De Galicia a los Andes Historia de la emigración de una familia gallega al Perú.

Jorge Andújar

Avance del libro del autor que se refiere a la historia de tres hermanos gallegos que en el último tercio del S. XIX emigraron al Perú atraídos por la riqueza de sus minas de Cerro de Pasco. El autor es descendiente directo de ellos.

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En la Universidad de Santiago de Compostela.El día de su graduación como abogado, aquella tarde del 31 de marzo de 1857, Ignacio Andújar Paseiro1 sabía muy bien que tenía mucho más de lo que un joven gallego podía soñar. Apenas había rozado los veinticinco años y además de su reciente título en leyes y jurisprudencia ostentaba desde los dieciocho años el grado de Bachiller en Filosofía, obtenido también en la entonces Universidad Literaria de Santiago de Compostela, primer Centro Cultural de Galicia desde su fundación en 1495. En su familia de remoto origen andaluz, no existían influyentes personalidades civiles, militares o connotados miembros del clero; menos aún títulos

nobiliarios, ni grandes de España; ni desde luego

mayorazgos, capellanías o apetecibles herencias o bienes de fortuna. Si bien no son miembros natos de la aristocracia y del poder regional, tampoco integran el pueblo llano. Quizá lo más justo sea situarlo en un estamento mesocrático de pequeños propietarios rurales que le permitía vivir con relativa tranquilidad económica y de espíritu. Como primogénito de cinco hermanos de nombres Eusebio, Ramón, Juan y Fernando,2 provenientes de la aldea de San Verísimo de Lamas, había sabido responder con creces el encargo familiar de labrarse en la capital una carrera universitaria de éxito, teniendo como única base su propio esfuerzo y dedicación. El acto académico importa todo un acontecimiento cultural y social realzado por el solemne y severo ritual de la ceremonia oficial que las 1

Nació el 11 de octubre de 1831.en San Verísimo de Lamas. Sus padres José Andujar Padin y Juana Paseiro Cadavid. Abuelos paternos Juan Andujar y María Padin. Abuelos maternos: Boniufacio Paseiro y María Cadavid. Cfr. Partidas de Bautizo 1830. Falleció en 1875 a los 43 años. 2 Eusebio ( 1833), Ramón (1835, Juan (1836) y Fernando (1837). Partidas de Bautismo de cada uno en archivo personal del autor.

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autoridades universitarias cuidan con mucho esmero y al más mínimo detalle. La presencia de altos funcionarios quienes lucen sus mejores galas, así como de numeroso público, da mayor lustre al evento. El boato de esta universidad española se parece al panorama que ofrece por entonces el Real Convictorio de San Carlos de Lima, dirigida por el ilustre intelectual y político don Bartolomé Herrera, que luego formaría parte de la Universidad Mayor de San Marcos.

3

En ese momento formaba parte del recuerdo los dos dilatados exámenes escritos y uno estrictamente oral ante el severo Tribunal conformado por tres catedráticos principales: el decano Dr. Vicente Ozores y Barrio, el Dr. Domingo Cortés y el Dr. Fernando Rosende. Conforme

lo

atestigua

su

voluminoso

expediente

académico

los

exámenes se presentan particularmente difíciles.4 La Filosofía, el Derecho y la Política a mediados del S. XIX.En sus ocho años de estudios en la Facultad de Jurisprudencia que corre desde 1848 a 1856

el autor a quien recurre, lee y cita con más

frecuencia, como la mayoría de los estudiantes de su generación, es Heinrich Ahrens,

profesor de filosofía y de Ciencias Políticas

de la

Universidad de Leipzig. Este reconocido pensador diserta con versatilidad sobre los dos campos intelectuales de su predilección: la filosofía y el derecho. Empero, es en realidad un exitoso divulgador de las ideas de su maestro el destacado filósofo alemán Karl C..F.

Krause (1780-1832), catedrático de las

Universidades de Jena, Berlín, Gottingem y Munich. Sus ideas se

3

Vargas Ugarte, Ruben. El Real Convictorio Carolino y sus dos luminares.Ed. Milla Batres.Lima.1970.p.148-149. 4 Expediente en el Archivo de la Universidad Santiago de Compostela (1845-1857)

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conocen como krausismo, racionalismo armónico o según un término creado por él mismo: panenteísmo (entre el teísmo y el panteísmo). Este cuerpo de doctrina5 goza a lo largo del s. XIX, de una vasta y notoria influencia en los centros universitarios europeos como Bélgica, España (introducida por Julián Sanz del Río) y Francia. Llega incluso con fuerza a Latinoamérica.;6 en particular a países como Brasil, Argentina, Bolivia, Puerto Rico, México, Ecuador. En el Perú se expande, mediante los círculos universitarios, en Lima y hasta zonas altoandinas como Arequipa y Cuzco.7 El libro básico de Ahrens Curso de Derecho Natural o de Filosofía del Derecho es traducido al español por Ruperto Navarro Zamorano y José Alvaro de Zafra (1841) y luego por el abogado Pedro Rodríguez y Mariano Ricardo de Asensi (1868).8 No obstante que el propio autor en el prefacio de la 1º edición ruega no olvidar que ha sido concebido como un resumen destinado a servir de manual para la enseñanza,9 esta obra académica por sus novedosos planteamientos sobre el Derecho, la sociedad y el Estado llega a alcanzar importantes

e insospechados

niveles de proyección política. En España casi todos los intelectuales liberales y republicanos, incluyendo

conocidos juristas, políticos y pedagogos,

adoptan

su

ideario o cuanto menos tienen decidida influencia krausista. Conforman

5

Corriente filosófica con fuerte énfasis en la filosofía del derecho.Se inscribe dentro de la corriente del Derecho Natural Racionalista. Propone un punto medio entre posiciones extremas de individualismo y absolutismo. Vincula la moral y el derecho. Su teoría del Estado deriva en un sistema constitucional orientado a una reforma dentro de un mundo dominado por el absolutismo. Alzamora Valdés, Mario. Filosofía del Derecho. Lima. 1976.p.157 6 En el prefacio a la segunda edición ( 1843) de su obra principal Ahrens hace mención de que su obra ha sido aceptada para la enseñanza universitaria “ hasta en América”. (sic) 7 Chamamé, Raúl. El Krausismo en el Perú. En Revista de Derecho y Ciencias Políticas UNMSM Vol.51-52.p.267.Lima. 1994 8 Resulta muy interesante la influencia de Krause en Latinoamérica y España teniendo en cuenta la existencia de filósofos mayores como Kant y Hegel 9 Ahrens, Enrique. Prefacio a la primera edición fechado en Bruselas el 22 de diciembre de 1837.

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un movimiento de renovación espiritual con vasta influencia en el campo de la educación y de la política durante la segunda mitad del s. XIX. Entre éstos se encuentra su principal discípulo Francisco Giner de los Ríos (quien traduce su obra Historia del Derecho) e intelectuales de la talla de Francisco de Paula Canalejas, el penalista Vicente Romero Girón, Federico de Castro, Clemente Fernández Elías, José María Maranges, Emilio Reus y Bahamonde. Asimismo, Leopoldo Alas, Nicolás Salmerón, Joaquín Costa, Pi y Margall, Gumersindo de Azcárate, Adolfo Posada, Dorado Montero, Gonzalez Serrano y José Feraz Turmo, Francisco de la Pisa Pajares. También Rafael Altamira, Piernas Hurtado, Eduardo Soler, Martín Navarro Flórez, Adolfo Alvarez Buylla

y Emilio

Cautelar.10 Muchos de ellos forman y dan vigoroso impulso a la Institución Libre de Enseñanza. Esta prestigiosa entidad pedagógica independiente formada en 1876 por profesores expulsados de la Universidad, se convierte en el núcleo aglutinador de la intelectualidad disidente contra la política educativa oficial

de

marcada

tendencia

conservadora

y

mediocre

de

La

Restauración. En el Perú su notoria repercusión y realce intelectual se vislumbra en el singular hecho de que, en forma paradójica, es adoptado como sustentador filosófico de las dos corrientes ideológicas y políticas más importantes

y antagónicas entre si. De un lado, el pensamiento

conservador encabezado por el obispo Bartolomé Herrera, discípulo y amigo del ilustre intelectual español Donoso Cortés, quien había traducido e introducido los textos de Ahrens en el Convictorio de San Carlos; y de otro lado de la corriente liberal dirigida por Pedro Gálvez, 10

Del Vecchio Giorgio. Filosofía del Derecho.9ed. española.Casa Bosch.Barcelona.p.218-219

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seguidor de Sebastián Lorente, quien enseñaba en el Colegio de Guadalupe lo que calificaba como el verdadero Ahrens. Ambos sectores se disputaban su nombre y su autoridad posiciones doctrinarias divergentes.

para

fundamentar

sus

11

Sin duda este ambiente de privilegiada formación intelectual, en un medio donde campea aún la ignorancia y la tara del analfabetismo, informa de su extracción cultural de avanzada, la misma que casi en forma natural,

por el propio peso de sus títulos académicos y de su

voluntad, lo coloca prontamente en las mejores posiciones de la sociedad gallega. Miembro por derecho propio del Estado Mayor de la inteligencia regional. Hasta aquí nada hacía sospechar al joven graduado, quien proyectaba su futuro con el fulgor del éxito, que por razón de sus ideas filosóficas y políticas,

su

magnífico

destino

intelectual

se

vería

truncado

y

desvanecido cuando apenas intentaba levantar vuelo. San Verísimo de Lamas y la Villa de La Estrada.Aún cuando por razones de estudio se instala desde muy joven en Santiago de Compostela, Ignacio como todos los hombres con raíces, se encuentra adscrito a una sencilla comarca o territorio. Tiene su pequeña patria o terruño familiar en San Verísimo de Lamas,12 en la Provincia de Pontevedra, partido judicial de Tabeirós. Lamas se mostraba por entonces como una muy modesta aldea, compuesta por alrededor de cincuenta y cuatro

11

casas de pizarra,13

Trazegnies, Fernando de. La idea de derecho en el Perú Republicano del s. XIX. Pontificia Universidad Católica. Lima. 1992.p.87. 12 San Breixo de Lams en gallego. 13 Diccionario Geográfico Estadístico de Galicia. p.51

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diseminadas en medio del Valle de Tabeirós y Pardemarín, en las Rías Bajas. Valle llano y verde por doquier, suave y dulce y de clima templado. De abundante pasto y ganado y de frondosas robledas y castaños surcados por serenos ríos como el Ulla un poco al norte, el Umia más al sur o el Liñares o Riobó, que cobijan de forma generosa, en su nacimiento y ocaso, al salmón, considerado como el rey de los peces. Nada extraordinario ocurría por estos lugares. Una monótona y apacible vida rural donde el viajero y el caminante pasaban sin dejar ninguna huella, ningún rastro, ningún hecho significativo que pudiera trascender lo suficiente para consignarse en alguna crónica que tenga la ilusión de vencer al

tiempo. Un día sus siluetas aparecían a la vera de sus

caminos y al cabo de unos pocos minutos desaparecían para siempre del horizonte siempre verde de árboles y de follaje. Los pueblos vecinos y similares tienen como centro poblado mayor a la Villa de La Estrada, la aldea que años más tarde sería ascendida, por mérito propio, como capital del distrito. Recién fundada en 1840, a la sazón, su fisonomía agraria permanece intacta, inalterable en el tiempo como hace más de cien años, con su invariable aire rural, su sabor a verdura, tierra fresca y azadón. La

Estrada se compone básicamente de las muchas fincas y algunas

pequeñas haciendas de antiguas familias lugareñas que, en forma similar a toda Galicia,

se dispersa y fracciona entre varias manos, lo

cual permite de algún modo el desarrollo de una vida civil, económica y política más democrática y quizá por ello más afín a las ideas que propician

la

libertad.

No

existen

aquí

los

orgullosos

blasones

castellanos, ni los ostentosos títulos nobiliarios. Tampoco se asientan los grandes terratenientes de Andalucía, Castilla, Trujillo o Ica, dueños

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absolutos de la hacienda y la vida, como los describe Calderón de la Barca en el Alcalde de Zalamea. Los apellidos de los Andión, Paseiro, Picans, Sanmartín, Durán, Carracedo, Puente, Cadavid, Saenz, Andújar, entre otros, se deslizan continuamente como antiguos vecinos en los documentos, escrituras públicas y sobretodo en las interminables partidas de bautismo que custodian sus simpáticas parroquias de piedra como la de Rubín o la de San Verísimo que sirvieron también durante siglos de

cementerios

locales. Allí se halla el pulso del ciclo vital de la historia del pueblo. En los libros de partidas se encuentran registrados los nacimientos y en sus marmóreas lápidas se inscribieron las muertes de sus habitantes.14 El corazón

de la villa se ubica en la antigua Plaza del Mercado (hoy

plaza Martínez Anido), centro y eje en la que confluyen todas las transacciones comerciales de compra y venta de los bienes que producen su valles interiores, así como de los traídos de otros sitios más lejanos, tales como lino, lana, cornezuelo de centeno, plantones de morera, telas, vinos de Ribeiro. Es también punto de referencia obligatoria de los incautos reclutas tan necesarios para el ejército y sus guerras y, desde luego, de los desesperados emigrantes camino a la América, quienes a diferencia de otros pueblos de la zona prefieren a Venezuela como destino. Por esta razón que andando los años una de sus calles principales lleva el nombre de este país sudamericano. Pero no todo se presenta color rosa. También se padece la pobreza, la estrechez y otras carencias básicas. Así Estrada, Cuntis y Forcarey soportan en 1855-1859 fuertes epidemias de tifoidea y tuberculosis que 14

En la parroquia de San Verísimo de Lamas pudimos observar muchísimos Andújar en sus registros de bautismos como en el cementerio lo cual prueba sus antiguas raíces gallegas..

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causan gran mortandad. En medio del flagelo se levantan sus mejores hijos como el Dr. Serafín Pazo Cumbraos quien por su generosidad, entrega

y

altruismo

obtiene

de

S.M.

la

Reina

Isabel

II

una

condecoración el 13 de diciembre de 1859. En su recuerdo el ayuntamiento le designa a este insigne médico graduado en la Universidad de Santiago una calle con su nombre que ha quedado hasta nuestros días.15 El clima benigno y propicio de la Villa hace de ésta un refugio natural de todos aquellos que buscan paz y aire puro para curar y sanar los males respiratorios o pulmonares que los aquejan. Bajo este influjo vienen de todos lados de la península personas de distinto

estado, edad, y

condición social para hallar paz, aire fresco y regenerador para mejorar la salud. Estrada significa cruce de caminos y carretera. Su privilegiada situación geográfica la coloca como paso obligado hacia Portugal. Por ella transitan arrieros y viajeros; pero

sobretodo muchedumbres de

peregrinos que siguen la conocida Vía de la Plata16, uno de los cinco tradicionales y venerados Caminos de Santiago para visitar los restos del Apóstol que según la tradición reposan en la Catedral de Compostela desde el s. IX. La Villa se encuentra muy cerca de esta ruta mundial que se considera con justicia el primer itinerario cultural europeo Ambiente social, intelectual y político del Antiguo Régimen-. A mediados del s.XIX se vive intensamente en toda España la pugna y enfrentamiento hostil entre distintos bandos políticos, cada uno de distinta ideología y bajo la égida de diferente caudillo. Luchan en forma abierta y soterrada por la captura del poder y del Estado. 15 16

Arca Caldas, Olimpio. Callejero histórico de la Villa de A Estrada .p59 Antigua calzada romana que pasa por Lalín y Silleda muy cerca de A Estrada

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Aparecen, por un lado, los partidarios de la monarquía ya sea absolutista o con limitaciones de orden constitucional. Frente a éstos se presentan los republicanos. Los liberales, por su parte, adoptan en unos casos posiciones radicales, y en otros posturas más conservadoras, incluido su monarquismo. Los liberales se dividen entre progresistas y moderados. Los primeros se encuentran encabezados por el general Baldomero Espartero; los segundos por el general Ramón Narváez. En medio de esta tensa situación política se suceden las tres Guerras Carlistas (1833-1840/1846-1849/1872-1876) que convulsionan y tiñen de sangre y de horror la península. Uno de sus más temibles cabecillas que aparece en la escena es Ramón Cabrera, conocido como el Tigre del Maestrazgo quien a

punta de terribles ejecuciones a bayonetazos en

San Mateo y fusilamientos masivos de opositores consolida una terrible fama de sanguinario.17 Los carlistas18 se muestran como conservadores a ultranza y fervorosos antiliberales. Partidarios del Antiguo Régimen o de la monarquía absolutista y de sus instituciones medioevales como el Tribunal del Santo Oficio y el férreo poder del alto clero católico. Su imagen tradicional se plasma en un cuervo anidado bajo los alerones de alguna torre feudal.19 Los liberales, en su amplio espectro, postulan una profunda reforma que reconozca, entre otros derechos fundamentales, el respeto de la voluntad soberana del pueblo, el sufragio universal que permita elecciones de gobiernos representativos y el establecimiento del Jurado como un medio de proteger la libertad de imprenta. Asimismo, amplias 17

Larousse. Historia de la Humanidad. t.11. p.26 A la muerte del Fernando VII su hermano Carlos reclamó el trono desconociendo a la infanta Isabel y se levantó en armas. Sin embargo, el problema pasa por la toma de una distinta posición ideológica y política. 19 Carr, Raymond. España 1808-1975. Ed. Ariel Barcelona. 1988. 18

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leyes en favor de la prensa. Asociación libre. Libertad religiosa, de cultos y matrimonio civil. En estas ideas bulle el germen de la libertad que caracterizaría las futuras sociedades modernas. En Galicia el vasto sector rural campesino permanece impasible. Empero los hidalgos rurales y urbanos, la disminuida aristocracia rural y sobretodo la jerarquía eclesiástica que cuenta con los ingresos florales, apoyan decididamente al carlismo.20 Los liberales cuentan con el apoyo orgánico del ejército. En el aspecto social, reposan sobre dos precarios vértices: la casi nula burguesía gallega y

los intelectuales

impregnados de estas ideas progresistas. Uno de ellos Ignacio Andújar Paseiro. Aún cuando los hidalgos rendeiros constituyen la base social del carlismo, Ignacio se identifica con sus ideas filosóficas y políticas y su doctrina liberal y republicana absorbida en las aulas universitarias y en los círculos intelectuales. Quizás también haya influido en su ánimo la tradición liberal de A Estrada, cuyo ayuntamiento había recordado allá por 1840, en un monumento público, a tres liberales víctimas del absolutismo, fusilados en la plaza del pueblo el 7 de abril de 1836.21 A estas alturas, las ideas liberales se propagan rápidamente por Bélgica, Nápoles y por toda Europa y amenaza con tomar el poder por la irresistible fuerza del pueblo. Ya ha provocado la formidable Revolución de Julio o Jornadas Gloriosas de 1830, en la que el pueblo de

París

toma

violentamente

las

calles

y

con

barricadas

y

enfrentamientos sangrientos arranca del gobierno al intransigente Rey Carlos X, sucesor de Luis XVIII.22

20

Villares Paz, Ramón. Galicia No Seculo XIX. p 150 Los nombres de los tres fusilados son: Fernando Lorenzo, Eduardo Otero y Gonzalo Arén 22 Esta epopeya popular de fondo heroico y soñador se evoca magníficamente en la novela Los Miserables de Víctor Hugo y en el cuadro de Dela Croix “La Libertad guiando al pueblo”. 21

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Esta misma escena de masas enérgicas en pos de la libertad que sacude el mundo se repite en febrero de 1848 cuando los estudiantes, obreros y periodistas toman en vilo las calles y plazas públicas logrando esta vez la dimisión del Rey Luis Felipe I - Luis Felipe de Orleáns fundándose la II República Francesa dirigida por el escritor Alfonso de Lamartine. Ignacio: liberal y republicano.Por su privilegiada formación filosófica-jurídica y su desenvolvimiento como joven abogado que ejerce su profesión en una ciudad tan permeable y sensible a las convulsiones que arden en el viejo continente como Santiago de Compostela, Ignacio no tarda en adoptar una determinada posición política.23 En la época de primacía de las ideologías, él se adhiere, en cuerpo y alma, a la que se ajusta a sus convicciones personales y a su pensamiento filosófico. Toma el bando de los liberales, en la vertiente de partidarios de la República. Esta sincera opción política, contraria a la corriente mayoritaria en Galicia, salvo importantes ciudades como El Ferrol y La Coruña, le costaría demasiado caro. La revolución del 17 de septiembre de 1868 que estalla bajo la arenga Viva España con gloria - La Gloriosa - encabezada por el general Juan Prim que sostiene por primera vez un claro ideario de corte liberal y anticlerical, lo tiene

como uno de sus más tempranos colaboradores.

Participan activamente en ella los estudiantes, el pueblo y una nueva casta dirigencial ajena a la tradicional presencia militar. Los políticos que dirigen el movimiento y se abren paso en esta nueva escena lo conforman, en su mayoría, civiles y juristas como él. Por ello en cuanto 23

No se han encontrado mayores evidencias de su trayectoria política. Se sigue aquí la tradición oral.

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se forma la Junta en Galicia bajo la presidencia de Ildelfonso Fernández Ulloa, se une a ella para colaborar con la causa. La

revolución

tiene éxito y observa con satisfacción las primeras

conquistas liberales que arroja del poder a la desprestigiada Reina Isabel II y a la dinastía de los Borbones, una de las más antiguas del planeta. La monarquía había sufrido una estocada mortal y don Ignacio lo celebraba con sentido júbilo. Siguiendo el curso de los acontecimientos presta su decidido concurso a la histórica decisión de las Cortes Españolas del 11 de febrero de 1873 de

abolir, por mayoría de 258 votos a favor contra 32 en contra, la

monarquía e instaurar la Primera República como nueva forma de gobierno. El cambio radical de sistema constitucional había llegado en forma inesperada. Este nuevo régimen

republicano lo coge en su cátedra en la

Universidad de Santiago y es allí donde se muestra como dirigente de primera plana de este movimiento. Colabora con rigurosos artículos en el periódico liberal dominicales y opina decididamente en favor de las ventajas y bondades del sistema republicano como forma de gobierno. Se encuentra identificado con la brillante oratoria y línea política de Emilio Castelar, liberal, republicano e intelectual como él (krausista también), que asume el cargo de Presidente de la República el 6 de septiembre de 1873.24 Pero esta primavera democrática sería demasiado corta. Poco antes de cumplir los doce meses, en la madrugada del 3 de enero de 1874, se 24

Castelar es considerado como el mejor de los oradores castellanos de todos los tiempos. En el Perú algunos intelectuales lo seguían y otros lo rechazaban. Víctor Andrés Belaúnde en el primer caso y Manuel Gonzalez Prada en el segundo.

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produce un nuevo golpe de Estado encabezado por el Capitán General de Madrid general Manuel Pavía, quien al mando de sus tropas y con las bayonetas en ristre, asalta las Cortes y por la fuerza de las armas las disuelve.25 La primera república española había muerto. Con ella su primera ilusión política. El nuevo gobierno, al menos en un primer momento, desata una tenaz persecución contra los opositores. Se dicta un régimen de excepción. Se declara

el

Estado

de

Sitio

y

la

suspensión

de

las

garantías

constitucionales. Las extraordinarias medidas restrictivas contra la prensa

y

partidos

prohibidos,

las

duras

sanciones

penales

y

administrativas y otros dispositivos legales para controlar el poder y la protesta se van publicando casi inmediatamente en el diario oficial La Gaceta de Madrid.

26

En febrero de 1875, bajo el pretexto de incitación a la revolución, el Ministro de Fomento Manuel de Orovio dicta el conocido Decreto de Orovio por el cual la libertad de cátedra desaparece en todas las universidades.27 A Ignacio se le despoja inmediatamente de la suya y se le expropian sus bienes. Aunque la represión en su discurso oficial pretenda la

hermosa ilusión de ser selectiva y sin revancha, a los

notorios partidarios del gobierno destituido, al menos en un comienzo, se les acosa y castiga duramente. La prematura muerte.A la primera convulsión luego del Golpe de Estado le sucedería un extendido período de paz con el retorno al poder de la monarquía a la 25

Esta asonada se parece a la del Cdte. Pablo Arguedas que al mando de su batallón disolvió la Convención Nacional del Perú en 1856, de claro corte liberal. 26 Martínez Cuadrado, Miguel. Historia de España Alfaguara. Tomo VI. La Burguesía Conservadora. Alianza Ed. 1986. 27 Se le despoja de sus cátedras a Salmerón, Castelar, Azcárate y otros

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cabeza del Rey Alfonso XII, período conocido como la Restauración que se inaugura en 1875.28 Este gobierno que instala nuevamente en el poder a la dinastía borbónica y sepulta a la I República se muestra

moderado y

constitucional. Su mentor y principal dirigente Antonio Cánovas del Castillo, Jefe del Partido Conservador, trata hábilmente en todo momento, y al final lo logra, conciliar las posiciones adversas. Esto daría a España el preciado bien de la estabilidad y continuidad política.29 A partir de allí la armonía parece proyectarse sobre la península, salvo la eventual amenaza armada carlista en algunos frentes debidamente focalizados en Andalucía, el País Vasco y Navarra, en cuya ciudad de Estella se le infringe su derrota militar final el 19 de febrero de 1876. Sin embargo, éstos al menos en la zona de Galicia devienen en pequeños grupos armados, dispersos, sin formación doctrinaria, que se dedican al pillaje. A juzgar por sus acciones violentas y latrocinios más se asemejan a simples partidas de bandoleros y salteadores de fondos municipales y rentas de tabaco de poblados interiores. Uno de estos grupos facciosos, compuesto por alrededor de cien sujetos fuertemente armados, al mando de José Ostendi,30 opera cerca de la frontera con Portugal para el caso de una huida repentina ante fuerzas gobiernistas o para la entrada clandestina de armamento. Esta partida lo embosca en un paraje a unas cuantas leguas de la villa Monforte de Lemos y lo mata alevemente. El asesinato se consuma rápidamente. Este hecho luctuoso le arrebata para siempre, 28

a sus

La novela “La Regenta “ de Leopoldo Alas “Clarín “ retrata y critica admirablemente la psicología, ambición y comportamiento de los miembros de este período. 29 García de Cortazar, Fernando y Gonzalez Vesga, José Manuel. Breve historia de España. Alianza Editorial,Madrid.2003.p.529 30 Gonzalez López, Emilio. Historia de Galicia. Bib.Gallega.La Voz de Galicia.1980. p.666

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cuarenta y tres años, la posibilidad de prestar su inteligencia en favor del país.31 La ausencia repentina y definitiva

permite que la

miseria y el abandono se presente a

cara terrible de la

la puerta de su hogar. Esto se

agrava mucho ante la confiscación por el Estado de sus pocos bienes. Esta circunstancia dolorosa e imprevista constituye la llave maestra para intentar comprender el singular camino de migración que hubieron de tomar, años más tarde, sus tres pequeños hijos varones. No podía ser de otro modo. como

su extracción social

La excelente media,

formación humanista, así

no son características típicas del

emigrante gallego del s.XIX. Estos básicamente lo conforman las masas de labriegos empobrecidos aunque con los suficientes recursos que le permita costear su largo viaje, carentes de suficientes tierras y capital, sin formación educativa superior y sin mayor esperanza de desarrollo en su suelo natal. Ignacio, por el contrario, las tenía en demasía, con pletórica generosidad. Empero, la arena política y el hado del destino le jugó al revés, sacándolo muy pronto de la contienda de la vida. El panorama familiar se pone extremadamente difícil. La idea de sus hijos menores de hacer la América surge de pronto como una solución desesperada. En algún momento aparece el nombre del Perú, con todo su oro, riqueza y esplendor al alcance de la mano. La emigración por aquellos remotos lugares se asoma como una fatalidad del destino, y acaso como una salida obligada.

31

Los asesinatos por motivos políticos son por desgracia eventos constantes. Recuérdese que el Gral Prim sería asesinado el 27.12.70 y Cánovas del Castillo el 8.8.87.Asimismo las matanzas del Tigre del Maestrazgo o las emboscadas del cabecilla carlista Mateo Guillade quien asesinó al Crnel. Gregorio Blanco Velasco en Pontevedra ( 15.08.37) o la del gallego Canalejas en Madrid en 1912..

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Bonifacio Andújar Cepa.Su primera infancia, acaso la única completamente feliz de su vida, se desenvuelve en el

barrio que se abre ante su pequeña casa de dos

plantas ubicada en una calle irregular y estrecha signada como rúa Travesa Nº.Trece,1 a pocos metros de la Puerta Miñá o del Carmen, la entrada más antigua de la imponente muralla romana que encierra la ciudad de Lugo. Viene al mundo la noche del 12 de febrero de 1860. Antes que inaugurara el alumbrado eléctrico y el ferrocarril. Lo bautizan al día siguiente en la parroquia de Santiago A Nova fundada en 1363 y reconstruida en 1759 ubicada al otro extremo de la ciudad, casi al pie de la Porta de San Pedro que en la edad media se le conocía como Puerta Sancti Petri

o Puerta Toledana. Le colocan los nombres de

Bonifacio Jesús María Luis Andújar Cepa.2 Toma como nombre principal el de su ilustre abuelo paterno y padrino de bautismo Bonifacio Paseyro Andújar quien es activo miembro y presidente en 1866 del prestigioso Circulo de las Artes de Lugo, que hasta la fecha irradia cultura en toda Galicia.3 Al igual que su padre es hijo primogénito y como en toda familia tradicional, esta vez recae sobre sus hombros la obligación de labrarse un futuro para ejemplo de los demás. Así desde pequeño lo acompaña a sus múltiples actividades académicas y proselitistas en la Universidad y alrededor de la ciudad. Observa con asombro infantil sus luchas que no alcanza a comprender. Pronto aprende los pormenores y sinsabores de la actividad política cuando se impregna de una determinada opción ideológica.

1

En el plano oficial de la ciudad de Lugo se le conoce en la actualidad como Rúa Travesa do Miño . Constancia de la parroquia de Lugo en archivo personal del autor. 3 www.circulodelasartes.org/index.php 2

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Su padre quiere seguramente para él la carrera de leyes o acaso un interesante puesto en el juego de la política, similar quizá a la que él mismo ha mantenido. Al final de sus días, cuando sus huesos se quemaban de frío en la desolada puna de Cerro de Pasco, a miles de miles de leguas de allí y a más de 4,000 metros de altura, Bonifacio recordaría con nostalgia y honda pena estos sueños de oro que nunca pudieron ser. El Perú donde el oro y la plata se encontraba botada. Desde niño Bonifacio había

escuchado muchas veces la antigua y

muy extendida leyenda, de que los minerales preciosos abundaban en el Perú. Se decía y se repetía por todo el mundo, desde Europa hasta la China, 4 que el Perú era un país extremadamente rico y privilegiado donde el oro y la plata se encontraban – literalmente botados en el suelo como cosas sin valor.5 Esta imagen se presentaba ante si tan evidente y cierta como un axioma matemático y no necesitaba ninguna demostración. Para hacerse ricos, entonces, sólo bastaba asumir la firme decisión de vencer las adversidades del camino. Aquella mágica percepción no formaba parte de una quimera sino que, por el contrario, constituía un riguroso dato con sólido fundamento. Así tal cual había sido corroborado a pie por acuciosos viajeros extranjeros y en especial por el inglés Robert Proctor quien había escrito que en Cerro de Pasco la plata, con frecuencia casi pura, y otros minerales “…se encuentran tirados como cosas sin valor”.6

4

Al Perú se le conocía en China también como el país del oro. El Perú es un país minero con una muy antigua tradición y riqueza de sus minas. Hoy es el 8º. productor de oro el mundo y el 1ero. de plata. 5

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El sabio Alexander von Humboldt había anotado que las minas de Pasco albergan tal riqueza que la plata aflora en la superficie.7 En este escenario solamente se espera levantarla o a lo sumo bastaba hacer, con medios sencillos, un simple hoyo y comenzar a extraerla. Además, como a inicios

del siglo XIX la metalurgia hallábase en

estado muy rudimentario, gran cantidad de mineral valioso se tenía que arrojar al suelo como desecho. Dentro de este cuadro real no cabe exageración alguna: bastaba recoger el mineral abandonado para hacerse ricos. La leyenda de la riqueza del Perú coincidía entonces algo con la simple idea de recoger sus minerales para hacerse ricos. La circunstancia de hallarse el mineral a flor de tierra promueve que los mineros situaran sus piques o bocaminas al muchas veces dentro de ella, ciudad-mina

lado de sus casas y

diseñando sin pensar

el trazo de una

tortuosa y caótica que crecía siguiendo las caprichosas

líneas de los filones o pacos de plata que corren zigzagueantes como subterráneos laberínticos debajo de ella. La fábula de su origen ratifica esta versión de fastuosa riqueza. Se dice que el pastor indio Huaricapcha la descubrió en 1630 cuando al hacer una pequeña fogata para guarecerse del frío advirtió que el fuego había fundido un trozo de metal de plata. Inmediatamente dio aviso a su patrón de apellido Ugarte, quien al poco tiempo denunció el hallazgo y empezó a explotarla, acumulando la primera fortuna privada, de una serie larga e interminable que se conocerían en Cerro las próximas centurias.

6

Proctor, Robert. Cerro de Pasco y la explotación Minera 1823. En: El Peru visto por viajeros Tomo II p. 32. Bib. Peruana .recop. Estuardo Nuñez. Peisa. 1973.

Jorge Andújar

de Galicia a los Andes

Siglos después, el 26 de noviembre de 1956, se verifica una vez más una verdad evidente: la ciudad misma se encuentra encima del cerro prodigioso henchido de mineral que

a pesar del tenaz y consecutivo

saqueo durante cuatro siglos, de enriquecer a virreyes, aventureros y gigantescas empresas modernas, aún permanece intacta y

virgen. Y

para su cabal explotación reclama la exclusividad del sitio. La mudanza de la vieja ciudad deviene inaplazable. Se proyecta, a varios kilómetros, una nueva villa moderna con calles simétricas y plaza rectangular a la que nombran San Juan Pampa. A partir de entonces se inicia el lento y definitivo ocaso del antiguo casco de la ciudad contra el avance inexorable de la explotación minera que ya cuenta con un enorme tajo abierto de 1,900 metros de diámetro y 380 metros de profundidad que lentamente va devorando – literalmente – a la ciudad y sus 65,000 habitantes. En el 2010 se hace evidente la ineludible necesidad de otra mudanza, esta vez total. La ciudad entera con sus edificios, hospitales, casas y calles y plazas. La contaminación de los recursos ha sobrepasado los límites permisibles y mediante consenso general el gobierno central y regional se proyecta la nueva ciudad hacia el sur. El corazón del casco viejo de la antigua ciudad, Chaupimarca, está herida y con sentencia de muerte definitiva. El viaje: venciendo los océanos y los Andes.Lleno de ilusión, teniendo a la mano su Cédula Personal No.318L gestiona su permiso de viaje. El 11 de septiembre de 1875, el Gobierno de la Provincia de Pontevedra le expide su pasaporte No 652.8 Bonifacio 7

El sabio Humboldt había escrito sobre las minas de Pasco que “ El manto mineralizado del yacimiento argentífero tiene 4,400 m.de longitud y 2,000 m. de ancho y aflora en la superficie” En: Estuardo Núñez.p.84 8 Original en archivo personal del autor

Jorge Andújar

de Galicia a los Andes

tiene a la sazón

quince años, edad promedio de los emigrantes

gallegos.9 La autorización de viaje es clara. El destino final se encuentra fijado hacía el Perú. Este documento deja perfectamente esclarecido que no llega al país por casualidad del destino, sino como un punto concebido y deseado desde su natal España. La visación oficial dice a la letra: Queda visada en este Gobierno de Provincia y se autoriza a don Bonifacio Andújar y Cepa para que pueda ausentarse al Perú, advirtiendo que este interesado garantizó la responsabilidad que pueda alcanzarle en quintaz.10 Bonifacio compra su boleto de tercera clase en la empresa VaporesCorreos Trasatlánticos de los Sres. A. López y Cia., una de las cuatro empresas pasaje

autorizadas por el gobierno para trasladar emigrantes. Su

le cuesta 40 pesetas. Para aprovechar vínculos que tiene en

Centroamérica se dirige a Cuba, descartando la vía del Sur por Valparaíso (Chile). A

diferencia

de

otros

emigrantes

gallegos,

paga

su

pasaje

y

manutención por adelantado. No tiene necesidad de otorgar ninguna hipoteca

sobre

propiedades

familiares,

ni

conceder

garantía

o

compromiso alguno con su trabajo futuro para costear su viaje. Esto – piensa - le da mayor seguridad e impulso en su tarea.

9

Vasquez Gonzalez, Alejandro. p.86 En: Españoles hacía América: La emigración en masa 1880-1930. Comp. Sanchez Albornoz 1988. 10 Este último término quintaz se refiere a la conscripción militar. Huir de esta obligación era también una causa de la emigración gallega.

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de Galicia a los Andes

Con unas pocas pesetas, su pasaporte, un delicado rosario de marfil y una foto de su madre doña Nicanora Cepa Gonzalez, tomada en el reconocido estudio fotográfico de Juan Palmeiro e Hijos de Santiago de Compostela11 se embarca, los últimos días de septiembre, en el puerto de Vigo. Un moderno vapor inglés con casco de acero y alumbrado eléctrico cuyo nombre

nunca podría recordar lo trasladaría al otro

mundo. Un viaje especialmente largo y arduo, y a una zona no convencional de emigración, no resulta comprensible sin alguien en el Perú que lo haya apoyado, orientado o financiado. En este sentido, resulta imprescindible que algún compatriota minero ya establecido en el país, lo haya llamado para trabajar.12 Al cabo de treinta y seis largos días de travesía por el Océano Atlántico arriba a Cuba, que se mantiene aún como colonia española a pesar de la guerra por su independencia que se vive intensamente y que décadas más tarde, con decisivo apoyo norteamericano, llegaría de forma inevitable. De aquí zarpa al Puerto de Colón (Panamá) y luego en una ruta similar a la

Vasco Núñez de Balboa atraviesa por tierra la selva

pantanosa del istmo donde la malaria hace estragos y alcanza, finalmente, las aguas mansas del Océano Pacífico. Ya en la antigua Mar del Sur aborda otro vapor en dirección al Golfo de Guayaquil (Ecuador) donde tiene la primera visión de la majestuosidad de los Andes con el imponente Cotopaxi (5,897m.s.n.m.) y sobretodo del Chimborazo (6,310).13 Luego, siguiendo en paralelo a la costa, enfila hacia el puerto del Callao, en Lima (Perú) donde arriba a comienzos de noviembre de 1875. 11

Dona Nicanora aparece con una esplendida mantila y gargantilla con una cruz. Juan Palmeiro era un destacado fotógrafo de la élite compostelana y un decidido partidario carlista. 12 Era una situación muy difundida. Muchos españoles propietarios de minas y comercios tomaban como empleados a sus compatriotas.

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de Galicia a los Andes

En la orilla del Callao halla la primera paradoja de su destino de emigrante. El país rico, abundante y próspero

que había imaginado

desde su Galicia natal se encuentra en franco curso hacia la bancarrota. Así lo declaró el Presidente de la República don Manuel Pardo y Lavalle en su mensaje al Congreso el 21 de septiembre de 187214 La crisis económica, fiscal y monetaria comenzaría luego a mostrar sus terribles rasgos: insolvencia de los bancos, incumplimiento sistemático del Estado de sus obligaciones y compromisos patrimoniales. Masivas emisiones inorgánicas de dinero. Desconfianza generalizada en los agentes económicos y ciudadanos en general. Pérdida total del crédito en el exterior. Pánico en los tenedores de bonos de la deuda externa del Perú que alcanza cifras enormes para las escasas posibilidades del país. Gigantesco desequilibrio presupuestal. Alza de precios, falta absoluta de metálico,

desconfianza

en

los

billetes,

entre

otros

signos

de

descomposición. En el plano político la inestabilidad es elocuente. Se suceden treinta y ocho

levantamientos

y

motines

armados

contra

el

gobierno

constitucional de Lima que ponen en constante zozobra la estabilidad de la República. El propio don Nicolás de Piérola, ex ministro y líder indiscutido de la oposición protagoniza algunos de los mas sonados. Todo ello constituye la antesala del desastre de la guerra con Chile que estallaría en 1879. Galicia y Cerro de Pasco: entre el sereno mar y el soroche de los Andes.Entre Galicia y Pasco no cabe similitud alguna. Por más que se busque, por más que se intente, difícil o casi imposible tarea será

13

Markham, Clements tuvo una impresión similar al divisar los Andes desde el mar por primera vez.

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de Galicia a los Andes

poder trazar un paralelo de cosas comunes entre ambos extremos irreconciliables.

Son

dos

lugares

antípodas

por

antonomasia.

Bonifacio muy pronto lo sabría en carne propia. Cerro de Pasco es por origen y tradición una ciudad minera alojada en la cima de la cordillera de los andes centrales peruanos. Su altitud supera fácilmente a cualquiera de Europa que le salga al frente. De hecho con sus 4,338 se eleva como la más alta del mundo. Marca una distancia muy clara respecto de los montes, ya no ciudades, más encumbrados de España como Mulhacén (3,481) y Pico de Aneto (3,404). En Galicia los macizos de Ancares, Courel, Manzaneda y Peña Trevinca apenas sobrepasan los 2,000. Los truenos y relámpagos y el frío congelante propio de la puna andina; el cielo permanentemente cerrado, repentinas y vigorosas precipitaciones pluviales acompañadas de fuertes vientos constituyen su estado habitual todos los días del año. Por el contrario, Galicia, el país de los mil ríos, forma una apacible región de áreas verdes, rías o bahías anchurosas, suaves pendientes, espejos de lagos, cielos azules y serenos, clima templado, suave brisa marina y la compañía de la inmensidad del mar atlántico a sus pies. La ciudad-mina se presenta como un hosco peñón que con el vértigo de su altura desafía a los hombres a extraer su riqueza interior y los reta de cara a las nubes, las que en su vapor blanco parecen tocarse con las manos y sentirse aún su helada humedad golpeando rostro

14

el

15

Manuel Pardo y Lavalle, nieto del gallego Manuel Pardo y Rivadeneyra, Oidor de la Audiencia del Cuzco y alto funcionario y magistrado del Virreynato del Perú y Ministro en España. 15 Humboldt había anotado que Pasco se encontraba a una inmensa altura muy cerca del límite de las nieves perpetuas. Ibid. p.94.

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de Galicia a los Andes

El predominante gris plomizo de la cadena de los andes pelados que la cobijan y algunos pocos penachos de nieve perpetua en sus cumbres más elevadas, delatan la carencia total de vegetación y de animada vida animal. Es un territorio donde sólo reina el cóndor majestuoso. Todo este cuadro compone un ambiente hostil y duro, metálico como los minerales que esconde en sus entrañas. En La Estrada, zona dulce, verde y salpicadas de alegres ríos colmados del salmón, conocida como La capital salmonera de Galicia se hallan ausentes los grandes abismos de picos y montañas. Las que existen a duras penas bordean los 300 metros. La geografía de Galicia invita a los hombres a vivir en permanente comunión y afable diálogo con ella. Los macizos andinos de Cerro de Pasco se yerguen, por el contrario, como un abierto reto para rudos gigantes, no para hombres. Ciertamente, en pocos lugares del mundo la vida se presenta

tan dura y a la par tan desprovista de todo halago

para vivirla, a pesar de las enormes riquezas que esconde. Las notorias diferencias se acrecientan aún más ante la inexistencia, por entonces, de vías de comunicación directa entre ambas. El único medio es el marítimo y el Canal de Panamá sólo habitaba en la mente de unos aventureros como un ambicioso proyecto para unir dos océanos, que recién daría sus frutos reales en 1914. Además, la enorme distancia que separa Lima de Cerro de Pasco, que bordea los 323 kms en permanente ascensión hacia las alturas, que en muchos parajes sobrepasa los 5,320m.s.n.m. se aparece como otra colosal e infranqueable barrera que la naturaleza ha colocado entre las dos ciudades del Perú.

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El Ferrocarril más alto del mundo .A finales de 1875 no existe medio de transporte directo de Lima a Cerro de Pasco. El Ferrocarril a las nubes o Ferrocarril a la luna como se conocía popularmente a la titánica obra de Henry Meiggs, inaugurada con estruendo por el presidente José Balta el 1 de enero de 1870 y que contaría finalmente con maravillas de ingeniería como los 61 puentes y 65 túneles, no sería culminada hasta Cerro sino muchos años después. Cuando Bonifacio arriba habíase quedado trunca en Chicla,

16

un

abandonado caserío en medio de las quebradas y abismos andinos. A partir de Chicla el arduo camino de ascenso a las cumbres andinas se efectúa, a lomo de caballos y acémilas, por senderos serpenteantes, entre enormes precipicios, tajos y quebradas de espanto: Había que sortear derrumbes y asaltos que demoraría el viaje, según el clima y otras circunstancias, aproximadamente doce días. Estas peripecias se describen en 1876 por el periodista del diario El Nacional don Manuel María del Valle, quien da vivo testimonio de estrechas trochas que sólo podían ser salvados a pie y cuyo ancho no eran mayores de una vara. En su trayecto observa los intensos trabajos del ferrocarril, el movimiento vertiginoso de miles de obreros e ingenieros que en precarios campamentos proyectan esta vía en condiciones geográficas y climáticas muy adversas y cuyo trazo se convierte en muchos trechos en el camino seguro a seguir. Conversa con algunos inmigrantes italianos que van con poco optimismo hacia la futura colonia del Chanchamayo, al otro lado de los Andes, en la selva. Se detiene a pernoctar en Casapalca donde sopesa por primera vez el enorme potencial minero de la zona explotada exitosamente por los ingleses Jacobo Backus y John Howard Johnston y el peruano Leonardo

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Pfluker.17 Luego de tres tensos días llega a La Oroya, a orillas del río Mantaro, donde décadas más tarde se levantaría la famosa fundición que arruinaría la poca vida vegetal de la región. El itinerario de Chicla a la Oroya se puede reconstruir día a día con la extensa y valiosa memoria de viaje del ing. Giordano al encargado de negocios del reino de Italia, de

mayo de 1875,

quien la transitó y

auscultó con el ojo ágil del hombre culto. Al referirse al ferrocarril vaticinó que al concluirse ninguno en América del Norte, Europa y otros a los que había visitado como Ghats en la India y Kandy (en la hoy Sri Lanka), y Blue Mountains en Australia podía comparársele. Tuvo mucha razón y justicia. La obra del Ferrocarril Central - de lejos el más alto del mundo - con

4,816 m.s.n.m. en la zona de Ticlio, deja

pequeño el F.C de Jungfrau (Suiza) de 3,456 m.s.n.m., el más alto de Europa. De hecho se muestra como una formidable y

extraordinaria

obra de ingeniería que venciendo los orgullosos Andes une por fin la costa y la sierra del Perú. La extremada altura disminuye la presión atmosférica y provoca la falta de oxígeno que desata los temibles ataques de soroche

que se

evidencian en espantosos dolores de cabeza, hemorragia por la nariz y orejas,

vómitos

y

asfixia

que

puede

ocasionar

la

pérdida

de

conocimiento, y aún la muerte en casos extremos.18 Asimismo,

en

el

horadar

por

quebradas

inhóspitas

resurgen

enfermedades mortales e incurables como la terrible verruga o fiebre de La Oroya que se manifiestan en horribles erupciones y pústulas en el cuerpo y altísima fiebre. Pese a los esfuerzos de la medicina, habían cobrado más de 10,000 vidas entre los peones chinos y chilenos que 16 17

Basadre, Jorge. Historia de la República. Tomo IV. p.172. Sánchez, Luis Alberto. o.cit. p.109

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levantan las primeras líneas de hierro del ferrocarril, en cuyo recuerdo de tan anónima heroicidad un magnífico puente llevaría el nombre de Verrugas. Tristeza y muerte en la ciudad minera.La primera referencia de su presencia en el Perú se observa con ocasión del nacimiento de su único hijo José, el 18 de agosto de 1896. 19 Sin embargo el dato más relevante de su vida en la cima de los Andes, se da el

26 de abril de 1916, cuando contrae nupcias con Gabriela

Camargo Vento, natural de la zona. Lo

singular del matrimonio consiste en que lo efectúa en trance de

muerte o in artículo mortis, 20 según las estrictas formalidades del Concilio de Trento de la Iglesia Católica. Lo realiza el párroco Leonardo Alarcón del Convento franciscano de Santa Rosa de Ocopa. Bonifacio apenas puede coger el bolígrafo y firmar el acta. 21 Se ignora la exacta razón que lo impulsa a efectuarlo tan tardíamente, aunque suponemos que espera dar a su hijo la legitimación filial y social que tanto se necesitaba en aquel entonces.22 No obstante su estado de salud tan precario al momento del acto nupcial fallece recién el 27 de diciembre de 1918, a los cincuenta y ocho años de edad.23 Habían transcurrido dos años y ocho meses desde la extremaunción. Este lapso de tiempo largo sugiere la existencia de alguna 18

penosa

y

larga

enfermedad.

La

partida

de

Defunción

Tauro, Alberto. Enciclopedia Ilustrada del Perú.Peisa. Lima. t.6.1987.p.2003 En la Parroquia de Chaupimarca en Cerro encontramos la referencia a un segundo hijo con la misma mujer, de nombre Ignacio, de quien nada se sabe. 20 El Derecho Canónico ha permitido el matrimonio in extremis justamente para legitimar la prole procreada antes y regularizar su situación por razones de orden ético, legal o de conciencia. 21 En la partida se consigna como su edad 60 años lo cual infiere que no se encontraba lúcido 22 La Constitución de 1860 y el Código. Civil de 1852 discriminaban en todo orden al hijo extramatrimonial 23 En el Minero No. 1235. p.3 del 30.12.1918 ( único ejemplar en hemeroteca del Archivo del Concejo de Cerro de Pasco) se halló aviso necrológico de Bonifacio. 19

Jorge Andújar

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proporcionaría la clave. En ésta se lee como causa del fallecimiento el “reumatismo” que lo había asolado durante “varios años”.24 Si a estos datos se suma una sentida carta de su hermano José desde Costa Rica en el cual le pide levantar su ánimo tan abatido, tan triste25 se concluye que Bonifacio sufrió durante largos años de reumatismo o de alguna malsana

enfermedad

muscular o arterial aún no

determinada. Sino originada al menos agravada muchísimo ante el severo clima de cuchillo que la puna cerreña reserva a los extranjeros que vienen a probar suerte con su riqueza minera. Su grave dolencia juega papel decisivo en su vida. Al menos durante las dos últimas décadas de su existencia la sombra de la muerte lo acecha y lo atenaza infaliblemente, sin querer darle el zarpazo final, como si quisiera que expiara lentamente todas las culpas propias y aún las ajenas. Este constituye acaso el altísimo precio de su aventura andina de riqueza fácil. Este cuadro acrecienta su innata nostalgia por la patria ausente. Se presenta así

la conocida

saudade, morriña, señardade, soidades tan

peculiar y propia de los hijos de Galicia.26 En esos días gusta cantar el tema El emigrante 27 , cuya letra refiere la penosa historia

de un

emigrante español, semejante a la suya y seguramente a la de muchos otros, que añora su tierra, y con su rosario de marfil

jura ante Dios

que jamás la olvidará.

24

Partida en archivo personal. Carta del 13.10.1913 fechada en San José de Costa Rica. Original en archivo del autor 26 Hay interesantes estudios sobre la saudade gallega, suerte de íntimo sentimiento psicológico, social y humano ante el destierro, explicable en un país hermoso al que la necesidad obliga dejar. 27 Existe una versión de Juanito Valderrama que prevemos sea en alguna medida una reactualización. 25

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de Galicia a los Andes

José Andújar Cepa.-28 Siguiendo la cadena migratoria iniciada por su hermano Bonifacio arriba muy joven aún a Cerro de Pasco y a los pocos años se independiza y empieza su vorágine como empresario de minas. Es así como desde 1885 se embarca y desarrolla con mucho empeño, algunas veces sólo, otros en colaboración con socios peruanos, y otros más de la mano de compatriotas, distintos proyectos mineros. Se interesa básicamente en la plata que abunda en la zona. Su actividad se muestra desbordante. Las ganancias que arranca de una mina lo invierte prestamente en otra; así como las pérdidas que sufre en una lo resarce con los beneficios que obtiene de otra. Todo en un riesgoso juego de equilibrio donde su voluntad constituye el único motor y fiel de la balanza. Hace denuncios mineros por doquier. De este modo inscribe a su nombre las minas de plata “Estrella Polar”, “Vencedora”, “El Huáscar” y “La Invencible”, entre otras

29

.

Como todos los mineros cerreños se encuentra muy atento a la nada remota posibilidad de hallar la gran mina, el gran yacimiento, que sabe perfectamente que ronda en el fondo de la tierra, cerca de ese prodigioso centro minero. Anda en la busca afanosa de capturar el sueño de su larga travesía: la ilusión de riqueza rápida. Ciertamente estuvo cerca, mucho más cerca de lo imaginado. Después de todo algunos mineros, menos avezados y astutos que él, muy cerca de los parajes por donde auscultaba, lo habían logrado y

28

Nació en San Verísimo de Lamas en 1861 o 1862. Aparece en un indice pero no está su partida.

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de Galicia a los Andes

gozaban de cuantiosas fortunas. Inclusive, habían fundado poderosas familias o grupos económicos, que tendrían actuación de primer orden en la época de La República Aristocrática. (1895-1919). Cerro de Pasco y la leyenda del Dorado.El caso de Ricardo Bentín con su riquísima mina Aguas Calientes

30

o el

de su paisano Agustín Arias Carracedo31 con Calera Cut Off , quienes al cabo de algunos años de laboreo acumularon una importante fortuna personal y merecido prestigio, se presentaban ante sus ojos como rotundos ejemplos de que el Perú era un país de riquezas y de posibilidades. Caso similar de rotundo éxito empresarial y social lo constituía don Eulogio Fernandini con su mina Colquijirca y otras. Contaría también el de Zacarías Montañes con Millotingo

32

. Acaso recordaría a su

compatriota Juan Vives, quien mucho tiempo antes había arribado a este territorio minero como un modesto carpintero o el del español José Maiz y Arias quien luego de convertirse en un acaudalado minero en 1771 obtiene de Carlos III el título de Marqués de la Real Confianza. Habían

otros

extranjeros

que

vinieron

sin

mayor

patrimonio

y

auscultando y midiendo su futuro con paciencia y tesón habían cosechado contundentes triunfos: Faustino Piaggio, inmigrante italiano que de modesto mesero había asumido el control del petróleo en Zorritos y

29

Calixto

Santos Romero y Hernández33 quien de pequeño

AGN. Archivo República. Minis. Hda. H-G-0717 (0718). Padrón General de Minas1899 y 2do sem 1902 30 Sanchez, Luis Albert. Historia de una Industria Peruana. Ed. Científica.Lima. 1978 p.109 31 Andujar, Jorge. Nosas Follass, No.5. p.17. Lima. 1997 .El gallego Arias Cariacedo tendría una descollante actuación tanto en Cerro de Pasco como en Lima. Presidio la colonia española en el centenario de la Independencia nacional. 32 Se dice que cuando la encontró gritó ¨millones tengo¨de allí su nombre. 33 Reaño, Germán y otro. El Grupo Romero: Del algodón a la banca Univ.El Pacífico. Lima. 1988. p.35

Jorge Andújar

comerciante

de Galicia a los Andes

lograría

fundar

un

poderoso

grupo

económico

con

haciendas, plantas industriales y bancos. Después de todo, se hallaban en la misma vieja tierra conquistada en el s. XVI por el Francisco Pizarro, quien zarpó de España pobre, acompañado tan sólo de su espada e una capa,34 y al cabo de 35 años obtuvo mucho oro, fama y honra a punto tal que el emperador Carlos l le concedió el título nobiliario de Marqués con el privilegio adjunto de tener dieciséis mil vasallos indios.

35

Contaba también, desde luego, los casos emblemáticos de Lizandro Proaño, de quien se decía que ¨a lo largo de su vida ganó y perdió varias fortunas¨.36 Asimismo, Octavio Valentine, David A. Stuart, Juan Azalia, Miculicich, quienes formaban la pequeña lista de audaces hombres de empresa que le demostraban, cada día, que aquel sueño de éxito no andaba lejos de la sierra central. Sin embargo, el trabajo minero era muy duro e incierto. Se desalienta de tantas y tan variadas vicisitudes propias de la naturaleza aleatoria de la actividad

minera, sus precios fluctuantes en el mercado mundial,

falta de adecuadas vías de comunicación, notorio atraso técnico, necesidad de grandes y prontas inversiones y inundaciones constantes de los socavones. Sucumbe ante el canto de sirena que significa la magnífica oferta del recién fundado consorcio americano Cerro de Pasco Corporation, La empresa americana le ofrece la compra de sus minas con un pago al contado de 20,000 libras esterlinas compartido con su socio Romualdo Palomino. 37 Acepta de forma inmediata. Vende las minas y sin dar 34

Del Busto, José Antonio. Pizarro. Ed. Cpe. Lima. Diciembre 2000. p. 69. Del Busto, José Antonio. El Marqués Gobernador.Studium. Lima,1978.p.255 36 Jochamowitz, p.60 37 Thorp, Resemary. O.C. p.121. 35

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de Galicia a los Andes

noticias a nadie parte prontamente hacia Costa Rica, donde sepulta para siempre el capítulo de su vida sobre el mundo mágico de la minería de socavones en los Andes. Nunca sabría que el rico yacimiento tan celosamente ansiado estuvo bajo sus pies y dentro de su dominio desde hace muchos años. Estas minas que siempre creyó de plata escondían una riqueza fabulosa en mineral de cobre que le reportaría a la empresa americana y luego al Estado peruano, durante

muchas décadas, astronómicos

ingresos y

ganancias. La actividad minera le permitió gozar de un status de cierto privilegio económico y social. Cuando viajaba a Lima cuidó de pasar por el afamado estudio fotográfico de Eugene Courret

38

que en el curso de

varios años ha dejado invalorable memoria gráfica de los mas importantes personajes de la sociedad peruana desde finales del s. XIX. Gracias a ello se conservan algunas fotos suyas de su época de minero cerreño que datan de 1885. En una de éstas se encuentra recostado sobre un enorme peñón de piedra. Se afincó en San José de Costa Rica dedicado al comercio de diversos productos como quesos, vinos, champagne y cueros. Como agente comisionista representaba casas de Europa y Estados Unidos. En este país dejó una hija y sus descendientes.39 Pese a lo atípico que significa que un gallego regrese a su tierra natal, por cuanto ello no marcaba una característica de la emigración gallega, volvió a España. Fue el único que pudo hacer el viaje de retorno.

38

Por su inestimable aporte cultural este archivo fue adquirido por la Biblioteca Nacional en 1987 y se encuentra sistematizado y en internet. 39 El nombre es Isabel. La familia es de apellido Cuevas.

Jorge Andújar

de Galicia a los Andes

Saturio Andújar Cepa.Nació el 24 de setiembre de 1863 y fue bautizado en la parroquia de Santa María de Rubín. 40 Llega al Perú en 1878 y ya debidamente advertido de las posibilidades y dureza de las minas, andando 1887 Saturio se instala en Cerro de Pasco y empieza una intensa labor como minero y comerciante que lo llevaría pronto a formar parte de la denominada

élite

cerreña,

pequeña

oligarquía

Coincidentemente, a finales de ese año, se casa con

en

los

Andes.

Gliseria Durand

Matos,41 miembro de una familia perteneciente a este clan. Como parte de este sector privilegiado tiene una destacada actuación en la actividad económica y goza de amplio prestigio social. Efectúa, laborea y explota una serie de denuncios, básicamente de plata, como padre, hijo y espíritu santo 42 . Asimismo, impulsa otros proyectos mineros relacionados al comercio local para lo cual utiliza algunas fincas que posee en la zona. Empero, su intensa voluntad lo impulsa a la búsqueda del metal más codiciado -el oro-, en proyectos que finalmente resultan infructuosos. Como muchos pioneros instalados en la ciudad vive la fiebre del oro que se desata en Cerro en 1896. Así en asociación con el vasco Venancio Hormaeche denuncia y explota con tanto esfuerzo como esperanza, venciendo mil y un obstáculos, la mina “Bilbao”.43 Aquí comprende que la voluntad no es todo, aún cuando sea férrea, cuando falta una cuota de azar, y en la actividad minera ésta cumple un decisivo papel.

40

Partida de Bautismo en archivo personal. Archivo Concejo provincial de Cerro de Pasco. Partidas de Matrimonio. Partida No. 15 del 31.12.1887. Doña Gliseria fallecería en La Victoria el 28.8.29. 42 El Minero Ilustrado. Año IV. No.160 pg.138. miercoles 10 de enero de 1900. El tunel se haría finalmente en septiembre de 1907. 41

Jorge Andújar

de Galicia a los Andes

Su relevante desempeño se grafica cuando el 11 de abril de 1900 se efectúa una reunión de los 41 mineros más importantes de Cerro de Pasco. Se debate la construcción por cuenta del gremio del Tunel de Rumillana, vital obra necesaria para drenar el agua que desde hace siglos inunda el mineral valioso aprisionado en los socavones más profundos y que había sido iniciado por Henry Meiggs. Saturio asiste por derecho propio y vota en contra del proyecto44 Como inmigrante de cierto éxito posee inmuebles y fincas en la zona aristocrática de la ciudad, en el Barrio del Consulado, llamado así por ser sede de las residencias de los vice-cónsules extranjeros acreditados, cerca de la calle del Marqués, la más cotizada en el pequeño centro de la vieja ciudad minera. En este lugar se sitúan las mejores casas de algunos prominentes miembros de este pequeño clan, cuando se hallan esporádicamente en la ciudad cuidando personalmente sus negocios. No obstante, éstas no resaltan en su fábrica. Los materiales pobres como el adobe y la paja, las líneas sencillas, la inclemencia del frío y seguramente su naturaleza de pascana y no de residencia fija y permanente, conspiran para no recordar alguna. Quizás podría ser una excepción la residencia del vicecónsul austrohungaro en la calle Huanuco. En lo que respecta a sus interiores, a juzgar por los viajeros, no faltaban las comodidades y aún ciertas excentricidades propias de las mejores mansiones de Lima. El

poder

regional

se

encuentra

depositado

básicamente

en

los

propietarios de minas. De los peruanos resaltan nítidamente Elías Malpartida - primer presidente de la Sociedad Nacional de Minería y Petróleo y Alcalde de Lima-, Felipe Salomón Tello, Eulogio Fernandini, Ricardo Bentín Sanchez, Romualdo Palomino, Lizandro A.Proaño, el ilustrado Leonardo Pflucker y Rico, Pedro Dávalos y Lissón, Pedro 44

El Minero Ilustrado. Año IV, no. 173

Jorge Andújar

de Galicia a los Andes

Caballero Lira, entre muchos otros. Todos ellos verdaderos capitanes de empresas

cuyo

dinamismo,

particularmente alejada, agreste

sagacidad

y

éxito

en

una

zona

y extraordinariamente dura y difícil,

debe figurar en los anales de la historia de la minería nacional y acaso mundial. Una típica hacienda minera a fines del s.xix: dolores.Saturio asienta sus reales y todos sus negocios en Cerro y al menos desde 1887 la propiedad más importante, puesto que constituía además su asiento habitual de residencia, es su hacienda de beneficio Dolores ubicada en La Quinua, (Quebrada de Sullumarca), a orillas del río San Juan, cerca de la Hacienda San Juan de Paria, distrito de Yanacancha. Este predio de 1 has. lo adquiere de sus socios mineros Joaquin Perez Bonany y Fernandez Maldonado y lo conduce y trabaja directamente, a la usanza tradicional, más de cuarenta y cuatro años. Allí nacen la mayoría de sus hijos hasta su venta definitiva el 16 de diciembre de 193145 Este ingenio minero cuenta con enormes piedras circulares extraídas de Huachón de más de 3 mts. de diámetro y 3 Tn de peso especialmente talladas y diseñadas para su fin de molienda de piedra.46 Saturio más que propiamente minero de extracción, se dedica al proceso de transformación del mineral bruto en metal valioso. Esta constituye, por antonomasia, la denominada actividad metalúrgica para obtener la plata, en el cual el Perú tiene una antigua y reconocida tradición. La metalurgia se originó en la cultura preinca Paracas y se desarrolló magníficamente en La Mochica y Chimú, quienes utilizaron diversas 45

Of. Reg. Reg Andrés Cáceres. Fs 60, Part. LI, T.I, Registro de Propiedad. En 1956 pasó a La Cerro de Pasco Corporation. 46 Dolores era uno de los 12 ingenios mineros que existían en la provincia. 3 en Yanacancha, 2 en La Quinua, 1 en Yarusyacan, 1 en Huachón, 2 en Tinyahuarco y 2 en Bolívar.

Jorge Andújar

de Galicia a los Andes

técnicas como la de soldadura, el martillado, fundido, repujado, dorado, entre otras, para fabricar vasijas, utensilios y adornos de oro y plata con valor artístico incalculable. . El modo de producción artesanal del cual se vale consiste en chancar las piedras con contenido de plata en precarios molinos de amalgamiento, cuyas inmensas y pesadas ruedas de piedra se mueven utilizando animales de carga como las mulas y en ocasiones operarios, algunas veces miembros de la familia. Cuando la geografía y la astucia lo permiten se aprovecha la fuerza de las caídas naturales de agua o de ríos. Una vez convertidas las piedras en mineral molido se realizan en los patios cercados y empedrados (circos) intrincados procesos físicosquímicos activados de la forma más simple. La masa se mezcla

con

azogue (mercurio); y algunas veces cal o sal. El resultado se coce a fuego en hornos primitivos de barro usando como combustible la paja, el carbón que abunda en Goyllarisquizga y en muchas ocasiones, el excremento de guanaco, de donde se obtiene

recién la plata piña. 47

Luego se procede a colar con lienzos finos de algodón para separar el azogue, y previo fundido, se obtiene lo más ansiado: plata pura. El mineral obtenido finalmente se acumula y despacha en sacos hacia Lima. Luego

parten para alimentar a

los principales centros

industriales del mundo. Todo un imbricado y largo circuito económico que se inicia con el enfrentamiento directo del minero, casi una lucha cuerpo a cuerpo, con el yacimiento en la entraña y profundidad de la tierra. Este arcaico procedimiento desaparecería con la irrupción de las modernas concentradoras y fundiciones en la zona, como el complejo

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industrial de La Oroya que se instala en 1922, que cuenta con impresionantes equipos y

tecnología

de avanzada que efectúa la

actividad metalúrgica por toneladas, a menor costo y con mejor calidad. A partir de 1890 en un proceso de alcance mundial, se abre la era del cobre y decae el ciclo de la plata. Buscando este mineral ingresa en los Andes remotos donde el tiempo parece haberse congelado el capital y la moderna técnica norteamericana, época que algunos identifican con cierto sesgo ideológico como el inicio del Imperialismo. En

1897 se da otro tiro de gracia a los mineros argentíferos: el

gobierno no puede seguir solitariamente junto con México y la India con su patrón de plata cuando el resto del mundo ha tomado el patrón oro auspiciado por Londres. Adopta este sistema universal para la economía nacional y dispone que no se acuñen más monedas de plata clausurando definitivamente la Casa de la Moneda de Cerro de Pasco. Los pequeños y medianos mineros de

plata diseminados en las

cumbres andinas sucumben ante esta embestida por partida doble. Pocos, en verdad muy pocos, podrán sobrevivir. Emigración Interna: de Pasco a Lima.A comienzos de los años veinte, siguiendo el inevitable curso de la enorme mayoría de los pequeños y medianos mineros y comerciantes cerreños, ora cordialmente invitados; ora nítidamente obligados ante la gigantesca e invencible competencia de la Cerro de Pasco Corporation, vende propiedades, fincas, animales, aparejos y se muda a la capital. El consorcio americano emplea sutilmente la compra a buen precio; pero en ocasiones ejerce sin contemplación la fuerza en base a la 47

Deústua, José. La minería peruana y la iniciación de la República. 1820-1840. IEP. 1986. p.116

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presión como propietario de fundiciones y del ferrocarril central; y por supuesto del manejo y control del poder político. En esta lucha contra un gigante que crece como las ondas de agua nacidas de una piedra arrojada en un apacible lago, y a su paso vencedor absorbe todo y concentra todo, sobresale

el minero nacional

don Lizandro Proaño

quien prefiere arrendar y no vender sus minas, y no teme asumir largos y complicados procesos judiciales con el propósito de reivindicar sus derechos. Presintiendo acaso el aguijón de la muerte, Saturio dicta su testamento en Lima 48 en la que

no obstante que

declara seis hijos vivos se ha

determinado que en el curso de su vida tiene con la misma mujer, una frondosa descendencia de quince vástagos.49 Hace edificar un singular rancho en La Victoria en el cual pueda vivir y hacer empresa y que hasta hoy se mantiene en la calle Luna Pizarro.50 Como vecino notable el Primer Ministro Dr. Germán Leguía y Martinez lo invita a formar parte del primer Concejo Municipal y emite al efecto la Resolución Ministerial del 7 de febrero de 1920 del flamante distrito de La Victoria creada por Resolución Suprema del presidente Augusto B. Leguía. El primer alcalde es el italiano Juan Carbone. Allí

impulsando una fábrica de velas - oficio íntimamente ligado a la

minería de socavones que él conoce muy bien pues toda su vida se había vinculado con ella51 – y jabones, lo encuentra la muerte a los 78 años de edad.52

48

Escritura publica ante Notario Flores Chinarro del 19 de enero de 1937 .Arq. Vignolo. Santiago, Saturio, Manuel, Antonio, Marcela y Bernarda. Los otros son Felipa Rafaela. 24.10.1888 part. 594, fol 236/ Daniel. 3.1 1890 part 13, fol. 138/. Saturio Aristes. Oct.1891. part. 366, fol 98/.Teresa Maria ag.1892. part.228 fol.199/.Ignacio Santiago dic. 1896 partida 270, folio 270/ Miguel Remigio mayo 1898. part.21, fol. 21/Amalia A. jul.1900. part.557, fol. 557/ Genaro Cristobal julio 1901.part.373, fol. 53/ Maria Micaela ag. 1902. Part.301, fol. 242/ Vicente Rufino jul. 1903 part. 661, fol. 161. 50 As.9, T.236, fs.307 Registro de la Propiedad Inmueble de 1925. Ing. Vignolo. Se dice que es réplica de una conocida casona española, lo cual no se ha verificado. 51 Las velas de sebo se ataban en los gorros de lana de los mineros que se introducían en las profundidades del suelo. 52 Falleció en La Victoria el 5 de junio de 1942. 49