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CUIDADO DE TERNEROS EN VERANO
HIDRATACIÓN DE TERNEROS EN VERANO. ATENCIÓN A LA CRIANZA Si bien el agua es un nutriente fundamental siempre, adquiere más importancia para esta categoría en el verano. Y aún más en las primeras semanas de vida, cuando los terneros son más vulnerables a sufrir eventos de diarrea y deshidratación. Cantidad y calidad a suministrar y momento en que se ofrece. El verano se acerca y con él, los cambios bruscos de temperatura, barro, precipitaciones y otros. Esto afecta no sólo a la producción de las vacas en el tambo sino también al crecimiento del mismo, a la cuna de formación: el sistema de crianza artificial. Desde antes de nacer Desde antes de nacer los terneros se ven perjudicados por el estrés que les producen las altas temperaturas, esto es debido a que cuando las vacas de preparto se encuentran frente a a temperaturas y humedad elevada disminuyen la calidad del calostro. Nardone en el 97 investigando el comportamiento de las vacas en preparto, llegó a la conclusión que con 32°C de temperatura ambiente y 55% de humedad relativa la calidad del calostro se ve diminuida principalmente la cantidad de defensas (Ig G), como así también disminuye la proteína un 17% y un 12% su energía. Además de afectar la calidad del calostro, investigadores de la universidad de Florida encontraron que el estrés térmico en el preparto afecta el peso al nacimiento, ya que vacas que no se refrescaron en los días previos al parto parieron terneros 6 kg más pequeños en comparación con vacas que no sufrieron estrés (Tao et al., 2012) Con lo cual, el primer lugar que debe tenerse en cuenta para ofrecer sombras, piso seco y abundante agua es el preparto. ¿Cuánta agua toma una vaca de esta categoría? Entre 35 y 80 litros, dependiendo de la calidad de la misma, composición de la dieta, factores propios del animal y aspectos climáticos. Una vez nacida esa futura productora de leche, la primer medida que se debe tomar luego de ofrecer calostro y desinfectar el ombligo con tintura de Iodo, es ubicarla en un sitio en lo posible con pasto y/o cama de paja y al reparo del sol. El principal aspecto para disminuir el estrés calórico es a través de la infraestructura, ofreciendo sectores con sombras naturales o artificiales, buena circulación de aire y terrenos altos donde no se acumule agua ni se forme barro. Sin embargo, estas instalaciones no serán suficientes si no se las acompaña de un buen manejo de la hidratación. Nutriente fundamental El agua es el nutriente más importante para el mantenimiento de la vida. Muchas veces se ha demostrado que un animal puede vivir mayor período de tiempo sin alimento que sin agua (Davis y Drackley, 2001). Esto no debe llamar la atención, ya que un ternero recién nacido contiene un 70-75% de su peso vivo en agua (Brody, 1945).
El agua es fundamental para los mecanismos de regulación térmica, diseñados para regular el metabolismo y las pérdidas de calor del cuerpo. Con temperaturas moderadas, el ternero puede mantener su temperatura corporal (39°C) por medio de regulación física solamente (Davis et al 2001). Cuando en días cálidos la temperatura supera los 26°C −temperatura crítica superior (Hahn 1981)−, el animal debe gastar energía para disipar el calor de su cuerpo. Los terneros intentan mantener su temperatura corporal perdiendo agua a través del aumento de la respiración y de la refrigeración por evaporación (sudoración). Si bien sabemos que los terneros deben aumentar su consumo de agua para reponer el agua perdida a las funciones de refrigeración, hay pocos datos disponibles para estimar con exactitud la cantidad de agua que se necesita cuando las temperaturas son elevadas (Coleen J. y J. Heinrichs , 2013) Antiguamente se creía que los terneros de menos de un mes de vida no consumían agua o que la leche era sustituto de la misma, pero esto no es así, ya que fisiológicamente el agua y la leche no siguen un mismo camino dentro del organismo (Andresen 2014). Cuando la ternera toma leche se estimula el cierre de la gotera esofágica para que la leche ingrese directamente al abomaso. Esto no ocurre con el agua, que va directamente al rumen, donde es esencial para su desarrollo y formación ya que los microorganismos del rumen requieren del agua para desarrollarse y crecer. En cantidad y calidad En la mayoría de los casos se cree que terneros de la primer semana de vida no consumen agua, pero la realidad es que consumen muy poca cantidad. Investigadores norteamericanos tomaron mucho tiempo y trabajo para lograr establecer el consumo de agua por los terneros, y no lo lograron. El consumo de alimento iniciador, la temperatura ambiental y la cantidad de leche eran los tres factores más importantes para predecir el consumo de agua. Mientras que la ingesta de alimento sólido representó el 60% de la variación en el consumo de agua, este estudio encontró que los terneros aumentaron la ingesta de agua exponencialmente a medida que aumentaba la temperatura diaria (Quigley, 2001). Además, cuando la temperatura excedió los 25°C, los terneros aumentaron el consumo de agua independientemente del consumo de ración seca (Quigley, 2011). En caso de terneros de más de un mes de edad, el consumo de agua es más abundante que en los de primeras semanas, por lo que se deberá evaluar si hay que ofrecer más de dos veces al día. En los casos en que los terneros permanecen en un sistema individual por más de 60 días se exacerba la ingestión de agua y, por lo tanto, la dedicación de tiempo que debe haber para la misma. Así cómo la cantidad de agua es importante, también lo es la calidad de la misma y el momento en que se ofrece. Lo ideal es poder ofrecerla alrededor de una hora post toma de la leche y, en caso de ser necesario, agregar agua fresca a las 2-3 horas previo a la próxima toma de leche. La calidad del agua que deben tomar los terneros debe ser apta para consumo humano, los límites máximos permitidos de los distintos componentes se expresan en la tabla 1.
Diarreas y rehidratación Los terneros de las dos primeras semanas de vida son los más vulnerables a sufrir eventos de diarrea, lo que puede conducir a una rápida deshidratación, y si además de eso no hay agua disponible, son extremadamente sensibles al estrés por calor. Una vez más, esto pone de manifiesto la importancia de proporcionar agua potable a los terneros en la primera semana de vida. Cuando los terneros sufren diarrea, la principal causa de muerte es la deshidratación y la pérdida de electrolitos, por eso la importancia de proporcionar sales rehidratantes. Cuándo comenzar a ofrecerlas: Ante el primer cambio en la consistencia de la materia fecal, ya que la detección temprana de las diarreas favorece a la rápida recuperación del ternero. Un investigador indicó que si se administran sales al comienzo del desarrollo de la enfermedad, la tasa de éxito puede ser del 95% o más (Heath, 1992). Qué cantidad ofrecer: Lo ideal es ver cómo avanza el cuadro. En general, si un ternero pesa 40 kg y tiene un 6% de deshidratación, necesita como mínimo incorporar 2,4 litros de líquido a su cuerpo, por lo que en la práctica se sugiere ofrecer 2 litros por toma (mañana y tarde), es decir 4 litros al día. No deben administrarse más de 2 litros cada vez pues se distiende el abomaso y se produce reflujo al rumen (Diez et al 2007). Si se necesita dar dosis superiores debe hacerse en intervalos de 2 horas entre una y otra, y según el grado de deshidratación convendrá evaluar si es necesario hidratación endovenosa. En el Cuadro 2, un esquema para evaluar deshidratación en terneros. Cuando la deshidratación es menor o igual al 6% con rehidratación oral será suficiente; a partir de allí será necesario hidratación endovenosa. La hidratación oral debe ser ofrecida con mamadera o sonda bucoesofágica, ya que si se administra en los baldes directamente no hay seguridad de que consuma la cantidad que se requiere para evitar que avance la deshidratación. Alimentación en verano Como se mencionó anteriormente, la alimentación es uno de los factores que afectan y dependen del consumo de agua. Los terneros naturalmente tienden a comer menos alimento durante los períodos de estrés por calor; esto significa que se deben hacer mayores esfuerzos para estimular el consumo de alimento iniciador. Asimismo, se deben ofrecer sólo pequeños puñados en cada oportunidad hasta que los terneros empiecen a comer mayor cantidad de alimento. Es preciso retirar el remanente de iniciador, limpiando partes húmedas, para mantener la calidad del alimento. Aunque hasta el momento muchos productores consideran que las mayores demandas energéticas se dan durante los meses de temperatura más bajas, Hill y colaboradores en 2013 demostraron que concentrar el sustituto (aumentar contenido de materia seca) o aumentar la cantidad de litros de leche ayudará a aumentar la ganancia diaria de peso vivo en épocas donde el consumo de alimento seco se ve disminuido debido a la falta de apetito producida por el estrés calórico.
Recomendaciones prácticas - En épocas de elevadas temperaturas, modifique el horario de la rutina para que la actividad de entrega de leche sea al amanecer y, aún en horas frescas, los terneros dispongan de agua y alimento fresco. - Es una buena práctica manejar los terneros en la mañana para que las actividades estresantes, como descorne, vacunación, castrado, o transporte, se realicen cuando la temperatura corporal del ternero y ambiental son más bajas. - Ofrezca mayor área de ocupación por ternero. Eso ayudará a mejorar la removilización del aire alrededor de cada animal y bajará su sensación térmica, mejorando su estado de ánimo. - Evite todos los factores que predisponen a las moscas, lave los baldes luego de cada uso, mantenga la vegetación corta, no arroje alimento en mal estado al suelo, desinfecte las diarreas y utilice larvicidas en el alimento.
Méd. Vet. Agostina Bogni Departamento Técnico Bovinos de Teknal RECUADRO El calor los afecta desde antes
El primer lugar que debe tenerse en cuenta para ofrecer sombras, piso seco y abundante agua es el preparto. El estrés térmico en esta categoría: - Afecta negativamente la cantidad de defensas (Ig G) y la composición del calostro. - Afecta el peso al nacimiento del ternero.
CUADRO 1 Composición química del agua recomendada para terneros Esperado (ppm) pH Sólidos disueltos totales Sulfatos Cloruros Nitratos Nitritos Fluoruro Sodio Calcio Magnesio Manganeso Arsénico Hierro
6,0-6,4 < 500 < 250 < 250 < 44 < 0,33 < 1,2