Revista de historia regional de Mexicali y su valle Año VIII, núm. 30, octubre-diciembre de 2015
Universidad Autónoma de Baja California
Luis L. Castro Pionero de la radiodifusión en Mexicali
Sfusbupt!ef!gbnjmjb Familia Castro Bojórquez
1958. La familia Castro Bojórquez. En la foto de izquierda a derecha, de pie: Lydia (13 años), Norma (24), Olga (27), Rubén (19), Luis (21), y Joel (16), sentados: Meche (6), Amada Bojórquez Apodaca (44), Luis Castro López (50) y Hugo Abel (9).
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1982. En la celebración de los 50 años de matrimonio de Luis y Amada. De izquierda a derecha, fila de arriba: Hugo Abel, Joel, Rubén y Luis Castro Bojórquez, Eduardo Ahumada, Jonathan Díaz, Mario Gutiérrez y Guillermo Lamadrid, Fila de abajo: Rebeca Vizcarra, Rosita Larios, Elsa Vizcarra, Rosario Ávila, Amada Bojórquez, Luis Castro López, Olga, Norma, Lydia y Mercedes Felícitas Castro Bojórquez.
R. C. B.
Índice Editorial Sergio Noriega Verdugo
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Luis L. Castro. Pionero de la radiodifusión en Mexicali Rubén Castro Bojórquez
19 33 45 51 55
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Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe Marcos A. Buruel Beltrán
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Cantú: lecciones de economía política Miguel Esteban Valenzuela Robles
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Precursores de la nacionalización de las tierras en el valle de Mexicali Yolanda Sánchez Ogás
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Exploración moderna de un trecho de la frontera Jimmy Griffin
41
La Facultad de Enfermería de Mexicali. Su historia y actualidad Antonio J. D. Olvera Flores
45
Cayetano Cisneros Aguilera Eduardo Andrade Cisneros
51
Valores de casa. Francisco Estrada Montaño Lorenzo Hurtado Valenzuela
55
Libros, reseñas, comentarios Sergio Noriega Verdugo
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Foto de portada: 1944. Luis L. Castro en su estación de radioaficionado XE2BY, (“Equis E dos be I griega, llamando, CQ40, CQ40, llamada general“) ubicada en Calle “C” núm. 440, sección segunda en Mexicali, B. C., comprendía los aparatos de recepción y difusión, así como micrófono y radio de onda corta. Por la estación desfilaba toda la familia para saludar al radio aficionado que estaba del otro lado de la línea.
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El Río El Río es una publicación trimestral de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali” A.C. en coedición con la Universidad Autónoma de Baja California para la divulgación histórica regional sobre el municipio de Mexicali, Baja California, México. Los artículos son responsabilidad única de sus autores. Tiraje 1 200 ejemplares. Directorio
Universidad Autónoma de Baja California
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Dr. Juan Manuel Ocegueda Hernández RECTOR Dr. Alfonso Vega López SECRETARIO GENERAL Dr. Ángel Norzagaray Norzagaray VICERRECTOR CAMPUS MEXICALI Dr. Alfredo Félix Buenrostro Ceballos COORDINADOR GENERAL DEL CESU-UABC
Roberto Jesús Amaro Pedroza PRESIDENTE Enrique Vicente Perez-Rul Vásquez VICEPRESIDENTE Alma Angelina de la Torre Vázquez SECRETARIA Ángel Juárez Estrada TESORERO PRESIDENTA HONORARIA VITALICIA Yolanda Sánchez Ogás Revista El Río
DIRECTOR Y DISEÑADOR: Rubén Castro Bojórquez COORDINADOR DE FOTOGRAFÍA: Carlos Manuel Reyes Moreno COMITÉ EDITORIAL: Rubén Castro Bojórquez, Lorenzo Hurtado Valenzuela, Miguel Esteban Valenzuela Robles, Miguel Ángel Lino Olvera, Luz Mercedes López Barrera, María Isabel Verdugo Fimbres, Yolanda, Sánchez Ogás, Jorge Núñez Verdugo, Jimmy Griffin y Carlos Manuel Reyes Moreno. CAPTURA: Catalina Rojas Monzón y Esmeralda Tapia Peralta DIGITALIZACIÓN Y APOYO TIPOGRÁFICO: Lydia Coronel Yáñez REVISIÓN: Luz Mercedes López Barrera APOYO LOGÍSTICO: María Concepción Ortiz Aguilar Elaborada en CESU-UABC
INFORMACIÓN GENERAL La Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali”, A. C. sesiona en la Sala Junta de Gobierno del Centro de Estudios Sobre la Universidad de la UABC, ubicado en la planta baja del edificio de Investigación y Posgrado en bulevar Benito Juárez. Teléfonos: (686) 566 9592 y (686) 841 2076. Correo electrónico:
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Respeto a la autoridad
C
uando primero se reunieron los pioneros de Mexicali, a principios del siglo pasado, se impuso el respeto a la autoridad. El pequeño pueblo fronterizo naciente optó por reconocer la autoridad del gobierno de México para efectos de organizarse políticamente y salir adelante. Cabe recordar que en aquel entonces el país se encontraba gobernado por la dictadura de Porfirio Díaz, de manera que el respeto a la autoridad era la costumbre. A pesar de su aislamiento y de sus diferencias interpersonales, en el pueblo de Mexicali no prevaleció la ley del más fuerte, sino el de las instituciones. En 1904, el nombramiento de jueces y, posteriormente, de subprefectos dio inicio al gobierno formal en Mexicali. Pero no faltaron escándalos en la vía pública, principalmente por borrachos, que rompían con la monotonía del pueblo que buscaba permanecer. Las autoridades originales no contaron con muchos recursos para imponer el orden deseado, pues no solo disponían de poco personal y mal remunerado, sino, además, porque no contaban con presupuesto suficiente para construir una cárcel. En el hogar prevaleció la voluntad del jefe de familia, hombres en su preponderante mayoría, dotados con fuerza física, más que con escolaridad y mejores costumbres. Podemos especular que un valor compartido fue su sentimiento de pertenencia a la nación. Aunque había extranjeros en la frontera, la mayoría de estos pobladores eran mexicanos venidos de otras partes. Hablaban el español, eran cristianos y comían tortillas. Principalmente eran originarios de Baja California Sur, algunos de Sonora y otros mexicanos que habían residido y trabajado en Estados Unidos de América. La principal lucha de aquellos pobladores era con la naturaleza. El calor en el verano, el frio en el invierno y la falta de agua para atender sus necesidades urbanas y rurales. Esta situación empeoró y se hizo crítica con la inundación de las aguas del Río Colorado a los valles de Mexicali e Imperial, de 1905 a 1907. Además de los daños a los cultivos y la incipiente infraestructura hidráulica en el medio rural, el poblado perdió algunas de sus manzanas, viviendas y negocios desaparecieron junto al Río Nuevo. A pesar de los pocos recursos públicos que fueron destinados a Mexicali para remediar el desastre, la autoridad del gobierno se mantuvo firme con Gustavo Terrazas, siendo subprefecto, cuando Mexicali aún pertenecía al municipio de Ensenada. La autoridad también fue fortalecida por la conducta del jefe político de la entidad, el coronel Celso Vega. El desarrollo inicial de Mexicali se vio favorecido por el respeto a la autoridad. A pesar de su inmigración, se mantuvo la estabilidad política. Prevaleció en el pueblo la aceptación de aquellos que fueron designados a gobernar a sus ciudadanos, fueran estos jueces o subprefectos. Ganó la conformidad, la subordinación y tal vez la obediencia. Sin embargo, no hubo tiempo u otros recursos para afirmar que se trataba de un pueblo de hombres libres, con aspiraciones de un futuro mejor.
Sergio Noriega Verdugo 3
Luis L. Castro Pionero de la radiodifusión en Mexicali Rubén Castro Bojórquez*
D
on Luis Castro López firmó toda su vida como Luis L. Castro, por la costumbre que se había adoptado de los norteamericanos en los primeros años de Mexicali, de poner la inicial del segundo apellido como letra intermedia (el ejemplo más claro es el de don Abelardo L. Rodríguez. La L. es de Luján, su segundo apellido). En sus últimos años de vida, cuando don Luis ya gozaba de su jubilación, a toda persona que conocía o le presentaban y que se dirigían a él como señor Castro o don Luis, les exigía que le dijeran “Luis” a secas. Con su voz fuerte y autoritaria de maestro que siempre tuvo, les decía: ¡No me digas don Luis! ¡Dime Luis! Por ello, en esta reseña me referiré a don Luis Castro López como ¡Luis! Difícil tarea es relatar en unas cuartillas la vida de un hombre que por su carácter inquieto, creativo, emprendedor, incursionó por más de 80 años en la construcción y desarrollo de una ciudad a la que arribó en 1920, cuando él tenía 12 años y la ciudad contaba con 20, y con una población de 6 732 habitantes.1 Cuando la vida te da la oportunidad de perdurar por 92 años, o los aprovechas o los desperdicias, o dejas un legado o el anonimato será tu destino. Luis aprovechó al máximo esos 92 años. Pionero de la electrónica en Mexicali, de la fotografía, de la filmación de películas, estableció el primer taller de reparación de aparatos electrónicos, creó la primera estación de radiodifusión, incursionó en la religión evangélica, en la masonería, y se convirtió a los 55 años en maestro de electrónica en el nivel de secundaria, donde dejó huella en miles de adolescentes que no solo se prepararon en las artes de la electrónica sino que también abrevaron en la búsqueda de la verdad y el fin último de la vida, a través de los principios de la filosofía que Luis siempre compartió con sus alumnos.
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Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali”, A.C. Censo de 1920.
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Sus orígenes Luis nació con el amanecer de octubre, en el cielo despejado de lo alto de la sierra Madre Occidental de Sinaloa y Chihuahua, en los inicios de la revolución mexicana; las bondades del clima de otoño lo acompañaron siempre. Nació en octubre y se fue en octubre. Su estación de radio XEAO se consolida en octubre de 1932, de allí las iniciales AO, porque dijo: “Adelante octubre”. Los orígenes conocidos de Luis se remontan al año de 1845, cuando nace su abuelo paterno José Castro, en Potrero de los Saucedo, una ranchería del municipio de Mocorito, Sinaloa, quien se casa con Antonia Galaviz su abuela paterna, nacida en el año de 1850 en Navolato, Sinaloa, ellos fueron los padres del padre de Luis, Inés Castro Galaviz, quien nació el año de 1867 en Culiacán, Sinaloa. Por el lado de su madre Felícitas López quien nació en 1882 en el Tule, sus abuelos fueron: Antonio López, quien nace en Mocorito en el año de 1850, contrae matrimonio con Gertrudis Santos nacida en 1858 en el pueblo de Leyva (hoy Sinaloa de Leyva) todos los miembros de su familia fueron avecinados de la zona norte del hoy estado de Sinaloa, entre los ríos Fuerte al norte y Mocorito al Sur, una región agrícola en los valles y minera en las serranías. Luis nace el día primero del mes de octubre de 1908 en San José de Gracia, Sinaloa, pequeño poblado minero que hace frontera con la sierra de Chihuahua. Su padre Inés Castro, y su madre Felícitas López que habían contraído matrimonio en 1905; procrearon siete hijos: Cayetana (1905), Manuel (1906), Rosario (1907), Luis (1908), Tula (1910), Piedad (1912) y Prudencio (1914). En 1915, en plena lucha de facciones en la revolución, Inés, padre de Luis, decide incorporarse al ejército de Francisco Villa, abandonando a la familia la cual no vuelve a saber de él. A falta del jefe de familia, la madre, doña Felícitas demuestra fuerte y decidido carácter (mismo que heredó Luis) y toma el control y futuro de la familia. Decide emigrar a lugares más prósperos y se traslada a Los Mochis, Sinaloa, que prometía
mejores expectativas de trabajo. La travesía es larga y difícil, sobre todo para una mujer de 35 años, sola y con cinco hijos de 10, 8, 7, 5 y 3 años. Los Mochis había nacido el mismo año que Mexicali, en 1903, al cobijo de un ingenio azucarero; al poco tiempo, en este lugar doña Felícitas se entera de que en el norte hay un pequeño poblado que se desarrolla rápido e intensamente, Mexicali, y toma la decisión de emigrar hacia esa población, para lo cual requería recursos que no tenía, por lo que decide trabajar en coser, lavar y planchar ropa ajena para allegarse fondos. Inscribe a Rosario, Luis y Tula en la escuela en los Mochis donde Luis cursó hasta 4º grado. (Cayetana y Manuel fallecieron de pequeños). Durante tres años doña Felícitas juntó el dinero necesario para los gastos de traslado a Mexicali.
En aquel tiempo, Mexicali solo tenía la calle Madero pavimentada, desde la línea internacional hasta la calle México. La orilla del poblado, es decir, los límites donde empiezan a escasear las casas, era la calle Oriente, donde está el mercado municipal. Cuando llovía eran unos lodasales que tenía uno que quitarse los zapatos. Aquí había aproximadamente 15 000 habitantes, de los cuales 10 000 eran chinos y 5 000 mexicanos. Ya estaba por terminarse la construcción del palacio de gobierno; lo llamaban “el segundo Chapultepec”, porque estaba dentro del algodonal; la calle que daba acceso al edificio la abrieron por el centro de los sembradíos de algodón. Atrás de la construcción había unos cañaverales y parras con uvas.
Al llegar se instalaron en un pequeño cuarto ubicado al otro lado del Río Nuevo, pero a los pocos días se cambiaron a dos pequeños cuartos que se ubicaban atrás de la estación del ferrocarril por la calle Altamirano. Se inicia el proceso de cambio de Luis, de vivir en un pueblo escondido arriba en la sierra, ahora se encuentra en el poblado más prometedor de desarrollo de esos años. Se inscribe en la Escuela Cuauhtémoc en el ciclo 1921-1923 para cursar los últimos tres años y concluir su educación primaria (no había escuelas secundarias).
La travesía2 En el mes de octubre inició un viaje que comprendía trasladarse al puerto de Topolobampo, Sinaloa, abordar el barco Unión, que llevaría a su familia al atracadero de la Bomba, ya en Baja California; de ahí trasbordaron en una lancha grande que los acercó al Mayor (Río Hardy), en donde en camión de redilas, que recorrió una vereda terregosa y lodosa, hasta llevarlo a Pascualitos, donde abordaron el ferrocarril Inter-California en vagones de tercera clase, realizando el Su desarrollo laboral 1938. Luis L. Castro. último recorrido hasta Mexicali. El viaje Luis ingresó a trabajar al pequeño duró poco más de dos días. cine Iris mismo que se quemó en 1923, Llegaron a la estación del ferrocarril ubicada en Altamirano propiedad de don Rafael Corella3, haciendo labores de y el hoy bulevar López Mateos; sin conocer absolutamente barrendero y mandadero; inquieto, inteligente y creativo al a nadie, doña Felícitas, convencida de que debía cambiar el poco tiempo sustituye al operador de máquinas. destino de sus hijos, como así fue. En entrevista que Irma Irma Apodaca anotó en la misma entrevista que le realiza Apodaca (1983) le realizó a Luis, este comentó: a Luis, que él comentó: 2
En 1919, las formas de viajar de los Mochis, Sinaloa a Mexicali eran varias, pero las más frecuentes eran dos: De Mochis a Nogales en ferrocarril, luego en ese mismo medio a Mexicali pasando por Estados Unidos, de Nogales a Tucson, Yuma y Mexicali. Este recorrido era más caro, fue por el que optó en 1920 don Eulalio Bojórquez, padre de Amada, futura esposa de Luis. La otra opción era en barco, que recorría los Mochis, Sinaloa, Topolobampo, La Paz, Guaymas, Santa Rosalía y a la Bomba, Baja California.
Entré a trabajar con el señor Corella en el teatro Iris; y llegué a ser el operador de máquinas. Lo único elegante del edificio 3
Rafael Corella (1893-1978) cuyo apodo era El Corellón nació en Guaymas, Sonora, y llegó a Mexicali en 1911. Pronto se convirtió en empresario de salas de cine y productor cinematográfico. Él fue de los primeros amigos de Luis. 5
del teatro era la fachada, por atrás era de lámina y adobe; el interior estaba enjarrado y los asientos eran bancas de madera. Las máquinas eran muy antiguas, se accionaban con las manos; ya después les adaptaron motorcitos. El técnico de la caseta era don Marcos Arruti; le sucedió José Ramírez y más tarde, yo. Había funciones desde las once de la mañana hasta las doce de la noche.
1922. Luis L. Castro.
1926. Luis L. Castro
Y con referencia a la escuela, en la misma entrevista, Luis continuó diciendo: “Yo primero viví en Pueblo Nuevo después nos vinimos a vivir a una casita cerca de la estación del ferrocarril antiguo y entonces entré a la Escuela Cuauhtémoc; ya había iniciado la primaria en Los Mochis, pero aquí la terminé en 1925”. Con la primaria terminada y con los conocimientos técnicos en electrónica, adquiridos en su primer trabajo, Luis instala un pequeño taller en la calle Altamirano, núm. 156 en local propiedad del coronel Galeana, donde atiende todo tipo de reparaciones en aparatos eléctricos, así como de fotografía, cine y radio. (Los aparatos de recepción de onda corta, recibían señales de estaciones de Estados Unidos, principalmente de Los Ángeles, California). Al mismo tiempo se prepara, en cursos por correspondencia, en la escuela Memphis School de Los Ángeles, California. En entrevista4 que le realizó Armando González Martínez Caracoles, Luis le comentó: Efectivamente trabajé como barrendero en el desaparecido cine Iris de don Rafael Corella, (nos dice el Profesor Luis Castro López) de quien me gané su buena amistad, y hasta fue mi padrino de matrimonio cuando en 1932 contraje matrimonio con esta buena mujer. Con la protección y la ayuda de don Rafael, en el garaje particular de su vecino, el señor coronel Galeana en la calle Altamirano núm. 156, donde hoy está la foto Lux, me instalé con un tallercito para la reparación de radios, baterías y pequeños artefactos eléctricos.
A los pocos años Luis concibe la idea de crear una estación radiodifusora en Mexicali ya que en todo el noroeste no existía ninguna estación y las señales que se recibían eran en el idioma inglés. 1942. De izquierda a derecha de pie: Amada Bojórquez de Castro, Luis L. Castro, Tula Castro de Tovar, Piedad Castro de Márquez; sentada Felícitas López Santos, madre de Luis. 6
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Folleto conmemorativo del XX aniversario del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Radiodifusión (STIR). 1974. Armando González Martínez “Caracoles”. Nativo de Mexicali y locutor desde 1935.
El aparato transmisor lo construye con piezas hechas con fierros viejos desechos de la primera guerra mundial y otros materiales. En septiembre de 1931, logró enviar una señal, principalmente musical que se logró escuchar en 200-300 metros a la redonda de la sede del taller. Luis siguió comentando en la entrevista que realizó Armando González: “precisamente un día que jamás olvidaré, el 16 de septiembre de 1931, puse a funcionar mi pequeño transmisor de 10 watts y ¡Al aire! Recuerdo que la primera selección que se tocó fue La Marcha Zacatecas que se me ocurrió porque estábamos en día patrio”. He aquí un detalle curioso, sigue platicándonos el profesor Luis Castro López:
1944. Tarjeta de la estación de radioaficionados de Luis.
En el instante que nos dimos cuenta que ya estábamos en el aire di la llamada o la identificación de mi transmisor engañando al poquísimo auditorio que podría estar escuchando, diciendo: Señoras y Señores, esta es XEM transmitiendo desde Los Ángeles California en ocasión de la celebración de las fiestas patrias de México. Escuchan ustedes a la famosísima Banda de la Policía de la ciudad de México, bajo la dirección del inminente músico mexicano don Fernando Torreblanca…! ¡Mientras se escuchaba como ya lo dije “La Marcha Zacatecas” en disco! y dije que estábamos transmitiendo desde Los Ángeles porque francamente sentí temor de que no fueran a creerme que nacía la primera difusora comercial de Mexicali. Como loco recorrí la vecindad visitando sorpresivamente casas de amigos y comercios, sintonizándoles en sus receptores mi frecuencia ya en el aire. Así fui avisándole a los pocos
1947. Amada Bojórquez de Castro en la estación de radio.
residentes que tenían aparatos de radio que ya ¡Mexicali contaba con una difusora! Con el correr de los meses y corregidos algunos detalles técnicos nos escuchaban en el Valle Imperial y en toda nuestra ciudad.
Todo el fin del año de 1931 y principios de 1932, Luis mejoró la potencia del transmisor, por lo que la señal ya se escuchaba en toda la ciudad y el valle de Mexicali, así como en el valle Imperial. Solicitó los permisos necesarios, primero como XEM, le asignan las letras XEA y luego él solicita las cambien por XEAO dado que para él era muy importante lograr que su estación tuviera las letras AO que significaban “Adelante Octubre”. Oficialmente la XEAO inicia en octubre de 1932. En ese año de 1932 la economía de Mexicali era precaria, la crisis económica de Estados Unidos iniciada en 1929, llamada
1947. Lydia Castro Bojórquez en la estación de radio. Todos los hijos tenían que hablar por la radio. 7
1932. Foto de la boda de Luis y Amada. De izquierda a derecha: Rafael Corella, padrino, Luis L. Castro y Amada Bojórquez, Viula de Corella, madrina.
la gran depresión, así como la abrogación de la Ley Seca en ese mismo país, ocasionaron la baja en los negocios del juego, venta de licor y otros, esto hizo que los habitantes de Mexicali pasasen penurias económicas. Esta situación contribuyó a que la primera estación de radiodifusión en Mexicali no fuera negocio. Sumado a lo anterior, Luis había aceptado de socio a Juan Chávez. Al respecto, Armando González Martínez anotaría lo que Luis comentó de este incidente en 1974:
A la creación de la estación, a Luis le tocó ser el primer locutor de Mexicali. En la entrevista comentada dijo: Desde luego me tocó ser el primero por razones de que alguien tenía que hablar cuando menos en el periodo de pruebas. Luego casi obligué a Cuauhtémoc Viniegra para que me sustituyera cuando yo tenía que salir cuando menos a escuchar nuestro sonido, Viniegra que aún vive aquí en la ciudad es en realidad el primero de todos. Luego un señor Alfonso Villaseñor,
Poco tiempo después se unió a nosotros por amistad con el señor
Juan Chávez, Belisario Domínguez (muy bueno por cierto),
Corella, Juan Chávez que a la sazón trabajaba en el municipio
Antonio Eguía Tello, Manuel Lucero, Miguel Téllez Gutiérrez,
regando con autotanque las calles de la ciudad. Se proponía
Prudencio Castro mi hermano, Antonio Eguía Gutiérrez,
vender anuncios y para el caso empezó a anunciar, para que lo
Elena Tonella (hoy de González Vega) y otros que trabajaron
oyeran los comerciantes, que podrían anunciarse.
esporádicamente.
De 1932 a 1938, años en los que Luis y Juan Chávez manejaron la estación, los problemas económicos y el jaloneo entre ellos ocasionó que Luis decidiera vender su parte a Juan. Luis comentó al respecto en la misma entrevista:
Para poder entender cómo Luis se animó a vender su creación que soñó por varios años hasta su realización, vale la pena anotar lo que Armando González Caracoles opinó sobre Juan Chávez:
En 1938 aproximadamente, ya no soportaba aquellas terribles
Juan Chávez fue siempre la madre de las discordias, unos
miserias y por dificultades muy especiales también me cansé de
lo aceptaban y otros le profesaron odio hasta su muerte….
los jaloneos de Juan Chávez y un día muy a lo Luis Castro le
Juan, muy astuto por cierto, digamos muy sagaz, mantuvo
regalé el negocio; sin más ni menos le dejé la difusora.
siempre una amistad si se quiere hipócrita o falsa…. Si Juan
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1947. Reunión del inicio de la iglesia bautista en Mexicali. Luis L. Castro la promovió y él tomó la foto donde se observa a Amada, su esposa, en la segunda fila casi al final, y a sus hijos en la primera fila: Joel, Norma, Rubén (de traje negro, sonriente y con las manos juntas) y Lydia sentada en las piernas del ministro que está sentado.
Chávez fue así o asá que lo sigan juzgando mal o bien según la herida, según la pedrada, los que vivieron con él…, y si como por ejemplo también debe aclararse que si es cierto que Juan le jugó duro a don Luis Castro López con la propiedad de esa difusora y que además posiblemente se adjudicó la posesión del lote urbano de la Zuazua donde transmitió la “O” por muchos años arrebatándoselo al viejo español don Aurelio García Pérez.
Al dejar la estación en manos de Juan Chávez, Luis vuelve al taller de radio que había dejado medio olvidado. A través de los años, de 1938 a 1948 el taller se ubicó en calle Altamirano y avenida Madero, donde nació la estación, posteriormente en avenida Madero y calle México y posteriormente en avenida Obregón y calle B, al final de los años cuarenta Luis deja el taller a su hermano menor, Prudencio, quien lo ubica en calle Morelos entre las avenidas Lerdo y Zuazua, quien le puso el nombre de taller Sonora. Prudencio había aprendido de Luis todas las artes de la electrónica. Nuevas incursiones laborales Durante la década de los años de 1950, Luis incursionó en varios tipos de trabajo, aunque no abandonó del todo los servicios que prestara de radio técnico a las radiodifusoras
XEAO, XEAA y XECL5, a las cuales atendió como radiotécnico por muchos años, así como a la Asociación Algodonera del Valle de Mexicali, que le atendía todo el sistema de comunicación a base de radios, en todo el valle de Mexicali. De igual manera los trabajos que le brindaba a las escuelas primarias Benito Juárez y Leona Vicario, en la filmación de películas de los eventos cívico-culturalessociales que celebraban. En el año de 1951, su amigo Lorenzo G. Cabañas, agente aduanal, lo invitó a que, utilizando su patente, se encargara personalmente de clientes que él no podía atender por lo que durante poco más de 10 años se dedicó a esa actividad. Procuró incrementar sus clientes entre los empresarios chinos que había cultivado como amigos años atrás cuando era activo miembro de la iglesia metodista. Entre ellos a Chau Gee Chiu, importante comerciante abarrotero de Mexicali. Adicionalmente a las actividades mencionadas, en los años de 1959 a 1962 se desempeñó como visitador auxiliar recaudador del H. III Ayuntamiento, recomendado por el señor José Ángel Anaya, contador del municipio, en la 5
Las primeras radiodifusoras en Mexicali fueron: la XEAO, en 1932 de Luis Castro López, XEAA de Alfonso Lagarra en 1937, XECL en 1938 del mismo señor Lacarra y XED en 1947, de Carlos Blando.
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1947. La familia leyendo en el comedor de la casa. Al fondo el piano, de izquierda a derecha: Olga, Norma, Rubén, Joel, Luis y Amada con Lydia en brazos. Luis tomó la foto.
1950. Luis y Amada en el patio de su casa de calle C número 440.
1955. Casa habitación de los Castro Bojórquez por más de 30 años, de 1939 a 1970, ubicada en calle C núm. 440 entre Lerdo y Zaragoza, sección segunda, Mexicali, B. C. (A la derecha un bello e inmenso pino salado). 10
administración del doctor Federico Martínez Manatou (1960-1962). En esta actividad cultivó amistad con el cirujano dentista Ernesto Sánchez Valenzuela, que se desempeñaba como director de La Casa de la Juventud, quien lo invitó a que impartiera cursos de electrónica a los jóvenes inscritos en esa institución. Invitación que aceptó y por más de tres años también ejerció esa actividad. En el ciclo escolar de 1962-1963 en la Secundaria Federal núm. 1, 18 de Marzo (escuela en la que estudiaba su hijo Hugo Abel) se jubiló el maestro que impartía la actividad tecnológica de electrónica. Situación que aprovechó Hugo Abel para proponerle a la profesora Isabel Macías de Calderón, directora del plantel, que Luis se encargara de impartir ese taller, propuesta que aceptó la directora. Ese fue el inicio de una larga carrera como profesor de electrónica, no solo en la Secundaria núm. 18, sino posteriormente en la secundaria particular Venustiano Carranza, y en la Secundaria Técnica núm. 21. Después de 26 años de prestar sus servicios en el sistema federal de educación en la Secundaria Federal núm. 18 y en la Secundaria Técnica núm. 21, se retira a gozar de su pensión. Se inició como maestro a los 55 años, se jubiló después de 26 años de servicio cuando cumplió los 81 años de edad, gozó de su pensión durante once años. La religión Otra de las actividades que Luis cultivó con pasión durante toda
Una estación radiodifusora en esta ciudad Es invención de Luis. L. Castro y la hizo con desperdicios. Hace tres días que me distraía con un radio en Calexico, buscando algo que me satisfaciera el gusto, cuando encontré música mexicana; y cual sería mi sorpresa cuando al terminar la pieza de música se anunciaba otra, por la “La Voz de Mexicali” estación radiodifusora de 10 watts, etc. Intrigado por aquel anuncio me eché en busca de la estación. Por la calle Morelos y a media cuadra del Parque “Héroes de Chapultepec” localicé la estación. Bajo unas láminas de hierro y figurando un cuarto, donde no cabe un automóvil, encontré el taller de electricidad Luis L. Castro, un chamaco que apenas hace dos años se ha dedicado al estudio de la electricidad. Castro jamás ha visto una estación difusora, pero en magacines y periódicos ha tomado algunas ideas y tras de muchos experimentos, logró arreglar un aparato que, junto al suelo, con piezas viejas 1932. Primera plana del diario El Regional de fecha 18 de junio de 1932, donde se publicó nota adjunta.
de radio, de Ford y hasta un bote de avena que le sirve de carrete trasmisor, por haber liado en él el alambre, trasmite a distancia los sonidos, teniéndose noticia de que no sólo
su vida fue la religión cristiana evangélica. Profesó el catolicismo superficialmente desde su nacimiento hasta los 32 años, cuando un incidente le hace cambiar de rumbo. Uno de sus hijos, adquiere una infección en los ojos al nacer, por lo que estuvo a punto de quedar ciego. La madre de Luis, Felícitas, le conmina a que encomiende a Dios la salud de su hijo. La abuela Felícitas tenía poco más de 10 años que profesaba la religión pentecostés (de la fe en Cristo Jesús). Ella asistía al templo que se ubicaba en Pueblo Nuevo, en calle Tercera y Puebla. Luis tenía muchos amigos chinos de los cuales uno de ellos le recomienda que acuda al templo metodista ubicado en avenida Juárez núm. 79, lo que hace Luis, y con devoción pide por la salud de su hijo. A los días la enfermedad cede y todo vuelve a la normalidad. Desde ese momento la vida de Luis cambia totalmente y se desenvuelve principalmente alrededor del templo metodista ubicado en la Chinesca, durante toda la década de los años de 1940. En Mexicali, la iglesia metodista data desde el año de 1911, a través de la instalación de una pequeña misión en la zona
se oye en la ciudad, sino hasta lugares distantes como El Centro California. Lo más curioso es que este chamaco se ha burlado de los principios y reglas de tales aparatos; está debajo de una red de alambre de alta tensión, su aparato junto al suelo sin torres ni antenas y pudiera decirse “sin aparato” porque lo que él tiene allí es más un tablero de Ford, que después de haber construido veintidós aparatos logró que este diera el resultado apetecido. “Hoy no he comido de gusto” nos decía Luis, “al fin triunfé, ahora solo me falta darle más fuerza, pero eso no tiene chiste, lo esencial era que se oyera a distancia, el principio es bueno”. Que prospere. En primera columna de la primera plana del diario El Regional de fecha 18 de junio de 1932.
de La Chinesca, cuando esta zona empieza a desarrollarse durante la segunda década de vida de Mexicali (1910-1920). La comunidad china recibe el apoyo de empresarios chinos ricos de San Francisco para construir un primer templo en 1917 el cual es destruido por incendio ocurrido en mayo de 1923. El templo fue de nuevo construido con mejores 11
1945. Certificado de locutor de estación de radiodifusión.
1934. Certificado de radio telefonista de 1ra.
1942. Boleta de afiliación al Comité de Defensa Civil (segunda guerra mundial) como miembro del 1er. Batallón de voluntarios del valle de Mexicali. 12
materiales (de concreto armado) en ese año, pero otro incendio ocurrido en el año 1944 lo dañó severamente, pero de nuevo la comunidad china de California lo reconstruyó en 1946.6 Este templo reconstruido es el que actualmente se ubica en La Chinesca. Es importante comentar que esta edificación desde sus inicios dio servicio a la comunidad china de Mexicali como escuela y actividades sociales y recreativas. El edificio consta de tres niveles; un sótano para actividades sociales y recreativas, primer piso donde se encuentra el templo y un segundo piso de salones de clases y casa pastoral. En la parte posterior del edificio se localiza una cancha de basquetbol y volibol. Durante los diez años que comentamos (1940 a 1950) Luis fue el hombre fuerte de la iglesia de Mexicali: predicaba (decía el sermón), organizaba, promovía, evangelizaba y se convirtió en el brazo derecho de los pastores y ministros nombrados desde Estados Unidos. Primero una ministra o pastora, señorita Rosa Fe Narro (1940-1947), mujer con cualidades extraordinarias. Rosa tenía tres hermanas que se involucraron en la iglesia, Lydia Narro que era la pianista oficial de la iglesia, las otras dos eran maestras en la escuela dominical. La posición de pianista era muy importante por lo que cuando la hija de Luis, Olga, aprendió a tocar el piano, se convirtió en la pianista de la iglesia. La auxiliar de la ministra Narro era la señorita Ruth Ferguson, mujer muy activa en las labores de la iglesia. Posteriormente se nombró pastor a Primitivo Villanueva, que permaneció al frente de la iglesia de Mexicali hasta que la entregó a la organización mexicana de la iglesia metodista de México, en el año de 1951. Durante los dos años que duró la reconstrucción del templo (1944-1946), dañado por el incendio del año de 1944, Luis se dedicó a promover el cristianismo evangélico en otras zonas de la ciudad de Mexicali. Promovió y fundó la primera iglesia bautista en Mexicali, que se ubicó en Pueblo Nuevo, por la avenida Michoacán ente las calles 6ª y 7ª. Así también asistió y apoyó a la creación de la iglesia metodista libre en Mexicali, en la colonia San Isidro en la calle Celaya esquina con los Reyes, donde todavía se encuentra. Tres razones causaron el desánimo de Luis que hicieron que se separa de la iglesia (aunque nunca dejó de ser profundamente cristiano). Primera, la muerte de su madre Felícitas en el año de 1951. Segunda, la transferencia de la iglesia de Mexicali a la iglesia metodista de México; retiraron todo el personal que dependía de la 6
Por otro lado hay que decir también que la iglesia metodista de Mexicali dependió de la organización correspondiente de California, EUA, desde su fundación hasta 1950 que pasó a ser administrada por la iglesia metodista de México.
1944. Licencia de predicador local de la iglesia metodista latinoamericana.
iglesia de Estados Unidos de América, todos ellos amigos de Luis y llegó gente nueva designada directamente por México y; tercera, le dedicaba tanto tiempo a la iglesia, que desatendió su taller de radio y por consiguiente la economía familiar no funcionaba correctamente. Cuando Luis se involucró en la iglesia no lo hizo solo, toda la familia tuvo participación con él, la más destacada fue la de su hija Olga que sirvió como pianista por casi tres años. Luis compró un piano en el año de 1942 para que sus hijas aprendieran a tocarlo y funcionaran como pianistas de la iglesia, lo que solo Olga realizó y por el año de 1947, ya era pianista de la iglesia. Vale la pena comentar que toda la familia Castro Bojórquez se ajustó a las rígidas reglas de comportamiento de la iglesia metodista: no fumar, no beber bebidas alcohólicas, no decir malas palabras, no bailes, no mentir, no salir sin permiso, obedecer, no vagar, no sexo fuera del matrimonio, ser honestos, respetuosos, no gritar. En fin, normas enérgicas de conducta que practican las iglesias evangélicas.
La masonería En las décadas de 1940 y de 1950 la masonería era practicada por un buen número de personalidades liberales que participaban en todas las actividades de la sociedad y lideraban a grupos participantes en la industria, comercio, gobierno y educación. Luis ingresó a esta fraternidad cuando tuvo oportunidad de conocer el código moral masónico que contenía principios muy similares a la iglesia metodista a la cual pertenecía. Su ingreso a la Logia Prometeo núm. 5 de Mexicali se dio a mediados de los años de 1940. En esos años las logias masónicas eran muy activas; en Mexicali funcionaron las siguientes: Precursora núm. 2, Prometeo núm. 5, Regeneración núm. 6, Chee Kung Tong núm. 9 y en la colonia Guerrero del valle de Mexicali la logia Vicente Guerrero núm. 11. También existían logias en Tijuana, Ensenada y Tecate, así como en localidades del sur de California con las cuales se tenían muchas relaciones continuas y cercanas. 13
1992. Credencial de miembro del Partido Revolucionario Institucional. Esta credencial la obtuvo, siendo su hijo Hugo Abel presidente del Comité Directivo Estatal.
En la parte de atrás se encontraba un patio grande con una cancha para básquetbol, volibol y fiestas al exterior. Este edificio fue demolido en los años de 1970 por su constante deterioro ya que era de estuco (madera forrado con cartón y alambre, forrado con emplaste de cemento-arena). El tempo masónico de la logia Chee Kung Tong fue construido en 1923 en la zona de la chinesca, avenida Juárez entre calles Azueta y Altamirano. Luis obtuvo todos los grados de masón hasta alcanzar el grado 33, máximo en la jerarquía masónica. Además fungió como venerable maestro de su logia, la Prometeo núm. 5, y perteneció a la Organización Internacional de los Shinners. En los años de 1954, la masonería de Mexicali formó un grupo de hijos de masones denominado Benito Juárez, filial de la organización internacional “De Moley”, a la cual pertenecimos Luis mi hermano y el que esto escribe, hijos mayores de Luis. Otros hijos de masones, que pertenecían a este grupo fueron: Pioquinto Espinoza Bojórquez, Gregorio y Pedro Vidal Rosas, Flavio Artemio Jiménez Castro y otros más. Luis participó activamente por más de 20 años en los eventos masónicos, visitó ciudades del sur de California, Tijuana, Ensenada, Tecate y Ciudad Morelos en el valle de Mexicali. El código moral masónico (Díaz, 1945) establece entre otros preceptos los siguientes: 1. Adora a Dios, el gran arquitecto del universo. 2. Ama a tu prójimo. 3. El verdadero culto a Dios consiste en las buenas costumbres. 4. Haz el bien, por el amor al bien mismo. 5. Ama a los buenos, compadece a los débiles, huye de los malvados, mas no odies a nadie. 6. Evita las disputas. 7. Respeta a las mujeres, jamás abuses de su debilidad. 8. Si el gran arquitecto del universo te da un hijo, dale gracias; pero tiembla por el depósito que te confía. Haz que hasta los diez años te tema; hasta los veinte te ame y hasta la muerte te respete. 9. Lee y aprovecha, ve e imita, reflexiona y trabaja. 10. Sé siempre contento para todo, con todo y de todo.
El edificio donde funcionaban estas logias de Mexicali (con excepción de la Chee Kung Tong) estaba ubicado en avenida Reforma y calle D y se había construido en 1926. Era un edificio de dos pisos, en la planta baja un salón social que se usaba para eventos varios, sobre todo bailes, en la planta alta era el templo masónico, donde se celebraban las reuniones de masones con todo el protocolo que guardaba la masonería.
La familia Luis formó una familia muy numerosa, él alcanzó a conocer a su primer tataranieto, último miembro de una familia que en el año de 2000, cuando él falleció. Solo de descendientes directos: hijos, nietos, bisnietos y tataranietos sumaban, 105 miembros, adicional a todos los descendientes de sus hermanos y de la hermana de su esposa Amada.
1934. Credencial de miembro del Partido Nacional Revolucionario.
1961. Credencial de miembro del Partido Revolucionario Institucional.
14
1985. Luis con sus hermanos. De izquierda a derecha: Prudencio, Piedad, Tula y Luis. En la casa de Luis en Obeliscos, Núm. 215, Fraccionamiento Los Pinos, Mexicali, B. C.
Inicio con la transcripción de lo que anotó su hija Mercedes en 1994.7 A la edad de 24 años un 15 de febrero de 1932 une su vida a la de una bella mujer, Amadita Bojórquez Apodaca, hija del agricultor y comerciante Don Eulalio Bojórquez Gálvez y la señora Mercedes Apodaca Figueroa y su única hermana Rosario, familia procedente de Los Mochis, Sinaloa; mujer que lo apoyaría y ayudaría a formar esta familia de la cual yo me siento tan orgullosa. Hombre de carácter fuerte, de decisión, honrado y cabal, unido a una dama honesta, sensible y llena de virtudes, juntos plasman en nosotros sus hijos toda una gama de valores: de lealtad, de responsabilidad, de esfuerzo y de amor. Olga, Norma, Luis, César Rubén, Joel, Lidia, Hugo Abel y yo Mercedes Felícitas, somos los ocho hijos procreados de este matrimonio, hablar de cada uno de ellos sería otro capítulo de esta historia, solo les diré que en nosotros está muy arraigado el concepto familia, todos nos amamos, nos apoyamos, nos respetamos y aún nos sigue uniendo ese bello centro que son nuestros padres. El hogar tuvo varios domicilios pero el más recordado es el del barrio de la calle C, 440 donde todos cultivamos y dejamos grandes amistades. 7
Luis Castro López y la Radiodifusión en Baja California. Historia de mi padre, Mercedes Felícitas Castro Bojórquez, pp. 7-9, octubre de 1994.
Había que agregar que otras familias surgieron de Felícitas, madre de Luis, aquella mujer que un día decidiera emigrar con sus hijos al valle de Mexicali: Estas familias son: Los Castro Bojórquez cuya cabeza es Luis, familia Tovar Castro de la tía Tula, matrimoniada con Emigdio Tovar de donde surgieron: Cesárea, Ruth, Leonor, Martha, Elizabeth y Job. El matrimonio regresó a Sinaloa a radicar en Mazatlán. Familia Márquez Castro, de la tía Piedad, matrimoniada con Manuel Márquez de donde surgieron: Gloria, Manuel, Delia, Irma, Rebeca, Raúl, José Luis y Rosana. Familia Castro Cruz, del tío Prudencio (Lencho) matrimoniado con Graciela Cruz, de donde surgieron: Graciela (Chelita), Prudencio (Lencho), Livier, David y Benjamín. Por parte de Amada, esposa de Luis, su hermana Rosario contrajo matrimonio con Pioquinto Espinoza, formaron la familia Espinoza Bojórquez de donde surgieron: Raúl, Pioquinto, Edmundo (Nere) y Rosa María. Con los años muchos familiares de Luis y Amada también emigraron a Mexicali, por lo que la familia formó un conglomerado importante para el desarrollo de Mexicali. Recuerdo a la tía Toña y su esposo Ciro Pozo, tía Edelmira, tía abuela Lucrecia, tías: Reyna, Sara, Lupita, Luz, los tíos Toño, Calo, Poncho, Teto, y en fin, una numerosa familia se asentó en Mexicali. 15
1955. Grupo de masones frente al edificio de la Logia Masónica de Mexicali. Ubicado en avenida Reforma y calle D (ya demolido). En la foto Luis es el penúltimo de la primera fila de pie, con mandil y manos atrás. Otros masones identificados son: Antonio E. Banuet, Pioquinto Espinoza y Cirilo Calderón, sentados en la primera fila, atrás: Antonio A. Banuet, Zacarías Miramón, Fidel Barranco, Gabino Mancillas, Jesús Espinoza, Gregorio Vidal y otros más.
La familia Castro Bojórquez, Luis y Amada, tuvieron su primera casa en callejón Madero, entre calles A y B, la cual la rentaban. En 1939 adquirieron en propiedad en $900 (novecientos pesos 00/100 M.N), terreno y construcción ubicado en calle C, 440, sección segunda de Mexicali, esta casa sirvió de hogar de la familia por más de 30 años, hasta 1971 que cambiaron de residencia a Obeliscos núm. 215, fraccionamiento Los Pinos, pero los recuerdos y vivencias que durante 30 años en la casa de la calle C núm. 440, perduran en la mente de los hijos de Luis y Amada. El barrio de la calle C estaba enclavado entre la avenida Lerdo al norte, el barranco del dren 134 al sur, la compañía Jabonera del Pacífico (La Jabonera) al oeste y la Cervecería de Mexicali (calle D y Zaragoza) al este, los vecinos mayoritariamente eran trabajadores de esas dos empresas. La casa está ubicada en calle C y callejón Lerdo, mismo que terminaba en el barranco que en el centro corría agua por un canal de tres a cinco metros de ancho correspondiente en un principio a drenes agrícolas, pero con los años se fue contaminando por las aguas negras que se arrojaban a este dren por no existir un sistema de drenaje en la ciudad hasta 16
1958 que el gobierno de Braulio Maldonado, gobernador del estado de Baja California (1953-1959), construyó el colector principal que recorría las calles Arista, calle D, avenida Zaragoza, calle C y avenida Lerdo, y pasa precisamente por medio de este barrio. La casa de los Castro Bojórquez, originalmente consistía en una construcción de adobe de dos cuartos grandes, con pisos de tierra y anexo otra construcción de dos pequeños cuartos de piso de tierra, con los años Luis la convirtió en una residencia de seis habitaciones: sala, cocina, comedor, tres recámaras y un baño. La casa estaba enclavada en un terreno muy grande donde Luis lo aprovechó y convirtió en una preciosa huerta con árboles de moras, naranjas, granadas, palmas datileras, peras y plantas de vides. Cada año producían: uvas, moras y granadas principalmente. Desde su llegada a esta casa Luis instaló una gigantesca antena para captar las señales de radio aficionado e iniciando los años 50´s le adaptó una antena de televisión para recibir la imagen de Los Ángeles. Fue la primera familia en Mexicali en tener televisión.
1983. Evento conmemorativo del 50 aniversario de la creación de la Escuela Secundaria Agrícola, luego Federal Núm. 18 y hoy Secundaria 18 de marzo. En el presídium, de izquierda a derecha: No identificado, no identificado, general Francisco Fernández Solís, arquitecto Rubén Castro Bojórquez, rector de la UABC, y como egresada invitada especial, profesora Celia Hernández Ladrón de Guevara, directora, Luis L. Castro, profesor de electrónica y otra persona no identificada.
La casa tenía una ramada muy grande donde en verano dormíamos en catres, con mosquiteros y sobre sábanas húmedas. Esto antes de que existieran los coolers (humificadores de aire) y que el aire acondicionado llegara a Mexicali. Las excursiones de los hijos varones de Luis se concretaban a recorrer el barranco, La Jabonera, que tenía el atractivo de los cerros de algodón, desde donde se tiraban clavados, y a la cervecería, a subir a la parte más alta del tanque elevado de agua desde donde se observaba toda la ciudad; recorrer el barranco, desde la calle C hasta la G al este, pasando por la casa del Chivero: al oeste hasta el puente que era el ingreso a la Jabonera y otro atractivo era jugar béisbol en la mitad de la calle que no estaba pavimentada. Bellas décadas de los años de 1940 y 1950. Luis fue un hombre de familia, le atraía realizar excursiones y pasear con su esposa y todos sus hijos. En mi memoria quedaron grabados los paseos a los balnearios (canales) de los años de 1940 y 1950: Wisteria, era una estructura de concreto que servía para regular el agua del canal principal del oeste y tenía un desagüe que formaba una poza o alberca. Se encontraba en el hoy bulevar Héctor Terán y la calle que ingresa a la colonia Morelos. Otros lugares similares que visitábamos eran: Compuertas, El Flum, la catorce y esporádicamente otros canales.
También en la misma ciudad, las visitas a las familias de sus hermanos y amigos eran frecuentes, recuerdo la casa de mi tío Lencho en avenida Larroque y calle I, colonia Nueva, la de mi tía Piedad en la Zona Urbana del exejido Zacatecas, el tío Pío en la calle A y Reforma, la tía Toña en callejón Madero y calle B, la tía Lucrecia en la colonia Héroes de Nacozari, la familia Silva en la colonia Industrial, la familia Sánchez en Pueblo Nuevo y muchas otras más. En los años de 1940 todas estas casas contaban con huertos frutales y gallineros, y se surtían de agua de un canal que pasaba por frente al lote de la casa que tenía un estanque (reservoir) para almacenar agua, el cual casi siempre tenía peces y sapos. Los perros no faltaban en ningún lugar. Con frecuencia salíamos de la ciudad a lugares cercanos. Los más visitados fueron los Ranchos del Abuelo materno (padre de Amada) le decíamos “Papá Bo”, el primero se ubicaba en la colonia Nuevo León, pegado al kilómetro 57 y el otro en la colonia Zacatecas por el mismo rumbo. Eran frecuentes las idas a San Luis Río Colorado a partir de 1951 que su hija mayor Olga se casó y cambió su residencia a esa población. En esos años realizaba los viajes a la Rumorosa, a Picachos, mismos que fueron relatados en otro artículo (Castro, 2014). Otros lugares que visitaba con toda la 17
1994. Homenaje al pionero de la radiodifusión en Mexicali, don Luis Castro López. En la foto de izquierda a derecha: Javier Fimbres presidente de la Asociación de Radiodifusoras de Baja California, Eduardo Andrade Cisneros, presidente del grupo político Lázaro Cárdenas, Rogelio Solís (conductor), don Luis Castro López, licenciado Francisco Pérez Tejada, presidente municipal de Mexicali, Salvador Peregrina, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Radio Comunicación (STIR) y Jesús Ruiz, director de la empresa Radiorama propietaria actual de la radiodifusora XEAO.
familia fueron Tijuana, Campo en California, Estados Unidos; Ciudad Morelos, San Felipe, Hechicera, Algodones y otros más que escapan a mi memoria. Vale la pena comentar que con el paso de los años, todos los hijos de Luis contrajeron matrimonio y le dieron a Luis y Amada 32 nietos vivos y dos que fallecieron de pequeños. Los matrimonios que formaron sus hijos son: Olga con su esposo Eduardo Ahumada Castillo, hijos; Eduardo, Yolanda, Luis Ernesto, Edmundo, Mary y Esequiel Ahumada Castro. Norma con su esposo Jonathan Díaz Cárdenas: hijos: Azucena, Jonathan, Alicia y Célica. Dos pequeños fallecieron Javier y Blanca Esthela Díaz Castro. Luis con su esposa Rosario Ávila: hijos: Luis, Ricardo y Carola Castro Ávila. César Rubén; hijos: con un primer matrimonio César Rubén y Leticia Castro Figueroa y con Elsa Vizcarra Lomelí: hijos: Luis Carlos y Marielsa Castro Vizcarra. Joel con su esposa Rosita Larios. Hijos: Rosa Amada, Miriam y Erika Castro Larios. Lidia con su esposo Mario Gutiérrez: hijos: Mario, Lidia, Mauricio y Martín Horacio Gutiérrez Castro. Hugo Abel con un primer matrimonio; hijos: Hugo Abel Castro Duarte y con Rebeca Vizcarra Lomelí, hijos: Rebeca, Héctor Alberto y Emiliano Castro Vizcarra. Mercedes Felícitas con su esposo. Guillermo Lamadrid Figueroa; Hijos: Guillermo, Rodrigo, Cristina y Fernando Lamadrid Castro. 18
Luego siguieron los bisnietos que llegaron a 68 en el año 2000, y la primera tataranieta que nació el 8 de octubre de 1998 (dos años antes que Luis falleciera) Ailed Muñoz Ahumada, bisnieta de Olga, nieta de Eduardo e hija de Angelita. El 2 de agosto de 1984 fallece Amada la compañera de Luis, madre abnegada y abuelita cariñosa. Un lamentable accidente acaba con su vida, a los 70 años de edad. Luis de 76 años, todavía joven y fuerte, vuelve a contraer matrimonio el 6 de agosto de 1985 con una buena mujer Graciela Valenzuela, quien lo acompañó sus últimos años. Ella fallece en el año de 1999 y Luis llegó al siglo XXI sano, fuerte y enérgico, como él era. Sus amigos Luis fue un hombre que tuvo en muy alta estima a sus amigos. Durante el desarrollo de su vida siempre se vio acompañado de compañeros de trabajo, familiares o simplemente conocidos. Su primer gran amigo lo fue Rafael Corella “El Corellón” empresario de múltiples facetas, de cine, tanto promotor como productor de películas y otro tipo de inversiones que realizó durante las décadas de 1920 hasta 1960. Don Rafael Corella fue el primer jefe de Luis en el cine Iris. Posteriormente lo apoyó a construir la estación de radio, fungió como su padrino de bodas cuando Luis se casó con Amada Bojórquez Apodaca en 1932. También fueron vecinos, ya que Luis vivió en calle C entre Lerdo
1954. Luis y Amada con sus primeros nietos. En la foto de izquierda a derecha: Amada, Eduardo Ahumada, nieto Eduardo, nieta Yolanda, Olga de Ahumada, Luis Castro López, abajo: Meche (volteada), Lydia, Joel, hincado y Hugo Abel.
y Zaragoza y el Corellón, vivió con su esposa Viula en Avenida Obregón entre Calle B y C. Esa amistad la conservó Luis hasta los años de 1970, cuando fallece don Rafael. Otro de sus grandes amigos lo fue Pioquinto Espinoza Burgueño, ya que fueron concuños, Luis y Pioquinto fueron los esposos de las únicas dos hijas que procreó el matrimonio de don Eulalio Bojórquez y Mercedes Apodaca, Rosario, esposa de Pío, y Amada, esposa de Luis. Pioquinto fue agente aduanal por más de 30 años y él y Rosario procrearon cuatro hijos: Raúl, Pioquinto, Edmundo y Rosa María Espinoza Bojórquez. Su amistad duró el resto de sus vidas de casados hasta el fallecimiento de Pioquinto en el año de 1972. También llevó una amistad cercana con las hermanas de Pioquinto: Blanca, Lupe, Lola, Perla, pero principalmente con Jesús y su esposa Juanita. Los amigos que más frecuentaba durante su participación en la iglesia metodista de Mexicali fueron: don Ernesto Mellado, funcionario de la Jabonera del Pacífico; don Julio Martínez, albañil, además, el señor Zepeda, señor Silva, Rosa Fe Narro, Primitivo Villanueva, señor Fonseca y familia Esquivel.
En la década de los años de 1950 sus amigos más frecuentados fueron: José Ángel Anaya y esposa, Julio Villanueva, Felipe Mosso y las familias Márquez y Apodaca. En la masonería: El profesor Salvador Jiménez Gómez, Cirilo Calderón, Jesús López Gómez, Fidel Barranco, Antonio A. Banuet y Antonio E. Banuet, doctor Francisco Dueñas, doctor Esteban Vargas Barreto, Gabino Mancillas, Eleazar Ortega Hernández, licenciado Pedro Castro López, profesor Manuel Covantes Rincón, José Rizzo Cavichiolo, Jesús Eguía Molleda y otros más. En su larga carrera de maestro fueron muchos a los que frecuentaba donde destacan los profesores: Noé de la Peña, Rigoberto Álvarez, Sotero Medina, Héctor Siqueiros, Celia Hernández Ladrón de Guevara, Manuel López García, Isabel Macías de Calderón, Gustavo Casanova, Jesús Lamadrid, Francisco Jasso, Pedro Astudillo Mier, y muchos más. En la radio, ingeniero Adalberto Walther, señor Simón Farah, Guillermo Sánchez, Rodolfo Ramírez, Cuauhtémoc Viniegra y otros más. Una larga vida llena de continuos cambios te allega nuevos amigos, pero con los años estos se van, pocos llegan a los 92 años de edad, por eso Luis comentó cuando cumplió los 88 19
1945. Tarjeta de felicitaciones que enviaba Luis a sus amigos en navidad y año nuevo.
1933. Amada, esposa de Luis, con su primera hija Olga.
que ya se quería ir. La mayoría de sus amigos habían partido al eterno descanso y a pesar de que con tantos años todavía era un hombre fuerte y lúcido, se encontró solo ante la vida. Pero hay que aclarar que por muchos años después de cumplir los 80 él decía ¡Yo me voy a morir 10 años después de que me dé la gana! Y cuando quiso a los 88, todavía le faltaban ¡diez! Afortunadamente Dios siempre fue su buen amigo y se lo llevó a los 92 años.
con el estado de California, de Estados Unidos, ofrecía todas las oportunidades que a un joven se le podía proporcionar, y Luis las aprovechó. En su primer trabajo que tuvo ascendió rápidamente hasta llegar a ser el técnico responsable del equipo de máquinas del cine Iris. A la par terminó su instrucción primaria y estudió por correspondencia las ciencias y tecnologías de la electrónica de esos años. En ese sentido, no habían pasado ni 10 años desde que se había instalado la primera estación de radiodifusión en Estados Unidos, al conjugarse una serie de eventos científicos como fueron el descubrimiento del campo electromagnético (1861) y las ondas hertzianas (1888) hasta llegar a las primeras transmisiones inalámbricas realizadas por Marconi entre 1906 y 1909; cuando Luis empezó a construir su radiodifusora en taller de su propiedad que instaló cuando se separó de su trabajo en el cine Iris y siempre con el apoyo de don Rafael Corella. Después de un tiempo de intenso trabajo de inventiva y creación pone en servicio la primera estación de radio de difusión en todo el noroeste de México.
Luis, el hombre Los seres humanos somos herencia y circunstancia. Herencia de nuestros padres, físicas e intelectuales. Se nos trasmite inteligencia, creatividad, perseverancia en mayor o menor intensidad y nuestra circunstancia es el tiempo y lugar donde nos toca vivir. Luis heredó facultades intelectuales que desarrolló durante toda su vida y su circunstancia fue el haber arribado a los 12 años a una población pujante y con gran futuro, Mexicali que, por su valle, el Río Colorado y su calidad de frontera 20
1942. Iglesia Metodista ubicada en Juárez 79, La Chinesca. Se quemó en 1945.
2010. Iglesia metodista reconstruida en 1947.
Hasta aquí las circunstancias lo favorecieron, pero lo que vino después no; la depresión económica en Estados Unidos y en el mundo entero, no le brindó la oportunidad de lograr que la estación fuese un éxito económico y comercial. Pero la vida le deparó otras alternativas que aprovechó y explotó hasta lograr el éxito que buscaba; formar una familia de bien en la ciudad que le abrió las puertas y lo acogió y apoyado firmemente en Dios, en quien, siempre confío intensamente, además siempre se sintió orgulloso de ser mexicano. No solo atributos de intelecto y creatividad tuvo Luis. También fue un excelente orador, demostrándolo en su paso por la iglesia metodista, la masonería, la educación y en cuanta oportunidad tuvo de expresar sus ideas y puntos de vista. Nunca necesitó de notas para expresarse en público o para abordar un discurso, sermón o plegaria; todo le salía natural. Además le encantaba cantar y en sus años maduros bailar con su esposa. Cantaba himnos cuando fue muy apegado a la iglesia, entre otros: Firmes y adelantes, Cuando allá se pase lista, Noche de paz. Roca de la eternidad, Yo quiero trabajar
para el señor, No te dé temor, Nos veremos junto al río y otras más que cantaba, y acompañándose con la acordeón que había aprendido a tocarla para dirigir los cantos. Años después con la acordeón se acompañaba y cantaba canciones populares como por ejemplo: Cuatro milpas tan solo han quedado, Dos almas, Cuando yo me vaya, Mi gusto es, Adiós muchachos y Pecos Bill. Frecuentemente, en las reuniones familiares en casa, bailaba con Amada, de brinquito, que solo ella le podía seguir el paso. También era amante de expresar frases que él ideaba o encontraba en algún lado. Toda su familia y sus amigos sabían de sus frases, ya que las repetía seguido, las más populares eran: “Se me hace chico el mar para echarme un buche de agua”, “No le doy de trompadas al sol para no dejarlos a oscuras”, “Para mí la pulpa es pecho y el espinazo cadera”, “¿Te caíste? ven para levantarte”, “Todo es según el color del cristal con que se mira”, y la más famosa con la cual todo mundo caía: “¿Eres americano? ¿Eres norteamericano? ¿Eres estadounidense?” Y claro todo 21
1996. En la foto: de izquierda a derecha: Adrián Manjarrez Quevedo (1923-1997), Carlos Rubio Parra (1917-2008), Raúl Uro Monrraz (1921-2014), Ángel Valencia Gallego (1920-2006), Carlos Vizcarra Merino (1906-2001), Milton Castellanos Everardo (1920-2012), Horacio Campero Martínez (1914-2007), Ildeberto Monge (1917-1999), Francisco Ávalos Altamirano (1924-2002) y Luis Castro López (1908-2000). En el noventa aniversario de don Carlos Vizcarra.
mundo le decía que no y él los corregía, “¡Eres de América!, ¡De norte América! y de los Estados Unidos Mexicanos!” Y la última frase que vale la pena comentar es la que dice “Yo me voy a morir 10 años después de que me dé la gana”, y llegó el momento en que expresó que ya se quería morir, a los casi 88 años, entonces sus hijos le recordábamos su frase y le dijimos: “Ya te amolaste, te faltan diez años”. Luis nunca dejó de preocuparse y ocuparse de su madre, sus hermanos y hermanas, sus hijos y algunos de sus sobrinos, los apoyaba, ayudaba, les proporcionaba dinero cuando se requería. En el caso particular de su hijo César Rubén a quien sostuvo siete años en México como estudiante, nunca expresó una queja o reclamo de los difíciles momentos que en algunas ocasiones se vio envuelto para enviarle su mensualidad a su hijo. Recuerdo también que en los años de 1950, cuando se intensificó la contratación de braceros, Luis ya trabajaba en la Aduana y seguido llegaba con un bracero que conocía y le ofrecía asilo en su casa y alimento. No menos de cuatro o cinco ocasiones llegó acompañado a su casa y por dos o tres 22
días los apoyaba mientras eran contratados. Recuerdo que ellos eran muy buenas personas y correspondían realizando algún trabajo que se requería en el hogar. Luis tenía muy buen ojo para escoger a sus amigos. Durante su larga vida, Luis fue operador de máquinas de cine, radiotécnico, creador de la primera estación de radio en Mexicali, ministro empírico, orador, el primer radioaficionado en Mexicali, tramitador aduanal, funcionario municipal, profesor de electrónica por más de 25 años; escribió un buen número de poemas, cantaba y tocaba el acordeón, fotógrafo y técnico en fotografía, filmador de películas, reparaba todo tipo de aparatos domésticos, automóviles y supo también de construcción en detalles de su casa, pero además fue un excelente hijo, hermano, esposo, padre, tío y abuelo. Luis aprovechó al máximo sus cualidades intelectuales y creativas y perseveró en ellas toda su vida. Además fue un lector compulsivo, siempre estuvo redeado de libros, los cuales casi se sabía de memoria. Fue un hombre de su tiempo y pionero en la conformación de esta ciudad de Mexicali.
1982. En el cincuenta aniversario de boda de Luis y Amada con todos sus hijos. De izquierda a derecha: Hugo Abel, Joel, Rubén, Luis, Amada y Luis, Olga, Norma, Lydia y Meche
Casi al final de su vida recibió el reconocimiento de varias agrupaciones sociales, incluido el H. Ayuntamiento presidido por Francisco Pérez Tejada, así como también la Asociación de Radiodifusoras de Baja California, del Sindicato de Radio y Televisión de la República Mexicana, del Consorcio Radiorama, propietarios de la estación XEAO, y del grupo político Lázaro Cárdenas. El 6 de octubre del año 2000 se celebró en su honor la reunión familiar número XIII. Él cumplió 92 años de vida. Todos: hijos, nietos y bisnietos, recordamos cuando se puso de pie frente a toda la familia para dirigirnos su mensaje acostumbrado; primero regañó a todos los niños, exigiéndoles que se sentaran y guardaran silencio. ¡Maestro hasta el final! Veinte días después, el 26 de octubre (¡Adelante octubre!) se reencontraba con su Dios, aquel en quien tanto confiaba, con quien tanto encomendaba a sus hijos. Se fue rápido, así como era él, sin molestar, sin sufrimiento, sabiendo que su tiempo se había terminado. Retrocedo un poco en el tiempo para comentar que a los pocos años del fallecimiento de Amada su esposa, el
2 de agosto de 1984, la familia acordó festejar a Luis en su cumpleaños con una gran fiesta anual, donde asisten todos sus miembros, tradición que se continúa posterior al fallecimiento de Luis, como reunión anual familiar todos los días primeros del mes de octubre de cada año. Este 1 de octubre de 2015 se festejó la reunión número 27, oportunidad que aprovechó su nieto Luis Carlos8 para compartir con toda la familia un pensamiento en recuerdo de su abuelo Luis: Recuerdo a un don Luis viejo, con su dedo chueco y una boina en la cabeza que cubría algunas de sus canas. Recuerdo sus lentes con cristales grandes y marco grueso, su mirada retadora y su bigote siempre presente. Recuerdo a un abuelo solo, lleno de anécdotas de los tiempos de antaño pero con poca memoria de los hechos recientes, recuerdo a aquel que me saludaba con mucho gusto al mismo tiempo que me preguntaba mi nombre y de quién era hijo. 8
Luis Carlos Castro Vizcarra es el nieto número 29 de los 31 que tuvo Luis. Convivió con su abuelo desde su nacimiento en 1982 hasta el fallecimiento de Luis en el año 2000, es decir, conoció a un abuelo viejo de los 76 a los 92 años. 23
2000. Fiesta familiar de la familia Castro Bojórquez, última a la que asistió Luis. Él se encuentra sentado en el piso, en medio de hijos, nietos y bisnietos.
Recuerdo a un abuelo necio, estricto con las palabras
personaje de la radio, el pionero de la radiodifusión en Mexicali,
y exacto en sus frases, con la imprudencia merecida y
al de la XEAO y la marcha de Zacatecas, al maestro de la 18,
ganada tras los años y experiencia. Recuerdo un abuelo que
amigo de pocos, conocido de muchos y profesor de todos, al
nunca dejó de enseñarnos, de recalcarnos: quiénes éramos,
papá, al esposo y al viudo.
dónde nacimos y de dónde éramos. Recuerdo un abuelo
De pocas personas conozco tantas historias y logros, sin duda
nacionalista, patriota, federalista y creyente, que inculcaba
esto se debe al gran cariño y respeto que le tienen sus hijos.
sus valores en sus pequeñas conversaciones y sorprendía con
Esto habla de la grandeza de don Luis Castro López, pero habla
preguntas capciosas a quienes no lo conocían bien. Recuerdo
más del amor de sus hijos, de recordarlo todos los años y a cada
el temblor de sus manos, las arrugas de su cuello y su frente
momento, de perdurarlo en recuerdo en la historia de nuestro
amplia a la Castro.
Mexicali, de celebrar año con año la fiesta que es vivir en esta
Recuerdo un abuelo viejo, pero fuerte, que cargaba a mi hermanita, aun cuando ya no era bebé, con la fuerza de sus
familia. Por eso hoy en el día de la Familia Castro Bojórquez los felicito a ustedes, a los hijos de don Luis: ¡Adelante octubre!””
brazos, que me ganó siempre a las vencidas y que sin importarle los años, nunca dejó de manejar su vocho. Recuerdo el olor de su casa, el color de su sala y sus máquinas e inventos. Recuerdo las clases de verano donde intentaba enseñarnos algo de electrónica a los nietos, recuerdo cuando quise entrevistarlo en la preparatoria, no sin antes recibir una santa reprimenda por no saber hacer las preguntas correctas. Recuerdo a un hombre jorobado, cansado de los años, fuerte, valiente y sobre todo de carácter. Recuerdo a Luis Castro López en sus últimos años, pero conozco al don Luis que sus hijos me han presentado: al
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Referencias Piñera Ramírez, D. (Coord.). (1983). Panorama Histórico de Baja California. Entrevista realizada por Irma Apodaca Chavira. Tijuana: Centro de Investigaciones Históricas UNAM-UABC. Díaz Carballo, J. (1945). Manual de la Masonería Simbólica. México, D.F.: Editorial Masónico. Castro Bojórquez, R. (julio-septiembre de 2014). A Picachos, por la cuesta de Cantú. El Río 25, 19-32 (año VII).
Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe Marco A. Buruel Beltrán*
E
n el Centro Histórico de nuestra ciudad, precisamente en la primera sección donde la avenida Reforma forma una ¨T¨ con la calle Morelos, se encuentra ubicada La Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe, cuyo edificio se ha convertido en un referente de la ciudad ya que es muy común encontrar su imagen publicada en las revistas especializadas, así como también en tarjetas postales, y se encuentra incluida en el Catálogo de bienes inmuebles de valor cultural de Mexicali y su valle editado por el Instituto de Antropología e Historia en 2006. Para apreciar en toda su magnitud el edificio que actualmente admiramos, es conveniente conocer parte de su historia que se remonta a los principios del siglo pasado, en lo concerniente a su estructura así como también de los personajes que lograron construir para la comunidad católica de nuestra ciudad y su valle un lugar preponderante y consagrado para la celebración de la Santa Misa. En sus memorias (libro segundo) editado en el año de 2003, el presbítero Máximo García Martínez escribe que en el mes de marzo de 1918 llegó a esta naciente población, proveniente de Ensenada, Baja California el reverendo padre Juan Rossi; como en esa época no existía capilla alguna, la Misa se celebraba en domicilios particulares oficiada por sacerdotes que se trasladaban desde la ciudad de Ensenada; por esa razón, se dio a la tarea de construir un templo formando para ello un comité proconstrucción en el cual fungió como presidenta la señora Aurelia
Gutiérrez de Liera, la señora Barranco como secretaria, como tesorera, la señora Sandoval, y vocal la señora Flores. Gracias a la incansable labor de estas damas, por medio de donativos del comercio, particulares y diversos eventos se reunieron los fondos necesarios y en poco tiempo se logró la construcción de un pequeño templo de madera, en un terreno consistente de dos lotes donados por el señor Benjamín Quevedo Aranda (sobre esto el historiador Enrique Estrada Barrera dice que el donante en el año de 1917 fue el señor Felipe Hernández, quien únicamente solicitó que el templo fuera dedicado a la Virgen Nuestra Señora de Guadalupe). El templo se bendijo el 18 de julio de 1918 con una Santa Misa celebrada por el padre Rossi. A los pocos meses, en noviembre del mismo año, el Santo Padre Benedicto X, solicitó a todos los obispos del mundo construyeran las iglesias en honor del Sagrado Corazón de Jesús, por lo cual el padre Rossi, acatando estas instrucciones, cambió las imágenes colocando en el altar principal la del Sagrado Corazón, que fue donada por la señora Romandía en el lugar en que estaba Nuestra Señora de Guadalupe. Es por eso que en fotografías de esa época en el altar principal aparece la imagen del Sagrado Corazón. Posteriormente, a fines de los años de 1930, monseñor Felipe Torres Hurtado celebró una misa pontifical declarando nuevamente a Nuestra Señora de Guadalupe patrona de esta ciudad y por consiguiente la iglesia recuperó el nombre al que se consagró.
* Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali”, A.C.
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contrajo una enfermedad y tuvo que trasladarse a la Con el paso de los años, debido al crecimiento de la ciudad de Los Ángeles, California, y fue sustituido por el ciudad y de la comunidad católica, el pequeño templo fue padre Miguel A. Valdez. agrandándose y teniendo diversas remodelaciones, al igual En el mes de marzo de 1944, monseñor Felipe Torres que en su altar. Oficiaron misa un gran número de sacerdotes Hurtado, quien fungía como administrador apostólico que dejaron huella en la memoria de los mexicalenses, por de la Baja California, giró un oficio en el que comisionaba sus labores sacerdotales, sociales, educativas y deportivas. a esta ciudad al padre José Ibarrola Grande, quien, por su Durante los primeros años los padres que oficiaron misa personalidad y labor cristiana, dejó una gran huella entre los en la naciente parroquia fueron en su mayoría misioneros mexicalenses de la época. Una de sus principales acciones fue el procedentes de Italia como fue el caso de los reverendos haber iniciado la cons-trucción de la Capilla de Nuestra Señora padres: Severo Acevedo, Alloero y César Castaldi, así como del Perpetuo Socorro en el año de 1946, así como algunas un misionero de la Inmaculada Concepción de María, quien más en el valle de Mexicali, y las modificaciones al edificio vino procedente de Yuma, Arizona para cubrir una ausencia de la iglesia de Guadalupe. temporal del padre Rossi. Durante el paso de los A principios de 1926 llegó años, varios sacerdotes más a esta ciudad procedente de fueron asignados a nuestra la ciudad de Guadalajara, parroquia para continuar Jalisco, el primer sacerdote la labor de sus antecesores. mexicano de nombre Gabino Entre ellos sobresalen el padre García, quien a los pocos Javier Esparza, egresado del meses sustituyó al padre Seminario de Ensenada, Baja Rossi. Posteriormente, en el California, un convencido de año de 1930, procedente de la educación de los jóvenes, y Tehapi, California, Estados que gracias a su labor, logró Unidos se hizo cargo de que se formara el Instituto la parroquia el padre Luis Salvatierra. Saule, quién gracias a las Otro padre que llegó a la buenas relaciones que ciudad aproximadamente logró con el gobernador del a principios de los años de territorio Sr. José Ma. Tapia, 1940, también proveniente recibió amplias facilidades del Seminario de Ensenada, para la operación del templo Baja California, donde era mexicalense. maestro, es el presbítero Al ser promovido el Máximo García Martínez. padre Luis Saule al Distrito Desde el principio de su Federal, llegó en su lugar 1946. Interior de la iglesia construida en 1946. gestión se dio cuenta de que procedente de Guadalajara, a misa asistían primordialmente las personas mayores de Jalisco, el padre Jesús Torres, quien posteriormente fue edad y muy pocos jóvenes. Con el fin de atraer a los niños conocido como cura peregrinante, ya que personalmente y jóvenes hacia la iglesia, aprovechó el apego que tenía él solo tenía que atender las tres principales ciudades hacia los deportes ya que en su juventud, en su nativa celebrando las misas en Ensenada, Tijuana para rematar Veracruz, fue aficionado al fútbol, y convocándolos a en Mexicali, B. C. En 1937 provenientes de Colima, reuniones los invitó a unirse a la ACJM y a la Vanguardia, arribó a estas tierras don Manuel Sánchez Ahumada con el incentivo de entrenarlos en esa disciplina logrando quién fundó la organización Asociación Católica Juvenil que se formaran los primeros equipos y se llevara a cabo el Mexicana (ACJM). Desafortunadamente, al poco tiempo 26
1946. Nueva parroquia en construcción.
1946. Fotografía donde se observan la capilla antigua construida en 1918, y la nueva a punto de terminarse.
1944. Reverendos padres: Carlos Fuber y Tarcicio Romo.
primer torneo, con cuatro equipos que se llamaron ACJM y Veracruz, dirigidos por él mismo, Mexicali manejado por el señor Fernando Navarro Padilla y patrocinado por la Cervecería de Mexicali, y el Orange Crush patrocinado por la embotelladora del refresco del mismo nombre. Debido al buen resultado obtenido, surgió la necesidad en el año de 1945 de formar la primera mesa directiva de la liga de futbol soccer de Mexicali, eligiéndose por mayoría, como su primer presidente, al padre Máximo García Martínez. Al constatar que el deporte era el camino correcto para acercar a los niños y jóvenes a una vida sana y hacia la Iglesia se diversificó hacia el béisbol y softbol, logrando que se formasen varios equipos en esas ramas. En 1918 fue construida la primera iglesia de madera, con estilo más o menos misional, pero con el paso del tiempo se fue deteriorando, además de que por sus pequeñas proporciones, aproximadamente 13 metros de ancho por 40 de largo, y con techo tan bajo que durante el verano el calor se tornaba insoportable durante la celebración de la misa, tanto para los padres como para los fieles, esto aunado al explosivo crecimiento de la población y, por consiguiente, de la grey católica, provocó que ocasionalmente se le hiciesen reparaciones y adaptaciones, hasta que llegó el momento en que se hizo necesario construir una nuevo edificio acorde a las necesidades de una ciudad como en la que se estaba convirtiendo Mexicali. Así fue como en el año de 1944 el reverendo padre y doctor José Ibarrola Grande, asistido por su vicario cooperador el padre Máximo García iniciaron las gestiones para la edificación del nuevo templo. Los planos arquitectónicos fueron diseñados por el señor Alfonso Bárcenas dirigido por el Ing. Eugenio Elorduy y el encargado de la realización de los planos fue el señor Conrado Moctezuma. El día 12 de diciembre de 1947 se llevó a cabo la bendición del templo parroquial, que fue construido con arquitectura de arte hispánico con sencillez en sus líneas, con atractivos colores y artísticos vitrales emplomados que fueron elaborados por una casa especializada de Torreón, Coahuila, colocados de tal manera que logran que su interior esté debidamente iluminado. Una torre campanario que sigue convocando a los fieles a misa y que en un tiempo tuvo instalado en ella un reloj. 27
1930. Interior de la Capilla construida en 1918.
1944. Asamblea de la Asociación Católica Juvenil Mexicana de Mexicali.
1944. El reverendo padre Carlos Fuber oficiando en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe. 28
Este edificio se construyó con visión moderna y futurista, planeándose con tres naves, por supuesto la principal dedicada a la Virgen de Guadalupe, y otra para el bautisterio, además se incluyeron aposentos para los padres, locales para oficinas y archivos, salones para diversas actividades y de estudio para los miembros de la juventud católica tanto femenil como varonil y de vanguardistas para los niños, así como una cancha bardeada, con gradas de cemento y con las medidas reglamentarias para la práctica de frontón y voleibol. ¿Cuántas generaciones de mexicalenses habrán acudido a practicar o presenciar los torneos de estos deportes?, siempre bajo la mirada enérgica y recibiendo regaños de los padres Ibarrola y Fulbert. En el mes de julio del año de 1966 se emite en Roma la Bula que daba a conocer como primer obispo de la recién erigida Diócesis de Mexicali, a monseñor Manuel Pérez Gil y González. El día 18 de octubre del mismo año, en la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe fue solemnemente consagrado el nuevo obispo de manos de los obispos Luigi Raimondi, Alfredo Galindo y Carlos Quintero Arce. Como segundo obispo, en julio de 1984, fue consagrado el arzobispo J. Ulises Macías Salcedo. Y como tercer obispo, en el mes de septiembre de 1997, fue consagrado el señor José Isidro Guerrero, quien hasta la fecha sigue su obispado. Referencias Archivo Histórico de la ciudad. Castañeda, Jorge (1905-1906). Vida religiosa en Mexicali, Revista Minerva. Instituto Nacional de Antropología e Historia. Catálogo de bienes inmuebles de valor cultural de Mexicali y su valle. García Martínez, Máximo (2004). Libro mis memorias.
Cantú: lecciones de economía política Miguel Esteban Valenzuela Robles*
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as condiciones sociales y económicas que Cantú afrontó desde su arribo al Distrito Norte denotaban situaciones sui-géneris, con las particularidades que esta alejada región de México desarrolló por su condición fronteriza y en tiempos en que aun el sentimiento expansionista de Estados Unidos no cesaba sobre nuestro país. Cantú establece un orden y organiza la hacienda pública como piedra angular sobre la que Baja California podrá cimentar sus acciones hacia el desarrollo material, social y político. Este sentido de oportunidad sobre las finanzas locales se transformará en la “joya de la corona”; será el elemento por el que se le envidiará y se le criticará; haciendo de la calumnia hacia Cantú un ejercicio de historiografía. Pero, ¿Cantú manejó los dineros públicos a su libre albedrío? La respuesta podría ser que sí. ¿Por qué Cantú operó las finanzas públicas con el uso del dólar y no con pesos? ¿Sería un intento anexionista a favor de Estados Unidos? Cantú asumió muchas de las decisiones sobre en qué invertir, cómo gastar, qué cobrar y cómo cobrarlo. El sistema fiscal impuesto y la estrategia de finanzas públicas aplicados favorecieron para que su administración contara con una liquidez envidiable y que fuera, precisamente Esteban Cantú, quien decidiera los destinos del dinero. Desde 1909 y hasta 1914, los ingresos fiscales derivados de las actividades del ramo de la tolerancia fueron el principal motor de financiamiento. Ese dinero se iba a Ensenada y desde allá se le asignaba a la entonces prefectura de Mexicali una ínfima cantidad de recursos para pagar los servicios públicos, la burocracia y el servicio de seguridad local. Si bien en esos años la alejada prefectura de Mexicali no representaba un costo elevado para la administración del Distrito Norte, los requerimientos sobre seguridad pública iban en aumento debido a las actividades de casinos, bares, a la extendida vida nocturna local. Adicionalmente, las actividades agrícolas y de comercio iban incrementando Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali”, A.C.
sus operaciones, por lo que las exigencias en materia de seguridad pública también. Pese a estas nuevas condiciones de crecimiento en la frontera, el gobierno del territorio —entonces asentado en Ensenada— no lograba atender las exigencias locales. Aunado a lo anterior era necesario considerar la constante amenaza por parte de gavillas y bandoleros de toda clase, así como la permanente amenaza de las incursiones de los adeptos a la ideología de los hermanos Flores Magón. Con este escenario de riesgo permanente a la seguridad pública, ningún presupuesto era suficiente. En estas condiciones, la lucha entre el orden federal representado por el general Gordillo Escudero y la municipalidad de Ensenada era constante ya que el dinero no alcanzaba y, en Mexicali, el entonces subprefecto Rodolfo Gallego, hacía malos manejos del escaso presupuesto que se le asignaba. Gallego administraba el dinero público para financiar su propia guardia blanca y escasamente atendía su responsabilidad pública. El desorden iba en aumento y el gasto no se empleaba de forma que beneficiara a la población. En cierto sentido las actividades del ramo de la tolerancia se incrementaban y la desorganización hacía presa fácil para actos de corrupción. En el contexto nacional debe tomarse en cuenta que, a partir de los sucesos de la Decena Trágica comenzó una importante fuga de capitales que provocó una drástica devaluación. Para evitar la salida del metálico, Huerta decretó la prohibición de la exportación de cuños nacionales de oro y plata, cuya circulación era cotidiana entre la población. Esta medida elevó la tasa de convertibilidad y demeritó el uso del papel moneda. Con ello, la incredulidad hacia el uso de los billetes emitidos por el gobierno central se generalizó, desatándose una crisis económica sin precedentes y en la que el gobierno no logró control alguno. Márquez (2014:118) señala que cuando Huerta fue derrocado las arcas del erario estaban vacías, los bancos en bancarrota y la producción y el comercio operaban de forma muy limitada, lo que repercutía en los ingresos fiscales. 29
El peso oro nacional, emitido en Torreón, Coahuila hacia 1917. Tiempo en que la Comarca Lagunera vivía un apogeo comercial e industrial; mientras la lucha revolucionaria colapsaba la economía en todo el país. En Baja California, Esteban Cantú capitalizó la dinámica económica fronteriza, apegada al uso del dólar americano, como una forma de protección financiera ante la debacle del sistema financiero nacional.
Los bilimbiques fueron la respuesta del gobierno constitucionalista para atenuar la crisis económica desatada por la escasez de circulante y las acciones de los acaparadores de oro y plata. Pese a su oficialidad, no eran moneda de uso reconocido en algunas regiones de la república. El gobierno del Distrito Norte nunca tuvo problemas de liquidez, ni se apegó a la institucionalización en el uso de la moneda constitucionalista.
Francisco Villa fue uno de los precursores en emitir papel moneda para agilizar el sistema monetario que ya había implantado en Chihuahua. La urgencia de liquidez era por la compra de armas cambiando la moneda villista por dólares en una serie de forzados préstamos “a la causa”. 30
Con el fracaso de la Convención de Aguascalientes los distintos bandos revolucionarios recurrieron a la emisión de billetes como su principal fuente de financiamiento. De esta forma se emitieron billetes por parte de los gobiernos locales de Sinaloa, Chihuahua, Sonora, Yucatán, el Banco de Torreón; y hasta Francisco Villa tuvo su propia emisión de papel moneda. Con el gobierno provisional de Carranza se intentó homologar la emisión de billetes y se crearon los billetes carrancistas que el público bautizó como bilimbiques. En este proceso se calcula que el monto de las emisiones, sin incluir las autorizadas por Carranza, sumó 1 500 millones de pesos. En septiembre de 1915, la destrucción de las cosechas, la devaluación, la inflación y la imposibilidad de acuerdos entre las facciones en lucha, hizo de ese año el año de la hambruna. También fue el año en el que se registró el mayor índice de mortandad en la historia moderna de México. Ante este escenario de la política nacional, Cantú intenta comunicar sus necesidades financieras a las autoridades asentadas en Ensenada. Después de todo era el centro comercial y de negocios en la región, siendo su aduana un importante punto de ingresos fiscales. Previo a llegada de Cantú al poder, ya desde el año de 1909, Mexicali y Tijuana operaban giros negros, corridas de toros, carreras de caballos y espectáculos que destacaban como importantes puntos de ingresos fiscales. Por su parte, el proceso de recaudación implicaba el envío de los recursos hacia Ensenada (entonces capital del Distrito), desde donde se realizaban las distribuciones presupuestarias para la operación gubernamental. Este es uno de los puntos críticos que Cantú controló desde inicios de 1915: la absorción de la totalidad de los ingresos fiscales y el control de la burocracia local; sin embargo, los ingresos estaban registrados en dólares y no en pesos. Esta coyuntura de convertibilidad cambiaria sería la gran diferencia en el manejo económico del régimen cantuista. El uso del dólar como moneda de curso común en el Distrito Norte facilitó el intercambio comercial, pero de forma prioritaria estimuló la credibilidad de las finanzas públicas locales. A los ojos de Estados Unidos, esta región de México no estaba inmersa en la lucha fratricida que libraban las distintas facciones y prueba
de ello era la estabilidad alcanzada en todos los planos, resaltando el plano económico. Sumado a los ingresos fiscales por las actividades de los giros negros, Cantú implementó el cobro de un derecho por la internación de migrantes chinos; incrementando de forma considerable los ingresos a las arcas de su mandato. Con esa liquidez se favoreció, entre otras cosas, el desarrollo de infraestructura urbana, la red carretera en el territorio, el tendido telegráfico y telefónico, escuelas y otros edificios públicos. Conjuntamente, desde la perspectiva cualitativa, es oportuno realizar una profunda reflexión de los matices considerados en sus decisiones de gobierno: “en qué circunstancia se dieron, qué presiones debieron afrontarse, qué intereses tenían sus detractores y qué elementos construyeron la opinión negativa hacia él por parte del gobierno central”. Para el año de 1916 la región ya estaba consolidando una estructura comercial y agrícola auspiciada por dos factores. Por una parte la pacificación que el régimen cantuista había logrado mediante un sólido andamiaje gubernamental y policial; y por otra parte, la fijación de Estados Unidos en su posible ingreso a la Gran Guerra, con lo que se incrementaba la demanda de algodón. Todo esto con un fuerte soporte que brindaba salud financiera al régimen, a los inversionistas y a la población en general: la estabilidad que representaba el uso del patrón dólar como moneda en circulación. Almaraz (2011:263) refiriéndose al registro de negocios en Mexicali en el periodo de 1916-1925, afirma que, a partir de entonces, el número de sociedades (mercantiles) aumentó de manera importante, con un promedio de 16 registros por año (señalando que) que era de cinco en el periodo anterior 1912-1915. Este proceso trajo consigo la diversificación de los perfiles productivos en Mexicali y su valle. Mientras que durante el trienio de 1913-1916 prácticamente se destruyó la economía mexicana y, para ciertos sectores, sembró el desencanto en las inversiones, en el entonces Distrito Norte de la Baja California se vivía un auge económico que posteriormente tuvo un despegue sin paralelo con la entrada en vigor de la Ley Seca en Estados Unidos. Esta coyuntura permitió la consolidación del intercambio económico entre Baja California y su frontera con California. Para agosto de 1920, Cantú negocia su remoción del cargo, dejando una estructura económica local consolidada y que sirvió de base para que despegaran otros negocios, se incrementara la inversión agrícola y, en general, la región fuera reconocida por su nivel de progreso.
Además del auge algodonero en el periodo cantuista, otras actividades como la producción harinera, fortalecieron la inversión productiva. Insumos, maquinaria y compresoras empezaron a ser instaladas en Mexicali. Mayor inversión que generalizó la circulación del dólar en la región.
En esta alegoría publicitaria del Bank of América en la década de los años de 1950, es posible apreciar un desfile sobre la calle Heffernan y su cruce por la calle Segunda en Caléxico, viendo al fondo el letrero de la antigua garita de Mexicali. El anuncio avistaba la gran vecindad entre estas ciudades y la forma en que sus economías están vinculadas; algo que Cantú entendió muy bien y logró capitalizarlo para beneficio de Mexicali.
A nivel nacional, es hasta iniciado 1917 cuando, como producto del pacto social que implicó la promulgación de la Constitución, las bases para la estabilidad económica fueron implementadas y prácticamente se reactivó bajo las mismas bases de la economía porfirista. Lo prioritario era recuperar 31
El auge comercial en el Mexicali de la segunda década del siglo XX, trajo consigo una permanente inyección de divisas que circulaban como moneda de curso legal, Cantú promovió que todas las operaciones fiscales y bancarias, de comercio e industria, se tasaran en dólares.
las capacidades fiscales de la planta productiva y reactivar el mercado; de esa forma el Estado recuperaría sus capacidades financieras y crediticias. En este sentido Tello (2014:12) apunta que bajo la perspectiva de la ciencia económica las finanzas públicas son la arena central y natural donde la sociedad determina sus objetivos y establece sus prioridades. En esa medida, también son reflejo de un importante y básico acuerdo entre la población y el Estado. Los ciudadanos están dispuestos a sacrificar soberanía a favor del interés colectivo y el Estado, a su vez, establece contribuciones para financiar tareas que beneficien al conjunto de la sociedad. Esteban Cantú así lo hizo. En estas circunstancias, ¿es posible que Cantú deseara un distanciamiento económico y político con México y promover una anexión a Estados Unidos? o, en su defecto, ¿Cantú realmente actuó con altura de miras para proteger de la convulsión política al Distrito Norte de la Baja California? En ambas situaciones la estrategia de Cantú fue plantearse el sustento económico para su administración pública, estableciendo impuestos y derechos locales; acumulando miles de dólares para luego invertirlos en obra pública que aun hoy en día existe. Desde la visión de los enfoques históricos; la coyuntura de Cantú tiene una interpretación desde el materialismo-histórico, que además conlleva la naturaleza de la economía política, ya que se tiene como resultado el análisis de la producción social que deriva en el establecimiento de determinadas relaciones sociales. No se puede negar que Cantú favoreció y controló 32
las actividades del juego y del vicio para allegarse recursos y aplicarlos en obras lícitas y de impacto en el desarrollo social de la región. Como todo acto humano las decisiones de Cantú en materia económica deben ser situadas en su contexto. Intentar la comprensión de estos actos nos remite a Florescano (2013:51), quien establece que… “debes situar todas las cosas en su tiempo” (sic); de esta forma se apertura el interrogatorio a la circunstancia del momento, buscando que lo sucedido en la vida económica del régimen de Cantú logre una lectura objetiva. Bibliografía De la Peña S. (2006). De la Revolución a la Industrialización, México, D.F.: Editorial Océano. Florescano, E. (2013). La función social de la historia, México: Fondo de Cultura Económica. Gómez, J. A. et al. (2011). Inversiones, colonización y desarrollo económico en el noroeste de México 1870-1940, Tijuana, B.C.: El Colegio de la Frontera Norte. Márquez, G. et al. (2014). Claves de la historia económica de México, Fondo de Cultura Económica, México, D.F. Samaniego, M. A. (1998). Los gobiernos civiles en Baja California 1920-1923, Universidad Autónoma de Baja California, Mexicali, B.C. Tello, M. C. (2008). Estado y desarrollo económico: México 19202006, Universidad Autónoma de México, México, D.F. — (2014). La economía política de las finanzas públicas: México 1917-2014, Universidad Autónoma de México, México, D.F.
Los precursores de la nacionalización de las tierras en el valle de Mexicali Yolanda Sánchez Ogás*
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e acuerdo con la California Development Company y su subsidiaria, la Sociedad de Irrigación y Terrenos de la Baja California, al iniciar el siglo XX en el delta del Colorado vivían entre 1500 y 2000 personas. Esta empresa aseguraba que la mayoría trabajaba para ellos en las obras de irrigación. Algunos hombres llegaron del sur del distrito: Real del Castillo, El Álamo, Ensenada, otros vinieron de Sonora y Sinaloa. Entre esos trabajadores se contaban algunos indígenas del delta que participaron en la construcción del canal Álamo. Juan García Aldama, indígena cucapá, en 1900 era un niño de aproximadamente diez años, cuando trabajó para la Sociedad de Irrigación. Él comentaba que por ser niño le pagaban cincuenta centavos, y a los adultos les pagaban un peso diario. El 20 de junio de 1901 llegó el agua a la compuerta Sharp a través del canal Álamo aprovechando su declive natural, que al iniciar tenía una altura de 35 metros y 65 kilómetros después, al entrar el agua a la compuerta era de 10 metros. En esa compuerta, once kilómetros al oriente de Mexicali, se abrían dos canales derivando el agua a los valles de Mexicali e Imperial en California. Tres años después se firmó el convenio entre México y Estados Unidos; ambos países recibirían agua por partes iguales. Abierta la posibilidad de regar tierras mexicanas, la Colorado River Land Company compró a Guillermo Andrade sus tierras del delta. Los primeros años como propietaria del valle de Mexicali, la Colorado aprovechó poco sus terrenos para cultivo. La inundación de marzo de 1905 a febrero de 1907 retardó cuando menos tres años el uso de la tierra. Al finalizar la primera década del siglo XX, existían varios ranchos de americanos; sembraban cebada y alfalfa en pequeña escala, usada como forraje para la cría de ganado. En otros ranchos cultivaban maíz y trigo, que debía llevarse * Cronista de la ciudad de Mexicali. Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali”, A.C.
a moler a Caléxico, porque en Mexicali no había molino. Otros cultivos en superficies reducidas eran remolacha, vid, caña de azúcar, frutas y hortalizas. El Instituto Geológico de México envió a Baja California una comisión de ingenieros para hacer un estudio sobre las condiciones geográficas, recursos naturales y las posibilidades de desarrollo del Distrito Norte. En Mexicali estuvieron los ingenieros Y. S. Bonillas y F. Urbina, de octubre a diciembre de 1911, y observaron sembradíos de algodón del ciclo 1911-1912. En su informe del 31 de marzo de 1912, mencionan: El algodón está adquiriendo una importancia merecida, se da de un modo espléndido y, aunque tiene que limpiarse en Estados Unidos, todavía da muy buenos resultados y una buena parte se vende directamente a Japón. Sin embargo, en el libro Reconquista y colonización del valle de Mexicali y otros escritos paralelos, de Pablo Herrera Carrillo se menciona como primera cosecha de algodón, la del ciclo 1912-1913, tomando datos de la Asociación Algodonera del valle de Mexicali y San Luis, Sonora. Según esta información se sembraron 12 hectáreas en el rancho del estadunidense Joe Sherman en la actual colonia agrícola Zaragoza. La cosecha que se levantó fue de 15 pacas. Había ranchos ganaderos cerca de los pastizales que crecían aledaños a los ríos Colorado, Paredones, Abejas, Pescaderos y las lagunas Volcano (que toma su nombre de los volcanes de lodo cercanos a Cerro Prieto) y Pascualitos. Los primeros años, la Colorado también se dedicó a la ganadería aprovechando que la humedad de los suelos permitía el crecimiento de zacatales. Abundaban los pastos, formados por zacates, tule, vainas de mezquite y tornillo. Al principiar la segunda década, los principales ranchos ganaderos eran Pascualitos, Packard y hacienda Hechicera, de aproximadamente 7 000 hectáreas, que recibían agua de los sobrantes del Álamo que corrían por varios canales. 33
Sembradío de algodón.
Uno de los primeros canales en el valle. Sus compuertas eran de madera.
También estaba el rancho de Santiago Castro, de 400 hectáreas divididas por el cauce del río. Una de las porciones, era llamada El Viborón, porque en esa parte el cauce del río tenía tantas curvas que parecía una víbora. A un lado estaba el rancho de Beltrán. El río Hardy, en la zona habitada por los indígenas cucapá, tenía bordes de poca altura y las tierras aledañas eran cultivables, pero estaban expuestas a inundaciones. Las tierras al oeste de este río, poco irrigadas por lo arenoso del terreno, eran ocupadas por los cucapá, quienes cultivaban algunos productos para el autoconsumo, en predios que ellos protegían con pequeños bordos. Estas eran las condiciones del valle, cuando en 1912 se levantaron las 15 pacas en el rancho de Sherman. En Caléxico desde 1906 se inició el cultivo de algodón, pero a partir de 1909 se empezó a cultivar con fines comerciales. Cuando se comprobó que el valle de Mexicali contaba con las condiciones para sembrar ese producto, la Colorado River Land Company ofreció sus tierras en aparcería, a quien quisiera dedicarse al cultivo de lo que después se llamaría el oro blanco. El primer estadunidense que obtuvo permiso del gobierno para adquirir tierras en Mexicali fue Leroy Lee Litlle. El 21 de agosto de 1908 solicitó 200 hectáreas, y dos meses después le fueron concedidas. El rancho Little, se localizaba donde ahora está el mercado Virreyes. Fue muy conocido como rancho Lee y el puente Lee era punto de referencia para quienes viajaban hacia el oeste del valle. Cuadro 1. Ranchos en producción registrados en 1918. Núm. Propietarios Núm. de hectáreas 30 mexicanos 1 266.30 28 estadounidenses 42 548.13 11 chinos 2 511.00 Total 69 46 325.43
Compuerta Sharp. 34
En cuanto a la producción, en 59 predios se sembraba algodón, en 12, alfalfa, y en tres, se cultivaba maíz milo. Las 15 hectáreas de Timoteo y Rufino Esparza eran utilizadas como potrero para cría de ganado. Después llegaron japoneses e indostanos. Esto provocó la preocupación de algunos agricultores mexicanos que radicaban en el valle. Miraban que se entregaban grandes extensiones a extranjeros, sin que la Colorado cumpliera con lo estipulado en el contrato original que la Secretaría de Industria y
Cuerpo de guardias blancas de la Colorado. Funcionó de 1911 a 1946.
Fomento otorgó a Guillermo Andrade en 1887, esto era poblar con mexicanos y respetar las tierras indígenas. Los primeros luchadores por la tierra Los primeros que buscaron cambiar esa situación y exigieron que se entregaran tierras a mexicanos fueron los hermanos Alejo, en 1914. Cinco años después, Teófilo Echevarría y el sonorense Miguel Vildósola solicitaron tierras para repartirlas. Esto provocó el enojo de la Colorado que enfrentó el problema con un juicio en el cual a los mexicanos los defendió el licenciado Dionisio Lacarra y a la compañía latifundista, el licenciado Arturo Guajardo. Los solicitantes perdieron, pero lograron unas cuantas parcelas, aunque no la cantidad que habían solicitado para entregar a todos los campesinos mexicanos que las requerían. Por un tiempo, la Colorado mantuvo su latifundio sin problemas, con la ayuda de su guardia blanca (1911) y la complicidad de los gobernantes. Al iniciar la década de los años de 1920 llegó a Mexicali el coronel villista Marcelino Magaña Mejía y formó un grupo de solicitantes de tierra. Magaña, amparado en el artículo 27 constitucional y con la asesoría de los licenciados Rogelio Escalona Gallardo, Rosauro Rojo y Pablo Herrera Carrillo, solicitó tierras, vía colonización, para 200 mexicanos, la mayoría repatriados de California. No se le entregaron, pero el grupo siguió creciendo hasta llegar a 2 805 mexicanos que pedían una parcela. Ante la negativa del gobierno, Magaña tomó algunos terrenos desde el rancho Coats hasta cerca del cerro del Centinela a lo largo de la frontera. Amparado en la Constitución, que establecía la imposibilidad de los extranjeros a poseer tierras mexicanas a 100 kilómetros de la línea fronteriza y 50 de las costas, el líder repartió esos terrenos entre sus seguidores. El 22 de
enero de 1924 envió una solicitud de tierras al presidente Álvaro Obregón, quien a su vez la envió a la Secretaría de Agricultura, sin solucionar la petición, En asamblea general celebrada ayer en colonia Magaña este municipio por más de 500 campesinos mexicanos por nacimiento, fui autorizado ampliamente para gestionar ante usted, el fraccionamiento y distribución de tierras nacionales de esta región de acuerdo al superior decreto del dos de agosto. Tierras que actualmente encuéntranse en manos de extranjeros que las subarriendan a chinos e igualmente el fraccionamiento y distribución tierras dentro de faja cien kilómetros a lo largo de la frontera que están ocupadas por sociedades anónimas extranjeras en contravención del Artículo 27 Constitucional …Suplícole atentamente dictar disposiciones superiores que procedan en concepto. Estoy dispuesto a dar toda clase de informes necesarios.
Con los terrenos tomados formó la colonia Magaña, donde construyó su rancho. Constantemente era perseguido por Alberto García, jefe de las guardias blancas, quien lo amenazaba y en ocasiones intentó asesinarlo disparando desde los matorrales. Magaña cada vez tenía más seguidores y esto generó la preocupación del gobernador Abelardo L. Rodríguez. Para disuadir a los magañistas, Rodríguez compró terrenos y los vendió a 230 campesinos mexicanos. Ningún magañista recibió una de esas parcelas de ocho hectáreas a las que después se agregaron otras ocho, por considerar la primera dotación insuficiente para la mantener una familia. Al mismo tiempo Rodríguez creó la Proveeduría y Departamento de Refacción Económica del Gobierno para apoyar a los colonos. Con esas 230 familias se formaron las colonias Progreso y Anexas y desde su fundación, el gobernador Rodríguez, 35
Rancho Hechicera.
admirador del cooperativismo, ordenó la creación de una cooperativa de consumo y producción. Trajo desde Veracruz a Luis Gorozpe, difusor de las virtudes del cooperativismo. También llegó desde Alemania el experto A. Eickemeyer y nombró gerente de la cooperativa al ingeniero Salvador España. La Progreso y Anexas recibió todo el apoyo del gobierno. En 1927, Rodríguez creó el Banco Peninsular a través del cual los agricultores de las nuevas colonias fueron refaccionados, y sus operaciones fueron suspendidas por la Proveeduría. Con estas acciones, el gobernador Rodríguez, partidario de la pequeña propiedad, neutralizó el movimiento magañista. De este intento de obtener tierras por la vía de colonización solo quedó la colonia Magaña, pero su creador perdió el liderazgo. Sin embargo, el líder tenía muchos seguidores y en 1926 fue nombrado candidato a diputado, pero fue derrotado por José María Tapia. Ese mismo año Magaña participó en un movimiento armado contra el Presidente Calles. Los rebeldes pretendían que el general Enrique Estrada tomara Tijuana y Magaña Mejía, Mexicali. Al respecto en su Autobiografía Abelardo Rodríguez escribió: (…) La Jefatura de Operaciones Militares en esa zona tuvo conocimiento de tales planes, en los cuales entraba una invasión a la Baja California por el punto llamado Dulzura, con elementos de guerra que habían sido adquiridos en Los Ángeles y San Diego. Para evitar una sorpresa, aparte de haber organizado un servicio de información que estuvo a la altura de las 36
circunstancias, se dio orden a fin de que se hiciera más estricta la vigilancia a lo largo de la línea divisoria, reforzando las guarniciones de Mexicali, Tecate y Tijuana. Todo el pueblo bajacaliforniano igual que la colonia mexicana en California, recuerda el fracaso rebelde, que se tradujo en la detención por la policía estadunidense, de los presuntos invasores, cuando con camiones blindados, ametralladoras, otras armas y municiones, se dirigían a la frontera. El proceso que por violar las leyes de neutralidad de los Estados Unidos les fue seguido se tradujo en su internación a la isla McNeil.
Marcelino Magaña Mejía salió libre de la cárcel de Los Ángeles y fue a radicar en San José, California, donde unos meses después falleció por causas desconocidas. El intento de Magaña por recuperar las tierras mexicanas del delta no resultó, pero cuando menos obligó al gobierno a tomar medidas para que no creciera el descontento campesino. El resultado fue la adquisición de 5 300 hectáreas con las que se formaron las colonia con los primeros propietarios mexicanos, la Progreso y Anexas. Los primeros ranchos Para mediados de la década de los años de 1920, la situación en el agro había cambiado un poco respecto al uso de la tierra, pero no en relación a las condiciones de los campesinos mexicanos. La mayoría trabajaban para agricultores extranjeros, a pesar de que ya existían colonias
de mexicanos poseedores de la tierra aunque no eran propietarios. Los únicos que eran dueños de su tierra eran los colonos de la Progreso y Anexas, que habían comprado sus tierras en 1925, pero recibieron sus títulos hasta 1938. Al oeste de la ciudad se habían formado las colonias Zaragoza y Sonora y al oriente otras colonias cuyos terrenos se habían dividido en pequeños predios y entregado a colonos mexicanos. Abarcaban alrededor de 10 000 hectáreas y las entregó el gobernador Esteban Cantú entre 1916 y 1919, pero los colonos carecían de títulos. Cuando Abelardo Rodríguez fue gobernador, estos colonos seguían en la misma situación. En su Memoria Administrativa de 1927, comenta:
Edificio de la cooperativa de la colonia Progreso y anexas.
…existe un grupo de colonias agrícolas (Castro, Herradura, Abasolo, Álamo Mocho, Rivera, Zaragoza, Sonora, etc.) que con antelación a la fecha que asumí el gobierno de esta entidad, habían sido formadas exclusivamente por elementos mexicanos, en su mayoría repatriados de Estados Unidos, pero estos agricultores no poseían en propiedad esas tierras, sino que las ocupaban como arrendatarios, pues pertenecían, lo diré una vez más, a compañías extranjeras. Tocó al gobierno a mi cargo verificar la compra de los terrenos en que se asentó el grupo prenotado de colonias y pasarlos a los propios agricultores mexicanos…
Rodríguez compró a compañías extranjeras los terrenos de las colonias Rivera, Abasolo, Castro y Herradura, alrededor de 6 500 hectáreas. Las fraccionó en parcelas de 20 hectáreas para venderlas a los posesionarios a $150.00 pesos por hectárea, con el 10 % de pago inicial y el resto pagadero a 10 años. Pero eso no resolvía el problema de la gran cantidad de mexicanos que requerían tierras, situación que se agravaba con la llegada de los repatriados de Estados Unidos. Los sindicatos campesinos Ante los escasos resultados, los mexicanos formaron sindicatos agrícolas, cuyo objetivo era mejorar las condiciones laborales de los campesinos que trabajaban en los ranchos del valle. Así nació la organización campesina. Algunos sindicatos, como el de la colonia Gómez dirigido por Anastasio Reyes, fue uno de los que más lucharon por proteger a los campesinos. En un valle de temperaturas extremas, Reyes creó, en 1926, la primera Cruz Roja Campesina para proteger la salud de los campesinos.
Puente sobre el canal principal del oeste. 1918.
Patio central de edificio de la Colorado River Land, en Mexicali, B.C. 37
General Abelardo L. Rodríguez.
Felipa Velázquez viuda de Arellano.
También fue el primero que solicitó tierras al gobierno, pero el gobernador Rodríguez les dijo que no estaba en condiciones de apoyarlos, porque todos los recursos estaban destinados a la colonia Progreso. Por su parte Harry Chandler, dueño de la Colorado, les dijo que las tierras que pedían estaban sembradas y que si se entregaban a los campesinos dejarían de producir, porque ellos no tenían recursos para trabajarlas. Les prometió que en cinco años abrirían nuevas tierras cerca del Río Colorado y las entregarían al gobierno para que se las repartiera. Otros sindicatos luchadores fueron el Enrique San Martín de Álamo Mocho, el Práxedis Guerrero de Sesbania, el de Cerro Prieto, Miguel Hidalgo de Campos Nuevos y otros, que para 1926 sumaban 26. En 1927, los miembros de Álamo Mocho se posesionaron del rancho Alcanfores, en estación Sesbania. Se negaron a firmar contrato con la Colorado, pero un año después, en la temporada 1928- 1929, refaccionados por el Banco Agrícola Peninsular sembraron algodón y cosecharon 375 pacas, que entregaron al mismo banco. Álamo Mocho en 1930 En lo ocurrido en 1930 en Álamo Mocho confluyeron varios factores. La ya conocida situación de los campesinos mexicanos, el incumplimiento de pago a los campesinos por las 375 pacas de algodón entregadas al banco, el fin del gobierno de Abelardo Rodríguez, en noviembre de 1929, el manifiesto de los campesinos contra la Colorado y el 38
Coronel Marcelino Magaña Mejía.
gobierno. A nivel nacional, influyó la rebelión escobarista, de acuerdo al Plan de Hermosillo, en Sonora y el rompimiento de relaciones de México con la URSS en 1930. La rebelión fue contra la imposición del candidato Pascual Ortiz Rubio de parte del ex presidente Plutarco Elías Calles y la dirigieron el gobernador de Sonora, Fausto Topete y el general José Gonzalo Escobar en 1929. El gobernador de Baja California, Abelardo L. Rodríguez fue invitado a unirse a los sublevados, no aceptó, manteniendo su lealtad a las instituciones. Para la defensa, contaba con el 21 batallón, pero formó el segundo batallón con obreros y campesinos voluntarios. Les prometió resolver sus problemas de pago del algodón y de tierras. El 3 de marzo inició la asonada, pero los escobaristas no llegaron a Baja California y fue escasa la actividad del 21 batallón del general Rodríguez. Dos meses después, el 6 de mayo de 1929, terminó la rebelión y los obreros y campesinos fueron licenciados sin cumplirse la promesa de entregarles tierra. Al contrario, al regresar a sus terrenos, aduciendo un adeudo, el banco Peninsular había embargado sus aperos de labranza, sin liquidarles sus 375 pacas. En el país, en 1930, había condiciones represivas para quienes se ostentaban como miembros de la CGT, de filiación comunista. Ese año, el presidente Emilio Portes Gil rompió relaciones con la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas, por su intromisión en los asuntos internos de México y el ataque a diversas embajadas mexicanas. A partir del rompimiento,
el 22 de enero de 1930, todo aquel identificado como comunista fue perseguido y encarcelado. En Mexicali, esta disposición se reflejó contra aquellos sindicatos que estaban adheridos a la CGT, como eran el Enrique San Martín de Álamo Mocho, Práxedis Guerrero de Sesbania y Cerro Prieto. En 1930, la lucha de los trabajadores agrícolas tuvo consecuencias negativas. Estos tres sindicatos se enfrentaron abiertamente a la Colorado y al gobierno, lanzando un manifiesto público. En ese documento acusaban al gobierno de José María Tapia de entreguista y lo signaban con las frases: “Salud y comunismo libertario”. Lo firmaban los representantes de los sindicatos Álamo Mocho, Cerro Prieto y Sesbania. Como consecuencia, se inició una tenaz persecución contra los miembros de estos grupos hasta que fueron detenidas 19 personas; los dirigentes del sindicato Álamo Mocho, la señora Felipa Velázquez viuda de Arellano, sus cuatro hijos y 12 hombres más. Los enviaron al penal de las Islas Marías donde era director Francisco J. Mújica. Este envió documentos a las autoridades para que se investigara la situación de los detenidos y por orden del presidente fueron liberados. Cuatro meses después, cuando arribó el barco, los llevaron a Mazatlán. Mújica extendió salvoconductos y los hombres regresaron a Mexicali, no así doña Felipa, que permaneció en Mazatlán. También trajeron al gobernador de Baja California, Arturo Bernal un oficio de Mújica explicando las causas de su detención:
Llegada de chinos al valle de Mexicali.
Sembradío de caña.
(…) los campesinos deportados por el gobierno anterior al suyo y que fueron traídos con el mote de anarquistas, comunistas y otros motes más rimbombantes que peligrosos en sí, vuelven hoy al lugar de su trabajo y de sus hogares abandonados a entregarse tranquilamente a su noble labor aunque inclemente por ciertas circunstancias, de cultivar la tierra. Los encabezan Marcelino Velázquez Calleros, Benjamín Magaña Ayala y Benigno Lamas. (…) he visto documentos en que consta la negativa de la compañía del Río Colorado, negándoles la venta de agua y la esterilidad de las súplicas de estos hombres ante el gobierno para conseguir dichas aguas mediante el pago de conservación del canal que no están estipuladas
Producción de alfalfa en la colonia Progreso. 39
en sus contratos, he visto los contratos de la compañía en donde se pone en evidencia la rapacidad de estos explotadores extranjeros de las riquezas nacionales en forma unilateral y favorecida para ellos y he visto como son explotados por el Banco Agrícola Refaccionario del lugar, quien los acusa de deudores morosos y aun no se les rinden cuentas de 375 pacas que le entregaron el año de 1928.
obras de irrigación. Probable falta de mejor organización e integración de mayor número de campesinos. Diferentes factores impidieron el éxito total de las gestiones de cada grupo. Lo importante de estos intentos de recuperar las tierras en manos de extranjeros, fue sembrar en los mexicanos la idea de luchar por su derecho a la tierra, como lo establecía la Constitución de 1917..
La cooperativa de que forman parte estos campesinos se alistó en marzo del año pasado en las filas del gobierno para formar el Segundo Batallón de Mexicali y sostener las instituciones en contra de los rebeldes sonorenses, obteniendo como único premio, al ser licenciados, el que el banco les recogieras sus animales, aperos y útiles de labranza, sin rendirles cuenta de sus deudas, culminando toda esta serie de calamidades con la deportación final…
Sobre este hecho se ha generado una polémica a partir de 1984, cuando se creó el “Año de integración de la mujer al desarrollo”, y se buscaron mujeres con merecimientos para ser declaradas heroínas. En Mexicali se nombró a Felipa Velázquez viuda de Arellano, con base en varios testimonios de personas del actual ejido Islas Agrarias, antes Álamo Mocho. Cuando ocurrieron las detenciones de 1930, ella tenía cuatro meses radicando en Mexicali y no era dirigente, pero, según testimonios, participaba en las reuniones. Por ese motivo fue apresada con sus cuatro hijos y enviada al penal de las Islas Marías. Regresó a Mexicali en 1948, enfermó y volvió a Sinaloa, donde murió en 1949. En 1930, el señor Jesús Cibrián era minero en Santa Rosalía y recordaba que había huelga en la mina, que estaba cerca del mar. Estando los mineros en la playa, vieron llegar un barco y se acercaron. Una mujer, doña Felipa, arrojó un papel donde explicaba que iban presos y las causas de la aprehensión. Al enterarse los mineros, corrieron al barco con intención de liberar a los presos, pero el barco se alejó de la costa. Cinco años después él vino a Álamo Mocho y pese a su excelente memoria, no recordaba que la gente mencionara a Felipa. Fue recordada hasta 1984, cuando se trajeron sus restos para ser sepultados en el actual ejido Islas Agrarias Todas estas iniciativas ocurrieron en momentos no propicios: gobernantes contrarios al ejido, enorme poderío de la Colorado, control de la Colorado sobre todos los aspectos de la vida económica de Mexicali. Apoyo del gobierno de Estados Unidos a la Colorado por proteger las
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Referencias Acosta Montoya, D. (1985). Precursores del agrarismo y el Asalto a las tierras en el estado de Baja California. Instituto de Investigaciones Históricas del estado de Baja California, Pablo L. Martínez. Carta de Francisco J. Mújica al gobernador Arturo Bernal en 1930 Cisneros Hernández M. (1988). El desarrollo capitalista en Baja California, valle de Mexicali. Tesis de licenciatura. Facultad de Economía. México: UNAM. Durante de Cabarga, G. (2000). Ante la Asonada. Mexicali: Archivo Histórico del Estado de Baja California. Entrevista personal a Jesús Cibrián por Yolanda Sánchez Ogás realizada en el ejido Islas Agrarias en 1990. Entrevista personal a Juan García Aldama realizada por Yolanda Sánchez Ogás en la Comunidad El Mayor Indígena Cucapá en 1988. Herrera Carrillo, P. (2002). Reconquista y colonización del valle de Mexicali y otros escritos paralelos. Colección Baja California, Nuestra Historia. México: Universidad Autónoma de Baja California, XVII Ayuntamiento de Mexicali, ICBC. Informe al Instituto Nacional de Geología: Observaciones hechas entre octubre y noviembre de 1911, por Y. S. Bonillas y F. Urbina, acerca de los recursos naturales de la parte norte de la Baja California, especialmente del delta del Río Colorado. Presentado el 31 de marzo de 1912 para la Secretaría de Fomento y realizado por el Instituto Geológico Nacional. Rodríguez L. Abelardo. (2006). Autobiografía. Hermosillo, Sonora. Segunda edición ——Memoria Administrativa Sánchez Ramírez O. y Sánchez López E. (2009). Valle de Mexicali. El Agua y sus hombres. Mexicali, B. C.: Universidad Autónoma de Baja California. Telegrama enviado por Marcelino Magaña Mejía al presidente Álvaro Obregón el 22 de enero de 1924
Exploración moderna de un trecho de la frontera Jimmy Griffin* y Austreberto Silva Olivares**
E
l doctor Austreberto Silva y su servidor Jimmy Griffin hicimos una pequeña excursión a Caléxico y sus alrededores el 29 de julio de 2014, con el propósito de encontrar información histórica y cosas nuevas que pudiésemos rescatar, pero sobre todo qué espacios del lugar serían interesantes para que la cámara fotográfica de Austreberto captare y que fuesen atractivos para la sociedad. Primero fuimos rumbo al este por la prolongación de la calle Segunda que corre paralela al cerco fronterizo, porque sabíamos que nos llevaría al abandonado edifico de C-M Ranch. Este inmueble fue construido en 1905, y en su tiempo y por muchos años fue uno de los mejores y más importantes edificios en el Valle Imperial. Actualmente, aunque esté arruinado, la estructura está intacta. De Mexicali es fácil verlo desde la avenida Colón, exactamente a la altura del edificio de la Voz de la Frontera y a unos 100 metros al norte del cerco. Las letras CM son las siglas de California-México Land and Cattle Company que era propiedad de los mismos accionistas de la Colorado River Land Company, que a su vez fue una corporación mexicana, creada cuando los dueños descubrieron que la primera empresa no podía tener propiedades en México. La CM fue organizada en agosto de 1902 y liquidada en 1920. En los años de 1950 y 1960 el edificio fue conocido como el rancho Bravo y el dueño era un médico del Valle Imperial que mantuvo el edificio en buenas condiciones. Una familia de agricultores de Brawley son los dueños actuales y lo han ofrecido, más algunas hectáreas de terreno, como donación a la ciudad de Caléxico, si la ciudad se compromete a arreglarlo y convertirlo en museo. El dinero ha sido el obstáculo. Austreberto tomó una serie de fotos del edificio y de otros viejos edificios rurales vecinos, algunas de esas fotos acompañan estas letras. * Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali” A. C. ** Austreberto Silva Olivares, miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali” A.C., es autor de todas las fotos que complementan este artículo.
Mapa de parte oeste y central del Valle Imperial. Con nuestras notas rústicas hemos delineado el Río Nuevo y el Canal Principal del Oeste. Sorprendente es la importancia y largo del Río Nuevo en ese valle.
Volvimos a Caléxico y después de un breve desayuno fuimos por la avenida Imperial y la carretera 111 hasta cruzar el Canal Todo Americano para fijar en nuestras mentes cómo era el canal en ese lugar. Después regresamos a la carretera 98, donde dimos vuelta al oeste. Paramos donde el canal Todo Americano cruza ese camino y continúa rumbo al sur para cruzar el barranco del Río Nuevo, y después hacer una curva de unos 90 grados para luego continuar paralelo al cerco internacional hasta casi llegar al cerro el Centinela. 41
Esa prolongación del canal Todo Americano vino a reemplazar el Canal Principal del Oeste, que desde las compuertas Sharp en Mexicali surtía agua de riego al lado oeste del Valle Imperial desde 1905 hasta 1940. Ese canal cruzaba el Río Nuevo en un acueducto al que todos le decían “el flum”. En este sitio hay pocos mexicalenses que recuerdan haber disfrutado de la refrescante agua que caía del Flum. Muchas hectáreas en la parte norte y oeste del valle de Mexicali se regaban con agua que transportaba ese canal. La función del Canal Principal del Oeste era Lo que queda del edificio de las oficinas del CM Ranch construido cerca de suministrar agua a los terrenos que quedaban a lado 1905. En los años de 1950 y más adelante fue propiedad de doctor Bravo oeste del barranco del Río Nuevo en el Valle Imperial. del Valle Imperial y fue conocido como rancho Bravo. Hay mucha historia En cuanto cruza la frontera la sinuosa ruta de ese adentro de esas antiguas paredes. barranco da un giro al noroeste hasta llegar cerca del pueblo de Seeley, después se cambia gradualmente al noreste para pasar por Brawley, enseguida cambia su rumbo al noroeste por algunos kilómetros y luego otros más hacia el oeste para descargarse en el Salton Sea. Como pueden apreciar en el mapa de la página anterior, quedaban extensos terrenos cultivables al oeste de Río Nuevo, especialmente en el área entre la frontera y el pueblo de Seeley y en el área de Westmorland, al oeste y norte de Brawley. Antes de las inundaciones de 1905-1907 existía un acueducto cerca Cruzando el puente sobre el Canal Principal del Oeste (West side Main de Brawley para llevar agua al área de Westmorland Canal) que ha surtido agua a todos los terrenos al oeste del Río Nuevo desde para auxiliar al Canal Principal del Oeste pero como 1905. Unos cuatros kilómetros al sur de este puente está la línea divisora y hasta 1940 ese canal recibía el agua en las compuertas Sharp en Mexicali fue el caso del flum original en Mexicali este fue y la llevaba hasta ese punto por terrenos mexicanos. Desde entonces, una destruido con las aguas y no solo eso, el barranco prolongación del canal Todo Americano lleva el agua hasta ese mismo fue tan agrandado por la erosión que los ingenieros punto y es lo que vemos en la foto. En el mapa rústico que acompaña a este consideraban que era demasiado costoso reemplazar artículo se puede apreciar hasta dónde llegaba ese canal antes de dividirse en varios canales menores. ese “flum” y que era preferible ampliar la capacidad del Canal Principal del Oeste mexicano. Entramos Seguimos adelante por la 98 y a poco menos de seis en mucho detalle para explicar cómo el Todo Americano kilómetros de la avenida Imperial llegamos al barranco del resolvió la falta de ese canal y cómo se ve ese canal corre Río Nuevo. El flujo de agua negra ha sido confinado a una lo más cerca posible al cerco fronterizo para aprovechar la corriente angosta en el lado este del barranco. Al norte del pendiente natural del terreno. puente casi todo el barranco está densamente poblado con Mientras estábamos viendo donde la prolongación del vegetación principalmente pino salado y pinillo, más algo de canal Todo Americano cruzaba el camino 98, observamos cachanilla. Al sur del camino han hecho un gran depósito, del un rótulo que marcaba el límite oeste de la ciudad de tipo llamado “relleno sanitario”, para la basura municipal. Caléxico. Indicaba una población de 36 274 personas y una En el área cerca del camino parece que ya está terminado y el elevación de un pie (30.48 centímetros) bajo el nivel del relleno está emparejado y tapado con tierra de modo que no mar. No creo que haya muchas ciudades que hagan alarde sabe uno de qué se trata. Aparentemente el relleno continúa de esa atracción. 42
una persona completamente ignorante de la historia de esta área, como yo. Mientras tanto, en 2014, continuamos por el camino 98, que sigue siendo una carretera de solo dos carriles. Los terrenos a los dos lados del camino estaban sembrados de alfalfa y lo que creo fue sudan grass, un forraje que han sembrado mucho en los últimos años. Algunos terrenos estaban sin sembrar. De repente, a unos 9 km de la avenida Imperial vimos que los terrenos al sur del camino estaban encerrados con cerco ciclónico de unos dos metros de alto y tras eso los terrenos están completamente cubiertos con Los primeros paneles solares que encontramos estaban al sur del camino. miles de grandes paneles solares. Estos están formados Ocupan terrenos que probablemente fueron cultivados por más de cien en líneas orientadas de norte a sur. Las líneas están años. Al fondo el cerro del Centinela. divididas en grupos y cada grupo está motorizado de manera que todos los paneles siguen el sol como si fueran los girasoles que crecen en los bordos de los canales de los ranchos. En la mañana todos están orientados al este y a medida que el sol avanza por el cielo los paneles giran sobre su ejes y cuando bajo el sol están mirando al oeste. Impresionante, y Austreberto tomó algunos buenas fotos con el impresionante cerro Centinela al fondo. Seguimos la 98 y los paneles se interrumpieron con terrenos sembrados y baldíos para iniciar otra vez. A unos doce kilómetros de Caléxico vimos una bodeguita que desde los años de 1960 ha estado cerrada y abandonada Estas tres líneas de muy alta tensión vienen de las plantas y los vientos han ido arrancando las láminas del techo termoeléctricas que están cerca de la Rosita en la carretera de Mexicali poco a poco pero todavía quedan unas cuantas. Lo más a Tijuana. No aparece en esta foto otra línea similar que viene de los cientos si no miles de paneles solares que ocupan terrenos que por cuando notable es que hay tres ventiladores rotativos en la cúpula menos cien años fueron agrícolas. y el del medio sigue girando sin haber tenido atención, más al sur. Hay un camino de acceso desde la 98, pero tal vez nueva lubricación, etcétera. Para alguien que le gustan las se cuente con otro ya que no vimos movimiento de camiones. especulaciones, ¿puede estimar cuántas revoluciones ha dado Recordé que hace unos 60 años entramos en aquella y cuánta electricidad pudo haber generado con un pequeño área una tarde a fines de marzo de 1954, para observar una generador acoplado? panorámica histórica, parte de una celebración de tres días A 15 kilómetros de la avenida Imperial vemos los primeros llamada Caléxico Cavalcade. Estábamos sentados sobre unas paneles solares en el lado norte del camino, no similares, pacas de alfalfa distribuidas en forma de un anfiteatro natural sino idénticos a los otros y así continúan en los dos lados del excavado por las aguas del Río Colorado por allá en 1906. camino hasta llegar a la orilla del desierto. Estimo que 30 a Pasaron en frente de nosotros personas, actores aficionados, 40 por ciento de los terrenos que antes estaban sembrados de representando a los indígenas, al capitán Juan Bautista de algodón, alfalfa, y otras cosechas ya están fuera de producción Anza y a los padres franciscanos que lo acompañaba, a los agrícola y generando quién sabe cuánta corriente eléctrica, ejércitos invasores de Kearny y de Cooke, las diligencias salvo en esos pocos días nublados que hay en el año. Entre los Butterfield, y a los ingenieros introduciendo el agua por el paneles han instalado un sistema de conductores para recibir canal Álamo, los primeros pioneros y agricultores y ¡mucho la electricidad producida y llevarla a unas subestaciones y de más que he olvidado! Muy impresionante sobre todo para ahí a una gran línea de transmisión. 43
Cosechando alfalfa en frente del Centinela. Esta rastrilladora está formando la ya cortada alfalfa en hileras donde la empacadora puede levantarla y hacerla pacas. Nos preguntamos, ¿ese rancho también será pronto víctima de la demanda para energía solar?
Llegamos a la orilla del desierto, donde la carretera 98 cruza un puente sobre el Canal Principal del Oeste, que es prácticamente el mismo que fue trazado para recibir agua del canal mexicano del mismo nombre por allá en 1905, o quizás un par de años antes. Ahora recibe el agua del Todo Americano. A los dos lados del camino, un par de kilómetros más adelante, hay una notable columna de palmeras antiguas que nunca han sido podadas y sus troncos están cubiertos de hojas secas hasta el suelo, debe de haber más de cien de ellas. No es difícil imaginar que es una fila de soldados esperando órdenes de su jefe: El Centinela. Decidimos continuar un kilómetro por el desierto para llegar a donde tres grandes líneas de alta tensión cruzan la carretera 98. Estas líneas vienen de las plantas termoeléctricas que están instaladas cerca de La Rosita en el camino de Mexicali a Tijuana. Paralela a ellas hay otra línea poco menos alta pero quizás de la capacidad de transmisión similar que viene de aquellos paneles solares. Es imposible para personas como nosotros que hemos tratado de aprender algo de la historia de esta región, de estar parados allí en ese pedacito de lo que fue desierto absoluto hace unos pocos años, sin pensar en el desarrollo de la historia. Ahora está la carretera 98 y estas líneas de transmisión. Al pie del cerro El Centinela podemos ver las bombas y tubería azul que llevan agua del Río Colorado a Tecate, Tijuana y otros lugares en la costa del Pacífico; están los paneles solares; y, si vamos unos kilómetros más al oeste por la 98, podemos ver a la distancia cientos de molinos de viento produciendo electricidad. 44
Línea de palmeras en la orilla del desierto, sembradas quien sabe cuándo para proteger las siembras de los vientos y la arena que trae. En esta foto están tal vez la mitad de las palmeras que están por los dos lados del camino 98.
Acueducto sobre el Río Nuevo en Mexicali conocido como el Flum. Conducía el agua del Canal Principal de Oeste sobre el Río Nuevo. Muchos mexicalenses recuerdan de haber disfrutado en su juventud de la refrescante agua que caía de ese conductor y en el que se bañaban.
Hace unos cientos de años (1775-1776) las expediciones De Anza pasaron por este mismo desierto, que ellos le pusieron el nombre de Yuha que aparece en un marcador histórico unos tres o cuatro kilómetros adelante por la 98. También podemos recordar que por este camino, aun antes de que fuera pavimentado, en los años 1950-1960, la mayor parte del agua potable para Mexicali fue llevada de unos excelentes pozos cerca del pueblo de Ocotillo en pipas, camiones chicos y raquíticos. El agua se embotellaba en los tradicionales botellones de vidrio de cinco galones y distribuidos a las casas y negocios en camiones chicos equipados para cargar botellones. Hasta hubo por un tiempo, un individuo que acondicionó una carreta y con ella y su caballo entregaba agua a las amas de casa.
La Facultad de Enfermería de Mexicali. Su historia y actualidad Antonio J. D. Olvera Flores*
L
a atención de los enfermos debe haber sido prioritaria desde tiempos ancestrales. Me imagino que en la prehistoria las personas que sufrían algún ataque de un animal y quedaban mal heridas eran atendidas por los brujos o chamanes y el cuidado posterior lo debieron recibir de la compañera del herido, hasta su total restablecimiento si es que la o las heridas recibidas no le habían causado la muerte con anterioridad. Por ejemplo, la historia consigna que el emperador Marco Aurelio, en el año 175 A. C. parte hacia el este del imperio, esto es, hacia Egipto, para combatir una sublevación, pero cae enfermo por la peste, la cual se le complica con la presencia de úlceras en la piel y fiebre muy elevada, es entonces cuando su esposa, la emperatriz Faustina, le sirve como enfermera hasta su recuperación, incorporándose de nueva cuenta al mando del ejército, con lo que logra detener el alzamiento del pueblo egipcio descontento por los altos impuestos que le reclamaba el imperio romano. Con el paso del tiempo, en la edad media, con el inicio de las cruzadas, cuando las guerras se realizaban con espadas, lanzas, mazos, flechas y otros objetos punzocortantes y contundentes, las heridas, si no eran mortales como en la prehistoria, eran graves o mutilantes, por lo tanto debían requerir de muchos cuidados, y estos debieron de ser de igual manera por las personas allegadas al herido, sobre todo del sexo femenino. En el siglo XIX aparece una figura importante que va a darle un giro al cuidado de los enfermos, el 21 de octubre de 1854, la británica Florencia Nightingale (1820-1910), de *
Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali” A. C.
familia acomodada, parte, junto con otras 38 enfermeras a Skutari, Turquía, para prestar ayuda a los heridos de la guerra de Crimea (1853-1856). El 4 de noviembre de 1854 llega junto con su grupo, y hasta el final de la guerra llegarían unas 125 enfermeras más. Las condiciones para el cuidado de las personas heridas son penosas y pronto estalla una epidemia de cólera. Sin embargo, el trabajo de organización de Florencia Nightingale es un éxito rotundo, y es ella quien inició el desarrollo de la enfermería como profesión, dándole sus bases técnicas. En 1860 se ponen los medios en el Hospital de Santo Tomás y a su regreso Florencia Nightingale funda en Londres la Escuela de Santo Tomás, iniciando así el adiestramiento metódico de estas profesionales. La enfermería en América Latina En América Latina la enfermería se inició a comienzos del siglo XX. La primera escuela de enfermería se creó en Chile en 1906, en la Escuela de Enfermería Hospitalaria de la Universidad de Chile. Pronto otros países hicieron lo mismo y se establecieron diferentes escuelas de enfermería a lo largo del continente. En México, la formación de las enfermeras fue así, iniciando a principios del siglo pasado: En 1900, el doctor Eduardo Liceaga, siendo director de Servicios Médicos del Hospicio, Maternidad y Consultorio, le solicitó al presidente Díaz autorización para establecer una escuela de enfermería en México. La Escuela de Enfermería fue inaugurada el 9 de febrero de 1907, gracias a los esfuerzos del doctor Fernando López. Aunque en el Hospital General ya se habían impartido cursos de preparación para las 45
1985. Letrero en la entrada de la Unidad de Enfermería ubicada en avenida Obregón y calle G.
enfermeras, en 1907 se creó el reglamento respectivo, en el cual se mencionó que la carrera se cursaría en tres años, por lo que en ese entonces se inició, en el Hospital General, la formación de enfermeras de carrera en México. La enfermería en Baja California En nuestro estado Baja California, la formación de enfermeras se inicia cuando en 1951, el doctor Raúl Lozano Villarreal observó que el personal de enfermería estaba muy falto de conocimientos y solo fungían como auxiliares, no había enfermeras generales, con estudios, es decir, de carrera, por lo que propuso al doctor Francisco Dueñas Montes la creación de la Escuela de Enfermería, proporcionando éste último una aula en la Escuela Cuauhtémoc; iniciando con cinco alumnas, fue el doctor Víctor Gutiérrez de 1951 a 1952 el primer director de la escuela, el único requisito que se solicitaba era haber concluido la educación primaria; el programa de estudio que se implementó fue el de la Escuela de Enfermería de Monterrey, N. L. En 1952 se inician prácticas clínicas de las alumnas en la Cruz Roja de Mexicali, posteriormente en1953, asume la dirección de la escuela el doctor Gamaliel Gutiérrez. El 28 de febrero de 1957, el gobernador del estado Braulio Maldonado Sández promulga la Ley Orgánica de la universidad, estableciéndose formal y oficialmente la Universidad Autónoma de Baja California, dos años después, en mayo de 1959 se nombra como primer rector de la institución, al doctor Santos Silva Cota y es entonces que el 1 de agosto de 1959, la Escuela de Enfermería, que antes era parte del Instituto de Ciencias y Artes del Estado 46
(ICAE), se incorpora a la Universidad, funcionando en el edificio de la Escuela Cuauhtémoc, con el mismo plan de estudios, exigiendo solo la educación primaria como requisito de ingreso. En septiembre de ese año se inicia el ciclo escolar 1959-1960 con el programa a nivel técnico profesional de enfermería, siguió funcionando en la escuela Cuauhtémoc pero ya como plantel universitario, se cambiaron y mejoraron los programas de prácticas profesionales en hospitales. En este mismo año se inician las prácticas clínicas de los alumnos en el Hospital General, siendo el doctor Víctor Gutiérrez y en forma fortuita el doctor Juan Cortés Núñez los encargados de dicha práctica; este mismo año egresan 27 alumnas, las que solo recibieron diploma. En el mismo año 1960, es cuando se solicita, ya como requisito de ingreso a la Escuela de Enfermería, el certificado de educación secundaria. El 16 de mayo de 1964 se adopta el lema universitario “Por la realización plena del hombre”, escogido entre 864 propuestas, después de la convocatoria lanzada en octubre del año anterior, el ganador es el estudiante de leyes Miguel Gárate Velarde. El 15 de febrero de 1966 la Universidad convoca al concurso para la creación de su escudo oficial y el diseño del pintor José Reyes Meza es el ganador. En el año 1966 se aplicaron los dos primeros exámenes profesionales en la UABC, y se realizaron a alumnas de la Escuela de Enfermería, el día 9 de febrero de 1966, de las 9:00 a las 11:30 horas a Catalina Flores Nieblas y posteriormente a Obdulia Flores Ramírez. Según narra el doctor Austreberto Silva Olivares, él tuvo el privilegio, satisfacción y orgullo de firmar, en su carácter de Secretario general, los primeros títulos de los alumnos que habían presentado sus exámenes profesionales respectivos, además de las anteriores a Julia Calderón Ávalos, enfermera, María Luisa Quintero, enfermera. En el periodo de 1967 a 1970 funge como director de la escuela el doctor Arcadio Chacón Mendoza, en este periodo se ubica a la Escuela de Enfermería en un terreno adjunto al Hospital Civil de Mexicali en el cual se construyeron tres aulas y un espacio como área administrativa, En 1967 se incluyen por primera vez materias de enfermería al plan de estudios y esta fue propedéutica de enfermería. En
este mismo año, se aceptaron varones en la escuela, ya que anteriormente se consideraba una profesión femenina. En 1968, la enfermera María Irma Ruiz Chávez reestructura el plan de estudios, basándose en el de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia de la UNAM, así como el panorama epidemiológico de la entidad, quedando constituido por 53% de asignaturas médicas y complementarias y 47% de asignaturas de enfermería, aplicándose este hasta 1969. Hasta el año siguiente de 1970 inicia la construcción de cinco aulas y una oficina administrativa (lo que se conoce ahora como el edificio A), y es en el mes de marzo de 1971 en que se traslada la Escuela de Enfermería a los edificios que actualmente ocupa y en donde se han formado muchas generaciones de enfermeras hasta la actualidad. En el año de 1974 es nombrado como director el doctor Alfredo Santaella Grossp, quien continúa con el mismo plan de estudios, y sigue en la dirección de la escuela hasta 1980. Es en este periodo cuando el gobernador del estado, el licenciado Milton Castellanos Everardo donó mediante un decreto publicado en el Diario Oficial el 20 de junio de 1974 los terrenos que pertenecían al Hospital General en el cual se construye el edificio en el que actualmente funcionan los laboratorios y aulas de la Escuela de Enfermería. La universidad continúa creciendo, y en 1976 se inicia la construcción del edificio B como respuesta a la necesidad de laboratorios, salas audiovisuales y el aumento de la matrícula, ya que en el año de 1975 ingresaron 120 alumnos. Se construye además un espacio para biblioteca, de la que Leticia Ruiz Chávez fue su primera encargada; se construyen también oficinas administrativas. Para 1978 se modifica el plan de estudios actualizando los aspectos de salud-enfermedad, por lo tanto el plan contemplaba materias médicas y de enfermería en una proporción de 50-50 por ciento. En 1980 toma la dirección de la escuela el doctor José Mayagoitia Gómez, quien continúa el plan de estudios vigente en esa fecha. El plan de estudios es evaluado en 1983 y se realiza un planteamiento justificado para la reestructuración de dicho plan. Este mismo año se ofrece el primer curso posbásico que es administración de los servicios de enfermería. Para el siguiente año, 1984, se ofrece otro curso posbásico de docencia asistencial y administración en el área de
1983. Edificio principal en la Unidad de Enfermería de Obregón y calle G.
1971. Colocación de la primera piedra del primer edificio que se construyó para la Escuela de Enfermería. En la foto: doctor Arcadio Chacón Mendoza, director de la escuela, señora Esther Zuno de Echeverría, químico Juan de Dios Muñiz Duarte, licenciado Rafael Soto Gil, rector, y licenciado David Piñera, secretario general de la UABC.
2014. Nueva Unidad de Ciencias de la Salud en la colonia Calles.
la salud, con lo que se amplía la gama de cursos para enfermeras generales. El crecimiento de la población estudiantil y la demanda por estudiar la carrera, hace que en 1986 se construya el edificio C en el que se contempló una sala audiovisual con capacidad para 90 personas, oficinas administrativas y seis aulas más, para dar lugar a la demanda de la población estudiantil. 47
Doctor Gamaliel Gutiérrez, director fundador 1953-1961.
Doctor José Mayagoitia Gómez, director 1980-1988.
Doctor Alfredo Santaella Gross, director 1976-1980.
Fue hasta el año de 1989 cuando se establece un convenio con la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia (ENEO) de la UNAM, con la finalidad de implementar la licenciatura en enfermería y obstetricia en la modalidad de ingresos a años posteriores al primero, mediante el Sistema de Universidad Abierta, egresando la primera generación en 1991. Es en el año de 1991 cuando por primera vez en la historia de la Escuela de Enfermería asume la dirección una enfermera, la licenciada en enfermería y obstetricia (LEO) María Irma Ruiz Chávez, después de un primer periodo directivo, en 1994 asume su segundo periodo de gestión. En el año de 1992, la Universidad Autónoma de Baja California, en el marco del 35 aniversario de la fundación de la Escuela de Enfermería, otorga un reconocimiento al doctor Gamaliel Gutiérrez Sánchez como director fundador, otorgado el 28 de febrero de 1992. Sigue habiendo cambios, en 1993 se inicia la reestructuración del plan de estudio del nivel técnico de enfermería, bajo la política de flexibilidad curricular, incorporándose áreas terminales de Enfermería Industrial, con lo cual se abre más campo de acción de la profesión en el estado, este plan entra en vigor a partir del ciclo escolar 1994-1995. En el año de 1995 se realizó un estudio de factibilidad para la creación de la Licenciatura en Enfermería escolarizada, resultando favorable, por lo que se estructuró el plan de estudios, basándose en la política de flexibilidad 48
Lic. Irma Ruiz Chávez, directora 1991-1999.
Lic. Bertha Cisneros Ruiz, actual directora desde 2011.
curricular, el cual constó de tres etapas: básica, disciplinaria y terminal, manejándose el sistema de créditos. Y es en 1996 cuando da inicio la licenciatura de enfermería en el período 1996-1997 con un número de 95 alumnos, además de esto, se reestructuran los planes de estudio de cursos posbásicos de administración de servicios de enfermería, enfermería pediátrica y enfermería en salud pública. Al siguiente año en 1997, se establece y da inicio el curso postbásico de enfermería quirúrgica (instrumentista) con lo que se amplía la formación de enfermeras en disciplinas más específicas y de más responsabilidad que requieren de mayor estudio por parte del alumnado recibiendo la instrucción teórica en la escuela y la práctica en los diversos hospitales de la ciudad (IMSS, ISSSTE y Secretaría de Salud). En 1998 se establece un convenio de la escuela de enfermería con el ISSSTE para la profesionalización del personal auxiliar de enfermería que labora en esta institución con lo que se pretende elevar la calidad de la atención a los pacientes derechohabientes. En el año 1999, asume la dirección la LEO Andrea Verdugo Bátiz, quien es la primera directora egresada de esta unidad académica. En este mismo año también se elabora el Plan de Desarrollo Institucional. En el año 2000 egresa la primera generación del Programa de Licenciatura en Enfermería que había iniciado en 1996, egresan ese año 43 alumnos. En este mismo año se elabora plan de estudio para un programa de nivelación a licenciatura en enfermería en modalidad abierta, el cual fue
aprobado por unanimidad tanto por el Consejo Técnico de la Escuela como por el Consejo Universitario, entrando en vigor en el ciclo escolar 2000-2001. Además, se establece el primer convenio de colaboración internacional con la Universidad del estado de Montana, Estados Unidos de América, con los que se trabajó un programa de educación ambiental en zonas marginadas, quedando otros proyectos pendientes como lo es el de intercambio académico. En el ciclo 2001-2 se reestructura de nueva cuenta el plan de estudios de la carrera licenciado en enfermería, para actualizarlo de acuerdo con las necesidades de la época que se está viviendo, para que el personal de enfermería esté bien preparado, en el cuidado de los enfermos. El programa de enfermería a nivel licenciatura fue sometido al proceso de evaluación para su acreditación por parte del Consejo Mexicano de Acreditación y Certificación de Enfermería, en noviembre de 2004. y el 4 de diciembre se otorga el Certificado de Calidad a dicho programa. Un acontecimiento importante en la Escuela de Enfermería es que el 25 de mayo de 2005 esta cambia su estatus de escuela a facultad. Es también de gran relevancia para la ya Facultad de Enfermería que en 2007 cuatro profesoras, la M.C. Anabel Magaña Rosas, la Lic. Sandra Luz Borrayo Saucedo, Lic. Andrea Verdugo Bátiz y Mtra. Rosa Icela Esparza Betancourt, de la planta docente se incorporan al padrón de Evaluadores Externos del Consejo Mexicano de Acreditación de Enfermería. Del 2004 al 2008 funge como directora de la Facultad la M.C Anabel Magaña Rosas y en 2008 se ratifica su nombramiento para un nuevo periodo directivo. Al año siguiente, esto es en 2009-2, se inicia la modificación del plan de estudios de la licenciatura de enfermería, integrándose al tronco común de Ciencias de la Salud de la Universidad, es en este mismo año que el programa de licenciatura de enfermería recibe su recertificación, por parte del Consejo Mexicano de acreditación y Certificación de Enfermería por cumplimiento de los estándares de calidad de la educación en enfermería. En el primer semestre de 2010 entra en vigor el nuevo plan de estudios de la licenciatura de enfermería, el cual fue aprobado por unanimidad por el Consejo Técnico de la facultad y también por el Consejo Universitario.
En este mismo año es demolido el edificio en el que dio inicio la Escuela de Enfermería, también se inicia este año el programa de maestría en ciencias de la salud con cinco alumnos, con el fin de ampliar la plantilla académica de docentes con una maestría. Se crea también el Laboratorio de Ciencias donde se realizan las prácticas de biología celular, bioquímica, biofísica funcional e histología. En el año 2011 entra en funcionamiento el nuevo edificio, que se construyó de dos plantas, el cual alberga biblioteca, laboratorio de cómputo, cafetería, sala de usos múltiples y cuatro cubículos, para uso de los estudiantes y profesores. También en este año es nombrada directora de la Facultad la M. en C. Lic. Bertha Cisneros Ruiz, y bajo su gestión la Facultad de Enfermería es sede del programa de maestría en salud pública, en colaboración con la Facultad de Medicina del campus Tijuana. En el semestre 2013-2014 los alumnos de primer ingreso a la licenciatura de enfermería cambian de unidad académica y se van a las nuevas instalaciones de la UABC en lo que se denomina Cd. Salud, al oriente de la ciudad por la calle Novena, a su nueva unidad se le llama Unidad de Ciencias de la Salud y ahí comparten tronco común con los estudiantes, también de primer ingreso, de las carreras de medicina y odontología, estando juntos los dos primeros semestres de la carrera y posteriormente irse a sus diferentes facultades, para continuar sus estudios, yo tuve el privilegio de ser de los primeros profesores que impartieron clases en esa unidad, dando cátedra de embriología, salud pública y terminología médica. Otros profesores que también iniciaron sus clases en esa unidad académica fueron los doctores Fernando Sánchez López, médico familiar, dando también clases de embriología, el doctor Jorge Ochoa Mancillas, cirujano general, con sus clases de anatomía topográfica, el doctor Andrés Acosta Santana, ginecólogo, impartiendo clases de embriología, la doctora Gisela Ponce y Ponce de León con clases de anatomía topográfica, el doctor Jesús García con clases de embriología, el doctor Navarro, odontólogo con clases de embriología, el doctor Francisco Vélez García con clases de terminología, el M.C. Lic. Ulises Rieke Campoy como coordinador, y muchos otros que escapan de la memoria, pero que también fueron pioneros en esa unidad académica y que contribuyen a la formación de los futuros enfermeros (as), médicos (as) 49
Acta del primer examen profesional en la UABC, mismo que fue de Enfermera.
y odontólogos, que son los que tendrán en sus manos nuestra atención y salud. En la actualidad continúa como directora de la Facultad de Enfermería la M. C. Bertha Cisneros Ruiz. Desde el lejano 1952 cuando por primera vez se iniciaron los estudios de enfermería en la Escuela Cuauhtémoc y las prácticas clínicas en la Cruz Roja, han egresado de la escuela primero, y facultad después, muchas generaciones de enfermeras y enfermeros que con dedicación y esfuerzo se han preparado para dar una atención de calidad, sin descuidar el aspecto humanístico de esta carrera, ya que en su formación entra el conocimiento de los valores, que la UABC ha impulsado desde hace varios años, y que continúa hasta la actualidad.
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Muchas historias no escritas se han producido en esos salones y campus, como el de una estudiante que se vino de su tierra natal a los 14 años, con el fin de pasar “al otro lado” y gozar del “sueño americano” junto con una prima y su esposo, al llegar aquí, fueron a la casa de una amiga del esposo de su prima y ahí se quedaron hasta que pudieron pasar, recuerda que sí pasaron juntos a Estados Unidos pero a ella la aprehendió el servicio de inmigración y fue deportada de nueva cuenta para Mexicali, sin otro conocido que la amiga del esposo acudió con ella, pero esta le cerró las puertas y le dijo que ya no podía quedarse ahí. Sola y sin conocer a nadie, se fue a caminar por el centro de la ciudad, ahí una señora, al verla tan triste y desvalida, le preguntó “qué le sucedía”, ella le comentó su pesar y la señora le dijo que la ayudaría y la llevó con otra señora que vivía para el lado de Pueblo Nuevo, esta señora le ayudó a conseguir trabajo, primero en una tienda como dependiente, después consiguió trabajo en una clínica como asistente, ahí conoció a una enfermera, que la contrató para cuidar a su mamá y esta enfermera la ayudó a entrar a trabajar al IMSS, y donde empezó a estudiar la carrera de enfermería, hasta concluirla y egresar como enfermera general, continuó estudiando y en la actualidad se desempeña como jefa de Enfermeras en una unidad médica del IMSS. Hay muchas historias, algunas similares, pero todas tienen el común denominador, el deseo de superación, las ganas de ser algo o alguien y lograrlo, sin importar el tiempo que tarden o los esfuerzos que esto implique y la UABC abre sus puertas a todo aquel que desea superarse, y la facultad de enfermería también contribuye a esto.. Bibliografía Cisneros Ruiz, B. Plan de desarrollo 2011-2015. Crónica de la medicina (3a. Ed., pp. 286). Laboratorios Senosian. Silva Olivares, A. ( ). El Departamento Escolar de la UABC. El Río, 23, 6-8. Cuevas Guajardo, L. & Guillén Cadena, D. (febrero de 2012). Breve historia de la enfermería en México (Vol. 1, núm. 1). México: UNAM.
Cayetano Cisneros Aguilera Eduardo Andrade Cisneros*
M
is abuelos maternos, Cayetano Cisneros Aguilera y Candelaria Ramírez, salieron de Janamuato, Michoacán, en 1943, después de muchos conflictos por las tierras del ejido de Janamuato, de encarcelamiento para varios de los familiares, la muerte del hermano más chico, Rosalío Cisneros Aguilera; sus cuatro hijas mayores ya estaban casadas. Mi madre María Guadalupe, era la mayor, María, Juvencia y Felipa. Mi abuelo Cayetano tomó la decisión de buscar mejores tierras, más tranquilas y partieron con rumbo al norte. Con mis abuelos venían también mis tíos Domingo de 15 años, Miguel de 13, José de 11 y Benito de 9 años, además mi tía María, su esposo Martín Ávila, su hijo Eleazar. Llegaron a Navolato, Sinaloa, donde permanecieron unos días, ya que mi abuelita estaba esperando un hijo, quien nació precisamente en Navolato. A los ocho días reanudaron el viaje, partieron en el tren que los traería a Mexicali, ya que su amigo Mauro Pérez lo esperaba en el valle de Mexicali. Él era colono de la colonia Baja California, de las colonias que había repartido en 1938 el general Lázaro Cárdenas. En el trayecto tuvieron tan mala suerte, que antes de llegar a Mexicali murió mi abuelita Candelaria. Llegaron a Mexicali, ¿qué hacer con un niño recién nacido y enfermo? Mi abuelo lo llevó al Hospital General, hospedó a los otros niños y él fue a tramitar el sepelio de mi abuelita, la sepultó en el panteón de los Pioneros. Luego tomaron el tren que los llevó al kilómetro 49, antes de pasar el Río Colorado, en busca del señor Mauro Pérez, que dijimos que era colono de la colonia Baja California. Se bajaron del tren en la nada, un camino por la orilla de la vía y puro monte. Cuando se bajaron del tren, un oficial que comandaba un piquete de soldados, que custodiaba el tren, se acercó y le preguntó: ¿Qué llevas en esa bolsa de ixtle? Sin decir palabra, mi abuelo la abrió, enseñándola al oficial, quien metió la mano sacando una pistola, le dijo, es 45. Enseguida, echó un vistazo a los integrantes de la familia, volteó hacia
* Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali” A. C. Correo electrónico:
[email protected]
1950. De izquierda a derecha: Ramón Álvarez Cisneros, José Cisneros Ramírez y José Reyes Álvarez Cisneros.
el paraje lleno de monte, era un angosto camino, que los llevaría a donde se dirigían. Sin más, el oficial puso la pistola en la bolsa de ixtle y se la entregó: Sigue tu camino, le dijo. Mi abuelo se subió al tren que iniciaba su recorrido rumbo al kilómetro 57, llegaron al rancho de Mauro Pérez, ahí estuvieron una temporada, porque la idea de mi abuelo era comprar un rancho. En el ejido Nayarit había unos amigos de mi abuelo, lo invitaron a que se fuera al ejido, ya casi no había tierras que repartir, quedaban algunas pero con mucho salitre, tomó un terreno, luego fue a Mexicali a la Colorado River para que le rentaran o le vendieran un terreno que colindaba con el ejido Nayarit. Como ya se sabe el latifundio no se vendía, daba las tierras en aparcería1. El 2 de enero de 1944 firmaron un 1
Hasta hoy no he encontrado ningún contrato de renta, entre colonos y la Colorado, todos son de aparcería; el de don Cayetano Cisneros Aguilera, y la Colorado, fue por cinco años, le debía entregar a la compañía 15% de su producción, en bruto. En las haciendas del sur de la república era “a medias”, o “al tercio”.
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1945. De izquierda a derecha: Eduardo Andrade Cisneros, María Guadalupe Cisneros Ramírez, hija mayor de don Cayetano, en sus brazos: Abelardo Andrade Cisneros y Julio Andrade Cisneros.
1947. Benito Cisneros Ramírez, padre de la licenciada en enfermería Bertha Cisneros Ruiz, actual directora de la Facultad de Enfermería de la UABC.
contrato que finalizaría el último de diciembre de 1948; este contrato amparaba 23 hectáreas que estaban ubicadas en esta delegación de Mexicali, como a cinco kilómetros al oeste y un kilómetro al sur de estación Delta. Colindaba con la parcela 87 del ejido Nayarit. Mi tío José Cisneros me platicaba que él fue el primero que se fue al ejido Nayarit:
1949. De izquierda a derecha: José Cisneros Ramírez y Benito Cisneros Ramírez.
Cuando llegó el agua al canal, todos los ejidatarios a los que nos tocaba el agua de ese canal, lo asentamos. Debí haber tenido como 14 años, una vez andábamos varios ejidatarios, cuidando el canal, en un hoyo estuvo el agua metiéndose 24 horas, la tierra estaba muy seca, como en cinco kilómetros duramos seis turnos para asentarlo, duré varios meses desmontando porque mis hermanos estaban en el Nayarit y en la tierra que mi padre
Luego desmontamos, había mucha cachanilla y algunos pinos,
le tomó a la Colorado en aparcería, en la siembra del algodón,
para ese mismo año de 1944 ya estábamos sembrando. En la
cuando no tenían trabajo en las siembras, llegaban al ejido
noche mi abuelo agarró una reata nueva y la puso alrededor
Veracruz para ayudarme al desmonte.
de donde dormiríamos, porque decía que las víboras no pasan
Recuerdo un día en la noche, después de cenar se pusieron los
un mecate nuevo, debajo de un mezquite nos quedamos ahí,
frijoles a cocer en una olla, dije estos en Zacatecas ya están, les
después en el ejido Nayarit compró la parcela 82.
pongo la sal y un leño a la lumbre y a dormir, pero, ¡oh sorpresa¡ Cuando busqué la sal lo que encontré fue el plato de frijoles en que
Como las tierras de la Colorado eran en aparcería las sembraron por tres años y luego las entregó a la Colorado River. Después compraron una parcela en el ejido Veracruz, en 700 pesos, no había agua, estaba enmontada, ya estaba hecho el canal central Veracruz, y de nuevo el tío José y sus hermanos mayores Domingo y Miguel se fueron a desmontar, platica que no recuerda si fue en octubre o en noviembre. Para llegar al Veracruz se fueron en un trineo jalado por una mula. 52
los lavé y no los eché a la olla, qué tiempos. No les he platicado que pasó con mi hermano que nació en Navolato, Sinaloa, cuando mi padre lo llevó al hospital. Al llegar, una enfermera le sugirió que lo llevara a una casa del niño, que se lo cuidarían por una cantidad de dinero mensual, lo llevó para que se lo cuidaran.
Pasaron los meses y un matrimonio que no tenía hijos y visitaba el hospicio se encariñó con el niño y conoció a mi
Sigue platicando José, que cuando se fue al Veracruz, en octubre o noviembre, se quedó solo entre el monte y cuando se le acabó la comida: Me vine y llegué en abril del año siguiente, sin pelar, con la misma ropa, mugrosa. Una vez estaba en el Veracruz desmontando la parcela cuando pasaron dos señoras vecinas, había una vereda para ir al agua, me dijeron hoy es domingo, no se trabaja, no sabía que día ni qué mes era, no había calendario. Luego que estuvimos en el ejido Nayarit mi padre compró una parcela fue la número 82 y el ejidatario, mi hermano mayor, Domingo Cisneros Ramírez, la del Veracruz a nombre de 1950. Antonio Cisneros Ramírez.
1960. Don Cayetano Cisneros Aguilera.
Miguel Cisneros Ramírez, después se compraron a la Compañía de Terrenos en
abuelo y le decía: Denos en adopción al niño, usted que hará con él, tiene cuatro hijos que atender, nosotros le diremos que usted es su tata. Lo convencieron y accedió a entregarlo en adopción, él lo siguió visitando, hasta que un día se fueron a vivir a Tijuana. Cuando mi abuelo murió en 1968, Ramón Álvarez Cisneros les habló por teléfono y llegaron al sepelio al kilómetro 57, su nombre es Antonio Martínez, ese día conocimos a la familia y al tío. Nunca más volvimos a saber de él, son las cosas que llevó mi abuelo en su mente. Sigue relatando el tío José:
1948, 50 hectáreas en la colonia Camacho, toda enmontada, yo me fui otra vez a desmontar. En la Camacho desmontamos con trabajadores, ya había dinero, traía como 15 y hasta 20 trabajadores, llegaban muchos paisanos de Michoacán, les pagábamos $10 pesos diarios. Me venía los sábados al Veracruz y regresaba los lunes. Agarraba el tren y me dejaba en el 43, de ahí me iba de aventón o a pie, del 43 o del 39 hasta el Veracruz hacía unas dos horas y de la Camacho al ejido Plan de Ayala hora y media. En la colonia Camacho, la tierra estaba a nombre de Domingo, porque yo todavía no tenía la edad para tener propiedades.
En el ciclo de 1946 empezamos a sembrar en el ejido Veracruz, cuando metimos el agua a esa parcela, la traíamos en dos o tres melgas, regando con contras y de repente el agua empezaba a dar vueltas y se perdía. Después se rastreaba y sembramos a tierra venida. Había que llevar comida para cuando menos un mes y yo me quedé solo, costal de papas, frijol, manteca, cosas que no se echaran a perder y las tortillas, con harina. A dos parcelas un señor puso una bomba de mano en un pozo que tenía 40 pies de profundidad, de ese pozo tomábamos el agua todos los vecinos. La perforación se hizo con una broca manual que era sacada constantemente para extraer la tierra y así hasta llegar al agua. En el mes de abril ya teníamos la parcela del Veracruz, preparábamos y cultivábamos la tierra con puras bestias.
1953. Domingo Cisneros Ramírez en el ejido Nayarit, valle de Mexicali, B.C. 53
Domingo, el mayor, no tenía la edad para contratar. En esos años nadie sabía de precios del algodón, creo que las compañías pagaban lo que querían, en los años de 1950 a 1953, el algodón valía mucho. En 1953 compramos un troque nuevo, ya teníamos dos tractores, más otro troque; en enero de 1954 mi padre compró una Caterpillar nueva, con arado, disca, escrepa y con topo, era una D6. Recuerdo que cuando subió el dólar, un Sábado de Gloria, la compañía le daba 50 mil pesos y todo lo que había pagado por la maquinaria, don Cayetano se refaccionaba con la Jabonera. 1964. En el ejido Nayarit del valle de Mexicali, B.C., de izquierda a derecha atrás: no identificado. Cuando se murió su hijo Miguel, En medio: no identificado, José Cisneros Ramírez, Ramón Álvarez Cisneros, secretario general de él adoptó su nombre, todos los la Liga de Comunidades Agrarias de Baja California, no identificado, Domingo Cisneros Ramírez, créditos salían a nombre de Manuel Machado y enfrente el niño Miguel Cisneros Magaña. Miguel Cisneros; el año de 1957 fue el último año que lo refaccionó la Jabonera, y ese año Con la cosecha de 1950, de la Camacho compramos un vendieron las parcelas del ejido Nayarit, allá vivía el tío troque nuevo. De la Camacho a Mexicali, un troque cargado Domingo, las vendió y se fue a vivir a la colonia Camacho, de algodón tardaba siete horas en llegar, cruzábamos el río el ciclo de 1958 se refaccionaron con la Algodonera del Valle. en una panga que estaba en la colonia Carranza, la panga del Ese año, mi familia y yo también nos fuimos a vivir a mexicano, estaba cerca de la escuela de la Carranza que ya no la colonia Camacho, al lote 23, fracción norte, ese año lo existe, pasando el río por el vado Carranza, rumbo a Mexicali. compramos. Fue cuando empezaron los problemas con los precios del algodón y la semilla. En septiembre, cuando Después del bordo de defensa, a la derecha, como a 200 empezaron las pizcas, las organizaciones campesinas, metros, se encontraba la escuela; al tiempo, compraron otras convocaron a una huelga, se reunieron en los patios de 50 hectáreas, ya desmontadas en la Camacho y fueron para Palacio de Gobierno; nadie levantaba la cosecha y los que no José Cisneros. Posteriormente, don Cayetano compró otras querían ir, llegaba un grupo de campesinos, los levantaban 50 hectáreas y fueron para Benito Cisneros, el más chico de y se los llevaban a Mexicali. Entonces empezaron los la familia. Para entonces los tres hijos de don Cayetano tenían problemas y las carteras vencidas en el campo. 50 hectáreas en la colonia Camacho y Domingo y José eran En el año del 1960, a don Cayetano le dio una embolia, ejidatarios en el Nayarit y Benito era ejidatario en el Veracruz, estuvo varios meses sin caminar y sin hablar, se fue ya que Miguel Cisneros murió muy joven, de un dolor, en el recuperando muy lento, en 1965 se repitió lo mismo, y ejido Veracruz le reventó el apéndice, cuando llegó a Mexicali volvió a recuperase, recuerdo que cuando ya volvió a ya no se pudo hacer nada por él, murió en 1947, a la edad 17 hablar me decía: “mira hijo, nunca en mi vida tuve miedo años, otro golpe para don Cayetano. morirme, pero no tengo ganas de morir”. De ese tamaño Una cosa rara de don Cayetano, él nunca puso una pulgada fue mi abuelo Cayetano Cisneros Aguilera, un pionero en el de tierra a su nombre, todo a nombre de sus hijos. Solo el valle de Mexicali. contrato de aparcería con la Colorado, porque entonces 54
VALORES DE CASA
Francisco Estrada Montaño Lorenzo Hurtado Valenzuela*
F
El primer contacto de Francisco rancisco Estrada nació con el valle de Mexicali fue en la el 12 de febrero de 1936 colonia agrícola La Rosita, al pie en La Barca, Jalisco. Sus del “viejo y altivo guardián” —el padres fueron Francisco Estrada cerro Centinela—. A la edad de 16 Eufracio (comerciante) y María años Francisco Estrada llega de su de Jesús Montaño Medel (ama natal La Barca, Jalisco. En esta de casa). Realizó sus estudios ciudad inicia su desarrollo laboral básicos en el Colegio Juan de Dios como mensajero de Telégrafos Peza de 1942- 1947, en La Barca, Nacionales. Jalisco; la educación media la A esa edad y ya en la colonia cursó en la Escuela Secundaria La Rosita apoya en las labores para Trabajadores, núm. XXX en del campo en la parcela de Mexicali, Baja California, de 1965 don Tiburcio Loya, esposo de a 1967. Estudió el bachillerato su tía abuela María Eufracio, en la preparatoria Adolfo López 1958. Francisco Estrada Montaño. exresidentes de Idaho, Estados Mateos de Mexicali, de 1968 Unidos de América. Cuando a1971; en la UABC estudió la les fueron ofrecidas tierras de licenciatura en Administración labranza, fungió el citado tío como canalero de la entonces Pública y Ciencias Política, de 1973 a 1977. Secretaría de Recursos Hidráulicos en la colonia Progreso. Vale la pena decir que, en ese tiempo en La Barca no Seis meses después Francisco ingresa como meritorio a había escuelas secundarias, al término de la primaria, en la Oficina de Telégrafos, ubicada en la avenida Madero. 1948, a la edad de 13 años Francisco aprende el oficio de En junio de 1954 es nombrado como mensajero de peluquero desempeñándose durante un año con objeto segunda y es hasta 1962 que es nombrado telegrafista de comprarse una bicicleta y cubrir sus necesidades más y radiotelegrafista, designaciones otorgadas por el apremiantes. En ese tiempo su padre, también de oficio presidente de la república en turno, ostentándose como peluquero, era el propietario de la peluquería; luego “patente” esos nombramientos para operar sistemas sería (su padre) relojero, armero, bracero, comerciante y de comunicación en las oficinas de telégrafos de toda la fotógrafo; hombre inquieto e incansable fallecido a los 92 nación, a donde fuera asignado. años, con apenas un esbozo de canas. * Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali” A. C.
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2009. Familia de Francisco Estrada. En la foto de izquierda a derecha: doctor Julio Francisco Estrada González (hijo), Julián Derek Estrada Acosta (nieto), Valerie Michel Estrada Acosta (nieta) y doctora Angélica Yadira Acosta (nuera).
La primera actividad formal en Mexicali se da al adquirir su Patente de Telegrafista SCT. De 1954 a1985 se dedica al manejo y operación de los equipos de transmisión del sistema Morse, teletipos, télex, y todo lo relacionado con la parte administrativa: contabilidad, estadística y servicio en las ventanillas, expedición y cobro de telegramas y giros telegráficos. Durante esos años ocupa y realiza otros encargos: ocupó la Cartera de servicios médicos ante el ISSSTE por el Sindicato de Telegrafistas; es becado por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para desempeñarse como técnico en comunicaciones inalámbricas, en la Escuela Nacional de Telecomunicaciones, en Balderas 28 en México, D. F. (1967 a 1968). También obtiene certificado de Técnico en Soldadura por el Centro de Capacitación para el trabajo Industrial Cecati 21, en el exejido Zacatecas, Mexicali, Baja California, con mención honorifica (1964-1965).
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Dada su afición por las comunicaciones le es otorgado el permiso número 3089, mediante los exámenes de Teoría, Reglamentación y Telegrafía, por parte de la SCT para instalar y manejar su propia estación de radioaficionado con las nominales XE2COM. Experiencia inolvidable la del primer comunicado con una estación lejana. Durante 30 años como radio experimentador logra un sinfín de comunicados alrededor del mundo entero sin que ningún idioma sea un obstáculo para entablar comunicación; como consta por el intercambio de tarjetas llamadas QSL en el código “Q”. Paralelo a su desempeño en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, ingresó a la Secretaria de Salubridad y Asistencia (SSA) realizando los siguientes cargos: Nombramiento en Control Sanitario como agente sanitario; encargado de la farmacia, auxiliar en Archivo de Personal y encargado de inventaros a nivel estatal. Asciende a funcionario en Servicios Coordinados de Salud Pública en el estado de 1973 a 1985 en Mexicali. En
el último de los cargos funge como jefe de la Oficina de Planeación a nivel estatal, y como representante del jefe de Servicios Coordinados en las reuniones binacionales de Salud Pública, llevadas a cabo en la “Oficina de Campo”, dependiente de la ONU, de la ciudad de El Paso, Texas. Con dispensa especial se desempeña hasta su jubilación laborando tanto en la Secretaría de Salubridad y Asistencia, como en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes atendiendo prioritariamente el trabajo de la SSA. Pues en esta dependencia es necesario trasladarse constantemente a distintas ciudades del estado y como necesidad a la capital del país, sea en plan de estudios o de trabajo, tanto en la dirección de Servicios Coordinados ubicado en avenida Puebla núm. 43, como en Reforma y Lieja de la ciudad de México, D. F., y como se mencionó antes a la ciudad del Paso, Texas. Aficionado a la literatura, desde su tiempo de estudiante en el Colegio Juan de Dios Peza de su lugar de origen, dirigido este por un tío abuelo por el lado materno, el exjesuita y misionero en la Gran China, fray Manuel Montaño, Francisco dedica mucho tiempo a la lectura y ya de adulto asiste a talleres de literatura y creación literaria, para luego concursar en certámenes literarios donde ha sido objeto de varios reconocimientos por su desempeño en la literatura habiendo publicado en diversos medios sus galardonados trabajos. Discreto y atento caballero, nuestro estimado amigo Francisco Estrada es otro valor de la Sociedad de Historia Centenario de Mexicali. En referencia a unos de sus trabajos galardonados, comentamos lo siguiente: De la solapa. “36 Sonetos a Mexicali. Una efeméride… un poemario” Por: Francisco Estrada Montaño, y de él un miembro del jurado, José Manuel Di Bella dice: Partiendo por la forma del soneto y su rigor modernista, El autor construye un imaginario nostálgico, romántico y en ocasiones pudoroso del Mexicali que fue, como base para entender el Mexicali que hoy somos; se reconoce esta obra por su calidad de oficio, por su dedicación al lenguaje, su depuración y medida, y que por tanto merece el reconocimiento de entre todas las obras concursantes.
Equipo para enviar señales telegráficas.
Equipo telegráfico.
2009. Francisco Estrada Montaño con el trofeo de la Fundación “Peritus”. 57
José Manuel Di Bella (jurado) De este trabajo y otros, Francisco comenta: Lo anterior es el veredicto del jurado en la premiación del “Certamen de la Fundación Peritus” en el cuarto Certamen Literario, que me hizo acreedor al diploma de primer lugar en la categoría Poesía adultos con la obra cuyo título se menciona líneas arriba. Mi filosofía de vida sería: Hice en la vida lo que me correspondió, de acuerdo con el esquema que mi destino tuvo a diseñarme, y será la Historia, todos tenemos una, quien me juzgue. Planté mi árbol, escribí mis libros, tuve mis hijos ¡misión cumplida! Por salud mental tomo píldoras de cultura en la música y la literatura a manera de hobby hasta que el tiempo lo permita. Antaño fue ciclismo y natación. Ya jubilado anhelo siempre navegar con las velas desplegadas en mares serenos, dulces y apacibles; el tiempo que le resta al reloj de mi tranquila existencia; hoy que ya empasto en las hojas de la revista El Río como parte de la historia de este Mexicali que me acogió hace casi setenta años siendo un mozalbete de 16 años. 1954. Oficio de nombramiento de la Dirección General de Telecomunicaciones a Francisco Estrada Montaño como mensajero de segunda para telégrafos.
Soneto Vivir contigo en quietud y armonía, Me da la voz de éste soneto. Ciudad de honor y de hidalguía Te entrego con amor mis versos. Mexicali de Sol, con flora de desierto, De atardeceres cromáticos Y de mujeres de verdad portentos. De trigales que deslumbran con sus oros. Níveos tabloides tus algodonales; Verdes praderas donde crece el pienso De tu ganadero y prodigioso valle.
2009. Diploma de la Fundación Peritus a Francisco Estrada Montaño por obtener el primer lugar en poesía adultos. 58
Los adobes de tu grande casa Los une la argamasa de tierra y cachanilla cocida por tus hombres.
Libros, reseñas, comentarios... Sergio Noriega Verdugo* La municipalidad de Mexicali a través de su historia. Crónica del desarrollo político, 1903-1954, de María Isabel Verdugo Fimbres La reedición de este libro es definitivamente un acierto puesto que es una aportación importante a la historia de los orígenes de Mexicali y de sus protagonistas. Aunque la primera edición apenas se publicó el año pasado, la considerable demanda y el limitado tiraje hicieron necesario que se volviera llevar a la imprenta. Cabe, por tanto, reconocer a las instituciones responsables de esta primera reimpresión: Conaculta, Cecuam, y Colegio de las Américas. La autora, María Isabel Verdugo Fimbres, cronista de esta ciudad y miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali”, A.C., nos brinda un relato cronológico del municipio de Mexicali, que incluye su desarrollo político de 1903 a 1954. La municipalidad de Mexicali a través de su historia (…) se encuentra dividida en tres partes. En la primera parte, la autora nos remonta a la Constitución de Cádiz de 1812, como un esfuerzo de la corona española para rehabilitar los municipios de la Nueva España. Ya como un país independiente, México modifica en sucesivas ocasiones el papel del municipio dentro de la organización política nacional, particularmente de acuerdo a la legislación de la constitución vigente. Antes de terminar con su relato histórico del siglo antepasado sobre la evolución jurídica del municipio, la autora advierte: Después de muchos debates del Congreso Constituyente de 1916 y promulgarse * Miembro de la Sociedad de Historia “Centenario de Mexicali” A. C.
la Constitución Federal el 5 de febrero de 1917, el artículo 115 consagró, con algunas variantes, el texto de Carranza en donde figuró el municipio libre como base de organización política y territorial de un estado, además de especificar sus funciones. (p. 28).
Es aquí donde el texto se orienta al examen de la experiencia propia de Mexicali, antes de la creación formal de su municipio, y en donde se relata lo ocurrido cuando los jueces y subprefectos representaban la autoridad en esta región. Con base en la Ley de Organización Judicial para el Distrito y Territorios Federales de 1903, el Distrito Norte de Baja California y, por ende, el municipio de Ensenada, se amplió a doce secciones judiciales, mismas que daban forma a la división territorial. Hasta ese entonces, Mexicali no era más que un pueblo de reciente creación, perteneciente a la jurisdicción de la sección de Los Algodones. Sin embargo, dado su rápido crecimiento poblacional, el jefe político del Distrito, coronel Celso Vega le propuso al secretario de Gobernación Ramón Corral, que la sección municipal de Los Algodones se dividiera en dos. Una vez que esta fue aprobada, en abril de 1904, la parte oeste de Los Algodones se convirtió en la sección Mexicali, con derecho a un juez de paz como autoridad (pp. 34-35). Fue poco antes que arribó al poblado de Mexicali, procedente de Los Algodones, Manuel Vizcarra, en calidad de juez auxiliar, la máxima autoridad del lugar. Es a partir del nombramiento de Manuel Vizcarra como juez auxiliar
de Mexicali, el 14 de marzo de 1903, fecha que celebramos como la fundación de nuestra ciudad, que inicia el periodo de los jueces de la región y la segunda parte del libro de María Isabel Verdugo. El ambiente que plasma la autora, del incipiente pueblo de Mexicali, es uno donde no prevalecía el orden y en el que había poco respeto para la autoridad. Según María Isabel Verdugo, mucho de ello debido a la venta de bebidas embriagantes, incluyendo a los indígenas del lugar. Esta situación repercutió en contra del trabajo de las obras de riego y de la agricultura. La inseguridad pública recrudeció por la falta de recursos disponibles del ayuntamiento en Ensenada, para el apoyo de Mexicali y las otras once secciones municipales de que constaba el Distrito Norte de Baja California. La falta de recursos económicos limitaba no solo al juez y los policías que lo ayudaban, sino también al equipamiento del personal y a sus sueldos. Según Verdugo Fimbres: “hubo dificultades para conservar a las autoridades nombradas; una de ellas era que esos puestos eran honoríficos, por lo que constantemente renuncia59
ban para atender sus necesidades personales.”(pp. 38-39). Unos dos años después de la llegada de los jueces a Mexicali, se elevó su categoría política a subprefectura. Por lo que suponemos que el subprefecto ocupó un rango más elevado en la línea de mando que el juez. De lo que nos comenta la autora, parece más un compromiso de velar por la seguridad pública que nuevas atribuciones concedidas por el municipio en Ensenada. No obstante, la autora destaca el apoyo presupuestal a la subprefectura de Mexicali por parte del gobernante del Distrito de Baja California, el jefe político coronel Celso Vega. (pp. 48-50). El primero en ocupar el cargo de subprefecto fue Gustavo Terrazas. Esto dada la propuesta del Jefe Político al presidente de la República, Porfirio Díaz en 1905. Sobre Terrazas, nos dice la autora que ocupó el mismo cargo en Tijuana “hacia 1903; fue jefe de los rurales en el Distrito Norte en la década de los noventa del siglo XIX, comandante de policía y guarda del rastro, entre otras ocupaciones”. Este funcionario público permaneció en su cargo casi seis años, hasta junio de 1911, “después de la caída del gobierno porfirista y del movimiento magonista”. (p. 50). Con excepción de Gustavo Terrazas, el tiempo que duraron los subprefectos fue muy corto. Refiriéndose al funcionamiento de la subprefectura en Mexicali, nos dice María Isabel Verdugo: “se observó la falta de respeto al cargo político, el abuso del mismo por parte del responsable en turno”, y por si eso no fuera suficiente añade: Este periodo, es un reflejo generado de la crisis política nacional, donde se pedía
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la supresión de las Jefaturas Políticas como órganos intermediarios entre los ayuntamientos y las autoridades estatales, y el deseo de mayor libertad política entre los ciudadanos, fueron las condiciones históricas que prepararon el cambio a otra etapa del desarrollo político en Mexicali.( p. 54).
La autora inicia su tercera parte del libro con una explicación sobre el proceso electoral en México que desemboca en la creación del municipio de Mexicali. De nuevo nos remonta al pasado para hacernos saber de los cambios ocurridos desde “la Constitución de Apatzingán (1814), las Bases para las Elecciones del Nuevo Congreso de 17 de junio 1823 y la Constitución de 1824” sobre el sufragio universal ( p. 68). Las múltiples citas de leyes y reformas electorales dejan entrever el conflicto entre el centralismo y la descentralización política por la que atravesaba el país. La historia del gobierno municipal de Mexicali nace propiamente con el decreto del mayor Baltasar Avilés, jefe político del Distrito Norte de Baja California, el 4 de noviembre de 1914. Según la autora, el gobernante “estimó que en Mexicali existían las condiciones previstas en la Constitución general de 1857 y en otras disposiciones legales de esa época”. (p. 77). El decreto publicado el 20 de noviembre convoca a la elección de un nuevo ayuntamiento el primero de diciembre, para que arranque a partir de enero de 1915. Llama la atención no solo la celeridad del proceso, sino el contexto en que ocurrió. ¿Por qué se le ocurrió a Baltasar Avilés formar un nuevo municipio? ¿Acaso era el momento propicio? No disponemos de la información
relativa a las circunstancias, ni a las motivaciones que pueda haber tenido dicho gobernante. Pero parece lógico pensar que algo tuvo que ver la guerra civil en México, pues después de todo fue un militar quien lo decidió. Tampoco conocemos la reacción que debió provocar que las secciones de Mexicali y Algodones se separaran del municipio de Ensenada. El libro La municipalidad de Mexicali a través de su historia nos aporta información valiosa sobre nuestra historia regional, por lo que debemos estar agradecidos con su autora. Sin embargo, no pretende explicar el funcionamiento de los gobiernos municipales ante las reglas de que estaba sujeta, ni tampoco ante las expectativas de los mexicalenses de entonces. Tampoco arroja un criterio como para poder interpretar el municipio como un órgano de gobierno, ni como una unidad administrativa. El libro más bien refleja la búsqueda de información pertinente en archivos, sin el esfuerzo por lo que hace a su interpretación. Referencias consultadas: Bórquez, Francisco P. (1997). Pellizcos al pasado. Mexicali, B. C. Encinas, Genaro, (1973). El régimen municipal en México, 2ª edición, México, D. F. Samaniego López, M. A. (1999). Ensenada, nuevas aportaciones para su historia. Mexicali: Instituto de Investigaciones Históricas, UABC. Walther Meade, A. (1986). El Distrito Norte de Baja California. Mexicali, B. C.: UABC ____. (1983). Origen de Mexicali. Mexicali, B. C. : UABC.
La Facultad de Enfermería en Mexicali. UABC
1982. Edificio Principal de la Unidad de Enfermería, ubicada en avenida Obregón y calle G, Sección Segunda, Mexicali, B.C.
2014. Edificio principal de la nueva Unidad de Ciencias de la Salud en la colonia Calles al oriente de la ciudad.
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La catedral de Nuestra Señora de Guadalupe
1920. Capilla de Nuestra Señora de Guadalupe de Mexicali, construida en 1918. Ubicada en calle Morelos y avenida Reforma.
1970. Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, Catedral de Mexicali, construida en 1946 y ampliada en 1960. Vista desde la avenida Reforma entre calles Morelos y México, hacia el poniente. 4