Calles, casas y gente

Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito Protagonistas y calles en sentido oriente-occidente, de 1534 a 1950, de la calle Egas a la calle

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Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

Protagonistas y calles en sentido oriente-occidente, de 1534 a 1950, de la calle Egas a la calle Chile

CALLES, CASAS Y GENTE DEL CENTRO HISTÓRICO DE QUITO Protagonistas y calles en sentido oriente - occidente, de 1534 a 1950, de la calle Egas a la calle Chile TOMO 1 Este es el primer tomo de cinco de la serie “Calles, Plazas, casas y gente del Centro Histórico de Quito, de 1534 a 1950” F e rnando Jurado Noboa PACO MONCAYO GALLEGOS Alcalde del Distrito Metropolitano de Quito P residente del Directorio del Fondo de Salvamento del Patrimonio Cultural Carlos Pallares Sevilla D i rector Ejecutivo del Fondo de Salvamento del Patrimonio Cultural Alfonso Ortiz Crespo Editor General Lucía Espinosa del Hierro y Ximena Ormaza Colaboradoras Fernando Jurado Noboa Autor Sebastián Crespo Fotografía Fabián Valencia y Martha Guerra Levantamiento digital de fachadas Yanko Molina Revisión de Textos ISBN 9978-92-348-9 © FONSAL, Quito, Octubre de 2004

Edición y Diseño: TRAMA Dirección de Arte: Rómulo Moya Peralta / TRAMA Diagramación: Verónica Maldonado Dávila / TRAMA Preprensa: TRAMA Dirección: Eloy Alfaro N34-85 / Telfs: (593-2) 2246-315 / 2246-317 www.trama.com.ec Impresión: Imprenta Mariscal

Impreso en Quito-Ecuador, 1500 ejemplares, 2004

Biblioteca Básica de Quito BBQ/4

TO M O I

Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

Fernando Jurado Noboa

Protagonistas y calles en sentido oriente-occidente, de 1534 a 1950, de la calle Egas a la calle Chile

7 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Ciudad: calles, casas, personas e historia

D

E LOS TANTOS MILES, O MILLONES, DE CIUDADES DEL MUNDO, SOLO UNAS POCAS DETENTAN EL TÍTULO

HUMANIDAD. NO PORQUE EN TODAS ELLAS NO HAYA VIVIDO GENTE, DESMADEJADO LA TRAMA DE SUS VIDAS, SUS PASIONES, SUS ASPIRACIONES, Y DEJANDO HUELLA DE SU CULTURA, QUE ES LO DISTINTIVO DE LOS SERES HUMANOS, SINO PORQUE SOLO EN ALGUNAS DE ELLAS ESE TESTIMONIO DEL PASADO ES DE UNA CALIDAD EXTRAORDINARIA Y SE CONSERVA, ADEMÁS, CON ESMERO, CUIDÁNDOLO Y PROTEGIÉNDOLO. Y DE ENTRE TODAS ESAS CIUDADES QUE HOY INTEGRAN LA LISTA DEL PATRIMONIO MUNDIAL, LA PRIMERA DE TODAS, LA QUE FUE DISTINGUIDA ANTES QUE NINGUNA, FUE LA CIUDAD DE QUITO, CAPITAL DE LOS ECUATORIANOS. A ELLA LE ACOMPAÑÓ SOLO OTRA CIUDAD, UNA CAPITAL PROVINCIAL EN POLONIA, CRACOVIA. DE

PATRIMONIO CULTURAL

DE LA

¿Qué vieron los integrantes del Comité de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en Quito para ser la que inaugurara esa lista de ciudades y sitios patrimoniales? Vieron sus componentes arquitectónicos, la acumulación de templos, iglesias, capillas y conventos de gran factura, pletóricos de pinturas y esculturas, y vieron también la homogeneidad de su arquitectura, y sus calles, y el trazado de estas, y la ubicación tan particular de la ciudad. Y vieron, también, que había un trabajo hecho, una delimitación del área histórica, y una voluntad de conservarla en su integridad y en cada uno de sus componentes. Ese trabajo fue hecho por personas concretas: decenas de quiteños y de ecuatorianos avecindados en Quito y ya hijos de ella, que habían ido construyendo, pacientemente, la conciencia del valor de su ciudad. Entre ellos, de manera principal, como lo reconoce la dedicatoria de este libro, Rodrigo Pallares Zaldumbide, director del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural, y Fray Agustín Moreno O.F.M., el historiador franciscano que había publicado un libro de gran importancia para el conocimiento y valoración de Quito. El año 2003, Quito, con su municipalidad a la cabeza, celebró, a lo largo de sus 12 meses, pero en particular el 8 de septiembre, los 25 años de la declaratoria de Quito como Patrimonio Cultural de la Humanidad. No se trató solo de la celebración de un hecho acaecido hace un cuarto de siglo, conmemoración jubilosa de uno de los títulos de la ciudad. Se trataba, también y sobre todo, de una celebración viva de una ciudad que nos define y de la que estamos orgullosos, de una ciudad que nos acoge y nos interpela, que nos desafía y nos acuna. Mejor que las ceremonias y los conciertos, las sesiones y los congresos, los festivales y los desfiles, que también de eso hubo, y de gran calidad, la celebración de los 25 años de la patrimonialidad de Quito se marcó por un hecho: la reubicación, pacífica y concertada, de 10.000 comerciantes informales que habían venido ocupando desde hace medio siglo cada vez más calles y plazas del centro histórico. Se decía que era imposible lograrlo. Y ante esa imposibilidad, se habían bajado los brazos, y se dejaba hacer, y la ocupación se extendía y se extendía, con mafias que alquilaban los espacios en las aceras y calzadas. Felizmente, la municipalidad hizo un descubrimiento importante cuando se dio cuenta, hace unos pocos años, que esos comerciantes no eran un “virus”, ni una “mancha”, ni unos “invasores”, como se les llamaba hasta entonces, sino que jugaban un papel en la economía de la ciudad, sobre todo de sus clases populares, y que el asunto no era “eliminarlos” o “expulsarlos” sino que había que reubicarlos, como en efecto se hizo.

8 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Es importante este señalamiento al escribir la presentación del libro de Fernando Jurado Noboa sobre las calles y plazas del centro histórico de Quito, porque cuando editó su primera versión, hace 20 años, esas calles y esas plazas estaban ocupadas en su mayoría, y habían dejado de cumplir la función para la que fueron hechas: la libre circulación de peatones y vehículos. Y hoy, cuando se edita y se lanza esta nueva versión, mucho más completa y enriquecida, esas calles y plazas han recuperado su papel, su dignidad y su prestancia. Por eso, el libro de este dedicado investigador, es otra celebración de esa Quito eterna, de la que hablaba el P. Agustín Moreno en los sesentas del siglo pasado y de la Quito recuperada y remozada por el Fondo de Salvamento (FONSAL) del Municipio, y por todas las otras instancias que se empeñaron en ponerla de nuevo con el brillo y la calidad urbana que se merece esta joya de la humanidad. Este libro constituye otra manera de celebrar la ciudad porque nos recuerda cómo eran esas calles, cómo se llamaron a lo largo de la historia, quiénes construyeron sus casas, quiénes vivieron en ellas. De esa descripción emerge una pintura de la riqueza humana y arquitectónica de Quito y cómo fue evolucionando, porque el centro se llama “histórico” porque acumuló cambios a lo largo de siglos, ya que se trata de una ciudad viva, habitada, no de unas ruinas donde ningún corazón late ni ninguna relación se teje. Ciudad es, como titulé esta presentación: calles, casas, personas e historia. Esto es lo que el libro del doctor Jurado Noboa nos muestra en estos dos tomos repletos de datos. Siguiendo la trama urbana, de oriente a occidente, de norte a sur, vamos como fisgoneando en cada casa para ver cómo es que está allí, quiénes la poseyeron, qué inquilinos tuvo, y cómo se relacionaba con el barrio. Se trata de una investigación ciclópea: la evolución de la ciudad desde su fundación española, a lo largo de los siglos. Es producto de miles de fichas, de miles de horas de estudio: Es también el producto de la historia oral, porque se basa, para el siglo 20, sobre todo, en decenas, centenares de conversaciones. En este sentido, es una muestra de la investigación de laboratorio con la investigación de campo, de la búsqueda archivística y bibliográfica y de la entrevista en vivo. Por eso, la Municipalidad de Quito y el FONSAL, cuyo directorio presido, se complacen en presentar este libro, que como el propio autor dice, es muy distinto de su obra anterior sobre el mismo tema, y viene a constituirse en una obra clave para conocer a fondo a Quito, Patrimonio de la Humanidad, al culminar este año en que hemos sido, además, Capital Iberoamericana de la Cultura.

Quito, Noviembre de 2004

Paco Moncayo Alcalde Metropolitano de Quito

9 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

El Autor y su obra

F

DE

REVISTA

“ARCHIVOS

ERNANDO JURADO DOCTOR EN

ES DOCTOR EN MEDICINA

(QUITO 1975)

Y

PSIQUIATRÍA POR LA UNIVERSIDAD DE NAVARRA (PAMPLONA, 1979).

PROFESIONALMENTE

DEPARTAMENTO

(QUITO 1949),

HA SIDO POR CASI UN CUARTO DE SIGLO

PSIQUIATRÍA DE

EN EL INSTITUTO DE

NEUROPSIQUIATRÍA”,

CRIMINOLOGÍA,

DIRECTOR

DEL

DIRECTOR DE LA

PROFESOR DE NIVEL MEDIO SUPERIOR Y DE

POSTGRADO Y GESTOR DE UNA LARGA CONSULTA PRIVADA.

EN

OTRO ÁMBITO HA DESA-

RROLLADO DE MANERA CRÓNICA UN RASTREO DOCUMENTAL Y TESTIMONIAL SOBRE MUCHOS HECHOS HISTÓRICOS DE LA VIDA CUOTIDIANA DEL PAÍS, CENTRADO ENTRE

BARBACOAS

POR EL NORTE Y LA PROVINCIA DE

ZONA NOROCCIDENTAL DEL PAÍS.

BOLÍVAR

POR EL SUR, ASÍ COMO EN LA

AUTOR DE CASI 60 VOLÚMENES Y DE MEDIO MILLAR DE

ARTÍCULOS MONOGRÁFICOS, POR LO MENOS DIEZ DE SUS LIBROS HAN SIDO DE LOS MÁS VENDIDOS EN LIBRERÍAS DE

QUITO EN SUS RESPECTIVOS AÑOS DE EDICIÓN.

La presente obra tuvo su mayor fase de investigación en el Archivo Nacional del Ecuador entre 1980 y 1982 en un horario muy sui géneris (de 6 a 9 de la mañana y de 2 a 4 de la tarde) gracias a la colaboración y al entendimiento del director de ese entonces Alfredo Costales. Una primera versión la editó en octubre de 1989 el Banco Central del Ecuador en un solo tomo, esta nueva versión ampliada, cuatro veces más extensa que la anterior, da una visión muy detallada sobre nuestra historia urbana y desde la cotidianeidad de nuestras gentes en casi cinco siglos de evolución. Fernando Jurado es miembro de Número de la Academia de Historia desde hace 25 años y en los 3 últimos años fue Director de sus publicaciones, gestando las colecciones Centenario y Testimonio. Como fundador y Presidente de la Sociedad Amigos de la Genealogía ha desarrollado uno de los más exitosos proyectos editoriales: la colección SAG que va ya por los 200 volúmenes.,

BIBLIOGRAFÍA DEL DOCTOR FERNANDO JURADO NOBOA ENTRE 1980 Y 2004 (OBRAS COMPLETAS) 1. -

El Dr. Joaquín Suárez de Villacreses y sus orígenes en el Mayorazgo de Salamanca, Ceniga, Ambato, 1980.

2. - Las Coyas y Pallas del Tahuantinsuyo, Gallo Capitán, Otavalo, 1983. 3. - Los Argüello en el Ecuador, 450 años de historia, Servimpress, Quito, 1984. 4. - Los Porras y los Garcés en el Ecuador, Servimpress, Quito, 1984. 5. - Los Cornejo en la historia política del Ecuador, Servimpress, Quito, 1985.

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1534 - 1950

Los descendientes de Benalcázar en la formación social ecuatoriana, 6. - Tomo I, Servimpress, Quito, 1984. 7. - Tomo II, Servimpress, Quito, 1985. 8. - Tomo III, Servimpress, Quito, 1985. 9. - Tomo IV, Servimpress, Quito, 1985. 10. - Tomo V, Servimpress, Quito, 1985. 11. - Tomo VI, Servimpress, Quito, 1986. 12. - Tomo VII, Servimpress, Quito, 1987. 13. - Tomo VIll, Arte Gráfica Publicidad, Quito, 1990. 14. - Los Noboa de la Sierra, Servimpress, Quito, 1985. 15. - Los Vásconez en el Ecuador, Servimpress, Quito, 1986. 16. - Los Larrea, burocracia, tenencia de la tierra, poder político, crisis, retomo al poder y papel en la cultura, Servimpress, Quito, 1986. Los Ribadeneira, antes y después de Colón, 17. - Tomo I, Servimpress, Quito, 1987. 18. - Tomo II, Servimpress, Quito, 1987. 19. - Tomo III, Servimpress, Quito, 1987. 20. - Plazas y Plazuelas de Quito, Banco Central del Ecuador, Quito, 1989. 21. - Calles de Quito, Banco Central del Ecuador, Quito, 1989. 22. - Un vasco aragonés y su descendencia en el Ecuador: Los Chiriboga, Servimpress, Machala, 1989. La migración internacional a Quito, 23. - Tomo I, Talleres J.M. Rodríguez, Quito, 1989. 24. - Tomo II, De dónde venimos los quiteños, Talleres J.M. Rodríguez, Quito, 1990. 25. - Tomo III, Los españoles que vinieron, Gráficas Vanesa, Quito, 1993. 26. - Esclavitud en la Costa Pacífica, Iscuandé, Tumaco, Barbacoas y Esmeraldas, siglos XVI al XIX, Instituto Afroecuatoriano, Cayambe, 1990. 27. - Sancho Hacho, orígenes de la formación mestiza ecuatoriana, Cedeco, Quito, 1990. 28. - El Chulla Quiteño, nacimiento, vida y agonía de un prototipo citadino, Arte Gráfica Asociados, Quito, 1991. 29. - Contribución de la Sociedad de Amigos de la Genealogía a la Cultura Ecuatoriana, Artigráfica, Quito, 1991. 30. - Los secretos del poder socioeconómico, el caso Dávalos, Offsestt Impresores, Quito, 1992. 31. - El proceso de blanqueamiento en el Ecuador, de los Puento a los Egas, Offsestt Impresores, Quito, 1992. 32. - Los Mancheno en el Ecuador, 270 años de historia, Talleres de J. M. Rodríguez, Quito, 1992.

11 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

33. - Casas del Quito Viejo, Talleres de J.M. Rodríguez, Quito, 1992. 34. - Los Donoso en el Ecuador, 1640-1992, Impresiones América, Quito, 1993. Las Noches de los Libertadores, 35. - Tomo I, IADAP, Quito, 1993. 36. - Tomo II, IADAP, Quito, 1993. 37. - Historia social de Esmeraldas, volumen I, indios, negros, mulatos, españoles y zambos del siglo XVI al XX, Editorial Delta, Quito, 1995. 38. - Las mujeres que Montalvo amó, Editorial Lennon, Medellín, 1995. 39. - Las Quiteñas, Dinediciones, Quito, 1995. 40. - Los pendejos en Quito y sus alrededores, 1534-1980, C-A ediciones, Quito, 1996. Historia Social de la Provincia de Bolívar, 41. - Tomo I, Casa de la Cultura, Quito, 1996. 42. - Tomo III, Casa de la Cultura, Quito, 1996. 43. - Tomo V, Casa de la Cultura, Quito, 1998. 44. - Tomo VI, Casa de la Cultura, Quito, 2001. 45. - Los Corral en el Ecuador, Producción Gráfica, Quito, 1996. 46. - Quito, una ciudad de casta taurina, historia del toro y de la Fiesta Brava entre el siglo XVI y principios del siglo XX, C-A ediciones, Quito, 1996. 47. - La Ronda, nido de cantores y poetas, crónica de sueños, Libresa, Quito, 1996. 48. - Las Peñas, historia de una identidad casi perdida, Banco del Progreso, Quito, 1997. 49. - Un soldado de Bolívar en Ambato, Fundación Cuesta Holguín, Quito, 1998. 50. - Quito Secreto, Grupo Cinco, Quito, 1999. 51. - Alfaro y su tiempo, Producción Gráfica, Quito, 1999. 52. - Las gentes del Corregimiento, lo rural, letras A-B, Instituto Otavaleño de Antropología, Otavalo, 2001. 53. - Los Paz en el Ecuador y en el sur de Colombia, un modelo histórico de movilidad social doble, Producción Gráfica, Quito, 2001. 54. - Vida cuotidiana colonial y republicana en la Sierra Centro Norte, el caso de la familia Villagómez, Producción Gráfica, Quito, 2002. 55. - Los Albornoz, familia fundadora del país, Producción Gráfica, Cuenca, 2002. 56. - Diccionario histórico genealógico de apellidos y familias de origen quechua, aymará y araucano, ediciones T-H, Quito, 2002. 57. - Los Veintemilla en la sierra central y norte del Ecuador y en Lima, Producción Gráfica, Quito, 2003. 58. - Calles, casas y gentes del Centro Histórico de Quito, Tomo I, FONSAL, Quito, 2004.

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13 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

D E D I C ATO R I A

A

Rodrigo Pallares Zaldumbide y a fray Agustín Moreno Proaño, semiolvidados gestores de que Quito fuera declarada Patrimonio de la Humanidad en septiembre de 1978. Al primero como su gran artífice, al segundo, como autor de Quito Eterno, la obra que hizo posible la práctica final de ese histórico empeño.

QUITO, SEPTIEMBRE 6 DE 2003 FERNANDO JURADO NOBOA

Tienden a desaparecer las denominaciones de Carreras que huelen a coloniaje, cuando algunas calles que se enorgullecían de ser REALES eran caminos públicos sin pavimentación, que añoraban quizás el paso de las Cajas Reales y del Cajón de España. Seguramente eran las zonas preferidas por donde se efectuaban ciertos desfiles y procesiones coloniales. Todavía es típica la manera de orientarse de cierta gente que no se ha tomado la molestia de fijarse en el plano de Quito y aprender de memoria el bautizo de las rúas principales. Toma las señas más visibles o mide las calles usando la diestra o la zurda. Averigua alguien por el domicilio de persona de viso. Individuos comedidos y serviciales se apresuran a darle indicaciones: , le dicen con honda convicción: . Si les inquieren por la calle y el número del domicilio se encogen de hombros, hacen una mueca y continúan su camino, moviendo la cabeza.

ALEJANDRO ANDRADE COELLO ARTÍCULO DE DIARIO EL COMERCIO, QUITO, 6 DE DICIEMBRE DE 1934

16 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

17 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Algunas palabras introductorias

E

N EL PRIMER SEMESTRE DE

1975, MIENTRAS CURSABA EL SÉPTIMO AÑO DE MEDICINA,

EN MIS HORAS LIBRES EMPECÉ A ESTUDIAR CON DETENIMIENTO TODAS LAS ESCRITURAS DE COMPRA VENTA Y LOS TESTAMENTOS, GESTADOS EN LAS SEIS

ANTIGUAS NOTARÍAS DE LA CIUDAD, ENTRE

1750 Y 1875. AQUELLO FUE COMO SUMERGIRSE EN UN ROMPECABEZAS TREMENDAMENTE AGRADABLE, EN DONDE GENTE, CASAS Y RINCONES EMPEZARON A RECOBRAR UN SENTIDO VITAL DE PERTENENCIA Y DE VIDA.

Viví tres años en Pamplona (1976-1979), cursando el Postgrado en Psiquiatría en la Clínica Universitaria de esa afamada ciudad. Los fines de semana, la milenaria POMPELIUM de los romanos me mostraba sus viejísimas casas medioevales que una feroz vocación por la identidad había conservado. Entre asombro y asombro, encontré en las piedras, los ángulos y los estilos el revelador y preciso testimonio de muchas coordenadas históricas. Quizás por eso, al volver al país, decidí completar aquella investigación primaria, estudiando entonces a cabalidad, entre septiembre de 1980 y diciembre de 1982, en cuantas horas pude, los documentos de la capital en sus mismas seis antiguas notarías, desde 1563 hasta 1750, cuando se había cortado el anterior proceso inve s t i gativo. En homenaje a mi labor profesional de médico y profesor, el Director del Archivo, Alfredo Costales, me abría las oficinas a las seis de la mañana, de tal manera que yo gozaba inve s t i gando las tres primeras horas de esas lúcidas mañanas. Fue así que, a partir de enero de 1983, decidí zurcir todas esas notas, partiendo de una enorme dificultad que antes no había previsto: los millares de fichas estaban ordenadas en estricto orden alfabético de personas, pero no por calles, de tal manera que durante varios meses y luego de terminar mis labores cotidianas de profesional y de maestro, de nueve a doce de la noche, debí leer todas las fichas y ponerlas en tres cajones: uno de plazas, otro de calles en sentido norte sur y un tercero de calles en sentido este-oeste. Obviamente, luego vino una segunda clasificación exacta por calles, una tercera por cuadras y finalmente una cuarta catalogación cronológica.

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1534 - 1950

Esa es la historia de los dos tomos presentados al Banco Central para ser editados en ese entonces: PLAZAS DE QUITO

Y

CALLES DE QUITO, que durmieron seis años en alguna gaveta hasta que tuvieron la

suerte de ver la luz. Fue muy triste la pérdida de más de cien fotografías originales entregadas junto con los originales. Cuando las reclamé, los funcionarios se traspasaron las responsabilidades de uno a otro: el que más probablemente las tenía estaba huído o se desconocía su paradero. Pero bueno, lo importante es que los libros vieron la luz en octubre de 1989. Mientras tanto, en 1985 pude volver a Pamplona y al País Vasco y contemplé aterrado como, en las zonas rurales, las viejas casas — algunas del siglo XIII — habían cedido su puesto a modernos condominios. Ventajosamente, años más tarde, la gente se arrepintió de esta necedad y en la última década Pamplona y las ciudades vecinas han visto renacer muchas de sus viejas casonas —sobre todo del siglo XVIII— total y bellamente restauradas.

¿Es la presente, acaso, una segunda edición de la obra que apareció hace catorce años? Creemos que definitivamente está tan modificada que realmente es un libro diferente.

Es que esta pasión congénita por reconstruir el pasado me ha seguido dando impulso para llenar cuantos espacios vacíos se ha podido, consciente de que la historia es un proceso que no conoce límites: cualquier vida le permite al historiador dedicarse a ella sola con singular empeño, de tal manera que las vidas de 40 calles y 2 500 casas con sus dueños, tiendas, alquilones y estilos, dan para varias vidas, quizás para cientos de ellas.

En la obra escrita en 1983 no pudieron constar los detalles que me enseñó desde 1984 Eulalia Calisto de Terán sobre la calle Venezuela, Hilda Zambrano de Ribadeneira Sáenz sobre su calle Bolívar o Ernesto Chiriboga Ordóñez sobre las Cuatro Esquinas, pero hoy esos testimonios, como los de muchos eruditos que nos entre ga ron su vivísimo recuerdo, se han incorporado ya a estas nuevas páginas. Y es que hay cosas que penosamente no constan en los documentos: la historia de una tienda, de un figón célebre —acaso refugio y cuartel de poetas y bohemios— de los inquilinos; los detalles vitales quedan solo en la memoria; siempre que esta sea de la clase que se pertenece a la categoría de respetable y probada.

19 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Fue por aquella vocación que, entre 1988 y 1992, tomé varios apuntes de la sección PADRONES del Archivo Municipal de Quito; entre los años 1989 y 1991 decidí completar la visión de la ciudad avanzando en el análisis de las escrituras hasta 1914; desde 1991 hasta 1995 gocé de las tertulias de Juan Escobar Pallares, verdadero que se conocía Quito al dedillo y por quien aprendí muchísimo sobre la historia urbana entre 1920 y 1950. Riqueza de recuerdos parecida, sobre algunos sectores de la urbe, se la debo a Anita Musello Durango, que, aunque guarandeña, sabía mucho de ese Quito que se fue y que para ella estuvo vivo entre 1907 y mediados de siglo. Ese mismo año 91, y luego el 92, también fueron pródigos para cumplir varios objetivos: quiteños sapientes me entregaron cuanto sabían sobre sus viejas calles de vecindad en los años 20 al 40 de aquel siglo: Pepe Jijón Gómez de la Torre para la Alameda, Jaime Dousdebés para la Loma Grande, los hermanos Byron y Gabriel Córdova Rivadeneira para las calles Oriente, Guayaquil, Esmeraldas, Venezuela y todo lo circundante a la Plaza del Teatro, Leonardo Mera Cárdenas para la calle Olmedo, Jorge Salazar Barba para el barrio de la Loma Chica, Eugenia Mateus de Peñaherrera para la calle Vargas, etc.

En las sesiones de la SAG (Sociedad de Amigos de la Genealogía), procuramos incentivar a los socios a que nos dieran charlas sobre sus calles y sus barrios para luego editarlas. Inolvidables fueron una que dio a principios de 1994 Manuel de Guzmán Polanco sobre su barrio de Santa Bárbara y, poco después, otra de Vicente Muñoz Franco sobre el Quito nocturno de los años 40 y 50, partiendo desde el Mesón. Por entonces Bolívar Chiriboga Donoso escribió sus recuerdos sobre la calle Chile. Traté de no desperdiciar ninguna oportunidad: en Guaranda, por ejemplo, hallé a partir de abril de 1995, dos figuras llenas de recuerdos sobre el Quito de los años 30 y 40: el notable abogado Oswaldo Vásconez Espinosa, quien con su esposa, Haydée Toledo Vizuete, llenaron varias de mis fichas de investigación. En el primer semestre de 1998, volví a revisar, en nuestro Archivo Nacional, cosas de la vida urbana en el período 1820-1840. En la última década, el material que ha editado nuestro Archivo Nacional, merced a las gestiones de ese Quijote femenino que es Grecia Vasco, ha develado también muchos

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aspectos de nuestra vida urbana; en el año anterior —2002— y en este he revisado con detenimiento colecciones de los periódicos LA PRENSA, EL DÍA Y EL COMERCIO entre principios de siglo y 1935 que, especialmente a través de sus avisos comerciales, logran hacernos reconstruir de una manera bastante precisa muchos asuntos cotidianos. En octubre del año 2002 y merced a la fineza del académico Fray Luis Octavio Proaño, pude revisar el cuatricentenario archivo de la Orden de la Merced, donde también se hallan preciosos testimonios. Así, esta obra apunta varias innovaciones importantes con respecto a la editada en 1989, que pueden sintetizarse de esta manera: • He preferido empezar por las calles del sentid oriente-occidente, porque ellas guardan mejores testimonios arquitectónicos que las que van en sentido norte-sur. La razón es una sola: la gente de mejores posibilidades económicas buscaba siempre las calles que iban en dirección a la Plaza Mayor o a las grandes plazas ciudadanas. Esas callecitas primeras transversales eran sitio de morada —en su m a y o r í a—de personas de menores recursos, que tienen o tenían posibilidades de tirar sus casas y reconstruirlas. Ellas fueron morada de pintores y poetas, es una ventura, pues, que allí existan más testimonios. • En la edición de 1989 partí de la calle Briceño al norte de la ciudad, pero los viejos planos de Quito me demostrarían que la ciudad empezaba en la actual calle Egas, en el sector de la Alameda, de tal manera que aumenté el espectro hacia el norte. • Añadí también la calle Antepara y el pasaje Royal en el centro de la ciudad, como arterias que no deben ser olvidadas. • En el sentido temporal he avanzado alrededor de medio siglo en la investigación, es decir hasta 1950. Aparte de los documentos y de la nueva bibliografía consultada, me han sido también de gran ayuda las guías de la ciudad editadas en 1922 —llamada G UÍA

COMERCIAL GEOGRÁFICA,

obra de ese

olvidado gestor de la cultura, el cañarense Gonzalo Orellana Pozo—, la de 1928 —titulada DIRECTORIO GENERAL DE LA REPÚBLICA, obra del latacungueño Julio Vizcaíno Viteri— y la de 1950, esta última por , a cargo del Dr. Emilio Gangotena Morán. • Pe ro quizás, el asunto que me ha parecido más substancial ha sido incorporar mayor material humano a los textos, pues definitivamente las calles pueden tener de hecho el sentido de lo impersonal. Y estos añadidos profundos quieren tener dos vertientes: una, el sumar las acciones de los grandes ecuatorianos que vivieron en determinados sitios de la ciudad y les dieron sabor e identidad a las calles; otra, a base a esas palabras previas de don Alejandro Andrade Coello, de que hasta hace 70 años los quiteños , queremos también asumir y re s c atar los nombres populares de las cuatro primeras décadas del siglo XX, que aunque hayan dura-

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N o b o a

do cinco o diez años, merecen ciertamente la incorporación al discurso histórico. Decir por ejemplo, o , significa innumerables cosas y detalles por detrás de esos simples enunciados. Muchos lectores se preguntarán el porque de no haber incorporado los barrios y las calles que corresponden a la llamada primera expansión de Quito, tanto al norte como al sur, es decir las ciudadelas Larrea, Urrutia, El Batán, América, La Mariscal, La Magdalena, etc. La razón es muy simple: esta obra toma las calles que ya existían a finales de la Colonia y definen lo que es el casco central de la ciudad. En realidad tenemos ya bastante material respecto de las primeras urbanizaciones, pero esa es materia de otro trabajo. G e n e rosos pro ve e d o res de datos han sido, también, en estos últimos 20 años, personas como M e rcedes Luna Tobar, Jorge Luna Yepes, Jaime Camacho Sosa. En cada calle y sector los nombre s de los pro ve e d o res de datos se vuelven casi innumerables. Ve r b i gracia: la calle Junín, dejo constancia de Luis Alfonso Ortiz, Jaime Guarderas Alomía, José Vicente Pallares, Lola Pérez de Eastman, Xavier Villasís, familia Bilbao Ortiz. Y la familia Almeida García y Miguel Angel Benalcázar. Para todos ellos mi perenne reconocimiento. Es importante acotar que tratándose de casas esquineras, el lector deberá buscar las dos calles de cruce, tanto en el tomo uno como en el dos. Quisiera también advertir que las placas que constan en las calles del centro de Quito con los supuestos nombres antiguos de esas calles deben desapare c e r, pues están muy mal puestas. Quienes lo hicieron pensaron que la nomenclatura colonial era igual a la actual, craso erro r, pues cada cuadra de la ciudad tenía un nombre diferente, nombre además que iba cambiando según los factore s históricos y sociales. Sea este un homenaje a la ciudad al haberse conmemorado los primeros 25 años de su declaratoria patrimonial y sea permitido expresar mi gratitud a quienes han hecho realidad este proyecto: Horacio Sevilla Borja, Carlos Pallares Sevilla y Alfonso Ortiz Crespo.

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N o b o a

Historia de la calle Egas

T

1740 COMO COLETI EN 1763 IDENTIFICAN A ESTA CALLE EN UNA EXTENSIÓN DE MÁS DE DOS CUADRAS HACIA EL ITCHIMBÍA, CON CINCO CASAS HACIA EL LADO NORTE Y APENAS DOS HACIA EL SUR. ANTO LOS ACADÉMICOS FRANCESES EN

Esta calle figura claramente en el plano de Manuel Villavicencio. Aunque aún sin nombre, muestra además unas cinco casas en la acera norte y dos en la acera sur. El plano hecho por Gualberto Pérez en 1888 revela en cambio una calle Egas prácticamente vacía, pues apenas asoman a ella los costados de las casas de la Av. Colombia y de la calle Los Ríos actuales. Según la Guía de 1894, en el lado sur de la calle estaba la casa de Simón Mantilla. El plano de Higley en 1903 la individualiza ya como calle y tenía por entonces una sola cuadra y una sola casa. En 1950 registramos a los siguientes vecinos de la calle:

1-70: Gabriel Márquez

4-63: Álvaro Ponce y Gonzalo Ávila Saá

1-94: Jaime Recalde M.

4-72: Luis Jarrín Maldonado

2-18: Ángel Polibio Vaca

5-51: Alfredo Tamayo

2-34: Judith Jaramillo

5-55: Zoilo Valencia

2-38: Humberto Moya

5-86: Dr. Eudoro Andrade Cabrera,

4-03: Jorge Alvarado Ojeda

natural de Gualaceo

4-55: Gustavo O. Rivadeneira

24 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Historia de la calle Castro

E

STE SENDERO PRIMITIVO APARECE GESTÁNDOSE RECIÉN A PRINCIPIOS DEL SIGLO

XVIII,

LOS PLANOS DE ALREDEDOR DE

1740

REVELAN QUE TENÍA DOS CUADRAS

HACIA EL ORIENTE, SE MIRAN DOS CASAS EN LA PRIMERA CUADRA, EN EL LADO

NORTE, Y UNA CASA EN LA SEGUNDA CUADRA, EN EL MISMO LADO NORTE.

Villavicencio, en su plano de 1858, identifica plenamente la calle, aunque tampoco le da nombre. Estaba muy poco poblada, pues solo tenía tres casas en su acera norte. La calle Castro también está vacía en el plano de Gualberto Pérez, apenas estaba construida la casa donde luego estaría la de Jorge Villagómez; mientras la esquina sur, donde luego se levantó la casa de los Jijón, se revela absolutamente vacía, incluido todo el lado que miraba a la Colombia, entre Castro y Espinosa actuales. En 1903 seguía siendo un sendero con una casa única en el lado sur. El plano de 1922 revela que su extensión era únicamente de una cuadra. Luego de ella, se mira un pequeño pasaje intermedio. En las décadas de los treinta y los cuarenta, vivían en el lado norte: en la esquina con la Av. Colombia, el Dr. Jorge Villagómez Yepes, conocido jurista; más arriba, doña Matilde Muñoz Muñoz de Bustamante, y finalmente la familia León Sarasti. En cambio, en el lado sur, luego de la casa de José Ignacio Jijón Gangotena, estaba la casa en que moraba el Dr. Camilo Octavio Andrade López con su esposa doña Ana Rosa Pino Roca; luego la casa de los Buitrón; dos casas pequeñitas, y finalmente la de los hermanos Gangotena Chiriboga.1 En 1950 se registraron en esta calle los siguientes propietarios, cuando la calle tenía ya cinco cuadras y se hallaba incrustada en pleno Itchimbía. Hay que tomar en cuenta que la numeración en Quito siempre parte desde el punto distal más oriental:

1

Testimonio de sus vecinos: Flor Villagómez Yepes, José y Patricio Jijón Gómez de la Torre.

1-19: Miguel Najas

4-56: Ricardo Játiva

2-00 y 2-03: Juan Francisco Baca Proaño

4-66: Leticia Rodríguez de Villa

2-71: Alfonso Montesinos Burbano

5-41: Luis Alfredo Solís O.

4-05: Remigio Noroña y Gastón Noroña

5-44: Ramiro Patricio Muñoz

Granda

5-55: Camilo Andrade

4-10: Telmo H. Muñoz

5-68: Alfredo Ante Quijano

4-24: Manuel Pacheco Mendoza

5-86: Dr. Jorge Villagómez Yepes

25 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia del pasaje

Vásconez Gómez (entre Castro y Espinosa)

L

OS PASAJES EMPEZARON A PONERSE DE MODA EN

QUITO EN LA DÉCADA DE LOS AÑOS

VEINTE DEL SIGLO PASADO. LOS PRIMEROS, SI COMENZAMOS EN EL NORTE, FUERON LOS SIGUIENTES:

• El pasaje Vásconez Gómez. • El Cordovez, que tenía su salida a la calle Espinosa y era extremadamente corto. • El Chiriboga, entre las calles Guayaquil y Esmeraldas. • El Royal, que cruzaba de lado a lado las calles Venezuela y García Moreno. • El Tobar, entre las calles Guayaquil y Sucre. • El Pérez Quiñones, entre las calles García Moreno y Bolívar. Esta pequeña callecita constituyó una especie de rincón residencial privado. En 1928 se registraron solo dos personas en el pasaje: Luis Barberis Jaramillo, que vivía en el número 43, y Víctor Manuel Pérez Perozo, funcionario de la Embajada de Venezuela en el país, que vivía en el número 1-81. Se puso de moda, especialmente en los años 30, cuando se mudaron allí personas muy 2

3

Héctor Coral: BIOGRAFÍA DE G ALO PLAZA, colección Academia de Historia, Quito, 2003.

conocidas de la ciudad, como Galo Plaza Lasso —recién casado con Rosario Pallares Zaldumbide—,2 el

Testimonio del Dr. Franklin Tello Mercado, Quito, 1983.

En 1934 vivió en un modesto departamento de esta calle don Luis Enrique Osorio, colombiano, en

Cnel. Aquilino Vásconez Naranjo, Luis Barberis Jaramillo y Eduardo Salazar Gómez.3

unión de su esposa y una hija de diez años. Osorio era asesor del Ministerio de Educación, por nom-

26 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

bramiento directo del Presidente Velasco en su primer mandato. Fue una de las poquísimas personas que gozó de la confianza total del mandatario, quien en algunas ocasiones compartía la modestísima cena de los Osorio. Esa casa está llena de recuerdos de la época de ese primer velasquismo de once meses de duración.4 Conocemos la estructura exacta para 1948: en el lado izquierdo o norte de la calle vivía la familia Fierro Jarrín, luego Luis Barberis Jaramillo con los Barberis Fernández y finalmente Julio Vásconez Delgado con la familia Vásconez Fierro. En el lado derecho o sur vivía la señora Palacios Alvarado, viuda de Ricardo Espinosa Astorga.5 Al terminar la parte plana, había unas gradas que limitaban con la casa en que moraban el joven Sixto Durán Ballén Cordovez con su tía Lucía Cordovez Cayzedo, esposa del notable intelectual Francisco Guarderas Pérez. Al final del pasaje se encontraba el pasaje Vásconez Gómez, que venía a ser paralelo a la Av. Colombia, en él vivía en esa fecha el Cnel. Aquilino Vásconez Naranjo, latacungueño, y también estaba allí el colegio de las Mercedarias, que arrendaban una casa para su internado. En 1950 aparecen viviendo allí las siguientes personas: 1-25: Adolfo Velasteguí 1-34: Arturo Peñaherrera Floresguerra 2-10: Dr. Clodoveo Alcívar Cevallos 2-11: José María Donoso Lasso

Historia de la calle Javier Espinosa

F

UE TAMBIÉN DURANTE LARGO TIEMPO UN SIMPLE SENDERO.

HACIA 1740 TENÍA TAMBIÉN DOS CUADRAS, LA PRIMERA —LA MÁS CERCANA A LA ALAMEDA— TENÍA TRES CASAS, Y DOS, LA SEGUNDA.

4

5

Franklin Tello: EL VELASCO IBARRA QUE YO CONOCÍ , manuscrito inédito. Testimonio de Flor Vi l l agómez Yepes, Quito, octubre de 2003.

En el plano de 1888, puede verse que esta calle avanzaba casi dos cuadras internándose hacia el oriente, todo el lado sur estaba prácticamente construido, no así el lado norte. Según la Guía de 1894, solo había construcciones en el lado sur de la calle: las dos casas de doña Rosario Noboa Páez de Navas, oriunda de Cayambe, y en tercer lugar, la casa de Fidel Corral.

27 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

A principios del siglo XX tenía tres casas en la sola cuadra de su extensión: una en la acera norte y dos en la acera sur. El plano de 1922 muestra que su trayecto era únicamente de una cuadra. En 1950, en el número 1-25 funcionaba el colegio Gran Colombia.

Historia de la calle Elizalde

F

UE TAMBIÉN SENDERO LARGO TIEMPO, GESTADO IGUALMENTE SOLO DESDE PRINCI-

XVIII, COMPRENDÍA DOS CUADRAS, CON DOS CASAS EN CADA UNA DE ELLAS, ALREDEDOR DE 1740. PIOS DEL SIGLO

En 1880 la calle avanzaba alrededor de dos cuadras hacia el oriente, pero estaba exenta de construcciones, pues apenas mostraba los costados de las dos casas esquineras que miraban a la primitiva calle Guayaquil. La GUÍA de Jiménez revela, en 1894, estos propietarios: en un lado las casas de Consolación Rodríguez, Antonio Moscoso Espinosa (padre de los Moscoso Rivadeneira y abuelo de los Moscoso Loza) y finalmente Manuel Aguirre, ya en la esquina con la calle Los Ríos actual. Al frente estaban solamente dos casas: la de David Silva y la casita de campo del Dr. Carlos Rodolfo Tobar Guarderas, notable ecuatoriano. En la primera de estas casas vivía el conocido farmacéutico Dr. 6

7

Adolfo Jiménez: GUÍA QUITO , 1894.

DE

Veáse nuestra obra EL C HULLA Q UITEÑO, Quito, 1991.

Canuto Silva Terán,6 luego gran hacedor de cosas e ilustre quiteño por adopción.7 En 1903 seguía teniendo una sola cuadra, pero estaba ya algo poblada, pues tenía seis casas, cuatro en la acera norte y dos en la acera sur.

28 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

El plano de 1922 revela que avanzaba una cuadra y media hacia el oriente. Al principio de la década de los treinta, el conocido político liberal Dr. Abelardo Montalvo Alvear tenía una quinta en la parte más alta y distal de esta calle, pasando el graderío. Frente a esta quinta, estuvo la casa en la cual vivió por años el Cmdte. Manuel Montalvo Hidalgo, guaneño y quien en su niñez había servido de guía por los páramos del Carchi a su tío, el ilustre Cosmopolita. Allí vivió su hijo el notable escritor Antonio Montalvo Viteri, fundador del Grupo América. El mismo Dr. Montalvo vendió un terreno anexo a su quinta en 1934 a Gualberto Montalvo Viteri, otro de los hijos del Comandante. Este terreno tenía 500 metros, donde el señor Montalvo levantó casa de un piso. Por 1935 o 1936, le compró otros 500 metros el citado Antonio Montalvo Viteri, en ese terreno estaba incluida la vieja piscina de don Abelardo. Gualberto puso fábrica de ladrillos en el terreno y, con ayuda de todos sus hermanos e incluso de sus dos hijos pequeñitos terminó, para 1940, tanto la casa de él como la de su hermano Antonio.8 En 1950, las siguientes personas viven en la calle Elizalde:

8

Testimonio de Gualbert o Montalvo Viteri, Quito, septiembre de 2003.

2-35: Víctor Acosta Vaca

4-04: Arturo Vicente Orcés

2-43: Antonio M. Montalvo

4-06: Segundo Zurita

3-07: Alberto Villamaría

4-24: Rafael Molineros

3-4l: Carlos Tufiño Pérez

4-38: Carlos Sánchez T.

3-42: Luis Alberto Rodríguez Núñez

4-87: Miguel Arias

29 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia de la calle Briceño

S

E HA CONSIDERADO, TRADICIONALMENTE, A LA CALLE

CALDAS

COMO EL LÍMITE

QUITO ANTIGUO: ASÍ LO SEÑALA LA PRIMERA NOMENCLATURA DE LA CIUDAD DE 1880 Y TAMBIÉN LO HACE CONSTAR ADOLFO JIMÉNEZ EN SU GUÍA DE QUITO, EDITADA EN 1894. SIN EMBARGO, LOS MISMOS PLANOS NOS INDICAN LA PRESENCIA DE LOS CALLEJONES QUE DESEMBOCABAN EN LA ALAMEDA Y A LOS CUALES NOS HEMOS REFERIDO EN LOS CAPÍTULOS ANTERIORES. NORTE DEL

Pero ya desde tiempos coloniales se señala como límite de la ciudad al célebre (hoy Alameda). Por tanto, la calle Briceño se hallaría al extremo de este sector. En el plano llamado de Alcedo, la calle aparece como un simple sendero paralelo a lo que sería después la calle Caldas. En el plano de los académicos franceses de 1736 ya se aprecian ocho construcciones en esta calle. Comprendía por entonces tres cuadras: una al oriente y dos al occidente, es decir, entre las actuales Guayaquil y Venezuela. En el fondo de su límite oriental, los planos de la ciudad muestran dos pequeñas construcciones y en la cuadra entre Guayaquil y Los Ríos había cuatro casas, es decir seis en total en este lado oriental. En el lado occidental, se advierte solo una casa en la actual esquina de la Briceño y Vargas. Sin embargo, en otros planos coloniales y en dirección desde la Guayaquil hacia el oriente se hallan solo huertas. Coleti re vela que en 1763 la Briceño avanzaba en su tramo oriental unas dos cuadras y media con unas cinco casas hacia el lado norte y unas tres casas muy pequeñas en el lado sur. Todo el trayecto de la Briceño, entre Guayaquil y Vargas, estaba despoblado, con apenas una casa en la esquina n o roriental con la Varga s . El plano de Gualberto Pérez, hecho en 1888, demuestra que la Briceño avanzaba casi dos cuadras desde la Guayaquil hacia el oriente, a su vez la acera norte tenía ya construcciones completas en todo su trayecto, mientras el lado sur tenía una o dos casas hacia el fondo, en la esquina sur oeste al formar esquina con la calle Los Ríos. La única cuadra que avanzaba desde la Guayaquil hacia el oeste estaba prácticamente desnuda, mostrando solo los costados de las casas que daban a la antedicha calle Guaya q u i l .

30 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Para 1894 había una sola cuadra poblada hacia el oriente; entre la Guayaquil y Los Ríos existían entonces tres casas en el flanco norte: la de Manuel Gómez y dos del mecánico Damián Shool. En el flanco sur existían cuatro casas: las dos primeras de Adolfo Marín, la tercera de Natalia Mena y la cuarta, de José María Verdesoto.9 Desde la Guayaquil hacia el occidente ya existían dos casas con la entrada por la Briceño, sin embargo, sus tiendas daban a la Guayaquil: en el lado norte la casa de Manuel Cornejo y en el sur la de Luis Fernández Salvador. Curiosamente, el plano de Higley en 1903 ni siquiera le otorga nombre alguno. Comprendía dos cuadras, en la primera, hacia el oriente, se ven siete casas en la acera norte y cuatro en la acera sur, es decir once en total. En su segunda cuadra —entre la Guayaquil y la Vargas actuales— se mira una sola casa en la actual esquina nororiental entre la Briceño y la Vargas. El plano de la ciudad hecho con motivo del Centenario de Pichincha muestra que la calle Briceño tenía solamente una y media cuadras hacia el oriente, pero el sector occidental tenía ya otro nombre: se llamaba Blasco Núñez, en honor al Virrey que murió a poca distancia de este sector y avanzaba solo una cuadra, de la Guayaquil hasta la Vargas. La prensa de julio a fines de los años 1920 trae un aviso curioso: Se arrienda en casa de la señora doña Mariana de Contag (carrera Briceño) un departamento amoblado con luz, agua, baño y excusado. Se preferirá a extranjeros>>.

33 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Entre 1920 y 1940, por lo menos, junto al actual colegio La Salle en la calle Caldas estaba la casa de doña Teresa Valdivieso de Larrea, allí arrendó durante varios años el Gral. Alcides Pesantes Villacís, que tuvo numerosas actuaciones en la historia política y militar del país en la primera mitad del siglo XX.11 Al frente, es decir en la acera norte y al lado de la casa del citado Dr. Alvear, murió en 1939 el célebre profesor de matemáticas don Tomás Rousseau, que formó a varias generaciones de estudiantes del Colegio Mejía.12 En 1935, don Tomás lucía 70 años, era francés, había llegado al país como Hermano Cristiano allá por 1885, pero al igual que muchos de sus compañeros dejó la Orden. Fue uno de los más distinguidos profesores de matemáticas del colegio Mejía y luego se dedicó a la cátedra privada. Era de muy pequeña estatura y él mismo decía que daba a su mujer a nivel de la cadera. Era esta la dama ambateña Margarita Hurtado Quirola, corpulenta y de gran carácter. A las doce en punto, estuviera quien estuviese recibiendo clases, doña Margarita lanzaba un grito: — ¡Rousseau, el almuerzo está servido...! Y los alumnos abandonaban precipitadamente la casa, hasta la próxima... despedida. El plano de Quito hecho en 1922 revela que la Caldas tenía solamente dos cuadras, una al oriente desde la calle Guayaquil y otra al occidente, desde la misma calle cuerda. La segunda casa de la acera norte entre Guayaquil y Los Ríos fue construida por el Arq. Pedro Aulestia Saá, entonces de moda en la ciudad y lo hizo para su dueña la señora María Luisa Bustamante Angulo de Pérez. El mismo año tomó allí un departamento en arriendo don Camilo Donoso Lasso, ex combatiente conservador de los tiempos de Alfaro, con el objeto de que sus hijos asistieran a pie al nuevo Colegio Mejía que se acababa de instalar en la calle Vargas, a pocas cuadras de este sitio.13 Con respecto a los vecinos de los últimos 50 años, en la cuadra oriental he de señalar la presencia, ya para llegar a la calle Los Ríos y en la acera sur, de la casa de doña Ana Lucía Uquillas Baquero de Melo, esposa del connotado médico Dr. Alejandro Melo Montúfar. Vivía rodeada de viejos recuerdos ligados a la historia del país, como el baúl de su bisabuelo, el prócer Antonio Baquero Bermeo, quien siendo 11

12

13

Papeles del Embajador Armando Pesantes García, Quito 1991.

alumno del San Fernando y al oír una arenga del Libertador en el plantel, abandonó los estudios y tomó las armas, portando el citado baúl. En la cuadra occidental, entre Guayaquil y Vargas, estuvo durante muchísimos años la casa del Dr. Abel Alvear Arturo, quiteño de tuerca y tornillo, era uno de los mayores conocedores de Quito y de su gente, dotado de gran memoria, gran contador de cachos, asistía a

Informes de los herederos del profesor Rousseau.

toda reunión cultural de la ciudad. Alrededor de los 75 años le empezó a fallar la memoria reciente y optó por hacer anotaciones en papelitos muy bien disimulados. Cuando en una conversación le falta-

Informes del Dr. Gonzalo Donoso Donoso, Quito, 1992.

ba algún detalle, iba discretamente al baño, repasaba la lección y seguía siendo el centro de una agradabilísima tertulia. Fue autor de la estupenda obrita ANECDOTARIO QUITEÑO. Valga referir que, según

34 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

sus propias referencias, uno de los secretos de su estupenda longevidad era el baño en leche de burra; cuando se le observaba que el tratamiento le podía resultar muy caro, respondía con mucha gracia: —Pero... es que vale la pena. Largos años, desde la década de los setenta hasta la de los noventa, fue su inquilino el historiador lojano Dr. Alfonso Anda Aguirre . Los vecinos registrados en 1950 son los siguientes, acotando que ya la calle empezaba tres cuadras al oriente de la plaza de San Blas y avanzaba diez cuadras en pleno barrio de San Juan, por detrás de la Basílica: 1-00: Luis Murillo

5-23: Ezequiel Mora

1-24: Humberto Roldán Quirola

5-58: Guillermo Pchorille

1-27: José Ayala García

5-62: Celia Uzcátegui de Jurado

1-35: Ángel Arias Cardoso

5-88: Juan Recalde Alemán

1-44: Gabriel Peña Weisson y Alberto Salazar

6-10: Dr. Pedro José Zambrano Sánchez

Rivadeneira

6-20: Rafael Jara

2-21: José Rafael Loza Soria y Tarquino Acosta

6-22: Alfredo Rosati y Carlos

2-28: Carlos Palacios González

Humberto Erazo

3-02: Dr. Carlos López Chaves

6-28: Jorge Araujo Chiriboga

3-22: Luis Belisario Rodríguez Jácome

7-18: Daniel Freire R.

3-32: Isabel y Blanca Andrade Sánchez

7-32: Herederos de José Rafael

3-48: Alejandro Ponce

Rivadeneira (de Atuntaqui)

3-48: Carlos Merino Casares

9-08: Manuel Villamarín

4-31: Francisco Pérez Dávalos

9-19: Manuel Moreno Yépez

4-32: Abelardo Apunte Hidalgo y

9-28: Arturo Terán Gavilanes

Juan Andrade Castillo

9-57: Rafael Moreta

4-43: Francisco Sánchez Melo

10-09: Ernesto Orbe Carrera

4-59: Julio Prado Salazar

10-24: Germán Yepes Almeida

4-67: Alberto de Larrea

14-05: Rafael Santacruz

4-81: Alberto de Larrea Valdivieso

14-71: Alfredo Ramos Suárez

4-94: Fanny Hurtado y Dr. Cristóbal Hurtado

15-58: Rafael Landeta

y Dr. Abel Alvear

18-58: Tránsito Arias

5-08: Guillermo Tambaco

36 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Historia de la calle Carchi

E

COLETI —1763— REVELA QUE ESTA CALLE COMENZABA EN LA VARGAS ACTUAL Y AVANZABA CUATRO CUADRAS HACIA EL OESTE. LA PRIMERA CUADRA, ENTRE VARGAS Y VENEZUELA, ESTABA CONSTRUIDA EN EL LADO NORTE (DONDE ACTUALMENTE ESTÁ EL PARQUE), MIENTRAS EN EL LADO SUR HABÍAN SEMBRÍOS. LA SEGUNDA CUADRA —ENTRE VENEZUELA Y GARCÍA MORENO— TENÍA DOS CASAS AL LADO NORTE Y ESTABA TOTALMENTE CONSTRUIDA HACIA EL LADO SUR. EN LA TERCERA CUADRA, QUE AVANZABA HASTA LA BENALCÁZAR, HABÍA UNA CASA AL NORTE Y DOS CASAS HACIA LA ACERA SUR. EN LA CUARTA Y FINAL CUADRA NO HABÍA CONSTRUCCIONES. L PLANO DE

En el plano llamado de Montúfar —1805— se ve que la Carchi comenzaba prácticamente en la actual Venezuela en forma de un callejón, al parecer privado; la cuadra siguiente, entre Venezuela y García Moreno, estaba prácticamente llena de sembríos, y hacia la Venezuela mostraba los costados de las casas que daban a la calle principal antedicha. Entre García Moreno y Benalcázar se veía una casa hacia la acera norte y unas dos en la acera sur. La cuarta cuadra, entre Benalcázar y Cuenca, tenía sembríos hacia el norte y una enorme pared en el lado sur. La quinta y la sexta cuadras, pasando la Cuenca, estaban incrustadas en el Pichincha en sus lados norte, mientras los lados del sur mostraban sembríos.

37 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Conocemos una escritura del 12 de enero de 1860 que sin duda se refiere a este sector: se trata de la venta de casa, tejar y cuadra que hace el señor Mariano Bargas (sic) al señor José Antonio de la Guerra y a su esposa, la señora Ignacia Peñafiel, en la parroquia de Santa Bárbara, en 600 pesos, suma importante para la época. Se señalan los siguientes límites: • Al frente y a las espaldas de la cuadra: la cuadra de Francisco Terneux, que antes fuera de José Antonio Borja. • A la izquierda, mirando al oriente de la cuadra en venta: una calle en recto, tras las paredes del convento de San Juan y la acequia —es decir de seguro, la calle Carchi—. • A la derecha de la cuadra vendida y hacia el oeste: la vista al Pichincha y una calle que divide la cuadra del Dr. Rafael Cornejo de la vendida. • Por la entrada: la calle que va a la cuadra que fue de los Villasís, hoy del Dr. Rafael Cornejo. Cerca de dos años después, el 7 de noviembre de 1861,14 los Guerra Peñafiel vendieron la casa y cuadra a Julián Calderón y su esposa Alegría Rodríguez, vecinos del pueblo de Cotocollao. Gualberto Pérez hace ver en su plano de 1888 que la calle Carchi tenía cinco cuadras de extensión y comenzaba, como hoy, en la esquina con la Venezuela; para entonces solo tenía tres sitios poblados: 14

ANQ, N.6, Pro t o c o l o s , 1861.

los dos lados entre las calles Venezuela y García Moreno, que estaban totalmente completas, más el lado sur de la tercera cuadra, entre las actuales Benalcázar y Cuenca.

38 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

La famosa GUÍA de Adolfo Jiménez indica claramente que la Carc h i comenzaba entonces en la Venezuela y luego avanzaba cinco cuadras hacia el occidente, pero no señala casa alguna, sino solamente tapias.15 En 1950 constan estos propietarios: 1-19: Dr. Milton Montalvo Ortiz 2-14: Nicolás Artieda 2-38: Galo Naranjo Dávila 3-27: Ernesto Velasco y Ermel Velasco Mogollón 3-28: Clímaco Narváez 3-48: Julio Hidalgo 3-54: Dr. Pío Severo Villamar Gutiérrez 3-56: Adolfo Álvarez Jervis 4-09: Carlos Agnelio Vásconez Espinosa 4-21: Manuel Vargas 4-75: Amable Arias

15

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

39 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia de la calle Antepara o de Don Roberto Andrade

E

MONTÚFAR, EN DIRECCIÓN ORIENTAL, HACIA EL ITCHIMBÍA. LA CUADRA MÁS INTERNA —DE LA ACTUAL LOS RÍOS AL ORIENTE— MOSTRABA UNAS CASITAS EN 1763, HACIA LOS RÍOS, PERO EL RESTO ERAN ESTABLOS. LA SEGUNDA CUADRA —SEGÚN EL MISMO PLANO— MOSTRABA TAMBIÉN ESTABLOS DE MANERA ABSOLUTA, Y DE LA TERCERA SE PODRÍA DECIR LO MISMO, EL LADO NORTE MIRABA A LA PARTE SUREÑA DE LA IGLESIA DE SAN BLAS Y AL FRENTE, UN ESTABLO CONSTRUIDO HACIA LA ACTUAL CALLE MONTÚFAR. STA PEQUEÑA CALLE RECORRÍA TRES CUADRAS DESDE LA ACTUAL

Para 1805 la calle mantenía las tres cuadras aludidas, la primera se mantenía igual, pero en la segunda se habían levantado tres casas en los últimos 40 años, dos en el lado norte y una en el lado sur. Esta cuadra, por su lado norte, estaba unida a la primera, que correspondía a la iglesia y casa de San Blas. En dicha primera cuadra, hacia el sur, no había sino una casa que miraba a la actual Montúfar. Curiosamente, el plano de Gualberto Pérez en 1888 revela una disminución vital de la calle, había disminuido en su extensión hacia el Itchimbía y no se muestran construcciones. En 1922 la calle tenía una trayectoria de dos cuadras hacia el oriente. En 1950 aparecen estos vecinos de la calle: 2-64: Segundo Benjamín Silva C.

4-06: Aziz Noé Mucarzel

3-10: Ing. Gonzalo Loza Jiménez

4-21: Juan Lestrel y Manuel Jarrín (famoso

3-36: Colegio de las monjas oblatas

personaje de Cayambe, alias Callá Jarrín)

3-51: César Paz y Miño

4-29: Enrique Moreno Montaño

3-59: José Adolfo Vela

y Gustavo Moreno Jarrín

3-70: Ing. Federico Medina Ríos

4-57: Abel Guarderas

40 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Historia de la calle El Vergel

S

E TRATA DE UNA DIMINUTA CALLE SITUADA POR DETRÁS DE LO QUE FUE LA

BIBLIOTECA NACIONAL, HOY MONUMENTO AL HERMANO MIGUEL. DE ALGUNA MANERA, VIENE A CONSTITUIR UNA PROLONGACIÓN HACIA EL OCCIDENTE DE LA CALLE ANTEPARA.

Fue una de las primeras, aunque minúsculas, urbanizaciones de la ciudad, se generó hacia 1920, cuando la fiebre de nuestros abuelos por hacer cosas novedosas en vista de la conmemoración del Centenario de Pichincha. Los accionistas fueron doña Juana Donoso Barba de Barba, que había h e redado solares a su suegro don Nicolás Barba Jijón, y los tres hermanos Ponce Borja: José María, Belisario y Alejandro, habiendo comprado los terrenos entre la Cevallos y la Montúfar solamente Belisario y José María. La casa de Alejandro la hizo el Arq. Francisco Espinosa Acevedo y allá se trasladó la familia Ponce Carbo —hijos del dueño— en 1921. En esa época vivían al frente don Reinaldo Cortés Aristizábal y sus hijos los Cortés Miranda, mientras en la esquina, dando ya a la calle Montúfar entre Oriente y Esmeraldas, vivía don Alejandro Ribadeneira Salazar en unión de su esposa doña María Saá Jaramillo. Los hermanos Ponce hicieron sus tres casas adjuntas, la primera que era de Belisario —padre de los Ponce Miranda— aún existe con ventanas que lucen arabescos redondos, él mismo hizo poco después otra casa nueva y adjunta a la primera. Tanto Belisario como su hermano Alejandro eran connotados juristas de la época y todos los días salían de sus casas, rumbo a la vieja casa familiar de la Olmedo y Venezuela, en donde tenían sus despachos profesionales. Alejandro vendió en 1924 la mencionada casa, pues había obtenido dinero luego de la venta de la hacienda de La Victoria, lo que le permitió radicarse en una casa de la plazoleta de la Merced.16 En 1950 se hallan como vecinos: 1-19: Luis Álava Pino 1-28: Vicente Quevedo L. y Rosa Mercedes Quevedo Coronel 1-38: Segundo Endara Jiménez 1-49: Víctor M. Peralta S. 1-77: Dr. Belisario Ponce Borja 16

Testimonios del Dr. Enrique Ponce y Carbo, Quito, 1992.

41 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia de la calle Galápagos

E

XVIII, LA CALLE GALÁPAGOS COMENZABA EN LA ACTUAL VARGAS, PUES AÚN NO SE ABRÍA EL PASAJE MIRANDA. N EL SIGLO

Según el plano de la ciudad en 1922, la calle tenía seis cuadras de extensión: desde la Guayaquil hasta la Cotopaxi. Cabe observar que actualmente, en las tres cuadras que van desde la Vargas hasta la Benalcázar, se conservan por ventura cuatro casas preciosas del siglo XVII, una del XVIII y una del XIX.

1. CALLE DE SISAÑA (GALÁPAGOS, ENTRE VARGAS Y VENEZUELA) La calle tenía este nombre preciso en 1768, sin duda obedecía al apellido de algún vecino indígena que había morado en ella, pues para ese año los dueños tenían otros apellidos, como luego lo veremos. Para 1740 esta cuadra tenía un aspecto totalmente rural, dos o tres casas en el lado norte además de una cuadra alfalfar que ocupaba casi toda la manzana, y una casa con una extensa huerta en el lado sur. Veinte años después, Coleti reporta la construcción de una pequeña casa interior en el lado sur, cerca de la Vargas y el resto prácticamente igual.

17

18

En esta cuadra, para 1768, existían dos casas: al lado norte de don Padrón de Santa Bárbara en 1768, en Museo Histórico 57, Quito. Censo de 1797 en ACQ.

Eugenio Ledesma, donde vivían doce personas. La siguiente, con cuatro tiendas, de don Miguel Jaime Pardo, con 28 personas: una de las tiendas era carnicería y otra ollería.17 En 1797 eran dueños: doña Estefa Ledesma y doña Juana Cárdenas, donde vivía la familia Pardo.18

42 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

El plano de Montúfar revela construcciones solo en las cuatro esquinas respectivas y la presencia de sectores agrícolas grandes incluidos en las respectivas manzanas. El censo efectuado en 1840 revelaría que, en el lado sur de esta calle, estaba la casa de Toribio Carrillo; no nos atrevemos a asegurarlo porque las condiciones técnicas en esos documentos eran relativas.19 Para 1888, si el plano no miente, no había construcciones en el lado norte, mientras el lado sur estaba totalmente construido. Hacia 1894, en el lado norte estaba la casa de Victoria Escobar; al frente se hallaban las casas de Margarita Hidalgo y de Camilo Jaramillo.20

2. LA CALLE EXCUSADA (GALÁPAGOS, ENTRE VENEZUELA Y GARCÍA MORENO) En el siglo XVIII solo estaba construido parcialmente el lado norte; en el lado sur quedaba una huerta. Coleti reporta en 1763 prácticamente construido todo el lado norte, mientras el lado sur mostraba una huerta que cubría gran parte de la manzana. La única casa de la cuadra en el lado sur pertenecía en 1768 a la viuda María Suárez de Bolaños, y allí vivían seis personas.21

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Según el censo de 1797 eran vecinos de esta calle don Santiago Bolaños, Rosa Quilago y Petrona Zurita.22 AMQ, censo de Quito en 1840.

En 1805 la situación se mantenía muy parecida: unas dos casas en el lado norte y nada al sur. Adolfo Jiménez, Pág. 66. Padrón de Santa Bárbara en 1768, Museo Histórico 57, Pág. 121.

Según el censo de 1840, parece que la casa de la señora Bolaños era ahora propiedad de Nicolás Reyes.23 En 1888 se miran muy regularmente construidos los dos lados de la cuadra.

ACQ, Gobierno, 1799. AMQ, Censo de 1840. A. Jiménez, Op. cit. Estas observaciones fueron tomadas por el autor en 1990 y sobre ellas hay datos precisos en la revista DINERS.

Para 1894 esa casa colonial de la señora Suárez de Bolaños, en el lado sur, pertenecía a Manuel Ramírez y tenía cinco tiendas (dos eran chicherías). Al frente —en el lado sur— quedaba la casa de Ángel Salazar.24 Valga referir que actualmente la casa número 3-54 en la acera norte tiene elementos primarios del siglo XVII, conserva los sitios originales de dos ventanas antiguas y es, en sí, una pésima mezcla de estilos, que le han hecho perder su originalidad.25

43 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

3. LA CALLE DE SAN MIGUEL (GALÁPAGOS, ENTRE GARCÍA MORENO Y BENALCÁZAR) Para 1740 su ambiente era típicamente rural: unas dos casitas a cada lado, en medio de cuadras de cultivo. Para 1763 se observan algunos cambios, sobre todo en la acera sur, donde se visualizan en los planos unas tres construcciones, obviamente recientes. En 1768, existían tres casas: la primera en el lado sur era del carpintero Juan Jurado, que vivía con ocho familiares, su esposa era María Victoria López de Solís; sus here d e ros la ve n d i e ron en 367 pesos a su cuñado, el célebre pintor Manuel Samaniego, quien la volvió a vender en 400 pesos a Narc i s a Palacios, en 1799.26 Por los límites de la escritura se ve claramente que esta casa quedaba en el Alto de San Juan y uno de sus costados daba a la plazuela del mismo nombre. Con toda seguridad, corresponde a la casa que en el plano de 1736 se ve a mitad de la cuadra. Para 1894, la célebre casa del pintor había pasado a Guadalupe Narváez. 26

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29

ANQ, Protocolos, N.3, 1799. Padrón de Santa Bárbara en 1768. ACQ, gobierno, 1799.

La segunda casa, en el lado sur, en el citado año de 1768, era de Antonio Jurado y más arriba se hallaba la casa del convento de San Juan, pegada a la anterior.27 En 1797 eran vecinos de la cuadra: Mariano Quiroga, el convento de San Juan, Eusebio Argüelles, Toribio Morales, Mariana Estrella, José Jurado y Manuela Jurado.28

AMQ, censo de 1840.

En 1805, en el plano de Montúfar, se observa más bien casi un vacío en los dos lados de la cuadra, 30

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

pues predomina la imagen de la iglesia de San Juan hacia el norte y una sola casa en la mitad del lado sur; eso sí, hay construcciones esquineras hacia la García Moreno. El censo de 1840 nos da con bastante precisión los nombres de los dueños en el lado sur: Mariana Melendre y Antonio Salazar.29 Villavicencio, en su plano de 1858, coloca a la iglesia de San Juan, mirando hacia la actual calle Galápagos, que por entonces aún no tenía nombre. En 1888 se infiere, de acuerdo al plano de Gualberto Pérez, que había modestas construcciones solo hacia el lado sur, pues el norte estaba ocupado solo por la plazoleta de San Juan. Para 1894 al frente de la casa que se mencionó como del pintor, es decir en el lado norte, vivía la viuda de Ángel Espinosa.30

44 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

4. LA CALLE DEL RETIRO (GALÁPAGOS, ENTRE BENALCÁZAR Y CUENCA) Los académicos señalan para 1740 unas dos casas en el lado sur, y prácticamente vacía la cuadra hacia el norte. Debieron hacerse construcciones en el sur, puesto que en 1763 y en el plano de Coleti —colonial— en este tramo se advierten solo cuatro construcciones en el lado sur; en el lado norte había huertas, exceptuando la esquina con la Benalcázar, en que aparecía también una casa. Estas cinco casas, en 1768 estaban, en su mayoría, en poder de indígenas: el carpintero Faustino Quishpe, el tejedor José Chanta, Feliciano Duque de Estrada, el zapatero Antonio de la Cruz y Polinario Inguicho. Según Montúfar, a principios del siglo XIX —1805— había construcciones regulares —unas tres casas a cada lado— en esta cuadra. El plano de Gualberto Pérez identifica construcciones regulares en el lado sur, pero prácticamente nulas en el lado norte. Para 1894, del lado norte se hallaba el tejar de Carmen Saá y, al frente, las casas de María del Carmen Triunfo y de Antonio Legarda. Fotografías de los años 20 del siglo XX revelan que el tramo de la Galápagos comprendido entre estas calles era un verdadero

CHAQUIÑÁN,

pues ni siquiera llegaba a la categoría de arrabal, según las

imágenes que publicamos. Un aviso de diciembre de 1926 reporta, bajo el título , la venta de una casa quinta frente a la iglesia de San Juan y con frente a las calles Galápagos, Pichincha (hoy Benalcázar) y Cuenca, medía 4 500 metros cuadrados, de tal manera que tenía cerca de 70 metros por lado, poseía además galpones y hornos para la fabricación de ladrillos. No consta el nombre del dueño, pues se debía contactar con la Administración de diario EL DÍA.

45 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

En la última cuadra —es decir de la Cuenca hacia arriba— había solo tapias en 1894; sin embargo, en 1805 se mira por lo menos una casa en el lado norte, cosa igual se observa en el plano de 1763, aunque aparece metida dentro de la cuadra anexa. El plano de 1888 no es claro al respecto. En 1950 la calle tenía los siguientes vecinos: S/N: Estuardo Albán B.

3-58: Néstor Salazar

1-44: Absalón Ávalos y Dra. Olga López

3-63: Hilda Jarrín de Racines

1-45: Ciro Maldonado Jarrín (Pasaje Miranda)

4-51: Joaquín Torres y Augusto Vinelli Cevallos

1-61: Dr. Juan Yepes del Pozo

4-63: Fabián Mantilla, Alfonso Vallejo y

1-69: Oswaldo Vaca

Miguel Recalde

1-71: Dr. Antonio Miño

4-64: Dr. Víctor Rojas

1-89: Carlos Villarroel

5-52: Pablo Sánchez

2-04: Manuel Ocaña y Alfonso Viel Gostalle

6-07: Pedro Alcívar

2-07: Dr. Leonardo Madrid y Antonio

6-15: Enrique Nieto Guzmán, notable músico

Alomía Larrea

6-41: Luis Arboleda

2-24: Gonzalo Proaño Maldonado

7-31: Sixto Montalvo V.

(Pasaje Miranda)

7-38: Alejandro Ojeda

3-35: Moisés Jiménez Páliz

7-41: Salomón Naveda

3-36: José Padilla Garzón

7-77: Carlos Neira

3-39: Jorge Rodríguez Buitrón

8-09: Juan Taipe

3-53: Néstor Salvador

8-10: Héctor Jarrín y Julio Torres Z.

3-55: Zoila Rodríguez

8-65: Diógenes Rueda Herrera

47 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia de la calle Oriente

E

N TIEMPOS COLONIALES ESTA CALLE COMPRENDÍA DOCE CUADRAS DE EXTENSIÓN, PUES IBA DESDE EL ITCHIMBÍA HASTA LA ACTUAL IMBABURA, INCRUSTADA EN EL TRADICIONAL BARRIO DE LA

CHILENA. POR

SU EXTENSIÓN, CORRESPONDÍA A DOS

PARRO QU I A S: LAS CINCO PRIMERAS CUADRAS ORIENTALES, DESDE LA

SAN BLAS, LAS JURISDICCIÓN DE SANTA BÁRBARA. CORRESPONDÍAN A

GUAYAQU I L,

SIETE RESTANTES, AL OCCIDENTE, PERTENECÍAN A LA

1. EL SECTOR DEPENDIENTE DE SAN BLAS O (ORIENTE, ENTRE GUAYAQUIL Y LEÓN) En documentos pro t o c o l a res de 1838, ante el notario segundo de la ciudad y a los cuales nos refer i remos al tratar de la calle Esmeraldas, consta claramente que este sector oriental de la actual Oriente se llamaba , el cual limitaba en su parte más alta con las tierras de Julián Quiroga . Se habló muy poco de ella en las crónicas hasta el fin de la Colonia, apenas había unas cinco casas desperdigadas, pues cabría decir que San Blas fue una parroquia cuyos vecinos vivieron en las calles largas que iban de norte a sur. Comprendía este sector cinco cuadras, entre las dos calles mencionadas. No hacemos mención del sector más adentro de la actual calle León, porque solo había huertas, aunque ya en el plano de Montúfar de 1805 aparecen casas en las esquinas más orientales de la Oriente con la León actuales. En los planos coloniales, la primera cuadra entre las calles León y Los Ríos se ve construida de los dos lados, con unas cuatro casas: tres hacia el lado norte y una hacia el sur. El plano de 1761 revela una sola casa en la esquina suroeste de Oriente y León. El de 1805 revela casas en las cuatro esquinas, con notables vacíos en los sitios intermedios.

48 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

El 7 de mayo de 1833, ante el notario Rivadeneira,31 se hizo la siguiente escritura: Juana García, viuda de Pedro Arrue, vendía casa y cuadras en el barrio de la Tola a Casimiro Carrera y a su esposa Toribia Armas, la había comprado a Teresa Jara, viuda del sillero Manuel Ortiz. Los límites eran estos: • Por la entrada, calle que conduce a la Tola, y que seguramente era la calle Oriente. • Al frente: casas y cuadras del difunto secretario don Luis Cifuentes. • A un lado: cuadras de Leonor Portugal. • Al otro lado: el tejar de Josefa Avendaño y la casa de Antonio Rivadeneira. Para 1894, el lado norte era la cuadra de Miguel Núñez, y el sur, la casa de Camilo Nolivos. La siguiente cuadra, entre León y Cevallos, también estaba construida en la colonia, excepto la zona nororiental. Para 1894 existían al norte tres casas: de Carmen Cáceres, Carlos Argüello y María Eguiguren.32 El segundo de los nombrados levantó en sus terrenos la primera plaza de toros, >.33 Al frente, en el lado sur, existían seis casas: del conductor de correos, Adolfo del

Salto; de Virginia Paz, alfarera; de Alejandro Cevallos; de Daniel López; del carpintero Luis Albán (tenía una chichería); y la fábrica de destilación de licores de Antonio Barahona. A fines del siglo XIX, el señor Vidal de Jesús Camacho Ortiz levantó una casa en la segunda cuadra de esta calle y en la acera sur: en la Oriente número 2-81 entre León y Cevallos. Era primo del celebérrimo don Carlos Amable Ortiz (el Pollo) gestor de innumerables canciones. Se hallaba casado con la dama costeña Mercedes Robinson, quien murió en 1903.34 La prensa de julio de 1913 trae el aviso profesional del médico Alejandro Villamar, en la calle Oriente 28. Para 1924 existía en la Oriente y Cevallos una casa vieja que en su totalidad fuera tomada en arriendo por el Capitán Carlos Noboa Saá, líder de los chullas galleros de la ciudad y ex soldado de Alfaro. Allí vivió unos diez años, tenía pianola y camas de metal, que llamaban la atención de los visitantes.

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34

ANQ, Protocolos ante Francisco Rivadeneira, 1828. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de su nieta Blanca Argüello Vaca, Quito, 1983. Testimonio del historiador Dr. Carlos Landázuri Camacho, miembro de la citada familia, 1995.

49 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Cuando la huída de los lázaros del leprocomio hacia 1932, vio desde la ventana del segundo piso de la casa que los pobres enfermos venían custodiados como reos, mientras el público cerraba puertas y ventanas. Muy consciente de que la enfermedad no era contagiosa, quiso dar ejemplo, bajó a la calle, besó a los leprosos en las mejillas e invitó a la gente a perder el miedo. En la casa de don Teodoro Puertas, situada entre Oriente y León, vivió en los años de 1936 y 37 el gran político e ideólogo del Liberalismo Dr. José Peralta. Vivía en unión de sus hijos Lucrecia, César y Luis, así como de sus nietos, los cuatro hermanos Albornoz Peralta, uno de ellos —Oswaldo Albornoz Peralta — notable futuro historiador.35 La tercera cuadra, entre Cevallos y Montúfar, está actualmente muy modificada por la construcción de la Av. Pichincha, fenómeno que ha permitido eliminar las casas más orientales de la cuadra. Estaba casi totalmente construida en la colonia, aunque en cambio el plano de Montúfar la re ve l a vacía. A fines del siglo XIX, todo el lado norte era la cuadra de Nicolás Barba Jijón. Al frente existían cinco casas: la del clérigo Darío Montaño, la de Carmen Guzmán, la de José María Becerra, la del Cmdte. Adolfo Zambrano Balcázar y la de Rosalía Merizalde, donde en 1911 tenía su consulta el Dr. Alberto Darquea Ceva l l o s .36 En 1917 el Municipio de Quito adquirió por compra, en 336 sucres (página 50 del libro respectivo), la cuadra de don Nicolás Augusto Barba y Barba, en este sitio de San Blas, con el objeto de ampliar la calle Oriente. El mismo año, los herederos de Nicolás Barba Jijón vendieron otro sector vecino y muy grande, en mil sucres, con el objeto de ampliar la calle Montúfar.37 A mitad de la cuadra y en el lado sur, tuvo su casa la famosa dama apodada Cuco con Cintas, seguramente por obsequio de algún galán. En la década de los años veinte, esta casa fue comprada por el médico urólogo Dr. Carlos Pólit Jarre, quien decidió poner aquí una clínica privada. Refiere Carlos Andrade en LOS INOLVIDABLES que pasando el Sordo Piedra por delante de la casa y cuando el Dr. Pólit hacía los preparativos para la inauguración y hablaba del aseo que le estaba dando, recordando a la antigua poseedora, le dijo: . Posteriormente y a mitad de siglo —1949— la casa fue adquirida por la familia Benites Guerrón, oriun35

36

37

da de Tulcán, a nombre de su hija Julia Benites de Burbano, quien vino desde Tulcán definitivamente Testimonio de doña Emma Albornoz Peralta de To l edo, Quito.

a esta casa en octubre de 1955, allí vivieron los hermanos Burbano Benites hasta por lo menos la década de los setenta. La casa fue vendida en 1993.

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Enríquez, Alcides, MANIFIESTO SINÓPTICO COMPARATIVO DE QUITO EN 1822 Y QUITO EN 1922, Pág. 53.

La cuarta cuadra iba desde la Montúfar hasta la Guayaquil. El plano de 1805 revela que era una calle muy corta en extensión, quizás con una sola casa a cada lado, parece que todo el sector que miraba a la Montúfar era aún solar.

51 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Hay documentos de hacia 1810 que hablan de la y que parecen referirse a esta calle, sobre todo porque era una cuadra totalmente construida. Allí, al medio de la cuadra, tenía una casa baja la señora doña María Villamar, quien la vendió a la señora doña María Bolaños. A esta le heredó su nieta doña Mercedes Tobar y Bolaños, quien la vendió el 13 de octubre de 1837, ante el notario cuarto de la ciudad, a Petrona Andrade y Albornoz, de una antigua familia del barrio de la carnicería (la Plaza del Teatro). Los límites eran estos: •

Al frente: el presbítero José Antonio Marzana.

• A la derecha: Petrona Cisneros. • A la izquierda: doña Mercedes Rivera o Cornejo Rivera de Espinel, madre del célebre político liberal Dr. Marcos Espinel Cornejo. • Detrás: el Dr. José Domingo Sierra, clérigo.38 El 15 de marzo de 1841, ante el notario Mariano Sosa, la calle se llamaba , la señora Ángela Tapia poseía una casa de dos pisos en la que también se llamaba calle que va a San Blas. Ese día la vendió a Félix Manuel Azcona, quien poseía también una casa adjunta por detrás, es decir que Azcona era dueño de todo el frente norte que miraba a la calle Oriente. Azcona la conservó 31 años, hasta que el 28 de mayo de 1872 la vendió ante el notario primero39 a Vidal del Castillo Reinoso, nativo de Machachi, esposo de la señora Felipa Bossano Piedrahita, sobrina carnal del señor Azcona. Conocemos perfectamente, por la GUÍA de Jiménez, que años después la señora Bossano tuvo su casa con estanco en la esquina noroeste de la Oriente y Montúfar. Los límites en 1872 se señalan así: • Al norte (hacia San Blas): la familia Ruilova. • Al sur: las esquinas respectivas. • Por detrás (hacia el oeste): el vendedor, señor Azcona. Para 1867 la calle tenía ya un cierto nombre definido, se llamaba ; hemos de recordar que la esquina de la Sábana Santa era justamente la de la Guayaquil y ANQ, N.4, Pro t o c o l o s , 1837.

Oriente. Allí tenía su casa Manuel Mena, quien la vendió a Mercedes Severa Loza, quien a su vez el 18 de enero de 1867, ante el notario segundo, la vendió a Felipe Moreno.40

ANQ, N.1, Pro t o c o l o s , 1872. ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , 1867.

Para 1894, la casa esquinera de la Oriente y Montúfar, del lado norte, era de Felipa Bosano Piedrahita, quien tenía su estanco hacia la Oriente. En la siguiente esquina, hacia la Guayaquil,

52 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

estaba la casa de los Azcona-Piedrahita. Al frente, en el lado sur, existían tres casas: la esquinera con la Montúfar era de Fernando Moncayo More n o 41 y de su esposa, la dama guanujeña doña Josefina Páez Egüez, heredó su hijo el notable y honradísimo jurista Dr. Alfonso Moncayo Páez, muchos años Ministro de la Corte Suprema y padre de los Moncayo Uquillas; seguía la de Ángela Beltrán; antes de la esquina con la Guayaquil, en el medio de la cuadra estaba la del abogado Dr. José Miguel Ocampo. Junto a esta y unos metros antes de la esquina con la citada Guayaquil, estaban dos tiendas en la casa de Belisario Jarrín. La prensa de 1911 trae un aviso muy curioso de don Jesús Alvarado, quien dice que en su casa de la calle Oriente, frente a la casa del señor Ludovico S. (será Sodestrom), ofrece en venta cuadros antiquísimos en cáñamo, madera, lienzo, cobre y hojalata, entre los autores figura Miguel de Santiago.42 Ofrecía además esculturas de Caspicara, pero citaba a los clientes en la Agencia El Fénix, situada en la Guayaquil y Esmeraldas. En realidad el señor Alvarado editó, años después, un excelente catálogo de antigüedades, con miles de piezas debidamente clasificadas. Valga decir que la vieja casa de los Azcona pasó al comerciante español Manuel Pardo, quien levantó una enorme casa de siete pisos que contó con la presencia de inquilinos muy interesantes: en los años 40, ocupó uno de los departamentos don José Ramón de Sucre Rodríguez, guayaquileño, sobrino nieto del Héroe de Pichincha, con sus hijos Amada, José Ramón de Sucre y Antonio José de Sucre. Muchos años y hasta la década de los noventa, vivieron allí dos hijas del célebre escritor don Manuel J. Calle, una de ellas, María Luisa, valiosa por sí misma. Allí acudía de continuo el Dr. Miguel Díaz Cueva en sus visitas a Quito, pues María Luisa conservaba con amor el archivo epistolar de su padre. La casa nunca tuvo ascensor y el visitante llegaba a los últimos pisos realmente fatigado. Vivió también allí, en los años 50, el joven estudiante de medicina Fausto Villamar Villamar, ibarreño, luego notable pediatra. Fausto casó con Rosa Pardo Velasco, hija de los dueños de casa. Frente a esta casa y en el lado sur estaba la casa que de don Belisario Jarrín, que pasó a doña Rosa María Yepes Terán de Villagómez, quien vivió allí hasta su muerte en los años 50. La casa fue heredada por su hijo el Dr. Jorge Villagómez Yepes, quien la vendió poco después.

LA CALLE ORIENTE EN EL SECTOR PERTENECIENTE A SANTA BÁRBARA

2. LA CALLE DE LAS MELCOCHAS (ORIENTE, 41

42

ENTRE

GUAYAQUIL Y VARGAS)

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Ver EL COMERCIO y EL DÍA de esas fechas.

Desde tiempo de la colonia, se hallaban cinco casas en esta cuadra; comenzando desde la Guayaquil (1768), estaba la de doña Manuela Fernández, seguía la de Esteban Aguilar, la de Magdalena Baca, otra

53 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

más de la primera propietaria (que era la casa más poblada de la cuadra) y la de María Inclana, donde se fabricaban unas sabrosas melcochas y que sin duda dio origen al nombre de la calle.43 En 1805 estaba muy irregularmente construida: una casa en el lado norte y unas dos hacia el lado sur. Gran parte de la manzana comprendida entre la Oriente, la Vargas, la Caldas y la Guayaquil, era una cuadra alfalfar.44 En 1840 se empadronan en esta calle y hacia el lado norte: Narciso Manzo, Ana Yepes y Luis Lizarazu. En el lado sur, en cambio, lo hicieron Francisco Cañizares y Narcisa Gómez.45 43

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Padrón de Santa Bárbara, en Museo Histórico 57. Ver Plano de Montúfar. AMQ, censo de 1840. Testimonio de su nieta doña Lucila Cortés de Carrera, Quito, 1983. Ver su correspondencia en nuestra obra LOS VEINTEMILLA EN LA SIERRA NORTE DEL ECUADOR Y EN LIMA, Quito, agosto del 2003.

senciales del asesinato de García Moreno y dio una larga declaración al respecto.48 Para 1894, las tres casas del lado norte eran: la de Rosa Paz, esquinera con la Guayaquil, donde tenía consulta el abogado Dr. Juan M. Paz, largo tiempo vecino de Pujilí;49 en los bajos había una pulpería y chichería hacia la Oriente. Seguía la casa de Francisco Orejuela Larrea y de su esposa la dama barbacoana Rosa Mercedes González Rubio Rivas que alcanzó casi al siglo de existencia, esta casa fue heredada por sus nietos los Estupiñán Orejuela;50 luego, en tercer lugar, la de Rafael Sánchez —que pasó más tarde a los Terán y luego a los Rodas—. Quedaban, hacia la Oriente, dos tiendas en la casa esquinera con la Vargas, de propiedad de Nicanor Luna. Al frente, al lado sur, existían solo dos grandes casas, aunque la esquinera con la Guayaquil —que era

Jurado Noboa, Fernando, LOS PAZ, UN MODELO HISTÓRIDE

MOVILIDAD

SOCIAL

colección Quito 2002.

SAG,

DOBLE ,

51

Miranda Ribadeneira46, gran liberal, amigo de Montalvo y de Veintemilla47, fue uno de los testigos pre-

ANQ, sección Criminales, ver Proceso de 1875.

CO

50

En esta calle y a mitad de la cuadra —entendemos que en el lado sur— tuvo su casa el Dr. Luis Emilio

Papeles de Ricardo Descalzi del Castillo. Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

desde 1863 de José Ignacio Proaño— tenía su gran frente precisamente a la calle Guayaquil: seguramente de esta casona salió la primera casa que ya miraba a la Oriente y que fue de Ignacio Proaño, con dos tiendas, era muy grande, tan es así que para 1903 allí funcionaba la Escuela Normal de Varones, según se observa en el plano de Higley; luego seguía la casa de Pedro Caicedo con cuatro tiendas, donde tenían su consulta el médico Dr. Julio Vizcaíno. Hacia la esquina y mirando a la Vargas, estaba la casa de Manuel Cornejo.51

55 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

En marzo de 1910, don Desiderio Olano, nativo de Popayán, avisaba por la prensa que vendía o arrendaba su casa de 24 habitaciones en esta calle Oriente, entre Guayaquil y Vargas. A principios de siglo, en esta misma calle, fue apuñalada doña Josefina Páez Egüez, luego de vo l ver de misa en San Agustín, por su esposo, don Carlos Salvador de la Barrera, quien terminó en el hospicio.52 En la década de los treinta, en la casa de la esquina nororiental de la Oriente y Vargas sucedió uno de los crímenes que más impactó a la ciudad: Jorge Ojeda asesinó a una conocida artista de teatro vinculada a la compañía Gómez Albán, se trataba de la célebre Marina Gonzembach. Jorge desapareció del país y murió años después en Chile en forma penosa.53 En los años 30, la casa más conocida en el lado norte fue la pensión Molestina, manejada por don José María Molestina Ordeñana, caballero guayaquileño, dueño de una de las primeras librerías en el puerto a principios de siglo, y por su esposa Lucila González Rubio Vásconez. En esa casa, vivieron, en 1937 y a raíz de su matrimonio, Pepita, hija de los dueños de casa con su novel marido el político conservador Eduardo Pólit More n o . 54 En los años 40, se convirtió en la Pensión Cobo, unas dos casas antes de llegar a la esquina con la Varga s .55 En los años 50, esta casa fue de una señorita Terán de Cayambe, de quien pasó al Cnel. Adolfo Rodas Guerra, militar cuencano y a su señora Ana Arias Mantilla, padres de conocidos médicos pediatras. Tenía cuatro pisos: en el segundo vivía el periodista Roberto Maldonado Iglesias, con sus hijos los Maldonado Palacios, todos de origen cuencano; al fondo, la citada Terán ya muy anciana. En el tercer piso vivían los dueños de casa, en el cuarto Augusto Paz y los suyos. Al frente, en el lado sur, había también casas muy conocidas en los años 40 y 50: la primera en la 52

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Testimonio de su sobrina política doña Eugenia Terán de Páez Flor, Quito, 1982.

esquina con la Guayaquil era también de Manuel Pardo y en sus bajos funcionó una de las farmacias

Papeles de Jorge Ribadeneira Araujo.

ciudad porque era un poco abrupto de manos; seguía la de Antonia Romo y finalmente, hacia la

Informes escritos de Eduardo Pólit Moreno, Quito, 1990.

esa casa estaba el famoso Niño Jesús que abría sus brazos al compás de la música y que fuera

Informes de la familia Córdova Ribadeneira, Quito, enero de 1991. Papeles e informes del Dr. Héctor Grijalva Muñoz, descendiente de esta familia. Trae re f e rencias al respecto el P. Severo Gómezjurado en su VIDA DE GARCÍA MORENO.

más conocidas de la localidad. A mitad de la cuadra estaba la casa y consultorio del médico manabita Dr. Dimas Burbano Bowen, el terror de los niños de las escuelas municipales de la esquina con la Va rgas, la de las hermanas Buendía Ordóñez, que mu r i e ron pasados los 90 años. En re galo personal del Papa Pío IX a García More n o .56 Vi v i e ron también allí su sobrina Mélida Ribadeneira Buendía y su esposo el Cnel. Julio H. Muñoz Arias, así como sus hijos los conocidos profesionales Muñoz Ribadeneira.

3. LA CALLE SOLA (ORIENTE, ENTRE VARGAS Y VENEZUELA) Su nombre era exacto: era una calle prácticamente abandonada.

56 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Coleti la identifica como totalmente construida para 1763 en sus dos lados, pero nos parece que se trata de un error técnico en su plano. Por 1768, en esta calle se hallaba solo la casa de María Quiteria Rodríguez, en la que vivían 18 personas. El resto deben haber sido tapias.57 En el plano de 1805 se observan unas tres casas hacia el lado norte, mientras el sur estaba totalmente vacío, pues correspondía a una cuadra alfalfar. Ignacio Liborio Vi l l a c reses tuvo, hacia 1870, una casa en la Oriente y Vargas que la heredó su hija Rosa de To r re s .58 En el lado norte, en 1894, existían dos casas: la primera era la testamentería de Agustín Toro Guerrero, con una zapatería; luego venía la de Rosa Erazo. Al frente, en el lado sur, se hallaban dos tiendas en la casa de Becerra, uno de ellas era la tintorería de Emilia Naranjo. Luego seguía la casa de Abel Torres, con una tienda.59 Esta última pasó a poder del Dr. Ricardo Donoso Chiriboga y aquí vivieron, en 1919, su hermana Margarita con su esposo Camilo Donoso Lasso; décadas después la compró el Dr. Leonidas García, a quien habremos de referirnos.60 En los años 20 y principios de los 30, en la casa que forma la esquina suroriental entre Esmeraldas y Venezuela, vivía la anciana doña Tránsito del Castillo Carriedo. Seguramente debido a un reumatismo articular, pasaba todo el día sentada sobre gruesa alfombra, era señora muy pequeña y avanzada en carnes, ella con su hija Aurora Albuja del Castillo —pionera de la hotelería en Machachi— criaron a 57

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Padrón de Santa Bárbara en 1768. ANQ, N.2, 1912. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Informes del Dr. Gonzalo Donoso Donoso, Quito, 1992.

su nieta y bisnieta doña Piedad Erazo del Castillo, luego esposa del Cnel. Octavio Valencia Llerena. Hacia 1930, la casa más conocida del lado norte y que había pertenecido a la señora Erazo, la adquirió el Dr. Alejandro Romoleroux, muy amigo de comprar casas para cuantas personas le venían en su íntimo afecto y esta lo fue para doña María Malo; la casa, a través de una peña, llegaba hasta la calle Venezuela y llevaba el número 6-54. En ella vivieron en los años cincuenta varios estudiantes universitarios, la mayoría de escasos recursos, que se arrimaban al más acaudalado, que era el cuencano

57 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Patricio Cueva Jaramillo, quien con el objeto de atender a sus numerosos amigos adquirió 30 colchones. Allí vivieron, por temporadas, Edmundo Ribadeneira, el gran ambateño Mentor Mera Oviedo y Camilo Mena, y pasaron también los hermanos Kingman Riofrío y Fausto Falconí Cobo.61 En los años 40 y 50 del siglo XX, en la acera sur, había unas seis casas, poco re l e vantes las dos primeras; la tercera era de la familia Alzamora de Mora, oriunda de San Miguel de Bolívar; la cuarta del Dr. Palacios, oriundo de Cuenca; la quinta del ilustre educador Dr. Leonidas García Ortiz, que a pesar de su arraigado liberalismo, entró en pugna con Alfaro y fue desterrado a Chile; la sexta casa, esquinera ya con la Venezuela, fue de Bolívar Cevallos Cruz, luego suegro del artista Fa u s t o G o r t a i re Chiriboga .62

4. LA CALLE SIN PAR (ORIENTE, ENTRE VENEZUELA Y GARCÍA MORENO) Vale decir única. Según el plano de 1740, obra de los académicos, para entonces solo estaba construido el lado sur, pues el norte era cuadra en su totalidad. Coleti, veinte años después, la representa igual, aunque en el lado norte y de manera interna, aparece una pequeña casita. En 1768 vivía en esta calle, en una casa pequeña, doña Joaquina Castro Calderón, posiblemente al lado sur, pues el norte era solar y huerta, como hemos manifestado.63 En el censo de 1840, figura en esta calle la casa de Rosa Cevallos.64 61

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I n f o rmes del Dr. Patricio Cueva Jaramillo, Quito, 1992.

Hacia 1894, del lado norte se hallaban las casas de Adelaida Cadena y de Modesto Suárez. En el lado sur estaban las tapias de la casa de los Guerrero, que daba hacia la Venezuela y su dueña era doña

I n f o rmes del Ing. Byro n Córdova Ribadeneira, Quito, 1991. AMQ, 1768, Padrón de Santa Bárbara. Id. Censo de 1840.

Magdalena Guerrero de Guerrero. En 1991 pude observar que la casa número 7-43, que está en la mitad del lado sur, es una auténtica joya del siglo XVII, con una típica ventanuca diminuta. Fue sin duda parte de la vieja casa de los aludidos Guerrero.

58 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

5. LA CALLE DE SAN ANTONIO (ORIENTE,

ENTRE

1534 - 1950

GARCÍA MORENO Y BENALCÁZAR)

Ya desde tiempos coloniales existían tres construcciones del lado norte y una muy pequeña en el lado sur. En 1768 sus propietarios, sin duda en el lado norte, eran tres: don Ignacio Merizalde Chacón, dueño de una pequeña casa que arrendaba y en la que vivían ocho personas. Luego, el sastre indígena Gregorio Silvestre, quien era el dueño de la casa más amplia de la cuadra. Después venía la casa de Diego de Mera. El plano de Montúfar, en 1805, revela unas tres casas en la acera norte y prácticamente vacío el lado sur. Por el documento de venta de la casa de la familia López Conde a José María Tena, efectuado en 1842 ante el notario sexto, se viene en conocimiento que por detrás de los vendedores quedaba la casa de Mariano Flor y que antes fuera de don Pedro Marcos de León. Como la casa quedaba a mitad de la cuadra de la Esmeraldas entre García Moreno y Benalcázar y en el lado norte, es obvio que esa parte trasera daba a la Oriente, pero en la acera sur. Veinte años después, en 1862 y en la misma notaría los Silva Cárdenas, vendieron la misma casa a los Valladares y allí consta que por detrás quedaba la huerta de la señora Rosario Terán. El censo de 1840 parece indicar que las dos casas del lado norte fueron de Antonio Andrade —justamente el vecino a quien encargaron el censo de la manzana— y de Justo Suárez. En 1894, las dos casas del lado norte pertenecían a Nicolás Reyes y a José Coronel. Al frente se hallaban las tapias de la casa del Dr. Mariano González Calisto, que miraba hacia la García Moreno. Para 1950, en la Oriente y Benalcázar tenía su casa don Emilio Gangotena Morán y allí vivía arrendando doña Margarita Donoso de Donoso, quien décadas antes ya había vivido en esta calle. Actualmente, la casa 8-36 que está en la acera norte se revela del siglo XVII, posee seis ventanas asimétricas y paredes de enorme espesor. Estaba al destruirse en 1991, actualmente se desarrolla un proyecto de vivienda por parte de la municipalidad.

59 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

En 1950 se registran estos vecinos en la calle Oriente:

1-24: Dr. Luis A. Páez Benites

5-10: Gerardo Mesías O. y

1-49: Cnel. Jorge Quintana Dueñas

Neptalí Silva Echanique

1-55: Antonio Romero

5-22: Leonardo Merino

1-59: Benjamín Pinto Guzmán

5-36: Escuela República de Panamá

1-71: Benjamín Pinto Guzmán

5-71: Enrique Unda Cadena y

2-11: Rafael Urgilés González

Manuel Utreras Gómez

2-18: Rebeca Salvador Guillén

5-81: Isaac Riesker y José Roitman

2-33: Dr. Teodoro Puertas

5-92: Nicanor Almeida

2-46: Benigno y César Armas

6-23: Dr. Augusto Alzamora Costales

2-53: Ing. Sergio Orejuela V.

6-29: Cnel. Ramón Villalba

2-62: César Mora Escalante

6-37: Dr. César Palacios Montesinos

2-67: Carmela Terneux Pallares

6-51: Julio César Noboa Muñoz

2-81: Dr. Luis Gabriel Camacho Araujo

6-65: Egon Donath

2-94: Dr. José María Urbina Mayorga

7-20: Juan José Valverde Paz

3-22: Mayor Gonzalo Villacís

7-32: Alonso Viteri

3-23: Dr. Alfonso Miranda Jaramillo

7-41: Edmundo Chávez

y Dr. Carlos Pólit Jarre

8-47: Celso Alejandro Jácome

3-34: Heriberto Leiva

8-53: Daniel Mera, Humberto

3-36: Dr. José Augusto Cajiao

Ricaurte Trujillo y Víctor M. Pantza

3-40: Alejandro H. Albán

12-21: Daniel y Enma Jaramillo

3-52: Georgina Armas

12-33: Rosa Rodríguez de Rodríguez

4-06: Julio Mancero J.

12-34: Jorge Lara Oña

4-11: Julio Larrea y Dr. Alfonso

12-41: Luz María Negrete

Moncayo Páez

12-80: Francisco Zaldumbide

4-42: Dr. Abraham Karabanov 4-43: Dr. Aníbal Mantilla y Alfredo Abril Nieto

60 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

61 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia de la calle Esmeraldas

A

ORIENTE, ESTA CALLE PERTENECÍA A DOS VIEJAS PARROQUIAS DE LA CIUDAD: DOS CUADRAS Y MEDIA HACIA EL ORIENTE SE HUNDÍAN EN EL ITCHIMBÍA Y PERTENECÍAN A SAN BLAS. OCHO CUADRAS, DESDE LA GUAYAQUIL, AVANZABAN HASTA LA COLINA DE LA CHILENA Y PERTENECÍAN A SANTA BÁRBARA. L IGUAL QUE LA CALLE

1. EL SECTOR DEPENDIENTE DE SAN BLAS (ESMERALDAS, GUAYAQUIL)

ENTRE

CEVALLOS

Y

En tiempos coloniales esta calle comenzaba en el Itchimbía, dos cuadras al oriente de la actual calle Montúfar. El plano de Montúfar muestra una casa al tope oriental de la calle, otra única en la segunda cuadra (entre Montúfar y Cevallos actuales), en su lado norte y, en cambio, muy regular y totalmente construida la cuadra entre Montúfar y Guayaquil. En tiempos republicanos solo se había prolongado unos metros en dirección a la calle Los Ríos. El plano de 1736 muestra claramente, en la actual esquina suroeste de la Esmeraldas y León, una casa bien visible que aún existe y es muy bella, tiene la típica base de sustentación inclinada como muchas de las casas del siglo XVII, por temor a los sismos, además de dos ventanas encantadoras hacia la calle Esmeraldas. En el mencionado plano de 1736, también figura la tercera casa del lado sur, pero esta fue derrocada y en su lugar está la actual de don Rodrigo Torres. El 27 de diciembre de 1822, Mariano Flor y su mujer Mercedes German vendieron una casa en San Blas, con una huerta muy grande, a Manuela Jácome.65 Quedaba, por la entrada, frente a la casa de don Francisco Javier Cruz y por detrás daba hacia el camino a la placeta de San Blas, es decir a la calle Oriente. 65

ANQ, N.2, protocolos ante Miguel Munive, 1838, ver la venta de Manuela Jácome a Carlos Puente.

El 20 de septiembre de 1838 ante el notario Miguel Munive, se hizo una escritura de venta de casa en San Blas y en la calle de los Buitrones: la ciudadana Joaquina Morales, esposa del escribano Mariano

62 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Santacruz, la vendió a doña Josefa Moreno y a sus hijos Pacífica, Rafael y Francisca Losa Moreno. Los límites eran los siguientes: • Al frente: la cuadra del ciudadano Francisco Bossano. • A la izquierda de la casa: la propiedad de Rosa Rea. • A la derecha, la esquina y el respaldo de la casa: la gran propiedad de la señora Luisa Banda.66 Por el siguiente documento veremos que había una íntima relación entre la casa de los Buitrones y el camino a la placeta de San Blas, y dado que los Buitrones vivieron en la León y Esmeraldas, creemos que estamos correctos en nuestra presunción. El 17 de diciembre de 1838 y ante el mismo notario Munive,67 entonces notario segundo de la ciudad, el albacea de la difunta señora Manuela Jácome vendió la aludida casa, que fuera de los Flor, a Carlos Puente y su esposa Rafaela Pérez. Los límites eran los siguientes: • Por la entrada: casa de Manuela Romero, que antes fue de don Francisco Javier Cruz. Esta casa de la Romero estaba en la acera sur, según lo que luego analizaremos. • A la derecha: los Buitrones. • A la Izquierda: Juan Borja. • Atrás: el camino a la placeta de San Blas y las tierras de Julián Quiroga. El camino a San Blas era la calle Oriente, esto significa que la casa vendida estaba en la acera norte de la Esmeraldas. Pero dado que, aun a fines de siglo, en esta primera cuadra solo había casas en uno de los lados, es posible que estas escrituras se refieran a la segunda cuadra. En 1894 y según la GUÍA de Jiménez, había dos casas coloniales en el lado sur de esta cuadra: la de Teresa Gordón, con cuatro tiendas, y la del capitán Manuel Salvador, que tenía cinco tiendas. Al frente, en el lado norte, había solamente tapias. El Dr. Carlos A. Bermeo, en junio de 1909, ofrecía sus servicios de abogado en la calle Esmeraldas 1-72 (acera norte), anotando que su teléfono era el 264. En julio de 1922, el capitán cuencano Virgilio Machuca Crespo estaba de guarnición en Quito, en el cuartel de la calle Montúfar, y había localizado una vivienda relativamente cercana, justamente en la Esmeraldas número 1-12, acera norte de la primera cuadra. Allí nació, en dicho mes, su hija Mercedes, años más tarde inspiradora de gran parte de la obra de su esposo, el poeta cañarense Enrique Noboa 66

67

Id. Id.

Arízaga. El mismo día y en el departamento situado al frente de los Machuca nacía también Napoleón Zavala Anda, hijo de otro militar: el comandante Zavala.

63 F e r n a n d o

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N o b o a

En 1935 y mediante un préstamo a la Caja de Pensiones, el gran escritor otavaleño Isaac J. Barrera construyó una casa en la Esmeraldas 1-35 y allí moró 35 años, hasta su muerte en 1970. En esa casa y en su planta baja, don Isaac tuvo una de las mejores bibliotecas de la ciudad, especializada en historia y en literatura. Desde 1912 ya había sido un tenaz vecino de este barrio de La Tola, pues había vivido en la vecina calle León, en casa de su paisano y pariente el Ing. Pedro Pinto Guzmán. En 1943, y recién venido de una casa frente al Correo, vivió en esta calle el gran poeta cañarense Enrique Noboa Arízaga, quien, como buen poeta, buscaba las mejores alturas de Quito, para tener motivos de soñar y de inspirarse.68 Hacia 1904 levantó una casa nueva de un solo piso, en la actual Esmeraldas 2-71 entre León y Cevallos, un señor Freire, este la vendió para 1917 a doña Natalia Godoy, señora de finos modales que había vivido una corta temporada en París y era dueña además de quinta en San Antonio de Pichincha siendo madre de los Puente Godoy, ligados a la conocida ferretería de este apellido. La señora la traspasó a doña Mercedes Espinosa, nativa del sur del país, quien a su vez la vendió, en 1966, a su actual propietario don Rodrigo Torres Acosta, hombre muy culto y amante de las cosas viejas. La casa esquinera hacia la León la poseía en los años 40, uno de los Canónigos de la Catedral.69 En 1944 el grupo Madrugada, liderado por el citado Noboa, por Galo René Pérez, Eduardo Ledesma Muñoz y otros connotados escritores, funcionaba en la calle Esmeraldas número 23, es decir en la acera izquierda de la segunda cuadra.70

2. LA CUADRA ENTRE CEVALLOS Y MONTÚFAR 68

69

70

LES CUENTO UNA COSA, autobiografía de Enrique Noboa Arízaga, obra a editarse en enero de 2004.

En la siguiente cuadra, en los planos coloniales se ven dos casas en el lado norte y una en el sur. Los documentos analizados de 1838, en la cuadra anterior, es posible que se refieran a esta misma cuadra.

Papeles, escrituras y testimonios de don Rodrigo Torres Acosta, Quito, 1993.

Para 1894 existían tres casas en el primer sector: dos de José Baca —en el lado norte— y una, al

Guerrero, Edwin, (LAS

ba hacia la Montúfar. Esa casa de los Baca es sin duda la misma que heredó, 40 años después, el señor

SO-

frente, de Agustín Osorio; también se ubicaba allí el toril del matadero y tapias del cuartel que mira-

CIEDADES DE ESCRITORES Y ARTISTAS),

Quito, 2001.

José Baca Miranda, al que habré de referirme.

64 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

En febrero de 1920, el Dr. Félix Proaño Maldonado, veterinario diplomado en Chile, ofrecía sus servicios en la carrera Esmeraldas número 24, en una casa de la acera norte. El 26 de marzo de 1930, la señora Manuela Villota de González vendió su casa frente al toril a Rafael Jarrín Benites, vecino de Guaranda. Por el norte quedaba la casa de José Baca Miranda —luego vendida al Dr. Catón Cárdenas Nava r ro—, por el sur miraba a la calle Esmeraldas, por el oriente (hacia el Itchimbía) estaba la casa de Manuel María Reyes y hacia el occidente (es decir hacia el cent ro de la ciudad) la casa de Eloy Yépez. Jarrín la tuvo solo tres años, pues la vendió el 9 de marzo de 1923 ante el notario Pompeyo Jervis, en 10 000 sucres al connotado comerciante don José María Andrade Flores, indicando que el sector, a pesar de ser periférico, empezaba a mejorar en estatus.

3. LA CUADRA ENTRE MONTÚFAR Y GUAYAQUIL O CALLE DE ÁNGEL POLIBIO CHAVES Estaba correctamente construida desde hace dos siglos. Del lado norte existían en 1894 seis casas: de Nicanor Vinueza; Tomás Espinosa —grande y con dos patios—; del Cmdte. Manuel López, quien tenía una fábrica de espermas en su casa, era la casa más alta de la cuadra y revelaba como si fuera de tres pisos; la cuarta del comerciante Vidal Ortiz, donde tenía su consulta el Dr. Rafael Espíndola, esta y la quinta del médico Carlos Román eran bastante pequeñas y, ya en la esquina de la Guayaquil, la del coronel Modesto Burbano, ibarreño, donde atendía el Dr. Julio Paredes C. Al frente, en el lado sur, existían cuatro casas, después de una chichería en la casa de Emilio Guerra: primero la de Felisa Navas, donde tenía su consulta el Abogado Dr. Carlos F. Gómez Díaz; la segunda de Manuel Quesada y las dos —tercera y cuarta— del comerciante Vidal Ortiz, en la primera de las cuales tuvo su consulta el Dr. Ricardo Ortiz Baca, hijo del dueño, quien años después viajó a Paris, junto con el Dr. Alejandro Melo, para repetir toda la carrera de Medicina en la Sorbona.

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N o b o a

Una de las casas de don Vidal Ortiz —justamente aquella en donde luego se construyó el Teatro Central— perteneció a principios del siglo XX a doña Luz Peñaherrera García y a sus hijos los Dávila Peñaherrera, según informes de sus nietos los Rivadeneira Dávila. El plano de Higley, hecho en 1903, revela algunos detalles de esta cuadra: en el lado norte había seis casas: la segunda era muy grande y poseía dos patios, la tercera era de dos pisos altos, la cuarta y la quinta eran bastante pequeñas. Al sur en cambio, había solo pocas casas. Eran cuatro, pero entre la primera y la segunda había un gran solar vacío; la segunda y la cuarta poseían dos patios cada una. En los primeros años del siglo XX y hasta 1912, el comerciante guayaquileño Enrique Jurado Cali tenía su pesebrera a la mitad del lado norte de esta cuadra, los caballos de su propiedad pertenecían a la Agencia de Coches de él mismo, que la tuvo primero en la Plaza de San Agustín y luego en la Plaza Grande, según se ve en las fotografías de la Exposición de 1909. Entre 1908 y 1922, los vecinos del lado norte eran los siguientes: el guarandeño Francisco Durango Flores compró la casa de la esquina noroeste de la Esmeraldas y Montúfar, sus herederos, los Durango Chauvin, la tuvieron más de 60 años, pues la vendieron en 1970. A continuación estaba la casa grande de doña Mercedes Ramírez de Vivanco, en donde se alojaba el gran guarandeño Dr. Ángel Polibio Chaves, cuando venía a vivir por temporadas en Quito. De allí que la gente conocía a este sector como >. La cuarta era de los Ortiz Baca, hijos del antiguo vecino don Vidal Ortiz;

la esquinera con la Guayaquil, de Rafael Rodríguez Arteta y de su esposa Hortensia Paz Ante; allí vivía Inés Rodríguez Ante de Suárez. Entendemos que la cuarta casa de los Ortiz (tercera desde la Guayaquil) fue dividida en esa década de los veinte en dos casas: que un sector lo compró el Cmdte. Juan Gabriel Jurado Martínez, quien ya vivía en esa casa en los años 1924 al 1928, cuando fuera profesor del colegio Militar; vivió allí en compañía de su esposa doña Luisa Riquetti Ayora, allí tuvo su consulta odontológica durante casi medio siglo el Dr. Edmundo Jurado Riquetti y en el tercer piso de esa casa murió en 1989, a los 91 años de edad, Rosa Elvira Jurado Martínez, una de las últimas sobrinas carnales del novelista Luis A. Martínez. El otro

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N o b o a

sector, aún en los años 40 y 50, estaba en poder de los Espinosa Bermeo y Espinosa Ortiz, nietos estos del Dr. Ricardo Ortiz Baca, heredero de la vieja casa del siglo XIX. En enero de 1916, la prensa avisa que en la Esmeraldas número 31 (acera sur) daba clases de piano el anciano don Vicente R. Bermeo, quien había sido discípulo de Neumane y de Rossa en los años de 1870, época en que había obtenido el primer premio en nuestro Conservatorio de Música. Un aviso por la prensa de diciembre de 1923 reporta que el dueño de la casa número 35 de la carrera Esmeraldas —junto al Teatro Popular— la ofrecía en venta o en permuta con una quinta. No consta su identificación. Frente, justamente a los Ortiz, se construyó el Teatro Popular, luego llamado Central, de moda en Quito en los años veinte del siglo pasado. Hemos dicho que don Vidal Ortiz tenía otras dos casas en el lado sur de esta calle, antes de la esquina con la Guayaquil. En marzo de 1926 la prensa quiteña reportaba que Juan Espinosa vendía parte del Teatro Popular con casa en la Esmeraldas 29; en la primera casa del señor Ortiz —junto al mentado Teatro— vivieron los Bravomalo Ruatta en 1932, fue pues la morada del gran artista César Bravomalo; allí mismo vivió, en 1934 y 35, don Carlos Mateus y García, sobrino nieto de García Moreno y persona muy conocida en Quito. La última casa esquinera con la Guayaquil fue de don Julio César Montalvo Terán, en los años 40.

EL SECTOR CORRESPONDIENTE A SANTA BÁRBARA

4. LA CALLE NUEVA Se denominaba en la Colonia al tramo de la Esmeraldas, entre Guayaquil y Varga s . Para 1768 tenía tres casas: de María Luisa Pérez, con dos tiendas atendidas por indígenas; la de don Ignacio Viteri, en donde vivían 29 personas, siendo la más poblada de la cuadra; y la de doña Magdalena Flores. Viteri tenía también una casa pequeña en la calle Chica, en la esquina de Varga s y Venezuela, que arre n d a b a . Vecinos de esta cuadra en 1797 eran: la misma doña Luisa Pérez, doña María Manjarrés, doña Baltasara Sola y Ros y el abogado Dr. Mariano Egas. Según el censo de 1833, en el lado sur de esta calle estaba la casa de Josefa Moncayo, señora de 42 años, pechera de oficio (fabricante de pecheras para chullas, indudablemente) y casada.

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En 1840, según el catastro, estaban al norte las casas de Mercedes Nolivos y de Ramón Betancourt. Para 1894, en esta calle había tres casas en el lado norte, luego de las tres tiendas que se hallaban en la casa de Fidela Aguirre y que miraban a la Guayaquil: la de Ramón Guevara, en donde vivían el Ing. Eudoro Anda Vásconez y el Dr. Luis Anda, médico ambateño; la segunda de Francisca Hernández; la tercera, esquinera con la Vargas, que pertenecía a Manuel Rojas y tenía una tienda de Timoteo Suárez, que daba hacia la Esmeraldas. Esta casa se quedó largamente con la familia Rojas. En el lado sur existían solo dos casas o, más bien dicho, ni una sola casa completa, pues estaba la esquinera, que tenía su mayor frente hacia la Guayaquil, a donde daban tres tiendas y era de Manuel V. Flor, quien tenía aquí su imprenta. La otra era esquinera con la Vargas y pertenecía a la comerciante Rosario Albán, viuda de Miguel Mora. El diario LA PATRIA, que funcionaba en la calle Venezuela 49, en su edición del 26 de marzo de 1906, sacó un aviso comercial de la fábrica de muebles de Alberto Mena, en la cuadra número cinco de la carrera Esmeraldas. Avisaba que tenía hábiles operarios, que la madera empleada era y que no se pedía nada de dinero por adelantado. En la década de los veinte en el siglo pasado se mantenían las cuatro casas del lado norte, incluyendo parcialmente la esquinera con la Guayaquil: la primera era de los Dávalos Suárez; la segunda, que era de dos pisos, había pertenecido pocos años antes a doña Ana Luisa Campana de López Darquea, guarandeña, quien la cambió con la hacienda Puntapié, situada en Tambillo, pasando así a poseerla desde 1919 el Dr. Alejandro Kennedy Valdez, conocido dentista quiteño que hizo entre las damas cuencanas a principios de siglo y era casado con doña Paulina Gozemet. En dichos años vivían en la planta alta los dueños de casa y, al frente, en un departamento, doña Leticia Enríquez Ribadeneira de Paz Gaviño, su hijo Eduardo León Enríquez y doña Eloisa Yepes. Eduardo fue militar y hombre muy popular y divertido en Quito, perdió el juicio prematuramente y su muerte fue profundamente sentida. En el piso bajo vivían varios estudiantes universitarios y la familia de don Cosme Musello Miranda —comerciante italiano— que moró allí en 1921 y 1922. La tercera casa de ese lado norte era de doña Antonia de Andrade. Al frente, en el lado sur y en los años veinte, estaba en la esquina el Hotel Europa que justamente se terminó en 1921, constituyéndose en una típica y agradable construcción. La casa esquinera con la Vargas era de la familia Guerrero Mora, que la habían heredado de Rosario Albán de Mora. En las décadas de los cuarenta y cincuenta, las casas en el lado norte había aumentado a cinco: en la esquina con la Guayaquil estuvo la Botica Pichincha, de Eduardo Ledesma de Janón; en el piso alto moró por muchos años don Carlos Guerra Peñaherrera, personaje muy chusco y fino en la ciudad.

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Venía la casa de los Rojas —antes de los Kennedy—, luego la de Julio Torres Vega, quien dejó a su muerte, en 1936, la suma de cuatro millones en efectivo. La cuarta era de los Arturo de Tulcán y la quinta de otra familia Rojas. Esta última conserva aún un precioso balcón esquinero colonial. El lado sur, en los años 40 y 50, conservaba las pocas tres casas antiguas: el Hotel Europa se convirtió en el Hotel Rosati, la casa del medio se había convertido en una fábrica de mimbres y la esquinera con la Vargas seguía siendo de los Guerrero Mora.

5. LA COLONIAL CALLE DEL GATO (ESMERALDAS, ENTRE VARGAS Y VENEZUELA) Ignoramos el porqué se la conocía así en el siglo XVIII, quizás moraba alguna persona de ojos claros, apodado como el Gato o quizás abundaban los gatos. Es curioso, pero aún en los años cincuenta del siglo XX, las casas de Oriente y Esmeraldas tenían una enorme población gatuna. En tiempos coloniales tenía dos casas, posiblemente, situadas al lado norte según el plano de Higley y pertenecientes, en 1768, a doña Margarita Aroca, casada y a Antonio Villamayor, soltero.71 71

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Padrón de Santa Bárbara en Museo Histórico 57, Quito. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. AMQ, censo de la ciudad en 1840.

Curiosamente —y tenemos constancia documental—, en todo el siglo XIX no existió sino una construcción en el lado norte.72 El censo parroquial de 1840 sugiere que esa única casa era de Mercedes Sáenz.73 Para 1894, en el lado norte y luego de una tienda, quedaba solamente la casa de Julio Guarderas Villacís, que tenía tres tiendas. Al frente —en la acera sur— estaban dos casas: la de Carmen Redín, con tres tiendas, y la de Federico Villafuerte.74 La casa de la citada señora Redín llevó el número 21 por muchos años; allí estaba el taller de la famosa modista Rosario Pozo.

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de Gabriel Córdova Rivadeneira, Quito.

En los años 40 y 50 del siglo XX estaban en el medio de la cuadra, y hacia el lado norte, las casas de

Véase cualquiera de las biografías de Eduard o Kingman.

Andrade Ribadeneira, ibarreña, viuda del médico del siglo XIX Dr. Gabriel Córdova. Vivía allí con

la familia Aulestia Donoso y la de la familia Córdova Andrade, cuyo jefe era la anciana Mercedes algunos de sus hijos y con sus nietos, los hermanos Córdova Rivadeneira.75 Durante alguna temporada vivió allí la familia Kingman Riofrío, pues el primer esposo de su madre, la señora Rosa María Riofrío, fue César Córdova, hijo de doña Mercedes.76

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En esas mismas décadas, el lado sur se había modificado sustancialmente pues había seis casas: la casa esquinera con la Va rgas había sido en los años 20 propiedad de doña Angelina Serrano Montaño y de su esposo el Cmdte. Augusto Cobo Cobo, y allí tuvo su consulta el popular médico esmeraldeño Dr. Franklin Tello Mercado; luego, en los antedichos años 40 al 50, se convirtió en la Pensión Aguirre. A continuación estaba la casa de los Intriago Castillo, de origen manabita; luego , la de la familia Bueno, en donde vivía la familia alauseña Herdoíza Cattani. En cuarto luga r, la casa de la señora Carmela Falconí, luego el primitivo local de Radio Nacional Espejo, que funcionó allí por varias décadas. En un departamento de esta casa vivió la familia Bruzzone Arcos y en otro la familia Valencia Villagómez. En esta casa se suscitó por entonces una gravísima tragedia: la señora Villagómez padeció una súbita depresión muy severa y, víctima de su enfermedad, liquidó a todos sus hijos, situación que conmovió a la ciudad durante largo tiempo.77 La quinta casa esquinera con la Venezuela fue de los Dirani Baquero .

6. LA CALLE DE LA SOLEDAD (ESMERALDAS, ENTRE VENEZUELA Y GARCÍA MORENO) En realidad, es una calle que, a despecho de la modernidad, suele estar casi siempre sin gente en sus aceras. El gran quiteñista Dr. Miguel Ángel Puga, cuando se enteró leyendo en 1989 que se trataba de esta cuadra, la visitó y vio que el nombre colonial aún tenía razón de ser a más de 130 años de historiada. La única casa que figura en esta cuadra entre Venezuela y García Moreno, en 1768, es la de doña Andrea Román, en la que vivían cinco personas y debe haber quedado en el lado norte.78 Sin duda, esta > de edificaciones debe haber sido la primera causa de su nombre.

Apuntes de Hilda Zambrano Álvarez, Quito, 1983.

En 1840 se encuentra también una sola casa, al parecer de la familia Albuja.79

Padrón de Santa Bárbara, en Museo Histórico, 57, Quito.

Para 1894, en este mismo lado norte, existían dos casas pertenecientes al comerciante Juan José Narváez: en la primera quedaba la tienda de Rosario Dieguez y en la segunda estaba la caballeriza del

Los padrones no son lo suficientemente explícitos, por eso usamos el término .

propietario. Al frente —es decir en la acera sur— se hallaban dos casas: la primera de Virginia Guerra

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

liberales del siglo XIX, el Dr. Marcos Espinel Cornejo.

de Espinel y otra caballeriza de Narváez. Luego venía la huerta y muros de la casa de los Angulo, que miraba hacia la García Moreno.80 La señora Guerra era viuda de uno de los más célebres políticos

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En los años 40 y 50 del siglo XX había cinco casas en la acera norte, de tal manera que también se había dado una importante subdivisión de la propiedad: pasando la esquina con la Venezuela, estaba la casa del conocido jurista Dr. José Alejandro Egüez Andrade y de su esposa la señora Rosa Toro Freile; en tercer lugar la casa de los Cevallos, en la cual moró largo tiempo el tore ro Edga r Puente. La cuarta casa pertenecía a la Dra. Soledad de Mora Gaybor,81 n a t i va de San Miguel, de quien se contaba una sabrosa anécdota ocurrida cuando era estudiante universitaria de Derecho, en los años 30: el Dr. Gustavo Buendía Jácome era hombre brillante y cazurro, tenía gran sal y un día corriendo lista, dijo: — Soledad Mora Al oír su nombre, ella se paró y le aclaró: — No Mora, De Mora, por favor. Y él la quedó viendo y la espetó, aludiendo a su soltería: — Y entonces, ¿por qué demora? 82 Al frente, en la acera sur, quedaban cuatro propiedades: la casa esquinera era de los Ponce Cornejo; la segunda constituía la clínica Quito, de los doctores Arellano Portilla, donde cientos de quiteños y quiteñas nacieron en esa casa en manos del Dr. Julio Arellano, ve r d a d e ro apóstol de la medicina. Casi en toda la mitad de la cuadra se veían los mu ros de la casa de la familia Angulo, cuya entrada estaba en la García More n o . 81

82

Informes de Byron Córdova Ribadeneira, Quito, enero de 1991. Alvear, Abel, “Anecdotario Quiteño”, Quito, 1977.

Lo curioso es que, con los años, casi todos han olvidado el nombre de la clínica Quito. Cuando a las personas de 60 o más años se les pregunta dónde nacieron, la respuesta es casi invariable: >.

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J u r a d o

N o b o a

7. LA CALLE DE OLAIS Este tramo, entre García Moreno y Benalcázar, en la Colonia, del lado sur, estaba totalmente desocupado, excepto en la esquina de la García Moreno, según observamos en los diferentes planos del siglo XVIII. El lado norte, en cambio, se hallaba totalmente construido, y entre estas casas debió haber estado la del Depositario General del Cabildo, don José de Olais, origen del nombre de la calle. En 1768 vivían allí 18 personas.83 Más arriba de la Benalcázar, desaparecía la calle. Conocemos un documento muy claro sobre este sector: lleva fecha del 8 de febrero de 1812, se lo hizo ante el escribano Ramón Maya y se trata de la compra de una casa de dos pisos hecha por Josefa Espinosa, esposa de Vicente López Conde y Martínez, en la suma de 2 030 pesos —suma de importancia entonces— a doña María Salvador y López, quien declara a su vez que la había adquirido en legado de doña Ángela López. En ese documento se indica que los 2 030 pesos los había regalado una persona piadosa —seguramente un clérigo— con la condición de que la casa sea para Carmen Quijano, esposa de José López Conde. Los Conde conservaron la casa cerca de 20 años, hasta que la vendieron el 21 de abril de 1831, ante el notario sexto, a José María Tena y su esposa Manuela Lamar, vecinos del estado llano, señalándose los siguientes límites:

• Al frente: casa llamada del Vínculo de las Espinosa. • A un lado: casa de doña Juana Mantilla. • Al otro: casa de doña Narcisa del Pino. • Por atrás: casa de Mariano Flor y que antes fue de don Pedro Marcos de León.84 83

84

Padrón de Santa Bárbara en Museo Histórico 57, Quito. ANQ, N.6, Pro t o c o l o s , abril 1831.

Tenemos otro documento del 7 de agosto de 1832, ante el notario segundo de la ciudad, donde figuran algunas de las personas citadas en el anterior documento: se trata de que Mariano Flor y su mujer, Mercedes German, venden una casa de dos pisos e interior a doña Petrona Borja Villacís, esposa de

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1534 - 1950

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J u r a d o

N o b o a

don Luis Muñoz Ruilova, en la dicha parroquia de Santa Bárbara. La casa debió tener un amplio frente; los límites eran estos: • Por el frente: las casas del Ministro Fiscal, Dr. Manuel Espinosa Ponce, y del alcalde primero, don Joaquín de la Barrera. • Por el un lado: doña Juana Mantilla, que también figura en el anterior documento. • Por el otro: casa de Matías Sánchez. • Por la parte trasera: la huerta de Miguel Loza. Por documento del 20 de diciembre de 1862 y ante el mismo notario sexto,85 se vende al parecer la misma casa —decimos esto por algunos de los límites constantes—; se trata de que la señora Gregoria Cárdenas, viuda del señor José Silva, vende casa en el barrio de Santa Bárbara a la señora Jesús Valladares que, de acuerdo a los límites, habría quedado a mitad de la cuadra de la Esmeraldas, en su acera norte, muy cerca ya de la Benalcázar. Constan estos vecinos: • Al frente: las paredes de las huertas de las señoras Mercedes Larrea y Paula Espinosa (es la que fue conocida antes como Casa del Vínculo de las Espinosa). • Hacia arriba (es decir hacia la Benalcázar): la casa que fue del difunto José Pérez y hoy pertenece al Coronel José Mariano Andrade. • Hacia abajo (hacia la García Moreno): la casa del señor Domingo Saá. • Por atrás: la huerta de la señora Rosario Terán (es decir dando esta hacia la calle Oriente). En este lado norte, en 1894, existían tres casas: de Pedro Aulestia, de Julio Cruz (sin duda estas dos fueron antes solo la casa grande de don Domingo Saá) y de Jesús Valladares, dueña de la casa desde 1862, según lo hemos referido ya. En esta casa, imitando a Pinto, que le encantaban las alturas occidentales de la ciudad, vivía el notable pintor don Ramón Vargas.86 Cabe decir que Aulestia estaba casado con la señora Rosario Saá Naranjo y que don Julio Cruz fue padre de los Cruz Caamaño.87 En los años 20 y 30 del siglo XX, había cuatro casas en este lado norte: la esquinera con la García Moreno pertenecía al notable médico y político Dr. Aurelio Mosquera Narváez, que ejerció la Presidencia del Ecuador en 1939; la segunda a la familia Egüez Narváez, primos de los primeros y que 85

habían heredado el solar sin duda del abuelo común; la tercera a los Heredia y la cuarta a la familia Id, Protocolos, diciembre de 1862.

Guerrero Andrade. A todos ellos les ha dedicado recuerdos Manuel de Guzmán en su trabajo de 1994 >.

La segunda casa del lado sur la compró en 1930 el señor José Francisco de Mora Almendáriz, connotado vecino anterior de San Miguel de Bolívar. En esa casa fallecieron él y su esposa, la señora

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Concepción Gaybor Infante. Esta pareja formó a sus hijas, entre las primeras profesionales del país, habiendo sido además pioneras al haberse educado en el Colegio Mejía. Fanny de Mora, como médica, y Soledad de Mora, como abogada, fueron competentes y muy conocidas profesionales en Quito y en los EE. UU, en la segunda mitad del siglo XX.88 La falta de datos precisos en los documentos impide la localización exacta de numerosas casas, pero según el mentado censo de 1797, en estas dos cuadras, entre las actuales Venezuela y Benalcázar, aparecen estos cinco dueños: doña Gertrudis Ribadeneira, doña Antonia Salvador, Alejandra Medina, Manuel Bolaños y doña Ignacia Quintana de Olais.89 Dado que entre 1767 y 1797 se habían construido en la parroquia de Santa Bárbara once casas nuevas hacia el lado norte, seguramente las dos primeras correspondían a la primera cuadra oriental y las tres siguientes a la calle de Olais. Ya en el siglo XX, la calle Esmeraldas se empinó aun más hacia el occidente: en 1940, en la Esmeraldas y Cuenca estaba la casa del Cmdte. Arquímedes Landázuri; allí vivió, en su época de estudiante de medicina, el otavaleño Germánico Endara Miño, luego profesional muy conocido en su ciudad.90 EN 1950 SE REGISTRAN LOS SIGUIENTES VECINOS EN ESTA CALLE:

88

89

90

1-09: Ángel G. Mera

Victoria Moscoso de Rodríguez

1-30: Ofelia C. de Torres

3-23: Rosa R. Yépez

1-46: Luis Rubianes

3-28: Juan Patiño

1-57: Raquel Morillo Andrade y E.

3-35: Jorge Recalde Fernández Salvador

Murillo Zola

3-61: Alberto Rojas T.

1-65: Rafael Alberto Valencia Castrillón

4-10: Luis Nolivos León y

1-98: Dr. Germán Jaramillo Larrea

Manuel Salvador

2-42: Dr. Francisco Araujo León

4-30: Isabel Jarrín

2-51: Rosa de Villacís

4-52: Segundo Ronquillo

2-56: Rafael Ruiz

4-76: Jorge Arias

2-59: Enriqueta Manzano De Mora, Fanny, ,colección SAG, Quito, septiembre de 1991. ACQ, gobierno, 1799. Testimonio del mismo Dr. Endara, Otavalo, 1995.

2-78: Alfredo Miño Cabezas

ESMERALDAS

2-83: Víctor Manuel Jaramillo T.

GUAYAQUIL:

ENTRE

MONTÚFAR Y

2-97: Alberto Núñez Rosero 3-01: Antonio Rosanía Greco y

5-00: Carlos Tamayo Carvajal

Juan Rosanía

5-01: Rafael Vinueza

3-14: Edmundo Rodríguez y

5-08: Guillermo Paz

77 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

5-09: Carlos Alberto Fernández

8-79: Gonzalo Salinas.

5-29: Guillermo Sinak

9-19: Alejandro Ponce Cornejo

5-44: María G. Vivanco

9-34: Camilo Tejada y Alberto Viteri

5-54: Andrés Peña Lazcano

10-40: Milton Ramírez y José María

5-80: Cmdte. Juan Gabriel Jurado Martínez y

Espinosa B.

Dr. Arturo Terán Gostalle

10-77: Magdalena Riofrío y Estanislao Masjhak

5-86: Amable Valencia e Isidoro

11-96: Tnte. Arístides Merizalde Suárez

Valencia Nieto

12-35: Fabián Larco

5-87: Herederos de Enrique

13-17: Milton H. Proaño

Andrade González

ENTRE GUAYAQUIL Y VARGAS:

6-06: Alfredo Muñoz López 6-09: Dr. Julio César Montalvo 7-50: Carlos Viteri J. 8-12: Teófilo Sáenz Dávalos 8-13: Luis Álvarez 8-21: Ernesto Wolf y Casa Viena 8-30: Ing. José María Aulestia Suárez 8-53: Dr. Camilo Pacheco Llerena, María Ifigenia Paredes, Efraín Sebastián Pare d e s Oñate y Luis Antonio Aguilar 8-73: Centro Ecuatoriano Norteamericano 8-75: David Pauker

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1534 - 1950

79 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia de la calle Manabí

C

ON ESTA CALLE SUCEDE EXACTAMENTE LO MISMO QUE CON LAS ANTERIORES

—LA

ORIENTE Y LA ESMERALDAS— LAS TRES CUADRAS MÁS AL ORIENTE PERTENECEN A SAN BLAS, MIENTRAS QUE LAS NUEVE RESTANTES —A PARTIR DE LA ACTUAL GUAYAQUIL— FUERON PARTE PATRIMONIAL DE LA PARROQUIA DE SANTA BÁRBARA.

1. EL SECTOR DEL MATADERO O O , O (MANABÍ, ENTRE ACTUAL AV. PICHINCHA Y MONTÚFAR), O CALLE CONOCIDA POPULARMENTE COMO >. Desde la Colonia, esta calle comenzaba en la actual avenida Pichincha sitio ocupado, entonces, por un ramal de la quebrada de la Marín. Existían tres casas en esta primera cuadra, dos en el lado norte y una en el lado sur. Sin embargo, el plano de Montúfar —1805— revela en esta primera cuadra una sola casa en la mitad del lado norte y totalmente vacío el lado sur, que se lo nota convertido en sembrío. La única variación ocurrida a fines del siglo XIX era que el ramal de la quebrada ya había sido canalizado, iniciándose la calle en por la presencia del matadero. Hacia 1860, la casa esquinera del lado sur y que hacía intersección con la Montúfar pasó a ser propiedad de la señora Josefa Salas Estrada de Salguero, hija del gran pintor don Antonio Salas, cuya casa estaba a cien metros hacia el sur, en la misma Montúfar y Olmedo; mientras la casa que estaba a mitad de la cuadra era propiedad del gran artista don Rafael Salas Estrada, según leemos en la

80 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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escritura de venta de la casa de los Caamaño a los Miranda Cevallos, en 1868 ante el notario Cosme Salazar, por documentos de 1870 se conoce que esta casa de don Rafael tenía una buena extensión de terreno hacia el oriente, y lindaba con la casa de Mariano Salguero. La señora de Salguero compartía la propiedad con su hermano, Alejandro Salas Estrada, pintor muy conocido en la ciudad, sobre todo porque fue quien, en 1879, realizó las copias de los cuadros del Infierno y del Juicio Final en la iglesia de la Compañía; en 1883 llamó para que trabajara en su mismo estudio a su primo hermano el famoso Antonio Salguero Salas, quien trabajó allí durante tres años, es decir hasta 1886. Al separarse, el primo Salguero instaló en 1886 taller propio en la misma casa, que lo mantuvo durante diez años, pues quería mantener su propia individualidad en esa visión interna tan complicada y personal que todo artista tiene.91 Entre 1890 y 92, Alejandro Salas dio clases en esa casa al joven Wenceslao Cevallos, nativo del Quinche, quien posteriormente se instaló en Guayaquil y luego en Roma durante 15 años. Al censarse los vecinos en 1894, declaró ser dueño de esta gran casa esquinera que prácticamente miraba a gran parte de la calle Manabí, el señor Alejandro Salas y que allí vivían sus íntimos, los también artistas Agustín Salas y Antonio Salguero.92 Este último estuvo en Chile ejerciendo la pintura entre 1896 y 1898. En la testamentaría de la señora Salas, llevada a cabo en 1898,93 consta que la casa fue heredada por sus hijos Concha Salguero de Salas y por el artista Antonio Salguero; este fue gran bohemio, casó dos veces —una con total oposición de la familia— y tuvo 20 hijos. Mientras tanto, Salguero volvió al Ecuador de 1898 a 1901, pero en 1901 partió a Europa, gracias a una beca del General Alfaro: estuvo tres años entre París y Roma. Regresó para siempre en 1904, enseguida instaló en su casa de la Manabí una galería de arte con copias hechas por él de los grandes maestros, sobre todo italianos; en agosto de 1905, la prensa informa que el artista Antonio Salguero abrirá su galería de pinturas y vistas en su propio domicilio de la Manabí número 1, de 11 de la mañana a 3 de la tarde. Las entradas se vendían en la misma casa. A partir de 1906 se convirtió en el pintor oficial de la familia Alfaro. Dejó de pintar en 1912, cuando no tenía sino 50 años, obedeciendo a su genio neurótico. Murió en 1935. Hacia 1860 mismo, el Dr. David Caamaño, natural de Guayaquil, perdió su casa en la calle del Puente de Rojas, debido a una deuda en pesos. El rematador fue el señor Joaquín Borja.

91

92

93

Navarro, José Gabriel, , ver el capítulo sobre el siglo XIX. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Hemos visto esta testamentaría en poder de sus herederos, las familias Vásconez Salguero e Hidalgo Vásconez.

81 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

El 24 de marzo de 1868, ante el notario Cosme Salazar94, este señor Borja vendió la casa a José Miranda y su esposa Tomasa Cevallos, ambos vecinos del estado llano. La casa quedaba a mitad de la cuadra en el lado norte y tenía estos límites: • Por la entrada: calle que va a La Tola y casa del señor Rafael Salas, de tal manera que la calle tenía dos nombres en ese año de 1868. • Por el lado derecho de la misma (hacia el oriente): los Silva. • Por el lado izquierdo: el señor Antonio Cortés. • A las espaldas: la huerta de la casa de los Cortés. El 4 de abril de 1868 se dio una escritura curiosa: los Tituasán, vieja familia indígena, vendieron cuatro cuartos en una casa en San Blas, en la calle que iba a la cuadra de Tomás Carcelén, a Ángela Vela, esposa del señor Carlos Vera. La casa quedaba a mitad de la cuadra. Lo curioso es que se trataba de un caso pionero de propiedad horizontal, pues en dicha casa habitaban otros dueños, como Mariano Salguero, Santos Sanguña y Jacoba N., de tal manera que además se nota que había dos familias indígenas en ese sector marginal de San Blas. La señora Vela mantuvo los cuatro cuartos solo dos años, pues los volvió a vender el 7 de abril de 1870, ante el notario sexto de Quito a Mariano Salguero, dueño de otros cuartos en la misma casa. Para entonces, los límites eran estos: • Al frente: casa de Josefa Pareja. • A la derecha de la casa: terrenos de la casa de Rafael Salas (es decir hacia el oeste). • A la izquierda de la misma (hacia el oriente): casa de Tomasa Vásconez. • Por detrás (es decir seguramente hacia la Olmedo): casa de María Espinosa. Se puede además decir que en el lado norte y en los años 1868 al 1870 estuvieron: primero, la casa de los Silva, vendida hacia 1869 a Josefa Pareja; luego, en segundo lugar, la casa de los Caamaño Monge que pasó a don Joaquín Borja Lizarzaburu y luego a los Miranda Cevallos, más tarde sería de los Falconí. En tercer lugar estaba la casa del señor Antonio Cortés, con huerta; luego, el solar del cuartel de caballería. Hacia la década de 1880, exactamente desde 1884, vivió en casa de la señora Pareja el célebre ingeniero esmeraldeño Alejandrino Velasco Sardá y su esposa doña Delia Ibarra Soberón, allí nacieron algunos de los 22 hijos que tuvo la pareja. El ingeniero Velasco dedica en sus apuntes autobiográficos varios recuerdos a esta casa,95 manifiesta por ejemplo que, a fines de 1882, se trasladó a la calle Junín, a casa de Rodolfo Carcelén; el año 84 ya aparece haciendo su compadre al médico Dr. Diego Salas 94

95

ANQ, N.1 y Protocolos, 1868.

N.6,

A rchivo privado del Dr. Juan Velasco Espinosa, Quito.

Estrada, vecino de este sector de la ciudad y está ya como feligrés de San Blas, bautizando a su hijo, el primer Pedro José, a manos del párroco Dr. Rafael Ordóñez. Diez meses después sepultaba a su citado hijo en el panteón de San Blas. Por allí refiere que , refiriéndose a la enfermedad que contrajo su cuñada y madre adoptiva doña Mercedes Estupiñán de Velasco, muerta pocos días después en esta casa. Nació allí el 31 de octubre de 1885, su hija María Lucila, luego madre de la familia Acosta Velasco y que fue bautizada en el mismo templo de San Blas, siendo madrina doña Nicolasa Soberón. La familia debió vivir en esa casa hasta fines de 1886, pues en febrero de 1887 ya estaban avecindados en el Sagrario.96 En cuanto al lado sur y en los mismos años de 1868 al 1870, estuvieron primero la casa de Tomasa Vásconez; luego, la casa de los Tituasán, Salguero y Sanguña, vendida a los Vera Vela y más tarde a Mariano Salguero, a quien le heredaron los Salguero Salas, integrándole en un solo bloque con la casa de al lado. Luego, y en segundo lugar, la gran casa con amplio terreno de don Rafael Salas. Para 1894, las dos casas del lado norte estaban ocupadas por Dorotea Pareja —heredada a Josefa Pareja— y por Carlos Falconí, pero bastante antes de llegar a la intersección con la Montúfar. Al frente había una gran casa esquinera con la calle Montúfar, de la que ya hemos dado muchas noticias.97 En la parte norte de esta calle, lindante con la Montúfar, estaba desde el siglo pasado el cuartel de caballería.

2. LA CALLE DE ONTANEDA, LUEGO LLAMADA (MANABÍ, ENTRE MONTÚFAR Y FLORES) Ya desde el siglo XVIII, esta cuadra llevaba el nombre de Ontaneda, si bien se ignoran las razones, es evidente que debió tomarlo de algún vecino importante de San Blas.98 En 1805, los planos demuestran que la esquina noroccidental con la Montúfar estaba vacía y luego había tres casas seguidas. El lado sur estaba irregularmente construido, solo en las dos esquinas y en el medio, dejando un sitio vacío cerca de la actual Flores.

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98

99

A rchivo parroquial del Sagrario, Quito, bautismos de 1887 a 1904. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Andrade Marín, Luciano, >, en ÚLTIMAS NOTICIAS, Quito, 17 de abril de 1965.

LA CASA DEL PRÓCER QUIROGA El 14 de abril de 1799, ante el notario Mestanza,99 don Juan Andrade vendió su casa en a doña Baltazara Flor de la Bastida y Coello, quien

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fuera la compañera afectiva del futuro e ilustre prócer boliviano Dr. Manuel Rodríguez de Quiroga. Documentos posteriores, a los que luego me voy a referir, me convencen de que era la segunda casa de la actual Manabí, a partir de la Flores y en la acera sur. Esa es la explicación del documento en relación al Matadero o Carnicería (actual Teatro Sucre). Sabemos que en 1824 Baltazara tenía otra casa al frente, casa que estaba al lado de la de Francisco de la Flor, frente a los Aguiar y a la casa aludida, de tal manera que tenía dos casas, en ambas aceras de la calle. Esta casa de la acera norte, la señora Bastida la vendió luego de 33 años, el 19 de mayo de 1832 y ante el notario segundo de la ciudad, don Miguel Munive, a doña Mariana Chiriboga,100 en la suma de 885 pesos, suma entre modesta y media para la época. El documento dice que se trata de una casa baja, pero ancha en su frente, en la calle que va de la plazuela de la carnicería a La Tola. Los datos nos hacen presumir con harta certeza que estaba al medio de la acera norte, sus límites eran: • Al frente: casas de la señora Cipriana Torres (que compró a Francisco de la Flor) y de las señoras Jácome. • A la derecha de la casa (es decir hacia el oriente) casa de los herederos de doña Antonia Abadiano. • A la izquierda de la casa (hacia el oeste) el corral y la huerta de doña Luisa Nicolalde, que sin duda miraba por el frente a la plazuela de la Carnicería. • Por detrás: la huerta del difunto Fernando Salcedo, que debió haber dado a la calle Montúfar actual.

Muerta la señora Chiriboga, le heredaron sus hijas Rosario, Tomasa y Magdalena Guerrero Chiriboga, la primera conocidísima mística quiteña; ellas, luego de cerca de 30 años de posesión, la vendieron el 4 de diciembre de 1861, ante el notario sexto de Quito,101 a la indígena Josefa Proa, esposa de Simón 100

101

ANQ, N.2, Pro t o c o l o , 1832, folio 42 vuelto.

Gutiérrez, en un documento en el que se declara que la casa es intermedia, que queda en la calle que

ANQ,N.4,Protocolos,1861.

difunto. Los límites eran:

va de la plazuela del matadero a la cuadra del Itchimbía, propiedad que fuera de Tomás Carcelén, ya

85 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

• Al frente: la señora Manuela Cepeda, donde antes estuvieron las casas de los Torres y Jácome. • A un lado (hacia el oeste): casa de Vicente Monge, sin duda la tercera casa desde el oriente, pues la heredó Rosario Monge. • Al otro: las señoras Quintana (hacia el oriente). • Por detrás: casa del difunto Fernando Salcedo. Curiosamente en 30 años se mantienen los dueños en este caso. Tenemos, pues, que la casa de Quiroga, gran casa histórica por cierto, fue la segunda viniendo desde la Plazuela de la Carnicería.

LA CASA DE DOS PISOS DE FRANCISCO DE LA FLOR Doña Ignacia Lescano Guzmán vendió, a principios del siglo XIX, su casa de dos pisos en San Blas al ciudadano Francisco de la Flor, vecino de Yaruquí, y a su esposa Mariana Calderón. Estos la volvieron a vender, el 11 de diciembre de 1824,102 al ciudadano José Cornejo. Según todos los datos que tenemos, quedaba en la actual esquina sur oriental de la Manabí y Flores, frente a la parte lateral del Teatro. Los límites eran estos: • Al frente (es decir al frente, en la esquina norte): las casas del procurador Joaquín Aguiar y Venegas y la de los herederos de doña Rosa Flor de la Bastida, madre esta de doña Baltazara, la esposa de Quiroga. • A un lado: casa de Baltazara Coello y Flor de la Bastida, a quien ya conocemos. • Al otro lado: casa de la ciudadana Luisa Jácome de Estrada y Montanero. • A las espaldas: casa del pailero Miguel Rojas, que sin duda daba a la calle Flores actual. Cornejo la conservó solamente dos años, pues la vendió el 6 de mayo de 1826 a Cipriana Torres, quien figura como dueña de la esquina sur aludida.

EL LADO NORTE ENTRE 1861 Y 1894 Ya sabemos que en 1861 en este lado estaban las casas de las señoras Quintana; de las señoras Guerrero Chiriboga, que las vendieron a Josefa Proa de Gutiérrez, y de Vicente Monge. Para 1894, existían cuatro casas del lado norte y una placeta mínima en el lado noroccidental, que venía desde tiempos de la Colonia. Los dueños de estos inmuebles eran: Carmen Romero, dueña de la casa más amplia de toda la cuadra y cuya enorme casona tenía seis tiendas hacia la Montúfar y cinco hacia la Manabí (tres eran chicherías y dos carnicerías); Aparicio Jijón (su casa tenía una zapatería y dos 102

103

ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , 1824.

estancos), en ella tenía su consulta el Dr. Carlos Eloy Gangotena, médico; la tercera era de Rosario

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

necía al médico Dr. Manuel Almeida (con dos estancos hacia la Manabí).103

Monge (con dos tiendas) y que sin duda la heredó a Vicente Monge; la esquinera con la Flores perte-

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1534 - 1950

EL LADO SUR EN EL SIGLO XIX En 1861 conocemos solo que la segunda casa —desde la Flores— pertenecía a la señora Manuela Cepeda, quien vivía frente a los Guerrero Chiriboga. Al frente, del lado sur y en 1894, existían seis casas, demostrando la total diferencia en relación a 90 años antes: la primera hacia la esquina con la Montúfar y que aún se halla en pie, exhibiendo las ventanas típicas del siglo XVII, para fines del siglo pertenecía a Te resa Martínez y tenía una chichería y un estanco en sus bajos. La siguiente era de Clementina Álva rez Arteta de Mosquera (tenía un estanco en sus bajos); a ella asistía con frecuencia su hermano, el célebre cura e historiador Dr. Segundo Álva rez Arteta, que luego de una complicada vida en Ambato, terminó de místico en la Argentina y hoy está en camino su Causa de Beatificación.104 En la tercera se acuñó la moneda, de modo que hasta principios de siglo los vecinos buscaban residuos metálicos a su alre d e d o r ;105 esta casa, por su parte posterior, tenía comunicación directa con la tercera casa de la calle Flores, ambas f u e ron compradas hacia 1870 por una señorita Pozo de Latacunga; la de la calle Flores fue ve n d i d a en 8 000 pesos, hacia 1890, a su sobrina Eloisa Flor y Pozo.106 La cuarta casa fue de Abraham C. Pástor. La siguiente fue de Estuardo Jaramillo (tenía una tienda, propiedad de Rosa Ti n a j e ro). La esquinera con la Flores (con dos tiendas) era del Cmdte. José María Vela Jijón, aquí tuvo su consulta el Dr. Isidro García Berrazueta, latacungueño.107 Cabe anotar que en una sola cuadra existieron diez sitios de expendio de alcohol y unos pocos negocios. Aquí consumían su jornal los indígenas que transportaban el ganado.108

104

105

106

107

Luis Barrantes: Monseñor Nicolás Saá, biografía de Mons. Segundo Álvarez Arteta, Buenos Aires, 1941. Informes del académico J. R o b e rto Páez Flor en 1970. Papeles del ingeniero Rodrigo Páez Terán, Quito, 1984. Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

LA CUADRA EN LOS AÑOS CUARENTA DEL SIGLO XX: UN NÚCLEO SOCIALISTA En septiembre de 1918, la matrona o partera María Medina ofrecía sus servicios en una casa de la acera norte: Atiende partos indoloros, según últimos adelantos. Carrera Manabí, casa del

>.109 En febre ro de 1908, el diario EL COMERCIO trae un aviso del abogado Roberto Posso, su consulta estaba en la Manabí número 23, atendía asuntos

108

109

110

civiles, criminales, de policía o del orden

>

nadie recordaba o sabía su nombre; venía luego la del historiador y bolivariano capitán Carlos Barreiro Peñaherrera, donde vivió algunos años la familia Torres Carrión.110

87 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Esta última casa cobró importancia a partir de 1932, cuando tomaron una amplia habitación en arriendo los estudiantes lojanos Alejandro Carrión Aguirre y Jorge Mora Ortega. En las noches se reunían aquí varios jóvenes socialistas, cuyo sano ánimo era cambiar el país. Sus nombres son estos:



Hugo Alemán Fierro



Ignacio Laso



Raúl Andrade Moscoso



José Alfredo Llerena



Francisco Borja del Alcázar



Diógenes Paredes



Alfonso Cuesta y Cuesta



Jorge Reyes y Reyes



Alfredo Chaves Granja



Augusto Sacoto Arias



Jorge Fernández Salazar



Humberto Vacas Gómez



Jorge Icaza Coronel



Pedro Jorge Vera



Eduardo y Nicolás Kingman Riofrío

El lector podrá comprender cómo se la pasaban 17 personas en una sola habitación, pero la bohemia siempre ha hecho y seguirá haciendo milagros.111

UNA CASA CON HISTORIA: LA DE LOS PEÑAHERRERA La tercera era la del probo abogado Dr. Modesto Peñaherrera Guerra, natural de Cotacachi, quien vivió allí con sus nietos los Salgado Peñaherrera.112 A poco de casado y hacia 1885, el Doctor y su esposa Virginia Mantilla adquirieron el terreno vacío, que seguramente fue jardín de la casa vecina. Mucho tiempo estuvo sin construir, hasta que se terminó para 1904. Tenía un pozo en el segundo patio y un escondite en el salón principal, de donde se abría una discreta portezuela que daba acceso a un zócalo de madera, en donde cabía perfectamente una persona de pie. Al subir Alfaro al poder en 1906, tuvo severos problemas con el Dr. Peñaherrera, porque había criticado al magistrado. Este tuvo que esconderse varias veces en ese zócalo, huyendo de la policía, pero al fin debió padecer tres destierros: el uno a Machachi, el otro a Ambato y el tercero al Perú; pudo regresar al cabo de cuatro años, en 1911, tras la caída del General. En esa casa se casó, en 1912, su hija Lola con el prominente médico ambateño Eustorgio Salgado Vivanco que, cosa curiosa, había estado becado por Alfaro en Europa. La familia conservó la casa alrededor de 90 años, pues la vendieron recién para 1974. 111

112

P é rez Pimentel, Rodolfo: > en tomo XVII del DICCIONARIO BIOGRÁFICO ECUATORIANO, pág. 195 y 196. Xavier Villacís: El Dr. Modesto Peñaherrera en DE DÓNDE VENIMOS LOS E C U AT O R I A N O S, colección SAG, Quito, 1987.

La cuarta casa, que daba a la Casa del Obrero por el frente, la compró ya casado el abogado Dr. Max Donoso Chiriboga, pianista, compositor, que a los 25 años fue Ministro de la Corte Suprema, fue esposo de Amalia Samaniego Aguirre, de origen lojano, arpista, profesora del Conservatorio de Música y quien dio algunos recitales en el vecino Teatro Sucre. Antes de los 30 fue una pensión, el Dr. Donoso botó la casa y levantó una nueva, que existe y tiene ahora poco más de 70 años. Lo más interesante es que el Dr. Donoso recibió como honorario de un cliente la biblioteca de García Moreno, que

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conservaba su hijo Gabriel. Este legado tuvo un fin penoso, pues fue vendida en la suma de cien sucres años después.113 Una parte de esta casa hacia el oriente se la vendió al joyero Cisneros, de tal manera que quedaron siete casas y no seis como antes de 1940.

DIARIO LA TIERRA La quinta casa de este lado norte —viniendo desde el oriente— y segunda desde la Plaza del Teatro, fue de una señora llamada Sabina. Allí funcionó durante largos años el diario LA TIERRA, fundado por don Carlos Zambrano Orejuela, donde colaboraron las inteligencias más robustas del país e identificadas con el Socialismo. Allí pararon gentes como Pablo Palacio y el poeta Jorge Reyes, que usaba en sus tarjetas: Jorge Reyes, habitante de la Plaza del Teatro>>114

>. La señora Ayllón declara que se han hecho dos casas, ella

.

Dice doña Rafaela en su testamento139 que esta casa la adquirió con su segundo esposo. La casa quedó casi un siglo en poder de sus here d e ros: en 1894 figura como su dueño el citado señor Larrea Vela. Le heredó su hijo Carlos Larrea Zambrano y su esposa Victoria Larrea García, quien se quedó muy largo morando en esta casa y aquí murió muy anciana hacia 1937. En tercera generación vivieron Roberto Larrea Larrea y su mujer Mercedes García Martínez; en cuarta, Sara Larrea García y su esposo Enrique Muñoz Borre ro, padres de Enrique Muñoz Larrea, que nació en esta casa el 27 de febrero de 1933. Enrique figuró luego como excelente editor, presidente de la SAG y de Cultura Hispánica.140 En los años veinte y treinta, el más notable vecino fue el gran político conservador 138

139

140

141

ANQ, sección Censos, caja número 100.

Dr. Manuel Elicio Flor Torres, quien vivió aquí con su esposa la poetisa ambateña María Natalia

Jurado Noboa, Fernando, E L CONQUISTADOR J UAN R ODRÍGUEZ ARMERO Y SU DESCENDENCIA EN ECUADOR Y SUR DE C OLOMBIA 1 e r a . parte, en colección SAG, volumen 5, Quito, 1984.

casona como la casa de las viejas con suerte.

Vaca,141 también mucho mayor que su marido, de tal manera que la sal de la ciudad identificó a esta

En los años 30 y más del siglo XX, las cuatro casas del lado norte tenían estos propietarios: • La esquinera de don José Páez Torres, quien asesinó a su esposa doña Leonor Jijón. La casa

Papeles de Enrique Muñoz Larrea, Quito, 1982. Testimonio de Merc e d e s Luna Tobar.

entre los años 30 y 64 pasó a ser de los Gallegos Negrete. • Casa del Dr. Manuel Elicio Flor y de doña Victoria Larrea de Larrea. • Casa parroquial.

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LA CASA PARROQUIAL DE SANTA BÁRBARA Era la segunda casa completa subiendo desde la Venezuela. Actualmente su estado interno es calamitoso, solo queda una típica fachada de principios del siglo XVIII. En 1768 era del cura Dr. Juan de Aguirre, quien vivía allí en unión de cuatro personas.142 Los documentos de la primera mitad del siglo XIX la llaman siempre como la casa parroquial. En 1894 figura en idénticas condiciones y con tres tiendas: la venta de cereales de Antonio Torres, la herrería de Darío Valencia y una cochera.143

LAS CASAS DE LA ACERA SUR DE LA MANABÍ, ENTRE VENEZUELA Y GARCÍA MORENO Al frente, en el lado sur, parece que siempre existieron dos casas completas, aparte de las esquinas. El censo de 1797 revela que la primera casa era enorme y pertenecía a los Cuéllar y Costales. Daremos mayores datos de ella al hablar de la calle Venezuela, ahora solo diremos que, hacia 1894, comenzaba la Venezuela con las tiendas de Miguel Pavón y de Margarita Meneses, situadas en esta casa esquinera. En los años primeros del siglo XX fue de don Rafael María de Guzmán España, pastuso y gran tradicionista de la ciudad, quien acudía casi todos los días a visitar a su vecino de la calle Venezuela el Dr. Leonidas Batallas, en busca de datos históricos.144 Aquí funcionó el célebre diario EL DÍA durante muchos años de las décadas de 1920 al 40, siendo el sitio de reunión de los grandes intelectuales, políticos y periodistas de la época.145

LA CASA DE LAS RELATORAS 142

143

144

145

Ver Censo de Santa Bárbara en Museo Histórico 57. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de Batallas Flores, 2003.

María Quito,

Alemán, Hugo, PRESENCIA DEL PASADO, tomos 1 y 2, ediciones del Banco Central, Quito, 1993.

L u e go venía una casa pequeña cuyo frente entero daba ya a la Manabí y que perteneció a fines de la Colonia a doña Luisa Jara. En documentos de 1828, dice que es de Antonio Pintado, pero que se la conoce como Casa de las Relatoras y se da por señal que su ventana mira exactamente al frente de la casa de los Betancourt, según hemos dicho en las respectivas constancias sobre esta última casa. En 1894, lo era de Rafael German, donde tenía su consulta el médico Dr. Fernando Salas. En los años veinte fue residencia de doña María Luisa del Castillo Pe ñ a h e r rera de Erazo, madre de una conocida familia quiteña; era por entonces una casa verde, típica en el barrio. Para 1929, esta casa se había convertido en modesto hotel y allí pasó su luna de miel el poeta cuencano Remigio Romero

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N o b o a

y Cordero con doña Luz María Pe ñ a h e r rera Albán; al mirar las limitaciones de la habitación le compuso los siguientes ve r s o s : Cómprame en el mercado de la vida, ya que soy dulce y bueno como un niño, dos reales de esperanza florecida calé de pan y medio de cariño.146 Posteriormente, la casa se convirtió en vivienda de samaritanas.

LA CASA DE LOS LUNA TOBAR Es la segunda casa completa del lado sur, aún conserva balcones de fines del siglo XVIII y un arco interesante arquitectónicamente. El resto es un desastre. Conocemos que en 1797 pertenecía a don Alonso Lasso de la Vega, según la GUÍA de Jiménez, en 1894 pertenecía a Manuel Cevallos, luego la compraron —para 1898— don Carlos Jijón Chiriboga y su mujer Josefina Gangotena Román, quienes vinieron de Ibarra a fines del siglo XIX en unión de sus numerosos hijos.147 En 1909, sus hijos, los Jijón Gangotena, la vendieron a Reinaldo Ponce Benites, quien la traspasó al Dr. Cristóbal Tobar Subía por 1927; este último nunca la usó y la vendió en 1930 al Dr. Moisés Luna Andrade, notable político conservador, quien vivió y murió en esta casa. Aquí pues, moraron en su niñez y juventud algunos de sus ilustres hijos, como Alberto y Alfredo Luna Tobar. En esta casa también tuvieron sus tertulias, en la década de los cuarenta, algunos notables quiteños como Paco Tobar García, Claudio Mena Villamar, Francisco Mera Borja, etc. La calle terminaba en la García Moreno con tres tiendas de la última casa esquinera: una era la tienda de Joaquín Naranjo y dos figones de María Segura. En la primera mitad del siglo XX fue casa de don José Julio Tobar Yepes, quien no vivía aquí, sino que la tenía en arriendo. A finales de la Colonia —1768— en estas dos cuadras de la Manabí existían cinco negocios de venta de aguardiente. Un siglo después —1894— el panorama había cambiado, existían: una fonda, dos figones, una zapatería, una talabartería, una tejeduría, una carpintería y un sitio de expendio de alimentos. 146

147

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Testimonio de Merc e d e s Luna Tobar, Quito, 1983.

En el censo de 1797 consta que en la esquina con la García Moreno estaba la casa de los Ribadeneyra

Escrituras en poder de Mercedes Luna Tobar.

Cruz, meditando en la sentencia cuando el alzamiento indígena de Chimborazo (1768).148

Moreno Yánez, Segundo, SUBLEVACIONES INDÍGENAS EN LA REAL AUDIENCIA DE QUITO, ediciones de la PUCE, Quito, 1978.

En julio de 1922, el médico lojano Dr. José A. Montero Carrión, especializado en gineco-obstetricia,

Coello; en esta última, durante varios días pasó encerrado su dueño, el Dr. Melchor Ribadeneyra de la

atendía de una a cinco de la tarde en la Manabí número 30, esquina de Santa Bárbara, su teléfono era el 206 y vivía allí mismo en la acera derecha.

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1534 - 1950

Por esta época, en esta cuadra tenía su empresa de alquiler de caballos don Rafael Flores, zapatero de oficio. Los animales los tenía en un potrero no tan cercano, de tal manera que cuando había un cliente seguro, tenía un empleado para el traslado. Alguna vez, el mayor Julio Silva alquiló uno para ir de paseo al Ejido, bruscamente se le dañó el paseo y fue a deshacer el negocio. Flores no lo aceptó y dijo que se quedaba con el dinero. Silva, que tenía mucha chispa, empezó a medir al animal por cuartas. Aterrado, el empleado le preguntó qué estaba haciendo y Silva le contestó que , el empleado denunció el caso a Flores y este, encantado, le devolvió el dinero.149

5. LA COLONIAL CALLE DE LA ADUANA, BÁRBARA

INCORPORADA A LA BAJADA DE

SANTA

LAS CASAS DEL LADO NORTE Podría decirse que hacia este lado, prácticamente había solo dos casas, luego de la esquina con la García Moreno. Empecemos por la esquinera de arriba, lindante con la Benalcázar, pues era sin duda la más importante.

LA CASA DE LOS ACADÉMICOS Los planos coloniales revelan que esta cuadra entre García Moreno y Benalcázar estaba ocupada, la esquina superior, por una casa en la que, en 1736, los académicos franceses hicieron sus primeras observacio149

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Alvear, Abel, ANECDOTARIO QUITEÑO , Quito, 1978, Pág. 17.

nes sobre la latitud.150 Esta casa había sido levantada hacia 1580, encontrándose, al derrocarla, en sus cimientos, un capitel de columna con la siguiente inscripción: 151. Por mala restauración del capitel, equivocaron el

Ver plano de Quito de 1763.

apellido nombrado. Según Luciano Andrade Marín, en esta casa los académicos trabajaron por diez años.

Andrade Marín, Luciano, >, en ÚLTIMAS NOTICIAS, Quito, 5 de julio de 1964.

En 1765, esta casa, llamada Real de la Aduana, fue asaltada por el pueblo con ocasión de la

González Suárez, Federico, HISTORIA GENERAL DEL E CUADOR, 2da. Edición, vol. III.

sublevación de los estancos.152 Era por entonces muy bella, pues tenía los patios superpuestos y un palomar extraordinario. En mayo de 1765, fue prácticamente demolida por el pueblo, poco antes la había tomado en arrendamiento en nombre del Rey el Comisionado don José de Herrera.153 Según el padrón de 1797, aparece como su dueño don Mariano Alcocer.154 Según los documentos de la casa del frente, de los Vizcaíno Acevedo, esta casa que historiamos habría sido en 1822 del clérigo don José Manso y Loza.

Enríquez, Eliécer, QUITO A TRAVÉS DE LOS SIGLOS, TUMULTOS ACAECIDOS EN LA CIUDAD DE Q UITO. ACQ, sección gobiern o , censo de 1799. Testimonio de sus herederos, Quito, 1992.

Para 1894, esta casa era de Ramón Granja y tenía una tienda. En 1913, pertenecía a don Mariano Rañón y aquí vivió algún tiempo el conocido guerrillero conservador Cnel. Juan Donoso Herboso.155 Hacia 1930 la casa tenía dos estupendas ventanas que daban hacia la Manabí y tres a la Benalcázar. En uno de sus departamentos vivía una espectacular señora; Gonzalo Escudero Moscoso y otros intelectuales solían demorar en esta casa de viernes a lunes con bastante frecuencia. Así lo ha recordado Manuel de

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Guzmán en su trabajo . Se la derrocó a finales de la década de los treinta, para levantar la clínica del novísimo Seguro Social, que funcionó ahí hasta 1970.

LA CASA DEL MEDIO Junto a la casa anterior estaba, en 1768, la del clérigo Dr. José Poveda, quien vivía con doce familiares; a fines de siglo —1797— era una propiedad pequeña de Jacinta Parra.156 Sin duda, a esta casa se refiere la siguiente escritura: El 18 de noviembre de 1817, don Mariano Cadena Vega y Barona vendió de manera privada una casa en Santa Bárbara, que había heredado a su hermano el Pbro. Dr. Sebastián Barahona, el comprador fue Juan Bolaños, este la mantuvo 17 años hasta que el 3 de julio de 1834, ante el notario Rivadeneira, la vendió a Josefa Bolaños, viuda de Pedro Guerra. Los límites eran los siguientes: • Frente o frontera: la casa de doña Rosa Flores de Ortega. • A un lado: casa de la ciudadana Mercedes Sanz. • Al otro lado: casa de Carmen Moncayo. • Por atrás: huerto de Eugenio Espinosa de los Monteros. Dado que sabemos que la casa de estos Espinosa de los Monteros quedaba en la Esmeraldas, entre García Moreno y Benalcázar, hacia el lado sur, hacemos la localización anticipada en la citada calle Manabí. En 1822, la casa del medio pertenecía al clérigo José Manzo y Loza, según veremos al historiar las casas de la acera sur. Para 1894, pertenecía a Elena Guarderas Villacís.157 La casa esquinera con la García Moreno, largo tiempo fue solar, según se mira en los planos; en 1797 fue de don Javier Rosales; en 1894 su mayor frente daba a la García Moreno y a la Manabí solo miraba el estanco de José María Proaño. En los años del 30 al 40 del siglo XX fue sede del Ministerio de Finanzas.

LAS CASAS DEL LADO SUR Clásicamente no existieron en este lado sino un pedazo de la casa esquinera —que daba a la García Moreno— y dos casas completas y muy extensas. 156

157

ACQ, Gobierno, censo de la ciudad 1797-1799.

Sobre la primera casa de arriba y que formaba esquina con la Benalcázar tenemos numerosos datos:

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

fue propiedad del venerable Deán y Cabildo de Quito, quienes la vendieron en 750 pesos el 2 de marzo

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de 1750 a don Esteban Recalde, esposo de doña Teresa Cáceres. Esta última señora, vecina de Ambato, dio poder desde esa ciudad, el 20 de noviembre de 1782, a su hermano don Francisco Cáceres para que procediera a vender la casa a doña María Talledo y Montenegro, esposa del notario de Quito Manuel Garcés. Los Garcés la tuvieron algunos años, hasta que por 1800 la vendieron al regidor don Joaquín Tinajero, dueño también de la casa colindante. Tinajero tuvo algunos años la casa en mención hasta que, el 17 de mayo de 1809, la vendió en 1 100 pesos —suma muy elevada en relación al precio de compra— a doña María Eulalia Albuja, de quien pasó poco después a poder de Rosa Acevedo, viuda de Calisto Vizcaíno. Luego de cortas estancias en sus varios dueños y muerta la señora Acevedo, sus hijos, el presbítero Dr. Antonio Vizcaíno, cura de San Pablo y su hermana María Francisca, monja concepta, la vendieron ante el notario primero el 4 de octubre de 1822 a Joaquín y Mariana Espinosa. Constaban los siguientes límites: • Al frente: casa del Pbro. don José Manzo y Loza. • A la derecha (del examinador, es decir para arriba): casa de los herederos de don Pedro Rañón. • Al extremo del lado derecho de la casa: queda frente al Beaterio Nuevo. Si sabemos que el Beaterio quedaba en la Benalcázar, entre Manabí y Olmedo, es obvio que la casa doblaba por la calle Benalcázar hasta quedar viendo al citado Beaterio que a su vez avanzaba hasta cerca de la Olmedo. • A la izquierda de la casa (es decir hacia abajo): la esquina y calle que baja a la parroquia de Santa Bárbara (si baja, obviamente es la calle Manabí) y casa del ciudadano Manuel Parreño, que debía estar pasando la esquina. • A las espaldas: casa de don Joaquín Tinajero. Esta quedaba en la García Moreno, de tal manera que su fondo se topaba con el fondo de la casa de los Vizcaíno. En el lado sur, cerca de la García Moreno, pasada la primera tienda, estaba la casa del Notario Mayor don Juan Pérez Correa, quien vivía en 1768 con su esposa, un hijo y un criado; en su interior también vivían las señoras Cagueñas, el botonero Joaquín Moscoso y el tejedor Agustín Chica. Se trata de la casa natal del prócer José Eugenio Corre a .158 Su dueño, en 1797, era Javier Suárez y vivían allí doce personas.159 La siguiente casa —es decir la segunda completa— era del clérigo Dr. Pedro Jijón y era la más 158

159

160

Padrón de Santa Bárbara, en Museo Histórico 57, Quito.

extensa de la cuadra, pues allí vivían 45 personas y mostraba un enorme frente; existían ocho tiendas (dos sastrerías, una carpintería, una zapatería y una tejeduría).160 Esta casa y la siguiente se convirtieron en una sola, así aparecen en el padrón parroquial de 1797, cuando su dueño era don Francisco

ACQ, Gobierno, censo de 1797. Museo Histórico, 56: 9697.

Fuentes. Un siglo después, en 1894, las dos casas juntas eran propiedad de Ezequiel Camacho, con dos chicherías en los bajos. En los años 30 y 40 del siglo XX, el dueño de esta casa era el señor Roldán Roldán, guanujeño, afincado en Quito y que la mantuvo por largo tiempo.

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La tercera casa, en el sentido oeste-este, en la esquina con la García Moreno, fue largo tiempo propiedad de los Riofrío, así como la casa adjunta pequeña. En 1920, en esta casa pequeña vivía don Ramón Riofrío Costa en edad centenaria, llamando la atención de toda la ciudad porque conservaba la dentadura intacta.161 Junto a él moraba su hija Elena Riofrío Fernández Salvador, famosa por las sabrosísimas mistelas que preparaba. Esta cuadra en la Colonia fue un centro de artesanos, pero a fines del siglo XIX tenía cuatro tiendas, de las cuales tres vendían aguardiente.

6. LA CALLE DE LAS INGLESAS (MANABÍ, ENTRE BENALCÁZAR Y COTOPAXI) Comprendía dos cuadras ya en el siglo XVIII, pues iba desde la Benalcázar, incluía la Cuenca y avanzaba hasta la Cotopaxi. La mitad superior u occidental, en el lado sur, entre la Benalcázar y Cotopaxi, no estaba construida según los planos coloniales; en cambio, el lado norte estaba plenamente ocupado. En el plano de Montúfar de 1805, se verifica que todo este lado sur no tenía prácticamente casas, excepto las casas esquineras que miraban a la Benalcázar (esquina sur-oeste) y a la Cotopaxi (también esquina suroeste), incluso en el plano de Higley de 1903 aparece una enorme huerta en el lado sur, que llegaba hasta la actual Cuenca. Estas dos cuadras llevaban este nombre debido a la presencia de varias familias de origen inglés. 161

162

Testimonio del testigo pre s e ncial Juan Escobar Pallares.

LA CASA DEL DOCTOR ANTE

De Guzmán, Manuel, MI BARRIO DE SANTA B ÁRBARA, en Estudios Histórico Sociales, colección SAG, Quito. septiembre de 1994.

Esta casa en la esquina noroccidental perteneció a don Nicolás de Ontañón y Lastra, Conde de las Lagunas, un ilustre quiteño, que se radicó en Lima hacia 1710.162 Durante más de dos siglos, la tradición aseguraba que el Conde había dejado depositados cuantiosos bienes en esta casa y así lo afirmaba el ex Presidente Camilo Ponce, heredero de los dueños de esta casona, que tenía unos 800 metros de extensión y no se la podía enajenar, prohibición que luego se anuló. En 1768, del lado norte había tres casas: en la esquina con la actual Benalcázar —es decir en la casa que estamos historiando— estaba la del relojero inglés Jerónimo Harman; en los bajos de la casa

102 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

estaba la tienda de Sebastiana Orozco. Seguía, en segundo luga r, la casa pequeña de don José Nieto.163 En 1797, estas dos casas pertenecían re s p e c t i vamente a don Mariano Cadena y a doña Gertrudis Erazo. Fueron adquiridas hacia 1812 por el ilustre prócer doctor Antonio Ante y Olaís, quien vivió largo tiempo aquí. En 1817, el Dr. Ante fue el líder de la gran conjura celebrada para liquidar a los españoles residentes en Quito; descubierto el gr a ve motín, se ocultó en el segundo patio de su casa, pero un día un espía español, fingiéndose un indígena que le entre gaba una carta confidencial,164 l ogró entrar hasta su habitación y clavarle una daga en el pecho. Ante fue lleva d o moribundo por toda la calle Benalcázar hasta el cuartel, en donde se lo tomó preso y poco después fue llevado a Ceuta, junto con su hijo José María, donde ambos ejerc i e ron honorables artesanías. El Dr. Ante no murió en esa casa, pues se trasladó a vivir cerca de Otavalo. En 1840, toda la manzana se llamaba , que era esposo de doña Mercedes Ante Olaís, hija del prócer.165 Hacia 1870, here d a ron las dos casas don Amable y don Vidal Enríquez Ante, hijos de doña Isabel Ante Olaís; Amable es quien figura como dueño en 1894.166 La familia Enríquez Vélez fue muy dedicada a la agricultura en una propiedad en Calacalí y don Vidal era acertado prestamista. Uno de estos préstamos favoreció a su vecino de al frente, el Cnel. José Antonio Polanco, que luego de la revolución de 1895 no pudo mantener el boato y mantenimiento de la gran casona suya en la esquina suroccidental y la entregó en cambio a la familia Enríquez, haciendo paso además de la deuda a don Vidal Enríquez. De esta manera los Polanco perdieron una casa de 1 400 metros y obtuvieron la otra de solo 600 hacia 1897. Entendemos que luego el Cnel. Polanco tiró la casa colonial y levantó la actual con balcón esquinero y cinco ventanas a la Manabí, de tal manera que la casa actual no tiene sino cien años. Un departamento, bajo con doble entrada independiente, lo dieron a don Rafael Grijalva Polanco, sobrino del Coronel y miembro de la inolvidable Banca Tigre. Doña Dolores Landázuri Bueno, viuda de Polanco, dice en su testamento que posee tres salas, cada 163

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una de diferente color167 y restauró completamente la casa hacia 1930. Entre 1920 y 1935 vivieron en esta Padrón de Santa Bárbara en 1768, Museo Histórico 57,Quito. Andrade, Manuel de Jesús, P R Ó C E R E S D E L A I N D E P E NDENCIA, Quito, 1909. AMQ, censo de la ciudad en 1840. Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

casa su hija María Ester, con su esposo el médico Dr. Manuel de Guzmán Echerri, uno de los primeros siquiatras de la ciudad. En una de las salas de la casa, el historiador guayaquileño Alfredo Flores y Caamaño dejaba por temporadas sus cosas, tanto documentos, cuanto vajillas y ropas.168 En el piso bajo, dando a la calle Manabí, vivía don Rafael Grijalva Polanco, apodado en familia el Ñato. La tercera casa, ya cerca de la esquina con la Cuenca, era en 1768 de doña Rosa Cosín; también era una propiedad pequeña. Treinta años después, en 1797, su dueña era doña Petrona Vega y Cofín. Para 1840, figura como su propietaria doña Ana Chica.169

Papeles en poder de Manuel de Guzmán Polanco. Testimonio personal de Manuel de Guzmán Polanco. AMQ, censo de Santa Bárbara en 1840, ver manzana de don Pástor Vélez.

A principios del siglo XX ya había tres casas en este lado, luego de la de los Polanco estaba la casa de don Rafael Villalba, oriundo de Cayambe, y más al oeste, en la esquina con la Cuenca, la casa de don Ricardo Jaramillo Cevallos, el fundador de diario EL DÍA, periódico que funcionaba en los bajos de esta casa. Hacia 1930, don Ricardo se trasladó con los suyos a una nueva casa en la calle Venezuela, frente al Carmen Bajo.

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LAS CASAS DEL LADO SUR El censo parroquial de Santa Bárbara, hecho en 1797, revelaría que los dueños de casa por este sector eran por entonces: Patricio Vizguete, Antonio Paz y la familia Saá López de Galarza.170 Debían ser casas muy pequeñas pues, como hemos dicho, en el plano de Montúfar hecho en 1805, todo este lado estaba prácticamente vacío. Entendemos que la primera casa en la esquina suroeste era, en 1822, de don Pedro Rañón, pues miraba a la de los Vizcaíno Acevedo, según leemos en los documentos de estos últimos.171 El 6 de agosto de 1832, ante el notario primero, el ciudadano Antonio Pineda vendió su casa a doña María Benavides Guzmán, ibarreña, por medio de un primo de la señora, el Dr. Pedro González Verdugo, párroco del pueblo de Yaruquí. Los límites eran estos: • Por el frente: casa del Dr. Antonio Ante. • Por el pie (entendemos que hacia el oriente), casas de don Joaquín Jaramillo y del Dr. Quiñones. • Por la izquierda: casa del abogado Dr. Bernardo de León y Carcelén. • Por la derecha de la casa: la calle que baja a la Carnicería, es decir la Manabí actual. Esto nos haría suponer que la casa podía estar orientada en un sentido de norte a sur y que una de sus fachadas miraba a la calle mencionada. De tal manera que, si nuestras presunciones son exactas, en 1832 los dueños de las tres casas desde el occidente serían: • El doctor Pedro Quiñones y Cienfuegos, a quien sin duda le heredaron los Carrión Quiñones, sus nietos y luego sus bisnietos, los Polanco Carrión. • Don Joaquín Jaramillo. 170

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ACQ, censo de la ciudad en 1797.

• Don Antonio Pineda y luego doña María Benavides. El 18 de julio de 1833 se firmó la escritura de ratificación de la venta de la casa.

N.1, Protocolos, 1822. E. Muñoz Borrero: o. c. 126.

En casa de los Polanco, en 1891, los hermanos cristianos hicieron Ejercicios Espirituales.172 En vista de la estrechez del Beaterio, allí abrió sus puertas el Pensionado de los Hermanos en 1892.

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En 1894, en la esquina con la Benalcázar existían tres tiendas en la vieja casa de los Polanco, cuyo mayor frente daba a la calle Benalcázar: una de Dolores Ramírez, otra de Concepción Cruz y la última de Trinidad Terán. Luego debían ser murallas que, según sabemos, aún en 1935 avanzaban hasta casi la calle Cuenca. Hemos dicho que esta casa tenía 1 400 m2, unos 20 de frente a la Benalcázar y unos 70 de fondo, mirando hacia la Manabí. Pasó por 1898 a don Amable Enríquez Ante y de este a su hija, Mercedes Enríquez de Calisto.

LA SEGUNDA CUADRA (ENTRE CUENCA Y COTOPAXI) Desde la Colonia y hasta principios del siglo XX, el lado sur lo ocupaban tapias; hacia la parte superior había una huerta mediana. Del lado norte, en cambio, existían cuatro casas en 1768: la esquinera con la Cuenca, muy grande, que daba albergue a 28 personas, era de doña Francisca Jarra, quien vivía con un hijo suyo. Entre los inquilinos se hallaba el sillero Tomás Trejo, el crucero —es decir fabricante de cruces— Alejandro Fernández y el zapatero Dionisio Pillajo. Para 1894, esta casa era de Gaspar Sandoval y en los años 20 y 30 del siglo XX ya pertenecía a la familia Albuja Páez, oriunda de Machachi. La segunda casa, algo separada de la anterior, era en 1768 del sastre Francisco Rivera, casado pero sin hijos. También vivían allí el sastre Manuel Rivera y el barbero indígena Vicente Moscoso. Pasó la casa, por 1869, a Carmen Saá Merizalde, quien vendió su anterior casa central, situada en la calle de la portería de la Merced, según lo cuenta al testar en 1874.173 Ella sigue figurando como dueña en 1894.174 Le heredaron sus hijos Quiterio y Mercedes Merizalde Saá. Por 1894 tenían allí sus tiendas Manuel Cisneros y Pacífica Valencia; también vivía ahí el agrónomo Antonio Barba. La tercera casa, también separada de la anterior, era en 1768 de don Manuel Terán, viudo, quien vivía con seis familiares; había una tienda en esta casa. Pasó en 1894 a Manuel de Jesús Patiño. 173

174

ANQ, Protocolos, Francisco Valdés.

La cuarta casa, también separada, hacia finales de la Colonia —1768—, ya cerca de la Cotopaxi, perte-

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

tor Manuel Esteban Cáceres. El sastre Salas posteriormente se trasladó a la parroquia de San Blas y fue

necía a Bernardo Villalva. Eran sus inquilinos: los sastres Carlos Romero y Juan Salas, así como el pin-

105 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

allí padre del gran pintor republicano don Antonio Salas y Avilés.175 Es muy posible que el primer maestro de Salas haya sido el pintor que acabamos de citar, Manuel Esteban Cáceres. En 1894 se había ya dividido en dos, la casa pasando la parte esquinera con la Cotopaxi a pertenecer a Avelino Albuja, donde vivía el músico José M. Cabezas. La siguiente —es decir la no esquinera— era de Mercedes Valencia.176

7. LA CALLE DE BUENA VISTA (MANABÍ, DESDE LA COTOPAXI HACIA EL OCCIDENTE) Debía este nombre a que efectivamente ofrecía, y aún ofrece, una vista bastante interesante del oriente de la ciudad visto desde esas alturas. En diciembre de 1713, al testar don Matías Calderón Milán declaró poseer un solar junto >.177 Cabe decir que aún en 1894,178 el tejar de los Mercedarios se hallaba exactamente en las actuales Imbabura y Manabí, al pie del barrio de La Chilena. Lo que sí es importante señalar es que en el siglo XVIII había dos sitios nominados como Altos de Santa Bárbara, uno era este, y el otro estaba situado en la parte más alta de la calle Benalcázar; así lo certifica el jesuita Mario Cicala en su conocida obra de hacia 1760. Según el plano de los académicos, en 1736 existían construcciones irre g u l a res en la cuadra entre la Cotopaxi e Imbabura: una casa en la mitad del lado norte y probablemente dos en el lado sur, más unos muros de las casas esquineras. Desde la actual Imbabura hacía el occidente se aprecian dos casas en el lado norte y otra al sur, por detrás del antiguo Beaterio que, como se sabe, miraba a la actual Imbabura. De tal manera que en esta calle cabían no más de seis casas en dicho año de 1736.

175

176

177

178

Archivo parroquial de San Blas, bautismos, 1784. Jiménez, Adolfo, Op. Cit., 72-73. ANQ, N.3, Pro t o c o l o s , 1713. Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

LAS CASAS DEL LADO NORTE Según el padrón de 1768, había solo cinco casas en esta calle de Buena Vista: La primera casa grande, ocupada por 25 vecinos, pertenecía en 1768 a doña María Manosalvas y a su marido don Bernardo Reinoso; allí vivían, entre otros, el plumario Francisco Javier de Leguía y don Simón Andraca.

106 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Seguía la casa pequeña del clérigo Dr. José de Saá, quien vivía con cinco familiares. Luego venía, en tercer lugar, la casa del azucarero Carlos Aluisa, indígena, donde moraban nueve personas. Nos parece que las dos siguientes casas que vamos a citar pudieron haber estado en la parte más alta de la calle: en el documento censal, aparece en cuarto lugar la casa pequeña de don Manuel de la Yedra, viudo (en su casa vivían cinco personas; una, vendedora de ají). La última era del pintor Joaquín Gutiérrez quien igual que Pinto escogió la altura para su casa-taller. Adentro vivía el sombrerero Sebastián Rodríguez; posiblemente quedaba en el lado sur.179 A fines de la Colonia —1797— y según los respectivos censos, aparecen en la parte más alta de la actual Manabí varios dueños de casa, casi todos dueños de propiedades muy pequeñas. Figuran alrededor de diez dueños, lo que significaría un buen crecimiento del sector entre 1768 y 1797:



La casa llamada del señor Magistral.

y Jaramillo, que era la más grande del



La de doña Juana Yedra, de seguro antes de

sector y donde vivían 33 personas. Se ve que

su padre don Manuel de la Yedra y al tope de

seguía la moda de los grandes maestros de

la calle.

ocultarse en los mejores miraderos



La de Mariano Calvache.

de la ciudad.



La de doña Feliciana Bolaños, de mayor



La de doña Fermina Ludeño.

extensión que las anteriores.



Doña Ursula Álava.



La de doña Josefa Cañizares.



Doña Magdalena Espinosa.



La del célebre artista don Manuel Samaniego



Doña Rosa Rocha.180

Varias de estas últimas señoras se distinguían por una conducta bastante liberal, ligada sobre todo a la vida de algunos clérigos de apellido Ribadeneira.181 La gente, indudablemente, para divertirse escogía los sitios más apartados y, al mismo tiempo, de mejor perspectiva: damiselas y pintores tenían corrientes estéticas comunes, aunque esto a varios les resulte un poco raro. Con cierta inseguridad —pues los datos son difíciles de ser convertidos en evidencias exactas— acotamos que el 8 de febrero de 1812, doña María Salvador y López vendió su casa de dos pisos en la 179

180

181

parroquia de Santa Bárbara en 2 030 pesos. Parece que estaba situada en la Imbabura, entre Manabí y Padrón de Santa Bárbara en revista Museo Histórico 56.

Esmeraldas, a mitad de la cuadra, por los límites, al decir que a un lado estaba la casa de doña Juana

ACQ, Gobierno, 1797.

Barruntamos que esta última daba a la esquina de la Manabí e Imbabura en su ángulo suroriental.

Jurado Noboa, Fernando, L OS R IBADENEIRA ANTES Y DESPUÉS DE COLÓN, tomos 2 y 3, Quito, 1987.

Mantilla y al otro —seguramente hacia la izquierda o norte— la casa de doña Narcisa del Pino.

En 1894, en el lado sur existían dos casas, pues es preciso recordar que, aún hoy en día, en la primera parte de la calle solo hay muros, aunque actualmente las dos casas del siglo XIX se han

107 F e r n a n d o

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N o b o a

convertido en cuatro casas: ya cerca de la Cotopaxi estaba la casa colonial de Delfina Barahona, por detrás de la de los Villafuerte, esta casa se conserva bastante bien en la actualidad. El solar antiguo y colonial se había convertido en casa de Daniel Martínez. Al lado quedaban los muros del doble patio de la casa de la señora Álava, que miraba hacia la Imbabura. En el lado norte existían dos casas coloniales en la cuadra, pero actualmente hay cinco casas, lo que d e muestra los cambios enormes que ha dado la ciudad en los dos últimos siglos. Por supuesto, en 1894 estaban ya las cinco casas mencionadas. En la esquina con la Cotopaxi, pero mirando hacia la Manabí, estaba la casa de Alegría Ocampo, que debió ser la colonial de los Reinoso. Seguían las casas nuevas de Federico Donoso González y del zapatero José Villacís. La que fue casa colonial estaba aparentemente en solar en 1894; sin embargo, hoy existe y en buenas condiciones. Cerca de la Imbabura se encontraban otras dos casas nuevas: la de Miguel Zárate y la esquinera, de un piso, de José María Chiliquinga .182 En el plano de Higley se observan tres casas de la Imbabura hacia el oeste (actual subida hacia Toctiuco), pero sus propietarios no constan en la Guía de Jiménez. En tiempos coloniales deben haber estado seguramente en este sector las casas de Yedra y del pintor Gutiérrez. En la esquina de la Manabí y Cotopaxi vivía en 1927 la señora María Elena de Salazar. En dicho año, el Sargento Mayor Faustino Rayo Carpio —hijo del matador de García Moreno— en un rapto pasional, le descerrajó un tiro en la boca. Pensando que la señora había muerto, él también se dio un tiro en la sien, pero el tiro dañó el nervio óptico y salió por el otro lado del cráneo, sin afectar la masa encefálica. Rayo quedó ciego por el resto de sus días, asilado en el Hospicio y prácticamente abandonado de todos, murió en esa casa asistencial en 1961, 34 años después de su crimen.183 En esta calle Manabí, entre Cotopaxi y Cuenca, vivió durante algunos años el gran artista quiteño Humberto Dorado Pólit, en unión de su madre. Vivieron en medio de una pobreza extrema. Cuando el artista murió en 1928, algunos de sus amigos fueron al Palacio Arzobispal a solicitar una ayuda al Arzobispo Pólit, primo de la señora, pues no había materialmente cómo enterrarlo. Pólit no los recibió y la ayuda no llegó.184 En realidad no era un acto anticristiano del Prelado, sino que algún 182

183

184

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Gómezjurado, Severo, VIDA DE GARCÍA MORENO t o m o XIII. Pérez Moscoso, César: Entrevista a Faustino Rayo Carpio, Guayaquil, 1959. Jurado Noboa, Fernando, EL CHULLA Q UITEÑO, Quito, 1991.

tiempo atrás llegaron algunos amigos de Dorado con la noticia de que había fallecido y Pólit entregó 500 sucres para comprar la caja. Fue una tomadura de pelo de los chullas, pues lo único que querían era dinero para beber. Ahora la broma resultó cierta y las consecuencias muy lamentables. En febrero de 1905, Zoila Zárate de Maldonado ofrecía en venta su casa en la Manabí 54 (La Chilena), tenía 15 cuartos, traspatios, horno para tejas y ladrillos, y gran terreno . En 1950 vivían en esta calle las siguientes personas que hemos podido localizar:

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1-13: Luis Miguel Molina Troya

7-34: Alfonso Torres

1-31: Luis Antonio Salguero Salas

7-57: Alfredo y Dr. Carlos A. Roldán

2-11: Nicolás Zubiría

8-11: Pablo Páez

2-21: Alfredo Moreno

8-20: Víctor Villalba

2-35: Guillermo Segarra Iñiguez

8-66: Alfonso Moncayo y Víctor

2-42: Dr. Eustorgio Salgado y Hotel Ecuador

Alarcón Mena

2-43: Herederos de José Segundo Paredes

9-18: Dr. Lauro Novillo Trelles

2-59: Hernán Yepes Guerrero

9-29: Luis Felipe Paz y Miño

2-62: Sergio Medina

9-36: José Francisco Puga Villalba

2-83: Eduardo Serrano M.

9-58: Manuel Rubio

2-97: Neptalí Larrea

9-74: Mayor Alfonso Avilés Jaramillo

3-06: Gabriel Ribadeneira Sáenz

9-77: Ernesto Sandoval Villota

3-46: Fuente de Soda El Trópico

10-18: Mario Eduardo Pasquel

5-29: Mario Suárez

10-32: Carlos Miño Boada

5-36: Presidencia del Consejo Nacional

10-39: Segundo Álvarez

de Economía y J. Emilio Álvarez

10-52: Manuel Salas y Manuel

5-56: Dr. Carlos Alberto Arteta García

Salvador Villacís

5-68: Ernesto Sarch

10-64: Jesús Aníbal Naranjo y

6-30: Bolívar Romo y Carlos S. Arguello

Laura Beatriz Naranjo de Rodríguez

6-42: Casa parroquial de Santa Bárbara

10-75: Alberto Jarrín Espinosa

7-21: Benigno Vallejo

10-84: Alejandro Rodríguez

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Historia de la calle Olmedo

A

>. 185

En realidad, hasta 1610, Quito era una aldea atravesada por tres inmensas quebradas. La más simple y norteña cruzaba toda la actual calle Olmedo y, al entrar por la actual Olmedo y Flores, partía la manzana en forma diagonal y tomaba cuerpo cuando penetraba por la actual Montúfar y Mejía. La segunda quebrada —llamada de Sanguña— se formaba por tres ramales que venían desde el Pichincha y se unían en el actual sector de la Mejía y Chimborazo, penetraba toda la manzana al norte de San Francisco y desde allí se perdía subterráneamente hasta emerger enorme en la actual manzana de la Guayaquil, entre Espejo y Sucre, y entrar luego con el nombre de quebrada de Manosalvas por la actual Flores y Sucre, hasta unirse con la anterior quebrada de la Olmedo, un kilómetro más allá. La tercera quebrada, casi tan colosal como la segunda, se llamaba de Ullanguanga en quechua y luego de Jerusalén, provenía de dos ramales que se unían en las actuales calles Cuenca y 24 de Mayo; luego 185

186

Gangotena, Cristóbal de, MONOGRAFÍA HISTÓRICA DE LA P R O V I N C I A D E PI C H I N C H A , Quito, 1922, Pág. 5.

atravesaba 500 metros por el sur de la ciudad a plena vista.

Descalzi, Ricardo, LA REAL AUDIENCIA DE QUITO , CLAUSTRO EN LOS ANDES, tomo I.

En tiempos primitivos pasaba por medio de ella una pequeña quebrada y una acequia, constituyendo

La calle Olmedo constituyó, desde el siglo XVI, el límite sur de la parroquia urbana de Santa Bárbara. una especie de límite natural del sector donde se habían refugiado los primeros colonizadores.186

112 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

De manera general puede decirse que la Olmedo era una especie de . El plano de 1805 la identifica como una de las más extensas de la ciudad, comenzaba una cuadra al oriente de la actual Montúfar, pero realmente unos pocos metros hacia el norte, la calle se continuaba en un sector de alrededor de cuatro cuadras en pleno Itchimbía. Por supuesto, en las primeras cuadras no había sino una o dos casas por cuadra y solo desde la León hacia el occidente las construcciones se volvían regulares, aunque con una excepción: entre la Flores y Guayaquil no había sino una casa. La calle comprendía 15 cuadras urbanas en 1805, y luego avanzaba por pleno Pichincha, formando un enorme callejón: cuatro cuadras correspondían al barrio de la Tola, tres eran mixtas entre San Blas y el Sagrario (pues el lado norte de la cuadra pertenecía a San Blas) y en el resto, a partir de la calle Guayaquil, la jurisdicción se partía entre Santa Bárbara al norte y el Sagrario al sur. Cabe decir que en 1894 la calle empezaba en la actual calle León, pero ese sector dentro del barrio de La Tola no tenía nombre alguno pues eran apenas senderos.187 En el verano de 1568, el Cabildo ordenó empedrar y arreglar esta calle al Capitán y Regidor Juan Velásquez Dávila, posiblemente, vecino del sector.188 Como se sabe, la calle de la Carnicería era la actual Guayaquil, entre Olmedo y Manabí, lo que confirma que a espaldas de las Casas Reales quedaba la actual Olmedo y su frente daba, posiblemente, a la actual Mejía.

1. LA CALLE DE SALAS (OLMEDO, ENTRE AV. PICHINCHA Y FLORES) LA ESQUINA DE LOS GRANDES PINTORES DEL SIGLO XIX Comprendía dos cuadras en el siglo XIX, pues constituía el tramo que abarcaba de por medio también el cruce con la actual calle Montúfar. Cabe advertir que la actual Avenida Pichincha, entre Chile y Manabí —es decir en el trayecto de unos 300 metros— formaba una quebrada, ramal a su vez de la quebrada de la Marín. Como se aprecia en el plano de Higley, a inicios de este siglo ya se había rellenado el sector de la Olmedo a la Manabí. En la primera cuadra, entre Pichincha y Montúfar actuales, las construcciones eran casi regulares de lado y lado. En la segunda cuadra, entre Montúfar y Flores, en el lado sur, por el inicio de la quebrada de la Marín (actual Monte de Piedad) solo había una casa esquinera hacia el ángulo de la Flores y dos casuchas en el ángulo de la Montúfar, conforme se aprecia en el plano de los Académicos Franceses. 187

188

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Id a la nota 184, Tomo I, Pág. 364, Quito, 1978.

El plano de Montúfar de 1805 revela que la Olmedo, en la primera manzana de la calle que tratamos, tiene unas tres casas a cada lado de la calle. La segunda cuadra, en cambio, por la presencia de la quebrada, muestra tres casas en el lado norte y apenas una o dos en el lado sur de la misma.

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En la esquina nororiental, entre Olmedo y Montúfar, en 1858, tenía su casa el gran pintor y retratista don Antonio Salas y Avilés,189 por lo cual las dos cuadras tomaron su nombre. Fue heredada por sus hijos y tenía su entrada por la Montúfar. No hay que olvidar que el límite parroquial, por su lado sur de San Blas, era también la calle Olmedo hasta su unión con la quebrada de la Marín, de tal manera que los vecinos que tenían sus casas hacia el lado norte de la Olmedo —en el sector aludido— bautizaban a sus hijos en San Blas. Según la escritura de venta otorgada en la sexta notaría en abril de 1870, de los cuartos que Ángela Vela de Vera cede en la actual Manabí entre Pichincha y Montúfar a Mariano Salguero, consta como límite que, por detrás, quedaba la casa de María Espinosa. Es posible que esta última casa haya, por tanto, mirado a los inicios de la calle Olmedo en su acera norte, pero cabe también la posibilidad de que haya mirado hacia el oriente por sobre la quebrada.190 Para 1894, en la primera de estas cuadras —entre Pichincha y Montúfar actuales—, había tres casas al lado norte: de Alegría Mogollón (con dos tiendas, una de ellas chichería), de Mateo Moscoso y de Joaquín Herre r a . En el lado sur también existían tres casas: la de Juana de Vega, la de José María Suárez y, ya en la esquina con la Montúfar, la de Fidel Alomía Sierra, ibarreño, comerciante de ganado y chulquero.191 Su viuda, doña Juana Llori Arana, vivió largo tiempo en esta casa y de ella salieron varios de sus hijos, algunos hacia el oriente.192 Víctor Delgado, otro gran comerciante de ganado, compró las dos casas de enfrente. Esta presencia se explica por la cercanía del matadero. En la segunda cuadra de la Olmedo, entre Montúfar y Flores, existían cuatro casas en el lado norte. La primera de Antonia Jijón de Recalde, imbabu reña, que se casó hacia 1850 con el militar Fidel Recalde Escudero, que no tenía bienes; ella adquirió la casa con su dinero, según declara en su testamento. La here d a ron sus nietos Franco Recalde. A esta propiedad se la conocía, hasta bien entrado el siglo XX, como la , pues allí se suicidó, en noviembre de 1900, 189

190

191

192

193

I n f o rmes del Padre José María Va rgas, 1982. ANQ, N.6, Pro t o c o l o s , 1870. Papeles de Antonio Alomía Larrea, Madrid.

el Capitán Francisco Noboa Saá, de la Artillería Bolíva r, mientras daba una serenata a su prima casada. Ensangrentado se arrimó al mu ro, cerca de la puerta de calle, por lo que su mano quedó pintada en la pared. Cada vez que los dueños hacían pintar la pared, la figura de la mano volvía a aparecer, por lo que los vecinos comenzaron a hablar de crimen y no de suicidio; a esto se sumó el hecho de que el cadáver de Noboa desapareciera del cementerio de San Diego. Parece que, en realidad, le dispararon desde una ventana del segundo piso.193 Sus propietarios pasaron a residir en

Papeles de Jaime Guarderas Alomía, Quito, 1990.

los EE.UU. desde hace muchos años.

Jurado Noboa, Fernando, LOS NOBOA DE LA SIERRA, Quito, 1985.

La siguiente casa era de Zoila Albán; seguía la de Rudecindo Arias; la cuarta la compró Carlos Castro Ortega, a quien le heredaron sus hijas Castro Noriega, quienes aún por 1930 se hacían conducir a

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misa en litera.194 Por entonces pasó a propiedad de don Manuel Burbano Egas, otavaleño adinerado, y de su esposa y sobrina la señora Isabel Alarcón Burbano. Al frente, en el lado sur, existían solo tres casas de hecho porque en mitad de la cuadra estaba el inicio de la quebrada hasta principios de siglo. Pero si esto sucedía en 1894, años antes de seguro que solo existió una casa en este lado de la cuadra. Según el censo de 1833, parece que su dueña era la señora Ignacia Andraca (Parroquia del Sagrario), quien tenía 33 años, para 1840 aparece como su dueña la heredera Ana Andraca.195 El sector esquinero sur occidental largo tiempo fue solar, de tal manera que las dos casas primeras que ahora vemos hacia la Olmedo no son coloniales en lo absoluto. Las dos primeras casas mencionadas las compró el comerciante de ganado Víctor Delgado Navarro. En la primera tenía su taller el gran pintor Juan Manosalvas y su consulta el Dr. Florentino Uribe Ramírez. Fue la esquina de los más afamados pintores del siglo pasado.196 La primera de esas casas tiene aún murallas que dan a la calle Montúfar. La tercera casa, pasando la quebrada, era de Ignacio Gangotena Román y en sus bajos funcionaba la tienda de Mercedes Villavicencio y el estanco de Rosario Veneras.197 La cuarta casa era esquinera y daba totalmente a la Flores. Pertenecía también al mismo señor Gangotena, en ella tuvo su célebre fotografía don Benjamín Rivadeneira Guerra y sin duda no hubo quiteña o quiteño que alguna vez no estuvo en esa casa, para tomarse una fotografía artística. En esta casa residió hacia 1890 la señora Mercedes Jurado Cali. Hacia la Manabí miraba el estanco de la señora 194

195

196

197

198

Papeles de la C a s t ro Proaño, 1983.

familia Quito,

AMQ, censos de 1833 y 1840.

Carmen Romo de Quijano.198 En octubre de 1919, doña Zoila Rosa Tinajero Freile, que vivía en la calle Olmedo número 28, sacaba en la prensa de Quito una nota en la que avisaba que daba clases privadas, incluyendo a personas analfabetas. Era de las preceptoras más conocidas de la ciudad.

Jiménez, Adolfo, Op. Cit., Pág. 73. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de su hijo Armando Carrión Jurado, Quito, 1987.

En los años 30 del siglo XX, en una casa que lindaba con la quebrada, murió un mendigo, dejando como único bien un colchón absolutamente mugriento y que despedía muy mal olor. La dueña de casa pidió la ayuda al policía Nazario Buenaño, para que consiguiera que cargara con el colchón y lo tirara en un basurero. Buenaño hizo su oficio y, cuando el capariche conducía la carga, se

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vio que empezaron a caer decenas de billetes. El policía dio la voz de alarma y el colchón fue trasladado a la Intendencia de donde —con honradez que hoy ya no existe— se dispuso su paso a una entidad de Beneficencia. A Buenaño se le escapó de las manos una regular cuantía y cuando se le hacía referencia al caso, se defendía y manifestaba .199

2. LA CALLE COLONIAL , LUEGO PARTE DE LA CALLE LLAMADA Corresponde al tramo entre Flores y Guayaquil. En la colonia, el convento de San Agustín ocupaba dos manzanas, por lo que su parte posterior daba a la Olmedo. Sus partes extremas estaban ocupadas por dos construcciones y en el medio había un corral o patio. En el plano de Montúfar —1805— las manzanas que rodeaban a esta cuadra estaban casi vacías y apenas figuran dos casas ya en la esquina con la actual Guayaquil. 199

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202

203

Alvear, Abel, ANECDOTARIO QUITEÑO, Pág. 45. ANQ, N.1 APS, tomo uno de bautismos de españoles.

DATOS SOBRE LA CALLE ENTRE 1634 Y 1691 Doña Leonor de Ahumada y Ahumada, sobrina de Santa Teresa, testó el 20 de mayo de 1634200 que tenía su casa y lindaba con Alonso García y Martín Valencia; poseía seis sillas bajas, un escritorio, un aparador, una alfombra vieja y una cuja con su pabellón.

ANQ, N.1. ANQ, N.5.

El mentado Valencia pertenecía al estado llano y era esposo de Francisca de Arco.201 García estaba casado con doña María de Torres. Doña María de Villarroel Santisteban recibió de dote de sus padres, en 1639,202 una casa a espaldas del convento de San Agustín que valía 1 200 pesos, para que se casara con Juan González de Ribera. El escribano Juan Martínez Casco, manchego, testó el 29 de septiembre de 1641203 que se había casado muy pobre con doña Catalina de Alvarado Orellana, de quien recibió 3 500 patacones por la dote; al morir, además de su casa , tenía cuatro estancias.

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El extremeño Miguel Suárez de Figueroa y Ortiz204 testó el 7 de abril de 1679; era vecino de la parroquia Catedral y estaba casado con doña Francisca Páez Altamirano. Llevaron como dote al matrimonio 12 000 patacones en cordobanes y paños y ella una cantidad similar; tenían además una estancia, un trapiche, una casa baja cubierta de teja,

>, que había sido

comprada en 200 pesos a Francisco Alarcón Palacios y a su mujer doña Inés Alarcón Hinostrosa. Al testar, Suárez era vendedor de lana. Juana Gómez de la Torre testó el 9 de agosto de 1680205 cuando era muy anciana; tenía una casa baja a espaldas de la Carnicería y frente a Antonio Domínguez. Probablemente daba a la Flores. El cuencano Alonso Álvarez de la Torre y Muñoz testó en octubre de 1682.206 Se había casado primero con la indígena Inés Criolla, luego con doña Beatriz Benalcázar y Orellana, que no aportó nada al matrimonio. Él tenía su casa . Juan Moscoso donó, en diciembre de 1685, parte de su herencia —una casa

>

Doña María Carvajal Ibarra testó en junio de 1689;207 era vecina de San Blas, tenía su casa detrás , frente a los Palomeros. En vista de que el límite de San Blas era la Flores, curvando por la Olmedo, la casa de esta señora debió estar en el lado oriental de la Flores, a no ser que la jurisdicción parroquial haya cambiado en detalles para aquella época. Y esto segundo parece probable, pues el testamento de Juan Palomero y Zapata, toledano, que lo hizo en octubre de 1631,208 204

205

206

207

208

209

señala que, aunque vivía en San Marcos, tenía casa en San Blas, lo que lleva a pensar que ambos lados ANQ, N.5.

de la Flores pertenecían a San Blas.

ANQ, N.3. ANQ, N.2. ANQ, N.5.

Francisco Nieto testó en enero de 1691,209 era marido de la indígena principal doña Elvira Criolla; tenía una casa de dos pisos detrás de San Agustín.

ANQ, N.6.

En el siglo XVII, este sector estaba muy poblado, tenía casas, en su mayoría de un solo piso (excepto

ANQ, N.5.

la de Nieto) y sus vecinos oscilaban entre el estado llano y el estrato más alto.

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SECTOR POSTERIOR DE SAN AGUSTÍN EN LOS SIGLOS XVIII Y XIX El famoso arquitecto español don José Jaime Ortiz declaró en 1704 que tenía su casa , declara además que había hecho trueque de la casa con doña Luciana Duque de Estrada, quien poseía su casona por el convento de Santa Catalina, pero finalmente se deshizo el contrato.210 Doña Beatriz Encinas testó en diciembre de 1708,211 poseía una casa baja . Tenía cinco hijos, tres de los cuales llevan el apellido Luna. Don Juan Antonio Monar de Escalante y Ontaneda, español, nativo de la provincia de Santander, testó en julio de 1718,212 era vecino de la parroquia central —igual que la anterior— y tenía una casa de dos pisos . Por 1740, la casa de don Diego Dávalos quedaba detrás del Convento que, sin duda, daba hacia la actual Olmedo, en la parte posterior del convento, lo mismo que sucedía con el de las Carmelitas.213 El herrero Juan Valentín de León y Sánchez Maldonado trabajaba por el año 1743 en la casa del capitán Ignacio Espinosa Arellano, .214 El 28 de agosto de 1873, ante el notario quinto de la ciudad, el señor Vidal Falconí compró en 2 050 pesos una casa medianera al apoderado de los señores Castillo Kast, residentes en Lima. Estaba situada en la calle que que pasaba por la conocida quebrada. Al frente quedaba el interior de la casa de doña Tomasa Enríquez —lo que significaba que su frente daba hacia otro lado y solo se miraba el jardín o interior desde la calle citada— a la izquierda de la casa el señor Miguel Andrade Vargas —que como veremos era la tercera del lado sur—, mientras que a la derecha y por detrás de la casa estaba la casa del notario Pío Terán, que como veremos miraba a la calle Flores. 210

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ANQ, C, caja 3.

De tal manera que, en el lado sur y en 1873, tendríamos a los siguientes propietarios desde la Flores:

ANQ, N.1. ANQ, N.3. Jurado Noboa, Fernando, L OS SECRETOS DEL PODER SOCIOECONÓMICO , Quito, 1992. ANQ, N.5. Agramonte, Roberto, MONTALVO EN SU EPISTOLARIO, Barcelona, 1982.

• Dr. Pío Terán, antes de los Gómez de la Torre. • Vidal Falconí y antes de los Castillo Kast. • Don Miguel Andrade Vargas. En 1894, en el lado norte de la cuadra existían cuatro casas: la de Pedro Valencia; la de Máximo Terán, amigo o impresor de las obras de Montalvo ;215 la de Isabel Pérez Quiñones de Cárdenas, en cuya casa vivió Luis Aníbal Mera, su yerno e hijo de Juan León Mera; la esquinera con la Guayaquil pertenecía a don Francisco Enríquez Puente. Esta casa mostraba tres tiendas hacia la Guayaquil y dos hacia la Olmedo.

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LA CUADRA EN EL SIGLO XX Entre los años de 1918 a 1922, ya eran cinco las casas del lado norte. No conocemos el nombre del dueño de la casa esquinera a la Flores (luego de la Fundación German de Machachi y en donde vivió María Montahuano Vela, hasta su muerte en 1994 y su hijo Jaime Sotomayor Montahuano hasta 1995). La segunda era de Zoila Rosa Salas (viuda y madre de un hijo que casó con una señora German). La tercera casa —marcada largos años con el número 6-36— siguió en poder de la familia Mera Cárdenas hasta cerca del año 1960, no tenía tiendas, para evitar problemas con los inquilinos. Allí murió, en 1928, Luis Aníbal Mera Iturralde. La cuarta casa fue de los Álva rez García, nietos de don Lizardo García, el Presidente del Ecuador en 1905 y 1906, y de seguro debió desprenderse de la casa esquinera. Pasó a una señora latacungueña, viuda, y por 1930 la adquirió el Dr. Víctor Rojas Trujillo, dueño de la hacienda Toctiuco. La quinta casa, esquinera con la Guayaquil, pasó a ser propiedad de doña Manuela Pérez de Pérez, quien en la misma década de los veinte la vendió al comerciante pastuso señor Gómez Arturo, quien tiró la vieja casa y levantó el anticuado edificio conocido como Edificio Gómez Arturo. A fines del siglo XIX, hacia el lado sur, lo que antes había sido terreno de los Agustinos se había convertido en cuatro casas, todas nuevas, pues aún en 1840 todo el sector estaba ocupado por las tiendas de los Agustinos:216 la casa esquinera con la Flores y la siguiente pertenecían a los herederos de A. Alarcón, en la primera vivió la última hermana de Luis A. Martínez.217 La tercera casa era de Miguel Andrade Vargas. La cuarta era del abogado Daniel Hidalgo, y en sus bajos funcionaban dos tiendas; allí mismo tenía su consulta, en 1911, el Dr. José María Ayora.218 En la misma Olmedo, venían a continuación las tiendas de Juan Grijalva y de Virginia Guzmán, en la casa de Úrsula Betancourt, cuya entrada era por la Guayaquil; en esta casa también vivió la hermana del escritor Martínez.219 216

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AMQ, censo de 1840. Testimonio de Rosa Elvira Jurado Martínez, 1983.

A partir de 1922, se modificó el lado sur de la cuadra, pues de cuatro pasaron a ser seis casas: en las

Rodenas, GUÍA DOR EN 1911.

al señor Federico Calderón Rodríguez, nativo de Cotocollao, y a su esposa la señora Victoria Moreno

DEL

ECUA-

Testimonio de la testigo Blanca Martínez de Ti n ajero.

décadas de los años diez al treinta y a partir de 1918, la casa esquinera con la Flores dio alojamiento del Castillo; aquí se crió el futuro político y ministro de Estado Ing. Alfonso Calderón Moreno, muerto trágicamente en Salinas, cuando fue ministro de Ponce Enríquez. Poco después, por 1920, vivió en esta casa el Cnel. Alfonso Darquea Cevallos y su esposa doña Mariana Moscoso Borrero, así como el

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Gral. Rafael Almeida Suárez. Para 1930 la compró don Enrique Donoso Riofrío, quien dividió la casa en dos, siendo el motivo fundamental del cambio en la cuadra. La segunda casa en este lado sur fue del célebre Gral. Juan Francisco Navarro Nájera —antes de los Alarcón—. Allí vivió de arriendo, entre 1918 y 1922, la señora Mercedes García Carrión de Pallares, ya bastante limitada de recursos, con su hija Isabel, su yerno, el gran quiteño Arcesio Escobar Borja, y sus nietos los Escobar Pallares. El General Navarro levantó el tercer piso de la casa por 1928 y allí vivía él. En el segundo piso vivieron varias familias: en la década de los veinte, los Meneses Pallares; en la década de los treinta, los Pitarque de Guayaquil; y en los años 40 y 50, doña Carmen Hurtado Flores de Pricot, nieta del Gral. Juan José Flores, quien murió en dicha casa. De la tercera casa, de los Andrade, luego diremos algunas cosas. Finalmente, la casa esquinera hacia la Guayaquil fue, entre 1918 y 1922, de una familia González, parientes de los Laso González. Por 1925 la compró la familia Samaniego Álvarez, quien dividió la casa en dos: llamadas casas grande y pequeña, pasando Luisa Álvarez Valdivieso de Samaniego a vivir en la pequeña, donde murió muchos años más tarde.220

LA CASA DE LOS ANDRADE SUÁREZ Valga decir algunas palabras sobre esta casa sin tiendas, comprada antes de 1873 por el próspero comerciante cotacacheño don Miguel Andrade Vargas y su esposa doña Felisa Suárez Gortaire, pariente él, en no lejano grado, de Monseñor Federico González Suárez. A partir de 1890, vivieron en esta casa sus nietos los Dousdebés Andrade, debido al matrimonio de su hija Dolores Andrade con el periodista guayaquileño don Aníbal Dousdebés González, de tal manera que esta fue la casa natal del gran poeta quiteño Carlos Dousdebés. González Suárez, ya Arzobispo de Quito, solía visitar a la familia solo una vez al año. Con gran sequedad, el Prelado tocaba la puerta, acudía uno de los chicos Dousdebés y le decía ásperamente: — ¡Chico!, ¿qué es de Felisa? ¡Llámala y rápido! La familia se vio obligada a vender la casa hacia 1910, debido a la quiebra del señor Andrade, famoso por las garantías que otorgaba sobre todo a comerciantes guayaquileños.221 220

221

Agradecemos con cariño las re f e rencias de Juan Escobar Pallares para los años 1918 al 22 y las de Leonardo Mera Cárdenas, para 1922 al 1950. Testimonios de Jaime Dousdebés Carvajal, Quito.

En 1918, la casa se llamaba y pertenecía a una señora de nombre Isabel. Poco después fue comprada, hacia 1925, por el músico español Ramón Rey, director de la banda municipal de la ciudad. En los años 1930, tuvo en esta casa su departamento la dama ibarreña Zoila Rosa Lara Espinosa, quien vendía mercadería importada en su propia casa. Allí vivió buena parte de su adolescencia y juventud el futuro historiador Jorge Salvador Lara.

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En agosto de 1826 testó don Mariano Espinosa Castelo,222 era vecino de Santa Bárbara, tenía una casa frente a la muralla de San Agustín. En realidad, pertenecía a San Blas.

3. LA CALLE LLAMADA DE LAS COVACHAS DEL CARMEN, LUEGO INCORPORADA A LA CALLE LLAMADA DE LAS GRADAS DEL CARMEN Corresponde al tramo de la Olmedo entre Guayaquil y Venezuela. En los planos coloniales se aprecia que, aún en 1763, el sitio que ocupa actualmente el Carmen Bajo correspondía a un cuarto de manzana que se hallaba vacío. Es preciso anotar que de manera crónica y desde el siglo XVIII, al oriente del Monasterio y en el lado norte de esta calle, había dos casas, aunque la primera tenía su mayor frente hacia la Guayaquil. En 1768, a continuación de la iglesia, estaba una casa grande con cinco tiendas de Tomasa Jaramillo. Allí estaban los negocios de Hermenegildo García (mudo), sacristán del Carmen; el de María Gandes; el del indígena Antonio Lino, damasquero; el del mestizo Nicolás Luisín; y el de la negra Pe t rona Escudero. Vivían en esta casa un total de 43 personas.223 En el censo de 1797 figura que el monasterio tenía 13 tiendas que daban rentas a las monjas, luego estaba la casa de doña Ignacia Guevara —en el medio de la cuadra—, y en la actual esquina con la Guayaquil, la casa de doña Leonor Fre i re de Andrade.224 222

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ANQ, protocolos ante Munive. Padrón de Santa Bárbara.

El plano de 1805 revela una curiosa conformación de esta cuadra: el lado sur aparece prácticamente vacío, excepto en las respectivas esquinas, pues en el medio estaba el enorme patio de la cárcel de la Audiencia.

ACQ, censo de la ciudad, sección Gobierno 17971899. ANQ. protocolos Acevedo.

ante

Para 1840, esta casa pegada a la iglesia era del notario don Miguel Munive Silva,225 y se la ubica ; la heredó su hija Francisca Munive de Rendón. En 1870 era su dueño > el abogado riobambeño Dr. Antonio Robalino Cuadrado con su prime-

Robalino, Luis, MEMORIAS DE UN NONAGENARIO, capítulo 1.

ra esposa doña Josefa Espinosa,226 esta casa la vendió en 1881 para a su vez adquirir una en las calles

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

Quiñónez.227 En esta casa nació su hijo, el diplomático y literato Francisco Guarderas Pérez.

Rocafuerte y Venezuela. Pasó pues a Alejandro Guarderas Villacís y a su mujer Josefina Pérez

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En esta misma casa vivió, hacia 1890, el notable Gral. Francisco Javier Salazar228 y a ella iban de visita sus nietos los Ponce Salazar. Para 1894, funcionaban tres tiendas en sus bajos: las de Eleuterio Martínez, de Juan Grijalva y de Clara Saá; además existían dos tiendas dependientes de la casa conventual: la de Damasio Bastidas y la de Manuela Paredes. De tal manera que, en un siglo, las tiendas habían disminuido notablemente. En la esquina norte con la Guayaquil estaba, en 1894, la casa del doctor y coronel Ramón Aguirre Izquierdo, la cual tenía cinco tiendas que daban a la calle Guayaquil.229 Desde la época colonial, en el espacio de en frente se hallaban las murallas de las respectivas casas que miraban hacia la Guayaquil y a la Venezuela. Solo en el siglo XX se levantó una casa en este lado sur de la cuadra y en ella murió el célebre Gral. Juan Francisco Navarro.

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Testimonio de María Vi rg inia Ponce Salazar de Ludwig, Quito 198l. Id. A la 223. ANQ, N.3.

4. LA COLONIAL CALLE DEL SUSPIRO Corresponde al tramo de la Olmedo entre Venezuela y García Moreno. Su nombre es colonial, pues ya figura así en el censo parroquial de 1768. Los hermanos Andrade Moscoso decían con gran gracejo que, al subir esta calle, se notaba la superficialidad de ciertos quiteños por no poder inclinar su cuerpo un poco hacia adelante. Por más de dos siglos, este pequeño sector conservó este nombre, por ser una cuesta empinada que a mitad de ella reclamaba un hondo suspiro para poder continuar la ascensión. El capitán pastuso Nicolás de Argüello y Becerra testó en marzo de 1704,230 tenía una casa esquinera en el ángulo noroccidental de la Venezuela y Olmedo; vivía al lado de Gabriel Llanos y Valdés, frente al escribano Sánchez Maldonado (actual Carmen Bajo) y por el otro frente estaba la casa de doña Ana Rosa Gutiérrez Pinto.

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N o b o a

En 1768 existían dos casas en el lado norte, sin tiendas. La más cercana a la Venezuela era de don Tomás Toledo, allí vivían 18 personas. Lindando con la García Moreno estaba la de don José Fernández, donde vivían 13 personas más.231 Para 1797 estas dos casas del lado norte eran de doña Nicolasa Pinto y de don Carlos Estrella.232 Según el censo de 1840, sus seguros dueños eran don Ramón Aguirre y doña Rafaela Jaramillo Suárez, oriunda de Otavalo. Doña Rafaela era mujer de gran impulso y fortaleza síquica. De ella hemos publicado sus acciones en el tomo primero de nuestra obra sobre LOS DESCENDIENTES

DE

BENALCÁZAR.

Hasta 1894, la estructura se mantuvo intacta, es decir, de dos casas completas que miraban a la calle, pero la de Toledo pasó al médico riobambeño Dr. Napoleón Dillon Bahamonde y a su mujer, Dolores Cabezas Polanco; aquí no nació —pues lo hizo en Cotocollao— aunque sí vivió largo tiempo su hijo, el notable político y financista Luis Napoleón Dillón.233 La segunda y colonial casa de Fernández y de Estrella pasó a Nicanor Chiriboga Corral.234 Esta última casa, a mitad de la cuadra fue, a partir de 1912, de la familia Casares Levoyer.235 Casi todo el lado sur, con las excepciones de las esquinas, perteneció en el siglo pasado a doña Ignacia Fernández Salvador de Chiriboga, quien al testar en septiembre de 1893236 la dejó a su hija Mercedes Chiriboga de Flores. En la esquina superior, formando esquina con la García Moreno, estaba la casa de su yerno, don José Villagómez Álvarez, y hacia la Olmedo daban cinco tiendas de las cuales cuatro pertenecían a: Rosario Espinosa, Micaela Paredes, Concepción Ramírez y Dolores Herrera. La casa de los Flores Chiriboga, a mitad de la cuadra, pasó a llamarse casa chiquita; fue adquirida por el notable médico ambateño Pablo Arturo Suárez, dueño también de la casa esquinera hacia la 231

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Padrón de Santa Bárbara.

Venezuela.237 En esta casa y a partir de 1928 vivieron el ambateño Pedro Antonio Sánchez Lalama y su familia; en esta misma casa tuvo su G ARÇONNIERE Carlos Chacón Montalvo, nieto de don Juan

ACQ, censo de la ciudad en 1797. Papeles de Manuel de Guzmán Polanco.

Montalvo.238

5. LA COLONIAL CALLE DE ANDRACA, LUEGO CALLE DEL DR. GORTAIRE

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio del Ing. Jorge C a s a res Levoyer, Quito 1981.

Corresponde a la Olmedo entre García Moreno y Benalcázar. Según el testamento de Antonio de la Chica, de 1672, la mal llamada , esquinera con la calle del mismo nombre, era por entonces del tesorero don Luis de Acosta Alburquerque.

ANQ, protocolos Mogro.

ante

Durante todo el siglo XVIII, esta calle tomó el nombre de Andraca, en homenaje de don Matías de Juan Suárez Chacón, Quito, 1989. Testimonio de Enrique Sánchez Barona, Quito, 1993. Archivo del Sagrario.

Andraca y Barasorda, vasco, establecido en Quito hacia 1694 y que se casó con doña María Manosalvas del Pozo.239 En 1760 existía solo una casa mediana en el lado norte y pertenecía al Alguacil Mayor de Corte, doctor Antonio Solano de la Sala, andaluz; tenía cuatro tiendas en sus bajos que, en orden

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ascendente desde la García Moreno, eran de: Ambrosia Centeno, María de la Serna, en la terc e r a tienda funcionaba la escuela de niños de don Diego de Alvarado, y la cuarta correspondía a la carpintería de Gre gorio Tituaña.240 Esta casa fue saqueada en julio de 1765 por la plebe, cuando el movimiento de los estancos, en represalia porque Solano de la Sala había defendido al Palacio Real de la Audiencia, en unión de sus esclavos y sirvientes el 22 de mayo.241 A fin de siglo seguía en poder del Dr. Salas o Solano de la Sala, pues se le conocía de ambas maneras; vivían allí entonces 27 moradores.242 En los planos coloniales se aprecia que todo el lado norte estaba construido. Posiblemente las casas esquineras daban la vuelta hacia la Olmedo y dejaban un solo espacio libre para la casa que estamos reseñando. Lo seguro es que la única casa que tenía su entrada por la Olmedo era esta de los Solano de la Sala. A partir de principios del siglo XIX, cambió por completo la estructura de esta cuadra, pues de mostrar solo una casa al medio y partes de las dos casas esquineras, pasó a mostrar cuatro casas: tres completas (incluida la de la esquina con la Benalcázar) y la incompleta en la esquina oriental o inferior.

LA ESQUINA DE LOS ABOGADOS A MEDIADOS DEL SIGLO XIX Según el censo de 1833, parece que la casa primera pertenecía a María Juana Quintana, viuda de 54 años. Lo que sí es evidente es que la vieja casa del medio pertenecía a Leonor Suárez, soltera y 240

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Revista M USEO HISTÓRICO 56, ver Padrón de Santa Bárbara. Puga, Miguel Ángel, CRÓNICAS DEL QUITO ANTIGUO, Pág. 162. ACQ, Gobierno, censo de 1799. AMQ, censo de Santa Bárbara en 1833. ANQ, C, 1847.

costurera, y la casa siguiente, que hacía esquina con la Benalcázar actual, pertenecía al doctor Ramón Gortayre de los Reyes, esposo de doña Mercedes Guerrero Borja; de allí que la calle tomó por nombre el apellido del Dr. Gortayre,243 a su vez hacia el norte de esta casa en la Benalcázar estaba la casa del abogado Salvador Ortega. Era pues la esquina de los abogados. Según un documento del 8 de junio de 1847, don Andrés Velasco Bermúdez había comprado una casa en la calle del Beaterio Nuevo a favor de sus hijos menores con censo de 620 pesos, en dicha fecha solicita el traslado del censo.244 En el plano de Villavicencio de 1858, esta calle figura con el apellido de este caballero.

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Conocemos el documento del 16 de diciembre de 1865, por el cual el Dr. Manuel Guzmán Quiñones remata la casa de dos pisos del Dr. Ramón Gortayre, en la llamada calle del Beaterio (pues este estaba en la Benalcázar y Olmedo), ante el notario Cosme Salazar. La casa estaba avaluada en 12 000 pesos, la venta la solicitaba Javier Gortayre Guerre ro, porque decía le convenía más comprarse un fundo. El proceso duró cuatro años pues terminó en octubre de 1869. La casa tenía cuatro lienzos, la puerta de calle poseía jampas de piedra y un zaguán empedrado. En el primer lienzo había dos piezas, una ventana de rejas de fierro con puertas y bastidores de vidrieras, la segunda pieza anotada tenía balcón y ventana de fierro. Por delante de este lienzo había dos corre d o res, uno alto y otro bajo, el primer corredor era enladrillado, poseía pilares, pasamanos de madera y barandillaje de fierro, grada de piedras sillares y otros tres pasamanos de madera. El segundo corredor era de pilares de piedra y poyo de ladrillo. El segundo lienzo a la derecha de la casa poseía dos cuartos altos enladrillados y dos bajos, aparte de una azotea. Este lienzo, que no tenía ventanas, de seguro limitaba con la vecina casa de la Olmedo. El tercer lienzo era frente a la puerta de calle, poseía una pieza alta, dos ventanas con rejas de fierro y una segunda azotea. El cuarto lienzo estaba a la izquierda de la casa, poseía tres ventanas, entendemos por tanto que este miraba a la calle Benalcázar. Todo lo anotado nos permitiría concluir que la hoy llamada Casa de Benalcázar tenía su entrada por la calle Olmedo, poseía dos pisos, un balcón, y siete ventanas; tres piezas altas y cuatro piezas bajas.245

UNA GRAN CASA HISTÓRICA LIBERAL En los años 1870 y 80, al lado de esta casa de los Gortayre y Guzmán, es decir, en el medio de la cuadra, estuvo la casa del Gral. Manuel Semblantes Cortés, fervoroso liberal, y allí se alojaron, en 1876, Alfaro y Montalvo, luego del triunfo veintemillista de Galte en diciembre de dicho año.246 Gabriel Unda localiza esta casa como .247 Semblantes murió en 1883 durante la campaña 245

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Archivo privado de Filoteo Samaniego Salazar.

de la Restauración y sus herederos vendieron la casa a Carlos Cobos.

Testimonio de doña Lucrecia Polanco de Semblantes.

Para 1894 existían tres casas completas en este lado, pero sin tomar en cuenta la casa esquinera con

Unda, Gabriel, BOCETOS NACIONALES, Quito, ver biografía de Manuel Semblantes. Testimonio de las familias Bueno Stacey y Albornoz Bueno. Más datos en nuestra obra C A S A S D E L Q U I T O VI E J O , Quito, 1992.

la García Moreno, cuya entrada era por esta última calle y que todos conocían como : la primera que miraba completamente a la Olmedo era de Mercedes Vargas; la segunda, en mitad de la cuadra, pertenecía a Carlos Cobos (con dos tiendas, una de ellas peluquería de Federico Garcés); la esquinera, de Trinidad Chiriboga Delgado de Guzmán, en donde tenía su consulta el médico e historiador pastense Dr. Rafael María de Guzmán España. Esta casa esquinera pasó a ser propiedad de doña Isolina Guzmán Chiriboga de Bueno, hija de los dueños de casa,248 quien luego la cedió a su pariente don Manuel Escudero Carrión, y pasó posteriormente a la señora Concha Escudero Espinosa de Egas en este siglo y es, actualmente, la Ecuatoriano de Cultura Hispánica.249

> sede del Instituto

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En las décadas de los años veinte a los cuarenta del siglo XX, luego de la casa de los Freile, se alzaba una casa de tres pisos propiedad del probo abogado latacungueño Dr. Pablo Vásconez Velasco. En el segundo piso de esta gran casa vivía don Arturo García Salazar, peruano, Ministro del Perú en Quito en los años veinte y casado con una hija de don Lizardo García; su hijo Arturo fue alumno del Borja e iba presuroso a su escuela. Fue uno de los personajes más populares de Quito en su época. En la tercera casa vivió por años la familia Pinto Espinosa.250 En 1938 pasó a ocupar una habitación al zaguán doña Matilde Andrade Rodríguez, hermana del famoso General Julio, muy disminuida en su economía. Al frente tenía su oficina Gustavo Pinto Dávila; esta miraba a la sede de la Bolivariana. En 1915, fue testigo de ello don Luciano Andrade Marín entonces de 22 años de edad, se descubrió en la casa esquinera de los Escudero la lápida infamante que se puso en el siglo XVI en la casa del conquistador Pe d ro de Puelles y que antes había pertenecido a Sebastián de Benalcázar. La célebre piedra se la trasladó a la Biblioteca Nacional, dirigida por doña Zoila Ugarte de Landívar.251 Este h a l l a z go hizo casi confirmar que allí fue donde estuvo la casa del fundador de la ciudad. Pe ro en realidad, la piedra era trasladada con frecuencia de un sitio a otro. De la Biblioteca desapareció y se la encontró medio siglo después empotrada en una casa de la calle Mejía; su dueño la re galó al historiador Ricardo Descalzi. En el lado sur estaban, a fines del siglo XIX, los muros de la casa de don José María Lasso, que la poseía en mayorazgo desde el siglo XVI.252 Ya en el siglo XX, la familia Lasso construyó dos casas modernas en este lado sur de la Olmedo y la primera fue vendida por la heredera Clemencia Lasso Chiriboga a la Sociedad Bolivariana. Allí, en agosto de 1938, se reunió la cúpula del liberalismo para decidir el futuro político del país.253 En 1945 y en su planta baja tenía su consultorio el gran abogado, poeta e historiador, Dr. Luis Felipe Borja hijo, donde se libaba un coñac de magnífica marca.254 La otra casa pasó a poder del Ministerio de Defensa desde 1961, por la herencia de doña Clemencia, que no tuvo herederos directos. 250

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De Guzmán, Manuel, EL BARRIO DE SANTA B ÁRBARA, en Estudios Histórico Sociales, Quito, 1994. Andrade Marín, Luciano, >, en ÚLTIMAS NOTICIAS de 10 de agosto de 1964. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. R. Pérez: EL ECUADOR PROFUNDO , III, 327 Testimonio de Jorge Luna Yépez.

En dos cuadras de esta calle Olmedo —desde la Venezuela hasta la Benalcázar— existían curiosamente muros que servían de límite entre real y simbólico entre las parroquias del Sagrario y de Santa Bárbara.

6. LA CALLE DE SANTA ROSA, LUEGO CALLE DEL BEATERIO NUEVO O SOLO CALLE DEL BEATERIO Es el tramo entre Benalcázar y Cuenca. Es preciso recordar que el lado sur perteneció a la llamada manzana segunda de las Conceptas, de tal manera que, hasta 1865, no hubo prácticamente propiedad

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privada en este lado sur, pues solo en este año, don Fernando Saá González compró toda la manzana a las monjas y construyó 16 casas, que subsisten en la actualidad. A fines del siglo XVI, tuvo su casa en mitad del lado norte Juan de Badajoz. Le sucedió en la propiedad el clérigo Cristóbal de Alemán Díaz y Torres quien, al testar el 6 de agosto de 1628,255 fundó vínculo para sus familiares en esta casa y en una estancia de Sangolquí. La casa se hallaba en Santa Bárbara: al frente estaban las casas reales viejas, por abajo la casa del Cap. Gonzalo de Martos Bohórquez, por arriba los herederos de Alonso López Merino. En el plano de los académicos —1736— se aprecia que el ángulo occidental de esta manzana —en la esquina con la Cuenca— era un solar, igual que el antiguo patio de la Audiencia, al frente. Por tanto, la casa de los López Merino debió haber sido la de en medio; la esquinera, luego del Beaterio, debió ser la de Martos y entre las dos debió hallarse la de Alemán. Doña Rosa Díaz Osorio, heredera de Alemán, cedió la casa a su hija doña María de Jesús Palacios Díaz Osorio, noventa años después de la muerte de este. La casa esquinera de Martos, en 1672, era del contador Antonio de la Chica Cevallos y Narváez: en su testamento256 declaró ser vecino de Santa Bárbara, que calle en medio vivía el tesorero Luis de Acosta y al frente se hallaba la casa de las Conceptas (que fueron dueñas de la antigua manzana de la Audiencia). Doña María Cevallos Velasco y de la Carrera testó en julio de 1707,257 tenía una casa en Santa Bárbara, que lindaba por un lado con las casas segundas de las Conceptas y, por el otro, con el re c ogimiento de las Carmelitas.

ORÍGENES DEL BEATERIO EN 1672 La casa esquinera de Chica Cevallos pasó, en 1672, al Cap. José Suárez de Figueroa, vecino de Santa Bárbara, cuyos herederos la vendieron en 1745 a las beatas mercedarias, que ocupaban una casa con 255

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ANQ, protocolos ante Hernández Marcillo.

capilla en lo alto de Santa Bárbara.258 Estaban dirigidas por el mercedario fray Gaspar Lozano, dedica-

ANQ, N.1.

aparece era el de la esquina de la Imbabura y Manabí actuales; este pasaría a llamarse Beaterio Viejo,

ANQ, N.4.

a raíz de la fundación de este nuevo en la calle Olmedo. Quizás era el mismo edificio que en 1707 fue

Monroy, Joel Leonidas, EL CONVENTO DE LA MERCED DE QUITO , 1700-1800, Quito, Imprenta del Clero, 1943, Pág. 184.

ban parte de su tiempo a la enseñanza de las niñas, por eso, en el plano de 1736 el único Beaterio que

recogimiento de las monjas carmelitas, sin duda recién venidas desde Latacunga. En todo caso, Lozano había hecho esfuerzos por establecer el Beaterio desde 1724, pero la Audiencia y el Municipio aceptaron su viejo pedido solo cuando adquirió la hacienda Albichuela con 41 cuadras de caña, un terreno de doce cuadras de maíz, otro de 20 costales de papas de semilla, en segundo lugar la hacien-

D e s c a l z i , R i c a r d o , < < R e c uperemos el Beaterio>>, diario EL COMERCIO, Quito, 14 de noviembre de 1990.

da Agato que la compró en 1744 y la hacienda de Malchinguí.259

ANQ, N.4.

comprado a su hija Francisca Pazmiño una casita en 525 pesos, frente al Beaterio de la Merced. Esta

Doña Juana Lozano Pazmiño, al testar en 1744,260 declaró que era vecina de Santa Bárbara; le había

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re f e rencia debe entenderse con linderación de la Imbabura, pues solo en 1749 fray Gaspar Lozano indica el traslado de casa. En 1768, en la nomenclatura de Santa Bárbara, la calle del Beaterio Nuevo corresponde a la actual Benalcázar, de la Olmedo hacia arriba, ya que la casa era esquinera. La calle del Beaterio Viejo pertenece a la parte final de la Manabí.261 Por esta época, entre la Benalcázar y la Cuenca actuales, del lado norte existían tres casas de: doña Ignacia Castro con 14 personas; doña Úrsula González, separada del marido, allí vivían doce personas. Hacia la Cuenca estaba la casa de doña Antonia Cabrera, viuda, con 17 personas, en cuyos bajos estaba la sastrería de Ignacio Martínez y de su mujer.262 Para 1797, las dos primeras dueñas eran las mismas, mientras de la tercera casa lo era doña Antonia Barreto. Para fines del siglo XVIII se conocía esta calle como Beaterio Nuevo.263 El plano de 1805 revela unas tres casas en este lado norte de la calle. En el siglo XIX, el Beaterio Viejo de la Imbabura había desaparecido. La actual Olmedo, entre Benalcázar y Cuenca, era por la institución que feneció en 1835 por orden de Rocafuerte, mandatario fogoso que calificó a este lugar como .264 Además debía servir para escuela de las niñas huérfanas de los soldados de la independencia.265 Él mismo convirtió este lugar en colegio Santa María del Socorro, la primera escuela femenina fiscal del país. Este edificio se dañó notoriamente en el sismo de marzo de 1859; en los años 1862 261

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y 1863 por orden de García Moreno fue ocupado por las monjas de los Sagrados Corazones de Museo Histórico 56, Padrón de Santa Bárbara. Padrón de Santa Bárbara.

Picpus, recién llegadas al país, pero estas pronto abandonaron el local, de tal manera que el P residente cedió el segundo piso al arquitecto oficial del gobierno —seguramente Sebastián Wisse— y luego, a partir de marzo de 1863, pasó a ser el Instituto de los Hermanos de las Escuelas

Andrade Marín, Luciano.

Cristianas. En el primer año lectivo que empezó en agosto de dicho año se matricularon 225 niños;

Tobar Donoso, Julio, LA IGLESIA ECUATORIANA EN EL SIGLO XIX, Págs.332 y 345.

en 1864, en su segundo piso, funcionó el Congreso ordinario de dicho año y desde 1869 laboró por

Muñoz Borrero, Eduardo, EL INSTITUTO SAN JOSÉ DE LA SALLE, Quito, 1998.

el arquitecto Gualberto Pérez construyó la capilla estilo gótico a la que se ha hecho re f e rencia.266 El

Id.

algún tiempo el ilustre Hermano Miguel, pasándose este con otros novicios, en 1874, al local del Cebollar donde antes fue la quinta de Daniel Aguilar. En 1886 y en época del Presidente Caamaño, 2 de agosto de 1892 tuvo lugar en el Beaterio la incorporación solemne del Hno. Miguel a la Academia de la Lengua (E. Muñoz Borre ro: o.c.). En 1895, el general Alfaro lo convirtió en un nuevo c e n t ro de enseñanza: el colegio Mejía, que funcionó allí por 40 años.267

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Andrade Marín, Luciano, >, en diario ÚLTIMAS NOTICIAS , Quito, 17 de abril de 1965.

No hay que confundir este establecimiento con la escuela de niñas llamada Beaterio, que funcionaba en la Benalcázar y Esmeraldas, por lo que la primera se llamaba .

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Veamos otros detalles históricos: Según documentos de 1820, los hermanos Barahona Cisneros declaran que su abuelo, el español Simón de Loyola Barahona, en 1750 tenía una casa en la calle que va al Beaterio Viejo, aunque también podría tratarse de la Manabí actual. En 1827, al testar, doña María Jacinta Aulestia Chiriboga declaró que su abuela, doña Clara Jácome, dejó hacia 1767 una casa en la calle del Beaterio Nuevo a cuatro nietos: a la testadora, a su hermano Nicolás Francisco Aulestia y a sus primas Joaquina y María Nieves Espinosa. Doña Jerónima Casco testó en mayo de 1771;268 declara que su casa estaba en la calle del Beaterio. Su hija Eugenia Freire confirmó, en 1785, que quedaba frontera al Beaterio Nuevo, ya de moda desde 1745. Es decir, suponemos que la palabra hace referencia a que estaba al frente del Beaterio, en el lado sur de la calle. Sin embargo, en otros documentos, frontera significa también . El clérigo José de Loza Sánchez de Orellana testó en noviembre de 1820,269 su casa estaba en la calle del Beaterio, seguramente la Olmedo. La tendera doña Ramona Viteri Baca, latacungueña, testó en septiembre de 1844.270 Su casa estaba en la calle que sube al Beaterio, que según la nomenclatura de 1858 era la subida de la Benalcázar actual. Para 1894 todo el lado norte de esta cuadra era la escuela de los Hermanos Cristianos.

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ANQ, protocolos ante Pazmiño. ANQ, protocolos ante Llerena. ANQ, protocolos ante Munive. ANQ, protocolos ante Mariano Pazmiño, 177l, testamento de Jerónima Casco. Ver nuestra próxima obra sobre la familia Saá.

EL LADO SUR DE LA CALLE Hemos dicho que, por lo menos entre 177l y 1785, frente al Beaterio estaba la casa que fue de doña Jerónima Casco y luego de su hija Eugenia Fre i re Casco. Debió estar a mitad de la cuadra.271 Sabemos que las casas de este lado pertenecían al Sagrario. En el plano de Montúfar de 1805, este lado se lo observa prácticamente sin casas y con un gran solar vacío en la actual esquina de la Olmedo y Cuenca. Como la manzana pertenecía a las Conceptas, la casa de los Casco debió haber sido la única de la cuadra. Las dos casas conocidas a fin de siglo fueron construidas seguramente por el mismo don Fernando Saá hacia 1865.272

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Existían dos casas en 1894: en la esquina con la Benalcázar estaba otro local de los Hermanos Cristianos y hacia la Cuenca se hallaba la casa de José María Donoso González.273 En 1886, la casa que fue cuartel pasó a ser ocupada por los Hermanos Cristianos, que allí abrieron la escuela de élite de la Sagrada Familia (E. Muñoz Borrero). En el año 1907, en el lado sur de esta cuadra, estuvo el cuartel del batallón Carchi al mando del célebre Coronel ambateño Tomás Reinoso (alias el Cholo Reinoso), uno de los héroes de Chasqui en enero de 1906. De esta casa salió Reinoso a repeler la sublevación universitaria del 25 de abril de 1907.274 Esta casa cuartel sin duda fue también quitada a los Hermanos Cristianos. Es lo cierto que en los años 30 y 40 funcionó aquí el Circulo Militar, fue luego, en los años 50 y 60, sede de la Asociación de Militares en Retiro; en abril de 1960 se veló en esta sede el cadáver de Leopoldo Noboa Saá, militar, poeta y músico, uno de los fundadores del Partido Socialista. Cabe decir que en el lado norte y en mitad de la cuadra, estuvo por largos años la entrada suplementaria del Colegio Mejía, pues la principal daba hacia la calle Benalcázar.275

7. LA ANTIGUA CALLE DE PALMA, LUEGO INCORPORADA A LA DE BARRERA, LLAMADA EN 1870 CAMINO NUEVO QUE VA A EL TEJAR DE LA MERCED Corresponde a la Olmedo entre Cuenca y Cotopaxi. En 1768 se la conocía como , quizás por algún antiguo vecino de ese apellido; un siglo después se la conoció como ,276 por la presencia de esta familia en la inmediata vecindad. En documentos de 1870, a los 273

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Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Troncoso, Julio, VIDA DEL G ENERAL ELOY ALFARO , Quito. Testimonio de Adolfo Álvarez Jervis. Villavicencio, Manuel, GEOGRAFÍA DE LA REPÚBLICA DEL E CUADOR, New Yo r k , 1858.

que luego haremos referencia, figura como . En efecto, si el viejo camino fue siempre la calle Mejía, para entonces se abrió otro camino, que sin duda era la calle Olmedo en la cuadra que vamos a historiar. Actualmente existen cuatro casas hacia el lado norte y cinco en el lado sur. Existen no muchos datos sobre esta cuadra. En el lado norte han existido, desde la Colonia y hasta principios del siglo XX, tres casas. El plano de Montúfar revela unas cuatro casas en 1805 en el lado norte, con un enorme solar posterior hacia la calle Manabí. Al frente, en el lado sur, el plano revela más bien cómo que avanzaba hacia adentro el fondo de las casas que tenían su frente hacia la Imbabura.

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N o b o a

La esquina de las Torres del Beaterio: Se la conocía así popularmente hasta bien entrado el siglo XX —1930—.

UNA CASA INMORTALIZADA POR LOS POETAS EN 1946 Según el censo de 1768, en la esquina con la Cuenca estaba la casa del indígena Bernardo de la Cruz, barbero, casa en la que vivían 19 personas. A fines de siglo, pertenecía a don Cayetano Aráuz, heredero de doña Catalina.277 E n t re 1861 y 1870, sabemos con certeza que esta casa pertenecía al Dr. León Espinosa de los Monteros, pues así lo dice la escritura de la compra de la casa de al frente, a la que más tarde haremos re f e re n c i a . En pocos años, pasó a su heredero el abogado Dr. Lorenzo Espinosa de los Monteros y aquí tuvo su consulta su hijo el Dr. Mario Isaac Espinosa, y una tienda Juan José Suárez.278 Hacia 1900 se derrocó la casa esquinera colonial y el solar fue comprado por don Carlos Moncayo Mena, quien enseguida hizo levantar una casa nueva, donde vivió su yerno el notable médico y político Dr. Alfonso Zambrano Orejuela, entre 1936 y 1948.279 En los años 40 del siglo XX, esta casa y la siguiente al occidente pertenecieron a la familia Moncayo Cruz, hijos del mentado don Carlos Moncayo Mena y de Luz María Cruz Caamaño. En esta casa vivió algún tiempo la familia Usbeck Valdivieso, procedente de Riobamba.280 Entendemos que, a principios de siglo, la familia Moncayo dividió la vieja casa esquinera en dos. Lo que podemos asegurar es que durante largo tiempo, la propia familia Moncayo Cruz vivió en la segunda casa, sin duda desprendida de la primera. Pe ro sin duda lo más importante que ocurrió en la casa esquinera se dio en 1946, cuando la habían 277

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ACQ, Gobierno, 1799.

tomado en arriendo los Silva Luque de Guayaquil. Estos decidieron marchar una temporada a Guayaquil y encomendaron su cuidado a su joven pariente, el poeta cañarense Enrique Noboa

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de Hernán Zambrano Moncayo, Quito enero de 1993. Adolfo Álvarez Jervis, Quito 1993.

Arízaga, dejando pagadas dos tarjetas de comida en el vecino salón: una para su añorado gato y la otra para su querida lora. El poeta Noboa se sintió a poco muy solo e invitó a que compartieran la vivienda a sus íntimos a m i gos Rafael Díaz Cueva (el Cuto) y a Enrique Aguilar. Se dedicaron a hacer versos y a beber como

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descosidos y, como tenían hambre, la comida que era para los dos animales obviamente se la s i r v i e ron. Cada vez que les veían, los animales bramaban: la lora en su desesperación se comió media puerta de una de las habitaciones, mientras el gato no podía pararse de la debilidad. Al faltar el dinero, empezaron a dejar en una contaduría las cosas y las prendas más fáciles, primero f u e ron las cobijas y al final los ternos del Dr. Silva. Muy orondos, en las primeras horas de la mañana, le preguntaban al retrato del Dr. Silva colgado en la sala: — Doctor, ¿qué traje desea ponerse hoy día? ¿El café? Lamentamos mucho decirle que este ya no existe. ¿El negro? Lamentamos darle la misma cálida respuesta… Así pasaron tres meses enteros, hasta que los vecinos avisaron piadosamente a la familia Silva Luque y a la familia Díaz Cueva de Cuenca, célebre por su honorabilidad. Los jóvenes debieron huir en forma despavorida, mientras los dueños de las cosas se juraron ardientemente no volver a cometer semejante pecado de confianza.281

LA FUTURA ESCUELA DEL DR. BORJA En 1768, la casa intermedia de este lado norte fue de doña María Medina, en cuyos bajos estaba la tienda de estanco del indígena Francisco Heredia; la casa pasó al italiano don Juan Fabara, quien la poseía en 1797,282 y luego fue de don Ramón Dueñas hacia 1870. Dado que en este lado existieron solo tres casas,283 entendemos que del señor Dueñas. En esta casa y en 1892 vivieron de arriendo don 281

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Noboa, Enrique, LES CUENTO UNA COSA. MEMORIAS DE UN P O E TA, manuscrito inédito. Así se desprende del censo de Santa Bárbara en 1797.

Alejandro Villafuerte y su esposa Mercedes Salvador, de tal manera que esta fue la casa natal del futuro sacerdote mercedario Pedro Armengol Villafuerte, que alcanzó a vivir un siglo;284 el señor Dueñas dividió su casa en dos luego de 1894, ya que solo una de ellas la vendió al Dr. Pe d ro Pablo Borja a principios del siglo y allí funcionó el pensionado Borja Nº 1,285 más conocido como la Escuela del Doctor Borja. Allí se educaron las más notables personalidades del país. Se podrían citar solo en el orden político los nombres de Galo Plaza, entre 1912 y 1918, Camilo Ponce, de 1918 a 1924, etc.

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. En diario EL COMERCIO de 1992 se hizo un reportaje por su centenario, al mencionado religioso. Testimonio de Cecilia Dueñas Ibarra de Serr a n o , Quito 1984. Testimonio del Dr. Juan Velasco Espinosa, Quito, 1993. ACQ, Gobierno, censo de 1799. Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

En la casa, que siguió siendo de los Dueñas Soberón, vivió largos años, entre 1910 y 1922 por lo menos, la familia Velasco Ibarra, pariente de los dueños de casa. De tal manera que de esta casa era la diaria salida de José María hacia la Universidad Central y luego a sus labores en el Palacio Arzobispal, como director del Boletín Eclesiástico, o como abogado síndico del Municipio de la ciudad.286

LA CASA ESQUINERA CON LA COTOPAXI La tercera casa, que lindaba con la Cotopaxi, del lado norte, por 1768, pertenecía a doña Catalina Aráuz, viuda, y allí vivían 16 personas. En el censo de 1797, figura como una casa pequeña, propiedad de don Agustín Cabrera.287 Para 1894 pertenecía a Mercedes Sierra y en sus bajos estaban las tiendas de Espíritu Haro y Tránsito López.288

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En 1912, esta casa —que tenía su mayor frente a la Cotopaxi— era ya de tres pisos y pertenecía al político orense don León Toro Morlás y a su esposa la señora Josefina Vásconez Gómez. Por ese entonces allí vivieron don Rafael María Pólit Narváez y su esposa María Ester Moreno Guerra. En ella nació en 1913 su hijo Eduardo (el popular Pollo, banquero hasta los años 1950) y en ella murió la señora Moreno, trasladándose la familia a vivir en unión de su abuela doña Ramona Guerra Espinel viuda de Moreno, a casa de los Estupiñán en la calle Imbabura. En 1920, esta casa pertenecía a Samuel Rojas (el popular Perro Rojas), esposo de Ernestina Valencia Castrillón, quienes normalmente no vivían en esta casa, sino que la daban en arriendo. A su lado, hacia la Cotopaxi, estuvo por muy largos años la casa de ese popularísimo personaje que fue el Lluqui Alfonso Endara Andrade.289 Este último tuvo como uno de sus CHUQUIS al señor Rojas y era frecuente la reminiscencia al mismo, tal que en una entrevista hecha hacia el año 1964, al pedírsele una recomendación filosófica de existencia, el Lluqui exclamó: — Cuánto más conozco a la humanidad, más le quiero a mi perro, pero no al Perro Rojas. Don Enrique Álvarez Mosquera y su esposa, la señora Mercedes García Coello, en el año 1920, tomaron esta casa para subarrendarla. En esta misma casa y hacia 1925 vivió la señora Benigna Dávalos de Diez en el primer piso, cuando aún los Álvarez García moraban en el segundo piso.290 Esta casa esquinera, por su amplitud, dio vivienda a numerosas familias: allí vivieron, por ejemplo, el abogado Dr. Ramón Muñoz, el notable joyero riobambeño Darío Argüello Estrella, recién venido a Quito con sus hijos los Argüello Jiménez en 1932, la familia manabita Pólit Ortiz, entre ellos Luis, que fue funcionario de Panagra y luego de Texaco, así como Jorge Pólit Ortiz. También el coronel de ejército Humberto Cabezas.291

LAS CASAS DEL LADO SUR DE LA CUADRA Las viejas dos casas de este lado pertenecían a la parroquia del Sagrario, lo cual es muy importante tener en cuenta. Durante mucho tiempo siempre se mantuvo la estructura de solo dos casas completas hacia la Olmedo, fenómeno que varió solo a partir de la década de los años cuarenta del siglo XX, en que ya figuraban cuatro o cinco casas. 289

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Testimonio de Adolfo Álvarez Jervis. Testimonio de Juan Escobar Pallares. Id. A la 285.

Conocemos un documento de 28 de julio de 1861, suscrito ante el notario Acevedo, por el cual Pío Terán vendió una casa de dos pisos en el barrio de La Merced a María y Gertrudis Espinel Cornejo, muerta esta última en el terremoto de Ibarra de 1868, dos años después; los otros hermanos Espinel la vendieron el 30 de agosto de 1870, ante el notario Francisco Valdez, al conocido general José Antonio Mata y Viteri. Consta en este documento que la casa quedaba en la calle que va de la casa de

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huérfanos al camino nuevo que va a El Tejar de la Merced y evidentemente daba al lado sur, según los límites que allí constan: • Al frente: casa del Dr. León Espinosa. • A un lado: casa del señor Rafael Pérez (de seguro hacia el oriente). • Al otro lado (es decir hacia el occidente) y hacia atrás: la enorme huerta de la casa de don Manuel Gómez de la Torre. Como la casa de este último miraba a la calle Cuenca y avanzaba totalmente hasta la Cotopaxi, no cabe duda de su ubicación. De tal manera que en época de García Moreno los dueños de las dos casas eran: • En la esquina con la Cuenca: Rafael Pérez. • A mitad de la cuadra: los Espinel y luego el Gral. Mata. Había dos casas en 1894: la de Dolores Ribadeneira Ponce de Sáenz, que tenía su entrada principal hacia la Cuenca (en ella se hallaban la zapatería de Mariano Granda y la tienda de Josefa Endara), y la del Gral. Rafael Barriga Marcos, que daba hacia la Cotopaxi (en esta última se realizaron varias sesiones preparatorias para el asesinato de García Moreno en 1875). En esta casa vivió una temporada la familia Traversari Salazar y acudía de visita el Gral. Francisco Javier Salazar, según lo refiere en su boceto biográfico el Dr. Aparicio Ortega y se reproduce, en el tomo XII de la biografía de García Moreno por Severo Gómezjurado. Valga señalar que la casa esquinera con la Cuenca luce aún hoy ventanas del siglo XVII que miran hacia la calle Olmedo. Hacia 1900, la familia Ribadeneira decidió vender su enorme casa del lado sur; como no hubo comprador, la dividieron en tres casas mediante paredes medianeras. La más oriental ha estado durante muy largos años en poder de los Calderón Salem; la occidental en poder de los Soberón Pareja y Acosta Soberón. La del medio la adquirió en 11 000 sucres Don Vidal Enríquez Ante y su mujer Emilia Vélez Noboa. En ella vivieron, de 1907 a 1912, su yerno el prestante abogado guayaquileño Dr. César D. Villavicencio Vera; la tarde del 20 de enero de 1912 huyó por el tejado de esta casa hacia la de los Gómez de la Torre —en la Cuenca— temeroso de ser arrastrado por la turba. En las décadas de 1940 y 1950 fue vivienda del historiador y técnico en economía Dr. César Villavicencio Enríquez, en cuya biblioteca se tenían muy agradables tertulias. César y su esposa, para 1945, compraron los derechos hereditarios a Carmela Enríquez de Bueno y a María Pareja Enríquez. En los años 40 del siglo XX había cuatro casas en la cuadra: la esquinera tenía su entrada por la Cuenca y pertenecía al político Abelardo Montalvo Alvear, en la misma década y para 1945 se convirtió en solo tienda y garaje; luego estaba la de la familia Calderón Salem, presidida por su jefe don Julio Calderón.

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En tercer lugar se formó la casa de la familia de don Carlos Bueno Guzmán y de doña Carmela Enríquez Vélez, quienes vivieron allí en la década de los treinta; en 1945 vivió en esta casa el Dr. Antonio Román Checa, ginecólogo, famoso por las decenas de perros que poseía.292 Más hacia el occidente estuvo en la misma década una elegante escuela femenina hacia la esquina; este edificio desapareció en la década de los cuarenta y dio paso a un enorme garaje, en donde antes estuvo la enorme huerta de los Gómez de la Torre.

8. LA COLONIAL CALLE DE LAS TOGRERAS, LUEGO INCORPORADA A LA DE BARRERA, LLAMADA TAMBIÉN CALLE QUE VA AL BEATERIO VIEJO Este tramo de la Olmedo, desde la Cotopaxi hacia el occidente, Luciano Andrade Marín señala que era la calle de las Togreras. La última casa de esta calle correspondía a los neveros, que traían agua de los deshielos del Pichincha, para proveerla a las casas de Quito y para refrescos. Representa, por tanto, una de las mejores fases del esfuerzo humano en el Quito antiguo. Por documentos de 1856 y 1871, a los que haremos referencia, se conocía a la cuadra entre Cotopaxi e Imbabura como . Pero es necesario también tomar en cuenta que los documentos hablan parcialmente de este sector, refiriéndose al barrio de La Chilena, antiguamente llamado Chilenapata. Pero como el barrio era tan pequeño (apenas las dos manzanas comprendidas entre la Cotopaxi, la Imbabura, la Mejía y la Manabí), solo esta cuadra —de las Togreras— solía estar mencionada como parte de La Chilena. Dado que iba desde la Cotopaxi al occidente, comprendía dos cuadras formales, entre la Cotopaxi y la actual Mires y luego un sector mucho más informal que ya se metía hacia el Pichincha. El plano de 1805 revela, por ejemplo, muy regulares los dos lados de la Olmedo entre Cotopaxi e Imbabura, aunque con pocas casas y luego, desde la Imbabura hacia el Pichincha, unas nueve casas por el borde derecho o norte de la calle Olmedo y que se prolongaban unos 200 metros después de la actual Mires. Al frente, en el borde sur, había solo unas tres casas entre la Imbabura y la Mires, y solamente otras tres después de la Mires. En 1768, en el lado norte, correspondiente a Santa Bárbara entre la Cotopaxi e Imbabura, existían cuatro casas, lo cual se mantuvo desde la Colonia hasta bien entrado el siglo XX: la casa que 292

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Noboa, Enrique, Op. Cit. Testimonio de Adolfo Álvarez Jervis para los años de 1932 al 1939. Testimonio de Ermel Fiallo Morán, sobrino carnal de la señora Morán.

formaba esquina con la Cotopaxi tuvo siempre su mayor frente a esta última calle y de ella sabemos que entre 1861 y 1872 pertenecía al Dr. Carlos Andrade Jaramillo, oriundo de Otavalo; tenía sus interiores profundos y tomaba toda la parte posterior de la casa siguiente que daba totalmente a la Olmedo actual. Esta casa, en las primeras décadas del siglo XX, fue la vivienda de doña Chepita Morán Noboa y de su hijo el abogado Dr. Emilio Gangotena Morán.293 En esta casa vivió y murió el Cmdte. Fidel Noboa Andrade, uno de los héroes del combate del 9 de abril de 1895 en Guaranda.294

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La primera casa realmente de la cuadra y que miraba a ella fue, en 1768, de doña Rosa Barco, viuda; debe haber pasado a poder de doña Nicolasa Pinto Va l d e m o ros, quien al testar en 1779295 dijo que tenía una casa

>. Hacia 1850 su dueño fue don Pío Terán Aguirre, quien

permutó la casa con José María Pintado, cambiándola con una que también estaba en la misma Santa Bárbara. En documentos de 1861 figura como su dueño don José María Pintado, quien la vendió el 24 de junio de 1861, ante el notario Francisco Valdez,296 al célebre clérigo Dr. Manuel Andrade Coronel, quien tenía fama de ideas liberales. Por otro documento del 6 de febre ro de 1868, consta que Pintado había permutado ante el notario Nicolás García la casa con el citado Pío Terán. Uno de estos últimos propietarios —seguramente Terán— dividió la gran casa en dos, según se despre n d e de la escritura de 1872, donde se manifiesta que la parte que daba a la izquierda de la misma fue vendida a doña Rosario Naranjo. El 24 de junio de 1871 y ante el notario primero, Pintado ratificó la venta al Colorado Andrade, manifestando que costaba 2 400 pesos, suma muy importante para la época. Este, que era Canónigo de la Catedral, la mantuvo solo once años, pues la vendió el 10 de marzo de 1872 a doña Eufemia Berrío. Dice en el documento que la casa es en el barrio de la M e rced, se manifiesta que queda al frente de la casa del abogado Braulio Buendía —esta era la segunda del lado sur y quedaba ya muy cerca a la Imbabura—, a la derecha y por detrás estaba la casa del Dr. Carlos Andrade, que en su mayor miraba a la Cotopaxi, y a la izquierda estaba la citada señora Naranjo. La señora y su marido, el artista Joaquín Pinto, vivieron en esta casa solo hasta 1880. En toda la década anterior, Pinto dio clases de pintura, llamando la atención por su erudición en lenguas —hablaba siete idiomas— historia, geometría, anatomía, mitología y perspectiva, de tal manera que los alumnos quedaban fascinados, según lo cuenta José Gabriel Nava r ro en su libro LA PINTURA EN EL

ECUADOR. En la GUÍA de 1894 consta como su dueño el gran pintor don Joaquín Pinto

Ortiz, esposo de la citada señora Berrío.297 En las décadas del diez y del veinte del siglo XX, fue propiedad de María y Josefina Pinto Berrío, hijas del artista, famosas por su mal genio; allá por 1922 protestaban airadamente por los serenos que recibía Carmela Rivadeneira Dávila en la casa vecina y su fastidio era tan grande que solían ocultarse en el traspatio para no oír a los sere n a t e ros.298 La casa, para los años citados, era vieja, estrecha y con una puerta desvencijada. Ya en la década de los tre i nta, esta casa se dividió en dos, el sector más cercano a la Cotopaxi pasó a Nicolás Salazar García y a su esposa Vi rginia Tobar Landázuri, sus dueños hasta los años cuarenta por lo menos.299 El sector más occidental, es decir cercano a la Imbabura, quedó en poder de las señoritas Pinto. 295

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ANQ, protocolos ante Navarrete. ANQ, N.6, Pro t o c o l o s , 1861. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de Carm e l a Rivadeneira Dávila, Quito. Testimonio de Adolfo Álvarez Jervis.

La segunda casa completa a la Olmedo se desprendió, como hemos dicho, en los años de 1860 de la anterior de los Andrade y pasó a la señora Rosario Naranjo, su dueña en 1872. Debió haberla comprado muy poco tiempo antes, ya que en 1871 figura como su dueña Carmen Dávila. Esta casa figura, en la GUÍA de 1894, como propiedad de Ángel Soria. A ella dedicaremos luego unos párrafos, por su importancia. La segunda casa colonial (tercera desde 1860 y también actual) era del bordador Manuel Samaniego (no el pintor). Sabemos que en la primera mitad del siglo XIX perteneció a las señoras Fabara y

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Trujillo, la casa fue rematada el 25 de octubre de 1856 ante Mariano Soria y pasó a poder del señor Juan Riofrío. Este la tuvo solamente 15 años hasta que, el 28 de marzo de 1871 ante el notario primero, la traspasó al comerciante señor Antonio Mora y a su esposa, la señora Margarita Andrade. Dice el documento que a la derecha estaba la casa de Carmen Dávila; a la izquierda, la de Concepción Baca y Mercedes Romo; por detrás, el tejar de Mariano Silva, sin duda mirando a la calle Imbabura, típico sector de tejares desde tiempo atrás. Dicen que está en la calle que va al Beaterio Viejo, de tal manera que se consideraba que la Olmedo conducía a la Imbabura, donde estaba el Beaterio. En 1920 pertenecía a la familia Barahona.300 La tercera casa colonial —cuarta desde la segunda mitad del siglo XIX— miraba completamente a la Olmedo, y era, en 1768, del mercader don Clemente Sánchez Gaona.301 Sabemos que en 1871 era de Concepción Baca y de Mercedes Romo, pero en la G UÍA de 1894 figura como propiedad de Vicente Garzón; en ella vivía el agrimensor Joaquín Álvarez, pariente de los dueños de casa.302 Aún en 1920 vivía aquí la familia Álvarez Garzón. La cuarta casa, hoy quinta, miraba más a la calle Imbabura. Según el padrón de 1768 era de María Ventura de León (tenía tiendas de Rosa de la Cruz). En un documento del 8 de febrero de 1812 figura como su dueño Mariano Flor y aparece que años antes la casa fue de don Pedro Marcos de León.303 De ella daremos más detalles al tratar de la calle Imbabura.

LA CASA DEL TUERTO CALLE La tercera casa completa de este lado norte (al lado de las señoritas Pinto), fue comprada con la ayuda 300

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del Gral. Alfaro, hacia 1900, por doña Rosa Solano de la Sala, recién casada con el notable periodis-

Id. 294. Padrón de Santa Bárbara en 1768, en Museo Histórico 56, Quito. Datos y fotografías de esta familia figuran en nuestra obra LOS VEINTEMILLA EN LA SIERRA CENTRO NO RT E DEL ECUADOR Y EN LIMA, Quito, 2003. ANQ, Protocolos, febrero de 1812, venta de casa doña María Salvador a Josefa Espinosa. Testimonio de Castillo Arguello.

Blanca

Testimonio de María Luisa Calle, Quito, octubre de 1993.

ta cuencano Manuel J. Calle. En esta casa nació precisamente su hija María Luisa, luego muy conocida intelectual quiteña. Fue pues, durante algunos años, el paradero del gran morlaco, quien allí metía la pluma en un plato lleno de tinta, pues era estrábico.304 A esa casa llegó un día el padre biológico del escritor, el señor Antonio Aguilar, pero Calle se negó a recibirlo. le dijo Aguilar, pero Calle le mandó a decir con su esposa: —No lo necesito, con el que tengo me basta y sobra. Le ruego irse de mi casa.305 Hacia 1908 se detectó una avería en la casa y, decepcionada, la señora Solano la vendió a la señora Hortensia Jervis Munive de Pérez. Esta tuvo algunos años la casa, hasta que la vendió por 1920 al Dr. Alberto Rivadeneira García, quien vivió aquí con sus hijos, los Rivadeneira Dávila, buena parte de su vida. En esta década vivió aquí doña Matilde Rivadeneira Rojas de Anderson y eran famosos los serenos que se daban a Carmelita Rivadeneira Dávila, con las agrias protestas de las señoras Pinto Berrío que vivían al lado.

138 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Para 1935 su hijo, el joven médico Jaime Rivadeneira Dávila (nacido en 1905), instaló su laboratorio médico en esta casa y hacia 1940 prestaba un esqueleto de su colección al estudiante de medicina Alfredo Jijón Melo, cuya tía, Rosa Jijón Pallares, ocupaba uno de los departamentos de la casa. Jijón Melo dejó el esqueleto en el departamento de su tía. Cuando el Dr. Rivadeneira vendió la casa y se trasladó al sector de la Colón, por alguna razón la Policía encontró el esqueleto en el departamento de la señorita Jijón. Lo tomaron entonces por un crimen oculto y el Dr. Rivadeneira, ya anciano con risa y sorna, debió ir a declarar en la Policía en defensa de Alfredo Jijón Melo.306 Cabe también decir que en una casa del lado norte consta una placa en homenaje al sacerdote dominico fray Inocencio María Jácome.

LAS CASAS DEL LADO SUR, ENTRE COTOPAXI E IMBABURA Al frente, en el lado sur, había dos casas que, según el padrón de 1840, habrían pertenecido a Tomás Rañón e Ignacia Moreno.307 En 1894 se mantenían las dos casonas: formando esquina hacia la Cotopaxi estaba la casa de Antonia Salas Andrade, madre del Dr. Daniel Román que, seguramente, es la misma casa que declaró en propiedad su madre, doña Elena Andrade de Salas, al testar en octubre de 1873:308 quedaba en . Allí existían dos tiendas: una de ellas de Darío Veloz. En esta casa vivía, en aquel 1894, el músico Ignacio Zambrano. Formando la otra esquina, es decir hacia la Imbabura, estaba la casa de doña Rosario 306

307

308

309

310

Testimonio de Catalina Rivadeneira Andrade de Coronel.

Ordóñez Castelar de Buendía, que tenía cuatro tiendas en los bajos: una carnicería, otra que pertenecía a Matilde San Miguel. Al testar en junio de 1873,309 doña Mariana Castelar Mejía señaló que la mentada señora Rosario Ordóñez de Buendía era nieta de su esposo, don José Ordóñez, y que vivía en la

AMQ, censo de 1840.

casa que fue del Dr. Manuel Castelar y Mejía, hermano de la testadora. Esta casa debió, pues, haber

ANQ, Soria.

ante

sido del célebre cura Castelar —con fama de haber sembrado de hijos a Manabí— 310 a partir de 1845.

ANQ, protocolos ante Valdés.

En enero de 1911, don Reinaldo A. Solano de la Sala ofrecía en venta su casa recién construida de 30

Archivo del Gral. Marcos Gándara Enríquez, Quito, 1999.

(dos cuadras desde la Chile hasta la Olmedo y tres desde la Venezuela y Olmedo, hacia arriba hasta la

protocolos

habitaciones, dos patios y una huerta en el barrio de La Chilena, a cinco cuadras de la Plaza de Armas Cuenca); era en la carrera Olmedo número 46.

139 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

En la década de los treinta ya eran cuatro casas en este lado: la esquinera con la Cotopaxi era de los Ovejos Andrade, muy populares en la ciudad, hijos de Elías Andrade Soberón y de Mariana Dueñas Soberón. La segunda casa era del Mayor Manuel Sotomayor y su esposa doña Leonor Yepes Rivera. Luego fue propiedad del Mayor Víctor Manuel Arguello Proaño y de su señora doña Emilia Yepes Rivera, él uno de los héroes de Angoteros en 1904. Arguello fue velado en esa su casa en abril de 1965, poco después la vendió su hijo Hugo, quien se trasladó a vivir en el barrio de La Tola. La tercera casa era de las dos hermanas Suárez: Hermencia, una de ellas, fue esposa del Ing. Rodríguez. La cuarta casa, esquinera con la Imbabura, daba su mayor frente a esta última calle, perteneció a la familia Jácome Varela. Allí vivieron Marta Jácome de Arroba, artista de la película AMANECER

EN

EL PICHINCHA, así como Carmela Jácome, esposa de un conocido deportista, el luchador Salomón Rosero.311

LA CUADRA DE LA IMBABURA HACIA EL OCCIDENTE, LLAMADA EN 1870 CALLE RUINOSA QUE VA AL ALTO DE LA CHILENA>>

. En los años 30 fue del Gral. Carlos Pinto Díaz.313

La segunda casa era, en dicho año de 1768, de la viuda Rafaela Guevara. Pasó un siglo después, hacia 1880, a doña Clotilde Torres Guarderas de Núñez, quien la poseyó hasta 1930.314 En esta casa se casó, en 1888, su hija Rosa Elena Núñez Torres, con el liberal guayaquileño Cmdte. Vicente Enrique Carbo Aguirre, uno de los pocos liberales de fondo, que jamás traicionaron al Gral. Alfaro. En esta misma casa nacieron las dos mayores de las Carbo Núñez: Rosa Elena y Laura; esta última llegaría a ser Primera Dama del País desde 1926 a 1930, como esposa del Dr. Isidro Ayora Cueva. Las monedas que salieron en este período fueron apodadas —en su honor— como

>. En 1893, el

Comandante se radicó en Guayaquil con los suyos. Poco después de 1930, esta casa fue del Dr. Maximiliano Valencia Lara y de sus hijos los Valencia Castrillón. Es por eso que esta esquina se la conocía hace 70 años como . La tercera casa era de Lorenzo Martínez, dependiente de la Iglesia Mayor en 1768; seguramente es la de Asencio Martínez a fines de ese siglo. Pasó en 1894 a Juana Mora, que tenía una chichería arrendada en sus bajos. En los años treinta del siglo pasado era del caballero latacungueño don Francisco Quevedo Baquero, solterón, de gran chispa y conocido como ; allí vivía con sus hermanas solteras Mariana y Rosario Quevedo Baquero, los tres tíos carnales del gran abogado y 312

313

314

315

ANQ, Av i l é s .

protocolos

ante

Id. 307. Testimonio del Dr. Enrique Ponce y Carbo, Quito 1992. Padrón de Santa Bárbara.

político Antonio J. Quevedo Moscoso. La cuarta casa fue, en 1768, del indígena Roque Orozco y pasó, un siglo después, a Hermenegildo Rodríguez. La quinta casa y otras pequeñas se llamaban y albergaban a 31 personas315 en dicho año de 1768.

141 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Para 1894 existían en este sector otras tres casas más, antes de la intersección con la Mires, y que indudablemente eran nuevas o por lo menos posteriores a 1770: la quinta casa era de Manuela Narváez de Pólit, cuya familia, incluidos los Pólit Moreno (sus nietos), vivieron aquí aún en las décadas del 20 y del 30316; la sexta, de Francisco Hidrobo y la séptima, de Felipa Carrera, con un estanco en sus bajos. La familia Pólit Manrique declaró en 1905 que tenía casa propia en la Olmedo Nº 60 y que la ofrecían en ve n t a . ¿A qué se debía la presencia de cuatro sitios de expendio de alcohol en dos cuadras? ¿A la cercanía del cementerio de El Tejar? ¿Al hecho de tratarse de un sitio recoleto, acogedor y alto? ¿A la presencia de los indígenas vendedores de nieve? En el lado sur —perteneciente al Sagrario—, en 1894, existían seis casas en la cuadra entre Imbabura y Mires: la primera, con entrada por la Imbabura, fue comprada en 1864 al Dr. Manuel Polanco Carrión por Manuel Chiriboga Guzmán, según su testamento de octubre de 1900.317 Tenía cinco tiendas hacia la Olmedo: de Luisa Campaña, de Juan Muñoz, de Clara Sandoval, de Enriqueta Coronel y de Dominga Paredes. En la década de los treinta, esta casa pertenecía al Cnel. Luis Fernando Castrillón Hidalgo y allí mismo vivía su hermano el profesor Pedro Alfonso Castrillón, quien fue rector del colegio 24 de Mayo. Seguía la casa de Manuel López; luego la del abogado Dr. Nicolás Astorga Salas; la cuarta era del Dr. Gabriel Buendía Ordóñez, abogado, con tres tiendas en los bajos (de Margarita del Castillo, de Mercedes Rosero y la zapatería de Francisco Vicuña). La quinta casa era de Julia Vélez, con una tienda de Dolores Enríquez. La sexta casa, esquinera con la Mires, pertenecía a Amalia Garrido. El 10 de febre ro de 1868, ante el notario Mogro, doña Carmen Ante Salas de Correa vendió una casa en la calle Camino Nuevo en el lado sur de esta cuadra, barrio de Santa Bárbara, según la jurisdicción de entonces. El comprador fue Camilo Coello. Al frente estaba la casa de Pe t rona Jácome; a un lado, la del Dr. Ignacio Bucheli —que entendemos que era en la esquina Olmedo-Imbabura—; al otro lado, la casa de Juan Mora (sin duda pariente de Juana Mora, que figura en 1894 en la acera norte); y por atrás la casa convento de monjas de la Encarnación de Popayán, que antes fuera el 316

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318

319

Testimonio del Ing. Eduardo Pólit Moreno, Quito, 1991. ANQ, Melo.

protocolos

Beaterio Viejo. Coello la conservó solo cuatro años, pues el 6 de septiembre de 1872318 la dio en venta al Cmdte. Rafael Vélez Guerre ro .

ante

9. EL FINAL DE LA OLMEDO

ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , 1872.

El señor Carlos Viteri de la Vega319 dejó importantes datos sobre la historia de El Tejar y de La Chilena Viteri, Carlos, MONOGRAFÍA DEL BARRIO DE EL TEJAR, en Museo Histórico 51, Quito, 1971, Págs. 312 a 314.

a inicios del siglo XX. En este sector fueron propietarios: Hermelinda Morillo de Astudillo, madre del Gral. Ricardo Astudillo. Seguía la casa de Francisco Hidrobo (sexta casa del lado norte en 1894), que la heredaron sus hijas las , por su pequeña estatura; una de ellas, Adela, vendía

142 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

material de zapatería. A continuación vivía el Ing. Lino Flor, alumno fundador de la Politécnica, que con su colega Gualberto Pérez promovieron la revuelta política que costó la casa al primero. En casa de Flor vivió don Eloy Valencia Castillo, quien fuera Secretario de la Policía desde la época de Veintemilla, hasta su muerte por 1921.320 Venía luego la casa de Francisco Quevedo (tercera del lado norte), quien pasó postrado los últimos años de su vida. A continuación la casa de don Camilo Echanique Morán, guayaquileño, cónsul en Francia, ministro de Alfaro en 1906; todo 5 de junio iluminaba y embanderaba su casa mediante faroles chinos. Al testar, el 3 de febrero de 1919, declaró tener tres casas en esa ciudad y una en Quito, en la Olmedo Nº 49 (número que no consta en la nomenclatura de 1894, en todo caso quedaba al lado sur); tenía también 11 000 sucres, al seis por ciento anual en el Banco Comercial y Agrícola. Su casa debió adquirirla al abogado Nicolás Astorga. Junto a los anteriores vivía el Dr. Gabriel Buendía (cuarta casa del lado sur), a quien le amortajó su inquilina ; tenía fama de haber atendido a los dos bandos como abogado. La familia Yánez de este sector fue la primera en poseer un museo privado. Otros vecinos eran Rosario Portugal y el Dr. Cornelio Valencia.

10. LA OLMEDO, ENTRE MIRES Y TOCTIUCO, ENTRE 1894 E INICIOS DEL SIGLO XX, SECTOR LLAMADO ALTO DE LA CHILENA La estructura colonial de este sector se observó igual hasta bien entrado el siglo XX. El 23 de julio de 1869, ante el notario Mariano Soria, se hizo la escritura de una casa del lado sur, por la cual Carmen Vi l l a c reses vendió su casa al señor Luis Pólit Ceva l l o s y a su esposa, la señora Manuela Narváez Jaramillo. No se llegó a efectivizar la venta, por algún defecto, por lo que, el 10 de febre ro de 1872,321 decidió empeñarla al señor Isidro Montúfar. Los límites que constan son los siguientes: • Por la entrada: calle ruinosa que va al citado alto de La Chilena. • Por el frente: casa del Cmdte. José María Ribadeneira (que daba a la acera norte). • Por la derecha de la casa: antigua casa de Mariano Castro y que hoy pertenece a la familia Araujo. • Por la izquierda de la casa: la de fray Ramón Velásquez. • Por la espalda de la casa: casa y huerta de las señoras Marcillo, que no sabemos si daba a la 320

321

Testimonio del Cnel. Octavio Valencia Llerena, Quito, 1981. ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , 1872.

Mejía o acaso a la calle Mires. Para 1894, del lado norte existían cuatro casas: la de Teresa y Valentina Cobos; dos de la viuda Juana Jara; en la parte alta, varios metros hacia el occidente, estaba la cuarta y última casa, que pertenecía al

143 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

agrimensor Cmdte. José M. Rivadeneira Albuja,322 quien la vendió al célebre Víctor Rojas en 5 000 sucres. Este se convirtió en un potentado.323 A fines de siglo, el mismo 1894, del lado sur existían tres casas: la del Dr. Rafael Mancero, abogado; la de Pacífico Miño; y la de Filomena Alvear. Años después, los propietarios eran cuatro: los Pintado; los Mancero, que sin duda heredaron al citado Rafael; la tercera casa era de los Bohórquez, que luego la vendieron a Manuel Rodríguez y a su mujer Antonia Jurado, especialista en encontrar entierros metálicos. También eran propietarios los hermanos Oquendo Salas, uno de ellos pintor en terciopelo, que subastaba sus obras en la Plaza Mayor. Al final occidental de la calle quedaba el . En 1950 eran vecinos de la calle Olmedo los siguientes: MEJÍA Y MONTÚFAR: ASOCIACIÓN DE EMPLEADOS MUNICIPALES.

322

323

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Viteri, Carlos, Op. Cit.

1-19: Luis Paz y Miño Proaño y

6-71: Carlos Samaniego Álvarez

Ángel Baca

7-07: Librería de Carlos Liebman

1-54: Carlos Terán Anaguano

7-12: Almacén de Mario Maldonado

1-72: Rafael Oñate Salcedo e Ignacio

7-21: Rafael y Carlos Enrique

Maya Miño

Almeida Vacas

2-22: Hugo Puente y Puente

7-42: José Valerio Ríos

2-25: Daniel Alberto Paredes O.

8-31: Juan Suárez

2-30: Carlos Toro Freile

8-32: Dra. Dora L. Bastidas

2-41: Enrique Viteri Villavicencio

8-45: Dr. Ricardo Cornejo Rosales

2-44: Carlos Zabala P.

8-52: Guillermo Salvador

2-93: Blanca Rea de Silva y Jorge Silva

9-18: Instituto Nacional de Previsión

2-99: Enrique Torres Suárez

9-30: Eduardo Quintana Miranda

3-45: Alfonso Molina

9-31: Alberto Sarmiento

4-13: Zoila Rodríguez de Cueva García

9-33: César Almeida

4-28: Segundo Mariano Osorio

9-54: Wenceslao Vásconez Cuvi,

5-04: César Arcos N.

Carlos Salas, oficina

5-33: Alberto Klaber

de Jorge Cornejo Rosales y

5-47: Mauricio Ascher, Luis

Pablo Vásconez Román

Antonio Troya

10-73: Jacinto Ruales Salvador

5-52: José Ignacio Jiménez Valdivieso

11-10: Virgilio Sáenz

6-22: Ana Gallegos de Caamaño

11-12: Víctor Naranjo Lavayen,

6-34: Arístides Alvarado

Mayor Gustavo Moncayo Cruz y

6-59: Renán Rey

Dr. Jorge H. Moncayo

144 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

11-41: César Vidal Villavicencio Enríquez

13-45: Dr. Maximiliano Valencia Lara

11-54: Pensionado Borja Número 1.

13-59: Rosario Jácome de Buendía Ordóñez y

11-55: Víctor Manuel Acosta Soberón

familia Buendía Endara

12-12: Dr. Jaime Ricaurte Enríquez, Cmdte.

13-71: Consolación Yánez G.

Vicente A. Rivadeneira

13-78: Nicolás Pacheco Jaramillo,

12-23: César Vela Darquea

Marcelo Ramex y Luis Argoti R.

12-29: Emilia Yepes de Arguello

13-85: Dr. Nicolás Martínez Vásconez

12-30: Humberto Alvarado y

13-86: Fabián Játiva, Alejandro

Nicolás Salazar

Marún y Dr. Lorenzo Peñafiel

12-38: José Castillo

14-05: Mercedes de Fabara

12-42: Nicolás F. Tobar

14-14: Luis Pinto, Ing. Galo Villamar

12-49: Carlos Mena Caamaño

14-23: Francisco y Hugo Albornoz

12-60: Ana María Peñaherrera,

Casares

Luis Fernando Ruiz Bastidas

14-24: Leonardo Rojas

12-70: Pedro Ortiz Aldaz

14-33: Antonio Moncayo Moncayo y Josefina

12-71: Julio Muñoz

Mena, también Hugo

12-80: Segundo Torres

Villacreses Sevilla

13-06: Edmundo Velasco Z.

14-34: César Fuentes Mera

13-18: José Miguel Ocampo

14-40: Gabriel Ordóñez Pallares

13-19: Miguel Gerardo Segovia López

14-65: Julio C. Zaldumbide M.

VIDA COTIDIANA EN LA OLMEDO, ENTRE 1905 Y 1931 Veamos algunos casos. En abril de 1912, la señora Zoila Flor decía que quería comprar un departamento al contado, vivía en la Olmedo 58, casa de su primo el Ingeniero Lino Flor. En septiembre de 1912, el comandante Reinaldo Solano de la Sala ofrecía en venta su casa en la Olmedo 46, barrio de La Chilena. En abril de 1924, el dentista Rafael Durán Pástor advierte que se ha trasladado a casa del Sr. Arnoldo B a rona Vaca, calle Olmedo, frente al Carmen Bajo, atiende de 8 a 11, de 1 a 5 y a cualquier hora de la noche. En 1931, el urólogo Carlos Pólit Jarre, que atendía en la Olmedo 17, sacaba un gran aviso para atender sífilis y enfermedades de mujeres; tenía gabinete reservado de 2 a 5 y de 8 a 10 de la noche.

147 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Historia de la calle Mejía

1. EL SECTOR DEPENDIENTE DE LA TOLA

T

RADICIONALMENTE, LA CALLE

MEJÍA

EN LA

COLONIA

EMPEZABA EN LA ACTUAL

MONTÚFAR, QUE ERA ATRAVESADA POR LA QUEBRADA QUE VENÍA DESDE LA CALLE OLMEDO. LA CITADA QUEBRADA SEGUÍA SU CURSO EN DIAGONAL ESQUINA CON LA

Y DEJABA EN SU BORDE NORTE UNAS TRES CASAS QUE PODRÍA DECIRSE ERAN LAS INICIALES

MONTÚFAR Y LA PEDRO FERMÍN CEVALLOS. SE CORTABA TOTALMENTE LA VÍA Y UNOS 100 METROS HACIA EL ORIENTE ASOMABAN UNAS CUATRO CUADRAS Y APENAS UNAS DOS CASAS EN LO QUE AHORA ES EL BARRIO DE LA TOLA. TODO ESTO ES MUY EVIDENTE EN EL PLANO DE 1805. DE LA CALLE ENTRE LO QUE AHORA SON LA

324

Al urbanizarse La Tola a raíz de la llegada de los Salesianos en época de Caamaño y con el relleno posterior de la quebrada, cambió totalmente la fisonomía del sector. Al principiar la década del treinta en el siglo XX, esta calle, en el sector anotado, fue paradero de muchas familias provenientes de la provincia de Bolívar. Por ejemplo: unos 50 metros después de la Cevallos, moraba el Cnel. Enrique Páez Lemos con su esposa la otavaleña Celia Mora, una de las últimas señoras que usaron manta en esta ciudad. Esta casa pasó a Humberto del Pozo Flores, padre de los Del Pozo Costa. Al frente y en una casa esquinera, vivían dos quiteños: el Cnel. Carlos Salvador Quintana y su esposa Rosa Chiriboga Policarp. Unos metros más hacia el oriente, vivían arrendando una casa Manuel Durango Pozo y su esposa Rosa Boada. Igualmente, todos los hermanos Arregui Pazos, de Guaranda, así como los hermanos Terán Sánchez, de Chimbo.325

324

325

Llamado de Montúfar. Testimonio de Ana Musello Durango, entre 1920 y 1932.

2. LA CALLE DE LAS TENERÍAS (MEJÍA, ENTRE CEVALLOS Y FLORES) C o r responde al tramo de la Mejía desde la Flores hacia el oriente y que por lo dicho en líneas anteriores, comprendía dos cuadras con apenas unas cinco casas en la primera cuadra (entre Montúfar

148 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

y Flores) y otras tres en la segunda cuadra, al borde de la quebrada. De esas cinco, solo tres casas miraban realmente a la calle Mejía, pues las otras eran esquineras y miraban a la Flore s . La presencia de la vecina quebrada convirtió a este sitio en preciso para curtir pieles, de allí su nombre de calle de las Tenerías. Las primeras curtidurías de Quito estuvieron en la actual plaza Marín, lugar donde se iniciaba la Mejía. En la intersección entre Mejía y Montúfar existía un puente sobre una quebrada que se iniciaba unos metros más al norte, en la actual Olmedo. Para poder ubicar correctamente las viviendas, es preciso considerar lo siguiente: en el trayecto de la quebrada, entre las calles paralelas de la Mejía y Chile, existían construcciones muy regulares en su borde oriental. La actual Flores, en su trayecto desde la Chile, tomaba una dirección oblicua hacia el noroeste, llegando hasta el puente de las Tenerías. En el borde occidental de la quebrada no había casas. En la Flores, entre Mejía y Olmedo existían propiedades cuyas espaldas daban hacia la quebrada. También la última casa de la Mejía, bajando por la Flores hacia el sur, y la casa que se hallaba en la Chile y Montúfar daban a un ramal de la quebrada (ver plano de los académicos franceses).

LA CALLE EN EL SIGLO XVII Según el Dr. Descalzi, en 1624 la quebrada también se llamaba de la Sala de Armas, pues al borde se levantaba un edificio que cumplía esa función de depósito de armamento.326 En esta calle tenían su vivienda, en 1624, Diego Espino de Cáceres y su mujer Alonsa del Castillo de Herrera, que estuvo enredada con el oidor Tello de Velasco. El mestizo Juan de Loza y Silva testó en agosto de 1673:327 dejó una casa abajo de San Agustín, que lindaba con la de los herederos de Juan Díaz Camargo y con las tenerías; al frente estaba la casa de 326

327

Pedro de Medina Sotelo; a las espaldas estaba la casa de la viuda de Diego Villaseñor; hacia arriba, la Descalzi, Ricardo, LA REAL AUDIENCIA DE QUITO, Quito, 1978, Tomo II, Pág.287.

casa de doña Beatriz de Encinas y más abajo Miguel Suárez. En esta cuadra, la única posibilidad de

ANQ, N.1.

sombreros de vicuña y otros efectos ordinarios.

que existieran tres casas seguidas era en el lado sur. El mentado Loza y Silva tenía una fábrica de

149 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

Juan Delgado Rojas testó en enero de 1681:328 su casa se hallaba .

DATOS SOBRE EL SIGLO XVIII Doña Josefa Cevallos Gómez testó en mayo de 1764:329 su casa estaba en la calle que baja desde Torrevieja (se denominaba así a la cuadra de Flores, entre Chile y Olmedo) hasta el puente del Itchimbía. Doña Josefa Andrade Sánchez Rubio testó en febrero de 1764:330 era mujer de Pedro Montero, tenía su casa , era de dos pisos, cubierta de teja y con huerta; la había comprado, en 1735, a Antonio Mejía del Valle en 2 864 pesos.

EN EL SIGLO XIX El 28 de septiembre de 1804, doña Manuela Donoso Cáceres, viuda de don Antonio Pérez de la Cuadra, vendió su casa en la calle de las Tenerías a la ciudadana Javiera Álvarez de Brito. La casa estaba entre dos quebradas, al frente estaba la de las Tenerías, también llamada Colgante Huayco, a las espaldas la de Ullaguangaguayco. Diecinueve años después, el 21 de abril de 1823, la señora Brito y sus dos hijos, Manuel Valderrama Álvarez y Antonino López Álvarez, la vendieron a Gertrudis Guevara, diciendo en el documento que a la derecha de la casa vivía Josefa Solís, mientras a la izquierda estaba la casa y la cuadra de Felipe Jara.331 En 1817, este sector, hacia el lado sur, era de hecho la huerta de Ignacio Loza y el corral de don Ramón Plaza, cuyas entradas daban a las calles vecinas. A su vez, el 25 de enero de 1832,332 la ciudadana María Villamar Villamar, viuda del ciudadano Policarpo Bravo, vendió una casa baja y esquinera, situada por un lado en la calle de Torrevieja frontera del Cucurucho (es decir en la Flores) y por otro en la calle que sigue a las Tenerías (es decir la Mejía). Los compradores fueron Juana Villalba y su hija Rosa Solano Villalba. Los límites eran estos: 328

329

330

331

332

ANQ, N.2. ANQ, Protocolos, ante Navarrete. Id.

• Al frente: casa de José Torresano. • A un lado: la calle que va a la placeta de la carnicería y el (es decir la mentada calle Flores). • Al otro lado: casa de Antonio Conde.

ANQ, N.3, Pro t o c o l o s , 1823. ANQ, protocolos ante Munive, 1832.

• A las espaldas, casa de la señora Josefa Carrera. Estos límites dan a entender que la entrada era seguramente por la calle Flores.

150 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

En 1833, en el lado sur, figuran al parecer las casas de Teresa Rodríguez Roque, una joven de 22 años de edad y la del barbero indígena Ignacio Pundo, que tenía 60 años.333 El lado norte era en el mismo año, 1833, propiedad de José Torresano, de 50 años y soltero, cuya casa ya sabemos que era al frente de los Solano Villalba. En 1840 sigue de propietario el señor Torresano, pero al lado ya ha construido una casa Rosa Rosero.334 Mientras tanto en el lado sur y en 1840, estaban las casas del indígena Dionisio Martínez y el tejar de don José María Brizón, natural de Venezuela. También en este lado estaba la casa de la citada Rosa Solano Villalba, de seguro frente a los Torresano. Hacia 1885, prácticamente toda la manzana era propiedad del señor Felicísimo Vega, natural de Yaruquí,335 hombre cuya fama de avaricia iba por igual con sus altos haberes económicos. En el mismo siglo él vendió la mayor parte de casas y solo se quedó con dos que miraban a la Chile y una a la esquina de la Mejía y Montúfar, donde había un molino.336 A fines del siglo antepasado se había rellenado la parte correspondiente a la Plaza Marín, por lo que la quebrada había desaparecido en este sector, formándose un rombo regular; en sus dos lados superiores existían casas, al igual que en la parte norte inferior, todas eran de condición modesta; el lado sur, parte inferior, estaba vacío (ver el Plano de Higley). Las tres casas del lado norte eran de Juana Torres, quien sin duda había hecho tres de las dos casas compradas a los Rosero y Torresano; la casa de enfrente era de doña Juana Moncayo Yépez de Guzmán, ibarreña y sobrina de don Pedro Moncayo.337 La señora sin duda había hecho un solo lote de modestas casas de indígenas y del tejar de los Brizones. La casa de la señora Torres —dueña de famosa heladería en la Flores, frente a San Agustín— fue 333

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AMQ, censo de 1833. Id. censo de 1840. A rchivo parroquial de Yaruquí, bautismos, 1835. Chiriboga, Bolívar, HISTORIA DE LA CALLE CHILE, ENTRE F LORES Y M O N T Ú FA R, en colección SAG, volumen 100, Quito, 1996. Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

heredada por su hijo, el Dr. Francisco Barba Torres, quien estudió en Francia. Esta casa él la convirtió, a su regreso y entre los años 1930 y 1940, en un verdadero cenáculo culinario francés. Sus salas solían estar cerradas.338 La casa daba también a la pequeña calle Bustamante. Jamás tuvo inquilinos el Dr. Barba y él vivía en la azotea posterior. En la planta baja había varias bodegas y la fenecida fábrica de cartón. Era definitivamente un personaje sui géneris en la ciudad. En buena parte del siglo XX, la primera casa del lado sur fue de Jorge Chiriboga Chiriboga, riobambeño, y de su esposa Blanca Sáenz Chiriboga; aquí vivieron, en 1941, los Stacey Chiriboga.339 Esta casa

Testimonio de su sobrino nieto político, don Jaime Dousdebés Carvajal, Quito, 2003.

fue vendida por su hija Marcela en 1991. Al lado de esta estuvo por largos años la casa de tres pisos de los Viteri Lafronte, adquirida a la señora Moncayo. Tuvo por muchos años el número 2. En los años veinte tuvieron aquí su consulta los juristas de este apellido. En el tercer piso vivió, hasta los años vein-

Testimonio de Marcia Stacey de Valdivieso.

te, Angelina Viteri Lafronte, que luego enfermó severamente. A la salida de ella, el piso fue ocupado por los hermanastros de la familia Cadena Meneses. En esta casa vivieron por largos años el gran his-

Testimonio de Ana Musello Durango.

toriador Homero Viteri Lafronte, su hermana Mercedes Viteri de Huras y los Huras Viteri.340

151 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

En 1945 vivió en esta casa el cuencano Rafael Díaz Cueva (el Cuto Díaz), personaje tan hábil de manos como bohemio de espíritu. Díaz, en unión de sus amigotes Enrique Noboa Arízaga y Enrique Aguilar Palacios, se las daban de comerciantes en base a la ropa enviada desde Colombia por Agustín Cuesta Ordóñez. En esa casa realizaron alguna pasada bastante desagradable a sus dueños, debiendo viajar algún honestísimo familiar desde Cuenca para salvar el desaguisado.341 Entre 1935 y 1950, en el lado sur de la cuadra había ya cinco casas: en la esquina con la Flores estaba otra casa de la familia Chiriboga Sáenz; luego estaba la enorme casa de los Huras, que ocupaba tres cuartos de la cuadra; en tercer lugar, una casa de tres pisos que formaba esquina con la Montúfar y en cuya esquina estaba la tienda Palermo, propiedad de un señor Guerra. Como la calle Mejía hacía un esguince para formar una plazoleta, la cuarta casa miraba a esta última y era propiedad de la ya aludida familia Chiriboga Sáenz. La quinta casa era un muro que ocultaba un molino y era propiedad de la familia Vega Rivadeneira, quienes lo habían heredado de su abuelo, el señor Felicísimo Vega.342

3. EL SECTOR DE LA MEJÍA, ENTRE FLORES Y GUAYAQUIL Crónicamente este fue un sector totalmente cerrado, pues era parte de la huerta de los Agustinos. En otras palabras, el convento no avanzaba solo hasta la calle Mejía, como ahora, sino que iba hasta la calle Olmedo. En 1878, el Dr. Francisco Andrade Marín, Jefe Político de Quito, pidió al provincial de los Agustinos, Padre Conceti, autorización para prolongar la calle Mejía por en medio de la huerta de la comunidad, arguyendo que las sabandijas podían subir a las celdas. La negativa fue rotunda. Sin embargo, a los 341

342

343

Testimonio de Miguel Díaz Cueva, Quito, 2002. Id. 332. Andrade Marín, Luciano, >, en ÚLTIMAS NOTICIAS, Quito, 8 de abril de 1964.

pocos días el propio provincial encontró una sabandija debajo de su almohada, por lo que autorizó al solicitante a prolongar la calle.343 Los solares del lado norte, lindantes con la calle Flores, fueron adquiridos por el Dr. Rafael Arjona Silva. Su casa, con entrada por la Flores, tenía tres tiendas que daban a la Mejía. Aquí vivió el Dr. Silva hasta su muerte en 1917; luego pasó la casa al Dr. Augusto Egas Hernández. La pequeña casa de al lado se convirtió en sede del Círculo de la Prensa y en su seno se hicieron muchos actos culturales.

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LA CASA PRESIDENCIAL DE 1929 A 1937 Los dos solares siguientes, que llegaban hasta la Guayaquil, fueron adquiridos por Nicolás Ribadeneira, quien a su vez los vendió a don León Villavicencio Rojas.344 Este y su esposa, doña Concha Álvarez Tinajero, levantaron una suntuosa casa y ambos figuran como propietarios en 1894.345 La casa fue heredada por su hija Victoria Villavicencio de Guarderas Lasso, cuyas hijas vendieron la casa al Dr. Isidro Ayora, Presidente del País en 1928. Ayora determinó que esta fuera la residencia para los Presidentes del Ecuador, sin duda por lo lejana que resultaba para él la vivienda de su propiedad, situada al final de la Alameda y junto a su clínica privada. Por otro lado, el vivir dentro del Palacio de Gobierno no resultaba muy cómodo. Aquí, pues, funcionó durante nueve años la casa Presidencial: para eso el Presidente la hizo arreglar y compró muebles de estilo a don Pacífico Chiriboga Gangotena, notable coleccionista de arte.346 Ayora vivió ahí de 1929 al 1931, Juan de Dios Martínez Mera no aceptó vivir en ella y lo hizo en una casa de la Venezuela y Olmedo, Abelardo Montalvo vivió aquí en su gobierno, al igual que el Dr. José María Velasco Ibarra durante su primer gobierno, en cuyos once meses de mandato prácticamente gobernó desde esta casa.347 Durante varios períodos —tres en total y que solían durar varias semanas— se alojaba en ella el Dr. Alejandro Ponce Elizalde, y sus hijos los Ponce Luque tenían esa franquicia, por ser parientes cercanos del Presidente. Allí mismo moraba la madre del mandatario, doña Delia Ibarra de Velasco, gran matrona quiteña, quien solía asistir a las sesiones del gabinete vestida de una manera sencillísima, cual si estuviera en su casa y entre conocidos.348 Las sesiones de 344

345

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348

Títulos de propiedad en poder de Jaime Zaldumbide Guarderas, Quito. Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

gabinete siempre fueron, con Velasco, a las nueve en punto de la mañana; en ellas estuvieron m i n i s t roscomo Antonio Parra Velasco, Jorge Montero Vela y el secretario del Presidente, Dr. Lizardo Mosquera Lasso. Alguna vez Velasco re veló una de sus originalidades, pidiendo permiso por un momento y re gresando a la noche. Simplemente quiso ir a Ambato.

Testimonio del Dr. Enrique Ponce y Carbo. Testimonio de su ministro el Dr. Franklin Tello Mercado, Quito 1983. Tello, Franklin, EL VELASCO IBARRA QUE YO CONOCÍ , manuscrito inédito.

Caído Velasco en agosto de 1935, vivió en esta casa unos pocos días el Ing. Antonio Pons Camposano y luego el Ing. Federico Páez, de 1935 a 1937, y que fue el último mandatario en vivir en ella. Páez dio una tónica muy original a esta casa: atendía en palacio generalmente solo las mañanas, casi todos los días asistía a las tres a la MATINÉE del Teatro Bolívar y se acostaba a las cinco de la tarde. Citaba a los compañeros y amigos de su hija Rita y les decía:

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N o b o a

—Haber guambras, cuéntenme de las últimas novedades. ¿Qué dicen de mí los desgraciados? 349 El Gral. Alberto Enríquez decidió no ocupar esta casa, sino la suya propia en el barrio de la Recoleta.350 Poco después la casa pasó a ser ocupada por el Ministerio de Previsión Social. Para cerrar el lado sur de su nuevo convento, en 1878 los Agustinos levantaron una casa y arrendaron en los bajos seis tiendas: tres chicherías, dos herrerías (de Manuel López y de Fernando Benalcázar) y una tienda de Pedro Pablo Rojas.351 Hacia 1963, los Agustinos derrocaron esta centenaria casa y levantaron el edificio donde ahora funciona el Registro Civil.

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350

351

352

353

I n f o rmación de Jaime Zaldumbide G., Quito, 1986.

4. LA CALLE DEL DR. VÁSCONEZ, LUEGO CALLE DE LOS FONDEROS SANGUÑA (MEJÍA, ENTRE GUAYAQUIL Y VENEZUELA)

Testimonio de su edecán el Mayor Horacio Sevilla Carrasco.

Desde fines del siglo XVIII entendemos que esta cuadra tomó el nombre del Dr. Prudencio Vásconez

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

su nombre se mantenía aún en época de García Moreno, según puede comprobarse en el plano de

ACQ, Gobierno, 1797.

Quito editado en 1858 por Manuel Villavicencio en su GEOGRAFÍA. Para 1797 sus vecinos eran: el Dr.

Naranjo, ilustre clérigo ambateño, que tuvo en este sector su vivienda; en ella vivían 18 personas352 y

Luis González Yerovi, doña Valentina Noboa y don Ramón Enríquez.353 Id.

La casa de la señora Noboa era la más poblada; allí vivían 28 personas. En el lado norte existían dos casas completas y parte de la esquinera que daba hacia la Mejía. Entendemos que la casa medianera de este lado perteneció en 1807 a doña Josefa Mogrovejo, pues la parte posterior de esta casa lindaba con la de los Freire, que tenía su entrada por la calle Guayaquil. Gran parte de la manzana —incluidas dos casas hacia la Mejía y dos casas hacia la Venezuela— f u e ron desde mediados de la primera década del siglo XIX de don Nicolás Calisto Borja y de su mujer doña Tomasa Arteta Calisto. Fusilado Calisto por realista en 1812, sus here d e ros primitivamente tuvieron solo dos casas hacia la Venezuela, las cuales fueron de su viuda y luego su hija de María Calisto Arteta y de su esposo el Gral. chileno José Miguel González Alminate. Para ampliar

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su territorio, debieron haber adquirido hacia 1850 la casa del sacerdote Carvajal, en la esquina con la Mejía, y la enorme que fue aguardentería, que corría casi todo el largo de la cuadra a la que luego h a remos re f e rencia. En tercera generación y desde 1870 here d a ron los González Calisto. En los planos de 1880 se observan cuatro casas en este lado norte: la casa mediana con tres patios —de seguro la adquirida a la aguardentería— la heredó su hijo el clérigo Pe d ro Rafael González Calisto, Arzobispo de Quito desde 1893; esta casa no tenía tiendas en su época, seguramente por la dignidad del sacerdote.354 La tercera y cuarta casa, que formaban esquina con la Venezuela, fueron de hecho una sola casa, que luego se dividió en dos, así estaba ya desde 1880, cuando su dueño era José Miguel González Calisto, eterno Cónsul de Chile en la ciudad y de su esposa doña Ignacia Mateus Pacheco. A la Mejía daban dos tiendas muy célebres: la carpintería del maestro Miguel Ve rgara y la fonda y pastelería de Gabriel Sanguña, descendiente de los célebres indígenas de su apellido.355 Esta última casa sirvió de vivienda, en la década del veinte y del treinta, al notable médico guayaquileño Dr. Carlos García Drouet y a su esposa doña Ángela Gómez Rendón, primos de los García Mateus,356 e m p a rentados a su vez con la última dueña, doña Ignacia Mateus de González.

LA CASA AL MEDIO O DE LA AGUARDENTERÍA La casa del medio fue llamada aún en 1834. Tenía un gran frente, pues tomaba los tres cuartos de la calle prácticamente desde la actual Venezuela, de fondo también avanzaba hasta la mitad de la manzana, es decir hacia el norte; fue largo tiempo la Administración de Aguardientes, de seguro desde fines del siglo XIX. La manejaba don Ramón Núñez del Arco que fue su administrador. En el censo de 1797, esta casa figura con el número 155, vivía allí como su dueña doña Ignacia Gabela y justamente aparece allí morando el citado don Ramón Núñez; eran sus vecinos en las casas cercanas personas como Marcelina Pérez, doña María Velasco, don Miguel Benavides y doña Antonia Muñoz de Calisto. Tenemos la constancia documental que fue rematada el 9 de febrero de 1830, era de dos pisos y pasó a manos de don Luis Fernández Salvador y López; este señor la tuvo solamente cuatro años, hasta el 2 de mayo de 1834, cuando, ante el notario sexto, la vendió a doña Margarita Michelena, con estos límites: • A un lado (entendemos que hacia el oriente): doña Ignacia Reyes, que debe haber sido la esquinera con la actual Guayaquil. • Al otro (sería hacia el occidente): el difunto doctor Mariano Carvajal. • Al frente: toda la extensión de las casas del Dr. José Javier Valdivieso y del Dr. Pablo Vásconez. • A la trasera: el solar del presidio urbano, cuya entrada era por la Venezuela, pero que avanza354

355

356

357

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Id. Testimonio de Merc e d e s Luna Tobar, Quito, 1984. AMQ, censo de 1840.

ba por toda la manzana hasta la actual calle Guayaquil. Según el censo de 1840, las dos casas completas de la cuadra pertenecían a Rosa Coello y a fray Mariano Carvajal357 pues entonces y mucho después, el voto de pobreza de los sacerdotes era totalmente teórico: la casa de la señora Coello debió ser la misma que en 1834 adquirió la señora Michelena.

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Para 1850, los González Calisto, dueños de las casas que daban a la Venezuela, decidieron ampliar su radio de propiedad urbana, adquiriendo tanto la casa pequeña del difunto cura Carvajal, como la enorme que fue la aguardentería. En 1894, la casa de Miguel Cruz —de seguro la que en 1834 fue de doña Ignacia Reyes— era esquinera con la Guayaquil, pero daba su mayor frente a la calle Mejía; tenía la fonda de Miguel Sanguña que daba hacia la Mejía.

LAS CASAS DEL LADO SUR Siempre fueron —según los planos— dos casas enormes, aunque comprendiendo la esquinera con la Guayaquil podría decirse que eran tres en total. Esta última casa tenía su entrada por la actual calle Guayaquil, pero mostraba tres tiendas hacia la Mejía. Fue, en 1840, de Ramona Nicolalde y, en 1894, pertenecía a los Alarcón Tamayo; en este año las tres tiendas estaban ocupadas por la venta de madera de Joaquín Herrera, la sastrería de Tomás Medina y la carnicería de Miguel Páez.358 En el medio quedaba la antigua casa del Dr. Pablo Vásconez Naranjo, que así figura en el censo de 1840. Entendemos que esta casa se desprendió de la esquinera, pues ambas debieron formar una sola casona. Esta fue una célebre casa, pues en ella y en los años treinta se criaron sus sobrinos Nicolás Martínez Vásconez, Joaquín Mendizábal Vásconez y Francisco Cobo Arias. En la misma casa se alojó, también, en algunas oportunidades su sobrino nieto, el poeta don Juan León Mera.359 Muerto soltero el Dr. Vásconez en la década de los años cincuenta, su casa pasó a otras personas. A fin de siglo, su dueña era doña Josefa Villarreal Valdez de Valdivieso, con una única tienda que era la venta de 358

359

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

madera de Emilia Paredes. La casa esquinera con la Venezuela perteneció por largos años al Dr. José Javier Valdivieso y Valdivieso, conocido político, conforme lo dicen los documentos de 1830 a 1834 en

Mera, Juan León, , en revista de la SOCIEDAD JURÍDICO L ITERARIA, Quito, 1921.

la notaría sexta de la ciudad. Después de 1875, le heredó su hija Mariana Valdivieso Carcelén: poseía diez tiendas en total, dos patios y su mayor frente daba a la calle Mejía, aunque la entrada daba hacia la Venezuela. En la Mejía había seis tiendas de abarrotes, entre ellas la de Manuela Dávalos.

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N o b o a

LA ESQUINA DE LOS TRES REYES Durante muchos años, quizás entre 1920 y 40 por lo menos, la esquina de la Mejía y Guayaquil fue conocida con este nombre. La sal quiteña había apodado como a tres propietarios de la zona, cada uno de diferente origen étnico: a uno le decían el rey blanco, al otro, el rey indio, y al tercero, el rey negro. Al hablar de la calle Guayaquil, daremos datos más específicos.

5. LA CALLE DE LA AZOTEA (MEJÍA, ENTRE VENEZUELA Y GARCÍA MORENO) Así —con ese nombre tan curioso— consta en el plano de Villavicencio de 1858, si bien se desconocen las razones para esta denominación. Los planos demuestran de manera general que en el lado norte existieron cuatro casas y tres en el lado sur.

LA CASA DE VÁSCONEZ BUENO Es la situada en la esquina noroeste y primera de la cuadra en la acera norte. El escribano Francisco Hernández Marcillo y Pérez de Zúñiga testó en junio de 1680:360 su casa era frente a Juan de Arce Velarde, por tanto debió haber estado con total seguridad en el ángulo noroccidental. En 1826 era su dueño el presbítero Antonio Ruiz Bernal, según leemos en las escrituras de la casa de los Cornejo. En 1840 figura como su dueño el difunto doctor Bernal. Esta casa fue totalmen360

361

362

ANQ, N.1 Papeles de Pepita Molestina González Rubio, Quito, 1996. Jurado Noboa, Fernando, L OS R IBADENEIRA ANTES Y DESPUÉS DE COLÓN, tomo 3, Quito, 1987.

te construida por el Arq. Juan Bautista Mendeville, quien fue especialista en derrocar las viejas casonas de la ciudad y darles el aire de la arquitectura francesa de principios del siglo XIX. Perteneció desde 1860 a Nicolás Vásconez Jijón y a su esposa doña Emilia Bueno Landázuri,361 quienes tuvieron que soportar un largo destierro político en Piura. Para fines del siglo —1894— su propietario era José Ignacio Proaño y su entrada daba hacia la Venezuela; hacia la Mejía quedaba la cantina de Antonio Viteri y la librería de Antonio Ribadeneira, el célebre , verdadero cultor de Quito según Alejandro Andrade Coello, pues tuvo una de las primeras librerías de la ciudad.362

158 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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LA CASA DE LOS CORNEJO CEVALLOS A continuación, en el mismo lado norte, se alzaba la casa que el 5 de mayo de 1809, ante el escribano Vizcaíno, la vendió don Pedro Calisto y Muñoz (ex amiga del dueño) al español Zoilo de León y Páez. Este mantuvo la propiedad durante 17 años, hasta que la volvió a vender el 30 de diciembre de 1826, ante el notario segundo, a don José Cornejo Rivera, comerciante muy conocido de la ciudad. Constan entonces estos límites: • A un lado (hacia el oeste): la casa pequeña de Isabel Villacís. • Al otro lado (hacia el oriente): la casa del presbítero Antonio Ruiz Bernal. • Al frente: la casa chiquita de los herederos de don Carlos Vélez de Álava. • Por atrás: casa de doña Josefa Paz de Gómez de la Torre (dando a la Venezuela) y la huerta de José Busé. En 1833, Cornejo remató la casa diagonal en la acera sur, mientras de la del norte seguía de propietario en 1840. En 1894, figura como su dueña la señora Virginia Páez Egüez de Quijano, natural de Guanujo.

LAS DOS CASAS DEL DR. CASARES Si el lector observa con detenimiento, la casa del lado norte más cercana a la calle García Moreno es o fue realmente preciosa, del siglo XIX, con cuatro ventanas en el segundo piso y con rejas. Hace muy pocos años, se la restauró, perdiéndose muchos detalles. La tercera y cuarta casa de la cuadra figuran, ya en 1826, como de una sola dueña, en este caso de Isabel Villacís. La más occidental se llamaba y la más oriental , según se lee en la venta que hace en 1826 Zoilo de León a los Cornejo. En 1837 consta que la casa de doña Isabel Villacís (ya con doña) era frente a la segunda casa de los Cornejo Cevallos, que quedaba en el lado sur. La señora Villacís era apodada como ,363 palabra que podía tener dos significados; estaba ya difunta en 1840. Poco después, las dos casas fueron adquiridas por el notable médico Dr. Camilo Casares García, actor de la leyenda de Montalvo de 1866 quien vino desde la casa paterna en San Roque. Aquí vivió con su esposa la señora Dolores Posse. Seguían como dueños en 1894. En la primera casa, es decir en la más pequeña, estuvo en ese año la sastrería de Camilo Valdez, que funcionaba solo con seis oficiales: uno de ellos era Francisco Espinel.364 Cabe también decir que en una de estas casas —la que tenía el número 22 en 1894— vivía José María Casares, guitarrista de la Estudiantina de Quito en dicho año. 363

364

AMQ, censo de 1840.

La casa pequeña u oriental pasó a poder de Leopoldo Brauer, quien en 1917 la rehizo totalmente con

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

el Arq. Augusto Ridder.

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N o b o a

LAS CASAS DEL LADO SUR La esquina opuesta, en la Mejía y Venezuela, al lado sur, perteneció por siglos a la fábrica de la Catedral. Tenía su mayor frente hacia la Venezuela, dando cuatro tiendas a la Mejía. A principios del siglo XIX, esta casa y su adjunta en la Mejía se llamaban y la , pues esta segunda no tenía tiendas. Las dos fueron adquiridas por don Carlos Vélez de Álava, hacendado de Imbabura, cuyos herederos las tenían en su poder en 1826.365 En 1837 consta que esta casa abrazaba por detrás a la segunda casa de los Cornejo y que su dueña era doña Juana Buenaño, viuda del citado Vélez de Álava.366 Para 1894 era del comerciante don Vicente Carbo Noboa; hacía la Mejía daban: la pulpería de Juan Poveda, la hojalatería de Benjamín Echeverría, la carnicería de Custodia Sevilla y la chichería de Bárbara Chiliquinga.367 La casa fue heredada por su nieto, Jacinto Gangotena Carbo, quien vendió la casa colonial al lojano Alfonso Eguiguren, quien hacia 1935 la dio en arrendamiento a la familia Román Pérez, que instaló en ella la pensión Dapsilia, paradero de muchos, entre otros del notable periodista Alejandro Carrión. Este describe un famoso carnaval ocurrido en esta casa en su libro UNA CIERTA

SONRISA.

El señor Eguiguren derrocó la casona en 1939 y, recién levantada la nueva en 1940, la dio en arrendamiento al gobierno de Arroyo para que funcionara la Cancillería, donde permaneció durante cuatro años, hasta que, a principios de 1944, el Canciller Francisco Guarderas Pérez la trasladó definitivamente a la 10 de Agosto, a la quinta de don José Najas.368 Muchos años y en su planta baja funcionó la conocida oficina de Manuel María Jaramillo Arteaga.

365

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367

368

ANQ, N.2, venta de Zoilo de León a José Cornejo. Id, venta de Dolores Cevallos a doña Manuela Peña. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio del Dr. Enrique Ponce y Carbo.

LA CASA CHICA DE LOS VÉLEZ DE ÁLAVA La casa adjunta, a mitad de la cuadra, era en 1722 del capitán Sebastián Pérez Guerrero; en 1768, del capitán Juan de Tena Berrío; en 1826 era de los herederos de don Carlos Vélez de Álava y quedaba frente a la segunda casa del lado norte, propiedad de Zoilo de León. El 23 de marzo de 1833 la ven-

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dió en remate y en 1 000 pesos doña Fulgencia Vélez de Álava Buenaño, a doña Dolores Cevallos Acosta de Cornejo, comerciante muy próspera y dueña ya de la casa al frente. Esta señora la tuvo solamente cuatro años, era casa de dos pisos, hasta que la vendió el 16 de noviembre de 1837,369 a doña Manuela Peña Vélez de Álava, esposa de don Manuel Riaño, hija de próceres de 1809 y heredera antes de la vieja casa. Los límites eran: • Al frente: casa de doña Isabel Villacís. • A un lado (hacia el oeste): casa de José Antonio Bonilla. • Al otro lado (hacia el oriente) y hacia la parte de atrás: la casa grande de doña Juana Buenaño de Vélez de Álava. Esa venta fue solo ficticia, pues al día siguiente doña Manuela Peña la dio en venta a doña Petrona Borja Villacís de Muñoz Ruilova. En 1894, esta pequeña casa era de Luis Gouin. En los años 14 y 15 del siglo XX vivió aquí el connotado abogado lojano Dr. Manuel Benigno Cueva García. Posteriormente fue propiedad del empresario latacungueño don Daniel Cadena Ampudia, experto en tomar el pelo a uno de sus vecinos, pues decía que las . Al mismo vecino le inventó la conseja de que, para no pagar limosna, oía misa por radio y que, en el momento en que oía por la radio el sonido del platillo del sacristán, apagaba el aparato.

LA CASA ESQUINERA FRENTE A LAS CONCEPTAS La casa esquinera con la García Moreno era, en 1722, de los Onagoytia. Conocemos documentadamen369

370

ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , 1837.

te que por 1790 perteneció a don Juan Cossío,370 vecino de la nobleza riobambeña; de este pasó a poder

ANQ, protocolos ante Miguel Munive, vol. 21, febrero de 1830.

Labarta. Tan es así que, el 20 de febrero de 1830, su dueña, la señora María de la Salud Labarta y

de Francisco Almenada y de este y en época de la independencia perteneció al cura español José Villavicencio, vecina de Guayaquil, dio poder a su antiguo vecino Antonio Ruiz de Bernal para que

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N o b o a

vendiera esta casa de dos pisos a José Antonio Bonilla, nacido en Popayán y esposo de Francisca Plácida Morillo. Los límites, en la escritura ante Miguel Munive, se señalan de esta manera: • Al frente: el Cnel. Mariano Guillermo Valdivieso. • A un lado: , que ya sabemos que daban a la misma Mejía. • Al otro lado: el Palacio Episcopal, lo que significaría quizás la parte posterior del Palacio. • Por detrás: los herederos de don Carlos Vélez de Álava, dato que nos permite asegurar que la casa miraba a la actual García Moreno. Curiosamente, en los censos de 1833 y 1840 figura aún como su dueño José Antonio Bonilla, pero se indica que esta casa lindaba con el Palacio del Obispo,371 es decir, lo mismo que en la escritura aludida, considerando como única posibilidad lo manifestado en el sector de atrás del mencionado Palacio. Esta casona fue derrocada hacia 1875 y fue comprada en solar por don Manuel Larrea Donoso,372 quien la edificó poco después, figurando como su dueño en la GUÍA de 1894. En la primera mitad del siglo XX, el señor Larrea la dio en arrendamiento a la Embajada de Chile, fue, pues, vivienda de don Víctor Eastman Cox, un chileno que llegó a ser popularísimo en la ciudad. Según testimonio de Galo Plaza Lasso, sobrino político de Eastman, este hacía gimnasia inglesa todas las mañanas en el patio y en la habitación de la esquina, casi desnudo y con el objeto de llamar la atención de sus vecinas de al frente, las hermanas Lasso Chiriboga. Aterradas, estas cerraban sus ventanas, pero la curiosidad, el interés y el amor terminaron venciendo, pues el chileno se casó, en enero de 1912, con María Lasso, una de las quiteñas más hermosas de su tiempo. Aquí nacieron varios de sus hijos, por ejemplo Patricio, en 1918. La casa fue cenáculo de magníficas tertulias al compás de vinos chilenos y franceses; los primeros solía ponerlos el dueño de casa, los segundos, su vecino, amigo y médico, el Dr. Francisco Cousín Saá.373 La heredó su hija Beatriz Larrea de Barba Aguirre. En la calle Mejía y García Moreno, a una cuadra del Palacio de Gobierno, vivió por poco tiempo, en 1914 y recién llegado de Latacunga, el futuro jurista Dr. Camilo Gallegos Toledo.374 Allí mismo era, en 371

372

373

374

375

AMQ, censos de 1833 y 1840.

1933, la casa del gran ideólogo don Luis Felipe Chávez, nacido en un caserío de Pujilí. Fue ese por

Testimonio de doña Beatriz Barba Larrea, Quito,1986.

Esta casa fue quizás, en octubre de 1933, el centro político más importante del país.

Testimonio de Eastman Lasso.

largo tiempo el paradero de los políticos socialistas que trataban de impedir un golpe de la derecha.375

Patricio

Muñoz, Hugo, PEQUEÑAS GRANDES BIOGRAFÍAS , Quito, 1986. C a rrión, Alejandro, UNA CIERTA SONRISA, ediciones Diners, Quito.

6. LA VIEJA CALLE DE VALVERDE, LUEGO

INCORPORADA A LA

CALDAS

C o r responde al tramo de la Mejía, entre García Moreno y Benalcázar. Fue de las primeras calles de Quito en tener nomenclatura propia. En el siglo XVI se la conocía como

de Va l ve r d e>>, por el

, en diario ÚLTIMAS NOTICIAS, Quito, 23 de enero de 1965. ANQ, N1. Datos sobre el testamento lo hemos dado en nuestra obra DE DÓNDE VENIMOS LOS QUITEÑOS , colección SAG, vol. 52, Quito, 1990. Así consta en el plano de Villavicencio, elaborado en 1858. ANQ, protocolos ante Miguel Munive, 1830.

• A un lado de la casa: el Arco de Santa Elena (este iba desde el Monasterio, primero a la casa de al frente y de esta a la manzana que quedaba hacia el norte). • Al otro lado de la casa (de seguro hacia el norte): casa de doña Josefa Corral de Rodríguez Nicolalde. • Atrás de la casa: la huerta de los herederos de don Joaquín Lasso de la Vega.380 Según los padrones de 1840, esta casa de Caldas ocupaba un cuarto de manzana y lindaba por el lado norte con la actual Casa del Toro, que ya sabemos la ocupaban los Rodríguez Corral.381 Cabe informar que, al frente en la manzana de las Conceptas, figura la casa del señor Joaquín Murgueitio. La única posibilidad para esto es que haya estado en la esquina suroeste de la García Moreno y Mejía, donde estuvo el primitivo hospital del siglo XVI. Posteriormente, la casa de Caldas fue adquirida por el Dr. Ramón Borrero Cortázar, político cuenca-

AMQ, censo de 1840.

no que terminó estableciéndose en Quito con su esposa la dama quiteña Dolores Galup Carrión. En

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

1894 daban a la Mejía dos tiendas: el figón de Isabel Semanate y la chichería de Antonio Alvarado.382

163 F e r n a n d o

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N o b o a

En 1928, esta casa pertenecía a don José María Andrade Flores.

7. LA CALLE QUE IBA DEL ARCO DE LAS CONCEPTAS A EL TEJAR DE LA MERCED, LUEGO LLAMADA SEGUNDA CALLE DE CALDAS (MEJÍA, ENTRE BENALCÁZAR Y CUENCA) Durante varios siglos, el lado norte, desde que fue sede de la Audiencia hasta 1612, estuvo en poder de las Conceptas, quienes fueron vendiendo solares y casas. El plano de Montúfar, hecho en 1805, revela muy claramente la presencia de uno de los arcos de Santa Elena, uniendo respectivamente a las casas del norte y del sur, y demuestra además que un cuarto de la manzana del norte en su ángulo noroccidental era un enorme huerto. En 1831, la calle se llamaba .383

HISTORIA DEL LADO NORTE Según el censo de 1840, no había casa alguna en esta manzana de las Conceptas. En el plano de Villavicencio de 1858, se la llama ya como segunda calle de Caldas. 383

384

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386

387

Lo dice así, textualmente una escritura celebrada en 1831 ante Juan Bautista Castrillón, 1992. Archivo parroquial de San Sebastián, bautismos 1829 al 1833. Papeles del académico Luis Bossano Paredes, Quito, 1983.

El llamado segundo arco de Santa Elena llegaba a una segunda casa del lado norte, que pertenecía a las monjas aludidas. En 1845, se pasaron a vivir en esta casa don Ramón Bossano de la Torre y su esposa doña Mercedes Piedrahita, quienes figuran en dicho año ya como feligreses del Sagrario. habiendo antes estado avecindados en San Sebastián.384 En esa casa murió la señora Piedrahita en 1854, Al año siguiente profesó como Concepta su hija sor Carmen Bossano, quien, muchas veces y violando la clausura, se pasaba por medio de los dos arcos desde su convento a visitar a su padre.385 Don Ramón era muy blanco de rostro y tenía una barba larguísima del mismo color, por lo que le apodaban como , ÚLTIMAS NOTICIAS, 23 enero 1946. Archivo familiar de Augusto Saá Cousín, Quito.

El viejito de azúcar>>. La casa fue vendida en 1865 al Municipio de Quito, que destruyó los dos arcos.

El cabildo tapió la casa y luego la destruyó.386 Para 1865, el gran empresario ibarreño don Fernando Saá y González Berdugo compró toda la manzana del lado norte a las monjas Conceptas,387 excepto la anotada casa que era del Municipio; la

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manzana tenía agua propia, Don Fernando construyó su propia casa en la esquina superior y también en el resto de la manzana, vendiendo todas las casas a muy buen precio. La portada de esta casa se la conocía como , por el asunto del arco, fue comprada por don José Antonio Saá y González, quien se la llevó a su casa de la plaza de Santo Domingo. Tiene una bellísima imagen de Santa Elena sobre el tímpano, está aún viva y luce en una casa del lado oeste de esta plaza. Jacinto Jijón la admiraba en sumo grado y tenía la costumbre de quedarse mirándola cuantas veces podía.388 Entre 1870 y 1880, parece que existía la plaza de la vieja Audiencia, que funcionó en esta manzana entre 1563 y 1612. Esta plaza fue ocupada por don Lutgardo Gómez con la construcción de su teatro.389 En la casa del Municipio se alojaron Veintemilla y sus famosos luego de su célebre y vandálica entrada a Quito a fines de diciembre de 1876.390 En 1894 había solo dos casas en el lado norte y las cuatro tiendas de la casa esquinera de Morlás. La esquina con la Benalcázar fue, a fines del siglo XIX, casa de Fernando Morlás Martínez, con la entrada por la Benalcázar; hacia la Mejía daban cuatro tiendas: la carpintería de Darío López, la tienda de Miguel Torres, la mecánica de Miguel Espinosa y la sastrería de Mariano García.391 En cuanto a la que fue casa de las monjas y la adquirió el Municipio, cabe decir que hacia fines del siglo XIX la casa fue comprada por Antonio Álvarez Tinajero y por su mujer Zoila Álvarez Dalgo. Era pequeña, pero realmente preciosa. Los Álvarez figuran como sus dueños en 1894. Allí residió, en 1898, la última hermana del notable escritor Luis A. Martínez,392 apenas llegada de Ambato. Heredó esta casa don Miguel Ángel Álvarez, hijo de los dueños. Hace pocos años estaba convertida en hotel.

LA CASA DE LOS SAÁ 388

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Testimonio de Luis Alfonso Ortiz Bilbao, Quito. 1976. Monge, Celiano, LAUROS, Pág.74. Archivo parroquial de San Sebastián, bautismos 1829 al 1833.

La tercera casa, esquinera con la Cuenca, tenía agua propia; las Conceptas la vendieron en solar en 1865 a don Fernando Saá González, quien levantó la suntuosa casa a dos frentes. Existían seis tiendas en 1894, de estas, solo dos daban a la Cuenca, mientras cuatro daban a la Mejía: la sastrería de Manuel Romero, la peluquería de Custodio Jácome y el estanco de Juan Cevallos. La casa pasó en 1905 a la hija Rosa Saá de Cousin y de ella en 1928 a su hija Rosa Cousin de Saá, y de ella a su hijo Augusto Saá Cousin, quien la vendió hacia 1970, luego de haber pertenecido más de un siglo a la familia. La última propietaria fue la señora Orfa Salgado de Peñafiel.393

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de Rosa Elvira Jurado Martínez, Quito 1983. Archivo familiar de Augusto Saá Cousín, Quito.

Esta casa fue célebre por varios conceptos: fue tertulia en los años 1870 y 1880 del gran fotógrafo Enrique Morgan —enamorado de Victoria Saá— luego de Marietta de Veintemilla y del gran político Ángel Polibio Chaves. A principios del siglo XX, se dio famosa tertulia con el mismo Dr. Chaves, con los jóvenes Enrique Noboa Requejo y Carlos Noboa Saá, parientes de los dueños de casa. Aquí

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tuvieron sus consultorios médicos los doctores Luis Vivanco Saá y Francisco Cousin Saá, ambos estudiados en París. En la planta baja y hacia el lado de la Mejía, funcionó casi medio siglo el laboratorio del Dr. Cousin, sin duda el primero que tuvo la ciudad. Don Fernando hizo la llamada hacia el extremo oriental de la casa, con la curiosidad de que al llegar a Quito los servicios higiénicos, a principios de siglo, el dueño los hizo poner en un sitio muy cercano a la calle . Los resultados no fueron muy positivos, sino más bien elocuentes y servían a que se divirtieran los muchachos, compañeros de clase de Augusto Saá Cousin o de su primo Panchito Cousin Plaza. Fue primero casa para sus huéspedes y luego vivieron ahí varias familias. En la década de los veinte del siglo anterior, vivió allí ese gran bohemio y poeta guayaquileño Guillermo Destruge Maruri, inmortalizado por Hugo Alemán; en la década de los treinta moraron allí los Ante Quijano, muy conocidos vecinos de la ciudad.394

LAS CASAS DEL LADO SUR Ha sido un poco difícil historiar a estas casas, por las obvias dificultades que muestran los respectivos documentos de compra venta, señalando solo nombres de vecinos de al lado, pero muy rara vez calles o datos más específicos. Podemos reportar de manera fehaciente que la segunda casa de este lado fue, a principios del siglo XIX, de don Ramón Donoso Chiriboga y de su esposa doña Antonia Borja Villacís. Era una casa de dos pisos y aquellos la vendieron al Cnel. Feliciano Checa y Barba, quien a su vez la vendió, el 29 de diciembre de 1831;395 , a doña María Mercedes Carrión Quiñones de Polanco, con estos límites: • Al frente: la casa de las Conceptas (que ya sabemos era la segunda del lado norte). • A un lado (hacia el oriente): casa de don Antonio y don Luis Fernández Salvador . • Al otro lado: calle que sigue a la Merced y la casa que fue de doña Josefa Vallejo (es decir la calle Mejía y la casa hacia el oeste). 394

395

Testimonio de Juan Escobar Pallares. ANQ, N.6, Pro t o c o l o s , 1831.

Según el censo de propietarios de 1840, figuran cinco casas en este lado de la calle, pero como más tarde aparecen solo tres casas —a fin de siglo— entendemos que dos de las cinco casas correspondían a las esquinas. En dicho 1840 sus dueños eran:

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• Los Fernández Salvador en la esquina con la Benalcázar. • Doña Manuela Ti n a j e ro, la primera casa completa hacia la Mejía y que antes fuera de los Polanco Carrión. Aquella señora declaró, el 14 de enero de 1845,396 que su casa estaba , que pesaba sobre ella un censo de 2 000 pesos y pidió trasladarlo al Te s o ro Nacional, para librarse del mismo. • Ángela Terán, antes de doña Josefa Vallejo. • Ángela Merizalde. • Antonio Cevallos, en la esquina con la Cuenca. Al frente, en el lado sur, existían tres casas en 1894, después del muro de la casa de los Corral que daba a la Benalcázar: la primera casa completa a la Mejía era de Josefa Oleas; la segunda, de Francisco Albornoz Tabares y largo tiempo tuvo el número 13; la tercera, del Dr. Pedro Cevallos Salvador, notable historiador, quien la había heredado de su padre. Uno de ellos debe haber hecho una sola de dos casas anteriores. En la segunda de estas casas, es decir frente a la familia Álvarez, estuvo, en la primera década del siglo XX, la fonda de Carmen llamada , negra famosa por sus habilidades culinarias. En los últimos años de su vida, el célebre ingeniero politécnico Alejandrino Velasco Sardá paraba mucho en esta fonda, víctima de su gran apetito que le hacía buscar con ansiedad los sabrosos preparados de doña Carmen.397 En la Mejía 46 estuvo la casa pequeña de doña Leocadia Freile Donoso, dama erudita en Historia y gran coleccionista de gatos. A partir de 1935 fue allí la gran tertulia a la que asistían Luis Felipe Borja hijo, Jorge Salvador Donoso (pariente de la señora y que tenía allí un pequeño departamento) y Augusto Paz Proaño, que acudía todos los días.398

8. LA CALLE DE LA MURALLA DE LA MERCED (MEJÍA, ENTRE CUENCA E IMBABURA) 396

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ANQ, Censos, caja 102. Tello, Franklin, manuscrito citado. Testimonio de Jorge Salvador Lara.

Estas propiedades han tenido una evolución dinámica. Como es obvio, han existido en las dos cuadras, con la Cotopaxi actual en el medio, pero solo en el lado norte, pues el sur ha estado totalmente ocupado por la muralla de los Mercedarios. La vecindad a este convento la ha hecho también motivo de selección desde tiempos inmemoriales.

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Es importante acotar que tradicionalmente en ese lado norte han existido diez casas, cinco en la primera cuadra y cinco en la segunda. Esta relativa abundancia de propiedades explica también las innumerables referencias documentales, sobre todo después de 1620, conforme lo vamos a ver.

EN EL SIGLO XVI El Capitán Pedro de Arévalo, antiguo vecino de Quito en 1570, fue casado con Isabel de Cuenca y poseyeron una casa a mitad de esta cuadra, según lo declarara su hija al testar en 1677, fenómeno que luego analizaremos. Aún en 1620, Arévalo estaba vivo, pues Mariana de Lugo, al testar en dicho año, dice que al lado de su casa vive el dicho capitán Arévalo.399 A fines del mismo siglo, el encomendero Mateo de Galárraga dejó una casa esquinera, de un solo piso y hecha de adobe, detrás de la Merced. Por un documento de 1648,400 se sabe que estaba frente a la casa de los herederos de Juan Vanegas, que a un lado quedaba la de los herederos de Juan de Cañas, calle en medio estaba la casa de Alonso de Melo y, finalmente por detrás, la de doña María Recuenco. Estos datos demostrarían que ese era acaso un sector donde la propiedad se mantenía en poder de herederos. 399

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ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , febrero de 1620. Id, N.1, Protocolos, 1648.

EL SIGLO XVII Y LA FAMILIA MONTENEGRO En este siglo encontramos cerca de una veintena de referencias.

ANQ, N.2. ANQ, N.3.

Hacia 1620, Simón Mateos de Astudillo tuvo una casa en este lugar. En febrero del mismo año testó Mariana de Lugo Ojeda: tenía una casa esquinera . Hacia el otro frente vivían: León de Senabria y junto a él, el Cap. Pedro de Arévalo. En vista de que la esquina nororiental, entre Cuenca y Mejía, era de las Conceptas, la propiedad de Senabria debe corresponder a las actuales Mejía y Cotopaxi.401 El Cap. Pedro de Arévalo, vecino de Quito por 1570, se casó con Isabel de Cuenca. Su hija, doña Jerónima de Arévalo, les heredó la casa que era a mitad de cuadra; era mujer de Melchor Pacho Marmolejo; al testar, en julio de 1677,402 declaró que por arriba de su casa vivía el Dr. José de Borja Ezpeleta, racionero de la Catedral; y por abajo, don Tomás Carlos de Cevallos Velasco. Este último,

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sin duda, había heredado la casa de su padre el provisor Tomás Cevallos, quien debió haberla, a su vez, comprado al Cap. Juan Fernández de Bustillo, quien, a su vez, debió haberla adquirido de los Lugo, de quienes ya hemos dado datos. Entendemos que la casa de Borja Ezpeleta fue la posterior casa de los Marqueses de Villaorellana, en 1776, ya que en dicho año los herederos de don Francisco Torres de Borja solicitaron el cobro de un censo impuesto sobre dicha casa.403 El español Domingo Lorenzo y Jara Fernández de Córdova testó en abril de 1622:404 vivía detrás de la Merced; su mujer era doña Mariana de la Vera y Salazar, descendiente de los Incas.405 Francisca Morán, viuda de Pedro de Quirós Vera, testó en febrero de 1624:406 dejaba una casa de teja detrás de la Merced. Catalina Fernández de Espinosa y Atahualpa, mestiza, bisnieta del Emperador Inca, testó en septiembre de 1626:407 su casa estaba a espaldas de la Merced, (es decir a la de El Tejar, que pasaba a unos 50 metros al oeste de la actual esquina de Imbabura y Mejía), y junto a las casas que fueron de Juan del Cazar Garay, por otro. Por estos datos, suponemos que debió haber estado en la actual Imbabura, por el que fue parque del Hermano Miguel. El extremeño Alonso Durán testó en septiembre de 1629:408 su casa estaba detrás de la Merced. Bernal y Leonor Candi dotaron a su hija María de Aldaba Bernal, a principios del siglo XVII, con una casa detrás de la Merced y con 200 ovejas, para que se casara con el Lcdo. Juan Benites de Alcarraz, según testamento de esta última de julio de 1634.409 La casa luego constituyó dote para su hija Paula 403

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ANQ, censos, caja 40, 1776.

de Alcarraz, mujer de Pedro Montanero. De tal manera que sirvió a tres generaciones.

ANQ, N.5.

En 1580 nació Francisco Bastidas; en mayo de 1639 dio como dote para su hija, Catalina de Bastidas,

Datos más amplios en mi obra LOS VEINTEMILLA EN LA SIERRA CENTRO NO RT E DEL ECUADOR Y EN LIMA , Quito, 2003.

e n t reotras cosas: dos mil arrobas de sal, que estaban en la casa de sus suegros, detrás del conve n-

ANQ, N.1.

to de la Merc e d .410 Ana de León Ruiz testó en septiembre de 1639:411 su marido era Gonzalo de Montenegro; este le dejó casa detrás de la Merced en reconocimiento a la dote recibida.

ANQ, N.1. ANQ, N.1. ANQ, N.2.

Hacia 1650, Alonso de Montenegro tenía su casa frente a los corrales de la Merced, situados estos en la parte más occidental de la manzana —si nos atenemos a planos de 1743— y a espaldas de la quebrada de El Tejar, lo que nos hace suponer que estaba en la parte media de la actual Imbabura,

ANQ, N.1.

entre Mejía y Chile. Por un documento de 1673, sabemos que, al lado de Montenegro, quedaba la casa

ANQ, N.1.

de Diego Martín Montenegro. Una parte la heredó su hijo el alférez Pedro de Montenegro.

169 F e r n a n d o

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N o b o a

Andrea de Pazmiño y Troya testó en septiembre de 1655:412 vivía frente al convento de la Merced, quizás en la actual Cuenca. Doña Francisca Robles y Quiñones de Montenegro fundó capellanía sobre sus casas, detrás del convento de la Merced; murió antes de 1658.413 El alférez Diego Martín Montenegro y Maldonado testó en 1673:414 compró una casa frente al convento de la Merced, entre don Pedro de Luna y Alonso Montenegro. Miguel de Leguía y Aldaz testó en 1673:415 dejó una casa y huerta detrás de la Merced. El canónigo Manuel Morejón testó en enero de 1685:416 tenía su morada a espaldas de la Merced. Para 1690, don Diego de Fuenmayor declaró poseer una casa frente al citado convento, propiedad heredada por su hija Juana.417

LA CALLE DE LA MURALLA DE LA MERCED EN EL SIGLO XVIII. EL PROCESO FINAL DE ARISTOCRATIZACIÓN Curiosamente, en este siglo hemos hallado menos referencias documentales, lo que podría indicar la misma conservación de la propiedad de las casas. Conviene recordar, para identificar de mejor manera las casas, que la portería de la Merced daba a la 412

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ANQ, N.1.

Cuenca y que la puerta falsa daba a la Chile, es decir, al mismo lado principal del convento.418

ANQ, N.2.

El Gobernador de Armas don Pedro Gregorio de Casanova, casado con una descendiente directa de ANQ, N.1.

Atahualpa, testó en junio de 1709:419 su casa estaba frente al convento de la Merced.

ANQ, N.5. ANQ, N.1. ANQ, N.4, Pro t o c o l o s , 1733. Villavicencio, Manuel, GEOGRAFÍA DEL ECUADOR, 1858. ANQ, Protocolos, ante López de Urq u í a .

Juan de Esparza y su mujer doña Petronila de Taón tenían, por 1680, una casa detrás de los corrales de la Merced; la heredó su hija Isabel, quien testó en 1717.420 Los corrales, según el plano de los Académicos, estaban en la parte más occidental del convento, es decir, entre las actuales Mejía e Imbabura, conforme lo hemos anotado ya. En marzo de 1730,421 doña Catalina Ayzaga vendió a doña María Isabel Cornejo, en 1 000 pesos, una

ANQ, N.3.

casa baja frente a los trascorrales del convento. Esta casa pasó, solo siete años después, en 1737, a

ANQ, N.4.

María Josefa Navarrete y a su marido Pedro Quirós.

170 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Don Diego de Fuenmayor, por 1690, tenía una casa frente al convento; la vendió su hija Juana, en abril de 1733,422 al cura Francisco Ramírez de Arellano; quedaba al lado del Alguacil Francisco Egas Venegas Ortega, quien había comprado su casa a José Guerrero. Doña Rosa Villacreces y Nieves, ambateña, testó en octubre de 1735:423 su casa estaba frente a la portería de la Merced, lo que nos hace creer que debió dar a la calle Cuenca. Doña María García de Angulo y Montanero testó en octubre de 1751:424 su casa estaba frente a los corrales de la Merced. Ya sabemos que era descendiente de una vieja familia vinculada al sector desde el siglo XVI. Fulgencio Loza y Albán testó en julio de 1782: su casa estaba frente a la muralla mercedaria; se casó con Estefanía Guerrero y con María de la Guerra. La casa la heredó don Pedro Loza y Guerra y, en 1805, se hallaba como materia de litigio. Está visto que la mayor parte de dueños de casa en este sector eran personas de lo que ahora traduciríamos por una clase media-alta o media conocida. Pero, por 1770, se da un franco, aunque parcial, proceso de aristocratización, a través de los Marqueses de Villaorellana (Sánchez de Orellana), los condes de Selva Florida (Guerrero), el mayorazgo Villacís y la familia del Marqués de Solanda (Carcelén). Se podría asegurar que esto constituía una expansión desde los antiguos solares de la calle Sucre, la plaza de San Francisco y la plaza de la Merced. El Marqués de Villaorellana, en 1776, declaró poseer una casa en el barrio de la Merced, gravada con un censo de 1 000 pesos a favor de una capellanía. Dicho censo lo reclamaron ese año los herederos de don Francisco Torres de Borja, Deán de la Catedral de Puebla de los Ángeles, en México.425 422

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ANQ, N.4.

Seguramente se refiere a la vieja casa de los Borja Ezpeleta.

ANQ, N.3. ANQ, protocolos ante Ocampo.

En 1780 tenía una casa esquinera en este sector el canónigo José Gabriel Batallas y Zambrano, la heredó su sobrina nieta Mercedes Galárraga Guerrero, según lo declara esta señora al testar.426

ANQ, censos, caja 40. ANQ, Protocolos, ante Acevedo, mayo 1845.

Según el censo de 1797 de la parroquia del Sagrario, los 15 vecinos del sector y dueños de casa eran los siguientes, acotando que algunos de ellos tenían sus casas en la actual Cuenca:

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• Don Manuel Bonilla • Doña Isabel Medina • Los herederos de don Ramón Puente • Doña Juana Médicis Montaño • Don Mariano Reyes • Doña Josefa Espinosa • El Dr. Mariano Merizalde • Don Pedro Guerra • Doña Rosa Andagoya • Los marqueses Jacinto Sánchez de Orellana y su esposa la neogranadina doña Antonia Cabezas y Burbano de Lara • Doña Petrona Pastrana • El Conde Manuel Guerrero (a quien pertenecía la casa de la gran cornisa en la Cuenca y Olmedo) • Don Ignacio Guerrero • Don Tomás Villacís (la casa de Villacís) • Doña María Carcelén427

LA CALLE DE LA MURALLA EN EL SIGLO XIX LA BELLA CASA DE MAENZA O DE LA TERTULIA DEL ARZOBISPO En la esquina norocciental de la Mejía, entre Cuenca y Cotopaxi, se alza aún una bellísima casa construida en su mayor parte en el siglo XVIII. Por larga tradición, se la ha considerado como que hubiese sido de los Matheu, marqueses de Maenza, pero no tenemos pruebas documentales. Solo sabemos que, hacia 1800, perteneció a don Vicente Paredes, quien murió debiendo bastante dinero al comerciante capitán José Miño Suárez. Este, por tal razón, pidió la casa por el llamado .428 A la mu e rte de Miño, el albacea, Dr. Pedro Espinosa, la sacó en remate y pasó entonces a poder del ciudadano Joaquín Nieto, pariente del albacea. Nieto la tuvo solo por poco tiempo, hasta que el 23 de diciembre de 1826, ante el notario tercero de la ciudad, el ciudadano Nieto vendió esta casa de dos pisos a Rafaela Yepes, viuda de Asencio Matheu, para que fuera para los seis hijos de esta pareja. Matheu era descendiente de los domésticos de los marqueses de Maenza y quizás por allí vino la confusión. Los límites que se citan son estos: • Por el frente: el convento de la Merced. • Por un lado (hacia el oriente): casa de don José Vivanco. • Por el otro lado (hacia el oeste): la esquina y termina a la vuelta (es decir en la Cotopaxi) que 427

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ACQ, Gobierno, 1799. Q,N.3,Protocolos,1826.

hace a la derecha, con la huerta de doña Antonia Cevallos. • Espaldas: casa de la citada señora Cevallos.

172 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

En esta casa vivió por muy largo tiempo el celebrado quiteño don Manuel María Zaldumbide y Maenza, hombre tremendamente ocurrido y muy grato para sus amigos. La familia Batallas Flores vivió muy largo tiempo en esta casa.429 González Suárez visitó mucho esta histórica propiedad desde que volvió de Cuenca en 1883 hasta su viaje a Europa en 1884 y luego, de 1888 en adelante. Cuando los asuntos del tomo IV de su Historia —1892— que tanto afectaron su ánimo, se refugiaba en esta casona, en la sala de sus queridos amigos los Batallas y estos invitaban al señor Zaldumbide a que, con sus ocurrencias, quitara lo agrio de la pesadumbre de González Suárez. De aquí salían también de paseo, unas veces hacia El Tejar y otras al Itchimbía.430 En 1894, la casa pertenecía a Rafael Maenza,431 época en que allí funcionaba la Escuela de Niñas del Sagrario, siendo sus tres profesoras Rosa Aguirre, Mercedes T. Álvarez y Virginia Cruz. En el mismo año, funcionaba en esta casa la célebre imprenta de los herederos de don Francisco Bermeo, quien hizo muchas publicaciones en nuestro medio. Aquí nació, en 1905, el ilustre escritor Jorge Reyes y Reyes.432 Pasó a manos de la familia Arellano Polanco, dueña de esta propiedad ya en los años veinte del siglo pasado, aquí pues vivió el gran médico obstetra Dr. Julio Arellano Polanco, una gloria de la medicina ecuatoriana. De esta familia pasó a una de sus domésticas hacia 1985 y de ella a la señora Orfa Salgado, que pretendió derrocar una de las mejores casonas de la ciudad.

LA CASA LLAMADA DEL MARQUESADO DE VIVANCO Y SU LIGADURA A VELASCO IBARRA, CELIANO MONGE Y LOS RUMAZO GONZÁLEZ Hemos dicho ya que, según los documentos de compra de la casa anterior, esta casa adjunta pertenecía en 1826 a don José de Vivanco. La casa la había adquirido recientemente por remate, con un censo de 1 500 pesos, el cual lo reclamaba en diciembre de 1827 el presbítero José Eustaquio Flores.433 Era una bella propiedad de cuatro balcones con una rejería de primera. 429

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Testimonio del propio Dr. Batallas a su hija doña Maria Batallas Flores. Id. Jiménez, Adolfo, Op. Cit., Pág.179.

Conocemos que, en 1840, la manzana del lado norte se llamaba de debido a que en ella tenía su casa el Dr. Víctor Vivanco, oriundo de Pasto,434 heredero del dueño anterior. En 1894 figura como su dueño Alberto Vivanco. Frente a esta casa se trasladó, hacia 1905, la portería de la Merced, que como sabemos antes estuvo en la calle Cuenca.435

Testimonio del propio escritor a su hija Marta Reyes de Vi t e r i .

En uno de los departamentos de esta casa, en el segundo piso, vivió el industrial harinero francés

ANQ, censos, caja 93.

Edmundo Catefort, así como su esposa la señora Elina Velasco Fabara. Fue de esta casa de donde par-

AMQ, censo de 1840.

tió el señor Catefort a su país en 1909, luego de un enojo con su esposa. Doña Berta Catefort de Torres

Viteri, Carlos, TIPOS QUITEÑOS , manuscrito inédito.

recordaba cómo, hacia 1910, ella veía desde el segundo piso al joven Pedro Velasco Ibarra, de apenas 13 años, engolfado en los libros de su biblioteca en el primer piso de la casa. Doña Elina Velasco murió

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en 1911; fue dramático para los asistentes al duelo ver a su pequeña hija de siete años sollozar por debajo del ataúd.436 En cuarta generación poseyó esta casa don José Antonio Vivanco, famoso por su avaricia. Cuando debía hacer algún pago, se movía de una habitación a otra, hasta llegar a la del fondo, pero iba cerrando las puertas de una en una, de tal manera que el proceso era un poco largo y tedioso. Jamás aceptaba dar propinas y salía todos los días al Banco de la Unión, simplemente a cambiar un billete en sueltos, para facilitar la economía.437 En esta misma casa vivió el famoso aguador de El Tejar, don Ramón Díaz.438 A su muerte, la casa fue vendida al cura Raimundo Torres Arredondo, quien vino desde su curato de San Felipe en Latacunga, junto con sus prohijados los ilustres jóvenes Alfonso y José Rumazo González, quienes residieron en esta histórica casa más o menos desde 1918 hasta 1930, en compañía del Padre Torres y de su hermana Mercedes.439 Torres hizo de la gran casa dos casas, una de ellas la vendió al notable historiador Celiano Monge, quien murió en esta casa en 1938.440 Esta vivienda estuvo hacia el occidente, mientras la de Torres se situó al oriente de la anterior.

LA CASA LLAMADA 436

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Testimonio de doña Berta Catefort de Torres a su hijo Augusto, Quito 1997. Id. a 431.

Estamos ya en la segunda casa de la cuadra, partiendo desde la calle Cuenca, pegada a la casa de Villacís. Siempre fue una pequeña casa con una sola tienda. Para 1870, sus dueñas eran las hermanas Pintado, que llegaron hasta avanzada edad. En 1894 su dueña era la señora Manuela Pintado de Mena y la única tienda estaba ocupada por Abel López.441

Viteri, Carlos, MONOGRAFÍA DEL BARRIO DE EL TEJAR, en Museo Histórico, números 48 a 52. Testimonio de don Rafael Rumazo Arcos, Quito.

Luego venía la conocida Casa de Villacís, hoy Museo de Arte Colonial. Esta casa también se dividió en dos, al formarse la casa pequeña que daba hacia la Mejía y que fue vivienda de unos comerciantes libaneses en 1927.

Testimonio de doña Laura Monge Jaramillo, hija del historiador, Quito, 1980.

LAS CASAS DE LA CUADRA ENTRE COTOPAXI E IMBABURA

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

Hemos dicho que, desde hace muchos años, fueron cinco las casas de esta pequeña cuadra.

174 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Según el censo de 1840, eran sus dueños: • Josefa Vallejo • Tomasa Muñoz • Ramón Garzón • Ramona Vinueza • Francisco Bossano442 En 1841, tras la muralla tenían su casa los hijos de Antonio Acosta Gómez de Urrea y de su esposa la mestiza doña María León y Borja.443 Suponemos que estaba en esta cuadra aludida. Don Mariano Espinosa Castelo testó en febrero de 1848:444 había comprado, por 1834, una casa central frente a la muralla de la Merced, estaba casado con Teresa Pérez. Isidora Guerra tuvo, hacia 1850, su casa . Quizás signifique que estaba ya en el ángulo suroeste de la Imbabura y Mejía. En todo caso, le heredó su hija Encarnación Navas Guerra, que testó en 1896.

LA CASA DEL VÍNCULO DE LOS BATALLAS Esta casa estuvo avinculada en tiempos coloniales, es decir, no podía venderse, y sus familiares podían vivir gratuitamente en ella. Conocemos que, en 1822, vieron la Batalla de Pichincha desde la terraza de esta casa numerosos vecinos, pues era la más alta del barrio, mientras las situadas hacia el occidente eran muy bajas. Uno de los mirones fue el joven José María Batallas Aulestia, luego importante abogado de la ciudad y padre de los doctores Batallas Flores.445 442

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AMQ, censo de 1840. A rchivo Histórico del Banco Central, Quito, papeles de Gerard o Chiriboga. ANQ, protocolos Munive.

ante

poseía en tercera generación, herencia de su tío abuelo el Dr. José Gabriel Batallas. En 1843, la poseía el Dr. José María Batallas, quien declaró el 3 de noviembre que era en el barrio de la Merc e d , que reconocía un censo de 1 100 pesos y que él liberó ese día por medio de un billete de crédito público.447 En 1845 continuaba en propiedad de aquella familia y era seguramente la casa esquinera

Papeles en poder de María Batallas Flores, Quito, 1995. ANQ, protocolos Acevedo.

Doña Mercedes Galárraga Guerre ro testó en mayo de 1845:446 tenía una casa frente a la muralla y la

ante

en el ángulo noroeste de la Mejía y Cotopaxi, junto a la que fuera del Dr. Julio Tobar Donoso. En 1894 era de Ramón German; allí vivían y tenían su consulta los doctores Flavio y Leonidas Batallas Flores y el médico Dr. Miguel Román. Este dato lo trae la GUÍA DE QUITO, pero parece que se trata de un erro r, pues tenemos la certeza de que los Batallas vivieron al frente, en casa de los Maenza. Cabe también, por supuesto, que en alguna época hayan vivido en esta casa que fuera vín-

ANQ, censos, caja 101.

culo de sus antepasados, los Batallas Bustamante.

448

Id. a la nota 442. Testimonio de los hermanos Escobar Pallares.

Hacia 1920 y 1930, esta casa pertenecía a don Alberto del Hierro Portilla y a su esposa Isabel Mena Caamaño.449

175 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

LAS OTRAS CASAS DE LA CUADRA Luego venía la segunda casa, que en 1840 pertenecía a Francisco Bossano y en 1867 a su heredera, la señora Ignacia Bossano.450 Su dueña en 1894 fue la señora Rosario Mena Ayala de Fuentes, con tiendas de Benigno Falconí, Francisco Zambrano y Nicolás Escobar. En los años veinte y treinta del siglo último, era aún una casa muy bella que pertenecía a las hermanas Alarcón Mena, sobrinas de la dueña anterior. Y vivía también allí la señora María Alarcón, esposa del Cmdte. Eloy Proaño Donoso, militar y músico.451 La tercera en esta cuadra era de doña Rosa Astudillo, quien el 9 de septiembre de 1857 la vendió al señor Antonio Pérez y Bravo, quien la poseyó solamente diez años, pues la vendió el 6 de julio de 1867, ante el notario Cosme Salazar, en 2 500 pesos, al señor Juan José Castrillón. Estaba situada en la . Se señalan estos límites: • A la derecha de la casa: Ignacia Bossano. • A la izquierda: María Corral. • A las espaldas de la casa: huerta de la señora Boza (que debe haber dado a la calle Imbabura). Juan Castrillón Espinosa seguía de dueño en 1894, cuando la casa tenía el número 40. Hacia 1907, esta casa fue comprada por el notable jurista Dr. Juan Aurelio Villagómez Andrade, quien se trasladó desde su casa de la Benalcázar, muy cercana a la plaza de San Francisco. Aquí, pues, vivió por algunos años la familia Villagómez Yepes. El Dr. Villagómez tenía su vivienda en el primer piso y el resto de su familia en el segundo. Organizaba descomunales farras, que solían durar por varios días, con artistas de teatro. Nos han referido sus más viejos familiares que doña Rosa María Yepes, cansada de tanta farra, le llamaba la atención al marido, hablando sin parar durante varios minutos que parecían interminables. Cuando consideraba prudente, el doctor decía: — ¿Terminó ya la señora? — No, respondía aquella, y seguía con una larga serie de reclamos. Villagómez volvía a preguntar y, por fin, cuando la señora decía: — Sí, ya terminé Él replicaba: 450

451

AMQ. Censo de 1840. Id. a la nota 446.

— Entonces, hágame un favor...

176 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

— ¿Cuál?, decía doña Rosa. — Hágame el favor, de irse a la mierda...452 En esta casa murió y fue velado el citado jurisperito en 1913.453 En las primeras décadas del siglo XX, la casa fue adquirida, seguramente hacia 1915, por doña Mercedes García Carrión de Pallares. Para entonces tenía ya el número 102. Allí vivió al principio de su matrimonio su hijo Luis Antonio Pallares García, esposo de la señora Zaldumbide y allí nacieron casi todos sus hijos,454 una de ellas, Rosario, fue Primera Dama del país de 1948 al 1952. Antes de 1920 salió Luis Antonio, pero en cambio pasaron a vivir con la señora su hija Isabel Pallares García con su esposo el gran quiteño don Arcesio Escobar Borja, quienes moraron aquí hasta 1939 por lo menos.455 Se refería que Juan Escobar Pallares, en su infancia, allá por 1922 y en adelante, prácticamente no pasaba en esta casa, sino donde la familia Saá.456 La casa fue vendida a la familia Zabaleta.

LA CASA DE LA CHILENA Y EL PARADERO DEL GENERAL PLAZA La cuarta casa era pequeñita y de corte colonial hasta bien entrado el siglo XX, pertenecía, en 1867, a María Corral, según los documentos de compra de la casa anterior en 1867; en otros de 1870, ante el notario quinto, consta igualmente que esta casa estaba a pocos metros de la esquina con la Imbabura y que la casa de la aludida señora Corral lindaba con la de los Velasco Muñoz, que era esquinera. En 1894 pertenecía al ya conocido don Manuel Zaldumbide y no tenía tiendas. Ya en ese año, vivía allí la gran modista chilena Eloisa C. Muñoz Salinas.457 Para 1900, aquel la vendió a la mentada señora apodada como la , lo cual re volvió la leyenda de que una chilena colonial había dado nombre al barrio, pero esto no es verdad, pues según documentos, viene del nombre indígena

> es decir pata de un sitio frío. Tengo entendido que

meseta>>, por eso

> significa

Chilenapata>> significaría meseta fría…

>… por lo que

, frente a la puerta falsa del convento. Le heredó su hija doña Teresa

Ramírez de Arellano y a esta y en cuarta generación, su hijo el clérigo Juan de Espinosa Albear y Arellano.503 Hernando de la Rocha, llamado el Viejo, tuvo su casa en San Agustín antes de 1665. El Procurador de la Audiencia Francisco Pérez testó en junio de 1665:504 heredó la casa de sus padres Diego Pérez y Juana Martínez de Malinas y quedaba .

LA LLEGADA DE LOS ANDALUCES Lorenzo de Cáceres y Baca testó en agosto de 1676:505 había formado una compañía comercial con don José Zuleta de Reales en una tienda en la . Hay que advertir que Zuleta proce503

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ANQ, N.5, Pro t o c o l o s , 1737.

día de una de las más notables familias de Córdoba, en Andalucía, que tuvieron que emigrar hacia América debido a un duelo caballeresco.506

ANQ, N.4. ANQ, N.6. Fernández de Betancourt, Francisco, HISTORIA HERÁLDICA Y GENEALÓGICA DE LA M ONARQUÍA ES PA Ñ O L A, 8 volúmenes, Madrid. ANQ, N.5.

Juan de Cozar Valenzuela testó en abril de 1684:507 era comerciante en cera y había comprado, en 900 pesos, una casa a los herederos de Juan Díaz Camargo. Con seguridad quedaba en la actual Mejía. El sevillano Félix Romero de Aragón testó en octubre de 1686:508 vendía lana, tabaco y chocolate en una tienda , en casa del cura Lorenzo Viera.

Ídem. ACQ, ver las capellanías de esta familia, legajos de 1678 y 1686.

El abogado Ignacio Barnuevo Castro y Guzmán, emparentado con poderosas familias de Guayaquil,509 tenía, por 1692, su casa , junto a la casa de los Cañaveral. Sus parientes510 vivían en la actual Chile, entre Flores y Guayaquil, es decir frente a la iglesia,

Véase nuestra obra L OS ALBORNOZ, FAMILIA FUNDADORA DEL PAÍS, Quito, 2002.

a mitad de la cuadra.

ANQ, N.3.

y cera en una tienda de la calle de San Agustín.

El sevillano Francisco de Cañizares Bracamonte testó en agosto de 1693:511 vendía cordobanes, tabaco

194 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

Para 1693, el extremeño Alonso Sánchez Cortés tenía una tienda de mercadería en la casa de Alonso Benito de Heredia.512 En resumen: comerciantes andaluces, sobre todo, y en menor grado extremeños, funcionarios de la Audiencia, ventas de cera, lana, tabaco y chocolate, así como de cordobanes, deben haberle dado un enorme sabor a este rincón de la ciudad.

LAS DOS CUADRAS EN PLENO SIGLO XVIII En 1715, en esta misma calle tenía una tienda el mercader Juan Bautista Cheverría.513 En 1716 poseía casa en esta calle doña Isabel de Torres, quien daba en arrendamiento una tienda al azucarero don Tomás de Paredes. Tomás Álvarez de Toro y Alvarado, payanés, testó en 1723:514 era dueño de una tienda de ropa en esta calle. Don Manuel de León Rosales y Villavicencio, vinculado a familias de Pasto, testó en 1735:515 también tenía un local para venta de ropa en esta calle.

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El alférez Esteban de la Puente y Mideros testó en 1739:516 tenía una tienda en esta calle, que la ANQ, N.6.

administraba su hijo Calisto.

ANQ, N.1. ANQ, N.1. ANQ, N.5.

Don José de Ugalde Unda, navarro, testó en 1740:517 su casa era . El coronel sevillano Pedro Buendía y Dávila testó en 1762:518 dejaba una casa de dos pisos en la calle

ANQ, N.6.

de San Agustín, junto a las Cuatro Esquinas, lo que demuestra que el nombre de calle de San Agustín,

Ídem.

se había extendido a la actual Guayaquil, entre Chile y Espejo.

ANQ, testamentarias, caja de 1762.

Sabemos que hacia 1765 la segunda casa a mano izquierda —yendo desde la Plaza Mayor o desde San

Ídem, N.1, Pro t o c o l o s , 1817.

Agustín, hacia el oriente, es decir en el lado norte de la primera cuadra— perteneció a doña Cecilia Barahona y González, de la familia de Santa Teresa,519 quien la vendió a don Pedro Herrera.

195 F e r n a n d o

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N o b o a

Para 1770, don Juan Manuel Constante y la Madre María Marta de San Joaquín vendieron una casa grande de dos pisos al guayaquileño don Joaquín Morán de Butrón y del Castillo. A este le heredó su hija doña Isabel Morán Abeldebeas, que aún la poseía en 1829.520 En el censo parroquial de 1797521 aparecen en esta zona los siguientes propietarios: • Casa 63 del doctor don Luis González y Yerovi, donde viven 18 personas, entre ellas don Andrés Sanz García, los Albán, etc. • Casa 64 del doctor Prudencio Vásconez de la Vega, clérigo ambateño muy notable. • Casa 65 de doña Andrea Ríos. • Casa 66 de la señora regente doña Josefa Andino, llegada a Quito poco tiempo antes. • Casa 67 de la familia Bustamante González. • Casa 68 de don José Layseca. • Casa 69 de doña Narcisa Serrano.

LA EVOLUCIÓN EN EL SIGLO XIX Si tomamos en cuenta que a fines de siglo habían cuatro casas y parte de la casa esquinera con la Flores, tanto en el lado norte como en el lado sur, inferimos de hecho que a principios de siglo las cosas no fueron iguales pues, por la cercanía a la quebrada, el sector no era apetecible en su porción oriental, aunque sí en la occidental. En 1811, el citado don Pedro Herrera vendió su casa a don José Layseca, quien con su mujer solo la mantuvieron seis años. Dicen los documentos que era una casa central , indicando nosotros que la voz mestiza con la cual se llamaba la quebrada significaba . Conocemos un documento de 1813 por el cual doña Mariana Abeldebeas cede su casa en el lado sur de la calle a su hija doña Isabel Morán. Ddebía ser una casa grande que ocupaba la mitad de la cuadra. Consta que hacia arriba (al oeste) estaba la casa esquinera del clérigo riobambeño José Camacho, y hacia el oriente, lindando con la actual Montúfar, la casa de los Tiba que eran indígenas. Frente a la casa de los Morán estaba la de don Tomás Bustamante. 520

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ANQ, N.3, Pro t o c o l o s , 1829, fianza que da Isabel Morán a favor de fray José Barona.

El 18 de julio de 1817,522 don José Layseca y Robles, oriundo de Santa Fe de Bogotá, y su esposa doña Rosa Aguilera y Bustamante vendieron la aludida casa a doña Manuela Villaespesa, pariente de uno de los últimos funcionarios de la Audiencia. Los límites eran estos:

ACQ, Gobierno, censo 1797 - 1799. ANQ, N.1, Pro t o c o l o s , 1817.

• Por la entrada: casa de don Javier Proaño, donde vivía el receptor de la real Hacienda Mariano Villamar.

196 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

• Por un costado: casa del escribano Ignacio Loza, que sabemos por documentos de l8l3 que estaba a mitad de la cuadra en su lado norte. Tenía además una gran huerta que abrazaba a la casa de al lado, por detrás. • Por el otro costado: casa de don Marcelino Montenegro. • Por las espaldas de la casa: la huerta del escribano Loza y el corral de don Ramón Plazas, cuyo frente quizás daba a la calle Mejía. De tal manera que las tres casas del lado norte de la cuadra entre Montúfar y Flores deben haber pertenecido en 1817, subiendo desde la Montúfar, a: • Ignacio Loza, en mitad de la cuadra, con una gran huerta posterior que daba a la Montúfar. • Don José Layseca, de quien sabemos que estaba a su vez frente a los Proaño Yerovi. • El presbítero Marcelino Montenegro y Ríos, en la esquina con la Flores. Se sabe que en 1817 la casa que antes fuera del doctor don Tomás de Bustamante Zeballos había pasado al ciudadano José Ponce, viudo de doña Tomasa Tobar y Auz. En dicho año, Ponce la enajenó al ya conocido escribano Ignacio Loza. Era una casona central de dos pisos, de la cual el 26 de junio de 1830 Ponce ratificó la venta anterior:523 señaló que la casa estaba en la y que su valor era de 3 400 pesos. El clérigo Francisco Javier Proaño y Araujo testó en julio de 1825:524 tenía una casa en esta calle, que la heredaron sus hijos Felipe y Petrona Proaño Yerovi de Holguín. Sabemos que en 1817 esta casa era, en el lado sur de la calle, la segunda casa desde la esquina de San Agustín, frente a los Layseca Bustamante y que Proaño no vivía allí, sino el inquilino que era el receptor Mariano Villamar.525 El 27 de enero de 1829,526 la señora Isabel Morán Abeldebas, que había heredado la antigua casa de su padre, en gran parte de la acera sur, otorgó fianza sobre esta casa a favor de su hijo Francisco Javier Salcedo Morán. La fianza fue a favor de fray José Barona y el costo de la casa era de 2 500 pesos, suma importante para la época, bajo estos límites: • Por un lado (seguramente hacia el oriente): casa del señor Felipe Viteri. 523

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• Por otro lado (debe ser hacia el oeste): casa de la señora Isidora Navarro. ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , junio 1830. ANQ, protocolos Santacruz.

ante

ANQ, N.1, 1817, venta de casa, los Layseca Aguilera a la señora Vi l l a e spesa. ANQ, 1829.

N.3,Pro t o c o l o s ,

• A las espaldas: casa de la señora Mariana Tinajero, que debía haber dado a la calle Flores. El 13 de agosto de 1831, el clérigo Dr. José Bernardo Arias Blanco remató una casa en el lado sur de la primera cuadra . La conservó trece años. Según los documentos censales de 1833, aparece que en el lado sur de la primera cuadra vivían desde la Montúfar:

197 F e r n a n d o

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N o b o a

• Los Tiba. • Los Morán Abeldebeas y María Camacho, heredera del cura Camacho. • Por las calles colindantes estaban las casas del clérigo José Sánchez y doña Joaquina Ortega, de 50 años. • Te resa Reyes, de 50 años, el pintor José Díaz, de 40 años, en el sector de la actual Montúfar, etc.527 El 27 de septiembre de 1837, ante el notario Miguel Munive, el abogado Dr. Pablo Vásconez Naranjo, en su calidad de albacea de doña Josefa León y Mosquera, vendió una casa a doña Dominga Cevallos, frente a la casa del clérigo Dr. José Bernardo Arias. Como sabemos con seguridad que esta casa estaba en la esquina suroriental, la de la venta obviamente estuvo en la esquina nororiental de la Chile y Flores. La señora Cevallos mantuvo esta propiedad durante 25 años. Doña Isabel Villacís Játiva, de familia oriunda de Ibarra, testó en 1840:528 su casa estaba frente a la puerta falsa de San Agustín. Según el censo del Sagrario, hecho en 1840, las tres casas del lado sur de la primera cuadra, parece que incluidas las esquinas, se habían convertido en cinco casas que pertenecían a: • Agustín Dávila Chica, natural de Cuenca y casado con la señora Josefa Donoso Mena. Debe haber dado casi totalmente a la actual Flores. • Cura José Bernardo Arias. • Isabel Morán de Salcedo, a quien ya conocemos. • Ramón Bermúdez y Cayetana Tiba, cuyo mayor frente debió haber estado en la actual Montúfar. Todo esto evidenciaría el cambio constante de los propietarios en la cuadra. A su vez, como vecinos de los anteriores aparecen: Pedro José Cruz; José Morillo; Dionisio Martínez, indígena (que debe haber mirado a la Montúfar); y el tejar de José María Brizón, que también limitaba con seguridad con la calle Montúfar.529 Según el mismo documento y para 1840, aparecen como vecinos del sector: Enrique Ramírez Puerta, el clérigo Dr. Justo Pástor Torres, don Manuel Cornejo y don Miguel Maldonado León. 527

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AMQ, censo de 1833. ANQ, protocolos ante Munive. Ídem, 1840.

El 23 de marzo de 1844, en la notaría primera de Quito, la señora albacea del cura Arias Blanco decidió vender la casa de dos pisos del clérigo a Juan Aguirre Zuleta y su mujer Antonia Arregui. Los límites eran estos:

198 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

• Al frente: Dominga Cevallos. • A la derecha: casa de Isabel Abeldebeas (era exactamente Morán Abeldebeas). • A la izquierda de la casa: la difunta Dolores Tiba, indígena. • A las espaldas: las respectivas huertas de las señoras Morán y Tiba que abrazaban por detrás a la casa del cura Arias Blanco. El clérigo barbacoano Mariano Ángel Quiñones y Cabezas testó en 1861:530 tenía casa en esta aludida calle de San Agustín. El 2 de octubre de 1862, ante el notario sexto, la ya conocida doña Dominga Cevallos vendió su casa en la calle que va de la esquina de San Agustín a la Sala de Armas al escribano señor Mariano Soria. Dice la vendedora que se reserva el derecho de . La casa quedaba de seguro en el lado norte de la primera cuadra. Su valor era de 1 500 pesos, suma mediana en su tiempo. Indica estos límites: • Al frente: casa de Juan Aguirre Zuleta y que antes fuera del Dr. José Bernardo Arias. • A la derecha: casa de la señora Clara Sandoval que, como veremos, era la segunda casa viniendo desde la Montúfar. • A la izquierda y a las espaldas de la casa: casa de doña Rosa Molineros, que debía haber dado a la Flores. El 19 de agosto de 1876 se dio la quiebra de la citada señora Clara Sandoval (oriunda de Latacunga), y su casa pasó al Dr. Fidel Egas, connotado abogado.531 Doña María Luisa Enríquez Corral testó en 1896:532 tenía una casa en esta calle, al lado , que es como se conocían a los primeros servicios higiénicos de la ciudad, indudablemente junto a la quebrada de las Tenerías. Doña Leonor Pérez Pareja de Borja testó en 1898:533 tenía una casa en esta calle que, al renunciar a los derechos hereditarios sus hijos varones Carlos, Luis Felipe, José María y Juan Elías, pasó a su hija Mariana Borja Pérez de Pérez.

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ANQ, protocolos Acevedo.

ante

ANQ, Caja de 1876.

2. LA CALLE DE SAN AGUSTÍN DESDE 1894 HASTA MEDIADOS DEL SIGLO XX HISTORIA DE LOS FRACCIONAMIENTOS URBANOS

ANQ, N.1 ANQ, cesión de herencia.

La primera cuadra al oriente de la calle Montúfar recién tomó cuerpo a principios de siglo, cuando don

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N o b o a

Pedro Cornejo Mantilla edificó su enorme casa por sobre la quebrada rellenada en el lado sur y la familia Baca Proaño compró parte del lado norte.534 En la primera cuadra colonial —segunda cuadra desde el siglo XX— entre Montúfar y Flores, existían cuatro casas del lado norte en 1894: La primera: de Marcos Enríquez Corral, que es la misma que declaró como suya la señora María Luisa Enríquez al testar en 1896. Ya sabemos que junto a esta casa —es decir en plena Marín de hoy— estaban los primeros excusados de la ciudad. Poco después la adquirió la señora Merc e d e s Suárez, nacida por 1854, con su esposo el señor Melchor Garzón, dueños también de otra casa en la calle de la Loma. La casa ocupaba más de un cuarto de manzana, su principal entrada estaba por la Montúfar, pero tenía otra pequeña por la calle Chile. Muerta su dueña, hacia 1931, la here d a ro n sus dos hijos, Ricardo y Segundo Melchor, y las hijas de su difunto hijo Francisco, pero Melchor cedió sus derechos sobre la hacienda en Pifo a los otros here d e ros; pagó además una deuda de la testamentaría y se quedó con más de la mitad de la casa. El señor Garzón tenía un bello jardín en el segundo piso, hizo cavar el jardín en su parte oriental hacia la Montúfar y debajo hizo caballerizas; iban y venían frecuentemente de su hacienda Pitaná en Pifo y preferían usar el caballo, antes que otros medios. A su muerte, se hicieron tres casas de la casa original que here d a ron sus hijas, dos quedaron con su entrada hacia la Chile y la tercera hacia la Montúfar; esta quedó para su hija Paca. En tercera generación here d a ron pues la casa sus hijos los Garzón Silva —sobre todo M e rcedes la mayor— quienes la fueron vendiendo poco a poco, hasta que los últimos retazos fueron vendidos en 1999 al señor Mena.535 Cabe decir que, según la prensa de septiembre de 1918, el abogado Telmo R. Viteri ofrecía en venta 5 000 metros cuadrados al término oriental de la carrera Chile, a solo tres y media cuadras de la Plaza Mayor. Estaba allí una casita de cinco piezas y pequeñas vertientes de agua. Advertía que quien compraba podía edificar tres casas e implantar alguna fábrica y decía además que, si bien el metro cuadrado en la Plaza Grande estaba a 200 sucres y a tres cuadras a 60 sucres, él lo ofrecía solamente a tres sucres el metro. Aquello de las tres cuadras y media nos hace presumir que estaba media cuadra más al oriente de la esquina de la Chile y Montúfar. Luego, en segundo lugar, tenemos la casa del abogado Dr. Fidel Egas Rueda, natural de Cotacachi, que fue Ministro de la Corte Suprema en dicho año de 1894. Esta casa, con seguridad, se debió formar hacia 1860, cuando la enorme casa del medio —de los Bustamante y luego de los Loza— debió 534

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Papeles de Bolívar Chiriboga Donoso.

dividirse en tres pequeñas. De los años veinte al cuarenta del siglo XX, fue de las cuatro señoritas Román, ya muy ancianas. Actualmente vive su único heredero.536

Testimonio de la señora Isabel Garzón Silva, Quito, octubre 22 del 2003. Ídem.

La tercera fue, en 1894, de Ana Pérez, que seguramente es la misma de los Pérez Pareja y luego de los Pérez Borja. Debió ser la parte central de la vieja casona colonial del medio. Pasó a ser

200 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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N o b o a

propiedad de Felicísimo Ve ga, el famoso millonario y ava ro nativo de Yaruquí, dueño también de la casa adjunta más arriba. Vega levantó esta casa de tres pisos. En 1917 tuvo la ocurrencia de ve n d e r el primero y el segundo pisos a don Benjamín Chiriboga Policarp —fervo roso alfarista— y a su esposa Te resa Donoso Moncayo, conservando para él el tercer piso, que finalmente también lo cedió a los Chiriboga Donoso.537 Y la cuarta casa, antes de la esquina con la Flores, era en 1894 de Lizardo Vega. Sin duda fue parte también de la casona colonial. La heredó Felicísimo Vega, hábil escultor, quien hacia 1905 talló la portada de esta casa, que resultó bellísima,538 tanto que muchos podrían datarla cual si fuera colonial. Hacia 1910 y 1920 vivía en esta casa doña Alegría Merino de la Guerra539 (Mama Alico), quien consideraba que había sido solar de sus antepasados, en lo cual sin duda habían elementos fabulatorios. Hacia 1930 pasó a ser propiedad del notable clérigo machacheño Dr. Manuel María Betancourt, sitio de reunión de varios clérigos muy aficionados a Baco, entre ellos el famoso Manuel María Pólit Moreno.540 Cerraba la esquina con la Flores una tienda en la casa del célebre jurista Dr. Alejandro Cárdenas, dueño también de la casa adjunta.541 Desde 1930, esta casa era la más grande de la cuadra, pues tenía un frente de más de 50 metros a la calle Chile. Perteneció al conocido banquero Humberto Albornoz Sánchez, quien luego trasladó su residencia al norte de la ciudad.

LAS CASAS DEL LADO SUR ENTRE 1894 Y 1950 En el lado sur también habían cuatro casas en 1894, hoy son siete, incluyendo las dos esquinas: 537

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Papeles de Bolívar Chiriboga Donoso. Testimonio de don Benjamín Chiriboga Policarp.

La primera, en la esquina con la Montúfar, era de Agustín Espinosa de los Monteros; tenía una sola tienda. En los años 1930 y 1940 pasó a pertenecer a una familia Valencia. De esta casa, a principios de siglo —seguramente en la segunda década del mismo—, se desprendió otra casa más pequeña hacia

Testimonio de Hort e n s i a Morán Noboa, Quito 1985.

el occidente, que pasó a ser propiedad del conocido pastelero don Alejandro Rivas.542

Papeles de Bolívar Chiriboga Donoso.

La segunda casa tradicional —hoy tercera— fue en 1894 de la colombiana Griselda Pérez de la

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

en su extensión, pero de amplio fondo. La adquirió, por el año 1900, el notable pintor Alejandro

Papeles de Bolívar Chiriboga Donoso. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio del Padre José María Va rgas, Quito.

Villota, oriunda de familias de Pasto y mujer de Landázuri.543 Era y es una casa de fachada limitada Salas Estrada, nacido en 1843 y quien vino desde su casa en la calle Manabí y Montúfar. El Padre José María Vargas visitaba esta casa muy joven, hacia 1920, ya interesado en la vida y obra de nuest ros célebres artistas.544 Aún en los años 1940 seguía en propiedad de la familia Salas. Posteriormente pasó a ser propiedad de doña Lucila Álva rez Ubidia, esposa del gran intelectual ambateño el Dr. Víctor Manuel Garcés Ubidia.

202 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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De esta casa también se desprendió otra en los primeros años del siglo XX. La cuarta parte de la casa anterior pasó a ser propiedad del agricultor pastense radicado en Latacunga don Carlos Egas Moscoso y de doña Salomé Moscoso Maldonado, quienes aquí vivieron por lo menos de la década de 1920 en adelante. Luego vivieron aquí sus nietos los Terán Egas. En la década de los cuarenta fue vendida al Dr. Ángel Muirriagui Donoso, oriundo de Riobamba.

LA CASA DE LOS CINCO PATIOS La tercera casa tradicional —hoy la quinta en la acera sur— es muy típica: posee cuatro patios interiores y un enorme patio que posteriormente fue dividido en tres, de tal manera que era otra casa de los siete patios, a la final. Está a mitad de la cuadra, aunque más cerca a la actual calle Flores y con gran fondo, que casi llegaba a la calle Espejo por su parte posterior, fue sin duda la mayor casa de esta acera sur y lindaba en opulencia con la del frente, que luego fue del Dr. Cárdenas. Debió haber sido levantada hacia 1820, hecha con paredes de un metro de ancho, siguiendo la moda colonial. Nos parece que es la casa que perteneció, en 1811, al cura don Javier Proaño Araujo; fue en 1894 de Carmen Romo de Narváez, comerciante que hizo fortuna con su actividad, cuyo nieto, el Dr. Aurelio Mosquera Narváez, llegó a ser Presidente del país. Por 1928 la compraron Juan Miño y su esposa, la ambateña Vi rginia Ortiz Hidalgo. El señor Miño murió poco después y la señora, sintiéndose sola, llamó para que la acompañaran a tres familias enteras que eran sus sobrinos: los López Aguirre, los Paz Guerre ro y los Merlo Guerre ro. También vivió aquí su hermano el canónigo Ortiz Hidalgo. Los inquilinos que ocupaban el segundo piso moraron por muy largo tiempo en esa casa: tal los Espinosa Baca, los Sarmiento, los Zurita, etc. La casa tenía tres tiendas: la primera o más oriental fue primero dormitorio de los dueños de casa y luego pasó a su objeto definitivo; luego estaba la puerta de calle, continuaba hacia el oeste la tienda de Matilde Belalcázar, que la ocupó por largo tiempo; la tercera fue zapatería. Esta casa fue vendida para 1947 al señor Jorge Cruz, nativo de Latacunga .545 La cuarta y última casa tradicional —sexta actual— era bastante pequeña y no tenía tiendas; nos parece que fue una casa secundaria de la gran casa esquinera que miraba a la Flores. Debió haberse formado en la segunda mitad del siglo XX como propiedad independiente. Para 1894 era su dueño el clé545

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Testimonio de la señora Olga Merlo Guerrero de Cadena, Quito, octubre del 2003. Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio del economista Jorge Moreno Egas. Testimonio de la señora Olga Merlo Guerrero de Cadena, Quito, octubre del 2003.

rigo Darío Montaño Calderón y quedaba, como hemos dicho, antes de la esquina con la Flores: en esta casa estaba la consulta, en dicho año, del Dr. Celio Enrique Salvador, abogado.546 En esta casa vivió también doña Juana Moncayo Yepes en alguna temporada, así como los niños Jorge y Enrique Moreno Moncayo, hijos de la citada señora.547 En los años 1930 y 1940 fue del Dr. Benjamín Terán Sánchez, chimbeño, Ministro de la Corte en Quito.548 Cabe advertir que la última casa tenía su frente principal a la Flores, aunque un poco más de metros hacia la Chile. Perteneció, en los años cuarenta del siglo XX, a un cura de apellido López. Al hablar de la Chile, daremos amplios datos sobre esta casa.

203 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

LAS CASAS FRENTE A SAN AGUSTÍN Al hablar de la Placeta de San Agustín daremos detalles más completos sobre esta cuadra. Hoy cabe decir lo siguiente: La segunda cuadra de la Chile, entre Flores y Guayaquil, en el lado norte, la ocupaba totalmente la muralla y luego la iglesia de San Agustín. Frente a la muralla existían tres casas completas: en la esquina, la del pastuso Miguel Miranda, en 1894, cuyo mayor frente daba a la Flores. Tenía seis tiendas hacia la Flores y cuatro hacia la Chile: dos eran de Natividad Velasco; la tercera, de Mariano Gaviño, que era correo urbano; y la cuarta, sastrería de Rafael Quijano.549 Esta casa fue, por largo tiempo en la Colonia, de los Cañaveral y de los Albornoz.550 De Miranda pasó al Gral. Francisco Hipólito Moncayo Yépez (el Gato de Yeso). En segundo lugar estaba la casa que fue de los Barnuevo en la Colonia. En 1875 sucedió un hecho muy grave: en esta casa murió al dar a luz la señora Mercedes Mata Viteri, pero muy pronto se tejieron comentarios de que había muerto asesinada; se lo complicó a un conocido abogado de la ciudad, los vecinos dieron fe de que había continuos maltratos entre ellos y que vieron varias veces que a la señora la arrastraban del cabello. Luego se comprobó que el entierro fue de apuro, que se la enterró simplemente en una cobija y sin caja mortuoria, asunto que se había empezado a poner de moda. El proceso jurídico levantado por los hermanos de la señora Mata duró algunos años, y en 1877, con motivo de la muerte del Arzobispo Checa, el asunto pasó a la luz pública a través de varias publicaciones.551 La casa pasó a Mariano Astorga, su dueño en el citado 1894; este arrendaba en los bajos un local para la agencia funeraria de don Darío Cortés Aristizábal. Luego compró esta casa don Fernando Pérez Quiñones. En época de Caamaño (1884-1888), esta fue la residencia presidencial.552 Allí se dio un famoso baile en 1888 al término del período presidencial, según lo cuenta don Juan León Mera en sus 549

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551

552

553

554

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Jurado Noboa, Fernando, LOS ALBORNOZ , FAMILIA FUNDADORA DEL PAÍS, Quito, 2002.

CARTERAS, editadas por la Casa de Montalvo en el centenario del nacimiento del poeta. La tercera casa, haciendo esquina con la Guayaquil, ha sido historiada con detenimiento al hablar de la placeta o plazoleta de San Agustín, al igual que las otras dos casas vecinas. Aquí cabe recordar que durante el largo tiempo colonial fue casa de los De la Carrera, alféreces reales de la ciudad. Luego fue

Andrade, Roberto, MONTALVO Y GARCÍA MORENO, Cajica, México. I n f o rme de doña Magdalena Pérez de Pallares, Quito, 1982.

del Cnel. Nicolás Vásconez —dueño también de casa chica hacia el sur, dando ya a la carrera Guayaquil— y, en el segundo piso, hizo hacer varios adornos con la de su apellido. En 1894 pertenecía al Dr. Antonio Portilla Lanchazo.553 Este sector de la ciudad fue también muy cotizado por los comerciantes:

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Andrade, Roberto, MONTALVO Y GARCÍA MORENO, Cajica, México.

• En la esquina de la Flores con la Guayaquil tuvo, en 1906, su agencia de coches urbanos el señor Enrique Jurado Cali.554

204 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

• En abril de 1909, el abogado Augusto R. Jácome declara haber abierto su estudio frente a la iglesia de San Agustín, en casa del señor Jesús del Hierro. • En mayo de 1912, el señor Enrique Lasso (ya con dos eses a que no moleste la gente) dice que en la agencia de coches La Reina, frente al templo de los Agustinos, se pueden hacer pedidos de madera de eucalipto, que se garantiza calidad de primera. Los vecinos en 1922 • S/n: Francisco Álvarez P. • S/n: con la Flores: Abarrotes de J. G. Armijos • S/n: con la Guayaquil: Agencia de coches Parisiense • S/n: Restaurant de Ezequiel Bastidas • S/n: Francisco Pérez Borja (sin duda en casa heredada a su madre) • S/n: Dr. Celio Enrique Salvador (que en 1894 tenía en casa del cura Montaño) • Núm. 14: Miguel Ángel Zambrano, Dr. Carlos Proaño Álvarez, Aureliano Silva Nieto y Dr. Alejandro Troya. Pastelería de Alejandro Rivas N. y restaurante de G. Miranda • Num. 16: Dr. Gustavo Buendía Jácome • Num. 18: Academia de la Lengua • Num. 24: Francisco Puebla, zapatero • Num. 26: Cámara de Comercio • Num. 26: Cancillería

3. LA CALLE DE ESCRIBANOS: COLONIAL CALLE DE SAN AGUSTÍN, PRIMERA CALLE DEL COMERCIO O, FINALMENTE, CALLE DE ESCRIBANOS (CHILE, ENTRE GUAYAQUIL Y VENEZUELA) Ha constituido una de las calles más importantes de la ciudad por estar inmediata a la Plaza Mayor. Por documentos de 1674 consta que se llamaba , en 1795 se llamaba quien tenía un negocio vecino en el portal del Obispo. En 1846 se la conocía como

205 F e r n a n d o

> debido a la importancia de sus tiendas y almacenes; con el mismo nom-

bre figura en documentos de 1872. Finalmente se la conoció como a partir de 1874 más o menos. Las dos primeras casas en su polo oriental, limitantes con la calle Guayaquil, han sido descritas minuciosamente al tratar de la Placeta de San Agustín, cosa igual puede decirse de las casas del polo occidental, que limitan con la Plaza Grande. Cabe recordar que existían cuatro casas en el lado norte de esta cuadra: la del medio, sin tiendas por 1674 era del mercader vasco José de Larrazábal y de su mujer Margarita González. Se llamaba, por entonces, . A su vez, la casa de en medio en el lado sur fue durante varias generaciones de la familia Lasso de la Vega. Pertenecía en 1745 al clérigo Martín Sánchez.

LOS NEGOCIOS EN 1795 EN LA CALLE DE PEDRO CALISTO (HOY CHILE ENTRE GUAYAQUIL Y VENEZUELA) ACERA N.1 (NORTE) a) Pedro Herrera (*) b) Ventura Padilla c) Marcos Pizarro d) Joaquín Betancourt e) Félix Proaño f) Relojería g) Tienda Vacía h) Josefa Moreno

ACERA N. 2 (SUR) a) Antonio Vera b) Isidro Padilla c) Nicolás Sarmiento d) Juan Andrade e) Agustín López de Sosa f) Jacinta Espinosa g) Mariano Capelo h) Marcelino Pérez i) Vicente Flores j) Tienda Vacía k) María González l) Victoria Rodríguez

(*) La mejor tienda de la ciudad Fuente: Las tiendas de la ciudad de Quito cerca 1800, Manuel Lucena (Rev. PROCESOS, 9, 125).

Don José Álvarez Torres dejó dos casas, una grande y otra pequeña en San Agustín y que eran 555

556

Archivo de Filoteo Samaniego Salazar, Quito, 1995. ANQ, protocolos ante Juan Bautista Castrillón, 1864.

adjuntas, además las mejores entre la decena de casas que tenía este caballero; fueron avaluadas las dos en 15 152 pesos, suma astronómica para la época.555 Fue su dueño entre 1800 y 1843, más o menos. Se trata de la misma casa del medio que fue vendida hacia 1845 por doña Teresa Villacís de Álvarez a doña Valentina Serrano de Klinger, quien así lo declara al testar en 1864.556 En esta casa se fundó, en

206 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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1850, la primera Academia de Escultura, dirigida por Camilo Unda.557 Esta casa pasó luego, hacia 1865, a poder del Cnel. Manuel de Ascázubi Matheu, quien la poseyó solo por pocos años, pues la vendió al gobierno de su cuñado el Dr. Gabriel García Moreno en 1870.558 Debió haberla reconstruido totalmente el Arq. Diego Benalcázar, quien figura como su constructor:559 consta en el documento que la casa estaba muy destruida por los sismos de 1859 y llama la atención la cantidad de flores de lis en la fachada, lo cual ha hecho presumir que perteneció al linaje de los Maldonado. Don Gualberto Pérez dice que el constructor del Palacio de Justicia fue también el francés Juan Bautista Mendeville. Quizás actuaron conjuntamente los dos. En dicho documento de compra-venta consta que, al oriente de Ascázubi —es decir mirando a la plazoleta—, vivían los Zaldumbide Gangotena y hacia el oeste, los Rebolledo Velasco, de tal manera que no había sino tres casas en este lado. A su vez, en el lado norte, solo figuran las casas de Carmen Sampedro de Echanique, que también miraba a la plazuela, y luego la de doña Leticia Arteta Borja. El mismo año 1870 vivió aquí don Darío Fiallo Pontón en unión de doña Felipa San Miguel Merino, pues la casa, a más de las funciones públicas, dejaba también espacios para arrendamientos. Aquí nació su hijo Ermel. La familia Fiallo debió haber vivido unos ocho años en la casa, pues Ermel cursó la primaria en la escuela de los Hermanos Cristianos.560 En 1846, el almacén del señor Joaquín Terán quedaba en la ; era uno de los tres sitios de expendio de periódicos en la ciudad.561 En la aludida casa comprada por García Moreno se fundó la Escuela de Bellas Artes en 1870, cuyos directores fueron los maestros Giovanni Rossa y el español José González Jiménez. Para entonces era una de las mejores casas de la ciudad, según Alcides Enríquez en la página 48 de su conocida obra comparativa de Quito en 1822 y 1922. Poco después funcionaron en esa casa, y por cerca de un siglo, el Palacio de Justicia y las Escribanías que hasta 1875 habían estado en la calle García Moreno, en el edificio de la Universidad. En esa misma casa estuvieron también el Tribunal de Cuentas y los Jueces 557

558

559

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561

Navarro, José Gabriel, LA PINTURA EN EL ECUADOR, p. 176. Gómezjurado, Severo, VIDA DE GARCÍA MORENO , tomo IX, p. 18. Papeles de Miguel Ángel Benalcázar, Quito, 1983.

Letrados. En lo que fueron las antiguas tiendas de comercio, se establecieron las seis escribanías. El personaje más importante vinculado a esa casa fue don Juan León Mera, Presidente del Tribunal de Cuentas en el gobierno del Dr. Luis Cordero.

El Tribunal funcionó en el tercer piso del Palacio de Justicia hasta 1927, cuando fue extinguido y en su lugar el gobierno de Ayora creó la Contraloría General de la Nación. Para la nueva entidad, se adquirió la casa centenaria, que pertenecía al Dr. José María Ayora —hermano del Presidente— situada en

Testimonio de los hermanos Fiallo Morán, Quito. Hallo, Wilson, HISTORIA DEL PERIODISMO EN EL ECUADOR.

la calle Mejía, entre Guayaquil y Venezuela, es decir a una cuadra del sitio que estamos historiando. Allí funcionó la Contraloría hasta 1965, cuando se trasladó al norte de la ciudad, y la casa de dos patios fue derrocada siguiendo la absurda costumbre de la época.

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N o b o a

En 1876 la Academia de Bellas Artes seguía funcionando en esta casa de la carrera Chile.562 En 1882 y frente a las citadas escribanías pusieron un almacén con artículos comprados en Guayaquil, los señores Rafael Portilla y Manuel Semblantes, ambos prominentes liberales. Nombraron gerente al colegial Daniel Andrade Rodríguez, hermano de los célebres Roberto y Julio Andrade.563 Para 1893, en esta casa tuvo su célebre galería de arte don Ignacio Benalcázar —hijo de Diego—, escultor muy conocido de la ciudad. Su taller ha sido descrito por José Gabriel Navarro en su obra sobre LA ESCULTURA

EN EL

ECUADOR.

En 1903 y frente a las escribanías se dieron de palos Víctor Gangotena Posse y Enrique Gangotena Jijón con Pancho Aguirre Guarderas y su hijo Alfonso Aguirre Nájera. Los primeros estaban sumamente indignados por el argumento de la comedia , obra de Aguirre, y en la cual se zahería a la primera familia.564 Don Pancho quedó maltrecho, fracturado sus clavículas; guardó cama algunos meses y murió en enero de 1904. Para 1926 y frente a las citadas notarías abrieron su despacho profesional Alfredo Pérez Guerre ro y Luis Ignacio Coronel, este último fue también gran abogado como el primero, pero murió prematuramente.565 Un hecho trascendente sucedió en la casa en agosto de 1935, luego de que el Dr. Velasco Ibarra proclamó su primera dictadura: el Dr. Arroyo del Río, Presidente del Senado que acababa de ser defenestrado, salió a las nueve de la mañana del hotel Metropolitano, en donde se alojaba, a la vecina joyería de López. En eso apare c i e ron dos pesquisas con el objeto de tomarle preso. En realidad lo hicieron, pero el forcejeo era intenso, logrando el Dr. Arroyo penetrar al portón del vecino Palacio de Justicia. Al ver los detalles, el Dr. Segundo Álva rez Jácome corrió a avisar al Dr. Manuel María Borre ro, que se encontraba en sus labores de Ministro de Justicia, quien bajó 562

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565

N a v a rro, José Gabriel, Op. Cit. Martínez, Eduardo N., “El Bayardo”, p. 27. Testimonio de los hermanos José María y Vicente Aguirre González, Quito. Muñoz, Hugo, PEQUEÑAS GRANDES BIOGRAFÍAS, Quito.

atropelladamente y gritó a los guardias: — ¡Cómo es posible, majaderos, que se atrevan a tomar preso al señor Presidente del Senado! ¡Les ordeno que lo suelten! Arroyo logró zafarse y el Dr. Borre ro lo invitó a que se sentara entre los magistrados de la Suprema, pues sabía que pronto vendrían más policías, como en efecto sucedió. El Dr. Arroyo concibió entonces el proyecto de pasar por el tejado a la vecina casa de los León Larrea, que daba a la calle Guayaquil, pero al ver

208 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

la diferencia de metros, dudó y en buena hora, pues caso contrario habría tenido un grave accidente. A las once y media de la mañana, vino el Intendente y condujo al Dr. Arroyo al Penal.566 Fue, pues, la casa más histórica de la cuadra.

LOS NEGOCIOS FRENTE A LAS ESCRIBANÍAS Obviamente, las escribanías fueron una especie de centro medular de la ciudad, y frente a ellas giró durante largo tiempo la vida comercial de Quito. Veamos algunos ejemplos. De la casa situada exactamente al frente —en el lado norte— cabe precisar que en 1894 pertenecía al ibarreño Miguel Páez Jijón; en ella tenía su consulta el abogado Pedro Pablo Jijón Coronel.567 Este profesional, en febrero de 1910, sacó un aviso en la prensa en el que decía que tenía su estudio frente a las escribanías, en la casa chica de la señora Rosario Albán viuda de Mora. Un mes después se anunciaba que en la escribanía de Luis Fernando Mesías iba a rematarse la casa del señor Guillermo Ramos para proceder a una cómoda división entre sus herederos. En octubre de 1910 hay dos avisos de importancia: Víctor M. Granizo Ramos anuncia que ya no trabaja en Machala y que ahora atendía en la casa de doña Luz Echanique, frente a las escribanías. El mismo día, el abogado Carlos Monteverde Romero dice que se ha separado del servicio militar y que atiende de 9 a 11 y de 1 a 5, en casa de doña Rosario Albán de Mora. En noviembre de 1910, Ricardo Valenzuela comunica que ha trasladado su almacén

para sus

>

s e ñ o res Narváez hijos. En noviembre de 1911, el abogado Reinaldo Cabezas Borja dice que atiende en la calle Chile número 28. En noviembre de 1911, el conocido jurista ambateño Gabriel Moscoso Suárez tiene su estudio en la calle de las Escribanías. Diario EL COMERCIO de mayo de 1912 anuncia que Leonidas Pizarro M., en su almacén frente a las citadísimas Escribanías, vende vino, coñac, whisky y licores de toda clase. ¡Salud! 566

567

Pérez, Rodolfo, EL ECUADOR PROFUNDO, III, 321.

En 1913, los almacenes , en la calle de las Escribanías y junto a la relojería

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

metal, arañas, estatuas para luz, etc.

de Brauer, reportan haber recibido papel atrapa moscas, levadura Royal, Quaker, catres de fierro y de

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N o b o a

El mismo año aparece la publicidad de la compañía de M. R. Cabezas frente a las Escribanías: pro p o rcionaba cualquier cantidad de dinero, vendía muebles de Viena, compraba acciones hipotecarias, etc. La prensa de junio de 1914 comunica un hecho trágico: a las cuatro de la tarde, en la escribanía de Mesías, se dirimía un juicio civil entre los hermanos Ángel y Justiniano Barona Guzmán. Al terminar la sesión, Ángel pronunció unas palabras en contra de su hermano, pero este sacó una daga de acero y le infrigió una puñalada en el costado izquierdo; quiso darle más, pero el señor Elías Orbe se lo impidió. Justiniano salió entonces a la escribanía de Daniel Rodríguez, donde se ocultó, pues alguien dio la voz de que se le debía coger. Cuando llegaron los soldados, pidió un automóvil, pero la multitud lo impidió, hasta que llegó el Intendente, quien lo tomó del brazo y lo llevó a mejor sitio. En el mismo periódico, la tintorería Tobar saca su anuncio. Estaba indudablemente en el mejor lugar de la ciudad: frente a las Escribanías. Por último, en 1922, en casa de la señora Luz María Freile de Zaldumbide, diagonal a San Agustín, se venden un Ford de cinco asientos y un Chalmers cerrado de siete asientos. Quito era ya una ciudad con lujos.

4. HISTORIA DE LA CALLE DE LA MERCED; TAMBIÉN LLAMADA DE ARTETA EN EL SIGLO XVIII; LUEGO, CALLE DE PICHINCHA Y, FINALMENTE, CALLE QUE VA DE LA PLAZA MAYOR A LA PLACETA DE LA MERCED. Es el tramo de dos cuadras de la Chile entre García Moreno y Cuenca. El tramo entre la García Moreno y Benalcázar estaba ocupado por el Palacio de la Audiencia y el monasterio de las Conceptas, de lo cual hemos dado razón al tratar de la historia de la Plaza Mayor. Aquí cabe advertir que, en abril de 1924, en el gobierno de Córdova se dio principio a la construcción del frente que daba a la calle Chile de la nueva Casa de Correos . En los documentos coloniales figura como , pero desde por 1770 empezó a ser conocida como gracias a las acciones de mejora de calle y de casa hechas por don Joaquín de Arteta y Larrabeytia, comerciante guayaquileño afincado en Quito.

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Parece que a raíz de la batalla de Pichincha, se la conoció con este nombre, quizás por mirar directamente al histórico campo de batalla o tal vez porque de las terrazas vecinas a esta calle, los quiteños vieron la histórica batalla. Este dato de haberse llamado Pichincha lo publicó Luciano Andrade Marín. Es lo cierto que en la nomenclatura de la ciudad creada por el municipio de 1860, cuando se nominaron por primera vez 28 calles de punta a punta, rompiendo el esquema colonial, las cuadras 23, 24, 25 y 26, se llamaron Chile, aunque nosotros no conocemos el por qué se tomó cuatro series, cuando normalmente solo se tomaba dos series.568 Para entonces la calle Pichincha era la Benalcázar actual. Sin embargo, a nivel popular e incluso en las escrituras se habló mejor de la calle , como lo vemos en la venta de la casa pequeña de los Veintemilla al coronel José María López. Aquí, pues, vamos a hablar de las siete casas de la Benalcázar hasta la Cuenca y que evolucionaron así:

LA CUADRA EN EL SIGLO XVII Según el testamento de Cristóbal de Troya, fundador de Ibarra,569 existían tres casas del lado norte: la primera, haciendo esquina con la Benalcázar, pertenecía a los herederos de Diego Rodríguez de León y de doña Leoncia de Figueroa y Estrada; era una casa enorme pues abrazaba por su espalda a la siguiente del capitán Troya. La de en medio era de dos pisos y estaba cubierta de teja; pertenecía a Troya. La de la esquina de la Merced era del gobernador Melchor de Peñalosa. Al frente, en el lado sur, se hallaba la casa de don Pedro de Arellano y Zúñiga y, a sus espaldas, el mismo Rodríguez de León. El clérigo payanés Francisco Velasco y Zúñiga testó en julio de 1662:570 era muy rico, pues tenía tres casas en la ciudad, todas adjuntas. Dice en el documento que la principal estaba que le habían costado 10 800 pesos al maestro Juan de la Cueva, su anterior dueño. 568

569

570

571

Enríquez, Alcides, MANIFIESTO SINÓPTICO COMPARATIVO DE QUITO EN 1822 Y QUITO EN 1922, p. 58.

Consta que, en 1689, la casa del difunto clérigo doctor don Felipe Berruete estaba en la esquina de la

ANQ, N.1, 1641.

propietario de esta casa, fundó capellanía a favor de la iglesia de San Francisco.571

cárcel (de Corte); su albacea el capitán Bartolomé de Zuleta Reales, la vendió ante el escribano López de Salcedo a favor de doña María Josefa Cevallos. En 1728, el cura don Francisco de Oteyza,

ANQ, N.5. ANQ, Censos y capellanías, caja 12, exp. 219.

Esto nos haría suponer que las casas de los dos lados no estaban sino en poder de cuatro propietarios.

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N o b o a

EN EL SIGLO XVIII En la segunda mitad del siglo XVIII, esta segunda cuadra tomó el nombre de (según Luciano Andrade Marín) porque, como lo hemos dicho, la casa esquinera con la Cuenca la había comprado el notable comerciante guayaquileño don Joaquín de Arteta y Larrabeytia y había colocado hermosas columnas salomónicas en su entrada, que aún hoy existen. Arteta rompió los esquemas feudales de la ciudad, dedicándose al comercio, actividad clásicamente prohibitiva para los segmentos más altos de la sociedad. A más de ello, la cuadra que iba desde la cárcel de Corte —en la esquina con la Benalcázar— hasta la iglesia de la Merced fue empedrada a costo del citado señor Arteta, razón más que suficiente para que largos años fuera conocida con su nombre.572 Según el censo del Sagrario de 1797,573 los propietarios de las dos casas completas del lado norte eran: doña Josefa Vallejo, riobambeña, casa en la que vivían trece personas; y don Joaquín Arteta, en la que moraban 32 personas (incluyendo un criado). Las cuatro casas del lado sur eran en 1797: la casa grande de don Francisco Orejuela, natural de Cali, en la que vivían 29 personas; la de don Pedro Pinto, con once habitantes; la de don José Montenegro, que vivía con cuatro personas; y la esquinera con la Cuenca, la más grande de toda la cuadra en general y que pertenecía a doña Rosa Suárez de Figueroa, viuda de Miranda, en la que vivían 33 personas.

EVOLUCIÓN EN EL SIGLO XIX LAS CASAS DEL LADO SUR. LA CASA DEL BAILE A ROCAFUERTE De acuerdo al censo de 1840, habían cinco casas en este lado, una más que 43 años antes. Desde la Benalcázar sus dueños eran: el señor González Alminate, la señora Álvarez, la señora Pareja Arteta y don Guillermo Pareja —considerado el vecino más importante de la manzana— y finalmente la casa del portero Salazar.574 Veamos ahora algunos detalles: La casa esquinera con la Benalcázar (suroccidental), entiendo que pasó de los Orejuela, hacia 1805, a 572

Núñez, JORGE, HISTORIA LA

MUJER

Y

LA

DE

FAMILIA ,

Quito. 573

574

575

AC. Gobierno, Censo de la ciudad en 1797-1799.

don Nicolás Calisto Borja, fusilado por realista en 1812, de tal manera que luego fue adquirida hacia 1826 por el Coronel chileno José Miguel González Alminate, luego varias veces Ministro de Estado de don Vicente Rocafuerte. Justamente, al asumir Rocafuerte el poder en 1835, el baile de gala se dio en esta casa. Durante el acto, por el exagerado número de invitados, cedió el piso y muchas parejas cayeron al primer piso; ventajosamente no hubo desgracias que lamentar.575

AMQ, censo de 1840. Testimonio de su descendiente el Dr. Jorge Salvador Lara.

Pasó la casa a su viuda, doña María Calisto Arteta de González Alminate; la heredó su hija Leocadia González de Donoso, mujer de Camilo Donoso Lasso.

212 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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En el carnaval de 1879 sucedió un hecho histórico: el joven médico Dr. Fidel del Castillo Reinoso se hallaba sirviéndose en la tienda de esta casa un dulce de higos, cuando violentamente fue llamado de urgencia a la casa de al frente, residencia del Gral. Veintemilla, Presidente de la República: Marietta, la bella e ilustre sobrina del Presidente, se había caído del segundo piso al patio y tenía fracturado un brazo. De las curaciones surgió al parecer el amor. El General jamás estuvo de acuerdo con ellos e hizo apresar en el cuartel de la artillería al médico. El objetivo era someterlo a un castigo infamante; a la final no se llegó a hacer y él fue desterrado a Chimbo.576 Esta casa tenía, en 1894, cuatro tiendas que daban hacia la Chile: la cantina de Serafín Arcos, las cigarrerías de Rafaela Cevallos y Apolinaria Salvador, finalmente la zapatería de Belisario Suárez.577 La casa pasó a ser propiedad de diario EL COMERCIO desde las primeras décadas del siglo XX.

LA CASA DEL CANÓNIGO SUCRE La siguiente casa poseía tres patios y era, en 1840, de la señora Álvarez, que seguía de dueña en 1862, según leemos en las escrituras de la casa de al frente. En noviembre de 1877, se apostó en esta casa el abogado Manuel Polanco Carrión, preso hasta ese día por su papel en la muerte de García Moreno unos pocos años antes. Polanco pidió permiso a Veintemilla para salir en su defensa en contra de la llamada protagonizada por conservadores de ese país.578 De aquí salió Polanco a la plazoleta de la Merced, donde recibió un balazo disparado al parecer desde la casa del Presidente; quien disparó fue un militar de apellido Valdez. Polanco cayó en la plazoleta antedicha. Juana Terrazas —joven revolucionaria— lo hizo trasladar a la casa aludida y allí murió horas más tarde.579 La propie576

577

578

579

580

Garcés, Enrique, BIOGRAFÍA DE MARIETTA DE VEINTEMILLA, Quito, 1945. Testimonios de Ricardo y Giga Descalzi del Castillo, Quito 1983.

dad, en 1894, era del colombiano Ramón Calvo; en sus bajos se hallaban dos tiendas: la zapatería de

Jiménez, Adolfo, Op, Cit.

siglo XX, perteneció a doña Leocadia Freile Donoso.

L o o r, Wi l f redo, G ARCÍA M ORENO Y SUS ASESINOS , Quito, 1955.

La tercera casa, que fuera de los Ramírez de Arellano en la Colonia, fue cedida por el gobierno a las

Testimonio de Manuel de Guzmán Polanco, Quito.

forma horizontal, tres patios y una huerta posterior que llegaba hasta la quebrada.

Ver diario EL COMERCIO de 4 de junio de 1930, Quito.

La casa esquinera con la Cuenca fue, en 1894, de Carmen Chiriboga Larrea de León, madre del ex

José García y la carpintería de Miguel Troya. En los años 1894 y 1895, se alojó en esta casa el canónigo Antonio José de Sucre, venezolano, quien vino a buscar los restos de su tío el Mariscal. Su labor estuvo llena de resistencias, debido al pésimo carácter del clérigo.580. En las primeras décadas del

madres de la Providencia. En 1880, se consideraba la casa más espectacular de la ciudad. En 1880 tenía

vicepresidente Francisco Javier León. A ella nos hemos referido al tratar de la plazoleta de la Merced.

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LAS HISTÓRICAS CASAS DEL LADO NORTE LA CASA DE LOS VEINTEMILLA EN LA ESQUINA DE CORTE Hay que recordar que este cruce de calles se llamaba desde el siglo XVIII por la presencia de la cárcel de Corte o especial en la esquina suroriental de estas dos calles. En el lado norte, la casa que hacía esquina con la Benalcázar es la clásica de los Veintemilla, es decir, diagonal a la esquina de Corte; primitivamente fueron tres casas, incluidas las dos adjuntas. La que daba enteramente a la Chile se llamaba y la adjunta que daba a la Benalcázar fue la caballeriza de la familia.581 La enorme casa fue comprada en 1815 por los hermanos doctores Ignacio y José Veintemilla Espinosa. En abril de 1838 el clérigo José declaró que su casa en la esquina de Corte debía 2 000 pesos de réditos al monasterio del Carmen Alto.582 En el censo de 1840, consta que esta casa ocupaba un tercio de la cuadra; al lado estaba la gran casa del Dr. Manuel María Salazar Lozano.583 En las décadas de los 1840 y 1850, la casa pequeña fue dada en arrendamiento al célebre coronel Carlos Demarquet, que había sido soldado de Napoleón en la campaña de Rusia y luego militar de los ejércitos libertadores a las órdenes de Bolívar.584 Muerto el Dr. Ignacio de Veintemilla, las acciones pasaron a su segunda esposa, doña Joaquina Tinajero Llona, pues su esposo había declarado que la casa pequeña en la que vivía el señor Carlos Demarquet debía adjudicársele a la señora Tinajero por la dote que ella había aportado y que realmente fue considerable, pues su padre, don Joaquín Tinajero y Guerrero, era una persona muy acomodada. Por tal donación, la señora Tinajero vendió la casa chica el 3 de abril de 1862 al Cnel. José María López.585 581

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585

586

Papeles del coronel Jaime de Veintemilla Morán, Quito, 1981. ANQ, Censos, caja 99.

Estaba , con estos límites: • Al frente: casa de la señora Vicenta Martínez. • A un lado (hacia el oeste): casa de don José María Pérez Calisto.

AMQ, censo del Sagrario en 1840. C a rvajal, Morayma Ofir, GALERÍA DEL ESPÍRITU, MUJERES DE MI PATRIA, Quito, 1949. ANQ, N.6, Pro t o c o l o s , 1862. A rchivo del Dr. Edgar Penagos Casas, Presidente de la Academia del Cauca, Popayán.

• Al otro lado (al oriente): la casa de los hermanos Veintemilla Villacís. • Por atrás: la misma casa grande de los Veintemilla. En 1877 estaba en esta casa la célebre fonda de Nicolás López, la mejor de la ciudad en sus tiempos; allí solían comer los desterrados políticos colombianos. Así lo testimonia el notable escritor payanés José María Velasco Castillo, uno de los intelectuales que sembró con sus luces a Quito, Tulcán e Ipiales.586 Cuando el General Veintemilla fue Presidente del país, esta casa fue muy célebre. Valdría referir que el mandatario tenía las habitaciones del primer piso llenas de periódicos y recortes escritos en su

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contra, a los cuales pegaba con engrudo. Mientras el peluquero le afeitaba todas las mañanas, hacía que su secretario, el coronel Rafael Guerrero, se los leyera; a veces se molestaba y en otras reía de buen grado. Solía finalizar sus advertencias con esta frase: — Digan lo que digan, nadie me quita la pinta que Dios me ha dado, puede que me digan mudo, bruto o cualesquier cosa, pero nadie me podrá decir feo ni tuerto, eso sí que no...587 A la caída de Veintemilla en enero de 1883, su casa fue saqueada. Ventajosamente lograron salvar varias de sus pertenencias de manos de los ladrones. Cuando la familia regresó, casi veinte años después, les fueron devueltas las propiedades.588 En 1894, tres tiendas daban a la Chile: la de María Paredes, la fonda de Rosa Barros y el estanco de Manuel Paredes.589 En esta casa murió Marietta, en 1907, y luego su tío el General, en 1908. La propiedad quedó en manos de Eduardo de Veintemilla Auz, quien terminó vendiendo la casa.590 Largos años funcionó aquí la célebre heladería de la Zamba Teresa (se llamaba Teresa Alvear). 587

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Testimonio de don Alejandro Espinosa Jarrín, yerno del aludido coronel. Archivo del Dr. Juan Vi t e r i Durand. Garcés, Enrique‚ MARIETTA DE VEINTEMILLA, Quito, 1945.

LA CASA PEQUEÑA DE LOS VEINTEMILLA Como hemos dicho, perteneció a la familia desde 1815. En 1862 pasó a ser propiedad del Coronel José María López. El 20 de junio de 1873 la casa era del clérigo ambateño Dr. Luis Rafael Albornoz Ramírez, quien pidió que se hiciera un inventario de la misma.591 Consta allí que estaba situada , que a un lado estaba la casa de los Veintemilla y, al otro, la de Ulpiano Quiñones.

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Papeles del coronel Jaime de Veintemilla Morán, Quito, 1981. ANQ, N.2, Pro t o c o l o s , 1873. Coba, José María, MONOGRAFÍA DE MINAS, p. 78.

Se conoce que en 1877, y al lado de los Veintemilla, vivía el célebre coronel Juan Ignacio Pareja, que era veintemillista; lo apodaban . Pareja engañó a un batallón formado de cien enemigos del gobierno, todos nativos de Perucho: les hizo entrar a su casa y que horadaran la pared oriental de la casa, con el objeto de que penetraran a la del Presidente. Mientras lo estaban haciendo, Pareja trajo un batallón gobiernista que atacó sin piedad a los peruchanos; murieron casi todos.592 En el fondo, se decía que esto significa .

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Esta casa pequeña pasó a ser propiedad del Ing. Abdón Ricaurte Venegas, quien aparece como dueño en 1894; tenía solamente dos tiendas: la sombrerería de Rafael Aguilar y la frutería de Carmen Cisneros.593 A principios del siglo XX, de 1903 a 1906, vivió en esta casa la familia Velasco Ibarra. Pedro, el hijo menor de la familia, recordaba haber ingresado a la Escuela en 1903, mientras vivía en esta casa,594 localizada por los quiteños durante décadas como . En las primeras décadas del siglo XX, funcionó en esta casa el salón de Mama Teresa, de valiosos personajes de su tiempo, casi todos procedentes del barrio de San Marcos, que hicieron su centro en este local hacia 1914: • N. Bastidas, alias Cañoncito. • El escribano Carlos Maya. • Ernesto Noboa Caamaño, quien efectivamente en la década de los diez vivía en San Marcos. • Benjamín Piedra, alias el Sordo. • N. Rodríguez, alias el Raposo. • Remigio Romero y Cordero, en plena juventud. • Nicolás Vega Rivas. • Manuel María Zaldumbide (el Bocón), erudito en historia.595 El grupo paraba allí dos veces al día: a las once se tomaban una botella de anisado peruano. A las seis de la tarde repetían, la visita y la dosis.

LA CASA MEDIANA O CASA PRESIDENCIAL La siguiente casa era enorme y casi topaba por atrás con la Mejía. Era la segunda casa tradicional en la cuadra, pero desde el siglo XIX es la tercera por las razones que hemos anotado hace pocas líneas. Hemos dado muchos datos sobre ella al tratar de la plazoleta de la Merced. Recordamos que en el 593

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Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

siglo XVII fue del capitán Cristóbal de Troya y en 1666 pertenecía al navarro Juan de la Cruz y Zúñiga.

Testimonio de Pedro Ve l a sco Ibarra, Quito, 1976.

En 1840 aparece como su dueño el Dr. Manuel María Salazar y Lozano.

Flor, Eduardo, EL SOYAPA Y EL JERÓNIMO, DOS GRANDES, en revista Familia, Quito, 13 de marzo de 1994. Jácome, Gustavo Alfredo, LUIS FELIPE BORJA, Quito, 1945. Testimonio del Dr. Ramiro Borja y Borja, ilustre jurista, Quito, 1990.

La casa fue comprada hacia 1842 por el joven abogado Dr. Juan Borja Lizarzaburu, recién casado con Leonor Pérez Pareja, vecina de la casa de al lado, sin duda con el ánimo de mantener a la chica cerca de sus padres. Aquí nació, en febrero de 1845, su hijo Luis Felipe, luego honra del foro ecuatoriano. Desde 1860, la familia Borja vivió una tragedia, pues el Dr. Borja cayó en desgracia frente al gobierno de García Moreno. La familia no tuvo algunos años ni siquiera para pagar el alumbrado y Luis Felipe debía acudir al vecino convento de la Merced para alumbrarse en él y estudiar durante las noches.596 La casa fue vendida en 1862, en plena crisis.597

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Fue una de las primeras casas de tres pisos que existió en Quito al final del siglo XIX. La adquirió el financista colombiano Aurelio Cañadas, quien aparece como su dueño en 1894. En sus seis tiendas funcionó la funeraria de Wenceslao Puente Arboleda. En el interior tenía su taller la famosa modista Mercedes Valencia. El gobierno del general Eloy Alfaro la adquirió en 1900 para Casa Presidencial y en ella habitaro n : el general Plaza, de 1901 a 1905, en unión de su hermana Diana que hacía las funciones de Primera Dama; Lizardo García, unos meses en 1905; Alfaro, de 1906 a 1911; Emilio Estrada, unos meses en 1911; Plaza de nuevo, de 1912 a 1916; Alfredo Baquerizo Moreno, de 1916 a 1920; y José Luis Tamayo, de 1920 a 1924, época en que falleció la Primera Dama Ester Concha To r res. Gonzalo Córdova, debido a la enfermedad cardíaca que tenía, decidió no vivir en esta casa. Por supuesto, la casa está ligada a la vida política del país en esos 24 años. En 1900, en ella el vicepresidente Manuel Benigno Cueva le propuso a Alfaro que lo escogiera como candidato a la Presidencia del país, a pesar de la dignidad que entonces ostentaba. Alfaro se opuso al Dr. Cueva y esto trajo un enorme resentimiento.598 Alguna vez llegaron a esta casa los alumnos de los Hermanos Cristianos a pedir una ayuda al Presidente y este les concedió con la generosidad que lo caracterizaba.599 A esta casa iban de niños Hugo Moncayo y los Freile Larrea a tomar el té cuando la segunda pre s i d e ncia de don Eloy600 y a la misma llegaban surcando peligrosamente por los tejados los niños Stacey Guzmán, prevalidos de un lejano parentesco con doña Ana Paredes de Alfaro por el lado de Arze.601 El 10 de agosto de 1911, 17 oficiales y líderes alfaristas decidieron en esta casa que al día siguiente se 598

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Pareja, Alfredo, LA HOGUERA BÁRBARA, 2ª edición. Jurado Noboa, Fernando, “El Chulla Quiteño”, Quito, 1991. Testimonio de Hugo Moncayo Veloz, Quito, 1970. Testimonio de Luis Stacey Guzmán, Quito, 19831984.

proclamaría la dictadura de Alfaro. Pero el 11 de agosto las cosas salieron al revés, cuando el General oyó la balacera, sonrió y dijo: —Son mis muchachos. Pero estaba totalmente equivocado, fue la caída final del General. Doña Ana Paredes, en unión de su hija América y del negro Aniceto, quemaron penosamente muchos papeles, debido a que les faltaba tiempo para encajonarlos. Lograron salvar coronas, laureles y

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tarjetas de oro que había en una caja de hierro. De esta casa salieron hacia la Legación de Chile, en donde se les había dado asilo diplomático. Nunca más volverían a la Casa Presidencial.602 Dicha casa pasó a ser Cancillería del país de 1924 a 1940, luego Facultad o el Instituto Superior de Filosofía y Letras por largo tiempo.603

LA CASA ESQUINERA DE LOS PÉREZ, QUE DA A LA MERCED La casa esquinera con la Cuenca pasó, en segunda generación, de Joaquín Arteta Larrabeytia a su yerno Joaquín Pareja y Mariscal, luego a su hija Leonor Pareja Arteta de Pérez y a su esposo don José María Pérez Muñoz y Calisto, conocido también como Muñoz; el censo de 1840 certifica que era una casa esquinera y que lindaba con el Dr. Manuel María Salazar.604 A partir de 1836 y hasta 1841, el joven Gabriel García Moreno visitó esta casa muchas veces, pues había venido recomendado desde Guayaquil al señor Pérez. En esa casa hizo gran amistad con José María Pére z Pareja. A partir de 1842, cortó relaciones con Leonor y con su esposo el Dr. Juan Borja, pero no con el resto de la familia. En sus cartas, luego de 1846 y en toda la década de 1850, envía recuerdos a Leonor Pareja de Pére z .605 En la época de los 40 vivió ahí el lojano Miguel Riofrío. Después de 1860 más o menos, la familia Pérez cedió esta casa a su hija Mercedes y se trasladaron a una cercana casa en la misma calle Chile, en la siguiente cuadra y frente a la llamada puerta falsa de la Merced, conforme lo ve re m o s . A partir pues de 1860, y en cuarta generación, poseyó esta casa Mercedes Pérez Pareja de Pareja, quien aún la poseía en 1894; tenía seis tiendas que daban hacia la Chile, pues a esta última calle daba la mayor parte del frente de la célebre casa. En 1911 Isaías Viteri dice que daba en arriendo su casa en la calle Chile, esquina de la Merced; tenía luz y excusados que eran las últimas novedades de entonces. El periódico EL ECUATORIANO de diciembre de 1911 reporta que frente a la Casa Presidencial estaba la zapatería de lujo de Rosendo Guerrero S. En mayo de 1912, la señora Rosario Donoso Chiriboga viuda de Guzmán ofrecía de venta sus dos casas: 602

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Pareja, Alfredo, Op. Cit. Testimonio del Dr. Enrique Ponce y Carbo, Quito, 1997. AMQ, censo de 1840. Loor, Wilfredo, CARTAS DE GARCÍA MORENO, tomos I y II.

una estaba en la Chile, junto a la Casa Presidencial y es la aludida que fue de los Pérez; pedía ponerse al habla con el señor Julio R. Borja en esa misma casa. En abril de dicho año, la prensa advertía que en esa casa se vendían muebles extremadamente baratos. En 1931, el médico Mariano Peñaherrera Vergara avisaba que en la Chile número 67 tenía su gabinete fisioterápico, hacía radiografías, trataba tuberculosis con rayos ultravioletas, inflamaciones con infrarrojos, hemorroides con diatermia, obesidad y asma con baños termo-luminosos, etc. Hubiese sido

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muy importante el que dejara escritas sus memorias. Atendía de ocho y media de la mañana hasta las doce, y de dos a cuatro en la tarde.

5. LA CALLE DE LA PUERTA FALSA DE LA MERCED (CHILE, IMBABURA)

ENTRE

CUENCA

E

Solo nos ocuparemos aquí de las siete casas antiguas (hoy ocho) que están fuera de la plazoleta, pues las que forman la plazuela fueron tratadas en el libro sobre PLAZAS DE QUITO. En cuanto al nombre de calle de la Puerta Falsa, así figura en el plano de Villavicencio de 1858. Valga decir que el plano de 1805 no demuestra sino unas dos casas en el lado sur de esta cuadra y luego aparece la quebrada de El Tejar que daba a la parte posterior de todas estas casas.

LA CUADRA EN EL SIGLO XVI Solo sabemos que, a fines del siglo XVI, Francisco Muñoz Morejón tuvo su casa de paja delante del convento de la Merced.606

LA EVOLUCIÓN EN EL SIGLO XVII Juan Diarto Marroquín testó en enero de 1625:607 tenía una casa pajiza esquinera, frente al convento y a Juan de Cañas y al lado de León de Sanabria. Lo que nos indicaría que a este lado había por lo menos dos casas, muy humildes por cierto. Juana Muñoz Ricos Saltos, descendiente de conquistadores vendió, antes de 1632, en 1 400 patacones, una casa al escribano Diego Rodríguez Docampo, frente igualmente a la Merced; lindaba con la del escribano Diego de Valencia y con Melchor de Villegas Santa María, lo que indica que empezaba a mejorar el estatus de los vecinos. 606

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ANQ, N.1, 1639.

Martín de Ayzaga y su mujer doña Marcela de Arteaga dieron una dote, en 1630, a su hija Catalina para

ANQ, N.1.

que se casara con Antonio Flores de Bastidas: correspondía la dote a la mitad de su casa, delante del

ANQ, N.6.

convento de la Merced.608

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Los Taón Ribera entregaron, en 1639, como dote para su hija Petronila un solar frente al convento. Según el testamento de su marido, Juan de Esparza, este construyó allí su casa.609 Don Juan de Borja tenía, en 1686, su casa frente a la Merced; en ella asesinó a su mujer doña Juana López Serrano, por adulterio.610 Estos asuntos no eran tan raros en la sociedad colonial. En 1692, el bachiller Tomás de Rojas declaró que tenía dos casas: la segunda estaba en la calle del Cebollar, abajo de esta y frente a los Montanero. Si sabemos que estos declaran luego tener su casa f rente a la muralla, quizás la de Rojas estaba en la esquina suroeste de la Chile e Imbabura actuales y la de los Montanero, al frente en la esquina noroeste, lo que posibilitaría que esta mirara a la muralla. Como se ve, las casas pajizas en el siglo XVII cedieron su puesto a otras de mejor calidad.

NOVEDADES EN EL SIGLO XVIII, EL BARRIO DE LOS MONTANERO Los Montanero nos son ya una familia conocida en el sector. Veamos nuevos detalles: María Cisneros y Vinueza, al testar en 1700, declaró poseer una casa heredada ; a su vez, por el testamento del padre de la testante, hecho en 1691, conocemos que la casa quedaba junto a la quebrada del Cebollar y al puente. Todos estos datos nos evidencian que las dos casas aludidas seguramente quedaban en la esquina noroeste de la Chile e Imbabura, lo cual posibilita la idea de que estaban frente a la muralla del convento. El General Alberto Fernández Montenegro, español natural de Galicia,611 fue padre de Josefa y de 609

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Andrés. Murió testando en 1701:612 dejó una casa de dos pisos en la calle de la Merced. ANQ, N.3, 1681. ANQ, N.4.

Jerónimo Martín Montanero tuvo, a principios de siglo, su casa frente a la puerta falsa, junto a su mujer

Archivo Toro Ruiz, Ambato.

doña María de Torres. Dado el apelativo común y la localización de esta casa, entendemos que es la misma que cita doña Jacinta Martínez Montanero, quien era descendiente de familias que fueron pro-

ANQ, N.1.

pietarias en el barrio desde los días de la Conquista; tenía una casa frente a la puerta falsa de la

ANQ, N.5.

Merced. Murió hacia 1746;613 le heredó su hija doña Rosalía por lo menos en tercera generación.

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Don Baltasar Maldonado, ya difunto en 1761, tuvo su casa cerca del puente de la Merced, donde estaba gravado un censo de 350 pesos a favor de las monjas Conceptas, quienes en dicho año hicieron el correspondiente reclamo.614 Aquella casa de don Jerónimo Montanero, frente a la puerta falsa, la heredó su nieta doña Ignacia Estrada Montanero y Torres, quien testó en 1780. Juan Crisóstomo de León y Baca testó en 1794:615 tuvo su casa inmediata a la iglesia de la Merced. Antes de 1795, don José de León tenía su casa frente a la puerta falsa; estaba casado con Agustina Vásquez Albán. Seguramente es la conocida casa de los Montanero. Todo esto nos hace ver la predominancia de dos familias —los Montanero y los León— a lo largo de este siglo. En 1797, los propietarios de este sector eran las siguientes 15 personas, que indudablemente no solo vivían en esta calle, sino en sus vecinas de la Mideros y la Imbabura actuales:616 • Doña María Vinueza • El Dr. Joaquín Olais, en cuya casa vivían los Andrade Olais, de origen cuencano617 • Don Manuel Heredia • Juan Sanguña, cuya familia sin duda dio origen al nombre de la quebrada que luego pasaba por la actual calle Mideros • El clérigo José Bustos • Doña María Luisa Viteri, cuyo apellido persistió en la zona • Feliciano Mejía • Don Ramón Maya, conocido notario de la ciudad • Doña Manuela Montesserín, en cuya casa vivían los Zambrano Montesserín • Doña Petrona Pastrana y Monteserrín • Doña Teresa Perales • Doña Micaela Cáceres, donde vivían los Gómez Cáceres • Miguel Ortiz • Doña Mariana Ramírez de Ayllón, y 614

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ANQ, censos, caja 31.

• Don Luis Boada

ANQ. N.3. ACQ, gobierno, 1799. Andrade, César, VIGENCIA DE UN CORREGIDOR, Cuenca, 1955.

NOTAS HISTÓRICAS SOBRE EL SIGLO XIX Doña María Gómez Cáceres de Mera ya vivía en este sector en 1797, en la citada casa de doña Micaela Cáceres. Fue abuela de Juan León Mera, de tal manera que el padre del poeta, don Pedro Mera Gómez,

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nació en esta casa en 1808.618 La aludida señora Gómez otorgó una escritura en 1833, en la que manifiesta que como hipoteca hizo figurar su casa , es decir en la Cuenca actual; estaba situada frente a doña Josefa Jijón.619 Ramona Espinel Cornejo de Guerra testó en 1888:620 su casa estaba en la calle de la Merced. Es preciso advertir que, según el latacungueño Adolfo Jiménez (GUÍA DE QUITO, 1894), a fines de siglo existían seis casas en esta cuadra, todas en el lado sur. Era un sector muy poco comercial, tan es así que solo la segunda casa poseía dos tiendas. Sin embargo, si tomamos en cuenta la casa esquinera que miraba con sus tres tiendas a la plazuela de la Merced — y que era de Ana Villareal Valdez— nos dan siete casas en total. Higley, en su plano de 1903, nos vislumbra ocho casas en la cuadra. Todas tenían por detrás al labio de la quebrada: la más grande era la segunda, que poseía dos patios; la tercera tenía un solo patio, pero bien gr a n d e . Esa casa esquinera fue habitada hacia 1940 por la familia Peñaherrera Peñaherrera y poco después por la familia de Margot Araujo Castillán, que era de las muchachas más guapas del barrio.

Veamos ahora los datos ordenados desde el extremo oriental: La segunda casa, luego de terminar la plazoleta, era de Camilo Donoso Lasso y de su mujer Leocadia González Calisto, quienes tuvieron la propiedad esquinera; la vendió el señor Donoso, en 1890, a 618

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Fernando Grijalva Polanco; este la traspasó al Dr. José Enrique Mera, a quien le heredaron, en 1893,

APS, bautismos 1808. ANQ, protocolos ante Tejada. ANQ, Melo.

protocolos

ante

Jiménez, Adolfo, Op. Cit. Testimonio de Manuel de Guzmán, febrero 2004. Testimonio del Dr. Ramiro Borja, 1990.

Luis y Dolores Mera.621 Esta casa fue donada posteriormente a Monseñor González Suárez. Esta segunda, con amplios balcones, era la más amplia de la cuadra y pertenecía al notable abogado Dr. José María Pérez Echanique,622 en recuerdo de que había sido vecina a la de sus bisabuelos los Pérez Pareja. En esa casa vivía arrendando un departamento, en 1926, del Dr. Francisco Pérez Borja, quien invitaba el día de San Francisco a la Corte Suprema en pleno, además de a otros parientes y amigos como Benjamín Borja Pérez y Carlos Noboa Saá. Al hijo de Benjamín —Ramiro Borja y Borja— entonces muy niño, lo sentaba a su lado como previniéndole que debía seguir las huellas del gran jurista.623

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Era la única casa de dos patios en la antedicha cuadra. Al morir la señora Elena Serrano de Pérez, la familia se trasladó, por 1942, al norte de la ciudad (calle Juan León Mera 343).624 En la década de los años cuarenta la administraba D. Vi rgilio Ontaneda y allí moraba la familia Dueñas Ibarra.625 En los años 43-48 vivió aquí la familia González Tinajero, sobrinos bisnietos de Juan Montalvo por su padre González Montalvo.626 Eran Eugenia, Fausto y Lily.627 La tercera casa era la del gran patio, en 1894. Quedaba allí la de Amelia Mantilla; tenía dos tiendas: una de ellas era la pastelería de José Sandoval.628 En los años 40 fue de María Córdova.629 La cuarta casa era, en 1894, de la familia Enríquez, pero en la década de los 40 existía como cuarta casa la propiedad del Dr. Virgilio Ontaneda Salazar, que allí vivía y que arrendaba un departamento a la extensa familia del habilísimo joyero riobambeño señor Darío Arguello Jiménez y a su esposa Amelia Jiménez Yépes.630 Dado que los planos demostraban que, en 1900, había continuidad constructiva, entendemos que hacia 1920 se habrá tendido una pared divisoria en la gran casa de los Enríquez hacia su lado oriental para formar la que estamos describiendo.

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Cegan: OC. Testimonio de la familia Suárez Morales, 2003.

UNA CASA HISTÓRICA La cuarta casa en el siglo XIX —quinta en el siglo XX— era muy particular, pues iba hasta la calle Mideros, es decir de calle a calle. Tenía 18 cuartos en el segundo piso, poseía una gran pesebrera; en

F. Jurado: Raíces de Juan Montalvo, 1982. Testimonio de la familia S a n t a c ruz, Fernández de Córdova, marzo 2004. Adolfo Jiménez: oc. Testimonio de la familia Santacruz, Fernández de Córdova, marzo 2004.

los terrenos posteriores sembraban maíz. Poseía una hermosa portada de piedra con escudo nobiliario, aún visible en 1930, luego una imagen en la grada principal, grada que poseía labores de fierro, al igual que la entrada al gran jardín.631 Entendemos que esta casa fue adquirida hacia 1860 por don José María Pérez Calisto, dueño de la casa esquinera frente a la iglesia de la Merced. Tenemos constancia que ya eran sus dueños en 1864 y aquí vivieron alrededor de un año sus nietos los huérfanos Borja Pérez, pues Luis Felipe recibió en esta casa clases de francés de su tía Dolores. Cuando estos descubrieron que García Moreno iba a jugar

Testimonio de la familia Santacruz, Fernández de Córdova, marzo 2004. Testimonio de la familia Borja Enriquez, hacienda El Auqui, Cumbayá, 1993. Testimonio de doña María Borja Pérez a su hijo Ramiro. Ver Revista Museo Histórico, 51, Quito.

tresillo en esta casa, la abandonaron para siempre.632 Recuérdese que García Moreno había encerrado al Dr. Juan Borja, padre de esos muchachos y que murió en prisión. Esta casa fue honrada largamente por las penitencias de Dolores Pérez Pareja y es fama que ella daba habitación y comida a los pobres del barrio.633 Hacia 1890 o antes, la casa pasó de poder de los Pérez a doña Petrona Guevara Anda de Andrade, quien figura como su dueña en 1894; esta casa estaba parcialmente construida sobre la quebrada. La

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familia siguió en su tradición de dar comida y habitación a los pobres del barrio. En una habitación vivió doña Clotilde To r res Guarderas de Núñez; las 18 habitaciones tenían una muy curiosa distribución: • 1.

Un salón de piano

• 2.

El salón grande

• 3.

El escritorio

• 4 y 5.Dos cuartos para arrendar • 6.

Medio baño

• 7.

El cuarto pequeño de doña Petronila Andrade Guevara

• 8.

Peinador de las Borja

• 9.

Dormitorio de las grandes

• 10. Dormitorio de doña Margarita • 11.

Dormitorio grande de Nenita y de la madre de los Borja Enríquez

• 12. Dormitorio de los varones Borja Enríquez • 13. Dormitorio de las chicas pequeñas • 14. Dormitorio de varones • 15. Ropero largo • 16. Cuarto con servicio higiénico • 17. Comedor inmenso • 18. Cocina • Y finalmente la galería de vidrios En esta casa vivió muchos años la familia Enríquez Andrade, hijos y nietos de los primitivos dueños y luego sus herederos los Borja Enríquez. En esta casa vivió arrendando un departamento el Dr. Aurelio Ante Valdez y aquí murió en 1920.634 Se la conocía como . Hacia 1916 murió su segunda dueña en familia, doña Margarita Andrade Guevara, quien dispuso que la casa la hereden sus dos sobrinas carnales Elena Enríquez de Borja y la apodada Nenita. La familia Borja vendió la casa hacia 1925 a José Gabriel Maldonado Rivadeneira, quien construyó el Pasaje Maldonado y vivió allí con su esposa Ester Sevilla y con sus hijas Átala y Elena.635 634

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Testimonio de doña Lucila Ante Quijano, Quito.

En los años 40, entrando a mano derecha y en el segundo piso, moraba la familia Egüez Mogro, hijos del

F. Jurado: Las Ribadeneyra, tomo 3, 1987.

notable sombrerero Dr. Alejandro Egüez. Entrando a mano izquierda y en el segundo piso

F. Jurado: Los Mancheno, Quito, 1992.

Cristina Mancheno Ribadeneyra.636 En el tercer piso moró, de 1943 a 1948, la familia del agricultor y hom-

Testimonio de la familia Santacruz, Fernández de Córdoba, marzo 2004.

nativa de San Gabriel. Cuando el señor Maldonado dejó la casa, su departamento fue cedido a la familia

moraban los dueños de casa y los Echanique Mancheno, hijos de Eduardo Echanique Cañades y de bre público tuguerreño Don Julio César Santacruz Patiño y de su esposa Lucrecia Fernández de Córdoba, Donoso Terán, hijo de Doña Natalia Terán Pérez descendiente de los dueños en el siglo XIX.637

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1534 - 1950

LAS CASAS MÁS OCCIDENTALES DE LA CUADRA Seguía, en quinto lugar y en 1894, la casa de María Silva Vicuña y de su marido Andrés Cabezas Cobos, profesor de guitarra.638 Entendemos que esta casa, que es la sexta actual, fue adquirida por una señora Vásconez de Ambato, pero ella no vivía ahí, sino que la dio en arriendo para burdel. En los libros de Sanidad de 1938 consta injustamente su nombre como proxeneta. Al conocer este detalle, el Dr. Pablo Arturo Suárez, que era Director de Sanidad, le dio aviso a la señora, quien no se inmutó y manifestó que a ella lo único que le importaba era que las damiselas estuvieran al día en sus arriendos. En 1943 esta casa fue adquirida por Doña Carmelina Guillén de Játiva, quien cerró los corredores para aumentar el número de habitaciones y por tanto las ventas.639 Allí vivió 22 años hasta su muerte, el 8 de junio de 1965. La señora compró la casa a Don Alcides Patiño, nativo de Túquerres. A continuación y en sexto lugar se hallaba la casa de Mercedes León Chiriboga, su dueña en 1894, que luego la pasó a la familia Delgado León y posteriormente a los Vásconez Delgado, y a los Vásconez Fierro y Aguirre Vásconez en cuarta generación. Entendemos que en esta casa vivió el comerciante riobambeño y liberal Gabriel Castillo Argüello con su larga familia, en dos ocasiones: primero en 1913 — cuando nació su hija Ana Lucía— y segundo en 1923.640 Al último se hallaba la casa del comerciante Rafael Dávila Rivadeneira, ibarreño, según aparece en la GUÍA de 1894. Aquí vivieron, pues, todos los Dávila Tinajero y los Ojeda Dávila. Aquí gestó toda su obra su nieto el gran Cristóbal Ojeda. Y allí mismo, en el corredor del segundo piso, mataron, en 1932, a su nieto, el ilustre compositor: un soldado que buscaba a un bonifacista, al parecer escondido en esta casa, lo confundió. Cuando Ojeda salió a reclamar, le disparó un tiro en la frente. Fue de una de las proezas militares más desgraciadas del siglo XX.641 En los años 40 fue peluquería y restaurante.

6. LA CALLE DEL CEBOLLAR (CHILE E IMBABURA HACIA EL OCCIDENTE) 638

639

640

641

Testimonio de doña Carmela Barba de Gómez de la Torre, Quito, 1982.

Es sabido que el nombre de Cebollar —es decir barrio de cebollas— se remonta a las primeras décadas luego de la colonización española, cuando Juan de Ampudia sembró las primeras huertas de cebo-

Testimonio de Marcos Arguello Guillén, Quito, marzo 2004.

lla en esta calle y en este sector.642

Testimonio de Blanca Castillo Arguello.

La calle de este nombre avanzaba tres cuadras hacia el occidente. El lado norte era de construcciones

Viteri, Carlos, MONOGRAFÍA EL TEJAR, en revista Museo Histórico, números 47 a 51.

sur, las construcciones aparecen irregulares en los planos: unas dos o tres casas entre la Imbabura y la

Andrade Marín, Luciano: trabajo citado en QUITO A TRAVÉS DE LOS SIGLOS, tomo I.

brada de El Tejar. De tal manera que, en síntesis, podría decirse que la mayor parte de documentos se

continuas y, en el plano de 1805 —por ejemplo—, aparecen unas diez casas. Mientras tanto, en el lado

DEL BARRIO DE

642

Chimborazo, apenas una casa entre la Chimborazo y la Quiroga actuales y unas dos casas pasando esta calle. Hay además que tomar en cuenta que solo las casas del lado norte tenían por detrás a la querefieren necesariamente a las casas del lado norte, por ser este el más regular.

225 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

VICISITUDES DEL SECTOR EN EL SIGLO XVII LOS FLORES DE LA BASTIDA EN EL PUENTE DE LA MERCED. EL APARECIMIENTO DEL ALTO DEL CEBOLLAR. En 1605, el Cabildo compró un terreno a espaldas de la Merced al Padre Martín de Gaviria, Mercedario; lindaba con los yanaconas de San Francisco (hacia el oriente del convento), con la cuadra de los herederos de Diego de Figueroa y con Francisco Guarchay. Por la quebrada de El Tejar lindaba con el guitarrero Francisco Guamancigia, con las tierras de Diego de Niebla y con el yanacona Bartolomé.643 Según criterio del Dr. Descalzi, es la primera vez que aparece el nombre de El Tejar en los documentos coloniales, significando que la fabricación de tejas empezó a ponerse de moda al abandonar los techos pajizos tan comunes en el siglo XVI. Los nombres de esos propietarios de 1605 hacen ver que era una zona fundamentalmente indígena. Hacia 1620, Francisco Muñoz Lobón tuvo su casa en el puente de la Merced, además de algunos esclavos.644 Al casarse en 1630 Juana Gascón con Tomás Díaz Chamizo, llevó como dote una casa en San Roque >; la dejó a su prohijado Juan

Flores.645 Hacia 1630, el capitán Francisco Flores de la Bastida y su mujer Isabel Rodríguez de la Parra tuvieron una segunda casa en San Roque ; la casa era de dos pisos y quedaba junto a la casa de N. Bastidas, su tío.646 Aquí es importante señalar que este sector pertenecía a San Roque. Cristóbal Flores de la Bastida y su mujer doña Beatriz de Hinojosa tenían, hacia 1640, una casa en San Roque, cerca del puente de la Merced.

643

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649

Descalzi, Ricardo, Op. Cit., II, 113.

Hacia 1650, Bartolomé Ortiz poseía un pedazo de terreno por bajo del puente de la Merced. Se lo dejó a su hija Juana Ortiz.647

ANQ, N.3, Protocolos, 1620.

En 1660, José de Ibarra tenía su pulpería en el puente de la Merced; la había comprado a Gabriel de

ANQ, N.4.

Cisneros.

ANQ, N.3. ANQ, N.4, protocolos.

Por 1660, igualmente, María Calderón tuvo su casa baja en este barrio del Cebollar; la heredó su nieta Paula Molina Flores, quien testó en 1726.648

ANQ, N.5, protocolos. ANQ, N.4, Protocolos, 1674.

La cuencana doña Isabel López de Reinoso testó en 1674:649 dejó una casa alta ; sus legatarios fueron Inés Reinoso y Antonia González de la Vega.

226 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

El mestizo Antonio Ortega Carua testó en 1679:650 dejaba cuatro cuadras en el alto del Cebollar, término que como veremos cada vez se hizo más común. Doña Andrea Flores de Bastidas, miembro de la familia que ya conocemos en la zona, testó en 1683:651 dejó una casa en la esquina del puente de la Merced, en camino al Cebollar. Dada la localización tan cercana al puente, entendemos que es la vieja casa del capitán Flores de la Bastida. El clérigo lojano José Ramírez de Montoya y Ordóñez testó igualmente en 1683:652 tenía una casa baja encima del puente de la Merced. El mismo año 83, Francisco de Castro y doña Inés de Reinoso vendieron su casa de dos pisos en la esquina del puente de la Merced a doña Catalina Arias Mosquera.653 En 1684, el bachiller Manuel Suárez de Figueroa vendió su casa en San Roque. Estaba situada en el alto del Cebollar; la compraron el alférez Juan de Noboa Saavedra y su mujer doña Juana del Castillo. Estos tuvieron cerca de 20 años la casa, pues la vendieron en 1703 a Teresa Pérez.654 La pastusa doña Manuela Narváez Cisneros testó en 1689:655 tenía una casa en San Roque, junto al puente de la Merced y junto a los herederos de Jerónimo de Bastidas. Gabriel García de Cisneros testó en 1691:656 vivía en una casa ; la heredó su hija María Cisneros Vinueza quien, al testar en 1700,657 declaró

ANQ, N.3.

Montanero>>. Hemos dicho, al tratar de la calle anterior, que nos parece que esta casa estuvo en la

Ídem.

esquina suroriental de la Chile e Imbabura.

ANQ, N.4, Protocolos, 1683.

El bachiller Tomás de Rojas y Durán testó en 1692:658 tenía dos casas, una en la Merced , por lo que los Hermanos abrieron cuatro grados especiales en el segundo piso

para niños de familias pudientes. Los primeros matriculados fueron Alfredo Pérez Guerrero y Carlos Andrade Marín, luego eminentes ecuatorianos y muy laicos en su conducta futura. Esta escuela de élite fue clausurada por el Arzobispo González Suárez en 1913, al cabo de seis años. En 1916 se terminó la Capilla Grande de la escuela, que es la misma que luce hasta hoy.681 681

Muñoz Borrero, Eduardo, EL INSTITUTO DE LOS HERMANOS DE LAS ESCUELAS CRISTIANAS , Quito, 1996.

234 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

LA CALLE EN 1894 > Diario LA PRENSA, Quito 1905. En la primera cuadra, del lado derecho o norte, existían unas diez casas: En la esquina con la Imbabura estaba la de Remigio Barreto; la heredaron sus dos hijas. Seguía, en segundo lugar, la casa de Andrés Acosta, donde vivía el médico Dr. Dositeo Batallas Flores. La tercera casa miraba ya a la calle Chimborazo en sus inicios en la etapa colonial,682 pero la construcción de varias casas cambió el panorama a fin de siglo y, en 1894, era de Juan Ampudia Rendón y allí vivía Carlos Valencia, profesor de violín. La siguiente o cuarta casa pertenecía a los señores Manrique Jaramillo y luego a los Pólit Manrique, que la ofrecían en arriendo. Esta casa pertenecía a Inés Pólit Manrique de Pólit Mantilla y a ella fueron a vivir, en 1928, el comandante Alfonso Sáenz Espín y su esposa la señora Alomía Tobar, recientemente llegados de Ibarra. Venía la quinta casa de Carmen Ayerve, con tres tiendas. Esta casa fue ocupada desde 1908 hasta 1914 por el gran poeta ambateño Alfonso Moscoso Sánchez y por su esposa Enriqueta Cárdenas López, quien había nacido al frente en la vieja casa de los López. A partir de 1923 fue ocupada por don Joaquín Ruales Andrade y su esposa doña Rosa Martínez Holguín, esta natural de Ambato.683 Muchas veces la 682

683

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685

686

Ver plano de Montúfar. Testimonio de Gabriela Moscoso Cárdenas de Serrano, Quito, 1993. Testimonio de Marcelo Ruales Martínez, Quito, 19981999. Testimonio de Hernán Jurado Gómez, Quito, 1997. Viteri, Carlos, MONOGRAFÍA EL TEJAR, en revista Museo Histórico, Quito, Nº. 47 a 51. DEL BARRIO DE

visitó su hermano el sabio Augusto Martínez; los hermanos Ruales la llamaban a esta casa .684 Daba frente a frente a los Moscoso Cárdenas, dueños de la séptima casa de enfrente y diagonal a los Donoso Enríquez —con quienes tuvieron gran amistad— y por tanto diagonal en varios grados a la escuela de los Hermanos. Aún vivían aquí en 1938, cuando se alojaba su joven pariente Hernán Jurado.685 De la siguiente no se conoce el dueño en 1894. Esta casa estaba ya pasando la calle Quiroga. En 1925 pertenecía a un señor Ontaneda y en el piso alto vivía la familia Ante Quijano. A continuación estaba la séptima casa, cuyo dueño era el canónigo Dr. Ramón Acevedo. Esta familia quedó en la miseria.686

235 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

La octava casa era de Pacifico Nieto. Venía la novena casa de Francisco España. Aquí vivió una corta temporada, no más de tres años, el comandante Rafael Bilbao Figueroa. La última era del Dr. Víctor Orellana Andrade, abogado,687 frente al noviciado de los Hermanos. En el lado sur o izquierdo existían nueve casas entre la Imbabura y la Chimborazo, lo cual significa que eran casas muy estrechas. Pertenecían a: • Rosa Peña, sin duda heredada a su padre el colombiano Manuel María de la Peña. • Josefa Villavicencio. • Carlos Pérez. Esta casa pasó a pertenecer en la década de los veinte del siglo XX a la familia López y se consideraba que fue la vieja casa familiar del siglo anterior; en ella vivió el coronel Nicolás F. López, hombre fuerte del régimen de Alfaro, así como sus hijos los López Valdivieso.688 • Ramón Moya (comerciante en la Plaza Grande y padre del artista Ramón Moya Alzamora).689 • José María Quishpe (dueño de una chichería en los bajos), luego de la familia Yánez en los años ve i n t e . • Manuel Jara. Pasó a ser en los años veinte de la familia Moscoso Cárdenas, hijos del gran poeta Alfonso Moscoso Sánchez; allí se trasladaron en 1925 y vivieron hasta alrededor de 1930. Estaba frente a la vivienda de los Ruales Martínez. • Nicolasa López. Pasó a pertenecer en los años veinte a la familia Donoso Enríquez, hijos de don Eduardo Donoso Mancheno; esta casa estaba frente a la familia Ontaneda y colindaba directamente con la escuela de los Hermanos. En 1937 pasó a pertenecer al comerciante Francisco Miño y allí vivió en sus primeros años de estudiante de medicina el joven otavaleño Germánico Endara Miño, pariente del dueño de casa.690 • Por último, la casa noviciado de los Hermanos Cristianos. 687

688

689

690

691

Jiménez, Adolfo, Op. Cit.

Hay un hecho digno de acotarse: el Padre Benjamín Bravo, Mercedario que luego se secularizó, el día Testimonio de Gabriela Moscoso Cárdenas de Serrano, Quito, 1993. Morlás, Alberto, FLORILEGIO DEL PASILLO E C U AT O R I A N O, Quito, 1967. Testimonio del Dr. Germánico Endara Miño, Otavalo, 1996. De Janón, Eugenio: EL VIEJO LUCHADOR , vol. II, ver al final.

del arrastre de los Alfaro —28 de enero de 1912— estuvo en una casa de familiares suyos en este barrio de El Placer. Hasta esa casa llegó su sobrino el niño Alfonso Aulestia Bravo para avisarle de la terrible novedad e invitándole a salvar a los presos, pues el sacerdote era amigo de don Eloy.691

LA ÚLTIMA CUADRA DE LA CHILE Pasando la calle del noviciado, venía la última cuadra de la Chile, que finalizaba en la quebrada de El Tejar. En el lado norte existían, en 1894, siete casas de las siguientes personas, pasando la de los O rellana Ricaurte:

236 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

• Eloy Guerrero. Esta casa pasó a ser de don Adeodato Noboa Páez y de su mujer Rosa Boada, cuyo jardín daba hacia El Tejar. En esta casa vivieron, desde 1930, los Bustos Noboa. A la muerte de sus dueños en aquella década de los 30, la casa se dividió en dos: la parte delantera hacia la Chile la heredaron sus hijos Rosa y Pedro Noboa Boada, mientras la parte trasera hacia El Tejar, la heredó su yerno Julio Calderón. • Ambrosio Angulo (con una chichería). • María Arroba. • Juana Garrido. • Vicenta Yépez viuda de Casares. • Dolores Velasco, y • Rosario Vargas, dueña de casa en el fin del mundo en aquel 1894. En el lado sur, pasando el noviciado mencionado, quedaban solo dos casas: de Manuel Salazar y del músico Baltasar Guevara, profesor de violín. De las diez tiendas de la calle del Cebollar, una era estanco y dos chicherías, por el año 1894. Después de 1895 los primeros servicios higiénicos de la ciudad se instalaron en la primera pare d que tapaba la quebrada de Sanguña, exactamente junto a la casa de los Dávila Ti n a j e ro, actual entrada del mercado Ipiales. Allí vivieron unas hermosas mujeres conocidas como . La segunda pared que tapaba la quebrada de El Tejar y que estaba hacia el norte iba desde la casa del escribano Luis Delfín Cevallos, en la actual calle Imbabura, hasta la casa de las Barreto, en la calle Chile.692

Las gentes y negocios de la Chile en 1922 •

39: Sastrería de Miguel Castañal



65: Zapatería de Luis Aurelio Ramírez



39: Sastrería de José Ignacio Flores



68: Sastrería de Benigno Haro Gómez



39: Acumulativa Popular, banco



77: Oficina de Retroventa de César Vizuete

de Moisés Loza



83: Fábrica de licores de Ricardo Manjarrés

45: Oficina de Manuel María



89: El Cebollar



Jaramillo Arteaga, agencia del Molino Miraflores instalado en Ambato •

49: Cortes Suprema y Superior, las seis escribanías, los Juzgados de Letras

692

Viteri, III, 250.

Los vecinos de la Chile en 1950

PRIMERA CUADRA (EN

LA

TOLA)



50: Sastrería de Camilo González S.



5l: Jorge Saavedra, diplomático chileno



1-01: José Viteri



57: Sastrería de Julio C. Carrera



1-31: Daniel Palacios

237 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a



1-33: Mercedes Guerrero



4-65: Gabriel Espinosa



1-39: Rafael Alberto Puente



4-66: Cornelio Leiva



1-44: Antonio Maldonado R.



4-68: Víctor Miño N.



1-65: Camilo Robalino



4-83: Eduardo Racines R.



1-68: José M. Torres B.



4-83: Rafael Carrión



1-75: Rafael A. Morales QUINTA CUADRA

SEGUNDA CUADRA (EN

LA

TOLA) •

5-11: Alberto Machado



2-09: Ignacia Delgado



5-13: Agustín Guarderas B.



2-15: Juan M. Delgado



5-21: José Luis Recalde



2-23: José R. Guarderas



5-31: Carlos Valdivieso V.



2-23: Manuel A. Delgado R.



5-40: Luis Santos L.



2-35: Manuel María Jurado



5-67: Bolívar Eloy Ortiz Freire



2-61: Carlos Campaña



5-67: Agustín Carrión

TERCERA CUADRA SÉPTIMA CUADRA (LA MARÍN – MONTÚFAR) •

3-15: Reinaldo Chaves



3-32: Pablo Hidalgo



7-23: Leonardo y Luisa Cornejo Sánchez



3-47: Segundo Delgado N.



7-30: José Poleaux



3-67: Víctor M. Estrella



7-37: José A. Jaramillo



3-74: Domingo Conti Borbone



7-46: Taller Baca Hnos.



3-85: Alfredo Carrillo



3-88: Dolores Castillo

CUARTA CUADRA

OCTAVA CUADRA (MONTÚFAR – FLORES) •

8-16: Segundo M. Garzón



8-17: Augusto Mera



4-13: Fernando Cano



8-17: Alejandro Rivas



4-14: Ricardo Leonidas Murgueitio



8-18: Dr. Glauco Salazar Espinosa



4-15: Eloy Mejía Erazo



8-35: Dr. Angel Moirriagui



4-25: Lucila Cadena



8-42: Euclideo Mera



4-33: Carlos M. Salguero



8-48: Benjamín Chiriboga Policarp



4-45: Antonio Jara R.



8-49: Dr. Rafael Terán Pazmiño



4-46: Adela Dávila de Garcés



8-60: José A. Pérez Luna



4-51: Alfonso Nordi Alemán



8-63: Pedro Viteri



4-51: Alfredo Martínez



8-63: Enrique Vivanco



4-52: Pedro Pablo Tirado



8-63: Jorge Cruz T.



4-54: José M. Velasco



8-65: Carmen Elena Egas Moscoso



4-57: Jorge Salazar A. y José M. Salazar



8-79: Alfredo Guijarro B.

238 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito



8-79: Rafael Barriga N.



8-79: Carmela y Angélica Barriga

NOVENA

CUADRA (ENTRE FLORES Y

1534 - 1950

CUADRA N.14 (CUENCA – IMBABURA)

GUAYAQUIL)



14-27: César Vinueza Parreño



14-27: José M. Velástegui



14-27: Fanny Vinueza Mena



9-11: Clementina Jarra de Moncayo



14-53: Dr. José Virgilio Ontaneda



9-24: Convento de San Agustín



14-67: Dr. Carlos Jaramillo Hidalgo



9-47: Dr. Luis Racines



14-81: Isaac Andrade



14-97: José M. Troya

DÉCIMA CUADRA (GUAYAQUIL – VENEZUELA) CUADRA N.15 (ESQUINA PARQUE HERMANO MIGUEL) •

10-06: Luis Carlos Botero Mejía



10-06: Julio C. Montalvo



15-17: Segundo A. Játiva



10-06: J. Elías Borja



15-29: Alfonso Aguirre Nájera



10-11: Francisco Dalmau Ll.



15-49: José Félix Mera



10-28: Luis Saavedra



15-49: Alfonso Dávila Tinajero y hermanos



10-28: Dr. Ricardo Izurieta



15-49: Lola Dávila



10-28: Manuel Yépez Cadena



15-76: Luis F. Burgos Montalvo



10-30: Juzgado primero del crimen



10-35: Dr. Daniel Hidalgo

CUADRA N.16 (IMBABURA – CHIMBORAZO)

(notaría cuarta) •

10-50-56: Grace y Cía.



16-17: Ester Bucheli D.



10-70: Augusto Sacoto Arias



16-26: Roberto Castillo



16-26: Fulvia Dávila Mena



16-31: Jesús Jácome Albuja



16-31: Raúl Gómez Jurado

11-22: Monseñor Carlos María



16-31: Ermel Eduardo Cruz

de la Torre



16-31: Luis A. Cueva Sotomayor

11-36: Joyería El Brillante de Bolívar



16-40: Dr. Luis A. Larenas

Lasso M.



16-40: Dr. Alvaro Castro Coronel

11-70: Lucinda Pazmiño de Cajiao



16-90: Ernesto Cuesta Calderón



16-90: Herederos de Agustín Pólit M.

CUADRA N.12 (GARCÍA MORENO – BENALCÁZAR)



16-93: Carlos Manuel Ruiz Bravo

CUADRA N.13 (BENALCÁZAR – CUENCA)



16-93: Miguel Carvajal Rosales

CUADRA N.11 (PLAZA GRANDE) •







13-25: Administración de diario EL COMERCIO



Rosario del Alcázar



Luis Chiriboga Gangotena



17-05: Dr. Jorge E. Durango



Mauricio de Jesús Carrera



17-11: Gabriel E. Guerra

CUADRA N.17 (CHIMBORAZO – QUIROGA)

239 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a



17-23: José Benigno Yánez Núñez

CUADRA N.18



17-28: José Luis Villacís



17-28: Lautaro Robalino T.



18-07: Editorial Labor



17-33: Pedro Pablo Caicedo



18-32: César Semanate Valladares



17-36: César Pérez León



18-53: Normal Juan Montalvo



17-43: Luis Miranda Cornejo



18-66: Rosario Cortés de Mendizábal



17-62: Dr. Javier H. Bustos



17-62: Manuel Leoro

CUADRA N. 19



17-81: Jorge A. Ramos





17-81: Antonio R. González



17-81: Angel A. González



17-88: Luis I. Salazar



17-88: Jorge Egas



17-97: Juan E. Luzuriaga



17-97: Antonio Cevallos

19-99: José Acosta

243 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

SIGLAS AAH: Archivo de la Academia de Historia, Quito AAH, B: Archivo de la Academia, fondo Luis Felipe Borja AAH, F: Archivo de la Academia, fondo Alfredo Flores Caamaño ACM: Archivo del Convento de la Merced, Quito ACQ: Archivo de la Curia, Quito ACSF: Archivo del Convento de San Francisco, Quito AMQ: Archivo Municipal de Quito ANQ: Archivo Nacional, Quito ANQ, C: Archivo Nacional, sección casas APA: Archivo particular del autor APS: Archivo Parroquial del Sagrario, Quito DGR: DIRECTORIO GENERAL

DE LA

REPÚBLICA, obra de Julio Vizcaíno Viteri editada en 1928

ELCSFQ: EL

LIBRO DE LA CIUDAD DE

GCG: GUÍA

COMERCIAL GEOGRÁFICA,

N.1: Notaría primera N.2: Notaría segunda N.3: Notaría tercera N.4: Notaría cuarta N.5: Notaría quinta N.6: Notaría sexta

SAN FRANCISCO

DE

QUITO HASTA 1951, ediciones Cegan

obra de Gonzalo Orellana Pozo editada en 1922

244 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

FUENTES VERBALES Y ESCRITAS TESTIMONIO DE:

• Donoso de García, Amalia

• Moscoso Cárdenas de Serrano, Gabriela

• Dousdebés Carvajal, Jaime

• Musello Durango, Ana • Ortiz Bilbao, Luis Alfonso

• Aguirre González, Vicente

• Dueñas Ibarra de Serrano, Cecilia

• Albornoz Bueno, familia

• Eastman Lasso, Patricio

• Albornoz Peralta deToledo, Emma

• Endara Miño, Germánico

• Polanco de Semblantes, Lucrecia

• Endara, doctor

• Pólit Moreno, Eduardo

• Álvarez Jervis, Adolfo

• Escobar Pallares, familia

• Andrade Marín, Luciano

• Escobar Pallares, Juan

• Ponce Salazar de Ludwig, María Virginia

• Ante Quijano, Lucila

• Espinosa Jarrín, Alejandro

• Arguello Guillén, Marcos

• Fiallo Morán, Ermel

• Argüello Vaca, Blanca

• Fiallo Morán, familia

• Reyes de Viteri, Marta

• Barba de Gómez de la Torre, Carmela

• Garzón Silva, Isabel

• Rivadeneira Andrade de Coronel, Catalina

• Barba Larrea, Beatriz

• Jijón Gómez de la Torre, José

• Aguirre González, José María

• Batallas Flores, María

• Díaz Cueva, Miguel

• Guzmán Polanco, Manuel de

• Peña Viteri, Ana

• Ponce y Carbo, Enrique • Reimers Redín, Isabel

• Rivadeneira Dávila, Carmela • Ruales Martínez, Marcelo • Rumazo Arcos, Rafael

• Borja Enriquez, familia

• Jijón Gómez de la Torre, Patricio

• Borja Pérez, María

• Jurado Gómez, Hernán

• Sánchez Barona, Enrique

• Borja y Borja, Ramiro

• Jurado Martínez, Rosa Elvira

• Bueno Stacey, familia

• Landázuri Camacho, Carlos

• Santacruz Fernández de Córdova, familia

• Calle, María Luisa

• Luna Tobar, Mercedes

• Sevilla Carrasco, Horacio

• Carrión Jurado, Armando

• Luna Yépez, Jorge

• Stacey de Valdivieso, Marcia

• Casares Levoyer, Jorge

• Machuca Ibarra, Mercedes

• Stacey Guzmán, Luis

• Castillo Arguello, Blanca

• Martínez de Tinajero, Blanca

• Suárez Chacón, Juan

• Catefort de Torres, Berta

• Suárez Morales, familia

• Chiriboga Policarp, Benjamín

• Merlo Guerrero de Cadena, Olga

• Córdova Rivadeneira, Gabriel

• Moncayo Veloz, Hugo

• Terán de Páez Flor, Eugenia

• Cortés de Carrera, Lucila

• Monge Jaramillo, Laura

• Torres Acosta, Rodrigo

• Descalzi del Castillo, Giga

• Montalvo Viteri, Gualberto

• Torres, Augusto

• Descalzi del Castillo, Ricardo

• Morán Noboa, Hortensia

• Valencia Llerena, Octavio

• Moreno Egas, Jorge

• Vargas, José María

• Batallas, doctor

• Salvador Lara, Jorge

• Tello Mercado, Franklin

245 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

• Velasco Espinosa, Juan

• Pólit Moreno, Eduardo

• Velasco Ibarra, Pedro • Villagómez Yepes, Flor

• Rousseau, herederos del profesor

• Zaldumbide G., Jaime

• Torres Carrión, Aníbal

• Zambrano Moncayo, Hernán

• Vargas, José María

APUNTES

PAPELES

• Zambrano Álvarez, Hilda

• Alomía Larrea, Antonio • Batallas Flores, María

ARCHIVO

• Benalcázar, Miguel Ángel • Bossano Paredes, Luis

• Penagos Casas, Edgar

• Castro Proaño, familia

• Saá Cousín, Augusto

• Chiriboga Donoso, Bolívar

• Samaniego Salazar, Filoteo

• Chiriboga, Gerardo

• Stacey Guzmán, Luis

• de Guzmán Polanco, Manuel

• Velasco Espinosa, Juan

• Descalzi del Castillo, Ricardo

INFORME

• Escobar, Juan • Grijalva Muñoz, Héctor

• Andrade Marín, Luciano • Córdova Ribadeneira, Byron • Córdova Ribadeneira, familia • Cueva Jaramillo, Patricio • Dávalos Vega, Leonardo • Donoso Donoso, Gonzalo • Escobar Pallares, Iván • Escobar, Ernesto • Grijalva Muñoz, Héctor • Muñoz Franco, Vicente • Páez Flor, J. Roberto • Pérez de Pallares, Magdalena

• Guarderas Alomía, Jaime • Molestina González Rubio, Pepita • Muñoz Larrea, Enrique • Páez Terán, Rodrigo • Peña Viteri, Ana • Pesantes García, Armando • Ribadeneira Araujo, Jorge • Torres Acosta, Rodrigo • Veintemilla Morán, Jaime de

246 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

INDICE • • • • • • •

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Abadiano, Antonia, 84 Abeldebas, Mariana, 195 Abril Nieto, Alfredo, 59 Academia de Bellas Artes, 207 Academia de Escultura, 206 Academia de la Lengua, 128, 204 Académicos Franceses (plano de), 23, 29, 44, 57, 98, 105, 112, 127, 148, 169, 177, 228 Acevedo, Carmen, 231 Acevedo, notario, 133 Acevedo, Ramón, 234 Acevedo, Rosa, 100 Acosta Alburquerque, Luis de, 123, 127 Acosta Burbano de Torres, Anita, 183 Acosta Gómez de Urrea, Antonio, 174 Acosta Soberón, familia, 134 Acosta Soberón, Víctor Manuel, 144 Acosta Solís, Misael, 92 Acosta Vaca, Víctor, 28 Acosta Velasco, familia, 83 Acosta Yépez, familia, 183 Acosta, Andrés, 234 Acosta, José, 243 Acosta, León Pío, 183 Acosta, Natividad, 184 Acosta, Tarquino, 34 Agudo, señora, 180 Aguiar y Venegas, Joaquín, 85 Aguiar, familia, 84 Aguilar Palacios, Enrique, 131, 151 Aguilar, Antonio, 137 Aguilar, Daniel, 128 Aguilar, Esteban, 52 Aguilar, Luis Antonio, 77 Aguilar, padre, 232 Aguilar, Rafael, 215, 233 Aguilar, Ramón, 229, 231, 232 Aguilera y Bustamante, Rosa, 195 Aguirre Guard, Pancho, 207 Aguirre Izquierdo, Ramón, 122 Aguirre Martínez, Antonio, 91 Aguirre Nájera, Alfonso, 207,

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238 Aguirre Vásconez, familia, 224 Aguirre Zuleta, Juan, 197, 198 Aguirre, Fidela, 68 Aguirre, Josefa, 182 Aguirre, Juan de, 96 Aguirre, Juan, 183 Aguirre, Manuel, 27 Aguirre, Ramón, 123 Aguirre, Rosa, 172 Ahumada y Ahumada, Leonor de, 116 Ahumada, Agustín de, 192 Alarcón Burbano, Isabel, 115 Alarcón Hinostrosa, Inés, 117 Alarcón Mena, familia, 175 Alarcón Mena, Víctor, 108 Alarcón Palacios, Francisco, 117 Alarcón Tamayo, familia, 155 Alarcón, A., 119 Alarcón, José María, 228 Alarcón, María, 175 Alarcón, Tomás, 181 Álava Pino, Luis, 40 Álava, Ursula, 106 Albán B., Estuardo, 45 Albán de Mora, Rosario, 68, 208 Albán Hinojosa, María, 227 Albán, Alejandro H., 59 Albán, Carmen, 182, 183 Albán, Luis, 48 Albán, Pedro, 182 Albán, Zoila, 113 Albornoz Casares, Francisco, 144 Albornoz Casares, Hugo, 144 Albornoz Peralta, familia, 49 Albornoz Ramírez, Luis Rafael, 214 Albornoz Sánchez, Ernesto, 186 Albornoz Sánchez, Humberto, 201 Albornoz Sánchez, Inés, 92 Albornoz Tabares, Francisco, 166 Albornoz, familia, 203 Albuja del Castillo, Aurora, 56 Albuja Páez, familia, 104 Albuja, Avelino, 105

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Albuja, familia, 71 Albuja, María Eulalia, 100 Alcarraz, Paula de, 168 Alcedo y Herrera, Dionisio, 227 Alcedo, plano de, 29, 31, 162, 177, 227, 228 Alcívar Cevallos, Clodoveo, 26 Alcívar, Pedro, 45 Alcocer, Mariano, 98 Aldaba Bernal, María de, 168 Alemán Díaz y Torres, Cristóbal de, 127 Alemán Fierro, Hugo, 87 Alemán, Hugo, 165 Alfaro, Eloy, 33, 48, 57, 80, 87, 128, 137, 140, 142, 185, 189, 216, 233, 235 Alfaro, Flavio, 185 Almeida Soria, Leona, 181 Almeida Soria, Mercedes, 181 Almeida Suárez, Rafael, 120 Almeida Vacas, Carlos Enrique, 143 Almeida Vacas, Rafael, 143 Almeida, César, 143 Almeida, Julio, 32 Almeida, Manuel, 85 Almeida, Nicanor, 59 Almeida, Ramón, 185 Almenada, Francisco, 90, 160 Alomía Larrea, Antonio, 45 Alomía Sierra, Fidel, 113 Aluisa, Carlos, 106 Alvarado de Palacios, Juana, 189 Alvarado Ojeda, Jorge, 23 Alvarado Orellana, Catalina de, 116 Alvarado, Antonio, 162 Alvarado, Arístides, 143 Alvarado, Diego de, 124 Alvarado, Domingo, 228 Alvarado, Humberto, 144 Alvarado, Jesús, 52 Álvarez Álvarez, Emilio, 92 Álvarez Arteta de Mosquera, Clementina, 86 Álvarez Arteta, Segundo, 86 Álvarez Dalgo, Zoila, 164 Álvarez de Álvarez, Zoila Ignacia, 92

247 F e r n a n d o

• Álvarez de Brito, Javiera, 149 • Álvarez de la Torre y Muñoz, Alonso, 117 • Álvarez de Toro y Alvarado, Tomás, 194 • Álvarez Gangotena, Carlos, 230 • Álvarez García, familia, 119, 133 • Álvarez Garzón, familia, 137 • Álvarez Jácome, Segundo, 207 • Álvarez Jervis, Adolfo, 38 • Álvarez Moreno, familia, 179 • Álvarez Mosquera, Enrique, 133 • Álvarez P., Francisco, 204 • Álvarez Tinajero, Antonio, 164 • Álvarez Tinajero, Concha, 152 • Álvarez Torres, José, 205 • Álvarez Ubidia, Lucila, 201 • Álvarez Valdivieso de Samaniego, Luisa, 120 • Álvarez Villacís, Vicente, 229 • Álvarez, Emilio, 108 • Álvarez, familia, 166 • Álvarez, Felipe, 162 • Álvarez, Joaquín, 137 • Álvarez, Luis, 77 • Álvarez, Mercedes T., 172 • Álvarez, Miguel Ángel, 164, 186 • Álvarez, Segundo, 108 • Álvarez, señora, 211, 212 • Álvarez, Teresa, 92 • Alvear Arturo, Abel, 31, 33, 34 • Alvear, Filomena, 143 • Alvear, Teresa, 214 • Alzamora Costales, Augusto, 59 • Alzamora de Mora, familia, 57 • Ampudia Rendón, Juan, 234 • Ampudia, Álvaro, 30 • Ampudia, Juan de, 179, 224 • Ampudia, Magdalena, 181 • Anda Aguirre, Alfonso, 34 • Anda Vásconez, Eudoro, 68 • Anda, familia, 91 • Anda, Luis, 68 • Andagoya, Rosa, 171 • Andino, Josefa, 195 • Andraca y Barasorda, Matías de, 123 • Andraca, Ana, 115 • Andraca, Ignacia, 115 • Andraca, Simón, 105 • Andrade Andrade, Carmen, 187 • Andrade Cabrera, Eudoro, 23 • Andrade Castillo, Juan, 34 • Andrade Coello, Alejandro, 157, 230 • Andrade Coronel, Manuel, 136

J u r a d o

N o b o a

• Andrade de Salas, Elena, 138 • Andrade Flores, José María, 64, 163 • Andrade González, Enrique, 77 • Andrade Guevara, Margarita, 223 • Andrade Guevara, Petronila, 223 • Andrade Jaramillo, Carlos, 135 • Andrade López, Camilo Octavio, 24 • Andrade Marín, Carlos, 233 • Andrade Marín, Francisco, 151, 192 • Andrade Marín, Luciano, 98, 126, 135, 162, 210, 211 • Andrade Moscoso, familia, 122 • Andrade Moscoso, Raúl, 87 • Andrade Olais, familia, 220 • Andrade Ribadeneira, Mercedes, 69 • Andrade Rodríguez, Daniel, 207 • Andrade Rodríguez, Matilde, 126 • Andrade Sánchez Rubio, Josefa, 149 • Andrade Sánchez, Blanca, 34 • Andrade Sánchez, Isabel, 34 • Andrade Soberón, Elías, 139 • Andrade Vargas, Miguel, 118, 119, 120 • Andrade y Albornoz, Petrona, 51 • Andrade, Antonia de, 68 • Andrade, Antonio, 58 • Andrade, Carlos, 49, 136 • Andrade, Dolores, 120 • Andrade, Isaac, 238 • Andrade, José Mariano, 75 • Andrade, Juan, 83, 205 • Andrade, Julio, 207 • Andrade, Margarita, 137 • Andrade, Roberto, 39, 207, 232 • Angulo y Montanero, María García de, 170 • Angulo, Ambrosio, 236 • Angulo, familia, 71, 72 • Ante Olaís, Isabel, 102 • Ante Olaís, Mercedes, 102 • Ante Quijano, Alfredo, 24 • Ante Quijano, familia, 165, 234 • Ante Salas de Correa, Carmen, 141 • Ante Valdez, Aurelio, 223 • Ante y Olaís, Antonio, 102, 103 • Ante, José María, 102 • Apunte Hidalgo, Abelardo, 34 • Arana, María, 140

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Araujo Castillán, Margot, 221 Araujo Chiriboga, Jorge, 34 Araujo León, Francisco, 76 Araujo, familia, 142 Araujo, Luis Abelardo, 30 Aráuz, Catalina, 132 Aráuz, Cayetano, 131 Aráuz, Piedad, 186 Arboleda, Luis, 45 Arce Velarde, Juan de, 157 Arco, Francisca de, 116 Arcos N., César, 143 Arcos, Mariano, 229 Arcos, Serafín, 183, 212 Arellano Polanco, familia, 172 Arellano Polanco, Julio, 172 Arellano Portilla, doctor, 72 Arellano Portilla, María, 186 Arellano y Zúñiga, Pedro de, 210 Arellano, Elías, 185 Arellano, Julio, 72 Arévalo, Jerónima de, 167 Arévalo, Pedro de, 167 Argoti R., Luis, 144 Argüelles, Eusebio, 43 Argüello Estrella, Darío, 133 Argüello Jiménez, Darío, 222 Argüello Jiménez, familia, 133 Argüello Proaño, Víctor Manuel, 139 Argüello y Becerra, Nicolás de, 122 Argüello, Carlos S., 108 Argüello, Carlos, 48 Argüello, Hugo, 139 Argumasín, señor, 229 Arias Altamirano y Núñez de Aguilar, Florencio, 227 Arias Blanco, José Bernardo, 196, 197, 198 Arias Cardoso, Ángel, 34 Arias de Arteaga, Margarita, 193 Arias Mantilla, Ana, 55 Arias Mosquera, Catalina, 226 Arias, Álvaro, 192, 193 Arias, Amable, 38 Arias, Jorge, 76 Arias, Miguel, 28 Arias, Rudecindo, 113 Arias, Tránsito, 34 Arjona Silva, Rafael, 151 Armas, Benigno, 59 Armas, César, 59 Armas, Georgina, 59 Armas, Toribia, 48

248 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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Armijos, J. G., 204 Aroca, Margarita, 69 Arregui Pazos, familia, 147 Arregui, Antonia, 197 Arregui, Gonzalo, 186 Arroba, María, 236 Arroyo del Río, Carlos, 159, 207 Arroyo, Benigno, 183 Arrue, Pedro, 48 Arteaga, Marcela de, 218 Arteta Borja, Leticia, 206 Arteta Calisto, Tomasa, 153 Arteta García, Carlos Alberto, 108 Arteta García, Julio, 92 Arteta y Larrabeytia, Joaquín de, 209, 211, 217 Arteta, Carlos Alberto, 92 Arteta, Joaquín, 211 Artieda, Nicolás, 38 Arturo, familia, 69 Ascázubi Matheu, Manuel de, 206 Ascher, Mauricio, 143 Asociación de Empleados Municipales, 143 Asociación de Militares en Retiro, 130 Astorga Salas, Nicolás, 141, 142 Astorga, Mariano, 203 Astudillo, Ricardo, 141 Astudillo, Rosa, 175 Atahualpa, 169, 230 Aulestia Bravo, Alfonso, 235 Aulestia Chiriboga, María Jacinta, 129 Aulestia Donoso, familia, 69 Aulestia Saá, Pedro, 33 Aulestia Suárez, José María, 77 Aulestia, Nicolás Francisco, 129 Aulestia, Pedro, 75 Auz Valdospinos, Mariano, 231 Ávalos, Absalón, 45 Avendaño, Josefa, 48 Ávila Saá, Gonzalo, 23 Ávila y Muñoz, Mariano de, 93 Ávila, Eustaquio, 89 Ávila, Lucas, 93 Ávila, Manuel M., 186 Avilés Jaramillo, Alfonso, 108 Ayala García, José, 34 Ayala, Carmela, 186 Ayala, Francisca, 181 Ayala, Matilde, 30 Ayala, Rosa Elena, 186 Ayerve, Carmen, 234

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1534 - 1950

Ayora Cueva, Isidro, 140, 152 Ayora, José María, 119, 206 Ayzaga, Catalina, 169 Ayzaga, Martín de, 218 Azcona, Félix Manuel, 51 Azcona-Piedrahita, familia, 52 Baca Miranda, José, 63, 64 Baca Proaño, familia, 199 Baca Proaño, Juan Francisco, 24 Baca, Ángel, 143 Baca, Concepción, 137 Baca, José, 63 Baca, Magdalena, 52 Badajoz, Juan de, 127 Banco Comercial y Agrícola, 142 Banco de la Unión, 173 Banda, Luisa, 62 Baquerizo Moreno, Alfredo, 216, 230 Baquero Bermeo, Antonio, 33 Barahona Cisneros, familia, 129 Barahona y González, Cecilia, 194 Barahona, Antonio, 48 Barahona, Delfina, 107 Barahona, familia, 137 Barahona, Gregorio de, 180 Barahona, Marco, 185 Barahona, Sebastián, 99 Barba Guerrero, Josefa, 162 Barba Jijón, Nicolás, 40, 49 Barba Torres, Francisco, 150 Barba y Barba, Nicolás Augusto, 49 Barba, Antonio, 104 Barberis Fernández, familia, 26 Barberis Jaramillo, Luis, 25, 26 Barco, Ana, 140 Barco, Rosa, 136, 140 Bargas, Mariano, 37 Barnuevo Castro y Guzmán, Ignacio, 193 Barnuevo, familia, 203 Barona de Sánchez, Beatriz, 89 Barona Guzmán, Ángel, 209 Barona Guzmán, Justiniano, 209 Barona Vaca, Arnoldo, 144 Barona, José, 196 Barreiro Peñaherrera, Carlos, 86 Barrera Paredes, Camilo de la, 91 Barrera, Isaac J., 63 Barreto, Antonia, 128 Barreto, familia, 236 Barreto, Ramona, 181 Barreto, Remigio, 234

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Barriga Marcos, Rafael, 134 Barriga N., Rafael, 238 Barriga, Angélica, 238 Barriga, Carmela, 238 Barros, Rosa, 214 Basabe, Josefa, 32 Basílica del voto nacional, 31, 34 Bastidas, Catalina de, 168 Bastidas, Damasio, 122 Bastidas, Dora L., 143 Bastidas, Ezequiel, 204 Bastidas, Francisco, 168 Bastidas, Jerónimo de, 226 Bastidas, Mariano, 92 Bastidas, N., 215, 225 Batallas Aulestia, José María, 174 Batallas Bustamante, familia, 174 Batallas Flores, Dositeo, 234 Batallas Flores, familia, 172, 174 Batallas Flores, Flavio, 174 Batallas Flores, Leonidas, 96, 174 Batallas y Zambrano, José Gabriel, 170, 174 Batallas, Ignacio, 90 Bayas, Ramón, 185, 186 Beaterio, 100, 103, 105, 124, 127, 128, 129, 135, 136, 137, 141, 233 Becerra, José María, 49 Bedón, Justa, 228, 232 Belalcázar, Matilde, 202 Beltrán Riofrío, Isa• bel, 177 Beltrán, Ángela, 52 Benalcázar y Orellana, • Beatriz, 117 Benalcázar, Antonio, 32 Benalcázar, Diego, 206, 207 Benalcázar, Fernando, 153 Benalcázar, Ignacio, 207 Benalcázar, Sebastián de, 126 Benavides Guzmán, María, 103 Benavides, Miguel, 154 Benites de Alcarraz, Juan, 168 Benites de Burbano, Julia, 49 Benites Guerrón, familia, 49 Benites, Manuela, 228 Bermeo, Carlos A., 62 Bermeo, Carlos Hugo, 30 Bermeo, Francisco, 172 Bermeo, Vicente R., 67 Bermúdez, Casimira, 180 Bermúdez, Margarita, 180, 181

249 F e r n a n d o

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Bermúdez, Ramón, 197 Berrazueta, Juan Pablo, 90, 91 Berrío, Eufemia, 136 Berruete, Felipe, 210 Betancourt González Cortés, Josefa, 94, 95 Betancourt González Cortés, María, 94 Betancourt y González, Manuel Vicente, 95 Betancourt, familia, 96 Betancourt, Joaquín, 205 Betancourt, Manuel María, 201 Betancourt, Ramón, 68 Betancourt, Úrsula, 119 Biblioteca Nacional, 40, 126 Bilbao Figueroa, Rafael, 235 Boada, Luis, 220 Boada, Rosa, 147, 236 Bohórquez, familia, 143 Bohórquez, José, 182 Bolaños, Feliciana, 106 Bolaños, Josefa, 99 Bolaños, Juan, 99 Bolaños, Manuel, 76 Bolaños, María, 51 Bolaños, Santiago, 42 Bolívar, Simón, 213 Boneta, Melchora, 180 Bonilla, Daniel, 184 Bonilla, José Antonio, 160, 161 Bonilla, Manuel, 171 Borja Álvarez, Blanca, 92 Borja del Alcázar, Francisco, 87 Borja Enríquez, familia, 223 Borja Ezpeleta, familia, 168, 170 Borja Ezpeleta, José de, 167 Borja Lizarzaburu, Joaquín, 81 Borja Lizarzaburu, Juan, 215 Borja Pérez de Pérez, Mariana, 198 Borja Pérez, Benjamín, 221 Borja Pérez, familia, 222 Borja Villacís de Muñoz Ruilova, Petrona, 73, 160 Borja Villacís, Antonia, 165 Borja y Borja, Ramiro, 221 Borja, Bernardino, 181 Borja, familia, 187, 223 Borja, J. Elías, 238 Borja, Joaquín, 80 Borja, José Antonio, 37 Borja, Juan de, 219 Borja, Juan, 62, 217, 222 Borja, Julio R., 217

J u r a d o

N o b o a

• Borja, Luis Felipe, 126, 166, 215, 222 • Borja, Pedro Pablo, 132 • Borrero Cortázar, Ramón, 162 • Borrero, Manuel María, 207 • Bossano de la Torre, Ramón, 163 • Bossano Piedrahita, Felipa, 51 • Bossano, Carmen, 163 • Bossano, Francisco, 62, 174, 175 • Bossano, Ignacia, 175 • Botero Mejía, Luis Carlos, 238 • Botica Pichincha, 68 • Brauer, Leopoldo, 158 • Brauer, señor, 208 • Bravo, Benjamín, 235 • Bravo, Policarpo, 149 • Bravomalo Ruatta, familia, 67 • Bravomalo, César, 67 • Brizón, José María, 150, 197 • Bruzzone Arcos, familia, 71 • Bucheli D., Ester, 238 • Bucheli, Ignacio, 141 • Buenaño de Vélez de Álava, Juana, 159, 160 • Buenaño, Nazario, 115 • Buendía Endara, familia, 144 • Buendía Jácome, Gustavo, 72,204 • Buendía Ordóñez, familia, 55 • Buendía Ordóñez, Gabriel, 141, 142 • Buendía y Dávila, Pedro, 194 • Buendía, Braulio, 136 • Bueno Guzmán, Carlos, 135 • Bueno Landázuri, Emilia, 157 • Bueno, familia, 71 • Buitrón, familia, 24, 62 • Burbano Benites, familia, 49 • Burbano Bowen, Dimas, 55 • Burbano Egas, Manuel, 115 • Burbano, Modesto, 64 • Burgos Montalvo, Luis F., 238 • Busé, José, 158 • Bustamante Angulo de Pérez, María Luisa, 33 • Bustamante González, familia, 195 • Bustamante Zeballos, Tomás de, 195, 196 • Bustamante, Emilio, 32 • Bustamante, familia, 199 • Bustos Noboa, familia, 236 • Bustos, Javier H., 239 • Bustos, José, 220 • Caamaño Monge, familia, 81

• Caamaño, David, 80 • Caamaño, familia, 80, 128, 203 • Caamaño, Plácido, 128, 147, 203 • Cabezas Borja, Reinaldo, 208 • Cabezas Cobos, Andrés, 224 • Cabezas Polanco, Dolores, 123 • Cabezas y Burbano de Lara, Antonia, 171 • Cabezas, Humberto, 133 • Cabezas, José M., 105 • Cabezas, M. R., 209 • Cabrera, Agustín, 132 • Cabrera, Antonia, 128 • Cáceres y Baca, Lorenzo de, 193 • Cáceres, Carmen, 48 • Cáceres, Francisco, 100 • Cáceres, Manuel Esteban, 104, 105 • Cáceres, María, 180 • Cáceres, Micaela, 220 • Cáceres, Teresa, 100 • Cadena Ampudia, Daniel, 160 • Cadena Meneses, familia, 150 • Cadena Vega y Barona, Mariano, 99, 102 • Cadena, Adelaida, 57 • Cadena, Lucila, 237 • Cagüeñas, señoras, 100 • Caicedo, Francisco Javier, 89 • Caicedo, Pedro Pablo, 239 • Caicedo, Pedro, 53 • Cajiao, José Augusto, 59 • Caldas Tenorio, Camilo, 162 • Calderón Milán, Matías, 105 • Calderón Moreno, Alfonso, 119 • Calderón Rodríguez, Federico, 119 • Calderón Salem, familia, 134 • Calderón, Julián, 37 • Calderón, Julio, 135, 236 • Calderón, María, 225 • Calderón, Mariana, 85 • Calisto Arteta de González Alminate, María, 153, 211 • Calisto Borja, Nicolás, 153, 211 • Calisto de Álvarez, Carmelina, 186 • Calisto y Muñoz, Pedro, 158 • Calisto, Pedro, 204 • Calle, Manuel J., 52, 137 • Calle, María Luisa, 52, 137 • Calvache, Mariano, 106 • Calvo, Ramón, 212 • Camacho Araujo, Luis Gabriel, 59

250 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

• Camacho Ortiz, Vidal de Jesús, 48 • Camacho, Ezequiel, 100 • Camacho, Joaquina, 181 • Camacho, José, 195 • Camacho, María, 197 • Cámara de Comercio, 204 • Campana de López Darquea, Ana Luisa, 68 • Campaña, Carlos, 237 • Campaña, Luisa, 141 • Cancillería, 159, 204 • Candi, Leonor, 168 • Cano, Fernando, 237 • Cañadas, Aurelio, 216 • Cañas, Juan de, 167, 218 • Cañaveral, familia, 203 • Cañizares Bracamonte, Francisco de, 193 • Cañizares, Francisco, 53 • Cañizares, Josefa, 106 • Capelo, Mariano, 205 • Carbo Aguirre, Vicente Enrique, 140 • Carbo Noboa, Vicente, 159 • Carbo Núñez, Laura, 140 • Carbo Núñez, Rosa Elena, 140 • Carcelén, María, 171 • Carcelén, Rodolfo, 81 • Carcelén, Tomás, 79, 81, 84 • Cárdenas López, Enriqueta, 234 • Cárdenas Navarro, Catón, 64 • Cárdenas, Alejandro, 201 • Cárdenas, Gregoria, 75 • Cárdenas, Juan José, 185 • Cárdenas, Juana, 41 • Carrera, Casimiro, 48 • Carrera, Felipa, 141 • Carrera, Josefa, 149 • Carrera, Julio C., 236 • Carrera, Mauricio de Jesús, 238 • Carrillo, Alfredo, 237 • Carrillo, Josefa, 181, 182, 231 • Carrillo, Toribio, 42 • Carrión Aguirre, Alejandro, 87 • Carrión Pinzano de Escudero, Antonia, 231 • Carrión Quiñones de Polanco, María Mercedes, 165 • Carrión Quiñones, familia, 103 • Carrión, Agustín, 237 • Carrión, Alejandro, 88, 159 • Carrión, Rafael, 237 • Carvajal Ibarra, María, 117 • Carvajal Rosales, Miguel, 238 • Carvajal, Carmen, 32

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1534 - 1950

Carvajal, Manuela, 181 Carvajal, Mariano, 154 Carvajal, sacerdote, 154 Casa comercial Viena, 77 Casa de Correos, 63, 209 Casa parroquial de Santa Bárbara, 108 Casanova, Pedro Gregorio de, 169 Casares García, Camilo, 158 Casares Levoyer, familia, 123 Casares, José María, 158 Casco, Jerónima, 129 Caspicara (Manuel Chili), 52 Castañal, Miguel, 236 Castelar Mejía, Mariana, 138 Castelar y Mejía, Manuel, 138 Castillo Argüello, Gabriel, 224 Castillo Kast, familia, 118 Castillo, Ana Lucía, 224 Castillo, Dolores, 237 Castillo, José, 144 Castillo, Roberto, 238 Castrillón Espinosa, Juan José, 175 Castrillón Hidalgo, Luis Fernando, 141 Castrillón, Juan Bautista, 91, 231 Castrillón, Pedro Alfonso, 141 Castro Calderón, Joaquina, 57 Castro Coronel, Alvaro, 238 Castro Noriega, familia, 113 Castro Ortega, Carlos, 113 Castro Reinoso, familia, 227 Castro, Francisco de, 226 Castro, Ignacia, 128 Castro, Mariano, 142 Catefort, Edmundo, 172 Catefort de Torres, Berta, 172 Cementerio de El Tejar, 141 Cementerio de San Blas, 32, 81 Cementerio de San Diego, 113 Centeno, Ambrosia, 124 Centro Ecuatoriano Norteamericano, 77 Cepeda, Manuela, 85, 86 Céspedes y Zúñiga, Juan de, 192 Cevallos Acosta de Cornejo, Dolores, 160 Cevallos Cruz, Bolívar, 57 Cevallos Gaviño, Fernando, 183 Cevallos Gómez, Josefa, 149 Cevallos Salvador, Pedro, 166

• Cevallos Velasco y Albornoz, Manuel, 228 • Cevallos Velasco y de la Carrera, María, 127 • Cevallos Velasco, Tomás Carlos de, 167 • Cevallos, Alejandro, 48 • Cevallos, Antonia, 171 • Cevallos, Antonio, 166, 239 • Cevallos, Dominga, 197, 198 • Cevallos, familia, 72 • Cevallos, Juan, 164 • Cevallos, Luis Delfín, 236 • Cevallos, Manuel, 97, 176 • Cevallos, María Josefa, 210 • Cevallos, Pedro Fermín, 229 • Cevallos, Rafaela, 212 • Cevallos, Rosa, 57 • Cevallos, Tomás, 168 • Cevallos, Tomasa, 81 • Cevallos, Wenceslao, 80 • Chacón Montalvo, Carlos, 123 • Chanta, José, 44 • Chaves Granja, Alfredo, 87 • Chaves, Ángel Polibio, 64, 65, 164 • Chaves, Reinaldo, 237 • Chávez, Edmundo, 59 • Chávez, Luis Felipe, 161 • Chávez, Vicente, 176 • Checa y Barba, Feliciano, 165 • Checa y Carrascosa, José Ignacio, 162 • Checa, José Ignacio, 233 • Cheverría, Juan Bautista, 194 • Chica, Agustín, 100 • Chica, Ana, 102 • Chiliquinga, Bárbara, 159 • Chiliquinga, José María, 107 • Chiriboga Chiriboga, Jorge, 150, 186 • Chiriboga Corral, Nicanor, 123 • Chiriboga de Flores, Mercedes, 123 • Chiriboga Delgado de Guzmán, Trinidad, 125 • Chiriboga Donoso, familia, 201 • Chiriboga Gangotena, Luis, 238 • Chiriboga Gangotena, Pacífico, 152 • Chiriboga Guzmán, Manuel, 141 • Chiriboga Larrea de León, Carmen, 212 • Chiriboga Mancheno, Jacinto, 95

251 F e r n a n d o

• Chiriboga Policarp, Benjamín, 201 • Chiriboga Policarp, Rosa, 147 • Chiriboga Sáenz, familia, 151, 186 • Chiriboga Sáenz, Marcela, 150 • Chiriboga, Mariana, 84 • Cicala, Mario, 105 • Cifuentes, Luis, 48 • Cifuentes, Manuel, 177 • Círculo Militar, 130 • Cisneros de la Torriente, Mercedes, 92 • Cisneros Vinueza, María, 219, 226 • Cisneros, Carmen, 215 • Cisneros, Gabriel de, 225 • Cisneros, Manuel, 104 • Cisneros, Petrona, 51 • Cisneros, señor, 88 • Clínica Quito, 72 • Cobo Arias, Francisco, 155 • Cobo Cobo, Augusto, 71 • Cobo, Teresa, 183 • Cobos, Carlos, 125 • Cobos, Teresa, 142 • Cobos, Valentina, 142 • Coello, Baltazara, 85 • Coello, Camilo, 141 • Coello, Rosa, 154 • Colegio 24 de Mayo, 141 • Colegio Cardenal de la Torre, 31 • Colegio de La Salle, 32, 33, 233 • Colegio de las Mercedarias, 26 • Colegio de las monjas oblatas, 39 • Colegio Gran Colombia, 27 • Colegio Mejía, 33, 76, 128, 130 • Colegio Militar, 65 • Colegio San Fernando, 33 • Colegio Santa María del Socorro, 128 • Coleti, Juan Bautista (plano de), 23, 29, 31, 36, 41, 42, 44, 56, 57 • Conceti, padre, 151 • Concha Torres, Ester, 216 • Conde, Antonio, 149 • Conservatorio de música, 67, 87 • Constante, Juan Manuel, 195 • Contag, Mariana de, 30 • Conti Borbone, Domingo, 237 • Contraloría General de la Nación, 206 • Convento de la Merced, 104, 105, 127, 138, 166, 167, 168, 169, 170, 171, 172, 174, 177, 179, 180,

J u r a d o



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N o b o a

182, 184, 187, 215, 217, 218, 219, 225, 226 Convento de San Agustín, 116, 117, 118, 121, 149, 191, 192, 193, 195, 197, 238 Convento de San Juan, 37, 43 Convento de Santa Catalina, 118 Cordero, Luis, 206 Córdova Andrade, familia, 69 Córdova Ribadeneira, Gabriel, 69 Córdova Rivadeneira, familia, 69 Córdova, César, 69 Córdova, Daniel, 185 Córdova, Gabriel, 69 Córdova, Gonzalo, 216 Córdova; María, 222 Cordovez Cayzedo, Lucía, 26 Cornejo Ayllón, Nicolasa, 230 Cornejo Cevallos, familia, 158 Cornejo Mantilla, Pedro, 199 Cornejo Rivera o Rivera de Espinel Mercedes, 51 Cornejo Rivera, José, 158 Cornejo Rosales, Jorge, 143 Cornejo Rosales, Ricardo, 143 Cornejo Sánchez, Leonardo, 237 Cornejo Sánchez, Luisa, 237 Cornejo, José, 85, 161 Cornejo, Manuel, 30, 53, 197 Cornejo, María Isabel, 169 Cornejo, Micaela, 230 Cornejo, Rafael, 37 Coronado, Bárbara, 227 Coronel, Enriqueta, 141 Coronel, José, 58 Coronel, Luis Ignacio, 207 Corral de Rodríguez Nicolalde, Josefa, 162 Corral Valdez, Jaime, 186 Corral, Fidel, 26 Corral, María, 175, 176, 177 Corral, Rosario, 177 Correa, José Eugenio, 100 Cortés Aristizábal, Darío, 203 Cortés Aristizábal, Reinaldo, 40 Cortés de Mendizabal, Rosario, 239 Cortés Miranda, familia, 40 Cortes Suprema y Superior, 52, 87, 199, 232 Cortés, Antonio, 81 Cortiguera, Toribio de, 98 Cosín, Rosa, 102 Cossío, Juan, 160 Cousin de Saá, Rosa, 164

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Cousin Plaza, Panchito, 165 Cousin Saá, Francisco, 161, 165 Cozar Valenzuela, Juan de, 193 Crespo Cornejo, Camila, 230 Crespo Cornejo, Manuela, 230 Crespo Cornejo, Virginia, 230 Crespo, doctor, 86 Criolla, Elvira, 117 Criolla, Inés, 117 Cruz Caamaño, familia, 75 Cruz Caamaño, Luz María, 131 Cruz T., Jorge, 237 Cruz, Concepción, 104 Cruz, Ermel Eduardo, 238 Cruz, Francisca, 181 Cruz, Francisco Javier, 61, 62 Cruz, Ignacia, 228 Cruz, Jorge, 202 Cruz, Julio, 75 Cruz, Miguel, 155 Cruz, Pedro José, 197 Cruz, Virginia, 172 Cuéllar y Costales, familia, 96 Cuéllar, Gregorio, 90 Cuenca, Isabel de, 167 Cuesta Calderón, Ernesto, 238 Cuesta Ordóñez, Agustín, 151 Cuesta y Cuesta, Alfonso, 87 Cueva García, Manuel Benigno, 160, 216 Cueva Sotomayor, Luis A., 238 Dalmau Ll., Francisco, 238 Darquea Cevallos, Alberto, 49 Darquea Cevallos, Alfonso, 119 Dávalos Calle, Bruno, 177 Dávalos de Diez, Benigna, 133 Dávalos Suárez, familia, 68 Dávalos, Diego, 118 Dávalos, Manuela, 155 Dávila Chica, Agustín, 197 Dávila de Garcés, Adela, 237 Dávila Mena, Fulvia, 238 Dávila Peñaherrera, familia, 65 Dávila Rivadeneira, Rafael, 224 Dávila Tinajero, Alfonso, 238 Dávila Tinajero, familia, 224, 236 Dávila, Carmen, 136, 137 Dávila, Lola, 238 Dávila, Rafael, 228 de Guzmán Echerri, Manuel, 102 de Guzmán España, Rafael María, 96 de Guzmán, Manuel, 75, 99 de Guzmán, Rafael María, 94

252 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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de la Barrera, Joaquín, 75 de la Bastida, Andrea Flor, 181 de la Bastida, Gertrudis, 226 de la Bastida, Rosa Flor, 85 de la Carrera, familia, 203 de la Chica Cevallos y Narváez, Antonio, 89, 123, 127 de la Cruz y Zúñiga, Juan, 215 de la Cruz, Antonio, 44 de la Cruz, Bernardo, 131 de la Cruz, Juan, 93 de la Cruz, Rosa, 137 de la Cuesta, Juana, 89 de la Cueva, Juan, 210 de la Flor, Francisco, 84, 85 de la Guerra, María, 170 de la Peña Cortés, Manuel María, 231, 235 de la Rocha, Hernando, 193 de la Serna, María, 124 de la Torre, Carlos María, 238 de la Yedra, Manuel, 106 de Leguía, Francisco Javier, 105 de Loyola Baraona, Simón, 129 del Alcázar, Rosario, 238 del Castillo Carriedo, Tránsito, 56 del Castillo de Herrera, Alonsa, 148 del Castillo Peñaherrera de Erazo, María Luisa, 96 del Castillo Reinoso, Fidel, 212 del Castillo Reinoso, Vidal, 51 del Castillo, Juana, 226 del Castillo, Margarita, 141 del Castillo, Mercedes, 183 del Cazar Garay, Juan, 168 del Corral Jiménez, Francisco, 94 del Hierro Portilla, Alberto, 174 del Hierro, Jesús, 204 del Marqués de Solanda, familia, 170 del Pino, María, 89 del Pino, Narcisa, 73, 106 del Pozo Costa, familia, 147 del Pozo Flores, Humberto, 147 del Salto, Adolfo, 48 Delgado León, familia, 224 Delgado N., Segundo, 237 Delgado Navarro, Víctor, 113, 115 Delgado R., Manuel A., 237 Delgado Rojas, Juan, 149 Delgado, Ignacia, 237 Delgado, Juan M., 237 Demarquet, Carlos, 213

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1534 - 1950

Descalzi, doctor, 148 Descalzi, Ricardo, 126 Destruge Maruri, Guillermo, 165 Diario El Comercio, 86, 189, 208, 212, 238 Diario El Día, 44, 96, 102 Diario La Patria, 32, 68, 187 Diario La Prensa, 187, 234 Diario La Tierra, 88 Diarto Marroquín, Juan, 218 Díaz Camargo, Juan, 148, 193 Díaz Chamizo, Tomás, 225 Díaz Cueva de Cuenca, familia, 132 Díaz Cueva, Miguel, 52 Díaz Cueva, Rafael, 131, 151 Díaz Osorio, Rosa, 127 Díaz, Dolores, 232 Díaz, José, 197 Díaz, Miguel, 228 Díaz, Octavio, 189 Díaz, Ramón, 173 Dieguez, Rosario, 71 Dillon Bahamonde, Napoleón, 123 Dirani Baquero, familia, 71 Domínguez, Antonio, 117 Donath, Egon, 59 Donoso Barba de Barba, Juana, 40 Donoso Cáceres, Manuela, 149 Donoso Chiriboga de Donoso, Margarita, 58 Donoso Chiriboga viuda de Guzmán, Rosario, 217 Donoso Chiriboga, Max, 87 Donoso Chiriboga, Ramón, 165 Donoso Chiriboga, Ricardo, 56 Donoso Enríquez, familia, 234, 235 Donoso González, Federico, 107 Donoso González, José María, 130 Donoso Herboso, Juan, 98 Donoso Lasso, Camilo, 33, 56, 211, 221 Donoso Lasso, José María, 26 Donoso Mancheno, Eduardo, 235 Donoso Mena, Josefa, 197 Donoso Moncayo, Teresa, 201 Donoso Riofrío, Enrique, 120 Donoso Terán, familia, 223 Dorado Pólit, Humberto, 107

• Dousdebés Andrade, familia, 120 • Dousdebés González, Aníbal, 120 • Dousdebés, Carlos, 120 • Dueñas Ibarra, familia, 222 • Dueñas Soberón, familia, 132 • Dueñas Soberón, Mariana, 139 • Dueñas, Ramón, 132 • Duque de Estrada, Feliciano, 44 • Duque de Estrada, Luciana, 118 • Durán Ballén Cordovez, Sixto, 26 • Durán Pástor, Rafael, 144 • Durán, Alonso, 168 • Durán, Antonio, 180, 181, 182 • Durán, José, 180, 181 • Durán, Sixto María, 182 • Durango Chauvin, familia, 65 • Durango Flores, Francisco, 65 • Durango Pozo, Manuel, 147 • Durango, Jorge E., 238 • Eastman Cox, Víctor, 161 • Echanique Cañades, Eduardo, 223 • Echanique Mancheno, familia, 223 • Echanique Morán, Camilo, 142 • Echanique, Luz, 208 • Echeverría Osorio, María Manuela, 90 • Echeverría Osorio, Nicolás, 90, 93, 94 • Echeverría, Benjamín, 159 • Egas Chiriboga, familia, 184 • Egas Espinosa, Magdalena, 181 • Egas Hernández, Augusto, 151, 184 • Egas Moscoso, Carlos, 202 • Egas Moscoso, Carmen Elena, 237 • Egas Rueda, Fidel, 198, 199 • Egas Valdivieso, Carlos, 184 • Egas Veintemilla, Rosa Mercedes, 177 • Egas Venegas Ortega, Francisco, 170 • Egas, Jorge, 239 • Egas, Mariana, 181 • Egas, Mariano, 67 • Egüez Andrade, José Alejandro, 72 • Egüez Meza, Manuel, 32 • Egüez Mogro, familia, 223 • Egüez Narváez, familia, 75 • Egüez, Alejandro, 223

253 F e r n a n d o

• EguigurenEscudero, Alfonso, 92, 159 • Eguiguren, María, 48 • Encinas, Beatriz de, 118, 148 • Endara Andrade, Alfonso, 133 • Endara Jiménez, Segundo, 40 • Endara Miño, Germánico, 76, 235 • Endara, Josefa, 134 • Enríquez Andrade, familia, 223 • Enríquez Ante, Amable, 102, 104 • Enríquez Ante, Vidal, 102, 134 • Enríquez Corral, Marcos, 199 • Enríquez Corral, María Luisa, 198, 199 • Enríquez de Borja, Elena, 223 • Enríquez de Calisto, Mercedes, 104 • Enríquez Puente, Francisco, 118 • Enríquez Ribadeneira de Paz Gaviño, Leticia, 68 • Enríquez Vélez de Bueno, Carmela, 134, 135 • Enríquez Vélez, familia, 102 • Enríquez, Alberto, 153 • Enríquez, Alcides, 192, 206 • Enríquez, Dolores, 141 • Enríquez, familia, 102, 222 • Enríquez, Ramón, 153 • Enríquez, Tomasa, 118 • Erazo del Castillo, Piedad, 56 • Erazo, Carlos Humberto, 34 • Erazo, Gertrudis, 102 • Erazo, Rosa, 56 • Escobar Borja, Arcesio, 120, 176 • Escobar Pallares, familia, 120 • Escobar Pallares, Juan, 176 • Escobar, Nicolás, 175 • Escobar, Victoria, 42 • Escudero Carrión, familia, 186 • Escudero Carrión, Manuel, 125 • Escudero Espinosa de Egas, Concha, 125 • Escudero Moscoso, Gonzalo, 98 • Escudero, Pablo, 231 • Escudero, Petrona, 121 • Escuela Unión Panamericana, 185 • Escuela de Artes y Oficios, 185 • Escuela de Bellas Artes, 206 • Escuela de Gramática, 185 • Escuela de los Hermanos Cristianos, 129, 206, 234, 235 • Escuela de Niñas del Sagrario, 172

J u r a d o

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N o b o a

Escuela Naciones Unidas, 185 Escuela Normal de Varones, 53 Escuela epública de Panamá, 59 España, Francisco, 235 Esparza, Isabel de, 169 Esparza, Juan de, 169, 179, 219 Espíndola, Rafael, 64 Espinel Cornejo de Guerra, Ramona, 221 Espinel Cornejo, Gertrudis, 133 Espinel Cornejo, Marcos, 51, 71 Espinel Cornejo, María, 133 Espinel, familia, 133 Espinel, Francisco, 158 Espino de Cáceres, Diego, 148 Espinosa Acevedo, Francisco, 40 Espinosa Albear y Arellano, Juan de, 193 Espinosa Arellano, Ignacio, 118 Espinosa Astorga, Ricardo, 26 Espinosa B., José María, 77 Espinosa Baca, familia, 202 Espinosa Bermeo, familia, 67 Espinosa Castelo, Mariano, 121, 174 Espinosa de los Monteros, Agustín, 201 Espinosa de los Monteros, Eugenio, 99 Espinosa de los Monteros, León, 131, 134 Espinosa de los Monteros, Lorenzo, 131 Espinosa Ortiz, familia, 67 Espinosa Paredes, familia, 93 Espinosa Ponce, Manuel, 75 Espinosa, Ángel, 43 Espinosa, Camilo, 181 Espinosa, Gabriel, 237 Espinosa, Jacinta, 205 Espinosa, Joaquín, 100 Espinosa, Josefa, 73, 121, 171 Espinosa, Juan, 67 Espinosa, Magdalena, 106 Espinosa, María Nieves, 129 Espinosa, María, 81, 113 Espinosa, Mariana, 100 Espinosa, Mario Isaac, 131 Espinosa, Mercedes, 63 Espinosa, Miguel, 164 Espinosa, Paula, 75 Espinosa, Pedro, 171 Espinosa, Rosario, 123 Espinosa, Tomás, 64 Estrada Montanero y Torres,

• • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • •

Ignacia, 220 Estrada, Emilio, 216 Estrella, Carlos, 123 Estrella, Mariana, 43 Estrella, Víctor M., 237 Estudiantina de Quito, 158 Estupiñán de Velasco, Mercedes, 83 Estupiñán Orejuela, familia, 53 Estupiñán, familia, 133 Fabara, Ezequiel, 185 Fabara, Juan, 132 Fabara, Mariano, 185 Fabara, Mercedes de, 144 Falconí Cobo, Fausto, 57 Falconí, Benigno, 175 Falconí, Carlos, 83 Falconí, Carmela, 71 Falconí, familia, 81 Falconí, Vidal, 118 Félix Mera, José, 238 Félix Valdivieso, José, 229, 232 Fernández de Bustillo, Juan, 168 Fernández de Córdoba, Lucrecia, 223 Fernández de Espinosa y Atahualpa, Catalina, 168 Fernández Montenegro, Alberto, 219 Fernández Salazar, Jorge, 87 Fernández Salvador de Chiriboga, Ignacia, 123 Fernández Salvador y López, Luis, 154 Fernández Salvador, Antonio, 165 Fernández Salvador, familia, 166 Fernández Salvador, Luis, 30, 165 Fernández Sierra y González de Vargas, Manuela, 162 Fernández, Alejandro, 104 Fernández, Carlos Alberto, 77 Fernández, José, 123 Fernández, Jose• fa, 32 Fernández, Manuela, 52 Fiallo Pontón, Darío, 206 Fiallo, Ermel, 206 Fierro Jarrín, familia, 26 Figueroa Ayala, Ángela, 181, 180 Figueroa y Estrada, Leoncia de, 210 Figueroa, Diego de, 225 Figueroa, Mercedes, 181 Flor de la Bastida y Coello, Baltazara, 83

254 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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Flor Torres, Manuel Elicio, 95 Flor y Pozo, Eloisa, 86 Flor, Lino, 142, 144 Flor, Manuel Elicio, 95 Flor, Manuel V., 68 Flor, Mariano, 58, 61, 73, 137 Flor, Zoila, 144 Flores Barahona, Pedro Nolasco, 227 Flores Chiriboga, familia, 123 Flores de Bastidas, Andrea, 226 Flores de Bastidas, Antonio, 218 Flores de Bastidas, familia, 227 Flores de la Bastida, capitán, 226 Flores de la Bastida, Cristóbal, 225 Flores de la Bastida, Francisco, 225 Flores de Ortega, Rosa, 99 Flores Viteri, Magdalena, 67 Flores y Caamaño, Alfredo, 102 Flores, Joaquina, 181 Flores, José Eustaquio, 172 Flores, José Ignacio, 236 Flores, Juan José, 95, 120 Flores, Juan, 225, 227 Flores, Rafael, 98 Flores, Vicente, 205 Franco Muñoz, señor, 176 Franco Recalde, familia, 113 Freile de Zaldumbide, Luz María, 209 Freile Donoso, Leocadia, 166, 212 Freile Larrea, familia, 216 Freile, familia, 125 Freire Casco, Eugenia, 129 Freire de Andrade, Leonor, 121 Freire R., Daniel, 34 Freire, Eugenia, 129 Freire, familia, 153 Freire, señor, 63 Fuenmayor, Diego de, 169, 170 Fuenmayor, Juana de, 169, 170 Fuentes Mera, César, 144 Fuentes, Francisco, 100 Fundación German de Machachi, 119 Gabela, Ignacia, 154 Galárraga Guerrero, Mercedes, 170, 174 Galárraga y Álvarez, Pablo, 227 Galárraga, Mateo de, 167 Gallegos de Caamaño, Ana, 143

• Gallegos Negrete, familia, 93, 95 • Gallegos Toledo, Camilo, 161 • Galup Carrión, Dolores, 162 • Gandes, María, 121 • Gangotena Carbo, Jacinto, 159 • Gangotena Chiriboga, familia, 24 • Gangotena de Arellano, Rosa Matilde, 186 • Gangotena Jijón, Enrique, 207 • Gangotena Morán, Emilio, 58, 135 • Gangotena Posse, Víctor, 207 • Gangotena Román, Ignacio, 115 • Gangotena Román, Josefina, 97 • Gangotena, Carlos Eloy, 85 • Gangotena, Carmen, 182 • Garcés Ubidia, Víctor Manuel, 201 • Garcés, Federico, 125 • Garcés, Manuel, 100 • Garcés, padre, 140 • García Berrazueta, Isidro, 86 • García Carrión de Pallares, Mercedes, 120, 176 • García Coello, José, 117 • García Coello, Mercedes, 133 • García de Cisneros, Gabriel, 226 • García Drouet, Carlos, 154 • García Martínez, Mercedes, 95 • García Mateus, familia, 154 • García Moreno, Gabriel, 53, 55, 67, 94, 107, 128, 134, 153, 185, 186, 206, 212, 215, 217, 222, 232, 233 • García Ortiz, Leonidas, 57 • García Salazar, Arturo, 126 • García, Alfredo, 208 • García, Alonso, 116 • García, Hermenegildo, 121 • García, José, 212 • García, Juana, 48 • García, Leonidas, 56 • García, Lizardo, 119, 126, 216 • García, Mariano, 164 • García, Nicolás, 136 • Gardea, Mariana, 90, 91 • Garrido, Agustín, 231 • Garrido, Amalia, 141 • Garrido, Juana, 236 • Garzón Silva, familia, 199 • Garzón Silva, Mercedes, 199 • Garzón, Francisco, 199 • Garzón, Leandro, 30

1534 - 1950

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Garzón, Ramón, 174 Garzón, Ricardo, 199 Garzón, Segundo Melchor, 199 Garzón, Vicente, 137 Gascón, Juana, 225 Gaviño, Mariano, 203 Gaviria, Martín de, 225 Gaybor Infante, Concepción, 76 German, Mercedes, 61, 73 German, Rafael, 96 German, Ramón, 174 Godoy, Natalia, 63 Gómez Albán, compañía, 55 Gómez Arturo, señor, 119 Gómez Cáceres de Mera, María, 220 Gómez Cáceres, familia, 220 Gómez Chiriboga, familia, 180 Gómez de la Torre, familia, 118, 134, 135 Gómez de la Torre, Juana, 117 Gómez de la Torre, Manuel, 134 Gómez Díaz, Carlos F., 64, 232 Gómez Jurado, Raúl, 238 Gómez Rendón, Ángela, 154 Gómez, Lutgardo, 164 Gómez, Manuel, 30 Gómez, Narcisa, 53 González Alminate, José Miguel, 153, 211 González Benavides, Rosa, 91 González Calisto, familia, 154, 155 González Calisto, José Miguel, 154 González Calisto, Leocadia, 221 González Calisto, Mariano, 58 González Calisto, Pedro Rafael, 154 González de Donoso, Leocadia, 211 González de Freile, Carmen, 91 González de la Vega, Antonia, 225 González de Ribera, Juan, 116 González Jiménez, José, 206 González Montalvo, señor, 222 González Rubio Rivas, Rosa Mercedes, 53 González Rubio Vásconez, Lucila, 55 González S., Camilo, 236 González Suárez, Federico, 120, 172, 221, 233 González Tinajero, Eugenia, 222 González Tinajero, familia, 222

255 F e r n a n d o

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González Tinajero, Fausto, 222 González Tinajero, Lily, 222 González Verdugo, Pedro, 103 González y Yerovi, Luis, 153, 195 González, Angel A., 239 González, Antonio R., 239 González, familia, 120 González, Gonzalo, 186 González, Margarita, 205 González, María, 205 González, Trinidad, 229 González, Ursula, 128 Gonzembach, Marina, 55 Gordón, Teresa, 62 Gortaire Chiriboga, Fausto, 57 Gortayre de los Reyes, Ramón, 124, 125 Gortayre Guerrero, Javier, 125 Gortayre y Guzmán, familia, 125 Gouin, Luis, 160 Gozemet, Paulina, 68 Granda, Mariano, 134 Granizo Ramos, Víctor M., 208 Granja, Ramón, 98 Grijalva Polanco, Fernando, 221 Grijalva Polanco, Rafael, 102 Grijalva, Juan, 119, 122 Grupo América, 28 Grupo Madrugada, 63 Guamancigia, Francisco, 225 Guarchay, Francisco, 225 Guarderas B., Agustín, 237 Guarderas Pérez, Francisco, 26, 121, 159 Guarderas Villacís, Alejandro, 121 Guarderas Villacís, Elena, 99 Guarderas Villacís, Julio, 69 Guarderas, Abel, 39 Guarderas, José R., 237 Guerra de Espinel, Virginia, 71 Guerra Espinel, Ramona, 133 Guerra Peñafiel, familia, 37 Guerra Peñaherrera, Carlos, 68 Guerra, Emilio, 64 Guerra, Gabriel E., 239 Guerra, Isidora, 174 Guerra, José Antonio de la, 37 Guerra, Pedro, 99, 171 Guerra, señor, 88, 151 Guerrero Andrade, familia, 75 Guerrero Borja, Mercedes, 124 Guerrero Chiriboga, Magdalena, 84 Guerrero Chiriboga, Rosario, 84 Guerrero Chiriboga, Tomasa, 84

J u r a d o

N o b o a

• Guerrero de Guerrero, Magdalena, 57 • Guerrero Mora, familia, 68, 69 • Guerrero S., Rosendo, 217 • Guerrero, Eloy, 236 • Guerrero, Estefanía, 170 • Guerrero, Ignacio, 171 • Guerrero, José, 170 • Guerrero, Manuel, 171 • Guerrero, Mercedes, 237 • Guerrero, Rafael, 214 • Guerrón Burbano de Acosta, Manuela, 183 • Guevara Anda de Andrade, Petrona, 222 • Guevara, Baltasar, 236 • Guevara, Gertrudis, 149 • Guevara, Ignacia, 121 • Guevara, Rafaela, 140 • Guevara, Ramón, 68 • Guijarro B., Alfredo, 238 • Guillén de Játiva, Carmelina, 224 • Guillermo, Josefina, 183 • Guisado, Joaquina, 181, 182 • Gutiérrez Pinto, Ana Rosa, 122 • Gutiérrez, Joaquín, 106 • Gutiérrez, José, 93 • Gutiérrez, pintor, 107 • Gutiérrez, Simón, 84 • Guzmán Chiriboga de Bueno, Isolina, 125 • Guzmán Quiñones, Manuel, 125 • Guzmán, Carmen, 49 • Guzmán, Virginia, 119 • Harman, Jerónimo, 101 • Haro Gómez, Benigno, 236 • Haro, Espíritu, 132 • Herdoíza Cattani, familia, 71 • Heredia, Alonso Benito de, 194 • Heredia, Benedicto, 177, 183, 185 • Heredia, Francisco, 132 • Heredia, Manuel, 220 • Hermano Miguel (Francisco Febres Cordero), 40, 128, 233 • Hernández Marcillo y Pérez de Zúñiga, Francisco, 157 • Hernández, Francisca, 68 • Herrera, Dolores, 123 • Herrera, Joaquín, 113, 155 • Herrera, José de, 98 • Herrera, Pedro, 194, 195, 205 • Hidalgo, Daniel, 119, 238 • Hidalgo, Julio, 38

• • • • •

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Hidalgo, Margarita, 42 Hidalgo, Pablo, 237 Hidrobo, Adela, 141 Hidrobo, Francisco, 141 Higley, H. G. (plano de), 23, 30, 32, 53, 65, 69, 101, 107, 112, 150, 221 Hinojosa, Beatriz de, 225 Hinojosa, Emiliano, 184 Holguín Albornoz, Eduardo, 92 Holguín Albornoz, Marcelo, 92 Holguín de Barona, Mercedes, 89 Holguín Herdoíza, Hugo, 92 Holguín, Hortensia, 89 Hotel Europa, 68 Hotel Metropolitano, 207 Huayna Cápac, 229 Huras Viteri, familia, 150 Hurtado Flores de Pricot, Carmen, 120 Hurtado Quirola, Margarita, 33 Hurtado, Cristóbal, 34 Hurtado, Fanny, 34 Hurtado, Manuela, 90 Ibarra de Velasco, Delia, 152 Ibarra Soberón, Delia, 81 Ibarra, José de, 225 Icaza Coronel, Jorge, 87 Iglesia Catedral, 136 Iglesia de El Tejar, 186 Iglesia de la Compañía, 80 Iglesia de la Merced, 177, 211, 220, 222 Iglesia de San Agustín, 55, 191, 203, 204 Iglesia de San Blas, 39, 81, 83, 113 Iglesia de San Francisco, 210 Iglesia de San Juan, 43, 44 Iglesia de Santa Bárbara, 93, 94 Inclana, María, 53 Inguicho, Polinario, 44 Instituto de Criminología, 186 Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, 128 Instituto Ecuatoriano de Cultura Hispánica, 125 Instituto Nacional de Previsión, 143 Instituto Superior de Filosofía y Letras, 217 Intriago Castillo, familia, 71 Izurieta, Ricardo, 238 Jácome Albuja, Jesús, 238 Jácome Celso, Alejandro, 59

256 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

• Jácome de Arroba, Marta, 139 • Jácome de Buendía Ordóñez, Rosario, 144 • Jácome de Estrada y Montanero, Luisa, 85 • Jácome Varela, familia, 139 • Jácome, Augusto R., 204 • Jácome, Carmela, 139 • Jácome, Clara, 129 • Jácome, Custodio, 164 • Jácome, Inocencio María, 138 • Jácome, Manuela, 61, 62 • Jácome, Petrona, 141 • Jácome, señoras, 84 • Jara Fernández de Córdova, Domingo Lorenzo, 168 • Jara R., Antonio, 237 • Jara, Darío, 32 • Jara, Felipe, 149 • Jara, Juana, 142 • Jara, Luisa, 96 • Jara, Manuel, 235 • Jara, Presentación, 230 • Jara, Rafael, 34 • Jara, Teresa, 48 • Jaramillo Arteaga, Manuel María, 159, 236 • Jaramillo Cevallos, Ricardo, 102 • Jaramillo Hidalgo, Carlos, 238 • Jaramillo Larrea, Germán, 76 • Jaramillo Suárez, Rafaela, 123 • Jaramillo, Camilo, 42 • Jaramillo, Daniel, 59 • Jaramillo, Enma, 59 • Jaramillo, Estuardo, 86 • Jaramillo, familia, 91 • Jaramillo, Joaquín, 103 • Jaramillo, José A., 186, 237 • Jaramillo, Judith, 23 • Jaramillo, Luisa, 182 • Jaramillo, Ramón, 91 • Jaramillo, Tomasa, 121 • Jaramillo, Víctor Manuel, 76 • Jarra de Moncayo, Clementina, 238 • Jarra, Francisca, 104 • Jarrín Benites, Rafael, 64 • Jarrín de Racines, Hilda, 45 • Jarrín Espinosa, Alberto, 108 • Jarrín Espinosa, Octavio, 186 • Jarrín Maldonado, Luis, 23 • Jarrín, Belisario, 52 • Jarrín, Héctor, 45 • Jarrín, Isabel, 76 • Jarrín, Manuel, 39 • Játiva, Fabián, 144

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1534 - 1950

Játiva, Luis Enrique, 30 Játiva, Ricardo, 24 Játiva, Segundo A., 238 Jervis Munive de Pérez, Hortensia, 137 Jervis, Pompeyo, 64 Jijón Chiriboga, Carlos, 97 Jijón Coronel, Pedro Pablo, 208 Jijón de Recalde, Antonia, 113 Jijón Gangotena, familia, 97 Jijón Gangotena, José Ignacio, 24 Jijón Gangotena, Leonor, 93, 95 Jijón Melo, Alfredo, 138 Jijón Melo, familia, 138 Jijón Pallares, Rosa, 138 Jijón y Vivanco, Juanita, 94 Jijón, Aparicio, 85 Jijón, familia, 24 Jijón, Jacinto, 164, 230 Jijón, José María de, 181 Jijón, Josefa, 221 Jijón, Pedro, 100 Jiménez Páliz, Moisés, 45 Jiménez Valdivieso, José Ignacio, 143 Jiménez Yepes, Amelia, 222 Jiménez, Adolfo, 27, 29, 38, 51, 62, 97, 107, 221 Jurado Cali, Enrique, 65, 203 Jurado Cali, Mercedes, 115 Jurado Martínez, Juan Gabriel, 65, 77 Jurado Martínez, Rosa Elvira, 65 Jurado Riquetti, Edmundo, 65 Jurado, Antonia, 143 Jurado, Antonio, 43 Jurado, Hernán, 234 Jurado, José, 43 Jurado, Juan, 43 Jurado, Manuel María, 237 Jurado, Manuela, 43 Jurado, Micaela, 231 Juzgado primero del crimen, 238 Karabanov, Abraham, 59 Karolys, Gonzalo, 186 Kennedy Valdez, Alejandro, 68 Kingman Riofrío, Eduardo, 87, 88 Kingman Riofrío, familia, 57, 69 Kingman Riofrío, Nicolás, 87 Klaber, Alberto, 143 La Belmonte, plaza de toros, 48 Labarta y Villavicencio, María de la Salud, 160

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Labarta, José, 160 Lamar, Manuela, 73 Landázuri Bueno, Dolores, 102 Landázuri, Arquímedes, 76 Landeras, familia, 91 Landeras, Tomasa, 91 Landeta, Rafael, 34 Lara Espinosa, Zoila Rosa, 120 Lara Oña, Jorge, 59 Larco, Fabián, 77 Larenas, Luis A., 238 Larrazábal, José de, 205 Larrea Calderón, Rafael, 30 Larrea de Barba Aguirre, Beatriz, 161 Larrea de Larrea, Victoria, 95 Larrea Donoso, Manuel, 161 Larrea García, Sara, 95 Larrea García, Victoria, 95 Larrea Larrea, Roberto, 95 Larrea Valdivieso, Alberto de, 34 Larrea y Vela, Genaro, 95 Larrea y Vela, Joaquín, 95 Larrea y Vela, Roberto, 95 Larrea Zambrano, Carlos, 95 Larrea, Camilo, 186 Larrea, Julio, 59 Larrea, Mariana, 181 Larrea, Mercedes, 75 Larrea, Neptalí, 108 Laso Espinosa, Galo, 30 Laso González, familia, 120 Laso Lara, Juan, 30 Laso, Ignacio, 87 Lasso Chiriboga, Clemencia, 126 Lasso Chiriboga, familia, 161 Lasso de la Vega, Alonso, 97 Lasso de la Vega, familia, 205 Lasso de la Vega, Joaquín, 162 Lasso M., Bolívar, 238 Lasso, Enrique, 204 Lasso, familia, 126 Lasso, José María, 126 Lasso, María, 161 Layseca Bustamante, familia, 196 Layseca y Robles, José, 195, 196 Ledesma de Janón, Eduardo, 68 Ledesma Muñoz, Eduardo, 63 Ledesma, Estefa, 41 Ledesma, Eugenio, 41 Legarda, Antonio, 44 Leguía y Aldaz, Miguel de, 169 Leiva, Cornelio, 237 Leiva, Heriberto, 59 León B., Pedro, 30

257 F e r n a n d o

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León Chiriboga, Mercedes, 224 León Enríquez, Eduardo, 68 León Larrea, familia, 207 León Mera, Juan, 118, 155, 203, 206, 220 León Ruiz, Ana de, 168 León Sarasti, familia, 24 León y Baca, Juan Crisóstomo de, 220 León y Borja, María, 174 León y Carcelén, Bernardo de, 103 León y Mosquera, Josefa, 197 León y Páez, Zoilo de, 158,159 León y Sánchez Maldonado, Juan Valentín de, 118 León, Francisco Javier, 212 León, José de, 220 León, María Ventura de, 137 Leoro, Manuel, 239 Lescano Guzmán, Ignacia, 85 Lestrel, Juan, 39 Liborio Villacreses, Ignacio, 56 Liebman, Carlos, 143 Lino, Antonio, 121 Lizarazu, Luis, 53 Lizarzaburu Larrea viuda de Borja, Mariana, 187 Llaguno, Timotea, 32 Llanos y Valdés, Gabriel, 122 Llerena, José Alfredo, 87 Llerena, Mercedes, 186 Llori Arana, Juana, 113 Lombeyda, Alonso Fiel de, 179 López Aguirre, familia, 202 López Álvarez, Antonino, 149 López Chaves, Carlos, 34 López Conde y Martínez, Vicente, 73 López Conde, familia, 58 López Conde, José, 73 López de Reinoso, familia, 227 López de Reinoso, Isabel, 225 López de Salcedo, señor, 210 López de Solís, María Victoria, 43 López de Sosa, Agustín, 205 López Echeverría, Daniel, 187 López Lisperguer, José Agustín, 90 López López, Felicísimo, 231 López Merino, Alonso, 127 López Merino, familia, 127 López Serrano, Juana, 219 López Valdivieso, familia, 235 López, Abel, 173

J u r a d o

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N o b o a

López, Ángela, 73 López, Daniel, 48 López, Darío, 164 López, Dolores, 231 López, familia, 235 López, Joaquín, 231 López, José María, 210, 213, 214 López, Manuel, 64, 141, 153 López, Nicolás F., 235 López, Nicolás, 213 López, Nicolasa, 235 López, Olga, 45 López, Tránsito, 132 Losa Moreno, Francisca, 62 Losa Moreno, Pacífica, 61 Losa Moreno, Rafael, 62 Loza Jiménez, Gonzalo, 39 Loza Sánchez de Orellana, José de, 129 Loza Soria, José Rafael, 34 Loza y Albán, Fulgencio, 170 Loza y Guerra, Pedro, 170 Loza y Silva, Juan de, 148 Loza, familia, 199 Loza, Ignacio, 149, 196 Loza, Miguel, 75 Loza, Moisés, 236 Lozano Pazmiño, Juana, 127 Lozano, Gaspar, 127, 128 Ludeño, Fermina, 106 Lugo Ojeda, Mariana de, 167 Lugo, familia, 168 Luisín, Nicolás, 121 Luna Andrade, Moisés, 97 Luna Tobar, Alberto, 97 Luna Tobar, Alfredo, 97 Luna, Nicanor, 53 Luna, Pedro de, 169 Luzuriaga, Juan E., 239 Machado, Alberto, 237 Machado, Hernando, 192 Machuca Crespo, Mercedes, 62 Machuca Crespo, Virgilio, 62 Machuca Ibarra, familia, 92 Madrid, Leonardo, 45 Madrid, Rosa, 88 Maenza, familia, 174 Maenza, Rafael, 172 Maldonado Cáceres, Antonio, 180 Maldonado Iglesias, Roberto, 55 Maldonado Jarrín, Ciro, 45 Maldonado León, Miguel, 197 Maldonado Palacios, familia, 55 Maldonado R., Antonio, 237 Maldonado Rivadeneira, José

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Gabriel, 223 Maldonado, Baltasar, 220 Maldonado, Mario, 143 Malo, María, 56 Mancero, familia, 183, 143 Mancero, Julio, 59 Mancero, Mercedes, 182 Mancero, Rafael, 143 Mancero, Tomasa, 182 Mancheno Ribadeneyra, Cristina, 223 Manjarrés, María, 67 Manjarrés, Ricardo, 236 Manosalvas del Pozo, María, 123 Manosalvas, Juan, 115, 182, 184 Manosalvas, María, 105 Manrique Jaramillo, familia, 234 Mantilla, Amelia, 222 Mantilla, Aníbal, 59 Mantilla, Fabián, 45 Mantilla, Juana, 73, 75, 106 Mantilla, Simón, 23 Mantilla, Virginia, 87 Manzano, Enriqueta, 76 Manzo y Loza, José, 98, 99, 100 Manzo, Narciso, 53 Marcillo, José, 90 Marcillo, señoras, 142 Marcos de León, Pedro, 58, 73, 137 Marín Saá, Galo, 30 Marín, Adolfo, 30 Márquez, Gabriel, 23 Martín, Gonzalo, 179 Martínez Casco, Juan, 116 Martínez Cevallos, Luis, 177 Martínez de la Rambla, Lorenzo, 226 Martínez de Malinas, Juana, 193 Martínez Holguín, Rosa, 234 Martínez Mera, Juan de Dios, 152 Martínez Montanero, Jacinta, 219 Martínez Vásconez, Nicolás, 144, 155 Martínez, Alfredo, 237 Martínez, Asencio, 140 Martínez, Augusto, 234 Martínez, Daniel, 107 Martínez, Dionisio, 150, 197 Martínez, Eleuterio, 122 Martínez, escritor, 119 Martínez, Ignacio, 128 Martínez, Lorenzo, 140 Martínez, Luis A., 65, 119, 164

258 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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Martínez, Manuel, 185 Martínez, Teresa, 86 Martínez, Vicenta, 213 Martos Bohórquez, Gonzalo de, 127 Marún, Alejandro, 144 Marzana, José Antonio, 51 Masjhak, Estanislao, 77 Mata Viteri, Mercedes, 203 Mata y Viteri, José Antonio, 133 Mateos de Astudillo, Simón, 167 Mateus García, Gabriel, 30 Mateus Pacheco de González, Ignacia, 154 Mateus y García, Carlos, 67 Matheu, Asencio, 171 Matheu, familia, 171 Maya Miño, Ignacio, 143 Maya, Carlos, 215 Maya, Ramón, 73, 220 Médicis Montaño, Juana, 171 Medina Ríos, Federico, 39 Medina Sotelo, Pedro de, 148 Medina, Alejandra, 76 Medina, Isabel, 171 Medina, María, 86, 132 Medina, Sergio, 108 Medina, Tomás, 155 Mejía del Valle, Antonio, 149 Mejía Erazo, Eloy, 237 Mejía, Feliciano, 220 Mejía, Juan, 185 Melendre, Mariana, 43 Melo Montúfar, Alejandro, 33 Melo, Alejandro, 64 Melo, Alonso de, 167 Melo, Antonio, 89 Melo, María, 90 Melo, Nicolás, 183 Mena Ayala de Fuentes, Rosario, 175 Mena Caamaño, Carlos, 144 Mena Caamaño, Isabel, 174 Mena Villamar, Claudio, 97 Mena, Alberto, 68 Mena, Camilo, 57 Mena, Josefina, 144 Mena, Manuel, 51 Mena, Natalia, 30 Mena, señor, 199 Mendeville, Juan Bautista, 157, 206 Mendizábal Vásconez, Joaquín, 155 Meneses Pallares, familia, 120 Meneses, Margarita, 96

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Mera Borja, Francisco, 97 Mera Cárdenas, familia, 119 Mera Gómez, Pedro, 220 Mera Iturralde, Luis Aníbal, 119 Mera Oviedo, Mentor, 57 Mera, Ángel G., 76 Mera, Augusto, 237 Mera, Daniel, 59 Mera, Diego de, 58 Mera, Dolores, 221 Mera, Euclideo, 237 Mera, José Enrique, 221 Mera, Luis, 221 Merino Casares, Carlos, 34 Merino de la Guerra, Alegría, 201 Merino, Leonardo, 59 Merizalde Chacón, Ignacio, 58 Merizalde Saá, Mercedes, 104 Merizalde Saá, Quiterio, 104 Merizalde Suárez, Arístides, 77 Merizalde, Ángela, 166 Merizalde, Mariano, 171 Merizalde, Rosalía, 49 Merlo Guerrero, familia, 202 Merlo, Luis Fernando, 186 Mesías O., Gerardo, 59 Mesías, Luis Fernando, 208 Mestanza, Mariano, 83 Meza, Isabel, 32 Michelena, Margarita, 154 Ministerio de Defensa, 126 Ministerio de Educación, 25 Ministerio de Finanzas, 99 Ministerio de Previsión Social, 153 Miño Boada, Carlos, 108 Miño Cabezas, Alfredo, 76 Miño N., Víctor, 237 Miño Suárez, José, 171 Miño, Antonio, 45 Miño, Dolores, 183 Miño, Francisco, 235 Miño, Juan, 202 Miño, Mercedes, 177, 183, 184 Miño, Pacífico, 143 Miranda Cevallos, familia, 80, 81 Miranda Cornejo, Luis, 239 Miranda Jaramillo, Alfonso, 59 Miranda Ribadeneira, Luis Emilio, 53 Miranda, G., 204 Miranda, José, 81 Miranda, Miguel, 203 Mogollón, Alegría, 113

1534 - 1950

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Mogro, notario, 141 Mogrovejo, Josefa, 153 Moirriagui, Angel, 237 Molestina Ordeñana, José María, 55 Molestina, Pepita, 55 Molina Flores, Paula, 225 Molina Troya, Luis Miguel, 108 Molina, Alfonso, 143 Molineros, Rafael, 28 Molineros, Rosa, 198 Monar de Escalante y Ontaneda, Juan Antonio, 118 Monasterio de las Conceptas, 126, 127, 129, 160, 162, 163, 164, 165, 166, 167, 209, 220 Monasterio del Carmen Alto, 213 Monasterio del Carmen Bajo, 89, 90, 91, 102, 121, 144 Moncayo Cruz, familia, 131 Moncayo Cruz, Gustavo, 143 Moncayo Donoso, Leopoldo, 30 Moncayo Mena, Carlos, 131 Moncayo Moncayo, Antonio, 144 Moncayo Moreno, Fernando, 52 Moncayo Páez, Alfonso, 52, 59 Moncayo Uquillas, familia, 52 Moncayo Yepes, Juana, 202 Moncayo Yépez de Guzmán, Juana, 150 Moncayo Yépez, Francisco Hipólito, 203 Moncayo, Abelardo, 185 Moncayo, Alfonso, 108 Moncayo, Carmen, 99 Moncayo, familia, 131 Moncayo, Hugo, 216 Moncayo, Jorge H., 143 Moncayo, Josefa, 67 Moncayo, Pedro, 150 Monge, Celiano, 173 Monge, Rosario, 85 Monge, Vicente, 85 Montaguano, José, 229, 231 Montaguano, Juan, 229, 231 Montaguano, Mariano, 228, 229 Montahuano Vela, María, 119 Montalvo Almeida, Pedro Javier, 89 Montalvo Alvear, Abelardo, 28, 134 Montalvo Hidalgo, Manuel, 28 Montalvo Ortiz, Milton, 38 Montalvo Terán, Julio César, 67

259 F e r n a n d o

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Montalvo V., Sixto, 45 Montalvo Viteri, Antonio, 28 Montalvo Viteri, Gualberto, 28 Montalvo, Abelardo, 152 Montalvo, Antonio M., 28 Montalvo, Juan, 123, 222, 229, 230,239 Montalvo, Julio C., 238 Montalvo, Julio César, 77 Montalvo, Milton, 38 Montanero, familia, 219 Montanero, Jerónimo Martín, 219, 220, 226 Montanero, Pedro, 168 Montaño Calderón, Darío, 49, 202 Montenegro y Maldonado, Diego Martín, 168, 169 Montenegro y Ríos, Marcelino, 196 Montenegro, Alonso de, 168, 169 Montenegro, familia, 91 Montenegro, Gonzalo de, 168 Montenegro, José, 211 Montenegro, Micaela, 91 Montenegro, Pedro de, 168 Montero Carrión, José A., 97 Montero Vela, Jorge, 152 Montero, Pedro, 149 Montesinos Burbano, Alfonso, 24 Montesserín, Manuela, 220 Monteverde Romero, Carlos, 208 Montúfar, Isidro, 142 Montúfar, Juan Pío (plano de), 36, 39, 42, 43, 44, 47, 49, 58, 61, 91, 112, 116, 191 Mora Almendáriz, José Francisco de, 75 Mora Escalante, César, 59 Mora Gaybor, Soledad de, 72, 76 Mora Ortega, Jorge, 87 Mora, Antonio, 137 Mora, Celia, 147 Mora, Ezequiel, 34 Mora, Juan, 141 Mora, Juana, 140, 141 Mora, Miguel, 68 Morales, Joaquina, 61 Morales, José María, 183 Morales, Rafael A., 237 Morales, Toribio, 43 Morán Abeldebeas, familia, 197

J u r a d o

N o b o a

• Morán Abeldebeas, Isabel, 195, 196, 197, 198 • Morán de Butrón y del Castillo, Joaquín, 195 • Morán de Salcedo, Isabel, 197 • Morán Noboa, Chepita, 135 • Morán, Francisca, 168 • Moreano, Augusto, 186 • Morejón, Manuel, 169 • Moreno del Castillo, Victoria, 119 • Moreno Guerra, María Ester, 133 • Moreno Jarrín, Gustavo, 39 • Moreno Jijón, Amalia, 230 • Moreno Moncayo, Enrique, 202 • Moreno Moncayo, Jorge, 202 • Moreno Montaño, Enrique, 39 • Moreno Yépez, Manuel, 34 • Moreno, Alfredo, 108 • Moreno, Felipe, 51, 182, 183 • Moreno, Ignacia, 138 • Moreno, Josefa, 62, 205 • Moreta, Rafael, 34 • Morgan, Enrique, 164 • Morillo Andrade, Raquel, 76 • Morillo de Astudillo, Hermelinda, 141 • Morillo, Carlos, 230 • Morillo, José, 197 • Morlás Martínez, Fernando, 164 • Moscoso Borrero, Mariana, 119 • Moscoso Cárdenas, familia, 234 • Moscoso de Rodríguez, Victoria, 76 • Moscoso Espinosa, Antonio, 27 • Moscoso Loza, familia, 27 • Moscoso Maldonado, Salomé, 202 • Moscoso Rivadeneira, familia, 27 • Moscoso Sánchez, Alfonso, 234, 235 • Moscoso Suárez, Gabriel, 208 • Moscoso Tamariz, Miguel, 30 • Moscoso, Joaquín, 100 • Moscoso, Juan, 117 • Moscoso, María, 117 • Moscoso, Mateo, 113 • Moscoso, Vicente, 104 • Mosquera Álvarez, familia, 88 • Mosquera Lasso, Lizardo, 152 • Mosquera Narváez, Aurelio, 75, 202 • Moya Alzamora, Ramón, 235 • Moya, Humberto, 23

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Mucarzel, Aziz Noé, 39 Muela Calderón, familia, 226 Muela, familia, 180, 181 Muirriagui Donoso, Ángel, 202 Municipio de Quito, 49, 163 Munive de Rendón, Francisca, 121 Munive Silva, Miguel, 61, 84, 90, 91, 121, 161, 197 Muñoz Arias, Julio H., 55 Muñoz Borrero, Enrique, 95 Muñoz Cobo, Bárbara, 176 Muñoz de Ayala, Manuel, 91 Muñoz de Calisto, Antonia, 154 Muñoz Lobón, Francisco, 225 Muñoz López, Alfredo, 77 Muñoz Morejón, Francisco, 218 Muñoz Muñoz de Bustamante, Matilde, 24 Muñoz Ribadeneira, familia, 55 Muñoz Ricos Saltos, Juana, 218 Muñoz Ruilova, Luis, 75 Muñoz Salinas, Eloisa C., 176 Muñoz, Juan, 141 Muñoz, Julio, 144 Muñoz, Ramiro Patricio, 24 Muñoz, Ramón, 133 Muñoz, Telmo H., 24 Muñoz, Tomasa, 174 Murgueitio, Joaquín, 162 Murgueitio, Ricardo Leonidas, 237 Murillo Zola, E., 76 Murillo, Carlos, 232 Murillo, Luis, 34 Murillo, Manuel, 232 Musello Miranda, Cosme, 68 Museo de Arte Colonial, 173 N., Jacoba, 81 Najas, José, 159 Najas, Miguel, 24 Naranjo Dávila, Galo, 38 Naranjo de Rodríguez, Laura Beatriz, 108 Naranjo Lavayen, Víctor, 143 Naranjo, Asencia, 186 Naranjo, Emilia, 56 Naranjo, Galo, 38 Naranjo, Jesús Aníbal, 108 Naranjo, Joaquín, 97 Naranjo, Rosario, 136 Narváez Cisneros, Manuela, 226 Narváez de Pólit, Manuela, 141 Narváez Jaramillo, Manuela, 142 Narváez, Clímaco, 38 Narváez, Guadalupe, 43

260 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

• Narváez, Juan José, 71, 208 • Navarrete y Antisco, Alonso, 227 • Navarrete, Fernando, 232 • Navarrete, María Josefa, 169 • Navarro Gardin, Hipólito, 186 • Navarro Nájera, Juan Francisco, 120, 122 • Navarro, Isidora, 196 • Navarro, José Gabriel, 136, 207 • Navas Guerra, Encarnación, 174 • Navas, Felisa, 64 • Naveda, Salomón, 45 • Negrete, Eduardo, 32 • Negrete, José, 181 • Negrete, Luz María, 59 • Negrete, María Tomasa, 91 • Neira, Carlos, 45 • Neumane, Antonio, 67 • Nicolalde, Luisa, 84 • Nicolalde, Ramona, 155 • Niebla, Diego de, 225 • Nieto Guzmán, Enrique, 45 • Nieto, Antonio, 182 • Nieto, Francisco, 117 • Nieto, Joaquín, 171 • Nieto, José, 102 • Nieto, Pacifico, 235 • Nieves Espinosa, Joaquina, 129 • Noboa Andrade, Fidel, 135 • Noboa Arízaga, Enrique, 62, 63, 131, 151 • Noboa Boada, Pedro, 236 • Noboa Boada, Rosa, 236 • Noboa Caamaño, Ernesto, 215 • Noboa Muñoz, Julio César, 59 • Noboa Muñoz, Julio, 176 • Noboa Páez de Navas, Rosario, 26 • Noboa Páez, Adeodato, 236 • Noboa Requejo, Enrique, 164 • Noboa Saá, Carlos, 48, 164, 221 • Noboa Saá, Francisco, 113 • Noboa Saá, Leopoldo, 130 • Noboa Saavedra, Juan de, 226 • Noboa, N., 185 • Noboa, Valentina, 153 • Nolivos León, Luis, 76 • Nolivos Maldonado, Max, 30 • Nolivos, Camilo, 48 • Nolivos, Mercedes, 68 • Nordi Alemán, Alfonso, 237 • Normal Juan Montalvo, 229, 230, 239 • Noroña Granda, Gastón, 24 • Noroña, Remigio, 24

• Novillo Trelles, Lauro, 108 • Núñez de Aguilar, Gertrudis, 227 • Núñez de Bonilla, Rodrigo, 179 • Núñez del Arco, Ramón, 154 • Núñez Rosero, Alberto, 76 • Núñez Torres, Rosa Elena, 140 • Núñez, Miguel, 48 • Ocampo, Alegría, 107 • Ocampo, José Miguel, 52, 144 • Ocampo, Rodrigo de, 179 • Ocaña, Manuel, 45 • Ojeda Dávila, familia, 224 • Ojeda, Alejandro, 45 • Ojeda, Cristóbal, 224 • Ojeda, Jorge, 55 • Olais, Joaquín, 220 • Olais, José de, 73 • Olalla, Margarita, 232 • Olano, Desiderio, 55 • Oleas, Josefa, 166 • Onagoytia, familia, 160 • Ontaneda Salazar, Virgilio, 222 • Ontaneda, familia, 235 • Ontaneda, José Virgilio, 238 • Ontaneda, señor, 234 • Ontaneda, Virgilio, 222 • Ontañón y Lastra, Nicolás de, 101 • Oñate Salcedo, Rafael, 143 • Oquendo Salas, familia, 143 • Oramas, Gonzalo Alfonso, 186 • Orbe Carrera, Ernesto, 34 • Orbe, Elías, 209 • Orcés, Arturo Vicente, 28 • Ordóñez Castelar de Buendía, Rosario, 138 • Ordóñez Espinosa, Rosendo, 186 • Ordóñez Pallares, Gabriel, 144 • Ordóñez, José, 138 • Ordóñez, Miguel C., 32 • Ordóñez, Rafael, 81 • Orejuela Larrea, Francisco, 53 • Orejuela, Francisco, 211 • Orejuela, Sergio, 59 • Orellana Andrade, Víctor, 235 • Orellana Ricaurte, familia, 235 • Orozco, Andrés de, 192 • Orozco, Roque, 140 • Orozco, Sebastiana, 102 • Ortega Carua, Antonio, 226 • Ortega, Aparicio, 134 • Ortega, Joaquina, 197 • Ortega, Manuela, 228 • Ortega, Salvador, 124

1534 - 1950

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Ortiz Aldaz, Pedro, 144 Ortiz Baca, familia, 65 Ortiz Baca, Ricardo, 64, 67 Ortiz Freire, Bolívar Eloy, 237 Ortiz Hidalgo, familia, 202 Ortiz Hidalgo, Virginia, 202 Ortiz, Amable, 183 Ortiz, Bartolomé, 225 Ortiz, Carlos Amable, 48 Ortiz, Carlos, 181 Ortiz, José Jaime, 118 Ortiz, Juana, 225 Ortiz, Manuel, 48 Ortiz, Miguel, 220 Ortiz, Vidal, 64, 65, 67 Ortuño, Segundo, 30 Osorio, Agustín, 63 Osorio, Luis Enrique, 25 Osorio, Mariana, 90 Osorio, Narciso, 140 Osorio, Segundo Mariano, 143 Oteyza, Francisco de, 210 Oviedo Jaramillo, Carlos, 30 Pacheco Jaramillo, Nicolás, 144 Pacheco Llerena, Camilo, 77 Pacheco Mendoza, Manuel, 24 Pacho Marmolejo, Melchor, 167 Padilla Garzón, José, 45 Padilla, Isidro, 205 Padilla, Ventura, 205 Páez Altamirano, Francisca, 117 Páez Benites, Luis A., 59 Páez Egüez de Quijano, Virginia, 158 Páez Egüez, Josefina, 52, 55 Páez Jijón, Miguel, 208 Páez Lemos, Enrique, 147 Páez Medina, Luis Alejandro, 186 Páez Torres, José, 93, 95 Páez, Federico, 152 Páez, Miguel, 155 Páez, Pablo, 108 Páez, Vicenta, 231 Palacio Arzobispal, 107, 132 Palacio de Gobierno, 152, 161 Palacio de Justicia, 206, 207 Palacio Episcopal, 161 Palacio Real de la Audiencia, 124, 209 Palacio, Pablo, 88 Palacios Alvarado, familia, 26 Palacios Díaz Osorio, María de Jesús, 127 Palacios González, Carlos, 34 Palacios Montesinos, César, 59

261 F e r n a n d o

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Palacios, Ana, 90 Palacios, Daniel, 236 Palacios, doctor, 57 Palacios, Narcisa, 43 Pallares Carrión, Isabel, 120 Pallares García, Isabel, 176 Pallares García, Luis Antonio, 176 Pallares Zaldumbide, Rosario, 25 Pallares, Luis Antonio, 176 Pallares, Rosario, 176 Palomero y Zapata, Juan, 117 Pantza, Víctor M., 59 Pardo Velasco, Rosa, 52 Pardo, familia, 41 Pardo, Manuel, 52, 55 Pardo, Miguel Jaime, 41 Paredes Armendáriz, Josefa, 180 Paredes de Alfaro, Ana, 216 Paredes Oñate, Efraín Sebastián, 77 Paredes Rubianes, Luis, 230 Paredes, Daniel Alberto, 143 Paredes, Diógenes, 87, 88 Paredes, Dominga, 141 Paredes, Emilia, 155 Paredes, José Segundo, 108 Paredes, Juan de, 89 Paredes, Julio, 64 Paredes, Luz, 182 Paredes, Manuel, 214 Paredes, Manuela, 122, 182 Paredes, María Ifigenia, 77 Paredes, María, 214 Paredes, Micaela, 123 Paredes, señoritas, 88 Paredes, Tomás de, 194 Paredes, Vicente, 171 Pareja Arteta de Pérez, Leonor, 217 Pareja Arteta, señora, 211 Pareja de Enríquez, María, 134 Pareja y Mariscal, Joaquín, 217 Pareja, Dorotea, 83 Pareja, Guillermo, 211 Pareja, Josefa, 81, 83 Pareja, Juan Ignacio, 214 Parra Velasco, Antonio, 152 Parra, Jacinta, 99 Parreño, Manuel, 100 Pasquel, Mario Eduardo, 108 Pástor Torres, Justo, 197 Pástor, Abraham C., 86 Pastrana y Monteserrín, Petrona, 171, 220

J u r a d o

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N o b o a

Patiño, Alcídes, 224 Patiño, Josefa, 226 Patiño, Juan, 76 Patiño, Manuel de Jesús, 104 Pauker, David, 77 Pavón, Miguel, 96 Paz Ante, Hortensia, 65 Paz de Gómez de la Torre, Josefa, 158 Paz Guerrero, familia, 202 Paz Proaño, Augusto, 166 Paz y Miño Proaño, Luis, 143 Paz y Miño, César, 39 Paz y Miño, Jorge, 186 Paz y Miño, Luis Felipe, 108 Paz, Antonio C., 186 Paz, Antonio, 103 Paz, Augusto, 55 Paz, Guillermo, 76 Paz, Juan M., 53 Paz, Rosa, 53 Paz, Virginia, 48 Pazmiño de Cajiao, Lucinda, 238 Pazmiño y Troya, Andrea de, 169 Pazmiño, Eulalia, 232, 233 Pazmiño, Francisca, 127 Pchorille, Guillermo, 34 Pensión Aguirre, 71 Pensionado Borja N.1, 132, 144 Peña Lazcano, Andrés, 77 Peña Vélez de Álava, Manuela, 160 Peña Weisson, Gabriel, 34 Peña, Rosa, 235 Peñafiel, Ignacia, 37 Peñafiel, Lorenzo, 144 Peñaherrera Albán, Luz María, 97 Peñaherrera Floresguerra, Arturo, 26 Peñaherrera García, Luz, 65 Peñaherrera Guerra, Modesto, 87 Peñaherrera Peñaherrera, familia, 221 Peñaherrera Vergara, Mariano, 217 Peñaherrera, Ana María, 144 Peñaherrera, Lola, 87 Peñalosa, Melchor de, 210 Perales, Teresa, 220 Peralta S., Víctor M., 40 Peralta, César, 49 Peralta, José, 49

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Peralta, Lucrecia, 49 Peralta, Luis, 49 Peralta, Oswaldo, 49 Pérez Borja, familia, 199 Pérez Borja, Francisco, 204, 221 Pérez Calisto, José María, 213, 222 Pérez Correa, Juan, 100 Pérez Cortés, José, 184 Pérez Dávalos, Francisco, 34 Pérez de la Cuadra, Antonio, 149 Pérez de la Torre, Juana, 180 Pérez de la Torre, Tomasa, 180 Pérez de la Villota, Griselda, 201 Pérez de Pérez, Manuela, 119 Pérez Echanique, José María, 221 Pérez Guerrero, Alfredo, 207, 233 Pérez Guerrero, Sebastián, 159 Pérez León, César, 239 Pérez Luna, José A., 237 Pérez Muñoz y Calisto, María, 217 Pérez Pareja de Borja, Leonor, 198, 215 Pérez Pareja de Pareja, Mercedes, 217 Pérez Pareja, Dolores, 222 Pérez Pareja, familia, 199, 221 Pérez Pareja, José María, 217 Pérez Pareja, Rosario, 92 Pérez Perozo, Víctor Manuel, 25 Pérez Quiñones de Cárdenas, Isabel, 118 Pérez Quiñones, Carlos, 233 Pérez Quiñones, Fernando, 203 Pérez Quiñónez, Josefina, 121 Pérez y Bravo, Antonio, 175 Pérez, Ana, 199 Pérez, Antonia, 158 Pérez, Carlos, 235 Pérez, Diego, 193 Pérez, familia, 217 Pérez, Francisco, 193 Pérez, Galo René, 63 Pérez, Gualberto (plano de) 23, 24, 29, 37, 39, 43, 44 Pérez, Gualberto, 128, 142, 206 Pérez, José, 75 Pérez, Luisa, 67 Pérez, Marcelina, 154 Pérez, Marcelino, 205 Pérez, María Luisa, 67

262 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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Pérez, Nieves, 32 Pérez, Rafael, 134 Pérez, Rafaela, 62 Pérez, Teresa, 174, 226 Pérez, Vicente, 232 Periódico el Ecuatoriano, 217 Pesantes Villacís, Alcides, 33 Piedra, Benjamín, 215 Piedrahita, Juana, 32 Piedrahita, Mercedes, 163 Pilamonta, Agustín, 90 Pillajo, Dionisio, 104 Pineda y Donoso, Antonio, 103, 162 Pino Roca, Ana Rosa, 24 Pintado de Mena, Manuela, 173 Pintado, Antonio, 94, 96 Pintado, José María, 136 Pinto Berrío, Josefina, 136, 137 Pinto Berrío, María, 136, 137 Pinto Dávila, Gustavo, 126 Pinto Díaz, Carlos, 140 Pinto Espinosa, familia, 126 Pinto Guzmán, Benjamín, 59 Pinto Guzmán, Pedro, 63 Pinto Ortiz, Joaquín, 136 Pinto Valdemoros, Nicolasa, 123, 136 Pinto, Luis, 144 Pinto, Pedro, 211 Piña, Francisca, 180 Pío IX, Papa, 55 Pitarque, familia, 120 Pizarro M., Leonidas, 208 Pizarro, Marcos, 205 Plácida Morillo, Francisca, 161 Plaza Lasso, Galo, 25, 132, 161 Plaza, Diana, 216 Plaza, Leonidas, 176 Plaza, Ramón, 149 Plazas, Ramón, 196 Polanco Carrión, familia, 103, 166 Polanco Carrión, Manuel, 212, Polanco, José Antonio, 102 Poleaux, José, 237 Pólit Cevallos, Luis, 142 Pólit Jarre, Carlos, 49, 59, 144 Pólit M., Agustín, 238 Pólit Manrique de Pólit Mantilla, Inés, 234 Pólit Manrique, familia, 141, 234 Pólit Moreno Manuel María, 201 Pólit Moreno, Eduardo, 55, 133 Pólit Moreno, familia, 141 Pólit Narváez, Rafael María, 133

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1534 - 1950

Pólit Ortiz, familia, 133 Pólit Ortiz, Jorge, 133 Pólit Ortiz, Luis, 133 Ponce Benites, Reinaldo, 97 Ponce Borja, Alejandro, 40 Ponce Borja, Belisario, 40 Ponce Borja, familia, 40 Ponce Borja, José María, 40 Ponce Carbo, familia, 40 Ponce Cornejo, Alejandro, 77 Ponce Cornejo, familia, 72 Ponce Elizalde, Alejandro, 152 Ponce Enríquez, familia, 119 Ponce Luque, familia, 152 Ponce Miranda, familia, 40 Ponce Salazar, familia, 122 Ponce, Alejandro, 34 Ponce, Álvaro, 23 Ponce, Camilo, 101, 132 Ponce, José, 196 Pons Camposano, Antonio, 152 Portilla Lanchazo, Antonio, 203 Portilla, Abelardo, 185, 186, 187 Portilla, Rafael, 207 Portugal, Leonor, 48 Portugal, Rosario, 142 Posse, Dolores, 158 Posso, Roberto, 86 Poveda, José, 99 Poveda, Juan, 159 Pozo, Mercedes, 93 Pozo, Rosario, 69 Pozo, señorita, 86 Prado de la Muela y Rosero, Diego, 226 Prado Salazar, Julio, 34 Proa de Gutiérrez, Josefa, 84, 85 Proaño Álvarez, Carlos, 204 Proaño Araujo, Javier, 202 Proaño Donoso, Eloy, 175, 184 Proaño Donoso, familia, 184 Proaño Donoso, Hortensia, 186 Proaño Gordillo, Carlos A., 186 Proaño Maldonado, Félix, 64 Proaño Maldonado, Gonzalo, 45 Proaño Paz y Miño, Eduardo, 186 Proaño y Araujo, Francisco Javier, 196 Proaño Yerovi de Holguín, Felipe, 196 Proaño Yerovi de Holguín, Petrona, 196 Proaño Yerovi, familia, 196 Proaño, Dolores, 185

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Proaño, Félix, 205 Proaño, Hortensia, 183 Proaño, Javier, 195 Proaño, José Ignacio, 53, 157 Proaño, José María, 99 Proaño, Milton H., 77 Prócer, Carlos, 186 Puebla, Francisco, 204 Puelles, Pedro de, 126 Puente Arboleda, Wenceslao, 216 Puente Godoy, familia, 63 Puente y Mideros, Calisto de la, 194 Puente y Mideros, Esteban de la, 194 Puente y Puente, Hugo, 143 Puente, Carlos, 61, 62 Puente, Edgar, 72 Puente, Rafael Alberto, 237 Puente, Ramón, 171 Puertas Ledesma, Jorge, 186 Puertas, José, 186 Puertas, Teodoro, 49, 59 Puga Villalba, José Francisco, 108 Puga, Miguel Ángel, 71 Pundo, Ignacio, 150 Quesada, Manuel, 64 Quevedo Baquero, Francisco, 140, 142 Quevedo Baquero, Mariana, 140 Quevedo Baquero, Rosario, 140 Quevedo Coronel, Rosa Mercedes, 40 Quevedo L., Vicente, 40 Quevedo Moscoso, Antonio J., 140 Quijano, Carmen, 73 Quijano, Rafael, 203 Quilago, Rosa, 42 Quintana de Olais, Ignacia, 76 Quintana Dueñas, Jorge, 59 Quintana Miranda, Eduardo, 143 Quintana, María Juana, 124 Quintana, señoras, 85 Quiñones y Cabezas, Mariano Ángel, 198 Quiñones y Cienfuegos, Pedro, 103 Quiñones, Ulpiano, 214 Quiñónez Villagómez, Ulpiano, 92 Quiroga, Julián, 47, 62 Quiroga, Mariano, 43 Quirós Vera, Pedro de, 168

263 F e r n a n d o

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Quirós y Girón, Luciana, 227 Quirós, José María, 232 Quirós, Pedro, 170 Quiroz, Manuel, 186 Quishpe, Faustino, 44 Quishpe, José María, 235 Racines R., Eduardo, 237 Racines, Luis, 238 Radio Nacional Espejo, 71 Ramex, Marcelo, 144 Ramírez Araujo, José, 186 Ramírez de Arellano, familia, 212 Ramírez de Arellano, Francisco, 170 Ramírez de Arellano, Teresa, 193 Ramírez de Ayllón, Mariana, 220 Ramírez de Montoya y Ordóñez, José, 226 Ramírez de Vivanco, Mercedes, 65 Ramírez Puerta, Enrique, 197 Ramírez, Concepción, 123 Ramírez, Dolores, 104 Ramírez, Juana, 177 Ramírez, Luis Aurelio, 236 Ramírez, Manuel, 42 Ramírez, Milton, 77 Ramos Suárez, Alfredo, 34 Ramos, Guillermo, 208 Ramos, Jorge A., 239 Rañón, Mariano, 98 Rañón, Pedro, 100, 103 Rañón, Tomás, 138 Rayo Carpio, Faustino, 107 Rea de Silva, Blanca, 143 Rea, Rosa, 62 Rebolledo Velasco, familia, 206 Recalde Alemán, Juan, 34 Recalde Escudero, Fidel, 113 Recalde Fernández Salvador, Jorge, 76 Recalde, Esteban, 100 Recalde, Jaime, 23 Recalde, José Luis, 237 Recalde, Miguel, 45 Recuenco, María, 167 Redín, Carmen, 69 Registro Civil, 153 Reimers Redín, señorita, 185 Reimers Thomas, Alberto, 185, 186 Reinoso, "Mama Shule", 184 Reinoso, Bernardo, 105 Reinoso, familia, 107

J u r a d o

N o b o a

• Reinoso, Inés de, 226 • Reinoso, Tomás, 130 • Rendón Salvador, Antonia, 93, 94 • Rendón y Olais, Baltazar, 92 • Rendón, Justa, 94 • Rey, Ramón, 120 • Rey, Renán, 143 • Reyes y Reyes, Jorge, 87, 88, 172 • Reyes, Ignacia, 154, 155 • Reyes, Manuel María, 64 • Reyes, Mariano, 171 • Reyes, Nicolás, 42, 58 • Reyes, señor, 183 • Reyes, Teresa, 197 • Riaño, Manuel, 160 • Ribadeneira Buendía, Mélida, 55 • Ribadeneira Ponce de Sáenz, Dolores, 134 • Ribadeneira Sáenz, Gabriel, 108 • Ribadeneira Salazar, Alejandro, 40 • Ribadeneira, Antonio, 157 • Ribadeneira, Edmundo, 57 • Ribadeneira, Emilia, 140 • Ribadeneira, familia, 134 • Ribadeneira, Gertrudis, 76 • Ribadeneira, José María, 142 • Ribadeneira, Juan Antonio, 90 • Ribadeneira, Luis, 231 • Ribadeneira, Nicolás, 152 • Ribadeneyra Coello, familia, 97 • Ribadeneyra de la Cruz, Melchor, 97 • Ribera García, Agustina, 179 • Ribera, familia, 179 • Ribera, María, 179 • Ricaurte Enríquez, Jaime, 144 • Ricaurte Trujillo, Humberto, 59 • Ricaurte Venegas, Abdón, 215 • Ridder, Augusto, 158 • Riesker, Isaac, 59 • Riofrío Costa, Ramón, 101 • Riofrío Fernández Salvador, Elena, 101 • Riofrío, Francisco, 92 • Riofrío, Juan, 137 • Riofrío, Magdalena, 77 • Riofrío, Miguel, 217 • Riofrío, Rosa María, 69 • Ríos, And• rea, 195 • Ríos, José Valerio, 143 • Riquetti Ayora, Luisa, 65 • Rivadeneira Albuja, José M., 143 • Rivadeneira Dávila, Carmela,

136, 137 • Rivadeneira Dávila, familia, 65, 137 • Rivadeneira Dávila, Jaime, 138 • Rivadeneira Francisco, 48 • Rivadeneira García, Alberto, 137 • Rivadeneira Guerra, Benjamín, 115 • Rivadeneira Játiva, José R., 30 • Rivadeneira Reyes, Carlos A., 186 • Rivadeneira Rojas de Anderson, Matilde, 137 • Rivadeneira, Antonio, 48 • Rivadeneira, Gustavo O., 23 • Rivadeneira, José Rafael, 34 • Rivadeneira, Luis, 231 • Rivadeneira, notario, 48, 99 • Rivadeneira, Vicente A., 144 • Rivas Iturralde, Juan Alcides, 186 • Rivas N., Alejandro, 201, 204, 237 • Rivas, Miguel, 231 • Rivera o Cornejo Rivera de Espinel Mercedes, 51 • Rivera, Francisco, 104 • Rivera, Manuel, 104 • Robalino T., Lautaro, 239 • Robalino, Camilo, 237 • Robinson, Mercedes, 48 • Robles y Quiñones de Montenegro, Francisca, 169 • Rocafuerte, Vicente, 211 • Rocha, Rosa, 106 • Rodas Guerra, Adolfo, 55 • Rodas, familia, 53 • Rodríguez Ante de Suárez, Inés, 65 • Rodríguez Arteta, Rafael, 65 • Rodríguez Buitrón, Jorge, 45 • Rodríguez Corral, familia, 162 • Rodríguez de Cueva García, Zoila, 143 • Rodríguez de la Parra, Isabel, 225 • Rodríguez de León, Diego, 210 • Rodríguez de León, familia, 210 • Rodríguez de Quiroga, Manuel, 84 • Rodríguez de Rodríguez, Rosa, 59 • Rodríguez de Villa, Leticia, 24 • Rodríguez Docampo, Diego, 218 • Rodríguez Jácome, Luis

264 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

Belisario, 34 • Rodríguez Marín, Rodrigo Antonio, 186 • Rodríguez Núñez, Luis Alberto, 28 • Rodríguez Roque, Teresa, 150 • Rodríguez, Alegría, 37 • Rodríguez, Alejandro, 108 • Rodríguez, Consolación, 27 • Rodríguez, Daniel, 209 • Rodríguez, Edmundo, 76 • Rodríguez, Hermenegildo, 140 • Rodríguez, ingeniero, 139 • Rodríguez, Manuel, 143 • Rodríguez, María Quiteria, 56 • Rodríguez, Mariana, 228 • Rodríguez, N., 215 • Rodríguez, Sebastián, 106 • Rodríguez, Victoria, 205 • Rodríguez, Zoila, 45 • Roitman, José, 59 • Rojas Trujillo, Víctor, 119 • Rojas y Durán, Tomás de, 226 • Rojas, Alberto, 76 • Rojas, familia, 68, 69 • Rojas, Leonardo, 144 • Rojas, Manuel, 68 • Rojas, Miguel, 85 • Rojas, Pedro Pablo, 153 • Rojas, Samuel, 133 • Rojas, Tomás de, 219 • Rojas, Víctor "Panzón", 143 • Rojas, Víctor, 45 • Roldán Quirola, Humberto, 34 • Roldán Roldán, familia, 100 • Roldán, Carlos A., 108 • Román Checa, Antonio, 135 • Román Pérez, familia, 159 • Román, Andrea, 71 • Román, Carlos, 64 • Román, Daniel, 138 • Román, Gaspar, 228 • Román, Miguel, 174 • Román, señoritas, 199 • Romero de Aragón, Félix, 193 • Romero y Cordero, Remigio, 97, 215 • Romero, Antonio, 59 • Romero, Carlos, 104 • Romero, Carmen, 85 • Romero, Juana, 231 • Romero, Manuel, 164 • Romero, Manuela, 62 • Romero, Pacifico, 92 • Romo de Narváez, Carmen, 202 • Romo de Quijano, Carmen, 115

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Romo, Antonia, 55 Romo, Bolívar, 108 Romo, Mercedes, 137 Romoleroux, Alejandro, 56 Ronquillo, Segundo, 76 Rosales y Villavicencio, Manuel de León, 194 Rosales, Javier, 99 Rosanía Greco, Antonio, 76 Rosanía, Juan, 76 Rosati, Alfredo, 34 Rosero y Torresano, familia, 150 Rosero, Mercedes, 141 Rosero, Petrona, 140 Rosero, Rosa, 150 Rosero, Salomón, 139 Rossa, Giovanni, 67, 206 Rousseau, Tomás, 33 Ruales Andrade, Joaquín, 234 Ruales Martínez, familia, 235 Ruales Salvador, Jacinto, 143 Rubianes, Luis, 76 Rubio, Manuel, 108 Rueda Herrera, Diógenes, 45 Ruilova, familia, 51 Ruiz Bastidas, Luis Fernando, 144 Ruiz Bernal, Antonio, 158, 160 Ruiz Bernal, familia, 161 Ruiz Bravo, Carlos Manuel, 238 Ruiz P., Nicolás, 186 Ruiz, Rafael, 76 Rumazo González, Alfonso, 173 Rumazo González, José, 173 S. (será Sodestrom), Ludovico, 52 Saá Cousin, Augusto, 164, 165 Saá de Cousin, Rosa, 164 Saá González, Fernando, 127, 164 Saá Jaramillo, María, 40 Saá López de Galarza, familia, 103 Saá Merizalde, Carmen, 104 Saá Naranjo, Rosario, 75 Saá y González Berdugo, Fernando, 163 Saá y González, José Antonio, 164 Saá, Carmen, 44 Saá, Clara, 122 Saá, Domingo, 75 Saá, familia, 91, 164, 176 Saá, Fernando, 129 Saá, José de, 106 Saá, Victoria, 164

1534 - 1950

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Saavedra, Jorge, 236 Saavedra, Luis, 238 Sacoto Arias, Augusto, 87, 238 Sáenz Chiriboga, Blanca, 150 Sáenz Dávalos, Teófilo, 77 Sáenz Espín, Alfonso, 234 Sáenz, Mercedes, 69 Sáenz, Virgilio, 143 Salas Andrade, Antonia, 138 Salas Estrada de Salguero, Josefa, 79 Salas Estrada, Alejandro, 80, 201 Salas Estrada, Diego, 81 Salas Estrada, Rafael, 81, 83, 79 Salas y Avilés, Antonio, 105, 113 Salas, Agustín, 80 Salas, Antonio, 79, 229 Salas, Carlos, 143 Salas, familia, 201 Salas, Fernando, 90, 96 Salas, Juan, 104 Salas, Manuel, 108 Salas, Zoila Rosa, 119 Salazar A., Jorge, 237 Salazar Espinosa, Glauco, 237 Salazar García, Nicolás, 136 Salazar Gómez, Eduardo, 25 Salazar Rivadeneira, Alberto, 34 Salazar y Lozano, Manuel María, 213, 215, 217 Salazar, Ángel, 42 Salazar, Antonio, 43 Salazar, Cayetano, 181, 182 Salazar, Cosme, 80, 81, 125, 175, 231 Salazar, familia, 183 Salazar, Francisco Javier, 122, 134 Salazar, José M., 237 Salazar, Luis I., 239 Salazar, Manuel, 236 Salazar, María Elena de, 107 Salazar, María J., 184 Salazar, Néstor, 45 Salazar, Nicolás, 144 Salazar, Nieves, 177 Salazar, Rafael, 32 Salazar, señor, 211 Salazar, Vicente, 140 Salcedo Montalvo, Germán, 186 Salcedo Morán, Francisco Javier, 196 Salcedo, Fernando, 84, 85 Salgado de Peñafiel, Orfa, 164, 172

265 F e r n a n d o

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Salgado Peñaherrera, familia, 87 Salgado Vivanco, Eustorgio, 87 Salgado, Eustorgio, 108 Salguero de Salas, Concha, 80 Salguero Salas, Antonio, 80 Salguero Salas, familia, 83 Salguero Salas, Luis Antonio, 108 Salguero, Carlos M., 237 Salguero, Mariano, 80, 81, 83, 113 Salinas, Gonzalo, 77 Salvador de la Barrera, Carlos, 55 Salvador Donoso, Jorge, 166 Salvador Guillén, Rebeca, 59 Salvador Lara, Jorge, 120 Salvador Martínez, Juan José, 186 Salvador Quintana, Carlos, 147 Salvador Villacís, Manuel, 108 Salvador y López, María, 73, 106 Salvador y Valdivieso de Dubecq, Isabel, 229 Salvador, Antonia, 76 Salvador, Apolinaria, 212 Salvador, Celio Enrique, 202, 204 Salvador, Guillermo, 143 Salvador, Juana, 92 Salvador, Manuel, 62, 76 Salvador, Mercedes, 132 Salvador, Néstor, 45 Samaniego Aguirre, Amalia, 87 Samaniego Álvarez, Carlos, 143 Samaniego Álvarez, familia, 120 Samaniego y Jaramillo, Manuel, 43, 106 Samaniego, Manuel, 136 Sampedro de Echanique, Carmen, 206 San Joaquín, María Marta de, 195 San Miguel Merino, Felipa, 206 San Miguel, Matilde, 138 Sanabria, León de, 218 Sánchez Cortés, Alonso, 194 Sánchez de Orellana, Jacinto, 171 Sánchez Gaona, Clemente, 137 Sánchez Lalama, Pedro Antonio, 123 Sánchez Maldonado, familia, 122 Sánchez Melo, Francisco, 34

J u r a d o

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N o b o a

Sánchez, Antonio, 177 Sánchez, Carlos, 28 Sánchez, doctor, 183 Sánchez, José, 197 Sánchez, Martín, 205 Sánchez, Matías, 75 Sánchez, Pablo, 45 Sánchez, Rafael, 53 Sandoval de Chiriboga, María, 180 • Sandoval José, 222 • Sandoval María, 180 • Sandoval Villota, Ernesto, 108 • Sandoval, Clara, 141, 198 • Sandoval, Diego de, 162 • Sandoval, Dolores, 181 • Sandoval, Gaspar, 104 • Sanguña, Gabriel, 154 • Sanguña, Juan, 220 • Sanguña, Miguel, 155 • Sanguña, Santos, 81 • Santa Teresa (Teresa Cepeda y Ahumada), 116, 194 • Santacruz Patiño, Julio César, 223 Santacruz, escribano, 94 • Santacruz, Mariano, 62 • Santacruz, Rafael, 34 • Santiago, Miguel de 52 • Santos L., Luis, 237 • Sanz García, Andrés, 195 • Sanz, Mercedes, 99 • Saona, Paula, 232, 233 • Sarasti Álvarez, familia, 92 • Sarasti, José María, 92 • Sarch, Ernesto, 108 • Sarmiento, Alberto, 143 • Sarmiento, familia, 202 • Sarmiento, Nicolás, 205 • Segarra Iñiguez, Guillermo, 108 • Segovia López, Miguel Gerardo, 144 • Segura, María, 97 • Selva Florida, condes de 170 • Semanate Valladares, César, 239 • Semanate, Isabel, 162 • Semblantes Cortés, Manuel, 125, 207 • Senabria, León de, 167 • Serrano de Klinger, Valentina, 205 • Serrano de Pérez, Elena, 222 • Serrano M., Eduardo, 108 • Serrano Montaño, Angelina, 71 • Serrano, Narcisa, 195 • Severa Loza, Mercedes, 51

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Sevilla, Custodia, 159 Shool, Damián, 30 Sierra, José Domingo, 51 Sierra, Mercedes, 132 Silva C., Segundo Benjamín, 39 Silva Cárdenas, familia, 58 Silva de Terán, María, 92 Silva del Pozo, Alfredo, 30 Silva Echanique, Neptalí, 59 Silva Luque, familia, 131 Silva Nieto, Aureliano, 204 Silva Terán, Canuto, 27, 92 Silva Vicuña, María, 224 Silva, David, 27 Silva, familia, 81 Silva, Jorge, 143 Silva, José, 75 Silva, Julio, 98 Silva, Mariano, 137 Silva, Trinidad, 181 Silvestre, Gregorio, 58 Sinak, Guillermo, 77 Soberón Pareja, familia, 134 Soberón, Nicolasa, 83 Sociedad de Amigos de la Genealogía SAG, 19, 95 Sola y Ros, Baltasara, 67 Solano de la Sala, Antonio, 123 Solano de la Sala, Reinaldo A., 138, 144 Solano de la Sala, Rosa, 137 Solano Villalba, familia, 150 Solano Villalba, Rosa, 149, 150 Solís, Josefa, 149 Solís, Luis Alfredo, 24 Solórzano Bowen, familia, 177 Solórzano, coronel, 177 Soria, Ángel, 136 Soria, Mariano, 137, 142, 198, 231, 232 Sosa, Mariano, 51, 228 Sotomayor Montaguano, Jaime, 119 Sotomayor, Manuel, 139 Stacey Chiriboga, familia 150 Stacey Guzmán, familia, 216 Suárez de Bolaños, María, 42 Suárez de Figueroa y Ortiz, Miguel, 117 Suárez de Figueroa, Antonio, 93 Suárez de Figueroa, José, 127 Suárez de Figueroa, Manuel, 226 Suárez de Figueroa, Petrona, 93 Suárez de Figueroa, Rosa, 211 Suárez Gortaire, Felisa, 120

266 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

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Suárez, Belisario, 212 Suárez, Hermencia, 139 Suárez, Javier, 100 Suárez, José María, 113 Suárez, Juan José, 131 Suárez, Juan, 143 Suárez, Justo, 58 Suárez, Leonor, 124 Suárez, María, 140 Suárez, Mario, 108 Suárez, Mercedes, 199 Suárez, Miguel, 148 Suárez, Modesto, 57 Suárez, Pablo Arturo, 123, 224 Suárez, señor, 88 Suárez, Timoteo, 68 Suasnavas de Páez, Mercedes, 177 Suasnavas Egas, familia, 177 Suasnavas, escribano, 94 Suasti, Juana, 140 Subiría, familia, 88 Sucre Rodríguez, José Ramón de, 52 Sucre, Antonio José de, 52, 212 Taipe, Juan, 45 Talledo y Montenegro, María, 100 Taller Baca Hnos., 237 Tamayo Carvajal, Carlos, 76 Tamayo, Alfredo, 23 Tamayo, José Luis, 216 Tambaco, Guillermo, 34 Taón Ribera, familia, 219 Taón, Luis, 179 Taón, Petronila de, 169, 179, 219 Tapia, Ángela, 51 Teatro Bolívar, 152 Teatro Central, 65 Teatro Popular, 67 Teatro Sucre, 87 Tejada, Camilo, 77 Tello de Figueroa y Andrade, Diego, 180 Tello de Figueroa, Juan Antonio, 180 Tello de Velasco, oidor, 148 Tello Mercado, Franklin, 71, 92 Tena Berrío, Juan de, 159 Tena, José María, 58, 73 Terán Anaguano, Carlos, 143 Terán Egas, familia, 202 Terán Gavilanes, Arturo, 34 Terán Gostalle, Arturo, 77 Terán Pazmiño, Rafael, 237 Terán Pérez, Natalia, 223

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Terán Sánchez, Benjamín, 202 Terán Sánchez, familia, 147 Terán, Ángela, 166 Terán, Elías, 185 Terán, familia, 53 Terán, Joaquín, 206 Terán, Manuel, 104 Terán, Máximo, 118 Terán, Pío, 118, 133, 136 Terán, Rafael, 32 Terán, Rosario, 58, 75 Terán, señorita, 55 Terán, Trinidad, 104 Terneux Pallares, Carmela, 59 Terneux, Francisco, 37 Terrazas, Juana, 212 Tiba, Cayetana, 197 Tiba, Dolores, 198 Tiba, familia, 195, 197 Tinajero Freile, Zoila Rosa, 115 Tinajero Llona, Joaquina, 213 Tinajero Morales, Ramona, 92 Tinajero y Guerrero, Joaquín, 213 Tinajero, Joaquín, 100 Tinajero, Manuela, 166 Tinajero, Mariana, 196 Tinajero, Rosa, 86 Tirado, Pedro Pablo, 237 Tituaña, Gregorio, 124 Tituasán, familia, 81 Toaquisa Sinasigchi, Francisco, 227 Tobar Donoso, Julio, 174 Tobar García, Paco, 97 Tobar Guarderas, Carlos Rodolfo, 27 Tobar Landázuri, Virginia, 136 Tobar Subía, Cristóbal, 97 Tobar y Auz, Tomasa, 196 Tobar y Bolaños, Mercedes, 51 Tobar Yepes, José Julio, 97 Tobar, Alomía, 234 Tobar, Carlos Rodolfo, 92 Tobar, Narcisa, 181 Tobar, Nicolás F., 144 Toledo, Tomás, 123 Tordesillas de Bermúdez, Mercedes, 182 Tordesillas Tobar, Ignacia, 182 Toro Freile, Carlos, 143 Toro Freile, Rosa, 72 Toro Guerrero, Agustín, 56 Toro Morlás, León, 133 Torres Acosta, Rodrigo, 63

1534 - 1950

• Torres Arredondo, Raimundo, 173 • Torres B., José M., 237 • Torres Carrión, familia, 86 • Torres de Borja, Francisco, 168, 170 • Torres Guarderas de Núñez, Clotilde, 140, 223 • Torres Suárez, Enrique, 143 • Torres Vega, Julio, 69 • Torres, Abel, 56 • Torres, Alfonso, 108 • Torres, Antonio, 96 • Torres, Cipriana, 84, 85 • Torres, Isabel de, 194 • Torres, Joaquín, 45 • Torres, Juana, 150 • Torres, Julio, 45 • Torres, María de, 116, 219 • Torres, Mercedes, 173 • Torres, Miguel, 164 • Torres, Ofelia C. de, 76 • Torres, Rodrigo, 61 • Torres, Rosa de, 56 • Torres, Segundo, 144 • Torres, Simona, 184 • Torresano, José, 149, 150 • Torresano, Mercedes, 89 • Trajano Oviedo, José, 30 • Traversari Salazar, familia, 134 • Trejo, Tomás, 104 • Tribunal de Cuentas, 206 • Triunfo, María del Carmen, 44 • Troya, Alejandro, 204 • Troya, Cristóbal de, 210, 215 • Troya, José M., 238 • Troya, Luis Antonio, 143 • Troya, Miguel, 212 • Tufiño Pérez, Carlos, 28 • Ubidia y Castro Calderón, Andrea, 180 • Ugalde Unda, José de, 194 • Ugarte de Landivar, Zoila, 126 • Unda Cadena, Enrique, 59 • Unda, Camilo, 206 • Unda, Gabriel, 125 • Unda, Josefa, 90 • Unda, Tomás, 186 • Universidad Central, 132 • Uquillas Baquero de Melo, Ana Lucía, 33 • Urbasus, Francisco, 228 • Urbina Mayorga, José María, 59 • Urgilés González, Rafael, 59 • Uribe Ramírez, Florentino, 115 • Usbeck Valdivieso, familia, 131

267 F e r n a n d o

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Utreras Gómez, Manuel, 59 Uzcátegui de Jurado, Celia, 34 Vaca, Ángel Polibio, 23 Vaca, Manuel, 185 Vaca, María Natalia, 95 Vaca, Oswaldo, 45 Vacas Gómez, Humberto, 87 Valderrama Álvarez, Manuel, 149 Valdez, Camilo, 158 Valdez, Francisco, 133, 136 Valdivieso Carcelén, Mariana, 155 Valdivieso de Larrea, Teresa, 32, 33 Valdivieso Donoso, Ángela, 184 Valdivieso V., Carlos, 237 Valdivieso y Valdivieso, José Javier, 154, 155 Valdivieso y Valdivieso, Josefa, 229 Valdivieso, Mariano Guillermo, 161 Valencia Castillo, Eloy, 142 Valencia Castrillón, Ernestina, 133 Valencia Castrillón, familia, 140 Valencia Castrillón, Rafael Alberto, 76 Valencia Lara, Maximiliano, 140, 144 Valencia Llerena, Octavio, 56 Valencia Nieto, Isidoro, 77 Valencia Villagómez, familia, 71 Valencia, Amable, 77 Valencia, Carlos, 234 Valencia, Cornelio, 142 Valencia, Darío, 96 Valencia, Diego de, 218 Valencia, familia, 201 Valencia, Martín, 116 Valencia, Mercedes, 105, 216 Valencia, Pacífica, 104 Valencia, Pedro, 118 Valencia, Zoilo, 23 Valenzuela, Ricardo, 208 Valladares, familia, 58 Valladares, Jesús, 75 Vallejo, Alfonso, 45 Vallejo, Benigno, 108 Vallejo, Josefa, 165, 166, 174, 211 Valverde Paz, Juan José, 59 Valverde Zabala, Antonia, 230 Valverde Zabala, Mercedes, 230 Valverde, Pedro de, 161 Vanegas, Juan, 167

J u r a d o

N o b o a

Vargas, José María, 201 Vargas, Manuel, 38 Vargas, Mariano, 182 Vargas, Mercedes, 125 Vargas, Ramón, 75 Vargas, Ramona, 231 Vargas, Rosario, 236 Vásconez Cuvi, Wenceslao, 143 Vásconez de la Vega, Prudencio, 195 Vásconez Delgado, familia, 224 Vásconez Delgado, Julio, 26 Vásconez Espinosa, Carlos Agnelio, 38 Vásconez Fierro, familia, 26, 224 Vásconez Gómez, Josefina, 133 Vásconez Jijón, Nicolás, 157 Vásconez Naranjo, Aquilino, 25, 26 Vásconez Naranjo, Pablo, 154, 155, 197 Vásconez Naranjo, Prudencio, 153 Vásconez Román, Pablo, 143 Vásconez Velasco, Pablo, 126 Vásconez, Amalia, 232, 233 Vásconez, Nicolás, 203 Vásconez, Tomasa, 81, 83 Vásquez Albán, Agustina, 220 Vásquez Albán, Mariana, 90 Vásquez de Ávila y Avendaño, José, 179 Vásquez, Rafael, 30 Vega Rivadeneira, familia, 151 Vega Rivas, Nicolás, 215 Vega y Cofín, Petrona, 102 Vega, Felicísimo, 150, 151, 201 Vega, Juana de, 113 Vega, Lizardo, 201 Veintemilla Auz, Eduardo de, 214 Veintemilla Espinosa, Ignacio, 213 Veintemilla Espinosa, José, 213 Veintemilla Villacís, familia, 213 Veintemilla, familia, 213, 214 Veintemilla, Ignacio de, 53, 142, 164, 182, 212, 213, 214 Veintemilla, Marietta de, 164 Vela Darquea, César, 144 Vela de Vera, Ángela, 81, 113 Vela Jijón, José María, 86 Vela, José Adolfo, 39 Velasco Bermúdez, Andrés, 124 Velasco Castillo, José María, 213 Velasco Cobo, Tomás, 176 Velasco Fabara, Elina, 172 Velasco Ibarra, familia, 132, 215 Velasco Ibarra, José María, 26, 132,

152, 172, 207 Velasco Ibarra, Pedro, 172, 215 Velasco Mogollón, Ermel, 38 Velasco Muñoz, familia, 176, 183 Velasco Sardá, Alejandrino, 81, 166 Velasco y Zúñiga, Francisco, 210 Velasco y Zúñiga, Jacoba de, 179 Velasco Z., Edmundo, 144 Velasco, Dolores, 236 Velasco, Elina, 172 Velasco, Ernesto, 38 Velasco, José M., 237 Velasco, Leonardo, 186 Velasco, María Lucila, 83 Velasco, María, 154 Velasco, Natividad, 203 Velasco, Pedro José, 81 Velásquez Dávila, Juan, 112 Velásquez, Ramón, 142 Velástegui, Adolfo, 26 Velástegui, José M., 238 Vélez de Álava Buenaño, Fulgencia, 160 Vélez de Álava, Carlos, 158, 159, 161 Vélez Guerrero, Rafael, 141 Vélez Noboa, Emilia, 134 Vélez, Julia, 141 Vélez, Paulina, 232 Veloz, Darío, 138 Veneras, Rosario, 115 Vera Vela, familia, 83 Vera y Salazar, Mariana de la, 168 Vera, Antonio, 205 Vera, Carlos, 81 Vera, Pedro Jorge, 87 Verdesoto, José María, 30 Vergara, Miguel, 154 Vicuña, Francisco, 141 Viel Gostalle, Alfonso, 45 Viera, Lorenzo, 193 Villacís de Álvarez, Teresa, 205 Villacís, Gonzalo, 59 Villacís, Isabel, 158, 160, 197 Villacís, José Luis, 239 Villacís, José, 107 Villacís, Rosa de, 76 Villacís, Tomás, 171 Villacreces y Nieves, Rosa, 170 Villacreses Sevilla, Hugo, 144 Villacreses, Carmen, 142 Villaespesa, Manuela, 195 Villafuerte, Alejandro, 132 Villafuerte, familia, 107 Villafuerte, Federico, 69

268 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

Villafuerte, Gabriel de, 226 Villafuerte, Pedro Armengol, 132 Villagómez Álvarez, José, 123 Villagómez Andrade, Juan Aurelio, 175 Villagómez Yepes, familia, 175 Villagómez Yepes, Jorge, 24, 52 Villagómez, Atanasio, 229 Villalba, Juana, 149 Villalba, Rafael, 102 Villalba, Ramón, 59 Villalba, Víctor, 108 Villalva, Bernardo, 104 Villamar Gutiérrez, Pío Severo, 38 Villamar Villamar, Fausto, 52 Villamar Villamar, María, 149 Villamar, Alejandro, 48 Villamar, Galo, 144 Villamar, María, 51 Villamar, Mariano, 195, 196 Villamaría, Alberto, 28 Villamarín, Manuel, 34 Villamayor, Antonio, 69 Villaorellana, Marqueses de, 168, 170 Villareal Valdez, Ana, 221 Villarreal Valdez de Valdivieso, Josefa, 155 Villarroel Santisteban, María de, 116 Villarroel, Carlos, 45 Villaseñor, Diego, 148 Villavicencio de Guarderas Lasso, Victoria, 152 Villavicencio Enriquez, César Vidal, 134, 144 Villavicencio Rojas, León, 152 Villavicencio Vera, César D., 134 Villavicencio, Josefa, 235 Villavicencio, Manuel (plano de), 23, 24, 43, 124, 153, 157, 163, 192, 218 Villavicencio, Mercedes, 115 Villegas Santa María, Melchor de, 218 Villota de González, Manuela, 64 Vinelli Cevallos, Augusto, 45 Vintimilla, Ventura, 181 Vinueza Mena, Fanny, 238 Vinueza Parreño, César, 238 Vinueza, María, 220 Vinueza, Nicanor, 64 Vinueza, Rafael, 76 Vinueza, Ramona, 174 Viteri Baca, Ramona, 129 Viteri de Huras, Mercedes, 150

1534 - 1950

Viteri de la Vega, Carlos, 141 Viteri J., Carlos, 77 Viteri Lafronte, Angelina, 150 Viteri Lafronte, Aníbal, 187 Viteri Lafronte, familia, 150 Viteri Lafronte, Homero, 150 Viteri Villavicencio, Enrique, 143 Viteri, Alberto, 77 • Viteri, Alonso, 59 • Viteri, Antonio, 157 • Viteri, Felipe, 196 • Viteri, Ignacio, 67 • Viteri, Isaías, 217 • Viteri, José, 236 • Viteri, María Luisa, 220 • Viteri, Pedro, 237 • Viteri, Telmo R., 199 • Vivanco Félix, Luis, 30 • Vivanco Saá, Luis, 165 • Vivanco, Alberto, 172 • Vivanco, Enrique, 237 • Vivanco, José Antonio, 173 • Vivanco, José, 171, 172 • Vivanco, María G., 77 • Vivanco, Víctor, 172 • Vizcaíno Acevedo, familia, 98, 103 • Vizcaíno, Antonio, 100 • Vizcaíno, Calisto, 100 • Vizcaíno, Julio, 53 • Vizcaíno, María Francisca, 100 • Vizguete, Patricio, 103 • Vizuete, César, 236 • Wisse, Sebastián, 128 • Wolf, Ernesto, 77 • Yánez G., Consolación, 144 • Yánez Núñez, José Benigno, 239 • Yánez, familia, 142, 184, 235 • Yedra, Juana, 106 • Yedra, señor, 107 • Yepes Almeida, Germán, 34 • Yepes de Arguello, Emilia, 144 • Yepes del Pozo, Juan, 45 • Yepes Guerrero, Hernán, 108 • Yepes Rivera, Emilia, 139 • Yepes Rivera, Leonor, 139 • Yepes Terán de Villagómez, Rosa María, 52, 175 • Yepes, Ana, 53 • Yepes, Eloisa, 68 • Yepes, Manuel, 91 • Yepes, Rafaela, 171 • Yepes, Ramón, 91 • Yépez Cadena, Manuel, 238 • Yépez viuda de Casares, Vicenta, 236

• • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • •

Yépez, Eloy, 64 Yépez, Rosa R., 76 Zabala P., Carlos, 143 Zabala, comandante, 62 Zabaleta, familia, 176 Zaldumbide Gangotena, familia, 206 Zaldumbide M., Julio C., 144 Zaldumbide y Maenza, Manuel María, 172 Zaldumbide, Francisco, 59 Zaldumbide, Manuel María, 215 Zaldumbide, Manuel, 176 Zambrano Balcázar, Adolfo, 49 Zambrano Mancheno, Rafaela, 95 Zambrano Montesserín, familia, 220 Zambrano Orejuela, Alfonso, 131 Zambrano Orejuela, Carlos, 88 Zambrano Sánchez, Pedro José, 34 Zambrano, Francisco, 175 Zambrano, Ignacio, 138 Zambrano, Miguel Ángel, 204 Zárate de Maldonado, Zoila, 107 Zárate, Miguel, 107 Zarria Ch., Edmundo, 31 Zarria, José M., 30 Zavala Anda, Napoleón, 62 Zubiría, Nicolás, 108 Zuleta de Reales, José, 193 Zuleta Reales, Bartolomé de, 210 Zurita, familia, 202 Zurita, Petrona, 42 Zurita, Segundo, 28

CONTENIDO PÁG CIUDAD, CALLES, CASAS, PERSONAS E HISTORIA

7

EL AUTOR Y SU OBRA

9

DEDICATORIA

13

ALGUNAS PALABRAS INTRODUCTORIAS

17

HISTORIA DE LA CALLE EGAS

23

HISTORIA DE LA CALLE CASTRO

24

HISTORIA DEL PASAJE VÁSCONEZ GÓMEZ (ENTRE CASTRO Y ESPINOSA)

25

HISTORIA DE LA CALLE JAVIER ESPINOSA

26

HISTORIA DE LA CALLE ELIZALDE

27

HISTORIA DE LA CALLE BRICEÑO

29

HISTORIA DE LA CALLE CALDAS

31

HISTORIA DE LA CALLE CARCHI

36

HISTORIA DE LA CALLE ANTEPARA O DE DON ROBERTO ANDRADE

39

HISTORIA DE LA CALLE EL VERGEL

40

LA CALLE GALÁPAGOS

41

1.

CALLE DE SISAÑA (GALÁPAGOS,

ENTRE

2. LA CALLE EXCUSADA (GALÁPAGOS,

VARGAS Y VENEZUELA) VENEZUELA Y GARCÍA MORENO)

ENTRE

3. LA CALLE DE SAN MIGUEL (GALÁPAGOS, 4. LA CALLE DEL RETIRO (GALÁPAGOS,

ENTRE

ENTRE

GARCÍA MORENO Y BENALCÁZAR)

BENALCÁZAR Y CUENCA)

HISTORIA DE LA CALLE ORIENTE

1.

SAN BLAS>> (ORIENTE,

42 43 44

47

EL SECTOR DEPENDIENTE DE SAN BLAS PLACETA DE

41

O

ANTIGUO CAMINO A LA

>.

>

(MANABÍ, ENTRE MONTÚFAR Y FLORES) 3. CALLE DE LA CHUSPI,

LUEGO DEL CHORRO DEL

4. LA ANTIGUA CALLE DE SAN JOSÉ, 5. LA COLONIAL

CARMEN

LUEGO DE LA BAJADA DEL

89 CARMEN

CALLE DE LA ADUANA, INCORPORADA A LA BAJADA DE

93

SANTA BÁRBARA

98

6. LA CALLE DE LAS INGLESAS (MANABÍ, ENTRE BENALCÁZAR Y COTOPAXI)

101

7. LA CALLE DE BUENA VISTA (MANABÍ, DESDE LA COTOPAXI HACIA EL OCCIDENTE)

105

HISTORIA DE LA CALLE OLMEDO

1.

111

LA CALLE DE SALAS (OLMEDO, ENTRE AV. PICHINCHA Y FLORES)

2. LA CALLE COLONIAL DEL

>

112 >

3. LA CALLE LLAMADA DE LAS COVACHAS DEL CARMEN, DE LAS GRADAS DEL

CARMEN

LUEGO INCORPORADA A LA CALLE LLAMADA

121

271 F e r n a n d o

J u r a d o

N o b o a

PÁG 4. LA COLONIAL

CALLE DEL

5. LA COLONIAL

CALLE DE

SUSPIRO

122

ANDRACA, LUEGO CALLE DEL DR. GORTAIRE

123

6. LA CALLE DE SANTA ROSA, LUEGO CALLE DEL BEATERIO NUEVO O SOLO CALLE DEL BEATERIO

126

7. LA ANTIGUA CALLE DE PALMA, LUEGO INCORPORADA A LA DE BARRERA, LLAMADA EN 1870

130

CAMINO NUEVO QUE 8. LA COLONIAL

EL TEJAR DE LA MERCED

VA A

CALLE DE LAS

TAMBIÉN CALLE QUE VA AL

TOGRERAS, LUEGO

INCORPORADA A LA DE

BARRERA. LLAMADA

135

BEATERIO VIEJO.

9. EL FINAL DE LA OLMEDO

141

10. LA OLMEDO,

142

ENTRE

MIRES Y TOCTIUCO, ENTRE 1894 E INICIOS DEL SIGLO XX, SECTOR LLAMADO

ALTO DE LA CHILENA

1.

HISTORIA DE LA CALLE MEJÍA

147

EL SECTOR DEPENDIENTE DE LA TOLA

147

2. LA CALLE DE LAS TENERÍAS (MEJÍA, ENTRE CEVALLOS Y FLORES)

147

3. EL SECTOR DE LA MEJÍA,

151

ENTRE FLORES Y

4. LA CALLE DEL DR. VÁSCONEZ,

GUAYAQUIL

LUEGO CALLE DE LOS

FONDEROS SANGUÑA (MEJÍA,

ENTRE

153

GUAYAQUIL Y VENEZUELA) 5. LA CALLE DE LA AZOTEA (MEJÍA,

ENTRE

VENEZUELA Y GARCÍA MORENO)

157

6. LA VIEJA CALLE DE VALVERDE, LUEGO INCORPORADA A LA DE CALDAS

161

7. LA CALLE QUE IBA DEL ARCO DE LAS CONCEPTAS A EL TEJAR DE LA MERCED, LUEGO LLAMADA

163

SEGUNDA CALLE DE

CALDAS (MEJÍA, ENTRE BENALCÁZAR Y CUENCA).

8. LA CALLE DE LA MURALLA DE LA MERCED (MEJÍA, 9. LA VIEJA CALLE DE LA ALCANTARILLA,

ENTRE

LUEGO CALLE DE

CUENCA E IMBABURA)

EL TEJAR (MEJÍA, DESDE LA IMBABURA

166 177

HACIA EL OCCIDENTE)

1.

HISTORIA DE LA CALLE CHILE

191

LA CALLE QUE BAJA DEL CONVENTO DE SAN AGUSTÍN A LA QUEBRADA DE GIGANTE GUAICU, LUEGO AGUSTÍN, EN 1858, Y CONOCIDA POSTERIORMENTE COMO CALLE QUE VA DE LA ESQUINA DE S AN AGUSTÍN A LA SALA DE ARMAS (CHILE, ENTRE MONTÚFAR Y GUAYAQUIL)

191

LLAMADA DE CALLE DE SAN

272 Calles, casas y gente del Centro Histórico de Quito

1534 - 1950

PÁG 2. LA CALLE DE SAN AGUSTÍN DESDE 1894 HASTA MEDIADOS

DEL

SIGLO XX

3. LA CALLE DE ESCRIBANOS: COLONIAL CALLE DE SAN AGUSTÍN, PRIMERA FINALMENTE, CALLE DE

ESCRIBANOS (CHILE,

4. HISTORIA DE LA CALLE DE LA MERCED; CALLE DE

PICHINCHA Y,

ENTRE

CALLE DEL

198 COMERCIO O,

204

XVIII; LUEGO,

209

GUAYAQUIL Y VENEZUELA).

TAMBIÉN LLAMADA DE

FINALMENTE, CALLE QUE VA DE LA

ARTETA EN

EL SIGLO

PLAZA MAYOR A LA PLACETA DE LA

MERCED. 5. LA CALLE DE LA PUERTA FALSA DE LA MERCED (CHILE,

ENTRE

CUENCA E IMBABURA)

6. LA CALLE DEL CEBOLLAR (CHILE E IMBABURA HACIA EL OCCIDENTE)

218 224

SIGLAS

243

FUENTES VERBALES Y ESCRITAS

244

INDICE

246

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