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Camiseta (30 €) de Alpine Stars. Pantalón caqui de Pi 3.14 (60 €). Colgante Doppiogioco (84 €) y reloj Master (118 €) de Morellato
TONI ELÍAS BORN TO BE WILD… Por [Elena Moro] Fotografía [DavidPonce.com] Estilismo [Ester Fernández]
A Toni Elías el himno de "Easy Rider" le va como anillo al dedo. “Nacido para ser salvaje”, sí salvaje. Sólo así se puede calificar a alguien capaz de subirse a una moto tan sólo 50 días después de sufrir una grave caída en la que se parte el fémur en cachitos, y terminar la carrera con el hueso casi sin soldar y unos dolores insoportables. Eso es tener pasión por el motociclismo. Pero no es de extrañar: Toni cambió el chupete por su primera moto, soñaba de pequeño con ganar grandes premios y ahora sueña con ser el número 1 de la categoría reina de las dos ruedas, moto GP.
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Lo primero que llama la atención al conocer a Toni es su sonrisa, que se hace enorme en comparación con su cuerpo pequeño y fibroso. Y te preguntas cómo es posible que pueda dominar un “bicho” de 148 kg y ponerlo en la pista a casi 300 km/h. Pero después de hablar con él, lo entiendes: es su pasión por las motos. Sólo así se explica cómo vendió un coche para continuar compitiendo, cómo consiguió un podium en plan ultimatum para seguir corriendo en el Campeonato de España, o cómo se subió a una moto tan sólo 50 días después de sufrir una grave lesión en su pierna izquierda y terminar una exigente carrera de Moto GP. Tiene sólo 24 años, pero su vida profesional va a toda velocidad, como su Honda en los circuitos. Y lo mejor está por llegar... Vienes de una familia con gran tradición motera, así que casi casi te viste "obligado" a dedicarte a ellas ¿no? Sí, en nuestra familia hay mucha tradición de motos. Mi abuelo era corredor de subidas en cuesta, y también tenía un taller de motos. Murió cuándo mi padre y mi tío eran pequeños, así que de joven mi padre tuvo que empezar a trabajar en el taller, y también empezó a competir en motocross. Ganó diez campeonatos de España de motocross, y mi tío uno. Cuando yo nací mis padres abrieron una tienda de motos. Al segundo día de nacer mi madre ya me llevó a la tienda mientras ella trabajaba allí. Así que tú, a diferencia de otros niños, cogiste una moto antes que una bici Sí, yo aprendí antes a ir en moto que en bici, al pedalear me desequilibraba, y en cambio en la moto sólo daba gas y me podía mantener antes en equilibrio. Empecé a los dos años con una moto eléctrica. He crecido entre motos, en el taller, gastando bromas, bueno, más bien "puteando" (risas) a los mecánicos de mi padre, les hacía travesuras de niño… (más risas) Se pasaban arreglando las motos más tiempo de la cuenta... Sí, por ejemplo, les metía las llaves dentro de los tubos de escape o en el depósito, les tiraba serrín, ¡unas cosas que…! pero me divertía un montón, han sido muchas horas ahí metido. A los cuatro años tuve mi primera moto de verdad, y la cambié por el chupete. Mis padres me dijeron: “si dejas el chupete te compramos una moto”, y lo hice. Era una 114
Yamaha Piwi. Con cuatro y medio aprendí a ir en bici, pero antes no sabía. ¿Y a tu madre no le daba miedo que llevaras una moto siendo tan pequeño? No, antes no. Ahora sí. !Pues ha tenido años para acostumbrarse! Sí, porque ella además siempre siguió a mi padre en los circuitos, pero dice que no es lo mismo un marido que un hijo...
Mundial. A partir del segundo año de Pockets me fabricó la moto, ya no la comprábamos, él la fabricaba y yo era el probador. De pequeño me pasé días enteros rodando en un circuito y probando cosas de las motos, y piensas: “ostras, para un niño hacer ya tan pronto de probador...” Pero eso me ha ayudado de cara al futuro a ser un poco más sensible a la hora de probar las motos. En tu caso, tu padre te fabricaba y preparaba las motos, ¿es difícil si no tienes ayudas económicas y de patrocinadores, dedicarse al motociclismo? Cuesta mucho de toda las maneras, a no ser que haya un campeonato como el que patrocinó Movistar (la Copa Honda Movistar), de donde salieron
¿Cuándo empiezas a competir? Bueno, recuerdo a los 4 años haber hecho una carrera de motocross, pero nunca, a pesar de que mi padre fue todo lo que había sido en el motocross, me presionó para que fuera corredor, fui yo el que quise hacerlo, y al tener una tienda de motos tenía más fácil dedicarme a esto. Lo que pasa es que el motocross no me gustaba, y con 6 años Toni, con el polo un día ví una pocket de su equipo, el bike, una minimoto Honda Gresini. de asfalto, y le dije a El reloj (168 €) mi padre: “esta moto y la pulsera de me gusta, quiero una”. plata (98 €) son Estábamos en un Salón de de Morellato de la Moto en Valencia, donde podías probar motos. Mi padre me dijo: “primero la pruebas, y si te gusta, compramos una”. Y me subí a esa moto y empecé a derrapar y a tocar con la rodilla el suelo, y pensé, ¡ostras, esto del asfalto es lo que a mí me gusta! Mi padre me preguntó: “¿quién te ha enseñado a hacer estas cosas?” Nadie, ¡he nacido así (risas)! Así que me compró una pocketbike, entrené un poco, y al cabo de dos semanas se hacía una carrera de esta especialidad aquí, en Manresa, el campeonato de Cataluña, y en mi primera carrera gané, ¡eso es lo que más me gustó! A partir de ahí, todo lanzado… Estuve 3 años en Pocket Bikes, siempre tuve un estilo diferente a los demás, y cuando crecí no cabía en la moto y no podía hacer ese estilo, así que decidimos correr en scooters de calle con preparaciones especiales para competir. Después de los scooters hice un año de unas motos 49, que ya se corren en circuitos "de los de verdad": Jarama, Montmeló… Eran motos que corrían poco, de menos cilindrada, pero al menos corrías en un circuito grande. Con 14 años corrí mi primer campeonato de España, a los 15 el segundo, los resultados fueron buenos y me cogieron para ir al Mundial con 16. ¿Y cómo entrenabas? Siempre he ido con mi padre a entrenar. Él ha sido quien me ha preparado las motos hasta ir al
muchos buenos pilotos: Bautista, Pedrosa, Olivé… Pero a mí me pilló tarde. Nosotros tuvimos que hacerlo todo. Una tienda de motos tampoco da para mucho, y es un mundo muy caro, en el que hay que tener un buen equipo, una buena moto… es fundamental, si no, por muy buen piloto que seas, no haces nada. Llegó un momento en el que estaba en el Campeonato de España y mi madre me dijo: “disfruta de esta carrera porque a lo mejor es la última”, porque no nos quedaba más dinero, fue un momento duro. Salí en esa carrera, disfruté muchísimo, conseguí mi primer podium, pero ni con ese primer puesto conseguí sponsor. Sólo quedaban
dos carreras para terminar el campeonato, y mis padres decidieron vender el único coche que teníamos para poder terminarlo, al final terminé tercero. También me ayudó mucho Carlos Checa por aquel entonces: me buscó un equipo italiano para disputar la última prueba del Mundial en Valencia y me consiguió un sponsor para poder pagarlo todo, porque un fin de semana costaba dos millones de las antiguas pesetas. Al final conseguí puntuar, y esos dos puntos fueron los que me llevaron a poder disputar un Mundial al año siguiente sin tener mis padres que pagar. Tus padres hicieron un gran sacrificio… Bueno, dicen que por un hijo se hace lo que sea. Te puede salir bien o mal, y mira, salió bien. ¿Les dedicaste ese primer podium a ellos? Sí, cada uno sabe el esfuerzo que le ha costado llegar hasta ahí, y quién te ha ayudado a conseguirlo. Y yo tengo mucho que agradecerles a mis padres. Carlos Checa fue también “tu particular hada madrina” Carlos Checa antes de correr el Mundial hacía de aprendiz de mecánico en el taller de mi padre, teníamos muy buena relación. Me dijo: “si te invitan a correr la última prueba del Mundial dímelo”. Me invitaron, le llamé, y me dijo: “vale, voy a ver si te consigo algún sponsor y en dos días te llamo. Me lo consiguió y mira, ahora estamos corriendo juntos en Moto GP, me sabe un poco mal adelantarle a veces ¡eh! (risas) ¿Por qué Moto GP es la categoría “reina”? A Moto GP sólo llegan los pilotos que realmente son muy muy buenos; de estos hay 20, y luego los 5 primeros marcan la diferencia. Para estar entre ellos hay que tener muchas cosas, es bastante complicado estar entre los elegidos. Hay que hacerlo bien, porque si no, no te quieren.
Camiseta manga larga a rayas de Converse by John Varvatos (170 €), y encima camiseta de Oakley (50 €). El colgante en forma de cruz (68 €) y el reloj Wave (188 €) son de Morellato 115
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¿Cómo diste el salto a Moto GP? Hice dos años de 125 cc, el último estuve luchando por el Mundial, en 250 cc estuve tres, luchando por los primeros puestos, con opciones a ganar el Campeonato, pero al final es un mundo muy complicado, es difícil sobrevivir, y por razones que no quiero comentar ahora, no pude ganar. Luego Fortuna me pasó a Moto GP. Dar el salto o mantenerse ahí, con posibilidades de ganar, depende mucho de los equipos en los que estés. A veces fichas por una marca pensando que es la mejor opción y resulta que has escogido la peor, y eso significa que para volver a poder estar luchando por ganar, en otra categoría como GP, a lo mejor pasan tres años. Si no te equivocas en la elección el camino es mucho más fácil, mucho más recto. Una mala opción significa tres años malos, como me pasó a mí. Al final el año pasado logré olvidarlo todo, ahora estoy en un nuevo equipo, el Honda, y estoy muy contento. El año pasado empecé con ellos, fue muy difícil, pero finalmente conseguí mi primer podium en GP. Este año las cosas son diferentes: la moto va bien, el equipo es muy bueno, me siento como en casa… Son cosas que un piloto necesita y que al final hacen que los resultados salgan. ¿Qué hay que tener para ser un buen piloto? Hay que ser valiente, muy duro
mentalmente, muy trabajador, muy constante, inteligente… No todos tienen esas cualidades. Hay pilotos mejores que otros, el tiempo dirá si soy de los buenos o de los malos. ¿La moto hace mucho? Si no tienes una buena moto es difícil ganar. Ahora mismo Moto GP tiene un nivel tan alto que es fundamental tener una buena moto, unos buenos neumáticos, un buen equipo, y que todo el conjunto funcione. Hasta el mismo Rossi, que es un crack, el día que le falla una pequeña cosa, hace un noveno puesto, y Rossi es un superdotado. Es complicado. ¿Cómo se prepara uno física y mentalmente para una carrera? El desgaste físico es muy grande, pero también el mental. La manera de que las dos cosas estén bien es entrenando. Son 45 minutos en los que hay que estar siempre concentrado, mentalmente es bastante duro, se va muy rápido, en la pista el cerebro tiene que estar alerta continuamente, y al mismo tiempo físicamente es un entrenamiento muy bestia, y hay que estar muy bien preparado. Todos los días entreno, física y técnicamente: hago gimnasio, bici, carrera a pie, etc. Por las mañanas entreno tres horas y a veces hago doble sesión, otras tres horas por la tarde. Intento no hacer el entrenamiento algo rutinario, que cada día sea diferente,
sea divertido. Pero la carrera en sí es el mejor entrenamiento que puedes hacer. ¿Cómo vives los momentos antes de la carrera? No soy muy maniático, son momentos en los que hay muchos nervios previos a competir, incertidumbre… no sabes si vas a salir bien o mal, si en la primera curva vas a pasar o te van a tirar… Normalmente cuanto mejor tengas preparada una carrera, más tranquilo vas a estar, pero cuesta, cuesta... Lo único que intento hacer es relajarme escuchando música. Justo en la parrilla de salida escucho dos canciones, siempre las mismas: primero escucho “The Best is yet to come” que significa “Lo mejor está por llegar”, que me motiva muchísimo, y luego la otra instrumental de Dire Straits, de la película de “Local Hero”, que me relaja muchísimo. ¿Y después de la carrera? Siempre al terminar, tanto los entrenos como la carrera, hablo con el equipo. En entrenos, para arreglar cosas de cara a la carrera. Y si es el día de la carrera, para arreglar cosas para la siguiente carrera, no soy nada conformista en este aspecto, siempre estoy buscando cómo mejorar, soy muy perfeccionista: si hay algo que mejorar, lo digo, y si hay que quedarse dos días más a entrenar, pues nos quedamos y trabajamos hasta solucionar el problema.
A Todo Gas Con Toni Elías Ese mes de vacaciones que os dan ¿cómo te gusta desconectar? En Cadaqués, un buen lugar para desconectar, escaparme con mis amigos… Una carrera para el recuerdo Mi primera victoria en el Mundial, en Assen, el circuito que llaman "La Catedral", creo que es el mejor sitio para ganar, y también ganar en Jerez, con toda la afición, son dos momentos muy bonitos. Tu circuito preferido El viejo Assen (ahora lo han cambiado y no me gusta tanto) era uno de mis preferidos, me gusta Jerez, Mugello en Italia… también por la afición y el ambiente. ¿Has tenido algún ídolo? Sí, dos. Uno, Wayne Rainey, dos veces campeón del mundo de 500 cc, y Ayton Senna, el piloto de Fórmula I. A Wayne le conocí cuando tenía 11 ó 12 años, en Montmeló, él ya no corría porque se quedó en silla de ruedas. Más adelante, cuando ya corría en GP, tuve la oportunidad de hablar con él. Empezó
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siendo una conversación con mi ídolo y luego fue una charla de piloto a piloto: me aconsejó cómo resolver los problemas que tenía en la moto, me decía: “pues yo cuando corría los solucioné así…”. Me hubiera gustado hablar más de él, ¡no de mis problemas! ¿Algún amuleto? No me quito una medalla de la Virgen de la Morenet que llevo al cuello. Cuando era pequeño y empecé a correr mi madre siempre me metía una fotografía de la Moreneta dentro del mono, y cuando empecé a correr en el Mundial mi madre me regaló esta medalla con la Moreneta, y siempre la llevo conmigo. ¿Por qué llevas siempre el número 24? Me lo dieron una vez, hice un buen año con ese número y dije, este ya no lo cambio, bueno, ¡sólo lo cambiaría por el 1! (risas) A quién dedicarías el título de campeón del mundo Se lo dedicaría a toda la gente que lo ha hecho posible, pero principalmente a mis padres.
Los pilotos pasáis mucho tiempo fuera de casa, y veo que eres muy familiar (la entrevista se realizó en la casa familiar de Toni en Manresa, sus padres y hermana estaban por allí) ¿cómo llevas estar lejos de tu gente? A veces es duro. Mi equipo es mi segunda familia, pero normalmente me acompaña mi padre y a algunas carreras viene mi madre y mi hermana. La temporada va desde marzo hasta el 30 de octubre, hay un mes obligatorio de vacaciones, del 15 de diciembre hasta el 15 de enero, en el que todos los equipos tienen que parar. Porque si no, ¡no descansaríamos! Si no existiera ese mes obligatorio de parón, los equipos seguro que programarían entrenos. Así que se pactó ese descanso entre todos los equipos, para que pudieran descansar no sólo los pilotos, también los mecánicos, técnicos… Gente que se pasa todo el año fuera de casa, necesitas descansar, estar con la familia, ¡al menos en Navidad! El motorhome se convierte en vuestra casa “itinerante” ¿Qué no te pude faltar para hacerte sentir como en casa? Mi equipo de música, una almohada no muy diferente a la que uso en casa… ¿Y qué es lo que más echas de menos? Como en casa no se come en ningún sitio. Siempre me llevo
embutido para desayunar todos los días pan con tomate (risas) Siendo tan joven llevas una vida diferente a la gente de tu edad ¿sientes que te pierdes algo de la vida “normal”? Quizás algunas cosas respecto a la gente de mi edad, sí, pero esto es lo que me gusta, y una cosa compensa a la otra. Estoy haciendo lo que he querido desde pequeño. Llegar a conseguir ganar grandes premios es lo que soñaba y reconforta un montón. Recientemente has pasado un momento difícil: la grave lesión que sufriste el 28 de junio en una caída en los entrenamientos del GP de Assen. Te fracturas el fémur izquierdo, te operan, pasas un mes de dura rehabilitación y dejas a todo el mundo con la boca abierta al competir en el GP de Brno, en la República Checa, tan sólo 51 días después. Subiste a la moto con el fémur casi sin soldar con el riesgo que supone… ¡y quedaste undécimo! El dolor fue bestial, tuve que pilotar sólo con las dos manos y mi pierna derecha, hice un gran esfuerzo para poder seguir en carrera. En Misano, que fue el siguiente GP, también tuve que luchar contra el dolor, además el circuito y las condiciones climatológicas me lo pusieron mucho más difícil. Terminé séptimo, pero al finalizar la carrera estaba hasta mareado del dolor. Creo que en los momentos difíciles es cuando realmente debes ser fuerte y tirar hacia delante. Yo quería recuperarme lo antes posible, y era consciente de que para ello debía trabajar duro, que no sería nada fácil, pero estoy seguro de que esto me ayudará a ser aún más fuerte. Tengo un sueño, y por nada del mundo lo dejaré escapar, quiero luchar para poder hacerlo realidad. La cabeza y las ganas mueven montañas. En esos momentos el apoyo de los que te rodean es fundamental Sí, yo quiero agradecer enormemente a todos las muestras de apoyo que recibo cada día, para mí tienen un valor impresionante. A pesar de todo, fueron momentos muy bonitos, porque recibí llamadas de personas de las que hacía años que no sabía nada, o gente que ni conozco, y que me ha animado, y eso, toca la fibra. También dice mucho por su parte que Valentino Rossi tuviera unas palabras para mí justo después de realizar una de sus más espectaculares carreras en
“La catedral" (Assen). Valentino, muchas gracias. También tengo que agradecer toda la gestión que Angel Viladoms realizó, al excelente servicio recibido por parte del RACC, a los Doctores Mir y Charte del Institut Universitari Dexeus, al Doctor Wiersma del hospital WZA de Assen, a sponsors, al equipo y a toda la gente que en esos momentos ha estado a mi lado. El trabajo de rehabilitación ha tenido que ser muy duro... Sí, desde el primer momento acepté mi lesión y mi única obsesión fue trabajar duro para poder estar recuperado lo antes posible, siempre bajo la tutela de mi médico, el doctor Xavier Mir, y mi fisioterapeuta Ricard Huélamo, que han sido los artífices de mi rápida recuperación. Desde entonces no he tenido descanso. Sabíamos que no sería nada fácil poder estar preparados para Brno, pero cuando estás en esta situación, debes pensar objetivos para motivarte y agilizar todo el proceso. El primer paso fue afincarme en casa de Ricard para poder aprovechar las 24 horas del día, durante seis días a la semana. Me pasé diez horas diarias de rehabilitación. Las ganas y la pasión por volver cuanto antes encima de la moto, hicieron el resto. Una lesión así te enseña, por muy tópico que parezca, pero realmente te enseña. Estas situaciones te endurecen, te hacen crecer. Y tres carreras después, el pasado 23 de septiembre, consigues un espectacular tercer puesto en el GP de Motegui, en Japón Después de todo lo que he pasado, ese tercer puesto representó una victoria. Una vez más, demuestra que con trabajo se consiguen los retos. La recuperación está siendo muy dura y eso me ayuda a seguir trabajando en la misma línea, es un premio, aunque no por ello se debe bajar la guardia en ningún momento.
Camiseta (25 €) y cazadora motera (298,95 €) de Alpine Stars. Reloj de Morellato (188 €)
¿Qué es lo que te motiva para seguir subiéndote encima de una moto? Antes tenía la ilusión de ganar un GP de España y lo conseguí, quería ganar en 125 cc, en 250 cc, y gané, también tenía la ilusión de ganar un premio en Moto GP, lo conseguí, y además ganando a Rossi. Me gustaría algún día ser Campeón del Mundo, pero es muy complicado, depende de muchos factores que sólo se consiguen con trabajo y con tiempo, pero espero poco a poco ganarme ese sitio.
Alpine Stars
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