Story Transcript
Primer premio categoría Ensayo:
LA POBREZA: CAUSAS EN EL PASADO, SOLUCIONES EN EL PRESENTE. UNA MIRADA AL EMPOBRECIMIENTO EN
COLOMBIA
Y
LA GUAJIRA
EN EL
CONTEXTO DE UN MUNDO GLOBALIZADO
Mario Alejandro Duarte Orozco, Barrancas, La Guajira
RESUMEN: “Ahora que la dama tiene plata Viene el galán a la casa y promete quererla Claro tiene el gas que es una ganga La sal de Manaure y su carbón de piedra” (La Dama Guajira. Canción vallenata)
La pobreza desde una perspectiva multidimensional no solo abarca la penuria material y la falta de ingresos pecuniarios, sino se expande a otras necesidades que atañen a la realización personal, libertad, formas de participar en las decisiones de la vida política y social. La pobreza mina los ideales de dignidad humana ligados al pensamiento democrático moderno. Este problema en Colombia, además de la falta de dinero, representa el desajuste y mal funcionamiento de las estructuras económicas y políticas, llevando consigo intrínsecamente elementos heterogéneos. Los principales efectos de la pobreza en Colombia son: atentar contra la dignidad humana, generar exclusión social, excluir y limitar el acceso a la educación, al empleo digno, al ingreso familiar y a la participación del sistema financiero, erosionar las familia y generar actos delictivos. Creando de esta manera el llamado círculo vicioso de la pobreza.
1
Los efectos de la pobreza en La Guajira y en Barrancas, mi municipio, son, además de la falta de electricidad, acueducto,
alimentos, agua potable, la
limitación del acceso a la etno-eduación y el desplazamiento de los indígenas. Constituyéndose pues en un atentado contra la dignidad e identidad cultural de los Wayuu y no Wayuu. Para analizar tales efectos en este ensayo se utilizaron las canciones vallenatas: La Dama Guajira y Yo soy el indio. La propuesta para mejorar la situación de algunas comunidades y conservar su identidad y legado cultural es conformar un grupo de trabajo de jóvenes profesionales de la localidad; aprovechando todos los conocimientos de sus profesiones y el que la sociedad del conocimiento proporciona. _____________ “Condiciones de vida digna para todos los sectores de la sociedad” es un ideal en torno
al cual existe consenso generalizado. Muchos de los enfoques
sociopolíticos vigentes se encuentran fundamentados sobre la premisa de que existen ciertas condiciones mínimas que deben poseer, sin excepción, las personas individualmente y las familias como grupo básico de convivencia. Pero a pesar de ello la desigualdad y exclusión se presenta como un problema real y concreto dentro de las relaciones sociales, económicas, políticas y culturales, generando situaciones como la pobreza que de una u otra manera afectan y atentan contra la dignidad humana. La pobreza debe mirarse desde un enfoque multidimensional que abarca situaciones habitacionales, sanitarias precarias y desnutrición y que es además un concepto histórico y social basado en los niveles de bienestar mínimamente aceptados. Así pues, entiéndase pobreza en este ensayo desde una perspectiva multidimensional que no solo comprende la penuria material (vivienda, aspectos sanitarios, servicios públicos), la falta de ingresos pecuniarios que permite la compra de bienes y servicios, sino que se expande a otras necesidades que atañen
2
a la realización personal, libertad, formas de participar en las decisiones de la vida política y social de país, la región y la localidad. La pobreza presupone una desigualdad social, una relación de inferioridad y de dominación. De igual manera su análisis depende del contexto social y de un momento histórico determinado. En el año 2000, en el marco de la cumbre del Milenio de las Naciones Unidas, se fijaron ocho objetivos: erradicar la pobreza, combatir el VIH y la discriminación de género, reducir la mortalidad infantil y mejorar la salud materna, fomentar la sostenibilidad ambiental y promover la asociación mundial. Todos ellos con metas claras, concretas y con plazos de tiempo determinados; los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) significan una clara preocupación de la comunidad internacional por solucionar las distintas problemáticas que afectan a millones de habitantes del mundo, y la afirmación de que debe ser consecuente con el desarrollo humano, teniendo en cuenta el progreso social y económico. Pero en un mundo globalizado como el nuestro los distintos fenómenos económicos y sus efectos tienen repercusiones a escala mundial, así pues la crisis financiera ha puesto “en grave peligro los progresos logrados con tanto esfuerzo en impulsar el crecimiento económico y avanzar en los objetivos de desarrollo del milenio” (Banco Mundial, 2009, p. 1) siendo los países pobres y las economías en vía de desarrollo las más afectadas, y, que según el Banco Mundial, la crisis ha sido una tras de otra, pues primero la situación histórica de pobreza en la cual viven, luego las distintas crisis como la de los alimentos y combustibles, lo cual ha hecho que el panorama mundial sea un poco difuso. El fenómeno de la pobreza se ha ido generalizando y ha creado situaciones de pauperismo y condiciones vida extrema que minan los ideales de dignidad humana ligados al pensamiento democrático moderno. Por esto erradicar dicha situación se ha vuelto de carácter prioritario para los distintos gobiernos –incluso planteado por la Organización de Naciones Unidas (ONU) como un objetivo para este milenio– pero las
soluciones y propuestas quedan cortas cuando tal
3
fenómeno aumenta desmedidamente y se conjuga con otras problemáticas de índole económico y cultural que agravan la situación de existencia y vida de millones de personas. Según el Banco Mundial (2001, p. 1) “casi la mitad de los 6.000 millones de habitantes del mundo vive con menos de dos dólares al día y una quinta parte subsiste con menos de un dólar al día. Las personas pobres no tienen oportunidades, tampoco tienen voz. Además son muy vulnerables a las enfermedades, la violencia y los desastres naturales” lo cual refleja las difíciles situaciones en las cuales muchas personas comienzan el nuevo siglo y el milenio. Pero, ¿Cómo es la realidad colombiana en torno a este problema? ¿Cuáles son las principales variables y los detonantes de la pobreza en el país? Algunas de estas preguntas la resolveremos a continuación.
¿Cómo afecta la pobreza a Colombia? El problema de la pobreza en Colombia es más que la simple falta de dinero, representa el desajuste y mal funcionamiento de las macro estructuras económicas y
políticas, y la acumulación de riquezas en pocas manos, “ejercen gran
influencia en la pobreza las normas, valores y costumbres sociales que, en el seno de la familia, la comunidad o los mercados, provocan la exclusión de las mujeres, de determinados grupos étnicos o raciales o de quienes sufren discriminación social” (Banco Mundial, 2001, p,7) haciendo de ella un situación extrema. En un primer momento, la pobreza en el país se presenta como un problema que lleva intrínsecamente un elemento de heterogeneidad a nivel geográfico, de grupos minoritarios, de regiones, de zonas urbanas, rurales y distribución de riquezas. Es decir, dicha situación de empobrecimiento encierra unas características genéricas cuantificables a partir de los distintos instrumentos de medición estadísticos que tienen los diferentes organismos y entidades nacionales e internacionales para clasificar a una persona como pobre o no, pero además tienen unas propiedades particulares y únicas dependiendo del contexto geográfico, de las normas, valores,
4
costumbres y diferentes aspectos culturales que hace de este problema algo único dependiendo del espacio, del tiempo, del país, de la región y del mundo de los individuos. Así pues no es lo mismo la situación de pobreza de Bogotá a la pobreza de un municipio de La Guajira, o la situación de empobrecimiento de una mujer cabeza de familia desplazada del departamento de Putumayo a la de una mujer indígena Arhuaca en la Sierra Nevada de Santa Marta. Es decir, existen elementos y características particulares, exclusivas y autóctonas que dependen de los elementos espacio-geográficos, culturales, socio-históricas y temporales, que hacen de la pobreza en Colombia un fenómeno heterogéneo y complejo, sin que deje de significar una erosión y atentado contra la dignidad humana. La pobreza atenta contra la dignidad humana, quizás este es el
efecto más
concreto de esta problemática en Colombia sobre el cual se entretejen las demás, resultando una amenaza directa contra la dignidad pues “la pobreza es origen de violación, en cuanto es una condición, derivada de un proceso social, político y económico acumulativo, de carencias y desigualdades, que excluye a las personas extremadamente pobres del ejercicio real y efectivo del conjunto de los derechos humanos” (Instituto Interamericano de Derechos Humanos [IIDH], 2007, pp, 1314),
condenándolos
a la privación, a la precariedad y mendicidad. Se les
desconoce su dignidad humana intrínseca en todos los colombianos, reconocida por la Constitución Nacional y ratifica con los distintos convenios y pactos en torno al tema. Vivir en la pobreza impide el alcance del bienestar integral, del goce real de los derechos y libertades y el reconocimiento como sujetos sociales. Otro efecto no menos grave es la exclusión social, entendida como “la existencia de poblaciones sin opciones de incorporación e integración al desarrollo y a sus beneficios, con ruptura de la cohesión social” ( López, 2005, p, 7), sometiendo a los pobres a una desigualdad y marginalidad de los distintos procesos sociales, económicos, políticos y hasta culturales del país, convirtiéndose el desarrollo para ellos un elemento más que perpetua su situación de pobreza y miseria, siendo
5
objetos de discriminación y rotulación, debido a la ruptura de la cohesión social y conciencia colectiva, llegando hasta tal punto de considerarlos como personas “desechables”, termino tan despectivo y ofensivo, que menoscaba
la esencia
humana de estos individuos. Mostrando una desnaturalización de las personas, se comparan con un objeto que al final de camino solo se convierte en basura, la cual se debe desaparecer. Siendo esta la causa de las populares “limpiezas sociales” que se han presentado en el país, llevando a la muerte sistemática de algunas personas en situación de pobreza, que no tienen la culpa de la agudización de la fallas del sistema económico imperante. La pobreza excluye y limita el acceso de muchos colombianos a la educación, a un empleo digno, a un ingreso familiar y a la participación del sistema financiero. Principalmente a los grupos sociales minoritarios e históricamente excluidos (mujeres, indígenas, niños, afro descendientes y ancianos). Creando un circulo y cultura de la pobreza, del cual muchos no pueden salir. Si una persona no recibe educación o formación académica, no podrá tampoco aspirar al mercado laboral formal. La pobreza actúa negando a los ciudadanos del país la oportunidad de un empleo digno y condenándolos a la informalidad y a los distintos riesgos que esta tiene, entre ellos la precariedad en cuanto a las condiciones laborales, la remuneración inadecuada y falta de prestaciones sociales. Así pues el comercio callejero, como otras actividades
económicas y sociales realizadas por los
trabajadores informales utilizando espacios públicos, se va multiplicando poco a poco; haciéndose visible actividades de subsistencia como ventas de comida, jugos, cacharrería, libros, zapatos, ropa, etc. La presencia de estos actores sociales se hace cada día más visibles así como también las actividades callejeras que realizan. Problemas como la invasión del espacio público y la contaminación auditiva, visual y de ornato en las ciudades, son algunas de las situaciones preocupantes efecto del problema en cuestión. Teniendo en cuenta que “No es posible erradicar la pobreza si la economía no genera oportunidades de inversión,
6
desarrollo empresarial, creación de puestos de trabajo y medios de vida sostenibles. La vía principal para salir de la pobreza es el trabajo” (Organización Internacional del Trabajo [O.I.T], 2003, p, 8) Junto con el efecto de la informalidad va ligado la falta o insuficiencia de ingresos económicos para las familias empobrecidas, afectando directamente la calidad de vida de estas personas, pues al no contar con el poder adquisitivo para satisfacer sus necesidades básicas, la precariedad y la escasez se vuelven mucho mayor, presentándose problemas como la falta de alimento, vestido, vivienda, y en algunos casos de servicios públicos vitales como acueducto, alcantarillado y aseo. Convirtiéndose los espacios habitados por estos hogares en foco propicio para el aparecimiento de enfermedades y patologías relacionadas con la alimentación, nutrición y situación higiénicas, siendo los niños y ancianos los más afectados, dentro de un marco de falta de acceso a servicios de salud. Así pues, los ingresos limitan la capacidad de compra de las familias, desmejoran su calidad de vida y los obliga a vivir en situación de precariedad. La desnutrición de los niños y niñas, es un problema latente y preocupante en el país, es la cara más cruel de la pobreza extrema, los niños y jóvenes que la padezcan tendrán secuelas para toda su vida y de cierta manera no podrán participar activamente en la sociedad. Ligado al efecto de falta de ingresos económicos, tenemos la dificultad para los pobres de poder acceder y participar al sistema financiero colombiano, este ultimo hermético, cerrado e indolente, que no ha ayudado a reducir la pobreza y mucho menos la desigualdad en la distribución de ingresos. Es bien sabido que en Colombia los bancos solo le prestan dinero a las personas que tienen dinero y la capacidad de pagarlo, sometiendo a las clases bajas a una cantidad de trámites y requisitos burocráticos que los pobres y los necesitados obviamente no pueden sobrellevar. Por otra parte, la pobreza genera un ascenso en el índice de actos delictivos, pues algunas personas que se encuentran en esta situación y excluidos del mercado
7
laboral formal, con necesidades básicas que no dan espera, se ven obligados a realizar actividades delictivas y así poder obtener el recurso económico. Además, la situación de empobrecimiento genera una erosión en la familia pues la pobreza origina inestabilidad económica, tristeza, angustia, desesperanza, violencia, humillación, impotencia y vulnerabilidad. Estos aspectos van desintegrando las familias y las relaciones sociales, llevándolas hasta una crisis que a su vez genera problemas como alcoholismo, drogadicción, embarazos juveniles no deseados, etc., en sus integrantes. Entonces, la pobreza en Colombia se torna como un fenómeno y problema que afecta a todas las esferas de la vida de las personas y las estructuras económicas, jurídicas y políticas, y a su vez se conjuga con situaciones como el desplazamiento forzado, la violencia política, el clientelismo, la corrupción, etc. A continuación miraremos los efectos de la pobreza en el departamento de La Guajira y mi respectivo municipio Barrancas. Para tal acción se utilizara las canciones vallenatas La Dama Guajira, del compositor Hernando Marín, y Yo soy el Indio, de Diomedes Díaz, como base para el análisis y la reflexión de la problemática en cuestión, teniendo en cuenta que la canción vallenata es acto discursivo producido por una persona y un contexto
histórico y social
determinado.
La guajira es una dama reclinada Bañada por las aguas del Caribe inmenso Y lleva con orgullo en sus entrañas Sus riquezas guardadas… (La Dama Guajira. Canción vallenata)
Mi departamento se caracteriza por ser el punto más septentrional de América del Sur, es el territorio que encabeza el mapa de Colombia. A su vez, es un lugar
8
mágico, de contrastes y contradicciones. Desde los áridos terrenos semidesérticos de la alta guajira hasta los hermosos pastos permanentes y tierras fértiles de la baja guajira. En cuanto a su composición demográfica, la población es indígena, la mayoría de ellos Wayuu pero también existen otros grupos como los arhuacos, koguis y wiwas en la Sierra Nevada de Santa Marta. El resto de la población somos “arijuna” o “no Wayuu”, pero sin duda alguna hemos adoptado formas de pensar, estilos de vida y aspectos culturales de la cultura indígena del entorno. Además es un departamento rico en carbón, gas natural, sal y energía eólica. Con importantes lugares turísticos como el Cabo de la Vela, Mayapo, Manaure, Riohacha, etc. Está conformada por 11 municipios, entre ellos Barrancas, lugar en el cual yo vivo y en su jurisdicción se encuentra una de las minas de carbón a cielo abierto más grandes del mundo: “El Cerrejón”. En La Guajira contrastan la riqueza de sus recursos naturales y humanos con la pobreza de sus habitantes como lo veremos a continuación, pues el desarrollo económico y social no se ha visto reflejado en sus comunidades.
Yo soy el indio guajiro de mi ingrata patria colombiana que tienen todo del indio más sin embargo no le dan nada (Yo soy el indio. Canción vallenata)
Aproximadamente el 45% de la población guajira es Wayuu, raza bravía que ha defendido su identidad cultural y se ha adaptado a las inclemencias del clima y del terreno de la península,
sobreviviendo por muchos años a la exclusión del
desarrollo nacional. Además de la exclusión también ha soportado la pobreza, pues un gran porcentaje de sus habitantes viven en esta situación: con altos índices de necesidades básicas insatisfechas, solo es cuestión de visitar algunas
9
de sus comunidades o “rancherías” para darse cuenta de la falta de electricidad, acueducto y de alimentos. Uno de los principales efectos de la pobreza para este grupo étnico es la falta de agua potable, pues por las mismas condiciones geográficas y de desamparo del gobierno, no posen fuentes de agua aptas para el consumo humano y para conseguirlas deben buscarla tras horas de largas jornadas de caminatas, o también con la construcción de haweis
que son piscinas
artificiales y rudimentarias para recolectar y conservar agua de lluvia para el consumo de las personas y los animales. Dicho liquido podría no ser apto para los individuos, ocasionándoles enfermedades gastrointestinales y de la piel, principalmente a los niños. Otro efecto crucial del empobrecimiento es la limitación del acceso a la etno-eduación, como una forma de acceder a los conocimientos que permiten el afianzamiento de los rasgos culturales e identitarios y así la construcción de un concepto de desarrollo desde su cosmovisión, cultura, territorio e imaginario colectivo y social. La situación de pobreza ha generado en cierta medida un desplazamiento de los indígenas, obligándolos a dejar sus rancherías y animales para irse a buscar mejor futuro en los pueblos y ciudades del departamento, arriesgando su identidad cultural. No todos los emigrantes cumplen sus objetivos ya que muchos, principalmente los niños, se dedican a la mendicidad y a la prostitución, convirtiéndose su presencia en un problema frecuente de las calles de Riohacha, Manaure y Maicao. Así pues, los altos índices de necesidades insatisfechas, agua potable, etno-educación y salud, son un atentado contra su dignidad e identidad cultural.
Entonces cuál es la vaina qué es lo que pasa con nuestro pueblo el gobierno no da nada y nos censura por lo que hacemos (Yo soy el indio. Canción vallenata)
10
Ahora bien, la otra parte de la población guajira no wayuu o “arijuna”, no es muy distinta a la indígena. La Guajira ha sido por muchos años olvidada y excluida lo que ha generando problemas de pobreza. Sus efectos van desde propiciar un gran porcentaje de necesidades insatisfechas hasta la formulación de la actividad del contrabando como forma de vida para muchos guajiros: un modo de ganarse la vida y poder sostener a sus familias, comercializando mercancías y productos traídos desde Venezuela. La variante más preocupante y peligrosa de tal actividad es el contrabando de gasolina también llamado “carros gasolineros” que transportan el combustible desde Venezuela hasta el norte y sur del departamento y el norte del Cesar. Estos carros resultan una bomba de tiempo y las personas que los conducen exponen sus vidas, y las del resto de la sociedad guajira, al momento de transportar el combustible. Ejemplo de este riesgo son los distintos accidentes que se registran en el sector. Lo peor de todo esto es la censura que se recibe del gobierno y de sus autoridades, la cual no tiene validez en el contexto de una población necesitada y por muchos años olvidada, que necesita soluciones reales, concretas y de fondo. Mientras tanto, en mi municipio de Barrancas, en donde a escasos kilómetros se encuentra una de las minas de carbón más importante del mundo, las necesidades insatisfechas son muchas en comparación con las regalías del carbón que entran a las arcas del municipio. El destino destino de estos dineros y su utilización para satisfacer y dar solución a problemas como el hambre, la falta de educación, de salud, la pavimentación, el agua potable, acueducto y alcantarillado para la cabecera municipal y sus corregimientos también es incierto. La pobreza ha sido el “caballito de pelea” de muchos políticos que han prometido erradicarla, pero cuando llegan al poder se olvidan de los pobres; a estos no se les ve como personas sino como “votos en las urnas”. Se agudiza el problema con situaciones clientelistas, de corrupción, “mañas” políticas, la falta de educación ciudadana y la instauración de un “cacicazgo
11
político” de pocas familias, que concentran recursos económicos e influencias, que controla el desarrollo político en el municipio. Esto ha traído como consecuencia la deslegitimación del sistema político ya que los barranqueros no creen en el Estado ni en sus representantes y mucho menos en los gobiernos locales. Consideran que hoy, en pleno siglo XXI, siguen siendo olvidados y los dineros de las regalías despilfarrados. Contrario a lo que muchos piensan, las riquezas de carbón de El Cerrejón no se ven reflejadas en el mejoramiento de la situación de la población. Así pues los guajiros no somos pobres desde hoy y nuestra situación de empobrecimiento estructural es solo el resultado de una amalgama de problemas y circunstancias; entre ellas el olvido estatal, la acumulación de riquezas voraz propia del sistema económico, las malas administraciones locales, la politiquería, corrupción y clientelismo, entre otros. Son causas localizadas en un pasado lejano y cercano, pero la búsqueda de la solución debe ser YA, en el ahora y el presente globalizado que nos permitirá el auto reconocimiento y el auto empoderamiento frente a nuestros problemas y realidades. Pero, ¿Qué podemos hacer? es una pregunta sencilla pero muy difícil de responder. Sabemos que la solución a la situación de pobreza debe ser estructural y de fondo, que solo el Estado y la comunidad Internacional pueden promover. Los pobres no necesitan de ayudas asistencialistas que mal acostumbran a las personas, “Los programas sociales asistencialistas provocan efectos en términos de institucionalizar entre muchos pobres una actitud de activa exigencia de donativos, combinada con una abismal pasividad para conseguir algo por su cuenta” (Narváez, 2002 p, 4). Entonces las soluciones deben ser proporcionadas por el Estado y el sector privado, generando empleos, cupos en los colegios, asegurando el respeto por las diferencias y las culturas, combatiendo la corrupción y el clientelismo. Sin olvidar que nosotros como sociedad civil también tenemos la obligación de ayudar a combatir la pobreza, preparando el camino.
12
¿Cuál es la propuesta? Conformar un grupo de trabajo de jóvenes profesionales de mi localidad, aprovechando todos los conocimientos de sus profesiones y el que la sociedad del conocimiento nos proporciona para mejorar la situación de algunas comunidades. ¿Objetivos de la propuesta? Crear estrategias educativas que permitan el desarrollo de una cultura democrática
(interiorización de los valores
democráticos que legitimen el sistema político) y una cultura de emprendimiento a través de asesorías jurídicas, psicológicas, empresariales, culturales y educativas. Estas que conlleven a las comunidades indígenas Wayuu, en un primer momento, y luego al resto de la población del municipio de Barrancas, a suplir sus necesidades materiales y a la creación de un ideal de desarrollo que respete su perspectiva cultural, modos de vida y costumbres, permitiéndoles defender y conservar su identidad. ¿Cuál es la justificación de la propuesta? circundante en el mundo actual, que
Aprovechar el conocimiento
no debe actuar en aras de buscar la
uniformidad y la homogeneidad para facilitar los procesos de producción y consumo, sino a la inversa, debe servir para estimular la heterogeneidad y la diversidad. También propiciar el reconocimiento de las comunidades, como la Wayuu, que permita crear un dialogo con el mundo para agilizar la búsqueda de la solución del problema de la pobreza. Lo anterior en aras de crear un ambiente pluri-cultural y democrático basado en el dialogo y el consenso, que permita la inclusión y participación de las personas empobrecidas de la región y la construcción de una realidad deseada. Lo anterior solo se puede lograr en la medida de que los individuos se apropien de los conocimientos y saberes de su comunidad y de los que el desarrollo científico e investigativo han logrado: acceder a ese acervo sin necesidad de fulminar nuestra propia identidad.
13
¿Cómo actuar? Realizar un diagnostico real de la situación de las comunidades indígenas Wayuu que se encuentran en jurisdicción del municipio de Barrancas, creando mesas de trabajo, sensibilizando a las personas, conceptualizado soluciones proporcionadas por los mismos miembros y recibiendo las distintas asesorías necesarias. Después de esto, la estrategia es seguir reproduciendo las actividades para el resto de la población a través de las personas participes.
Conclusión
El conocimiento debe permitir reconocer la verdad, nuestra realidad y observarnos a nosotros mismos como sujetos sociales. La pobreza no es una condición natural del ser humano como si lo es la dignidad humana razón por la cual deben de aumentarse los esfuerzos gubernamentales para erradicarla estructuralmente, igual que nosotros debemos ayudar desde nuestro contexto en mejorar la situación de las personas de las localidades en las que vivimos. Espacios de respeto por la diferencia, dignidad humana y goce de todas las libertades deben ser el común denominador. Es imperante la necesidad de crearlos, pluri-culturales, de dialogo, consenso y respeto.
Los resultados, interpretaciones y conclusiones expresadas en esta publicación son en su totalidad de sus autores y no deben ser atribuidos en forma alguna al Banco Mundial, a sus organizaciones afiliadas o a los miembros de su Directivo Ejecutivo ni a los países que representan.
14