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LAS REVOLUCIONES DE 1820, 1830 Y 1848 La Europa de 1815 se caracteriza en el orden político por la restauración de las monarquías absolutas, a la vez que los cambios territoriales establecidos en el Congreso de Viena suponen la sumisión a potencias extranjeras de distintos pueblos que aspiran a la independencia (griegos, polacos, belgas y húngaros) o a la unificación (italianos y alemanes). En el orden económico-‐social, la industrialización se extiende por el continente, con el consiguiente ascenso de la burguesía. Como resultado de este contraste, se producen los movimientos revolucionarios de 1820, 1830 y 1848, influidos por una ideología liberal y/o nacionalista. 1. LOS M OVIMIENTOS REVOLUCIONARIOS DE 1820
participan militares
La independencia de Grecia (único movimiento triunfante): § Bajo dominio turco, el movimiento es liberal y nacionalista. § La sublevación, con guerra y represión culmina con el triunfo griego en 1827, gracias al apoyo de potencias europeas. § El vacío turco en Europa oriental es sustituido por la intervención de las potencias europeas (Austria, Rusia, Gran Bretaña y Francia, cuyos intereses contrapuestos provocan la ruptura de la Santa
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Alianza) y el inicio de las reivindicaciones nacionalistas de los pueblos balcánicos (reprimidas por Austria y apoyadas por Rusia); se inicia la denominada “cuestión de Oriente”. 2. LOS M OVIMIENTOS REVOLUCIONARIOS DE 1830 Afectan a más territorios que los de 1820, la influencia del liberalismo y el nacionalismo es mayor (nacen las Sociedades Patrióticas), hay ya una importante participación popular y comienzan a difundirse algunas ideas socialistas. 2.1. FRANCIA La Restauración supuso para Francia la vuelta al trono de los Borbones con Luis XVIII, que implantó un régimen basado en una Carta Otorgada. Con Carlos X (1824-‐1830) hay un creciente predominio de los ultras en el gobierno (aristocracia terrateniente), que practican una política represiva antiliberal (“ordenanzas de julio”, censura de prensa, etc.). Además, se produce una crisis económica (descenso de los precios, los salarios, la producción, etc.), con el consiguiente descontento social. Todo ello provocó la sublevación burguesa de julio de 1830 (barricadas, influencia de la prensa), que supone el inicio de la monarquía de Luis Felipe de Orléans y el acceso al poder de la alta burguesía. Se establece un sistema político basado en: ü ü ü ü ü ü ü
Soberanía nacional. Aconfesionalidad del Estado. Iniciativa legislativa de las Cámaras. Bandera tricolor. Libertad de prensa. Guardia Nacional. Sufragio restringido masculino.
2.2. LA INDEPENDENCIA DE BÉLGICA ü Integrada en el Reino de los Países Bajos, hegemonía holandesa. ü Factores: nacionalismo, diferencias religiosas. ü Sublevación triunfante, con el apoyo anglo-‐francés. ü Constitución de 1831: monarquía constitucional.
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2.3. Difusión ü Estados centrales italianos (Parma, Módena, Romaña): sublevación en 1831 contra el Papa, con represión austríaca. Se inicia el Risorgimento, con diversas tendencias (republicanos de la Joven Italia, con Mazzini, y liberales monárquicos). ü Polonia: levantamiento contra Rusia, con destacado papel de las Sociedades Secretas y violenta represión. ü Estados centrales alemanes: se inicia la integración bajo liderazgo prusiano (Zollverein=Unión Aduanera). ü España y Portugal: triunfo del liberalismo. ü Balance: Europa liberal (Gran Bretaña, Francia, España, Portugal y Bélgica) y Europa absolutista (Rusia, Prusia y Austria). 3. LOS M OVIMIENTOS REVOLUCIONARIOS DE 1848 3.1. FACTORES: • Crisis económica de tipo mixto, que afecta al sector agrario (malas cosechas de patata y cereales, con subida de precios, hambres y revueltas) y al financiero (“fiebre ferroviaria”, por la especulación, que provoca quiebra de empresas, paro, etc., en gran parte como consecuencia de la crisis agraria). • Descontento político: por la influencia del liberalismo y nacionalismo. 3.2. FRANCIA En una situación de crisis económica y revueltas obreras, el exclusivismo de la gran burguesía provocó una agitación política (banquetes, influencia de la prensa), que culminó en las jornadas revolucionarias de febrero de 1848. Se inicia así un proceso cuyas etapas son: • Gobierno provisional (febrero-‐mayo de 1848): compuesto por republicanos (Lamartine) y socialistas (Louis Blanc), adoptó medidas democráticas como el sufragio universal masculino, la libertad de prensa y reunión y la creación de los Talleres Nacionales.
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• República burguesa y moderada (mayo de 1848-‐mayo de 1849): giro conservador, que provoca la represión de obreros y socialistas (se suprimen los Talleres Nacionales). En noviembre de 1848 se promulga una nueva Constitución que establece un poder legislativo unicameral y la elección directa del presidente, que recae en Luis Napoleón Bonaparte. • República constitucional y Asamblea legislativa (mayo de 1849-‐ diciembre de 1851): se caracteriza por el predominio del “partido del orden” (conservadores, bonapartistas y monárquicos), que adopta medidas reaccionarias (favorece a la Iglesia católica en la enseñanza secundaria, reimplanta el sufragio restringido masculino), lo que provoca un enfrentamiento con el presidente, que da un golpe de Estado y proclama el Segundo Imperio (2-‐11-‐ 1851). 3.3. ITALIA Se producen movimientos liberales antiaustriacos, que triunfan en algunos Estados, pero, al coincidir con la fase de reacción en Francia y la represión austriaca, fracasan, excepto en Piamonte, donde se implanta la monarquía constitucional con Víctor Manuel II. 3.4. AUSTRIA El movimiento revolucionario se inicia en Viena y se difunde a otras zonas; al mismo tiempo, se producen levantamientos nacionalistas en Hungría y Bohemia, que fracasan por la represión austriaca (con ayuda rusa, en el caso húngaro). 3.5. ALEMANIA Se producen movimientos liberales, que triunfan en algunos Estados; se reúne en Francfurt un Parlamento, elegido por sufragio universal masculino, en el que se manifiestan distintos proyectos para la unificación; finalmente, todo termina con la represión prusiana.
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3.6. BALANCE • Fracaso político general: se instauran gobiernos autoritarios (Austria, Prusia, Roma). • Gran victoria social para los campesinos austríacos y alemanes: se abolen la servidumbre y los censos señoriales. • El nacionalismo se revela como la fuerza más importante (excepto en Francia) y como una ideología capaz de aglutinar intereses políticos, religiosos y de clase contrapuestos. • Piamonte y Prusia quedan como claros polos de atracción de las unificaciones italiana y alemana, respectivamente.