Steven D. Kirby Eastern Michigan University RIMA, ORALIDAD Y ESTRUCTURA: UN ASPECTO DESATENDIDO EN EL ESTUDIO

DEL FERNÁN GONZÁLEZ

Tradicionalmente los críticos y editores de textos del mester de clerecía se han mostrado poco tolerantes con la repetición de una misma rima de cuaderna vía en dos o más estrofas consecutivas. Algunos han censurado este fenómeno como una manifestación de deficiencia técnica (FitzGerald 1905). Otros han visto en esta característica una reminiscencia (tal vez inconsciente) de las largas tiradas del mester de juglaría (Artiles 95-96). Pero antes de condenar una faceta textual de esta naturaleza hay que investigar la posibilidad de que sea un deliberado recurso expresivo del autor. El hecho que este fenómeno se encuentre, en un grado u otro, en casi todos los poemas de clerecía (menos el San Ildefonso) hace pensar que puede ser parte de la técnica formal de esta "escuela" de poesía. Si no es así, ¿cómo se explica que, durante dos siglos, apenas un poeta (y bastante mediocre) se escape de una tendencia que incluye habitualmente a poetas excelsos como Berceo y Juan Ruiz? Esta característica tampoco se explica como consecuencia de incuria de parte de copista, ya que en los casos en que plurales copias nos transmiten el texto de obras como las de Berceo, el Alexandre, el Libro de buen amor y el Libro rimado

del palacio, las múltiples copias garantizan la autenticidad de la rima consecutiva. La extensión del fenómeno nos obliga a considerar una explicación artística para un fenómeno que parece haber sido censurado de acuerdo con principios neoclásicos de pureza estética. Mi método en el presente estudio es empírico; analizo el fenómeno desde la perspectiva de su colocación y utilización dentro de la obra para ver si tiene una función claramente estética. Mis conclusiones aspiran a aclarar un elemento estructuralizador dentro de un importante poema de clerecía. El Poema de Fernán González sigue siendo uno de los poemas de clerecía con mayor cúmulo de problemas. Su conservación en un MS único y tardío dificulta su estudio textual. El desajuste entre su carácter épico y su presentación en forma clerical suscita dudas sobre su clasificación — ¿es obra culta original o refundición de un cantar de AIH. Actas XI (1992). Rima, oralidad y estructura: un aspecto desatendido en el ... STEVEN D. KIRBY.

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gesta? Su estado fragmentario complica más estos asuntos (Zamora Vicente ix). Ante estas complicaciones insolubles, me parece preferible aceptar y analizar la versión que se nos ha conservado para ver si descubrimos rasgos de una conciencia artística detrás de los estragos textuales. Hay en el PFG 38 casos de rima consecutiva, todos menos dos de dos estrofas. Los dos casos excepcionales son de tres estrofas y de cuatro respectivamente. Estas rimas consecutivas afectan un total de 79 estrofas, es decir, algo más que el 10% del cuerpo total del poema. La distribución de las rimas consecutivas no es fortuita tampoco, como se esperaría si fuese una deficiencia técnica. Así como hay ocasiones con hasta cuatro rimas consecutivas en el espacio de unas 15 estrofas (276-93 y 463-78) hay también trechos de más de cien estrofas (113-227) y de unas setenta (395-462 y 479-545) sin ningún caso. Tanto la agrupación como la suspensión de los casos parece indicar algo distinto del azar. Estudiosos anteriores del PFG han indicado que el poeta construyó su obra con mucho cuidado para obtener determinados efectos dramáticos y de significado (Gimeno Casalduero 63-64). Puesto que comparto su reacción ante la composición del poema, voy a utilizar un afortunado análisis de la estructura de la obra para examinar la función de las rimas consecutivas. El consenso afirma que el poema consta de tres partes: I, los antecedentes históricos; II, nacimiento y victorias de Fernán González; III, la independencia de Castilla (Gimeno Casalduero 32; Lihani xli). Hay seis casos de rima consecutiva en la primera parte, 19 casos en la segunda y 13 en la tercera. Ante la imposibilidad de explicar todos los casos en el tiempo aquí disponible, propongo examinar hasta nueve casos representativos que forman cuatro grupos y que coinciden con momentos clave de la narración. El primer caso que quiero examinar cae dentro de la oración (Ritual de los agonizantes) que rezan los cristianos atribulados por el tributo de las cien doncellas (105 cd -113, esp. 111-12). La repetición de la rima (en -er) rompe el patrón del cambio de rima en cada estrofa y, por lo tanto, llama la atención del público hacia la encarnación de Cristo como Mesías y redentor. Pero también prepara al público para lo que sigue a la oración. Las estrofas 114-16 son la profecía de la venida de Pelayo (una especie de Redentor humano). Bajo el mando de Pelayo, los cristianos vieron que, cuando los moros tiraban saetas a Pelayo, las saetas dieron AIH. Actas XI (1992). Rima, oralidad y estructura: un aspecto desatendido en el ... STEVEN D. KIRBY.

21 la vuelta y mataban a los moros (117-19). Este milagro divino (118 c) produjo la victoria que tanta falta les hacía a los cristianos (120). La repetición de la rima -er en la estrofa 112 subraya en la oración la fe en Cristo como redentor y prepara el camino secuencial para profecía, milagro y victoria. Es un elemento de apoyo que no señaló Gimeno Casalduero en su análisis de este episodio compacto pero crucial para la estructura del Poema. Una estructura parecida, pero más rica en rimas consecutivas, vuelve a manifestarse en el episodio de Hacinas (380-563). Después de aconsejar a sus tropas, Fernán González asegura la preparación de todos y todos se recogen a sus tiendas y rezan. Estos preparativos últimos se cuentan en un pasaje de rima consecutiva en -ada (463-64) que precede inmediatamente a la visión tremebunda de la serpiente sangrienta y en llamas que aterroriza a los cristianos (465-67). Informado el Conde del prodigio, reunió a sus hombres. Un pasaje de rima consecutiva en -ar (471-72) anuncia la explicación que a continuación ofrece Fernán González. El afirma que los moros no son creyentes en Dios y aclara que, por su asociación con el Diablo, pueden conjurar prodigios. Esta sección, con tres menciones de Diablos (474 d, 475 a, 475 d), aparece con el apoyo de rima consecutiva (474-75 en -entos). Una estrofa solitaria (476) explica que la serpiente es un engaño que un diablo ha podido figurar o inventar. Las estrofas siguientes (477-78) con rima consecutiva en -er tranquilizan a las tropas con una explicación que esos diablos no pueden ocasionarles daño, ya que Cristo es el único a quien deben obedecer y temer. Este pequeño sermón reitera la necesidad de la fe en Dios. En este sentido es un recuerdo implícito de lo que les pasó en la estrofa 41 cuando España, por falta de fe, empezó a caer bajo dominio musulmán. La concentración de rimas consecutivas no es ni casual ni deficiente. Es una clarísima señal de estructuración consciente de parte del poeta, quien nos llama la atención con sacudidas acústicas colocadas oportunísimamente. Esta arenga/sermón del Conde conducirá a la victoria poco después en Hacinas con la milagrosa intervención de Santiago Apóstol. Con las dos muestras arriba tratadas hemos visto cómo funciona la rima consecutiva cerca del final de una sección. En cada caso la rima consecutiva prepara y anuncia el camino hacia la resolución de la sección. En mi última muestra de esta técnica, mostraré cómo la rima AIH. Actas XI (1992). Rima, oralidad y estructura: un aspecto desatendido en el ... STEVEN D. KIRBY.

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consecutiva inicia y finaliza una parte textual con un efecto que se parece al marco de un cuadro. La tercera división del texto del poema comienza con la conocidísima venta del azor y del caballo a Sancho Ordóñez (564-75). Es, a mi juicio, significativo que este relato de estilo folklórico no ostente ningún caso de rima consecutiva. Gran parte de las rimas consecutivas se dedican a subrayar momentos de devoción religiosa y de intervención divina, y esto no es ni uno ni otro. Es más bien un castigo humano en la forma de la autodecepción de un traidor. A continuación una hermana del rey Sancho concierta alevosamente el matrimonio con el conde castellano (576-84). Cuando asiste a las vistas correspondientes, Fernán González es detenido por los soldados del rey navarro. En una rima consecutiva (585-86) declara su victimización, grita de pena, y relaciona su dificultad con la profecía del monje Pelayo (238d) quien dijo que sería preso dos veces. La rima consecutiva aquí sirve claramente para señalar el cumplimiento de la profecía. También anuncia su huida y refugio en una ermita hasta que, al final, se entrega a su perseguidor, el rey García (587-94). Después de un desmayo, Fernán González pregunta por qué Dios le ha fallado y, en una rima consecutiva en -ado (595-96) critica a Dios por desamparar a un leal servidor. Añade que si alguna ofensa hizo, debe haberla compensado con su sufrimiento actual. Este par de casos de rima consecutiva sirve para criticarse el conde a sí mismo, para relacionar su situación con la profecía de su juventud y finalmente para afirmar su leal servicio a Dios. De esta manera van estos casos de acuerdo con el patrón general de conectar episodios textuales con el destino religioso del protagonista. Los últimos casos que el tiempo me permite examinar aquí son los casos finales de rima consecutiva que se nos conservan dentro del texto que tenemos. Después de reclamar su dinero por el azor y el caballo al rey Sancho Ordóñez, la rima consecutiva en -ar (733-34) subraya la imposibilidad de pago porque la duplicación progresiva del precio había llegado a tal extremo que todos los hombres de Europa no podrían pagar la deuda y Fernán González rechazó el pago de la suma acordada inicialmente. La atención acordada a la resolución del acuerdo por medio de la rima consecutiva contrasta con la aparente inocencia y rutina del acuerdo oficial inicial. Puede ser que el poeta adrede no haya querido llamar la AIH. Actas XI (1992). Rima, oralidad y estructura: un aspecto desatendido en el ... STEVEN D. KIRBY.

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atención sobre la etapa inicial y sí sobre la final. El caso final de rima consecutiva en el poema cae en las estrofas 74142 (en -adó) que cuentan la desolación de Castilla por el rey García de Navarra, incidente que provocó un sangriento contraataque de parte de Fernán González con el cual se finaliza el poema conservado. Es imposible saber si habría otras rimas consecutivas en el poema en su estado íntegro. Pero lo conservado es más que suficiente para indicar una clara técnica literaria expresiva. Es evidente que la rima consecutiva es un elemento fundamentalmente acústico que sirve para despertar o avivar la atención del público del poema hacia episodios clave del Poema. La función estructural se ha demostrado ya. Pero hay que señalar las consecuencias para la creación y difusión del Poema de estas técnicas acústicas. En primer lugar, queda claro que la rima consecutiva apoya la percepción de que este poema fue destinado o a la recitación o a la lectura en voz alta como lo fueron la generalidad de los poemas medievales. Sin esta dimensión oralista, la presencia de un elemento primordialmente acústico carece de sentido. La mera presencia de estas rimas consecutivas nos indica el segundo aspecto de la cuestión. Evidentemente el poeta ha querido favorecer una recta percepción de su mensaje poético mediante el empleo de respaldos acústicos. La colocación de las rimas consecutivas no puede ser sistemáticamente casual cuando coinciden habitualmente con momentos claves de la narración. Y, en tercer lugar, ya no se puede considerar la rima consecutiva como una deficiencia técnica una vez demostrado su empleo como elemento estructuralizador. Pero hay que examinar otras consecuencias de la cuestión. ¿No es posible que estas rimas consecutivas sean restos de las largas tiradas monorrimas del perdido cantar de gesta de Fernán González (Menéndez Pidal 173; Catalán xxxii)? Aquí la respuesta tiene que ser múltiple. En primer lugar, nunca he creído en la existencia de tal cantar de gesta. El Fernán González que tenemos posee todas las características de una obra original clerical —inspiración culta, técnica sofisticada— y pocas o ninguna de las de una refundición. Desde luego el hecho de que verse sobre un protagonista legendario español no es suficiente argumento para afirmar dicha refundición. Tampoco lo es su adaptación en la Crónica general.

Otro hecho que mitiga en contra de una supuesta conexión entre AIH. Actas XI (1992). Rima, oralidad y estructura: un aspecto desatendido en el ... STEVEN D. KIRBY.

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rimas consecutivas y cantares de gesta es que casi todos los poemas de clerecía emplean esta técnica. Nadie, que yo sepa, está por afirmar que obras como el Apolonio y el Alexandre se inspiraron en cantares de gesta, salvo incidentalmente. Tengo en curso, desde hace varios años una investigación sistemática de la rima consecutiva en los poemas de clerecía y puedo afirmar que su empleo sistemático es para señalar determinados episodios cruciales de los textos. Hay poquísimos casos que parecen indicar debilidad técnica. Creo que ya es hora de prestar debida atención a la rima en estudios poéticos. Lejos de ser un elemento accesorio o meramente decorativo, creo haber demostrado que sirve como un componente esencial de la estrategia de la narración, por lo menos en poemas de clerecía como el Fernán González.

Bibliografía Artiles, Joaquín. Los recursos literarios de Berceo. Madrid: Gredos, 1968. Catalán, Diego. "A propósito de una obra truncada de R. Menéndez Pidal." Introducción a Reliquias de la poesía épica española. Madrid: Gredos, 1980. FitzGerald, John Driscoll. Versification of the "Cuaderna Vía." New York: Columbia University Press, 1905. Gimeno Casalduero, Joaquín. "Sobre la composición del Poema de Fernán González" (1968). Estructura y diseño en la literatura castellana medieval. Madrid: Porrúa Turanzas, 1975. 31-64. Lihani, John, ed. Poema de Fernán González. East Lansing: Colleagues Press, 1991. Menéndez Pidal, Ramón. Reliquias de la poesía épica española. Ed. Diego Catalán. Madrid: Gredos, 1980. Zamora Vicente, Alonso, ed. Poema de Fernán González. Madrid: Espasa-Calpe, 1954.

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