IV. Sistemas de produccion, ganaderia ejidal y renta de pastos ejidales 4.1 Sistemas de produccion ganadera Sin entrar en detalles sobre estos aspectos, cuyo tratamient o corresponderia mis bien a especialistas en las ciencias agron6micas, nos limitaremos a presentar la incidencia de estos sistemas y subsistemas en las diferentes regiones ganaderas de Chiapas. Comenzaremos por recordar que 10s dos principales sistemas de la prictica ganadera son el de la cria de becerros para su venta a1 destete y la engorda de ganado. Por otra parte, si consideramos el tip0 de product0 principal, nos encontramos con la ganaderia de carne, la de leche o la de' doble prop6sit0, en la que es primordial la producci6n de carne y secundario el aprovechamiento de la leche no obstante el doble prop6sit0, siendo 6sta una tendencia creciente en la ganaderia chiapaneca. En Chiapas no es muy comhn la explotaci6n mixta, agricola y ganadera, en la que 6sta aproveche 10s subproductos de aquklla. Tampoco es comhn la produccihn de forrajes en funcihn de una ganaderia semintensiva. Lo usual es el pastoreo libre e n potreros cercados de alambre: ganaderia extensiva, con distintos tipos de pastos. El irea en que mis se da una combinaci6n de agricultura y ganaderia es la correspondiente a la dcpresihn central de Chiapas r e g i 6 n Centro de las Uniones- donde el ganado aprovecha 10s rastrojos u otros subproductos como parte de su alimentacihn. Ya hemos indicado, por lo demis, que en esta misma zona la ganaderia ha venido desplazando a la agricultura, lo que, en cierto sentido, quizi ha facilitado este tip0 de explotaciones mixtas. Cabe seiialar que, en la ganaderia de doble prop6sit0, la producci6n de leche, aunque es una actividad secundaria, sine muchas veces para hacer frente a 10s gastos de la explotacibn, con lo cual la venta de carne se convertiria en ganancia para el ranchero. De todas formas, la producci6n de leche, cuando significa una cierta especializaci6n, tiene mayores costos de producci6n, ya que es necesaria, a1 menos, la semiestabulaci6n del ganado y requiere m b fuerza

de trabajo. Es asi como la ganaderia de doble prop6sito es mLs comhn en 10s ranchos pequefios que aprovechan la fuerza de trabajo familiar para las tareas de la produccibn de leche. Por lo demk, esta produccibn s o b r e todo en forma especializada- estL muy vinculada a las posibilidades del mercado, lo que implica el asegurarse una red de recoleccibn y la proximidad de enfriadoras, pasteurizadoras o industrias de transformacibn, ya que el aprovisionamiento de leche bronca para el consumo de las poblaciones cercanas, aunque pueda tener una importancia coyuntural no despreciable, nunca llegar6 a ser un factor determinante de una producci6n creciente y sostenida. Es asi como las areas de producci6n de leche se van integrando en redes de recolecci6n --"ruteros de ranchos" especialmente en la costa-, enfriamiento y, por fin, surtido a la Nest16 (Chiapa de Corzo para la costa y centro de Chiapas, y Nest16 y Cremeria Chalco en Emiliano Zapata y La Libertad respectivamente, para el nnrte r l Chiapas ~ y Tabasco). Se&n datos de la SARH, la produccibn de leche en 1976 alcanz6 un volumen de 165 millones de litros, con un valor de 420 millones de pesos, para llegar, en 1977, a 167 millones de litros y un valor de 534 millones de pesos. La zona de mayor produccibn es la costa: Arriaga, Tonalii, Pijijiapan y Mapastepec, que contribuye con m6s del 40 por ciento de la producci6n total del e ~ t a d o . 'Es ~ tambi6n en esta zona donde se encuentra una incipiente especializacibn del ganado para la producci6n de leche, que se realiza a base de cruces de razas cebuinas con ganado holand6s o suizo, dandose, por consiguiente, en la misma medida que la especializacibn, una semiestabulaci6n del ganado lec h e r ~ "En . la costa el 70 por ciento de la produccibn de leche es manejada por la Nestlk, el siete por ciento para el consumo direct0 de la poblaci6n y el 23 es destinado a pequeiias industrias queseras. Los subsistemas de producci6n de becerros a1 destete y

'

54 Ver SARH, Tuxtla GutiBrrez: Explotacion lechera en el estado d e Chiapas. 55

Ibidem.

de engorda de ganado para el sacrificio se podrian analizar tanto a nivel espacial como a partir de 10s diferentes grupos sociales implicados en la producci6n de cada subsistema. Asi, tendriamos dos zonas principales en la produccibn de becerros a1 destete, una que se situaria en la franja Jiquipilas, Villaflores, Carranza, Concordia, Trinitaria y Chicomuselo; y la otra en la costa, desde Arriaga hasta Tonald. Las zonas mis especializadas en la engorda y que, por lo mismo, son ireas de repasto hacia donde se moviliza ganado de otras regiones, se encuentran distribuidas entre algunos municipios del Soconusco (Mapastepec y Pijijiapan principalmente), y otros del norte de Chiapas: Tecpatin, Ocozocoautla, Bochil, Pichucalcb, Catazaj6, Palenque, etc.; ademis de Comitan y Las Margaritas, en 10s limites de la Selva Lacandona. No hay que olvidar tampoco que parte del ganado de Chiapas (especialmente de la Frailesca) sale a otros estados para ser engordado: a Veracruz, Tabasco, Campeche, Yucatin, Puebla, e t ~ k t e r a . ' ~ La base de estas diferencias regionales hay que buscarla, desde luego, en las distintas cualidades de 10s suelos -mis pobres o mLs ricos en humedad y pastos-, lo que genera una renta diferencial; per0 existe, ademis, una estrecha vinculacibn entre subsistemas y grupos sociales de productores, que se encuentran en muy diferentes condiciones "de producci6n del product0 para el mercado", lo que permite el establecimiento de relaciones asimktricas: de dominaci6n y dependencia. Digamos que, de manera general, el subsistema de cria de becerros para venderlos a1 destete aparece con ciertas desventajas respecto a1 subsistema de engorda, que es manejado, fundamentalmente, por 10s grandes ganaderos, dotados de las mayores superficies y 10s mejores pastos, mientras que en la cria de becerros estarian m6s comprometidos 10s pequeiios campesinos y 10s ejijidatarios. Sin embargo, es muy frecuente aue 10s grandes ganaderos aprovechen no s6l0 sus propios pastos sino tambibn 10s de 10s ejidatarios mediante la venta -disimulada bajo la forma de contrato de asociacibn en participacibn-. 5 6 N o pretendemos entrar e n detalles sobre la ubicacion e interrelaciones d e 10s subsistemas d e las zonas norte y costa d e Chiapas.

Esto se da en Chiapas en dimensiones no f6cilmente cuantificables pero, desde luego, importantes; y se intent6 programar por 10s ganaderos cuando solicitaron, en el Plan Nacional Agropecuario, disponer de agostaderos ejidales para engordar cien mil becerros de la ganaderia privada a nivel naci~nal.~' Los becerros a1 destete son vendidos -muchas veces en lotes- con unos 1 0 meses de edad y unos 150 kg. de peso, constituyendo un negocio no despreciable para 10s engordadores. Hay toda una serie de combinaciones en esta relaci6n cria-engorda en las que no entraremos aqui por falta de esp a ~ i o . ~Digamos ' solamente que la especializaci6n en la cria de becerros y venta a1 destete responde, en general, a la falta de recursos para completar el ciclo de producci6n.

4.2 Ganaderia ejidal y renta de pastos ejidales Como es bien sabido, el desarrollo del capitalism0 se manifiesta de manera desigual en todos 10s sectores de la economia. El sector pecuario no podia estar a1 margen de este fen6men0, y de hecho aparecen fuertes desigualdades tanto entre 10s diversos grupos de propietarios privados como, especialmente, entre el sector privado y el ejidal. Estas diferencias se refieren tanto a la forma de producir como a la organizaci6n social de 10s productores. No contamos todavia con suficientes datos como para realizar un andisis detallado de la ganaderia ejidal en Chiapas, por lo que nos limitaremos a unas breves reflexiones sobre la importancia global de este sector y sus caracteristicas mis significativas, aportando, ademis, algunos resultados de las investigaciones directas realizadas en dos ejidos del estado. 5 7 Confederacion Nacional Ganadera: "Planeacion congruente con la realidad del pais". Mexico Ganadero, Organo oficial de la CNG, Num. 243, julio, 1978. 5 8 Por ejemplo, el caso del Jatate, en la Selva Lacandona, donde 10s ganaderos mris ricos venden a 10s ejidatarios 10s becerros pequeiios y flacos, y se 10s compran despues que 10s ejidatarios 10s han engordado en sus pastos. Informaciones obtenidas por Victor Juirez y Alvaro Solis durante su trabajo de campo en la regi6n a fines de 1976.

En 1974, la CNC realizb un inventario de recursos en 10s ejidos y comunidades del estado de Chiapas, dentro de un programa que se estaba llevando a cab0 en todo el pais. De aqui se pueden extraer algunos datos cuantitativos, pero, desafortunadamente, es muy poco lo que nos aporta este inventario en cuanto a la problematica fundamental del sector. Segbn esta fuente, Chiapas contaria con 851 ejidos ganaderos, cuya inversion en ganado ascenderia a miis de 900 millones de pesos (poco mis de un millon de pesos por ejido en promedio); el valor de la produccibn de 1974 se situaria alrededor de los 83 millones de pesos, con promedios por ejido de unos 97 mil pesos. De todos estos ejidos, s610 1 2 tenian seguro, 1 8 disponian de crkdito y 23 estaban organizados para vender su produccibn. A falta de posibilidades para procesar todos 10s datos del mencionado inventario de la CNC, presentaremos solamente resultados de cinco municipios: Palenque, Villaflores, La Libertad, Catazajii, Arriaga y Villa Corzo. Palenque seria el municipio con mayor nbmero de ejidos ganaderos, mientras que Playas de Catazajii tendria 10s ejidos ganaderos miis ricos, ya que cuentan con la media mas alta en cuanto a1 valor de la production ganadera. Los ejidos mas pobres se encontrarian en 10s municipios de la region centro: Villa Corzo y Villaflores, seguidos de cerca por uno de la costa: Arriaga, no obstante que en torno a la ganaderia ejidal de este municipio se haya hecho bastante propaganda por parte de 10s politicos; el conjunto de 10s ejidos ganaderos de este municipio fue objeto de diversos apoyos (como obsequios de pies de cria finos) por parte del gobierno estatal para fomentar la actividad ganadera. La primera observaci6n que valdria la pena hacer a este inventario de la CNC es que nos parece demasiado alto el nbmero de 851 ejidos ganaderos en Chiapas, a menos que se haya considerado ganadero a cualquier ejido que tenga algo de ganado. Esto ~ l t i m opareceria desprenderse de 10s bajisimos promedios por ejido en el valor de la produccibn ganadera. Despuks -ya en el supuesto de que, a1 menos, 10s datos reportados sobre seis municipios sean verdaderos- se podria seguir reflexionando sobre las escasas perspectivas de capitalizacibn y desarrollo de la ganaderia ejidal, ex94

Cuadro 23 Caracteristicas economicas de algunos ejidos ganaderos (1974)

% de ejidos con: 2 de inverNGm. siones en de ganado Municipio ejidos por ejido Palenque Villaflores La Libertad Catazaja Arriaga Villa Corzo -

37 20 2 12 8 6

366 659 977 237 9 250 000 1 8 1 1 905 2 308087 4 859 516

OrgaCrQ- nizadito ci6n Separa guro venta

de valor produccibn por ejido

ji

32 983.5 2 056.0 56 850.0 717 610.0 3 202.5 524.6

8.1

5.4

-

5.0 8.3

-

8.3

-

-

-

5.4 5.0

-

8.3 12.5

-

-

FUENTE: Confederacion Nacional Campesina. Inuentario de Recursos. Chiapas, 1974.

cepto cuando algcn ejidatario -0 bien un pequeiio grupo privilegiado- acapara buena parte de 10s pastos y un nfimero relativamente alto de cabezas de ganado (que puede oscilar de 50 a 100). En 10s demas casos reportados por la CNC y se confirma por nuestras observaciones de campo- es evidente que 10s bajos promedios del valor de la producci6n ganadera global del ejido, aun desconociendo el numero de beneficiaries, no permiten ir mas all6 de un pequeiio ingreso adicional para aliviar, siquiera minimamente, las mfiltiples carencias de 10s ejidatarios. Cualquier ganadero privado con un rancho regular en explotaci6n dispone de un ingreso anual muy superior a1 que representa el promedio de 10s ejidos mas ricos: algo mas de 700 mil pesos en 10s ejidos ganaderos de Catazaja. Es normal que, en estas condiciones, 10s ejidos ganaderos no tengan mayores posibilidades de acumulacibn ni rein'versi6n para la modernizacibn de sus explotaciones y que, incluso, en etapas de penuria, terminen comibndose hasta 10s pies de cria. Esta desigualdad entre sectores puede tambibn observarse

en el caso de las afectaciones a Reyes Garcia en Mapastepec. En efecto, considerando solamente algo mis de 5 mil 500 has. que Reyes Garcia "restituyo a la Naci6n por ser terrenos n a c i o n a l e ~ " ,tenemos ~~ la siguiente distribution: 1. Para campos experimentales: 345 has. (SARH y Comision Nacional de Fruticultura) 2. Para constituir o ampliar ocho ejidos: 5 mil 230 has. Aun desconociendo el numero de ejidatarios de estos nuevos centros de poblacibn o ejidos ampliados, no es dificil imaginar las diferentes posibilidades de acumulacion de riqueza con estas enormes extensiones en manos de un solo dueiio, cuando sobre estas tierras tienen que vivir ocho pueblos campesinos con una poblacion creciente y sin mayores posibilidades de empleo fuera del ejido. Quiere esto decir que, mientras se habia permitido a un solo propietario disponer de mas de cinco mil has. de tierra (solamente en Chiapas) y apropiarse de la riqueza de enormes hatos ganaderos que se reproducian sobre ellas, ahora cada ejido tiene que tratar de desarrollar la ganaderia sobre promedios de unas 680 hectireas. Siendo justamente la gran cantidad de tierra disponible lo que constituye la base principal de la ganancia del ganadero en el sistema extensivo, es evidente que la ganaderia ejidal, al tener fuertemente limitado este recurso, se encuentra en desventaja sobre la gran ganadena privada para acumular excedentes y capitalizarse. En efecto, el ejidatario, al disponer de tan poca tierra, deja de percibir esa especie de renta que se embolsa el gran ganadero por el simple hecho de haber monopolizado grandes extensiones de tierra que "producen ganado" sin mayores c o ~ t o s . ~ ~ Esto, ademas de las otras desventajas en que el pequeiio productor se encuentra con respecto a1grande en todo lo referente a 10s procesos de aprovisionamiento &a sea en insumos, tkcnica o cr6dito), transformaci6n y comercializaci6n. Por cierto que la ganaderia ejidal en Chiapas, como acti5 9 Algo mas de 6 mil segfin el primer informe del gobernador Salomon Gonzalez Blanco. 60 Cabe recordar que, aun despues de estas afectaciones, se le permiti6 a Reyes Garcia conservar en Chiapas la finca ganadera Sesecapa con mas de mil has., quizis en premio por haberse apropiado durante aiios una gran extension de tierras nacionales.

vidad institucionalizada, recibio un fuerte impulso con la formacibn del Fideicomiso Ganadero Ejidal, el 31 de agosto de 1973. Dentro de 10s objetivos del mencionado Fideicomiso se seiialan: el aprovechamiento de 10s pastizales existentes en el sector ejidal; evitar el sacrificio del mayor numero posible de hembras y, de esta manera, incrementar la ganaderia a nivel nacional. La politica general del Fideicomiso Ganadero Ejidal es proporcionar crkdito a 10s ejidos para obtener o compral pies de cria; sin embargo, para que el crkdito (de avio o refaccionario) sea proporcionado a 10s ejidos, 6stos deben reunir ciertos requisitos tales como: contar con el terreno apropiado (numero de has. y pastos) contar con cierta infraestructura, etc. Todo esto es evaluado por un tkcnico del Fideicomiso Ganadero Ejidal. Si el dictamen es positivo, el Fideicomiso promueve ante BANCRISA el otorgamiento del crkdito; para tal efecto tiene que firmarse un contrato denominado "contrato de asociacion". El crkdito debe pagarse en siete aiios con la venta de las crias generadas. Es evidente que estos ejidos ganaderos funcionan en una dependencia total del Fideicomiso, hasta el punto de que no es dificil identificar en estos campesinos una situaci6n objetiva de semiasalariados del mismo Fideicomiso: de 61 reciben la "planta productiva" (10s pies de cria) y la tkcnica para hacerla funcionar, trabajando para tener lista una mercancia (10s becerros) que el fideicomiso lleva a1 mercado. El product0 de esta venta se destina, ante todo, a la amortizaci6n de 10s crkditos bancarios otorgados a1 ejido, distribuykndose el resto entre 10s ejidatarios. Si, de mod0 semejante a lo que sucede en 10s ranchos privados, con la produccibr, de leche se puede hacer frente a la mayor parte de 10s costos de production, habria que concluir que 10s ingresos obtenidos por la venta de 10s becerros vendrian a constituir la ganancia de 10s ejidos ganaderos. Veamos algunos datos en dos de 10s ejidos visitados. En Nicolb Bravo, ejido ganadero de Arriaga, bajo 10s auspicios del Fideicomiso se compraron a cr6dito 262 cabezas de ganado que se establecieron en una superficie de 300 has. Se obtuvieron 70 crias en un aiio, mismas que fueron vendidas a 2 mil 500 pesos cabeza, lo que dio un total de 175

mil pesos. Si distribuimos estos ingresos entre 10s 20 socios a lo largo del aiio, le corresponderian 729 pesos por mes a cada socio, es decir, unos 24 pesos diarios. En el supuesto de que hayan cubierto 10s gastos de producci6n con la venta de la leche, estos ingresos deberian ser catalogados como utilidades revertidas a 10s ejidatarios por haber aportado la tierra -que, por cierto, debi6 ser empastada previamente, a1 menos, en un 50 por ciento-. Se trataria, concretamente, de una especie de utilidades o "retornos cooperativos" provenientes de la aportaci6n de 10.5 has. de tierra por ejidatario para la explotaci6n ganadera del ejido. Esta situaci6n sugiere varias reflexiones. En primer lugar, cuando el ejidatario entrega toda la tierra a la explotacibn ganadera colectiva, es evidente que tendrii que buscar ingresos adicionales con trabajo asalariado fuera del ejido, o bien rentando tierra para sembrar sus cultivos de subsistencia. En el primer caso, el ejidatario entra en un proceso de proletarizaci6n para vivir y se ayuda en algo con la ganaderia; en el segundo, tiene que destinar parte de lo que obtiene por su tierra aportada para la ganaderia, para pagar la renta de la tierra donde siembra su maiz y frijol. Por otra parte, no parece aventurado afirmar que 10s aproximadamente nueve mil pesos anuales que recibe cada ejidatario por la tierra aportada, no pagan ni lo que podria ser la renta de esas 10.5 has. de tierra de pastos. Con situaciones parecidas nos encontramos en la zona de Villafores, donde BANCRISA habilita a siete ejidos, entre 10s que se encuentra el ejido Domingo Chanona. Este comenzb su explotaci6n ganadera colectiva en 1975, con 130 cabezas. Para fines de 1977, se tenian 303 cabezas. El ejido habia recibido un crQditode aproximadamente un millon 200 mil pesos, a 10s que se cargaron 10s intereses del seis por ciento anual, contrayendo una deuda de un mill6n 776 mil pesos. Para 1977, se obtuvo una producci6n de 150 becerros que se vendieron a1 destete a 2 mil 500 pesos cabeza, obteniQndoseun total de 375 mil pesos. Si descontamos la parte cowespondiente a la amortizaci6n anual del crkdito, quedarian 153 mil pesos que, distribuidos entre 10s 24 ejidatarios, nos darian utilidades de seis mil 375 pesos anuales por ejidatario, es decir unos 17.4 pesos diarios. Si ahora

calculamos la renta que les producirian sus aproximadamente ocho has. de tierra aportada, nos encontrariamos con una situacibn parecida a la del ejido anterior en cuanto a la dudosa rentabilidad de estas explotaciones ganaderas. Por lo demis, ya hemos apuntado la total dependencia de est3s ejidos ganaderos respecto a1 Fideicomiso y a1 banco en 10s procesos de aprovisionamiento y venta. La pesadez burocrhtica e incluso la corrupci6n, que con frecuencia invade estos organismos, son muchas veces causa de fuertes elevaciones en 10s costos de produccibn o de phrdidas en 10s procesos de comercializaci6n de 10s ejidos ganaderos. Esto ultimo sucedi6, por ejemplo, en el caso del ejido Tectuapan, municipio de Pichucalco, donde 10s nueve ejidatarios de la Sociedad de Crhdito Francisco I. Madero se quejan de que un funcionario del banco vendi6 a un amigo suyo 40 novillos a 11 pesos kg., mientras que 10s ejidatarios, si hubieran podido venderlos libremente, hubieran conseguido 1 4 pesos por kilogramo. Perdieron, pues, 18 mil pesos en la venta no libre. Se podria concluir que 10s ejidos ganaderos no s6l0 no acumulan sino que incluso funcionan con algunas phrdidas; o lo que es equivalente, que 10s ejidatarios est6n siendo sometidos a un proceso de explotaci6n y extracci6n por agentes no fhcilmente identificables -ya que el proceso se enmascara bajo 10s fen6menos de la modernizaci6n y el desarrollo con crkdito oficial-, per0 entre 10s que cumple una importante funci6n el Fideicomiso Ganadero Ejidal. Otro fen6meno que vale la pena resefiar es la renta de pastos ejidales por parte de 10s ganaderos privados. Ya Moishs T. de la Peiia hablaba, en 1951, de que 10s ganaderos de la costa rentaban pastos ejidales para ampliar las capacidades de sus ranchos. Este fen6meno sigue vigente en todas las zonas ganaderas del estado de Chiapas, aunque no es f i cil de cuantificar, ya que, en el fondo, se trata de algo que todavia no puede ser legalmente justificado, pese a que 10s fanlosos "contratos de asociaci6n en participaci6n" tratan de dar una cobertura legal a este hecho. Como en 10s dem L casos de renta de tierras ejidales, aqui se trata, en realidad, de la adaptaci6n de un sistema de tenencia a las exigencias expansivas del capital privado. Y esto puede ha99

cerse ya sea bajo la forma de "contrato de asociaci6n" o, mis comhnmente, por arreglos amigables entre ganaderos privados y ejidatarios. Ademis de la renta de pastos, 10s ganaderos mantienen otra serie de relaciones con 10s ejidatarios, como son las diversas formas de medieria o aparceria. SegGn informaciones de campo, estas formas estarian desapareciendo, a1 menos en la regi6n centro de Chiapas. V. Produccion y consumo de came y leche: el impulso a la produccion ganadera en el tropic0 Ya hemos tenido ocasi6n de ver, desde distintos ingulos, el fuerte crecimiento de la ganaderia en el estado de Chiapas: extensi6n de las ireas dedicadas a pastos, notable increment o en el nhmero de existencias bajo el impulso de politicas locales y externas, amen de 10s estimulos y subsidies de diversa indole, y, mis que nada, porque la ganaderia se ha venido manifestando como una actividad redituable y segura. Tambien ha quedado suficientemente demostrada la importancia de esta actividad en el estado; ya sea en t k m i nos de existencias ganaderas como por el progresivo aumento del valor de la producci6n, debido esto Gltimo a diversos factores, como son la elevaci6n de 10s precios, el aumento del nGmero de reses lanzadas a1 mercado, y tambikn, aunque en menor proporci6n, el aumento del peso en canal por un mejoramiento genbtico de 10s animales. Se dice que Chiapas tiene excedentes de carne y aun de leche. Aceptemos esta afirmacion en cuanto significa que Chiapas produce m k de lo que consume, saliendo a1 mercad0 nacional un nGmero cada vez mayor de reses, ya sea para abasto o para repastoreo en otros estados de la RepGblica, motivadas estas salidas por la creciente demanda nacional y facilitadas por las vias de comunicaci6n que unen a Chiapas con el resto del pais. Hubo, pues, un aumento de la producci6n de carne bovina en Chiapas. Sin embargo, parece necesario reflexionar sobre las contradicciones entre producci6n y consumo de carne y leche en el estado. En efecto, podria pensarse que a una abundante y creciente producci6n de carne y leche corresponde un consumo