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ACTIVIDAD PRÁCTICA: Alumna de 1º ESO que se siente a disgusto con todas las asignaturas. Por lo que interrumpe constantemente el ritmo de la clase; se levanta de su silla, pregunta insistentemente a la profesora, tira los papeles al suelo, se asoma por la ventana, se burla de los compañeros, no le gusta recibir órdenes, se aísla de los compañeros, etc.
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Desarrollo socioafectivo: La alumna es la mayor de tres hermanos, sus padres están trabajando y se encarga de ellos la abuela materna. El nivel socioeconómico y cultura es mediobajo. Los padres presentan un estilo educativo permisivo como consecuencia de que a penas están con sus hijos, las normas no están bien delimitadas y en casa se hace lo que quieren sus hijos. Por su parte, la abuela paterna, también mima en exceso a sus nietos. Pocas veces se le lleva la contraria en casa, lo que ella quiere, se hace.
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Desarrollo académico: Es una alumna con un buen rendimiento académico y muy inteligente pero los profesores apuntan a cambios importantes como consecuencia del paso de primaria a secundaria (a pesar que esté en el mismo colegio). Al final de 6º de primaria empezaron a observar estos cambios y a través de tutorías y reuniones con los padres, los problemas disminuyeron. A pesar de que consiguió sacar el curso bien, sus notas bajaron considerablemente, aprobando todo por los pelos. Al comenzar el nuevo curso no manifestó interés por ninguna asignatura, sentándose al final de la clase.
Planteamiento de la actividad:
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¿Qué tipo de conductas identificas en esta alumna?.
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¿De qué manera están influyendo?.
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¿Qué orientaciones o pautas de trabajo introducirías como P.T. con respecto a esta alumna?, ¿y con respecto a la familia, el tutor y el resto de profesores?. Complementa la información del tema con la bibliografía recomendada para que te permita plantear de la forma más completa posible el caso.
Respuestas varias de algunos alumnos:
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¿Qué tipo de conductas identificas en esta alumna?.
Se trata de una alumna de 1º ESO, que no se encuentra a gusto en ninguna asignatura, mostrando desinterés. En clase se levanta constantemente, se burla de sus compañeros, interrumpe, pregunta insistentemente, tira papeles al suelo, no acata
órdenes y se aísla de sus compañeros. Por todo esto, podemos decir que la niña perturba el ritmo normal de la clase y manifiesta conductas disruptivas, probablemente como respuesta a una situación familiar, social y escolar cuyas variables están interactuando e influyendo negativamente en su desarrollo. Es la mayor de tres hermanos en una familia de nivel socioeconómico mediobajo en la que la abuela es la que se encarga de los niños. Los padres pasan poco tiempo con ellos y el estilo educativo es muy permisivo. Por tanto, en casa se hace lo que los niños quieren, no habiendo unas normas claras y la atención que la niña recibe es escasa. Podemos apreciar carencias afectivas probablemente desde su infancia que afectan a sus cuidados básicos. Así, la falta de un modelo estable y unas normas claras hace que la niña se sienta insegura, no sienta la protección que necesita y reaccione con comportamientos inadecuados cuando le imponen una cierta disciplina en el medio escolar. Al final de la etapa de Primaria, se observó que su rendimiento bajaba. Siempre ha sido una niña inteligente y con un rendimiento bueno, pero ahora muestra desinterés y se sienta al final de la clase. Los cambios de etapa son siempre difíciles, ya que los contenidos cambian y se hacen más abstractos. Es posible que la falta de interés de la niña se deba a la distancia entre los planteamientos educativos de la familia y la escuela, la transmisión de unos valores y normas de comportamiento diferentes y la visión de contenidos y forma de trabajo en el aula poco ajustada a sus necesidades, a sus intereses y motivaciones.
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¿De qué manera están influyendo?.
Las carencias socioafectivas, la inestabilidad familiar, el estilo permisivo de educación familiar, llevan a la niña a sentir una falta de protección que la hace reaccionar de forma inadecuada ante el mundo. La familia, desde el momento del nacimiento debe favorecer el desarrollo del niño dándole la protección que necesita y satisfaciendo sus necesidades. Cuando un niño carece desde pequeño de esta protección, aprende que no puede esperar que nadie le proteja, que está solo ante el mundo y reacciona ante las normas de todo sistema mediante conductas inadaptadas. Por tanto, las normas claras y un estilo de educación familiar ni autoritario ni demasiado permisivo, favorecen el adecuado desarrollo del niño. Un modelo educativo autoritario generará dependencia y reacciones negativas ante la falta de libertad. En cambio, un modelo demasiado permisivo como el del caso, generará inseguridad, aislamiento y conductas inadecuadas. Por otra parte, la etapa en la que se encuentra, marca un cambio importante a nivel escolar, que se une al comienzo de la pubertad y la adolescencia. Es, por tanto, un periodo de cambios físicos, psicológicos y educativos ya de pro sí difíciles. Se trata de una etapa conflictiva en la que se producen sentimientos de incomprensión, empiezan a verse como adultos y no les gusta que se les den órdenes, quieren más libertad...En este caso, tiene mucha libertad en casa, puesto que puede hacer lo que quiera sin que se la lleve la contraria, pero en la escuela tiene que acatar ciertas normas de convivencia como respetar a los compañeros, estar sentada, no interrumpir la clase y hacer las tareas que se la mandan. Aquí por tanto surge el conflicto entre lo que vive en casa y lo que se la pide en el colegio, los modelos educativos son muy distintos y la niña reacciona ante esa falta de compenetración familiaescuela.
Probablemente, a medida que avanza en el sistema educativo, los contenidos se hacen más abstractos y alejados de su realidad diaria, lo que supone una falta de motivación hacia la escuela. Vive los contenidos como lejanos, fuera de aplicación a su vida diaria y como no responden a sus necesidades e intereses no quiere participar. Como consecuencia, interrumpe el ritmo de la clase y molesta tanto a los profesores como a sus compañeros. También es posible que al alterar el ritmo habitual de la clase, la niña obtenga la atención que en casa no tiene por parte de la profesora y los compañeros, aunque sea para regañarla por su comportamiento. Además, la relación con sus compañeros está alterada, ya que se burla de ellos, les molesta en clase y ella misma se aísla. El desarrollo socioafectivo de la niña hemos visto que ha sufrido alteraciones y falta de estabilidad desde que era pequeña, por lo que está alterado todo tipo de relación social. Ha aprendido que está sola en la vida, sabe que su comportamiento no es aceptado en clase y decide aislarse. Los niños que no reciben una adecuada atención afectiva y que viven rodeados de inestabilidad, falta de atención y con modelos permisivos se sienten desorientados a menudo en las situaciones vitales y tienden a relacionarse y comunicarse poco con los demás. Los compañeros además, suelen tender a apartarse de ellos, porque son niños que no saben aceptar normas de un juego y no saben relacionarse.
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¿Qué orientaciones o pautas de trabajo introducirías como P.T. con respecto a esta alumna?, ¿Y con respecto a la familia, el tutor y el resto de profesores?.
Respecto a la alumna: La intervención se dirigirá a eliminar las conductas disruptivas que perturban el ritmo de la clase. Para ello: Observar las conductas inadecuadas o disruptivas que presenta la alumna. Qué variables pueden estar influyendo. Circunstancias en las que se producen. Descubrir por qué se comporta así y qué busca con su forma de actuar. Diálogo con la alumna. Técnicas de modificación de conducta. Para mejorar la relación con sus compañeros t écnicas de aprendizaje cooperativo, actividades en grupo, dinámicas y juegos en los que se promueva un aprendizaje que no se base en la competitividad, sino que los grupos luchen por conseguir un objetivo común de manera que tengan que unirse para lograrlo todos. Promover el aprendizaje significativo y lúdico, partiendo de sus intereses y adaptándose a las peculiaridades de la alumna. Favorecer las relaciones sociales y una autoestima ajustada para ello, habr á que reforzar sus logros aunque sean básicos, promover su participación en tareas de grupo, dotarla de estrategias de comunicación adecuadas, fomentar el debate y el diálogo en clase con actitudes de respeto a las ideas de los demás, proponer actividades ajustadas a su nivel de competencia para que pueda lograr superar pequeños retos, ajustar el nivel de consecución de las tareas, proporcionarla continuo feedback, valorar sus aportaciones cuando no sean perjudiciales para el resto, animarla a participar en clase
en debates, que salga a la pizarra, que vea que puede conseguir lo que se propone y que cuando ella respeta y tiene un comportamiento adecuado es respetada y se la valora. Que aprenda a ajustarse a unas normas. Respecto a la familia: Reunión para comunicar la situación y el comportamiento de la niña en la escuela y valorar si hay alguna situación concreta que pueda estar afectando a la falta de interés de la niña por la escuela y a su actitud y comportamiento en el aula. Establecer comunicación familiaescuela, mediante participación en reuniones. Proponer pautas de actuación comunes. Fomentar el diálogo familiar, compartir momentos lúdicos, pasar más tiempo con los hijos. Establecimiento de normas claras en casa. Coordinación en las normas de casa y del colegio. Información sobre cómo afecta un determinado clima familiar en el comportamiento del niño. Estrategias para afrontar posibles conflictos en el hogar. Importancia de la existencia de una figura de autoridad en casa. Modelo de referencia adecuado. Información sobre la etapa educativa y evolutiva en la que se encuentra la alumna y cómo afrontar los cambios y necesidades que presenta. No hacer lo que la niña quiere siempre. Respecto al tutor y el resto de profesores: Promover técnicas de aprendizaje cooperativo. Educación en valores de respeto y tolerancia. Aportar feedback continuo. Promover actividades grupales. Favorecer la participación de todos los alumnos en las actividades. Conocer las necesidades e intereses de los alumnos para partir de ellos. Desarrollo y fomento del diálogo. Que los alumnos puedan establecer las normas, que participen en la gestión del aula y del centro. Actividades de autoconocimiento por parte de los alumnos les ayudar án a conocerse a sí mismos, conocer cómo se comportan, por qué se comportan así y cambiar los comportamientos inadecuados por conductas adaptadas. Favorecer las relaciones sociales. Reforzar el éxito de los alumnos. Promover aprendizajes significativos y lúdicos. Respeto a las intervenciones de los alumnos, ser tolerantes. No discriminación. No emplear la violencia para resolver conflictos, mostrar tranquilidad. Expectativas positivas sobre los alumnos, incluso los conflictivos.
OTRAS ORIENTACIONES PARA COMPLETAR:
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¿Qué tipo de conductas identificas en esta alumna?.
En esta alumna se pueden identificar conductas de tipo disruptivo, como se ha visto en el tema, son conductas que chocan con los valores y pautas de conducta establecidas. Además, alteran el ritmo general de la clase, ya que las conductas en si afectan al resto de los alumnos y a la profesora y porque la profesora debe parar la clase para prestar atención a este tipo de conductas para que no sigan produciéndose.
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¿De qué manera están influyendo?. Estas conductas, provocadas (teniendo en cuenta los datos disponibles) por ausencia de normas claras y de un estilo educativo coherente en el seno familiar y por una apatía general hacia los estudios, están incidiendo en el rendimiento escolar, la niña muestra un desinterés general hacia los estudios y sus notas están bajando progresivamente, no muestra ningún interés hacia el trabajo académico. Además estas conductas disruptivas están incidiendo también en su integración social y en sus relaciones sociales, por un lado ella misma se está aislando y mantiene pocos contactos sociales pero además, los propios compañeros comienzan a rechazarla y no querer relacionarse con ella. Estas conductas disruptivas, de momento no se han manifestado acompañadas de violencia (salvo burla hacia los compañeros), se trata de una situación que requiere de una intervención inmediata para no derivar en conflictos más graves. Si no se actúa de forma prioritaria, la niña puede llegar a una seria situación de fracaso escolar, a rechazar por completo la escuela y al abandono temprano de ésta. Todo este proceso, inevitablemente, conduciría a una situación de marginalidad y desadaptación social con terribles consecuencias en el desarrollo integral de la niña. No obstante, las actuaciones a desarrollar actualmente pueden evitar este proceso de desadaptación.
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¿Qué orientaciones o pautas de trabajo introducirías como P.T. con respecto a esta alumna?, ¿Y con respecto a la familia, el tutor y el resto de profesores?.
Familia: Lo ideal sería que la familia colaborase activamente ya que parece ser que gran parte del origen del conflicto se encuentra en la permisividad continuada y prologada vivida por la niña en el seno familiar. Ahora bien, teniendo en cuenta las condiciones familiares comentadas en el caso, es poco probable que la familia se implique activamente en la actualidad. Por lo tanto, será necesario empezar con pocas recomendaciones e ir aumentando su actuación a medida que sea viable. En primer lugar, el tutor debería concertar una entrevista con los padres para informarles de lo que está sucediendo con su hija en el colegio, explicándoles con detenimiento todo lo que hace en clase y las posibles explicaciones que se han atribuido a este comportamiento. Posteriormente, les orientará sobre una serie de pautas que pueden seguir desde casa (en función de su disposición hacia éstas, insistirá más o menos).
Establecimiento de normas y límites claros: es fundamental explicar a la niña que existen una serie de normas que debe cumplir, que no puede hacer lo que quiere. Además, deben ser firmes en esas normas, hay que establecer desde el principio unos límites que la niña debe conocer y respetar. En realidad, la niña con sus constantes conductas disruptivas, está demandando unos límites, está investigando hasta donde puede llegar ya que está acostumbrada a que la permitan hacer todo. Hay que explicarles a los padres que no son mejores padres por consentirla todo, que los niños necesitan que los adultos pongan una contención a su conducta, que esto es esencial para su desarrollo y socialización. Calidad del tiempo compartido: los padres disponen de poco tiempo para pasar con la niña, hay que mostrar comprensión y empatía hacia esto, admitiendo que es lógico dadas las condiciones laborales actuales. El tutor debe explicarles que so bien es cierto que cuanto más tiempo puedan pasar con la niña será mejor para ésta, lo más importante es la calidad del tiempo que pasen con ella: que sean momentos únicos, que sean momentos disfrutados por todos (no donde la consientan todo). Deben ser momentos llenos de diálogos, juegos, afectividad. Propuestas: hablar con ella un poquito todos los días sobre como la ha ido en el colegio, intentar cenar o desayunar juntos, realizar una actividad conjunta en el fin de semana,… Comunicación con el centro educativo: es esencial establecer unos cauces de comunicación entre la familia y el colegio para lo que se pueden intentar las siguientes acciones: o Entrevistas periódicas para hablar sobre el rendimiento, conducta e integración de la niña. o “Libreta de comunicación”: se utilizará un cuaderno que la niña debe llevar siempre en la cartera para establecer comunicación diaria. Se aprovechara para reforzar (positiva o negativamente) de forma conjunta, para que la niña pueda ver que los padres se preocupan por lo que hace en el cole. Si los padres aceptan esta propuesta, insistirles en que deben leer el cuaderno todos los días. o Participación en actividades del colegio en las que las familias sean invitadas, para que la niña vea que sus padres tienen interés por lo que hace en el colegio. Clases extraescolares de refuerzo escolar. Se les puede comentar que en el colegio, de forma gratuita, hay unas clases de refuerzo escolar por las tardes a las que la niña podría apuntarse para reforzar los aprendizajes escolares al tiempo que se trabajan otra serie de hábitos. En este caso esta opción es interesante ya que los padres por la tarde no están en casa y además, dado su rendimiento escolar, a la niña la beneficiarían mucho. Además, estas clases tienen un carácter más informal más lúdico,…probablemente motivarán más a la niña que las clases ordinarias, pueden ser una forma interesante de volver a “enganchar” a la niña a los trabajos escolares. Aplicación de refuerzos: hay que explicarles que deben de reforzar positivamente a la niña siempre que puedan. Se les explicará que hay varias formas: o Refuerzo verbal, comentarios haciendo referencia a lo bien que ha hecho algo. Estos comentarios pueden ser directos (dirigidos a la niña, cuando estén hablando con ella) o indirectos (cuando estén hablando entre ellos o con otra persona, pero sepan que la niña les está escuchando).
o Actividades: hacer conjuntamente alguna actividad que a la niña le guste mucho, siempre y cuando la niña se haya portado bien. Por ejemplo, si leen e la “libreta de comunicación” que la niña se ha portado bien durante toda la semana, en el fin de semana harán algo que a la niña le guste mucho. En cambio, s ha mostrado conductas disruptivas en el cole, no harán dicha actividad, pero recordándola a la niña por qué no la hacen. o Refuerzos materiales: regalos, premios,…Se les explicará que no pasa nada porque utilice estos refuerzos de vez en cuando pero que no conviene abusar de ellos. Dado el contenido de esta entrevista y la situación familiar, a lo mejor es necesario realizar más de una entrevista (demasiado contenido para un solo encuentro) y también sería conveniente que, además del tutor, estuviese presente el especialista de pt o el orientador del centro para reforzar al tutor ante las oposiciones de los padres. Tutor: La intervención estará enfocada a eliminar las conductas disruptivas y a favorecer la adaptación escolar de la niña, retomando el buen ritmo académico y las relaciones interpersonales. Esta intervención deberá desarrollarla el tutor, ya que es el que más tiempo pasa con la niña y por lo tanto el que mejor la conoce, pero deberá ser apoyado por el resto de los profesores (también responsables de la acción educativa). Las líneas de actuación podrían ser: Establecimiento / recordatorio de normas grupal: se utilizará alguna hora de tutoría para recordar las normas establecidas a principio de curso. Este recordatorio estará abierto al diálogo y a la modificación de alguna norma, si se considera oportuno. Los alumnos formarán grupos y escribirán las normas en diversos carteles que luego se colgarán en la pared. “Buzón”: se hará un buzón grande que se colocará en un lugar visible de la clase. Todos los alumnos podrán depositar cartas en este buzón, serán cartas de agradecimiento o de quejas dirigidas a diferentes compañeros de la clase. Una o dos veces en semana se leerán las cartas y se tratarán de solucionar los conflictos y se hablará de las buenas noticias. “Responsabilidades”: se establecerán diferentes responsabilidades y encargados dentro de la clase. Para implicar a la niña, se la pueden asignar responsabilidades importantes, que la lleven bastante tiempo y la involucren de forma activa en el ritmo de la clase, por ejemplo, repartir los ejercicios, exámenes, etc. Sesiones de dinámica de grupo y resolución de conflictos: Se realizarán diferentes sesiones en las horas de tutorías para favorecer la cohesión y adaptación grupal y para trabajar la resolución de conflictos así como las habilidades sociales. Estas actividades beneficiarán a la niña pero también al resto del grupo. En las diferentes clases se diseñarán actividades cuya base sea el trabajo cooperativo y el trabajo en grupo, donde todos tengan que implicarse activamente para obtener resultados. Diseñar y realizar actividades motivadoras, que conecten con la realidad e intereses de la niña.
Procurar un acercamiento a la niña, hay que favorecer el diálogo y la escucha activa. Es importante mostrarla que aunque no nos gusta su comportamiento y su actitud, ella nos importa mucho y que nos preocupa todo lo que la sucede. En definitiva, que estamos ahí para ayudarla. Reforzar todos los comportamientos adecuados y buenas actuaciones. Es muy importante anticiparse a las conductas disruptivas y reforzar positivamente a la niña cuando se esté portando bien, cuando esté trabajando, cuando esté centrada en la tarea, cuando respeta las normas y a sus compañeros,… Reducción /eliminación de conductas disruptivas: Para abordar las conductas disruptivas se seguirá el siguiente proceso: o Retirada de atención cuando sea posible, normalmente esto se podrá hacer cuando las llamadas de atención estén dirigidas solo hacia el maestro, no cuando impliquen a toda la clase (ya que sería imposible seguir el ritmo). o “Tiempo fuera”: si la conducta es más seria y observamos que es necesario cambiar a la niña de ambiente para cortar la continuidad de la conducta, se la sacará de la clase, procurando que no reciba estímulos más interesantes. Esta técnica es complicada de llevar a la práctica porque la niña no puede quedarse sola en el pasillo, habría que ver quien la supervisa, pero lo cierto es que en algunas ocasiones es la única manera de cortar ciertas conductas. o Para evitar las llamadas de atención negativas (conductas disruptivas) se prestará atención a la niña de forma previa, como ya he dicho antes, es fundamental anticiparse a sus comportamientos. “Economía de fichas”: se elaborará un panel con la niña donde estén representados todos los días de la semana. Al final del día se valora su comportamiento, si ha habido al menos una conducta disruptiva, ella misma pondrá una cruz, si no ha habido ninguna, podrá una señal “P”. Si al final de la semana hay cinco “P” (el comportamiento tiene que ser perfecto desde el principio, no por la perfección sino porque no podemos reforzar si hay mal comportamiento) la niña recibirá un premio / recompensa previamente acordado con ella, se procurará que sea un refuerzo de actividad. Por este motivo es muy importante analizar sus intereses. Lo ideal es que esta actividad la realizase el tutor pero si no es posible por falta de tiempo la haría el maestro de PT. Contrato de contingencias: Firmar un acuerdo o contrato donde se explicite las conductas que debe cambiar y lo que va a obtener a cambio si cumple dicho contrato. Los contratos deben ser revisados cada semana como mucho.
Profesorado: El resto del profesorado darán continuidad a las líneas trabajadas por el tutor, es fundamental la comunicación y unificación de criterios para que el trabajo con la niña sea efectivo. Sería muy interesante plantear entre el profesorado la posibilidad de introducir el aprendizaje cooperativo como estrategia metodológica en donde la alumna estuviera en un grupo que le permitiera obtener éxitos académicos y compartir responsabilidades. Maestro PT:
Las principales líneas de actuación serían: Trabajar técnicas de autocontrol, reducción de la ansiedad y relajación…Es importante enseñar a la niña técnicas para regular su comportamiento, relajarse en situaciones en las que esté nerviosa,… Analizar con ella el autoregistro de sus conductas disruptivas, tratar de buscar explicaciones, alternativas de conducta…Es importante que la niña reflexione en voz alta sobre su comportamiento. Analizar intereses y aficiones de la niña para poder determinar los refuerzos. Refuerzo escolar: se establecerán diferentes sesiones de refuerzo escolar donde abordar las dificultades académicas de la niña. Diálogo, escucha activa y empatía. Coordinación con todo el equipo docente y comunicación con la familia. Reforzar positivamente todos los buenos comportamientos y los éxitos y avances académicos