La Buena Noticia
Dios nos Habla hoy LECTIO DIVINA
07 de Noviembre del 2010 N. 34
Domingo XXXII del Tiempo Ordinario– Ciclo C Pagina Web: www.pastoralfamiliarvenezuela.org/; www.apologeticacatolica.org/
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† Lectura del santo Evangelio según San Lucas (20, 27-38)
Se acercaron a Jesús algunos saduceos. Esta gente niega que haya resurrección, y por eso le plantearon esta cuestión: «Maestro, Moisés nos dejó escrito: Si un hombre tiene esposa y muere sin dejar hijos, el hermano del difunto debe tomar a la viuda para darle un hijo, que tomará la sucesión del difunto. Había, pues, siete hermanos. Se casó el primero y murió sin tener hijos. El segundo y el tercero se casaron después con la viuda. Y así los siete, pues todos murieron sin dejar hijos. Finalmente murió también la mujer. Si hay resurrección, ¿de cuál de ellos será esposa esta mujer, puesto que los siete la tuvieron?» Jesús les respondió: «Los de este mundo se casan, hombres y mujeres, pero los que sean juzgados dignos de entrar en el otro mundo y de resucitar de entre los muertos, ya no toman marido ni esposa. Además ya no pueden morir, sino que son como ángeles. Son también hijos de Dios, por haber nacido de la resurrección. En cuanto a saber si los muertos resucitan, el mismo Moisés lo dio a entender en el pasaje de la zarza, cuando llama al Señor: Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob. El no es Dios de muertos, sino de vivos, y todos viven por él.» (TRADUCCION BIBLIA LATINOAMERICANA)
1. LECTURA: ¿Qué dice el texto? PISTAS PARA LA LECTURA Los saduceos, grandes propietarios de tierras, formaban la élite de los sacerdotes. No creían en la
resurrección, y proponen a Jesús un caso difícil, para mostrar que es absurdo creer en la resurrección. Jesús rectifica la cuestión para mostrar que la vida de la resurrección no debe concebirse como una mera copia de la vida en la dimensión presente. ¿Y los muertos resucitan? Refiriéndose a la celebre formula “Dios de Abrahán, Dios de Isaac y Dios de Jacob”, Jesús muestra que, siendo Dios de los vivos y de la vida, también Abrahán, Isaac Jacob deben estar vivos para Dios, y esa vida no conoce final. Quien esta con Dios está vivo.
Elaborado y diseñado por el Licdo. Orlando Carmona. Ministro de la Palabra.
Publicación Bíblica Semanal. Pagina Web: www.pastoralfamiliarvenezuela.org/ www.apologeticacatolica.org/
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2. MEDITACION ¿Qué me dice el texto? Preguntas para la meditación
¿Soy como los saduceos que niegan la resurrección? ¿Creo firmemente en la vida eterna? ¿La “vida futura” para mí es motivo de esperanza? ¿Creo en el Dios Padre Todopoderoso? ¿Estoy consciente que Dios es un Dios de vivos y no de muertos? ¿Tengo seguridad que en la otra vida no necesitare nada? ¿Considero que mi vida aquí en la tierra es continuidad de la eternidad? ¿Hay alguna diferencia entre este mundo y el de los resucitados? ¿Le he declarado la guerra al pecado para ser grato a los ojos de Dios? 3. ORACION: ¿Qué le digo? Vamos a orar al Señor con el salmo 99 (lit 98), que trata dos asuntos: la grandeza de Dios y su admirable santidad. A nosotros los cristianos debe hacernos pensar en el cielo donde Dios reina para siempre, y donde nosotros reinaremos con Él.
**** El Señor reina, tiemblan los pueblos; monta en querubines, la tierra se estremece. En Sión el Señor es muy grande, exaltado por encima de todos los pueblos. Que celebran tu nombre grande y terrible: "¡El es Santo!" Rey poderoso, amante de la justicia, tú has establecido la rectitud, tú ejerces en Jacob el derecho y la sentencia justa. Ensalcen al Señor, nuestro Dios, póstrense ante la tarima de sus pies: ¡El es Santo! Moisés y Aarón eran sus sacerdotes, Samuel también invocaba su nombre: invocaban al Señor y él les respondía. De la columna de nube les hablaba, guardaban sus órdenes, las leyes que les dio. Oh Señor, nuestro Dios, tú les respondías, tú eras para ellos un Dios tolerante, pero no les dejabas pasar nada. Ensalcen al Señor, nuestro Dios, póstrense ante su santo monte: ¡Santo es el Señor nuestro Dios! 4. CONTEMPLACION: ¿Cómo interiorizo el mensaje
Cómo interiorizo el mensaje? ¿Cómo interiorizamos el mensaje? Para interiorizar el mensaje propongo contemplar las palabras de San Fran Francisco de Sales en su libro “Introducción a la Vida Devota” en el que nos habla sobre la gloria eterna. “Considera, finalmente, el bien que logran todos en gozar de Dios, que con su amabilísimo aspec-
to eternamente los regala y derrama en sus corazones un abismo de delicias. ¡Qué dicha estar siempre unidos a su primer principio! Son los bienaventurados en el cielo como unos felices pajarillos que revolotean y cantan sin cesar en el aire puro de la divinidad, que por todas partes los rodea con increíbles placeres” Elaborado y diseñado por el Licdo. Orlando Carmona. Ministro de la Palabra
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5. ACCION: ¿A que me comprometo? Propuesta Personal
Buscar la vida eterna, para ello irla creando desde el mundo en el que vivo.
Catecismo de la iglesia católica 992 La resurrección de los muertos fue revelada progresivamente por Dios a su Pueblo. La esperanza en la resurrección corporal de los muertos se impuso como una consecuencia intrínseca de la fe en un Dios creador del hombre todo entero, alma y cuerpo. El creador del cielo y de la tierra es también Aquél que mantiene fielmente su Alianza con Abraham y su descendencia. En esta doble perspectiva comienza a expresarse la fe en la resurrección. En sus pruebas, los mártires Macabeos confiesan: El Rey del mundo a nosotros que morimos por sus leyes, nos resucitará a una vida eterna (2 M 7, 9). Es preferible morir a manos de los hombres con la esperanza que Dios otorga de ser resucitados de nuevo por él (2 M 7, 14; cf. 7, 29; Dn 12, 1-13).
995 Ser testigo de Cristo es ser "testigo de su Resurrección" (Hch 1, 22; cf. 4, 33), "haber comido y bebido con El después de su Resurrección de entre los muertos" (Hch 10, 41). La esperanza cristiana en la resurrección está totalmente marcada por los encuentros con Cristo resucitado. Nosotros resucitaremos como El, con El, por El.
996 Desde el principio, la fe cristiana en la resurrección ha encontrado incomprensiones y oposiciones (cf. Hch 17, 32; 1 Co 15, 12-13). "En ningún punto la fe cristiana encuentra más contradicción que en la resurrección de la carne" (San Agustín, psal. 88, 2, 5). Se acepta muy comúnmente que, después de la muerte, la vida de la persona humana continúa de una forma espiritual. Pero ¿cómo creer que este 993 Los fariseos (cf. Hch 23, 6) y muchos contem- cuerpo tan manifiestamente mortal pueda resucitar a poráneos del Señor (cf. Jn 11, 24) esperaban la resu- la vida eterna? rrección. Jesús la enseña firmemente. A los saduceos que la niegan responde: "Vosotros no conocéis 997 ¿Qué es resucitar? En la muerte, separación del ni las Escrituras ni el poder de Dios, vosotros estáis alma y el cuerpo, el cuerpo del hombre cae en la en el error" (Mc 12, 24). La fe en la resurrección corrupción, mientras que su alma va al encuentro descansa en la fe en Dios que "no es un Dios de con Dios, en espera de reunirse con su cuerpo glorimuertos sino de vivos" (Mc 12, 27). ficado. Dios en su omnipotencia dará definitivamente a nuestros cuerpos la vida incorruptible 994 Pero hay más: Jesús liga la fe en la resurrección uniéndolos a nuestras almas, por la virtud de la Rea la fe en su propia persona: "Yo soy la resurrección surrección de Jesús. y la vida" (Jn 11, 25). Es el mismo Jesús el que resucitará en el último día a quienes hayan creído en él. 998 ¿Quién resucitará? Todos los hombres que han (cf. Jn 5, 24-25; 6, 40) y hayan comido su cuerpo y muerto:"los que hayan hecho el bien resucitarán bebido su sangre (cf. Jn 6, 54). En su vida pública para la vida, y los que hayan hecho el mal, para la ofrece ya un signo y una prenda de la resurrección condenación" (Jn 5, 29; cf. Dn 12, 2). devolviendo la vida a algunos muertos (cf. Mc 5, 21 -42; Lc 7, 11-17; Jn 11), anunciando así su propia 999 ¿Cómo? Cristo resucitó con su propio cuerpo: Resurrección que, no obstante, será de otro orden. "Mirad mis manos y mis pies; soy yo mismo" (Lc De este acontecimiento único, El habla como del 24, 39); pero El no volvió a una vida terrenal. Del "signo de Jonás" (Mt 12, 39), del signo del Templo mismo modo, en El "todos resucitarán con su pro(cf. Jn 2, 19-22): anuncia su Resurrección al tercer pio cuerpo, que tienen ahora" (Cc de Letrán IV: DS día después de su muerte (cf. Mc 10, 34). 801), pero este cuerpo será "transfigurado en cuerpo de gloria" (Flp 3, 21) Elaborado y diseñado por el Licdo. Orlando Carmona. Ministro de la Palabra
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La Familia: Meditando el Evangelio (Lc 20,27-38) “Las familias dignas transforman la sociedad y alegran el cielo” El texto que nos presenta Lucas, pone en acción a los saduceos que no creían en la resurrección, y que intentaban enredar a Jesús con una pregunta basada en la Ley del Levirato (Dt 25,5ss). La respuesta de Jesús hace ver primero que el matrimonio es una realidad temporal, natural y necesaria para la prolongación de la especie. Jesús le responde a los saduceos que “en la vida futura los que sean juzgados dignos de ella y de la resurrección de los muertos, no se casarán ni podrán ya morir, porque serán como loa ángeles e hijos de Dios, pues él los habrá resucitado” (Lc 20,35-36). En la resurrección ya no habrá necesidad de una serie de cosas que eran necesarias al ser humano, ya que la resurrección no es la prolongación de esta vida con sus necesidades y deficiencias, sino un estado de vida absolutamente pleno donde ya no habrá necesidades por satisfacer. San Juan Crisóstomo nos habla sobre la otra vida y nos dice en su libro sobre el Matrimonio Único “porque no es la muerte o la muerte esta, sino una especie de migración y desplazamiento de lo peor a lo mejor, de la tierra al cielo, de los hombres a los ángeles y arcángeles y al Señor de los ángeles o arcángeles”. Jesús ha sido muy claro y nos dice que para llegar a la vida futura hay que ser digno de ello, pero sin duda alguna hay que ser digno en este mundo para aspirar a lo más alto. En la época en que vivimos predomina el existencialismo, es por ello que necesitamos de familias dignas que transformen la sociedad y que alegren al cielo. En la medida en que nuestras familias sean “dignas” la sociedad se volverá más humanista y sobre todo llena de mucha paz y caridad. Las características fundamentales de estas familias son: renuncia, sufrimiento, buenas obras , conocimiento de Dios y pureza. . Algunos de los pasajes del Nuevo Testamento nos demuestra este concepto de “ser digno”:
Mt 10,37 “Quien ama a su padre o a su madre más que a mí no es digno de mí” (Renuncia).
Hch 5,41 “Ellos se marcharon del tribunal contentos de haber sido considerados dignos de sufrir desprecios en el nombre de Jesús” (Sufrimiento).
1 Col 1,10 “Lleven una vida digna del señor, agradándole en todo, dando fruto de buenas obras y conocimiento de Dios (Obras y Palabra de Dios).
Ap 3,4 “Con todo, tienes en sardes unos cuantos que no han contaminado sus vestiduras. Vestidos de blanco se pasearán conmigo, porque son dignos” (Pureza).
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VOCABULARIO BIBLICO Saduceo: gr. Saddoukaios, del ar. Zaddûqâyâ, que deriva del nombre propio del Sumo sacerdote rival de Abiatar (2 S 8,17; 1 R 1,8), Sadoq (gr. Sadôk), nombre que a su vez, viene del hebreo que significa “justo”. La descendencia de Sadoq ejerció un gran influjo sobre el clero de Jerusalén, hasta el punto que ya no se habla más de los “hijos de Aarón”, sino de los hijos de Sadoq. En Mt aparecen ordinariamente en compañía de los fariseos , pero se distinguen claramente de éstos por sus creencias (Mt 22,23; Hch 23,6-8), por su comportamiento político y por su actitud frente a Jesús y los primeros cristianos. Resurrección: Imagen principal por la que los judíos y cristianos expresan lo que el hombre llega a ser después de su muerte. La palabra evoca el hecho de “ponerse de pie”, ya sea después de estar acostado (gr. anistamai) (Mt 26,62), ya sea después de un sueño (gr. egeiromai) (Mt 8,26; 9,19); es resurgir después de la muerte. En Israel , la fe en la resurrección se expresó hacia el principio del s. II a.C., con ocasión del martirio de los Macabeos (2 M 7,14); puesto que Dios es justo, el no puede dejar eternamente en el seol a los que han entregado su vida para afirmar que YHWH es el verdadero Dios. La resurrección no consiste en la recuperación del cuerpo por un alma inmortal, sino en el acto del Dios justo que da al hombre su propia vida, y eterna. Los primeros cristianos afirmaron, mediante dos lenguajes, que Jesús había regresado vivo después de su muerte, el lenguaje de la exaltación y el de la resurrección. Mediante este último, en sus confesiones de fe (Rm 10,9; 1 Co 15,3-5), proclamaron que Jesús era Señor, Cristo, Primogénito de entre los muertos (Hch 2,36). La resurrección universal sucederá al final de los tiempos. Excepcionalmente, Pablo dice que nosotros ya hemos resucitado con Cristo (Col 3, 1-3); sin embargo no se pude pretender que la resurrección ya haya sucedido ( 2 Tm 2,18). Ordinariamente es el termino “vida” el que caracteriza el efecto de la resurrección de Jesús sobre los creyentes, estos han pasado de la muerte a la vida.
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REFLEXIÓN DIARIA DEL EVANGELIO “Porque la Palabra de Dios es viva y eficaz y más cortante que espada de dos filos” (Hb 4,12)
**Lunes 8 de Noviembre . Evangelio Lc 17,1-6: Si el Evangelio advierte a los discípulos sobre los escándalos, es porque éstos existían en las comunidades cristianas de aquel tiempo. Escándalo es una palabra griega que significa cebo, celada, trampa, y luego piedra de tropiezo, piedra colocada a propósito para hacer tropezar a alguien. Jesús sabe que los escándalos son inevitables. Pero ¡ay de quienes lo provoca! DIOS TE HABLA HOY: ¿Eres de los que provoca ocasiones de pecado? **Martes 9 de Noviembre. Evangelio Jn 2,13-22 (Dedicación de la Basílica de Letrán) Los Evangelios sinópticos ponen este incidente en la única visita que Jesús hace a Jerusalén al final de su ministerio. Jesús viene a transfórmalo todo. El templo que se había convertido en un mercado debía ser sustituido por Jesús , el nuevo Templo de la presencia de la gloria de Dios. DIOS TE HABLA HOY: ¿Es tu cuerpo templo del Espíritu Santo, donde me glorificas ? **Miércoles 10 de Noviembre. Evangelio Lc 17,11-19 (San León Magno): Cerca del poblado, Jesús se encuentra con diez leprosos, ellos debían permanecer fuera de la ciudad (marginados) . La petición que hacen a Jesús demuestra la confianza. Jesús no los cura de inmediato, sino que prueba la fe de ellos y su obediencia a las prescripciones de la Ley. En efecto, se ordenaba que un curado se presentara a los sacerdotes para que éstos comprobaran la curación y lo reintrodujeran en la convivencia social (Lv 14,1-32). En el camino quedan curados y uno de ellos, uno solo, se vuelve para agradecer a Jesús, solo el samaritano agradeció. DIOS TE HABLA HOY: ¿Eres de los que agradece mi gracia y me das toda la gloria? **Jueves 11 de Noviembre. Evangelio Lc 17,20-25 (San Martín de Tours): Los fariseos todavía no aceptan que en Jesús ya esté inaugurado el tiempo del reinado de Dios. Ellos mantienen la expectativa de un mesías glorioso, investido con todo poder. Jesús no sólo declara que el reino ya está actuando, sino también que el Hijo del hombre es quien ha inaugurado ya este advenimiento del reino. DIOS TE HABLA HOY: ¿ Estas consciente que mi Reino ya llegó ? **Viernes 12 de Noviembre. Evangelio Lc 17,26-37 (San Josafat): El día en que se revele el Hijo del Hombre será tan grande que no habrá tiempo de volver a recoger los bienes. El que quisiera hacer esto resultaría destruido como la mujer de Lot, que simplemente miró hacia atrás. Sencillamente no habrá tiempo de cambiar a ultima hora , quien quiera salvarse se perderá, y el que pierda su propia vida la conservará. DIOS TE HABLA HOY: ¿Te dedicas a hacer el bien para preparar el encuentro con mi Hijo? **Sábado 13 de Noviembre. Evangelio Lc 18,1-8: Esta parábola tiene dos aspectos acumulados. Originalmente llama la atención sobre el juez y lo contrapone a Dios, si un juez injusto atiende, mucho más Dios, que es justo y ama a sus escogidos. Es una lección sobre la perseverancia en la oración, y recuerda de cerca lo que se dijo en Lc 11,5-12. DIOS TE HABLA HOY: ¿Cómo esta tu oración? ¿Oras sin desfallecer? Elaborado y diseñado por el Licdo. Orlando Carmona. Ministro de la Palabra.
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