poema inédito de rafael alcides

MISERICORDIA rafael alcides RAFAEL ALCIDES nació en 1933. Entre otros poemarios ha publicado La pata de palo (1967), Agradecido como un perro (Premi

2 downloads 182 Views 545KB Size

Recommend Stories


HISTORIAS ANTIGUAS POEMA DE GILGAMESH
HISTORIAS ANTIGUAS POEMA DE GILGAMESH Gilgamesh 2 Historias antiguas Cuando los primeros seres humanos empezaron a hacer garabatos sobr

a 1 Poema 1
www.jlcorrea.com a 1 Poemas breves Poema 1 Y estás aquí a mi lado, tan lejos y tan cerca Tu voz resuena tibia en el pozo de mi alma Y levanta mil o

Story Transcript

MISERICORDIA

rafael alcides

RAFAEL ALCIDES nació en 1933. Entre otros poemarios ha publicado La pata de palo (1967), Agradecido como un perro (Premio de la crítica, 1983), Y se mueren, y vuelven, y se mueren (1988), Noche en el recuerdo (1989) y Nadie (1993). Un caballo, dos hombres y una mujer (1986) es una muestra de su producción novelística: de esta, anuncia para muy pronto El anillo. Reside en La Habana. Es uno de los mejores poetas cubanos vivos en el fin de siglo. Su obra ha alcanzado el más alto galardón a que puede aspirar un poeta: a la trascendencia otorgada por el reconocimiento de cientos de lectores de su país…, sin embargo, poco divulgado aún en el exterior, sigue siendo uno de esos poetas rodeados por el silencio y el propio misterio de su vida.

¿De dónde viene, quién lo manda, qué busca entre nosotros este viento con olor a presidio y a cementerio, a ceniza de hospitales y a miseria? Retírate, oh viento de la desgracia, respeta mis cuadros, mi lámpara, mis papeles, deja en paz mis cacharros de cocina. Pero él no oye, no escucha. Míralo, Señor, sacar el mar del mar y traerlo a la puerta de mi casa. Míralo hacer y deshacer como si él fuera el sol, las cuatro estaciones, la rosa de los vientos, la razón de las cosechas, la verdad íntima de los mundos. A la luz del rayo y la centella, míralo levantar el tejado de enfrente, luego un árbol que resistía en la acera ahí va un tendido eléctrico seguido por dos hojas de zinc girando como hélices funestas, como guillotinas monstruosas buscando cabezas. Ya no queda ni una puerta ni una ventana. Más que tarea de salvamento, echar un bote a la calle en estas circunstancias sería un suicidio. ¿Y quién, por otro lado, pensaría en salir a rescatar a otros estando él mismo por ser rescatado? Y sigue el mar subiendo de nivel, Señor, y sigue el cielo oscureciéndose.

poema inédito de

Deténte, oh viento canalla; atrás, perverso. Esta es la casa del Poeta, no la subestimes, ni convoques la ira de ese ser que tan solitario y frágil parece. (Para que jamás bajo el cielo tuviera lugar el olvido creo Dios al Poeta, no lo olvides, ni olvides que el Poeta habla con Dios, y Dios pensativo lo escucha.)

36

Deténlo, no le permitas, oh Señor, completar el desastre: no le permitas arrancar la casa del Poeta y dejarla a la deriva en la corriente como los barcos del que huye, del que se marcha clandestino. Igual que trigo o tabaco en gavilla, utilizando sábanas y toallas enrolladas ya ha comenzado el Poeta a atarse con su mujer y sus hijos, y bajo el ruido devastador y el crujir del techo, seguimos en este pueblo, oh Señor, aguardando por ti: atrapados, incomunicados, sin teléfono, sin luz…

rafael alcides

SÚPLICA ARGUMENTADA

poema inédito de

Todo en torno mío, oh Señor, anuncia la gloria de tu Progra/ ma. Con música de manzano batido por el viento, ahí están el espacio infinito y el tiempo sin medida proclamando tu amor a la libertad. En la tierra, en el mar o en el cielo, por dondequiera que hoy o mañana pase, puntuales hallaré los cuatro puntos cardinales con sus numerosas posiciones intermedias, indicándome que a tu divino juicio no existe un camino sino numerosos, infinitos caminos. 37

rafael alcides

No encontrar bajo el sol dos tomates idénticos, dos gallinas exactas ni ninguna cosa igual a otra (por parecidas que éstas puedan ser), garantizan tu respeto a la individualidad. La noche estrellada y el mar con su estruendo, el día y el cielo, la selva y el desierto, los pájaros y el viento, el silencio y todo lo que es música, el girasol y la humilde flor del cactus (y hasta el cactus mismo con su imagen de testigo solitario que un día te viera fundar el mundo y consumieráse luego extrañándote), van locuaces diciendo que funcionalidad y belleza son en tu código una sola, misma, idéntica cosa. Con sus infinitas variedades cada una de ellas, las infinitas especies zoológicas, minerales y vegetales, confirman tu amor por lo diverso. Y de la vastedad de tu capítulo de justicia social responden esas propias especies que a las puertas de tus criaturas colocaras, libres de alquiler e impuestos, junto con la luz, al aire y la Ilusión. (La Ilusión, Señor, que tan cara puede ser!… y que tampoco la cobras.)

poema inédito de

El fuego y el hielo, el placer y el dolor, lo blanco y lo negro, el día y la noche, el cielo para soñarlo y la tierra para preguntarse: todos los contrarios coexisten en tu proyecto.

38

Y tú mismo, Señor, a fin de no convertirte en un déspota has permitido la presencia del diablo en tus dominios y ni te lo llevas preso ni le clausuras sus periódicos. Mi ideal de democracia toma ejemplo en tu democracia. Oh Señor, en estas elecciones y en las que vienen dame siempre siempre presidentes formados en las filas de tu partido.

rafael alcides

ADIÓS

poema inédito de

He aquí, Señor, el retrato, la imagen del héroe que nos perdiera, que nos impidiera encontrar el nuevo mundo posible entre los hombres. Tal vez no lo hizo por malo. Tal vez no pudo ver que con tanto candado y voz de mando y amenazas de fusilamiento minaba el camino en nombre del cual marchóse a veces hasta descalzo. Y henos aquí a nosotros, Señor, los descalzos, los que poníamos la vida a cada metro de tierra conquistada, ya sin caminos para ir, ni caminos para volver, oscuramente sentados a la orilla de los años perdidos, haciendo trizas el retrato: como quien dice adiós a un sueño, a una edad, a una Atlántida que se hunde. (Del libro inédito Conversaciones con Dios)

39

DOMINGO ALFONSO (Matanzas, 1935) poeta y arquitecto, es un coloquialista mantenido. Ha publicado varios libros de poemas, entre los que sobresalen Poemas del hombre común (1964) y Esta aventura de vivir (1987).

domingo alfonso

CUANDO PIENSO EN TU MANERA DE DECIRME ADIÓS Abrense las paginas sonoras de la Novela del Aire para hacer vivir a Uds. la emoción y el romance de un nuevo capítulo). (exergo del programa radial: la novela del aire en la década de los años 40 y 50).

Cuando pienso en tu manera de decirme adiós vienen a mis ojos todas las lágrimas del mundo. He pasado largo tiempo en la playa tratando de escapar de mí mismo y de tu ausencia. Las ondas que se alejan y retornan coronadas de espuma, en tanto la tarde discurre tranquila y estas personas deambulan, casi desnudas, olvidando las ropas de la ciudad, sus hábitos y costumbres Yo mismo, prisionero de este espectáculo del agua azul y verde, moviéndose sin cesar empujando las arenas, rizadas por el viento, bajo este sol de marzo que sale y se oculta en las nubes poniendo la luz y la sombra encima del universo.

poema de

Así, mientras los segundos se convierten en horas y el día se consume como una vela sin fuerza trato de escapar a tu imagen que flota sobre mi vida como especie de niebla cercando mis sentidos llenándolos de tristeza y cubriéndome de nostalgia porque hipnotizado por el oleaje del mar apenas pienso, mi desdicha pesa menos; porque me embarga la certeza que lejos de este hechizo de las olas, estaré cautivo de nuevo en esas telas de mi pena, tejidas con el hilo de tu abandono.

40

domingo alfonso

VAGANDO POR CALLES DE MI TRISTE CIUDAD A, veces, andando por esas calles perdidas un olor de pronto me recuerda la infancia; años oscuros, cuando trotaba por estas aceras donde aquellas casas, hoy parecen caer. Las gentes miran a los transeúntes sin esperanza yo mismo formo parte del paisaje de miserias. La ciudad y sus gentes son un turbio amasijo. El polvo estruja las almas que no pueden volar.

LA CARAVANA DE LOS ÍDOLOS

poema de

Vi la caravana de los ídolos alumbrados tenuemente por la luz del atardecer en medio de la arcilla, caballos y caballeros, ignorantes de su destino, en un sendero que no conducía al mar. La bruma colgaba sobe el páramo como una tela difusa e in/ móvil; pero en un ángulo del paisaje, a lo lejos, mas allá de planetas y de lunas carentes de vida vi una moneda oscura, caricatura del sol. ¿Porqué los ídolos desfilaban ante mí? Pedazo de un dios nos soy. Cuál era el objetivo de esos gestos creando un idioma de jeroglíficos dibujados en el aire para no permanecer? Tal vez conmigo otros ojos contemplaban la escena: espectadores desconocidos se agrupaban a mi lado, invisibles para mí, en medio de la neblina y en silencio descifraban el mensaje que nunca pude comprender.

41

luis suardíaz

EUROPA DESPUÉS DE LA CAÍDA

LUIS SUARDÍAZ (Camagüey, 1936). Ha sido director de la Biblioteca Nacional José Martí, director del Departamento de Literatura y Publicaciones del Consejo Nacional de Cultura, vice-presidente de la UNEAC, director de las revistas Prisma latinoamericano y Cuba internacional, subdirector de la Agencia noticiosa Prensa Latina y consejero cultural de las embajadas cubanas en Canadá y la Unión Soviética. En su obra poética figuran los libros Haber vivido (1966), Como quien vuelve de un largo viaje (1975), Leyenda de la justa belleza (1978), Todo lo que tiene fin es breve (1984), Éstas son mis sagradas escrituras (1988), El pez en el agua (1988). En 1983 publicó el libro de ensayos y crítica literaria Siempre habrá poesía.

42

poemas de

Los ángeles en los palacios alabados en tiempos del frágil socialismo como criaturas ideales de un arte y una era sin retorno, miran hoy con ojos torcidos a los usurpadores que beben y fornican bajo sus hieráticas alitas de ganso. Los ruidosos del jolgorio que hoy adoran la importada flor de cocaina y se santiguan con espumas de champán. Viejos mendigos de la carne y del ánima, neofitos mafiosos que ayer fueron disciplinados números, oficiantes de Partidos que se fueron con las pompas de jabón. Los que siembran a boleo monedas y billetes hacia los músicos con trajes ajenos a la moda, disminuidos artistas que echan a un lado los trémulos tímpanos y el arco del violín para rastrear entre gargajos, mustios papeles y colillas, su magra paga adicional. Viejos simuladores, ladrones que ayer mismo perseguían a los mansos creyentes de lo imposible y ahora se persignan torpemente en los templos y trasiegan un oro que sigue filtrando orines, lodo y sangre, sin que se cumpla la leyenda de un mesías que los marque con su látigo. Luis Suardíaz 1997

luis suardíaz

QUÉ TENDRÁ LA PRINCESA Lady D, con su hostigada boca de fresa, se baña en la alberca fría de un día sin sol. Los fotógrafos han seguido su rastro hasta Mallorca — y el de su amiga, su doble de sonrisa mustia — pagando, pulsando y prometiendo, y al fin la toman, cuando duerme de espaldas, cuando cruza o descruza las piernas, cuando bosteza con aire de plebeya.

poemas de

Buscan la foto millonaria que les permita veranear, vagar entre supermercados y autopistas, beberse el descanso de las cervezas enlatadas, o su pinta de whisky contra el tedio. Lady D, siempre acosada por las impúdicas revistas del corazón, desertora de sí misma, estruéndosamente triste, desciende al mallorquino cristal de las aguas, al nirvana de no tener memoria, y se despoja del vaporoso blusón azul. Qué tiene, qué tuvo, qué no tendrá nunca la princesa Palma de Mallorca, La Habana, mayo de 1996 enero de 1997

43

RETRATO

armando álvarez bravo

ARMANDO ÁLVAREZ BRAVO nació en La Habana, Cuba, en 1938. Es miembro de número de la Academia Cubana de la Lengua; correspondiente de la Real Academia Española y la Academia Norteamericana de la Lengua Española; y miembro de la American Translators Association. Es crítico literario y de arte de El Nuevo Herald/ The Miami Herald, de Miami; y profesor de periodismo en el Koubek Memorial Center, Escuela de Estudios Continuados de la Universidad de Miami. Ha publicado: El azoro (Poesía, 1964); Orbita de Lezama Lima (Ensayo, 1966); Relaciones (Poesía, 1973); Para domar un animal (Primer Premio Internacional de Poesía “José Luis Gallego/ 1981”, 1982); Juicio de residencia (Poesía, 1982); Las Leja-nías (Poesía, 1984); El prisma de la razón (Poesía, 1990); Naufragios y comentarios (Poesía, 1993); Al curioso lector (Ensayo, 1996); Las traiciones del recuerdo y Les Trahisons du souvenir (Ficción, edición simultánea en francés y español, 1996); Autorretrato a trancos (Ensayo autobiográfico, 1996); Trenos (Poesía, 1996); y Cabos sueltos (Poesía, 1997).

Bebe, fuma y come con exceso. No puede vivir sin amor. Adora la violencia. Persigue la calma, el olvido. Busca la seguridad y la rechaza. Anda solitario y va final en pos de compañía. Es silencioso, y cuando habla con vehemencia, duda que se entiendan sus palabras. Sabe mentir, golpear, ocultarse. Se entrega sin reserva, y desaparece. Ama los libros, los cuadros, la música, la materia diversa que traduce la belleza, el lujo y sus complacencias: un orden perdido. Es feliz en la intemperie, en lucha perpetua con los elementos y cualquier enemigo implacable. Nada tiene y todo lo da. Quiere ganar siempre y cuando pierde se alegra de tener que luchar de nuevo por algo, sin esperanza, como un deber magnífico.

poemas de

Es soberbio, comprensivo, hermético, generoso, frío, sincero, calculador, sentimental, agresivo. Duda de su inocencia y expía una culpa que no puede definir. Ama el mar y desea ser un árbol. Son muchas sus biografías y ninguna coincide con otra, mas todas son verdaderas. De él queda un retrato, anónimo. 44

armando álvarez bravo

PARAÍSO PENDIENTE En la gloria del denso bosque norteño, ni un alma a la vista, recuperar los sonidos, su gracia perdida. El agua que fluye; el viento que se hace latido en las copas de los empinados árboles; el leve crujido de las hojas; una rama que se parte— ¿cruza la espesura, invisible y casi palpable, poderoso o levísimo, un animal?—; el silencio de los ruidos indescifrables que ahondan la honda noche. A la orilla del bosque, magnífica, la abrupta costa: sus oscuras rocas en que brama, tan virgen e historiado, el mar, deshaciéndose en un rocío de prístina blancura que dialoga con el impenetrable firmamento, cuando se extingue el horizonte. Este es el espléndido y exacto paisaje del orden natural de las cosas. Su calma, armoniosa e incontaminada belleza proclamando la única vida posible, cuando tan poca vida nos resta. Todo es aquí. Partimos a pesar de nosotros mismos. No sabemos, no podemos hacer otra cosa. Nos acompaña en nuestro inexorable éxodo, una oceánica piedra y una crujiente hoja.

poemas de

La única, imprescindible justificación de nuestra vida, es devolverlas a este sitio.

45

ENTRE EL GATO Y LA CASA

heberto padilla

HEBERTO PADILLA (Puerta de Golpe, Pinar del Río, 1932). Uno de los poetas más destacados de la Generación del 50. En 1967, su poemario Fuera del juego, que ese año obtuvo el Premio “Julián del Casal”, de la UNEAC, fue calificado de contrarrevolucionario por las autoridades cubanas y motivó un conflicto político que dio inicio al llamado “caso Padilla”. En 1971, acusado de hacer propaganda contra la revolución, fue detenido por la policia política y dejado en libertad un mes después, luego de su célebre autocrítica. En 1980 emigró a Estados Unidos, donde aún reside. Su obra poética incluye los siguientes libros: Las rosas audaces (1948), El justo tiempo humano (1961), Los magos (1962), La hora (1964), Fuera del juego (1968), Provocaciones (1972) y El hombre junto al mar (1981). También es autor de una novela, En mi jardín pastan los héroes (1981), y del libro de recuerdos La mala memoria (1989).

1 Entre el gato y la casa hay un plano inclinado lleno de gentes con pinta de arlequines, que se quieren mover en un campo de acción muy lejos de mi alcance, además, como ya no hace sol, se desdibujan y enredan en las ramas del arce. Se han pasado todo el otoño ahí, apoyados algunos en la cerca de piedra, otros en la cumbrera del garaje, alertas como gallos. Yo permanezco inmóvil. Yo llamo a estos los actores extrapolados de mis escenarios o, si prefieren oir, de mis ficciones. 2 Escribo en Princeton desde una casa en Markham Road. El gato que menciono es un siamés que cada día sube la escalera de la puerta del patio; husmea y come, pero no entra jamás. Cuando hace mucho frío se cobija en las yerbas más altas, esperando que se abra la puerta.

poemas de

3 Entre el gato y la puerta Entre el abrigo y la orfandad Entre los ojos de un animal cualquiera Entre los sueños y la desesperanza Entre un idioma y otro Entre un país perdido y otro que no aparece Yo permanezco inmóvil, al acecho. Después abro los ojos Y afuera lo que veo son los ojos del gato.

46

heberto padilla

ALLAN MARQUAND ESPERA A SU COMPAÑERO DE TENIS EN EL CAMPO SUR

poemas de

Alguien debió llegar, ¿pero quién lo asegura, si en el retrato sólo aparece el anfitrión, todo de blanco, la raqueta en la mano, la gorra pulcra, un joven simplemente sentado en el sillón, que mira distraído, como si el siglo no conociera el desconcierto? Princeton, entonces, era una clara estampa casi bucólica; lo atestigua esta casa rodeada de verdura; la enredadera, asida a la pared de / piedra, ¿cómo hubiera podido amenazar toda esta mansedumbre? Y el que debió llegar ¿dónde se oculta? Quizás su nombre está en el mármol de los muertos del pueblo en los lejanos campos de batalla. La época exigió una marca de fuego también, un sacrificio que Allan Marquand no pudo presentir.

47

MIGUEL BARNET (1940). Premio Nacional de Literatura, (1994). Es un conocido narrador, cuya obra ha recorrido las traducciones de numerosos idiomas. Como poeta quizás sea menos conocido universalmente, pero no menor en calidades literarias; su libro principal, donde se reúne lo mejor de toda su poesía, es Con pies de gato (La Habana, 1993)

CHIAPAS

miguel barnet

SPOT II He llegado al corazón exacto de Chiapas He sentido latir el sístole y diástole de Chiapas He escuchado el grito de ave en peligro salido de la roca alta del cañón de Chiapas He sido protegido por el manto Chamula de un venerado sacerdote de Chiapas He conocido la mirada blanca, velada, de una vendedora de atole en un mercado de Chiapas La palabra Chiapas sabe a yerba amarga, a roca dentada, a tinieblas, Pero tiene también color, y hasta un ciego puede imaginar la rica profusión de tonos de azul y verde de Chiapas Dentro de sus piedras y acantilados, en sus cuevas hay fósiles más viejos que un enigma, ángeles arrojados por el diablo a las aguas del río, en el Cañón, mujeres degolladas, cirios encendidos Todo eso me ha sido dado ver, ciego para otras visiones, en Chiapas Escrito este spot un domingo melancólico junto a mi gato que no se llama Diego ni Tamerlán, pero que se alimenta también, como yo, de ese emoliente tónico que por primera vez probé, en la tierra encantada de Chiapas.

POEMAS BERLINESES.

poemas de

XII

48

Obligado a cantar, le canto a ustedes, palomas grises de Berlín, engordadas por los turistas, palomitas platónicas que no compran en Wertheim ni entran en los Mac Donalds, aves soberanas, sin primera comunión ni partido.

miguel barnet

BOCETOS DE HAIKU (selección) Qué oscuridad para el que sólo se alumbra de lo que ve. Todo me dice que entre el azogue y el espejo escoja el azogue. La alegría llega tarde a la casa del poeta, por eso es poeta.

poemas de

¡Ah! Poesía, el solitario mitiga su soledad con tu presencia, pero se queda más solo. Asomo la cabeza a la tierra como el perro de Goya, ofrezco sólo la punta de mi iceberg. Nadie está solo del todo, simplemente estamos solos de algo. 49

josé agustín goytisolo

QUÉ LINDA ES PEPA Yo deseo morir en Cuba entre las piernas de una mulata que le dicen Pepa y más nunca a Paris quisiera yo volver por miedo a los cuchillos de Michelle. Pero estoy vivo y meo esplendorosamente la sucia boca de un montón de gente y haré mil cosas feas cuando ya esté aburrido de tanto fantasmón y tanto ruido. Mas temo no volver ni a Cuba ni las piernas de la mulata María Josefa

poema de

y morir en Paris en un cuarto de hotel y en el pecho un cuchillo de Michelle.

50

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.