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Unidad 1: Conociendo la Historia de Chile Contenido: Introducción al estudio de la Historia de Chile Fuente: Equipo de Didáctica de la Historia, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. TEXTO El vocabulario histórico, por supuesto, no se aprende aisladamente, fuera de un contexto de programación. El léxico específico de la disciplina es potencialmente significativo para el alumnado si se activa y relaciona dentro del estudio de un tema. De todas maneras, con demasiada frecuencia, los profesores de Historia tendemos a figurarnos que el alumnado o bien ya conoce los conceptos o bien le basta una única explicación sencilla para dotarlos de sentido de manera permanente. Las investigaciones didácticas y la práctica docente señalan con asiduidad que la comprensión de conceptos históricos durante la enseñanza obligatoria es muy limitada y fácilmente olvidadiza. Por esto, hay que tener presente con suma claridad cuáles son los conceptos históricos que se priorizan como resultados de aprendizaje para dedicarles una doble atención didáctica. Por una parte, asegurar su comprensión con actividades precisas y, por otra, repetir de manera sistemática actividades específicas de aprendizaje en el que el uso de dichos conceptos en otros temas del programa de estudio sea posible o necesario. Este uso en nuevas actividades de aprendizaje de nuevos temas resulta relativamente sencillo si el concepto es de carácter más constante o universal en el espacio y el tiempo (imperio, monarquía, campesino, latifundio, invasión, colonización, asentamiento...). Surgen más dificultades, en cambio, en la didáctica de léxico histórico de utilización más restringida en espacios y tiempos como la Historia de Chile (parlamentarismo chileno, anarquía, guerra de 1891). En este caso, para facilitar su aprendizaje, dichos conceptos deben aplicarse a lo largo de los cursos, ciclos y etapas a base del establecimiento de analogías, diferencias o semejanzas de manera más o menos constante en relación con lo que se estudia en cada momento. Los estudiantes necesitan también de palabras para ser capaces de compartir sus pensamientos con otros. Como todas las disciplinas académicas, la historia tiene sus propios términos y frases especializados. Hay que estimular a los alumnos a expresar ideas históricas a su propia manera. "Revolución”, "poder”, "época”, "crisis”, "justicia" tienen significados claros y específicos. Los alumnos son capaces de entender las ideas de un concepto la clave es ofrecerles relaciones para poder revestir de significado a dichas palabras. Un chico de 1º medio que describe una situación como un tanto "injusta" está abordando el concepto de justicia en su nivel, del mismo modo que el de 4º medio describe "poder" como "control sobre lo que otras personas quieren”. En los dos primeros años de la enseñanza media los alumnos deben estar capacitados para apreciar el significado de términos históricos, con la condición de que vengan revestidos con una imagen que puedan abordar. El medio, por así decirlo, conforma el mensaje. La idea de pobreza, por ejemplo, se capta mucho más directamente a través de una descripción de un documento o contemplando unas imágenes de mujeres y niños de África, desesperadamente faltos de alimentos, que por medio de una definición del diccionario. PROCEDIMIENTOS PARA EL APRENDIZAJE DE CONCEPTOS HISTORICOS.
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1. CLASIFICACIÓN DE CONCEPTOS HISTORICOS. A. Criterios de clasificación. Desde un punto de vista procedimental, el aprendizaje del vocabulario histórico supone que el alumnado, por lo menos, sea capaz de clasificarlo según su naturaleza y que tenga una conciencia clara de los criterios de dicha clasificación. Esta clasificación y el establecimiento de sus criterios, cuyo uso podrá facilitar lentamente la construcción de diversos niveles simultáneos de la realidad histórica en la mente del alumnado, también resultan útiles para organizar los hechos históricos. Una de las clasificaciones que puede resultar más sencilla y operativa para la enseñanza podría ser la que organiza los conceptos históricos en cuatro grandes apartados: político, económico y social y religioso y cultural. Criterios de clasificación de los conceptos o vocabulario histórico. Político Lo que concierne a cómo la gente ha sido gobernada y a cómo se ha ejercido el poder político a través de las instituciones, a cómo las naciones relatan sus acontecimientos del pasado en la paz y en la guerra.
Económico Lo que concierne a los recursos de la gente para vivir, la manera de producir, creación, distribución y consumo de la riqueza y comercio; también la manera como la gente entendía y usaba la tecnología y la ciencia.
Social y religioso Lo que concierne a la manera de vivir, al tamaño y forma general de las sociedades; a la naturaleza de las clases sociales, a los roles de género (hombres y mujeres); y también a los aspectos étnicos, las religiones y las creencias.
Cultural Lo que concierne a la creatividad humana en arte, arquitectura, música, drama, danza, lengua y literatura así como a los aspectos de cultura popular.
Conceptos de la Historia de Chile entre 1831-1891. Político Conservadurismo Liberalismo Constitución de 1833 Privilegios exclusivos Estabilidad política
Económico Proteccionismo Crecimiento económico Desarrollo minero Urbanización
Social y religioso Crecimiento demográfico Inmigración extranjera Proletariado Sectores medios Laicización Patronato Conflicto Iglesia y Estado
Cultural Educación técnica Movimiento cultural de 1842 Desarrollo de las artes Liceo Escuela Normal Intelectual
B. Práctica de clasificación. Utilizando la prensa actual se le plantea a los alumnos extraer hechos que correspondan a los criterios de clasificación, luego se les solicita que conceptualicen dichos conceptos. Por ejemplo se clasifica una noticia sobre el mejoramiento de las calles de la ciudad en el ámbito económico y se le solicita a los alumnos los conceptos históricos que le permitan identificar y comprender el hecho de la prensa.
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Ejemplo: Político
Prensa Conceptos Social y religioso Económico económicos Noticia sobre el Crecimiento económico mejoramiento de las Urbanización calles de la ciudad.
Cultural
La práctica de esta forma de clasificación permite a los alumnos a desarrollar un puente entre la clasificación de conceptos de la prensa actual y los de un período de la historia pasada. C. DEFINICIÓN DE CONCEPTOS. Definir es expresar qué significa un concepto para diferenciarlo de los demás. La idea de definición que puede ser de interés didáctico para la enseñanza de la historia es la que permite identificar, distinguir y aplicar distintos tipos de definición. Como profesores de Historia, somos partidarios de priorizar las definiciones nominales, reales, esenciales, por antónimos o sinónimos, descriptivas y seriadas. Por nominal se entiende la definición que se refiere al término o palabra que designa el concepto. Así, por ejemplo, sería una definición nominal de democracia la que rezara como sigue: “la palabra democracia procede del antiguo griego, de demos (pueblo) y Kratós (poder), y significa poder o gobierno del pueblo”. Las definiciones nominales suelen apelar necesariamente a la etimología y ayudan a asentar referentes del pasado remoto (ibérico, griego, latín, árabe...) y a vivenciar herencias presentes en la actualidad cotidiana. Además, potencian relaciones de larga duración al proponer una atribución de significado a un concepto a base de efectuar saltos temporales presente -pasado con referencias a períodos históricas concretos. La definición nominal o etimológica debería utilizarse con frecuencia en la clase de Historia, no sólo porque tiende a recordarse con menor dificultad, sino también porque intensifica la relación con largos períodos históricos de indiscutible interés para entender el presente y progresar en el autoconocimiento humano y humanista. La llamada definición real se refiere al objeto o concepto que designa. Así, por ejemplo, una definición real de democracia podría ser: “doctrina política que defiende la participación del pueblo en el gobierno y en la elección de los gobernantes”. Una definición es esencial cuando se precisa el significado de un concepto enumerando las características indispensables que lo definen. Este tipo de definiciones se suele conseguir a base de buscar un sinónimo cuyo campo semántico incluya el concepto que se pretende definir, limitando a continuación su significado con una diferencia específica. Un modelo de este tipo lo hallamos en la escolástica definición de hombre (o mejor dicho hoy, de persona humana): “Animal racional”. En Historia, las definiciones necesitan ordinariamente más de una diferencia específica y, por lo tanto, este tipo definitorio no suele ser el mas indicado para adentrarse en el entramado conceptual de nuestra disciplina. Así, por ejemplo, resulta muy difícil dar una definición significativa de democracia con esta tipología definitoria. La definición por antónimos o sinónimos, a pesar de sus imprecisiones, suele ser fácil y efectiva en lo que se refiere a su comprensión por parte de los alumnos y alumnas. Sería un ejemplo de 3
este tipo definir democracia como “lo contrario de una dictadura”. De todas maneras, conviene no abusar de este tipo de definición, puesto que no acaba de dejar sentada con precisión la naturaleza de lo definido. La definición descriptiva consiste en explicar el significado de un concepto enumerando sus características fundamentales adoptando la forma de una frase más o menos larga. Un ejemplo de definición descriptiva de democracia podría ser: “régimen político caracterizado por la libertad de asociación, expresión y manifestación en el cual el poder es ejercido temporalmente por los representantes libremente elegidos por los ciudadanos en sufragio libre, universal, directo y secreto”. Finalmente, la definición por serie o seriada, cuya utilización puede ser frecuente en Historia, consiste en situar la palabra que queremos definir dentro de un conjunto temporal —sea de sucesión o de simultaneidad— que la incluya. Aquí, el término democracia, pues, en cuanto a su definición, debería situarse forzosamente en un contexto preciso en el tiempo histórico. Podríamos proponer el siguiente ejemplo: “se conoce con el nombre de democracia el sistema político de Atenas fundado por Pericles en el siglo V a.C. posterior a las oligarquías anteriores que habían regido la capital del Ática”. Para proponer al alumnado las actividades que les procuren potencialmente un aprendizaje correcto de la definición de vocabulario histórico, sería conveniente proceder, a lo largo de un ciclo o de una etapa, por pasos escalonados, pasos que, si bien suponen una superación respecto de lo realizado anteriormente, no deben abandonarse como actividades a lo largo de la enseñanza media.
D. RELACIONES DE CONCEPTOS. LOS MAPAS CONCEPTUALES. COMO PODEMOS DEFINIR LOS MAPAS CONCEPTUALES Los mapas conceptuales han sido ideados por Joseph D. Novak para poner en práctica el modelo de aprendizaje significativo de Ausubel. Debido a su orientación práctica y aplicativa, se habla de ellos como "instrumento ","recurso esquemático", "técnica o método", "estrategia de aprendizaje"... La función de los mapas conceptuales consiste en ayudar a la comprensión de los conocimientos que el alumnado tiene que aprender y a relacionarlos entre si o con otros que ya posee. Como instrumento, técnica y método son una ayuda para clarificar los conceptos claves y relevantes que deben aprenderse y para establecer relaciones con otros conocimientos nuevos o ya interiorizados por el alumno. "La construcción de los mapas conceptuales (...), es un método para ayudar a estudiantes y educadores a captar el significado de los materiales que se van a aprender" (Novak, 1984). Recogemos las definiciones expuestas en otro libro nuestro (Ontoria y otros, 1995): "Los mapas conceptuales constituyen un método para mostrar tanto al profesor como al alumno, que ha tenido lugar una auténtica reorganización cognitiva" (Novak), porque indican con relativa precisión el grado de diferenciación de los conceptos que posee una persona. "Los mapas conceptuales ponen de manifiesto las estructuras proposicionales del individuo y pueden emplearse, por tanto, para verificar las relaciones erróneas o para mostrar cuáles son 105 conceptos relevantes que no están presentes" (Novak). 4
LOS MAPAS CONCEPTUALES COMO ESTRATEGIA DE APRENDIZAJE La estrategia se define como procesos ejecutivos mediante los cuales se eligen, coordinan y aplican las habilidades. Son los procesos que sirven de base para la realización de las tareas intelectuales (Nisbet y Shucksmith (1987). Se trata, pues, de una secuenciación de actividades planificadas para conseguir un aprendizaje. Cuando el alumno intenta comprender, busca el significado de los hechos, ideas y conceptos básicos. En la medida que sea capaz de establecer relaciones con otros hechos, ideas, experiencias, etc., la comprensión es mayor y cuanto más amplia sea la red de conocimientos, la capacidad del alumno para establecer nuevas relaciones será mayor. El aprendizaje significativo de la información implica necesariamente su comprensión y podemos equipararlo al enfoque profundo del aprendizaje, ya que se dan las siguientes características: 1. La intención del alumno se dirige a la comprensión del significado del tema de trabajo o de las tareas por realizar, 2. Se establecen relaciones con otros conocimientos o experiencias, 3. El análisis de los datos, obtención de conclusiones y creación de. nuevas estructuras de conocimientos. Para facilitar la comprensión y la asimilación, los profesores han utilizado distintas estrategias o técnicas, como clasificaciones, categorías, esquemas... y han orientado al alumnado en las llamadas "técnicas de estudio"