Departamento de Lengua Castellana y Literatura Prof. Mercedes Cartón. La poesía lírica

Departamento de Lengua Castellana y Literatura Prof. Mercedes Cartón La poesía lírica La poesía lírica ha sido definida tradicionalmente como la expr

21 downloads 126 Views 402KB Size

Recommend Stories


DEPARTAMENTO DE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA
DEPARTAMENTO DE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA CUADERNO DE ORTOGRAFÍA Y REDACCIÓN PARA ALUMNADO DE SECUNDARIA NOMBRE:________________________________

Departamento de Lengua Castellana y Literatura
Departamento de Lengua Castellana y Literatura I.E.S. Gustavo Adolfo Bécquer Departamento de Lengua Castellana y Literatura ACTA DE LA REUNIÓN En

PROGRAMACIÓN DEPARTAMENTO LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA
PROGRAMACIÓN DEPARTAMENTO LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA 2013-2014 IES CÁNOVAS DEL CASTILLO 0 ÍNDICE 1. EL DEPARTAMENTO DE LENGUA CASTELLANA Y LIT

LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA
ÍNDICE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA ......................................................................................... 2 LATÍN..............

Story Transcript

Departamento de Lengua Castellana y Literatura Prof. Mercedes Cartón

La poesía lírica La poesía lírica ha sido definida tradicionalmente como la expresión de los sentimientos por medio de la palabra, escrita u oralmente. Desde este punto de vista, este género literario se caracteriza por la subjetividad, es decir, el poeta nos ofrece una parte de su pensamiento, de su interior, de su visión de la realidad. De manera errónea, la poesía lírica se ve asociada a sentimientos exclusivamente amorosos. Bien es verdad que éste es el tema más frecuente, pero no es el único. Cualquier expresión de las emociones del autor ante la contemplación del mundo o de la realidad puede ser considerada lírica: amor, pena, soledad, miedo, fracaso, alegría, desamparo, nostalgia... Esta expresión de los sentimientos no puede hacerse de cualquier manera, sino que se suele ver sometida a una gran depuración técnica y estética. Por ello, quizás la característica formal más reconocible de la poesía sea la de estar escrita en verso. Así pues, el poema es la unión de un fondo emotivo y sentimental y de unas determinadas características formales que lo caracterizan a simple vista incluso ante los ojos de personas que no han leído nunca poesía. La mayor parte de los poemas están escritos en verso, aunque ésta no es una característica exclusiva de la poesía. La expresión de la emotividad del poeta se puede llevar a cabo a través de otros vehículos de expresión, como la prosa poética. En este tipo de escritos, el autor prescinde del verso, aunque sigue manteniendo todas los rasgos propios de la poesía: subjetividad, expresión sentimental, utilización de un gran número de recursos literarios, cuidado formal y estético... La prosa poética o poemas en prosa encontraron en Juan Ramón Jiménez a uno de sus mejores cultivadores, aunque también podemos citar autores como Rubén Darío, Gustavo Adolfo Bécquer o Federico García Lorca, y más recientemente, Antonio Gala o Antonio Muñoz Molina. Hemos titulado este apartado Poesía lírica porque es conveniente diferenciarla de otro tipo de poesía que puede ser calificada como poesía épica o poesía no lírica. En este tipo de poesía, el autor no expresa sus sentimientos ni muestra al lector su interior a través de la palabra, sino que se limita a narrar (como lo podría hacer un novelista) la historia de unos personajes determinados, aunque con la característica de que `la narración se realiza en verso. La poesía épica, apenas cultivada hoy en día, tuvo en la Edad Media su momento álgido, con obras tan conocidas como el Poema de Mío Cid o la amplia producción del mester de Clerecía, con Gonzalo de Berceo como figura más representativa. Una vez definida la poesía lírica y acotada convenientemente, ofrecemos a continuación las características más importantes de este género literario, con la salvedad de que el gran número de subgéneros con que cuenta hace que muchas de estos rasgos generales deban ser matizados convenientemente: El autor transmite un determinado estado de ánimo, es decir, la poesía lírica se suele caracterizar por la introspección y la expresión de los sentimientos.

1

Un poema no narra una historia propiamente dicha, en él no se desarrolla una acción, sino que el poeta expresa, de manera inmediata y directa, una emoción determinada. La poesía lírica exige un esfuerzo de interpretación al lector, que debe estar, cuando menos, algo habituado a esta forma de expresión literaria. Suele haber una gran acumulación de imágenes y elementos con valor simbólico. La mayoría de los poemas líricos se caracterizan por su brevedad: no es frecuente que sobrepasen los cien versos. Debido a esa brevedad, hallamos una mayor concentración y densidad que en el resto de géneros literarios. Un poema es la expresión directa del sentimiento del poeta al lector; esto es, debe ser considerado una especie de confidencia hecha a solas. La poesía lírica, al ser eminentemente subjetiva y estar expresada, con gran frecuencia, en primera persona, se convierte, así, en un relato autobiográfico, aunque no hemos de confundir el yo del poema con el autor que hay detrás, ya que puede estar expresando unos sentimientos que no siente en realidad, con lo que el poema no sería más que un ejercicio estético. Los poemas suelen ajustarse a unas normas formales que los caracterizan: versos, estrofas, ritmo, rima, englobadas todas ellas bajo la denominación de métrica. Además, con el fin de lograr un discurso lo más bello posible, los autores se valen de los recursos literarios o estilísticos. La unión de la temática sentimental, la métrica, la depuración lingüística y los recursos literarios recibe el nombre de poética. Así, la poética de un autor o de un movimiento literario concreto será el conjunto de rasgos que los caracterizan e individualizan frente a otros autores o movimientos literarios, respectivamente. La poesía nació íntimamente unida a la música, de ahí que el término canción fuera aplicado a las composiciones en verso que cantaban los poetas. Esto se debe a que los primeros poemas se transmitían acompañados por un instrumento musical, con frecuencia una lira (de donde procede el término lírica). Así, la entonación al leer un poema se acercaba bastante a los compases musicales que servían de fondo a la recitación. Si nos fijamos en algunas canciones actuales, observaremos que están sometidas a una métrica rigurosa y estudiada que encaja perfectamente la letra con las notas musicales. Además, los cantautores o compositores de nuestros días introducen un gran número de recursos literarios en sus composiciones musicales, con lo que, sin miedo a equivocarnos, podemos afirmar que todavía hoy la poesía, o al menos una parte de ella, continúa transmitiéndose con el inestimable acompañamiento musical. La métrica La métrica es la disciplina literaria que se ocupa de la medida de los versos, de su estructura, de sus clases y de las distintas combinaciones que pueden formarse con ellos, es decir, trata de establecer las normas de versificación: versos, rima, ritmo, estrofas. En la poesía actual es frecuente encontrar poemas que no se acomodan a ningún tipo de esquema métrico y que, por lo tanto, están más cercanos a la prosa poética que a la poesía. Aun así, la mayor parte de nuestra poesía se encuentra regulada, con más o menos rigurosidad, por la métrica.

2

El verso Entendemos por verso un conjunto de palabras sometidas a ritmo y cadencia en relación con otros versos. Suele presentar pausas, acentos y rima, aunque estas características no son generales. Desde un punto de vista más práctico, cada una de las líneas o renglones que forman un poema pueden ser denominadas versos. Los versos se clasifican según el número de sílabas con que cuentan. Así, los versos formados por ocho o menos sílabas son denominados versos de arte menor, mientras que los versos compuestos por nueve o más sílabas son versos de arte mayor. Los versos que no cuentan con rima ni con uniformidad en el cómputo silábico se denominan versos libres. Este tipo de versificación es muy frecuente en la poesía actual ya que se basa en la libertad creativa y en la unión estricta del fondo del poema, es decir, del contenido, con la forma. Los poetas pueden reflejar mediante versos libres estados caóticos de conciencia o complicadas imágenes poéticas gracias a la adaptación de la medida del verso al contenido que se pretende expresar. Cuando medimos un verso, es decir, cuando contamos el número de sílabas que lo forman, debemos tener en cuenta una serie de normas: Si el verso acaba con una palabra llana, el cómputo resultante no cambia. Si el verso acaba con una palabra aguda o monosilábica, deberemos sumar una sílaba al cómputo resultante. Si el verso acaba con una palabra esdrújula, deberemos restar una sílaba al cómputo resultante.

Las licencias a las que podemos someter los versos son: • SINALEFA: la vocal situada al final de una palabra se une con la vocal inicial de la siguiente palabra y las dos vocales se cuentan como una sola sílaba. • SINÉRESIS: dos vocales de un hiato se juntan en una misma sílaba formando diptongo. "Muele pan, molino muele trenza, veleta, poesía." (en poesía se cuentan tres sílabas, en vez de las cuatro que constituyen la palabra). • HIATO: el fenómeno contrario a la sinalefa. Consiste, precisamente, en no hacer sinalefa; la vocal final de una palabra y la inicial de la siguiente palabra se separan en sílabas diferentes: • DIÉRESIS: el fenómeno contrario a la sinéresis. Consiste en la separación de un diptongo (dos vocales que constituyen una sola sílaba), en dos sílabas distintas: "Qué descansada vida la del que huye el mundanal ruïdo". ( en ru-i-do, se cuentan dos sílabas: rui-do). ------------ VERSOS MÁS IMPORTANTES ----------Los versos de entre dos y ocho sílabas se denominan versos de arte menor. Los de nueve o más sílabas se llaman versos de arte mayor. Los versos de menos de doce sílabas son versos simple, los de doce o más sílabas, compuestos. Estos últimos están formados por dos mitades (que normalmente tienen el mismo número de sílabas, aunque tal cosa no tienen por qué ocurrir siempre), denominadas hemistiquios. Ambos hemistiquios están separados por una pausa denominada cesura. A

3

la hora de contar las sílabas de un verso compuesto, la cesura tiene los mismos efectos que la pausa versal, de manera que si el primer hemistiquio es agudo tendrá una sílaba más, mientras que si es esdrújulo se contará una menos.

Heptasílabo (7 sílabas). “¡Pobre barquilla mía entre peñascos rota...” Lope de Vega Octosílabo (8 sílabas). Es el verso más importante de entre los de arte menor y el más antiguo de la lírica castellana. Es el verso característico del romance. “Que por mayo era por mayo cuando hace la calor,...” Romancero Eneasílabo (9 sílabas). “¡Juventud, divino tesoro, que te vas para no volver!” Rubén Darío Decasílabo (10 sílabas). Del salón en el ángulo oscuro, de su dueño tal vez olvidada,(...) Gustavo Adolfo Bécquer Endecasílabo (11 sílabas). Es el verso más importante de entre los de arte mayor. Eres la primavera verdadera, rosa de los caminos interiores,(...) Juan Ramón Jiménez Alejandrino o tetradecasílabo (14 sílabas). Los dos hemistiquios suelen medir 7+7 sílabas, pero también pueden darse hemistiquios de distinto número de sílabas (8+6). Su verso es dulce y grave; monótonas hileras de chopos invernales en donde nada brilla; Antonio Machado -------------- LA RIMA ----------La rima es la igualdad total o parcial, entre dos o más versos, de los sonidos situados a partir de la última vocal tónica. Puede ser de dos tipos: consonante, si los sonidos idénticos son vocales y consonantes, y asonante que se produce cuando sólo las vocales son idénticas: Abiertas copas de oro deslumbrado sobre la redondez de los verdores bajos, que os arrobáis en los colores mágicos del poniente enarbolado. (Rima consonante: -ádo, -óres, -óres, -ádo)

4

- Madre del alma mía, a qué viejecita eres - ya los ochenta años a pesan sobre tus sienes. (Rima asonante: -, é...e, -, é...e)

------------- PAUSAS -----------

En todo poema, existen pausas determinadas por dos factores: por la longitud del verso; y por la estructura sintáctica de la oración. Hay cuatro tipos de pausa que nos interesa considerar: • Pausa estrófica, que se produce al acabar una estrofa, y que es obligada.. • Pausa versal, que se produce al acabar un verso, y que es obligada. • Cesura, que se produce en el interior de los versos compuestos. Esta pausa impide la sinalefa. • Pausas internas, que pueden aparecer en el interior de un verso, y que están provocadas en cada caso por el ritmo y la sintaxis. Estas pausas no impiden la sinalefa. Tanto la cesura como las pausas internas no tienen por qué coincidir con los signos ortográficos (coma, punto y coma, punto, etc.). Se trata de dos tipos de pausa exigidos por el ritmo y por la estructura del verso, que habremos de aprender a distinguir y localizar guiados más por el oído que por la vista. ENCABALGAMIENTO. Consiste en un desajuste que se produce en la estrofa cuando el final de un verso no coincide con el final de una construcción sintáctica (sintagma). Este desajuste provoca una "tensión" interna en el texto, ya que obliga o bien a romper una unidad sintáctica para respetar la pausa versal o bien a prescindir de esta pausa para mantener la ilación sintáctica. Por otro lado, el encabalgamiento no anula la rima. Dentro de un encabalgamiento hay que distinguir entre el verso encabalgante, que es aquel en el que se inicia, y el verso encabalgado, que es aquel donde termina. Dependiendo de la extensión del verso encabalgado los encabalgamientos pueden ser abruptos o suaves. Si la pausa se produce antes de la mitad del verso el encabalgamiento es abrupto. Si por el contrario abarca la mitad o más del verso encalgado es suave. “Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol verde, sin pozo blanco, sin cielo azul y plácido...” Juan Ramón Jiménez

--------------- ESTROFAS ------------

Los versos se agrupan en unidades superiores, a las cuales denominamos estrofas. La estructura de una estrofa se representa mediante una fórmula alfanumérica que indica la longitud de los versos y el esquema de rima; por ejemplo, la fórmula métrica de la lira es ésta: 7a 11B 7a 7b 11B. Las estrofas se clasifican según el número de versos que las integran. ESTROFAS DE DOS VERSOS. • Pareado: consiste en dos versos que riman entre sí. Lo más habitual es que sean dos versos de la

5

misma medida, aunque también pueden tener diferente número de sílabas métricas. Los hay de arte mayor y también de arte menor; por su parte, la rima puede ser consonante o asonante. Lo esencial es que los dos versos tengan la misma rima: “Todo necio confunde valor y precio.” Antonio Machado • Cuarteto: lo forman cuatro versos de arte mayor con rima consonante ABBA: Alguna vez me angustia una certeza, y ante mí se estremece mi futuro. Acechándole está de pronto un muro del arrabal final en que tropieza. Jorge Guillén • Serventesio: es una variante del cuarteto; consiste en cuatro versos de arte mayor con rima consonante ABAB: Valerosos, enérgicos, tranquilos, caminan sin dudar hacia un futuro que tramándose está con estos hilos de un presente en fervor de claroscuro. Jorge Guillén • Redondilla: cuatro versos de arte menor con rima consonante abba: La tarde más se oscurece; y el camino que serpea y débilmente blanquea, se enturbia y desaparece. Antonio Machado • Cuarteta: cuatro versos de arte menor con rima consonante abab: Luz del alma, luz divina, faro, antorcha, estrella, sol... Un hombre a tientas camina; lleva a la espalda un farol. Antonio Machado • Cuaderna vía o tetrástrofo monorrimo alejandrino: estrofa compuesta por cuatro versos alejandrinos que riman en consonante, según la fórmula AAAA, BBBB, CCCC, etc.: Vistie a los desnudos, apacie los famnientos, acogie los romeos que vinien fridolientos, daba a los errados buenos castigamientos que se penitenciasen de todos falimientos. Gonzalo de Berceo • Lira: combinación de dos versos endecasílabos (segundo y quinto) y de tres heptasílabos, cuya rima, en consonante, es aBabB. “Si de mi baja lira tanto pudiese el son, que en un momento

6

aplacase la ira del animoso viento, y la furia del mar en movimiento.” Garcilaso de la Vega • Copla de pie quebrado: Se denominan "de pie quebrado" aquellas estrofas de versos de arte menor en las que alternan versos largos y cortos (éstos suelen ser normalmente tetrasílabos) La más conocida de estas estrofas es la sextilla de pie quebrado, que también recibe los nombres de copla de Jorge Manrique (debido a que este poeta medieval la utilizó en sus conocidísimas Coplas a la muerte de su padre) o estrofa manriqueña. En esta estrofa, el tercer y el sexto verso son tetrasílabos y los demás octosílabos; la rima tiene el esquema abcabc. “¿Qué se hicieron las damas, sus tocados, sus vestidos, sus olores? ¿Qué se hicieron las llamas de los fuegos encendidos de amadores?” Jorge Manrique • Octava real u octava rima: consta de ocho versos de arte mayor, generalmente endecasílabos, y con rima consonante, según el esquema ABABABCC: “No las damas, amor, no gentilezas, de caballeros canto enamorados, ni las muestras, regalos y ternezas de amorosos afectos y cuidados; mas el valor, los hechos, las proezas de aquellos españoles esforzados, que a la cerviz de Arauco no domada pusieron duro yugo por la espada.” Alonso de Ercilla El poema es la unidad métrica y rítmica más importante. En cuanto a su forma, los poemas pueden ser estróficos, si están estructurados en estrofas, o no estróficos. A su vez, los poemas estróficos pueden ser monoestróficos, cuando constan de una sola estrofa, o poliestróficos, cuando están compuestos por varias estrofas. • Letrilla: Tiene estribillo. Los versos son octosílabos o hexasílabos, y tiene siempre una intención burlesca o satírica: "Poderoso caballero es Don Dinero." Madre, yo al oro me humillo: Él es mi amante y mi amado, Pie pues de puro enamorado, de continuo anda amarillo; que, pues doblón o sencillo, hace todo cuanto quiero. "Poderoso caballero es Don Dinero."

7

Nace en las Indias honrado, donde el mundo le acompaña; viene a morir en España y en Génova es enterrado. Y, pues, quien le trae al lado es hermoso aunque sea fiero. "Poderoso caballero es Don Dinero." Quevedo • Soneto: consta de catorce versos endecasílabos, divididos en dos cuartetos y dos tercetos. Es una forma poética procedente de Italia, que fue introducida en la literatura española por los poetas renacentistas Juan Boscán y Garcilaso de la Vega, quienes tomaron como modelo de soneto el establecido por el poeta italiano Francesco Petrarca. Ha sido muy utilizado a lo largo de todas las épocas, y se le considera como la estructura poemática más perfecta y armoniosa. El esquema clásico del soneto petrarquista es el siguiente: ABBA-ABBA-CDC-DCD (dos cuartetos y dos tercetos encadenados). Hay otras combinaciones posibles en los tercetos, como CDE-CDE, CDEDCE, etc. Veamos algunos ejemplos: Suelta mi manso, mayoral extraño, pues otro tienes tú de igual decoro, deja la prenda que en el alma adoro, perdida por tu bien y por mi daño. Ponle su esquila de labrado estaño y no le engañen tus collares de oro; toma en albricias este blanco toro que a las primeras yerbas cumple un año. Si pides señas, tiene el vellocino encrespado, y los ojuelos tiene como durmiendo en regalado sueño. Si piensas que no soy su dueño, Alcino, suelta y verásle si a mi choza viene que aún tienen sal las manos de su dueño. Lope de Vega Madrigal: combinación libre de heptasílabos y endecasílabos, que no tiene forma fija en cuanto al número de sus estrofas ni al número de los versos que debe contener cada una de ellas. El tema debe ser de carácter amoroso e idílico; se recomienda que los madrigales sean breves y que la combinación de los versos sea armónica y sencilla: Ojos claros, serenos, si de un dulce mirar sois alabados, ¿ por qué si me miráis, miráis airados? Si cuanto más piadosos, Más bellos parecéis a quien os mira, no me miréis con ira, porque no parezcáis menos hermosos. ¡Ay, tormentos rabiosos!

8

Ojos claros, serenos, ¡ ya que así me miráis, miradme al menos! Gutierre de Cetina

• Romance: consta de una serie ilimitada de octosílabos, de los cuales sólo los versos pares tienen rima asonante, mientras que los impares quedan libres. Uso abundante en todas las épocas de la literatura española. Según la llamada "teoría tradicionalista" los romances proceden de la partición de los versos compuestos de los cantares de gesta: los versos alejandrinos o hexadecasílabos de estos poemas demasiado largos para recitarlos con comodidad se dividen en sus dos hemistiquios, formando así la estructura métrica característica del romance:

En Santa Gadea de Burgos // do juran los hijosdalgo A allí toma juramento // el Cid al rey castellano A sobre un cerrojo de hierro // y una ballesta de palo. A En Santa Gadea de Burgos a do juran los hijosdalgo allí toma juramento a el Cid al rey castellano sobre un cerrojo de hierro y una ballesta de palo

a a a

• Silva: se trata de una serie poética ilimitada en la que se combinan libremente versos heptasílabos y endecasílabos con rima consonante y sin ningún esquema métrico fijo. Muchas veces se introducen versos sueltos. Era del año la estación florida en que el mentido robador de Europa -media Luna las armas de su frente, y el sol todos los rayos de su peloluciente honor del cielo, en campos de zafiro pace estrellas; cuando el que ministrar podía la copa a Júpiter mejor que el garzón de Ida, -náufrago y desdeñado, sobre ausentelagrimosas, de amor, dulces querellas da al mar; que condolido, fue a las ondas, fue al viento el mísero gemido, segundo de Arión dulce instrumento. Luis de Góngora • Poemas de versos sueltos o de versos blancos: son poemas que se caracterizan por la ausencia de rima entre los versos, los cuales, a diferencia de los poemas de versos libres, tienen todos la misma medida:

9

La catedral de Barcelona dice: Se levantan, palmeras de granito, desnudas mis columnas; en las bóvedas abriéndose sus copas se entrelazan, y del recinto en torno su follaje espeso cae hasta prender en tierra, desgarrones dejando en ventanales, y cerrando con piedra floreciente tienda de paz en vasto campamento. Miguel de Unamuno • Poemas de versos libres: no hay estrofas, ni rima, ni tampoco una medida exigida a los versos, que pueden tener la longitud que el poeta desee en cada caso. No estás ya aquí. Lo que veo de ti, cuerpo, es sombra, engaño. El alma tuya se fue donde tú te irás mañana. Aún esta tarde me ofrece falsos rehenes, sonrisas vagas, ademanes lentos, un amor ya distraído. Pero tu intención de ir te llevó donde querías, lejos de aquí, donde estás diciéndome: "aquí estoy contigo, mira". Y me señalas la ausencia. Pedro Salinas

Según el número de sílabas de cada verso, la denominación cambia, como vemos a continuación: VERSOS DE ARTE MENOR

VERSOS DE ARTE MAYOR

Bisílabos: 2 sílabas

Eneasílabos: 9 sílabas

Trisílabos: 3 sílabas

Decasílabos: 10 sílabas

Tetrasílabos: 4 sílabas

Endecasílabos: 11 sílabas

Pentasílabos: 5 sílabas

Dodecasílabos: 12 sílabas

Hexasílabos: 6 sílabas

Tridecasílabos: 13 sílabas

Heptasílabos: 7 sílabas

Alejandrinos: 14 sílabas

Octosílabos: 8 sílabas Los versos se suelen agrupar en estrofas, es decir, conjuntos de versos que presentan uniformidad en cuanto a la rima, ya sea consonante, ya sea asonante. A continuación ofrecemos los tipos de estrofas más frecuentes en nuestra literatura:

10

NÚMERO DE VERSOS 2 3

4

5

6

8

TIPO DE ESTROFA

CLASE DE RIMA

ESQUEMA MÉTRICO

Pareado

Consonante o asonante

AA, aa

Terceto encadenado Tercerilla Soleá

Consonante Consonante Asonante

ABA, BCB, CDC... a-a a-a

Cuarteto Serventesio

Consonante Consonante

ABBA ABAB

Redondilla Cuarteta

Consonante Consonante

abba abab

Seguidilla Cuaderna Vía

Asonante Consonante

7-, 5a, 7-, 5a 14A, 14A, 14A, 14A

Copla

Asonante

8-, 8a, 8-, 8a

Consonante

Los versos se combinarán con las siguientes condiciones: a) Tener dos rimas consonantes distintas. b) No pueden rimar más de dos versos seguidos.c) No pueden terminar en pareado

Consonante

8a, 8b, 4c, 8a, 8b, 4c

Quinteto (arte mayor)

Quintilla (arte menor) Copla de pie quebrado o manriqueña Copla de arte mayor Octava real

Consonante

12A, 12B, 12B, 12A, 12A, 12C, 12C, 12A 11A, 11B, 11A, 11B, 11A, 11B, 11C, 11C,

Octava italiana 10

Décima o espinela

11-, 11A, 11A, 11B’, 11-, 11C, 11C, 11B’ Consonante

8a, 8b, 8b, 8a, 8a, 8c, 8c, 8d, 8d, 8c

Además de estas agrupaciones estróficas, hay poemas que constituyen una organización rítmica fija y autónoma. Un poema puede estar formado por varias estrofas: POEMA

NÚMERO DE VERSOS

CLASE DE RIMA

ORGANIZACIÓN

Soneto

14 versos endecasílabos

Consonante

2 cuartetos y 2 tercetos: ABBA ABBA CDC DCD (o CDE CDE)

Romance

A voluntad del poeta (octosílabos)

Asonante

Riman en asonante los versos pares y quedan sueltos los impares: 8-, 8a, 8-, 8a, 8-, 8a...

Silva

A voluntad del poeta (heptasílabos y endecasílabos)

Consonante

El poeta combina libremente los versos heptasílabos y endecasílabos. Pueden quedar algunos sueltos.

11

El ritmo El ritmo, tanto musical como poético, consiste en repetir un fenómeno de manera regular con la finalidad de producir un efecto unitario y reiterado. En español, el ritmo poético se debe a los siguientes factores: La medida: repetición del número de sílabas en los versos que forman un poema. Los acentos: la fuerza espiratoria se reparte sobre las mismas sílabas en cada uno de los versos. Las pausas: los descansos en la lectura, convenientemente repartidos, contribuyen a dar uniformidad al poema. La rima: consiste en la repetición de los sonidos que aparecen al final de cada verso. La rima Como hemos dicho más arriba, la rima es la repetición de los sonidos que cierran cada uno de los versos que componen un poema. Esta repetición puede ser de dos tipos: Asonante: cuando desde la última vocal acentuada sólo se repiten los sonidos vocálicos. Consonante: cuando desde la última vocal acentuada se repiten todos los sonidos, tanto vocálicos como consonánticos. Los recursos estilísticos o literarios Por medio de estos artificios retóricos el escritor intenta llamar la atención del lector gracias a su belleza, ingenio, sensibilidad, dificultad, ritmo o trabazón. La utilización de recursos literarios aleja la lengua poética de la lengua cotidiana, embelleciéndola y estilizándola. Con ellos, el poema puede tener dos niveles de análisis: interno (relativo al contenido, al tema del que se trata) o externo (relativo a la forma del poema, esto es, la unión de recursos métricos y recursos estilísticos). Existe un gran número de recursos estilísticos, aunque a continuación ofrecemos sólo los más frecuentes: Recursos literarios basados en el sonido 1.

o

Aliteración: repetición de sonidos, sobre todo consonánticos, a lo largo de un verso o de una estrofa. Con este recurso, el autor intenta recordar el significado de lo que está expresando por medio del sonido repetido: “con el ala aleve del leve abanico” (Rubén Darío).

o

Onomatopeya: imitación de sonidos reales. Es un recurso muy utilizado en el lenguaje de los tebeos: ¡boom! ¡zas! ¡pío pío! ¡guau guau!

o

Paranomasia: utilización de palabras de sonido parecido, aunque con distinto

12

significado: “como tontos, como tantos, como todos” (Gabriel Celaya).

Recursos literarios de tipo gramatical o

Epíteto: suelen ser adjetivos que destacan una cualidad de un sustantivo que es suficientemente conocida y aceptada: la verde hierba, la blanca nieve. “Corrientes aguas, puras, cristalinas” G de la Vega.

o

o

Pleonasmo: insistencia innecesaria para dejar claro el sentido de una oración o verso. Suele ser muy corriente en el habla coloquial: Lo vi con mis propios ojos. “De los sus ojos tan fuertemente llorando” PMC

o

o

Elipsis: supresión de algunos elementos en un verso ya que quedan sobreentendidos. Este recurso dota al poema de rapidez, brevedad y concisión: “Por una mirada, un mundo; por una sonrisa, un cielo; por un beso... ¡yo no sé qué te diera por un beso” (Bécquer) “lo bueno si breve, dos veces bueno” B. Gracián

o

o

Hipérbaton: alteración del orden lógico de las palabras de un enunciado oracional: “Volverán las oscuras golondrinas de tu balcón sus nidos a colgar” (Bécquer)

o

o

Polisíndeton: utilización de más conjunciones de las que son necesarias. Dota al verso de lentitud y solemnidad: “Alguien barre / y canta / y barre / -zuecos en la madrugada” (Rafael Alberti). “Y yo me iré y se quedarán los pájaros cantando, y se quedará mi huerto con su verde árbol” JRJ"Ser y no saber nada, y ser sin rumbo cierto, /y el temor de haber sido y un futuro terror.../Y el espanto seguro de estar mañana muerto,/y sufrir por la vida y por la sombra y por / lo que no conocemos y apenas sospechamos(...)" Rubén Darío

 o

Asíndeton: omisión de las conjunciones que son necesarias en un verso. Dota al verso de rapidez: “Para la libertad, sangro, lucho, pervivo” (Miguel Hernández).

o

o

Anáfora: repetición de una o más palabras al principio de varios versos: ¿Por qué fue desterrada la azucena, por qué la alondra se quedó sin vuelo, por qué el aire de mayo se hizo pena bajo la dura soledad del cielo? (Rafael Morales)

o

o

Paralelismo: repetición de una misma estructura gramatical en un verso o en varios: La paz de su hora sola me daba la claridad. La gloria de su amor solo colmaba mi soledad (Juan Ramón Jiménez). “Por ti el silencio de la selva umbrosa/ por ti la esquividad y apartamiento del solitario monte me agradaba” Garcilaso. "Yo vivo en paz con los hombres y en guerra con mis entrañas." Antonio Machado Quiasmo es un paralelismo cruzado: una ordenación de dos grupos de palabras de forma que el segundo invierte el orden del primero. Tiene una presentación visual que recuerda la imagen invertida en un espejo. Un ejemplo lo podemos ver en la disposición de atributo y cópula en los dos últimos versos del soneto quevedesco: serán cenizas, polvo serán El siguiente ejemplo muestra un doble quiasmo. El primero, en los dos versos

o

13

iniciales: verbo + complemento circunstancial // complemento circunstancial + verbo El segundo, en los dos últimos: sintagma nominal + circunstancial // circunstancial + sintagma nominal Tejidos sois de primavera, amantes, de tierra y agua y viento y sol tejidos. La sierra en vuestros pechos jadeantes, en los ojos los campos florecidos. (Antonio Machado. De un Cancionero apócrifo.)

o

Anadiplosis: se da cuando las palabras del final de un verso son las mismas que al inicio del siguiente: “también yo tengo mis rejas, / mis rejas y mis rosales” (A. Machado).

o

La reduplicación consiste en la repetición inmediata de un término. Tras de un amoroso lance, y no de esperanza falto, volé tan alto, tan alto que le di a la caza alcance. (San Juan de la Cruz. Otras coplas a lo divino.) La concatenación es una repetición en serie, de tal forma que un término se reitera para enlazarse con uno nuevo.

o

A cada uno de los muros de cada hexágono corresponden cinco anaqueles; cada anaquel encierra treinta y dos libros de formato uniforme; cada libro es de cuatrocientas diez páginas; cada página, de cuarenta renglones; cada renglón, de unas ochenta letras de color negro. (Jorge Luis Borges. La biblioteca de Babel. Ficciones.) o

o

Juego de palabras: utilización de palabras que se escriben igual, aunque con significado distinto: “¡No! Pues bueno; / sea usted bueno y cállese” (M. Machado).

o

El retruécano o conmutación consiste en repartir varias palabras de una frase bajo otra forma e invirtiendo el orden de sus elementos, dando lugar a una alteración del significado. Dan vuestras amantes penas a sus libertades alas, y después de hacerlas malas l as queréis hallar muy buenas. ¿ Cuál mayor culpa ha tenido en una pasión errada: la que cae de rogada, o el que ruega de caído? ¿0 cuál es más de culpar, aunque cualquiera mal haga, la que peca por la paga o el que paga por pecar? (Sor Juana Inés de la Cruz. Arguye de inconsecuente el gusto y la censura de los hombres.)

14

o

o

Calambur: relacionado con el anterior, consiste en unir dos palabras o separar una en dos distintas, de manera que cambia radicalmente el significado inicial: “Entre el clavel / y la rosa, / su majestad / escoja” (= es coja) (Quevedo). Este recurso se usa profusamente en adivinanzas: “¿Qué fruta es la que oro parece y plata no es?” (plátano). Enumeración: sucesión de elementos relacionados entre sí.

o

o

o

"Las playas, parameras al rubio sol durmiendo, Los oteros, las vegas En paz, a solas, lejos; Los castillos, ermitas, Cortijos y conventos, La vida con la historia, Tan dulces al recuerdo,..." Luis Cernuda Interrogación retórica: pregunta enfática de la que no se espera respuesta. ¿ Serás, amor, un largo adiós que no se acaba? Pedro Salinas La exclamación retórica es manifestación de sentimientos y emociones que la escritura representa con signos de exclamación. Éstos traducen una entonación distinta, de carácter enfático en su expresión («¡Pedro ha venido!»), frente a la puramente enunciativa («Pedro ha vertido») o interrogativa («¿Pedro ha venido?»). i Voto a Dios que me espanta esta grandeza y que diera un doblón por descrivilla' porque ¿a quién no suspende y maravilla esta máquina insigne, esta riqueza? ¡Por Jesuchristo vivo, cada pieza Volver vale más que un millón, y que es mancilla que esto no dure un siglo, oh gran Sevilla, Roma triunfante en ánimo y nobleza! (Miguel de Cervantes. Al túmulo del Rey que se hizo en Sevilla.) El apóstrofe o invocación nos permite dirigir la palabra a personas o cosas, estén presentes o ausentes. Puede ir asociada a una exclamación retórica. ¡Oh tristes nubes oscuras que tan recias camináis, sacadme de estas tristuras y llevadme a las honduras de la mar a donde vais! (Gil Vicente. Comedia de Rubena.) 0 puede mostrarse la invocación sólo como tal. Ojos claros, serenos, si de un dulce mirar sois alabados, ¿por qué, si me miráis, miráis airados? Si cuando más piadosos,

15

o

o

o o

más bellos parecéis a aquel que os mira, no me miréis con ira, porque no parezcáis menos hermosos. ¡Ay tormentos rabiosos! Ojos claros, serenos, ya que así me miráis, miradme al menos. (Gutierre de Cetina. Ojos claros, serenos.) Derivación es la combinación de palabras que están formadas a partir de un mismo lexema o raíz. ¡No estás en ti, belleza innúmera que con tu fin me tientas, infinita, a un sinfin de deleites! (Juan Ramón Jiménez. Piedra y cielo.) Ya nunca llegaré a tu lado, puede ser, amor mío, que no te amara ya, que no te hubiese amado nunca, que sólo hubiese amado a mi propio amor, el amor que te tuve, Clara, amor mío. (José Hierro. Brahms, Clara, Schuman. Agenda.) Poliptoton o polipote es la utilización de un mismo tipo de palabra con distintos accidentes gramaticales o distinta forma. Soy un fue y un será y un es cansado. Quevedo ¡Si supieras, mi perro qué triste está tu dios, porque te has muerto! ¡También tu dios se morirá algún día! Moriste con tus ojos en mis ojos clavados, tal vez buscando en éstos el misterio que te envolvía. (Miguel de Unamuno. Elegía a la muerte de un perro. Poesías.) ¡Qué alegría vivir sintiéndose vivido! Rendirse a la gran certidumbre, oscuramente, de que otro ser, fuera de mí, muy lejos, me está viviendo. (Pedro Salinas. La voz a ti debida.) Gradación: enumeración en la que se lleva un determinado orden. “en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.” Góngora Sinestesia: mezcla de sensaciones correspondientes a diversos sentidos corporales.

"Yo soy aquél que ayer no más decía el verso azul y la canción profana".

Rubén Darío

Recursos literarios basados en el significado o

Metáfora: consiste en nombrar una cosa con el nombre de otra a causa de su semejanza, real o ficticia. Aquello que estamos comparando se denomina “término real”, y aquello con lo que lo comparamos “término imaginario”: “Todas

16

las casas son ojos / que resplandecen y acechan” (Miguel Hernández); “Las perlas de tu boca”; “El sol es un globo de fuego, / la luna es un disco morado” (A. Machado). Las formas que puede presentar una metáfora son muchas, veamos algunas estructuras posibles. Llamaremos R al término real e I a la imagen. R es I: Pedro es fuerte como un jabato

Pedro es un jabato

R de I: boca de fresa lengua de cuchillo R:I (R,I): juventud, divino tesoro el otoño: isla de perfil estricto la mujer, sombra triste, se sienta en una silleta Metáfora pura: cuando no aparece el término real. Es la más difícil de entender puesto que hay que suponer o imaginar la realidad.En dos lucientes estrellas,/dividido he visto el sol o

Símil o comparación: consiste en comparar una cosa con otra por semejanza: “y me ofreció sus mejillas / como quien pierde un tesoro” (J. R. Jiménez); “tengo la cabeza como un bombo”; “Como se arranca el hierro de una herida / su amor de las entrañas me arranqué” (Bécquer).

o

Metonimia: se trata de nombrar un objeto con el nombre de otro, como los dos recursos anteriores, aunque en este caso no por razones de semejanza, sino por proximidad física o significativa (el cuello de la camisa; los pies de la cama; beberse una copa; comerse tres platos; el trompeta –en una banda de música-; el espada –en una corrida de toros-; el cámara –el operador de cámara-; un Velázquez –un cuadro de Velázquez). Tipos de metonimia: - La causa por la consecuencia: ¡Deprisa, Lupita! El espejo. Y una toalla húmeda para mi cara. Tengo que borrar la noche de mis ojos. En esta metonimia, se nombra la causa (la noche) en lugar de la consecuencia (ojeras, somnolencia…) -El continente por el contenido: La Casa Blanca ordenará una investigación del asunto Casa Blanca por Presidente de los EE.UU., que es donde vive. Madrid exige a Londres que se cumplan las decisiones de la ONU respecto a Gibraltar Madrid es el Gobierno español y Londres el británico. Me he tomado una copa con Carlos en el bar de la esquina - Lugar por lo que en él se produce: Me he tomado un rioja Mientras estábamos en el café He comprado una botella carísima de coñac - El autor por la obra

17

He comprado dos murillos para la sala de exposiciones o

Sinécdoque: es un tropo con el que nos referimos a un todo con el nombre de una de sus partes o a una de sus partes con el nombre del todo. No deja de ser un tipo especial de metonimia. Una mano blanca, en el extremo de un blanco brazo, manejó con cautela un cepillo sobre sus hombros. Unos gruesos labios, en el extremo de un rostro amable, musitaron recomendaciones referentes a la puntualidad (…) Una voz musical, desde lejos, entonó una cancioncilla de moda que el investigador pareció escuchar con sonrisa ilusionada.

El novelista ha aludido a tres personas, pero nombrándonos sólo partes de ellas. Una mano blanca es una mujer; unos gruesos labios es otra y una voz musical representa a otra. o Imagen es una metáfora en la que no se produce sustitución de un término por otro, pues ambos coexisten. Cuenta que al levantar el borde de la sábana que cubría al ahogado, revivió en la cenagosa profundidad de pantano de sus ojos abiertos un barrio de solares ruinosos y tronchados geranios cruzado de punta a punta por silbidos de afilador; un remoto espejismo traspasado por el aullido azul de la verdad. (Juan Marsé. Si te dicen que caí.) En la red de mi música estás presa, amor mío y mis redes de música son anchas como el cielo. (Pablo Neruda. Veinte poemas de amor.) Como vemos, los términos reales (ojos, verdad, en el primer ejemplo; música, en el segundo) no han sido desplazados por sus correspondientes imaginarios (pantano, aullido, y redes). Ej.: La aurora de Nueva York tiene / cuatro columnas de

cieno / y un huracán de negras palomas / que chapotea las aguas podridas. [Federico García Lorca]. o

Alegoría: es una representación continuada de términos imaginarios

(i1, i2, i3, i4...) que corresponden a términos reales (r 1, r2, r3, r4...), formando un conjunto global (R) de significación metafórica (I). Ej.: o

Símbolo: en esta figura el término real es un concepto abstracto, que es sustituido por un elemento concreto, por lo que la relación entre ambos no puede ser, como en la metáfora, de parecido, sino de origen psicológico o convencional.

Ejs.: Nuestras vidas son los ríos [Jorge Manrique]. El

roble es la guerra, el roble / dice el valor y el coraje [Antonio Machado].

o

Dilogía presenta dos palabras de la misma forma o del mismo sonido pero con significados distintos: Cruzados hacen cruzados escudos pintan escudos, y tahúres muy desnudos con dados ganan Condados; ducados dejan Ducados,

18

y coronas Majestad.¡verdad! (Luis de Góngora. Dineros son calidad...) o

Antítesis o contraste: oposición de palabras o ideas contrapuestas: “Cuando estoy alegre, lloro, / cuando estoy triste, me río” (M. Machado).

o

Paradoja: empleo de expresiones aparentemente opuestas, contradictorias o absurdas, que encierra significación poética: “La música callada, / la soledad sonora” (San Juan de la Cruz); “muero porque no muero” (Santa Teresa de Jesús).

o

Hipérbole: exageración, amplificación: “Tanto dolor se agrupa en mi costado, / que por doler me duele hasta el aliento” (Miguel Hernández).

o

Personificación o prosopopeya: atribución de cualidades humanas a seres animados o inanimados: “Las cárceles se arrastran por la humedad del mundo, [...] / buscan a un hombre, buscan a un pueblo, lo persiguen” (Miguel Hernández); “La heroica ciudad dormía la siesta” (Clarín).

o

Animalización: dotar de cualidades propias de algún animal a seres humanos.

Ej.: Ante el mostrador, los tres visitantes, reunidos como tres pájaros en una rama, ilusionados y tristes... [Ramón del Valle-Inclán].

o

Cosificación: aplicar cualidades de cosa a persona. Ej.: Si eres campana, ¿dónde está el badajo?; / si pirámide andante, vete a Egipto [Francisco de Quevedo].

o

La topografía es la descripción de un lugar. Alrededor de la catedral se extendía, en estrecha zona, el primitivo recinto de Vetusta. Comprendía lo que se llamaba el barrio de la Encimada, y dominaba todo el pueblo que se había ido estirando por noroeste y sudeste. Desde la torre se veía, en algunos patios y jardines de casas viejas y ruinosas, restos de la antigua muralla, convertidos en terrados o paredes medianeras, entre huertos y corrales. (Leopoldo Alas «Clarín». La Regenta.)

Prosopografía es la descripción de una persona en su aspecto exterior. Letamendi era un señor flaco, bajito, escuálido, con melenas grises y barba blanca. Tenía cierto tipo de aguilucho: la nariz corva, los ojos hundidos y brillantes, se veía en él un hombre que se había hecho una cabeza, como dicen los franceses. Vestía siempre levita algo entallada, y llevaba un sombrero de copa de alas planas, de esos sombreros clásicos de los melenudos profesores de la Sorbona. (Pío Baroja. El árbol de la ciencia.) o Etopeya es la descripción de las cualidades morales de un individuo. (Don Gumersindo) era afable, servicial, compasivo, y se desvivía por complacer y ser útil a todo el mundo, aunque le costase trabajos, desvelos fatiga, con tal que no le costase un real. Alegre y amigo de chanzas y de burlas, se hallaba en todas las reuniones y fiestas, cuando no era a escote, y las regocijaba con la amenidad de su o

19

trato y con su discreta, aunque poco ática , conversación. Nunca había tenido inclinación alguna amorosa a una mujer determinada; pero inocentemente, sin malicia, gustaba de todas, y era el viejo más amigo de requebrar a las muchachas y que más las hiciese reír que había en diez leguas a la redonda. (Juan Valera. Pepita Jiménez.) o Retrato es la descripción, tanto moral como física, de una persona. Tenía la Benina voz dulce, modos hasta cierto punto finos y de buena educación, y su rostro moreno no carecía de cierta gracia interesante que, manoseada ya por la vejez, era una gracia borrosa y apenas perceptible. Más de la mitad de la dentadura conservaba. Sus ojos, grandes y oscuros, apenas tenían el ribete' rojo que imponen la edad y los fríos matinales. Su nariz destilaba menos que las de sus compañeras de oficio, y sus dedos, rugosos y de abultadas coyunturas, no terminaban en uñas de cernícalo . (Benito Pérez Galdós. Misericordia.) o Máxima o sentencia ofrece una reflexión de carácter filosófico sobre la vida o el mundo. Tan de valientes corazones es, señor mío, tener sufrimiento en las desgracias como alegría en las prosperidades. (Cervantes. Quijote, XVI, ll.) o El refrán es similar a la sentencia, pero recogiendo experiencias de tono más común y en expresión popular. Mas no muera yo de muerte, hasta que me vea con un cuero [de vino] o tinajica de mis puertas adentro. Que en mi ánima no hay otra provisión, que como dicen: «pan y vino anda camino, que no mozo garrido». (Fernando de Rojas. La Celestina, IV.) o El epifonema es una reflexión final, resultado o resumen de afirmaciones anteriores: Es mucho más complejo de lo que parece este vicio de fumar, al que algunos llaman un vicio pequeño. Yo, por ejemplo, no puedo ponerme a escribir sin encender un pitillo, y, a partir de ese momento, la pluma se detendrá muchas veces, pero los pitillos se sucederán unos a otros sin la menor interrupción. Con una idea más romántica de mi vicio o de mi trabajo, yo supondría que el tabaco facilitaba la lucidez de mis pensamientos, pero no hay nada de eso. Lo que pasa es que, con la atención enteramente concentrada en una cosa, abandono el control de mis movimientos neuromusculares, y éstos, entonces -como unos criados de poca confianza a los que no vigilase nadie-, van y me acaban con las cajetillas. -¡Dichoso el hombre que no tiene criados! -suelen decir todos aquellos que pueden permitirse el lujo de tener muchos. ¡Dichoso, digo yo a mi vez, el que no tiene hábitos, reflejos, tics ni rutinas que lo esclavicen! (Julio Camba. Esto, lo otro y lo de más allá.)

Principales subgéneros líricos Oda

20

Etimológicamente, oda significa “canto”, ya que, en la antigua Grecia, era recitada con el acompañamiento de una lira. Sirve para que el autor exprese cualquier tipo de emoción lírica: alegría, melancolía, tristeza, placer... Hemos de destacar la Oda a Francisco Salinas de fray Luis de León. Elegía Es un poema escrito en homenaje y recuerdo de una persona fallecida. Famosísimas son las Coplas que Jorge Manrique dedicó a su padre, así como la Elegía a Ramón Sijé de Miguel Hernández o el Llanto por Ignacio Sánchez Mejías de Federico García Lorca. Égloga Poema amoroso en el que los protagonistas son pastores situados en un lugar idílico. Estos personajes suelen lamentar sus penas de amor a través de un diálogo muy estilizado y de un vocabulario bastante esmerado. Las más conocidas y, quizás, de mayor calidad, son las tres Églogas que Garcilaso de la Vega escribió entre 1534 y 1536. Sátira Composición habitualmente breve con tono burlesco en la que el autor censura vicios tanto individuales como colectivos. En realidad una sátira es una especie de burla en verso. Quizás uno de los mejores autores de sátiras de nuestra literatura ha sido Francisco de Quevedo, como podemos observar en los títulos de algunos de sus poemas satíricos: “”A un hombre de gran nariz”; “Mujer puntiaguda con enaguas”; “Hastío de un casado al tercer día”; “Casamiento ridículo”; “Vieja verde, compuesta y afeitada”... Epitalamio Poema en el que se resalta la solemnidad de una boda y el amor de los recién casados. Antonio Machado dedicó un epitalamio a su amigo Francisco Romero. Letrilla Poema breve, gracioso, de contenido burlesco, amatorio o religioso. Suele contar con un estribillo que le da unidad y ritmo. Destacan las letrillas satíricas de Francisco de Quevedo o Luis de Góngora. Epístola Se trata de una carta en verso que el poeta dirige a un amigo. Puede ser de tema variado, aunque predomina la reflexión moral. Garcilaso de la Vega es autor de la Epístola a Boscán. Canción Con esta denominación se suele designar a cualquier composición de contenido amoroso. VALOR ESTILÍSTICO DE LAS PARTES DE LA ORACIÓN

21

El verbo a.- La abundancia de verbos de acción, sobre todo principales, da dinamismo a la expresión: "El Duque entendido el designio, sin dar lugar a esto les salió al encuentro...acometieron a los franceses con gran ímpetu, comenzóse una batalla reñida, aunque duró poco; desbaratóse la gente de a caballo.... b.La alternancia de tiempos verbales para narrar hechos pasados (indefinido/presente/imperfecto/ perfecto) presta vivacidad al estilo: "Partiós de la puerta, por Burgos se aguijaba/ llegó a Santa María, luego descavalgaba" c.- Es conveniente tener en cuenta el uso de los tiempos verbales que se describen en las gramáticas, pues suelen constituir un rasgo estilístico interesante. - Los tiempos y modos verbales tienen amplias posibilidades estilísticas en nuestro idioma. De la compleja teoría al respecto, destaquemos cinco usos de formas verbales. 1. El presente histórico, como actualización de la acción pasada (El novelista Juan Valera viene al mundo en 1824), da viveza al relato. 2. La acción referida al futuro, pero captada como un presente, llamado presente futuro (Mañana vamos al cine con los niños), es muy expresiva. 3. Por su valor durativo, el pretérito imperfecto es la forma apropiada para la descripción. La casa de la Escandalosa consistía en un cuarto de unos tres metros en cuadro, en el fondo se veía una cama donde dormía vestido el Bizco. (Pío Baroja. La busca.) 4. También se utiliza, como portador de una especial expresividad de la narración, el pretérito imperfecto con los valores de apertura (Aquel día comenzaba [= comenzó] con un sol radiante), y de cierre de una acción (Nos anunció su visita. Al día siguiente llegaba [= llegó] jubiloso). Como hemos podido apreciar, se trata, en ambos casos, de un imperfecto que equivale a un pretérito perfecto simple o indefinido. 5. El pretérito perfecto simple es el tiempo más característico de la narración. De repente, sus cabellos se pusieron blancos como la nieve, su rostro se cubrió de arrugas, y sus espaldas se encorvaron como las de un hombre decrépito, después le faltó el aliento. Y al fin, cayó muerto en la playa. (Juan Valera. Elpescadorcito Urashima.)

- También en el plano morfológico cabe destacar la utilización expresiva de sufijos, como los diminutivos, los aumentativos y los despectivos. Los primeros son frecuentes portadores de valores afectivos, además de las ideas de disminución o aumento de tamaño, que les son propias; los despectivos encierran nociones de rechazo o de desafecto. El sustantivo a.- Abundancia de sustantivos abstractos es típica de una

actitud intelectual:

"No es dudable que la diferente temperie de los países induce sensible diversidad en hombres, brutos y plantas".

22

b.- Abundancia de sustantivos concretos para designar lo abstracto cuando no es estilo conversacional, es una forma de intensificación expresiva "Los tribunos y los oradores de Atenas y Roma tienen puestos los ojos (la mirada) antes de soltar los torrentes(abundancia) de su elocuencia, en los semblantes(caracteres) de los pueblos" c.- La preferencia por los sustantivos que indican especie es una técnica realista: álamo por árbol, caballo por bestia, uniforme por ropa. d.- La tendencia contraria supone una técnica idealista e.- El diminutivo supone un estilo familiar con matices de ternura, delicadeza: "Parad, airecillos"desprecio: "Unas devocioncitas de lágrimas y otros sentimientos pequeños que el primer airecito de persecución se pierden estas florecitas f.- El aumentativo supone un estilo familiar; añade una intención humorística con matiz caricaturesco o de desprecio: "Tenía el hablar cotorrona/ Lucio, grandote, abobalicado" g.- El uso de colectivos puede obedecer al deseo de sustituir lo analítico por lo sintético, dando una visión de conjunto o de sugerir heterogeneidad. El artículo a.- Un solo artículo para una serie de sustantivos da a éstos un sentido unitario: "Destruyeron el imperio y nombre de los romanos" b.- El artículo delante de cada sustantivo tiene una intención deslindadora, dando personalidad propia a cada uno de ellos: "El sosiego, el lugar apacible, la amenidad de los campos" c.- La ausencia de artículo hace que se designe más la esencia que la individualidad del objeto: "Se mueve con bastoneo, carraspeos y arrastrar de pies"

El adjetivo a.- La abundancia de adjetivos calificativos proporciona un ritmo lento, complacencia en la descripción: "La vieja camina por una vereda húmeda, olorosa, rústica." b.- El uso de adjetivos determinativos supone una actitud intelectual y objetiva. c.- Los adjetivos descriptivos (color, forma, sonido) suponen una actitud sensorial: "Yo voy soñando caminos/ de la tarde. Las colinas/ doradas, los verdes pinos/ las polvorientas encinas". d.- El adjetivo antepuesto tiene un valor evocador y afectivo: "Con blando impulso el céfiro suave/ las copas de los árboles moviendo/ recrea el alma con manso ruido/ mientras el dulce soplo desprendidas/ las agostadas hojas, revolando/ bajan en lentos círculos al suelo". e.- El adjetivo pospuesto tiene un valor intelectual u objetivo: "Los reflejos memorables de este modo de confraternizar las clases sociales surgen a menudo en los hechos históricos". f.- El superlativo en -isimo denota énfasis y afectividad: "El Señor cura era aficionadísimo a la fruta"

23

g.- El "desplazamiento calificativo" - atribución de la cualidad de un objeto a otro íntimamente relacionado con él- es un procedimiento impresionista: "El débil trino amarillo del canario". f.- El epíteto o adjetivo explicativo que -sin tener el valor selectivo propio del especificativo: El coche rojo--- se emplea con valor ornamental o estilístico. En amigable estaba y dulce trato (trato amigable y dulce, si amigable y dulce trato ser llamado puede cosa que, ausente vos, venga a ofrecerse) (Francisco de Aldana. Respuesla a Costne de Aldana, su hermano.)

Las conjunciones a.- La abundancia de conjunciones de subordinación es indicio de actitud intelectual: "En las amenazas suele exceder la lengua, porque el fuego de la cólera la mueve muy aprisa, y como no puede corresponder la venganza a la pasión del corazón, queda después desacreditada la prudencia del príncipe, y así... b.- El polisíndeton produce un ritmo retardado, aislando una idea de otra para que la acción se detenga en cada una de ellas: c.- El asíndeton da un ritmo acelerado a la acción: "Sal, corre, vuela, alcánzalo, llámale, porque si n, estamos perdidos" d.- Cuando se trata de ausencia de coordinación y subordinación es un recurso impresionista: " Azorín escucha al maestro. Honda tristeza satura su espíritu en este silencioso anochecer de invierno. Yuste pasea..."

Los sonidos a.- La onomatopeya es un recurso impresionista b.- La asonancia y similicadencia pueden encerrar una intención de intensificar la expresividad, pero pueden ser también elegancias externas: "Porque en la cárcel cantamos, en el potro callamos, de día trabajamos, de noche hurtamos" c.- La abundancia de arcaísmos suele tener intención evocadora y se presenta en textos de tono sensorial o afectivos: "Había escrito algunas monografías de claros varones de su casta y de su villa, que los doctos guardaban cual oro en paño. Los que lo conocieron en la mocedad hacíanse lenguas de su donaire y de su gallardía" d.- La abundancia de cultismos responde a una actitud intelectual: "Una generación no es un puñado de hombres egregios, es como un cuerpo social íntegro con su minoría selecta" e.- Los exotismos buscan sensaciones de color; abundan en estilos impresionistas "O con amor hindú que alza sus llamas/ en la visión suprema de los mitos/ y hace temblar en misteriosas brasas/ la iniciación de los sagrados ritos/ en

24

tanto mueven tigres y panteras/ sus hierros, y los fuertes elefantes/ sueñan con ideales bayaderos/ los rajahs, constelados de brillantes"

El verso a.- El verso corto característico de la poseía popular crea un ritmo rápido y sus efecto es el dinamismo: "Yo soy viva soy atractiva me meneo me paseo; yo trabajo subo y bajo; no me estoy quieta jamás" b.- El verso largo lleva consigo un ritmo lento y da un tono grave a la expresión: "El Rey de los hidalgos, señor de los tristes/ que de fuerza alientas y ensueños vistes/ coronado de áureo yelmo de ilusión/ que nadie ha podido vencer todavía/ por la adarga al brazo, toda fantasía/ y la lanza en ristre, toda corazón" c.-El encabalgamiento suave indica serenidad, armonía d.- El encabalgamiento abrupto da dinamismo al verso.

25

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.