PRIMITIVOS POBLADORES

Los primeros indígenas que ocuparon esta región fueron los Puchanas, los Timanases, los Pascuazas y López; luego llegaron de las parcialidades circunvecinas, Los Condes, Los Jojoas, Los Carlosamas, Los Mallamas, los Amaguañas y los Gamboas, Con motivo de las guerras y otros incidentes importantes arribaron a estos lugares numerosas familias pertenecientes a la raza blanca que venía de Pasto o de otros lugares que por no hacer larga la enumeración no se mencionan sino los troncos principales enumerando un personal en orden descendente o sea de padres e hijos. Juan Guerrero, José María Guerrero, Aurelinao P. Guerrero y José María Guerrero del Castillo (Concejal); Sixto Guerrero, Luis D. Guerrero y Luis Guerrero N. Manuel Guerrero, Adolfo Guerrero, Dr. Adolfo Guerrero M. José Guerrero, Laureano Guerrero, Lucas Guerrero, Celso Guerrero, Bibiana Guerrero, Alvaro Guerrero, Rosendo Guerrero P. Elías Guerrero, José María Guerrero, Rosendo Guerrero T. José Augusto Guerrero, Crisanto Guerrero, Ramón Guerrero, Adelaida Guerrero y Victoriano Paz Guerrero, Ezequiel Guerrero y Pola Guerrero. Lucas Cabrera, Juan Cabrera, Lucas Cabrera, Antonio Paz, Manuel María Paz y Victoriano Paz Guerrero; Juan Dorado, Manuel Dorado, Luciano Dorado, Juvenal Dorado y Marcial Dorado, Alejandro Córdoba, Anselmo Córdoba y José María Córdoba E.; Elías Guerrero, Manuel Quintero, Serafín Quintero, Lucas Quintero, José Felix Eraso, Evangelista Eraso, Juan Evangelista Eraso, Guillermo Eraso, José Manuel Rosero, Avelina Rosero y Luis María Guerrero Rosero (Concejal); Antonio Santacruz, Primitivo Santacruz, Justino Santacruz, Javier Santacruz, Antonio Delgado Guerrero, Telesforo Delgado, Antonio Delgado, Eduardo Delgado, Eulogio Rivas, Víctor Rivas, Alberto Paz Rivas, Manuel Burbano, Hermogenes Burbano, Joaquín Moncayo, Sergio J. Moncayo, Angel Ibarra, Rafael Ibarra, Ignacio Ibarra, Luis Ibarra, Juan Jojoa, Brigrida Jojoa, Angel María Villota, Abibal Villota Cabrera, Peregrino Villota Córdoba, Feliciano Ordóñez, Arquímedes Ordoñez (concejal) Juan Martín Córdoba, Vidal Córdoba, Enrique Córdoba, Salvador parra, Juan Parra, Cornelio Parra, Vitelio Parra, José María Espinosa, Francisco Espinosa, Angel María Espinosa, Pedro A. Espinosa (Personero) Blas Argoti, Manuel Argote, Juan Gamboa, Vidal Gamboa, Apolinar Gamboa (Alcalde) y Guillermo Gamboa Wenceslao Espiridión Burbano J. (Concejal) Mariano Muñoz, Emigdio Muñoz, Miguel Angel Muñoz, Excequiel Paz, Manuel María Paz (Presbítero), Vidal Insuasti, Manuel Insuasti, Mardoqueo Insuasti, Rosa Elena Insuasti. Existen además los Madroñeros, Bermúdez, Mejía, Obandos, Andrades, Chávez, Nogueras y terminamos con los troncos de Puchanas que son: Francisco Puchana, Ramón Manuel, Lorenzo, Mayor y menor y Manuel Puchana con los cuales queda descrita toda la descendencia tangueña.

EFEMERIDES

En el año 1873 el Presidente de los Estados Unidos de Colombia, Manuel Murillo Toro, sanciona la Ley que declara Fiesta nacional del 20 de Julio. TANGUA. : En el año 2008 cumplirá 168 años de su fundación oficial y 131 de su elección como Municipio, territorio que fue desmembrado del antiquísimo Municipio de Yacuanquer y su fundación se hizo mediante la Ordenanza 103 de la Asamblea del Cauca. LA ESTANCIA Recuerdo Histórico

El hombre es un ser dependiente de un Creados y a través de su historia el tiempo y el espacio es un peregrino por naturaleza. Viaja recorriendo lugares para llegar a su destino, donde encontrará a su Santo de su Devoción, llegan a Tangua a la Casa Posada “La Estancia” un parador obligado de todo caminante. Tangua, del Chibcha Tangua que significa pueblo de agua donde existió el asentamiento obrero, las mujeres de caracterizan por ser hacendosas, servidoras y bien atentas. Los peregrinos que viajan a visitar el Santuario de la Virgen de “Las Lajas” descansan y buscan alimento en la vieja y denominada Casona “La Estancia” en la vereda de Siquitán. Con este escrito se quiere hacer un homenaje a todas las mujeres que viven en Tangua y que atienden en la Estancia preparando cuyes y toda clase de platos típicos de la región; como también a todos los caminantes que buscan hospedaje y alimentación en la Casona de la Estancia. Este relato es copiado de una hoja volante repartida en una Carroza titulada “LA ESTANCIA” en el 6 de Enero del año 200 dedicándola como homenaje a la mujer de Tangua en los Carnavales de Pasto. Autores de Carroza: Grupo de Trabajo: Copia:

Oscar Chicaiza y Jaime Caicedo. Fabio Fajardo, Rene Sarralde, Geovanny Salas, Jony Melo y Parmenides Caicedo. Miguel Antonio Villota.

PERSONAJES ILUSTRES DE TANGUA - DON ESPIRIDION BURBANO J.

Entre las personalidades más notables que ha tenido Tangua, ya desaparecidas, merece recordarse al señor ESPIRIDION BURBANO JOJOA, respetable caballero, apreciado por la sociedad por la cortesía para atender a las personas de cualquier condición, por su laboriosidad, su habilidad y el cumplimiento de sus compromisos, y en fin por muchas y excelentes cualidades con las que dio lustre a la Sociedad Tangueña. El señor Burbano, hombre sencillo, de costumbres austeras, permanecía infaltable en su casa, atendiendo en sus espaciosas oficinas a las personas que iban allí en solicitud de la confección de obras, ya sea muebles, reparación de piezas de hierro o de otros materiales, también por medicinas, fotografías, escrituras de piezas de música y en fin, de tantas cosas que él era capaz de hacer, porque bien podría decirse que era un hombre de actitud polifacética. Su ocupación principal era la mecánica, hacia reparaciones de motores de fuerza motriz, armas de fuego, maquinas de escribir, relojes, etc. Y les hacia los repuestos con una perfección admirable, motivo que los clientes las recibían con su mejor satisfacción. En su juventud fue el fundador, organizador y director por mucho tiempo de las Banda Victoria o la Banda Liberal, como la llamaban las gentes para distinguirla de la otra que había en el lugar, llamada San Rafael y le decían la Banda Conservadora porque sus integrantes eran todos de este partido. Se recuerda que en la Casa del Señor Espiridion Burbano, se hicieron por mucho tiempo las reuniones de carácter Político con dirigentes de Pasto y los del lugar con el fin de orientar y dirigir el Partido Liberal al cual perteneció y le sirvió con dedicación. Por otra parte, también se efectuaron allí, reuniones de personas de ambas filiaciones, para con su acertada opinión determinar como se podría desarrollar y llevar a la práctica las obras públicas a favor del Municipio. Por esto, el maestro Espiridion a quien así se le trataba, no acostumbraba a salir fuera de su casa, y lo hacía por casualidad para asistir a los funerales de personas distinguidas o para actos de trascendental importancia, de otra forma no lo hacía porque sus múltiples ocupaciones no lo permitían. En el oficio de carpintería tuvo muchos oficiales, de ellos se recuerda a los señores Evangelista Guerrero, Enrique Paz Rivas, Cesar Ordoñez, León Valdomero Romero y Manuel Enrique Ordoñez. En la mecánica Ignacio López, Jesús Jojoa, Capitolino Guerrero, Marino Villota, Eliécer Muñoz, Celestino Rosero y Pedro Celestino Atapuma Jojoa, unos y otros en los distintos oficios fueron trabajadores de calidad y han prestado importantes servicios. El maestro Espiridion era estricto en la confección de obras, y cuando observaba que tenían cualquier desperfecto, las destruía y obligaba a sus oficiales a hacer todo con perfección. Este señor no conoció nunca el egoísmo, antes bien le gustaba transmitir sus conocimientos y sus consejos a las personas que lo necesitaban.

Quien escribe este apunto siendo aún joven menor de 22 años, conoció al maestro Espiridion, quien demostraba tener ya una edad de 75 años, y aunque no fue oficial de su dependencia, tuvo la suerte de tener buena amistad y ser objeto de sus consideraciones, pues cuando iba a su casa por cualquier circunstancia suspendía sus ocupaciones, le invitaba a tomar asiento y luego con su habitual cortesía desarrollaba sus conversaciones agradables sobre varios aspectos que habían tenido lugar en el ámbito social, comentaba lo que había leído en periódicos y revistas que le llegaban especialmente lo que tenía relación con la política o cosas científicas que a él le interesaba pues aparte de sus ocupaciones gustaba mucho de la lectura. Don Espiridion vivió con su madre Señora Angelita Jojoa y la hermana de ésta Anita Jojoa, estas señoras se ocupaban de elaborar el mejor pan que se producía en Tangua, muy ancianas, fallecieron hace mucho tiempo, con ellas vivió también Emigdio Erazo Jojoa, hijo natural de doña Angelita y medio hermano de Don Espiridion, trabajaba carpintería en uno de los corredores de esa habitación, igual que su hermano, fue un hermano muy respetable y bien apreciado, muy anciano, falleció en la década de 1940. Don Espiridion quedo sólo, acompañado únicamente de una sirvienta joven de difícil expresión pero que cumplía bien sus obligaciones domésticas como una buena ama de casa. Las señoras Angelita y Anita, los señores Emigdio y Espiridion fueron solteros hasta su muerte. La Gran Casona que vivió la familia de los Jojoas aún existe ocupaba mas de la tercera parte de una cuadra incluyendo su extenso huerto donde don Espiridion cultivaba hortalizas y plantas medicinales, su construcción es de tapias, consta de un solo piso enladrillado con techo de tejas de barro, puertas muy altas, cuatro amplios corredores en el pretil de uno de ellos hay un aljibe para extraer agua para servicio doméstico. Pues en ese tiempo no había acueducto; en el mismo corredor había un telón de color morado pendiente de una percha que servia para tomar fotografías, una de las piezas de la casa estaba destinada para construir los instrumentos de la banda con una mesa grande en el centro, allí estudiaron y aprendieron los primeros músicos de la Banda Victoria. Allí mismo también estudiábamos el arte de la música los que reemplazamos a los que habían fallecido, conocimos el pentagrama los posturajes del instrumento, las notas y sus valores, los ejercicios y las piezas de numeroso repertorio que enseñaron don Espiridion y luego don Hermogenes Guerrero miembro de la misma banda de mucha práctica en el arte y muy paciente para enseñar. En los momentos de descanso de los repasos se conservaba entre el personal se hacían comentarios de cosas que habían observado, escenas que habían ocurrido a las personas particulares y a los mismo músicos, se cruzaban chistes y tiraderas de unos a otros se escuchaban los reproches y se respondían las acusaciones sin herir los sentimientos, todo dentro de un buen compañerismo.

Ya en la década de 1960 don Espiridion con el peso de la edad y su salud muy quebrantada habían disminuido la mayor parte de sus actividades por lo que las obras que se recibían estaban únicamente a cargo de los oficiales. Se comentaba después que en la mañana que dejo de existir alguno de los familiares que más frecuentaban en esa casa, como también los oficiales cuyos nombres no se mencionan aquí los que se preciaron de haber sido los abnegados servidores del maestro Espiridion, estas personas que la sociedad las conoce bien y los señala con el dedo fueron las que a cual mas se sustrajeron los objetos que tenia don Espiridion, algunos de valor tales como el motor que producía energía para las obras, una máquina alemana de fotografía, una flauta de ébano finísima, libros de importancia, e infinidad de herramientas de trabajo de pertenencia del fallecido. La muerte del señor Burbano que se produjo en horas de la mañana la dieron a conocer en las últimas horas de la tarde. Después por la casa el huerto, muebles e inmuebles que habían quedado se estableció un proceso sucesional por parte de una sobrina con los demás presuntos heredero y como resultado de ese reñido pleito los que más se aprovecharon fueron los abogados que intervinieron en el proceso. Muchos días antes de su muerte don Espiridion había dicho que de sus bienes no dejaría haciendo ningún reparto porque no tenia referencias a nadie de sus familiares, que lo que él había tenido allí quedaba para que los presuntos herederos peleen por ellos. Así que todo lo determinado por el fallecido se cumplió al píe de la letra. La alegre mansión donde habito la familia de los Jojoa, donde existieron las grandes oficinas de trabajo, música, mecánica, fotografías y demás sufrió un cambio inesperado: ya falto en ella el trepidar del motor que generaba energía para elaborar las obras, el accionar de los oficiales, el trajín de gentes particulares que salían después de solicitar o recibir sus obras, las voces armoniosas de los instrumentos de soplo (viento) cuando los músicos hacían los repasos, esto y mucho mas, todo quedo silenciado para que siempre después de la muerte del maestro Espiridion acaecida en la luctuosa mañana del 12 de Junio de 1969. Y como todo en la vida se acaba, lo que ayer fue la banda Victoria de tan gratos recuerdos, organizada y dirigida por el nunca bien lamentado Maestro Señor Burbano que en su juventud fue su mas anhelada obsesión, la que al acorde de sus notas musicales despertó tantas veces la alegría de los moradores de Tangua, y también las de otros lugares lejanos, y acompañó en el desfile fúnebre de los que cansados de la vida se marcharon para siempre, también a ella le llego el tiempo de finalizar su existencia, por muerte de algunos de los músicos y de otros que cambiaron de domicilio. A hoy quedamos únicamente cuatro de sus miembros que por avanzada edad y deficiencia de salud solo servimos para contar el cuento.

Datos tomados de relato del señor MIGUEL ANTONIO VILLOTA el 21 de Junio de 2002.

TANGUA AYER Y HOY

Hasta los patrimonios del año 1930 el Municipio de Tangua había permanecido en una situación estática, debido en parte a las consecuencias dejadas a la absurda Guerra Civil, denominada de los 1000 días, luego también por la inercia de los empleados de esos tiempos, que algunos de ellos carecieron de visión para idear las formas del progreso. Por estas y otras razones, tanto en la parte urbana como en la rural se hacía ostensible el atraso en diversos aspectos. En la parte Urbana se observaban los edificios como abandonado, su enlucimiento deteriorado con el paso del tiempo daba un aspecto desagradable por las calles, en algunas de ellas corrían acequias de aguas inmundas, la hierva en los andenes sin arreglo, los basureros y la permanencia de animales domésticos que deambulaban por todas partes como ovejas, perros, marranos, gallinas y hasta vestías, todo eso demostraba la indiferencia de los representantes de la autoridad y de los mismos habitantes, las casas de bareque con cubierta de paja se derrumbaban en la periferia y algunas también en el Centro Urbano, las cercas de pigllo se veían en las cuadras que no estaban con edificios, las costumbres de la gente en el modo de vestir daban aspecto de mala presentación, los hombres acostumbraban ruana, sombrero de paño o de paja muy deteriorados y otros de lana de oveja, calzaban alpargatas de cabuya, y también quimbas de cuero rústico. Las mujeres usaban el bolsicon de bayetilla, con guardapolvo de tela, y las más pobres las usaban de bayeta, confeccionados con lana de oveja. Como calzado, chanclas de plantilla de cabuya, con capelladas de tela y como abrigo el pañolón. El vestido del os jornaleros eran pantalones y camisas muy viejos con muchos parches y una gruesa capa de mugre, tanto en el vestir como el cuerpo, pues el baño no acostumbraban sino por rareza. La viviendas por lo general eran con piso en tierra, suelo disparejo, sin ladrillo ni tabla, la gente hablaba muy mal el castellano, mal pronunciado que fastidiaba a las personas mas o menos educadas; pero en este particular la razón se justificaba por que no habían escuelas, mas que las dos (2) en la parte urbana, y ninguna en las veredas. En algunos lugares del campo habían escuelas privadas donde personas de escasa ilustración enseñaban mas a rezar que otras cosas. Las vías de comunicación fueron senderos estrechos, cubiertos de malezas y obstáculos, con quingos y pendientes, lo mismo que fandangos peligrosos en las partes planas. La luz eléctrica hasta 1924 casi no era conocida; tampoco había medios de comunicación como es el telégrafo, el teléfono y los vehículos de fuerza motriz ni siquiera las bicicletas.

Pero todas estas irregularidades no solamente fueron ocurridas en el territorio tangueño, sino que se sucedieron en todos los municipios de nuestro departamento, quizá hasta en peores condiciones, así las cosas nuestros antepasados sufrieron resignadamente toda clase de dificultades sin esperar la cercanía de soluciones, pero ya en el año de 1930 con el cambio de gobierno y la llegada al poder del Presidente Enrrique Olaya Herrera, la situación fue cambiando radicalmente. El y los gobernantes que le sucedieron como Alfonso López, Eduardo Santos, nuevamente López y Alberto Lleras Camargo, formaron la organización y el adelanto progresivo en los periodos de su gobierno, llegando sus actividades hasta los lugares mas apartados del territorio Colombiano. Así pues termino el concertaje de los jornaleros pobres que vivieron esclavizados descontando suplementos señalados en tarja por los patrones de mala conciencia. En el Municipio de Tangua, ya se comenzaron a construir escuelas rurales como la de la Higuerilla en límites de las veredas de Providencia y San Francisco en el año de 1938, luego en Santander, el Cebadal, El Tambor, Paramillo y San Vicente, Tapialquer Alto y Bajo y al fin en todas las veredas. Se construyeron los puentes del Río Bobo en las vías que conducen al Paramillo y San Francisco. Otro sube el mismo río entre San Luis y la Cocha, se construyo la Planta Eléctrica Municipal en 1939 con la instalación de un molino por motivo de una tormentosa creciente del Río Bobo y aumentada por la saltina de la represa de la Planta Eléctrica en la región de jurado y al mismo tiempo de otra represa formada por un derrumbe, la crecida del Río fue enorme, llevando multitud de troncos y piedras que destruyeron el primer puente de cal y ladrillos que fue construido en 1940. Aproximadamente un tiempo después el Fondo Regional de Caminos Vecinales construyo otro puente de Cemento armado, mas alto, elegante y consistente que los anteriores. En 1993 al 1994 se construyó el puente que une las Veredas La Cocha y San Luis, terminando de esta manera los peligrosos puentes de barda. Volviendo mas atrás la primera planta eléctrica que hubo en Tangua fue traída fue traída de Pasto de la empresa de Don Julio Bravo, en el año de 1924, esta fue retirada con el tiempo hasta que en 1939 el Municipio adquirió una de su propiedad, conjuntamente con un molino y fue instalada en el Río Bobo, la cual duró unos años hasta que fue poco a poco sufriendo desperfectos por malos manejo de personas incapaces, hasta que al fin se inutilizo por completo. En el Gobierno del Señor Segundo Juvenal Dorado, se trajo de Pasto la conducción de las redes en pasta de cemento, proveniente de Centrales Eléctricas de Nariño, que es la que actualmente se halla en servicio. En 1931 el Sr. Alcalde en ese entonces Lucas A. Guerrero, construyó la carretera de Tangua hasta donde principia el descenso hacia el Río Bobo; en 1959 el Alcalde Adonías Madroñero, la llegó hasta el Río, de allí para adentro en el año de 1966, el señor José María Trujillo a su costa la llevo hasta la finca San Javier de su propiedad en la Vereda San Francisco. De 1980 en adelante se han construido las carreteras del Boquerón pasando por la vereda Paramillo hasta la vereda la Cocha y de allí hasta el caserío de Opongoy, luego las vía de San Luis a empatar

a la carretera Panamericana, también otra de la vereda San Francisco a Tapialquer Alto y por último la que conduce desde la carretera vieja del Obraje hasta las veredas de Tapialquer bajo y otro ramal hasta la escuela de la vereda Nazcan. En el orden de estas transformaciones también se han sucedido las modificaciones de viviendas que actualmente se hallan bien arregladas en pisos de baldosas o cubiertas con cemento, hay modernos y elegantes edificios que han mejorado la urbanización, quitando de los espacios las cercas de pingllo, o cimientos de piedra que daban mala presentación se han construido edificios públicos como el Palacio Nacional, que se utiliza para algunas oficinas como el Juzgado Promiscuo, Concejo Municipal, Estación de Policía y el Almacén de la Alcaldía Municipal de Tangua. Otra la Casa Municipal Nueva, construida en la década de 1970, la Escuela de Niñas Buena Esperanza, La Urbana de Varones, el Colegio Mixto Misael Pastrana Borrero, también se debe tener en cuenta que anteriormente para los años 1990 a 1991 el Teatro Municipal se encontraba deteriorado y bajo la Administración del Sr. Alcalde Miguel Angel Martínez Puchana, se realizó una muy bonita y elegante remodelación a lo que hoy es el Teatro Municipal, durante la Administración del Dr. Hermes Hernando Andrade Mejía, periodo 1995 – 1997 se realizó una importante adecuación a la antigua “Gallera de Tangua”, la cual se convirtió en un edificio de mayor servicio a la comunidad y principalmente a la niñez de Tangua, allí se destino como “Casa del Menor del Municipio” igualmente se techo y adecuó de forma considerable la Plaza de Mercado Municipal, últimamente durante la Administración del Sr. Luis Mijair Calderón Toledo 1998 – 2000, una de las obras arquitectónicas que consagra su administración en el Centro de Salud – Nivel I primera etapa ubicado en el Barrio El Carmen, una cuadra al frente del Templo Parroquial, en esta misma administración se realizó una remodelación considerable al Parque Simón Bolívar de Tangua, donde se levanta un monumento al libertador Simón Bolívar cabalgando en un brioso corcel y en actitud de combate. En la Administración del Dr. Jesús Alberto Andrade Mejía, otro edificio de gran trayectoria y renombre desde la Administración del Dr. Hermes Hernando Andrade Mejía con la construcción de la primera fase e el Parque Recreacional del Trigo la Cebada y el Maíz. Las calles de la población se mantienen en perfecto aseo y ya no se observa el transito de animales sueltos. Debido al establecimiento de planteles educativos los habitantes de hoy demuestran otra forma de costumbres el idioma de pronuncia mejor, la manera de vestir se hace con descencia, ya no se usa ruana, sombrero ni alpargatas. Todo el mundo usa calzado, así sea el mas pobre y para el traslado de un lugar a otro así fuera a corta distancia se utilizan los vehículos de transporte que ahora los hay en abundancia por que existen vías comerciales para todas partes hasta para ir al cielo, porque también hay muchos lugares de oración principiado en 1914 y terminado en 1918 capillas las hay en las veredas de El Cebadal, Tambor, La Marqueza, Opongoy Santa Rosalía, Tapialquer Alto y Bajo y También en la sección San Vicente.

El servicio de energía eléctrica se halla extendido a casi la totalidad de las veredas, por lo que en cada hogar es infaltable el radio y el televisor y los moradores se hallan informados de todo lo que en el mundo ocurre diariamente. Por lo que se deduce Tangua, sus conocimientos de avanzada y su presentación estética que produce una sensación agradable para propios y extraños ya puede contarse como una de las poblaciones más sobresalientes de nuestro departamento.