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II Jornada Cleanstart de CERTIS
Desinfección de suelos en fresa: la solución debe ser integrada La política comunitaria en materia fitosanitaria promueve desde hace años lo que se ha dado a conocer como “Product Stewardship”, esto es, el manejo responsable y sostenible de este tipo de productos a lo largo de todo su ciclo de vida. Este es el germen que promueve las jornadas Cleanstart organizadas por la empresa CERTIS. Tras un primer paso por Almería, Huelva ha sido la segunda parada de este encuentro de expertos en desinfección de suelos, que en esta ocasión han abordado el cultivo de la fresa, de alto valor productivo y de vital importancia para esta provincia andaluza.
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La jornada, celebrada en las instalaciones del IFAPA Huelva, ha reunido a técnicos y productores de fresa que han podido escuchar, bajo un mismo techo, a algunos de los principales investigadores y expertos en este cultivo. La proximidad del “grueso” de la desinfección de suelos en las explotaciones de fresa onubenses ha hecho que el interés haya cumplido las expectativas de los organizadores, sabedores de la compleja situación que actualmente rodea a la desinfección.
Antecedentes La desinfección de suelos en el cultivo de la fresa es principalmente de carácter químico, ya que la opción no química todavía no está suficientemente puesta a punto desde el punto de vista de la divulgación en los grandes sectores. Lo que se hace básicamente es la inyección en el suelo o la aplicación mediante riego por goteo antes de establecer el cultivo. La principal opción entre los productores de fresa consiste en la mezcolanza del 1,3 Dicloropropeno con la Cloropicrina, mientras que con las nuevas tecnologías gana peso el uso de generadores de
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metil-iso-tiocianato (Metam sodio, Metam potasio y Dazomet). Como opción de futuro se presenta el Dimetildisulfuro (DMDS), pendiente de aprobación de registro. Tras la declaración del protocolo de Montreal a finales de los años 80, la comunidad internacional expulsaba al bromuro de metilo entre las sustancias a utilizar entre los agricultores, debido a los daños que causa a la capa de ozono. Por otro lado, las otras moléculas más extendidas en la desinfección de suelos (1,3 Dicloropropeno y Cloropicrina) han ido recibiendo autorizaciones excepcionales para su uso, mientras que las multinacionales han ido introduciendo mejoras en ellas para tratar de hacerlas de nuevo registrables. Paralelamente, muchos investigadores están luchando por implementar entre los agricultores las alternativas de carácter no químico, aunque cambiar mentalidades no es sencillo.
aérea de la planta se ve afectada. Según Berta de los Santos (investigadora del IFAPA Las Torres – Tomejil, en Sevilla) la Macrophomina phaseolina se ve favorecida por el stress térmico además del déficit de agua en el suelo, mientras que el hongo Fusarium spp se ve favorecido con altas temperaturas principalmente. En todos los casos, las labores de labranza contribuyen a la redistribución, horizontal y vertical, de los patógenos.
Principales enemigos Si hemos de englobar a los principales enemigos de los cultivos de fresa en suelo, tenemos que hablar de dos clases: ● Nematodos: Según el investigador José María Vega (Responsable de nematodos en el Laboratorio de Producción y Sanidad Vegetal de Sevilla) el que más preocupa en Huelva es el endoparásito sedentario Meloidogyne hapla, que suele aparecer con temperaturas más o menos frescas. Preocupa también la especie Pratylenchus penetrans y Hemicycliophora spp. ● Hongos: Cada vez es más común encontrar en la provincia de Huelva especies como Fusarium spp y Macrophomina phaseolina, que provocan enfermedades como la podredumbre carbonosa. Afectan a las raíces y coronas y la enfermedad no es detectada hasta que la parte
Ejemplar de Meloidogyne. Fuente: USDA-ARS.
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Desinfección en España y en el mundo Las zonas productoras más importantes del mundo son básicamente California y la Costa de Huelva y, en menor medida, Florida y China. En nuestro país, y según datos de la campaña 2012/2013 facilitados en esta jornada por Juan Jesús Medina (Director del Centro IFAPA Huelva), el 73% de las desinfecciones en el cultivo de la fresa se basan en la mezcla de 1,3 Dicloropropeno con la Cloropicrina (60% en inyección, 40% por goteo). Muy por debajo se encuentran los que sólo utilizan Cloropicrina (10%), Dazomet sólo o mezclado con 1,3 Dicloropropeno (12%) y Metam sodio (2,5%), mientras que el resto es cultivo ecológico o fuera de cultivo. La mayoría de estas desinfecciones (65%) tienen lugar a finales de verano y comienzos de otoño, aunque tradicionalmente se producían entre marzo y abril. A nivel mundial, la situación es similar. Según el experto José Manuel López-Aranda (ex director del Centro IFAPA de Málaga) existen otras alternativas, como es la rotación cultivos con pimiento, berenjena y diversas cucurbitáceas (más común en países como China, Turquía o Alemania), la solarización y biosolarización (usar gases en descomposición bajo plástico de solarización), que tienen lugar en latitudes adecuadas como las de Israel o el Delta del Nilo, la biofumigación (en países como Holanda) o la desinfección anaerobia del suelo (en experimentación en California), mientras que el uso de variedades resistentes o el cultivo orgánico no es efectivo, al igual que el uso de vapor de agua, que se “sale de presupuesto” y tiene un dudoso efecto. Los estudios llevados a cabo en España se centran en las materias activas existentes, además de técnicas como la biosolarización, todo ello conjugado con el uso de plásticos VIF o TIF. Desde el Centro IFAPA Las Torres – Tomejil (Sevilla), el investigador Luis Miranda afirma que los resultados más consistentes, siempre desde el punto de vista productivo, se obtienen con el uso de 1,3 Dicloropropeno y la Cloropicrina. Otra buena alternativa es el
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uso del Dazomet; una cantidad de 200-300 k/ha es suficiente, aunque hay que prestar atención a la técnica aplicación. Por otro lado, el Metam sodio ofrece resultados un tanto inconsistentes, mientras que el DMDS muestra buenos resultados asociado a la Cloropicrina o al Basamid. Según Miranda, para el buen funcionamiento de la biosolarización es importante desarrollar una maquinaria específica. En cuanto al control de nematodos, los ensayos realizados por Miguel Talavera (IFAPA de Camino de Purchil, en Granada) muestran que en Pratylenchus penetrans el 1,3 Dicloropropeno + Cloropicrina es la solución más eficaz, aunque recordemos, son productos que se encuentran en el “limbo” legal. Tras esta solución, el uso de Dazomet y la biosolarización se muestran bastante eficaces. En todos los casos, los plásticos VIF mejoran eficacia de todos los tratamientos fumigantes. En relación al control de hongos hay que destacar que los tratamientos con Dazomet son tan eficaces como con los tratamientos con otros fumigantes químicos. La solarización también reduce podredumbre carbonosa.
Programa Cleanstart de CERTIS Los organizadores de la jornada tienen clara una cosa. Ninguna solución de manera aislada es eficaz a la hora de desinfectar los suelos. Únicamente una solución integrada, en la que se conjuguen las diferentes estrategias, es eficaz. Este es el objetivo del programa Cleanstart, basado en 7 grupos de trabajo en producciones como la fresa, la viña o el tabaco, y en el que han apostado, además de CERTIS, centros de investigación del IFAPA, ITACYL, INIA, IMIDA, Universidad de Almería, CETARSA y CTAEX. A ello hay que sumar el trabajo que también se está desarrollando en otros países del arco mediterráneo, como Francia, Italia o Grecia. Las soluciones que CERTIS pone en el mercado pasan por productos en: ● Preplantación: Basamid (Dazomet), DD-90 (Dicloropropeno emulsionable), DD-95 (dicloropropeno inyectable) y Paladín (Dimetil-Disulfuro), producto este último
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del que esperan obtener la autorización para su uso a finales de 2015. ● Postplantación: Tusal (biofungicida), Rootgard (fitofortificante) y fertilizantes especiales como Bioradicante. María Jesús Zanón (Directora de proyectos de CleanStart para CERTIS – España) destaca en este portfolio dos productos, uno ya establecido y otro que está por venir: ● Basamid (Dazomet 98% granulado): Fumigante en formulación microgranulada. Tiene una buena eficacia entre 30 y 50 g/m2 en la fresa, que se puede reducir si se usa con DMDS. El periodo de espera es de 30 días (sellado 10 días, aireación 20 días). Automáticamente después a la aplicación debe sellarse con plástico estanco al gas que se libera (basta con polietileno de uso convencional). ● Paladín (DMDS): Se presenta como alternativa al Dicloropropeno. Subproducto de la empresa petroquímica, patentado por ARKEMA, producido en Francia y con un elevado grado de pureza (99,1%). En el caso de la fresa, debe estar 14 días bajo la lámina plástica (preferiblemente VIF) y esperar 7 días aireándose. 21 días después se puede transplantar. Se caracteriza por un fuerte olor a ajo. Habrá producto para inyección (Paladin AL) y para riego por goteo (Paladin EC). Por otro lado, Laurence Gutiérrez (Director de Desarrollo y Registro en CERTIS – España) nos recuerda que la em-
presa también pone a disposición del agricultor un programa de tutela (stewardship) basado en un agrodiagnóstico, apoyo técnico, la integración de métodos alternativos y la posibilidad de acceder maquinaria específica que aporta una mejora en la aplicación. En ese sentido, Francisco Jiménez (Responsable de Ventas en la Zona Suroeste de CERTIS - España) afirma que las aplicaciones a mano y el uso del rotavator no son las mejores opciones. Como método más eficaz, destaca la maquinaria específica a cada cultivo, que ofrece, entre otras ventajas, la reducción de la dosis en el cultivo de la fresa, ya que la aplicación y alomado tienen lugar en una sola pasada.
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