VICTORIA DE SAMOTRACIA El debilitamiento de Atenas y de las demás ciudades griegas a causa de la dominación macedonia, y las conquistas de Alejandro trajeron aparejado un "personalismo". Este personalismo (sin referirme al mal sentido de la palabra), distingue la nueva época denominada "helenística". En el período helenístico las características escultóricas se modifican. En él se empiezan a representar las emociones, las sensaciones, lo religioso y la naturaleza. Todas estas características están influidas por Oriente y dan lugar a una estética más realista.

El concepto de autor desaparece, pasando a destacar el lugar o la escuela donde la obra había sido esculpida. La escuela de Rodas destaca la Victoria de Samotracia (220 al 190 aC). No se sabe en realidad quién fue el autor de esta obra, pero lo cierto, es que en ella notamos una de las cumbres de la plástica griega. Probablemente fue donada por los rodios al santuario de Samotracia por la victoria de la flota rodia sobre Antioco III, de Siria (190 a. C.), y que para conmemorarla sacan de la mitología griega la figura de la diosa Victoria (Niké), cuerpo de mujer con alas. Este monumento fue construido en la isla de Samotracia, en un nicho sobre el santuario de los Grandes Dioses. Estaba colocada en una saliente, sobre el teatro. Celebra un triunfo en el mar: la diosa se encuentra en la proa de una galera con la mano derecha, se cree, que levantada. La Victoria está en actitud de andar contra un fuerte viento que pega a su cuerpo la túnica. El tratamiento de los pliegues y textura de la tela es la técnica de paños mojados de Fidias (gran escultor que realizó las esculturas y bajorrelieves para el Partenón que fueron las más perfectas de la anatomía del cuerpo humano, en movimiento y que se caracteriza por su estilo de paños mojados que se adhieren al cuerpo en pequeños pliegues), que hace parecer que el agua adhiere la túnica al cuerpo y la tensa sobre el pecho. A la vez las alas de la Victoria se despliegan hacia atrás. La obra, de mármol de Paros, tiene una altura de 3,28 m con las alas y 1

de 2,45 m sin ellas. La unión de escultura y naturaleza fue algo nuevo, que distinguió este nuevo período helenístico del anterior. Esta figura recuerda por un lado el clasicismo de Lisipo (artista greco 380 a.C. − 318 a.C) , por la armonía del dibujo, mientras que, por otro, resulta barroca por su actitud y sus ropas que dan una visión realista. La obra, fue reconstruida con los fragmentos descubiertos en 1863 por el cónsul francés Charles Champoineau en la isla de Samotracia. No se encontraron los brazos ni la cabeza. Sólo fue descubierta, y mucho tiempo después que el resto del cuerpo, parte de una mano. Actualmente la Victoria de Samotracia se conserva en el Museo del Louvre, en París. Comparación de la Victoria de Samotracia con la Fuente de las Nereidas, de Dolores Mora de la Vega (Lola Mora). Es cierto que las dos esculturas provienen de lugares y de épocas muy diferentes, pero esto no descarta su, a veces, parecido entre sí, aunque hallamos también infinitas diferencias. Empezaré diciendo que, los dos autores (Lola mora y el desconocido de la Victoria), se basaron en dos diosas (Venus y Niké) para su representación. Las dos obras están hechas en mármoles diferentes, y comparten una visión estética parecida entre sí. En mi opinión, la fuente alude a una visión reverencial: esto se ve en la posición de las nereidas, y en la actitud de la diosa. En cambio la Victoria, creo yo, que por sus alas muestra una realidad menos lejana a la de Venus, menos inalcanzable. En lo personal, me gusta más la Victoria de Samotracia porque se muestra menos arrogante. Además me parece muy interesante el trabajo hecho en su túnica, me gustan mucho los detalles que tiene esta obra. La fuente de las Nereidas.

Es la obra más famosa realizada por Lola Mora. Representa el nacimiento de Venus y está hecha de mármol de Carrara y granito rosado. Hubo un primer proyecto que utilizaba a Nereo, dios de las profundidades del mar, como personaje principal del conjunto . Luego lo cambia −cosa habitual en ella que rehacía muchas veces sus bocetos− por la diosa Venus, a quien le servían de séquito las nereidas y tritones. Todas las figuras lucían un desnudo total. Incluso las nereidas, que, por lo general, su desnudo termina en la cintura las presentó con el desnudo hasta la media pierna.

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Desde el comienzo, la fuente y la autora fueron atacadas y mal vistas por la sociedad. En 1901, cuando Lola Mora recién llegaba a Buenos Aires con las maquetas terminadas, un escándalo la sorprendió denunciando que la fuente no podría ser colocada en la Plaza de Mayo. La fuente fue inaugurada en 1903, y actualmente−después de haber sido trasladada varias veces− se encuentra en la Costanera Sur, frente al Río de la Plata, en Buenos Aires.

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FUENTE DE LAS NEREIDAS Bibliografía http://www.uc3m.es/uc3m/dpto/HC/ESCUL/victoria.html http://www.iespana.es/mule/Arte/Samotracia.htm http://www.artehistoria.com/frames.htm?http://www.artehistoria.com/historia/obras/7983.htm http://www.galartes.com/escultu/alas.htm http://www.todo−argentina.net/historia/videos/generacion80/lolamora.html http://artesur.com/catalogo/news.php?id=57 http://www.todo−argentina.net/biografias/Personajes/lola_mora.htm http://www.artehistoria.com/frames.htm?http://www.artehistoria.com/historia/personajes/4181.htm http://www.eha.boj.org/repositorio/epocas−estilos/griego/msg00004.html http://www.dooyoo.es/review/371303.html http://www.poesiadelmomento.com/luminarias/mitos/47.html

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