Voluntariado Internacional Marianista FAMILIA MARIANISTA - Boletín informativo 15 - Abril 2009 - w w w. m a r i a n i s t . o r g

>Nuevas experiencias en Perú y Malawi. >Un voluntario rumbo a Argentina. >Kenia y Perú; voluntarios que han vuelto...

Voluntariado Internacional Marianista Queridos amigos del Voluntariado Internacional Marianista, Les acercamos el primer número del Boletín Informativo del VIM, en el cual encontrarán varias notas de algunos de nuestros voluntarios VIM 2009 en distintas partes del mundo: • Miguel, de España en Perú • Michael, de Estados Unidos en Argentina • Liz, de Estados Unidos en Kenia • John, de Estados Unidos en Perú También, les acercamos las últimas novedades del programa de voluntariado marianista MVP de los Estados Unidos, que ofrece una gran experiencia de voluntariado siguiendo fielmente el estilo marianista, aunque por ahora sólo acepta candidatos de los Estados Unidos. Por otro lado, quisiéramos comentarles que en Argentina recibiremos por primera vez dos voluntarios del VIM, los dos llamados Michael, y los dos de los Estados Unidos, uno de los cuales ha escrito un artículo para esta revista. Estamos muy entusiasmados con esta nueva propuesta, especialmente en este mismo año en que las Hermanas Marianistas FMI han fundado su primer comunidad en nuestro país, con lo cual, esperamos que la presencia de los primeros voluntarios VIM en nuestro país fortalezca y dinamice la Familia Marianista local.

tiempo más prolongado, y asumiendo un compromiso mucho más importante. Felicitamos a los dos voluntarios VIM John y Miguel por su entrega y compromiso con la misión marianista. Finalmente, también nos enorgullecemos de la misión de Liz, quien se ha quedado en Kenia desde el año pasado, y se quedará por un total de dos años en este lugar encantador, donde ya varios voluntarios VIM han realizado una misión más corta o más larga, pero todos han quedado maravillados, con la misión, con los niños de la Escuela Nuestra Señora de Nazaret, y con los religiosos marianistas locales, especialmente con Martin Solma SM y Chola Mulenga SM. Agradecemos como siempre a todas las personas que colaboran y hacen posible que el VIM siga creciendo a lo largo de los años, para que más personas se sumen a esta maravillosa tarea de ser misioneros de María, dando a Su Hijo al mundo, ofreciendo paz, y esperanza para todas aquellas personas olvidadas y marginadas de nuestro mundo. Un mundo mejor es posible, José Luis Pérez Coordinador del VIM

Queremos también destacar la misión que están realizando John de Estados Unidos y Miguel de Valencia en Perú, uno en Callao, el otro en Otuzco. Ambos han conocido la misión marianista de cada uno de estos lugares en visitas y experiencias más breves, y se han animado a volver al mismo lugar para realizar un voluntariado internacional marianista por un Correspondencia: José Luis Pérez - Coordinador del VIM // [email protected] // J. J. Naón 735 (C1406DTC) Buenos Aires, Argentina // +54 (11) 4634-2557

Una carta desde la Cordillera de los Andes

Les escribo desde la comunidad marianista de “María Madre del Buen Consejo”, en Otuzco, al norte de Perú. La Región Marianista de Perú consta de quince religiosos que llevan a cabo catorce obras (colegios, parroquias, emisoras de radio…), obviamente a mi tampoco me salían las cuentas al principio. La cuestión es que acá el papel del laico es fundamental, se cree y se confía en él plenamente. La ciudad de Otuzco, lleva como apellido “la capital de la Fe”, y como escribió Manuel Madueño (religioso marianista en Argentina, que estuvo acá de reciclaje el año pasado) en un artículo suyo que leí hace unas semanas: “Sí, puede parecer un título un poco pretencioso pero para los otuzcanos es un título que les llena de orgullo. Otuzco es una ciudad de unos 10.000 habitantes, capital de una de las doce provincias en que se divide el departamento de La Libertad, situado al noroeste del Perú. Su capital es Trujillo, a unos 800 Km. al norte de Lima. Y se llama “capital de la Fe”, porque en Otuzco se venera la imagen de la Inmaculada Virgen de la Puerta. Es un centro de peregrinación y de piedad popular al que todos los días especialmente los fines de semana, llegan peregrinos.” ¿Y cual es el trabajo que hacemos acá? El objetivo principal de esta comunidad es la Evangelización, la formación en la Fe de las comunidades de los

alrededores, de todas las comunidades en las que se divide el distrito de Otuzco, cerca de 60, hemos elegido casi 20, donde existe una presencia marianista. Las comunidades son generalmente bastante dispersas, grandes extensiones de “chacras” (campos de cultivo), con casitas de adobe donde viven las familias. Las comunidades más numerosas tienen cerca de 300 familias y las más pequeñas apenas 20. En su mayoría viven del cultivo de piñas, palta (aguacate), mango, patatas, lentejas, cebada, trigo… y otras frutas y verduras que nunca antes había visto ni oído; oca, camote, yuca, guabas, carambolas. En cada una de estas comunidades viven los agentes de pastoral, normalmente son dos, que se encargan de reunir semanalmente a las gentes de la zona para tener su reunión, su celebración de la palabra, sus formaciones… Nuestra labor es acompañar, formar, apoyar, visitar, animar… a estos agentes de pastoral, tenemos reuniones de formación acá en el centro, jornadas por las zonas (los pueblos están divididos en la zona baja, media y alta), encuentros de

jóvenes, misas compartidas… Este año como novedad se ha soñado con poder crear comunidades un poco más formadas, más comprometidas, que en un futuro puedan ellos solos salir a los pueblos de alrededor a evangelizar. Se seleccionaron 6 pueblos (2 de cada zona) y se han planificado 5 visitas de 3 días a lo largo de todo el año, hace un rato he llegado de una de estas visitas, del pueblo de Casmiche Blanco. Las comunidades donde está presente esta misión marianista son; Pagash Bajo, Samne, Chagapampa, Huacaday, Capulí, Casmiche, Tarnihual, Rayampampa, Campo Nuevo, José Balta, Pichampampa, Machigón, Tambillo… En la ciudad de Otuzco hay también dos obras marianistas más, además de nuestra comunidad,

Preparativos para una celebración eucarística y una boda en Chagapampa.

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tenemos la “chamiradio” (www.chamiradio.org.pe) un medio de comunicación estupendo para esta realidad, donde en muchos poblados ni siquiera tienen todavía luz eléctrica, pero sin embargo en todas las familias hay un aparato de radio. Esta emisora tiene un clarísimo perfil crítico, de denuncia de corrupciones (que lamentablemente tan frecuentes son por acá), de defensa del pueblo, de contar y explicar las noticias. También tiene una gran programación cuyo fin es la formación en la Fe, por ejemplo el programa “Buenas Nuevas”, que lo llevamos a cabo desde el Centro de Formación Pastoral, y es todas las noches de 7 a 8:30 (se puede escuchar por Internet). La otra obra marianista de este encantador pueblo

es AMAS (www.amasperu.org) es la Asociación Marianista Acción Social, es un grupo de laicos súper comprometidos (un biólogo, un antropólogo, un educador, una comunicadora social…) que se encargan de la defensa de los derechos de los campesinos afectados por los desastrosos impactos ecológicos de una minera que hay a 4 o 5 horas de acá. Ellos organizan monitoreos de agua, capacitaciones, movilizaciones… Yo les digo que son el “greenpeace marianista”. Bueno y llegamos a la parte más interesante, por supuesto la experiencia de misión y evangelización es “chévere” como dicen acá, pero lo que realmente me enamoró desde el primer momento, desde que conocí esta comunidad, es eso mismo, la comunidad.

Grupo de niños durante los trabajos de una convivencia misionera.

Comentaba al principio de esta carta que en la región marianista del Perú, se cree y se confía en los laicos plenamente, por ejemplo yo estoy viviendo en el centro de formación de pastoral rural, la verdad es que se trata de una comunidad algo “peculiar”, la dirigen un matrimonio José Luis e Isela, con dos niños peques Sebas y Jose Mariano, y vivimos cuatro laicos más; Susana, Teresa, Jhon y yo, todos más o menos de mi edad, y dos religiosos un hermano, Douglas y un sacerdote, Juan Carlos. Hace unos días me terminé de leer la “Propuesta de vida; sobria, honrada y religiosa” que escribió José Eizaguirre, SM hace unos meses, mientras me lo leía pensaba pero si esto que propone José ya existe más o menos, y se encuentra acá en Otuzco.

Bendición de los alimentos y bebidas que se consumirían durante el banquete de la boda.

Antes de esto nunca había vivido en comunidad (un piso de estudiantes no es una comunidad, verdad?) y he de confesar que me encanta, compartimos la oración, la misión, las tareas, las responsabilidades... De momento llevo un par de meses acá, pero estoy convencido de que va a ser una experiencia fundante en mi vida, en el tiempo que llevo son muchos los momentos en los que he sentido mi corazón interpelado, en los que he sentido que me encontraba entre los favoritos de Dios, los más pobres, los más olvidados. Las razones por las que decidí venirme con el VIM a Otuzco son varias; la primera era por cuestiones lingüísticas, buscaba un lugar donde se hablara el mismo idioma que yo hablo, no quería “perder” tiempo aprendiendo otra lengua. La segunda, era por el entorno, prefería irme a alguna zona montañosa, aunque “nací en el mediterráneo” como diría Serrat, pero siempre me ha fascinado la montaña, sus amaneceres, sus gentes, sus plantas, sus aves… por lo tanto acá estoy en el paraíso, a casi 3000 metros de altura. El tercer requisito era la labor, buscaba algo referente a la educación o a la evangelización… La verdad es que a priori no me había planteado nada sobre como era la “comunidad” que buscaba, por lo tanto la sorpresa ha sido más grande, la alegría de encontrarme este tipo de comunidad, con esta

estructura, con este buen ambiente… ¡increíble! Y ya para terminar, animo a todos aquellos jóvenes marianistas, que se lancen a tener una vivencia de misión. Dentro del carisma marianista la misión es uno de los pilares básicos, en nuestras ciudades podemos tener “experiencias de voluntariado” (que por supuesto que está fenomenal tenerlas), pero considero que el matiz entre una experiencia y una vivencia es que la experiencia es algo puntual, por ejemplo ir a visitar un centro de acogida de inmigrantes dos tardes por semana, pero una vivencia es algo muchísimo más amplio, que abarca todos los aspectos de nuestra vida, por ejemplo un camino de Santiago, una semana en taize, son vivencias, porque abarcar las 24 horas de nuestro día. Personalmente pienso que el momento ideal de tener una vivencia de misión de este tipo es cuando terminamos la universidad y justo antes de ponerse a buscar trabajo. Yo terminé mi carrera de Historia del Arte, en julio del 2008 y por eso pienso que este año 2009 era el año “perfecto”. Bueno y que no me enrollo

más, si tenéis alguna duda o alguna consulta sobre este maravilloso lugar, os invito a que visitéis la web del centro: http://buenconsejo.marianistas.org o si preferís me podéis escribir un correo a [email protected] y encantado os contestaré en cuanto pueda, de acuerdo? Un fuerte abrazo desde la maravillosa cordillera de los Andes peruanos, a 3000 metros más cerca del cielo… Paz y bien, siempre en misión permanente, Miguel Perles Alabau / Voluntario VIM de España en Perú (2009) (http://perlegrino.marianistas.org)

Mikel con la comunidad de Chagapampa frente a la escuela del lugar.

Voluntariado Internacional Marianista

Voluntario VIM de los Estados Unidos en camino a Argentina. Durante mi segundo año en la Universidad de Dayton, sentí un fuerte llamado a dedicar una parte de mi verano siguiente a servir a los demás. Fue así que junto con otros médicos nos fuimos de misión a Puerto María, en Jamaica. Mientras estaba allí atendí a pacientes internados en una clínica sin recursos y sin personal, y fue entonces que me di cuenta que sólo sirviendo a los demás me podía sentir pleno. En esta clínica atendí a un paciente llamado Lee (que casualmente es mi segundo nombre), que me pidió que lo asistiera. Aunque le expliqué que recién había terminado mis estudios previos a la carrera de medicina, su gran necesidad de auxilio y de contención era mayor, y sólo me tenía a mí, un futuro estudiante de medicina, no un médico competente, para que me ocupara de él. Su pedido de ayuda hacia

cualquiera que Lee pensara que se lo pudiera brindar, independientemente de su formación, me hizo ver la cruda realidad que tanta gente en el mundo debe enfrentar. Esta experiencia me hizo decidir que quiero dedicar una parte de mi vida a servir a los demás, después de mi graduación. Pensando en mi próxima misión con los Marianistas en Buenos Aires, tuve que luchar contra la idea de hacer un voluntariado en una ciudad aparentemente rica como Buenos Aires, “la París de Sudamérica”. Sin embargo, recordando la afirmación de Juan Pablo II que el 4° mundo existe para los pobres de los países y ciudades del 1° mundo, creo que los porteños más marginados, aunque vivan en una ciudad moderna, tienen muchas necesidades que, junto con los Marianistas, deseo poder satisfacer durante mi año

Michael con su paciente Lee en Jamaica.

de servicio en Argentina. Específicamente, mi interés en hacer un voluntariado marianista se origina en el compromiso del Carisma Marianista de saber discernir los “signos de los tiempos” para lograr un mundo más justo y más fraterno para todos. También me atraen de los Marianistas el deseo de solidarizarse con los más pobres, siendo voz de los que no tienen voz, y comprometiéndose a un estilo de vida simple y austero. Creo que estas características, tan propias de los Marianistas, son aspectos importantes del voluntariado ¡y espero ansiosamente poder colaborar con esta misión después de mi graduación!

Michael Elliot / Voluntario VIM de Estados Unidos en Argentina (2009)

Michael con niños en Jamaica.

Segundo año en Kenia.

Liz Ramey, de los Estados Unidos, está realizando su segundo año de voluntariado en Kenia, en el Colegio Nuestra Señora de Nazareth, dirigido por Marianistas. Aunque Liz pensaba pasar parte de sus dos años de voluntariado en Nairobi y Mombassa, finalmente se decidió por establecerse en Nairobi y realizar sus dos años de voluntariado en la misma ciudad, y con la misma comunidad. En las siguientes fotos verán algunas de las tareas que realiza Liz, y los rostros concretos de las personas que ella sirve como voluntaria Marianista. Entre sus actividades Liz enseña inglés a un grupo de jóvenes, y colabora en los distintos proyectos de capacitación de adultos en oficios como peluquería , cocina y carpintería. Este año también volverá a Kenia nuestra querida voluntaria María Pilar Liz, de España, que ya se ha decidido a realizar en Nairobi un voluntariado de un año de duración, en lugar de sus numerosas visitas a Kenia ya realizadas de dos o tres meses de duración. Invitamos a todas aquellas personas que hablen inglés y tengan interés en conocer la realidad de este país, a contactarse con el VIM para colaborar en la misión que llevan adelante los Marianistas laicos y religiosos en este lugar. El mismo coordinador del VIM hará una pequeña experiencia de voluntariado en Kenia este año durante el mes de Julio, antes de participar en el Encuentro Internacional de las CLM (Comunidades Laicas Marianistas), que tendrá lugar en la misma ciudad de Nairobi en el mes de Agosto. Liz Ramey / Voluntaria VIM de Estados Unidos en Kenia (2008/9)

Otra experiencia en Perú.

Después de volver a los Estados Unidos habiendo vivido una increíble experiencia de voluntariado en Perú el verano pasado, decidí volver para realizar un voluntariado más prolongado al terminar mis estudios universitarios. Investigué varios programas de voluntariado en América Latina, pero finalmente decidí volver a Perú por unos 7 meses para seguir colaborando en el Instituto Marianista Chaminade. En este momento estoy trabajando en la escuela y asistiendo en distintas actividades de mantenimiento y actualización de la parte tecnológica de la escuela. Además, también ayudo a un grupo de alumnos en sus prácticas para mejorar su inglés. Estoy viviendo una experiencia fantástica aquí en Perú, y espero poder recorrer algo más del país en los próximos meses. John Ventimiglia / Voluntario VIM de Estados Unidos en Perú (2008/9)

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¡Sin embargo se puede! Hace ya más de un año y medio que estoy realizando un voluntariado en Karonga, Malawi. Durante este tiempo me transformé en una persona diferente y aprendí muchísimas cosas. He disfrutado de cada minuto de mi experiencia. No digo que haya sido siempre fácil, he cometido errores, muchos en realidad, pero aprendí de ellos. He enfrentado obstáculos, pero los pude superar. Lloré, pero sequé mis lágrimas, y seguí para adelante. Al acercarme al segundo año de mi voluntariado en el mes de agosto, se me vienen a la cabeza muchas reflexiones y cosas que aprendí durante este tiempo aquí, y quisiera compartir cinco de ellas con ustedes: “La vida puede parecer a veces tan difícil, sin embargo se puede.” Este es el estribillo de una canción popular de reggae que pasan en la radio tres o cuatro veces por día. Es una oración simple, pero tiene un mensaje muy fuerte. Pasamos varios días a veces sin electricidad, o en el aula con temperaturas de más de 48 grados centígrados! Nos cuesta conseguir comida, y pasamos a veces varios meses sin agua potable, pero siempre encontramos la manera de salir adelante. Nos enfrentamos con muchas dificultades y pensamos que la vida no podría ser peor que esta, pero seguimos adelante y sobrevivimos. “La danza aliviana muchos problemas.” La danza

es parte de la vida diaria aquí. La gente de Malawi baila en reuniones, en la Iglesia, en clase, mientras escucha música, mientras hace la cola en el mercado, o mientras camina varios kilómetros para llegar a la ciudad. Puede tratarse simplemente de un repiqueteo de dedos, o mismo un paso improvisado más elaborado. A veces se oye música de una radio, o de gente que canta y toca los tambores en la calle. Incluso la música en la cabeza de una persona. Antes de llegar a Malawi, nunca me gustaba bailar. Siempre que se organizaban bailes yo me escabullía, odiaba los bailes escolares. Sin embargo, cuando comencé mi voluntariado, me di cuenta inmediatamente que debía superar esta aprensión al baile, porque aquí la danza ocupa un lugar muy importante en la vida cotidiana. Más allá de cuan estresada, cansada, aburrida, o frustrada me pueda sentir, descubrí que tomarme unos minutos por día de danza tanto en un sentido literal como figurado ayuda a eliminar las energías negativas que sentía antes de hacerlo. ”Si no puedes reírte de ti mismo, la vida te va a parecer mucho más dura.” Soy blanca. Vivo en un pueblo africano donde soy una de las pocas personas blancas en muchísimos kilómetros a la redonda. Esto no lo puedo cambiar. A veces me ven como una desubicada, o como una forma de

entretenimiento. Pronuncio mal las palabras del idioma local, el Chitumbuka, me veo ridícula cuando quiero intentar hacer una de las danzas como alguien de Malawi. Cuando corro en la cancha de fútbol o salto para embocar la pelota de básquet en el aro, me ven como una atracción en un parque de diversiones. Aprendí muchas cosas sobre distintos aspectos de la cultura local. Aunque me vea como una tonta haciéndolo y se me rían casi siempre de mí, igual intento vivir la experiencia. Ni bien llegué, me sentía tímida y avergonzada. Sin embargo, fui aprendiendo que está bien verse ridícula al intentar hacer algo nuevo. La gente de Malawi realmente valora mi esfuerzo y mi intento de adaptarme a la cultura, y ahora me doy cuenta que, efectivamente, me veo medio ridícula… pero, ¿a quién le importa en realidad? ”La amistad es sencilla.” Durante toda mi vida he tenido grupos estables de amigos. En la primaria, comía con las mismas cinco chicas todos los días en el almuerzo. En la secundaria, estudiaba con mis mejores amigas en la biblioteca. En la universidad, viví con las mismas siete chicas durante cada uno de los cuatro años de estudio. Sí, es cierto, tenía amigos fuera de estos grupos, pero la mayor parte del tiempo la pasaba con mis más íntimos. Una vez que llegué aquí, todo esto cambió. Puedo decir

honestamente que cada persona que he conocido pasó a ser mi amigo. Soy amiga de los profesores con quienes trabajo y de los hermanos que viven al lado. Cuando viajo, me hago nuevos amigos de todo tipo. Me hago amiga de la señora que se sienta al lado mío en el mini bus. He hecho amigos de todas partes del mundo. He caminado durante horas en distintas partes de Malawi con personas que jamás volveré a ver en mi vida. He comido, he bebido, y me he reído con personas de todo tipo. Intercambié correos con personas que apenas conozco y con quienes me mantengo en contacto desde el encuentro inicial. El tener amigos de todo tipo me abre la mente hacia nuevas ideas, nuevas charlas, y nuevas maneras de pensar. Las relaciones deberían ser sencillas. No hay que excluir a nadie o decidir si una persona merece o no ser “ mi amiga”. Sin excepciones. “Los desafíos son una bendición disfrazada.” Antes de llegar a Malawi, me dijeron que iba a enseñar inglés y biología. Inmediatamente comencé a pensar en lo que quería enseñar y en cómo lo haría. Cuando llegué, la realidad me hizo cambiar todos los planes. Enseño en una escuela donde cinco de cada cincuenta alumnos tienen libro, donde los laboratorios de ciencias no tienen ni siquiera un

microscopio que funcione, donde yo, la profesora, soy la única fuente de información que tienen los alumnos. Lo que escribo en el pizarrón es todo lo que tienen para una determinada asignatura. Durante mi primer mes aquí, estaba horrorizada por el hecho que no hubieran libros. Pronto comencé a recaudar fondos para comprar libros para la escuela y junté más de 3000 dólares de los Estados Unidos. Este dinero ayudó bastante, pero no erradicó el problema completamente. La escuela carece de la mayoría de los recursos necesarios para la instrucción y el aprendizaje. Sin embargo, aprendí que soy capaz de pensar en soluciones para estos problemas. En realidad, ahora me encanta el desafío de tratar de hacer entender temas a mis alumnos con diferentes proyectos, diagramas que dibujo o

ejercicios que les invento. Por ejemplo, los alumnos odian escribir composiciones. Esta es una de las pasiones de mi vida, y me sentí profundamente frustrada al ver que a ellos no les gustara escribir. Después de algunos meses luchando con uñas y dientes para que escriban una simple composición, se me ocurrió la idea de inventar un diario escolar. Este diario, The Chaminade Times , contiene cuentos, poemas, noticias, notas de editor, historietas, juegos de ingenio, chistes, dibujos y fotos que ellos sacan con una cámara digital. Tengo un staff de más de 75 alumnos. Cada uno participa

Emily dictando clases en la escuela como parte de sus actividades de voluntariado.

Voluntariado Internacional Marianista en un departamento de su elección. Están sumamente orgullosos de este periódico. Tienen algo para lo cual trabajar y su escritura ha mejorado drásticamente. De hecho, el periódico se vende a un costo mínimo en muchas escuelas en el norte de Malawi. Los desafíos pueden parecer imposibles. Sin embargo, nos hacen ver de qué estamos hechos, y de lo que somos capaces de lograr con lo poco que uno dispone para trabajar muchas veces. Estoy sumamente agradecida por la experiencia que viví durante este voluntariado en Karonga, Malawi. Frente a mis últimos seis meses aquí, me entristece pensar que dejaré este lugar que hoy llamo mi hogar. Sin embargo, me consuela el hecho de pensar que haya podido llamar “hogar” a este lugar, y que pueda volver en cualquier momento de mi vida más adelante. Emily Richardson / Voluntaria del programa MVP de los Estados Unidos en Karonga, Malawi

El VIM ofrece la posibilidad de realizar un voluntariado durante un período de 6 meses a un año o dos, en misiones pastorales y/ o proyectos de desarrollo y promoción humana concretos, animados por la Familia Marianista en distintas partes del mundo, como los presentados en este boletín. Para mayor información, dirigirse a su coordinador, José Luis Pérez, a la dirección electrónica [email protected] [email protected]