TDAH en la edad juvenil y adolescencia

  TDAH en la edad juvenil y adolescencia Dra. María Vaquero Garrido. Médico especialista en Neurología y Neuropediatría. Hospital Viamed Los Manzano

4 downloads 132 Views 170KB Size

Recommend Stories


PSICOLOGÍA DEL DESARROLLO DE LA INFANCIA Y DE LA ADOLESCENCIA II EDAD ESCOLAR Y ADOLESCENCIA
PSICOLOGÍA DEL DESARROLLO DE LA INFANCIA Y DE LA ADOLESCENCIA II EDAD ESCOLAR Y ADOLESCENCIA Prefacio PARTE PRIMERA: EL NIÑO EN EDAD ESCOLAR CAPÍTULO

Embarazo en la Adolescencia
Adolescencia Temprana. Causas del Aumento de Casos de Embarazos Adolescentes. Factores. Actitudes. Padre Adolescente. Consecuencias para los Padres Adolescentes. Consecuencias para los Hijos de Padres Adolescentes. Parto Adolescente

Story Transcript

 

TDAH en la edad juvenil y adolescencia

Dra. María Vaquero Garrido. Médico especialista en Neurología y Neuropediatría. Hospital Viamed Los Manzanos La OMS define la adolescencia como “la época de la vida que comprende el rango de edad entre 10 y 19 años”, considerándose 1ª adolescencia de los 10 a los 14 años y 2ª adolescencia de los 15 a los 19. La adolescencia incluye la pubertad, maduración orgánica y psicológica del individuo. Durante la maduración psicológica tiene lugar la evolución psico-intelectual y el desarrollo de la personalidad del niño adolescente hasta alcanzar la autonomía propia del adulto. En este transito se diferencian varias etapas, cada una determinada por un tipo de comportamiento característico. En la 1ª adolescencia existe un afán de conocimientos asequibles al niño, tanto sobre sí mismo como sobre el mundo que lo rodea. En la 2ª etapa, el adolescente se identifica con lo que podría denominarse “yo soy yo” “tengo conciencia de mí, una realidad y unos potenciales” A esta edad, se producen importantes cambios tanto afectivos, (el objeto del afecto deja de ser los padres y se orientan hacia los líderes que representan el ideal del yo). Intelectualmente se adquiere la inteligencia abstracta así como gran espíritu crítico y objetividad. La evolución hacia la autonomía, que es característica del desarrollo de la persona humana hacia un ser adulto, se manifiesta en la adolescencia intensamente, conllevando en ocasiones conflictos o resistencias por parte del adolescente y en ocasiones de sus padres. Ante todas las dificultades mencionadas es fácil deducir que un proceso patológico adquirido en este momento o bien ya existente previamente, repercutirá con gran intensidad, aumentando el riesgo de generar desequilibrios en la maduración psicológica del adolescente afecto.

 

1  

  La tasa de morbilidad de las distintas patologías en la adolescencia es poco conocida debido a la ausencia de servicios específicos que den una atención diferenciada a este grupo de la población. Los adolescentes suelen ser “tierra de nadie” y se atienden en consultas u hospitalización a veces pediátrica, a veces de adultos. De entre las patologías neurológicas más prevalentes en este rango de edades al que nos referimos se encuentran: cefaleas, sincopes, trastornos paroxísticos no epilépticos, traumas craneales, epilepsias, trastornos de conversación, alteraciones de conducta, encefalopatías crónicas o el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). TDAH del joven y el adolescente: Centrándonos en el TDAH del joven y el adolescente, debemos decir que esta entidad, varía y evoluciona sintomatológicamente con la edad. Entre el 35 y el 80 % de los niños con TDAH continúan con este trastorno en la adolescencia, incluso en ocasiones en la edad adulta; aunque en menor proporción. La persistencia de los síntomas en esta entidad tiene consecuencias negativas muy importantes para el afectado igual que ocurre en la edad infantil. • Inatención: Inmadurez cognitiva y emocional, introversión y escasa expresividad, dificultad en las relaciones sociales, falta de iniciativa, falta de autonomía, problemas académicos y del aprendizaje…etc. • Hiperactividad: Dificultad en relaciones sociales, exagerada extroversión, sobrecarga de intereses y objetivos, dificultad para concluir tareas, necesidad de movimiento constante…etc. • Impulsividad; Dificultad para aceptar límites a su comportamiento, búsqueda de recompensas inmediatas, actitud desafiante, mayor riesgo de adicciones, abandono y rechazo de los estudios…etc. En la etapa adolescente nos encontramos diferentes perfiles de TDAH en función de sus condiciones biológicas y sintomáticas (genética y desarrollo) y de las condiciones ambientales que han rodeado su evolución (aspectos académico, entorno familiar, estimulación cognitiva, corrección conductual, características y tipo de tratamiento e intervención). Dependiendo del perfil de funcionamiento del adolescente, su problemática estará asociada a otros factores y este requerirá de un tipo de intervención u otra. Algunos síntomas propios del TDAH, así como el impacto de estos en el entorno, están presentes durante toda la vida, otros en cambio se trasforman hasta no ocasionar ningún tipo de problema en el funcionamiento del sujeto con el tiempo y tratamiento. Dado que el TDAH es un trastorno crónico de tipo evolutivo, la sintomatología a medida que los niños crecen se modifica, reduciéndose en algunos aspectos

 

2  

  (hiperactividad motriz) e incrementándose en otros (Impulsividad). Es por ello que la adolescencia presenta un espectro sintomatológico global distinto al que se observa en la niñez. La apatía la desmotivación, los problemas conductuales, la aversión hacia el estudio, las conductas impulsivas, la falta de esfuerzo, la ausencia de planes de futuro… importan de forma negativa no solo en la propia percepción, ”autoestima del adolescente” sino también en sus resultados y funcionalidad. Estos comportamientos también impactan en su entorno más cercano, manifestándose a través de reacciones desproporcionadas, pasotismo, aislamiento etc; siendo manifiesto de las dificultades y necesidades no expresadas por el joven-adolescente en su problemática diaria.

Impacto del TDAH en la adolescencia: • • • • • • • • • • •

Mal desarrollo de la autonomía Dificultad para identificar sus necesidades Indefensión aprendida Alta frustración Problemas afectivos Miedo al futuro Impacto académico Baja autoestima y autoconcepto negativo Sentimiento de culpa y baja autoeficacia o competencia personal Escasa o malas relaciones con sus iguales Conflictos en el núcleo familiar

En los adolescentes TDAH es necesario además considerar una serie de aspectos como son: la alta incidencia de otros procesos comórbidos asociados y el alto riesgo de fracaso académico y social El TDAH no suele aparecer solo, siendo frecuente que se acompañe de otros problemas lo que denominamos comorbilidad. La concurrencia del TDAH con otros diagnósticos psiquiátricos se presenta en más del 50% de los adolescentes afectados. Cuanto más tiempo pase sin ser correctamente diagnosticado el trastorno, más riesgo de comorbilidad derivada de la propia sintomatología del trastorno y del impacto que esta causa en el afectado y su entorno. Estas otras entidades asociadas al TDAH no obstante, también vienen determinadas por la genética. Cuando existen antecedentes de trastornos psiquiátricos en la familia es más probable que los adolescentes los desarrollen, especialmente cuando además se dan circunstancias precipitantes

 

3  

  en el entorno, lo que suele ser frecuente (fracaso escolar, bullyng, rechazo social, consumo de tóxicos etc.)

Las principales entidades asociadas al TDAH del adolescente son: •







Trastornos socio-emocionales 20-45% o Ansiedad o Fobias o Problemas sociales o Baja autoestima Trastornos del humor 20-30 % o Bipolaridad o Depresión Trastornos de conducta o Disocial (antes de los 18 años) 60 % o Oposicionista desafiante 40% o Límite de la personalidad o Personalidad antisocial (en mayores de 18 años) Adicciones o Por uso o abuso de sustancias 30-50% o Adicciones a las nuevas tecnologías 50%

La presencia de otros procesos comórbidos al TDAH empeora el proceso ya que favorece la cronicidad y dificulta el tratamiento que debe ser multimodal en estos casos. Dirigiéndose tanto al afectado como a su entorno con el fin de establecer nuevas rutinas, potenciar apoyo emocional desde las familias y núcleo social, evitar comportamientos o actividades perjudiciales y desarrollar conductas positivas. Es por tanto significativamente importante tanto el diagnóstico en esta etapa de la vida (si no se ha realizado antes) como la detección de otros procesos concomitantes y el adecuado tratamiento dada la enorme cantidad de problemática derivada para el paciente tanto de tipo psicológica como afectiva y social. Si ya en sí misma la adolescencia y primeros años de la edad adulta suponen un cambio en distintos aspectos y nuevas vivencias no exentas de conflicto, en el caso del adolescente TDAH la situación se complica en ocasiones todavía más. (Como se ha explicado previamente) Esta etapa de la vida tan voluble, fundamental para la adquisición de la autonomía y la personalidad, debe por tanto ser meticulosamente valorada por especialistas adecuados evitando complicaciones o conflictos emocionales y sociales que podrían afectar no solo al adolescente, sino a su familia y persistir además en la edad adulta.

 

4  

 

Aunque lentamente, las sociedades médicas, tanto a nivel nacional como internacional, defienden la el abordaje específico de estos pacientes; luchando por la creación e instauración de unidades específicas del joven y adolescente en los centros sanitarios que en este caso englobaría la patología neurológica, lo que supondría un abordaje específico y de alta calidad para este grupo etario a veces tan disperso, inclasificado o infradiagnosticado. Confiamos, que nuestra comunidad pueda ser una de las pioneras en el establecimiento de estas citadas y tan necesarias unidades.//

 

5  

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.