Para siempre en nuestra memoria. Centro de Día de Mayores de Luque

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Para siempre en nuestra memoria Centro de Día de Mayores de Luque

Para siempre en nuestra memoria Centro de Día de Mayores de Luque

Taller recuperación de tradiciones ROMANCES - POESÍAS - SAINETES - COPLAS CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE SANTOS Y SANTAS DE LUQUE CANCIONES PARA EL RECUERDO...

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Centro de Día de Mayores de Luque

SILVIA CAÑERO HORCAS DELEGADA PARA LA IGUALDAD Y BIENESTAR SOCIAL

A

l leer esta recopilación de romances, poesías y cantos se comprueba una vez más la riqueza de la tradición oral de los pueblos de nuestra provincia. Cantares transmitidos de padres a hijos, romances mil veces recitados por los juglares, canciones cantadas para amenizar las duras faenas del campo... Una tradición oral que con la publicación de este libro ha pasado a ser escrita, gracias al esfuerzo de un grupo de mayores del Centro de Día de Luque, que con la ayuda de la directora, de la monitora, Eulalia, y de la silenciosa labor de otras personas han realizado un espléndido trabajo de recuperación histórica. Edita: Centro de Día de Mayores de Luque. Plaza de España, s/n - 14880 Luque (Córdoba) Patrocina: Delegación para la Igualdad y Bienestar Social. Recopilación: Eulalia Molina Jiménez. Fotografías: José de la Rosa Pérez. Depósito Legal: CO-????-2009 Imprime: Impresiones Guadajoz, S.L.L. Avda. San Carlos de Chile, 55 - 14850 Baena (Córdoba) Tel. 957 691 635

Han sido más de dos años de estudio, de selección de material y de corrección de textos que han dado como fruto este “Para siempre en nuestra memoria”, un libro que no es sólo un excelente legado histórico, sino que además es un ejemplo del trabajo que se desarrolla diariamente en los Centros de Día. El centro de Luque cuenta actualmente con más

de 800 socios que son los verdaderos artífices de se desarrollen talleres como éste. Talleres que cuenten con la participación activa de todos sus miembros y que contribuyan a dinamizar la vida social y cultural de nuestros municipios. Desde la delegación provincial para la Igualdad y Bienestar Social trabajamos en el desarrollo de más y mejores iniciativas para que las personas mayores, una vez alcanzada su merecida jubilación, puedan desarrollar su vida de una forma activa y saludable. Por eso, me siento muy feliz de poder prologar obras como ésta o de asistir a la grabación de los documentales de oficios perdidos, o de compartir con todos vosotros otras muchas actividades que se desarrollan durante todo el año en ese magnífico centro, dotado ahora de más espacio y de mejores infraestructuras gracias a la última reforma. Así pues muchas gracias a todos por la dedicación y el esfuerzo derrochado en este libro que nos ayudará a conocer un poco más de aquello que fuimos, somos y seremos.

TELESFORO FLORES OLMEDO ALCALDE DE LUQUE

SALUDA DEL ALCALDE

S

on muchas los recuerdos que tenemos grabados en la memoria para siempre, de vivencias, de imágenes, de sonidos, de olores…. un sinfín de sensaciones que sin querer, sin pensarlo, perduran en nuestra memoria, bien por buenos o bien por malos. Es por ello que es una inmensa satisfacción para mí el dar la bienvenida a este “LIBRO” con forma de revista en el que se plasman tantos y tantos recuerdos agradables de tantas y tantas personas de nuestro pueblo: canciones, coplas, romances, poesías antiguas, sainetes, coplas, etc. que forman ya parte de nuestra cultura más arraigada, esa cultura milenaria que se ha ido transmitiendo de generación en generación, esa cultura que ha formado parte de los hogares luqueños hasta hace bien poco, esa cultura que si no fuera por la labor que se realiza por grupos como éste, de

Recuperación de Tradiciones del Centro Día de Mayores de Luque, se irían perdiendo en el olvido pues la juventud actual camina por otras sendas. Aprovecho desde esta líneas que me dais ocasión de escribir para agradeceros la labor tan importante que venís desarrollando desde este Grupo de Recuperación de Tradiciones, un grupo que no solo recupera dichas tradiciones sino que las pone en valor, volviéndolas a traer para su disfrute a todos los luqueños. Deseo que este libro se convierta en referencia para todos los luqueños, y que estás 60 páginas queden grabadas, sin saber por qué, en la memoria de todos nosotros, como recuerdo de ese pasado reciente luqueño, tan rico en tradiciones y a la vez tan pobre.

MARÍA DEL CARMEN LEÓN BRAVO DIRECTORA DEL CENTRO DE DÍA DE MAYORES DE LUQUE

INTRODUCCIÓN

E

l libro que hoy nace es fruto del trabajo y la ilusión de un grupo de personas, mayores en edad, pero también, mayores en sabiduría, que nos quieren dejar constancia de lo que ellos, en la edad de juventud, vivieron, recitaron y cantaron. Es para mí una gran satisfacción haber podido colaborar a que esta idea de recuperar nuestras tradiciones, en este caso “romances, poesías y canciones antiguas”, y a que se vean plasmadas en este libro para el recuerdo y disfrute de todos. Ahora que tanto hablamos del envejecimiento activo como un proceso dinámico: “dar más años a

la vida, pero también, más vida a los años”, sirva como ejemplo esta publicación donde colaboran un grupo numeroso de mayores activos, inquietos e ilusionados con lo que hacen y lo que esto significa para ellos. El taller “Recuperación de tradiciones” que se puso en marcha hace dos años en el Centro de Día de Mayores de Luque da ahora un paso más con la publicación de este libro: “En la memoria, para siempre I”. Ya en el 2.006 se publicó la revista “Las Ánimas Benditas” y desde entonces seguimos trabajando por recoger todo aquello que tenga que ver con las costumbres, gastronomía y cantos populares de nuestro pueblo.

EULALIA MOLINA JIMÉNEZ MONITORA DEL TALLER “RECUPERACIÓN DE LAS TRADICIONES”

VIVIR LAS TRADICIONES

E

n el taller de Recuperación de Tradiciones del Centro de Día de Mayores de Luque, se trabaja para que queden en la memoria todas las tradiciones y costumbres que formaron parte de nuestra vida: juegos, comidas, canciones, romances, poesías, carnavales, villancicos y fiestas populares. En este primer libro hemos recogido romances, poesías, canciones populares y religiosas, como las canciones a la Virgen de la Aurora ó a la Virgen del Rosario así como otras canciones compuestas por miembros del grupo más actuales.

De la mayor parte de lo recopilado no se conocen los autores. Los romances, por ejemplo, son historias de sucesos reales que cantaban los juglares por las calles en la primera mitad del siglo pasado y cuyas letras escritas repartían en cuadernillos.

Casi toda esta sabiduría popular la adquirieron en el arduo trabajo del campo para hacer la faena más corta. En la campiña y en la recogida de aceitunas se amenizaban con ellas las noches en los cortijos. En las sobremesas, alrededor de una candela, los nietos boquiabiertos escuchábamos a los abuelos cantar y recitar historias de amores imposibles, tragedias, grandes sucesos... El libro recoge también canciones y plegarías a Santos y Santas que se cantaban y aún se siguen cantando en las novenas. Espero que esta obra sirva para que nos acerquemos a los nietos, le cantemos y recitemos y para que esta riqueza quede para siempre en nuestra memoria y en la de las generaciones venideras.

ROMANCES

Para siempre en nuestra memoria

ROMANCES

LA HISTORIA DEL PUEBLO DE MARCHENA En la provincia Sevilla en el pueblo de Marchena, habitaba un matrimonio de una familia muy buena. Y esto era un matrimonio, que vivía muy feliz, ella era costurera, y él de oficio albañil. La vecinita de enfrente, que a la mujer murmuraba, envidiándole la suerte, de lo bien que se llevaban. Éstos tenían una hija. que se llamaba Isabel. Su madre la quería mucho. que era la locura de él. Un domingo por la tarde, con su hija paseando, aquella mala vecina , al albañil ha llamado. Y le ha dicho: “Escucha Antonio, de lo que yo me he enterado, que tu mujer no es muy buena, y a ti te está traicionando”. En estos mismos momentos, él a su hija besaba, y llorando le decía: “Vas a ser muy desgraciada”. En estos mismos momentos a su casa se marchó, ha cogido las maletas y a Segovia se marchó. Antonio llegó a Segovia, y se ha puesto a trabajar y dio con unos señores que fueron su felicidad. Él tomó tantas contratas e hizo tantos edificios y ganó tanto dinero, que llegó a ponerse rico. Aunque él estaba muy bien, con mucha felicidad, pero a su hija Isabel nunca la pudo olvidar. Esta muchacha tan guapa que su madre la crió, cuando tuvo quince años sola en su casa quedó. 14

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Ella quería ser artista y el teatro le gustaba y al verse sola en su casa esa idea ejecutaba. Ella de pueblo en pueblo iba con una compañía grande, hasta que llegó a aquel sitio que se encuentra con su padre. Una noche en el teatro se aproxima un caballero y cuando estaba bailando a ella le tiró el sombrero. Y le dice: “Escucha joven, si a usted le parece bien, cuando termine el baile yo la invite a café”. “Qué bonita eres muchacha, te llamo para decirte que si te casas conmigo, los dos seremos felices”. “En este mismo momento no le puedo contestar porque el asunto es muy serio y lo tengo que pensar”. “Pues si te casas conmigo tú te tienes que alegrar, porque yo estoy solo y para ti es mi capital”. En este mismo momento la muchacha contestó: “Pues yo también estoy sola, acepto su petición”. “Pues dime cómo te llamas, y del pueblo dónde eres, para que vayan enseguida y que arreglen los papeles”. “Me llamo Isabel Fernández y mi madre Encarnación, soy del pueblo de Marchena y mi padre me abandonó”. El padre al oír aquello en el suelo se cayó diciendo en estas palabras ¡Hija de mi corazón! ¡Hija mía de mi alma ¡ ¡Hija de mi corazón! ¿Cómo has venido a mis brazos para que te encuentre yo?

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ROMANCES LA NIÑA HUERFANITA Que caso tan triste. Murió la vecina, se ha quedado el barrio lleno de dolor. Su padre era bueno, su madre era buena, la niña angustiada así replicó: “Mamaíta querida, tengo mucho sueño, ábreme los brazos que quiero dormir. Mamaíta querida, si tú a mi no me oyes, llamo a papaito mientras estás así.” “Papaito querido: ¿Por qué estás tan triste? ¿Por qué tanta gente, y tanto llorar? ¿Por qué tantas velas dentro de la sala, y al lado la cama, ¿Dónde está mamá?. La niña inocente no sabía nada, no sabía la pena de aquel triste hogar. No sabía la niña que su madre buena, se iba al otro mundo y no vuelve más. Llega la mañana, hora del entierro, la niña enganchada de la caja va. Llega al cementerio, la sueltan en el suelo, y la niña dice: “Por Dios destapad”. “Mamaíta querida, ven que te dé un beso, ven que te dé un beso, el último ya. Mamaíta querida que sola me dejas, adiós mamaíta, hasta la eternidad”.

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GUERRA A LA GUERRA FUEGO De Madrid ha venido un mando, de Madrid a Badajoz, padre que no tenga hijos , padre se muere, por Dios. GUERRA A LA GUERRA FUEGO Un padre tenía tres hijas, y en ellas ningún varón, y la más chica decía: “Padre a la guerra voy yo”. GUERRA A LA GUERRA FUEGO “¡Ay padre, querido padre,! que a la guerra me voy yo a pelear con el moro, con el moro peleo yo” GUERRA A LA GUERRA FUEGO Y esa cara tan bonita, de hembra y no de varón. “Padre cuando a mi me miren, para el suelo miro yo”. GUERRA A LA GUERRA FUEGO. Y ese pelo tan bonito, de hembra y no de varón. “Padre traiga usted un barbero un barbero afeitador”. GUERRA A LA GUERRA FUEGO. Y esos pechos tan bonitos, de hembra y no de varón. “Padre traiga usted un corsé, un corsé ajustador”. GUERRA A LA GUERRA FUEGO A la entrada del palacio la espada se le cayó, por decir Dios pecador, dijo “pecadora yo”. GUERRA A LA GUERRA FUEGO. El hijo del Rey que estaba al lado aquellas palabras oyó, corriendo fue a su casa y a su madre le contó. GUERRA A LA GUERRA FUEGO.

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¡Ay madre, querida madre! , que yo me muero de amor, que el caballero D. Marcos, es hembra que no es varón. GUERRA A LA GUERRA FUEGO. Convídala tú hijo mío a pasear contigo un día, y si él una mujer fuera . atrás se te quedaría. GUERRA A LA GUERRA FUEGO Todos los caballeros madre, todos atrás se quedaban, y el caballero don Marco, no corría ¡es que volaba! GUERRA A LA GUERRA FUEGO Convídalo tú hijo mío a beber contigo un día, y si él una mujer fuera, la copa no cogería. GUERRA A LA GUERRA FUEGO Ya lo he convidado madre a la taberna a beber, yo me he bebido un copa y él se ha bebido tres. GUERRA A LA GUERRA FUEGO Convídalo tú hijo mío a pelear contigo un día y si él una mujer fuera, la espada se le caería. GUERRA A LA GUERRA FUEGO. Convídalo tú hijo mío a dormir contigo un día y si él una mujer fuera, contigo se rendiría, GUERRA A LA GUERRA FUEGO. Ya lo he convidado madre a dormir conmigo un día y como era mujer, cayó en mis brazos rendida. GUERRA A LA GUERRA FUEGO

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ROMANCES UN PUEBLO DE ÚBEDA

CLARITA

Yo vivía en el pueblo de Úbeda, desde chica allí me crié en una fábrica de capachos, donde frente había un cuartel. Un soldado moreno que había, de sus ojos yo me enamoré, el tunante me ha dejado una niña y ahora dice que suya no es. Él se ha marchado a su tierra, a mí me ha mandado llamar, en casa de su familia me han recibido muy mal. Tú creías que yo era una niña, que tenía muchísimas perras, y ahora ves que soy pobrecita, tú, canalla, te vas y me dejas. A tu hija no la quieres, a mí no me puedes ni ver, señal que te han dado algo para que olvides mi querer. Tú creías que yo era una niña, y ya tengo peso de mujer, ahora vas a casarte conmigo por justicia y mano del juez.

Estando un día Clarita bordando paños de seda, ha pasado un caballero que venía de la guerra,. -¡Caballero, caballero! ¿De la guerra viene usted? -Sí señora, de allí vengo, ¿Qué se le ha ocurrido a usted? - Que lleva mi maridito siete años ya en ella. - Pues déme usted alguna seña, por ver si lo conociera. -Mi marido es alto y rubio a caballería llega. -Por las señas que me da, su marido muerto queda. Su marido muerto queda, que yo lo estuve alumbrando para que el testamento hiciera. En el testamento puso que me case con su bella. -Si lo dijo, no lo hago si lo puso no lo hiciera, que si eso es verdad, a monja yo me metiera. Siete años lo he esperado, siete años esperaré, si a los catorce no viene, a monja me meteré y los dos hijos que tengo frailecitos los haré. - Alza los ojos Clarita, alza los ojos y me ves, que el del caballito blanco, tuyo maridito es. Ahora es cuando creo que tengo buena mujer, que en la vida y en la muerte siempre me ha querido bien.

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EL DIECIOCHO DE OCTUBRE El dieciocho de octubre, el dieciocho de octubre, en el baile la estanquera un novio mató a su novia en la flor de la canela. Un novio mató a su novia en la flor de la canela. La convidaron al baile, la convidaron al baile; su padre no la dejó. Sin permiso de su padre ella al baile se marchó. Sin permiso de su padre ella al baile se marchó. Como era tan bonita, como era tan bonita, todos le tiran el sombrero. Su novio le ha tirao el suyo y no quiso recogerlo. Su novio le ha tirao el suyo y no quiso recogerlo. -A la salida del baile, a la salida del baile, me la tienes que pagar: te he de cortar la cabeza con mi mano principal, te he de cortar la cabeza con mi mano principal. A la salida del baile, a la salida del baile como tanta gente había, no ha podido ejecutar las ideas que traía. No ha podido ejecutar las ideas que traía. Al otro día de mañana, al otro día de mañana, Isabel se está peinando. -No subas Antonio mío, mira que llamo a mi hermano. -No subas Antonio mío, mira que llamo a mi hermano. Y sin bozo de la capa y sin bozo de la capa, ha tirado de un puñal, le tira de los cabellos y la deja degollá, le tira de los cabellos, le tira de los cabellos,

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UN MILITAR DE ALICANTE y la deja degollá. Y su padre que venía, y su padre que venía, del trabajo a almorzar, a su hija se la encuentra, en el cuarto degollá, a su hija se la encuentra, en el cuarto degollá. -¿Quién ha sido el asesino, quién ha sido el asesino, quién ha sido el criminal, que a mi hija yo la encuentro, en su cuarto degollá? ¿que a mi hija yo la encuentro, en su cuarto degollá? La han cogido entre cuatro, la han cogido entre cuatro, y la ponen en el suelo, su hermano que estaba al lado, la tapó con un pañuelo, su hermano que estaba al lado, la tapó con un pañuelo. La han cogido entre cuatro, la han cogido entre cuatro, la ponen en una loza, vestida de azul y blanco, que parecía una rosa, vestida de azul y blanco, que parecía una rosa. Llamaron al asesino, llamaron al asesino, por ver si la conocía, -¿No queréis que la conozca, si ha sido la prenda mía?, -¿No quieres que la conozca, si ha sido la prenda mía?. Si el alcalde de éste pueblo, si el alcalde de éste pueblo, cumpliera con su deber, cuatro tirillos le diera, a tó el que mata a una mujer, cuatro tirillos le diera, tó el que mata a una mujer. Cuatro tirillos le dieron, cuatro tirillos le dieron, al panteón lo llevaron, eso le pasó a ese hombre, por haber sido tan malo

En la estación de Alicante, al tren subió un militar, en un coche de segunda, que para su casa va. Éste fue a tomar asiento y el joven quedó admirado de una señora muy guapa que lleva un niño en los brazos. La señora le pregunta: -¿Militar vas con permiso?. Y el militar le contesta: -No señora voy cumplido. Se queda mirando al joven, y le dice muy risueña: -Si no tiene inconveniente, me puede dar usted las señas. -Me llamo José Jiménez, vivo en la calle mayor, vivo en la calle mayor, numero cuarenta y nueve. Al llegar a una estación, le dice con mucha gracia: -Me quieres coger al niño mientras bajo a beber agua. Pasaron cuatro estaciones, la señora no volvió y el militar con el niño, -¿Ahora qué voy hacer yo?. Se queda mirando al niño, -Niño no viene tu madre. Vio que en la mano derecha, lleva colgada una llave. Le coge la llave al niño, coge y abre la maleta y envueltos en unos papeles, llevaba diez mil pesetas. En los papeles decía: -“Procure al niño criarlo y si no tiene bastante, lo publica en el diario”. Ha llegado a la estación donde todos lo esperaban y al verlo con aquel niño,

la novia le preguntaba. Desde la estación al pueblo le contó lo que pasaba, cómo le dieron al niño y el dinero que llevaba. Se marcharon a su casa, ellos los dos se casaron y se llevaron al niño con biberón lo criaron. Cuando tuvo quince años lo meten en un taller, para que aprendiera a chofer que eran los deseos de él. Ya que ha aprendido el oficio, se ha marchado a Barcelona y se colocó de chofer con una noble señora. Un día coge la señora, lo ha llamado a su despacho: -Perdona mi atrevimiento y escucha lo que te hablo, si te casaras conmigo, como yo no tengo a nadie, todito mi capital será para ti y tus padres. Y el muchacho le contenta con profundo sentimiento, -Yo tampoco tengo padres, su petición se la acepto. -¿Es que tú no tienes madre? -Sí señora tengo madre, pero buena no será, pues siendo un niño pequeño me entregó a un militar. -Perdona hijo querido que yo no fui madre mala, por eso dejé dinero, para que a ti te criaran. No lo hice por desprecio, ni tampoco por la edad, lo hice por mi familia, me tienes que perdonar.

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UNA MUJER DE CADIZ

LOS DOS HERMANOS Esto eran dos hermanos, criados en Barcelona, el niño se llama Enrique, la niña se llama Lola. El niño siendo mayor se ha marchado al extranjero, pasando ríos y mares, se ha hecho un gran caballero. Disfruta de lo que gana, disfruta de su mejora, disfruta de su dinero sin acordarse de Lola. Lola se le va llorando noche y día por su hermano, y a la Virgen del Pilar, le reza por encontrarlo. A Lola le ha salido un novio para casarse con Lola, Lola acepta el casamiento por no estar en el mundo sola. Estando un día almorzando, Lola le dice al marido: -Nos vamos para la Habana, tengo un hermano perdido. Tengo un hermano perdido, me han dicho que allí estará, -Lola tu gusto es el mío, vamos los dos para allá. Lo buscan por calle y plaza, es imposible encontrarlo y al poco tiempo la Lola, cayó su marido malo. Cayó su marido malo con la fiebre amarilla,

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y al poco tiempo la Lola, quedo en el mundo solita. Quedó en el mundo solita se ha puesto a pedir limosna, se ha arrimado a un caballero y le ha dicho que perdona. La joven se echó a llorar y el caballero la vio, se echó mano al bolsillo, y cuatro duros le dio. -Es usted una bella rosa, es usted un bello clavel, esta noche viene a casa que yo la socorreré. A la noche salió Lola, y el caballero la vio, la cogido de la mano y la entró en su habitación. Le pide cosas imposibles, la Lola dice que no. -Antes prefiero morir que no mancharme mi honor. Si estuviera aquí mi hermano, Enrique de mis entrañas, sacaría la defensa, por la pobre de su hermana. -¿Acaso se llama Lola? , -Lola me llamo señor. -Mátame hermana querida, que he sido un inquisidor. Allí fueron los abrazos, allí fueron los suspiros, allí fueron a encontrarse, los dos hermanos perdidos.

En Cádiz hay una mujer, viuda y con una hija, hija de buen parecer, quince años tiene Rita. Devota de un santo era aquella joven, lo tiene en su pecho como corresponde. Lo tiene en su dormitorio en una urna metido, y le reza a San Antonio: -Tú lógrame lo que pido, porque mi mamá, muda el pensamiento, me quiere vender por su mismo cuerpo. En esto ha entrado la madre: -Dime, ¿qué has pensado Rita?, que estemos pasando hambre siendo tu tan rebonita. Siendo un caballero que nos quiere dar cantidad de dinero, por tu hermosedad. Rita contesta llorosa: -Tú eres una mala madre, tu carne de tus entrañas, ¿Tú quieres vender tu sangre?, ¿Tú quieres que yo por dinero entregue mi amor a un caballero? En esto entró el caballero, solos quedaron los dos, el caballero se sienta: -Yo no mancho nuestro honor.

¿Dime qué Santo es tu devoción? El caballero contesta: -Yo no me puedo casar. Si a monja quieres entrar, yo hablaré con la abadesa, te corta una dote, esto es lo mejor. Siempre serás monja y Antonio en tu honor. Rita contesta llorosa: -¿De qué forma y qué manera?, De forma de una paloma la sacó por la ventana, llegaron al huerto, saltaron la tapia, y aquel era el huerto, y el santo la ampara. -Tú ya estás en salvación, y que soy él de tus uñas, Antonio del corazón. Así que la madre vio que el caballero no salía, llegó la noche y entró a la sala de la porfía. Y encima de un bufete, había una carta, la que contenía un bicho que arrastra: -Tu hija está en salvación, ahora te degüello yo. La cogió del cuerpo y la descoyuntó. Y ese fue el milagro que en ella obró.

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ELENA Elena era una joven de tipo muy delicado. Elena tenía amores con chico muy gallardo. Este se llamaba Enrique y de apellido Navarro. Ellos dos se festejaban, se amaban con ilusión, pero llegó cierto día y quiso lograr su intención. Trataron de casamiento y Navarro se marchó, viendo que quedaba encinta, viendo que encinta quedó. Madrecita mía del Carmen dime lo que debo hacer, antes que llegue la hora, quítame de padecer. Llegó la hora del parto dándole Dios un varón, quedando bien en el parto, Elena se levantó. Se puso su vestido, se marchó para el bosque y al lado de un barranco lo dejó a media noche. Un pastor que allí se hallaba, aunque muy lejos se oía,

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EL 18 DE MARZO un angelito gritaba, ya tiene este niño padre. Lo llevan a cristianar, en la catedral del Carmen, el niño interno quedó, al cabo de mucho tiempo, cura de la población. Una mañana temprano, una señora elegante, al confesor se dirigió y le ha dicho el padre cura: -Diga usted en nombre de Dios. -Padre tengo una gran pena, he sido una criminal más terrible que una fiera, mi sino será fatal. He tirado a un hijo mío, el 18 de Agosto de 1905, en el barranco del lobo. Madre e hijo se abrazaron, sin poderse contener, el cura tan jovencito llorando quedó a sus pies y la señora decía: -Que desgraciada soy yo por haberme descubierto dentro de la población.

El 18 de marzo, empezó la primavera, salió el general Navarro con soldados a la guerra. Tres mil y pico llevaba debajo de su bandera, todos cantan, todos ríen, todos comen y se alegran; menos un pobre soldado que ni come, ni se alegra. -¿ Qué tienes triste soldado que ni comes ni te alegras? ¿ Si es por padre, o es por madre, o por que vas a la guerra ? -Ni es por padre, ni es por madre, ni porque voy a la guerra. La noche de desposarme, me apartaron de mi prenda. Se echó mano a la cartera, se sacó una foto de ella. Mira si sería guapa, mira si sería bella, que hasta el mismo capitán, se ha enamorado de ella. -Tenga usted mi capitán esta cadena de perlas, me la dio mi dulce Elvira la noche de enhorabuena. -Coge soldado el caballo, márchate para tu tierra,

que con un soldado menos, también se acaba la guerra. Anda siete u ocho pasos, a un peregrino se encuentra, -¿Dónde vas triste soldado si tu Elvira ya está muerta? -Si mi Elvira ya está muerta, a verla tengo que ir. Anda unos cinco pasos, una sombra vio venir: -No te asustes soldadito, no te asustes tú de mí, que soy tu dulce Elvira que te vengo a recibir. -Si tú eres mi dulce Elvira, echa los brazos a mi. -Brazos con los que te abrazaba, a la tierra se los di. Labios con que te besaba, son para un pobre jazmín. Si te casas con mi hermana, no la lleves a Madrid, le vayan a dar veneno como me dieron a mi. -Ni me caso con tu hermana, ni me voy a estar así. Me voy a meter a fraile, fraile de San Agustín. La primera misa que diga, tiene que ser para ti.

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ADELA Yo conocí a una joven, llamada Adela, llamada Adela. Por el amor de Juan, se hallaba enferma, se hallaba enferma. Él le juraba, él le juraba que aunque estuviera enferma no la dejaba, no la dejaba. El mocito a la mocita la festejaba, la festejaba, llevaban cinco años con ella hablaba, con ella hablaba. Llegó el día de su Santo, le regaló, le regaló un corte de vestido de gran valor, de gran valor. Un Domingo por la tarde fue a pasear, fue a pasear, él no llevaba ganas con ella hablar, con ella hablar. Y ella le dice y ella le dice: -¿Qué tienes esta tarde que estás tan triste, que estás tan triste?. Ya puedes llorar, Adela por tus amores, por tus amores, que no te quiero a ti, quiero a Dolores, quiero a Dolores. La pobre cayó al suelo muy desmayada, muy desmayada, su madre no sabía

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de aquello nada de aquello nada. -Madre, mi linda madre, vente a mi lado, vente a mi lado que antes de morir quiero darte un recado, darte un recado: -Si viene Juan a verme después de muerta, después de muerta, no le dejes pasar de aquella puerta, de aquella puerta. -Si vienen mis amigas, Ana y Dolores, Ana y Dolores, a coronar mi tumba lirios y flores, lirios y flores. Lirios y flores, collar de perlas, que Juan me regaló su amor en prenda, su amor en prenda. A las cuatro de la tarde pasó el entierro, pasó el entierro Juan que estaba en la puerta se entró pa´dentro, se entró pa dentro. Se entró pa´dentro, se arrodilló, delante de la foto que ella le dio, que ella le dio. Al otro día de mañana allí bajó, allí bajó, delante de la tumba donde lloró, donde lloró. Adela mía, Adela mía, que yo nunca creía, que te morías, que te morías.

ROMANCES EL MILAGRO DE LA VIRGEN DE LA CABEZA La Virgen de la Cabeza es muy nombrada en toda España. Un muchacho se perdió en un monte cuajado de fieras. Cuando vino anocheciendo, el angelito fuerte lloraba, vino la Virgencita y con su manto ella lo tapaba. No te asustes tú mi niño que yo estaré en tu compaña hasta que sea de día que te llevaré con tu mama. Al otro día al amanecer, la Virgencita le acompañaba, lo pone al lado de su madre y su madre al verlo de alegría lloraba. -¿ Dónde has estado hijo mío? ¿ Dónde has estado hijo del alma? -Con una mujer morena que con su manto me tapaba. Toda la gente de Andújar ha ido hasta el Santuario. Todos con mucho fervor por el milagro que hizo al muchacho.

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LA SEÑORITA RICA Una señorita rica de un pobre se enamoró. Era humilde de clase, honrado y trabajador Los padres que se enteraron un rico le prometieron pero sin saberlo ella por la ambición del dinero. En el jardín de su casa, era una noche de invierno, ante la luz que alumbraba le juraba amor eterno. Y él le decía: -“Mi dulce Elvira, nuestros amores tendrán mal fin porque tú eres rica y yo pobre soy”. Y la muchacha decía así: -Maldito sea el dinero que a mí me impide el quererte, si yo no llego a ser tuya mil veces pido la muerte. Los padres que estaban siempre en el acecho constante, trataron de trasladarla al verla marchar con su amante. Y ya la meten en un convento, bajo la insignia de caridad y aunque las monjitas la cuidan muy bien pues la muchacha decía así: -¡Maldito sea el dinero que me hace tan desgraciada por la ambición del dinero aquí me veo encerrada. Padres queridos, yo os perdono pero os pido por caridad que venga mi novio y me vea morir que no lo puedo nunca olvidar.

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UN CURA MUY JOVENCITO Un cura muy jovencito, un cura muy jovencito que a la capital llegó, que a la capital llegó. Se enamoró de una niña, se enamoró de una niña desde que la bautizó, desde que la bautizó. Se le murieron sus padres, se le murieron sus padres y ella huérfana quedó, y ella huérfana quedó. Un día fue a confesar, un día fue a confesar con aquel cura traidor, con aquel cura traidor. -Dame de tu amor Pepita, dame de tu amor Pepita, dame de tu amor por Dios, dame de tu amor por Dios. La niña como era joven, la niña como era joven no supo decir que no, no supo decir que no. La ha metido en una sala, la ha metido en una sala y allí confesión le dio, y allí confesión le dio. -Ya no quiero mas sotana, ya no quiero mas sotana ni tampoco mas convento, ni tampoco mas convento. Que yo me caso con ella, que yo me caso con ella aunque falte al juramento, aunque falte al juramento.

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ROMANCES SILVANA Silvana se paseaba por una alameda florida. Su padre la remiraba por un mirador que había -Acércate mi Silvana, acércate Silvana mía, que una nochecita o dos contigo dormir quería. Y Silvana le contesta, muy triste y descoloría -Yo para dormir con Conde no debo de ser tu hija. Silvana se fue a su casa muy triste y descoloría. y su madre le pregunta: -¿Qué tienes Silvana mía, siendo tu cara una rosa y está tan descoloría?. -A usted se lo digo madre, a otra no se lo diría, que el canalla de mi padre conmigo dormir quería. -Eso lo remedio yo si quieres, Silvana mía, que yo me ponga tu ropa y tú te pongas la mía. Que yo me acueste en tu cama y tú te acuestes en la mía. A esto de la medianoche por la sala recorría. -Acércate mi Silvana, acércate Silvana mía. Acércate mi Silvana, reina de todos mis castillos, estás tan estropeada como si hubieras parido. -¿Cómo quieres que yo esté si he tenido a mis tres hijas?, Primero tuve a Constanza, segunda doña María y tercera a mi Silvana la que por mujer querías. -Perdóname tú, mi esposa, perdóname esposa mía que es tanto lo que la quiero, que en sueños la tenía. -Perdóname tú mi esposo, cosa que no merecía, que cuando lo ibas hacer, bien pensado lo tenías, que la sangre de tus venas por esposa la querías.

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PROVINCIA DE BADAJOZ Provincia de Badajoz y pueblo de Almendralejo habita un hermosa dama con su novio saladero. Ella es rica y labradora él se la da de flamenco. De noche cuando iba a verla le contaba varios cuentos. Pero nada conseguía porque era dura Consuelo, por aquella cruz bendita que está en la mitad del huerto. -Que me peguen cinco tiros si no logro lo que intento. -No seas tonto Manolito recobra el conocimiento que esta noche has de entrar donde tengo mi aposento. Todito lo has de andar si me guardas el secreto. A las ocho de la noche se pone a cenar Consuelo y le dice a sus hermanos: -Vamos a cenar ligeros que vamos a ir de boda. -Dime niña quien se casa para que la acompañemos. -Pues se casa nuestra abuela con Manolito el salamero.

A las doce de la noche Manolito entró sereno, palpando las paredes, los cuadros y los espejos. Exclamó: -¡Dios me perdone, parece que no es Consuelo. Y era la pícara abuela que roncaba como un cerdo: -Subid mis nietos, subid, que no sé ni lo que tengo, que se han metido en mi cuarto los diablos del infierno. Han subido sus dos nietos, con latas y con cencerros, Consuelo con el candil para celebrar casamiento. Cuando Manolito vio que tan bien iba Consuelo, se tiró por el balcón, se ha roto los cuatro remos. -Muchachos que me escucháis, os pongo en conocimiento, que no vayáis a entrar por flores a ningún huerto. Esto me ha pasado a mí, por meterme a bolichero, que entré a por un gorrión y me zamparon un mochuelo

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UNA JOVEN DESAMPARADA Conocemos a una joven, de una familia muy rica que su novio la dejó cuando vio que estaba encinta. Así que los padres vieron de la manera que estaba, la amenazan con la muerte y la echan de su casa. Viéndose desesperada, se fue a casa su madrina la cual que la recibió como si fuera una hija. Allí nada le hace falta, se pasa el día llorando, pensando en el porvenir que se le iba acercando. Carmen ha tenido un niño que es mas hermoso que el sol, ella sola lo criaba, por guardarse de su honor. Nueve meses tiene el niño todavía no es cristiano, por guardase de su honor no lo habían bautizado. Carmen empezó a escribir una postal a su novio en la cual iba una cita que se vieran los dos solos. Él aceptó la cita, que Carmela le ha mandado,

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UN JOVEN ACAUDALADO y la encuentra con su hijo recostada bajo un árbol Con la sonrisa en los labios le dice: - Carmen soy yo. -Acércate y verás el fruto, de nuestro amor. Rogelio se fue acercado dándole besos al niño. -Válgame Dios de los cielos, qué desgraciado es mi hijo. -Rogelio no digas eso no maldigas a tu hijo, ¿no te acuerdas de aquel día el juramento que hicimos?. -El juramento que hicimos, mis palabras son en vano, tú te quedas con tu hijo y yo me lavo las manos. Viéndose desamparada, a sus pies se arrodilló, diciendo en estas palabras: -Qué desgraciada soy yo. Paseando camarotes encima de un velador, le deja una carta escrita, al Señor Gobernador. -La culpa fue de mis padres por no haberme recogido, yo me voy por esos mares y me mato con mi hijo.

Un joven acaudalado que tenía relaciones con una joven muy guapa aunque ella era pobre. Con engaño y falsedad, a la joven deshonró, hasta que un día el maldito de su honra se reía y después la abandonó. Viéndose desamparada en un hospital ingresó, y tuvo una hermosa niña, fruto de aquella pasión. Un día que por la calle la niña decía así: -Mamaíta tengo hambre, ¿quieres que vaya a pedir?. Un caballero elegante, por la plaza paseaba con lagrimas en los ojos y estas palabras le hablaba: -Caballero una limosna, se la pido por favor, porque estamos sin comer mi mamaíta y yo. El caballero le dice: -No tengo nada que dar.

La niña se le retira, al punto se echó a llorar y la joven al conocerlo enseguida se acercó. -¿No tienes una limosna, pa tu hija del corazón?. Y LE HA DICHO:- MISERABLE, SI ES QUE TE VAS A CASAR, NO SABES QUE ÉSTA ES TU HIJA, Y LE HAS CLAVADO UN PUÑAL. Llegó la hora del templo. Ella con ansias esperaba con su hija de la mano en un rincón se ocultaba. Llego la hora del templo y la boda se acercó con su hija de la mano estas palabras habló: ¿DONDE VAS HOMBRE COBARDE? ES QUE TE VAS A CASAR, NO SABES QUE ÉSTA ES TU HIJA, Y LE HAS CLAVADO UN PUÑAL Y en las últimas decía: -Chiquilla que me has matao, pero que no te castiguen, tú has cumplío con tu deber porque yo te he deshonrao.

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CARMEN GARCÍA En el pueblo donde habitaba una joven viuda y sin caudal, que tan solo una hija tenía que su honor le quería manchar. -Hija querida, de ti enamorado está un caballero muy rico que cien duros por tu honor da. El capital de cien duros ese infame traidor le ofreció. -Mil veces le doy la muerte quien intente manchar mi honor. Pero la madre a la casa del caballero se fue y le dice: -Caballero, esta noche a mi casa va usted. -Caballero, caballero, a la diez en punto esté allí, si mi hija no quiere entregarse en mis brazos tendrá que morir. Y el apuesto caballero, a las diez se presentó, y la madre cerrando la puerta estas palabras habló: -Anda anda, hija mía, anda y entrégate a él, que nos da mucho dinero y eso nadie lo ha de saber. Pero la joven a la madre se abalanzó, y en el pecho sin tardanza, dieciséis puñaladas dio.

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EL PAÑERO Y el caballero al ver eso, desmayado al suelo cayó. -No me mates, no me mates, no me mates blanca flor. Mira que tengo tres hijos, inocentes de mi corazón. -No creí que un alma pura, tenía tan mal corazón. Pero la joven al punto le contestó: -Yo no puedo perdonar, al que tanto daño causó. Así que lo dejó muerto, ella sola a dar parte se fue, con el traje ensangrentado, de este modo le habló al Juez: - Señor juez, dijo la joven, a mi madre muerte le he dao, y a un ingrato que quería gozarme, a ese ingrato, también se la he dao. -Yo como joven que soy y usted como juez que es, tenemos que saber que la honra no se vende por dinero. Hasta el mismo juez lloraba, al oír aquella blanca flor, que había matado a su madre, sólo por no manchar su honor. Carmen García , ella la muerte se ha dao, en un triste calabozo y su alma a Dios le ha entregao.

De Francia vino un francés a una niña pretender y se encontró con la niña que le supo responder: -Soy pañero y vendo paños, y cortes de pantalones para las niñas bonitas, de Manila los mantones. Si te vinieras conmigo por el término de un año, te vistiera y te calzara, te regalaría un paño. -No señor que soy muy chica y me reconozco el daño, por donde quiera que fuera, sería la niña del paño. Caballero si usted quiere de mi hermosura gozar, todo cuanto yo le pida, me lo tiene usted que dar. -Lo primero es una casa que valga dos mil doblones, con ventanas a la mar y también tenga balcones. En el patio de la casa, ha de poner una fuente, con cuatro caños de vino y otros cuatro de aguardiente. -La habitación donde duerma ha de estar ladrillá en oro y las sillas plateadas para darme gusto en todo.

Cuatro negros que me guarde y que me tengan temor, para cuando yo los llame se metan en un rincón. -Desde mi casa a la iglesia han de poner un almendro, para cuando vaya a misa vaya partiendo y comiendo. -Desde mi casa a la iglesia han de poner una parra, para cuando vaya a misa no me de el sol en la cara. -Desde mi casa a la iglesia han de poner un tablao, para cuando vaya a misa no se me ensucie el calzado. -Un coche con cuatro mulas que yo también necesito, porque estoy casi gordita no puedo dar un pasito. -Vaya usted con Dios madama que mañana volveré, que lo que pide es muy poco si encuentra quien se lo dé. -Vaya usted con Dios galán, vaya usted con Dios mancebo, yo no quiero su persona lo que quiero es su dinero. Y se acabaron las coplas, de este cante tan bonito, la niña casi gordita no pudo dar un pasito.

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EL ARLEQUÍN

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Mañanita, mañanita, mañanita, mañanita mañana de Juan Simón. QUE CON EL ARLEQUIN QUE CON EL ALECÓN, mañana de Juan Simón.

Para que no vuelva más, para que no vuelva más le echaré una maldición. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, le echaré una maldición.

De quien es ese caballo, de quien es ese caballo que en mi cuadra veo yo. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, que en mi cuadra veo yo.

Había una señorita, había una señorita de pechos en su balcón. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, de pechos en su balcón.

Que se le sequen los ojos, que se le sequen los ojos, el alma y el corazón. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, el alma y el corazón.

Es del novio de mi hermana, es del novio de mi hermana de mi hermana la menor. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ARLECÓN, de mi hermana la menor.

Ha pasado un caballero, ha pasado un caballero hijo del emperador. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, hijo del emperador.

Y los perros con que caza, y los perros con que caza lo saquen en procesión. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, lo saquen en procesión.

De quien ese sombrero, de quien ese sombrero que en mi percha veo yo. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ARLECÓN, que en mi percha veo yo.

Y le ha dicho bella rosa, y le ha dicho bella rosa y le ha dicho bella flor. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCON, y le ha dicho bella flor.

Estando en esas razones, estando en esas razones el caballero llegó. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, el caballero llegó.

Tuyo, tuyo esposo mío, tuyo, tuyo esposo mío que mi padre te lo dio. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ARLECÓN, que mi padre te lo dio.

Quién durmiera con usted, quién durmiera con usted una nochecita o dos. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, una nochecita o dos.

Ábreme la puerta luna, ábreme la puerta luna ábreme la puerta sol. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ELERCÓN, ábreme la puerta sol.

La ha cogido de la mano, la ha cogido de la mano con su padre la llevó.

Y la dama le contesta, y la dama le contesta aunque sean treinta y dos. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, aunque sean treinta y dos.

Que te traigo un conejito, que te traigo un conejito de los montes de León. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, de los montes de León.

Mi marido está cazando, mi marido está cazando en los montes de León, QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN, en los montes de León.

Y estando en esas razones, y estando en esas razones el caballo relinchó. QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ALERCÓN el caballo relinchó.

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QUE CON EL ARLEQUÍN QUE CON EL ARLECÓN, con su padre la llevó. Aquí tiene usted a su hija, aquí tiene usted a su hija sin vergüenza y sin honor. QUE CON EL ARLE QUÍN QUE CON EL ARLECÓN, sin vergüenza y sin honor. Aquí se acaba la historia, aquí se acaba la historia de este humilde cazador. QUE CON EL ARLEQUÍ QUE CON EL ALERCON, de este humilde cazador. Que por no darle la muerte, que por no darle la muerte con su padre la llevó. QUE CON EL ARLEQUIN QUE CON EL ALERCÓN, con su padre la llevó. Eso le pasó a una dama, eso le pasó a una dama por querer dormir con dos. QUE CON EL ALERQUÍN QUE CON EL ALERCON, por querer dormir con dos.

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LA MONJA

EN EL PUEBLO DE ORIHUELA

LOS MAÑOS

Siendo yo enfermera de la caridad, curaba a un herido grave militar. Una de las veces que lo fui a curar me pidió el herido un beso na más, me pidió el herido un beso na más.

En la provincia Alicante, en el pueblo de Orihuela había un niño pequeño que a los tres años no llega. Viene el padre del trabajo -¿Dónde está mi sangre bella que ha de contarme a mi todito el que a casa entra?. -Padre, a casa ha entrado un alférez, que con mamaíta juega, le da besitos y abrazos lo mismo que si tú fueras. A mí me dan cuatro chavos me mandan con la abuela y yo como granujilla, me escondo detrás la puerta. Se va el padre al trabajo y la madre lo degüella. -Ya no le cuentas tú más, todito el que a casa entra. -Sube maridito mío que te tengo buena cena, la cabecita de un chivo sólo le falta la lengua. En la primera cucharada un ángel se le revela: -No comas tú de esa carne que tomas tu sangre bella. Ella que estaba delante los demonios se la llevan, la han cogido de los pelos y barren la sala con ella. Lo que ha hecho ella con su hijo, ahora, lo hacen con ella.

Un mañito a una mañita desde chica pretendió y en aquel mismo momento se querían con amor. Un día paseando, se acerca un señor, a ella la pretende y le dice que no. - DE TI TENGO QUE VENGARME DE TI TENGO QUE VENGARME, DELANTE DE ESTE POBRETE TÚ VENDRAS EN BUSCA MÍA MI DINERO ES EL QUE VENCE, TÚ VENDRAS EN BUSCA MÍA MI DINERO ES EL QUE VENCE. La mañita como un lirio a su casa se marchó, a contarle a su madre todo lo que le pasó: -MADRE, HAY UN ACAUDALADO QUE A MÍ ME QUIERE MATAR, PORQUE QUIERE MIS AMORES Y NO SE LOS PUEDO DAR. Y la madre le contesta: -NIÑA TU FELICIDAD, SI TE CASAS CON EL MAÑO VAS A SER UNA DESGRACIÁ PUES CÁSATE CON EL RICO Y SERAS AFORTUNÁ. Ella le contesta con pena y dolor: -YO QUIERO SER POBRE, PERO RICA NO. -NO ME DÉ USTED ESOS CONSEJOS, NO ME DÉ USTED ESOS CONSEJOS QUE YO NO PUEDO TOMARLOS, QUE LLEVO EN EL CORAZON TODO EL QUERER DE MI MAÑO QUE LLEVO EN EL CORAZON TODO EL QUERER DE MI MAÑO. La mañita silenciosa en su cuarto se metió y a deshora de la noche una guitarra sintió. Era el maño, su novio, que le canta esta canción: -PUES YA ME ENTERÁO QUE ES UN RICANCHÓN

-Dame un beso hermana y me curaré, dame un beso hermana y me pondré bien. Como me lo pide con tanta piedad, que dárselo tuve por la caridad, que dárselo tuve por la caridad. Al ponerse bueno yo le supliqué, que a nadie dijera que yo le besé que tuviera suerte y felicidad y que se portara como un militar, y que se portara como un militar. A los nueve meses carta tuve de él, que lo habían hecho grande coronel, pero ese papel pronto lo rompí porque me decía: Tú eres para mi, porque me decía: Tú eres para mi. Un día en el coro, pensativa yo, y la superiora a mi me llamó, pero al verlo a él me desmayé yo, me caí al suelo y él me recogió, me caí al suelo y él me recogió. Levántate amada, levántate por mí, que a las doce en punto vendré yo por ti, que tengo una casa toda prepará con todo servicio para un militar, con todo servicio para un militar.

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QUE CON SU DINERO, LOGRA SU INTENCIÓN. Y AUNQUE ME CUESTE LA VIDA, Y AUNQUE ME CUESTE LA VIDA CONTIGO ME HE DE CASAR, EL QUERER QUE NOS TENEMOS NADIE ME LO QUITARÁ, EL QUERER QUE NOS TENEMOS, NADIE ME LO QUITARÁ. Han trascurrido tres días que se vino a recordar, el maño le dice al rico: -Ya te puedes preparar, que es la tuya o es la mía, uno tiene que quedar. Los dos pelearon y el rico murió, de una puñalada, que el maño le dio. -Y ADIOS MAÑITA DEL ALMA, Y ADIOS MAÑITA DEL ALMA, A LA CARCEL VOY POR TI, SI TÚ NO QUIERES A OTRO ES QUE ME QUIERES A MI, SI TU NO QUIERES A OTRO ES QUE ME QUIERES A MI. Ha cumplido su condena, y a su casa se marchó, a saludar a su madre, y después le preguntó: -QUIERO QUE ME DIGAS MADRE, QUE ME DIGAS LA VERDAD, SI MI NOVIA HA SIDO BUENA Y UNA MUCHACHITA HONRÁ. - PUES TU NOVIA HA SIDO BUENA Y UNA MUCHACHITA HONRÁ. - PUES PREPARA LO QUE TENGA, QUE NOS VAMOS A CASAR. Y el día que se casaron, y el día que se casarón todo el pueblo le acompaña y dice en el altavoz: -Vivan los hombres honrados que por defender la novia tres años en la cárcel ha estado, que por defender la novia tres años en la cárcel ha estado. Centro de Día de Mayores de Luque

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LA PROMESA DE UN NIÑO

EL BANDOLERO

LA MODISTILLA

Por cumplir una sagrada promesa que dejó mi madre antes de morir, a la iglesia me dirigí un día y este caso presencié yo allí. Como era día de festividad, estaba la iglesia cuajada de oro, adornados todos los altares con alhajas que valían en tesoro. Con alhajas y alegría y un precioso alumbrador, van todas las señoritas, a escuchar el sermón. Pero sin fijarse el lujo que había, aquel pobre niño de entrar intentó y al entrar el primer paso en el templo, lo detiene el ministro de Dios. -¿Dónde vas huérfano desgraciado, si tú en este día no puedes entrar porque llevas la ropa harapienta, y hoy es día de festividad?. -Tan sólo vengo a cumplir con el divino Señor que murió crucificado, mi madre me lo encargó. Que cuando me viera triste y apurado, que fuera pa la iglesia a hablar con Jesucristo, porque dicen que es muy bueno, y perdona los delitos. -Quítate de mi presencia y no me camorres más que le doy parte a la guardia preso te van a llevar. -Yo me dirijo a la ley que Jesucristo mandó, no me quitarías el paso porque llevo la razón:

Era mi padre un bravo bandolero que solamente robaba con traición, un cierto día me trajo un prisionero y al verlo a él robo mi corazón. Era gallardo y rubio como el oro y en una cueva mi padre lo encerró, yo por su vida daría un tesoro y estando a solas oí que reclamó. -SI LA VIDA NO ES QUERIDA, QUE ME IMPORTA A MÍ EL DINERO. LA QUIERO MAS QUE A MI VIDA, A LA HIJA DEL BANDOLERO. Al oír eso yo me sentí orgullosa, con un arranque de locura y pasión, abrí la puerta y yo le dije ansiosa, salga usted pronto, busque su salvación. Él, muy galante, me dijo enternecido: -HERMOSA JOVEN, NO TE ASUSTES DE MÍ CON TODO EL ALMA, TE QUEDO AGRADECIDO, Y el prisionero me vuelve a repetir: -SI LA VIDA NO ES QUERIDA, QUE ME IMPORTA A MI EL DINERO... LA QUIERO MAS QUE A MI VIDA, A LA HIJA DEL BANDOLERO. Y yo a él le dije que lo quería, y que con él también marcharía yo, estando a solas la fuga preparamos, y un tierno beso en aquella voz se oyó. SI LA VIDA NO ES QUERIDA, QUE ME IMPORTA A MI ÉL DINERO LA QUIERO MÁS QUE A MI VIDA, A LA HIJA DEL BANDOLERO.

Una linda modistilla de ésas que pasean por la castellana. Se le acerca un caballero, guapo y elegante, que le ha hecho gracia. Con palabras seductoras, a la modistilla la pudo engañar, prometiéndole que un día, llegaría a ser dueño de su corazón. Pobre de la modistilla, hasta que una tarde al charco cayó. -Modistilla, Modistilla no llores más, porque tu amante galante no volverá. -Me encuentro sola en mundo y sin amor, solita y abandonada por un seductor. Metida en un cabaret, pasaba sus delicias, donde habrían de venir, los mozos del postín, al baile de Galicia. Una tarde que se hallaba, triste y afligida. se le acerca un caballero, y a bailar un tango, la comprometió. Ella lo ha reconocido, y sobre sus brazos, así le cantó. -Caballero, caballero recuerda usted, antes de pasar mi vida en un cabaret, y si no recuerda ya, yo se lo diré, soy aquella modistilla, que abandonó usted, -Cuando estoy juntito a ti, me siento mas feliz, que todo el mundo entero, porque tu eres la mujer, que me has hecho feliz, y por eso te quiero. -Yo también te quiero a ti, te quiero hasta el morir, si no me eres traidor. -No me hagas más sufrir, rosita de pasión, rosita encantadora. Acerca tus labios juntito a mi, que te quiero con locura, y hasta el morir.

JESUCRISTO ERA POBRE EN ESTE MUNDO, DESPRECIABA EL LUJO DE LA HUMANIDAD, PUERTA EN PUERTA, PIDIENDO LIMOSNA. SÓLO PA PODERSE ALIMENTAR. AQUEL NACIMIENTO ERA TAN DIVINO, AL PIE DE UN RETABLO AQUEL NIÑO NACIÓ Y UN PESEBRE, QUE HABÍA DE LAS BESTIAS, FUE LA CUNA DE AQUEL REDENTOR.

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LA COCINERA Era una joven muy linda y bella, era mas linda que el sol de Abril, tenía oficio de cocinera, en un comercio de gran postín. Y el señoriíto hijo del amo, de aquella joven se enamoró, siempre jurando que la quería, que la quería de corazón. Aquella joven muchacha, como tanto se lo juraba, le entregó su pretensiones, y después que se ha burlado, la ha dejado abandonada. Se fue a casa de su madrina, como si fuera una hija, y ella le cita con una carta, y a la cita siempre acudió. El señoriíto que se creía echar con ella un rato de amor. Tu eres un hombre cobarde, tu eres un hombre traidor, te burlaste de mi honra, y ahora vienes a burlarte de mi conciencia y honor, y entonces fue y lo mató. Aquella joven marcho a presidio por el delito que cometió, cuando estaba en el calabozo, ella cantaba esta canción. MUJERES QUE ME ESCUCHÁIS, NO DEJARSE ABANDONAR, QUE EL LUJO ATRAE MUCHO, ESTA JOVEN POR EL LUJO, MIRAR DONDE SE VE YA, CUMPLIENDO CONDENA ESTÁ. YO ESTOY CUMPLIENDO CONDENA, POR UN INFAME TRAIDOR, PERO LA CUMPLO CON GUSTO, Y ALGUN DÍA YO SALDRÉ. TODA LA JOVEN QUE SEA POBRE, Y SE ENAMORE DE UN SEÑORITO, TENDRÁ QUE VERSE MUY DESGRACIADA, Y SI ES VALIENTE IR A PRESIDIO.

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POESIAS, SAINETES Y COPLAS

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ORIENTAL Corriendo van por la Vega, en los puertos de Granada, hasta cuarenta donceles y el capitán que los manda. Al entrar en la ciudad, pasando su yegua blanca, dijo esto a una mujer, que entre los brazos lloraba: Enjuga el llanto cristiana, no me atormentes así, que tengo yo mi sultana un nuevo edén para ti. Tengo un palacio en Granada, tengo jardines y flores, tengo una fuente dorada, con mas de cien surtidores. En la Vega del Genil tengo pardas fortalezas, que serás Reina entre mil, cuando encierre tu belleza. Y sobre toda una orilla extiendo mi señorío, ni en Córdoba ni en Sevilla hay un parque como el mío. Allí la altiva palmera y el encendido granado, junto a la poderosa higuera, cubre el valle y el collado. Allí el robusto nogal, allí el nóvalo amarillo, allí el sombrío moral, crecen al pie del castillo. Y olmo tengo en mi alameda que hasta los cielos levanta, y en redes de plata y seda tengo pájaros que cantan.

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MADRE PATRIA Sultanas serás si quieres, que desiertos mis salones está mi tierra sin mujeres, y mis oídos sin canciones. Yo te daré blancas peinas para que adorne tu frente, mas blancas que las espumas de nuestros mares de oriente. Y perlas para el cabello, y baños para el calor, y collares para el pelo, y para tus labios amor. ¿ Qué me valen tus riquezas? respondiole la cristiana, Si me quitas a mis padres, mis amigos y mis damas. Vuélveme moro a mis padres y a mi patria, que mis torres de León, valen mas que tu Granada, Y escúchala en paz el moro, y manoseando su barba, dijo como quien medita en su mejilla una lágrima: “Si tus jardines mejores, que nuestros castillos son, y son más bellas tus flores por ser tuyas en León”. Si tu diste tus amores, algunos de tus guerreros, ¡ Moro del edén no llores¡ Vete con tus caballeros, y dándole sus caballos y la mitad de sus guardia, el capitán de los moros volvió en silencio la espalda.

Oigo patria una aflicción, y escucho el triste concierto que forma tocando a muerto, la campana y el cañón. Sobre tu invicto pendón, miro flotantes crespones, y oigo alzarse tres regiones en estrofas funerarias. De la iglesia las plegarias, y de arte las canciones. lloras porque te insultaron, porque su amor te ofrecieron. Y a ti que siempre temieron, porque tu gloría admiraron... A ti por quien se inclinaron, los mundos de zona a zona. A ti soberbia patrona, que libre de extraño yugo, no has tenido más verdugo, que el peso de tu corona. De quien la mente mía, sus alas batido lleva, y allí un sepulcro se eleva, cantando tu valentía. Sobre la cumbre bravía el sol indio tona sola, y hasta el África que inmola tus hijos en torpe guerra, que no hay un puñado de tierra sin una tumba Española. Templó el orbe a tus regiones, y de la espanta esfera sujetaron los guerreros las garras de tus leones. Nadie humilló tu victoria, no cabe el rayo fecundo, ni en los ámbitos del mundo, ni en el libro de la historia. Siempre en lucha desigual, cantando tu invicta arrogancia: Sagunto, Cádiz, Numancia, Zaragoza, y en San Marcial,

en tu seno virginal no arraigan extraños fueros. Porque indómitos y fieros suelen ser tus caballos con los cetros extranjeros, y aún habló en la tierra un hombre, que osó profanar tu manto, y espacio falta a mi canto, para maldecir su nombre. Sin que el recuerdo me asombre, con ansia abriré la historia, presta lujo mi memoria que el mundo y la patria a coro. Oirá el higüero sonoro, de tus recuerdos de gloría, y aquel genio de ambición, que de delirio profundo, cantando guerra hizo al mundo sepulcro de su nación, sino el íbero león. Que ansiado a España regí, no llego a percibir el brío de orgullo y poder que no pudo esclavo ser, pueblo que sabe morir. ¡Guerra¡ repitió en el altar el sacerdote con ira, ¡Guerra¡ repitió la lira con indómito cantar, ¡Guerra¡ cuando el despertar que al mundo aterra, gritando venganza y guerra. La madre con patrio ardor ansiosa salta del lecho, y el niño bebe en su pecho, odio a muerte al invasor. La madre mata su amor, y cuando colmado ya está, grita a su hijo que se va, lánzate al combate y muere, tu madre te vengará.

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PENAS Y ALEGRÍAS DEL AMOR Mira como se me pone la piel, cada vez que te recuerdo, por la garganta me sube un nudo de sangre fresco, de la herida que atraviesa de parte a parte mi cuerpo. Tengo clavos en mis manos y cuchillos en mis dedos, y en mis sienes una corona hechas de alfileres negros. Mira como se me pone la piel cada vez que te recuerdo, de que soy un hombre casado y sin embargo te quiero. Entre tu casa y mi casa hay un muro de silencio, de ortigas y de chumberas, de cal, arenas y vientos. De madreselvas oscuras y de vidrios en acecho. Un muro para que nunca lo pueda saltar el pueblo, que está rondando la llave que guarda nuestro secreto. Yo sé bien que tú me quieres y tú sabes que te quiero, y lo sabemos los dos y nadie puede saberlo. Nuestro amor es agonía, luto, llanto, angustia y miedo. Salgo de mi casa al campo, solo con mis pensamientos, para acariciar a solas la tela de aquel pañuelo

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que se te cayó un domingo cuando venías del pueblo, y que no te he dicho nunca mi vida que yo lo tengo. Y lo estrujo entre mis manos lo mismo que un limón nuevo, y miro sus iniciales y las repito en silencio, para que en el campo sepan que yo te estoy queriendo. Allá por la plaza nueva, vida, no vuelvas a hacerlo, ve a besar a mi hijo, a mi hijo el más pequeño, y como no lo besarías, ¡Ay Virgen de de los Remedios, que fue la primera vez que tú me diste un beso. Salí corriendo a mi casa, alcé a mi niño del suelo, y sin que nadie me viera, como un ladrón en acecho, en su cara de amapola, ¡Mordió mi boca tu beso! Mira, pase lo que pase, aunque se hunda el firmamento, aunque la tierra se abra, aunque sabiéndolo todo el pueblo, y pongan nuestra bandera de amor en los cuatro vientos, sígueme queriendo así, tormentos de mis tormento. ¡AY ALEGRIA, ALEGRIA, QUERERTE COMO TE QUIERO

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EL BESO

AL BESAR POR VEZ PRIMERA

Dicen que el besar es pecado, y yo digo, que ¿Por qué? yo no creo que se peque, cuando se besa con fe. ¿Tu no besas a tus hermanos? y tú los dejas besar, si lo dejas que te besen, ¿Para qué los dejas pecar? ¿No tuviste una madre? dime si también pecó, cuando con mucho cariño, en sus brazos te besó. ¿Tú, no besas a Jesucristo?, Dime si es pecado también, cuando con fe religiosa, vas a besarle los pies, Dime niña del tormento, la que el pecado lo ignora, el beso nace en el alma, y se mece en el corazón. Eso, preguntó una pecadora, que se acercó a confesar. Padre, ¿Es pecado besar?. Y el padre que es un bendito, con cara de inteligente, le responde: ¿A quién pretendes besar? ¿A tu padre? o ¿A tu hermano? No padre, a un chico muy galante, que se ha prendado de mí. ¿Tú lo quieres? De amor muero. ¿Él te quiere? Me lo ha jurado. Pues si es amor verdadero: bésalo que no es pecado.

AUTOR : Miguel Jiménez Castro Por la tierra pasa el mal, y por la carretera, el viento de todo aquel movimiento, que encierra en el fondo amor. De aquel jugo no hay licor, y si compararlo quiere, en el cáliz, de una flor, de una boca, a otra boca. Produce un breve sonido, que el alma, la vuelve loca, después del sabor provoca, un deleite embriagador. Ha dejado tal dulzor, al pasar por nuestros labios, que hace olvidar los agravios, si los hay en el amor. Al besar por vez primera, sentirás niña hechicera, en toda tu alma entera, la más grata embriaguez. Te advierto que el besar, es vicio de mal corregir, porque una vez de empezar, es forzoso, reincidir. Me pides niña preciosa, que te describa de un beso: el sabor y que haga de eso, una poesía preciosa. ¿Pero acaso crees mi moza, que eso es tan fácil de hacer? ¿Y como darte a entender, de un beso la dulce esencia?. Espera que en tu existencia, nazca amor sin contrapeso, y todo el sabor de un beso, lo sabrás por experiencia. Ya sé que esta verdad, no te deja satisfecha, porque en claridad, que sepa, tú quieres, más claridad. Transijo tu terquedad, por lo bonita, que eres, y puesto que tú lo quieres, algo te habré de decir, porque en lo de conseguir, siempre ganan las mujeres.

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UN ACTO EN LA GUERRA Esta pierna que me falta, me la he dejado en el Ébro. ¡En el Ebro, sí! Luchando con corazón, me la hizo mil pedazos, el proyectil de un cañón. Una tarde alegre fue, triste se encontraba el cielo, el sol en el horizonte, se iba perdiendo, perdiendo. Tan solamente la luna, el camino le alumbraba, aquel pobre desgraciado, que para su casa marchaba. Él sólo se resignaba, él cosas tristes, decía, cuando me vea mi morena, con esta pierna perdida. Si yo he perdido esta pierna, conforme tengo que estar, Cuantos pobres habrán perdido la vida y el capital. Como Dios le dio a entender, a su casa se acercó, apoyando sus dos muletas, a su madre se abrazó - No llores madre querida, no tengas que sufrir nada, porque madre estoy lo mismo, que cuando salí de casa. Al fin pudo consolar, a aquella madre tan buena, y a su hijo le contaba, las faenas de Carmela. -Que no vayas a su casa, que no la mires ni siquiera -Madre querida del alma, yo tengo que ir a verla, yo tengo que saludarla, Si es que me ha aborrecido, yo le tengo que contar, todo lo que he padecido Y sin decir más palabras, en silencio se quedó, cogiendo sus dos muletas, a ver la novia marchó. Aquel pobre desgraciado, que por la acera bajabas,

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LAS LENGUAS DE DOBLE FILO el golpe de sus muletas, por la calle resonaba. Y en su rostro iba dejando, las señales de una bota señales de dos muletas. las señas de una derrota. Las mozas al oírlo, abrieron un poco la puerta mientras tanto aquel soldado, a su puerta se acercó: - Muy buenas tardes Carmela. ella no le contesto. -Ya veo mujer traidora, que son vanas tus promesas. ya se ha cumplido Carmela, el plazo de los tres años. ¿Ya no te acuerdas hermosa, el beso que te di en mi despedida, y llorando me decías, que aunque me fuera mil veces, tú nunca me olvidarías? ¿Ya no te acuerdas que para darme consuelo, decías que me querías, cuando estaba sano y bueno? Yo contento y ligero, a la guerra me marché, donde serví de artillero, donde tres años luché. La sangre que derramé, orgulloso en aquel momento. La sangre que derramé, se ha convertido en veneno, veneno que a mi me pesa, de haberlo derramado. Quisiera en aquel momento, haber muerto envenenado, y no volver a tu vera, para verme despreciado. - Vete de mi vera Carmela, porque, a mi vera me estorbas, las mujeres que comercian, las comparo con las bombas Adiós para siempre, adiós, quédate con Dios Carmela, que te has portado conmigo, mucho peor que la guerra.

No te deseo mas castigo, que estés, durmiendo con otro, y estés soñando, conmigo. Me lo dijeron ayer, las lenguas de doble filo, que te casaste hace un mes, y yo me quedé tan tranquila. Otro cualquiera en mi caso, se hubiese echado a llorar, y yo cruzándome de brazos, dije que me daba igual. Nada de pegarme un tiro, ni enredarme en maldiciones, ni apedrear con suspiros, los vidrios de tus balcones. ¿Te has casado? Buena suerte. Vive cien años contenta, y a la hora de la muerte, Dios no te lo tenga en cuenta. Porque sin ser tu marido ni tu novio ni tu amante, soy el que mas te ha querido, con eso, tengo bastante. ¿Qué tiene el niño Malena? anda como transtornao, le encuentro cara de pena, y el colorcillo robao: Que ya no juega a la trompa, ni tira piedras al río, ni se destroza la ropa, subiéndose a coger nios. ¿No te parece a ti extraño, y también una cosa rara, que un chaval de doce años, tenga tan triste la cara?. Mira que soy perro viejo, y tú estás demasiao tranquila. ¿Quieres que te dé un consejo?. Vigila, mujer, vigila. y fueron dos centinelas, los ojillos de mi mare, Cuando sale de la escuela, se va por los olivares. ¿Y qué busca allí?. A una niña, José Miguel, no le riñas, que está empezando a querer. Y mi padre lío un pitillo,

se enteró bien de tu nombre, y te compro unos zarcillos, a mi un pantalón de hombre. Yo no te dije te adoro, pero amarré en tu barcón, dos cinta de seda y oro, de mi primera comunión. Y tú, fina y orgullosa, me ofreciste en recompensa, dos cintas color de rosa, que engalanaban tus trenzas. Voy a misa, con mis primas, Bueno te veré en la ermita, y que serios nos pusimos, al darte el agua bendita. Mas luego en el campanario, cuando rompimos hablar, dice mi tía Rosario, que la cigüeña es sagrá: El colorín y la fuente, las flores, y el rocío, aquel torito valiente, que está bebiendo en el río, y aquella raja lejana, que le llaman horizonte. Todo es sagrado, tierra y cielo. porque todo, lo ha hecho Dios. ¿Qué te gusta mas? Tu pelo, que bonito te salió, tu cara, tus brazos, tus manos redonditas, y tus pies fingiendo el paso, de la paloma zurita. Con la pureza de un copo de nieve, te comparé. Te revestí de piropos, de la cabeza a los pies. A la vuelta te hice un ramo, de pitiminí precioso, y luego nos retratamos, en las agüitas del pozo. Hablando de estas pamplinas, que se inventan las criaturas, llegamos hasta la esquina, cogidos de la cintura. Y te pregunté: ¿Qué piensas?, tú dijiste, en darte un beso,

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LAS CADENAS DEL AMOR y yo sentí una vergüenza, que me caló hasta los huesos. De noche muertos de luna, nos vimos en la ventana, Mi hermanito, está en la cuna, le estoy cantando una nana: QUÍTATE DE LA ESQUINA, CHIQUILLO LOCO, QUE NI MI MÁRE TE QUIERE, NI YO TAMPOCO. Y mientras que tú cantabas, yo inocente me pensé, que la nana nos casaba, como marido y mujer. Pamplinas, y figuraciones, que se inventamos los chavales. Después la vida se impone, tanto tienes, tanto vales. por eso yo al enterarme, que llevas, un mes casada, no dije, que iba a matarte, sino que me daba igual. Ya como rico tu dueño, te vendo esta profecía, tu por la noche entre sueños,

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soñaras que me querías. Y recordarás la tarde, que mi boca te besó, y te llamaras cobarde, como te lo llamo yo. Verás como Dios te envía, un niño como una estrella, te servirá de alegría, cantarle la nana aquella: QUITATE DE LA ESQUINA CHIQUILLO LOCO, QUE NI MI MÁRE TE QUIERE, NI YO TAMPOCO. Y verás sueña que sueña, que me morí siendo chico, y se llevó la cigüeña, mi corazón en su pico. Pensarás... no es cierto nada, y que lo estoy soñando, pero allá en la madrugada, te despertarás llorando: Por el que no es tu marido, ni tu novio, ni tu amante, sino quien mas te ha querido, con eso tengo bastante.

Las cadenas del amor, son unas largas cadenas, y yo como valeroso, no me atrevo a romperlas. Si tratas desconocida, porque no me escribes carta, si es por falta de papel, o la voluntad te falta. Si es por falta de papel, me lo mandas a decir, te mando la pluma y tinta, y papel para escribir. La pluma será los cabellos de mi amor, la tinta será mi sangre para escribirle a mi amante. Al pasar por los portales, mala noticia me han dao, que me han dicho, que te casas, y que a mí me has olvidao. Me han dicho que te casas, yo no lo puedo creer, te doy la enhorabuena, y que sea para bien. Primera amonestación yo le di mi juramento, para que a nadie le dieras, palabras de casamiento. Segunda amonestación, bajo el pulpito te dieron la primera puñalá, que en el corazón me dieron. Tercera amonestación, al pasar por San Vicente, a decirle al sacristán, que puede tocar a muerte. Cuando tu estés en tu cama, gozando de tu hermosura, a mi me estarán echando, de pies en la sepultura. Cuando pasen por mi tumba, hay un clavel encarnao, con un letrero que dice, aquí esta tu enamorao. No ha muerto de calenturas, ni del mal que Dios le ha dao, que ha muerto de mal de amores, que es un mal muy delicao

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SAINETES

CURRO Y MATILDE CURRO- Buenas tardes Matilde ¿Qué te pasa que tan triste estas? MATILDE- Pues, nada que como no venías mi corazón lo sentía, y estaba sobresaltá. CURRO- ¿Por eso estás tan triste, hermosa rosa temprana? Pues siéntate, que te contaré por lo que fue mi tardanza: Cuando a Villanueva entré, mi amigo, a convidar me llamarón, me cogí una garana que me duró hasta la mañana. MATILDE- ¿ Y te acordabas de mí?. CURRO- ¡Sí, guasona! Más que de tu bella persona. Bueno, adiós Matilde, hasta la noche, que venga a la reja. Que me digas, si me quieres, bien o mal. MATILDE- ¡Ay cielo, que triste quedó, cuando mi Curro se va, pero como soy mujer, no me puedo declarar. y ahora que no está el, me declaro con llorar. Parece que siento pasos. si mi Currillo será. Me limpiaré lo ojos, pa que no me vea llorar. CURRO- Buenas noches Matilde, Me he enterao que quiere casarte tu padre, a gusto de tu mamá. Si con D. Juan te casaras,

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SAINETES

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EL SOLTERÓN me volvería una fiera, a tu padre degollara, contigo lo mismo hiciera. MATILDE- Gasta paciencia Currillo, por Dios y la Soledad. ¿Tú no sabes que he nacido, pa ser tuya y nada más? Al no casarme contigo, con nadie me he de casar. CURRO- ¡Ole tu boca chulona! ¡Ole tu boca salá! Anda dile a tus padres, que nos vamos a casar, si tu padre no da el sí, la Iglesia nos lo dará, y a casa de una tía mía, te llevo depositá. MATILDE- Mucho te quiero, Currillo, mucho sin comparación, pero no arrolles la ley, que Jesucristo mandó. CANCIÓN Tengo un mantón de Manila, los cabos me llegan al suelo, cada vez que me lo pongo, me sale un novio torero. Los grandes me hacen palmas, los chicos tiran flores, y yo las voy recogiendo, con mi mantón de colores.

Esto era un solterón , le llamaban, el tío Carajo, él se quería casar, y ya contaba cien años. Una tarde en el paseo, se encuentra con la Matraca, una vieja muy revieja, que de los cien ya pasaba. CARAJO—Dios te guarde, tía Matraca, a mi me llaman, Carajo yo te quiero con locura, y nosotros nos casamos. MATRACA: Pues no lo has pensado mal, yo buscando novio estaba, y por eso, te camelo carajillo,de mi alma. NARRADOR: Y este par de totolitos se ponen en relaciones, como si fueran dos novios. hablando por los balcones. Y la noche de casados, la tía Matraca observaba, y le dice al tío Carajo: MATRACA: Tú no sirves para nada, CARAJO: ¿Y tú no sabes, que mi oficio, ha sido siempre pavero? Por eso te traigo un moco, que eso es lo que yo tengo.

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EL POLIZON

LA NIÑA CIEGUECITA

(De Juanito Valderrama)

(De Juanito Valderrama)

Cuando supe que mi mare en el pueblo se moría, yo solo en tierra extraña con un dolor de agonía, me embarque con rumbo a España

La niña nació bonita, como un serafín de cielo, pero nació cieguecita, cieguecita y sin remedio. Le preguntaba a su madre, como era la luz y el sol, y los ríos y los montes, los colores, y la flor. ¡Aquel angelito ciego, todo inocente de Dios! Cuando tuvo siete años, tomaron la comunión, las niñas de su colegio, y con ellas comulgó, ¡Y aquel angelito ciego todo inocente de Dios! Cuando la sagrada forma, la niña ciega tomó, la vista vino a sus ojos, por un milagro de Dios ¡Y aquel angelito ciego todo inocente de Dios!

QUE MIRE USTED QUE MI SEÑOR CAPITÁN, QUE SE ME MUERE, LA POBRE DE MI MARE, QUISIERA PODERLA BESAR. Escondido en la bodega entre la marinería, temblaba mi corazón, cuando escuche que decía: ¡Voy buscado a un polizón! QUE MIRE USTED QUE MI SEÑOR CAPITÁN... Déjame de polizón, pa que acabe mi sufrir, yo se lo pido por Dios, que la quiero ver morir. QUE MIRE USTED, QUE MI SEÑOR CAPITÁN……. En el barco trabajaba, sin descanso, noche y día, y al cielo yo le rezaba, para que Dios me dejara, ver a la mare mía. QUE MIRE USTED, QUE MI SEÑOR CAPITÁN…….. Cuando llegué junto al lecho donde triste se moría, alzó la frente feliz, se le acabó la agonía con un beso que le di.

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COPLAS

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CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE CANCIONES PARA EL RECUERDO

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CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE

CANCION DE SANTA RITA

PUES DE DIOS SOIS ESTIMADA, DE IMPOSIBLE PROTECTORA, SEDNOS NUESTRA INTERCESORA, RITA BIEN AVENTURADA.

SEDNOS NUETRA INTERCESORA, RITA BIEN AVENTURADA. Por más que lo resististe, por vuestros padres os casaste, y en el marido encontraste, martirio, en que padeciste, fuiste de paciencia armada, de sus furias triunfadora. SEDNOS NUESTRA INTERCESORA RITA BIEN AVENTURADA. Cuando falto vuestro esposo, y dos hijos se os murieron, las ansias os renacieron, del estado religioso, de angustiaos en la morada, querías ser habitadora. SEDNOS NUESTRA INTERCESORA, RITA BIEN AVENTURADA. Aunque por viuda os negaron, aquel hábito divino, Juan, Nicolás y Agustino, en el convento os entregaron, si era imposible la e r vos Dios la mejora. SEDNOS NUESTRA INTERCESORA, RITA BIEN AVENTURADA. Cristo en la frente una espina, de su corona os fijó, y con ello os coronó, reina y esposa divina, y pues vais tan señalada, de este esposo imitadora. 52

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CANCION DE SAN ISIDRO

Vuestro nacimiento y nombre, por un ángel fue advertido, porque antes de haber nacido, ya vuestra grandeza asombre, y pues tanto a Dios agrada, vuestro nombre y le enamorado.

El día que os bautizaron, de vuestra boca advirtieron, que abejas blancas salieron donde un enjambre formaron en él se miró cifrada. la dulzura que atesora.

CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE

SEDNOS NUESTRA INTERCESORA, RITA BIEN AVENTURADA. Dios os quiso alimentar, Tres años con forma expresa, Sin llegaron a otra mesa, Que a la mesa del altar Y pues sois tan regalada. Del dulce pan que enamora. SEDNOS NUESTRA INTECESORA, RITA BIEN AVENTURADA.

San Isidro el labrador labraba su fincaría y cuando, salía arar. era cerca mediodía. Los gañanes de alrededor, todos le tenían envidia de ver que con su trabajo, comparación no tenía. Han ido a casa del amo, y han ido a disponer, a decirle que el criado, no cumple con su deber. Si mi criado no labra, ni cumple con su deber, a usted no le pido cuentas, para yo pagarle a el. Ha cogido su caballo. para la finca se marchaba, tenía que pasar el río, como siempre acostumbraba. A lo lejos vio salir, tres pares de bueyes blancos, y los que iban con ellos, todos vestidos de blanco.

Buenas tardes tenga Isidro, buenas tardes tenga mi amo, dime quien te ayuda a ti, para hacer tu trabajo, A mi no me ayuda nadie, para hacer mi trabajo, tan solo el Rey de los cielos, que me da salud y amparo. Estando en estas palabras, Isidro ha salio arando, y vieron salir tres surcos, no habiendo más que un arado. Ha cogido su caballo, de alegría va llorando, a decirle a su señora, que su criado era santo. Al otro da de mañana, las campanas repicando, que bajen por San Isidro, porque lo manda su amo. Como tantos lo queremos, y tanto lo veneramos, por eso se hace la fiesta el día quince de Mayo.

De sepulcro son despojaos, Vuestra perfeccione bellas, Y logramos ver estrellas, Si os hacen abrir los ojos, La vida queda encalmada, Donde el arca os atesora SEDNOS NUESTRA INTERCESORA, RITA BIEN AVENTURADA. Cosuelo en vuestra piedades, Encuentran los corazones En tristezas y aflicciones En partos y enfermedades, Su intención mira lograda, Quien os invoca y adora. En el amor del esposo, Haz que todos te imitemos, Y que en el perseveremos, Hasta gozarle glorioso, Que el alma sea librada, Del pecado y su rémora. SEDNOS NUESTRA INTERCESORA RITA BIEN AVENTURADA. Centro de Día de Mayores de Luque

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CANCIÓN DE LA VIRGEN DE LAS MERCEDES Madre de la Merced, Reina de nuestro corazón, venimos a tus pies, para implorar tu protección Madre Celestial recibe entero mi corazón que quiere morar sobre tu pecho sobre tu pecho lleno de amor. Acuérdate de mí. Madre de alma, mírame, y tenme junto a ti, porque sino me perderé. Madre Celestial, recibe entero mi corazón, vela sin cesar por nuestra amada congregación.

CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE

CANCIÓN DE SAN JOSÉ Viendo encinta a su esposa, esposa, José se aflige, José se aflige, pero le dice el cielo, se regocije, pero le dice al cielo, se regocije, se regocije. José glorioso, José glorioso, glorioso, ampara a quien contempla, ampara a quien contempla, tu pena y gozo. Camino de Belén, Belén, José con pena, José con pena, pero nacido el niño, José se alegra, pero nacido el niño, José se alegra, José se alegra. José glorioso, José glorioso... Circuncidado el niño, el niño, José padece, José padece, pero le alegra el nombre, que se merece, pero le alegra el nombre, que se merece, que se merece.

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HIMNO A LA VIRGEN DEL ROSARÍO, PATRONA DE LUQUE Viva la Virgen Nuestra Patrona, Que en nuestro pecho, tiene su altar, Y reine siempre triunfante cristo, En nuestro pueblo noble y leal. Siempre seremos tus fieles hijos, Nuestra abogada siempre serás, Y con tu ayuda perpetua siempre, Derrotaremos a Satanás. Viva la Virgen Nuestra Patrona... Siempre seremos tus fieles hijos, Tal es el grito de nuestra fe, Responde ¡Oh Virgen! desde tu trono, Yo Vuestra Madre siempre seré. Viva la Virgen Nuestra Patrona...

José glorioso, José glorioso... En su huida a Egipto, Egipto. José con miedo, José con miedo, pero fue consolado en aquel reino, pero fue consolado en aquel reino, en aquel reino. José glorioso, José glorioso...

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CANTOS A LA VIRGEN DE LOS DOLORES Si las dulces palabras del Ángel, inundaron de gozo tu alma, de un profeta la fúnebre calma, te predijo que aquel que en tus brazos. presentabas al templo ¡Oh piadosa! en la cima del gólgota umbroso, le verías morir por su amor. Por tus dolores ten compasión, pide y alcanza nuestro perdón, nuestro perdón, nuestro perdón, Si los Reyes de Oriente adoraron al Infante Dios hombre en pobreza, un tirano con odio y vileza, degollar los infantes mandó, y del fiel corazón traspasado, las maternas delicias ostentas, con el hijo que al mundo salvó. Por tus dolores ten compasión, Quien esa mujer que angustiada, vacilante y llorosa camina, quien esa mujer tan divina, quien esa mujer celestial. esa triste mujer es maría, que en el templo perdió a su hijo amado, y en su rostro divino ha grabado, la congoja su huella fatal. Por tus dolores ten compasión, Si en el Santo lugar le perdiste, a tu amado Jesús hayas luego, y conoces la voz que con fuego, entre doctos sapiente orgullo. Si en la calle amargura ¡Oh María¡, te lo encuentras sangriento. agobiado, con el peso del leño cargado , de ese leño fatal espiró.

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PLEGARÍAS A LA VIRGEN DEL CARMEN

Del discípulo amado en compaña, abatida a tu hijo seguiste, y de agudo dolor presa fuiste cuando al Monte Calvario llegó,. Allí el eco repite en sonidos, de clarines, martillos y voces, se suspenden ¡Oh Madre! Entonces, al Dios justo clavado se vio. Por tus dolores ten compasión.

Hoy quiero cantarte, Señora del Carmelo, Reina del cielo, Madre Celestial. Yo soy una alondra, que he puesto en ti su nido, viendo tu hermosura, te reza su cantar. Luz de la mañana, María templo y pura, mar de toda Gracia, fuego, nieve y flor. Puerta siempre abierta, rosa sin espinas , yo te doy mi vida, soy tu trovador. Salve surco abierto, donde Dios siembra, te eligió por Madre, misma el Redentor. Salve esclava y Reina, Virgen Nazarena, casa, paz y abrazo, para el pecador. Luz de la mañana, María, templo y pura, mar de toda Gracia, fuego, nieve y flor. Puerta siempre abierta, rosa sin espinas, yo te doy mi vida, soy tu trovador

Por tus dolores ten compasión,

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CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE

y a las tres personas de la Trinidad. Por tu puerta si pasa la Aurora invoca a la virgen con gran devoción, que esta madre es nuestro tesoro y debes llevarla en tu corazón. ¡Los ángeles son! Los que cantan en el cielo en coro cantemos nosotros en su imitación.

CANTOS A NTRA. SRA. DE LA AURORA (Recopilados por los Hermanos de la Aurora de Luque) A la Aurora venimos buscando que dicen que anda por este lugar recogiendo rosas y jazmines para los hermanos que al rosario van ¡Devotos llegad! A rezar el rosario a la Aurora si el reino del cielo queréis alcanzar,

En la noche tranquila y serena cantan los hermanos con gran devoción, unas coplas que llegan al cielo llamando a la Virgen la madre de Dios. ¡Oh, que sensación! Si despiertas llegara a tus oídos la orquesta florida de la salvación.

Si a tu puerta llega una campana ni te llama ella, ni te llamo yo; que te llama la boca de un ángel pa que te levantes a alabar a Dios. ¡Los ángeles son! los que cantan en el cielo en coro, Cantemos nosotros en su imitación. Nuestro Padre Jesús Nazareno del cielo y la tierra Rey universal si hay un alma que te haya ofendido pide que sus culpas sean perdonás ¡Vamos a alabar! a la Madre, al Padre, al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Es la misa la cosa más grande que no tengo pluma con que numerar, que tan solo con cinco palabras queda convertida y puesta en el altar. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. De rodillas postrada Maria, mirando a los cielos comenzó a decir: “yo Señor soy vuestra humilde esclava, la voluntad vuestra se ejecuta en mí ¡Virgen recibid! El anuncio que el ángel nos trajo cuando fue enviado del reino feliz. Dios te salve, llena eres de gracia, contigo María se encuentra el Señor. Entre todas tú eres bendita y bendito el fruto de tu bendición. ¡Oh! Madre de Dios. Por nosotros pecadores ruega ahora y en la hora de la expiración. Si superas la entrada que tuvo el rey de los cielos en Jerusalén. que no quiso coche de caballos solo un borriquito que prestado fue.

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CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE

Sobre un trono de nubes sentada la divina Aurora y a los pies el Sol, rodeada de angelitos bellos que alegres sujetan la madre de Dios. ¡Oh, madre de Dios! Por nosotros pecadores ruega ahora y en la hora de la expiración.

¡Vamos a coger! El clavel encarnado, la rosa, la flor del romero y el verde laurel. De que sirve que trabajes tanto por bienes, terrenos que han de acabar. pues por mucho que los disfrutemos a la sepultura vendrán a parar. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre, al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Yo quisiera que me respondieran esos que al rosario no quieren venir, si a esta puerta bendita no llegan a que puerta abierta habrán de acudir. ¡Devotos venir! A rezarle el rosario a la Aurora si el reino del cielo queréis conseguir. Los hermanos de la Aurora tocan, campanas de plata, pitos de marfil, y la virgen se asoma a los cielos por ver sus devotos por la calle ir. ¡Devotos venir! A rezar el rosario a la Aurora y a las tres personas del reino feliz. Dios te guarde divina princesa ya hemos dado vueltas por todo el lugar, dando voces y despertando al pueblo para que tu rosario vengan a rezar. ¡Vamos a alabar! A la madre, al Padre y al Hijo

El rosario que anuncia la Aurora va dando la vuelta por todo el lugar. y María vuelve la cabeza Jesús que belleza de hermanos que van. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Al balcón de los cielos se asoma la Aurora divina, nuestra Emperatriz, los luceros según los profetas corriendo con Ella todos quieren ir. ¡Virgen recibid! El anuncio que el ángel nos trajo cuando fue enviado del reino feliz. Sacerdote que celebras misa con cinco palabras de consagración, las pronuncias con tanta hermosura que a tus manos baja nuestro redentor. ¡Oh, que sensación! Que por chica que sea la hostia tiene cuerpo y sangre de nuestro Señor. Es María la mujer más pura que en el cielo pudo parir y criar. Azucenas, jazmines, violetas, la flor del romero y rosa encarná ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. En el cielo no hay santo ni santa que tengan la insignia de Bartolomé, porque lleva el cuchillo en la mano, el pellejo al hombro y el diablo a los pies.

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¡Eso es de creer! Que este santo fue martirizado entre los infieles por salvar la fe. En la cueva de la penitencia Santa Rosalia su pelo cortó, y el demonio le daba combate y ella se consuela con llamar a Dios. ¡Los ángeles son! Los que cantan en el cielo en coro cantemos nosotros en su imitación. En el cielo al rayar el día los ángeles todos cantan sin cesar, por que viene la madre de Cristo Aurora, divina, madre celestial. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad Hermanitos venid con silencio porque a Jesucristo lo van a enclavar, las estrellas se visten de luto el sol y la luna se quieren eclipsar. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Un devoto por ir al rosario por una ventana se quiso arrojar, y la Virgen Maria le dice detente devoto, por la puerta sal. ¡Devotos llegad! A rezarle el rosario a la Aurora si el reino del cielo queréis alcanzar. Un devoto por ir al rosario cincuenta buñuelos se quiso comer y la Virgen María le dice detente devoto, mójalos en miel. ¡Vamos a coger! El clavel encarnado, la rosa, la flor del romero y el verde laurel. Es Maria la caña del trigo, San José la espiga y el Niño la flor, y el Espiritu Santo es el grano donde va encerrado por obra de Dios. ¡Oh, que sensación! Que por chica que sea la ostia tiene cuerpo y sangre de nuestro Señor. El demonio rajó los papeles de un pleito que tuvo y no pudo vencer, de quitarle el rosario a la Aurora cosa que en el mundo no ha podido ser. ¡Vamos a coger! El clavel encarnado, la rosa, la flor del romero y el verde laurel. Acudid a rezar el rosario

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cristianos devotos que han dado las tres. Pieza recéis del rocío suave del alba risueña del amanecer. ¡Vamos a coger! El clavel encarnado, la rosa, la flor del romero y el verde laurel. Al rosario de la Aurora tocan con pitos de plata y lenguas de marfil, él que quiera coger estas rosas véngase conmigo que voy al jardín. ¡Cristianos venid! ¡Devotos llegad! A rezarle el rosario a la Aurora si el reino del cielo queréis alcanzar. Tus hermanos soberana Aurora por estos devotos te pedimos ya, los ampares en vida y en muerte por esta limosna que por ti nos dan. ¡Vamos a alabar! A la madre. al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Un hermano le dice a otro hermano vamos al rosario yo no quiero ir, por que tengo la mesita puesta el vino en el cáliz para consumir. ¡Virgen recibid! El anuncio que el ángel nos trajo cuando fue enviado del reino feliz. Hermanitos venid en silencio por que a Jesucristo lo van a enclavar. y a los golpes del duro martillo le tiemblan las carnes a su majestad. ¡Ven a contemplar! La pasión y la muerte de Cristo que es el mejor remedio para no pecar. Hermanito tú estás muy malito tú no te levantes vuélvete a acostar, que con cuatro hermanos que vamos ya estamos bastantes para ir a rezar. ¡Hermanos llegad! A rezarle el rosario a la Aurora si el reino del cielo queréis alcanzar. El rosario de por la mañana es para los pobres que al campo se van, porque el rico se queda acostado guardando el rocío de la madruga. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Coronada de flores y estrellas está sobre el cielo la madre de Dios dirigiendo su vista a la Tierra donde sin consuelo llora el pecador. ¡Oh, Madre de Dios! Por vosotros pecadores ruega

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CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE

ahora y en la hora de la expiración. Cuando Cristo estaba en el desierto Satanás astuto le vino a tentar y le dice si eres poderoso porque no conviertes las piedras en pan. ¡Más no tentarás! y su Dios y Señor le responde vete a los infiernos falso Satanás. Si la Aurora se viene a esta casa a un rico palacio se viene a vivir, por que dicen que dando las doce las puertas del cielo se quieren abrir. ¡Virgen recibid! El anuncio que el ángel nos trajo cuando fue enviado del reino feliz. A Jesús lo veréis en el huerto postrado en la tierra haciendo oración, por las culpas de nosotros llora y echa tanta sangre que el suelo regó. ¡Oh, que sensación! Que por chica que sea la hostia tiene cuerpo y sangre de nuestro Señor. Es Maria la barca sagrada San José la vela y el niño el timón, y el Espíritu Santo es el remo que va dirigiendo dicha embarcación. ¡Que linda ocasión! Embarcar en esa bella nave que nos lleva al puerto de la salvación. Es María la barca sagrada donde fue embarcado el niño Manuel, nueve meses lo tuvo encerrado hasta que llegaron al portal de Belén. ¡Vamos a coger! El clavel encarnado, la rosa, la flor del romero y el verde laurel.

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Aurora divina con esta canción. ¡Oh, que sensación! Si despiertas llegará a tus oídos la orquesta florida de la salvación. San Cristóbal con el pino al hombro el Niño en sus brazos se le apareció, débil Niño Jesús lo que pesas, sin duda en el agua caeremos los dos. Y Él le contestó: Desde ahora te llamas Cristóbal que así lo dispuso el Hijo de Dios. En el monte calvario sangriento en la Cruz penitente está el Redentor con los brazos abiertos pidiendo pa todo el pecado viva redención. ¡Cristo Salvador! Que quisiste ser crucificado por salvar al hombre débil pecador. Coronaron al Rey de los cielos con una corona de profanidad. Y una caña le ponen por cetro haciendo más burla de su majestad. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre, al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Es la misa la cosa más grande que no tengo pluma con que numerar, que con cinco palabras que dices traes a tus manos el Dios de bondad. ¡Eso es la verdad! Que por chica que sea la hostia tiene cuerpo y sangre de su majestad. Sacerdote que estás acostado

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despierta en el lecho si durmiendo estás, que te llama la Virgen Maria que la Santa misa se va a celebrar. ¡Cosa singular! Que tan sólo con cinco palabras viene a tus manos el Dios de bondad. Sacerdote que en el lecho estáis levántate pronto, te vengo a llamar. Que es la Aurora, las claras del día y tu Santa misa se va a celebrar. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre, al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Son las cuentas del Santo Rosario, balas que al demonio se le han de tirar. Y la pólvora el Ave Maria que lleva la fuerza con que le han de matar. ¡Vamos a alabar! A la Madre, al Padre y al Hijo y a las tres personas de la Trinidad. Zapatero que estas remendando de noche y de día a la luz del candil. cuando sientas pasar a la Aurora apaga la vela y échate a dormir. ¡Virgen recibid! El anuncio que el ángel nos trajo cuando fue enviado del reino feliz. Estas coplas que vamos cantando se cantaron siempre en la población, y por eso hoy las recordamos pa que no se pierda viva tradición. ¡Oh, que sensación! Si despiertas llegará a tus oídos la orquestas florida de la salvación.

Al pasar el arroyo triunfante los álamos verdes se vieron mover porque dicen que viene la Aurora repartiendo perlas al amanecer. ¡Vamos a coger! El clavel encarnado, la rosa, la flor del romero y el verde laurel. Dios te guarde azucena hermosa, Dios te guarde luna, Dios te guarde Sol, Dios te guarde Aurora divina que al mundo iluminas con tu resplandor. ¡Los ángeles son! Los que cantan en el cielo en coro, cantemos nosotros en su imitación. Hermanitos que escucháis la Aurora entre sueños dulces de viva ilusión. Os bendice la madre de Cristo,

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HINNO A LA VIRGEN DE CONSOLACIÓN Y CORREA

HIMNO A LA VIRGEN DEL ROSARIO

Letra: Francisco León

FRANCISCO LEÓN, 2008

Convento los Agustinos, de la calle Velesar, Madre de consolación y Virgen de la Correa que bien acompañada está.

La patrona de mi pueblo, es la Virgen del Rosario tiene su ermita en el cerro, donde bendice los campos. Donde bendice los campos, y también la serranía, y guarda el pueblo de Luque por la noche y por el día.

Virgen bonita Madre de Dios no nos abandones danos tu bendición. A lado de Santa Rita y el Señor de la inspiración, siendo tu tan chiquitita, y te luces como el sol. Virgen bonita... La juventud de este pueblo te sacan en procesión, por donde quiera que pasas vas causando admiración.

Para siempre en nuestra memoria

CANTOS E HIMNOS A LAS IMÁGENES DE LOS SANTOS DE LUQUE

Más te quisiera, más te amo yo, Madre mía del Rosario te llevo en el corazón. Al llegar el siete de octubre La sacan en procesión, Sus hermanas costaleras, ¡ Ay, con mucha devoción! Van por las calles de Luque, Repartiendo ilusión,

Y a las personas enfermas, Se les alegra el corazón. Más te quisiera, Más te amo yo Madre mía del Rosario Te llevo en el corazón Es la Virgen del Rosario, nuestro estandarte y guía por eso en mi escapulario. La llevo de noche y día. Todas las madre de Luque A sus hijos le presentan, Y le da sus su bendición, Más te quisiera, más te amo yo, Madre mía del Rosario Te llevo en el corazón.

Virgen bonita...

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CANCIONES PARA EL RECUERDO

ESTA CANCIÓN FUE ESCRITA EN TIEMPOS DE LA POSTGUERRA POR LOS EMIGRANTES LUQUEÑOS QUE SALIAN. SOBRE TODO A FRANCIA Y ALEMANIA.

¡SEVILLANA¡ ¡SEVILLANA¡ TIERRA DONDE YO NACÍ, POR SER MI TIERRA GITANA, LA CUNA DONDE NACÍ, LA CUNA DONDE NACÍ. SEVILLA, SEVILLA, SEVILLA, ME MUERO POR TI. Viva mi pueblo de Luque, que es un pueblo soberano, donde está el anís poyato, de esa marca embotellado. Viva Luque y los Migueles, y el lagar que han puesto nuevo, la taberna de Agustín, viva el Bar Los Caballitos, que es el rey de los toreros. Si yo tuviera dinero, como voluntad me queda, con mi caballo torero y mi traje de brillantes, correría el mundo entero. ¡AY LUQUEÑOS, AY LUQUEÑOS¡

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(Canción de los años 50 compuesta por Miguel “ el de Amalia” y Frasquito “el espejeño” en el cortijo de Pavo Reales, cuando llovía muchos días seguidos y no podían salir a trabajar)

Y NO PARA DE LLOVER

MI TIERRA LEJANA El río Guadalquivir, bautízá con manzanilla, conocemos a una niña, que le llaman en Sevilla. La gitanilla que adoro tiene la cara morena, porque el sol se la quemó, igual que la Macarena, esa Virgen que es tan buena, que tanto la quiero yo.

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CANCIONES PARA EL RECUERDO

TIERRA DONDE YO NACÍ, POR SER MI TIERRA LEJANA, EN ELLA QUIERO MORIR, LUQUEÑO, LUQUEÑO, LUQUEÑO, LUQUEÑO, ME MUERO POR TI. Calle Velesar hermosa, la mejor del mundo entero, donde tengo yo a mi novia, a mi padre y a mi madre, mi familia la que quiero. Si yo tuviera dinero, como voluntad me queda, con mi caballo torero y mi traje de brillantes, correría el mundo entero. Cale Velesar hermosa, con que pena me retiro, las paredes me conocen, y tú no me has conocido. Si yo tuviera dinero, como voluntad me queda, con mi caballo torero, y mi traje de brillantes, correría el mundo entero.

Son las dos de la mañana y no para de llover, y la juerga de mañana ya la vamos a tener. Como esto siga así cuatro o cinco días más las quijás en una percha vamos a tener que colgar. Y SI SIGUE ASÍ NO MARCHAMOS MAL NOS HARTAMOS DE COMER Y SIN TRABAJAR Ahí, que a gusto se está así, comiendo y sin trabajar, pero las cosas de aquí como esto siga así las vamos a pintar. Yo quisiera trabajar, madre mía,

para ganar los erentes siquiera, pero aquí sin trabajar, pero aquí sin trabajar nos vamos a comer las perras que ganemos esta quincena. Yo no puedo resistir esta vida que me llevo, por que si yo como aquí, a Luque no van dineros. Y la pobre mi mujer y también mis pequeñuelos, se quedarán sin comer por que no mando dineros. Yo me tiraba a robar aunque fuera en los habares pero lo que siento yo que la Guardia Civil se emplee en mi costillares.

¡AY LUQUEÑOS, AY LUQUEÑOS¡ TIRRA DONDE YO NACÍ, POR SER MI TIERRA LEJANA, EN ELLA QUIERO MORIR, EN ELLA QUIERO MORIR, LUQUEÑO, LUQUEÑO, LUQUEÑO, LUQUEÑO ME MUERO POR TI

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CANCIONES PARA EL RECUERDO

ENTRE ALMENDROS Y OLIVARES

HOMENAJE A CRISTOBAL ORDOÑEZ

El autor de la letra y música de esta canción: FRANCISCO LEÓN

AUTOR DE LETRA Y MUSICA: Rafael Ordóñez 2009

ENTRE ALMENDROS Y OLIVARES, AL PIE DE LA SERRANÍA, SE ENCUENTRA LUQUE MI PUEBLO, ORGULLO DE ANDALUCÍA. Con su tajo El Algarrobo, con su Iglesia y su castillo, por donde quiera que voy, siempre te llevo conmigo. Por lejos que yo me encuentre, ¡Luque! De ti no me olvido. y ese Patín del Convento, donde den niño jugaba, de la Fuente de la Mina, agua fresquita tomaba. ENTRE ALMENDROS Y OLIVARES, AL PIE DE LA SERRANÍA, SE ENCUENTRA LUQUE MI PUEBLO, ORGULLO DE ANDALUCÍA

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CANCIONES PARA EL RECUERDO

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(el guitarrilla)

Al llegar el mes de Agosto, pa su fiesta se engalana, la plaza y ese paseo, con repique de campana. Con sus niñas tan bonitas, y esas señoras tan guapas, que alegran los corazones, por donde quieran que pasan. ENTRE ALMENDROS Y OLIVARES, AL PIE DE LA SERRANÍA, SE ENCUENTRA, LUQUE MI PUEBLO ORGULLO DE ANDALUCÍA. Bartolomé tu Patrón, desde el cielo nos bendiga, y nos dé salud todos, para que estas fiestas sigan.

Tengo un amigo en mi pueblo que toca de maravilla tiene por nombre Cristóbal, y de apodo el guitarrilla. Lo mismo toca un fandango un pasodoble que un vals, la rumba, las sevillanas, la llenca y el chachachá. Así es, así es, así es, así es, así es. Así es, así es, así es, así es, así es. No ha conocido academia, partitura ni profesor, él siempre toca de oído, por su arte y su pasión. Pudo haber llegado alto, si lo coge un manager, y lo sube a un escenario,

para darlo a conocer. Así es, así es, así es, así es, así es. Así es, así es, así es, así es, así es. Es un artista tocando, la bandurria y el laúd, con esos dos instrumentos, a donde quiera que toca, se quedan todos contentos y por eso sus amigos, lo vamos a homenajear, catándole esta coplilla, para siempre recordar. a Cristóbal “el guitarrilla” Así es, así es, así es, así es, así es. Así es, así es, así es así es, así es. Así es, así es, así es, así es, así es.

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Socios del centro que han colaborado en la elaboración de este libro, aportando: Romances, canciones, poesías, temas propios y fotos.

Y DEL PUEBLO DE LUQUE TAMBIEN CANCIÓN ADAPTADA, PRESENTACIÓN PARA EL CARNAVAL 2009 LETRA: Eulalia Molina Jiménez. SOY CORDOBÉS, DE LA TIERRA DE JULIO ROMERO, EL PINTOR DE LA MUSA GITANA, CORDOBA SULTA, CUANTO TE QUIERO. SOY CORDOBÉS, Y DEL PUEBLO DE LUQUE TAMBIÉN. ESTE PUEBLO TAN CHIQUITO TAN LINDO Y BONITO, DONDE VIVE USTED. Carretera de Granada, y lindando con Jaén, Luque este pueblo se llama a los pies de un gran tajo allí lo podrás tú ver. Sus hombres son gallardones, sus mujeres guapetonas. somos gente muy sencilla y si te pasas por Luque no te vayas a Sevilla, SOY CORDOBÉS, DE LA TIERRA DE JULIO ROMERO, EL PINTOR DE LA MUSA GITANA, CORDOBA SULTANA, CUANTO TE QUIERO. SOY CORDOBÉS, Y DEL PUEBLO DE LUQUE TAMBIÉN, ESTE PUEBLO TAN CHIQUITO TAN LINDO Y BONITO, DONDE VIVE USTED. Somos gente muy alegre, y cantamos sin cesar, viejas coplas, tradiciones que no se pueden acabar. Igual somos romanceros, que cantamos villancicos, a los santos y difuntos, cantamos en los carnavales y en misa cualquier Domingo.

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CANCIONES PARA EL RECUERDO

SOY CORDOBÉS, DE LA TIERRA DE JULIO ROMERO, EL PINTOR DE LA MUSA GITANA, CORDOBA SULTANA, CUANTO TE QUIERO SOY CORDOBÉS,...

SIERRA FARAGO ORTIZ CONSUELO OLMEDO MARÍN JUAN MORALES JURADO ROSARIO CARRILLO MOLINA JUAN ORTIZ ARREBOLA FILOMENA ORDÓÑEZ SERRANO FRANCISCO ORTIZ LÓPEZ FRANCISCO LEÓN JIMÉNEZ JOSÉ ORTIZ HIGUERAS CRISTOBAL ORDÓÑEZ JURADO ELISA MOLINA LÓPEZ VICENTA ORÉA LUQUE CARMEN BAENA PINTO JOSEFA RUIZ MANSILLA ELVIRA MOLINA NAVAS JOSEFA NAVAS JIMENEZ ANTONIA JIMÉNEZ MARZO PATROCINÍO JIMÉNEZ CASTRO FILOMENA RUIZ JURADO DULCE LUQUE MONTES MARÍA DE PAZ RODRÍGUEZ PAULINA ORTIZ LÓPEZ ANA JOAQUINA RABADÁN CARRILLO FELISA RABADÁN CARRILLO ROSARIO JIMÉNEZ ORDÓÑEZ CARMEN BAENA RUIZ JOSEFA VILCHES LÓPEZ ASUNCIÓN RAMÍREZ MOLINA TERESA MOLINA LÓPEZ MIGUEL JIMÉNEZ CASTRO ELENA PINTO LÓPEZ CONSUELO ORTIZ BRAVO ARACELI CAÑETE AGUILERA ISABEL ORTIZ BRAVO ANTONIO BAENA PINTO LAURA MARIN AGUILERA MANUEL MOLINA ROJANO EULALIA MOLINA JIMÉNEZ JOSÉ MANUEL DE LA ROSA PÉREZ RECORDAMOS CON MUCHO CARIÑO A: Asunción Ramírez Molina, Consuelo Ortiz Bravo, Josefa VIlches López, Josefa Ruiz Mansilla, que formaron parte del taller de recuperación de las tradiciones, y a Elena Pinto López colaboradora en recopilación de letras.

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