Story Transcript
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BC>&65!33'+C# El cuerpo es depositario de signos, una instancia narrativa, cuyas partes se muestran o se ocultan, según la época y la cultura. Sobre la piel se instalan imágenes, a la vez que, mediante el vestido o el tatuaje, los seres humanos devienen discurso. Se muta a diario con lo que se lleva puesto, y en cada '1#*&+%K0$"0$%)$2&'%,%G&1+&'%.&"#&%'$/&'MI%+&%)*+#*'&%8% sus diversos dispositivos de socialización han ido 12"#&*'&20,%*2,"%4'0$2$"%B*$%\,*)&*+#%K566]M%N',pone analizar como discurso, pero que también se $V#1$20$2% &% +&% '$#4'1)&% 0$+% 3$"#10,I% 8&% B*$% S"#$% $"% otra manera de enunciar. Con cada prenda se puede subvertir el poder, instaurar el azar, negar la institución, adherirse a ella, crear otra, formar un grupo propio, asentir, rebelarse o insinuar. Sin embargo, en el vestido como construcción identitaria, casi siempre prima la necesidad de ser aceptados por los otros, o por esos pocos que hacen parte de la institución o de las muchas instituciones que, a lo largo de +&% $V1"#$2)1&I% 3&2% '$-*+&20,% +&% F&2$'&% 0$% 3$"#1'"$% ),2%B*$%G*")&%$VN'$"&'"$%)&0&%1201310*,;
!"#$%&'#()*+,%'$),-$%+,"%.&++&/-,"%0$%+&%123$"#1-&)142% !"#$%#&'(%#)'#*)+'&'(%,#$%#&'("-)*(%(#*&%.*)%(%#%#/-%012#("$#0"2/!%-*'3#4'.'/5# 6789:67;9, 121)1&0&%$2%$2$',%0$%5676%8%92&+1/&0&%$2%:*+1,%5677;%2(3'4'56#()#78#5(#9!)'6#5(#7:;7%56#()#?#5(#@(=>'(,4&(A **Profesora asociada de la Universidad de los Andes, Departamento de Diseño. Es artista plástica de la Universidad Jorge Tadeo Lozano de &-("#$'%$2%?1"#,'1&%8%@$,'(&%0$+%A'#$%8%+&%A'B*1#$)#*'&%0$%+&%C213$'"10&0%D&)1,2&+%0$%E,+,FG1&;%H*%#$"1"%0$%-'&0,%$2%+&%>&$"#'(&I%J@'$"% ideas de lo moderno en la concepción del hogar Bogotá, años cincuenta”, obtuvo mención meritoria. Entre sus publicaciones encontramos: libro Tres ideas de lo moderno en la concepción del hogar%K566LMI%&"(%),F,%&'#()*+,"%8%)&N(#*+,"%0$%+1G',"I%$2#'$%$++,"%JO1"$P,I%&))$",'1,"%8%N'$20&"%0$% 3$"#1'Q%K!2R%$*+*(%(##J#+')+"P+*')"2#("$#+!"-P'##J#"$#0"2/*('#")#4'.'/5,#6789:67A9
“des0$% +,"% Nc+N1#,"% T*$% 0$2*2)1&0,% ),F,% *2&% $V.1G1)142% 120$)$2#$d% 8% +,"% FS01),"% 31$',2% $2% S+% *2% N$+1-',% N&'&% +&% "&+*0Q;% K^&3$'I7YL5I% 5Z]M;% % E,2% +&% guerra, todo el alboroto anterior se apaciguó y pasó a ser normal utilizar vestidos más cortos, funcionales y con cierto aire masculino, en un momento cuando las mujeres tuvieron que ocupar espacios laborales anteriormente asignados a los hombres. !2%$"#$%),2#$V#,I%E,),%E.&2$+%+&2/4%*2%),2:*2#,%0$% #$:10,%0$%N*2#,d%F$'1&+%*#1+1/&0,%.&"#&%$+%F,F$2#,% para ropa interior, pero que debido a su elasticidad contribuyó a que las mujeres pudieran desenvolverse con mayor holgura tanto en el trabajo como en el deporte, práctica, esta ultima, importante en la concepción del cuerpo. Cuando la guerra terminó, era imposible inten#&'%B*$%#,0,%T*$'&%),F,%&2#$"R%+&"%F*:$'$"%.&G(&2% avanzado y accedido a espacios laborales y sociales inimaginables para ellas. En efecto, su liberación continuó y el vestido fue su aliado en una lucha B*$%2*2)&%.&%$"#&0,%$V$2#&%0$%)$2"*'&";%!2%7Y5]%%"$% dio tal vez el cambio más fuerte relacionado con la indumentaria femenina, cuando la falda subió hasta +&%',01++&;%E,2%$"#,I%+&%$VN+,"142%0$%N',#$"#&"%2,%"$% hicieron esperar: “el arzobispo de Nápoles dijo que $+%'$)1$2#$%#$''$F,#,%0$%AF&+9%"$%0$G(&%&%+&%1'&%0$% Dios contra una falda que no llegaba más allá de la ',01++&Qd%3&'1,"%N&("$"%$F1#1$',2%+$8$"%$2%),2#'&%0$% esta nueva moda y “en Utah se publicó un decreto $2% $+% B*$% "$% F*+#&'(&% 8% &N'$"&'(&% &% &B*$++&"% F*:$res que llevasen por las calles “faldas a más de tres N*+-&0&"%N,'%$2)1F&%0$%+,"%#,G1++,"Q%K^&3$'I%7YL5I% 5Z]M;%H12%$FG&'-,I%2&0&%0$%+,%&2#$'1,'%0$#*3,%&%+&"% mujeres, quienes como el resto de la humanidad, .&G(&2%&N'$2010,%),2%$+%),2U1)#,%&'F&0,%B*$%#,0,% N,0(&%)&FG1&'%0$%*2%0(&%N&'&%,#',;%O$G(&2%"$-*1'%+*).&20,%N,'%"*"%0$'$).,"%),F,%+,%.&G(&2%.$).,I%8&% B*$%2,%.&G(&%"10,%*2&%#&'$&%T=)1+R%N&"&'%0$%"$'%F&21B*($"%"12%N,"1G1+10&0%0$%N$2"&'%,%0$%&)#*&'I%&%"$'% seres humanos con voz y voto, necesitó de muchos años de lucha y, en ese momento, ninguna ley, por drástica que fuera, las iba a hacer desistir, a pesar de los retrocesos y reveses que un proceso como éstos lleva consigo. Aunque los ritmos de la moda parezcan aleatorios y parte de su lógica de seducción, desde la modernidad, ha estado marcada por la promesa de
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'$2,3&)142% ),2"#&2#$% K^1N,3$#"e8I% % 7YY6MI% +,"% &'#(9)$"% $2% $"#$% N',)$",% 0$% 122,3&)142% )'$
&% .&2% tenido que proponer tendencias acordes a las ne)$"10&0$"%8%&%+&"%&"N1'&)1,2$"%0$+%),2#$V#,%$2%B*$% $"#=2%01"$P&20,;%A"(I%F*).&"%3$)$"%3,+314%&%,")1+&'% $+%+&'-,%0$%+&%T&+#&I%$+%S2T&"1"%$2%+&%)12#*'&I%+&%+(2$&% de la silueta, entre otros cambios en la forma, que pasaron desapercibidos o se impusieron por tempo'&0&"% F="% +&'-&"I% '$U$:&20,I% ),F,% ,)*''14% $2% +,"% &P,"%56I%)&FG1,"%"*"#&2)1&+$"%$2%+&%10$,+,-(&%0$%"*"% usuarias. Las mujeres han sido las más llamadas a $"#&% F$#&F,'T,"1"% ),2"#&2#$% B*$% +$"% $V1-(&I% ",G'$% #,0,% .&"#&% 7Y]6I% $"#&'% &+% #&2#,% 0$% +&"% 3$'#1-12,"&"% F,019)&)1,2$"%2,%"4+,%$2%)&0&%#$FN,'&0&%8%"$-c2% +&%$"#&)142I%"12,%"$-c2%+&%.,'&%0$+%0(&I%$+%$")$2&'1,%8% +,"%N$'",2&:$"%),2%B*1$2$"%0$G(&2%12#$'&)#*&';% G%&%#C6#E!(5%&@(#%>&H@IA# Bogotá, como otras ciudades latinoamericanas, 2,%T*$%&:$2&%&%$","%&1'$"%0$%)&FG1,%8%&%"*%12U*$2cia en la concepción del cuerpo que invadieron las revistas después de la Primera Guerra Mundial. El aumento en la circulación de la prensa ilustrada, suF&0,%&%B*$%+&%S+1#$%"&2#&T$'$P&%"1$FN'$%.&G(&%'$)*''10,%&%+,"%3$"#10,"%#'&(0,"%0$%T*$'&%N&'&%+$-1#1F&'% su estatus, hicieron que tras el letargo de la Gue''&%0$%+,"%>1+%O(&"%8%+&%)'$)1$2#$%0$2"19)&)142%0$+% )&"),%*'G&2,%K566;666%.&G1#&2#$"%&N',V;M%$+%2*$3,% siglo fuera recibido con una indumentaria que rompió con el uso de las mantillas y el faldón colonial K\*20&)142%>1"142%E,+,FG1&I7YLYM; Con ello las calles se llenaron de contrastes: bas#&%),FN&'&'%*2&%T,#,-'&T(&%0$%+&%$"#&)142%0$%+&%H&bana, con otra en que aparecen retratados prestantes cachacos y damas santafereñas departiendo en clubes sociales como el Country Club, el Polo Club, el Magdalena Sports Club2I%$2#'$%,#',"%K\1-*'&"%7%8%5MI% para dar cuenta de que dos formas de vestir diametralmente distintas se cruzaron en las mismas calles: unos cuantos hombres y mujeres se instalaron con su traje en los años veinte, mientras los otros se quedaron detenidos en el tiempo, con las ruanas y las &+N&'-&"%B*$%.&G(&2%)&+/&0,%"*"%&G*$+,"; 2 Estos clubes sociales y deportivos que se empezaron aparecer en +&%)1*0&0%$2#'$%7Y76%8%7YZ6I%%.&2%"10,%0$"0$%"*%T*20&)142I%$V)+*"13,"% lugares de reunión de las elites capitalinas, como lo evidencia la Revista Cromos. El Magdalena Sports Club, fue fundado en honor al nombre 0$% +&% 92)&% 0$+% H';% ?,2,',% !"N12,"&I% 0,20$% T*2)1,2&G&% #&FG1S2% $+% Polo Club.
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\1-*'&%7R%A%+&%1/B*1$'0&%T,#,-'&T(&%0$%*2&%0$"N$010&%0$%",+#$'&%)$+$G'&0&%$2%$+%>&-0&+$2&%HN,'#"%E+*G;%A%+&%0$'$).&%T,#,-'&T(&% 0$%+&%!"#&)142%0$%+&%H&G&2&I%0$+%F1"F,%&P,;%K\1-*'&%5M%%KW$31"#&%E',F,"I%:*+%57;%7Y5hMI
Los cambios tan radicales en la indumentaria de las mujeres europeas y norteamericanas, atrás descritos, estuvieron acompañados de una noción 01"#12#&%0$%"*%10$,+,-(&%8%0$%"*%)*$'N,R%N&'&%0$F,"#'&'%N'1,#1"F,%2,%"4+,%"$%'$0*)1'(&2%$+%$V)$",%0$% +*:,%B*$%"*N,2(&2%$2)&:$"I%&0,'2,"I%F$#&+I%#&T$#&2$"% y demás telas superpuestas, sino en Europa, en el mundo del trabajo, enfermeras, conductoras de tran3(&%8%+&"%,G'$'&"%$2%+&"%T=G'1)&"%0$G(&2%$"#&'%)4F,0&";%%!"#&%$VN'$"142%0$%+&%F1"$'1&%0$%+&%-*$''&%B*$% además incidió en que Chanel convirtiera la elegancia, en sinónimo de sobriedad y que marcó, sobre #,0,I% +&% +1G$'&)142% 0$% +&% F*:$'I% $2% 1'&3$+I% 2,3;%0$%7Y5fM;%% O$%+&%F&")*+121/&)142%"$%0$G(&%.*1'I%%N*$"%&*2que se cortaran el pelo y atrás hubieran quedado las 1)421)&"%#'$2/&"%0$%+&%>&'(&%0$%i,'-$%j"&&)I%T'&"$"% ),F,% $"% JG$++&I% :,3$2% 8% G*$2&QI% KF-5W+'I% 7YZ7M%% que acompañaron numerosos avisos publicitarios de la época, dan cuenta de ese ideal de mujer que N,0(&I%N,'%"*%N,"1)142%",)1&+I%$"#&'%&%+&%F,0&I%N$',% B*$%$2%"*%),#101&210&0%"*"%N'$,)*N&)1,2$"%"$-*(&2% ancladas a ser madre, esposa y paciente administra0,'&%0$+%.,-&'I%),F,%+,%$VN,2$%$"#$%&2*2)1,%0$%A"pirina: “Las sirvientas, las compras, los muchachos, +&"%31"1#&"I%k@&2#("1F&"%),"&"I%O1,"%H&2#,I%#&2#("1F&"% ),"&"%B*$%$20$'l%D*'&+F$2#$%.&8%0(&"%$2%B*$%+&% pobre mamá se irrita, se pone nerviosa y acaba con
*2% #'$F$20,% 0,+,'% 0$% )&G$/&lQ% K]-'&'2, agos. de 7Y5hI%fh`M;% En pocas palabras, esas divas del cine que circularon en periódicos como el F-5W+'#U$!2/-%(' y la Revista ]-'&'2, mostrando sus piernas bronceadas $2%N+$2,%1231$'2,%G&:,%$+%12U*:,%F=-1),%0$%+&"%,20&"% 0$%+*/%K\1-*'&%Z%8%fMI%2,%T*$',2%+&"%F1"F&"%"$P,'1tas, ni mucho menos señoras de la capital bogotana. A"(% ),F,% +&% F,0$'210&0% T*$% *2% N',)$",% 0$% 2$-,)1&)142% 0$% "$2#10,% B*$% "$% $VN$'1F$2#4% 0$% F&2$'&% diferente y en paradójicas circunstancias en Latino&FS'1)&%K$01&"%^*V1#$%K\1-*'&%`MI%8&%2,%"$%3&+1$',2% de la persuasión y el consejo sabio que el anunciante disfrazaba en la voz de un amigo, sino se impuso el uso de esta prenda con un tono imperativo: “PorB*$% +&"% $V1-$2)1&"% 0$% +&% F,0&% 0$F&20&2% T,'F&"%
'&)#13&"%8%F$'1&+%92,QI%%N'$3121$20,%),2%$++,%&% +&"% F*:$'$"% 0$+% $'','% $2% B*$% "$% N,0'(&% 12)*''1'% $2% "*"%)(')*+,"%",)1&+$"I%"12,%$"#&G&2%"1$FN'$%12T,'F&das de cada tendencia: “En la actualidad la media es tal vez tan importante para la mujer, como lo es el N',N1,% 3$"#10,Q;% !+$-&2)1&% B*$% "$% G*")&G&% $V.1G1'% desde el mismo instante en que se dirigieran a la tienda a pedir el producto con el estilo, la clase y el toque cosmopolita, de quienes contaran con el capital cultural K$*+*(%(##J#+')+"P+*')"2#("$#+!"-P'##J#"$#0"2/*('#")#4'.'/5,#6789:67A9
!2% "(2#$"1"I% $"#,"% $:$FN+,"% 0$% &31","% N*G+1)1#&rios que circularon en la Bogotá de 1920 a 1930, dan cuenta de otra concepción del cuerpo y del ves#10,%B*$%.&'(&2%N&'#$%0$%$"#$%$2#'&F&0,%0$%"1-2,"%0$% ser modernos y habitar en la ciudad de los que tuvo que apropiarse una élite, en su afán por monopolizar una idea de gusto que la moda y, su correlato publicitario, fueron instaurando con la lógica del cambio constante que siempre le han sido propias al capitalismo. Sin embargo, esa trama libidinal que recubrió )&0&%,G:$#,%),2%01"#12#,"%"1-219)&0,"I%"$%),2"#'*84% en un proceso de mediación en que el sentido se fue negociando con el orden de valores de la sociedad colombiana de los años veinte. &'".&+%K7YLLM;%Todo lo sólido se desvanece en el aire;%>SV1),I%H1-+,%uuj%!01#,'$"; *%#"$#("2P"-/%-#("#$%#&'("-)*(%(, Bogotá: Ediciones Foro Nacional por Colombia. _1-&'$++,I% g$,'-$"% K566]M;% @*2/'-*%# ("# $%# >"$$"M%Z#