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INDICE

I.

Introducción: “Aún cuando el Planeta Tierra es conocido como el planeta del agua y por lo menos dos terceras partes de su superficie están cubiertas por ese líquido vital, la realidad es que únicamente el 2.5 % del total es agua dulce y de ese porcentaje el .3 % está en ríos y lagos, el 30.8 % en el subsuelo, humedad del suelo, ciénegas y congelada en el subsuelo (“permafrost”) y el 68.9 % restante en glaciares y hielos permanentes en las montañas. La paradoja es que en este mundo, supuestamente pleno de agua, todos los días mueren miles de niños por falta de agua o por enfermedades relacionadas por ingesta de aguas contaminadas. Los conocedores y los organismos internacionales han catalogado el problema de la escasez de agua como la prioridad del Siglo XXI, inclusive con amenazas de guerras entre quienes comparten las cuencas proveedoras en las diversas regiones del mundo.

II. Agua en el Mundo: “Al inicio de este trabajo se pretendía exponer la problemática del agua en Baja California, no obstante se llegó a la conclusión de que no puede hablarse de una región sin comprender el entorno general, porque al final de cuentas todos vivimos en el mismo planeta y lo que en él suceda, no importa en cual de sus rincones, impactará al conjunto y, desgraciadamente, parece que nosotros género humano, por avaricia o simple irresponsabilidad, nos hemos propuesto destruir el equilibrio maravilloso de la naturaleza. Un somero recorrido por la disponibilidad y uso del agua en el mundo en general y de algunas regiones en lo particular. III. Agua en México: En esta sección del trabajo se pretende ubicar la problemática del agua en el contexto nacional, cuales son nuestras fuentes de abastecimiento y los usos que damos al líquido vital. De nuevo nos enfrentamos a la paradoja de un país que en su conjunto parece disponer de grandes recursos de agua y por otra parte el contraste de su distribución en las diversas regiones del territorio nacional. Mientras que cuatro estados disponen del 68 % de las disponibilidades de agua del país, solo reside en ellos el 23 % de la población y se genera únicamente el 15 % del Producto Interno Bruto (PIB) En contraste, todo el resto de nuestro territorio dispone únicamente del 33 % del total del recurso, aloja al 77 % de la población y genera el 85 % del PIB. Vaya paradoja…

2 IV. Agua en Baja California: Por diez años esperamos poder hablar del tema del agua sin incurrir en demasiadas contradicciones o herir sensibilidades, de quienes en una u otra forma han tenido en sus manos si no la solución, al menos el inicio de un proceso claro y definido en ese sentido. Con este trabajo no se pretende lastimar a persona o institución alguna, nuestra humilde pretensión es hacer transparente y accesible a cualquier ciudadano la grave situación de abasto de agua en que vivimos, especialmente en la parte que se refiere a la Costa del Pacifico de nuestro territorio, donde paradójicamente, de nuevo se aloja la mayor parte de la población y se genera el mayor porcentaje del Producto Interno Estatal, precisamente donde el recurso acuífero es extremadamente escaso y la confiabilidad del suministro resulta severamente cuestionable. A vía de ejemplo, si el abasto de agua de Tijuana depende en un 87 % de un acueducto con aproximadamente treinta años de operación, no se puede entender como puede haber un solo residente de esa ciudad que ignore esta problemática y no actúe en consecuencia…

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¡ AGUA…..ESA PESADILLA ! Por: Francisco Molina Robles Mexicali, B.C.; Enero 25, 2007.

No en balde, cada día más y más fuerte, se escucha, se lee, se percibe…el drama creciente del agua y su distribución. Hay quién habla ya, con insistencia, que las guerras futuras, entre regiones y países tendrán como causa la escasez de este vital recurso. Si aproximadamente el 80% del cuerpo humano es agua, no es difícil concluir que la falta del recurso o su escasez, atenta directamente contra la propia subsistencia. También la escasez de agua atenta indirectamente contra la vida, limitando seriamente el cultivo de especies de flora y fauna que constituyen también el sustento vital del ser humano, su alimento. A través de este análisis pretendemos hacer llegar nuestra inquietud a un amplio sector de la sociedad que aún no se ha dado el tiempo de pensar en lo que viene, no solo en el mediano plazo, mucho menos en el largo. Curiosamente, el problema del agua ya está aquí, no en el mañana sino en el HOY, tal vez oculto pero real e inminente. La información está en todas partes, pero pocos se dan el tiempo de reunirla, estudiarla y con base en ello concluir en la inminencia del problema. Cada vez que oímos de acuíferos sobre-explotados, de intrusión salina, de canales descuidados, de cultivos irrigados por inundación, de ineficiencias en los sistemas de conducción y distribución rural y urbana, de aguas contaminadas, en suma, de mal uso y desperdicio de ese líquido vital, estamos corroborando el problema que viene. Desgraciadamente no faltan intereses, algunos quizá legítimos y otros no tanto, empeñados en mantenernos en la ignorancia por aquello de “no hacer ruido” o mediante la publicación de cifras confusas o francamente dolosas para hacer creer que el problema no existe o que no es tan grave. Esperando pasarle al próximo el costo político de decir la verdad. El problema que se deriva de estas actitudes es el de ignorar la magnitud, la gravedad e inminencia del problema y consecuentemente querer detener con “aspirinas” el avance de un cáncer… y las grandes decisiones se posponen por que hacen “demasiado ruido” o no es “el momento político” para plantearlas.

4 A continuación procederemos a poner nombre y apellido al problema, con el frío lenguaje de los números, con una perspectiva de lo general a lo particular.

EL AGUA EN EL MUNDO Antecedentes Hablar de agua, aparte de ser un gran atrevimiento, requiere atisbar por lo menos en las disponibilidades de agua del Planeta Tierra y la interacción del hombre en ese entorno con sus aciertos y con sus enormes errores. La disponibilidad de agua del Planeta Tierra “es lo que es” y no hay manera de ir mas allá. Empezaremos por lo tanto con aceptar que vivimos en un mundo de agua,( tres cuartas partes de su superficie total)…en su mayor parte salada. En la Figura I se aprecia que el 97.5 % del agua total del Planeta (Aproximadamente 1,365,000,000 Kilómetros cúbicos) es agua salada y solo el 2.5% es agua dulce (35,000,000 de Kms3), de este 2.5% el 68.9% corresponde a glaciares y a cubiertas de nieve permanentes. El 30.8% corresponde a agua subterránea, incluyendo humedad del suelo, pantanos y agua permanentemente congelada en el subsuelo (“Permafrost”) y solo el 0.3% corresponde a ríos y lagos. Figura I

5 Figura II Como complemento a lo anterior en las gráficas que se incluyen a continuación, marcadas como Figura II, puede apreciarse la distribución de la disponibilidad de agua dulce en glaciares y acuíferos subterráneos, así como en pantanos, lagos mayores y ríos, por región del Globo. Se aprecia también su inequitativa distribución entre las diversas regiones que lo integran.

A todo esto debemos añadir que las cifras anteriores son solo una visión estática de un fenómeno naturalmente dinámico y con diferentes espacios de permanencia en el tiempo.

Para la comprensión de este proceso se han desarrollado diversas concepciones de lo que se conoce como “El Ciclo del Agua”

Para efectos ilustrativos hemos elegido el gráfico que se incluye como Figura III: Las dos secciones que la integran muestran con toda claridad en que consiste la dinámica permanente del Ciclo del Agua, así como los volúmenes de agua en movimiento por cada concepto: evaporación, precipitación pluvial, lagos, ríos, flujos subterráneos, océanos etc. Todo ello en un continuo movimiento por billones de años y toda la vida que existe en el Planeta depende de ello. La interrupción de este ciclo acabaría con todo tipo de vida existente en el planeta Tierra.

6 Figura III El ciclo del agua no tiene principio ni fin, sin embargo para efectos descriptivos iniciamos con los Océanos, por ser el lugar de la tierra donde existe una mayor acumulación de agua. El sol, quien determina el ciclo del agua, calienta los océanos generando la evaporación que conduce parte de esa agua. La nieve y el hielo a su vez se subliman directamente como vapor de agua. Las corrientes de aire ascendentes transportan el vapor hacia la atmósfera, conjuntamente con agua proveniente de la evapotranspiración de suelo y plantas. El vapor asciende por acción de esas corrientes hasta alturas donde las bajas temperaturas provocan su condensación como nubes, las mismas corrientes de aire transportan éstas nubes alrededor del globo, las partículas que las conforman colisionan, crecen y caen del cielo como precipitación. Una porción de ésta precipitación cae como nieve y puede acumularse como cubierta de hielo en las montañas y como glaciares, propiciando de ésta forma el almacenamiento del agua en estado de congelación por miles de años. Las acumulaciones de nieve en las montañas, generalmente se descongelan y derriten cuando llega la primavera, la mayor parte regresa a los

7 océanos o la tierra, donde a causa de la gravedad fluye sobre la superficie, una porción llega a los valles desembocando en los ríos cuya corriente la lleva de nuevo a los océanos. El agua que fluye por la superficie se acumula en lagos de agua dulce, y fluye por los ríos, no obstante no toda el agua llega a ellos, mucha de ésta se infiltra profundamente en la tierra enriqueciendo los acuíferos subterráneos, donde se conservan grandes volúmenes de agua dulce por largos periodos de tiempo; otra porción permanece mas cerca de la superficie y puede filtrarse hacia los depósitos naturales y al océano para iniciar de nuevo el ciclo, en un movimiento continuo, sin término. Evolución del Uso del Agua en el Mundo En la Figura IV puede apreciarse la evolución de la extracción de agua, su uso y sus niveles de desperdicio, en cada uno de los cuatro sectores: agrícola, doméstico, industrial y evaporación de las presas de almacenamiento, del año 1900 al 2000 y su proyección al año 2025.

Figura IV

A lo largo del Siglo XX el uso del agua se incrementó sensiblemente en los sectores: agrícola, doméstico e industrial y a una tasa menor en la parte correspondiente a evaporación. Las proyecciones al 2025 muestran también la magnitud de las tendencias crecientes de uso de agua de los cuatro sectores mencionados, incluyendo la evaporación, todo ello como consecuencia primordial del incremento de la población del Globo de 6 mil a 7.5 mil millones de habitantes en el mismo período.

8 Cabe hacer notar que la extracción de agua del sector agrícola es aproximadamente 3 veces mayor que el consumo doméstico y 5 veces mayor que el industrial y su nivel de desperdicio, como se aprecia en la misma figura, es del orden del 40% de sus requerimientos.

La crisis del agua El inicio del Siglo XXI se ve marcado por grandes sectores de la población mundial que enfrentan retos formidables para hacer frente a la creciente demanda de agua. No obstante, existen situaciones que dificultan hacer frente a esas demandas, entre las cuales se cuentan: Ineficiencias de los sectores agrícolas, áreas urbanas en continua expansión, contaminación del agua y conflictos regionales e internacionales, sobre todo en aquellos casos donde se comparten cuencas hidrológicas. La llamada “crisis del agua” ha alcanzado tales proporciones que más de 1000 millones de personas no tienen acceso a agua potable a costos asequibles. Cada año mueren 4 millones de personas como consecuencia de enfermedades atribuibles a la ingestión de aguas contaminadas, no potables, de los cuales 2 millones son niños que mueren de diarreas. Con base en supuestos de crecimiento de la población, incremento de los niveles de crecimiento económico de los países emergentes y los cambios climáticos derivados del calentamiento Global, el Stockholm Environment Institute estima que la proporción de la población mundial viviendo en países con escasez significativa de agua se incrementará de aproximadamente 34% en 1994 a 63% en 2025. Estiman que “las zonas mas afectadas se localizarán en grandes superficies de Africa, Asia y América Latina”. La administración consciente y efectiva de los recursos acuíferos y el acceso a agua potable y servicios sanitarios se consideran ahora como un elemento clave para el futuro desarrollo sustentable, particularmente como una condición previa para la mejoría del nivel de vida de los países en desarrollo. En el primer Foro Mundial del Agua celebrado en Marrakech, Marruecos en 1997 se evaluaron las dimensiones de la crisis mundial del agua y se acordó, como primer paso para resolver la crisis, la elaboración de una visión compartida del agua a largo plazo en el mundo, conocido ahora como “La Visión a Largo Plazo del Agua, la Vida y el Medio Ambiente en el Siglo XXI”, publicado por primera vez el año 2000. Vale la pena repetir en este análisis la sentida dedicatoria de ese monumental trabajo “Esta obra la dedicamos a los niños del mundo, porque no heredamos la tierra de nuestros padres, sino que la tomamos prestada de nuestros niños”.

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Dice Ismail Serageldin, Presidente de la Comisión Mundial del Agua sobre el Agua para el Siglo XXI: “Si el agua es vida; todo ser humano ahora y en el futuro, debería disponer de suficiente agua limpia para beber y para higiene y suficiente comida y energía a un costo razonable. Porque el agua es la base de todos los ecosistemas y hábitat vivos y forma parte de un ciclo hidrológico inmutable que debe respetarse para que el desarrollo de la actividad y bienestar humano sea sostenible”. La Asamblea del Milenio celebrada en las Naciones Unidas en el año 2000 destacó la problemática del recurso acuífero como una de las más importantes metas a ser alcanzadas para el año 2015. Es importante destacar la Declaratoria del Milenio, expresada por las Naciones Unidas: “Reconocemos que en adición de nuestras responsabilidades con nuestras propias sociedades, tenemos una responsabilidad colectiva para resguardar los principios básicos de la dignidad humana, igualdad y equidad a nivel global. Como líderes tenemos por consiguiente una obligación con todos los seres humanos que pueblan el mundo, especialmente los mas vulnerables y, en particular, los niños del mundo, a quienes pertenece el futuro”. De esta declaratoria general se derivaron 8 objetivos, vinculados con 18 metas concretas y 48 incisos para cada meta. Para el efecto que nos ocupa mencionaremos exclusivamente la parte relativa al agua: Objetivo Num. 8: Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente Incisos: 9. Incorporar los principios del desarrollo sustentable en las políticas y programas nacionales y revertir las pérdidas. 10. Reducir a la mitad el porcentaje de personas que carezcan de acceso sostenible a agua potable y a servicios básicos de saneamiento para el año 2015. 11.Mejorar considerablemente la vida de por lo menos 100 millones de habitantes con viviendas precarias para el año 2010

Oferta y Demanda Global de Agua Disponibilidad Total de Agua: La disponibilidad total de agua del planeta Tierra depende de diversos factores propios del comportamiento del Ciclo del Agua, tales como: precipitación pluvial, evaporación, transpiración de las plantas y flujos de agua superficiales y del subsuelo. Diversas fuentes estiman que menos del 1% del total de

10 agua dulce existente en el globo es susceptible para uso humano, esto significa aproximadamente 12,500 Kilómetros cúbicos anuales o su equivalente 6,600 m3 por persona por año. Si la distribución del recurso fuera equitativo para todos los continentes y regiones dentro de ellos, podríamos concluir que no existe problema alguno de disponibilidad de agua en el mundo, ya que 6,600 m3 por persona por año es clasificado como una disponibilidad “MEDIA”, sin embargo la realidad es otra y existen grandes disparidades de disponibilidad entre regiones, como puede apreciarse en la Figura V con datos al año 2000. A medida que la población crece, la disponibilidad per capita del recurso se reduce, ya que la disponibilidad de agua sigue siendo constante. Figura V

En la figura anterior, puede apreciarse la desigual distribución del recurso agua entre diversas regiones del mundo, cabe destacar que mientras extensas zonas de Africa del Norte y Medio Oriente tenían en el año 2000 disponibilidad de 0 a 1000 m3 por habitante – año, regiones como Canadá, Costa del Pacifico Sudamericana y parte de la Península Escandinava disponían de 50,000 a 605,000 m3 por habitante por año. México aparece con una disponibilidad de solo 1,700 a 5,000 m3 por habitante año, con el agravante de que dentro del mismo país se da la misma situación de inequidad en la distribución por regiones, sin tomar en cuenta el problema adicional de distribución por estaciones del año. Demanda Total de Agua: En la actualidad, el agua utilizada para todos los propósitos excede los 3,700 m3 por año, la Agricultura es el usuario más importante con un consumo aproximado de dos terceras partes de la demanda proveniente de ríos, lagos y acuíferos subterráneos. La otra parte es agua de lluvia. Indudablemente que la

11 agricultura de riego contribuye significativamente a la producción agrícola total, sin embargo resulta extremadamente intensiva en consumo de agua. De 1960 a la fecha, el agua para uso agrícola se incrementó en un 60 a 70%; la industria utiliza aproximadamente un 20% y la demanda municipal para uso humano directo utiliza aproximadamente el 10% del total del agua disponible, obviamente, el incremento de la población mundial y el desarrollo de la industria han venido y continuarán incrementando la mencionada participación. En la Figura IV se aprecia la dinámica del consumo por sector con su proyección correspondiente. Acceso al Agua: Como se ha venido haciendo notar en los puntos anteriores, la disponibilidad de agua en el mundo no se distribuye equitativamente por regiones, por estaciones del año y de año con año. Aproximadamente tres cuartas partes de la precipitación pluvial anual ocurre en zonas donde habita solo una tercera parte de la población del globo y las dos terceras partes restantes residen donde la precipitación anual representa solamente una tercera parte del total. A vía de ejemplo, la cuenca del Amazonas recibe aproximadamente el 20% de la precipitación anual promedio y solo reside en ella 10 millones de personas. Algo similar se observa en la cuenca del Río Congo, donde la precipitación promedio de la cuenca es del orden del 30% del total de Africa y solo reside el 10% de su población. Debido a que gran parte del agua de las zonas de desarrollo en el mundo proviene de la precipitación pluvial estacional, muchos países no pueden utilizar mas del 20% de sus disponibilidad potencial de agua, como en el caso de India, donde 90% de su precipitación anual ocurre solo en la estación de los monzones y el resto del año la precipitación es muy pobre. Como agravante de lo anterior la intensidad de las precipitaciones puede variar significativamente de año a año, como consecuencia de comportamientos climáticos diversos, como el caso, muy conocido nuestro, del fenómeno de El Niño y sus efectos extremos en los volúmenes de precipitación pluvial en las Costas de Baja California. El International Water Management Institute estima que a la fecha hay 230 millones de personas en 26 países, incluyendo 11 países de Africa, afectadas gravemente por la escasez de agua. Cuando el abasto de agua es inadecuado se distinguen dos tipos de escasez, particularmente en los países en desarrollo: Escasez física de agua: Cuando el consumo de agua excede del 60% del abasto utilizable. Esto quiere decir que existe un reducido margen de maniobra. El abasto no es suficiente para satisfacer las demandas del sector agrícola, industrial y doméstico aún con los índices mas elevados de efectividad y productividad en su manejo. Escasez económica de agua: Cuando una región o país dispone de recursos suficientes para sus necesidades pero requiere de infraestructura como presas para

12 almacenaje y acueductos para su transporte. En concreto, requieren de inversiones masivas de capital y financiamiento para desarrollar esa infraestructura. Hay muchos países que por diversas razones de inestabilidad política, económica etc. no son viables para acceder a esos recursos. World Water Vision puntualiza que “en los últimos 100 años las cifras del agua han aumentado de forma exponencial, la población del mundo se ha triplicado pero el uso de agua para fines humanos se ha sextuplicado. Es posible que en la actualidad la mitad del agua dulce disponible es utilizada para fines humanos, dos veces más que hace 35 años. Visto de otro modo, toda el agua dulce sirve a necesidades humanas porque los ecosistemas proporcionan bienes y servicios a la humanidad, mas allá del agua que obviamente se utiliza para beber y asearnos, para producir alimentos y para fines industriales” En concreto, “hoy existe una crisis del agua, pero es una crisis de manejo. Hemos amenazado nuestros recursos hídricos con instituciones deficientes, mal gobierno, incentivos inadecuados o ausencia de los mismos y deficiente asignación de recursos. De todo ello podemos concluir en dos opciones: o continuamos como hasta ahora haciendo lo de siempre y agravar y ahondar la crisis mañana o podemos iniciar un movimiento para pasar de la visión a la acción haciendo que el agua se convierta en la responsabilidad de todos y cada uno de los habitantes del planeta”. Esta toma de conciencia conducirá a la elaboración de políticas y marcos legislativos e institucionales nuevos con el fin de servir a los intereses del género humano y del planeta Tierra, con eficacia, eficiencia y equidad. De no hacerlo así no debemos sorprendernos de que en un futuro muy cercano la situación conduzca a las guerras del agua entre regiones y países, sobre todo en aquellos que comparten cuencas hídricas y ríos. La problemática del agua a nivel mundial, por países y por regiones, requiere de evaluar con la seriedad que la magnitud del problema implica, aspectos cruciales como los siguientes; • • • • • • • •

Limitar la expansión indiscriminada de la agricultura de irrigación. Aumentar sensiblemente la productividad del agua. Aumentar el almacenamiento del agua, donde las condiciones lo permiten. Asegurar la calidad del agua (eliminando las causas de contaminación). Reformar las instituciones que administran los recursos hídricos. Incrementar la cooperación donde existen cuencas internacionales. Valorar las funciones de los ecosistemas. Apoyar y promover la innovación.

Finalmente, enfrentar esa problemática con responsabilidad requiere necesariamente, de una visión integral; no es factible llegar a soluciones efectivas, con visiones parciales, no es simplemente mover agua de un lado a otro, desalar agua de mar o reducir fugas en los sistemas Municipales de distribución. Resolver el problema implica

13 atender con seriedad y eficacia la coordinación de por lo menos los ocho puntos antes listados. No olvidemos que todos los días crece la población mundial y la disponibilidad de agua per capita disminuye. Cabe hacernos algunas preguntas: ¿Existe algún lazo de unión entre estos complejos elementos del problema del agua? ¿Existen políticas que puedan hacer la diferencia entre una mujer en África que tiene que caminar quizá kilómetros para encontrar agua, con la que dispone de sistemas de suministro de agua como San Diego? ¿En alguna forma, son las grandes presas, el agua embotellada, la desalinización o la conservación, las respuestas al problema? ¿Puede el sector privado hacer que las cosas sucedan donde el sector público ha fallado irremisiblemente en su responsabilidad de satisfacer las necesidades del agua de miles de millones de personas? Estas son algunas de las preguntas que al inicio del Siglo XXI siguen clamando por respuestas. Aquí en nuestro planeta el agua es algo más que un elemento químico; el concepto está imbuido de profunda importancia cultural, política, ambiental y religiosa. En la medida que seamos capaces de descifrar esta complejidad podemos tener una esperanza de continuar hacia adelante, poniendo un esfuerzo mayúsculo para hacer frente al reto del problema. Agua para todos.

EL AGUA EN MEXICO Antecedentes Hablar de agua en México requiere iniciar con su marco jurídico básico. La Ley de Aguas Nacionales establece en su Artículo Primero: “La presente ley es reglamentaria del artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de aguas nacionales; es de observancia general en todo el territorio nacional, sus disposiciones son de orden público e interés social y tiene por objeto regular la explotación, uso o aprovechamiento de dichas aguas, su distribución y control, así como la preservación de su cantidad y calidad para lograr su desarrollo integral sustentable”. Mas adelante la misma ley establece en su Artículo Segundo: “las disposiciones de esta ley son aplicables a todas las aguas nacionales, sean superficiales o del subsuelo”. Finalmente y para terminar con las disposiciones legales relevantes para efectos de este análisis, en su Artículo Cuarto establece: “La autoridad y administración

14 de aguas nacionales y de sus bienes públicos inherentes corresponde al Ejecutivo Federal, quién la ejercerá directamente o a través de la “Comisión”. Con base en lo anterior es claro que todo lo que se refiera a aguas superficiales y subterráneas corresponde a la Nación, quién actúa generalmente a través de la Comisión Nacional del Agua, conocida como CNA ó CONAGUA. Siguiendo las palabras textuales de la publicación “Estadísticas del Agua en México 2006” que al definir su Visión de Sector a la letra dice: “Considerando la problemática actual y la trascendencia del recurso en el bienestar y el desarrollo del país, aspiramos a ser; •

“Una nación que cuente con seguridad en el suministro del agua que requiera para su desarrollo, que la utilice de manera eficiente, reconozca su valor estratégico y económico, proteja los cuerpos de agua y preserve el medio ambiente para las futuras generaciones”

Enseguida, el mismo documento destaca la Misión, Visión y Objetivos de CONAGUA como órgano administrativo desconcentrado de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) quien define su misión en la siguiente forma: •

“Administrar y preservar las aguas nacionales, con la participación de la sociedad, para lograr el uso sustentable del recurso”

Y su visión como sigue: •

Ser un órgano normativo y de autoridad con calidad técnica y promotor de la participación de la sociedad y de los órdenes de gobierno en la administración del agua”

Finalmente, para terminar con los antecedentes normativos, transcribimos los objetivos de CONAGUA, consignados en el mismo documento antes mencionado:

Objetivo 1: Fomentar el uso eficiente del agua en la producción agrícola Objetivo 2: Fomentar la ampliación de la cobertura y calidad de los servicios de agua potable, alcantarillado y saneamiento Objetivo 3: Lograr el manejo integrado y sustentable del agua en cuencas y acuíferos Objetivo 4: Promover el desarrollo técnico, administrativo y financiero del sector hidráulico Objetivo 5: Consolidar la participación de los usuarios y la sociedad organizada en el manejo del agua y promover la cultura de su buen uso

15 Objetivo 6: Disminuir los riegos y atender los efectos de inundaciones y sequías

Si los lectores se preguntan, cual es el caso de recorrer todos los antecedentes antes mencionados, la respuesta es tan simple como que las visiones, misiones y objetivos constituyen el marco de referencia sobre el cual iremos juzgando lo atinado de su cumplimiento y concluyendo en donde se ubica la responsabilidad en caso contrario. Finalmente, dentro del mismo marco de referencia, CONAGUA considera: 1. Que la participación de la sociedad es un factor indispensable para alcanzar las metas que se han trazado para cada cuenca del país, ya que son las comunidades quienes pueden exigir la continuidad que requiere el cumplimiento de las metas planteadas. 2. Adicionalmente considera que: • • •

El agua genera bienestar social (servicio de suministro de agua. El agua propicia desarrollo económico (como insumo de la actividad agrícola, generación de energía eléctrica e industria). Al preservarla se cierra el concepta de sustentabilidad (preservación del recurso acuífero en cantidad y calidad para las generaciones presentes y futuras y las necesidades de la flora y de la fauna de cada región).

Como consecuencia del marco de referencia anterior es importante destacar, al cierre del año 2005, el grado de avance en la consecución de algunas de las metas de CONAGUA con base en algunos indicadores relevantes: Del lado positivo, vale hacer notar que el 89.2 % del país cuenta con agua potable, el 85.6 % con alcantarillado y en el medio rural el 71.3 % tiene acceso a agua potable. Sin embargo para ese mismo año sólo se trata el 35.5 % del agua residual, con una meta planteada del 60 %, muy lejos del real. Y lo más grave, únicamente el 23.7 % de la superficie total irrigada en el país puede considerarse eficiente. Mas adelante abundaremos sobre la gravedad de esta ineficiencia. El Ciclo Hidrológico Por lo que se refiere al Ciclo Hidrológico del país, el 72 % del agua que llueva en el país se evo transpira (evaporación de los cuerpos y flujos de agua superficiales y la transpiración de las plantas) y regresa a la atmósfera, el resto fluye por los ríos y arroyos o se infiltra al subsuelo y recarga los acuíferos. A continuación se incluye un gráfico que ilustra con toda claridad los valores medios anuales de los componentes de dicho Ciclo Hidrológico, tomado de la publicación denominada “Estadísticas del Agua en México 2006”:

16 Valores medios anuales de los componentes del ciclo hidrológico (Cifras en hm3 = a 1,000,000 de metros cúbicos por hm3)

I = Importaciones de otros países 49.7 (Volúmenes de agua generados en países con quién compartimos cuencas) E = Exportaciones a otros países 0.43 (Volúmenes de agua que México debe entregar a Estados Unidos por el Tratado de 1944) Fuente: Subdirección General Técnica. CONAGUA. Los valores anteriores son promedios para el país en su conjunto por lo cual es importante destacar la enorme inequidad en materia de precipitación pluvial media anual para algunas entidades de la República durante el periodo 1941 – 2005: Media Nacional Tabasco Chiapas Baja California Baja California Sur

773.5 milímetros 2,405.8 1,968.9 203.7 176.2

Resulta dramático observar las diferencias de precipitación pluvial entre Tabasco y Chiapas, entidades con los niveles mas altos, y Baja California y Baja California Sur, entidades con los niveles mas bajos en el país.

17 La precipitación pluvial de Tabasco y la Media Nacional son 11.8 y 3.8 veces mayores que la de Baja California, respectivamente. Considerando que los recursos hidráulicos de un país se miden con base en la disponibilidad natural media de agua por habitante en un año, en esa disponibilidad natural media se toma en cuenta únicamente el agua renovable, es decir, el agua de lluvia que se transforma en escurrimientos de agua superficial y en recarga de acuíferos. Actualmente mas de la mitad de los países del mundo tiene una disponibilidad promedio baja y prácticamente un tercio de ellos ya padece de escasez. A continuación se incorpora cuadro que define las cuatro categorías de evaluación de la disponibilidad de agua, para países y regiones. Parámetros mundiales para la evaluación de la disponibilidad de agua

Categoría

MUY ALTA ALTA

Disponibilidad Mts3/habitante/año + de 20,001 10,001 a 20,000

MEDIA

5,000 a 10,000

BAJA

1,000 a 5,000

EXTREMADAMENTE BAJA

- de 1,000

México se encuentra catalogado entre los países del mundo cuya disponibilidad promedio de agua es BAJA y las tendencias para el año 2025 no son alentadoras ya que a medida que crece la población, la disponibilidad por habitante/año continuará demeritándose, ya que la disponibilidad total del recurso es prácticamente constante. En 1955, la disponibilidad de agua en el país era de 11,500 mts3/habitante/año, para 2003 había descendido a 4,547 y se estima que para 2020 disminuirá a 3,500 mts3/habitante/año. En otras palabras, hace menos de 50 años disponíamos de más del doble de agua por persona. La situación es aún más complicada si se toma en cuenta la desigualdad de su distribución geográfica, donde destacan dos grandes zonas de disponibilidad del recurso: a) El sureste y b) El norte, centro y noroeste del país, donde la disponibilidad natural del sureste es 7 veces mayor que la del resto del país, sin

18 embargo en la zona norte, centro y noroeste se asienta el 77 % de la población, se genera el 85 % del PIB, (Producto Interno Bruto), y solo se cuenta con el 32 % de la disponibilidad de agua natural media. Consecuentemente cuatro regiones hidrológicas cuentan con el 68 % de la disponibilidad natural media con solo el 23 % de la población y el 15 % del PIB. A continuación se inserta un mapa donde se muestran las 13 Regiones Hidrológico Administrativas en que se ha dividido el país con sus correspondientes disponibilidades de agua.

Contraste entre el desarrollo y la disponibilidad de agua

Fuente: Subdirección General de Programación. CONAGUA.

19 En este orden de cosas, la disponibilidad media de agua por Región Hidrológica Administrativa, en el año 2005 se aprecia en el siguiente cuadro elaborado por la Subdirección General Técnica de CONAGUA, que por su importancia se incluye en su totalidad:

Si volvemos a los Parámetros de evaluación mundial sobre la disponibilidad de agua, concluimos que a siete de las trece Regiones Hidrológicas en que se divide el país le corresponde la categoría de “MUY BAJA” (1000 a 5000 Mts3/habitante/año), donde la Península de Baja California se ubica en la parte mas baja del rango, muy cercana al nivel de clasificación de “EXTREMADAMENTE BAJA” (Menos de 1000 Mts3/hab./año) con una cifra de 1,318 Mts3, la tercera mas baja del país después de la Región VI, Río Bravo con

20 1,212 Mts3 y la Región XIII, Aguas del Valle de México y Sistema Cutzamala, la mas crítica, con clasificación de “EXTREMADAMENTE BAJA” disponibilidad, con 192 Mts3/hab./año. Únicamente dos regiones: la XI - Frontera Sur y la X - Golfo Centro presentan disponibilidades clasificadas como MUY ALTA, con volúmenes superiores a los 10,000 Mts3/hab./año. En la clasificación mundial, México esta considerado como un país con disponibilidad “BAJA” de agua con 4,573 Mts3/habitante/año, los países más ricos en este recurso son Canadá y Brasil. Un segundo elemento de medición de la disponibilidad natural media de agua, considerado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es el denominado “Grado de presión sobre el recurso hídrico” cuyo cálculo resulta de la división del Total de Agua Concesionado entre la Disponibilidad media de agua. De esta operación se derivan cuatro niveles de clasificación, a saber: un Grado mayor del 40 % es calificado como “Fuerte presión”, “Media Fuerte” cuando el porcentaje se ubica entre el 20 y el 40 %, “Presión Moderada” entre el 10 y el 20 % y “Escasa Presión” cuando el porcentaje es menor del 10 %. A continuación se inserta un cuadro, elaborado por la Subdirección General de Programación de CONAGUA, que ilustra con toda claridad los grados de presión sobre el recurso hídrico calculado con datos correspondientes al año2005:

De nuevo se confirma la gravedad de la problemática del agua en el país, consecuencia de la inequitativa distribución del recurso hídrico entre las diversas regiones hidrológico administrativas.

21 Mientras la Península de Baja California se ubica con un grado de presión clasificada como ”Fuerte” de 86 %, la mas alta del país, casi igual que la Región Noroeste con 80 %, las regiones Pacifico Sur, Golfo Centro, Frontera Sur y Península de Yucatán gozan de una situación de “Escasa” presión sobre su recurso hídrico, con niveles de clasificación por abajo del 6 %. Enorme la desigualdad. Aguas Superficiales De acuerdo a las cifras de CONAGUA, en los ríos del país fluyen aproximadamente 400 Kms3 de agua por año, incluyendo importaciones y deduciendo exportaciones, de los cuales el 87 % fluye a lo largo de los 39 ríos mas importantes del país y cuyas cuencas ocupan el 58 % de su extensión territorial. El 65 % del flujo superficial se concentra en siete ríos: Grijalva – Usumacinta, Coatzacoalcos, Balsas, Pánuco, Santiago y Tonalá, la superficie de sus cuencas cubre el 22 % del territorio nacional. De los ríos correspondientes a la vertiente del Pacifico, 22 en total, presentan flujos del orden de 84,225 hms3 anuales (1 hm3 igual a 1,000,000 de mts3) con una superficie de cuenca de 463,200 Kms2. Dentro de la misma vertiente Pacífico, el Río Balsas es el que presenta los mayores flujos de la región con 24,273 hms3 por año, seguido por el Río Santiago con 7.849 hms3, el Verde con 5,937 hasta el mas pequeño, el Huicicila con solo 591 hms3 anuales. En la Región Hidrológica I – Península de Baja California, únicamente se registra el Río Colorado con flujos del orden de 1,867 hms3 por año y un área de cuenca de 3,840 Kms2. Los ríos principales de la vertiente del Golfo de México, 14 en total, presentan flujos del orden de 250,835 hms3 por año con un área de cuenca de 539,173 Kms2. Por nivel de flujo destacan, en primer lugar, el Grijalva – Usumacinta con 115,536 hm3, el Papaloapan con 44,662, el Río Bravo con 7,280, hasta el más pequeño, el San Fernando con solo 876 hms3. Finalmente los principales ríos de la vertiente interior: Lerma, Nazas y Aguanaval contribuyen, en conjunto, con un flujo anual de 7,416 hm3, con un área de cuenca de 136,355 Kms2.

22 Aguas Subterráneas (Acuíferos) México es altamente dependiente de sus aguas subterráneas dada la magnitud de su contribución al total de agua utilizado en el país; el 36 %, 27,737 hms3, del volumen total concesionado para usos fuera del cuerpo de agua tiene ese origen. Para fines administrativos del agua, de acuerdo a la publicación de Diario Oficial de fecha Diciembre 5 del 2001, el país se ha dividido en 653 acuíferos. La Península de Baja California cuenta con 87 acuíferos, de los cuales, con cifras al 2005, 7 se encuentran en condición de sobreexplotación, 9 con intrusión marina y 4 salobres. A nivel nacional, de los 653 acuíferos registrados, 104 están clasificados como sobreexplotados, 17 con intrusión marina y 17 salobres. De ellos se extraen 27,553 hms3 y tienen en conjunto una recarga anual de 76,984 hms3. De estos acuíferos se extrae el 60 % del agua subterránea para todos los usos. A continuación se incorpora un mapa en el cual se señalan las disponibilidades medias anuales de agua en las diversas regiones del país, cabe destacar las zonas en color rojo donde se concluye que no hay disponibilidad de agua en los acuíferos.

23 Usos del Agua Para hablar de usos del agua en México debemos distinguir dos tipos: •

Usos fuera del cuerpo de agua o usos consuntivos. Es el uso en el cual por las características del proceso hay pérdidas volumétricas de agua. Es decir, la cantidad de agua que sale de la fuente de abastecimiento es mayor a la que regresa, tales como: el uso industrial, agrícola, pecuario y público urbano (doméstico, comercial e industrial que se distribuye por la red urbana).

•

Usos en el cuerpo de agua o usos no-consuntivos, En este uso no hay pérdidas, la cantidad de agua que sale de la fuente de abastecimiento, es la misma o casi la misma que retorna del proceso. Ejemplos de este tipo de uso son los que predominan en hidroeléctricas, acuacultura, navegación y uso ambiental.

Una vez aclarado lo anterior, de aquí en adelante nos referiremos a las cifras correspondientes a usos fuera del cuerpo de agua o consuntivos. Los tres grandes rubros de uso de agua están constituidos por, a) la agricultura, b) abastecimiento público y c) la industria autoabastecida. En el siguiente cuadro se aprecian los volúmenes de agua concesionada para esos usos. (Para efectos de apreciación, recuérdese que 1 hm3 es igual a 1,000,000 de mts3)

24 Para tener una visión aún mas clara de las proporciones en que los tres grandes sectores antes mencionados utilizan el agua, a continuación se inserta la gráfica que muestra porcentualmente su distribución:

Como puede apreciarse, el sector agrícola es el gran usuario del agua disponible en el país, utilizando aproximadamente 5.5 veces mas que el abastecimiento público, desafortunadamente es también el sector que reporta los mayores desperdicios ya que solo en los sistemas de conducción de los distritos de riego, en el período 1990 a 2005, han operado a eficiencias del orden de 61.6 % en 1990, el nivel mas bajo del período, 65.5 % en 1999, su nivel mas alto y 62.8 en el 2005, lo cual significa que durante esos años, los niveles de desperdicio han estado consistentemente muy cercanos al 40 %. Con este desperdicio se podría haber dado servicio público a un México con aproximadamente 500 millones de habitantes. Otras fuentes consultadas sostienen que los niveles de desperdicio de agua en el sector agrícola son del orden del 57 %, volúmenes que se pierden por causa de la deficiente infraestructura de conducción y la utilización de métodos obsoletos e ineficientes de riego. Aun cuando el sector agrícola es el mayor desperdiciador de agua en el país, no quiere decir que los sistemas de distribución pública urbana sean un dechado de eficiencia. De acuerdo a la publicación “El Agua en México, lo que todas y todos debemos saber”, con datos del 2005, la dotación promedio de agua en el medio urbano en el país es de 250 lts/habitante/día y en general, por fugas de diferente tipo y origen, se pierde en los sistemas cerca de 100 lts/habitante/día. Tijuana

25 reporta un consumo de 176 lts/hab./día, León Guanajuato 116, Monterrey 180, Mexicali 220 y Naucalpan Estado de México 225 lts/hab./día. Las causas por las que se desperdicia esta agua, la más cara por ser supuestamente tratada, pueden resumirse en tres: a) Deficiencias en la operación e infraestructura para la captación y distribución del agua, b) Malos hábitos de consumo de los usuarios y c) Falta de cultura de re-uso, separación y aprovechamiento del agua de lluvia. Volviendo al sector agrícola, de los aproximadamente 20 millones de hectáreas de superficie cultivada de México 6.4 millones son de irrigación, lo que coloca al país entre los primeros del mundo en superficie irrigada, sin embargo los niveles de desperdicio de que hablábamos antes, son producto de una operación ineficiente, por prácticas inadecuadas del uso del agua en las parcelas (riegos por inundación), por problemas institucionales (falta de coordinación en la elaboración de políticas públicas) y cultivos inapropiados (alfalfa en zonas áridas). La productividad por hectárea es baja, un porcentaje considerable de los distritos de riego no es rentable y los precios de sus productos no son competitivos. La ineficiencia del sector agrícola Mexicano se manifiesta claramente en las cifras, pues consume el 76.75 % del agua del país, la cual se le proporciona a costos irrisorios, se le subsidia, entre otros muchos, la electricidad para el bombeo, el diesel, está exento del cobro de derechos por concepto de aguas residuales, goza de una tasa menor de impuesto sobre la renta que cualquier otra actividad productiva y solo genera el 3% del producto interno bruto. Cabe hacer la pertinente aclaración de que esta situación no es privativa de México sino que es práctica común en casi todo el mundo, incluidos países desarrollados como los Estados Unidos, Canadá y Francia. Afortunadamente empieza a reconocerse la importancia de nivelar la tierra para reducir las pérdidas, el uso de sistemas de riego por goteo que virtualmente elimina el desperdicio y los sistemas de riego por aspersión que evitan el riego excesivo. El reciclado de aguas residuales se está convirtiendo en una práctica muy favorecida en los países industrializados. De acuerdo al programa de Detección y supresión de fugas de Agua Potable del Distrito Federal, en 1977 las pérdidas de agua potable en las redes primarias y secundarias de la Ciudad de México se calcularon en el 37 % del total del agua abastecida, lo cual representa mas de 12 mts3/segundo, equivalente a un total anual del orden de 380 millones de metros cúbicos de agua potable. Estas pérdidas se deben principalmente a la antigüedad de las tuberías de distribución y a las fisuras y fracturas originadas por hundimientos del terreno relacionados con los procesos de instalación, así como a la mala calidad de algunos materiales o a las conexiones defectuosas y tomas clandestinas.

26 Hoy en día, enero del 2006, en la Ciudad de México se desperdician 5,000 litros por segundo y se reciben entre 22 mil y 25 mil reportes de fugas de agua al año. Para muestra con un botón… Los enormes desperdicios de agua no terminan solo en eso, sino que traen consigo el agravante de que las aguas desechadas por el consumo irracional en cualquier ámbito, agrícola, industrial, doméstico, etcétera, implica la mezcla de aguas limpias con aguas sucias. Los escurrimientos de las zonas rurales y las provenientes de centros urbanos vienen saturadas de substancias tóxicas como: metales pesados, pesticidas, sales, etcétera, que lamentablemente descargan en lagos y océanos como parte del ciclo hidrológico. En la actualidad es alarmante la contaminación de importantes depósitos de aguas superficiales por aguas negras, materiales de empaque y residuos provenientes de actividades industriales, entre otros. Siguiendo con la línea del agua desperdiciada, en México se trata alrededor del 5 % del total, esto se debe fundamentalmente a que la mayor parte del consumo de agua es para uso agrícola, sector en el cual no se cuenta con plantas de tratamiento y el agua se descarga cruda a drenes, ríos y canales, sin tratamiento alguno. Aun cuando la Ley de Aguas Nacionales obliga a los usuarios a dar tratamiento, la disposición está muy lejos de cumplirse a cabalidad. Monterrey es el único caso en el país donde se cuenta con capacidad para tratar el 100 % de las aguas residuales; en la Ciudad de México solo se trata el 20%. La unidad de monitoreo de la calidad del agua de CONAGUA reporta que en el año 2004 el 26 % de los ríos, lagos y embalses son de buena calidad, en tanto que el 74 % restante presenta diversos grados de contaminación, donde destacan sustancias tales como: materia orgánica, nutrientes como nitrógeno y fósforo y microorganismos del tipo coniformes totales y coniformes fecales. En zonas industriales es común encontrar en el agua residual, contaminantes como metales y derivados de hidrocarburos. Los resultados de la evaluación de la calidad del agua en el país muestran que las cuencas de ríos con mayor grado de contaminación son las del Lerma, Alto Balsas, Río Colorado y Alto Pánuco. Entre las cuencas con menores grados de contaminación destacan: las del Grijalva, Medio y Bajo Pánuco, Tehuantepec, Soto la Marina y Yaqui. En resumen, las principales causas de contaminación en México son: •

Practicas Agrícolas: Donde los principales contaminantes son los plaguicidas, llevados hasta los ríos por la lluvia y la erosión del suelo que de una u otra forma llegan hasta los mares, expandiendo el efecto contaminante.

27 • •

•

Urbanización: Las descargas de aguas residuales de origen doméstico y público. Descargas Industriales: Descargas generadas por las actividades de extracción y transformación de materias primas en bienes de consumo requeridos por la población. Destacan como las más contaminantes la industria azucarera, química, petrolera, metalúrgica y de papel y celulosa. Sector Pecuario: Efluentes de las instalaciones dedicadas a la crianza, engorda y sacrificio de ganado mayor y menor.

Sin embargo, una cantidad cada vez más alta de problemas y deficiencias en la calidad del agua se debe a la contaminación generada por los seres humanos. Conflictos por el Agua A continuación nos permitimos transcribir fragmentos de un estudio denominado: ”Los conflictos por agua en México” realizado por Jaime Sáenz Santa María y Mariana Becerra Pérez, que ilustran la problemática que ya se está viviendo en el país por causas relacionadas con el agua: “El crecimiento poblacional y el crecimiento económico han ejercido mayor presión sobre las reservas de agua en México, al punto que el volumen demandado de agua siempre es mayor que el volumen suministrado, lo que obliga al gobierno a decidir a quién dejar sin este recurso, generando problemas distributivos. La competencia por el recurso es ya causa de conflictos a diferentes escalas y a diferente intensidad, presentándose tanto entre una misma comunidad, entre diferentes comunidades, municipios e incluso estados. En un intento por controlar el uso del agua y de evitar los conflictos, el marco institucional ha ido cambiando, sin conseguir del todo una reforma acorde con el nivel del problema. La gráfica siguiente muestra que el 49% de las notas de conflicto se presentaron en el Distrito Federal y en el Estado de México, siguiéndole la región del Norte del país y el Sur, con 14% y 13% respectivamente.

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Los mecanismos de mercado, precios y tarifas, han sido utilizados de manera limitada por las agencias gubernamentales para regular la demanda. Se han preferido, en cambio, estrategias que realizan grandes inversiones para ampliar la oferta (aun con costos ambientales altos) y, cuando aún persiste la escasez crónica o aguda, se utiliza algún mecanismo de racionamiento. En México el crecimiento económico ha ocurrido sin tomar en cuenta plenamente las señales de escasez del agua. La concentración de la población y la actividad económica han creado zonas de alta escasez, no sólo en las regiones de baja precipitación pluvial, sino también en zonas donde eso no se percibía como un problema al comenzar el crecimiento urbano, o el establecimiento de agricultura de riego. Esta situación no es exclusiva de México ni de la época actual, los conflictos por esta causa tienen una larga historia, sin embargo hoy en día la preocupación ha ido en aumento ante el incremento de la demanda. A nivel mundial el programa de las Naciones Unidas para el medio ambiente, en cuya elaboración participaron 200 científicos de 50 países, llegaron a la conclusión de que la escasez de agua es uno de los dos problemas más apremiantes del nuevo milenio, seguido por el cambio climático”. Es importante hacer notar que los problemas del agua están más relacionados con la mala administración del recurso que con su escasez, de allí la necesidad de atacar el problema desde todos los ángulos, de manera integral, para evitar que una acción aparentemente beneficiosa para un sector redunde en consecuencias nocivas para otro. A continuación nos permitimos transcribir unos párrafos de la publicación “La Gestión del Agua en México – avances y retos”, en su capitulo de retos, por su visión objetiva de la problemática del agua en nuestro país, que ilustran aún más la importancia de enfrentar la problemática que vivimos:

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“El desarrollo de nuestro país depende de la disponibilidad del agua; todas las actividades socio-económicas, las localidades, los grupos sociales y los ecosistemas dependen de ella, por esta razón, resulta estratégico elevar la política pública en materia hídrica al mas alto nivel de la agenda política y continuar los esfuerzos para materializar dos de sus principios normativos fundamentales: El desarrollo económico y social con equidad y la sustentabilidad ambiental.” México experimenta ya, en algunas regiones, grados de escasez de agua que amenazan con poner límites a su desarrollo, el problema de sobreexplotación de sus acuíferos es la más clara manifestación de ello.

Disponibilidad natural media de agua per cápita por región hidrológica en el año 2030

Para lograr una mayor seguridad en la disponibilidad de agua será necesario armonizar las políticas de desarrollo económico y social y de ordenación territorial con las políticas hídricas. Para los próximos años la definición de fuentes alternas de suministro, la disminución de los niveles de abatimiento y el mantenimiento del equilibrio entre explotación y recarga de los acuíferos, la eficientización de los sistemas de distribución y el desarrollo de técnicas que permitan predecir con oportunidad los efectos del cambio climático sobre el ciclo hidrológico, serán asuntos que necesariamente tendrán que ser evaluados integralmente, desde todos sus ángulos, para llegar a soluciones efectivamente beneficiosas para cada región y el país en su conjunto.

30 Es necesario acabar con la improvisación y el predominio de los intereses políticos o de grupo en un campo donde debe prevalecer una visión científico – técnica del problema y sus soluciones. La dirección de las empresas de gobierno dedicadas a la administración del agua no deben ser campos de experimentación de políticos improvisados que anteponen intereses electoreros a las necesidades vitales de la población. Resumen Para terminar esta sección del agua en México pretenderemos concretar con unos cuantos comentarios, lo que se dijo a lo largo de las páginas anteriores: 1. Un país que enfrenta una reducción tan fuerte de la disponibilidad natural media de agua per cápita de 9,791 lts/habitante año en 1970 a 4,573 lts en el año 2005 y con una proyección de 3,705 lts al año 2030 es en definitiva, un país con serios problemas para el futuro. 2. Los retos son mayúsculos y las inversiones en infraestructura tendrán que ser enormes, en el rango de los miles de millones de dólares. Seguramente que la disponibilidad de fondos públicos serán insuficiente, por lo cual, el sector privado tendrá que jugar un papel importante en el desarrollo y operación de infraestructura básica dentro de un marco regulatorio que con toda transparencia defina su papel en una actividad de servicio público que por naturaleza es monopólico. 3. La decreciente disponibilidad de agua, consecuencia del incremento de la población, se agrava cuando se observa desde el punto de vista de la inequitativa distribución del recurso. De las trece Regiones HidrológicoAdministrativas en que se divide el país, para el año 2005, ocho tenían disponibilidades menores de 5001 Lts/hab/año, clasificada de acuerdo a la escala de la ONU como ”MUY BAJA”: Las estimaciones para el año 2030 son realmente preocupantes ya que tres de dichas regiones tendrán una disponibilidad de agua inferior a 1,000 Lts/habitante/año, cuya clasificación de acuerdo a la misma escala es de “EXTREMADAMENTE BAJA”, La Península de Baja California se encuentra en esta clasificación con una disponibilidad estimada de 775 Lts/habitante/año. 4. Otro de los elementos que se suman a la gravedad del problema son los niveles de contaminación de aguas superficiales y subterráneas y el bajo nivel de tratamiento de aguas residuales de todos los orígenes, que contribuyen a incrementar esa contaminación. 5. Finalmente, tenemos encima otro fenómeno, el calentamiento global, prácticamente impredecible en cuanto a su magnitud, que incidirá

31 irremisiblemente en los niveles de disponibilidad de agua en el país en lo particular y en el planeta en lo general. 6. Si se quiere ser muy crítico, conviene comparar las visiones y objetivos del sector agua, anotados al inicio de este artículo, para que cada quién saque sus conclusiones sobre los progresos reales y lo que nos falta por hacer.

EL AGUA EN BAJA CALIFORNIA

Para llegar a la parte medular del problema del agua en nuestra región, creímos necesario hacer el largo recorrido de las páginas anteriores con el único objeto de ubicarnos en la problemática del agua del planeta; si somos parte de él, no podemos ignorar lo que le aqueja sin ser irresponsables en valorar nuestra propia situación, en este pequeño mundo de Baja California. Nuestro caso, Baja California, es especialmente dependiente de allende nuestra frontera, ya que la principalísima fuente de suministro de agua, por no decir que la única confiable, es una cuenca binacional, la del Río Colorado, que compartimos con siete estados de la Unión Americana. Lo que pase en esta cuenca, nos guste o no, repercutirá inevitablemente en mayor o menor grado en nuestro destino como estado. No podemos, por lo tanto, hablar del agua en Baja California sin entender, por lo menos someramente, la cuenca del Río Colorado, desde su origen hasta su descarga al Golfo de California.

La Cuenca del Río Colorado La denominada Cuenca del Río Colorado es la región que, en mayor o menor escala, se beneficia del agua proveniente del río a lo largo de su trayecto. Para efectos ilustrativos se incorpora un mapa que permite apreciar con claridad su magnitud.

32 Cuenca binacional del Río Colorado

Históricamente, desde 1922, la cuenca del Colorado se ha dividido en la llamada “Cuenca Alta”, que comprende los estados de Wyoming, Utah, Colorado y Nuevo México, en la Unión Americana y la “Cuenca Baja” que incluye California, Arizona y Nevada también en la Unión Americana y Baja California en México. Con base en acuerdos interestatales y el Tratado Internacional de Límites y Aguas celebrado con México en 1944, la Suprema Corte de los Estados Unidos decretó que 16.5 millones de acres-pie anuales (20,361 millones de metros cúbicos), de las aguas presentes y futuras del río se destinarían para su uso en las Cuencas Alta y Baja de ese país y 1.5 millones de acres-pie (1,850 millones de metros cúbicos) corresponderían a México. En este contexto se

33 asignaron al Estado de California USA 4.4 millones anuales de acres-pie (5,429.6 millones de metros cúbicos). Como complemento del plano anterior, a continuación se incorpora, a mas detalle, el correspondiente a la parte Mexicana de la cuenca, (desde el punto de recepción en la Presa Morelos hasta su desemboque en el Golfo de California:

El Río Colorado, a lo largo de su trayecto de 2,300 kilómetros, desde las Montañas Rocallosas hasta el Golfo de California, proporciona agua a más de 30 millones de personas y constituye la arteria vital del desarrollo de la región más árida del suroeste de los Estados Unidos y del Valle de Mexicali en México. Desafortunadamente, al inicio del Siglo XXI la cuenca del Río Colorado está entrando en una coyuntura crucial debido a la necesidad de incorporar a la reglamentación y administración del agua otros valores que anteriormente parecían irrelevantes, tales como: La protección al ambiente, el uso recreacional, la protección de la flora y fauna acuáticas, la calidad del agua y otros nuevos de índole ecológico y cultural.

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Bajo la actual reglamentación y sistemas de administración, no habrá suficiente agua para satisfacer las demandas futuras de la población, proteger las funciones ecológicas del río y evitar los conflictos que se suscitarán en un futuro muy cercano. Sin embargo, para llegar a encontrar soluciones óptimas para el futuro de quienes vivimos en y de la cuenca, solo podrán lograrse: 1) Contemplando el río como un todo, y 2) Con la cooperación de todas las partes afectadas, independientemente del estado o país donde se ubiquen. Hasta el día de hoy, la Cuenca del Río Colorado se ha reglamentado a través de una larga historia de conflictos desde 1922 hasta la fecha, donde un gran número de acuerdos, pactos interestatales, minutas, actas, etcétera y el tratado internacional de 1944 entre México y Estados Unidos, en conjunto, han integrado el cuerpo normativo que hoy se conoce como “Ley del Río”, que regula las acciones y conflictos de los participantes de la cuenca. El tema de la Cuenca del Río Colorado es amplio y apasionante, sin embargo para efectos de este análisis cerraremos este apartado con la estadística de las entregas de agua procedente del Río Colorado a nuestro país que se destinan para uso urbano e irrigación y los volúmenes de agua recibida en los períodos de excedentes, que con toda claridad se aprecian en la siguiente gráfica:

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Disponibilidad de Agua La estadística sobre la disponibilidad de agua del Estado de Baja California se complica en la medida que la información publicada se refiere a la Región Hidrológica-Administrativa I, que comprende la península en su conjunto (Baja California y Baja California Sur), sin embargo trataremos de anotar con toda claridad cuando nos referiremos a la Región y cuando al Estado. La disponibilidad de agua del Estado de Baja California depende de las siguientes fuentes: 1. Precipitación Pluvial La precipitación registrada por la Subdirección Técnica de CONAGUA para el estado, ha sido del orden de 203.7 mm por año, en el período comprendido entre los años 1941 – 2005, el segundo mas bajo del país después de Baja California Sur con 176.2 mm. Situación que contrasta radicalmente con estados como Tabasco, el más alto del país, con 2,405.8 mm, Chiapas con 1,968.9 y Oaxaca con 1,518.8. En resumen, la precipitación pluvial de Baja California es 3.8 veces menor que la media nacional (773.5 mm) y 11.8 veces menor que Tabasco, estado que registra la mayor precipitación en el país, en el mismo período. No es por lo tanto extraño que el estado no cuente con ríos, mas allá del Colorado, cuyo origen se ubica a mas de 2,000 kms al norte, cuyo caudal no recibe contribución significativa alguna dentro del territorio del estado. Los bajos niveles de precipitación pluvial del estado son especialmente graves a la luz de la recarga de los acuíferos, cuyo caudal depende de las filtraciones de las lluvias, como se apreciará mas adelante en este análisis. A nivel Península de Baja California (Región Hidrológico-Administrativa I), la presión sobre el recurso hídrico es del 86 %, donde, de acuerdo a los estándares internacionales más del 40 % se considera FUERTE. Este indicador se calcula dividiendo el “Volumen Total de Agua Concesionada” entre la “Disponibilidad natural media de Agua” En hms3 por año ( 1 hm3 = 1,000,000 de mts3), la disponibilidad media total de agua para la Península en su conjunto fue de 4,423 hms3 en el año 2005, integrado por un escurrimiento natural superficial medio de 3,012 hms3 y una recarga de acuíferos del orden de 1,411 hms3. Con una población mas de 3.3 millones de habitantes, la disponibilidad natural media total de agua por habitante, en ese mismo año, fue de 1,318

36 mts3/habitante, nivel muy cercano al considerado en la clasificación de las Naciones Unidas como EXTREMADAMENTE BAJO. La gravedad de estos bajos niveles de disponibilidad se hace más apremiante si consideramos que la población crece día a día y la disponibilidad de agua, en el mejor de los casos, permanece invariable.

2. Aguas Subterráneas (Acuíferos) El Programa Nacional Hidráulico 2001-2006 dice textualmente, a este respecto, lo siguiente; “La región, se refiere a la península en su conjunto, depende en gran medida de sus recursos de aguas subterráneas. La recarga de los acuíferos es de unos 1,400 hms3 por año, cuando las extracciones ya superan esa cantidad. De los 88 acuíferos de la región, los del Valle de Mexicali, Mesa Arenosa, Santo Domingo y Vizcaíno aportan 63 % del volumen total de agua de la región, el volumen restante se distribuye en 84 acuíferos pequeños dispersos en toda la península” “Además de este volumen, anualmente se dispone de 1,850 hms3 por año provenientes de Estados Unidos de América, generados en la cuenca del Río Colorado, conforme al Tratado de imites y aguas de 1944, volumen que representa prácticamente 160% del escurrimiento superficial medio anual de la propia región y la mayor fuente del recurso para las poblaciones fronterizas” “La capacidad de almacenamiento de la región es de 220 hms3, distribuida en siete presas principales: tres de almacenamiento en el estado de Baja California y cuatro para el control de avenidas y recarga de acuíferos en el estado de Baja California Sur. La presa Abelardo L. Rodríguez sobre el Río Tijuana, con una capacidad de 138 hms3, solo se llena en promedio una vez cada diez años” Es pertinente hacer notar que en ese documento se distinguían como problemas centrales de la región (la península en su conjunto) los siguientes: (1) Sobre explotación de acuíferos, (2) Calidad del agua, (3) Deficiente tratamiento de aguas residuales, (4) Baja eficiencia en el riego, a lo que nosotros nos permitimos añadir un quinto, incomprensiblemente soslayado, (5) Aseguramiento del abasto de agua de la Zona Costa. Una vez ubicados en el contexto general del Plan Nacional Hidráulico, entraremos en el frío lenguaje de los números, más allá de las indudablemente buenas intenciones. No hay duda que ha habido grandes logros en materia de mejoras de cobertura en distribución y tratamiento de aguas residuales, el tan llevado y traído crédito Japonés ha proporcionado gran parte del fondeo para ello, la infraestructura hidráulica urbana.

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De 1990 al 2005 la cobertura de agua potable en el estado se incrementó de 79.8 % a 93.8 y el alcantarillado de 65.4 a 88.9 % en el mismo período, sin duda logros importantes. También en el mismo período, con base en los datos del Plan Hidráulico Estatal 2003 – 2007, la población de la Zona Costa de Baja California, se incrementó de 1.67 a 2.08 millones de habitantes, situación que plantea la incógnita ¿de donde saldrá el agua para hacer frente a lo que viene, 4.0 millones de habitantes para el año 2020, a solo trece años a partir de hoy y a 4.9 para el 2030? La infraestructura primaria que este reto plantea, además de ser enormemente más costosa, requiere de mucho más tiempo para ponerla en operación. Pero volvamos a las aguas subterráneas que podrían sustentar la espera de las grandes obras hidráulicas que se requieren para dar seguridad en el volumen, confiabilidad y costo soportable al abasto de agua de la Zona Costa. El Programa Hidráulico Regional 2002 – 2006, para la Región I, Península de Baja California, cuya disponibilidad fue publicada en el Diario Oficial de la Federación del 16 de Enero del 2003, identifica 48 acuíferos ubicados en el estado de los cuales se extrae un total de 1,277.6 hms3 por año con una recarga de 1,097.17 hms3 lo que representa, a nivel estatal, un grado de SOBREXPLOTACION del orden del 11 %. Sin embargo, las cifras por acuífero, especialmente aquellos que juegan un papel determinante en el abasto de agua de las ciudades Costeras, presentaba un panorama aun más serio, dado que la mayor concentración de acuíferos sobreexplotados se da precisamente en aquellos de los cuales depende parcialmente el suministro de agua de las ciudades fronterizas del estado, Ensenada, Rosarito y otras poblados pequeños como La Rumorosa, El Hongo, etcétera.

A continuación se incluye la Tabla correspondiente al estado de los acuíferos del estado con datos al 2005, publicados por CONAGUA en “Estadísticas del Agua en México – Edición 2006”

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Acuíferos de la Sub-región de Planeación Baja California - 2005 Acuífero

Zona Costa Norte: Tijuana Tecate La Misión Valle de Guadalupe Ensenada Maneadero

Resto de Estado: Ojos Negros Valle de las Palmas Santo Tomás San Vicente Valle de la Trinidad Laguna Salada Valle de Mexicali Col. Vicente Guerrero San Quintín San Felipe-P. Estrella Real del Castillo Otros menores 31)

Extracción (hms3/año)

Recarga Media (hms3/año)

Relación Extracción/ Recarga

Condición

17.00 7.00 6.10 33.51 3.60 30.61

19.00 7.00 6.20 23.87 3.70 20.80

0.89 1.00 0.98 1.40 0.97 1.47

Subexplotado En equilibrio En equilibrio Sobrexplotado En equilibrio Sobrexplotado

25.52 7.90 5.00 5.00 25.24 14.00 718.20 15.23 24.40 4.00 8.50 45.99

19.00 10.50 7.00 8.00 24.35 17.00 700.00 19.52 19.10 6.00 11.70 76.81

1.34 0.75 0.71 0.63 1.04 0.82 1.03 0.78 1.28 0.67 0.73 0.60

Sobrexplotado Subexplotado Subexplotado Subexplotado En equilibrio Subexplotado En equilibrio Subexplotado Sobrexplotado Subexplotado Subexplotado Subexplotado

Intrusión Marina

Si Si

Si

Fuente: Elaborado con datos de ”Estadísticas del Agua en México – Edición 200” – CONAGUA

Comparando la información del Cuadro anterior con los datos del Programa Hidráulico Regional 2002 – 2006, la extracción en lo acuíferos de la Zona Costa se incrementó en un 20 %, de 81.44 en 2003 a 97.82 hm3, en 2005. Por su parte la recarga solo aumentó en un 3.2 %, de 78.07 a 80.57 hms3, en el mismo período. Abundando sobre el mismo Cuadro anterior, el 82,6 % del agua que se extrae en la Zona Costa proviene de acuíferos en equilibrio y sobreexplotados, con niveles de sobreexplotación del 47 % en el caso de Maneadero y de 40 % en el caso del Valle de Guadalupe. Un acuífero sobreexplotado es aquel cuyo volumen de recarga en menor que el volumen de extracción, consecuentemente está en vías de extinción, de intrusión salina grave, como ya ocurre en los casos de

39 Maneadero y Ensenada, o de encarecimiento del bombeo a mayor profundidad, en el mejor de los casos. No hay evidencia mas clara de la falta de agua que la sobreexplotación de los acuíferos.

3. El Río Colorado El Valle de Mexicali, por obra del “Tratado sobre Distribución de Aguas Internacionales entre los Estados Unidos Mexicanos y los Estados Unidos de América” (Tratado de Aguas), firmado el 3 de Febrero de 1944 y el Acta Num. 242 denominada “Solución Permanente y Definitiva del Problema Internacional de la Salinidad del Río Colorado”, firmada por ambos Gobiernos el 30 de Agosto de 1973, establecen los volúmenes y calidad del agua de los Ríos Colorado y Bravo que corresponden a México, así como las bases para la resolución de conflictos entre los beneficiarios de esas aguas en ambos lados de la frontera. Para efecto del tema que nos ocupa, corresponde a México, donde el Valle de Mexicali es el principal beneficiario, una cuota anual de 1,850,234,000 metros cúbicos (1,500,000 acres-pie) y en casos donde a juicio de la Sección de los Estados Unidos, en cualquier año que exista en el Río Colorado agua en exceso, lo cual no significa que México adquiera derecho alguno sobre el agua adicional, mas allá de 1,850,234,000 metros cúbicos convenidos, se obligan a entregar agua adicional hasta un volumen que no exceda de 2,096,931,000 metros cúbicos (1,700,000 acres-pie). Finalmente, de acuerdo a lo establecido en el Acta 242, los Estados Unidos se comprometen a adoptar medidas para mantener los niveles de salinidad del agua dentro de los parámetros que establece la mencionada acta. Para lo cual, entre otras medidas, el Congreso Norteamericano autorizó la construcción de la Planta Desaladora de Yuma con una inversión de $ 250 millones de dólares (prácticamente terminada en 1992 y en la actualidad en estado de espera, nunca ha operado), además, la construcción de la Extensión del Desvío Principal de Desfogue (MODE por sus siglas en inglés) y de su extensión de desvío que descarga el drenaje agrícola en los humedales del Golfo de Santa Clara. Es pertinente destacar, a la luz de la normatividad anteriormente comentada en este artículo, nuestra opinión sobre los recientes acontecimientos que se han venido publicitando en la prensa local en relación al recubrimiento del Canal Todo-Americano en el vecino estado de California, donde concluimos que de acuerdo al Artículo 27 Constitucional y la Ley de Aguas Nacionales y sus reglamentos, de observancia en el territorio nacional, ”todo lo que se refiera a aguas superficiales y subterráneas corresponde a la Nación quién actúa

40 generalmente a través de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y la Comisión Nacional de Límites y Aguas (CILA)” en lo que se refiere a la administración y observancia de los tratados internacionales en la materia. Es por lo tanto muy atrevido a nuestro juicio, interferir acudiendo directamente ante gobiernos extranjeros, a nombre de cualquier organismo privado, que en este caso especifico ha demostrado su desconocimiento del entorno global de la problemática del agua, poniendo en riesgo las negociaciones que de acuerdo a nuestra legislación competen a instituciones gubernamentales con pleno conocimiento del problema integral y la autoridad para hacerlo. Los resultados están a la vista. Dado el caso, el sector privado y cualquier ciudadano tiene el derecho a cuestionar y exigir, al organismo público competente, información sobre las negociaciones del caso y hacerles llegar todas aquellas opiniones y argumentaciones que permitan enriquecer la negociación. Como complemento de lo anterior, a continuación se incorpora una gráfica que ilustra la participación relativa de cada uno de los beneficiarios del agua de la cuenca del Río Colorado, incluyendo tanto los estados de la Unión Americana como la parte correspondiente a México. El año de 1996 se considera el más representativo del comportamiento normal de las particiones, por el hecho de que no hay entregas de excedentes. Algunos de los años comprendidos en el periodo 1990 – 2000 incluyen volúmenes importantes de excedentes que elevan el promedio.

41 Disponibilidad de Agua del Estado y niveles de dependencia por fuente: A manera de resumen, en las Gráficas siguientes se muestra la importancia de cada fuente en el suministro de agua del Estado en su conjunto y de la Zona Costa en lo particular, dejando fuera el renglón de agua de lluvia dado su bajo nivel de aportación directa al total, su concentración estacional (únicamente en el invierno) y la poca confiabilidad del almacenamiento en presas y embalses. Consecuentemente, la contribución de la precipitación pluvial queda incluida a través de la recarga de los acuíferos:

Las gráficas anteriores muestran sin lugar a dudas la importancia fundamental del Río Colorado en el abasto de agua del estado, tanto en su conjunto como excluyendo la Zona Costa (Definida como Tijuana, Tecate, Rosarito, Ensenada y poblados menores a lo largo de la ruta del Acueducto Río Colorado – Tijuana. Como puede apreciarse, la dependencia del suministro de agua del Río Colorado es especialmente grave en el caso de Tijuana, donde un acueducto con poco menos de treinta años en operación, es la única fuente confiable de abasto de agua para una población de 1.7 millones de habitantes, en continuo crecimiento en superficie y en población, ya que la contribución de los acuíferos de la zona es prácticamente irrelevante. Más adelante se comentará este tema con todo detalle.

42

Usos del Agua en el Estado En el apartado anterior, se definieron las disponibilidades de agua del estado, a continuación procederemos a consignar los diversos usos del recurso, iniciando con el sector mas demandante, el agrícola, donde el Valle de Mexicali exige un lugar por separado.

Valle de Mexicali Dada la importancia de los volúmenes de utilización del recurso acuífero por parte del sector agrícola, decidimos iniciar este apartado con el mayor usuario de agua en el estado, el Valle de Mexicali. Para entrar en materia es pertinente comentar algunos conceptos que nos permiten llegar a una visión integral de la utilización del recurso y los niveles de eficiencia de su uso. Cuando hablamos del “consumo real” de agua del ser humano, nos referimos al consumo directo para su supervivencia, sus necesidades de aseo, lavado de ropa, preparación de alimentos etc. Y dejamos por fuera lo que ahora se denomina el “consumo virtual”, aquella que ingerimos como consecuencia de nuestros alimentos. En el caso de México, el uso consuntivo de agua para producir los alimentos necesarios para una dieta del orden de 3,000 calorías diarias es de alrededor de 3,500 litros. Esta es el agua que no contabilizamos al hablar de los requerimientos por persona, sin tomar en cuenta que el volumen de agua necesario para producir nuestra ingesta diaria de alimento, es tanto mayor que la requerida para consumo directo. A manera de ejemplo, para producir 1 litro de leche en la región de la Laguna en Coahuila se requieren aproximadamente 1,000 litros de agua. Otra forma de definir el concepto de ”Agua Virtual” podría ser: “el total de agua utilizada en la producción y procesamiento de un producto de origen agrícola o industrial”. A continuación reproducimos un Cuadro publicado por las Naciones Unidas en su estudio “Walter; a Shared Responsibility”, que muestra el contenido virtual de agua de diversos productos:

43 Contenido Virtual de Agua para diversos productos

Las cifras anteriores permiten enfocar desde una correcta perspectiva la importancia vital del agua, tanto real como virtual, en la supervivencia de la especie humana. El estudio sobre la gestión del agua en México – Avances y Retos, publicado por CONAGUA a mediados del 2006, incluye los siguientes comentarios sobre el tema que nos ocupa, que por su relevancia es pertinente transcribir: “Aumentar la producción de alimentos en búsqueda de la seguridad alimentaría, bajo un contexto de una población en crecimiento, una creciente escasez del agua en algunas regiones y una mayor competencia entre usos, es un reto complejo que involucra de forma directa a la política hídrica, pero también a las políticas de agricultura, desarrollo rural y comercial”. “Gran parte del reto de la seguridad alimentaria reside precisamente en el sector de la política pública hídrica y se le debe hacer frente con medidas a incrementar la productividad del sector de alimentos, en particular la agricultura (mas alimentos por gota de agua), sin comprometer la disponibilidad de agua para otros usos, incluyendo la producción ambiental; el reto de la seguridad alimentaría no va a resolverse solamente destinando mas agua para la producción de alimentos” “El reto que se plantea para México es proveer de seguridad alimentaria a los 125 millones de mexicanos que seremos en el año 2030, tomando en cuenta que actualmente hay un rezago de 20 millones de mexicanos que viven en estado de pobreza alimentaria”. Siendo el agua factor vital en la producción de alimentos, en todos los tiempos y muy especialmente en los actuales, el mal uso, la contaminación y el desperdicio del agua, no es solo irresponsable sino un atentado contra la vida misma.

44 Quizá alguien pueda aducir que el problema no es nuestro y que las generaciones futuras encuentren soluciones. Sin tomar en cuenta que al día de hoy, cientos de miles de niños mueren ya en el mundo a causa de la escasez y la contaminación del preciado recurso. Vayamos pues a tratar con objetividad, sin sectarismos ni intereses personales nuestra realidad, en esta pequeña porción del globo en que nos tocó hacer nuestras vidas. El Valle de Mexicali Como decíamos antes, El Valle de Mexicali, además de ser el mayor usuario del agua del Río Colorado, es también su mayor depredador: Sustentar una afirmación tan contundente como la anterior requiere de la frialdad de los números que a continuación se presentan: Superficies Regadas y Volúmenes de agua aplicados a Punto de Control de Módulo en el Distrito de Riego 014, Río Colorado Ciclo Agricola

Unidad

2000-2001

2001-2002

(Hectáreas)

182,113

175,368

Uso de Agua: Volumen Bruto Volumen Neto

(Millones de Mts3)

2,501.2 2,364.4

1,809.4 1,787.8

Pérdidas por Manejo: Volumen Total Porcentaje

(Millones de Mts3)

691.8 38.2

576.6 32.3

Superficie Regada

(Millones de Mts3)

( %)

Notas aclaratorias: Volumen Bruto:

Es el total de agua efectivamente entregado a punto de control de

Volumen Neto:

Módulo. Es el agua que realmente requiere el cultivo para su desarrollo de acuerdo a los estándares asignados cada cultivo

Pérdidas por manejo:

Es la diferencia entre los dos anteriores

Fuente: Elaborado con datos del Departamento de Estadística Agrícola de CNA-Distrito de Riego 014-Río Colorado

Es pertinente aclarar que el Distrito de Riego 014, Río Colorado, comprende tanto la parte del valle que se ubica en el Estado de Baja California como la de San Luís Sonora.

Para proporcionar un conocimiento mas amplio sobre los niveles operativos de las entregas de agua en el Distrito de Riego 014, Río Colorado y la eficiencia de los sistemas de conducción, desde la recepción del agua procedente de los Estados

45 Unidos hasta su punto de entrega a nivel Usuario, a continuación se inserta un diagrama de flujo que ilustra con toda claridad el mencionado proceso:

46 Como complemento del diagrama anterior, a continuación se presenta un balance de las disponibilidades normales de agua en el Distrito, (incluyendo agua rodada y pozos), su utilización y el monto de las pérdidas en el proceso, elaborado con datos de CNA:

DISPONIBILIDAD Y DISTRIBUCION DE LOS RECURSOS HIDRAULICOS EN EL DISTRITO DE RIEGO 014, RIO COLORADO (Cifras en Millones de Metros Cúbicos) FUENTES DE ABASTECIMIENTO

Parciales

Superficial (Río Colorado) Subterránea (Pozos) Zona Antigua Mesa Arenosa

1,850.2 897.4 700.0 197.4

Abastecimiento Total USOS: Asignaciones a Ciudades y otros: Asignación a Ciudades Fronterizas Usos Domésticos Rurales e Industriales

2,747.6

Parciales

Totales

203.5 197.4 6.1

Volumen Bruto para Riego Pérdidas Totales por Conducción: Pérdidas Red Mayor Pérdidas Red Menor

Totales

2,544.1 585.1 254.4 330.7

Volumen Neto para Riego Pérdidas estimadas en Riego Parcelario Volumen de agua efectivamente requerido para cultivo Nivel de Eficiencia del Uso del Agua destinada a Irrigación

1,959.0 500.0 1,459.0 57.3 %

Los datos anteriores suponen condiciones normales en abasto y uso del agua Fuente: Elaborado con datos de Comisión Nacional del Agua

47 Como puede apreciarse, los dos Cuadros anteriores muestran con toda claridad que las pérdidas por manejo del agua en el Distrito de Riego que nos ocupa, superan los 500 Millones de Metros Cúbicos por año. Cabe aclarar que de acuerdo a las asignaciones de litros por habitante-día (215 litros), las pérdidas anteriores serían suficientes para abastecer a una población adicional de 6,371,456 habitantes en la Zona Costa. Como agravante de lo anterior, las mermas agrícolas no terminan con las pérdidas por manejo en la conducción del agua (red mayor y red menor), sino que es necesario agregar las pérdidas por concepto de sistemas inadecuados de irrigación. Los conocedores del tema hablan de que esas pérdidas ascienden aproximadamente a otros 500 millones metros cúbicos anuales, cuya causa fundamental reside en que más del 90 % de la superficie irrigada en el Distrito 014, Río Colorado, se hace por inundación en tierras que aún adolecen de problemas de nivelación. El riego presurizado por aspersión o por goteo está por abajo del 10 % del área total de cultivo y se circunscribe básicamente a la siembra de hortaliza y frutales. Podría argumentarse que los tipos de cultivos del valle no permiten su aplicación, lo cual es parcialmente cierto por lo que se refiere al trigo, sin embargo no lo es para el algodón donde existen sistemas ya probados, en Israel y Australia en el extranjero y en Chihuahua y aquí en el mismo Valle de Mexicali. Este último en pequeña escala (200 Has) por una empresa local, con resultados muy prometedores, tanto en la reducción del uso de agua, del orden de 30 a 40 %, como en incremento de la productividad, al pasar de 6 hasta 11 pacas por hectárea. Otro argumento muy común para negar la conveniencia de utilizar el riego por goteo es su costo, sin embargo, la misma empresa antes mencionada, utilizó un sistema cuya inversión no sobrepasa los $1,000 dólares/hectárea (sin incluir equipo de bombeo) con una vida útil de 3 ciclos agrícolas, hasta un máximo de $1,500 dólares por hectárea (incluyendo equipo de bombeo), con el mismo ciclo de vida útil; el ahorro de agua y el incremento de producción garantizan la rentabilidad de la inversión. Desgraciadamente, los agricultores no tienen acceso a créditos ágiles que les permitan invertir masivamente en este tipo de sistemas. Algo similar sucede en el cultivo de alfalfa, donde podrían obtenerse ahorros importantes en el uso de agua si hubiera acceso a formulas de financiamiento que permitieran inversiones en sistemas de riego por aspersión, siguiendo el ejemplo de nuestros vecinos del Valle Imperial. Finalmente, como elemento ilustrativo de los ahorros de agua susceptibles de obtenerse con la modernización de los sistemas de irrigación, a continuación

48 se inserta un Cuadro que muestra los resultados de investigaciones realizadas por la Universidad de Arizona en los Estados Unidos, donde se comparan las eficiencias de los diversos métodos de irrigación en terrenos y climas muy similares a los del Valle de Mexicali.

Las eficiencias reportadas entre uno y otro método de irrigación confirman con creces las estimaciones antes mencionadas de pérdidas de por lo menos otros 500 millones de metros cúbicos de agua al año por deficiencias en los sistemas de irrigación de los cultivos en el Valle de Mexicali y San Luís. Podemos por lo tanto concluir que las pérdidas totales por irrigación en el Distrito 014 del Río Colorado superan los mil millones de metros cúbicos anuales, agua suficiente para las necesidades de una población adicional de más de 12 millones de habitantes. Corresponde en justicia hacer un reconocimiento al Ing. Eduardo Paredes Arellano, quién dedicó por lo menos 40 años de su vida, prestando sus servicios a Recursos Hidráulicos y Comisión Nacional del Agua, Distrito 014, Río Colorado y los últimos cuatro años de su vida a elaborar los estudios que nos han permitido hablar con propiedad del tema del Valle de Mexicali. Descanse en paz el Ing. Paredes.

49

Se han tenido que dejar fuera de este trabajo a otras zonas agrícolas de importancia en el estado de Baja California como: San Quintín, Valle de Guadalupe (la zona vitivinícola del estado) y Valle de la Trinidad, entre otros, cuyos abastos de agua dependen de acuíferos específicos de cada región, dado que sus casos requieren de información difícil de obtener y quedan pendientes para análisis futuros sobre el tema del agua. No obstante, es pertinente aclarar que su situación de abasto de agua es también crítica en algunos casos y de equilibrio en otros. Sin embargo, no existe vinculación alguna entre el abasto de agua de esas regiones y la del Valle de Mexicali y el triángulo La Rumorosa – Ensenada – Tijuana (incluyendo Tecate y Rosarito).

Finalmente dentro de los usuarios del agua del Río Colorado se ubican las ciudades de Mexicali en Baja California y San Luís Río Colorado en Sonora, entre otras poblaciones menores, cuyo abasto está plenamente garantizado por el agua procedente de la cuota mexicana del Río Colorado, donde por el bajo costo del agua y su “aparente abundancia” tienen consumos per cápita del orden de 275 a 325 lts por habitante-día, prácticamente el doble de las asignaciones para las ciudades costeras, consecuencia de una cultura de mal uso del agua, derivada de la “supuesta abundancia” a que nos referíamos antes y a un bajo precio de la misma, situación que propicia el desperdicio.

La Zona Costa y su Problemática de Abastecimiento de Agua

Para efecto de este análisis, definimos como Zona Costa la comprendida por el triángulo, La Rumorosa - Tijuana/Tecate/Rosarito - Ensenada y poblados intermedios cuya dependencia de suministro de agua está en una u otra forma vinculado con las ciudades, como puede apreciarse en el siguiente mapa del estado donde adicionalmente se hizo un acercamiento de lo que entendemos como Zona Costa (triángulo amarillo), que comprende las ciudades de Tijuana, Ensenada y el poblado de La Rumorosa, como vértices: (Ver siguiente mapa)

50

Esta Zona agrupa al 77.3 % de la población del estado y su abasto de agua depende en un 54.4 % del Acueducto Río Colorado – Tijuana y en un 45.6 % de acuíferos regionales, cuya mayor parte están sobreexplotados o en equilibrio, por lo cual no es posible esperar un mayor suministro de agua procedente de esa fuente. Más bien resulta lógico esperar una reducción. Esta situación nos lleva a concluir que la única fuente de abasto confiable de agua para la Zona Costa en general y en especial para Tijuana, es el acueducto procedente del Río Colorado, ya que el abasto de esta última, la ciudad más poblada del Estado, depende en un 87.3 % de esa fuente y en un 12.7 % de acuíferos locales. Con el fin de ilustrar las expectativas de abasto de agua para la Zona Costa en general y Tijuana y Ensenada en lo particular, a continuación se insertan varias Graficas (elaboradas con datos oficiales de la Comisión Estatal del Agua, CESPT, CNA y los planes de desarrollo urbano e hidráulico del estado), que con toda claridad muestran la problemática de abastecimiento de agua presente y futuro. A fin de facilitar su comprensión, procedemos con la información básica utilizada en la construcción de las mencionadas gráficas:

51

Oferta de Agua - 2006 Nominal

Extracción

Efectiva

Lts / Seg

Lts / Seg (*)

Lts / Seg

Recomendable

Oferta Tijuana: Acueducto RC - Tijuana Ampliación Acueducto Acuíferos Regionales:

4,000.00

3,700.0

3,700.0

1,300.00

1,200.0

1,300.0

470.0

Río Tijuana

300

Río Tecate Rosarito (Pozos)

150 20

TOTAL Tijuana – Tecate-Rosarito

5,370.0

5,000.0

Oferta Ensenada: Acuíferos Regionales: Valle de Guadalupe La Misión Maneadero Pozos Locales Presa López Zamora TOTAL ENSENADA GRAN TOTAL

722.0 209 160 207 146 0 722.00 6,092.00

5,000.00

(*) Fuente: CESPT - Datos promedio Enero - Octubre 2006

Los datos anteriores constituyen la oferta actual de agua para la Zona Costa, no hay mas agua. A menos que se hicieran inversiones multimillonarias en dólares, en nuevos y mas grandes acueductos o en plantas desaladoras con capacidades inéditas a nivel mundial; tema que se tratará con amplitud en el último apartado de este artículo. Una vez precisadas las fuentes de abastecimiento, sin olvidar el estatus de sobrexplotación de la mayoría de los acuíferos listados en el cuadro anterior y aclarando que las estimaciones de demanda son las publicadas por el estado en el Plan Estatal de Desarrollo Urbano – Baja California y el Programa Estatal Hidráulico 2003-2007, procedemos a incorporar las Gráficas de oferta y demanda de agua de la Zona Costera. En la Gráfica que se inserta a continuación “Zona Costa, Oferta y Demanda Actual Proyectada de Agua”, definida antes, se aprecia en color verde la aportación de los acuíferos de la región (1.1 metros cúbicos por segundo), cuya situación de sobreexplotación se comentó con anterioridad en este mismo artículo. Así mismo se muestra el volumen aportado por el acueducto actual (con

52 capacidad de 3.7 metros cúbicos efectivos y 30 años de operación), ambos constituyen, a la fecha, la única oferta real de agua para la zona, ante una fuerte demanda emanada del continuo crecimiento de la población de la zona. Al combinar la oferta y demanda comentada, los resultados son realmente preocupantes. El suministro, incluyendo acuíferos y acueducto actual, llegó al límite de abasto aproximadamente en el año 2004, punto donde se cruzan la oferta actual acumulada con la demanda. Enseguida, en la franja de color azul claro, se incorporó el abastecimiento agregado bajo el supuesto de que se construyera el dos veces licitado, cancelado, ratificado y de nuevo cuestionado “nuevo acueducto” (1.2 metros cúbicos efectivos por segundo), cuya limitada capacidad solo puede entenderse como un “pequeño” paso transitorio a la verdadera solución al problema de agua de la zona costera. Como agravante, su construcción está aún en conflicto por deficiencias en las licitaciones que motivaron la intervención de la Secretaría de la Función Pública, quién en su Resolución 115.53290, Expediente 642/2006, de la Dirección de Inconformidades, quienes textualmente resolvieron: “se decreta la nulidad de la licitación pública nacional No. 32130001-001-06,……”, aduciéndose como causal principal: “….la irregular actuación de la convocante”… (Págs. 100 y 101 que para mayor detalle se sugiere consultar el documento) En enero 20 hubo declaraciones oficiales en la prensa local en el sentido de que se ratificó a la misma empresa, declarada con anterioridad como ganadora de la licitación, y que no se esperaban inconformidades. Sin embargo, es de nuestro conocimiento que con fecha enero 23 se presentaron nuevas inconformidades ante la Secretaría de la Función Pública. Todo lo anterior muestra el estatus de la licitación, mas bien de las dos licitaciones fallidas, para una oferta agregada de 1,2 metros cúbicos efectivos por segundo que, como se aprecia en la gráfica, solamente pospondrán el problema de desabasto hasta el 2009, dos años a partir de hoy. Es evidente que para atender el problema, del 2004 a la fecha se han hecho obras de distribución que han permitido ahorros sustanciales, se han aprovechado los escurrimientos acumulados en la Presa Abelardo L. Rodríguez, los cortes por mantenimiento y el hábil manejo del suministro por colonia.

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Con la Gráfica anterior se pretende proporcionar una visión global de la problemática del agua de la Zona Costa, entendida como el triangulo cuyos vértices son Tijuana, Ensenada y La Rumorosa, aún cuando es difícil, aunque no necesariamente imposible o inconveniente, proponer una solución única para el problema, en ese tenor procedemos a enfocarnos a porciones mas precisas del mismo. Iniciamos con la Gráfica que se incorpora a continuación y que muestra por una parte: la proyección de la demanda acumulada de agua de Tijuana, Tecate y Rosarito (línea diagonal en color rojo), y por la otra la oferta acumulada de: acuíferos, con una aportación de 470 litros/segundo (área de color verde claro; acueducto RC-Tijuana, con una aportación efectiva de 3,700 lts/seg (área de color azul obscuro) y proyecto de ampliación, con una capacidad efectiva proyectada de 1,200 lts/seg (área de color azul claro; de donde se desprende lo siguiente:

1) El suministro de las tres ciudades y sus alrededores está ligado entre sí, ya que dependen de las mismas fuentes de abastecimiento 2) El abasto efectivo total a la fecha es del orden de 4,170 lts/seg, (acueducto actual más acuíferos). Bajo estos parámetros, la zona que nos ocupa, entró en desabasto desde el año 2004, situación que se ha venido resolviendo con las obra, maniobras de corto

54 plazo y escurrimientos de la Presa Abelardo L. Rodríguez, como anteriormente se mencionó. Finalmente, en el dado caso de que se superen las dificultades antes comentadas y se construyera la pequeña ampliación del acueducto actual, la oferta total se incrementaría a solo 5,370 lts/seg, en cuyo caso el abasto sería suficiente hasta el 2010, un margen demasiado crítico para una población esperada del orden de 2.2 millones de habitantes para ese mismo año. (Ver gráfica)

Continuando con el mismo proceso de ir enfocando el problema a áreas mas restringidas, a continuación se inserta la gráfica correspondiente a las ciudades de Tijuana y Tecate, donde se aprecia con claridad que las fuentes de suministro actual de agua se circunscriben al acuífero de Tecate, con una aportación de 470 lts/seg y al acueducto actual con la capacidad efectiva de 3,700 lts/seg; un total entre ambas de 4,170 lts/seg (ver gráfica).

55

Excluyendo Rosarito, la oferta actual se igualó a la demanda en el año 2005 y de construirse la ampliación del acueducto, la oferta se ampliaría hasta el 2012 aproximadamente. Obviamente este caso es solo ilustrativo ya que no sería posible dejar a Rosarito sin abastecimiento.

Otro caso hipotético pera altamente ilustrativo es el de Tijuana donde, al no contar con acuíferos significativos, su dependencia del acueducto actual, como prácticamente única fuente de suministro, sería del orden de un 87.3%.

En la gráfica siguiente, se parte del supuesto de que la capacidad del acueducto actual más la ampliación proyectada se destinen a Tijuana, que insistimos es hipotético, concluimos que la problemática de abasto se inició en el 2006 y la ampliación proyectada pospondría el problema al 2014 (ver gráfica).

56

Finalmente, el abastecimiento de agua de Ensenada nos resulta francamente incomprensible, a menos que la información sobre el tema sea inexacta y los niveles de sobreexplotación de los acuíferos de la región esté subestimada en la estadística oficial o que la estimación de la demanda sea para una población mayor que el nivel de cobertura real del sistema de distribución, ya que la problemática de abasto sobrepasó su nivel crítico entre el año 2002 y el 2005, como puede apreciarse en la siguiente gráfica:

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¿Cuál es el estatus de abastecimiento de agua de la Zona Costa ? A manera de resumen se puede concluir que el abastecimiento de agua de la Zona Costa es sumamente grave y la confiabilidad del sistema de transporte de la misma, aún mayor. No queremos aparecer como mensajeros de grandes males, ni caer en un amarillismo pernicioso, pero los números son fríos y hablan por si mismos y las fuentes son todas oficiales, como se ha visto a lo largo de este análisis. Aclarado lo anterior nos permitimos asentar que a nuestro juicio el estatus de abastecimiento de agua de la zona en cuestión, se resume en los siguientes puntos: 1. La oferta actual de agua, procedente de las diversas fuentes antes comentadas, se sitúa por abajo de la demanda, tanto a nivel general como en cada una de las ciudades principales del estado. 2. La demanda sigue creciendo día a día. Para confirmarlo basta con observar el crecimiento explosivo de Tijuana y el corredor TijuanaRosarito hasta Punta Piedra. 3. Con la nueva vialidad conocida como Boulevard 2000 en Tijuana se han abierto nuevas zonas susceptibles de desarrollo habitacional e industrial y se observan ya las actividades de los desarrolladores en esa dirección. 4. Se anunció recientemente en los medios un proyecto para la creación de una ciudad satélite de Tijuana en la zona conocida como Valle de las Palmas, al sur de Tecate y a solo 13 kilómetros de la Planta Toyota hasta donde se está ampliando la comunicación a Tijuana con la ampliación a cuatro carriles de la carretera libre a Tecate. Las empresas desarrolladoras estiman que en un período de 15 a 20 años, se construirán 250,000 viviendas en ese lugar. 5. La Dirección de Desarrollo Urbano del Municipio de Rosarito reporta que en los últimos cinco a seis años se han vendido, en su mayor parte a extranjeros, más de 110,000 lotes que requerirán de servicios, de agua entre otros, en muy corto plazo. 6. Para no abundar demasiado en el tema, no se necesita mas que hacer un recorrido del tramo de Real del Mar (a la altura de Playas de Tijuana), hasta el fraccionamiento de Punta Piedra, para apreciar el creciente número de torres de apartamentos de medio y superlujo que se han construido en los últimos dos años, y las, por lo menos 12 torres más en

58 construcción, de aproximadamente 14 pisos cada una y los desarrollos turísticos de todo tipo a lo largo de ese corredor. 7. Se requiere preservar los acuíferos de zonas como Maneadero, La Misión y Valle de Guadalupe (esta última catalogada como la región vitivinícola mas importante del país), para garantizar la subsistencia de sus productores agrícolas, cuyas manifestaciones de inconformidad por la sobreexplotación de sus acuíferos para atender las demandas de uso urbano y por ende el riesgo adicional de precipitar la intrusión marina, van acrecentándose. 8. Finalmente, si queremos hacer un cálculo simplista, con aritmética de primaria, olvidándonos de las complejas estadísticas, llegamos al siguiente resultado: Si en el 2007 la Zona Costa tiene 2.2 millones de habitantes, (cuyo requerimiento promedio diario de agua es de 215 litros por persona), se requieren 5,600 lts/seg para satisfacer sus necesidades, cuando la oferta total, incluyendo acueducto actual y acuíferos sobreexplotados, es del orden de 4,892 lts/seg, obviamente ya son muchos los habitantes que están sufriendo por esta causa. Aún en el caso de que se superaran los problemas y se construyera la ampliación del acueducto, el volumen agregado por ese concepto incrementaría la oferta total a solo 6,092 lts/seg, sin embargo, cuando la obra se terminara (siendo optimista para el 2009), la demanda se habrá incrementado a 5,954 lts/seg, prácticamente al mismo nivel de la nueva oferta. En pocas palabras, para el año siguiente a que la ampliación esté en condiciones operativas, ya será insuficiente. La problemática resumida en los ocho puntos anteriores depende de tres fuentes de abasto, en las siguientes condiciones: 1. Un acueducto, con prácticamente 30 años en operación, al borde terminal de su vida útil, dada la tecnología de la época en que fue construido, con los riesgos que ello conlleva como fuente confiable de suministro a mediano y largo plazo. 2. Un proyecto de ampliación del acueducto actual, a todas luces insuficiente y a destiempo debido a la problemática de dos licitaciones fallidas y hasta la fecha con tiempos impredecibles dadas las nuevas inconformidades presentadas por algunos de los licitantes, comentadas con anterioridad en este análisis. 3. Seis acuíferos regionales, calificados por CONAGUA en estado de sobreexplotación y que en el caso especifico de Tijuana resultan irrelevantes por su baja contribución a los requerimientos de la ciudad.

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4. A manera de confirmación de lo anterior, es de conocimiento público que la disponibilidad de agua, por lo menos en Tijuana, se está convirtiendo en un freno a su crecimiento económico ya que no es posible obtener “Factibilidades de Suministro” para proyectos que requieran volúmenes por encima de los 30 lts/seg.

¿Qué se tiene que hacer para resolver el problema? Sin pretender convertirnos en oráculo de las soluciones al problema planteado, a continuación nuestro punto de vista sobre algunas soluciones potenciales: Como en todo problema, el primer paso para su solución reside en la aceptación plena del problema tal como es, en su magnitud y gravedad implícita, con transparencia y sin temores derivados de intereses políticos o de cualquier otro tipo, más allá del bien común de los ciudadanos. Enfocar el problema en su contexto amplio, sin anticipar soluciones a la ligera, tan comunes a nuestra idiosincrasia política, en busca de una solución integral que identifique con toda claridad donde se ubican las fuentes potenciales de suministro confiable a corto, mediano y largo plazo y la factibilidad real de llevar el agua, en tiempo y costo accesible hasta el punto en que el usuario la requiere. Siguiendo la metodología delineada en los dos puntos anteriores nos atrevemos a concluir que las únicas fuentes confiables de abasto de agua para las zonas urbanas del estado son: 1) La transferencia de agua del Río Colorado a la Zona Costa, y 2) Desalación de agua de mar. Difícilmente podría ampliarse el portafolio de opciones a otras alternativas de abasto externo, salvo otras fuentes tales como el reciclaje del agua para usos diferentes al consumo humano, como el riego de campos de golf, parques, jardines, etcétera y por supuesto, eficientar los sistemas de distribución para reducir mermas e inclusive como materia de trueque con zonas agrícolas con disponibilidad de acuíferos, esto último menos factible por la antes comentada situación de sobreexplotación. 1. Transferencias de Agua: Concentrándonos en las fuentes de abasto externo, como comentábamos antes, el Valle de Mexicali genera un desperdicio de agua del orden de 1000 millones de metros cúbicos anuales, de los cuales aproximadamente la mitad provienen de las redes de conducción (mayor y menor) y el resto de prácticas obsoletas de irrigación en campo, debido a la falta de financiamientos adecuados para la modernización de los mismos.

60 La población oficial proyectada para la Zona Costa en el año 2035 es de 4.5 millones de habitantes, cuyo requerimiento de agua de acuerdo a la dotación estándar de 215 litros por habitante – día, ascendería a 11,258 lts/seg, equivalentes a 355 millones de metros cúbicos anuales, 238.3 millones mas que los 116.7 que actualmente se transportan por el acueducto. Los 238.3 millones de metros cúbicos adicionales representan únicamente el 23.8 % del desperdicio total del Valle de Mexicali y con ello se garantizarla el abasto de la Zona Costa, incluyendo Ensenada, hasta el año 2035. Además de lo anterior, la recuperación parcial de ese desperdicio (dada la imposibilidad de recuperación del total ya que incluye pérdidas por evaporación), sería suficiente para hacer frente a las demandas crecientes de Mexicali, San Luís Río Colorado y los demás poblados del Valle y mantener adicionalmente programas sustentables para los humedales de la costa del Golfo y la rehabilitación del delta, todo ello sin afectar una sola hectárea de cultivo. Es importante destacar los recientes convenios entre el Valle Imperial y San Diego en California donde se firmó una transferencia de agua del primero en beneficio del segundo, por 264.8 millones de metros cúbicos (200,000 acrespie), procedentes de ahorros de agua derivados de la conducción y mejores prácticas de irrigación, en una zona cuyas practicas de cultivo tienen un nivel de modernización considerablemente mas avanzado que el nuestro. 2. Desalación de Agua de Mar: Esta fuente alterna de “producción” de agua ha venido manejándose como la panacea para resolver todos los males de abastecimiento. Sin embargo la única capacidad de desalación significativa se encuentra en el Golfo Pérsico, en islas con limitadas fuentes de abastecimiento y en otras localizaciones donde no hay alternativas y la población está dispuesta a pagar altos precios por el agua. En los Estados Unidos prácticamente todas las plantas desaladoras en operación son pequeños sistemas para abastecer actividades turísticas, industriales y comerciales de alto valor agregado. El mayor interés por proyectos de desalación se ha disparado en el estado de California que por su expansivo incremento de población y los daños ecológicos causados por otras fuentes tradicionales de abastecimiento han forzado a las autoridades competentes a replantear las políticas y prácticas de administración del agua. Las diversas propuestas para llevar a cabo este tipo de proyectos han generado fuertes controversias por sus altos costos, la demanda masiva de energía que requieren y los impactos ambientales directos e indirectos. Entre

61 aproximadamente 22 proyectos presentados, los de mayor tamaño son del orden de 2,199 lts/seg con posibilidades futuras de ampliación al doble. Como nota al calce es oportuno mencionar que hace algunos años se instaló una planta desaladora en la termoeléctrica de Rosarito B.C,. la cual dejó de ser considerada como fuente de abasto regular para uso urbano, dado el alto costo del agua obtenida El estudio denominado “Desalination, with a Grain of Salt – A California Perspective”, concluye que las propuestas resultan prematuras para California por las siguientes razones, entre muchas otras: • • • •

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Aún cuando el costo de desalar se ha reducido en los últimos años, continúa siendo una opción de abasto muy costosa. Los costos de desalar se ven influenciados por muchos factores lo que dificulta los análisis comparativos y las estimaciones de costos resultan con altos grados de incertidumbre. El supuesto de que los costos de desalar continuarán reduciéndose es inexacto. Reducciones adicionales a las ya logradas serán muy difíciles y las probabilidades indican que los costos futuros tenderán a subir Desalar requiere de consumos masivos de energía muy superiores a cualquier otra opción alternativa, consecuentemente los costos futuros de agua desalada presentan una fuerte sensibilidad a los cambios en los costos de energía. Las desaladoras ofrecen altos niveles de confiabilidad en el suministro de agua pero hay otras opciones con las mismas ventajas a menor costo La desalación puede producir agua de excelente calidad pero, puede también inyectar materiales contaminantes en el sistema (metales pesados, entre otros), así mismo, el agua desalada puede ser corrosiva y causar daños en los sistemas de distribución. Las plantas desaladoras, para producir agua para consumo humano necesariamente tienen que generar desechos de salmueras con una elevada concentración de sales que es necesario regresar al mar o disponer de ellas por otros medios, con el riesgo consecuente de afectar los desarrollos y hábitats costeros. Entre muchos otros argumentos, el estudio mencionado, considera que las plantas desaladoras, por su ubicación en terrenos costeros, son vulnerables a los efectos del cambio climático, incluyendo los aumentos del nivel de las aguas del mar, los huracanes y los cambios climáticos extremos. Finalmente, el estudio hace énfasis en la necesidad de desarrollar una normatividad que de claridad a las condiciones en que deben instalarse y operar este tipo de plantas, antes de que su proliferación sin control pueda provocar daños ambientales mayores e irreversibles.

62 Lo anterior no descarta, de manera alguna, la conveniencia de la instalación de plantas – piloto que permitan experimentar su comportamiento en nuestro medio, inclusive como fuentes de abasto de poblaciones pequeñas, a fin de contar con la necesaria experiencia para afrontar un largo plazo sin opciones alternativas; siempre y cuando estén sujetas a una clara normatividad legal.

A manera de Conclusión Aún cuando las comparaciones son por lo general odiosas, es nuestro sentir que nunca hace daño aprender lo bueno de otros. Desde esta perspectiva el ejemplo de San Diego es un buen modelo a seguir, ya que las condiciones de suministro son claramente similares, inclusive en su relación con el Valle Imperial, por supuesto con las adecuaciones que exige nuestra propia idiosincrasia. La solución de problemas de esta magnitud requieren de planteamientos con objetivos claros a largo plazo, no hay otra forma de orientar la congruencia de las acciones de corto y medio plazo, soslayando las muy comunes desviaciones promovidas por intereses ajenos al bien de nuestra comunidad o a la aún mas común improvisación. Solo sabiendo con claridad a donde vamos podremos llegar al objetivo sin precipitaciones y con un mínimo de errores, las consecuencias de fallar no son aceptables y los daños que puedan causar intolerables. Para ilustrar lo antes dicho insertamos las gráficas que muestran la visión del abasto de agua al año 2020 para la ciudad de San Diego, visión que norma las acciones del organismo responsable (San Diego County Water Authority): San Diego, California. Portafolio comparativo del suministro de agua al año 2020

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Finalmente, a manera de ilustración y de propuesta, a continuación insertamos las gráficas que pretenden hacer un símil para el caso de Tijuana. Una última aclaración, en cosas de esta trascendencia los planes sexenales no contribuyen mayormente a soluciones de largo plazo, a menos que formen parte de una visión, a un plazo aún mas largo que con toda seriedad marque el camino y su punto de destino. Si esa visión existe, no la hemos encontrado en documentación oficial alguna y si así lo fuera, nos preguntamos, ¿Es secreta?, ¿No somos los ciudadanos lo suficientemente inteligentes para comprender esos “misterios”? o ¿Cuál es la “razón de estado” para ello?... Hablar de suministro de agua a nuestras comunidades debe ser un tema al cual no solo se de acceso a la información, sino también participación en las grandes decisiones. Tijuana, Baja California. Portafolio comparativo del suministro de agua al año 2020

Las gráficas anteriores hablan por sí mismas, solo queremos preguntarnos ¿Quién va a asumir la responsabilidad de cambiar la gran incógnita de la gráfica, por un plan realizable?, ¿No será tiempo ya de que comunidad y gobierno nos sentemos, con toda seriedad y profesionalismo, lejos de intereses privados o político electorales a replantear la situación del agua en el estado y fijar objetivos congruentes, validados por la sociedad? ¿Qué esperamos? o ¿Queremos “llorar”, demasiado tarde, lo que no supimos enfrentar con oportunidad”?

Finalmente para cerrar este somero análisis sobre las fuentes de abastecimiento y los usos del agua, nos permitimos traducir un párrafo de “The World’s Water 2004-2005” que a la letra dice: “Todos los días la población del mundo crece y la disponibilidad de agua por persona decrece…

64 Cada quince días, la naturaleza envía mensajes de su poderío y su creciente versatilidad climática: inundaciones, tormentas, sequías, incendios forestales y ondas de calor… Cada año, el mundo se alimenta bombeando mas agua de las reservas del subsuelo que serán reabastecidas por la lluvia, los deshielos y los escurrimientos del año siguiente. Globalmente el déficit se incrementará 20 % año con año… Cada mes, se incrementa la contaminación del agua, como también lo hace la demanda de energía y alimentos… Se estima que el planeta tierra tiene suficiente recursos acuíferos para proporcionar confiablemente agua y alimentos para 14,000 millones de vegetarianos, no obstante, con la dieta y los patrones actuales de uso del agua, únicamente se cuenta con agua suficiente para 5,000 millones cuando la población actual es superior a los 6,000 millones... Los grandes cuestionamientos saltan a la vista: ¿existen lazos comunes que unifiquen los disparatados factores del problema del agua? ¿existen elementos para diseñar a políticas de acceso al agua que acaben con las diferencias entre una mujer en el continente africano que tiene que caminar kilómetros para acceder el vital liquido, mientras otra en cualquier ciudad del mundo desarrollado solo requiere abrir la llave? ¿acaso son las grandes presas, el agua embotellada, la desalación o el reciclaje del agua las respuestas? ¿Podría el sector privado hacer que las cosas sucedan, donde el sector público ha fallado en suministrar agua suficiente a miles de millones de personas? Continuamente se aprueban nuevas leyes sobre el agua, nuevas responsabilidades se formulan pero las condiciones de implementación y cumplimiento siguen siendo muy difíciles. Hasta finales del siglo XX, fue relativamente sencillo abastecerse de mas agua; construir una nueva presa, cambiar de curso un río, drenar un lago y perforar cada vez mas profundo en un acuífero fueron practicas comunes pero hemos llegado a los límites ecológicos y económicos, grandes ríos ya no descargan sus aguas al mar, los niveles freáticos de los mantos acuíferos han descendido a niveles mas profundos y la mitad de los humedales han desaparecido. En suma el impacto al ambiente ha llegado a su límite moral y de supervivencia de la especie”.

Es nuestra pretensión, continuar los trabajos de investigación de este tipo a lo largo del año 2007, cubriendo los temas que a continuación se listan: • • • • •

Agua y Agricultura… ¿Desalar.......Otra Pesadilla? ¿Sustentabilidad…..que es eso? ¿Combustibles alternos? ¿Dónde están nuestras autoridades?

65 BIBLIOGRAFIA: o The World’s of Water 1998-1999 – Meter H. Gleick o The World’s of Water 2000-2001– Meter H. Gleick o The World’s of Water 2002-2003 – Meter H. Gleick o The World’s of Water 2004-2005 – Meter H. Gleick o The World’s of Water 2006-2007 – Meter H. Gleick o State of the Planet Science Magazine’s 2006-2007 o World of Water Vision – Consejo Mundial del Agua – W.J. Cosgrove and F.R. Rijsberman o Water in Crises, A guide to the world’s water resources – Peter H. Gleick o Balancing Water Uses: Water for Food and Water for Nature – F.R. Rijsberman and D. Molden – Secretariat of the International Conference on Freshwater – Bonn o United Nations Enviromental Programme (UNEP) o Missing Water he uses and Flows of the Colorado River Delta Region – M.J. Cohen and C. Henges-Jeck – Pacific Institute o Reclamation, Managing Water in the West – Colorado River System Uses and Losses Report 1966-2000 – U.S. Department of the Interior o The Sustainable Use of Water in the Colorado River Basin – Pacific Institute o Spilled Water – Institutional commitment in the Provision of Water Services – Latin American Research Network o The Political Economy of Water Pricing Reforms – Edited by Ariel Dinar o Water a shared responsibility – The United Nations World Water Development – Report 2 o An Introduction to Desalination – AMBAG Desalination Workshop, Monterrey California may 20, 2004 – D.H. Furukawa, PE - Bay Area Regional Desalination Project Pre-Feasibility Study Final Repot , October 2003 – Boyle Engineering Corporation o California Water 2030: an efficient future P.H. Gleick, H. Cooley and D. Groves – September 2005. o Seawater Desalination in California, Coastal Desalination Projects in California – California Coastal Commission o Seawater Desalination and California Coastal Act – California Coastal Commission o Desalination Plant at Sand City – Long Term Water Supply Contingency Plan o Water Recycling and Desalination Overview o Soothing water woes with desalination – American City and County o Seawater Desalination – San Diego County Water Authority o Groundwater and Wells – Fletcher G. Driscoll – U.S. Filter / Johnson Screens o When the Rivers Run Dry (Water-the defining crisis of the Twenty First Century) – Fred Pearce-Beacon Press o Desalination, with a grain of salt – A California Perspective – H. Cooley, P.H. Gleick and G. Wolf – June 2006 – Pacific Institute o Water 2025: Preventing Crisis and Conflict in the West - U.S. Department of the Interior, Bureau of Reclamation

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