Story Transcript
(parte 2)
“La obra del Espíritu Santo en la vida del Creyente ”
I.
Introducción a. Desde la semana pasada iniciamos nuestra serie sobre el Espíritu Santo i. Hablamos un poco sobre nuestra frustración con no experimentar constantemente su presencia y su poder ii. Cuestionamos la razón por la que estamos buscando más 1. Algunos lo buscan con las motivaciones incorrectas 2. Vimos como todo lo que es del Espíritu Santo es para el bien común y no solo para beneficio personal iii. Hablamos de lo que es el bautismo en el Espíritu Santo 1. Una experiencia diferente de la salvación 2. Puede pasar al mismo tiempo que la salvación o bien en una ocasión distinta 3. Cuando lo recibimos somos movidos a la misión de Jesús iv. Terminamos con un llamado para todos aquellos que nunca habían recibido el bautismo del Espíritu Santo b. La vida después del bautismo del Espíritu Santo i. Muchos se preguntan, 1. ¿Ahora qué? 2. ¿Cuál es la obra del Espíritu Santo en el día a día? 3. Aparte de los milagros y lo sobrenatural (la próxima semana), ¿Cómo se si estoy viviendo en el Espíritu? ii. La realidad es que el Espíritu Santo es mucho más que las manifestaciones sobrenaturales iii. Podemos ver evidencias del Espíritu de Dios en nuestras vidas cada día iv. Debemos vivir una vida que continuamente esté buscando de la presencia y la guianza del Espíritu de Dios
c. El mejor ejemplo para ver la obra del Espíritu Santo en una persona es Jesús
II.
La obra del Espíritu Santo en la vida de Jesús (Mat. 4:1-‐11) a. Mat 4:1 “Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo. i. El espíritu santo guía a los creyentes 1. Rom 8:14 “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.” 2. No siempre nos guía a donde nos esperamos, en este guió a Jesús al desierto y a la tentación ii. Conocer la voluntad de Dios vs. Ser guiados por el Espíritu Santo 1. Hay demasiado gente buscando conocer la voluntad de Dios para sus vidas 2. Desafortunadamente eso se convierte en una excusa para quedarnos estancados 3. Rara vez vemos en las escrituras que Dios le haya revelado su plan de vida a alguien a. Ciertamente tiene un plan para nuestras vidas, pero nunca prometió revelarlo anticipadamente y de junto b. Definitivamente puede hacerlo c. La realidad es que rara vez lo hace d. No siempre nos revela a donde vamos (Abraham deja su casa para ir a una “tierra que yo te mostraré”) 4. Aunque esto suene raro, debemos de dejar de buscar la voluntad de Dios para nuestras vidas y comenzar a aprender a buscar con todo nuestro corazón la guianza del Espíritu Santo para nuestras vidas HOY iii. Dios nos llama a una rendición completa de nuestras vidas, sin importar a donde nos guie 1. Esto es mucho más fácil decirlo que hacerlo 2. La verdad a veces nos asusta a donde nos puede guiar el Espíritu Santo a. ¿y si me guía al desierto? b. ¿y si me guía a dejar todo para ir a otro país? c. ¿y si me guía a una situación no tan cómoda? d. ¿y si me pide que renuncie a algunas cosas? 3. La realidad de esto a veces nos hace querer guardar algo del control iv. La vida en el Espíritu no es una de un solo acontecimiento, es cosa de todos los días
1. ¿Lo escuchas cuando estás en fila? Tal vez te guía a hablar con alguien y terminar compartiendo el evangelio 2. ¿Lo buscas cuando estás haciendo tu presupuesto? Tal vez te guía a gastar menos en unas áreas y más en otras 3. ¿Te sometes a él cuando estás con tu familia? Demasiadas veces vemos cumplida la frase “luz de la calle y oscuridad en su casa” v. Con la experiencia vamos aprendiendo a discernir la guianza del Espíritu Santo 1. Cuando somos llevados por el Espíritu Santo, aun a un lugar o situación difícil, lo vemos evidenciado por los frutos del Espíritu Santo en medio de eso (Gal. 5:22-‐23) 2. Sentimos a. Amor b. Gozo c. Paz d. Paciencia e. Benignidad f. Bondad g. Mansedumbre h. Templanza i. fe b. Mat 4:2-‐3 “Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.” i. El diablo ataca la identidad de Jesús… “si eres hijo de Dios” ii. El Espíritu Santo es el que afirma esa identidad en nosotros iii. Rom 8:16 “El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.” iv. Cada vez que hacemos algo que no sale como creíamos que Dios quería va a venir este ataque del diablo… ¿será que de verdad eres hijo de Dios? v. Es allí cuando el Espíritu Santo nos afirma que lo somos 1. No por el resultado positivo de las cosas que hacemos 2. Sino por el sacrificio de Jesús en la cruz y nuestra fe en él c. Mat 4:4 “Él respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” i. Cada vez que estamos en una posición difícil, tenemos la promesa de que es Espíritu Santo nos va a dar las palabras que decir (Luc 12:12 “porque el Espíritu Santo os enseñará en la misma hora lo que debáis decir.”) ii. Es el Espíritu Santo el que nos recuerda de las palabras de Jesús (Joh 14:26 “Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en
mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.”) iii. Esto aplica no solo cuando estamos siendo atacados, sino tambien 1. Cada vez que queremos hablar de Jesús con alguien 2. Cada vez que alguien demanda de nosotros un porque de lo que creemos 3. Cada vez que queremos hablar a la vida de alguien enfermo, desmotivado, etc. d. Mat 4:5-‐6 “Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra.” i. El Espíritu Santo nos da dones, como por ejemplo el de discernimiento, con el que podemos identificar la mentira del diablo, aunque esta venga disfrazada de versículos bíblicos ii. La verdad es que sin el Espíritu Santo, nosotros caeríamos en alguna de estas tentaciones solo porque vienen con un versículo bíblico incluido e. Mat 4:7-‐9 “Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios. Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares.” i. Fue el Espíritu Santo el que dio el poder a Jesús para resistir estas tentaciones ii. Tenemos la promesa de que es el Espíritu Santo el que nos purifica y nos da las fuerzas para vivir en santidad y resistir la tentación iii. El Espíritu Santo es el único que nos puede ayudar a hacer morir las obras de la carne (Rom 8:13 “porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.”) iv. Ahora bien, como nosotros no somos Jesús, muchas veces no vamos a seguir al Espíritu Santo y rendirnos a él y vamos a caer en la tentación 1. En ese momento es el Espíritu santo el que nos convence de pecado (Jn 16:8 “Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.”) 2. Al ser convencidos de pecado y afirmados como hijos de Dios, regresamos a él buscando el perdón de nuestros pecados f. Mat 4:10 “Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.” i. El Espíritu Santo nos da el poder y la autoridad para luchar contra y resistir al diablo (Mat 12:28 “Pero si yo por el Espíritu de Dios echo fuera los demonios, ciertamente ha llegado a vosotros el reino de Dios.”) ii. El diablo no tiene otra opción más que huir de un creyente que es empoderado y guiado por el Espíritu de Dios
g. Mat 4:11 “El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.”
III.
Conclusiones a. A veces asusta el pensar en dejarnos guiar por el Espíritu Santo, pero ¿no es peor no hacerlo? i. Nuestras vidas pueden ser más cómodas ii. No pongamos lo ojos solo en esta vida solamente sino también en la venidera b. El recibir guianza y libertad es algo que rara vez se hace sobre nosotros, donde somos espectadores pasivos i. Ejemplo de la máquina de correr ii. Hay momentos cuando eso si pasa iii. En mi experiencia, el generalmente nos pide que juguemos un rol activo en el camino hacia una vida completa c. Comencemos a pedir que él nos de, no solo el querer, sino también el hacer (Fil 2:13 “porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.”)