Sermón en el día miércoles 17 de noviembre de Título: LA FE EN LA VIDA Y EN LA ESPERANZA Biblia: Hebreos 11:1-27 Predicador: Pastor Dong Han

Sermón en el día miércoles 17 de noviembre de 2010. Título: LA FE EN LA VIDA Y EN LA ESPERANZA Biblia: Hebreos 11:1-27 Predicador: Pastor Dong Han Dav
Author:  Benito Río Reyes

0 downloads 7 Views 499KB Size

Recommend Stories


Sermón en el día miércoles 6 de marzo de Título: HEREDEROS Y COHEREDEROS (Parte 1) Biblia: Romanos 8:1-39 Predicador: Pastor Dong Han David Lee
Sermón en el día miércoles 6 de marzo de 2013. Título: HEREDEROS Y COHEREDEROS (Parte 1) Biblia: Romanos 8:1-39 Predicador: Pastor Dong Han David Lee

Sermón en el día miércoles 14 de mayo de Título: EL SOCORRO SOBRE UN PODEROSO Biblia: Salmos 89:1-37 Predicador: Pastor Dong Han David Lee
Sermón en el día miércoles 14 de mayo de 2014. Título: EL SOCORRO SOBRE UN PODEROSO Biblia: Salmos 89:1-37 Predicador: Pastor Dong Han David Lee Igles

La trinidad en la Biblia. de las más importantes de la fe cristiana. Pero últimamente algunos han cuestionado su
La trinidad en la Biblia Gerhard Pfandl Doctor en Teología. Director asociado del Instituto de Investigaciones Bíblicas de la Asociación General. La

Esperanza de vida libre de incapacidad y esperanza de vida en buena salud en Cataluña
Esperanza de vida libre de incapacidad y esperanza de vida en buena salud en Cataluña 1994-2000 Rosa Gisperta, Xavier Puiga, Anna Puigdefàbregasa, Ric

Story Transcript

Sermón en el día miércoles 17 de noviembre de 2010. Título: LA FE EN LA VIDA Y EN LA ESPERANZA Biblia: Hebreos 11:1-27 Predicador: Pastor Dong Han David Lee Iglesia Esperanza Presbiteriana Reformada Tte. 1ro. Leónidas Escobar 3913 c/ Av. Japón, Asunción, Paraguay www.evangelio123.org (595) 021-301-706 / (595) 0981-815-179 ********************** 1. Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. 2. Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos. 3. Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía. 4. Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella. 5. Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios. 6. Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. 7. Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en

que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe. 8. Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba. 9. Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa; 10. Porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. 11. Por la fe también la misma Sara, siendo estéril, recibió fuerza para concebir; y dio a luz aun fuera del tiempo de la edad, porque creyó que era fiel quien lo había prometido. 12. Por lo cual también, de uno, y ése ya casi muerto, salieron como las estrellas del cielo en multitud, y como la arena innumerable que está a la orilla del mar. 13. Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. 14. Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; 15. Pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. 16. Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.

17. Por la fe Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había recibido las promesas ofrecía su unigénito, 18. Habiéndosele dicho: En Isaac te será llamada descendencia; 19. Pensando que Dios es poderoso para levantar aun de entre los muertos, de donde, en sentido figurado, también le volvió a recibir. 20. Por la fe bendijo Isaac a Jacob y a Esaú respecto a cosas venideras. 21. Por la fe Jacob, al morir, bendijo a cada uno de los hijos de José, y adoró apoyado sobre el extremo de su bordón. 22. Por la fe José, al morir, mencionó la salida de los hijos de Israel, y dio mandamiento acerca de sus huesos. 23. Por la fe Moisés, cuando nació, fue escondido por sus padres por tres meses, porque le vieron niño hermoso, y no temieron el decreto del rey. 24. Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, 25. Escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, 26. Teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenían puesta la mirada en el galardón. 27. Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo como viendo al Invisible.

INTRODUCCIÓN: Son tantas las personas quienes están contentos porque han sido bendecidos en Jesucristo, y no estoy hablando simplemente de la salvación. Sino muchos “creen” haber sido bendecidos, y son tan amplios y variados los campos de esa bendición… seguramente no existirán personas más contentas en el mundo. Y por el grado de “gozo y alegría por las bendiciones recibidas” debería ser muy, pero muy contagiante y entusiasta a todos los hombres, y en todos los sentidos de la vida. Más aún, sabiendo que esas “bendiciones” provienen del Señor Jesús, si todo esto es según esta regla: “por Cristo más bendición”, y la conclusión es una sola: “yo quiero más bendición por tanto más Cristo en mi vida”. Haciendo cálculos con números, sí todos los cristianos que dicen ser “bendecidos” y esa alegría se transmitiera cada uno en el mundo que vive, “de seguro” somos la sociedad más gozosa y el país más alegre del mundo. ¡Donde la luz de Cristo brilla y resplandece aquí y allá como luminares del mundo! Mas “oh”, ¿qué pasó? Hay un apagón generalizado… no de nuestra Itaipú (la mayor usina hidroeléctrica en producción constante del mundo), sino de la “luz de Cristo”. ¿Por qué si son personas tan… bendecidas? ¿Cuál es el problema? Es que han vendido un producto en las iglesias cristianas de hoy llamado “bendición” por todos lados, a cualquier cosa lo llamaron “bendición” y lo han relacionado íntimamente con la fe. O sea, a mayor “bendición y prosperidad” mayor fe en Jesús. Mas a la gran mayoría de los creyentes no les sale

esta matemática, y por ello se sienten mal, creen que no les contaron un secreto o dejaron de cumplir una regla o seguir un paso importantísimo. Porque no hay tantas bendiciones y prosperidades como la boca lo profesa, ni según la fe alegada. Y para los expertos en el “evangelio de la prosperidad” les resulta sumamente difícil explicar todo este capítulo 11 de Hebreos, y menos el versículo 1 al cual hacen tanta referencia. Todo lo que vengo diciendo es esto: es sumamente difícil que se haga progresar al evangelio de la prosperidad de esta forma, porque la Biblia no responde a los caprichos del hombre codicioso, siempre delatará su error. Por eso, lo que hoy dicen es bendición y lo persiguen con ansias, eso mismo les producen dolores, quebrantos y horrores. ¿Por qué? Porque verdaderamente no son bendiciones bíblicas de Dios, es más cuando el hombre insiste en perseguirlas, cae en la incredulidad y es sobre ellos el enojo y la indiferencia del Señor Jehová. Por eso, hoy les voy a hablarles acerca de la FE en los Grados Superiores, y que hablan acerca de la vida y la esperanza con que debe vivir todo creyente. LA ESPERANZA EN LA VIDA La esperanza que tenga la persona influye gravitantemente en toda la vida del hombre. Porque el hombre tiene una gran fuerza de voluntad siempre que la persona tenga una esperanza y crea que es posible alcanzarla. Y una vez que cree o ve la esperanza, toma decisiones, es capaz de caminar, de remar, de mover grandes montañas, de

cruzar desiertos inmensos, y asumir grandes sacrificios para alcanzarlos. Siempre que tenga señales correctas e inequívocas, siempre que vea y considere que las está alcanzando poco a poco, tendrá mayor fuerza en la consecución de esa esperanza. Veamos el versículo 20: Por la fe bendijo Isaac a Jacob y a Esaú respecto a cosas venideras. Ahora busquemos en la Biblia, las bendiciones con que bendijo Isaac a cada uno de ellos: o Génesis 27:27-29 Mira, el olor de mi hijo, como el olor del campo que Jehová ha bendecido; Dios, pues, te dé del rocío del cielo, y de las grosuras de la tierra, y abundancia de trigo y de mosto. Sírvante pueblos, y naciones se inclinen a ti; sé señor de tus hermanos, y se inclinen ante ti los hijos de tu madre. Malditos los que te maldijeren, y benditos los que te bendijeren. Aquí vemos cómo están contenidos y ampliados las bendiciones del pacto de Abraham que Isaac las ha vivido y aprendido; y ahora las da a su hijo Jacob. Luego, las palabras de Esaú a su padre son reveladoras, vean Génesis 27:36-38 Y Esaú respondió: Bien llamaron su nombre Jacob, pues ya me ha suplantado dos veces: se apoderó de mi primogenitura, y he aquí ahora ha tomado mi bendición. Y dijo: ¿No has guardado bendición para mí? Isaac respondió y dijo a Esaú: He aquí yo le he puesto por señor tuyo, y le he dado por siervos a todos sus hermanos; de trigo y de vino le he provisto; ¿qué, pues, te haré a ti ahora, hijo mío?

Y Esaú respondió a su padre: ¿No tienes más que una sola bendición, padre mío? Bendíceme también a mí, padre mío. Y alzó Esaú su voz, y lloró. Y ahora veamos la bendición que entonces Isaac hizo a su hijo Esaú: o Génesis 27:39-40: He aquí, será tu habitación en grosuras de la tierra, y del rocío de los cielos de arriba; y por tu espada vivirás, y a tu hermano servirás; y sucederá cuando te fortalezcas, que descargarás su yugo de tu cerviz. ¿No has guardado bendición para mí? ¿no tienes más que una sola bendición? Aquí se puede notar cómo Isaac ha comprendido que su vida está íntimamente ligada a la tierra que Jehová le dio y su modo de pensar también está enfocado según el pacto. Y ese es el cuestionamiento que le está haciendo Esaú, ¿no tienes más que una sola bendición? Por eso, Isaac bendice a Esaú según la otra bendición posible, la que dan los hombres terrenales, aquellos quienes no tienen el pacto de Dios. Repito: “Estas son las dos bendiciones que típicamente pueden existir en el mundo, entre el elegido de Dios (Jacob) y el no elegido (Esaú).” Mientras al hijo de la promesa se les bendice según los términos del pacto de Abraham; al que no es hijo de la promesa, según los términos del mundo, donde están las grosuras de la tierra y del rocío del cielo, pero que depende de su ESPADA para vivir. Mas también habla de la condición: servirás a tu hermano. ¿Qué es esta espada? Es la competencia, tener un producto mejor, desarrollar algo novedoso, tener la

exclusividad, el juego y prevalecer por el capital, el uso de la tecnología, el bombardeo de la publicidad, es la guerra, es la supervivencia, es matar a la competencia, es el robo, el contrabando, es la coima. Todo lo que normalmente vemos en la sociedad y en el comercio mundial. La oferta y la demanda de unos recursos limitados… En cambio, según la bendición en los términos del pacto es que heredaremos la tierra, que creceremos hasta llegar a ser una gran nación y somos los benditos de Jehová. Un pequeño ejemplo de esto lo podemos ver con lo que es “la nación judía” alrededor del mundo, así que yo no estoy hablando de cosas sin sentido. Y podemos ver el ejemplo de ese pueblo a lo largo de la historia; muchas naciones, imperios, y grandes hombres se han levantado y empuñado diferentes tipos de “ESPADAS” pero todos no pudieron prevalecer, mas la descendencia de Abraham sí prevalecen hasta hoy; y podrían ser mayores si verdaderamente creyesen en Jesucristo. A esta esperanza, el Señor nos ha abierto la puerta dentro del pacto de Abraham al decirnos la Biblia: pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa. (Gálatas 3:2629). Mas también sé que para los judíos de hoy existe un futuro mayor, porque la Biblia dice: Y aun ellos, si no

permanecieren en incredulidad, serán injertados, pues poderoso es Dios para volverlos a injertar. Porque si tú fuiste cortado del que por naturaleza es olivo silvestre, y contra naturaleza fuiste injertado en el buen olivo, ¿cuánto más éstos, que son las ramas naturales, serán injertados en su propio olivo? Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos; que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles; y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, que apartará de Jacob la impiedad. Y éste será mi pacto con ellos, cuando yo quite sus pecados. (Romanos 11.23-27) Saben ustedes que luego se separan ambos hermanos, y pasan veinte años. Según el relato de la Biblia, ambos: tanto Jacob como Esaú se dedican a vivir y a prosperar en el mundo; y los dos se hacen ricos. Mas en el interior de Jacob siempre tiene la esperanza de volver a la tierra donde está su bendición, porque la bendición de Jehová está siempre LIGADA CON LA TIERRA PROMETIDA y dentro del “pacto”; no en cualquier lugar. Y esto es lo que deben aprender los creyentes de Jesús de hoy, porque a cualquier “cosa” dicen bendición, mas ninguna bendición es realmente una bendición de Dios si no está relacionada al pacto y se da dentro del territorio de la tierra prometida, y en el tiempo correspondiente a su concesión. Esta es la causa de por qué las bendiciones que muchos “creen” vienen de Dios hoy, luego les produce problemas…, porque lo buscaron según los términos de Esaú.

Y esto es más notorio cuando veinte años después se reencuentran: o Jacob busca la bendición de Jehová a través de la lucha con el ángel de Dios en el arroyo Peniel: así se quedó Jacob solo; y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba. Y cuando el varón vio que no podía con él, tocó en el sitio del encaje de su muslo, y se descoyuntó el muslo de Jacob mientras con él luchaba. Y dijo: Déjame, porque raya el alba. Y Jacob le respondió: No te dejaré, si no me bendices. Y el varón le dijo: ¿Cuál es tu nombre? Y él respondió: Jacob. Y el varón le dijo: No se dirá más tu nombre Jacob, sino Israel; porque has luchado con Dios y con los hombres, y has vencido. (Génesis 32:27-28) En cambio vean cómo piensa Esaú luego de su encuentro con Jacob: suficiente tengo yo, hermano mío; sea para ti lo que es tuyo. (Génesis 33:9) LA LEY DE LOS HIJOS DE DIOS Tienen que saber esta ley existe SOLAMENTE para “los hijos de Dios”, y es la razón de por qué los creyentes de hoy JAMÁS pueden encontrar toda la bendición y siempre su luz se apagará en el mundo cuando busca las bendiciones del mundo como Esaú utilizando la misma “espada”. Porque han de buscar las bendiciones según los “términos del pacto de Abraham”, o sea, que la bendición que se da en la tierra que Jehová tu Dios te da es la verdadera, y cuando te bendice y multiplica de ti y hace una gran nación en la tierra prometida; entonces eres bendición. Como lo dijo Jehová a Jacob cuando volvió y ofreció un sacrificio en el mismo lugar que él veinte

años antes había soñado mientras huía de Esaú su hermano: Y dijo Dios: Tu nombre es Jacob; no se llamará más tu nombre Jacob, sino Israel será tu nombre; y llamó su nombre Israel. También le dijo Dios: Yo soy el Dios omnipotente: crece y multiplícate; una nación y conjunto de naciones procederán de ti, y reyes saldrán de tus lomos. La tierra que he dado a Abraham y a Isaac, la daré a ti, y a tu descendencia después de ti daré la tierra. Y se fue de él Dios, del lugar en donde había hablado con él. (Génesis 36:10-13) Por eso, Jacob fue un hombre muy rico en la tierra de su suegro Labán pero nunca encontró la bendición de Dios, porque siempre era perseguido por Labán su suegro y sus cuñados. Tampoco notarán que Jehová le prometió durante ese tiempo esa tierra como posesión, ni tenemos registros de que Dios le hable. Solamente volvió a escuchar la voz de Jehová cuando debía abandonar la tierra. Jesús lo dijo de esta forma: Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor, porque os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al padre en mi nombre, él os lo dé. Esto os mando: Que os améis unos a otros. Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros. Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece. Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es

mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra. Mas todo esto os harán por causa de mi nombre, porque no conocen al que me ha enviado. Si yo no hubiera venido, ni les hubiera hablado, no tendrían pecado; pero ahora no tienen excusa por su pecado. El que me aborrece a mí, también a mi Padre aborrece. (San Juan 15:1423) Por eso, tienen que atesorar definitivamente en el cielo, porque allí es donde hay construir. Así dijo Jesús: No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan, sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas. Así que, si la luz que en ti hay es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas? Ninguno puede servir a dos señores, porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas. (san Mateo 6:19-24) Esta es la ley de los hijos de Dios, que si no atesoran según los términos del pacto, si no buscan su bendición dentro de la tierra prometida y según los términos del tiempo del pacto; hagas lo que hagas jamás será bendición aun cuando eso en el mundo parezca prosperidad. Por eso, el hijo de Dios podrá según los ojos del mundo ser prosperado, mas jamás se sentirá contento, ni gozoso, ni durará demasiado;

porque no lo está construyendo en la tierra que Jehová su Dios le dio. Y esta es una ley, exclusiva de los elegidos. Así también, los pastores cuando no están trabajando en su tierra prometida, si no está guiando a las ovejas a la tierra prometida y que allí busquen su bendición, jamás será considerado por Dios como un buen siervo. Por eso, cuando Jacob murió en la tierra de Egipto, verán que los bendijo según los términos del pacto, y cómo sus hijos se desenvolverían en la tierra prometida. Siempre les acordó que deberían volver, y pidió que fuese enterrado en la tierra de Canaán cuando muriere haciéndole jurar a José. LA CONVICCIÓN DE LA VIDA ¿Cómo debe ser la vida del creyente mientras viva? ¿En qué debe tener fe? ¿Cómo debe ser su vida frente a las diferentes circunstancias que se les presenta? Aquí vemos el caso de la vida de varias personas quienes fueron muy famosos y no tanto. o El caso de José: ¿Cuánto más puede ascender un hombre en el mundo? Ser el segundo hombre más poderoso en la tierra de Egipto, quien tenía el poder en sus manos de dar o no comida a miles y miles de personas. Además era conocido y todos le temían porque el Dios de los cielos estaba con él revelando los sueños y tenía el poder de la adivinación (según los egipcios). Qué más privilegios podían tener los hijos de José, o los hijos de Israel. Pues todo el mundo en Egipto los amaba, los querían, porque les habían salvado la vida por las revelaciones. Por años, y

talvez por dos o tres generaciones fueron muy alabados y queridos. Mas en José siempre existió la certeza que Jehová les visitaría y los conduciría nuevamente a la tierra prometida. Por eso mencionó acerca de la salida de Israel de Egipto y les dio instrucciones para que sean llevados sus huesos. Siempre José supo que el tiempo en Egipto era temporal, para que Jacob y sus hijos no muriesen de hambre y porque debían multiplicarse como las estrellas del cielo en multitud; y porque había de mostrar al profeta Moisés quien anunciaba a Jesucristo. ¿En dónde creen puso José su convicción de la vida? ¿En dónde creía José que estaba la bendición de su pueblo? Siempre supo que su momento de estar como el Primer Ministro de Egipto era solamente temporal. Por eso dice la Biblia: Por la fe José, al morir, mencionó la salida de los hijos de Israel, y dio mandamiento acerca de sus huesos. o Los padres de Moisés: por la fe Moisés, cuando nació, fue escondido por sus padres por tres meses, porque le vieron niño hermoso, y no temieron el decreto del rey. Es la fe de los creyentes que está en Jehová Dios, más allá de la fuerza y poder de los gobernantes. Porque saben que existe Dios quien gobierna y juzga en la tierra.

o El caso de Moisés: Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenían puesta la mirada en el galardón. Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo como viendo al Invisible. ¿Quién podría pedir una mejor profesión que nieto de un rey de Egipto? ¡Cuánto poder, cuánta gloria, qué vida! Todo lo que podría pedir un hombre, lo tenía. ¡Mas cuánta fe, cuánta convicción en Jehová, cuánta certeza de qué pueblo es y a donde pertenece! Y todo esto es posible porque Moisés sabía que su pueblo era mayor e importante. No temió las consecuencias, y dice la Biblia: se sostuvo como viendo al Invisible. Mas vean con qué convicción vivían estas personas, no vivían según las circunstancias en que estaban envueltas, no vivían con excusas. Sino que tenían bien claro qué estaban buscando, qué deseaban ellos, a dónde debían volver. ¿Con qué convicción y fe viven ustedes? ¿Cuántos de ustedes creen en el pacto de Abraham y que este pacto también existe para ustedes y su familia? Entonces deben saber que hoy, mientras no entren en la tierra prometida es necesario que nosotros sepamos vivir como peregrinos y

extranjeros, teniendo siempre la esperanza puesta en el pacto de Abraham. ¿Pueden renunciar, pueden soportar, pueden hoy perder, pueden hoy elegir y cuidar el destino de su vida para no esclavizarse de este mundo? Si fueran José y estuvieran en su posición de Egipto, ¿cómo vivirían ustedes? ¿Podrían ustedes vivir con la convicción de los padres de Moisés? ¿Podrían ustedes rechazar los deleites temporales del pecado, y preferir los vituperios de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tienen puesta la mirada en el galardón? ¿Podrían ustedes renunciar a ser hijo de la hija del Rey de Egipto? ¿Qué significaría eso hoy? ¿Renunciarían a ser presidente? ¿Renunciarían los privilegios? ¿por guardar los mandamientos de Dios podrían renunciar y preferir los vituperios de Cristo? Dejarían todo lo bueno que ofrece el mundo, el Egipto de hoy porque ven al Invisible Dios y creen firmemente en sus promesas del pacto? ¿Prefieren ser antes maltratados por ser hijos de Dios que gozar de los deleites temporales del pecado? ¿O recibirían todas las cosas diciendo que “SON LAS BENDICIONES QUE DIOS ME DA EN RESPUESTA A MIS ORACIONES”? ¿Se pueden dar cuenta de cuán importante es el conocimiento del pacto de Abraham y en dónde te corresponde hoy? Suelo escuchar en conversaciones con muchos creyentes quienes dicen que Dios está en todas partes, y hoy buscan y desean emigrar a países donde “se gana más dinero” diciendo que ahí está la bendición; y por ello ora a Dios afanosamente.

Y justamente esta es la falta de enseñanza de la Biblia según los términos del pacto que actualmente reina en las iglesias de nuestro Señor Jesucristo. Es una búsqueda ciega de bendiciones… como Esaú. LUMINARES DEL MUNDO Por más que tengas necesidades, faltas, hambre, deseos, ambiciones, mas a todo puedes tener control porque creen en el pacto que Jehová te ha dado, de que recibirás la tierra, que serás una gran nación, que eres el bendito de Dios. Cuando esto pueden hacer, entonces son la luz del mundo, como los luminares que brillan en el mundo. Y les vengo diciendo cuál es nuestra tierra prometida, por eso salimos todos los días incansablemente para evangelizar, porque sabemos que hoy estamos sembrando, estamos conquistando; cada vez que salimos a evangelizar estamos confesando a Dios Todopoderoso, al Dios de Abraham, de Isaac, y de Jacob que creemos en nuestra herencia. Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor, porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad. Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo; asidos de la palabra de vida, para que en el día de Cristo yo pueda

gloriarme de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado. (Filipenses 2:12-16) Es el secreto que hemos estado conociendo, porque Dios nos ha renovado cada día, nos ha dado mayores fuerzas, siempre nos está alimentando de las grosuras del cielo y de la tierra, y sabemos que las Palabras de Jehová no nos faltará a nosotros, ni a nuestros hijos, ni a los hijos de nuestros hijos porque así nos ha prometido Dios. Y saben que nuestra iglesia no se ha desviado de este camino, y el Señor Jesús nos ha retribuido grandemente. Porque comprobamos cada día, semana tras semana la grandeza y perfección de las Escrituras. CONCLUSIÓN: Este es el grado superior de fe, que uno vive y tiene sus esperanzas puestas en las promesas del pacto que nuestro Padre Celestial nos ha dado. Y sabemos que siempre que vivamos de esta forma, estamos atesorando en los cielos, cada día vemos con más nitidez la patria celestial y sentimos nuestra unión en Cristo. A nosotros también nos sorprende mirar atrás, tantas semanas saliendo a las calles para evangelizar y confesar que creemos en las promesas de nuestro Dios. Pero también tuvimos que renunciar a muchas tentaciones, rechazar muchas invitaciones, trabajos, ministerios, y nuevos programas; porque creíamos en un camino, en este pacto que hemos recibido de Dios. Puede parecer a muchas personas que estamos estáticos, que no hacemos grandes cosas, que no atraemos a muchas personas, que no crecemos como lo decimos; mas sí

sabemos lo que Dios está haciendo y vemos con fe que estamos más cerca de lo que muchos pueden ver. Hemos conquistado los reinos de Sehón y de Og, y son las palabras de Dios. Esta es nuestra vida y la esperanza con que vivimos. ¡Que Dios les bendiga por la fe que tienen y les hace ver!

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.