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“Durante más de tres años, Manuel, un chico tranquilo de 13 años, fue el juguete de algunos de sus compañeros de clase. Estos lo empujaban en el recre
Author:  Raquel Araya Reyes

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“Durante más de tres años, Manuel, un chico tranquilo de 13 años, fue el juguete de algunos de sus compañeros de clase. Estos lo empujaban en el recreo y en los pasillo para quedarse con su dinero, lo forzaban a comer hierba y a beber agua sucia de las fuentes, le daban palizas en los servicios y, en una ocasión, le ataron una cuerda al cuello para llevarlo por ahí como una “mascota”. Cuando los acosadores fueron interrogados acerca de las agresiones, dijeron que perseguían a su compañero, sobre todo, porque era divertido”.

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Esta historia real y un tanto terrorífica, aporta una negra imagen de la violencia que niños y jóvenes pueden llegar a mostrar hacia otros en determinadas circunstancias, y demuestra que la vida escolar puede ser una pesadilla para los alumnos acosados mientras padres y profesores, por lo general, desconocen lo que sucede.

lar atrajo la atención también de otros países como Japón, Gran Bretaña, los Países Bajos, Canadá, EEUU y España. En Estados Unidos, el interés se ha visto propiciado por los casos de tiroteos en los centros escolares, ampliamente difundidos por los medios, en los que los trágicos incidentes estaban relacionados, al menos en parte, con problemas entre acosadores y víctimas en los alumnos implicados. Ya a mediados de los ochenta, Olweus presentó una de las primeras definiciones oficiales de bullying o acoso escolar: “Un alumno sufre bullying o acoso escolar cuando se encuentra expuesto, de forma reiterada y prolongada en el tiempo, a acciones negativas por parte de uno o varios otros alumnos”. Una acción negativa tiene lugar cuando alguien inflige o intenta infligir intencionadamente heridas o inquietud a otro; en definitiva, es lo que implica la definición de comportamiento agresivo. Las acciones pueden realizarse por contacto físico, verbalmente o de otras maneras, como haciendo muecas u

El bullying o acoso escolar es para muchos estudiosos u pedagogos un fenómeno antiguo. Pese a que para muchos no es desconocido, no ha sido hasta muy recientemente, a principios de la década de 1970, cuando se ha investigado de forma sistemática a nivel europeo y estadounidense. Durante unos cuantos

otros gestos o mediante la exclusión deliberada de un grupo. Para referirse a acoso, tiene que haber además un desequilibrio de poder o fuerzas, una relación asimétrica, en la que el alumno que sufre tales acciones difícilmente puede defenderse por sí mismo.

años, la realización de estos estudios quedó circunscrita en gran parte a Escadinavia. A finales de los ochenta y en los años noventa, sin embargo, el acoso esco INTRODUCCIÓN

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En un lenguaje más general, el comportamiento acosador puede definirse como “comportamiento intencionado y repetidamente negativo (desagradable o hiriente) por parte de una o varias personas, dirigido a otra persona que difícilmente puede defenderse”. De acuerdo con esta definición que parece haber obtenido una considerable aceptación entre los investigadores y profesionales de este campo, el fenómeno del acoso escolar puede describirse a través de sus componentes fundamentales, es decir, ¿qué elementos aparecen en toda situación de acoso escolar?: • Un comportamiento agresivo o para causar un daño intencionado. • Repetido y prolongado en el tiempo • En una relación interpersonal caracterizada por un desequilibrio de poder o fuerzas real o percibido.

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Se podría añadir que, por regla general, el acoso parece ocurrir sin provocación aparente por parte de la persona que lo sufre. Esta definición deja claro que el bullying puede ser considerado como una forma de abuso entre iguales (alumnos) como una característica distintiva de este fenómeno. Lo que lo distingue de otras formas de abuso como el maltrato infantil o hacia la mujer es el contexto en el que se desarrolla y las peculiares características de la relación existente entre quienes participan en él. Pero *? qué comportamientos o acciones ocurren durante el bullying? Algunos expertos utilizan el término “comportamiento violento” como sinónimos aproximados de agresión física. Actualmente, también es muy común hablar de “violencia psicológica” y de “violencia emocional”. INTRODUCCIÓN

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La violencia o el comportamiento violento deberían quedar definidos como un modo de comportamiento agresivo donde el agresor utiliza su propio cuerpo o un objeto para infligir heridas o inquietud relativamente graves a otro individuo. El significado de “violencia” según el diccionario es muy similar e implica el uso de fuerza o poder físicos. La definición de las infracciones violentas en el derecho penal (que incluyen el homicidio, la agresión con o sin agravantes, el robo y la violación) se basa igualmente en una interpretación muy cercana. Por lo tanto, al igual que el acoso escolar, la violencia es una categoría dentro del comportamiento agresivo pero posee sus propias características. De este modo, el concepto de “agresión” o “comportamiento agresivo” es el término general que lo engloba todo, a modo de un gran paraguas, mientras que tanto el acoso como la violencia o comportamiento violento son categorías dentro del comportamiento agresivo que cubren áreas mas pequeñas dentro del paraguas mayor. Como se muestra en la página siguiente, existe un cierto solapamiento entre violencia y acoso

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Una vez definido el término y las distintas conductas que lo caracterizan es tiempo de presentar a los protagonistas de una escena de acosos escolar. El tipo de víctima más común, la pasiva o dócil, suele presentar algunas de las siguientes características: •son prudentes, sensibles, tranquilos, retraídos y tímidos •tienen tendencia a sufrir ansiedad, son inseguros, infelices y poseen una baja autoestima •se deprimen y piensan en el suicidio mucho más frecuentemente que sus compañeros Algunas de estas características han contribuido a convertirlos

Esta área señala situaciones en las que el bullying se realiza por medios físicos o de contacto (arriba) o, dicho de otra manera, cuando se utilizan medios físicos en un contexto de acoso (golpes, patadas, empujones, etc. (en situaciones que reflejan los criterios generales que definen el acoso).

en víctimas de acoso escolar. Por otro lado, como resultado del acoso repetido por parte de sus compañeros, debe haber aumentado considerablemente su inseguridad y la evaluación en general, negativa de sí mismos. Por ello, parte de estas características son a la vez causa y consecuencia del acoso escolar. También existe otro grupo de víctimas, mucho más reducido, las víctimas provocadoras o acosadores-víctimas, que se caracterizan por una combinación de patrones de reacción agresivos y de ansiedad. Estos alumnos suelen tener problemas de concentración y dificultades lectoras y de escritura. A menudo su forma de comportarse puede causar irritación y tensión a su alrededor. No es infrecuente que su comportamiento constituya una provocación para muchos alumnos, lo que deriva en una serie de reacciones negativas de gran parte o incluso toda la clase.

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El diagrama muestra también claramente que muchas veces el acoso se lleva a cabo sin que haya violencia (con palabras, gestos, exclusión intencionada del grupo, etc.) e, igualmente, que gran parte de los casos de violencia no pueden ser considerados como acoso (por ejemplo, una pelea ocasional en el patio del colegio, o una riña por cualquier tontería en la cola de un restaurante entre desconocidos).

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Los alumnos de perfil “acosador” suelen exhibir algunas de las siguientes características:



Fuerte necesidad de dominar y someter a otros alumnos y salirse con la suya

► ► ►

Son impulsivos y se enfadan con facilidad Escasa empatía hacia los estudiantes que sufren acoso A menudo se muestran desafiantes y agresivos con los adultos, incluidos los padres y profesores.



Suelen participar en otras actividades antisociales o contra las normas como el vandalismo, la delincuencia y el consumo de drogas



En el caso de los chicos, suelen ser más fuertes físicamente que los chicos de su edad y que sus víctimas en particular



Cabría añadir que, frente a la creencia común, no presentan

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problemas especiales en su autoestima. En lo que respecta a los posibles orígenes psicológicos de este comportamiento, el patrón de los hallazgos sugiere al menos tres motivos relacionados entre sí. En primer lugar, los agresores experimentan una fuerte necesidad de poder y dominio; parecen disfrutar cuando ejercen control. En segundo lugar, estudiando las condiciones familiares en las que han crecido una gran mayoría, es natural asumir que hayan desarrollado un cierto grado de hostilidad hacia el entorno; tales sentimientos e impulsos pueden hacer que el herir o hacer sufrir a otros les produzca cierta satisfacción. Finalmente, existe un componente claramente instrumental o de beneficio, ya que suelen coaccionar a sus víctimas para obtener de ellas todo tipo de objetos de valor. Además, por supuesto, se ven recompensados con renovado prestigio ante otros compañeros. INTRODUCCIÓN

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Si queremos garantizar buenos resultados en el trabajo en el colegio contra el acoso escolar, necesitamos de agentes educativos — profesores y otros miembros del personal y padres— que posean al menos un cierto grado de compromiso o participación y un nivel razonable de concienciación sobre la naturaleza y el nivel de este tipo de problemas que existe en su colegio. Pero no basta que los adultos se comprometan y conozcan los problemas. Además, deben tener conocimientos suficientes y habilidad práctica para aplicar las medidas de intervención y los procedimientos que los estudios han demostrado ser efectivos. Para conseguirlo, debe reforzarse de forma sistemática el nivel de competencia del personal educativo. Además, es muy necesario disponer de un buen modelo de aplicación práctica, pues hasta un programa de calidad puede fracasar si su puesta en práctica no está a la altura. Existen varios factores importantes que deben ser considerados y tratados contra el acoso escolar en el marco de un trabajo sistemático para producir resultados positivos y duraderos: ACTIVIDAD CENTRAL

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Calidez, intereses positivos, e implicación por parte de los



agentes educativos.



Límites fijos sobre los comportamientos inaceptables



Aplicación consistente de castigos no punitivos ni físicos para los comportamientos inaceptables o la violación de las reglas.



nidad educativa, llevando a cabo estrategias de evaluación y revisión permanente del proceso de enseñanza/aprendizaje y de todo aquello que interviene en la práctica educativa (actitudes, organización, planificación...).



dizaje significativo que asegure la motivación y participación del alumnado en el proceso de enseñanza/aprendizaje.

los positivos de comportamiento.

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En primer lugar, es una responsabilidad de todos los docentes en sus respectivas categorías. Y aquí el personal docente no podrá ser nunca sustituido. A la hora de enseñar a convivir y a aprender a aprender, no puede ser sustituido por ningún libro de texto ni metodología válida. Hace falta el guía, el que aconseje, oriente, acompañe y ayude. El ejercicio de la docencia es un ejercicio institucional, se hace en la escuela, adquiere características de grupo porque no es posible pedirle a cada individuo que cumpla con todas estas exigencias que le estamos pidiendo a la institución. Quien debe dar todas estas respuestas es la institución escolar,, no cada docente individualmente. Para ello es importante:

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Desde todos los sectores de la comunidad se potenciará el desarrollo de una metodología activa y creativa basada en el apren-

Agentes educativos que actúen con autoridad y como mode-

Aprender a vivir juntos se ha convertido en un eje fundamental del debate educativo. La convivencia no es un resultado, es un proceso de construcción, por tanto algo dinámico, continuo, permanente, en el que participan todos los agentes educativos: profesores, alumnos, padres y, sobre todo, el sistema de aprendizaje .

Estimular el espíritu crítico de todos los miembros de la comu-



Fomentar a través de las distintas áreas curriculares, actividades socio-culturales... la adquisición de hábitos y técnicas de trabajo intelectual que aseguren la adquisición de procedimientos adecuados para aprender a aprender.



Crear mecanismos adecuados para que profesores, padres y demás miembros de la comunidad establezcan líneas comunes de actuación en lo que se refiere a la orientación educativa y profesional, entendida como atención a la diversidad para poder ofrecer una educación adaptada a las características y necesidades individuales.



Fomentar el trabajo cooperativo y en grupo tanto entre los alumnos como entre el profesorado, estimulando el trabajo interdisciplinar para conseguir una mayor relación entre las programaciones de las áreas.



Potenciar la innovación educativa a través de una formación conjunta y continuada en aquellos temas comunes a todos. ACTIVIDAD CENTRAL

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Consideramos necesaria, además de su revisión global, la inclusión de todas aquellas actuaciones que no se hayan tenido en cuenta en su elaboración inicial, tales como:



Elaborar y aplicar protocolos de detección y prevención de conflictos, realizando diagnósticos específicos.



Analizar los ámbitos que suelen concretarse en las normas de funcionamiento: espacios comunes, materiales, horarios y relaciones personales.

Cerezo, F. (2002). La violencia en las aulas. Madrid: Pirámide. Cerezo, F. (2000). Bull-s. Test de evaluación de la Agresividad entre escolares. Madrid: Albor-Cohs. Avilés, J. Mª (2006) Bullying: el maltrato entre iguales. Agresores, víctimas y testigos en la escuela. Salamanca: Amarú. Harris, S. y Petrie, G. (2006) El acoso en la escuela. Los agresores, las víctimas y los espectadores. Barcelona: Paidós.



Establecer las normas de convivencia de aula.



Determinar las necesidades de formación de la comunidad educa-

Serrate, R. (2007) Bullying acoso escolar. Guía para entender tiva en temas relacionados con la convivencia.



PARA SABER MÁS:

y prevenir el fenómeno de la violencia en las aulas. Laberinto. www.acosoescolar.info

Establecer las actuaciones obligatorias que permitan desarrollar

www.bullyinginschoolinfo/es/

www.el-refugio.net

adecuadamente el trabajo en equipo, que debe estar basado, entre otros, en los siguientes aspectos:



Evaluación de necesidades del grupo y las respuestas para satisfa-

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cerlas: Evaluación inicial, adaptaciones, propuestas de orden convivencial, evaluación de los aprendizajes y rendimientos.



Conocimiento y elaboración de la información que se traslade a los padres del alumnado.



Elaborar protocolos de mediación.



Revisar las funciones y actuaciones del Consejo Escolar y de la Comisión de Convivencia.

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