IMPORTANCIA GEOPOLÍTICA DE BOLIVIA E INTEGRACIÓN SUDAMERICANA

IMPORTANCIA GEOPOLÍTICA DE BOLIVIA E INTEGRACIÓN SUDAMERICANA Luciano Wexell Severo Julio 2013 El propósito de este artículo es realizar un breve aná

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"OPINIONES Y ANÁLISIS" "OPINIONES Y ANÁLISIS" POLÍTICA E IDENTIDAD EN BOLIVIA Primera edición, agosto 2007 D.L. Nº 4 - 1 - 1606 - 07 ©FUNDEMOS Call

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IMPORTANCIA GEOPOLÍTICA DE BOLIVIA E INTEGRACIÓN SUDAMERICANA Luciano Wexell Severo Julio 2013

El propósito de este artículo es realizar un breve análisis sobre la importancia geopolítica de Bolivia en el escenario de América del Sur, desde el punto de vista de destacados pensadores de diferentes nacionalidades. Inicialmente se presentará una visión general del concepto de Heartland, desarrollado a principios del siglo pasado por el geógrafo Inglés Halford Mackinder. A continuación, vamos a presentar las contribuciones de autores como el brasileño Mario Travassos, el estadounidense Lewis Tambs y los bolivianos Jaime Mendoza, Alipio Valencia Vega, Alberto Ostria Gutiérrez, Guillermo Francovich y Valentín Abecia Baldivieso, entre otros. Por último, se sugiere una reinterpretación del papel de Bolivia en el proceso de Integración Regional en curso, frente a la reciente diversificación de las actividades económicas, el fortalecimiento de nuevas ciudades y la implementación de la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Sudamericana (IIRSA). 1. Heartland de Mackinder En 1904, el geógrafo inglés Halford Mackinder presentó a la Royal Geographical Society de Londres, su artículo The Geographical Pívot of History. En el reconocido trabajo estaba presente su teoría sobre la "zona pivote". En 1919, volvió a presentar el trabajo bajo el nombre de Heartland (Mello, 1999, p.45). Según su interpretación, el mundo estaría dividido en tres zonas: el Gran Océano (que cubre tres cuartas partes del planeta), la Isla Mundial (Europa, Asia y África) y las islas-continentes menores (Australia y las Américas). Una gran área continental, cuyo centro estaba lejos de los mares, tenía las características geográficas de una fortaleza rodeada de grandes accidentes geográficos tales como ríos, desiertos, glaciares, mesetas y cadenas montañosas. Por otra parte, esta región ofrece la posibilidad de proyección fácil en varias direcciones. Tenía poder de articulación territorial y estaba situada en el centro de una gran masa continental (Pfrimer y Roseira, 2009, p.5). Según García y Oliveira (2010), el concepto de Heartland: Fue desarrollado para categorizar una vasta región en el "Corazón de Eurasia", el más grande de todos los continentes de la tierra, "World-Island"... El Heartland fue definido originalmente como un vasto territorio, con gran potencial para la agricultura, la ganadería, la extracción de recursos o el asentamiento de grupos humanos. Rica en recursos naturales de todo tipo, además de tierras fértiles cultivables, llanuras, estepas y bosques, la zona de "pivote" de Eurasia incluye, en su configuración original, la idea de ríos caudalosos, enormes yacimientos de recursos minerales, desde hierro y manganeso hasta el fósforo y el potasio, grandes reservas de recursos energéticos como carbón y petróleo [1]. A principios del siglo pasado había, naturalmente, una fuerte influencia de las teorías geopolíticas de Europa y de Estados Unidos en los medios militares sudamericanos. Fueron exactamente los autores relacionados con el área militar que se dedicaron a estudiar la geopolítica de la región. En el caso específico de nuestro trabajo, lo más relevante a destacar es que unos veinte años después de la formulación del concepto de Heartland por Mackinder, también se utilizó en los análisis sobre el territorio de América del Sur [2]. La principal contribución en este sentido es el trabajo realizado por Travassos (1935), posteriormente reinterpretado por Tambs (1965). Couto e Silva (1955) y Pinochet (1968) que continuaron utilizando los marcos teóricos existentes, pero aprovecharon las contribuciones actualizadas del geógrafo y geo-estratega holandés Nicholas Spykman [3]. Los cinco pensadores bolivianos usados añadieron poco valor teórico a la propuesta original de Travassos, aunque representaron una visión propia de un país que perdió casi dos tercios de su territorio en cincuenta años, entre 1883 y 1935.

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2. "Antagonismos geográficos" y "Triángulo Estratégico" de Travassos La primera edición del libro de Mario Travassos, 1930, fue llamado "Aspectos Geográficos Suramericanos". En 1935, el trabajo fue publicado de nuevo con el nombre mucho más audaz de "Proyección Continental de Brasil". Según la interpretación de este autor, exactamente en el territorio de Bolivia se produjeron una serie de "contradicciones geográficas con resultantes geopolíticas" [4] relacionadas con su ubicación respecto de los tres principales accidentes geológicos de América del Sur: la cordillera de los Andes, que divide el continente de este a oeste y las cuencas de los ríos Amazonas y del Plata, que condicionan una división norte-sur.

De acuerdo con este punto de vista, en el territorio de Bolivia, en la región que entre 1559 y 1825 fue conocido como "Audiencia de Charcas", se unen las "vertientes" del Océano Pacífico y el Océano Atlántico y se tocan las dos principales cuencas hidrográficas de la región (Filho, 2004, p.10). Bolivia sería por tanto el único país de América del Sur que ocupa simultáneamente o ejerce proyecciones sobre los cuatro espacios. Las tensiones sobre el territorio boliviano se concentraron en la zona comprendida entre las ciudades de Santa Cruz de La Sierra, Cochabamba y Sucre. Existió entre estas ciudades un "triángulo estratégico", que incluyó a las importantes ciudades mineras de Oruro y Potosí. Precisamente en esta zona, según Travassos, se enfrentaban abiertamente los intereses de Brasil ("influencias amazónicas") y Argentina ("influencias platinas") por la supremacía geopolítica del subcontinente. Pfrimer y Roseira (2009, p.6) señalan que, para el militar brasileño, "la clave de estos problemas radica en el triángulo económico, verdadero signo de la riqueza boliviana" [5]. Travassos identifica la influencia de la Argentina, que detenta la desembocadura del Río de la Plata, como una amenaza sobre Bolivia. Desde hace algunos años, el país fue creando vías de comunicación ferroviaria con el Océano Pacífico en el sentido este-oeste (desde Buenos Aires hasta Santiago de Chile) y en el sentido sur-norte (desde Buenos Aires hasta La Paz y el puerto de Arica) [6]. Según el autor, la estrategia argentina de establecer estas líneas verticales en el mapa de América del Sur confrontaba claramente con la proyección brasileña de crear caminos hacia el oeste, en constante búsqueda de una salida al Océano Pacífico. Para Leonel Itaussu Almeida Mello (1997), Travassos proponía que Brasil lanzará una contundente política de comunicaciones que garantizase la unidad territorial y, al mismo tiempo, asegurase la proyección brasileña en América del Sur. Durante el primer gobierno de Getúlio Vargas se inició la construcción de la línea entre Corumbá y Santa Cruz de la Sierra, con el objetivo exactamente a expandir la presencia de Brasil en la parte oriental de Bolivia. En ese momento, todavía no había conexión actual entre Argentina Buenos Aires y Santa Cruz de la Sierra. [7] Vale la pena señalar que Mackinder tomó la idea de la Heartland para hablar de una zona mediterránea central que le daría al Estado que la domina la capacidad de movilidad y proyección en todas las direcciones de Eurasia. Al mismo tiempo, era una fortaleza natural. El caso de Bolivia es similar. Una zona mediterránea central que se puede considerar una fortaleza natural, un altiplano entre dos cadenas montañosas. De hecho es una plataforma de proyección en todas las direcciones y, al mismo tiempo, está sujeta a sufrir amenazas desde todas las direcciones. La gran pregunta es porqué el Estado boliviano no utilizó estas potencialidades. 3. "South American Heartland" de Tambs Pfrimer y Roseira (2009, p.7) señalan que "en algún momento" Travassos se refirió a la idea de Heartland o Pivot Geográfico de la Historia como había hecho Mackinder [8]. Ellos consideran que la responsabilidad por la "reconceptualización de los postulados de Travassos hacia el concepto de Heartland, fue propuesto por el profesor de Historia de Brasil en la Universidad de Creighton, Lewis Tambs". Este, no Travassos, habría adaptado la idea de Mackinder para la situación de América del Sur. Por lo tanto, para el estadounidense, "quién controla Santa Cruz comanda Charcas. Quién controla Charcas comanda el Heartland. Quién controla el Heartland comanda América del Sur "(Citado en Gumucio y Weise, 1978) [9].

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Se advierte que hay un límite en el uso del término Heartland en el caso de América del Sur. En nuestra interpretación la validez del concepto se limita a sugerir similitudes generales, que pierden sentido cuando se trata de generalizar ampliamente. Una de las grandes características que marcan al Heartland suramericano es la aparente ausencia de un poder integrador político, económico y militar. El Estado de Bolivia no asumió ese carácter. Antes de la Guerra del Chaco (1932/1935), las elites gobernantes de Bolivia hicieron algunos pocos movimientos con el fin de crear posibilidades para integrar el territorio nacional, consolidar las fronteras y ocupar vastas zonas del este, considerados como "baldías". Después de la revolución nacionalista de 1952, los planes de "marcha hacia el Oriente" ganaron amplio apoyo, con la construcción de la infraestructura de transporte y servicios. El proyecto trató de activar una línea de polos de desarrollo, desde el altiplano, a través de los valles y llegando a las llanuras de Santa Cruz, promoviendo la integración nacional (Pfrimer y Roseira, 2009, p.10). En 1954, el gobierno de La Paz construyó una carretera entre Cochabamba y Santa Cruz de la Sierra. En ese momento Argentina y Brasil ya estaban unidos a la ciudad por las líneas de tren desde Buenos Aires y Santos (Del Bosco, 2006, p.4). El geopolítico boliviano Alipio Valencia Vega (2011, p.255) afirma que: La vastedad territorial Bolivia, abarcando cuatro regiones tan distintas entre sí y, sobre todo, separadas de otras por accidentes geográficos poderosos, sólo podría mantenerse a condición de que la acción humana de los escasos pobladores de dicho territorio se orientara prácticamente y sin descanso, desde el primer día de la independencia, al aprovechamiento efectivo de los principales recursos económicos de esas regiones y a la superación de los obstáculos geográficos, mediante la apertura de vías de penetración de unas regiones sobre otras. Si no se operaba esta acción, los centros nerviosos del país siempre estarían sumamente lejanos de la periferia de las fronteras, las cuales podían ser seccionadas fácilmente por los vecinos, en cuanto fuesen algo más poderosos y se aproximasen en su acción, desde sus costas hasta su propio interior. Veremos cómo, años más tarde, algunos autores ampliaron los "límites originales" del Heartland sudamericano como resultado del descubrimiento de mayores riquezas. [10] La zona pasó a incluir al norte argentino, Paraguay y el centro-oeste brasileño. Este fue el caso de los militares Couto e Silva (1955) y Pinochet (1978), ambos fuertemente influenciados por la Doctrina de Seguridad Nacional contra el "enemigo rojo”. El Heartland sudamericano ampliado, riquísimo en ríos, gas natural, petróleo, minerales y tierras fértiles pasó a ser identificado como estratégico para la seguridad regional y vital para el proceso de integración sudamericano. En 1981, el general brasileño Golbery do Couto e Silva presentó la idea de que en la configuración geopolítica de América del Sur, existían cinco zonas continentales. En el caso de nuestro estudio, el más relevante es una referencia a la "Geopolítica Área Continental de Soldadura", integrado por Paraguay, Bolivia y los estados brasileños de Mato Grosso y Rondônia (Freitas, 2004, p.49/50). Es interesante notar que diez años antes, en 1946, el libro "Una obra y un destino", el boliviano Alberto Ostria Gutiérrez ya había hablado en términos muy similares e incluso usó el término "soldadura". [11]. Otro prominente pensador boliviano Jaime Mendoza realizó trabajos que rescataron la identidad nacional y enaltecieron la nacionalidad. Su libro "El macizo boliviano" de 1935, fue muy influyente al desarrollar ideas nativas que relacionaban el territorio fraccionado con la fortaleza cultural del país. El intelectual describió el macizo de esta manera: Hemos llamado Macizo de Charcas y por extensión Macizo Boliviano, a esa formidable expansión geográfica de los Andes sudamericanos que se halla en la parte céntrica de su recorrido de más de cuatro mil kilómetros por las costas del Pacífico. De ella dijimos que constituye el eslabón más grueso y pujante de cuantos integran la cadena andina, dilatándose al oriente hacia el corazón de América del Sur, cual si quiera darse de mano con el macizo del Brasil.

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El general Pinochet (1978), bastante influido por las ideas de Golbery, describe el área de la siguiente manera: Por su situación relativa en América del Sur no tiene una función aislante sino, al contrario, de atracción, articulación y soldadura entre los países que lo rodean. Para su configuración, se podría comparar a un imán gigante que une las piezas del conjunto, y que si dejase de actuar se desmoronaría desarticulándose [12]. 4. Tres conflictos, tres derrotas Los tres conflictos militares enfrentados por Bolivia dieron lugar a importantes pérdidas territoriales. En el momento de su creación en 1825, el país contaba con un área tres veces mayor que la actual 1,09 millones kilómetros cuadrados. La situación cambió por completo por la Guerra del Pacífico contra Chile, la cuestión de Acre contra Brasil y la Guerra del Chaco contra Paraguay. Aunque la interpretación de estas razones y el desarrollo de esos choques armados sea muy compleja, podemos señalar dos factores como determinantes: la falta de atención del Estado boliviano con fronteras distantes de las grandes ciudades y la participación de empresas extranjeras en el centro de los enfrentamientos [13]. En la Guerra del Pacífico (1879/1883), Bolivia perdió su única salida al mar. En 1825, con la independencia de Bolivia, las autoridades chilenas habían reconocido (aceptado) los límites entre los dos países. Sin embargo, en 1830 se produjo un nuevo elemento como detonador del conflicto: los descubrimientos en la costa de Bolivia de enormes reservas de guano, nombre dado al excremento de pájaros y murciélagos, acumulados sobre las piedras. Debido a los altos contenidos de nitrógeno, fosfatos y amoníaco, el material fue utilizado ampliamente como un fertilizante en el empobrecido suelo de Europa. El surgimiento de la química agrícola y una mayor intervención en suelos pobres apalancaron los precios internacionales de los fertilizantes internacionales. Más tarde, también se identificaron en la antedicha región enormes concentraciones de salitre, otro tipo de fertilizante. Desde entonces, las provincias de Tarapacá y Antofagasta y el desierto de Atacama ganaron relevancia. Cientos de kilómetros de ferrocarriles comenzaron a conectar el puerto boliviano de Antofagasta, con la ciudad de Oruro, pasando por Uyuni, en el departamento de Potosí. Los autores bolivianos analizados asocian el estallido de la guerra con los movimientos de empresas anglo-chilenos, para apoderarse de una zona rica, deshabitado y prácticamente abandonada por el Estado boliviano. Por otra parte, algunos documentos chilenos, como el de Liberona (2002), atribuyen el conflicto al hecho de que el país no estaba de acuerdo con los límites determinados "arbitrariamente" por el Mariscal Antonio José de Sucre, en 1825. El autor citado hace referencia a una orden expresa de Simón Bolívar a Sucre "dar un puerto a Bolivia a cualquier costo" [14]. La cuestión del Acre (1902/1903) es también muy compleja. Según el general brasileño Carlos de Meira Mattos (1980), los antecedentes del conflicto están presentes en las contiendas sobre la navegabilidad en los ríos de la frontera entre Brasil y Bolivia. Desde 1826, los sucesivos gobiernos brasileños han rechazado numerosas propuestas hechas por bolivianos y estadounidenses para autorizar la libre navegación de buques extranjeros en aguas interiores de Brasil. En la práctica, sin embargo, el estallido de enfrentamiento coincidió con el auge del caucho. La atención se centró en los árboles de la goma, con cuyo látex se producía el caucho, cada vez más utilizado por la naciente industria automotriz en los Estados Unidos y Europa. Incapaz de defender sus remotas provincias del noreste, las autoridades de Bolivia optaron, con el apoyo del gobierno de EUA., transferir el control de la región a la corporación Anglo-Bolivian Syndicate de Nueva York. La corporación privada asumió el control efectivo sobre el Acre, con el monopolio de la exploración de caucho en el área y amplios poderes para administrar, recaudar impuestos y organizar a la policía. La compañía tenía como principal ejecutivo a un primo del presidente de EUA Theodore Roosevelt y como uno de los mayores accionistas al banquero Inglés Rothschild.

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Las tensiones con el gobierno de Brasil fueron aumentando hasta la firma del Tratado de Petrópolis en 1903, en virtud del cual Bolivia le cedió el territorio de Acre. Por su parte, Brasil ofreció pagarle dos millones de libras y le propuso construir el ferrocarril Madeira-Mamoré, que permitiría una salida boliviana por el Océano Atlántico a través de Belém do Pará (Reyes, 2010, p.61/62). Desde la época colonial, la región del Chaco siempre recibió poca atención y se caracterizó por la imprecisión en la delimitación de las fronteras. La Guerra del Chaco (1932/1935) enfrentó a los dos países más pobres de América del Sur, que lucharon de forma cruel por una porción de terreno inhóspito, seco, arenoso y deshabitado. Algunos autores, como Chiavenato (1980), relacionan al conflicto con los descubrimientos de yacimientos de petróleo en el Chaco, alrededor del año 1920. En Bolivia las exploraciones fueron hechas por la estadounidense Standard Oil, mientras que en Paraguay los trabajos estuvieron a cargo de la británica Shell, la guerra sería entonces resultado de estos intereses petroleros. Sin embargo, otros autores, como Gumucio (1978), quienes interpretan que el enfrentamiento tuvo su origen en razones más estructurales. Es necesario tener en cuenta la coyuntura de crisis de la década de 1930, la caída de las exportaciones de estaño boliviano y la agitación en la que se sumió el país. Por otra parte, en Bolivia, después de perder la salida al Pacífico, la relevancia del Chaco fue la posibilidad de asegurar una salida al Atlántico, a través de los ríos Paraguay y de La Plata. En pocos días, el intento boliviano de obtener rápidamente el control de los puertos en el río Paraguay se convirtió en una terrible tarea. Gutiérrez (1946) considera que con el final de la Guerra del Chaco se cerró para Bolivia una etapa de la vida nacional. Se acabó el proceso de configuración territorial y fueron establecidos los límites internacionales del país. Según el autor, "estaban terminados los pleitos fronterizos con todos los vecinos, bien o mal, justa o injustamente, por la razón o por la fuerza, habían sido trazadas todas sus fronteras y suscriptos los convenios respectivos" [15]. 5. El "triángulo estratégico" hoy Las medidas promovidas por el Estado boliviano después de la Guerra del Chaco tuvieron un impacto visible sobre el ordenamiento territorial del país. Una nueva red de caminos y carreteras permitió la migración y estimuló el surgimiento de nuevas ciudades. Por otra parte, se puede afirmar que uno de los principales resultados de la "competencia" brasileña y argentina por el control de Charcas fue el progresivo fortalecimiento del este de Bolivia, a través de inversiones, incentivos financieros, construcción de infraestructura y el establecimiento de una mayor oferta de servicios públicos. El triángulo estratégico propuesto por Travassos fue alterado [16]. Santa Cruz de la Sierra, una pequeña villa jesuita establecida en 1561, a los pies de la Cordillera de Cochabamba, se convirtió rápidamente en un importante centro de articulación continental y en motor económico de Bolivia. [17] Gracias a la intensa integración con Brasil en varios sectores, como la agricultura y la energía, el área es considerada como una macroregión asociada al estado de Mato Grosso. Santa Cruz y el oriente boliviano tienen los privilegios de localización disponibles del Heartland. La región tiene relaciones tanto con el Pacífico como con el Atlántico, potenciados por los proyectos de la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA). [18] Sólo en Bolivia, están en marcha 53 proyectos de infraestructura, como ferrocarriles, hidrovías, carreteras, sistemas intermodales, energía y fibra óptica [19]. La tendencia es que gane fuerza una visión global de planificación y organización para la integración Regional bajo criterios políticos y estratégicos, y no simplemente mediante el fomento del mercado o las empresas privadas. La integración de la infraestructura, ahora dirigida por la UNASUR, podría articular la integración física con los esfuerzos para ampliar el comercio intrarregional y ampliar la complementación de las cadenas productivas.

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En este nuevo contexto, y junto con la posibilidad de ingreso de Bolivia al MERCOSUR en los próximos años, la importancia del territorio boliviano sólo tiende a aumentar. Sea como un nuevo triángulo estratégico (Santa Cruz, Cochabamba y Tarija) o junto a Paraguay y el CentroOeste de Brasil, Bolivia seguirá teniendo un papel crucial en este proceso, como la gran "zona de soldadura." Según Padula (2011), estos espacios mediterráneos, situados en el corazón sudamericano continental, "al mismo tiempo en que sufren con el confinamiento del interior, su situación les genera un enorme potencial para desempeñar el papel de plataforma de interconexión del comercio Regional y bioceánico". Notas (*) Economista egresado de la Pontificia Universidad Católica de São Paulo (PUC-SP), Maestría y Doctorando en Economía Política Internacional de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ). Profesor visitante en la Universidad Federal de Integración Latinoamericana (UNILA). Agradezco los valiosos comentarios del profesor y colega Raphael Padula, UFRJ. Artículo publicado en el Seminario de Posgrado de la Asociación Brasileña de Relaciones Internacionales (ABRI), celebrado el 12 y 13 de Julio de 2012 en Brasilia. [1] José Luis Fiori (2011) considera que "Mackinder formuló un nuevo principio y una nueva teoría geopolítica, que marcaron la política exterior británica en el siglo XX. ¿Quién controla el corazón del mundo domina la isla del mundo, y quien controla la isla del mundo comanda el mundo ". La "isla del mundo” sería el continente euroasiático y su" corazón "se situaría - más o menos -. Entre el Mar Báltico y el Mar Negro y entre Berlín y Moscú". [2] De acuerdo con los bolivianos Baldivieso (1986, p.44) y Francovich (1985, p.96), desde el siglo XX, el científico alemán Alexander von Humboldt se refirió al actual territorio de Bolivia como "Macizo central de los Andes "," Perú interno " y " promontorio de América del Sur". [3] Según Fiori (2007), Spykman "partió de las ideas de Halford Mackinder, pero modificó su tesis central. Para Spykman, quien tiene el poder en el mundo no es el que controla directamente el “corazón del mundo ", pero ¿quién es capaz de rodearlo, al igual que los Estados Unidos hicieron durante la Guerra Fría y siguen haciéndolo hasta hoy." El Heartland pierde importancia frente al Rimland. [4] Según Baldivieso (1986, p.48), el antagonismo propuesto por Travassos "podría decirse que estaba insatisfecho y que había conformado un país vacilante en su triple rol sobre las hoyas amazónica, del Plata y del Pacífico, pero en ninguna de ellas gravitó con la fuerza necesaria para definir sus destinos como nación de estructuras centrípetas. Los internacionalistas y geopolíticos bolivianos, insistentemente, anotan su indudable rol en los tres caminos continentales, pero ocultan, muy comprensiblemente, su debilidad e invertebración que hizo de ella un país vacilante. " [5] Cabe destacar el interesante hecho que Ernesto Che Guevara decidiera iniciar su guerrilla exactamente en el centro del "triángulo estratégico", incluso en contra de las directrices del Estado cubano. El argentino insistía que desde la localidad de Vallegrande sería posible proyectar la lucha armada para los demás países de la región. En 1967, fue capturado y muerto por los Rangers de EUA y el ejército boliviano. [6] Se creó también el acceso a Asunción, estableciendo contacto con las capitales de tres importantes países . [7] Pfrimer y Roseira (2009, p.11) señalan que "Por la presión argentina y las dificultades para romper los contrafuertes andinos entre Cochabamba y Santa Cruz, se construyó un ramal ligando a Santa Cruz con el departamento de Tarija y desde allí hasta el norte argentino. Así, la red ferroviaria oriental boliviana se integra, incluso hoy en día, a la occidental en territorio argentino". Es decir, hasta hoy no hay ninguna extensión entre Santa Cruz y Cochabamba. [8] Afirman que "tal vez el único pasaje que ha sido mal interpretado más tarde es aquél en que el mariscal brasileño afirmaba la fuerza coordinadora de Brasil en la dirección longitudinal en el

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territorio de América del Sur:" En primer lugar, las grandes líneas de la masa continental – las cumbres de los Andes dividiéndose en dos vertientes, la vertiente del este opera por los compartimientos de dos grandes cuencas - el Amazonas y el Plata. Entonces, el hecho de que estas dos cuencas se encuentran en una especie de pivote, emergiendo de las formaciones de la Cordillera - el altiplano boliviano – a partir del cual los caudales de aquellas cuencas se colocan verdaderamente en antagonismo ". El uso de la palabra pivote debe ser interpretada en el contexto del parágrafo y del libro, en ese sentido no se refiere al Pívot Geográfico de la Historia de Mackinder, pero si al hecho de que las tierras altas de Bolivia constituyen una zona de conexión entre el Amazonas y la Cuenca del Plata". [9] Afirma Tambs que "la historia ha demostrado la importancia de esta región durante los imperios precolombinos Aymará e Inca y más tarde durante la colonización española, cuando el altiplano y Charcas eran los centros de poder. El Alto Perú siguió siendo el centro neurálgico del poder español en América del Sur hasta su final... El Rimland sudamericano cercó a Charcas (actual Sucre). En virtud de la falta de liderazgo boliviano, el Heartland no tenía más poder para actuar y fue coaccionado. Vista como la lucha por Heartland de Charcas, la historia suramericana de los siglos XIX y XX, se vuelve inteligible (Idem, 1978). El autor utiliza el concepto de Rimland, de Spykman de 1942. [10] Con el fin de definir un ámbito para el concepto físico de South American Heartland, Oliveira y García (2010, p.10) desarrollaron un mapa azimutal equidistante centrado en la frontera entre Brasil y Bolivia. La figura muestra las principales ciudades de América del Sur con más de 500.000 habitantes. Desde el punto central, en un radio de 2300 km se encuentran las principales ciudades del Cono Sur y dentro de un radio de 3100 km se encuentran las principales ciudades de América del Sur. [11] De acuerdo con este autor, "situada en el centro de la América del Sur, cabecera de los tres grandes sistemas fluviales - Amazonas, Plata y Pacífico - nexo entre dos océanos, bordeando cinco naciones, obligado paso norte-sur y de este al oeste, la geografía impone a Bolivia, no una función aisladora y de aislamiento, sino de atracción, articulación, unión, de soldadura entre los países que la rodean". [12] Pinochet concibe al Estado como "un organismo formado por Territorio o espacio, Población o masa humana y Soberanía. Los Estados adquieren una constitución semejante a una ameba en la que se distinguen: las fronteras o capa envolvente cuya resistencia está de acuerdo con el grado de potencialidad del núcleo vital, el 'Heartland', las comunicaciones y el ciclo vital del Estado, que está demostrado por la historia de la humanidad en el transcurso de los siglos: nace, se desarrolla y muere". [13] Reyes (2010) formula un análisis actual y detallado de los tres conflictos. [14] " Tarapacá fue cedida definitivamente a Chile, que también recibió la posesión temporal de Tacna y Arica - sobre las que se desarrolló una larga disputa diplomática que sólo vino a ser resuelta en 1929. Los últimos soldados chilenos dejaron Perú en Agosto de 1884. El armisticio con Bolivia (Abril de 1884) permite que Chile continúe controlando Atacama hasta la negociación de un acuerdo de paz definitivo, que solamente se materializó en 1904 "(Collier, citado en Reyes, 2010, p.56). Hasta el día de hoy Bolivia mueve demandas judiciales para la reanudación de su salida al mar, conservando su pequeña flota estacionada en el Lago Titicaca. [15] Vega (2011, p.257) afirma que "Las mayores perdidas territoriales de Bolivia no fueron realizadas por vía diplomática, sino que fueron consecuencia de diversas guerras o “Revoluciones " sostenidas con los países vecinos. Diplomáticamente si perdieron parte del territorio del Litoral [no el propio litoral, sino un pedazo de la provincia del Litoral] cedido a Chile en 1866 y los territorios cedidos a Brasil en el norte y hacia el este en el 1867. También más tarde perdió el territorio de Bermejo y la Puna de Atacama, cedidos a la Argentina por el tratado de 1889. Además, la zona de Tambopata al Perú en al año 1909. Todos los demás territorios, o sea el litoral sobre el Océano Pacífico, el Acre y el Chaco fueron perdidos como consecuencia de guerras que sostuvo Bolivia con los países vecinos: Chile, Paraguay y el Brasil. En el fondo de esas guerras que aparecen en sus causas como esencialmente políticas, hay una influencia

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económica poderosa. Se producen conflictos armados por la codicia de las riquezas naturales existentes los territorios disputados por las armas; riquezas naturales que son materias primas altamente apreciadas en los mercados del mundo". 16] Del Bosco (2006, p.6), haciendo referencia a Travassos, dice "que si tuviéramos que actualizar su pensamiento respecto a Bolivia, dejaríamos de lado el triángulo SucreCochabamba-Santa Cruz de la Sierra y hablaríamos a futuro de un eje norte-sur, conformado por los departamentos de Tarija y Santa Cruz de la Sierra. El primero con la 2ª reserva de gas de Sudamérica, eje con capacidad para proyectarse externamente. Tarija gracias al empuje de los hidrocarburos es el departamento que más ha crecido. Durante el período 1988/2004 su PBI se incrementó en 191%. ". A su vez, Pfrimer y Roseira (Op.cit., P.12/15) consideran que "la influencia de los discursos geopolíticos brasileños y argentinos, especialmente en relación con el concepto de triángulo estratégico boliviano, sobre sus políticas territoriales, acabó a lo largo de esa disputa materializando en suelo boliviano un triángulo. No aquel representado por Travassos, una vez que Sucre dejó de ser la capital política del país y perdió cada vez más su importancia económica. Por otra parte, la expansión económica de Tarija, tras el descubrimiento de grandes reservas de petróleo y gas, se colocó como uno de los cuatro principales centros urbanos del país. Esta área con formato triangular constituida por una red de tres ciudades principales: Santa Cruz, Cochabamba y Tarija. Envueltos y bien articulados a esos centros urbanos principales hay centros secundarios como Potosí, Oruro, Sucre y Yacuiba ... Este nuevo ordenamiento territorial posee aproximadamente el 60% del producto interno boliviano, casi la mitad de la población boliviana y el 98% y el 99,2% de las reservas probadas de petróleo y gas en Bolivia, respectivamente. ". Teniendo en cuenta los proyectos de corredores bioceánicos que pasan a través de los países andinos, se cree que el área del nuevo triángulo puede constituirse en el futuro Hub Logístico Suramericano. [17] Hay buenas carreteras que conectan Santa Cruz con Cochabamba, La Paz y los puertos del Perú (Ilo y Matarani) y de Chile (Arica y Antofagasta). Además, está prevista la del este hasta Corumbá y los puertos de Río Paraguay (un canal conecta Puerto Aguirre, Puerto Quijarro y Puerto Suárez a la Hidrovía Paraguay-Paraná- en la frontera con Brasil). En los últimos años, ha avanzado el proyecto de activación de Puerto Busch, ubicado en la frontera boliviana con Paraguay. Esto se conoce como el "Mar guaraní" que permitirá el acceso directo desde Bolivia al Océano Atlántico a través del río Paraguay, sin necesidad de navegar por el canal Tamengo. La nueva ruta permitirá intensificar la inversión en actividades como el petróleo, el gas, las minas de hierro del Mutún y la producción agrícola. Las redes ferroviarias ya conectan a Santa Cruz con el Atlántico (hasta Santos y Buenos Aires) y casi hasta el Pacífico. Hay planes para conectar la región con el sistema del Amazonas, hasta Porto Velho, Manaus y Santarem. [18] La IIRSA fue creada en 1990 bajo la orientación del "regionalismo abierto" de la CEPAL y del "Nuevo Regionalismo" del BID. La iniciativa funcionaría como espina dorsal de la propuesta estadounidense de anexión continental, la denominada zona de Libre Comercio de las Américas (ALCA). La propuesta de IIRSA, que continuó existiendo a pesar del entierro del ALCA en Mar del Plata en 2005, se concentró en el fortalecimiento de los "corredores de exportación", profundizando aún más la condición de nuestro países como vendedores de bienes de bajo valor añadido para los centros industriales. El cambio actual es la creación del Consejo de Infraestructura y Planeamiento (COSIPLAN) dentro de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR). Por lo tanto, los gobiernos han asumido la dirección del proceso y la tendencia es intensificar las obras encaminadas a una efectiva integración Regional en energía, transportes y comunicaciones. Se entiende como esencial que los Estados nacionales y las poblaciones fortalezcan su poder de intervención en los proyectos. [19] Del Bosco (2006, p.5) señala que "hoy en Santa Cruz, además de petróleo, madera, caña de azúcar y ganadería, ha desarrollado el cultivo de soja y ha pasado a constituirse en un centro de importantes inversiones de agricultores brasileños y argentinos. Su PBI representa el 30% del total de Bolivia, la actividad agropecuaria el 43%, la del comercio el 36,2% y la industria manufacturera el 35%. Por parte sus bancos acaparan el mayor movimiento financiero del país".

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