Widgets por todas partes Salvador Pérez Crespo Tecnologías

¿Qué es un widget?, ¿cuáles son sus principales características?, ¿qué aplicaciones tienen?, ¿qué impacto tienen?. Halle las respuestas en este interesante y ameno artículo. Descargar archivo de audio (18:26 min / 4,22 Mb)

Reconozcámoslo. Tener que abrir obligatoriamente un navegador web para utilizar servicios de Internet pudo estar bien hace unos años. Pero a día de hoy, supone equiparar la "navegación por Internet" a la edición de un documento en un procesador de texto o ver unas fotos en el ordenador procedentes de nuestra cámara digital. A falta de un sistema operativo "en red" que borre las fronteras entre lo que se realiza localmente en el propio ordenador personal y lo que ocurre en algún lugar de la red, aproximaciones como las que proporcionan los widgets suponen un relevante paso intermedio en el proceso de evolución. Los widgets son pequeños programas informáticos que realizan funciones específicas, y que habitualmente se incluyen en el escritorio del ordenador o en páginas web. También son conocidos por términos equivalentes como 2page components", "startlets", "gadgets", "web badges" o "modules", aunque la denominación común más aceptada es la anticipada de widgets. Como se anticipaba la definición anterior, dos son las utilidades principales que se pueden dar a los widgets. La primera estaría relacionada con la necesidad de las personas de conseguir que lo cotidiano se

encuentre siempre disponible. Cuanto mayor es el número de servicios disponibles en Internet, mayor es el beneficio de que muchas de ellas se hagan de forma continua y automática. La segunda estaría relacionada con la personalización de los contenidos generados por los usuarios. De la misma manera que se crean pequeñas aplicaciones que se ejecutan en un ordenador personal, es posible crear pequeños programas que mejoran la apariencia de las páginas web. Y cuanto mayor es el papel creador del individuo canalizado a través de weblogs o redes sociales, mayor es el interés de enriquecer el contenido. A modo de ejemplo, en la siguiente figura se muestra en 15 ejemplos del segundo tipo.

15 widgets útiles Desde el punto de vista de la innovación, los widgets suponen un paso hacia la "modularización" de las aplicaciones web, entendido este término en la interpretación que le da Clayton Christensen como evolución tras la necesaria "integración" de los primeros productos. Así, en la etapa de la "integración", las aplicaciones web se construyen a partir de desarrollos individualizados para así maximizar la calidad que se puede conseguir a partir de los primitivos elementos disponibles. Con la evolución de las tecnologías base, llega la madurez que permite "modularizar" las aplicaciones web, y con ello la posibilidad de crear soluciones a partir la suma de piezas estandarizadas. En este sentido los widgets son equivalentes a las técnicas de mashups para la creación de aplicaciones web popularizadas con el movimiento web 2.0, pero con un notable mayor grado de estandarización y simplicidad de uso. El paso

final se dará cuando se estandaricen los "puntos de modularidad" de los componentes y se elimine la fricción que en la actualidad produce la disparidad de interfaces existentes. Los widgets son un claro ejemplo de "innovación en plataforma", un tipo de innovación "hacia arriba" que busca eliminar la complejidad de las tecnologías que deja atrás para hacer posible una nueva generación de ofertas de valor. Para que este tipo de innovaciones triunfe, es necesaria la presencia de un conjunto de partners que completen la proposición de valor y la hagan triunfar. El problema ha sido que los primeros entornos para el desarrollo de widgets no fueron suficientemente exitosos en la creación de esa red de partners y ha dado tiempo a que multitud de ofertas compitan en la actualidad. La salida pasa por la estandarización. Widgets para todo La era de los widgets comienza con el desarrollo de un entorno para la creación de estos pequeños programas llamado Konfabulator en febrero de 2003. Inicialmente fue de pago (24,95 $), y sólo existía una versión para Mac pero se hizo gratuito cuando fue comprado por Yahoo en julio de 2005. La idea fue tan exitosa que Apple decidió incluirlos como parte de su sistema operativo, hasta llegar a ser una las características de preferidas de los usuarios Mac. En 2006 se populariza una versión primitiva de widgets (primitiva por su relativa complejidad) como forma de referenciar contenido de portales como YouTube o Flickr. Y ya en 2007, Microsoft los incluye como una de las principales novedades de su sistema operativo Vista, imitando lo que antes hizo Apple, lo que probablemente hará que se hagan populares entre el gran público. Los widgets consiguen su valor, no porque realicen tareas complejas de forma sencilla, sino porque realizan tareas sencillas y cotidianas de forma muy eficiente. En el caso de los "widgets de escritorio", se trataría de disponer de puntos de acceso especializados para cubrir las necesidades más cotidianas de los usuarios, dejando el uso de herramientas especializadas para las aplicaciones más complejas. Es mucho más cómodo ejecutar un widget que consulte el pronóstico del tiempo periódicamente de forma que la información esté siempre lista para el usuario; que tener que abrir un navegador, conectarse a una página web de meteorología y consultar el pronóstico en el lugar deseado. Widgets en todas partes Como acierta a diagnosticar Eric Shonfeld, la causa principal que de que los widgets comiencen a estar en todas partes es que "la web se ha convertido en programable gracias a la separación de la información y la presentación que está presente en las páginas web actuales" [1]. El diseño de las páginas web actuales se basa en una clara separación entre los datos que se presentan (el texto, las imágenes, ), del formato en el que se presentan (el tipo de letra que se usa, la disposición de los elementos, el tamaño de los objetos gráficos, ). Esta separación facilita que la parte de la información de los servicios se encuentre mucho más fácilmente accesible para su uso por otros servicios, entre los que se incluirían los widgets. Tres son las características que permiten realizar una taxonomía de los tipos de widgets disponibles en la actualidad: el terminal utilizado, la plataforma de de soporte que permite la creación y ejecución de los mismos, y el lugar donde se ubican.

Tipos de widgets Los primeros widgets, conocidos como tal, que existieron, son los que se ubican en el escritorio de un ordenador personal. Existen en dos variantes: aquellos que están soportados por el sistema operativo del ordenador (aquí encontraríamos los gadgets de la "Vista sidebar" de Microsoft y los widgets del OSX Dashboard de Apple) y los que están soportados por un programa informático que se ejecuta en el sistema operativo correspondiente (aquí se encontrarían los Yahoo! widgets -antes Konfabulator- y los Google Desktop gadgets). Podría pensarse que la ventaja de los primeros es que al estar integrados con el sistema operativo ofrecen funcionalidad y prestaciones mucho más elevadas; o que la ventaja de los segundos es que al ser entornos multiplataforma permiten atraer a un número mayor de desarrolladores con lo que el número de widgets creados será notablemente mayor. Aun siendo ciertas ambas afirmaciones, las diferencias no son sustanciales como para que, por el momento, unas soluciones hayan destronado a las otras. Un caso especial sería el de los widgets del navegador web Opera: conceptualmente se parecen a los widgets sobre una plataforma específica pero pierden parte de su atractivo por el hecho de que obligan a que el navegador web haya de estar siendo ejecutado permanentemente, algo que los usuarios no suelen hacer.

Widgets en el escritorio (Apple OS X Dashboard) Un segundo grupo de widgets son los que forman parte de una página web. Pierden "inmediatez" frente a los widgets anteriores pero ganan en que pueden ser utilizados desde cualquier ordenador que disponga de conexión a Internet. En este grupo se encuentran, por un lado, los llamados webtops o escritorios online que buscan ser la versión online del escritorio del ordenador. Su propósito es hacer converger en una única página web, contenido perteneciente o ligado al usuario, pero procedente de varias fuentes: correo electrónico de Gmail, fotos de Flickr, videos de YouTube, los weblogs favoritos,.... En este contexto, cada uno de los módulos que pone, quita o reubica el usuario es un widget.

Widgets en una página web (Netvibes)

Dentro del grupo de widgets para páginas web, la otra posibilidad son los widgets para personalizar los contenidos generados por los usuarios. Existen widgets disponibles para personalizar los weblogs creados mediante las herramientas más populares Wordpress o TypePad. También existen widgets para personalizar las páginas que los usuarios crean en MySpace.

Widgets para un weblog (TypePad) Casi recién llegados están los widgets para el teléfono móvil. A diferencia de sus hermanos para ordenador personal, los widgets para teléfono móvil aportan un valor extra pues el propósito actual es en muchos casos ser capaz de popularizar servicios que no habían triunfado por las deficiencias de la web móvil de los años pasados. El ejemplo paradigmático, aún sin haber salido todavía al mercado, es el de los widgets que incorporará el próximo teléfono móvil de Apple, el iPhone. En este caso el sistema operativo del teléfono (una versión reducida del OSX, el sistema operativo que usan los ordenadores personales de Apple) es la plataforma sobre la que se desarrollarán los widgets. Y al igual que en el mundo de los ordenadores personales, en el teléfono móvil ya existen plataformas para la creación de widgets con los ejemplos representativos de los WidSets de Nokia o el entorno de la empresa BluePulse.

Widgets en el iPhone Los últimos en llegar serían los widgets que se utilizarían en pequeñas pantallas secundarias en ordenadores portátiles. Se trata de una de las características de Vista, el nuevo sistema operativo de Microsoft, que permite ejecutar pequeñas aplicaciones en una pequeña pantalla que se añadiría a los nuevos ordenadores personales que utilicen este sistema operativo. Con esta tecnología (Windows SideShow) se podrían ejecutar pequeñas aplicaciones sin necesidad de activar la pantalla principal. Los candidatos serían widgets con funcionalidad semejante a los que se ubican en el escritorio del ordenador. La tecnología no es exclusiva del ordenador portátil, aunque éste sea su entorno ideal. También podría utilizarse para crear widgets que se ejecuten en teléfonos móviles o en un mando a distancia.

Widgets en pantallas secundarias de portátiles (Windows SdeShow) Finalmente, y rayando con los productos de ciencia ficción, se encontrarían dispositivos como la WidgetStation, ganador del premio a la innovación del CES 2007. Se trata de un reloj que se conecta a Internet a través de redes WiFi o por cableado Ethernet y que tiene la posibilidad de ejecutar widgets. Gracias a ello es posible acceder a servicios típicos de los widgets como escuchar emisoras de radio por Internet, obtener pronósticos meteorológicos, recibir titulares de noticias,...

Widgets en un dispositivo "ad hoc" (WidgetStation) Muchas plataformas de widgets dispersan a los desarrolladores La evolución se encontraría en la fase inicial en la que los primeros diseños están dedicados a mejorar funcionalidad ya existente para los usuarios a través de nuevos procedimientos. En su gran mayoría se trata de widgets muy sencillos por lo que el coste de replicar su desarrollo en varias plataformas no es muy grande. Esto hace que, hasta ahora, la multiplicidad de plataformas no esté siendo de momento un gran freno para la creatividad de los desarrolladores. Pero puede llegar a serlo si se evoluciona de la forma que se prevé . Un ejemplo comparable y representativo es el de las extensiones al navegador web Firefox. Las extensiones son pequeños añadidos a la funcionalidad básica del navegador web que los usuarios añaden y quitan a voluntad para personalizar la funcionalidad de la aplicación. Firefox proporciona guías de desarrollo de forma que las extensiones son desarrolladas por personas ajenas al proyecto. Las primeras extensiones desarrolladas estaban dedicadas mayoritariamente a aumentar la funcionalidad del navegador web, añadiendo funciones que no existían o modificando las existentes. Dos años después del lanzamiento de Firefox en noviembre de 2004, las extensiones más populares son desarrollos de empresas de servicios online que se aprovechan del mecanismo de las extensiones para implementar auténticos servicios que anteriormente sólo eran posibles a través de interacciones web. Hasta el punto que un servicio online que se precie suele estar acompañado de una extensión que facilite o posibilite su uso. Sin embargo, existe aún una escasez de startups dedicadas al desarrollo de widgets, lo que puede ser un síntoma de que el ecosistema sí podría estar resintiéndose de la falta de estandarización. Las tecnologías de creación de widgets pueden llegar a variar notablemente de una plataforma a otra haciendo desaparecer en algunos casos cualquier atisbo de sinergia. Y aunque, desde el punto de vista de tecnologías de desarrollo software, es frecuente el uso de Javascript y XML en la mayoría de las plataformas [2], no se trata de un factor siempre común. En este contexto son varias las iniciativas que buscan la estandarización del terreno. Desde los organismos de estandarización, el esfuerzo más relevante vendría del entorno del W3C cuyo Web Application Formats Working Group se encuentra definiendo los requerimientos para la programación, firma digital, seguridad, empaquetado y distribución de los widgets. El objetivo final sería que los

desarrolladores llegaran a ser capaces de distribuir sus creaciones con independencia del dispositivo donde van a ser utilizadas, lo que sería de especial importancia en el mundo móvil donde el desarrollo está en la actualidad más fragmentado. Desde el mundo de las empresas, Netvibes ha anunciado el lanzamiento de un Universal Widget API, que permitiría el diálogo y sincronización entre widgets. Un pequeño trozo de código sería añadido al widget para permitir identificar la plataforma sobre la que se ejecutará el widget y ejecutar el código necesario en cada caso. Se trata de una aproximación pragmática que permitiría crear un único código para cada widget y ser utilizado en muchas plataformas.

Widgets que se ejecutan en plataformas distintas gracias al Universal Widget API de Netvibes Las transformaciones que impulsa el ecosistema de los widgets Desde el punto de vista de las empresas, los widgets constituyen un punto de acceso preferente a servicios online. Baste imaginar el caso de un usuario que decide ubicar en un su escritorio un widget de uno de los servicios de búsqueda en Internet (o una tienda online, o un periódico online,...). En estas condiciones los servicios de la competencia pierden posibilidades de ser utilizados frente a la facilidad de acceso del servicio elegido. El mecanismo sería similar a cuando un usuario decide seleccionar en los bookmarks de un navegador web un servicio concreto, lo que hace más probable su uso posterior. La diferencia aquí está en que mientras que el número de bookmarks que suele manejar un usuario normal es elevado, el número de widgets que utiliza es pequeño con lo que la eficacia de la selección es mayor. Para el usuario, el uso de widgets supone un paso más en la personalización de su experiencia online. Crear páginas personales, lejos de la tediosa tarea de escribir en un lenguaje extraño, se convierte en agregar los widgets y organizarlos al gusto de cada persona. El uso de widgets tiene un impacto, a veces significativo, en el tráfico de datos de la conexión a Internet, lo que es especialmente relevante en el caso de los teléfonos móviles donde las tarifas planas reales de datos son escasas. Los widgets son programas que se están ejecutando constantemente y que por lo tanto necesitan intercambiar información de forma regular con diversos servidores de Internet. Si bien para la mayoría de widgets la cantidad de información intercambiada es relativamente pequeña si se compara con el uso normal de Internet, ésta puede llegar a ser significativa en el caso de widgets multimedia. El impacto alcanza incluso a las bases de financiación de los servicios en Internet. El uso de widgets como forma de acceder a servicios online modifica los procedimientos en los que se realiza la medida del uso de los mismos. En particular porque degrada el modelo publicitario ya que la posibilidad de insertar anuncios en un widget es notablemente menor que en una página web convencional (salvo en el caso obvio de los widgets patrocinados). Basten unos detalles para dar idea del posible impacto sobre la publicidad en Internet: Yahoo compró Konfabulator, la primera plataforma exitosa de creación de widgets, y Google se ha apresurado en crear una plataforma similar. Un toque europeo Contrariamente a la tendencia general de Internet donde las grandes compañías son estadounidenses, en el área de los widgets se aprecia al menos un toque europeo, poco frecuente. Los dos mejores ejemplos de escritorios online, Netvibes y PageFlakes, son empresas de procedencia francesa y alemana. Dos de los

agregadores online de widgets más conocidos Snipperoo y Widgetoko son respectivamente portales británico y holandés. Y claro está, Nokia, la creadora de la plataforma Nokia Widsets, es finlandesa. A pesar de todo, el futuro se atisba prometedor Sin llegar a los excesos de Tariq Krim, presidente ejecutivo de Netvibes, quien afirma que "en un plazo de unos dos años los widgets cambiarán la forma en la que conocemos la web, lo que obligará a los navegadores a replantearse su función y convertirse en 'lectores de widgets'", lo que si parece seguro es que las páginas web dejarán de estar formadas exclusivamente por código estático y se conformarán cada vez más a partir de la unión de pequeñas piezas. Podría alcanzarse el "tipping point" de popularidad con la progresiva llegada de Vista a los ordenadores personales (y con ella su plataforma de "gadgets", widgets en terminología de Vista) o con la introducción de widgets para el móvil "à la iPhone". Y, tal vez, la popularidad pueda forzar la estandarización que tanto beneficiaría al ecosistema. Salvador Pérez Crespo. Telefónica I+D para Telefónica España [1] Eric Schonfeld, Business 2.0. [2] Curiosamente (o no tan curiosamente) la tecnología por excelencia del web 2.0, AJAX, se basa también en el uso de Javascript y XML. Descargar archivo de audio (18:26 min / 4,22 Mb)