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Lección 3 Julio 9-16
Señor de nuestros pensamientos
“Siendo que habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra” (Colosenses 3:1, 2).
Sabbath 9 de julio
No ver la realidad al revés INTRODUCCIÓN Rom. 6:13
El asma es una enfermedad en la que los conductos de aire hacia los pulmones se inflaman y se ponen muy sensibles. Estos pasajes de aire se pueden hacer más estrechos cuando son expuestos a ciertos elementos lo que hace más difícil la respiración de la persona. Hay varios factores que pueden desencadenar la disminución de tamaño de los ductos, uno de los cuales puede ser el contacto con animales así como los gatos. Investiguemos este hecho. Saldremos a la calle para entrevistar a muchas personas, hasta que hayamos hablado con unas 100 personas que tienen asma. Les preguntaremos si tienen gatos en casa o si alguna vez han tenido gatos en casa. Encontramos que unas 50 de ¡Imagínate qué sucedería si estas personas solían tener gatos en casa pero se deshiciedecidimos que estas personas ron de ellos. Por lo tanto, podría contrajeron el asma porque se ser que estas personas descudeshicieron de sus gatos! brieron que tenían asma y se enteraron de que los felinos empeoraban su situación; así que vendieron sus gatos (o los regalaron) para ayudar a controlar sus síntomas. Pero ¿qué si no pensaron de esa manera? ¡Imagínate qué sucedería si decidiéramos que estas personas contrajeron el asma porque se deshicieron de sus gatos! Tendríamos una campaña publicitaria masiva informando a las personas acerca de nuestros descubrimientos. Imagínate los cartelones en las vitrinas de las tiendas de mascotas: "¡Compra un gato: Evita el asma!" Tendríamos muchos miembros nuevos —potencialmente peligrosos— en los hogares de personas asmáticas. Es un simple caso de causa y efecto, ¿verdad? Regalar el gato no hace que desarrolles asma. La verdad del asunto es que una de las reacciones al tener asma es la decisión de deshacerte del gato. Pero en ocasiones es fácil pensar en forma inversa. Los cristianos pueden caer en la trampa de pensar que hacer cosas buenas los hace aceptables ante los ojos de Dios. Hasta llega a ser una especie de consuelo en algunas maneras; con tal de que siga haciendo esto o aquello, Dios tendrá que amarme, ¿verdad? Pero este enfoque está al revés. Cuando estamos bien con Dios, intentamos obedecerle por gratitud por lo que hizo por nosotros. "Ofreceos a Dios, como quienes han vuelto de la muerte a la vida" (Rom. 6:13). Puesto que fuiste salvo, deja que Cristo sea tu Señor. ¿Qué mejor manera de mostrar nuestro aprecio por el amor y la gracia que Dios nos ha dado? Romanos 12:1 nos desafía: "Así, hermanos, os ruego por la misericordia de Dios, que presentéis vuestro cuerpo en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto razonable".
Miranda Simkin, Mount Waverley, Australia 25
Domingo 10 de julio
¿Puede Dios leer la mente?
LOGOS Rom. 12:1, 2; 1 Cor. 2:16; 2 Cor. 10:3-5; Efe. 6:10-18; Col. 3:1, 2
Romanos 12:1, 2 La voluntad de Dios es para tu felicidad. No hay forma de negarlo. Dios desea cosas buenas para nosotros, cosas placenteras y nuestro deber es procurar hacer su voluntad y entregarnos completamente a él por lo que Cristo hizo a nuestro favor. Todo esto es más fácil decir que hacer. Además, es importante notar que debemos ofrecer nuestro cuerpos (esto incluye nuestra mente) debido a la misericordia de Dios. No es un simple acto de fe ciega, sino más bien, una bella reacción a lo que Dios hizo por ti. Es una verdadera respuesta a la gracia que Dios te ha dado por medio del sacrificio de su Hijo Cristo Jesús. ¿Cómo lograr esto? Muriendo al yo cada día. Dicho en forma sencilla, renovamos nuestra relación con Cristo diariamente para mantenerlo como prioridad en nuestras vidas. Es un concepto tomado directamente del apóstol Pablo quien consideró que cada día era una nueva oportunidad para acercarse a Cristo y hacer más para el avance de la obra de Dios.
1 Corintios 2:16
Esto constituye tanto una inmensa responsabilidad como un gozo indecible.
Pero tenemos la mente de Cristo. No sólo renovamos nuestra relación con Cristo, sino que adoptamos su voluntad y su mente como nuestras. Así como aceptamos su salvación perfecta en lugar de nuestras vidas manchadas por el pecado, podemos aceptar su voluntad y su mente como propias. A medida que continuemos estudiando la Palabra de Dios, veremos el poder que contiene y comenzaremos a conformar nuestros pensamientos a los de Cristo. El vocablo técnico para esto es "santificación", o semejanza progresiva al Dios que servimos. Tomando esto en consideración, podemos confiar más en la mente que Dios nos ha dado y en su habilidad para tomar buenas decisiones basadas en la voluntad de Cristo. Este es un proceso, pero nos dieron herramientas para crear el deseo de entregar nuestras mentes a los pensamientos que Cristo desea que tengamos.
2 Corintios 10:3-5 En este texto se nos recuerda de una batalla que no es de este mundo. Es una guerra por nuestros corazones y mentes los cuales están íntimamente ligados. El versículo cinco dice "y cautivar", que es una alusión a la idea de disciplina. Esta tarea que hacemos con nuestros pensamientos es justamente eso, una tarea. Nos disciplinamos a nosotros mismos y pensamos en aquellas cosas que son buenas y justas y puras. Mientras más meditamos en estas cosas, se hace más fácil mantener las prioridades de Cristo en mente en todo momento. Para algunos, se nos hace fácil ser disciplinados. Pero para otros, se nos dificulta. Para algunos, esto podría ser lo más difícil de dominar en la experiencia cristiana. Luchamos contra una falta de disciplina acudiendo nuevamente a la Palabra de Dios en busca de su consejo sobre lo que sea
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mejor para nosotros. Proverbios 5:23 dice: "Morirá por falta de disciplina, y errará por su gran locura". Esto demuestra que es sumamente importante. Debemos mantener sujetos nuestros pensamientos para que no se descarríen.
Efesios 6:10-18 Finalmente, en armonía con el tema de la guerra espiritual y la disciplina, vemos una lista de aquellas cosas que Dios nos ofrece como armas y protección en la guerra por nuestras mentes y corazones. Una nota importante sobre este texto es que no menciona que habrá un momento cuando necesites usar toda esta ventaja. El texto no dice que tal vez lo necesites, sino que simplemente menciona que "para que podáis resistir en el día malo", como si fuera inevitable. Y seguramente que lo es, si leemos y tomamos en serio la Palabra de Dios. Sin embargo, este texto nos trae consuelo, igual que todos los demás, puesto que hay un poder que nos protege que ni siquiera podemos imaginar. Tenemos un aliado poderoso en Cristo Jesús. No sólo un aliado, sino el Ganador. Es nuestro deber vivir como si hubiéramos ganado puesto que la guerra ya terminó. Jesucristo, el Maestro de nuestras mentes y corazones ya peleó la batalla y ahora seguimos su ejemplo para nuestras vidas. Esto constituye tanto una inmensa responsabilidad como un gozo indecible. Al final, resulta en felicidad y es un resultado de la vida eterna, dada a nosotros por la gracia de Dios.
Colosenses 3:1, 2 No sólo tomamos control de nuestras mentes, sino que aprendemos a pensar en cosas de importancia eterna. El himno antiguo nos dice que "no puede el mundo ser mi hogar, pues sólo paso por aquí" y eso sigue siendo verdad en la actualidad. Permite que tu mente medite en los temas que son eternos, en aquellos que tienen que ver con Dios y su amor, que están más allá de nuestra existencia finita. Nuestros corazones pueden ser consolados y las preocupaciones disipadas cuando tomamos el tiempo para meditar en lo eterno y observar lo grandioso y la intimidad que nuestro Señor y Salvador nos ofrece. Aunque jamás llegaremos a comprender plenamente a Dios, se nos pide que tomemos tiempo para meditar y fijar nuestras mentes "en las cosas de arriba" (Col. 3:2). No es una tarea que debemos tratar con liviandad, puesto que Cristo nos puso el ejemplo de encontrar tiempo para no hacer otra cosa más que orar y comunicarse con Dios. Tal vez recuerdes un incidente cuando los discípulos fueron reprendidos por no permanecer despiertos cuando Jesús se preparaba para su batalla espiritual, meditando en las prioridades eternas para su vida (Mar. 14:37). Esta es una ilustración magnífica de lo que nos dice el texto. Siendo que no pertenecemos aquí, necesitamos ubicar nuestras mentes en cosas que van más allá de este mundo y colocar este mundo en una perspectiva eterna. Habiendo hecho esto, podemos hacerle frente a cualquier situación que el mundo nos ofrezca.
PARA COMENTAR 1. La lección del 10 de julio señala que cada día debemos morir al yo. ¿Qué significa eso? ¿Cómo lo logramos? 2. En Colosenses 3:2 se nos amonesta a que fijemos nuestras mentes en las cosas de arriba. En una vida tan ocupada donde todo pasa tan rápido, con tantas actividades y distracciones que luchan por nuestra atención, ¿de dónde sacamos tiempo para pensar en asuntos celestiales?
Timothy Gillespie, Riverside, California 27
Lunes 11 de julio
Dejando el pasado atrás
TESTIMONIO 2 Cor. 10:5; Fil. 3:13, 14; Heb. 12:1-3 En el pasado todos hemos hecho, dicho y pensado cosas de las cuales nos arrepentimos. Aún ahora, el recuerdo de nuestras acciones, palabras y pensamientos no santificados nos hace desear que nos trague la tierra. Si nuestra propia maldad se nos hace tan repulsiva, entonces, podríamos pensar, también somos repulsivos ante Dios. Tal vez Dios no nos ha perdonado. Tal vez Dios no escuche nuestras oraciones pidiendo perdón. ¡No es así! El pecado es repulsivo ante Dios, no los pecadores. Dios nos ama de tal manera que dejó la gloria del cielo, vino a la tierra por medio de un nacimiento natural, se hizo ser humano (una criatura que él creó originalmente), vivió en la tierra durante 33 años, fue tentado en todo, igual que nosotros, cedió ante la muerte, conquistó la muerte y fue resucitado. Nuestro Creador pasó todo esto para que el perdón y la salvación estuvieran accesibles en el momento que nosotros, sus hijos, se lo pidiéramos. Así que, aun cuando la memoria de nuestro pasado pecaminoso resulte en sentimientos de culpa y condenación propia, "si nuestro corazón nos condena, Dios es "Cuando el diablo te mayor que nuestro corazón" (1 Juan 3:20). ¡Qué pensamiento tan maravilloso! recuerde tu pasado, sólo Verdaderamente podemos confesar nuesseñálale su futuro". tros pecados a nuestro Padre lleno de amor y empatía. Es verdaderamente tan fiel a su palabra que está dispuesto a "perdonar nuestros pecados" y limpiarnos de todo mal (1 Juan 1:9), aún cuando nuestro corazón nos condene. Por medio de Cristo, verdaderamente puedes alejarte de tu pasado, hábitos, pensamientos y palabras pecaminosas sin condenación. "No debemos sentirnos tan abrumados por el pensamiento de nuestros pecados y errores que dejemos de orar. Algunos se dan cuenta de su gran debilidad y pecado, y se desaniman. Satanás echa su oscura sombra entre ellos y el Señor Jesús: su sacrificio expiatorio. Ellos dicen: Es inútil que yo ore. Mis oraciones están tan mezcladas con malos pensamientos que el Señor no las oirá. Estas sugestiones son de Satanás. En su humanidad Cristo enfrentó y resistió esta tentación, y sabe cómo socorrer a los que así son tentados. En nuestro favor ofreció ‘ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas’ (Heb. 5: 7)".1
PARA COMENTAR 1. Leí una vez en una camiseta la siguiente leyenda: "Cuando el diablo te recuerde tu pasado, sólo señálale su futuro". ¿Te da ánimo este pensamiento? Explica tu respuesta. 2. ¿Cómo le darías ánimo a alguien que sufre de culpabilidad y condenación propia? 1. En lugares celestiales, p. 79.
Stacey Grant, Orlando, Florida 28
Transformados por la renovación de vuestros pensamientos
Martes 12 de julio
EVIDENCIA Rom. 12:2 "Y no os conforméis a este mundo, sino transformaos mediante la renovación de vuestra mente, para que podáis comprobar cuál es la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta" (Rom. 12:2). Como cristianos, muchos hemos perdido el sentido de identidad, misión y dirección. Como resultado, la mundanalidad se ha infiltrado en la iglesia al grado que es difícil distinguir un cristiano de un no cristiano con sólo observar su caminar, su hablar, su vestir, su comer, su mirar o su conducta. Esto se debe a que no le hemos entregado el control absoluto de nuestras mentes a Cristo, por lo tanto, nos parecemos al mundo. Nuestros pensamientos a menudo determinan nuestras acciones. Aquello en lo que concentramos nuestros pensamientos se hace visible por medio de nuestras acciones. Por eso Elena de White nos amonesta que debemos "impedir a la mente divagar en asuntos prohibidos o gastar energías en cosas triviales. Los que no quieren ser víctimas de las trampas de Satanás deben guardar bien las avenidas del alma; deben evitar el leer, mirar u oír lo que Impedir que la mente divague puede sugerir pensamientos 1 impuros". Salomón también nos en asuntos prohibidos. dice: "porque tal como piensa en su corazón, así es él" (Prov. 23:7). De acuerdo con Strong’s Exhaustive Concordance of the Bible, [Concordancia exhaustiva de la Biblia de Strong], "conformado" significa "hecho acorde o conforme a un molde o patrón" y "transformado" significa "cambiado en forma". Así como al cambiar una licencia se invalida la anterior (ya no la podemos seguir usando), debemos descartar nuestra naturaleza anterior, tomar el nombre de Cristo y no ser conformado acorde al molde de este mundo sino ser cambiado en forma (asumir un aspecto, conducta y vida de pensamientos nuevos) de Cristo. Cuando Cristo verdaderamente llega a ser Señor y Salvador, la "mentalidad de Cristo" reemplaza la "mentalidad del yo" y sopesamos todos nuestros pensamientos en su balanza. Él nos da la habilidad de vencer a la tentación y nos capacita para vivir vidas piadosas. Confesaremos a Cristo como nuestro Salvador personal y también le permitiremos ser Señor de nuestras vidas (obedecer y hacer su voluntad).
PARA COMENTAR 1. ¿Cómo se puede combatir la mundanalidad que penetra furtiva pero continuamente en nuestras vidas, nuestros hogares y nuestras iglesias? Sé específico. 2. ¿Cuál es el secreto para vivir una vida cristiana victoriosa? 1. El hogar cristiano, p. 367.
Tom Owiti, Kalamazoo, Michigan 29
Miércoles 13 de julio
Una contraseña para mi caja de seguridad
CÓMO ACTUAR Efe. 6:10-16 Algunas personas solían tener cajas de seguridad en sus hogares. En ellas guardaban algunos artículos caros de la casa. Si tuvieras una caja de seguridad para tu uso personal, ¿qué meterías en ella? La mente es una caja de seguridad. Es la unidad central de procesamiento (CPU) de tu ser, el centro de comandos de tu alma. La única manera de acceder a ella es usar la contraseña adecuada. ¿Cuál es la contraseña para tu mente? ¿Cuál es la contraseña de tu vida? ¿Tienes una? Nuestros cinco sentidos son la puerta de acceso al alma (la mente). Debemos cuidar nuestros cinco sentidos porque si el enemigo los captura, lo estaremos invitando a entrar a la caja de seguridad. Una vez que esté allí, él decidirá lo que debemos pensar y hacer. Si no sabes cómo colocar una contraseña o clave en el candado de tu alma, a continuación hay algunas instrucciones que te ayudarán a mantener tu mente y alma seguras contra las artimañas del diablo (Efe. 6:11). 1. Identificar tus debilidades. Piensa en aquellas situaciones que te hacen caer. No las ¿Cuál es la contraseña escribas; sólo identifícalas en tu mente. 2. Para mantener tus sentidos lejos de las de tu mente? manos del diablo debes usar la armadura de Dios. Cada mañana antes de salir de tu hogar, ora al Señor y pídele el poder para vencer tus debilidades. 3. Cuando venga la tentación, recuerda que Jesús, la Verdad, siempre está a tu lado. No importa de dónde venga el ataque, la justicia del Señor te protegerá. 4. La paz del evangelio te guiará por el sendero por el que Dios quiere que camines. 5. Habla con el Señor varias veces al día. Habla con él antes de tus alimentos, habla con él antes de tus exámenes, habla con él mientras caminas. Si así lo haces, tu fe crecerá y crearás un escudo contra el pecado. 6. Piensa todos los días en Jesús y la salvación que te ofrece. Esto servirá como un yelmo que permitirá que tu mente se concentre sobre las cosas de arriba, no en las cosas de este mundo. 7. Finalmente, para neutralizar al enemigo, permite que el Espíritu Santo guarde la llave de tu mente. Esto servirá como una espada contra el diablo. Si sigues estas instrucciones, crearás una contraseña para la mente. El enemigo no tendrá acceso a tus sentidos; sólo Jesús sabrá la contraseña.
PARA COMENTAR ¿Cuáles son los cinco sentidos que tienen acceso al alma?
César B. Tavarez, Lares, Puerto Rico 30
Jueves 14 de julio
Descansa en las manos de Dios OPINIÓN 2 Cor. 5:17
Una experiencia personal con la presencia salvadora de Jesucristo es la más grande necesidad de la humanidad. El propósito de tu vida y su maravillosa voluntad para tu vida se aclarará y será emocionante después que lo conozcas como tu Señor y Salvador personal. Una vez que hayas cambiado completamente por un encuentro personal con él, hallar su propósito será fácil y no tendrá complicaciones. La Biblia lo llama "nacer otra vez", ser transformados por su sangre, la Palabra de Dios y su Espíritu Santo. Una experiencia personal con Jesucristo siempre renueva tu mente para escuchar y entender la mente de Dios para ti en cada área de tu vida. Su Espíritu llega a morar en ti desde el momento que vuelves a nacer. Serás una criatura nueva. Dios no queda satisfecho cuando conocemos cosas acerca de él. Desea que lo conozcamos a él. Quiere que estemos conectados a él en una relación personal. Saber cosas acerca de Dios sin conocerle personalmente es como estar en un cuarto obscuro, comprar una lámpara pero no enchufarla, o tener frío en una habitación que tiene una chimenea y no encender un fuego en ella. Dios desea revelarse ante nosotros y de esa manera, bendecirnos. Desea que verdaderamente lo conozcamos. El día que alguien viene a Cristo es Pero jamás habrá el antiguo un día maravilloso en su efecto sobre el futuro de esa persona. Es como cuando amor por el pecado. la popa de un barco da un giro completo. El hombre ahora navega en una dirección completamente diferente. Su futuro jamás será lo que fue su pasado. Podrá haber fallas; desaciertos y errores; pero jamás habrá el antiguo amor por el pecado. "El pecado no tendrá dominio sobre vosotros" (Rom. 6:14). Esta es una promesa que Dios nos hace, dada por medio de su siervo Pablo. Cuando Cristo llega a nuestra alma, le rompe el cuello al pecado y aunque todavía sobrevive en forma moribunda y a menudo hace mucho ruido en nuestros corazones, su destino final es morir. La cruz de Cristo le rompió la columna vertebral y el cuello también, y no le queda otra cosa que morir. De allí, el hombre va en camino a la santidad y se dirige hacia el cielo. Morar en Cristo significa encontrarse en el modo "estar". Todavía hacemos las cosas que Dios nos pide que hagamos, pero las hacemos con sus fuerzas. Morar en Cristo tiene que ver con tener una relación íntima con él. La relación es más importante que las cosas que hacemos o dejamos de hacer. Mientras más moramos en él, más fieles seremos. Oiremos su voz más clara, no nos concentraremos en las obras y tendremos más paz en nuestras vidas. Morar en él es experimentar su presencia.
PARA COMENTAR ¿Cómo podemos morar en Cristo en tiempos de pruebas y dificultades?
Omosa Protas Mwamba, Pune, India 31
Viernes 15 de julio
Una obra de amor
EXPLORACIÓN 2 Cor. 10:5; Col. 3:1, 2
PARA CONCLUIR Como un hombre piensa, así es y llega a ser (Prov. 23:7). La conducta se cristaliza primero en los pensamientos. Pensamos, luego hacemos. Por lo tanto, es imperativo que sometamos nuestros pensamientos en cautiverio a Cristo (2 Cor. 10:5). Estudiar y meditar sobre la Palabra de Dios cautiva la mente para Cristo. Al meditar en su Palabra, la mente habita en Cristo, la Palabra eterna de Dios. Los pensamientos se conforman a los suyos; sus ideales prevalecen, y emergen conductas nuevas, semejantes a las de Cristo. "Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. Las cosas viejas pasaron, todo es nuevo" (2 Cor. 5:17).
CONSIDERA ■ Dibujar una tira cómica que en el primer cuadro muestre a un hombre pensando y en un
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globo se describa cuáles son sus pensamientos. En los cuadros subsiguientes muestra al hombre haciendo lo que había pensado. Componer un cántico en el que se repita constantemente el estribillo "tal como piensa en su corazón". Enfatiza el poder del pensamiento sobre la conducta. Investiga la palabra pensamiento en una concordancia bíblica. Registra tus hallazgos sobre los diversos usos de la palabra y el consejo que dan las Escrituras sobre el tema. Entrevistar a varios cristianos que tengan impedimentos físicos en las siguientes maneras que afectan sus cinco sentidos: ciegos (vista), sordos (oído), cuadriplégico (tacto). Pregúntales en qué manera la ausencia de ese sentido afecta sus pensamientos y comprensión. Pregúntales cómo afecta su relación con Jesús. Pensando en esta idea: en muchas sociedades los archivos de computadora de una persona pueden ser accedidos y usados en su contra por sus acusadores. ¿Cuán similar —y cuán diferente— es esto a la manera en que nuestros pensamientos serán examinados durante el juicio final? Visitar un viñedo u hortaliza en las que hay vegetales o frutas que crecen en guías. Observa la relación entre el tallo, las ramas y los frutos. Pregúntale al hortelano acerca de cualquier cuidado especial que deba tener la guía para producir su fruto. Compara lo que has aprendido con las enseñanzas de la Biblia acerca de la necesidad de habitar en Cristo. Compara cuánto aprende el cerebro de los diferentes sentidos. Entrevista un investigador del cerebro. ¿Cuáles de los sentidos hace un impacto de información mayor en el cerebro? ¿Aprendemos más de lo que escuchamos que de lo que vemos?
CONEXIÓN Mente, carácter y personalidad, tomo 2, caps. 34, 35. Dick Winn, God’s Way to a New You [El camino de Dios a tu nuevo yo], cap. 11; Elden Chalmers, Healing the Broken Brain [Sanando el cerebro roto].
Phil Williams, Huntsville, Alabama 32