LIBRITO #01 (p. 1-49) NOTAS DE CLASE (Clases 1-8; páginas 2-49)

“...el testimonio de JESÚS...” (páginas 3-30) INTRODUCCIÓN al Manual y al Estudio del Apocalipsis Abreviaturas y otras Convenciones Explicaciones para estudiantes que tienen el Manual Repasos Referencias Bíblicas y los Índices Bienvenida al Estudio Introducción al Estudio El Propósito y el Plan del Estudio Una Meta Importante La Tarea para la próxima clase

p. 2-4a p. 4a-5 p. 4a-c p. 4c-5 Clase #1, p. 6a-d Clase #1, p. 6d-8 Clase #1, p. 7a-b Clase #1, p. 7c-8a Clase #1, p. 8a-b

Profecía El Apocalipsis —Revelación Inspirada Estructura de la Biblia Unidad del Mensaje Bíblico

Clase #2, p. 9-12c Clase #2, p. 12c-13d Clase #2, p. 13d-14 Clase #2, p. 15

El Apocalipsis —un Libro de Mucho Orden Bosquejo del Apocalipsis El Gran Tema de la Biblia Conceptos Destacados en el Apocalipsis

Clase #3, p. 16-18b p. 17a-d Clase #3, p. 18b-23b Clase #3, p. 23b-25

Escuelas de Interpretación Gráfico de la Semana #70

Clase #4, p. 26-29 p. 27

Clase #5, p. 30-35 Estudio Cronológico sobre el Tiempo y la Eternidad Visual: Paréntesis de Tiempo dentro de la Eternidad p. 31 Jesús Afirmará Sus Pies sobre el Monte de los Olivos ¿Arrebatamiento Pretribulación?

Clase #6, p. 36-38 Clase #6, p. 39-40

Jesús Enseña un Arrebatamiento Post-tribulación

Clase #7, p. 41-46

Clase #8 (parcial), p. 47-48b Clase #8 (parcial), p. 48b-49

“Permanezca el amor fraternal” 1

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Libros bíblicos citados (Lista puede ser incompleta) Abd. Am. Ap. Cnt. Co. Col. Cr. Dn. Dt. Ef. Esd. Éx. Ez. Fil. Gá. Gn. Hab. Hag. Hch. He. Is. Jer. JI. Jn. Jos.

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Jud. Jue. Lc. Lm. Lv. Mal. Mi. Mr. Mt. Nah. Nm. Os. P. Pr. R. Ro. Rt. Sal. Sm. Sof. Stg. Ti. Ts. Zac.

Abdías Amós Apocalipsis Cantares Corintios Colosenses Crónicas Daniel Deuteronomio Efesios Esdras Éxodo Ezequiel Filipenses Gálatas Génesis Habacuc Hageo Hechos Hebreos Isaías Jeremías Joel Juan Josué

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Judas Jueces Lucas Lamentaciones Levítico Malaquías Miqueas Marcos Mateo Nahum Números Oseas Pedro Proverbios Reyes Romanos Rut Salmo Samuel Sofonías Santiago Timoteo Tesalonicenses Zacarías

Otros libros de referencia C.C. CSAT

= Clarke’s Commentary = Manual de estudios con base en el texto Conozca Su Antiguo Testamento C.W.T. = A Contemporary Wesleyan Theology KJV = The King James Version L.B.,P. = The Living Bible, Paraphrased N.B.C.:R. = The New Bible Commentary: Revised N.B.D. = New Bible Dictionary NASB = New American Standard Bible NIVSB = The NIV Study Bible NKJV = The New King James Version RSV = The Revised Standard Version 3

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misma figura, y la misma palabra griega, usada por Cristo en Su relato de la Segunda Venida en Ap. 19:15 que dice: “De su boca sale una espada aguda, para herir...”. Ya que 2:16 amonesta a la iglesia en Pérgamo por la manera rápida (“pronto”) de Su Venida y por el terror de Su juicio severo (“espada”) contra los que no se arrepienten, es claro que ambos, obedientes y desobedientes, estarán en la tierra cuando Jesús regrese. También, 2:25 dice: “pero lo que tenéis, retenedlo hasta que yo venga”. Por esto, nos da a entender que cristianos fieles permanecerán en este mundo hasta el momento de la Segunda Venida. ¿Hay alguna razón por desechar lo que Cristo dice a las siete iglesias? Se podría decir más. Pero, ¿tienen Uds. alguna pregunta u observación en cuanto a estas declaraciones de Cristo que hemos presentado? ¿Creen Uds. que estas palabras de Jesús enseñan un arrebatamiento pre-tribulación de la iglesia? Si no, ¿qué enseñan en cuanto a la cronología del arrebatamiento de la iglesia? Les animo a dar su lealtad a lo que Jesús dice y no a lo que los intérpretes conjeturan.

“Permanezca el amor fraternal”. Reconocemos, al concluir esta Introducción al estudio del Ap., que hay opiniones muy divergentes en cuanto a estos asuntos escatológicos, como hemos visto en esta INTRODUCCIÓN. Por eso, insistimos que los hermanos tengan mucho cuidado de no ofender o juzgar a otro porque tenga un punto de vista diferente. Debemos hacer, como Col. 4:6 exhorta: “Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno”, y como He. 13:1 dice, “Permanezca el amor fraternal”. Y, Fil. 4:7 dice, “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús”. Hermanos, no permitan que nada destruya la paz de Dios en su propia alma, o con otro hermano. A la vez, como hizo Jesús, nosotros también exhortamos: “Escudriñad las Escrituras... ellas son las que dan testimonio de mí” (Jn. 5:39). Nuestro Árbitro tiene que ser las Santas Escrituras. Hemos procurado dejar a las Escrituras que hablen en el estudio que sigue, y pedimos su paciencia y comprensión en este nuestro esfuerzo de “escudriñarlas”. Jesús advirtió del peligro de añadir a, o de quitar de, lo que está escrito (Ap. 22:18-19). Esto nos alerta a la gran responsabilidad cristiana de “predicar la palabra” (2 Ti. 4:2), y, como Pablo dice en 1 Co. 4:6, “...no pensar más de lo que está escrito...”. Siempre debemos preguntarnos, ¿Qué dice la Palabra? Que Dios nos libre de fundamentar nuestra fe, y la de otros, sobre la falacia, y que nos dé discernimiento para conocer la diferencia entre la falacia y la Palabra de Verdad.

referidos en este Manual de estudio. Por ejemplo, ¿a qué libro de la Biblia se refiere la abreviatura Dt.? Sí, a Deuteronomio. Quizá Uds. ya conocen estas abreviaturas. Si no, inviertan tiempo para estudiarlas. Pronto podrán reconocerlas fácilmente. También, conviene que inviertan tiempo para familiarizarse con los 66 libros de la Biblia, y dónde están ubicados. Quizás tendrán oportunidad para practicar el encontrar los libros de la Biblia con un compañero. También, mirando una referencia bíblica, Uds. pueden notar que un número sigue el nombre del libro de la Biblia. (Escriba un ejemplo en el tablero.) El primer número representa el capítulo en el libro en el cual se encuentra el texto. Luego en la referencia, verán un “dos puntos” (:) (un punto encima de otro) seguido por un número, o números que representan el versículo o los versículos en el capítulo y libro nombrados en la referencia. Así, ¿cuáles son las tres partes de una Referencia Bíblica? ¡Eso! —1) libro; 2) capítulo; 3) versículo o versículos. Las referencias bíblicas en el Índice de Referencias Bíblicas están seguidas por un guión (–), y luego el número de la página o las páginas en el Manual donde dicha referencia está citada. Este Índice se presta para saltar de su propio estudio de la Palabra al Manual. También encontrará muchas referencias anotadas a través del Manual. Están allí con propósito. Por favor, cultiven el hábito de buscar y leerlas. Más y más descubrirán que las Escrituras se armonizan entre sí y se apoyan mutuamente. El Apocalipsis es sólo un miembro de la familia entera de las Santas Escrituras. ¿Cuántos miembros hay en esta “familia” sagrada? Sí, ¡66! Y, ¿quién es el miembro más joven de esta “familia” grande? Sí, el Apocalipsis. El Índice de Referencias Bíblicas es el último de 6 índices al fin del Manual. Observen, por favor, que hay otros 5 índices —Temas, Simbolismos, Personas, Lugares y Profecías. Hemos procurado no meterlo todo en un solo índice. Como Uds. saben, hay una gran diferencia entre lo que es literal y lo que es simbólico. Por ejemplo, se usa “día” en el Apocalipsis y en el Manual en sentido literal, y desde luego “día” está en el Índice de Temas en la p. 243. Pero, la palabra “día” se usa también en un sentido figurativo, o simbólico, y por lo tanto “día” está en el Índice de Simbolismos en la p. 249. Poder distinguir entre lo literal y lo simbólico es muy importante para un buen entendimiento del libro del Apocalipsis. En estos índices, hemos hecho un esfuerzo sincero para distinguir entre estos dos conceptos básicos. Encontrarán referencias de enlace a conceptos relacionados (indicadas con las palabras “véase” o “véase también”) en los Índices —por ejemplo, véase “aire” en la p. 241 y luego véase “aire” en la p. 249. Pido a Dios que estos Índices resulten muy útiles a ustedes al investigar diferentes temas tratados en el Manual. En la p. 241 y también la p. 257 hay explicaciones para el uso de los Índices.

Un profesor querido solía ilustrar que un expositor fiel de la Biblia es como 48

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quenla.), Jesús profetizó la formación de la iglesia cristiana como la unificación de las “otras ovejas” con las ovejas de “este redil [auvlh,]” (el redil israelita), haciendo “...un rebaño [poi,mnh]” con “...un pastor”. Y el Espíritu profetizó lo mismo por medio de Caifás. Él pudo profetizarlo debido a su posición como sumo sacerdote, aunque lo dijo buscando la crucifixión de Jesús —“Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la 52 nación; y no solamente por la nación, sino también para congregar en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos” (Jn. 11:51-52). Jesús logró esta unificación a través del Calvario haciendo uno, tanto a los creyentes judíos como a los creyentes gentiles, derribando “la pared intermedia de separación” entre los dos (Ef. 2:14). También, Ef. 3:6 dice “que los gentiles son coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio”. Sin embargo, los Dispensacionalistas separan a cristianos judíos de cristianos gentiles, enseñando que la iglesia será arrebatada antes de la tribulación, y que son los judíos (Israel) que pasarán por la tribulación, y algunos dicen, aun, que los dos estarán separados eternamente, Israel en la tierra y la iglesia en el cielo. ¿No es triste que la enseñanza de tal separación se promueva en el nombre del cristianismo? ¡Esto no es congregándolos “en uno”! La Biblia nos dice que para Dios no hay acepción de personas —“el cual pagará a cada uno conforme a sus obras: 7 vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad, 8 pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia; 9 tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego, 10 pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno, al judío primeramente y también al griego; 11 porque no hay acepción de personas para con Dios” (Ro. 2:6-11). Y la Biblia nos exhorta a nosotros a ser imparciales como lo es Dios: “Hermanos míos, que vuestra fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo sea sin acepción de personas” (Stg. 2:1). Discriminación basada en la nacionalidad o raza es odiosa. Es malo y anti-bíblico enseñar la fe del Señor Jesucristo con acepción de personas. — AP #7 (CL) clase hasta aquí, 30 de junio de 1998 —

El Apocalipsis es el último mensaje escrito de nuestro Señor Jesucristo, pues, según creemos, de todos los libros de la Biblia éste es el último de ser escrito. Según el primer versículo del Apocalipsis, ¿para quiénes destinó Dios esta revelación importante del futuro? Sí, para “...sus siervos...”. Espero que ustedes sean “siervos” de Dios. Si es así, ¡este estudio es para usted! ¡Qué bueno! El Propósito y el Plan del Estudio Nuestro propósito es que éste sea un estudio bíblico —en primer lugar, un estudio del Apocalipsis, pero también, de muchas otras Escrituras a través de la Biblia que se relacionan con este libro final de profecía, porque toda la Palabra es “...el testimonio de Jesús...”. Jesús es la Palabra, y la Biblia es la Palabra escrita. Tengan en mente que el título de este Manual es una cita del Ap. 19:10, que dice, “...el testimonio de Jesús es el espíritu de profecía”. El plan es de estudiar el Apocalipsis en orden consecutivo, el mismo orden en que está escrito. 1 Co. 2:13 expresa el método que usamos para interpretar este libro: “...acomodando lo espiritual a lo espiritual” —esto es, procuramos entender el Apocalipsis por compararlo con muchos otros pasajes de la Biblia. Una Meta Importante (p. 11, Meta #2 [M]) Una meta, que esperamos que cada estudiante logre, es leer el Apocalipsis cuatro veces en forma progresiva del primer capítulo y continuando progresivamente hasta el fin del último capítulo (22) a la medida que nos adelantamos en los estudios sobre el Apocalipsis. El propósito es mantener nuestras mentes empapadas del Texto Sagrado al mismo tiempo que lo estamos estudiando. Estamos aquí con un propósito más noble que hablar de detalles proféticos. Resolvamos, al iniciar este peregrinaje, dejar que Dios hable a nuestros corazones a través de este Libro Santo. Ustedes saben que Jesús prometió, “Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho” (Jn. 14:26). El hacernos recordar es una promesa maravillosa, pero para recordar es preciso que primero hayamos oído. Oír es parte de nuestra responsabilidad. Si leemos la Palabra de Cristo, entonces el Espíritu Santo tendrá algo que traer a nuestra mente cuando necesitamos esas Palabras. Esto no quiere decir que Uds. deben afanarse a leer todo el libro en una sola sentada. No. Lean a su propio paso y con atención. En la próxima oportunidad, empiecen donde dejaron su lectura, y así sucesivamente, hasta que terminen su lectura de todo el Libro.

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con él [con el Cordero] son llamados y elegidos [escogidos, evklekto,j] y fieles”. Yo no entiendo la autoridad de los Dispensacionalistas para limitar Mt. 24, y todo el Evangelio de Mateo, a judíos. ¿La entienden Uds.? 4) Ahora, unos comentarios breves en cuanto a Las enseñanzas de Cristo: Primero, la parábola del trigo y la cizaña, les da una luz valiosa como estudiantes de la Palabra. Observen dos citas en Mt. 13: —vss. 24-30 y también vss. 36-43. La primera cita (vss. 24-30) es la parábola que Jesús contó; la segunda cita (vss. 36-43) es la explicación de esa parábola. Una parábola es una comparación, fiel a la vida, que enseña una verdad espiritual. Algunos elementos de una parábola son simbólicos, no literales. Algunas parábolas son tan claras que no necesitan una explicación; en tal caso una exhortación basta. La parábola de la lámpara en Mr. 4:21-23 es un ejemplo —“¿Acaso se trae la luz para ponerla debajo del almud, o debajo de la cama? ¿No es para ponerla en el candelero? 22 Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz. 23 [Y ahora, Jesús da la exhortación] Si alguno tiene oídos para oír, oiga”. Pero otras parábolas son tan complicadas que Jesús las explicó. Estas explicaciones, desde luego, son muy importantes para entender correctamente la parábola. Da. 7 es otro ejemplo bueno de la visión simbólica primero, y luego la explicación. El punto es, mientras Uds. estudian, deben tener cuidado de observar lo que es parábola (lo simbólico) y lo que es explicación (lo literal). En conclusión, creo que la explicación literal de la parábola en Mt. 13:38, de “los hijos del reino” y “los hijos del malo” quedando juntos en “el mundo” “hasta la siega” (Mt. 13:30), enseña claramente la presencia de la iglesia en este mundo durante la tribulación hasta la “siega” que los ángeles segarán cuando Jesús vuelva. ¿Cierto? Segundo, cuatro citas totalmente literales de Jn. 6 (vss. 39, 40, 44 y 54) enseñan claramente una resurrección post-tribulación. Observen estos versículos: por ejemplo, Jn. 6:40 —“Y ésta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquél que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero”. Según cada una de estas citas, ¿cuándo declara Jesús que Él resucitará a los Suyos, pues, a “todo lo que” el Padre Le diere (Jn. 6:39), “todo aquel que... cree en Él [en Jesús]” (Jn. 6:40), al que el Padre “trajere” (Jn. 6:44), “El que” come Su carne y bebe Su sangre (Jn. 6:54)? Sí, cada vez Jesús dice que le resucitará “...en el día postrero”. ¿Es esto claro en su mente? Todos los creyentes serán resucitados al mismo tiempo, “...en el día postrero”. ¿Cuándo será este “...día postrero” cuando los creyentes serán resucitados? ¿Es este “día postrero” lo mismo como el “fin” del mundo de que Jesús habló en Mt. 28:30? Probablemente. 1 Co. 15:22-23 define el día 44

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05/26/98 (CL)

AP CLASE #2 (p. 9-11d [M])

Tarea para 06/02/98 1) Seguir la primera lectura consecutiva del Ap., capítulos 4-5 2) Estudiar Introducción, las p. 12a-14c 3) Hacer tareas: #1-3 en la p. 13d, y #1-3 en la p. 14c

4.

¡Maranata! ¡Maranata! Cristo viene! ¡Maranata! ¡Maranata! Cristo viene! A llevar los suyos en las nubes, ¡Cristo viene ya! Autor desconocido

Oración ¡Tengo muchas preguntas! ¿Hicieron las tareas? ¿Les gustó la lectura bíblica? ¿Apartaron un tiempo determinado para hacer las tareas? Apreciamos su deseo de dedicar tiempo y esfuerzo para este estudio, dándonos cuenta, a la vez, de que ustedes, sí, están ocupados, y que vienen de diferentes niveles de preparación. En Colombia, tuvimos el privilegio de visitar a estudiantes tanto en los pueblos como en las ciudades, en la selva y al lado de la carretera. Las circunstancias y fondos de preparación de los estudiantes eran diferentes, y así son los suyos. Bien, ¿qué dicen de la tarea? ¿Fue demasiada, insuficiente, o apenas lo justo? ¿Cuántos dicen que fue insuficiente? ____. ¿Cuántos dicen, “demasiada”? ______. ¿Cuántos dicen, “apenas lo justo”? _______. La semana pasada, hablamos de unas Abreviaturas y Convenciones utilizadas en los Libritos y el Manual, y de Referencias Bíblicas que señalan partes más bien específicas de páginas en el Manual. Les pedimos a los que tienen el Manual o una copia de este Librito, que estudiaran más estas instrucciones. ¿Hay alguna pregunta referente a estas Convenciones? Profecía (p. 9 [M]) El Ap. es el libro de profecía “por excelencia” que quiere decir que el libro del Ap. sobrepuja todos los otros libros proféticos en la Biblia. En lo que se refiere al tiempo del Fin, no hay otro libro de profecía igual al Ap.. Con esto, no estoy menospreciando la excelencia de los asombrosos libros proféticos del AT. Ellos también fueron inspirados por el Espíritu Santo. Por ejemplo, el profeta Isaías, en Is. 44:28 y 45:1, predijo por nombre, unos 160 años antes de su nacimiento, que Ciro daría la orden para reedificar el templo en Jerusalén. También, Isaías predijo, aproximadamente 730 años antes, el nacimiento de Jesucristo por una virgen. Esta profecía se encuentra en Is. 7:14 —“Por tanto, el mismo Señor os dará la señal: He aquí que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel”. E Isaías predijo (profetizó) el sacrificio expiatorio de Jesús y Su sepultura “con los ricos”, en Is. 53:6-10 —“...Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros. 7 9

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1) La promesa de Cristo a Sus discípulos;

Dt. 18:10-11 — “No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, 11 ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos”.

2) La oración de Cristo por Sus discípulos; 3) La exhortación de Cristo a Sus discípulos; 4) Las enseñanzas de Cristo; 5) La profecía de Cristo en cuanto a la iglesia; y 6) Los mensajes de Cristo a las siete iglesias. 1) Primero, observen, por favor, la maravillosa promesa de Cristo dada a Sus discípulos en Mt. 28:20. ¿Qué es esa promesa? Sí, “...he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin [sunte,leia] del mundo [del siglo, aivw,n]. Amén”. Esta promesa se hizo en conjunción con lo que se llama la Gran Comisión. Jesús murió en la cruz por toda persona a través de todo el tiempo hasta “el fin [sunte,leia –la terminación, la consumación] del mundo”. La orden de Jesús de ir y hacer discípulos no ha sido revocada, ni será revocada: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mt. 28:19). El propósito de Jesús era de evangelizar a todas las naciones hasta el fin del mundo a través de Sus discípulos. ¿Armoniza la enseñanza de que la iglesia será arrebatada antes del “...fin del mundo” con la promesa que Jesús dio a Sus discípulos de estar con ellos hasta el fin del mundo? ¡Claro que no! La promesa de Jesús indica claramente que Sus discípulos estarán aquí hasta “el fin del mundo”. La promesa de Jesús indica claramente que Sus discípulos estarán aquí evangelizando “...hasta el fin del mundo [del siglo, aivw,n]”. La manera en que Jesús usa sunte,leia (fin), en Mt. 13, indica claramente lo que Él tenía en mente con “fin”. En ambas citas en Mt. 13, Jesús hace referencia a la siega que los ángeles juntarán “al fin del siglo”. Primero, Mt. 13:39 dice: “El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin [sunte,leia] del siglo; y los segadores son los ángeles.” Luego, en Mt. 13:49, Jesús dice: “Así será al fin [sunte,leia] del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos”. También, en Mt. 24:29-31, sin usar la palabra “fin” en Su respuesta a la pregunta de los discípulos en cuanto al “fin [sunte,leia] del siglo” en Mt. 24:3, Jesús describe a los ángeles apartando a los escogidos de entre los malos en el tiempo de Su Segunda Venida —“E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. 30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. 31 Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro”. 42

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Estos vss. nombran varios siervos de Satanás. Sortílego = persona que pretende adivinar el futuro, o lo desconocido, por medio de suertes supersticiosos. Hechicero = persona con supuesto poder sobrenatural sobre otros y sus asuntos por un contrato con el diablo o espíritus malignos, por la magia negra. Adivino = persona que dice poder predecir lo futuro o lo oculto. Nigromante (uno que consulta a los muertos) = persona que dice tener poder para predecir el futuro alegando su comunicación con los muertos. El predecir, o profetizar, el futuro es derecho exclusivo de Dios. Observen el desafío de Dios a los dioses falsos: Is. 41:21-22 — “Alegad por vuestra causa, dice Jehová; presentad vuestras pruebas, dice el Rey de Jacob. 22 Traigan, anúnciennos lo que ha de venir; dígannos lo que ha pasado desde el principio, y pondremos nuestro corazón en ello; sepamos también su postrimería, y hacednos entender lo que ha de venir”. Is. 41:26 — “¿Quién lo anunció desde el principio, para que sepamos; o de tiempo atrás, y diremos: Es justo? Cierto, no hay quien anuncie; sí, no hay quien enseñe; ciertamente no hay quien oiga vuestras palabras”. Is. 44:6-8 — “Así dice Jehová Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mí no hay Dios. 7 ¿Y quién proclamará lo venidero, lo declarará, y lo pondrá en orden delante de mí, como hago yo desde que establecí el pueblo antiguo? Anúncienles lo que viene, y lo que está por venir. 8 No temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oír desde la antigüedad, y te lo dije? Luego vosotros sois mis testigos. No hay Dios sino yo. No hay Fuerte; no conozco ninguno”. Is. 46:9-11 — “Acordaos de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí, 10 que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quiero; 11 que llamo desde el oriente al ave, y de tierra lejana al varón de mi consejo. Yo hablé, y lo haré venir; lo he pensado, y también lo haré”. Dios es soberano; el futuro es conocido sólo a Él, pero Él puede conceder vislumbres del futuro a quienquiera y cuando quiera. Los profetas del AT son ejemplos; Pablo es un ejemplo en el NT, y Juan, en el libro que estamos estudiando, es otro ejemplo. Por el otro lado, la espiritista de Endor es un ejemplo de personas no cristianas quienes han tenido parte en una predicción. Ustedes recuerdan el caso de Saúl cuando Dios se apartó de él y no 11

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Viene’, por la Biblia de Referencia Escofield, por Conferencias Proféticas y en Institutos Bíblicos; pero cuando empecé a escudriñar las Escrituras para mí mismo, descubrí que no hay un solo versículo en la Biblia que apoya la teoría pre-tribulación, pero que la enseñanza uniforme de la Palabra de Dios es de un arrebatamiento post-tribulación”. — AP #6 (CL) clase hasta aquí, 23 de junio de 1998 —

29:11-12 a los que no quieren entender la visión sellada —“Y os será toda visión como palabras de libro sellado, el cual si dieren al que sabe leer, y le dijeren: Lee ahora esto; él dirá: No puedo, porque está sellado. 12 Y si se diere el libro al que no sabe leer, diciéndole: Lee ahora esto; él dirá: No sé leer”. ¡Excusas, excusas! ¡Qué indiferencia al deseo de Dios que entendamos la visión! ¿Las Escrituras nos dan alguna razón para creer que Dios quiere que entendamos este libro de profecía? Lean Ap. 1:1-3 —“...para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto;... 3 Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas...”. ¡Ánimo, mis hermanos! Dios tenía a nosotros en cuenta cuando habló esas palabras! No somos presuntivos, ni demasiado creídos esperando entender este libro de profecía; más bien, somos creyentes obedientes. Sí, tenemos que obedecer, y hacer lo que Mt. 7:7 dice —“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá”. Ahora, quiero destacar el tema de la inspiración del Ap.. Las Escrituras son inspiradas divinamente, “...porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo” (2 P. 1:21). La sorprendente unidad de las Escrituras es una prueba de su inspiración divina. La Biblia tiene 66 partes (libros); sin embargo, es una sola unidad. Empieza con el Génesis y termina con el Apocalipsis. El Apocalipsis es una parte integral del libro entero. Sin el Apocalipsis, la Biblia sería incompleta, y sin los otros libros de la Biblia, el Apocalipsis sería un misterio. Es imposible entender el Apocalipsis aislado de los otros libros de la Biblia. Así, nuestra meta es lograr una interpretación del Apocalipsis que provenga de y armonice con las enseñanzas de todas las Escrituras. A la medida que Uds. van estudiando las Escrituras, van a descubrir que se armonizan entre sí y se apoyan mutuamente. Esta armonía demuestra que las Escrituras son inspiradas por el Espíritu Santo. Aunque muchos individuos, separados el uno del otro por centenares de años, aun más de 1.500 años, escribieron estos 66 libros, su mensaje y sus profecías están perfectamente de acuerdo. Espero que cada uno de ustedes tenga en cuenta la verdad de esta inspiración de las Escrituras al entrar en el estudio. Estructura de la Biblia El Antiguo Testamento es estructurado de cuatro divisiones naturales: 1) La Ley (El Pentateuco, 5 libros); 2) La Historia (12 libros); 3) La Sabiduría (los 5 Libros Poéticos);

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(vs. 8). Zac. 14:2 también describe las consecuencias de esta batalla contra Jerusalén. ¿Cuáles son? —“La ciudad será tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las mujeres; y la mitad de la ciudad irá en cautividad, mas el resto del pueblo no será cortado de la ciudad”. Así, podemos ver de Zac. que las actividades normales de la vida continúan después de la Batalla de Armagedón (pues, dice, “...el resto del pueblo no será cortado...”). Armagedón no es el fin. La mitad de la ciudad será llevada en cautiverio. Necesariamente, hay un período de tiempo entre el tiempo cuando las naciones combaten contra Jerusalén y el tiempo cuando Jehová sale contra aquellas naciones. Durante este período de 42 meses, la mitad de la ciudad sigue, suponemos, apresada en su cautiverio. Según el Ap., 42 meses después de que las naciones pelean contra Jerusalén (pues, Ap. 11:2 dice, “...y ellos [los gentiles] hollarán la ciudad santa por cuarenta y dos meses”), el Señor vendrá y peleará contra las naciones. Esa venida y pelea se relatan en Ap. 19:11-21; la estudiamos la semana pasada. ¿Recuerdan? Según Zac., es “...en aquel día [el día de Su Segunda Venida, cuando]” “...se afirmarán Sus pies... sobre el monte de los Olivos”. ¿No es hermoso como las Escrituras del AT armonizan con las del NT? El problema presentado por algunos es que sería imposible que el Señor recibiera “en el aire” (1 Ts. 4:17) a los muertos en Cristo ya resucitados, y a los santos aún viviendo ya arrebatados, en la misma ocasión cuando Él viene y afirma Sus pies sobre el monte de los Olivos después de haber peleado contra las naciones, para dar principio a Su reino milenario sobre la tierra. Bien, cuando Jesús dijo que era “más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios” (Mt. 19:24) y Sus discípulos se asombraron, Jesús respondió, “Para los hombres esto es imposible; mas para Dios todo es posible” (Mt. 19:26). De hecho, si Dios puede resucitar a los muertos y transformar incorruptibles los cuerpos de los vivientes y arrebatarlos “...para recibir al Señor en el aire” (1 Ts. 4:17) “en un momento, en un abrir y cerrar de ojos...” (1 Co. 15:52), mientras el Señor desciende del cielo [dibuje en el tablero, cielo, tierra, descendiendo], que es lo que 1 Ts. 4:16-17 dice que hará, yo no entiendo qué dificultad tendría el Señor en continuar descendiendo acompañado ya con los Suyos y luego afirmar Sus pies sobre el Mte. de los Olivos para empezar Su reino milenario en la tierra. ¿Qué dicen ustedes? La verdad de mucho consuelo en 1 Ts. 4:17, que dice, “...y así estaremos siempre con el Señor”, no puede hacer referencia a ese encuentro momentáneo en el aire como una condición fija por toda la eternidad, sino más bien a nuestra semejanza al Señor, “...tal como él es” (1 Jn. 3:2). Pues, ¡nunca más estaremos sujetos a las limitaciones terrenales de un cuerpo humano natural —como las de la gravitación, el tiempo, y el espacio! ¡Alabado sea Dios!

Unidad del Mensaje Bíblico (p. 10 [M]) Por favor, observen los ejemplos siguientes de la unidad del mensaje bíblico, tomados principalmente de los 3 primeros y de los 3 últimos capítulos de la Biblia. Tengan en mente que están separados en tiempo, en cuanto se refiere a su escritura, por aproximadamente 1.500 años. CONCEPTOS EN GÉNESIS

CONCEPTOS EN EL APOCALIPSIS

1)

Cielos y tierra creados —Gn. 1:1

"un cielo nuevo y una tierra nueva" —Ap. 21:1

2)

“...las tinieblas llamó Noche” —Gn. 1:5

“...allí no habrá noche” —Ap. 21:25

3)

Dios hizo “dos grandes lumbreras” (sol y luna)

“La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna”

—Gn. 1:16

—Ap. 21:23

4)

El huerto de Edén (el paraíso) —Gn. 2:8

La nueva Jerusalén —Ap. 21:2-3; cf. 2:7d

5)

Árbol de vida en medio del huerto,

Árbol de vida en medio de la calle,

pero inasequible —Gn. 2:9; 3:24

ya asequible —Ap. 22:2, 14

6)

Un río que salía de Edén —Gn. 2:10

Un río que salía del trono de Dios —Ap. 22:1

7)

Bodas del primer Adán —Gn. 2:23--24

Bodas del "postrer Adán" —Ap. 21:2,9; 19:7

8)

Pecado es posible y trae muerte —Gn. 2:16-17

Pecado es excluido; “ya no habrá muerte”

9)

La Serpiente astuta, engañando —Gn. 3:1,13

La Serpiente antigua atada para no engañar

—Ap. 21:4, 27 —Ap. 20:2-3 10) El hombre y su mujer se esconden de la

Una gran multitud se goza delante del trono

presencia de Jehová —Gn. 3:8

y en la presencia del Cordero —Ap. 7:9; 21:3

11) Sentencia pronunciada contra la Serpiente

Sentencia ejecutada contra la Serpiente antigua

—Gn. 3:14-15

—Ap. 20:10

12) Dolores multiplicados —Gn. 3:16

No hay más dolor —Ap. 21:4

13) Maldición pronunciada —Gn. 3:17

"...no habrá más maldición..." —Ap. 22:3

14) Túnicas de pieles —Gn. 3:21

"...lino fino, limpio y resplandeciente..." —Ap. 19:8

15) Camino prohibido —Gn. 3:24

Puertas abiertas —Ap. 21:25; 22:14

16) El agravio cometido —Gn. 4:8,23; 6:5

El juicio "según sus obras" —Ap. 20:11-15

17) La sangre de un santo derramada —Gn. 4:8, 10

La sangre de los santos vengada —Ap. 19:1-3

18) La muerte, una realidad —Gn. 4:8

"...ya no habrá más muerte..." —Ap. 21:4

19) El libro de las generaciones de Adán —Gn. 5:1

El libro de la vida del Cordero —Ap. 20:12,15; 21:27; 22:19

20) Comienzo de Babel —Gn. 10:10; 11:9

Babilonia destruida —Ap. 17:16; 18

21) Magog nacido —Gn. 10:2

Magog consumido con fuego —Ap. 20:8-9

En cuanto a los incisos 20 y 21, observen que los nombres Babel (Babilonia) y Magog, tanto en el principio de la Biblia como en su fin, son ejemplos claros e impresionantes de la unidad del mensaje bíblico. — AP #2 (CL) clase hasta aquí, 26 de mayo de 1998 —

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06/23/98 (CL)

AP CLASE #6 (p. 24a-c [M])

Tarea para 06/30/98 1) Seguir la primera lectura consecutiva del Ap., capítulos 15-16 2) Estudiar Introducción, las p. 24a-29d 3) Hacer tareas: #1-3, en la p. 24c; y #1-11, en las p. 27c-28c

45.

A continuación, presentamos el bosquejo llamado: Doce Visiones para los Siervos de Dios. Éste es el bosquejo que vamos a seguir en nuestro estudio del Ap.. Mirémoslo (reparta copias del bosquejo):

Voy al cielo, soy peregrino, A vivir eternamente con Jesús; Él me abrió ya veraz camino, Al expirar por nosotros en la cruz.

Bosquejo del Apocalipsis DOCE VISIONES PARA LOS SIERVOS DE CRISTO

Voy al cielo, soy peregrino, A vivir eternamente con Jesús.

Preciosa vida, de gozo llena, El alma mía sin fin disfrutará.

A.

¡Tierra santa, hermosa y pura! Entraré en ti salvado por Jesús.

LAS COSAS QUE HAS VISTO (1:9-20)

B.

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LAS COSAS QUE SON (2:1 — 4:11) 2) Visión de las Siete Estrellas y los Siete Candeleros

Agradecemos su participación en este estudio, llegando a la clase semana tras semana, haciendo la lectura bíblica del Ap. y haciendo las tareas asignadas.

Estábamos adelantándonos en algunos aspectos, tocando temas que vamos a tratar más a fondo en los días que vienen. Ojalá que hubiera tiempo suficiente para tratar todas sus inquietudes, aunque sería quizás imposible responder a ellas. De todos modos, el Señor puede concedernos a todos paciencia y una mente despierta para entenderlas en un tiempo apropiado. Mi oración, cuando hay tales inquietudes, es, “O Señor, ayúdame a recordar esta inquietud particular [anotándola en un papel es una ayuda] para que, luego que tenga oportunidad, busque la respuesta en Tu Palabra”. Maravillosamente, ¡Él contesta la oración!

1:19-20

La Tarea y el Misterio de la Visión

Mary S. B. Dana, Tr. Estrella de Belén, HFA, #308

Hace 8 días, concluimos el estudio extra sobre el concepto de la eternidad, y del principio, la duración y el fin del tiempo dentro de esa tremenda eternidad. Comparamos algunas profecías en el Ap. con otras referencias, principalmente del NT [dibuje rápidamente en el tablero la larga línea que representa tiempo y las dos eternidades, o muestre transparencia]. 1) la Creación (primera línea perpendicular); 2) la Primera Venida y ministerio de nuestro Señor (segunda línea perpendicular); 3) nuestro tiempo (círculo); 4) el principio de la Semana #70, llamado comúnmente la Tribulación (tercera línea perpendicular); 5) la Segunda Venida, la primera resurrección, el arrebatamiento, el fin de la Semana #70, y el principio del Milenio (cuarta línea completa perpendicular); 6) fin del Milenio, la segunda resurrección, la desaparición de la primera creación, el juicio final y la continuación de la eternidad (quinta línea completa perpendicular).

1:9-18

1) Visión de Cristo

Yo gozaré siempre la ventura Iluminando con deliciosa luz.

Oración

1:1-8

Prólogo y Salutación

Duelo, muerte, amarga pena, Nunca, nunca se encontrarán allá;

4:1-11

3) Visión del Cielo C.

2:1 — 3:22

LAS QUE HAN DE SER DESPUÉS DE ÉSTAS (5:1 — 22:5) 5:1-14

4) Visión del Cordero tomando el Libro

6:1 — 8:1

5) Visión de los Siete Sellos

8:2 — 11:19

6) Visión de las Siete Trompetas 7) Visión del Conflicto de las Edades

12:1 — 14:20

8) Visión de las Siete Plagas Postreras

15:1 — 16:21

9) Visión del Juicio contra la Gran Ramera

17:1 — 18:24

10) Visión de Regocijo en el Cielo y la Segunda Venida

19:1-21

11) Visión del Milenio, del Juicio Final y de la Nueva Creación

20:1 — 21:1

12) Visión de la Santa Ciudad

21:2 — 22:5 22:6-21

Mensaje Final

(NOTA: El Bosquejo presentado en la p. 13 del Manual no es el bosquejo corregido. Los cambios en el bosquejo se ven sólo en la nueva p. 3 [M].) El cuerpo principal del Apocalipsis está precedido por un Prólogo y Salutación (1:1-8), y seguido por un Mensaje Final (22:6-21). Según 1:19, el 17

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(empezando con esta tercera línea perpendicular); 5) la Segunda Venida, la primera resurrección, el arrebatamiento y el fin de la Gran Tribulación (cuarta línea completa perpendicular).

cido [en Su primera venida] una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan”.

Es importante mantener en mente que, por ejemplo, en relación con la Segunda Venida, ningún pasaje, ni libro de la Biblia, habla de, o trata, todos los detalles mencionados en la Biblia en relación con la Segunda Venida de Cristo. Sin embargo, Dios nos ha dado Su Espíritu Santo para reconocer los varios detalles y entender como cada detalle cuadra con los otros. Bueno, sigamos en nuestro estudio de lo que llamamos el paréntesis de Tiempo dentro de la Eternidad.

La primera venida de Cristo incluye varios elementos indispensables: Su humillación (Su nacimiento es un ejemplo), Su obediencia (He. 5:8 “Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia”), Su tentación (una realidad muy humana; He. 4:15 dice, “Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado”), Su ministerio (¿Cuánto duró? Sí, 3½ años.), Su ejemplo perfecto, Sus sufrimientos y muerte, Su sepultura, Su resurrección, Su ascensión. Pero ciertamente, el propósito principal de la primera venida de Cristo fue la salvación de nuestras almas por Su sangre derramada en la cruz. Mt. 1:21 dice, “Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados”. Según este vs., ¿cuál fue el propósito? —¿que nos salve en nuestros pecados? ¡Claro que no! Él vino para ¡salvarnos, para librarnos de nuestros pecados! Y 1 Jn. 3:8 está de acuerdo con Mt. 1:21, “Para esto apareció el Hijo de Dios [esta manifestación hace referencia a Su primera venida], para deshacer las obras del diablo”. Esta cita llama “pecados” “las obras del diablo”. ¡Terrible pensamiento —el diablo obrando en el hombre! Ef. 2:1-2 también acredita estas “obras” al diablo diciendo, “...vosotros... estabais muertos en vuestros delitos y pecados, 2 en los cuales anduvisteis en otro tiempo... conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia”. Ro. 13:12 llama esas obras“las obras de las tinieblas”. Gá. 5:19 las llama “las obras de la carne”; y He. 9:14 las llama “...obras muertas...”.

Inmediatamente después del relato de la Segunda Venida en Ap. 19:1121, llegamos a Ap. 20:1-10. ¿Cierto? Estos vss. en el capítulo 20 describen el encarcelamiento de Satanás por 1.000 años, y el reino de Cristo en la tierra con Sus santos durante los 1.000 años cuando Satanás está atado. Este período de tiempo es llamado el Milenio. Observen que se menciona este período de 1.000 años 6x en el capítulo 20 —vss. 2, 3, 4, 5, 6, 7. Así, para visualizar el Milenio, vamos a poner una quinta línea perpendicular en la línea horizontal de tiempo, 1.000 años después de la Segunda Venida, o sea, después de la cuarta línea completa perpendicular. Aun cuando el relato de la Segunda Venida en Ap. 19:11-21 no menciona la resurrección de los santos, como lo hacen los pasajes en 1 Co. 15 y 1 Ts. 4, sin embargo, Ap. 20:4-5, sí, menciona dos resurrecciones, y las menciona en relación con el Milenio, con la primera resurrección a su principio, y la segunda resurrección a su fin. (Miren el gráfico en la p. 30 de estas Notas.) ¿Con qué coincide el principio del Milenio? Exacto, con la Segunda Venida, y con el fin de la Gran Tribulación. Y, ¿cuántos años hay entre el principio del Milenio y el fin del Milenio (o sea, desde la Segunda Venida y el arrebatamiento hasta el fin del Milenio)? Sí, 1.000 años, no 1.007 años, como se enseña comúnmente. Pienso que Uds. conocen esa enseñanza —la Interprea tación Pretribulación, que pretende que Cristo vendrá en la 3 línea perpendicular que representa el principio de la Tribulación, cuando, dicen ellos, los muertos en Cristo serán resucitados y los santos aún viviendo serán arrebatados. Esa enseñanza añade los 7 años de la Tribulación a los 1.000, para un total de 1.007 años entre las dos resurrecciones. Pero, esto no concuerda con Ap. 20:5-6. ¿Verdad? Según Ap. 20:5, 7, en el tiempo de la segunda resurrección, Satanás será suelto de su cárcel, y reunirá a las naciones para hacer batalla contra los santos. Fuego desciende del cielo y consume a los engañados, y el diablo es lanzado “en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta” (Ap. 20:10), donde habrán estado ya por ¿cuántos años? Sí, por 1.000 años.

Recordemos; estamos pensando en El Gran Tema de la Biblia —“Las dos venidas de Jesucristo a este mundo y la salvación del hombre a través de estas dos venidas...”. La obra de Cristo en la cruz, en Su Primera Venida, fue completa; pues, en la cruz Él dijo, “Consumado es” (Jn. 19:30). La redención total del hombre del poder de Satanás fue provista, tanto moralmente, la salvación del pecado, como físicamente, la salvación de los efectos mortales del pecado en el cuerpo del hombre. Ro. 5:12 dice, “...la muerte [espiritual y física] pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron”, y He. 9:27 dice, “está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio”. Hoy en día, por la fe en la sangre que Jesús derramó en la cruz, el hombre puede vivir una vida de salvación total del pecado.

Así que, esta última línea completa perpendicular (la 5 ), 1.000 años más allá de la Segunda Venida, 1.000 años más allá del fin de la Semana #70, representa el fin del rato breve entre dos eternidades, un rato que llamamos

Pero sólo a la Segunda Venida de Jesús podrá el hombre disfrutar salvación total, inclusive los efectos mortales y físicos del pecado. Pues, Dios ha propuesto que vivamos juntos con Él por toda la eternidad, y para lograr este propósito la Segunda Venida de Cristo es necesaria. Jesús dijo a Sus discípulos, “En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3 Y si me

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a

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archivo Vis-Paréntesis de Tiempo), representa el tiempo de la Primera Venida de Jesús cuando estuvo ministrando en la tierra hace unos 2.000 años. Y, el círculo representa donde nosotros estamos en la línea de tiempo. La próxima cosa que voy a señalar con otra línea perpendicular es la Segunda Venida de Cristo (la cuarta larga línea perpendicular). ¿Soy muy atrevido? Realmente, Su Venida es un evento determinado con mucha precisión —en Mt. 24:36 Jesús dice que Su Padre sabe “...el día y la hora...” de ella. Eso es bien preciso. Sin duda Dios sabe el momento preciso, es decir, la fracción del segundo, cuando Él vendrá como un relámpago. Y Él sabe donde cada individuo estará y lo que cada uno estará haciendo y pensando en ese momento preciso. ¡Así es el conocimiento de nuestro Dios! La Venida de Jesús en “un caballo blanco”, representada por esta línea perpendicular, se describe en Ap. 19:11-21. El énfasis en este relato de la Venida de Cristo en el Ap. es la derrota de la Bestia y la destrucción de sus ejércitos. Por supuesto, esto sucede al fin de la Semana #70, es decir, al fin de la Gran Tribulación, al fin del período de autoridad concedido a la Bestia. ¿Es esto claro? Estudiaremos en cuanto a esto más adelante. Así, vamos a a meter otra línea perpendicular 7 años antes de la línea de la 2 Venida para señalar el principio de la Semana #70, y poner una línea más corta para señalar el punto medio de la Semana #70. OK, según este relato profético (léalo en Ap. 19:20d), ambos, la Bestia y el Falso Profeta, son “lanzados vivos dentro de un lago de fuego” en el momento final de la Gran Tribulación cuando Cristo vuelve a la tierra. ¿Cierto? Si Uds. leen todo este pasaje (Ap. 19:11-21) con buena atención, observarán que no todos los eventos mencionados en la Biblia en relación con la Segunda Venida son mencionados en Ap. 19:11-21. ¿Quizá se preguntan en cuanto a esto? Por ejemplo, un detalle no mencionado en Ap. 19:11-21 es la resurrección de los santos. Sin embargo, 1 Co. 15:22-23 define el tiempo de la resurrección de los santos diciendo, “...en Cristo todos serán vivificados [resucitados]. 23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida”. Así, según esto, ¿cuándo será a la resurrección de “los que son de Cristo”? Sí, “en su venida”, en esta 4 línea completa en el gráfico. Tengamos en mente que no todos los muertos serán resucitados en el tiempo de la Segunda Venida, ni serán todos los vivientes arrebatados. La Venida de Cristo será un tiempo de “decisión” (véase Jl. 3:14 —“Muchos pueblos en el valle de la decisión; porque cercano está el día de Jehová en el valle de la decisión”); será un tiempo de juicio, sobre los que están en la tierra y sobre los que están en el sepulcro. Será un juicio guiado por la omnisciencia de Dios. En cuanto a los vivientes en la tierra, algunos serán arrebatados, otros muertos, otros dejados para el Milenio. En cuanto a los que ya están en el sepulcro, algunos serán resucitados, y otros quedarán en el sepulcro hasta la segunda resurrección al fin del Milenio. Este juicio, basado 32

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a Jehová muchas naciones, y serán mi pueblo...”. Sal. 96:13 — “...Porque él viene para juzgar la tierra. Juzgará al mundo con justicia y a los pueblos con su verdad”. a

T Su 1 Venida fue en relación con el pecado Is. 53:5 — “Pero él fue herido por nuestras transgresiones, molido por nuestros pecados. El castigo que nos trajo paz fue sobre él, y por sus heridas fuimos nosotros sanados”. 2 Co. 5:21 — “Al que no conoció pecado, por nosotros Dios le hizo pecado, para que nosotros fuéramos hechos justicia de Dios en él”. He. 9:26 — “...pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en medio el pecado”. a

Su 2 Venida será sin relación con el pecado He. 9:28 — “así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan”. Piensen en el contraste entre estas ideas —“en relación con el pecado” y “sin relación con el pecado”. Hace casi 2.000 años, Jesús vino en relación con el pecado, para expiar nuestro pecado. Fue hecho pecado por nosotros. Pero, en Su Segunda Venida, Él vendrá “sin relación con el pecado”; vendrá para recibir a los cuyos pecados ya están lavados. Juan escribió: “Ahora, hijitos, permaneced en él para que, cuando aparezca, tengamos confianza y no nos avergoncemos delante de él, en su venida” (1 Jn. 2:28). Los que persisten en pecado serán avergonzados. ¡Hoy es el día para ser salvo del pecado! a

T Su 1 Venida fue con sufrimiento Is. 53:3-4 — “Fue despreciado y desechado por los hombres, varón de dolores y experimentado en el sufrimiento. Y como escondimos de él el rostro, lo menospreciamos y no lo estimamos. Ciertamente él llevó nuestras enfermedades y sufrió nuestros dolores. Nosotros le tuvimos por azotado, como herido por Dios, y afligido”. He. 13:12 — “Por lo tanto, también Jesús padeció fuera de la puerta de la ciudad [¿Por qué padeció fuera de la puerta? Sí,] para santificar al pueblo por medio de su propia sangre”. 1 P. 3:18 — “Porque Cristo también padeció una vez para siempre por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en el espíritu”. a

Su 2 Venida será con gloria 21

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06/16/98 (CL)

AP CLASE #5

Tarea para 06/23/98 1) Seguir la primera lectura consecutiva del Ap., capítulos 12-14 2) Estudiar Introducción, las p. 19b-21d 3) Hacer tareas: #1-4, en las p. 21d-23d

5.

Al cielo voy, al cielo voy. Tu puedes ir también, Jesús te dice, “Ven”. Al cielo voy, al cielo voy, Con el Salvador Jesús.

L. James Kindig, Trad. por R.C.S.

Oración Éste es un estudio adicional sobre el tiempo y la eternidad en un orden cronológico, visualizándolos con una línea de tiempo. Estudio Cronológico sobre el Tiempo y la Eternidad Quisiera presentar ahora un vistazo al concepto de la eternidad y del principio y el fin de tiempo metido dentro de esa tremenda eternidad, comparando algunas profecías en el Ap. con otras referencias, principalmente del NT. Desde luego, vamos a hablar de cosas que no hemos estudiado todavía, ni podremos tratarlas a fondo hoy. Quiero explicar, antes de empezar, que mi entendimiento de la cronología de los eventos del tiempo del Fin, como presentada en este vistazo, se basa en parte en el relato ordenado de los eventos claves predichos en el Ap., p.ej., la Segunda Venida y el Milenio en los capítulos 19 y 20. La primera línea perpendicular a la izquierda en la visual (véase en la p. 30 [archivo Vis-Paréntesis de Tiempo]) representa el principio de tiempo, cuando “En el principio [del tiempo, pues, la eternidad no tiene principio] creó Dios los cielos y la tierra” (Gn. 1:1). Esta parte, a la izquierda de esta primera línea perpendicular, representa la eternidad pasada, porque antes de la creación, la eternidad se extendía hacia atrás sin fin, más de lo que podemos imaginar. Salmo 90:2 expresa el concepto del Dios Eterno que existe antes y después de Tiempo: “Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo [la eternidad] y hasta el siglo [la eternidad], tú eres Dios”. Y, Mi. 5:2 hace referencia a la eternidad que fue antes del principio de tiempo, diciendo, “Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad”. Este “Señor” gobernador profetizado por Miqueas es Cristo quien ya era antes de empezar el tiempo. Jn. 1:1 confirma esta verdad del AT, diciendo, “En el principio [del tiempo; pues, la eternidad no tiene principio] era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios”. Muy bien. La segunda línea perpendicular, en la visual en la p. 31 (véase 30

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esto que fue predicho en el AT, y tomará Su derecho como Rey. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento hablan de las dos venidas de Jesucristo. René Pache, en su libro El Retorno de Jesucristo, afirma que “...a lo menos la mitad de las muy numerosas profecías pertenecientes a Jesucristo en el Antiguo Testamento tienen que ver con Su gloria y Su reinado”. Los cuatro Evangelios del N.T. son dedicados especialmente a la primera venida de Cristo; sin embargo, Cristo habla en ellos mucho de Su Segunda Venida. René Pache declara: “En cuanto al Nuevo Testamento, se ha calculado que 319 versículos —es decir uno de veinticinco— son dedicados al regreso de Cristo” (El Retorno de Jesucristo, p. 22). La C.W.T, hablando de la Segunda Venida de Cristo, dice: “Pablo hace referencia a ella en sus epístolas a lo menos cincuenta veces. Es una de las más importantes doctrinas del Nuevo Testamento”. El Apocalipsis, más que cualquier otro libro de la Biblia, descubre los eventos y detalles relacionados con la Segunda Venida de Cristo, los cuales se efectuarán en “el día del Señor”, “grande y espantoso” (Jl. 2:31; cf. Mal. 4:5). Conceptos Destacados en el Apocalipsis (p. 14 [M]) Por lo general, la gente habla de lo que llena su mente. Por ejemplo, si una persona se ocupa en trabajos de imprenta, probablemente habla de papeles, de tinta, de prensas, de computadoras, de la tecnología, etc.. Bueno, sacamos una idea de las cosas en la mente de Cristo en el Ap. al observar, no sólo las frases y oraciones, sino también las palabras y conceptos repetidos vez tras vez en el libro. 7 conceptos (o temas) generales se destacan. Jesús hace énfasis en el elemento del tiempo. Las palabras tiempo, días, mes, hora, años, etc., se repiten 95x. El tiempo es el recurso más importante del hombre. ¿De qué sirve un millón de dólares a una persona muerta? 2 Co. 6:2 dice: “...En tiempo aceptable te he oído, y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación”. Quizás aquí ustedes se sienten protegidos del peligro y seguros en cuanto a mañana. Pero, la verdad es, ¡el único tiempo del cual podemos estar seguros es ahora mismo! Una verdad importante que Jesús revela en el Ap. es que la duración del tiempo del Fin, sea cuán miedoso como sea el Fin, a la luz de lo eterno, es sólo un momento de tiempo. Podemos estar muy seguros de esto; Jesús lo dice muy claramente, profetizando aun el número de los días del Fin. Jesús pone énfasis en otro concepto —en la realidad del conflicto y del juicio— por las palabras que usa; por ejemplo: guerra, pelear, vencer, matar, ira, caballo, espada, muerte, etc., son repetidas 148x. Hermanos, ¡no se desanimen por las pruebas y las persecuciones que vengan! En Jn. 16:1-4 Jesús avisó a Sus discípulos de estas pruebas: “Estas cosas os he hablado, 23

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tiempo + 2 tiempos + ½ tiempo son 3.5 años. Estas tres expresiones hacen referencia a un período de tiempo (una mitad de 7 años), mientras Dn. 9:27, diciendo, “...a la mitad de la semana...”, hace referencia al punto de tiempo que divide las dos mitades de la Semana #70. Teniendo en mente la profecía de las 70 Semanas en Dn. 9:24-27, ¿cuál sería su respuesta a esta pregunta? —¿En cuánto tiempo se cumplirán las profecías en Ap. 5—19:21? Sí, en una semana, o sea, en 42 meses + 42 meses (= 84 meses) dividido por 12 = 7 años de 360 días c/u (5 días más corto que nuestro año solar), que = 1 semana profética. Ahora, pensemos en las Escuelas de Interpretación en cuanto al Milenio y la Segunda Venida. Milenio es una palabra que quiere decir “un período de mil años”; ella viene de dos palabras latinas: “mil” y “año”. Aun cuando la palabra “milenio” no se encuentra en la Biblia, se usa para hablar del período de 1.000 años cuando Cristo reinará sobre la tierra después de Su Regreso esperado ya por mucho tiempo, es decir, después de Su Segunda Venida. La expresión “1.000 años” ocurre 6x en Ap. 20:1-7. Hay 3 escuelas principales de interpretación en cuanto al Milenio y la Segunda Venida —la premilenaria, la postmilenaria, y la a-milenaria. ¿Son estos términos nuevos para Uds.? Levante la mano si es así. O, ¿piensan que las entienden? En todo caso, miremos estas 3 escuelas de pensamiento. Estos términos, pre-, post-, y a-milenaria, tienen que ver con el tiempo de la Segunda Venida de Cristo en relación con el Milenio —es decir, premilenialismo enseña que Jesús vendrá antes del milenio, postmilenialismo enseña que vendrá después del milenio, y los que creen en a-milenialismo (“a” en a-milenialismo quiere decir no), niegan que haya un milenio; así, creen que Jesús podría venir en cualquier tiempo. ¿Hay preguntas?

Quizás ése sea el intento. Sal. 2:4 dice, “El que habita en los cielos se reirá; el Señor se burlará de ellos”. Otro concepto enfatizado es: Consumación, o sea, el Fin, por medio de palabras repetidas 15x. Pues, tengan en mente, el Ap. presenta la última de las 70 Semanas profetizadas por Daniel, la que llamamos la Semana #70, o sea, el tiempo del Fin. La última de la 70 Semanas, pues, es la consumación de los tiempos determinados, según Dn. 9:24, “...para terminar la prevaricación, y poner fin al pecado, y expiar la iniquidad, para traer la justicia perdurable, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo de los santos”. Jesús hace énfasis, también, sobre el concepto de revelación, de profecía, por repetir varias palabras e ideas 99x: revelación, mostrar, manifestar, declarar, trompeta, profetizar, abrir, etc.. Aun cuando la palabra revelación se usa sólo una vez, la palabra “abrir” expresa muchas veces la idea de descubrimiento o revelación. Y por último, Jesús presenta el concepto de Visión. Uno de los verbos para “ver” se encuentra 57x en el Ap.. Lo que Juan vio no era el mundo imaginario de las caricaturas de Disney en la televisión, sino la verdad de lo que es y de lo que ha de venir, de verdades eternas en que somos exhortados a enfocar nuestra atención, aunque el mundo en nuestro derredor se mofe de ellas. Juan el Apóstol las vio. Que el Espíritu capacite a cada uno de nosotros a verlas mientras estudiamos este registro escrito de lo que él vio. Dt. 4:9 nos exhorta a echar mano firme a la visión, “Solamente guárdate y guarda diligentemente tu alma, no sea que te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni que se aparten de tu corazón durante todos los días de tu vida”. — AP #3 (CL) clase hasta aquí, 2 de junio de 1998 —

A Contemporary Wesleyan Theology, un libro sobre la teología, declara, “En ningún campo es más evidente ese desacuerdo [entre intérpretes] que en el campo de la escatología” (la escatología es doctrina referente al tiempo del Fin) (V. 2, p. 1105). Las enseñanzas de estas 3 escuelas en cuanto al Milenio y la Segunda Venida ilustran este triste desacuerdo. Alguien tiene que estar equivocado. Sin embargo, nosotros hemos de descubrir la verdad si atendemos cuidadosamente a las Escrituras. ¿Verdad? Pienso que Sal. 119:99 es apropiado —“Más que todos mis enseñadores he entendido, porque tus testimonios son mi meditación”. Si Uds. observan el bosquejo del Ap. que les dimos, podrán ver fácilmente dónde Jesús coloca Su Segunda Venida en relación con el Milenio. OK. En la sección C. de este bosquejo, observen la Visión #10, la Visión de la Segunda Venida de Cristo y también la Visión #11, la Visión del Milenio. ¿Las ven? Ahora, observen las referencias bíblicas de las Visiones en la columna a la derecha. OK. ¿En qué capítulo revela Jesús la Segunda Venida? Sí, en el cap. 19. ¿En qué capítulo revela Jesús el Milenio? Sí, en 28

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