PREGUNTAS Y RESPUESTAS PARA EMPRESAS RESPONSABLES Las empresas del sector alimentario tienen la responsabilidad de poner en el mercado alimentos seguros y saludables, y ello depende, en gran medida, de la profesionalidad del personal que trabaja manipulando esos alimentos. Está suficientemente demostrado que los análisis clínicos del manipulador, únicamente, reflejan una situación puntual en el momento en que se realizan, y no garantizan la manipulación higiénica de los alimentos. Sin embargo, está demostrado que el mantenimiento de unos hábitos correctos de higiene en la manipulación de los alimentos, minimizan los riesgos para la salud. El cumplimiento de esa responsabilidad se garantiza a través de la formación continuada del personal en higiene de los alimentos. Por ello, la Consellería de Sanidade, ante la necesidad de promover prácticas higiénicas en alimentación y la importancia del sector alimentario en nuestra comunidad ha elaborado el Decreto 290/2003 por el que se fijan las normas relativas a la formación de los manipuladores de alimentos, el procedimiento de autorización de empresas y entidades de formación y se crea el registro de las mismas, desarrollando así la norma básica estatal vigente. Con esta nueva normativa, se pretende implicar más a los empresarios del sector alimentario en la formación de sus trabajadores en materia de higiene de los alimentos, de tal forma que garanticen que cada manipulador de alimentos recibe la formación adecuada, de acuerdo con su actividad laboral concreta.

Depósito Legal: C - 50 - 2004

¿A QUIÉN AFECTA ESTA NORMATIVA? A las empresas del sector alimentario y entidades de formación en materia de higiene de los alimentos que operen en la Comunidad Autónoma de Galicia y a los servicios de inspección de salud pública.

¿LA ANTIGUA NORMATIVA DE MANIPULADORES YA NO ESTÁ VIGENTE? Dejó de estar vigente a partir del 25 de agosto de 2000, fecha en la que entró en vigor el Real Decreto 202/2000 por el que se establecen las normas relativas a los manipuladores de alimentos, y que, en Galicia, ha tenido su desarrollo en el Decreto 290/2003 de la Consellería de Sanidade.

¿ESTE CAMBIO AFECTA A LA RESPONSABILIDAD DEL EMPRESARIADO DEL SECTOR ALIMENTARIO? No. En todo caso, la nueva normativa vuelve a recordar que es el empresario del sector alimentario el máximo responsable de la seguridad de los alimentos que pone en el mercado. Para ello, la empresa ha de contar con profesionales que lleven a cabo prácticas correctas de manipulación de alimentos. Son los empresarios los que tienen la responsabilidad de la formación de estos trabajadores, por lo que deben de desarrollar un Programa de Formación Continuada de los mismos e incluirlo en el Plan de Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico (APPCC) o bien aplicarlo como instrumento complementario de las guías de prácticas correctas de higiene (GPCH).

CUANDO UN MANIPULADOR VAYA A EMPEZAR A TRABAJAR, ¿QUÉ TIENE QUE HACER LA EMPRESA? La empresa de alimentos es la responsable de formar al manipulador de alimentos, bien con sus propios medios, o bien a través de Entidades de Formación autorizadas. Dispone para ello de un plazo de un mes, contado a partir de la fecha de firma del contrato. Dicha formación inicial deberá ajustarse a los objetivos y contenidos recogidos en el anexo I del Decreto 290/2003, con una duración mínima de 3 horas.

¿LA FORMACIÓN SE RECIBE SÓLO UNA VEZ, O HACE FALTA RENOVARLA? La formación es continuada. El empresario tiene la obligación de facilitar al manipulador de alimentos una formación inicial al incorporarse a su puesto de trabajo y, posteriormente, la formación se ajustará a las frecuencias y contenidos que la empresa determine en virtud del Programa de formación incluido en el Plan de APPCC de la misma.

¿QUIÉN NECESITA FORMACIÓN? Aquellas personas que por su actividad laboral tienen contacto directo con los alimentos, durante su preparación, fabricación, transformación, elaboración, envasado, almacenamiento, transporte, distribución, venta, suministro y/o servicio, es decir, todos los manipuladores.

¿QUÉ ES UN PROGRAMA DE FORMACIÓN? El conjunto de actividades formativas encaminadas a garantizar en todo momento que los manipuladores de alimentos disponen de una formación adecuada en higiene de los alimentos de acuerdo con la actividad laboral que desarrollan: todo lo que debe saber y practicar habitual y correctamente en su puesto de trabajo cada manipulador.

¿QUÉ CONTENIDO DEBE TENER ESE PROGRAMA? Según se indica en el Anexo I del Decreto 290/2003, el programa de formación contendrá aquellos aspectos teóricos y prácticos necesarios para capacitar al manipulador de alimentos en materia de higiene de los alimentos, con el objeto de minimizar o eliminar los riesgos potenciales para la salud de los consumidores, asociados a la actividad que desarrolle. Los contenidos mínimos de los programas de formación estarán dirigidos a la actividad que el manipulador de alimentos desarrolle en el momento de recibir la formación.

¿QUÉ ES UNA ENTIDAD DE FORMACIÓN? Toda persona física o jurídica, pública o privada, que imparta programas de formación en materia de higiene de los alimentos para manipuladores de alimentos, debiendo estar autorizado y registrado por la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad.

¿QUIÉN PUEDE CONSTITUIRSE COMO CENTRO DE FORMACIÓN AUTORIZADO? Toda persona física o jurídica, pública o privada, que reúna los requisitos establecidos en el Decreto 290/2003 de la Consellería de Sanidade.

¿YA NO EXISTE CARNÉ DE MANIPULADOR? El documento “carné de manipulador” ha desaparecido. Sin embargo, no desaparece la necesidad y obligación de la formación en higiene de los alimentos. Los manipuladores con carné en vigor según la normativa anterior, independientemente de su fecha de emisión, quedan equiparados a los certificados individuales de acreditación regulados en la presente norma, entrando a formar parte del programa de formación de las empresas de alimentación, siendo responsabilidad de estas la continuidad de una formación que garantice el nivel adecuado en materia de prácticas higiénicas de manipulación de los alimentos de sus trabajadores, sin perjuicio de las competencias y funciones de la Administración en la materia.

¿LAS OBLIGACIONES DEL MANIPULADOR HAN CAMBIADO? No. El manipulador sigue siendo una pieza fundamental en la higiene de los alimentos, y tiene que formarse adecuadamente, a fin de evitar riesgos para la salud del consumidor. Los requisitos que deben cumplir ya quedaron recogidos en el Real Decreto 202/2000, de 11 febrero, por el que se establecen las normas relativas a los manipuladores de alimentos.

¿CÓMO JUSTIFICA LA EMPRESA LA FORMACIÓN IMPARTIDA? El empresario lo justificará presentando la documentación que demuestre el desarrollo y ejecución del Plan de Formación que forma parte de los sistemas de autocontrol que debe desarrollar. El manipulador tiene derecho a la certificación de la formación recibida, bien de la propia empresa o del centro que la realice en cada caso.

¿LA INSPECCIÓN DE SALUD PÚBLICA YA NO VA A PEDIR EL CARNÉ? No. El inspector verificará la existencia y el desarrollo del Programa de Formación de la empresa, en el que se detallan los manipuladores que lo han recibido y valorarán las prácticas higiénicas ejecutadas por los trabajadores en cada puesto de trabajo.

PREGUNTAS E RESPOSTAS PARA EMPRESAS RESPONSABLES As empresas do sector alimentario teñen a responsabilidade de poñer no mercado alimentos seguros e saudables, o que depende, en boa medida, da profesionalidade do persoal que traballa manipulando esos alimentos. Está suficientemente demostrado que as análises clínicas do manipulador unicamente reflicten a situación puntual no momento en que se realizan e que non garanten a manipulación hixiénica dos alimentos. Sen embargo, está demostrado que o mantemento duns hábitos correctos de hixiene na manipulación de os alimentos, minimizan os riscos para a saúde. O cumprimento desa responsabilidade garántese a través da formación continuada do persoal en hixiene dos alimentos. Polo que, a Consellería de Sanidade, ante a necesidade de promover prácticas hixiénicas en alimentación e a importancia do sector alimentario na nosa comunidade, elaborou o Decreto 290/2003, polo que se fixan as normas relativas á formación dos manipuladores de alimentos, o procedemento de autorización de empresas e entidades de formación, e se crea o seu rexistro, desenvolvendo así a norma básica estatal vixente. Con esta nova normativa, preténdese implicar máis os empresarios do sector alimentario, na formación dos seus traballadores en materia de hixiene dos alimentos, de tal forma que garantan que cada manipulador de alimentos recibe a formación adecuada, de acordo coa súa actividade laboral concreta.

Depósito Legal: C - 50 - 2004

¿A QUÉN AFECTA ESTA NORMATIVA? Ás empresas do sector alimentario e ás entidades de formación en materia de hixiene dos alimentos que operen na Comunidade Autónoma de Galicia e ós servicios de inspección de saúde pública.

¿A ANTIGA NORMATIVA DE MANIPULADORES XA NON ESTÁ VIXENTE? Deixou de estar vixente a partir do 25 de agosto de 2000, data en que entrou en vigor o Real decreto 202/2000, polo que se establecen as normas relativas ós manipuladores de alimentos, e que, en Galicia, tivo o seu desenvolvemento no Decreto 290/2003 da Consellería de Sanidade.

¿ESTE CAMBIO AFECTA Á RESPONSABILIDADE DO EMPRESARIO DO SECTOR ALIMENTARIO? Non. En todo caso, a nova normativa volve a lembrar que é o empresario do sector alimentario o máximo responsable da seguridade dos alimentos que pon no mercado. Para isto, a empresa deberá contar con profesionais que leven a cabo prácticas correctas de manipulación de alimentos. Son os empresarios os que teñen a responsabilidade da formación destes traballadores, polo que deben desenvolver un Programa de Formación Continuada destes e incluílo no Plan de Análise de Perigos e Puntos de Control Crítico (APPCC) ou ben aplicalo como instrumento complementario das guías de prácticas correctas de hixiene (GPCH).

CANDO UN MANIPULADOR VAI EMPEZAR A TRABALLAR, ¿QUE TEN QUE FACE-LA EMPRESA? A empresa de alimentos é a responsable de forma-lo manipulador de alimentos, ben cos seus propios medios ben a través de entidades de formación autorizadas. Dispón para iso dun prazo dun mes, contado a partir da data da sinatura do contrato. Esta formación inicial deberá axustarse ós obxectivos e contidos recollidos no anexo I do Decreto 290/ 2003, cunha duración mínima de 3 horas.

¿A FORMACIÓN RECÍBESE SÓ UNHA VEZ OU É NECESARIO RENOVALA? A formación é continuada. O empresario ten a obriga de facilitarlle ó manipulador de alimentos unha formación inicial ó se incorporar ó seu posto de traballo e, posteriormente, a formación axustarase ás frecuencias e contidos que a empresa determine en virtude do programa de formación incluído no seu Plan de APPCC.

¿QUÉN NECESITA FORMACIÓN? Aquelas persoas que pola súa actividade laboral teñen contacto directo cos alimentos, na súa preparación, fabricación, transformación, elaboración, envasado, almacenamento, transporte, distribución, venda, subministración e/ou servicio, é dicir, tódolos manipuladores.

¿QUE É UN PROGRAMA DE FORMACIÓN? O conxunto de actividades formativas encamiñadas a garantir que os manipuladores de alimentos dispoñen en todo momento dunha formación adecuada en hixiene dos alimentos, de acordo coa actividade laboral que desenvolvan: todo o que debe saber e practicar habitual e correctamente cada manipulador no seu posto de traballo.

¿QUE CONTIDO DEBE TER ESE PROGRAMA? Segundo se indica no anexo I do Decreto 290/ 2003, o programa de formación conterá aqueles aspectos teóricos e prácticos necesarios para capacita-lo manipulador de alimentos en materia de hixiene dos alimentos, co obxecto de minimizar ou elimina-los riscos potenciais para a saúde dos consumidores, asociados á actividade que desenvolva. Os contidos mínimos dos programas de formación estarán dirixidos á actividade que o manipulador de alimentos desenvolva no momento de recibila formación.

¿QUE É UNHA ENTIDADE DE FORMACIÓN? Toda persoa física ou xurídica, pública ou privada, que imparta programas de formación en materia de hixiene dos alimentos para manipuladores de alimentos, coa obriga de estar autorizada e rexistrada pola Dirección Xeral de Saúde Pública da Consellería de Sanidade.

¿QUÉN SE PODE CONSTITUÍR COMO CENTRO DE FORMACIÓN AUTORIZADO? Toda persoa física ou xurídica, pública ou privada, que reúna os requisitos establecidos no Decreto 290/2003 da Consellería de Sanidade.

¿XA NON EXISTE CARNÉ DE MANIPULADOR? O documento “carné de manipulador” desapareceu. Sen embargo, non desaparece a necesidade e a obriga de formación en hixiene dos alimentos. Os manipuladores con carné en vigor segundo a normativa anterior, independentemente da súa data de emisión, quedan equiparados ós certificados individuais de acreditación regulados nesta norma, entrando a formar parte do programa de formación das empresas de alimentación, sendo responsabilidade destas a continuidade dunha formación que garanta o nivel axeitado en materia de prácticas hixiénicas de manipulación dos alimentos dos seus traballadores, sen prexuízo das competencias e funcións da Administración na materia.

¿AS OBRIGAS DO MANIPULADOR CAMBIARON? Non. O manipulador segue sendo unha peza fundamental na hixiene dos alimentos, e ten que se formar axeitadamente, a fin de evitar riscos para a saúde do consumidor. Os requisitos que deben cumprir xa quedaron recollidos no Real Decreto 202/2000, do 11 febreiro, polo que se establecen as normas relativas ós manipuladores de alimentos.

¿COMO XUSTIFICA A EMPRESA A FORMACIÓN IMPARTIDA? O empresario xustificarao presentando a documentación que demostre o desenvolvemento e a execución do plan de formación que forma parte dos sistemas de autocontrol que debe desenvolver. O manipulador ten dereito á certificación da formación recibida, ben da propia empresa ou do centro que a realice en cada caso.

¿A INSPECCIÓN DE SAÚDE PÚBLICA XA NON VAI PEDI-LO CARNÉ? Non. O inspector verificará a existencia e o desenvolvemento do programa de formación da empresa, no cal se detallan os manipuladores que o recibiron e valorará as prácticas hixiénicas executadas polos traballadores en cada posto de traballo.