Story Transcript
Puntuación
I
Los
signos
sintagmá1cos.
Estructuración
del
texto.
Puntuación
y
entonación.
Los
signos
de
puntuación.
Para
empezar
• La
puntuación
es
un
sistema
de
signos
gráficos
relacionado
directamente
con
la
construcción
del
texto.
Es
uno
de
los
recursos
fundamentales
para
distribuir
y
organizar
la
estructura
y
el
contenido
del
texto
escrito.
• Excepto
algunas
normas
básicas,
no
resulta
posible
establecer
reglas
de
cumplimiento
obligado
para
todos
los
casos.
“Las
reglas
de
puntuación
no
son
anárquicas
ni
personales,
pero
sí
variables
y
no
siempre
simples”
(Cassany).
• Se
trata,
por
tanto,
de
un
ámbito
diIcil
de
enseñar
y
complejo
de
dominar.
Signos
sintagmá1cos
• Afectan
a
unidades
mayores
que
la
palabra.
• Signos
de
puntuación
.
,
;
:
…
– Sirven
para
indicar
las
pausas
y
el
sen1do
del
texto.
• Signos
de
entonación
¡!
¿?
– Indican
énfasis
o
estado
emocional.
• Signos
auxiliares
de
la
puntuación,
sirven
de
complemento
a
los
anteriores.
(
)
[
]
–
‐
“
”
Hay
una
estrecha
relación
entre
signos,
unidad
lingüís1ca
y
valor
comunica1vo
(la
estructura
textual):
Signo
Unidad textual
Unidad significativa
punto final…………. punto y aparte…….
…....texto……… …….párrafo……..
………..mensaje ...... tema, capítulo, apartado
punto y seguido……. ……oración……… …….idea, pensamiento punto y coma…….. ...frase, sintagma… ….apunte, comentario coma, paréntesis… …inciso, aposición.. …..elemento añadido admiración, Interrogación….
…..enunciado….
….exclamación, mandato, pregunta
Puntuación
y
entonación
• Vinculación
tradicional
“La
puntuación
de
los
textos
escritos,
con
la
que
se
pretende
reproducir
la
entonación
de
la
lengua
oral,
cons1tuye
un
capítulo
importante
dentro
de
la
ortograIa
de
cualquier
idioma”
(RAE,
1999,
p.
55).
• Puntuación
como
sistema
de
organización
sintác1ca,
lógica
y
retórica
del
texto
“La
puntuación
organiza
el
discurso
y
sus
diferentes
elementos
y
permite
evitar
la
ambigüedad
en
textos
que,
sin
su
empleo,
podrían
tener
interpretaciones
diferentes”
(RAE,
1999,
p.
55).
La
coexistencia
de
estas
dos
perspec1vas
es
causa
frecuentes
confusiones.
Recapitulemos: desambiguación de expresiones equívocas, significación, ritmo y melodía de la frase, estructura lógica del discurso, emociones e intenciones del autor… ¡e incluso la respiración! Son muchas las cosas que dependen de la puntuación, y por otra parte el sistema actual es el fruto de una evolución histórica compleja. José Antonio Millán, 2006, p. 18
El
punto
.
• Es
el
signo
de
puntuación
por
excelencia
para
la
estructuración
general
del
texto.
• Es
el
más
an1guo
—está
en
el
origen
de
otros
signos—
y
también
el
más
básico.
Reflejo
en
la
fraseología.
• Punto
final:
es
la
marca
que
cierra
semán1ca
y
comunica1vamente
el
texto
(o
una
parte
importante
del
todo,
como
un
capítulo).
• Punto
y
aparte:
delimita
el
párrafo,
subdivisión
del
tema
general
del
que
trata
el
texto.
Crea
el
eje
ver1cal
del
discurso;
es
decir,
divide
el
tema
global
en
temas
locales
o
específicos
y
establece
una
jerarquía
entre
ellos.
• El
punto
y
aparte
organiza
la
macroestructura
del
texto.
• Con
el
punto
y
aparte
se
señala
la
clausura
de
un
subtema
específico
y
se
crea
la
expecta1va
de
que,
a
con1nuación,
se
abre
otra
unidad
temá1ca
dis1nta.
• Tiene
una
función
facilitadora
de
la
lectura,
ayudado
de
la
mayúscula
inicial
y
los
espacios.
• Permite
al
lector
iden1ficar,
a
veces
con
una
sola
ojeada,
las
divisiones
temá1cas
básicas
del
texto:
el
inicio,
la
exposición
de
datos,
la
argumentación
y
la
conclusión.
Ejemplos
de
estructuración
y
visualización
de
los
párrafos
• En
una
no1cia
– Mayúscula
inicial
y
punto
y
aparte,
sumados
al
espaciado
entre
párrafos,
mayor
que
el
que
se
presenta
entre
las
líneas
del
mismo
párrafo.
• En
un
manual
– Mayúscula
inicial
y
punto
y
aparte,
más
sangrado
a
la
derecha
en
la
primera
línea.
– Las
dos
opciones
a
la
vez.
• El
punto
y
seguido
delimita
enunciados
en
el
interior
del
párrafo.
Ordena
la
microestructura
del
texto,
pues
permite
ar1cular
dis1ntas
oraciones
que
comparten
o
desarrollan
un
mismo
tema.
• Va
seguido
de
un
espacio
que
debe
ser
igual
que
los
que
separan
las
palabras
en
la
misma
línea
(y
no
mayor,
ya
que
se
dificultaría
la
lectura).
Junto
con
la
mayúscula,
permite
una
visualización
rápida
y
cómoda
de
las
ideas
contenidas
en
el
párrafo.
• Separa
ideas,
argumentos
o
conclusiones
parciales
(en
el
texto
argumenta1vo),
un
suceso
individual,
una
acción
u
operación
(simple
o
compleja),
un
dato
o
un
conjunto
de
datos
relacionados.
• También
se
emplea
en
las
abreviaturas,
tras
los
signos
que
indican
apartado,
en
horas
y
fechas.
El
número
de
puntos,
tanto
seguidos
como
aparte,
que
la
persona
que
escribe
puede
hacer
es
algo
subje1vo:
depende
del
es1lo.
En
los
géneros
literarios
(por
ejemplo
en
la
novela)
el
autor
es
muy
libre
de
crear
tantos
puntos
y
aparte
como
quiera,
al
servicio
del
ritmo
o
de
los
designios
de
su
escritura,
como
en
este
ejemplo
de
Baroja
en
que
habla
sobre
el
sonido
de
la
lluvia:
Aun
desde
la
cama
lo
oigo
en
la
gotera
del
desván,
que,
al
caer
en
un
barreño,
hace
un
ruido
metálico.
Y
la
lluvia,
y
el
viento,
y
el
agua,
todo
me
encanta
y
todo
me
entristece.
Es
la
herida,
esa
herida
que
va
fluyendo
anegando
mi
alma,
manan>al
cegado
que
ahora
tornó
a
brotar.
J.
A.
Millán,
2006,
p.
70
Omisión
del
punto
• En
dtulos
y
subdtulos,
cualquiera
que
sea
el
lugar
y
disposición
en
que
aparezcan.
• En
líneas
de
epígrafes
o
pies
de
figuras.
Se
omite
también,
en
general,
en
cualquier
línea
que
se
centre.
• En
listas
de
nombres
o
conceptos
(como
en
índices
de
contenido).
• En
las
siglas:
ONU,
DNI,
IVA.
• En
los
números
de
solo
cuatro
cifras
(años,
por
ejemplo).
Errores
frecuentes
en
la
escritura
del
punto
• Tras
otros
signos
de
puntuación
o
entonación
no
debe
añadirse
un
punto.
¿Vienes?
Date
prisa,
por
favor.
Venta
de
libros
usados
de
informá>ca,
diccionarios,
etc.
• Para
separar
los
números
enteros
de
los
decimales
debe
emplearse
la
coma.
Escribir
un
punto
se
considera
un
anglicismo
ortográfico.
2,5
0,75
3,1416
• Con
las
abreviaturas
de
las
unidades
de
medida
no
se
usa
ningún
signo.
m
cm