o d n a v e l Sobrel … s e n o i c o em laos o1 ip t s e t e b ia d la ciadas a As

Informándonos Cuando a alguien le dicen que tiene diabetes se queda sin palabras, disgustado, triste, enfadado y preocupado, y más cosas: es perfectamente normal. Los padres y las personas jóvenes se enfadan por el diagnóstico inicial. Los padres se enfadan y piensan que son ellos los que la han causado en sus hijos a través de unos genes imperfectos o por haber acudido al médico demasiado tarde. Muchas personas jóvenes pueden enfadarse con sus padres por no haberlos protegido y haberles transmitido la diabetes. Pero en realidad esto falso. Otros se lamentan por tener que dejar atrás el tipo de vida que llevaban, y también se sienten hundidos por las nuevas limitaciones en sus actividades y tienen la sensación de que las cosas nunca volverán a ser como antes. Es fácil caer en un círculo vicioso con la diabetes. Cuanto peor te sientes por ella, más se descontrola. Esto te hace sentirte aún peor;- Así que aceptar y entender tus emociones te ayudará desde el principio.

Muchas preguntas Al principio habrá muchas cosas que comprender. Tendrás un montón de preguntas acerca de cómo va a afectar ahora la diabetes a tu vida, así como qué va a pasar en el futuro. Resolver todas estas preocupaciones desde el principio puede ser de gran ayuda. Te llevará algunas semanas o meses, pero esos sentimientos se irán calmando, a pesar de que incluso personas con diabetes desde hace años todavía pueden estar haciéndose preguntas. Es muy difícil entender toda la información que te da el equipo de diabetes: -pero piensa cuál es la mejor manera de entenderlo:- ¿te gusta leer cosas en los libros, o folletos o prefieres hablar con las personas?- Piensa en la manera más apropiada para ti.

Puede que tu madre o tu padre puedan ayudar explicándote algunas cosas que te preocupa que sucedan. Tu equipo de diabetes también te puede ayudar.

Cosas que debes tener en cuenta Vivir con diabetes significa tener que prestar atención a cosas en las que la gente que no tiene diabetes no piensa, por ejemplo: •

Ponerte insulina (a veces en momentos poco oportunos).

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Hacerte análisis de sangre con pinchazos en el dedo.

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Observar qué y cuánto comes (como cualquiera), e igualarlo con la insulina que te tomas.

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Hacer ajustes para adaptar la diabetes a tus actividades diarias.

Sentimientos que puedes tener Agobio El intentar acordarte de hacer todo lo que tienes que hacer por tu diabetes te hace sentirte estresado, molesto, enfadado, harto o desgraciado y estos sentimientos pueden ser incluso más duros si tienes que hacer todas esas cosas. Estos sentimientos pueden ser muy deprimentes y ser difícil deshacerse de ellos. Te pueden llevar a perderte comidas, a saltarte la insulina o a enfermarte. Si sientes estas cosas, tus padres también pueden acabar molestándose, enfadándose, decepcionándose o sintiéndose desgraciados. Tus padres algunas veces estarán molestos, y puede parecer que es por tu culpa, así que hablar juntos en familia puede ser una buena forma para daros cuenta de que estáis juntos en esto. Piensa en qué tareas quieres que tus padres te ayuden. Decide quién quieres que te acompañe a la clínica, y quién quieres que te ayude con tu diabetes. A veces tendrás ganas de pasar de las inyecciones, los análisis de sangre, la comida sana. Pero eso va a suponer que acabes con el azúcar muy alta o muy baja y es perjudicial para ti. Piensa en algo del pasado que te sacara de tu camino y qué hiciste para recuperarte. Después piensa en cómo podrías aprovechar esta experiencia para ayudarte a vivir con la diabetes y no permitir que interfiera en tus ilusiones y sueños para el futuro.

¿Con quién te gustaría hablar cuando estés harto?- ¿Te ayuda hablar con tus amigos o con tu familia sobre lo que te preocupa? Hablar de ello puede hacer que te sientas mejor o ayudarte a ti y a tu equipo de diabetes a resolver el problema. Puedes acudir a foros para hablar con gente de tu edad sobre cómo lo llevan.

Inyecciones Al principio puede resultar complicado acostumbrarse a las inyecciones, ya que puede que no te gusten las agujas, pero, con el paso del tiempo, se te hará más fácil y tu equipo de diabetes puede ayudarte a practicar relajación cuando te estás inyectando insulina para que te preocupe menos. No sufras en silencio, aunque hayas intentado cambiar de métodos de inyectarte u otros mecanismos. Tu equipo de diabetes puede ayudarte con eso.

Estrés ¿Te sientes triste o estresado algunas veces, o estás preocupado por las cosas que están sucediendo en tu vida? El estrés puede hacer más difícil controlar los azúcares en sangre, lo que puede, a su vez, causar más estrés. ¡Nos encontramos con otro círculo vicioso! Y cualquier tipo de estrés: bueno o malo, controlable o incontrolable puede afectar a tu organismo. Esto ocurre porque te hace producir adrenalina, que puede hacer que te sientas tenso y nervioso. Cada cual tiene que sobrellevar el estrés, que puede presentarse por múltiples razones, como discutir con el novio o la novia, o porque alguien a quien quieres enferma o muere. Incluso algo como no hacer bien un examen puede dificultar que te relajes. Cuando te sientes así, crees que va a suceder algo malo y te sientes nervioso, te esfuerzas por contener la respiración, te mareas, te entristeces, sientes ganas de llorar o te comportas de una manera distinta a la normal. También puede suceder que tengas más ganas de comer o menos de lo habitual, que te quedes despierto por la noche o que no te quieras levantar y enfrentarte al día a día. Por muy horrible que parezca, es normal sentirse triste o preocupado alguna que otra vez:- pero si te sientes así todo el tiempo y eso te impide llevar el tipo de vida que quieres, te podría ayudar hablar con alguien. Puedes hablar con tus amigos, tus padres, tu médico de cabecera o tu equipo de diabetes acerca de tus sentimientos y pedirles ideas para volver a sentirte mejor. Te ayudará el simple hecho de contarlo. Pero si nada de esto funciona, un consejero o psicólogo podrá ayudarte a

que pienses diferentes maneras de enfrentarte a la tristeza y la preocupación para volver a llevar las riendas de tu vida.

Enfrentarte al estrés Los acontecimientos de la vida que nos hacen sentirnos nerviosos se llaman estresores y no siempre se pueden evitar, pero se pueden sobrellevar. Aquí tienes una lista de cosas que pueden producir estrés:- ¿puedes añadir alguna a la lista? •

Acabar los deberes a tiempo

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Hacer exámenes en el colegio

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Discutir con amigos, hermanos o los padres.

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Mudarse de casa

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Irse de vacaciones

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Enfermedad en la familia/amigos

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Viajar en transporte público

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Acudir a la clínica y tener que hablar de tu diabetes con el equipo

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Hacerte análisis de sangre o ponerte insulina cuando estás con tus amigos

Otros tipos de estrés

Piensa en las situaciones que más estrés te causan. ¿Es posible evitar la situación que hace que te sientas así? Algunas se pueden evitar, pero otras, como los deberes, hay que sobrellevarlas. Procurar centrarte en lo que va a salir bien, algunas veces puede servir de ayuda. Intenta pensar en algo que haya ido hoy bien, incluso si ha durado sólo un instante. Pregúntate, ¿Cómo hice para que eso sucediera? ¿Qué puedo hacer para que esto vuelva a pasar otra vez? Habla con tus padres o equipo de diabetes si te sientes alterado durante gran parte del tiempo.

Tu cuerpo Cuidar de tu diabetes supone tener que estar pendiente de lo que comes y de cuándo comes, bastante más de lo que lo hacen tus amigos. Dependiendo de tu régimen de insulina, hay varias cosas que no debes comer. Esto puede hacer que no tengas una buena relación con la comida. También puedes sentir ansia por las comidas que no puedes comer. En vez de comerte un trocito de chocolate, te comerías la tableta entera, con lo que terminarías teniendo una híper al mismo tiempo que sintiéndote tremendamente culpable a la vez. Si te sientes triste o preocupado, la comida puede hacerte sentir mejor a corto plazo, pero después te sentirás peor, estarás enfermo o no te pondrás la insulina para compensarlo. Tendrás que esforzarte mucho en comer bastante menos que antes. Pero esta montaña rusa, que te incita a pasa hambre, o a comer en exceso: puede hacerte muy difícil salir de ella, y que sea realmente complicado mantener la diabetes en su sitio. Es importante que salgas de esa montaña rusa ¡tan pronto como te des cuenta que has entrado en ella! Puede ser que hayas comenzado a sentirte mal por el aspecto de tu cuerpo. Te encontrarás comparándote con las fotos de las revistas o comparándote con amigos y pensando que pesas demasiado. Esos pensamientos pueden ser bastante angustiosos y complicado salir de ellos. Podrán llevarte a olvidarte de comidas o a saltarte la insulina o a enfermarte. Intenta contestar las siguientes preguntas. ¿Con cuáles de estas afirmaciones estás de acuerdo?

Es cierto

No es cierto

Evito comer cuando hay gente delante Me salto comidas y luego como mucha cantidad a escondidas Me peso con frecuencia Últimamente he perdido mucho peso a propósito Me gustaría estar mucho más delgado Odio mis muslos/barriga/trasero Evito ponerme insulina para no engordar

Si estás de acuerdo con alguna de ellas, sería buena idea hablarlo con tu equipo de diabetes o tus padres para afrontar esos problemas. Te sentirás preocupado de tenérselo que contar a los demás, pero es fundamental que le hables a alguien de estos pensamientos y comportamientos.

Para ayudarte, lo primero que debes hacer es dejar de pensar que hay comidas buenas o malas. Tu equipo de diabetes te ayudará a pensar en cómo equilibrar tus comidas y a asegurarte de que comes lo que más te conviene, así como permitirte algún que otro capricho o tentempié en tu régimen de diabetes.

Cambiando hábitos Ventajas de cambiar

Inconvenientes de cambiar

¿Hay algo que pienses que deberías hacer de otra forma? Este es un ejercicio para ayudarte a planear detenidamente si estás dispuesto a cambiar algo. Toma nota de las cosas que haces que puedan causarte un problema a ti (o a otras personas). En la primera columna, apunta todo lo que piensas que es positivo de este comportamiento: -Intenta pensar en lo mejor de la situación. En la segunda columna, escribe lo más negativo de ese comportamiento. Tómate el tiempo que necesites. Algunas veces te podrá ayudar pensar cómo te gustaría que fueran las cosas en el futuro mientras haces ésto. ¿Cómo serían las cosas si todo siguiera así? -¿Cómo sería si las cosas cambiaran?

Si hay muchas cosas que te impiden introducir cambios positivos en tu vida, habla con tu equipo de diabetes o con tus padres para que te puedan ayudar. Intenta comer con regularidad para que la insulina pueda actuar y evite que tengas mucha hambre. Podrías hablar con tu equipo de diabetes para cambiar tu régimen para la diabetes, y que te permitan comer más cosas de las que te gustan.