Mercaderes y banqueros en la Edad Media

Mercaderes y banqueros en la Edad Media Capítulo primero-La actividad profesional La revolución comercial Entre los siglos XI y XIII, se manifiesta la

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Mercaderes y banqueros en la Edad Media Capítulo primero-La actividad profesional La revolución comercial Entre los siglos XI y XIII, se manifiesta la revolución comercial, debido a los procesos que se dieron en la época medieval. Esta revolución comercial se produjo debido a múltiples variables. Debieron cesar las invasiones y con ello nacen los intercambios pacíficos de diferentes zonas. La paz aparente, crea una seguridad que permite reforzar la economía, al ser menos peligrosas tanto las rutas de mar como de tierra, se reanuda el comercio; con él se mejoran las condiciones de alimentación y como siempre se demostró que al tener exceso de alimento, se produce el aumento demográfico. Con esta situación las ciudades renacen económicamente, es el tiempo de los barrios comerciales, del mercado y del tránsito de mercaderías. Debemos destacar que no en todas las regiones de la cristiandad la revolución comercial se manifiesta en el mismo grado, y se pueden observar dos zonas comerciales fuertes que darán en cada caso particular, según su marco geográfico, sus métodos y su personalidad al mercader italiano y el hanseático. El mercader errante Los caminos El mercader se encuentra en apuros por los obstáculos que se le presentan en Estos obstáculos son generalmente naturales, acompañados de los caminos poco transporte del siglo X se veían poco reflejadas. A estos inconvenientes hay que sumarles la piratería en los caminos, los peajes de parcelamiento territorial y político). Estos gastos eran sumamente tenidos en cuenta por el mercader debido a que, 150% más de su valor original.

los caminos marítimos. refaccionados, donde las invenciones en el impuestos por los señores feudales, etc. (tiempo al costo inicial, tendría que sumarle un 100 a

Las vías fluviales Por los motivos anteriormente mencionados, el mercader prefería las rutas navegables marítimas. Hay tres redes de transporte a destacarse: 1- La de Italia del norte que con el Pó y sus afluentes constituía la mayor vía de navegación interior del mundo Mediterráneo. 2- Ródano, prolongado por el Mosela y Mosa, que fue hasta el siglo XIV el gran eje del comercio norte-sur. 3- El sistema que forman los ríos flamencos, completado a partir del siglo XII por toda una red artificial. Las vías marítimas El transporte marítimo es el medio preferido por los mercaderes, donde tenían dos puntos en contra, el naufragio y la piratería. Sólo las grandes ciudades marítimas crecieron por organizar viajes comerciales custodiados por naves de guerra. Otros inconvenientes que tenían estas vías, era la poca velocidad de las naves y el poco tonelaje de carga que con el tiempo se fue tecnificando a partir del siglo XIII; numerosas invenciones como el timón, la vela latina y la brújula aceleraron los tiempos del recorrido comercial, sumado a esto el menor costo por este medio de transporte. Las ferias En el siglo XIII, el objetivo principal del errante mercader son las ferias de Champaña. Estas ferias tenían lugar en distintas ciudades de la actual Francia, las cuales duraban en cada lugar dos meses, demostrando un mercado permanente en Occidente. El éxito de las ferias está íntimamente relacionado con el poder de los condes, éstos garantizaban la seguridad y el cumplimiento de las transacciones comerciales y financieras. Las ferias pierden auge en el siglo XIV debido a muchas causas, una de ellas la inseguridad de Francia (la guerra de los cien años), el desarrollo de la industria textil italiana y la flamenca, pero el principal motivo de esta decadencia fue el traspaso comercial de un mercader errante a sedentario. El mercader sedentario La organización y los métodos utilizados por el mercader sedentario nacieron en el momento mismo de la revolución comercial, pero en el siglo XIV y XV es cuando se adapta esta generalidad en el momento del apogeo comercial. Los créditos serán la operación comercial más complicada de la cristiandad medieval. Contratos y asociaciones Las asociaciones fueron de diferentes formas, donde según el caso, el prestamista o el comerciante se veían perjudicados según la asociación. En lo que respecta a los contratos, su diversidad era mayor en el comercio terrestre, de ellos de desprenden dos tipos: La compagnía y las societas térrea; las primeras son de tipo veneciano, mientas que las segundas son especialmente empleados por el mercader del interior. Mercaderes y poderes políticos En el siglo XIV se realizaron los contratos de seguros e incluso surgen las compañías dedicadas exclusivamente a esta actividad. La letra de cambio MANSUR, RENATO: Mercaderes y Banqueros, en Hablemos de Historia, 04/06/2006 [http://www.hdhistoria.uni.cc/archivos/mercaderes-y-banqueros]

El auge de la letra de cambio se debe a la evolución monetaria. Occidente vuelve a acuñar oro en el siglo XIII, y el otro patrón de valor es la plata. Las ciudades emiten su propia moneda, y surge el problema de cambio. Los problemas cambiarios están relacionados por estos factores: • La existencia de dos patrones. • La escasez de metal precioso. • La especulación de las autoridades políticas. • La variación estacional del mercado. La letra de cambio es en la actualidad a lo que llamamos pagaré, donde una persona es arrendatario y la otra dador. La letra de cambio satisfacía cuatro necesidades del mercader: • • • •

El medio de cambio de una operación comercial. Transferencia de fondos en monedas diferentes. Fuente de crédito. Ganancia financiera por la diferencia.

La contabilidad Las nuevas operaciones demandan la necesidad de la contabilidad. Las transacciones se asientan en libros y se registran todas las cuentas, como podría esperarse, los mercaderes italianos fueron los más evolucionados en aplicar la contabilidad. La contabilidad fue herramienta básica para el control de sus negocios del mercader sedentario. Las categorías de mercaderes Surge de • • •

una especialización entre los hombres de negocios que se pueden discutir en tres categorías. Los lombardos: se dedican al préstamo con prenda en garantía. Los cambistas de metales: se dedican al cambio de moneda y a la compra-venta de metales preciosos. Los cambistas banqueros: desempeñan múltiples actividades financieras y comerciales.

¿Fue el mercader medieval un capitalista? El sistema económico de la Edad Media es el feudalismo y dentro de ese marco actúan los mercaderes destruyendo la estructura feudal, preparando la llegada del capitalismo. Provocan la expropiación de la tierra a los campesinos y convierten al artesano en obrero asalariado. La economía medieval continúa siendo rural, pero la ampliación de los horizontes geográficos y económicos, sus métodos comerciales y financieros, su mentalidad y su estilo de vida nos dicen que el mercader banquero medieval es un capitalista. Capítulo Segundo-Función social y política El crecimiento de los mercaderes medievales va tomando de la mano con el resurgimiento económico de las ciudades. A partir del siglo XIII, los mercaderes establecen una dominación social y política en las ciudades, debido a las complejas relaciones con los diferentes estratos sociales. Mercaderes y nobleza La relación de los mercaderes con la nobleza pasó por un proceso de diferentes climas sociales. Con el transcurso del tiempo se asociaron por la necesidad mutua y llegaron, en algunos casos, a convertirse en una aristocracia. Queda demostrado, con el tiempo, que la nobleza y el mercader no tenían mentalidades antagónicas y el enfrentamiento surgió de una nobleza antigua contra una unión nueva nobleza y burguesía. La fusión de esta última era necesaria ya que acechaban las clases populares urbanas. Mercaderes y las clases populares La clase burguesa surge de un sector de la clase artesana que amasó una fortuna importante y se diferenció socialmente y empezó a ejercer una presión económica sobre las clases urbanas populares. La reacción fue inmediata: se produjeron huelgas y motines, pero debido al poder político del que ya gozaba el burgués, no le costó mantener bajo su yugo a los disconformes. Mercaderes y campesinos La relación de los mercaderes con los campesinos no fue tan fluida socialmente como con los demás estratos sociales, pero serían ellos los que enriquecerían a los mercaderes en forma abismal. Los mercaderes compraban sus tierras y los campesinos se trasladaban a los burgos, donde se establecían y eran empleados en los comercios donde el mismo propietario de sus ex propiedades era el dueño de la industria. Con el comienzo de la crisis en el siglo XIV, el maltrato al campesino se agudizó llevándolo por lo general al estado servil. Aspectos del dominio político de la burguesía mercantil El aspecto del dominio político mercantil se debió a un régimen de clase establecido por la política de los hombres de negocios. Este régimen opresivo tiene por consecuencia levantamientos populares. Los mercaderes democráticos Es de total asombro el papel de algunos burgueses (democráticos) que se valían de la clase baja para aumentar su imagen y contrarrestar el negocio de sus rivales comerciales. MANSUR, RENATO: Mercaderes y Banqueros, en Hablemos de Historia, 04/06/2006 [http://www.hdhistoria.uni.cc/archivos/mercaderes-y-banqueros]

Estas rivalidades no se daban únicamente entre los burgueses patricios y los democráticos, sino que cuando los intereses se acentuaban la situación de rivalidad existía también en el patriciado. Las luchas entre los clanes burgueses Las luchas de las familias patricias se manifestaban por lo general en Italia. El triunfo político significa la destrucción de competidores comerciales. En los dos últimos siglos de la Edad Media, la burguesía apoya el crecimiento de la monarquía centralizada. Mercaderes y señoríos En Italia los mercaderes favorecen y consolidan a los señoríos. No disimulaban el apoyo de cualquier forma, a aquellos regímenes que garantizan su seguridad económica. Mercaderes y príncipes Desde el comienzo de la revolución comercial existió una relación entre los mercaderes y el poder. En este caso se debió a préstamos que le otorgaban los mercaderes banqueros a príncipes y soberanos, lo cual demuestra su poder económico en relación con los privilegios políticos. Las grandes familias burguesas Existió una recuperación desde los mercaderes del siglo X, que lograron su fortuna con arduos esfuerzos y corriendo grandes riesgos y peligros hasta las generaciones futuras que con grandes capitales en sus manos, algunos se mantuvieron, otros carentes de la habilidad comercial de sus ancestros dilapidaron sus riquezas. Capítulo tercero-La actividad religiosa y moral La iglesia contra los mercaderes La iglesia opacó en la Edad Media al mercader en lo que respecta a su vida profesional y en el medio social. La condenación La iglesia condena a los mercaderes y a otros oficios y profesiones. En el caso del mercader la iglesia por medio de una idea de Gregorio el Grande sostiene “que es difícil no pecar cuando se hace profesión de comprar y vender”, Santo Tomás de Aquino, suponía que “el comercio considerado en sí mismo, tiene cierto carácter vergonzoso”. Los motivos ¿Cuáles son los motivos de esta consideración? El deseo de lucrar no era sostenido en la doctrina, éste deseo dará como resultado la avaricia, uno de los principios capitalistas. La usura A los mercaderes-banqueros, obstaculizados por la iglesia, no les quedó otra alternativa que encontrar el lado oscuro de las operaciones. Estas operaciones eran ilícitas debido a que la iglesia sostenía usura a todas las operaciones donde existía el pago de un interés (crédito, base del comercio y de la banca). Lo que queda claro es que para la iglesia prácticamente todo mercader-banquero era un usurero.

Mercaderes cristianos e infieles Como detallamos anteriormente, los mercaderes medievales fueron reprobados por la iglesia. El problema se acrecentó en la época de las cruzadas, cuando la iglesia se lanzó decisivamente a la lucha del Islam. Los mercaderes cristianos tenían una buena relación con los mercaderes árabes y se solidarizaron mutuamente ante esta situación. La iglesia y los mercaderes La distancia entre la realidad y la doctrina de la iglesia, también en la práctica de las relaciones entre la iglesia y los mercaderes, distaban mucho de la teoría que acabamos de enlazar. Protección a los mercaderes Desde muy temprano la iglesia apaño a los mercaderes, del mismo modo que desde inicios de la revolución comercial, se los consideraba a los mercaderes-banqueros como buenos banqueros y no se habla para nada de apartarlos de la iglesia. Importancia de la iglesia frente a los mercaderes La importancia de la iglesia frente a los mercaderes se refleja en la Edad Media por los documentos. La iglesia mira para otro lado y los mercaderes-banqueros pueden realizar sus operaciones disfrazando la usura, ejemplo, el “comercio seco” que operaba con la ayuda de una letra de cambio falsa y mencionaba movimientos económicos que no fueron realizados. La justificación del mercader

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De tal forma justificado, e incluso exaltado, el mercader medieval puede dar libre curso a su genio. Sus objetivos son: la riqueza, los negocios y la gloria. El dinero Para los mercaderes, el amor al dinero sigue siendo su pasión fundamental. Según los mercaderes el dinero es el socorro, la defensa, el honor y el provecho. La influencia social La influencia social marca el perfil del mercader para llegar a los buenos negocios. Aconsejan si no tienes dinero que no debe estar en estado pasivo sino en continuo movimiento y para llegar a tener alguna fortuna no es necesario contar con un gran capital, sino que hay que dejarse caer y emplear con potencia la habilidad más fuerte que uno posea. La dignidad La dignidad que se le otorga al mercader es el gran manejo de dinero, donde son consultados frecuentemente por artistas, príncipes, prelados, etc. quienes confían en la superioridad del mercader, que demuestra la altura de su dignidad. La ética del mercader La ética del mercader se va tornando a los asuntos netamente terrenales y laicos. El mercader sabe muy bien con quien relacionarse, con los pobres no va a tener ningún provecho. La ética está reforzada en sagradas escrituras que los mercaderes deben tener en cuenta. La religión del mercader El mercader es un hombre, y un hombre de la Edad Media, predomina en una sociedad impregnada de espíritu y prácticas religiosas. La religión y los negocios En todos los libros, los mercaderes siempre estaban con una invocación divina, lo que demuestra una preocupación religiosa. Además de ciertos artículos donde se respetaban los días religiosos. La beneficencia El mercader realiza obras de beneficencia con los pobres, poseían una caja de limosnas de las cuales sacaban, en días de fiesta, dinero de sus bolsillos para repartir a los pobres. La penitencia final Los ricos mercaderes manifiestan sus sentimientos religiosos principalmente a la hora de su muerte. Son innumerables los documentos que se dejaron como herencias a la iglesia. La importancia de estos sentimientos y los motivos de estos actos piadosos y caritativos se pueden analizar desde diferentes puntos de vista. Los móviles religiosos Tenemos que tener muy en cuenta que es algo sospechoso que una religión relacione con tanta facilidad a Dios con los negocios. Algunas fuentes históricas nos muestran que el temor del mercader al infierno, en la Edad Media, pudo haber sido el desencadenante de muchos actos caritativos y piadosos hacia la iglesia. Mercaderes y herejías No es fácil precisar que parte tomaron los mercaderes más poderosos de la época en el auge del período designado por tono herético. Se sabe que tuvo una cierta preponderancia la zona francesa de Languedoc, con la herejía cátara o albigense, lo que no se sabe fue la real importancia que tuvieron estos sectores, de alguna manera, fragmentados, en la fase comercial de los siglos XII y XIII. De todas maneras, el enfrentamiento con el poder eclesiástico, va tomando un matiz diferente con tendencia a darle un tono de contienda armada. Evolución de la actitud de la iglesia respecto de los mercaderes Hay que poner en duda los cánones por los cuales analizamos la situación en que se encontraba la iglesia con los mercaderes, si bien no los anteriores, hay que rever los parámetros que van a definir los actos que va a tomar la iglesia para con los mercaderes en el advenimiento del feudalismo. El período feudal Durante los siglos XII y XIII los intereses de la iglesia seguían siendo beneficiados por las clases existentes, todas y cada una de ellas mantienen un cierto desprecio por la actividad mercantil; unos por considerarla indigna de su clase y su posición social, otros por pensar en ella como herejía y unos últimos porque nunca van a entrar en el proceso de distribución de los bienes producidos por ellos mismos y además del temor irreproducible hacia el no cumplimiento de los preceptos cristianos. La iglesia y la revolución comercial Se hace cada vez más eminente la necesidad por parte de los protagonistas eclesiásticos hacia los mercaderes, fue claro el papel cada vez más preeminente de los mercaderes de la curia en los asuntos mercantiles. Si bien el trato de la iglesia para con los MANSUR, RENATO: Mercaderes y Banqueros, en Hablemos de Historia, 04/06/2006 [http://www.hdhistoria.uni.cc/archivos/mercaderes-y-banqueros]

mercaderes va a ser diferente, se ve la preparación del camino de la alianza entre los altos rangos de la iglesia y los mercaderes; esta unión de tipo comercial va a traer aparejada una red de instituciones y atrofiadas que dan a lograr una mixtura de la rama religiosa y los altos intereses comerciales de la época. El gran interés en común va a ser: la usura. La iglesia y los comienzos del capitalismo Los más destacados mercaderes de la época eran los que ingresaban en las órdenes religiosas, no provoca sorpresa que fueran genoveses, las actividades mercantiles se desarrollaban con una total complicidad y venía de la iglesia; los métodos eclesiásticos eran tendientes a la usura y ciertos motivos de engaño mercantil. La escolástica y estudios teológicos provocaban el marco que iba a legalizar los usos y abusos en materia económica de la que iban a ser víctimas quienes comerciaban con los grandes prestamistas y los monasterios bancarios que formaban parte de la nueva red (mercantil) de la que se va a servir la iglesia para mantener sus intereses durante la revolución agrícola y luego del período feudal. El ideal de la iglesia: las clases medias De alguna manera, los cambios tecnológicos no favorecen el anticuado y rígido espíritu de la iglesia, si bien se toma como ideal al artesano, el humilde productor no se termina de acomodar a los cambios capitalistas del período, se pretendía defender un pequeño comercio cuyos réditos son limitados. El no querer involucrarse con los grandes mercaderes obedece a que las acciones que pueda llegar a realizar el clero puedan llegar a perjudicar u dejar maltrecho en materia financiara a alguna de las partes del gran cuerpo que comenzaba a desarrollar la iglesia; además de su, todavía, mentalidad medieval. Los mercaderes y el renacimiento Los motivos por los cuales los mercaderes se seguías sirviendo del poder religioso van a ir en descenso al alcanzarse las teorías individualistas que signaron el comienzo del renacimiento. La teología y la escolástica, si bien eran enseñadas en ámbitos académicos no constituían una forma de vida aplicable al comercio del siglo XVI, que ya no va a necesitar (en la mayoría de los casos) una justificación supraterrenal para los actos de usura y préstamo con altísimo interés, que por otra parte eran de las formas comerciales más usadas por la iglesia cristiana durante el período feudal y luego de la revolución agrícola. Las ideas humanistas también tienen un impacto en los componentes del cuerpo eclesiástico, para aferrarse a la espiritualidad medieval, en unos casos, o para abrazar las teorías renacentistas con cada vez más frecuencia; lo que significa la perdida del poder seudo-secular que legalizaba las acciones eclesiásticas hasta el momento del advenimiento del siglo XVI, la época de Nicolás Maquiavelo.

Capítulo cuarto-La función cultural Los mercaderes y la laicización de la cultura La idea que la iglesia reunía en su persona todos los conocimientos de la Edad Media sólo es cierto para el período que llamamos Alta Edad Media, porque siempre existieron sectores tendientes a una avidez cultural; los mercaderes se van a encargar de absorber gran parte del bloque cultural de la época y además de distribuirlos, desposeyendo al clero de unas de las últimas líneas de defensa en orden de monopolizar todos los aspectos de la vida en la Edad Media. Las escuelas laicas A lo dicho anteriormente se va a añadir la cuestión que la emergente clase burguesa va a poder acceder, mediante la legalidad de su creciente status social, a la educación básica asestando uno de los más duros golpes a la iglesia; esta legalidad se basó en el dominio de cuatro aspectos que además de culturizar a los representantes de la burguesía, provocaría un avance en el pensamiento práctico y utilitario de los mercaderes: la escritura, el cálculo, la geografía y las lenguas vivas y vulgares. La escritura era clara y limpia, el hecho de que se cambiara la letra que se usaba en los monasterios correspondía a la agilización de los asientos en los libros de los comerciantes. El cálculo fue desarrollado en comunión con la escritura, tendiente a metodizar y aunar los criterios de valores comerciales de la época (se ve claramente con la introducción de ciertas operaciones matemáticas y los números arábigos). La geografía tiene más que ver con la publicación de literatura fantástica y libros de aventura, además de que reunía los dos campos anteriores con los libros y la cartografía. Las lenguas vulgares aseguraban los intercambios comerciales y aúnan los criterios en el francés, latín, lenguas musulmanes y nativas. La historia La parte historiográfica se ve reflejada en lo económico, los autores medievales se preocupan por censos y datos estadísticos, los cuales venían siendo muy pobres. Los historiadores no sólo se contentan con ser parte del período, sino que a través de datos claros nos brindan los datos que hoy signan al período. Los manuales de comercio Estos libros albergaban todos los conocimientos económicos, químicos y útiles para viajeros y comerciantes, los métodos fiscales y notariales por los que se reclutaría a los miembros del cuerpo universitario, siendo los más buscados los de Derecho, como empleados notariales, y de Medicina para las droguerías. La racionalización La vida de los comerciantes y de las personas ya no se podía regir por consideraciones religiosas, las ideas humanistas ya habían alzado una incipiente clase burguesa, que va a marcar los períodos de comienzos y finales de temporada e iba a regular las horas del día de acuerdo a criterios que le eran propios para la realización de sus actividades; así se sientan las bases del predominio sociocultural de las actividades mercantiles, recordemos que ya poseía el poder político. Una cultura de clase

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Los paralelismos en cuanto al dominio particular de los sectores dominantes son visibles, el mercantilismo había venido para quedarse, por lo tanto, las clases burguesas no podían sino reunir los aspectos educacionales en su seno, guardando sus secretos de los comunes, pretendiendo y logrando que los saberes culturales se trasmitan de padre a hijo y sean conservados por la clase dominante. El mecenazgo mercantil Constituían éste, a resabio de los producidos anteriormente, un modelo ya en vigencia tendiente a mantener contentas, tontas y divertidas a las masas para que no quisieran excavar en materia de política. Se puede decir que además de beneficiar a la burguesía dominante, beneficiaba a los más grandes genios artísticos que produjo la historia universal. Si bien los Médicis habían logrado secularizar y subordinar a la iglesia bajo su poder, ésta iba a jugar un papel importante en cuanto a la beneficencia artesanal; los modos de distracción del populacho, que habían sido originadas en Roma, resultaban tan caros que eran pagados con rentas populares, poco faltaba para que se vuelva y se instale el “populismo” que tanto provecho había provocado en Roma y que buenos fines políticos posee ahora. Las obras de arte jugaron un papel harto importante en la cultura impuesta por los mercaderes a partir del renacimiento. La cultura burguesa Es comparable a cualquier cultura de nuevo rico que pretende emular las costumbres más refinadas en boga, para así, de alguna manera, encajar en un medio que otrora le fuera hostil. La cultura burguesa todavía está signada por los gustos refinados de la iglesia y las maneras aristocráticas que, la burguesía, comparable a cualquier pequeña nobleza, va a tener como circuitos sociales y, de no ser por su ostentable status económico, no le sería permitido frecuentar. La asimilación fue el signo que marcó la pertenencia de los burgueses a éstos nuevos circuitos sociales, los ejemplos más claros se encuentran en las obras signadas por el gusto religioso y las crecientes épicas guerreras que comenzaban a sobresalir. La arquitectura Esta faceta de la vida cultural muestra como las casas más ricas van perdiendo su temor lógico por revueltas o contiendas armadas en su detrimento a la vez que se populariza el uso de la torre; sin embargo vemos que lo más importante en ornamentos y demás se ve en las ciudades que son ya no comerciales sino netamente mercantiles, tal es el caso del Gran Canal Veneciano. En suma, los edificios y estructuras de la Alta Edad Media van perdiendo su severidad militar, aún cuando ciertas fisonomías de fortaleza quedan en pie. La pintura Aunque esta actividad se llevó a cabo, casi completamente, gracias al mecenazgo los pintores buscaban deslizar sutilmente en sus retratos una forma de protesta para con el servicio casi servil que presentaban a sus benefactores. La manera de perdurar para esta clase burguesa residía en la ostentación de sus riquezas, ya que no se poseían objetos característicos que delataran su posición social (tal y como los clérigos). Las artes menores. El lujo El lujo de los suntuosos vestidos y platos exóticos de los burgueses se remonta a la Baja Edad Media, en realidad el exceso del lujo estaba penado por las autoridades eclesiásticas teniendo como bastión una Catalina de Siena; en Venecia hay un comité encargado de dictaminar a los objetos y vestidos que representan una inmoralidad en materia espiritual, el problema es que los burgueses también imponen la moda, en decir Dante, en un lugar privilegiado de toma de decisiones en el imaginario colectivo. Esto representa una ganancia sin precedentes para los mercaderes quienes, beneficiados por el destrabe de las rutas asiáticas, traen costosos productos que van a alimentar la avidez burguesa de estar en los primeros planos sociales. El mercader y la sociología del arte Se analiza el papel que tuvo el mercader con respecto a lo que inconscientemente representaban y significaban los artistas en sus obras de arte, encargadas o no, desprovistas de un teísmo desproporcionado y más bien tendientes a dejar indeleble la impronta burguesía para las generaciones venideras. La literatura Es difícil caracterizar la literatura del período que correspondería a una enumeración de virtudes y reflexiones de la nueva clase social emergente, sin embargo esto no ocurre y lo curioso es que no se encuentra literatura pujante, o sátiras sin concesiones; todas las características burguesas. El humanismo Las ideas del Quattrocento se consideran características importantes del humanismo, son ideas referentes a lo cultural, a lo social y tendientes a la espiritualidad de cada individuo, quien debe dejar continuar el funcionamiento de la maquinaria mercantil. Porque al fin las ideas benefactoras del mecenazgo y la del refinado gusto burgués por lo artístico y exótico entraña fines comerciales y económicos, unos porque fomenta la actividad mercantilista en busca de activar o reactivar economías de mercado que poco a poco van tomando más fuerza. Mercaderes y civilización urbana Podemos decir que patria es igual a ciudad, el pequeño estado por el cual los mercaderes tomaban las armas, la concepción de un estado más abarcativo (no todavía nacional) no atraía a los comerciantes quienes, ya convertidos en civiles, pudieron lograr su cometido participando indirectamente del conflicto bélico que podrá llegar a aquejar a su ciudad; de todas maneras, se debe tomar a la ciudad como se toma a una familia, como una pequeña unidad de producción y consumo inserta en el marco más extenso del futuro estado nacional. Si bien es cierto que cada ciudad tenía su refractaria en la mayoría de los puertos comerciales, no es menos cierto que el hecho de pertenencia se daba solamente en su unidad de producción y consumo y tendía a su mejoramiento, modernización y supremacía por sobre los otros puntos comerciales. Digamos, por último que esto no podría haberse llevado a cabo MANSUR, RENATO: Mercaderes y Banqueros, en Hablemos de Historia, 04/06/2006 [http://www.hdhistoria.uni.cc/archivos/mercaderes-y-banqueros]

en los burgos y que, al contar con límites fijados sólo en el propio interés, signarían las características de cada uno de los períodos en que fue partícipe y protagonista el mercader en la Edad Media. Bibliografía: LE GOFF, Jacques. “Mercaderes y banqueros en la Edad Media”. Editorial EUDEBA, Buenos Aires. 1980.

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