La paz la construimos desde las regiones!

¡La paz la construimos desde las regiones! Segunda Edición de los Encuentros Regionales para la Paz. Colombia. Marzo de 2015 Percepciones desde las r

2 downloads 147 Views 1MB Size

Story Transcript

¡La paz la construimos desde las regiones! Segunda Edición de los Encuentros Regionales para la Paz. Colombia. Marzo de 2015

Percepciones desde las regiones en torno a la construcción de paz y los acuerdos de La Habana / p. 3 Los Encuentros Regionales para la Paz han servido, entre otras cosas, para hacer visibles algunos aspectos que son de gran sensibilidad y preocupación para la población y mostrar diferentes percepciones, expectativas y posturas frente al proceso de paz.

Infografías del Proceso de Paz y Política de Desarrollo Agrario Integral / p. 5 - 6 Las 25 preguntas claves de los Encuentros Regionales para la Paz / p. 7 seleccion de 25 interrogantes compilados en seis temas generales, que reflejan las preocupaciones de la gente por esta compleja búsqueda de ponerle fin al conflicto armado.

La Paz desde las regiones: La Esperanza Tumaqueña / p. 8 Entrevista

“En La Habana se está trabajando con gran seriedad” Padre Francisco de Roux

/ p. 10

2

ENCUENTROS / Nº2 / ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ marzo / 2015

Editorial

El pueblo colombiano no está dispuesto a soportar una nueva decepción Por Gonzalo Murillo Escobar En julio de 2014, la Red Nacional de Programas Regionales de Desarrollo y Paz, la Red de Iniciativas y Comunidades de Paz desde la Base, promovida por Pensamiento y Acción Social –PAS- y la Ruta Pacífica de las Mujeres, decidimos iniciar un recorrido por el territorio nacional convocando a distintos actores de las regiones a participar de los 12 Encuentros Regionales para la Paz, una iniciativa de la sociedad civil que busca fomentar el diálogo social y la participación ciudadana en el marco del actual proceso de paz. Para ello, contamos con el apoyo decidido de la Oficina del Alto Comisionado y de las embajadas de Suecia, Suiza y Noruega.

¡La paz la construimos desde las regiones! 1

Y justamente allí radica la importancia de los Encuentros. Porque además de entregar y recibir información valiosa sobre el proceso de paz, hemos tenido la oportunidad de conocer las inquietudes y temores que asaltan a las comunidades en sus territorios: ¿Se van a desmovilizar las FARC? ¿De dónde van a salir los recursos para el posconflicto? ¿Qué va a pasar con los territorios étnicos? ¿Quién va a proteger a las comunidades? ¿Qué penas van a recibir los violadores de los derechos humanos?

CONVOCAN: Ruta Pacífica de las Mujeres: Página web: http://www.rutapacifica.org.co Mail contacto: [email protected] Número de télefono móvil: 313 333 7959 Teléfono: 222 9145 / 222 9146 Dirección: Carrera 35 #53A 86 – Bogotá. Colombia Red Nacional de Programas Regionales de Desarrollo y Paz – Redprodepaz Página web: http://www.redprodepaz.org.co/ Mail de contacto: informació[email protected] [email protected] Teléfono: 2888982 Dirección: Cra 6 # 35 – 49. La Merced, Bogotá.

Una primera decisión importante era dónde íbamos a realizar los Encuentros, y coincidimos en hacerlos en aquellos territorios de la geografía nacional afectados por el conflicto armado: Quibdó, Puerto Asís, Sincelejo, Granada, Popayán, Florencia, Barrancabermeja, Chaparral, Tame, Tibú, Tumaco y Apartadó.

Pero en la medida que la información suministrada y las respuestas a los interrogantes pretenden disminuir la incertidumbre y el escepticismo, también es cierto que por esa misma razón crecen las expectativas. Y de eso se trata. De imaginarnos colectivamente cómo sería el territorio si le pusiéramos fin a la confrontación armada y nos pudiéramos ocupar entre todos de construir condiciones para el desarrollo sostenible y el bienestar de la sociedad.

Los Encuentros son un medio para explorar las vías territoriales hacia la paz y continuar un proceso de construcción «de abajo hacia arriba» que permita la interacción entre comunidades y organizaciones sociales, movimientos políticos, instituciones y gobiernos locales, sector privado, iglesias, academia y medios de comunicación para hacer realidad la paz territorial y la paz de Colombia.

Por eso resulta tan sensible y trascendental los pasos que sigan. El pueblo colombiano no está dispuesto a soportar una nueva decepción, más frustraciones y el incumplimiento sistemático de todos los compromisos. Por eso creer en este proceso de paz es tan difícil. No existen referentes ni indicios que permitan pensar que ahora sí vamos por buen camino.

APOYAN Los Encuentros cuentan con el apoyo político y financiero de las Embajadas de Suecia, Noruega y Suiza.

Desde el comienzo tuvimos conciencia de que los Encuentros no podían convertirse en un evento más y la única posibilidad de que así no ocurriera era enmarcarlos en procesos territoriales. Por esta razón ha sido fundamental trabajar en estrecha colaboración con nuestros aliados territoriales, porque con ello aseguramos una efectiva y cualificada convocatoria y que los resultados de cada Encuentro no se diluyan en el tiempo y en el espacio.

La Oficina del Alto Comisionado no sólo está cumpliendo una importante labor de dar a conocer, de socializar el proceso y los acuerdos que se han construido en La Habana, sino que tiene una percepción directa tanto de las preocupaciones como de las expectativas de los territorios. Es un insumo vital para diseñar la siguiente fase: la implementación de acuerdos.

Coordinación Comunicaciones Encuentros Regionales para la Paz María Mercedes Abad

En tal sentido el enfoque metodológico parte de reconocer a los actores relevantes, los procesos sociales y políticos que representan, y sus agendas. Ese es el factor que permite que la información suministrada por la Oficina del Alto Comisionado dialogue con las preocupaciones y expectativas territoriales respecto del proceso de paz que se adelanta en La Habana. Se puede afirmar que la constante que resaltó en los 12 Encuentros Regionales para la Paz que realizamos es la gran desinformación que existe en los territorios sobre el proceso de paz y los acuerdos hasta ahora logrados. No es suficiente con que estén publicados e incluso ser accesibles. No pareciera existir una preocupación social por conocer el contenido y discutir sus alcances. No obstante, la convocatoria ha tenido gran acogida y el grado de incertidumbre se puede medir por el altísimo número de preguntas que se le formulan a la Oficina del Alto Comisionado.

Pensamos que es estratégico que el reconocimiento de los procesos sociales, las agendas y los actores en cada territorio sean la base para establecer mecanismos plurales de coordinación y articulación que permitan desarrollar proyectos, planes e iniciativas para materializar la paz territorial, pero sobre la base de acuerdos o pactos regionales que se constituyan en el criterio de lo que va y lo que no va. Nada peor que ahora se comience a financiar a diestra y siniestra cualquier tipo de iniciativa sin tener claridad sobre la visión de desarrollo y de paz a la que apunta, generando nuevas conflictividades y sin resolver las causas que dieron origen al conflicto que ahora debemos resolver. Si algo importante tiene los acuerdos de La Habana y los Encuentros Regionales es que ponen el énfasis en la participación ciudadana. Y no es para menos: es la condición de una transformación democrática y de lograr una paz sostenible. 1

Pensamiento y Acción Social (PAS) Página Web: http://www.pas.org.co/ Mail de contacto: [email protected] Teléfono: +571 751 87 76 / 320 01 17 fax +571 751 88 14 Dirección: Diagonal 42a N°19-17, Ofc. 201 Bogotá D.C., Colombia Red de Iniciativas y Comunidades de Paz desde la Base http://www.pazdesdelabase.org/

EQUIPO COLABORADOR Edición Juan Diego Restrepo

Redacción Oscar Fernando Sevillano Germán Moreno Infografía Diego Álvarez Carlos Alarcón Caricatura Mafalda - QUINO Sopa de Letras y crucigrama Diego Álvarez Fotografía, Diseño y Diagramación: Fundación Chasquis www.fundachasquis.org Juan Pablo Salamanca www.imagologo.com Impresión: Diario LA PATRIA TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS

marzo / 2015



3 ENCUENTROS / Nº2 ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ

Percepciones desde las regiones en torno a la construcción de paz y los acuerdos de La Habana1 Por: Carlos H. Fernández.2 Desde su inicio formal en 2012, el proceso de conversaciones entre el Gobierno Nacional y la guerrilla de las FARC-EP ha suscitado controvertidas posturas. Ha sido objeto de duras críticas, especialmente por parte de quienes han favorecido una salida militar al conflicto armado, pero también ha recibido el apoyo decidido de amplios sectores de la sociedad y de la comunidad internacional. Pero ¿Qué están pensando las comunidades en los territorios?

tado, son dos caras de la misma moneda que empiezan a plantear muchas preguntas y retos. Se hace necesario, por una parte, fortalecer espacios de concertación y mediación intersectorial que permitan construir visiones y agendas compartidas de paz para los territorios, y por otra, abrir canales de interlocución que ayuden a armonizar las políticas nacionales con los procesos regionales.

Los Encuentros Regionales para la Paz han servido, entre otras cosas, para hacer visibles algunos aspectos que son de gran sensibilidad y preocupación para la población y mostrar diferentes percepciones, expectativas y posturas frente al proceso de paz. En primer lugar, líderes y organizaciones han señalado la importancia de que se tome en serio el planteamiento según el cual la paz no puede ser la misma en todas las regiones ni para todos los actores sociales, y lo que se requieren son “muchas paces” -como lo expresa un líder campesino. La paz que se construya en las regiones debe ser una construcción participativa, acorde con las particularidades históricas, organizativas y de identidad territorial. Pero si bien esto es deseable, es decir, que cada región cree su propio modelo de paz, también se requiere que existan consensos y acuerdos sobre unos mínimos comunes que sirvan de referentes compartidos y den unidad al proceso. La paz diferenciada, a nivel territorial y sectorial, y a la vez unos consensos y pactos que den unidad a una Política de Paz de Es-

En segundo lugar, si bien hay una gran coincidencia en que el proceso es una oportunidad, existe una divergencia de percepciones en cuanto a los alcances del proceso. Para el Gobierno Nacional los cambios de fondo, dependen en gran medida de cómo se movilice la sociedad a través de la participación. Para la población es el momento de que el Estado “cumpla” con su responsabilidad y pague la deuda histórica que tiene con las regiones, en particular con el mundo rural, y ello implica necesariamente que se den cambios sustanciales en el modelo de desarrollo económico y en la estructura política del país.

Finalmente existen divergencias de visión en cuanto a dónde y cómo se tomarán las decisiones que afectaran a los territorios. En las regiones existe la percepción de que el Gobierno Nacional actúa de manera incongruente cuando, por un lado, se compromete en ‘La Habana’ con transformaciones importantes que van a “cerrar las brechas” y, por otro lado, sostiene y continua profundizando políticas que están generando pobreza y haciendo daño al territorio, como es el caso de la locomotora minero-energética. Esto es evidente las concesiones para la explotación minera, de hidrocarburos e hidroeléctricas, que no tienen en cuenta los proyectos de vida de las poblaciones rurales, ni la vocación de los territorios. Esto hace que el proceso pierda credibilidad y confianza entre la gente y afirma la idea, ya anclada en el imaginario, de que “es lo mismo de siempre” y que “no habrá cambios sustanciales”. El proceso de ‘La Habana’ representa una oportunidad sin precedentes para el país y tiene una gran importancia práctica y simbólica: poner fin a la confrontación armada -“terminar la guerra”- e imaginar un país sin el asomo de la violencia; poder vivir y expresarse sin miedo y avanzar hacia un futuro compartido. Pero la confianza en el proceso debe estar acompañada de discusiones y transformaciones serias y profundas sobre aspectos como las autonomías y el ordenamiento del territorio, entre muchos otros. Solo un proceso de concertación de los diversos intereses que están en juego, en el cual los actores estén en igualdad de condiciones para el ejercicio del poder, permitirá ir despejando las claves de construcción de eso que se ha llamado la “paz territorial”.

Coordinador Nacional de la Redprodepaz, desde marzo de 2013

www.encuentrosregionales.co

1

Este artículo surge del análisis de aspectos culturales sensibles relacionados la construcción de paz y la implementación de acuerdos en los Encuentros Regionales para la paz, realizados en el 2014.

2

Antropólogo, master y candidato a doctor en Paz Conflictos y Democracia. Investigador y pedagogo. Especialista en cultura de paz y transformación de conflictos. Asesor Redprodepaz.

4

ENCUENTROS / Nº2 / ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ marzo / 2015

Así van los acuerdos en La Habana Infografías El periódico Encuentros presenta a continuación los tres puntos sobre los que ya hay acuerdos concretos entre el gobierno nacional y la guerrilla de las Farc. Con esta manera esquemática, queremos contribuir a una mejor comprensión de los logros alcanzados en Cuba. Quedan por concretarse los temas de víctimas, implementación y refrendación de los acuerdos, y fin del conflicto.

marzo / 2015

Derechos y garantías para la oposición política



Fortalecimiento de la participación ciudadana Ley de Garantías para las organizaciones y movimientos políticos

Participación electoral: Se fortalecerá el voto, la trans parencia del sistema electoral, la participación de la mujer y se promoverá una cultura democrática de tolerancia (los enemigos se deben tratar como adversarios políticos)

Circunscripciones Transitorias Especiales de paz: De manera temporal, las regiones más golpeadas por el con icto, podrán elegir a representantes a la Cámara adicionales.

5 ENCUENTROS / Nº2 ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ

No más política con armas Sistema Integral de Seguridad para el Ejericio de la Política: - Nadie nunca más utilizará las armas para promover una causa política. - Quienes ejercen la política no serán víctimas de las armas. - Garantías de seguridad para líderes de organizaciones y movimientos sociales - Garantías de seguridad para defensores de derechos humanos. - Estatuto para la oposición: se garantiza y promueve la discusión con amplia participación.

6

ENCUENTROS / Nº2 / ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ marzo / 2015

Las 25 preguntas claves de los Encuentros Regionales para la Paz

marzo / 2015



7 ENCUENTROS / Nº2 ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ

Las organizaciones de mujeres en el proceso de construcción de la paz en Colombia

Por: Carlos Fernández y Diego Pérez

Quienes participaron en los Encuentros Regionales para la Paz tuvieron la oportunidad de hacer preguntas sobre las implicaciones del proceso de negociación que se adelanta en La Habana, Cuba, entre el gobierno nacional y la guerrilla de las FARC. Fueron cientos de interrogantes sobre diversos temas que inquietan a las comunidades, que después de revisarlas y clasificarlas, se seleccionaron 25, reunidas en seis temas generales, que reflejan las preocupaciones de la gente por esta compleja búsqueda de ponerle fin al conflicto armado. A. Sobre la construcción de paz en sentido amplio y su relacion con el proceso de conversaciones entre el gobierno nacional y la guerrilla de las FARC-EP. 1. ¿Cuánto durará la negociación, cuándo y cómo empezarán a darse los cambios que plantean los acuerdos entre el Gobierno y las FARC? 2. ¿Qué se puede y qué no se puede esperar de La Habana? Posiciones de oposición (en menor grado), escepticismo (en alto grado), preocupaciones sobre lo que implica para los territorios (alto grado). 3. ¿Cómo se van a abordar (mecanismos) las especificidades territoriales al momento de implementar los acuerdos? Y cuáles van a ser los mecanismos y procedimientos para la Refrendación? 4. ¿Cómo se va a financiar la implementación de los acuerdos de paz? ¿De dónde saldrán los recursos financieros? B. Sobre la desmovilización de las FARC-EP, la permanencia de otros grupos armados y las condiciones de seguridad para la población – el papel de las fuerzas militares y de policia. 5. ¿Cómo se va a garantizar por parte del gobierno nacional que los miembros de las FARC-EP realmente se desmovilicen y que tengan condiciones adecuadas para la reintegración, sin que ello signifique una carga para las comunidades a dónde lleguen? 6. ¿Cómo se va garantizar el control y desmonte de otros grupos armados como las Bacrim, grupos paramilitares, delincuencia común, que siguen actuando en las regiones una vez se dé la desmovilización? 7. ¿Cuál va a ser el papel de las fuerzas armadas y de policía en el pos-acuerdo y como se va a garantizar su idoneidad? 8. ¿Cuál es la capacidad y decisión del Gobierno y el Estado para el desmonte de las estructuras armadas (guerrilla, paramilitares, Bacrim, redes de narcotráfico y mafias)?

C. Sobre el modelo de desarrollo territorial y los acuerdos sobre el punto de reforma rural integral y el problema de las drogas ilicitas. 9. En la base del conflicto está la propiedad y el uso de la tierra. ¿Se va a garantizar la implementación de la zona de reservas campesinas como figura que brinda elementos para la solución de la problemática estructural en las regiones? 10. Cómo se va hacer el nuevo re-ordenamiento territorial para facilitar la implementación de los acuerdos y la paz territorial? 11. Después del acuerdo, ¿el gobierno como implementará la democratización de la tierra que viene siendo explotada inadecuadamente, en manos de las grandes multinacionales y terratenientes, para que sean titulados y formalizadas a pequeños campesinos, para que la exploten adecuadamente en su seguridad alimentaria y que no haya otro conflicto? 12. ¿Cómo se va a hacer la reforma rural integral cuando se sigue cambiando la vocación agrícola de los territorios por la gran minería y la explotación de hidrocarburos, sin tener en cuenta los proyectos de vida y sin consultar a la población indígena, afro, campesina? 13. ¿Hasta dónde está dispuesto el gobierno a construir realmente con los campesinos los planes de sustitución gradual de cultivos de uso ilícito y a no seguir estigmatizando al campesino cocalero? D. Sobre la participacion social y politica de diversos actores en el proceso de paz. 14. ¿Qué garantías tendrán las organizaciones étnico-territoriales, indígenas, afros y campesinos, de que se van a respetar sus procesos sociales y que los acuerdos no van a pasar por encima de sus propuestas? 15. ¿Cómo se va a garantizar la participación amplia de la sociedad en la definición de los acuerdos con los grupos armados, más allá de enviar propuestas a La Habana y de una refrendación? 16. ¿Cómo se va avanzar en el cumplimiento concreto de acuerdos pactados entre las organizaciones y distintas instancias del Estado, desde años atrás? 17. ¿Cuáles son los mecanismos para el diálogo y negociación que habrá qué hacer en las regiones entre las comunidades, organizaciones, el Estado, la Empresa Privada y los actores desmovilizados? 18. ¿Qué garantías hay de que se va a respetar la consulta previa cuando hasta ahora las multi-

nacionales en el territorio no respetan los derechos, ni siquiera se permite realizar consultas populares a los ciudadanos, torpedeando los procesos que se inician? 19. ¿Qué garantías hay de que los procesos que adelantan las organizaciones sociales en el territorio realmente sean tenidos en cuenta, van a contar con los recursos para desarrollar sus propuestas y proyectos de vida comunitarios? E. Sobre las trasnformaciones institucionales. 20. El Estado local ha sido permeado por actores del conflicto, “victimarios” ¿Está abierto el gobierno a una propuesta de reestructurar las instituciones estatales, para superar su fragilidad y hacer efectiva la aplicación de las garantías de derecho y la democracia? 21. ¿Cómo se va a desligar la política de los intereses privados y de las mafias que generan la corrupción y que traen más violencia? 22. ¿Cómo se va a garantizar que los acuerdos y las reformas propuestas queden en los planes de desarrollo a nivel nacional, regional y local, y que realmente se cumplen? F. Sobre las victimas, la justicia transicional y los procesos de reconciliación. 23. ¿Con los acuerdos cómo se va a superar la poca eficacia del Estado en la aplicación de la ley de víctimas y restitución de tierras? ¿Habrá realmente reparación integral a las víctimas? 24. ¿Cuál es la estrategia para articular el ordenamiento jurídico ordinario nacional, al ordenamiento jurídico especial y transicional, y de estos con los ordenamientos regionales y locales, a fin de hacer efectivo el cumplimiento de las normas en ellos contenidas? 25. ¿Cuáles son las medidas de justicia transicional que evitaran la impunidad y el olvido de las violaciones de los derechos humanos por parte de FARC y de los demás grupos armados?

Por: OLRR

Los ERP mostraron la capacidad de resistencia de muchas organizaciones de mujeres. En el ERP de los Montes de María se afirmó: “No cabe duda que los bastiones de la resistencia en Los Montes de María han sido, ante todo, las mujeres y los jóvenes. En las escasas ocasiones en las que alguna comunidad enfrentó a los actores armados para reclamar el derecho a la vida de sus hijos, sus compañeros y sus vecinos, generalmente fue una mujer la que se atrevió a hablar”. En el Putumayo se señala que desde la “Agenda Regional de Paz de las Mujeres se ha impulsado la defensa de los derechos de ellas y de las comunidades frente a las múltiples agresiones y violencias, así como propuestas de movilización pacífica y de carácter humanitario, en los momentos más críticos del conflicto en el departamento”. Estos son testimonios de la significación de las organizaciones de mujeres en contextos duramente golpeados por la guerra; las mujeres y sus organizaciones son imprescindibles para el logro de la paz. De otra parte es importante destacar la alta participación de las mujeres en los ERP. Del total de participantes (5.608), el 44% correspondió a mujeres. Este porcentaje es significativo si se tiene en cuenta que el análisis toma en cuenta las mujeres representantes de organizaciones y es revelador de la fuerza que tienen las organizaciones de mujeres, que en medio de una cultura patriarcal logran movilizarse alrededor de propósitos comunes y, especialmente, el propósito de la paz. Su autoridad moral es reconocida en las regiones, pues son ellas las que se ocupan de que sus hijos no sean involucrados en la guerra y se organizan para buscar alternativas de futuro para ellos. La significación económica de su aporte a la sociedad -sistemáticamente invisibilizado- no se reduce al trabajo cotidiano de sustentar la vida familiar afectiva y materialmente en muchos aspectos, sino que, como lo muestran las reivindicaciones de las organizaciones de mujeres en los ERP, muchas de estas organizaciones tienen presencia en el quehacer económico regional. Las agendas regionales de las organizaciones de mujeres parten de la experiencia que tienen, por ejemplo, en proyectos agroecológicos, así como en su visión del desarrollo territorial. Es necesario, como se expresó en los ERP, “reconocer el papel de las mujeres como productoras y por lo tanto como sujetos de titulación de

Los Encuentros Regionales para la Paz –ERP– realizados durante 2014 en doce regiones donde el conflicto armado ha golpeado muy duramente a las poblaciones, dejaron valiosas enseñanzas para el proceso social de construcción de la paz. Una de ellas es que en todas las regiones el trabajo de las organizaciones de mujeres es fundamental y, en algunos casos, son ellas quienes han roto las cadenas del miedo y con ejemplar valor civil han abierto espacios a la paz. tierras con un seguro agrario que las cubra; inversión en la política familiar y jubilación para la mujer rural; asignar presupuesto en programas y políticas que apoyen los proyectos de las organizaciones de mujeres; en general, se requiere desarrollar una política de seguridad social para las mujeres campesinas y una política pública integral con enfoque de género“. Desde el punto de vista político, las organizaciones de mujeres han ganado en incidencia política real, con la creación o transformación de instituciones y políticas públicas en función de dar respuestas a sus demandas. La creación en casi todo el país de las secretarías departamentales y municipales de la mujer y en el nivel nacional de la Consejería para la Mujer, las decisiones de la corte Constitucional en cuanto al reconocimiento de las violencias contra las mujeres y otros desarrollos institucionales recientes, han sido posibles por la labor de las organizaciones de mujeres en denunciar y hacer visible su realidad. Esta incidencia ha sido posible gracias a la construcción colectiva de una agenda de las mujeres para la paz que plantea desde la oposición al patriarcado y la reivindicación de la dignidad de las mujeres hasta alternativas al capitalismo desde el eco-feminismo; que sean las mismas mujeres el eje central para la construcción de la paz y la reconciliación.

Un aspecto central de la acción de las organizaciones de mujeres ha sido la recuperación de la memoria histórica. En este sentido, el trabajo de la “Comisión de Verdad y Memoria de las Mujeres” de la Ruta pacífica es un aporte de gran valor que las mujeres hacen desde su experiencia directa como víctimas y que ellas han visibilizado en varios de los ERP. Este trabajo ha permitido elaborar su dolor, comprender las causas de los hechos que vivieron y encontrar vías para la reconstrucción de sus vidas. En el ERP de Catatumbo, la Embajadora de Suecia mostró la importancia que en muchos sectores de la comunidad internacional se da a las organizaciones de mujeres por el rol decisivo que ellas juegan en los procesos de construcción de la paz. El aporte de estas organizaciones a la construcción de un modelo civilista de desarrollo y paz es de la mayor trascendencia pues ellas han puesto en el centro del debate el problema del militarismo en todas sus dimensiones. Asimismo, son las organizaciones feministas, asociadas al pacifismo y la no violencia, las que han señalado el desarme como la perspectiva más humana para una sociedad víctima de la violencia y los grandes negocios de la industria armamentista. En conclusión: los ERP y el proceso de paz son ocasión para que la sociedad y el estado colombiano reconozcan la riqueza organizativa de las organizaciones de mujeres y su contribución a la construcción de una sociedad más civilizada.

8

ENCUENTROS / Nº2 / ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ marzo / 2015

marzo / 2015

La Paz por regiones / Tumaco

Vivir con preocupación Nacida en la vereda Chajal, en riberas del río Chaguï, Karen Vanessa Cuero Riasco vive hoy en el barrio Nuevo Milenio, donde donde la mayoría de sus habitantes están en condición de desplazados, quienes, además de los problemas de seguridad generados por el control territorial de los diferentes actores armados, padecen una fuerte deficiencia en servicios públicos. ¿Cómo se vive, como joven mujer, el conflicto en Tumaco? Principalmente hay que vivir con mucha precaución, evitando amigos que se escuche que estén de cualquier lado del conflicto, bien sea Fuerza Pública, guerrilla o paramilitares. ¿Qué estás estudiando? En este momento participo en un curso del SENA, formándome en gestión de recursos naturales. Pero quería estudiar medicina para suplir alguna de las necesidades que tiene nuestra gente en Tumaco. Acá, el servicio de salud es pésimo y los especialistas sólo llegan cada tres meses. Sin embargo, por el pésimo sistema de educación no fue posible que yo estudiara esa carrera. ¿Cómo es la cuestión de servicios públicos en tu barrio? Todos los servicios públicos en nuestra población son de pésima categoría. Sólo tenemos agua una vez por semana que tampoco nos llega hasta la casa. La educación básica con cupos limitados que no alcanza para toda la población y con pocas instituciones de buena calidad para educación secundaria y superior. Cuando nos enfermamos sólo recibimos acetaminofén para cualquier dolencia y no hay citas médicas. ¿De qué manera el conflicto está afectando a la juventud en Tumaco? El conflicto nos afecta a todo nivel porque evita el desarrollo cultural y económico de la ciudad, lo cual nos permitiría tener más oportunidades de estudio y trabajo. Además no nos permite transitar por toda la ciudad libremente.

¿Cómo te proyectas en tu vida, en caso de que el gobierno y las FARC logren firmar la paz? Estoy esperando una disminución gradual de la violencia con más oportunidades. Sin embargo, sabiendo que la firma de la paz entre el gobierno y la guerrilla de las FARC no va a ser más que un descanso de la violencia para enfocarnos en los demás problemas sociales que tiene el país. Una iniciativa de paz Neisy Fernanda Tenorio vive en el barrio de Buenos Aires. Es una zona ganada al mar en la que las casas son construidas sobre basura, madera o piedras acumuladas que hacen de relleno. Por no haber podido ingresar a la Universidad, esta joven se dedica a una labor social con la comunidad parroquial de su barrio. ¿Cómo se vive, como joven mujer, el conflicto en Tumaco? Vivimos en una situación muy difícil donde los hombres de los grupos armados tienden a creer que nosotras somos de su propiedad por vivir en la zona en la que ellos supuestamente mandan. ¿Qué te ha impactado del conflicto estos últimos años? Vi morir asesinado a mi hermano a manos de un soldado a plena luz del día en la calle principal del barrio. Mi hermano estaba sin ningún arma, sólo teniendo su camiseta en la mano. Me ha causado mucha impotencia y mucho dolor. También el ver que a causa de eso, muchos amigos tuvieron que irse del barrio o se metieron en grupos armados para poderse vengar. ¿A qué te dedicas? Yo empecé desde muy chiquita con la infancia misionera en la parroquia de La Resurrección, con la influencia del Padre Paul. Luego fui ascendiendo hasta que empezamos el grupo juvenil que se reúne semanalmente en la parroquia.

9 ENCUENTROS / Nº2 ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ

“A una mesa de conversaciones se va con realismo”: Carlos Medina

La esperanza tumaqueña Dos jóvenes mujeres hablan de sus vidas en este puerto sobre el Pacífico, agobiado por graves problemas sociales y el accionar de grupos armados ilegales.



¿Cuáles son las actividades que propone el Centro Juvenil? El Centro Juvenil maneja una biblioteca la cual está a disposición de toda la comunidad y funciona de lunes a sábado. Realizamos también un campo santo. Son unas cruces blancas en las cuales están los nombres de todas las personas asesinadas del sector. Son más de 120. En las reuniones del grupo juvenil nos dedicamos a formarnos en temas de derechos humanos, compromiso social, proyecto de vida y no violencia.

“Lo que está ocurriendo en La Habana no es una negociación de paz y eso la gente lo tiene que tener absolutamente claro”, dijo el investigador Carlos Medina Gallego en su intervención ante el público asistente.

A su juicio no hay tal negociación porque “no hay una transacción de fuerzas estatales con fuerzas insurgentes sobre los patrimonios, la historia y el futuro del país”. Medina Gallego también llamó la atención sobre uno de los aspectos fundamentales que contiene lo que él llamó “conversaciones de paz” y es que lo que se defina allí arroja unos acuerdos políticos que deben ser refrendados por los colombianos: “se puede firmar el acuerdo, pero ese acuerdo debe pasar por el constituyente primario y es el pueblo colombiano, a través de un mecanismo de refrendación, quien le da el visto bueno a esos acuerdos”.

¿Piensas que el Grupo Juvenil es una iniciativa de paz? Sí, es una iniciativa de paz porque primero que todo los temas que vemos siempre van enfocados a la no violencia. También tenemos compromisos que nos ayudan y nos motivan a trabajar por la comunidad. De esta forma tenemos jóvenes que invitan a más jóvenes a hacer el bien y ocupar su tiempo en cosas productivas. ¿Cuáles fueron sus mayores logros? Tuvimos que armarnos de valor para sacar al grupo armado que estaba en el barrio. Se logró gracias a la unidad. Defendimos nuestras calles de una manera no violenta, con pura presencia humana y con fogatas. Todo el mundo tenía miedo, pero este grupo armado no volvió más.

El académico formuló dos preguntas: ¿Por qué está sentado el Gobierno Nacional y las FARC en las mesas de conversaciones de La Habana? Y ¿qué está pasando en materia de guerra que llevó al Gobierno Nacional y a las FARC a sentarse en la mesa de conversaciones de La Habana?

“Es decir, hay un golpe militar muy fuerte que las FARC asimilan, entienden y aceptan”, apuntó Medina, y evocó a uno de los jefes históricos de las Farc, a ‘Alfonso Cano’, quien pensaba que “la decisión militar más importante que tiene que tomar un guerrero, es de naturaleza política”. En ese sentido, el académico consideró que las Farc entendieron que no iban a llegar al poder por la vía de las armas, como lo habían considerado en algún momento los jefes guerrilleros, y, por tanto, se sentaron a la mesa para movilizarse “de la guerra a la política”.

Sobre la primera pregunta aseveró que una guerra se gana cuando hay una articulación entre lo militar y lo político, y las Farc “no tenían el mecanismo político para hacer efectiva la victoria militar”. Y esa situación se ve complementada con la respuesta a la segunda pregunta: las derrotas sufridas en el campo militar por este grupo insurgente fueron letales debido a la aplicación de la política de seguridad democrática durante la presidencia de Álvaro Uribe Vélez (2002 – 2006; 20062010), que recurrió a la inteligencia técnica y la inteligencia humana con énfasis en las operaciones de la aviación militar.

De otro lado, explicó que el gobierno tomó la decisión de sentarse a dialogar con las Farc porque comprendió que si bien iba ganando la guerra, no derrotaría a las Farc militarmente. Y la única posibilidad de convertir esa ventaja militar en victoria militar “es en un escenario político, es en un acuerdo político. La paz es la victoria, ese es el concepto del gobierno”. Y para ponerle fin a esa confrontación armada se construyó una agenda de seis puntos básicos cuya discusión y acuerdo llevará, si se logran superar todos los obstáculos y diferencias, a una paz estable y duradera.

Medina Gallego destacó lo que significa la presencia de las Farc en una mesa de conversaciones y lo que está haciendo: “es la gran revolución de pensamiento político, es una auténtica revolución de ideas, es el paso de la lucha estratégica por el socialismo a la construcción histórica de la democracia de este país. Y eso es un acto revolucionario: construir democracia es hacer revolución”. De otro lado, se refirió a dos aspectos que son cruciales en una mesa de conversaciones: la confianza entre las partes y seguridad en el proceso: “Son dos piezas de cristal que hay que cuidar para que no se rompan”. Pero más allá de esos dos aspectos, para Medina Gallego el proceso en La Habana con las Farc tiene un reto mayor: “ganar un lugar en el corazón y la conciencia de los colombianos”. Para lograrlo, resaltó que se debe “superar el escepticismo […] la pesadumbre […] la histórica lección de fracasos para colocar el empuje en la fuerza vital de toda la sociedad en la construcción exitosa del proceso”. Y para lograr un mayor compromiso de la gente, le propuso una tarea a los asistentes al Encuentro Regional por la Paz: “que cada uno de nosotros vaya a la casa de sus vecinos a golpear y a explicarles que este proceso de paz es bueno para este país y que hay que comprometerse con él”.

10

ENCUENTROS / Nº2 / ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ marzo / 2015

Entrevista

“En La Habana se está trabajando con gran seriedad”: Padre Francisco de Roux Convencido de que el proceso de negociación entre el gobierno nacional y la guerrilla de las FARC está sólido, el provincial en Colombia de la Compañía de Jesús considera que esas conversaciones también son necesarias para comprender la barbarie y el sufrimiento y dolor tan profundo que ha causado la guerra. Así lo expuso en este diálogo con Encuentros.

marzo / 2015

Encuentros: ¿Cuál es la importancia de la sociedad civil en los diálogos? FR: Juega un papel definitivamente central porque construye la confianza colectiva en las regiones y muestra que realmente es posible que hagamos una transformación de la situación que estamos viviendo entre todos. La participación de la gente aporta la convicción de que podemos salir adelante juntos, el propósito de que las grandes convicciones como defender la vida, defender la dignidad entre todos, garantizar la inclusión colectiva, transformar el Estado para hacer de éste la institución que queramos los ciudadanos para garantizar a todos las condiciones de la dignidad, tener una perspectiva largo plazo. Los que están en el Estado tienen la perspectiva de los cuatro años que dura un gobierno; pero tener la convicción de que hay que ocupar productivamente el territorio por los propios pobladores; de que nosotros no somos dueños de un territorio sino que pertenecemos al territorio y que tenemos que cuidarlo, las aporta un proceso de sociedad civil y la convicción, sobre todo, de que la seguridad es la confianza que nos damos los unos a los otros. Encuentros: Se habla mucho de paz territorial, ¿usted qué opina?

Encuentros: ¿Cuál es su opinión sobre este proceso actual de negociaciones? Francisco de Roux (FR): Yo estoy convencido que el proceso está sólido en su desarrollo hoy en día en La Habana, que los dos grupos están trabajando con una gran seriedad, estoy convencido de que cada vez se siente más la necesidad de la presencia del Ejército de Liberación Nacional en el conjunto de las conversaciones y que, incluso, el tiempo va a estar absolutamente condicionado a la presencia de los dos grupos. Porque no creo que se pueda cerrar el nivel de conversaciones a sabiendas que serán dos mesas distintas pero que tienen que confluir en un momento definitivo para que pueda haber un acuerdo de paz en el país. Encuentros: ¿Sólido en La Habana y débil en el país? FR: Siento fragilidad en el proceso, por fuera; me preocupa lo que está pasando en el país. Primero porque el proceso mismo ha quedado politizado por la forma como se llevó la campaña política, se considera que el presidente Santos es el de la paz y que la oposición es la guerra y es

en contra de la paz, y eso realmente no conviene para nada en el avance de la opinión pública para tratar de apoyar lo que necesitamos todos los colombianos. Lo que está pasando en La Habana no es definitivamente ganar un resultado para Santos o un resultado para Uribe o un resultado para las FARC o un resultado para el ELN, lo que ahí importa es que los colombianos podamos vivir como seres humanos. Encuentros: ¿Qué otros aspectos de este proceso le preocupan? FR: El tiempo. Disponemos de poco tiempo, más o menos tres años y medio. Ahora hay voluntad de hacerlo, hay un establecimiento comprometido para conseguirlo, si eso no se consigue ahora muy fácilmente el país va a tomar una actitud parecida a la que tomó durante los tiempos de Pastrana cuando, después de la zona de despeje, el país dijo “No más” y decidió llamar a Uribe que estaba ofreciendo que vencería en poco tiempo a la guerrilla. Yo creo que el país se irá a una guerra muy profunda si no se consigue ahora la paz. La fatiga terminará por movilizar a los colombianos y tendremos una guerra mucho más honda de la que hasta ahora hemos tenido.

Me preocupa también, que hay mucha resistencia a los cambios estructurales que la paz exige en las regiones, en la manera de transformar el campo, de participar en la política, de enfrentarnos ante la minería, de la manera como hay que dar la seguridad en un país donde no tengamos necesidad de esta gran cantidad de ejército. Y con eso de la resistencia a la justicia transicional, hay mucha en el país y no creo que si se les exige a los que han estado en la guerra que tienen que ir a la cárcel, vamos a tener la posibilidad de que estén en una actitud seria de incorporarse a la construcción de la paz en Colombia. Y me preocupa finalmente, lo que uno podría llamar la extrema – extrema derecha en el país que acabó con la Unión Patriótica y que podría estar dispuesta a eliminar a la gente que finalmente deje las armas y acepte vivir de una forma distinta en Colombia, todo eso contribuye a hacer un escenario delicado y creo que desde las regiones tenemos que contribuir desde ya a garantizar que no vamos a tener esa situación y que vamos a fortalecer el proceso.

FR: Yo creo que el gobierno ha entendido perfectamente que el conflicto colombiano es territorial, es regional, que es muy distinto el conflicto como se plantea en el Putumayo a como se da en la Guajira; es muy distinto el conflicto como se ve en Arauca, a como se ve en la cordillera de San Lucas. El conflicto está muy imbricado en la cultura, a la relación que la gente tiene con el territorio, que es distinta a la que tienen los pueblos indígenas, a la que tienen los pobladores de una zona como el Magdalena medio santandereano, eso hay que respetarlo con toda claridad. Los juegos de intereses, la manera como se configura la economía en los territorios es distinta, eso es una primera cosa que es definitivamente muy importante, pero también la participación de las comunidades y la cultura de la gente en estas cosas es seriamente muy importante. Encuentros: ¿Coincide el tema de la paz territorial con lo que desde años vienen trabajando los programas de desarrollo y paz en el país? FR: Aquí hay una cosa muy interesante y es que la intención del gobierno en este momento llega a corresponder algo que los programas de desarrollo y paz traían desde muy hondo



11 ENCUENTROS / Nº2 ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ

y es que Colombia hay que construirla desde las regiones y un valor que es este: los programas se han tenido que ir construyendo en medio del conflicto, los programas han tenido muchísimo coraje, los programas han perdido gente muy bella que ha sido asesinada por el conflicto, los programas han tenido, además, la fuerza de comprender que el conflicto se lo puede utilizar creativamente, pero los costos han sido inmensos. Encuentros: Con todo ese recorrido, ¿qué tanto le pueden aportar los programas de desarrollo y paz a lo que se viene negociando en La Habana? FR: Un escenario de programas después de los acuerdos para parar la guerra tendría una fuerza extraordinaria inmediatamente porque ya los programas traen la metodología de la participación de la gente y de la construcción del desarrollo desde los pobladores, de la convicción de que el desarrollo es la gente, el desarrollo no es la cantidad de toneladas de aceite que se saquen de un territorio o el número de barriles de petróleo o la cantidad de toneladas de carbón; el desarrollo es la gente feliz en un territorio construyendo un mundo que corresponde a la vida que ellos quieren vivir. Poderlo hacer sin una guerra sería extraordinario y esa es la posibilidad que se le presenta ahora a los programas. Encuentros: ¿Qué opina de los encuentros regionales para la paz? FD: Me parecen muy valiosos porque hacen que la gente comprenda lo que está pasando en La Habana, que tenga una visión clara de por dónde va el proceso, se sienta motivada para vincularse y enriquezca el proceso, le de nuevas ideas a las instituciones de qué es lo que se aporta desde las regiones y desde los programas de desarrollo para justamente hacer la paz territorial.

CONVOCAN

¡Yo también quiero participar con mis ideas!

1

2

3

4

5

6

7

8

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

VERTICALES / 1. Común denominador entre la Unión y la Marcha 2. Ciudad donde se inició la mesa de conversaciones de paz. 3. Uno de los Inspiradores filosóficos de las Farc 4. Institución facilitadora en procesos internos con la insurgencia 5. Primeras sílabas para completar el término chenko 6. Requisito electoral que no se exigirá para mantener vigente a un partido político, luego de unas elecciones. 7. Ex candadita de izquierda que apoyo a Santos en la segunda vuelta 8. Apellido de Ayda . HORIZONTALES / 1. Proceso de participación ciudadana donde guerrilleros que no se encuentren con delitos atroces entrarían 2. Primeras letras de la palabra asociación 3. Cuando algo es de uno se dice tal cosa es ___

SOPA DE LETRAS

LA CARICATURA DE LOS ENCUENTROS

CRUCIENCUENTROS

ENCUENTROS / Nº2 / ENCUENTROS REGIONALES PARA LA PAZ marzo / 2015

O I N O T N A E R E S D

P A T R I O T I C A F E

O S S L A R B M U F G R

S D A I R U D E E v H T

I F D F F B H J N A B U

C I O P G L R D O O F P G V E R A T E C R S S O I A S S S E T C G A D A

N C V B N M E U I O V A

1. Reglamento con el cual se regirá la oposición al gobierno de turno 2. El Partido que en los años 80 sirvió de plataforma política para traer a las Farc al desarme fue la Unión __________ 3. Rendición de _______ de las autoridades a sus comunidades 4. Ejercicio de la ciudadanía mediante el cual se regirá la vigilancia y control a las autoridades 5. Requisito que no se exigirá para mantener vigente a un partido político, luego de unas elecciones. 6. Partido político que actualmente promueve ideas de izquierda en todo el país. 7. Apellido del alcalde de Bogotá que militó en el M -19 8. Movimiento de izquierda que gobierna a Bogotá 9. Siglas de la Corriente de Renovación Socialista desmovilizada en el 94, de la que hicieron parte el actual concejal de Bogotá Antonio Sanguino y el actual alcalde Santa Marta Carlos Caicedo. 10. Nombre del Senador Navarro, desmovilizado del M -19 Respuestas: 1. Estatuto 2. Patriótica 3. Cuentas 4. Veedurías 5. Umbral 6. Polo 7. Petro 8. Cambio 9. CRS 10.Antonio

12

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.