Story Transcript
PLAN ESPECIAL RECOLETOS-PRADO
ESTUDIO
DE
IMPACTO
AMBIENTAL
ANEXO 8
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Junio 2010
AYUNTAMIENTO DE MADRID. ÁREA DE GOBIERNO DE URBANISMO Y VIVIENDA C o o r d i n a c i ó n G e n e r a l d e P r o y e c t o s S i n g u l a r e s
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO-PALEONTOLÓGICO
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
ANEXO 8. ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD, MADRID
PROMOTOR
ÁREA DE GOBIERNO DE URBANISMO Y VIVIENDA DEL AYUNTAMIENTO DE MADRID
1
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
FICHA TÉCNICA
COORDINACIÓN
Cristóbal Rubio Millán (Licenciado en Ciencias Geológicas, especialidad Paleontología) Daniel Pérez Vicente (Licenciado en Geografía e Historia) Marta Bueno Moreno (Licenciada en Geografía e Historia)
ARQUEOLOGÍA
Daniel Ibáñez Amo (Licenciado en Historia) Eva Longarón Gracia (Licenciada en Historia) Sonia Montanel Tramulla (Licenciada en Historia) Cristóbal Rubio Millán (Licenciado en Ciencias Geológicas)
PALEONTOLOGÍA
Alberto Pablo Torres (Licenciado en Ciencias Geológicas) Rosana Perruca Remartínez (Licenciada en Ciencias Geológicas)
MAQUETACIÓN Y
Daniel Ibáñez Amo (Licenciado en Historia)
PLANOS
Daniel Castilla Ascaso (Licenciado en Ciencias Geológicas)
2
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
ÍNDICE
1.
2.
INTRODUCCIÓN 1.1 INTRODUCCIÓN
4 4
1.2 ANTECEDENTES BÁSICOS DEL PROYECTO
5
DESCRIPCIÓN BÁSICA DEL PROYECTO 2.1 DESCRIPCIÓN BÁSICA DEL PROYECTO
6 6
2.2 IMÁGENES Y PLANOS GENERALES DEL PROYECTO
7
Parte I: Estudio Arqueológico
1-95
Parte II: Estudio Paleontológico
1-41
3
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
1. INTRODUCCIÓN
1.1 INTRODUCCIÓN Se ha llevado a cabo por parte de la empresa Paleoymás, Actuaciones Museísticas y Paleontológicas S.L., la realización del estudio arqueológico y paleontológico informativo previo, con la finalidad de poder estimar y así realizar una valoración sobre el potencial arqueológico y paleontológico de la zona afectada por el anteproyecto de construcción de Aparcamientos Subterráneos para Residentes y rotación en la Plaza de la Lealtad (Aparcamiento Plaza de la Lealtad), entre la Plaza de Cánovas del Castillo y el Paseo del Prado, incluidos en el ámbito del “Plan Especial Prado - Recoletos”.
Este trabajo se realizó por encargo del Área de Gobierno de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Madrid.
Inicialmente se realizó un trabajo importante de documentación sobre los trabajos hallados en la bibliografía histórica y arqueológica y geológica y paleontología existente de la zona y con la información aportada por la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid y con respecto al estudio paleontológico por el Área de Protección del Patrimonio
4
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Arqueológico, Paleontológico y Etnográfico de la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid.
En el presente estudio se realiza una valoración arqueológica de los bienes existentes en la zona y una valoración paleontológica con los yacimientos existentes en la zona y las posibles afecciones que el anteproyecto analizado pudiese ocasionar en ellos y en su entorno.
Se ha llevado a cabo durante los meses de junio, julio y agosto de 2008 la documentación y recopilación de información existente para realizar este estudio previo informativo arqueológico e histórico y paleontológico y geológico. Dichos trabajos se detallan a continuación, con el fin de poner en conocimiento como se llevaron a cabo los trabajos y el grado de la posible afección al patrimonio arqueológico y paleontológico que puedan presentar.
1.2 ANTECEDENTES BÁSICOS DEL PROYECTO Anteriormente a la redacción del Anteproyecto de Aparcamiento Subterráneo de Residentes y rotación en la Plaza de la Lealtad (Aparcamiento Plaza de la Lealtad) incluido en el Plan Especial Prado - Recoletos y según los Artículos 228 y 229 de la Ley 12/2003 Reguladora de los Contratos de Concesión de Obras Públicas, se obligó a la Administración contratante a efectuar un Estudio de Viabilidad del mismo. Este estudio fue sustituido por un Estudio de Viabilidad Económico – Financiera y un Anteproyecto de construcción y explotación de las obras.
En virtud de todo lo anterior, la Dirección General de Proyectos Singulares, perteneciente al Área de Gobierno, de Urbanismo y Viviendas, del Excelentísimo Ayuntamiento de Madrid, contrató la Asistencia Técnica para la Redacción del anteriormente citado “Estudio de Viabilidad para la construcción de un aparcamiento subterráneo de residentes y rotación en la Plaza de la Lealtad (Aparcamiento Plaza de la Lealtad)”, entre la Plaza de Cánovas del Castillo y el Paseo del Prado, que en lo sucesivo denominaremos PAR PLAZA DE LA LEALTAD. Dicha Asistencia Técnica ha sido a adjudicada a PROINTEC, como Sociedad de Ingeniería especialista en esta clase de proyectos.
5
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2. DESCRIPCIÓN BÁSICA DEL PROYECTO
2.1 DESCRIPCIÓN BÁSICA DEL PROYECTO Construcción de un aparcamiento subterráneo de residentes y rotación en la Plaza de la Lealtad (Aparcamiento Plaza de la Lealtad), El aparcamiento se ubica en el barrio de los Jerónimos, en el distrito de Retiro, en concreto entre la Plaza de Cánovas del Castillo (Neptuno) y el Paseo del Prado, correspondiéndose a una zona libre de arbolado del vial que semicircunda a la Plaza de la Lealtad.
La zona noble central (zona ajardinada y zona central de la plaza) no se verá afectada por la obra, junto con la zona arbolada.
Se prevé una ordenación de la zona afectada por las obras. Se tratará principalmente de urbanizar de acuerdo a la propuesta marcada por la remodelación del eje Prado - Recoletos.
Dado el alto valor histórico de la zona volver a restaurar el vial y la zona de aceras con mejor diseño que el que ofrece en la actualidad e incorporando mobiliario urbano y equipamientos.
6
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2.2 IMÁGENES Y PLANOS GENERALES DEL PROYECTO
7
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
8
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
9
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
10
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
11
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
12
ESTUDIO INFORMATIVO ARQUEOLÓGICO Y PALEONTOLÓGICO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
13
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
PROMOTOR
TÉCNICOS REDACTORES
ÁREA DE GOBIERNO DE URBANISMO Y VIVIENDA DEL AYUNTAMIENTO DE MADRID
Sonia Montanel Tramulla Daniel Pérez Vicente Marta Bueno Moreno Eva Longarón Gracia Daniel Ibáñez Amo
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
ÍNDICE 1. MARCO LEGAL
3
1.1 MARCO LEGAL
3
2. ESTUDIO HISTÓRICO-ARQUEOLÓGICO
14
2.1PATRIMONIO HISTÓRICO- ARTÍSTICO- ARQUEOLÓGICO
14
Localización histórica del aparcamiento de La Plaza de la Lealtad:
14
Documentación cartográfica y fotografía aérea:
17
2.2 PATRIMONIO HISTÓRICO- ARTÍSTICO- ARQUEOLÓGICO
32
Yacimientos Arqueológicos en el entorno del futuro aparcamiento de la Plaza de La Lealtad:
32
Monumentos históricos y edificios emblemáticos en el entorno del futuro aparcamiento plaza de la Lealtad:
61
Vías pecuarias:
84
2.3 METODOLOGÍA DE ACTUACIÓN
89
2.4 CONCLUSIONES
91
2.5 BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
93
2
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
1. MARCO LEGAL
1.1 MARCO LEGAL En España, se denomina Patrimonio Histórico, al conjunto de bienes, tanto materiales como inmateriales, acumulados a lo largo del tiempo. Estos bienes pueden ser de tipo artístico, histórico, paleontológico, arqueológico, documental, bibliográfico, científico o técnico. El patrimonio histórico-artístico se halla regulado por la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español, indicando en el artículo 1.2:
“Integran el Patrimonio Histórico Español los inmuebles y objetos muebles de interés artístico, histórico, paleontológico, arqueológico, etnográfico, científico o técnico. También forman parte del mismo el patrimonio documental y bibliográfico, los yacimientos y zonas arqueológicas, así como los sitios naturales, jardines y parques que tengan valor artístico, histórico o antropológico”.
Siendo el objeto de esta ley “la protección, acrecentamiento y transmisión a las generaciones futuras del Patrimonio Histórico Español” artículo 1.1.
En el título V de la Ley 16/1985, se recoge la legislación pertinente al Patrimonio Arqueológico, indicando la obligatoriedad de realizar prospecciones arqueológicas autorizadas por la administración competente, con el fin de poder determinar la existencia o no de yacimientos arqueológicos en la superficie o en el
3
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
subsuelo y así estimar la incidencia que el proyecto u obra tiene sobre los elementos del Patrimonio Histórico.
Además, existe un Reglamento para la Ejecución de Evaluación de Impacto Ambiental, es el Real Decreto 1131/1988, donde en su artículo 6 muestra: “La evaluación................. Asimismo, debe comprender la estimación de la incidencia que el proyecto, obra o actividad tiene sobre los elementos que componen el Patrimonio Histórico Español,...”. Por ello se tiene que estimar si se procediese a la Evaluación de Impacto Ambiental de la obra. Y en el Título XVI del Código penal se recogen los casos y sanciones referentes a los “Delitos Relativos a la Ordenación del Territorio y la Protección del Patrimonio Histórico y del Medio Ambiente” (Capítulos I y II artículos 319, 331 y 323).
Todo ello queda ratificado por el artículo 46 de la Constitución Española, que se refiere a la obligatoriedad dominical de tutela y cuidado del bien patrimonial:
"Los
poderes
públicos
garantizarán
la
conservación
y
promoverán
el
enriquecimiento del patrimonio histórico, cultural y artístico de los pueblos de España y de los bienes que lo integran, cualquiera que sea su régimen jurídico y su titularidad. La ley penal sancionará los atentados contra este patrimonio."
La competencia para la tutela del Patrimonio Histórico, está descentralizada en las Comunidades Autónomas, por lo que muchas de ellas han desarrollado su propia legislación. En Madrid, se encomienda a la administración de la Comunidad la competencia sobre dicho patrimonio, sin perjuicio de la competencia del Estado, desarrollándose en la Ley 10/1998 de 9 de Julio de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid. Así mismo el Decreto 125/2004, de 29 de julio aprueba la estructura orgánica de la Consejería de Cultura y Turismo, y atribuye las competencias relativas al Patrimonio Histórico a la Dirección General de Patrimonio Histórico de esa Consejería.
La Comunidad de Madrid posee un rico y variado Patrimonio Histórico, legado materializado en un rico conjunto de bienes arqueológicos, arquitectónicos, urbanísticos y artísticos que comprende todas las épocas, estilos y tendencias representadas en la geografía de la región. Forman parte del Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid todos los bienes culturales en cualquiera de sus
4
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
manifestaciones, sea cual fuere su titularidad y régimen jurídico, exceptuando los de titularidad estatal, ubicados en la Comunidad de Madrid, que pese a no haber sido objeto de declaración ni inventario reúnan los valores expresados para ello.
De esta manera, el Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, de acuerdo con lo indicado en la Ley de Patrimonio Histórico, está integrado por los bienes muebles e inmuebles de interés cultural, social, artístico, paisajístico, arquitectónico, geológico, histórico, paleontológico, arqueológico, etnográfico, científico y técnico, así como natural, urbanístico e industrial, relacionados con la historia y la cultura de la Comunidad de Madrid. También forman parte del mismo el patrimonio documental y bibliográfico, los conjuntos urbanos y rurales, los lugares naturales, jardines y parques de valor artístico, histórico o antropológico y aquellos bienes inmateriales
que
conforman
la
cultura
popular,
folclore,
artes
aplicadas
y
conmemoraciones tradicionales.
Los bienes que integran el Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid se clasifican, a efectos de su protección específica, en:
Bienes incluidos en el Inventario Los bienes muebles e inmuebles, materiales o inmateriales del Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid que, sin tener el valor excepcional de los declarados de interés cultural, posean especial significación e importancia, serán incluidos en el Inventario de Bienes Culturales de la Comunidad de Madrid y gozarán de la protección prevista en esta Ley y en la legislación general del Estado.
Bienes declarados de Interés Cultural (BIC) Se consideran Bienes de Interés Cultural a todos los bienes muebles e inmuebles, así como los hechos culturales y obras de los hechos culturales y obras de la naturaleza integrantes del patrimonio histórico de la Comunidad de Madrid, que reúnan de forma singular y relevante las características previstas en el artículo 1 de la Ley de Patrimonio Histórico.
Para declarar un Bien de Interés Cultural se requiere la incoación y tramitación de un expediente que se puede iniciar, de oficio por la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid o a instancia de otra Administración Pública o de cualquier persona física o jurídica. La Ley dispone que los bienes más relevantes del Patrimonio
5
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
histórico, deban ser inventariados o declarados de interés cultural. Es la principal figura jurídica establecida en la ley y supone la individualización, para un bien concreto, de la protección que ésta otorga al Patrimonio.
Los elementos que componen el Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid han de ser entendidos y valorados como la explicación de una historia pasada que a través de sus manifestaciones sociales, culturales y económicas han posibilitado la evolución histórica cuyos elementos patrimoniales deben de ser valorados como testigos de esta evolución. Estos elementos, algunos de ellos insustituibles, siendo sensibles a actuaciones con un alto potencial de alteración paisajística y del suelo, tal y como se va a proceder en este proyecto.
Además, en el artículo 9 de la Ley 10/1998, el concepto de Bien de Interés Cultural se divide en categorías: Monumento, Conjunto Histórico, Jardín Histórico, Sitio o Territorio Histórico, Zona Arqueológica, Lugar de Interés Etnográfico y Zona Paleontológica. Siendo Zona Arqueológica: “Lugar o paraje natural en donde existan bienes muebles o inmuebles o restos de la intervención humana, susceptibles de ser estudiados con metodología arqueológica, tanto si se encuentra en la superficie como si se encuentran en el subsuelo, bajo las aguas o en construcciones emergentes”.
También se establece en el contenido de los planes especiales, articulo 30.e, ciertas determinaciones para la protección del patrimonio arqueológico en el ámbito del plan:
“que incluirá el deber de verificación de la existencia de restos de la naturaleza mencionada en cualquier remoción del terreno donde exista o se presuma la existencia de dichos restos”.
En esta Ley del 9 de julio de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, en su capítulo VI, se recogen las normas específicas de protección del patrimonio arqueológico, paleontológico y etnológico. Indicando en su artículo 39:
“Integran el patrimonio arqueológico de la Comunidad de Madrid los bienes muebles e inmuebles de carácter cultural e histórico, para cuyo estudio es preciso utilizar metodología arqueológica. También lo integran el territorio o paisaje habitado por el hombre en época histórica y prehistórica y los elementos
6
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
geológicos y paleontológicos relacionados con el ser humano y con sus orígenes y antecedentes”.
Se marcan unas categorías específicas de protección del patrimonio arqueológico, paleontológico y etnológico en el artículo 40, que se mostrarán en el Inventario de bienes culturales de la Comunidad de Madrid, la descripción pormenorizada y jerarquizada de su grado de protección además de los requisitos que se indican en el artículo 11. De acuerdo con esto se establecen:
a) Ámbito de máxima protección. Tendrán esta categoría los bienes de interés cultural (yacimientos arqueológicos) en cuya declaración se haga constar expresamente
tal
circunstancia.
Serán
fundamentalmente
los
Sitios
Arqueológicos (yacimientos de alto valor científico y cultural).
b) Ámbito de especial protección. Tendrán esta categoría los bienes de interés cultural que no pertenezcan al ámbito de máxima protección y los bienes incluidos en el Inventario, en los que se haga constar tal circunstancia: que se solicite su protección por parte de la administración local, por cualquiera de las Instituciones públicas con investigación en arqueología y paleontología o por parte de asociaciones u organizaciones de arqueólogos y paleontólogos legalmente reconocidas. Pertenecen a este ámbito las Zonas Arqueológicas.
c) Ámbito de protección específica. Tendrán esta categoría los bienes integrantes del patrimonio arqueológico de la Comunidad de Madrid, por reunir condiciones que hagan muy probable la existencia de restos arqueológicos y que no se encuentren incluidos en las categorías anteriores en el Inventario, que no pertenezcan al ámbito de especial protección. También tendrán esta categoría aquellas zonas donde se conoce la existencia de yacimientos agotados o destruidos y su radio de posible influencia.
d) Ámbito de protección general. Tendrán esta categoría los bienes integrantes del patrimonio arqueológico de la Comunidad de Madrid, por reunir condiciones que hagan muy probable la existencia de restos arqueológicos y que no se encuentren incluidos en las categorías anteriores.
7
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
La delimitación de los ámbitos corresponderá a la Consejería de Educación y Cultura, previo informe del Consejo Regional del Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid.
En el artículo 41 se hace referencia a las intervenciones realizadas por particulares, donde al nombrar “intervenciones arqueológicas” se refiere en realidad a todas las intervenciones en cualquiera de los patrimonios:
“Artículo 41. - Intervenciones arqueológicas de los particulares. 1. La realización de cualesquiera intervenciones arqueológicas y paleontológicas, ……… requerirá la autorización previa de la Dirección General de Patrimonio Cultural, sin perjuicio de la licencia municipal que sea preceptiva según la legislación urbanística. En caso de falta de resolución los efectos del silencio administrativo serán desestimatorios. 2. Se consideran intervenciones arqueológicas y paleontológicas los estudios directos de arte rupestre y las prospecciones, los sondeos, las excavaciones, los controles y cualquier otra intervención, con remoción de terrenos o sin ella, que tenga por finalidad descubrir, documentar o investigar restos arqueológicos o paleontológicos. 3. Para el otorgamiento de la autorización a la que se refiere el apartado 1 será preciso acompañar la solicitud de un proyecto que acredite la conveniencia y el interés científico de la intervención, avale la idoneidad técnica y científica de los directores y garantice la financiación de las actuaciones. 5. Las personas o entidades que hayan solicitado autorización para realizar actuaciones arqueológicas o paleontológicas serán responsables de los daños o perjuicios que pudieran resultar de la ejecución de dichas actuaciones. 6. Reglamentariamente se determinarán los diferentes tipos de intervenciones arqueológicas, su alcance, los requisitos que deben cumplir las solicitudes, la titulación y la capacidad técnica de los directores y las condiciones a las que debe quedar sujeta la autorización.
En el artículo 43 se describe la actuación a seguir con los descubrimientos de restos arqueológicos:
“Artículo 43.- Descubrimiento de restos arqueológicos.
8
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
1. Los bienes integrantes del patrimonio arqueológico y paleontológico de la Comunidad de Madrid son de dominio público. 2. Los descubrimientos de restos con valor arqueológico hechos por azar, entendiendo por tales los derivados de cualquier tipo de obra o remoción de ……. se comunicarán en el plazo de cuarenta y ocho horas a la Dirección General de Patrimonio Cultural, o al Ayuntamiento correspondiente, sin que pueda darse conocimiento público de ellos antes de haber realizado la citada comunicación. 4. El descubridor de restos arqueológicos depositará el bien, en el plazo de cuarenta y ocho horas, en el Ayuntamiento correspondiente, en la Dirección General de Patrimonio Cultural o en el Museo Arqueológico de la Comunidad de Madrid, salvo que sea necesario efectuar remoción de tierras para hacer la extracción del bien, dadas sus características, o salvo que se trate de un hallazgo subacuático, en cuyos supuestos el objeto permanecerá en el emplazamiento originario. Mientras el descubridor no efectúe la entrega, se le aplicarán las normas del depósito legal. 6. El Museo Arqueológico de la Comunidad de Madrid recibirá en depósito definitivo los restos arqueológicos y paleontológicos hallados y procederá a su evaluación, clasificación y exposición pública con el fin de garantizar su conservación y seguridad.”
El Patrimonio Arqueológico tiene entre sus características diferenciales la de que parte de sus bienes no son visibles, pueden estar ocultos o enterrados, total o parcialmente. Por ello, los mecanismos de investigación y de protección que les resultan adecuados son algo diferentes a los del resto del Patrimonio y se ha de poner particular énfasis en la prevención, tanto o más que en la intervención. El resultado de las intervenciones arqueológicas ha permitido acrecentar el grado de conocimiento de nuestro pasado, así como documentar los yacimientos arqueológicos afectados por las intervenciones.
La Dirección General de Patrimonio Histórico está llevando a cabo la puesta en marcha de un nuevo modelo de Arqueología Preventiva con el fin de compatibilizar la protección del Patrimonio Arqueológico y el desarrollo urbanístico. Para ello, se promueven dos medidas: mejorar la coordinación con las administraciones encargadas de la planificación del suelo y la construcción de infraestructuras; y adecuar los niveles de protección al conocimiento de los bienes que integran el Patrimonio Arqueológico.
9
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Corresponden a la Dirección General de Patrimonio Histórico, además de las previstas en el artículo 47 de la Ley 1/1983, de 13 de diciembre, de Gobierno y Administración de la Comunidad de Madrid, las competencias de la Comunidad de Madrid en materia de patrimonio histórico, artístico, monumental, arqueológico, arquitectónico y científico de interés para la Comunidad, sin perjuicio de la competencia del Estado para la defensa de los mismos contra la exportación y la expoliación. Asimismo, tiene atribuido el ejercicio de las funciones dirigidas a la conservación, defensa, protección, enriquecimiento y difusión del patrimonio histórico previstas en la Ley 10/1998, de 9 de julio, de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid.
También debemos señalar la importancia del patrimonio etnológico, siendo parte de las categorías de Bien de Interés Cultural, que se recoge en el artículo 9, f y g:
“f. Lugar de Interés Etnográfico: El paraje natural susceptible de delimitación espacial o conjunto de construcciones o instalaciones vinculados a las formas de vida, cultura, costumbres, acontecimientos históricos y actividades tradicionales significativos del pueblo madrileño o de los lugares que, dentro del ámbito territorial de la Comunidad de Madrid, merezcan ser preservados por su interés etnológico. g.
Las
actividades
tradicionales
que
contengan
especiales
elementos
constitutivos del patrimonio etnológico de la Comunidad de Madrid, así como los topónimos arraigados con antigüedad superior a cincuenta años gozarán de idéntica protección que los lugares de interés etnográfico, bajo la denominación de Hechos Culturales.”
Recogiéndose las normas especificas de protección del patrimonio etnológico junto con el arqueológico y paleontológico en el capítulo VI, articulo 47:
“Constituye el patrimonio etnológico de la Comunidad de Madrid el conjunto de bienes materiales e inmateriales de interés cultural que caracterizan y expresan la cultura tradicional de la región de Madrid; también forman parte del patrimonio etnológico aquellos bienes de interés cultural que son expresión del pasado productivo, tecnológico o industrial de la región de Madrid.”
10
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Además, existe Ley 2/2002, de 19 de junio, de Evaluación Ambiental de la Comunidad de Madrid, donde en su artículo 28 sobre Estudio de Impacto Ambiental señala:
“1. El estudio de impacto ambiental comprenderá, al menos, la siguiente información: (…) h. Identificación y valoración de las alteraciones generadas por las acciones de la alternativa propuesta susceptibles de producir un impacto directo o indirecto sobre el medio ambiente o sobre los bienes materiales, incluido el patrimonio histórico artístico y arqueológico, detallando las metodologías y procesos de cálculo utilizados en la valoración.”
Por ello se tiene que estimar si se procediese a la Evaluación de Impacto Ambiental de la obra. En el Anexo VII, de la Ley nos señala que se deberá tener en cuenta
“El valor y la vulnerabilidad de la zona probablemente afectada a causa de: o
Las características naturales especiales o el patrimonio cultural.
o
La superación de niveles o valores límite de calidad del medio ambiente.
o
La explotación intensiva de la tierra.”
El ámbito de estudio en el que se enmarca la construcción de este aparcamiento previsto por el Ayuntamiento de Madrid engloba un sector de la ciudad con un alto valor patrimonial: el Recinto Histórico de la Villa de Madrid. Las normas que más directa y explícitamente afectan al Patrimonio Arqueológico en la Comunidad de Madrid son tres: la Ley de Patrimonio Histórico Español (LPHE) de 1985, la Orden de 1986 por la que se regulan las prospecciones y excavaciones arqueológicas en la Comunidad y la Ley de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid (LPHCM) de 1998.
El Recinto Histórico de la Villa de Madrid cuenta con una protección especial ya que ha sido declarada Bien de Interés Cultural con categoría de Zona Arqueológica, decreto 61/1993 del 20 de Mayo. Además, esta zona de estudio está dentro del Conjunto Histórico de la Villa de Madrid, declarado BIC con el decreto 41/1995 del 27 de Abril.
11
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
La LPHE en sus artículos 22.1 y 20.4 especifica que siempre que se vaya a realizar cualquier clase de obra, ésta deberá ser autorizada por la Administración competente, que podrá ordenar intervenciones arqueológicas antes de que comience la misma, no pudiendo ser el municipio quien otorgue los permisos, como sí lo sería para otros tipos de BIC. La LPHCM del año 1998 refuerza y apoya esta tesis, exponiendo que para cualquier remoción de tierra en la zona circunscrita al Bien se obligará a la verificación de la existencia de restos arqueológicos (LPHCM, Art. 30e).
La denominación de Zona Arqueológica representa la figura de máxima protección por la Ley de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid es definida en el artículo 9.2.e como:
“lugar o paraje natural en donde existen bienes muebles o inmuebles o restos susceptibles de ser estudiados con metodología arqueológica, tanto si se encuentran en superficie como si se encuentran en el subsuelo, bajo las aguas o en construcciones emergentes”
El presente estudio histórico-arqueológico pretende hacer un recorrido por todos los yacimientos que se encuentran dentro del ámbito de afección del proyecto para poder llevar a cabo, de esta manera, una valoración patrimonial previa del área de actuación.
La metodología desarrollada para este estudio ha consistido en un vaciado documental de la siguiente documentación:
-
Catalogo de Yacimientos Arqueológicos de la Comunidad de Madrid.
-
Anuario de Actuaciones Arqueológicas de la Comunidad de Madrid.
-
Consulta de los Informes de las actuaciones realizadas anteriormente en el ámbito de estudio.
1
-
Consulta de bibliografía general y específica 1.
-
Consulta de documentación cartográfica y planimetría: histórica, actual y
Se adjunta bibliografía en los apartados 3.5
12
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
fotografía aérea 2. -
2
Revisión de la toponimia, caminería histórica y vías pecuarias.
Apartado 3.2c, cartografía histórica y fotografía aérea resaltando la zona de proyecto del aparcamiento.
13
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2. ESTUDIO HISTÓRICO-ARQUEOLÓGICO
2.1PATRIMONIO HISTÓRICO- ARTÍSTICO- ARQUEOLÓGICO
Localización histórica del aparcamiento de La Plaza de la Lealtad: El espacio que actualmente ocupa el Paseo del Prado, en concreto el tramo comprendido entre la puerta de Atocha y las Cuatro Fuentes, era hasta el siglo XVIII una alameda, lindante con algunas huertas y con un barranco que daba lecho al arroyo de Valnegral, que venía descubierto desde los pinares del camino de Maudes, donde con posterioridad se situó el Jardín Botánico. Con anterioridad, en la zona eran escasas las construcciones que podemos destacar, entre los antecedentes más significativos antes de las grandes transformaciones de finales del XVIII, la construcción de un estanque en tiempos de Felipe II, en concreto en el año 1569, ya que tomaría la decisión de reorganizar los Prados de San Jerónimo y de Atocha, y hacer de esos espacios extramuros, conocidos como Prado Viejo, un sitio preferente de recreo y esparcimiento para los ciudadanos. 14
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Durante el reinado de Carlos III, las reformas urbanas de Madrid se plantearon en lo que entonces era la periferia de la ciudad: el Prado Viejo que, pese a ser un paseo muy popular había ido decayendo en un estado de abandono y perdiendo su primitiva función de lugar de esparcimiento.
El Salón del Prado, como se llamó a esta gran reforma, cubrió el arroyo que lo cruzaba (arroyo del Olivar o de la Castellana), convirtiendo esta zona, profusamente arbolada, en un paseo con jardines y fuentes. La idea fue promovida por el Conde de Aranda, presidente del Consejo de Castilla, iniciándose los trabajos en 1763. Se trataba de integrar de forma unitaria los fragmentos dispersos del espacio de transición entre la ciudad y el conjunto palatino del Buen Retiro, mediante la creación de un espacio circoagonal limitado y embellecido por fuentes y vías arboladas.
El Salón del Prado fue ordenado urbanísticamente por José de Hermosilla, el cual diseñó una planta longitudinal, con grandes fuentes de trecho en trecho (Cibeles, Neptuno y las Cuatro Estaciones o de Apolo). Las fuentes y los elementos decorativos fueron proyectados por Ventura Rodríguez, trabajando en las esculturas los más reconocidos escultores del momento.
El Salón del Prado discurría desde la actual plaza de Cibeles a la glorieta del Emperador Carlos V (glorieta de Atocha), distinguiéndose tres tramos. El primero, con la fuente de Apolo (o de las Cuatro Estaciones) en su centro, contaba con las de Cibeles y Neptuno en los extremos, recibiendo el nombre de Prado de Apolo. El segundo, iba de Neptuno al Jardín Botánico, ante el cual se disponía una glorieta con cuatro pequeñas fuentes (en el cruce de la calle de Huertas), y por último, el paseo que discurría delante de la fachada principal del Jardín Botánico constituía el tercer tramo.
Se dará una zona determinada dentro del Paseo del Prado denominada el paseo de las Víctimas, por ser la que tiene a su lado el obelisco de la Lealtad, se pueden destacar edificios de una relativa reciente construcción como en Hotel Ritz, que se levanta sobre el terreno del antiguo jardín Tívoli, y el edificio de la Bolsa. Esta zona será el enclave donde se localice el futuro aparcamiento subterráneo, en la Plaza de la Lealtad.
15
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Se constataría que la zona fue siempre un área de extramuros, sin urbanizar, destinada, históricamente, a ser una zona de esparcimiento y recreo de los ciudadanos. Sin apenas construcciones arquitectónicas hasta el siglo XIX.
Señalar que en sus inmediaciones, durante el reinando Isabel II (1833–1868) se abrió la calle de Granada, calle que más tarde se llamaría de Alfonso XII, vendiéndose al estado los terrenos comprendidos entre ésta y el Paseo del Prado, siendo urbanizados por particulares.
Zona de ubicación del futuro aparcamiento de La Plaza de la Lealtad
Zona urbanizada entre el Parque del Retiro y el Paseo del Prado
16
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Documentación cartográfica y fotografía aérea:
Leyenda:
1) Planos históricos (De la Figura 1 a la Figura 11): (a) Aparcamiento de La Plaza de la Lealtad señalado, con mayor o menor definición, en color rojo. (b) Norte geográfico:
N
2) Fotografía aérea (De la figura 12 a la Figura 14): (a) Aparcamiento de La Plaza de la Lealtad señalado en color azul. (b) Norte geográfico: El margen superior de la imagen se corresponde con el norte geográfico.
17
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 1:
N
Autor: Pedro Texeira Año: 1656 Escala original: 1: 1.800 Visión axonométrica de la ciudad.
El Plano de Texeira está considerado como el plano más importante de Madrid del siglo XVII y del que se han hecho numerosas reproducciones. Grabado en Amberes, representa fielmente la planta de la ciudad de Madrid observándose de forma clara cada uno de los edificios que configuran las manzanas.
18
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 2:
N
Autor: Nicolás de Fer Año: 1700 Visión geométrica de la ciudad de Madrid donde se delimitan las manzanas.
Este plano se grabó en París. Se representa de una manera geométrica la planta de Madrid.
19
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 3:
N
Autor: P. van der Aa Año: 1707 Escala original: Pitipié de quinientas varas castellanas, ou 500 toises. Plano geométrico donde se delimitan las manzanas.
20
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 4:
N
Autor: Antonio Espinosa de los Monteros Año: 1769 Escala original: 1.200 pies castellanos, equivalente a 400 varas castellanas. Visión geométrica de la ciudad.
Este plano está considerado básico para analizar la transformación de Madrid en uno de los períodos más importantes de la Historia de la capital. Se trata del reinado de Carlos III (1760-1788), rey que se preocupó de embellecer la ciudad, dándole una imagen de capitalidad comparable a las ciudades más importantes de Europa.
21
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 5:
N
Autor: Fausto Martínez de la Torre Año: 1800 Escala original: 1.000 varas castellanas Plano geométrico de Madrid donde se delimitan las manzanas.
22
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 6:
N
Autor: Juan López Año: 1835 Escala original: 3.000 pies castellanos Plano geométrico de Madrid donde se delimitan las manzanas.
23
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 7:
N
Autor: Carlos Ibáñez e Ibáñez de Íbero Años: 1872, 1873 y 1874 Escala: 1: 2.000 Plano topográfico, parcelario.
Se trata de un parcelario muy útil para conocer el desarrollo de Madrid en este período. Donde se recogen todas las transformaciones dadas durante el período isabelino.
24
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 8:
N
Autor: R. Conde Año: 1877 Plano geométrico, donde se delimitan las manzanas
Se trata de un plano considerado poco fiable donde aparecen cada una de las manzanas señalando los nombres de los edificios más importantes.
25
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 9:
N
Autor: Carlos Lassailly Año: 1877 Plano geométrico, donde se delimitan las manzanas
26
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 10:
N
Autor: P. Núñez Granés Año: 1910 Escala original: 1:10.000 Plano de Madrid y su Término Municipal.
El gran desarrollo que sufren en esta época los núcleos urbanos formados a las afueras del centro determina que el Ayuntamiento encargue a Núñez Granés el estudio de un proyecto de ordenación del extrarradio de Madrid.
27
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 11:
N
Autor: Ayuntamiento de Madrid. Inspección General de los Servicios Técnicos. Año: 1955 Escala original: 1: 5.000 Plano topográfico y parcelario.
Este plano representa un nuevo intento del Ayuntamiento por representar Madrid por distritos. Plano muy valorado debido a que muestra fielmente la distribución del suelo de Madrid.
28
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 12:
Fotografía aérea realizada en 1956
29
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 13:
Fotografía aérea realizada en 1999
30
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Figura 14:
Fotografía aérea realizada en 2008
31
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2.2 PATRIMONIO HISTÓRICO- ARTÍSTICO- ARQUEOLÓGICO
Yacimientos Arqueológicos en el entorno del futuro aparcamiento de la Plaza de La Lealtad: (Consulta de la Carta Arqueológica de Madrid)
En cuanto al patrimonio arqueológico se refiere, el futuro aparcamiento de la plaza de La Lealtad se encuentra en la Zona Arqueológica del Recinto Histórico de la Villa de Madrid, declarado Bien de Interés Cultura con categoría de Zona Arqueológica, decreto 61/1993 del 20 de Mayo. Responde al casco histórico de la ciudad conformado a partir de la fundación de Madrid en el siglo IX. Desde entonces y hasta el siglo XVIII se configuran los límites del espacio que se ha considerado yacimiento por su gran riqueza patrimonial (CATÁLOGO DE YACIMIENTOS ARQUEOLÓGICOS DE LA COMUNIDAD DE MADRID).
Para una mejor y más completa localización de yacimientos arqueológicos en las proximidades de este proyecto se procedió por parte de Paleoymas S.L. a solicitar la consulta de Carta arqueológica y paleontológica a la Dirección General de Patrimonio Histórico, en la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid.
Dicha solicitud de consulta se realizó con fecha 28 de Mayo de 2008 y se le otorgó por parte de la Comunidad de Madrid la referencia 12/037931.9/08. (Ver documentos anexos).
La Dirección General de Patrimonio Histórico de la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid no respondió a la consulta de Carta emitida por Paleoymas, sin llegar a indicar vía administrativa la negativa a dicha consulta.
32
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
33
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
La zona de estudio se sitúa entre la calle de Alcalá, desde la plaza de Cibeles a la plaza de la Independencia (Puerta de Alcalá), la calle de Alfonso XII, el paseo del Prado, desde la Cibeles hasta la Glorieta de Carlos V (Puerta de Atocha), y el paseo de la Infanta Isabel, desde la Glorieta de Carlos V a la calle Alfonso XII. Dentro de esta manzana, con la que se ha delimitado un área amplia de investigación que nos servirá de base para conocer mejor los antecedentes históricos, toponímicos y arqueológicos de la zona, solo se actuará constructivamente en un área muy concreta: en la calle semicircular que rodea al monumento a los caídos de la Plaza de la Lealtad.
El espacio urbano ocupado por esta gran manzana ha sufrido a lo largo de la historia una de las transformaciones más interesantes y documentadas de la ciudad de Madrid. Esta zona pasó de ser un sector despoblado, con abundante vegetación, surcado por barrancos delimitados por colinas que bordeaban el arroyo del Abroñigal Bajo, también conocido en la documentación como Valnegral o de la Fuente Castellana, hasta llegar a la construcción del Palacio del Buen Retiro, en el siglo XVII, y, posteriormente, en los siglos XIX y XX convertirse en uno de los barrios más característicos y espectaculares de la ciudad de Madrid.
Prehistoria
Antes de la fundación de la ciudad de Madrid, en el siglo IX d. C., la zona de nuestro estudio estaba atravesada, de Norte a Sur, por un gran barranco formado por la erosión del paso del arroyo del Abroñigal Bajo. Este curso de agua nacía en los pinares del antiguo Camino de Maudes (topónimo proveniente del nombre árabe Mahmud que significa el alabado) que se situaba entre la actual plaza de Castilla y el barrio de Chamartín, y desembocaba en el arroyo del Abroñigal Alto, cerca del Cerro Negro en el actual Parque Tierno Galván.
Por los topónimos históricos conocidos en la documentación y en la cartografía antigua sabemos que en este sector de Madrid había una abundante vegetación arbórea compuesta por diversas especies, por ejemplo el término Abroñigal significa cerezo silvestre y el nombre de Valnegral podría provenir de Valle Negro que se relacionaría con el color verde oscuro de los amplios pinares de la zona del Cerro de San Blas, en el límite Sur de la zona de estudio o de Chamartín, al Norte.
Desde el Camino de Alcalá (calle de Alcalá) el relieve de esta zona se podría
34
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
diferenciar entre la margen derecha u occidental del arroyo que estaba ocupada por las suaves laderas que descendían desde la Puerta del Sol o de la Plaza Mayor; y la margen izquierda o Este del arroyo que se encontraba más encajonada, dando unas pendientes y colinas mucho más pronunciadas y agrestes. Además, la zona alta de la margen izquierda estaba dominada por una amplia meseta, relativamente llana, poblada de pinos, donde se sitúa actualmente el parque del Retiro.
La orientación del arroyo de Valnegral sirvió como eje de comunicación natural, de Norte a Sur, entre las regiones de la Sierra y el valle del Tajo. Esta característica geográfica unida a la de la abundante vegetación y al curso de agua propiciaban la presencia de numerosa fauna. Por estas razones los investigadores siempre han pensado que esta área reunía las condiciones idóneas para el desarrollo de la temprana ocupación humana a lo largo de la prehistoria, así como en momentos históricos previos a la fundación islámica de Madrid.
Hasta el momento se han documentado restos dispersos de industria lítica del Paleolítico Inferior y Medio y del Neolítico (del 5000 al 4000 a. C.) en la calle de Alcalá a la altura del Parque del Retiro y en diversos puntos de este parque (Pérez de Barradas 1926). Además, en diversos puntos del sector delimitado por la plaza de Colón, la calle de Goya, la de Velázquez, el Paseo de Recoletos y la calle de Alcalá se conoce, por fuentes antiguas poco concretas, la localización de restos de la Edad del Bronce (del 1800 al 900 a. C.), del Hierro II (del siglo V al II a. C.) y de la Época Romana. También, se tienen noticias, a través de la Carta Arqueológica de la Comunidad de Madrid (Yacimiento incluido en el “Casco Histórico de Madrid”) que José Pérez de Barradas, en 1926, localizó en el Cerro de San Blas materiales en superficie del Paleolítico Inferior y Medio, del Neolítico y del Calcolítico (del 3500 al 2500 a. C.).
Edad Media Durante la Edad Media se va realizando la adecuación del eje de comunicación al cauce del arroyo que determinará una configuración sinuosa del mismo. Su tramo más antiguo que es el que ahora nos interesa, fue conocido desde el siglo XIII como Prado Viejo o Prado de Atocha. Esta segunda denominación provendría de la localización de una Ermita con culto a la Virgen de Atocha en el Camino de Atocha o de Vallecas.
35
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
La cita documental más antigua que se ha localizado sobre el Prado Viejo o Prado de Atocha se encuentra en el Fuero de Madrid, sancionado en 1202 por Alfonso VIII, donde hay una parte dedicada a delimitar las posesiones de la Villa, así como el uso y disfrute de determinados espacios o la prohibición de otros. Uno de estos espacios es el Paseo del Prado del que se dice “El Prado de Atocha está vedado desde la fuente del Manzano, donde se juntan los arroyos de los valles, y desde allí hasta la hondonada de las huertas”.
Entre los siglos XIII y XIV se empieza a denominar el arroyo del Abroñigal Bajo como arroyo de la Castellana, por la presencia de una denominada Fuente Castellana que debía estar localizada en la zona de la plaza de Emilio Castelar. En esta fuente abrevaban los rebaños de ovejas que atravesaban esta vaguada, por esta razón el barranco, surcado por el arroyo, fue conocido también como Cañada Castellana.
A finales del siglo XV el casco urbano de Madrid solo llegaba a lo que hoy es la Puerta del Sol, y el Prado Viejo o de Atocha, a ambos lados del cauce del Abroñigal Bajo, era un paraje ocupado por pinares, alamedas, pastos, huertas y olivares. Los cultivos y las huertas se fueron situando a los lados de los antiguos caminos de salida de la villa por sus lados Este y Sur que más tarde se convertirían en calles de Madrid: Camino del Prado, Camino de Alcalá, Prado Viejo, Camino de las Huertas, Camino de Atocha, Camino de Cantarranas (hoy calle Lope de Vega), etc.
Edad Moderna: Siglos XVI y XVII El Prado Viejo se extendía desde la Glorieta de Carlos V (Atocha) hasta la Plaza de Cibeles (camino de Alcalá). Este nombre cambiará a lo largo del siglo XVI y se comenzarán a distinguir dos tramos, uno al Sur, el Prado de Atocha, y otro al Norte, el Prado de los Jerónimos. El primero recibía su denominación por la presencia de la mencionada Ermita dedicada a la Virgen de Atocha, llamada así por encontrase entre los atochares o espartales que poblaban esa zona. Esta ermita estuvo situada donde hoy se encuentra la Basílica de Atocha. Por su parte, el Paseo de los Jerónimos, era llamado así por el Convento de mojes Jerónimos, existente en la margen izquierda del barranco desde principios del siglo XVI.
Sobre uno de los cerros de la margen izquierda del arroyo se iniciaron, en 1503, las obras del nuevo Convento de San Jerónimo que ya había sido fundado en 36
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
1464 por Enrique IV en la margen izquierda del río Manzanares junto al camino del Pardo, pero los monjes solicitaron permiso y tierras a Isabel la Católica, para su traslado por la insalubridad de la zona de la primera fundación.
Se les instaló en una colina en el paraje conocido en esos momentos como Prado Viejo, al Sur del camino de Alcalá. Desde este momento este sector del Prado Viejo será conocido como Prado de los Jerónimos. Estos monjes acostumbraban a levantar sus monasterios en lugares muy concretos y elegidos con mucho cuidado. Solían localizarse en las afueras de las ciudades, pero en sitios relativamente cercanos. Buscaban zonas bien comunicadas a ser posible próximas a caminos importantes y, por último, que hubiera buen acceso al agua y buenas tierras de cultivo.
A principios del siglo XVI ya estaba terminado el convento que era de estilo gótico tardío o gótico isabelino. Del monasterio sólo han llegado a nuestros días el templo reconstruido a mediados del siglo XIX por la destrucción durante la Guerra de la Independencia y un claustro de granito.
Muy poco después de finalizar las obras del Convento, el emperador Carlos I, inicia la vinculación de los parajes del Prado de los Jerónimos con la Corona. En primer lugar, reunió Cortes en el Convento en 1510. En segundo lugar, se realizó en este lugar el primer juramento de su hijo Felipe como heredero. Y en tercer lugar, el emperador decidió pasar algunas temporadas de retiro en el monasterio. Por esta razón se ordenó la construcción al Norte del convento de unos aposentos que fueron conocidos como Cuarto Real y más tarde como Cuarto Viejo, desparecido tras la ocupación de Madrid por las tropas de Napoleón entre 1808 y 1813.
A partir de esta costumbre, iniciada por Carlos I, los siguientes reyes también pasaban temporadas retirados en los aposentos reales del convento, por lo que pronto toda aquella zona, sobre los cerros y las huertas al Este del Pase del Prado, se conocería como el Buen Retiro. Como la Corte pasaba cerca del Rey el tiempo que este permanecía retirado, muy pronto algunos personajes influyentes empezaron a adquirir terrenos y huertas por las inmediaciones.
También, en la margen Izquierda, en su límite Sur, se localizaba, en el siglo XVI la Ermita de San Blas (desaparecida en 1795). Su situación exacta no se conoce, pero se sabe que estaba situada en el cerrillo de San Blas, desde donde se controlaba
37
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
el camino de Atocha o Vallecas, donde se localizaba la ermita y después Convento de Atocha y actualmente Basílica de Nuestra Señora de Atocha.
La Basílica de Nuestra Señora de Atocha está situada sobre el antiguo Convento de Dominicos de Nuestra Señora de la Asunción, más conocido como Convento de Nuestra Señora de Atocha. El convento fue fundado en 1523 por Fray García de Loaysa, inquisidor general, por y Fray Juan Hurtado de Mendoza, confesor de Carlos V, instalándose en el lugar donde se daba culto en una ermita a la Virgen de Atocha.
El edificio ha sufrido numerosos derribos y sucesivas construcciones a lo largo de su historia por lo que en la actualidad nada queda del primitivo templo. El 14 de agosto de 1652 se quemó la iglesia; en 1726 se desplomó la capilla mayor y en 1809 los franceses destinaron el edificio a cuartel y quedó arruinado tras la Guerra de la Independencia, por lo que en época de Fernando VII fue reedificado casi por completo.
En 1836, con la desamortización de Mendizábal, el edificio pasó a ser propiedad del Patrimonio Real, siendo destinado el convento a Cuartel de Inválidos y su iglesia, a parroquia castrense. La iglesia fue transformada en Basílica en 1863 por el Papa Pío IX. En 1924, Alfonso XIII cedió la propiedad de nuevo a la Orden de los Dominicos que siguen regentándola en la actualidad.
A finales del siglo XIX la Basílica volvía a estar muy deteriorada por lo que en 1890 se convocó un concurso público para su reconstrucción. El proyecto ganador fue realizado por el arquitecto Fernando Rabos con una propuesta de basílica neobizantina con campanile exento y un Panteón de Hombres Ilustres. Las obras comenzaron en 1891 pero diez años después, debido a la falta de recursos económicos, se suspendió la construcción hasta que en 1924 el conjunto fue cedido a los dominicos, quienes prosiguieron las obras sin seguir el proyecto original de Arbós. Durante la Guerra Civil el edificio fue nuevamente arrasado. En 1946 la Dirección General de Regiones Devastadas decide llevar a cabo su reconstrucción que finaliza en 1951 con un nuevo edificio de trazas neobarrocas.
A finales del siglo XV y principios del siglo XVI el casco urbano de Madrid llegaba hasta la zona de la Puerta del Sol y de la antigua Puerta de Atocha a la altura
38
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
de Antón Martín y de la plaza de Jacinto Benavente. Entre el caso urbano y la zona del Paseo del Prado, conocido en estos momentos como Prado Viejo, solo había parcelas de cultivos de secano (olivos y vides) y huertas en las proximidades del arroyo.
Aunque a lo largo del siglo XVI se va urbanizando la zona que se localiza entre la puerta del Sol y el arroyo de la Castellana. Esta expansión urbana solo llegó hasta la mitad de la ladera en lo que hoy son las calles de San Agustín, de Jesús o del Duque de Medinaceli. Este crecimiento se realizó siguiendo los caminos de salida de las cercas (camino de Alcalá y camino de Atocha, camino del Prado, camino de la Huertas y carrera de San Jerónimo), ocupándose, posteriormente, las zonas entre estos caminos surgiendo las calles transversales como la calle del Príncipe, del León, etc.. El caserío que se va desarrollando en esta zona es modesto compuesto por casas de diverso tipo desde edificios de una sola planta con patios o jardines traseros hasta edificios de tres plantas y corralas de vecinos, algunas de ellas aprovechadas para representaciones teatrales. Entre este caserío modesto y la zona del arroyo Castellana se irán instalando los jardines, las huertas y los palacetes de los cortesanos que acompañaban a los reyes.
Cuando en 1561 Felipe II decide instalar definitivamente la corte en Madrid se produjo, a lo largo de los siglos XVI y XVII, un crecimiento urbano considerable, aunque la zona de estudio no cambiará mucho su aspecto, salvo que será en estos momentos cuando los gobernantes municipales empiecen a dignificar algo el aspecto del Paseo del Prado y se irá convirtiendo en una de las zonas preferidas de la población para el paseo y el recreo.
A lo largo del siglo XVI, en la zona del Paseo del Prado, aparte del Convento de los Jerónimos y del Cuarto Viejo, eran escasas las construcciones a destacar. Entre los antecedentes más significativos se podría mencionar la construcción, en el año 1569, de un Estanque efímero frente al Convento de los Jerónimos, donde se recreó un simulacro de la toma de un castillo con la construcción de ocho galeras para recreo de la esposa de Felipe II.
Con la construcción del Cuarto Viejo en el siglo XVI, lugar temporal de residencia real adosado al Convento de los Jerónimos, esta zona se va asociando a la Monarquía. Por esta razón los nobles irán comprando parcelas e irán construyendo casas, palacios, huertas y jardines de recreo.
39
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Desde la calle de Alcalá hasta la Carrera de San Jerónimo se producirá en el siglo XVII la mayor concentración de huertas y jardines pertenecientes a la nobleza. La calle de los Jardines (hoy Marqués de Cubas) tomó este nombre por las casas – jardines aquí situados, cuyas fachadas daban a esta calle, mientras que al Paseo del Prado daban las tapias traseras. La propiedad más grande y más importante de esta zona era la huerta del marqués del Carpio luego, en el siglo XVIII, pasó al marqués de Alcañices y por último al duque de Sesto que lo vendió para el Banco de España. En la esquina del Paseo del Prado con la Carrera de San Jerónimo estuvo la finca del duque de Maceda que posteriormente fue adquirida para el palacio del Marqués de Villahermosa (actual Museo Thyssen). También tenían huertas en este paraje, entre otros, el marqués de Villamagna y el conde de Monterrey.
En 1603 en el tramo del Prado de Atocha desde la Carrera de San Jerónimo hasta la calle de Huertas estaban las inmensas propiedades del duque de Lerma donde construyó una casa principal con patio central en 1614. Dentro de estos terrenos se construyeron en 1606 los conventos de San Antonio del Prado hoy desaparecido y el de Trinitarios Descalzos donde está el famoso Jesús de Medinaceli. Todas estas propiedades pasaron en 1618 a su hijo el duque de Medinaceli que se fueron manteniendo de forma parecida hasta inicios del siglo XIX en que fue incautado por los franceses que causaron grandes destrozos. En 1857 se abrió en sus terrenos la prolongación de la calle Lope de Vega y a principios del XX las de Cervantes y de Jesús. En 1912, en una parte de los terrenos de estas propiedades, se construyó el Hotel Palace.
Por lo tanto, la margen derecha del arroyo de la Castellana se va caracterizando por la presencia de estos jardines y palacetes propiedad de los nobles que en muchos casos se mantendrán hasta finales del siglo XIX y principios del XX. Pero, en la margen izquierda se van desarrollando un conjunto de edificios y jardines que conformarán, a lo largo del siglo XVII y XVIII, el Real Sitio del Buen Retiro.
Para esta época, a mediados del siglo XVII, el caserío de Madrid había crecido espectacularmente, llegando el límite urbano por el Este hasta las proximidades del Paseo del Prado. Con este crecimiento de la ciudad el Prado quedará flanqueado en sus dos márgenes, al Este por los Jerónimos y las primeras edificaciones del Palacio del Buen Retiro y al Oeste las casas de la ciudad que correspondían mayoritariamente
40
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
a los jardines y huertas de las casas nobiliarias más destacadas del momento.
Desde 1650 toda esta zona quedará incluida en la nueva cerca de delimitación urbana conocida como Cerca de Felipe IV que empezó a levantar en 1625, a la que pertenecen, entre otras, las puertas de Atocha o de Vallecas y la de Alcalá. El trazado de la nueva Cerca comprendía una superficie de unas 500 hectáreas, de las que más de 150 hectáreas pertenecían al Real Sitio del Buen Retiro. Esta Cerca tenía el siguiente recorrido partiendo del Palacio Real: cuesta de la Vega, rondas de Segovia, Toledo, Valencia y Atocha, glorieta del Emperador Carlos V, avenidas de la Ciudad del Barcelona y Menéndez Pelayo, calle de Alcalá, plaza de la Independencia, calle de Serrano, calle de Jorge Juan, plaza de Colón, calle de Génova, de Sagasta, de Carranza y girando a la izquierda por San Bernardo y Santa Cruz de Marcenado hasta Serrano Jover, Princesa, Ventura Rodríguez, Ferraz, cuesta de San Vicente, paseo de la Virgen del Puerto y subía bordeando el Campo del Moro hasta enlazar con la cuesta de la Vega
De forma paralela a la ocupación de esta zona del Prado Viejo por la Aristocracia y la Monarquía, desde finales del siglo XVI y a lo largo del siglo XVII, este sector de la ciudad, también se fue convirtiendo en uno de los lugares preferidos por el pueblo llano de Madrid para el paseo, la diversión y el esparcimiento. Para Mesonero Romanos este hábito se relacionaba con la devoción a la Virgen de Atocha por lo que esta zona se convirtió, desde la Baja Edad Media, en una de las áreas más transitadas de la Villa.
El Prado Viejo era un paraje ideal para el uso festivo de los madrileños por sus arboledas y su abundancia en fuentes. Este Paseo se convirtió en la pasarela social donde se miraba la ciudad y no dejó de serlo en el siglo XVIII ya que las reformas que se llevaron a cabo con los Borbones terminaron de otorgarle la condición del más hermoso de los lugares de paseo de Madrid.
Entre finales del siglo XVI y el siglo XVII el eje viario, es decir, el Paseo del Prado propiamente dicho, se va organizando y enriqueciendo con la plantación de hileras de árboles (álamos) que separaban las diversas zonas del recorrido. También se van instalando fuentes, como la Fuente del Prado próxima a la calle de Alcalá, la Fuente del Peñasco en la margen derecha cerca de las tapias de los jardines del marqués del Carpio y la Fuente del Caño Dorado frente a lo Jerónimos. Se sabe que
41
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
en el año 1624 el arroyo se empezará a encauzar desde el Paseo de Recoletos hasta el de Atocha, construyéndose varios puentecillos para cruzar el cauce. Uno de estos puentes se puede ver en el plano de Teixeira de 1656 frente a los Jerónimos.
A pesar de estas actuaciones, hasta que no se finalizaron las obras del Palacio del Buen Retiro en 1640 y sobre todo hasta que no se realizaron las reformas del siglo XVIII, el aspecto general de la zona todavía se parecía más a un agradable camino a orillas de un río o arroyo que a uno de los principales ejes urbanos de la capital de un imperio. Esto se puede corroborar con los planos históricos de Madrid anteriores al siglo XVIII (de De Witt de 1635 y de Teixeira de 1656) donde se observan tramos sinuosos sin encauzar del arroyo Castellana.
En esta época discurría, muy próximo al Paseo del Prado, el Viaje de Agua del Bajo Abroñigal que desde la zona de Canillas y Canillejas hasta llegar al valle del Arroyo Castellana a la altura de Colón, desde este punto se dirigía hacia el Sur, bajo la zona del Paseo de Recoletos, hasta el cruce con la calle de Alcalá en la actual plaza de Cibeles y luego subía por la calle de Alcalá hasta Sol y el núcleo urbano de Madrid.
El origen del Palacio y Jardines del Real Sitio del Buen Retiro se puede ver en la construcción en época de Carlos I y de Felipe II del llamado Cuarto Real en el huerto situado al Este del Convento de los Jerónimos y en la presencia de varias propiedades reales y de la nobleza con jardines y huertas de recreo, por ejemplo, a principio del siglo XVII se situaba, en la esquina del camino de Alcalá con el Paseo del Prado, la Huerta de San Juan o Huerta del Rey, delimitada por una tapia con edificios tipo torre en las esquinas (el conjunto irá desapareciendo a lo largo del siglo XIX). En estos terrenos se solían reunir los aristócratas madrileños. Fue famosa por sus pajareras con aves exóticas y porque por su río artificial o Río Chico se podía navegar en pequeños botes. Esta Huerta debía su nombre a la presencia de la Ermita de San Juan que desparecerá después de la ocupación de Madrid por las tropas napoleónicas (1808 – 1813).
Pero el despegue como Sitio Real de la margen izquierda del Paseo del Prado vendrá con el Conde Duque de Olivares, valido del Felipe IV, que decidió en 1629 construir un gran palacio, con el objetivo de mantener entretenido al monarca para que no entorpeciera su labor de gobierno. Para este proyecto utilizó el Cuarto Real o
42
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Cuarto Viejo, anexo al convento y se aprovechó una finca del Conde Duque donde a condesa tenía unas jaulas de aves exóticas.
Las obras finalizaron entre 1633 y 1635 siguiendo el proyecto de Leonardo Jusepe, aunque hay quien otorga el proyecto a Juan Gómez de Mora. El palacio estaba compuesto por un edificio principal de planta cuadrada, con un amplio patio central y con cuatro torres en cada una de las esquinas. De este conjunto solo se conserva en pie el Salón de Reinos que ha sido utilizado hasta hace poco como Museo de Ejercito y correspondería el ala Norte del Palacio. El conjunto palacial se hizo con gran rapidez y con materiales de escasa calidad, a pesar de lo cual el interior fue decorado con gran riqueza artística.
Adosados al conjunto principal, se irán construyendo hasta finales del siglo XVII, otros edificios que conformaban patios donde se situaban los servicios del palacio (criados, guardia, caballerizas, almacenes, etc.). Entre estos edificios hay que destacar el Coliseo de Comedias (desaparecido durante la guerra de la Independencia) y el Salón de Baile o Casón del Retiro donde se hacían fiestas, bailes y recepciones. Este edificio se conserva y está siendo utilizado como ampliación del Museo del Prado.
Los Jardines del Buen Retiro no se finalizarán hasta 1640 con paseos salpicados de estatuas como la ecuestre del Rey Felipe IV de Pietro Tacca, fuentes, estanques de estos todavía se puede verse el Estanque Grande, canales y ríos artificiales.
En el Prado Alto que era una extensión sin edificaciones que se situaba entre el Palacio del Retiro y la Huerta de San Juan se encontraba en el siglo XVII el edificio del Juego de Pelota donde se practicaba el frontón. Esta construcción tenía planta rectangular con tres pisos y un patio central de tipo corrala. El conjunto desparecerá en torno a 1761. También en el extremo Sur del Prado Alto frente al acceso al Palacio desde el Paseo del Prado se localizaba la Torrecilla del Prado de planta cuadrada y de dos pisos que se utilizaba para dar pequeños conciertos de música. Esta Torrecilla desaparecerá hacia el año 1788.
En el camino de Alcalá se encontraba la antigua Puerta de Alcalá que se construyó a principios del siglo XVII para conmemorar la llegada de la esposa de
43
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Felipe III doña Margarita de Austria y estaba situada algo más hacia el Oeste de la actual Puerta a la altura de la calle Alfonso XI.
Para completar la visión de la zona de la margen izquierda en el siglo XVII se situaba al Sur del Convento de los Jerónimos y de sus huertas y olivares un amplio terreno sin construir donde todavía eran visibles las colinas y los barrancos que bajaban hasta el arroyo de la Castellana. Esta zona se conocía como Campo de San Blas donde se situaba, en una colina de su extremo Sur, la Ermita de San Blas.
Siglos XVIII, XIX y XX
En el siglo XVIII, con el advenimiento de una nueva dinastía de origen francés, va a iniciarse para Madrid un nuevo período de cambios y transformaciones que intentarán dar a la vieja Villa un aspecto más moderno y monumental acorde con su condición de capital borbónica y europea. Estos cambios que se inician con el primer Borbón, Felipe V, y tendrán su culminación con Carlos III (1759-1788).
El Madrid que reciben los Borbones, a principios del siglo XVIII era una de las capitales europeas más caóticas y desordenadas, con un escaso desarrollo de los servicios urbanos más elementales (alcantarillado, empedrado de las calles, iluminación nocturna, etc.), con un caserío pobre y humilde y con un crecimiento urbano espontáneo y falto de planificación urbanística. La falta de espacios públicos era otra característica el tejido urbano madrileño a excepción de la Plaza Mayor, la Puerta del Sol, la Plaza de la Cebada y el Paseo del Prado.
En la segunda mitad del siglo XVIII los ediles y gobernantes ilustrados del reinado de Carlos III concentraron la mayor parte de los esfuerzos en embellecer el entorno del viejo Madrid sin apenas modificar la estructura interna de la ciudad. Con el acceso al trono de Carlos III en 1759 se propiciaron una serie de actuaciones que dotaron a la corte de servicios modernos como La Real Casa de la Aduana, la Real Casa de Correos en el interior del viejo casco urbano, el Hospital General en el extremo Sur de la ciudad. También promovió instalaciones fabriles como las Platerías Martínez, la Fábrica de Tapices o la Real Fábrica de Porcelanas del Buen Retiro.
A lo largo del siglo XVIII toda la zona de estudio conocerá una amplia transformación urbana y arquitectónica. En la margen derecha se van urbanizando
44
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
poco a poco los jardines y huertas, sobre todo desde la calle de Huertas hacia Atocha. En los jardines que van quedando se van construyendo nuevos y mejores palacios de nobles constituyéndose en una zona habitada por la alta sociedad.
De la calle de Alcalá hacia el Sur se situaba en el siglo XVIII el palacio del marqués de Alcañices, antes del marqués del Carpio y luego del duque de Sesto. En una parte del espacio ocupado por este palacio se abrieron a finales del XIX, entre otras, la calles del Sordo (hoy de los Madrazo) y se edificó el Banco de España. Las obras de este último edificio se iniciaron en 1884 y es uno de las más hermosas construcciones contemporáneas de Madrid que sus líneas fundamentales parecen inspiradas en el arte del Renacimiento. Los autores de los planos fueron Eduardo de Adaro y Severiano Sáinz de la Lastre.
En el lugar donde se levantaba el palacio de Maceda se construyó el palacio de Villahermosa (Museo Thyssen) en 1806. Por su parte en el jardín de los condes de Monterrey, situado entre este palacio y el de los marqueses de Alcañices, se edificó en 1746 la iglesia de San Fermín, muy popular por su reloj que permitía la interpretación de variadas piezas musicales.
En la margen izquierda se van observando importantes cambios en la zona del Palacio del Buen Retiro. A principios del siglo XVIII los jardines y el palacio estaban semiabandonados, pero Felipe V eligió este palacio como residencia real en vez del viejo Alcázar. Por esta razón se hizo necesario realizar numerosas mejoras y reparaciones. Entre estas mejoras habría que destacar la construcción de un jardín de flores que dibujan arabescos llamado Parterre que todavía se puede ver en la entrada al Retiro por la calle Alfonso XII, frente al Casón. Se amplían las edificaciones relacionadas con el servicio de los monarcas como las Caballerizas que se utilizan también como cuartel la Guardia Real. Estas caballerizas se sitúan al Norte del Palacio aprovechando una parte del Prado Alto, entre la ermita de San Juan del siglo XVII y el ala Norte del Palacio. Al oeste del Convento de los Jerónimos y del viejo Cuarto Real se edifica una casa para el Intendente del Palacio aprovechando la pequeña ermita de San Pablo del siglo XVII.
Otro cambio importante será el de la localización de la nueva Puerta de Alcalá que se trasladará algo más hacia el Este. Su construcción se finalizaría en 1778 con
45
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
diseño de Sabatini y se convertirá en una de las entradas más importantes y suntuosas de la villa.
Gracias al espíritu Ilustrado de Carlos III, pero sobre todo con la finalización del Palacio de Oriente como nueva residencia de los reyes, se decidió que en esta zona del Paseo del Prado y del Palacio del Buen Retiro se fueran concentrando las instituciones relacionadas con la búsqueda del conocimiento y de la investigación. Esta tradición que se mantendría a lo largo del siglo XIX e inicios del siglo XX.
Como hitos de esta decisión están los siguientes ejemplos: el Gabinete de Máquinas en el Interior del Palacio del Buen Retiro donde se almacenaban para su estudio todo tipo de artilugios mecánicos; en 1778 se instalará la Escuela de Agricultura en el jardín de la Ermita de San Juan; muy cerca de la Puerta de Alcalá se edifica una casa octogonal que servirá de Leonera o Casa de Fieras que fue ampliada en 1765; entre la ermita de San Blas y el convento de Atocha, se situará el Almacén de Pólvora que desaparecerá en 1788; al Sureste del Convento de los Jerónimos, en el Campo Grande, se construyó en 1780 la Real Fábrica de Porcelanas del Buen Retiro que se instaló alrededor de la ermita de San Antonio de los Portugueses del siglo XVII que se incendió en 1730 y se reconstruyó rápidamente. Carlos III se trajo de Nápoles un equipo de artistas, artesanos y químicos y la maquinaria necesaria para instalar esta fábrica que llegó a tener una gran fama y prestigio.
En el antiguo Campo de San Blas, se construyó el Jardín Botánico que se inauguró en 1781 según diseño del Juan de Villanueva. El rey decidió trasladar el Jardín Botánico desde el Soto de Migascalientes junto al camino del Pardo hasta esta nueva ubicación. El recinto del Jardín Botánico fue adornado con una elegante verja diseñada por Francisco Arrillaga y por Pedro José de Muñoz y que se completó, en su parte central, con una sencilla portada clásica de granito donde una inscripción indica que la obra fue realizada por el rey Carlos III. Como edificaciones de interés dentro del recinto del Jardín habría que destacar, en el tramo final del paseo que comienza en la puerta que da al Paseo del Prado, una elegante portada con cuatro columnas de orden dórico que daba ingreso a la cátedra de Botánica; un Invernadero de plantas tropicales arrimado a la parte del muro que da a la calle de Espalter; la Biblioteca y el Herbario, donde se reúnen más de treinta mil especies distintas. Dentro del botánico también se pueden señalar dos estatuas, una dedicada a Cavanilles y la otra a Lagasca, como
46
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
tributo a estos grandes botánicos españoles. A fines del siglo XIX la extensión del Botánico se vio reducida con la desaparición del extenso pinar que llegaba hasta el paseo de la Infanta Isabel (Atocha). En este pinar se abrió la calle Claudio Moyano y se edificó el Ministerio de Fomento.
En 1785, con proyecto de Juan de Villanueva, se inician las obras del Gabinete de Historia Natural y Academia de Ciencias Exactas hoy Museo del Prado de traza neoclásica y que presenta al lado del Paseo su principal fachada con una elegante columnata. La obra iniciada con Carlos III se alargó durante todo el reinado de su hijo Carlos IV y no se pudo finalizar por la guerra de la Independencia. Estos acontecimientos provocaron su abandono y su paulatina destrucción, proceso que finalmente fue detenido durante el reinado Fernando VII. Gracias a la iniciativa de su segunda mujer, Isabel de Braganza, se reconstruyó el edificio y se comenzó a poner en practica la idea de instalar en el edificio un Museo de Pintura y Escultura, reuniendo las obras de arte más considerables procedentes de los reales sitios. El proyecto vio la luz el 19 de noviembre de 1819.
Luego se proyectó el Observatorio Astronómico con diseño de Juan de Villanueva y se construyó sobre la antigua Ermita de San Blas. Las obras finalizaron en 1795, aunque sufrió muchos destrozos durante la guerra de la Independencia, por lo que hasta 1845 no se restauró y reconstruyó.
Otro de los edificios científicos de finales del XVIII que se levantarán en la zona del Paseo del Prado, pero en la glorieta de Carlos V, será el Hospital General que se construyó entre 1756 y 1781 y que hoy es utilizado como Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. El origen de este hospital se remonta a 1587 cuando Felipe II fundó un Hospital General para hombres con la advocación de Nuestra Señora de la Encarnación y San Roque. Este primer hospital estuvo situado en la Carrera de San Jerónimo, junto al Convento de los Capuchinos del Prado. En el año de 1603 se trasladó la institución al extremo sur de la calle Atocha.
En 1756, Fernando VI mandó construir un nuevo edificio para albergar el Hospital. Las obras fueron iniciadas por el arquitecto José de Hermosilla, pero sólo llegó a realizar los cimientos y levantar algunas partes del piso principal. Tras la muerte de Hermosilla en 1776, Francisco Sabatini continuó las obras, pero alterando notablemente el proyecto original, si bien no pudo realizarlo en su totalidad.
47
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
El edificio pasó más tarde a depender de la Diputación convirtiéndose en Hospital Provincial y continuó en uso hasta mediados del siglo XX. Desde entonces el edificio comenzó a deteriorarse hasta tal punto que quedó inutilizado. Un Real Decreto de 1977 declarándolo monumento histórico evitó su demolición.
En 1980 se llevó a cabo la restauración del edificio, realizada por Antonio Fernández Alba y en 1986 se inauguraba como Centro de Arte Reina Sofía, dedicándose únicamente a la celebración de exposiciones temporales de arte contemporáneo. En 1988 José Luis Iñíguez de Onzoño y Antonio Vázquez de Castro llevaron a cabo las últimas modificaciones entre las que destacan las tres torres de ascensores, de vidrio y acero. Finalmente, en 1992 se inaugura la Colección Permanente del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, quedando desde entonces constituido como un auténtico museo.
La consideración del Paseo del Prado como marco urbano de la ciudad de Madrid no se dio hasta el reinado de Carlos III, momento en el que se inició la transformación de la zona y su acondicionamiento como una de las principales vías de la capital. Bajo este reinado se puso en práctica el proyecto del ingeniero José Hermosilla para nivelar el terreno del Prado en sus tres partes, llamadas de San Fermín, San Jerónimo y de Atocha, con este proyecto se construyó una mina subterránea para un gran colector que encauzará las aguas del arroyo, desde la puerta de Recoletos en la zona de la actual plaza de Colón hasta la de Atocha, obra que se complementó con la construcción de un colector en Atocha, todo lo cual permitió terraplenar y allanar el terreno del Prado.
En 1766, el Conde de Aranda, Ministro de Carlos III, comenzó las gestiones para reformar el Prado de los Jerónimos y convertirlo en un magnífico salón europeo, encargando las obras al ingeniero José de Hermosilla y el diseño decorativo al arquitecto Ventura Rodríguez. El primero se encargó de la labor de allanar los terrenos, urbanización, canalización de aguas y diseño del paseo, y el segundo del diseño de sus bancos, fuentes y elementos arquitectónicos. En 1777 se finalizan las obras de infraestructura del Paseo y en 1781 se completan los proyectos para las fuentes. Se instalan las nuevas fuentes monumentales proyectadas por Ventura Rodríguez y esculpidas por diversos maestros: La Fuente de la Alcachofa en la
48
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Puerta de Atocha que actualmente se encuentra en el Retiro; la Fuente de Neptuno; la Fuente de Apolo y la Fuente de la Cibeles.
José Hermosilla diseñó un paseo con planta de hipódromo que tenía un antecedente en Madrid en el Paseo de la Virgen del Puerto. Este hipódromo del Prado era estrecho y alargado, con un paseo peatonal central y dos vías laterales de circulación para carruajes. Los extremos del salón acababan en curvas o ábsides con dos grandes fuentes circulares dedicadas a Neptuno (Agua) y a Cibeles (Tierra) que se orientaban hacia otra en el centro del paseo dedicada a Apolo (Fuego y Aire) y que centralizaba todo el desarrollo elíptico – lineal del conjunto. Es aquí, en la forma concreta escogida para el Salón del Prado, donde se ha reconocido la formación barroca de los dos autores: multiplicidad de puntos de vista y variedad temática. Posteriormente, en 1891, las fuentes de Cibeles y Neptuno fueron ligeramente elevadas y cambiadas de sitio y de orientación mirando ahora hacia el casco urbano.
A finales del siglo XVIII y principios del XIX el Prado se había consolidado como eje social y representativo más importante y distinguido de toda la ciudad tras las reformas emprendidas por los gobernantes del momento. Hasta el inicio de esas reformas había sido lugar de huertas y jardines de los nobles, pero zona de paseo preferido de las capas populares. A mediados del siglo XVIII se va poniendo de moda entre la nobleza y la incipiente burguesía. En estos momentos habría que destacar la construcción del Palacio de Buenavista de 1777 (hoy Cuartel General del Ejército) y del de Villahermosa (Museo Thyssen) de 1806.
Un edificio lamentablemente desaparecido en la margen derecha era la famosa Platería Martínez diseñada por Carlos Vargas Machuca y que construyó en 1783 desapareciendo en 1869. Se localizaba en la confluencia de las calles de Huertas y Moratín (San Juan) esquina al Prado. Antonio Martínez Barrio era un platero aragonés condiscípulo de Goya que se granjeó la protección de Carlos III convirtiéndolo en abastecedor real. La platería de este establecimiento fue la más importante de la orfebrería clásica y romántica de España.
Con la ocupación francesa de Madrid, a partir de 1808 y hasta 1813, en la zona del Paseo del Prado no hay excesivos cambios constructivos. Durante el reinado de Fernando VII tampoco hicieron grandes cosas en el Paseo del Prado por falta de recursos económicos. De estas fechas se podría destacar el inicio del proyecto del
49
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Monumento a las Víctimas del 2 de Mayo que se iba a levantar en el llamado Campo de la Lealtad en el límite Oeste del Prado Alto. El concurso municipal lo ganó un discípulo de Villanueva, Isidro González Velázquez, con un proyecto romántico compuesto por un obelisco sobre un gran catafalco rodeado de cipreses en un jardín redondo y cerrado. El monumento no se inauguró hasta el año 1840.
En cambio, donde se observan numerosas transformaciones será en la zona del palacio del Buen Retiro que será ocupado por las tropas francesas y utilizado como cuartel. Por esta razón fue bombardeo en varias ocasiones quedando en pie, al final de la guerra, el llamado Salón de Reinos (Museo del Ejército), el Salón de Baile (Casón del Buen Retiro), el Convento de los Jerónimos que quedó muy afectado, una parte de las caballerizas que serán utilizadas a lo largo del XIX como cárcel el Museo de pinturas y el Jardín Botánico.
Además, las tropas francesas construirán una zona fortificada con baluartes y trincheras en torno a la Fábrica de Porcelanas que convertirán en polvorín, el Convento de Atocha y el Observatorio Astronómico. Una vez derrotadas las tropas francesas en 1813 los ingleses dinamitarán y destruirán toda esta zona fortificada incluyendo la Fábrica de Porcelanas que desaparecerá y quedando muy afectados los jardines del Retiro, el Convento de Atocha y el observatorio Astronómico.
Al otro lado del Botánico, hacia la zona de Huertas, y contiguo a la Platería de Martínez hubo durante mucho tiempo desde fines del reinado de Fernando VII (1830) hasta los últimos años de Isabel II, un famoso espectáculo conocido como el Diorama. Se trataba de espacioso edificio en cuya parte principal estaba reproducido el interior del templo de San Lorenzo de El Escorial. Había además, en los salones altos y bajos del edificio, otras vistas también en diorama, como la del Coro de los Capuchinos de Roma y el Panteón del Escorial. También había un salón de física recreativa y el edificio estaba coronado por un belvedere de inspiración oriental desde el que se podían contemplar las cercanías de Madrid. Este mirador existe actualmente coronando una de las últimas casas de la calle de Moratín, antes llamada San Juan.
Desde mediados del siglo XIX el paseo se convirtió en la zona favorita de paseo de las clases altas de la capital. Fue en esta misma época cuando una parte del paseo del Prado recibe una especial denominación, se trataba de la calzada inmediata a las casas desde la esquina de la calle de Atocha a la de la plaza de Neptuno, donde
50
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
entonces estaba el palacio de los duques de Medinaceli, tramo que desde mediados de siglo recibió el nombre de calle de Trajineros.
En la esquina del Paseo del Prado con la calle Lope de Vega se construyó en 1865 el Palacio Xifré que un curioso edificio construido por el capitalista Xifré de estilo neoárabe Tras varios usos, entre Legación de México y almacén y tienda de venta de muebles, fue derribado en los años 50 del silgo XX y en su lugar se edificó el enorme edificio del Ministerio de Sanidad.
Pasada la calle de Lope de Vega podemos destacar una casa donde en 1872 estaba la redacción del periódico "El Debate", donde escribían notables personajes como Benito Pérez Galdós. Dentro de la misma zona también podemos destacar en la esquina con Neptuno, un palacete de estilo barroco mandado construir por el conde de Casal, un edificio emblemático de la capital que se levantó sobre una parte del o que anteriormente fueron los jardines del palacio de los duques de Medinaceli.
En los jardines que bordeaban la calle de Trajineros se alzaba un pequeño monumento dedicado al doctor Alejandro San Martín, obra de Miguel Blay. Al otro lado y tras el paseo limitado por una línea de bancos de granito colocados a finales del reinado de Fernando VII, delante del vestíbulo del museo del Prado se levantó la estatua de Velázquez realizada por Aniceto Marinas y financiada por iniciativa del Círculo de Bellas Artes, obra que fue inaugurada en junio de 1899.
El Paseo del Prado, entre 1820 y 1870 era denominado como Salón del Prado que realmente estaba compuesto por tres paseos paralelos separados por hileras de árboles y bancos. Cada uno de estos paseos eran privativos de las tres clases sociales. La gente distinguida paseaba por el sitio más amplio y despejado en la zona central, el pueblo llano paseaba por la arboleda próxima a la acera de la margen derecha (calle de Trajineros), y por último se reservaba a la más selecta concurrencia un estrecho espacio limitado por una serie de bancos, llamado Paris, y que daba al paseo de carruajes.
En estos momentos la acera de la margen izquierda o del Este era llamada el paseo de las Víctimas, por ser la que tenía el Obelisco de la Lealtad o Monumento a las Víctimas del 2 de Mayo. En esta zona se pueden destacar edificios de interés como el Hotel Ritz de 1910 que se levanta sobre el terreno del antiguo jardín Tívoli y
51
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
el edificio de la Bolsa de Comercio levantado hacia 1890.
Además, el solar de la Huerta de San Juan, convertida en parque de espectáculos con el nombre Jardines del Buen Retiro, se edificará una nueva Casa de Correos que desde mediados del XIX compartía sede con el Ministerio de Gobernación en el viejo caserón de la Puerta del Sol. Para la nueva edificación se eligieron las Huertas de San Juan o Jardincillos del Buen Retiro en la esquina del Paseo del Prado con Cibeles. Era un solar muy frecuentado por el pueblo madrileño donde se celebraban verbenas y teatrillos. Las obras se iniciaron el 1907 y finalizaron en 1918 según proyecto de Antonio Palacios y Joaquín Otamendi. El Palacio de Correos y Telecomunicaciones abre al Prado su parte más significativa, la galería de los buzones, formada por un amplio soportal, entre cuyos pilares penden unas solemnes y decorativas farolas.
Por las mismas fechas en que se acaba el Palacio de Correos se iniciaron los trabajos del Ministerio de la Marina que ocuparon lo que quedaban de las Huertas de San Juan.
Antes del Plan de Ensanche Madrid de 1860, el extremo Sur del ámbito de estudio comienza a transformarse con el derribo de la Puerta de Atocha en 1851, iniciándose una tímida expansión urbana que cobró vigor en la década siguiente a raíz de la demolición de la cerca de Felipe IV como parte del Plan de Ensanche de Castro.
Antes de la aprobación de este Plan ya se había construido la primera Estación de Atocha. En 1851 se inaugura la segunda línea férrea del país entre Madrid y Aranjuez, desde Madrid salía el tren de un embarcadero de madera que se situó junto a la Calle de Atocha. En 1856 la Compañía de Ferrocarriles Madrid – Zaragoza – Alicante (MZA) se hizo cargo de ese primitivo embarcadero para convertirlo en la cabecera de una línea que uniera Madrid con Levante, encargando la nueva estación al ingeniero francés Lenoir. Esta estación se inauguraría en 1865.
La construcción de Estación, también llamada del Mediodía hace que al cabo de poco tiempo todo este sector de la ciudad se reestructure y aparezcan la Ronda de Atocha o de Valencia, el Paseo de Santa María de la Cabeza, el Paseo de Atocha, el Paseo de las Delicias y el Paseo de la Infanta Isabel que junto con el Paseo del Prado convergen en la zona de Atocha. Este lugar es el elegido para la ubicación de edificios
52
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
emblemáticos como el Ministerio de Fomento (actual Ministerio de Agricultura) o Museo Antropológico.
En cuanto a la Estación de Atocha, la espectacular expansión que tuvo el ferrocarril a partir de 1860 hizo que pronto se quedara pequeño el edificio diseñado por Lenoir por lo que en la MZA se planteó la construcción de una nueva estación que pudiera dar cabida al nuevo tráfico ferroviario. En 1889 se aprobó el proyecto definitivo para la nueva estación, adjudicado al ingeniero Alberto del Palacio. Las obras, que comenzaron en 1890, consistían en una gran nave de hierro y cristal para vías y andenes, y dos edificios cúbicos paralelos para taquillas y otras dependencias. De su estructura, el elemento más destacado es la cubierta de la nave principal por su gran envergadura. La nueva estación fue inaugurada en 1892 y siguió dependiendo de la MZA hasta que en 1941 fue nacionalizada e integrada en el monopolio estatal de la RENFE.
La estación fue reformada entre 1984 y 1992 siguiendo el proyecto diseñado por Rafael Moneo. En la actualidad la Estación de Atocha es un complejo formado por dos estaciones: la antigua y la nueva. La nueva está destinada al tráfico ferroviario (terminal del AVE, largo recorrido y red de cercanías) mientras que la antigua ha sido dedicada a oficinas de RENFE y a un complejo comercial y de ocio, en el que se ha instalado un jardín tropical que alberga más de 7000 plantas de 400 especies.
La presencia de las estaciones de tren convirtió la zona en un importante nudo de comunicaciones y movimiento de pasajeros. Como consecuencia en el Paseo del Prado y sus inmediaciones fueron apareciendo hoteles. Entre estos establecimientos destacan el Palace de 1912 situado en los terrenos del Palacio de los duques de Medinaceli y el Ritz de 1910 situado en la margen izquierda cerca de la Bolsa y del monumento a los caídos o el Hotel Nacional de 1924 situado en la esquina de Atocha con el Paseo frente al Jardín Botánico.
En 1865 con la enajenación de parte de los bienes de la Corona se inició el cambio radical de la margen izquierda o Este del Paseo del Prado. En esta enajenación de terrenos le correspondió al Ayuntamiento las llamadas Huertas del Buen Retiro (antigua Huerta de San Juan) y una amplia franja entre el Paseo del Prado y el Retiro y desde el Botánico a la calle de Alcalá, donde la corporación municipal decidió parcelar el suelo para su edificación orientada a la alta burguesía y
53
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
así se creó el Barrio de los Jerónimos donde se observan algunas de las muestras arquitectónicas más destacadas del Madrid moderno y contemporáneo.
En este barrio se localizan algunas de las calles más emblemáticas de la ciudad como la de Alfonso XII, Alfonso XI, Montalbán, Antonio Maura, de Ruiz de Alarcón, de la Academia, de Felipe IV, Espalter, la Plaza de la Lealtad, etc. En la zona se construyeron algunos edificios oficiales durante el período de la Regencia de la reina María Cristina entre 1885 y 1902, como la Bolsa de Comercio y la Real Academia de la Lengua Española (1894) y, se reutilizaron como museos viejos edificios del Palacio del Buen retiro como el Casón o el Salón de Reinos.
54
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
LEYENDA PLANO APARCAMIENTOS PRADO-RECOLETOS SITUACIÓN YACIMIENTOS DE PREHISTORIA, EDAD MEDIA, Y EDAD MODERNA: SIGLOS XVI Y XVII 1). Restos dispersos de industria lítica del Paleolítico Inferior y Medio y del Neolítico (del 5000 al 4000 a. C.) en la calle de Alcalá a la altura del Parque del Retiro y en diversos puntos de este parque. 2). Materiales en superficie del Paleolítico Inferior y Medio, del Neolítico y del Calcolítico (del 3500 al 2500 a. C.) en el Cerro de San Blas (Carta Arqueológica de la Comunidad de Madrid, Yacimiento incluido en el “Casco Histórico de Madrid”) 3). En el siglo XIII había una Ermita con culto a la Virgen de Atocha en el camino de Atocha o de Vallecas. 4). Convento de San Jerónimo construido en 1503 sobre uno de los cerros de la margen izquierda del arroyo Valnegral. 5). Carlos I, ordenó hacia 1510 la construcción, al Norte del Convento, de unos aposentos que fueron conocidos como Cuarto Real y más tarde como Cuarto Viejo. 6). En el siglo XVI hay noticias de la situación de la Ermita de San Blas en el cerrillo de San Blas 7). En 1523 se funda sobre los restos de la ermita de la Virgen de Atocha el Convento de Dominicos de Nuestra Señora de la Asunción, más conocido como Convento de Nuestra Señora de Atocha 8). En el año 1569 se construye un Estanque frente al Convento de los Jerónimos. 9). En el siglo XVII estaba la huerta del marqués del Carpio que luego, en el siglo XVIII, pasó al marqués de Alcañices y por último al duque de Sesto. 10). En los siglos XVII y XVIII, en la esquina del Paseo del Prado con la Carrera de San Jerónimo estuvo la finca del duque de Maceda que posteriormente, fue adquirida para el palacio del Marqués de Villahermosa (actual Museo Thyssen). 11). En 1603 en el tramo del Prado de Atocha desde la Carrera de San Jerónimo hasta la calle de Huertas estaban las inmensas propiedades del duque de Lerma donde construyó una casa principal con patio central en 1614. 12). Dentro de los terrenos del Duque de Lerma se construyó en 1606 el convento de San Antonio del Prado hoy desaparecido. 13). Dentro de los terrenos del Duque de Lerma se construyó en 1606 el convento de Trinitarios Descalzos donde está el famoso Jesús de Medinaceli. 14). Entre 1625 y 1650 se construye la Puerta de Atocha o de Vallecas. 15). En el siglo XVII se instala la Fuente del Prado próxima a la calle de Alcalá. 16). En el siglo XVII se instala la Fuente del Peñasco en la margen derecha cerca de las tapias de los jardines del marqués del Carpio. 17). En el siglo XVII se instala la Fuente del Caño Dorado frente a lo Jerónimos. 18). Se sabe que en el año 1624 el arroyo se empezará a encauzar desde el Paseo de Recoletos hasta el de Atocha, construyéndose varios puentecillos para cruzar el cauce. Uno
55
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
de estos puentes se puede ver en el plano de Teixeira de 1656 frente a los Jerónimos. 19). Entre 1629 y 1640 se edificará el Palacio del Buen Retiro. 20). Viaje de Agua del Bajo Abroñigal que desde la zona de Canillas y Canillejas hasta llegar al valle del Arroyo Castellana a la altura de Colón, desde este punto se dirigía hacia el Sur, bajo la zona del Paseo de Recoletos, hasta el cruce con la calle de Alcalá en la actual plaza de Cibeles y luego subía por la calle de Alcalá hasta Sol y el núcleo urbano de Madrid. 21). A principio del siglo XVII se situaba, en la esquina del camino de Alcalá con el Paseo del Prado, la Huerta de San Juan o Huerta del Rey, delimitada por una tapia con edificios tipo torre en las esquinas (el conjunto irá desapareciendo a lo largo del siglo XIX). En estos terrenos se solían reunir los aristócratas madrileños. Fue famosa por sus pajareras con aves exóticas y porque por su río artificial o Río Chico se podía navegar en pequeños botes. 22). La Huerta de San Juan debía su nombre a la presencia de la Ermita de San Juan del siglo XVII que desparecerá después de la ocupación de Madrid por las tropas napoleónicas (1808 – 1813). 23). Del conjunto del Palacio de Buen Retiro construido en el siglo XVII se conserva en pie el Salón de Reinos que ha sido utilizado hasta hace poco como Museo de Ejercito y correspondería el ala Norte del Palacio. 24). Coliseo de Comedias (siglo XVII) desaparecido durante la guerra de la Independencia. 25).Salón de Baile o Casón del Retiro (siglo XVII) donde se hacían fiestas, bailes y recepciones. Este edificio se conserva y está siendo utilizado como ampliación del Museo del Prado. 26). En 1640 se finalizarán los Jardines del Buen Retiro. 27). El Estanque Grande sería de mediados del siglo XVII. 28). En el siglo XVII estaba el Prado Alto que era una extensión sin edificaciones que se situaba entre el Palacio del Retiro y la Huerta de San Juan. 29). Dentro del Prado Alto se encontraba en el siglo XVII el edificio del Juego de Pelota donde se practicaba el frontón. Esta construcción tenía planta rectangular con tres pisos y un patio central de tipo corrala. El conjunto desparecerá en torno a 1761. 30). En el extremo Sur del Prado Alto frente al acceso al Palacio desde el Paseo del Prado se localizaba la Torrecilla del Prado (siglo XVII) de planta cuadrada y de dos pisos que se utilizaba para dar pequeños conciertos de música. Esta Torrecilla desaparecerá hacia el año 1788. 31). En el camino de Alcalá se encontraba la antigua Puerta de Alcalá que se construyó a principios del siglo XVII (entre 1625 y 1650). 32). En el siglo XVII se sabe que al Oeste del Convento de los Jerónimos estaba la ermita de San Pablo. 33). La ermita de San Antonio de los Portugueses del siglo XVII que se incendió en 1730 y se reconstruyó rápidamente.
56
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
N
Plano Aparcamientos Prado-Recoletos situación Yacimientos de la Prehistoria, Edad Media y Edad Moderna: siglos XVI y XVII.
57
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
LEYENDA PLANO APARCAMIENTOS PRADO-RECOLETOS SITUACIÓN YACIMIENTOS SIGLOS XVIII, XIX Y XX
34). Entre finales del siglo XIX y mediados del siglo XX se construye La Basílica de Nuestra Señora de Atocha que está situada sobre el antiguo convento de Nuestra Señora de Atocha 35) En la huerta del marqués de Carpio, luego de Alcañices y del duque de Sesto se edificó en 1884 el Banco de España. 36). En 1912, en una parte de las propiedades de los Lerma - Medinaceli se construyó el Hotel Palace. 37). En el lugar donde se levantaba el palacio de Maceda se construyó el palacio de Villahermosa (Museo Thyssen) en 1806. 38). Por su parte en el jardín de los condes de Monterrey, situado entre este palacio y el de los marqueses de Alcañices, se edificó en 1746 la iglesia de San Fermín, muy popular por su reloj que permitía la interpretación de variadas piezas musicales. 39). Entre estas mejoras de los jardines del Buen Retiro se construirá a principios del siglo XVIII de un jardín de flores que dibujan arabescos llamado Parterre que todavía se puede ver en la entrada al Retiro por la calle Alfonso XII, frente al Casón. 40). Hacia mediados del siglo XVIII se construyen la Caballerizas que se utilizan también como cuartel la Guardia Real. 41). Al oeste del Convento de los Jerónimos y del viejo Cuarto Real se edifica la casa para el Intendente del Palacio (siglo XVIII). 42). En el año 1778 se finaliza la construcción de la nueva Puerta de Alcalá. 43). En 1778 se instalará la Escuela de Agricultura en el jardín de la Ermita de San Juan. 44). La Leonera o Casa de Fieras que fue ampliada en 1765. 45). Entre la ermita de San Blas y el convento de Atocha, se situará el Almacén de Pólvora (siglo XVIII) que desaparecerá en 1788. 46). Al Sureste del Convento de los Jerónimos, en el Campo Grande, se construyó en 1780 la Real Fábrica de Porcelanas del Buen Retiro 47). En el antiguo Campo de San Blas, se construyó el Jardín Botánico que se inauguró en 1781 según diseño del Juan de Villanueva. 48). En 1785 se inician las obras del Gabinete de Historia Natural y Academia de Ciencias Exactas hoy Museo del Prado. 49). El Observatorio Astronómico se construyó sobre la antigua Ermita de San Blas. Las obras finalizaron en 1795, aunque sufrió muchos destrozos durante la guerra de la Independencia, por lo que hasta 1845 no se restauró y reconstruyó. 50). El Hospital General que se construyó entre 1756 y 1781 y que hoy es utilizado como Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. 51). En 1777 se finaliza la construcción de una mina subterránea para un gran colector que encauzará las aguas del arroyo, desde la puerta de Recoletos en la zona de la actual plaza de
58
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Colón hasta la de Atocha, obra que se complementó con la construcción de un colector en Atocha, todo lo cual permitió terraplenar y allanar el terreno del Prado. 52). En 1781 se completan los proyectos para la Fuente de Neptuno. 53). En 1781 se completan los proyectos para la Fuente de Apolo. 54). En 1781 se completan los proyectos para la Fuente de la Cibeles. 55). Palacio de Buenavista de 1777 (hoy Cuartel General del Ejército). 56). Platería Martínez se construyó en 1783 y desapareció en 1869. 57). Monumento a las Víctimas del 2 de Mayo que se inauguró en el año 1840. 58). Desde 1830 hasta 1868 se mantuvo en pie el famoso Diorama. 59). En la esquina del Paseo del Prado con la calle Lope de Vega se construyó en 1865 el Palacio Xifré. 60). El Hotel Ritz 1910. 61). La Bolsa de Comercio de 1890. 62). El palacio de Correos y Telecomunicaciones: las obras se iniciaron el 1907 y finalizaron en 1918. 63). A principios del siglo XX se edifica el Ministerio de la Marina. 64). Estación de Atocha de 1892. 65). Ministerio de Agricultura fue construido para albergar al Ministerio de Fomento, se inauguró en 1893. 66). Museo de Antropología entre 1873 y 1875. 67). Hotel Nacional de 1924. 68). En 1894 se inaugura la sede de la Real Academia de la Lengua Española. 69). Puerta de España de 1869. 70) Puerta de Felipe IV de 1869.
59
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
N
Plano Aparcamientos Prado-Recoletos situación Yacimientos siglos XVIII, XIX, y XX.
60
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Monumentos históricos y edificios emblemáticos en el entorno del futuro aparcamiento plaza de la Lealtad: Entre los monumentos y edificios más destacados del área de influencia y entorno del futuro aparcamiento subterráneo de la plaza de la Lealtad destacan:
1. La Bolsa de Comercio de Madrid. 2. El Hotel Ritz. 3. El Obelisco a los Héroes del Dos de Mayo. 4. La Fuente de Neptuno. 5. El Museo Thyssen-Bornemisza. 6. El Hotel Palace. 7. El Banco de España. 8. El Museo del Ejército. 9. El Museo del Prado. 10. La Iglesia y Convento de San Jerónimo el Real. 11. El Palacio de Comunicaciones. 12. La Casona del Buen Retiro. 13. La Real Academia Española. 14. El Cuartel General de la Armada y Museo Naval. 15. El Museo Nacional de Artes Decorativas. 16. El Palacio de Bruno Zaldo. 17. La Puerta de Mariana de Neoburgo.
61
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
N
62
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
A continuación se expone una breve descripción de cada uno de ellos:
1. La Bolsa de Comercio de Madrid
Se trata de una edificación singular que se construyó sobre el solar dejado por el teatro El Dorado y como resultado del concurso nacional convocado por la Junta de Obras de la Bolsa de Comercio en 1884, en el que Repullés ganó el primer premio, con la obligación de introducir algunas modificaciones. Su propuesta se adapta a la forma irregular del solar, con su frente principal curvilíneo, definido por la alineación de la Plaza de la Lealtad, en torno al obelisco conmemorativo del Dos de Mayo. En el volumen, que cuenta con cuatro niveles, sótano, bajo, principal y ático, destaca el cuerpo central de planta basilical, con nave, galerías laterales, ábside semicircular y deambulatorio, al que se adosan otros dos trapezoidales, uno en cada flanco, con su respectivo patio triangular. Este conjunto se organiza según dos ejes: el de simetría, central y de acceso, que coincide con la dirección de uno de los diámetros de la Plaza y en el que se suceden peristilo, galería o pórtico de arcadas, vestíbulo, nave y ábside, y otro transversal, por la tercera pieza, con dos núcleos de comunicación vertical a cada lado y, en el nivel inferior, el guardarropa y los servicios públicos, a izquierda y derecha, respectivamente. El espacio más significativo, y al que queda supeditada toda la distribución, es el Salón de Contrataciones, centro del edificio y de doble altura, que abarca todo el primer cuerpo referido, con una superficie aproximada de 1.000 m2 y capacidad para dos mil personas. Decorado con gran riqueza, en lenguaje neorrenacentista, está delimitado por una doble arquería, la inferior entre pilastras estriadas con capiteles tallados con el emblema del Comercio y la superior sobre columnas de mármol, con capiteles y basas de bronce, cuyas arquivoltas se adornan con los escudos de diferentes naciones. Cubre el Salón una bóveda esquifada de hierro y cristal. En el alzado principal se observa el mismo énfasis en el cuerpo central, configurado por una gran escalinata, un monumental pórtico hexástilo corintio, coronado por un ático con tondos y un reloj intermedio, más un escudo con las armas reales soportado por angelotes. Su estilo también es el Neorrenacimiento, de líneas sencillas pero solemnes, cuyo modelo fue la Bolsa de Viena, realizada por Theophil von Hansen en 1871.
63
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2. El Hotel Ritz
Fue construido sobre los terrenos que ocuparon el Teatro Tívoli y el Circo Hipódromo por la cadena hotelera inglesa "Ritz Development", quien encargó el proyecto al arquitecto francés Mewes, autor de los homónimos de la cadena en París y Londres, y la supervisión y "autorización" del mismo en España, así como la dirección de las obras, a Landecho. Se trata de un volumen levantado sobre un solar irregular y con tres fachadas, una de ellas curva, para adaptarse a la plaza de la Lealtad, que es en donde se dispone su entrada principal. Cuenta con ocho niveles: sótano, donde se sitúan la cocina y sus dependencias, comedores de servicio, despensas, bodegas y cuartos de instalaciones; bajo, destinado a "salones de recibo y descanso de viajeros, jardín de invierno, salón de fiestas, restaurant y comedores; cinco superiores para dormitorios y aseos; y sotabanco para los cuartos de la servidumbre. Para la comunicación vertical se proyectó una gran escalera de tres tramos y solada de mármol, junto al acceso, y otra secundaria en el ángulo de las medianerías, así como varios ascensores y montacargas. Las plantas superiores se distribuyen según un patio central y rectangular, de notables dimensiones, con crujías de habitaciones paralelas a sus lados y a las fachadas, siendo el suelo de aquel acristalado, lo que se aprovecha en la inferior para colocar el citado Jardín de Invierno. Destaca además este nivel por su distinción, como se observa en el diseño del vestíbulo semicircular y en el hall cuadrado y columnado, con nichos en las esquinas, y su diafanidad, con espaciosas salas iluminadas desde el exterior y separadas por columnas. Las fachadas son de líneas francesas, neobarrocas, con profusa decoración en proyecto, molduras enlazando verticalmente los huecos o guirnaldas, que debió ser depurada durante las obras por Landecho. A pesar de que todo el conjunto goza de unidad y gran equilibrio compositivo, destaca en él el alzado a la Plaza de Cánovas del Castillo,
64
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
hoy semioculto por un jardín, bien proporcionado y simétrico, flanqueado por torreones curvos rematados por cúpulas.
3. El Obelisco a los Héroes del Dos de Mayo
El Monumento a los Caídos por España era llamado antes de 1985 Obelisco o Monumento a los Héroes del Dos de Mayo. El obelisco fue erigido en 1840 a petición popular para honrar a los héroes que allí murieron fusilados por el ejército napoleónico. El conjunto fue proyectado por el arquitecto Isidro González Velázquez (1765–1840), ganador del concurso que se convocó para tal efecto en 1820 y resuelto al año siguiente. El 22 de noviembre de 1985, el rey Juan Carlos I reinauguró de nuevo el monumento, pasando a dedicarse a todos los caídos por España, en cuya memoria se colocó una llama alimentada por gas que arde permanentemente. En la base del obelisco hay una gran urna de piedra que contiene las cenizas de muchos de aquellos héroes. Dos de estos héroes son los capitanes Luis Daoiz y Pedro Velarde que se encuentran inmortalizados en el monumento de la plaza del Dos de Mayo y que podemos ver también en el medallón que está situado justo encima de la urna. Un poco más arriba, el obelisco está flanqueado por con cuatro estatuas que simbolizan; El Valor, La Constancia, El Patriotismo y La Virtud. Finalmente, se erige un obelisco de piedra de 46 metros de altura.
65
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
4. La Fuente de Neptuno
Incluida en el proyecto original del Paseo del Prado, creado por Juan Hermosilla a instancias del rey Carlos III, la fuente de Neptuno se levanta en el centro de la plaza de Cánovas del Castillo. El diseño del conjunto escultórico se debe a Ventura Rodríguez, que también fue el responsable del resto de las fuentes que jalonan el paseo: Cibeles, Apolo, las Cuatro Fuentes y la Alcachofa, en Atocha, aunque esta última es en la actualidad una réplica del original, que se encuentra instalada en el Retiro.
La escultura de mármol de Neptuno comenzó a esculpirla el artista toledano Juan Pascual de Mena en 1780 y los trabajos los finalizó su discípulo José Rodríguez en 1786. En el conjunto se observa a Neptuno, en medio de un gran vaso circular, con un
66
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
tridente en una mano y una serpiente enroscada en la otra. El dios del mar está de pie sobre un carro en forma de concha al que sujetan unas ruedas con radios de palas. Dos caballos marinos tiran del carro, rodeados de delfines. La altura del monumento se acerca a los siete metros y el diámetro supera los 32.
5. El Museo Thyssen-Bornemisza
El museo Thyssen-Bornemisza está ubicado en el antiguo palacio de Pico della Mirándola, edificio civil de estilo neoclásico, que en 1771 fue adquirido por el duque de Villahermosa como residencia particular, no sin antes promover una profunda reforma. Se conservan proyectos para esta actuación de Manuel Martín Rodríguez y Silvestre Pérez, si bien fue finalmente López Aguado el encargado de acometerla en 1805. Tuvo una planta casi rectangular, distribuida en torno a tres patios, con dos fachadas a la calle y la tercera al jardín. En 1973 fue adquirido por la Banca López Quesada que encargó a Fernando Moreno Barberá su reestructuración, en la cual se vació el interior, dejando sólo los muros perimetrales, y se añadieron tres plantas de sótanos. Posteriormente, Rafael Moneo volvió a reestructurarlo para albergar la importante colección de arte Thyssen-Bornemisza. Reorientó el edificio, situando el acceso principal en la fachada del jardín, y reorganizó por completo el interior en torno al patio central. Respetó el sistema de muros de la fachada norte, creó una serie de salas con muros perpendiculares y circulación periférica al Paseo del Prado y dejó una amplia sala en la fachada a la Carrera de San Jerónimo. Es de destacar el sistema de iluminación natural, a través del patio y lucernarios en las salas altas que permite regular la intensidad de luz. En abril de 2002 se aprobó un proyecto de ampliación que incorpora al museo dos fincas anexas. Próximamente el Museo será ampliado con los dos edificios colindantes
67
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
de la calle Marqués de Cubas, 19 y 21. Para acondicionarse a su nuevo uso, el inmueble se sometió a la adaptación dirigida por Rafael Moneo.
6. El Hotel Palace
Sobre el solar del antiguo palacio del duque de Medinaceli se levantó el Hotel Palace, que surgió como respuesta a la necesidad de dotar de hoteles de gran lujo al centro político, financiero y turístico de la capital. Se estudió el emplazamiento para el hotel y se eligió la manzana delimitada por las calles de Duque de Medinaceli, plazas de Cánovas del Castillo y de las Cortes y calle Cervantes. Previamente se le encargó un anteproyecto al arquitecto francés Edouard Niermans, cuyos planos están fechados en junio y julio de 1910. Inmediatamente la oficina técnica del Palace Hotel de Bruselas convocó un concurso para la construcción del hotel. El certamen fue ganado por el arquitecto catalán Eduardo Ferrès y Puig, que fue el encargado, junto con la empresa de ingeniería belga León Monnoyer et Fils, de realizar el proyecto de ejecución sobre el anteproyecto de Niermans, y también de su construcción. Ferrés introdujo modificaciones sustanciales respecto al anteproyecto, como fue sustituir la forma octogonal del jardín de invierno por una elíptica, cambiar en parte la distribución y toda la decoración interior, e incorporar todos los avances técnicos del momento. El hotel se construyó en sólo dieciocho meses, desde el 30 de marzo de 1911 al 29 de septiembre de 1912. Fue el primer edificio con estructura de hormigón armado en Madrid. Las secciones de hormigón fueron mínimas y los cálculos se realizaron con los métodos más avanzados. Recibió el primer premio del Ayuntamiento de Madrid al edificio mejor construido en 1912. Tiene una planta trapezoidal distribuida en torno a un gran patio de la misma forma. En realidad, el patio se corresponde con el jardín de invierno, cubierto con una cúpula de vidrios emplomados. Consta de ocho plantas
68
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
superiores y tres subterráneas. Albergaba 500 habitaciones con cuarto de baño y servicio telefónico, que hicieron del Palace uno de los hoteles más modernos de Europa. Se caracterizó por su polifuncionalidad: hotel, cine, restaurantes, oficinas y comercios. Sus amplios salones y el gran hall ovalado, cubierto con cúpula, anteriormente nombrada, de hierro y cristal que es una magnífica obra modernista realizada por la conocida firma Maumejean. Las fachadas siguen el estilo Luis XVI de la época, y tienen gran similitud con las del Hotel Negresco de Niza, también diseñado por Niermans. Entre 1925 y 1926 las plantas bajas fueron reformadas por Martín Domínguez y el bar fue decorado por Carlos Arniches y el propio Domínguez. Después de la Guerra Civil, Francisco López Izquierdo y José Luis Duran de Cottes acondicionaron un local para cine, que se cerró años más tarde. Posteriormente se reformó la planta baja de la plaza de Cánovas del Castillo para centro comercial. En los últimos años el hotel ha sido objeto de una rehabilitación general.
7. El Banco de España
En 1880 se estructura el Banco Nacional para la emisión única de billetes en España y se decide construir una sede más acorde con sus necesidades que la que hasta entonces ocupaba la antigua Casa de los Cinco Gremios, en la calle Atocha. Las obras del edificio comienzan según un proyecto de Eduardo de Adaro y Severiano Sainz de la Lastra, que obtuvo en 1884 la medalla de oro en la sección de Arquitectura de la Exposición Nacional de Bellas Artes. El edificio original proyectado por Adaro y Sainz de la Lastra tenía menores dimensiones que el edificio construido, ya que sólo ocupaba el ángulo de la calle Alcalá y el Paseo del Prado. La planta se cerraba sobre sí misma y contenía un amplio chaflán con acceso al vestíbulo y el patio de
69
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
operaciones. Ya empezadas las obras, se decidió ampliarlo por el Paseo del Prado. Este cambio le imprimió un carácter más acorde con las funciones y la representatividad de la institución, incorporando una segunda puerta que da acceso a la escalera de honor, una de las más bellas de la arquitectura decimonónica madrileña, que se cubre con una amplísima vidriera. En 1927 se encargó a José Yarnoz Larrosa su ampliación a lo largo de la calle de Alcalá. Exteriormente repitió la composición de la fachada inicial, de forma que está perfectamente integrada sin apreciarse la zona de ensamble, realizado a través del núcleo central de la puerta de la calle de Alcalá. En cambio, interiormente rompió la composición anterior, construyendo un nuevo patio de operaciones que se convirtió el centro de la nueva distribución. En 1944 Luis Menéndez Pidal reformó la Sala de Comisiones y el Salón de Consejos. Posteriormente sufrió una segunda ampliación que nada tiene que ver con lo anteriormente construido. El Banco de España es uno de los edificios más representativos de Madrid, tanto por su ubicación como por su volumetría y su interés artístico. Sus fachadas son fruto de un eclecticismo basado en los modelos manieristas italianos y de la arquitectura parisina del siglo XVII. Interior y exteriormente posee una rica ornamentación, que se ha conservado hasta nuestra época, entre la que sobresalen las magníficas vidrieras realizadas por las firmas Mayer y Maumejean. En 1978 se realizó un concurso restringido para su ampliación mediante el derribo de la antigua Banca Calomarde, que fue ganado por Rafael Moneo, arquitecto que está redactando en la actualidad el proyecto de ejecución y que posibilitará la ocupación total de la manzana por el Banco.
70
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
8. El Museo del Ejército
El actual Museo del Ejército, situado en la calle de Méndez Núñez, se levanta sobre uno de los escasos fragmentos arquitectónicos conservados del conjunto palaciego del Buen Retiro, concretamente sobre el Salón de Reinos. Aquel extenso complejo residencial fue mandado construir por el conde-duque de Olivares para el recreo de Felipe IV. Además, del palacio real, contaba con numerosas edificaciones auxiliares, plazas, jardines, estatuas y fuentes que se extendían hasta el paseo del Prado. Las obras, dirigidas por Alonso de Carbonell, comenzaron en 1629. Aunque el rey inauguró el nuevo palacio en 1633, los trabajos continuaron hasta 1640. El palacio disponía de dos plantas y era de traza cuadrangular, con torres en las esquinas que remataban con los típicos chapiteles de pizarra de la arquitectura madrileña de la época. Estaba construido con materiales modestos como el ladrillo y la madera, y su riqueza se encontraba en la ornamentación interior, especialmente en este Salón de Reinos, bautizado así por su techo decorado con los escudos de los reinos que formaban parte del Imperio español en el siglo XVII. Entre 1808 y 1813 el complejo palaciego fue ocupado por las tropas francesas, que provocaron graves daños, y a la postre, su casi total demolición posterior, con dos únicas excepciones: el área del palacio donde se hallaba el mencionado Salón de Reinos -que hoy alberga el Museo-, y el pabellón de baile del Casón del Buen Retiro. A ello hay que añadir que el parque del Retiro también formó parte en sus orígenes del complejo palaciego.
71
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
9. El Museo del Prado
Con destino al lugar que por deseo de Carlos III, y de su primer ministro el conde de Floridablanca, debía convertirse en foco del saber ilustrado, esto es, los terrenos que mediaban entre el Real Sitio del Buen Retiro y los Paseos del Prado y Atocha, le fue encomendado al arquitecto Juan de Villanueva la ejecución de este gran palacio, originalmente de las ciencias, cuyo programa incluía un Gabinete de Historia Natural, la Academia de Ciencias Naturales y un gran salón de juntas para ésta, con la posibilidad de compartirlo con la de Bellas Artes de San Fernando. El solar elegido se situaba al Norte del recién fundado Real Jardín Botánico, entre la Iglesia y Monasterio de San Jerónimo y el Salón del Prado, para el que concibe un bloque de gran desarrollo lineal que embellece y cierra ópticamente este Paseo. Nacía, por tanto, con vocación urbana, con pretensión de participar en la renovación de este espacio público, que por entonces se venía ejecutando, máxime porque el edificio debía ser considerado pieza fundamental de ese gran conjunto, paradigma de la Ilustración, y adaptarse al uso para el que había sido destinado. Esta circunstancia explica que un primer proyecto, que se correspondería con el conservado en la Academia de San Fernando, firmado y fechado el 25 de mayo de 1785, apareciera antepuesta al edificio una elegante e insólita logia, una stoa, de inspiración clásica, con la que se pretendía crear una falsa fachada y a la vez un foro romano que sirviera de transición entre el exterior y el nuevo monumento sagrado, templo de la ciencia y la razón. No hay certeza sobre si ésta fue la propuesta elegida por el Ministro, con la aquiescencia del Monarca y entre las dos presentadas por Villanueva, o si por el contrario fue la perdida, sobre la que se conserva una maqueta, aunque ésta parece una fase intermedia entre aquella y la tercera y definitiva que hoy se contempla. En cualquier caso, el planteamiento era común a las tres, pues la diferencia de funciones que imponía el referido programa del edificio, así como la acusada pendiente del terreno
72
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
en que se asienta, obligaron al arquitecto a resolverlo, no como uno, sino como tres autónomos bajo una misma piel, en plantas superpuestas, con entradas diferentes en cada frente y circulaciones en fondo de saco. Así, por el Norte, y mediante una rampa curva, se accedía al Gabinete, que ocupaba todo el nivel principal y había sido proyectado como una galería-museo entre rotondas, mientras que por la Sur se entraba en el nivel inferior, donde se hallaban dispuestas las escuelas de Botánica y Química, a lo largo de un corredor central. Con el pórtico occidental hacia el Prado se comunicaba el Salón de Juntas, de doble altura y recorrido por una galería accesible desde el piso principal, el cual se organizaba según un eje ortogonal y central, que otorgaba al conjunto planta en T simétrica. El constante incremento de los fondos del museo derivó en sucesivas ampliaciones durante el siglo XX. La primera, que tuvo lugar en 1918, se produjo por la parte trasera del edificio, dejando abiertos unos patios que después fueron cubiertos. Las extensiones realizadas en los años 50 y 60 acabaron por ocupar todo el solar trasero. El problema de la falta de espacio fue solucionado con el anexo en 1971 de un inmueble independiente, el Casón del Buen Retiro, un edificio construido por el arquitecto Alonso de Carbonell para albergar el Salón de Baile de un palacio de descanso de Felipe IV, del que aún se conserva el techo pintado por Lucas Jordán a finales del siglo XVII. Pese a estas adiciones, el museo sólo tiene expuesta una parte de sus fondos, por lo que,
recientemente,
se
ha
inaugurado
una
nueva
ampliación
de
las
instalaciones diseñada por el arquitecto Rafael Moneo. Consiste en la construcción de un edificio en torno al antiguo claustro de los Jerónimos y la conexión del mismo con la sede de Villanueva. De esta forma, habrá más espacio para exposiciones temporales, talleres de restauración, un auditorio, una cafetería, un restaurante y oficinas. Tras la reforma, el edificio Villanueva concentrará tanto las colecciones históricas como las colecciones modernas.
73
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
10. La Iglesia y Convento de San Jerónimo el Real
Fundación de Enrique IV de 1464, este Monasterio de monjes jerónimos tuvo su primitivo emplazamiento en el Camino de El Pardo, al borde del río Manzanares, pero la insalubridad del lugar ocasionó su traslado en 1502 por orden de los RR. CC., eligiéndose unos terrenos al Este, en el prado alto del arroyo Abroñigal, extramuros de la entonces villa de Madrid. Las obras comenzaron al año siguiente, probablemente con trazas del maestro Enrique Egas, quien tomó como modelo los templos de San Juan de los Reyes de Toledo y de Santo Tomás de Ávila, esto es, una nave única con capillas entre los contrafuertes, crucero poligonal y coro alto a los pies, cubierto todo el espacio con bóvedas de crucería. Su estilo era el gótico tardío o isabelino, igual que el del primitivo claustro situado al Sur de la Iglesia, alrededor del cual se organizaban las dependencias monacales. Contaba también con algunas habitaciones denominadas el "Cuarto Real", adosado al Norte y Este del ábside de la Iglesia, para aposentar a dichos monarcas en sus retiros al Monasterio, el cual sería ampliado en 1561 por Felipe II, con planos de Juan Bautista de Toledo, no solo ya con fines espirituales, sino también recreativos. Fue este aposento embrión del posterior Real Palacio del Buen Retiro, con el cual el templo adquiriría doble función, como capilla palatina y a la vez conventual. Hacia 1550 se levantó un segundo claustro plateresco, que se demolió tres siglos después, y en 1602 ó 1612, a la par que se creaba la hospedería, ordenó Felipe III la reconstrucción del primitivo y principal, el citado gótico, en estilo herreriano, para lo cual aportó trazas Francisco de Mora, que recuerdan al Patio de los Evangelistas de El Escorial. Algunos autores consideran que este nuevo claustro se ejecutó por entonces, aunque de ser así ya amenazaba ruina cinco lustros después, cuando el prior y monjes jerónimos decidieron encomendar al arquitecto fray Lorenzo de San Nicolás su derribo y reconstrucción. Las condiciones para su ejecución,
74
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
caracterizadas por el respeto a la arquitectura preexistente y el ahorro de materiales, fueron aceptadas por los maestros de obras José de Sopeña y Miguel Martínez. Este claustro, que coincide con el que actualmente se conserva, una vez rehabilitado ha de quedar integrado dentro de la ampliación del Museo del Prado, que proyecta Rafael Moneo. La ocupación francesa durante la Guerra de la Independencia, que transformó el Monasterio en cuartel de artillería, y, sobre todo, la Desamortización de Mendizábal de 1836, acarrearon su ruina, lo que obligó a sucesivas reparaciones en él y a una restauración más ambiciosa a partir de 1851, bajo la dirección de Pascual y Colomer, quien prácticamente lo redujo a las partes hoy existentes, iglesia y claustro, demoliendo el resto por inservible. De este momento es la fachada principal, sustituyendo a la antigua, más sencilla y mutilada, aunque se recuperó y respetó la portada primitiva oculta en el muro, dotándola de nueva decoración escultórica. También se realizaron las dos torres adosadas al ábside, siguiendo modelos centroeuropeos, y en general toda la decoración exterior, aquí con referencias al referido convento toledano, mientras que las escasas actuaciones interiores llevadas a cabo por Pascual y Colomer desaparecieron con los nuevos criterios restauradores de Repullés a partir de 1879, más acordes con la concepción original, cuando el templo se erigió en parroquia del Arzobispado de Madrid. Con motivo de la boda de Alfonso XIII, en 1905 se levantó la escalera monumental y en 1948 Íñiguez Almech eliminó el revoco exterior, dejando visto el aparejo de mampostería y ladrillo.
75
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
11. El Palacio de Comunicaciones
En 1903, el Gobierno resolvió la desaparición de los denominados Jardines del Buen Retiro, ante la oposición de la opinión pública, eligiendo parte de sus terrenos para la construcción de un nuevo centro que englobase el correo y las telecomunicaciones, así como la dirección general del ramo. El 20 de agosto de 1904 un Real Decreto disponía la convocatoria de un concurso nacional para su ejecución, del que resultó ganador el proyecto presentado por dos jóvenes arquitectos: Palacios y Otamendi, en el cual se adivinaba ya la fuerte personalidad del primero por su curiosa vinculación a ciertos modernismos, que habrían llegado a él a través de los libros y revistas de la Escuela y por el conocimiento directo que sus frecuentes viajes le aportaban. Su propuesta, adaptada perfectamente a la irregularidad y gran extensión del solar, se caracteriza por la originalidad, monumentalidad y deseo de trascendencia, asumiendo el historicismo, los logros espaciales, propiciados por la Revolución Industrial, y el simbolismo de la arquitectura europea contemporánea.
76
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
12. La Casona del Buen Retiro
El Casón formó parte del conjunto de edificaciones que componían el Palacio del Retiro, mandado construir a partir 1631, durante el reinado de Felipe IV, por iniciativa del Conde Duque de Olivares. Su proyecto de construcción es de origen incierto, pero se cree que su trazado barroco fue realizado por Alonso Carbonell en 1637 para albergar el salón de baile del palacio. No obstante, su construcción se prolongó hasta las postrimerías del siglo XVII bajo la dirección de obras de José del Olmo. Del interior destacan las pinturas del techo del Gran Salón, realizadas por Lucas Jordán en 1695. Durante el siglo XIX su traza barroca se fue alterando debido a los diversos usos a que fue destinado: estamento de Próceres o Senado (1834-1835), Gabinete Topográfico y Gimnasio del príncipe Alfonso. En 1868, con motivo de la revolución, el edificio fue nacionalizado y once años después convertido en sede del Museo Nacional de Reproducciones Artísticas. Las fachadas que presenta en la actualidad no son las originales. La principal fue prácticamente destruida por un ciclón y en 1886 tuvo que ser reconstruida en trazas clásicas por el arquitecto Ricardo Velázquez Bosco. Años antes, en 1877, la fachada que da a la calle Alfonso XII fue reformada y porticada por los arquitectos Antonio Felipe Peró, Manuel Antonio Capo y Mariano Carderera. En la actualidad, y desde 1971, forma parte del complejo del Museo Nacional del Prado, y en sus salas se exponen las colecciones de arte del siglo XIX. No obstante, lleva algunos años cerrado porque se están realizando importantes obras de restauración.
77
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
13. La Real Academia Española
El edificio de la Real Academia Española, situado en la calle de Ruiz de Alarcón, fue diseñado específicamente para convertirse en la sede de la institución. Su construcción se inició en 1891 sobre unos terrenos del antiguo complejo palaciego del Buen Retiro cedidos por la Casa Real, y su arquitecto fue Miguel Aguado Sierra, que diseñó un paralelepípedo de tres pisos y líneas sencillas que sugieren la imagen de un templo griego.
En el exterior el ladrillo rojo de los muros contrasta con los elementos decorativos de piedra clara, y en la fachada principal sobresale el pórtico adosado sobre cuatro columnas dóricas que se remata con un frontón triangular. Esta nueva sede se inauguró en abril de 1894, dando asiento definitivo a la Real Academia, que desde su fundación había conocido diversos emplazamientos. La conocida institución existía desde 1713, año en que se crea por iniciativa de Juan Manuel Fernández Pacheco, marqués de Villena, con el apoyo y protección de Felipe V. El propósito que inspiró su constitución fue el de preservar el castellano de
78
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
cualquier desviación, condensado en el archisabido lema "Limpia, fija y da esplendor", muy en la línea del despotismo ilustrado de la época. Adaptados a los tiempos actuales, los ilustres académicos contemporáneos velan, al dictado de los estatutos de la institución, porque nuestra lengua no pierda "la esencial unidad que mantiene en todo el ámbito hispánico".
14. El Cuartel General de la Armada y Museo Naval
Edificio oficial representativo que proyecta Espelius y termina De Luque, quien en esta época realiza o concluye una serie de edificios estatales de gran magnitud y monumentalistas, con fachadas muy recargadas ornamentalmente y mezcla de elementos góticos isabelinos, en honor del impulso de la Marina durante el reinado de los Reyes Católicos, pero también clásicos, dentro de un tono general ecléctico, que este último justificó en la búsqueda de una arquitectura nacional, tan en boga en el
79
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
primer cuarto del siglo XX. Levantado por Real Orden del 22 de julio de 1915 para acoger el Ministerio de Marina, el volumen primitivo se asienta sobre un solar de planta trapezoidal, con fachada a tres calles y a dos amplios patios interiores. La principal es la de Montalbán, desde donde se entiende su magnificencia, lograda por su altura, seis niveles más semisótano y áticos, su masividad y su profusa decoración. Se divide este alzado simétricamente en cinco cuerpos, avanzados los extremos y el central y éste rematado por un esbelto torreón de planta cuadrada, que potencia el eje intermedio y marca el ingreso, producido a través de una gran portada. Traspasada ésta, recibe al visitante la monumental escalera imperial, de mármoles jaspeados, con casetones de "alga marina" e iluminada por faroles de bronce, a modo de fanales de un navío. La caja está coronada por una galería de arcos escarzanos que soportan la potente cornisa y las vidrieras emplomadas, que iluminan cenitalmente. Casi toda la planta primera la ocupa el Museo Naval, con una importante colección de objetos, cartografía y bibliografía relacionada con la mar, y la segunda a la antigua vivienda del Ministro, los despachos y las salas de recepción oficial, embellecidas con los revestimientos decorativos y pinturas, de estilo pompeyano, que ornamentaban algunas de las habitaciones de su antigua sede de la calle de Bailén o Palacio de Grimaldi, realizadas en 1792 por el arquitecto Jean Demosthène Dugourc, y aquí trasladadas en 1928, preservándolas para la posteridad. Destaca así el llamado "Salón de Apolo", el singular "Despacho de Godoy", el "Salón del Rapto de Gamínedes", etc. La necesidad de nuevos espacios motivó su ampliación en los años setenta, sobre un solar anexo sito al mediodía. Se trata de un volumen concebido desde la modernidad, pero con pretensión de integrarse exteriormente al primitivo y no yuxtaponerse, mediante el mantenimiento de la monumentalidad y de sus pautas compositivas, como la altura de impostas, una modulada ordenación derivada de aquel, división clásica en cuerpos horizontales, basamento, central, a modo de columnata, y coronación o entablamento, etc., aun cuando fue preciso quintuplicar la superficie de ventanas, sin romper la armonía del conjunto.
80
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
15. El Museo Nacional de Artes Decorativas
El edificio actual es el resultado de sucesivas adiciones efectuadas sobre el que fuera palacete de la opulenta dama Dª María del Carmen Hernández y Espinosa, viuda del marqués de Manzanedo y duque de Santoña, destinado en principio a su residencia particular, aunque nunca lo llegó a habitar. Posteriormente, fue ocupado en arrendamiento por personajes de la alta sociedad, hasta que en los años veinte se decidió su cambio de uso para Escuela Superior de Magisterio. Tenía originalmente planta cuadrangular y simétrica con tres niveles: bajo, principal y segundo más sótano, acogiendo el intermedio, de mayor altura libre, las habitaciones nobles, y el superior las de servicio. Estructuralmente estaba configurado por cuatro crujías, de aproximadamente 6 m las paralelas a la vía pública y 5 m las transversales, alrededor de un patio central cuadrado, con galerías sobre columnas de fundición y cubierto por un lucernario de hierro y cristal. A la derecha, entrando, se situaba la escalera de traza imperial, que unía los dos primeros pisos, existiendo otra de servicio de madera, enfrentada y a la izquierda, que los recorría todos. Su tipología interior y exterior se corresponde con la de los primitivos hoteles levantados en lo que fueron terrenos del Buen Retiro a partir de 1877, tempranamente desaparecidos. Su fachada se encuadra dentro del eclecticismo clasicista, con paramentos de ladrillo que contrastan con el zócalo de sillería y las molduras ornamentales de piedra, como las líneas de imposta y cornisa, los encadenados y pilastras, que enfatizan las esquinas de los cuerpos extremos, a modo de torreones, o los dinteles, frontones y guardapolvos que rematan los huecos desde el piso bajo al segundo, respectivamente. Una balaustrada de forja, dorada con panes de oro, al igual que los antepechos de los balcones, cerraba la composición y ocultaba la cubierta de teja. Aunque el frente hacia la calle de Montalbán delimitaba todo el solar, el volumen del Palacete no lo ocupaba totalmente, separándose de las edificaciones medianeras mediante un patio en U y dos pabellones de portería y cocheras, situados respectivamente a poniente y levante de aquel, con acceso directo desde la vía pública. Precisamente sobre este último, o izquierdo, se levantaba un invernáculo acristalado que sería sustituido, ya funcionando como Escuela, por Carrasco-Muñoz por un piso completo con triple ventana al exterior, el cual respetaba al máximo la concepción original. Con esta misma pretensión, aunque con mayores ambiciones, proyectó Moya la segunda ampliación en 1942, desde su puesto de arquitecto conservador del ya Museo de Artes Decorativas, tras la adquisición del inmueble por el Estado dos años antes, proponiendo la edificación de
81
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
los huecos existentes entre el palacete primitivo y las medianerías y la adición de un sótano y dos nuevas plantas sobre la línea de cornisa existente. También intervino en el interior demoliendo la tabiquería, con el fin de crear salas "amplias y despejadas", aumentando con dos más el número de escaleras, sustituyendo el lucernario por otro de hormigón armado y transformando la portada, más ancha y redecorada, por considerar de "poca importancia" la original. Aunque en fachada su actuación fue mimética, Moya logró, como en otras ocasiones y tras un profundo estudio, una solución respetuosa y bien compuesta, en la que se reconoce con claridad el palacete original, del que solo desapareció la balaustrada, también la del pabellón de servicio, y la ampliación de Carrasco. Hoy el Museo alberga importantes fondos, continuamente acrecentados, como la reciente adquisición de la colección Torsten Bröhan, constituida por valiosos muebles y piezas, diseñados por arquitectos y artistas del Movimiento Moderno.
16. El Palacio de Bruno Zaldo
Situado en la calle Alfonso XII, junto al Casón del Buen Retiro, fue construido entre 1901 y 1903 por el arquitecto Eduardo Adaro, como casa-palacio del rico financiero Bruno Zaldo, para quien ya había trabajado anteriormente en la construcción de diversos edificios de viviendas en la calle Juan de Mena y Felipe IV. Aplicando un estilo arquitectónico claramente ecléctico, se trata de un hermoso palacete levantado sobre una manzana entera de planta cuadrangular. Organizado en torno a un patio interior se compone de sótano y tres plantas. En el exterior, destaca sobre todo la fachada, en donde podemos ver perfectamente la mezcla de estilos:
82
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
clasicismo en balcones y pilastras, barroco en los frontones partidos, así como reminiscencias modernistas en los miradores de esquina y en los elementos decorativos de la cornisa.
17. La Puerta de Mariana de Neoburgo
Se trata de una de las puertas de acceso al Parque del Retiro desde la calle Alfonso XII. Fue construida en 1689 por el arquitecto Melchor de Bueras, para conmemorar la entrada en Madrid de Mariana de Neoburgo en 1690, segunda esposa de Carlos II. Se trata de una puerta barroca realizada en granito para este tipo de solemnidades, en la que destaca su vano adintelado coronado por un gran arco de medio punto. A mediados del siglo XIX la puerta fue traslada al desaparecido palacio de San Juan, cuyo solar hoy ocupa el Palacio de Comunicaciones, aunque algunos autores sostienen que también estuvo emplazada en la Casa de Campo. Su emplazamiento actual frente al Casón del Buen Retiro precisó de una adaptación realizada por el arquitecto Luis Bellido. También se la conoce como la Puerta del Parterre, puesto que da acceso a este recinto.
83
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Vías pecuarias: Las cañadas, también denominadas galianas, son antiguas rutas que cruzan la Meseta castellana y que permiten el paso de los ganados trashumantes que emigraban entre sus pastos de verano en las montañas del norte y centro de la Península (agostaderos) y sus pastos de invierno (invernaderos o "extremos") en los cálidos valles, dehesas y tierras bajas del sur y oeste del país. En su conjunto forman un anastomosado sistema de caminos de distinta anchura, hasta un máximo de 70100 metros (90 varas castellanas =75,22 metros) en las cañadas reales, que conducen hacia el sur desde las principales sierras del país. Las rutas más estrechas y de menor rango se llaman cordeles, cuerdas y veredas; también hay que citar ciertos ensanchamientos dónde el ganado solía detenerse al final de cada jornada conocidos como descansaderos. Todas ellas, en conjunto, reciben la denominación de vías pecuarias. Estas vías, se clasifican según una anchura que se fijaron por la Mesta y se mantienen vigentes por la Ley de 27 de junio de 1974.
La Ley 8/98, de vías Pecuarias de la COMA, en su preámbulo expone:
"El conjunto formado por las cañadas reales y demás vías pecuarias españolas constituyen un patrimonio histórico único en Europa y en el mundo. Dentro de ese conjunto, Madrid, centro geográfico peninsular que participa de lo serrano y de lo manchego, es también encrucijada de grandes vías trashumantes y cuatro de aquellas cañadas reales intercomunitarias atraviesan su territorio; hasta tal punto las cañadas reales y vías pecuarias han desempeñado y siguen desempeñando un papel de singular relieve, que desde la Baja Edad Media, constituyen un referente inequívoco para la historia de Castilla y de nuestra Comunidad como lugar de encuentro de ambas Castillas. La Comunidad de Madrid es recorrida además por gran número de otras vías pecuarias que sumadas a las primeras totalizan cuatro mil kilómetros de longitud y más de trece mil hectáreas de superficie. La tendencia actual de la política de la Unión Europea, propugnada por la reciente Declaración de Cork (noviembre de 1996) y defendida por la Carta Verde del Espacio Rural Europeo del Consejo de Europa (1995), es la de considerar al mundo rural como un ámbito dotado de tres funciones básicas: la agro-ganadera y forestal que siempre ha tenido y a la que se añaden ahora la medio ambiental y la socio cultural, debiéndose destacar que el árbol y el bosque sirven a esas tres finalidades por lo que bien merecen una especial
84
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
atención. Por todo ello constituye un deber inexcusable de las Administraciones Públicas el fomento y la adecuada conservación del Patrimonio que constituyen las cañadas reales y vías pecuarias, vinculando dicho Patrimonio a un modelo de desarrollo sostenible para las zonas rurales".
Tras la consulta de la Ley 8/1998, de 15 de junio, de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid y de la Ley 3/1995, de 23 de marzo, de Vías Pecuarias se nos define vía pecuaria de la siguiente forma:
“Artículo 2.- Se entiende por vías pecuarias las rutas o itinerarios por donde discurre o ha venido discurriendo tradicionalmente el tránsito ganadero”. “Artículo 3.- Las vías pecuarias cuyo itinerario discurre por el ámbito territorial de la Comunidad de Madrid son bienes de dominio público de esta Comunidad y, en consecuencia, inalienables, imprescriptibles e inembargables”.
La actuación de la Comunidad de Madrid sobre las vías pecuarias que transcurran por su territorio tendrá como fin, entre otros:
“Artículo 4.- c. Promover y fomentar el contacto entre los ámbitos urbano y rural favoreciendo
las
actividades
medioambientales,
sociales
y
culturales
compatibles en torno a las vías pecuarias, de manera que suponga la creación y mantenimiento de una conciencia social conservacionista y sirva de satisfacción a la demanda de esparcimiento y recreo al aire libre”.
El Artículo 6: Tipos de vías pecuarias de la Ley 8/1998, de 15 de junio, de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid nos remite al Artículo 4 de la Ley 3/1995, de 23 de marzo, de Vías Pecuarias, en el que se nos expone la clasificación de las mismas:
“Artículo 4.- 1. Las vías pecuarias se denominan, con carácter general: cañadas, cordeles y veredas: a. Las cañadas son aquellas vías cuya anchura no exceda de los 75 metros. b. Son cordeles, cuando su anchura no sobrepase los 37,5 metros. c. Veredas son las vías que tienen una anchura no superior a los 20 metros. 2.
Dichas
denominaciones
son
compatibles
con
otras
de
índole
consuetudinaria, tales como azagadores, cabañeras, caminos ganaderos, carreradas, galianas, ramales, traviesas y otras que reciban en las demás lenguas españolas oficiales.
85
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
3. Los abrevaderos, descansaderos, majadas y demás lugares asociados al tránsito ganadero tendrán la superficie que determine el acto administrativo de clasificación de vías pecuarias. Asimismo, la anchura de las coladas será determinada por dicho acto de clasificación.”
Si fuesen necesarias modificaciones del trazado sobre terrenos de vías pecuarias los artículos 23 al 28 del Capítulo IV del Título I de la Ley 8/1998, indican el procedimiento a seguir, ya fuesen por la realización de obras públicas o de otra característica. El 20 de diciembre de 2001 por Acuerdo del Consejo de Gobierno, se delega en el Consejero de Economía e Innovación Tecnológica el ejercicio de la competencia para la previa desafectación de los terrenos de vías pecuarias objeto de modificaciones de trazado previstas en los artículos 23 a 27 de la Ley 8/1998, de 15 de junio, de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid.
Si solo fuese una ocupación temporal de una parte de la superficie de la vía pecuaria se establece en el artículo 38 del Capítulo III del Título II de la Ley 8/1998 la excepcionalidad mediante permiso de la autoridad competente, y las características de este:
“Artículo 38.-2. De otras ocupaciones temporales. 1. Excepcionalmente y mediante concesión administrativa previamente otorgada al efecto podrá autorizarse la ocupación temporal de las vías pecuarias, cuando así lo exija inexcusablemente la realización de una obra, actividad de interés público o utilidad general, o para la instalación de servicios públicos, cuyas conducciones, tuberías, cables o líneas hayan de discurrir o cruzar por las vías pecuarias. En este último caso sólo podrá autorizarse la conducción subterránea de los citados servicios, a efectos de suprimir el impacto ambiental y visual negativo que provocaría su ubicación en superficie, debiendo cumplirse las especificaciones técnicas y de seguridad previstas en la normativa vigente. 2. Será de aplicación el apartado 2 del artículo anterior para la definición de las obras de interés público a los efectos del presente. 3. La duración de la concesión no podrá exceder de tres años, que sólo podrán prorrogarse por motivos excepcionales debidamente fundados. 4. Únicamente podrán otorgarse estas concesiones cuando resulten compatibles con la continuidad del tránsito ganadero en las condiciones anteriores y no impidan los restantes usos comunes.
86
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
5. La concesión de estas autorizaciones se someterá al trámite de información pública por tiempo de un mes, así como a informe de los Ayuntamientos cuyos términos queden afectados. 6. Como contraprestación a la ocupación de la vía pecuaria habrá de satisfacerse la correspondiente tasa de conformidad con lo establecido en la legislación tributaria autonómica. 4.
La extinción de estas autorizaciones se ajustará a lo establecido en la
legislación reguladora del patrimonio de la Comunidad de Madrid”.
En lo que se refiere al futuro aparcamiento de La Plaza de la Lealtad localizamos un Cordel próximo. El Cordel de Pavones, clasificado en 1952, posee una anchura legal de 37.50 metros y una longitud de 13.100 metros. No se encuentra deslindado ni amojonado. (En la imagen, designado con el número 37). Como se observa próxima a La Plaza de la Lealtad discurriría también la Colada Elipa-Tapías del Retiro (número 47), sin embargo, dicha Colada no se vería afectada por ni por la futura obra ni se encuentra dentro del entorno de influencia de la obra. Discurrir del Cordel de Pavones a escasos metros de La Plaza de la Lealtad:
N
87
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
N
Paso del Cordel de Pavones dentro del área de influencia de la obra:
88
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2.3 METODOLOGÍA DE ACTUACIÓN El trabajo arqueológico y paleontológico que desarrolla el equipo de técnicos se ciñe a las prescripciones emitidas por la Dirección General de Patrimonio Histórico que se incorporan en la hoja informativa solicitada por la propiedad o bien por la concesionaria de los trabajos.
El planteamiento propuesto por el equipo de arqueólogos y paleontólogos consistirá en varios trabajos ejecutados siguiendo el correspondiente orden cronológico:
-
Realización del proyecto de actuaciones arqueológicas y paleontológicas, donde se especifica la propuesta de los trabajos a realizar y se solicita la autorización para desarrollar los trabajos.
-
Recepción de la autorización por parte de la Dirección General de Patrimonio Histórico en la que comunica los trabajos a realizar y autoriza a los profesionales (arqueólogos y paleontólogos) a ejecutar estos trabajos.
-
Ejecución del proyecto de actuaciones arqueológicas y paleontológicas, en las que se proponen:
1. Actuaciones a realizar antes de iniciar los trabajos de excavación.
1.1 Prospección arqueológica y paleontológica de la zona superficial con el fin de documentar la existencia o no de bienes patrimoniales, con en esta prospección se pretende tener en cuenta que bienes pueden verse afectados antes de iniciar los trabajos.
1.2 Realización de sondeos mecánicos de 3 x 8 x 2 metros, ayudados por una máquina excavadora mixta, realizados en la superficie exterior donde se va a ejecutar la obra, con una distancia no superior a los 50 metros entre sondeos. Estos sondeos se documentarán desde un punto de vista arqueológico, paleontológico y geológico, tomando los datos de estratigráficos, las muestras paleontológicas y las muestras para
89
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
determinar dataciones. Dependiendo de la existencia de bienes patrimoniales, el procedimiento de actuación variará. Si no hubiera restos patrimoniales se procedería a informar negativamente de los resultados. Si por el contrario hubiera restos, estos se documentarían exhaustivamente y se comunicaría a la Dirección General de Patrimonio Histórico su hallazgo y ellos determinarían que actuación se debería llevar a cabo. La realización de los sondeos se llevaría a cabo antes de iniciar los trabajos de excavación, aprovechando el momento de la retirada del asfalto. 2. Realización del seguimiento arqueológico, paleontológico y geológico. Se supervisa diariamente el avance del terreno por parte de la obra, se toman datos de los frentes de avances de las máquinas, se elaboran informes mensuales indicando los avances que se han producido y las incidencias que se han llevado a cabo. Igualmente si se considera oportuno se toman muestras paleontológicas y de datación para poder documentar exhaustivamente los trabajos. Igualmente que con los sondeos, si se diese el caso de aparecer bienes patrimoniales, el protocolo de actuación consiste en una documentación de los bienes y su comunicado inminente a la Dirección General de Patrimonio para que ellos determinen el procedimiento de trabajo. 3. La finalización de los trabajos arqueológicos y paleontológicos concluye con el fin de movimiento de tierras, a partir de este momento comunicamos la finalización de los trabajos a la Dirección General de Patrimonio y se elabora la memoria final de los trabajos que se han desarrollado en el trascurso de la Obra.
90
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2.4 CONCLUSIONES El área donde se emplazará el proyecto de aparcamiento de la Plaza de la Lealtad es una zona arqueológica muy rica y con yacimientos conocidos desde antiguo en la zona 3, numerados en el apartado de yacimientos arqueológicos. En definitiva, se encuentra ubicado en zona de gran riqueza arqueológica e histórica, con grandes monumentos y edificios emblemáticos visibles 4, pero que además en el subsuelo hay una fuerte antropización del medio.
Como así lo muestran los yacimientos arqueológicos considerados Bien de Interés Cultural (B.I.C): la zona arqueológica "Recinto Histórico de Madrid" (61/1993, de 20 de mayo). Pero además también está dentro del área de influencia del Conjunto Histórico de la Villa de Madrid declarado B.I.C. por el decreto 41/1995 de 27 de Abril, que a su vez este conjunto está incluido dentro de la Zona de Protección Arqueológica del Recinto Histórico.
Pertenecientes al patrimonio histórico-artístico y dentro de este:
o Las declaradas expresa e individualmente Monumento o Jardín Histórico y estén inscritos como tales en el Registro de Bienes de Interés Cultural. o Los inmuebles ubicados dentro de la zona arqueológica Recinto Histórico de Madrid e incluidos en el Plan General como objeto de especial protección. o Los inmuebles ubicados dentro del Conjunto Histórico del Recinto de la Villa de Madrid, catalogados como objeto de protección integral o singular y con una antigüedad igual o superior a 50 años.
Patrimonio aplicaría con carácter general el artículo 8 de la Ley 10/1998, que exige la previa autorización para intervenir en los bienes objeto de la citada norma. Al estar en un ámbito arqueológico, cualquier actuación en la plaza de la Lealtad requiere la previa autorización de la Dirección General de Patrimonio Histórico al estar incluida en la zona arqueológica del recinto histórico de Madrid, regulada por el decreto 61/1993. Por lo que se considera recomendable que mientras se realicen los trabajos 3
Indicados en el apartado de yacimientos arqueológicos, 3.3 a.
4
Indicados en el apartado de monumentos históricos y edificios emblemáticos, 3.3 b.
91
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
de ejecución de las obras, que impliquen remoción de tierras, excavaciones y aperturas de zanjas, etc. se llevasen a cabo un control y seguimiento arqueológico exhaustivo.
Dentro del área de influencia se encuentra un monumento declarado Bien de Interés Cultural de titularidad estatal, es el Hotel Palace. Aunque no se ve afectado por las obras, se tendrá que solicitar permiso al Gobierno central por estar en el área de influencia de éstas.
Los yacimientos arqueológicos conocidos, así como los monumentos históricos no van a sufrir afección por las obras que se derivan de este proyecto.
El Cordel de Pavones se ve afectado por las obras al estar en el área de influencia, por lo que se tendrá que someter a la normativa jurídica, la Ley 8/1998, de 15 de junio, de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid. En el artículo 38 del Capítulo III del Título II, se indica la excepcionalidad para autorizar la ocupación temporal de las vías pecuarias, cuando así lo exija inexcusablemente la realización de una obra de un proyecto declarado de interés público o utilidad general, o para la instalación de servicios públicos, cuyas conducciones, tuberías, cables o líneas hayan de discurrir o cruzar por las vías pecuarias. El permiso de obra será una concesión administrativa
previamente
otorgada
al
efecto
antes
señalado
mediante
la
contraprestación de una tasa de conformidad establecida en la legislación autonómica de Madrid, y únicamente podrán otorgarse estas concesiones cuando resulten compatibles con la continuidad del tránsito ganadero en las condiciones anteriores y no impidan los restantes usos comunes. Teniéndose que someter a información pública por tiempo de un mes, así como a informe de los Ayuntamientos cuyos términos queden afectados. Además, la duración de la concesión no podrá exceder de tres años, que sólo podrán prorrogarse por motivos excepcionales debidamente fundados. Debiéndose cumplir las especificaciones técnicas y de seguridad previstas en la normativa vigente. La extinción de estas autorizaciones se ajustará a lo establecido en la legislación reguladora del patrimonio de la Comunidad de Madrid.
Indicar que el presente informe es una valoración técnica emitida por un equipo de profesionales y que este trabajo se presenta de modo informativo a la Consultora. El Área de Protección del Patrimonio Arqueológico, Paleontológico y Etnográfico de la Comunidad de Madrid es el órgano al que le compete emitir cualquier resolución que tendrá valor en las futuras obras que se realicen.
92
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
2.5 BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
ÁLVAREZ RODRÍGUEZ, M., 2003: Memoria Monumental de Madrid. Guía de Estatuas y Bustos, España. BERNÁLDEZ MONTALVO, J. Mª, 1989: Historia de una Institución madrileña: El estudio de la Villa (a. 1290 – 1619). Madrid. BONET CORREA, A., 1961: Iglesias madrileñas del siglo XVII. Madrid. BRAVO MORATA, F., 1980: Historia de Madrid. Madrid. BUSTILLO BRAVO, I. Y OTROS, 1985: Espacios públicos. El casco histórico de Madrid. Tipos, configuraciones y génesis. Madrid. CANES, R; VICENTE, X., 1981: Descubrir el Madrid antiguo. Madrid. CAPMANI Y MONTPALAU, A., 2008: Origen histórico y etimológico de las calles de Madrid. Reedición del original de 1863. Madrid. DEL CORRAL, J., 1985: Madrid de Los Borbones. Madrid. DELEITO PIÑUELA, 1970: Solo Madrid es corte. Madrid. DÍAZ Y DÍAZ, M. S., 1976: “Noticias sobre algunas fuentes monumentales de Madrid del siglo XVIII”. Villa de Madrid nº 54. Madrid. CANES, R; VICENTE, X. (1981): Descubrir el Madrid antiguo. Madrid. GEA ORTIGAS, I., CASTELLANOS OÑATE, J.M., 2008: Madrid musulmán, judío y cristiano. Las murallas medievales de Madrid, España. GUERRA DE LA VEGA, R., 1984: Madrid de los Austrias. Guía de Arquitectura. Madrid. GUERRA DE LA VEGA, R., 1996: Guía para visitar las Iglesias y Conventos del Antiguo Madrid. Madrid. HIDALGO MONTEAGUDO, R. ET AL., 1985: Madrid de Los Austrias. Recorridos didácticos por Madrid. Eds. La Librería. Madrid. HIDALGO MONTEAGUDO, R. ET AL., 1986: Madrid de Los Borbones. Recorridos didácticos por Madrid. Eds. La Librería. Madrid. HIDALGO MONTEAGUDO, R. ET AL., 1990: Madrid del Siglo XIX: El Ensanche. Recorridos didácticos por Madrid. Eds. La Librería. Madrid.
MADOZ, P., 1981: Madrid: Audiencia, Provincia, Intendencia, Vicaría, Partido y Villa. Madrid.
93
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
MESONERO ROMANOS, R., 1999: El antiguo Madrid. Paseos histórico-anecdóticos por las calles y casas de esta villa. Reedición del original de 1863. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, Alicante. MENA MUÑOZ, P.; NOGUERAS MONTEAGUDO E., 1990: “Las murallas de Madrid”. Revista de Arqueología nº 114. Madrid. MORÁN, M y GARCÍA, B. J., 2000: El Madrid de Velázquez y Calderón. Villa y Corte en el siglo XVII. Vol II: El Plano de Teixeira, lugares, nombres y sociedad. Madrid. NAVASCUÉS PALACIO, P., 1973: Arquitectura y Arquitectos Madrileños del siglo XIX. Madrid. LÓPEZ CARCELÉN, P., 2005: Atlas Ilustrado de la Historia de Madrid. Madrid. PÉREZ VICENTE, D., 2004: “Excavaciones Arqueológicas en el Madrid Islámico”. Testimonios del Madrid Medieval. El Madrid musulmán. Museo de San Isidro. Madrid. SANCHO GASPAR, J.L., 1995: La Arquitectura de los Reales Sitios. Catálogo Histórico de los Palacios, Jardines y Patronatos Reales del Patrimonio Nacional. Madrid. OLIVER ASÍN, J., 1991: Historia del nombre “Madrid”. Madrid. ORDIERES DÍEZ, I., 2005, Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid. De la Prehistoria al Renacimiento, Vol.1, Madrid. ORTEGA VIDAL, J.; MARÍN PERELLÓN, F. J. (Dirs.), 2004: La forma de la villa de Madrid. Madrid. TURINA GÓMEZ, A.; RETUERCE, M., 1987: “Arqueología más reciente. Época visigoda, islámica, medieval cristiana y moderna”. 130 Años de Arqueología Madrileña. Madrid. VALDÉS, F., 1992: Mayrit. Estudios de arqueología medieval madrileña. Madrid. VV.AA., 1979: Cartografía Básica de la ciudad de Madrid. Planos históricos, topográficos y parcelarios de la Siglos XVII-XVIII XIX y XX, Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid, Comisión de Cultura, Servicio Histórico, Madrid. VV.AA, 1982: Guía de Arquitectura y Urbanismo de Madrid. Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid. Madrid. VV.AA., 1987: 130 años de Arqueología Madrileña. Catálogo de la Exposición. Madrid. VV.AA., 1990: Madrid del siglo IX al XI. Catálogo de la Exposición. Madrid. VV.AA., 1996: Reunión de Arqueología Madrileña. Madrid. VV.AA., 2004: Testimonios del Madrid Medieval. El Madrid musulmán. Museo de San Isidro. Madrid. VV.AA.: Cartografía básica de la ciudad de Madrid. Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid. Madrid.
94
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO INFORMATIVO DE LAS OBRAS DE NUEVOS APARCAMIENTOS SUBTERRÁNEOS EN LA PLAZA DE LA LEALTAD
Ley 8/1998, de 15 de junio, de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid. Ley 3/1995, de 23 de marzo, de Vías Pecuarias. Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español. Ley 10/1998, de 9 de julio, de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid. www.madrid.org/ceconomia/agricultura/html/pagprincipal.html www.esmadrid.com gestiona.madrid.org/nomecalles_inter/Inicio.icm
95