Entrevista a Hugh Hefner SEXO, PUBLICIDAD Y CONEJOS A sus 71 años, el fundador y presidente emérito de Playboy Enterprises, y también director de la célebre publicación mensual, hace sentir nuevamente su presencia en la compañÃ−a, cuya gestión diaria traspasó a su hija Christie, luego de sufrir un infarto en 1985. En una era en que las marcas y la globalización son palabras claves del marketing, Hefner tiene mucho que decir: (Extractos de la entrevista de Chuck Ross) Estoy seguro de que el hecho de que Playboy fuera polémica no le sorprendÃ−a en 1953. Pero ¿no le sorprende comprobar 44 años más tarde que la revista sigue siendo controvertida, sobre todo entre los avisadores tradicionales? • No creo que nadie, salvo George Orwell, quien lo anticipó en alguna medida en la novela “1984”, pudiera haber predecido lo que ocurrió con la percepción de la sexualidad en los 80. No creo que alguien pudiera haber anticipado que la revolución sexual, con el movimiento de la mujer como parte de ella, contuviera un elemento antisexual. Playboy era, en realidad, menos polémica en los 50 y los 60 a mi modo de ver, de lo que llegó a ser en los80. La noción de la liberación de la mujer no incluirÃ−a sexo ni imágenes de sexo... Quizás “ironÃ−a” serÃ−a una palabra amable para definirla. Es simple puritanismo bajo otra forma. Estados Unidos sigue poseyendo una cultura auténticamente puritana en lo sexual, muy esquizofrénica en relación al tema, fascinada por el sexo y al mismo tiempo dominada por la culpa. Probablemente, hoy en dÃ−a hay más mensajes relacionados con el sexo y dirigidos al público general que en cualquier otro momento del siglo pasado. Cuándo los avisadores tradicionales deciden no anunciar en una revista que llega a millones de hombres cada mes, ¿se trata de falta de coraje o de un reflejo de su sensibilidad respecto a las actitudes de los consumidores? • Creo que parte de la explicación se puede definir de ese modo, aunque por otra parte es más sutil... En parte, y sabemos que es un hecho, se trata de un reflejo de mujeres ejecutivas, y algunos hombres ejecutivos, que responden al mismo tipo de presión. Sabemos de muchas instancias especÃ−ficas en que estarÃ−amos en la de medios, a no ser porque algunas mujeres ejecutivas tienen problemas con nuestra publicación. “ ¿Por qué habrÃ−an de tener problemas con Playboy las ejecutivas mujeres, tratándose de la revista para hombres más popular e influyente de nuestro tiempo, la revista que prácticamente ha cambiado la naturaleza de la sociedad en que vivimos?...Por otra parte, está el extraño descontento o incomodidad asociada a las fotografÃ−as de desnudos. De hecho, una de las cosas que intenté desde el principio fue lograr que ambos sexos se sintieran cómodos con las imágenes (bastante inocentes) del cuerpo desnudo.

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¿ Se siente agraviado por la industria publicitaria en su conjunto, o sólo por aquellos elementos de ella que aún no respaldan la revista? • No, no. Los comprendo. Creo que es tonto, porque una de las cosas que se obtienen con una revista es un público especÃ−fico. El avisador puede dirigirse especÃ−ficamente a quien desee. Bueno, ninguna revista estadounidense tiene más seguidores y mayor respaldo entre sus lectores que Playboy. Los lectores se identifican con la revista como una forma de ser, un estilo de vida. “ El vigor y el poder de la marca se ven demostrados una y otra vez. Hay gente que, por sus propios prejuicios, piensa que de algún modo dicha popularidad y poder han disminuido. La realidad es exactamente la opuesta. La marca es más fuerte en la actualidad a nivel mundial de lo que fue en ningún otro momento de historia. Somos una de las mayores marcas de moda masculina en el territorio continental chino, donde la revista ni siquiera se vende todavÃ−a. ¿ Por qué los boicots de los consumidores son aparentemente efectivos en el caso de los avisadores, cuando la mayorÃ−a de ellos han demostrado tener escaso impacto sobre las ventas? Playboy ha perdido avisos debido a ellos. • Siempre ha sido asÃ− con los avisadores. Tradicionalmente, basta una carta o dos para que revisen toda su campaña publicitaria. Los avisadores rehuyen la controversia. Pero la realidad es que si su cliente lee Playboy, y usted está en ese ámbito, entonces es absurdo no utilizar esa vÃ−a. ¿ Hay un doble estándar para las revistas femeninas? Puede que Cosmopolitan no incluya desnudos, pero presenta francamente temas sexuales. Y, sin embargo, no es tan polémica. • Sin duda hay un doble estándar. Cosmopolitan es simplemente una versión femenina de Playboy. Fue lo que creó Helen Gurley Brown, y asÃ− lo dijo. Y la ayudamos a hacerlo. ¿ De qué se enorgullece por sobre todas las cosas al ver más de 40 años en retrospectiva? • Es difÃ−cil pensar en otra cosa más importante que en cambiar los valores sociales y sexuales d nuestra era. Es lo que más me enorgullece. Con toda la controversia que aún rodea a las imágenes sexuales, el nivel de comodidad asociado a la sexualidad humana, la comunicación y la educación... Se trata de un mundo distinto al de los 50 y 60. La gente puede vivir hoy de manera abierta. Eso era imposible en los 50.

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