María Rosa Palazón Mayoral. 40c. Periquillo. Sarniento. sarna pícara o sarna culposa? Universidad Nacional Autónoma de México

María Rosa Palazón Mayoral PERIQUILLO SARNIENTO ¿SARNA PÍCARA O SARNA CULPOSA? 4 NOTAS AL MARGEN 243134 40c Periquillo Sarniento ¿sarna pícara o

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María Rosa Palazón Mayoral PERIQUILLO SARNIENTO ¿SARNA PÍCARA O SARNA CULPOSA?

4 NOTAS AL MARGEN 243134

40c

Periquillo

Sarniento

¿sarna pícara o sarna culposa?

786070 9

ISBN 978-607-02-4313-4

José Joaquín Fernández de Lizardi, periodista y autor de folletos por vocación, es conocido, no obstante, por una novela: El Periquillo Sarniento, sus cinco tomos retratan la corrupción de la que nadie se salvaba a principios del siglo xix: vísperas de la Independencia, ésta misma, el Imperio de Agustín de Iturbide y los inicios de la República encabezada por Guadalupe Victoria. La acción transcurre en la Ciudad de México y sus alrededores, centro de pillos y pillajes. El protagonista de esta novela es Don Pedro Sarmiento, alias Periquillo Sarniento, una vez redimido, y habitando una hacienda como su propietario. Aconseja a sus hijos, ejemplificándoles tal corrupción “democrática”: de todas las clases, las castas, la burocracia, y los comerciantes, mediante sus propias y divertidas aventuras.

María Rosa Palazón Mayoral

Notas al margen Periquillo.indd 1

Universidad Nacional Autónoma de México

Universidad Nacional Autónoma de México

27/05/13 05:24 p.m.

Periquillo Sarniento: ¿sarna pícara o sarna culposa?

notas al margen 4

Coordinadora

Adriana Sandoval Comité editorial

Edith Negrín Esther Martínez Luna

Instituto de investigaciones filológicas Centro de Estudios Literarios

María Rosa Palazón Mayoral

Periquillo Sarniento: ¿sarna pícara o sarna culposa? Cronología de Alejandro Amaro Valencia

Universidad Nacional Autónoma de México México, 2013

Primera edición: 2013 Fecha de término de edición: 30 de abril de 2013 D. R. © 2013, Universidad Nacional Autónoma de México Ciudad Universitaria, delegación Coyoacán, México, D. F. C. P. 04510 Instituto de Investigaciones Filológicas, Circuito Mario de la Cueva, s. n., Ciudad Universitaria http://www.filologicas.unam.mx Departamento de publicaciones Tel. 5622 7347, fax 5622 7349 ISBN: 978-607-02-4309-7 (Obra completa) ISBN: 978-607-02-4313-4 Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra —incluido el diseño tipográfico y de portada—, sea cual fuere el medio, electrónico o mecánico, sin el consentimiento por escrito del titular de los derechos de esta edición. Impreso y hecho en México

Contenido I. Datos biográficos de José Joaquín Fernández de Lizardi ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 11 II. Fecha de edición ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 20 III. Estructura de la obra y contenidos éticos ... ... ... 23 1. La ética social ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 23 1.1 La misoginia y la rebelión ideológica de Lizardi ... 24 1.2 Pericos vergonzantes o ética y picaresca ... ... ... 26 1.3 Consejos y lecturas ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 27

IV. El mal, la imitación y el arrepentimiento. Estructura moral ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 32 V. Las clases y la economía ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 36 1. El amo, las apariencias y la igualdad ... ... ... ... ... ... 36



VI. Patria ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 39 VII. Estilo ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 39

1. Los aciertos y las fallas ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 39 2. El riesgo de las publicaciones ... ... ... ... ... ... ... ... 40

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3. El habla ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 40 4. Los destinatarios ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 42 5. Estructuración de El Periquillo ... ... ... ... ... ... ... ... 43

VIII. La trama y los personajes ... ... ... ... ... ... ... ... ... 44

1. La educación en familia y la escuela ... ... ... ... ... ... 44 2. Los oficios ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 49 3. La corrupción en personajes de clases bajas y en los supuestos intelectuales ... ... ... ... ... ... ... 50 3.1 Los pillos ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 51 3.2 El contrabando ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 52 3.3 La rapiña en las agencias mortuorias ... ... ... ... 52 3.4 Subdelegados y la justicia ... ... ... ... ... ... ... ... 54 3.5 Los tahúres ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 57 3.6 El clero ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 58 3.7 La medicina ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 60 3.8 Boticarios ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 63 3.9 Boticarios-dentistas ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 63

IX. La redención ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 64

X. El Pensador como personaje ... ... ... ... ... ... ... ... 66

XI. Apéndice y preguntas a un lector contemporáneo ... ... ... ... ... ... ... ... 66 Bibliografía ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 68 Bibliografía y hemerografía sobre El Periquillo Sarniento, de José Joaquín Fernández de Lizardi ... ... 68 Cronología... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 75

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Antes de comenzar, advierto sobre la distinción que realizo entre quien llamo El Periquillo Sarniento, personaje absorbido por la corrupción colonial, y el redimido Pedro Sarmiento, que escribe la primera redacción de este libro instructivo sobre la honestidad y el bienestar social: las dos caras de la misma moneda vistas en dos épocas de su vida. También aviso que no he seguido linealmente las tramas, las cuales se pueden consultar en El Periquillo Sarniento. Este proceder tiene la finalidad de resaltar el fondo ideológico de la novela en cuestión, su tesoro más preciado y actualizable. Bien dijo Agustín Yáñez que la voz de Fernández de Lizardi puesta en solfa por el Periquillo Sarniento, su protagonista, “clamó urgencias que subsisten sobre el desierto de nuestra conciencia colectiva” (Yáñez 1954: VII). María Rosa Palazón Mayoral Instituto de Investigaciones Filológicas Universidad Nacional Autónoma de México

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I. Datos biográficos de José Joaquín Fernández de Lizardi José Joaquín Eugenio Fernández de Lizardi Gutiérrez (1776-1827), de clase media y “limpio de sangre” (Fernández de Lizardi 1990a: 45), es decir, sin mezclas con los negros y sus castas, que oficialmente fueron considerados humanos y obtuvieron su manumisión hasta 1825, fue originario de la ciudad de México; hijo del bachiller en medicina Manuel y de Bárbara, hija de unos libreros de Puebla. Siendo pequeño falleció su madre, y su padre contrajo nupcias con María Josefa Torres. Lizardi fue miembro de las clases medias, tirando a la pobreza. Su padre fue asignado al Real Colegio de Tepotzotlán que, después de la expulsión de los jesuitas, había caído en franca decadencia, de manera que su personal era integrado por los estudiantes que habían fracasado en las escuelas religiosas de prestigio. Nuestro Lizardi pasó su infancia en aquel pue-

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blo, donde su padre ganaba una miseria. Debió recibir la primera educación en colegios de indios, los cuales si bien eran ciudadanos desde la época de Isabel la Católica, eran segregados en su educación. Podemos intuir el carácter recto y duro de Manuel Fernández de Lizardi porque, siendo su hijo bastante joven, lo denunció a la Inquisición por haber copiado unas cartas divinatorias, esto es, una baraja donde las preguntas casaban con las respuestas mediante albures que, bajo nuestra mirada, son por demás inocentes. La Inquisición era temida básicamente por sus prácticas de tortura; fue una institución que reclamaba inculpaciones (en gran número debidas a odios personales). ¿La intención paterna fue salvarlo de infamaciones? De 1792 a 1798 estudió gramática, retórica y filosofía en casa de maestros particulares, uno de los cuales era su padrino. Se inscribió en la Real y Pontificia Universidad. No se graduó de bachiller porque en el momento del grado, su padre enfermó y tuvo que asistirlo, Con seguridad, José lo cual contradice, siguiendo la literatura Joaquín Eugenio Fernández de Lizardi Gutiépicaresca, las canonizadotas biografías rrez recibió la primera de “héroes” poderosos conocidas desde educación en colegios Grecia y Roma. de indios, posteriorDurante un periodo fue amanuense; mente estudió gramática, retórica y filosofía siempre presumió de su buena letra. Esta con maestros particunovela sugiere que, por sus conocimienlares. Se inscribió en la tos legales y por su caracterización de los Real y Pontificia Univerleguleyos rábulas (1990a: 148), sirvió a un sidad, pero no se pudo escribano, uno de tantos abogados sugraduar de bachiller debido a que su padre cios que depuraban los expedientes anenfermó y tuvo que tes de que llegaran al juez de tribunal, esto ocuparse de él. es, que, a cambio de prebendas moneta-

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rias o no, inculpaban a inocentes y exoneraban a culpables. El juez, por lo tanto, sólo conocía tales expedientes alterados. En 1810, Lizardi había sido juez interino de Taxco en sustitución de un español. Fue sustituto porque, según las disposiciones borbónicas, sólo los nacidos en la Metrópoli podían ocupar cargos burocrático-políticos. Es de suponer que el peninsular huyó o simplemente le heredó el cargo a nuestro autor cuando vislumbró a las tropas insurgentes en las cercanías de esta ciudad de españoles. La Nueva España se dividía en ciudades de indios y de españoles. Segregación que funcionó como una manera de proteger las comunidades no-hispanohablantes de los iniciales repartimientos de indios, esclavismo disfrazado de redención cristiana. En aquellos días, la Nueva España, llamada por José Joaquín Fernández de Lizardi América Septentrional, se hallaba bajo el gobierno de Francisco Javier Venegas. En Taxco, donde nuestro periodista era intendente, escribió cartas a este virrey acerca de los hipotéticos planes que los lugareños fraguaron en defensa de su “república de españoles”. Explico. La Nueva España estaba organizada en dos, a saber, “repúblicas” o poblaciones de españoles, y de “naturales” o pueblos originarios. Taxco, habitado por “gachupines”, fue rodeado por tropas de Hidalgo, compuestas de indios. Estaba, pues, en peligro a los ojos de los hispanohablantes que la habitaban. Las cartas mencionadas nunca llegaron a su destino. Fernández de Lizardi entregó sin presiones las armas al general Hernández, quien comandaba una de las tropas. Otro dato relevante. En El Pensador Mexicano número 9, Lizardi le felicita el aniversario a Venegas, el texto obedece la censura: obligaba a escribir alabanzas sin límite a la autoridad, o no se imprimían los escritos. Después de estos párrafos de marras, nuestro periodista espeta críticas muy fuertes a Venegas

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sobre su pésimo gobierno. Para colmo, defiende el fuero de los curas en armas juzgados mediante el fuero de los militares. Luego, la ideología inicial de Fernández de Lizardi no parece contraria a la insurgencia armada. Nuestro bocón autor vino como reo de Taxco a la capital, sus bienes fueron embargados y la recientemente inaugurada libertad de prensa fue suspendida por el déspota Venegas. Pasó siete meses en la cárcel, donde es de suponer que además de seguir con sus periódicos y folletos, ideó y posiblemente inició El Periquillo Sarniento, donde su crítica directa de periodista se escondía bajo los velos de un género fantasioso, o al menos ésta fue su pretensión. El Periquillo… se considera como la primera novela de Hispanoamérica, aunque pienso que ser vanguardia o epígono carece de importancia, lo que resalta en la novela es el contenido que perfila una sociedad en plena decadencia y hundida desde arriba hasta abajo en una corrupción casi inenarrable. Antes de editar los tres volúmenes de El Pensador Mexicano (fechados en 1816, aunque el texto orienta que lo componía en 1813), aseguró que si bien ninguna actividad honesta es estéril en el reino (1990a: 148), dedicarse temerariamente en aquellos días al arte de escribir de tiempo completo, es decir, a las Letras, que indiscutiblemente deleitan a sus escuchas y a una minoría alfabetizada, pero que no llenaban la bolsa ni del poeta más extraordinario o magnífico. Él persistió en este oficio de malos presagios porque, dice, la escritura suministra gusto, erudición, y difunde las fuentes originales que la inspiraron. Si en otros lugares las artes y las ciencias daban de comer, añade nuestro autor en boca del padre de Pedro Sarmiento, esto ocurría raramente en América, donde faltaban la “proporción”, los estímulos y los premios a estas formas de dedicar la vida (1990a: 149).

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En 1813, Lizardi se casa con María Dolores Orendáin. Salió temporalmente de la cárcel, donde estuvo por su número 9 de El Pensador Mexicano, porque su hija iba a nacer sin que hubiera cumplido con el sacramento de la boda, lo cual significaba que sería una bastarda, estigma tan gigantesco en el siglo xix que sus biógrafos, como González de Obregón, trataron de esconder. A invitación expresa de Agustín de Iturbide fue jefe de prensas en Tepotzotlán con el objetivo de tener influencia en un posible giro liberal de la Rebelión de la Profesa, encabezada por autoridades, altos cargos militares, económicos y eclesiásticos, que eligieron al militar realista Iturbide como jefe de la insurrección armada. El giro de esta fase fue claramente reaccionario o contrario a las ideas liberales y modernas, decretadas en la Constitución de la Monarquía Española de 1812, sin que Lizardi se percatara de que la conspiración trató de eliminar leyes tan conspicuas y avanzadas: en su Conductor Eléctrico, nuestro periodista apasionado explicó que, según las nuevas leyes, la soberanía de la nación residía en el pueblo, garantizaba la igualdad ante la ley y dividía el gobierno en Poder Ejecutivo y Legislativo o diputados. Cuando los sublevados tomaron la ciudad de México, escribió que aquel excelente soldado no quería ser presidente. Después del nuevo golpe de estado que dio Pío Marcha, declarando a Iturbide emperador (Agustín I), Fernández de Lizardi dijo que Agustín sería rey El Periquillo Sarconstitucional. Rompió todos los lazos con niento, considerada Agustín I a partir de que disolvió el Congreso la primera novela y encarceló a los diputados rebeldes, espehispanoamericana, retrata una sociedad cialmente defendió a su amigo fray Servanmexicana corrupta y do Teresa de Mier. decadente en todos Según hizo saber, le pareció aberrante sus estratos sociales. que el emperador dejara marchar a los es-

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pañoles con el circulante que acumularon, mientras sus tierras quedaron en baldío, y que se diera a Iturbide una pensión con la cual podría regresar con un ejército bien armado a retomar el trono del imperio que hubo de abandonar debido al levantamiento republicano de Casa Mata. Asimismo, criticó el fausto o lujo de un Imperio; Fernández de Lizardi ahora era consciente de que la rebelión de La Profesa había nacido para oponerse a la liberal y republicana Constitución de la Monarquía Española de 1812. Iturbide regresó el tiro: denunció sus Cincuenta preguntas de El Pensador a quien quiera responderlas. El Pensador se dolió, aunque le pareció justo, que los llamados Tamaulipas fusilaran a su amigo Agustín cuando regresó con la esperanza de volver a ocupar el trono y conservar las políticas coloniales bajo el disfraz de la liberación política. Esta fase de la Independencia fue un golpe de estado para evitar los cambios profundos o anticoloniales. En sus inicios no confió en la rebelión de Casa Mata, encabezada por Antonio López de Santa-Anna; pero se adhirió a la causa en el tiempo en que Guadalupe Victoria y otros insurgentes la hicieron suya. Nuevamente fue huésped de la cárcel cuando en 1821 argumentó en su folleto Chamorro y Dominiquín. Diálogo jocoserio sobre la independencia de la América que, cuando llegaran los liberales al poder, gracias a la liberal Constitución de la Monarquía Española (en la cual intervinieron ilustres diputados americanos), España nos daría motu proprio la independencia por convenirle a esta Metrópoli, que estaba perdiendo sus colonias europeas y sus colonias americanas porque era incapaz de controlar un territorio tan vasto y que manifestaba ideales de liberación.

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En junio de 1823 fue a prisión por un foEn 1822 fue excolleto donde fingió un sueño sobre un congremulgado por su so de ladrones, simbolizando de esta maneDefensa de los francmasones. ra la inseguridad que se vivía en la ciudad de Sufrió por varios México. No se le permitió este símil imaginameses toda clase de rio. Por añadidura, fue arrestado en el Hospiataques. Sólo destal de San Andrés por escribir un verso en la pués de presentar un “recurso de fuerpared donde le decía “vieja” a su casera Joza” especie sefa González, por entonces valorada como de perdón, consigue heroína de la Independencia. De seguro que que se levante su El Pensador no tenía el dinero para solventar excomunión. el alquiler debido a que su capital lo reinvertía en la publicación de los que llamó sus “papeles”. En 1822 fue excomulgado por su Defensa de los francmasones. Después de siglos de haberse decretado, se revivieron las Bulas de Clemente XII y Benedicto XIV las cuales prohibían el trato de los católicos con los masones. El folleto lizardiano es bastante inocuo porque sólo argumenta que no era ningún delito mantener en secreto las resoluciones de sus asambleas, todas de corte liberal. Escribió cinco “ocursos” al Congreso, explicando los motivos de sus inocentes páginas. Lo ignoraron porque aquel cúmulo de diputados parecía más un concilio reaccionario que una institución política de avanzada, esto es, laica. Una vez excomulgado, vivió un terrible ostracismo: la soledad. Experimentó el desprecio de muchos, como el de una fanática que se quejó a gritos porque Lizardi le rozó sus faldas. Presentó un “recurso de fuerza”, especie de perdón, y a partir de entonces, nuestro católico, que había leído a los padres de la Iglesia como San Agustín y San Jerónimo, arremetió incluso con argumentos teológicos y directamente bíblicos contra el alto clero, entremetido en la educación y en la vida personal de

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los ciudadanos. Desde entonces atacó sin miramientos al alto clero, guía de un pueblo fanatizado, y partidario de España o de la monarquía. Lizardi, antecedente de la Reforma, delgado y un tanto bizco, un poco “turnio” según sus palabras, pidió: la separación de la Iglesia y el Estado, que se extinguieran los canónigos, que los obispos cobraran un sueldo, que el voto de castidad no se jurara antes de los veinticinco años, que no se enclaustrara a las jóvenes sin vocación, que se expropiaran los bienes del clero (por entonces el mayor propietario de bienes muebles e inmuebles del país, los cuales eran de manos muertas, es decir, no vendibles ni enajenables), y hasta deshizo con ironía feroz el Catecismo del padre Ripalda, las supersticiones que propiciaba la religión y que ésta fuera un asunto mercantil. Incluso recla­ mó que no se cobraran los Sacramentos (en esto mostró su co­ nocimiento profundo de los jansenistas españoles como Pedro Rodríguez, conde de Campomanes, quien fundó las Sociedades Económicas de Amigos del País; este ilustrado propuso medidas agrarias y la extirEl Pensador Mexicano, antecesor de los pación de la mendicidad que agobiaba las ideales de la Reforma, ciudades, entre otras medidas, y Gaspar pidió, entre otras coMelchor de Jovellanos, que presidió la prisas, la separación de mera Junta Central en contra de José Bola Iglesia y el Estado, naparte; escribió monografías sobre cuesque los obispos cobraran un sueldo, que el tiones del campo y de justicia; además, voto de castidad no defendió la utopía de instaurar la poblase jurara antes de los ción en la clase media y, como Campomaveinticinco años, que nes, atacó las supersticiones religiosas y la no se enclaustrara a las jóvenes sin vocación, mercantilización del clero; ambos prohibique se expropiaran los dos en España por los Borbones y figuras bienes del clero, etc. revolucionarias cuando gobernaban los

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Austrias la Península Ibérica. ¿Los textos de estos teóricos hispanos llegaron al actual México en la valija del gran Houdini, o sea, el escapista padre Mier, para quien no hubo cárcel ni encierro, nacional o extranjero, del que no se liberara? Si Lizardi conoció a tales filósofos hispanos, ¿hubo en aquellos momentos álgidos reuniones parecidas a las sociedades españolas, donde se leía lo prohibido? ¿Lizardi, sin ser masón, asistió?). Cuando los Estados Unidos Mexicanos ingresaron en un mercado mundial ya repartido entre las potencias colonizadoras (Inglaterra, Francia, Holanda, Portugal) y en lo interno seguían pri­vando asonadas políticas variopintas —españolistas, monárquicos, incondicionales del vertical poder civil y del clerical, federalistas— El Pensador temió la reconquista de la Santa Alianza (llamada localmente la Santa Liga). Los españoles aún tenían en su poder San Juan de Ulúa, paso marítimo del comercio (imaginó y propuso varias tácticas para derrotarlos). Éramos la debilidad socialmente encarnada en lo social, económico, militar y en la idiosincrasia. Nuestro autor tuvo la suerte de morir sin padecer la invasión francesa y la pérdida de la mitad del territorio nacional: aunque equivocado sobre el enemigo, sus temores estaban más que justificados. Finalmente vivió parte de su utopía: una república federal y la independencia política; empero siguieron existiendo las enormes distancias entre clases sociales, el congreso estuvo lleno de sacerdotes, Victoria instauró un fuerte presidencialismo que opacaba las resoluciones de los diputados, institución que valoraba como la suprema autoridad política; el Ejecutivo sólo debía ejecutar las resoluciones del Congreso, la agobiante corrupción siguió privando, y, siguiendo el ejemplo de Don Quijote, José Joaquín Fernández de Lizardi, El Pensador Mexicano (nombre

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de su periódico y seudónimo que le atribuyeron) murió melancólico, en la depresión, sin un centavo en la bolsa. Se acepta que su cadáver fue expuesto para desmentir la conseja de que murió endemoniado. Fue enterrado en el cementerio de San Lázaro, pocilga que alimentaba cerdos y perros con los cadáveres.

II. Fecha de edición José Joaquín Fernández de Lizardi, el más común de los hombres sabios y el más sabio de los hombres comunes, ha sido identificado como el primer novelista de Latinoamérica, que no el primer narrador. El advenimiento literario o la génesis de su novela tuvo una bienvenida calurosa: se pagaron por los tres primeros tomos de El Periquillo Sarniento desde dos pesos y cuatro reales (en origen, cada entrega costaba cuatro pesos, y cuatro pesos más cuatro reales en las provincias) hasta veinticinco y sesenta pesos, cantidad exorbitante en aquellos días, lo que no contrasta demasiado con el precio de su romántica Noches tristes y día alegre. Posiblemente este sonado éxito se dio gracias al perió­dico El Pensador Mexicano, que leyeron tirios y troyanos; por este motivo, el título inicial de su obra, que luego tachó por extenso y poco atinado, fue Vida que el Periquillo Sarniento escribió para sus hijos, y publícala para los que la quieran leer don J[osé] [Joaquín] F[ernández] de L[izardi], autor del periódico El Pensador Mexicano. Lizardi dio la noticia de que su primera obra narrativa se vendía en La Habana, Portugal y quizá la imprimirían los ingleses, ¿realidad o fantasía? Los tres primeros volúmenes de El Periquillo…se editaron en 1816. En una nota del tomo V el autor asienta que los ameri-

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canos mostraban su voluntad de liberarse de España, “pero es muy peligroso escribir esto, año de 1813” (1990b: 391), es decir, en la “época de horror, de crimen, sangre y desolación” (1990b: 391), es decir, cuando inicialmente estaba redactando su novela. La novela consta de V volúmenes: doce capítulos del I, más prólogo, dedicatoria y advertencia a los lectores y suscriptores; doce capítulos del II más un prólogo; doce del tomo III; siete del tomo IV más una advertencia del manuscrito que dejó inédito, y el V lo integran nueve capítulos. En los folletos ya más libres de la censura, con tintes menos tiránicos (1820 en adelante), Fernández de Lizardi critica la impericia militar de los curas insurgentes, cuya causa asumió, si repasamos lo dicho líneas arriba. La impericia de los caudillos facilitó su pronta derrota, las masacres, los robos y las violaciones de una tropa desbocada y llena de odios larvados durante los siglos de la Conquista y del Virreinato. En el folleto Chamorro y Dominiquín sobre la independencia de América (1821), se nota su auténtica, no de política obligada, separación de las tácticas asumidas por los Hidalgo y Morelos: no una desviación, sino que siempre coincidió con sus ideas antiesclavistas y modernizadoras. El Periquillo Sarniento No le costó demasiado al dominio rea­ consta de cinco volúlista hispano acabar con los Hidalgos, Momenes. Su título inicial relos, Allendes y demás guerrilleros. Tras fue Vida que el Periquillo Sarniento escribió sus muertes, la situación empeoró. Conpara sus hijos, y putinuaron con fuerza avasalladora el caos, blícala para los que la los robos, los asesinatos, las violaciones… quieran leer don J[osé] Por lo mismo, Lizardi pasó una temporada [Joaquín] F[ernández] de L[izardi], autor del en San Agustín de las Cuevas (hoy Tlalpan) periódico El Pensador para reestablecerse de una hidropesía y Mexicano. evadir aquellos ratos de terror. Las bata-

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llas mal conducidas habían desatado, por lo tanto, tal crueldad y tal destrucción que empañaron la utopía de los primeros sublevados. Como medida alterna, Lizardi abandonó su proclividad a la lucha armada para imaginar una liberación pacífica gracias a la Constitución de Cádiz (esta aclaración trata de evitar malas lecturas que sostienen que escribió a favor de que permaneciera la colonización, obviando que siempre admiró los grandes ideales de Hidalgo y Morelos, pero temió y hasta aborreció su falta de habilidad táctico-militar). Una vez que el actual México obtuvo la independencia, proclamó a estos “héroes” como padres de la patria o nación. Eran patriotas auténticamente mexicanos que nos otorgaban una personalidad comunitaria para negociar en la escena internacional (“nación” deriva de natus nationis y de nascio¸ camada y nacido; o sea que los pueblos se organizan como una familia de hermanos y, por lo mismo, requieren de padres o antecesores; la demagogia posterior no aplica en el momento de fraguar, al estilo renacentista, una fratría). El tomo IV de El Periquillo Sarniento fue censurado por el Alcalde de Corte Felipe Martínez, quien puso rayas al margen y subrayó la palabra “negros” cuando la trama revela, en Filipinas, otra colonia española (entiéndase en México, porque a los “morenos” no se les reconoció oficialmente como humanos hasta 1825, cuando la apreciación lizardiana contra la discriminación que privó la escribió durante la Colonia). Martínez le ordena que las suprima por su carácter inoportuno, perjudicial y no político, o contrario a un “comercio permitido por el rey” (1990b: 208). La arbitrariedad de la Conquista y la Colonia entorpeció la publicación. Sin cambiar ni una palabra, Fernández de Lizardi guardó a buen resguardo este tomo y el siguiente, los

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cuales vieron la luz póstumamente, en 1830 y 1831, sin mayor problema, entre otros motivos porque el presidente Guadalupe Victoria decretó la manumisión de los “negros” y sus castas el 15 de septiembre de 1825. La publicación abarca, pues, desde fines del virreinato hasta el México liberado, aunque simule estar escrito en 1813 para respetar la continuidad cronológica y los acontecimientos del virreinato, no de la republica. Después de que se han leído los XIV tomos de las Obras de José Joaquín Fernández de Lizardi, editados por la unam en la colección Nueva Biblioteca Mexicana, es presumible suponer que nuestro autor aprovechara algunos ratos libres para seguir en su papel de novelista (escribió cuatro novelas: la que estamos analizando, La educación de las mujeres o la Quijotita y su prima, Noches Tristes y día alegre, y Vida y hechos del famoso caballero Don Catrín de la Fachenda), siendo por vocación, subrayo, un periodista (nueve títulos) y autor de folletos (más de 300). Si bien recursos como el diálogo, los versos entre la prosa y la ejemplificación con anécdotas personales son una constante en toda su producción de cualquier género.

III. Estructura de la obra y contenidos éticos 1. La ética social Desde la primera página hasta la última se declara que lo que se ofrece son cuadernos de moral, consejos que don Pedro Sarmiento lega a sus hijos para que manden a la nada el veneno de los extravíos corruptos. Los instruye mediante la descripción de los daños que llevan aparejados los vicios, contrarios, opina,

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a la paz interior y a la felicidad: “Cuando escribo mi vida es sólo con la sana intención de que mis hijos se instruyan alguna cosita en las materias sobre las que les hablo” (1990a: 34). Entrega, pues, un recuento de los escollos donde se estampan los jóvenes que no escuchan los avisos de los “pilotos” experimentados en los terrenos de la virtud cívico-moral.

1.1 La misoginia y la rebelión ideológica de Lizardi Los personajes femeninos y demás de la novela aparecen como fantasmas de un problema comunitario. Son más símbolos que personalidades distinguibles. No faltan algunos apuntamientos realistas y a veces misóginos (que después pulirá hasta llegar a aceptar que las mujeres pueden ser diputadas) o al tenor del patriarcado feroz que privaba en la América Septentrional (continente y punto cardinal que usaba Lizardi para evitar el nombre de Nueva España). Al citar las aventuras de Ponciano y Martín, ambos personajes secundarios y un tanto fantasmagóricos, dice que las mujeres pagan o hacen lo que quieran sus explotadores con tal que se lo exijan. En otras partes enfatiza la conducción inevitablemente sana de los maridos y padres, hombres, por supuesto. Empero insiste en los males que causan las madres consentidoras. E inversamente, Perico mató a su madre por medio de las pesadumbres que le vertió como un balde de agua sucia hasta que la hundió en la miseria. Una vez fallecida, al casero le quedó como pago un montón de trastos rotos, de muebles destripados llenos de chinches, guitarras sordas y nueve tomos despostillados, truncos y sin estampas de Don Quijote (1990a: 280). Fernández de Lizardi insiste en la subordinación de las mujeres al padre y al marido bondadosos, y descubre la misoginia que mamaban las mujeres con los pleitos entre las recamareras

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(Clara), las nanas (Lorenza), aunque también éstas descubren el velo de las trampas de Perico en casa del escribano. Lizardi se detiene en los intentos del chino (que Perico trajo de una isla, cuyo nombre queda en el misterio, donde naufragó de regreso a su patria bajo el engaño de que él, Don Pedro Sarmiento, era un noble de Guadalajara) por tener un affaire forzado con Anita, esto es, por violarla, así como el duelo que se desató. El Periquillo Sarniento paga los platos rotos porque el capellán lo increpa llamándole desvergonzado, estafador, alcahuete (1990b: 296). Y no es nada despreciable que Periquillo confiese que intentó violar a Luisa cuando ésta ya estaba bien casada. Luisa, con quien había engañado al escribano Chanfaina y cohabitado. Perico recibe arañazos y estrujones que lo desmechan. Asimismo, Pedro Sarmiento opina que, para que funcionen, los matrimonios deben ser la unión de mujeres jóvenes y de hombres de mayor edad, y lo ejemplifica con su última boda. Por otro lado, al final del último tomo, al frente de una tienda para después mudarse como administrador de la hacienda que termina heredando como propietario, asienta que los que viven bajo un mismo techo deben casarse. A su casa había llegado Don Antonio, el único preso, por razones injustas, que lo había tratado con amistad. Viejo y a punto de morir llega a la tienda que regentea Pedro, acompañado de su hija. Sarmiento la pide en matrimonio, ella acepta; después se muda a la hacienda de San Agustín de las Cuevas y pormenoriza su boda: el amo de aquella tierra de cultivo y animales domésticos fue su padrino. Ofició la misa su confesor y amigo, también redimido, Pelayo. Total, la fiesta se realizó en la casa modesta de una “pastora de la Arcadia” (1990b: 384). Digresión que revela su animadversión al lujo festivo en un país hundido en la miseria.

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1.2 Pericos vergonzantes o ética y picaresca Los pasajes de su vida no son, dice Sarmiento, raros, ni violentan la realidad, ni son fabulosos (1990a: 14), sino las vivencias de los “Pericos encubiertos y vergonzantes” (1990b: 141), como él mismo. Su descendencia aprenderá a no exponerse a los malos tratos si aprovechan los desengaños en cabeza ajena. El displacer enseña que los “malos maestros” pueden dar quiméricas buenas lecciones pragmáticas; educa sobre la infidelidad de un teórico amigo; educa sobre la perfidia de una mujer y de cómo la  “trácala” del lisonjero acaba en la enfermedad y en los excesos mórbidos de sus víctimas. En suma, estos discursos sobre la justicia social y del individuo podrán servir a su descendencia como frutillos dulces a partir de sus raíces amargas (1990b: 332). Ésta es la médula, la espina dorsal que mantiene en pie el resto de historias sobre la cizaña y la corrupción en grado sumo que agobiaban al México a fines de la Colonia e inicios de la República. El Periquillo llevó a cabo trapacerías antisociales para cubrir sus necesidades básicas de supervivencia porque no quiso seguir las orientaciones de su padre de aprender un oficio. El personaje Januario le advierte a Sarmiento que “consejos y bigotes […] ya no se usan” (1990a: 208). Cierto, admite. No obstante, Don Pedro está convencido de que por un mal consejo se han perdido muchos, muchas ciudades, muchos reinos, el mundo debe su perdición a los malos consejos y ejemplos. El Pensador es consciente de que el tono de consejo, ombligo que estructura a El Periquillo…, se olvida fácilmente. Para mostrar los estragos del vicio y pormenorizar laudablemente la virtud es menester salpimentarlos con anécdotas instructivas, es decir, con una diégesis o una trama que fije las lecciones. En honor a la verdad, la base moral a toda prueba vuelve a ratos los cinco tomos de esta obra una lectura cansina, lenta. Se

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trata, por lo tanto, de una novela para leerla en partes, poco a poco, respetando la mezcla, no mutilando ni la instrucción que pretende ofrecer ni la historia que la ilustra. No basta con enfatizar las andanzas deleznables que obligan a Perico a que las realice para sobrevivir. Las expurgaciones que se han dado (versiones resumidas y hasta ilustradas) mutilan las gracias estilísticas lizardianas y el sentido del libro basado en la moral cristiana. Por ende, no es una lectura para secundaria. Cuando me lo impusieron obligatoriamente lo leí en diagonal, de manera impertinente a su sentido. Creo que este camino torcido lo han seguido quienes no tuvieron la paciencia de Job para analizar la multitud de párrafos y la dirección de los cinco volúmenes de la obra. La hermenéutica o interpretación de El Periquillo… ha fallado o, en buena parte, ha sido impertinente. La insistencia en que se trata de una novela picaresca o de pelados (en calificativo de Agustín Yáñez) obedece a que se ha leído en diagonal, fijando la atención en los desvíos por malas sendas del protagonista, no en la manera en que está elaborado este texto con un foco de atención básico o contrapunto para criticar la insociable sociablidad, en conocida expresión de Kant, que agobiaba nuestro pasado y cuyas huellas reaparecen en niveles aún más anómicos, El Periquillo... es una esto es, tan enfermos que o nuestra socienovela para leerse en partes, sin mutidad cambia o está seriamente amenazada lar la historia de las con su desaparición.

1.3 Consejos y lecturas La hermenéutica o interpretación posterior al siglo xix ha estado más interesada en las descripciones humorísticas, cuando no sar-

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andanzas de Perico, ni la instrucción que Lizardi pretende ofrecer. No es, por lo tanto, una lectura para secundaria.

cásticas, de las aberraciones de toda clase que se experimentaron a fines del Virreinato e inicios de la República. Un lector del siglo xxi verá las huellas degeneradas que persisten hasta devenir un vacío hacia el que México dirige sus pasos, si no cambia de rumbo. Fernández de Lizardi introduce, pues, anécdotas ilustrativas anotadas para que la lección se fije en la memoria como digresiones oportunas. Con este proceder, el valor y la sinceridad para escribir moralizando, Lizardi deseó salvar de los vicios a los flojos y a los disipados, que padecen más situaciones insoportables que los hombres “arreglados” en el “buen vivir” (1990b: 315). Este amplio texto ejemplifica dónde se estrella la juventud incauta, alejada de la moral cristiana, que obliga a honrar y amar a Dios y a observar sus preceptos orientados a ser útiles a sus semejantes, a seguir la regla de oro de no hacer al otro lo que no se desea que le ocurra a uno mismo, a no desobedecer las potestades benéficas, a no realizar voluntariamente el mal y sí hacer el bien. En unas cuantas palabras, a seguir los amores fraterno, filial y caritativo. Es innegable que existe un sinnúmero de los mal llamados amigos, los hipotéticos próximos abundan, pero la amistad escasea (1990b: 400) y, por lo tanto, se incide en las manchas, en los estigmas y en los pecados sociales, afirma en tono sentencioso Pedro Sarmiento. Hay hombres de carácter tan venenoso que se salen de misa para decir una mentira y desacreditar a su prójimo (1990a: 283). Son tan poca cosa que sin duda hacen mucho mal aun creyendo que hacen el bien o que se comportan normalmente. Perico los compara con el gato que lastima al tiempo de hacer cariños (1990a: 187). En esta caracterización abarca no sólo a los pobres

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como Januario, sino a los malvados o corruptos adinerados que cometen ilegalidades y violencias, que hoy llamaríamos bandidos de cuello blanco. Esta tendencia es la más destacada para la supervivencia o actualizaciones de esta novela. Nadie ha dejado de conocer al grosero por sus majaderías, al inmoral por su pésima conducta, al embustero por sus historias y sus juramentos, al fullero por sus drogas, al ambicioso por su codicia y al mezquino por sus cicaterías. La lección no debe olvidarse. Al anotar sus cuadernos, la intención de Don Pedro es laudable, porque se orienta a enmendar vicios aborrecibles y a ensalzar virtudes como la generosidad. Moraliza con el valor de la sinceridad para enmienda de periquillos viciosos y disipados cuya vida tiene efectos insoportables para la comunidad, es decir, pondera a las personalidades arregladas en el “buen vivir” (1990a: 315) en el hogar y en el terruño propios. En forma declinada en vocativo —¡oh, hijos!, por ejemplo—, Sarmiento les dice a sus hijos no afanarse en lograr bienes fugitivos por reglas aciagas que los alejan de la felicidad interna (noción propia de la cultura heredada de la Grecia clásica y del cristianismo primitivo); por buscar los bienes, las mercancías y los lujos sin valor social, Perico Sarniento la perdió durante mucho tiempo. Su vida no fue ni la presenta como la de un santucho, sino como desviada en un ambiente de rapiña mayoritaria, porque lo mismo es el que roba en coche que el que roba a pie; y tan dañoso a la sociedad, o más, es el salteador en las ciudades que en los caminos despoblados (1990a: 328). Roban el oficial, el soldado, el mercader, el escribano, el juez, el abogado, el alto clero… El verbo “rapio se conjuga en todos los modos y tiempos: se hurta por activa, por pasiva, por circunloquio y por participio” (1990a: 329).

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No, hijos, les aconseja Don Pedro, nunca deben asumir las ideas y los actos que les inspiren los inmiscuidos en la podredumbre, sino, dice con Aristóteles, deben ser prudentes. Especifica que la gente feliz aplica la frónesis, sabiduría práctica o prudencia, es decir, lo contrario a quienes niegan lo que no comprenden, emiten afirmaciones antes de un juicioso análisis de los hechos y los discursos, y se comportan contra quienes practican la sociabilidad y el espíritu comunitario con sus hermanos, a saber, los habitantes de esta América del Norte, que después propuso llamar Anáhuac y acabó por ser Estados Unidos Mexicanos. Lizardi le hace decir a Sarmiento que se tome su letra como la de Don Quijote, que sermoneaba con tal asiduidad que Sancho Panza le dijo que podía tomar un púlpito y andar por la Tierra predicando lindezas. Los consejos no son, pues, un añadido, repito, sino el centro y base de esta novela, escrita por un periodista que no espera ser leído por los superiores ni los necios obstinados. Y sentencia: el grosero es majadero, el inmoral realiza malas conductas, el embustero jura en falso, el ambicioso aplica su codicia y el mezquino sus cicaterías. Todos son los pésimos forjadores de la nación mexicana que oteaba en el horizonte de un futuro no demasiado lejano. Por estas páginas desfilan escribanos, mendigos, sacristanes, boticarios, curas que inculcan las supersticiones, los malos jueces criminalistas, los abogados embrolladores, los médicos “desaplicados”, los padres indolentes… y los demás inmorales que han hecho de la queja su práctica sin hacer nada para solucionar las desviaciones sociales que llevan a término (tesis cuya

Los consejos a lo largo de la obra no son meros añadidos, sino el centro y base de esta novela, Lizardi los introduce en anécdotas ilustrativas para que permanezcan en la memoria.

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fuente no cita porque los jansenistas estaban prohibidos, sino El fruto de mis lecturas de Jamin, una serie de epítomes que pasaron la censura inquisitorial; esto es, Fernández de Lizardi oculta, en buena medida, sus fuentes porque su existencia se desenvuelve en la tiranía de la censura civil y eclesiástica). Retrata a los preceptores ineptos, a los eclesiásticos relajados, a las coquetas de vida galante o las del rodeo (las sexoservidoras ambulantes, diríamos actualmente), a los flojos, a los ladrones, a los fulleros y a los hipócritas. Tales individuos imaginarán, como dice Tomás de Iriarte en la fábula “El elefante y otros animales”, que las advertencias que Sarmiento ha escrito los aluden personalmente; pero el autor que habla de la culpa o la mancha es inocente, por lo tanto, “que con su pan se lo coman” (1990a: 224-225), porque no “destaza” los defectos ni engrandece las ventajas de la patria que ama. El amor a la patria debería ser principio de virtudes cívicas y morales (1990b: 224), si faltan, la denuncia es necesaria. Luego, se ama a alguien o algo por lo que es, con sus defectos y cualidades. Como dato secundario es interesante saber en nuestros días que incluso se refiere al San Lunes de los oficiales mecánicos; o ausencia para curarse de la “tranca” con otra “tranca” (o cruda) (1990a: 301). Con el Arte poética de Horacio, Lizardi repite que desempeña su quehacer divirtiendo; empero, precisa, que lo hace falto de la saña que zahiere a las personas en lo individual, no al vicio. Claro que cualquier escritor tiene en mente sujetos reales: varios hechos se corresponden a la práctica de gente real en parte, aunque en general no se refiere a ninguno en especial. Esta amalgama de veracidad y ficción verosímil la aprovecha para enfatizar la “instrucción” que le ministraron sus anécdotas propias. En resumen, utiliza la fantasía como lo hace cual-

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quier narrador. Su estilo sentencioso, moralista, se apartó de la “malicia” sarcástica que señala a individuos con nombre propio (claro que nadie está exento de alguna que otra salida a lo trivial, confiesa). Dicho de otra manera, El Periquillo Sarniento ofrece un mural de las secuelas corruptas que durante la Conquista y la Colonia funcionaban como llaga purulenta, y que se agudizaron en aquella época insurreccionada y de grandes masacres que se emparejaron con ideales patrióticos sublimes. Como un mural es menester observar este libro con mucho tiempo y que lo analicen los amantes de las letras, la Historia, la lingüística y la sociología. Es un enorme discurso de consulta porque denuncia cómo reinaba un poder de dominio tremendo. Como efecto, las prédicas de los opresores beneficiados habían minado la autoestima de los habitantes de estas tierras, y la fraternidad, por lo tanto, era una práctica hundida en el vacío. En la elocuencia y retórica popular lizardianas nunca faltaron, a lo Sancho Panza, los refranes.

IV. El mal, la imitación y el arrepentimiento. Estructura moral Fernández de Lizardi define el corazón del mal intencionado y ególatra como un depósito de arcanos, enigmáticos al principio; y, sin embargo, vacíos de fondo social. Por lo mismo, se esconden o disfrazan con los ropajes de la bondad. Esto es, los sádicos y los que quieren todo lo económico, político o cultural sólo para sí o con exclusión de los demás, tienen recámaras anímicas donde embodegan sus astucias y estrategias hasta que sus conductas traslucen su iniquidad. Cuando se descubre

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su corazón perverso, nace el recelo. En antítesis, el hombre de bien no recela ni encubre sus intenciones. Es merecedor de confianza. Pedro Sarmiento declara que sus aventuras “pecaminosas” tuvieron mal fin. Fue un individuo moldeado por circunstancias nefastas en las que hubo de incurrir para obtener el pan. Es, empero, la contraparte de Don Catrín de la Fachenda, un protagonista de cortas miras, quien aceptó que las situaciones no cambian y es indispensable adaptarse, aprovecharlas. Don Catrín es un amoral. Periquillo conoce las degeneraciones y desde muy pronto explicita sus remordimientos, es alguien paradójicamente inmoral obligado y moral en su interior. El Periquillo no es, pues, una novela picaresca que se mueve entre lo moral e inmoral, sino que versa sobre un personaje débil de carácter, al menos en varias ocasiones de su existencia. Reconoce vicios que sigue por necesidad, y moldeado por las situaciones degeneradas de los colonizados y, pese a estas razones, es capaz de transformar su conducta emulando las virtudes de las buenas personas que conoció y que había conocido en su niñez. Pedro Sarmiento confiesa que debía a Dios un corazón noble, piadoso y dócil a la razón. La virtud le prendaba la vista con otros benéficios potenciales. Los delitos atroces lo horrorizaban; la culpa le impuso ciertos límites porque al final de alguna acción ilegal su alma la evadía, lo atormentaba por su carácter por un lado cruento y por otro anticomunitario. La sensibilidad excitaba sus entrañas ante escenas escandalosas éticamente. Pero ¿qué importan las buenas cualidades, las virtudes, si no se cultivan? Se cuestionaba metafóricamente: ¿cuál es el beneficio de una tierra fértil si la semilla que se siembra es de cizaña? Mi docilidad, confiesa y se confiesa, me servía para seguir el ímpetu de mis propias pasiones, es decir, el ejemplo de sus malos “amigos”;

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pero cuando trataba con una buena persona, “pocas veces dejaba de enamorarme la virtud” (1990a: 384). El planteamiento ético y moral es, pues, asimétrico, oscilante: pone aquí y allá como la posta, o correo de entonces, sus buenas y malas acciones; por ejemplo, no duda en mofarse y “periquearse” de la gente soez y grosera como los tahúres (1990a: 325), practicando la fullería. Cuando entra al servicio de “amos” con vocación socializante, Periquillo deja atrás los desvíos, se corrige en dirección hacia los amores fraterno y filial. La razón antropológica que aduce es que “no hay un hombre tan malo que no tenga alguna partida buena, y en medio de mis extravíos conservaba algunas semillas de sensibilidad, aunque embotadas con mi soberbia, y tal cual respetillo y amor a mi religión” (1990b: 285). Lejos de ser un hipócrita perverso o un amoral, Pedro Sarmiento muda de buen grado hacia las rutas comunitarias (que hubo en aquella etapa de capitalismo mercantil y de incipiente industrialización). En esas ocasiones, su personalidad influenciable deja en el pasado los extravíos del libertinaje y de una existencia desarreglada (1990a: 7), porque “el hombre mientras menos malicioso es más fácil de ser engañado” (1990a: 375). Perico muestra un carisma que, según la hermenéutica de lo literal, refleja un carácter inocente y bonachón. Desde la hermenéutica de la sospecha, creo que en el fondo es un individuo de personalidad endeble, un tanto de siervo o fuera de sí mismo; una personalidad agobiada por las huellas y la actualidad de la degeneración que privaba en aquella que llamaré una eta-

Periquillo en el fondo es un ser moral, pues reconoce sus faltas y tiene remordimientos de sus malas acciones, de este modo no estamos frente a una novela picaresca, como se ha clasificado en muchas ocasiones.

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pa de crisis o punto crítico en que las opciones eran renovarse o morir. Las inclinaciones sociables o comunitarias de Pedro le nacen, en buena medida, de la educación que recibió de su padre, un hombre que cualifica como excelente esposo, prudente, amoroso, afable y juicioso (1990a: 206). Lo instruyó, de entrada, en el Decálogo para que llegara a la paz interior y a la felicidad eterna (1990a: 207). Al salir del ala familiar, que cobija para obtener el pan, perdió el lustre de su nacimiento, su salud se extravió y arruinó los bienes de fortuna heredados por simples excesos no comunitarios. Sarmiento les explica a sus hijos que es demasiado tarde para que cambie de conducta, porque el ayer es lo ido; sin embargo, acepta que nunca es tarde para mudar de una pecadora vida relajada. La justicia siempre tiene redención si hay fe y amor al prójimo. Haber traicionado a su padre es lo que Sarmiento más la­ menta: “¿no advertís mi depravado espíritu y condición? Porque el hombre que se complace en afligir a otro [a su padre y madre] no puede menos que tener un alma ruin y un corazón protervo” (1990a: 94). Harto de sus desviaciones, en un ataque de desesperación debida a la pobreza, a la soledad y al aburrimiento de existir en aquel entorno social, Pedro quiso ahorcarse: amarró la reata a la rama de un árbol; ésta cedió. Después del “porrazo” desistió de su intentona. Este episodio intercalado dice que cuando fue amparado, después de su intento de suicidio, Perico entró en una accesoria abierta donde había un velorio. Escribe que detrás de su “estampa”: “Fui fraile, fui secretario/ y aunque ahora tan pobre estoy, / fui comerciante en convoy, / estudiante y bachiller. / Pero ¡ay de mí!/ esto fui ayer /y hoy ni petatero soy.”

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(1990b: 313): la suerte de su nacimiento está opacada por los extravíos, la salud está arruinada por los excesos y sus bienes los ha disipado. Don Pedro advierte a sus descendientes que no se abandonen al vicio ni tomen al pie de la letra su mal ejemplo con la esperanza necia de enmendarse, ellos también, al final de sus años. Les suplica que honren su memoria después de excusarlo, y esto conlleva que sean útiles al país, humildes, atentos, afables, benéficos, corteses, honrados, veraces, sencillos, nada pedantes, prudentes y racionales, o sea, con sabiduría práctica.

V. Las clases y la economía Cuando su patrón hereda a Pedro Sarmiento su hacienda, éste se casa con la hija de don Antonio, no sin antes matar de tristeza y angustias a la hermosa Mariana, a quien sólo quiso para satisfacer su líbido (después de haberla preferido a Luisa).

1. El amo, las apariencias y la igualdad El amo hacendado envía a Perico a una misión a Manila. En esa ocasión salta a la vista del Periquillo que el capital en haber de los comerciantes es expansivo, no tiene patria, sino que entre sus poseedores priva la avaricia y demás facetas contrarias a la tendencia comunitaria y al amor a sus compatricios. Los capitalistas burgueses (que Sarmiento llama “ricos”) se aman demasiado a sí mismos (ejercen lo que Aristóteles llamó pleonexía, es decir, quieren todo para sí, en este caso lo económico, con exclusión de los demás). No dudan en hacer el mal o agredir a

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particulares y al mismo colectivo al que pertenecen o deberían pertenecer. La moraleja es que la abundancia de bienes es algo secundario, fugaz y negativo en exceso comparada con la vida y la nación. Por lo mismo, cuando naufraga el barco, los potentados no tienen más solución que tirar por la borda sus riquezas para no ahogarse durante el hundimiento debido a la sobrecar­ ga del barco. Después Perico vuelve a naufragar y nuevamente se salva; pierde su capital, y acaba presentándose en la ciudad de México, repito, como un conde para estafar al “chino” (en México se llamaban “chinos” a todos los que llegaban de los Mares del Sur) que engañó. Habitamos, se lee, en una sociedad de apariencias: aun cuando estén llenos de pio­jos, los vivillos amorales, tal vez ladrones o simplemente aprovechados de los afanes de riqueza en medio de una población paupérrima, con las ganancias de sus pillerías se compraban ropa de lujo y adminículos como la “cascarita del reloj” (esto es, sin la máquina), que colgaban de una leontina. Don Pedro asegura que la pobreza no hace a los malos, como se juzga en principio (1990a: 385) ni el “color bajo”, o piel oscura, ni los vestidos destrozados califican a los perversos. La ocasión en que Perico visita a Manila, donde aprendió el tagalo, describe que un sujeto inglés se cree con el derecho de maltratar a un comerciante negro por un involuntario encontronazo (repito, en sentido inverso: la discriminación agobiaba a Manila: no sólo era realidad en la Nueva España y demás colonias españolas). El inglés ataca al “moreno” y lo reta a terminar el asunto con pistolas. Por más que el negro repite que no trató de ofenderlo ni quiere morir ni matarlo, el inglés no desiste de su necedad. El día del duelo, el “moreno” le dice que una de las pistolas está cargada y la otra vacía, porque no tiene motivo para perpetrar

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un homicidio gratuito. Con pistola cargada no la dispara. El inglés, conmovido, lo abraza y nace entre ambos un asomo de amistad. La moraleja infaltable es que si todos procedemos de un mis­mo ascendente  —“todos somos hijos de un padre y componemos una misma familia” (1990b: 219)—, por qué se comete la imbecilidad de la discriminación esclavista: “es una estupidez despreciar al negro por negro, una crueldad comprarlo y venderlo y una tiranía matarlo” (1990b: 219). ¿Qué clase de libertad es la de obrar al antojo propio sin respeto ni subordinación al primer precepto del Decálogo? Fernández de Lizardi aspiraba a que se instaurara una clase media culta, bien alimentada, que no insultara el lustre que debe tener la convivencia; con una alimentación fuera de medida y con servicios de tal gala que enfermaran de vagancia a los pudientes. Con una influencia inesperada de uno de los padres de la Economía, Adam Smith (¿la obtuvo mediante los jansenistas?), califica de aberración social que una minoría de familias conserven su fastuosidad a costa de infinitos sumergidos en la desdicha y oscuridad. La mejor distribución de las riquezas podría lograr que los ciudadanos, sin excepción, vivieran con desahogo y comodidad. La minería no era una solución para el país, y esto porque no sólo el enclave donde se encuentra un socavón padece cambios, sino porque los metales no se comen. En los poblados cerca de las minas de plata los precios de los bienes primarios y secundarios crecen exponencialmente; enerva la industria y el “cabrío” (1990b: 197). También despierta la codicia de los extranjeros. Esta alusión insinúa, de paso, que los mares estaban infestados

Fernández de Lizardi condenaba que unos pocos tuvieran demasiado mientras que muchísimos tuvieran tan poco. Si la distribución de la riqueza fuera equitativa, los ciudadanos vivirían con comodidad y ello repercutiría en el bien de la nación.

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de corsarios ingleses, piratas holandeses o de otros enclaves europeos que se llevaban a manos llenas los metales preciosos, de modo que España recibía una mínima parte, si es que la recibía (por esta razón, ¿quién tuvo las posibilidades de una Revolución Industrial?). Los ingleses se apropiaron de la plata y el oro, además de establecer el comercio en pequeña y gran escala, y tuvieron esta Revolución.

VI. Patria En el magín que dio a la luz esta novela nace y después se desarrolla la pretensión de ser leal en la forja de la patria. El objetivo lizardiano fue generar un sentimiento centrípeto, no chauvinista ni xenófobo, esto es, impulsar la autoestima capaz de enmendar las deformaciones del poder de dominio que se había padecido y padecía. Sólo el que ama lo cercano, en un movimiento centrípeto, mira la injusticia, le salta a la vista, se enfada, y entonces está preparado para extender centrífugamente su amor hacia el mundo.

VII. Estilo 1. Los aciertos y las fallas El lenguaje de Fernández de Lizardi es sumamente atractivo y rico (no así la estructura de la novela). Sin embargo, confiesa y vuelve a confesar, concediendo a la multitud de críticos elitistas u oportunistas, que lo atacaron a mansalva, que su estilo tiene mil y un defectos; y cómo no, alega, si escribir para oyentes con

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una formación educativa mala requiere “atropellar las reglas del arte” (1990a: 24). Esto es, un pueblo mayoritariamente no hispanohablante, cuando intentaba expresarse, cometía faltas gramaticales que el autor reproduce. Ello molestaba a los “genios” de la pluma que se atenían a la preceptiva y a la gramática castellana. En algunas ocasiones, cediendo en demasía, se disculpa a sí mismo, diciendo con pena que si sus escritos tienen méritos relevantes, los defectos son producto más bien de sus escasas luces. A estas alturas de su carrera como escritor valora que sus errores no son excusables, aunque se debían a que redactaba entre las distracciones familiares y de los amigos que visitaban su casa. Admite que hubiera debido enmendar despacio algunas faltas del lenguaje, pero insistió en que carecía de paciencia y de recursos. Sin embargo, también admite que como autor no puede ni debe alabar su producción, ni abatirla hipócritamente.

2. El riesgo de las publicaciones Cabe repetir una aclaración: Lizardi pagaba la publicación de sus “papeles”, de manera que si no los vendía, pasaba algunos días de penurias alimenticias y de salud, cuando no de habitación. Murió de tuberculosis. Se describió como si fuera un gato “enlagartijado”, sin cien pesos para ir a curarse a San Agustín de las Cuevas, hoy Tlalpan, porque no los tenía para solventar los gastos familiares y de la imprenta.

3. El habla Desde el punto de vista de su habla, en este mural de lo que fue México, o sea El Periquillo…, no detectamos tantas erratas (han

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de contarse las de los impresores), sino un lenguaje apropiado para las clases que describe la diégesis o la trama: desde las más humildes, los honrados llamados “canallas”, como “indios” y “negros”, así como las clases potentadas en grado sumo. La riqueza léxica que manejó ha desa­parecido en el intercambio con los medios de comunicación masivos. Ahora bien, quizá por motivo de la mejor redacción, al finalizar el tomo V nos enteramos de que El Pensador Mexicano se ha comprometido a retocar y anotar los cuadernos de Perico: “¡ojalá el éxito corresponda a sus intenciones laudables!” (1990b: 415). Se encargó, dice el autor homodiegético, o sea el narrador empírico o real, José Joaquín Fernández de Lizardi, de la corrección, las notas y de dar la forma última a los cuadernos del autor heterodiegético, quien figura como narrador del texto, es decir, Pedro Sarmiento. El Pensador Mexicano afirma que los cuadernos del difunto tienen la gracia que los hace dignos de leerse y publicarse, a pesar de que los habían tachado de vulgares, entre otras razones, porque en la cárcel El Periquillo dice que los otros presos le vaciaron encima bacinicas llenas de orines. Víctima de odios larvados comprensiblemente en contra de alguien de otro nivel social, aunque la venganza la ejercieran fuera de la justicia del caso, recibió “unos jarritos de orines […] tantos y tan llenos y con tan buen tino que al poco estaba hecho una sopa de meados, descalabrado y dado a Judas” (1990a: 367), acto propio de aquellos desorientados que lo juzgaban un blanquito rico venido a menos. Si enjuiciaron por ladrones a tales vengativos, fue no por violación de la ley, sino por falta de “valimiento”. Aún de viejo Lizardi siente dolor cuando toca las llagas de aquellos agravios que cicatrizaron tan mal como se aplicaba la ley. Frente a las críticas desaforadas por este episodio, pese a su moral encubierta,

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contestó a quienes lo señalaron como un vulgar: ¿por qué no opinaban lo mismo de cuando Don Quijote y Sancho vomitaron el licor de Fierabrás? En el capítulo X de la primera parte, Don Quijote se refiere al bálsamo de Fierabrás, medicina para la inmortalidad. Cuando Sancho ve a uno que, al parecer echaba sangre por la boca, percibe que era el bálsamo de fierabrás. Este personaje lo vomitó sobre Don Quijote y Sancho. Los que juzga El Pensador que eran aciertos, repite, no merecieron los aplausos de ciertos lectores (la mayoría eran escuchas); pero él no apetece los vítores de los doctores borlados ni de la plebe ignorante y novelera respecto a sus obras porque, como escribió Iriarte en “El oso y la mona”, cuando el sabio aprueba sucede algo malo; pero si el necio aplaude, ha ocurrido lo peor.

4. Los destinatarios En 1812, cuando se decretó la libertad de imprenta, Fernández de Lizardi se hizo periodista y folletinista, es decir, escribió básicamente para el pueblo analfabeto, en el sentido estricto de esta palabra. Su uso de los diálogos permitía al lector el cambio de voz, y los escritos de este autor no suponen una lectura retroactiva, sino que repite lo que dijo antes de los párrafos incidentales aclaratorios; sobreabunda, también, en dichos y refranes populares. En contraste, ocasionalmente utiliza alguna frase en latín porque estos tropezones aún se escuchaban, según Muratori citado por nuestro escritor, y porque era el medio para dar a conocer los clásicos, acompañados de su traducción libre. La versión lizardiana, un tanto maltrecha de citas latinas obedece a que el latín aún no era letra muerta ni siquiera para los más ignorantes.

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5. Estructuración de El Periquillo

El Pensador Mexicano escribía sobre todo para el pueblo, el cual era, en un gran porcentaje, analfabeto. Hizo uso de diálogos, pues permitían al lector el cambio de voz, asimismo, las repeticiones y los dichos o refranes populares no eran gratuitos.

Dentro de la trama de El Periquillo se encuentran historias intercaladas a imitación del barroco cervantino (Isabel, Tadeo, Rosalía, sirvientes, nobles…). En una discusión con un cura, el autor cita versos de esquina del popular Negrito Poeta. No cita más versificadores populares de quienes deambulaban por las calles de la América Septentrional, sino que El Pensador las hizo suyas, dando voz a los que no tenían acceso a los medios escritos; esto significa que se alejó de los sabios eruditos a la violeta, los pedantes que dicen conocer todo y no penetran en ningún asunto, pues éstos, consideraba, no necesitaban sus lecciones (1990a: 34). Si en ocasiones su estilo es menos risible que de costumbre (se pensaba un tanto bufón), es porque en realidad sus textos bordan en un fino e inteligente humor (muy a lo Miguel de Cervantes, Francisco de Quevedo y Francisco de Isla), en el entendido de que el humor se parece a las simbólicas máscaras del teatro: una llora y la otra la consuela, diciéndole que es suficientemente adulto y libre para vislumbrar un asomo de esperanza social y personal. Joaquín Lizardi (a veces se llamaba de esta manera) expuso las vivencias de los habitantes de una colonia, quienes habían padecido la deformación y la negación, y fueron obligados a un silencio por demás sospechoso o, si se prefiere, significativo de su cultura y de sus cualidades. Durante los trescientos y pico años de conquista y colonización, los dominantes no habían dejado de narrar, generalmente de manera deformada, el mundo cultural de los dominados, porque cambiaron sus nociones geo-

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gráficas, alimenticias y hasta algunas de sus costumbres. Ahora que la derrota era evidente, que la independencia asomaba en cualquier rincón, los dominantes optaron por silenciar los acontecimientos de la Provincia Autónoma de la Nueva España.

VIII. La trama y los personajes El texto clava una pica en Flandes, es decir, en la sociabilidad degenerada, o lo que Kant llamó la “insociable sociabilidad”: somos sociables por naturaleza y cultura; sin embargo, también algunas conductas son contrarias al buen funcionamiento de una vida fraternalmente comunitaria.

1. La educación en familia y la escuela Nacido en la clase media, Pedro Sarmiento, apodado El Periquillo Sarniento por un pantalón amarillo, una chaqueta verde que llevó a la escuela en Tepotzotlán, y por haberse contagiado con esta enfermedad, tuvo tías y familiares femeninos que de bebé lo envolvieron como un “cohete” para que no fuera manilargo, y contra el mal de ojo lo adornaron con manitas de azabache, ojos de venado y un colmillo de caimán. En cuanto el padre observó a su hijo como un tamal adornado como fetiche, prohibió este paganismo supersticioso, lo cual tiene otro fuerte regusto jansenista. De sus padrinos no hay palabra que valga, dice el protagonista, porque las obligaciones que contrajeron con su ahijado, cuando murieron sus compadres las olvidaron más rápido de lo que canta un gallo. Práctica generalizable hasta el fastidio. En una historia intercalada acerca del Marqués de Baltimonte y la

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impía Clisterna, Pedro sentencia que los padrinos acreedores de amor eran una franca minoría comparados con los “odiosos y malignos” (1990b: 368). En el colegio, donde asistió mal de su agrado, El Periquillo aprendió lo que nunca debió haber aprendido e ignoró lo que debía saber. Fernández de Lizardi aprovecha para darnos directrices pedagógicas. Tuvo, dice, profesores sádicos que ejercían un oficio tan digno y trascendente como la “última droga que puede hacer el diablo” (1990a: 56). Aquella severidad le inculcó tanto miedo, y el miedo, torpeza ante aquel “sátrapa infernal” (1990a: 67). La sabiduría en ciencias del mentor, la deslucía mediante su genio tétrico. Martirizaba a las criaturas con orejas de burro, con azotes y con la infaltable palmeta. Enfrentado al axioma de que la letra con sangre entra, ese profesor le generó temor: su mano actuaba trémula, balbuciente y no articulaba palabra adecuada. En contraposición, fue alumno, asimismo, de un profesor indulgente, consentidor, que mimaba sin poner límites a sus alumnos. Era un ignorante que no distinguía estilos en la lectura; aprendió a leer aprisa, hablando disparatadamente, o con afectación, según la ortografía y no respetando el sentido. Cuando fallaba, a la par de la mayoría de sus colegas, la sintaxis y la ortografía no podían estar muy depuradas, porque sobre los cimientos falsos de quienes nunca quisieron educar a sus oprimidos, “no se levantan jamás fábricas firmes” (1990a: 58). El Periquillo aprendió despropósitos que se enseñaban por costumbre, dice el ya centrado Don Pedro, o quizá Lizardi, en una anotación culta a los cuadernos. Esta pésima instrucción aquí y allende del Atlántico, la puso a la vista Feijoo en sus discursos 10 a 12 del tomo VII de su Teatro crítico, en donde al parecer Jefferson Rea Spell (profesor de la Universidad de Texas, especialista,

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cuya tesis trata de la vida y obra de Fernández de Lizardi, 1931) encuentra la hipótesis de que Lizardi fue el Feijoo americano, que Yáñez considera una valoración exagerada y empobrecedora de El Periquillo… que nada tiene de copia. Después de la educación primera, como nunca aprendió las enseñanzas de la filosofía, “con más garbo que el mejor doctor de la Academia de París” (1990a: 97), desatinaba en Bárbara y en Ferison. En medio de sus discursos huecos echaba mano de pedantes excrecencias terminológicas mediante silogismos, entimemas, sorites y dilemas, procedimientos todos ellos lógico-retóricos. Conversando con su padre, le informa a Perico que las carreras de leyes, medicina y letras eran las “ciencias más oportunas para subsistir en nuestra patria” (1990a: 148). Cuando ya era bachiller, sus padres le dieron la libertad para que seleccionara la carrera que más le acomodase (1990a: 148). Estando tan mal instruido, Juan Largo le pregunta sobre los cometas. Responde con una estupidez enorme y tan fanfarrona que el vicario lo rebatió, avergonzándolo. Desde el alma honesta, Sarmiento reconoce que ha sido culpable de meterse en lo que no entiende. El buen corazón no basta para ser buenos padres, ayos ni maestros, hace falta “ciencia, prudencia, virtud y disposición” (1990a: 64), se lee. Aquel buen hombre, de vocación médica y cumplidor, daba gusto a la madre consentidora por no disgustarla: atropellando lo justo, se expuso a recoger los frutos de su “imprudente cariño como me sucedió a mí” (1990a: 87). Las esposas eran por regla general, dice, no sólo bastante más jóvenes que su pareja, sino, por adición, cándidas y tan obstinadas que hacían flaquear decisiones atinadas. Por el “chiqueo” materno y las adulaciones de las parientas, sin faltar la pésima compañía de muchachos “desarreglados” (1990a: 93),

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acabó hundiéndose en lo más profundo de Periquillo fue “cuidalos malos senderos, “a costa de no pocas do” por chichiguas. reprehensiones” debidas al buen ejemplo Lo amamantaron ebrias o sifilíticas, por de otros niños y adultos (1990a: 93). lo que mermaron su Una constante en la extensa producsalud y lo llenaron de ción lizardiana es el abandono materno en malos hábitos. manos de la servidumbre que llenaban a En la obra de Lizardi es una constante el los bebés de enfermedades al amamantartema del abandono de los y de temores supersticiosos, formando los bebés por parte niños cobardes y aterrados por fantasmas de sus madres, quienes provenientes de una tradición malsana llelos dejan en manos de la servidumbre que gada de África (cita a una “etiopisa”) o, en malcría a los infantes. menor escala, de las mujeres indias (la mayoría de servicios estuvieron entonces en manos de esclavas, condición que no tenían los pueblos originarios, legalmente españoles desde tiempos de Isabel la Católica, aunque sí hubo indias expósitas debido a su pobreza), como el muy local coco, los macacos, los brujos y los muertos aparecidos: “¡Qué concepto tan injurioso formé de la Divinidad y cuán ventajosos y respetables hacía a los diablos!” (1990a: 52). A Periquillo lo dejaron, pues, bajo los cuidados de chichiguas (nanas que también los amamantaban) que lo llenaron de malos hábitos y enfermedades; estropearon su salud porque lo amamantaron borrachas, golosas, gálicas (sifilíticas) y, en general, enfermas del cuerpo y del espíritu. Total, lo dejaron raquítico. En tales manos de “genio maldito” se volvió mal intencio­ nado, “consentido y mal criado” (1990a: 53). Se levantaba a las qui­nientas, se bañaba cada campanada de vacante, de tarde en tar­de, se debilitó porque lo criaron “regalón y delicado”, “sin dirección ni tono” (1990a: 50), porque los chicos deben travesear al aire fresco y bañarse frecuentemente con agua templada.

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La madre violó los daños, que quiso evitar su marido, como la llaga de un hijo borracho, jugador y tahúr, por no ahorrar los consentimientos, es decir, por no establecer límites prudentes recibió más agravios que consuelos de su hijo. Distaba de ser el “hijo de gato que caza ratón” (1990a: 258), fue malcriado, cometió oprobios durante la confusión de aquella anarquía social carente de los sentimientos de comunidad. Debido a una suerte de mayorazgo de pobre (injusticia hiperbólica que se explica porque fue hijo único), derrochó, gastó en galanterías sin que diera nada a su madre, sin favorecerla ni en casos extremos. Si heredó poco, lo dilapidó, porque “el dinero en manos de un inmoral semeja una espada en manos de un furioso” (1990a: 228). En su autocrítica, piensa que cometió vilezas, ruindades, a la par de sus falaces parientes que, fingiendo condolerse de la viuda, nunca la socorrieron, sino que fueron ingratos, vanos e interesables o pragmáticos. En suma, como el padre fue prudente, se crió “bien y mal” (1990a: 50). Pese a sus vaivenes por la ruta correcta e incorrecta, no aceptó ejercer ningún oficio. La enseñanza tenía un nivel tan desastroso que, en prueba, obtuvo el grado de bachiller que incrementó su petulancia porque todos “bachillereaban” a un verdadero ignorante. En contraposición, su padre, viendo su holgazanería y poco brillo en las artes libres, lo incita al aprendizaje de un oficio que le diera de comer, haciendo caso omiso de que se despreciaban las prácticas manuales, porque todos, opina la sabia figura de Perico, su padre las consideró igualmente dignas (asunto que El Pensador Mexicano repetirá en sus folletos). Así pues, como Pedro no daba el ancho en el estudio, siendo inteligente, su padre supo que para dar oficio a las criaturas es menester consultar su genio, su constitución física, sus fuerzas, su agilidad y sus inclinaciones intelectuales. Si unos son buenos

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para las Letras, otros para teólogo, médico, abogado, o zapatero, o… Cada individuo es finito y limitado, acertado en unas prácticas y fallido en otras. Su padre remata con que elija un oficio porque si no sirve para el estudio, y le faltan los medios para sobrevivir, podría acabar en la “ganzúa” o la “horca” (1990a: 75); “no aproveché este conocimiento” (1990a: 153), dice él. La madre insiste en que siga con una carrera universitaria, que le aportaría más honor y pesetas. A pesar de las circunstancias, el padre cede a los caprichos de su esposa, enajenada en la vieja y grosera preocupación de que los oficios o manualidades (banausía en griego) envilecen a quienes los ejecutan. La lección de la obra es consultar el genio y la constitución física para que el joven seleccione el oficio adecuado. El espíritu dominante de la madre repitió que un hidalgo sin oficio es mejor recibido que un sastre o un pintor. Lizardi escogió las letras y murió como Cervantes, pidiendo limosna (1990a: 152).

2. Los oficios El intelecto requiere que las manos se muevan. A partir del Renacimiento, se trató sin éxito de desterrar la “vieja y grosera preocupación de que los oficios convierten en ser-vil a quien los ejercita” (1990a: 268). Como este prejuicio, proveniente de la Grecia esclavista, significa sumir en la pobreza, se está hablando de la tiranía y la altivez contra quien nos da comida, habitación y vestido a las poblaciones. Como la imitación de este añejo hábito es mera necedad, los habitantes de Manila, adonde va a dar El Periquillo, no comprenden la nobleza de los amos, ni el desprecio de ciertas profesiones, ni la negación de valor a los oficios. No convencido aún de este juicio, a partir de su segundo naufragio nuestro protago-

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nista se finge conde de Guadalajara: excusa así su falta de oficio y su fobia al trabajo. Hasta aquí la caracterización del padre, la madre y su hijo Pedro. Repito. Mediante sus ínfulas de rico capaz de mantener a terceros, se trae a México al “chino” (en México se llamó así a todos los de ojos rasgados, aunque procedieran de los Mares del Sur), que nada entiende la nobleza hereditaria: a esta palabra le da el significado de virtud. Pero… “el mundo las más veces aprecia a los hombres y sus títulos reales”, por lo que tienen y no por lo que dicen y hacen (1990b: 253). Pedro Sarmiento pormenoriza algunas inclinaciones depravadas por el mal ejemplo de los ricos (por ejemplo, las violaciones y el derecho de pernada), sus disipaciones en general y su inutilidad. He aquí una aproximación al multiculturalismo en el radio de las colonias hispanas. El Periquillo explota al habitante de Manila hasta que un mendigo lo reconoce en presencia del chino. Obviamente Perico niega tener parentela humilde. Esta figura incide en las diferencias culturales, sus valores e ideologías implícitas. Sin oficio ni beneficio, el Periquillo sobrevive en medio de la “cizaña” que hundía en el caos a su América Septentrional. Por esta novela pasan Juan Largo o Januario, el Aguilucho y el Pípilo, tres de los crápulas más pormenorizados en su carácter y sus tretas.

3. La corrupción en personajes de clases bajas y en los supuestos intelectuales Perico se unió a los mendigos, no con los apuros del caso que justifican mendigar, como ser casado y sin medios para sobrevivir, sino que en su mayoría eran solteros. El jefe de la cuadrilla enseñaba a cada quien cómo imponerse en escena para conse-

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guir limosnas. Unos fingían ser ciegos, otros cojos o baldados, otros corcovados, otros leprosos. Otros, simulando ser desdichados, lloriqueaban y afectaban el alma con sus ruegos y gritos lastimeros. Y con estas actuaciones sacaban comida, bebida y hasta mantenían algunas mancebas.

3.1 Los pillos Sin manejar ninguna manualidad, en una venta cerca de Río Frío, le dan posada porque “Dios castiga, pero no destruye a sus hijos porque éstos le sean ingratos” (1990b: 316). En aquel caserío, Periquillo, después de haber probado varios empleos, se hace cofrade de unos ladrones, una “academia de pillos”, un complot de borrachos, tahúres capaces de encontrar las cosas antes de que su dueño las pierda. El motivo: “porque es peor morirse de hambre” (1990b: 322). Por la falta de bienes para sobrevivir, se une a una cuadrilla de ladrones o cazadores, no de conejos, sino de gente (1990b: 317). Su teórico papel es el de vigía, o hacer la guardia. Roban, hurtan, el sereno los descubre, llegan los guardias, la víctima se desmaya. Don Antonio, con quien después mantendrá una relación entrañable, lleva a la Cárcel de Corte a Perico, a Januario y al Pípilo, donde conviven con presos sucios y “empelotados”. Januario lo había incitado a seguir sus Periquillo se unió primero a los mendigos, mañas, e inocentemente Perico lo considequienes fingían estar ró un amigo útil, eficaz y pregonero de sus ciegos, cojos o hasta glorias. Empero, para ridiculizarlo en públileprosos, para obtener, co, dio a conocer su mote: “conocí cuan a costa de los demás, comida y bebida. Desodioso era tener un mal nombre, y qué capués se junta con unos rácter tan vil es el de los rufianes” (1990a: ladrones por los cuales 113). Januario o Juan Largo no se saciaba lo meten a la cárcel. con hacerle jugarretas, fingiendo amistad

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sincera. Inclusive, lo mete entre las astas de un toro sin avisarle. Siempre le tiende redes de araña, por ejemplo revelando sus secretos para burlarse a costa de su honor. En otra sección del libro, ubicada en Calpulalpan, El Periquillo ve a Januario, teniente de la gavilla, colgado de un árbol. Don Pedro entonces asegura que le enseñó máximas de conducta erróneas, que él siguió por desacierto, aunque debido al palo del que surgió (su padre) es astilla que reconoce las posibilidades de enmendarse. En la ciudad de México intima con el mulato Aguilita, ladrón astuto y lisonjero, muy contrario a Don Antonio, quien le profesa una amistad auténtica. Cuando las culpas agobian a nuestro personaje, siente en las entrañas una luz que le señala el sendero correcto.

3.2 El contrabando Perico se escapa de la cárcel, y después de varios tumbos, va a radicarse a Zacatecas, donde vive con un amo benévolo. En ese tiempo muere su padre. Después va con sus tías a Veracruz. Dado el ambiente familiar sano, trabajó con tesón y fidelidad como “cajero mayor y el árbitro de sus confianzas” (1990a: 345). No obstante, el contrabando, costumbre usual y gananciosa en el puerto, logra que pierda lo que ganó en dieciocho años de trabajo. Las artimañas económicas de las potencias afectaban a los trabajadores honestos nacionales. 3.3 La rapiña en las agencias mortuorias Cuando sana de una cuchillada que le clavó el esposo de Luisa la ocasión en que intentó violarla, entra de sacristán. Esconde las chorreaduras de las velas y los cabos para venderlos y saca propinas en bodas y bautizos. A una que estaba en el ataúd le roba su rosario, sus joyas y su ropa. Cerraron el cajón y la ocasión de

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este abuso dio sus frutos una sola vez, porque tales hazañas no son repetibles y se descubren fácilmente. Ha de buscar otro trabajo. Don Pedro aprovecha para detallar el asunto. A quien muere pobre se le disipan los amigos y deudos como mosquitos incomodados por el humo, dice. El fausto de los ricos se prolonga mucho debido a la aberración del mayorazgo o herencia para el hijo mayor, quien suple la personalidad del padre (el resto de los hijos con frecuencia iban a dar al convento o a la milicia). Los que contaban con recursos notorios eran enterrados en los conventos; a su funeral se invitaba a los pobres del Hospicio, mientras que los ricos ni siquiera se asomaban a los funerales de los pobres. La capilla de los “sin blanca” o dinero (de plata) se llenaba de viejos, contrahechos y despilfarrados que se llamaron los “hermanos del Santísimo” (1990a: 237; en cursivas en el original). El orgullo con que eran tratados los miserables, criados incluidos, la altanería y actitud despreciativa eran redundantes, es decir, se repetían hasta el aburrimiento. Otros conocidos del difunto “mandamás” se encajaban, como lo hacía Januario, vestidos con el “lujo” del color negro. Eran atraídos por el repique de las campanas y el olor del guajolote y del pulque. Tal repique recuerda no tanto que alguien murió, sino que mañana todos moriremos, señala Don Pedro a su descendencia. Estas caracterizaciones atañen a cuanto rico se asoma en la escritura lizardiana. Un “canalla” lo invita a ser soldado: tendría fueros para cometer abusos, comida, ropa, cama, libertad para ir a bailes y no estar encerrado. Cuidarle la espalda a una monarquía tan lejana era una praxis muy fácil y redituable. Perico denuncia la leva. El sino lo ayuda. Durante ocho años se comporta de manera honrada. Llega a ser asistente de un coronel honesto, afable,

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instruido en las legislaciones, por cuyo mandato se embarcó rumbo a Manila.

3.4 Subdelegados y la justicia En las intendencias, el subdelegado tuvo a su cargo la justicia o ejercerla, entre otros cargos. La otra práctica que ejerció El Periquillo después de su primer matrimonio, capítulo en el cual se muestran los amplios conocimientos lizardianos sobre la justicia, a la sazón llena de ejecutores fraudulentos, situación que no lo sorprende porque mediante su relación con el tuno de Aguilucho había aprendido que la justicia se compra igual que una simple mercancía. En la ciudad de México se pone bajo las órdenes de un escribano, quien tomaba las declaraciones preparatorias anteriores a la confesión de cargo. La corrupción facilitó que los escribanos engañaran con facilidad a los jueces, abusando de su confianza. Una de las partes sustanciales de El Periquillo... es que después de mendigo, Perico acepta ser escribiente del subdelegado de Tixtla, un ladrón que sacaba su “principalillo” (1990b: 159) en cinco años. Además era comerciante. Vendía forzadamente a los indios lo que hacía pasar por semillas. Instruido doctor en cánones y nada escandaloso, obligaba a comprar fiado y a pagar con semillas buenas. Los indios le trabajaban por jornal (azotaba y encarcelaba a quienes no lo obedecían). Cobraba multas en grande. Por quinientos pesos liberó a un asesino. Era jugador, estafaba a los habitantes de ese pueblo no hablante del español, no pagaba a sus criados. Compraba en el tianguis (mercado de un solo día) a precios ridículos, y en sus tiendas revendía a precios elevados. Sus propios hijos le reconvinieron que trabajara para tal malandrín. La historia toma un giro inesperado. El Periquillo había caído en la prisión. En tal privación de libertad fue objeto de burlas pe-

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sadas por parte de los indios, los negros, los lobos, los mulatos, porque era un “cucharero” blanco (en aquel entonces los amantes de lo ajeno robaban los cubiertos, en especial las cucharas porque tenían mayor cantidad de plata). No fue sentenciado. Entre rejas conoció a un usual escribano, Chanfaina, quien, viendo la buena letra de Perico, lo emplea como su amanuense. Tareas que cumple con “puntualidad, tesón y eficacia” (1990a: 411), esto dice que gracias a sus habilidades, sale de la cárcel. El Coronel predica al escribano Periquillo que en los procesos jurídicos debe privar la verdad para que el juicio sea justo. Le muestra la sabiduría ordenadora de las leyes contra la justicia de compadres. Por ejemplo, a su ahijado lo recrimina con estas palabras: No señor, le dijo el Coronel, la obligación de un defensor es examinar si el cuerpo del delito está correctamente justificado. Un pelo en la sopa es que El Periquillo le pone los cuernos con su esposa Luisa. Posteriormente, se encuentra con esta esposa de Chanfaina, casada con otro. Ella se mofa de que su anterior marido lo hubiera sacado de su casa a bofetadas. Intenta violarla, pero Sancho Martín, su nuevo esposo, le clava un puñal en las costillas y Perico es internado por enésima vez en el hospital. Pese al ejemplo excepcional citado, el Después de mendigo, texto detalla que las acciones y las palaPeriquillo trabaja como bras de los escribanos no coinciden, como escribiente del subdelegado de Tixtla, quien en el caso del licenciado Casalla, uno entre también era un hombre muchos fraudulentos de la justicia. Perico corrupto y ladrón. se enteró de que un “amigo”, preso por En general, los escribaocho meses en el Morro de La Habana, tenos hacían caso omiso nía una hermana de no malos bigotes (Luide las leyes o las manipulaban a su antojo por sa). El escribano deshonesto la favoreció, unas cuantas monedas. soltándole de la cuerda con más facilidad

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que Don Quijote a Ginés de Pasamonte, según Don Pedro. En su lugar, amarró a un indio tirado en la calle que estaba borracho y dormido. La víctima ni siquiera entendió las acusaciones. Fernández Lizardi acude a otro episodio similar, el del Payo y Lorenza (historias dentro de la historia principal al modo de Don Quijote). Los escribanos que cumplían honestamente con sus deberes, sufrieron indirectamente los vejámenes que atañían al resto, efectos de la inculpación en falso, sentencia Pedro Sarmiento. En general los escribanos atropellaban las leyes, recurrían a testimonios falsos. Por unas onzas invocaban cédulas y órdenes reales interpretándolas a voluntad, porque del arte por medio de la “cábala con la pluma se aprende mañas” (1990a: 415). Con tal ejemplo del “cagatinta perverso” (1990a: 415), Perico Sarniento aprendió a acriminar y defender reos, formar sumarias y a conducir procesos. Por ejemplo, a don Severo, un pobre, lo trataron con soberbia, utilizaron “testigos instrumentales” o citaron nombres de supuestos culpables (1990a: 419), y le enredaron con latinajos ajenos a su comprensión. De nuevo, por su tendencia al delito, fue encarcelado en la Cárcel de Corte (ya con el subdelegado Chanfaina muerto). Harto de su condición de mal viviente decide suicidarse. Entonces la bondad aparece: una india lo lleva a su jacal y le da un frugal tentempié. La cuadriga buena del alma de Periquillo, opuesta a la parte mala (en metáfora de El Fedro de Platón), le dice que hubo tantos escribanos y represores “tan pelotas” o faltos de entendimiento y honestidad, tan maliciosos, que habían logrado que el vulgo los mirara con un enorme desafecto, que el pueblo detestara una profesión que, por definición, debería ser noble, ordenadora y ética. Nada extrañaba que la población confundiera sus deberes con los actos de los criminales trapaceros. Casalla replica, en di-

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rección contraria del lado bueno (o Sarmiento) de Perico, que le enseñaron tales principios cantándole la verdad sobre la honestidad por simple envidia. Sarmiento persiste en sus llamadas de la conciencia. Sin las leyes y sin ordenamiento ético, se estaba llenando el país de tiranos, así como desgraciadamente en Europa, América y cualquier otro lugar, los abogados se manejaban por la fuerza, el orgullo y hasta la grosería contra los desgraciados. Lizardi aprovecha esta pudrición legal para calificar, además, la “fiesta” de los suplicios y las ejecuciones como un espectáculo horrendo, funesto y vengativo: falla notable del aspecto legal de la justicia. Aunque es una verdad inobjetable que si la humanidad se sujetara a la equidad y a la recta razón, se desconocerían los castigos. Desgraciadamente, el origen de las leyes penales se debe a que es necesario que se sometan los ímpetus desordenados mediante el temor de perder los bienes, la libertad, la reputación o la vida, escribe Sarmiento citando a un jurista.

3.5 Los tahúres En los inicios de la trama o diégesis, cuando era huérfano, “sin casa ni hogaza” (1990a: 282), bajo la influencia de Juan Largo, entra a la pillería del juego en condición de cócora. Sin dinero y con ingenio obtiene ganancias mediante la vigilancia del que lleva el monte: advierte las trampas, ve la primera carta y después las dos que componen el albur. Aprende a fabricar barajas marcadas y otros arbitrios que son robos declarados y latrocinio (1990a: 291): el juego quita al enganchado mucho más de lo que le aporta, aclara Sarmiento. Como cócora come, no paga y duerme donde cae: Perico lo hace en la mesa de billar, tapándose con frazadas repletas de piojos, que comparte con mulatos, ratas, un gallo y aromatizado con “estornudos traseros”

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(1990a: 299). Fernández de Lizardi detalla el lenguaje de los tahúres, las trampas, prácticas definitorias de los garitos y escucha la abundancia de juramentos, las blasfemias y las obscenidades a que eran propensos los desdichados negros y sus mezclas. Periquillo trampea al mulato Aguilucho de manera tan obvia que se desata la trifulca y el mulato le deja los dientes flojos y las narices rotas. Otro ejemplo: en los garitos quitan a un payo su dinero, que le dan a Periquillo Sarniento, después de una “tarea de trancazos” (1990a: 315), de costillas rotas y de partirle la cabeza a la víctima. Don Pedro Sarmiento escribe que únicamente sobreviven en y del juego los tramposos y ladrones. De los últimos la gente se previene; del jugador, no, aunque también merece cárcel. El juego engancha o aliena el alma. Por ejemplo, en un episodio, tras las rejas conoció a Aguilita, quien incluso empeña sus pantalones por jugar al monte.

3.6 El clero Al clero le toca otra reprimenda, la cual abrió el agujero del ostracismo y de la discriminación, en donde El Pensador fue a caer en 1822 con motivo de su excomunión. Lizardi, el jansenista mexicano, narra que bajo la influencia de un tal Martín, “un bicho menos maleta que Juan En El Periquillo Sarniento también Largo” (1990a: 153), más enamorado que Cuse critica al clero. pido, más jugador que Birján, bailador, tonto Lizardi sentencia y zángano de colmena, entra a estudiar para a través de Don sacerdote. Martín no tenía la más mínima voPedro que para el cación, pero sus padres lo encajonaron en el sacerdocio se necesita vocación, capaseminario. Con temple acomodaticio, Martín cidad de celibato, aconsejó al Periquillo que cerrara los ojos y sabiduría y virtud. emprendiera su misma profesión, la mejor

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carrera, porque sería bien recibido en cualquier parte, venerado, respetado y se le disimularían sus defectos, aunque sólo leyera los peores libros de moralina seudo-religiosa: nadie lo motejaría ni le llevaría la contra. Asistiría, además, a los mejores bailes, juegos y estrados. Martín le asegura que a los curas jamás les falta un peso, aunque sea por una misa mal dicha (1990a: 154). Con que estudie tres o cuatro autores archisabidos, sería loado como un consumado teólogo y moralista, un “Séneca para el confesionario y un Cicerón para el púlpito” (1990a: 155): “ordénate y quítate de ruidos, que después tú me darás las gracias por el buen consejo” (1990a: 156). Perico emprende la carrera del sacerdocio creyendo que no se necesita más ciencia que estudiar cuatro distinciones y los cuatro casos más comunes de la moral. Se encaja, pues, en el sínodo, enterado que si en éste acierta por casualidad, sería elevado a presbítero, y aumentaría el número de los idiotas, con descrédito de todo el estado clerical (1990a: 158). Se percata de que los ricos mantienen al capellán. Gracias a su padre, pronto se entera de que él era inepto (le faltaba capellanía) para destinarse a vicario y administrar los sacramentos, y esto porque desconocía las lenguas de los indios (1990a: 156), la mayoría de habitantes de la Nueva España. Don Pedro concluye que para entrar a esta carrera hace falta tener vocación y capacidad de celibato: “siempre he deseado que los ministros del altar estén plenamente dotados de ciencia y virtud” (1990a: 159), porque “un sacerdote es un sabio en la ley, doctor de la fe, sal de la Tierra y la luz del mundo” (1990a: 160). Si en vida de su padre, nuestro vividor moralista tomó el hábito religioso, a la primera ocasión, abandona el seminario, dejando atrás el encierro nocivo y el estómago debilitado. Deser-

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ta porque ¿qué hará el secular más escandaloso en tales lances cuando ve que un religioso que ha profesado la virtud, que ha jurado separarse del mundo y refrenar sus pasiones, escandaliza con su “perverso ejemplo” (1990b: 119). Por ejemplo, el confesor cumplía con sus funciones “de priesa” (1990a: 241), en oposición a sus largas visitas en las casas de los pudientes. Éstos los invitaban por lujo y por vanidad, no por devoción. Este clero servía más para adular que corregir a los amos o patrones y demás feligreses; incluso percibe sus dobleces el chino. El Pensador atenúa lo malo de los curas de alcurnia con ejemplos notorios: en aquel espacio históricamente lúgubre para la religión auténtica, conoce al converso Martín Pelayo, sacerdote con vocación contraria al mercantilismo, con quien se confesó desde entonces hasta su muerte y de quien recibió el Viático. Se confesaba viniendo a la ciudad de México desde San Agustín de las Cuevas. Otro párrafo lleva la misma orientación en el caso de Don Roque. Después de fungir como vigía de la gavilla de ladrones a la que se había incorporado, Periquillo regresa a la capital. Entra a los ejercicios de la Profesa, donde conoce a Don Roque, confesor que lo acomoda en una tienda. Es un sacerdote sabio, ejemplar, que le enseña cómo se disfrazan los vicios como virtudes (1990b: 347): los lisonjeros y oportunistas llenan de incienso al ídolo que los favorece por criminal que sea; con la mayor desvergüenza alaban sus maldades como acciones heroicas.

3.7 La medicina Quizá por la veneración a su figura paterna insiste en la pésima atención que hubo en la Nueva España en asuntos de salud. No falta en la novela el matasanos Dr. Purgante. Los médicos charlatanes engañaban con terminajos generalmente desatinados, con títulos retumbantes de enfermedades que se sacaban de su ma-

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gín como verdaderos enigmas. Se presentaban como dueños de los arcanos divinos de la naturaleza, siendo “punches”, es decir, sapos de talla mediana que se inflan en los charcos y, empujando el aire, acaban por confundirse con becerros. Un médico, por lo común, se atribuía títulos pomposos en sus presentaciones en carátulas, y lanzaban al aire promesas. El resultado final era el parto de los montes. Como los abogados, los médicos son indispensables y, en principio, positivos socialmente; pero viendo a la mayoría que profesaba como sanador, lo cierto es que abundaron los médicos farsantes que con mil trampas ocultaban su ignorancia. En resumen, asoman con asiduidad en las páginas de El Periquillo Sarniento las farsas en que estuvo sumido el sector salud, como las del Dr. Purgante. La medicina fue un negocio teatral con actores duchos en poses o pantomimas, como mover la cabeza de un lado al otro y morderse los labios mientras tomaban el pulso. Su juramento hipocrático de asistir por caridad y con la eficacia que les era posible, los mediquillos lo metieron en el fondo de una caja fuerte, porque lo valoraron como simple quimera. La charlatanería es enemiga de la salud, y en ocasiones aliada de la corrupción. Por ejemplo, un payo, herido en un garito, va a convalecer al hospital. El escribano entra donde yace y lo amenaza para que confiese sus pecados. El miedo del payo es tal que dice lo que quiere al dominante abogado ayudado por el capellán. El médico le da una consulta fugaz, receta sangrías, lavativas y cataplasmas, y lo remite a la sala de recuperación, no de cirugía, para curarle una herida. El payo huye más lastimado que nunca. El Pensador Mexicano explica estas desviaciones homicidas. Periquillo había entrado al servicio del doctor Purgante, quien hablaba en latín y mataba con sus recetas de eméticos (purgas) porque ignoraba qué drogas son nocivas según la enfermedad.

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La pregunta es: ¿cómo el Protomedicato (institución examinadora de los médicos) lo había examinado y aprobado? En un santiamén, nuestro personaje aprendió la pedantería de su maestro y su afición a las purgas. Un chiquillo en plena adolescencia, originario de Tula, le pidió que fuera a auxiliar a los enfermos de su región, donde no había ni un consultorio para asistir a los enfermos. Se marcharon. Por urbanidad, Perico envía a los principales su “recado” ofreciendo sus servicios. De hecho sus pacientes son los indios, con quienes usaba los latines y recetaba evacuaciones a mansalva. Fernández de Lizardi ilustra: ¡Ay, señor, […] se muere mi padre! Yo afirmé, afectando mucha serenidad de espíritu, y con la confianza de un profeta le respondí: — Callen ustedes niñas, ¿qué se ha de morir?; éstas son efervescencias de humor sanguíneo que oprimiendo los ventrículos del corazón, embargan el cerebro porque cargan con el pondos de la sangre sobre la espina medular y la traschiatería; pero todo se quitará en un instante, pues si evaquatio fit recetur pletora [con la evacuación liberaremos la plétora] (1990b: 41).

Los miembros de ese pueblo originario le pagaban con gallinas, frutas, huevos, queso… Si sanaban, crecía su fama de ducho en su carrera; si morían, pues “ya estaba de Dios” (1990b: 40). Se hace de un buen capital. Nadie lo acusaba de homicidio. Sin embargo, el cura lo reta: “tatita hablemos en [la] lengua [con] que nos entendamos como la gente!”. Perico le responde con lecciones mal citadas de Galeno, amasadas con otras de Hipócrates y Avicena (1990b: 44). La farsa dura poco. Una peste mata a la población de Tula. Los tártaros eméticos son contrarios a la basca, la fiebre y los delirios. En la cuarentena los afectados ex-

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piran. Perico sale corriendo de Tula, bajo una lluvia de pedradas y maldiciones en lengua náhuatl: la sangre se le bajó hasta los talones (1990b: 76). Regresa a la ciudad de México.

3.8 Boticarios Otro empleo de Perico es el de boticario. Lo consigue provocando mil lástimas y contando treinta mil mentiras. Lo acepta el boticario y lo viste con “decencia”. Perico asciende a aprendiz por sus relativos conocimientos del latín. Por simple vanidad prevaricó. Don Pedro Sarmiento dice que a pesar de ser la mano derecha del médico, un boticario sigue sus caprichos pragmáticamente, a saber, Perico era obligado a llenar con agua las redomas. En contraposición a los médicos, el boticario no pone magnesia sino polvos de arsénico a sus menjurjes. Como los médicos no eran duchos en el nombre de las medicinas, la “droga va segura” (1990b: 22) si se conserva su color original del jarabe. El enfermo está persuadido de que el remedio lo sanará porque ignora que los boticarios son inexorablemente tramposos comerciantes que encarecen las drogas que faltan en las boticas y no en la suya. El boticario nunca estaba en su droguería, sino que se marchaba con sus amigos a jugar. Periquillo decide robarlo; empero se salva porque la conducta de su amo no es precisamente honrada, y más le vale que sus artimañas no se divulguen: sólo lo multan y Perico sale del apuro porque tan sólo es aprendiz y no el responsable. 3.9 Boticarios-dentistas Dando un brinco analicemos el asunto del Barbero y de cuán “increíble” es el terreno que avanza el cobarde en su carrera, escribe Don Pedro. Durante una temporada teme que Chanfaina

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lo busque para vengarse de la infidelidad que cometió con Luisa. Encuentra al barbero Agustín Rapamentas, amigo de sus padres, y a quien conoció siendo niño. Lo conmueve con “llanto de viudas” (1990b: 7), refiriéndole la muerte de su padre y un altero de malas vivencias como embargos y la pérdida de múl­tiples empleos. En su entusiasmo discursivo va apropiándose de personajes literarios como el mariscal Birón, que le rompió un plato en la cabeza y lo persiguió con un cuchillo porque, siendo su mayordomo, le sirvió la sopa fría. El Barbero sonríe: ha invocado como reales a personajes nobles de comedia que Periquillo suponía olvidados, como les estaba sucediendo a los nobles: la herencia por motivos de sangre era ya un anacronismo. Cuando acepta aprender el oficio de barbero y dentista, que a la sazón se ejercían juntos, rapa inicialmente a un perro, el cual gemía lastimosamente debido a las cuchilladas que le infringía. Hubo de sacarle la muela a una vieja. Le cortó una cantidad de trozos de mandíbula que sirvieron de almuerzo para el gato del lugar (1990b: 11 y ss.). La vieja le regresa las ofensas bañándolo y chamuscándolo. Los barberos raramente eran buenos en su oficio de odontólogos, pero una minoría exageró su impericia, como Periquillo.

Otro empleo que consigue Periquillo es el de boticario. Aprende las malas mañas que los boticarios tenían. Después ejerce el oficio de barbero-dentista en el cual también hizo de las suyas.

IX. La redención Más adelante, al finalizar la diégesis, Perico se casa con la hija de Don Antonio, de catorce años (1990b: 376), quien lo había

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protegido cuando Perico había estado en prisión. Está acongojado por la culpa. Se cuestiona qué puede hacer un secular de existencia escandalosa como la suya cuando observa que un religioso, que ha profesado la virtud, que ha jurado separarse del mundo y de refrenar sus pasiones, escandaliza con su “perverso ejemplo” (1990a: 119). Don Antonio muere siendo dueño de la hacienda que había administrado, siendo el patrón más solidario, generoso y justo de una hacienda. Un protector que lo convierte en heredero universal de sus bienes y de su bonhomía. Sus últimos días los vive en la bonanza, como dueño de la hacienda que le hereda don Antonio. Y la pasa divertido porque la virtud jamás ha estado reñida con la alegría y la honestidad (1990b: 351): Dios no nos quiere mustios ni zonzos (1990b: 351). En la parte última de la novela le toca el turno a Tánatos. En aquellos sus últimos momentos declara que no existen los diablos (tema que repite en su Pastorela) porque Dios no necesita valerse de títeres aéreos para castigar y aterrorizar al pecador. La mala conciencia, los remordimientos son demonios y espantajos alojados en el alma. Como disposición testamentaria, prohíbe que en sus minutos postreros las devotas empiecen a “jesusearlo”, obligándolo a marcharse con ese sonsonete y con un altero de quejas desaforadas. Tampoco en su cabecera debe escucharse la cantinela de “Jesús te ayude, Jesús te ampare y te favorezca” (1990a: 401), porque su constricción deposita su confianza en la misericordia que ha despertado en su corazón la fe, la esperanza y la caridad. Demanda que lo dejen bien morir sin que le pongan caldo en la boca, sino que se la humedezcan con algodones mojados.

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X. El Pensador como personaje Para terminar el texto se informa que por sus aprendizajes en el arte de componer y por su letra magnífica, Don Pedro Sarmiento (El Periquillo), delega a El Pensador Mexicano, autor constante y desgraciado, conocido por el mote de El Pensador Mexicano (como Pedro Sarmiento carga con el apodo de El Periquillo Sarniento) amén de un dinero para los pobres (en el novenario se distribuyeron para los pobres dos mil pesos de limosna que devolverían cuando hubieran hecho negocio y ya no lo necesitaran), la tarea de pulir los cuadernos que escribió, reconociéndose como hombre inculto que hereda a sus hijos unos cuantos consejos. En alabanza del narrador inventado, o sea, Don Pedro Sarmiento, El Pensador Mexicano, el autor real, escribe que consideró al Periquillo su amigo verdadero y tanto “nos hemos amado que puedo decir que soy uno mismo con El Pensador y él conmigo” (1990b: 396).

XI. Apéndice y preguntas a un lector contemporáneo Estas páginas que traslucen fe nos indican que después de nuestro paso por tantos vericuetos de acciones desviadas, que colocaron al actual México al borde del precipicio, entre los horrores de la historia se asoma la redención nacional porque somos compensados con las buenas acciones que abren la puerta a la felicidad personal y del país. Don Pedro Sarmiento ordena a su progenie que no presten sus cuadernos a hipócritas, a curas que negocian con sus feligreses vivos y muertos, ni a los abogados u oficiales fanfa-

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rrones ni a médicos farsantes e inhumanos, ni a escribanos o relatores de mala calaña, ni a procuradores del mismo jaez, ni a ladrones y comerciantes usureros, ni albaceas que roban las pertenencias de sus teóricos protegidos o ladrones de herencias, ni a padres indolentes, ni a beatas necias y supersticiosas, tampoco a ricos avaros, ni a mozos que no saben servir y que es necesario correrlos del servicio, ni a… ¿Mantiene este libro su actualidad? ¿Cuáles de las corrupciones se han eliminado? ¿Por qué Fernández de Lizardi habrá tenido una influencia mayúscula en el siglo xix mexicano y hasta hispanoamericano?

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Bibliografía Fernández de Lizardi, José Joaquín. Obras VIII-Novelas. El Periquillo Sarniento (tomos I y II), prólogo, edición y notas de Felipe Reyes Palacios, México: Instituto de Investigaciones Filológicas, Centro de Estudios Literarios, unam, 1990a (Nueva Biblioteca Mexicana, 86). —. Obras IX. Novelas. El Periquillo Sarniento (tomos III-V) y Noches tristes y día alegre, presentación, edición y notas de Felipe Reyes Palacios, México: Instituto de Investigaciones Filológicas, Centro de Estudios Literarios, unam, 1990b (Nueva Biblioteca Mexicana, 87).

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- Gran Bretaña: • E. Gibbon publica la primera parte de su obra: Decadencia y caída el Imperio romano. • Adam Smith publica: Ensayo sobre la naturaleza y las causas de la riqueza de las naciones

1776

- España: • 10 de noviembre. Real Cédula que manda realizar un censo general de la población en América.

Francia, Gran Bretaña y España

Año

José Joaquín Fernández de Lizardi • 15 de noviembre. Nace, en la ciudad de México, José Joaquín Eugenio Fernández de Lizardi Gutiérrez, hijo de Manuel Fernández de Lizardi y de Bárbara Gutiérrez Malpartida, es bautizado como español en la parroquia de Santa Cruz y Soledad.

Nueva España • 22 de agosto. Por Real Orden, se crea la Comandancia General de las Provincias Internas en la zona septentrional del virreinato de Nueva España, con capital en Arizpe y bajo jurisdicción de la Real Audiencia de Guadalajara. • Primer mapa general de la Nueva España realizado por Alzate y Ramírez.

- Estados Unidos: • Enero. Thomas Paine proclama su panfleto Common sense a favor de la independencia y la forma de gobierno republicana. • 12 de junio. La Declaración de Derechos de George Mason es aprobada por la Convención de Virginia. • 4 de julio. El Congreso aprueba un documento redactado por Thomas Jefferson que finalmente se convierte en la Declaración de Independencia.

Alejandro Amaro Valencia

Estados Unidos e Hispanoamérica

Cronología

- Estados Unidos: • 17 de octubre. George Washington logra su primera victoria en la Batalla de Saratoga. • Se redactan los artículos de la Confederación.

- España: • 19 de febrero. José Moñino, conde de Floridablanca, toma posesión como Secretario del Despacho de Estado. Ocupará el cargo hasta el 27 de febrero de 1792.

1777

Estados Unidos e Hispanoamérica - Hispanoamérica: • 22 de agosto. Por orden de Carlos III, y a propuesta del entonces Ministro de Indias José de Gálvez y Gallardo, se crea el Virreinato del Río de la Plata.

Francia, Gran Bretaña y España

1776

Año

• Mayo. Creación del Tribunal de Minería sobre el modelo de los Consulados de Comerciantes. Permite a los mineros hacer uso de su propio fuero.

Nueva España

José Joaquín Fernández de Lizardi

- Estados Unidos: • Comienzo de la Guerra de Independencia americana. • El capitán James Cook descubre Hawái.

1778 - Francia: • 30 de mayo. Muere Voltaire. • 2 de julio. Muere JeanJacques Rousseau.

Estados Unidos e Hispanoamérica - Hispanoamérica: • 8 de septiembre: Se expide la Real Cédula de creación de la Capitanía General de Venezuela.

Francia, Gran Bretaña y España

1777 • 20 de febrero. Real Cédula que prohíbe los empalados y otros espectáculos en las iglesias de todo el imperio.

Año

• En la capital, fuerte epidemia de viruela que será controlada hasta 1780.

Nueva España

• 27 de octubre. Su padre, Manuel Fernández de Lizardi, aprueba su examen de Bachiller en Medicina. Por ello, es probable que en este año comience su práctica como médico en el Hospital de Naturales de la ciudad de México.

José Joaquín Fernández de Lizardi

Francia, Gran Bretaña y España

- Gran Bretaña: • Samuel Compton inventa la mule Jenny, máquina de hilar movida por energía hidráulica.

1779 - Francia: • El conde de Buffon publica: Las épocas de la naturaleza.

1778 - España: • 12 de octubre. Carlos III firma el Reglamento para el comercio libre. Se permite a doce puertos españoles el libre comercio con el imperio americano (con excepción de Nueva España).

Año

- Hispanoamérica: • Rebelión de esclavos en la Hacienda de San José, en la costa de Perú.

Estados Unidos e Hispanoamérica

• Siendo todavía virrey Antonio María de Bucareli y Urzúa, cargo que tomó el 23 de septiembre de 1771, se pone en práctica la política de libre comercio entre España y las Indias. • 23 de agosto. Martín de Mayorga es nombrado virrey.

Nueva España

José Joaquín Fernández de Lizardi

Francia, Gran Bretaña y España

1781

1780 - España: • 12 de abril. Se firma el Tratado de Aranjuez entre Francia y España, por el cual la segunda interviene en la Guerra de Independencia de los Estados Unidos.

Año

- Estados Unidos: • Agosto. George Washington derrota definitivamente a los ingleses en Yorktown, Virginia. Proclamación de los Articles of Confederation.

- Hispanoamérica: • En Perú, comienza la rebelión indígena encabezada por Túpac Amaru II.

- Estados Unidos: • Abolición de la esclavitud en Pennsylvania.

Estados Unidos e Hispanoamérica

• Se funda la Academia de San Carlos.

Nueva España • Su padre obtiene la licencia del Protomedicato o Tribunal Médico. Posiblemente, en éste año sea nombrado médico del Real Colegio de San Francisco Javier en Tepotzotlán. Así, José Joaquín pasa su niñez en esta población.

José Joaquín Fernández de Lizardi

1782

1781

Año

Francia, Gran Bretaña y España - Hispanoamérica: • Marzo. En Nueva Granada, surge la “rebelión los comuneros”. Movimiento opuesto a las disposiciones fiscales de la Corona española. • 18 de mayo. Túpac Amaru II es ejecutado en la Plaza de Armas del Cusco, Perú.

Estados Unidos e Hispanoamérica

• Por orden del virrey Martín de Mayorga, la ciudad de México se divide en 8 cuarteles. El objetivo es contar con un sistema de seguridad y vigi­lancia más eficiente.

Nueva España

José Joaquín Fernández de Lizardi

• Se edita, nuevamente, la Gaceta de México. • Se funda la Academia de Bellas Artes. • 17 de junio. Bernardo - Hispanoamérica: de Gálvez sustituye a • Se extingue la Compañía su padre como virrey. Guipuzcoana de Caracas, Venezuela.

1785

Nueva España

1784

Estados Unidos e Hispanoamérica • 29 de abril. Matías de - Estados Unidos: Gálvez es nombrado • 3 de septiembre. Se virrey. firma el Tratado de París -o Tratado de Versalles- • Se publican las Ordenanzas de entre Gran Bretaña y Minería, destinadas Estados Unidos que a formalizar y pone fin a la Guerra de sistematizar las Independencia de los nuevas políticas Estados Unidos. económicas de la Corona.

Francia, Gran Bretaña y España

1783

Año

José Joaquín Fernández de Lizardi

1786

Año

Francia, Gran Bretaña y España

Nueva España

José Joaquín Fernández de Lizardi

• Habiendo enviudado su • Se promulga la Real - Estados Unidos: padre, contrae nuevas Ordenanza para el • Se lleva a cabo la nupcias con María Joseestablecimiento “Rebelión de Shays” en fa Torres en la ciudad de e Instrucción de la ciudad de Concord, México. Intendentes de Massachusetts. Exérsito y Provincia en Granjeros dirigidos el Reino de la Nueva por Daniel Shays se España. El documento manifiestan en contra da carácter legal de una ley que los al sistema de enviaba a prisión por no intendencias; además, pagar sus deudas. fija las funciones de corregidor y alcalde - Hispanoamérica: mayor. • En Perú, se proclama • Una crisis agrícola la Instrucción sobre provoca la “Gran la educación, trato y hambre”. ocupaciones de los • Se funda el Jardín esclavos. Botánico.

Estados Unidos e Hispanoamérica

Francia, Gran Bretaña y España - Estados Unidos: • La Convención de Filadelfia proclama la Constitución de EE.UU.

Estados Unidos e Hispanoamérica

- Hispanoamérica: • Con la disolución de la Compañía Guipuzcoana de Caracas, Venezuela es integrada a la política de libre comercio.

- Estados Unidos: 1788 - España: • 14 de diciembre. Muere • 13 de septiembre. El Congreso ratifica la Carlos III, rey desde Constitución Federal. 1759. Lo sustituye su hijo • George Washington es Carlos IV. electo primer presidente de los Estados Unidos.

1787 - Gran Bretaña: • E. Cartwright inventa el telar mecánico.

Año • 8 de mayo. Es nombrado virrey Alonso Núñez de Haro y Pe­ralta. • 17 de agosto. Manuel Antonio Flores, nuevo virrey.

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Estados Unidos e Hispanoamérica

- Estados Unidos: 1789 - Francia: • 5 de mayo. Se inaugura • 30 de abril. George Washington toma la Asamblea de los posesión como primer Estados Generales en presidente electo. Versalles. • 17 de junio. El tercer Estado se separa y crea la Asamblea Nacional. • 9 de julio. La Asamblea Nacional se nombra a sí misma Asamblea Nacional Constituyente. • 14 de julio. Toma de la Bastilla, símbolo del inicio de la Revolución francesa.

Año • 29 de febrero. La política de libre comercio se amplía a Nueva España. Se sustituye el sistema de flotas por uno de registros; así, se intenta romper con los monopolios y con el corporativismo. Se crean los nuevos Consulados de Guadalajara, Veracruz y Puebla para contrarrestar el monopolio del de la ciudad de México. • 16 de octubre. Juan Vicente de Güemes, segundo conde Revillagigedo, es nombrado virrey.

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1789 • 4 de agosto. En la llamada “noche de la locura”, la Asamblea Nacional Constituyente acuerda la supresión del feudalismo, eliminando las prebendas que recibía el clero y los derechos señoriales de los nobles. • 27 de agosto. La Asamblea Nacional Constituyente publica la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano.

Año

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1790 - Francia: • 13 de febrero. Un decreto prohíbe los votos monásticos, es decir, se suprimen las órdenes regulares. • 26 de febrero. División administrativa de Francia en 83 departamentos.

Año

Nueva España

- Hispanoamérica: • 28-29 de octubre. Revuelta de esclavos y negros libres en la colonia francesa de Santo Domingo (actual Haití).

• El virrey Revillagigedo - Estados Unidos: ordena el • Primer censo revela levantamiento de un que los Estados Unidos censo. tienen una población de casi cuatro millones de personas. • La capital es trasladada temporalmente a Filadelfia.

Estados Unidos e Hispanoamérica

José Joaquín Fernández de Lizardi

1791

Año

Estados Unidos e Hispanoamérica

- Estados Unidos: - Francia: • 14 de junio. Se promulga • El Congreso autoriza la creación del primer la ley Le Chapelier. Banco. Instaura la libertad de • Se ratifica la Ley de empresa y proscribe Derechos o Bill of Rights. las asociaciones y corporaciones gremiales de todo tipo. • 3 de septiembre. En acto solemne, la Asamblea Nacional Constituyente promulga la nueva Constitución. • 1 de octubre. La Asamblea Nacional Constituyente se convierte en Asamblea Legislativa.

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1792 - Francia: • 20 de abril. La Asamblea Legislativa declara la guerra a Austria y a Prusia. • 30 de julio. La Marsellesa se canta en París por primera vez. • 10 de agosto. Las fuerzas populares, sans-culottes, asaltan el Palacio de las Tullerías provocando la huída de Luis XVI de Borbón. • 20-21 de septiembre. En su primera sesión, la Convención Nacional instituye la República Francesa.

Año

Estados Unidos e Hispanoamérica

José Joaquín Fernández de Lizardi • Habiéndose trasladado a la ciudad de México, José Joaquín Fernández de Lizardi se inscribe a los cursos de gramática latina impartidos por Manuel Enríquez de Agreda.

Nueva España • 1 de enero. Se funda el Real Seminario de Minería.

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1792 - España: • 28 de febrero. Carlos IV sustituye al conde Floridablanca como primer secretario de Estado. Su lugar lo ocupa el conde de Aranda. Se pretende mejorar las relaciones con Francia. • 15 de noviembre. Manuel Godoy es nombrado primer secretario de Estado. Sustituye al conde de Aranda.

Año

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José Joaquín Fernández de Lizardi

• Ingresa al Colegio de • Se concreta el censo - Estados Unidos: 1793 - Francia: San Ildefonso a los curpoblacional. La • 21 de enero. Después de • Eli Whitney inventa sos de filosofía bajo la población supera los la despepitadora de ser sometido a juicio, dirección de Manuel Ancuatro millones. algodón. Con ello, se el otrora Luis XVI de tonio de San Cristóbal y • Se descubre en acelera el crecimiento Borbón -convertido Garay. Guadalajara una industrial de esta en el ciudadano conspiración cosecha y se propicia la Luis Capeto por la de 200 criollos institucionalización de Convención Nacional– acaudillados por el la esclavitud en el sur es guillotinado padre Juan Antonio del país. • 24 de junio. Se promulga de Montenegro, y adopta la Constitución vicerrector del colegio del año I del calendario tapatío de San Juan republicano. Bautista. • 5 de septiembre. Comienza “El Terror” cuando la Convención vota a favor de instrumentar medidas para reprimir la actividad contrarrevolucionaria.

Año

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Estados Unidos e Hispanoamérica

- Estados Unidos: 1794 - Francia: • Los granjeros de • 10 de junio. El Tribunal Pennsylvania dan Revolucionario origen a la “Rebelión proclama la Ley del 22 del whisky”. Es de Pradial. Comienza el una respuesta a los “Gran Terror”. impuestos sobre el • 27 de julio (9 Termidor). alcohol. Derrocamiento de • La Batalla de Fallen Robespierre. Timbers acaba con el • 28 de julio. Ejecución de poder indio en Ohio. Robespierre, Saint-Just y otros jacobinos.

1793 • 16 de octubre. María Antonieta, otrora reina, es guillotinada y su cabeza expuesta al pueblo parisino como triunfo de la Revolución. • 31 de octubre. Los líderes girondinos son guillotinados.

Año

• 12 de julio. Es nombrado virrey Miguel de la Grúa Talamanca y Branciforte, marqués de Branciforte. • 2 de diciembre. Polémico discurso de fray Servando Teresa de Mier sobre la virgen de Guadalupe.

Nueva España

• Después de ser denunciado por su propio padre, el Tribunal del Santo Oficio y la Santa Inquisición le abre un expediente bajo la sospecha de “practicar suertes divinatorias, amatorias y obscenas”. Aunque comparece, el episodio no pasa a mayores.

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1795 - Francia: • 1 de abril. Se firma el primer Tratado de Basilea con Prusia. Concluye el conflicto armado.

- España: • Por iniciativa de Jovellanos, se crea el Real Instituto Asturiano de Náutica y Mineralogía, en Gijón. Se pretende aplicar las ideas de la Ilustración en la enseñanza.

1794 • 12 de noviembre. La Convención Nacional clausura el Club de los Jacobinos.

Año

- Estados Unidos: • Se firma el Tratado de Pinckney. Con él, se abre el Mississippi al comercio estadounidense; a su vez, se elimina a España como posible rival en el Oeste.

Estados Unidos e Hispanoamérica • En la capital, se produce la conjura hecha por el contador Juan Guerrero.

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1795 • 22 de julio. Un segundo Tratado de Basilea pone fin a la Guerra del Rosellón con España. • 22 de agosto. Constitución del año III del calendario republicano. • 5 de octubre. El “golpe de los señoritos” es aplastado por Napoleón Bonaparte. • 26 de octubre. Disolución de la Convención Nacional. • 3 de noviembre. Se constituye El Directorio.

Año

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1795 - España: • La Sociedad Económica de Madrid publica el Informe en el expediente de ley agraria, escrito por Jovellanos. Recomienda poner fin a las restricciones al libre cambio de propiedad y critica el régimen de amortización eclesiástica. • Septiembre. Carlos IV otorga el título de “Príncipe de la Paz” a Manuel Godoy por su participación en el Tratado de Basilea.

Año

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Estados Unidos e Hispanoamérica

- Estados Unidos: 1796 - Francia: • John Quincy Adams es • 2 de marzo. Napoleón electo presidente. Bonaparte es nombrado General en Jefe del ejército francés en Italia. • 10 de mayo. Al ser descubierta la “Conspiración de los Iguales”, que pretendía derrocar al Directorio y aplicar la Constitución de 1793, Babeuf y otros conjurados son arrestados.

Año

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Francia, Gran Bretaña y España

-España: • Abril. La flota inglesa bloquea el puerto de Cádiz.

- Gran Bretaña: • Thomas Malthus publica: Ensayo sobre el principio de la población.

1797 - Francia: • 4 de septiembre (18 de Fructidor). Golpe de Estado de Paul Barras contra los constitucionalistas. • 17 de octubre. Concluyen, de manera victoriosa, las campañas de Napoleón en Italia.

Año

Estados Unidos e Hispanoamérica • Brota una epidemia de sarampión que será controlada hasta el año siguiente.

Nueva España • Obtiene matricula en la Universidad, en la cátedra de retórica de Francisco Zambrano

José Joaquín Fernández de Lizardi

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- España: • 19 y 25 de septiembre. Reales Decreto y Cédula de Consolidación de Vales Reales ordenan la venta de propiedades de fundaciones religiosas e instituciones caritativas. Es el comienzo de la desamortización de las propiedades de la iglesia española.

1798 - Francia: • 1 de julio. Comienza la campaña de Napoleón en Egipto.

Año - Estados Unidos: • Se crea el Ministerio para asuntos de Marina (Navy Department).

Estados Unidos e Hispanoamérica • 31 de mayo. Miguel José de Azanza es nombrado virrey.

Nueva España • Su padre muere en Tepotzotlán. Por ello, se ve forzado a abandonar sus estudios sin recibir el título de Bachiller en Artes. • Por su buena caligrafía se convierte en amanuense público, probablemente en la misma ciudad de México. Ésta será su principal actividad hasta prácticamente 1808.

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Estados Unidos e Hispanoamérica

- Estados Unidos: 1799 - Francia: • 9 de octubre. Napoleón • Abolición de la esclavitud en Nueva Bonaparte regresa a York. Francia. • 9 de noviembre (18 Brumario). Napoleón Bonaparte da un golpe de Estado que acaba con el Directorio, última forma de gobierno de la Revolución francesa. Inicia el periodo conocido como Consulado. • 13 de diciembre. Se aprueba la Constitución del Año VIII que otorga el poder ejecutivo y legislativo al Primer Cónsul, Napoleón Bonaparte.

Año • En la capital, Pedro de la Portilla encabeza la “conspiración de los machetes”.

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1799

Año

- España: • 5 de junio. El barón Alexander Von Humboldt parte del puerto de La Coruña, con rumbo a la América española.

- Gran Bretaña: • En Londres, aparece el panfleto del jesuita, peruano exiliado, Juan Pablo Vizcardo y Guzmán: Carta dirigida a los españoles americanos. Por primera vez, un latinoamericano no-indígena exhorta a sus compatriotas a rebelarse contra la Corona española.

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1801

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- Francia: • 9 de febrero. El Tratado de Lunéville entre Francia y Austria establece la paz.

• Rebelión indígena en - Estados Unidos: la sierra de Nayarit. • Thomas Jefferson La encabeza el indio toma posesión como Mariano. presidente. • Comienzo del “Segundo Gran Despertar”.

• 29 de abril. Félix - Estados Unidos: de Berenguer de • Rebelión fallida del líder Marquina toma esclavo Gabriel Prosser, posesión como virrey. en Richmond, Virginia. • La capital se traslada, - Gran Bretaña: de manera definitiva, a • 5 de mayo. Gran Bretaña Washington D.C. proclama la Act of Union para unir a Gran Bretaña e Irlanda en el Reino Unido.

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1800 - Francia: • 13 de febrero. Creación del Banco de Francia.

Año

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- España: • 13 de febrero. Se firma el Convenio de Aranjuez entre Francia y España. Establece las condiciones en las que se unirán los ejércitos y flotas de España, Francia y Batavia, para combatir a Gran Bretaña.

Año

1801

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1802 - Francia: • 25 de marzo. Se pacta la Paz de Amiens con Gran Bretaña. • A iniciativa de Napoleón, se promulga la Constitución del año X. Este documento le otorga el título de Cónsul único y vitalicio. • 20 de mayo. Comienza la “Guerra de las Naranjas”. Conflicto militar que enfrenta a Francia y España con Portugal, por negarse a romper su alianza tradicional con Gran Bretaña. Concluye el 29 de septiembre con la firma del Tratado de

Año

Estados Unidos e Hispanoamérica • Rebelión del indio Pedro Martín en Teocelo, cerca de Jalapa.

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Madrid, mismo que fija la obligación de cerrar los puertos portugueses a sus aliados británicos y permitir el paso libre a Francia.

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• Se expide la - Hispanoamérica: 1804 - Francia: Real Cédula de • 1 de enero. Jean-Jacques • 2 de diciembre. Consolidación de Vales Dessalines hace oficial la Napoleón Bonaparte Reales. independencia de se corona a sí mismo la nueva República de • Humboldt realiza el en la Catedral de Notre primer mapa útil de Haití. Se convierte en su Dame, ante la presencia Nueva España. primer gobernante. del Papa Pío VII. Se convierte en Napoleón I.

• Enero. José de - Estados Unidos: 1803 - Gran Bretaña: Iturrigaray toma • 18 de mayo. Se rompe la • 30 de abril. Se obtiene posesión como virrey. la Luisiana, vendida por Paz de Amiens al declaNapoleón en 15 millones • 22 de marzo. rar la guerra a Francia. Humboldt llega al de dólares. puerto de Acapulco.

Año

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1805 - España: • 21 de octubre. Se libra la Batalla de Trafalgar, cerca de Cádiz. La armada británica, al mando del Almirante Nelson, destruye las flotas conjuntas de Francia y España.

1804 - España: • 14 de diciembre. Se declara la guerra a Gran Bretaña. • 28 de diciembre. Debido a la guerra con Gran Bretaña, el rey decreta la Real Cédula de Consolidación de Vales Reales.

Año

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• 1 de abril. Primer número del Diario de México.

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1806 - Francia: • 9 de octubre. Prusia declara la guerra a Francia. • 14 de octubre. Napoleón I derrota al ejército prusiano en la Batalla de Jena. • 1 de noviembre. En Berlín, Napoleón I decreta el “Bloqueo Continental” contra Inglaterra. - España: • 24 de enero. Se estrena en Madrid El sí de las niñas de Leandro Fernández de Moratín.

Año

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- Estados Unidos: 1807 - Francia: • 7 de julio. Con la Paz de • Robert Fulton realiza el primer viaje en un barco Tilsit, el Zar Alejandro I a vapor, desde Nueva de Rusia pone fin a las York hasta Albany. hostilidades con Francia. • 18 de octubre. Con el pretexto de atacar Portugal, el ejército napoleónico inicia la invasión de la Península Ibérica. • 30 de noviembre. Un ejército franco-español entra en Lisboa. La familia real portuguesa se ve obligada a huir a Brasil.

Año

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José Joaquín Fernández de Lizardi

• Escribe el primer texto • 8 de junio. Llega la - Estados Unidos: que de él se tiene nonoticia de la caída • 1 de enero. Se prohíbe la ticia: el poema Polaca, de Manuel Godoy y importación de esclavos en honor de Fernando de la ascensión de en Estados Unidos, no la VII. Se publica al año Fernando VII al trono esclavitud. - España: siguiente en la ciudad de de España. • 18-19 de marzo. El Motín México en un volumen • 14 de julio. Se conocen de Aranjuez en Madrid de composiciones. las abdicaciones de provoca la destitución Bayona de Carlos IV y de Manuel Godoy, así Fernando VII. como la abdicación del • 29 de julio. Llega rey Carlos IV en favor de la noticia del su hijo Fernando VII. levantamiento del • 23 de marzo. El ejército pueblo español contra napoleónico ocupa los franceses. Madrid. • 9 de agosto-9 de • 2 de mayo. Comienzan septiembre. Juntas los levantamientos de celebradas en la los patriotas españoles capital por el virrey contra la ocupación José de Iturrigaray francesa. con la Real Audiencia,

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1808 - Francia: • 2 de febrero. El ejército napoleónico ocupa los Estados Pontificios.

Año

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1808 • 5 de mayo. Se firma el acuerdo de Bayona. Fernando VII abdica en favor de su padre, Carlos IV, este último en favor de Napoleón, quien a su vez, proclama a su hermano José Bonaparte como rey de España. • Septiembre. En Aranjuez, se crea la Junta Suprema Central que gobernará en nombre de Fernando VII.

Año

Estados Unidos e Hispanoamérica el Ayuntamiento de México y demás autoridades para resolver la situación política del virreinato. • 15-16 de septiembre. El hacendado español Gabriel de Yermo aprehende por la noche al virrey José de Iturrigaray. La Audiencia nombra virrey al mariscal de campo Pedro Garibay. También son aprehendidos los licenciados Francisco Primo de Verdad y Ramos y Juan Francisco de Azcárate, regidores del Ayuntamiento de México, entre otros.

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José Joaquín Fernández de Lizardi

José Joaquín Fernández de Lizardi

- Gran Bretaña: • En Londres, aparece la publicación mensual El Español. Su director es José María Blanco y Crespo, mejor conocido como Joseph Blanco White.

- Francia: • 2 de abril. Napoleón contrae matrimonio con María Luisa, hija del emperador de Austria, Francisco I.

- Estados Unidos: • El presidente James Madison anexa la parte occidental de la Florida.

• Siendo teniente de jus• 13 de septiembre. ticia o juez temporal en Francisco Xavier Taxco, en sustitución de Venegas asume el un europeo que huye cargo de virrey. por la cercanía de las • 15-16 de septiembre. tropas de Hidalgo, escriSe inicia en Dolores, - Hispanoamérica: be dos cartas al virrey Guanajuato, el • 19 de abril. Inicia Venegas para proponer levantamiento en Venezuela un plan defensivo de dirigido por Miguel el movimiento Taxco. Las cartas nunca Hidalgo. independentista. llegan a su destinatario. • 25 de mayo. Tiene lugar, • 23 de septiembre. Proclama de Francisco en Buenos Aires, la Xavier Venegas Revolución de Mayo. contra la insurrección Se expulsa al virrey de encabezada por Baltasar Hidalgo de Miguel Hidalgo. Cisneros y se nombra

• 19 de julio. Francisco Javier de Lizana y Beaumont asume el cargo de virrey.

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1810

Estados Unidos e Hispanoamérica - Estados Unidos: • James Madison toma posesión como presidente.

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1809 - Francia: • 13 de mayo. Napoleón I entra en Viena.

Año

1810

Año

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en su lugar a la Primera - España: Junta. Este hecho • 24 de septiembre. marca el inicio de la Comienzan a sesionar independencia. las Cortes en Cádiz con • 20 de julio. En la participación de Santa Fe, capital diputados americanos. de Nueva Granada, • 10 de noviembre. inicia el proceso de Decreto de las Cortes independencia. que establece la libertad • 18 de septiembre. En de imprenta. Santiago de Chile, se realiza la Primera Junta Nacional de Gobierno. Inicia el primer período de la independencia llamado Patria Vieja.

Francia, Gran Bretaña y España • 28 de septiembre. Las tropas insurgentes toman Guanajuato. Comienza el asalto a la Alhóndiga de Granaditas. • 20 de octubre. En su entrevista de Charo, Morelos es comisionado por Hidalgo para sublevar la costa del Sur. • 29 de noviembre. En Guadalajara, Hidalgo decreta el Bando que abolía la esclavitud y los tributos. • 20 de diciembre. Comienza la publicación de El Despertador Americano.

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1811

Año

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- Estados Unidos: • 2 de marzo. El presidente Madison aplica el embargo comercial a Inglaterra. • Sangrienta revuelta de esclavos en Luisiana.

• 17 de enero. Félix María Calleja vence a las fuerzas insurgentes en la batalla de Puente de Calderón. • 25 de enero. Hidalgo es despojado del mando insurgente. - Hispanoamérica: • 14-15 de mayo. Proclama • 21 de marzo. Miguel Hidalgo, Ignacio de la independencia Allende, Ignacio de Paraguay por José Aldama, Mariano Gaspar Rodríguez de Jiménez, Mariano Francia. Abasolo y otros • 5 de julio. En Venezuela, insurgentes, son se firma el Acta de aprehendidos en Independencia. Acatita de Baján 27 de noviembre. Se y conducidos a fundan las Provincias Monclova. Unidas de la Nueva Granada.

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- Publica: • 19 versos, algunos de ellos: Aviso patriótico a los insurgentes a la sordina; Diálogos críticos sobre diferentes asuntos; La gloría de México en María Santísima de Guadalupe; La muralla de México y La verdad pelada.

• A principios de año, entrega las armas y municiones a las tropas de Miguel Hidalgo. • Apresado por el realista Nicolás Cosío, viaja como reo a la capital. Sus bienes le son embargados.

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Año

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José Joaquín Fernández de Lizardi

• 21-26 de junio. Ignacio • 7 folletos, destacan tres Diálogos críticos. Aldama, Ignacio Allende, Juan Aldama • En polémica entablada con Juan María Lacunza, y Mariano Jiménez, le ofrece 6 respues­tas son fusilados en en el Diario de México. Monclova. Sus cabezas son cortadas y remitidas a Guanajuato. • 31 de julio. Miguel Hidalgo es fusilado en el patio del Hospital Real de Chihuahua. Le es cortada la cabeza para remitirla a Guanajuato. • 19 de agosto. Es creada, en Zitácuaro, la Suprema Junta Gubernativa de América encabezada por I. López Rayón.

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- Francia: • 7 de septiembre. En la Batalla de Borodino, Napoleón I vence al ejército ruso.

1812

José Joaquín Fernández de Lizardi - Publica: • En el Diario de México, su fábula “La abeja y el zángano”, así como sus poesías “Buscapié” y el “Envite”. • 9 de octubre. Aparece el primer número de su periódico El Pensa­dor Mexicano. Se publicará en tres tomos, hasta el 8 de noviembre de 1814. • 24 versos, entre ellos: El glorioso protomártir san Felipe de y Si la envidia fuera tiña.

Nueva España • 2 de enero. Calleja toma Zitácuaro. • 2 de mayo. Morelos rompe el sitio de Cuautla. • 27 de mayo. Se publica el primer número del periódico insurgente El Ilustrador Americano. • 19 de julio. Se publica el primer número del Semanario Patriótico Americano, dirigido por Andrés Quintana Roo. • 30 de Septiembre. Lectura de la Constitución de Cádiz y su jura, en la ciudad de México, por

Estados Unidos e Hispanoamérica - Estados Unidos: • Reelección de James Madison con apoyo del Sur y el Oeste. • 1 de junio. El presidente Madison declara, con la aprobación del Congreso dominado por los republicanos, el estado de guerra con Gran Bretaña.

- España: • 19 de marzo. Las Cortes de Cádiz promulgan la Constitución liberal. • 11 de Agosto. José I abandona Madrid - Hispanoamérica: temporalmente. En mayo de 1813 lo hará de • 2 de noviembre. Simón Bolívar publica manera definitiva. el Manifiesto de • 9 de noviembre. Cartagena. Documento Decreto de las Cortes político, por el cual, el que abolía las mitas y los libertador analiza el servicios personales de proyecto emancipador los indios. de Venezuela y Colombia.

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Año

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• 15 de noviembre. Real orden de las Cortes de Cádiz sobre el reparto de tierras a los indios.

Año

1812

Estados Unidos e Hispanoamérica

José Joaquín Fernández de Lizardi

• 11 folletos, entre ellos: Francisco Xavier Aviso importante sobre Venegas, la Audiencia, las juntas parroquiales el Ayuntamiento y citadas para el domingo demás autoridades. 29 del corriente • 5 de octubre. El [diciembre] y La virrey Francisco igualdad en los oficios. Xavier Venegas se • 7 de diciembre. Es ve obligado a hacer detenido por el receptor público el decreto Roldán. Pasa en prisión sobre la libertad de siete meses por pedir, imprenta. el 3 de diciembre, en el • Carlos María de número 9 de El Pensador Bustamante publica Mexicano, que el virrey El Juguetillo, Venegas revocara aprovechando la el bando que daba recién concedida li­ injerencia a los militares bertad de imprenta. en el enjuiciamiento de • 25 de noviembre. los curas rebeldes. Asalto y toma de Oaxaca por Morelos.

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José Joaquín Fernández de Lizardi

- España • 22 de febrero. Las Cortes de Cádiz decretan la abolición de la Inquisición.

- Francia: • 14 de septiembre. Napoleón fracasa en su campaña de Moscú. • 16 de octubre. Derrota del ejército napoleónico ante una coalición de ejércitos europeos en la Batalla de Leipzig.

• Sale temporalmente de • 25 de febrero. Se prisión para contraer publica, en Oaxaca, matrimonio con María el primer número del Dolores Orendáin Correo Americano del Hurtado antes del Sur. nacimiento de su hija • 4 de marzo. Félix que llevará por nombre María Calleja toma María Dolores. posesión como virrey. • Aún preso, envía • 12 de abril. Morelos algunas cartas a los toma Acapulco. virreyes Venegas y • 14 de septiembre. Se Calleja pidiendo piedad instala el Supremo y sosteniendo su Congreso Nacional, inocencia. en Chilpancingo. El • 7 de julio. Sale de mismo día, Morelos prisión. da a conocer a la

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1813

Estados Unidos e Hispanoamérica • 5 de diciembre. Bando de Francisco Xavier Venegas suspende la libertad de imprenta.

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1812

Año

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• 21 de junio. Fuerzas francesas a las órdenes del rey José I son derrotadas en Vitoria por las fuerzas conjuntas españolas y británicas al mando del duque de Wellington. • 11 de diciembre. Con la firma del Tratado de Valençay, se pone fin a las hostilidades entre Francia y España. Además, se reconoce a Fernando VII como rey de España.

Año

1813

Estados Unidos e Hispanoamérica

José Joaquín Fernández de Lizardi

- Publica: Asamblea un • Cierra el primer tomo programa llamado de El Pensador Mexicano Sentimientos de la con un Soneto en que Nación. renuncia al oficio de • 5 de octubre. Morelos escritor. decreta abolida la • 10 folletos, entre ellos: esclavitud. Proclama de El Pensador • 6 de noviembre. Se a los habitantes de expide el Acta solemne México en obsequio del de la declaración de excelentísimo señor don independencia de la Félix María Calleja del Rey América Septentrional. y Reflexión patriótica sobre la próxima elección. • La obra de teatro Auto mariano para recordar la milagrosa aparición de nuestra madre y señora de Guadalupe.

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1814

Año

Estados Unidos e Hispanoamérica

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• 10 de Agosto. El virrey - Estados Unidos: - Gran Bretaña: Calleja da a conocer el • 24 de diciembre. Se • George Stephenson real decreto que anula firma el Tratado de construye la primera la Constitución liberal Gante entre Estados locomotora de vapor. de Cádiz. Unidos y Gran Bretaña. • Comienza la iluminación Queda establecida una • 22 de octubre. En con gas en las calles de Apatzingán, es “paz perpetua” y se Londres. promulgado el pone fin a la Guerra de documento que lleva 1812. - Francia: por nombre Decreto • 6 de abril. Napoleón I constitucional para la abdica al trono imperial - Hispanoamérica: libertad de la América y es desterrado a la Isla • 2 de enero. La Asamblea mexicana. A este Nacional de Venezuela de Elba. documento se le otorga a Simón Bolívar • 1 de octubre. Comienza considera la primera los poderes absolutos. a sesionar el Congreso Constitución política • Reconquista española de Viena. El objeto de en la que se declara de Venezuela. su convocatoria es a México como un restablecer las fronteras • 2 de agosto. En Perú, pueblo libre. levantamiento de Mateo de Europa tras la Pumacahua, prócer de derrota de Napoleón, la independencia. así como restaurar las.

Francia, Gran Bretaña y España - Publica: • Tres fábulas, entre ellas: El oso, la mona y el cerdo. • Tres folletos, destaca: Elogio de nuestro augusto soberano el señor don Fernando VII. • En marzo, en El Pensador Mexicano, presenta su Proyecto fácil y utilísimo a nuestra sociedad. • En noviembre, el último número de El Pen­sador Mexicano.

José Joaquín Fernández de Lizardi

Año

- España: • 4 de mayo. En Valencia, Fernando VII firma un decreto que declara ilegal la reunión de las Cortes de Cádiz, incluida la Constitución. El absolutismo queda restablecido. • 21 de julio. En Madrid, un decreto de Fernando VII restablece la Inquisición

ideologías políticas previas al inicio de la Revolución Francesa.

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Estados Unidos e Hispanoamérica

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José Joaquín Fernández de Lizardi

Francia, Gran Bretaña y España

- Francia: • 1-20 de marzo. Napoleón Bonaparte abandona su exilio en Elba y establece “el gobierno de los cien días”. • 18 de junio. Napoleón es derrotado por las fuerzas anglo-prusianas en la Batalla de Waterloo. • 22 de junio. Napoleón es desterrado, de forma definitiva, a la Isla de Santa Elena. • 26 de septiembre. Declaración en París que constituye la Santa Alianza.

Año

1815

Nueva España

- Hispanoamérica: • 6 de diciembre. Después de tres meses de sitio, la ciudad de Cartagena de Indias es ocupada por Pablo Morillo. Inicia la Reconquista española de Nueva Granada.

• 5 de noviembre. - Estados Unidos: Morelos es capturado • 8 de enero. Victoria por las tropas del general Andrew realistas en Texmalaca Jackson, en la Batalla de (Guerrero). Nueva Orleans, contra • 22 de diciembre. los ingleses. La batalla Morelos es fusilado en se libra después de Ecatepec. firmarse la paz, pero antes de que se conociera la noticia en los Estados Unidos.

Estados Unidos e Hispanoamérica - Publica: • El Prospecto de El Periquillo Sar­niento. • Los periódicos Alacena de Frioleras y Cajoncitos de la Alacena (hasta 1816), así como Las Som­bras de Heráclito y Demócrito. • El verso El mentado Chicharrón.

José Joaquín Fernández de Lizardi

1817

1816

Año

- Gran Bretaña: • David Ricardo publica: Principios de economía política y tributación.

Francia, Gran Bretaña y España

José Joaquín Fernández de Lizardi

- Publica: • 15 de mayo. Fray • Tres tomos de El PeriquiServando Teresa de llo Sarniento. Empero, se Mier zarpa, junto prohíbe la publicación a Francisco Xavier de los otros dos tomos. Mina, del puerto de Liverpool, Inglaterra. Su destino es la Nueva España • 18 de septiembre. Juan Ruiz de Apodaca toma posesión como virrey.

Nueva España

- Publica: • 22 de abril. Después - Estados Unidos: • El volumen de Fábulas de haber hecho • 4 de marzo. James de El Pensador Mexicano, escala en Estados Monroe toma posesión así como el verso El Unidos, fray Servando como presidente. anuncio de la paz. y Francisco Xavier • 8 de marzo. Creación de Mina llegan al puerto • Circula su Pastorela en la Bolsa de Nueva York. dos actos. de Soto la Marina • 20 de noviembre. (Tamaulipas). Comienza la Primera Guerra Seminola en Florida.

- Hispanoamérica: • 9 de julio. Proclama de la independencia de Argentina por Manuel Belgrano.

- Estados Unidos: • El Congreso autoriza la creación del segundo Banco de los Estados Unidos.

Estados Unidos e Hispanoamérica

1818

1817

Año

Francia, Gran Bretaña y España

- Hispanoamérica: • 12 de febrero. Chile proclama su independencia de España, la encabezan José de San Martín y Bernardo O´Higgins. • 23 de octubre. Bernardo O’Higgins promulga la Constitución Provisoria de Chile.

- Estados Unidos: • Fin de la Guerra Seminola.

Estados Unidos e Hispanoamérica • 27 de octubre. Mina es capturado en el rancho El Venadito. • 11 de noviembre. Fusilamiento de Mina.

Nueva España

- Publica: • El primer volumen de la novela La Quijotita y su prima. • El folleto Anatomía o disección moral de algunas calaveras.

José Joaquín Fernández de Lizardi

Francia, Gran Bretaña y España

- Gran Bretaña: • 16 de agosto. Masacre de Peterloo contra la población civil, en Manchester.

Año

1819

- Hispanoamérica: • 17 de diciembre. En la ciudad de Angostura, Simón Bolívar funda la República de Colombia con la Unión del Virreinato de la Nueva Granada y la Capitanía General de Venezuela.

- Estados Unidos: • 22 de febrero. Por el Tratado Adams-Onís, España cede a Estados Unidos los territorios de Oregón y Florida; a cambio, obtiene Texas.

Estados Unidos e Hispanoamérica

Nueva España - Publica: • La novela Noches tristes y día alegre. • El segundo volumen de La Quijotita y su prima • En dos volúmenes, Ratos entretenidos • El verso El voto de México en la muerte de la reina nuestra señora. • Es probable que en este año haya escrito su drama Todos contra el Payo y el Payo contra todos.

José Joaquín Fernández de Lizardi

Francia, Gran Bretaña y España

Estados Unidos e Hispanoamérica

Nueva España

José Joaquín Fernández de Lizardi

- Publica: • 20 de abril. Llega - Estados Unidos: 1820 - España: • 25 folletos que tienen la noticia de que • 6 de marzo. James • 1 de enero. El joven como eje temático Fernando VII juró la Monroe firma el coronel Rafael del Riego la Constitución, por Constitución de Cádiz. Compromiso de se subleva y obliga al rey ejemplo: La catástrofe • Mayo. Algunos Missouri. En él, este Fernando VII a aceptar de Cádiz; La palinodia de simpatizantes del estado es admitido en la y a jurar la Constitución El Pensado y Respuesta régimen absolutista Unión como esclavista, liberal de 1812. Lo último de El Pensador a la preparan la mientras que se prohíba ocurre el 7 de marzo. Cómica Constitucional. Conspiración de la la esclavitud al Norte del • 9 de marzo. Abolición • El verso El indio y la india Profesa. paralelo 36º 30´. de la Inquisición. del pueblo de Actopan. • 31 de mayo. El virrey Apodaca jura la Constitución. • 9 de junio. Abolición de la Inquisición.

Año

1821

Año

Estados Unidos e Hispanoamérica

- Hispanoamérica: • 28 de julio. Perú proclama su independencia de España. • 30 de agosto. Con la proclamación de la Constitución, el Congreso de Cúcuta establece la República de la Gran Colombia. • 15 de septiembre. Se firma el Acta de

- Estados Unidos: - Francia: • 4 de marzo. James • 5 de mayo. Muere Monroe inicia su Napoleón en el exilio, en segundo periodo la Isla de Santa Elena. presidencial.

Francia, Gran Bretaña y España • Nuevamente es llevado a prisión por lo expuesto en su folleto Chamorro y Dominiquín. Diálogo jocoserio sobre la independencia de la América • Atendiendo a la invitación de Iturbide, se incorpora al Ejército Trigarante como jefe de prensas en Tepotzotlán.

• 10 de febrero. Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero se entrevistan en Acatempan. • 24 de febrero. Iturbide firma el Plan de Iguala. • 5 de julio. Derrocamiento del virrey Apodaca. A fin de mes, Juan O’Donojú llega al puerto de Veracruz. • Agosto. Chiapas, hasta entonces una intendencia de Guatemala, decide suscribirse al Plan de Iguala.

- Publica: • 37 folletos, entre ellos: A las valientes tropas del Ejército Imperial Mexicano de las Tres Garantías; Defensa de

José Joaquín Fernández de Lizardi

Nueva España

1821

Año

Francia, Gran Bretaña y España Independencia de Guatemala; con ello, se logra la Independencia de Centroamérica. • 3 de octubre. En Cúcuta, Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander juran como presidente y vicepresidente, respectivamente, de la República de la Gran Colombia.

Estados Unidos e Hispanoamérica • 24 de agosto. Iturbide y O’Donojú firman el Tratado de Córdoba. • 27 de septiembre. Entrada triunfal del Ejército Trigarante a la ciudad de México. • 28 de septiembre. Firma del Acta de Independencia.

Nueva España la libertad de imprenta; El Pensador Mexicano al excelentísimo señor general del Ejército Imperial Americano don Agustín de Iturbide e Ideas políticas y liberales [1 y 2].

José Joaquín Fernández de Lizardi

Francia, Gran Bretaña y España

Estados Unidos e Hispanoamérica

- Estados Unidos: 1822 - España: • Denmark Vesey, • 7 de febrero. La un negro libre de Santa Alianza decide Charleston, Carolina intervenir en España del Sur, encabeza una para restablecer el revuelta de esclavos absolutismo. severamente sofocada. • 12 de febrero. Las Cortes españolas declaran nulo - Hispanoamérica: el Tratado de Córdoba. • 24 de mayo. Ecuador alcanza su independencia de España tras la victoria de Antonio de Sucre en la Batalla de Pichincha. • 7 de septiembre. Don Pedro, rey de Brasil, proclama la independencia de Portugal. El 1 de diciembre es coronado emperador con el título de Pedro I.

Año • 9 de enero. Gabino Gaínza, Capitán General de Guatemala, anuncia la unión de toda Centroamérica a México. • 28 de marzo. La Gaceta Imperial de México publica la circular española que rechaza el Tratado de Córdoba. • 23 de mayo. Se dispone que Iturbide sea Emperador Constitucional de México. • 21 de julio. Agustín de Iturbide es coronado emperador con el título de Agustín I.

NuevaMexicano España Imperio

- Publica: • 57 folletos en los que trata diversos temas, desde Agustín de Iturbide hasta su excomunión, destacan: Ausente del emperador, México queda mejor; Defensa de los francmasones; Cartas [1 a 4] al Papista; Defensa de los diputados presos y demás presos que no son diputados, en especial el padre Mier; Segunda defensa de los francmasones; Maldita sea la libertad de

• Es excomulgado por su Defensa de los francmasones.

José Joaquín Fernández de Lizardi

1822

Año

Francia, Gran Bretaña y España

Estados Unidos e Hispanoamérica

José Joaquín Fernández de Lizardi

imprenta y • 31 de octubre. Desvergüenzas y Agustín I disuelve el excomuniones no Congreso. En su lugar, destruyen las sólidas instala una Junta razones. Nacional Instituyente • El verso La nueva tonada el 2 de noviembre. de trágala, trágala. • 2 de diciembre. En • El drama El uniperso­nal Veracruz, Antonio del arcabuceado de hoy López de Santa Anna 26 de octubre de 1822 se levanta en armas • El periódico El Amigo de contra Iturbide. la Paz y de la Patria. • 6 de diciembre. Santa Anna proclama el Plan de Veracruz.

Nueva Mexicano España Imperio

Francia, Gran Bretaña y España

Estados Unidos e Hispanoamérica

Imperio Nueva Mexicano España

• 1 de febrero. Se firma - Estados Unidos: 1823 - España: el Plan de Casa Mata. • 2 de diciembre. En • 7 de abril. Con la • 19 de marzo. el mensaje anual del bendición de la Santa Abdicación de presidente al Congreso, Alianza, Luis XVIII envía Agustín I al trono y su se promulga la famosa a España al ejército ulterior exilio. Doctrina Monroe francés, de los “cien mil • 1 de julio. En (que empezó a ser hijos de San Luis”, para Guatemala, llamada de esta forma devolver a Fernando VII el Congreso sólo desde 1852). La su autoridad legítima. Se Constituyente de las Doctrina advierte a restaura la monarquía Provincias Unidas del las naciones europeas absolutista. Centro de América que se abstengan de • 1 de octubre. Fernando aprueba un decreto intervenir en los asuntos VII declara nulos, y de que establece la hemisféricos. ningún valor, todos los independencia; actos realizados por el con ello, se separa régimen constitucional. - Hispanoamérica: definitivamente de • Francia reconoce la México. independencia de Haití proclamada en 1804.

Año

- Publica: • 48 folletos, entre ellos: Fuera reyes absolutos, que el pueblo quiere Congreso; La defensa de los gachupines de Juanita la Curtidora y La resurrección de Hidalgo y Morelos. • El drama El unipersonal de Agustín de Iturbide, emperador que fue de México.

• 24 de octubre. Después de presentar un recurso de fuerza y pedir perdón a la Audiencia, consigue que se levante su excomu­nión.

José Joaquín Fernández de Lizardi

Francia, Gran Bretaña y España

- Gran Bretaña: • Legalización de las trade-unions inglesas.

1824 - Francia: • 16 de septiembre. Muere Luis XVIII, le sucede su hermano Carlos X.

1823

Año

- Hispanoamérica: • 28 de julio. Proclama de la independencia de Perú por José de San Martín y Simón Bolívar. • 7 de diciembre. Simón Bolívar convoca al Congreso de Panamá. • 9 de diciembre. Derrota definitiva de las tropas realistas en Ayacucho.

- Estados Unidos: • Es electo presidente John Quincy Adams.

Estados Unidos e Hispanoamérica • El verso El sueño de la anarquía. • Los periódicos El Payaso de los Periódicos y El Hermano del Perico que cantaba la Victoria

José Joaquín Fernández de Lizardi

• Se enrola en la • 23 de enero. Estalla conspiración el primer movimiento antiespañola en importante contra los Cuernavaca que tiene empleados españoles por jefe al brigadier dirigido por el general Francisco Hernández. José María Lobato. • 31 de enero. Es - Publica: aprobada la primer • 23 folletos, los temas Acta Constitutiva de principales refieren la Nación Mexicana los problemas de la que adopta la recién creada República forma de república Mexicana, por ejemplo: representativa, Disputa de los congresos; popular y federal. impugnación que los

NuevaMexicano España Imperio

1824

Año

Francia, Gran Bretaña y España

Estados Unidos e Hispanoamérica

José Joaquín Fernández de Lizardi

gatos Barbilucio y • 11 de mayo. Iturbide Machucho hicieron zarpa, desde del papel titulado Si Southampton, los liberales no dejan Inglaterra, rumbo a la lenidad, perece la México. República o cuatro • 17 de Julio. Iturbide palabras a El Pensador desembarca en el Mexicano; Pésame pueblo de Soto la de El Pensador por la Marina, en la costa muer­te de Iturbide de Nuevo Santander a sus apasionados y (Tamaulipas). Pronóstico po­lítico de El • 19 de julio. Iturbide es Pensador Mexicano. fusilado. • Una breve obra lla­mada • 5 de octubre. Se La tragedia de los gatos. publica la Constitución Federal de los Estados • El periódi­co Conversaciones del Payo Unidos Mexicanos. y el Sacristán (en dos • 10 de octubre. tomos, hasta 1825). Guadalupe Victoria • Participa, además, en inaugura el primer algunos comunicados periodo presidencial en El Sol y El Águila de la República Mexicana. Mexicana.

Nueva España Estados Unidos Mexicanos (México)

Francia, Gran Bretaña y España

Estados Unidos e Hispanoamérica

- Hispanoamérica: 1825 - Francia: • 28 de mayo. Coronación • 6 de agosto. Se proclama el Acta de de Carlos X en la Independencia de Catedral de Reims. Bolivia. Ésta será la última coronación de un rey en • 25 de agosto. Uruguay declara su Francia. independencia de Brasil. • 29 de agosto. - Gran Bretaña: Portugal reconoce la • Primera línea ferroviaria independencia de Brasil. del mundo entre • 10 de diciembre. El Stockton- Darlington. Imperio del Brasil declara la guerra a las Provincias Unidas del Río de la Plata (Argentina). El conflicto llegará a su fin hasta 1828.

Año

Estados Unidos Nueva España Mexicanos (México) • Es nombrado editor de la Gaceta de México. • Después de casi dos años de trámites, consigue la asignación, como premio a sus servicios a la Independencia, de sesenta y cinco pesos de sueldo mensual de Capitán Segundo de Infantería. - Publica: • 23 folletos, algunos títulos son: Defensa de un gachupín que quieren arcabucear y 2 Diálogos de los muertos. Hidalgo e Iturbide. • La segunda parte de la obra teatral de comedia El negro sensible.

José Joaquín Fernández de Lizardi

1826

1825

Año

Francia, Gran Bretaña y España

- Hispanoamérica: • 22 de junio. Se instala el Congreso de Panamá.

Estados Unidos e Hispanoamérica

• 10 de Julio. Firma del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación entre México y los Estados Unidos de América. • 26 de diciembre. Tratado de Amistad, Comercio y Navegación entre la Gran Bretaña y México. • Guadalupe Victoria declara abolida la esclavitud.

Nueva España Estados Unidos Mexicanos (México)

- Publica: • 28 folletos, algunos de ellos: A los sordos se les grita y al gobierno se le incita, o sea nuevas medidas de precaución contra la maldita Liga; Anita la Tamalera ha dado en ser diputada y De aquí a noviembre no hay patria yendo como va la danza. • El periódico Correo Semanario de México (hasta 1827).

• El verso El grito de libertad en el pueblo de Dolores. En breve artículo del Águila Mexicana, propone la amortización de la moneda.

José Joaquín Fernández de Lizardi

José Joaquín Fernández de Lizardi

• Enero. Se descubre la - Publica: supuesta conspiración • 12 folletos, entre ellos: Testamento y despedida encabezada por el de El Pensador Mexicano padre Joaquín Arenas. [en dos partes]; Diálogo Pretendía restablecer por El Pensador entre el dominio español en el Fiscal y el Defensor México. del padre Arenas; y su • Mayo. Decreto que último escrito: Hasta en prohíbe a todos los el teatro hacen da­ño los españoles ocupar gachupines con mando. puesto alguno en la administración pública • El drama El grito de liber­tad en el pueblo de o militar, hasta que Dolores y La tragedia del España reconozca la padre Arenas. independencia.

Nueva España Estados Unidos Mexicanos (México)

- Estados Unidos: 1827 - España: • Se traza el ferrocarril • Marzo-septiembre. En Baltimore-Ohio. la región de Cataluña se lleva a cabo “La revuelta de los agraviados”. Es considerado un movimiento precursor del Carlismo.

Estados Unidos e Hispanoamérica • Levantamiento de • Escribe una carta a indios yaquis y mayos Guadalupe Victoria en el norte de México. dedicándole su novela El Periquillo Sarniento.

Francia, Gran Bretaña y España

1826

Año

1832

1827

Año

Francia, Gran Bretaña y España

Estados Unidos e Hispanoamérica • 20 de diciembre. Se aprueba la primera ley de expulsión de españoles.

Estados Unidos Nueva España Mexicanos (México)

• Se publica la novela Vida y hechos del famoso caballero Don Catrín de la Fachenda. Obra póstuma.

• Escribe una carta al coronel Manuel Reyes Veramendi. • 21 de junio. Muere en la Ciudad de México. Al día siguiente, es sepultado en el cementerio de San Lázaro

José Joaquín Fernández de Lizardi

Periquillo Sarniento: ¿sarna pícara o sarna culposa? Editado por: Instituto de Investigaciones Fi­lo­lógicas Jefe del Departamento de Publi­caciones: Sergio Reyes Coria Fecha de impresión: 22 de julio de 2013 Impreso en los talleres: Desarrollo Gráfico Editorial, S. A. de C. V., ubicados en Municipio Libre 175-A, col. Portales, del. Benito Juárez, C. P. 03300, México, D. F. Lectura en originales: Iván Cerón Olvera Cuidado de la edición: Américo Luna Rosales Diseño de portada: Omar Reyes Solorzano Diseño de interiores y composición tipográfica: María Guadalupe Martínez Gil Tipos: Candara 10.5:15, 9.5:14, 8.5:12 Número de ejemplares: 500 Papel: Cultural 90 g Proceso: impresión Offset

María Rosa Palazón Mayoral PERIQUILLO SARNIENTO ¿SARNA PÍCARA O SARNA CULPOSA?

4 NOTAS AL MARGEN 243134

40c

Periquillo

Sarniento

¿sarna pícara o sarna culposa?

786070 9

ISBN 978-607-02-4313-4

José Joaquín Fernández de Lizardi, periodista y autor de folletos por vocación, es conocido, no obstante, por una novela: El Periquillo Sarniento, sus cinco tomos retratan la corrupción de la que nadie se salvaba a principios del siglo xix: vísperas de la Independencia, ésta misma, el Imperio de Agustín de Iturbide y los inicios de la República encabezada por Guadalupe Victoria. La acción transcurre en la Ciudad de México y sus alrededores, centro de pillos y pillajes. El protagonista de esta novela es Don Pedro Sarmiento, alias Periquillo Sarniento, una vez redimido, y habitando una hacienda como su propietario. Aconseja a sus hijos, ejemplificándoles tal corrupción “democrática”: de todas las clases, las castas, la burocracia, y los comerciantes, mediante sus propias y divertidas aventuras.

María Rosa Palazón Mayoral

Notas al margen Periquillo.indd 1

Universidad Nacional Autónoma de México

Universidad Nacional Autónoma de México

27/05/13 05:24 p.m.

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