Muy lejos, allí cerca del sol, están mis altas aspiraciones. Tal vez no sea capaz de alcanzarlas, pero puedo admirar su belleza, creer en ellas y tratar de llegar a donde me guían. (Louisa May Alcott)

Manual de Perspectiva de Genero ESTRATEGIA PARA LA IMPLANTACIÓN DE LA PERSPECTIVA DE GÉNERO EN CRUZ ROJA JUVENTUD Oficina Central de Cruz Roja Juventud Madrid, marzo de 2005

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Índice

1.

Introducción

2.

Antecedentes

3.

Análisis de contexto

4.

Marco de política institucional

5.

Marco conceptual

6.

Directrices generales para la implantación de la perspectiva de género en Cruz Roja Juventud

7.

Incorporación de la perspectiva de género en las áreas de trabajo de Cruz Roja Juventud

8.

Conclusiones

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1.

Introducción

En Cruz Roja Juventud, a través de nuestra labor socioeducativa, pretendemos formar personas en una sociedad justa e igualitaria, donde no haya diferencias por el simple hecho de haber nacido hombre o mujer, sino en la que se considere a la persona en su integridad, con sus valores y limitaciones. En este compromiso con la no discriminación se reconoce la perspectiva de género, que Cruz Roja Juventud quiere asumir y promover de forma explicita, a través de los programas, proyectos y acciones desarrolladas en el marco del área de “Perspectiva de Género y Coeducación” y de forma implícita, mediante una transversalización del enfoque de género a toda la estructura y servicios que ofrece la asociación. El documento que a continuación se presenta pretende definir en primer lugar las pautas para avanzar en el compromiso de la equidad de género y, en segundo lugar, mostrar la capacidad de Cruz Roja Juventud para integrar la perspectiva de género de manera transversal en todos los ámbitos (programas, proyectos, procedimientos y cultura organizacional); todo ello siguiendo las directrices del Documento Marco del área de Perspectiva de Género y Coeducación de Cruz Roja Juventud, así como los modelos utilizados por otros organismos que ya han incorporado la perspectiva de género en su dinámica de trabajo.

2.

Antecedentes

Desde sus inicios, Cruz Roja Juventud ha venido trabajando de manera transversal y mediante la elaboración de guías y otros materiales, en la sensibilización sobre la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres, la violencia de género, y otros temas relacionados con la no discriminación y los derechos de las mujeres y niñas. En el año 2001, tras la celebración de la VII Junta General de Cruz Roja Juventud se acordó la incorporación del Área de Mujer Joven a las áreas de actuación previamente existentes en la organización, así como la creación de la Comisión Estatal de Mujer Joven que se encargaría de la promoción y desarrollo del nuevo área de intervención. Con esta iniciativa se pretendía fortalecer y equilibrar el papel que las mujeres jóvenes tienen en Cruz Roja Juventud, así como trabajar a favor de la igualdad de derechos de hombres y mujeres en nuestra sociedad. Desde su creación, la Comisión Estatal ha venido siendo un foro de participación activa y reflexión sobre los temas que afectan a Cruz Roja Juventud, dando a un mayor número de voluntarios y voluntarias de diferentes ámbitos territoriales la oportunidad de implicarse en sus acciones y debates, generando espacios de reflexión y posicionamiento, elaborando Documentos Marcos y definiendo acciones concretas de intervención.

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En el año 2003, tras la reunión nº2 del nuevo Consejo Nacional de Cruz Roja Juventud, la Comisión Estatal de Mujer Joven pasó llamarse Comisión Estatal de Perspectiva de Género y Coeducación, concretando mediante esta nueva denominación su razón de ser y sus objetivos de trabajo hasta la fecha, enumerados a continuación: -

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Promover un desarrollo humano equitativo y sostenible desde una perspectiva de género Desarrollar el conocimiento sobre las desigualdades de género, sus determinantes y consecuencias, ayudando especialmente a niños, niñas y jóvenes a plantearse desde una visión reflexiva y crítica, las diferentes formas de discriminación entre hombres y mujeres que existen y persisten en nuestra sociedad, fomentando la construcción de una realidad más justa para todos y todas. Diseñar y llevar a cabo acciones orientadas hacia la lucha contra la discriminación de la mujer, contra la violencia de género y a favor del emponderamiento de la mujer. Dotar a todas nuestras actuaciones de una perspectiva de género, garantizando que todos nuestros programas beneficien a hombres y mujeres por igual, de acuerdo con sus necesidades específicas, y con la colaboración y participación igualitaria de ambos sexos en todos los niveles.

Cruz Roja Juventud, como sección juvenil de Cruz Roja Española, no quiere permanecer ajena a los derechos de las mujeres, jóvenes y niñas, y considera fundamental posicionarse e implicarse ante una realidad que nos muestra históricamente que todas las mujeres, en mayor o en menor intensidad, viven diferentes formas de violencia que recortan los Derechos Humanos y las libertades fundamentales de las personas. “toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamadas en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo” Declaración Universal de los Derechos Humanos. Asamblea General de las Naciones Unidas. 10 de Diciembre de 1948.

3.

Análisis de contexto

A continuación vamos a intentar hacer un breve y conciso análisis de las desigualdades que afrontan las y los jóvenes españolas/es , desigualdades que, desde la perspectiva de desarrollo humano, suponen una limitación de las capacidades y una negación de oportunidades para obtener una mejor calidad de vida.

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● Demografía: Según datos del Instituto de la Mujer, la población de España en 2003 asciende a 42.717.064 personas, de las cuales 21.682.738 (50,76%) son mujeres y 21.034.326 (49,24%) son hombres. La estructura de edades refleja la existencia de una población más bien adulta, con el mayor porcentaje de personas entre los 25 y 49 años. Disgregando los datos por sexo, llama la atención el hecho de que es a partir de los 50 años cuando la esperanza de vida de las mujeres supera a la de los hombres, llegando a alcanzar los 83,36 años frente a los 76, 62 años que alcanzan los hombres. El estado civil mayoritario en España es el de casado /a, constituyendo el 58,65% del total. La soltería es la siguiente opción deseada, donde las mujeres constituyen el 45,05% del total. Destaca la cifra de separadas/ divorciadas, donde las mujeres supones el 64, 36% frente a los hombres (35,64%). La cifra de separaciones/ divorcios viene incrementándose progresivamente en los últimos años. Por último, las tasas de fecundidad se han reducido escandalosamente en los últimos veinte años. En 1983 hablábamos de una tasa global de fecundidad (por mil) del 53,65, en el 2002 esta cifra es de 38,70. No obstante, como dato positivo, comenzamos a observar un leve pero paulatino incremento en los últimos cinco años. Otro dato que refleja el cambio por el que están atravesando las mujeres en nuestra sociedad es el desplazamiento en la edad de fecundación de los hijos; en 1983 la edad predominante se situaba entre los 25-29 años, desde entonces un continuado incremento ha situado a las mujeres entre 30-34 años como grupo mayoritario. Junto a ello, también se ha incrementado el número de mujeres mayores de 34 años que tienen hijos. Los apartados siguientes apuntan diferentes temas que sin ser exhaustivos, reflejan las principales áreas de preocupación de las mujeres españolas y europeas (datos extraídos de la “Guía de Mujeres Jóvenes por la Igualdad de Género en Europa” (Lobby Europeo de Mujeres, Abril 2001) * http://youngwomen.womenlobby.org/pdf/JF_SP.pdf y del documento “Mujeres en cifras”(Instituto de la Mujer, 2004) http://www.mtas.es/mujer/principal.htm )

● Educación: Las jóvenes y las mujeres europeas encuentran todavía muchos obstáculos para que sus capacidades sean reconocidas en el sistema educativo (por el profesorado, por la jerarquía educativa...) y para poder encontrar un empleo. La educación, que debería ser un motor de igualdad de oportunidades , reproduce en muchas ocasiones la discriminación hacia las mujeres.

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Algunas cifras: -

Las mujeres no representan más que el 45% de los estudiantes en formación profesional. Los resultados escolares de las mujeres son generalmente mejores que los de los hombres, pero las mujeres tienen siempre mayores dificultades para acceder a un empleo. En la Unión Europea en su conjunto hay un 21% de jóvenes desempleadas y un 18,2% de jóvenes parados.

En España, los datos del Instituto de la Mujer, del segundo trimestre del 2004 señalan que un 3,69% de la población femenina es analfabeta, frente al 1,75% de los hombres. En el nivel de Estudios Primarios son más las mujeres que los han finalizado (26,39%) que los hombres (24,45%). También son más las mujeres que se decantan por estudios universitarios de primer ciclo (7,40%) que los hombres (5,65%), invirtiéndose esta tendencia en los estudios universitarios de segundo ciclo. Además, los chicos eligen estudios de Formación Técnico-Profesional en mayor medida que las chicas (12,71% de los chicos y 10,57% de las chicas).

● Mundo laboral: La distancia que separa a las mujeres de los hombres en el mercado laboral es todavía muy amplia en todos los países de la UE: la tasa de empleo es menor, la duración del paro más elevada, los salarios son más bajos y los trabajos más precarios. Las mujeres jóvenes son las más importantes víctimas, ya que acumulan una doble discriminación, por ser jóvenes y por ser mujeres. Otros grupos, tales como mujeres jóvenes inmigrantes, las pertenecientes a grupos étnicos minoritarios, las que sufren algún tipo de minusvalía o las lesbianas, deben hacer frente a dificultades todavía más importantes. Algunos datos: -

En el conjunto de la Unión Europea, a igual trabajo, el salario bruto/ hora de una mujer, equivale al 76% del de un hombre. La tasa de empleo de las mujeres es del 51,2% a diferencia del 70,8% de los hombres. La Unión Europea cuenta con un 21% de mujeres jóvenes desempleadas (de entre 15 y 25 años) a diferencia del 18,25% de los hombres. El 83% de trabajadores a tiempo parcial en la Unión Europea son mujeres.

En España, volviendo a los datos aportados por el Instituto de la Mujer, nos encontramos con que, en el segundo trimestre del 2004, del total de la población ocupada mayor de 16 años, el 39 % son mujeres (los hombres 61%). Entre las personas que buscan su primer empleo el 65% son mujeres. El porcentaje de paradas asciende a 57% frente al 43% de los hombres.

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Si analizamos la repartición de la ocupación femenina por sectores de actividad laboral, constatamos la existencia de nuevas discriminaciones: el 83% de las mujeres españolas trabajan en Servicios, el resto se reparten en Industria donde se encuentra un 11%, Agricultura con 3,6% y por ultimo Construcción, 1,7%. La situación de los hombres es bastante diferente: en el sector Servicios se emplean el 52,4% , 22% en la Industria, en la Construcción 18,7% y en la Agricultura 6,42%. Si bien las mujeres jóvenes se orientan cada vez más hacia profesiones “típicamente masculinas” continúan estando sobrerepresentadas en las profesiones “tradicionalmente femeninas” y están infrarepresentadas en trabajos de responsabilidad o profesiones liberales. Esta segregación tiene como origen un fuerte componente cultural que ha inclinado tanto a las mujeres como a los hombres hacia una preparación profesional fuertemente estereotipada, que está presente en las empresas ejerciendo una fuerte presión en los procesos de selección, formación y promoción. Otro dato estadístico muy representativo lo aportan las tasas de paro por edad y sexo. Mientras en la franja de edad de 16-19 años las diferencias en parados hombres y mujeres no son excesivas (38,28% mujeres y 27% hombres) esta diferencia va incrementándose ininterrumpidamente, alcanzando su máximo entre los 40-44 años, (14,24% mujeres y 5,44% hombres). Ello es un reflejo de las complicaciones con que se va encontrado la mujer, a medida que avanza en su desarrollo y adopta su rol femenino.

● Salud: Las mujeres sufren enfermedades típicamente femeninas como el estrés o la depresión, que generalmente no son tomadas en serio por la medicina. Las mujeres jóvenes son particularmente vulnerables a la tiranía de la delgadez y a la apariencia física impuesta por los estereotipo perpetuados por los medios de comunicación. Se estima que un 1% de las adolescentes europeas sufren anorexia y un 4% tiene problemas de bulimia. La medicina parece que ignora las características femeninas. Las mujeres reaccionan de forma diferente a algunos tratamientos médicos en comparación con los hombres: su cuerpo no absorbe bien ciertos medicamentos, sin embargo, la mayor parte de las pruebas farmacéuticas se efectúan en hombres. Recogiendo de nuevo algunos datos de las estadísticas del Instituto de la Mujer, en España, en el año 2002 las principales causas de mortalidad en mujeres fueron: enfermedades del aparato circulatorio, seguidas de tumores, y a mucha distancia enfermedades del aparato respiratorio. En el caso de los hombres las causas más importantes son las mismas, si bien los tumores se sitúan en primer lugar.

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Llama la atención el caso de las enfermedades mentales y los trastornos del sistema nervioso, donde las mujeres superan a los hombres en su padecimiento en un porcentaje muy considerable (66% de mujeres frente a 34% de hombres).

● Violencia: La raíz de la violencia de género se encuentra en el legado de la sociedad patriarcal, en el seno de la cual se encuentran los estereotipos y las discriminaciones pasadas y actuales. Con demasiada asiduidad los hombres se sienten legitimados a ejercer violencia contra sus parejas, como si en el hogar las reglas exteriores no tuvieran vigencia alguna. Algunos datos: -

El 98% de las víctimas de violencia doméstica son mujeres. Una mujer de cada cinco en Europa ha sufrido algún tipo de violencia por parte de su pareja. Según un estudio llevado a cabo en los Países Bajos, el coste de la violencia doméstica hacia las mujeres (servicios sociales, sanidad, policía...) en ese país es de alrededor de 150 millones de euros por año.

Los países de la Unión Europea están tomando diferentes medidas legislativas destinadas a proteger a las mujeres de la violencia. En el caso de España, el Gobierno aprobó en julio de 2003 la “Orden de Protección de las víctimas de la violencia doméstica”, que incluye medidas penales, civiles y sociales. En diciembre de 2003 se habían solicitado 7.869 ordenes, en su mayoría por el cónyuge femenino, es decir, en el marco de un matrimonio formalizado. A pesar de estas medidas, las denuncias por malos tratos continúan incrementándose de año en año de una manera vertiginosa, siendo las mujeres entre 31 y 40 años quienes más denuncian, seguidas muy de cerca por las mujeres entre 21 y 30. Junto a este dato, el Instituto de la Mujer realizó la macroencuesta sobre “violencia contra las mujeres” en la que las mujeres entre 45 y 64 años resultaron ser el grupo mayoritario de mujeres maltratadas. Por último, otro grave atentado contra las mujeres en nuestra sociedad es la violencia sexual. Las jóvenes son las primeras victimas del tráfico de seres humanos, que en la mayoría de los casos combinan una elevada violencia física y psíquica con la explotación sexual. La Organización Internacional para las Migraciones estima que 500.000 mujeres son cada año víctimas del tráfico de seres humano en la UE. De ellas, unas 300.000 provienen de los Balcanes . En España, anualmente se recogen alrededor de 6.000 casos de abuso, acoso y agresión sexual, siendo Madrid quien encabeza la lista de las Comunidades Autónomas.

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● Medios de Comunicación: Tanto en la prensa, la radio, el cine, la publicidad o la televisión, y en general en toda la industria de la cultura, se detecta un constante goteo de imágenes y expresiones que alimentan el patrón que muestra una visión deformada de la mujer como víctima, objeto, sexo débil y figura dominada y vicaria. A pesar de los avances registrados en los últimos años, en los que se observa, por parte de las y los profesionales, una mayor toma de conciencia sobre la imagen discriminatoria de las mujeres en los medios de comunicación, eliminar los mensajes que contribuyen a crear ese estereotipo femenino, sigue siendo necesario y fundamental para afrontar con posibilidades de éxito el problema de la violencia de género. Algunas cifras: -

Los hombres detentan el 87% de los puestos de responsabilidad en el sector de los medios de comunicación. En España, si nos referimos a las noticias de radio y televisión, las mujeres representan el 14 % del total de personas entrevistadas, los hombres el 86%.

● Participación política: En Europa las mujeres siguen estando infrarepresentadas en el seno de los gobiernos, parlamentos o empresas, así como en todos aquellos órganos que toman decisiones importantes para el conjunto de la sociedad. Son una minoría en los puestos de responsabilidad, y su situación es sensiblemente inferior en el ámbito privado. En nuestro país la situación política de las mujeres responde al patrón general europeo, así, actualmente en el Congreso de los Diputados las mujeres representan el 36% del total de diputados. En el Senado la cifra se reduce a 25,10%. En el poder judicial su participación se incrementa al 41%. Por otra parte, las mujeres en altos cargos en la Administración representaban en el 2002 tan sólo el 16%. Si nos trasladamos al ámbito autonómico, las alcaldesas representan el 12 % del total, y las concejalas el 27%. Si analizamos la evolución de estos datos desde el año 1982 hasta el presente , comprobamos un progreso positivo y un mayor acercamiento hacia la idea de democracia paritaria promovida por el Consejo de Europa, no obstante, se debe seguir trabajando en medidas de acción positiva que continúen potenciando la presencia de las mujeres para establecer un equilibrio definitivo

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● Igualdad de género: En España, el Instituto de la Mujer creado en 1983, es el organismo autónomo competente para la promoción y fomento de la igualdad de oportunidades. Desde su creación se han puesto en marcha cuatro Planes de Igualdad, el primero con un periodo de vigencia entre 1988 y 1990, el segundo, entre 1993-95, el tercero, 199700, en el que se adoptó el “ principio de mainstreaming” integrando así los acuerdos de la conferencia de Beijing (1995), y por último el cuarto Plan de Igualdad que entró en vigor en el 2003, con vigencia hasta el 2006, y en el que se pretende continuar potenciando el mainstreaming, con el conocimiento de que se ha conseguido mucho en diversas áreas (participación, mercado de trabajo, educación...) pero con el convencimiento de que hay que continuar combatiendo las discriminaciones aún existentes y aumentar la presencia de las mujeres en aquellos ámbitos de la vida social en que todavía se demuestra insuficiente.

4.

Marco de política institucional

Este epígrafe pretende sintetizar los organismos y documentos clave que han marcado y marcan hitos en las políticas en materia de igualdad de género, y que nos han proporcionado el marco necesario para asumir la implantación de la perspectiva de género en Cruz Roja Juventud. La Organización de las Naciones Unidas: Las Conferencias y Cumbres que convoca la ONU han servido de plataforma para reafirmar la igualdad de derechos de las mujeres mediante la creación de instrumentos internacionales que persiguen la adquisición de compromisos gubernamentales. Dentro de ellas destaca: IV Conferencia Mundial sobre las Mujeres de Beijing (China.1995): se potencia la aplicación de dos conceptos básicos para alcanzar la igualdad : enpowerment o emponderamiento de las mujeres y mainstreaming o integración de la perspectiva de género en todas las políticas, programas o proyectos. Unión Europea: En 1957, en el Tratado Constitutivo de la Comunidad Económica Europea, firmado en Roma, se introdujo el artículo 119, por el que se obliga a que los Estados miembros

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garanticen la aplicación del principio de igualdad de retribución entre trabajadores y trabajadoras que realizan un mismo trabajo. Este artículo supuso el primer antecedente sobre las políticas de igualdad en el marco comunitario. En 1997, con la firma del Tratado de Ámsterdam, se introdujo una nueva base normativa para las medidas relativas a la igualdad entre hombres y mujeres, concretamente, a las oportunidades en el mercado laboral y a la igualdad de trato en el trabajo. El Tratado introduce también el mainstreaming. En 1995 se creó un Grupo de Comisarios implicados en el desarrollo de actuaciones a favor de la igualdad de oportunidades. Durante los últimos diez años, desde la Comisión Europea se ha impulsado el cambio favorable para las mujeres con la puesta en marcha de diversas iniciativas y Programas de Acción Comunitarios. Hasta la fecha se han desarrollado cinco Programas de Acción basados en las líneas de acción de las Conferencias Mundiales de la ONU. En la actualidad se encuentra en vigor: V Programa de Acción comunitario para la igualdad de oportunidades 2001-2005: que consolida el mainstreaming, es decir, la integración horizontal de la dimensión del género en todas las políticas, y la adopción de acciones específicas complementarias a favor de todas las mujeres. España: La Constitución Española de 1978 estableció el principio de igualdad y nodiscriminación e instó a los poderes públicos a promover las condiciones para que la libertad y la igualdad fueran reales y efectivas. La Administración General del Estado, a través del Instituto de la Mujer, creado en 1983, y teniendo en cuenta las directrices marcadas por la Estrategia Marco Comunitaria, ha venido aprobando diversos Planes de Igualdad de Oportunidades, como instrumento de impulso y planificación de las políticas de igualdad entre mujeres y hombres. El último de los Planes elaborados es el que rige actualmente: IV Plan para la Igualdad de Oportunidades entre Mujeres y Hombres (2003-2006): Bajo los principios de mainstreaming y cooperación se articulan las ocho áreas que vertebran el plan: vida económica, toma de decisiones, calidad de vida, fomento de la igualdad en la vida civil, valores y actitudes igualitarias, conciliación en la vida familiar y laboral, y cooperación Por su parte, las diecisiete Comunidades Autónomas cuentan con mecanismos de igualdad de oportunidades en sus respectivos ámbitos territoriales, a nivel regional, promovidos por los Organismos de Igualdad de las Comunidades Autónomas, y a nivel local, promovidos desde las Concejalías de la Mujer de los Ayuntamientos.

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En España, es tal la importancia que está cobrando el principio de mainstreaming, que todos los mecanismos de igualdad, promovidos desde los diferentes ámbitos anteriormente mencionados están siendo elaborados desde el punto de vista integrador del mainstreaming.

5.

Marco conceptual

GÉNERO Las investigaciones feministas de los años 70 muestran que el concepto de sexo no es válido para explicar las diferencias de actividades entre hombres y mujeres en las distintas culturas a lo largo de la historia. Se elabora e introduce entonces el concepto de género como categoría de análisis que permite diferenciar y separar lo biológico, atribuido al sexo, de lo cultural, determinado por el género. El concepto de género puede definirse a tres niveles: 1) Género como construcción social Es la construcción social, cultural e histórica que se hace de las personas a partir de la identificación de sus características sexuales y que les asigna de manera diferencial un conjunto de funciones, actividades, relaciones sociales, formas de comportamiento, valores y normas. Se trata pues de un complejo de determinaciones y características, económicas, sociales, jurídicas, políticas, psicológicas y culturales que crean lo que en cada época, sociedad y cultura representa el ser y el hacer femenino y masculino y configuran un tipo de relaciones de poder entre hombres y mujeres que determinan las oportunidades de desarrollo de las personas. Es importante retener que: -

Su origen es histórico Está construido sobre la diferenciación sexual: sobre los cuerpos Está sujeto a cambio y transformación: es modificable.

2) Género como categoría de análisis de la realidad Una nueva forma de interrogar la realidad que implica una mirada más profunda. Permite identificar los diferentes papeles y tareas que llevan a cabo los hombres y las mujeres en una sociedad, tanto las asimetrías como las relaciones de poder e inequidades. Permite reconocer las causas que las producen y formular mecanismos para superar estas brechas. Contribuye a explicar y ampliar aspectos de la realidad que anteriormente no habían sido tomados en cuenta, y es aplicable a todos los ámbitos de la vida: laboral, educativo, personal, etc.

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3) Género como categoría política que implica acción para transformar esta inequidad Género como parte de una teoría política que parte del reconocimiento de la existencia de un patriarcado como sistema de dominación y reconoce la construcción androcentrista de nuestras sociedades. Por lo tanto, implica cuestionar ese sistema de dominación y comprometerse en la transformación de esta realidad y en el camino hacia la equidad.

CONCEPTOS RELACIONADOS: ● Igualdad de género: Cuando hablamos de igualdad de género se entiende como una relación de equivalencia en el sentido de que las personas tienen el mismo valor, independientemente de su sexo, y por ello son iguales. Se refiere a las normas, valores, actitudes y percepciones necesarias para alcanzar un estatus de igualdad entre mujeres y hombres sin neutralizar las diferencias que hay entre ellos. Podemos diferenciar también entre: -

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igualdad de derecho: igualdad formal ante la ley, es decir, equiparación de hombres y mujeres mediante medidas legislativas. igualdad de hecho: paridad entre hombres y mujeres real y efectiva. No bastan las medidas legislativas para transformar las estructuras de desigualdad. El mecanismo de acción positiva tiene como fin trabajar activamente y contrarrestar las desigualdades de partida para que la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres sea una realidad. igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres: constituye la garantía de que mujeres y hombres puedan participar en diferente esferas (económicas, políticas, sociales, de toma de decisiones) y actividades (educación, formación, empleo) sobre bases de igualdad.

● Perspectiva de género: Es el resultado de la aplicación del concepto de género, y supone tener en cuenta de forma sistemática las diferencias entre las condiciones, situaciones y necesidades de mujeres y hombres, en las fases de planificación, ejecución y evaluación de todas las políticas, proyectos y acciones emanadas desde cualquier institución, por lo que respecta a Europa, a los países industrializados y a los países en desarrollo.

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Exige el compromiso de todo tipo de organizaciones e instituciones para la modificación de la condición y posición de las mujeres, y en trabajar para lograr un sistema sexo-género equitativo, justo y solidario. ● Empoderamiento (empowerment): Acuñado en la Conferencia Mundial de las Mujeres en Beijing para referirse al aumento de la participación de las mujeres en los procesos de toma de decisiones y acceso al poder. Actualmente esta expresión conlleva también otra dimensión: la toma de conciencia del poder que individual y colectivamente ostentan las mujeres y que tiene que ver con la recuperación de la propia dignidad de las mujeres como personas. A través del “empoderamiento”, las personas y los grupos conquistan tres tipos de poder: • Social: información, conocimientos, acceso a las redes sociales y a recursos financieros. • Político: acceso a los procesos democráticos de toma de decisiones que les afectan. • Psicológico: toma de conciencia del poder que individual y colectivamente tienen las mujeres. Se alcanza mediante la autoestima personal y la recuperación de la dignidad como personas. Es por esto que el “empoderamiento” de las mujeres es no sólo un proceso personal y colectivo, sino también el resultado de dicho proceso.

● Transversalidad (Mainstreaming): El concepto “mainstreaming” se extendió y consagró tras la celebración de la IV Conferencia de Mujeres de Beijing. La transversalidad de género (en ingles, gender mainstreaming) es la estrategia elegida para avanzar en la igualdad de género. La característica principal de esta estrategia es que entiende como necesario tener en cuenta el enfoque de equidad de género de forma transversal en todas las políticas, estrategias, programas, actividades administrativas y económicas e incluso en la cultura institucional de una organización para contribuir verdaderamente a un cambio en la situación de desigualdad genérica. Por lo tanto, no basta con acciones directas y específicas a favor de la mujer, sino que es necesario que el esfuerzo por avanzar en la igualdad de género sea integral y afecte todo los niveles de la organización. Respecto a los proyectos y los programas, la transversalidad de género no significa únicamente asegurar que las mujeres participen en un programa de desarrollo previamente establecido, sino que pretende asegurar que tanto mujeres como hombres participen en la definición de objetivos y en la planificación. De esta manera,

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el desarrollo cumple con las prioridades y necesidades tanto de las mujeres como de los hombres, así como asegura la participación de todas y todos en la toma de decisiones, tanto en las grandes decisiones políticas como en las pequeñas decisiones diarias de la implementación, y en el disfrute de los beneficios del desarrollo. Además requiere de un análisis del impacto que la intervención de desarrollo puede tener en las mujeres y los hombres antes de tomar decisiones importantes respecto a objetivos, estrategias y distribución de recursos.

● Coeducación: En España, la evolución de la teoría y la práctica de la coeducación comenzó su nuevo enfoque con la transición democrática, en 1977. La base de la coeducación parte de un concepto: modificar de forma radical las relaciones interpersonales, tratando de cambiar un sistema educativo que sitúa a las niñas y a las mujeres en inferioridad de condiciones. Para eso, es fundamental demandar un marco pedagógico de una escuela activa y comunicativa con el fin de conseguir acciones más amplias y de mayor incidencia en las mentalidades, no como materia a impartir, sino como una opción de vida. Actualmente, la coeducación se considera un método de intervención educativo que va más allá de la educación mixta y cuyas bases se asientan en el reconocimiento de las potencialidades e individualidades de niñas y niños, independientemente de su sexo. La coeducación es, por tanto, educar desde la igualdad de valores de las personas.

6.

Directrices generales para la implantación perspectiva de género en Cruz Roja Juventud

de

la

En la elaboración de la estrategia de género de Cruz Roja Juventud, se observa como primera necesidad llevar a cabo un diagnóstico institucional, que permita retratar la situación actual de la transversalización del enfoque de género en todos los ámbitos de trabajo de la asociación, y a la vez, identificar los principales retos que quiere asumir CRJ en este sentido.

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DIAGNÓSTICO INSTITUCIONAL El trabajo que nos planteamos se concibe como un diagnóstico interno y participativo, en el que todas las personas involucradas contribuyan con sus opiniones y comentarios a dibujar el mapa situacional en Cruz Roja Juventud. Todos los niveles de la institución deben quedar reflejados: Oficina Central, Oficinas Autonómicas, Oficinas Provinciales y Oficinas Locales de Cruz Roja Juventud. El intercambio entre las diferentes estructuras debe ser abierto y permanente, asumiendo las diferentes velocidades de cada nivel y de las personas que lo conforman. Adoptando además un estilo propositivo y abierto a los cambios. A nivel metodológico, se proponen los siguientes instrumentos: -

Investigación documental Entrevistas formales e informales Observación participante Cuestionarios Reuniones de trabajo con las diferentes Comisiones de CRJ

Por otra parte, el análisis se estructura en torno a tres epígrafes diferentes: 1. Aspectos generales: se analizará, en los diferentes niveles de la institución, la difusión que existe sobre las políticas de género, el grado de conocimiento conceptual, los recursos económicos destinados a esta temática, los recursos humanos... 2. Perspectiva de género en los programas y proyectos existentes: se analizarán los documentos y los programas de las diferentes áreas de Cruz Roja Juventud bajo diversos indicadores: grado de segregación de datos por sexo, utilización de lenguaje no sexista, etc... También se contemplará en este sentido, el nivel de conocimiento de género de los responsables y técnicos de cada área de trabajo 3. Perspectiva de género en Oficina Central: Los indicadores de la Oficina Central de Cruz Roja Española, por sus características y posibilidades intrínsecas, serán utilizados como muestra ejemplificadora de la situación de Cruz Roja a nivel estatal: condiciones laborales según sexo, situación de los salarios, categorías profesionales, nivel de estudio, contrataciones, capacitación de los trabajadores, cultura organizacional... La ejecución del diagnóstico correrá a cargo de la Oficina Central de Cruz Roja Juventud, a través de la responsable del área de Perspectiva de Género y Coeducación, quien se encargará de planificar, elaborar, desarrollar y evaluar, los diferentes aspectos que conlleva este análisis.

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Con la elaboración del diagnóstico obtendremos un paisaje esclarecedor de la situación en que se encuentra la perspectiva de género en Cruz Roja Juventud y los aspectos en los que habrá de incidir nuestra institución a la hora de desarrollar la presente estrategia.

ESTRATEGIA DE GÉNERO EN CRUZ ROJA JUVENTUD Como mencionamos más arriba, el análisis institucional será el primer paso, pero éste queda enmarcado en un Plan de Acción más amplio que persigue transversalizar la perspectiva de género a toda la estructura de Cruz Roja Juventud y dinamizar el “mainstreaming” mediante su incorporación a todos los programas, proyectos, actividades y a la cultura organizacional. El objetivo último es que CRJ a través de todas sus acciones y procedimientos contribuya a la igualdad de género en nuestra sociedad. LINEAS DE ACCIÓN GENERALES: El objetivo general que enmarca esta Estrategia: Contribuir a lograr la transversalidad de la perspectiva de género en Cruz Roja Juventud y en las acciones que la entidad apoya, con el fin de avanzar en las metas a largo plazo de igualdad de género y progreso de las mujeres en nuestra sociedad. Para contribuir al desarrollo de este objetivo, se definen los siguientes objetivos específicos: OBJETIVO ESPECIFICO 1: Adoptar compromiso político y económico por parte de Cruz Roja Juventud para dar prioridad a la transversalidad del enfoque de perspectiva de género al interior de la institución e impulsar el proceso. RESULTADO 1.1. Posicionado el enfoque de perspectiva de género como tema prioritario en el Consejo Nacional de Cruz Roja Juventud Concretar este compromiso en Cruz Roja Juventud implica hacer explícito el tema en todos los documentos claves, adoptar la estrategia en el plan de acción estatal y elaborar y difundir una política de género, así como dar a conocer e involucrar al personal en este compromiso.

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RESULTADO 1.2. Asignados recursos humanos y económicos para impulsar el proceso de mainstreaming El proceso de transversalización de género precisa de la existencia de recursos humanos especializados que actúen como principales motores del proceso a través de la asistencia técnica. El hecho de no contar en este momento con este tipo de expertos/ as dentro de la institución hace necesario que mientras dure el periodo de construcción de capacidades internas, se contraten recursos humanos expertos que apoyen a la Comisión Estatal de Perspectiva de Género y Coeducación de manera estable o temporal. La asignación de recursos humanos y económicos será un indicador más del grado de prioridad que se le da al tema y del grado de compromiso en impulsar el proceso de transversalidad.

OBJETIVO ESPECÍFICO 2: Los voluntarios/as de Cruz Roja Juventud, así como el personal contratado, contribuyen activamente en el proceso de transversalización de la perspectiva de género: RESULTADO 2.1. Construidas capacidades internas sobre temas de género y transversalidad del enfoque de igualdad de género en el personal de la institución. Para que los voluntarios y voluntarias de CRJ, junto con el resto de profesionales puedan asumir su responsabilidad en el proceso de mainstreaming, es preciso fortalecer sus capacidades a través de capacitaciones en la temática que vayan desde los aspectos más conceptuales hasta cuestiones más técnicas, teniendo en cuenta los diferentes niveles de conocimiento y las diferentes tareas que los voluntarios/as y técnicos desempeñan. Se pretende, a través de la Comisión de Perspectiva de Género y Coeducación, diseñar un programa de capacitación de género dentro del Plan Estatal de Formación de CRJ. Por su parte, la Comisión de Perspectiva de Género y Coeducación, cuenta ya con algunos recursos humanos más sensibilizados, quienes, asistidos y formados convenientemente, podrían conformar a medio plazo un polo de expertos/ as en género en la organización. Además, la Oficina Central de CRJ está compilando materiales de género con el objetivo de poner estos recursos al servicio de todas las Oficinas Territoriales. La página web de la institución también es un recurso existente que en estos momentos está siendo infrautilizado.

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OBJETIVO ESPECÍFICO 3: Constituir Cruz Roja Juventud organización con relaciones más humanas y equitativas.

como

una

RESULTADO 3.1. Incorporado el enfoque de perspectiva de género en la política de recursos humanos Es una de las áreas que más claramente pueden demostrar el compromiso de la organización hacia el tema. Entre la acciones a las que se les da prioridad en esta área, destaca la incorporación del enfoque en todos los procesos de “socialización” del personal por parte de la organización, así como la presencia del enfoque de género a lo largo de todo el proceso de selección y contratación de nuevo personal. Otros tema clave son los esfuerzos para intentar conciliar mejor la vida personal y profesional de las personas que trabajan en la institución. RESULTADO 3.2. Construida una cultura organizacional más sensible al género Cambiar la cultura de una organización para que incorpore el enfoque de igualdad de género, es decir, cambiar la combinación de opiniones personales, valores, normas y pautas comunes que conviven en una organización, requiere trabajar desde lo personal y desde lo colectivo. Como acciones para impulsar este proceso, se plantean la creación de espacios formales e informales de reflexión y análisis, o el aprovechamiento de los espacios ya existentes, como el “Actúa” o la Escuela de Verano, donde los jóvenes de la institución trabajen desde sus vivencias personales y profesionales todo el tema de género.

OBJETIVO ESPECÍFICO 4: Contribuir a la igualdad de género y la coeducación con los programas y proyectos que desarrolla Cruz Roja Juventud: RESULTADO 4.1. Incorporada transversalmente la perspectiva de género en los Documentos Marcos de las seis áreas de trabajo de Cruz Roja Juventud La perspectiva de género, así como un lenguaje no sexista, deberá aparecer de manera visible en todos los Documentos Marco de las áreas de trabajo de CRJ. Para poder conseguirlo, los miembros de las diferentes Comisiones contarán con la asistencia de las miembros de la Comisión de Perspectiva de Género y Coeducación.

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RESULTADO 4.2. Incorporada la perspectiva de género en los programas, proyectos y otras acciones de Cruz Roja Juventud Los programas y proyectos que lleva a cabo Cruz Roja Juventud deben incorporar de manera explícita el enfoque de perspectiva de género en todas las fases del ciclo del proyecto, en los formatos y en la metodología para la formulación, ejecución, seguimiento y evaluación de proyectos. Es imprescindible establecer como criterios en los proyectos la participación de mujeres y la necesidad de un análisis de género, así como la asignación de recursos para actividades de género relacionadas con el proyecto. Se trata de un proceso a largo plazo por lo que, para impulsar el proceso mientras se construyen capacidades internas (resultado 2.1), se recomiendan una serie de acciones generales para todos los programas y otras líneas de acción por área de trabajo (ver páginas siguientes) para poder hacer operativa la incorporación del enfoque de perspectiva de género en todos los proyectos y programas de Cruz Roja Juventud.

OBJETIVO ESPECÍFICO 5: Realizar un seguimiento de la implementación de la perspectiva de género y extraer lecciones aprendidas para mejorar su incorporación: RESULTADO 5.1. Elaborado un sistema de seguimiento y evaluación del proceso de mainstreaming y del enfoque de perspectiva de género: Se diseñará y pondrá en marcha un sistema de seguimiento y evaluación del proceso de transversalidad del enfoque de perspectiva de género en base a los objetivos planteados. RESULTADO 5.2. Sistematizado el proceso de mainstreming de género con el fin de extraer lecciones que sirvan para el aprendizaje de la organización: Se elaborará una memoria que recopile la información del proceso, los avances, los obstáculos, los esfuerzos y los problemas encontrados, con el fin de extraer lecciones aprendidas y buenas prácticas en las incorporación del enfoque de perspectiva de género en Cruz Roja Juventud.

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7.

Incorporación de la perspectiva de género en las áreas de trabajo de Cruz Roja Juventud

Además del área de perspectiva de género y coeducación, la acción de CRJ se estructura en las siguientes áreas de trabajo: -

área de intervención e inclusión social área de promoción y educación para la salud área de educación ambiental y sostenibilidad área de educación para el desarrollo y cooperación internacional área de participación

Implementar la perspectiva de género en las diferentes áreas de trabajo de Cruz Roja Juventud supone reconocer que existe una desigualdad en la asignación de recursos y oportunidades entre hombres y mujeres a la hora de desarrollar los proyectos y planes de trabajo de cada área. Esta desigualdad debe ser abordada en todos los pasos que conforman la secuencia lógica de trabajo: 1. Análisis de la situación o contexto: se refiere a la revisión inicial de la situación en el área que resulta de interés para la planificación del proyecto. Debería incluir una descripción de toda cuestión de género relevante. La mayor parte de las veces la información disponible no está desglosada por sexo ni analizada desde la perspectiva de las diferencias entre el uso que hacen los hombres y las mujeres de las actividades y sus roles en la toma de decisiones. 2. Identificación de una necesidad o problema: Mientras muchos problemas ordinarios resultan obvios sin necesidad de recurrir a una política determinada, las cuestiones de género tienden a ser soslayadas, junto con la política de género. 3. Formulación de metas: Es corriente que los objetivos de los programas no manifiesten intención alguna de referirse a las cuestiones de género. Pero la orientación de género de los programas consiste precisamente en reconocer y hacer referencia a las problemáticas de género. Un objetivo con orientación de género puede ser un objetivo de resultado, vinculado con superar brechas de género o poner fin a una práctica discriminatoria. O un objetivo con orientación de género puede ser un objetivo de proceso, vinculado con las actividades y el proceso social mediante el cual se logra el resultado. 4. Articulación de estrategias de intervención y plan de implementación: En el caso de las cuestiones de género, una estrategia de intervención es efectiva por su abordaje de las causas subyacentes del problema de género. 5. Implementación de las actividades del proyecto: Para una determinada estrategia de intervención pueden existir múltiples y diferentes estrategias de implementación. Por ejemplo, la meta de aumentar el acceso de las jóvenes a

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información sobre los métodos anticonceptivos puede ser lograda mediante la estrategia de intervención de incrementar el acceso a Internet. Ésta puede buscarse a través de diversas estrategias de implementación: poner más ordenadores a su disposición, capacitarlas en el uso de Internet, etc... 6. Comprensión de los resultados del proyecto: Si el proyecto carece de metas referidas al género, es entonces precisamente éste el hallazgo importante de la evaluación. La acción resultante debería ser modificar el proyecto para incorporar la meta de género requerida y la intervención apropiada. 7. Implementación de un sistema de monitoreo y evaluación: La evaluación puede ser utilizada para establecer un sistema de monitoreo de la implementación del componente de género del proyecto. Los resultados deben influir en el diseño y aplicación de futuras acciones. Nota:

Adaptado

de

“GEN

Metodología

de

Evaluación

desde

una

perspectiva

de

género”

http://www.apcwomen.org/gem/esp/entender/index.htm

8.

Conclusiones

Es evidente que existen obstáculos en el avance del tema de género, tanto visibles como no visibles: falta de recursos humanos, económicos, falta de capacidades internas, la consideración del tema es secundario... Sin embargo también es cierto que no se ha llevado a cabo hasta ahora un trabajo planificado y continuo para impulsar el proceso de transversalización del enfoque de género en Cruz Roja Juventud. Por otra parte el proceso de transversalización e implementación de la perspectiva de género no es responsabilidad únicamente de personas con poder de decisión o del/ la punto focal de género, sino que todas las personas, a través de su trabajo y actitudes, pueden contribuir a ello, por lo que es importante que los valores de la organización no sólo sean conocidos sino también asumidos como compromisos por parte de todas las personas que participan en Cruz Roja Juventud, tanto voluntarios/ as como trabajadores / as. Creemos que Cruz Roja Juventud se encuentra en una situación favorable para avanzar en el proceso de implementación de la perspectiva de género, y consideramos que las limitaciones y obstáculos existentes, pueden ser compensados con las fortalezas, deseos y desafíos de nuestra institución, que también son múltiples.

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