ASESORAMIENTO DIETÉTICO EN EL SOBREPESO Y LA OBESIDAD EN LA OFICINA DE FARMACIA

ASESORAMIENTO DIETÉTICO EN EL SOBREPESO Y LA OBESIDAD EN LA OFICINA DE FARMACIA Coordinación: Facultad de Farmacia Instituto de Ciencias de la Alimen

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ASESORAMIENTO DIETÉTICO EN EL SOBREPESO Y LA OBESIDAD EN LA OFICINA DE FARMACIA Coordinación:

Facultad de Farmacia Instituto de Ciencias de la Alimentación

MÓDULO 1: ENERO-MARZO 2010

Tema 1. Sobrepeso y obesidad. Definición, clasificación, epidemiología, fisiopatología y comorbilidades Para acceder a los cuestionarios de evaluación y a toda la información sobre el curso, ver

Módulo 1: 5,9 créditos

www.auladelafarmacia.org

Actividad acreditada por la Comisión Nacional de Formación Continuada

ENERO 2010

9

FORMACIÓN ACREDITADA

Sobrepeso y obesidad. Definición, clasificación, epidemiología, fisiopatología y comorbilidades Pedro Luis Prieto Hontoria Diplomado en Nutrición Humana y Dietética. Licenciado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos. Master Europeo en Nutrición y Metabolismo. Dpto. de Ciencias de la Alimentación, Fisiología y Toxicología. Facultad de Farmacia. Universidad de Navarra.

J. Alfredo Martínez Hernández Catedrático de Nutrición y Bromatología. Dpto. de Ciencias de la Alimentación, Fisiología y Toxicología. Facultad de Farmacia. Director del Instituto de Ciencias de la Alimentación. Universidad de Navarra.

Definición El concepto de obesidad ha sufrido diver-

de un balance energético positivo mantenido

sas interpretaciones en cuanto a su relación

en el tiempo (figura 1). La obesidad se ha rela-

con la salud a lo largo de la historia. En la ac-

cionado con dietas hipercalóricas, con alto con-

tualidad, la obesidad se define como una en-

tenido en grasas saturadas y azúcares sencillos,

fermedad crónica multifactorial caracterizada

estilos de vida inadecuados, el sedentarismo y

por un aumento de la masa grasa y, por lo

con un componente genético, entre otros

tanto, del peso corporal, como consecuencia

agentes causales. Esta enfermedad afecta a un gran porcentaje de la población en la mayoría

Figura 1. Cambios en el peso corporal determinados por el equilibrio/ desequilibrio entre el consumo de energía (calorías de alimentos) y el gasto de energía (calorías consumidas). Consumo de energía

de los países, abarcando todas las edades, sexos y condiciones sociales. Ciertamente, un exceso de peso en relación a la altura no significa obligatoriamente obesidad, ya que esta si-

Gasto de energía

tuación puede atribuirse a diversas causas ajenas a la obesidad, ya sea un deportista con Peso estable

Consumo de energía

una masa muscular elevada, en personas con un desarrollo óseo aumentado, o bien, como sucede en algunas enfermedades, como la in-

Gasto de energía

suficiencia cardiaca, en las que se retiene gran Pérdida de peso

cantidad de agua, o como consecuencia del embarazo, etc. (Barbany y Foz, 2002).

Consumo de energía

Gasto de energía

Clasificación Ganancia de peso OBESIDAD

10

ENERO 2010

La obesidad puede clasificarse según diversos criterios. El Índice de Masa Corporal

(IMC) o Índice de Quetelet es el más utilizado. Este indicador de adiposidad relaciona el peso del individuo expresado en kilogramos con la altura de dicho individuo, expresada en metros, y elevada al cuadrado. IMC = Peso (Kg)/Talla2 (m)

Tabla 1 Criterios SEEDO 2007 para definir la obesidad en grados según el IMC en adultos. Categoría

Valores límite del IMC (kg/m2)

Peso insuficiente

< 18,5

Normopeso

18,5-24,9

Sobrepeso grado I

25,0-26,9

Sobrepeso grado II (preobesidad)

27,0-29,9

Obesidad de tipo I

30,0-34,9

Obesidad de tipo II

35,0-39,9

de los estudios epidemiológicos y recomenda-

Obesidad de tipo III (mórbida)

40,0-49,9

do por diversas sociedades médicas y organi-

Obesidad de tipo IV (extrema)

>50

Dicho índice es utilizado por la mayoría

zaciones de salud internacionales para su uso clínico, dada su reproducibilidad, facilidad de

con una mayor prevalencia de enfermedades

utilización y capacidad de reflejar adiposidad

crónico-degenerativas.

en la mayoría de la población (Salas-Salvado y

El Índice Cintura / Cadera (ICC) se aplica

col., 2007) a pesar de algunas limitaciones. De

como indicador de la distribución de la grasa

acuerdo con el Consenso SEEDO´2007 esta

corporal, y para su cálculo hay que medir con

clasificación queda establecida tal y como se

una cinta métrica el perímetro de la cintura a

muestra en la tabla 1.

nivel de la última costilla flotante, y el períme-

Este índice (IMC) no refleja directamente

tro máximo de la cadera a nivel de los glúteos.

la composición corporal, sino que relaciona el

Un ejemplo, un varón tiene 110 centímetros

peso y la talla de una persona sin discriminar

de cintura y 100 de cadera, es decir:

entre el exceso de peso producido por acumu-

ICC = 110 cm / 100 cm = 1.10

lación de grasa, una hipertrofía muscular o una

Se ha propuesto que una relación entre

retención de líquido. Los deportistas con hue-

cintura y cadera superior a 1.0 en varones y a

sos densos y músculos desarrollados podrían

0.8 en mujeres indica que la grasa corporal

tener sobrepeso según el IMC. Sin embargo,

sigue una distribución central o abdominal. En

tienen poca grasa y sería un error clasificarles

relación a este índice, si la circunferencia de la

en el rango de obesidad-sobrepeso y también

cintura es mayor de 88 cm para mujeres y de

ocurriría lo mismo en el caso de algún culturis-

102 cm para hombres, decimos que además

ta clasificado con sobrepeso aunque no tenga

de distribución central existe obesidad abdo-

grasa, mientras que de la misma forma, una

minal o androide. El origen de esta obesidad

gimnasta podría ser clasificada con peso insufi-

es normalmente un exceso de grasa hipertrófi-

ciente aunque esté completamente sana. Por el

ca y visceral, es decir, existe un aumento del

contrario, una persona muy sedentaria puede

tamaño de los adipocitos alrededor de las vís-

tener un IMC adecuado cuando seguramente

ceras, de manera que la grasa abdominal

tiene demasiada grasa corporal.

(también llamada grasa oculta o visceral) se

Tan importante como la cantidad de

deposita en y alrededor de los órganos vitales

grasa corporal, es su distribución, ya que se ha

(corazón, hígado, páncreas, riñones). Es impor-

demostrado que una mayor tendencia al de-

tante señalar que la grasa visceral es metabóli-

pósito abdominal de grasa está relacionada

camente más activa que la grasa subcutánea y

ENERO 2010

11

FORMACIÓN ACREDITADA

número de células. Este tipo de obesidad

Figura 2. Tipos de obesidad según criterio anatómico (Tomada de la guía “Nutrición saludable y prevención de los trastornos alimentarios” del Ministerio de Sanidad y Consumo).

suele aparecer en épocas de crecimiento, considerándose responsable de la obesidad infantil y del adolescente. •

Hipertrófica: relacionado con un aumento del tamaño celular, en particular de los adipocitos, siendo este tipo de obesidad el principal responsable de la obesidad en el adulto.

• Criterio anatómico: según la cantidad así como la localización predominante de los depósitos grasos (figura 2). De esta forma se pueden distinguir al menos tres tipos diferenciados de obesidad: •

Obesidad androide

Obesidad ginoide

Obesidad difusa o de clase I: caracterizada por el exceso de grasa corporal total sin que se produzca una concentración

secreta productos químicos tóxicos hacia el to-

específica de tejido adiposo en alguna re-

rrente sanguíneo, alterando los procesos metabólicos normales, lo que produce inflama-

denominada obesidad “androide” por

línica, que es un factor fundamental para la

considerarse típica de varones y caracteri-

aparición de la diabetes tipo 2, hipertensión

zada por el exceso de grasa subcutánea

arterial, dislipemia y cardiopatía isquémica

en la región abdominal (tipo manzana) y

(Ross, 2001; Goldstein, 1992).

en el tronco. Es una obesidad fundamen-

Actualmente existen otros métodos de

talmente hipertrófica, la grasa es visceral

medida de la composición corporal, como son:

y altamente sensible a la lipólisis inducida

bioimpedancia eléctrica, hidrodensitometría,

por catecolaminas. Esta obesidad suele

absorciometría de rayos X de doble fotón

asociarse a intolerancia a la glucosa, hi-

(DEXA), pletismografía por desplazamiento de

pertrigliceridemia, diabetes mellitus tipo

aire (Bod Pod), interactancia infrarroja, tomo-

2, hipertensión y enfermedad arterial co-

grafía axial computada (TAC) y resonancia

ronaria. •

Obesidad glúteo-femoral o de clase III: tí-

debe ser rápido, eficaz, no invasivo y preciso

pica de mujeres, también denominada

con el que evaluar la composición corporal de

obesidad “ginoide”, la cual se caracteriza

los pacientes.

porque la grasa se localiza preferente-

Otros criterios para la clasificación de la obesidad son los siguientes: • Criterio celular: según el número y tamaño de los adipocitos (Moreno y col., 1997): •

ENERO 2010

Obesidad central o de clase II: también

ción de las arterias coronarias, resistencia insu-

magnética nuclear (RMN). El método ideal

12

gión corporal. •

Hiperplásica: atribuido a un aumento del

mente en la región glúteo femoral (tipo pera). Es una obesidad hiperplásica y poco sensible a la lipólisis. Suele asociarse a litiasis biliar, tromboflebitis e hiperinsulinemia.

Epidemiología

sino también ciertos tipos de cáncer y otras enfermedades altamente prevalentes. Los pa-

Actualmente, la obesidad constituye una

cientes con obesidad mórbida presentan

de las alteraciones metabólicas de mayor reper-

también un aumento de la mortalidad total y

cusión, no sólo desde el punto de vista sanita-

sufren una gran estigmatización social y dis-

rio, sino también desde ámbitos psicológicos,

criminación, ya que esta condición mórbida

sociales y económicos (Martínez y col., 2002).

muchas veces no es considerada como una

Este fenómeno de naturaleza epidémica se debe

verdadera enfermedad.

en gran medida a los cambios ambientales y so-

Los últimos estudios epidemiológicos re-

ciales que han tenido lugar en las últimas déca-

velan unos alarmantes datos en la población

das, que han interaccionado negativamente con

adolescente mostrando una prevalencia de

la base genética preexistente (Martí y col., 2008;

obesidad del 13,9% y de un 12,4% de so-

Goyenechea y col., 2006).

brepeso (Aranceta y col., 2007). La prevalen-

Esta patología se ha convertido en la se-

cia de obesidad en la población adulta (25-

gunda causa de mortalidad prematura evita-

60 años) en España se estima en un 15,5%,

ble después del tabaco (OMS, 2000), de ahí

es más elevada en mujeres (17,5%) que en

que el coste sanitario para la sociedad ha

los varones (13,2%), según el estudio DORI-

enfocado su atención sobre la carga econó-

CA (Dislipemia, Obesidad y Riesgo Cardio-

mica que conlleva esta enfermedad teniendo

vascular) (Aranceta y col., 2005) y depende

en cuenta que supone un coste total de

de la edad (tabla 2). Además, durante la

2.500 millones de euros al año en España

edad adulta, la prevalencia de obesidad se

(González-Zapata y col., 2007), y que según

incrementa con la edad y está relacionada

el estudio DELPHI representa casi el 7% del

inversamente con el nivel educativo y la si-

gasto sanitario (Consenso SEEDO´2007 So-

tuación socioeconómica (Roman y col.,

ciedad Española para el Estudio de la Obesi-

2009). Así, las mujeres de 45 o más años

dad). Dicho gasto viene dado, en parte, por-

con un bajo nivel educativo son el subgrupo

que las personas obesas presentan un riesgo

con mayor prevalencia de obesidad. Entre los

superior de sufrir enfermedades, que en-

factores que influyen en esta mayor preva-

cuentran su base o su efecto promotor en el

lencia de obesidad destacan, por un lado,

exceso de tejido adiposo, como son la resis-

los ligados al estilo de vida: mayor sedenta-

tencia a la insulina, la diabetes tipo 2 y en-

rismo, menor consumo de frutas y verduras,

fermedades cardiovasculares, entre otras

así como el incremento del aporte calórico a

(Moreno y col., 2005).

expensas de grasas o de alcohol.

Los datos actuales revelan que la preva-

Asimismo se han observado diferencias

lencia de la obesidad ha aumentado y conti-

significativas en la prevalencia de obesidad en

núa incrementándose de forma alarmante en

las diferentes regiones españolas y entre sexos

nuestra sociedad, así como en países de eco-

(figura 3). En el sexo femenino la prevalencia

nomía en transición, adquiriendo proporcio-

de obesidad es alta en el Noroeste (21,8%),

nes epidémicas. La obesidad aumenta sus-

en el Sur (20%) y en las Islas Canarias

tancialmente no sólo el riesgo de desarrollar

(22,2%), comparado con el Noreste y Centro

diabetes y de enfermedad cardiovascular,

(15,3%). La distribución de la obesidad en el

ENERO 2010

13

FORMACIÓN ACREDITADA

Tabla 2 Prevalencia de obesidad en la población española por grupos de edad y sexo. Varones (%)

Mujeres (%)

Total (%)

2-9 años

16,3

11,6

14,0

10-17 años

18,5

9,1

13,9

18-24 años

12,6

14,9

13,7

Población infanto juvenila

Población adultab 25-34 años

7,1

4,8

5,9

35-44 años

11,7

12,2

12,0

45-54 años

16,9

26,4

22,0

55-60 años

21,5

34,2

29,5

Ancianos no institucionalizadosd

31,5

40,8

36

Ancianos institucionalizadose

20,5

21,7

21

Población >65 añosc

Resultados del estudio enKid (Serra-Majen, 2003). Para calcular la prevalencia de obesidad se han considerado los valores específicos por edad y sexo del percentil 97 del IMC, utilizando las tablas de Orbegozo confeccionadas por Hernández y col, 1988. bResultados del estudio DORICA (Aranceta y col 2005). Se definió obesidad a valores de IMC por encima de 30 kg/m2. cSe utilizaron para definir obesidad valores de IMC por encima de 30 kg/m2. dAncianos no institucionalizados (Gutiérrez Fisac y col, 2004). eAncianos institucionalizados: (Aranceta y col., 2004).

a

subgrupo de sexo masculino sigue un patrón

Estos datos de prevalencia de obesidad

similar, con una prevalencia mayor en el Sur

han sido corroborados por la Encuesta Nacio-

(18,5%) y Noroeste (19%) comparando con el

nal de Salud 2006 publicada por el Ministerio

Noreste (8,5%) y Centro (9,3%).

de Sanidad Español, aunque se ha observado un ligero incremento en las cifras anteriormen-

Figura 3. Distribución de la prevalencia de obesidad (%) (IMC > 30) por áreas geográficas y sexo. Estudio DORICA (2005).

te citadas. Así, del total de la población adulta, un 37,8% padece sobrepeso y un 15,6% padece obesidad en España. Por último, destacar que según la Organi-

Región Noroeste H: 19,07 M: 21,78

Región Norte H: 11,46 M: 16,52

Región Noroeste H: 8,53 M: 13,77

zación Mundial de la Salud (OMS) la prevalencia de sobrepeso (IMC

25 kg/m2) y su esti-

mación para años venideros es aún mayor, de tal manera que para el año 2015 las cifras Región Centro H: 9,31 M: 15,29

Región Sur H: 18,51 M: 20,02 Región Canarias H: 14,21 M: 22,22

Región Este H: 12,46 M: 16,2

serán de un 60% en hombres y un 52,5% en mujeres con obesidad en España.

Fisiopatología

Región Murcia H: 18,99 M: 24,89

8-14 %

En la aparición de la obesidad están im-

15-17 %

plicados numerosos elementos causales, entre

18-25 %

los que se encuentran factores genéticos, metabólicos, endocrinológicos, ambientales (hábi-

14

ENERO 2010

tos dietéticos y actividad física) y psicosociales.

Figura 4. Factores que desencadenan la obesidad.

De hecho, en la mayor parte de los pacientes que desarrollan obesidad es difícil establecer

Otros: • Embarazo • Menarquia • Intervención quirúrgica

una única causa, atribuyéndose en gran medida a la interacción entre la carga genética y los factores ambientales relacionados con el

Fármacos

Factores genéticos

estilo de vida (Marti y col., 2008). Los factores interrelacionados que pueden desencadenar la obesidad (figura 4) incluyen: • Predisposición genética. La participación de factores genéticos en la obesidad ha que-

OBESIDAD Factores neuroendocrinos

Dieta

dado demostrada por diferentes estudios en animales y seres humanos. Se puede afirmar que entre un 25-40% de la variabilidad en el peso corporal en humanos es atribuible a la

Factores psicosociales

Sedentarismo

genética (Marti y col., 2006, Walley y col., 2009). Estudios recientes han identificado más de 430 genes, marcadores y regiones

alta palatabilidad (ricos en grasas), hiperca-

cromosómicas asociadas o potencialmente

lóricos y de bajo coste, haciéndolos formar

relacionadas con fenotipos de obesidad en

parte de la dieta diaria de millones de per-

humanos (Ochoa y col., 2004).

sonas. De hecho, la ingesta excesiva de

Así, la susceptibilidad a la obesidad está muy

grasa se ha correlacionado con el desarrollo

determinada por factores genéticos. Sin em-

de obesidad así como de las enfermedades

bargo, es necesario un “ambiente obesigéni-

asociadas a ésta. También un exceso de

co” (dietas de alta densidad energética y se-

azúcares simples se ha relacionado con una

dentarismo) para su expresión fenotípica. Los

mayor incidencia de obesidad.

factores ambientales amplifican los efectos

• Falta de ejercicio físico. El incremento del

de la susceptibilidad genética en individuos

sedentarismo, característico de las socieda-

predispuestos a la obesidad en comparación

des industrializadas, es responsable en gran

con individuos obeso-resistentes. Esta teoría

medida del aumento de la incidencia de

se denomina la “hipótesis del genotipo aho-

obesidad. En la actualidad se están produ-

rrativo” (Southam y col., 2009).

ciendo cambios en los hábitos de vida de la

• Factores dietéticos. Una dieta inadecuada

población, como una disminución de la acti-

por exceso de aporte calórico con respecto

vidad física que genera, por consiguiente, un

al gasto energético, la sobrealimentación en

menor gasto energético. Estudios epidemio-

edades tempranas y la elevada frecuencia

lógicos han demostrado la importancia del

de la ingesta, son factores de riesgo para el

ejercicio físico para evitar la obesidad, al ob-

desarrollo de obesidad (Moreno y col.,

servarse un aumento de esta patología tras

2005). En la actualidad, los hábitos de vida

una disminución en el ejercicio físico, a pesar

obligan a comer fuera de casa y el mercado

de darse simultáneamente un descenso en la

pone a nuestra disposición alimentos de

ingesta calórica (Aranceta y col., 2007).

ENERO 2010

15

FORMACIÓN ACREDITADA

• Causas psicosociales. Determinadas situa-

gasto energético y que podrían desempe-

ciones ambientales pueden desencadenar

ñar un papel importante en la aparición de

respuestas emocionales que condicionen un

la obesidad, como el neuropéptido Y

exceso de la ingesta, induciendo a lo que

(NPY), la adiponectina, la grelina, la adipsi-

se denomina obesidad reactiva (Bray, 1998).

na, el factor del plasminógeno-1 (PAI-1), la

Por otro lado, el rechazo social que pueden

urocortina y el receptor de la melanocorti-

sufrir personas obesas por razones estéticas

na 4 (MC4R) (Mora y Pesssin, 2002; Srini-

potencia el sedentarismo y la falta de ejerci-

vasan y col., 2004), entre otras.

cio físico (Martínez y col., 2002). También

El ovario poliquístico, el síndrome de Cus-

influyen el nivel socioeconómico bajo, el

hing, el síndrome de Laurence-Moon-Bield,

nivel educativo, el estrés, fenómenos migra-

el síndrome de Carpenter, el síndrome de

torios, la transculturización y el aumento en

Summit, el síndrome de Cohen, la acrome-

las porciones de alimentos.

galia, el síndrome de Prader-Willi o la buli-

• Factores neuroendocrinos. Las alteracio-

mia afectan a los centros reguladores del

nes en la región ventromedial o paraventri-

hambre en el hipotálamo causando obesi-

cular del hipotálamo, ya sean producidas

dad. Sin embargo, este grupo de enferme-

de forma espontánea o inducidas por trau-

dades afecta a un porcentaje muy bajo de

matismos, tumores, infecciones o enferme-

los obesos.

dades inflamatorias, pueden producir obe-

• Empleo de fármacos. Algunos fármacos

sidad por modificación de la ingesta (hi-

pueden producir obesidad. Así, la adminis-

perfagia) en animales y en humanos (King,

tración de glucocorticoides, antidiabéticos

2006), siendo en estos últimos poco fre-

(sulfonilureas), antidepresivos tricíclicos, es-

cuente. También la deficiencia de la hor-

trógenos (anticonceptivos), hidracinas, feno-

mona del crecimiento, el hiperinsulinismo

ticinas (cloropromacina) y antiepilépticos

y el hipogonadismo están asociados con la

(valproato), entre otros, suelen provocar un

ganancia de peso (Dandona y col., 2008).

aumento del peso corporal a través de ac-

En este sentido, se conoce desde hace

ciones sobre el sistema nervioso central, la

tiempo la implicación de diversas hormo-

distribución del tejido adiposo y retenciones

nas y péptidos en el control de la ingesta y

hídricas entre otros mecanismos (Barbany y

del gasto energético. Es bien conocido el

Foz, 2002).

papel de las hormonas tiroideas T4 y T3

• Otros. El embarazo, el periodo de lactan-

en la regulación del gasto energético.

cia, la menarquia, el abandono del taba-

También se ha especulado que las hormo-

quismo, así como el periodo que transcurre

nas suprarrenales puedan estar implicadas

tras una intervención quirúrgica, pueden fa-

en la aparición de la obesidad. En el año

vorecer la aparición de sobrepeso u obesi-

1994, Zhang y colaboradores identificaron

dad (Forga y col., 2002).

la leptina, una hormona que juega un papel en la regulación del peso corporal.

Comorbilidades

Posteriormente, se han descubierto dife-

16

ENERO 2010

rentes moléculas relacionadas con el con-

Los efectos de un exceso de peso corporal

trol neuroendocrino de la ingesta y del

sobre la morbilidad y la mortalidad se conocen

desde hace más de 2000 años. Hipócrates re-

• Enfermedad cardiovascular arterioscle-

conoció que “la muerte súbita era más fre-

rótica

cuente en aquellos de naturaleza obesa en



Cardiopatía isquémica

comparación con los delgados”. En este senti-



Enfermedad cerebrovascular

do, los estudios epidemiológicos demuestran



Alteraciones cardiorrespiratorias: insufi-

una clara asociación entre la obesidad y la tasa

ciencia cardíaca congestiva, insuficiencia

de mortalidad. Así, tanto la elevada cantidad

ventilatoria, síndrome de apnea obstructi-

de grasa corporal total como el incremento de

va del sueño.

los depósitos de grasa central (grasa visceral) y

• Alteraciones metabólicas

la ganancia excesiva de peso se asocian con un



Resistencia a la insulina y diabetes tipo 2

riesgo aumentado de muerte (Forga y col.,



Hipertensión arterial

2002). La mortalidad en obesos mórbidos es



Dislipemia aterógena

12 veces superior que en la población normal,



Hiperuricemia

dentro de un intervalo de edad entre los 25 y

• Alteraciones de la mujer

34 años de edad. Así, al aumentar el IMC y el



Disfunción menstrual

índice cintura/cadera (que es un buen indica-



Síndrome de ovario poliquístico

dor de la obesidad central), se incrementa el



Infertilidad

riesgo de padecer otras patologías. Esta situa-



Aumento del riesgo perinatal



Incontinencia urinaria

ción conduce a que la obesidad sea un problema que genera enormes costes económicos,

• Digestivas

debido sobre todo a que no sólo se invierte en



Colelitiasis

corregir esta patología, sino también las enfer-



Esteatosis hepática

medades relacionadas.



Esteatohepatitis no alcohólica, cirrosis



Reflujo gastroesofágico, hernia de hiato

Los desórdenes clínicos asociados con la obesidad se generan bien como consecuencia

• Músculo-esqueléticas

directa del aumento de la masa grasa o bien



Artrosis

de manera secundaria, debido a que los obe-



Lesiones articulares

sos presentan una actividad secretora del teji-



Deformidades óseas

do adiposo alterada que puede afectar al fun-

• Otras alteraciones

cionamiento de distintos sistemas (Moreno y



Insuficiencia venosa periférica

col., 2005).



Enfermedad tromboembólica



Cáncer (mujer: vesícula y vías biliares,

Los riesgos sobre la salud asociados al sobrepeso y obesidad son generalmente conoci-

mama y endometrio en postmenopausia;

dos por las personas con este problema y por

hombre: colon, recto y próstata)

la sociedad en general. El facultativo debe rea-



Hipertensión endocraneal benigna

lizar un esfuerzo en determinar las patologías



Alteraciones cutáneas (estrías, acantosis

asociadas al exceso ponderal, y especialmente

nigricans, hirsutismo)

aquellas susceptibles de mejoría tras la pérdida



Alteraciones psicológicas y psicosociales

de peso (Consenso SEEDO’2007). La obesidad



Disminución en la calidad de vida

se acompaña de una serie de alteraciones



Trastornos del comportamiento alimenta-

como se detallan a continuación:

rio

ENERO 2010

17

FORMACIÓN ACREDITADA

Tabla 3 Efectos beneficiosos para la salud de una pérdida de peso del 10% Enfermedad

Efecto beneficioso

Mortalidad



Disminución > 20% de la mortalidad por todas las causas

Cáncer



Reducción > 40% de las muertes por cánceres relacionados con la obesidad

Diabetes



Disminución > 30% de la mortalidad relacionada con la diabetes



Disminución de la glucosa sanguínea basal hasta el 50%

Hipertensión



Reducción de 10 mm Hg de la tensión sistólica



Reducción de 20 mm Hg de la tensión diastólica

Lípidos

Otros



Disminución de los triglicéridos en un 30%



Disminución del colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad (LDL) del 15%



Disminución del colesterol total del 10%



Aumento del colesterol unido a lipoproteínas de alta densidad (HDL) en un 8%



Mejoría de la función pulmonar



Reducción del dolor dorsal y articular



Reducción de la dificultad respiratoria



Reducción de la apnea del sueño



Mejoría de la sensibilidad de la insulina



Mejoría de la función ovárica

Las personas obesas y con sobrepeso soli-

miento de adelgazamiento. Los obesos con fre-

citan el consejo sobre la pérdida de peso y los

cuencia están motivados para perder peso por

facultativos deben ser conscientes de la impor-

argumentos estéticos, para tener mejor aspecto

tancia de establecer objetivos realistas y salu-

a la hora de vestirse y sentir más confianza. Sin

dables para el adelgazamiento. El compromiso

embargo, los facultativos expertos deben hacer-

de lograr una pérdida de peso gradual les

les comprender los indudables efectos beneficio-

ofrecerá mayor probabilidad de éxito y una

sos para la salud asociados a pérdidas de peso e

mayor persistencia del mantenimiento del

incluso con pequeñas reducciones ponderales.

peso perdido, como se verá en posteriores

Una pérdida de peso modesta de entre 5-

módulos. Así, pérdidas de peso moderadas y

10% resulta tener un efecto beneficioso sobre

sostenibles del 5-10% del peso corporal ini-

los factores cardiovasculares asociados a la obe-

cial, con una reducción máxima de peso de

sidad y mejorar el conjunto de comorbilidades

0,5-1 kg por semana son consideradas razona-

asociadas a ella. Sin embargo, el éxito de inter-

bles (tabla 3). Una vez que se ha alcanzado la

venciones en el peso es limitado y parece dismi-

bajada de peso deseada, también es necesaria

nuir con el tiempo, por todo ello en los siguien-

la educación nutricional, sobre la transición

tes temas se abordan una serie de nuevas es-

desde la pérdida de peso hasta el manteni-

trategias para asegurar un correcto asesora-

miento de peso a largo plazo.

miento dietético en el sobrepeso y la obesidad.

Aunque el obeso puede conocer los efectos beneficiosos para la salud de la pérdida de peso

Resumen

sobre la morbilidad y la mortalidad, con frecuencia no es el factor principal para iniciar un trata-

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• La obesidad se define como una enferme-

dad crónica multifactorial caracterizada por

los que se encuentran factores genéticos,

un aumento de la masa grasa y, por lo

metabólicos, endocrinológicos, ambientales

tanto, del peso corporal, como consecuen-

(hábitos dietéticos y actividad física) y psico-

cia de un balance energético positivo man-

sociales.

tenido en el tiempo. • Existen diferentes criterios para clasificar la obesidad.

• Son muchas las alteraciones de salud asociada al sobrepeso y obesidad, como la diabetes mellitus tipo 2, dislipemia, hiperten-

• El Índice de Masa Corporal (IMC) indica la

sión arterial, enfermedad coronaria y cere-

adiposidad, relacionando el peso del indivi-

brovascular, colelitiasis, osteoartrosis, insufi-

duo expresado en kilogramos con la altura

ciencia cardiaca, síndrome de apnea del

de dicho individuo, expresada en metros, y

sueño, algunos tipos de cáncer, alteraciones

elevada al cuadrado.

menstruales y alteraciones psicológicas,

• Los datos actuales revelan que la prevalencia de la obesidad ha aumentado y continúa incrementándose en nuestra sociedad. • En la aparición de la obesidad están implicados numerosos elementos causales, entre

entre otras. • Pérdidas de peso moderadas y sostenibles del 5-10% del peso corporal inicial resultan tener un efecto beneficioso sobre la adiposidad y las comorbilidades asociadas. 

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