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Ranking a 3 meses Fruto de un trabajo que muchos no conocen a que horas se fabrica...para estar aquí ...los insumisos seguimos abriendo sendero. Ranking a 3 meses2.294.287 visitantes mensuales , Insumisos.com se encuentra entre las 2.000.000 páginas más importantes del mundo. COORDINADORES: Robinson Salazar y Nchamah Miller ESTIMADO COLEGA Y AMIGO LA DIRECCIÓN DE WWW.INSUMISOS.COM LES AGRADECE LA PREFERENCIA QUE TIENE CON NUESTRO TRABAJO PARA SER CONSULTADO Y LO INSTRUMENTEN COMO HERRAMIENTA DE APOYO PARA SUS REFLEXIONES, TRABAJOS ACADÉMICOS, INFORMATIVOS, REDACIÓN O DEBATE PÚBLICO EN EL FACEBOOK DE INSUMISOS LATINOAMERICANOS ALIMENTAREMOS DIARIAMENTE LA INFORMACIÓN DEVENIDA DE PERIÓDICOS Y REVISTAS DEL DÍA. HTTP://WWW.FACEBOOK.COM/INSUMISOS.LATINOAMERICANOS EL DOSSIER SEMANAL LLEVARÁ EL CONTENIDO DE INFORMACIÓN ESTRATÉGICA, DE MAYOR EXTENSIÓN, PERFIL DE ANÁLISIS, COADYUVANTE DE NUESTRAS INVESTIGACIONES, CARTELERA DE REVISTAS, CONVOCATORIAS, CONGRESOS Y EVENTOS ACADÉMICOS. USTED PUEDE INGRESAR AL HTTP://WWW.FACEBOOK.COM/INSUMISOS.LATINOAMERICANOS SIN NECESIDAD DE REGISTRRSE, LEE LAS ACTUALIZACIONES Y LAS BAJA SI ASÍ ES DE SU INTERÉS. CADA NOTICIA LLEVA SU LINK DE DONDE SE OBTUVO LA REDACCIÓN Y ARMADO LO HAREMOS DESDE BUENOS AIRES, ARGENTINA MIL GRACIAS POR SU APRECIABLE CONSULTA Y VISITAS, DE NUEVO ASUMO, AL LADO DE NCHAMAM MILLER, LA RESPONSABILIDAD DE SELECCIONAR LAS LECTURAS POR LA IMPORTANCIA QUE REVISTE, LEER LO MEJOR EN EL CORTO TIEMPO Y A LA VEZ SEA COADYUVANTE PARA EL EJERCICIO ANALÍTICO. RECIBIMOS COLABORACIONES Y SUGERENCIAS EN LAS DIRECCIONES: Correos: [email protected]

/ [email protected]

INDICE CONTEXTO GLOBAL

OTAN CAMBIA DE RUMBO EN SIRIA UNA HERRAMIENTA DE LA NSA QUE RECOGE “CASI TODO LO QUE UN USUARIO HACE EN INTERNET” EL CONFLICTO DE MALÍ/ RETROSPECTIVAS, INTROSPECTIVAS Y PERSPECTIVAS “NO IMPORTA QUIEN APOYE A LOS EEUU, LO IMPORTANTE ES DESUNIR A LOS ÁRABES Y QUE NO APOYEN LA CAUSA PALESTINA” LA INSURRECCIÓN EGIPCIA NO FUE ESPONTÁNEA A LA SOMBRA DE LOS MILITARES MUGABE, DE LÍDER REVOLUCIONARIO A DESPIADADO Y ETERNO PRESIDENTE, POR JON LEE ANDERSON NORTEAMÉRICA

¿NECESITAMOS EMPRESAS EXTRANJERAS? MÉXICO, CONDENADO A SER IMPORTADOR NETO DE ALIMENTOS BÁSICOS ACTUALIZACIÓN SOBRE LA GUERRA CON AVIONES NO TRIPULADOS EL ARTE DE GANAR ENEMIGOS EL TRIUNFO DEL ESPIONAJE « UN SISTEMA FINANCIERO SIN CONTROL NOS LLEVA AL PRECIPICIO » SUSAN GEORGE LOS DISIDENTES, EN ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA. EEUU: COMO SE CAE A PEDAZOS LA MENTIRA DEL 9/11 LA REFORMA ENERGÉTICA TOMADA EN SERIO MÉXICO, SEGUNDO PAÍS PRIVATIZADOR DE AMÉRICA LATINA

CUENTAS ALEGRES DE LA PRIVATIZACIÓN DEL PETRÓLEO ¿PUNTA DE LANZA DE LOS INTERESES DE EEUU? GRANDES EMPRESAS DESPIDIERON A 68 MIL PERSONAS DE ENERO A JUNIO EL 73 POR CIENTO DE LOS RECORTES AFECTARON A EMPLEADOS, CON 50 MIL 61 CESADOS EN EL PERIODO LA CAÍDA DEL PIB EN LAS URNAS: MÁS DINERO, MÁS CORRUPCIÓN LAS VERDADERAS RAZONES DE LA PRIVATIZACIÓN DEL PETRÓLEO CON APERTURA EN PEMEX, SÓLO ALZA MARGINAL EN EL VALOR DE LA ECONOMÍA CENTROAMÉRICA Y EL CARIBE

POR UN SOCIALISMO MÁS EFICIENTE/ EN CUBA HAY UN PROCESO DE RENOVACIÓN GENERACIONAL, DICE ABEL PRIETO. DOMINICANOS DISCRIMINADOS POR SU ASCENDENCIA HAITIANA HAITÍ FRENTE A LAS DEBACLES POLÍTICAS Y ECOLÓGICAS CONO SUR

EN LA PLAZA NERUDA, EN MEJILLONES: ¡HOMENAJE A HAWKER HUNTER QUE BOMBARDEARON LA MONEDA! URUGUAY: LUCHA CONTRA LA POBREZA URUGUAY TENDRÁ DEVALUACIÓN MÁS GRANDE DE LA REGIÓN, SEGÚN BBVA BRASIL: UNA ECLOSIÓN SOCIAL QUE QUIERE AVANZAR SOBRE EL PODER FINANCIERO BRASIL, INERME ANTE INVASIÓN CIBERNÉTICA ELECCIONES EN ARGENTINA Y CHILE: QUE NO ES LO MISMO, PERO ES IGUAL EL TERRORISMO DE ESTADO EN CHILE: SIMILITUDES Y DIFERENCIAS DEL OTRO LADO DE LA CORDILLERA

CHILE: PUGNAS NEOCONCERTACIONISTAS: CONSTITUCIONALISTAS VERSUS NEOLIBERALES A 40 AÑOS DEL GOLPE, CHILE RECUERDA Y SE EXPRESA SIN MIEDO: “PINOCHET ES UN ESTIGMA PARA EL PAÍS Y PARA EL MUNDO” BRASIL: LA CALMA Y EL MAREMOTO ARGENTINA: UNA INDUSTRIA QUE SE CONECTA EN EL SUR LAS FABRICAS DE TIERRA DEL FUEGO YA COMENZARON A INCREMENTAR LA PRODUCCION DE TELEVISORES CON EL MUNDIAL ENTRE CEJA Y CEJA UN ESPECIALISTA EN PLANIFICACION ENERGETICA ANALIZA EL ACUERDO CHEVRONYPF Y SUS CONSECUENCIAS “NO HAY ESTAFA NI CESIÓN DE SOBERANÍA” EL FIN DE LA EDAD DE ORO DE LOS “PUEBLOS JÓVENES” LIMA, ¿UNA CIUDAD PARA TODOS? ENTREVISTA CON EVO: ‘POR PRIMERA VEZ, BOLIVIA ES UNA REFERENCIA INTERNACIONAL’ CONTROVERSIAS EN ARGENTINA SOBRE EL ACUERDO YPF-CHEVRON Y ADOLFO PÉREZ ESQUIVEL Y MARISTELLA SVAMPA ARGENTINA CAZA PETROLEO "COLOMBIA ES PASIÓN":RAMBO DE TURISMO POR SU PATIO TRASERO YA SE FABRICAN EN LA ARGENTINA MÁS DE 3.200 AUTOS 0 KM POR DÍA UN PARTIDO ROMPIÓ CON CAPRILES BRASIL: RETRATO DE UNA MUJER TRAICIONADA SOCIODIALOGANDO

LA IDEA DE LA METAMORFOSIS ES, QUE EN EL FONDO TODO TIENE QUE CAMBIAR » EDGAR MORIN POLEMIZANDO CON RAÚL PRADA ALCOREZA: CRÍTICA DE LA “RAZÓN” NACIONALISTA

CÓMO PERDER EL TIEMPO ESTUDIANDO NIMIEDADES, SIN CONTACTO CON LA REALIDAD DEL MUNDO Y SUS PROBLEMAS IMPOSTURAS POSTMODERNAS E IZQUIERDA POLÍTICA ASEGURAN QUE LA SOLIDARIDAD SALVÓ A LA RAZA HUMANA DE LA EXTINCIÓN ENTREVISTA CON MIGUEL ALTIERI, PROFESOR DE LA UNIVERSIDAD DE CALIFORNIA, Y MARC DUFUMIER, PROFESOR EN EL INSTITUTO NACIONAL AGROECONÓMICO DE PARÍS LA CRISIS ALIMENTARIA Y LA AGROECOLOGÍA COMO ALTERNATIVA AL HAMBRE

LAS 10 MULTINACIONALES MAS PELIGROSAS DEL MUNDO PREPARÁNDONOS PARA EL NARCOPODER ENTREVISTA CON VIKTOR SCHÖNBERGER, AUTOR DEL LIBRO "BIG DATA, LA REVOLUCIÓN DE LOS DATOS MASIVOS" "LOS DATOS MASIVOS (O BIG DATA) SON EL NUEVO ORO" QUÉ SIGNIFICA LA LEGALIZACIÓN DE LA MARIHUANA EN URUGUAY EN LA GUERRA CONTRA LAS DROGAS CONSECUENCIAS DE LAS PROTESTAS EN BRASIL EL PT EN LA ENCRUCIJADA RECURSOS NATURALES, REDISTRIBUCIÓN Y POLÍTICA LA CORRUPCIÓN COMO CRÍTICA DE LA POLÍTICA EL ORIGEN DEL PROBLEMA LA IZQUIERDA URUGUAYA EN SU LABERINTO. AFIRMA ACADÉMICO DE HARVARD: "LAS FARC NO SON EL PROBLEMA DE COLOMBIA, SON UNO DE LOS SÍNTOMAS" LA OTRA CARA DE LA GLOBALIZACIÓN NEOLIBERAL: LA POBREZA MARTA HARNECKER: "ESTAMOS VIVIENDO UN PROCESO DE RESQUEBRAJAMIENTO DE LA HEGEMONÍA BURGUESA" "NUESTRA OBLIGACIÓN MORAL ES PERDER EL MIEDO Y REBELARNOS CONTRA EL SISTEMA CAPITALISTA"

EL USO DE LA FUERZA MILITAR EN SUDAMÉRICA: CONSIDERACIONES PARA EL MULTILATERALISMO Y LA INTEGRACIÓN REGIONAL LA CONEXIÓN CHILENA EN EL MILLONARIO NEGOCIO DE LA “TRIANGULACIÓN” DE FUTBOLISTAS ANÁLISIS Y PROYECCIÓN DEL ESCENARIO POLÍTICO EN EL CHILE DE HOY UN GRAN “CRASH” Y LUEGO... UN MUNDO DE VIDA BÁSICA DOCTRINA POWELL: NO SE PERMITIRÁ NINGUNA/ POTENCIA QUE PUEDA DESAFIAR A LOS EE.UU. KINTTO LUCAS/ CRISIS E INTEGRACIÓN ESTRATÉGICA: HACIA UN MUNDO DE BLOQUES ANALIZANDO AL SUJETO EN SOCIEDAD “SUBJETIVIDAD RADICAL” PARA MAQUILLAR LA DICTADURA DEL CAPITAL E INTENTAR AMPLIAR SUS FORMAS MISERABLES DE “DEMOCRACIA” “DEMOCRACIA PLURAL RADICAL”, LA IMPOSTURA POSTMARXISTA “ALEX DOGBOY”: CALIDAD LITERARIA Y COMPROMISO LOS NIÑOS DE LA CALLE EN LA OBRA DE MONICA ZAK LOS MOMENTOS EN LOS QUE LA HUMANIDAD ESTUVO AL BORDE DE LA TERCERA GUERRA MUNDIAL MÉXICO CEDE SUS BOSQUES Y SELVAS A REDD+ FANTASÍAS. RESPUESTA AL POST DE ŽIŽEK RAZA, CLASE Y GÉNERO LA INTERSECCIÓN ENTRE REALIDAD SOCIAL Y LÍMITES POLÍTICOS ¿ESTÁ AGOTADA LA RETÓRICA NEOLIBERAL? "HAY MÁS CONTINUIDADES QUE RUPTURAS ENTRE LOS ÚLTIMOS PAPAS" LO QUE PONE AL DESNUDO EL CASO EDWARD SNOWDEN: THE OUTSOURCING OF INTELLIGENCE TODA LA INFORMACIÓN QUE FACEBOOK RECOPILA A TUS ESPALDAS LA PRIVATIZACIÓN DE LA GUERRA: LA ONU CONTRATA A EMPRESAS DE SEGURIDAD PRIVADAS EN OPERACIONES HUMANITARIAS Y DE PAZ

MALUCHA PINTO, ACTRIZ: “LLEGÓ EL MOMENTO DE UN CAMBIO DE VERDAD” URUGUAY LIDERA UN RANKING DE LAS AMÉRICAS SOBRE INCLUSIÓN SOCIAL COMIENZA EN BRASIL LA ÚLTIMA ETAPA DEL IV ENCUENTRO INTERNACIONAL CONTRA EL TRABAJO INFANTIL EL PRÍNCIPE DE ANTIOQUIA: PABLO ESCOBAR POLICÍAS COMUNITARIAS, AUTODEFENSAS Y PARAMILITARES LAS 300 PERSONAS MÁS RICAS DE LA TIERRA TIENEN MÁS RIQUEZA QUE LOS 3.000 MILLONES MÁS POBRES, CASI LA MITAD DE LA POBLACIÓN DE MUNDO EL MENSAJE DE LA JUVENTUD BRASILEÑA TESIS SOBRE EL SUJETO DE LA SOBERANÍA NACIONAL EEUU SE ESFUERZA POR EXPORTAR A AMÉRICA LATINA MIENTRAS MÉXICO DABA VIDAS EN LA GUERRA AL NARCO, LA BANCA GLOBAL BEBÍA “DINERO CON SANGRE” EL HAMBRE COMO ESPECTÁCULO POLÍTICO PEDRO CAYUQUEO: “ES DIFÍCIL ENCONTRAR UN MAPUCHE ANTI-CHILENO, PERO NO UN CHILENO ANTI-MAPUCHE” WALL STREET PINTA A ARGENTINA COMO ALIADA DEL “DIABLO” IRANÍ – TODAS LAS CLAVES DEL PROGRAMA DE VIGILANCIA DE EEUU VATTIMO: "EL ÚNICO IDEAL POSIBLE ES EL COMUNISMO" ARAM AHARONIAN/ VENEZUELA: LA FARANDULIZACIÓN DE LA POLÍTICA ¿TERRORISMO? PIZARRÓN INSUMISO

Revista Nexos del mes de agosto 2013. ENTREVISTAS F. RETAMAR: “EL PORVENIR DE NUESTRAS LETRAS ESTÁ UNIDO AL DE NUESTRA AMÉRICA” LIBROS DEL MES

REVISTA PRISMA SOCIAL...CONSÚLTELA TEXTOS ESTRATÉGICOS

[LIBRO] EL DIOS MORTAL: LUCIFER Y LA BESTIA HISTORIA DEL EGP (EJÉRCITO GUERRILLERO DEL PUEBLO) DE ARGENTINA PARA MI PARTIDO Y EL DE USTEDES HAY UNA COSA IMPRESCINDIBLE AL LLEGAR AL PODER, NO PERDER LA RELACIÓN CON EL PUEBLO DISCURSO COMPLETO DE LUIZ INACIO LULA DA SILVA EN EL XIX FORO DE SAO PAULO. EL 54% DE LOS INTERNAUTAS EN EU AVALA PRÁCTICAS DE ESPIONAJE COMO MEDIDAS PARA COMBATIR EL TERRORISMO, SEGÚN ESTUDIO CONTRA EL IMPERIALISMO Y LA COLONIZACION: SEIS ESTRATEGIAS POR LA SOBERANIA, LA DIGNIDAD Y LA VIDA DE LOS PUEBLOS

PARAGUAY-ESPAÑA: UNA REVISIÓN CRÍTICA A LA INVERSIÓN EXTRANJERA DIRECTA ZONAS GRISES NUEVOS DESTINOS DE LOS INVERSORES INMOBILIARIOS...O BLANQUEO DE DINERO ILÍCITO:MIAMI Y HOLLYWOOD (EN ESTADOS UNIDOS); PIRIÁPOLIS; PUNTA DEL ESTE Y PUNTA DEL DIABLO (EN URUGUAY); PANAMÁ, ADEMÁS DE ASUNCIÓN Y VILLA ELISA (EN PARAGUAY), BARÓMETRO GLOBAL DE CORRUPCIÓN 2013 TRANSPARENCIA INTERNACIONAL.

LIBRO: AMÉRICA LATINA EN LA TURBULENCIA GLOBAL: OPORTUNIDADES, AMENAZAS Y DESAFÍOS

REVOLUCIÓN Y CONTRARREVOLUCIÓN NOCIONES ESENCIALES EN LA OBRA Y ACCIÓN DE ÁLVARO CUNHAL

DR. PABLO GONZALEZ CASANOVA

Oficio núm. PGC-249/2013

A los colaboradores e integrantes del Consejo Editorial del sitio “Conceptos y Fenómenos Fundamentales de Nuestro Tiempo” MODERNIDADES ALTERNATIVAS

PABLO GONZÁLEZ CASANOVA PRESENTÓ CONCEPTOS Y FENÓMENOS FUNDAMENTALES DE NUESTRO TIEMPO LANZA LA UNAM SITIO WEB, PRÓXIMO PARADIGMA EN EL DEBATE DE LAS IDEAS

EEUU: LA FED, ARQUITECTA DEL ESCLAVISMO MUNDIAL RAFAEL CORREA, PRESIDENTE DEL ECUADOR, EXPONE DENUNCIAS SOBRE LA CIA ( USA) Y LA PDI (CHILE) EN CONTRA DE SU PAÍS Y SU GOBIERNO

LA DUEÑA DE 'YERBABUENA'

BRASIL, INERME ANTE INVASIÓN CIBERNÉTICA

CONTRATO COLECTIVO DE TRABAJO DE PEMEX, MÁS PRIVILEGIOS A CÚPULA SINDICAL

MÉXICO: REFORMA FINANCIERA: EL PREMIO A LA BANCA USURERA

URUGUAY...LA OPCIÓN DEL FRENTE ESTA ENVEJECIENDO A PASOS AGIGANTADOS

HACIA LA METAMORFOSIS : DEL PENSAMIENTO ANTROPOLÓGICO A LA NOOSFERA

¿LA PODEROSA IGLESIA DEL VATICANO, ALIADA DE EEUU Y LA OTAN, NEUTRALIZÓ Y “SE TRAGÓ” A LA TEOLOGÍA DE LA LIBERACIÓN? ¿NUEVAMENTE GANÓ LA HEGEMONÍA DE LOS PODEROSOS?

LECTURAS 2-A SEMANA SEMANA AGOSTO DE DE 2013 CONTEXTO GLOBAL

OTAN CAMBIA DE RUMBO EN SIRIA 9. agosto, 2013 Red Voltaire

D, Línea Global, Semana

http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2013/08/09/otan-cambia-de-rumbo-en-siria/ Occidente –sus gobiernos y su prensa– se ha dado cuenta de que los hasta hace un par de semanas “rebeldes” y “héroes de la libertad” son fanáticos terroristas que no saben hacer otra cosa que matarse entre sí. Washington ha abandonado la idea de derrocar a Bashar al-Assad, presidente de Siria, y se dirige hacia la realización de la conferencia de Ginebra 2. Próxima etapa: la pérdida de influencia de Francia en la región Thierry Meyssan/Red Voltaire El 13 de junio de 2013, el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos anunciaba que se había violado la línea roja: las pruebas acumuladas por franceses y británicos demostraban que la Siria de Bashar al-Assad había utilizado armas químicas contra su propio pueblo. El nuevo mando conjunto de las fuerzas terrestres de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) fue activado de inmediato. La guerra era inminente. Un mes más tarde, la enérgica determinación de Occidente se ha desvanecido. La prensa de los países de la OTAN descubre con espanto que la oposición armada en Siria se compone de fanáticos odiados por la gran mayoría de los sirios… Cosa que la Red Voltaire ha venido documentando desde hace 2 años. Mientras tanto, en el campo de batalla, el Ejército Sirio Libre y el Frente al-Nusra, en vez de combatir contra las tropas de Damasco, están luchando entre sí.

¿Qué es lo que ha convertido la guerra “de liberación” de Siria en este enorme caos? El hecho es que en 1 mes nada ha cambiado. El Ejército Árabe Sirio nunca utilizó armas químicas contra los “rebeldes”. Y estos últimos no se han “radicalizado”. Lo que sí está sucediendo es que el plan estadunidense que ya habíamos expuesto desde este espacio –en noviembre de 2012– está concretándose lentamente. Descripción de la actual etapa: abandono de la oposición armada. Todo esto nos confirma el agotamiento del imperialismo anglosajón. La aplicación práctica de las decisiones ya tomadas en Washington se produce con extrema lentitud. Ese proceso pone de relieve la ceguera de los medios de prensa occidentales, que ignoran esas decisiones adoptadas hasta que éstas acaban traduciéndose en hechos. Incapaces de analizar las realidades del mundo que tienen ante sus ojos, esos medios se obstinan en repetir y dar crédito a las consignas de la “comunicación política”. Es por ello que lo que ya escribí hace meses, y que la prensa dominante calificaba entonces de “teoría del complot”, se convierte ahora en la evidencia misma para esa prensa…, con 10 meses de retraso. Eric Schmitt escribe púdicamente en The New York Times que “los planes de la administración estadunidense son mucho más limitados de lo que [la propia administración] declaraba en público y en privado”. Mientras que David Ignatius titula crudamente en el Washington Post: “Washington da calabazas a los rebeldes sirios”. Esperaban armas antitanque y recibieron morteros de 120 milímetros. Les habían prometido aviones y recibieron fusiles kalachnikov. Las armas llegan en cantidades, pero no para derrocar a Bashar al-Assad, sino para que se maten entre sí hasta que no quede ni uno. Y para que no queden dudas, el director de la Agencia Central de Inteligencia estadunidense, John Brennan, y el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, convencieron al Congreso –a puertas cerradas– de que no era buena idea enviar armas decisivas a los grupos armados que operan en Siria. Mientras tanto, en Londres, la Cámara de los Comunes sigue el mismo camino. Y en París, los diputados Alain Marsaud y Jacques Myard tratan –por otras razones– de encaminar la Asamblea Nacional francesa en el mismo sentido de rechazo Occidental a seguir respaldando a los “rebeldes”. Sin la menor vacilación, el ministro francés de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius –el mismo que en diciembre de 2012 deploraba la decisión de Estados Unidos de incluir el Frente al-Nusra en su lista de organizaciones terroristas, declarando además que los hombres de al-Nusra “hacen un buen trabajo en el terreno” [sic]– pidió ahora a la Organización de las Naciones Unidas que incluya a ese grupo en la lista internacional de organizaciones terroristas. Y Manuel Valls, el ministro francés del Interior, declara ante las cámaras de France 2 que los franceses que luchen en Siria junto a sus exaliados islamistas serán arrestados y juzgados a su regreso a Francia. Así se precisa la conferencia de Ginebra 2, de la que se viene hablando desde hace 1 año. Los principales obstáculos venían de la Coalición Nacional, que exigía, respaldada por Catar, la capitulación previa de Bashar al-Assad. Las objeciones venían también de los franceses y los británicos, que se negaban a aceptar a Arabia Saudita e Irán en la mesa de negociación. En Teherán, el ayatolá Jameneí ha sacado del juego al presidente Ahmadineyad y al director de su equipo, Meshaie –hombres de fe y a la vez anticlericales–, para reemplazarlos por el jeque Rohani, un religioso muy pragmático. En cuanto se instale como nuevo presidente de Irán, a fines de agosto, Rohani aceptaría participar en la negociación. Por su parte, los anglosajones sacaron del juego a Catar, el micro-Estado productor de gas que les servía para disimular la alianza entre la OTAN y la Hermandad Musulmana. Y han dejado el manejo de los “rebeldes” en Siria únicamente en manos de Arabia Saudita, mientras se dedican a desacreditar a los “rebeldes” internacionales a través de la prensa. Con rey Abdullah o sin él, Riad tendría también que aceptar la negociación. En lo que constituye una falsa sorpresa, y a la insistente demanda del secretario de Estado estadunidense, John Kerry, la Autoridad Palestina aceptó retomar las negociaciones con Israel, aunque el Estado hebreo siga adelante con su política de colonización de los territorios. A no ser que se produzca algún acontecimiento inesperado en Egipto o en Túnez, no deberían subsistir, dentro de 2 o 3 meses, obstáculos importantes para la celebración de Ginebra 2, el “nuevo Sykes-Picot” ampliado, denominación que hace referencia a los acuerdos secretos en los que Francia y el Reino Unido se repartieron Oriente Medio durante la Primera Guerra Mundial. En el marco de la nueva conferencia de Ginebra, Estados Unidos y Rusia se repartirán el Norte de África y el Levante, en detrimento de Francia y

dividiendo la región en zonas cuyo control podrían garantizar subcontratando la influencia de sauditas (sunnitas) e iraníes (chiítas). Después de haber forzado la abdicación del emir de Catar y de abandonar a los “rebeldes” en Siria, Washington se apresta ahora a retirar su apoyo regional a Francia, otro de sus fieles aliados, que habrá pasado por lo tanto 2 años ensuciándose las manos para quedarse finalmente sin la menor compensación. Ésa es la cínica ley del imperialismo.

Fuente: www.contralinea.com.mx Periodismo de investigación http://contralinea.info/archivorevista/index.php/2013/08/09/otan-cambia-de-rumbo-en-siria/

UNA HERRAMIENTA DE LA NSA QUE RECOGE “CASI TODO LO QUE UN USUARIO HACE EN INTERNET” Glenn Greenwald The Guardian http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172277 Traducido para Rebelión por S. Seguí

Un programa top secret de la National Security Agency (Agencia de Seguridad Nacional – NSA) estadounidense permite a sus analistas realizar búsquedas no autorizadas en una serie de grandes bases de datos que contienen mensajes de correo electrónico, chats en línea y los historiales de navegación de millones de personas, según testimonian los documentos revelados por el filtrador (whistleblower) Edward Snowden. En sus materiales de capacitación, la NSA se jacta de que su programa, llamado XKeyscore, es su sistema de “mayor alcance” para la recogida de inteligencia en toda Internet. La presentación siguiente ( NSA's XKeyscore program – read one of the presentations ) muestra cómo el programa XKeyscore cubre prácticamente todo lo que un usuario típico hace en Internet.” Estas recientes revelaciones añadirán nuevos elementos al intenso debate público y del Congreso de EE.UU. sobre las amplitud de los programas de vigilancia de la National Security Agency (NSA). Dichas revelaciones se han producido en el momento en que funcionarios de alto nivel de los servicios secretos testificaban ante el Comité judicial del Senado, el miércoles pasado, presentando documentos secretos en respuesta a los artículos que The Guardian publicó anteriormente sobre la recogida masiva de datos telefónicos y de vigilancia en el extranjero con arreglo a la legislación conocida como FISA (Foreign Intelligence Surveillance Act). Los archivos arrojan luz sobre una de las declaraciones más controvertidas de Snowden, hecha en su primera entrevista publicada por The Guardian el 10 de junio. “Sentado en mi escritorio”, dijo Snowden, “podía realizar escuchas telefónicas de usted mismo o de su contable, de un juez federal o incluso del presidente, si disponía de un correo electrónico personal”. Funcionarios estadounidenses negaron con vehemencia esta afirmación concreta. Mike Rogers, el presidente republicano del Comité de inteligencia de la Cámara, afirmó de las declaraciones de Snowden: “Está mintiendo. Es imposible que él pudiera hacer lo que afirmaba que podía hacer.”

Sin embargo, los materiales de formación de XKeyscore indican en detalle de qué modo pueden los analistas utilizar éste y otros sistemas a fin de rastrear las enormes bases de datos de la agencia rellenando un sencillo formulario en pantalla y dando sólo una somera justificación para la búsqueda. La solicitud no la revisa ningún tribunal o responsable de la NSA antes de ser procesada. Según proclaman los documentos, XKeyscore, es el sistema de “más amplio alcance” de la NSA para la obtención de inteligencia de las redes de ordenadores, lo que la agencia llama Digital Network Intelligence (DNI). Una de las páginas de presentación afirma que el programa cubre “casi todo lo que un usuario corriente hace en Internet”, incluyendo el contenido de sus correos electrónicos, los sitios web visitados y las búsquedas, así como sus metadatos. Los analistas pueden también usar el sistema XKeyscore y otros de la NSA para conseguir interceptar “en tiempo real” la actividad en Internet de un individuo cualquiera. Con arreglo a la legislación estadounidense, la NSA s ólo necesita obtener una orden FISA individualizada si el objetivo de la vigilancia es una “persona de los EE.UU.”, aunque no se requiere dicha autorización para interceptar de las comunicaciones de los estadounidenses con extranjeros considerados “objetivos”. Pero XKeyscore proporciona la capacidad tecnológica, aunque no la autoridad legal, para acosar, mediante todo tipo de vigilancia electrónica, a ciudadanos estadounidenses de sin orden judicial, siempre y cuando el analista sea conocedor de alguna información de identificación, tales como el correo electrónico o la dirección IP. Una diapositiva del paquete de formación ilustra la actividad digital constantemente realizada por XKeyscore y la capacidad del analista para consultar las bases de datos en cualquier momento. El propósito de XKeyscore es permitir a los analistas buscar los metadatos, así como el contenido de los correos electrónicos y otras actividades de Internet, tales como el historial del navegador, incluso cuando no haya ninguna cuenta de correo electrónico conocida (“selector”, en la jerga NSA) asociada con el individuo considerado “objetivo”. Los analistas también pueden buscar por nombre, número de teléfono, dirección de IP, palabras clave, idioma en que se realizó la actividad de Internet o tipo de navegador utilizado. Un documento señala que esto se debe a que “una fuerte selección [búsqueda por dirección de correo electrónico] por sí misma nos da sólo una capacidad muy limitada”, ya que “una gran cantidad de tiempo que se dedica a la red consiste en la realización de acciones anónimas.” Los documentos de la NSA afirman que hasta 2008, 300 terroristas fueron capturados utilizando la inteligencia obtenida por XKeyscore. Los analistas son conscientes de que la búsqueda en el contenido completo de la base de datos dará demasiados resultados para tamizar. En su lugar, se recomienda utilizar los metadatos también almacenados en las bases de datos para reducir lo que debe revisar. En una diapositiva titulada “Plug-ins”, de un documento de diciembre de 2012, se describen los distintos campos de información que se pueden inspeccionar. Esto incluye “todas las direcciones de correo electrónico observadas en una sesión, por nombre de usuario y dominio”, “todos los números de teléfono observados en una sesión (por ejemplo, entradas de la agenda o bloque de firmas)” y la actividad del usuario: “la actividad de correo electrónico y chateo en línea, incluyendo nombre de usuario, lista de conocidos, cookies específicos de la máquina, etc.” Vigilancia del correo electrónico

En una segunda entrevista concedida por Snowden al Guardian, en junio, aquél se refirió a su declaración de ser capaz de leer el correo electrónico de cualquier persona si disponía de su correo electrónico. Dijo que esta afirmación se basaba en parte en la capacidad de búsqueda de correo electrónico de XKeyscore, que Snowden afirma que fue autorizado a utilizar, mientras trabajaba como contratista de Booz Allen para la NSA. Un documento altamente secreto describe cómo el programa “busca en el interior de los cuerpos de mensaje de correo electrónico, páginas web y documentos”, incluyendo los campos de dirección –A:, De:, CC:, BCC:– y las páginas de contacto de los sitios web.

Para buscar mensajes de correo electrónico, un analista que utilice XKeystone introducirá la dirección de correo electrónico de la persona en un formulario simple de búsqueda en línea, junto con la “justificación” para la búsqueda y el período de tiempo durante el cual interesan los mensajes de correo electrónico. A continuación, el analista selecciona cuál de los correos electrónicos devueltos desean leer, abriéndolos por medio del software de lectura de la NSA. El sistema es similar al método con el que los analistas de la NSA pueden generalmente interceptar las comunicaciones de cualquier persona que elijan, incluidas, como afirma la NSA, “las comunicaciones que transitan por los Estados Unidos y las comunicaciones que terminan en los Estados Unidos”. Uno de los documentos, una guía altamente secreta de 2010 que describe la formación recibida por los analistas NSA en materia de vigilancia general con arreglo a FISA –ley de 2008– explica que los analistas pueden comenzar la vigilancia de cualquier persona haciendo clic en unos sencillos menús desplegables diseñados para proporcionar justificaciones tanto legales como del objetivo. Una vez seleccionadas las opciones de los menús desplegables, su objetivo se marca para su vigilancia electrónica y el analista es capaz de revisar el contenido de sus comunicaciones. Chats, historial de navegación y otras actividades de internet Más allá de los correos electrónicos, el sistema XKeyscore permite a los analistas supervisar una variedad casi ilimitada de actividades en Internet, entre otras las de los medios sociales. Una herramienta de la NSA llamada DNI Presenter que se utiliza para leer el contenido de los correos electrónicos almacenados, también permite a un analista dotado de XKeyscore leer el contenido de las charlas en Facebook o los mensajes privados. Un analista puede controlar estos chats de Facebook introduciendo el nombre de usuario de Facebook, y un periodo de tiempo en una pantalla de búsqueda simple. Los analistas pueden buscar en Internet las actividades de navegación utilizando una amplia gama de información, entre otros los términos de búsqueda introducidos por el usuario o las páginas web visitadas. Como una diapositiva indica, la capacidad de búsqueda de la actividad HTTP por palabras claves permite el acceso a lo que el analista de la NSA llama “casi todo lo que un usuario normal hace en internet.” El programa XKeyscore también hace posible que el analista conozca las direcciones IP de cada persona que visita cualquier sitio web que el analista especifique. La cantidad de las comunicaciones accesibles a través de programas como XKeyscore es asombrosamente grande. Un informe de la NSA, de 2007, estimó que había 850.000 millones de “eventos de llamada” recogidos y almacenados en las bases de datos de la NSA, y cerca de 150.000 millones de entradas de Internet. Cada día, afirma el documento, se añaden entre mil y dos mil millones de entradas.

William Binney, un antiguo matemático de la NSA, dijo el año pasado que la agencia había “recogido una cantidad del orden de 20 billones de operaciones de ciudadanos de Estados Unidos con otros ciudadanos de Estados Unidos”; siendo una estimación, afirmó, que “sólo cuenta las llamadas telefónicas y los correos electrónicos”. Un artículo del Washington Post 2010 informó que “todos los días, los sistemas de recolección de la NSA interceptan y almacenan 1.700 millones de correos electrónicos, llamadas telefónicas y otro tipo de comunicaciones.” El sistema XKeyscore recoge continuamente tantos datos de Internet que sólo puede almacenarlos por períodos cortos de tiempo. El contenido permanece en el sistema durante tres a cinco días, mientras que los metadatos se almacenan durante 30 días. Un documento explica: “En algunos sitios, la cantidad de datos que recibimos por día (más de 20 terabytes) sólo puede ser almacenada durante no más de 24 horas.” Para resolver este problema, la NSA ha creado un sistema de varios niveles que permite a los analistas almacenar contenidos “interesantes” en otras bases de datos, como por ejemplo uno llamado Pinwale que puede almacenar el material hasta cinco años. Es la actual base de datos de XKeyscore, según muestra un documento, la que contiene la mayor cantidad de datos de comunicación recogidos por la NSA. En 2012, había al menos 41.000 millones de entradas totales recogidas y almacenados en XKeyscore durante un único periodo de 30 días.

Restricciones legales y técnicas Si bien la legislación FISA, de 2008, requiere una orden individualizada para que una persona sea designada objetivo, los analistas de la NSA están autorizados a interceptar las comunicaciones de esas personas sin orden judicial cuando están en contacto con uno de los objetivos extranjeros de la NSA. El director jurídico adjunto de la American Civil Liberties Union (ACLU), Jameel Jaffer, manifestó a The Guardian el mes pasado que funcionarios de seguridad nacional afirmaron expresamente que un objetivo principal de la nueva ley es permitirles recopilar grandes cantidades de comunicaciones de los estadounidenses sin órdenes individualizadas. “El Gobierno no tiene por qué calificar a ciudadanos estadounidenses como “objetivos” para recopilar grandes volúmenes de sus comunicaciones”, dijo Jaffer. “El Gobierno inevitablemente barre sistemáticamente las comunicaciones de muchos estadounidenses” cuando realizan el monitoreo de ciudadanos de otros países. Un ejemplo es el de un documento XKeyscore que muestra a un “objetivo” de la NSA en Teherán comunicándose con personas en Frankfurt, Amsterdam y Nueva York. En los últimos años, la NSA ha intentado separar las comunicaciones exclusivamente nacionales de Estados Unidos en bases de datos separadas. Pero los propios documentos de la NSA reconocen que tales esfuerzos son imperfectos, en la medida en que las comunicaciones, incluso las puramente nacionales, pueden circular a través de sistemas extranjeros, y las herramientas de la NSA a veces son incapaces de identificar los orígenes nacionales de las comunicaciones. Además, todas las comunicaciones entre estadounidenses y otras personas en tierra extranjera se incluyen en las mismas bases de datos que las comunicaciones de extranjeros a extranjeros, para que sean de fácil acceso sin orden judicial.

Algunas búsquedas realizadas por los analistas de la NSA son revisadas periódicamente por los supervisores dentro de la NSA. “Es muy raro que nos interroguen sobre nuestras búsquedas,” manifestó Snowden a The Guardian en junio. “Y las preguntas, cuando las hay, van acompañadas, por lo general, de frases del tipo: ‘Vamos a engordar un poco la justificación'.” En una carta enviada esta semana al senador Ron Wyden, director de Inteligencia Nacional, James Clapper reconoció que los analistas de la NSA han excedido incluso los límites legales según interpretación de la NSA en materia de vigilancia nacionales. Reconociendo lo que llamó “una serie de problemas de cumplimiento”, Clapper los atribuyó a “errores humanos” o a “cuestiones de tecnología altamente sofisticada”, pero no a “mala fe”. Sin embargo, Wyden manifestó ante el Senado el martes lo siguiente: “Estas infracciones son más graves que las que reconoce la comunidad de inteligencia, y son preocupantes”. En declaraciones a The Guardian, la NSA afirmó: “Las actividades de la NSA se concentran y despliegan específicamente contra –y sólo contra– legítimos objetivos de inteligencia extranjeros, en respuesta a requerimientos en el sentido de que nuestros líderes necesitan la información necesaria para proteger a nuestro país y sus intereses.” “XKeyscore se utiliza como parte del sistema legal de la NSA de recogida de señales de inteligencia. “Las acusaciones de un acceso generalizado y sin restricciones a la recopilación de datos por parte de la NSA simplemente no son ciertas. El acceso a XKeyscore, así como todas las herramientas de análisis de la NSA, se limita al personal que requiere dicho acceso por las tareas que le han sido asignadas... Además, hay múltiples controles técnicos, manuales y mecanismos de supervisión y verificación dentro del sistema como para prevenir un mal uso deliberado cuando se produzca.” “Cada búsqueda por parte de un analista de la NSA es totalmente auditable, a fin de asegurarse de que es correcta y se halla dentro de la legalidad. “Este tipo de programas nos permiten recopilar la información que hace posible que llevemos a cabo con éxito nuestras misiones: la defensa del país y la protección de las tropas estadounidenses y aliadas en el extranjero.” Fuente: http://www.theguardian.com/world/2013/jul/31/nsa-top-secret-program-online-data/print

EL CONFLICTO DE MALÍ/ RETROSPECTIVAS, INTROSPECTIVAS Y PERSPECTIVAS Mbuyi Kabunda Pueblos http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172271 En el conflicto de Malí es preciso dejar de hacer el paradigma entre islam y terrorismo, y la guerra entre el sur de este país y el norte habitado exclusivamente por los tuareg yihadistas. Se trata de simplificaciones y generalizaciones abusivas, que pasan por alto los aspectos históricos y estructurales que el presente análisis pretende exponer para comprender este conflicto en su totalidad, con la consiguiente identificación de los actores internos y externos, y las perspectivas que se presentan. El país cuenta 13 millones de habitantes y está integrado principalmente por los peul, bambara, malinké, soninké, senufo, songhai, dogon y tuareg (el 10 por ciento de la población del norte, donde los songhai

constituyen la etnia mayoritaria), y comparte fronteras con siete países del África Occidental. Es la suma, por su superficie, de los territorios de Costa de Marfil, Guinea Conakry, Senegal, Burkina Faso, Benín y Togo. Desde finales de la década los 60 se produjeron tres golpes de Estado: el 18 de noviembre de 1968, el general Moussa Traoré derribó a Modibo Keita e instauró una dictadura feroz. Fue derribado, a su vez, el 26 de marzo de 1991 por el general Amadou Toumani Touré, llamado ATT, y que se ganó el apodo de “soldado de la democracia” por instaurar el proceso de democratización con la celebración de las elecciones multipartidistas, ganadas por Alpha Oumar Konaré, que tras sus dos mandatos, se retiró dando paso, tras el veredicto de las urnas a ATT. A este último, un grupo de oficiales subalternos, liderado por el capitán Amadou Haya Sanogo, le echó del poder en marzo de 2012, como resultado de la corrupción reinante, la inoperatividad del Estado, y de los altercados ocurridos con los movimientos separatistas tuareg en el norte del país. Durante todo este tiempo, el Estado maliense tuvo que enfrentarse a las rebeliones de los tuareg que venían reclamando su propio Estado, el Azawad, en el norte del país. En los cincuenta últimos años, se han producido cuatro rebeliones tuareg para conseguir este objetivo, al considerar este grupo nómada las fronteras como un impedimento a sus actividades, además del sentimiento de exclusión económica y social por Bamako. I. Las causas históricas, intermedias y actuales del conflicto maliense A. Causas lejanas El conflicto de Malí tiene raíces que se remontan al periodo precolonial con el ataque del imperio de Malí de Kankan Musa, en el siglo XV, por los tuareg, que se aprovecharon de las disputas internas para conquistar las ciudades del norte como Gao, Tombuctú y Mema, imponiendo el islam. Las dimensiones coloniales del conflicto tienen que ver con la Conferencia de Berlín (1884-1885), donde las potencias europeas se dividieron el continente africano en función de sus intereses económicos y políticos, y en el descuido de las realidades socioculturales y medioambientales locales. En el caso de Malí (llamado entonces “Sudán francés”) se unió en un mismo territorio a pueblos con diferentes características y modos de vida: la población del sur sedentaria y la del norte nómada, junto a un desarrollo desigual entre ambas partes, favoreciendo a los sureños (que no se opusieron a la colonización, al contrario de la rebelión tuareg del norte), y que heredaron el aparato del Estado en el momento de la descolonización. El 22 de septiembre de 1960, el Sudán francés accede a la independencia bajo el nombre de Malí, liderado por Modibo Keita. Las fronteras, arbitrarias y artificiales del país se mantuvieron tal y como fueron definidas en su día, conforme a la ideología jacobina, con la consiguiente negación del derecho a la autodeterminación de los grupos étnicos. B. Causas intermedias Los programas de ajuste estructural (PAE) de las instituciones financieras internacionales (Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional), impuestos en la década de los 80 y 90, empeoraron la situación del país como consecuencia de las privatizaciones y de la máxima apertura externa. El resultado fue la descomposición política y económica de muchos Estados africanos, sometidos a los deberes externos en detrimento de las obligaciones internas. En el caso concreto de Malí, la liberalización de la economía y la privatización de las empresas públicas, en el marco de los PAE, tuvieron como consecuencia la destrucción de la educación y de la salud, la agudización de la extrema pobreza, del desempleo y de la precariedad, favoreciendo, sobre todo en el norte, la emigración de los jóvenes y las iniciativas de las instituciones de caridad islámicas, que se sustituyeron al Estado ausente.

En 1994, Francia procedió a la devaluación del franco CFA (moneda común de 14 países africanos ex colonias francesas), conforme a las recomendaciones de las instituciones financieras internacionales (IFI). El resultado fue la pérdida del poder adquisitivo y la pauperización de amplias capas de la población. C. Causas inmediatas C.1. La crisis argelina de los 90 Argelia se hundió en esta década en una cruel guerra civil tras el golpe de Estado militar, para impedir el acceso al poder del Frente Islámico de Salvación (FIS), tras su victoria en las urnas. El fin de la guerra civil en este país condujo a las formaciones terroristas de los Grupos Islámicos Armados (GIA), convertidos en el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC), después en AQMI, a refugiarse en el norte de Malí donde se reorganizaron ante la indiferencia y/o impotencia del gobierno de Malí. Es decir, el norte de este país se convirtió en la retaguardia de grupos islamistas armados, movilizados y financiados por los fundamentalistas saudíes. C.2. La guerra civil en Libia en 2011 Es preciso también vincular el conflicto de Malí con la guerra civil en Libia, que desestabilizó todo el Sahel. Muchos jóvenes tuareg se alistaron en el ejército de Gadafi en las décadas anteriores, algunos incluso lucharon al lado de los talibanes en Afganistán. Procedieron al traslado masivo de armas ilegales a Malí, en el momento en el que los bombardeos de la OTAN (encabezada por Francia y Gran Bretaña) destruían las infraestructuras militares del coronel Gadafi. Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), que luchaba al lado del régimen libio, se aprovechó también de la situación para sacar las armas del país hacia Malí, incrementando considerablemente su capacidad militar y movilidad en el Sahel. En este contexto, los soldados tuareg del AQMI regresaron fuertemente armados a Malí, dispuestos a llevar a buen puerto la causa por la que luchaban: la realización de su sueño de independencia del Estado de Azawad. A todo ello, es preciso añadir la entrega de armas, en paracaídas en el sur de Libia, por Sarkozy, echando gasolina al fuego. De este modo, la caída de Gadafi se convirtió en el exportador del caos, el terrorismo y la militarización en el Sahel. C.3. Las torpes estrategias de ATT para mantenerse en el poder El presidente ATT, llegando a final de sus dos mandatos, puso en marcha subterfugios de todo tipo para prolongarlos, impidiendo la celebración de las elecciones. Esto se sumaba a su mal gobierno, con la implicación de los altos cargos políticos y militares en el tráfico de drogas, armas y actividades criminales en el norte del país, además del desconcierto total ante la rebelión que acababa de estallar en esta región y la descomposición de la clase política o gobernante maliense. Lo que condujo al mencionado golpe de Estado del capitán Sanogo, con el respaldo de la sociedad civil. A todos estos factores, se puede añadir la desertificación en el norte del país en la década de los 80 y 90 (en particular entre 1990 y 1997), que no sólo expulsó hacia Libia a muchos jóvenes tuareg reclutados en el ejército de Gadafi, sino que además generó conflicto agrarios, y no étnicos, nacidos de las sequías. II. Los actores locales del conflicto A. El Estado maliense Durante mucho tiempo se presentó a Malí como un modelo de democracia y de crecimiento económico, y se perdió de vista que era un “simulacro de democracia”, impuesto según los criterios occidentales, y destinado a complacer a sus padrinos extranjeros, las IFI. En realidad, se instauró en este país el nepotismo, la corrupción y una nueva clase de nuevos ricos, tal y como denunció repetidas veces Aminata Traoré. El

gobierno se desentendió de los problemas de desarrollo, en particular en el norte del país. Además, el ejército maliense es débil, mal equipado y desanimado. B. Los movimientos rebeldes: tuareg e islamistas Entre estos movimientos, es preciso mencionar, principalmente, los siguientes: El Movimiento Nacional para la Liberación del Azawad (MNLA), movimiento laico tuareg, que inició la rebelión en abril de 2012 para crear un Estado tuareg en la región del Azawad; Ansar Dine (los defensores de la religión), milicia de origen tuareg, integrado por salafistas fundamentalistas, cuyo principal objetivo es la conquista de todo el territorio maliense y la imposición de la ley islámica, la sharía; el Movimiento para la Unicidad y el Yihad en África Occidental (MUYAO), salafista, el cual es una emanación del AQMI, y con pretensiones cercanas a las de Ansar Dine. AQMI que se juntó a la rebelión tuareg iniciada por el MNLA, se propuso como principal objetivo la conexión de los movimientos salafistas sahelianos y del norte de África con Boko Haram o “los talibanes del norte de Nigeria”, que armaba y entrenaba. Quiso aprovecharse del debilitamiento del gobierno de Malí para crear en la región el núcleo de un Estado islámico. Después se separó del MNLA, al que echó de varias zonas del norte, para juntarse a Ansar Dine, próximo a los tuareg, y al MUYAO, integrado por mauritanos y malienses, para imponer la sharía en las principales ciudades del norte de Malí. Por lo tanto, el MNLA terminó cambiando de estrategia aliándose, en junio de 2012, con el ejército maliense con el objetivo de derrotar a sus aliados de ayer, las milicias islamistas radicales. III. La intervención francesa: ¿neocolonialismo o lucha contra el terrorismo? La “operación Cerval”, desde que se llevó a cabo el 11 de enero de 2013, para hacer frente al avance de los yihadistas, tras la caída de la ciudad estratégica de Konna, en el centro (lugar de paso entre el norte y el sur del país), ha suscitado reacciones opuestas. Para unos, se trata de una operación neocolonialista. Para otros, era necesaria, para salvaguardar la integridad territorial de Malí contra los ataques terroristas. Francia justifica su intervención por la invitación del presidente interino Dioncounda Traoré; el visto bueno de la organización regional (CEDEAO), y la resolución 2085 del CS de la ONU, que autorizó tácitamente dicha intervención. En su entrevista con la RFI y TV5 Monde, el 31 de mayo de 2013, el presidente François Hollande (propuesto por la Unión Africana al “premio Houphouët-Boigny”, destinado a las personas que han contribuido a la paz en África), tras hacer un balance positivo de la operación que ha conseguido, según él, importantes resultados militares y prácticos, manifiesta que la principal razón de esta intervención es la liberación de Malí de la dominación e influencia terroristas. Sin embargo, y de acuerdo con Aminata Traoré, las verdaderas razones de la intervención de Francia son: Económicas: el acceso al uranio de Níger (en la zona fronteriza con Malí), fundamental para la independencia energética de Francia, y que explota la multinacional francesa AREVA. De seguridad: la lucha contra la presencia en la zona de grupos terroristas que se dedican a la toma de rehenes franceses y a la gran criminalidad, y en particular al narcotráfico y la venta de armas. Geopolíticas: el contrarrestar la presencia de China en la zona y la lucha contra los flujos migratorios procedentes de esta región. En fin, la ayuda a Malí tendrá un precio. El presidente Dioncounda Traoré está obligado por Francia (que le salvó de otro golpe de Estado que preparaba el capitán Sanogo) a negociar con los tuareg moderados e independentistas del MNLA, favorables a los intereses franceses. De este modo, el MNLA conseguirá muchos de sus objetivos que no pudo alcanzar por las armas. El MNLA, que no es representativo del pueblo tuareg, sigue controlando la ciudad de Kidal donde se niega a la presencia de las tropas malienses para evitar

supuestamente los enfrentamientos. Francia exigió que se respetara la fecha de celebración de las elecciones en Malí (el 28 de julio de 2013), aunque no estuvieran reunidas las condiciones objetivas para su celebración, en particular la reconciliación, la estabilidad y la creación de instituciones democráticas, en las que ha de participar el MNLA, y que se tome en cuenta los intereses de los tuareg, repartidos como es sabido en áreas de Argelia, Libia, Níger y Malí. Es decir, zonas ricas en hidrocarburos y recursos minerales. IV. Los países africanos y la ONU ante el conflicto de Malí Todos los países africanos, anglófonos, francófonos y lusófonos, han aplaudido la intervención francesa, o han guardado silencio. No ha habido ninguna condena a la intervención “neocolonialista”, como sucedió en otras ocasiones (Costa de Marfil y Libia). La principal razón es el rechazo al terrorismo y, sobre todo, el apego al principio de la intangibilidad de las fronteras heredadas de la colonización de la OUA/UA. Por su parte, la CEDEAO intenta implicarse en el conflicto a través de la Misión Internacional de Apoyo a Malí (MISMA), que apenas ha empezado a desplegarse sobre el terreno. Sin embargo, todo deja entrever la futura transformación de la fuerza africana en una operación de mantenimiento de la paz de la ONU o la denominada Misión Multidimensional Integrada de las Naciones Unidas en Malí (MINUMA), que será operativa en julio de 2013, con el objetivo de contener a los grupos islamistas, encargarse de la seguridad en las zonas pacificadas, proteger a los civiles y respaldar el proceso político. De este modo, Francia intenta retirar paulatinamente sus tropas del país, reduciendo sus efectivos a 1.000 soldados de aquí a finales del año. Dicho con otras palabras, se crea una fuerza paralela, dejando la lucha antiterrorista a las tropas francesas. V. Conclusión y perspectivas La resolución del conflicto de Malí pasa por la adopción de un nuevo modelo federal de Estado y la eliminación de las fuentes de financiación de los grupos terroristas. Sin embargo, las principales fuerzas políticas malienses se oponen a la solución federal: el gobierno sigue apostando por un Estado unitario y centralizado (sólo permitiendo algunas formas de descentralización) y el MNLA por un Estado tuareg. Es decir, la ausencia de voluntad política para conseguir la reconciliación nacional, pues muchos tuareg siguen considerando a los negros como esclavos o descendientes de esclavos (los bella). El error que se ha cometido por ahora ha consistido en dar prioridad a la solución militar (operación Cerval, MISMA, MINUMA…), a los que se ha dedicado importantes fondos, que bien pudieran haberse dirigido a la educación, la sanidad, el agua, la vivienda, la agricultura y el medioambiente (lucha contra la desertificación) o la creación de empleos para la juventud condenada a la precariedad. Son estos aspectos descuidados los que crean el caldo de cultivo o la adhesión de los jóvenes a los grupos yihadistas y de narcotraficantes, y de futuras rebeliones y revueltas. A pesar de reducir considerablemente sus capacidades de acción los grupos yihadistas radicales, siguen siendo operativas. Algunos grupúsculos de estos movimientos, refugiados en los montañas inasequibles de Ifoghas y en el sur de Argelia y Libia, siguen cometiendo atentados en Gao y Tombuctú, e incluso extendiendo sus ataques a las ciudades nigerinas de Agadez y Arlit, bajo la instigación de Mokhtar Belmokhtar, el jefe yihadista, responsable de la toma de rehenes en Argelia (In Amenas) en enero de 2013. Nada puede asegurar, a raíz de lo sucedido en Irak, Afganistán y Libia, que la lucha antiterrorista acabará en Malí con aquellos movimientos. Tampoco se puede confiar en la fuerza de mantenimiento de la paz de la ONU, que no pudo conseguir dicho objetivo, por ejemplo, en la República Democrática del Congo después de 15 años de presencia de sus tropas. La solución debe ser política, mediante el diálogo entre los malienses, y en el campo social, es decir, mediante un amplio programa de desarrollo y de lucha contra la pobreza en todo el país, y en particular en el norte, como se hizo en el vecino Níger, empezando por la

renuncia a la militarización y al neoliberalismo, que ha agudizado la precariedad y la miseria. Es triste, según lamenta el informe del grupo parlamentario galo “Sahel”, que los cuatro meses de la intervención francesa hayan costado unos 200 millones de euros; es decir, un monto superior a los fondos dedicados por la cooperación bilateral francesa al desarrollo rural en la última década. Los problemas estructurales que han conducido al conflicto de Malí siguen intactos, y no van a ser resueltos por la celebración de las elecciones.

Mbuyi Kabunda es profesor e investigador en el Instituto Internacional de DDHH de Estrasburgo y profesor visitante en distintas universidades españolas. Artículo publicado en el número 57 de Pueblos – Revista de Información y Debate, tercer trimestre de 2013.

“NO IMPORTA QUIEN APOYE A LOS EEUU, LO IMPORTANTE ES DESUNIR A LOS ÁRABES Y QUE NO APOYEN LA CAUSA PALESTINA” Publicado en 7 agosto, 2013 de Iroel Sánchez Rate This http://lapupilainsomne.wordpress.com/2013/08/07/no-importa-quien-apoye-a-los-eeuu-lo-importante-esdesunir-a-los-arabes-y-que-no-apoyen-la-causa-palestina/#more-34780 Entrevista a Khaled Hadade, Secretario General del Partido Comunista del Líbano Ernesto Gómez Abascal Khaled Hadade, Secretario General del Partido Comunista del Líbano Khaled Hadade, Secretario General del Partido Comunista del Líbano -EGA. Las fuerzas populares que hace tres años participaron en el inicio de los levantamientos contra regímenes corruptos en varios países árabes, con aspiraciones de democracia, libertad y justicia social, no son las que han llegado al poder ni han logrado estos objetivos. ¿Tienen las fuerzas populares y de la izquierda posibilidad de reagruparse para lograr cambiar las estructuras de poder de estos regímenes? -KH.-La cuestión no reside en si pueden reagruparse o no… Esta es una necesidad ineludible. No puede haber cambio sin que se unan estas fuerzas y sin que desempeñen su rol en el ámbito del movimiento popular para el cambio que se está desarrollando. Su desempeño será el que garantice el carácter progresista de ese movimiento. Lograr un cambio real en las estructuras reaccionarias y burguesas del poder depende en gran medida de la consolidación del rol de las fuerzas de la izquierda, de su unidad, de la ampliación del marco de sus alianzas, sobre la base de los intereses de clase y sociales de los sectores mas humildes del mundo árabe. -EGA. ¿Cuál cree Ud. que debe ser el papel de los partidos de izquierda y otras fuerzas populares para frenar la contraofensiva imperialista- sionista-reacción árabe? -KH.-Durante la Intifada popular egipcia, enero 2011, antes de la caída del presidente egipcio y poco después de la caída de Ben Alí, alertamos en torno a la ilusión de que la Revolución había triunfado y que sería fácil que cumplimentara sus misiones. Y como partido dijimos que la ausencia del rol dirigente de la izquierda en la elaboración del programa de las intifadas y en su liderazgo, es un factor que limitaría la posibilidad de completar la consecución de sus objetivos. Y sobre todo insistimos en que la ausencia de la izquierda debilitaría la proyección social de las intifadas. Y dijimos que Barak Obama en su discurso en la Universidad de El Cairo definió claramente las partes que participarían en su alianza para completar el plan diseñado por los EEUU: rediseño de la región, control de sus riquezas, lo que llamamos el Sikes Picot 2 o lo que llaman ellos el nuevo Medio Oriente. Las fuerzas de esta alianza están dirigidas por los EEUU e integradas por el enemigo israelí y con este las fuerzas de la reacción árabe y locales, desde el Golfo hasta Turquía. Las fuerzas

islámicas también representan una base de esta contraofensiva, especialmente las llamadas moderadas. En efecto, esta alianza emprendió una contraofensiva contra el movimiento revolucionario árabe. Se multiplicaron sus escenarios, desde confiscación de las intifadas de Egipto y de Túnez hasta ayudar a las fuerzas islamistas en esos países para que tomaran el poder. En otros países recurrieron a las intervenciones armadas como en Libia y Yemen tratando de militarizar las intifadas y desatar guerras civiles, como hicieron en Yemen y en especial en Siria. Fuimos claros y dijimos que las fuerzas islamitas no querían cumplimentar los objetivos de las intifadas y en especial no estaban en capacidad de traducir en la práctica sus postulados de libertad, justicia y dignidad nacional. Por eso dijimos que esta primera etapa no es el final. Dijimos que el pueblo árabe que se levantado por su felicidad, por el pan, por libertad, justicia y dignidad nacional, perdió el miedo al poder y seguirá luchando por completar los objetivos de sus intifadas y recuperar lo que se les confiscó. Esto sucede en Túnez y en especial sucedió en Egipto cuando no había pasado un año del poder de los islamistas. Lo que sucedió en Egipto, con los millones de gente en las calles, reafirmó lo que dijimos y fue clara respuesta a los que pensaron que los artífices de las intifadas eran los norteamericanos o eran acciones promovidas desde afuera. La consolidación del papel de las fuerzas laicas, de izquierda, progresistas, nacionalistas, en el frente de Salvación, la alianza de izquierda o el movimiento Tamarrod fue factor decisivo para mantener el movimiento revolucionario y derrocar el régimen de la Hermandad Musulmana. Esta importante victoria repercutirá en todo el mundo árabe, pero no hay que hacerse ilusiones, esto no significa la derrota definitiva de la contraofensiva, seguirán tratando de abortar los resultados de esta segunda etapa. El PCL tiene conciencia de la necesidad de unir a todas las fuerzas de la izquierda en todo el mundo árabe y en cada país árabe, por lo que desde antes de la Intifada de Túnez propugnamos que se celebraran encuentros de la izquierda árabe, hasta ahora se han celebrado 4 encuentros, el último en junio de este año. Ya se han convertido en una sólida institución que trabaja por la formulación de un programa conjunto de la izquierda en cada país árabe y en el mundo árabe. Esta ha sido una herramienta para unir a la izquierda en más de un país árabe. Seguiremos trabajando por su fortalecimiento. -EGA. ¿Cuál es la valoración del PCL de la situación en Siria? -Las Intifadas se levantaron contra los regímenes oficiales árabes represivos y que trajeron a sus pueblos hambre y pobreza, y en que la dependencia económica del capitalismo y del imperialismo les llevó a la dependencia política del proyecto norteamericano israelí y a la traición desde Camp David, la normalización de relaciones con Israel, la afectación a la causa palestina que pasó a otro plano frente a los pueblos árabes. El régimen sirio, si bien era similar a los otros por la represión y limitación de las libertades o por la adopción de una política económica de apertura al mercado dando al traste con muchos de los logros sociales alcanzados anteriormente por el pueblo, por otro lado no se unió al proyecto norteamericano- sionista, ayudó a la resistencia palestina y libanesa y con sus alianzas a nivel regional con Irán y los países del BRIC. Esta contradicción del régimen facilitó a las fuerzas de la reacción árabe, Turquía, Occidente y los EEUU a movilizarse para cambiar el rumbo de las protestas que fueron inicialmente pacíficas contra la represión y exigiendo dignidad y libertad. Se aprovechó la presencia activa de fuerzas del islam político, salafistas y Hermandad Musulmana, se armó a estas organizaciones y a otras de la oposición siria vinculadas con el exterior y por otro lado el régimen siguió reprimiendo los movimientos populares, de manera que se desató una guerra civil real que amenaza con mantenerse por largo tiempo, a pesar de las victorias “cuantitativas” y no definitivas alcanzadas por el régimen en la ultima etapa.

Naturalmente, los beneficiarios principales son los EEUU e Israel, se desgasta el potencial de Siria y no puede así enfrentarse a los objetivos de ese plan. La situación en Siria, la correlación favorable al régimen, a nivel popular, militar y otros, las alianzas del régimen con China, Rusia e Irán y con Líbano, obstaculiza la opción de intervención directa de las fuerzas del imperialismo en Siria, y hace que resulte imposible, pues no cuentan con apoyo del Consejo de Seguridad y pudiera desatarse una guerra de mayor envergadura cuyas consecuencias serían incalculables. Por ello EEUU y sus aliados se limitarán al apoyo logístico y militar a la oposición a través del Golfo y de Turquía para extender la guerra en Siria y lograr un cambio de correlación favorable a la oposición armada. El encuentro de Ginebra se pospondrá por largo tiempo. -EGA- Los enfrentamientos cada vez más parecen adquirir un carácter de guerra confesional. ¿Se extenderá esto al Líbano? KH.-Hay que precisar la naturaleza de la pregunta, no es guerra contra shiitas o sunitas. El plan norteamericano pretende reorganizar la región de manera que puedan ejercer el control sobre sus riquezas. Y garantizar la seguridad del enemigo sionista, y para esto acuden a todas las vías posibles. Los elementos fundamentales del plan sionista norteamericano son: -Cambiar el carácter de la confrontación árabo-israel por otro confesional sunita-shiita. Avivar conflictos étnicos entre árabes y kurdos y entre árabes y persas. Estimular las contradicciones tribales. No importa quien apoye a los EEUU, lo importante es desunir a los árabes y que no apoyen la causa palestina. Los EEUU se aliaron a los shiitas en la batalla de Iraq y en otros casos se han aliado a otros. En Libia y Yemen se estimularon las contradicciones tribales. -Conspiración contra todas las fuerzas que se enfrentan a su proyecto, cualquiera que sea su carácter confesional. Están en contra de Hamas, de Hizbulá, de Siria. -El enfrentamiento a las verdaderas aspiraciones de los pueblos árabes a libertad, justicia, dignidad nacional, es lo que justifica la contraofensiva que dirigen los EEUU. Con relación al Líbano, el carácter multiconfesional, multisectario, la crisis del confesionalismo político hace que se multipliquen los enfrentamientos de carácter confesional. La política del gobierno es insuficiente, es como el avestruz. Todos los sectores en Líbano están vinculados a la crisis siria, inicialmente introduciendo armas y combatientes, apoyando a la oposición, luego Hizbulá anunció que entraba en la guerra para apoyar al régimen sirio. Esto dio lugar a que el Líbano se complicara con la crisis siria y se avivara el confesionalismo y se produjeran mayores enfrentamientos con carácter confesional, como los ataques al ejército desde Arsal a Saida, el carro bomba en el Sur, el disparo de cohetes contra la Bekaa y el Suburbio Sur. Nosotros condenamos esa política y llamamos a que se adopte una postura de interferencia positiva basada en tres aspectos: 1- Dar total apoyo al ejército libanés para que controle la frontera e impida el envío de armas y combatientes a Siria desde Líbano. 2- Apoyar el dialogo para la edificación de una Siria cívica, democrática, resistente a los proyectos foráneos, sobre todo el proyecto israelo-norteamericano.

3- Brindar atención oficial gubernamental a la cuestión de los refugiados sirios e impedir se manipule y comercie políticamente con su causa.

LA INSURRECCIÓN EGIPCIA NO FUE ESPONTÁNEA A LA SOMBRA DE LOS MILITARES Por Alain Gresh* http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/a-la-sombra-de-los-militares/ ¿Golpe de Estado? ¿Insurrección popular? ¿Nueva fase de la revolución? ¿Cómo calificar el movimiento masivo contra Mohammed Morsi, primer presidente civil democráticamente elegido en Egipto, tras su destitución, el pasado 30 de junio?

or supuesto, uno se puede sorprender al ver que una fuente militar certifica que catorce millones de egipcios (cifra que a veces llevan hasta los treinta y tres millones) salieron a las calles el 30 de junio de 2013, y al ver al Ejército facilitarles a los medios imágenes tomadas desde sus aviones para confirmar sus declaraciones (1). Por supuesto, uno se puede cuestionar cuando responsables del Ministerio del Interior festejan las más grandes manifestaciones de la historia de Egipto. Por supuesto, uno puede ser un poco escéptico acerca de las quince y hasta veintidós millones de firmas que consiguió el movimiento Tamarod (“Rebelión”) pidiendo la renuncia del presidente Mohammed Morsi, y sonreír cuando un “filósofo egipcio” asegura que “la Alta Corte Constitucional llevó a cabo un recuento” (2) de las mismas. No importa. Más allá de estas exageraciones, el país fue testigo el 30 de junio de su mayor movilización desde enero-febrero de 2011. En masa, los egipcios quisieron recordar sus exigencias de dignidad, de libertad, de justicia social. Quisieron dar a conocer su rechazo hacia la política de Morsi y de la organización que representa, los Hermanos Musulmanes. Creada en 1928, la cofradía atravesó un tormentoso siglo XX. Su historia está marcada por la represión, los arrestos, la tortura. Sin embargo, cada vez que se presentaba una ocasión, la organización lograba importantes éxitos electorales, ya fuera en escrutinios legislativos o profesionales (ingenieros, médicos, abogados, etc.). Durante décadas, su consigna (“El islam es la solución”), su red de solidaridad y la auténtica abnegación de sus militantes le confirieron un aura. Y le aseguraron una mayoría en el momento de las primeras elecciones legislativas libres (fines de 2011-principios de 2012), marcadas por la participación sin precedentes de treinta millones de egipcios. Más allá del núcleo duro de los simpatizantes, muchos votantes quisieron darle una oportunidad a la organización fundada por Hassan Al-Banna. “Ya probamos todo. Probamos con un rey; no funcionó. Después probamos el socialismo con [Gamal Abdel] Nasser, e incluso en los momentos más fuertes del socialismo todavía estaban los pachás del Ejército y de los servicios de inteligencia. Acto seguido probamos el centro, más tarde el capitalismo. […] Y no funciona. Así que ahora podríamos probar con los Hermanos Musulmanes, a ver si funciona. De cualquier manera, no tenemos nada que perder.” En un serpenteante relato de sus tribulaciones en medio de los embotellamientos de El Cairo prerrevolucionario, el escritor Khaled Al-Khamissi daba cuenta de este comentario de un taxista (3). En la primavera de 2013, el periodista adepto a las confidencias de esos mismos taxistas escuchó otra campana: los Hermanos Musulmanes “tampoco funcionan”. Lo que la represión no había conseguido, dos años y medio de vida pública y de debate pluralista, más abierto y frecuentemente polémico, lo lograron: expuestos a la luz y a la controversia, los Hermanos retrocedieron inexorablemente.

Incapacidad reformista

Desde hacía varios meses, las urnas confirmaban ese repliegue. En la primera vuelta de la elección presidencial, en mayo de 2012, Morsi consiguió tan sólo un cuarto de los votos y logró la mayoría en la segunda vuelta sólo gracias a quienes rechazaban a su adversario, el general Ahmed Chafik, el candidato del antiguo régimen. Algunos meses de un relativo estado de gracia le permitieron al presidente deshacerse, como quien no quiere la cosa, en agosto de 2012, del Consejo Superior de las Fuerzas Armadas (CSFA), responsable de la desastrosa transición luego de la caída de Hosni Mubarak y de violentas represiones, entre las que se cuenta la de octubre de 2011 contra una manifestación pacífica en solidaridad con los coptos (4). Pero después, el rais y su organización iban a ver cómo se debilitaba su popularidad. Y cómo sus resultados retrocedían en las elecciones estudiantiles en las universidades, pero también dentro de los sindicatos de periodistas o de farmacéuticos. Este fracaso tiene muchas explicaciones, y no todas son susceptibles de ser atribuidas a los Hermanos. Pero, fundamentalmente, la organización no fue capaz de adaptarse a la nueva realidad política pluralista, salir de su cultura de la clandestinidad, transformarse en un partido político, forjar alianzas. Es cierto, fundó el Partido de la Libertad y la Justicia (PLJ) (5), pero este partido permaneció totalmente sometido a la dirección de los Hermanos. Contando sus negociaciones con el PLJ, un cuadro del Partido Socialdemócrata nos decía que, a cada hora, había que suspender la sesión para que sus interlocutores pudieran consultar con la cofradía. Comprometidos a lo largo de la década de 1990 en un aggiornamento signado principalmente por la aceptación de las nociones de democracia y de soberanía popular, los Hermanos, bajo los golpes de la represión que le siguió a su éxito en las legislativas de 2005, otra vez se replegaron sobre sí mismos. Durante su congreso de 2009, el ala más conservadora, dirigida por el empresario Khairat Al-Shater, consolidó su posición e hizo a un lado a los elementos más abiertos, como Abel Moneim Aboul Fotouh. Claramente, no son su activismo religioso o su voluntad de aplicar la sharia [ley islámica] los que desanimaron a los egipcios: su balance en este campo es bastante pobre, lo que por otro lado les reprocha el poderoso partido salafista Al-Nour. En realidad, su incompetencia y su ineptitud para encarar reformas sorprendieron a más de uno. Organización conservadora, los Hermanos respetaron el orden establecido y no supieron hacer las alianzas que habrían posibilitado una transformación del aparato de Estado –Ejército, Policía o Poder Judicial–, que permaneció mayoritariamente fiel al antiguo régimen.

Fuerte tónica conservadora

En lo que respecta al movimiento social y a los sindicatos, su actitud fue semejante a la del antiguo régimen. “En el Parlamento –destaca la revista estadounidense Merip– los Hermanos rechazaron un proyecto de ley laboral que habría garantizado el derecho a formar sindicatos independientes por medio de elecciones libres. Propusieron ‘regular’ las huelgas y se posicionaron del lado de las patronales durante las salvajes huelgas que se extendieron luego de la destitución de Mubarak. A principios del verano, Egipto volvió a la lista negra de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) por haber omitido respetar las convenciones de las que es signataria. […] El gobierno de Morsi ignoró los mandatos del tribunal, que imponían revisar varias privatizaciones de empresas públicas malvendidas en la era Mubarak” (6). Aislado, el presidente Morsi se complicó, en noviembre de 2012, con una declaración constitucional que le atribuía plenos poderes. Incapaz de ponerla en marcha, movilizó a sus milicias e intentó colocar a sus hombres, dando lugar así a que se lo acusara de “hermanizar” el Estado (acusación poco consistente en la medida en que lo esencial de las instituciones escapaba a la autoridad del presidente). Pero sería ingenuo pensar que el levantamiento fue un resultado de este único rechazo. Los Hermanos le hicieron frente a una campaña de desestabilización orquestada por el antiguo régimen: disolución del Parlamento electo, rechazo por parte de la policía de garantizar el orden público y la

protección de sus oficinas (es significativo que el ministro del Interior fue removido de sus funciones luego del 30 de junio), absolución por los tribunales de los responsables de la época Mubarak. Cuando, en mayo de 2013, Reporteros Sin Fronteras (RSF) ponía al gobierno egipcio en su lista de “depredadores” de la libertad de prensa (un calificativo que nunca se utilizó contra el régimen de Mubarak), estaba en marcha, según el sitio The Arabist (30 de junio), una “máquina implacable de demonización mediática y de deslegitimación de la administración Morsi, mucho más allá de los errores de los que Morsi es responsable. Cualquiera que mire CBC, ONTV, Al-Qahira wal-Nas y otros canales satelitales, o lea diarios histéricos como Al-Destour, Al-Watan o Al-Tahrir (y, cada vez más, Al-Masri Al-Youm), es atiborrado con una propaganda anti Morsi permanente”. La oposición, agrupada en torno al Frente de Salvación Nacional (FSN), participó en esta campaña y no dudó en hacer causa común con el antiguo régimen. Como lo remarcaba Esam Al-Amin en la víspera del 30 de junio, “en la batalla ideológica entre ex compañeros revolucionarios, los fouloul [ci-devant, partidarios del antiguo régimen] fueron capaces de reinventarse y de volverse actores principales junto a los grupos laicos contra los Hermanos y los islamistas. Recientemente, [Mohammed] El-Baradei se declaró listo a recibir en su partido a todos los elementos del Partido Nacional Democrático de Mubarak, mientras Hamdeen Sabbahi [candidato desafortunado en la elección presidencial que quedó en la tercera posición y que se reclama del nasserismo] afirmaba que la batalla contra los fouloul era ahora secundaria, siendo el principal enemigo los Hermanos y sus aliados islamistas” (7). La fascinación de Sabbahi por el Ejército y por Nasser parece haberlo conducido a este viraje, más extraño aun si se considera que, durante las elecciones legislativas, su partido estaba aliado con los Hermanos Musulmanes.

Contra las versiones ingenuas

Más allá de esa “postal” que muestra a jóvenes desorganizados que voltean a un “dictador islamista” se perfila un cuadro menos luminoso. Mahmoud Badr, uno de los fundadores de Tamarod, puede jactarse – ¿inocencia o estupidez?– de que el comandante en jefe del Ejército, durante su primer encuentro, se haya plegado a su crítica: “Se lo digo yo, usted es el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, pero el pueblo egipcio es su comandante en jefe y le ordena colocarse inmediatamente a su lado y pide elecciones anticipadas” (8). Más realista, una militante del movimiento explica que se retiró en el momento en que vio aparecer caras que conocía “como pertenecientes a los fouloul o que justificaban las acciones de la Seguridad del Estado”. Mil y un indicios prueban que el movimiento fue preparado durante mucho tiempo por el Ejército, con garantías concedidas por Arabia Saudita y por los Emiratos Árabes Unidos, la Seguridad del Estado y los fouloul. El multimillonario Naguib Sawiris, relacionado con el antiguo régimen, reconoció haber financiado a los militantes de Tamarod, sin que ellos lo supieran, mientras Tahani Gebali, ex vicepresidente de la Alta Corte Constitucional, explicaba cómo ella misma los había ayudado a armar una estrategia para hacer intervenir al Ejército (9). La misma Gebali también declaraba, luego de la caída del régimen de Mubarak del cual era un pilar, que era necesario que las personas diplomadas dispusieran de más votos que las otras en las elecciones (10). Y, como por milagro, luego de la caída de Morsi, las penurias, principalmente la de nafta, se terminaron; los policías volvieron a las calles. Pero uno puede dudar de que vayan a proteger a las mujeres: el 3 de julio, día del derrocamiento de Morsi, un centenar de agresiones sexuales y violaciones fueron perpetradas en la plaza Tahrir (11). ¿Y no es el general Abdel Fatah Sissi, el nuevo hombre fuerte del régimen, quien se hacía el apóstol de los “tests de virginidad” realizados en ese momento por el Ejército a manifestantes? El derrocamiento de Morsi no amplió el pluralismo de los medios en Egipto. Al contrario: una media docena de cadenas fue prohibida, periodistas arrestados, los medios extranjeros denunciados con los mismos tonos que la prensa oficial bajo Mubarak. La continuidad de un Ministerio de Información no augura nada bueno.

Mientras que los medios del Estado se niegan a cubrir las manifestaciones organizadas por los Hermanos – que sin embargo reúnen a cientos de miles de personas–, prácticamente la totalidad de los periodistas se pliega al discurso oficial, al tono nacional-chovinista. Las amenazas y las presiones apuntan, más allá de los Hermanos, a todos aquellos que critican la línea oficial. Hay que leer de todos modos la bella y valiente toma de posición del célebre cómico Bassem Youssef que, aunque enemigo declarado de los Hermanos, denuncia la deshumanización de sectores enteros de la sociedad (12). Caso de escuela: la cobertura de la represión del sit-in (la “sentada”) organizado el 8 de julio de 2013 por los Hermanos ante el sitio de la Guardia Republicana, en el que murieron al menos cincuenta personas. Interrogado acerca del uso excesivo de la fuerza, el portavoz del Ejército afirmó, sin reír (ni llorar): “¿‘Uso excesivo’? Habría sido excesivo si hubiéramos matado a trescientas personas”. El sitio en lengua inglesa Madamasr, uno de los pocos que no sucumbió a la propaganda, publicó testimonios abrumadores para el Ejército, sobre todo las imágenes de un videasta que trabajaba para un canal de la oposición y que mostraban soldados disparando, sin ningún motivo. Su video fue rápidamente levantado del sitio, “a la espera de la posición oficial del Ejército”. A un artículo publicado por el diario Al-Chourouk, que citaba a varios residentes del barrio que confirmaban que el Ejército había sido el primero en disparar, también lo sacaron de circulación (13). Todos los poderes están en este momento en manos de Adly Mansour, miembro de la Alta Corte Constitucional, la cual presidió durante… cuarenta y ocho horas. El hombre cuya carrera está ligada al antiguo régimen y a Arabia Saudita, donde trabajó por más de diez años, promulgó una “hoja de ruta”, una declaración constitucional que le concede plenos poderes ejecutivos y legislativos y prevé elecciones para dentro de seis meses (14). Algunos artículos discutidos de la ex Constitución fueron abolidos: rol consultativo de la Universidad Islámica Al-Azhar en la elaboración de las leyes, limitación del pluralismo sindical, etcétera. Pero el Ejército está al resguardo de cualquier control civil. Curiosamente, en el campo religioso, la nueva formulación adoptada marca un retroceso, ya que los “principios de la sharia” siguen siendo la “principal fuente de la legislación”, pero esta vez se aclara que deben ser conformes a la tradición sunnita. Este texto puso en un aprieto al FSN, que lo condenó antes de retractarse. Tamarod, por su parte, hace campaña por la prohibición de los Hermanos Musulmanes y de los partidos salafistas (que representan, al menos, ¡a un tercio de la población!). El nuevo gobierno confirmó el rol clave del general Sissi, quien, nombrado viceprimer ministro, sigue siendo ministro de Defensa. Dominan, en el campo económico, partidarios del liberalismo y muchas figuras del antiguo régimen. El nombramiento en el Ministerio de Trabajo del líder de un sindicato independiente es la única buena noticia. Durante mucho tiempo, la opinión pública se preguntó si, una vez elegidos los Hermanos, habría “pasaje de vuelta”. La pregunta que se hace ahora es si, habiendo sido derrocado el presidente electo, Egipto volverá a tener elecciones pluralistas. Aunque algunos de los responsables, entre quienes se cuenta El-Baradei, afirman la necesidad de incluir a los Hermanos, se quedan callados frente a la represión a todos los niveles ejercida por la Seguridad del Estado y por el Ejército, por fuera de cualquier acción legal, contra sus militantes, calificados como “terroristas” por los medios y tratados como tales. ¿Cómo interpretar, si no, que se haya abierto una investigación sobre la evasión de Morsi y de varios dirigentes de los Hermanos, durante el levantamiento de enero-febrero de 2011, de la prisión de Wadi AlNatroun? Desde hace meses, la prensa, alimentada por los moukhabarat (servicios de inteligencia), multiplicaba las “revelaciones” sobre este incidente, llegando a decir incluso que los Hermanos habían sido ayudados por Hamas, Hezbollah y Al-Qaeda, lo que alimenta una violenta campaña antipalestina y chovinista (15). ¿Para cuándo la acusación a los militantes por haber exigido, en enero-febrero de 2011, la caída de Mubarak? ¿Se trata de llevar a los Hermanos a la violencia –incluso de provocarla– para permitir un restablecimiento del estado de sitio en nombre de la “guerra contra el terrorismo”? La inestabilidad en el Sinaí, que no

empezó con Morsi, ¿servirá de pretexto? El desafío es incluir en el juego político a todas las fuerzas, sin exceptuar a los islamistas y a los Hermanos, que deberán aprender de su fracaso y dar vuelta la página de la clandestinidad. Cerrándoles la puerta, el Ejército y sus aliados los empujan, al revés, hacia un camino radical que puede costarle caro a Egipto. 1. Sobre estas estimaciones, véase Ruth Alexander, “Counting crowds: Was Egypt’s uprising the biggest ever?”, BBC Magazine, Londres, 16-7-13. 2. Ayyam Sureau, Le Figaro, París, 30-6-13. 3. Khaled Al-Khamissi, Taxi, Actes Sud, París, 2009. 4. Véase Alain Gresh, “¿Hacia una dictadura en Egipto?”, Le Monde diplomatique, edición Cono Sur, noviembre de 2012. 5. Véase Gilbert Achcar, “Una ‘transición dentro del orden’”, Le Monde diplomatique, edición Cono Sur, marzo de 2011. 6. “Egypt in Year Three”, Merip, Washington DC, 10-7-13. 7. Esam Al-Amin, “Egypt’s fateful day”, 26-6-13, www.counterpunch.org 8. Reuters, 7-7-13. 9. Ben Hubbard y David D. Kirkpatrick, “Sudden improvements in Egypt suggest a campaign to undermine Morsi”, The New York Times, 10-7-13. Véase también Claire Talon, “Un coup préparé à l’avance par les militaires?”, Le Monde, 7/8-7-13. 10. Véase Alain Gresh, “Egipto: primeros pasos de la revolución”, Le Monde diplomatique, ed. Cono Sur, julio de 2011. 11. Véase la entrevista con Aaalam Al-Wassef en France-Inter, 4-7-13, www.franceinter.fr 12. Bassem Youssef, “Alas, nobody lives here anymore”, 17-7-13, www.tahrirsquared.com 13. Ali Abdel Mohsen, “The killing of islamist protesters: State censorship or self-censorship?”, 9-7-13, http://madamasr.com 14. Cfr. “In the interim”, 12-7-13, http://madamasr.com 15. Dina Ezzat, “Wild rumours of Hamas interference in Egypt find audience”, Ahram Online, 12-5-13. * De la redacción de Le Monde diplomatique, París.

Traducción: Aldo Giacometti

MUGABE, DE LÍDER REVOLUCIONARIO A DESPIADADO Y ETERNO PRESIDENTE, POR JON LEE ANDERSON August 1st, 2013 → 11:01 pm @ gabriel pasquini 1

http://www.elpuercoespin.com.ar/2013/08/01/mugabe-de-lider-revolucionario-a-despiadado-y-eternopresidente-por-jon-lee-anderson/ 421701-robert-mugabe Los primeros resultados muestran que la elección del miércoles (31 de julio de 2013) en Zimbabue, la séptima desde que el país ganó su independencia en 1980, ha conferido la gloria del triunfo, una vez más, a Robert Mugabe, quien ya tiene 89 años. Aun antes de que cerrara la votación, los opositores políticos de Mugabe ya denunciaban un amplio fraude, incluyendo la privación de derechos de hasta un millón de votantes. El jueves, Morgan Tsvangirai, el comparativamente joven (tiene 69) rival de Mugabe, calificó la elección de una “gran farsa”. Mugabe, que ha liderado Zimbabue durante 33 años, parece decidido a morir en el cargo. En verdad, pocos políticos de la era moderno han sido tan tozudamente duraderos o tan malévolamente determinados a permanecer, estilo fantasma, como Mugabe (una excepción notable es Fidel Castro, aunque dimitió en 2008, después de 49 años en el poder). A principios de esta semana, Mugabe, el Emperador Palpatine de la política africana, dio una conferencia de prensa en Harare, flanqueado por leones y cheetas rellenos, en la que prometió “rendirse” si perdía la elección. Pero, al hablar con Lydia Polgreen del New York Times, se burló de que su edad fuera una debilidad política: “89 años no significan nada. No me han cambiado, ¿no? No me han marchitado, no me han vuelto senil todavía, no. Todavía tengo una idea, ideas que necesitan ser aceptadas por mi pueblo”. El record de Mugaban, aún más que su venenoso narcisismo, desmiente la convicción de que es el único que merece gobernar su patria natal. En el curso de su larga y tortuosa carrear, Mugaba ha atormentado a sus críticos y superado en astucia a sus enemigos, aparentemente con el solo propósito de seguir gobernando. La edad le ha añadido un toque de absurdo decoro, especialmente desde la muerte de su esposa durante tres décadas, Sally Hayfron, en 1992, y su nuevo matrimonio, cuatro años más tarde, a la edad de 71, con su secretaria Grace, cuarenta y un años menor. En 2005, Grace y él se mudaron a una mansión de 25 cuartos que habían construido con fondos de origen desconocido. Grace construyó otra mansión, llamada Graceland, que fue vendida más tarde al gobierno libio, entonces dirigido por Muammar Gadafi. Mugabe mismo admitió que algunos “gobiernos extranjeros” habían contribuido a su lujoso estilo de vida; el rumor en Harare era que había dinero chino involucrado. China hizo lucrativas incursiones en Zimbabue tras la decisión de Mugabe en 2000 de “dar poder” a la mayoría negra sin tierras del país despojando violentamente a los granjeros blancos de sus tierras (por entonces, eran la espina dorsal de la próspera economía agrícola del país). Los pobres no fueron los beneficiarios de esta acción. En cambio, la campaña resultó en numerosas muertes y fue seguida por el colapso de la economía. La moneda nacional perdió todo valor y la hiperinflación alcanzó el 230.000.0000% antes de que el gobierno parara de contar e imprimiera rápidamente billones de dólares zimbabuenses. Eventualmente esta moneda fue eliminada en favor del dólar norteamericano. En un éxodo a toda escala, millones de pobres se marcharon en busca de trabajo a países vecinos. En junio de 2008, conduje quinientas millas a través de las que alguna vez habían sido tierras fértiles – estaban áridas y llenas de malezas y, en una zona, campesinos pobres hachaban cítricos para obtener leña. Mientras todo ello ocurría, Mugabe hacía acuerdos privados con empresarios extranjeros, incluyendo compañías mineras, ipad-art-wide-mugabe2-420x0que rápidamente se mudaron a la tierra tomada. Atravesé en auto uno de estos emprendimientos, donde un par de decenas de trabajadores zimbabuenses construían un campamento de trabajo supervisados por varios chinos. Habían traído equipo de minería y estaban detonando explosivos en las colinas cercanas. Durante los dos años siguientes, los granjeros vecinos me enviaron fotos que habían tomado de este emprendimiento en rápida expansión. Al final era enorme. Su economía no podía ser explicada en sus libros contables; habían existido continuos informes sobre sobornos y retornos en el círculo de Mugabe. Muchos de los aparentes beneficiarios son miembros de las fuerzas de seguridad, que se quedaron con algunas de las mejores granjas. Hijo de un carpintero, educado por misioneros y que llegó a obtener hasta siete títulos universitarios (varios de ellos por correspondencia), Mugabe se radicalizó en la Ghana de Nkrumah , regresó a su patria, entonces una colonia británica llamada Rodesia del Sur, y se unió a la temprana lucha por la independencia en contra del dominio de la minoría blanca. Habiendo desarrollado su talento como orador, se convirtió en la cabeza del clandestino Frente Patriótico-Unión Nacional Africana Zimbabuense (ZANU-PF, por sus siglas en inglés),

pero en 1964 fue arrestado y encarcelado bajo el cargo de subversión, y pasó los siguientes once años en prisión. Emergió de allí para liderar el ZANU-P.F. a lo largo de la sangrienta guerra de independencia, en los ‘70s, y las negociaciones, organizadas por los británicos, que terminaron con el dominio de la minoría blanca. Llegó al poder en 1980 como el primer líder negro de su país. Pero, pese a una apariencia inicial de moderación —sus gestos incluyeron permitir a los blancos conservar sus tierras y dar la bienvenida a otros para que vineran a invertir—, Mugabe demostró no ser un Nelson Mandela. Primero se dedicó a consolidar su poder acabando con sus antiguos compañeros revolucionarios del ZAPU, una facción rebelde liderada por Joshua Nkomo. Así como el ZANU era dominado por el grupo étnico de Mugaba, los shona, el ZAPU de Nkomo representaba a los sureños ndebele, que hablaban zulu. Para 1986, hasta 20.000 ndebele habían sido asesinados en las purgas de Mugabe, en las que utilizó a consejeros militares de Corea del Norte. En el tómenlo-o-déjenlo acuerdo de reconciliación que siguió, Nkomo acordó fusionar su ZAPU con el de Mugabe y convertirse en su vicepresidente, un título sin poder real que retuvo hasta su muerte, en 1999. La manera en que Mugabe lidió con Nkomo fue un sangriento presario del juego de cooptación despiadada que usaría en 2008 contra Morgan Tsvangirai, del Movimiento por la Cooperación Democrática (o M.D.C. en inglés). Tsvangirai había perdido una elección previa ante Mugaba, pero en marzo de 2008 ganó la primera ronda con 47 por ciento de los votos emitidos frente al 42 por ciento de Mugabe. En represalia, éste desató pandillas armadas que aterrorizaron a los simpatizantes de Tsvangirai, que fueron violados, cortados, golpeados y atacados a tiros. Más de doscientas personas murieron. Al final, Tsvangirai huyó a esconderse. En la segunda rueda, realizada en junio, Mugaba no tenía oposición y ganó sin problemas. Para septiembre, sin embargo, Tsvangirai había sido atraído a conversaciones con Mugaba con la perspectiva de un acuerdo para compartir el poder. Durante las negociaciones, frustrado, Tsvangirai me dijo: “Estoy intentando conseguir un buen trato de un mal hombre”. No mucho después, como Nkomo antes que él, Tsvangirai sucumbió y tomó el puesto, así como los vacíos privilegios, de Primer Ministro. Y así continua. Durante los últimos cinco años, Tsvangirai y muchos de los dirigentes de su MDC –alguna vez desposeídos opositores, ahora parte del gobierno de Mugabe—han sido vistos por sus compatriotas disfrutando de las prebendas del poder y el privilegio. Sea que perdieron genuinamente en la votación o que meramente dejaron que los engañaran, el resultado es el mismo: Robert Mugaba, presidente de por vida. Los perdedores, como siempre, son los zimbabuenses de a pie, que merecen un líder mejor que un hombre que se ha inflingido a sus compatriotas durante demasiado tiempo y que claramente ha perdido toda conexión entre su ego y su conciencia hace ya mucho.

NORTEAMÉRICA

¿NECESITAMOS EMPRESAS EXTRANJERAS? Antonio Gershenson http://www.jornada.unam.mx/2013/08/11/opinion/017a1pol Vemos publicado que con la próxima apertura de Pemex sólo habría un alza marginal en la economía, y ya de por sí como estamos. Ahora, que se dice que en unos días se anunciará el camino para esta entidad petrolera, tenemos que revisar que con las petroleras internacionales, ya tenemos una declinación. Lo poco de áreas que aún crece no es de trasnacionales, sino de Pemex en lo básico. Ya hemos mencionado el ejemplo del Litoral de Tabasco, que en aproximadamente 10 años ha aumentado su petróleo crudo ocho veces, y su gas ocho y medio. Pero los políticos y jefes de Pemex no hablan de que a esta zona se les aumente el presupuesto ni el número de perforaciones. De las empresas privadas y sobre todo las trasnacionales sí hablan quienes tienen mucho dinero y altos puestos. No hablan de la baja en la producción de estas presas. No mencionan a las siete trasnacionales de Burgos que son virtualmente dueñas de todo ahí para producir gas natural... en decadencia. En cinco años ya sólo producen 83 por ciento de gas; sin embargo, el que gasta el dinero es Pemex: tenía asignado un

presupuesto en 2012 de 18.7 mil millones de pesos, pero, en realidad, durante ese año gastó 25 mil millones. Ya habíamos mencionado que Veracruz, con puro contratismo con empresas privadas, en seis años redujo su producción de gas a 55 por ciento. Otro caso, de prácticamente puros contratos, por tres y cuatro años, el dineral y una producción ridícula, es Chicontepec. Presumían de su producción, pero en todo 2012 produjo 69 mil barriles diarios, frente a 319 mil de Litoral de Tabasco. Éste tuvo un presupuesto ejercido en ese año de 3 mil 746 millones de pesos diarios, frente a 29 mil 674 millones de pesos en Chicontepec, casi 10 veces más caro por una quinta parte de la producción. La productividad promedio por pozo en Chicontepec es de 25 barriles de crudo diarios. En el sureste hay varios lugares en los que se han descubierto y desarrollado pozos que producen miles de barriles diarios. Ya en este año, la producción de crudo en Chicontepec va en plena baja. De su producción en enero, 75 mil barriles diarios, cayó a 65 mil en julio, 68 por ciento de la producción del principio del mismo año. Vamos a comparar la exploración y obtención de reservas probadas de gas natural en varios años: 2008: Litoral de Tabasco, 63 por ciento del total nacional. Burgos, 7 por ciento. 2009: Litoral de Tabasco, 55 por ciento del total nacional, Burgos, 10 por ciento. 2010: Litoral de Tabasco, 54 por ciento del total nacional, Burgos, 4 por ciento. 2011: Litoral de Tabasco, 46 por ciento del total nacional, Burgos, 11 por ciento. Ya vimos la diferencia de costos entre los dos casos, y ahora vemos la de la obtención anual de reservas probadas de gas natural. Entonces, querer entregar a empresas privadas los bienes de Pemex, no sólo no es productivo para el país, sino que se pierden los bienes nacionales productivos que muestran ser los mejores para México. En otra área, las refinerías deben ser también de producción nacional, pues se crean empleos en el país, se consumen materias primas nacionales, etcétera. Los hechos, aunque se ha hablado de entregarlas a empresas trasnacionales –lo que también es negativo–, han sido que cuando la derecha se impone no se construye ninguna refinería. Desde que llegaron al poder los derechistas, en 1982, así ha sido, y sólo se ha hablado de refinerías por los gobernantes. Se perdieron 40 años. El presidente elogió el petróleo en Brasil. Pero allí hay cinco refinerías en construcción que lleva a cabo la empresa pública Petrobras. Las palabras se las lleva el viento. Sí, debemos impulsar la construcción de refinerías por Pemex. Es elemental, pues importaríamos menos gasolinas y otros combustibles; sería más barata y habría más empleos no sólo en la construcción, sino por todos los componentes que se puedan producir o armar aquí. Esto complementa más lo que necesita el país. Y debe ser tomado en cuenta para fijar el programa de energía. [email protected]

MÉXICO, CONDENADO A SER IMPORTADOR NETO DE ALIMENTOS BÁSICOS De 1989 a la fecha pasó de la autosuficiencia en producción de arroz a generar sólo 10% del consumo interno del grano Rosa Rojas http://www.jornada.unam.mx/2013/08/10/politica/014n1pol Periódico La Jornada Sábado 10 de agosto de 2013, p. 14 Adalides del libre comercio –con 12 tratados firmados con 44 países y nueve acuerdos en el contexto de la Asociación Latinoamericana de Integración–, los gobiernos mexicanos han sido tan aplicados en la ejecución de las políticas neoliberales que, de 1989 a la fecha, pasó de la autosuficiencia en la producción de arroz a primer importador mundial del grano palay (con cáscara), y los productores nacionales son una especie en vías de rápida extinción. El país genera apenas 10 por ciento de su consumo de ese cereal, que ronda en un millón 200 mil toneladas; el resto proviene principalmente de Estados Unidos, pero también de naciones como Pakistán, Vietnam o China, reconoció en entrevista el director general de Fomento a la Agricultura de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Jorge Kondo López. También ex secretario de Agricultura de Sinaloa, coincidió con lo expresado a La Jornada por los dirigentes arroceros Alejandro Díaz Hartz y Luis Bueno Torio: se requiere un plan de choque para rescatar el campo arrocero o, como definió el fucionario: medidas para mantener la llama prendida de la producción nacional, tanto de arroz como de oleaginosas, rubros en los que México depende en 95 por ciento de las importaciones. Las oleaginosas representan importaciones por 2 mil 500 millones de dólares (mdd). El arroz, unos 400 mdd. ¿Cómo se llegó a este desastre? La élite política decidió modernizar el campo mexicano de acuerdo con las directivas para América Latina del Consenso de Washington (que se habían implantado a sangre y fuego en el Chile de Augusto Pinochet) –privatización, apertura comercial a rajatabla, eliminación de subsidios–, primero con el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio y después con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ya durante el régimen de Carlos Salinas de Gortari. El primero de enero de 1994, cuando entraba en vigor dicho acuerdo, estalló en Chiapas la rebelión del Ejército Zapatista de Liberación Nacional. En una publicación sobre agricultura sostenible, el Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria, de la Cámara de Diputados federal, señala que a países como el nuestro se les condenó a ser importadores netos de sus alimentos básicos. La propuesta para México es que sembremos en lo que seamos competitivos y tengamos ventajas comparativas, como hortalizas y frutas tropicales, y que Estados Unidos nos abastezca de granos, básicamente maíz y trigo. Hay continuidad en las políticas: el ahora titular de la Sagarpa, Enrique Martínez, mencionó en una entrevista televisiva el pasado 25 de julio que el plan del gobierno del pre-sidente Enrique Peña Nieto es dar seguridad alimentaria, sin que esto quiera decir que vamos a producir todo lo que consumimos, porque además de ser poco factible no es conveniente. Mencionó que 57 por ciento de lo que se consume en México se produce aquí mismo y la aspiración es llegar al 75 por ciento recomendado por la FAO. Agregó que sale más barato importar arroz y soya que producirlos aquí, lo cual no quiere decir que no produzcamos y hay que aspirar a producir más. México tiene buen potencial, pero se requiere de muchísima agua, así que no son cultivos en donde nosotros aspiremos a ser autosuficientes.

Kondo López apuntó que lo que quiso dar a entender el titular de la Sagarpa es que hay que hacer una reconversión regional. Citó que en Sinaloa, cuando escaseó el agua, se dejaron de producir 500 mil toneladas de arroz, pero se producen 5 millones de toneladas de maíz. Hay que cultivar el arroz en el sureste, donde llueve mucho, indicó. Bueno Torio, ex presidente y actual vicepresidente del Consejo Mexicano del Arroz, relató que en 1989 se abrieron las fronteras al arroz asiático, con un arancel de 20 por ciento. El productor mexi-cano tenía 70 años vendiendo bajo un esquema de precios de garantía, nunca lo obligaron a ser eficiente... y de repente se le puso a competir con Vietnam, donde el arroz se da solo, porque hay lluvias monzónicas 100 días al año... y la gente trabaja por dos o tres dólares al día. La debacle vino porque llegó arroz de Vietnam, 40 o 50 por ciento más barato que el nacional, señaló por separado Díaz Hartz, presidente del Consejo Nacional de Productores de Arroz de México. Explicó que entre 1989 y 1992 desapareció 50 por ciento de los 25 mil productores de arroz que sembraban unas 265 mil hectáreas y cosechaban unas 290 mil toneladas, poco más de lo que se consumía entonces en el país. Importado desde 1993, 50% del consumo En 1993 se logra el cierre de las fronteras, pero ya se importaba 50 por ciento del consumo. En 1994 llega el TLCAN. Después, Estados Unidos expide una Farm Bill (Ley Agrícola) fijando subsidios altísimos a los productores de arroz para que se fomentara la producción... para 1999 ya estábamos importando 85 por ciento de arroz palay de EU. En paralelo, quiebran los industriales propietarios de los molinos que secan, descascarillan y empacan el arroz, de los que había unos 200 hace 30 años y ahora quedan quizá unos 14, aunque algunos no están funcionando, informó en Palizada, Campeche, Federico Ayala. En el rancho de los Ayala, Laguna Blanca, donde ahora se siembran unas 100 hectáreas de arroz orgánico, la beneficiadora llegó a procesar hasta seis mil toneladas del cereal al año. Ahora prácticamente está parada. En 2013, informó Díaz Hartz, quedan en situación precaria 3 mil 310 productores en 14 estados del país que, si bien les va, sembrarán 34 mil 650 hectáreas (en 2009 se sembraron 60.8 mil hectáreas) para una producción estimada en 174 mil 300 toneladas. Los principales estados productores son: Campeche, con 9 mil hectáreas; Veracruz, 10 mil; Nayarit, 4 mil, y Michoacán 3 mil hectáreas. Morelos, con mil 200 hectáreas, es significativo porque produce una variedad especial de arroz grueso, con denominación de origen, Morelos, muy apreciada por los consumidores. Los rendimientos promedio de arroz por hectárea son de 4.32 toneladas en la zona del sureste, 5.88 en el occidente, llegando a siete en Sinaloa y 8.65 en la zona centro, con un pico de 9 a 10 toneladas en Morelos. Cultivo en riesgo de desaparecer Díaz Hartz coincidió con Bueno Torio en que por lo menos las importaciones de arroz palay desde Estados Unidos, que en 2012, según datos de la Sagarpa, fueron de 698 mil 241.33 toneladas, con valor de 272.94 millones de dólares, dan trabajo a las beneficiadoras en México porque viene con cáscara, acá se procesa y hay trabajo en la industria y en la cadena de distribución. No ocurre lo mismo con el arroz asiático, que llega ya pulido, justo para empacarlo y ponerlo en los anaqueles, cuya importación autorizó la Secretaría de Economía en 2008, cuando hubo una crisis alimentaria y abrió las fronteras a todos los países, aun a aquellos con los que no tenemos TLC. Eso provocó una nueva debacle porque llegaron arroces de mala calidad a precios desleales, de acuerdo al precio internacional, y no se ve voluntad de esa dependencia para imponerles aranceles.

Se le preguntó a Kondo López si hay alguna posibilidad de que se ponga en marcha el plan de choque que demanda el campo arrocero. Contestó que no será para mañana pero las organizaciones de productores han conversado con el secretario Martínez y el subsecretario Jesús Aguilar sobre un plan emergente, para mantener un nivel mínimo de reserva técnica; no pretende en el corto plazo alcanzar un nivel de suficiencia sino que no se nos desaparezca el cultivo definitivamente.

ACTUALIZACIÓN SOBRE LA GUERRA CON AVIONES NO TRIPULADOS EL ARTE DE GANAR ENEMIGOS Lisa Hajjar Jadaliyya.com Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172228 El 1 de agosto de 2013, el Secretario de Estado estadounidense John Kerry hizo un anuncio en Islamabad, adonde se había desplazado en un intento de resucitar las estratégicas negociaciones bilaterales entre EEUU y Pakistán. Durante la conferencia de prensa, dijo que EEUU se había comprometido a poner fin a la guerra con aviones no tripulados contra Pakistán en un futuro próximo. “Pienso que el Presidente Obama tiene un calendario muy claro y confiamos en que sea muy, muy pronto”. El plan para reducir la guerra con aviones no tripulados era la condición previa fundamental para retomar las negociaciones entre los dos países, rotas en noviembre de 2011 tras un ataque aéreo que mató accidentalmente a veinticuatro soldados pakistaníes. En aquel entonces, las negociaciones iban ya renqueando en medio de crecientes sentimientos antiestadounidenses a causa de los ataques con aviones teledirigidos, la indignación provocada por los hechos acaecidos cuando un contratista de la CIA mató a tiros a dos hombres en Lahore y la última invasión del territorio pakistaní para asesinar a Obama bin Laden. Según una reciente encuesta Gallup, el 92% de la población está en contra del gobierno de EEUU. Aunque Pakistán había permitido con anterioridad que EEUU emprendiera ataques con aviones teledirigidos, la postura de la oposición se ha convertido en la nueva posición oficial, como afirma implícitamente el comunicado de Kerry. En efecto, momentos después de haber jurado su puesto en junio, el Primer Ministro Nawaz Sharif pedía el fin de la guerra con aviones no tripulados en las zonas tribales del país y junto a la frontera con Afganistán. La actual postura pakistaní contra la guerra con aviones no tripulados en su país está motivada por la creciente cifra de víctimas civiles. En febrero de 2012, el Bureau of Investigative Journalism (BIJ), con sede en Londres, informaba que entre 2009 y 2011, la CIA había emprendido asimismo la práctica de los segundos ataques (doble golpe), que matan e hieren a los rescatadores y atacan los funerales. Supuestamente, los segundos ataques habían terminado en julio de 2011. Sin embargo, en el mismo día en que Kerry hacía su anuncio en Islamabad, el BIJ informaba de nuevos hallazgos de cinco segundos ataques de la CIA contra el personal de rescate entre el 23 de mayo y el 23 de julio de 2012. En junio de 2012, Christof Heyns, el Relator Especial de la ONU para las Ejecuciones Sumarias, Arbitrarias y Extrajudiciales, definió como crimen de guerra los segundos ataques que ponen en peligro a los rescatadores. En respuesta a la afirmación de Heyns, el representante de Pakistán en Ginebra, Zamir Akaram, instó al Consejo de los Derechos Humanos de la ONU a investigar la utilización de aviones no tripulados y exigió a EEUU “que respetara la cada vez más extendida opinión internacional” de que el uso de aviones no tripulados “no solo viola nuestra soberanía sino que, bajo nuestro punto de vista, viola también la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional”.

El 9 de mayo de 2013, el Tribunal Supremo de Peshawar (TSP) dictaminó que la guerra con aviones no tripulados de EEUU viola el Derecho Internacional, la soberanía del país y constituye un crimen de guerra. Esa sentencia se produjo tras la presentación de dos peticiones constitucionales por parte de la Fundación por los Derechos Fundamentales de Pakistán, denunciando el fracaso del gobierno a la hora de proteger a sus ciudadanos. El TSP ordenó al gobierno que emprendiera acciones inmediatas para impedir futuros ataques, llevara la cuestión de los ataques estadounidenses con aviones no tripulados en Pakistán ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (donde Pakistán es en la actualidad miembro no permanente) y, si se bloqueaba esa opción, solicitara una reunión urgente de la Asamblea General. Por último, el tribunal instó al gobierno a que pidiera indemnizaciones a EEUU por cada civil asesinado por un avión teledirigido. En julio, el BIJ consiguió un informe secreto interno pakistaní sobre la muerte de civiles. Ese informe, que examinaba setenta y cinco ataques de los aviones teledirigidos de la CIA entre 2006 y octubre de 2009, halló que al menos 147 del total 746 de muertos eran civiles, 94 de ellos niños. Estas cifras se basaban en las investigaciones efectuadas sobre el terreno por funcionarios locales y, por tanto, contradicen con toda autoridad la versión oficial estadounidense de que los ataques de aviones no tripulados no suponen gran peligro para los civiles. John Brennan es uno de los defensores más acérrimos de la línea de que las víctimas civiles son escasas. Durante la vista de su confirmación en el Congreso en febrero de 2013, la senadora Dianne Feinstein, que preside el Comité de Inteligencia del Senado, trató de validar las afirmaciones de Brenan. “Durante los últimos años, este Comité ha llevado a cabo controles importantes sobre la conducta del gobierno en relación a los ataques selectivos y las cifras que hemos obtenido de la rama del ejecutivo, que hemos hecho todo lo posible por verificar, confirman que cada año el número de víctimas civiles consecuencia de esos ataques ha sido por lo general de un solo dígito”. Chris Woods, investigador de los aviones teledirigidos del BIJ, fue entrevistado por Democracy Now tras la publicación del informe interno pakistaní. Explicó lo que hizo tras conocer las afirmaciones de Feinstein: “Me puse en contacto con cada organización que había llevado a cabo importantes investigaciones de campo en Pakistán sobre la muerte de civiles, independientemente del resultado. Todas y cada una de esas organizaciones me dieron la misma respuesta: ‘Ningún miembro de un comité de supervisión del congreso, de un comité de supervisión de la inteligencia, ni el Congreso ni ninguno de sus miembros nos ha contactado nunca”. Sencillamente, la idea de que hay un control, la idea de que el Congreso está haciendo su trabajo, de que está investigando las afirmaciones y contraafirmaciones respecto a la muerte de civiles, no se sostiene. Están yendo a la CIA y diciéndoles: ‘Muéstrennos sus videos. Cuéntennos qué hicieron’. Y después, a partir de esos contactos, están haciendo suposiciones. No existe ninguna investigación independiente. Y no salen de la comunidad estadounidense de inteligencia. Creo que hasta tanto el Congreso como la Agencia misma no empiecen a abordar algunas de estas preocupaciones públicas, vamos a tener este inmenso abismo, este creciente abismo, entre la percepción pública de lo que supone la guerra con aviones no tripulados y esa afirmación del gobierno estadounidense de que ‘Todo es estupendo. Sólo matamos terroristas. ¿Y saben qué? Que nunca matamos civiles. O si los matamos, es una cifra muy pequeñita’ ”. La línea oficial estadounidense no tiene caché en Peshawar, pero vende en Peoria [Illinois]. Las grandes mayorías bipartidistas de estadounidenses se creen y aceptan algo, o más que algo, de la siguiente afirmación: los ataques con aviones no tripulados son eficaces para reducir la amenaza del terrorismo, están justificados por el hecho de que estamos en guerra, son necesarios ante la falta de alternativas para capturar a los sospechosos, están legitimados por el permiso de gobiernos extranjeros para perpetrar ataques en su territorio, tienen un bajo coste y son armas de precisión cuyo uso es seguro para nuestras tropas, etc. Durante el discurso sobre la seguridad nacional del Presidente Obama del 23 de mayo de 2013, exhibió toda esa combinación de afirmaciones. Sobre la política de los aviones no tripulados, dijo:

“Sólo atacamos a al-Qaida y a las fuerzas asociadas con ellos, e incluso así el uso de aviones no tripulados está fuertemente restringido. EEUU no lleva a cabo ataques cuando tenemos capacidad para capturar a terroristas individuales. Preferimos siempre detener, interrogar y procesar. EEUU no puede atacar siempre que se le antoje. Nuestras acciones están vinculadas a consultas con los socios y respeto por la soberanía estatal. EEUU lleva a cabo ataques para castigar a individuos. Actuamos contra terroristas que suponen una amenaza continuada e inminente para el pueblo estadounidense y cuando no hay otros gobiernos capaces de actuar con eficacia ante la amenaza. Y antes de atacar, al más alto nivel que podamos establecer, nos cercioramos de que los civiles no mueran o resulten heridos”. La mayoría de las afirmaciones de Obama, cuando no todas, se contradicen con los datos empíricos de las víctimas como consecuencia de los ataques con aviones teledirigidos, y disponemos de abundante información revelada por periodistas de investigación y por organizaciones de derechos humanos acerca de la política de asesinatos selectivos de EEUU. Por tanto, teniendo en cuenta lo que se conoce y lo que queda por conocer acerca de la guerra con aviones no tripulados, las afirmaciones del presidente (y parecidas afirmaciones públicas de otras autoridades) deberían valorarse por lo que son: mera propaganda. El gobierno de EEUU distorsiona y le oculta a la gente, de forma activa y como materia política, lo que hace y por qué lo hace con los aviones teledirigidos y trata por todos los medios de suprimir o negar las informaciones contradictorias. Consideren un ejemplo de esa conducta típica de delincuentes. Según el presidente Obama, no se lanzan ataques letales a menos que exista “la casi certeza, al nivel más alto que podamos establecer, de que ningún civil va a acabar muerto o herido”. Esto se contradice absolutamente con lo que se sabe del bombardeo llevado a cabo por el Comando de Operaciones Especiales Conjuntas (JSOC, por sus siglas en inglés) sobre el pueblo yemení de al-Mayalah el 17 de diciembre de 2009. El objetivo principal del ataque fue la supuesta presencia de un grupo vinculado con Al Qaida en la Península Arábiga (AQAP, por sus siglas en inglés) en la provincia de Abayan, asegurando que el lugar bombardeado era claramente un campo de entrenamiento. Contrariamente al nivel de “casi certeza” proclamado por Obama, el asesor legal del Departamento de Estado, el general Willian McRaven, y el Consejero General del Pentágono, Jeh Johnson, tuvieron 45 minutos para decidir si apoyaban el ataque que el comandante del JSOC, el general comandante Willian McRaven, les urgía a aprobar. La autorización se dio y dos misiles de crucero llenos de munición de racimo y material incendiario se lanzaron desde un submarino que se encontraba frente a costa yemení. Cuando la bomba impactó resultó que no era un campo de entrenamiento del AQAP sino un mísero pueblo beduino y el fruto que se cosechó fue el asesinato de 46 personas, incluyendo 21 niños y 14 mujeres, cinco de las cuales estaban embarazadas. (El relato más completo del ataque de al-Mayalah y de sus consecuencias nos lo proporciona Jeremy Scahill en su nuevo libro titulado “Dirty Wars: The World is a Battlefield” [Guerras sucias: El mundo es un campo de batalla]. Quizá uno pudiera ser capaz de descartar al-Mayalah como un desafortunado error. Pero eso no justifica las decisiones políticas adoptadas a fin de tergiversar y ocultar deliberadamente los hechos alrededor del ataque. Al principio, el gobierno yemení asumió la responsabilidad de lo ocurrido para desviar la agitación pública en contra del ataque estadounidense. (En efecto, ese bombardeo fue el principio de la guerra estadounidense con aviones no tripulados en el Yemen). Esa afirmación fue rebatida de inmediato por los líderes tribales y por los periodistas que se desplazaron hasta el pueblo al descubrir, entre los restos de las víctimas, partes del misil en las que aparecía la etiqueta “Made in the United States”; el arsenal yemení no posee ese tipo de armamento. La artimaña de que el bombardeo fue yemení quedó aún más desacreditada cuando oficiales estadounidenses no identificados hicieron afirmaciones ante los medios confirmando que se trataba de un ataque de EEUU. En enero de 2010, Wikileaks publicó un cable diplomático secreto sobre una reunión, varias semanas después del ataque, entre el jefe del Mando Central de EEUU, David Petraeus, y el entonces Presidente yemení Ali Abdullah Saleh, en el cual se acordaba que Yemen seguiría asumiendo la responsabilidad de los ataques yemeníes en la provincia de Abayan.

El 17 de abril de 2012, la American Civil Liberties Union (ACLU) y el Center for Constitutional Rights (CCR) presentaron una petición de información, en virtud del Acta de Libertad de Información (FOIA, por sus siglas en inglés), sobre el ataque de al-Mayalah. Lo que buscaban eran los archivos de inteligencia que propiciaron el ataque, incluido averiguar si las autoridades eran conscientes de la presencia de civiles; si se había dado algún paso para investigar la matanza de civiles y para indemnizar a los supervivientes y a las familias de las víctimas; y por qué un oficial estadounidense conspiraba con un gobierno extranjero para engañar a los pueblos de ambos países. Hasta la fecha, el gobierno aún no ha contestado a esa petición de ACLU-CCR de aportar los archivos. Bien al contrario, ni siquiera las autoridades han reconocido que EEUU perpetrara el ataque, a pesar de la abundancia de pruebas confirmando ese hecho. El Presidente Obama podría haber dicho la verdad sobre la masacre de al-Mayalah (fracaso de la inteligencia, víctimas civiles, estratagema de falsa bandera) durante su discurso de mayo de 2013, si el objetivo no hubiera sido el mero encubrimiento propagandístico dirigido a la audiencia interna. En cambio, su silencio sobre al-Mayalah (que es un incidente atroz pero que no es aislado) ha hecho del presidente un vendedor de mentiras oficiales. Pero ha hecho algo más: está defendiendo que se silencien las críticas. El 2 de febrero de 2011, el presidente llamó personalmente al Presidente Saleh pidiéndole que cancelara el planeado “perdón” para el periodista yemení Abdulelah Haider Shaye, que había presentado el informe más extenso sobre el ataque. Saleh obedeció y mantuvo a Shaye en la cárcel. Cuando finalmente Shaye salió libre en julio de 2013, la Casa Blanca dejó constancia de su protesta ante el gobierno yemení. Bajo la administración Obama, la guerra con aviones no tripulados y los asesinatos selectivos se han convertido en las piezas centrales de la política y prácticas del contraterrorismo estadounidense. (Ambos formaban ya parte de los elementos de la política de la administración Bush, pero durante la mayor parte de esos ocho años, se utilizaron estratégicamente de forma indirecta para arrestar, interrogar y detener). La política de aviones teledirigidos de EEUU es enormemente impopular en el extranjero. Según una encuesta dirigida por Pew Research Global Attitudes publicada el 18 de julio de 2013: “En al menos 31 naciones se desaprueban los ataques de misiles con aviones no tripulados que EEUU está llevando a cabo para atacar extremistas en lugares como Pakistán, Yemen y Somalia. Al menos tres de cada cuatro personas tienen este punto de vista en 15 países de todos los rincones del mundo, incluyendo naciones del Oriente Medio, Europa, Latinoamérica y Asia. Los únicos tres países donde la mayoría de los ciudadanos aprueban esos ataques son Israel (64%), Kenia (56%) y los mismos EEUU (61%). … Las opiniones sobre los aviones teledirigidos difieren de forma aguda según el género en muchos países. Por ejemplo, en Japón, el 41% de los hombres los aprueban, frente a sólo el 10% de las mujeres. También se encuentran diferencias de dobles dígitos en seis de las ocho naciones encuestadas, así como en Australia, Canadá, EEUU, Corea del Sur y Uganda”. Este año, el contraataque exterior e internacional frente al afirmado derecho de EEUU de emprender la guerra con aviones teledirigidos ha tomado nuevo impulso. La afirmación de Kerry de que esa práctica se acabará –por supuesto que tiene que acabar- se debe a que el gobierno de Pakistán insiste en que así sea y es solo un ejemplo. Otro ejemplo es la unidad de investigación de la ONU que Ben Emmerson, Relator Especial de la ONU sobre Contraterrorismo y Derechos Humanos, estableció el 24 de enero de 2013. Esta unidad, compuesta por expertos de varios países, tiene un mandato para valorar no sólo el asesinato de civiles resultante de esos ataques sino también la legalidad de los asesinatos selectivos como política de gobierno. En un discurso pronunciado en la Facultad de Derecho de Harvard en octubre de 2012, donde Emmerson anunció su intención de crear esta unidad con la cooperación del Relator Especial Heyns, dijo: “Si los correspondientes Estados no están dispuestos a establecer controles eficaces e independientes… entonces

puede que en última instancia sea necesario que la ONU actúe”. Sobre la posición de EEUU de que tiene una prerrogativa global para ejecutar a la gente, Emmerson afirmó: “El paradigma de la guerra global ha hecho un daño inmenso al consenso internacional previamente compartido acerca del marco legal subyacente tanto en el derecho internacional de los derechos humanos como en el derecho humanitario internacional. Se han justificado de forma espuria una serie de graves violaciones de los derechos humanos y humanitarios… Este paradigma de guerra se basó siempre en el más débil de los razonamientos y ni siquiera los más estrechos aliados de EEUU lo apoyaban”. La urgencia de esta investigación viene sobre todo impulsada por la rápida expansión de la guerra con aviones no tripulados de EEUU y la proliferación de la tecnología para los mismos. Su legitimidad se deriva de la impopularidad global de esos ataques y del hecho de que ningún gobierno, excepto Israel, ha afirmado para sí mismo el derecho de llevar a cabo aviones con ataques teledirigidos o aceptado que la política de asesinatos selectivos de EEUU es legítima. Lisa Hajjar es profesora de Sociología en la Universidad de California, Santa Bárbara. Sus investigaciones se centran en cuestiones de leyes y legalidad, guerra y conflicto, derechos humanos y tortura. Ha escrito Courting Conflict: The Israeli Military Court System in the West Bank and Gaza (University of California Press, 2005) y Torture: A Sociology of Violence and Human Rights (Routledge, 2012). Además de ser coeditora en Jadaliyya, colabora con los comités editoriales de Middle East Report y Journal of Palestine Studies. En la actualidad, trabaja en un libro sobre la abogacía en lucha contra la tortura en EEUU. Fuente: http://www.jadaliyya.com/pages/index/13394/how-to-lose-friends-and-alienate-people_anupdate-

EL TRIUNFO DEL ESPIONAJE Por David Price* A partir de la política del miedo instrumentada por el gobierno desde el atentado contra las Torres Gemelas en 2001, los estadounidenses, antes celosos defensores de la libertad individual, han aceptado, en aras de la seguridad, la violación de su privacidad. http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/el-triunfo-del-espionaje/ as revelaciones de Edward Snowden sobre la magnitud del programa de control electrónico de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) plantean la cuestión de la intrusión de las agencias estadounidenses de información en la vida privada de los ciudadanos. Pero más allá del registro de metadatos a partir de las líneas telefónicas y de la navegación en Internet, este asunto desnuda otra realidad igual de inquietante: la mayoría de los estadounidenses aprueban el control de las comunicaciones electrónicas privadas. Según un sondeo de The Washington Post realizado algunos días después de las declaraciones de Snowden, el 56% de la población considera que el programa de vigilancia PRISM es “aceptable”, y el 45% que el Estado debe “poder controlar el correo de cualquier persona para luchar contra el terrorismo”. Resultados poco sorprendentes: desde hace más de diez años, medios, especialistas y dirigentes políticos no dejan de presentar la vigilancia como un arma indispensable en la guerra contra el terrorismo. Este consentimiento al espionaje no existió siempre en Estados Unidos. Algunas semanas antes de los atentados del 11 de septiembre de 2001, el diario USA Today titulaba: “Cuatro estadounidenses sobre diez no tienen confianza en el FBI [Federal Bureau of Investigation]” (20 de junio de 2001). Durante décadas, estudios sucesivos del Departamento de Justicia mostraron la viva oposición de la población a las escuchas telefónicas por parte del poder público. Entre 1971 y 2001, la tasa de desconfianza fluctuaba hasta en un 70% u 80%. Pero los atentados del World Trade Center y del Pentágono y después la guerra contra el

terrorismo del presidente George W. Bush cambiaron la perspectiva, que condujo a los estadounidenses a abandonar bruscamente su secular oposición a la supervisión de los ciudadanos. En 1877, el planeta sólo contaba con una única línea telefónica que conectaba setecientas setenta y ocho estaciones entre Boston y Salem (Massachusetts). Esta tecnología se difundiría a una velocidad sostenida. A principios del siglo XX, sólo un estadounidense sobre mil era dueño de un teléfono: veinte años más tarde, el promedio era del 1%; a mediados de siglo, un tercio de la población ya disponía de uno. En la actualidad, en Estados Unidos hay más teléfonos que habitantes. Con el surgimiento de la fibra óptica y de los teléfonos móviles, a fines del siglo XX, las escuchas exigen medios técnicos poco sofisticados y una débil complicidad de parte de las compañías de telecomunicaciones. Para grabar una conversación a partir de una línea compuesta de hilo de cobre, basta con tener acceso al hilo y disponer de pinzas cocodrilo para conectarle un micrófono.

La heroica resistencia inicial

Los primeros escándalos relativos a las escuchas remontan a los comienzos del siglo XX. Durante la Primera Guerra Mundial, esta práctica –reprobada por la población– se expandió a tal punto que el Congreso la declaró ilegal, aun a pesar de la amenaza real que representaban los espías extranjeros. Después de la guerra, muchos Estados federados, siguiendo sus pasos, adoptaron legislaciones que limitaban la capacidad de control de las fuerzas del orden locales. Esto no impidió que las prácticas continuaran. Bajo la prohibición de las bebidas alcohólicas (1919-1933), la policía local y la federal, ávidas por controlar a los contrabandistas que utilizaban el teléfono con el fin de relacionar a productores, distribuidores y consumidores de alcohol, infringieron regularmente la ley grabando sus conversaciones. En 1924, con el apoyo de la opinión pública, el procurador general de Estados Unidos, Harlan F. Stone, se preocupa y prohíbe al Departamento de Justicia realizar escuchas. Inútilmente: despreciando la decisión de Stone, el Departamento del Tesoro y el Buró de Investigación –antepasado del FBI– continuaron secretamente con sus actividades. Dos años más tarde, un nuevo asunto renovó el debate: en Seattle, agentes federales espían las conversaciones del ex teniente de policía Roy Olmstead, sospechado de tráfico de ron. A pesar de la ilegalidad de las escuchas, la justicia dio la razón a la policía y condenó a Olmstead. La decisión levantó murmullos en los pasillos de los tribunales. El juez Frank Rudkin afirmó entonces que las amenazas criminales no justificaban las prácticas ilegales de la policía: “Ningún agente federal tiene el derecho de escuchar las conversaciones telefónicas de otros para utilizarlas contra él mismo. Tal actuación es lamentable e intolerable. Aceptarla sería como admitir el fracaso de nuestros antepasados en su voluntad de establecer para ellos y para sus hijos, un Estado que garantice la libertad y la prosperidad” (1). En 1928, Olmstead llevó su caso ante la Corte Suprema de Estados Unidos. Recibió entonces el apoyo de empresas como Seattle Pacific Telephone y Telegraph Company, que publican una declaración defendiendo el derecho de los contrabandistas a conversar sin ser espiados: “Cuando dos líneas telefónicas se juntan en la oficina central [de una compañía telefónica] se supone que están reservadas exclusivamente a sus dos usuarios, y en ese sentido, las líneas les pertenecen a ellos exclusivamente. Si un tercero controla la línea viola a la vez el derecho de propiedad de los usuarios y el de la compañía telefónica” (2). Hoy nos costaría mucho pensar en un proveedor de acceso a Internet o una empresa de telecomunicaciones que defendieran los derechos a la vida privada de sus clientes. Cuestionados por Snowden, Facebook, Google, MSN y demás prefieren no saber nada. La Corte Suprema falló finalmente contra Olmstead por cinco votos contra cuatro. En efecto, uno de los jueces, Louis Brandeis, manifestó su acérrima oposición a semejante decisión: “El crimen es contagioso – argumentó–. Si el propio Estado se ubica fuera de la ley, anima a los otros a hacer lo mismo: invita a la

anarquía. Declarar que, en la lucha contra el crimen, el fin justifica los medios –que el Estado puede cometer crímenes con el objetivo de obtener la condena de un criminal– tendrá consecuencias terribles. La Corte Suprema debe oponerse resueltamente a esta doctrina perniciosa” (3). La mirada de los estadounidenses cambió durante los años 1940. Había una guerra y, además, el teléfono ya no era privilegio de una elite que los magistrados frecuentaban y protegían: se había vuelto accesible a las clases populares. Eso condujo al poder público a reexaminar la cuestión de la legalidad de las escuchas. Poco antes de la entrada en guerra de Estados Unidos, el director del FBI, John Edgar Hoover, exigió del Congreso nuevas prerrogativas en materia de vigilancia telefónica. A pesar de la oposición del presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), James Fly, Franklin D. Roosevelt permitió secretamente al Departamento de Justicia controlar a los individuos “subversivos” y a los que se presumía espías. El concepto de subversión de Hoover demostraba ser bastante amplio. No empleaba su renovado poder sólo para averiguar sobre los nazis. William Sullivan, su asistente, contó que durante la guerra el FBI procedió regularmente a la escucha sin consentimiento. “Con el futuro del país en juego –explicaba–, obtener el acuerdo de Washington no era sino una formalidad inútil. Varios años después [del fin del conflicto], el FBI continuó escuchando las conversaciones sin la autorización del procurador general”. En otros términos, la historia de las escuchas en Estados Unidos se parece a un corrimiento en el que los agentes del FBI se desviaron poco a poco de su misión inicial –descubrir a los simpatizantes nazis– para controlar de cualquier manera a los militantes de los derechos civiles, los dirigentes sindicales, trabajadores sociales, cristianos progresistas y personas sospechadas de comunismo. A partir de 1950, en el marco de la caza de brujas lanzada por el senador anticomunista Joseph McCarthy, el FBI aprovechó el temor inspirado por la Guerra Fría para extender sus escuchas ilegales a pesar de la oposición de los tribunales, que se negaban a avalar estos pequeños arreglos con la ley. Así, en el momento del juicio de apelación de Judith Coplon, acusada de ser una agente de la KGB –los servicios secretos soviéticos–, el FBI revela que grabó las conversaciones de la acusada con su abogado. Resultado: la Corte de Apelación anula la condena formulada en primera instancia. Los años que siguieron a la muerte de Hoover, en 1972, aportaron nuevas revelaciones sobre la intrusión ilegal del FBI y de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en la vida privada de los estadounidenses. En 1975, las comisiones Church y Pike (4), sacaron a la luz las vastas campañas de vigilancia que tenían como objetivo a los ciudadanos comprometidos en actividades políticas perfectamente legales. El asunto llegó a la primera plana de los diarios y la opinión pública se rebeló. Pero el Congreso abandonó rápidamente la investigación. Nuevo escándalo en 1978: durante una audición ante el subcomité de información del Senado, David Watters, un ex ingeniero en telecomunicaciones de la CIA, aseguró que la NSA vigilaba y grababa miles de conversaciones telefónicas, en Estados Unidos y en el exterior. Este testimonio fue recibido con malestar por la población, pero no se hizo nada al respecto: en octubre de 1978, el presidente James Carter promulgó la Ley de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera de 1978 (FISA) que establece un sistema jurídico secreto para velar por la “seguridad nacional”. Una victoria para el pequeño mundo de la información que milita desde hace años por la legalización de las escuchas. El número de autorizaciones libradas en el marco de esta Ley no cesó de aumentar con los años (de 322 en 1980 a 2.224 en 2006) y el de los rechazos fue siempre ridículamente bajo: sólo cinco sobre 22.990 demandas entre 1979 y 2006. Mientras que al principio, Internet sólo era utilizado por los militares y los investigadores, su apertura al público en general planteó nuevos problemas. Hasta la adopción de la Ley de Privacidad de las Comunicaciones Electrónicas, en 1986, era legal interceptar los correos que circulaban por las líneas telefónicas. Con esta Ley, las comunicaciones electrónicas gozaron de la misma protección legal que las conversaciones telefónicas.

La aceptación de la intromisión

En 1994, muchos estadounidenses denunciaron la Ley de la Telefonía Digital, que impone equipar las fibras ópticas de manera de facilitar las escuchas autorizadas por los tribunales. La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) y el Centro de Privacidad de Información Electrónica organizaron la oposición al proyecto de ley. En todo el país, se enviaron cartas a los diarios para denunciar su carácter liberticida. Pero los tiempos habían cambiado desde el proceso de apelación de Olmstead, en 1927: la industria de las telecomunicaciones sostuvo con todo su peso la Ley de la Telefonía Digital, y la ley fue finalmente votada. Sin que la población se diera verdaderamente cuenta, las administraciones de los presidentes Ronald Reagan, George Bush padre y William Clinton, cada una a su tiempo, permitieron un empleo cada vez más importante de las escuchas, así como la obtención de datos personales para las empresas. La justicia no encuentra nada para decir. Hacia el final de los años noventa se dieron también situaciones incómodas. La NSA fue acusada de haber puesto bajo escucha a líneas telefónicas internacionales y de haber utilizado computadoras para analizar las palabras clave. Al mismo tiempo, se abrió una serie de juicios para determinar si los correos profesionales deben o no gozar del mismo nivel de protección que las cartas y los llamados telefónicos. La mayoría de los jueces eran totalmente ignorantes del funcionamiento de Internet: apenas comprendían que se pudiera esperar la misma confidencialidad por un intercambio de correos que por una conversación telefónica. Si, a principios de los años noventa, el Poder Judicial hubiera considerado que los correos no eran sino sobres electrónicos, Estados Unidos sería hoy un país muy diferente. En su advertencia, ya durante el juicio Olmstead, el juez Brandeis estableció un paralelo entre el teléfono y el correo postal: “No hay real diferencia entre la carta sellada y el mensaje telefónico privado”, afirmaba. Pero, en el mundo pos-11 de Septiembre, las chances de lograr proteger los correos electrónicos gracias a un razonamiento similar eran pocas… La Patriot Act del 26 de octubre de 2001 suprimió, en efecto, algunos límites jurídicos a las escuchas telefónicas conducidas por el Estado Federal establecidos por la comisión Church. Esta ley levantó también las restricciones que impedían a los servicios de información espiar a los ciudadanos estadounidenses; ratificó la utilización de soplones que permite vigilar los desplazamientos; se autorizó el control masivo de los correos y de las actividades en línea. Con la creación, en 2003, del Departamento de Seguridad Interior (Department of Homeland Security), el Estado cuenta con una agencia centralizada que coordina las operaciones de información por medios que Hoover no se hubiera atrevido a soñar jamás y que conduce el control sobre los individuos a un nivel nunca alcanzado. Después de un siglo de fuerte oposición, la sociedad estadounidense aprendió a renunciar a su derecho a la confidencialidad. Dentro de una amplia franja de la población que ha olvidado ese pasado, el temor al terrorismo sabiamente instilado y la promesa de que los derechos de los “inocentes” serán respetados acabaron con las aspiraciones a la protección de la vida privada y las libertades civiles. El “desierto del olvido organizado” (5), según la expresión del sociólogo Sigmund Diamond, deja el campo libre a los que deseaban mantener el orden establecido. 1. “Minority opinion on the appeal of the Olmstead defendants”, Corte de Apelación de Estados Unidos para el Noveno Circuito, San Francisco, 9-5-1927, www.fjc.gov 2. “Amicus curiae brief of telephone companies submitted to the Supreme Court in Olmstead v. United States”, Corte Suprema de Estados Unidos, Washington DC, 1928, www.fjc.gov 3. “Dissenting opinion of Justice Louis D. Brandeis in Olmstead v. United States”, Corte Suprema de Estados Unidos, 1928, www.fjc.gvc

4. La primera, con el nombre del senador demócrata Frank Church, que se oponía a Richard Nixon, fue establecida después del escándalo del Watergate para investigar las actividades de la CIA. La segunda, con el nombre del representante Otis Pike, también demócrata, era su equivalente en el Parlamento. 5. Sigmund Diamond, Compromised Campus: The Collaboration of Universities with the Intelligence Community, 1945-1955, Oxford University Press, Nueva York, 1992. * Profesor de Antropología en la Universidad Saint Martin de Lacey, Washington DC. Autor de Weaponizing Anthropology: Social Science in Service of the Militarized State, AK Press, Oakland (Estados Unidos), 2011.

Traducción: Florencia Giménez Zapiola

« UN SISTEMA FINANCIERO SIN CONTROL NOS LLEVA AL PRECIPICIO » SUSAN GEORGE Enregistrer au format PDF http://www.elcorreo.eu.org/Un-sistema-financiero-sin-control-nos-lleva-al-precipicio-Susan-George La presidenta de honor de Attac, que lucha por regular los mercados financieros, cree que la austeridad es una patraña. Augmenter policeDiminuer police Susan George se levanta de la elegante mesa de madera de su silencioso apartamento parisiense, taza de té en mano, y se acerca a la biblioteca. Rebusca entre sus libros. Entresaca El Minotauro global,del economista griego Yanis Varoufakis. « Aquí está », dice, satisfecha. « Pero esto solo es para yonquis interesados en las finanzas, como yo », bromea. Sí, el mundo de las finanzas. Una de sus obsesiones, uno de sus caballos de batalla. La politóloga, filósofa y escritora usamericana, afincada en París desde 1954, lleva toda la vida luchando, agitando conciencias. En los noventa lo hizo desde Greenpeace. Entre 1999 y 2006, como vicepresidenta en Francia de la Asociación para la Tasación de las Transacciones Financieras y la Ayuda al Ciudadano, organización que promueve el control de los mercados financieros. « Más vale que pongamos bajo control a estos locos », dice en alusión a los banqueros en un momento de la entrevista, « ¡hacen lo que quieren y los Gobiernos les animan a seguir haciéndolo! ». A sus 79 años, Susan George es una mujer elegante y cultivada que habla desde la indignación. Exclama constantemente. Una especie de sistemático “¡será posible!” late bajo sus afirmaciones cuando analiza cómo funciona la sociedad en la que vivimos. Con esa visión panorámica que le otorga su recorrido vital, la autora de « El informe Lugano II » (editado por Deusto) clama su verdad frente a un mundo que avanza, en su opinión, en dirección equivocada. Pregunta. ¿Qué está pasando en este mundo en el que vivimos? Respuesta. ¿Dispone usted de tres horas? Bueno, es relativamente simple. Hemos permitido al capitalismo hacerse, virtualmente, con cada aspecto de la existencia humana; tenemos un sistema financiero que está completamente fuera de control, y ninguna autoridad parece querer controlarlo; hay una carrera entre las compañías multinacionales para hacerse con los recursos que quedan, ya sea energía, comida, tierra, agua, metales, oro... Y hace 10 años parecía que se estaba produciendo una toma de conciencia ecológica, pero eso parece haber desaparecido completamente. ¿Y cómo explica usted la crisis en la que nos hallamos inmersos? Tenemos una crisis generalizada, una convergencia de varias crisis: la financiera, la de la creciente desigualdad engendrada por el capitalismo y la ecológica. Hay una crisis alimentaria y de agua que afecta

cada vez a más gente, no solo a aquello que llamábamos el Tercer Mundo, también a los países ricos. Y por encima de todo ello está la crisis de la democracia: autoridades ilegítimas que no han sido elegidas por los ciudadanos son las que crean las reglas del juego. Hacia eso camina el mundo, y no es una dirección demasiado bella… En su libro « Sus crisis, nuestras soluciones », escribe usted: « La mayoría de las personas no necesitan más pruebas, ven perfectamente que el sistema no funciona ni para ellos, ni para sus familias, amigos o país » . Bueno, depende de para quién. Para el 1% del 1% funciona. Y ese 1% del 1% ha decidido, desgraciadamente, que debemos tener desempleo, austeridad, sufrimiento de la población y pérdida de aquello que la clase trabajadora conquistó a lo largo de los últimos 50 años. ¿El 1% del 1% es lo que usted denomina como el « grupo de Davos », los poderosos del mundo que se reúnen cada año en la localidad suiza? ¿Son ellos los que deciden realmente, o eso es una teoría conspirativa? No, yo no creo en conspiraciones, yo creo en el manejo de las situaciones en favor de determinados intereses. No es que ellos se reúnan y digan: « Bueno, vamos a derribar los derechos que la gente ha conquistado en los últimos 50 años ». No, ellos se reúnen y dicen: « Tenemos demasiadas cargas sociales; hemos ganado 10 puntos del PIB en los últimos años y ahora queremos otros 10 ». Se trata de una convergencia de intereses. Luego la ideología neoliberal genera ideas que la gente se acaba creyendo, como esa que tanto se ha escuchado en España de « hemos vivido por encima de nuestras posibilidades ». ¡Eso es una tontería! ¿Podría explicar por qué es una tontería? El Estado español no pidió prestado para mejorar la educación, la sanidad, la cultura o cosas que beneficiaran a la población en general; pidió para salvar al sistema bancario tras la crisis inmobiliaria. España no estaba tan endeudada antes de la crisis. Proporcionalmente, estaba menos endeudada que los virtuosos alemanes, que son los que han sacado uno de esos números mágicos que aparecen en el Tratado de Maastricht: hay una cifra, el 3%, que marca el límite de déficit que los países no deben superar; la otra indica que no hay que endeudarse en más de un 60% del PIB. Nadie sabe de dónde vienen esas cifras; del Bundesbank, probablemente; pero ¿por qué es un 3% en vez de un 4%, o un 60% en vez de un 65%? Son cifras arbitrarias que además han sido rebatidas. Hace poco el FMI dijo que nos equivocamos con el rescate griego. La ATTAC ha publicado un estudio que muestra que de los 200.000 millones de dólares (153.000 millones de euros) que se entregaron a Grecia, el 77%, al menos, fue a parar a los bancos. Todo eso está basado en ideología. El sustento de la austeridad es una patraña. Sí, una patraña matemática y económica. ¿Y qué habría que hacer para reinventarse el mundo? Lo primero es poner el sistema financiero bajo control. Está operando conforme a sus propias reglas y nos va a llevar más allá del borde del precipicio. Los banqueros usan un lenguaje que los líderes políticos quieren creer, o no comprenden, no sé. Pero el caso es que acaban haciendo lo que les viene en gana. Y no serán penalizados, ni irán a la cárcel, ni serán multados; seguirán haciendo locuras. ¿Son ellos los que detentan el poder real? Sí, claro. Podríamos tener carteles electorales en las calles que digan: « Vote a Goldman Sachs, ¡elimine al intermediario! ». La banca es demasiado grande para quebrar, demasiado grande para que encarcelen a sus responsables; si es así, ¡es demasiado grande para existir! Mejor sería que por un lado estuviera la banca minorista, y por otro, la banca de inversiones, no las dos bajo un mismo techo. Y si la banca de inversión quiebra, que quiebre, ¡pero que no jueguen con nuestro dinero!

¿Y qué más habría que hacer? Una vez controladas las entidades financieras, obligar a los bancos a contribuir a la transición verde. Esta es la idea central. Eso, además, permitiría crear empleo. Hay que controlar a la banca para que la gente no pierda sus ahorros, sus seguros, su salario ... [RISAS] Probablemente [/RISAS] la gente esté más interesada en que se controle a estos bastardos por estos motivos. La otra razón es que hay que construir una sociedad sostenible, hacer la transición verde en transporte, hogares, agricultura. La humanidad se está yendo a tomar viento por las demandas de capital de un sistema productivo estúpido, mal organizado, que permite tremendas desigualdades. Tenemos que parar el calentamiento tan rápidamente como podamos; salvar las pequeñas granjas, dar la producción de alimentos a pequeños agricultores ecológicos… Hay que buscar la manera de sobrevivir. Estamos hablando del futuro de la humanidad. Ninguna generación en la historia, desde el Homo sapiens, ha estado enfrentada a un problema de semejante magnitud. Los Gobiernos miran a otro lado, los presidentes de las empresas piensan que esto ocurrirá cuando ellos ya no estén aquí… El capitalismo es un sistema que no permite pensar a largo plazo. Susan George suelta su larga parrafada consciente de que acaba de encontrar las palabras adecuadas para expresar lo que quería explicar. Considera que es fundamental profundizar en nuevas formas de democracia participativa. « La democracia está aplastada por la especulación », dice, « y los ciudadanos pueden hacer muy poquita cosa con un simple voto ». Su análisis se vuelve sombrío cuando sobrevuela Europa. Sostiene que la idea que guía a la Unión Europea es la de las grandes bondades de la privatización. « Acabaremos con un régimen extremadamente cruel; un régimen de las grandes multinacionales no se va a preocupar demasiado de la población. Excluirán a la gente como nunca se ha hecho hasta ahora ». También le preocupa el ocaso del Estado de bienestar. « El año que viene cumpliré 80 años y no quiero morir en una Francia gobernada por el Frente Nacional », espeta. ¿Y cree que eso puede suceder? Creo que están preparando la cama para los fascistas, les están preparando un bulevar. Mire Aurora Dorada en Grecia. ¡Eche la vista atrás, a los años treinta! Hitler fue elegido, no lo olvidemos. En el caso italiano, hubo un golpe, pero Mussolini gozaba del apoyo de buena parte de la población; y Berlusconi no está muy lejos de Mussolini. Joseba Elola para El País El País. París, 4 de agosto de 2013

LOS DISIDENTES, EN ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA. por David Brooks * Enregistrer au format PDF http://www.elcorreo.eu.org/Los-disidentes-en-Estados-Unidos-de-America « Aquellos que pueden ceder una libertad esencial para obtener un poco de seguridad temporal no merecen ni libertad ni seguridad » Benjamin Franklin. Augmenter policeDiminuer police Casi todos hablan de cómo creían en la retórica oficial de su país, en la misión de Estados Unidos como guardián mundial de la democracia, como faro de esperanza libertador, como ejemplo para la humanidad.

Casi todos recuerdan que por eso se sumaron a las filas de agencias de inteligencia, a las fuerzas armadas, al Departamento de Estado o a la FBI. Y recuerdan cuando, con esa noble dedicación, denunciaron y revelaron algo que parecía abuso, corrupción o violación de los ideales tan repetidos por los representantes y líderes del país, y fueron expulsados de sus mundos y algunos condenados por « traidores ». Siete de ellos han sido o están acusados por el gobierno de Barack Obama según la « Ley de Espionaje » y otros por divulgar « secretos oficiales » vía los medios de comunicación, más del doble de los casos que todos los presidentes anteriores combinados. El gobierno afirma que todos estos casos son estrictamente asuntos legales y no políticos, y rechaza que los acusados sean « denunciantes » o « disidentes ». Afirma que son simples criminales que violaron no sólo las leyes, sino la « confianza pública », en efecto, traidores. Dos de ellos están en los titulares mundiales de la noticia: el soldado Bradley Manning, cuyo consejo de guerra está por determinar su condena penal por varios cargos, incluidos cinco según la Ley de Espionaje; el otro, Edward Snowden, a quien se acaba de otorgar asilo político en Rusia, por ahora ha logrado escapar de las autoridades estadunidenses y de cargos por esa misma ley. Entre los otros cinco denunciantes está : Thomas Drake, analista de alto rango de la NSA, quien expresó preocupaciones a sus superiores por violaciones a la privacidad de estadunidenses por parte de la agencia, y más tarde platicó con un reportero sobre abusos y prácticas de mala administración en la NSA. A pesar de que el caso criminal en su contra, de acuerdo con la Ley de Espionaje, se desestimó, sigue en la lista negra, como todos los denunciantes que trabajan en inteligencia o defensa, y con ello su carrera. El ex integrante de la fuerza aérea y analista de la CIA ahora trabaja en una tienda de Apple. John Kiriakou, ex agente de la CIA, fue condenado a dos años y medio de cárcel por dar a periodistas, incluido uno del New York Times, los nombres de dos ex colegas que habían empleado tácticas de tortura en interrogatorios. Stephen Jin-Woo Kim, contratista del Departamento de Estado, enfrentó cargos por filtrar información al periodista James Rosen, de Fox News (quien después, se reveló, fue espiado por la FBI). Shamai Leibowitz, ex traductor de la FBI, filtró a un bloguero que promueve la paz entre Israel y Palestina transcripciones de intervenciones telefónicas de la embajada de Israel en Washington sobre esfuerzos para influir en la opinión pública estadunidense. Jeffrey Sterling, ex agente de la CIA, se declaró no culpable de filtrar información sobre planes estadunidenses de sabotaje de planta nucleares de Irán a James Risen, del New York Times. Risen ha rehusado identificar su fuente, y el gobierno de Obama ha logrado que un tribunal le ordene hacerlo o enfrentará la cárcel. Otros denunciantes a lo largo de las últimas décadas han enfrentado graves consecuencias, sobre todo el fin de su carrera, aun en casos donde las acusaciones legales en su contra fueron desestimadas. El más famoso entre ellos, Daniel Ellsberg, quien filtró los Papeles del Pentágono en 1971, afirma que la persecución de quien se atreva a revelar secretos oficiales a la opinión pública es peor con Obama que en tiempos de Richard Nixon. Aunque las autoridades insisten en que sólo están aplicando la ley, los críticos sospechan que más bien se trata de suprimir las libertades de expresión y de prensa, y sobre todo la disidencia dentro de las filas oficiales. Muchos recuerdan que esta Ley de Espionaje fue empleada inicialmente como arma política contra disidentes cuando fue promulgada en 1917, cuando Estados Unidos entró a la Primera Guerra Mundial. Fue usada contra socialistas, anarquistas y pacifistas que se oponían a la guerra, entre ellos el líder y candidato presidencial socialista Eugene Debs (quien pasó cinco años en la cárcel), líderes anarco-sindicalistas del gremio IWW, así como para deportar a Emma Goldman y cientos de extranjeros más que criticaban la política bélica en ese tiempo.

Tal vez para algunos en el gobierno lo que más preocupa es que se multipliquen expresiones como éstas, resultado de los secretos revelados: « He servido en el complejo militar industrial durante 10 años, primero como soldado en Bagdad, y ahora como contratista de defensa. Cuando ingresé, creía en la causa. Era ignorante, ingenuo y estaba engañado. Se ha comprobado que la narrativa profesada por el Estado, de la que hacen eco los medios establecidos, es falsa y criminal. Nos hemos convertido en lo que pensaba que combatíamos. Recientes revelaciones de valientes periodistas sobre crímenes de guerra, incluidas las guerras sucias de contrainsurgencia, terrorismo por drones, la suspensión del proceso debido, tortura, vigilancia masiva… han arrojado luz sobre la verdadera naturaleza del gobierno estadunidense... Algunos dirán que estoy haciendo algo irresponsable, impráctico e irracional. Otros dirán que estoy loco. He llegado a creer que la verdadera locura es no hacer nada. Mientras estemos sentados en la comodidad, ciegos ante las injusticias del mundo, nada cambiará… Yo sólo era un soldado, y ahora soy un administrador de bajo rango. Sin embargo, siempre he creído que si cada soldado arrojara su rifle al suelo, se acabaría la guerra. Por lo tanto, hoy arrojo el mío... » Esta es la carta de renuncia de Brandon Toy, administrador de un proyecto de vehículos de combate artillados de una división de General Dynamics, una de las principales contratistas del Pentágono. Davide Brooks para la Jornada. La Jornada. Desde New York, 5 de agosto de 2013.

EEUU: COMO SE CAE A PEDAZOS LA MENTIRA DEL 9/11 08:14 Comentarios Por Giulietto Chiesa* Publicado por Virgilio PONCE http://periodicodigitalwebguerrillero.blogspot.mx/2013/08/eeuu-como-se-cae-pedazos-la-mentira-del.html Las llamadas telefónicas supuestamente realizadas por los pasajeros desde los aviones secuestrados el 11 de septiembre de 2001 influyeron profundamente en el imaginario colectivo. Pero sirven además de base al relato sobre cómo se desarrollaron los hechos. Sin embargo, 12 años después, los expertos del 9/11 Consensus Panel han demostrado que esas llamados nunca existieron. Conforme a lo prometido, sigo informando a nuestros lectores sobre el desarrollo y avance de los trabajos del 9/11 Consensus Panel, en el que yo mismo figuro como miembro. Aprovecho por demás la ocasión para señalar la incorporación de dos nuevos miembros: Jonathan Cole, ingeniero civil, y Daniel Ganser, historiador, director del SIPER (Swiss Institute for Peace and Energy Research) y también profesor de la universidad de Saint-Gall y en la universidad de Basilea. El Panel se interesó esta vez por el extraordinario y extremadamente singular caso de las llamadas telefónicas realizadas desde 3 de los 4 aviones secuestrados en aquella trágica mañana. El meticuloso análisis de todas esas llamadas telefónicas permitió al Panel identificar no menos de 32 contradicciones, algunas de ellas imposibles de resolver, entre el relato proporcionado por las autoridades (que no han parado de contradecirse) y las pruebas documentales disponibles. Comencemos por recordar que durante 3 años, desde 2001 hasta 2004, las historias sobre las llamadas realizadas desde los aviones a través de teléfonos celulares han predominado en los recuentos publicados por los medios de prensa de Estados Unidos y del mundo entero. Han alimentado miles de artículos, libros y relatos. Esas llamadas son parte integrante de la historia del 11 de septiembre y nunca han sido verdaderamente cuestionadas. Incluso se hizo una película, sobre el vuelo UA 93, enteramente basada en algunas de esas llamadas telefónicas. Tanto el FBI como el tristemente célebre Informe de la Comisión sobre el 11/9, presentado en 2004, afirman oficialmente que se hicieron llamadas con teléfonos celulares desde 3 de los 4 aviones secuestrados. Dado que la credibilidad del Informe de la Comisión sobre el 11/9 se basa parcialmente en esos relatos, es evidente que si tales llamadas telefónicas dejan de ser creíbles el informe

también deja de serlo. Así que el 9/11 Consensus Panel se dio precisamente a la tarea de verificar esa parte de la historia. No alcanzaría el espacio aquí para retomar todos los detalles de las llamadas (Todd Beamer desde el vuelo UA 93; Barbara Olson desde el AA 77; Peter Hanson desde el UA 175; Jeremy Glick y Mark Bingham desde el UA 93; Renee May, aeromoza del vuelo AA 77; Brian Sweeney desde el UA 175; Thomas E. Burnett y sus 4 llamadas desde el vuelo UA 93; Sandra Bradshaw, aeromoza del vuelo UA 93; Elizabeth Wainio y Mario Britton desde el UA 93), un total de 35 llamadas telefónicas. Sólo me detendré aquí en dos protagonistas de esas llamadas telefónicas. Los lectores deseosos verificar las fuentes de nuestras conclusiones pueden hacerlo consultando el sitio web consensus911.org. El primero es Todd Beamer, quien –según la historia contada por los medios de prensa– lanzó la famosa frase «Let’s Roll!», grito de guerra que supuestamente dio inicio a la rebelión de los pasajeros del vuelo UA 93. Según Lisa Jefferson, la operadora telefónica que recibió la llamada, Beamer le pareció asombrosamente sereno, dadas las circunstancias. Tanto que la señora Jefferson declaró al FBI que pensó por un momento que se trataba de una llamada falsa (crank call), sobre todo por el carácter tan «metódico y racional» de su interlocutor en una situación en la que se hallaba «a punto de morir». La llamada duró unos 13 minutos, algo relativamente singular ya que en aquellas condiciones excepcionales y dado el enorme número de llamadas recibidas en las centrales [aquella mañana] las comunicaciones eran a menudo cortadas. Pero lo más extraño –también según el testimonio de Lisa Jefferson al FBI– es que la línea telefónica se mantuvo conectada durante 15 minutos después de haberse estrellado el avión. Hay que agregar que Beamer se mantuvo hablando por teléfono por no menos de 13 minutos con 2 operadoras diferentes y cuando Jefferson le propuso comunicarlo con su mujer –Lisa, embarazada de su tercer hijo que debía nacer en enero– [Beamer] le contestó: «No, no. No quiero preocuparla sin razón.» Y después agregó: «Sólo quiero hablar con alguien para que sepa lo que está pasando aquí», como si no tuviese ningún amigo o pariente con quien hablar. La otra operadora, Phyllis Johnson, no parece haber sido interrogada por el FBI y no existe finalmente ningún elemento que permita comprobar con certeza que la persona que habló con las dos operadoras era realmente Todd Beamer. La llamada no fue grabada, ni por las dos operadoras ni por el AOSC (Airphone Operations Surveillance Center). ¿Qué se puede deducir de todo esto? Las interrogantes son innumerables. Pero agregaré ahora otra más, que me parece más decisiva aún que todas las mencionadas hasta este momento. El 29 de septiembre de 2001, Verizon (el operador telefónico del teléfono celular de Beamer) entregó al FBI la lista detallada de las llamadas, que demuestra que desde ese teléfono se hicieron 18 llamadas después (así mismo, después) del estrellamiento del vuelo UA 93, o sea después de las 10:03 horas de la mañana del 11 de septiembre de 2001. ¿Qué podemos deducir de ello? La hipótesis más plausible es aquel teléfono celular no estaba a bordo del vuelo UA 93 con Todd Beamer… o que el avión que se estrelló en Pennsylvania no era el vuelo UA 93. Ante toda esta serie de preguntas sin respuestas, el FBI no tuvo más remedio que recurrir (basándose ya únicamente en la fe del juramento) a una nueva versión. Lo cual sucedió en 2006, durante el juicio contra Zacarias Mussawi. El FBI dijo entonces que ninguna de las llamadas, con excepción de 2, habían sido realizadas con teléfonos celulares y que las 2 únicas llamadas realizadas con ese tipo de aparatos se habían producido simultáneamente, a las 9 horas 58 minutos, desde el vuelo UA 93, realizadas por 2 miembros de la tripulación, E. Felt y Cee Cee Lyle. Las 2 llamadas fueron [según el FBI] realizadas desde los baños del avión en momentos en que este volaba a 5 000 pies de altitud (unos 1 500 metros), o sea desde una altura relativamente compatible con las posibilidades técnicas de las comunicaciones telefónicas celulares en 2001. Pero hay otro problema. Esas 2 llamadas tampoco pueden haberse realizado con teléfonos celulares. A pesar del profundo examen al que fue sometida la lista de llamadas de los celulares de todos los pasajeros y miembros de la tripulación de ese vuelo, no se encontró el menor indicio de una llamada realizada a la 9 horas y 58 minutos, ni ninguna especificación de la duración de tales llamadas, ni por lo tanto ninguna huella de los números supuestamente llamados. Conclusión: Todas las historias que mencionan llamadas realizadas con teléfonos celulares desde los aviones son falsas. Esas llamadas nunca existieron. Pero veamos las llamadas telefónicas más sensaciones (en el sentido de que causaron sensación en el mundo entero, provocando así gran emoción): las llamadas de Bárbara Olson, célebre presentadora de la CNN, que se hallaba a bordo del vuelo AA 77. Según el testimonio de su marido, Theodore Olson (no

olvidemos que este último era entonces secretario de Justicia de Estados Unidos), Bárbara lo llamó 2 veces, casi una hora antes de que el avión se estrellara contra el Pentágono. CNN fue el primer medio en anunciarlo. Ted Olson fue muy claro: su mujer lo había llamado a través de su teléfono celular… Hay que señalar que las llamadas de Bárbara Olson son las únicas que hacen referencia al armamento de los terroristas (cortapapeles) y que las revelaciones de Ted Olson fueron por lo tanto cruciales en la reconstrucción de los hechos. Incluso puede decirse que ese relato constituye uno de los pilares de la versión oficial. El problema es que, posteriormente, Ted Olson cambió de versión varias veces. La versión del FBI señala, sin embargo, que la primera llamada duró «alrededor de un minuto». En el Larry King Show, Olson declara también que la segunda llamada había durado «dos, tres, quizás cuatro minutos». Hay al menos 4 problemas que ponen en duda lo que cuenta Ted Olson. El primero viene del propio FBI, que declaró firmemente en 2004: «Todas las llamadas [realizadas] desde el vuelo AA 77 se hicieron a través del sistema telefónico del avión.» Entonces, ¿mintió Olson? Desgraciadamente, el FBI también mintió. En 2006, un agente de American Airlines declaró (en el juicio contra Mussawi) «que ningún Boeing 757 disponía de teléfonos de asiento, incluso desde mucho antes del 11 de septiembre de 2001. Los pasajeros del vuelo AA 77 utilizaron sus teléfonos celulares.» Otro elemento viene a confirmar esa declaración. Se trata del manual de mantenimiento del Boeing 757, con fecha del 28 de enero de 2001: «El sistema telefónico para pasajeros fue desactivado en aplicación de la directiva Eco FO878.» Otros elementos confirman igualmente que no había en los aviones teléfonos para uso de los pasajeros. Por muy asombroso que pueda parecer, el hecho es que no existe ningún elemento objetivo que permita demostrar la existencia de alguna llamada de Bárbara Olson aquella mañana. No existe del lado del operador telefónico, como tampoco existe del lado del propio Departamento de Justicia (donde se hallaba su marido), ni tampoco en los datos sobre el movimiento del teléfono celular de la periodista. Pero este enredo no para ahí. Un informe del FBI (hecho público durante el juicio contra Mussawi, en 2006) destruye definitivamente la historia de Tel Olson. Según ese informe, hubo una sola llamada (y no 2) proveniente de Bárbara y esa llamada duró… «0 segundos». En otras palabras, no se estableció la comunicación. Así que Bárbara no pudo describir nada. Y todavía no hemos mencionado lo inverosímil de toda la historia, en la que 60 pasajeros, entre los que se hallaba uno llamado Charles Burlingame, levantador de pesas y ex boxeador, son rechazados hacia la cola del avión por dos secuestradores más bien enclenques (al menos según el relato de Ted Olson, quien a su vez decía lo que le había dicho su mujer) mientras que los otros dos secuestradores se mantenían encerrados en la cabina de pilotaje. Conclusión: ¿Mintió Ted Olson? No se puede descartar que le hayan llegado llamadas provenientes de su mujer. Pero lo que consta en las actas judiciales hace pensar que tales llamadas no podían venir del vuelo AA 77. Y, por lo tanto, toda reconstrucción está falseada. Alguien la inventó. Si realmente existieron tales llamadas telefónicas, el hecho es que no fueron realizadas desde los aviones. Y si no se hicieron desde los aviones, ¿quién las hizo? ¿Y con qué objetivo? Cuando reclamamos que se haga una verdadera investigación, en la que se llame a declarar bajo juramento a todos los protagonistas aún vivos, estamos reclamando algo simplemente lógico y evidente. Pero lo evidente nunca se tiene en cuenta cuando se habla del 11 de septiembre. Así que tendremos que proseguir nuestra propia investigación. *Giulietto Chiesa, periodista, fue corresponsal de El Manifesto y de Avvenimenti, colaboró con múltiples emisoras de radio y televisión en Italia, Suiza, el Reino Unido, Rusia y el Vaticano. Autor de diversos títulos, su trabajo se ha centrado en la disolución de la URSS y en el imperialismo estadounidense. Comprometido en la lucha contra la participación de Italia en la invasión a Irak. En 2004, fue electo miembro del Parlamento Europeo (alianza de demócratas y liberales). Fuente Megachip (Italia) Traducido al español por la Red Voltaire a partir de la versión al francés de Christophe Fuente: Voltaire

LA REFORMA ENERGÉTICA TOMADA EN SERIO Este País | Miguel Carbonell | 268 | 01.08.2013 | 0 Comentarios

http://estepais.com/site/?p=46842 Necesariamente ideológico, el debate sobre la reforma energética debe ser también técnico y pragmático. El desafío es conciliar lo deseable con lo posible y lo conveniente. En el marco de esta discusión, Carbonell ofrece un conjunto de datos que da cuenta de la gravedad de las circunstancias. Introducción México está frente a un peligroso cuello de botella que puede detener su desarrollo por décadas y borrar de un plumazo todo lo que hemos avanzado en materia de bienestar social. Si no resolvemos de manera urgente el desabasto de energía por medio de una reforma constitucional y legal rigurosa, estaremos ante las puertas de un gran desastre nacional. El abasto de energía es lo que hoy en día marca la diferencia entre pobreza y desarrollo. Hay países que tienen ingresos impresionantes y generan grandes bolsas de riqueza gracias a que cuentan con fuentes de energía que utilizan para su propio desarrollo o para exportar. Lo que no deja de resultar paradójico es que México tiene una gran oportunidad de aprovechar su enorme potencial energético (ojo: no solamente el petrolero, sino también el de otras fuentes de energía), pero seguimos atados a una serie de fantasmas históricos que no permiten avanzar en la discusión sobre el futuro energético del país. Para usar un símil que puede parecer torpe, es como si un país de hambrientos estuviera sentado sobre un enorme pastel, pero decidiera no probarlo para no disgustar u ofender a unos ancestros que murieron hace décadas. De ese tamaño es nuestra ceguera en el tema energético. Lo que requerimos en la actualidad son aproximaciones frescas y pragmáticas, que nos aporten soluciones de fondo y no meramente cosméticas a los desafíos que enfrentamos. Un poco de sentido común puede ser de gran ayuda. La pregunta es muy sencilla: ¿cómo resolvemos los problemas de exploración, explotación, refinación y distribución del petróleo y de las demás fuentes de energía? Para poder contestar adecuadamente es indispensable guiarse por los hechos y los datos duros, a fin de no caer en prejuicios ideológicos que no hacen más que poner obstáculos en una discusión nacional que no solamente es relevante, sino que se ha vuelto sumamente urgente. Veamos. 1. y reservas a la baja

Producción

petrolera

Durante décadas hemos dependido de la renta petrolera para financiar el gasto público. Todos los datos disponibles señalan que el petróleo se acaba a gran velocidad. Entre 1999 y 2012, las reservas de crudo disminuyeron 23%. De seguir a este ritmo, para la mitad del siglo XXI nos quedaremos sin crudo, con todo lo que ello implica para la economía del país. Mientras que Estados Unidos produce cada vez más petróleo, como resultado de la exploración en aguas profundas y ultraprofundas, pero sobre todo por la técnica llamada “shale oil”, nosotros vamos declinando a un ritmo estratosférico. En 2004 fuimos capaces de producir 3 millones 383 mil barriles diarios; en 2013, las proyecciones indican que estaremos rozando apenas los 2 millones 544 mil barriles diarios. La caída es brutal, y todavía no la sentimos porque los precios internacionales se mantienen muy altos; si llegaran a bajar un poco, tendríamos que aplicar drásticas medidas de austeridad en el gasto público: se cerrarían escuelas y hospitales, se despedirían funcionarios públicos, se eliminarían programas de apoyo a las personas más pobres, se aumentarían los impuestos, etcétera. En 2012, en Estados Unidos se perforaron 9 mil 100 pozos en yacimientos de shale oil / gas; en México fueron apenas tres. Durante ese mismo año, Estados Unidos perforó 137 pozos en aguas profundas y ultraprofundas; México, apenas seis (ver el Cuadro 1).

2. La en materia de gas?

otra

energía:

¿qué

hacemos

Ahora bien, el problema no es solamente el petróleo, sino también el gas que utilizamos para calentar nuestra comida, bañarnos y mover nuestra industria. En 1997 importábamos solamente 3% del gas que consumíamos; hoy en día importamos 33%. Y eso a pesar de que se estima que México es el sexto país del mundo con mayores reservas probables de gas natural shale, solamente por detrás de Estados Unidos, China, Argentina, Argelia y Canadá, pero muy por encima de Rusia (que abastece de gas a buena parte de Europa) y de Brasil.

Hay que tomar en cuenta que, de 2008 a la fecha, la cantidad de gas natural que México le compra a Estados Unidos ha aumentado 177%. De hecho, la disponibilidad de gas a precios bajos es un punto de apoyo muy fuerte para la industria manufacturera, que es un sector estratégico de la economía mexicana. Lo cierto es que nuestro Sistema Nacional de Gasoductos alcanzó su límite de capacidad en noviembre de 2012. En el primer semestre de 2013 se han generado ya 13 alertas críticas, las cuales pueden dar como resultado el desabasto de gas en buena parte del país. La capacidad de transportarlo está hasta el tope. Nos guste o no, lo cierto es que el futuro ya nos alcanzó. Hoy tenemos la capacidad de transportar 5 mil millones de pies cúbicos de gas diariamente; para el año 2026 necesitaremos transportar más de 8 mil 400 millones de pies cúbicos. O nos ponemos las pilas para invertir en gasoductos o terminaremos bañándonos con agua caliente una vez por semana en las ciudades del país. Y esa no será la peor consecuencia del desabasto de gas. Los que más sufrirán serán los industriales mexicanos, que verán pulverizada su competitividad frente a otros países por falta de gas a precios razonables (ver el Cuadro 2).

3. El la gasolina que todos pagamos

subsidio

a

los

ricos:

Un tercer tema relevante en relación con la reforma energética es el de la gasolina. En 1997 importábamos 25% del consumo nacional; hoy importamos 49%, y todo indica que esa cifra seguirá subiendo en los próximos años. Eso nos cuesta una millonada, y se debe a que no tenemos capacidad de refinación en el país. Es absurdo que saquemos tanto crudo, lo llevemos al extranjero a que lo refinen, lo compremos mucho más caro en forma de gasolina y paguemos para que lo transporten de vuelta a México. La importación neta de petroquímicos le costó al país 14 mil 500 millones de dólares en 2012. Es el costo de tantos años de demagogia y de cerrar los ojos ante lo evidente. Repito lo que los datos están poniendo frente

a nuestros ojos: el futuro ya llegó, nos guste o no. Ahora estamos obligados a actuar y a hacer una profunda reforma energética si queremos tener un país con futuro. En el caso del subsidio oficial a la gasolina, abundan los estudios que demuestran que se trata de una transferencia de recursos públicos que beneficia mayoritariamente a los sectores ricos y muy ricos del país, quienes de todas formas podrían pagar la gasolina sin subsidio. Pero bajo el actual esquema, Pemex trabaja para el 20% más rico de la población mexicana, cuando lo cierto es que tenemos a la mitad de la población viviendo todavía en la pobreza. ¿Es justo? ¿Es racional mantener ese esquema de subsidios? ¿Cómo es que nuestros partidos de izquierda, que dicen defender a los pobres, no se han puesto a la cabeza de un gran movimiento nacional que tenga como propósito disminuir o terminar con tales subsidios regresivos? 4. Hay las tomas clandestinas

poco

y

se

lo

roban:

Por si fuera poco todo lo que llevamos dicho, hace falta agregar que persiste el robo de gasolina a través de tomas clandestinas en los ductos de Pemex que recorren buena parte del país. En 2012 fueron detectadas nada más y nada menos que mil 744. Tenemos poco combustible, nos cuesta muy caro y todavía hay algunos aprovechados que se lo roban. Es el colmo (ver el Cuadro 3).

Es probable que el robo de combustible sea orquestado desde adentro de Pemex. No es fácil que un ciudadano común y corriente pueda perforar un ducto, conectar una toma y extraer el producto que transporta. Tampoco es sencillo que arme una red de distribución y venta que haga rentable esa actividad ilícita. Debe de haber dueños de gasolineras metidos hasta el cuello en este negocio ilícito. Todo apunta a que existen redes bien organizadas que controlan el tráfico de los combustibles robados. Si hubiera más coordinación entre Pemex y las fuerzas de seguridad federales y locales, se podrían obtener muchos resultados a mediano y corto plazos. Pero la evidencia que sugiere el Cuadro 3 es que, lejos de disminuir, el problema sigue creciendo: en 2004 se detectaron 110 tomas clandestinas, pero para 2012 ya eran mil 744. El problema no ha dejado de crecer.

5. La reforma que no podemos posponer Como ciudadanos, deberíamos exigir de manera muy firme que el Gobierno y el Congreso trabajen lo antes posible en el diseño de una reforma energética profunda y no meramente cosmética. Obviamente, una reforma de esa naturaleza va a afectar intereses creados, comenzando por los del sindicato de Pemex y su muy cuestionable dirigencia. El sindicato de Pemex —hay que decirlo con todas sus letras— se ha convertido en un lastre para el desarrollo energético del país. La productividad de sus trabajadores está por los suelos. Para darnos una idea: Pemex produce 10 mil 229 barriles al año por cada uno de sus trabajadores, mientras que ExxonMobil es capaz de producir 20 mil 175 barriles anuales por trabajador y la empresa colombiana Ecopetrol produce 31 mil 335 barriles por trabajador. Es decir, un trabajador colombiano da tres veces mejores resultados que uno mexicano. Caramba, ¡dan ganas de importar mano de obra colombiana! ¿Será que no podemos incentivar adecuadamente a nuestros trabajadores para que hagan de Pemex una empresa que esté a la altura de los desafíos que enfrentamos? ¿No podemos revisar cada una de las prebendas del sindicato para que, efectivamente, los beneficios de la industria petrolera se distribuyan por entero entre los ciudadanos y no se queden en manos de una camarilla sindical que debe estar entre las más acaudaladas del planeta y que se niega sistemáticamente a rendir cuentas de ningún tipo? Nadie puede negar que lo que está en juego es demasiado importante. O tomamos las decisiones correctas lo antes posible, o el futuro nos pasará por encima y seguiremos siendo el país pobre y subdesarrollado que hemos sido durante tanto tiempo. El avance que hemos logrado se puede borrar en pocos años. ¿Estarán nuestros políticos a la altura del reto o seguiremos retrasando la toma de decisiones que le urgen al país? __________ MIGUEL CARBONELL es investigador de tiempo completo en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM y profesor de la Facultad de Derecho de la misma universidad . - See more at: http://estepais.com/site/?p=46842#sthash.H4rteBcD.dpuf

MÉXICO, SEGUNDO PAÍS PRIVATIZADOR DE AMÉRICA LATINA Natalia Antezana Bosques /@Natalia3_0 http://revoluciontrespuntocero.com/mexico-segundo-pais-privatizador-de-america-latina/ (05 de agosto, 2013).- El discurso oficialista mexicano casi equipara los conceptos de apertura a la inversión privada y modernización. Desde el año 1982 se abrieron las puertas para que la iniciativa privada empezara a invertir en áreas exclusivas y prioritarias del Estado. Para tales efectos se han llevado a cabo reformas constitucionales, leyes secundarias, reglamentos, entre otras estrategias legales. Así es como México se convirtió en el segundo país privatizador de América Latina, según el economista Julián Castaño. En treinta años en México se han privatizado sectores como la siderurgia, la banca, teléfonos y ferrocarriles, entre otras importantes. Según un estudio del Banco Mundial en la década de los años 90, el gobierno mexicano transfirió a particulares activos por 31.458 millones de dólares, lo cual representa el 20,4 por ciento de la venta total de empresas propiedad del Estado en Latinoamérica, según la tesis doctoral del Economista Julián Castaño Guillèn, de la universidad de Extremadura. Un ejemplo claro de dicha afirmación es lo sucedido con la Banca. Según Castaño, entre 1988 y 1993 el estado transfirió al sector privado el 50 por ciento de sus empresas, de las cuales, 18 eran entidades financieras.

Los bancos fueron recapitalizados y dotados de reservas para afrontar la deuda vencida y la interbancaria, pero tras la privatización, el estado obtuvo -12 mil millones de dólares- 3.53 veces más del valor de los libros contables. El economista Emilio Sacristàn, de la Universidad Nacional Autónoma de México señala que años después, con el rescate de la banca –que se endeudó con el fobaproa/IPAB- el estado gastó dos o tres veces más el valor del que obtuvo por la venta, para dicho fin. Otro ejemplo de las privatizaciones en México es la siderurgia. Sidermex, un conjunto de tres siderurgias con administración federal -Altos Hornos, S.A., Fundidora Monterrey, S.A. y Siderúrgica Lázaro Cárdenas-Las Truchas, S.A. de C.V.- fue vendida a la iniciativa privada por Un total de 755 millones de dólares. No obstante el costo en pasivos de las tres empresas superaba los 6 mil millones de dólares, según el economista Emilio Sacristán. Por lo menos 15 comunidades en el territorio mexicano están en pleito con empresas que tienen concesionados sus territorios para la explotación de mineral, puesto que aparte de contaminar su medio ambiente, inhabilitan las tierras para su cultivo, siendo pueblos con altos índices de pobreza. En este mismo conjunto se encuentra Teléfonos de México, que a pesar de que los nuevos dueños cumplieron las exigencias, gozaron de “un lapso de privilegio monopólico”. Actualmente las tarifas en el sector están por encima de otros países. En el caso de los ferrocarriles la privatización se empezó con los talleres de mantenimiento y la flota locomotora que estaba asignada a ellos, en el año 1994. Un año después se reformó el artículo 28 constitucional, en el cual se especificaba que los ferrocarriles eran exclusivos del estado. Actualmente el sistema ferroviario mexicano cuenta con dos ferrocarriles en manos extranjeras y otros dos en manos estatales. El pasado 29 de julio, el ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador señaló que el 50 por ciento de la Comisión Federal de Electricidad se encuentra en manos privadas. Asimismo informó que en los últimos seis meses se han registrado pérdidas de hasta 35 mil millones de pesos. Para que se llevara a cabo la privatización del 50 por ciento de la comisión, el tabasqueño señaló que se tuvo que reformar la ley secundaria al artículo 27 constitucional en el año 1992, cuando aún era presidente Carlos Salinas de Gortari. Con esta modificación se permitió entregar contratos a empresas extranjeras para la generación de energía eléctrica en el país, lo cual resulta en un cobro excesivo por consumo de luz en el país, explicó el ex jefe de gobierno. (http://revoluciontrespuntocero.com/la-privatizacion-es-sinonimo-de-corrupcion-amlo/) Ejemplos como los anteriores se multiplican a lo largo de la historia mexicana. El economista Emilio Sacristan señala que sólo en algunos casos se han alcanzado parcialmente los objetivos planteados ante las privatizaciones de las empresas en México, mas no en la mayoría. Hay casos, especialmente los bancarios, en que la operación resultó ser menos eficiente y más costosa en manos privadas que estatales. Aunque el economista señala que es difícil emitir un juicio objetivo al respecto, explica que bajo la experiencia adquirida en las últimas tres décadas en privatizaciones, no se recomienda seguir con el mismo modelo económico.

CUENTAS ALEGRES DE LA PRIVATIZACIÓN DEL PETRÓLEO

¿PUNTA DE LANZA DE LOS INTERESES DE EEUU? Pedro Echeverría V. Rebelión http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172137 1. Cuando una gente miserable se roba un pan o una cartera y lo detienen se va con todos sus huesos a la cárcel, pero si un presidente o régimen político con sus programas erróneos o irresponsables destruye la economía de un país, lo hacen más miserable o provoca decenas de miles de muertos, no pasa nada. En 1993 se firmó, de manera irresponsable, el Tratado de Libre Comercio (TLC) que llevó al pueblo de México a mayor miseria, desempleo y hambre y los salinistas siguen gobernando. Zedillo, Fox y Calderón siguieron aplicando el TLC y la miseria se hizo más grande; nadie fue castigado. En septiembre se busca aprobar la privatización del petróleo y si esa política demuestra que es errónea porque el pueblo sigue en la miseria, pues tampoco pasará nada. 2. Petróleos Mexicanos (Pemex) se convertirá en “punta de lanza de la innovación a nivel mundial”, aseguró su director Emilio Lozoya Austin. Dijo que con acciones como ésta se refrenda la voluntad del gobierno federal de fortalecer a la empresa como palanca de desarrollo e impulsora de otras industrias. Resaltó que Nacional Financiera y Pemex son socios en diversas iniciativas de fomento empresarial. Nafin brinda liquidez a proveedores de Pemex operando un promedio de 40 millones de pesos diarios. Nafin ofrece un “micrositio electrónico” informativo. A su vez, el titular de la Secretaría de Economía, Ildefonso Guajardo, reiteró que el gobierno de la República comprará más de 100 mil millones de pesos al año a pequeñas y medianas empresas. 3. Ignora el “junior” Lozoya que el petróleo sólo puede convertirse en “punta de lanza de innovación mundial” si es usado como instrumento de independencia política para el desarrollo nacional y no como una mercancía más controlada por los EEUU. Otras naciones como Venezuela, países árabes, han sabido usarlo como instrumento de presión adecuado de intercambio para evitar que los países imperialistas les impongan su mercado; el petróleo de México, por el contrario, le ha servido a los EEUU –por lo menos desde 1982- para chantajear y romper los bloques de países petroleros árabes. ¿Puede haber un país más solidario que Venezuela que en los 13 años del gobierno de Hugo Chávez usó su petróleo para apoyar a los países que más lo necesitan y que están enfrentados al imperialismo? 4. Uno de los peores problemas que pueden ocurrir en caso de que comiencen a fluir capitales extranjeros en petróleos es que el gobierno de Peña Nieto, los empresarios y los inversionistas protegidos, se dediquen a dilapidar capitales en obras suntuosas e innecesarias. ¿Puede olvidarse acaso el sexenio de López Portillo que ante la “abundancia” petrolera y de dineros que se obtuvo de su venta, se comenzaron a construir grandes y suntuosas plazas como las de Monterrey, Guadalajara, Culiacán, Toluca y muchas más obras que quedaron a medias porque llegó la crisis? Obras en las que justificaron grandes derroches y desfalcos. Por ello me preocupa que ahora se esté adelantando que el petróleo será “la punta de lanza a nivel mundial”. 5. Ninguna política petrolera, fiscal, financiera o de comunicación es justificable si no va directamente ligada a resolver los problemas de comida, de salud, de vivienda y de educación de los sectores ampliamente mayoritarios de la población. Después de resolver estos cuatro problemas básicos centrales en todo el país se puede pasar a otros; pero no se puede justificar que durante siglos se sigan sufriendo esos mismos problemas por el 70 por ciento de la población. Quizá en algunos países europeos no sean esos los problemas básicos a resolver, pero en México, América Latina, África, Asia, son los asuntos prioritarios desde hace muchos siglos. Cualquier política de reducción de la desigualdad, de distribución equitativa de la riqueza, debe ser bienvenida. 6. El día en que el pueblo mexicano esté convencido de que su gobierno y sus empresarios son gente honesta y con espíritu de servicio, con los ojos cerrados apoyará cualquier política que se instrumente; pero

en el México en que es exactamente lo contrario: políticos y empresarios sólo viven para hacer negocios, explotar y acumular capitales particulares, el pueblo tiene que oponerse a cualquier política, aunque se prometa otra cosa. Existe una absoluta desconfianza en los partidos políticos: PRI, PAN; PRD y demás por todo lo que han hecho sólo en beneficio de ellos mismos. Por eso cuando los funcionarios y grandes empresarios hacen cuentas alegres pensando en la privatización hay que decirles que en vez de joder al pueblo es mejor que se jodan a su progenitora. Blog del autor: http://pedroecheverriav.wordpress.com

GRANDES EMPRESAS DESPIDIERON A 68 MIL PERSONAS DE ENERO A JUNIO EL 73 POR CIENTO DE LOS RECORTES AFECTARON A EMPLEADOS, CON 50 MIL 61 CESADOS EN EL PERIODO Foto Aspecto parcial de Santa Fe, donde se instalaron las empresas más grandes del paísFoto Roberto García Ortiz Susana González http://www.jornada.unam.mx/2013/08/05/economia/028n1eco Periódico La Jornada Lunes 5 de agosto de 2013, p. 28 Las grandes empresas del país que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), muchas de ellas trasnacionales y que tienen entre sus principales accionistas a integrantes del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios (CMHN), despidieron en total a 68 mil 479 trabajadores durante el primer semestre de 2013. El dato corresponde a los informes financieros más recientes de 31 firmas mineras y siderúrgicas, constructoras, televisoras, telefónicas, agroalimentarias, de servicios, fabricantes de diversos artículos de consumo así como de materiales, fraccionadoras, aerolíneas y cadenas de supermercados que concentran más de 70 por ciento del valor del mercado. Se trata de Grupo México, Industrias Peñoles, Altos Hornos, Walmart, Soriana, Chedrahui, Comercial Mexicana, ICA, Cemex, Cementos Chihuahua, MexiChem, Vitro, Geo, Sare, Hogar, Homex, Ara, Televisa, Tv Azteca, América Móvil, Bachoco, Bimbo, Femsa, Grupo Modelo, Aeroméxico, Grupo Posadas, Kimberly-Clark, Alfa, Gruma, Grupo Carso y San Luis. Muchas son parte también de los 39 integrantes del CMHN, presidido por Claudio X. González, de KimberlyClark, y que este año se comprometió a invertir 27 mil millones de dólares en México, lo que según divulgaron, contribuiría a la generación de más puestos de trabajo. Sin embargo, al llegar a la mitad del año las esas compañías reportaron tener un millón 280 mil 856 trabajadores (entre obreros, empleados y funcionarios), una reducción de 5 por ciento respecto al millón 349 mil puestos de trabajo que informaron tener cuando finalizó 2012. Esa caída en la plantilla laboral de estas grandes empresas implica que cada día, entre enero y junio de este año, 378 mexicanos perdieron su trabajo, es decir, entre 15 y 16 por hora. En promedio, cada una de las 31 empresas revisadas por este medio de información cesaron a 2 mil 208 empleados en el semestre. Los despidos contrastan con el aumento de ganancias que, en general, reportaron la mayoría de las empresas en comparación con el primer semestre de 2012 y que sumaron 130 mil 51 millones de pesos. La principal excepción la constituyen fraccionadoras como Homex, Ara, Geo, Hogar o Sare, que desde el año pasado ya presentaban pérdidas.

El 73 por ciento de los recortes afectaron a empleados, pues acumularon 50 mil 61 despidos, lo cual se explica porque la mayoría de las empresas son de servicios. Este grupo pasó de tener 803 mil 9 puestos de trabajo a 752 mil 948, una caída de 6.2 por ciento en el semestre. Los obreros sumaban 451 mil 302 en diciembre, pero para junio llegaron a 431 mil 622, es decir, una disminución de 4.3 por ciento. En cambio, el grupo de funcionarios no disminuyó en varias empresas e incluso en algunas se incrementó, aunque hay muchas que no tiene este tipo de puesto. Entre las 31 empresas analizadas, el de los funcionarios fue el único de los tres grupos de personas contratadas que ganó más plazas, al pasar de 95 mil 16 en diciembre a 96 mil 30 para junio, es decir, un punto por ciento adicional en seis meses. Más grandes, menos empleo Entre el listado seleccionado destacan los siguientes casos: la fraccionadora Homex registró un desplome de 38 por ciento en sus puestos de trabajo, al pasar de 9 mil 975 en diciembre pasado a sólo 3 mil 792; de ellos 35 por ciento eran de obreros, pues sólo se mantuvieron 748 contra 4 mil 267 que había a finales de 2012. La trasnacional Walmart, que se ufana de ser una de las principales empleadoras del país y que no ha dejado de inaugurar tiendas, en el periodo mencionado despidió a 8 mil 847 empleados (no tiene funcionarios ni obreros), lo que representa una reducción de 3.5 por ciento de su plantilla laboral. En diciembre contaba con 193 mil 333 trabajadores, pero cerró junio con 182 mil 260, indica su informe financiero enviado a la BMV. Alfa, dedicada a los petroquímicos, autopartes, alimentos refrigerados y telecomunicaciones, reportó contar con 66 mil 989 funcionarios, empleados y obreros en 2012, cuyo número quedó reducido a cero en junio de este año, sin que se explique si esto se debe a que ya son contratados mediante outsourcing. En Cemex se perdieron mil 22 puestos de trabajo, al pasar de 43 mil 905 a 42 mil 883. En Grupo Bimbo se perdieron mil 61 y en la cadena Chedrahui mil 294. En otras compañías las reducciones fueron menores y también están las que reportaron incrementos en algunos de los tres grupos de trabajadores que conforman sus plantillas, como por ejemplo Altos Hornos de México o Industria Peñoles. Incluso hay fraccionadoras o vivienderas donde aumentaron los puestos de trabajo como Ara y Geo, en el sector de obreros.

LA CAÍDA DEL PIB Sergio Silva ( Ver todos sus artículos ) http://www.nexos.com.mx/?P=leerarticulo&Article=2204273 0 COMENTARIOS versión para imprimir enviar por email aumentar tamaño del texto tamaño normal del texto disminuir tamaño del texto En las últimas semanas del sexenio pasado y durante los primeros meses del actual vimos una estampida de artículos en la prensa internacional desbordando optimismo sobre el futuro económico de México. The Economist, Financial Times, Foreign Affairs y, particularmente, el New York Times, todos publicaron artículos donde se describía a México en el umbral de un despegue económico brutal. En un caso extremo este optimismo desbordado alcanzaba para colocar a México en la competencia con India y China por ser la economía más importante del siglo XXI.

Este optimismo parecía particularmente anómalo considerando que el desempeño económico de México en los últimos años dista de ser espectacular. El súbito consenso además coincidía con el regreso del PRI al Poder Ejecutivo. Perfecta receta para despertar a los teóricos de la conspiración. Pero supongamos que no se trata de una conspiración sino de una estrategia, argumento que escuché un par de veces en círculos académicos: una campaña de medios que resalte las potencialidades de la economía mexicana y aleje la imagen del país de la nota roja permitiría atraer inversiones de tal forma que el resultado sería una especie de profecía autocumplida. Altas expectativas se traducirían en altas inversiones y éstas, a su vez, permitirían cumplir esas altas expectativas. Unos cuantos meses han pasado y el optimismo parece colapsarse. Después de una portada de The Economist en noviembre pasado con un artículo títulado “The Rise of Mexico”, en mayo los editores de la misma publicación se preguntaban si la economía mexicana era un tigre azteca o un simple gatito. ¿Qué fue lo que pasó? Simplemente que el optimismo no aguantó los primeros datos económicos del sexenio. Un trimestre de mal desempeño económico fue suficiente para obligar a editorialistas mexicanos y extranjeros a moderar su optimismo. Aunque aún no tenemos datos oficiales sobre el desempeño de la economía en el segundo trimestre, las estimaciones de algunos analistas nos muestran que las cosas no mejorarán mucho en la segunda parte de este semestre. Si el optimismo desbordado fue una estrategia, ésta ya fracasó. El dato clave de ese primer trimestre es el raquítico crecimiento de 0.8% anualizado en el PIB real. Ciertamente un dato menos preocupante si, como se han cansado de explicar los analistas económicos, tomamos en cuenta el efecto que tiene sobre estos indicadores el hecho de que la semana santa este año haya caído en este trimestre. INEGI estima que si no fuera por ese efecto-calendario el crecimiento hubiera sido del orden de 2.2%. Aún así, es un crecimiento muy por debajo de la meta original de 3.5% para 2013 y, sobre todo, muy por debajo del crecimiento durante el mismo trimestre del año pasado que fue de 4.9%. La caída del PIB Aún peor, Jonathan Heath estima, con los pocos datos disponibles hasta el momento, que el crecimiento en el segundo trimestre no será mucho mejor. De acuerdo con Heath, un escenario optimista pondría al crecimiento anualizado durante el primer semestre alrededor de 1.6% (aquí el multicitado efecto calendario ya se habría desvanecido al estimar la tasa anualizada para todo el semestre). La principal razón detrás de este pobre desempeño de la economía mexicana es la desaceleración de la economía de Estados Unidos. Mientras que se esperaba un crecimiento de 2.4% en la economía americana durante el primer trimestre, el crecimiento fue de sólo 1.8%. Muchos analistas coinciden en que si la economía mexicana ha de alcanzar un crecimiento anual por encima de 3%, requeriríamos que Estados Unidos creciera a tasas que no hemos visto desde el otoño de 2009. Posible, pero poco probable. The Economist y otros basaron su optimismo, entre otras cosas, en el hecho de que los salarios en China habían crecido de tal forma en la última década que prácticamente habían alcanzado a los salarios mexicanos. Si bien los salarios en China siguen siendo ligeramente menores que en México, la diferencia ya no es suficiente para compensar la ventaja geográfica que tienen los productores mexicanos para llegar al mercado de Estados Unidos. Los salarios chinos hicieron competitivas otra vez a las exportaciones mexicanas. Este argumento tiene dos problemas, primero que de poco sirve ser más competitivos que China cuando el principal cliente para esas exportaciones no está creciendo lo esperado. Mientras la economía de Estados Unidos no crezca a tasas como las de 2009 y 2010, nuestro sector exportador no será suficiente motor económico, por más competitivo que sea. El segundo problema es que la convergencia de salarios entre México y China se debe al crecimiento acelerado de los salarios chinos frente al estancamiento de los salarios mexicanos. Y este estancamiento en los salarios en México explica, en buena medida, la falta de dinamismo del mercado interno y, por tanto, el que nuestro crecimiento dependa casi por completo de la demanda en Estados Unidos por nuestras exportaciones. Ciertamente, el optimismo también encontraba sustento en el afán reformador del nuevo gobierno. Se esperaba que el impulso de varias reformas de esas llamadas estructurales impulsaría el crecimiento y, por

lo menos, haría al país más atractivo en materia de inversiones. Sin embargo, el efecto directo de estas reformas sobre el crecimiento es cuestionable. Una reforma educativa exitosa sólo tendrá efectos en el mediano plazo y algunos elementos importantes de esa reforma no están definidos. Los detalles de la reforma en telecomunicaciones están aún por verse. La reforma financiera, tal vez la que más efecto podría tener sobre el crecimiento de la economía de las que hasta ahora se han presentado, ha sido descrita como parcialmente acertada en el diagnóstico pero equivocada en las soluciones que ofrece. Pero además las más importantes en materia económica, la energética y la fiscal, aún no han sido presentadas. Seis meses después, ese afán reformador a quedado reducido, en materia económica, a mucho ruido y pocas nueces. Así sólo tenemos una reforma ya aprobada que tendría que haber permitido mayor crecimiento económico durante el primer semestre de este año, la laboral. Entre los ríos de tinta que corrieron durante el otoño pasado hubo quienes incluso pronosticaron que de ser aprobada esa reforma, como lo fue, la economía mexicana crecería entre 1% y 1.5% de la tasa de crecimiento sin reforma. Si aceptamos el estimado de Heath sobre el crecimiento del primer semestre de 2013 tendríamos que optar por una de tres explicaciones posibles. La primera sería que efectivamente la reforma impulsó el crecimiento en el primer semestre de tal manera que sin reforma el crecimiento en el primer semestre hubiera sido de entre 0.1% y 0.6%: la maravilla de los argumentos infalsificables. La segunda opción sería que si bien la reforma fue publicada el 30 de noviembre de 2012, los efectos positivos no serían inmediatos. Tal vez los apologistas de la reforma olvidaron explicarnos exactamente cuánto tiempo íbamos a tardar en ver los efectos de un mercado laboral más flexible. La última opción es que probablemente la economía mexicana no sufría de falta de flexibilidad laboral y por tanto el posible efecto de esta reforma sobre el crecimiento fue sobreestimado. En cualquier caso, el punto es que con todo y reforma laboral esta administración tiene ya un primer semestre de gestión con un crecimiento económico raquítico. Pareciera que la administración de Peña Nieto ha tratado de revivir el optimismo lanzando algunos datos esperanzadores en materia de empleo. Según la Secretaría de Hacienda, el número de afiliados al IMSS creció durante el mes de mayo a una tasa anualizada de 4.0%. Además, reporta Hacienda, la generación de empleos entre enero y mayo de 2013 está muy por encima del promedio para el mismo periodo en los últimos 10 años. Si esto es cierto, Hacienda ha descubierto un fenómeno interesante en la economía mexicana que tendría que ser estudiado por economistas en todo el mundo: crear empleos sin crecer económicamente. Por desgracia, los datos de Hacienda no coinciden con lo reportado por el INEGI. Según INEGI el número de afiliados al IMSS de hecho se redujo en mayo de 2013 y, si bien entre enero y mayo de 2013 sí se crearon más empleos que en el mismo periodo de 2012, la cifra es menor a la de empleos creados en el mismo periodo de 2011 y en 2010. Si Hacienda no está pecando de optimista, entonces INEGI necesita terapia contra su mal humor. Así las cosas, la estrategia del optimismo desbordado no aguantó un semestre de malos resultados. Tal y como la estrategia de un equipo de futbol tiene que cambiar al recibir un par de goles en los primeros cinco minutos, el equipo económico del presidente Peña Nieto tendrá que cambiar el planteamiento ante los resultados de un mal primer semestre. n Sergio Silva. Profesor-investigador del Departamento de Relaciones Internacionales del ITAM.

EN LAS URNAS: MÁS DINERO, MÁS CORRUPCIÓN Luis Carlos Ugalde • Mario Guzmán ( Ver todos sus artículos ) http://www.nexos.com.mx/?P=leerarticulo&Article=2204271

La democracia electoral en México se ha encarecido en los últimos años, tanto en su vertiente presupuestal como en la de financiamiento ilegal y no registrado. Aunque la reforma electoral de 2007 redujo el financiamiento público para campañas, en los hechos su costo ha aumentado y con ello el flujo de recursos privados y fuera de la ley. Que las campañas sean más caras tiene un impacto corruptor sobre el funcionamiento de los gobiernos y sobre el sistema democrático en su conjunto. El costo de la democracia electoral comprende cinco rubros: a) el presupuesto público destinado a financiar el funcionamiento de las autoridades electorales; b) el financiamiento público a los partidos políticos y campañas; c) el financiamiento privado; d) otras fuentes de financiamiento no r eportado; e) el valor de mercado de los spots gratuitos de radio y televisión, fruto del nuevo modelo de acceso a medios vigente a partir de 2007. Pese a que la reforma electoral de 2007 redujo el financiamiento público a partidos: pasó de cinco mil 393 a cinco mil 143 millones de pesos entre 2006 y 2012, el financiamiento público total del sistema electoral federal se ha incrementado: pasó de 16 mil 906 millones en 2006 a 17 mil 452 millones en 2012 (en términos reales). El aumento se debió, en mayor part e, a un incremento significativo del presupuesto del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Como se observa en la gráfica 1, la reducción del financiamiento público a partidos fue de 250 millones entre 2006 y 2012, equivalente a 4 .7%. La reducción es marginal porque a pesar de que el financiamiento de campañas cayó en 37% (pasó de dos mil 674 millones de pesos en 2006 a mil 681 millones en 2012), esta reducción fue compensada con un incremento de 26% en el financiamiento de gastos ordinarios y permanentes de los partidos, los cuales pasaron en el mismo periodo de dos mil 674 a tres mil 361 millones de pesos.

Financiamiento privado Además de las prerrogativas públicas, los partidos y las campañas se fondean mediante aportaciones privadas que realizan sus militantes y simpatizantes, ya sea en efectivo o en especie. Aunque los partidos podrían allegarse fondos pr ivados mayores, las reglas lo desincentivan. Por una parte, los topes de contribuciones individuales son bajos (1.7 millones de pesos en 2012). Pero aun cuando un partido busque muchas donaciones privadas, enfrenta un segundo obstáculo: los partidos sólo pueden recaudar un total de aportaciones que no rebasen el 10% del tope de gastos de la campaña presidencial —aproximadamente 33.6 millones—. Eso significa que en 2012 un partido sólo podría haber recaudado 20 donaciones privadas de 1.7 millones y llegar a su límite. Adicionalmente, si un partido recaudara muchos fondos privados no podría gastarlos porque rebasaría los topes de campaña. No hay sincronía entre las reglas de financiamiento privado y los topes de campaña. Como resultado, en 2006 el financiamiento privado reportado a la autoridad representó sólo 12% del financiamiento público, con partidos que mostraban aportaciones mínimas de 2% (PVEM), hasta aportaciones de 13% (PRI), 15% (PRD) y hasta 27% (PAN). Por su parte, en 2012 el financiamiento privado habría representado, con cifras preliminares, 17% del financiamiento público, con aportaciones privadas desde 10.5% (Movimiento Ciudadano) hasta 24% (PANAL). 1

Asimismo, algunos partidos y campañas recurren a financiamiento que no reportan a la autoridad electoral, ya sea porque proviene de fuentes ilegales (empresas mercantiles, recursos públicos) o porque sus montos superan los límites que establece la ley. Según diversos tes timonios de ex candidatos y operadores políticos, el financiamiento no reportado es, en muchas ocasiones, mayor al reportado a la autoridad. 2 Este sistema de financiamiento par alelo es germen de corrupción porque quien da dinero a una campaña lo hace en espera de una retribución futura: contratos de adquisiciones y obra pública, permisos de gobierno, acceso privilegiado a la toma de decisiones. Para desviar recursos públicos a campañas, con frecuencia se infla el costo de obras públicas y se piden pagos en efectivo a cambio de permisos de construcción y/o licencias de operación. De esa forma muchos gobiernos van acumulando bolsas de recursos que canalizan o triangulan durante l os procesos electorales. Valor de los spots Al costo del financiamiento público y privado (legal e ilegal), debe sumarse el valor de mercado de losspots que reciben los partidos de forma gratuita, a fin de obtener una estimación del valor económico de las elecciones en México. Estos spots no representan una erogación presupuestal directa debido a que son parte de los tiempos de Estado, pero implican un costo de oportunidad porque su uso para las campañas políticas significa que esos tiempos no pueden ser aprovechados por el gobierno federal, ni por otros anunciantes, además de tener un valor comercial que debe considerarse. Por ejemplo, en 2012 estas prerrogativas se tradujeron en 45 millones de spots para todo el proceso electoral, de los cuales los partid os recibieron aproximadamente 22.5 millones. De acuerdo con un catálogo de tarifas comerciales de las estaciones de radio y televisión elaborado por Eficiencia Informativa (empresa mexicana que monitorea medios de comunicación), el valor comercial de los poco más de 22 millones despots distribuidos entre los partidos políticos durante el proceso electoral 2011 2012 (en precampañas y campañas), podría ascender a 884 mil 790 millones de pesos.

Ahora bien, al considerar que las emisoras hacen grandes descuentos, especialmente a los clientes que adquieren altos volúmenes como podría ser un partido político, a quienes cobran sólo 15% o 20% de la tarifa comercial publicada, es probable que durante el proceso electoral 2011 -2012 los partidos habrían tenido que pagar entre 132 mil 718 y 176 mil 958 millones de pesos por los spots transmitidos en campañas y precampañas. Desde cualquier perspectiva estas cifras son muy superiores a los mil 335 millones de pesos reportados por los partidos en 2006 en gastos en radio y televisión. Gasto y topes de campaña Por el lado de los egresos, aunque a la fecha se desconoce el reporte final de fiscalización de las elecciones de 2012, la evidencia sugiere que los gastos de campaña han aumentado significativamente en los últimos años y que con frecuencia superan los topes que establece la ley. Estos gastos han aumentado por la mayor competitividad electoral que ha e stimulado mayores prácticas de clientelismo electoral (movilización, dádivas, dinero en efectivo), así como por el pago de cobertura mediática —prensa, radio y televisión— que se ha vuelto una práctica común en elecciones locales. (La mayor liquidez de las haciendas locales a partir de 2003-2004 ha facilitado que esos costos crecientes sean financiables parcialmente con recursos públicos.) Como violarían la ley al rebasar los topes de gasto, algunos partidos no reportan una porción significativa de sus ero gaciones de campaña. Suelen realizarse pagos en efectivo para las estrategias de movilización de votantes, así como para “pagar” cobertura noticiosa en medios de comunicación. En ocasiones, los proveedores de servicios para las campañas facturan sólo una p orción del costo real de sus servicios, con el propósito de evitar que los partidos rebasen sus topes de campaña. Mientras los gastos de campaña han aumentado, los topes se redujeron en 2007. Por ejemplo, el tope promedio de gasto para senador pasó de 16 .3 millones en 2006 a 11.4 millones en 2012, mientras que para presidente de la República se redujo significativamente: pasó de 651.4 millones en 2006 a 403.3 millones en 2012 (incluyendo precampaña).

Muchos candidatos, ex candidatos y operadores polític os, tanto de campañas federales como locales, expresan de forma anónima que los topes de ley no reflejan la realidad del mercado y que casi todos los violan. Por ello la reducción de esos topes no ha contribuido a reducir los costos reales de las campañas y sí, en cambio, ha estimulado una mayor simulación. Los topes de campaña “irreales” desincentivan que los partidos reporten el financiamiento privado que reciben. Si lo hicieran, no podrían gastarlo porque violarían la ley. Tan sólo en el ramo de financiamiento público, en 2012 algunos partidos o coaliciones contaron con más recursos de aquellos que podían gastar durante las campañas. (Cabe mencionar que con frecuencia los partidos usan recursos de actividades ordinarias para pagar gastos de campaña.) En la gráfica 2 se ilustran los ingresos totales por coalición en 2006 y 2012, tanto de actividades ordinarias como de campaña. También se señalan los topes máximos que cualquier fuerza política pudo haber gastado en todas las campañas en disputa: una presid encial, 64 de senadores y 300 de diputados. Por ejemplo, en 2012 este tope global fue de mil 154 millones de pesos (336 millones de la presidencial más el resto). Se observa que los ingresos disponibles de algunas coaliciones superaron los topes globales.

Los topes establecidos en la reforma electoral de 2007 parecen más una aspiración o una justificación política que una intención de reducir los costos de campaña: su incidencia ha sido menor. Mucho dinero, mucha corrupción El costo presupuestal directo del sistema electoral federal —17 mil 452 millones de pesos en 2012— es apenas el piso del costo global de la democracia electoral en México. Según el estudioFortalezas y debilidades del sistema electoral mexicano. Ideas para una nueva reforma electoral, realizado por Integralia con patrocinio del Centro de Estudios Espinosa Yglesias, por cada peso presupuestal para financiar campañas, puede haber al menos cuatro pesos adicionales de financiamiento no reportado de fuentes diversas e ilegales. Asimismo, debe sumarse el valor comercial de los spots gratuitos, cuyo valor de mercado puede ascender a decenas de miles de millones de pesos. Finalmente, habría que sumar el costo del sistema electoral en las entidades del país (estudio en marcha, de futura publicación). Combatir los costos crecientes de las campañas y el financiamiento ilegal es urgente no sólo para cuidar la equidad de las contiendas electorales, sino para combatir la corrupción gubernamental. Una vez que ganan, muchos gobernantes tienen que “pagar” las facturas de quienes donaron recursos a sus campañas, para lo cual pueden desviar recursos públicos, manipular los concursos de obra pública u otorgar permisos de diversa índole. Cuando reciben apoyo del gobierno en funciones, con frecuencia abdican de su función fiscalizadora una vez en el poder: dejan de revisar las cuentas de sus antecesores y con ello se facilita la corrupción y el dispendio y se genera una cultura intertemporal de la impunidad. ¿Qué hacer para reducir los costos de las campañas? 1. Combatir la práctica de pagar la cobertura de las campañas mediante convenios de publicidad con medios de comunicación. Se requiere mitigar la “adicción” de algunos medios, sobre todo locales, de los dineros de los gobiernos y de las campañas. Una propuesta para minar esa adicción sería reducir o incluso prohibir la publicidad oficial en todo momento, no sólo durante el periodo electoral, con excepción de los programas relativos a salud y seguridad públicas. Ello con el fin de estimular un sistema de medios de comunicación (prensa, radio y TV) que viva más de su audiencia y de los anunciantes que de los presupuestos públicos y de los partidos políticos y las campañas. 2. Aunque se trata de una práctica difícil de combatir por su arraigo social, deben combatirse con inteligencia las prácticas de clientelismo electoral en sus diversas vertientes (movilización e intento de compra de voto). Aunque su eficacia es incierta y limitada, los candidatos gastan sumas enormes de efectivo en prácticas clientelares y, cada vez más, son los propios grupos organizados desde la sociedad los que piden e incluso “extorsionan” a las campañas en busca de beneficios económicos a cambio de votos. Si combatir el clientelismo es un reto muy complejo (reitero, porque se trata de un fenómeno voluntario de beneficio para muchas comunidades), una alternativa es rastrear y dificultar el uso de efectivo que se usa para pagar esas prácticas. 3. La fiscalización a partir de los informes de campaña que entregan los partidos es insuficiente. Hay que considerar modelos complementarios como: fiscalización concurrente a las campañas y no sólo a posteriori como sucede actualmente; mayor inversión en sistemas de detección de propaganda fija (espectaculares) y mayores auditorías en tiempo real a los eventos públicos de campaña. ¿Cómo combatir el financiamiento ilegal? 1. Fortalecer la fiscalización de los gobiernos estatales y municipales. Se trata de una medida no electoral pero indispensable para detener el desvío de recursos públicos a campañas. 2. Estimular que las donaciones privadas se transparenten mediante nuevas fórmulas y topes de financiamiento privado. Hay dos opciones: seguir estigmatizando el financiamiento privado (que ya es mayoritario) o encontrar nuevas fórmulas para transparentarlo y legalizarlo (con límites y fórmulas más realistas). 3. Repensar los topes de campaña: por una parte, no han evitado los gastos excesivos; por otra, estimulan que se oculte financiamiento y gasto que no se puede reportar porque violaría la ley. En lugar, la autoridad

debería focalizar su atención en evitar desvío de recursos públicos y que dinero del crimen organizado penetre campañas políticas. n Luis Carlos Ugalde. Director General de Integralia. Fue consejero presidente del IFE en 2003-2007. Mario Guzmán. Economista e investigador en finanzas públicas de Integralia. 1

Cifras preliminares a julio de 2013. Se realizaron diversas entrevistas anónimas para conocer la vertiente informal y no reportada del financiamiento y gasto de las campañas políticas en México: incluye testimonios de candidaturas a diputados federales y gobernadores 2

LAS VERDADERAS RAZONES DE LA PRIVATIZACIÓN DEL PETRÓLEO Claudia Sheinbaum http://www.jornada.unam.mx/2013/08/09/opinion/017a2pol Modificar la Constitución con el fin de que empresas privadas nacionales y extranjeras inviertan en la cadena productiva del petróleo es, en los hechos, privatizarlo. De acuerdo con las declaraciones de connotados priístas, la propuesta que enviará Peña Nieto al Congreso de la Unión mantendrá los hidrocarburos en manos de la nación y no privatizará Pemex, pero permitirá que los privados compitan con Pemex en la exploración, explotación, transporte y transformación de petróleo. Así que aun cuando el petróleo y el gas natural contenidos en el subsuelo del territorio nacional declarativamente le pertenezcan a la nación, el permitir que la ganancia derivada de la cadena productiva de este bien público sea apropiada por privados es de facto privatizar el recurso.

Los argumentos para la modificación constitucional con objeto de privatizar el petróleo no son nuevos: México produce cada vez menos petróleo, Pemex no tiene dinero, Pemex requiere de nuevas tecnologías para explotar nuevos yacimientos que no tiene. Veamos cada uno de ellos. En cuanto al primer argumento la pregunta más obvia es: ¿necesita México producir más petróleo? La respuesta es no. Veamos por qué: a) El petróleo es un recurso no renovable. Por ese solo hecho, la explotación de este recurso debería hacerse de forma racional y limitada. b) El petróleo es una fuente de energía fósil que produce gases de efecto invernadero, causantes del cambio climático global. Por este motivo a escala internacional el debate central es cómo disminuir el consumo de estos combustibles y no cómo aumentarlo. c) México no requiere más petróleo para su consumo nacional. Actualmente México produce cerca de 2.5 millones de barriles diarios de petróleo, 900 mil barriles menos que en 2004, el año de mayor producción histórica de petróleo en México. Pero hoy por hoy, México necesita, para cubrir la demanda nacional de petrolíferos (producidos nacionalmente e importados), entre 1.9 y 2.0 millones de barriles diarios de crudo (considerando incluso pérdidas). Es decir, producimos 2.5 millones de barriles diarios y necesitamos 2 millones para el consumo nacional. Hacia el futuro, si contenemos el crecimiento de la demanda de petrolíferos a través de una verdadera estrategia de eficiencia energética y uso de otras fuentes de energía (como lo propone la propia Estrategia Nacional de Cambio Climático), la producción de petróleo podría inclusive disminuir. d) A pesar de que México exporta menos crudo recibe más dinero. En 2004 se exportaron casi 1.9 millones de barriles diarios, frente a 1.1 de 2013. En particular, la exportación de crudo a Estados Unidos pasó de 1.5 millones de barriles diarios a 950 mil barriles diarios. Sin embargo, a pesar de esta disminución, por concepto de exportación de crudo México recibió 21 mil 258 millones de dólares en 2004 y 46 mil 788 millones de dólares en 2012, ¡más del doble y récord en su historia!, debido al incremento internacional del precio del barril de petróleo. ¿Entonces, para qué necesitamos producir más? La respuesta resulta obvia frente a estos datos. No es una necesidad nacional, es una necesidad de Estados Unidos. El segundo argumento es que Pemex no tiene recursos. Veamos los datos. Además de los 46 mil millones por exportaciones, Pemex recibió por ventas internas de petrolíferos cerca de 60 mil millones de dólares. Si descontamos 30 mil millones de dólares que eroga por importaciones, el ingreso neto en 2012 es de cerca

de 80 mil millones de dólares. Por supuesto, parte de este recurso se va a los gastos de operación y mantenimiento y alrededor de 52 por ciento en impuestos y derechos. Sin embargo, para 2013 Pemex recibió un presupuesto de cerca de 39 mil millones de dólares, de los cuales alrededor de 70 por ciento tiene programado para inversión (como 30 mil millones de dólares). En comparación y de acuerdo con la información en Internet de la petrolera Shell, ésta tiene programados para este mismo año cerca de 49 mil millones de dólares de inversión en todo el mundo. Considerando las necesidades nacionales, el monto de Pemex es sumamente considerable. Por supuesto podría ser más, si las grandes empresas privadas nacionales pagaran impuestos, y podría usarse más eficientemente si disminuyera la corrupción. En realidad, el dinero de las empresas petroleras multinacionales proviene de una sola fuente y es la misma de Pemex: las ventas de crudo y de petrolíferos. Finalmente el argumento de que Pemex no tiene tecnología no sólo es patético sino es una falta de respeto a instituciones públicas como la UNAM, el IPN y el IMP, que por años han formado algunos de los mejores ingenieros civiles, petroleros y químicos del mundo. Por si fuera poco, el desarrollo, transferencia y compra de tecnología se ha hecho en Pemex por décadas. Las razones de fondo de la privatización del petróleo podrían ubicarse más bien de la siguiente manera: a) un dogmatismo religioso de la clase gobernante hacia el neoliberalismo. Aun cuando el modelo ha demostrado su fracaso, los hijos pródigos mexicanos de la escuela de Chicago no pueden reconocerlo; b) la presión del gobierno de Estados Unidos (copado por las trasnacionales petroleras) para recibir más petróleo de México y la ideología de los gobernantes mexicanos de que mientras más cercanos estemos a Estados Unidos, mejor; y c) la avaricia y corrupción de la clase política mexicana, aliada con la gran oligarquía, para quedarse con parte del negocio. Por ello, la defensa del artículo 27 constitucional es hoy por hoy la defensa de la soberanía nacional y la oportunidad de un proyecto nacional diferente. En 2008 las llamadas Adelitas en defensa del petróleo gritaban una consigna: “No, no me da la gana ser una colonia norteamericana. Sí, sí me da la gana ser una nación libre y soberana”.

CON APERTURA EN PEMEX, SÓLO ALZA MARGINAL EN EL VALOR DE LA ECONOMÍA Aportaría 0.4% de crecimiento al PIB, o $56 mil millones, cuando en 2012 la petrolera generó más de un billón 183 mil millones y financió 35 de cada 100 pesos del gasto público, según SHCP Roberto González Amador y Juan Antonio Zúñiga http://www.jornada.unam.mx/2013/08/09/economia/022n1eco Periódico La Jornada Viernes 9 de agosto de 2013, p. 22 Una eventual reforma al régimen legal de Petróleos Mexicanos (Pemex) para abrir al capital privado áreas reservadas por la Constitución al Estado aportará a la economía nacional una fracción de los recursos que ahora genera la empresa petrolera y que financian un tercio del gasto público, de acuerdo con cálculos de especialistas e información oficial. Una reforma constitucional para permitir la participación de capital privado en áreas de Pemex reservadas al Estado, como exploración o gas, aumentaría en 0.4 puntos porcentuales el crecimiento potencial del PIB, calculó Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer, el principal grupo financiero del país. El aumento de 0.4 puntos porcentuales en el crecimiento potencial del PIB representa a valores actuales 56 mil millones de pesos, que equivalen a 4.7 por ciento de los ingresos que genera la actividad petrolera para el Estado y que en 2012 sumaron un billón 183 mil 895.3 millones de pesos, suficientes para financiar 35 de cada 100 pesos de gasto público, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Una propuesta de reforma al sector energético, que involucrará las actividades petrolera y eléctrica, será presentada por el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, previsiblemente la próxima semana, según manifestaron diversas fuentes gubernamentales y legislativas. El planteamiento de modificar el régimen legal de la industria –en el que de acuerdo con la Constitución no puede participar la iniciativa privada en áreas estratégicas– está incluido en el llamado Pacto por México, en el que participan el gobierno federal y los partidos Revolucionario Institucional, Acción Nacional y de la Revolución Democrática. La manera en que la reforma energética contribuya a un mayor crecimiento de la economía –objetivo de los cambios, según sus promotores– dependerá del alcance que tengan los cambios, planteó Carlos Serrano, durante una conferencia de prensa en la que fue presentado un informe de BBVA Bancomer. Si no es una reforma constitucional, que permita la inversión privada o asociaciones de particulares con Pemex, no será entonces una reforma deseable, consideró. Tanto si no hay reforma, como si la hay y es de corto alcance, es malo. Pensamos que es mejor que no las haya a que sean incompletas, sostuvo. En todo caso, si la reforma al sector energético es aprobada e incluye cambios a la Constitución para permitir la inversión privada en áreas en las que ahora sólo puede involucrarse Pemex su impacto en el crecimiento será positivo, de 0.4 puntos en el PIB potencial. El término producto interno bruto potencial alude al nivel de producción máximo que un país puede alcanzar con el trabajo, capital y tecnología existentes, sin provocar presiones inflacionarias. Serrano dijo en la conferencia de prensa que el PIB potencial de México es de 2.7 por ciento, que subiría a 3.1 por ciento con cambios a la Constitución para permitir capital privado en Pemex. Aumentar casi medio punto del PIB con la reforma energética no es poco, respondió, al ser interrogado sobre el efecto en apariencia escaso en el crecimiento económico del país con los cambios constitucionales para abrir Pemex al capital privado. El PIB repuntatrá dos terceras partes de lo que avanzó en 2012 La desaceleración de la actividad económica en la primera mitad del año fue más acusada de lo previsto. Como consecuencia, el producto interno bruto (PIB), la medida más amplia del desempeño de la economía, repuntará en 2013 apenas dos terceras partes de lo que avanzó en 2012, anticipó este jueves BBVA Bancomer, el principal grupo financiero del país. La pérdida de dinamismo de la actividad productiva causará que sólo sean creados 540 mil empleos formales, 40 mil menos de los previstos en enero y la mitad de los demandados por la población que se incorpora al mercado de trabajo. Foto Vista aérea del edificio de Pemex en el Distrito FederalFoto Ap En ese entorno de desaceleración importante, BBVA Bancomer redujo de 3.1 a 2.7 por ciento la expectativa para el crecimiento del PIB, a la vez que advirtió sobre la posiblidad de un nuevo ajuste a la baja. Dado el débil primer semestre, bajamos la previsión de crecimiento del PIB a 2.7 por ciento para este año, informó Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer. En 2012 el PIB repuntó 3.9 por ciento, por lo que un avance de 2.7, como el anticipado ayer por BBVA Bancomer, representaría dos tercios del logrado el año pasado. La caída en el gasto y la inversión por parte del sector público, así como la disminución en las exportaciones manufactureras y petroleras fueron las causas detrás de la desaceleración en la actividad de la economía mexicana, expuso.

El miércoles pasado el Banco de México ajustó a la baja, a un rango de entre 2 y 3 por ciento, la previsión de crecimiento del PIB en 2013. El pronóstico de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que inició el año en 3.5 por ciento, fue ajustado a 3.1 por ciento en mayo pasado, donde se mantiene hasta ahora. Uno de los factores detrás de la desaceleración en la actividad de la economía mexicana fue el retraso con el que el gobierno federal, que inició funciones en diciembre de 2012, ejerció el gasto público en los primeros meses de este año, explicó Carlos Serrano, durante la conferencia de prensa en la que presentó el informe Situación México, tercer trimestre de 2013. La inversión pública se contrajo 3 por ciento anual en el primer trimestre de este año, después de que ya había presentado una caída de 4 por ciento, también a tasa anual, en el último trimestre de 2012, de acuerdo con los datos mostrados por Serrano. El otro factor que contribuyó a la desaceleración de la economía mexicana fue la disminución en las exportaciones, tanto las petroleras como las del sector manufacturero, las cuales se dirigen principalmente a Estados Unidos, agregó Serrano. Ya es muy clara la desaceleracion del primer semeste, lo vemos en que la producción industrial de México, que suele estar totalmente correlacionada con la de Estados Unidos, ha disminuido más que la de aquel país, agregó. Ello significa que, además de la caída en las exportaciones también hay factores internos – como la disminución del gasto– que explican el menor crecimiento del país, abundó. Los precios bajaron 0.03% en julio, reporta Inegi Los precios de bienes y servicios al consumidor tuvieron un descenso de 0.03 por ciento en promedio durante julio, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Con esto la inflación anual se ubicó en 3.47 por ciento, tal y como adelantó en la víspera el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, para colocarse dentro del objetivo anual del banco central de un crecimiento anual de los precios de 3 por ciento, más-menos un punto porcentual. Sin embargo, en la medición de la inflación general se observan grandes disparidades en la evolución de los precios entre productos y grupos de marcancías y servicios. La inflación subyacente, para cuyo cálculo se eliminan los bienes y servicios más volátiles, tuvo un aumento mensual de 0.03 por ciento, con el cual su incremento respecto a julio del año pasado fue de 2.5 por ciento. Los renglones de mayor crecimiento anual fueron la educación, con un ascenso de 4.41 por ciento, y los alimentos procesados, con una elevación de 3.50 por ciento. A su vez, el subíndice no subyacente tuvo una caída mensual de 0.26 por ciento en el promedio de los productos y servicios que agrupa. El abaratamiento momentáneo fue resultado de un descenso de 2.31 por ciento en los precios de las verduras y frutas, y de una contracción de 1.08 en los de productos pecuarios. Incluso, el Inegi apuntó que la cotización de la carne de pollo tuvo una baja mensual de 5.13 por ciento respecto a junio.

CENTROAMÉRICA Y EL CARIBE

POR UN SOCIALISMO MÁS EFICIENTE/ EN CUBA HAY UN PROCESO DE RENOVACIÓN GENERACIONAL, DICE ABEL PRIETO. http://juventudperucuba.blogspot.mx/2013/08/por-un-socialismo-mas-eficiente.html Abel Prieto, exministro de Cultura de Cuba y actual asesor del mandatario Raúl Castro, visita en estos días Lima, y habló con LA PRIMERA de diversos temas como los nuevos tiempos de la Revolución Cubana, el bloqueo norteamericano, la ausencia de Hugo Chávez en el panorama político latinoamericano y la crisis en Europa. Sobre Yoani Sánchez

Son personas fabricadas, sin ninguna influencia en el país, cuya misión es crear una imagen para justificar la política de agresión y bloqueo. En Cuba nadie piensa que la solución sea el capitalismo; y una abrumadora mayoría cree en las ideas del socialismo, reclamando al mismo tiempo perfeccionemos lo que haya que mejorar. No hay una real oposición a las ideas revolucionarias. La crisis Un periodista español, Santiago Alba, decía que mientras en Cuba faltan viviendas y hay gente que vive con sus suegros, en España hay viviendas vacías cerradas y gente en la calle. Esa es la irracionalidad de un sistema que tiene a las personas sin amparo alguno, que no coloca en el centro al ser humano. Es la crisis de un sistema que está encontrando su fin. Lo lamentable es que haya mucha gente que ve esto a través de los grandes medios de dominación cultural, que han hecho creer que el único sistema es el capitalismo, como un orden natural de las cosas, y que los pobres son los que fracasaron. Ese darwinismo social es de una crueldad sin límites. —Usted ha sido ministro de Cultura durante 15 años, un tiempo bajo Fidel Castro y otro con su hermano Raúl; ahora es asesor de este último. ¿Qué cambios hay de un gobernante a otro? —Hay una continuidad entre la política de Raúl y Fidel. En lo cultural, no hubo ningún cambio. Una característica sustancial de nuestro socialismo es la democratización del acceso a la cultura y protegerla de los efectos del mercado, que hace un daño implacable en el campo de lo espiritual. Mantenemos eventos como la Feria del Libro, los festivales de cine, ballet, teatro, que tienen gran impacto popular. Mantenemos la red de escuelas de arte intactas, desde el nivel elemental hasta la universidad. La educación es gratuita, para que no se pierda ningún talento. Empero, se está convocando a un análisis de las estructuras de algunas de las instituciones y ver hasta dónde se han distorsionado sus funciones por exceso de burocracia, que más que apoyar la creación y promoción de las artes, más bien la entorpece. Nuestras instituciones pueden ser más eficientes. Hoy tenemos una desproporción entre el enorme talento del país y la capacidad de las instituciones para promover ese talento dentro y fuera de Cuba.

—¿Y en cuanto a las reformas políticas y económicas? —No usamos el término reforma porque se ha contaminado mucho en los últimos años y se asocia a la restauración del capitalismo. Lo que estamos haciendo no tiene nada que ver con eso. Estamos trabajando por un socialismo más eficiente, productivo, atento a las necesidades de la población, que mantenga las conquistas de la salud pública universal y gratuita, desde curar una gripe hasta poner un marcapaso; igual en la educación, nadie tiene que pagar un centavo desde la primaria hasta la universidad. Eso no es negociable. Estamos experimentando, tratando de no equivocarnos, con formas de gestión no estatales. A veces se

habla en algunos medios de privatización, pero no es así. Estamos arrendando tierras a cooperativas o familias que las quieren hacer producir, y el Estado conserva la propiedad de la tierra. También alquilamos locales para que funcionen cooperativas de servicios de gastronomía, de transporte público, pero nunca privatizando. Basamos nuestro desarrollo en la empresa estatal, a las que se les va a dar más atribuciones y libertades en términos de gestión empresarial. Con eso esperamos salir de una situación muy tensa por el bloqueo de Estados Unidos, que está intacto.

—Hablando del bloqueo, ¿cómo ha transcurrido esa situación durante el gobierno de Obama? —Muchos creen que porque ha permitido que algunos artistas o académicos cubanos viajen a Estados Unidos, Obama va a levantar el bloqueo. La administración Obama ha sido eficaz en perseguir y multar a los bancos que hacen transacciones financieras y empresas que hacen negocios con Cuba. Esta crisis mundial nos sorprende totalmente bloqueados por un país poderoso y con un mercado grande. Por eso, la idea es producir más alimentos, porque gastamos mucho importando, con medidas de estímulo de producción para que esa situación cambie y podamos autoabastecernos. Estamos haciendo cambios en la generación de electricidad, buscando fuentes de energía. Producimos muy poco petróleo, dependemos de la importación.

—¿Esta es una nueva etapa de la revolución? —Hay una continuidad de la revolución, es un momento de transformaciones, pero no hay una fisura entre la que encabezó Fidel, la que encabeza Raúl y las nuevas generaciones que están ahora en el gobierno. Se está haciendo el tránsito de la generación histórica, con gente muy comprometida. Esta es una nueva etapa con los elementos de continuidad que he señalado: principios de socialismo, igualdad, justicia social. En nuestro sistema democrático, Raúl ha enfatizado que no hay que promover una falsa unanimidad, porque la unidad se construye en una discusión abierta entre revolucionarios. Los lineamientos del Partido Comunista han sido modificados gracias a la opinión de la gente, para democratizar más la sociedad, empezando por el partido, dejando prejuicios en cuanto a la religión, la orientación sexual, lo racial.

—¿Eso sintoniza con el socialismo del siglo XXI que pregonaba Hugo Chávez? —Chávez hablaba de este concepto para dejar explícito que no podíamos repetir los mismos errores del socialismo que se derrumbó en Europa oriental. No creo que en Cuba haya la pretensión de crear un nuevo tipo de socialismo. Creemos que la revolución bolivariana de Venezuela, que dirigió brillantemente Chávez, y que con una gran laboriosidad dirige Maduro, va tener su camino. No creemos que los modelos deban ser exportables, ni que se deban copiar. Fidel criticó el “copismo”: el implantar en Cuba fórmulas de otros países socialistas. Recordemos a José Carlos Mariátegui, que dijo que el socialismo en nuestras tierras tenía que ser creación heroica, sin calco ni copia. Simón Rodríguez, maestro de Bolívar, dijo “o creamos o erramos”, refiriéndose a las nacientes repúblicas independientes de España. Todo lo hacemos desde nuestra lógica histórica, como nación soberana e independiente en las peores condiciones, porque no es lo mismo hacer todo esto sin persecuciones de un enemigo poderoso, sin los intentos de subversión que promueve.

—¿Qué piensa del nuevo panorama que presenta América Latina, con varios gobiernos progresistas y la integración en marcha? —Esta situación es más propicia para Cuba. Fuimos expulsados de la OEA, pero ahora tenemos la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), sin la presencia del imperio (Estados Unidos), algo que antes era inconcebible. Y Cuba ocupa nada menos que la presidencia pro témpore.

Entre Fidel y Raúl Castro hay plena continuidad, asegura el entrevistado.

—¿Cuál es el papel que ha jugado Chávez en este proceso? —Es una pérdida incalculable. Fue casi un hijo de Fidel, un líder excepcional. Un hombre con un carisma extraordinario. Tuve el privilegio de asistir a las honras fúnebres. Fue un líder de estatura mundial y a nivel de nuestra región; y tuvo una influencia excepcional para llegar a este momento de avance en la integración. Un gran líder anticolonial y antiimperialista. Un hombre muy conectado a la cultura popular, que aunque en el campo de la teoría era un autodidacta, conocía muchas lecturas. Sin duda, su ausencia es algo que la estamos sintiendo.

—Algunos analistas sostienen que la ausencia de Chávez puede afectar estos procesos. ¿Pueden caminar solos? —La revolución bolivariana, ahora encabezada por Maduro, ha tenido una actuación muy audaz. Aunque ya no tienen a su líder, están haciendo lo posible por cubrir esa ausencia. Creo que el principal campo de batalla son las trampas de la reacción interna, junto con los yanquis, que le tiendan a la revolución. Están dando una batalla cotidiana. Hay un proyecto muy perverso para desestabilizar a ese país. El frente principal sería que el presidente Maduro y su equipo logren sustituir ese golpe trágico de la pérdida de un líder en la plenitud de sus facultades. No creo que haya un retroceso del bloque progresista. Vamos a tener muchos peligros por delante.

—¿A qué peligros se refiere? —América Latina, en términos geopolíticos, siempre se consideró el traspatio de Estados Unidos. Jamás, desde el imperio, va a haber una política de tolerancia hacia una América Latina que se une de manera soberana. No se van a conformar con que estemos fuera de su control, tienen mucho poder, pese a que es un Titanic que está haciendo agua. En términos de comunicación y cultura tiene un enorme poder, manipula gran parte de la opinión publica. Son capaces de satanizar a un líder o de omitir golpes de Estado como en Honduras, sacando a Zelaya de manera brutal, y después a Lugo. De todos modos, es un momento esperanzador. Lo más interesante de lo que está pasando en el mundo de hoy, en medio de la crisis económica, ética y cultural.

—Muchos medios de comunicación critican procesos como el venezolano, suelen decir que son gobiernos autoritarios o dictaduras… —Eso forma parte de una matriz de opinión. Decían que Chávez era un dictador. Pocos líderes en el mundo se han sometido a tantos procesos electorales como Chávez. La gran maquinaria mediática bautiza como dictador al que se opone a las directivas del imperio. Bolívar decía que los Estados Unidos estaban destinados por la providencia para plagar nuestras tierras de desgracias en nombre de la libertad. Ya veía cómo se iba a usar demagógicamente la palabra libertad, como el caso de la guerra contra el terrorismo, que se usó para encubrir operaciones de saqueo. En América Latina se ha creado un núcleo importante de resistencia frente a ese proyecto de dominación mundial.

—Hace poco la bloguera Yoani Sánchez estuvo en Lima y dijo que en Cuba los servicios de salud y educación estaban en mala situación… —A nosotros nos fabrican una oposición desde Estados Unidos, de la que forma parte esta señora, que es financiada a través de premios y cargos. Son personas que viven de la calumnia a su país. Es interesante que cuando a esta señora le preguntaron por Julián Assange, dijo que debía ser extraditado. Alguien que es presentado como una especie de bloguera independiente, luchadora por la libertad, debía tener en su altar a Assange. Pero cumplió al pie de la letra la agenda imperial con respecto a Assange. Es un doble discurso. Son personas fabricadas, sin ninguna influencia en el país, cuya misión es crear una imagen para justificar la política de agresión y bloqueo. En Cuba nadie piensa que la solución sea el capitalismo; y una abrumadora mayoría cree en las ideas del socialismo, reclamando al mismo tiempo perfeccionemos lo que haya que mejorar. No hay una real oposición a las ideas revolucionarias. Ahora, según nuestro sistema electoral, en que la gente se postula desde la cuadra de sus barrios a la Asamblea Nacional, si en un municipio hubiera una mayoría de votantes contrarrevolucionarios, estos podrían tener diputados en la Asamblea Nacional. Pero no son mayoría.

—¿Cómo observan, desde Cuba, la crisis europea? —La vemos como una crisis del sistema, no como algo coyuntural. Un periodista español, Santiago Alba, decía que mientras en Cuba faltan viviendas y hay gente que vive con sus suegros, en España hay viviendas vacías cerradas y gente en la calle. Esa es la irracionalidad de un sistema que tiene a las personas sin amparo alguno, que no coloca en el centro al ser humano. Es la crisis de un sistema que está encontrando su fin. Lo lamentable es que haya mucha gente que ve esto a través de los grandes medios de dominación cultural, que han hecho creer que el único sistema es el capitalismo, como un orden natural de las cosas, y que los pobres son los que fracasaron. Ese darwinismo social es de una crueldad sin límites. Fidel advirtió en la Cumbre V Centenario en 1992, luego del derrumbe del bloque socialista europeo: el mundo se va a hacer ingobernable, se va abrir más la brecha entre ricos y pobres. Es como la etapa en que Mussolini y Hitler ascendieron al poder: crece el desempleo, la xenofobia, el egoísmo. Es un momento de peligro y hay que estar alerta.

—¿Y el incidente con Evo Morales en Europa? -Lo que pasó con Evo es una de las páginas más vergonzosas, oscuras y viles de la historia contemporánea. Incluso de toda la historia. Europa hizo un papel lamentable, humillante. Es terrible la imagen que uno tiene de esos gobiernos, porque luego de ser víctimas del espionaje, no solo evitaron indignarse con Estados Unidos, sino que se hicieron cómplices de una maniobra inaceptable contra un presidente de nuestra América, con valores excepcionales.

DOMINICANOS DISCRIMINADOS POR SU ASCENDENCIA HAITIANA Baje texto con imágenes aquí http://periodismohumano.com/migracion/dominicanos-discriminados-por-su-ascendencia-haitiana.html

HAITÍ FRENTE A LAS DEBACLES POLÍTICAS Y ECOLÓGICAS lunes 05 de agosto de 2013 Las montañosas tierras de Haití, han sido testigos de históricas e innumerables hecatombes ocurridas tanto en el plano político como medioambiental. La dominación esclavista seguida de

gobiernos sátrapas y dictatoriales, han conllevado a la sistemática crisis socioeconómica y política del país, acrecentada por reiteradas catástrofes naturales, que golpean a un territorio extremamente deforestado e indefenso frente al cambio climático. Por María José Araya Morales / Mapuexpress http://otramerica.com/especiales/seleccione-especial/haiti-frente-las-debacles-politicas-ecologicas/2954 Estas debacles no solo han dejado a la población haitiana en condiciones de extrema vulnerabilidad, sino que han sido argumento y justificación para que un consabido grupo de mercenarios internacionales engruese sus haberes con vastas consecuencias para la soberanía del pueblo haitiano.

Andamiaje sociohistórico Haití es considerado el país más pobre de Latinoamérica y el Caribe, sin embargo, fue el primero que conquistó libertades políticas al promulgar en 1804 su independencia de Francia, la abolición de la esclavitud y la proclamación de un gobierno “de y para” los afroantillanos. La Rebelión de los cimarrones, ex cautivos en las fincas cafetaleras y productoras de caña de azúcar, representó una afrenta para los colonizadores europeos quienes impusieron una deuda histórica como forma de indemnización y castigo.

Durante sus primeros 100 años de vida, el país fue dirigido por una seguidilla de militares que se enquistaron en el poder delineando regímenes autocráticos y represivos. La constante confrontación entre mulatos y negros no permitió la consolidación de un Estado unificado política y socialmente, quedando la construcción del proyecto país relegada. En tanto, las actividades económicas fueron monopolizadas a manos de una burguesía blanca y extranjera compuesta en su mayoría por inmigrantes alemanes y holandeses, mientras que la sociedad haitiana se estructuró en base a un antagonismo de clases fundamentado en el racismo. A inicios del siglo XX, alertado por el dominio económico europeo en un territorio de interés geoestratégico, Estados Unidos -aludiendo a la Doctrina Monroe- invadió Haití, ocupación militar que perduró 19 años hasta 1934. A través de su presencia, el imperio intentó influenciar la cultura político-administrativa del país sin mayores resultados y pretendió reafirmar la vocación agrícola actuando en detrimento de las masas campesinas. Este episodio dejó un escenario sociopolítico candente que dio paso a una nueva era de represión rampante. En 1957 la llegada al poder del dictador François Duvalier “Papa Doc” determinó la historia política de Haití, desatando a partir de su figura mesiánica vinculada al vudú, el control absoluto de la población. El ejercicio del monopolio desmesurado de la violencia, se institucionalizó en el quehacer represivo del cuerpo militar de los “Tontons Macoutes”, milicia que instaló en las áreas rurales sus propias reglas y formas de extorsión. Duvalier estructuró un sistema dictatorial basado en el culto a la personalidad, modificando la constitución para ser reelegido y autoproclamándose como presidente vitalicio con derecho a sucesión en 1964. Se calcula que durante su régimen murieron más de 30.000 civiles. Su dinastía se prologó con el ascenso al poder en 1971 de su hijo Jean Claude Duvalier o “Baby Doc” quien asumió el cargo de presidente vitalicio a los 19 años de edad, dedicándose a amasar una enrome fortuna a costa de diversos ilícitos. Hacia 1986, un movimiento popular derroca la dictadura Duvaleriana, sucediéndole una serie de gobiernos militares. Para entonces, el sacerdote Jean Bertrand Aristide se había perfilado como figura política de relevancia vinculado a la teología de la liberación y reconocido por su actuar a favor de los derechos de la clase oprimida en Haití. En 1991, se celebran las primeras elecciones democráticas del país y Aristide es elegido presidente, siendo derrocado solo siete meses más tarde por un nuevo golpe militar encabezado por Raoul Cédras. Después de el exilio en Venezuela y luego en Estados Unidos, Aristide retoma el poder hacia 1994, facilitando la injerencia de Washington en los asuntos internos del país, conllevando –entre otros- a la

disolución de las Fuerzas Armadas y su reemplazo por un cuerpo de Policía Nacional. En 1996, llega a la presidencia René Préval, quién impulsa una serie de reformas neoliberales. Hacia el año 2001, Aristide gana nuevamente las elecciones presidenciales y se ubica como aliado geopolítico de las izquierdas latinoamericanas representadas por Cuba y Venezuela, gobernando bajo una fuerte presión política orquestada por U.S.A, la derecha y sus grupos armados (Frente de Resistencia Artibonito y Nuevo Ejército). Durante este período, su gobierno es criticado por no contener la corrupción y remontar la economía, siendo derrocado en 2004 por un golpe armado. El presidente del tribunal supremo Boniface Alexandre, asume la conducción del país y solicita a Naciones Unidas su intervención militar para apaciguar la crisis sociopolítica, estableciéndose la “Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití” –MINUSTAH-. El año 2006, René Préval asume por segunda vez la presidencia y se le acusa de influenciar las elecciones del 2011, desatando una crisis electoral y política, resuelta a partir de negociaciones que derivan en la proclamación del actual presidente Michel Martelly, cuestionado por sus estrechas relaciones con la diplomacia estadounidense.

Hecatombe ambiental Haití o “Tierra de Montañas” en idioma Creole, abarca la parte occidental de la isla “La Hispaniola” que comparte con la vecina nación de República Dominicana. Siendo un territorio de morfología montañosa en clima tropical, la geografía haitiana ha sufrido abruptas transformaciones producto de siglos de explotación indiscriminada de sus recursos naturales. Es así como en la época colonial, se talaron grandes extensiones boscosas a fin de convertirlas en terrenos aptos para el monocultivo intensivo de la caña de azúcar, llegando el territorio haitiano a ser el principal productor azucarero de las Antillas. Desde entonces, la deforestación se fue instalando como una práctica común y constante, y que hoy tiene como principal objetivo la producción de carbón vegetal para consumo humano. Esta histórica e indiscriminada deforestación ha generado como consecuencias la degradación de las cuencas, la erosión de los suelos, la pérdida de cobertura vegetal y la desaparición de flora y fauna nativa – entre otros-. Panorama de devastación ambiental que vuelve al territorio haitiano extremadamente vulnerable frente a las inclemencias naturales que azotan con frecuencia a la isla (sequías, ciclones, terremotos) y agudizan los efectos derivados del cambio climático como el aumento de la temperatura en zonas desérticas sin paragua vegetal alguno. La crisis ecológica ha comprometido insoslayablemente la soberanía alimentaria a través del deterioro de las labores agrícolas, la pérdida de las semillas criollas entre los campesinos y los recursos fitogenéticos del país, subsumiendo a sus habitantes en una escasez alimenticia extrema, con matices pero especialmente crítica, en la zona fronteriza del Noreste. Rehabilitar el territorio con especies nativas y alimenticias, multiplicar sistemas agroecológicos y técnicas para la captación de aguas y el despliegue de energías renovables son algunas de las esperanzas que albergan las montañas haitianas.

Mercenarios de la inestabilidad Es consabido que las constantes situaciones de inestabilidad política, económica y ambiental en torno a las que deambula el país, han conllevado a que las tierras haitianas sean el foco de diversidad de acciones de “ayuda” emprendidas por entidades externas entre las que se cuentan la cooperación internacional,

organismos de Naciones Unidas, ONGs y Fundaciones. Algunas de estas iniciativas, se mueven motivadas más que por amainar crisis políticas y catástrofes naturales, por intereses económicos y foráneos. En la actualidad, el caso más emblemático es la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití – MINUSTAH-, conformada en 2004 por soldados de ejércitos de todo el mundo y de algunos países de Latinoamérica entre los que se cuentan: Chile, Argentina, Uruguay, Ecuador y Brasil. Este proceso militarista, que inició bajo el pretexto de brindar seguridad al país, ha conllevado a un injustificado aumento de la violencia y la criminalización, mermando la soberanía del pueblo hatiano que se pregunta ¿quién controla a los cascos azules de MINUSTAH? Reconocidos como soldados mercenarios e inmunes que a costa de la represión, la corrupción, la obstaculización hacia el ejercicio de la ciudadanía, y el resguardo a los intereses de las transnacionales, suelen redituar a sus haberes entre 4000 y 6000 dólares mensuales. Se les acusa además, de haber introducido el cólera en Haití través de soldados nepaleses que contaminaron las aguas del río Artibonito. Hoy en día, juegan un rol estratégico para facilitar el despojo de los recursos a favor de multinacionales mineras de capitales Estadounidenses y Canadienses tales como Unigold y Barrick Gold. La restitución de los derechos políticos y civiles del pueblo, y la soberanía sobre sus recursos naturales deben ser el motor de toda acción sensata que busque orientarse en territorio haitiano, reconociendo la dignidad de un pueblo que no deja de cantar su vocación antiesclavista.

CONO SUR

EN LA PLAZA NERUDA, EN MEJILLONES: ¡HOMENAJE A HAWKER HUNTER QUE BOMBARDEARON LA MONEDA! por Wilfredo Santoro Cerda (Chile) Sábado, 10 de Agosto de 2013 E-mailImprimirPDF http://piensachile.com/index.php?option=com_content&view=article&id=11867:2013-08-11-03-4418&catid=1:opinion&Itemid=2 Fach y Concertación rinden tributo a aviones que bombardearon La Moneda Eran las 7.20 de la mañana del 11 de septiembre de 1973 cuando los 4 aviones Hawker Hunter despegaron desde Carriel Sur, Concepción, al mando del comandante Mario López Tobar. Se trataba de una cuadrilla dependiente del Grupo 7 de la Fuerza Aérea. Ocho pilotos, entre los cuales, además de López se hallaba Gustavo Leigh Yates, hijo del entonces comandante en jefe de la Fach. Las Fuerzas Armadas chilenas se habían alzado en contra del gobierno constitucional y ellos debían bombardear el palacio de gobierno: La Moneda. La tarea fue cumplida exitosamente alrededor del mediodía por dos de los aviones. Otros dos se encargaron de bombardear el domicilio particular del gobernante civil, Salvador Allende, quien se quitó la vida para simbolizar su compromiso con las clases más desposeídas del país. De estos dos Hawker Hunter, uno de los pilotos se equivocó y lanzó cuatro cohetes nada menos que contra el hospital de la propia fuerza aérea. Bien. Este es seguramente uno de los hechos más luctuosos dentro de la historia chilena. Le tocó a la Fach, precisamente la única rama de la fuerzas armadas chilenas que –afortunadamente- jamás ha participado contra un enemigo externo. Ha tenido solamente dos participaciones bélicas desde que fue creada, el 21 de

marzo de 1930 y en ambas ha debido disparar contra sus propios connacionales. Además de destruir nuestro palacio de Gobierno, forzar el suicidio del presidente constitucional, disparar contra un domicilio particular y contra su propio hospital, el año 1973, recién creada tuvo su estreno, disparando contra chilenos. Ocurrió en 1931 cuando bombardeó la escuadra nacional estacionada en el puerto de Coquimbo. Las naves se encontraban en poder de los marinos, sublevados por temas gremiales. FANTASMAS QUE RETORNAN ¿Por qué saco a colación todo esto? Cosas del pasado que debieran quedar en el olvido, porque en una cosa estoy de acuerdo: la Fach es una prestigiosa institución, necesaria y profesional. Por lo demás, poco menos de la mitad del país tiene una visión diferente a la mía y piensa que la actitud de la Fuerza Aérea el 73 fue correcta y necesaria ….y ¿quién dice que no tengan razón? Bueno, saco a colación todo esto por una razón muy sencilla. Cada vez que recorro la Plaza de la Cultura “Pablo Neruda” en Mejillones (el destino y sus paradojas) me tropiezo con un Hawker Hunter, que la Fach y las autoridades de la Concertación colocaron hace 10 años… quien dice si no es el mismísimo que bombardeó La Moneda. Aquella mañana del 11 de septiembre del 73, cuatro hawker hunter sembraron el terror y el fuego en Santiago. ¿Dónde están esos cuatro aviones? El que está en Mejillones tiene la matrícula 752. Tal vez fue uno de los cuatro, tal vez no. Si fue uno ¿cuál habrá sido? ¿uno de los dos que bombardeó La Moneda? ¿el que bombardeó Tomás Moro? ¿o acaso el despistado que lanzó los cuatro cohetes contra el Hospital de la Fach? RARA ENTRETENCIÓN Bueno, cada vez que uno se tropieza con un Hawker Hunter es inevitable pensar eso. Por lo menos para quienes no son de la derecha dura. ¿A quien se le puede ocurrir colocar un Hawker Hunter en una plaza para que la gente se relaje? Es entonces cuando –por lo menos a mí- me entra una repentina rabia contra los desacierto de la Concertación. Aquí. En este punto. Meto las manos al fuego por la Fach. Más allá del juicio valórico acerca de su postura, ellos ya no tienen elección posible. No sólo son profesionales sino que –además- militares. Y un militar debe apechugar por lo que hace. Ofertar los aviones con los cuales bombardearon La Moneda para colocarlos en las plazas públicas, haciéndolos adquirir la condición de monumentos a héroes, está dentro de sus tareas. En pedir no hay engaño y ellos de alguna forma promueven su actividad. ¿Dónde está la falla? En que los chilenos elegimos a la Concertación porque ellos electoralmente no se plantearon como admiradores de los que bombardearon La Moneda, sino que todo lo contrario. CONCERTACIÓN QUE SE CONGRACIA Si en Mejillones tuviésemos un alcalde Udi. Si el Gobernador Provincial o el Intendente fueran designados por los militares, yo entendería…. claro, deben poner un hawker hunter o pierden su carguito, pero …se supone que son de la Concertación ¿a tanto puede llegar la necesidad de congraciarse con los militares? ¿todavía temen un golpe militar o sencillamente se trata de una vocación servilista natural? Hay tantas cosas de que preocuparse además de colocar un avión que –entiéndanme por favor- es el epicentro de lo confrontacional. Es una bofetada para todo izquierdista. Daré algunos ejemplos de muy buena fe de cosas por las cuales preocuparse. Pedí que en esta nota se acompañara un cartel que dice sencillamente “vale por: fotografía satelital de zona chilena estratégica”. A ver… ¿Cómo explico ese cartel? Así!! Directamente. Con ese cartel manifiesto que tengo acá, en mi poder, una foto satelital de instalaciones militares de la Fach con la segunda mejor resolución que brinda el

sistema. ¿Cómo las obtuve? Por Internet. ¿Que se necesita? ….A lo más tener alguna noción de las coordenadas geométricas donde buscar. ¿Por qué coloco el cartel y no las fotos? …naturalmente porque estoy del lado de la Fach …tendré mis reparos históricos, pero soy chileno. SECRETOS EN EXHIBICIÓN ¿Para qué coloco ese cartel? Para lo que se colocan todos los carteles, ¡para llamar la atención! ¿Por qué la Fach, en lugar de colocarnos un Hawker Hunter en la plaza Pablo Neruda no se preocupa del tema que les señalo? Por pura curiosidad, hice un repaso satelital por lugares estratégicos norteamericanos. De los 6 que busqué …ninguno aparecía. En cinco de ellos aparecía una accidental nube que tapaba el sitio de interés y en el único en que el cielo aparecía claro había sencillamente una leyenda que decía algo así como “en este lugar no están permitidas resoluciones superiores”. Bien. Abordaré la situación como si se tratara de mi problema. Total, ya reconocí que existen temas en los cuales estoy en línea con la Fach. En primer término haría un mapa de los lugares en los cuales los buscadores de Internet internacionales están vulnerando la soberanía y la seguridad chilena y pediría oficialmente que –al menos- le bajaran la resolución. Pero, como además soy un experto planteador de situaciones que no serán acogidas, simultáneamente iniciaría el plan B. Contrataría un hacker con la exclusiva tarea de colocar un “quitasol” a las instalaciones militares que nos interesen. Y aprovechando tamaña influencia le diría a uno de los asistentes “…y sácale el hawker hunter de la plaza Pablo Neruda a esos mejilloninos, total, la intención es volver a construir un país en que todos seamos uno”. *Fuente: Diario Mejillones

URUGUAY: LUCHA CONTRA LA POBREZA x Jorge Zabalza http://www.lahaine.org/index.php?p=71005 El partido del presidente y ex-guerrillero Mujica anuncia que su candidato a las próximas elecciones será Tabaré Vázquez, el amigo de Bush y enemigo del aborto “Tengo 45 años y llevo 43 arriba de un carro“, cruda síntesis de uno de los oradores en la asamblea de a caballo que realizó la UCRUS (Unión de Clasificadores de Residuos Urbanos Sólidos) en la explanada de la Intendencia de Montevideo. Síntesis de su vida y de la realidad de un sector social excluido y marginado. Según cifras de la IMM, en la ciudad hay 3.188 personas que dependen de la recolección y clasificación de residuos domiciliarios, el 70% de ellas menores de 30 años. A simple vista parece que el municipio se queda corto. Basta recorrer ciertos asentamientos para darse cuenta de ello. Más cercana a la realidad es la estimación de UCRUS: unos 7.000 trabajadores de los que dependen alrededor de 30.000 personas. No solamente a caballo se recogen los residuos urbanos, también hay carritos con ruedas de bicicleta y abundan los que van a pie de contenedor en contenedor. Continúa la requisa de carros por parte del municipio, los manijazos clasistas de los medios de comunicación y la persecución de la policía. Tristeza. La Intendencia tiene registrados alrededor de 1.500 cuidacoches, de los cuales unas 600 son mujeres. Otra vez parecen cortas las cifras oficiales. Se puede presumir que otros 2.500 cuidacoches trabajan sin permiso municipal. Es decir, para unos 16.000 montevideanos sus ingresos provienen de ese servicio que se realiza en condiciones lamentables

La Unión de Vendedores Ambulantes del Transporte censó más de 1.500 personas que sobreviven vendiendo y pidiendo en los omnibuses de Montevideo. En Montevideo alrededor de 600 cruces tienen semáforos, nichos de sobrevivencia para unos mil montevideanos que limpian parabrisas y hacen malabarismos a cambio de alguna moneda. Entre la Intendencia y el Ministerio del Interior los expulsaron de allí. En realidad, después de años de cruzar las mismas esquinas, uno se había a acostumbrado a intercambiar brevísimos comentarios con varios de ellos. Los extraño. ¿Cuántas personas trabajan cortando césped a domicilio? ¿Cuántos lavan coches en las calles de Montevideo?. Según revelan los cupos disponibles en los refugios nocturnos, al menos uno de cada mil montevideanos está en situación de calle. Dicen que muchos de ellos se niegan a pasar la noche en el refugio, porque padecen sicosis o temen que les roben sus pertenencias. Muestras vivientes de la injusticia del sistema Cuando los encuestadores del Instituto Nacional de Estadísticas preguntan “usted trabajó una hora en la última semana“ … la respuesta positiva en los semáforos, carros y veredas, sirve para redondear una “tasa de desempleo” muy baja, que luego podrá ser utilizada como publicidad del gobierno. No es exagerado suponer que entre 17 y 18.000 hogares (más de 70.000 montevideanos) dependen de estas formas de trabajo, informales, desamparada, miserable. Está claro que nadie debería ganarse la vida de esa forma, pero es el 5% de la población de la capital que vive en esas condiciones de “sálvese quien pueda“. La mega-brecha En la 'Brecha' del 19 de julio, la periodista Tania Ferreira entrevista a Marcelo Boado, doctor en sociología, quien concluye de sus estudios que “se ha estirado la desigualdad entre las posiciones extremas y se han robustecido los movimientos cortos en el sector intermedio de la escala social“. Los que se mueven en corto son trabajadores no manuales sin calificación, dueños de pequeñas empresas, trabajadores manuales calificados, los“treintamilpesistas“ en una palabra. Se asegura que la movilidad en los sectores intermedios es una demostración de que ha disminuido la desigualdad, afirmación enmarcada en el optimismo general de los sectores que participan de la alegría progresista. Sin embargo el estudio de Marcelo Boado también afirma que se ha estirado la distancia entre el vértice más rico y el extremo sur de la sociedad y uno, de puro triste, se espanta. El método más conocido para “medir” la pobreza, es el de fijar una “línea” divisoria que separa los pobres del resto. En diciembre del 2012 y para la ciudad de Montevideo, el gobierno fijó la divisoria unos 8.500 pesos mensuales. Se afirma que dicho ingreso alcanza para la alimentación sana (con los nutrientes necesarios) de quienes dependen del que lo percibe, como también para satisfacer las necesidades básicas de vivienda, salud, educación, transporte y vestimenta. El INE calculaba que en la misma fecha el 11.3% de los montevideanos estaba por debajo de la “línea”. Todo esto es bastante arbitrario pues, al entender de uno, la mayor parte de los elementos que concurren a determinar el estado de pobreza no se pueden medir ni pesar, no son bloques ni chapas de cartón, no son calefones ni estufas eléctricas. La “línea de pobreza” ha sido bien útil, sin embargo, pues uno de los éxitos que más propagandea el gobierno es haber empujado 800.000 personas por encima de ella. Una persona que empieza a percibir 8.600 pesos atraviesa la divisoria y, entonces, deja de ser pobre para las estadísticas por lo menos; teóricamente saltó por encima de la brecha social, aunque sus condiciones de vida sigan siendo las mismas que las de aquellos que ganan 8.400 pesos y el INE considera pobres..

Aunque los feligreses (académicos, periodistas, militantes) pasen por alto el abismo, es lo determinante a la hora de juzgar la gestión de gobierno. Su existencia justifica que buena parte del cuantioso presupuesto de la policía, se destine a la defensa del territorio donde viven y transitan los que tienen sus necesidades más que satisfechas. Es también la razón de ser de miles de abogados y funcionarios del poder judicial, de otros miles de empleados públicos que circulan por el sistema carcelario y de un ejército de trabajadores sociales. La mega-brecha es fuente de trabajo para decenas de miles pero, sin embargo, indiferente a todo ese gasto en asistencia social, crece y se profundiza. Los gobernantes parecen haber olvidado que es un producto natural de la reproducción del capital, que es imposible encontrar un camino de solución dentro del sistema. En la triste realidad no logran detener el crecimiento de la mega-brecha, porque no se atreven a poner coto a los más ricos (nacionales y extranjeros, residentes y no residentes en el país) que se apropian de una parte cada vez mayor del ingreso nacional y día a día se hacen más y más ricos. Asistimos a una especie de genocidio por cuentagotas y los operadores del progresismo se encargan de disimular la forma criminal en que se acumula la riqueza en el vértice, mientras allá abajo, en el pantano del saturnismo y las rejas, se crea un infierno para trabajadores manuales sin la más mínima calificación. El actual modelo productivo privilegia la concentración del ingreso y de la riqueza, se diferencia muy poco del modelo liberal de producción y distribución que caracterizó los últimos setenta años de historia del Uruguay. El desarrollo del capitalismo desemboca en la sociedad del 1% y del 99%, en la del EE.UU. y el Mercado Común Europeo, con la Merklen o con Rodríguez Zapatero, con Sanguinetti y Lacalle o con Mujica, Astori y Vázquez. El semáforo y el carro son residuos del sistema que promueve el gobierno progresista. Lo pobre no es el ingreso ni las necesidades insatisfechas, lo pobre es estar reducido, por la fuerza del poder político y económico, a la imposibilidad de proyectarse para cambiar las condiciones forzadas en que se vive, para salir del pozo social y del semáforo laboral. Lo pobre es la imposibilidad material e intelectual de pensar otra manera de vivir, solidaria, gratificante, humana. Tiene que ver con características culturales e intelectuales, con el no-manejo del pensamiento abstracto y de los conocimientos científicos y técnicos, con la falta de capacidad de iniciativa y de voluntad para luchar por sus reivindicaciones, con la carencia de sentimientos de responsabilidad social y de solidaridad. En definitiva, un vocabulario de cien palabras es suficiente para desempeñarse en esa vida tan empobrecida y salir al mercado laboral del semáforo y del contenedor. A eso los han reducido y de ahí no los sacan con tarjetas MIDES, “ceibalitas” ni trabajos organizados para justificar el gasto presupuestal. “Incluir a los excluidos” parece limitarse a aprobar la ley No. 18. 874 para cobrarles el “monotributo MIDES” , porque en la mentalidad capitalista del partido de gobierno, incluir es hacerlos pagar impuestos. Hay que cambiar el poder, no alcanza con el gobierno por más progresistas que sean sus ilusiones. Fortalecer el sistema no es un camino para eliminar la injusticia social, la exclusión y la miseria. Alegato Nadie llega al semáforo por exceso de ofertas de trabajo. Nadie opta por recorrer la ciudad levantando residuos en un carro tirado por un caballo. Nadie elige camperear las heladas o pasar el día entero a rayo del sol cuidando autos. Cada cual trabaja donde puede o donde el sistema lo arroja. Nadie elige vivir en el lado oscuro de la brecha social donde su destino es irreversible. Detrás de cada uno de ellos hay una tragedia; el escenario es una vivienda muy precaria en un asentamiento abandonado de la mano de dios. El padre, el abuelo, el bisabuelo y el tatarabuelo ya habían sido marginados por el Estado de Bienestar, alguno de ellos probablemente fue un expulsado de la tierra. La madre, la

abuela, la bisabuela y la tatarabuela ya habían sido madres adolescentes y solteras, muy probablemente sufrieron violencia doméstica. Se criaron en la única habitación, durmiendo en el único colchón meado por todos y esquivando las mismas goteras que los perros y los gatos. Fueron cuidados por sus hermanas mientras la madre limpiaba mugres ajenas, mendigaba con el bebé en brazos o se prostituía por un mendrugo. Alguno de ellos se quemó con el agua hirviendo de la olla o con el brasero o con el rulo de la improvisada estufa eléctrica. Tal vez un cortocircuito en la conexión clandestina les incendió el rancho o se les inundó el dormitorio, frecuentemente la lluvia mojaba las ropas y calzado, jugaban en el barrial del patio, con palos y piedritas de la basura. Vieron pasar muchos hombres por la casa y muchas escenas de brutal bestialidad hacia su madre. El alcohol, la droga y la televisión eran la forma habitual de anestesiarse para soportar el día a día. Otra de las rutinas era preparar el “paquete” para los que estaban presos y varios días al mes transcurrían yendo de visita a la cárcel o las cárceles. Se criaron hablando de que “fulano ganó y mengano perdió”, que “a zutano lo cortaron y a perengano le dieron pa’tabaco”. Un mundo dividido en “ñeris” y “ortivas”, gente y policías. El relato de muchas vidas transcurre del barrio a la cárcel y de la cárcel al barrio pasando por la comisaría. Nacieron con una reja en la frente y, si lograban zafar, su destino era el semáforo, la vereda o el carrito. Cuando los periodistas criados con esmero por su familia, demonizan, satanizan y descalifican, bien podrían darse una vuelta por el asentamiento antes de escribir. El Centro CAIF y la guardería representan unas horas de alivio en la vida de esos niñas y niños, tantas educadoras y educadores preocupándose porque aprendan a limpiarse los mocos y el culo, esforzándose porque una sonrisa borre la expresión adulta de sus caritas. En cambio los alumnos no recuerdan con gratitud la escuela, apenas la ven como un comedor y un patio de recreo. Están ahí sentados en sus bancos, los championes y las medias mojadas en aulas frías y húmedas, sin haber desayunado, mirando al vacío y esperando un mediocre almuerzo, sin poder concentrar la atención ni controlar la inquietud, sin entender casi nada por mucho que hayan rebajado el nivel educativo. Es imposible aprender nada en tales condiciones. Acumulado durante cuatro o cinco generaciones, el déficit de conocimientos y de cultura se ha vuelto vacío inconmensurable. Como el nivel educativo se ha rebajado hasta ponerlo a tiro con dicho déficit, las escuelas “de contexto” y de tiempo completo NO PUEDEN desarrollar las capacidades potenciales de sus alumnos. Se cercena su posibilidad de desarrollo en el campo del conocimiento y de la cultura, se perpetúan el déficit y la injusticia del sistema educativo. Totalmente antidemocrático. Los socialmente condenados a vivir en la exclusión, no tienen ningún estímulo para estudiar, aprender y superar el déficit cultural y de conocimientos. Por “extraedad” o por “razones sociales” los van pasando hasta egresar de la escuela como analfabetos funcionales, para que engrosen el ejército de los semáforos y los carros, de los candidatos a golpizas en las comisarías y cárceles. Mentalidades represivas Los medios masivos y los dirigentes de derecha (dentro y fuera del Frente Amplio) festejan la “limpieza social” realizada por el municipio y la policía frenteamplistas. Hasta un amigo mío, compañero de muchos años, editorialista de un semanario, increpó a la gente de los semáforos: “que le salgan a las ocho horas”. Cuando un limpiavidrios declaró “no nos queda otra que robar“, el ministro Bonomi entendió que “no se

debe aceptar ningún tipo de chantaje” de esta gente” que “siempre tienen posibilidades de trabajo” y, de puro ingratos, las desprecian. Se los persigue como si fueran criminales potenciales que afectan a la “seguridad pública“. El Estado es implacable gobierne quien gobierne. Inmorales son las medidas que perpetúan la injusticia social. Se trata de vagos y atorrantes a los que laburan pero no a los que pasan el día en el casino de oficiales, no se los ha oído descalificar a las fuerzas armadas, ni a la suprema corte, ni a López Mena y la “jodita“ de PLUNA, ni a al empresariado transnacional que viene a acogotarnos. Fueron muy mesurados al hablar de lo ocurrido a Evo Morales o a Snowden, el imperialismo no existe y el discurso sobre los EEUU es muy delicado y diplomático. Las baterías apuntan hacia abajo, no hacia arriba. El poder ejecutivo ataca la lucha de los trabajadores desde el 2005, cuando UTAA ocupó unas miserables 32 hectáreas, hasta el 2013 en que los docentes luchan por su dignidad. El agravio ha sido una política constante contra los trabajadores que luchan. Se trata de desestimular la lucha de clases. Como fracasaron en negar su existencia, intentan el desestimulo arrojando dardos envenenados. Han logrado crear un clima subjetivo en la población que mira con desconfianza a los sindicatos que luchan por sus reivindicaciones. La misma desconfianza siente hacia quienes andan en carro, laburan en los semáforos o cuidan autos en las veredas La persecución institucional y el acoso ideológico contra los 70.000 montevideanos del pantano desconocen que su situación es consecuencia del modelo de país y descarga sobre ellos la responsabilidad de vivir como viven, descalificándolos y persiguiéndolos. Es bien clasista, se adoptaron los valores, los prejuicios y las pautas culturales de la clase dominantes. Con el decreto sobre los lugares públicos, hacen lo mismo que Marc Sarnoff, alcalde de la ciudad de Miami, que propone encarcelar a todas las personas sin hogar para que no violen el orden estético público. Tal vez piensen en seguir el ejemplo del gobernador de Río Janeiro, Carlos Lacerda, que después del golpe militar de 1964, “limpió“ la ciudad de mendigos arrojándolos a la bahía de Guanabara. Cabe recordar que Lacerda inició su trayectoria política en la izquierda brasilera más radical. Ya a nadie le duele en la propia el golpe en la mejilla ajena, se ha cambiado el espíritu del Ché Guevara por la mentalidad represiva de los dueños del mundo. Dejaron de lado la denuncia de la injusticia y se dedican a reprimir por todos los medios. Tal vez entendieron mal a Raúl Sendic: la lucha es contra la pobreza, no contra los pobres. La mega-brecha desaparece con reforma agraria, no pago de la deuda externa, estatización de la banca y aumento sustancial del salario para que el mínimo pasara la media canasta básica. Un frente grande contra la extranjerización del país. Claro, para esa lucha, hay que enfrentarse con la clase dominante y el imperialismo y, sobretodo, no se puede llevar al gobierno a Danilo Astori ni a Tabaré Vázquez. Voces / La Haine

URUGUAY TENDRÁ DEVALUACIÓN MÁS GRANDE DE LA REGIÓN, SEGÚN BBVA http://www.elpais.com.uy/economia/finanzas/uruguay-tendra-devaluacion-mayor-region.html

Según las previsiones del banco BBVA, Uruguay registrará este año y el próximo la mayor caída de moneda locales en la región. El banco proyecta un dólar promedio de $ 22,62 en 2014 y entiende que el principal desafío será controlar la inflación. Marcela Dobal

Las estimaciones fueron presentadas ayer por el economista jefe para América del Sur, Juan Ruiz, de BBVA Research, y surgen del informe económico del tercer trimestre titulado "Situación Latinoamérica". El experto dijo que las monedas de la región mostrarán una "leve tendencia a la depreciación" frente al dólar por el aumento que se producirá en las tasas de interés en Estados Unidos a medida que su recuperación económica sea "más potente". Ruiz sostuvo que la expansión de la economía mundial seguirá, pero con "condiciones menos favorables para la región", lo que llevó a recortar las previsiones: la de 2013 de 3,5% a 2,7% y la de 2014 de 3,7% a 3,2%. El analista presentó un gráfico con el alza del dólar prevista en países de la región que manejan objetivos de inflación (queda excluida Argentina), donde se observa que Uruguay lidera en 2013 y 2014, con subas de casi 12% y 10%, respectivamente (ver aparte).

El dólar tuvo ayer la mayor caída en casi un mes (-0,7%) al promediarse a $ 21,458. Sin embargo, en lo que va del año, acumula un aumento de 10,61% y BBVA prevé que suba un 1% adicional entre este mes y diciembre. En tanto, el Banco República redujo 15 centésimos la pizarra a $ 21,15 la compra y $ 21,75 la venta. Ruiz señaló a El País que si bien la suba del dólar en 2013 ha sido de una magnitud similar a la que ocurrió en Brasil, el mayor aumento en 2014 "debería ayudar o contribuir a recuperar parte de competitividad por el lado de tipo de cambio". El experto dijo que la brecha cambiaria con países vecinos "es un elemento de preocupación en el caso de Uruguay", ya que afecta la llegada de "turismo e inversiones" desde Argentina y compradores de Brasil.

No obstante, afirmó que la competitividad del país depende también de la productividad y de las "aceleradas tasas de inflación". "Atajar el problema de inflación va a contribuir también a atajar el problema de la apreciación en términos reales del tipo de cambio en Uruguay", dijo. Ruiz indicó que la suba del dólar "no va a jugar a favor del objetivo de reducir las tasas de inflación más cerca de la meta del Banco Central". La inflación en los 12 meses a julio fue de 8,75% y la meta del gobierno es ubicarla entre 4% y 6% este año y entre 3% y 7% a partir de 2014. A juicio de Ruiz, la inflación es "el principal reto macroeconómico" del país. "Está claro que hacia adelante la política monetaria y la fiscal tienen que avocarse más a reducir esas presiones inflacionistas y hay un consenso entre las autoridades económicas sobre eso", dijo Ruiz. Para BBVA, Uruguay es el único país de los analizados donde la inflación se mantiene por encima del objetivo del Banco Central y continuará así en 2014. De hecho, el economista dijo que "el efecto" de la devaluación sobre la inflación "se sentirá más en Brasil y Uruguay, por sensibilidad y magnitud del ajuste cambiario". BBVA prevé un deterioro de los déficits exteriores y fiscales en la mayoría de los países, pero aún los ve "sostenibles y financiables sin demasiado problema", afirmó. El titular del Banco Central, Mario Bergara, dijo ayer en Melo que "Uruguay es un país mucho más competitivo" que en el pasado. "Es cierto que un componente es el tipo de cambio, pero en un mundo tan volátil e incierto en el que vivimos desde el 2008, cuando explotó la crisis financiera de Estados Unidos, el tipo de cambio en Uruguay acompaña los movimientos en los tipos de cambio de los países emergentes y las olas que genera la volatilidad de lo que pasa en los grandes países nos arrastrará de la misma manera a todos", añadió. Bergara aseguró que "en este marco de flexibilidad cambiaria no debe existir mayor preocupación con respecto a los temas de competitividad", pero que se debe seguir trabajando en mejorarla con cambios tecnológicos en las empresas. (Producción: Néstor Araújo / Diego Guichón)

BRASIL: UNA ECLOSIÓN SOCIAL QUE QUIERE AVANZAR SOBRE EL PODER FINANCIERO Posted: 09 Aug 2013 04:52 PM PDT http://www.librered.net/?p=28658&utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed% 3A+librered+%28LibreRed+Not%C3%ADcias%29 El estallido de masivas protestas sociales en junio en Brasil hicieron evidente la fuerte contradicción entre la política social del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), que sacó de la pobreza a unos 40 millones de brasileños, con el sector financiero, que ejecuta y controla una economía neoliberal. Un poder financiero que cuando Luiz Inácio Lula da Silva ganó su primer mandato, en 2002, provocó una fuerte corrida que obligó al PT y al presidente electo a aceptar sus principios: apertura financiera y férrea disciplina fiscal para generar el superávit que permitiese pagar la pesada carga de la deuda externa. A partir de la eclosión social de junio la derecha brasileña sueña con retornar al gobierno en 2014 y poner fin al ciclo del PT, mientras las mayorías movilizadas reclaman profundizar el proceso de redistribución de ingresos y avanzar en la reformas agraria y política, para distribuir tierras, ensanchar la participación popular y reducir los nichos de corrupción. Una masiva protesta social que en la segunda quincena de junio tuvo algunos grupos violentos, pero sobre todo padeció una brutal represión policial en Rio de Janeiro que dejó varios muertos y un albañil de la favela Rocinha desaparecido. El cuestionado gobernador de Rio, Sergio Cabral (del PMDB, aliado del PT), ante esa situación, exigió la renuncia del jefe de policía estadual, que además de la represión había amnistiado a agentes sancionados por diversas faltas.

Por su parte, la ministra de Derechos Humanos de Brasil, María do Rosario Nunes, sostuvo que “el abuso y la violencia policial es algo con lo que no podemos convivir más”, tras admitir que esa fuerza de Rio es la principal sospechosa de la desaparición del albañil Amarildo Souza, después de haber sido interrogado en una comisaría, lo que según ella “ocurre con gran frecuencia”. La gigantesca y compleja ola de protestas sociales, iniciada en Sao Paulo por el Movimiento Pase Libre en contra del aumento del transporte, rápidamente se extendió a todo el país y amplió sus reclamos contra la corrupción en todos los niveles del Estado, los gastos del futuro mundial de fútbol y los deficientes servicios de salud y educación públicas. En la semana que el papa Francisco visitó Rio de Janeiro, con las enormes movilizaciones por la Jornada Mundial de la Juventud, la protesta se redujo, pero la que hubo fue con sordina mediática. Los grandes y concentrados medios de comunicación brasileños, mayoritariamente opositores al gobierno del PT, no quisieron incomodar al pontífice, lleno de gestos de acercamiento a lo popular, de intentos de recuperar la feligresía perdida, pero también del tradicional conservadurismo teológico-doctrinario. Con las primeras protestas la presidenta Dilma Rousseff, rápidamente declaró que era “necesario escuchar la voz de la calle”, recibió a representantes de organizaciones sociales que las convocaron y formuló nuevas propuestas de gobierno. Propuso, entre otras cosas, contratar médicos del extranjero para reforzar la dotación de galenos, sobre todo en áreas rurales y barriadas humildes, pero recibió críticas del sector. Destinó 4.000 millones de dólares para construir otros 100 kilómetros de autovías exclusivas para el transporte en Sao Paulo, tras reconocer que gran parte de sus 11 millones de habitantes gastan hasta 6 horas diarias para ir y volver de sus trabajos. Además, propuso convocar a un plebiscito antes de octubre para que la ciudadanía opine sobre una reforma política a ponerse en práctica con las elecciones presidenciales del 2014. El Parlamento brasileño, donde se deberá elaborar esa reforma, frenó los ímpetus del Ejecutivo. Aún los partidos aliados al PT defendieron la idea de postergar esa consulta hasta el 2014, para que una eventual reforma recién pudiese entrar en vigencia en las elecciones municipales del 2016. Pero, sobre todo, dejaron en claro la potestad exclusiva del Legislativo –muy cuestionado, según todas las encuestas-, para debatir y proponer los ejes de esa reforma, que según la presidenta debe terminar con la financiación privada de los partidos, dar trasparencia y participación popular. El ex presidente Lula da Silva, líder indiscutido del PT y mentor de la candidatura de Rousseff, apoyó las protestas de los movimientos sociales y destacó que esas manifestaciones son la expresión de la gente que demanda más conquistas. “¡Que vivan las protestas!, así se arreglan las cosas; es preciso mejorar la salud y muchas cosas más”, resaltó el ex mandatario en un seminario celebrado a mediados de julio en Sa0 Paulo. Lula explicó que, a diferencia de Europa, donde los ciudadanos se movilizan para no perder servicios básicos, en Brasil los reclamos son para pedir más salud, educación y más inversión social. Pero el fundador y líder del PT alertó que hay grupos “fascistas y de extrema derecha dentro” de las manifestaciones de junio.

Lula también reconoció que su partido está “envejecido”, que necesita renovarse y conquistar a los jóvenes indignados. Lo de Brasil no es algo asimilable con otras protestas -como los cacerolazos de sectores medio-altos que hubo en Argentina contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner-, no sólo por su masividad, también por la composición de los manifestantes brasileños, mayoritariamente de sectores populares. No es gente que quiera una vuelta a la derecha y el neoliberalismo, sino realmente muy enojada por el hecho de que los grandes beneficiarios de la gestión macroeconómica de los gobiernos, tanto de Lula como de Dilma, han sido los bancos, algo públicamente reconocido por el propio ex presidente. En definitiva, está claro en qué dirección apunta el grueso de la protesta social en Brasil. Pero el costo político que hoy paga Rousseff por la estrategia inicial del PT para acceder y mantenerse en el poder desde hace una década, abren una difícil pulseada entre la fuerza indiscutible de las elites, la marea popular y la capacidad de corregir el rumbo del gobierno. Telam

BRASIL, INERME ANTE INVASIÓN CIBERNÉTICA 9. agosto, 2013 IPS

D, Línea Global, Semana

http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2013/08/09/brasil-inerme-ante-invasion-cibernetica/ El espionaje ejercido por Estados Unidos contra Brasil, mayor a cualquier otra nación del Continente. El llamado gigante de América Latina se descubre totalmente vulnerable ante los ataques cibernéticos. Obsoleta, la tecnología brasileña para defender a sus ciudadanos y su propio gobierno Fabiana Frayssinet/IPS Río de Janeiro, Brasil. Como uno de los supuestos principales blancos del control cibernético estadunidense, Brasil intenta desentrañar una trama de espionaje de tecnología de última generación con recursos artesanales similares a los descritos en las novelas del inglés John le Carré. El experto brasileño en asuntos internacionales Marcos Azambuja dice a Inter Press Service (IPS) estar sorprendido por el alcance de la operación de espionaje de Washington sobre Brasil, revelada por el diario local O Globo a partir de informaciones del excontratista de inteligencia estadunidense Edward Snowden. “Hay violaciones a la privacidad e intervención en comunicaciones telefónicas, telegráficas, de correos electrónicos, y son tan vastas y tan invasivas que es difícil encontrar algún paralelo en el pasado”, advierte. “Antes el espionaje tenía un blanco determinado. Era casi una actividad artesanal y se actuaba ante sospechas”, recuerda Azambuja, quien entre 1989 y 2003 sirvió al país como jefe de la delegación para temas de desarme y derechos humanos ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En Ginebra se desempeñó como secretario general de la Cancillería y fue embajador en Argentina y en Francia. “Pero ahora, las novelas de Le Carré parecen escritas en la Edad Media. Estamos ante un cambio cualitativo y cuantitativo del espionaje”, compara. Ante la extremada gravedad de lo descubierto, el gobierno de Brasil y los del resto de los países suramericanos reaccionaron airadamente. Brasilia pidió explicaciones al embajador de Estados Unidos en este país, Thomas Shannon, e inició investigaciones para determinar la complicidad de las empresas de telecomunicaciones en su propio territorio. También informó que promoverá en ámbitos internacionales el perfeccionamiento de las reglas multilaterales sobre la seguridad de las telecomunicaciones y que presentará en la ONU iniciativas “con el objetivo de prohibir abusos e impedir la invasión de la privacidad de usuarios de las redes virtuales” y la soberanía.

Pero todo parece poco, como admitió el propio ministro de Defensa, Celso Amorim, al ser interpelado por el Parlamento. En materia de defensa cibernética este país aún “está en la infancia”, afirmó. El presupuesto para esa área este año es de menos de 44 millones de dólares; un cuarto de lo que destina Gran Bretaña, por ejemplo. El blanco es verde-amarillo Los documentos divulgados por O Globo indican que en la última década la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA, por su sigla en inglés) y empresas extranjeras instaladas en Brasil vigilaron a personas residentes o en tránsito. En enero, Brasil quedó apenas atrás de Estados Unidos con 2 mil 300 millones de telefonemas y correos electrónicos vigilados a través de por lo menos tres programas de computación, ubicándose así como uno de los blancos de espionaje preferidos por Washington equiparable a China, Rusia, Irán y Pakistán, todos “los más problemáticos” para la potencia del Norte. Asimismo y por lo menos hasta 2002, se afirma que Brasilia fue una base de espionaje por satélite de la NSA y de su par, la Agencia Central de Inteligencia estadunidense (CIA, por su sigla en inglés), un “privilegio” de apenas otros 15 centros mundiales de ese tipo y la única en América del Sur, aunque también se habría rastreado a sus vecinos. “Estoy sorprendido con esta jerarquización de Brasil, que es marginal en la lucha antiterrorista”, apunta Azambuja. Sólo está el asunto de la llamada Triple Frontera, la zona compartida por Brasil, Argentina y Paraguay, que siempre preocupa a Washington por la supuesta presencia de grupos islámicos, negada sistemáticamente por los tres países involucrados. Pero el delito que comete Estados Unidos sería más grave, según el diplomático, si el espionaje tuviera objetivos aún “menos justificables”. Brasil es hoy la sexta economía mundial, descubrió grandes reservas petroleras en la capa presal del Océano Atlántico, desarrolla una alta tecnología nuclear con fines pacíficos, su dinámica industria aeronáutica compite en licitaciones internacionales y tiene otras empresas en el exterior en áreas como hidrocarburos, minería y construcción. Hacia el papel internacional de Brasil, dice a IPS Clóvis Brigagão, de la Facultad Cándido Mendes, el motivo puede ser la “postura independiente de Brasil en política internacional”. Añade que Washington puede haber “encontrado en este país a otro enemigo fantasma”, por su pretensión de obtener un lugar permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU o su postura ante Turquía e Irán. También juegan en esto las materias primas, “que en Brasil involucran recursos estratégicos”, y la “obsesión” de Estados Unidos por “mantener su hegemonía en esa área”. Por su parte, el internacionalista Celso Pereira, de la Universidad Federal de Río de Janeiro, supone que el espionaje sería por el “peso internacional de Brasil y la estatura de su economía”. “El gobierno brasileño no es irresponsable, tiene relaciones normales con Irán y los países árabes”, al tiempo que mantiene “estrechas relaciones con Venezuela, Ecuador, Bolivia”, todos con “litigios importantes con Estados Unidos”. “No es que sea diferente a la época de la Guerra Fría. La novedad es que estamos ante un nuevo instrumento de espionaje a través de internet, que facilita la invasión de la soberanía y la privacidad de las personas, y no sólo de Estados Unidos”, indica Pereira en entrevista con IPS. Las reglas sin reglas “Cuáles son las reglas de este nuevo juego; no lo sé”, puntualiza Azambuja. “Antes el espionaje era a países rivales, de un carácter casi artesanal, pero ahora vivimos un momento inédito de las relaciones internacionales marcado por la capacidad de penetración del sistema mundial de comunicaciones a través de supercomputadoras”, dice. Es un nuevo orden o “desorden” internacional, según el diplomático, que requiere más desarrollo tecnológico nacional, en primer lugar para determinar el alcance del espionaje en otros tiempos “selectivo, limitado”. En ese sentido, Brasil apuesta a instrumentos como el lanzamiento de un satélite nacional, a cables submarinos ópticos y a un centro de datos de informaciones por internet. Pero aún así hay riesgos de invasión cibernética.

El embajador estadunidense en Brasil, que negó las denuncias, habría admitido que su país tiene registro de “metadatos”, como los de horario, frecuencia y duración de llamadas y hasta de tráfico de correos electrónicos, aunque supuestamente sin acceder a su contenido. “Por más que tengamos protección de datos por la criptografía, la mera detección sobre ese tipo de contacto es ya una información de valor analítico para un eventual adversario de país”, explica el ministro Amorim. En conclusión, Brigagão cree que la región está ante un nuevo tipo de crimen internacional de “ciberespionaje” que requiere ser colocado en la agenda mundial. Pero Pereira es pesimista al respecto: “En América del Sur no tenemos las condiciones tecnológicas que posee Estados Unidos para espiar y hacer contraespionaje. Esto va a continuar”.

Fuente: www.contralinea.com.mx Periodismo de investigación http://contralinea.info/archivorevista/index.php/2013/08/09/brasil-inerme-ante-invasion-cibernetica/

ELECCIONES EN ARGENTINA Y CHILE: QUE NO ES LO MISMO, PERO ES IGUAL Borrador sobre la crisis del sistema de partidos políticos y de los recursos electorales en ambos países. Andrés Figueroa Cornejo 1. El domingo 11 de agosto se realizan en toda Argentina las elecciones primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (Paso) con el fin de determinar los cargos nacionales que modificarán o no la composición de un tercio del Senado y la mitad de la Cámara de Diputados a fines de octubre de 2013. Un análisis que condensa desde una perspectiva crítica los alcances de las Paso se encuentra en http://frentepopulardariosantillan.org/ante-las-elecciones-primarias-2013-declaracion-de-marea-popular-yel-fpds-cnpatria-grande/ En Chile, a mediados de noviembre de 2013, se efectuarán las elecciones generales, presidenciales y de ambas cámaras. Para conocer algunos de sus aspectos se puede revisar http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172205&titular=an%E1lisis-y-proyecci%F3n-del-escenariopol%EDtico- y http://www.rebelion.org/noticia.php?id=171577&titular=las-hijas-de-los-generalesEl presente borrador, en cambio, pretende explorar, más allá de los detalles contingentes y las distancias matizadas entre las democracias burguesas de Argentina y Chile, el modo en que se expresa la crisis del sistema de partidos políticos en ambos países. 2. Tanto en Argentina como en Chile, la política profesional se presenta ante las grandes mayorías como distanciamiento y espectáculo; como publicidad, farándula y saturación. Como una industria cuya particularidad está asociada a la administración de un Estado aparentemente inmutable e imparcial. Ello se acentúa en los períodos electorales.

3. ¿Cuál es la mercancía en temporada de elecciones? Los candidatos y luego sus promesas programáticas. ¿Cuál es la forma de semejante mercancía? El compromiso pegajoso, amigable, vecino y verosímil de cambiar el actual estado de cosas ‘para el bien común’, envuelto en un procedimiento mendicante explícito. En su movimiento doble, la democracia burguesa representativa y vertical –o la dictadura del capital mediada por el truco o la puesta en escena del sufragio- resulta patriarcal (aunque se trate de candidatas), lejana como la mercancía más cara y, a la vez, con rostro que busca la identificación inmediata con el eventual comprador.

¿Por qué abusar de la mercadotecnia? Porque es una mercancía desacreditada, en crisis, que precisa de renovados artificios y coberturas en el momento de la oferta y la vitrina. Los pueblos ya conocen el momento frustrante de su realización. Por eso, desde arriba, el sistema de partidos políticos hegemónico – por fuerza y consenso-, se lima las uñas constantemente, reflota acontecimientos mistificados y sin contexto, como también oscurece la memoria y experiencias históricas de los expoliados. Siempre desde arriba, durante las elecciones la población habilitada para votar es tratada como clientela de supermercado, consumidores, espectadores; como masa infantilizada, deficitaria, incompleta, impotente e incapaz. Es decir, como grupos sociales fáciles de distraer, víctimas de un déficit atencional sin retorno, analfabetos políticos. En buenas cuentas, en las elecciones del capitalismo argentino y chileno, simplemente se reproducen las relaciones sociales que dominan provisionalmente la totalidad de la vida.

4. La crisis de representatividad del sistema de partidos políticos –que sólo subsiste porque su agotamiento no es suficiente por sí solo para ser trascendido- atraviesa tanto a las viejas derechas, como a las viejas izquierdas. Por más que acudan a la cirugía plástica antes de cada rutina electoral. Por más que empleen nuevas caras viejas o, peor aún, viejos apellidos, como si el ejercicio de la política fuera un asunto genético, atávico, hereditario, toda vez que es histórico y universal. (En Argentina puede cumplir esa función el tótem masculino de Néstor K. o Perón o Belgrano; y en Chile, el de los generales golpistas y los no golpistas, o cualquier Alessandri o Frei Montalva o incluso Salvador Allende. Cada uno de ellos como figura aislada, individual, ausente de texto y contexto). Los representantes, partidos, alianzas, bloques, frentes y concertaciones, directos, postizos o ‘voluntarios’, de más o menos similares intereses de clase en el sistema político en decadencia -apenas oxigenado por el éxito parcial de la alienación y el miedo- no se corresponden a expresiones opositoras, sino que complementarias. Ahora bien, en Argentina y Chile, aquellas agrupaciones críticas al capitalismo y, por extensión, refractarias al devaluado sistema de partidos políticos y que, sin embargo, participan en las elecciones por beneficio táctico (publicidad ampliada) o convicción, se presentan hoy como ‘alternativa’. O sea, como otredad y negación propositiva respecto del imperio planetario del capital y la hegemonía de su modalidad financiera, extractivista, informatizada y militarizada, según sus grises formas nacionales. No obstante, y lejos de la propaganda, situarse como pura alternativa u oferta programática democratizadora, pero carente de las fuerzas sociales concretas que combaten al capital, es un gesto insuficiente. Cuando se propone que la lucha contra el capitalismo es por arriba y por abajo, no se trata de dos opciones separadas, sino de un solo momento que comporta los mismos supuestos y soportes. Es decir, no es posible considerar decisivo un diferendo electoral desde los intereses y modos de los pueblos y los trabajadores, desde su movimiento real, sin contenerlos protagónicamente. Y así también, el movimiento real de los pueblos y los trabajadores que se enfrenta contra el capital no puede desdeñar las elecciones burguesas siempre y cuando su desempeño allí esté férreamente subordinado a sus intereses, tácticas y realización histórica, con los resguardos suficientes para que las plazas ganadas no reviertan su sentido –por cooptación, mesianismo o ilusión- y terminen siendo parte del problema. Entonces, postularse como ‘alternativa’ política, sin que el sujeto político que orienta y desenvuelve mientras corre o camina- su propia práctica y proyecto emancipador, en el mejor de los casos, puede tal vez testimoniar la naturaleza inhumana del capitalismo desde una tribuna en 3D, y, en el peor de los casos, puede fortalecer la escenografía gastada del sistema de partidos políticos imperante aún.

Asimismo, también resulta insuficiente plantearse como pura ‘alternativa’. Tanto en Argentina, como en Chile, las luchas colectivas del sujeto político concreto (pueblos indígenas, mujeres oprimidas y sin derechos, trabajadores activos e inactivos precarizados, estudiantes e intelectuales empobrecidos, ambientalistas consecuentes; todo quien sobrevive de la venta de su fuerza de trabajo, e incluso pequeños propietarios subordinados a los precios, la demanda y la deuda impuestas por el gran capital imperialista resumido en la bolsa, las armas y la divisa), se manifestará como posibilidad de superación del capitalismo, más que como ‘alternativa’ o simple negación de lo que, por ahora, constituyen las relaciones sociales dominantes.

5. Los Estados no son inmutables e imparciales. Son un producto histórico devenido de las relaciones sociales y de poder existentes en una época determinada de la sociedad humana en la naturaleza. Sus instituciones, funciones y movimiento no tienen que ver con un mítico acuerdo social ocurrido en distintos tiempos o a similar distancia y velocidad. Por el contrario, su sola realidad revela la existencia –para este caso, desde la modernidad- de clases sociales de intereses antagónicos e irreconciliables. Por tanto, el Estado es una relación social que está allí para promover, servir, proteger y legitimar la hegemonía de una clase social sobre otra. Bajo el capitalismo, el Estado, incluso extremando sus formas democráticas hasta los bordes tolerables por la minoría que vive a costa de la mayoría, es de contenido burgués. De no ser burgués, el Estado sólo podría ser popular y radicalmente democrático si es concebido por una sociedad autoconciente que lo va minando en tanto crea sus propias formas nuevas de organización social, distintas de la sociedad de clases. Es decir, un Estado no es burgués ni antipopular ni antidemocrático sólo cuando el conjunto de la sociedad lo sabe transitorio o como mal necesario y temporario mientras edifica las condiciones para su extinción y superación. De volverse el Estado un fetiche y la estatización de los bienes y servicios un fin en sí mismo -como si el Estado fuera un producto abstracto y terminal-, como tendencia observada históricamente, él sostiene las relaciones de poder y obstruye la mismidad entre necesidad y libertad. Para la voluntad e intereses de la sociedad como totalidad libre y liberadora pendiente, el Estado únicamente es un ‘mientras tanto’ la política deje de ser la concentración de la economía y la guerra. Naturalmente, la velocidad espacial de la desaparición del Estado está determinada, en general, por el mapa temporal de la lucha de clases en todas sus escalas y proporciones nacionales, regionales y mundiales, y por la inauguración de una era post-capitalista, sin explotados ni explotadores, sin arriba ni abajo, sin opresión y sin guerras. Esto es, junto con la abolición de la propiedad privada, es necesario abolir la política conocida como hasta ahora.

EL TERRORISMO DE ESTADO EN CHILE: SIMILITUDES Y DIFERENCIAS DEL OTRO LADO DE LA CORDILLERA http://www.argenpress.info/2013/08/el-terrorismo-de-estado-en-chile.html LA RETAGUARDIA Hace pocos días, un represor chileno, antes de morir, confesó el lugar exacto donde fueron arrojados al mar víctimas de la dictadura de ese país. Allí se encontraron restos de rieles, utilizados para evitar que los cuerpos salieran a flote y permanecieran, de ese modo, desaparecidos. Estos trozos de metal se hallaron cerca de la costa de Caldera en el norte de Chile, a 870 kilómetros de la capital. Actualmente, los rieles son analizados por el Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones para determinar si tienen adheridos otros elementos y para poder obtener más datos sobre los vuelos de la muerte durante el

Terrorismo de Estado en Chile. A partir de esta información, dialogamos con Gloria Elgueta, integrante del Colectivo Londres 38, que nos ayudó además a entender las particularidades de la dictadura allí. La larga conversación se dio en el marco de Oral Y Público. Oral y Público: ¿Cómo es la situación a partir de que se conoce la noticia de este genocida que antes de morir dio información sobre los vuelos de la muerte? Gloria Elgueta: Es una información que se originó en una investigación periodística de la Agencia EFE. En general el círculo de familiares o abogados relacionados con los temas de violación a los derechos humanos durante la dictadura desconocía este hallazgo, entonces es poco lo que se sabe, pero aparentemente, y hasta donde se ha podido establecer, lo que se encontró fueron los rieles que se utilizaban para atar a los cuerpos de las personas detenidas y muertas, y luego con un procedimiento muy macabro los ataban a estos rieles para que se hundieran en el mar, entonces estos rieles encontrados ahora estarían vinculados a ejecuciones y desapariciones del año 1973, que corresponden a un etapa previa a la de la desaparición forzada como práctica sistemática que comenzó en Chile en más o menos mayo de 1974. OyP: Esto se dio en el marco de lo que se conoce como la Caravana de la Muerte. GE: Exactamente, la Caravana de la Muerte fue un proceso represivo que se desarrolló en todo el país y consistió en el recorrido, como lo dice el nombre, de norte a sur a lo largo de todo el país con el objetivo, decían, de agilizar los procesos, procesos que en verdad nunca existieron, fueron procesos sumarios y en general este recorrido terminaba en cada lugar con fusilamientos y ejecuciones de las personas que habían sido detenidas inmediatamente después del golpe o en las primeras semanas. OyP: En Argentina las víctimas eran arrojadas desde los aviones todavía con vida, incluso fueron apareciendo en las costas del país y también en Uruguay, ¿allí el mecanismo brutal era similar? GE: Aquí ha sido diferente al proceso vivido en Argentina, en el sentido que aquí no ha habido tanta información. Hay un solo caso de un cuerpo que habría estado mal atado y que apareció en una playa en el año 1976 o 1977, pero en general no hubo ese tipo de hallazgo y solo se pudo establecer a través de testimonios que se han reconstruido muy posteriormente, porque también la filtración de información que ha habido desde los propios agentes ha sido muy poca, porque en general la justicia ha avanzado muy poco en el esclarecimiento de esa parte de la verdad, del destino final, como le llamaban aquí, y en realidad hay un solo proceso de hace un par de años que logró establecer fehacientemente y con mucho detalle todo el proceso, que fue el caso de un conjunto de dirigentes políticos que fueron hechos desaparecer. Pero en general es poca la información que se maneja, y respecto a los cuerpos yo en este momento solo recuerdo aquel encontrado en 1976 (el de Marta Ugarte) y estos rieles que aparecen ahora como huellas de la ejecución o desaparición de cuerpos. OyP: ¿Cuando alguien caía en Chile en condición de detenido desaparecido había posibilidad de que recuperara la libertad como aquí que hubo varios sobrevivientes que ayudaron a reconstruir esa historia o hay pocos sobrevivientes? GE: Hay algunas diferencias con el proceso en Argentina porque acá sí hubo muchos sobrevivientes, de hecho dos comisiones investigadoras sobre prisión política y tortura en Chile llegaron a un total aproximado de sesenta mil personas que testificaron haber estado detenidas en diferentes circunstancias y lugares. Esos son los que testificaron, pero más bien no existen casos en Chile de personas que hayan estado desaparecidas uno o dos años y que luego hayan sido entregadas o trasladadas a lugares de reclusión más permanente o que hayan sobrevivido. Los desaparecidos en Chile fueron personas que tuvieron un paso breve de tiempo por los centros de interrogatorios y torturas y que desaparecieron generalmente a los quince días, un mes. De manera excepcional hay casos que estuvieron máximo hasta tres meses prisioneros, que hubo testigos que los vieron y que luego desaparecieron, pero son muy pocos.

OyP: En el recorrido de estos años de transición democrática, desde que Pinochet deja el poder y pasa a ser senador vitalicio en 1989, en esa reconstrucción democrática que tanto le ha costado a la sociedad chilena, ¿hay espacio hoy para hablar de estas cosas o solo hablan los familiares y la gente que se ha reunido en diferentes colectivos de derechos humanos? GE: Diría que el espacio es limitado, que se ha ido ampliando. Después del término de la dictadura hubo un pacto entre los sectores que se hicieron del gobierno inicialmente y la dictadura saliente para hacer una transición ordenada, como se la llamó, basada en un consenso, en la mantención de una serie de aspectos de lo que había sido la obra de la dictadura, tanto desde el punto de vista económico como político, y particularmente respecto al tema de las violaciones a los derechos humanos en dictadura. Como parte de ese pacto no hubo investigaciones ni se produjo lo que era parte del programa de la oposición durante la dictadura que era la derogación de una ley de amnistía que la dictadura había promulgado en 1978 para autoamnistiar sus crímenes. Entonces durante los primeros años de la post dictadura hubo muchos procesos que fueron amnistiados o que fueron sobreseídos sin ningún tipo de resultado. Fue muy importante la detención de Pinochet en Londres porque eso constituyó una presión muy fuerte para los tribunales en Chile y para las autoridades políticas; ahí comenzó a haber un cambio significativo, que permitió abrir más espacios de justicia y también hacer más extensiva la preocupación por estos temas en el conjunto de la sociedad chilena. Pero yo diría que eso es todavía una deuda pendiente y que estos temas siguen principalmente estando en quienes se los considera como más afectados sin pensar que en verdad fue el conjunto de la sociedad la que fue afectada por el Terrorismo de Estado aunque de diferentes maneras. OyP: Se ha hablado bastante aquí acerca de que las dos principales contendientes para la presidencia en las próximas elecciones a realizarse en Chile tienen historias familiares diferentes. ¿Allí también se habla en estos términos de las candidatas? GE: Si, ese tema se ha hablado. En realidad, Michelle Bachelet es hija de un general de la fuerza aérea que murió en prisión producto de las torturas, pero no desapareció. Este tema ha estado en el debate y ha sido motivo de discusión y de polémica particularmente porque la candidata de la derecha, Evelyn Matthei, y la derecha en general, ha negado la participación o el involucramiento o toda responsabilidad del padre de ella en las torturas y en la prisión política de la que fueron víctimas muchos, incluso uniformados de la fuerza aérea a la cual pertenecía, y en general de los detenidos que pasaron por manos de la fuerza aérea. OyP: ¿Qué opinión tienen del proceso que se fue dando en la Argentina? Un proceso inicial de justicia en el regreso de la democracia, luego las leyes de impunidad, y después la reapertura de las causas que nos lleva a tener juicios a lo largo y ancho del país. GE: Puedo hablar más a título personal, pero a mí me impresiona mucho el proceso que se ha vivido en Argentina, que si bien es cierto que tuvo ese retroceso con la ley de obediencia debida, creo que fue muy importante y algo que aquí nunca existió el desarrollo de los juicios iniciales a los principales responsables de la dictadura. Creo que como señal, y no solo desde un punto de vista simbólico, sino desde la estricta justicia y desde un punto de vista político, esa decisión fue muy importante. No hay otros gestos que tengan la potencia que creo que tuvo eso, y pienso que eso también influyó en una actitud distinta, seguramente no de toda la sociedad, pero sí de sectores importantes de una mayor sensibilidad frente al tema de la represión en dictadura, una mayor preocupación que se aprecia en una presencia del tema en medios de comunicación, en la producción cultural e intelectual, uno puede ver esta preocupación por esa parte del pasado. Y luego con los procesos posteriores y los juicios ahora recientes a mí me parece que constituyen un modelo que uno podría decir que es ejemplar, a seguir, y yo desearía mucho que en Chile pudiéramos avanzar en algo parecido, pero todavía estamos bastante lejos de ello. OyP: ¿Qué fue Londres 38, qué es ahora?

GE: Es una casa, un lugar muy grande que está en pleno centro de la ciudad de Santiago, a dos cuadras de la Casa de Gobierno, muy cerca del centro político, de lo que era el Congreso en aquella época, y del corazón de la ciudad. Allí funcionó durante aproximadamente un año en forma más o menos intensa, y de forma más esporádica hasta el año 1975, un centro secreto de detención y tortura por el cual pasó un número de personas que nosotros hasta ahora no hemos podido determinar. No se sabe cuánta gente estuvo detenida ahí, pero se estima que pudieron haber sido muchos. Por lo menos, hemos identificado hasta ahora a noventa y ocho personas que estuvieron detenidas ahí y luego desaparecieron, o en algunos casos fueron ejecutados y sus cuerpos fueron recuperados por sus familiares. La importancia de este sitio o su particularidad es que fue desde este lugar donde comenzó la desaparición forzada como una práctica sistemática, planificada, y eso fue más o menos a partir de mayo de 1974. En el proceso represivo hubo una secuencia que fue ordenada y priorizada según las organizaciones políticas a las cuales se reprimió. En ese período Londres 38 fue el escenario de la represión contra el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), que fue la primera organización reprimida por la dictadura, y al año siguiente, en 1975-1976, se concentraron en el Partido Socialista y luego en el Partido Comunista. Evidentemente durante todo ese período también se detuvo a personas de otras organizaciones, pero lo que es importante destacar es que el foco, la prioridad en cada momento estuvo en torno a una de estas organizaciones, fue la manera en que lo planificaron. Ese fue el rol de Londres 38. Gloria Elgueta contó a Oral y Público que durante toda la historia de Londres 38 hubo, tal como es común en este tipo de sitios, un intento permanente de ocultar las huellas de lo sucedido allí y de destruir el lugar. En el caso particular de Londres 38 cambiaron su numeración por el 40, y se entregó el espacio al Instituto O'Higginiano, vinculado al ejército chileno. Esta situación continuó hasta 2007 cuando un conjunto de organismos llevó adelante una campaña para que el Estado recuperara este sitio y se lo entregara a las organizaciones de memoria para su gestión y uso como espacio justamente de memoria, como sitio histórico. Los colectivos lograron además que Londres 38 sea declarado monumento histórico e hicieron una intervención urbana colocando en la calle, que es semi peatonal, un memorial que señaliza lo que pasó allí e incluye los nombres de cada una de las personas cuyo paso por este centro de represión y exterminio pudo ser identificado y se encuentran desaparecidas: "hoy día Londres 38 es un espacio desde el cual hemos buscado desarrollar esta visibilización de ese pasado y de esa historia, como parte de eso desarrollamos también una línea de generación de conocimiento, investigación sobre los protagonistas de esa historia, no sólo la historia represiva sino también los proyectos políticos y las organizaciones a las que esas personas estaban vinculadas, y como parte de ese esfuerzo nos ha importado mucho vincular esa historia con las luchas del presente y con las organizaciones y sectores sociales que hoy día están movilizados contra justamente lo que fue la obra de la dictadura porque en Chile tal vez eso también es en parte una diferencia con la Argentina; en Chile la dictadura logró transformar muy radicalmente la sociedad, el Estado, la economía, la base y los cimientos de esa transformación son sobre los cuales hoy día estamos parados y esta sociedad sigue viviendo y trabajando sobre lo que fue ese modelo, y es justamente contra esa herencia de la dictadura que los nuevos movimientos sociales, especialmente los jóvenes, se han movilizado, y en ese esfuerzo nosotros hemos buscado colaborar, hacernos parte y sobre todo establecer ese vínculo entre aquellas aspiraciones y proyectos del pasado con lo que sucede hoy día. OyP: En tu caso personal, tuviste un hermano que pasó por Londres 38. GE: En verdad son dos hermanos que estuvieron presos allí, uno de ellos sobrevivió, estuvo tres años preso en distintos lugares, pero luego pudo salir en libertad y vivir en el extranjero. En el caso de mi otro hermano, él cayó detenido en julio de 1974, pero desapareció desde este lugar, desde Londres 38. Ambos eran militantes del MIR. OyP: Imagino que desde Chile deben estar siguiendo especialmente uno de los juicios que se están desarrollando en Argentina que es el de la Operación Cóndor, la coordinación entre las diferentes dictaduras, porque de alguna manera contiene algo de lo que sucedió allí ¿Qué expectativas tienen de lo que pueda ocurrir en ese juicio?

GE: Nosotros tenemos expectativas y de hecho hemos contactado a alguna persona y queremos contactar también al juez y a las personas que están haciendo la investigación, tanto para ofrecer nuestra colaboración con lo que podamos aportar del conocimiento sobre el proceso represivo en Chile como también eventualmente hacernos parte porque hay procesos que están relacionados. Hay chilenos que cayeron en Argentina y que están considerados dentro de las víctimas de esta investigación, pero también hay otros casos que todavía no han sido considerados porque son anteriores al golpe en Argentina, y allí hay un caso que es bien importante para nosotros, un caso que se conoció como la lista de los 119 o la Operación Colombo que es el nombre en la jerga de los servicios represivos, y que consistió en un intento de encubrimiento de la desaparición de personas que habían sido detenidas en Chile y que mediante una operación de desinformación que realizaron los servicios de inteligencia en conjunto y en colaboración con los servicios argentinos, se publicaron unas listas en una revista argentina en la cual se informaba que estas personas habían muerto producto de una interna en Argentina y en otros países o en enfrentamientos con la policía. Esa información era completamente falsa, existían ya en ese momento antecedentes en Chile sobre la detención y desaparición de estas personas, incluso había gestiones judiciales y estaban acreditadas sus detenciones, entonces esta maniobra fue bastante burda, fue un intento de encubrir esos casos, y se estableció también que ellos pensaban seguir publicando más listas hasta llegar al número total de personas denunciadas como desaparecidas en Chile, pero esas dos listas que se publicaron, una en Argentina y otra en Brasil, produjeron una reacción tan fuerte de denuncia internacional contra la dictadura chilena que suspendieron esas publicaciones y llegaron solo a ese número de 119 casos. Entonces este caso nosotros pensamos que aunque es anterior al golpe argentino, ya que las publicaciones fueron en julio de 1975, también forma parte de la misma Operación Cóndor, porque como se sabe y se ha establecido comenzó antes del golpe en Argentina. Esta extensa charla con Gloria Elgueta nos permitió entender las particularidades de la dictadura chilena, conocer un poco más la situación del otro lado de la Cordillera de los Andes tan diferente y a la vez tan parecida a la argentina.

CHILE: PUGNAS NEOCONCERTACIONISTAS: CONSTITUCIONALISTAS VERSUS NEOLIBERALES http://www.elciudadano.cl/2013/08/08/76167/pugnas-neoconcertacionistas-constitucionalistas-versusneoliberales/ Sucedió lo esperado. Los neoliberales coparon la comisión económica de la candidatura del pacto Nueva Mayoría (PC+ex Concertación). El equipo definitivo es coordinado por el economista socialista Alberto Arenas e integrado por los ex ministros Eduardo Bitrán y René Cortázar, el ex presidente del Banco Central José de Gregorio y los economistas Andrea Betancourt, Ricardo French-Davis, Oscar Landerretche, Guillermo Larraín y Andrea Repetto. Detrás de ellos, conformando un círculo ideológico-técnico regulador, estarán Eduardo Engel, neoliberal encubierto (si no se lo lee con atención en la 3a.), Andrés Velasco, el ex de Finanzas de Bachelet (un neoliberal-liberal valórico) y Alejandro Foxley del think tank DC Cieplan (cercano al ordoliberalismo alemán de la CDU de A. Merkel(1), ex ministro de la cartera entre 1990 y 1994. Cabe decirlo, este ultimo fue elegido hace algunos días -junto con el actual de Finanzas, Felipe Larraín- por la institución empresarial Icare, destinatario del premio a la Institucionalidad Económica Chilena (los beneficiarios del modelo neoliberal le otorgan laureles dorados a los guardianes de la institucionalidad o modelo). Vale hacer notar que en el equipo económico bacheletista no hay ningún especialista en cuestiones económicas del Partido Comunista, ni tampoco comentarios de su dirección acerca del tema. Bachelet está orgullosa y se siente cómoda con sus asesores pro libre empresa. Le hacen el peso a los managers piñeristas UDI-RN y a Mathei. Los dos piños se disputan los favores de la oligarquía capitalista.

Bien sabemos que no es del grupo neoconcertacionista que saldrán las medidas socioeconómicas destinadas a satisfacer las demandas democráticas de carácter abiertamente antineoliberal exigidas por los movimientos sociales e incluso algunas de inspiración anticapitalista como el “no al lucro en las empresas” que vimos en las movilizaciones de Aysén el 2012. ¿Ingenuos o precursores los jóvenes ayseninos? Hace algunos años, cuando la ultraderecha y la Concertación con Bachelet alzaban juntos las manitos para celebrar como un triunfo el reemplazo de la LOCE por la LGE, nadie hubiera pensado que hoy el movimiento estudiantil y ciudadano, de corte sociopolítico, iba a poner en la agenda política la desmunicipalización y la educación gratuita y pública para todos. Las prácticas sociales y colectivas son transformadoras. Los obstáculos sabemos de donde vienen. Por eso conviene tener presente que los imperativos económicos capitalistas, las presiones de las instituciones globales (agencias de notación de riesgo, FMI, BM, BID, mercados financieros) y las anteojeras “académicas” siguen siendo los factores con los cuales operan los economistas de la Concertación. Nada ha cambiado en sus cabezas. Son refractarios (por sus prácticas actuales) a políticas económicas definidas como “progresistas” por quienes se consideran ser los genuinos. Nos referimos a las que van más allá de “corregir el modelo socioeconómico” y que hacen un balance crítico de los 20 años de gobiernos de la Concertación. Lo que se percibe en el equipo económico bacheletista es un continuismo en ideología económica y un afán por dar seguridades a los intereses de los poderosos grupos empresariales nacionales y extranjeros en tiempos de incertidumbres generadas por el mismo capitalismo global. Éstos, por su parte, confían en que la política económica de Bachelet en manos del ramillete de tecnócratas no atentará a la estabilidad de las estructuras del modelo. Las palabras claves están dichas y de sobra: más crecimiento, cero déficit fiscal, aumento de la productividad y flexibilidad de la mano de obra. Es decir, más explotación del trabajo asalariado y reformas mínimas a la institucionalidad laboral y en derechos colectivos de los trabajadores. Juan Somavía -el “experto en trabajo decente” de la OIT- todavía no se pronuncia con claridad acerca de si Bachelet integrará en su programa las demandas de los trabajadores. La razón: éstas generan reacciones negativas en el empresariado. De ahí la prioridad dada a los nombres que integran el equipo neoliberal y que evocan redes de influencias con los poderosos grupos económicos así como la postergación de los anuncios de las reformas laborales esperadas. En este contexto, el silencio de las direcciones sindicales acerca de las exigencias de los trabajadores refuerza las posturas de la elite neoliberal tecnócrata. Quedará siempre el recurso de echarle más tarde la culpa al empedrado: al binominal remozado que no votará nuevas leyes laborales. Por supuesto, los dineros de la explotación del trabajo en manos de grupos económicos contribuirán a financiar la elección presidencial de la NM y de sus candidatos parlamentarios, apostando a que son la mejor carta para dar gobernabilidad política al régimen del Capital. Propaganda neoncertacionista y potenciales pugnas internas Sin embargo, la propaganda neoconcertacionista dice lo contrario. Que un Gobierno de Bachelet hará “cambios estructurales”. Difícil creerle puesto que los cambios estructurales exigidos por vastos sectores sociales, trabajadores y estudiantes son resistidos por los dueños efectivos del poder y la riqueza. Nada de combatir la desigualdad social de la única manera que es posible hacerlo y bien. Con políticas redistributivas de la riqueza social e impuestos estatales a los súper ricos, a sus empresas y ganancias; renacionalizar el cobre y las empresas públicas privatizadas por la fuerza militar; garantizar educación, vivienda, salud y pensiones universales, solidarias y públicas (por el Estado); y nacionalizar un sector de la banca junto con crear otro modelo energético, no depredador como el actual. Además de suprimir las prebendas del cobre a los militares y aumentar los salarios de los trabajadores.

Lo que no deja de sorprender en este cuadro, marcado por el continuismo en la hegemonía neoliberal, es el silencio del ala auténticamente progresista del neoconcertacionismo. Aquellos que sinceramente quieren cambios estructurales tendrían que expresarse. Se han organizado para exigir una Asamblea Constituyente y elaborado análisis. Y quieren, con razón, “reconstruir la relación entre economía y política y entre Estado y sociedad”, es decir, tirar a la basura la Constitución pinochetista por “tramposa”. Puesto que es el marco de la institucionalidad neoliberal económica heredada de la dictadura, como dicen acertadamente. Empero, al mismo tiempo, creen y hacen creer que será posible con Bachelet y sus equipos. Cabe preguntarse si tienen una táctica para acumular fuerzas desde el interior para revertir la hegemonía neoliberal actual representada en lo político por Escalona, Walker, Bitar, los Lagos, etc. Es la misma institucionalidad neoliberal elogiada por los empresarios de Icare la que les dará el marco de intervención al equipo de economistas dirigido por el socialista-liberal Alberto Arenas. Que sólo permitirá algunos ajustes del tipo de reformas adaptativas para introducir regulaciones que permitan una mayor competencia en el mercado de los agentes capitalistas (entre grupos de farmacias por ejemplo, para impedir colusiones y de AFP e Isapres, para evitar abusos, lo que MEO llama “humanizar” el capitalismo, su proyecto). Junto con programas sociales para facilitar la inclusión, que son buenos, a condición de saber que sólo son paliativos contra la desigualdad. No es de equipos de economistas neoliberales que saldrán las políticas económicas para eliminar la desigualdad social, ni la concentración de la riqueza en un polo social minoritario. Tampoco habrá voluntad para cambiar las leyes del mercado que permiten la explotación del trabajo asalariado. Esto no se lo plantean los progresistas pro mercado que en los ochentas abandonaron las tesis socialistas para adoptar las “terceras vías”. Insistamos. Es una evidencia que el equipo de economistas bacheletistas no promoverá un nuevo modelo socioeconómico deseado por el progresismo académico. Para los intelectuales de FLACSO, que intentan darle consistencia a la ideología progresista en crisis, durante los veinte años de gobiernos concertacionistas “no fue superado el doble amarre de la sociedad chilena al orden social de la dictadura, principio de mercado generador de desigualdades e institucionalidad política que impide la transformación del modelo socioeconómico” (2). Estos consideran en sus análisis que la Asamblea Constituyente es el camino para tales metas (“Establecimiento de un plebiscito, a través de une reforma constitucional, que abra paso a una Asamblea Constituyente.”). En esto son preclaros, pero al mismo tiempo tendrían que elaborar una crítica contundente a las orientaciones ideológicas en lo económico al personal político y técnico concertacionista. Quienes se oponen a una Asamblea Constituyente, donde se exprese el poder ciudadano, son sus propios correligionarios y en primer lugar los tecnócratas del equipo designado por la candidata; los guardianes del orden neoliberal económico y jurídico político. Poco antes del Golpe militar el presidente Salvador Allende planteó la necesidad de una nueva Constitución para Chile redactada por una Asamblea Constituyente surgida desde los trabajadores y el pueblo. Visionario Allende. La derecha antidemocrática hizo lo que sabe hacer. Detener los procesos de cambio por todos los medios. Hoy, la derecha está incrustada en la misma Nueva Mayoría. Llamar a los trabajadores y trabajadores de Chile a integrarse con fuerza en el proceso constituyente desde sus lugares de trabajo en asambleas y con sus propias organizaciones es una garantía de éxito que permitiría doblarle la mano al ala conservadora y neoliberal del neoconcertacionismo y a los ex civiles golpistas hoy reciclados en la democracia oligárquica y formal. Por Leopoldo Lavín Mujica El Ciudadano

A 40 AÑOS DEL GOLPE, CHILE RECUERDA Y SE EXPRESA SIN MIEDO: “PINOCHET ES UN ESTIGMA PARA EL PAÍS Y PARA EL MUNDO” Publicado el 08 Agosto 2013 http://www.elclarin.cl/web/index.php?option=com_content&view=article&id=8931:a-40-anos-chilerecuerda-y-se-expresa-sin-miedo-pinochet-es-un-estigma-para-el-pais-y-para-elmundo&catid=26:politica&Itemid=11 Durante el gobierno de Pinochet en Chile, el activista pro derechos humanos José Zalaquett fue detenido dos veces y finalmente se vio obligado a exiliarse. Como abogado comprometido, el gobierno intentó impedir que defendiera los derechos humanos. Aquí cuenta su historia y lo que piensa que significa actualmente la figura de Augusto Pinochet. Cuando Augusto Pinochet tomó el poder en Chile, hace 40 años, el profesor de Derecho José Zalaquett impartía clase en la Universidad de Chile. Aunque la noticia no le sorprendió en su momento, los días siguientes empezaron a parecerse a un guión cinematográfico. “Vimos que iba a producirse el golpe. Fue como una tragedia griega anunciada de la que todo el mundo sabe el final, pero nadie puede evitarlo”, dice. Cuando Pinochet tomó el poder por la fuerza, Zalaquett, su entonces esposa y sus dos hijas de corta edad tomaron algunas pertenencias y se marcharon de su casa para vivir relativamente a salvo con un amigo, en las afueras de la ciudad. Allí pasaron horas reunidos frente al televisor, viendo cómo se desarrollaban los acontecimientos, incluidas la muerte del presidente Allende y las declaraciones de las nuevas autoridades, que prometieron públicamente “erradicar el cáncer marxista en Chile”. Poco después de tomar posesión, las autoridades militares publicaron listas de personas a las que buscaban para detener. El jefe de José apareció en la primera de ellas. Un trabajo peligroso Sin dejarse intimidar por la posible amenaza para su seguridad y la de su familia, unos meses después del golpe José se incorporó al Comité pro Paz. Era una nueva organización de la iglesia que asumió la peligrosa labor de documentar abusos y proporcionar asistencia letrada gratuita a los detenidos y a sus familias. José estaba encargado de recopilar información sobre cientos de hombres y mujeres detenidos o desaparecidos. Los acontecimientos se desarrollaron con rapidez y para los chilenos la vida se convirtió en algo casi irreconocible. Partidos políticos y sindicatos fueron prohibidos, las detenciones de activistas aumentaron y se impuso el toque de queda, lo que significaba que nadie podía ser visto en la calle entre la medianoche y las 6 de la mañana. “El gobierno militar impuso un control muy estricto... si estabas en la calle entre esas horas podían dispararte”, recuerda José. Los detenidos eran llevados inmediatamente a centros repartidos en todo el país, algunos de ellos secretos. Unas 18.000 personas terminaron en el Estadio Nacional, una de las canchas de fútbol más grandes de Chile, que fue reestructurado para alojar a un gran número de personas.

Al mismo tiempo, el régimen de Pinochet creó la DINA, una unidad de policía política secreta encargada de realizar detenciones sistemáticas y de cometer abusos contra quienes consideraban opositores al régimen. Secuestraban a la gente en su casa, en el trabajo o en la calle, y a veces no se volvía a saber de ellos. A medida que aumentaba el número de personas detenidas y desaparecidas, los familiares empezaron a contactar con abogados como José en busca de ayuda. Aunque poco era lo que podía hacer realmente, José comenzó a acompañar a los familiares de las personas detenidas en el Estadio Nacional. Había largas colas de gente que entregaba comida y ropa a los soldados, con la esperanza de que llegaran a sus seres queridos. “La gente necesita saber que hay un abogado a cargo, les da tranquilidad espiritual que están haciendo todo lo posible por sus seres queridos”, recuerda. “A los militares no les gustaba lo que hacíamos pero estábamos protegidos por las iglesias.” Cuando se acabó la suerte Durante dos años trabajó sin descanso ayudando a que los activistas políticos encontraran asilo en embajadas locales y, en última instancia, a que salieran en secreto del país. Sin embargo, cuando lo despertaron unos fuertes golpes en la puerta a la 1.30 de una cálida madrugada, no se sorprendió. José sabía que era un blanco perfecto. “Recuerdo que le dije a mi mujer que se calmara, me tomé un valium en el baño para controlar los nervios por si acaso me interrogaban y me llevaron”, cuenta a Amnistía Internacional. Tras la puerta, aguardaba un grupo de policías. En una semana, dice, fueron detenidas un total de 22 personas de su organización. José estuvo detenido dos meses y medio; lo interrogaron pero no lo torturaron. Sin embargo, tras ser puesto en libertad le dijeron que se marchara del país. No tenía ninguna intención de hacerlo, y tras apenas 13 días de libertad recibió otra visita de la policía. “La policía civil me preguntó a dónde quería ir y yo dije que ninguna parte. Entonces me tomaron preso y me tuvieron 12 días.” Cree que todo fue porque “no entendí el mensaje de que debía parar la primera vez.” José salió de Chile escoltado por dos militares que lo acompañaron hasta el avión, donde lo sentaron y le abrocharon el cinturón. Primero fue a Francia y luego a Estados Unidos, donde se unió a Amnistía Internacional y a varios exiliados chilenos más que trabajaban para dar a conocer la situación de los derechos humanos en este país del Cono Sur. Fue presidente del Comité Ejecutivo Internacional de la organización y posteriormente secretario general adjunto. El legado de Pinochet de miedo y represión José vivió 15 años en el exilio hasta que pudo regresar a su país.

En 1990 Pinochet fue destituido como consecuencia de un referéndum celebrado en 1988 que desembocó en unas elecciones nacionales; un nuevo gobierno, elegido democráticamente, tomó posesión en marzo de ese año.

Posteriormente, José fue un miembro clave de la Comisión Rettig, encargada de analizar el alcance de las violaciones de derechos humanos cometidas durante el régimen militar.

José afirma que aunque sigue habiendo desafíos, las cosas han cambiado a mejor. En parte como resultado de su trabajo, 160 policías y militares han sido detenidos por su participación en los abusos de la era Pinochet. Ellos y otros muchos están actualmente siendo juzgados.

“En Chile, nadie discute sobre lo que pasó. Los periódicos que apoyaron al régimen militar dejaron de hablar de los ‘presuntos’ desaparecidos y ahora hablan de los desaparecidos. E incluso los canales privados de televisión emiten documentales sobre lo que sucedió en esa época. La verdad ya no es asunto de debate”, dice.

“Pinochet hoy día es una memoria. Él era la cara visible de una junta que gobernó durante los 17 años. Es un mal recuerdo, un estigma para el país y el mundo.

BRASIL: LA CALMA Y EL MAREMOTO Osvaldo Coggiola http://www.argenpress.info/2013/08/brasil-la-calma-y-el-maremoto.html Los movimientos callejeros continúan dictando cada paso de la política del país, a pesar de su retroceso en julio. Río de Janeiro asiste diariamente a manifestaciones contra el gobernador Cabral (PMDB), elegido plebiscitariamente en 2010 (con apoyo del PT) y que ahora cuenta con un (sobreestimado) apoyo de 12% del electorado. Cabral fue cercado por la población en Campo Grande, donde había ocurrido un accidente trágico y tuvo que huir: su propia casa sufre un cerco diario. El gobierno de San Pablo, histórica y actualmente en manos del PSDB (oposición), sufre la explosión de una bomba en su propio campo: la empresa Siemens auto-denunció su participación en un esquema de sobrefacturación en las obras de construcción del subte metropolitano (280 millones de dólares), con la complicidad del gobierno del Estado. Las manifestaciones en San Pablo, aunque muy minoritarias en relación a las del tarifazo de transportes, también continúan diariamente. Bajo esas condiciones, el gobierno nacional (PT), después de un nuevo corte presupuestario (10 mil millones de reales), que se suman a los 28 mil millones de reales ya cortados en el primer semestre, para alcanzar las metas de superávit primario impuestas por el FMI (garantizando el pago puntual de la deuda pública) liberó 6 mil millones de reales en “enmiendas parlamentarias” (corrupción disfrazada), con el objetivo de mantener el apoyo de la “base aliada”, que le podría jugar la carta de la destitución. El superávit primario de 2013, aun así, es el peor desde 2001. A la fuga de capitales (que invocan los peligros de un país en el cual las calles son ocupadas cotidianamente) se suma ahora el déficit comercial, el primero en toda la década petista: 5 mil millones de dólares en los primeros siete meses del año (contra un superávit de más de 25 mil millones en igual período de 2006). El boom exportador se ha reducido en 30 mil millones. Sólo continúa ganado el capital financiero, beneficiado por la elevación de las tasas de interés: Itaú Unibanco (mayor banco privado) lucró 3,6 mil millones de reales en el segundo trimestre, récord histórico. El país se hunde al compás del parasitismo capitalista-financiero.El parasitismo estatal está a su servicio. Frente a las movilizaciones, la presidente anunció que estudia la fusión de algunos

de los 39 ministerios (13 en 1990), que emplean 984.330 funcionarios, o sea, despidos de estatales. Pero nada de tocar los 22.417 “cargos de confianza” de los ministros, un verdadero ejército de parásitos sociales. La única noticia “positiva” es la desaceleración del ritmo inflacionario (0,26% en julio) debido a la caída… del precio de los transportes (la gran victoria de las manifestaciones). Como la población sabe que esto no se debe en nada al gobierno, el índice de popularidad de Dilma Rousseff sigue cayendo (ya lo hizo de casi 70 para poco más de 30%): el único consuelo de petistas oficiales y oficiosos es que el índice de los opositores electorales (declarados) también cayó. Esto los lleva a la conclusión de que, con las debidas correcciones, el PT podrá “navegar” la actual crisis. La gran contribución de la Dirección Nacional (DN) del PT (olímpicamente ignorada por Dilma) fue la producción de un parco documento (después de diez días de negociaciones entre todas sus corrientes) donde afirma que “la conducción de una nueva etapa del proyecto exige ratificaciones en la línea política del PT y el gobierno que se reflejen en la actualización del programa y la consolidación de la estrategia que expresa la radicalización de la democracia”, o sea, nada. Sobre fuga de capitales, deuda pública (interna e externa), salarios, despidos (el desempleo creció 0,6% este año, y las empresas anuncian nuevos cortes) y, sobre todo, represión (asesinatos en las favelas, y un desaparecido en Río, Amarildo Dias de Souza), ni una palabra. La izquierda petista y no petista Mientras la izquierda no petista se limitar a reclamar (literariamente) su derecho a la existencia (remunerada, claro) -su participación en las actuales manifestaciones es nula- la izquierda del PT busca aprovechar la crisis para subir en el aparato, usando la política del avestruz hasta la esquizofrenia. “La reacción pública de la DN del PT, de la presidente Dilma y de Lula fue en la misma dirección: enfatizar la coincidencia entre los reclamos callejeros y nuestros objetivos estratégicos”, reza el documento de la Articulación de Izquierda, AE (Página/13, agosto). Dilma, recordemos, mandó inicialmente reprimir con todo las manifestaciones, mientras Lula se iba de gira por Africa. Para la AE, el problema sería que “las fuerzas de derecha, incluso la que se abriga en el gobierno y controla el Congreso Nacional, no quieren ninguna reforma política”; “los acontecimientos confirmaron”, continúa, “que si el PT no cambia de estrategia será atropellado”, lo que no impidió a la AE firmar el documento de la DN (“consolidación y ratificación de la estrategia” incluida). Lo de la reforma política es más sabroso. Pues la “fuerza de derecha gubernamental que controla el Congreso” (el PMDB) instituyó una comisión parlamentaria de reforma política, con un proyecto que “flexibiliza” (sic) el financiamiento partidario, elimina prácticamente las multas a los donadores privados (personas o empresas), suprime cualquier límite a la propaganda electoral por cualquier medio, y libera a los partidos y candidatos de comprobación de gastos, además de incrementar los recursos públicos de campaña; o sea, la joda completa. Lo sabroso es que la comisión es presidida, por indicación del PMDB… por el propio PT (Cándido Vaccarezza). Los gurús ideológico/políticos de la izquierda han apuntado unánimemente el peligro del surgimiento de una derecha fascistoide, como el sujeto que grita “¡al ladrón!” para encubrir la acción de los ladrones reales. La izquierda brasileña surgida al calor de la fase final de la lucha contra la dictadura y de la pseudo democratización de la década del ‘80 ha agotado su ciclo histórico y político. En medio al derrumbe comercial y financiero del país, y al derrumbe de su régimen político, una nueva izquierda clasista podrá ver la luz sobre la base del balance político de la izquierda actual, que no será, sino que está siendo, “atropellada”.

ARGENTINA: UNA INDUSTRIA QUE SE CONECTA EN EL SUR http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-226173-2013-08-07.html

De 2009 a la fecha, la producción de aires acondicionados creció de 570 mil a 1,5 millón; la de hornos microondas, de 232 mil a 665 mil; la de televisores, de 1,2 a 3 millones y la de celulares, de 400 mil a 14 millones. Luces y sombras del proceso.

Por Javier Lewkowicz Desde Ushuaia En el sector electrónico de Tierra del Fuego existe una compleja mezcla de importante generación de empleo en una región alejada de los grandes centros de producción, distribución y consumo; un esquema de ensamblado con baja tracción hacia la industria nacional, aunque con algunos nichos con potencialidades y altamente tecnificado; enorme facturación de las empresas y una pesada carga fiscal para el Estado. Estas variables no se presentan con la misma intensidad en la producción de celulares, donde el ensamblaje es manual y las posibilidades de sustitución de importaciones casi nulas, que en aires acondicionados o notebooks. La plataforma de ensamblaje podría utilizarse para desarrollar algún componente específico o potenciar la electrónica nacional en otros sectores, aunque esa definición de política industrial no está clara. Página/12 recorrió las principales plantas de Río Grande y Ushuaia. El esquema de desgravación de IVA, Ganancias y derechos de importación que comenzó en 1972, junto al cambio impositivo de 2009, que penalizó a los importados y benefició a los fabricados en la isla, permitió un notable avance de la electrónica en Tierra del Fuego. Los aires acondicionados pasaron de 570 mil a 1,5 millón, el triple, similar al salto de los hornos microondas, de 232 mil a 665 mil. Los televisores, en tanto, avanzaron de 1,2 a casi 3 millones por año. La suba más abrupta se dio en celulares: de los casi 400 mil ensamblados en 2009 se llegó el año pasado a 14 millones de unidades, 35 veces más. En todos los casos, el Ministerio de Industria establece qué partes se importan y cuáles son nacionales, en un proceso productivo que cada empresa debe respetar. Alrededor de 7 millones de celulares al año de las marcas Samsung, Motorola, BlackBerry y HTC son ensamblados por Brightstar, firma de capitales estadounidenses. La empresa tiene varias plantas en la ciudad de Río Grande, donde recibe unas 60 piezas importadas por cada teléfono, que ingresan en una larga línea de montaje manual que ensambla la placa con los microchips, la cámara de fotos, el micrófono, la carcasa, la pantalla y el cobertor con tecnología touch, entre otras. Luego pequeñas máquinas ubicadas en cada módulo y manejadas por un operario sellan esos componentes. Los aparatos se someten a controles de calidad tanto manuales como electrónicos. Los únicos elementos de fabricación nacional son la caja y folletería. Hugo Bonifacini, gerente de relaciones institucionales de Brightstar, explica que la posibilidad de sustituir partes de celulares por producción nacional es nula. “Hay en todo el mundo una o dos fábricas que hacen componentes. La escala de producción eficiente es gigantesca y el tiempo de recambio del producto en el mercado es cada vez menor”, indica. Para esa firma, los celulares representan más del 90 por ciento de la facturación. También ensamblan celulares con la misma técnica, definida por Industria, BGH para Sony y Mirgor para Nokia, entre otros. Los celulares tienen el máximo contenido importado y es la producción con más mano de obra intensiva, con baja transferencia tecnológica y trabajo ingenieril. Su producción explica una parte de la fuerte suba del empleo en la isla, de 3513 en 2009 a 12.186 personas. Son trabajadores en su mayoría jóvenes, con buenos salarios aun para el alto costo de vida. El ritmo de crecimiento poblacional en la isla es vertiginoso, del 20 por ciento anual. Por fuera de los celulares y las TV, donde tampoco hay exigencia de contenido nacional, en aires acondicionados se analiza avanzar sobre la compra local de caños, válvulas de bronce, motores eléctricos y controles remotos. En las notebooks las memorias RAM son locales y se trabaja sobre fuentes de alimentación y baterías. También las placas donde van los chips podrían ser fabricadas en el continente. Son insumos que no modifican el resultado en términos de divisas. Sí pueden impulsar la producción de las

firmas proveedoras y tener impacto en el empleo. Ese camino es incipiente e incierto su resultado. En las TV no hay exigencias de producción nacional. Otra diferencia con respecto a celulares radica en la tecnología de producción. Industria exige utilizar máquinas de inserción automática para aires acondicionados, TV, equipos de audio y computadoras. Son robots japoneses que insertan en la placa los chips y los transistores. Requieren software, control y mantenimiento que es desarrollado por ingenieros argentinos, de las empresas BGH (para las marcas BGH y Samsung), Fapesa (Philips) y Mirgor (LG, Whirpool y Dell). En estas líneas hay transferencia de tecnología, aunque el empleo, por ser capital-intensivo, es menor. Otra variable sensible es el dinero que el Estado deja de recaudar para promocionar la actividad en la isla. Este año se calcula que serán más de 13 mil millones de pesos, el 0,52 por ciento del PIB.

LAS FABRICAS DE TIERRA DEL FUEGO YA COMENZARON A INCREMENTAR LA PRODUCCION DE TELEVISORES CON EL MUNDIAL ENTRE CEJA Y CEJA Las empresas instaladas en la isla confían en incrementar las ventas a medida que se acerque el comienzo del torneo. Cómo es el régimen de promoción fiscal que las protege. Desde Ushuaia http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-226246-2013-08-08.html Las fábricas de electrónica de Tierra del Fuego ya comenzaron a incrementar su producción en vistas al próximo Mundial de fútbol del año que viene. “El plan de la empresa prevé un paulatino crecimiento de la producción de televisores, que ya están saliendo a un promedio diario de entre 1200 y 1500 unidades junto a los ocho mil decodificadores para televisión por cable”, indicó Juan Galera García, gerente de Relaciones Institucionales de BGH. Las demás firmas fabricantes de TV, como el Grupo Mirgor (que produce LG) y Fapesa (Philips), también apuestan a impulsar las ventas con el mayor evento deportivo del mundo. La electrónica de consumo multiplicó el grado de innovación tecnológica de modo de generar la necesidad en los usuarios de renovar los equipos en un período de tiempo mucho más corto que años atrás. De modo similar a lo que ocurre con los celulares, en donde la producción de cada modelo en las plantas de Tierra del Fuego no se prolonga por más de seis meses para que luego ingrese en la línea de ensamblaje la última novedad, en los televisores el tiempo de recambio se acortó sustancialmente. “Si antes las fábricas demorábamos entre 3 y 4 años en sacar nuevos modelos que contenían pequeños cambios de orden más cosméticos, ahora cada semestre salen nuevos modelos con tecnología mucho más moderna que dejan rezagado al televisor anterior”, explica Roberto Cacheda Rey, director de planta de Fapesa, que fabrica para Philips en la ciudad de Río Grande. “Lo que se viene en Tierra del Fuego es desarrollar más proveedores, buscar más eficiencia en todas las etapas de producción y empezar a incluir a la industria nacional en los celulares”, señaló el gerente comercial de Newsan, Fabio de la Mata. Antes ministro de Industria provincial, De la Mata sostiene que el impacto de la electrónica sobre el empleo directo, proveedores e infraestructura provincial es grande, y relativiza el esfuerzo fiscal que exige el régimen de promoción. La tecnología del proceso productivo y el potencial para la manufactura local es más relevante en TV, audio y computadoras que en celulares. El régimen de promoción fiscal en la isla comenzó en 1972 con la desgravación de IVA y Ganancias. Se buscó impulsar la actividad económica desde una óptica geopolítica, ante la posibilidad latente de un conflicto territorial con Chile. Posteriormente, en los ’90, el Mercosur permitió la continuidad de los regímenes aduaneros especiales tanto en Argentina como en Brasil. Para equiparar el tratamiento impositivo de la isla al que reciben las empresas en Manaos (Brasil), en noviembre de 2009 se sancionó la ley de electrónicos, que a través de impuestos internos y la suba del IVA del 10,5 al 21 por ciento, elevó en un 30 por ciento la

carga impositiva total a una serie de productos terminados importados como celulares, computadoras, monitores, televisores, aparatos de aire acondicionado y cámaras de fotos. A esos mismos productos ensamblados en Tierra del Fuego se les redujo por decreto la alícuota de 17,0 a 6,6 por ciento. Se penalizaron así los artículos importados y se benefició a los fabricados en territorio fueguino. Este cambio normativo permitió un notable avance de la electrónica en Tierra del Fuego en los últimos años. Una porción relevante de la promoción es apropiada por los celulares, donde el proceso productivo es manual y todos los componentes importados. En cambio, la inserción automática de componentes en las placas genera una transferencia tecnológica y trabajo ingenieril relevante en TV, audio y computadoras. Eso no sucedería sin la exigencia del Ministerio de Industria de impulsar la importación de las placas limpias, para luego insertar chips, conductores y transistores. Las inversiones de las empresas son importantes. Newsan, por ejemplo, está construyendo un depósito de logística de 37 millones de dólares y tiene 20 líneas de robots japoneses de 3,2 millones de dólares cada uno. Además de la electrónica de consumo, en la isla también se fabrican otros productos que se benefician del régimen de promoción de 1972 y no de los beneficios de 2009. El Grupo Mirgor, por ejemplo, además de ensamblar 16 mil celulares por día, produce equipos de climatización para automóviles Renault, General Motors, Volkswagen y Chery. Tienen el 50 por ciento del mercado local de climatizadores. Esos equipos se producen a través de un proceso de inyección plástica, con maquinaria alemana de punta y matrices que en general proporcionan las terminales. Mirgor tiene 1790 empleados y una facturación esperada de 831 millones de dólares para 2013. También trabaja con Industria para insertar equipos de electrónica en bienes de capital, como maquinaria agrícola.

UN ESPECIALISTA EN PLANIFICACION ENERGETICA ANALIZA EL ACUERDO CHEVRONYPF Y SUS CONSECUENCIAS “NO HAY ESTAFA NI CESIÓN DE SOBERANÍA” Ricardo De Dicco, especialista en temas de energía, desgrana las condiciones del acuerdo para la explotación de Vaca Muerta y rechaza los cuestionamientos. “Todo el control de la operación queda en manos de YPF”, asegura. Por Raúl Dellatorre http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-226184-2013-08-07.html “Decir que este contrato es una cesión de soberanía o una estafa es desconocer el sentido de la operación y los compromisos asumidos”, aseguró Ricardo De Dicco, director del Centro Latinoamericano de Investigaciones Científicas y Técnicas (Clicet), en referencia al acuerdo recientemente firmado por YPF con la norteamericana Chevron para la explotación del área General Mosconi en la formación Vaca Muerta y la concesión por esa misma área otorgada por la provincia de Neuquén. De Dicco, que cuenta con vasta experiencia profesional en distintos organismos del Estado y en la actividad privada, en temas en los que se especializa –infraestructura y planificación energética y en tecnología nuclear–, analizó la información disponible con respecto al acuerdo entre las empresas y la concesión del área, enfatizando que el punto clave es que “la titular de la concesión es YPF, la responsable de la administración de las inversiones y de la operación del área es YPF, hasta la comercialización de lo que se extraiga seguirá en manos de YPF; Chevron se asocia para compartir a riesgo, en partes iguales, las inversiones y también compartirá las ganancias obtenidas por la comercialización, pero no comparte el control de la gestión ni del recurso”. La concesión del área General Mosconi ya fue resuelta por decreto del gobierno de Neuquén, aunque falta la aprobación de la Legislatura provincial, que la votaría la semana próxima. El titular de la concesión de esta área de 395 km2 es YPF. Dentro de ella, hay en ejecución un programa piloto en una subárea de 20 km2, en la cual YPF viene trabajando y que requeriría, para su desarrollo, de una inversión de 1500 millones de dólares en un período de 12 a 18 meses. Aquí es donde intervendrá Chevron, por el acuerdo firmado con YPF, con un aporte de 1240 millones de dólares.

–¿En qué medida el acuerdo representa cesión o reparto de soberanía entre YPF y Chevron? –consultó Página/12 a De Dicco. –No hay cesión ni reparto de soberanía. YPF será el titular del área concesionada por Neuquén. Estará a cargo de la dirección del proyecto, de la administración de las inversiones, de la operación técnica de los pozos y de la comercialización de los hidrocarburos, tanto en los mercados internos como en los destinados a la exportación. –¿Pero Chevron no podrá disponer de su parte para exportarla a partir del quinto año? –El beneficiario del decreto 929 de promoción de las inversiones es YPF, no Chevron, porque es el titular de la concesión y el único operador. Es el único responsable del cumplimiento de las inversiones frente a la provincia de Neuquén, es el que debe pagar las regalías (porcentaje del valor de la producción que recibe la provincia). YPF podrá exportar el 20 por ciento de la producción después del quinto año si se cumplen todos los requisitos previos, y disponer de las divisas en el exterior. Ahí sí Chevron podrá recibir su parte, como participación en las ganancias, y decidir si las reinvierte en el país o las deja afuera. E YPF tomará su propia decisión sobre su parte. Pero si el desarrollo del área a esa altura es exitoso, yo no dudaría de que esa plata se reinvierte en Vaca Muerta. –¿La asociación con Chevron deja atada a YPF la tecnología y equipamiento que traiga la empresa norteamericana? –Tampoco. Ambas empresas compartirán experiencias y conocimiento en el desarrollo de formaciones geológicas de explotación no convencional. Además, YPF puede adquirir equipamiento con transferencia tecnológica en el mercado internacional sin necesidad de establecer en esta cuestión una relación de dependencia con Chevron. La reducción de aranceles para la importación de determinados bienes de capital, por el decreto 927, es un beneficio para YPF. –Así planteado, no se ve cuál sería el atractivo para Chevron de hacer semejante inversión... –Chevron es la segunda petrolera del mundo. No viene a la Argentina para sacar ventaja con la supuesta disponibilidad del 20 por ciento de la producción, como critican algunos sin conocer el tema. Para Chevron, eso no es nada. Su interés es conocer si Vaca Muerta tiene el potencial que le asigna el Departamento de Energía de Estados Unidos, que lo coloca como el cuarto yacimiento del mundo en petróleo no convencional. Arriesga 1240 millones de dólares para saber, dentro de 18 meses, si hay indicios de una explotación importante. Y en cinco años si hay resultados de extracción a través de la perforación de 900 pozos. El desarrollo total del área General Mosconi demanda 26.500 millones de dólares a lo largo de 35 años. A eso apunta Chevron, a estar presente en ese desarrollo si el área le interesa.

EL FIN DE LA EDAD DE ORO DE LOS “PUEBLOS JÓVENES” LIMA, ¿UNA CIUDAD PARA TODOS? Por Elizabeth Rush* http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/lima-una-ciudad-para-todos/ La capital peruana conoció una época en que sus habitantes lucharon por hacerse un lugar, y lo consiguieron. Gracias a la cooperación colectiva nacieron los “pueblos jóvenes”, un modelo de desarrollo informal para otras ciudades del mundo. Pero la lógica rentista de Fujimori, terminó anulando la lógica comunitaria.

n esta noche de sábado, en pleno enero, cientos de personas se reúnen para festejar el segundo aniversario de Los Álamos, un asentamiento hecho de todo un poco. En cualquier lugar del mundo, un sitio así se calificaría de villa miseria, tugurio o barrio de okupas. En Lima, en cambio, se le brinda la armónica denominación de “pueblo joven”. El optimismo de la fórmula traduce un estado de espíritu característico de la capital peruana, donde invadir colectivamente un terreno todavía disponible, aunque sea de manera informal o irregular, es considerado como una especie de derecho propio en el proceso de urbanización. A lo largo del tiempo, algunos de esos “pueblos jóvenes” han pasado a figurar entre los barrios más animados de la capital. En Los Álamos, la velada está en su apogeo: una multitud baila sobre el piso de tierra al ritmo de una orquesta de salsa que toca sobre un escenario tambaleante, y bebe cerveza entibiada por el aire cálido de esa noche estival. A la mañana siguiente, el ambiente cambia: el “pueblo joven” se transforma en una ciudad fantasma. Guirnaldas y banderines siguen decorando las casuchas que se levantan en desorden por la ladera pedregosa de la colina; pero ni un alma a la redonda, sólo algunos perros anémicos que dormitan al sol. Golpeamos puerta por puerta, sin éxito, hasta que por fin una se abre. “Después de la fiesta de anoche, la gente quedó tan agotada que todos volvieron a sus casas, en el Huaycán Bajo, las zonas C y D”, explica Leonarda Ruiz, una mujer robusta con dos niños aferrados a su falda. Su marido trabaja en la ciudad como lustrabotas; recién volverá al anochecer. “Pueden hablar conmigo, pero yo no sé mucho”, nos dice. Sólo tres familias residen de manera permanente en Los Álamos; la suya es una de ellas. Durante mucho tiempo la invasión de tierras se hizo de manera colectiva. Esto permitía a los inmigrantes pobres que venían de las montañas peruanas crear un lugar común donde vivir compartiendo sus magros recursos. Actualmente, la mayoría de los campesinos que “bajan a la capital” con la esperanza de una vida mejor se instalan como pueden, cada uno en su rincón. La parcela de Leonarda está dieciséis kilómetros al este del centro de Lima, sobre el costado más alto del valle de Huaycán. Desde la escalinata, la joven mujer goza de una vista excepcional de la ciudad que se agita abajo, con sus carreteras rectilíneas, sus jardines públicos, sus comercios, sus escuelas, sus cibercafés, sus rotiserías, sus cementerios y sus canchas de fútbol, sus numerosas canchas de fútbol… Hace cuarenta años, Huaycán era tan solo un desierto. Luego, la guerrilla maoísta desgarró el interior del país, desencadenando una espiral de sangrientas represalias que causaron estragos en la economía peruana, y empujó a miles de campesinos a buscar refugio en la capital. Se multiplicaron los asentamientos, al principio en la periferia, después cada vez más lejos, hasta este olvidado valle. En lugar de ignorarlos o perseguirlos, la municipalidad de Lima decidió ayudar a los refugiados que intentaban construir un hogar en las tierras comunales. Se realizaron investigaciones geológicas y topográficas para elaborar un plan de desarrollo. Los inmigrantes construyeron ellos mismos las infraestructuras prescriptas por la municipalidad, y ésta se comprometía a cambio a proveer acceso al agua, a la electricidad y a los transportes. Así, en el espacio de una noche o menos, nacía un nuevo “pueblo joven”.

Especulación inmobiliaria

En las conferencias internacionales, los “pueblos jóvenes” se presentan a menudo como un modelo de desarrollo urbano informal. De hecho, los que surgieron entre los años 1960 y 1980 impresionan por su vitalidad, su (relativa) paz social y la fuerte implicación de sus habitantes en la vida de su ciudad. Pero a principios de los años 1990, bajo la dirección del presidente neoliberal Alberto Fujimori (1990-2000), el título de propiedad se impuso como la medida de todo, en especial para la “rehabilitación” del asentamiento informal. La antigua cooperación entre poderes públicos y habitantes sin tierra fue reemplazada por una privatización en cadena del espacio de vida, que apuntaba a transformar en pequeños propietarios a los habitantes librados a los rigores de la triunfante economía de mercado.

Las poblaciones de los pueblos jóvenes construidos durante o después de ese período siguen luchando, a veces desde hace décadas, para que los prestadores de servicios –privatizados– acepten conectarlos a los servicios de agua o electricidad. Cada vez con mayor frecuencia, las tierras susceptibles de acoger a un nuevo pueblo joven son objeto de la especulación inmobiliaria, en beneficio de los habitantes del centro de la ciudad de Lima. El alza de los alquileres que esto provoca ya no les permite a los nuevos migrantes acceder a las únicas viviendas que podían pagarse hasta aquel entonces. Por delante de la casa de Leonarda pasa una joven elegantemente vestida, con un smartphone en el cinturón de su jean. “Mi madre es una histórica fundadora de Huaycán. En 2008 le compró todos estos terrenos a Collanac [una comunidad de habitantes indígenas]”, dice, señalando con el dedo las alturas erosionadas de la colina. Su madre no fue la única que aprovechó la ganga. En toda Lima, los caciques locales se apoderan ilegalmente de las tierras que los inmigrantes codician, para luego sacarle dinero a quien desee establecerse allí de forma permanente. Antiguos inmigrantes, instalados más abajo en el valle, pagan una suma y acampan en las parcelas durante algunos meses, mientras construyen casuchas provisorias. Luego vuelven a sus casas a la espera de nuevos recién llegados, como la familia de Leonarda. En un país donde las oportunidades inmobiliarias son escasas, para muchas familias modestas comprar y vender esos pequeños terrenos representa un medio para llegar a fin de mes. “Todo lo que queríamos era una pequeña parcela propia para plantar algunas verduras y mandar a nuestros hijos a la escuela”, explica Leonarda. Un año atrás, ella y su familia habían abandonado su poblado, a novecientos kilómetros de allí, cerca de la frontera con Ecuador, con el fin de iniciar una nueva vida en la capital. Pero terminó la época en que sus semejantes podían invadir colectivamente tierras sin desembolsar un centavo. Para obtener el derecho de ocupar un cobertizo en la ladera de la colina, en el cinturón exterior de la ciudad, Leonarda y su marido tuvieron que pagarle el equivalente a 2.800 dólares –es decir cuatro años de sus ingresos– a un lejano vecino del Huaycán Bajo. “No hay ni agua corriente, ni caminos, ni desagües. Tenemos electricidad, pero clandestina y cuesta muy cara”, protesta Leonarda. Detrás suyo, algunas casitas deshabitadas pintadas de vivos colores cubren la colina, como un puñado de confites diseminados por el desierto. Muchas de las construcciones están sin terminar: cuatro paredes ocres que todavía esperan un techo. Es a menudo así como nacen las nuevas zonas urbanas irregulares, a base de cartones, lonas y chapas onduladas; lo que en general no impide que luego se transformen en barrios habitables. Pero el Huaycán Alto difiere de los pueblos jóvenes fundados en el pasado: es un asentamiento abandonado incluso antes de haber nacido. Por cierto, de entre todos los padecimientos que sufre Leonarda, el más doloroso es la ausencia de vecindario.

De la exclusión a la autogestión

“Una ciudad para todos”. En Lima este lema se exhibe por todas partes: en el nuevo subterráneo de la capital, sobre los tanques de agua instalados en medio de las áridas colinas, en los sitios donde trabajan los encargados de calcular el valor de las tierras que bordean el río Rímac. Un tercio de los peruanos vive en Lima. Y entre los habitantes de la capital, uno de cada tres ocupa un terreno que no le pertenece. A lo largo del siglo pasado, la ciudad vivió un gran crecimiento gracias al flujo de millones de pequeños campesinos desalojados de sus tierras por los grandes agricultores, la guerrilla de Sendero Luminoso y la brutalidad de la contra-insurgencia. De 1940 a 1993, su población se multiplicó por veinte. Con cada nueva ola de inmigrantes aumentaba la escasez de lugar para acogerlos. Entonces, los recién llegados empezaron a construir sus propias viviendas, sus propias ciudades en los confines de la periferia, sin ningún título de propiedad. En este sitio donde la cordillera de los Andes se hunde en el océano Pacífico, quienes no tienen recursos para alojarse en la reverdecida meseta del centro de Lima se hacen un lugar en los intersticios de la geología: contrafuertes montañosos, recovecos desérticos y valles escarpados.

Hubo un tiempo en que Lima sufría tal presión demográfica que el Estado tuvo que entablar una inédita cooperación con los inmigrantes rurales. La periferia de la capital sería así remodelada para siempre. En 1971, doscientas familias se pusieron de acuerdo para invadir terrenos privados en la superpoblada ciudad de Pamplona, cerca de Lima. Ese día, llegaron a ser finalmente más de nueve mil. Ante el caos que acechaba, las autoridades tomaron medidas drásticas. El general Juan Velasco Alvarado, en el poder entre 1968 y 1975, decidió en primer lugar cortar la distribución de víveres a los “invasores” y luego expulsarlos hacia una franja de tierra árida usando convoyes de autobuses. Sin saberlo, acababa de crear las bases de lo que iba a convertirse en el arquetipo de la villa autogestionada: Villa El Salvador. En el mapa, Villa El Salvador se muestra tan monótona y previsible como un hospital. No existe ninguna sinuosidad para vagabundear por esa cuadrícula de calles rectilíneas que se cruzan en ángulo recto y a intervalos regulares. El gobierno de Velasco fue el que trazó los planos de la ciudad, y los propios desplazados eran quienes estaban a cargo de los trabajos. Los habitantes, en su mayoría desocupados desde su llegada a Lima, aseguraron primero la construcción gratuita de las infraestructuras –hechas con sus propias manos– y, más tarde, desde el nivelamiento del suelo para el trazado de los caminos hasta la excavación de las zanjas para los conductos de agua. En 1975, la población de Villa El Salvador ya alcanzaba ciento treinta mil personas, de las cuales la mayoría disponía de agua corriente y electricidad tan sólo cuatro años después de haberse mudado al desierto. “El gobierno y la población acordaron que si los inmigrantes hacían el esfuerzo de construir las bases de esos nuevos asentamientos, era tarea del Estado proveerlos de los servicios, o al menos establecer el compromiso de hacerlo”, explica Daniel Ramírez Corzo, un viejo inmigrante de Villa El Salvador devenido asesor del alcalde en lo relativo a la vivienda. Tras haber inaugurado el período de urbanización informal más floreciente de la historia de Lima, esta villa surgida de la nada se convirtió en una referencia para otras comunidades, como la del Huaycán Bajo. Durante las dos décadas que siguieron a su creación, cientos de barrios informales del mismo tipo empezaron a brotar en las arenas del desierto. En el curso de esta edad de oro, los refugiados económicos que desembarcaron en la capital fueron considerados socios en la expansión de Lima. Ellos aseguraron la sorprendente prosperidad de esas colonias, visitadas por urbanistas de todo el mundo. Sin embargo, a lo largo del tiempo el poder endureció su política y consagró la victoria de los intereses privados por sobre los públicos. Hace menos de veinte años, el presidente Alberto Fujimori –hoy en prisión por violación de los derechos humanos– lanzaba la campaña de privatización de tierras más radical nunca antes producida en el mundo. El instrumento de esta política era el Organismo de Formalización de la Propiedad Informal (Cofopri). Financiado por el Banco Mundial e inspirado en las teorías neoliberales del economista Hernando De Soto (según quien “los pobres no son el problema, son la solución”), el Cofopri se proponía entregar títulos de propiedad a los residentes de los pueblos jóvenes. En su libro El misterio del capital, De Soto explica: “La mayoría de los pobres ya poseen suficientes bienes como para triunfar en el sistema capitalista. En realidad, el valor de sus bienes es enorme; se eleva a cuarenta veces el monto total de la ayuda extranjera recibida en todo el mundo desde 1945. […] Pero esos recursos no se presentan como sería necesario. […] Al no existir documentos que designen claramente a su propietario, esas posesiones no pueden ser directamente transformadas en capital: no pueden venderse fuera de los estrechos círculos locales donde la gente se conoce y se tiene confianza mutua, no pueden servir para garantizar un préstamo, ni de aporte en efectivo en una inversión”. Por lo tanto, bastaría con acordar al okupa un título de propiedad y los derechos que de ello se derivan para que coseche los jugosos frutos del capitalismo –a saber, el capital disponible por el acceso al crédito– y así mejorar su existencia para mayor beneficio de su comunidad.

Las bondades del espíritu empresario

Así, durante la era Fujimori, Perú empezó a privilegiar la propiedad privada –más que la construcción– como solución a la escasez de vivienda, y esto por al menos dos razones. En primer lugar, los derechos de propiedad acordados a diestra y siniestra a los habitantes tenían un valor tan irrisorio (60 dólares por título) que le costaban al Estado menos que la provisión de ladrillos y cemento. En segundo lugar, presentaban la doble ventaja de hacer aparentemente superfluas otras medidas redistributivas –tales como una fiscalidad progresiva o subvenciones a la edificación de nuevas viviendas– mientras preservaban los intereses de los más ricos. Gracias a la varita mágica del Cofopri, el Estado pretendía suprimir las barreras que les impedían a los pobres gozar plenamente de la riqueza que “ya poseían”: el suelo sobre el que dormían. Pero esta conminación a ser felices no bastó para que el pequeño propietario se convenciera y actuara como ellos esperaban que hiciera: no corrieron al banco a endeudarse. “¿Por qué arriesgaría mi casa, que es la cosa más importante de mi vida, sólo para que me presten un poco de dinero?”, se pregunta Casio Vizcarra, el presidente de la comunidad Virgen de Guadalupe, una de las primeras en recibir los títulos de propiedad del Cofopri. Fabricante de bijoutería artesanal, músico aficionado y padre soltero de dos hijos, logró ahorrar el dinero suficiente para equipar su casa de cañerías, piso de cemento y televisión con servicio satelital. Los ahorros que debió juntar para esas compras le demandaron más tiempo del que hubiera empleado en obtener un préstamo bancario, pero fue precisamente esa larga y paciente mejora del hábitat lo que les permitió a tantas comunidades desarrollarse “poco a poco”. Junto con sus vecinos, Casio sometió la pedregosa colina en la cual vive, cavando un sendero a golpes de pico y utilizando las piedras obtenidas de la roca como material para preparar las bases de otras casas. Durante más de diez años, llevó adelante el combate por lograr la conexión de su comunidad al agua corriente y al sistema de cloacas. Cuando la compañía de aguas Sedapal terminó por ceder, les mostró a sus camaradas cómo utilizar y mantener sus nuevos sanitarios con descarga de agua. Casio es tan ingenioso como prudente. Al igual que la inmensa mayoría de los “invasores” de ayer convertidos en pequeños propietarios periurbanos, se obstina en no endeudarse. Consultado sobre esa resistencia al crédito bancario, el director del Cofopri, Ais Jesús Tarabay Yaya, elude la pregunta oponiendo a los buenos ciudadanos, los que “tienen el don de los negocios”, con las mentes retrógradas de aquellos que “carecen de espíritu empresario”. Es evidente que Casio, sus vecinos y la mayoría de los habitantes de los pueblos jóvenes de Lima pertenecen a la segunda categoría. Se necesitaron decenas y centenas de fatigosos pequeños pasos para que las comunidades de exiliados se construyeran una existencia decente en las tierras que ocupan y hacen fructificar. Pero bajo el reinado del Cofopri, acceder a la propiedad no demanda enormes esfuerzos: basta con sacar un número en la oficina central de San Isidro y esperar que un empleado los llame a la ventanilla. En el corazón de Lima, en la sala de espera bañada de luz fluorescente, algunos inmigrantes con sus trajes de domingo compulsan nerviosamente su expediente. Para obtener un título de propiedad, tienen que probar diez años de presencia en la parcela de tierra que reivindican y disponer de un certificado, otorgado por un ingeniero, de que se puede construir en ese terreno. Poseer un título de propiedad puede resultar útil. Pero los mecanismos que condicionan su adquisición ejercen una influencia nada despreciable sobre la manera en que se desarrolla la ciudad.

Un proyecto vaciado

Según estimaciones creíbles, en el curso de los próximos treinta y cinco años debería duplicarse, en todo el planeta, la cantidad de personas alojadas sin derecho ni título. En el lapso de dos generaciones, dicha

cantidad podría representar un tercio de la población mundial, contra un sexto en la actualidad. La mayoría residirá al borde de grandes metrópolis, víctimas de una expansión desenfrenada. Al respecto, Lima constituye un caso de manual. Hace dos años, India envió a Perú una delegación para verificar si el sistema del Cofopri podía permitir a ciudades como Nueva Delhi o Bombay administrar su propia superpoblación. Una mirada superficial sobre la capital peruana lleva a retener la imagen de esos “pueblos jóvenes” de desarrollo ejemplar, sin por ello permitir evaluar el papel crucial que la organización colectiva de los habitantes y su cooperación con los poderes públicos juega en este éxito. Dado que la percepción del mundo no es impermeable a las distorsiones a las que induce la economía de mercado, muchos visitantes extranjeros se inclinarán incluso por atribuir los éxitos de los pueblos jóvenes... a la ideología de la propiedad privada. Para Teresa Cabrera, investigadora en el Centro de Estudios y Promoción del Desarrollo (Desco), “el fácil acceso a la propiedad que preconiza el Cofopri destruyó cierto equilibrio. Hoy las tierras que rodean Lima son presa de los especuladores, que consiguen títulos de propiedad sin preocuparse por el proceso de consolidación local que prevalecía hasta ese entonces. El hábitat ya no se mejora y desapareció el componente social de la vida comunitaria”. Incluso la solidaridad entre habitantes que prevalecía en las invasiones colectivas de tierras cedió su lugar a una anexión especulativa elevada al rango de deporte nacional. Víctor Raúl Acuna soñaba con tener su casa propia, así que decidió imitar a sus padres. En 2005, se instaló en un tramo de carretera abandonada a la salida oeste de Villa El Salvador, donde creció. “Varios grupitos ya vivían sobre ese camino. Su asentamiento se había incendiado, así que vinieron aquí. Con mi mujer, mis dos hijos y cerca de doscientas otras personas, nos unimos a ellos”, cuenta. Juntos, decidieron formar una nueva comunidad, bautizada Juan Pablo Segundo, en homenaje al entonces Papa. Novicios en política, Acuna y sus compañeros no se dieron cuenta hasta qué punto las prácticas de ocupación de tierras habían evolucionado desde los primeros días de Villa El Salvador. En primer lugar, una parte de los fundadores de Juan Pablo Segundo revendieron varias veces los mismos títulos de propiedad, y luego simplemente desaparecieron. Los recién llegados padecieron la brutalidad policial y la falta de agua. Como la mayoría de los lotes revendidos fueron además divididos por dos, la comunidad se desgarró por cuestiones vinculadas al tamaño de los terrenos y su eventual regularización. Pero el problema más espinoso fue el de las casas vacías. Entre los primeros habitantes del pueblo joven, muchos armaron a las apuradas una casucha inhabitable destinada tan solo a sostener su demanda de propiedad. “Esa gente ya posee una linda casa en Lima; pero, como quieren ganar todavía más dinero, nos dejan a nosotros todo el trabajo de mejora del terreno, esperando tranquilamente su título de propiedad y la conexión de agua y electricidad. Tras lo cual revenderán la casa y no los veremos más”, se enfurece Acuna, abriendo y cerrando sus callosas manos, que todavía conservan el rastro de los recientes trabajos de terraplenado. Acuna le muestra al visitante los pocos éxitos de los que su comunidad puede jactarse, como la canilla pública de agua potable o las cañerías decoradas con banderines amarillos y blancos que drenan la escasa agua de lluvia hacia las cisternas de plástico dispuestas delante de cada casa. Pero el objetivo de una existencia decente basada en servicios confiables sigue más alejado de lo que desearía admitir. En la actualidad, siete años después de instalado sobre esta arenosa colina, la única electricidad de la que dispone proviene de una conexión clandestina. Su casa sigue sin agua corriente y el camino es demasiado empinado para que puedan llegar los camiones de entrega de la Sedapal. “Nos gustaría recibir el título de propiedad. Quizás nos permitiría obtener los servicios que necesitamos”, espera. Lo que ignora, y que el Cofopri se abstiene de reconocer, es que la posesión de un título de propiedad no aporta en sí misma ninguna garantía en materia de desarrollo. “Un rincón de desierto no es una solución, pero un trozo de papel tampoco. Sin acceso a los servicios públicos, el título de propiedad no hace más que mantener a los habitantes de los asentamientos en la

pobreza”, señala Corzo. El mes pasado, este electo del Consejo Municipal de Lima lanzó el primer programa de viviendas sociales de la historia de la capital, pensado como una alternativa a la política de acceso a la pequeña propiedad. La expansión vertical en zonas menos alejadas de la ciudad constituye a sus ojos una mejor solución para los inmigrantes que se amontonan en los barrios superpoblados de la ciudad. La alcaldesa de Lima, Susana Villarán (de izquierda), se comprometió a terminar con las prácticas clientelistas heredadas de la era Fujimori. Pero la transición es dolorosa. Además de consumir una parte de los recursos de los más modestos, suscita el rencor de los funcionarios electos a los que el Consejo Municipal persigue por corrupción. La campaña para destituir a Villarán desembocó el 17 de marzo pasado en un referéndum que la alcaldesa ganó con un estrecho margen del 3%. Antes de abandonar Los Álamos, encontramos una familia procedente de La Victoria, un barrio central de Lima que alberga el floreciente mercado de los mayoristas textiles, Gamarra. Además de Leonarda y la hija de la especuladora, son las únicas personas con las que nos cruzamos en esta colina desolada el día siguiente al de la fiesta de aniversario. Vinieron a inspeccionar un negocio del que escucharon hablar a un amigo y que no se puede desaprovechar. “Nuestro país se desarrolla rápidamente, así que es una buena idea comprar tierra para hacerse de un poco de dinero”, explica el padre, quien trabajó en la capital durante casi cincuenta años. Para escapar del calor sofocante, nos refugiamos a la sombra de una casa abandonada. “Pero ese terreno está demasiado alto, al igual que su precio –murmura–. Aquí no hay nada. Quería esta parcela para mi hijo, que no necesita mudarse enseguida. Pero, ¿cuánto tiempo va a pasar hasta que la carretera y el agua corriente lleguen aquí?”. Mucho tiempo, estuvimos tentados de responder. A menos que su hijo se ponga manos a la obra. O que el Estado se decida por fin a intervenir. * Periodista.

Traducción: Teresa Garufi

ENTREVISTA CON EVO: ‘POR PRIMERA VEZ, BOLIVIA ES UNA REFERENCIA INTERNACIONAL’ Publicado el 8/06/13 • en el tema Bolivia • Visitas 320 , 9 en este día • Imprime este Artículo Imprime este Artículo http://www.contrainjerencia.com/?p=72386&utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaig n=Feed%3A+contrainjerencia%2FjvtA+%28CONTRAINJERENCIA%29 Compartir presidente-Evo-Morales-entrevista_LRZIMA20130806_0021_11 La Razón / Claudia Benavente, Carlos Orías, Rubén Atahuichi / La Paz - El Presidente del Estado recibe a La Razón en un momento crucial de las relaciones de Bolivia con el mundo. Las más complejas derivaron del bloqueo que sufrió el avión presidencial en Portugal, Francia, Italia y España, cuyos espacios aéreos no pudo cruzar el 2 de julio debido a que se creía que Edward Snowden, buscado por Estados Unidos, iba a bordo. El Mandatario estuvo varado 13 horas en Viena. Tras el incidente del 2 de julio en Europa, un par de conclusiones han resultado del análisis del presidente Evo Morales: Bolivia es referente internacional más allá del impasse; y con Francia, Portugal, Italia y España la confianza no es la misma. Recién llegado el domingo de Sao Paulo, donde asistió al Foro Social, el Jefe del Estado concede en su residencia de San Jorge una entrevista a La Razón para hacer un repaso a la situación del país ante el mundo. “Por primera vez, Bolivia es una referencia internacional, no por el secuestro del avión ni porque el Presidente represente a un sector más humillado de la historia, sino por las políticas, los programas, los principios y los valores”, dice.

Morales resume así esos cuatro ejes: las políticas “no vienen de afuera ni de arriba”; los programas “no solamente tienen un impacto interno, sino también externo, algunos de ellos están siendo exportados”; los principios se basan en la lucha de los antepasados; “la lucha de la independencia fue contra el colonialismo interno y externo”; y los valores, en su caso, de la familia: no mentir, no robar ni ser flojo. En su criterio, eso tiene efecto en la región, aunque encuentra cuatro tipos de relaciones. La menos favorable, con Estados Unidos. “No hay munanaku (quererse), sino maq’anaku (pelearse); pero por lo menos tenemos relaciones para pelearnos, que es lo peor. No quisiéramos que sea así”. Define a la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) como el otro extremo, el más positivo. Son relaciones de mucha confianza, de “políticas que pensaron toda la vida los movimientos sociales y los pueblos, en defender la vida y rechazar la muerte, entre defender la paz y rechazar la guerra”. Un tercer grupo es el que lo componen países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), de la Comunidad de Estados Latinoamericanos (Celac) y del Mercado Común de Sur (Mercosur). Pero esos afanes pretenden ser boicoteados por Estados Unidos a través de la Alianza del Pacífico (Perú, Colombia, Chile y México). “Estos gobiernos que promueven el libre comercio, la privatización de servicios básicos, la entrega a transnacionales de recursos naturales o instalar bases militares en esos países, nunca van a tener estabilidad política”, presagia. “Mientras Estados Unidos no cambie de política, nunca va a haber relaciones de confianza. Puede haber intercambio de embajadores, pero no serán relaciones diplomáticas de confianza”, insiste. — ¿Qué peso tiene Bolivia con relación a la región y el mundo tras el incidente en Europa? — Cuando digo que Bolivia es una referencia es que, si bien hemos empezado a liberarnos económicamente, socialmente, militarmente y políticamente, Bolivia es vista como país digno entre los países sudamericanos y del mundo. Escuché a un comentarista: por dos veces Bolivia estuvo (en la opinión) del mundo, una cuando un dirigente sindical e indígena ganó las elecciones, y, dos, por el secuestro del avión. Pero una cosa es ser víctima de ese hecho, el indígena de un grupo condenado al exterminio, y otra el ser autoridad. No sé si fue un error o si hubo alguna meta u objetivo en ese secuestro. — O algún mensaje de parte de Estados Unidos. — Tal vez un mensaje de Estados Unidos. Lo cierto es que hubo repercusión internacional. Por encima de eso, una cosa es ganar las elecciones… ¿Qué dijeron los de la derecha y los fascistas de Bolivia en 2006? “Pobre indiecito, que se divierta unos cuantos meses, no va a poder gobernar y se va a ir o lo vamos a sacar”. Después de mi informe de 2007, ¿qué dijeron? “No, no, hay que hacer algo”. En 2007 se prepararon y en 2008 fracasaron en el revocatorio, como en el intento de golpe. Organizamos la gran marcha. Por primera vez, la COB y el Instrumento Político para la Soberanía de los Pueblos (IPSP) tuvieron una reunión que dirigí en La Coronilla, en Cochabamba, para organizar la marcha de Caracollo, que definió la situación política, social, democrática e ideológica del país. No es que este proceso vale porque un indígena ganó las elecciones o porque un dirigente ha sido secuestrado. — Usted dijo que aceptaba las disculpas y Bolivia se reserva el derecho a tomar acciones. ¿Qué quiso decir con eso? — Yo te pregunto una cosita, pero me vas a responder… Si tu compañera te ha puesto cuernos y luego la perdonas, ¿crees que va a haber confianza? — No.

— Es eso. Es difícil, se pierde confianza; aunque los aymaras perdonamos totalmente, no somos rencorosos ni vengativos. — ¿A qué se refirió cuando dijo que Bolivia se reserva a tomar acciones? — Especialmente velando ante las futuras acciones que pueda tomar Estados Unidos y sus aliados. No quiero que se entienda como soberbia y capricho. Si no hacemos algo, van a seguir tomando represalias con algunos presidentes o con algunos gobiernos, por la situación. Cómo nos irá en la parte jurídica. En el Alba acordamos formar una comisión técnica y jurídica para estudiar qué argumentos legales tenemos para llevar a Estados Unidos a tribunales internacionales por espionaje. Una cosa es el secuestro, que ha violado tratados internacionales, pero que se ha derivado del caso de espionaje. Ya, digo que espíen a los gobiernos y presidentes antiimperialistas, pero que espíen a sus aliados… Ya no, pues, es insoportable. Por diferencias programática, ideológica y cultural nos pueden espiar, pero a sus aliados… Voy a plantear en la próxima reunión de Unasur que todos los presidentes definamos llevar (a Estados Unidos) a los tribunales internacionales para hacer respetar los derechos humanos, los tratados internacionales. Esa reserva está fundamentada para que nunca más ocurra (lo que me pasó) con ningún presidente del mundo. — ¿Qué cambios habrá en la región tras este incidente? — ¿Qué hemos visto? A veces cuesta hacer entender a nuestros pueblos, a nuestras fuerzas sociales, qué es el imperialismo, el capitalismo o el neocolonialismo; cuáles son sus instrumentos sobre los recursos naturales o sobre políticas sociales. Ahora que secuestraron el avión del Presidente, la gente dice “ah, eso había sido imperialismo y capitalismo”. Eso nos ha unido a todos, que entiende que si hicieron eso con un presidente, cómo será con los migrantes. Hay un profundo sentimiento en América Latina y el Caribe, en las fuerzas sociales de Estados Unidos, en Europa y en todo el mundo de que todos tenemos soberanía. Cómo puede haber para algunos presidentes y gobiernos de segunda o de tercera. Aquí, casi todas las fuerzas e instituciones del Estado se han manifestado, hasta las Naciones Unidas y la OEA, pero menos el Consejo de Seguridad de la ONU. Entonces, ¿qué papel juega el Consejo de Seguridad? Yo entiendo que Naciones Unidas tiene ese consejo que tiene que dar seguridad… ¿A quiénes? A los Estados, porque son sus brazos. No me arrepiento de haber dicho que ése no es un Consejo de Seguridad sino un “Consejo de Inseguridad”, que sólo planifica intervenciones. Hay que hacer una reforma o una profunda revolución en las Naciones Unidas para acabar con esta clase de instituciones que no dan ninguna seguridad a los Estados. — El presidente Rafael Correa dijo “Lo que es con Evo es contra nosotros”. Incluso, insinuó que después de Hugo Chávez, viene Evo. Hablando de liderazgo, ¿o Correa o Evo? — Yo soy enemigo de hablar de liderazgos, hablo más de referencia en políticas y programas. No nos metan a una pelea sobre quién después de Chávez. No me gusta. Aquí dicen “los evistas”… No quiero que haya evistas, sino antiimperialistas.

No creo que las personas sean líderes, sino los pueblos o las fuerzas sociales. Ahora, saludo la solidaridad, Correa dijo “si es Con Evo, es con todos y todas”. Lindo mensaje, aquí somos todos, no se trata de Evo. Si provocaron a Evo, eso nos permitió reflexionar de manera conjunta para defender a todas y a todos. Ése es el mensaje del compañero Correa, a quien expreso mi respeto y mi admiración. Lo dije en Quito, el primero en llamarme ha sido Correa, solidario; no sé cuántas veces. Luego de que partimos de Viena, ni bien aterrizamos en las Islas Canarias, otra vez llamó Correa. También Nicolás Maduro, Cristina Fernández y otros presidentes. Correa ha debido estar llamando a cada minuto en todo el vuelo. A uno se le conoce cuando uno pasa malos momentos. — ¿Cómo van a seguir las relaciones con Estados Unidos? — Hay una mirada sobre Estados Unidos, de soberbia, de sometimiento, de uso geopolítico a la región con fines monopólicos… Esto nunca va a cambiar. Creo en las fuerzas sociales, no hay imperio que aguante. El imperio romano y tantos imperios fueron derrotados; el imperio norteamericano va a ser derrotado. ¿A qué conclusión llego? Allí no gobierna (Barack) Obama, ni demócratas ni republicanos. Son producto de las elecciones, se los respeta; gobiernan banqueros y empresarios. Y cuando banqueros, empresarios y otras transnacionales no pueden seguir exprimiendo al pueblo, declaran en crisis (al Estado) y hay crisis para los más pobres. Ellos siempre caen bien parados, como el gato. Yo tenía mucha confianza en Obama, que viene de un sector discriminado. No puedo entender que ese discriminado discrimine a un discriminado. — En la práctica, ¿va a haber mejoras en las relaciones? — Podemos restablecer embajadores, de formalidad, pero no va a ser de confianza. — ¿Eso será pronto? — No sabemos. Puede agudizarse (la crisis) también, depende del comportamiento del Gobierno de Estados Unidos. Líder de los últimos tiempos Evo Morales Ayma tuvo un intento favorable para llegar a la presidencia en 2002, cuando fue el segundo más votado en los comicios, detrás de Gonzalo Sánchez de Lozada. Con esos antecedentes, tras la renuncia de Carlos Mesa y el interinato de Eduardo Rodríguez Veltzé, en diciembre de 2005 ganó cómodamente las elecciones con el 53,7% de los votos. Juró como Presidente el 22 de enero de 2006, pero su mandato fue interrumpido por un acuerdo político, a un año de su fin. En agosto de 2008 se impuso a un revocatorio y en diciembre de 2009 ganó las elecciones con el 64% de los votos. Promovió entre 2006 y 2008 la Asamblea Constituyente para la aprobación de la nueva Constitución. ‘Decir que soy candidato sería un gran error’ — ¿Va a ser candidato en 2014? — Es constitucional, se ha demostrado eso. Yo no sé por qué dudan. Pero estoy muy sorprendido de las proclamaciones de comunidades y sindicatos del campo y la ciudad. Por ahora estamos más ocupados con la gestión. Yo saludo esos respaldos, son un aliento, una recompensa. Pero ratificamos que no es tiempo de campaña. Personalmente, estoy dedicado a temas de gestión. Por eso no he decidido, estamos en gestión. Depende de mucho, todo puede pasar. En Brasil, por ejemplo, la compañera Dilma (Rousseff) tenía alto porcentaje de apoyo, pero dos o tres problemas (las movilizaciones por las tarifas de transporte) que aparecieron por

sorpresa cambiaron la situación. Decir que soy candidato sería un gran error. Hay que ocuparse de seguir trabajando y llegará el momento de decidir. No comparto con su pregunta, soy sincero. Ustedes están más preocupados por las siguientes elecciones, yo estoy más preocupado por las futuras generaciones; eso significa planificación. Ésa debería ser la responsabilidad de los partidos y de los movimientos sociales: ocuparse de las futuras generaciones. Algunos dirigentes, algunos alcaldes, usan el tema de límites para hacer protagonismo. Lamentablemente, todavía nos falta descolonizarnos. Por ahora hay que preocuparse de las futuras generaciones. Acudimos a La Haya para ganar el juicio — ¿Qué espera del proceso contra Chile en La Haya? — Deberíamos sentirnos en regocijo desde el momento en que La Haya y el Gobierno de Chile admiten la demanda. Primero, Chile decía que (el juicio) no es procedente o no va a proceder la demanda. No soy experto, pero hemos sido muy optimistas para acudir a La Haya. Me dicen que (el juicio) está políticamente bien decidido y jurídicamente bien planteado. Si está políticamente bien decidido y jurídicamente bien planteado, La Haya admite y Chile se somete. Debería causar regocijo después de haber sido admitida la demanda. Ganamos la primera batalla. — ¿Qué criterio tienen sus colegas respecto de la demanda? ¿Cómo recibe la región este paso? — Si hemos ido a la demanda, es para ganarla. No hay que dudar. Más bien, nos unimos todos, aunque no faltan algunos que observan por qué (el agente) no es un militante. Hay que apelar a los mejores juristas que tenemos, pese a las diferencias. No quiero comentar más. Hablé con muchos presidentes. Deberíamos valorar lo siguiente: ¿En qué relaciones bilaterales de Chile con otros países éstos apoyaron a Chile sobre el tema del mar? ¿En qué relaciones entre Bolivia y otros países éstos rechazaron nuestra reintegración marítima? ¿En qué actos o cumbres los movimientos sociales respaldan a Chile y le piden no devolver el mar a Bolivia? Los medios no aprovechan ese tema; lamentablemente hay medios de comunicación (pro)chilenos. Revisen todos los documentos, hay cumbres de movimientos sociales y de presidentes que apoyan o callan, pero nunca rechazan apoyo para Bolivia. Hay que medir esa temperatura, porque el mundo expresa que hay una injusticia con Bolivia y es un derecho nuestro. Incluso hay profesores e historiadores que nos enseñan mal, que dicen que hubo una guerra. No hubo guerra, sino una invasión.

CONTROVERSIAS EN ARGENTINA SOBRE EL ACUERDO YPF-CHEVRON Y ADOLFO PÉREZ ESQUIVEL Y MARISTELLA SVAMPA http://www.elcorreo.eu.org/Controversias-en-Argentina-sobre-el-acuerdo-YPF-Chevron-y-Adolfo-PerezEsquivel-y Bajo el título « ¿Desarrollo o Semicolonia? Acuerdo YPF - Chevron », el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel escribió un artículo de opinión sobre las consecuencias que para la soberanía nacional tiene el reciente contrato que YPF Argentina firmó con la petrolera estadounidense Chevron. Dado el prestigio adquirido por el autor de la nota, es probable que su reflexión sea del agrado de un vasto espectro de lectores. Sin embargo, por la importancia del tema, debatido a izquierda y derecha –y por la cantidad de elementos erróneos que contiene–, vale la pena rebatir varios aspectos, en tanto su prestigiosa trayectoria

nada tiene que ver con el conocimiento del sector energético, a la vez que no contribuye a ningún debate fundado siquiera sobre temas calientes como soberanía, medio ambiente o desarrollo. Augmenter policeDiminuer police En primer lugar, la Argentina recién comienza a incursionar en el área de los recursos no convencionales. La cuantificación efectuada por el Departamento de Energía de los Estados Unidos y por la Sociedad de Ingenieros en Petróleo (SPE por sus siglas en inglés) es precisamente eso, una cuantificación de recursos. Como tales, potenciales. Los recursos deben ser convertidos en reservas comprobadas. En Argentina sólo se ha certificado el uno por mil de esos recursos no convencionales. Por lo tanto, el primer error muy grueso es llamar reservas a lo que sólo son recursos. La conversión de recursos en reservas requiere de un largo proceso que implica no sólo cuantiosas inversiones, sino además de un tiempo de maduración del conocimiento que, según se estima, puede rondar los cinco años o más, dado que las etapas de concepto, pruebas piloto, determinación de la curva de aprendizaje y finalmente la explotación comercial no pueden llevar menos que eso. Adicionalmente, mientras ello ocurre se debe disponer de la infraestructura y logística de agentes de sostén y suministro de agua. Una sola fractura hoy implica transportar alrededor de 50 camiones cisterna al pozo donde se realizará la fractura. Cada pozo puede requerir varias fracturas en el tiempo. La etapa de aprendizaje requiere de la perforación de un número considerable de pozos por año. Para producir hidrocarburos en forma comercial e inyectar el agua se requiere construir una red de suministro de agua, infraestructura de producción y almacenamiento de agentes de sostén (proppants), productos químicos para tratar las aguas e instalaciones, abastecerse de múltiples equipos de presión y obtener los de perforación de pozos en cantidades muy significativas. Estos últimos son provistos por empresas de servicios petroleros, todas multinacionales. Muy pocas empresas petroleras integran en su cadena estos servicios a pesar de que con los actuales precios del petróleo podría convenirles y algunas piensan en ello. Toda esta logística es muy distinta en cantidad –y a veces en tipo– de la requerida para la explotación convencional. Del mismo modo, el uso posible de aproximadamente el 30 por ciento del agua utilizada, que es de reflujo, debe ser tratada y el sobrante depositado de modo seguro para cumplir las normas ambientales vigentes, todo lo cual debe analizarse experimentalmente, precisamente para que la explotación sea sustentable. Ninguna empresa de servicios traería la cantidad de equipos necesarios antes de terminar la etapa de piloto y ramp-up. La Argentina hoy se halla entre la etapa de concepto y la de piloto y debe poder conocer el potencial de explotación y la forma de hacer la explotación viable en términos económicos y ambientales. El acuerdo firmado entre YPF y Chevron sólo afecta al 1,3 por ciento de la superficie de la formación Vaca Muerta. El país requiere de forma urgente despejar la incógnita y sobre todo poder incrementar la producción de petróleo y gas. Un aspecto que también hace a la soberanía es el autoabastecimiento, dado lo degradado del término en tiempos de un mundo global. Los yacimientos de hidrocarburos comerciales conocidos en Argentina entraron en declinación en 1998 y los de gas en 2004. Puede ser que algo de esta declinación se desacelere con mayores inversiones, pero la tendencia es clara y podría afirmarse irreversible. La búsqueda de recursos convencionales deberá continuar, pero ello es una apuesta a más de diez años, pues la actividad exploratoria declinó desde las privatizaciones. Esta realidad enfrenta al país con importaciones crecientes de gas y derivados, lo que a su vez tiene tal importancia macroeconómica que nadie puede desconocer, dado que afecta directamente la sostenibilidad del crecimiento y del empleo y, por consiguiente el tema de la posibilidad de combatir la pobreza. Resta la cuestión implícita de un estilo de desarrollo alternativo, pero eso transita un andarivel de pensamiento y prácticas complejas en un mundo global. Nadie quema su casa en pos de mudarse a un palacio imaginario a menos que desee vivir en la calle o bien las circunstancias lo obliguen. Siendo así, la alternativa real es ser importador –lo que implica, en el caso argentino, disminuir en puntos poco imaginables el PBI– o bien luchar por recuperar el autoabastecimiento.

La segunda falacia se refiere a las empresas estatales latinoamericanas, lo que textualmente deviene de esta frase de la nota en cuestión: “¿Es tan difícil pensar en una YPF ciento por ciento pública y nacional que haga convenios estratégicos de unidad latinoamericana con las petroleras Pdvsa (Venezuela), Petrobras (Brasil), YPFB (Bolivia) y Ancap (Uruguay)? ¿Es tan difícil pensar que los recursos naturales de los latinoamericanos sean de los latinoamericanos? (http://www.adolfoperezesquivel.org/...). Dado que el término demagogia suele aplicarse supuestamente a los políticos y gobernantes populistas de un modo despectivo, varios aspectos aquí merecen ser aclarados, porque la anterior afirmación no condice con ninguna realidad concreta: a) Pdvsa se asocia con grandes multinacionales (BP, Chevron-Texaco, Total, Lukoil y CNPC) para la explotación de un tipo particular de recursos no convencionales: los crudos extrapesados de la Faja Petrolífera del Orinoco, cuya certificación de reservas como comprobadas, a partir de la iniciativa Magna Reserva lanzada en 2005, colocó a Venezuela en 2012 como el país de mayor cantidad de reservas comprobadas, superando a Arabia Saudita, lo que no significa que esas reservas estén en producción; b) Petrobras, empresa estatal capitalizada, líder en tecnologías para la exploración y explotación en aguas ultraprofundas, busca socios externos para desarrollar tanto recursos convencionales como no convencionales, en este último caso el PreSal, a pesar de que para su explotación ha creado un marco legal específico que se deriva de su absoluto liderazgo en el descubrimiento y pruebas iniciales de este potencial megayacimiento; c) YPFB se halla condicionada en su accionar, porque al igual que en Argentina, las privatizaciones dejaron en manos de transnacionales y de la propia Petrobras (una « Translatina »), el desarrollo de reservas comprobadas en forma previa y difícil de revertir y d) Ancap no tiene experiencia alguna en la producción de hidrocarburos, dado que Uruguay es un importador absoluto de petróleo, gas y algunos derivados. Es más, en este último caso la propia Ancap estudiaba cómo crear un marco atractivo para atraer capitales extranjeros privados a la exploración, dado que deseaba incursionar en el upstream petrolero. Recordemos además que Petrobras opera en Argentina como importante operador privado y en Bolivia opera los bloques San Alberto y San Antonio, que albergan las mayores reservas de gas natural del país. Aunque existen más aspectos de la nota que son erróneos y falaces –entre ellos una mala lectura de los aspectos tributarios–, el espacio no permite extenderse pormenorizadamente sobre ellos. Tal vez lo que este tipo de mensajes no le dice al público lector es qué le sucedería al país si tuviera que afrontar importaciones adicionales de 30 ó 40 mil millones de dólares por año y qué clase de vida deberían vivir los argentinos si ello ocurriese, como así también qué se le ocurre al autor para evitar enfrentar la demanda de combustibles, siendo que la Argentina presenta un indicador de consumo de energía por habitante que supera al de China y al promedio mundial (pero es cerca de la mitad del de los países desarrollados como Alemania y Japón, y cerca de un cuarto del de los de los Estados Unidos), siendo que a la vez el número de automóviles por habitante se halla en un valor que es 40 por ciento del de países como Alemania, España, Japón y Francia, bastante inferior al de casos como los de México, Hungría e Israel, pero aún supera al de China en cerca de cuatro veces. Por eso, si la discusión es en torno de si « los argentinos debemos debatir para qué queremos nuestra energía y al servicio de quiénes, sin olvidar que no somos los dueños de la Madre Tierra, simplemente somos sus hijos y debemos cuidarla y honrarla », ello no puede ser llevado a cabo de modo honesto sin proponer una profunda discusión acerca de qué estilo tecnológico, de consumo, de producción y organización social política y económica se propone y con qué países debería la Argentina aliarse para poder lograrlo. Ello claro está, si es que alguno de ellos ha logrado resolver el equilibrio entre las diversas dimensiones del desarrollo sustentable en alguna parte del planeta o bien si un país puede, debe y desea aislarse totalmente del resto del mundo. Roberto Kozulj * para Página 12

Página 12. Buenos Aires, 6 de agosto de 2013. * Roberto Kozulj Vicerrector A/C Sede Andina UNRN. Experto en energía y desarrollo, licenciado en economía, actualmente Director de la Escuela de Economía, Administración y Turismo de la Sede Andina de la Universidad Nacional de Río Negro y Profesor Titular e Investigador Principal Adscripto a la Fundación Bariloche desde 2012, mientras que entre 1986 y 2011conformó la planta de investigadores y profesores permanente de dicha Institución. También es integrante del Comité Académico de la Maestría en Economía y Política Energética y Ambiental que dicta la FB junto a la Facultad de Economía y Administración de la Universidad Nacional del Comahue y miembro del Comité evaluador en la carrera de economía del CONICET. Se ha especializado en temas energéticos desde 1989 y ha desarrollado investigaciones, tareas de docencia y asesorías para el Consejo Mundial de Energía, CEPAL, PNUD y organismos de diseño de políticas energéticas y económicas en Perú, Colombia, Venezuela y Argentina. Ha realizado estudios para la Asociación Empresaria Argentina y otros actores del sector privado. En 2011 ha coordinado el proyecto Multi-agencias (CEPAL, CIER, OLADE, ARPEL, WEC y otras) “Diagnóstico para la Formulación de una Nueva Agenda Energética para La Región” financiado por la CAF y ejecutado por la Fundación Bariloche (Argentina) con apoyo del IEE-USP (Brasil). Cuenta con numerosas publicaciones en el campo de aspectos económicos y de Regulación del Sector Energético, en el área de Energía y Desarrollo, en Teorías del Desarrollo y Escenarios, como así también ha sido responsable de documentos de proyecto publicados por la CEPAL y PNUD.

OTROS PUNTOS DE VISTAS El acuerdo entre YPF y Chevron: Extractivismo 2.0 Emiliano Guido BRECHA. Uruguay, 5 de agosto de 2013 La socióloga argentina Maristella Svampa advirtió en su momento que la sintonía entre los gobiernos progresistas del Cono Sur con el modelo productivo extractivista hacía pensar que la región había pasado “del consenso de Washington al consenso de los commodities”. Esa idea es mucho más palpable en Argentina tras el acuerdo de la petrolera recientemente renacionalizada (ypf) con la multinacional estadounidense Chevron, acusada además de cometer un “ecocidio” en el Amazonas ecuatoriano por utilizar una metodología de exploración, el fracking, que está prohibida o sufre una moratoria en diversos países por su gran impacto ambiental. Nacida y criada en una zona cercana a donde estarían las reservas que harían de Argentina la Arabia Saudita del gas shale, Svampa advierte sobre las consecuencias de la asociación ypf-Chevron. Plataforma 2012, un colectivo de intelectuales de izquierda opositores al gobierno nacional, calificó el acuerdo con Chevron como la reprivatización de YPF. ¿Por qué utilizaron esta caracterización? - No, no es así. No hablamos de « reprivatización », sino de una vuelta de tuerca en el proceso de falsa estatización de ypf, que hoy concluye en la entrega a Chevron. En mayo de 2012, en un largo documento titulado « Por una verdadera estatización de los recursos energéticos. La crisis de ypf o el fracaso de una política energética », desde Plataforma 2012 sostuvimos que se trataba de una falsa estatización, ya que la anunciada « reconquista » de ypf no contemplaba los aspectos estructurales de la cuestión energética y carecía de una mirada estratégica de mediano y largo plazo. Por ejemplo, la ley no proponía cambio alguno del marco regulatorio ni política de nacionalización de los hidrocarburos; no asistíamos a una verdadera estatización de la empresa, ya que no se había optado por una sociedad de Estado; no existía una propuesta

de largo plazo que apuntara a la diversificación de la matriz energética. También alertábamos que el país se aprestaba a ingresar de manera ciega e imprudente en una forma de extracción de gas y petróleo no convencional, a través de la fractura hidráulica o fracking, [Procedimiento que consiste en inyectar a presión en el terreno agua, arena y productos químicos para ampliar las grietas existentes en el subsuelo y así poder extraer más fácilmente los hidrocarburos. Este sistema es cuestionado ambientalmente, ya que, entre otros riesgos, los químicos inyectados para disolver la piedra suelen contaminar los acuíferos más profundos.] una metodología muy controvertida, prohibida en varios países, sin siquiera abrir debate o informar sobre sus gravosas consecuencias ambientales. Las denuncias ambientales contra el fracking son conocidas en todo el mundo. Sin embargo, los técnicos de YPF aducen que la extracción en la zona conocida como Vaca Muerta será a mayor profundidad y por lo tanto será menos lesiva de la roca madre. Además, contraargumentan manifestando que esta técnica de exploración ya ha sido practicada en Argentina. ¿Ustedes cómo observan esta polémica? No me parece que haya polémica, pues no hay vocación por parte del oficialismo de debatir. Y tampoco el tema del fracking se limita a un solo punto, el de la contaminación del agua. Esto me hace recordar a la discusión sobre la megaminería, a la cual intencionalmente buscaban reducir a un solo tema: si se utilizaba cianuro o no. Veamos qué sucede con los otros pozos de fracking. Primer ejemplo: Neuquén. En enero visité a la comunidad Gelay Ko, cerca de Zapala, donde se hizo el primer pozo de fracking del país. Allí, en ese territorio árido, la empresa estadounidense Apache entró sin autorización de las comunidades indígenas. No hubo consulta ni estudios previos de impacto ambiental. Apache está extrayendo agua del acuífero Zapala, mientras las comunidades carecen de ella. No hay que olvidar que el Estado neuquino es un violador serial de los derechos indígenas, lo cual incluye a la justicia provincial, que –salvo excepciones– falla sistemáticamente a favor de las corporaciones o de los grandes propietarios privados, cuando se trata de explotación hidrocarburífera, minería y emprendimientos turísticos. Otro aspecto: la actividad sísmica. Hace unos días, cerca de Las Heras, provincia de Santa Cruz, donde ypf perforó tres pozos con técnicas de fracking, se registró el primer movimiento sísmico que podría estar ligado a esta actividad. Así apareció publicado en varios portales de noticias, tomando como fuente el Centro Nacional de Información de Terremotos del Servicio Geológico de Estados Unidos. El movimiento telúrico no se percibió, pero quedó registrado en los sensores de ese centro de alerta temprana. Un último ejemplo: incompatibilidad con otras actividades productivas. En una localidad de la provincia de Río Negro, Allen, que tiene una matriz productiva centenaria ligada a la producción de peras y manzanas, Apache empezó a perforar, extrayendo tight gas, con el método de la « multifractura ». La población ignora si en algunos pozos están haciendo fracking o no, pues no hay información. Hay 300 pequeños chacareros en el lugar y más de 170 perforaciones, casi todas de gas convencional. Pero la incompatibilidad entre ambas actividades (sobre todo estamos hablando de peras de exportación) es algo que muchos vislumbran en un futuro cercano. Así que son muchos los aspectos o dimensiones que incluye la discusión sobre el tema del fracking, no solamente respecto de la contaminación del agua. Con relación a la megaminería y al agronegocio, ¿qué particularidades presenta el gas de esquisto como el nuevo hit del extractivismo? Más allá de los impactos ambientales, a diferencia de la megaminería y el agronegocio, la explotación del shale gas se hace en nombre de la soberanía energética. Esta carrera desenfrenada por el autoabastecimiento rompe con la perspectiva neocolonial clásica; esto es, con la idea de que en el Norte se consume y en el Sur se extrae, ya que en el Norte también hay países que apuestan por el shale gas. Las poblaciones de Holanda y Estados Unidos ya están padeciendo el sacrificio de sus territorios en nombre de la soberanía energética. En Canadá pasa lo mismo respecto de las arenas bituminosas. Entonces, lo que puede verse es que la opción por los combustibles « no convencionales » traerá profundas

reconfiguraciones de los territorios, tanto en el Norte como en el Sur. Lo dicho puede ser visto también desde otra perspectiva. En mis incursiones europeas más recientes me di cuenta de que cuando hablo de megaminería me miran como si estuviera hablando de « un estudio de caso » y el Norte nada tuviera que ver con el tema; pero cuando hablo de fracking los ojos de mis interlocutores se iluminan y entran en sintonía con lo que digo. Quizá entonces esto pueda generar mayores solidaridades en las luchas. Otras petroleras estatales regionales, como Ancap y Pdvsa, se manifestaron interesadas en participar en Vaca Muerta. ¿Por qué los gobiernos suramericanos no objetan un modo de producción petrolero que tiene atrás a todo el lobby del Departamento de Estado estadounidense? Es una buena pregunta, pues por debajo de los discursos grandilocuentes acerca del retorno del Estado, los gobiernos suramericanos han aceptado que se mueven en un espacio de geometría variable, en el cual se insertan los imperativos de la globalización asimétrica. Por otro lado, no se olviden de que hablamos de gobiernos que viven bajo el influjo de la visión « eldoradista », que trajo aparejado el « consenso de los commodities ». Más aun, antes de objetar el lobby del Departamento de Estado estadounidense, son capaces de dar vuelta el argumento antimperialista, para responder que se trata de objeciones de « ong extranjerizantes », de reacciones « pachamamistas » o aun de un « fundamentalismo colonial » que le hace el juego a aquellos que no quieren el desarrollo autónomo de los países del Sur. Enclaustradas entre el pragmatismo y la ilusión desarrollista, estas políticas terminan por generar un punto ciego para estos gobiernos. ¿Cuál es, en líneas generales la reacción de la población local neuquina sobre el boom del gas de esquisto? Es decir, más allá de la movilización de sectores ambientales o de los pueblos originarios, ¿el sentido común acompaña este nuevo imaginario eldoradista? Soy hija de esas tierras. Además, hace un mes fui invitada por la Legislatura de la provincia de Neuquén a un seminario sobre hidrocarburos « no convencionale ». Había mucha gente, muchos profesores y estudiantes de colegios secundarios. Me tocó hablar de los impactos sociales y ambientales del fracking, sobre todo vinculado a los pueblos indígenas. En el seminario había tres técnicos –entre ellos dos ingenieros en petróleo con vasta trayectoria en empresas, y uno de ellos asesor del oficialismo– y un geólogo. Los tres técnicos fueron contundentes y desaconsejaron la explotación mediante el fracking. El único que habló a favor fue el geólogo. Pero las empresas no estaban presentes; no les interesa estar. Para ellos el tema ya está saldado. Tienen toda la prensa escrita a favor. Los legisladores del oficialismo aceptaron hacer el seminario para calmar a las voces críticas, pero lo hicieron pour la galerie [para la foto]. Más aun, los legisladores parecían no escuchar y hablaban extasiados una y otra vez del « segundo gran descubrimiento del petróleo » y del « clúster » que se generaría en Vaca Muerta. Por otro lado, tengo la impresión de que gran parte de la sociedad neuquina, que siempre fue petróleo-dependiente, sigue los avatares de YPF y Chevron como si fueran algo ajeno a su destino. ¿Qué opina de la estructura argumentativa del kirchnerismo defendiendo el acuerdo con Chevron? ¿Es una nueva épica neodesarrollista o trasunta más pragmatismo de negocios? Cuesta creer que puedan transformar en gesta épica algo tan opaco como el acuerdo con Chevron, del cual ni siquiera la propia Legislatura de la provincia de Neuquén conoce el contenido. Mucho menos con el historial de Chevron, prófuga de la justicia ecuatoriana. En ese sentido, veo más un discurso de realpolitik, amparado en la demanda de autoabastecimiento energética. Y aunque se los ve empecinados en decir que sólo compran know-how [el saber hacer], es poco creíble, ya que se trata de un contrato de explotación que además de otorgar numerosas ventajas (el derecho a exportar el 20 por ciento a partir del quinto año sin pagar derechos de exportación y sin la obligación de liquidar las divisas en el país), es por 35 años y en el principal yacimiento de gas no convencional del país. La matriz energética mundial se está reconfigurando. Si las fronteras del fracking son inestables, ¿dónde debería buscarse un nuevo mapa energético?

En lo que respecta a Argentina, hay que diversificar la matriz energética, para romper con la dependencia exclusiva del patrón energético basado en la extracción de hidrocarburos. Hay que promover el desarrollo de energías alternativas no contaminantes (eólica y solar). E incluso, para poder pensar una transición, habría que explorar y desarrollar áreas hidrocarburíferas convencionales (que las hay, ya que Repsol en los últimos años no hizo exploración), antes que embarcarse ciegamente en los no convencionales. Hay países, como Alemania, que abandonaron la energía nuclear [Abandono es progresivo y sería finalizado en 2022 y el costo según Siemens sería de 1 700 millardos de euros en 2030.] y se están orientando hacia otras matrices energéticas, basadas en la energía eólica y fotovoltaica. Sobre todo la energía eólica es limpia, tiene costos operativos menores que otras energías (como la que se produce a través del fracking) y una vida útil más larga. Pero estas no son discusiones fáciles, requieren de consenso social y político y de grandes cambios culturales en los patrones de consumo. Argenpress. Buenos Aires, 5 de agosto de 2013

ARGENTINA CAZA PETROLEO Cazar... http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/17-6988-2013-08-05.html

Por Fernando Krakowiak La energía eólica no es considerada una alternativa de base por la inestabilidad que presenta y la imposibilidad de ser acumulada, pero es un aporte complementario que puede servir para ampliar la capacidad de generación eléctrica en el corto plazo, sin emisiones de dióxido de carbono. El Congreso Nacional sancionó en 2006 una ley de fomento y promoción de fuentes renovables que prevé incrementar al 8 por ciento su participación en la matriz energética para 2016. Dentro de esa denominación se incluye también el aporte solar, biomásico y de hidráulicas de baja potencia (ver aparte), aunque el objetivo oficial es que la mitad de ese porcentaje lo aporten los vientos. La potencia eólica instalada hoy es de apenas 162,2 megavatios, el 0,5 por ciento de la matriz. En el sector afirman que las dificultades para acceder al financiamiento impidieron un mayor despegue de la actividad. En el Gobierno sostienen, en cambio, que muchas empresas reclaman crédito, pero no están dispuestas ni siquiera a poner una mínima porción de capital propio. Igual destacan que hay varios proyectos que están avanzando. Potencia En la actualidad, el Parque Rawson, construido por la empresa Genneia en Chubut, es el que dispone de la mayor potencia eólica del país con 77,4 megavatios. En segundo lugar se ubica el flamante Parque Loma Blanca, montado por Isolux Corsán en Trelew, que a mediados de julio puso en funcionamiento el primero de sus cuatro módulos con 17 aerogeneradores que suman una potencia de 50 MW. Luego le siguen Parque Arauco (La Rioja), con 25,2 MW; Diadema (Chubut) con 6,3 MW; El Tordillo (Comodoro Rivadavia) con 3,0 MW y el Parque Necochea (Buenos Aires), con 0,3 MW. Esos emprendimientos aportan al Sistema Argentino de Interconexión (SADI) una potencia acumulada de 162,2 MW. Según la CNEA, en junio de este año la potencia energética instalada en todo el país fue de 31.228 MW, sin contar los 50 MW de Loma Blanca. Si se suma este último aporte llega a 31.278 MW y la participación de la eólica en la matriz es del 0,5 por ciento. Además, se estima que hay otros 30 MW

dispersos de cooperativas que no están conectadas al SADI, pero que le restan demanda al Mercado Eléctrico Mayorista. En el caso de la energía eólica, la brecha entre la potencia instalada y la electricidad entregada al sistema es amplia porque los vientos son inestables e impredecibles. En Argentina, el factor de capacidad está en torno del 35 por ciento, y es un promedio bueno a nivel internacional. Además, no hay en la actualidad una tecnología, al menos comercialmente desarrollada, que permita acumular esa energía y distribuirla de un modo estable. Por eso, por ahora no es considerada una energía de base y se la toma sólo como un complemento de las fuentes tradicionales. No obstante, en Argentina el potencial de crecimiento es muy amplio porque aún está poco desarrollada. Los especialistas coinciden en que un parque eólico se puede montar en un año. Por lo tanto, podría ayudar incluso a reducir las importaciones de combustibles en el corto plazo, mientras se llevan adelante obras que demandan mayor tiempo como la explotación petrolera de Vaca Muerta, la construcción de las represas de Santa Cruz y las nuevas centrales nucleares que están en carpeta. “El objetivo es llegar al 8 por ciento de la matriz energética con las renovables en el menor tiempo posible y la mitad de ese porcentaje debería ser eólico”, afirmó a Cash Javier De Urquiza, coordinador del área de Energías Renovables del Ministerio de Planificación. Proyectos En la actualidad, hay una serie de proyectos con distinto grado de avance. El Parque Arauco, por ejemplo, está próximo a duplicar su potencia. “En septiembre está previsto elevar la capacidad instalada a 50,4 MW y en mayo se licitó una nueva etapa que permitirá llevarla a 100,8 MW en todo el proyecto, utilizando la misma línea de transmisión”, señaló a Página/12, Javier Riba, project manager de Arauco. El parque pertenece a una sociedad integrada por el gobierno de La Rioja y la estatal Enarsa. Impsa fue la encargada de montarlo y ahora realiza la operación y el mantenimiento. La empresa de Pescarmona obtuvo además la adjudicación para construir Koluel Kaike I y II, en el norte de Santa Cruz, y Malaspina I y II, al sureste de Chubut, parques que tienen previsto aportar una potencia total de 75 y 80 MW, respectivamente. Las obras estuvieron demoradas al inicio por falta de financiamiento, pero Impsa informó en enero del año pasado que obtuvo fondos de la Corporación Andina de Fomento y el BICE para Koluel Kaike II, que sumará 25 MW. A su vez, en diciembre consiguió recursos del Banco Nación y el BICE para Malaspina I, que aportará 50 MW. Otro de sus emprendimientos es El Jume en Santiago del Estero, a 290 kilómetros de la capital provincial. En enero concluyó la obra civil y ahora resta montar los cuatro generadores que acumulan una potencia de 8,4 MW. El listado de los proyectos más importantes se completa con el Parque Tres Picos (99 MW), que planea Sogesic en la localidad bonaerense de Tornquist; Puerto Madryn I y I, de Genneia, que sumará otros 100 MW; el Parque El Angelito con 200 MW en el paraje El Escorial de Chubut; el Parque Valle Hermoso, una iniciativa de NRG Patagonia que aportará 12 MW en Comodoro Rivadavia; el Parque Aguada del Molle, en Río Cuarto (Córdoba), que sumará otros 110 MW; y Puerto Madryn Norte (50 MW), Oeste (20 MW) y Sur (50 MW), de los desarrolladores New Energies, Energías Sustentables y Patagonia Wind Energy, respectivamente. Todas esas iniciativas permitirían acumular otros 880 MW de potencia en los próximos años. Problemas El gobierno nacional fue el principal impulsor de los parques que ya están en funcionamiento y de los proyectos en curso. Además de apoyar la Ley 26.190 de fomento de energías renovables, realizó un Mapa Eólico para determinar el potencial de generación, incentivó la producción de aerogeneradores al montar el parque El Tordillo, donde Impsa y NRG instalaron sus primeros prototipos de alta potencia fabricados en el país, adjudicó 754 MW en 2010 a través del Programa de Generación de Renovables (Genren) con contratos a 15 años e incluso sancionó otra serie de normas para incentivar al sector. Además, en 2006 inauguró la línea de transmisión Choele-Choel-Puerto Madryn y en 2008 la línea Puerto Madryn-Pico Truncado, las

cuales permitieron conectar el sistema eléctrico patagónico con el SADI, poniendo en valor los vientos del sur. Pese a estos avances, hubo desarrolladores que tuvieron problemas para concretar sus proyectos eólicos por falta de financiamiento, incluso varios de los favorecidos por la licitación del Genren. Uno de los argumentos empresarios es que el contrato con Cammesa para proveer energía al SADI no es suficiente garantía para los bancos. “Cammesa ha tenido demoras en los pagos y eso los bancos lo saben. Por lo tanto, una posibilidad para solucionar este tema es que se habilite a firmar contratos entre privados para la provisión de energía, siempre bajo la supervisión de Cammesa”, aseguró a Cash Vanesa Revelli, gerente de la desarrolladora alemana Abo Wind. Otra de las causas esgrimidas por los desarrolladores es que los contratos a 15 años que ofrece el Estado no son un plazo suficiente para garantizar la devolución del crédito al banco y obtener una ganancia razonable por la inversión. Erico Spinadel, presidente de la Asociación Argentina de Energía Eólica, agregó además a este suplemento que, “a diferencia de lo que ocurre en Brasil, no hay financiamiento público a tasas competitivas para los proyectos”. En el Gobierno afirmaron a Cash que están evaluando la posibilidad de que se firmen contratos entre privados, pero descartaron ampliar el plazo de los que involucran a Cammesa. “Un proyecto de estos se paga en 5 o 7 años; el resto es ganancia. Por lo tanto, los 15 años no son un problema. Lo que pasa es que muchas empresas piden financiamiento, pero no están dispuestas a poner capital propio y eso frena el desarrollo”, agregó una fuente oficial. Con referencia al crédito público, remarcaron que el Banco Nación y el BICE están realizando aportes, pero reconocen que en una escala menor a la que garantiza una banca de desarrollo como la brasileña. Integración nacional Algunos de los parques que se construyeron a partir del Genren tuvieron una participación altísima de componentes importados. Por ejemplo, el Parque Rawson de Genneia, la energética que controla Alejandro Ivanissevich, le compró los aerogeneradores a la danesa Vestas. Esa situación incluso le terminó trayendo problemas porque cuando se implementaron las restricciones cambiarias no pudo seguir pagando su deuda en dólares y Vestas la demandó ante un tribunal internacional a fines del año pasado. La Cámara de Industriales de Proyectos e Ingeniería de Bienes de Capital reclama que a los parques que reciben ayuda estatal se les exija una integración nacional mínima y además piden que se modifiquen los aranceles de importación porque en la actualidad si una empresa compra un aerogenerador en el exterior no paga arancel, pero las principales piezas para fabricarlo en el país tienen un arancel del 14 por ciento. “La apuesta nuestra es que la generación de energía eólica se haga con tecnología nacional y empleo argentino”, afirmó a Cash Rubén Fabrizio, director ejecutivo de esa cámara. Ante la consulta de este suplemento, en el Gobierno respondieron que trabajan con los fabricantes nacionales que integran el cluster eólico y que en todo momento buscan garantizar su participación en los proyectos, siempre que haya oferta local a precios competitivos. Quieren apuntalar la integración nacional, pero sin que se convierta en un obstáculo para el desarrollo del sector [email protected]

"COLOMBIA ES PASIÓN" RAMBO DE TURISMO POR SU PATIO TRASERO Renán Vega Cantor Rebelión http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172111

“Los marines solamente estamos realmente motivados dos veces. Una es cuando estamos de permiso. La otra es cuando vamos a matar a alguien”. Palabras de Randall Carter, Brigadier de los Marines en Irak, 2 de abril de 2004. Citado en Jeremy Scahill, Blackwater. El auge del ejército mercenario más poderoso del mundo, Editorial Paidos, Barcelona, 2008. p. 161.

Que se pudiera viajar libremente por Colombia fue de lo que más presumió el régimen criminal del uribismo y todos sus epígonos y en torno a ello se generó una campaña mediática con el lema “Colombia es Pasión: vive y viaja por ella”, con el que se anunciaba en tono triunfalista la “recuperación de la seguridad” en todo el territorio nacional, un eufemismo para ocultar la inseguridad que produce la terrible militarización de la vida cotidiana, en campos y ciudades. Hasta tal punto se impuso esta falacia en el imaginario de la gente común y corriente que, en un país con un puñado insignificante de terratenientes, todo el mundo alardea de poder ir a descansar a su finca, para huir del ruido y la miseria de las grandes ciudades. Junto con esta propaganda mediática de consumo interno, también se pregona que el país es un atractivo para la inversión extranjera, porque se conceden todo tipo de prebendas y garantías a los capitalistas que quieran invertir en este lugar paradisiaco para los negocios, con salarios chinos y con una frontera abierta a la destrucción ambiental, como en el lejano oeste yanqui del siglo XIX. Con esto simplemente se ha querido legitimar la entrega de las riquezas naturales del país a las trasnacionales para que se las lleven sin ningún obstáculo. La pretendida seguridad que convierte a Colombia en uno de los lugares más atractivos para el capital foráneo ha venido acompañada del incremento de la presencia militar de los Estados Unidos, hasta el punto que nuestro país es el portaviones terrestre más grande e incondicional con el que cuenta el imperialismo en América Latina, si se tiene en cuenta que tropas y asesores de aquel país se encuentran en más de 30 sitios del territorio colombiano. Y junto con el Plan Colombia, las bases militares, los aviones de guerra , los drones y todo tipo de instrumentos para matar también nos llegaron los Rambos, es decir, los “matones profesionales” Made in USA. La propaganda oficial del régimen se exalta la presencia de militares y mercenarios –¡perdón contratistas! – como imprescindibles para resguardar la seguridad de los colombianos. Y vaya seguridad que nos proporcionan como se evidencia con una serie de hechos que vale la pena recordar. Violaciones de los marines y pornografía infantil En el departamento del Tolima, en límites con Cundinamarca, se encuentra el caluroso pueblo de Melgar, localizado a escazas dos horas de Bogotá. A pocos kilómetros de distancia se localiza la base militar de Tolemaida, donde se encuentra un contingente de militares y mercenarios de los Estados Unidos. El 27 de agosto de 2006 dos de estos militares salieron de esa base y se dirigieron a Melgar, obligaron a ingerir licor a una niña de doce años, a la que luego raptaron e introdujeron en un vehículo con placas diplomáticas de los Estados Unidos, la llevaron hasta las instalaciones de la Fuerza Aérea, allí la violaron y la filmaron. Después de consumado ese atroz delito, la niña fue encerrada en el cuarto de uno de los agresores y luego fue sacada de las instalaciones del batallón en la misma camioneta diplomática y tirada en la calle, al frente de la iglesia de Melgar. La madre de la niña se atrevió a denunciar el hecho, por lo cual sufrió amenazas y atropellos que la obligaron a abandonar su casa y a convertirse en otra de las miles de desplazadas que deambulan en la ciudad de Bogotái.

Este no es ningún hecho aislado, puesto que en el año 2006 se denunciaron 26 casos similares en la Comisaria Familiar de Melgar y en el 2007 otros 13 casos. Aparte de violar a las niñas y a las jóvenes del lugar, militares de los Estados Unidos han hecho videos pornográficos que han dado a conocer públicamente. Una de las niñas filmadas, de 16 años de edad, se suicidó poco después de enterarse que aparecía en uno de estos videos pornográficos, que fue grabado por un sargento activo del Ejército de Colombia y un exmilitar de los Estados Unidos que formaba parte del Plan Colombiaii. Por supuesto, los soldados de los Estados Unidos gozan de inmunidad (es decir, impunidad) de tipo diplomático, lo que impide que siquiera sean demandados en instancias judiciales del país, y sin ningún recato siguen cometiendo crímenes de este tipo, tanto en Colombia como en otros países. No sorprende que uno de los militares estadounidenses le hubiera dicho a la madre de la niña que comentamos en este vergonzoso episodio: “Sí la violé. ¿Y? ¡Demándeme!… a nosotros no nos pueden hacer nada”iii. Guardaespaldas de Obama en juerga sexual en Cartagena Un segundo hecho que produjo algún revuelo mediático aconteció en abril de 2012 en el marco de la Cumbre de las Américas que se realizó en Cartagena. En esa ocasión, una docena de los quinientos guardaespaldas de Barack Obama, se vio involucrada en un hecho típico de imperialismo sexual –un término usado para referirse a los desmanes de los marines yanquis en Filipinas-, en el cual consiguieron a veinte trabajadoras sexuales las llevaron a los aposentos del Hotel Caribe, disfrutaron de una noche de juerga, pero al otro día se negaron a pagar lo que correspondía por el servicio. Este hecho cotidiano en el comportamiento de los militares, mercenarios y agentes secretos que se encuentran en Colombia no se hubiera conocido, si no es porque lo realizaron guardaespaldas de Obama, en el contexto de la Cumbre de las Américas en Cartagena. A raíz de este acontecimiento, se pudo establecer que en cada una de las giras que realiza Obama o algún funcionario de alto rango del gobierno de los Estados Unidos, el “servicio secreto” se transforma en el “circo secreto” que opera de noche y al cual todo se le permite todo tipo de tropelías en los países a donde lleguen, entre ellas sus intrépidas “conquistas” sexuales, a punta de dólares. Esto es tan evidente y tolerado que el senador Joe Lieberman apuntó, no sin cierta dosis de cinismo, que “si uno de los agentes (Arthur Huntington, de 41 años, casado y con hijos) no hubiera discutido con una de las mujeres sobre cuánto le debía, el mundo no lo habría sabido, pero ahora el mundo lo sabe y por eso la reputación del cuerpo depende de esta investigación”iv. El revuelo que causo el escándalo mediático intentó ser disimulado por parte de funcionarios de Washington con el argumento que en verdad lo que les preocupaba era que las trabajadoras sexuales de Cartagena hubieran sido utilizadas como señuelo por “enemigos de los Estados Unidos” para tener acceso a información secreta. Afortunadamente, acotó uno de estos personajes, “es irónico que nos sintamos aliviados al comprobar que eran simplemente prostitutas” v, con lo que se demuestra el valor que los funcionarios del imperio le atribuyen a los seres humanos del mundo periférico, todos y todas consideradas como puros sirvientes, en el caso mencionado como sirvientes sexuales. La DEA en la “Zona Rosa” de Bogotá La penetración de los organismos militares y de agencias de espionaje de los Estados Unidos alcanza tales niveles, que se ha naturalizado su presencia en nuestra vida cotidiana, como se demuestra con lo acontecido hace pocas semanas en Bogotá, en la denominada “zona rosa”, un sitio de diversión de la clase media y de la “gente bien” de la capital del país. El 20 de junio, un agente de la Agencia Antinarcóticos de los Estados Unidos (DEA) murió luego de subirse a un taxi en donde intentaron someterlo a lo que en la jerga delincuencial de la ciudad se conoce como el “paseo millonario” -una práctica cotidiana que se vive en este país desde hace muchos años y que consiste en robar a los pasajeros- y que no genera ninguna noticia cuando lo sufren anónimos ciudadanos. Pero en este caso el hecho trascendió porque el involucrado era

Terry Watson, quien según informes oficiales del propio embajador de los Estados Unidos fue “víctima de un atraco”, cuando se encontraba en una “misión especial”, sobre la que no proporcionó detalles. Inmediatamente después de conocido el deceso del agente yanqui, el Director de la Policía Nacional ofreció una recompensa de 50 millones de pesos (unos 25 mil dólares) a quien diera información para capturar a los responsables. Y al otro día, Juan Manuel Santos lamentó la muerte del miembro de la DEA –lamento que nunca se ha escuchado cuando se trata de la muerte de un campesino en El Catatumbo, en El Cauca o en cualquiera otra región del país. Como algo raro en este país, con una celeridad pasmosa a las pocas horas del suceso, la policía reportó las primeras capturas y 72 horas después afirmó que se había esclarecido el crimen. Como un muerto del imperio vale más que cualquier muerto de la periferia, y además debe demostrarse quiénes son los que mandan y quiénes son los súbditos, el gobierno de los Estados Unidos ordenó que fueran extraditados a los Estados Unidos los presuntos responsables de la muerte del agente, sin ningún juicio previo en Colombia, a donde seguramente van a ser juzgados y condenados los colombianos a los que se inculpa de ese delito. Esta exigencia que, entre paréntesis pone de presente nuestro carácter de una neocolonia en la que manda el embajador de los Estados Unidos, como cualquier virrey, indica el grado de dependencia de la mal llamada justicia colombiana, como lo registra sin eufemismos una noticia de prensa, que en otros tiempos no dejaría de causar estupor, por su descaro: “Un gran jurado federal del estado de Virginia acusó a seis ciudadanos colombianos por el secuestro y posterior asesinato de un agente de la DEA en Bogotá el mes pasado durante un intento de robo, informó el Departamento de Justicia de EE.UU”. En la misma noticia se agrega, que, léase bien, Eric Holder, el mismísimo Secretario de Justicia y Fiscal General de los Estados Unidos –no de Colombia donde se cometió el delito- señaló en forma textual: "Estamos dando un paso importante para garantizar que los presuntos responsables de su asesinato sin sentido comparezcan ante la Justicia", la de Estados Unidos, por supuesto que es la única válida para ellos. Para darle el tono de superioridad que no puede faltar en el caso de los Estados Unidos, el Fiscal General remató diciendo que "el agente especial Watson era un valiente servidor público que dedicó su vida a la protección del país que amaba. Era un héroe, en todo el sentido de la palabra, al que nos han arrebatado demasiado pronto”vi. ¡Que la divina providencia nos libre de este tipo de héroes! Este hecho confirma la dependencia absoluta del Estado colombiano con respecto al de Estados Unidos, como se evidencia con varios elementos que deben recalcarse: uno, que un delito común y frecuente en Bogotá, en la que diariamente se realizan decenas de “paseos millonarios”, en los que nunca se captura a los responsables, se haya clarificado en una forma tan rápida y la policía –que en forma frecuente está involucrada en ese y otros delitos- haya sido tan efectiva; dos, que la investigación haya sido coordinada en forma directa por la DEA en Bogotá y Washington, como si estuviéramos no en Colombia sino en territorio de los Estados Unidos; tres, que los señalados como responsables del homicidio sean acusados directamente desde los Estados Unidos, se ordene su extradición y el Estado colombiano lo vaya a aceptar y que pronto los entregue en manos de la “justicia yanqui”, en violación flagrante de la legislación vigente, que indica que un delito como el “paseo millonario” debe ser tramitado en el país y los culpables deben pagar su pena acá y no en una cárcel del extranjero. En estas condiciones, es bueno recordar que hasta el momento después de muchos años de haber vuelto a imponer la extradición ningún ciudadano de los Estados Unidos que haya matado colombianos, tanto en suelo de su propio país o en el nuestro, ha sido extraditado a Colombia. Tampoco han sido extraditados los funcionarios de la empresa bananera Chiquita Brands, financiadores y responsables directos del asesinato de miles de colombianos por parte de sus paramilitares y que fueron condenados por una corte federal de los Estados Unidos a pagar una multa de 25 millones de dólares al fisco de ese país, por patrocinar grupos paramilitares. Y tampoco sorprende que en Colombia la Fiscalía los haya exonerado por los mismos delitosvii. Sobre el suceso reciente del agente de la DEA es importante hacerse una serie de preguntas elementales, que, sin embargo, aquí nunca se formulan por parte de los periodistas de los medios de desinformación masiva: ¿Qué hace un agente de la DEA en Bogotá o en cualquier lugar del país? ¿Cuántos agentes de la DEA

hay en todo el territorio colombiano? ¿Cuál es la misión secreta que estaba realizando un individuo de larga trayectoria, que incluso estuvo presente en Afganistán, donde se dice que realizó “tres misiones” con éxito? Rambo de turismo en la selva Todo lo antes mencionado nos sirve de contexto para referirnos a un caso que sucede en este momento, sobre el cual la desinformación da la vuelta al mundo. En días recientes se anunció la captura por parte de las Farc de un mercenario de los Estados Unidos, Kevin Scott Sutay, en el sur de Colombia. De manera inmediata, el Embajador de los Estados Unidos, Michael McKinley, sostuvo que este personaje es un ex militar que se “encontraba en el país como turista” cuando fue capturado, a lo que agregó que “es un ciudadano privado que nada tiene que ver con el conflicto”. El mismo Embajador reconoció que Kevin Scott Sutay fue miembro de las fuerzas armadas de los Estados Unidos entre el 2009 y marzo del 2013, y en su “hoja de vida” (o mejor “su hoja de muerte”) se destaca su participación en la guerra de Afganistán, donde se desempeñó como experto explosivistaviii. En la información que se ha dado a conocer se afirma que, tras su reciente retiro de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, el exmilitar inició una gira por todo el continente latinoamericano que comenzó en México y continuó por América Central hasta llegar a Colombia, a donde se internó en territorios del sur del país, en una zona selvática del Departamento del Guaviare, un candente teatro de guerra. Si este es el escenario geográfico al que llegó Kevin Scott Sutay, resulta un poco cándido –por decir lo menos- el cuento que circula sobre sus andanzas por Colombia, que citamos en forma directa: “Comenzó su viaje en México. El 8 de junio estaba en Panamá desde donde tomó un avión a Bogotá. En la capital permaneció dos días y desde allí tomó un bus que lo llevó a San José de Guaviare, en donde se hospedó en el hotel Las Palmas. Equipado con un morral con poca ropa y una cámara fotográfica, se quedó una semana visitando los alrededores de la capital de Guaviare. Su presencia no pasó desapercibida y a pesar de su escaso español logró hacerse entender por los lugareños. Allí conoció al pastor evangélico Norberto Mendoza quien lo hospedó durante dos días en su vivienda. Sutay le contó que quería viajar hasta algunos de los resguardos indígenas y que planeaba caminar hacia el municipio de El Retorno. El pastor, así como las autoridades locales, le informaron que esa travesía era extremadamente peligrosa no sólo por las complejidades propias de la selva, sino porque en la zona había presencia de dos frentes de las Farc. El joven le respondió que por haber sido marine estaba entrenado en técnicas de supervivencia y que lo único que necesitaba era un machete, que procedió a comprar en el pueblo. Los policías del lugar hablaron con él, al igual que el personero, entre otros, para intentar persuadirlo. Todo fue en vano. A lo único que accedió fue a firmar y a poner su huella en un documento en el que consta que fue ampliamente advertido de los riesgos. En la mañana del 20 de junio se despidió de su amigo el pastor y se tomó algunas fotos, las cuales fueron reveladas en exclusiva el jueves pasado por Semana.com. Unas horas más tarde, cuando caminaba cerca de la vereda Puente Tabla se encontró con la guerrilla y hasta ahí llegó la aventura de este joven e ingenuo exmarine”ix. Por lo pintoresca y poco verosímil, la noticia merece algunos comentarios. Estamos hablando de una persona con experiencia militar en un escenario como el de Afganistán, que se retiró hace escasos tres meses –según lo dice el Embajador de los Estados Unidos- y no hace décadas y que llega a meterse, cual mansa oveja, a una de las zonas más conflictivas de Colombia y persiste en su actitud de irse selva adentro, a pesar de que un “pastor protestante” y la policía del lugar le advierta del riesgo que corre al proseguir su pretendida aventura. Realmente este cuento solamente lo pueden creer los guionistas de Hollywood, o los

periodistas colombianos, que cada vez se diferencian menos. Que se inventen otra película de vaqueros, porque nada cuadra en este cuento tan reforzado. El asunto es todavía menos creíble si se recuerda que en forma frecuente "El Departamento de Estado recuerda a sus ciudadanos el peligro de viajar a Colombia”. De esta forma se inicia un comunicado del gobierno de Obama en donde se brindan instrucciones a sus ciudadanos si vinieran a este país y se dice que si bien “la embajada no posee información específica y preocupante sobre amenazas en contra de los ciudadanos americanos, recomendamos ser precavidos y estar vigilantes”. En forma concreta, les recomienda a sus connacionales no utilizar buses intermunicipales y no viajar "fuera de áreas urbanas por la noche"x. Si estas advertencias son hechas a ciudadanos comunes y corrientes de los Estados Unidos, es de suponer que en el caso de un ex soldado recientemente retirado del servicio, luego de haber peleado como Rambo en Afganistán, se le redoblan las advertencias. Si eso es elemental, por qué un individuo con tales antecedentes aparece de súbito en una zona de guerra en el sur de Colombia y se introduce en un territorio en donde hay frentes de la insurgencia, como cualquier persona lo sabe. Como debe descartarse la hipótesis de la ingenuidad, lo que puede concluirse es que este es un acto premeditado de provocación y de infiltración. Por esta razón, lo que allí ha sucedido no puede ser catalogado como un secuestro, como lo repiten como papagayos amaestrados los medios de desinformación de Colombia y el mundo. Tal es la brutalidad mediática que ciertos literatos –que se supone deberían ser personas sensatas, con distancia crítica frente a cualquier hecho- han llegado a decir, como lo hace Juan Gabriel Vásquez, que “las Farc secuestran a un norteamericano y luego dicen que lo van a soltar como gesto de buena voluntad”xi. En qué país vive un individuo que puede decir tamaña estupidez -la misma que se pregona desde el Ministerio de Defensa y repite la mayor parte de “opinadores” de escritorio-, que no tiene la más mínima idea de lo que es una guerra y lo que representa en estos tiempos de bombardeos aéreos, guiados por satélite, la infiltración de un espía en las filas de la insurgencia. Columnistas como este, que son casi todos los que escriben en la “gran prensa” de este país, con su crasa ignorancia, su mala fe y su analfabetismo político –el peor de todos los analfabetismos como lo afirmó Bertold Brecht- poco aporte le hacen al conocimiento y resolución de los grandes problemas del país –como el de la guerra-, en un momento en que se requiere mesura, en lugar de decir cuanta torpeza sin fundamento se les ocurra. Al parecer todos estos “ilustrados” comentaristas creen en la leyenda hollywoodense de Rambo, en la que se nos muestra, según la primera película de 1982, a un ex soldado de los Estados Unidos, que viene de una guerra –la de Vietnam- y que deambula pacífica e inocentemente por el mundo y se ve obligado a defenderse por los ultrajes recibidos, que es exactamente el mismo guion que se nos ofrece en este momento en Colombia. En la vida real, e incluso en la historia fílmica, rápidamente esta imagen de Rambo desapareció para dar paso al héroe de los Estados Unidos que enfrenta a malvados y comunistas, y los derrota en forma espectacular, por aquello que siempre ganan los “buenos”. Todo este asunto sirve para develar que Rambo está en Colombia, pero no desde hace pocas semanas, sino desde hace varias décadas. Y Rambo sí que aplica al pie de la letra el lema uribista: “Colombia es pasión: viaja, mata, tortura y masacra por ella”. Notas: i. “Revive caso de niña que habría sido violada en Melgar”, Revista Semana, agosto 12 de 2009. ii. Denuncian abuso de una niña por militares extranjeros, en http://www.caracol.com.co/noticias/actualidad/denuncian-abuso-sexual-a-una-nina-por-parte-de-militaresextranjeros/20090814/nota/861556.aspx

iii. Citado en Violaciones de soldados americanos en Colombia, en http://www.taringa.net/posts/info/5015087/Violaciones-de-Soldados-Americanos-en-Colombia.html iv. El Senado de Estados Unidos critica la falta de control del servicio secreto, en http://www.laverdad.es/murcia/v/20120524/mundo/senado-estados-unidos-critica-20120524.html v. Ibíd. vi. EE.UU acusa a seis colombianos por la muerte de un agente de la DEA en Bogotá, en http://globovision.com/articulo/ee-uu-acusa-a-seis-colombianos-por-la-muerte-de-agente-de-la-dea-enbogota vii. Esto no huele bien: el caso chiquita, en http://www.semana.com/nacion/articulo/esto-no-huele-biencaso-chiquita/255731-3 viii. EE.UU., preocupado por bienestar de estadounidense (en) poder de las Farc, en http://www.elespectador.com/noticias/elmundo/eeuu-preocupado-bienestar-de-estadounidense-poderfarc-articulo-435326 ix. El marine (r) gringo que se fue selva adentro, en http://www.semana.com/nacion/articulo/el-marine-rgringo-selva-adentro/352255-3 x. Estados Unidos advierte a sus ciudadanos sobre los problemas de seguridad en Colombia, febrero 21 de 2012, en http://www.larepublica.co/economia/estados-unidos-advierte-sus-ciudadanos-sobre-losproblemas-de-seguridad-de-colombia_2133 xi. Juan Gabriel Vásquez, “Instrucciones para tragar sapos”, El Espectador, julio 25 de 2013. Renán Vega Cantor es historiador. Profesor titular de la Universidad Pedagógica Nacional, de Bogotá, Colombia. Autor y compilador de los libros Marx y el siglo XXI (2 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 1998-1999; Gente muy Rebelde, (4 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 2002; Neoliberalismo: mito y realidad; El Caos Planetario, Ediciones Herramienta, 1999; entre otros. Premio Libertador, Venezuela, 2008. Su último libro publicado es Capitalismo y Despojo.

YA SE FABRICAN EN LA ARGENTINA MÁS DE 3.200 AUTOS 0 KM POR DÍA 06-08-13 00:00 En 145 días hábiles, las terminales locales lograron una suba de 17,3% con respecto a los 397.693 vehículos de 2012. La cifra incluye también camiones y utilitarios nuevos http://www.cronista.com//negocios/Ya-se-fabrican-en-la-Argentina-mas-de-3.200-autos-0-km-por-dia201308060009.html?utm_source=planisys&utm_medium=EnvioNewsletterCronista&utm_campaign=EnviodiariodelN ewsletterdelCronista&utm_content=10 Compartir Comentar ComentarImprimir Imprimir Enviar Enviar Aumentar Tamaño Disminuir Tamaño Texto GALERÍA Las exportaciones de vehículos explican más del 50% de la producción En julio se fabricaron 71.895 unidades, 9% más que en igual mes de 2012 Las exportaciones de vehículos explican más del 50% de la producción DAVID CAYÓN Buenos Aires

La presidenta Cristina Fernández vaticinó en su cuenta de twitter que la industria automotriz este año va a llegar a “1 millón de autos”. Seguramente la Jefa de Estado lanzó esta predicción teniendo en su poder un anticipo de los datos de producción de julio que ayer publicó la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa).

Según la entidad que agrupa a las 11 automotrices que fabrican en la Argentina, durante el mes pasado salieron de las plantas 71.895 unidades, cifra que significó un crecimiento de 9,1% respecto de las 65.900 unidades que salieron de las terminales en julio de 2012.

Con estos números, el sector que se muestra como uno de los más dinámicos de la industria local, alcanzó un acumulado de 466.445 unidades entre enero y julio de este año. Es decir, entre automóviles, camiones y utilitarios se fabricaron 3.217 unidades por día durante los 145 días hábiles que tuvieron, hasta ayer, el 2013.

Además, el acumulado en los primeros siete meses significa una suba de 17,3% con respecto a los 397.693 vehículos que salieron de las líneas de montaje en el mismo período del año pasado.

Pero ninguna de las marcas que fabrican en el país –Fiat, Ford, General Motors, Honda, Iveco, Mercedes Benz, PSA Peugeot, Citroën, Renault, Scania, Toyota y Volkswagen– hubiese logrado estos números sólo con un crecimiento del mercado interno. Por eso en el rubro exportación, las terminales contabilizaron 39.298 unidades, un 37,9% más respecto de las 28.483 unidades que despacharon en el mismo mes del año pasado, pero una baja de 7,8% si se las compara con las 42.261 unidades de junio.

En los primeros siete meses, las terminales exportaron 262.800 unidades. Es decir, 30,1% más respecto de las 201.955 que se enviaron al exterior entre enero y julio del año pasado. Brasil continúa siendo el principal destino de las exportaciones de autos nacionales. Más del 85% de los modelos fabricados en el país que se envían al exterior tienen como destino el vecino país.

No obstante, desde Adefa buscan romper con la “brasildependencia”. Según un comunicado de la entidad, las “casi 2.000 unidades menos que se han enviado y atentos a la situación socio–económica y política del país vecino, sumado a la revisión de las proyecciones a la baja que manifiestan nuestros pares, dan cuenta de la necesidad de que sector público y privado redoblen los esfuerzos para superar el desafío de diversificar los destinos de exportación tales como Venezuela, Colombia, y Ecuador y profundizar vínculos con México”.

Este pedido de ampliar horizontes incluye una mejora en la competitividad del sector que se reclama desde muchas de las gerencias regionales.

En la mayoría de los casos, los ejecutivos a cargo de América latina que pasaron hace muy poco tiempo por el Salón del Automóvil de Buenos Aires realizado del 20 al 30 de junio, señalaron a la inflación y a la volatilidad del tipo de cambio como dos inconvenientes para poder enviar unidades fabricadas en la Argentina al exterior. Advirtieron que los precios locales no son competitivos para vender afuera de América latina

UN PARTIDO ROMPIÓ CON CAPRILES http://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-226130-2013-08-06.html El secretario general de la formación de izquierda, Felipe Mujica, criticó a la alianza opositora. “La Mesa de la Unidad Democrática ha maltratado al partido, a sectores de la sociedad civil y a otras organizaciones políticas.” El partido venezolano Movimiento Al Socialismo (MAS) decidió ayer separarse de la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que lidera Henrique Capriles. Según la fuerza de izquierda, la MUD escogía los postulantes de manera arbitraria y anunció que acudirá a las elecciones municipales de diciembre con candidatos propios. “La Mesa de la Unidad Democrática ha maltratado al partido, a sectores de la sociedad civil y a otras organizaciones políticas”, sostuvo el secretario general del partido, Felipe Mujica, quien se mostró contrario a la estrategia de Capriles de desconocer el triunfo del presidente Nicolás Maduro y cuestionó el intento de la dirigencia de la alianza de polarizar el país. Con esta escisión, la primera que sufre la coalición antichavista desde las elecciones presidenciales del pasado 14 de abril, la MUD pierde a su principal componente de izquierda. El MAS justificó la ruptura alegando que la MUD tenía un reglamento en el que se escogían los candidatos de forma autoritaria. “Hemos señalado que la aplicación de un reglamento era totalmente contraria a criterios democráticos. El partido planteó la discusión y se nos prometió revisar el reglamento.” Ante la falta de transparencia dentro de la coalición opositora, el partido conducido por Mujica tomó la decisión de separarse. “Nosotros, como organización política, no estamos dispuestos a que ese tipo de respuestas signen la marcha de una instancia plural y democrática como la MUD”, añadió Mujica. En una entrevista que le concedió al periodista Vladimir Villegas la semana pasada, Mujica se había mostrado opuesto a la actitud que tomó Capriles tras su derrota en abril. “El tema del desconocimiento de Maduro no está compartido por todos los sectores ‘no oficialistas’”, había asegurado, al tiempo que reconocía que no era el tema más urgente para los venezolanos. “Yo no hubiese hecho el ‘yo gané, me quitaron el triunfo, vamos a protestar con cacerola’. Eso yo no lo haría jamás, me parece que eso fue un camino equivocado.” Por otro lado, se mostró indiferente por la posible reacción de la oposición. “Nosotros tomamos la decisión, se lo anunciamos hoy al país claramente, de ir con la tarjeta del MAS a las elecciones municipales. ¿Qué va a pasar ahí? ¿Qué va a decidir la MUD? ¿Hacia dónde esa decisión se va a encaminar? Ya esa decisión no es problema nuestro”, afirmó Mujica en rueda de prensa. Mujica criticó también la estrategia polarizadora de la oposición, ya que, según encuestas, el 82 por ciento de los venezolanos serían partidarios del diálogo entre gobierno y oposición. “Hay sectores de la oposición empeñados en polarizar el país. La polarización es un hecho contrario a los intereses de todos los venezolanos y viene siendo aplicada de manera ventajosa por parte de los sectores oficialistas porque son los que han insistido en colocar las cosas en blanco y negro”, enfatizó. Señaló también que el MAS lanzará mayoritariamente candidatos propios, pero también podría apoyar a candidatos de la MUD o del chavismo disidente. “Nosotros podemos apoyar candidatos del MAS, obviamente; podemos apoyar candidatos de la MUD; podemos apoyar disidentes del chavismo, que seguramente habrá también”, subrayó. Sin embargo, dejó en claro su malestar con el comportamiento de la heterogénea coalición. “Si aquí se hicieran rectificaciones a fondo no nos importaría ir con los candidatos de la Unidad”, dijo Mujica y aclaró que no se trata de obtener más cargos para el partido, sino de corregir lo que creen es una situación irregular para la democracia. El líder del MAS dijo asimismo que en la actualidad hay realidades que son diferentes en los municipios y así es como debe ser asumido. “Es mucho más fácil ganar los municipios con los candidatos que se tienen que

pretender que una fórmula nacional va a resolver el problema y va garantizar tal o cual resultado.” Mujica consideró que es un error creer en la necesidad de polarizar el país con el propósito de ganar las elecciones. Por este motivo, propuso a los candidatos hacer propuestas para los municipios. “El resultado que se pretende lograr no será posible si en cada elección no se realiza una campaña. Creemos que polarizar la campaña municipal es un gravísimo error”, dijo. Para Mujica, el problema del MAS no son los votos porque, según aseguró, las decisiones del partido no son tomadas en función de eso, sino en función de la política. “Somos un partido político que tiene 40 años, tradición de historia y de debate y pensar que nos van a chantajear con ese tipo de debates es equivocado.” El MAS es el primer partido político que se escinde en bloque de la MUD, aunque previamente el diputado suplente Ricardo Sánchez se había retirado de la colación opositora para crear el partido propio Alianza para el Cambio. La MUD fue creada en 2008 mediante el documento conocido como Acuerdo de Unidad Nacional, con la idea de agrupar a los partidos antichavistas que no lograban derrotar al oficialismo en la sucesivas elecciones. Eric Nepomuceno

BRASIL: RETRATO DE UNA MUJER TRAICIONADA br dilma llorosa http://www.surysur.net/2013/08/brasil-retrato-de-una-mujer-traicionada/ Hace unos días, la presidenta Dilma Rousseff ordenó liberar de forma inmediata poco menos de mil millones de dólares para atender las enmiendas parlamentarias al presupuesto anual. Anunció, además, que en septiembre serán liberados otros dos mil millones de dólares. Esa montaña de dinero será empleada por los señores legisladores para atender intereses parroquiales de sus feudos electorales. En Brasil el presupuesto nacional, una vez aprobado por el Congreso, autoriza al Poder Ejecutivo a gastar, es decir, señala de cuánto puede disponer el gobierno a lo largo del año, promoviendo cortes o ajustes. Impone un tope, y nada más. No obliga al gobierno a cumplir lo que ha sido propuesto por él y aprobado por los parlamentarios. Es parte del juego. De la misma forma, es parte del ritual que en el Congreso la propuesta original sufra un sinfín de enmiendas. Ya la liberación de recursos para atender la demanda de diputados y senadores depende del Ejecutivo, en un ciclo vicioso de presiones y contrapresiones. Al liberar, a estas alturas del año, miles de millones de reales para satisfacer a los parlamentarios, Dilma Rousseff hace un nuevo intento por mejorar las cada vez peores relaciones con su base aliada, que abarca 10 partidos de los más diversos orígenes, y sin otro compromiso visible que la voluntad de ocupar espacios de poder, con sus consecuentes prebendas. Encabezada por el PT de Lula y Dilma, esa alianza creada para asegurar la llamada gobernabilidad tiene un costo cada vez más elevado, y no sólo en términos presupuestarios. También en términos políticos aliarse a grupos tan diversificados, tan variopintos, tiene un precio muy alto. Dilma Rousseff, y tal como antes le ocurrió a Lula, parece resignada a esa circunstancia. Hay, sin embargo, diferencias cruciales. Primero: Lula tiene un carisma incomparable, mientras que el de Dilma, si existe, todavía no se deja ver. Segundo: Lula es un negociador hábil y la cintura política de Dilma es de piedra. Tercero: nunca, desde que en enero de 2003 el PT llegó al poder, el apoyo en el Congreso ha sido tan bajo y el precio tan alto. Ni siquiera en 2005, cuando se dio el estallido del escándalo del mensalão (sobornos a legisladores) –que casi le costó a Lula da Silva la relección al año siguiente– el índice de lealtad de los aliados fue tan bajo, especialmente en la Cámara de Diputados. Luego de la oleada de manifestaciones de protesta que asolaron el país en junio, parece obvio que la semana que viene, cuando se levante el receso parlamentario, el escenario se haga todavía más turbio.br protestas25 La constatación de la fuerte pérdida de popularidad de la presidenta luego de los sucesos del mes pasado – fenómeno igual ocurrió con todos los gobernadores estaduales sin excepción– también contribuye para que se agudice el apetito voraz de los aliados de ocasión.

Ahora insinúan retirar su respaldo a la relección. Hace tres meses disputaban quién le presentaba a Dilma los más contundentes juramentos de amor eterno. Reivindican más diálogo con el Poder Ejecutivo, o sea, quieren más puestos, más presupuesto. Desde enero, el apoyo al gobierno en la Cámara de Diputados se desplomó a niveles inauditos. El principal aliado, el PMDB, apoyó al gobierno en solamente 56.06 por ciento de las votaciones, el más bajo índice desde que adhirió formalmente a un gobierno encabezado por el PT en 2007, todavía con Lula. Es menos de cuando no integraba la alianza del gobierno (2003-2006) y se declaraba independiente. Incluso, el pequeño PSOL, que desde la izquierda es dura oposición a Dilma, ha sido más positivo: apoyó 56.14 por ciento de los proyectos del gobierno. Otros dos aliados, el PSB y el PP, aprobaron, respectivamente, 64.79 y 63.85 por ciento de las propuestas que Dilma envió al Congreso. Lo más curioso es que el mismo PT de Dilma, que tiene el mayor número de diputados, retrocedió entre 2011 (primer año de su gobierno), y el primer semestre de 2013 de 95.19 por ciento a 92.15 de apoyo efectivo. Todos los partidos de la base aliada han sido tenidos en cuenta para otorgarles ministerios, secretarías nacionales con rango ministerial o puestos clave en entes autárquicos y direcciones nacionales. Vale destacar que el balance de la lealtad –o de su falta– tuvo como foco central las votaciones de todo el primer semestre, o sea, no está vinculado directamente a la oleada de protestas que desgastaron fuertemente al gobierno. Al contrario: menos de 10 por ciento de las votaciones en el Congreso ocurrieron después de la marea de manifestaciones callejeras. Para este segundo semestre está previsto en el Congreso el análisis de temas cruciales para Dilma. De persistir ese clima francamente antagónico entre los partidos aliados y el gobierno, la tensión seguramente alcanzará niveles aún más elevados. Es sabido que de muchas traiciones también está hecho el juego político. Lo que se ve en Brasil, en todo caso, es un claro ejemplo de hasta qué punto el bicho humano puede esmerarse por traicionar cada vez más.

SOCIODIALOGANDO

LA IDEA DE LA METAMORFOSIS ES, QUE EN EL FONDO TODO TIENE QUE CAMBIAR » EDGAR MORIN Enregistrer au format PDF http://www.elcorreo.eu.org/La-idea-de-la-metamorfosis-es-que-en-el-fondo-todo-que-tiene-que-cambiarEdgar-Morin Todas las versiones de este artículo: [Español] [français] Si el mundo tal como va produce desastres, Edgar Morin invita a creer que llegará « el improbable beneficio ». Para este sociólogo el cambio se producirá a escala planetaria. Augmenter policeDiminuer police Edgar Morin es un pensador globetroter, fino conocedor de América Latina y invitado a menudo a dictar conferencias en los cuatro rumbos del planeta, todo un mundo que impregna su pensamiento. Sociólogo, filósofo, antropólogo ama entrecruzar las miradas, confrontar los saberes, interrogar a las disciplinas. Nacido en 1921, Edgar Morin se vuelve un rebelde a los veinte años, se une al PCF (Partido Comunista Francés) en 1941 antes de ser excluido por haberse distanciado del stalinismo. En 1950, entra al CNRS (Centro Nacional de Investigaciones Científicas) en el que en 1970 es nombrado Director de Investigaciones.

Este pensador inclasificable es también un hombre comprometido, un militante. Muy tempranamente Edgar Morin, invita a « entrecruzar los conocimientos » Es esta su marca de fábrica que lo ha conducido a desarrollar el concepto de « pensamiento complejo » entendido como « lo que está entretejido » planteado ya en su libro Ciencia con Conciencia de 1982. En su Método, redactado en seis volúmenes (1977-2004) incluye títulos convocantes, la Vida de la Vida, el Conocimiento del Conocimiento o mejor aún la Humanidad de la Humanidad en los que explicita los desafíos de la complejidad. Observador de las irregularidades mundiales, Edgar Morin cuyo hilo de Ariadna es una reflexión encaminada hacia el porvenir « ¿Nos dirigimos hacia las catástrofes en cadena? » « algo que parece probable si no nos decidimos a cambiar de ruta » cuestiona en la Vía, escrita en 2011 Usted acaba de firmar junto a decenas de intelectuales, el Manifiesto Convivialista [para firmar hágalo clicando AQUI], que se propone intentar definir la filosofía que le es común a movimientos tan diferentes como el altermundismo, los Indignados españoles, el « slow food » o el de la economía social y solidaria ¿Cree usted que estas iniciativas perfilan el futuro? E.M. : Los movimientos existen pero no han llegado verdaderamente a converger. Todas esas iniciativas conforman una constelación pero no se han asociado aún orgánicamente. El movimiento de los Sociables que efectivamente he firmado representa una parte de la perspectiva. Es necesario reintroducir la convivencia en nuestra sociedad « Convivencialismo » es una buena etiqueta pero no abarca toda la complejidad del problema. Le otorgo mucha importancia al pensamiento de Ivan Illich uno de los pensadores de nuestra cultura que en los años 70, extresó una crítica a nuestra civilización bastante radical, tanto a la industrialización, alas formas de consumo, a la educación, etc. Ahora bien, estamos en un momento de la historia en que todo plantea problemas; la dominación del capitalismo financiero, la agricultura o la cría industrial de animales, el consumo orientado hacia una verdadera intoxicación. Las instituciones mundiales se han vuelto totalmente insuficientes, impotentes y arbitrarias como la ONU o desviadas como el FMI. La política ha llegado al nivel cero del pensamiento. En esta situación ¿debemos inclinarnos hacia el pesimismo o hacia el optimismo? E.M.: Debemos buscar un nuevo camino. He desarrollado la idea de la metamorfosis para decir que en el fondo todo debe cambiar. Los países como América Latina y el Ecuador han elaborado una política del « buen vivir » Es una idesa uqe debemos impulsar. El « bienestar » es una hermosa palabra cuyo sentido ha sido totalmente degradado. El problema no consiste solamente en poder alcanzar un nivel de confort mediante la posesión de bienes materiales como un aparato de televisión, una heladera o un coche. Son importantes, pero lo que cuenta ante todo es el sentimiento del « buen vivir » que descansa sobre el desarrollo de una realización individual en el seno de un desarrollo colectivo en una comunidad fraterna. La aspiración a otro tipo de vida atraviesa la historia. Largo tiempo estuvo encarnada en la idea del paraíso. Luego regresó a tierra con la Revolución Francesa, el socialismo, Karl Marx. Pienso que tenemos que unir las tres fuentes: la libertaria para el individuo, la socialista para mejorar la sociedad y la comunista para vivir en comunidad y habría que agregar la ecologista. La aspiración a otra vida ha atravesado el socialismo que se ha reblandecido, al comunismo que se ha desviado; fue la que alzó a la juventud de mayo del 68. Actualmente anima a los jóvenes de la primavera árabe, los de Occupy Wall Street en los EE.UU., los Indignados españoles, los manifestantes de Brasil. Pero para poder cambiar de rumbo está faltando el pensamiento político. La gente está decepcionada, resignada, sin esperanza. Es cierto pero sobre todo porque todavía no se ve la descripción de algo creíble. En el fondo ¿qué es una sociedad conviviente? Una sociedad en que la cooperación entre los hombres ocuparía el lugar de la explotación del hombre por el hombre? La película de Victorio De Sica « Milagro en Milán » termina con la idea de una sociedad en que cada uno le dice al otro « Buenos días ». En una sociedad conviviente, las personas no son anónimas, se conocen, se entrecruzan. No se trata tan solo de buena educación ni de cortesía. El otro existe, y es reconocido como diferente y al mismo tiempo parecido a uno mismo. Esta necesidad de ser reconocido es común a todos los seres humanos. Los que se hallan privados de ese disfrute por hallarse humillados, seviciados, dominados, lo sufren. En las administraciones,

en las empresas, en todas partes las personas se hallan disgregadas, separadas unas de otras. Es decir podríamos mencionar que hace falta una « re-unión » Hallarse unido a su vecino a escala individual, de un pueblo o de una comuna es fácil de imaginar. Pero a escala mundial ¿solo puede darse a partir del concepto que usted plantea de « tierra patria »? En todo ser humano existen dos principios fundamentales. Primero el « yo » egocéntrico y vital para defendernos frente a la adversidad. Pero también el « nosotros » que se expande en la familia, los compañeros, los partidos políticos, la religión, etc. Nuestra civilización a superdesarrollado el « yo » y subdesarrollado el « nosotros » Debemos cambiar este planteo y volver a desarrollar el « nosotros » Anteriormente uno se enfrentaba al enemigo, al invasor. La Convivialidad a escala mundial se describe como la toma de conciencia de que compartimos un destino humano común. Corremos la misma aventura, nos encaminamos hacia los mismos abismos, es necesario reaccionar a escala global. El problema es lograr salvar a nuestra tierra-patria de la destrucción. Somos el producto de una evolución biológica que ha venido construyendose durante dos mil millones de años y de la que surgió una especie abusivamente llamada Homo sapiens. Esta identidad común produce diferencias. La palabra « patria » habla a la sensibilidad, fraterniza. No puede concebirse sino sobre la base del Respeto a todas las diversidades nacionales y culturales, a condición de seguir insistiendo en la unidad. Porque los que solo ven la diversidad humana olvidan la unidad. Y los que solo ven la unidad solo tienen una concepción abstracta y olvidan la diversidad humana. La actual mundialización técnico-económica ignora la diversidad cultural y la sensibilidad de los pueblos. Ahora bien , si la « tierra patria » engloba las patrias entonces la diversidad humana es el tesoro de la unidad humana y la unidad es el tesoro de la diversidad. Existen momentos en la historia de la humanidad en que se producen cambios de rutas, bifurcaciones ¿Qué indicadores percibe usted que nos indiquen que estamos realmente en una de esas fases? Estamos en una situación en que no hay algo formado, no sabemos ni cuando ni cómo llegará el momento de la transición. El mundo está fermentando. No se sabe en qué terminará Las pulsiones de muerte y de destrucción son muy fuertes Pero eso no debe desesperanzarnos. Existen múltiples conflictos que podrían desembocar en una deflagración general. Cada uno es como un árbol. El viento desparrama las semillas. Cuando caen en tierra fértil germinan. En la India, las reflexiones del príncipe Sakiamuni, el Buda sobre el sufrimiento humano y la verdad dieron nacimiento a una religión que profesan millones de personas. En otro orden de cosas Marx y Prudhon eran considerados por los intelectuales de la época como marginales, como desviados antes de que sus ideas dieran nacimiento a considerables fuerzas políticas. Aunque el futuro previsible no genera demasiado optimismo, usted afirma sin embargo que el improbable beneficio llegará. Las revoluciones árabes ¿son para usted signos de que lo improbable puede convertirse en probable? Las primaveras árabes, sobre todo en Túnez y Egipto, son movimientos muy importantes, pacíficos. Pero por el momento lo que ha surgido en términos de procesos electorales es tanto positivo como negativo La mayor parte de los partidos de izquierda se hallaban perseguidos por los regímenes dictatoriales. Habían perdido a menudo el contacto con el pueblo. Los islamistas lo tenían y la gente los votó. Eso nada tiene que ver con la importancia del acontecimiento. Hoy en día el pueblo está contra el presidente Morsi pero la oposición es muy heterogénea. La primavera árabe representa un despertar inicial que va a fecundar el futuro pero aún no sé cómo. Los artífices de la primavera árabe han calificado a su movimiento con el término de « revolución » Usted ha preferido cambiarlo por el de metamorfosis. ¿Qué significa ese concepto? Es necesario pensar en la oruga que se encierra en un capullo para convertirse en mariposa. Llega a destruirse totalmente para convertirse en algo diferente. La historia humana está llena de metamorfosis. La nueva metamorfosis solo tendrá lugar a escala planetaria. Se va a modificar el conjunto de las relaciones, la

organización va a modificarse y es hoy en día imposible de prever la nueva forma que tomará esta nueva sociedad mundial. He abandonado la idea de revolución por dos razones. La primera se corresponde con el objetivo de no continuar con la idea de hacer « tabla rasa » con el pasado. Necesitamos todas las culturas del pasado, todo lo adquirido por el pensamiento en el pasado. La idea de metamorfosis conduce a la vez a la ruptura y a la continuidad. La segunda pretendía que la idea de revolución era cuanto más violenta más auténtica. La violencia es a veces inevitable pero es erróneo pensar que es justificada y necesaria porque entonces genera otras violencias. El tratamiento impuesto a Grecia, los planes de austeridad que conducen a la recesión alimentan en grandes franjas de la población un sentimiento de rechazo hacia Europa. ¿Puede aún Europa jugar un papel en la política civilizatoria que usted impulsa? La crisis económica ha puesto de manifiesto una crisis ya existente. Europa se desarrolló económicamente pero sin unidad fiscal y se ha convertido en un enano político incapaz de llevar adelante la idea original: unirse para la paz y en función de aspectos civilizatorios comunes. Actualmente ese vacío constituye un peligro real. Alemania se ha convertido en la potencia política dominante y ha impuesto a los demás el falso remedio de la austeridad. Existen hoy en día, para mí, dos señales de alerta. Las respuestas planteadas al dominio del neoliberalismo económico están produciendo caos en Grecia y conduciendo a Hungría a una nuevo sistema autoritario, que no puede calificarse aún de fascista, pero que es peligroso. En Francia usted ha invitado recientemente al presidente de la República a cambiar de gabinete. ¿Cómo ve usted la situación? Digamos que espero el sobresalto. Aún no estoy desesperado. Planteo una crítica constructiva. La situación muestra signos inquietantes. Encontramos a las mismas personas en los cargos ministeriales que elaboran los mismos informes y piensan políticamente a partir de ideas basadas en el crecimiento y la competitividad. El presidente de la república debe comprender que es necesario cambiar de rumbo y que el gran escenario que constituye un verdadero relanzamiento es el de la economía verde. La falta de ideas sobre nuestro mundo contemporáneo, sobre la actual crisis de la humanidad en la era de la mundialización conduce a una visión miope que a menudo se reprocha a los partidos políticos. Usted convoca a regenerar el pensamiento político ¿Que es lo que usted entiende en tal sentido? Los responsables políticos viven el día a día. Ya no tiene una visión global. Para que no sean condenados al sonambulismo me parece útil elaborar un pensamiento político que sepa reunir los conocimientos. Tomemos, por ejemplo, la mundialización. Es un proceso económico, demográfico, sociológico, sicológico y religioso, etc. Todas las ideas se entrecruzan. También los acontecimientos. En 2001 un grupo minoritario y marginal, Al-Qaeda, logró destruir dos torres de la ciudad de Nueva York y la consecuencia fue una deflagración mundial. Los partidos están en el todo pero el todo está en los partidos. El mundo está en nosotros. Y este hecho acarrea una manera de pensar muy diferente, compleja, de largo plazo, no maniquea. El mundo tiene al mismo tiempo necesidad de mundialización (las culturas por ejemplo) y de desmundialización (la agricultura) Se tiene a la vez necesidad de crecer y de decrecer. Se debe desarrollar para que cada uno disfrute de los progresos positivos y delimitar para que la gente pueda seguir perteneciendo a una comunidad. He aquí un pensamiento político que podría conducir a una metamorfosis, a un cambio de rumbo. Entrevista realizada por Paule Masson et Jean-Paul Pierot para el periódico francés L’Humanité. Las séries de verano de l’Humanité : « Penser un monde nouveau » L’Humanité. Paris, 19 de julio de 2013. Traducción del francés para El Correo de : Susana Merino

El Correo. París, 10 de agosto de 2013.

POLEMIZANDO CON RAÚL PRADA ALCOREZA CRÍTICA DE LA “RAZÓN” NACIONALISTA Raúl Prada Alcoreza La “razón” nacionalista no es otra cosa que la reiteración discursiva y local de la razón de Estado. Lo que se llama razón de Estado se encuentra en las raíces mismas del Estado moderno, de la separación dada entre Estado y sociedad. La razón de Estado es la razón de los juristas y burócratas, interesados en la universalización de la ley, en la abstracción del poder, en la conformación de una maquinaria administrativa instrumental, no ligada al cuerpo del soberano. La razón de Estado eleva el concepto de Estado a verdad absoluta, principio y fin de la historia nacional. Es, en términos kantianos, una idea, un ideal. http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2013080805 Raúl Prada AlcorezaEscritor, docente-investigador de la Universidad Mayor de San Andrés. Demógrafo. Miembro de Comuna, colectivo vinculado a los movimientos sociales antisistémicos y a los movimientos descolonizadores de las naciones y pueblos indígenas. Ex-constituyente y ex-viceministro de planificación estratégica. Asesor de las organizaciones indígenas del CONAMAQ y del CIDOB. Sus últimas publicaciones fueron: Largo Octubre, Horizontes de la Asamblea Constituyente y Subversiones indígenas. Su última publicación colectiva con Comuna es Estado: Campo de batalla. Dedicado a Juan Pelerman Fajardo, combatiente anarquista, maestro intempestivo, eterno militante antiimperialista. La presentación de los resultados del Censo de Población y Vivienda de 2012, sobre todo los que se refieren a la pregunta de opinión sobre auto-identificación, han ocasionado una reacción, que llamaría exaltada, sacando conclusiones apresuradas, como la que dice: ven, la mayaría de la población en Bolivia no es indígena, es “mestiza”. Dejamos constancia de nuestra posición al respecto, dijimos con anticipación que no se trataba de un censo, sino de un retroceso a una enumeración, con pretensiones de ser completa. También dijimos que había problemas con la preparación del censo, debido a la ausencia de actualización cartográfica, además de problemas en la boleta censal, pues no se mantuvo la consistencia de las preguntas de comparación internacional, no se corrigió, desde el 2001, la pregunta solitaria de opinión sobre autoidentificación, que no viene acompañada por preguntas de control. Este tema merecería un tratamiento adecuado; tanto desde el punto de vista “objetivo”, trabajando preguntas apropiadas contando con la constatación de evidencias; tanto como desde el punto de vista de vista “subjetivo”, de opinión. Empero, a pesar de estas observaciones se ha persistido en mantener la forma de pregunta, aislada de un contexto metodológico de preguntas de control. Los medios de comunicación, la llamada oposición, además de otros “opinadores”, se enfrascaron en una discusión estéril sobre la necesaria incorporación de la pregunta sobre la auto-identificación de mestizo. No se trataba de resolver el problema, incorporando la categoría de mestizo, en una pregunta aislada de opinión. Así no se resuelven los problemas metodológicos y logísticos de un censo mal encaminado. Los “opinadores”, los medios de comunicación, los nacionalistas, vuelven a hacer relucir la pregunta de opinión, sus resultados, atendiendo a las proporciones que salieron sobre pertenencia e identidad, obviando que no hubo un censo “científico”, que así como se llama, sino una enumeración incompleta[1]. ¿Qué discusión puede haber sobre datos inadecuados e inconsistentes, que no tienen valor estadístico? Ninguna. Si los nacionalistas se agarran de estos resultados desesperadamente, como revancha esperada, no hacen otra cosa que mostrar su falta de seriedad en los temas y en la discusión. Lo que sí es serio, y esto interesa, además es esto lo que hacen cuando pueden, es volver a exponer su concepción nacionalista de la historia. Antes de comenzar la crítica a la “razón” nacionalista, vamos a aclarar algunos puntos, que deberían estar despejados. 1. La defensa de los derechos de las naciones y pueblos indígenas no es asumida porque son más o son menos, porque son mayoría o son minorías, sino porque se trata de una lucha descolonizadora. Esto es, es una lucha contra la dominación polimorfa colonial, imperial y capitalista.

2. Por lo tanto, esta lucha descolonizadora tiene su legitimidad de por sí, es histórica-política; corresponde a la lucha emancipadora de los pueblos colonizados. 3. Pretender que este problema, el de la colonialidad, se resuelve con la consolidación del Estado-nación, no es más que patentizar la continuidad del colonialismo en la forma unificada de nación mestiza y de Estado moderno, ratificando la conquista, la colonización, el despojamiento y desposesión colonial y capitalista. Desconociendo la institucionalidad de las naciones y pueblos indígenas. 4. El nacionalismo es un imaginario político que legitima la dominación de la burguesía nativa - entiéndase como se entienda esto de burguesía nativa; criolla, mestiza o indígena -, que tiene su articulación orgánica con la burguesía internacional, al formar parte ambas del control del sistema-mundo capitalista. Entonces, la pretendida independencia que persiguen los nacionalistas no es otra cosa que ilusión, pues lo que hacen es soldar las cadenas de la dependencia al complementarse con las estructuras de dominación y control mundial del capitalismo. No puede haber independencia con un Estado-nación que administra la transferencia de los recursos naturales de las periferias a los centros del sistema-mundo, lo hagan a través de la vía privada o nacionalizando. 5. La independencia proclamada solo puede darse por el camino de la descolonización, que además exige salir del modelo extractivista colonial del capitalismo dependiente, postulado tanto por los nacionalistas, los liberales y neo-liberales. 6. Entonces la defensa de los derechos de las naciones y pueblos indígenas es un requisito de partida de la descolonización. No hay una lucha anti-imperialista consecuente que no sea a la vez una lucha anti-colonial y descolonizadora. Tampoco hay una lucha por la independencia que no sea a la vez una lucha contra el despojamiento y la desposesión extractivista de la geopolítica del sistema-mundo capitalista. Como no hay una lucha consecuentemente anti-capitalistas sino es una lucha consecuentemente anti-colonial y descolonizadora. Dejando en claro estos puntos, podemos iniciar nuestra crítica a la “razón” nacionalista. La “razón” nacionalista no es otra cosa que la reiteración discursiva y local de la razón de Estado. Lo que se llama razón de Estado se encuentra en las raíces mismas del Estado moderno, de la separación dada entre Estado y sociedad. La razón de Estado es la razón de los juristas y burócratas, interesados en la universalización de la ley, en la abstracción del poder, en la conformación de una maquinaria administrativa instrumental, no ligada al cuerpo del soberano. La razón de Estado eleva el concepto de Estado a verdad absoluta, principio y fin de la historia nacional. Es, en términos kantianos, una idea, un ideal. A nombre de esta idea se legitiman las dominaciones instauradas. La nación es el otro concepto ligado al Estado; en realidad, es el Estado el que construye la nación, el que formula la “ideología” nacionalista. Se construye la nación abstracta, unificada, donde desaparecen las otras identidades, las otras lenguas, las otras culturas. Esta unificación y homogeneización se efectúa recurriendo a la fuerza, por lo tanto a la violencia para imponerla. La razón de Estado es la razón de la ley, ley suprema, ley abstracta, impuesta a todos, a pesar de la diversidad y diferencia. La “razón” nacionalista se basa en la razón de Estado. Lo que hace sobre esta base es desarrollar una “ideología” nacionalista propia, con sus propias particularidades, referencias y memoria. Los que han jugado un papel en las luchas emancipadoras son los nacionalismos criollos, en la llamada guerra anticolonial de las independencias. Como dice Benedict Anderson, la “ideología” nacionalista o, si se quiere, el imaginario nacionalista, arranca en las colonias de América, con los colonos opuestos y afectados por la administración colonial, que restringía sus facultades y accesos, discriminándolos en la jerarquía racial de las colonias, aunque no ocupen el último puesto de la pirámide social[2]. Este nacimiento de la “ideología” nacionalista fue recogido por los nacionalismos del siglo XX, cuando en las repúblicas conformadas, en los Estado-nación constituidos, la dominación económica imperialista se apoderó de las riquezas de los países. La “ideología” nacionalista se reformuló en la formación expresiva de los discursos populistas. Esta “ideología” interpela al imperialismo, a sus formas inscritas en el país, sobre todo interpela a las oligarquías aliadas al imperialismo. Este nacionalismo anti-imperialista popular tiene efectos de cohesión y convocatoria, logra articularse a organizaciones de trabajadores y a las llamadas clases medias, mas bien urbano-populares, repercutiendo en el campo político al reconfigurarlo. Este nacionalismo llega efectivamente al poder, como se dice, desde donde comienza su proyecto politico a partir de las medidas de nacionalización. Estos nacionalismos populares propugnan un capitalismo de Estado, tal como lo concebimos en América Latina[3]; es decir, un capitalismo administrado por el Estado, sobre todo con el establecimiento de empresas públicas. El

programa, más o menos, se puede resumir en las medidas de nacionalización, en el control del comercio exterior, en una política proteccionista, en el control del cambio y en la nacionalización de la banca. Hasta ahí tenemos el carácter progresista de este nacionalismo anti-imperialista y popular. El problema del nacionalismo es su apego, como dijimos a la razón de Estado, que corresponde a la lógica de la universalización, homogeneización y generalización del poder, en su forma abstracta; esta macro-institución que incumbe al campo burocrático. El problema del nacionalismo es sostener el imaginario de una nación unificada y homogénea, “ideología” que logra materializarse por el propio ejercicio estatal, de los aparatos ideológicos del Estado, por el funcionamiento eficaz del campo escolar. Esta nación universal se impone y sustituye a las naciones concretas, diversas y singulares. El Estado entonces se reproduce en las dinámicas mismas del campo escolar; se legitima como mega-agenciamiento concreto de poder por ser la nación, la nación institucionalizada, la nación como norma y ley. El nacionalismo refuerza la gravitación estatal en su relación con la sociedad. Los nacionalistas de las sociedades de las periferias del sistema-mundo capitalista consideran que el fortalecimiento del Estado es fundamental en el enfrentamiento con el imperialismo. En este argumento se explica la razón de Estado, que, en estas condiciones, pretende ser razón anti-imperialista. ¿Hay que preguntarse si hay una razón anti-imperialista, si la razón de Estado puede convertirse en razón antiimperialista, cuando es la misma razón de Estado que ha llevado al imperialismo? La genealogía del Estado lleva al imperialismo, al dominio de un Estado sobre otros estados, después de haber dominado a su propia sociedad. Lo que se puede comprender es la contradicción entre estados, mucho más si se trata de la relación de poder de un Estado imperialista respecto de otro Estado subordinado. En esta contradicción está claro que hay que defender al Estado subordinado frente al dominio del Estado imperialista; empero, lo que está difícil aceptar es que el Estado subordinado pueda llevar a término la lucha anti-imperialista consecuentemente, manteniéndose en la propia institucionalidad estatal. Manteniendo sobre todo una “ideología” nacionalista. Ciertamente el fortalecimiento del Estado-nación subalterno es indispensable, es parte de la lucha antiimperialista, a su dominación, a sus agresiones y a su apropiación desmedida y neocolonial de los recursos naturales. No se puede pensar esta lucha sin el fortalecimiento de los estados subalternos; esto es parte de la defensa de la soberanía nacional, indudablemente. Empero, el problema es que el Estado-nación subalterno, que se confronta con el imperialismo, reproduce una dominación interna, un colonialismo interno. El colonialismo interno se puede definir no solo como continuidad del colonialismo externo, en las dimensiones locales, sino también con su trasformación estructural en las condiciones de republica y el Estado-nación. En Bolivia el colonialismo interno adquiere forma de mestizaje. La nación es la nación mestiza, el Estadonación es el Estado que nace de la revolución nacional. Es el Estado que emerge de la nacionalización de las minas, de la reforma agraria, del voto universal y de la reforma educativa. Al principio estamos ante un Estado acompañado por el pueblo armas; milicianos obreros y campesinos armados, un Estado sostenido por los sindicatos de obreros y campesinos, un Estado administrador y gestor de empresas públicas. Un Estado que postula la educación fiscal, abriendo la educación para todos. Estamos hablando de todo un despliegue instrumental en la construcción la nación y el Estado-nación, además de la representación del pueblo. Pero, todo esto, todas estas construcciones institucionales, se pueden efectuar diluyendo a las comunidades, a las naciones y pueblos indígenas, en la nación mestiza, en la sociedad mestiza. El proceso de subsunción es gigantesco, las comunidades se convierten en sindicatos agrarios, las autoridades originarias en dirigentes sindicales, las tierras comunitarias en tierras distribuidas y entregadas como propiedad privada a las familias. Las migraciones convierten a los habitantes rurales en habitantes urbanos, la escuela convierte a los niños en castellano hablantes, expandiendo el bilingüismo, si es que no desaparece la lengua nativa. Esta nación, la boliviana, como cualquier otra nación, correspondiente a la construcción del Estado-nación, es una comunidad imaginada, hecha “realidad” social, si se quiere por el campo escolar. Sin embargo, el Estado-nación no logra hacer desaparecer las diferencias culturales, las diferencias lingüísticas, no logra hacer desaparecer las naciones y los pueblos nativos. Persisten, resisten, no son subsumidos del todo, mantiene sus características propias culturales, inclusive institucionales. El nacionalismo comprende también una concepción histórica lineal y evolutiva. Su tesis es la transición a la sociedad moderna, al desarrollo, al bien estar, a través del crecimiento económico. En este sentido

caracteriza a las comunidades indígenas como atrasadas y a las otras culturas como pre-modernas o no modernas. Las soluciones son entonces el desarrollo y la modernización. Es sugerente observar la forma como el Estado y la nación se convierten en sujeto, en el imaginario social. Como si el Estado tuviera vida propia y no fuera movido por las propias dinámicas sociales, como si la nación fuera alguien, una madre, con memoria histórica, a la que hay que defender, como si esta imagen no correspondiera a una construcción estatal, transmitida e inoculada por la escuela. Las entidades jurídicopolíticas se convierten en “realidad” social a través de las instituciones, se institucionalizan. La nación entonces “existe” por este armazón institucional. Es una invención estatal. La escuela o el programa escolar encuentra una historia de la nación; esta historia rastrea desde los orígenes mismos de la nación. Ésta se encontraría en la época precolonial, en las sociedades conquistadas y colonizadas. Los acontecimientos de los levantamientos y rebeliones anticoloniales se convierten en la historia de la nación que surge en su lucha emancipadora. Las conspiraciones y sublevaciones en las ciudades se convierten en escenas dramáticas de la historia de la nación. Todos los eventos, tanto los levantamientos indígenas como las rebeliones criollas, se convierten en parte de la misma historia de la nación, que avanza a su realización. La guerra anticolonial pan-andina y la guerra de la independencia son aproximadas en el relato del nacimiento de la nación mestiza. Cuando nace la nación nace desnuda, todavía incompleta, requiere seguir madurando para lograr su realización plena. Todavía tiene que experimentar, tiene que sufrir, para madurar, para formar su consciencia nacional. Las heridas que abren las guerras en el cuerpo le ayudan a adquirir consciencia histórica, las clases sociales se encuentran en las trincheras, donde mueren y se mezclan sus sangres. La consciencia nacional se forma en el drama de la guerra. Los combatientes vuelven a la finalización de los desenlaces bélicos, vuelven para recuperar el país en manos de la oligarquía. La revolución es el renacimiento de la nación, la recuperación de su soberanía; la nación puede emprender su época auténtica, cuando ella es ella misma, llevada de la mano por el Estado-nación. Esta narrativa nacionalista puede ser expresada de distintas maneras, más teórica, más históricas, más descriptivas, más propagandísticas, no importa; el formato más o menos es el mismo. Lo que importa es la conclusión; todos somos uno, el Estado-nación; todos venimos de la misma madre, la nación; por lo tanto, todos somos la nación. Esta “ideología” nacionalista, que es también una “ideología” mestiza, ha hermanado a todos, indígenas, mestizos, criollos; incluso ha hermanado a las clases sociales, pues ha logrado la alianza de clases. Los problemas coloniales habrían desaparecido, la lucha de clases habría desaparecido; lo que queda adelante es resolver los problemas de desarrollo. Este relato convincente forma parte del imaginario nacionalista. El mito nacionalista es la nación. Se puede decir que los pueblos no pueden vivir sin sus mitos; los mitos constituyen la matriz estructural de las subjetividades. Empero, lo que no se puede aceptar es que el mito moderno de la nación y el mito moderno de la historia, se den a costa de la desaparición de los otros mitos constitutivos de los pueblos, componentes, si se quiere, de la “nación” del Estado. No se puede aceptar que la construcción de la “nación” del Estado equivalga a la desaparición de las naciones e identidades culturales de los pueblos componentes de la “nación” del Estado. Esto no es democrático, aunque sea republicano. El “desarrollo evolutivo” de la democracia, usando términos inapropiados como “desarrollo” y “evolutivo”, refiriéndonos a la profundización de la democracia, ha ampliado los derechos fundamentales, incorporando los derechos colectivos; en este sentido, el derecho de las naciones y pueblos indígenas a su autonomía, a su autogobierno y libre determinación. El respeto de estos derechos hace ahora a la democracia, al ejercicio de la democracia y de la política contemporánea. Desconocer estos avances es situarse en una posición anacrónica y conservadora, que además no deja de ser colonial. Esto ya no es anti-imperialismo, es mantenerse en los códigos imperiales, aunque se lo haga localmente. En esta historia efectiva, lo que hay que entender es que, en el contexto contemporáneo, en la actualidad del dominio y control financiero del ciclo del capitalismo vigente, la lucha anti-imperialista, hoy, en la coyuntura de crisis orgánica y estructural, es distinta que la de a mediados del siglo pasado. En aquél entonces el movimiento nacional-popular en Bolivia se enfrentaba a la oligarquía minera, burguesía minera a la que se llamó el súper-Estado minero, que tenía en sus manos el manejo del Estado y el control de los gobiernos de turno; oligarquía minera que, además, monopolizaba privadamente la explotación y la exportación de los recursos mineros. En esta situación histórica, económica y política, el libro de Carlos Montenegro Nacionalismo y coloniaje es, además de crítica del poder de la oligarquía minera y latifundista, una convocatoria a unir la nación contra la anti-nación, que dejaba las venas abiertas por las que sangraba el

país. La anti-nación identificada era lo que se llamó popularmente la “rosca minera”, que correspondía a una caracterización de la época, conocida también como la “feudal-burguesía”. En ese contexto histórico y político, el “concepto” de nación se identificaba con el concepto de pueblo, de pueblo oprimido por la “feudal-burguesía”; la lucha requería la necesaria unificación de las fuerzas populares. Se trataba de la guerra de la nación de los explotados y oprimidos contra la dominación de la “feudal-burguesía”, cuyos intereses coincidían con los intereses del imperialismo británico. A pesar de las diferencias de concepción, de las diferentes perspectivas políticas, otras interpelaciones a la oligarquía minera coincidían en esta percepción histórica, que tenía como horizonte al Estado-nación. La interpelación trotskista del POR, expresada en la Tesis de Pulacayo, también concebía una lucha contra la “feudal-burguesía” en términos de unificación de fuerzas, de alianzas en un frente anti-imperialista, bajo la hegemonía de proletariado, cuya alianza fundamental era obrero-campesina. También el POR, desde el enfoque de la lucha de clases, tenía como horizonte la nación, aunque planteaba una revolución permanente, en el marco de la teoría de transición, que conduzca a la dictadura del proletariado; es decir, a un Estado socialista en transición al comunismo. Como dice, Luis H. Antezana, estas interpelaciones, la nacionalista y la proletaria, componen una formación discursiva característica, correspondiente al discurso del nacionalismo revolucionario[4]. Lo que nombro en un ensayo como la episteme boliviana[5]. A estas alturas, a más de sesenta años de la revolución de 1952, no se puede estar blandiendo el mismo discurso “ideológico”, como si los contextos histórico-políticos no hubieran cambiado, como si no se hubiera vivido la experiencia del “nacionalismo revolucionario”, como si no se hubieran conocido su realización, además de sus límites. Pretender luchar contra el imperialismo actual, transformado, cuya composición estructural es otra, con las armas discursivas e “ideológicas” de la mitad del siglo XX, es un error no sólo conceptual sino estratégico y táctico. No se puede entablar el combate con mapas desactualizados; es como ir a una derrota segura. A estas alturas no se puede alguien arrogar la posesión de la “verdad”, menos cuando se tiene una interpretación anacrónica, como la nacionalista; interpretación débil para comprender lo que acontece en la coyuntura. Descalificar, desde la posesión de la supuesta “verdad”, a otras interpretaciones de la época en cuestión, mitad del siglo XX, y a las nuevas interpretaciones del presente. Por ejemplo, descalificar a la interpretación de Guillermo Lora por su enfoque de lucha de clases, en la interpretación de la historia de Bolivia y de la historia del movimiento obrero. Lucha de clases que daría lugar a la desunión y no a la unificación de las fuerzas. La interpretación del POR formó parte de la misma episteme, aunque lo haga desde posiciones más radicales. Por otra parte, la experiencia de los gobiernos del nacionalismo revolucionario, para no incluir a los gobiernos del nacionalismo reaccionario, las dictaduras militares, corresponde a la historia efectiva, no a la historia imaginaria; esta experiencia histórica y política ha mostrado las contradicciones del nacionalismo revolucionario y sus propios límites, cuando la república se hace nacional-popular con la revolución de 1952. El nacionalismo, de revolucionario, tiene sólo la exaltación del término y las medidas iniciales que se tomaron, como las relativas a las nacionalizaciones. La revolución queda ahí, en las nacionalizaciones; lo que viene después es reiterar la consolidación de las bases de la dependencia, como el modelo extractivista de la economía y la forma del Estado rentista. Gestiones nacionalistas que resuelven sus problemas de legitimación, en la etapa crítica del proceso político, recurriendo a la ampliación de las redes clientelares, empujando a la administración de las empresas publicas a una pesada burocratización, a una alarmante ineficacia y, por último, a una escandalosa corrupción. Si no hay una crítica a esta práctica efectiva nacionalista, es difícil tomar en serio las “críticas” actuales de los nacionalistas a la perspectiva del Estado plurinacional comunitario y autonómico. A estas alturas, tampoco se puede aceptar la crítica a la Constitución Política del Estado, concretamente a su condición plurinacional del Estado, con el argumento insostenible, que sólo vale para la diatriba, de que detrás de la constitucionalización del Estado plurinacional estaban las ONGs. Llama la atención un manejo descuidado y desinformado del tema. El Convenio 169 de la OIT de NNUU, que establece los derechos de los pueblos indígenas, no ha sido un obsequio de Naciones Unidad sino una conquista de la lucha de los pueblos indígenas del continente Abya Yala por la descolonización, por sus territorios y derechos colectivos. Se trata de una lucha de décadas, realizada por las organizaciones indígenas, en defensa de los territorios comunitarios, reivindicando la autonomía, el autogobierno, la libre determinación, en defensa de sus leguas, de sus culturas y de sus normas y procedimientos propios. El concepto de Estado plurinacional viene de

estas luchas de los pueblos indígenas. Descalificar esta lucha y sus logros políticos y conceptuales, que se expresan en otra perspectiva de transición pos-capitalista, como es la del Estado plurinacional, Estado en transición, no es más que reproducir prejuicios coloniales. No se tiene todavía la experiencia del Estado plurinacional, pues este Estado no ha sido construido, ni en Bolivia, ni en Ecuador. Lo que se ha hecho es preservar y restaurar el Estado-nación, convirtiendo lo plurinacional en un folklore ceremonial y de montaje político. Al respecto es aceptable un debate sobre el Estado plurinacional, sobre su viabilidad, sus posibilidades y alcances transformadores, emancipadores y liberadores. Empero, se trata de un debate, mejor si es teórico, pero no de la reiteración de una diatriba y descalificación prejuiciosa. En lo que coinciden oligarquías, conservadores, nacionalistas, vieja izquierda, ideólogos y funcionarios del gobierno, es que defienden el Estado-nación como único horizonte posible, como fin de la historia. Todos ellos comparten esta perspectiva conservadora, cuya raíz conceptual radica en la razón de Estado. Sergio Almaraz Paz tenía una virtud, entre otras, haber comprendido que una revolución estaba en marcha, a pesar de sus contradicciones. Parte del trotskismo de entonces también comprendió que esto ocurría, hizo entrismo en el MNR, para posteriormente dividir el partido y atraerlos hacia la conformación del partido revolucionario. Los “entristas” quedaron atrapados en el magma del MNR, siguiendo una ruta sinuosa que Sergio Almaraz llamó el tiempo de las cosas pequeñas. Sergio Almaraz, militante de la juventud del PIR, responsable de la célula Lenin, fundador del Partido Comunista, después expulsado de éste, entre otras cosas por leer más a Camus que a Kostantinov[6], ingresa al MNR, partido destinado a hundir una revolución hecha por obreros, campesinos y sectores populares urbanos. En este drama político, no se puede escapar a la seducción de la revolución, de comprometerse y entrelazarse con una revolución popular; la revolución interpela, convoca, exige que se tenga una actitud clara con ella. Muchos se desentendieron dela revolución y se apartaron de las masas. Con esto no se dice, de ninguna manera, que había que entrar entonces al MNR, ya sea como “entristas” o como lo ha hecho Sergio Almaraz. Sencillamente se dice que no se podía ignorarla, como lo hicieron quienes se desconectaron de ella, desconectándose también de las masas. Ahora también hay quienes ignoran lo que ha ocurrido entre el 2000 y el 2005 con la movilización prolongada. Esta movilización de las multitudes, de los sindicatos campesinos, de las naciones y pueblos indígenas originarios, de los sectores populares urbanos y de los trabajadores mineros, es un acontecimiento insurreccional. Este acontecimiento político ha puesto en evidencia la crisis múltiple del Estado-nación, este acontecimiento insurreccional ha puesto en mesa todos los problemas no resueltos, todas las luchas y reivindicaciones, las antiguas guerras inconclusas y la presente guerra contra el Imperio. Las dos consignas claras de esta movilización se expresaron en las agendas de los movimientos sociales; en la Agenda de Octubre se exige la nacionalización de los recursos naturales, concretamente, de los hidrocarburos; en las agendas de los movimientos sociales se exige la convocatoria a la Asamblea Constituyente, reivindicación que viene de parte de las organizaciones indígenas y de los cabildos de la guerra del agua en Cochabamba. En otras palabras, se articularon el proyecto indígena de descolonización y el proyecto nacional-popular. Esta articulación no fue dada en el marco de la “ideología” nacionalista; todo lo contrario, fue elaborada en una perspectiva pluralista. No se puede desconocer y despreciar esta perspectiva colectiva, esta construcción política colectiva, este saber colectivo, más aún, a nombre de un nacionalismo que se remonta a la primera mitad del siglo XX, nacionalismo que no ha salido de sus contradicciones y de sus enrevesadas relaciones con el imperialismo que decía combatir. La razón de Estado La razón de Estado es, en primer lugar, la aparición de una forma de gobierno que ya no es el gobierno de sí mismo, el gobierno de la familia y el gobierno de la ciudad, en el sentido de la la Grecia antigua; tampoco corresponde al gobierno pastoral, al gobierno de las almas, al gobierno de la iglesia. Se trata de un gobierno terrenal, que tiene sus propias “leyes”. En segundo lugar, la razón de Estado corresponde a la racionalidad de los políticos, quienes desarrollan un tipo de raciocinio sobre temas de la política, de gobierno, de administración, de políticas públicas. En tercer lugar, la razón de Estado convierte al Estado no sólo en una idea independiente, relativa a un campo de conocimiento, sino también en una “realidad” institucional[7]. La razón de Estado vendría a ser la composición, la estructura y la lógica del Estado; así como también el conocimiento de esta composición, estructura y lógica, de su funcionamiento. La razón de Estado concibe al Estado fuera del campo natural, fuera de la esfera divina, forma parte de la esfera terrenal, definiendo un campo propio, el del Estado, el campo institucional. La razón del Estado es el saber sobre el Estado, más o

menos planteando el conocimiento de su “esencia”. La razón de Estado es conservadora, se propone conservar al Estado y se propone el Estado como fin mismo. La razón de Estado no se plantea como problema el origen del Estado o su culminación, se trata, mas bien, de una concepción de tiempo indefinido del Estado. La razón de Estado se propone la paz, pero no la paz del imperio, sino la paz entre los estados, la paz pensada como equilibrio entre los estados, es decir, como diplomacia. Lo más peculiar de la razón de Estado es que descubre lo intrínseco al Estado, esto es, su carácter de excepción; el Estado de excepción, su facultad inherente de suspender las leyes y los derechos para gobernar[8]. La razón de Estado se manifiesta elocuentemente en el teatro político, en los montajes ceremoniales del poder. El Estado se muestra apabullantemente a plena luz del día o sigilosamente en las tinieblas de la noche, protagonizando con imágenes desmesuradas el papel dramático de la política, de una manera desmedida y presumiendo omnipresencia. Así como la razón de Estado es la exigencia de obediencia al pueblo, quien puede sublevarse, revelarse, movilizarse, a partir del descontento. Entonces, la razón de Estado es también la administración de las causas del conflicto, comprendiendo tanto las causas estructurales como las ocasionales. El pueblo aparece a la razón de Estado con sus dos rostros; como sujeto de legitimación de sus actos o, al contrario, como interpelación de los mismos[9]. Los nacionalistas no cuestionan el Estado, mas bien son una de sus expresiones más acabadas, una de sus “ideologías” más elaboradas; este es el límite del nacionalismo, aquí acaba su función emancipadora, a partir de aquí su papel no solo es conservador sino hasta reaccionario. Recurre a la razón del Estado, a la necesidad del Estado, al Estado de sitio, a la suspensión de las leyes y los derechos para salvar al Estado. Se acepta la violencia del Estado para salvar los temas estratégicos, desechando los que considera temas pequeños; se sacrifica a unos, que estorban, para mantener a otros, que considera el Estado que son necesarios. A diferencia de los socialistas, por lo menos los socialistas marxistas, aquellos que se llamaron comunistas, que se plantearon, como postulado en el Manifiesto comunista, la destrucción del Estado, sustituido por la asociación de productores, los nacionalistas no cuestionan el Estado. Empero los socialistas resultaron socialistas inconsecuentes al agarrarse del Estado para defenderse, al optar por el Estado para establecer la dictadura del proletariado, quedando atrapados en el funcionamiento de sus engranajes y su fabulosa maquinaria, volviéndose también extremadamente estatalistas. Es cuando el socialismo se convierte en reaccionario y represivo. El problema en ambos casos es ciertamente su límite, que no pueden cruzar, el Estado; problema que también se puede interpretar a partir de una pregunta que no se responden: ¿Cómo continuar con la emancipación, cómo convertirla en liberación? En Bolivia y, al parecer, en América Latina, los nacionalistas se apegan al verdugo que dicen combatir. Dicen defender los recursos naturales de su despojamiento imperialista; empero, cuando nacionalizan las empresas transnacionales que explotan los recursos, continúan con el modelo extractivista, volviendo a entregar los recursos naturales a la vorágine capitalista, sólo que lo hacen en otras condiciones, después de haber disputado los términos de intercambio. Es cuando el nacionalismo se embarca en un discurso encubridor, atiborrado de justificaciones, inventando seudo-teorías de la revolución por etapas, prolongando la dependencia. Este nacionalismo, que se dice de soberanía, no hace otra cosa que manifestar dramáticamente su incapacidad para defender la soberanía. En definitiva, en las periferias del sistemamundo capitalista el nacionalismo ha servido para reforzar la dominación imperialista, investida ahora con una aparente continuación de la lucha anti-imperialista, mostrando nacionalizaciones que no continúan con la transformación del modelo productivo, que no puede ser otro que salir del modelo extractivismo. Decir ahora que los pueblos indígenas, sus derechos, constitucionalizados, son los mejores aliados del imperialismo, porque detrás de sus planteamientos están las ONGs es no solo un argumento insostenible, sino también un discurso colonial. Ahora, el mejor argumento de las empresas trasnacionales, mineras e hidrocarburíferas, que encuentran en la consulta con consentimiento y previa, que encuentran en los derechos indígenas, que encuentran en los territorios indígenas un obstáculo para sus inversiones y su explotación. Los nacionalistas, coincidiendo con las empresas trasnacionales, encuentran en los pueblos indígenas un obstáculo al desarrollo. ¿No es este un acuerdo imperialista, entre los nacionalistas, los nuevos cipayos, y las empresas trasnacionales, apoyadas por el sistema financiero mundial? Atacar a los pueblos indígenas es atacar a los sujetos sociales que se han levantado contra el capitalismo desde la guerrilla en la selva Lacandona hasta la movilización prolongada boliviana, en defensa de la madre tierra. La lucha anti-imperialista concreta, la lucha anticapitalista efectiva, viene efectuada por los pueblos

indígenas, así como también por movimientos sociales anti-sistémicos no-estatalistas, por lo tanto nonacionalistas, movimientos sociales anti-sistémicos pluralistas. ¿Es un problema el mestizaje? La llamada oposición y el gobierno se entrabaron en una discusión, que me parece estéril; si se incluía o no en el listado de pueblos indígenas a la categoría mestizos. Cuando el problema no era este. Técnicamente el problema planteado desde el censo de 2001, que incluye la pregunta, era que se trataba de una pregunta de opinión, que merece otro tipo de tratamiento; una metodología para preguntas de opinión, que requieren de un paquete metodológico, incluyendo preguntas de control. Sin embargo, extraña que no se haya tenido en cuenta la encuesta socio-étnica y demográfica, realizada a fines de los años noventa, con el objeto de cubrir a la población de los llamados pueblos nativos. Allí se captan varias características, mediante una boleta con preguntas objetivas, sujetas a verificación en sitio. Se trataba de introducir en la boleta censal, del censo que venía, un paquete de preguntas que permitan captar características de los pueblos indígenas, no solamente los tamaños. Sin embargo, no se sabe por qué se optó por una pregunta de opinión, aislada, que además iba a dar resultados muestréales. El mismo problema se mantuvo once años después, en el Censo de Población y Vivienda de 2012. ¿Por qué? No se sabe por qué no les interesa a los organizadores del censo discutir temas estratégicos que afectan a toda la población. Prefirieron optar por decisiones arbitrarias, derivadas del ejecutivo, que tiene escaso conocimiento de la metodología de los censos, mucho menos de demografía. La introducción de la categoría mestizos en el listado no resolvía, obviamente, los problemas estadísticos heredados. ¿Es un problema saber si son mayoría los mestizos o los indígenas? ¿No es este, mas bien, un problema de poder? Hay en esta situación algunas alternativas; que sean mayoría los indígenas, sin embargo, minoría política; que sean mayoría los mestizos, sin embargo, ahora se sienten minoría política; ¿por qué? Una tercera alternativa, que ambos sean mayorías y minorías, en unos casos demográficas, en otros casos, políticas, dependiendo de la territorialidad. ¿Qué significa esto en términos políticos? ¿No se puede plantear la cuestión de otra manera? Por ejemplo, que todos sean mayorías políticas, mejor dicho que todos sean minorías políticas[10], bajo una concepción pluralista de la política. Esta discusión sobre quien es mayoría nos muestra que no se ha entendido el espíritu constituyente, la episteme pluralista, en el que mueve la Constitución. Como dijimos más arriba, sobre los resultados cuestionables del censo, que no fue censo sino una enumeración incompleta, con un margen de sub-registro, por lo tanto de sub-numeración, por falta de actualización cartográfica, que podría moverse entre el 10% al 30%, no se puede discutir nada. Hay que hacer un censo de verdad, con amplia participación de la ciudadanía. El vicepresidente, en el discurso del 6 de agosto ante el Congreso, en Cochabamba, dijo, refiriéndose a los resultados censales, sobre todo a este tema de la proporción de indígenas y mestizos, que mestizos es una categoría colonial de tributación, refiriéndose, seguramente, a la clasificación de la tributación “indígenal” colonial. Bueno, no sólo, pues es un término usado de manera polisémica. Ahora bien, toda clasificación racial es obviamente colonial, ahí entran los términos raciales de blanco, de color, mestizo y también indígena. Todas estas categorías son coloniales. El objetivo de abrir el censo para la cuantificación de los pueblos indígenas, en principio, nuca fue cuantos son indígenas y cuántos son mestizos, sino cuáles son las características de los pueblos nativos en su distribución territorial, rural y urbana, y que impacto estadístico tenían estas características. La incorporación de las poblaciones nativas formaba parte de la incorporación de paquetes metodológicos para producir indicadores específicos y diferenciales, con el objeto de apoyar la definición de las políticas públicas. Todo esto, que forma parte del estudio de las poblaciones, ha quedado inhibido, y se ha preferido optar por preguntas de interés político. Esta discusión estrambótica, sobre mestizos e indígenas, entre la oposición y el gobierno, se puede resolver con una aproximación; ¿Cuántos hablan lengua nativa, cuantos hablan castellano, cuántos son bilingües y hasta trilingües? Empero, lo que está en cuestión es la representación de los pueblos indígenas, de acuerdo a normas y procedimientos propios, representación donde deberían estar todas las naciones y pueblos indígenas; de lo contrario no tiene sentido hablar de Estado plurinacional, menos de Asamblea Legislativa Plurinacional. Las minorías no se representan porque son más o porque son menos, bajo el criterio de la democracia pluralista, las minorías se representan precisamente porque son minorías. Las mayorías ya están representadas. Este tema es agudo para tierras bajas, también cuando hablamos de tierras altas, en el caso

de los urus, de los chipayas y otros pueblos indígenas andinos. Una verdadera discusión democrática es esta y no si los mestizos son mayoría o los indígenas, que es una discusión en todo caso colonial. El vicepresidente también ha dicho que todos somos bolivianos, sólo que unos son bolivianos, en general, y otros son bolivianos con identidad particular. ¿Qué es esto? ¿Quiere decir que unos son bolivianos del Estado-nación y otros, además de ser bolivianos del Estado-nación, son también bolivianos de sus naciones y pueblos indígenas? ¿Así se resuelve el problema? Este argumento es parte de la concepción nacionalista del vicepresidente. De lo que se trata es de saber de qué manera, de qué forma, se concreta, se institucionaliza, la condición plurinacional de los ciudadanos bolivianos. El discurso del vicepresidente nos muestra cuán lejos estamos de la construcción del Estado plurinacional. Lo que no se da cuenta el vicepresidente al decir, ingenuamente, que unos son bolivianos en general y otros bolivianos con identidad particular, con identidad indígena, dice, concretamente, que unos son mestizos en general y otros son mestizos con identidad indígena. ¿Qué es ser boliviano sino mestizo? El Estado-nación de Bolivia, que nace a la independencia en 1825, como república de Bolívar, algo así, en el imaginario político de los nombres, como la esposa de Simón Bolívar, se consolida como Estado-nación cuando la república se hace nacional-popular con la revolución de 1952, después de un interregno “bárbaro” desatado por los “caudillos ilustrados” y después del lapso republicano liberal, dado con la culminación de la guerra Federal. Este Estado-nación y esta república popular constituyen e instituyen una nación mestiza. Entonces ser boliviano es ser mestizo y mestiza. ¿Se explica estas contradicciones del vicepresidente por el desborde del inconsciente? El inconsciente se filtra a través del lenguaje, está en el lenguaje como su sentido oculto. ¿O se explican por una ingenuidad patética, que se esconde en una pretendida soberbia desmedida?Notas: [1] Revisar de Raúl Prada Alcoreza ¿Censo o enumeración incompleta? Bolpress, Rebelión, Horizontes nómadas, Dinámicas moleculares; La Paz 2013. [2] Ver Benedict Anderson, Imagined Communities: Reflections on the Origin and Spread of Nationalism (London: Verso, 1983). [3] En el marxismo austriaco se llama capitalismo de Estado a la articulación entre Estado y capital financiero, en las condiciones de la masiva concentración y alta centralización del capital que lleva al monopolio expandido de gigantescas empresas capitalistas. En América Latina llamamos capitalismo de Estado a la forma política y económica donde el Estado es el administrador de empresas públicas estratégicas, sobre la base de las nacionalizaciones. [4] Ver de Luis H. Antezana Sistemas y procesos ideológicos en Bolivia (1935-1979). En Bolivia hoy; Siglo XXI; México 1983. [5] Ver de Raúl Prada Alcoreza Genealogía de la dependencia. Horizontes nómadas, Dinámicas moleculares; La Paz 2012. En el capítulo sobre Episteme boliviana se define esta formación enunciativa como el saber sobre lo que se llama la “realidad” social, la formación histórica social y económica, obviamente de la época, correspondiente al horizonte histórico cultural del momento. La composición de esta episteme boliviana es diversa; están los aportes de los teóricos del nacionalismo revolucionario, los aportes teóricos del marxismo, los aportes de las tesis indianistas. Todos discursos que tenían como utopía a la nación, en el caso de los nacionalistas, como problema a la nación, como el caso del marxismo, como referente colonial, como en el caso del indianismo. Discursos sustancialistas, con pretensiones de verdad. Es esta episteme local la que logra el conocimiento de la formación social de la época. Aunque contrasten, se opongan, conforman polémicamente esta episteme. [6] Argumento vertido en la carta de expulsión de Sergio Almaraz del Partido Comunista. [7] Revisar de Michel Foucault Seguridad, territorio y población. Curso en el Collège de France (1977-1978). Fondo de Cultura Económica 2006; Buenos Aires. Particularmente las clases del 8, del 15 y del 22 de marzo de 1978. [8] Ibídem. [9] Ibídem. [10] La minoridad o la reivindicación de múltiples minorías que se oponen al efecto masivo de una mayoría estadística, que termina legitimando el poder, es parte de los enunciados de las teorías nómadas.

CÓMO PERDER EL TIEMPO ESTUDIANDO NIMIEDADES, SIN CONTACTO CON LA REALIDAD DEL MUNDO Y SUS PROBLEMAS IMPOSTURAS POSTMODERNAS E IZQUIERDA POLÍTICA Andrés Huergo http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2013080804 (Rebelión).- La producción filosófica de las últimas cuatro décadas se ha caracterizado, a grandes rasgos, por un tipo de discurso carente de sistematicidad, proclive a la fantasía y la elucubración, amante de los circunloquios y los retorcimientos sofísticos, en el que la ciencia apenas tiene lugar y, cuando lo tiene, no pasa de ser una amalgama de conceptos mal entendidos e interpretaciones absolutamente disparatadas. La inanidad general de la filosofía de nuestros tiempos se comprende mejor cuando se pone en relación con ese movimiento que se dio a sí mismo el nombre de “postmodernidad”. La gran tesis postmoderna es el rechazo de la unidad de la razón, lo que lleva implícito el relativismo. El relativismo tiene dos vertientes: la cognitiva y la ética. El relativismo cognitivo nos dice que no hay verdades universales y -aún peor- que ni siquiera el concepto de verdad es universalmente válido; que no es posible conocer el mundo tal cual es y que todo lo que llamamos “real” es resultado de una pura construcción sociolingüística. El relativismo ético nos dice que tampoco hay valores morales comunes y que no es posible ni siquiera llegar a un acuerdo sobre principios éticos válidos para todos los seres humanos. El relativismo cognitivo llega a negar la propia independencia epistemológica de la ciencia, a la cual presenta como una narración más entre otras. Lo que quiere decir que la ciencia no sería más que un relato indisolublemente ligado a un tipo concreto de sociedad, la sociedad occidental industrial capitalista, fuera de la cual aquélla pierde su sentido y validez. No hay razones objetivas, por tanto, para preferir la explicación de la lluvia que nos proporciona el meteorólogo a la explicación mítica del chamán que cree poder provocarla o evitarla con sus “mágicas” capacidades. No es extraño que al amparo de las ideas postmodernas hayan proliferado de forma espectacular las pseudociencias y todo tipo de creencias supersticiosas: el creacionismo, la parapsicología, la homeopatía, la medicina holística, la cartomancia, interpretaciones espiritualistas de la física cuántica, “pensamiento new age”, etc. Los autores postmodernos rehúyen de manera deliberada la claridad expositiva y la precisión, siguiendo en esto a Nietzsche, quien reprochaba a Stuart Mill el hecho de que fuera demasiado claro. Prefieren hacer uso de una jerigonza pedante, críptica, abstrusa, extravagante, escurridiza e impenetrable. Sostienen una concepción de la filosofía de tipo esotérico, según la cual ésta sería una especie de revelación de una verdad arcana que solamente unos pocos privilegiados pueden alcanzar y ante la cual los demás (los no iniciados) no pueden sino asentir de manera totalmente pasiva. Es necesario aclarar, sin embargo, que cualquier filosofía que base su prestigio en argumentos de autoridad y en afirmaciones ininteligibles es todo lo contrario de lo que debe ser una filosofía comprometida con la justicia y la libertad. Si la filosofía se hace oscura, inmediatamente deja de cumplir su cometido críticoemancipador y se convierte en una estafa, porque solamente servirá a los designios de una élite cultural determinada y no al conjunto de los ciudadanos a quienes potencialmente va destinado el producto de sus reflexiones. Son particularmente notables las consecuencias que la postmodernidad ha tenido en la práctica política a través de la asimilación de sus ideas por parte de un considerable número de personas vinculadas a la “izquierda” política. Noam Chomsky, refiriéndose a este fenómeno hace veinte años, dijo: “Los intelectuales de izquierda participaron activamente en la vida animada de la cultura obrera. Algunos buscaron compensar el carácter de clase de las instituciones culturales con programas de educación obreros o mediante obras de divulgación —que conocieron un éxito muy grande— sobre matemáticas, ciencias y otros temas. Es hiriente constatar que hoy en día sus pretendidos herederos a menudo privan a los trabajadores de estos instrumentos de emancipación, informándonos, de paso, de que el ‘proyecto de los Enciclopedistas’ está muerto, que hay que abandonar las ‘ilusiones’ de la ciencia y de la racionalidad. Será

un mensaje que hará felices a los poderosos, satisfechos de monopolizar esos instrumentos para su propio uso”. (1) La Enciclopedia ilustrada fue concebida como un proyecto grandioso de acumulación de saber con un claro objetivo político y social: la crítica al oscurantismo religioso y al sistema de privilegios del Antiguo Régimen y la defensa de una nueva sociedad basada en el “progreso” de las ciencias y las artes, el mérito y los frutos del trabajo. Voltaire, D‘alembert, Diderot, D‘Holbach, Helvetius, Franklin, Jefferson, Cesare Beccaria y todas las grandes figuras del siglo XVIII tenían muy claro que sin las luces de la razón la humanidad estaba condenada a permanecer para siempre en un eterno estado de minoría de edad. Diríase que hoy, a la vista del rechazo de la ciencia y del universalismo ético por parte de gran número de filósofos, lo que se ha llamado “postmodernidad” no es más que una vuelta a la premodernidad, a la Edad Media. Estos nuevos “bárbaros” (como acertadamente los llama Mario Bunge) pretenden devolver al mundo a épocas de brumas y tenebrosidad. Pero el mundo no puede avanzar sin ciencia ni razón. La renuncia al conocimiento científico hace inviable cualquier proyecto serio de crítica a los poderes político-económico establecidos. Las personas que no se ilustran en el conocimiento de la ciencia y de la filosofía sistemática no disponen de instrumentos analíticos ni herramientas conceptuales para entender nada de lo que ocurre a su alrederor. No son capaces de identificar las causas de los hechos sociales ni los mecanismos por los cuales se producen las diferentes formas de dominación. Y si no pueden entender lo que ocurre, tampoco pueden elaborar formas de respuesta eficaces, ni por supuesto son capaces de plantear proyectos de construcción de una sociedad alternativa, puesto que no saben lo que tienen que cambiar ni cómo hacerlo. Millones de personas están hoy huérfanas de pensamiento sólido. (2) Lejos quedan aquellos años de Universidades obreras y Ateneos libertarios en los que los trabajadores adquirían los conocimientos de las más diversas disciplinas y la formación humanística pertinente que les había sido negada por su condición social. Desde luego, cabe atribuir a muchos de los “intelectuales” parte de la culpa de esta situación, por no haber estado a la altura de los tiempos para ofrecer a los ciudadanos una cosmovisión coherente con lo que los tiempos estaban demandando. Tras el desprestigio académico del marxismo (debido en gran parte al fracaso del sistema soviético, pero también a su osificación teórica), la izquierda buscó su propio discurso en terrenos ajenos al materialismo. En realidad, la aceptación de los mantras de la postmodernidad (relativismo, subjetivismo, irracionalismo) por parte de la izquierda se empezó a producir antes de la pérdida de hegemonía intelectual del materialismo histórico y dialéctico. El viraje se comenzó a gestar en los años sesenta, a partir de la irrupción de los llamados “nuevos movimientos sociales”. Fue el momento del nacimiento de la “nueva izquierda”, insatisfecha ante una doctrina marxista cada vez más anquilosada y unos partidos políticos demasiado vinculados a formas burocratizadas del Estado que hacían inviable la verdadera revolución en todos los órdenes, tal como era el deseo de los integrantes de esos movimientos sociales (estudiantes, feministas, ecologistas, homosexuales, etc.), cuyas demandas no habían sido suficientemente atendidas hasta entonces por parte de los teóricos marxistas clásicos. El problema es que esta nueva izquierda sustituyó muchas veces el dogmatismo de cierta escolástica marxista por un nihilismo de consecuencias igualmente desastrosas. En lugar de dar a luz un nuevo tipo de ideología, compatible con el desarrollo de la ciencia y la técnica y con los principios innegociables del humanismo ilustrado, renunció a toda Ilustración, ignorando de esa forma su propia tradición y razón de ser. Todos los movimientos obreros de distinta índole (socialistas, comunistas y anarquistas), habían sido hasta hace algunas décadas conscientes de su deuda con los ideales de la Ilustración dieciochesca. Consideraban que el capitalismo era una traición a la Ilustración y, por consiguiente, asumían la posibilidad de la separación de la ciencia y de la técnica del discurso ideológico capitalista, con la intención de librar a la razón del afán de dominación economicista y ponerla al servicio de la emancipación del ser humano, haciendo justicia de este modo al proyecto ilustrado originario. Sin embargo, en el seno de la “izquierda académica” se produjo una inversión de los valores éticos y epistémicos tradicionales de la “izquierda política”. Como nos cuenta Antoni Domènech, “así como las necesidades de propaganda de los bolcheviques acosados por la Entente a comienzos de los años 20 les llevaron a regalar de barato a la “burguesía”, al “liberalismo” y al “capitalismo” la “democracia” –es decir, el grueso de las luchas obreras europeas hasta 1914—, así también, pero sin necesidad perentoria alguna que pudiera venir a justificarlo, Adorno y Horkheimer obsequiaron al “capitalismo” con la “Ilustración”. (3)

A juicio de Domènech, el origen académico de la reacción antiilustrada estaría en Dialéctica de la Ilustración, obra en la que los autores de la Escuela de Franckfurt realizan una crítica total de la razón como mero instrumento de dominio de la naturaleza. Esta operación de desprestigio de lo racional sería posteriormente consolidada por Heidegger y sus acólitos, quienes se tragaron el antihumanismo del alemán hasta sus últimas consecuencias. “Demasiada” racionalidad (no la ausencia de ella) fue la causa de la barbarie humana, según el dictum postmoderno. Los “críticos de la razón” llegaron a la conclusión de que los campos de concentración nazis fueron un producto de la tecnociencia, no de la falta de valores éticos, ni de la insuficiencia de la democracia, ni de un sistema económico generador de miseria y servidumbre. De ahí en adelante, de la mano de Foucault, Derrida, Deleuze, Lacan, Lyotard, Baudrillard, Feyerabend, Khun, Latour y otros muchos, la filosofía renunció a la verdadera crítica, abrazó el irracionalismo sin límites y dio cancha a la pseudociencia, el fraude y la pereza mental, como consecuencia de un ejercicio de deshonestidad intelectual solamente parangonable con su falta de fortaleza ética. La huida hacia el relativismo de gran parte de esta autodenominada “izquierda” dinamitó todo el potencial de transformación de las capas populares al tener como consecuencia la separación de intereses entre movimientos, el individualismo y la ausencia de propuestas sustantivas y serias. En lugar de centrar sus esfuerzos intelectuales en producir conocimiento, indagar en la búsqueda de la verdad y difundir por todos los medios esa verdad para ponerla a disposición de la gente, los filósofos se han estado divirtiendo en sus academias a costa del erario público que ha sostenido sus salarios de funcionarios conspicuos al servicio de la maquinaria del Estado. La mayoría de estos “mercenarios intelectuales” prefirieron delegar sus responsabilidades y optaron por ocupar su tiempo en menudencias: análisis espurios del discurso, trabajos antropológicos de campo basados en la reflexión del observador sobre sí mismo, divagaciones sobre el carácter falocéntrico de la mecánica de sólidos, estudios acerca del uso del dildo como práctica de sexualidad performativa socialmente transgresora y otras cosas por el estilo, tareas todas ellas, suponemos, muy “edificantes” para quienes se ejercitan en ellas, pero absolutamente fútiles desde el punto de vista del conocimiento y totalmente irrelevantes para la consecución de una sociedad más justa. (4) Y así, la sociología constructivista, la etnografía relativista, la deconstrucción, el pensamiento débil, la epistemología feminista, la teoría queer y otras tendencias de parecido pelaje consiguieron consolidarse como “paradigmas” de pensamiento crítico en las facultades de ciencias sociales y humanidades de muchas Universidades, para desgracia de éstas. Es curioso (y da que pensar) que todas estas teorías postmodernas se hayan desarrollado en los últimos años al abrigo de la subvención estatal y el cobijo administrativo, a pesar de presentarse muchas de ellas como “críticas radicales del sistema”. Los enemigos de la razón y de la ciencia no se limitan a atacarlas solamente desde fuera, sino que ahora, gracias al relativo prestigio ganado en la Academia, pueden atacarlas también desde dentro, lo que es mucho más grave. Como apunta Mario Bunge: “Otrora los impostores intelectuales tenían que ganarse su modesto pasar en la calle, donde embaucaban a los que no podían pagarse una educación universitaria. Hoy pueden cobrar sueldos decorosos y embaucar a jóvenes incautos que asisten a cursos universitarios creyendo que van a aprender conocimientos sólidos”. (5) Mientras el intelectual pierde el tiempo estudiando nimiedades, se aísla en su “torre de marfil” y pierde el contacto con la realidad del mundo y sus problemas. Como la objetividad no es más que una construcción del investigador, se desplaza el centro de interés desde las cuestiones en torno a hechos políticos y económicos hasta las cuestiones puramente lingüísticas. Se sustituyen las realidades sociales por los discursos sobre dichas realidades. La postmodernidad ha propiciado una manera de hacer filosofía que consiste en atenerse única y exclusivamente al comentario de los textos de otros filósofos, normalmente con preferencia por algunos considerados “sagrados”. Así, se han creado especialistas en Foucault o Derrida que creen estar haciendo algo importante porque pueden citar de memoria fragmentos enteros de las obras de estos autores, como si dichos autores fueran depositarios de una sabiduría universal, eterna, fuente inagotable de “soluciones” para todo tiempo y lugar. De esta manera, la filosofía puede permanecer encerrada en sí misma sin preocuparse de nada de lo que acontece fuera de ella y sin tomar contacto ni por un momento con ninguno de los hechos del mundo. Es una filosofía para filósofos alejada completamente de la realidad del presente. Si la realidad no existe y todo vale por igual, entonces a cualquiera que quiera indagar en el conocimiento de alguna cosa simplemente le basta con sentarse en el sofá de su salón y divagar y escribir todo lo que se le ocurra. Si el conocimiento es solamente un relato, un mito, el trabajo de un historiador que se ocupa de

fundamentar sus opiniones en el análisis escrupuloso de los documentos tiene el mismo valor que el de alguien que extrae sus conclusiones de una obra de literatura fantástica sin haber palpado un solo archivo histórico. Con la coartada del subjetivismo, también la explotación y la injusticia comienzan a perder su carácter real. Si la opresión del gran capital sobre los trabajadores no es más que un discurso entre otros, entonces la búsqueda de una explicación que indague en las causas objetivas, históricas, de dicha opresión está fuera de lugar y, además, la propia existencia de la opresión es puesta en duda, porque pudiera ser que la bajada de salario que yo percibo como injusta no lo sea, pues no existe un concepto universalmente válido de justicia, no hay necesidades objetivas (por ejemplo la necesidad de salud o de alimento), mi interpretación no es más válida que la de mi adversario, etc. Finalmente, puesto que la realidad social es del todo incierta e imprevisible, es inútil que me involucre para cambiarla. Únicamente tiene sentido que me ejercite en cambiar “mi propia realidad”. Como señalaron Alan Sokal y Jean Bricmont en su imprescindible obra Imposturas intelectuales, si la izquierda política quiere hoy ser algo más que una fantasía masturbatoria totalmente ajena a la realidad, es necesario “combatir la actual moda del discurso posmoderno/postestructuralista/socialconstructivista (y, más en general, una tendencia al subjetivismo)” (6), que en opinión de los autores, como en la mía, es “contrario a los valores de la izquierda y una hipoteca para el futuro de ésta”. (7) Y como más adelante precisan: “Ninguna izquierda puede ser eficaz si no toma en serio las cuestiones relativas a hechos científicos y a los valores éticos y a intereses económicos. Lo que está en juego es demasiado importante como para dejarlo en manos de los capitalistas o los científicos (o los posmodernos)”. (8) El principio democrático-liberal de tolerancia ha dado lugar a formas abusivas de aplicación, como cuando se dice “todas las opiniones son igualmente respetables”. Pero la negación del Holocausto no es una opinión respetable, como tampoco lo es la creencia en la superioridad de los blancos sobre los negros. No son las opiniones las que merecen respeto, sino en todo caso las personas que las emiten. La tolerancia se ejerce sobre el derecho a expresión, no sobre el contenido mismo de lo expresado. Por ello la tolerancia es un valor positivo que implica tanto el respeto activo hacia las personas como la libre crítica de las ideas que dichas personas sostienen. Debemos ser transigentes con el error, pero no con la impostura. Hemos de pelear contra esta última con todas las armas a nuestro alcance, que son las armas de la razón. Adiós a la postmodernidad Durante algún tiempo la corriente de la autodenominada “postmodernidad” se impuso como una moda fulgurante en prácticamente todos los ámbitos de la vida y el pensamiento: la filosofía, la ciencia, el cine, la música, la literatura... Todo era postmoderno. A finales de los años setenta, en su obra La condición postmoderna , Lyotard proclamaba al mundo la muerte de los “grandes relatos”. La Modernidad se había construido, según él, en torno a “metarrelatos” que convergían en la necesidad de emancipar a la humanidad y que tenían como finalidad práctica legitimar las costumbres morales, sociales y políticas. El relato cristiano que prometía la salvación a través de la redención divina, el relato ilustrado de la emancipación a través de la luz de la razón y la educación de las masas, el relato liberal-burgués basado en el progreso indefinido de la ciencia y la técnica y, finalmente, el relato marxista de la abolición de la injusticia a través de la socialización de los medios de producción, todos se revelaron como proyectos fallidos y perdieron su credibilidad debido a que ninguno de ellos consiguió cumplir lo que prometía. Con la caída del muro de Berlín, la disolución del régimen comunista de la URSS, seguida del derrumbamiento de todos los regímenes comunistas de Europa del Este y el advenimiento del capitalismo en gran parte del planeta, la división del mundo en dos bloques antagónicos (capitalismo por un lado y comunismo por otro) y el enfrentamiento entre dos ideologías contrapuestas dejaban de tener sentido. El peligro de una hecatombe nuclear había desaparecido y ahora el mundo se alzaba, luminoso y confiado, hacia una paz aparentemente perpetua, hacia el disfrute de una libertad e igualdad sin cortapisas. Francis Fukuyama, a la sazón ideólogo conspicuo del neoliberalismo, certificaba entonces el fin de la historia. La historia como conflictividad, como gran relato de sucesos que enfrentan a unos hombres con otros, a unos grupos sociales con otros, dejaba paso a una multiplicidad infinita y sumamente heterogenea de microhistorias personales, imposibles de subsumir bajo un sentido unívoco o una razón común.

El sistema de libre mercado y la democracia liberal se presentaban ya como únicas formas posibles de organización de la convivencia humana ante la ausencia de mejores alternativas a la vista. El capitalismo traería al mundo la utopía prometida que ningún otro proyecto político ni ideología pudo antes hacer realidad: la de un mundo pletórico de bienes materiales que por doquier colmarían las ansias infinitas de voracidad de una humanidad cada vez más numerosa y cada más proclive a consumir todo cuanto estaba a su alcance. Nunca antes el mundo había disfrutado de niveles de bienestar tan altos... se decía. A finales de los años noventa, cuando este ensueño culminó, Europa y el llamado “Primer Mundo” aparecían triunfantes. Occidente vivía sin preocupación su gigantesco espectáculo de exceso y frivolidad. La posmodernidad nos dijo entonces que no hay hechos sino únicamente interpretaciones. Todo es lingüístico. La sociedad y la realidad misma no son más que construcciones lingüísticas. No hay criterios únicos de validez, sino que éstos son locales, contextuales. La comunicación es caótica, fragmentaria; el mundo mismo que ese lenguaje muestra es fragmentario, no tiene unidad, como tampoco tiene unidad la propia racionalidad. Las culturas son inconmensurables. La ética, el bien común y la justicia no existen, solamente existen infinidad de microcolectividades que reclaman para sí la legitimidad, sin poder llegar a ponerse de acuerdo. El principio de la búsqueda de placer lo domina todo y desaparecen los límites. Todo vale. Zygmunt Bauman designó a este período como “modernidad líquida”: los pilares de la modernidad habían dejado de ser sólidos y en su lugar emergía un nuevo mundo en el que los vínculos eran inestables; las certezas, nulas; la incertidumbre, constante; el relativismo, de todo punto inevitable. Gilles Lipovetsky se refirió a esta época como una “época indolora” caracterizada por una moral sin dolor, sin deberes, sin inconvenientes, únicamente centrada en el disfrute de todo tipo de placeres. El primer conflicto en el golfo Pérsico no alteró demasiado la indolencia de los postmodernos, porque, según Baudrillard, la Guerra de Irak nunca existió: fue una “hiperrealidad”. Años después llegaría el atentado contra las Torres Gemelas de Nueva York y el orden mundial proclamado por los postmodernos se vendría abajo con la misma furibunda violencia con la que se derrumbaron dichas torres. Todavía unos años más tarde, el estallido de la crisis financiera en 2008 acabaría por sembrar el pánico en todo el mundo (especialmente en el occidental) y confirmar lo que muchos ya intuían pero pocos querían reconocer en público: que habíamos estado viviendo una enorme mentira. Y la postmodernidad contribuyó, sin lugar a dudas, a su propagación. No todos los efectos del éxito del pensamiento postmoderno fueron nocivos, lógicamente. Entre las virtudes cabe citar la extensión de los derechos y libertades individuales en las modernas democracias occidentales; el acceso de las clases populares a una buena parte del “confort” material; el rechazo de las ortodoxias y los dogmas y la ampliación de los límites de la tolerancia; el respeto a las diferentes culturas; la relajación de los tabúes y las normas sociales y la “democratización” de las expresiones artísticas. Si bien todo esto tuvo un coste demasiado alto. Es necesario decirlo ya, con la perspectiva que otorga el paso del tiempo, una vez la postmodernidad ha perdido ya toda su fuerza legitimadora y credibilidad que otrora pudo tener: los postmodernos le han hecho el juego a los discursos excluyentes, a planteamientos legitimadores de la opresión y la desigualdad social. Centrarse en la fragmentación, en el nihilismo, en el vacío, tuvo como efecto ignorar que en el mundo se estaban produciendo otros procesos como el proceso de globalización económica y el establecimiento, sin oposición ni crítica, del discurso ideológico que tal proceso conllevaba. Es la aceptación acrítica de la hegemonía capitalista y la democracia liberal pluripartidista, con sus valores de competitividad, productividad, crecimiento ilimitado, demagogia, banalización de la política y mercantilización de la vida en general, lo que la posmodernidad dio por bueno sin ni siquiera plantearse una alternativa, debilitando justamente todo poder de liberación y emancipación al precio de dejar en pie precisamente aquello que debía ser cuestionado: el neoliberalismo, la tecnocracia. Esto es lo que se denominó durante bastante tiempo como “pensamiento único”: la claudicación del pensamiento ante la aparente evidencia de que vivíamos en el mejor de los mundos posibles y que nada podíamos hacer por transformarlo. Lo curioso es que, mientras la postmodernidad se empeñaba en debilitar el pensamiento, relativizándolo todo, el sistema avanzaba y lo hacía de forma implacable, seguro de sí mismo y de su lógica aplastante, arrasando a su paso con todo lo que salía a su encuentro, empezando por el planeta mismo, cuya sostenibilidad a medio/largo plazo es cada vez más dudosa. Justamente la operación postmoderna de diluir

todo vínculo universal y toda unidad, corre en paralelo con el proceso de descomposición y división del trabajo que es inherente a la lógica del capitalismo. El triunfo del capitalismo consolidó la separación de dos esferas: por un lado, una razón científico-técnica basada en el dominio instrumentalista y la experimentación, que nos manda ser altamente productivos, eficaces; por otro, una razón práctica encargada de regular las interacciones humanas. Sin embargo, a pesar de las apariencias en contra, los seres humanos vivimos los diferentes usos de la razón como si estuvieran interconectados, porque no podemos dividir la vida artificialmente en dos y hacer un corte. La razón científico-técnica y la razón ética han de caminar juntas de la mano. Lo que ha ocurrido a lo largo del proceso denominado como Modernidad es que uno de esos miembros del par, la razón instrumental, se ha apoderado de todas las áreas de la vida hasta el punto de arrinconar al otro miembro dejándole poco más que la exigua capacidad de la emoción subjetiva y la exhortación moralista. Para decirlo con otros términos: la Modernidad económica ha desbancado totalmente a la Modernidad cultural. Pareciera como si la única racionalidad posible fuera la basada en el frío cálculo de costes y beneficios. Hasta tal punto que los seres humanos mismos, tratados como si no fueran más que meros objetos, números, cantidades, han acabado siendo dominados unos por otros en aras de un utilitarismo despiadado. Es más, llegados al punto en que actualmente nos hallamos, podemos formular la siguiente tesis: el capitalismo ha entrado en abierta contradicción con la democracia. La organización económica basada en el libre mercado ilimitado y desregulado es incapaz de asegurar el respeto, promoción y realización de los derechos fundamentales y los principios éticos recogidos en la Declaración Universal de 1948. La consecuencia es que el individuo moderno vive su vida de forma esquizofrénica, enfrentado por un lado a los poderes sistémicos que le subyugan y con la necesidad, por otro lado, de encontrar referentes universalmente válidos desde los que denunciar la injusticia, pero sin saber cómo articular esa necesidad de una forma concreta y efectiva. La postmodernidad ha engendrado un mundo de sujetos anómicos, asociales, apáticos, acríticos, indiferentes, que delegan sus responsabilidades sociales y políticas y prefieren que sean otros (los expertos técnicos, los políticos profesionales, los dirigentes del Fondo Monetario Internacional) quienes tomen por ellos sus decisiones más importantes. La infantilización generalizada de la población, la eterna permanencia en la minoría de edad mental, es el rasgo definitorio más ilustrativo de este hecho. El sujeto postmoderno es frágil, provisional, pura simulación. No tiene continuidad. No hay unidad en los “yoes” que lo conforman. La unidad se la confiere el sistema en el que se integra, esa sociedad de consumo que le incita a devorar el mundo entero como si de un gran mercado se tratara, donde todo se puede comprar y vender, donde todo tiene precio, incluidas las personas. Este sujeto sustituye la ética del ser por una ética del tener, en la que la felicidad es sinónimo de consumir de forma ilimitada. El único principio es centrarse en la propia individualidad y disfrutar de la vida sin preocuparse de nada más. Ahora bien, en un mundo caracterizado por la desigualdad y la injusticia, negar esta realidad, darle la espalda, es irresponsable. Replegarse en la subjetividad es la opción más cómoda, claro está. Pero no es la opción más ética, ni tampoco la más inteligente a medio/largo plazo, como evidencia la situación actual por la que atravesamos. La postmodernidad nos recomendó desconfiar de todos los discursos, de todas las ideologías. Se nos decía que las ideologías habían muerto, que no había diferencia entre las izquierdas y las derechas. Y los “hechos consumados” (como gusta decir precisamente a los “políticos prácticos”) nos han demostrado que lo que se jugaba al borrar semejante distinción era ni más ni menos que la libertad humana. Lejos de potenciar el espíritu critico, la postmodernidad sirvió para desactivarlo en buena medida. En el lugar del individuo consciente de sí mismo y del mundo que le circunda, capaz de someter a sospecha los discursos hegemónicos del sistema y rebelarse contra la injusticia, la postmodernidad elevó a categoría de culto, en nombre del subjetivismo y el relativismo, cualquier forma de identidad vivida como propia. Las diferencias se multiplicaron “ad infinitum”, pero olvidando muchas veces que nunca hay verdadero respeto a la diferencia si no estamos preparados para defender, antes que nada, la igualdad de todos los seres humanos desde la base de una condición humana común y un mismo patrón universal de racionalidad. Los postmodernos se quedan en la mera negatividad en su oposición a lo que denominan los grandes relatos de la Modernidad, en lugar de ver el discurso ilustrado como producto de una dialéctica histórica y someterlo a una crítica constructiva con el fin de poner de manifiesto tanto los aspectos negativos como los positivos de dicha dialéctica (es decir, las posibilidades reales de emancipación). De nada sirve sustituir la

tiranía de la razón por la del sentimiento. Esa reacción cae en los mismos excesos que ella critica cuando acaba por absolutizar, en el lugar de todo aquello cuya muerte decreta, nuevos ídolos: la diferencia, el sentimiento, la relatividad, el “todo vale”... No se puede renunciar a la Ilustración ni a la racionalidad científica sin renunciar con ello a todos los avances que ese movimiento nos trajo. Una cosa es denunciar los excesos y errores del racionalismo (el cientificismo, el positivismo, el utopismo escatológico de las historias salvíficas) o sus sesgos partidistas (etnocentrismo, androcentrismo, heterosexismo) y otra cosa renunciar por completo a lo que de positivo pueda tener todavía la razón. Porque sin la razón, sencillamente, no podemos construir nada. No es que no podamos ya valorar lo que es mejor o peor; es que sin ella no podemos ni siquiera atisbar lo que hay, porque solamente la razón es la que nos permite poner el panorama, dibujar el mapa del mundo en el que vivimos. Nuestros tiempos de globalización exigen una ética asimismo global. Ante la colonización del espacio-tiempo por parte de la unidimensional razón economicista, no cabe otro posicionamiento que el de defender una razón ético-política con pretensión de universalidad capaz de servir como estímulo para la construcción de un mundo mejor, más humano, más justo, más compasivo, más integrador. Es imposible enfrentar los retos de la globalización desde una razón débil, pequeña, atrincherada en posiciones localistas y contextualistas y empeñada en invocar identidades cerradas sobre sí mismas. Sin pretensión de universalidad no podemos imaginar siquiera las invisibles líneas de sutura que unen los múltiples fragmentos aparentemente inconexos de la realidad. La relatividad es un hecho. El relativismo, una teoría sobre este hecho. La relatividad de la razón no implica que no haya posibilidad de construir verdades en el ámbito de la ciencia o que sea imposible acordar unos mínimos éticos universales, por ejemplo. Podemos argumentar, podemos entendernos los unos a los otros a pesar de nuestras múltiples diferencias. Hay que admitir el pluralismo como una nota distintiva de toda realidad, pero el pluralismo tiene que estar a su vez contenido dentro de ciertos límites porque no todo vale. Hay que asumir la complejidad y la incertidumbre también. El pensamiento filosófico, la ciencia y el arte del siglo XXI tienen que abrirse a un nuevo paradigma en el que el orden y el caos no sean conceptos mutuamente excluyentes, sino más bien dos caras de una misma moneda. No todo es igual, no todo es nivelable. Es preciso reivindicar un mundo donde el discurso del opresor no sea igual que el del oprimido, donde la verdad no sea igual que la mentira, donde la ciencia no sea igual que la superstición. Conviene ya, después de más de dos décadas de retórica bobalicona y anestésica, recuperar el sentido de la memoria de la historia, no desde la vivencia constrictiva de un sentido finalista y determinista, pero sí desde la vivencia abierta, flexible y también creativa de una utopía social como ideal regulativo, como instancia crítica que nos permita marcar la distancia entre lo que es y lo que debería ser para imaginar posibilidades mejores que las que son el caso. Es momento, pues, de recuperar la herencia humanista e ilustrada que nos constituye. El ansia de novedad de la moda postmoderna nos hizo olvidar que hay cosas que es mejor no olvidar, enseñanzas que siguen plenamente vigentes y de las que podemos extraer, todavía, interesantes lecciones para nuestra vida. Es menester, en definitiva, abogar por una ética basada en la promoción de los tres principales valores que caracterizan la tradición ilustrada: libertad, igualdad y solidaridad. Quizás estos tiempos turbulentos que nos ha tocado vivir sirvan, después de todo, para abjurar definitivamente de esta filosofía disgregadora, narcisista y escasamente solidaria que ha sido la llamada postmodernidad. El contexto actual de crisis sistémica y global nos obliga a revisar nuestros conceptos y nos sitúa ante el reto de dar respuesta a la siguiente pregunta: ¿Cómo vamos a salir de esta situación? La urgencia del presente nos apremia y nos impele a adoptar una actitud ético-política mucho más amplia y generosa en línea con la globalización que caracteriza nuestro mundo; una actitud racional y responsable que sea capaz de tomar parte en un movimiento general lo más abarcador posible con objeto de avanzar decididamente en el efectivo reconocimiento de los derechos fundamentales de las personas y en la realización de una verdadera justicia a nivel planetario. La exigencia de una democracia profunda y una economía al servicio del bien común se convierte en algo imperativo, como nos han recordado una y otra vez los más recientes movimientos sociales en nuestro país. El renacer del espíritu de ciudadanía da alas a quienes piensan -pensamos- que no toda esperanza está perdida. Puede que ésta no sea más que una de las posibilidades que se nos presentan y que ni siquiera tenga el éxito asegurado; hay que admitirlo. La otra opción que se nos ofrece es resignarnos y sentarnos a contemplar la llegada del ocaso, el advenimiento del fin, mientras rememoramos, acaso con nostalgia

romántica, estados de cosas irremisiblemente pasados que ya nunca volverán. Pero yo, que confío en el optimismo de la voluntad, me niego a apostar por esta segunda posibilidad, aun a sabiendas de que el riesgo de perder, y perderlo todo en el camino, existe. De modo que mi apuesta es, claro, la apuesta por un mundo en el que la injusticia y la sinrazón no tengan la última palabra. La apuesta por el ser humano, en definitiva. La apuesta por la afirmación de la vida. Notas: 1. Citado en Daniel Raventós, “Noam Chomsky sobre la revolución cognitiva, el postmodernismo, la libertad de expresión, la democracia y las guerras”, en Sin Permiso, nº 5 2. Traigo a colación intencionadamente la expresión “pensamiento sólido” en referencia polémica al término “modernidad líquida” acuñado por Zygmunt Bauman. 3. Antoni Domènech, “Izquierda académica, democracia republicana e Ilustración. Diálogo con un estudiante mexicano de filosofía” en http://www.sinpermiso.info/textos/index.php?id=1255 4. Los ejemplos son verídicos, aunque cueste creerlo. Según la feminista belga Luce Irigaray, el privilegio de la mecánica de sólidos sobre la de fluidos, y las dificultades de la ciencia con el flujo turbulento, se debe a la asociación de los fluidos con lo femenino: “Mientras los hombres tienen órganos sexuales protuberantes que se ponen rígidos, las mujeres tienen aberturas que liberan sangre menstrual y fluido vaginal. Aunque los hombres en ocasiones también “fluyen” -al expeler semen- esto no se enfatiza (…) Del mismo modo que las mujeres quedan borradas en las teorías y el lenguaje masculino y existen sólo como no hombres, los fluidos han sido también borrados de la ciencia y existen sólo como no sólidos”. Citado en A. Sokal y J. Bricmont, Imposturas intelectuales, Paidós, Barcelona, 1999, p. 117 Beatriz Preciado, célebre representante en nuestro país de la teoría queer, escribe en su obra más conocida: “Sacando partido de la estrategia de Marx, esta investigación sobre el sexo toma como eje temático el análisis de algo que puede parecer marginal: un objeto de plástico que acompaña la vida sexual de ciertas bollos y ciertos gays queers, y que hasta ahora se había considerado una «simple prótesis inventada para paliar la discapacidad sexual de las lesbianas». Estoy hablando del dildo. Robert Venturi había intuido un giro conceptual semejante: la arquitectura debía aprender de Las Vegas. En filosofía es tiempo de aprender del dildo”. V. Beatriz Preciado, Manifiesto contrasexual, Anagrama, Barcelona 2011, p.12 5. Mario Bunge, “Contra el charlatanismo académico”, disponible en http://www.lainsignia.org/2007/febrero/cyt_001.htm 6. Alan Sokal y Jean Bricmont, Imposturas intelectuales, Paidós, Barcelona, 1999, p. 285 7. Ibid., p. 285 8. Ibid., p. 292.

ASEGURAN QUE LA SOLIDARIDAD SALVÓ A LA RAZA HUMANA DE LA EXTINCIÓN ConvenienciaNaturalezaSociedadSolidaridad Rating: 5.0/5 (2 votes cast) La Nación | 07/08/2013 http://iniciativadebate.org/2013/08/08/aseguran-que-la-solidaridad-salvo-a-la-raza-humana-de-laextincion/ El egoísmo no aporta ninguna ventaja evolutiva. Muy por lo contrario, ser una persona colaboradora es una recompensa a largo plazo. Esta es la idea que sugiere una nueva investigación, y que desafía teorías anteriores que indicaban justo lo contrario. Un equipo de científicos de EE.UU. analizó un modelo del “dilema del prisionero”, un problema fundamental de la teoría de juegos, que es el estudio matemático de las estrategias en procesos de decisión. Los investigadores sostienen que su trabajo, publicado en la revista Nature Communications, muestra que la especie humana se habría extinguido si sólo exhibiera características egoístas. La teoría de los juegos plantea escenarios con situaciones de conflicto o cooperación. Esto permite a los científicos desentrañar complejas estrategias de decisión y establecer por qué emergen cierto tipo de comportamientos entre los individuos.

PRISIÓN O LIBERTAD El equipo de la Universidad de Michigan, Estados Unidos, usó el modelo del dilema del prisionero, en el que dos sospechosos que son interrogados en celdas separadas deben decidir si traicionan o no al otro. En este modelo, se ofrece a cada persona la libertad a cambio de delatar al otro, que será condenado a prisión por seis meses. Sin embargo, esto ocurrirá sólo si el oponente elige no delatar. “Ser mezquino puede dar ventajas en el corto plazo, pero ciertamente no a largo plazo. Nos extinguiríamos”, aseguran los científicos Si los dos prisioneros eligen confesar (traición), los dos deberán pasar tres meses en prisión, pero si los dos deciden no hablar (cooperación) los dos obtendrán una pena de sólo un mes de cárcel por falta de pruebas. El matemático estadounidense John Nash demostró que la estrategia óptima para el dilema del prisionero es no cooperar. “Durante muchos años mucha gente se preguntó por qué, si Nash está en lo correcto, vemos cooperación en el reino animal, en los humanos y en el mundo de los microbios”, dice Christoph Adami, autor del estudio e investigador de la Universidad Estatal de Michigan. EXTINCIÓN POR MALDAD La respuesta, según Adami, es que no se ha tenido en cuenta la comunicación. “Los dos prisioneros interrogados no pueden hablar entre ellos. Si lo hicieran, harían un pacto y estarían en libertad en un mes. Pero si no se comunican entre ellos, se ven tentados a delatarse”, explica el investigador.

Coolaborar con el otro, fue la premisa para que el hombre pudiese sobrevivir en un entorno hostil. Foto: AFP “Ser mezquino puede dar ventajas en el corto plazo, pero ciertamente no a largo plazo. Nos extinguiríamos”. Estos hallazgos contradicen los de un estudio de 2012 que sostiene que las personas egoístas sacan ventaja de compañeros más cooperativos. La teoría denominada “estrategia mezquina y egoísta”, se basa en que el participante conozca previamente la decisión de su oponente y adapte la suya en consecuencia. Pero en un entorno evolutivo, conocer la decisión de un oponente no representaría una ventaja por mucho tiempo, ya que éste desarrollaría el mismo mecanismo de reconocimiento para conocer al otro, explica Adami. Los investigadores muestran que la especie humana se habría extinguido si sólo exhibiera características egoístas Esto es exactamente lo que su equipo observó: que cualquier ventaja obtenida de la traición tiene una vida corta. En su trabajo utilizaron un poderoso modelo computarizado para analizar cientos de miles de juegos, simulando un intercambio simple de acciones que tuvieron en cuenta comunicaciones previas. “Lo que modelamos en la computadora eran cosas muy generales, decisiones entre dos comportamientos diferentes. Las llamamos cooperación y traición. Pero en el mundo animal hay toda clase de comportamientos que son binarios, por ejemplo volar o pelear”, le dijo Adami a la BBC. “Es casi como lo que tuvimos durante la Guerra Fría, una carrera armamentística. Pero estas carreras armamentísticas ocurren todo el tiempo en la biología evolutiva.” Y al final, según el investigador, prevalecen los grupos más colaboradores. INSECTOS SOCIALES

A propósito de este nuevo estudio, Adrew Coleman, de la Universidad de Leicester en el Reino Unido, opina que “pone freno a las interpretaciones excesivamente entusiastas” de la anterior teoría, que proponía la ventaja de las estrategias manipulativas y egoístas. “Incluso a Darwin desconcertaba la cooperación que se observa en la naturaleza. Estaba particularmente fascinado por los insectos sociales”, explica Coleman. “Uno puede pensar que la selección natural debe favorecer a los individuos que son explotadores y egoístas, pero de hecho, después de décadas de investigación, sabemos que esta es una visión de las cosas muy simplificada, sobre todo si tenemos en cuenta la teoría del gen egoísta en la evolución”, agrega el experto. “No son los individuos los que deben sobrevivir, sino los genes, y los genes utilizan organismos individuales – animales o humanos- como vehículos para propagarse”, finaliza el científico.. http://www.lanacion.com.ar/1608447-aseguran-que-la-solidaridad-salvo-a-la-raza-humana-de-la-extincion

ENTREVISTA CON MIGUEL ALTIERI, PROFESOR DE LA UNIVERSIDAD DE CALIFORNIA, Y MARC DUFUMIER, PROFESOR EN EL INSTITUTO NACIONAL AGROECONÓMICO DE PARÍS LA CRISIS ALIMENTARIA Y LA AGROECOLOGÍA COMO ALTERNATIVA AL HAMBRE Sally Burch Alai y Amlatina http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172274 Existe un interés creciente, no sólo en el mundo rural sino también en la población urbana, por la agricultura ecológica, debido a su potencial para asegurar una alimentación sana y con menor impacto ambiental. No obstante, hasta ahora se lo ve más bien como una opción marginal del sistema alimentario, mientras se sigue imponiendo la visión de que sólo con la agricultura a gran escala se podría responder a las necesidades alimenticias del mundo. Pero, ¿qué hay de cierto en todo eso? Un primer hecho a notar es que el hambre crónica que se padece en el mundo no se debe a una escasez en la producción de alimentos. En eso las cifras están claras. Cada persona requiere ingerir unas 2,200 kilocalorías por día, para lo cual se necesita producir unos 200 kilos de cereales por habitante por año, o su equivalente en forma de papa, yuca o similares. La producción mundial actual es de 330 kilos por habitante, o sea que hay una sobreproducción de comida, suficiente como para alimentar a 9 mil millones de personas, la cifra de población mundial estimada para el año 2050. Estos datos nos proporcionaron dos investigadores, en sendas entrevistas que realizamos para profundizar sobre las causas de la crisis alimentaria y las alternativas que ofrece la agroecología. Se trata de Miguel Altieri, profesor de la Universidad de California en Berkeley, quien es también presidente de la Sociedad Científica Latinoamericana de Agroecología (Socla); y Marc Dufumier, profesor en el Instituto Nacional Agroeconómico de París, AgroParisTech. Dufumier reconoce que la crisis alimentaria se agudizó en estos últimos cuatro años, “pero ya en 2006 había 800 millones de personas que tenían hambre. Ahora hay un poquito más, pero es estructural, no es una crisis coyuntural”. Afirma: “Es un problema de pobreza en términos monetarios. La gente no tiene poder de compra”. En el mismo sentido, Altieri recalca: “Un tercio de la población humana gana menos de dos dólares por día, entonces no tiene acceso a la comida. En Europa y en EU se bota aproximadamente 115 kilos por persona por año de comida, suficiente para alimentar a toda África”.

Otros factores que contribuyen a la crisis alimentaria, señalados por nuestros entrevistados, incluyen el aumento de la producción agrícola para alimentar a los carros en lugar de las personas; el incremento del consumo de carne (que se extiende ahora en países de gran población como China e India), siendo que se necesitan de tres a 10 calorías alimenticias vegetales para producir una caloría animal; el sistema de distribución de alimentos, y otros problemas estructurales relacionados con el control de las multinacionales sobre el sistema alimentario. Para Altieri, la crisis alimentaria, acoplada a la crisis energética, la ecológica y la social, “es una crisis del capitalismo, de un modelo industrial de agricultura que se basó en premisas que hoy ya no son válidas”. Lo explica en estos términos: “Cuando se crea la revolución verde en los años 1950-60, se crea un modelo de agricultura maltusiano, que percibe el problema del hambre como un problema de mucha población y poca producción de alimentos; y que había que cerrar la brecha trayendo tecnologías del Norte al Sur, como las variedades mejoradas, los fertilizantes, los pesticidas, etcétera. Ellos asumían que el clima iba a ser estable, que el petróleo iba a estar abundante y barato, que el agua iba a estar siempre abundante y que las limitantes naturales de la agricultura, como las plagas, se podían controlar fácilmente. Y así nos encontramos hoy en día con una agricultura que ocupa aproximadamente 1.400 millones de hectáreas en monocultivos altamente dependientes de productos externos, en los cuales los costos de producción varían de acuerdo a como sube el petróleo; donde tenemos más de 500 tipos de plagas resistentes a más de mil pesticidas”. Uno de los resultados es que actualmente en el mundo hay “aproximadamente mil millones de personas hambrientas y por otro lado mil millones de personas obesas, que son víctimas directas del modelo industrial de agricultura”. Es cierto que este modelo, siendo altamente mecanizado, rebaja significativamente los costos directos de producción por hectárea; por lo tanto permite vender alimentos a menor precio a la vez que aumentar las ganancias. No obstante, Dufumier destaca que esto es una trampa, pues no toma en cuenta los costos indirectos: sociales, ambientales, de salud pública, etcétera. Cita el ejemplo de la leche en polvo barata, que “nos cuesta sumamente caro, por la contaminación de los suelos, por el exceso de nitrato en las aguas freáticas, por las hormonas en la leche. Entonces hay lo que los economistas llaman externalidades negativas”, que impactarán en una menor expectativa de vida y en la salud de la población. Altieri estima que en el caso de EU, de internar estos costos, sumarían unos $300 por hectárea de producción. La agroecología como alternativa Frente a este modelo, surge la pregunta: en qué medida la agroecología puede ofrecer soluciones viables; y si se trataría de soluciones parciales o marginales, o si tiene la capacidad de solucionar el hambre. Miguel Altieri aclara: “No me gusta caer en el argumento de si la agroecología podría alimentar el mundo porque, como dije, no es un problema de producción. Con la agroecología podemos producir alimentos suficientes para alimentar al mundo, pero si las inequidades, las fuerzas estructurales que explican el hambre no se solucionan, entonces el hambre continúa, no importa que sigamos produciendo con agroecología”. La agroecología –nos recuerda– "es una ciencia que se basa, por un lado, en el conocimiento tradicional campesino y utiliza también avances de la ciencia agrícola moderna (salvo la biotecnología transgénica y los pesticidas, por supuesto), pero sí los avances que tienen que ver con ecología, con biología del suelo, control biológica de plagas, todo eso se incorpora dentro de la agroecología, y se crea un diálogo de saberes. En el mundo hay aproximadamente 1.500 millones de campesinos que ocupan unas 380 millones de fincas, que ocupan el 20% de las tierras, pero ellos producen el 50% de los alimentos que se están consumiendo en este momento en el mundo. (La agricultura industrial solamente produce 30% de los alimentos con el 80%

del área agrícola). De esos campesinos, 50% practican agroecología. O sea, están produciendo el 25% de la comida del mundo, en un 10% de las tierras agrarias. Imaginen si esta gente tuviera el 50% de las tierras a través de un proceso de reforma agraria: estarían produciendo comida en forma abundantísima, con excedente incluso”. Al mismo tiempo, la agroecología trae otras ventajas que no tiene la revolución verde. “Por ejemplo –señala Altieri– es socialmente activante, porque para practicarla tiene que ser participativa y crear redes de intercambio, sino no funciona. Y es culturalmente aceptable porque no trata de modificar el conocimiento campesino ni imponer, sino que utiliza el conocimiento campesino y trata de crear un diálogo de saberes. Y la agroecología también es económicamente viable porque utiliza los recursos locales, no entra a depender de los recursos de afuera. Y es ecológicamente viable porque no pretende modificar el sistema campesino sino optimizarlo. La revolución verde buscó cambiar ese sistema e imponer un conocimiento occidental sobre el conocimiento campesino. Por eso ha tenido mucha repercusión en las bases”, concluye. Un factor importante a considerar es que la producción agroindustrial de gran escala es menor cuando se considera la producción total. O sea, los monocultivos son más productivos en términos de mano de obra; pero la agricultura campesina produce mucho más por hectárea. “Si haces un gráfico de producción total contra área –indica Altieri–, la curva de producción va bajando en relación al área de la finca. Porque no estamos comparando producción de maíz con maíz, sino que estamos comparando la producción total de la finca. ¿Y qué produce el campesino? Produce maíz, habas, papas, frutas; cría cerdo, pollo... Y cuando analizamos así el sistema, nos damos cuenta que es aproximadamente 20 a 30 veces más productiva. Eso da una base muy importante para pensar en reforma agraria”. Otra ventaja es su mejor resistencia al cambio climático. No sólo porque no genera calentamiento global –a diferencia de la agricultura industrial, con su alto consumo de combustibles fósiles–, sino que hay evidencias de que resiste mejor fenómenos como las sequías. Los monocultivos, que crecientemente dominan los paisajes agrícolas del mundo, “son altamente susceptibles porque tienen homogeneidad genética y homogeneidad ecológica”, como lo evidenció la sequía del año pasado del Mid-West de EU, la más grande en 50 años, donde la agricultura transgénica de maíz y soya perdió el 30% de todo el rendimiento, según Altieri. ¿Cuáles serían, entonces, las políticas públicas clave para que un país promueva y desarrolle en serio la producción agroecológica? Nuestros entrevistados coinciden en reconocer que la producción agroecológica, por ser artesanal e involucrar mayor mano de obra, tiene costos de producción más altos y debe ser mejor pagada; entonces se requieren políticas de fomento y subsidios que protejan a la agroecología y a los pequeños agricultores. De este modo se puede lograr que la comida sana esté al alcance de las mayorías, y que no sea solamente un producto de consumo de lujo de los sectores adinerados (como ocurre, por ejemplo, con los productos orgánicos que se exportan al Norte). Miguel Altieri destaca, en este sentido, la experiencia de Brasil, con el programa del Ministerio de Desarrollo Rural que compra el 30% de la producción al campesinado, reconociendo su rol estratégico. Es una comida sana que se destina al consumo social, en las escuelas, los hospitales, las cárceles. “La agricultura familiar en Brasil cuenta con 4.7 millones de agricultores que producen el 70% de la comida en 30% de la tierra; es un papel fundamental para la soberanía alimentaria”. Entendieron que para protegerla, no podían poner a los pequeños productores a competir ni con los grandes, ni con la producción de EU o de Europa “que es una competencia totalmente desleal”. El investigador considera un acierto que ese país haya creado dos ministerios del sector: el de Agricultura, para los grandes productores (que evidentemente van a seguir existiendo), y el de Desarrollo Rural para los pequeños, con proyectos de investigación, extensión, políticas agrarias específicas para el agricultor campesino. Incluso dice que este último ministerio tiene más recursos que el de Agricultura. “Lo que no

funciona es cuando el Ministerio de Agricultura cuenta apenas con una pequeña oficina o secretaría del agricultor familiar”, algo que pasa en la mayoría de los países. Apoyar las prácticas agroecológicas con investigación y con extensión agroecológica es otro elemento clave. “Mucho gente pregunta: ¿puede la agroecología alimentar el mundo, puede ser tan productiva? Pero mira, todos los institutos nacionales de investigación agropecuaria, los centros internacionales de investigación, las universidades, durante 60 años han financiado investigación en agricultura convencional. ¿Qué tal si a nosotros nos dieran el 90% de ese presupuesto para apoyar la agroecología? La historia sería otra”, reflexiona Altieri. Señala a Cuba como el país más avanzado en este sentido, por la situación que enfrentó en el periodo especial. Una ventaja fue que tenía los recursos humanos para hacerlo, tenía agroecólogos formados; y a través de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), 120 mil agricultores en 10 años incorporaron la agroecología, con altos niveles de producción y eficiencia energética. Quizá el obstáculo mayor es la falta de voluntad política, combinado con intereses multinacionales “que están siempre empujando en el sentido equivocado”. Altieri cree que el cambio climático es lo que finalmente va a poner los límites a la agricultura industrial. En el caso de países como Ecuador y Bolivia, cuyas constituciones ya establecen la soberanía alimentaria, el investigador considera que tienen “una oportunidad histórica: si no es ahora, ¿cuándo?” Él les ha propuesta establecer un proyecto territorial piloto, pues “el manejo territorial implica ecología del paisaje y otras dimensiones del diseño que van mucho más allá del diseño de la finquita particular. Porque si hay campesinos que practican la agroecología pero están dispersos, no se puede hacer una conversión territorial. Así aprendamos, porque no tenemos todas las respuestas”. ¿Una agricultura de pequeña escala? Nos preguntamos si la agroecología puede aplicarse en cualquier escala, o si es básicamente para la pequeña agricultura, y si eso es una limitante. Marc Dufumier considera que, por su esencia, sirve para la agricultura familiar, aunque reconoce que es más accesible a la mediana producción familiar que al minifundista, por su poca capacidad de ahorrar e invertir en tracción animal, carretas, producir estiércol y fertilizar por la vía orgánica. Las unidades familiares de tamaño mediano serían, además, las óptimas para generar empleo y evitar el éxodo rural. Los grandes productores agrícolas, en cambio, “tienen la capacidad de inversión, pero no tienen el interés, porque quieren maximizar la rentabilidad del capital financiero invertido, y amortizar la inversión sobre grandes superficies, entonces su interés es el monocultivo que es todo lo contrario de la agroecología”. Para Miguel Altieri, en cambio, la agroecología es una ciencia que entrega principios de cómo diseñar y manejar sistemas agrarios, de cualquier escala, pero con respuestas tecnológicas diversas, según el caso. “Yo he mostrado ejemplos de fincas de entre 500 y 3,000 hectáreas que se manejan agroecológicamente. Estoy hablando de un rediseño del sistema agroecológico con biodiversidad funcional, con rotaciones, con policultivos, que toman otras formas en la gran escala, porque hay que usar maquinaria por supuesto, no van a manejar 3,000 hectáreas con chuzo ni con tracción animal. Entonces hay muchos ejemplos de que se puede hacer a gran escala. Lo que pasa es que en América Latina, dada la importancia estratégica de la pequeña agricultura, la agroecología siempre se dedicó a solucionar el problema de la agricultura familiar, campesina, pero eso no significa que no se pueda aplicar a gran escala”. Fuente original: http://forumenlinea.com/portal/images/stories/carton/corrupcion_judicial.jpg

LAS 10 MULTINACIONALES MAS PELIGROSAS DEL MUNDO

160 comentarios

Por chenina El 18 de julio de 2012

http://ecocosas.com/eg/las-10-multinacionales-mas-peligrosas-del-mundo/ Ya no importa donde vivas, es imposible escapar de la globalización. La única salida, es informarse para poder elegir con conciencia antes de comprar. Comenzar a cultivar y a fabricar tus alimentos, reducir el consumo de petroleo y sus derivados, reforestar, comprar lo necesario, escuchar tu voz interior en vez de la voz de la publicidad...son pequeños paso para escapar de grandes monstruos. Y recordar siempre que el poder de elección esta en uno, no les demos el placer de caer en sus zarpas.

1. Chevron

Varias de las grandes compañías petroleras estarian en esta lista, pero Chevron merece un lugar especial. Entre 1972 y 1993, Chevron (en ese entonces Texaco) vertió 18 mil millones de galones de agua tóxica en los bosques tropicales del Ecuador sin ningún tipo de reparación, destruyendo los medios de subsistencia de los agricultores locales y enfermando a las poblaciones indígenas. Chevron también ha contaminado en los EE.UU, en 1998, Richmond(California), demandaron a Chevron por vertido ilegal sin pasar por tratamientos de aguas residuales, contaminando los suministros locales de agua, ídem en New Hampshire en 2003. Chevron fue el responsable de la muerte de varios nigerianos que protestaron en contra de la empresa por su presencia y explotación del delta nigeriano. Chevron pagó a la milicia local, conocida por sus abusos contra los derechos humanos , para aplastar las protestas, e incluso les proporcionó helicópteros y barcos. Los militares abrieron fuego contra los manifestantes, luego quemaron sus aldeas hasta el suelo.

2. De Beers

Esta empresa no escatima en gastos, y financia, apoya y crea autenticas guerrillas y dictaduras del terror para poder seguir obteniendo mediante explotación de niños y adultos, la preciada piedra. En Botswana, a DeBeers se le ha culpado por la "limpieza" de la tierra donde se extraen los diamantes, incluyendo el traslado forzoso de los pueblos indígenas que habían vivido allí durante miles de años. El gobierno supuestamente cortó el suministro de agua, los amenazó, los torturó y ahorcó públicamente a los resistentes. No dejemos de lado su nula responsabilidad ambiental, sus nulos derechos laborales, las vidas humanas, y sus campañas rancias y machistas. 3. Phillip Morris

Phillip Morris es el mayor fabricante de cigarrillos de Estados Unidos y del mundo . Se sabe que causan cáncer en los fumadores, así como defectos de nacimiento en los niños por nacer si la madre fuma durante el embarazo. El humo del cigarrillo contiene 43 carcinógenos conocidos y más de 4.000 sustancias químicas, incluyendo monóxido de carbono, formaldehído, cianuro de hidrógeno amoníaco, la nicotina, y el arsénico. La nicotina, la sustancia química principal psicoactivo en el tabaco, ha demostrado ser una adicción psicológica. Fumar aumenta la presión arterial, afecta el sistema nervioso central y constricción de los vasos sanguíneos. Las colillas de cigarrillos son uno de los principales contaminantes que los fumadores arrojan rutinariamente; lento para degradar. Muchos de estos filtros se abren camino en el suelo o en el agua, donde sus productos químicos se comportan como verdaderas sanguijuelas. El tabaco no sólo contamina la tierra durante sus extensas hectáreas de monocultivo, las cuales son rociadas a diario de agro tóxicos, su producción industrial contamina (se utilizan enormes cantidades de papel, algodón, cartón, metal, combustibles...), su consumo contamina la atmósfera, daña a su comprador y a los que le rodean. Su colilla tarda años en degradarse proporcionándole al suelo y al agua una cantidad enorme de tóxicos.

4. Coca-Cola

La bebida favorita del mundo o "la leche del capitalismo", acumula demandas y sanciones en diversos países derivados de graves hechos de contaminación, malas prácticas laborales y uso de aguas no autorizados. En la fase de producción, la compañía utiliza casi tres litros de agua por cada litro de producto terminado. Las aguas desechadas constituyen contaminantes, que la multinacional deposita en lugares protegidos, como ocurrió en Colombia, situación por la cual, fue multada en Agosto pasado, por la Secretaría Distrital del Ambiente, de la Alcaldía Mayoy de Bogotá, al demostrarse que habáin descargado sus desechos en el humedal de Capellania, en la zona de Fontibón.El hecho es considerado atentatorio contra un área de especial importancia y protección ecológica. El proceso por contaminación del Humedal Capellanía tiene su

origen en la caducidad del permiso de vertimientos otorgado a la multinacinal por cinco años y la no autorización de la Secretaría de Ambiente para renovar este permiso. Posteriormente, mediante visitas técnicas fue verificado el estado de la red de alcantarillado de Coca Cola y la realización de descargas industriales, evidentemente no autorizadas. Una situación muy similar ocurrió en la India en el 2005, donde alrededor de mil manifestantes marcharon para pedir que cerrara la planta cercana a Varanasi, ellos tenían la certeza de que todas las comunidades cercanas a plantas embotelladoras de Coca Cola padecen la falta y contaminación de sus suelos y napas freáticas. Análisis toxicológicos registran la presencia de altos porcentajes de pesticidas prohibidos como el DDT y como “buenos vecinos” distribuyeron sus desechos industriales a los campesinos de Mehdigani con el argumento de que servían para “abono” El resultado es que hoy los suelos son estériles. Y como si fuera poco, la bebida en cuestión, junto con consumir agua en exceso no aporta ningún elemento nutritivo, al contrario, al contener altas concentraciones de azúcar, es uno de los principales contribuyentes de la obesidad que afecta cada vez en mayor medida a nuestras poblaciones del tercer mundo, generando por otra parte, problemas dentales. Y el efecto de " quitar la sed", lo logra mediante el uso de ácido fosfórico. ¿Sabías que ... España es el país europeo que más Coca-Cola consume? Otros productos suyos son Fanta, Sprite, Aquarius, Nestea, Minute Maid, Tab, Sonfil, Finley, Nordic Mist o Fruitopia (hay 324 distintos)? Una lata de 33 cl. contiene unos 35 gr. de azúcar? En 1931 Coca-Cola cambió el traje verde de Papá Noel a rojo para una campaña publicitaria, haciendo juego con su color corporativo? Otras universidades en Atlanta, Toronto, California, Irlanda o Berlín ya han expulsado a Coca-Cola de sus Campus? Las botellas de plástico de Coca-Cola en España no son de material reciclado, sino de plástico virgen. ¿Casualidad que el ex-presidente mejicano Fox sea ex-representante de Coca-Cola? ¿y Adolfo Calero, exgerente de Coca-Cola, agente de la CIA y cara pública de la contra nicaragüense? ¿y el embajador de EEUU en la India ? ¿y el magnate golpista Cisneros, en Venezuela ? ¿y el ministro Jorge Presno, de Uruguay? Cuenta con delegaciones en más de 200 países, incluyendo paraísos fiscales como Bahrein o las islas Caimán, para evadir impuestos por sus beneficios... En el año 2003 obtuvieron unos beneficios de 21.044 millones de dólares (La mitad de los gastos previstos por la ONU para garantizar la educación básica a todos los niños del mundo). Impulsa potentes grupos de presión: se opuso al tratado de Kyoto a través de sus lobbys US Council for International Business y la Business Round Table, cambió regulaciones en la UE a través del American Chamber of Comerce , fue fundadora del International Life Science Institute, muy influyente en la FAO y la OMS , etc. Contiene productos transgénicos. La próxima vez que vayas por una bebida, recuerda la contaminación de los humedales, el uso no autorizado de aguas subterráneas, la violencia, que un litro equivale a tres en realidad... tal vez sea mejor una limonada.

5. PFIZER Como si el uso masivo de Pfizer en la experimentación animal no era lo suficientemente desgarrador, Pfizer decidió utilizar a los niños nigerianos como conejillos de indias. En 1996, Pfizer viajó a Kano, Nigeria; a probar un antibiótico experimental en el tercer mundo para combatir enfermedades como el sarampión, el cólera y la meningitis bacteriana. Dieron trovafloxacina a aproximadamente 200 niños. Decenas de ellos murieron en el experimento, mientras que muchos otros desarrollaron deformidades físicas y mentales. Pfizer también puede orgullosamente afirmar que se encuentra entre las diez primeras compañías en los Estados Unidos que provocan la contaminación de la atmósfera. Y no dejemos de lado los millonarios "incentivos" que le dan a los médicos, y a los gobiernos para que receten sus "medicamentos".

6. Mc Donalds

Cada año, miles de niños consumen la comida rápida de una empresa que forma parte activa en la deforestación de selvas, la explotación laboral y la muerte de millones de animales: McDonald's. Estrategias de mercadotecnia hábilmente diseñadas han expandido la empresa McDonald's a más de 40 países, donde la empática imagen de Ronald McDonald y su "Cajita feliz", vende en los niños el gusto por la comida rápida, asociándola con un ideal de alegría. Esta publicidad ha tenido un gran éxito en diferentes partes del mundo, contribuyendo a altas tasas de obesidad infantil. (ver articulo completo) La alimentación que entrega esta empresa es totalmente carente de nutrientes. Es más, esta comida se conoce mundialmente como ‘comida chatarra’, y no es por nada que recibe este nombre. Las hamburguesas y "nuggets" que McDonald's ofrece, provienen de animales que durante toda su vida fueron mantenidos en condiciones artificiales: Privados de aire libre y luz solar, permanecen hacinados al punto de no poder estirar sus miembros o alas (en el caso de los pollos), atiborrados de hormonas para acelerar su crecimiento, y de antibióticos para contrarrestar las múltiples infecciones a que están expuestos, por las condiciones de insalubridad y amontonamiento. Los pollos son engordados al grado en que sus patas no resisten su peso. Para establecer sus franquicias, McDonald's adquiere terrenos a bajo precio en lo que antes fueron selvas tropicales deforestadas para la explotación ganadera. Ofrece sueldos mínimos a sus empleados, aprovechándose de las minorías étnicas y contratando menores de edad. Los productos de McDonald's, con su alto contenido en grasas, azúcar y sal, estimulan en los niños el desarrollo de sobrepeso, la resistencia a la insulina y su consecuente Diabetes Tipo 2. Ah, ¿les comenté que fué una de las financiadoras de la campaña de George W Bush ?

7. Nestlé Nestlé y su enorme manto de crímenes contra el hombre y la naturaleza, como son la deforestación masiva en Borneo - el hábitat de los orangutanes en peligro crítico - para cultivar aceite de palma, y la compra de la leche de las granjas confiscadas ilegalmente por un déspota en Zimbabwe. Nestlé comenzó a provocar a los ambientalistas por sus ridículas afirmaciones de que el agua embotellada es "ecológica" , desde ahí en adelante se han ido destapando su red siniestra de control y destrucción. Nestlé realizó esfuerzos mundiales para instar a las madres de países del tercer mundo a utilizar su sustituto de leche para lactantes en lugar de la lactancia materna, sin advertirles de los posibles efectos negativos. Supuestamente, Nestlé contrató a mujeres vestidas de enfermeras para entregar la fórmula infantil gratuita, que se mezclan con frecuencia con agua contaminada, los medios no mencionaron a los niños que murieron de hambre cuando la fórmula se agotó y sus madres no podían pagar más.

8. British Petroleum

¿Quién puede olvidar la explosión de 2010 de una plataforma petrolera en la costa del Golfo, que dejó 11 muertos y miles de aves, tortugas marinas, delfines y otros animales, destruyendo la pesca y la industria del turismo en la región? Este no fue el primer crimen de BP contra la naturaleza. De hecho, entre enero de 1997 y marzo de 1998, BP fue responsable de una friolera de 104 derrames de petróleo. Trece trabajadores del equipo de perforación murieron en 1965 durante una explosión, 15 en una explosión de 2005. También en 2005, un ferry que transportaba a trabajadores del petróleo de BP se estrelló, matando a 16. En 1991, la EPA cita a BP como la empresa más contaminante en los EE.UU.. En 1999, BP fue acusada de ilegal de tóxicos en Alaska, luego en 2010 por filtrar venenos muy peligrosos en el aire en Texas. En julio de 2006, los agricultores colombianos ganaron un acuerdo con BP después de que se acusó a la compañía de beneficiarse de un régimen de terror llevada a cabo por los paramilitares del gobierno colombiano que protegen el oleoducto Ocensa. Claramente, no hay manera de que BP haga lo correcto.

9.Monsanto

Monsanto, creadores y fomentadores de los alimentos genéticamente modificados, hormonas de crecimiento bovino y el envenenamiento por agrotoxicos. La lista de Monsanto incluye la creación de la semilla "exterminadora" , que crea plantas que nunca dan semillas para que los agricultores deban comprar cada año, el lobby para que etiqueten "libres de hormonas" la leche y sustitutos de la leche para lactantes (se encuentra presente si el bovino ha ingerido hormonas de crecimiento, un comprobado agente cancerigeno), así como una amplia gama de violaciones ambientales y de salud humana asociados con el uso de venenos de Monsanto - ". Agente Naranja", sobre todo. Entre 1965 y 1972, Monsanto viertes ilegalmente miles de toneladas de residuos altamente tóxicos en los vertederos del Reino Unido. Según la Agencia de Medio Ambiente los productos químicos estaban contaminando las aguas subterráneas y el aire 30 años después de que fueran vertidos!!.

Monsanto es célebre por agredir a los propios agricultores que pretende "ayudar", como cuando demandó a un agricultor y lo encarceló por guardar las semilla de la cosecha de una temporada para plantar en la siguiente.

10. Vale

La minera Vale, transnacional brasileña presente en 38 países, es la mayor empresa de exploración de minerales diversificados en Latinoamérica y la segunda a nivel mundial.Entre los méritos se destaca la participación de la empresa en el desarrollo de la hidroeléctrica Belo Monte, ubicada en Altamira –Brasil-, dado que el proyecto afecta al río Xingú, principal fuente de vida para la región. Como resultado de la intervención de la empresa, hoy el paisaje amazónico está siendo modificado severamente, como también la vida de miles de pueblos a orillas de uno de los principales ríos de Brasil. A su vez, en Carajás, en Pará – Brasil-, numerosas familias fueron desalojadas, perdieron sus casas y poseen parientes que murieron como resultado de la construcción de línea férrea construida por la empresa, también denunciada por las pésimas remuneraciones y condiciones de trabajo que sufren sus empleadas. Los impactos sobre el accionar de la minera no se reducen a las denuncias dentro de Brasil. En la región de Tete, en Mozambique, un pueblo fue desalojado de sus tierras para que la empresa pudiese llevar a cabo su explotación de carbón. A cambio la empresa construyó un re asentamiento en el barrio Cateme, donde las casas y servicios públicos no cumplen las condiciones básicas para el desarrollo de la población. EXISTEN LAMENTABLEMENTE MUCHAS OTRAS CORPORACIONES QUE DEBERÍAN ESTAR PRESENTE EN ESTA LISTA, ALGUNAS COMO SAMSUNG, TEPCO, BARKLAYS, MICROSOFT, INTEL, SONY...ETC COMO EL ARTICULO SERÍA ENORMEMENTE EXTENSO Y TRISTE, ME COMPROMETO A ENTREGARLES PROXIMAMENTE LA LISTA DE LAS 10 MULTINACIONALES MÁS RESPONSABLES Y COMPROMETIDAS ¿EXISTIRAN?, ¿SERÁ CIERTO?, PRONTO LO SABREMOS.

PREPARÁNDONOS PARA EL NARCOPODER http://www.elciudadano.cl/2013/08/06/75957/preparandonos-para-el-narcopoder/ En las calles y mercados de Paraguay, el ágil mundo del pirateo audiovisual descubre, recrea e impone gustos, hace comentarios críticos respecto a las películas pirateadas y sobre la calidad técnica del pirateo, establece alianzas de gustos con los clientes y recomienda o sataniza producciones a las clientes. Todo en el marco de lo que se vende y lo que no. Al final es un negocio. Y como en todo negocio lo primero que se vende es la ideología. En estos días el producto más ofertado y más solicitado es una batería de documentales y series de televisión sobre el colombiano, antioqueño para más señas, Pablo Escobar Gaviria (1949-1993), el narco por excelencia a esta altura de la historia. El acento colombiano se escucha media cuadra antes de llegar al televisor donde se promociona y visiona el audiovisual que habla sobre las peripecias del mitológico narco. Las imagénes de portada cubren una gran extensión dentro del espacio que los vendedores tienen como estanterías y publicidad. Han, estas series y documentales, llenado la necesidad de conocimiento fílmico que el pueblo paraguayo tiene del narco.

Existe, hoy, ahora, una necesidad imperiosa de conocimiento sobre el narco y el narcopoder en específico por parte del pueblo paraguayo. Y esa necesidad no la satisface nadie del mundo mediático paraguayo. Esta necesidad surge debido al consenso social de que el poder ejecutivo que asumirá el 15 de agosto de 2013 está indefectiblemente unido al narco. A eso que se llama narcopoder. Este nexo entre la figura del Cartismo y el Narco es un consenso social que escapa al tradicional relato sobre el poder en Paraguay que incluye historias de campo, tierras, hidroeléctricas, obras públicas, compras de votos, golpes de estados, masacres, etc. etc. Este relato se hace insuficiente para dar cuenta del poder que viene, distinto por su conexión y fundamento (según la rumorología y mitología nacional) en el Narco. Narco paraguayo que incluye variantes respecto al colombiano, incorporando a la cocaína elementos como tráfico de marihuana, tábaco, dólares, lavado de dinero. Esta mitología y rumorología sirve para explicar riquezas rápidas e inexplicables, negocios extraños que parecieran no tener justificación ni éxito pero que igual persisten. El narco paraguayo existe a los ojos de la gente e incluso tendría una estética y una arquitectónica similar a la de nuevo rico y que produce un impulso a la industria que se muestra en forma de nuevos y fastuosos edificios, hoteles, negocios a lo largo y ancho de las fronteras de Paraguay, y Asunción está en zona de frontera. Todas esas certezas y conocimientos sociales no están siendo alimentados desde la prensa oficial que se queda con un relato blando sobre el origen y circunstancias del poder económico que ahora asumirá el ejecutivo. Quien alimenta esta necesidad de conocimiento político social sobre el narcopoder que nos llega es el audiovisual: estas series y documentales que nos dicen y dictan cómo es la relación histórica entre el poder político y el poder narco, audiovisuales que tienen su correlato en la televisión abierta en versiones light de senos y cocaína. Las series y documentales que llenan la pirateria paraguaya hoy son la herramienta de aprendizaje social del pueblo paraguayo para afrontar el gobierno que viene. Es un aprendizaje y también al mismo tiempo un entrenamiento respecto a lo que debemos esperar y a lo que podremos o no hacer. Por ello son también un problema en tanto muestran que respecto al narcopoder el pueblo no puede hacer nada. Muestran interesadamente que el pueblo no puede gestionar herramientas propias para reducir autónomamente el daño del narco. Las series y documentales sobre el narco ratifican ese poder, lo legitiman y mitologizan, lo hacen parte integral del estado de cosas y de la realidad permanente. El narcopoder sólo puede ser desplazado, controlado e integrado por poderes más fuertes y habitualmente externos: la DEA, la CIA, policía especializada, gobiernos fuertes y de derecha. Es un asunto, nos quieren decir, que escapa a las posibilidades de acción del pueblo que, así como respecto a series y documentales, en la realidad también debe ser un mero espectador. Estas series y documentales al mismo tiempo que aprendizaje se constituyen en domesticaciones interesadas. Hay ahí ese doble juego de resistencia y domesticación que nos hace ser pueblo al mismo tiempo que consumidores. Aprendemos sobre el narcopoder para esquivar y reducir su impacto, y nos dejamos entrenar para no poner trabas a su desarrollo. Falta entonces información, materiales de aprendizaje que nos entreguen herramientas para manejarnos frente al narcopoder que se nos viene encima como actores y no como espectadores. Por ahora, están esas series y documentales sobre Pablo Escobar, ahí en la esquina, con su vendedor o vendedora de siempre. Por Pelao Carvallo

6 de agosto de 2013

ENTREVISTA CON VIKTOR SCHÖNBERGER, AUTOR DEL LIBRO "BIG DATA, LA REVOLUCIÓN DE LOS DATOS MASIVOS" "LOS DATOS MASIVOS (O BIG DATA) SON EL NUEVO ORO" Marilín Gonzalo eldiario.es http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172252 Google no tenía en mente que su buscador fuera un corrector ortográfico. Y aún así, todos los días, miles de personas teclean palabras en su página, no para hacer una búsqueda, sino para saber cuál es su ortografía correcta, en vez de usar un diccionario.

Lo que probablemente no saben (o sí), es que están haciendo uso de una de las mayores bases de datos del lenguaje actualizadas al instante. Por eso si escribes con errores lo que estás buscando, el algoritmo se da cuenta y te pregunta si no quisiste decir otra cosa, colocando la palabra que cree que es correcta porque muchas personas la escribieron antes que tú. Los datos masivos están presentes cada vez más en nuestras vidas, y sin embargo apenas nos damos cuenta de sus aplicaciones. Cuando empiezas a conocer cómo funcionan, qué posibilidades se abren y cómo se están usando ya, no puedes dejar de verlos en todas partes, o mejor dicho, en muchos sitios donde no te imaginabas. Y te preguntas también por sus usos futuros. Cada vez que metemos una serie de letras en un recuadro utilizando un sistema llamado reCAPTCHA para indicarle a un ordenador que somos personas, estamos contribuyendo a digitalizar textos. Decimos a la máquina qué se lee en esa palabra que un lector digital no pudo entender. El sistema presenta esa palabra a 5 personas y si coinciden todas, la da por válida. De esta manera hacemos útil un dato que de otra manera hubiera sido usado sólo una vez para la autenticación. Pocas personas son conscientes de que cada vez que hacemos este pequeño test de Turing estamos contribuyendo a que un sistema utilizado por unas 200.000 páginas web, entre ellas Facebook y Twitter, almacene estos datos y los utilice para escanear libros, algo que por su magnitud sería muy costoso producir. La idea fue del brillante Luis von Ahn, a quien entrevistamos en Diario Turing, y es sólo una de las formas de utilizar datos masivos en la era del big data. Viktor Mayer-Schönberger es profesor de regulación y gestión de internet en el Internet Institut de la Universidad de Oxford, y uno de los expertos más reconocidos internacionalmente en el mundo de los datos masivos. Su último libro es "Big data, la revolución de los datos masivos", que escribió conjuntamente con otro experto, Kenneth Cukier, editor de datos de The Economist. Big Data, A Revolution That Will Transform How We Live, Work, and Think puede leerse online en su versión en inglés. En este ensayo hacen una muy buena introducción al mundo del big data, un concepto del que se oye mucho pero se explica poco. De esta obra, el mismo Lawrence Lessig ha dicho que "cada década hay un puñado de libros que cambian la forma en la que ves todo. Este es uno de esos libros". "Big Data" ilustra lo que consideran el comienzo de una era, la de los datos masivos. La recolección de datos comienza a ser tan barata que ya no necesitaremos establecer una muestra para estudiar un hecho de forma de encontrar conocimiento, sino que podremos analizar el conjunto total de datos, lo que nos permitirá establecer resultados mucho más precisos, más baratos y también más inesperados. Pero una

correlación no es una causalidad y estamos acostumbrados a buscar causas en todo, por lo que esta nueva era implica una adaptación de mentalidad. Deberemos estar dispuestos a aceptar resultados basados en la correlación sin entender completamente el por qué (la causa). Apenas estamos viendo el principio de sus aplicaciones, como el autocorrector que sugiere palabras a medida que tecleamos, el análisis de precios que hace PriceStats, para indicar las tendencias inflacionarias y que en muchos casos es más acertado que las estadísticas oficiales o, Google Flu Trends, el experimento que Google puso en marcha para monitorizar personas con síntomas del virus H1N1 casi en tiempo real a través de sus búsquedas. En Big Data también hablan de los riesgos: la obsesión con los datos y buscar causalidad donde no la hay, o de confiar en los determinismos de la predicción en casos en los que se aplican castigos o penas, sin dar lugar a la posibilidad de cambio de las personas. De algunas de estas cosas hablamos con uno de sus autores, Viktor Mayer-Schönberger. MG - ¿Cuál es la que podríamos considerar la base de datos más grande actualmente? VMS - Eso es muy difícil de decir, porque no podemos saber cuántos datos han acumulado los gobiernos y las grandes corporaciones, pero mi corazonada es que la mayor cantidad de datos en el mundo está controlada por Google que aparentemente tiene alrededor de un millón de discos duros donde guardar datos. MG - No sé si le entiendo bien, usted menciona discos duros, pero ¿de qué capacidades hablamos? VMS - Sí, estoy hablando de discos duros. Entiendo que tienen diferentes capacidades y de hecho, también en Google los tienen de distintos tamaños, en tanto que son reemplazados no todos de una sola vez, sino permanentemente a lo largo del tiempo. Por lo tanto es imposible fijar una capacidad precisa, por eso lo expresé así. MG- ¿Por qué los gobiernos deberían tener bases de datos abiertas con los datos de la ciudadanía? ¿Cómo puede ser esto importante para el desarrollo de un país? VMS - En la era de los datos masivos, los datos son el nuevo oro. Pero este nuevo oro sólo puede ser desenterrado si usamos los datos que tenemos. Mucho valor permanece oculto porque los datos no son usados. Tener suficientes conjuntos de datos disponibles es esencial para que las startups que se dediquen a los datos masivos puedan prosperar, para que haya nuevos productos y servicios innovativos y para que en una escala más amplia pueda haber crecimiento económico. Aquí el gobierno puede proveer subsidios para estimular el emprendimiento en temas de big data (y también para beneficiar a la sociedad). Pero este subsidio no sería económico (lo que es difícil de lograr en estos tiempos de austeridad, por otro lado), sino que es un subsidio en forma de datos que el gobierno ha recogido, de los cuales no se está usando todo su potencial y puede poner a disposición de las compañías de datos masivos y de la sociedad en su conjunto relativamente fácil. MG - En su libro anterior usted prevenía sobre el peligro de no ser capaz de olvidar cada detalle, en cuanto el olvido es necesario para aprender y llegar a conclusiones. Ahora muestra cierto optimismo por el tema de los datos masivos, por la recogida de cada pequeño detalle y la datificación de todo lo posible, ¿ha cambiado su visión como si esto fuera un nuevo paradigma? VMS - No realmente. Yo estoy muy preocupado por los datos irrelevantes que quedan guardados y no nos permiten olvidar. Lo que también trae problemas para los datos masivos -los datos irrelevantes son ruido, reducen el valor en el conjunto de datos. Así es que filtrar y eliminar datos irrelevantes también es importante en la era de los datos masivos. Por la misma razón he llegado a creer que la protección de la

privacidad en la era del big data requiere aún más que lo que habría pensado en "Delete" [su libro anterior]. Ahora creo que para que nuestra privacidad esté protegida en estos tiempos, necesitamos hacer a los usuarios de los datos completamente responsables de la forma en la que usan los datos personales sobre nosotros que tengan, como hemos explicado en el capítulo 9 de "Big Data". MG - ¿En qué medida han sido los datos masivos la causa del éxito de compañías como Facebook, Gmail, Netflix o Amazon? VMS- En una medida muy, muy amplia. Google no existiría sin los datos masivos, tampoco Facebook. Y Amazon supuestamente ha obtenido un tercio de sus ganancias de productos que la gente compra por el sistema de recomendaciones de Amazon, que no es otra cosa que [utilización de] datos masivos. MG - Supongo que la mayoría de preguntas que le hacen son sobre los riesgos de vivir en una suerte de estado de determinismo de los datos. ¿Cree que esto es porque no estamos realmente preparados para pensar en estos términos? ¿Cuánto tiempo queda hasta que la sociedad aprenda a manejar los datos sin caer extremismos? VMS - A mí también me preocupa un montón el peligro de que el análisis de datos masivos sea abusado o usado de mala manera buscando relaciones causales, para castigar a las personas basándose en predicciones. La lección clave que nuestra sociedad y todas las personas que toman decisiones especialmente los que se encuentran en el gobierno- necesitan aprender es que los datos masivos pueden mostrar correlaciones, el qué, pero no causalidad, el porqué. Una vez que hayamos entendido esta lección (y por lo tanto la limitación inherente a los datos masivos), creo que seremos capaces de cosechar mucho del tremendo potencial de los datos masivos sin exponernos demasiado a los riesgos de su lado oscuro. MG - En el libro usted indica que estamos bajo un estado de vigilancia. ¿Cuál es su posición personal en temas como dar información privada o personal a cambio de obtener mejores servicios, por ejemplo como en Gmail o Facebook? Por ejemplo, usted da su código postal cuando va de compras? ¿Alguna vez declina dar datos que son requeridos para usar servicios gratuitos en la web? VMS - Sí, yo rechazo dar información personal que siento que es innecesaria para la otra parte. He dejado de usar un servicio de alquiler de coches porque usaban prácticas intrusivas y he dejado de comprar en sitios online por la misma razón. Creo que los consumidores debemos resistirnos a veces, especialmente cuando se nos pide dar información sin causa y sin la contraprestación de un mejor servicio. MG - Compartir información es parte de la operativa habitual de servicios online, pero las personas se están volviendo más conscientes de la importancia de proteger sus datos personales. ¿Cree que en un futuro tendremos una especie nueva de poder colectivo en esta área, de la misma manera en que ahora tenemos cierto poder con nuestras acciones como consumidores? VMS - Posiblemente. Y puede ser que tengamos nuevos intermediarios que nos ayuden, como un colectivo de consumidores que negocie con quienes usan nuestros datos. Así podríamos superar lo que se llama el problema de la acción colectiva, es decir, que sólo si muchos consumidores se agrupan en un colectivo pueden crear un contrapoder a los intereses de quienes tienen los datos, pero esa agrupación es difícil de lograr. Quizás aquí podrían ayudar como intermediarias nuevas plataformas operativas para la utilización de datos. MG - ¿Cómo cree que afectará esta nueva relevancia de la correlación frente a la causalidad en nuestra vida cotidiana? ¿La gente dejará de preguntarse por las causalidades lógicas? VMS - No, como humanos estamos configurados para buscar causalidades. Pero necesitamos darnos cuenta de que las correlaciones a menudo ofrecen información valiosa y son mucho más fáciles de identificar comparadas con la causalidad real. A menudo pensamos que conocemos las causas de ciertas cosas pero no

es así realmente, y esto es peor que no conocer la causa en absoluto. Así es que necesitamos tener humildad cuando pensamos en la causalidad, y estar preparados para aceptar las correlaciones. MG - ¿El big data cambia la manera en la que las máquinas piensan (por ejemplo cuando hablamos de búsquedas semánticas o cuando comienzan a dar mejores resultados) o están las máquinas cambiando la manera en que nosotros pensamos? VMS - El big data cambia la forma en que las máquinas piensan -desde tratar de enseñarles reglas hasta tener estadísticas para resolver cuestiones sin la necesidad de entender el porqué. Eso cambia la forma en que dejamos a los ordenadores hacer cosas -desde traducir lenguajes hasta hacer recomendaciones de libros- pero no cambia la manera en la que nosotros pensamos. MG - Para los que trabajamos con información parece ser necesario que sepamos cómo operar con datos masivos. ¿Deberíamos aprender programación los periodistas? ¿O las competencias para manejar grandes cantidades de datos deberían ser restringidas a algunos expertos? VMS - Los periodistas no necesitan aprender a programar, pero sí necesitan desarrollar mentalidad de datos masivos, de manera en que entiendan que los datos contienen historias que pueden quedar sin ser contadas; y que puedan tomar datos y una idea y con la ayuda de un experto (de la misma manera en que trabajan con fotógrafos y artistas gráficos ahora) puedan contar esa historia. Fuente: http://www.eldiario.es/turing/Big-data_0_161334397.html

QUÉ SIGNIFICA LA LEGALIZACIÓN DE LA MARIHUANA EN URUGUAY EN LA GUERRA CONTRA LAS DROGAS Peter Watt Znet Traducido para Rebelión por Germán Leyens http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172226 Uruguay va camino de convertirse en el primer país que legaliza el consumo, el cultivo y la posesión de marihuana después de un siglo de leyes frecuentemente autoritarias de prohibición en todo el mundo. En una trascendental votación sobre la reciente propuesta del presidente José Mujica, una mayoría abrumadora del Congreso uruguayo votó a favor de la legalización y se espera que la ley sea aprobada por el Senado uruguayo en las próximas semanas. La votación en Uruguay tiene lugar en medio del aumento del escepticismo regional con respecto a los beneficios de la prohibición y a las estrategias militares dirigidas por EE.UU. para imponer una legislación antinarcóticos represiva. Incluso cierto número de dirigentes y exdirigentes latinoamericanos de la derecha política han llamado a legalizar la marihuana, presumiblemente por reconocer el terrible sufrimiento socioeconómico que la “guerra contra las drogas” ha causado durante los últimos 40 años. Significativamente, la acción del gobierno de Mujica es una señal de la creciente independencia de la región. John Kerry podrá seguir refiriéndose a Latinoamérica como el “patio trasero” de EE.UU., pero una parte del mundo escapa cada vez más al control hegemónico de Washington. Después de todo, la guerra contra las drogas fue principalmente una invención estadounidense, lanzada por el presidente Nixon cuando declaró que los narcóticos eran el “enemigo público número uno” del país. Desde entonces, la guerra contra las drogas ha proporcionaro un pretexto para la intervención militar y política en Latinoamérica (y en Asia) y un control social cada vez más brutal y represivo en EE.UU. La

aprobación de la nueva ley en Uruguay podría ser un primer paso para desmantelar una guerra cuya fraudulencia e hipocresía se comparan fácilmente con sus equivalentes, la Guerra Fría y la “guerra contra el terror”. El año pasado, el Estado de Washington y el de Colorado aprobaron leyes que permiten el uso recreativo de la marihuana y es bastante posible que otros Estados sigan su ejemplo en un futuro cercano. Esas acciones tienen el potencial de detener algunas absurdidades de la guerra contra la droga, incluso aunque no se adopte una legilación similar en el ámbito federal. Las nuevas leyes también reflejan un creciente escepticismo del público de EE.UU. con respecto a los beneficios de la prohibición. Hay que considerar que en 1969, un año marcado por el repentino aumento del consumo de marihuana entre los estadounidenses, casi un 12% de la población estaba a favor de la legalización. Comparando los relativamente conservadores años sesenta con las actitudes actuales: un sondeo realizado este año por Pew Research Center estableció que un 52% de los estadounidenses están a favor de la legalización de la marihuana. Semejante cambio en las actitudes también refleja el aumento de la concienciación popular con respecto a la droga y la hipocresía alarmista de los políticos y su flagrante manipulación de los hechos. En EE.UU., por ejemplo, es perfectamente legal que el tabaco mate a unas 440.000 personas al año. Unas 80.000 muertes en EE.UU. son causadas anualmente por el consumo excesivo de alcohol adquirido legalmente. Y sin embargo no hay muertes registradas por sobredosis de marihuana. Las leyes relacionadas con el consumo, posesión y cultivo de la marihuana podrán parecer exageradamente duras a un observador racional. No obstante, es poco probable que desaparezcan los que tienen interés en mantener el statu quo, como la industria privada de las prisiones, la industria del armamento y la elite política de EE.UU. En EE.UU. los consumidores de marihuana pagan condenas de prisión más largas que los asesinos y violadores. Gracias a la ley “de los tres golpes” de Bill Clinton algunos consumidores de cannabis se han enfrentado a condenas de cadena perpetua. Semejantes medidas llevaron a un experto en la ley nazi, Richard Lawrence Miller, a comparar la legislación contra los consumidores de drogas a la utilizada en Alemania para marginar y excluir a los judíos de la sociedad en general. Michelle Alexander califica la guerra contra la droga de “Nueva Jim Crow”, nombre que se dio a la ley que impuso la segregación en EE.UU. de antes de los años sesenta. Argumenta que las prácticas actuales afectan sobre todo a los afroestadounidenses, a pesar de que los estudios demuestran que utilizan y venden drogas en la misma medida, o menor, que sus equivalentes caucásicos. Por cierto, desde que Nixon declaró que las drogas eran “el enemigo público número uno” en una época en la que el consumo de drogas iba bajando, la población carcelaria de EE.UU. ha aumentado de 0,3 millones de personas a 2,3 millones, la mayor cantidad de presos de la historia del mundo. Y EE.UU. encierra proporcionalmente a más gente negra que Sudáfrica durante el apartheid, sobre todo como resultado de la legislación contra la droga. Aunque el encarcelamiento de cientos de miles de jóvenes afroestadounidenses por delitos menores relacionados con la droga puede parecer extraño, sin embargo tiene sentido para la exitosa industria de las prisiones privadas. Con la devastación de gran parte de la fuerza de trabajo manual como resultado de políticas económicas neoliberales, la contribución económica y el valor de todo un sector de la sociedad se han utilizado de otra manera. Al respecto, señala el periodista estadounidense Chris Hedges: Gente pobre, especialmente de color, no vale nada para las corporaciones y los contratistas privados si están en la calle. En las cárceles y prisiones, sin embargo, cada uno puede generar ingresos de 30.000 a 40.000 dólares anuales a las corporaciones.

Un argumento decisivo a favor de la legalización es que rebajará seriamente las ganancias del crimen organizado. Los narcóticos (incluida la marihuana), por ejemplo, pueden representar casi la mitad de los beneficios de algunos cárteles mexicanos. Organizaciones como Los Zetas son capitalistas impecables y buscan constantemente nuevos mercados. Los Zetas se han expandido al contrabando de personas, tráfico sexual, extorsión, piratería e incluso a la industria del petróleo y a la minería del carbón, que representan inmensas fuentes de ingresos. Por lo tanto el tema tiene un alcance mucho más profundo que la simple legalización y descriminalización. Si no hay esfuerzos por encarar las causas a la raíz de la explosión y crecimiento del crimen organizado, ¿quién dice que los sindicatos criminales no se expandirán simplemente hacia otros mercados muy lucrativos? Ojalá la acción de Uruguay provoque un debate internacional serio sobre la legalización. Pero ese debate también debe abordar quién controlará la producción de marihuana en los Estados que la legalizan. ¿Podría organizarse el cultivo en comunidades locales y ser controlado por los consumidores o la legalización dará un pretexto para que se impongan las corporaciones transnacionales, tal vez encabezadas por grandes compañías farmacéuticas? Desde su perspectiva, ¿por qué van a controlar el mercado los delincuentes advenedizos y acumular grandes ganancias cuando los profesionales “de cuello blanco” pueden dirigir las cosas con mucha más eficacia? Un problema potencial es que puede llegar a monopolizarse el mercado global creando lo que sería un cártel legal pero quizá más poderoso todavía. Pero, por ahora, la acción de Uruguay obviamente es un paso positivo. Publicado originalmente en: The Conversation Fuente: http://www.zcommunications.org/what-uruguay-s-legal-weed-means-for-the-war-on-drugs-bypeter-watt

CONSECUENCIAS DE LAS PROTESTAS EN BRASIL EL PT EN LA ENCRUCIJADA Por Darío Pignotti* http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/el-pt-en-la-encrucijada/ El levantamiento de miles de jóvenes el pasado 20 de junio en Brasil, único en la historia democrática reciente del país, no ha sido fruto de reivindicaciones económicas sino de la exigencia por la igualdad de derechos políticos y sociales en un país de fuertes contrastes.

Toma del Congreso Nacional, Brasilia, 17-6-13 (Evaristo SA/AFP)o fue en carnaval. Cientos de miles de brasileños tomaron por asalto San Pablo, Río de Janeiro, Brasilia, Salvador de Bahía, Porto Alegre y decenas de ciudades, como sucede cada año en febrero. Esta vez sucedió en junio. Y en lugar de citarse para renovar ese ritual de sensualidad descomunal (una transgresión pactada que acaba indefectiblemente cada Miércoles de Cenizas), la multitud marchó a contramano de toda convención, incluyendo las políticas, con una furia y una masividad inesperadas hasta para sus protagonistas. La rabia se destapó cuando miles de jóvenes, en su mayoría universitarios integrantes del Movimiento por el Pase Libre (que demandan la gratuidad del boleto), se movilizaron en San Pablo contra el aumento del precio, ya abusivo, del transporte público (de 3 a 3,2 reales, equivalentes a 1,6 dólares), un servicio prestado por empresas privadas a las que el Estado favorece a través de contratos que les garantizan ganancias excesivas.

El levantamiento de junio, único en la historia democrática reciente de Brasil –equiparable sólo en algunos aspectos a las movilizaciones de 1983 contra la dictadura– no fermentó en el descontento por la suba del costo de vida o en la demanda por aumento salarial, a pesar de que estas reivindicaciones aparecieron esporádicamente. Las protestas en las avenidas Paulista, de San Pablo, y Getúlio Vargas, de Río de Janeiro, muestran el vacío, casi absoluto, de las reivindicaciones económicas: y es lógico que así sea luego de una década de gobiernos del Partido de los Trabajadores caracterizados por sus políticas sociales progresistas, ejecutadas con bastante eficacia. Es cierto que los indicadores de desigualdad brasileños aún son similares a los presentados por algunos países africanos y la concentración de la riqueza está más cerca de las estadísticas de Paraguay que las de Argentina o Uruguay. Pero también lo es que desde 2003 a la fecha se alcanzaron resultados extraordinarios en el combate a la pobreza (30 millones de personas salieron de la miseria, 50 millones son asistidas con el Plan Bolsa Familia) y el desempleo bajó estructuralmente, llegando al 5,8% en mayo pasado, en franco contraste con la desocupación y el empobrecimiento que precedieron a las revueltas de la Primavera Árabe o de los indignados de España, donde el desempleo afectó al 27% de la población en el primer trimestre de este año. La locomotora brasileña perdió el empuje de años anteriores, pero aun así el poder de compra del salario mínimo creció el 8% en los dos primeros años de gobierno de Dilma Rousseff (22% de aumento nominal) y el 53% en los dos gobiernos de Luiz Inácio Lula de Silva (155% de avance nominal), contra el exiguo 22% acumulado durante la administración de Fernando Henrique Cardoso, la última presidencia neoliberal, que prevaleció entre 1995 y 2002 (1).

Bautismo cívico

Ciertamente, en la explosión del 20 de junio, cuando hubo 1,5 millones de brasileños en las calles, nadie repudió el gasto público para sostener el Plan Bolsa Familia ni reclamó la aplicación de un programa de austeridad a la española. Las quejas contra colectivos y subterráneos caros y malos (rápidamente contestadas por las autoridades que bajaron los 20 centavos de la discordia) fueron el grito preliminar de una demanda que fundamentalmente exige transporte para todos por igual en ciudades de contrastes abismales, como las de San Pablo, donde banqueros y empresarios eluden los embotellamientos de tránsito desplazándose a bordo de la segunda mayor flota de helicópteros particulares del mundo. “Nos organizamos para confrontar contra el Estado, creemos que así como está no funciona más. Lo que hacemos es atacarlo en puntos neurálgicos, con acciones directas como romper los molinetes para que la población viaje gratis, que es lo mínimo que se debiera garantizar al que va a trabajar. Nosotros no somos lo mismo que los jóvenes de la Primavera árabe ni nos vamos por las ramas con asambleas eternas como los Occupy de Nueva York. Nosotros nos reunimos, deliberamos horizontalmente, elegimos un punto concreto. Después de eso se acaba el debate porque lo importante es movilizarse con todo”, explicó a el Dipló Matheus Preis, uno de los referentes del Movimiento por el Pase Libre, que admitió que la masividad y la federalización de las marchas desbordaron a su agrupación, cuya razón última es “avanzar hacia una disputa contra el sistema” (2). Al final de cuentas lo que acabó por ocurrir, luego del chispazo inicial paulista, fue una conmoción mayúscula en todo el país, que en lugar de asumir el signo ideológico de los muchachos del Movimiento por el Pase Libre, mutó en una constelación de demandas, atomizadas, sin organicidad, que sumadas expresaron vagamente la exigencia por derechos básicos (movilidad, educación, salud, justicia), garantizados por la letra de las leyes pero incumplidos por un Estado concebido como agente reproductor de un modelo socioeconómico atravesado por la mercantilización de las relaciones sociales.

Las protestas representaron una novedad tanto virtuosa como imprevisible debido a la preocupante ausencia de partidos, lo cual fue celebrado por la prensa unánimemente conservadora. Sin liderazgos que galvanicen las reivindicaciones, las plazas y avenidas se convirtieron en una suerte de zona franca para oportunistas y provocadores y hasta facilitó la aparición de grupos fascistas reivindicando a la dictadura: “Dilma y Lula, váyanse a Cuba”, decía una pancarta. Hubo, incluso, agresiones contra militantes del PT y consignas, en algunos actos coreadas por un número importante de manifestantes, denostando toda forma de organización partidaria. Falta en Brasil una tradición política presencial, históricamente el pueblo no sale (o no salía) a las calles. Claro que existen puntos de concentración referenciales, como la Avenida Paulista en San Pablo o los canteros del Eixo Monumental frente al Congreso en Brasilia, pero no hay un “ágora nacional” unánime, equivalente al Zócalo de México, destino obligado de los grandes mitines electorales o las concentraciones zapatistas de 1994, la Plaza de Mayo porteña o la Alameda de Santiago de Chile. Para millares de brasileños de clase media, y entre ellos también los recién llegados a esa condición social, las marchas de junio representaron su bautismo en este tipo de protagonismo cívico, tardío. La incorporación al mercado de trabajo y de consumo de millones de excluidos, legado genuino de Lula, redundó en un país capaz de enfrentar la crisis global de 2008 gracias al dinamismo de esa demanda interna, que había tenido como correlato, hasta ahora, la ausencia de un protagonismo activo respecto de la cosa pública: los nuevos consumidores, a veces compulsivos, se caracterizaron por ser políticamente indiferentes, una suerte de sub-ciudadanos que se dan por satisfechos con ir de shopping (3). Brasil cuenta con una población de 194 millones de habitantes y 250 millones de celulares. Cada año crece la venta de vehículos, especialmente los de menor cilindrada, y en 2013 se estima que superará las 3,3 millones de unidades, en un mercado que no para de crecer, como el de los vuelos de cabotaje gracias al aluvión de pasajeros de la nueva clase media, que en vacaciones desbordan la capacidad de los aeropuertos. Pero, por más exuberante que sea la expansión de su mercado interno, el gigante latinoamericano renguea de una pata, la de su defectuosa representación política, a cargo de partidos conservadores asociados a los socialdemócratas de Fernando Henrique Cardoso, que juntos tienen maniatado al Congreso y vuelven impotente al PT, pese a su numerosa bancada. “Estamos hartos de los políticos”, fue una frase gritada con frecuencia por parte de aquellos ciudadanos que resolvieron asumir su condición de tales en la revuelta de junio. De una manera invertebrada, dijeron ¡basta! a quienes los degradan a la condición de consumidores de productos electorales cada cuatro años (para votar a Presidente) o a la de televidentes conformistas, al estilo Homero Simpson, que sentados en el living de su casa devoran por igual palomitas de maíz y noticias cocinadas (y adulteradas) por el multimedios Globo, cuyos estudios en San Pablo y Río de Janeiro fueron blanco de protestas (4). Podemos llegar a la conclusión, entonces, que la erupción brasileña, a diferencia de otros movimientos en apariencia similares, como el de los indignados españoles o el de los ocupantes de Wall Street, no es resultante del descontento frente a una crisis económica severa. Sino que fue enteramente política. Una eclosión que impedirá al país ser el que fue. Con todo, ningún análisis que se pretenda serio, puede presagiar si este movimiento telúrico, que provocó pánico a las elites, impulsará un giro capaz de profundizar las conquistas logradas en una década de gobiernos petistas. O, por el contrario, la ebullición será apropiada por el bloque conservador, interesado en instalar la ingobernabilidad como precedente para producir un barquinazo hacia la derecha. Al respecto, el teólogo Leonardo Boff, sostuvo en diálogo con el Dipló que “los 33 años de vida del PT fueron muy importantes para Brasil, sus gobiernos fueron muy imperfectos y también fueron los mejores para el pueblo. Nosotros no vamos a olvidar eso ni vamos a callar nuestras críticas, que las hacemos sin ser unos ingenuos desestabilizadores. No hay que prestarse a las tramoyas de una derecha muy perseverante.

Siempre fue enemiga del PT. […] Debajo de este mar bello de gente, novedoso, impetuoso, está pasando algo profundo con esos chicos frustrados, están desengañados con la falsedad del proyecto de vida consumista, anti-ecológico e individualista que les habían inculcado a través de los avisos publicitarios. Debemos valorizar al PT porque su gobierno se preocupó por los pobres aunque no prestó atención a las expectativas de los jóvenes, y ahora ellos están dando una voz de alerta. Creo que el PT está capacitado para entender esa situación y responder, pero no puede demorar demasiado, si no será tarde” (5).

Con o sin rupturas

La preocupación de Boff no es muy distinta a la de su amigo Lula da Silva y de la presidenta Rousseff, que percibieron la seriedad de la situación y su impacto sobre la continuidad de un proyecto transformador, sustentado en la tesis de construir cambios graduales sin rupturas. Tres consecuencias derivan de las protestas. La primera es electoral. Las manifestaciones a pesar de no embanderarse con el derrocamiento de la actual administración (dato soslayado cuando se compara linealmente el caso brasileño con el egipcio o el turco) tuvo como consecuencia inmediata haber deshilachado la popularidad de Rousseff, que pasó del 51% al anémico 30% de las intenciones de voto de cara a los comicios de octubre de 2014, dejando en entredicho una reelección que a principios de junio era concebida como incontestable. Al desdibujarse esa certeza también se diluye la expectativa de poder dilmista y su capacidad de garantizar la sobrevivencia de la coalición de partidos que la llevaron al gobierno en 2010, donde conviven, o se hacinan, desde el Partido Comunista al conservador Partido Movimiento Democrático Brasileño, del poderoso vicepresidente Michel Temer, al que se atribuyen emboscadas frecuentes para debilitar a Rousseff. La segunda es de carácter económico. Bastaron tres semanas de revuelta, para poner de rodillas al Palacio del Planalto y licuar su capacidad de negociación frente a los grupos de interés, especialmente ante el lobby financiero, que aprovechándose de la debilidad oficial reavivó su guerra de guerrillas contra la inspiración desarrollista de la política económica y logró asestarle un mazazo monetarista a través de la elevación de las tasas de interés (medida que había sido resistida con éxito durante un año por el gobierno) al 8,5%, índice que además de ser el más alto de América enterró la promesa oficial de alcanzar un crecimiento del orden del 4% del PIB. Reservadamente en el gobierno admiten la derrota de la apuesta productivista, al menos en 2013. Reconocen que no se logrará la recuperación anhelada y estiman una expansión inferior al 3%, al tiempo que en el mercado financiero pronostican (y desean) un crecimiento raquítico, posiblemente menor al 2,5%, una pésima noticia para la economista Rousseff. La tercera es estrictamente política. Las movilizaciones paralizaron al gobierno porque Rousseff fue incapaz de interpretar, en un primer momento, la protesta. Durante algunos días la Presidenta evidenció su falta de talento para lidiar con el problema –cuya magnitud, hay que admitirlo, habría paralizado incluso a políticos más avezados– mientras crecía el fantasma de la ingobernabilidad, todo lo cual erosionó la capacidad del Ejecutivo para poner en caja al anticuado Congreso (donde manda un puñado de caciques recelosos frente al “dilmismo”, del cual detestan su republicanismo auténtico, su progresismo y su reticencia a los arreglos mafiosos ), espejo de una clase política regresiva sujeta, de un lado, a los feudos aún vigentes en varios estados y, del otro, al accionar de grupos de choque parlamentarios como la bancada rural (de los neoterratenientes surgidos con el agronegocio, enemigo dogmático de la reforma agraria) y la evangélica, de cuyos escaños surgieron proyectos de ley para reducir la edad penal, formalizar la tercerización laboral clandestina y tipificar a la homosexualidad como una enfermedad. Se trata de piezas legislativas que bien merecerían una investigación antropológica por su viva fe reaccionaria en la que está encarnado el ascendente populismo de derechas, contra el cual el PT debe entablar una “batalla cultural” para no perder el apoyo del subproletariado conquistado por Lula entre 2003 y 2010, según alertó el ministro Gilberto Carvalho, secretario general de la Presidencia.

Los pastores del bloque legislativo neo-pentecostal pusieron el grito en el cielo frente a los dichos del funcionario, amenazando romper la tambaleante alianza con el gobierno si no había una retractación pública, algo que Carvalho, uno de los petistas de hueso colorado en el gabinete presidencial, hizo sin mucha convicción. En último análisis, cuando Carvalho habló de romper lanzas con los socios evangélicos, sacó a la luz un debate que madura en el PT, donde la crisis agudizó los cuestionamientos sobre otras alianzas indigestas, como las establecidas con el agronegocio y los banqueros, cuando aún imperaba la creencia de que era posible lograr avances sin estremecer la estabilidad. Dilma, incluso, estaría reflexionando sobre la conveniencia de prolongar la “paz armada” con Globo, al constatar que todas las concesiones políticas, y los multimillonarios contratos televisivos, fueron plata quemada, ya que el conglomerado está a la cabeza de las huestes desestabilizadoras. En ese sentido el titular del PT, Rui Falcão, no le escapó al toro, y propuso algo que hasta hace un tiempo ningún alto dirigente del partido se animaba a mencionar en público: la necesidad de sancionar una ley que regule la comunicación y acote los “monopolios”. En suma, este carnaval de junio, ese oxímoron a la altura del Trópico de Capricornio, fue un llamado de alerta para el mayor partido de izquierdas de América y un convite a considerar si aún está en pie la tesis de que en Brasil, a diferencia de lo que ocurre en otros países de la región, es posible profundizar el proyecto sin sobresaltos. 1. Con base en datos del Departamento Intersindical de Estadísticas y Estudios Socioeconómicos (DIEESE) y el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE). 2. Entrevista con el autor, Brasilia, 25-6-13. 3.Véase al respecto como el “subproletariado” políticamente indiferente o “conservador popular” que nunca apoyó al PT finalmente adhiere a Lula. André Singer, Os Sentidos do Lulismo. Reforma gradual e pacto conservador, Companhia das Letras, San Pablo, 2009. 4. “En una visita que hicimos a la TV Globo con otros profesores de la Universidad de San Pablo, el presentador estrella y editor del noticiero, William Bonner, reconoció que confecciona las noticias pensando en un receptor con el intelecto de Homero Simpson”, Laurindo Leal Filho, en entrevista con el autor, Brasilia, abril de 2010. 5. Entrevista con el autor, Brasilia, 16-7-13. * Periodista, Brasilia.

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RECURSOS NATURALES, REDISTRIBUCIÓN Y POLÍTICA Por Nicolás Tereschuk y Gustavo Grobocopatel http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/recursos-naturales-redistribucion-y-politica/ A partir del dossier “La trampa de los recursos naturales” (el Dipló, Nº 168, junio de 2013), el empresario Gustavo Grobocopatel, líder del grupo agroindustrial Los Grobo, y el politólogo Nicolás Tereschuk mantuvieron un diálogo sobre el sector agroalimentario en Argentina, la apropiación y distribución de la renta agraria, la reprimarización de la economía y el rol del país en el mundo.

n la última década, las economías de la región han basado su desarrollo en actividades extractivas intensivas que generan una renta extraordinaria, lo que ha llevado al debate sobre la apropiación y distribución de esa renta.

••• El Dipló:En Argentina en particular, las ganancias del sector agroalimentario han sido fuente de conflictos políticos y sociales. ¿Cuál es su visión de esta situación? Gustavo Grobocopatel: Yo creo que para poder definir extractivismo hay dos abordajes. Un abordaje, si se quiere, técnico: hay extracción de recursos que no son sustentables. Y otro que tiene que ver con lo social, es decir: si esa actividad deja capacidades en la sociedad, si genera inclusión. Me parece que son dos temas centrales. La agricultura desde mi punto de vista no es una actividad extractiva porque de lo que se trata es de transformar sol y agua en productos útiles para la sociedad: alimentos, energías, medicamentos, madera para el papel, madera para la vivienda. Es decir que hay un balance positivo, se hace un agregado de valor a la sociedad… Por supuesto que hay mala praxis y buena praxis. Felizmente, la buena praxis se va extendiendo, a veces por regulaciones. También hay problemas. En Argentina son puntuales: el tema del agua, los abusos en el uso de agroquímicos sin restricciones o sin cuidados, la deforestación, los excesos asociados al monocultivo, que están más vinculados con políticas públicas que con motivaciones propias de los productores: si hacés una política en contra del trigo y el maíz, la gente va a tratar de hacer lo que puede. Desde el punto de vista social también creo que es una actividad que genera capacidades por varios motivos. El primer motivo es que está totalmente atomizada. En la agricultura, a diferencia de la minería, la energía, el petróleo, hay 100.000 productores. De esos 100.000, el 80% son pequeños productores, en general pymes. Después hay miles de comercios, que son los acopios, los corredores, las cooperativas; hay proveedores de servicios. Es cierto, hay alguna concentración en algunas cuestiones, como por ejemplo la exportación. Pero en la exportación hay veinte jugadores, no hay dos como en la energía o tres como en la minería. Son multinacionales, pero también hay nacionales. Los proveedores de tecnología en general compiten entre sí. Es cierto que hay un líder en el tema biotecnológico que es Monsanto, y en todo caso la pregunta es por qué no aparecieron otras empresas. Ahí yo creo que hay un error de las organizaciones ambientalistas, que al combatir a Monsanto lo fortalecen, porque impiden que aparezcan otros competidores. Es decir, el problema de la agricultura y de la sustentabilidad no es Monsanto; el problema es que no haya diez Monsanto que compitan entre sí. Nicolás Tereschuk: El mayor conflicto que enfrentó el gobierno de Cristina Kirchner fue con este sector y fue justamente por la discusión sobre la renta. Uno escucha que quizás todo iría mejor si el Estado no interviniera, si no hubiera algunas políticas cerradas, porque los productores saben manejar la tecnología, la tecnología ha avanzado, las buenas prácticas han avanzado, etc. Pero si bien hay cierta agregación de valor, la mayoría de los productores, por los precios que hay, están tratando de mantenerse o de sacar lo más posible de la actividad más primaria. Cuando uno ve la cadena de valor de toda la agroindustria, el capital argentino está en la base de esa pirámide, digamos, de la producción hacia el puerto. No sé si está pensando en llegar a lo que da más valor que son las góndolas de los países centrales con una marca, con un packaging, que es donde está el valor real y grueso al que apuntan las grandes multinacionales. Hay, en ese sentido, una visión primarizada o primaria. ¿En qué medida eso es sustentable? Inclusive políticamente, inclusive para los sectores que están en las grandes ciudades, o en los conurbanos de las grandes ciudades,

etc. Me parece que en ese punto, el sector de los agronegocios no tiene una mirada más general y entonces entra en conflicto con el poder político. G.G.: Ahí está la contradicción, el corazón del problema. Por un lado tiene que haber redistribución, tiene que haber un Estado fuerte que redistribuya, y por otro lado tenemos que dejar que estos emprendedores inviertan en agregar valor, en industrializar. Ahí está el punto de la tensión, porque si hacés pagar más impuestos, lo que lográs es redistribuir más –hay que ver con qué calidad, pero es una forma de redistribución–, pero sacás dinero de la renta de un productor y ese dinero es el que permite invertir. En general se piensa que la gente invierte porque accede al crédito. No, la gente invierte porque hay rentabilidad. Lo que nosotros tenemos ahora con el récord de presión impositiva, que es asfixiante en el caso del campo – esto lo digo desde el año 2002–, es más soja, más primarización, menos valor agregado, menos industrialización, un portfolio de exportaciones menos diverso. Yo no estoy de acuerdo, yo creo que hay que diversificar, que hay que industrializar, que hay que generar valor agregado. Ahora para eso hay que dejar a la gente ganar plata y además crear los incentivos para que reinviertan ese dinero en la industrialización. Y eso está muy vinculado con retener gente del interior y que no se venga al Gran Buenos Aires. Si no creás condiciones para generar rentabilidad es muy difícil que alguien invierta. Y la realidad es que la inversión nuestra es más una inversión especulativa –es decir, hay una oportunidad que me cayó del cielo–, que estructural –una vocación y condiciones para la inversión–. Y va a ser así hasta que eso no cambie en forma estable, es decir hasta que no se generen reglas. Ahora, ¿cómo se define eso? No es una cuestión de un gobierno de turno, porque si no después se genera esta cuestión, como decía [Raúl] Alfonsín, del péndulo: pasamos de un extremado liberalismo o neoliberalismo a un extremado estatismo. Yo creo que es parte de un pacto social que después deriva en un pacto fiscal. Es decir, tenemos que definir qué porcentaje del PIB vamos a destinar a impuestos. ••• El Dipló: Hay quienes sostienen que la abundancia de recursos naturales se convierte en una condena, ya que permite ganar mucho dinero sin esfuerzo. Si el Estado no se apropiara de parte de esa renta, ¿el productor reinvertiría ese dinero o lo llevaría fuera del país? G.G.: No hay productor agropecuario que tenga la plata afuera, es otro sector de la sociedad argentina el que puede sacar la plata afuera. Es más, el productor agropecuario no va al banco, se queda con la soja en la silo bolsa. Retiene grano porque no sabe qué hacer, no es un sofisticado financiero. Lo peor que puede hacer, piensa hoy, es quedarse con pesos, por eso no vende. Antes a lo mejor iba a comprar dólares, y se quedaba con los dólares en el colchón, ahora no lo puede hacer, entonces se queda con los granos. Es una reacción de protección frente a la incertidumbre que tiene, que puede ser justificada o injustificada. La condena no son los recursos naturales, la condena es no tener una sociedad con instituciones consolidadas, no tener sistemas de participación. Hay países que tienen recursos naturales y sobre los recursos naturales hicieron flor de sociedades. Desde Finlandia, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, hasta el mismo Estados Unidos, crearon gracias a los recursos naturales muchas cosas positivas porque se basaron en instituciones, en desarrollo, en calidad del Estado, en una sociedad no corrupta. Los recursos naturales, cuando no existen instituciones, exacerban el problema, porque le dan a un Estado ineficiente un poder económico que le permite exacerbar ese problema.

N.T.: En general en varios de esos países –Estados Unidos, Australia, Canadá–, la distribución de la tierra ha sido más equitativa. En Argentina, la distribución de la tierra históricamente ha sido muy inequitativa y eso

plantea la cuestión de algún tipo de acuerdo o pacto, firmado o no firmado, de cómo debe ser la distribución de ese ingreso, quizás previamente al gran empuje de la cuestión de los recursos naturales. G.G.: En Argentina, con el alquiler de tierras, en algunos casos son pooles y en otros no, se ha generado una democratización del acceso a la tierra: el hecho de disociar quién es el propietario de la tierra y quién es el que produce. Antes vos para ser agricultor tenías que ser “hijo de”. Ahora, un emprendedor con una buena idea puede acceder a la tierra. Hemos hecho una especie de reforma agraria. N.T.: Entiendo que haya nuevos actores, pero no dejan de tener conflictos con el Estado por la cuestión de la distribución de la renta. Obviamente que al Estado se le puede criticar toda una serie de cuestiones, como, por ejemplo, la calidad con la que desarrolla servicios públicos. G.G.: Ese es un tema central del debate. Nosotros ponemos el eje en la distribución, que a mí, es lo que menos me preocupa. A mí lo que más me preocupa es que en Carlos Casares o en el interior –Carlos Casares es mi pueblo–, no haya agua potable, el hospital esté semidestruido, no haya autopista para llegar, que el tren no funcione o que funcione cada vez peor. Y no es un tema de este gobierno, el deterioro se ha venido dando en los últimos años. El problema de la calidad del Estado es el tema central, porque si vos me decís “¿querés que haya distribución o no?”, yo te digo “depende, depende de la calidad del Estado”. Yo soy pro Estado, personalmente; no digo que el sector lo sea. El sector, en el mundo, es un sector solitario, son gente en el medio del campo que lucha contra el tiempo, contra la helada, contra la lluvia y se las arregla como puede. Descree de la ayuda de cualquiera, y eso es cultural. No es una cuestión ideológica siquiera, es cultural. Pero si el Estado accede a esos lugares generando servicios públicos, institutos, bienes públicos y demás, yo creo que se pueden mantener las retenciones a la soja dando a cambio una serie de servicios o armando un plan a diez años: con las retenciones vamos a hacer autopistas, tren, hospitales... N.T.: El proyecto de ley de retenciones que fue al Congreso decía que pasado cierto límite los fondos se iban a usar en determinadas cuestiones específicas, como hospitales, y tampoco gustó. Me da la impresión de que esta discusión va a continuar. ¿Por qué? Porque se debate la apropiación de una renta. G.G.: Lo que no podés evitar son las consecuencias. No se puede decir quiero quedarme con la renta del campo y exigirles a los del campo que inviertan la plata que no tienen. ••• El Dipló: Hoy la renta del sector es extraordinaria debido al aumento de los precios de los commodities, que se supone permanente gracias al consumo de países emergentes como China e India. ¿No es necesario prepararse para un cambio de tendencia futuro? G.G.: Pero el problema no es el precio, es la cantidad. Hay que sacarse de la cabeza el tema precio, porque el precio va a subir y va a bajar. Nosotros no manejamos el precio, manejamos la cantidad. La renta es extraordinaria por el trabajo de la gente. Nosotros tenemos que tener muchos granos, porque es la forma de capitalizar mejor la ganancia de precios. Tenemos que tener mucho, producir mucho. Porque además la ventaja que tenemos es que el mundo quiere lo que nosotros podemos producir, eso es algo único. Vas a Grecia y no saben qué hacer; vas a España y, tampoco, salvo algunas empresas grandes de servicios, de construcción, el resto no sabe mucho qué hacer. Obviamente que esto solo no soluciona el problema de Argentina, pero soluciona el 50%. Hay un dato del Plan Estratégico Agroalimentario y Agroindustrial que en general todo el mundo pasa de largo, que para mí es central. El Plan Estratégico, que es la versión oficial, dice que solamente su aplicación genera un crecimiento de tres puntos más del PIB por año. Es la primera vez en la historia de Argentina que un gobierno dice eso. ¡Es impresionante!

Acá hay una renta extraordinaria que está vinculada con el esfuerzo y el trabajo de 100.000 tipos. Y viene alguien que dice: “Vos tendrás la propiedad, pero la renta es mía”. El 80% de la utilidad se va. El conflicto va a continuar, porque no ha habido un pacto sobre eso. Esa renta no vuelve en instituciones. Y eso se va a dirimir… Mi temor es que se dirima de una mala manera, se dirima yendo al otro extremo. Porque esto ya lo vivimos. El potencial problema que estamos generando es una situación en que la gente se harte del Estado y diga ahora no quiero más Estado. Porque la tensión no está bien resuelta. La sociedad en su conjunto, con toda su complejidad, debería definir cuál es la participación del Estado en este proceso redistributivo y cuál la participación del sector privado. Yo creo que el Estado tiene que cumplir algunas funciones, pero que para otras es decididamente ineficiente, si lo hace solo. No estoy en contra de las sociedades entre el sector público y el Estado. N.T.: Ahora bien, si uno le pregunta a un habitante del segundo cordón del Gran Buenos Aires, que hace diez años no tenía nada, que ahora consiguió un trabajo, tiene un hijo que va al secundario y le dieron una computadora, que trabaja en una casa de familia y la blanquearon y así accedió a una tarjeta de crédito, etc., esa persona puede decir: “Yo ahora esa renta la veo. Quizás viajo mal en tren pero acá esté mi hijo con su notebook, acá tengo mi jubilación. Yo antes no tenía nada”. G.G.: Es porque ese persona piensa que esos beneficios vienen con plata que cayó del cielo y que la administra el gobierno de turno. No relaciona que esa plata viene de un sector productivo que paga sus impuestos. Y no tiene conciencia de que es una vaca para ordeñar y no una vaca para matar. Como diría Pepe Mujica: “Yo a la vaquita la quiero ordeñar todos los días de mi vida”. Si la quiero carnear, está bien, me comí un flor de asado, pero la dejo de ordeñar. El problema de la redistribución es de qué manera se incluye a esas personas en el proceso y fundamentalmente de qué manera se le generan capacidades en términos de Amartya Sen: cada día es más empleable, que no es lo mismo que tener empleo, es más libre, es más autónomo, es más emprendedor, es más saludable. En la medida que nosotros logremos un sistema de redistribución que genere ese tipo de capacidades vamos bien, porque vamos generando soluciones estructurales sustentables. Ahora, ¿eso tiene que estar exclusivamente en manos del Estado? Yo creo que el Estado no es bueno para muchas de esas cosas, es bueno para otras. Es bueno para generar servicios públicos, es bueno para generar salud, en educación hay un esfuerzo muy grande y debería hacerla el Estado obviamente. Debería ser bueno para el tema seguridad, debería poner el foco en algunas cuestiones estructurales, infraestructura. Pero no sé si es bueno para crear empleo, empresas, emprendedores. Porque son otros niveles de incentivo totalmente diferentes. ••• El Dipló: El monocultivo de soja se extiende por el país, ¿es ese el rol de Argentina en el mundo? G.G.: Hay roles en el mundo. Hay roles porque hay un patrón de especialización, nos guste o no nos guste, porque así funciona la economía del conocimiento. El conocimiento se aplica en especializaciones porque es donde se pueden absorber más conocimientos. Es una cuestión básica, como la ley de gravedad. Se puede, a través de políticas de Estado, compensar, atenuar, diversificar. Hay como dos tensiones en la globalización desde mi punto de vista. Una primera tensión es diversificaciónespecialización. Querés ser especialista porque sos más competitivo y tenés más conocimiento intensivo, y al mismo tiempo más diversificado para que si el día de mañana se da vuelta el viento no quedar colgado del pincel. La otra tensión se da entre lo local y lo global, es decir, gestión local pero al mismo tiempo integración al mundo. Si no hay flujo de intercambios no hay posibilidad de agregar valor. La forma de resolver los dos

problemas es integrar Argentina al mundo. Para mí es un error integrarla desde la soja exclusivamente. Ahora bien, la soja es lo que abre otras oportunidades. Cuando negociás con el mundo tenés que ser importante en algo. China necesita soja, entonces vos le decís China te vendo soja, pero comprame pollo, comprame lácteos, comprame lo otro. Tenemos que usar la soja para abrir las otras cuestiones. De cualquier manera, vemos un mundo donde en los próximos diez años va a seguir creciendo el consumo de este tipo de productos. Va a haber otros diez años en los que se va a ralentizar y después se va a estabilizar. Estos próximos veinte años implican un desarrollo para esta región extraordinario. Podemos estar estructurando la base de una nueva nación. N.T.: Ahí está la tensión: ¿cómo pasar de la soja a algo que agregue más valor? Cuando uno escucha al sector, dice: “Hay políticas que, al revés, me reprimarizan”. G.G.: Eso es definitivamente así. El productor quiere diversificar, quiere poner los huevos en distintas canastas. Además el monocultivo va contra el interés del productor porque baja los rendimientos, aumenta los costos de control de plagas, enfermedades, etc. El productor naturalmente está incentivado a diversificar. Hoy va al monocultivo por una cuestión de salvación: es lo único que le permite salir del agobio del 80% de impuestos y de no poder comercializar trigo y maíz, que son los otros productos de la rotación. N.T.: Bien, pero algún tipo de esquema va a haber que tener para pasar, por ejemplo, como Finlandia, de plantar árboles a inventar el Nokia. Ahora bien, esta región que puede crecer tanto, el Mercosur, sigue siendo de las más desiguales del mundo al momento del arranque. Y eso le suma una tensión, una fuente de conflicto. Los Estados asiáticos que crecieron mucho tenían como única meta el crecimiento. Acá los Estados quieren crecer y distribuir, crecer y distribuir. ¿Qué pasa con estas actividades que tienen tanto potencial de crecimiento en sociedades que a su vez necesitan redistribuir? G.G.: El crecimiento tiene tres vertientes: el consumo interno, la inversión y las exportaciones. Exportar es importar, son intercambios. Cuando vos sustituís importaciones sustituís exportaciones porque son intercambios, no se pueden separar unas de las otras. Entonces son tres vertientes. Hay gobiernos que se han dedicado al consumo interno, pero desatendieron la inversión y los flujos. Otros fueron a los flujos y menos consumo interno, es el caso de China. Yo creo que hay que hacerlo todo de forma equilibrada. Tenemos que aumentar los flujos, aumentar la inversión y aumentar el consumo. Todos decimos lo mismo, sólo que algunos piensan que se hace de una manera, otros de otra. Tenemos que tener metas, de inflación, de crecimiento, de inversión externa, de superávit, de desempleo. Y eso tiene que ser una construcción colectiva, para darles estabilidad. Argentina tiene una enorme cantidad de recursos, una sociedad civil súper sofisticada, buenos recursos naturales, un capital humano espectacular. Nos falta un tris, alinear los planetas. Confiaba que habíamos aprendido de la crisis del 2001 y que algo bueno iba a surgir. Bueno… Hay una frase que dice: “Es preferible aprender a tener razón”. A mí me encanta esa frase. Todos los argentinos queremos tener razón y nos cuesta aprender.

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LA CORRUPCIÓN COMO CRÍTICA DE LA POLÍTICA Por Sebastián Pereyra* http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/la-corrupcion-como-critica-de-la-politica/ La corrupción alcanzó estatus de problema político durante los años 90, como parte de un fenómeno global. ¿Cuál es su magnitud en Argentina? Es imposible saberlo, pues las mediciones son complicadas y contradictorias. Lo que importa no es tanto cuánta corrupción hay sino por qué se volvió intolerable.

Eduardo Iglesias Brickles, Todo es efímero, 1985 (gentileza del autor)Cuándo comenzó la corrupción? Nos hemos acostumbrado a pensar que las denuncias de corrupción se instalaron en Argentina a partir de los escándalos que surgieron a lo largo de la década menemista. Sin embargo, existe una fuerte afinidad entre el neoliberalismo y los discursos contra la corrupción. El propio gobierno de Menem fue el impulsor, en sus primeros años, de una crítica en términos de corrupción a los modos de intervención y regulación del Estado en la economía. En efecto, el recurso a la denuncia de corrupción para fundamentar los procesos de privatización de empresas públicas y la racionalización de organismos estatales fue una práctica recurrente, y es por eso que resulta paradójico que la corrupción se volviera luego contra el propio gobierno, a punto tal de que se ha convertido en una de las imágenes con que el sentido común evoca esa década. Pero la lucha contra la corrupción no es un invento argentino. El interés en este tema, sobre todo en el ámbito de los organismos internacionales y de cooperación, se despertó en los años 90. Ese interés, además de consolidar un importante espacio para el desarrollo profesional, produjo una serie de nuevas herramientas y recomendaciones. La definición del “problema de la corrupción” a nivel internacional fue adquiriendo, con el correr de la década, contornos cada vez más claros, vinculándose a los debates sobre la consolidación de la democracia, por un lado, y a las reformas de libre mercado, por otro. En este marco, el problema de la corrupción ha tendido a globalizarse. Los estudios sociales clásicos solían definir a la corrupción como una cuestión típica de los países en vías de desarrollo, como un resabio de los procesos de modernización. Algo de eso persiste hoy en la mirada de los organismos internacionales, instituciones largamente abocadas a producir discursos sobre la corrupción para los países de América Latina y de la ex Unión Soviética. Esa visión se apoya en la idea de que los países centrales son principalmente exportadores de corrupción. Sin embargo, los términos de esa división internacional del trabajo han sido muy cuestionados, así como la tesis de que las democracias más consolidadas eran inmunes al problema. En este sentido, la década de 1990 representa un hito: en esos años se registra un aumento de las denuncias en diversos países, uno de cuyos rasgos más notables es la incorporación definitiva de los escándalos de corrupción a la vida política. Así sucedió en América Latina. En países como Brasil, Perú o México las denuncias de la corrupción generaron importantes consecuencias institucionales, que llegaron incluso al desplazamiento del presidente, y en otros países, como Argentina, dejaron una huella indeleble. Pero los escándalos se extendieron más allá del mundo en desarrollo. Tanto España y Portugal como Italia y Francia, por nombrar sólo algunos ejemplos significativos, fueron sacudidos por el impacto de fuertes campañas anticorrupción. En 1992 en Italia se produjo un fenómeno novedoso y resonante a la vez, cuando se constituyó una coalición de juristas que emprendieron una auténtica campaña judicial contra la corrupción política (“manos limpias”). Algo similar ocurrió en Francia, donde se desató una verdadera rebelión de los jueces de instrucción contra la clase política. Aunque las cruzadas anticorrupción tendieron a multiplicarse durante los 90 en prácticamente todo el mundo, los casos nacionales presentan importantes diferencias: mientras que en los países europeos las coaliciones anticorrupción estuvieron encabezadas por jueces, en los países latinoamericanos la iniciativa recayó más bien en los profesionales del derecho nucleados en ONG y en los periodistas.

La magnitud del fenómeno

A diferencia de lo que sucede con otros temas, como la inseguridad y el desempleo, carecemos por completo de mediciones que permitan objetivar las representaciones que existen sobre la corrupción. Quizá lo único parecido sean los escándalos en los que se ponen de manifiesto conductas o formas de intercambio ilegales o ilegítimas y en los que se ofrecen pruebas para el juicio del público acerca de –digamos– la intensidad o la magnitud del fenómeno. Pero un escándalo o una serie de escándalos son, como medida de

una tendencia, poco significativos en comparación con indicadores cuya evolución puede medirse estadísticamente a lo largo del tiempo. De manera intuitiva, podríamos pensar que una simple correlación vincula las denuncias y las preocupaciones ciudadanas con una mayor incidencia de los actos de corrupción. Pero ese vínculo supuesto por la crítica no ha sido corroborado, y difícilmente pueda serlo. Insistimos: no existen mediciones confiables sobre los niveles de corrupción en los países. No sabemos, ni podemos saber, si la corrupción (¿de qué tipo?) se ha incrementado o no (¿en comparación con qué?), y en qué medida lo ha hecho. Lo que es seguro, en todo caso, es que se ha constituido en un problema público en Argentina a partir de los años 90, y que ese proceso puede ser objeto de un análisis detallado. En otras palabras: lo importante no es tratar de analizar si la corrupción aumentó o no, sino preguntarse por qué se volvió intolerable. La crítica hacia la actividad política se ha vuelto un rasgo persistente de la vida democrática, tanto en los países periféricos como en los centrales. Por ejemplo, las encuestas de opinión en Francia mostraban en el año 2000 que el 64% de los ciudadanos pensaba que la mayoría de los políticos eran corruptos. El World Values Survey muestra que en 2006 el 80% de los ciudadanos de los países centrales manifestaba poca o nula confianza en los partidos políticos (1). En la encuesta Latinobarómetro realizada en 2001, el 74,6% de la población latinoamericana contestó que la corrupción era un problema muy serio en su país. En Argentina, esa percepción era compartida por el 88% de los encuestados en 1997 y ascendía a más del 94% en 2001. Entre 1997 y 2002, cerca del 90% de los encuestados consideraba que la corrupción había “aumentado mucho” en el último año. El panorama cambia, sin embargo, cuando la evaluación se pone en perspectiva con otros problemas. Así encontramos que en Argentina entre 1995 y 2004 la corrupción representaba el principal problema sólo para el 10% de la población. Aunque esa proporción aumentó en forma considerable hasta llegar al 18% en 2002, se mantuvo muy por debajo de otras preocupaciones, en particular respecto de la desocupación. En 2010, sólo el 2,6% de los encuestados consideraba que la corrupción era el principal problema del país (2). Algo similar ocurre cuando consideramos no ya la percepción sobre el aumento de la corrupción, sino el contacto directo con los casos de corrupción: frente a ese tipo de preguntas, las respuestas son mayoritariamente negativas. En 2010, por ejemplo, apenas un 5% de los argentinos manifestaba que un funcionario público le había solicitado una coima en el último año (3). Una de las herramientas de medición más conocidas es el Índice de Percepción de la Corrupción (CPI) elaborado por Transparencia Internacional, que permite clasificar en un ranking a casi doscientos países. Además de inducir a una confusión entre percepción y medición, el índice ha sido cuestionado porque recurre centralmente a consultoras financieras para realizar las evaluaciones, lo cual genera un fuerte sesgo que refleja lo que podríamos llamar genéricamente el punto de vista del mundo de los negocios. Según esta medición, en 2012 Argentina se ubicaba en el puesto 102, mientras que Chile, por tomar un ejemplo cercano, se ubica en el 20. ¿Argentina es un país mucho más corrupto que Chile? Desde este punto de vista sí, pero la información sólo da una pauta de la percepción. La otra gran herramienta de medición producida por la misma organización es el Barómetro Global de la Corrupción, que consulta a las personas sobre su exposición a casos de corrupción. Los datos de 2013 indican que, mientras que en Argentina entre un 2% y un 7% de los encuestados (dependiendo de las áreas de gobierno) reconocía haber pagado un soborno en los últimos doce meses, en Chile esa proporción se ubicaba entre el 3% y el 11%, y en EE.UU. entre el 6% y el 15%. Las percepciones no siempre coinciden con las prácticas.

La interrupción de la política

La política democrática es conflictiva y las denuncias de corrupción forman parte rutinaria y cotidiana de ella. Sin embargo, los escándalos se caracterizan justamente por sacar a la política de su flujo cotidiano, por interrumpirlo. Esa interrupción está vinculada principalmente al hecho de que la corrupción pone en

cuestión los roles y el estatus asignados a los actores políticos. Su potencial degradante hace que nadie sepa si terminará parado en el mismo lugar en el que estaba cuando todo comenzó. Los escándalos son, en definitiva, un modo de infligir un castigo, principalmente en virtud del juicio de la opinión pública. Suponen un riesgo de degradación que implica principalmente a quien es denunciado, pero que potencialmente puede afectar también al denunciante. En el escándalo, el denunciante apela directamente al público; la justicia se ejerce en el propio escándalo. Asimismo, a diferencia de la lógica judicial, que es preponderantemente individualista, el escándalo puede impartir justicia sobre un colectivo. Los escándalos representan una arena en la que se disputa el estatus social de los distintos personajes en una dinámica que va de la consagración a la degradación. El análisis de los escándalos permite observar cómo la imposición de nuevos patrones morales afectó la evaluación de la actividad política. Si por un lado los escándalos reafirman nuevos significados sobre el modo correcto de comportamiento de los dirigentes, por otro favorecen la capacidad de nuevos actores – centralmente de los periodistas y los profesionales del derecho– para enjuiciar a la actividad política. Sucede que, a la hora de definir el problema de la corrupción por la vía de la designación de casos concretos, expertos y periodistas resultan ser los mejores denunciantes. Esas denuncias resultan creíbles en la medida en que quienes las formulan no forman parte del campo de la política profesional (de donde, curiosamente, proviene la mayor parte de la información que las nutre). En ese sentido, más allá de que las denuncias se hayan incorporado como un recurso más a la disputa política, son otros actores, y no los políticos profesionales, quienes resultan favorecidos. La dinámica de los escándalos refuerza entonces la figura de los denunciantes que no provienen del mundo político, y que aspiran a erigirse en agentes moralizadores y defensores del bien común frente a una actividad que es definida como degradada y orientada al interés particular. Ello cuenta también, paradójicamente, para quienes intentaron, desde la propia actividad política, diferenciarse de sus colegas de los partidos tradicionales. La política profesional no ha sido ajena a la producción de denuncias de corrupción, en particular en los intentos de creación de espacios políticos de centroizquierda (Frepaso) y centroderecha (Acción por la República) durante los años 90. Finalmente, los escándalos tienen la importancia fundamental de producir pruebas orientadas al juicio de la opinión pública. En la sumatoria de casos nos encontramos con que la corrupción puede ser remitida a ciertos personajes y hechos específicos. Puede ser vinculada a narraciones que hacen del problema algo palpable y comprensible, materia de castigos y redenciones, un escenario con personajes que representan el papel del político corrupto en contraposición con la figura de los ciudadanos honrados. En cierto modo, la difusión de escándalos genera un efecto que permite des-responsabilizar a otros actores sociales en el problema de la corrupción. Los escándalos han perdurado –con intensidad variable– hasta nuestros días. Sin embargo, existe una diferencia fundamental entre los escándalos de los 90 y los actuales, que se explica a partir del impacto de la crisis del 2001. Durante los 90, los escándalos crecieron como una forma novedosa de intervenir políticamente, ubicándose fuera de la política profesional. Tenían la potencia que derivaba de un cierto halo de neutralidad respecto de la política que los denunciantes reivindicaban de manera permanente. Esa idea de neutralidad, de prescindencia, se volvió mucho más difícil de sostener luego de la crisis del 2001 y el ascenso político del kirchnerismo, cuando se configuró un escenario de fuertes clivajes políticos en relación con los cuales la neutralidad es permanentemente cuestionada. En ese contexto, los escándalos actuales, entendidos como fenómenos comunicacionales, es decir más allá de su confirmación judicial, tienen un techo, ya que se dirigen a públicos que están fragmentados y escindidos por clivajes previos y más profundos. En otras palabras, cada escándalo le habla a su público.

Los cambios de la protesta

¿Cuál es la incidencia de las denuncias de corrupción en las elecciones? Pese al fuerte impacto en la opinión pública, la percepción sobre la corrupción no parece incidir directamente sobre los comportamientos electorales. Sí pueden impactar en las chances de los personajes denunciados, por ejemplo al ser descartados como potenciales candidatos o funcionarios, pero sin duda son muchos los criterios que guían a la sociedad a la hora de definir su voto y no se limitan al tema de la corrupción. Menem, por ejemplo, fue reelecto en octubre de 1995, pocos meses después de que se desatara el escándalo por el contrabando de armas, con una mayoría más amplia que la de mayo de 1989. Algo similar ocurrió en 1993 con la elección de Erman González como diputado por la Ciudad de Buenos Aires: dos años antes, en 1991, Erman se desempeñaba como ministro de Economía cuando se desencadenó el Swiftgate. Quizá el contraejemplo sean las elecciones legislativas de octubre de 2001, en las que se popularizó el denominado “voto bronca”, y que tuvieron lugar luego de que estallara el caso de las coimas en el Senado. Pero hay que considerar también que ese proceso había llevado a una descomposición de la coalición gobernante y que los comicios tenían lugar en un contexto de profunda crisis económica, luego del recorte del 13% de jubilaciones y salarios públicos, de la creación de las monedas provinciales, etc. Más que como una fuente de conflicto específica, la corrupción es un plus que se agrega sobre diversos tipos de tensiones que tienen una dinámica propia. Ejemplo de ello es el vínculo entre corrupción y protesta social. No obstante la indignación que produce, la corrupción no se tradujo, en Argentina, en una motivación directa para la movilización. No se han registrado casos de movimientos o experiencias de movilización ligados a los episodios de corrupción más publicitados. Sin embargo, si se mira la evolución de la protesta social en las últimas décadas puede comprobarse que la corrupción se ha incorporado progresivamente al lenguaje de la movilización como un elemento importante. Esa presencia es muy significativa, desde las emblemáticas puebladas de los años 90 en el interior del país, en Cultral Có y Tartagal, hasta los recientes cacerolazos de los sectores medios, pasando por la crisis de 2001. Ese registro puede darnos idea de hasta qué punto el discurso –o los discursos– contra la corrupción se fueron incorporando al sentido común, produciendo modificaciones en las prácticas y en el vocabulario de la protesta. Esto se verifica, a su vez, en un proceso de creciente distanciamiento –marcado por la desconfianza o incluso el franco rechazo– entre los sujetos de la movilización y la clase política. Los 90 representan el momento crucial en la escenificación de esa brecha que, con matices y algunos cambios importantes, continúa. En suma, la percepción de la corrupción agrega un “plus de dramatismo” a las experiencias de movilización. La política, así, lejos de constituir una vía para la canalización de las demandas sociales, se constituye en el objetivo de la intervención de los manifestantes contra lo que consideran son los símbolos del poder y el privilegio. En algunos casos, la corrupción –o, mejor dicho, las demandas contra la corrupción– alimentan la violencia, la ira y la indignación; en otros casos, sirven para que los colectivos que surgen de los procesos de movilización se diferencien, adquieran cierta particularidad e identidad propias. Así ocurrió en los estallidos sociales en las provincias argentinas durante los 90, de los cuales el Santiagueñazo de 1993 fue uno de los ejemplos más significativos, o con los propios piqueteros en los grandes cortes de ruta en el sur y el norte del país a mediados de esa década. En este sentido, el vocabulario de la corrupción incorporado a la protesta permite entender de qué modo la actividad política es percibida en términos personales, inorgánicos y, finalmente, desligada de un discurso ideológico estructurado.

Las aristas del problema

La insistencia sobre la corrupción parece oscurecer algunos elementos que la vinculan con dimensiones políticas y económicas que quizá convenga explicitar. ¿Cuáles son los ámbitos principales en los que interviene esta transformación del vocabulario político? ¿Qué elementos del funcionamiento democrático se volvieron ilegítimos? ¿Cómo resolver esos problemas de legitimación? El problema de la corrupción tiene varias aristas. En términos democráticos, se presenta como un problema de representación, de relación entre gobernados que no confían y buscan ejercer un control activo sobre quienes los gobiernan. En términos republicanos, aparece como una crisis del imperio de la ley: los políticos, en tanto clase, cuerpo profesional o elite, escapan a la coacción que el ordenamiento jurídico ejerce sobre el resto de la sociedad. En términos económicos, la corrupción es un costo que se impone al despliegue de las fuerzas del mercado y que limita el crecimiento. Por último, la corrupción se presenta a partir de rasgos estrictamente morales: el desempeño de los funcionarios no se evalúa a la luz de los criterios de legitimidad política sino también a partir de su capacidad de demostrar un comportamiento ético en todos los ámbitos de la vida. Frente a ello, la corrupción como crítica de la política remite directamente a los escándalos, transformados actualmente en una de las figuras centrales del conflicto en la vida pública. Cuando el discurso político pierde los contenidos ideológicos y programáticos típicos de la política de partidos, la denuncia forma parte de las estrategias de degradación del adversario. Las personas –los personajes– adquieren una destacada centralidad. En este contexto, su estatura moral y su credibilidad se transforman en capitales políticos vitales en la lucha por el poder, aunque no siempre alcancen para ganar elecciones. 1. Datos del World Values Survey para Francia, Alemania, España, Gran Bretaña y Estados Unidos. 2. Todos datos del Latinobarómetro. 3. Barómetro de las Américas-LAPOP.

EL ORIGEN DEL PROBLEMA Por Natalia Zuazo* http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/el-origen-del-problema/ ¿Qué es la corrupción además de un tema en los medios y las campañas electorales? Superadas las ideas que la vinculaban con la naturaleza humana y la cultura, la economía y las ciencias sociales encontraron otras explicaciones.

Eduardo Iglesias Brickles, La dignidad, 2005 (gentileza del autor)enimos de Grecia. De ahí para abajo, todo estaba destinado a empeorar. Nos gusta insistir en esa tradición clásica, donde toda reflexión sobre el orden político es también una reflexión moral. Desde ese pedestal se sigue mirando Occidente, su idea de democracia, y también su ideal de líder político. De Platón a Maquiavelo, la idea del gobernante tiene a la ética como un a priori de la acción, con la vocación (cuando no con la religión) como guía para el bien común. No casualmente, Maquiavelo, el primero que separa la política de la ética, habrá de quedar del lado inmoral del mundo cuando la burguesía, ya afirmada con todo su poder tras la Revolución Industrial, prefiera “despachar al incómodo Maquiavelo (y a Hobbes) y retener al moderado y ponderado Locke (y Montesquieu), que le proporcionan un justificativo mucho más tranquilizador, más idealizado y elegante para su República de Propietarios: es decir, para su dominación de clase” (1). De ahí para abajo, o cumplimos o estamos destinados a la corrupción. Desde la filosofía

“En Alcibíades, Platón desarrolla la idea de que para gobernar a los otros un líder primero tiene que poder gobernarse a sí mismo. Esa idea todavía está en la cuna de nuestro entender político”, explica el filósofo Darío Sztajnszrajber. “Para Platón, el ser humano es un conjunto de fuerzas en conflicto que interactúan, igual que en la sociedad. Un buen líder es el que logra encontrar el autodominio en la fuerza de la razón y a partir de allí gobierna a los otros, como un sabio”. En ese ideal platónico se asienta el origen de la política como vocación, como un propósito casi metafísico, capaz de guiar al gobernante hacia el bien común y alejarlo de las corrupciones, desde las sensibles (a las que incitan los instintos del cuerpo) hasta las materiales (que genera el gobierno). Por eso para Platón era fundamental la educación de los futuros gobernantes, haciéndoles creer su origen superior, su sangre azul, su proveniencia metafísica distinta al resto de los hombres. “Se aislaba a los niños de su familia y de su propiedad para llegar al poder desinteresado de dinero y ambición personal”, señala Sztajnszrajber. La educación del líder implicaba un camino de obstáculos, donde los jóvenes tenían que demostrar su resistencia a los engaños, a la violencia y a los placeres. Permanecer incorruptibles para ganar luego el lugar más alto. Y allí en la cima, sí, decidir todo, incluso mentirle al pueblo, guiados por su razón. Para Sztajnszrajber, ese ideal tiene claras consecuencias hoy. “Todavía se vota a un gobernante priorizando su capacidad de gestión a sus principios políticos. Gobierna ‘el que sabe’, pero se pierde de vista que toda técnica supone una ideología, que de esa forma se invisibiliza”. Sobre esa suposición, seguir la vocación pública y separarla de la vida privada es todo lo que se necesita. Pero, metidos en el capitalismo, esos ideales suelen plantear otros problemas. El primero es que pensar algo “porque sí”, militar “porque sí”, o sin pretensión de ganancia, siempre presume algo oculto, un chanchullo. El segundo problema –entre muchos– es la escasa posibilidad de cambio. Un claro ejemplo es la vocación religiosa, donde un cura con deseo sexual –aunque no cometa ningún delito– se convierte automáticamente en un caso corrupto. Pero en la percepción social no todo es tan blanco o negro. La gente ama a Maradona aunque sea misógino y se haya drogado hasta el cansancio. Silvio Berlusconi fue acusado repetidamente no sólo de corrupción y conexiones con la mafia sino de llevar una vida privada rayana con el actor porno, y sin embargo fue reelegido sucesivamente por el voto popular. Otras veces, un gobierno moderado con altas tasas de crecimiento permite perdonar hasta las tentaciones carnales, como sucedió con Bill Clinton, que siguió gobernando con un not guilty de la Justicia tras el caso Lewinsky. Y otras, una gestión que suma al bienestar popular pero no tiene la mejor imagen de transparencia también quiebra el idealismo: roban pero hacen. Las encuestas lo demuestran: la corrupción no está entre los temas que más preocupan a la gente. El último Barómetro Global, publicado en julio de 2013, indica que el 72% de los encuestados cree que la corrupción aumentó en Argentina en los últimos dos años y que nuestro país tuvo la peor performance de la región. Sin embargo, en las encuestas nacionales de temas prioritarios en un año electoral primero aparece la inseguridad (45%), segundo el desempleo (20%) y tercera la inflación (12%), muy lejos del 5% de preocupación expresada por la corrupción (2). “La última vez que el nivel de preocupación estuvo alto fue entre 1997 y 1999, cuando empezó la Alianza, que se sumó al discurso anticorrupción”, dice el sociólogo Hernán Charosky, ex director ejecutivo de Poder Ciudadano. “Eran los últimos años del menemismo, con desgaste político, pero fue un año de crecimiento, lo cual descarta esa idea de la preocupación por la corrupción como emergente de momentos de crisis económica. Yo no coincido con esa visión”, señala Charosky, siguiendo también una vasta investigación económica sobre las causas y correlaciones materiales del fenómeno.

Desde la economía

A principios del siglo XX, los economistas no miraban la corrupción como un tema interesante. Estaban más preocupados por la eficiencia, y creían que la corrupción era un tema político, vinculado con la distribución: le saco a uno y le doy a otro, sin agrandar o achicar “la torta”. La explicación tradicional también se vinculaba con la tesis weberiana de que los empresarios nacidos bajo el protestantismo tenían un espíritu

emprendedor más potente, que los diferenciaba culturalmente y los hacía más aptos para los negocios, además de hacerlos más honestos (la entrada al Cielo dependía de la riqueza, pero también de la ética para llegar a ella). “Es una tesis pésima. Está estudiado empíricamente que no hay correlación entre la corrupción y la cultura o el origen de los empresarios. Lo fue demostrando la inmigración de Estados Unidos: italianos, judíos y negros pudieron ser igual de buenos empresarios. Está estudiado y demostrado que la propensión a tomar riesgos pero también a ahorrar no dependen de la cultura”, explica desde Harvard el economista Rafael Di Tella, referente y pionero en investigaciones económicas sobre la corrupción. “De hecho, estos temas recién se hicieron interesantes académicamente cuando salió a la luz el Mani pulite en los 90, que confirmó que también en los países desarrollados la corrupción estaba presente. Entonces se empezaron a mirar las causas, y a través de mucha investigación con base en estadísticas llegamos a la conclusión de que lo relevante es el ambiente económico.” Dentro de estas explicaciones macroeconómicas, y habiendo estudiado los casos de 75 países, Di Tella encontró que la inflación es una variable de altísima correlación con la corrupción (3). “Al no poder comparar precios debido a las oscilaciones propias de la inflación, no se sabe qué es caro o no, y por lo tanto no se pueden controlar los gastos del Estado. Por ejemplo, si hay muchísimos precios para un escritorio, y una dependencia estatal compra escritorios, ¿cómo demostrás que pagó de más? Eso también es un problema para las causas judiciales: en épocas de inflación, con mucha dispersión de precios, los peritos no tienen un parámetro para juzgar un sobreprecio.” Estudios como los de Di Tella, basados en niveles de precios, ahorro, inflación y otros indicadores económicos proveyeron una base estadística más dura a las investigaciones sobre corrupción y un argumento para contrarrestar a los que decían que la percepción era un dato muy subjetivo para medir el problema (y por lo tanto deslegitimarlo). La economía avanzó en su diagnóstico y correlaciones, pero hay problemas que persisten. El primero es que, como todo dato de la “economía oculta”, la corrupción escapa a los registros oficiales. El segundo es que los organismos que se encargan de medirla son los mismos encargados de calificar, castigar o premiar a los países afectados por ella. Sorteando esos obstáculos, las ONG y los expertos hoy trabajan complementando estudios. “Transparencia Internacional publica todos los años, desde 1995, el Índice de Percepción de Corrupción, un ranking mundial que toma indicadores de otros organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo, The Economist, datos de seguridad jurídica, libertad de comercio y libertad de expresión de cada país. Transparencia hace como un mashup de todo eso y publica el ranking”, detalla Charosky. “En cambio, el Barómetro de Corrupción incluye también investigación primaria, con unos mil casos en el país, y preguntas interesantes como si usted cree que su gobierno está haciendo algo por controlar la corrupción.” Además de estos enfoques clásicos, hay otros estudios (4) que pueden contribuir, sobre todo para detectar la percepción de los ciudadanos sobre la corrupción sistémica, mucho más difícil de dar cuenta que la llamada petty corruption (pequeñas coimas, pagos para acelerar trámites o evitar una multa) porque está lejos de la vida cotidiana de la gente. Otro indicador muy interesante es el que produce Tax Justice Network, que mide la evasión impositiva en el mundo y devela que no siempre los países con bajos índices de corrupción son modelos en otras áreas. Un ejemplo es Singapur, un país muy bien posicionado en términos de corrupción pero que funciona como un paraíso fiscal que protege desvíos de dinero de las grandes corporaciones.

Desde las instituciones

La ciencia política, en especial el campo de la administración pública, también contribuyó a los análisis de la corrupción y al diseño de estrategias y políticas públicas para reducirla. Un primer grupo de investigadores, vinculados con el neoinstitucionalismo y la economía política, se abocaron a análisis más sistémicos del fenómeno, y los vincularon a las asimetrías de información en el Estado. “Esta línea trabajó sobre cómo reducir por ejemplo las asimetrías sobre los precios de las compras públicas, algo que ahora tiene su avance en la creación de sistemas de compras electrónicas centralizadas”, explica Charosky. Una de las académicas más destacadas en estos estudios, Susan Rose Ackerman, de la Universidad de Yale, investigó las

interrelaciones entre Estado y mercado para crear una tipología que vincula sistemas políticos y sistemas económicos, de más a menos competitivos, para desde allí derivar mayores o menores oportunidades de corrupción. En su clásico La corrupción y los gobiernos: causas, consecuencias y reforma, publicado inicialmente en 1999 y traducido a 17 idiomas, Ackerman estudiaba los países en transición del socialismo y los ubicaba entre los más expuestos a la ineficacia y desigualdades económicas, y a partir de allí recomendaba una serie de reformas para reducir los beneficios materiales procedentes de los sobornos (sistémicamente, más allá de apartar a las “manzanas podridas” individualmente), y en estos procesos consideraba la implicancia de los dirigentes locales e internacionales como parte del proceso. La palabra “reforma” está presente en toda la obra, sin ninguna voluntad de ocultar su ideología ni su trabajo como consultora del Banco Mundial. Su perspectiva permite mirar casos cercanos: “El gobierno de Menem tuvo en los primeros años un grado de legitimidad y falta de competencia política que le permitió por ejemplo privatizar el mercado de los teléfonos y dejárselo a dos empresas en situaciones poco competitivas, de monopolio”, analiza Charosky. También desde la ciencia política, otra serie de estudios se centró en los procesos organizacionales, para diseñar mecanismos de transparencia, canales para ampliar el acceso a la información de la ciudadanía y organismos de control. Dentro de este grupo, Robert Klitgart, de la Universidad de Harvard –también consultor de organismos internacionales y de la Rand Corporation (5)–, creó a mediados de los 90 una fórmula que se convirtió en un clásico. La ecuación que explicaría la emergencia de la corrupción es simple: monopolio más discrecionalidad menos transparencia. Más cerca, y en ascenso en los últimos cinco años, el también harvardiano pero más joven Archon Fung propone que las intervenciones más efectivas para garantizar transparencia no son las macro sino las intervenciones sectoriales en políticas públicas y beneficiarios específicos. Su propuesta “sectorialista” es la que actualmente toman organismos como el BID y se centra en interceder en cada nivel particular para generar control y reducir la corrupción: salud, educación, infraestructura, transporte.

En el camino

Sea cual fuere la perspectiva, la buena noticia es que la corrupción ya no es analizada desde el prisma individual: los hombres racionales que escapan a las tentaciones privadas ya no son los mejor destinados para el gobierno. Tanto la economía como el estudio de las instituciones políticas, sumados a ONG, fueron generando en los últimos años evidencia de que las causas del problema son más bien sistémicas y no tienen relación con lo cultural. Esto es una buena noticia para descartar los prejuicios sobre las economías menos avanzadas y sus culturas. Sin embargo, todavía existe una preminencia, tanto en los estudios académicos como en los organismos internacionales, de la corrupción como tema, y por lo tanto de las recetas para controlarla. Y también hay una tendencia a hablar de la corrupción con rankings, efectivos para asignar lugares pero incompletos para entender los porqués. Quizá para entender la gris naturaleza del problema, ni tan racionalizable ni tan ligado a lo prohibido, haya que recorrer un camino más cercano al cambio, un poco más lejos de los ideales platónicos, un poco más cerca del común posible a cada sociedad en cada tiempo. 1. Eduardo Grüner, “La astucia del león y la fuerza del zorro”, en A. Borón (comp.), La filosofía política clásica, Clacso-Eudeba, 1999, pág. 255. 2. Management & Fit, julio de 2013. 3. Véase, entre otros: Miguel Braun y Rafael Di Tella, “Inflation, inflation variability and corruption”, Economics & Politics, Vol. 16, 2004. 4. Véase Germán Lodola, Cultura política de la democracia en Argentina, 2010, Vanderbilt University/UTdT.

5. Considerado “el think tank que controla América”, por sus vínculos con la corporación militar estadounidense. * Periodista y politóloga.

© Le Monde diplomatique, edición Cono Sur

LA IZQUIERDA URUGUAYA EN SU LABERINTO. Por José Luis Perera http://www.quehacer.com.uy/index.php?option=com_content&view=article&id=845:la-izquierdauruguaya-en-su-laberinto&catid=149&Itemid=159 Luego de 8 años en el gobierno, el progresismo parece haber dado todo de sí, y ya no tiene demasiado que ofrecer a los votantes de izquierda. El primer período mostró logros indudables en varios terrenos: recuperación de salarios, reducción de la pobreza y la indigencia, mejoras en el nivel del empleo, etc. Pero también retrocesos en otros, como una concentración y extranjerización de la tierra como jamás se había visto, al punto que podría hablarse de una reforma agraria pero en sentido contrario.

Sin embargo, desde el punto de vista de la izquierda, los elementos más decepcionantes se dieron en el terreno de lo político. Fue allí donde las señales fueron más claras, en el sentido de hacia donde apuntaba el proyecto de futuro. Nadie esperaba ya, desde luego, que el Frente Amplio en el gobierno concretara en el 2005 lo que había sido su programa en 1971. Ya habían sido descartadas progresivamente medidas radicales como la reforma agraria o la estatización de la banca mucho tiempo antes. Pero tampoco era factible esperar retrocesos, que sin embargo se dieron. Muchas de las medidas que el Frente Amplio criticaba mientras estuvo en la oposición, fueron llevadas adelante luego como la cosa más natural. De esa manera, se hicieron maniobras conjuntas con tropas yankis, se enviaron tropas a Haití, se concretó en el primer año de gobierno un Tratado de Protección de Inversiones con los EEUU (traducido al español: se le protegieron las inversiones al imperio), y se intentó por todos los medios un Tratado de Libre Comercio con ese país a pesar de que el programa planteaba exactamente lo opuesto. Puede decirse, como bien lo señalaba un militante frenteamplista (contado por Constanza Moreira), que el FA en el gobierno mejoró muchas cosas pero no transformó absolutamente nada. Sin duda fue una administración mucho más eficiente que las anteriores de blancos y colorados, aunque mostró también diversas desprolijidades y oscuridades (por llamarles de una manera suave) cuyo caso más notorio fue el de PLUNA. Se avanzó mucho en el tema de las violaciones de los derechos humanos durante la dictadura, aunque sin dudas más a impulsos de las organizaciones de derechos humanos, de familiares, etc.., que a la propia acción del gobierno, que se limitó a la aplicación del art.4 de la ley de impunidad. Sin olvidar algunas cuestiones como las directivas concretas por parte del presidente Vázquez a sus ministros de no involucrarse en la campaña por la anulación de la ley de impunidad, o el ascenso a general del asesino de Nibia Sabalzagaray a pesar de habérsele advertido de quien se trataba; o el impulso al proyecto del “nunca más”, de cuño ultraderechista, solo por mencionar algunos ejemplos.

Otras perlas personales del presidente Vázquez fueron sin dudas dos vetos a leyes votadas por su propia fuerza política. Quizá el menos recordado sea el veto a la ley de seguros por accidentes laborales (que beneficiaba a los trabajadores), que había obtenido amplias mayorías en el Parlamento, y que el presidente vetó porque encarecía los seguros a los empresarios. Y luego el veto a la ley de salud sexual y reproductiva (conocida popularmente como ley del aborto). SEGUNDAS PARTES No obstante, la izquierda siguió apostando a generar cambios profundos. Para lo que sería el segundo período de gobierno, trabajó en la generación de un programa que de alguna manera pusiera proa hacia la izquierda, y logró introducir algunas medidas que, si bien no eran el socialismo, podían ser consideradas anticapitalistas. Sin dudas las más importantes, y que generaban mayores expectativas, eran la creación de un frigorífico multimodal y una flota pesquera, y la convocatoria en el primer año de gobierno de una Convención Nacional Constituyente. Las primeras generaban cambios sustanciales en lo productivo, y la Constituyente permitía generar una discusión y participación a nivel popular donde todo estaría a consideración, y donde se podían establecer nuevas reglas de juego, diferentes a las que históricamente las clases en el poder habían establecido. La candidatura de un ex guerrillero, perteneciente además al grupo mayoritario dentro de la fuerza política gobernante, apoyado por el Partido Comunista, sin duda podía albergar expectativas de un viraje a la izquierda. Sin embargo, nada de eso sucedió. En primer lugar, porque desde el inicio, al conformarse la fórmula presidencial, se pactó que la economía quedara a cargo del mismo equipo económico que en el primer gobierno: el equipo de Danilo Astori, premiado como el mejor ministro del mundo por los grandes grupos del capital trasnacional (premio que ya había recibido antes el ministro colorado Alfie). De manera que con la economía en manos de Astori, y la mayor parte de las reformas ya efectuadas en el primer gobierno, fue muy poquito lo que se hizo en este segundo período. Hubo una mejora sustancial en la política internacional, se aprobaron leyes como la del aborto y la del matrimonio igualitario y poca cosa más. El buque insignia del presidente, el Plan Juntos, no ha contado con los recursos necesarios y el presidente parece querer llevarlo adelante con mucho voluntarismo y nada más. Quien sabe si pueda apuntarse un porotito más con la legalización de la marihuana. DE AQUÍ EN MAS Para el futuro, el panorama para la izquierda no puede ser más desolador. Para lograr un viraje hacia la izquierda, necesita al menos dos cosas: un programa de izquierda y un candidato de izquierda. Ambas cosas parecen difíciles de lograr. Porque además no alcanza con que el programa tenga aspectos de izquierda...además tienen que llegar a concretarse, cosa que como hemos dicho no necesariamente sucede. Si bien la comisión de programa viene trabajando y es poco lo que se conoce, algunos síntomas señalan que el rumbo no ha de variar sustancialmente. El economista Jorge Notaro (economista con concepciones avanzadas y de cambio) que estaba trabajando en esa comisión en el área temática de la economía, acaba de retirarse porque lo que se viene imponiendo es la concepción del ministerio de economía, y porque además no se le permitía hacer públicas sus diferencias. En cuanto a candidaturas, más allá de un fuerte movimiento desde las bases por candidaturas múltiples o alternativas, es más que evidente que el ex presidente Tabaré Vázquez contará con el apoyo mayoritario de los sectores y grupos del FA (recientemente el MPP, grupo fundado por el presidente Mujica, decidió su apoyo a Vázquez). Un Vázquez que, desde que dejó su investidura, no ha hecho más que mostrar a todo el mundo que es más conservador que lo que uno podía llegar a imaginarse. Su confesión de haber pedido ayuda a Bush contra Argentina, su participación descarada en el plebiscito por la derogación de la ley del aborto, sus planteamientos en torno al cambio de “actitud imperialista” de los EEUU y su llamado a una agenda común con el imperialismo, amén de sus disquisiciones acerca de lo obsoleto de los términos derecha e izquierda, son claras muestras de ello.

De manera que la situación es clara. Un Frente Amplio que se ha modificado sustancialmente desde lo que fue en su origen -una fuerza de izquierda que pretendía ser la alternativa al conservadurismo de la derechahasta transformarse en un partido tradicional más. Que como alternativa hacia el futuro presentará un programa conservador con un candidato más que conservador (tal vez el más conservador de los posibles) para llevarlo adelante. Hace unos años, en Italia, se constituyó el Partido Demócrata, como fusión de los Demócratas de Izquierda (DS, social-liberales) y de la Margarita (ex -democristianos), conformación que sellaba definitivamente la mutación profunda de la izquierda proveniente del Partido Comunista Italiano. Al mismo tiempo, otros proyectos intentaban reconstruir los pedazos de la socialdemocracia dispersos por ahí. Lo que importa traer a colación, es que el proceso nacía marcado por su subalternidad a las fuerzas socialliberales en el gobierno y que se configuraría como izquierda complementaria de gobierno, revelando la actitud de unos grupos dirigentes que redescubrían el valor de la realpolitik. Del otro mundo posible se pasaba al otro gobierno posible…que vota la guerra, privatiza los servicios y las empresas públicas etc. Un camino incapaz de modificar las relaciones de fuerza, y que mostraba la consecuencias de una izquierda encerrada en la perspectiva de gobierno, fundada en una lógica de mediación e incompetente para pensar una alternativa a la izquierda liberal. Hace pocos meses hubo en Italia elecciones municipales. El dato más relevante es que la abstención superó a los votantes. Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

AFIRMA ACADÉMICO DE HARVARD: "LAS FARC NO SON EL PROBLEMA DE COLOMBIA, SON UNO DE LOS SÍNTOMAS"

James Robinson http://www.cronicon.net/paginas/edicanter/Ediciones88/nota10.htm POR CAMILA ZULUAGA En Colombia la gente necesita no solamente quejarse por la crítica realidad socioeconómica que enfrenta, sino que requiere de una voz común, una forma de articular cuáles son los problemas de este país y cuáles son las soluciones, y ello no está ocurriendo, sostiene el profesor de la Universidad de Harvard James Robinson, quien desde hace 15 años ha dictado clases en la Universidad de los Andes de Bogotá durante el verano. Autor de varios títulos, su libro más reciente es Por qué fracasan las naciones. Es experto en política y economía colombiana. Aprovechando la coyuntura hablamos con él y le preguntamos por los paros, el proceso de paz, la situación económica del país y la coyuntura política colombiana. Su libro 'Por qué fracasan los países' empieza hablando de la Primavera Árabe y las razones que tenía la población para protestar. Por estos días estamos viviendo en Colombia un sinnúmero de manifestaciones desde diferentes sectores. ¿Tienen razón los manifestantes en salir a las calles? Cuando viajo por Colombia veo enormes problemas y legítimas causas para que la gente se queje. Por ejemplo, en el Chocó no hay carretera decente. Son 189 kilómetros de Quibdó a Medellín, nos dijeron que tardaríamos 12 horas. ¡189 kilómetros y se tarda usted 12 horas! Ellos se sienten abandonados y tienen un argumento legítimo para decir que lo han estado por el gobierno.

¿Por qué está pasando esto ahora en Colombia? La gente piensa que puede haber una nueva forma de hacer política, creen que las negociaciones con las Farc al parecer van muy bien, la gente está muy optimista de que se va a firmar un acuerdo de paz. Iván Márquez así lo dijo, y la gente siente que es el momento de movilizarse y de que la sociedad civil influencie el proceso, porque de pronto tienen la oportunidad de hacer parte de esta nueva política. ¿Estas protestan llevarán a algún lado a los manifestantes? Esa gente necesita no sólo quejarse de lo que tienen enfrente, sino que necesitan una voz común, una forma de articular cuáles son los problemas de este país y cuáles son las soluciones. No veo eso sucediendo, pero eso es lo que debería pasar. ¿Cómo ve usted el hecho de que este gobierno ha cedido a las peticiones económicas de los manifestantes cada vez que hay un paro? No suena como una dinámica muy sana. Pero estoy a favor de la protesta, creo que hay muchas razones legítimas para protestar en este país. La protesta es sana. Si uno ve la historia mundial se da cuenta de que muchas protestas han traído un cambio institucional en buenas direcciones. No veo nada de malo con los paros, así haya quedado atrapado en el aeropuerto de Quibdó por unas horas, eso es sano en la sociedad. Claro que dar dinero no es la solución a esos problemas, identificar correctamente cuáles son los problemas es la forma en que se debería estar pensando. La política minera es una de las causas de uno de los paros en el país. ¿Cree que es correcta la forma en que el Gobierno está tratando a este sector? Veo la lógica de usar capital internacional y experiencia internacional en tecnología para maximizar la cantidad de bienestar generado por la minería, pero la realidad de Colombia es que hay una enorme inestabilidad y ausencia de autoridad en las regiones. Lo que necesita este país es estabilidad, un contrato social que funcione. Tener a mineras como Anglo Gold Ashanti maximizando la riqueza a través de la explotación del oro extraído en el Chocó no va a ayudar a lograr eso. Entiendo el argumento económico, pero pienso que el argumento político y social es mucho más importante para este país en términos de tratar de encontrar un "contrato social" que funcione. Estoy seguro de que Anglo Gold Ashanti y su minería tienen mucho que ofrecer, pero esto no es lo que Colombia necesita. En esa misma línea de políticas adoptadas por el Estado, ¿cómo ha visto el episodio del manejo de baldíos en el departamento del Vichada? Exponer un argumento económico para trazar una política que respalda que es mucho mejor darle un baldío a Riopaila y al señor Sarmiento en vez de dárselo a los campesinos es una locura para el país. Lo sucedido en el Vichada con los baldíos le hace un daño enorme a Colombia, porque muestra nuevamente que, como siempre, los intereses de la gente del común son anulados por gente que está políticamente conectada. ¿Cómo ve usted el gobierno Santos? Está tratando de hacer cosas que el país necesita. La Ley de Víctimas es una gran idea; no sé si algo de ella se ha implementado, están tratando de hacer un gran trabajo en darle a la gente títulos de propiedad, pero toda esta idea de restitución de tierras es todavía una ilusión. Hay políticas que el Gobierno tiene que son buenas, pero hay un problema de implementación, hay mucha gente bien intencionada trabajando en el Gobierno tratando de hacer las cosas mejor, pero veo todo el tiempo evidencia de que el Estado no entiende qué puede y qué no puede hacer.

¿Qué piensa del expresidente Uribe? Él es una persona complicada. Leí su autobiografía y me dio la impresión de que por lo menos él entendió qué se podía y qué no se podía hacer. Sabía que no se podía ganar la guerra de inmediato pero había que hacer algo simbólico que hiciera pensar a la gente que venía una nueva Colombia. Por eso, una hora después de posesionado viajó a Valledupar a hacer la toma de la carretera. Fue muy hábil en cómo decidió enviar ese mensaje, y funcionó. Además, estuvo muy obsesionado con la estrategia militar, lo cual en su momento era la correcta priorización y fue enormemente exitoso en su estrategia. Hay que aceptar que las negociaciones en Cuba no hubieran sido posibles de no ser por la estrategia militar de Uribe. Ya que habla de mesa de negociación, ¿de ser exitoso el proceso de paz cómo ve usted el futuro del país? La preocupación que tengo es que si llega a darse la desmovilización de la guerrilla, la gente esté tan satisfecha que crea que el trabajo llega hasta ahí. Y eso sería un desastre. El trabajo de verdad empieza después de firmado el acuerdo. Hay agendas para la transformación, pero no sé si haya el suficiente apoyo político para ello. ¿Si se firma el acuerdo con las Farc se soluciona el mayor problema quetiene el país? Las Farc no son el problema de Colombia, son uno de los síntomas. En la historia de este país ha habido muchos que se han desmovilizado y son reclutados nuevamente por otros grupos. Que las Farc se desmovilicen no va a cambiar a la sociedad, tampoco cambiará la inseguridad en la propiedad de la tierra, ni la ausencia de carreteras o de servicio médico. Habló de los impuestos, pero si usted le pregunta a la gente en la calle lo primero que le dicen es: ¿Por qué voy a pagar impuestos, si terminan en manos de los políticos que se los roban? Nadie quiere pagar impuestos por nada. Este es el país con mayor desigualdad en América Latina, es un país con gente muy acomodada que no está preparada para pagar ningún dinero para proveer bienes públicos y eso es porque no se ven a ellos mismos como parte de la misma nación. Este es un país de "islas" y no es por su geografía, sino porque el Estado no ha funcionado. ¡Aquí no hay servicio postal! Este país tiene vías como un país de África, hasta Ecuador tiene mejor infraestructura que Colombia. Este no es un problema de ingeniería, sino de política, es de cómo interactúan los políticos, de las regiones con el Gobierno Nacional. Hay un debate que siempre se ha dado en Colombia: ¿Se debe centralizar el poder en Bogotá o se les debe permitir a las regiones manejar sus presupuestos? Hay una especie de disonancia entre la realidad y lo que se quiere hacer. Si usted mira la Constitución, este es un país centralizado, pero la realidad es que el poder está muy descentralizado. Cuando usted está en una campaña presidencial tiene que ir a los diferentes departamentos y negociar con el poder político local. Aquí hay élites muy poderosas a nivel político y económico en las regiones, esa es la razón por la cual hay cosas que el Gobierno no puede hacer así quiera, porque tiene que negociar con ese poder local. Sin embargo, así se concentre el presupuesto a nivel central, al final tendrá que negociar con el poder local a la hora de hacer infraestructura, es un circulo vicioso. En esta entrevista usted expone una realidad poco alentadora en el país. ¿Por qué entonces en publicaciones internacionales vemos constantemente qué Colombia es un milagro económico y político? Sé que hay una versión de que Colombia es una gran historia de éxito que está a punto de entrar a la OCDE, pero hasta donde yo puedo ver, ese discurso no tiene ningún sentido. ¿A qué se debe esa disonancia entre lo que se dice de nosotros en el exterior y lo que realmente pasa?

Hace 30 años Colombia tenía una pésima imagen en el exterior. De repente vino una gran campaña, muy exitosa, para cambiar la imagen del país en el exterior, pero fue sobredimensionada a tal punto que la gente tiene una visión muy distorsionada de los problemas. Se reemplazó una falsa imagen (la exclusiva de narcotráfico) con otro tipo de falsa imagen. Hace tres semanas di una videoconferencia desde los Andes al Credit Swiss Research Center en Londres sobre este país, y no podían creer lo que les estaba contando. ¿Qué dijo usted en esa conferencia? Me preguntaban qué países latinoamericanos van por la dirección correcta. Tendría que decir que Brasil y México. Las historias de México y de Colombia son similares, el PRI es el equivalente a lo que fue el Frente Nacional, lo que pasa es que los mexicanos fueron forzados, por las circunstancias, a consolidar las zonas rurales del país y extender la autoridad del Estado a las áreas rurales. Eso fue lo que nunca hizo Colombia. ¿Cuáles fueron las razones para que Colombia nunca lo hiciera? Si usted se va atrás al Frente Nacional, a los años 50, había un proyecto de Estado en construcción, no se trataba exclusivamente de repartir la torta del poder. Si va al pasado y lee a Alberto Lleras, se da cuenta de que era también un proyecto de reconstruir el Estado, pero ese programa se desbarató porque muy pronto se vieron en el Congreso leyes que pasaban para facilitar la creación de grupos paramilitares. Carlos Lleras no pudo llevar a cabo su reforma agraria porque las élites locales no cooperaron. Igual le está pasando al presidente Santos, porque no ha logrado que las élites locales colaboren con la restitución de tierras; en el Urabá, por ejemplo, eso no ha cambiado. La historia y los problemas siempre han sido los mismos, la ausencia de autoridad por parte del Estado. ¿En conclusión podríamos decir que usted no cree que la economía en Colombia vaya tan bien como nos han querido hacer ver? Las exportaciones son en su mayoría de recursos naturales, eso no es diversificación de la economía. Hay un gran talento empresarial en el país, pero al final del día la única forma de hacer dinero aquí es crear monopolios y hacer que el Gobierno los haga crecer. Si se miran los grandes ricos de este país, están centrados en construir y proteger los monopolios a través de las conexiones políticas. Esa es una forma de hacer dinero, pero no la de tener una exitosa dinámica económica a nivel internacional. Las exportaciones están casi todas basadas en los recursos naturales, la economía crece cuando los precios de los recursos están arriba. Eso no crea sociedades modernas, lo que hace es crear sociedades desiguales. El Espectador, 23 de julio de 2013.

LA OTRA CARA DE LA GLOBALIZACIÓN NEOLIBERAL: LA POBREZA POR MIGUEL ROMERO Y PEDRO RAMIRO http://www.cronicon.net/paginas/edicanter/Ediciones88/nota06.htm "Somos la primera generación que puede erradicar la pobreza". En el año 2005, en las campañas de promoción de los Objetivos del Milenio, este eslogan expresaba, a costa de olvidar la historia real de las luchas de las generaciones anteriores y las razones por las que no consiguieron vencer, el optimismo autosatisfecho con que se afrontaba entonces en los países del Norte la erradicación de la pobreza del Sur. Porque era obvio que cuando se hablaba de "pobreza" se hacía referencia a otros países y pueblos, los del Sur global. Ocho años después, buena parte de esa "generación" está más preocupada por librarse de la pobreza cercana que por erradicar la lejana. La crisis capitalista que estalló en el año 2008 está transformando el mundo con una radicalidad que sólo tiene parangón en los orígenes del capitalismo. Como diagnosticó Karl Polanyi en su imprescindible La gran

transformación: "El mecanismo que el móvil de la ganancia puso en marcha únicamente puede ser comparado por sus efectos a la más violenta de las explosiones de fervor religioso que haya conocido la historia. En el espacio de una generación toda la tierra habitada se vio sometida a su corrosiva influencia"/1. El triunfo del neoliberalismo en los años ochenta del siglo pasado dio inicio a una "segunda corrosión", que arrasó las economías de los países del Sur con los planes de ajuste estructural y comenzó una demolición sistemática tanto de los sistemas públicos en los que estaba basado el Estado del Bienestar como de los valores morales asociados a ellos. Al comienzo de la crisis financiera que hoy sufrimos, se hizo célebre una frase del entonces presidente francés, Nicolas Sarkozy, llamando a "refundar sobre bases éticas el capitalismo". Expresaba así los temores de las élites hacia el rechazo social a un modelo económico desnudado por la caída de Lehman Brothers y las tramas ocultas de la financiarización que, en aquel momento, sólo empezaban a emerger. Lamentablemente, esa contestación no llegó a alcanzar ni la fortaleza necesaria ni una expresión política significativa en los países del Centro, con la excepción de la organización Syriza en Grecia. Una vez comprobada la debilidad del adversario, cambió radicalmente el sentido de la "refundación". "Claro que hay lucha de clases. Pero es mi clase, la de los ricos, la que ha empezado esta lucha. Y vamos ganando". El lema del multimillonario Warren Buffett, que como tantos otros -George Soros en primer lugar- ejerce de filántropo en los ratos libres con las migajas de sus actividades de especulación financiera, resume la dinámica fundamental de la situación internacional: ciertamente, asistimos a un intento de "refundación del capitalismo", pero no sobre "bases éticas", sino sobre las bases de la lucha de clases y por medio de la acumulación por desposesión -según la expresión de David Harvey- de los bienes comunes y públicos, y de los derechos sociales y las condiciones para una vida digna de la gran mayoría de la población mundial/2. Las políticas de ajuste estructural de los ochenta y noventa en el Sur imperan ahora en la Unión Europea con fundamentos similares y nombres diversos: austeridad, disciplina fiscal, reformas, externalizaciones. Este es el marco general de la "globalización de la pobreza" que es el tema del presente artículo. Llamamos así a la lógica común que produce y reproduce el empobrecimiento de las personas en todo el mundo, tanto en el Norte como en el Sur. Pero es necesario analizar las diferencias en los procesos políticos y económicos creadores de pobreza, en sus consecuencias materiales en la vida de las clases trabajadoras y en las percepciones sociales que se tienen de estos procesos. Mostraremos también el rol que, desde los gobiernos de los países centrales y las instituciones multilaterales, quiere asignarse al mercado y a las grandes empresas en la erradicación de la pobreza, así como el papel residual que va a cumplir la cooperación internacional para el desarrollo tras el estallido del crash global. Somos conscientes de que las categorías, que utilizaremos indistintamente, Norte/Sur o Centro/Periferia simplifican la realidad, en general, y especialmente en lo que se refiere a la pobreza. Sin duda, hay muchos "Sures", e incluso dentro de un mismo continente hay una enorme distancia política y social entre, por ejemplo, México y los países de la Alianza Bolivariana para América (ALBA). En los límites de este texto, trataremos de analizar por qué todavía pueden señalarse excepciones a esta regla, que aún permiten establecer diferencias significativas en el tratamiento que se da a la pobreza en los países centrales y periféricos. Para ello, partiremos de datos fiables, entre los que no está, por cierto, el Índice de Desarrollo Humano del PNUD, que en el año 2011 situaba a Chipre en el muy honorable puesto 31 y con tendencia ascendente; por tener una referencia, Venezuela ocupaba el puesto 71 en la misma clasificación. ENTRE LA POBREZA Y LAS "CLASES MEDIAS" Según una interpretación ampliamente difundida, la crisis capitalista está siguiendo un curso paradójico que cuestiona los esquemas tradicionales sobre la jerarquía Norte-Sur: mientras que las economías del Centro, especialmente la de la Unión Europea, bordean o se hunden en la recesión, las economías periféricas, sobre todo las de los países llamados "emergentes", mantienen año tras año altos niveles de crecimiento, por encima del 5% del PIB. Una de las consecuencias de esta asimetría es que la pobreza ha hecho su aparición en el Norte como un problema político importante, con un gran impacto social, mientras que, a la vez,

parecería estar en retroceso en el Sur. Frecuentemente, se asocia esta situación con el estado de las "clases medias", nuevo mantra sociológico que se ha convertido en el criterio de medida de numerosos fenómenos sociopolíticos relevantes, desde la movilidad social a la crisis de la democracia. Hay en estos enfoques datos relevantes que dan cuenta de cambios profundos en la situación internacional: por ejemplo, la relativa y desigual autonomización de los países del Sur, bajo el liderazgo de aquellos que forman parte de los BRICS -Brasil, India, China y Sudáfrica; no cabe incluir a Rusia desde ningún punto de vista en la categoría "Sur"-, respecto a los "viejos" imperialismos, EEUU y la UE/3. En lo que se refiere a la lucha contra la pobreza, sin embargo, esta consideración del contexto internacional es más que discutible. Empezaremos por el Sur, planteando dos tipos de problemas: el primero, la valoración de los logros alcanzados en la erradicación de la pobreza; el segundo, el uso y la manipulación de la categoría "clases medias". Con la habitual afición de los políticos del establishment a las cifras redondas, el secretario general de Naciones Unidas ha contado los mil días que quedan para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) y se ha mostrado extraordinariamente satisfecho de los logros ya alcanzados. En especial, porque en los últimos doce años "600 millones de personas han salido de la pobreza extrema, lo que equivale al 50%". El cálculo es cuanto menos engañoso: según el Banco Mundial, en 1990 el 43% de la población mundial vivía con menos de 1,25 dólares al día, mientras en 2010 esta cifra ha caído al 21%; esta es la reducción a la mitad a la que se refiere Ban Ki-Moon. Pero no informa ni de las condiciones de extrema pobreza que siguen existiendo cuando se supera la barrera de los 1,25 dólares de ingreso diario -más del 40% de la población mundial sobrevive con menos de dos dólares al día-, ni de que cerca de 1.300 millones de personas siguen viviendo por debajo de ese nivel. Al final, esa reducción de la pobreza extrema se debe a los grandes países emergentes, fundamentalmente a China, y no tiene nada que ver con las políticas y proyectos inspirados en los ODM ni tampoco con la ortodoxia económica imperante. En la presentación de esta nueva campaña, que tuvo lugar el pasado 2 de abril en la Universidad de Georgetown bajo la marca de "Un mundo sin pobreza", el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, afirmó: "Nos hallamos en un auspicioso momento histórico, en que se combinan los éxitos de décadas pasadas con perspectivas económicas mundiales cada vez más propicias para dar a los países en desarrollo una oportunidad, la primera que jamás hayan tenido, de poner fin a la pobreza extrema en el curso de una sola generación". No puede tomarse en serio un proyecto que tiene como punto de partida una visión tan poco consistente de la situación internacional, en la que por cierto no podía faltar la ya habitual coletilla generacional. La ingeniería estadística sobre las "clases medias" merece una mayor atención. Un reciente estudio publicado por el Banco Mundial/4 propone un cambio importante en la caracterización y medición de la pobreza: lo más significativo es el uso del concepto de "seguridad económica", entendido como "baja probabilidad de volver a caer en la pobreza". De ahí nace una nueva categoría, la población "vulnerable", una estación de paso desde la pobreza hasta la entrada en la "nueva clase media", formada por quienes han alcanzado la "seguridad económica" y garantizarían la "estabilidad económica futura". La suma de pobres, vulnerables y clase media supone el 98% de la población latinoamericana; por tanto, la medida del éxito en la lucha contra la pobreza sería una movilidad social ascendente hacia la clase media. Esto es lo que, según los autores, está ocurriendo, ya que "la clase media en América Latina creció y lo hizo de manera notable: de 100 millones de personas en 2000 a unos 150 millones hacia el final de la última década". Nos estaríamos acercando, siguiendo esa argumentación, a un continente de "clases medias" que habría superado definitivamente el peso determinante de la pobreza. Aunque los criterios cuantitativos sean sólo unos de los que deben ser tenidos en cuenta en el análisis de la pobreza, en ocasiones son imprescindibles para concretar los términos del debate/5. Si hacemos caso al Banco Mundial, se considera pobres a quienes tienen ingresos inferiores a 4 dólares; estos vienen a representar el 30,5% de la población latinoamericana. Las personas que tienen entre 4 y 10 dólares al día serían las "vulnerables", el 37,5% de la ciudadanía de América Latina. Por encima de los 10 hasta los 50

dólares de ingreso diario estaría la "clase media", el 30% de la población continental. Por último, el 2% restante son los considerados "ricos", que ingresan más de 50 dólares al día. Tomando como referencia el salario mínimo existente en Ecuador, unos 300 dólares mensuales, podemos comprobar, en fin, que con un ingreso como este se tendría acceso a la "clase media". No parece, pues, que tal clasificación sea razonable: lo suyo sería concluir que, al menos, el 68% de la población latinoamericana es pobre. Y además, continuando con la referencia ecuatoriana, vemos que esa "clase media" se compondría, en realidad, de trabajadores con ingresos de entre uno y cinco veces el salario mínimo, es decir, quienes están entre un frágil escalón por encima la pobreza y el nivel medio-alto de la población asalariada. Brasil aparece como uno de los principales estandartes utilizados para justificar todo este proceso de ascenso de las "clases medias". Así, el Gobierno brasileño define como clase media a quienes alcanzan un ingreso per cápita mensual de entre 291 y 1.019 reales,/6 de manera que el 54% de la población del país pertenecería a esta supuesta "clase media". En la última década, 30 millones de personas (el 15% de la población) habrían "salido de la pobreza", ya que pasaron a disponer cada mes de ingresos superiores a 250 reales. Teniendo en cuenta que en Brasil el salario mínimo es de 678 reales, esta "clase media" tendría unos ingresos que oscilarían entre el 42% y el 150% de un salario mínimo. Con semejantes criterios, parece fácil alardear de que Brasil sea ya un país de "clases medias", unas "clases medias" cuyos ingresos no permiten siquiera alcanzar una cobertura digna de las necesidades básicas. Es verdad que, para evaluar esta cobertura, también hay que tener en cuenta otros factores; sobre todo, la extensión y calidad de los servicios públicos al alcance de los ciudadanos y, por tanto, el volumen de gasto social destinado a ellos. Por eso es muy importante tener en cuenta que, en cuestiones económicas básicas, Brasil, como la gran mayoría de los países del Sur, se somete a la ortodoxia dominante: con nueve días del pago de la deuda externa podría cubrirse todo el presupuesto del programa Bolsa Familia, eje de la política asistencial y de la base electoral del partido gobernante/7. Si podemos decir que con la crisis capitalista los programas de ajuste estructural han viajado del Sur al Norte, los fundamentos del Estado del Bienestar, por el contrario, no han hecho el viaje desde el Norte hasta el Sur. Dice David Harvey que "el crecimiento económico beneficia siempre a los más ricos". Efectivamente, ellos están siendo los principales beneficiarios del crecimiento en los países del Sur, de ahí que el incremento del PIB se vea acompañado del aumento sostenido de la desigualdad. La bonanza económica no está produciendo un incremento de esas ficticias "clases medias", sino de millones de empleos precarios, con bajos ingresos, mínimos derechos laborales y grandes carencias en servicios sociales. "Trabajos brasileños" se les llama, precisamente, en algunos análisis sociológicos con sentido crítico. Pero son mucho más habituales los enfoques afines a las ideas del Banco Mundial, que en sus versiones más delirantes llegan nada menos que a llamar "neoburguesía" a la "clase media". No han terminado los procesos de empobrecimiento en el Sur, pero es cierto que se han modificado. Sustancialmente, sólo en aquellos países -como Venezuela- que están realizando un esfuerzo considerable más allá del incremento de los ingresos de los trabajadores pobres, apostando por el establecimiento de potentes redes públicas de educación, vivienda y sanidad. Sin embargo, en la gran mayoría de los países, se ha pasado de la extrema pobreza al empleo extremadamente precario, en un camino que además tiene vuelta atrás. Si las frágiles expectativas de movilidad social ascendente se quebraran, una posibilidad nada descartable dadas las actuales perspectivas de la economía global, la situación en el Sur tendería a parecerse más a las revoluciones árabes que a los ficticios paraísos de la "clase media". EXTENSIÓN Y PERCEPCIÓN SOCIAL DE LA POBREZA En la Unión Europea, antes del estallido de la crisis financiera, 80 millones de personas -el 17% de la población- sobrevivían en la pobreza. En el año 2010, la cifra había aumentado hasta los 115 millones de personas (23,1%) y se estimaba que un número similar se encontraba "en el filo de la navaja"/8. Pero, para entender la situación actual, hay que considerar la etapa anterior al crash global. Porque si es significativo y alarmante el crecimiento de la pobreza, también debía haberlo sido que antes de 2008 la pobreza fuera ya

una lacra masiva tanto en la Unión Europea como en España, donde entre 2007 y 2010 pasó de afectar a 10,8 millones de personas (23,1% de la ciudadanía) a 12,7 millones (25,5%). La extensión de la pobreza es, sin duda, un problema de primera magnitud. Creemos, sin embargo, que no explica por sí sola que en cinco años la pobreza haya pasado de ser considerada por la mayoría de la población europea como un problema marginal y ajeno, "invisible", cuyo control quedaba a cargo de las organizaciones asistenciales y con mínimos subsidios públicos, a afectar a la situación y los temores de esa mayoría de la ciudadanía que se consideraba liberada para siempre de "caer en la pobreza". Se afirma ahora que la pobreza se ha hecho más intensa, más extensa y más cíclica. De estas características hay que destacar la tercera, que indica una tendencia al incremento de la pobreza sin "brotes verdes" en el horizonte, estimulada por las políticas que se imponen implacablemente en la Unión Europea, sin alternativas creíbles a medio plazo. La pobreza se ha hecho "visible" en la UE no sólo porque haya más pobres, sino fundamentalmente porque se ha masificado la conciencia del riesgo de caer en la pobreza/9. Diagnosticar el problema como una "crisis de las clases medias" es una simplificación que no permite entender ni las causas de la crisis actual ni las condiciones básicas para revertir esa tendencia al empobrecimiento. También en los países del Norte este es un concepto manipulable y fundamentalmente subjetivo: un mileurista era hace unos pocos años el símbolo de la precariedad, hoy sería considerado un miembro más de la "clase media". Es más útil considerar en su conjunto los elementos principales, bien conocidos, que han ido produciendo la corrosión de la "seguridad social", con minúscula, característica fundamental del Estado del Bienestar: el paro masivo, de larga duración y con subsidios decrecientes; el incremento de los "trabajadores pobres" porque el trabajo precario y sometido al poder patronal ya no asegura ingresos suficientes para una vida digna; los recortes drásticos en el empleo en la administración y en los servicios públicos, que amenazan al funcionariado; el riesgo de no poder hacer frente a las deudas contraídas en la etapa anterior, que permitieron una burbuja de alto consumo en las clases trabajadoras pese a la tendencia generalizada a la caída de los salarios desde los años noventa; el deterioro de la calidad de la sanidad y la educación, y el aumento de los pagos a cargo de los usuarios que sirven para avanzar en su privatización. Todo este conjunto de medidas responde a una lógica común que es el principio fundamental de la economía política neoliberal: la reducción sistemática del coste directo e indirecto de la fuerza de trabajo. En condiciones de relaciones de fuerzas muy favorables para el capital, eso termina desgarrando las redes de seguridad que constituían la base de estabilidad del sistema. Es aquí, en la debilidad de las clases trabajadoras, incluso aquellas que consideraban un logro garantizado el empleo estable de calidad, con sanidad y enseñanza básica públicas y gratuitas y jubilación en condiciones dignas, donde ha nacido el pánico a la pobreza y, al mismo tiempo, la impotencia para hacerle frente. Y es que, a diferencia de la situación en muchos países periféricos, donde con independencia de la orientación política de los gobiernos se ponen en marcha políticas focalizadas en la pobreza -habitualmente por razones de gestión de conflictos y construcción de clientelas electorales, muy alejadas de la idea de solidaridad-, en los países del Centro, y particularmente en la UE, las políticas que se aplican siguen sometidas a la "regla de oro" de privilegiar los intereses del capital sobre las necesidades de la población, tratando la atención social a la población empobrecida como un lastre y recortando sistemáticamente los fondos destinados a ella. En este contexto, que el año 2010 haya sido etiquetado como el "Año Europeo de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social" no deja de ser un sarcasmo. Desde los primeros estudios de los conflictos sociales característicos de la sociedad capitalista, se ha considerado un rasgo fundamental de la clase obrera la "inseguridad" en las condiciones de vida. Cuando, gracias a las políticas propias del Estado del Bienestar, pareció que esta característica desaparecía para una gran parte de la población trabajadora, la categoría de "clase media" cumplió la función de certificar esa nueva situación: "Hemos dejado de ser clase trabajadora", vino a decirse entonces. El neoliberalismo desarrolló con éxito "una demonización de la clase obrera", según la expresión de Owen Jones en su excelente reportaje Chavs,/10 tratando a esta como un grupo social en declive, cuyos ingresos no provienen del trabajo sino de los subsidios públicos.

Generalizando la inseguridad social y aproximando la amenaza de la pobreza, la crisis está debilitando estas barreras ideológicas que fragmentaban el tejido social de las clases trabajadoras. Pero no caerán si no se enfrentan a alternativas que comprendan que sólo puede lucharse eficazmente por la erradicación de la pobreza venciendo a quienes la producen. MERCADO Y EMPRESAS PARA "LUCHAR CONTRA LA POBREZA" "El capital, las ideas, las buenas prácticas y las soluciones se extienden en todas direcciones"/11. Sumidos en una crisis económica, ecológica y social como nunca antes había conocido el capitalismo global, estamos asistiendo al final de la "globalización feliz" y a la demolición de la belle époque del neoliberalismo/12. Pero las grandes corporaciones y los think tanks empresariales insisten en no darse por aludidos; lejos de cuestionar su responsabilidad en el actual colapso del sistema socioeconómico y en la crisis civilizatoria, las empresas transnacionales vuelven a presentarse como el motor fundamental del desarrollo y la lucha contra la pobreza. Según el pensamiento hegemónico, la gran empresa, el crecimiento económico y las fuerzas del mercado han de ser los pilares básicos sobre los que sustentar las actividades socioeconómicas de cara a combatir la pobreza. Eludiendo su responsabilidad en el origen de la crisis sistémica que hoy sufrimos, así como el hecho de que ellas están siendo precisamente las únicas beneficiarias del crack, las grandes corporaciones nos proponen más de lo mismo: que el fomento de la actividad empresarial, la iniciativa privada y el emprendimiento innovador sean los argumentos fundamentales para la "recuperación económica". Esta reorientación empresarial consiste en aplicar, junto con una táctica defensiva basada en el marketing, una estrategia ofensiva para pasar de la retórica de la "responsabilidad social" a la concreción de la "ética de los negocios" en la cuenta de resultados mediante toda una serie de técnicas corporativas. Y su objetivo no es el de atajar las causas estructurales que promueven las desigualdades sociales e imposibilitan las condiciones para vivir dignamente a la mayoría de la población mundial, sino gestionar y rentabilizar la pobreza de acuerdo a los criterios del mercado: beneficio, rentabilidad, retorno de la inversión. Es lo que hemos denominado pobreza 2.0 y constituye uno de los negocios en auge del siglo XXI/13. En los países del Sur global, por un lado, eso se traduce en el deseo del "sector privado" de incorporar a cientos de millones de personas pobres a la sociedad de consumo; en el Norte, por otro, significa la no exclusión del mercado de la mayoría de la población, una cuestión central ante el creciente aumento de los niveles de pobreza en las sociedades occidentales como consecuencia de las medidas económicas que se están adoptando para "salir de la crisis". "Ya es hora de que las corporaciones multinacionales miren sus estrategias de globalización a través de las nuevas gafas del capitalismo inclusivo", escribían hace diez años los gurús neoliberales que llamaban a las grandes empresas a poner sus ojos en el inmenso mercado que forman las dos terceras partes de la humanidad que no son "clase consumidora". "Las compañías con los recursos y la persistencia para competir en la base de la pirámide económica mundial tendrán como recompensa crecimiento, beneficios y una incalculable contribución a la humanidad", decían entonces/14. Hoy, las corporaciones transnacionales han asumido plenamente esta doctrina empresarial y han puesto en marcha una variada gama de estrategias, actividades y técnicas que tienen como objetivo que las personas pobres que habitan en los países del Sur se incorporen al mercado global mediante el consumo de los bienes, servicios y productos de consumo que suministran estas mismas empresas. "Responsabilidad social", "negocios inclusivos" en "la base de la pirámide", "inclusión financiera", "alfabetización tecnológica" y, en definitiva, todas aquellas vías que permitan lograr el acceso a nuevos nichos de mercado se justifican con el argumento de que van a contribuir al "desarrollo" y la "inclusión" de las personas pobres. Pero, como recalcó Evo Morales en la última Cumbre Unión Europea-CELAC, "cuando nos sometemos al mercado hay problemas de pobreza; problemas económicos y sociales, y la pobreza sigue creciendo". Al mismo tiempo, en los países centrales, donde también están aumentando los niveles de pobreza y desigualdad, en vez de emplear los recursos públicos en políticas económicas y sociales que pudieran poner

freno a esa situación, las instituciones que nos gobiernan no se han salido de la ortodoxia neoliberal y han emprendido toda una serie de contrarreformas que van a contribuir a aumentar el empobrecimiento de amplias capas de la población. Y las grandes empresas, en este contexto, están rediseñando sus estrategias para no perder cuota de mercado: "En Madrid, Londres o París también hay favelas, aunque no se llamen así", sostiene un experto brasileño en "la base de la pirámide", "es un mercado creciente que compone la nueva clase media con poder de consumo"/15. [15] Gigantes como Unilever, por ejemplo, ya están pensando en trasladar aquí estrategias que antes probaron que funcionaban en países del Sur/16. Pero, aunque algunas multinacionales están viendo cómo aplicar en Europa la lógica de los "negocios inclusivos", la mayoría de las grandes corporaciones ha optado por no innovar demasiado cuando lo que se trata es de seguir incrementando los beneficios: la continuada presión a la baja sobre los salarios/17 y la expansión de la cartera de negocios a otros países y mercados han sido, hasta el momento, las vías preferidas por las empresas para continuar con sus dinámicas de crecimiento y acumulación. La tendencia a considerar el incremento del crecimiento económico como la única estrategia posible para la erradicación de la pobreza se ha visto reforzada desde que estalló la crisis financiera. Con el actual escenario de recesión, las grandes corporaciones pretenden incrementar sus volúmenes de negocio y ampliar sus operaciones en las regiones periféricas para así contrarrestar la caída de las tasas de ganancia en Europa y EEUU. Por su parte, los gobiernos de los países centrales abogan por un aumento de las exportaciones y de la internacionalización empresarial como forma de "salir de la crisis". Según la doctrina neoliberal, la expansión de los negocios de estas compañías a nuevos países, sectores y mercados redundará en un incremento del PIB y, por consiguiente, en una mejora de los indicadores socioeconómicos, fundamentalmente en el aumento del empleo. "La única solución posible para superar la crisis y volver a crear puestos de trabajo es recuperar el crecimiento económico", resume el presidente de La Caixa, quien para lograrlo propone "buscar nuevas fuentes de ingresos, diseñar nuevos productos y abrir nuevos mercados"/18. A pesar de que las afirmaciones acerca de una correlación directa entre el crecimiento del PIB y los avances en términos de desarrollo humano no resistirían ningún análisis serio, la idea de que crecimiento económico es equivalente a desarrollo se ha hecho dominante en el discurso de la "lucha contra la pobreza". De esta manera, las referencias al crecimiento de las economías nacionales -cuantificadas exclusivamente a través del aumento del PIB- como vía para la superación de la pobreza no solo forman parte de toda la arquitectura discursiva de la agenda oficial de desarrollo, sino que además se están pudiendo llevar a la práctica mediante la asignación de medios y recursos públicos para las estrategias de fomento de la actividad empresarial y de los "negocios inclusivos". Esto es así porque las principales agencias de cooperación y los gobiernos de los países del Centro, así como los organismos multilaterales, las instituciones financieras internacionales e incluso muchas ONGD, avalan este discurso y trabajan por incorporar al "sector privado" en sus estrategias de desarrollo. DE LA COOPERACIÓN INTERNACIONAL A LA FILANTROPÍA EMPRESARIAL La cooperación para el desarrollo, en tanto que política pública de solidaridad internacional, difícilmente encuentra encaje en este marco. Y es que, en las contrarreformas estructurales que se imponen en la actualidad, la cooperación internacional no está teniendo un destino diferente al del resto de los servicios públicos: la privatización y la mercantilización. No puede decirse que en los últimos años se haya provocado un cambio de rumbo en la senda emprendida por los principales organismos y gobiernos que lideran el sistema de cooperación internacional, sino más bien lo contrario: en el marco de la búsqueda de alternativas neoliberales para huir hacia delante con la actual situación, la crisis ha llevado a que toda la renovada orientación estratégica de la cooperación para el desarrollo se refuerce y cobre aún más sentido. Por eso, estamos asistiendo a una profunda reestructuración de la arquitectura del sistema de ayuda internacional con vistas a reformular el papel que han de jugar, tanto en el Norte como en el Sur, los que se considera que son los principales actores sociales -grandes corporaciones, Estados, organismos internacionales y organizaciones de la sociedad civil- en las estrategias de "lucha contra la pobreza". La hoja

de ruta para los próximos tiempos parece clara: otorgar la máxima prioridad al crecimiento económico como estrategia hegemónica de lucha contra la pobreza, considerar al sector empresarial como agente de desarrollo en las líneas directrices de la cooperación, reducir los ámbitos de intervención estatal a determinados sectores poco conflictivos y limitar la participación de las organizaciones sociales en las políticas de cooperación para el desarrollo/19. Ya no es posible "seguir exportando tanta solidaridad", las "circunstancias han cambiado" y los compromisos contra la pobreza han de reorientarse "hacia nuestro territorio". Eso afirmaba el pasado mes de septiembre el consejero de Justicia y Bienestar Social de la Generalitat Valenciana, Jorge Cabré, para justificar la decisión de su Gobierno de poner fin a las políticas de cooperación internacional. Es sólo un ejemplo de cómo, siguiendo una línea argumental similar, tanto el Gobierno central como la mayoría de las administraciones autonómicas y municipales del Estado español eliminaron o redujeron drásticamente sus presupuestos para cooperación al desarrollo en 2012. Y para este año, lejos de augurarse una recuperación -cierto es que existen algunas excepciones a esta tendencia generalizada-, caminamos en la misma dirección: como ha denunciado la Coordinadora de ONG para el Desarrollo, a los 1.900 millones de euros que se recortaron el pasado año se le sumarán este otros 300 millones más. Con todo ello, la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) española pasará a suponer solamente el 0,2% de la renta nacional bruta, lo que nos retrotrae a niveles de principios de los noventa. "Fue un error perseguir el 0,7%", dice ahora el secretario de Estado de Cooperación y para Iberoamérica, Jesús Gracia, renunciando así a la que desde hace dos décadas ha sido una de las reivindicaciones fundamentales de las ONGD en el Estado español y que los sucesivos ejecutivos se habían comprometido a cumplir firmando el Pacto de Estado contra la Pobreza. En los años ochenta y noventa, la cooperación internacional contribuyó a apoyar el Consenso de Washington y las reformas estructurales que posibilitaron la expansión global de las grandes corporaciones que tienen su sede en los principales países donantes de AOD. Hoy, la cooperación al desarrollo ya no cumple un papel fundamental para la legitimación de la política exterior del país donante, como lo venía haciendo hasta el comienzo de la crisis financiera. Aunque aún puede seguir desempeñando un rol secundario en la proyección de imagen internacional, su función esencial es la de asegurar los riesgos y acompañar a estas empresas en su expansión global, así como contribuir a la apertura de nuevos negocios y nichos de mercado con las personas pobres que habitan en "la base de la pirámide". En el caso que nos toca más de cerca, todo ello se articula en torno a la famosa marca España, un proyecto para atraer capitales transnacionales a nuestro país -con EuroVegas como modelo bandera- y fomentar la internacionalización de las empresas españolas: en palabras de José Manuel García-Margallo, ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, "los intereses de España en el exterior son en gran medida intereses económicos y tienen a las empresas como protagonistas". Esto se constata, sin ir más lejos, en el presupuesto del ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación para este año, en el que se observa que la partida de cooperación para el desarrollo ha disminuido el 73% entre 2012 y 2013 mientras, en el mismo periodo, han subido el 52% los fondos para la acción del Estado en el exterior a través de sus embajadas y oficinas comerciales/20. Nos hemos habituado a escuchar con frecuencia, en el discurso oficial, una frase que se repite a modo de justificación: "Bastante tenemos con la pobreza de aquí como para preocuparnos de la de otros sitios". Es evidente que los últimos gobiernos españoles, tanto el actual como el anterior, han incumplido una y otra vez sus compromisos sobre la cooperación internacional y la lucha contra la pobreza a nivel mundial/21. Y a la vez, no es verdad que, a cambio, se estén destinando más fondos para afrontar la extensión de la pobreza en nuestro país. Aquí y ahora, esa labor se está dejando en manos de algunas ONG y de las grandes empresas, recuperando la obra social, la caridad y la filantropía como forma de paliar las crecientes desigualdades. Mientras crece la desigualdad a marchas forzadas -desde 2007, la diferencia entre el 20% más rico y el 20% más pobre en España ha subido un 30%-,/22 resurge con fuerza la filosofía del "neoliberalismo compasivo", basada en la idea de que pueden paliarse la pobreza y el hambre aportando "lo que nos sobra".

"Cada vez más gente de la que imaginas necesita ayuda en nuestro país", decía Cruz Roja en sus anuncios para el último "Día de la Banderita", poniendo el foco en la pobreza "local". "Cuenta conmigo contra la pobreza infantil", ese era el lema de la pasada campaña navideña de La Caixa y Save the Children, añadiendo lo de "infantil" para darle un toque adicional de sentimentalismo. Y tenemos muchos más ejemplos de cómo las grandes corporaciones están intentando reapropiarse de las buenas intenciones y de la solidaridad de una ciudadanía cada vez más preocupada por el incremento de la pobreza y el hambre: desde la filantropía de Amancio Ortega, patrón de Inditex y tercer hombre más rico del planeta, que ha donado 20 millones de euros a Cáritas (el 0,05% de su fortuna), hasta los spots tipo "siente a un pobre a su mesa" que han publicitado diferentes ONGD,/23 pasando por el auge de los bancos de alimentos, a los que han anunciado donaciones grandes empresas como Mercadona o Repsol. Hace años, la "solidaridad de mercado" se medía en base al dinero recaudado en los telemaratones, hoy parece computarse a partir de la cantidad de bolsas de comida que pueden donarse a las organizaciones asistencialistas. REPENSANDO EL MODELO DE DESARROLLO "No es una crisis, es una estafa", gritan los manifestantes que protestan por la privatización de la sanidad, la educación y el agua. Y efectivamente, no hay otro nombre mejor para explicar el hecho de que los grandes capitales privados estén saliendo reforzados de la crisis mientras, por el contrario, la mayoría de mujeres y hombres van perdiendo empleo y vivienda, sanidad y educación, pensiones y derechos sociales conquistados en el último siglo. En este contexto, los cambios sustanciales para luchar contra la pobreza sólo pueden darse confrontando, en alianza con las organizaciones políticas y sindicales y con los movimientos sociales emancipadores, a las reformas económicas y los ajustes estructurales que cada día producen y reproducen un mayor empobrecimiento. Ante el desmantelamiento de la cooperación como política pública de solidaridad internacional, la única forma de no perder ese sentido solidario que ha presidido las actividades de muchas organizaciones españolas de cooperación internacional en las dos últimas décadas es trabajar, aquí y ahora, en la formulación y puesta en práctica de una agenda alternativa de desarrollo en la que la cooperación solidaria se entienda como una relación social y política igualitaria, articulada con las luchas y los movimientos sociales emancipadores. No podemos pensar que vamos a aliviar la pobreza con lo que nos sobra, hace falta otro programa político. Trabajando en la construcción de alternativas solidarias que pueden contribuir a la resistencia social frente a los procesos de empobrecimiento y, en un futuro, a ganar fuerza para revertirlos, es decir, para cambiar de raíz la economía política dominante, tutelada por la dictadura de la ganancia. En eso estamos. NOTAS: 1/K. Polanyi, La gran transformación, La Piqueta, Madrid, 1989, p. 66. 2/ D. Harvey ha desarrollado recientemente las modalidades de esta acumulación, como puede verse en esta entrevista de E. Boulet al geógrafo británico: "El neoliberalismo como "proyecto de clase"", Viento Sur (web), 8 de abril de 2013. 3/ No es el tema central de este artículo, pero dejemos claro que no hay nada que lamentar en esto que podríamos llamar "desoccidentalización", por más problemática que sea la nueva relación de fuerzas a nivel global desde el punto de vista de los intereses de las mayorías sociales. 4/ F. H. G. Ferreira, J. Messina, J. Rigolini, L. F. López-Calva, M. A. Lugo y R. Vakis, La movilidad económica y el crecimiento de la clase media en América Latina. Panorama general, Banco Mundial, Washington, 2013. 5/ Los principales datos que aquí vamos a citar están tomados de J. L. Berterretche, "Los tramposos delirios de los tecnócratas del Banco Mundial", Viento Sur (web), 8 de abril de 2013. 6/ El tipo de cambio es de 1 real = 0,38 euros. El salario mínimo en Brasil es de 678 reales, por tanto, unos 257 euros. 7/ El 42% del presupuesto federal brasileño se destina al pago de la deuda pública. Los presupuestos de educación y sanidad equivalen solamente al 8% y 10%, respectivamente, de esta enorme sangría de los fondos públicos.

8/ Así lo recogía el diario El País, 30 de marzo de 2013, pp. 4-5. 9/ Diferentes estudios alertan de ello: Intermón Oxfam, por ejemplo, en Crisis, desigualdad y pobreza (Informe nº 32, 2012), pronostica que en España pasaremos de tener 12,7 millones de pobres (27% de la población total) en 2012 a 18 millones (38%) en 2022. 10/ O. Jones, Chavs. La demonización de la clase obrera, Capitán Swing, Madrid, 2012. 11/ Eso afirma el Consejo Mundial Empresarial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD, Visión 2050. Una nueva agenda para las empresas, Fundación Entorno, 2010). 12/ R. Fernández Durán, La quiebra del capitalismo global: 2000-2030. Preparándonos para el comienzo del colapso de la civilización industrial, Libros en Acción, Virus y Baladre, 2011. 13/ Hemos desarrollado ampliamente estas ideas en: M. Romero y P. Ramiro, Pobreza 2.0. Empresas, estados y ONGD ante la privatización de la cooperación al desarrollo, Icaria, Barcelona, 2012. 14/ C. K. Prahalad y S. L. Hart, "The fortune at the bottom of the pyramid", Strategy and Business, nº 26, 2002. 15/ "En Madrid hay favelas aunque no se llamen así", El País, 3 de septiembre de 2012. 16/ "En Indonesia, vendemos dosis individuales de champú a dos o tres céntimos y aún así obtenemos un beneficio decente", afirma un ejecutivo de la compañía en "La pobreza regresa a Europa", Público, 27 de agosto de 2012. 17/ En este año, por primera vez los excedentes empresariales (46,1%) han superado a las rentas salariales (44,2%) en el cómputo del PIB español. 18/ I. Fainé, "Crecer para dirigir", El País, 2 de noviembre de 2011. 19/ G. Fernández, S. Piris y P. Ramiro, Cooperación internacional y movimientos sociales emancipadores: Bases para un encuentro necesario, Hegoa, Universidad del País Vasco, Bilbao, 2013. 20/ CONGDE, "Análisis y valoración de la Coordinadora de ONG para el Desarrollo-España del proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2013", 8 de octubre de 2012. 21/ Plataforma 2015 y más, "España lidera la reducción de la Ayuda Oficial al Desarrollo y lleva la cifra de cooperación a su mínimo histórico", 3 de abril de 2013. 22/ Cáritas, Desigualdad y derechos sociales. Análisis y perspectivas, Fundación Foessa, 2013. 23/ Acción contra el Hambre, por ejemplo, nos invitaba a dar un donativo por cada "menú solidario" que consumiéramos en uno de los "Restaurantes contra el hambre" que formaban parte de la campaña; en una línea similar, Intermón Oxfam nos llamaba a sentarnos en su "Mesa para 7.000 millones".

Viento Sur, agosto de 2013.

MARTA HARNECKER: "ESTAMOS VIVIENDO UN PROCESO DE RESQUEBRAJAMIENTO DE LA HEGEMONÍA BURGUESA" Marta Harnecker http://www.cronicon.net/paginas/edicanter/Ediciones88/nota04.htm

POR JOSÉ SARRIÓN ANDALUZ Entrevista con la investigadora y divulgadora de movimientos políticos latinoamericanos con motivo de la presentación en España de su último libro Un mundo a construir (nuevos caminos). Formadora y a la vez estudiosa del movimiento revolucionario latinoamericano, Marta Harnecker es una autora de referencia en la izquierda de la segunda mitad del siglo XX y los albores del siglo XXI. Chilena, en los años 60 Marta pasó de ser dirigente de Acción Católica a militar en el socialismo tras conocer la experiencia de la revolución cubana. Discípula directa de Althusser y traductora al castellano de sus dos

obras más importantes: La revolución teórica de Marx y Para leer El CapitalMarta ha tenido una enorme importancia como divulgadora del pensamiento marxista. Ha sido directora del centro de investigaciones Memoria Popular Latinoamericana (La Habana, Cuba) e investigadora del Centro Internacional Miranda (Caracas, Venezuela), y entre 2002 y 2010 fue asesora de Hugo Chávez. Sus obras trufan las estanterías de cualquier militante de izquierda, junto a las de sus maestros Lenin, Marx, Gramsci, Althusser o Paulo Freire. Además, Marta ha sido determinante para la nueva generación de marxistas que no hemos conocido el bloque del este, y que nos acercamos a la tarea de reconstruir la izquierda en el ambiente cultural anticomunista de los 90. El pensamiento de Marta, difundido a través de la entonces novedosísimarebelion.org, nos ayudó a muchos jóvenes a comprender cómo se puede ser revolucionario en el siglo XXI, y nos transmitieron una visión crítica y alentadora de los nuevos procesos populares de América Latina. Trabajos como La izquierda después de Seattle (2001), Delegando poder en la gente (1999) o La izquierda en el umbral del siglo XXI (1999) fueron de lectura obligada en estos años de crisis de la izquierda mundial, que alcanzaron con especial rotundidad a España a finales de los 90. La definición de Manolo Monereo en la presentación de su libro como "un clásico en vida" no puede ser más precisa. Harnecker comenzó como divulgadora del pensamiento de Marx y Lenin entre los movimientos revolucionarios (ahí están clásicos como Los conceptos elementales del materialismo histórico, El capital: conceptos fundamentales, Táctica y Estrategia, o su serie completa de Cuadernos de Educación Popular). Pero su labor más fecunda y a la que ha dedicado décadas de su vida es la de estudiar los procesos revolucionarios de América Latina, en muchas ocasiones regogiendo la voz directa de sus protagonistas. De esta forma nos ha narrado procesos sociales en países como Cuba, Nicaragua, El Salvador, Colombia, Uruguay, Brasil, Venezuela, Bolivia, Ecuador, Paraguay, Chile e incluso el estado indio de Kerala. En su análisis de los procesos revolucionarios, Marta ha prestado especial atención a fenómenos como la edificación de nuevos instrumentos políticos, la comprensión del papel revolucionario de los cristianos, la lucha indígena, la organización de las mujeres o el movimiento estudiantil. Un interés central en su obra que aparece tempranamente en el 79 ( Cuba: Los protagonistas de un nuevo poder) y que se acentúa desde los años 90 es la participación ciudadana, entendida como una de las claves fundamentales del socialismo del siglo XXI, cuestión a la que ha dedicado una gran parte de su obra. Defensora y practicante de la pedagogía popular, los textos de Marta destacan por su sencillez, su claridad expositiva, su lenguaje llano y su estructuración en parágrafos cortos enumerados que facilitan la lectura comprensiva y la dinámica de grupo. Además, a lo largo de su obra, Harnecker ha sabido emplear el pensamiento de Lenin con inteligencia, enseñándonos a leerlo sin dogmatismos y poniéndolo en relación con las experiencias reales de América Latina. Así lo atestiguan libros como La revolución social: Lenin y América Latina (1985), Estrategia y táctica (1985), Reflexiones acerca del problema de la transición al socialismo (1985), Enemigos, aliados, frente político (1987) o Vanguardia y crisis actual (1990). ? Charlamos con ella con ocasión de la presentación de su último libro Un mundo a construir. Nuevos caminos (El Viejo Topo, 2013), en un acto organizado conjuntamente por la editorial, la revista Crónica Popular y el Frente Cívico "Somos Mayoría" de Madrid.

Mundo Obrero: Has vivido, asesorado y acompañado al proceso revolucionario bolivariano de Venezuela. Creo que la primera pregunta es evidente: ¿cómo ves el futuro de la Venezuela bolivariana sin Chávez? ¿Los revolucionarios bolivarianos han sido capaces de vertebrar un movimiento popular más allá del liderazgo de Chávez? Marta Harnecker: Yo me entusiasmé con el Presidente Chávez cuando fui a hacerle una larga entrevista. Durante las sesiones yo aprovechaba los momentos de descanso para transmitirle críticas que estaba recogiendo a su gestión, fundamentalmente desde la izquierda. Resultó que el Presidente quería cerca a alguien que fuera crítico, y esa fue la razón por la que terminé yéndome a vivir 7 años a Venezuela. Es un

dato interesante, porque a veces se piensa que Chávez era un autoritario. Escogí titular el libro Un hombre, un pueblo[1] porque me impresionó enormemente su humanidad y su convicción de que para transformar la sociedad tenía que darle poder al pueblo. Respondiendo a tu pregunta, yo creo que Chávez sembró muchas ideas en el pueblo venezolano durante sus años de gobierno en constante contacto con la gente. Fue un gran pedagogo popular. Aunque no inició su mandato pensando en una sociedad alternativa al capitalismo, sino en un capitalismo con rostro humano, las circunstancias muy rápidamente le llevaron a entender que no iba a poder hacer ninguna transformación profunda si no planteaba una sociedad alternativa. En ese momento decidió hablar del socialismo del siglo XXI, contra algunas personas que le recomendaban no hacerlo, porque la palabra socialismo tenía una profunda carga negativa. Por el contrario, él decidió asumir este término, pero inmediatamente empezó a hacer una incansable pedagogía acerca de qué era el capitalismo y qué era ese socialismo que él mencionaba. Y eso dio por resultado el que, a pesar de la opinión muy negativa que entonces se existía, en poco tiempo según las encuestas, más de la mitad de la gente en Venezuela llegara a percibir que el socialismo era la solución a sus problemas. Esos discursos de Chávez están siendo repetidos constantemente por el canal del estado y otros programas de televisión. La voz de Chávez está impresionantemente presente. En décadas pasadas cuando alguien moría desaparecía, pero ahora no. Como Chávez habló mucho y sobre cada uno de los temas referidos a la construcción de la nueva sociedad, en cada actividad que se hace se escuchan sus palabras sobre los temas a los que alude dicha actividad. Sus ideas y orientaciones acerca de necesidad de construir una sociedad alternativa al capitalismo y cómo hacerlo están presentes y marcan el camino del actual gobierno. Pero no se trata sólo de un discurso muy pedagógico que sirve de faro que ilumina el camino, sino también de la inmensa confianza que el tenía en el pueblo. Hay que tener en cuenta que Chávez ofreció a la gente la posibilidad de tomar decisiones entregando recursos a las pequeñas comunidades. No en forma populista, sino que la gente elaboraba planes, proyectos... y así la gente ha ido creciendo en autoestima, ha ido madurando mucho. Con sus palabras y sus políticas la gente se siente comprendida, apoyada, estimulada.

Otro asunto es que el Presidente actual, Nicolás Maduro, fue el candidato designado por Chávez. De alguna manera el cariño hacia éste se ha volcado en Nicolás, quien sabe que su fortaleza está en tener un pueblo organizado que lo apoye. Creo que Nicolás ha elegido el mejor gabinete desde que Chávez es Presidente, ha puesto cuadros muy buenos, yo conozco a varios personalmente. Por otro lado, sabiendo que él no es un estadista con gran experiencia -él mismo dice "me eduqué con Chávez" y que de alguna manera esa inmensa responsabilidad de dirigir el país le llegó por sorpresa, eso le hace apoyarse más en el pueblo y buscar hacer un gobierno muy ligado al mismo. Está haciendo gabinetes en distintos lugares del país, lo que el llama el "gobierno de calle", que ya el presidente Rafael Correa estaba haciendo en Ecuador con sus gabinetes itinerantes. Contacto directo con la gente, les pide: "ayúdenme a gobernar". Pero sin duda Venezuela está viviendo una situación objetiva muy complicada. El Presidente Chávez luego de ser electo por tercera vez reconoció que la gran debilidad del gobierno había sido la falta de eficiencia así como la falta de planificación. Ha habido un gran gasto en misiones sociales -que es muy importante sin duda- pero no ha habido suficiente la inversión y el estímulo a la producción interna. El gasto público ayudó a que la gente recibiera mejores salarios y recursos para salud, alimentos baratos, subsidios, etc..., aumentó la demanda interna y como eso no fue acompañado de un estimulo a la inversión en el aspecto productivo, se ha comenzado a sentir la escasez, han faltado productos y se ha recurrido a la importación. Por otra parte, el sistema cambiario ha desestimulado la producción nacional y favorecido las importaciones durante mucho tiempo. Y está el problema de haber tenido que devaluar. La derecha está haciendo una campaña muy demagógica en contra, aunque sabe que había que hacer eso. Claro que es una medida muy antipolítica y el haberla hecho sin que se produzca una crisis absoluta muestra que el pueblo da crédito al gobierno,

pero sabemos que es un desafío, y si no se logra resolver este problema, la situación podría ponerse muy seria, porque la gente está muy afectada por esta cuestión económica.. El propio presidente Maduro ha dicho que hay que hacer un "gobierno económico". Y no está sólo el problema objetivo de estas deficiencias de planificación económica, también está ocurriendo lo que nosotros vivimos en Chile en la época de Allende: una oposición que oculta productos para aumentar la escasez, se lleva capitales fuera del país, produce menos, etc... Todo lo que hizo la derecha en Chile lo están haciendo en Venezuela, creando una inseguridad en la gente que la lleva a comprar más de lo necesario. La derecha tiene una gran habilidad mediática para estas cosas, felizmente sus medios no tienen una gran audiencia. La cuestión es compleja pero los elementos que te he dado me hacen tener esperanzas. Si no existiera todo bagaje cultural y emocional acumulado por Chávez la situación sería mucho más difícil. M.O.: Hace 20 años habría sido impensable un auge de la izquierda en un continente como el que hemos visto en América Latina. Sin embargo, el avance de posiciones de izquierda o críticas con el neoliberalismo ha sido arrolladora: Venezuela, Brasil, Argentina, Uruguay, Bolivia, Chile, Ecuador, Nicaragua, Paraguay, El Salvador, Guatemala... M.H.: Especialmente yo diría que Venezuela, Ecuador y Bolivia son los países más adelantados en plantear una sociedad alternativa al capitalismo. M.O.: Todos estos procesos tienen en común que se han realizado por vía electoral. Sin embargo los golpes de estado en Honduras y Paraguay han demostrado que las élites dominantes no están dispuestas a tolerar que se les arrebate el poder, como ya hicieron en su país en 1973. ¿Crees que hay riesgo de golpe de estado en Venezuela u otros países? ¿Peligra de nuevo la vía democrática al socialismo? M.H.: Yo creo que la vía pacífica es el tránsito posible en el mundo de hoy. No podemos pensar que va a producirse lo mismo que se produjo en el siglo XX. Cuando Chávez hablaba del Socialismo del Siglo XXI estaba hablando entre otras cosas de este tránsito por la vía institucional. En mi opinión Allende fue el precursor de este socialismo, aunque yo digo que el socialismo como ideal siempre ha sido esencialmente democrático, lo que pasa es que por razones históricas y por errores cometidos en la URSS se presentó como totalitarismo. Pero las ideas originales de Marx hablan de una sociedad libertaria, democrática, de pleno desarrollo de la persona humana, en la que la persona se transforma a sí misma luchando por transformar la sociedad. Esa transición que estamos viviendo parte de esas ideas del socialismo, y lo hace con muchas limitaciones que debemos reconocer. Es el único camino que tenemos ahora mismo, y debemos tener claro que no tenemos el poder, sino que hemos conquistado un pedacito del poder. Aún tenemos en contra el poder económico, el poder mediático y las instituciones. Por eso se hace este gran esfuerzo por cambiar las reglas de juego institucional. Cuando Chávez decide pasar de su primera intención insurreccional a la conquista del poder por la vía electoral, él inmediatamente plantea el proceso constituyente, para cambiar esas reglas del juego. Lo mismo se hizo en Ecuador y Bolivia. Las asambleas constituyentes cambian la institucionalidad, para lo que se requiere de una correlación de fuerzas positiva, porque si se convoca una asamblea constituyente y quienes ganan son las fuerzas opositoras, se reafirma institucionalmente el pasado. Eso significa que hay que medir las cosas bien, el cuándo, el cómo... Por eso en Chile nunca hicimos asamblea constituyente aunque teníamos la misma situación: no porque no se hubiese descartado la necesidad política de hacerla, sino porque se pensó que no teníamos la fuerza para ganarla. Y ahí entra un tema por el que admiro mucho a Chávez, que es la audacia para crear una correlación de fuerzas que permita hacer las cosas. Cuando Chávez llega al poder había una crisis tal en el país que cambiar la institucionalidad era un sentir general de la población y muy especialmente de los sectores medios, de hecho esa fue la bandera que asumió Chávez para ser Presidente. Pero cuando la oposición se lanzó al referendo revocatorio (después de fracasar el golpe en abril del 202, y no lograr parar la economía mediante el paro petrolero), todas las encuestas decían que el presidente tenía muy baja popularidad. En ese momento muchos le dijeron: "No aceptes, vas a perder" y Chávez dijo: "Yo me he metido en las reglas de juego institucional y voy a seguir estas reglas, pero voy a crear la correlación de fuerzas que me permita ganar". Y empezó a trabajar. Creó un sistema muy interesante que llamó "patrullas electorales"[2], en las que se organizaban los simpatizantes del proceso en grupos de 10. No importaba que tuvieran partido o no.

Cada uno de esos trabajaba para crear un grupo de otros 10. Creo que debemos aprender mucho de esta experiencia.Yo me fuí a los barrios populares a ver cómo la gente había hecho este trabajo sin contar con grande recursos electorales. ¡Muchas veces no había ni propaganda! Está por ejemplo el caso de una mujer que estaba alfabetizándose, iba a su curso, después volvía a casa a cocinar, y, cuando la familia ya había comido, salía a visitar las casas de su cuadra y les hablaba de qué había significado para ella aprender a leer. Ésa era la propaganda: cómo había cambiado la vida de la gente. Eso me parece muy importante porque a veces no llegas a la gente no porque rechacen el proyecto de país que tú tienes, porque no sabes comunicarlo. De ahí la importancia de lo que esta gente sencilla comunica al narrar a los otros la transformación de su propia vida. La otra cosa importante es que hay mucha gente que simpatiza con nuestras ideas, en este caso con Chávez, y no sabe que hacer, esta idea de las patrullas permitió darle tareas concretar a mucha gente que no militaba pero que quería participar. Ahora, para responder a tu pregunta, no se puede descartar que el gobierno de los Estados Unidos intente nuevas formas de derrocar a nuestros gobiernos, pero la mejor forma de disuadirlo es la existencia de un pueblo organizado que apoya a su gobierno y que saldrá a defenderlo. Los golpes de Estados que señalas se dieron justamente en países en que la organización popular era muy débil. M.O.: En el libro que vienes a presentar distingues dos subtipos de gobiernos gobiernos alternativos al neoliberalismo: los que sin romper con las políticas neoliberales ponen énfasis en lo social (el Chile de Bachelet, Brasil, Uruguay) y los que buscan romper con las políticas neoliberales apoyándose en la movilización popular (Venezuela, Bolivia, Ecuador)[3]. ¿Es correcto hablar de una "izquierda revolucionaria" frente a una "izquierda moderada", o es necesario buscar una vía de cooperación entre ambos tipos de Gobiernos? M.H.: ¡Imagínate!, nosotros estamos hablando de cooperación hasta con los gobiernos de derechas. Unasur es la articulación de todos nuestros gobiernos para tener una voz sin EE.UU. Como tú sabes, y así lo expongo en este libro, para mí la izquierda tiene que ser anticapitalista, pero la palabra izquierda se suele usar para denominar a un sector más amplio. En América latina fue el neoliberalismo quien, con sus efectos tan desastrosos para los sectores populares, cultivó el terreno para que nacieran sus sepultureros. Pero no sólo afectó a los sectores sociales más pobres, sino también a las capas medias que vivían tensionadas la competencia. En este modelo se vive el absurdo de que hay gente que trabaja 14 horas para no perder ser vencidos por la competencia, y otros que no tienen trabajo. Esa gente tiene un bienestar económico pero vive para trabajar, no trabaja para vivir. Por eso te digo que la convocatoria debe ser muy amplia, debe tratar de reunir a todos los afectados por este modelo, no sólo económicamente sino también psicológicamente. La palabra izquierda a veces no sirve. Yo me siento de izquierdas por supuesto, pero hay gente que quiere el cambio, a la que si tú le dices "éste es el proyecto de sociedad" está contigo, lo que pasa es que no sabe que ese es un proyecto es de izquierdas. Cada país, cada cultura y cada historia tiene que usar las palabras que la gente entienda, no las palabras científicas. Yo siempre digo que cuando tú le ofreces agua a una persona, le ofreces "agua" no "H2O". La izquierda durante mucho tiempo hablaba con palabras que la gente no entendía. Pero, ahí tenemos la gran lección de Fidel, que cuando hablaba a la gente de la sociedad alternativa al capitalismo hablaba de educación gratuita, de la posibilidad de trabajar, de la salud, de la alimentación, de la soberanía nacional...y cuando preguntó en una gran asamblea de masas si la gente quería el socialismo no empezó por ahí, sino por preguntarle a la gente si quería esa salud gratuita, esa educación gratuita, etcétera, y una vez que la gente le dijo que sí, que eso quería, el le dijo: "¡Eso es el socialismo! Ésa fue la pedagogía de Fidel. Chávez lo hizo a la inversa, y por eso, muchas de sus intervenciones públicas se dedicaron a explicarle al pueblo por qué el capitalismo era nefasto y cómo sólo el socialismo era la solución para sus problemas.. Y como conocía las críticas al socialismo del siglo XX, lo llamó Socialismo del Siglo XXI para distanciarse del socialismo soviético. A veces las críticas que hacemos del socialismo soviético nos hacen olvidar que aquello fueron sólo intentos de socialismo, porque el socialismo para mí lo construye la gente, no se puede construir desde el Estado. Sin duda fue un intento que resolvió los problemas del hambre, de la educación, algo del

problema de la vivienda, la salud... de millones y millones de gentes, y por eso nosotros admirábamos esa sociedad, no éramos tontos. Pero eso llegó hasta ahí, justamente porque no hubo protagonismo popular. En mi criterio ese modelo de sociedad se derrumbó tan rápidamente porque la gente no lo sentía como suyo, porque no sentían que era ella la que lo había construido. La visión que tenemos ahora del socialismo -al menos la que yo defiendo- se basa en un socialismo construido por la gente. El socialismo no se puede decretar desde arriba.:. Los partidos y los gobiernos tienen que ser facilitadores de este proceso de construcción con la gente. Esa fue una de las grandes enseñanzas de Chávez. M.O.: Otra de tus apuestas en tu obra en referencia al socialismo del siglo XXI es la descentralización[4]. Tomas pie para ello en varias afirmaciones de Marx y en la experiencia cubana. ¿Cómo compaginar eso con el diseño de una política económica nacional? También los soviéticos apostaron inicialmente por el control obrero de las fábricas, que era la situación heredada del proceso revolucionario, y las necesidades de la Guerra Civil les llevaron a implantar una economía centralizada. ¿Qué condiciones han cambiado para que sea posible una economía descentralizada hoy en América Latina? M.H.: Yo distinguiría lo que es la participación, los soviets, de lo que es la planificación y la descentralización. Yo creo que tiene que haber un plan central estratégico de toda la nación, por supuesto, y en el futuro habrá también que hacer un plan único de nuestra región latinoamericana, pero por ahora estamos aún en el nivel nacional. Cuando se plantea la descentralización en la Comuna de París, no se plantea suprimir el estado central, él debe conservar las tareas que son necesarias para la coordinación de las comunas (seguridad, políticas de educación, políticas generales...). El otro tema es cómo se implementa esto en cada localidad. Yo parto de que la participación no es una frase bonita, para que haya participación tiene que haber espacios adecuados de participación y delegación de poder, y que para ellos es necesario descentralizar recursos, funciones, etc. El principio es que tú descentralices todo lo que se pueda descentralizar hasta el nivel más bajo que puedas. La idea es que las cosas que puedan ser mejor gestionados en los niveles inferiores pasen a manos de esos niveles. En Cuba, en la zafra azucarera el propio Fidel llegó a la conclusión de que no se podía dirigir todo desde el centro, porque ¿quién mejor que una comunidad para saber que la panadería de su barrio está funcionando bien o mal, o cómo hacerlo? Pero en este tema no se puede ser rígido, porque luego de descentralizar recursos a los municipios Fidel empezó a recorrer la isla y se dio cuenta de que no había ningún nuevo hospital. ¿Por qué? Porque los recursos eran tan poquitos que cada municipio había empezado a construir los cimentos. En ese caso queda claro no tenía sentido descentralizar recursos para la construcción de hospitales, había que manejar esos recursos centralmente y discutir en qué territorio era prioritario edificarlos. Una cosa diferente es la pintura para la escuela, la política de deportes para una localidad... Esas cosas perfectamente se pueden descentralizar. Lenin en sus últimas obras atribuyó al estado heredado zarista el problema del burocratismo, tú debes saberlo. Antes de morir estaba muy preocupado por las trabas que veían en ese aparato de estado. Yo no comparto esa opinión, creo que la causa más importante del burocratismo es la excesiva centralización: no puedes resolver problemas abajo, todo pasa por las decisiones de arriba, todo se bloquea, se lentifica, etc. Ése es el primer motivo para defender la descentralización, eso permite luchar contra el burocratismo. El segundo motivo es la participación. La gente tiene que ser capaz no sólo de levantar la mano y debatir, también tiene que ser capaz de tomar decisiones en la pequeña comunidad, en los territorios mayores (que Chávez llamó Comunas), en municipios, etc. Para eso se necesita crear espacios que faciliten esos procesos participativos. Yo insisto en el libro en que la palabra "descentralización" fue usada por los neoliberales para debilitar el estado central, para que los conflictos que llegaban al estado central se diluyeran en los municipios. Por otra parte, esa es una descentralización absolutamente no solidaria. Por ejemplo, se descentralizó la educación, de manera que el municipio pobre no podía desarrollar una política educativa como la del municipio rico. Nuestro concepto de descentralización es un concepto completamente distinto, donde tiene que entrar la solidaridad: debería existir una fórmula para que los municipios ricos apoyen a los más pobres. Ya en algunos países se ha practicado eso.

M.O.: Siguiendo con la cuestión de la participación, en tu artículo Democracia y socialismo. El futuro enraizado en el presente[5] analizabas cuatro experiencias prácticas de democracia participativa: Porto Alegre, Chiapas, Kerala y Venezuela. Como sabes, en España la explosión del 15-M tuvo como uno de sus lemas "Democracia Real YA". ¿Ves posibilidades de exportar estos modelos de participación que analizas? M.H.: Yo creo que la participación es tan central para la constitución de una alternativa al capitalismo que de lo que se trata es de ponerla en práctica. Conocer otras experiencias puede ayudarnos a descubrir cómo hacerlo mejor, pero siempre las formas de participación tendrán que adaptarse a cada realidad. Una sociedad participativa y protagónica, para mí eso es el socialismo. Lo otro es todo lo que tú quieras menos socialismo. El compañero marxista Pat Devine[6] habla de sociedades estatistas para referirse a la experiencia de socialismo soviético. No consiera correcto hablar de capitalismo de estado porque al fin y al cabo el excedente en esos países se usaba para cuestiones sociales, no para privilegiar a una clase. Independientemente de que los funcionarios tuvieran privilegios, pero no era como en el capitalismo. Nosotros no queremos construir sociedades estatistas. Las tres experiencias más avanzadas en América Latina (Venezuela, Ecuador, Bolivia) son muy diferentes una de la otra, pero tienen en común que son nuestros pueblos los que van a construir la nueva sociedad. Rasgos comunes son la participación, la democracia profunda, la economía centrada en el hombre y no en el lucro y respetuosa de la naturaleza, y la democracia en todos los aspectos, no sólo sociales sino también en cuanto a libertades y derechos. Yo creo que el futuro del mundo es ése.

M.O.: Una de tus preocupaciones en tus obras es combatir la tendencia al sectarismo que se halla en la izquierda revolucionaria. En este aspecto, has autocriticado que existían en América Latina grupos que se autoproclamaban la vanguardia del movimiento obrero, y que aplicaban el marxismo-leninismo de un modo mecanicista, antidialéctico, fijándose sólo en los objetivos estratégicos últimos, y no en los objetivos tácticos para alcanzarlos. No puedo estar más de acuerdo. Ahora bien, sobre esto querría preguntarte algo. En nuestra sociedad tan hegemonizada, tan penetrada por la ideología burguesa, parece difícil esperar que el pensamiento socialista nazca espontáneamente. En este sentido, estaría de actualidad la necesidad de la lucha ideológica que planteaba Lenin o tú misma en tus clásicos Cuadernos de Educación Popular ¿Podemos hablar de la necesidad de una "vanguardia" dentro de estos movimientos amplios? M.H.: El problema del término vanguardia es que fue mal interpretado. En América Latina había muchas vanguardias sin retaguardia. Cada grupo de izquierda se declaraba LA vanguardia y despreciaba a todos los otros. La pregunta que habría que hacerse es: ¿qué son esas masas espontáneas? ¿Qué son esos sectores populares que aparecen y que luchan, y que vemos en Egipto, Túnez, España, Wall Street, Chile, etc? Esos movimientos que se producen contra el neoliberalismo también los tuvimos en América Latina y llegaron incluso a tumbar presidentes, pero ahí se quedaban. Es decir, hay una limitación del movimiento espontáneo. Yo sigo pensando que eso es así, y que se requiere de un instrumento político que permita articular a todos los sectores para vencer al capitalismo. Se requiere preparar esa lucha, no surge sola. Se requiere también el conocer muy bien la realidad social y levantar un programa. Inicialmente hay que articular una plataforma de lucha que permita aglutinar a todos los sectores afectados por el sistema. Tiene que haber una formulación en la que todos estemos de acuerdo -yo uso el término "plataforma" cuando se trata de una plataforma de lucha coyuntural, el programa es una cosa más a largo plazo- y alguien tiene que formular eso. Eso no quiere decir que ese alguien va a estar desconectado en una oficina: tiene que estar participando y ser capaz de ver los elementos comunes para reunirlos en este programa. Ese alguien es lo que yo denomino instrumento político. El tema es: ¿cuáles son las características de este instrumento político? Sería muy largo hablar de eso aquí, desarrollo ampliamente el tema en mi libro Reconstruyendo la izquierda, donde incluyo una cosa que no desarrollé enHaciendo posible lo imposible: La Izquierda en el umbral del Siglo XXI[7]: cuál es el fundamento teórico de los errores de la izquierda que se desarrollaron en ese libro: la famosa tesis de la necesidad de la importación de la teoría marxista en el movimiento obrero.

El libro que hoy presentamos precisamente termina con un capítulo sobre el tema de la hegemonía y el instrumento político que hoy necesitamos. Allí planteo que estamos viviendo un proceso de resquebrajamiento de la hegemonía burguesa, y eso es lo que explica que surjan estos procesos. Hasta ahora el capitalismo dominaba por consenso, pero esto empieza a resquebrajarse. Eso no significa que de forma automática surja una hegemonía popular: hay que construirla, y para ello se requiere este instrumento político, porque ¿qué es la hegemonía popular si no es convencer a los demás de las ideas plasmadas en un proyecto de sociedad alternativa al capitalismo? Y ese proyecto no se construye entre dos amigos, para eso hay que tener conocimientos de historia, de economía, de la situación internacional, y de muchos otros temas. Todo ese conocimiento tiene que volcarse en el programa. Por eso la elaboración inicial del proyecto tiene que iniciarse por algún grupo, y luego ese proyecto debería ser enriquecido incorporando los aportes que puedan hacer los distintos movimientos que están luchando contra la actual sociedad buscando construir una sociedad diferente. Los diversos grupos tienden a tener visiones sectoriales, y por eso es el instrumento político el que debe ser el articulador, constructor o formulador de esa plataforma de lucha y de ese programa. Por otra parte, para que nuestras luchas sean eficaces y no meras explosiones de indignación, debemos conocer muy bien quiénes son los enemigos, tratando de concentra el fuego sobre nuestros principales enemigos, debemos conocer cuáles son sus debilidades y fortalezas, y por dónde es que podemos trabajar y avanzar mejor. Para todo eso, para planificar nuestros combates y ser capaces de golpear políticamente en el lugar y momento oportuno, es fundamental el instrumento político. Nosotros en América Latina hemos logrado pasar de la resistencia y las manifestaciones callejeras, -cortes de caminos, botar presidentes- a tener gobiernos, porque nuestros pueblos entendieron que había que jugar en el terreno político. Pero fíjate: primero resistieron, se organizaron, lucharon. Costó pasar al terreno político por que existía un gran rechazo a eso, a los partidos, a la política y los políticos. En La izquierda en el umbral del siglo XXI ofrezco dos razones para este rechazo: por un lado la derecha se ha apropiado de nuestro lenguaje, y por otro el estilo de nuestros políticos de izquierda no se diferencia del de la derecha: el clientelismo, el carrerismo político, las prebendas, etc. ¿Qué ve la gente? Discursos iguales y conductas iguales, ¿cómo va a sentirse atraída por eso? No quiere nada con la política y yo lo entiendo perfectamente. El único problema es que quien se beneficia de eso es la derecha, porque ella puede gobernar sin instrumentos políticos. El sistema capitalista tiene su lógica económica que avanza, acumula sin la necesidad de tener partidos políticos. Pero la izquierda y las fuerzas que quieren cambiar la sociedad -llámense izquierda o conglomerado progresista, o como sea- necesitan romper con esa lógica, elaborando una propuesta alternativa de sociedad y señalando los caminos para lograrla, y para realizar esa tarea se requiere, te insisto, de una instancia política, no necesariamente al estilo de los partidos de antes, sino algo nuevo que no reproduzca sus fallas y cuya principal función debe ser la facilitar participación popular y la organización.autónoma del pueblo. M.O.: En tus obras se transpira un gran conocimiento de Lenin, en cuyo pensamiento basas muchas de tus afirmaciones. No es una exageración decir miles de jóvenes en España hemos aprendido a leer a Lenin a través de tus obras, y gracias a ellas hemos aprendido a leerlo no dogmáticamente, como cuando Lenin habla de alianzas amplias, objetivos tácticos, lenguaje adaptado a la realidad, que la fórmula del Partido no es universal, sino que el instrumento político debía ser adaptado a cada circunstancia, etc. ¿Qué podemos aprender de Lenin hoy? ¿Qué significa ser marxista-leninista en el siglo XXI? M.H.: Veo que has leído bien mis obras. Hace poco revisé mi libro Vanguardia y crisis actual[8]. Me parece que hoy puede ser muy interesante releerlo porque son experiencias que se repiten en muchos lugares de un modo parecido, aún en Europa. Traté de poner algo de eso en este nuevo libro pero no se puede poner en un libro todo. A veces los libros pasan y las nuevas generaciones no tienen acceso a ellas porque desaparecen de las librerías, aunque, claro, a las mías se pueden acceder vía internet. M.O.: En el caso de tus obras, en Rebelion.org principalmente ¿no?

M.H.: Sí, ahí aparecen todos mis libros. Por cierto, que tengo que contarte que en estos dos últimos años me he dedicado a hacer unos audiovisuales pedagógicos de formación política. Se trata de unas charlas que he filmado sobre la izquierda, el socialismo, el instrumento político, el capitalismo, etcétera, que están estructuradas en bloques de aproximadamente 10 minutos cada uno. Cada bloque va seguido de unas tres o cuatro preguntas acerca del tema desarrollado en dicho bloque.[9] La idea es poder formarse sin la necesidad de contar con un profesor. Puede usarse en grupos de distinto tamaño o estudiarse en forma individual. Si el colectivo que sigue el curso es de más de diez personas se recomienda que, luego de ver el bloque en plenaria, se divida en grupos de trabajo de no más de diez personas cada uno y se converse sobre el tema abordado en ese bloque y se recojan las dudas que se plantean al discutir la temática expuesta. Una vez terminado la discusión el colectivo se vuelve a reunir en plenaria para ver el bloque siguiente y se retorna al trabajo de grupo. Las dudas se van guardando en una libreta. La charla irá resolviendo muchas de ellas, pero otras pueden quedar sin respuesta. Una vez terminado el curso que puede durar de 12 a 22 sesiones según el tema de que se trate, se debe llamar a un profesor o a una persona conocedora de la materia, para que responda las dudas. Si el curso es realizado simultáneamente por varios colectivos de una misma localidad, estos colectivos podrían juntarse en una sola gran plenaria para aprovechar en conjunto la presencia del profesor. Casa curso tiene un texto escrito al que se puede acceder por Internet. Por último, estos cursos pueden realizarse con distintos ritmos de intensidad dependiendo de la disponibilidad de tiempo de cada colectivo: puede hacerse un estudio semanal de uno o dos bloques; puede hacerse un estudio intensivo de un fin de semana largo, etcétera. Lo he experimentado en varios países, entre ellos en la escuela de cuadros del Movimiento de los sin Tierra en Brasil con líderes campesinos y de movimientos sociales urbanos de diversos países y he comprobado lo útil que es esta forma de pedagogía en un momento en que la gente lee poco. La dinámica de discusión que se produce luego de cada bloque es muy positiva y evita que quienes sigan el curso se limiten a recibir una información en forma pasiva. Me entusiasmó tanto ver el resultado que ahora estoy dedicada en gran medida a preprar ese tipo de materiales. Y también a doblarlos al inglés. He visto poco antes de venir a España un excelente discurso de Julio Anguita y he pensado que sería muy útil hacer un audiovisual con esta metodología dividiéndolo en bloques de más o menos 10 minutos, elaborando preguntas para cada bloque y estudiándolo luego en grupos, anotando las dudas e invitando a alguien una vez finalizado éste para que vaya a resolverlas. Ahora, respecto a tu pregunta, supongo que se me califica de marxista-leninista porque he sido una estudiosa de Marx y de Lenin. Sigo revindicando los análisis de Marx del capitalismo. Lenin me parece un estratega político fundamental, aunque en algunas cosas a lo mejor sería un poco crítica, en lo esencial yo creo que es válido. En Vanguardia y crisis señalo varias reflexiones de Lenin que me parecen muy pertinentes. M.O.: En tus obras también has destacado que uno de los muchos elementos que ha caracterizado a la izquierda latinoamericana ha sido su comprensión acerca del papel de los cristianos en la revolución. Tú misma procedes del cristianismo, fuiste dirigente de un movimiento católico chileno antes de tu adscripción al marxismo. ¿Qué queda hoy de la teología de la liberación en América Latina? M.H.: (Hace una pausa breve y pronuncia en voz suave: "los ecos") Bueno, quedan sacerdotes en Brasil y otros sitios que siguen luchando. Por cierto, dicen que el Papa fue crítico de la teología de la liberación, yo leí una carta de un jesuita a quien el Papa había liberado de la represión en Argentina. Lo digo porque se han contado muchas cosas del Papa, y yo soy contraria a encasillar a la gente en el pasado. Este jesuita cuenta que el Papa fue a una universidad argentina recientemente y habló de los errores cometidos por él en cuanto a la teología de la liberación. Para mí la teología de la liberación es una forma de entender la historia y la fe. Esa forma permanece y creo que conlleva un mensaje muy importante: la redención del ser humano ocurre en la tierra, no en el cielo. Y en esa visión hay coincidencia con los seguidores de Marx.

M.O.: Buena observación, gracias. ¿Encuentras alguna similitud entre este planteamiento y los que has estudiado en los movimientos del socialismo del siglo XXI en Latinoamérica? M.H.: Yo diría mejor: movimientos relacionados con la crisis del neoliberalismo en América latina, no con el socialismo. Este planteamiento es muy similar al que expongo en el libro La izquierda después de Seattle[10], y antes, tal vez en La izquierda en el umbral del siglo XXI. Se trata de la idea de plantear una plataforma de lucha frente a la crisis. Yo cito a un uruguayo, Enrique Rubio, y es en Uruguay donde se ha dado la experiencia más interesante para mí, de un amplio frente que no es la suma de partidos políticos, sino que logró convocar a mucha ciudadanía, más de dos tercios de los comités de base han estado conformados por simples ciudadanos que no militan en partido alguno. Esta idea de convocar a todos los que se sientan afectados me parece muy importante. Entender como dice Anguita -idea en la que yo suelo insistir-que tenemos un proyecto que responde a los intereses objetivos de la inmensa mayoría de la gente, de más de 90%: esos 16 puntos de ustedes. Estoy totalmente de acuerdo con lo que él propone: "hay que ir a la base del PP". El proyecto de país que Chavéz, Correa y Evo levantaron en sus respectivos países reflejan esos intereses objetivos de la inmensa mayoría de sus habitantes Sin embargo, el apoyo en Venezuela a Chávez era menos del 60%, había un 40% de la población que no se manifestaba en favor del proyecto. Ahí tenemos que hacer un análisis por qué eso ocurría. Por un lado no cabe dudas de que está la cuestión mediática, la manera en que los medios opositores deforman este proyecto, pero también está el que nosotros no somos capaces de comunicar este proyecto porque no hablamos el lenguaje de la gente de la calle. Por eso me gusta el discurso de Anguita, que es absolutamente claro. Y lo otro que impide que la gente se convenza de lo justo de nuestro proyecto es el hecho de que muchas veces nuestra forma de vivir, de actuar se contradice con el proyecto que pretendemos difundir: no somos coherentes con los principios y los valores de la sociedad que decimos defender. Somos autoritarios y defendemos una sociedad democrática; somos egoístas y defendemos una sociedad solidaria. ¡Eso es lo que hace que la gente no crea! Ustedes por ahora tienen esa plataforma de lucha, todavía no tienen elaborado un proyecto de sociedad como nosotros lo tenemos en Latinoamérica, pero contar con esa plataforma es fundamental para convocar a la gente. Creo que hay que buscar los medios para que ese discurso de Anguita no se pierda y creo que no basta que se estudie sólo de forma individual, a través sólo del Youtube. Creo que sería muy interesante una dinámica en la que la gente fuese discutiéndolo en grupo -como te comentaba antes-,y fuese anotando las dudas que hayan ido quedando de esas discusiones y sólo después de haberlo discutido a fondo, entonces inviten a alguien para que las esclarezca.

NOTAS 1. HARNECKER, M., Hugo Chávez Frías. Un hombre, un pueblo, Ed. Tercera Prensa, San Sebastián, 2002. Disponible en: http://www.rebelion.org/docs/97068.pdf 2. La autora ha desarrollado este concepto en los parágrafos finales de: HARNECKER, M, Reconstruyendo la izquierda, Siglo XXI, 2008, pp. 191-192. Disponible en http://www.rebelion.org/docs/97076.pdf 3. Esta tipología puede verse también en la obra precedente de la que nos ocupa: HARNECKER, M., América Latina y el socialismo del siglo XXI. Inventando para no errar. El Viejo Topo, 2010. Disponible en: http://www.rebelion.org/docs/102813.pdf 4. Puede encontrarse un desarrollo de esta idea en: HARNECKER, M. (COORD.), La descentralización ¿fortalece o debilita el estado nacional?, 2009. Disponible en: http://www.rebelion.org/docs/97088.pdf 5. Artículo inédito de marzo de 2010, anexo a su libro Inventando para no errar. América Latina y el socialismo del siglo XXI. Disponible en: http://www.rebelion.org/docs/118327.pdf

6. Sobre este asunto en este economista inglés puede consultarse: DEVINE, P.J., Democracy and economic planning: the political economy of a self- governing society, Polity Press, Cambridge, 1988. Marta Harnecker realizó junto Camila Piñeiro una síntesis-resumen que está disponible para su descarga en: http://www.rebelion.org/docs/97087.pdf 7. HARNECKER, N., La izquierda en el umbral del siglo XXI. Haciendo posible lo imposible, Siglo XXI, 2000. 8. HARNECKER, M., Vanguardia y crisis actual, Gente sur, 1990. (También publicado en cinco países con el título Izquierda y crisis actual). Disponible en: http://www.rebelion.org/docs/92106.pdf 9. Los vídeos pueden verse en el enlace en el Canal de Youtube ciclopolitico: http://www.youtube.com/user/ciclopolitico 10. HARNECKER, M., La izquierda después de Seattle, Siglo XXI, 2000. Disponible para su descarga en: http://www.rebelion.org/docs/95169.pdf

Mundo Obrero, España, agosto de 2013.

"NUESTRA OBLIGACIÓN MORAL ES PERDER EL MIEDO Y REBELARNOS CONTRA EL SISTEMA CAPITALISTA" http://www.cronicon.net/paginas/edicanter/Ediciones88/nota03.htm Arcadi Olivares

POR EDUARDO AZUMENDI Sus frases y reflexiones en torno de la crisis del capitalismo y sus secuelas en Europa son contundentes: "Se ha deteriorado tanto la situación que no hay otra alternativa que la desobediencia civil". "No se puede decir que hay que cambiar las cosas y no intentarlo". "Si el capitalismo no ayuda a las personas a cubrir sus necesidades tendremos que hacerlo desaparecer porque está en juego la supervivencia de la humanidad". Arcadi Oliveres (Barcelona, 1945) no puede reprimir la indignación cuando habla del actual sistema político y económico, de cómo se "dilapida" el dinero en ayudar a salvar bancos mientras se permite que miles de familias se hundan. Este profesor de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona y presidente de la ONG Justicia y Pau ha participado en las jornadas sobre energía organizadas por la Plataforma Fracking Ez, en Vitoria. Además de hablar sobre la situación y las desigualdades energéticas Norte-Sur, En esta entrevista aboga por "perder el miedo y rebelarse" contra el sistema político actual, al que considera enfermo y caldo de cultivo para la corrupción. Parece que eliminar las disfunciones de la crisis pasa por basar la economía en una menor rentabilidad y en un reparto más justo de la pobreza. ¿Estos preceptos son compatibles con el capitalismo? No sé si son compatibles, pero sí sé que es absolutamente necesario para la humanidad. Si no es compatible, será el capitalismo el que tenga que desaparecer porque está en juego la supervivencia de la humanidad. Si el capitalismo no permite esta supervivencia, hagámosle desaparecer y dotémonos de un sistema que facilite la cobertura de necesidades básicas de la ciudadanía y el sostenimiento del planeta.

¿Y cuál es la alternativa al sistema capitalista? Nunca en la historia ha habido alternativas preparadas. Cuando desapareció el feudalismo y llegó el capitalismo no avisaron que a las doce terminaba uno y a las doce y un minuto comenzaba el otro. Se fueron cambiando las estructuras económicas, los señores feudales fueron perdiendo su poder, los burgueses de las ciudades lo fueron ganando. Nació el capitalismo comercial, después otro financiero e industrial. Y estamos en ese proceso hacia un capitalismo más humano que permita que la gente pueda cubrir sus necesidades. Con más de seis millones de parados, ¿cómo es posible que no se produzca un estallido social? Los medios de comunicación han metido el miedo a los ciudadanos y la gente todavía tiene el temor a perder las pequeñas cosas que le quedan. Si la historia de la humanidad hubiera funcionado así, nunca se hubiera progresado. Si los primeros objetores de conciencia al servicio militar no hubieran asumido la voluntad de ir tres años a la cárcel, el servicio militar seguiría vigente en la actualidad. Si las personas de color en Estados Unidos no se hubieran rebelado contra la discriminación racial, los negros todavía irían de pie en los autobuses. Nuestra obligación moral es perder el miedo y rebelarnos contra este sistema enfermo, caldo de cultivo para la corrupción y con políticos y bancos que tanto daño están haciendo.

¿La desobediencia civil puede ser una forma de rebelión? Sí, siempre que sea pacífica y no violenta. ¿Está preparada la sociedad para ese movimiento? Sí. Creo que ahora las circunstancias son muy favorables para que esto se emprenda. Se ha deteriorado tanto la situación que no hay otra alternativa. Le voy a contar un caso que ocurrió en Barcelona hace unos años. Cuando concluyó la guerra de Irak se formó un consorcio de 24 bancos a nivel mundial para captar fondos para su reconstrucción. ¿Curioso no? Que los que más han ayudado a destruir Irak ahora también se quieren lucrar con su reconstrucción. La Caixa formaba parte del consorcio y en Barcelona no gustó nada esa idea. Así que organizamos una campaña en tres fases. En la primera, repartimos pegatinas con el lema 'La Caixa gana dinero con la sangre de los iraquíes'. En un segundo momento, un grupo de 80 voluntarios visitaron oficinas de la Caixa para entrevistarse con sus directores y preguntarles por Irak. Y la tercera fase consistió en que un grupo de 25 personas se acercaban en horas punta a las oficinas de la Caixa y se ponían a gritar que rompían sus cuentas con la entidad por su actitud en Irak. Al cabo de unas semanas, nos llamaron los responsables y nos pidieron que dejáramos la campaña. ¿A cambio de qué?, les preguntamos. Unos días más tarde abandonaron el consorcio. Siempre se puede conseguir que la sociedad secunde iniciativas organizadas de desobediencia civil, de respuesta al poder establecido. Usted ya ha buscado una fórmula para Cataluña, una plataforma que reúne a ciudadanos indignados y movimientos de izquierda con el que pretende participar en las próximas elecciones al Parlamento catalán. Yo he creído en eso, pero puedo equivocarme. Hay tanta gente que protesta que sería positivo que se uniese. A la crítica le falta dimensión política para tirar hacia adelante. La izquierda debería aprender y preparar más este tipo de actuaciones, porque con la derecha es imposible ya que solo mira la cartera. Yo no pertenezco a ningún partido, por eso en Cataluña he planteado una fórmula de coalición electoral: movimientos sociales, personas individuales y corrientes de izquierda. Todos se han subsumido en una candidatura de protesta con vistas a las elecciones en Cataluña. Ya se han adherido más de 30.000 personas y hemos empezado por reuniones en pequeños grupos locales. Dentro de dos años celebraremos unas

primarias para formalizar una candidatura. Así, nos habremos quitado la mala conciencia de decir que hay que cambiar las cosas y no intentarlo. Eldiario.es, agosto de 2013.

EL USO DE LA FUERZA MILITAR EN SUDAMÉRICA: CONSIDERACIONES PARA EL MULTILATERALISMO Y LA INTEGRACIÓN REGIONAL

http://www.cronicon.net/paginas/edicanter/Ediciones88/nota02.htm POR CÉSAR CEDEÑO La integración regional y el multilateralismo sudamericanos cuentan hoy con un creciente apoyo institucional. Sin duda, los Gobiernos latinoamericanos han buscado alcanzar sinergias que contribuyan a generar el crecimiento de las instituciones multilaterales de integración regional y su profundización. A pesar de que Sudamérica está avanzando en este propósito, existen una serie de interrogantes y asuntos de debate vinculados a dicha consecución. Una de estas interrogantes gira alrededor del uso de la fuerza militar en el siglo XXI y, en especial en el contexto de una Sudamérica cada vez más unida. A su vez, y en relación a una coyuntura de seguridad ciudadana cada vez más importante, el uso de la fuerza militar da lugar a variados debates respecto a su rol en un contexto doméstico e interestatal, ahora más dinámico. Mientras se reduce el número de conflictos internacionales, donde la fuerza militar es un factor evidentemente clave, se incrementan las demandas ciudadanas de mayor seguridad interna, y hasta del involucramiento militar en aquellos problemas que afectan la convivencia social. De cierta forma, parecería que los ciudadanos demandan la acción de una herramienta que ven infrautilizada ante la falta de guerras. En democracia, estas demandas son líneas cuyo nivel de respaldo ciudadano podría convertirlas casi directamente en políticas públicas. Sin embargo, la comprensión y gestión del tema de Defensa Nacional genera desafíos para toda democracia. Por tomar un ejemplo, Alexis de Tocqueville (2003) señalaba que el crecimiento de las instituciones democráticas, así como del comercio internacional, reducía los entornos que ubicaban a la guerra como una herramienta estatal de solución de controversias. Pero el mismo filósofo francés resaltaba que “la guerra es una ocurrencia a la cual todas las naciones están sujetas, naciones democráticas así como otras” (De Tocqueville, 2003: 629). La reflexión de Tocqueville lleva a tomar en consideración un aspecto de la naturaleza de la guerra: a mayor democratización de la decisión de usar la fuerza militar, mayor probabilidad de resistencia a afrontar los costos de esta decisión (Bellamy, 2009: 138)1. La guerra ha sido un elemento activo de las Relaciones Internacionales y, la fuerza militar ha sido un elemento que, en esa materia, tiene un rol muy claro: ser la herramienta principal mediante la cual proyectar una política realista o Realpolitik, sujeta a situaciones de competencia interestatal no cooperativa. La fuerza militar es uno de los estímulos usados para disuadir o influir en las decisiones y preferencias de un actor cuando sus objetivos afectan intereses de otros. El asunto se vuelve aún más problemático cuando se examina la naturaleza per se de la guerra. El aforismo de Von Clausewitz, “la guerra es la continuación de la política por otros medios” (1984: 13), es mucho más complejo de lo que se puede elucubrar a primera vista. De acuerdo a Brian Orend, profesor de Filosofía de la

Universidad de Stanford, se trata de un conflicto de gobernanza común entre los Estados (Orend, 2008). Esto lleva a considerar que: hay una relación permanente entre los asuntos de gobernanza común interestatal y el uso de la fuerza militar como herramienta política. La guerra, de cierta forma, es un costo y una posibilidad latente que deben estar dispuestos a asumir los Estados al coexistir internacionalmente para preservar su soberanía. Es por ello que, a pesar de que las demandas ciudadanas para un redireccionamiento del empleo de la fuerza militar tendrían quizá una alta legitimidad social, esta decisión representa un dilema estratégico que no se puede tomar solo considerando el nivel de respaldo ciudadano. Entendiendo que, dentro de los asuntos conflictivos que afectan la gobernanza común interestatal, la fuerza militar es una herramienta política cuya presencia puede ser un elemento de equilibrio en el procesamiento de estos conflictos; ¿qué pasaría si este factor es drásticamente alterado o removido? Si bien es cierto que, en un mundo cada vez más interconectado, se han reducido los episodios de conflictos en los que la guerra es una herramienta de atractivo uso, ¿qué implicaciones interestatales habría si se altera el carácter decisivo de la fuerza militar? Este artículo se propone aportar algunos elementos estadísticos y teóricos para ayudar a responder estas preguntas. Se han usado estadísticas elaboradas en el Estudio de la Universidad Casa Grande: El uso de la fuerza militar en la resolución de conflictos interestatales y el Ecuador. Una mirada cuantitativa; estas, a su vez, fueron recopiladas por el proyecto “Correlates of War” de la Universidad de Michigan en EE.UU. En el plano teórico, se han reconsiderado ciertos elementos realistas para evaluar los principios de Relaciones Internacionales que plantean el rol clásico de la fuerza militar. CONSIDERACIONES SOBRE LA FUERZA MILITAR Y LOS CONFLICTOS INTERESTATALES Hoy en día, existe suficiente evidencia estadística para afirmar que la guerra es menos frecuente y determinante que antaño (Pollins, 2004). En Sudamérica se augura una era de paz, donde es lógico redefinir, tanto el objetivo de la fuerza militar, como su rol dentro de la política estatal, en general. Sin embargo, existen aspectos conceptuales, teóricos y políticos a reconsiderarse antes de tomar decisiones en base a expectativas que no necesariamente guardan una estrecha relación con la realidad. Para empezar, hay que replantear el concepto convencional de la guerra. Carl Von Clausewitz afirmó que la misma no era otra cosa que un duelo extenso, donde se usaba la fuerza para, políticamente, imponer una voluntad y, militarmente, desarmar al enemigo (1984: 22-39). Esta clásica visión asignaba a la guerra una naturaleza instrumental, en tanto que no es necesario llegar a la intensidad de la Guerra Total para conseguir su fin: imponer una voluntad política. El general prusiano explica que la fuerza militar debe aplicarse progresivamente “para obtener preponderancia, o, en el caso que no tengamos los recursos para esto, hacer nuestro mejor esfuerzo para incrementarlos lo más alto posible” (Von Clausewitz, 1984: 26). Se deja abierta la posibilidad de alcanzar el fin instrumental de la Guerra Total mediante la aplicación de la fuerza militar en niveles de menor intensidad. Cuando se debate al respecto, y en el contexto de una Sudamérica en vías de integración, es necesario ver al fenómeno como un todo, no solo a su máxima evolución: la Guerra Total interestatal2, que –de hecho– está casi extinguida en Latinoamérica, pero que no es la única expresión de la influencia que puede tener la guerra. De acuerdo a Brian Orend, el concepto de guerra hace referencia al uso de la violencia para contribuir a un fin político determinado, quebrantando, en palabras del mismo Clausewitz, “la voluntad de un actor” (Von Clausewitz, 1984: 25).Refraseando a Orend, esta violencia se usa como elemento estratégico dentro de la confrontación de gobernanza común interestatal (Orend, 2008). Las Relaciones Internacionales, como campo de estudio, han consagrado dos distintas visiones sobre la interrelación entre guerra, fuerza militar y conflictos interestatales. Por un lado, la visión realista argumenta que el poder es el hilo conductor de las relaciones entre Estados, donde se han generado ideas como la Política de Poder. Por el otro lado, la visión idealista enfatiza al Derecho Internacional como el hilo que

debería conducir las relaciones internacionales. En esta corriente, el uso de la guerra o la fuerza militar se produce dentro de las reglas y canales establecidos por la Carta de las Naciones Unidas. Concretamente, para Sudamérica, este principio se elabora en mayor detalle dentro de tratados multilaterales como el Pacto de Bogotá de 19483. El factor común de estos instrumentos es su adherencia al principio del Ius Ad Bellum4 como mecanismo para determinar la ‘legalidad’ de una guerra. Sin embargo, hay limitaciones teóricas y políticas en esta corriente. A nivel teórico, el modelo falla al tomar en cuenta aspectos geopolíticos que no permiten cumplir los prerrequisitos para recurrir a una guerra en el conflicto interestatal.

Quizás la mejor explicación de esta carencia la hace Willian Pfaff, cuando afirma que el Consejo de Seguridad, canal establecido por la ONU para procesar los conflictos interestatales, “funciona solo cuando las principales potencias representadas en el Consejo de Seguridad quieren que funcione. Ninguna de ellas ha cedido un palmo de su soberanía y ninguna de ellas piensa hacerlo” (Pfaff, 1994: 191). A la crítica se suman hechos militares concretos ejecutados fuera de este marco. El ataque de Rusia a Georgia en el 2008, de Colombia a Ecuador el mismo año –en Angostura– y la invasión de EE.UU. a Iraq en el 2003 son eventos que demuestran cuán escaso es el apego de la vía idealista sobre la guerra, a la realidad. En consecuencia, es pertinente -y necesario, también- considerar los planteamientos realistas respecto a la guerra y el conflicto interestatal. Cuando los atenienses, durante la guerra del Peloponeso, quisieron invadir la isla de Melos, explicaron que el “Derecho, como el mundo va, es solo una preocupación entre iguales en poder, mientras que el fuerte hace lo que puede y el débil sufre lo que debe” (Tucídides, s/f). Se plantea, entonces, que el uso del poder es el principal elemento de las relaciones internacionales, y la guerra es la máxima expresión de una herramienta estatal fundamental: la fuerza militar. De igual manera, establece que las opciones políticas de los ‘fuertes’ son siempre más flexibles y variadas respecto a aquellas de los que son ‘iguales’ en poder. Debido a que el realismo examina el mundo por como es y no por como quisiéramos que sea (Goldstein, 1994), su explicación sobre la interrelación entre guerra fuerza militar-conflicto busca, en definitiva, estar más apegada a lo concreto. En este sentido, Henry Kissinger sostiene que la fuerza militar se usa dentro de conflictos internacionales, donde las acciones políticas de uno afectan los intereses nacionales del otro. En el realismo, la fuerza militar es una herramienta que se maneja en varios niveles de intensidad, desde el más alto (guerra) hasta los más bajos (demostraciones verbales o prácticas de fuerza), y se enmarca en estrategias guiadas por intereses nacionales (Kissinger, 2001: 802). Este ex político norteamericano también explica que, en el mundo pos-Guerra Fría, los Estados buscan en la práctica el equilibrio de poder interestatal, usando una serie de medidas coercitivas y cooperativas para influir en las decisiones estatales. El objetivo es activar el mecanismo que obligue al competidor a escoger el conducirse de una determinada manera. Goldstein afirma que los Estados despliegan dos tipos de medios: unos representan los pacíficos, y otros “representan los medios violentos. Estos ponen a marchar los ejércitos y a volar a los misiles” (Goldstein, 1994: 179). Para el realismo, el rol de la guerra y de la fuerza militar es funcionar como estímulo de negociación para circunstancias no colaborativas entre Estados, de manera muy similar a lo planteado por la Teoría de Juegos. En otras palabras, y de acuerdo a Pyndick y Rubinfeld, existen juegos donde los actores tendrían objetivos que no podrían ser alcanzados por colaboración (1998: 476-489). La Guerra Fría probó la representatividad de este modelo de relacionamiento, al diseñar políticas que mantuvieron un equilibrio adecuado entre los competidores de este episodio histórico5.

Este planteamiento podría encontrarse con el lugar común del cambio de época que se vivió al final de la Guerra Fría, cuando inclusive se llegó a plantear el fin de la historia, pues se creía que la ‘muerte’ del marximismo-leninismo significaba la masificación de los mercados a nivel internacional y la reducción de conflictos interestatales (Fukuyama, 1989). Sin embargo, Kissinger (2001) recordó que las épocas pueden cambiar, pero los principios de las relaciones internacionales se mantendrán siempre inmutables. Así, el planteamiento realista puede estar, quizá, más ajustado a la cotidianeidad internacional. Recapitulando, la fuerza militar es un estímulo para influir en los conflictos interestatales donde se desea que un actor mantenga una conducta predeterminada y su uso tiene graduaciones de intensidad, que pueden llegar hasta la Guerra Total. Claro está que la aplicación de este estímulo se somete a las limitaciones de legitimidad que establezca la comunidad internacional y doméstica. Toda esta reflexión teórica encuentra cierto sustento en las estadísticas. De acuerdo a la información sistematizada por la Universidad Casa Grande de Guayaquil, y tomada, a su vez, de las bases de datos del proyecto Correlates of War (COW) de la Universidad de Michigan, en Sudamérica la fuerza militar permanece como una herramienta en las relaciones interestatales. Este uso, sin embargo, se ha manifestado en menor intensidad que la Guerra Total. Los hechos demuestran que los augurios de paz, sobre los cuales se está redefiniendo drásticamente el rol de las fuerzas armadas en Sudamérica, no están necesariamente apegados a la realidad. Se puede, entonces, vislumbrar algunos elementos de interés. En primer lugar, es un hecho que el fin de la Guerra Fría fue sucedido por un incremento importante en el uso de la diplomacia para solucionar los problemas interestatales sudamericanos. Sin embargo, también es cierto que se recurrió al uso de fuerza militar de menor intensidad. En realidad, existe una diferencia de setenta puntos porcentuales entre el crecimiento de ambas medidas, lo que significa que la fuerza militar se mantuvo como una herramienta estatal, y que superó con creces al uso de la diplomacia. Es notorio que, de acuerdo a los datos metodológicos de COW, las categorías mencionadas tienen significados muy prácticos (Jones et al., 1996: 163-215; Faten Goshn et al., 2004: 133-154). Para COW, las acciones de no hostilidad involucran todas las medidas estatales no violentas utilizadas para resolver las Disputas Militares Interestatales (DMI) que el proyecto recopiló. Mientras que las medidas de Demostración de la Fuerza involucran todas las acciones militares que van desde las muestras de fuerza militar (una maniobra o ejercicio conjunto militar) hasta la violación de fronteras interestatales. Si tenemos estos significados en cuenta, la fuerza militar fue utilizada 320% más que en el periodo1989-1999, y casi en 100% más ocasiones que las medidas no violentas. Otra observación importante es la variación de casos que COW contó como DMI. De acuerdo al proyecto, una DMI “son casos históricos unificados de conflicto donde la amenaza, demostración o uso de la fuerza militar cerca de la guerra por un Estado está explícitamente dirigida hacía un Gobierno, representantes oficiales, fuerzas oficiales o territorio de otro Estado. Las Disputas están compuestas de incidentes en un rango de intensidad, desde amenazas de usar la fuerza hasta combate cerca del nivel de intensidad a la guerra” (Jones et al., 1996: 163). Por tanto, los casos observados tienen relevancia al momento de compararlos con las premisas teóricas antes expuestas. De 24 DMI contabilizadas por COW entre 1989-1999, se pasó a 42 casos en 1999-2010. En porcentaje, un crecimiento de 75%. Esto evidencia una situación que genera interrogantes respecto a la situación de la paz en Sudamérica y la efectividad de las instituciones multilaterales que para este propósito se han creado. En adición, todas estas acciones militares son de menor intensidad que las acciones preponderantes en 1989-1999. Durante este período, 14 de las 24 acciones militares de las DMI involucraban uso activo de la fuerza militar de manera focalizada. Es por ello que, la reducción significativa de estas medidas en el período 1999-2010 apunta a una mayor estabilidad en el continente y una relativa pacificación de los mecanismos para procesar desacuerdos interestatales en Sudamérica.

REFLEXIONES SOBRE EL USO DE LA FUERZA MILITAR Existe concordancia entre los enunciados teórico-conceptuales y los datos estadísticos desplegados. No obstante, no se intenta afirmar que el realismo es la escuela que se ajusta más a las relaciones internacionales. Lo expuesto solo permite vislumbrar que Sudamérica atraviesa por una coyuntura de seguridad y de balance militar, intra-extra regional, que debe considerarse a la hora de definir el nuevo empleo de la fuerza militar en el siglo XXI, y en un marco de integración regional cada vez más avanzado. Esta coyuntura no necesariamente guarda conexión con las premisas sobre las cuales parecen redefinirse los roles militares en la región. Para empezar, es claro el hecho de que, a pesar de que las estadísticas no evidencien guerras, la fuerza militar sigue siendo un elemento importante en el balance de poder internacional en Suramérica. Además, el comportamiento de las cifras da una fuerte base empírica a Von Clausewitz, quien sugiere usar la fuerza militar progresivamente, en torno a una estrategia que ‘quebrante’ la voluntad del adversario. Para Clausewitz, más importante que ‘desarmar’ al enemigo por medios directos y violentos, es quebrar su voluntad. En este sentido, hay que considerar que Clausewitz ha sido malinterpretado frecuentemente (¿a propósito?), también por militares. Se ha supuesto que las máximas de Von Clausewitz implicaban priorizar el fin militar sobre el fin político, una interpretación fatalmente errónea. De acuerdo a Lidell Hart, esta idea se originó en los altos mandos militares alemanes de la Guerra Franco-prusiana de 1870, y de allí se expandió, como lo haría un virus, a través de los ejércitos del mundo6. Tanto Lidell Hart como Brian Orend han rescatado que el propósito principal de Clausewitz era argumentar que la fuerza militar debía usarse progresivamente, dentro del marco de permisividad generado por el contexto nacional, el internacional y las prioridades políticas gubernamen tales, así como estatales. En pocas palabras, una correcta lectura del pensamiento de Clausewitz es coherente con aquellos datos que, precisamente, evidencian que la fuerza militar sigue usándose, pero de una forma progresiva, y priorizando, más que un logro militar, el logro de fines políticos. Básicamente, las estadísticas demostrarían tres cosas: la diplomacia se ha incrementado, la guerra es un hecho extraño en Sudamérica y la fuerza militar aún sería más usada que la diplomacia, cumpliendo un rol de negociación importante –como lo vislumbran autores como Henry Kissinger, Brian Orend y Joshua Goldstein. Estos hechos no necesariamente tienen implicaciones negativas para los objetivos de paz que se persiguen en el continente. Las estadísticas permiten apreciar que la fuerza militar no se usa como herramienta principal, sino complementaria y auxiliar, cumpliendo un rol de estímulo, similar a lo que plantean enfoques como la Política del Palo o la Zanahoria. Retomando el caso de Uruguay y Argentina, el despliegue de la fuerza naval y terrestre uruguayas fueron el ‘palo’, mientras que sus negociaciones diplomáticas sirvieron de ‘zanahoria’, dos estímulos cuidadosamente orquestados por Uruguay para condicionar las decisiones argentinas. Es, entonces, esencial complementar estímulos coercitivos y colaborativos para disponer el comportamiento de los participantes del juego. La disuasión sigue siendo, entonces, un aspecto fundamental para asegurar la paz. Un asunto de debate, y que no será clarificado por este artículo, es la implicación de un cambio radical en el empleo de las fuerzas militares en torno a una coyuntura regional, donde la disuasión común parece contribuir a la paz. Sin embargo, los datos mostrados permiten apreciar dos cosas: 1) la disuasión tiene una trascendencia innegable, y 2) la cantidad de disputas militares podría variar significativamente si este elemento fuera repentinamente alterado. EE.UU. y Canadá juntos tienen muchas menos DMI que Sudamérica; esto a pesar de que todavía usan y muestran la fuerza en cantidades que superan a las veces en que recurrieron a la diplomacia para zanjar una DMI. Se puede colegir un comportamiento donde resalta el rol que tendría la disuasión a la hora de reducir las confrontaciones interestatales. Sudamérica no ha vivido

guerras interestatales y usa más la diplomacia, pero tiene más DMI; EE.UU. y Canadá mantienen altos números en cuanto al uso de la fuerza, pero tienen menos DMI. ¿Qué pasaría con este comportamiento si EE.UU. y Canadá no se preocuparan por mantener altos niveles de disuasión? Si la Teoría de Juegos es aplicable, los actores buscan maximizar su utilidad en función de lo que hacen sus contrincantes (Pyndick y Rubinfeld, 1995: 458). De esta manera, si unos actores redujeran sus estímulos coercitivos para que otros no usen la fuerza contra ellos, es claro que las confrontaciones aumentarían, toda vez que es más fácil confrontar al actor que reduce su disuasión. Claro está que este cálculo racional siempre se sujeta a los techos de legitimidad doméstica e internacional que pueden existir para una confrontación. Al haber implicaciones si repentinamente se alterase, de manera drástica, el rol de la fuerza militar en el equilibrio interestatal, Sudamérica debería buscar un balance entre la disuasión interestatal, las necesidades internas y la redefinición radical de tareas para sus fuerzas militares. Este fin no es incompatible con las demandas que, en tiempos de paz e integración entre Estados, reclaman más resultados en cuanto a seguridad ciudadana. Pero la respuesta a estas demandas también pasa por justificar adecuadamente el rol institucional (Policía y Fuerzas Armadas), y estar conscientes del propósito de mayor envergadura que tiene la milicia en los Estados modernos y democráticos. LOS RESULTADOS MILITARES Y EL MULTILATERALISMO Es importante examinar los resultados de las DMI para conocer la efectividad que, hasta el 2010, tuvieron los esquemas multilaterales para la resolución de conflictos militares. En teoría, Sudamérica ha sido ‘bendecida’ por diplomacias que priorizan el diálogo por sobre la fuerza. De cierta forma, sus naciones han sido menos proclives a cumplir la máxima de Von Clausewitz para ‘quebrantar’ la voluntad del contrincante y, en su lugar, recurren al poder del diálogo y el encuentro de intereses comunes entre los discordantes. Entre los períodos de análisis, se evidencia un incremento de las disputas donde se empleó la fuerza militar de manera demostrativa, pero que no terminaron de una forma negociada. De una sola disputa militar donde se mostró la fuerza, y que terminó a través de negociaciones en el periodo 1989-1999, se pasó a dieciséis disputas donde se usó la fuerza. Esto apunta a que, en materia de conflictos interestatales militarizados, el éxito de los organismos multilaterales podría ser puesto en tela de duda, al no cumplir con el objetivo de llegar a resoluciones negociadas. Los datos no son del todo positivos en cuanto a la efectividad de los esquemas multilaterales para resolución de conflictos, pero no se puede hablar de un fracaso. El debate aquí es el grado de realidad que tiene el planteamiento de que los países sudamericanos priorizarán solo el diálogo y no la fuerza militar en confrontaciones o desencuentros. La estadística demuestra que los países involucrados recurrieron a la fuerza militar, hasta niveles prudentes y factibles, para apoyar sus intereses estatales. Pero, por otro lado, no hay información sobre los factores exógenos o endógenos que pudieron influir en su actitud y decisión de desengancharse de las disputas en las que estaban envueltos. No es posible aventurar una respuesta, pero sí resaltar que el multilateralismo para la resolución de conflictos en Sudamérica no ha sido necesariamente tan exitoso como se presume. Es posible vislumbrar que, entre el fin de la Guerra Fría y el mundo pos - 9/11, se incrementaron las DMI entre países sudamericanos y levemente, también, los casos donde estas disputas terminaban de cualquier forma, menos a través de negociaciones. CONSIDERACIONES PARA LA INTEGRACIÓN SUDAMERICANA En base a lo anterior, es posible enunciar ciertas consideraciones para el proyecto de integración sudamericana que, en parte, representa la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), permitiendo que los esfuerzos realizados en el marco de este cuerpo supranacional se diferencien, de forma radical, de iniciativas anteriores.

EQUILIBRIO MILITAR INTERESTATAL PARA CONSOLIDAR LA PAZ La prioridad que para muchos sudamericanos tiene la seguridad ciudadana es, sin duda alguna, una demanda que debe ser satisfecha con celeridad. Sin embargo, es necesario precautelar que la solución de un problema no cree otro a largo plazo. En este sentido, redestinar las FF.AA. a tareas de seguridad ciudadana es una decisión a ser evaluada prudentemente. El discurso de algunos funcionarios estatales ecuatorianos ha dejado entrever que la falta de guerras, y amenazas militares convencionales, hace más sencilla la labor de reasignar recursos militares7, para sumar esfuerzos con las policías sudamericanas. Se ha demostrado con cifras que las disputas militares no son cosa del pasado. Al contrario, Sudamérica sigue evidenciando situaciones donde el equilibrio militar interestatal resulta un importante estímulo para que el uso de la fuerza no trascienda a mayores niveles de confrontación e intensidad -aún más cuando se ve que los organismos de diálogo multilateral y bilateral no han tenido incidencia significativa. Por ello, los Estados sudamericanos necesitan enfrentar sus problemas de seguridad ciudadana con decisiones políticas que equilibren necesidades internas con visión estratégica. Puede resultar atractiva, a corto y mediano plazo, la idea de destinar fuerzas militares a tareas policiales. Pero ¿qué pasaría si esta redistribución, a largo plazo, altera los equilibrios militares interestatales que desincentivan la idea de usar la fuerza militar para la solución de un conflicto? Ante esto solo es posible recordar un aspecto importante del equilibrio Bayes-Nash: “ningún actor puede obtener mayor utilidad esperada desviándose a una estrategia diferente, dadas sus creencias, acerca de la distribución de los tipos hacia los cuales otros jugadores son atraídos” (Cedeño, 2011: 28). Si hay Estados sudamericanos que empiezan a remover los estímulos que disuaden a otros de desviarse de las estrategias predeterminadas, se está rompiendo la principal garantía de la paz estatal: el costo/beneficio que existe en una confrontación militar. Entonces, si hay Estados que empiezan a redestinar sus recursos militares a necesidades internas, y otros perciben que esas decisiones reducen los costos e incrementan las ganancias de usar la fuerza militar, es posible que se decidan acciones de alto riesgo/alta ganancia (usar la fuerza militar en lugar del diálogo)8. Por esto, se vuelve necesario que Sudamérica solucione sus necesidades de seguridad ciudadana sin afectar su equilibrio militar. INSTITUCIONALIDAD DEFENSIVA SUPRANACIONAL: MAYOR OPERATIVIDAD PARA MAYOR SINERGIA MILITAR Han pasado sesenta y siete años desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. En todo este tiempo se ha recorrido un extenso, intrincado, pero extraordinario camino. Europa ha demostrado que la sinergia militar interestatal es posible, aun cuando la intensidad de desacuerdos históricos haya sido muy alta. Al 2012, la Unión Europea no solo cuenta con un Consejo de Defensa Europeo -donde se realizan consultas y diálogos políticos de alto nivel-; tiene también la estructura defensiva- militar más integrada y operativa del mundo, después de la OTAN. Centros de Mando y Control, formaciones de combate multinacionales o binacionales, políticas conjuntas de adquisiciones, programas científicos y otras actividades comunes muestran que la institucionalidad defensiva supranacional puede sumar las capacidades de países, que por sí solos podrían no contar con las capacidades militares necesarias para influir mundialmente. El Consejo de Defensa Suramericano debe trascender de una instancia de coordinación política al pináculo de una estructura defensiva supranacional, que use la operatividad militar estatal para generar sinergias militares interestatales. Al momento, el Consejo ha logrado avances en materia presupuestaria y de medidas de confianza mutua entre Estados, los cuales se complementan con la existencia de un Plan de Trabajo anual, orientado a distintas líneas de Política Defensiva, Industria y Tecnología militar.

Pero se necesita ir más allá, aprovechando la necesidad de conservar el equilibrio militar interestatal en Sudamérica, y poniéndolo a su servicio. La Unión Europea puede tomarse como un ejemplo referencial para alcanzar un objetivo estratégico claro: equilibrar la debilidad militar sudamericana con el resto de potencias mundiales. De igual modo, el Consejo de Defensa Sudamericano debería extender sus pasos a fin de precautelar la operatividad de las fuerzas militares sudamericanas, implementando esquemas de integración militar que superen la debilidad y dificultad que, por sí mismos, tienen sus Estados partes, y garantizando así su balance militar con potencias mundiales, que cada día fortalecen sus tecnologías y medios militares. Si se lograra este equilibrio geopolítico y militar, se sembrarían algunos de los estímulos que cerrarían la posibilidad de surgimiento de conflictos futuros. A la hora de asegurar la paz, reducir las asimetrías militares podría llegar a ser una herramienta, sin duda, decisiva. REFERENCIAS 1- Ver la lectura de Alex Bellamy respecto a la lógica de los artículos de Immanuel Kant sobre la Paz Perpetua. Aquí se explica cómo Kant esperaba que una democratización de la decisión de iniciar una guerra condujese a ciudadanos menos dispuestos a incurrir en los costos de esa decisión. 2- La guerra es un fenómeno que ocurre únicamente entre comunidades políticas, definidas como esas entidades que o son Estados o están tratando de convertirse en uno (lo que da lugar a la Guerra Civil) […]. Ciertos grupos políticos de presión, como las organizaciones terroristas, pueden ser considerados ‘comunidades políticas”. Orend, Brian, (2008). 3- El pacto establece la obligación de los signatarios de “resolver las controversias internacionales por los procedimientos pacíficos regionales” (Art. II) y también reafirma su voluntad de “abstenerse de la amenaza, del uso de la fuerza o cualquier otro medio de coacción para el arreglo de sus controversias y en recurrir en todo momento a procedimientos pacíficos” (Art. III). 4- Esto es la base de la Escuela de la Guerra Justa formada por San Agustín, Santo Tomás de Aquino, Hugo Grottio y Vatel. Admiten usar la fuerza bélica cuando hay causa justa también llamada en Derecho Internacional Ius Ad Bellum. Ver Orend (2008) para un resumen analítico de sus principales supuestos y Alex Bellamy en Guerras Justas para un análisis histórica de esta tradición. 5- Estábamos tratando de reducir la probabilidad de una guerra nuclear creando poderosos incentivos para que los rusos no inicien una guerra por que los estábamos estimulando a no atacar nuclear o convencionalmente. Así que diría que los incentivos fueran muy importantes para ello.” Transcripción y Traducción propia de disertación de Alain Enthoven (2008), Estratega Nuclear, RAND Corporation 1956-1960 publicado en youtube. com [http://www.youtube.com/watch?v=qzNcY-gZdiA]. Consultado el 06/07/2012 6- “El estado adquirió su rigidez dogmática en gran parte a través de la influencia póstuma de Clausewitz y su libro sobre las mentes de los soldados de Prusia, en particular Moltke y, por ende más ampliamente a partir de las victorias en 1866 y 1870 sobre los ejércitos del mundo, los cuales copiaron muchas características del sistema prusiano. Por tanto, es de vital importancia el examinar sus teorías. Como suele suceder con frecuencia, los discípulos de Clausewitz llevan sus enseñanzas a un extremo al que su maestro no tuvo intención de llegar”. (Lidell Hart, 1991: 339). 7- Comentando sobre el rol de las FF.AA., el Ministro de Seguridad Interna y Externa, VALM (SP) Homero Arellano explicó que cada vez es más visible que Ecuador no tiene problemas de soberanía externa y como ejemplo indicó que las relaciones con Perú se encuentran en muy buen estado. “En ese sentido las Fuerzas Armadas deberían fortalecer otro tipo de temas” Arellano (2011). 8- El retiro de Colombia del Pacto de Bogotá, que establece la solución pacífica de controversias entre países americanos, es un indicador alarmante de esta posibilidad. Colombia cuenta actualmente con una de las Fuerzas Armadas más poderosas, capaces y preparadas de Sudamérica. Esta acción se produjo en el marco de una posibilidad de tener que defender su reclamo marítimo en el Archipiélago de San Andrés posterior a la decisión de la Corte Internacional de Justicia que favorecía a Nicaragua, un país en clara desventaja estratégica frente al poder militar colombiano.

BIBLIOGRAFÍA Arellano, Homero (2011). “Militares deben tener papel más activo en seguridad ciudadana y ambiental”. Ecuador inmediato. Visita 19 de junio de 2011 en http://www.ecuadorinmediato.com/index.php?module=Noticias&func=news_user_view&id=151334&umt= Militares%20deben%20tener%20papel%20m% E1s%20activo%20en%20seguridad%20ciudadana%20y%20ambiental,%20dice%20Homero% 20Arellano Bellamy, Alex (2009). Guerras Justas-De Cicerón a Iraq. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica. Cedeño, César (2011). El uso de la fuerza militar en la resolución de conflictos interestatales y el Ecuador: Una mirada cuantitativa. Guayaquil: Universidad Casa Grande. De Tocqueville, Alexis (2003). Democracy in America. Nueva York: Barnes and Noble. Enthoven, Alain (2008). “Game Theory pt1”. RAND Corporation 1956-1960. Visita 6 de Julio de 2012 en http://www.youtube.com/watch?v=qzNcY-gZdiA (min 3:36) Fukuyama, Francis (1989). “The End of History?”. Visita el 25 de Enero de 2012 en http://www.wesjones.com/eoh.htm Goldstein, Joshua (1994). International Relations. Nueva York: HarperCollins College Publishers. Ghosn, Faten, Glenn Palmer y Stuart A. Bremer (2004). “The MID3 Data Set, 1993–2001: Procedures, Coding Rules, and Description”. Conflict Management and Peace Science N.° 21: 133-154. Jones, Daniel, Stuart Bremer y David Singer (1996). “Militarized interstate disputes, 1816-1992: Rationale, coding rules, and Empirical patterns Conflict Management and Peace Science Vol 15, N.° 2: 163-215. Kissinger, Henry (2001). La Diplomacia. México DF: Fondo de Cultura Económica. Lidell Hart, Basil (1991). Strategy. Nueva York: Meridian Books, Nueva York. Orend, Brian (2008). War. Visita 2 de julio de 2012 en http://plato.stanford.edu/archives/fall2008/entries/war/ Organización de Estados Americanos (1948). “Tratado Americano de Soluciones Pacificas. Pacto de Bogotá”. Visita diciembre de 2012 en http://www.oas.org/juridico/spanish/tratados/a-42.html Pfaff, William (1994). La ira de las naciones. Santiago de Chile: Editorial Andrés Bello. Pollins, Brian (2004). “Cannons and Capital: The use of Coercive Diplomacy by Major Powers in the Twentieth century”. En Reconstructing Realpolitik, Ann Arbor: 29- 57. EE.UU.: University of Michigan Press. Pyndick, Robert y Daniel Rubinfeld (1995). Microeconomía. España: Prentice Hall. Tucídides (s/f). The Melian Dialogue. Traducido por Richard Crawley. Visita 4 de julio de 2012 en http://www.wellesley.edu/ClassicalStudies/CLCV102/Thucydides-MelianDialogue.html Von Clausewitz, Carl (1984). On War. EE.UU.: Princeton University Press. Visita 06 de julio de 2012 en http://www.pdfbooks.co.za/library/CARL_VON_CLAUSEWITZ/CARL_VON_CLAUSEWITZ-ON_WAR.pdf]. Páginas web Correlates of War (COW) http://correlatesofwar.org/

Revista Línea Sur, Cancillería del Ecuador, Quito, agosto de 2013.

LA CONEXIÓN CHILENA EN EL MILLONARIO NEGOCIO DE LA “TRIANGULACIÓN” DE FUTBOLISTAS Por : Gregorio Riquelme y Pedro Ramírez en Reportajes de investigación Publicado: 05.08.2013 http://ciperchile.cl/2013/08/05/la-conexion-chilena-en-el-millonario-negocio-de-la%E2%80%9Ctriangulacion%E2%80%9D-de-futbolistas/ El juez argentino Norberto Oyarbide pesquisa transferencias de jugadores trasandinos realizadas por San Felipe y Rangers que nunca jugaron en Chile y que solo habrían servido para evadir impuestos y lavar activos. Oyarbide cuenta con documentos que indican que San Felipe acordó cobrar una comisión por “triangular” la venta de un jugador e indaga si River Plate le depósito US$940 mil en una cuenta en Miami. El juez también investiga al “Leo” Rodríguez y procesó al dueño de la agencia de valores que opera con San

Felipe tras “pinchar” su teléfono. Además, descubrió que en Chile se manejan inversiones de figuras como Gonzalo Higuaín y Ezequiel Lavezzi. El negocio es simple, pero rentable. Funciona así: un futbolista que juega en Argentina y cuyo pase va a ser vendido, es inscrito previamente en un modesto club chileno, que no cobra un peso por ponerlo en sus registros; la venta se hace desde Chile, donde los jugadores no pagan impuestos por el traspaso y de esa forma se elude el pago de los tributos que sí se cobran en Argentina; finalmente, el dinero lo recibe el club chileno y lo transfiere al verdadero dueño del jugador, quien puede depositar la suma fuera de Argentina, evitando así el pago de nuevos impuestos y eludiendo las férreas limitaciones del mercado divisas de ese país. ¿Qué gana el club chileno? Una comisión de decenas -y hasta cientos- de miles dólares. Y si esa comisión es depositada en un banco del exterior, cabe la posibilidad de que ese ingreso no sea declarado ante el Servicio de Impuestos Internos (SII). Esta creativa fórmula de negocios fue bautizada como “triangulación de pases”. El nombre se lo puso la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), organismo argentino similar al SII. La AFIP denunció las “triangulaciones” a mediados del año pasado ante la justicia tributaria de su país porque, a su juicio, involucran los ilícitos de evasión tributaria, lavado de activos y fuga de capitales. La investigación de la AFIP se hizo pública el 21 de agosto del año pasado y de inmediato involucró al club chileno Unión San Felipe, propiedad del argentino Raúl Delgado, antiguo colaborador de Carlos Menem y ex socio del afamado conductor de TV Marcelo Tinelli. La AFIP acusó que el defensa Jonathan Bottinelli, proveniente de San Lorenzo, había sido inscrito por Unión San Felipe apenas tres días antes de ser vendido finalmente a River Plate. La acusación dio pie a una investigación inicial del Juzgado Nacional en lo Penal Tributario Nº 2, cuyo titular, Javier López Biscayart, rechazó las imputaciones en noviembre de 2012. Parecía que Unión San Felipe había librado. Pero el juez federal Norberto Oyarbide acogió la denuncia de la AFIP en una causa penal y continuó con la investigación. El pasado 6 de junio, el magistrado Oyarbide envió un exhorto a la justicia chilena pidiendo la incautación de documentos desde la sede de Unión San Felipe y de la agencia de valores Alhec, que trabaja para el mismo club. Las incautaciones fueron realizadas por el OS-9 de Carabineros el 13 de junio y nutrieron a Oyarbide con abundante documentación que volvió a complicar al club de Raúl Delgado. Documentos que figuran en el expediente que lleva Oyarbide, y a los que CIPER tuvo acceso, indican que Unión San Felipe pretendía cobrar US$170 mil dólares por la transferencia de Bottinelli, suma correspondiente al 10% del total de la venta del jugador a River Plate. Lo que indaga el juez federal es si efectivamente el club chileno recibió ese dinero, o parte de él, en una cuenta bancaria de Miami. Un contrato que lleva el membrete de River Plate y que también forma parte del legajo que acumula Oyarbide, dice que San Felipe pudo haber recibido a lo menos US$940 mil en esa cuenta. De comprobarse que se efectuaron tales depósitos, la situación obligaría al SII a fiscalizar si Unión San Felipe declaró esos ingresos. El escándalo por evasión tributaria y lavado de dinero asociado a las transferencias de jugadores va en escalada en Argentina. El pasado viernes 2 de agosto, a escasas horas del inicio del torneo local, el director nacional de la AFIP, Ricardo Echegaray, informó que de 144 transferencias efectuadas en su país, 104 no se ajustan a las normas tributarias. En los escritos que acumula Oyarbide, la AFIP denuncia que dos clubes chilenos -Unión San Felipe y Rangers de Talca- junto a siete de Uruguay y uno de Suiza, se han prestado para servir de “puente” en operaciones bajo sospecha. En el expediente, la AFIP también califica a Chile como “paraíso fiscal deportivo”.

LA JUGADA DEL JUEZ OYARBIDE El nombre del argentino Leonardo Adrián Rodríguez está grabado en la galería de los ídolos azules. La parcialidad de la “U” lo venera desde su memorable torneo de 1995, cuando su figura se agigantó en el mediocampo del elenco que terminó abrochando un ansiado bicampeonato y después encumbrándose hasta una semifinal de la Libertadores. Hoy, “el Leo” figura en otra nómina. Una desprovista de los ribetes épicos de las hazañas deportivas. En la página 18 de un escrito redactado por la abogada de la AFIP María Luján Rodríguez, el recordado volante encabeza una nómina de ocho representantes de futbolistas investigados en el vecino país por las “triangulaciones” de pases de sus pupilos. El escrito de la letrada Rodríguez formó parte del exhorto despachado a Chile por Norberto Oyarbide, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 5. El nombre de Leonardo Rodríguez aparece ahí porque la AFIP lo sindica como representante de dos futbolistas trasandinos que fueron inscritos en Unión San Felipe -Jonathan Bottinelli y Carlos Javier Matheu- sólo para ser transferidos desde Chile y así sortear en Argentina las obligaciones tributarias y los controles de las operaciones cambiarias. El 14 de junio pasado la AFIP suspendió la Clave Única de Identificación Tributaria (CUIT), similar al RUT, de 149 agentes y representantes de futbolistas. Entre ellos se encuentran los más importantes del país vecino, como Gustavo Mascardi (quien llevó a Leonardo Rodríguez a la “U” y luego puso a Marcelo Salas en River), Hugo Issa, Diego Caniggia (hermano del ex seleccionado, Claudio Paul) y Marcos Franchi (ex manager de Maradona y Juan Román Riquelme). En esa lista figura también “Leo” Rodríguez y otro ex referente de la epopeya azul del 95 y 96, Cristián “el Tigre” Traverso. CIPER se comunicó con “Leo” Rodríguez, pero respondió que no hará declaraciones “por lealtad a los compañeros” y “por consejo de los abogados”. Oyarbide también le sigue la pista al ex volante azul. Además de la documentación de Unión San Felipe y la agencia Alhec, el juez pidió en su exhorto copia del registro de jugadores de Rangers y que el SII le informara sobre operaciones tributarias relacionadas con la transferencia de Bottinelli y si su representante, Leonardo Rodríguez, figura vinculado a ese traspaso. Los equipos informáticos y documentos fueron finalmente requisados por el OS-9 de Carabineros a solicitud de los fiscales Andrés Montes y José Morales, con autorización de la jueza de garantía Daniela Guerrero. Sellados bajo cadena de custodia, fueron embalados y puestos a disposición de Oyarbide. De los documentos incautados en la agencia Alhec surgió información novedosa para los intereses de la AFIP: carpetas con inversiones y movimientos financieros realizados en Chile por jugadores de nivel mundial, como Gonzalo “Pipita” Higuaín y Ezequiel Lavezzi, y de clubes trasandinos, como Argentinos Juniors y Tigre. La AFIP ya tenía en la mira al “Pipita”, pues en el expediente que lleva Oyarbide se señala que fue transferido en 2006 desde River Plate a Real Madrid, operación en la que quedó registrado que el jugador recibió en pago el equivalente al 15% del total de la venta, lo que se le canceló en dos cheques. Pero la AFIP sostiene que Higuaín declaró que sólo cobró uno de los cheques, por lo que la entidad investiga el paradero del monto restante. UN GOL A LOS IMPUESTOS En los traspasos de futbolistas que se realizan en Argentina, el 15% del total que se paga por la transferencia queda para el jugador, monto que la legislación de ese país califica como ganancia del trabajador afecta a impuestos. Por lo tanto, de ese 15% el deportista debe cancelar un tributo de 35%. Además, el 7% del total involucrado en la venta se destina a pagar el Importe de Seguridad Social. Así, por ejemplo, si un club europeo paga US$3 millones por el pase de un jugador que sale desde Argentina, el futbolista debe cancelar

US$157.500 por Impuesto a las Ganancias y, además, se deben pagar otros US$210 mil por Importe a la Seguridad Social. En Chile, el jugador transferido no paga impuesto. De acuerdo con el Oficio Nº 1957 del SII, el dinero que recibe el futbolista es considerado una “indemnización anticipada de término de contrato de trabajo”, por lo que no es constitutiva de renta y queda exenta de tributación. De allí surge el vivo interés de los empresarios argentinos que invierten en pases de futbolistas por inscribir a sus pupilos en clubes chilenos – con la certeza de que no van a jugar en nuestra competencia- y con el único objeto de que despeguen desde Santiago hacia los mercados internacionales, sin desembolsar impuestos. Si bien los clubes chilenos pueden ocupar sólo siete extranjeros en la competencia local, no hay límite para que inscriban futbolistas foráneos “no habilitados” para jugar. De acuerdo con los registros de la ANFP enviados al juez Oyarbide, en 2010 San Felipe mantuvo en su nómina a 29 argentinos no habilitados para competir en el torneo. Al año siguiente fueron 22, mientras que en 2012 registró 25. Este año, después de que estalló el escándalo de las “triangulaciones”, bajó a 14. Tanto Unión San Felipe como Rangers son propiedad de sociedades anónimas deportivas profesionales (SADP). La de Rangers es controlada por el empresario argentino Ricardo Pini, quien ha mantenido nexos comerciales con el propietario de San Felipe, su compatriota Raúl Delgado. Darío Calderón, ex vicepresidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), dice que las SADP que están incurriendo en malas prácticas son precisamente aquellas en las que hay inversionistas argentinos: -Se dieron cuenta que les salía más fácil comprar clubes chilenos y usarlos como plataforma para inscribir jugadores. Se da el absurdo que clubes como San Felipe tenían alrededor de 160 jugadores en el registro general de la ANFP. Aparecían jugadores que nunca habían estado en Chile. Alguna de estas empresas argentinas fantasma se habían comprado por dos pesos un club de provincia y lo usaban exclusivamente para inscribir jugadores. Esos jugadores salían de Chile diciendo que se habían vendido en 100 pesos y toda la plata se dejaba afuera. Ese es el sistema, absolutamente corrupto. El presidente del Sindicato de Futbolistas (Sifup), Carlos Soto, dijo a CIPER que, producto de las indagaciones realizadas en Argentina, su organización ha avanzado conversaciones con la ANFP para poner límites a las inscripciones de extranjeros no habilitados, de forma que no se institucionalicen en Chile malas prácticas que han proliferado en otros mercados latinoamericanos. El ex presidente de la Asociación Nacional de Fútbol (ANFP) y propietario del club O’Higgins, Ricardo Abumohor, también se mostró preocupado por los alcances de la pesquisa judicial argentina. A su juicio, el tiempo ha demostrado que algunas SADP sólo están preocupadas de lograr réditos económicos y es el momento de ponerles límites: “Hay instituciones que entienden que el fútbol es un tema social, deportivo y económico, pero hay otras que sólo pretenden lo económico. La ANFP debe revisar qué jugadores se pueden inscribir, prohibir ciertas situaciones o autorizarlas”. DEPÓSITOS DE RIVER EN MIAMI A mediados de 2012, cuando se conocieron las primeras noticias de la investigación iniciada en Argentina y saltó a la palestra el nombre de Unión San Felipe, el Consejo de Presidentes de la ANFP analizó la situación. En su sesión del 23 de agosto, el consejo determinó que Unión San Felipe no había transgredido las normas del fútbol chileno. Ese día Raúl Delgado escribió en twitter: “Gracias a (Sergio) Jadue y a los representantes de los clubes por el apoyo ante las difamaciones de muchos periodistas”. Delgado controla Unión San Felipe desde 2005, cuando el club se convirtió en sociedad anónima. El empresario fue periodista deportivo del influyente diario argentino La Nación en los años 80 y se codeó con

figuras de la primera línea de la política del vecino país, como Carlos Menem (bajo su gobierno fue su secretario de prensa) y “Palito” Ortega. Hincha de San Lorenzo, dio sus primeros pasos en el negocio del fútbol asociado inicialmente con otro fanático azulgrana, Marcelo Tinelli. Con él compartió la propiedad del pase de Gonzalo Bergessio, jugador que en 2009 fue transferido desde San Lorenzo al Saint Etienne de Francia. “Nosotros no hicimos los reglamentos. Nos ajustamos a ellos”, es otro mensaje escrito por Delgado en twitter. En efecto, las inscripciones y traspasos de jugadores argentinos hechos por Unión San Felipe se ajustan a las reglas del fútbol local, pero el documento suscrito por River Plate que obra en poder del juez Oyarbide puede complicar al club aconcagüino y a sus propietarios. En el expediente judicial argentino figura un “convenio” suscrito el 14 de julio de 2012 entre Unión San Felipe y el zaguero Jonathan Bottinelli. En esa escritura, el jugador declaró que el pase estaba en su poder tras el fin de su contrato con San Lorenzo y San Felipe se comprometió a inscribirlo en sus registros, renunciando a toda pretensión sobre el valor de su futuro traspaso. Si el jugador era transferido, toda la plata quedaba para él. ¿Qué ganaba el club de Raúl Delgado si no podía ocupar a Bottinelli en la competencia local y tampoco tenía dominio económico sobre su pase? Vistas así las cosas, pareciera que San Felipe operaba como una especie de casa de acogida sin fines de lucro para futbolistas extranjeros. Pero la respuesta sobre el beneficio para el club está en la cláusula quinta del mismo convenio: Bottinelli se comprometió a entregar a San Felipe el 10% del total de su futura venta. El 29 de julio, apenas tres días después de haber sido inscrito por Unión San Felipe, Bottinelli fue adquirido por River Plate en US$1,7 millón. De acuerdo con el convenio entre Bottinelli y San Felipe, el club de Raúl Delgado debía recibir US$ 170 mil. Tres semanas después, la AFIP le cayó encima a Bottinelli y a River. Su investigación se hizo pública el 21 de agosto de 2012, cuando le informó a la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) que tenía bajo investigación la venta del defensa que, supuestamente, provenía de Unión San Felipe. Dos días después la situación fue abordada en el Consejo de Presidentes de la ANFP y El Mercurio informó que la justicia argentina tenía en la mira a la sociedad Old Oaks Investment Limited, constituida en Islas Vírgenes, sospechosa de ser la verdadera propietaria del pase de Bottinelli y de otros jugadores inscritos por San Felipe. De hecho, el exhorto de Oyarbide pidió información acerca de posibles nexos de Old Oaks con el club de Raúl Delgado. El diario oficial de las Islas Vírgenes Británicas (Virgin Islands Official Gazette), en su edición del 13 de diciembre de 2012, informó que la sociedad Old Oaks fue disuelta el 16 de noviembre de 2012, casi dos meses después de que la AFIP comenzara a investigar el pase de Bottinelli. Cuando el escándalo ya estaba desatado, Unión San Felipe y Bottinelli firmaron un anexo a su convenio del 14 de julio. El nuevo documento quedó suscrito el 6 de septiembre, a cinco semanas de haber cerrado el trato con River. En lo principal, este anexo dejó sin efecto la cláusula quinta del convenio original, por lo que Bottinelli ya no pagaría a San Felipe la comisión del 10%. También se invalidó la cláusula cuarta, que indicaba que San Felipe cobraría el dinero pagado por el traspaso y que en no más de 96 horas debía transferirlo a una cuenta señalada por Bottinelli. Por último, el anexo establecía que River pagaría directamente al jugador, en pesos argentinos y en una cuenta bancaria de su país. El intento de convencer a la AFIP, mediante este anexo extemporáneo, de que la operación se había hecho por completo al interior de Argentina, en moneda local y sin que Unión San Felipe obtuviera beneficio alguno (de manera que no podía acusarse ni evasión ni fuga de divisas ni lavado de activos), colisiona con un documento oficial de River Plate que figura en el expediente judicial. Este antecedente fue clave para que Oyarbide dirigiera su exhorto a Chile y solicitara la incautación de documentos de las oficinas de San Felipe y Alhec.

En cuatro hojas con el membrete de River quedó impreso el “Contrato de Cesión de Derechos Federativos y Económicos” suscrito entre Bottinelli, Unión San Felipe y el club argentino. En el documento se establece que el US$1,7 millón sería pagado por River con cuatro depósitos en la cuenta 716966 de la sucursal de Miami del Interaudi Bank, abierta a nombre del Club Deportivo Unión San Felipe SADP. El contrato indica que River haría un primer depósito de US$500 mil antes del 2 de agosto de 2012. El segundo (US$440 mil) se materializaría el 20 de agosto. El tercero (US$500 mil) se pagaría el 20 de diciembre y el último (US$260 mil), el 20 de marzo de 2013. Según este cronograma, cuando la AFIP informó a la AFA que la transferencia de Bottinelli estaba bajo investigación y solicitó bloquear los pagos de River a San Felipe, el club de Raúl Delgado ya tendría que haber recibido US$ 940 mil en su cuenta de Miami. Por eso, ni al magistrado Oyarbide ni a la AFIP le convenció el anexo suscrito el 5 de septiembre entre Bottinelli y San Felipe. Y, por lo mismo, el juez envió el exhorto a Chile para seguir la pista del dinero en los computadores y carpetas del club y de la agencia Alhec. SIGUIENDO EL DINERO La sociedad Alhec Agentes de Valores S.A. fue constituida en Chile el 2 de julio de 2009 por los empresarios argentinos Carlos Alberto Rivera y Marta Zulema Rondinella. En Alhec explicaron a CIPER que no están autorizados para emitir declaraciones. Sin embargo, manifestaron que la investigación derivada desde Argentina es solo por la sociedad constituida en ese país y no por ALHEC Agentes De Valores S.A. que opera en Chile. Carlos Rivera, dueño de Alhec Group, socio de la agencia en Chile y representante de futbolistas, estuvo prófugo en la causa que lleva el juez Oyarbide y se entregó a inicios del mes pasado. De acuerdo con los antecedentes que se acumulan en la investigación judicial argentina, y a los que CIPER tuvo acceso, entre las pesquisas desarrolladas en Buenos Aires se cuenta la interceptación de conversaciones telefónicas de Rivera. En las oficinas de Alhec, ubicadas en Isidora Goyenechea, en Las Condes, el OS-9 incautó tres computadores, discos duros, una tablet y un celular, además de carpetas de clientes extranjeros y archivos varios. En tanto, desde la sede de Unión San Felipe se confiscaron discos con información del jugador Bottinelli. Todo fue entregado voluntariamente por el abogado del club, Eduardo Olivares Gutiérrez, quien también integra el directorio de la SADP propietaria de la institución. El interés de la AFIP y de Oyarbide por obtener los documentos con los flujos financieros de San Felipe y Alhec se debe a que, para probar la eventual evasión tributaria y una posible transgresión a las normas de operaciones cambiarias, requieren determinar quién es efectivamente el titular de la cuenta en Miami, a quién le llegó ese dinero como destinatario final, a quiénes pertenecía realmente el pase de Bottinelli y cuál fue la cifra que recibió en definitiva el jugador. La AFIP, en su presentación a la justicia tributaria argentina, consideró como un dato relevante que el mismo futbolista reconociera que su representante y negociador es Leonardo Rodríguez, a objeto de que se investiguen también sus flujos financieros. Además de representar a Bottinelli, la AFIP asegura que Leonardo Rodríguez también maneja al internacional argentino Carlos Javier Matheu. El escrito ingresado por la AFIP a la justicia tributaria de su país señala que Matheu fue transferido desde Unión San Felipe al Atalanta italiano. Según los registros de la ANFP, Matheu figuró inscrito en San Felipe por escasos 20 días, entre el 3 y el 23 de julio de 2012. Por tal razón, la AFIP solicitó a la justicia argentina que se libre un exhorto a Italia para conseguir toda la documentación que posea Atalanta sobre ese traspaso. OTRAS TRANSFERENCIAS

El Club Unión San Felipe SADP es controlado en un 98% por Inversiones Deportivas Rojo y Blanco Limitada. A su vez, Inversiones Deportivas Rojo y Blanco Limitada, es controlada en partes iguales por Ramón Raúl Delgado, Sebastián Alejandro Delgado, Pablo Ezequiel Delgado y Raquel Guadalupe Ghirardi. La historia de la sociedad que controla Rangers de Talca, el segundo club chileno en la mira de la AFIP, está cruzada por una estrecha relación con los dueños de Unión San Felipe. De hecho, Piduco SADP, propietaria inicial del club talquino, fue constituida en agosto de 2010 por María Antonieta Costa Ros y Monserrat Olivares Costa: esposa e hija del actual miembro del directorio de Unión San Felipe SADP, el abogado Eduardo Olivares, quien además representó a Old Oaks Investment en un litigio por los derechos del seleccionado chileno y actual jugador de O’Higgins Luis Pedro Figueroa. El controlador de la sociedad que maneja a Rangers es el argentino Ricardo Pini. El abogado Olivares aclaró en una nota publicada por La Tercera en octubre de 2010 que no era su familia la que estaba tras la propiedad del equipo talquino, sino los hermanos Ricardo y Sebastián Pini. Según dijo Olivares, los Pini habían sido abogados de Raúl Delgado en Unión San Felipe: “Cuando se creó la sociedad (de San Felipe) los asesores acá eran del estudio Pini, que es un estudio importante de Buenos Aires (…). La relación entre Raúl Delgado y los Pini concluyó hace año y medio”. Piduco SADP compró el club Rangers el 26 de agosto de 2010. Al año siguiente, la sociedad cambió su nombre a Rojinegro SADP, denominación que mantiene hasta hoy. Los registros de la ANFP con las nóminas de jugadores argentinos “no habilitados” inscritos por Rangers son modestos en comparación con los de Unión San Felipe: uno en 2011, cuatro en 2012 y seis en 2013. De estos, solo los nombres del arquero Hernán Ismael Galindez y el defensor Santiago Juan Gentiletti, podrían despertar sospechas. Formado en Rosario Central, el golero Galindez figura inscrito en el elenco talquino para las temporadas 2012 y 2013, aunque fue cedido a la Universidad Católica de Ecuador. En el caso de Gentiletti, aparece en las nóminas de Rangers en 2010, 2011 y 2012, pero en esos años militó en Argentinos Juniors, luego en el Stade Brestois francés y finalmente en San Lorenzo. En las nóminas de inscritos por Unión San Felipe figuran otros dos argentinos de pergaminos internacionales: Ignacio Piatti y Renato Civelli. El primero está en los registros del club desde 2009 en adelante, pero su ficha dice que en 2009 jugó en Gimnasia La Plata, el 2010 en Independiente, el 2011 en el Lecce de Italia y el 2013 en San Lorenzo. Respecto de Renato Civelli, estuvo en las nóminas de San Felipe en las temporadas 2010 y 2011, aunque en esos años alineó en el Niza de Francia. CIPER solicitó entrevistas con los presidentes de las SADP de Rangers y de Unión San Felipe, pero en ambos casos no hubo respuesta. El andamiaje instalado por Raúl Delgado en San Felipe no sólo ha servido como pista de despegue para argentinos que parten al mercado internacional sin haber vestido la camiseta del club aconcagüino. También se ha utilizado para el aterrizaje de jugadores que llegan al país y de inmediato son cedidos a otros clubes chilenos. Es el caso del discreto atacante Gino Clara, quien en agosto de 2010 fue presentado en Colo Colo por el entonces presidente del directorio de Blanco y Negro, Guillermo Mackenna. Inicialmente se informó que venía de Huracán, pero según los registros de la ANFP sólo un mes antes había sido inscrito por San Felipe. Un caso similar es el del volante Luciano Civelli. Siguiendo la misma ruta de su hermano Renato, fue inscrito por San Felipe el 27 de julio de 2012. Ese mismo mes fue presentado como refuerzo de la Universidad de Chile. La prensa informó que provenía del Libertad de Paraguay, pero la operación incluyó su inscripción previa en el club de Raúl Delgado. CONTRATOS SIMULADOS

La AFIP también ha investigado las transferencias en las que se declara un monto menor del que realmente se pagó por el futbolista. En el expediente judicial argentino se menciona el traspaso de Diego Buonanotte desde River Plate al Málaga de España para graficar este tipo de evasión tributaria. La AFIP informó al tribunal que Buonanotte fue transferido en la suma de 3 millones de euros el 20 de enero de 2011. Ese mismo día River y Málaga firmaron un contrato de “colaboración deportiva” por 2 millones de euros. Luego, Málaga cedió en préstamo a River, por seis meses y de manera gratuita, al mismo jugador. Para volver a contar con los servicios de Buonanotte, River debió contratar un seguro para proteger la inversión del club español. Pero este seguro no fue por 3 millones de euros, que es lo que supuestamente pagó el Málaga, sino por 5 millones de euros. La AFIP asegura que esto prueba que el valor total de la venta fue de 5 millones de euros y que el convenio de colaboración entre ambos clubes no fue más que un ardid para rebajar de manera ficticia el monto. De ser efectivo lo que denuncia la AFIP, en el traspaso de Buonanotte se evadió el pago de impuestos por un total de 252.963 euros. El ex dirigente Darío Calderón explica que históricamente los precios de los traspasos que se hacen a Europa no tienen suficiente fiscalización. Cuenta que ha revisado la prensa sudamericana para ver los valores de las transferencias que se publican acá y los ha comparado con la información difundida en el país que recibe al jugador. Las cifras, dice, no coinciden. -Esa diferencia responde a que, como acá no hay fiscalización, se coloca un precio distinto. Se vende un jugador y, como no se le rinde cuentas a nadie, en Chile se dice que se vendió en 200 y afuera, que se compra en 2 millones. Y la diferencia quedó en alguna parte. Ese es el sistema que se usa para blanquear platas. El presidente del Sifup, Carlos Soto, asegura que en Chile también se evaden impuestos y se recortan los beneficios sociales de los futbolistas por la vía de declarar menos dinero del que se paga realmente a los jugadores. Y apunta sus dardos precisamente a los dos clubes locales que están siendo investigados en Argentina: -En el caso de San Felipe y de Rangers, los jugadores extranjeros firman contrato por un sueldo, por ejemplo de $1.000.000, que es lo que queda registrado en la ANFP. Pero reciben otro millón de pesos que se pagan en dólares, en efectivo y sin recibo. No queda registrado en ninguna parte, porque, como dicen ellos, se paga “en negro”. Marcelo Pablo Barticciotto, ex jugador y director técnico, corrobora las afirmaciones de Soto: “Sé de clubes que ponían 2 o 3 millones de pesos en el contrato que entregan a la ANFP y otros 3 millones lo hacían por contrato privado y pedían (a los jugadores) que dieran un número de cuenta de su país de origen, sobre todo los argentinos y paraguayos. Y había jugadores que no tenían cuenta, que no entienden de estos temas, y entonces le pedían la cuenta del representante”. Para el presidente del Sifup esto atenta contra el Estatuto Laboral del Futbolista Profesional, que en su artículo 152 bis G señala: “La entidad deportiva que utilizando cualquier subterfugio, oculte o simule beneficios o prestaciones laborales que tenga como causa el contrato de trabajo, será sancionada”. Las multas oscilan entre 10 y 150 UTM ($400 mil y $6 millones), aumentando en media UTM ($ 20 mil) por cada empleado afectado por la infracción. Una bicoca al lado de las cifras que se transan en el mercado del fútbol. EL SII RAYA LA CANCHA Soto y Barticciotto no entregan los nombres de los futbolistas que han aceptado este tipo de prácticas, para evitarles represalias, pero sus denuncias tienen asidero. Así se desprende de la decisión del SII de iniciar una exhaustiva fiscalización a los contratos y transferencias de jugadores. Un artículo de La Segunda, publicado

el 26 de junio de este año -dos semanas después de las incautaciones practicadas en las oficinas de Unión San Felipe y Alhec-, informó que el SII está auditando cinco clubes y una sociedad intermediaria. Citando fuentes del SII, el vespertino señaló que las seis entidades fueron notificadas de la investigación porque se detectaron “inconsistencias entre los montos que constaban en los antecedentes de las transferencias y los declarados tributariamente (…). En algunos de estos casos se detectaron triangulaciones a paraísos fiscales”. El SII confirmó a CIPER que esa auditoría está en curso y que sus resultados quedarán listos en diciembre. Respecto de las “triangulaciones” denunciadas por la AFIP, en el SII señalaron que, de comprobarse que hay clubes chilenos que recibieron pagos en el exterior -como podría haber sucedido con San Felipe en la transferencia de Bottinelli-, se debe determinar si esas sumas fueron declaradas en Chile. Impuestos Internos no es la única institución fiscalizadora que ha encendido alertas por las operaciones de las SADP. La Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) ha cursado más de 500 sanciones a las SADP. En su mayoría, los incumplimientos fueron por no entregar a tiempo los certificados de pagos de sueldos y obligaciones previsionales, además de memorias y estados financieros. Resulta extraño que las SADP incurran en estas omisiones ante la SVS, porque, tal como lo señaló una nota de El Mercurio del 7 de julio pasado, detrás de varios clubes sancionados hay empresarios e inversionistas de vasta experiencia: “Es el caso de Wanderers (Alberto Eguiguren, Jorge Lafrenz y Wolf von Appen), Unión Española (Jorge Segovia) o Palestino (Fernando Aguad y Salvador Said)”, se lee en el artículo. Frente a las “triangulaciones” denunciadas por la justicia argentina y las omisiones detectadas por el SII y la SVS, el integrante del directorio del Club Social y Deportivo Colo Colo, Alex Friedemann, es categórico: “No podemos estar prestándonos para realizar estas omisiones y este tipo de prácticas. Las sociedades anónimas, que tanto han criticado a los antiguos dirigentes y las malas prácticas, deberían dar ejemplo de probidad. No podemos ser una suerte de Islas Vírgenes o paraíso fiscal del comercio deportivo”.

ANÁLISIS Y PROYECCIÓN DEL ESCENARIO POLÍTICO EN EL CHILE DE HOY por Manuel Acuña Asenjo (Chile) Domingo, 04 de Agosto de 2013 E-mailImprimirPDF http://www.piensachile.com/index.php?option=com_content&view=article&id=11841:2013-08-05-00-2722&catid=2:analisis&Itemid=5 MARCO TEÓRICO En uno de nuestros últimos documentos, y comentando lo que podría suceder en los meses siguientes a las elecciones primarias de junio, aseverábamos que los hechos de la escena política nacional prevalecerían por sobre todos los demás sucesos y que la información de los medios de comunicación se volcaría, por entero, a solazarse con ellos. Afirmábamos que veríamos desplazarse, por dicha escena, a figuras, personalidades, actores políticos que no sólo ocuparían los espacios disponibles en esos medios sino, además, se incorporarían a nuestro diario vivir invadiendo la privacidad de nuestros hogares y gobernando el contenido de nuestras conversaciones con sus afirmaciones, acciones y demás decires. Los hechos han confirmado esta apreciación, pues no ha sucedido de otra manera. Y no dejará de suceder hasta que el evento principal que motiva tales comportamientos, que es la competencia por acceder a la Presidencia de la nación o algún cargo en el Parlamento, quede resuelta. Sólo entonces bajará en intensidad este ‘noise’, este ‘ruido’ comunicacional que impide ver al Chile real, el Chile que se oculta y no se permite emerger, que es el de los movimientos sociales, el de las clases dominadas. Este documento, por consiguiente, necesariamente ha de referirse a esos hechos aunque, de soslayo, intente desentrañar el intrincado mundo de la lucha de clases que subyace tras esas acciones. PUNTO DE PARTIDA

Comencemos recordando que el miércoles 17 de julio, el hijo mayor de Pablo Longueira, abanderado presidencial no sólo del partido Unión Demócrata Independiente UDI sino de todo el conglomerado denominado ‘Alianza Por Chile’, a nombre de la familia del candidato, dio lectura a un documento en el que dicho personero hacía pública su irrevocable decisión de abandonar la lucha política por razones de salud. Al parecer, había sufrido el candidato una fuerte depresión que lo inhabilitaba para continuar en su empeño de alcanzar la mayoría necesaria para vencer a sus contrincantes en la carrera presidencial. Y, como era de suponer, no hubo en ese anuncio información alguna acerca de las razones que provocaron esa depresión ni, tampoco, posibilidad de inquirir acerca de ello, pues la generalidad de las intervenciones referidas al hecho no hicieron más que lamentar lo sucedido, desearle los mejores parabienes al candidato y ‘respetar’ la reserva de la familia. Sin embargo, culminaba así una crisis que ya se manifestaba entre las organizaciones políticas integrantes de la coalición ‘Alianza Por Chile’ (Renovación Nacional RN y UDI), desde la nominación que hiciera esta última, de Laurence Golborne, ex ejecutivo de CENCOSUD, como candidato presidencial a nombre de ese partido. Como muchas de las circunstancias que a diario ocurren en Chile, en donde causas, motivos o razones quedan ocultos, subsumidos en la contingencia, relegados al olvido, convertidos en bastiones que resguardan principios morales de dudosa procedencia, la renuncia de Longueira se transformó en un ‘hecho’ establecido, una ‘realidad’. Y es que, en las actuales circunstancias, como sugerente asimilación a lo que sucede en el ámbito de la economía, dentro de la escena política de la nación también las razones públicas se trastocan en razones privadas, y nadie tiene derecho a preguntar más allá de lo que conviene al interés de las clases dominantes y a su representación política natural[1]. Los hechos se han precipitado. La crisis (larvada, en un comienzo) entre ambas organizaciones políticas (Renovación Nacional RN y UDI)[2], se ha hecho manifiesta, provocando fuertes enfrentamientos entre las mismas. Y si durante varios días se mantuvo la incertidumbre de una candidatura que reemplazase la de Pablo Longueira, las nominaciones de Evelyn Matthei (UDI) y Andrés Allamand (RN) no resolvieron la duda. Porque la crisis entre ambas colectividades pareció agudizarse: nuevas primarias dentro de la coalición y enfrentar las elecciones presidenciales con un candidato de unidad o, simplemente, hacerlo con dos. Por supuesto que tales disputas provocaron regocijo entre quienes, en las elecciones primarias de 30 de junio pasado, se habían pronunciado por la candidata de la alianza ‘Nueva Mayoría’ que es Michelle Bachellet. El regocijo era que ‘ahora, la derecha no tiene candidato’, que ‘la derecha está en el suelo’[3] o que ‘si la derecha no puede resolver su problema de la candidatura presidencial, ¿cómo va a resolver los problemas de toda la nación?’ De lo cual se podría inferir que esa ‘derecha’ estaría perdida frente al avance incontenible de las fuerzas de ‘izquierda’, representadas por la candidata del conglomerado Nueva Mayoría (ex Concertación o, si se quiere, Concertación más el Partido Comunista). Tales conclusiones —apresuradas, por cierto, e incluso claramente triunfalistas— pasaron por alto el problema central de toda elección cual es su ubicación en el espacio (o campo de acción) de la teoría del Estado. En la sociedad actual, las clases sociales se presentan reemplazadas por estructuras institucionales que gobiernan la escena política de la nación; dichas estructuras están constituidas por los partidos que no sólo se arrogan la representatividad de las clases sino, simplemente, las sustituyen. Así, una crisis que afecte a la representación política natural de las clases dominantes, pasa a ser una ‘derrota’ de dichos estamentos e invita a extraer una conclusión tremendamente errónea. Sin embargo, las disputas entre quienes representan natural o espuriamente a los sectores dominantes no priva a éstos del ejercicio de su derecho de conducir hegemónicamente al conjunto social. Menos aún las disputas electorales. Las elecciones son componentes del mecanismo que gobierna la conducta de la escena política de la nación. Si bien es posible descubrir en ellas algunas de las contradicciones que existen dentro del Bloque en el Poder, también cumplen la función de impedir a las clases dominadas poder determinar el grado de desarrollo de sus propias luchas al interior de esa sociedad. La escena política es un mundo de referencias, de manifestaciones o actuaciones a través de ‘interpósita personae’, a menudo bastante alejado de la realidad que pretende representar.

Es importante recordar estas enseñanzas, pues lo que se denomina ‘derecha’ no es más que la representación política natural de las clases dominantes. Cumple una función, sin lugar a dudas; pero esa misma función la puede cumplir su representación espuria, es decir, lo que se denomina ‘izquierda’. Por consiguiente, no tenía (ni tiene), mayor importancia para los sectores populares, las disputas habidas entre los actores que componen la Alianza Para Chile; tampoco la tendría para el caso que su candidato o sus candidatos fuese(n) vencido(s) en forma vergonzante. Esa es tan sólo la visión que presenta la escena política. Y nada más. Hechas estas observaciones, sentemos algunas premisas básicas. QUIENES SON LOS CANDIDATOS PRESIDENCIALES Los candidatos que, hasta el momento se manifiestan para enfrentar los comicios de noviembre próximo son: Verónica Michelle Bachelet Jeria, en representación de la coalición denominada ‘Nueva Mayoría’; Evelyn Rose Matthei Fornet, en representación de la organización llamada ‘Alianza Por Chile’; Marco Enríquez-Ominami Gumucio, en representación del Partido Progresista PRO; Franco Aldo Parisi Fernández, que se presenta como independiente; José Tomas Joscelyn-Holt Letelier , que también se presenta como independiente; Marcel Henri Claude Reyes que representa al Partido Humanista; Alfredo Juan Sfeir Younis, que representa al Partido Ecologista; Gustavo Ruz Zañartu, en representación del conglomerado ‘Asamblea Constituyente’; Roxana del Pilar Miranda Meneses, en representación del Partido Igualdad y de la Asociación Nacional de Deudores Hipotecarios ANDHA; y, Ricardo Jacob Israel Zipper, en representación del Partido Regionalista Independiente PRI. Las posibilidades que estos candidatos tienen para llegar a enfrentarse como tales en los comicios de noviembre próximo son bastante relativas. Con excepción de quienes representan a las dos grandes coaliciones, que son el pacto Nueva Mayoría y la Alianza Por Chile, los demás necesitan reunir un determinado número de firmas antes del 17 de agosto próximo; de no hacerlo, arriesgan no poder participar en el acto eleccionario final. Y es una incógnita saber si esos candidatos van o no a cumplir semejante requisito para, finalmente, presentarse como tales. TENDENCIAS QUE ACUSAN LOS CANDIDATOS En términos generales, las tendencias de los candidatos se orientan en sentido inverso. Mientras Evelyn Matthei, Tomás Joscelyn –Holt y Franco Parisi se manifiestan partidarios de mantener en forma inalterable la esencia del modelo y aceptan modificaciones accidentales al mismo (en lo que también se pronuncia el candidato del PRI, Ricardo Israel, aunque acompañado de ciertas reivindicaciones específicas), Michelle Bachelet, Marco Enríquez-Ominami, Marcel Claude, Alfredo Sfeir, Roxana Miranda y Gustavo Ruz se manifiestan con proposiciones más radicales que, incluso, en algunos casos, llegan a la abolición de la Constitución pinochetista y a la convocatoria a una Asamblea Constituyente. No vaya a creerse, sin embargo, que todos estos últimos candidatos se identifican en sus proposiciones. No. Sus programas son diferentes. Existen mayores similitudes entre cinco de ellos, excluyéndose a Michelle Bachelet cuyos postulados han experimentado notables variaciones. Existen, no obstante, dos hechos que unen, en mayor o menor medida, a todos los candidatos, independientemente del programa que lleven o del sector social cuyos intereses quieran representar. Es el primero que, de una u otra manera, todos ellos han apostado lidiar dentro de los márgenes del sistema, al interior del marco democrático, a través de elecciones que suponen libres, secretas e informadas. Esta voluntad manifiesta en orden a relegar a un segundo plano la tarea primordial de los

movimientos sociales, cual es transformar la protesta social en organización y la organización en poder social, y optar por aceptar las condiciones en orden a disputar las propuestas políticas dentro de los marcos establecidos por las clases dominantes para el funcionamiento del conjunto social, es una tendencia que se manifiesta desde hace varios meses incluso entre los líderes que han conducido las protestas estudiantiles. No está de más señalar aquí que los primeros en hacerlo fueron Camila Vallejos y Camilo Ballesteros, que determinaron seguir la línea impuesta por su partido; les han seguido en una actitud semejante aunque no idéntica, Gabriel Jackson, fundador del Partido ‘Revolución Democrática’ y Francisco Figueroa y Gabriel Boric , fundadores del movimiento ‘Izquierda Autónoma’, para participar en las contiendas parlamentarias[4]. No lo ha hecho de manera diferente Marco Enríquez-Ominami con su Partido Progresista PRO (y hasta podría llegar a hacerlo Andrés Velasco). La vía de las reformas a través de la institucionalidad parece haberse impuesto; al menos, en las candidaturas presentadas. El otro hecho es que la generalidad de los programas está íntimamente relacionada con las reivindicaciones planteadas por los movimientos sociales desde la revolución de los pingüinos en adelante, es decir, desde 2006. Queremos decir aquí que los programas de los candidatos no han podido evitar pronunciarse sobre dichas reivindicaciones, sea para apoyarlas o para rechazarlas rotundamente. Lo cual es un índice importante para concluir que las protestas habidas desde 2006 en adelante parecen ser los acontecimientos más relevantes ocurridos en el Chile post dictatorial. Los movimientos sociales, especialmente los estudiantiles, han determinado el rumbo de la política chilena de los años futuros, y lo seguirán haciendo por un largo tiempo más. Y eso sí constituye una novedad para las elecciones que se avecinan. Desde este punto de vista, no debe sorprender que esos candidatos, también en mayor o menor medida, contrapongan o adapten sus estrategias a las de los movimientos sociales. No puede extrañar, en consecuencia, que para la generalidad de esos candidatos (especialmente para las abanderadas de la Alianza Por Chile y de Nueva Mayoría, sin perjuicio que en esa misma línea se inscriban los independientes JoscelynHolt y Parisi), el principal adversario sea el movimiento social. Y es que los partidos constituyen elementos consubstanciales a la estructura del Estado; son parte del Estado, como también lo es la escena política y el Bloque en el Poder. La Concertación de Partidos Por la Democracia tuvo la oportunidad de liquidar, consciente y deliberadamente, al movimiento estudiantil de los ‘pingüinos’ en 2006 porque era un elemento extraño y disociador dentro de la institucionalidad en la que ella funcionaba. No sucedió de manera diferente con las protestas estudiantiles de 2011, cuando el Gobierno de Sebastián Piñera trasladó al Parlamento las peticiones que los jóvenes le hacían directamente a él, colocándolos en la disyuntiva de desafiar en su globalidad al sistema democrático. Y si ya así ha sucedido, no tendría por qué no ocurrir de la misma manera en el futuro: el enemigo principal de la escena política es el movimiento social. Esto no debe sorprender. Es parte de la defensa que el sistema hace de su propia estructura. El sometimiento del movimiento social, la cooptación de su dirigencia, la asimilación cultural de los dominados al poder espiritual dominante, no es solamente una tarea del sistema, sino la obligación ineludible que le asiste. Se entiende, así, que frente a la posibilidad de la convocatoria a una Asamblea Constituyente algunos sectores (Renovación Nacional y sectores de la Concertación) hayan querido firmar un acuerdo para enviar al Congreso la reforma al sistema binominal y que el presidente de la primera de esas colectividades haya expresado abiertamente que el objetivo de esa reforma era, precisamente, quitar a los movimientos sociales la bandera de la Asamblea Constituyente. Del mismo modo se explican las palabras del dirigente de los gremios empresariales en el Congreso anual de ICARE cuando, al finalizar ese encuentro el 30 de julio, expresó que “[…]las peticiones de la calle deben ser consideradas, pero no podemos dejar que gobierne la calle”. POSIBILIDADES QUE TIENEN LOS CANDIDATOS DE ALTERAR LA ESTRUCTURA DEL SISTEMA Los sistemas poseen elementos que son de su esencia y otros que le son accidentales. En el sistema capitalista, son elementos de su esencia (o estructurales) la existencia de compradores y vendedores de fuerza de trabajo. Por consiguiente, cuando se habla de introducir reformas estructurales a su funcionamiento, la referencia implícita es a alterar esa composición. Las posibilidades de alterar la

estructura de un sistema empleando las mismas herramientas que el mismo otorga, sin embargo, son mínimas (por no decir nulas), pues no existen sistema con vocación suicida. En el caso chileno, una reforma estructural debería ser efectuada a través del uso de la normatividad heredada de la propia Dictadura. Sin embargo, como ya se ha dicho, la regla general es que todo sistema admita reformas siempre y cuando tales reformas no alteren el contenido de su esencia. Por ende, esta transformación no será posible. Y constituiría un disparate mayor intentar, siquiera, realizarla. De manera que, pasadas las elecciones, el sistema mantendrá su natural estructura de desigualdad. Un sistema social desigualitario por naturaleza, para poder perseverar en el tiempo, requiere de una estructura coercitiva que garantice su existencia, la que, a su vez, necesita de una normatividad fundamental que organice al conjunto social. La estructura coercitiva es el Estado; la normatividad fundamental, su Constitución. Ambos elementos, puesto que aseguran la mantención de la esencia del sistema, son elementos consustanciales al mismo. Por consiguiente, no desaparecen; aunque se intente reformarlos[5]. En consecuencia, tampoco desaparece la forma interior de su estructura, vale decir, el Bloque en el Poder ni, mucho menos, la existencia de una fracción hegemónica dominante que conduzca a la sociedad en su conjunto. Nos guste o no nos guste. En seguida, es necesario despedirse de otra circunstancia imposible de realizar: tampoco podrá cambiarse la composición del Bloque en el Poder ni, mucho menos, la conducción hegemónica que ejerce su fracción dominante, hoy la bancaria. Y si alguien pudo creer que alguno de los candidatos tuvo la precaución de advertir a su electorado al respecto, los porfiados hechos nos conducen a una conclusión por entero antagónica: ninguno lo ha hecho, ninguno deja indicios de querer hacerlo; mucho menos una voluntad explícita orientada en ese sentido. En tercer lugar, aún cuando existiera esa voluntad y se manifestara de manera explícita, tampoco podrían realizarse dichos cambios con las actuales reglas del juego pues la economía chilena está fuertemente atada a los vaivenes del exterior, y es en ese exterior donde reina sin contrapesos la fracción hegemónica bancaria que, a su vez, mantiene a las que existen en cada una de las formaciones sociales de las naciones sudamericanas. De lo cual puede deducirse que, si existen posibilidades de robustecer la actividad de algunos sectores de la burguesía industrial criolla, lo más que podría alcanzarse sería lograr un mayor equilibrio entre ésta y la fracción que hoy predomina al interior de esa estructura conduciendo hegemónicamente al conjunto social. Pero lo cierto es que dicha fracción va a seguir imponiendo sin contrapeso sus intereses. Digámoslo más francamente: aún cuando se intentaran reformas de consideración parece difícil que ellas puedan traducir algunas de las más sentidas aspiraciones de los movimientos sociales. La fracción bancaria, que tiene bajo su mando la conducción del Bloque en el Poder chileno, como en otras formaciones sociales a las cuales se encuentra fuertemente ligada, jamás ha dejado de realizar su interés en todos estos años de democracia en Chile; es ilusorio suponer, también, que pueda existir posibilidad alguna de realizar cambios diferentes a aquellos intentados por el propio gobierno de Sebastián Piñera[6]. Queremos decir con ello que no es posible efectuar reformas a la conducción hegemónica que mantiene dentro del Bloque en el Poder la fracción bancaria tanto chilena como internacional. Los bancos nacionales, reducidos hoy solamente a seis (Banco de Chile, de propiedad del grupo Luksic; el Banco de Crédito e Inversiones, de propiedad del clan Yarur; el BancoEstado, de propiedad del Estado; el Banco Ripley, del grupo Calderón; el Banco Falabella, del grupo Solari, y el Banco París, del grupo CENCOSUD, como asimismo, los bancos internacionales (Santander, BBVA, Scotiabank, Itaú, Internacional) están preparados para enfrentar las nuevas condiciones que ofrece el panorama político nacional y no se encuentran, en modo alguno, intranquilos. Total, el BancoEstado vuelve a quedar en manos del gobierno de turno; el Banco de Chile pertenece a una familia como la Luksic, ligada a la ex Concertación; y el BCI sigue en poder de los Yarur. No puede suponerse que CorpBanca, del grupo de Álvaro Saieh, interprete una melodía discordante, a pesar de haber pertenecer a un grupo que, además, posee COPESA, dueña, a su vez, del periódico La Tercera, que apoyó en su momento la candidatura de Laurence Golborne y, posteriormente, de Pablo

Longueira. Y es que dicha entidad puede ser afectada por la crisis que experimenta el SMU (Supermercado UNIMARC). Hoy, mantiene un discreto silencio. Así, pues, la fracción bancaria, que hegemoniza el Bloque en el Poder y, en consecuencia, la conducción de la sociedad en su conjunto, parece dispuesta a apoyar a cualquier gobierno que le permita realizar sus negocios; lo hizo con la Concertación y, más tarde, con la Alianza Por Chile; no tendría por qué no hacerlo con la coalición que triunfe o con quien triunfe en los comicios de noviembre. En este mismo orden de cosas, también el Banco París, de propiedad de CENCOSUD que dirige Horst Paulmann[7] parece estar dispuesto a hacerlo. Sin embargo, esto es sólo el comienzo. Existen otros hechos que impiden la realización de reformas estructurales al sistema. LA VOLUNTAD POLÍTICA DE REALIZAR CAMBIOS El problema mayor que presentan la elecciones de noviembre es que los candidatos que podrían disputar con mayor éxito tales comicios —Matthei y Bachelet— no evidencian deseo alguno en torno a comprometerse con reformas de consideración (no es extraño que así suceda con Matthei, pues representa naturalmente el interés del capital; Bachelet, cuyo discurso es ‘renovador’ eleva al carácter de reformas ‘estructurales’ reivindicaciones que no lo son en absoluto, como la gratuidad de la educación, la reforma tributaria y la reforma a la Constitución pinochetista). La voluntad política de realizar reformas estructurales existe en algunos de los otros candidatos (Enríquez-Ominami, Claude, Sfeir, Ruz, etc.), sin embargo, las posibilidades de un éxito electoral de los mismos se encuentran fuertemente limitadas, aún cuando algunos de ellos cuenten con el apoyo de sectores sociales junto a quienes lucharon, codo a codo, en las protestas. No deja de ser revelador el hecho que la abanderada de Nueva Mayoría haya mantenido hasta fines de julio un acusador silencio en torno a lo que piensa realizar en materia de derechos laborales. Por supuesto que no existe voluntad alguna de intentar imponer la participación de los trabajadores en la toma de decisiones de las empresas; el trabajador, componente de la producción según la teoría clásica, no recibe del capital un trato diferente al que ésta asigna a la naturaleza, que es la dominación. Y esta concepción es la que prevalece. En el programa de Bachelet, inconcluso aún, tampoco hay referencia a una reforma al Código del Trabajo. Ese es un tema que se encuentra tan fuera de protocolo que el lunes 29 de julio el propio Partido Socialista debió realizar un encuentro de representantes del Comando de la candidata y parlamentarios de ese partido. El objetivo del encuentro, realizado en el Instituto Igualdad —al cual concurrieron en representación del Comando de Michelle Bachelet su vocero Álvaro Elizalde y su asesor en temas internacionales Luis Maira—, fue hacer presente a los primeros la preocupación de todos ellos por “[…] la ausencia de temas laborales […]”

en el programa de la candidata[8]. Sin embargo, lo más revelador de esta voluntad de no querer hacer cambios o hacerlos ‘en la medida de lo posible’, está constituido a) por expresiones (promesas) que se formularon en cierta oportunidad y que, posteriormente, han ido experimentando modificaciones hasta terminar siendo una caricatura de su original; b) la incorporación a labores de preparación del programa de personajes estrechamente vinculados a intereses económicos de varios de los Grupos que existen en el país, y c) contradicciones entre los propios personeros de la coalición. a)

Expresiones de la candidata que han sido alteradas.

En su discurso en El Bosque, Bachelet criticó fuertemente ‘la letra chica’ que condena a los consumidores a aceptar todas las condiciones que imponen los grandes almacenes; y sin embargo, para mantener a Alberto Arenas —que empleó su veto contra los dirigentes de CONADECUS—debió nominar a Aldo González y

ocultar, de esa manera sus vínculos con ‘Líder’ y LAN, empresas a las que ha servido en contra del interés de los consumidores[9]. Esta duda acerca de la distancia que existe entre su discurso y la práctica ha sido denunciada por Carlos Peña, quien refiriéndose a la candidata recuerda: “Entre los partidos y la gente, insinuó a su llegada a Chile, hay que escoger a la gente. Un gesto semejante – es fácil recordarlo- tuvo a inicios de su anterior gobierno y ocurrió que la gente, estimulada por la idea de gobierno ciudadano, amenazó con anegar las calles. El resultado fue que terminó gobernando con profesionales de la política, como Pérez Yoma, Viera-Gallo, Bitar. ¿Por qué no ocurrirá lo mismo ahora?”[10]. b)

Incorporación al Comando de personajes de discutible vocación solidaria.

Numerosos de los técnicos que ha llamado la candidata para formar parte de su Comando pertenecen al sector neoliberal de la Concertación; entre otros, Eduardo Engel, economista profundamente contrario al sistema de reparto en las pensiones y defensor de las AFP; Guillermo Larraín, panelista de ‘Estado Nacional’, ex superintendente de AFP que terminó su gestión poniéndose del lado de ellas; René Cortázar, ex director de ‘La Polar’, hombre vinculado a los Matte y a los Luksic, ex presidente de Canal 13, hombre cuyas maniobras han sido denunciadas por el propio ex vicepresidente de la Democracia Cristiana Ricardo Hormazábal en carta enviada a dicha colectividad[11]; Javiera Blanco, ex ejecutiva de una fundación de los Edwards, en fin[12]. La gota que ha rebasado el vaso ha sido la incorporación —reciente, por cierto— de José de Gregorio, ex presidente del Banco Central, quien ya se había manifestado contrario a conceder la gratuidad en la educación: “[…] darles gratuidad a todos los estudiantes es partir al revés […]”[13] Cortázar, por lo demás, está unido a Evelyn Matthei por lazos de amistad, pues no sólo fue compañero de curso del marido de ésta, Jorge Desormeaux, sino testigo de matrimonio de la pareja cuando ésta contrajo nupcias, en 1979[14]. c)

Contradicciones entre personeros de la propia coalición.

Existen numerosos ejemplos, al respecto. No obstante, hemos querido tomar uno de los últimos. Mientras que, por una parte, el ex vocero del Comando, Álvaro Elizalde, refiriéndose a la gratuidad de la educación, a la reforma tributaria y a la dictación de una nueva Constitución, señalaba que “Las reformas estructurales no van a ser modificadas […]”[15], el ex ministro de la Concertación, Sergio Bitar, planteaba la necesidad de realizar las transformaciones en forma gradual. “Ante tantas expectativas, aún con la potencia de Michelle Bachelet y liderazgo que ella tiene, esto puede ser explosivo de aquí a un año. Y podemos tener a todos los cabros en la calle diciendo : Bueno, ¿dónde está la solución de gratuidad?”[16] ¿Es posible, en estas condiciones, cumplir con algunas de las reivindicaciones mínimas planteadas por los movimientos sociales y, en especial, por los estudiantes? No seamos categóricos, pero permítasenos invocar el beneficio de la duda. Como expresa una vieja sentencia, muy en boga en Chile y hoy un tanto olvidada: ‘Dime con quién andas y te diré quién eres’. No nos hemos referido, aquí, al problema tributario. Y es que el cumplimiento de las reivindicaciones sociales conduce ineluctablemente a la reforma tributaria. Y a la reforma constitucional, lo que implica

revisar todas las llamadas ‘leyes orgánicas constitucionales’[17]. La clave para realizar esos cambios parece sencilla. Al menos, en palabras. CLAVES PARA REALIZAR LOS CAMBIOS SOCIALES La vía elegida por la generalidad de los candidatos para realizar los cambios sociales es su ejecución a través de los márgenes establecidos por el mismo sistema. La tarea se reduce a cumplir, pues, los requisitos contenidos en las mismas normas emanadas de la Dictadura. Con prescindencia de lo que significa aceptar dicha normatividad como ‘legítima’ y regirse por ella, el camino elegido por los candidatos requiere imperiosamente de la concurrencia de dos circunstancias: a) Contar con una amplia mayoría social que los apoye y apoye sus propuestas o, lo que es igual, dominar ampliamente en el Parlamento; y, b)

Contar con la idoneidad y respaldo de dichos candidatos para realizar las reformas propuestas.

Veamos la primera condición, aunque podemos separar en ella las proposiciones tanto de la abanderada de Nueva Mayoría como las planteadas por Marco Enríquez-Ominami, Marcel Claude y Gustavo Ruz, principalmente. La propuesta de Nueva Mayoría se orienta, fundamentalmente, a obtener tal número de parlamentarios en los comicios que pueda realizar todas las reformas prometidas. De ahí el nombre que identifica a la coalición; de ahí el slogan ‘un parlamento para Michelle’. El resultado de las elecciones primarias realizadas el día 30 de junio pasado y el enorme respaldo obtenido por la candidata Bachelet de los votantes en esos comicios alientan a quienes pretenden tales objetivos. No obstante, creemos nosotros que dicho resultado no permite extraer conclusiones tan apresuradas. En primer lugar, porque el voto que recibió la abanderada de Nueva Mayoría ese 30 de junio no puede considerarse exclusivamente suyo. Había (y hay) un cansancio con la administración de Sebastián Piñera, un cansancio que evidencian los índices de desaprobación de las encuestas, los índices de popularidad y el profundo rechazo que gran parte de la población manifiesta hacia el gobierno. Porque, como muy bien lo señala un articulista, “Las elecciones muestran la conformidad o disconformidad de la gestión gubernamental respecto de las expectativas ciudadanas. Como sabemos, lo que finalmente importa de un gobierno para los ciudadanos son sus resultados. Los resultados que la gente ilusiona, a pesar de su frustración reiterada con la política y los políticos. Lo que el gobierno pone en juego cuando da a conocer sus propuestas es su palabra. Palabra que valida con su cumplimiento y el país evalúa por sus resultados. Resultados –como afirmaba C. Matus– es la palabra que encumbra o hunde a un gobierno”[18].

No debe sorprender, por ende, que algunos analistas estimen el alto porcentaje de votos recibido por la abanderada de Nueva Mayoría no como una manifestación de apoyo a ella y a su coalición sino un voto de rechazo a Piñera y su gobierno. Un voto que le incomode. Lo cual implica suponer, también, que el voto puede tener un objetivo distinto al que corrientemente se le asigna. “[…] en las recientes elecciones lo que podemos observar es un proceso de identificación de la protesta –en relación con los resultados del gobierno– con la candidatura que representa Bachelet. El voto a Bachelet es también una respuesta de los que perciben que ese voto duele a la gestión. De allí que el Voto Bachelet tiene como destinatario al gobierno de Piñera en primer lugar y al oficialismo –Alianza por Chile– en segundo”[19].

En segundo lugar, no se trata de un voto nuevo, de ese voto de esperanza en un futuro mejor que entrega la juventud cuando participa en las elecciones, sino el voto de personas mayores, de personas en gran medida de la tercera edad, y miembros de la antigua militancia de los partidos que conforman la Concertación. Si bien es cierto que el Servicio Electoral SERVEL no sólo ha evitado entregar cifras que avalen esta afirmación sino, además, sostiene que no ha hecho un análisis de la edad de los votantes, la generalidad de las personas que concurrió a los locales de votación sí asegura haber visto un electorado compuesto de personas adultas, adultos mayores vinculados a la vieja Concertación, afirmación que también el televidente pudo constatar con sólo presenciar la información entregada por los diversos canales de Televisión, y concluir que el tipo de sufragante no correspondía al de la juventud. De lo cual puede concluirse que la gran incógnita sigue siendo, de todas maneras, el comportamiento del votante joven, de ese individuo que ha dejado la secundaria y se manifiesta como votante voluntario. En tercer lugar, puede colegirse de lo dicho que, si se trataba de personas mayores que fueron tanto a mostrar su encono contra Piñera como a apoyar a la candidata de Nueva Mayoría, no puede suponerse por esa circunstancia que las cifras obtenidas ese día aumentarán en el futuro. Con la misma seguridad de quienes sí lo afirman puede sostenerse que se trata de personas que se agotaron en esa votación y que, posiblemente, pueden volver a hacerlo de la misma manera, pero no que se multiplicarán por arte de magia. El acrecentamiento de la votación a Michelle Bachelet puede acontecer; pero nada impide que dicha cifra de votantes pueda, también, mantenerse u oscilar en una cantidad igual o levemente superior a la ya obtenida. No hay que olvidar dos hechos: a) la presencia de otros candidatos que no sólo ingresan al escenario electoral a medir sus fuerzas sino también van a recibir apoyo de la masa de votantes; y, b) quienes apoyan las listas de los partidos de la Alianza Por Chile son votantes ‘cómodos’, que no concurren con mucha asiduidad a los locales de votación, como muy bien lo expresa el editorial de un diario capitalino: “Tal vez el punto de partida sea superar el derrotismo. Hay diez millones de votantes que se abstuvieron en las elecciones del domingo: por cada votante, hay tres que se quedaron en casa. Entre éstos, parecen ser muchos más los que en elecciones anteriores se inclinaron por la Alianza —incluida la municipal de octubre pasado— que los del bloque opositor. Además, parte de los votantes del independiente Andrés Velasco, y quizá del DC Claudio Orrego, pueden no sentirse a gusto en una Nueva Mayoría que parece renegar de la obra de la Concertación”[20]. Así, pues, no es seguro que la elección esté ganada. Por el contrario, la disputa recién empieza. La segunda condición es más complicada. Dice relación con la estatura moral de los candidatos al Parlamento. A menudo, no basta tener mayoría en el Congreso para poder realizar cambios estructurales al sistema dentro del cual se vive. El comportamiento de los parlamentarios así lo evidencia. No es extraño que muchos de ellos no concurran a las votaciones en las que está en juego un proyecto de ley y permitan, de esa manera, que fracasen laudables iniciativas. A veces lo hacen por simple desidia; otras, directamente en defensa de intereses particulares. Y es que el Parlamento no es diferente a otras instituciones del Estado en donde los conflictos de interés se manifiestan a cada instante. La Concertación sufrió esta ausencia de parlamentarios en varias de sus ‘votaciones emblemáticas’[21]. La misma selección de los candidatos, al interior de cada colectividad, no se realiza con la diligencia y el esmero que cualquier podría suponer. Predominan los intereses de los diversos sectores que participan dentro de cada partido. Los hechos en que se han visto involucrados ciertos parlamentarios, si bien no invalidan el ejercicio de la democracia, ponen en entredicho la posibilidad de contar con el respaldo de todos los elegidos para proceder a las reformas trascendentales[22].

La última complicación es que la Constitución pinochetista ha sido redactada de tal manera que impide se le introduzcan reformas sin reunir un quórum calificado de parlamentarios. Pertenece a las cartas fundamentales conocidas bajo el nombre de ‘rígidas’ o ‘duras’, es decir, aquellas que exigen una mayoría tal de parlamentarios para reformarla que, prácticamente, resulta imposible hacerlo. En el caso de la Constitución pinochetista, cualquier reforma que se intente deberá reunir mayorías parlamentarias que oscilan entre los dos tercios y los tres quintos del Congreso, lo que resulta casi imposible. EL PLEBISCITO, ¿UNA POSIBILIDAD? Obtener una mayoría parlamentaria que posibilite la reforma de la Constitución es una vía para realizar reformas importantes, sin lugar a dudas. Sin embargo, no es la única posible. Existe un medio de consulta establecido en la misma Constitución pinochetista que es el llamado a plebiscito. Este mecanismo también ha sido considerado por los candidatos opositores que interpretan así las disposiciones contenidas en los arts. 32, n° 4; 82, n°4 y 117 de la carta heredada de la Dictadura. Pero realizar esta tarea supone también el respaldo de un amplio movimiento social. Para la Alianza Por Chile, estos problemas no existen. No está preocupada de cambiar la Constitución, pero sí estaría llana a hacerlo respecto del sistema electoral y otras reformas que perfeccionen el método de extraer plusvalor, lo hagan más eficaz y no desvirtúen la esencia de la forma de acumular. Porque estos personeros, aún cuando no ignoran las demandas sociales, consideran que no es posible acceder a todas ellas sin arriesgar la continuidad del modelo impuesto. Lo cual no les impide alegar su vocación de servicio al servicio de las clases postergadas. Por eso, sus promesas se limitan, más o menos, a lo mismo que prometió la Concertación hace algunas décadas: que las reformas deben ser realizadas en la medida de lo posible. Si así no sucediera, si las contradicciones se extendieran hasta poner en peligro la continuidad del sistema, los poderes encargados de velar por su integridad se verían obligados a implantar un régimen de excepción o dictadura para reordenar, nuevamente, la estructura social con sus estamentos dominantes y dominados. QUÉ PUEDE SUCEDER La candidata Matthei no ha sido ratificada aún por el Consejo Nacional de Renovación Nacional como abanderada de la Alianza Por Chile. Es posible que lo sea, como también que no lo sea. Esa circunstancia permanecerá en incógnito hasta el 10 de agosto. No existe certeza de si alguno de los candidatos a Presidente de la República reunirá la cantidad de firmas que exige la ley para presentarse como tal ni se sabe qué ocurrirá con sus votantes para el caso que no lo lograra. No se sabe si los porcentajes de abstención que hubo en las elecciones municipales de 2012 se mantendrán, aumentarán o disminuirán. No se saben muchas cosas. Incluso, si las disputas al interior de la coalición Nueva Mayoría podrían o no afectar el estado anímico de su candidata[23]. Un articulista se ha atrevido a formular, incluso, la hipotética duda acerca de lo que sucedería si la candidata de Nueva Mayoría declinara a seguir compitiendo[24]. Aún cuando lo más probable sea que triunfe la candidata del pacto Nueva Mayoría, lo cierto es que, en cuanto a las elecciones que se aproximan, nadie tiene clavada la rueda de la fortuna. Sin lugar a dudas que la situación de las clases dominadas tenderá a experimentar mejoras en tanto gobiernen organizaciones políticas que se arroguen la representación de sus intereses, especialmente, las tendencias social demócratas; pero ello sólo ocurrirá para el caso de existir buenas oportunidades para el empresariado, lo que, en buen romance, significa que dichos sectores sólo podrán mejorar su estado en la misma forma que lo han hecho a través de la historia: a través de ‘la política del chorreo’, que era la política de Pinochet. Y luego que se hayan producido fuertes demandas por mejoras salariales. De lo cual se pueden colegir otras circunstancias como, por ejemplo, que el cambio del sistema de votación, de binominal a proporcional, podría constituir, sin lugar a dudas, un adelanto; pero, en términos de reformas, poco o nada resuelve. Tampoco la gratuidad escolar, así, a secas, porque si se le sigue entregando dinero fiscal a quienes son los dueños de los colegios, lo único que habremos logrado es financiar el lucro de unos pocos a costa del dinero de todos los chilenos.

La desconfianza hacia la política y los políticos no ha experimentado variaciones. Y es que, como lo señala un antiguo refrán, “la confianza, al igual que la honra, cuando se pierde, jamás se recupera”. Por eso, algunos mantenemos nuestras dudas acerca de la participación en comicios electorales bajo las actuales condiciones. Porque, ¿es posible creer en un sistema que deja fuera a las minorías y se solaza en otorgar toda clase de franquicias a las grandes coaliciones? ¿Es posible creer en un organismo, como el SERVEL, manejado por personas de dudoso pasado en materia de derechos humanos, donde aparece, con su inscripción electoral vigente, hasta el ex presidente Salvador Allende? ¿Es posible creer en un servicio que declara válida una elección municipal donde las actas de las mesas receptoras de sufragios aparecen, al cabo de unos días, en los contenedores de basura? ¿Es posible creer en candidatos nombrados a dedo por los partidos, vinculados a grandes empresas o a negocios en donde ellos son parte o lo son amigos o familiares suyos? Sin lugar a dudas es esa desconfianza lo que motiva a muchas personas estimar a la abstención como la vía más adecuada para deslegitimar a una escena política que no representa el interés verdadero de las clases postergadas. Santiago, 31 de julio de 2013

NOTAS: [1] Véase, al respecto, de Carlos Peña, “El enfermo público”, ‘El Mercurio’, 21 de julio de 2013, pág. D-15, en donde pueden leerse frases como ésta: “El rasgo principal de la derecha es que privatiza incluso aquello que, por su naturaleza, es público. ¿Cómo explicar —si no— que la noticia del retiro de Longueira haya sido encomendada a sus hijos?” [2] A esos partidos hay que agregar un que se ha incorporado últimamente y que se autodenomina ‘Evolución Política’ o EVOPOLI. [3] Portada de la revista ‘Cambio 21’ correspondiente a la semana entre el 24 y 30 de julio de 2013. La revista ‘The Clinic’ tuvo como portada ‘Carnicería «La Alianza»’, edición del 25 de julio de 2013. [4] La situación de estos líderes estudiantiles y de sus partidos no ha sido la mejor. Rechazados por la Concertación para obtener cupos parlamentarios, hoy se han volcado a apoyar ciertas candidaturas, entre las cuales se cuenta la de Carlos Montes, un personaje socialista, ex MAPU, cuya discutible trayectoria política describimos en parte dentro de nuestra obra “In Memoriam”. [5] Esta circunstancia es tan cierta que los clásicos, en un comienzo, debieron recurrir a designar el tipo de organización social para la nueva sociedad de diferentes maneras. Al final, Engels escribió que el mejor nombre para esa estructura no debía ser ‘Estado’ ni ‘Estado proletario’ o ‘Estado de los trabajadores’ sino ‘Gemeinweissen’, es decir, ‘Comunidad’. [6] Entre otros, un mayor control de la Superintendencia de Bancos sobre las operaciones bancarias, que van desde la concesión de créditos (restricción, en algunos casos, expansión en otros), la emisión de tarjetas y el cobro de comisiones a su clientela.

[7] La fotografía de Horst Paulmann con la abanderada del conglomerado Nueva Mayoría, colocada en el hall de la Torre Cencosud, fue muy comentada y solamente se acallaron las críticas cuando se colocó, junto a la misma, la fotografía del empresario junto a Pablo Longueira, abanderado en ese entonces de la Alianza

Por Chile. La empresa encargada de colocar esos carteles señaló que si no había colocado la segunda fotografía en la misma oportunidad que lo hizo con la otra, había sido porque, en ese entonces, no existía aún alguien que representara en esa carrera a la segunda coalición. [8] Potthoff, A. y Ahumada, M.J.: “Diputados PS plantean inquietud al comando de Bachelet por falta de temas laborales en el programa”, ‘El Mercurio’, 30 de julio de 2013, pág.C-4. [9] Ortíz, Edison: “El nuevo Comando de Bachelet: del discurso de El Bosque a la tecnocracia y a los fácticos”, ’El Mostrador’, 12 de julio de 2013. [10] Peña, Carlos: “Tres preguntas a Bachelet”, ‘El Mercurio’, 23 de junio de 2013, pág. D-19. [11] En una de sus partes, dicha carta expresa: “René es representante del grupo Luksic, no de los DC. Ha trabajado para ellos en Canal 13, injustamente privatizado por la Iglesia Católica, ha trabajado y, de seguro, lo sigue haciendo para el conglomerado económico más grande de Chile. Ha sido asesor de las AFP y fue elegido por ellas director de La Polar, durante el período en que se estafó a millones de personas. Recibió sólo una multa, como los estafadores de las farmacias, sin la obligación de ir a clases de ética, eso sí”. [12] Ortíz, Edison: Id. (9). [13] Sáez Rojas, Alejandro: “El fuerte resquemor que generó el ingreso de Cortázar y De Gregorio a la Nueva Mayoría”, ‘El Mercurio’, 28 de julio de 2013, pág. B-9. [14] Redacción: “El vínculo que Matthei y Cortázar tienen desde hace más de 30 años”, ‘El Mercurio’, 28 de julio de 2013, pág. D-2. [15] Ahumada, M.J. y Muñoz, G.:”No va a haber cambios respecto de las reformas estructurales anunciadas”, ‘El Mercurio’, 27 de julio de 2013, pág. C-8. [16] Franco, Rienzi: “Bitar advierte riesgos ante expectativas de cambios generadas por Bachelet”, ‘El Mercurio’, 27 de julio de 2013, pág. C-9. [17] Estas denominaciones fueron inventadas por la Dictadura. Una ley es una reglamentación originada en un parlamento, no en un régimen dictatorial. En doctrina, las disposiciones emanadas de un régimen de facto se consideran ‘decretos-leyes’ y así son llamadas, no leyes, denominación que se reserva para la dictación de reglas generales para la comunidad dentro de un régimen democrático. [18] Moreno, Marco: “Bachelet y el voto protesta contra Piñera”, ‘El Mostrador’, 9 de julio de 2013. [19] Moreno, Marco: Id. (18). [20] Editorial: “Atraer al votante”, ‘El Mercurio’, 7 de julio de 2013. [21] Valenzuela, Esteban y Jofré, René: “La imposible mayoría parlamentaria por la nueva Constitución”, ‘El Mostrador’, 19 de julio de 2013. [22] El programa ‘Contacto’ de 23 de julio de 2013 dejó al descubierto las maniobras de algunos parlamentarios para ocultar sus vínculos con negocios y/o empresas en las que tienen intereses. Entre esos parlamentarios se citó a Ramón Barros (UDI), Ignacio Urrutia (UDI), Andrés Zaldívar (DC), Hosain Sabag (DC), Jorge Ulloa (UDI), Clemira Pacheco (PS), Alejandro García-Huidobro (UDI).

[23] Véase, de Edison Ortíz, el artículo “El comando de Michelle y los partidos: preludio de una tormenta”, ‘El Mostrador’, 30 de julio de 2013. [24] Véase de Claudio Alvarado el artículo “¿Y si se baja Michelle?”, ‘El Mostrador’, 31 de julio de 2013.

UN GRAN “CRASH” Y LUEGO... UN MUNDO DE VIDA BÁSICA por Mario Briones R. (Chile) Lunes, 05 de Agosto de 2013 E-mailImprimirPDF

“EL PAPEL MONEDA EVENTUALMENTE REGRESA A SU VALOR INTRÍNSECO”, VOLTAIRE 1729. http://www.piensachile.com/index.php?option=com_content&view=article&id=11845:2013-08-06-02-4238&catid=2:analisis&Itemid=5 Un diario digital informaba hace algunos días lo siguiente, “huelga alcanzó a unos 60 restaurantes operados por McDonald's, Wendy's, KFC y Burger King en la ciudad de Nueva York. Los empleados que participaron de la protesta piden un salario mínimo de 15 dólares por hora, más del doble de los actuales US$ 7,25 que se pagan en la mayoría de las tiendas de comida rápida.” Si consideramos US$ 7,25 la hora, en un mes estas personas ganan US$ 1.160. La media mínima nacional son US$ 7,50 y la línea de la pobreza en EE UU es de US$ 1.920 al mes (familia compuesta de 4 personas). La petición de estos trabajadores, tiene dos elementos muy interesantes que nos alertan. No estaban pidiendo un aumento de 5, 10 o 20 %, lo que piden es un 200% de aumento, y ello da cuenta de la gran pérdida de valor de las remuneraciones de los trabajadores en EE UU. El otro aspecto que sugiere este caso, es que se esté frente a una gran manipulación de las cifras de inflación y es lo que veremos, como ha ocurrido en Chile. Las personas saben que algo anda mal, miran a su alrededor y tratan de enfrentar el problema. Se levantan temprano para seguir el consejo de los que se “convirtieron” en ricos, trabajan en una, dos y hasta tres “pegas”, y al final de mes, todo sigue igual, están casi donde mismo y no saben dónde está lo malo. Permítanme hacer una sugerencia sobre dicho punto, somos víctimas del engaño sistemático de un modelo neo liberal ilusorio sostenido con papeles que no valen nada. Veamos el caso de estos trabadores de EE UU. El Gobierno estadounidense está considerando cambiar la manera en que se calcula el índice de precios, el denominado CPI (Consumer Price Index). Tras años en la peor crisis económica de las últimas décadas y con la Reserva Federal inyectando dinero en cantidades nunca vistas, los políticos de Washington están estudiando cambiar el método mediante el cual se obtiene el CPI. Hecho esto, según los cálculos, el Gobierno se ahorraría en 10 años US$ 112.000 millones de dólares en pagos por la Seguridad Social, aumentaría los impuestos en US$ 60.000 millones y reduciría en US$ 24.000 millones las pensiones y los beneficios a los veteranos militares. No es la primera vez que se cambia el método para calcular el índice, lo han hecho muchas veces, en los años 70, Richard Nixon pidió al entonces presidente de la Reserva Federal, Arthur Burns, separar el índice de precios entre el core inflation y headline inflation. El core inflation excluía los productos más problemáticos de ese momento, la comida y energía. Desde el término del enlace dólar/oro del sistema monetario, se ha ido cambiando el sistema de medir los precios sistemáticamente, siempre con el mismo objetivo: reflejar una menor subida de precios. Ahí tiene Ud. una respuesta a una parte de sus dudas. El engaño de las cifras, permiten que Ud., trabaje sin avanzar, igual que cuando se sube a esas máquinas para hacer ejercicios, donde corre hasta que se cansa, sin haber avanzado un ápice. Se cambió el método en los 70´s, los 80´s, los 90´s, lo han en hecho en cada crisis. No sólo alteran el valor del dólar para uso interno, son los mismos dólares que utilizan para invertir en Chile y en el resto del mundo, conceden créditos, compran commodities, etc., y con ello nos traspasan la inflación, como ocurre hoy con el combustible y los alimentos.

John Maynard Keynes dijo lo siguiente sobre la inflación, “Lenin tenía toda la razón, no hay manera mejor, más sutil o segura de destruir las bases de una sociedad, que corromper su moneda, mediante un proceso continuo de inflación, los gobiernos pueden confiscar en secreto y sin que nadie se dé cuenta, una parte importante de la riqueza de los ciudadanos”. No tienen para que cerrar las embajadas, no busquen más a los conspiradores en Al qae·da, el enemigo lo tienen adentro de EE UU. A la ciudadanía de aquí o de allá le ha sido muy difícil comprender en profundidad como se transmiten los efectos y porqué ocurren en el mundo crisis económicas globales, como la que irrumpió con fuerza el 2008 y 2009 develando la feroz irresponsabilidad política que ha sido, gastar más de lo que se produce. Pero esa es la mitad de la irresponsabilidad, la otra mitad es la solución adoptada, más deuda, más dinero. El último comunicado de la FED, antes de irse de vacaciones, sentencia que seguirá comprando US$ 85.000 millones mensuales, lo que implica mantener el QE3 mientras la cesantía esté por encima del 6,5% y la inflación a 1-2 años, proyectada, no supere el 2,5%. Eso se llama jugar con dinamita. ¿Cómo es posible inyectar y sostener tanto dólar en la economía, al punto que en cinco años y hasta fines de año, habrán sobrepasado los US$ 4,08 millones de millones de dólares, sin que ocurra otra gran debacle? Nuestra contribución para sostener el dólar es de US$ 41,9 mil millones de dólares como reservas del Banco Central, una modesta cifra, comparada con los US$ 3,3 millones de millones de dólares que tiene China, producto de los excedentes de sus exportaciones. De acuerdo con el Banco Mundial al 2012, son más de US$ 10 millones de millones en dólares y otros instrumentos los que están como reservas en 135 países alrededor del mundo. Usualmente, estos valores vuelven al sistema financiero global reinvertidos como depósitos bancarios, en bonos, otras inversiones, etc. El exceso de dinero ya creó una crisis enorme el 2008 y 2009 por los valores inflados de los activos basados en hipotecas de propiedades que llegaron a su tope y colapsaron las instituciones financieras globales sufriendo pérdidas inmensas y la pérdida de confianza resultante ocasionó que los mercados globales del crédito casi se detuvieran, con los inversionistas huyendo hacia la seguridad de los títulos de la renta fija. La otra gran crisis, está madurando, está en proceso de gestación y en algún momento irrumpirá. De acuerdo a los datos de la FED, la “inflación” en Estados Unidos aún permite un margen para continuar con la expansión monetaria del QE3, mientras dicha “inflación” esté en línea con un 2,5 % para una proyección de 1-2 años, etc. Lo que no calza es que a nivel de consumidor, como es el caso de los trabajadores de restaurantes de Nueva York, hay una evidente distorsión en el costo de vida que los afecta y es lo que los lleva a pedir un aumento de salarios del 200% y no porque hayan sufrido un ataque repentino de avaricia o los invadió la locura. ¿Qué explica la persistente baja de la inflación? Una parte es la manipulación de los datos. Una cantidad muy importante de dinero está atrapada en la Banca especulativa. No se ha traslado como crédito a las personas o las pequeñas empresas pero si al 1% más rico y a la banca que es el objetivo buscado, la cual a pesar de toda la ayuda recibida, ya sea en dólares, euros, yenes, etc., aún presenta signos de debilidad producto de la audacia de crear créditos descontrolados. En la última revisión realizada por las autoridades británicas al Barclays, el segundo banco más importante de Inglaterra, detectaron un “agujero” de capital de £ 12.800 millones de libras (€ 14.765 millones de euros). Están volviendo a construir un castillo de arena con el dinero emitido, creando una nueva euforia en las bolsas que en algún momento se desplomará, porque en la economía real no existe tal euforia. Los operadores de Wall Street, los CEO´s de las grandes corporaciones no aprendieron la lección y siguen dispuestos nuevamente a torcer las cifras para lograr sus enormes utilidades. Reitero, en alguna parte se está acumulando el dinero, en los bonos, en el crédito, en sobre inversión de capacidad productiva y en dólares que llegan como capital de las transnacionales para ser invertidos en países bananeros como el nuestro, donde la derecha chilena, que es dueña de todo, opera como dueño de fundo y entrega todas las facilidades para que compren terrenos, inviertan en minería y compren extensas zonas en regiones, donde ya debemos pedir permiso a los extranjeros para transitar.

En precios actuales, el PIB (Producto Interno Bruto) de EE UU, es de US$ 16,237.75 billones, la deuda bruta total del Gobierno es de US$ 17,556.01 billones, lo que representa un 108,1 %, del PIB. La Fed, en el último comunicado antes de irse de vacaciones, advierte que la persistente baja de la inflación podría perjudicar la expansión económica. Esta advertencia tiene relación con el grueso del dinero que sigue el camino de la especulación financiera y eso nos lleva al tema del oro. De acuerdo a la versión de Economy Watch, cuando el precio del oro cayó en abril, algunos analistas se apresuraron en señalar que el mercado del oro también puede estar sufriendo una manipulación por los grandes bancos y las autoridades de la CFTC (Commodity Futures Trading Commission) lo saben, pero hacen la vista gorda, no actúan a pesar de que la manipulación es evidente, porque por medio de ella, se transfiere riqueza de los "ciudadanos comunes" al mundo de las finanzas, caracterizados como los bancos de oro que concentran la riqueza en los más ricos y compran oro para prevenir pérdidas bursátiles. Existen varios componentes para la próxima crisis que se está incubando. El crecimiento del dinero, la burbuja crediticia, la ausencia de ahorro, el costo de la energía y una deuda impagable. Se trata de una deuda financiera, es decir, una obligación de devolver el dinero en un algún momento del futuro, más los intereses, como hacer un gasto hoy para pagarlo mañana. En EE UU la deuda pública es US$ 17,5 billones gastada mayormente en consumo, en Social Security US$ 16,4 billones, en Programa Medicamentos US$ 21,8 billones, en Medicare US$ 86,7 billones, total US$ 142,4 billones, cifra que representa más de 8,6 veces el PIB de Estados Unidos. Toda esta deuda, la de Europa y del resto de los países, incluido el nuestro, supone condiciones superiores en el futuro en energía para producir una renta que permita pagar los compromisos, lo que creemos será imposible. Aproximadamente en el año 1850, cuando se inicia la explotación del petróleo, la relación de extracción del petróleo, era de 100/1, es decir, para extraer 100 barriles de petróleo se gastaba 1 barril en la extracción, hoy la relación ha cambiado de 3/1 lo que implica que se gasta 1 barril de petróleo para obtener 3. En nuestro pasado, Chile extrajo petróleo en el extremo sur, producción que cubría sólo una parte del consumo nacional, también se agotó. Lo más grave en nuestro caso, es que se ha regalado el cobre. Hoy, además de producirlo con energía muy cara, recibirán el subsidio que pagaremos los chilenos a las transnacionales con la carretera eléctrica por valor de US$ 700 millones de dólares para que sigan extrayendo minerales. Le han dado varios manotazos al litio, un recurso básico para la producción de baterías y que también quieren regalar. Muchos se preguntan, ¿Qué clase de políticos existen en Chile, dispuestos a entregar una riqueza finita, que ya está dando signos de agotamiento? Sólo la deuda de EE UU, es equivalente a que los norteamericanos tengan que trabajar 8.6 años, sin consumir ni un solo dólar, para poder extinguirla. ¿Tendremos realmente en el futuro el doble de energía, o 2 billones extra de barriles de petróleo, una mayor cantidad de recursos hídricos, minerales emergiendo como milagro, al mismo tiempo que la población aumentará a 7.200 millones de habitantes el 2015, y otra parte vivirá más tiempo en vejez, mientras siguen empapelando con dólares y creando mas deuda para un bienestar ilusorio? No lo creo, con este modelo neo liberal, si no ocurre algo extraordinario, milagroso, sólo nos dará sólo un gran “Crash” y luego... un mundo de vida básica.

DOCTRINA POWELL: NO SE PERMITIRÁ NINGUNA/ POTENCIA QUE PUEDA DESAFIAR A LOS EE.UU. Por el profesor Luis Moniz Bandeira http://www.laondadigital.com/LaOnda/LaOnda/636/B3.htm El programa el Café na Política de la TV brasileña le realizó la siguiente entrevista al profesor Luis Moniz Bandeira, que La ONDA tradujo y compendió. Moniz Bandeira historiador, cientista político y columnista de La ONDA digital, publicó en el 2005 el libro “La Formación del Imperio Americano” (de la guerra contra España a la guerra contra Irak), que luego fue editado en diversos idiomas incluído el español. El historiador brasileño aborda con detalles precisos las operaciones de espionaje de la (National Security Agency?) NSA, de los EE.UU. y el programa Echelon, tal como se ha puesto de moda por estos días, con el caso Snowden.

-Este fue el gran problema denunciado por Snowden.¿Qué nos puede decir de esta situación desatada por el ex agente de la CIA, que está en Moscú? -A mi no me sorprendió, porque yo hablo de ese esquema en mi libro “Formación del Imperio Americano”. Inclusive de ese dispositivo de llamadas heptatlon, que fue establecido - inicialmente - entre los EE.UU. y Gran Bretaña ya en 1947 y luego extendido a Australia, Nueva Zelandia y Canadá, los países de lengua inglesa. Y tienen una gran estación - tal vez la más grande de todas - que está en Londres. Yo hablo de todo esto que está siendo revelado ahora en ese libro. Porque en cada embajada hay un dispositivo para ese control electrónico de los mensajes - no sólo electrónicos - sino como, actualmente, Internet. En todas las embajadas de los EE.UU., en todas las bases, están instaladas estas estaciones, con una gran central en Londres. Y este espionaje no se extendió sólo con el desarrollo de la tecnología y con este tipo de correspondencia y agentes sociales. Los agentes sociales son un tipo de instrumento de espionaje. No fue ahora con Obama ni con Bush. Ya Clinton usaba esto para espionaje comercial. -En su libro - “Formación del Imperio Americano” - usted menciona el caso de aquel espionaje en Japón de los autos japoneses, para beneficiar a las empresas americanas. Esto coincide mucho con la caída de las empresas japonesas con relación al mercado de automóviles. Ellos pasaron a ser un mercado secundario, cuando estaban en auge, cuando eran el primer mercado mundial. Todo el mundo sólo quería saber de autos japoneses. Lo mismo sucedió también con las computadoras. ¿Usted atribuye esto también a este espionaje, al efecto de este espionaje? -Es posible que sí. El espionaje no se da sólo ante el terrorismo y éste - a veces - es una justificación. Hay de todo y en todos los sentidos: económico, comercial. Todo está involucrado y mantiene contactos entre sí. Todas estas empresas electrónicas, por ejemplo Google, si para un auto frente a sus casas, captan códigos personales. Tanto es así que Alemania lo prohibió. -Dicen que ellos captan las contraseñas. -Las contraseñas personales y mucho más. - Quiere decir que hoy ya no tenemos condiciones de privacidad. - No, no tenemos. Todo Londres está infectado de dispositivos. También aquí en Alemania ya se comienzan a tener las calles fotografiadas, Inglaterra hoy es un estado - virtualmente - totalitario. -¿Por qué para usted hay una exacerbación del espionaje ¿Cuál es la razón de esto? -Son diversos factores. Los pueblos - a veces - están neurotizados. El 11 de septiembre fue orquestado, no sucedió sin que ellos no lo supieran. Pero viene de antes. Los EE.UU. ya habían visto el despertar islámico - de cierta forma - seguramente en Medio Oriente, con la revolución de Irán. Los EE.UU. con Israel atrás. El problema de Israel es que es la gran fuente de todas las crisis. Porque desde el 68 - con Johnson, desde aquella época - los EE.UU. pasaron a confundir su seguridad nacional con la de Israel y la de Israel, con su seguridad nacional. Y eso está dominado por la prensa y por el sistema financiero. Y si alguien lo ataca, se lo tilda de antisionismo o antisemitismo. Y no lo es. No se puede confundir semitismo con nacionalismo sionista. Existe un nacionalismo sionista, a pesar de que Israel no sea - aparentemente - una sociedad democrática. Pero hay rabinos y a pesar de ser una sociedad democrática, existen no sé cuántas sectas fundamentalistas. Hay ómnibus en donde - cuando los fundamentalistas suben - las mujeres no pueden sentarse al frente y tienen que sentarse atrás. -Nos gustaría que hiciese un análisis de lo que está sucediendo y de la relación que estos acontecimientos internacionales tienen con Brasil. Las manifestaciones callejeras, que aún son objeto tratamiento nacionales e internacionales. - Estas manifestaciones en Brasil me resultan muy extrañas. Los motivos son viejos, antiguos. Hay motivos suficientes para protestar. Sin embargo, tal como se dieron, se me hace como que alguien encontró basura y la prendió fuego, a través de las redes sociales. Y luego hubo infiltraciones y - ahí - se pierde el control. Puede haber alguna que se presente espontáneamente. Pero - incluso - por causa de la prensa.

La prensa viene sistemáticamente alimentando esto. Nunca vi una prensa… Yo leo todos los diarios posibles, de aquí, de Alemania. Nunca vi una prensa que sólo hable de corrupción, como la de Brasil. No es que no exista. Existe. Y mucha corrupción. Sin embargo, no es del gobierno federal. Y es muy raro que una presidenta que estaba con el 57% de popularidad, caiga por causa de las manifestaciones. -Estas manifestaciones no pedían la cabeza de Dilma. No había un cartel, que dijera: “fuera Dilma o fuera Lula”… - No, no. Pero las manifestaciones no pedían la cabeza, no eran contra ella. Pero lo que yo digo es que afectan su presidencia y afectan más al país, también. -Ahora, ¿qué existe por detrás de esta campaña contra la presidenta incitando a estas manifestaciones? -Brasil es un país emergente y ha estado emergiendo - realmente - como fuerza internacional, como una potencia de nivel más que regional y eso le interesa a quien domina. Y más aún por su alianza con China, con Rusia, con India. Con los llamados Bric’s. La doctrina fue establecida por Collin Powell, que no permitía el resurgimiento de Rusia como potencia, ni de ninguna otra potencia que pudiese desafiar a los EE.UU. Por eso no le interesa a los EE.UU. que Brasil, Rusia y China se fortalezcan. -¿Usted cree que China se va a convertir - realmente - en una potencia? -Claro. En dos años, China va a ser la primera potencia económica mundial. ¿Qué es ser una potencia? Basta con un cohete atómico, un misil atómico, tener armas nucleares, para poder tener poder de disuasión. El mayor error que Brasil supo tener, fue cometido por el gobierno de Fernando Henrique, al firmar el Tratado de No Proliferación. No porque Brasil fuera a fabricar armas, no. Quiero que quede bien claro. Pero Brasil no podía renunciar al derecho a esas armas. -Pero a él lo obligaron. -No fue obligado. Y si fue obligado, lo fue durante muchos gobiernos y no lo hizo. Collor de Mello tapó los agujeros y Fernando Henrique… Mire, Israel hasta hoy no lo firmó, la India no lo firmó, Pakistán no lo firmó. Brasil sí. Esa era la condición para entrar en el Consejo de Seguridad. En materia de política internacional, el derecho sólo es respetado cuando el otro tiene poder de disuasión. ¿Por qué hasta ahora no hicieron nada contra Irán o contra Corea? -El caso de Irán causa cierta perplejidad, porque vino del Sha de Irán, cuando tenía el 5° mayor ejército, todos ellos con equipamiento suministrado por los EE.UU. Y de repente todo cambia y se transforma en una potencia - inclusive - casi nuclear. -Sí. Es muy difícil atacar a Irán. Su topografía es muy compleja, similar a la de Afganistán. Esto está todo en mi libro que va a salir en septiembre. Es difícil ubicar las estaciones que procesan uranio, las usinas. Están dentro de cavernas y los satélites no las ven. - Pero están un poco aislados. Ahora, con el resurgimiento de Siria, es posible que se refortalezcan, ¿no? - No. Ellos ya tenían esta alianza con Siria. Una de las razones de la guerra en Siria es porque pueden debilitar a Irán. -Bien. Pero si Irán pertenece a Siria, por lógica, se debilitaría, ¿no es así? -Ah, ahí quedaría debilitado - En caso de Brasil. ¿cree usted con relación a estas manifestaciones que pueden deteriorar - realmente - el apoyo a la presidenta Dilma y a Lula? ¿Tendrán la posibilidad de entorpecer la reelección de uno u otro? - Hay mucha agua que va a correr bajo el puente hasta 2014,tanto internacionalmente, como en Brasil. Por otro lado, la oposición no tiene un candidato viable. Están queriendo forjar a Marina Silva como candidata, pero es muy débil. Tampoco sé cuáles son los intereses extranjeros que están por detrás de Marina. Todo puede suceder. Ahora, por más que caiga la popularidad de Dilma, cae - como dijo la propia Dilma a la “Folha de San Pablo” -, cae y para. Yo vi al propio Lula caer y subir. Tengo una larga experiencia en esto.

Lo vi en el 54 en Río de Janeiro. Aquella turba en la calle impulsada por Lacerda, quemando camionetas del PDB y todo eso. Diez días después, los que fueron atacados eran la TV Globo, A Tribuna da Imprensa, la EXON, las empresas americanas, la embajada americana. ¡Cambió todo! En varias ciudades del país la multitud es muy maleable. Depende mucho de la hora, de las circunstancias. Y no es de ahora, en estas manifestaciones. Lo fue siempre. Por eso le digo que me parecen muy extrañas. De repente todo el mundo sale a la calle y comienza a gritar contra el gobierno. Y no había un factor determinante. ¡Dilma no hizo nada malo! Los problemas ya son viejos, antiguos. Vienen de antes del gobierno de Fernando Henrique y se fueron acumulando. Se acumularon aún más con Collor, con Fernando Henrique y están ahí. Porque Lula tuvo que combatir primero - la inflación, que Fernando Henrique la había descuidado en su segundo mandato. Fernando Henrique hizo el Plan Real que fue favorable. Pero cuando llegó a su segundo mandato él no administró más el país, se dedicó a hacer política. Y el resultado fue que Lula agarró el país con un dólar que llegaba casi a los 4 Reales. - Lula en su momento tuvo de devaluar el Real. Antes el Real valía más que un dólar, ¿se acuerda? -Exactamente. Y Lula tuvo que adoptar una política enérgica, ortodoxa y tenía que hacerlo para asegurar las puntas. No podía combatir la inflación, asegurar las cosas y - al mismo tiempo - hacer inversión en infraestructura. No podía. Dilma heredó una situación diferente pero - al mismo tiempo - asumió en un momento de una crisis internacional que comenzó en 2007 y que se extiende hasta el día de hoy. Diariamente hay conflictos en Grecia. El desempleo hoy - en Grecia llega al 27%. El PBI griego ya cayó por sexta vez en lo que va del año y hace 6 años que viene cayendo. En España y Portugal, sucede más o menos lo mismo. Y en los demás países también. Alemania es la única que aguanta la situación. Porque Francia e Inglaterra también están en crisis. Y el programa de austeridad sólo está perjudicando a los pueblos. No funciona. Pero ellos gastaron de más y la especulación sirve para aguantar a los bancos. Préstamos interbancarios, donde un banco le prestaba a España y luego tomaba dinero de otro banco en otro país. Ya los bancos alemanes le prestaron a los griegos y - al mismo tiempo - tomaban préstamos interbancarios. Quiero agregar algo: creo que se debe hacer un reajuste de todas las Ong’s de Brasil, para saber de dónde proviene el capital. Hacer un reajuste en el Ministerio de Justicia y saber de dónde sacan el dinero. -¿Por qué, profesor? -Por un tema político. Ya sean de medioambiente o de lo que sea. De todas ellas. -¿Quiere decir que están infiltradas en todos los movimientos sociales? -Están infiltradas. Esto es hacer lo que hizo Puttin en Rusia y lo que los EE.UU. hicieron allá - Roosevelt lo hizo - antes de la guerra, en los años 40. -¿Qué es lo que hicieron allá? - Registrar todo lo que es Ong. No se puede confundir una Organización No Gubernamental con otras entidades que son privadas. Una Ong que aparece defendiendo los DD.HH. ¡Eso es una ficción! ¿Los EE.UU. respetan los DD.HH., cuando todavía mantienen esas prisiones en Afganistán, en Irak y en otros lados? ¿Medioambiente? Ellos hacen política del medioambiente, también. Lobbies… Todo esto está en mi libro que va a ser lanzado en septiembre, en la 2ª edición alemana de la Feria de Frankfurt y también en Brasil. Cómo hay Ong’s que hacen política con la situación de Alemania, justamente para favorecer a sectores industriales de aquí.

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KINTTO LUCAS/ CRISIS E INTEGRACIÓN ESTRATÉGICA: HACIA UN MUNDO DE BLOQUES

http://www.surysur.net/2013/08/crisis-e-integracion-estrategica-hacia-un-mundo-de-bloques/ unasur presidentes El mundo vive una crisis global que se manifiesta a nivel político y económico, pero se evidencia también en el ámbito multilateral regional y global. El mundo vive una crisis global que se manifiesta a nivel político y económico, pero se evidencia también en el ámbito multilateral regional y global. Hay una crisis económica visibilizada en Europa, sobre todo, y Estados Unidos. Hay una crisis de la gobernanza mundial evidenciada en el papel cada vez menos trascendente con pérdida de credibilidad de la ONU (Organización de Naciones Unidas), y en la sobredimensión de un Consejo de Seguridad que sigue representando un momento histórico ya pasado y superado. UNO Hay una crisis del multilateralismo tradicional, manifestado en la ONU, pero también en el sistema interamericano con una OEA (Organización de Estados Americanos) cuestionada. Hay una crisis de las multilaterales de crédito cada vez menos creíbles en el Norte y en el Sur, más allá de algunos grupos interesados. Hay una crisis del comercio mundial evidenciado en los traspiés de la OMC (Organización Mundial de Comercio), que finalmente recurre a un suramericano para intentar salir de su pozo, en la especulación con los alimentos, y en la promoción de un consumo parásito para que el sistema financiero sobreviva otorgando créditos no productivos. Y dentro de esa crisis mundial podemos también colocar el fortalecido crimen organizado global y en red, cada vez más vinculado a instancias de poder político y económico en todo el mundo. Pero la crisis no toca al Imperio. Al decir de Toni Negri, hoy el imperio asume formas y connotaciones distintas al imperio tradicional. Se trata de una especie de coalición mundial integrada por países, grandes corporaciones, sistema financiero global, ciertas multilaterales, entidades de arbitraje internacional, y otras tantas instancias entrelazadas entre sí y al servicio de un poder global, unipolar, que se resume en lo que para Negri es el Imperio. La crisis no toca al Imperio en esta nueva definición, son los procesos integradores que hacen emerger un mundo diverso contrapuesto al pensamiento único del mundo homogeneizado política, económica, comercial y culturalmente. Son los procesos integradores de nuevo tipo los que se oponen al Imperio. Son, también, esos procesos integradores los que hacen surgir una nueva propuesta multilateral. Ante la crisis del multilateralismo tradicional surge un nuevo multilateralismo que se fortalece en nuevas expresiones como los BRIC (Brasil, Rusia, India y China), y en procesos integradores como los que se dan en América Latina, Eurasia, Asía y África. Procesos estratégicos hacia un mundo de bloques, multipolar. La UNASUR (Unión de Naciones Suramericanas) es uno de los mejores ejemplos de proceso integrador estratégico de nuevo tipo. DOS En 2010 cuando Ecuador asumió la PPT (Presidencia Pro Témpore) de la UNASUR, se trazaron varios objetivos y una agenda para desarrollar y proyectar la Unión hasta ese momento todavía incipiente. Era muy importante lograr la ratificación del convenio por los países necesarios, porque hasta ese momento habían ratificado solo tres naciones y, si se demoraba, podía ponerse en cuestión la validez jurídica de la Unión.

También era necesario proyectar la Secretaría General organizando el funcionamiento de la sede en Quito y nombrando al Secretario General. Un tercer punto fundamental era armar una agenda de actividades para proyectar y desarrollar los Consejos y la Unión en general. Estos tres puntos llevaban a consolidar la institucionalidad e iniciar un posicionamiento regional y mundial de UNASUR. Muchos viajes, reuniones y más reuniones, llevamos adelante el canciller de Ecuador Ricardo Patiño y yo como Vicecanciller, para lograr el compromiso que habíamos asumido con el presidente Correa, quien mantuvo un apoyo permanente. Finalmente con el aporte de las instancias necesarias en la Cancillería unasur correaecuatoriana, luego que una reestructura le diera más dinamismo para moverse a nuestro ritmo, y de los ministerios involucrados en los consejos sectoriales, logramos los objetivos planteados para el año de gestión. Mientras, también se llevaban adelante decenas de otros temas estratégicos y coyunturales desde la Cancillería. Algún día se escribirá sobre ese trabajo y en especial sobre las tareas relacionadas con la integración. Pero recordar en forma resumida la gestión por UNASUR, es recordar que las acciones concretas en la práctica fueron producto de una política integradora mandatada por la Constitución aprobada en 2008, pero teorizada antes en el programa de gobierno, y consolidada después en nuestros análisis durante la gestión. Teoría y práctica se complementaban y retroalimentaban. Finalmente UNASUR tuvo la proyección y el avance que se buscaba en ese periodo, que coincidió también con el nombramiento de Néstor Kirchner como Secretario General. Néstor puso las bases políticas de la Secretaría. Luego Ema Mejía y Alí Rodríguez fortalecieron el proceso institucional. Rodríguez, además, aportó una base teórico-práctica a UNASUR con su propuesta sobre los recursos naturales como eje integrador. Ahora estamos en otro momento histórico y la coyuntura exige consolidación institucional definitiva y proyección de la Unión hacia un mundo de bloques. TRES A fines de agosto Perú entrega la PPT de la Unión de Naciones Suramericanas a Surinam. Cada traspaso de la PPT es un hecho sumamente importante porque va integrando a todos los países de forma directa en la construcción de la Unión en la práctica. Surinam se ha involucrado previamente en las instancias de UNASUR para hacer una buena gestión, y participar activamente en esa construcción. En esos días, posiblemente se elija también el nueva o nuevo Secretario General, que estará en la conducción de la Secretaría durante dos años, tendrá la tarea de consolidar esa instancia, aportar el afianzamiento del bloque y proyectar su presencia regional y mundial. UNASUR es la propuesta más importante de integración que involucra a toda América del Sur. Surgió como una propuesta de integración desde lo político, llevando adelante acciones trascendentes para solucionar conflictos, consolidar una mirada de defensa de la democracia en común, fortalecer políticas de defensa y sociales integradoras, e inclusive posicionándose como un bloque a tener en cuenta a nivel mundial en el desarrollo de un mundo multipolar.

Un bloque que, más allá de las diferencias políticas o de políticas económicas entre los países que lo integran, ha logrado levantarse como espacio de acuerdos y entendimientos desde la diversidad y ha generado un proceso integrador diferente. UNASUR ha demostrado que, dentro de las diferencias, se puede llegar a ciertos acuerdos que parten de un punto central: para competir, para ser escuchados en un mundo que va a ser de bloques, tenemos que participar como un todo más compacto y poderoso desde toda América del Sur. unasur reunion de ministros defensaPor ejemplo, el acuerdo de transparentar gastos militares y parar la instalación de bases militares estadounidenses, acordados en el Consejo de Defensa, son temas que se han resuelto, con discrepancias mediante pero llegando a ciertos consensos. Ahora es necesario afianzar la Unión como bloque de poder e interlocución mundial. Dentro de ese proceso es fundamental afirmar la institucionalidad de sus diferentes instancias, y particularmente la Secretaría General. Tal vez haya que transformar el Consejo de Delegados en un organismo de representación permanente mucho más vinculado a la Secretaría General ya establecido en la sede de Quito, para que se complemente mejor con ésta. Además es fundamental fortalecer y consolidar los Consejos con planes de gestión y mirada estratégica. Es necesario, también, afirmar la gestión de UNASUR desde la Secretaría, para reforzar las acciones del bloque a nivel regional y mundial. Para eso, se deben elaborar objetivos de corto, mediano y largo plazo, con una agenda que permita llegar a esos objetivos produciendo un salto cualitativo en la gestión y un mayor posicionamiento de la Unión, generando además alianzas económicas, comerciales, políticas, sociales y culturales. En el segundo semestre de 2014, Uruguay asumirá las PPT de manos de Surinam, buena oportunidad para ser un puente de Unidad en la diversidad. * Escritor, periodista. Ex Vicecanciller de Ecuador. Actualmente Embajador Itinerante de Uruguay para UNASUR, CELAC y ALBA.

ANALIZANDO AL SUJETO EN SOCIEDAD http://www.pagina12.com.ar/diario/ciencia/19-226158-2013-08-07.html Este sábado, en la Biblioteca Nacional, habrá una mesa redonda sobre filosofía, política y psicoanálisis, organizada por la Unsam. Aquí, un diálogo con una de sus organizadoras. Por Leonardo Moledo –¿En qué temas trabaja? –Mi tema son los dilemas contemporáneos del sujeto y los lazos sociales. Me interesan las cuestiones de los sujetos, de lo social, lo cultural y lo político. Al psicoanálisis lo considero una herramienta poderosa para poder pensar el mundo actual, investigarlo y operar sobre él. Mi formación freudiana-lacaniana me permitió investigar en la clínica con el padecimiento subjetivo, pero también entender el mundo de los lazos sociales y las subjetividades desde un punto de vista social. Creo que los cambios de esta época nos interpelan. Y el psicoanálisis siempre fue una disciplina referencial que investigó otros campos disciplinares para avanzar, para dialogar y para discutir también.

–A propósito de estos cruces, en unos días están organizando un encuentro... –Así es, presido la Fundación Hábitat y Salud Urbana; desde allí nuestro objetivo es tender puentes entre teorizaciones, investigaciones y el conjunto de la población. Y el sábado 10 de agosto a las 12, en la sala Ortiz de la Biblioteca Nacional, habrá una mesa redonda sobre la actualidad con relaciones entre filosofía, política y psicoanálisis, organizada por la Universidad Nacional de San Martín y la fundación. Participarán Jorge Alemán, Enrique Corti, Germán Cano, Horacio González, Silvia Bermúdez, Osvaldo Delgado y yo. Toda la información está disponible en www.habitatysaludurbana.org.ar –Cuénteme cómo lleva adelante sus trabajos. –Mi primer estado de interrogación parte de la experiencia, cuando uno escucha los padecimientos subjetivos, los consultorios para mí tienen paredes porosas... –Yo preferiría salir de los consultorios... –Quiero decir, mi camino de la investigación va de la experiencia a la investigación. Mi experiencia como analista en cuanto a los debates del país, la práctica hospitalaria y la enseñanza universitaria permite luego investigar y teorizar. Siempre fue una investigación que tiene la forma de una aventura, sabemos por dónde empezamos, qué interrogantes iniciales nos suscita la experiencia, pero nunca sabemos dónde terminamos. –Empecemos por su objeto de estudio. –Estudiamos cómo fue el cambio de subjetividades en la época, qué ha pasado con el sujeto que nosotros entendíamos como el sujeto moderno y cómo es el sujeto actual hoy. Vemos síntomas y su manera de participación social. Las características del sujeto actual son que es un sujeto del consumo, de la acción, de pocas palabras y que ha transformado también el tiempo, para él el tiempo es un instante. Es un tipo de subjetividad para la cual han cambiado los padecimientos y la posibilidad de tratarlos, pero también cambiaron los vínculos sociales. Para nosotros es de suma importancia ver esa transformación porque esto permite comprender algunas de las situaciones socio-culturales y políticas. –¿Por ejemplo? –Cuando en instancias públicas se pensó en la ley de abuso y violencia, participé del debate en el Congreso nacional, y en esos debates estaba el problema de pensar el sujeto como un organismo natural, donde las repeticiones de las mismas cosas van a ser frecuentes. O sea que en la medida en que algo le ocurrió una vez se va a repetir infinitamente: si la madre fue violada, la hija lo va a ser. En aquel momento participé para hacer intervenir la noción de trauma. El trauma no tiene por qué repetirse, es algo que le ocurre a una persona en un momento determinado. –Pero ¿quién supone esa repetición, quién supone que si la madre fue violada la hija va a ser violada? –Existe toda una corriente que se encuentra, por ejemplo, en la Justicia. Para los estudios de los comportamientos es esperable que esto ocurra, por encima de las elecciones y decisiones subjetivas. Esto está en todas las mediciones que se hacen habitualmente. La noción de trauma como hecho único e irrepetible de una persona no aparece considerada ni por las mediciones ni por los estándares de test. –Nunca había oído hablar de esa historia de la repetición. –Se llaman cadenas identificatorias, comportamentales. –¿Esto quiere decir que piensan que los chicos se identifican con los padres y repiten sus formas?

–Exactamente. –Bueno pero de alguna forma sí las repiten. –No, porque cuando hay inconsciente nada puede ser idéntico. Cada sujeto es irrepetible. No está la prueba de que a partir de un hecho o por la familia de donde viene, o los padres que tuvo, se pueda determinar exactamente la existencia. –No se puede ser determinista, pero es razonable pensar que alguien que viene, por ejemplo, de un hogar alcohólico tienda al alcoholismo... –Lo que pasa es que éste es el problema que tenemos con la ciencia y el sentido común. La ciencia necesita objetividad y métodos de repetición para poder estandarizar, homogeneizar y hacer universales y se olvidan de la subjetividad y el ser humano como único e irrepetible. –¿El psicoanálisis no es una ciencia? –Es una ciencia conjetural que está en el campo de las logociencias, pero está vista como de segunda categoría por la ciencia. Yo, en cambio, creo que es de primera categoría para las personas y los conjuntos sociales. Para pensar el mundo actual, el psicoanálisis ha tomado referencias de otras disciplinas, desde la lógica hasta el arte. Además, si usted lo lee por ejemplo a Laclau, verá que para pensar la actualidad utiliza conceptos del psicoanálisis. Es que a partir del horror de la Segunda Guerra Mundial la idea freudiana de “todos los seres humanos tenemos un mal no erradicable” se vuelve ineludible. Aquella fue la respuesta que le dio Freud a Einstein, le dijo “lamentablemente la naturaleza humana tiene un mal no erradicable”, también lo llamaron “la parte maldita”. –¿Qué quiere decir con eso? –Quiero decir que, entonces, pensar el mundo de armonía, homeostasis o cadenas identificatorias es verdaderamente una ingenuidad ante los acontecimientos que nos atropellan. –Pero muy poca gente piensa un mundo de la armonía como usted dice. –No crea, escuche, por ejemplo, el discurso de Macri, “vamos a hablar”, “vamos a dialogar”, “vamos a consensuar entre todos”. –Bueno pero después no lo hace... –Claro, como se dará cuenta es imposible. Lo imposible organiza la vida humana. Es imposible que nos pongamos de acuerdo, porque el desacuerdo es la vida. El psicoanálisis siempre trae malas noticias, como dice Jorge Alemán. –Decir que existe una parte maldita no erradicable no es una buena noticia. –Cierto. Somos los únicos seres que podemos ir contra nosotros mismos. Es una parte que no se puede quitar, hace a la naturaleza humana. En el fondo no somos educables, no podemos ser adaptables y, como decía Aristóteles, la nuestra es una materialidad que excede la forma. –¿También ha estado estudiando acerca de política y epistemología? –Tomo la epistemología como parte de la filosofía, relacionada con el logos y con cómo razonamos. En este momento mi hipótesis es acerca de la no ingenuidad de las palabras. Digo, el orden de racionalidad construye políticas y las políticas son solidarias de ciertas racionalidades. Vea cómo la política neoliberal

produjo cambios en palabras ingenuas, pertenecientes al campo de la salud, y el “paciente” pasó a ser “usuario”, y el “profesional” pasó a ser “prestador”. Esto nos cambió absolutamente el panorama de las cosas y el lugar que ocupamos hoy en la sociedad y cómo las prácticas y las políticas públicas, que eran para el bienestar social, mutaron y hoy son políticas de mercado. –¿Pero el hospital público tiene un modo de gestión empresarial? –El hospital público lamentablemente padece también de las políticas neoliberales, porque el hospital no es independiente de las políticas nacionales y las políticas nacionales no son independientes de las políticas internacionales. La salud hoy tiene una política mundial. Claro que desde la política ahora, aquí, se está luchando, estamos en un momento paradigmático, toda Latinoamérica está luchando por la accesibilidad a los derechos a la salud, al bienestar de las personas, para todos y no sólo para algunos. Es una batalla que no está ganada todavía. Y en este punto el psicoanálisis tiene un rol muy importante.

“SUBJETIVIDAD RADICAL” PARA MAQUILLAR LA DICTADURA DEL CAPITAL E INTENTAR AMPLIAR SUS FORMAS MISERABLES DE “DEMOCRACIA” “DEMOCRACIA PLURAL RADICAL”, LA IMPOSTURA POSTMARXISTA Claudia Cinatti * http://www.ft.org.ar/estrategia/ei20/ei20impostura.htm La contrarrevolución estalinista, las derrotas de procesos revolucionarios y el retroceso subjetivo de la clase obrera en las últimas décadas frente a la ofensiva imperialista ha transformado a algunos “intelectuales críticos”, como Ernesto Laclau, en ideólogos de la resignación, descartando a priori la posibilidad de que la clase obrera en sus futuros combates retome esta experiencia histórica.

En el libro de reciente publicación en español Contingencia, hegemonía, universalidad. Diálogos contemporáneos en la izquierda (2003), Judith Butler, Ernesto Laclau y Slavoj Zizek, proponen un intercambio de ideas teórico-políticas que pretende dilucidar las coordenadas de una nueva “subjetividad radical” emergente de las articulaciones políticas en el campo de los movimientos sociales y sus luchas reivindicativas de los últimos años. A pesar de las diferencias notables en los enfoques teóricos y de las discusiones políticas más encendidas entre Laclau y Zizek, el punto de partida y de llegada del debate no ofrece otro horizonte más que la búsqueda de “formas radicales de la democracia que tratan de comprender los procesos de representación a través de los cuales procede la articulación política, el problema de la identificación -y sus fracasos necesarios- a través del cual tiene lugar la movilización política, la cuestión del futuro tal como surge para los marcos teóricos que insisten en la fuerza productiva de lo negativo”. (1) En esta perspectiva de “radicalización” de la democracia, las bases económicas de la propia “democracia liberal” no son puestas en cuestión y por lo tanto debemos suponer que son tomadas como un dato dado, un “fantasma imposible de atravesar”. De los tres autores, Ernesto Laclau es quien expresa con más crudeza la “naturalización” de las “relaciones de mercado” y del “poder”, aunque por la vía de lo que parecería ser su opuesto, la “contingencia” y la “historicidad radical” de las formas de organización social. En su concepción política, lo verdaderamente “radical” es asumir la propia imposibilidad de la revolución social, presentando las condiciones actuales de miseria material y subjetiva como la condición de posibilidad misma de la política de las “diferencias” y, por lo tanto, de la participación “pasional” en los campos de batalla por la hegemonía dentro de los marcos de la democracia liberal-representativa. En sus intervenciones, Slavoj Zizek reprocha a Butler y Laclau toda falta de referencia al modo de producción capitalista, o mejor dicho, al capitalismo “global” como telón de fondo de producción de las subjetividades fragmentarias sobre las que se basaría la posibilidad de una política “democrática plural o agonística”. Como en otras oportunidades, Zizek intenta incorporar a sus elaboraciones esta dimensión económica que la llamada “política de identidad” no haría más que encubrir, y en ese sentido, su esfuerzo teórico tiende a

señalar que en la “realidad posmoderna” continúa predominando la “lucha de clases” frente a la proliferación de múltiples identidades. Al igual que su reivindicación de la “lucha de clases”, su elaboración acerca de las perspectivas de la emergencia de una subjetividad radical (revolucionaria) se basa en una combinación ecléctica de categorías marxistas, leídas a través del prisma de la teoría psicoanalítica lacaniana. (2) Su desacuerdo político más fuerte es sin dudas con Ernesto Laclau, de quien dice al final de libro que se acerca demasiado a “radicalizar simplemente este imaginario democrático liberal, permaneciendo dentro de su horizonte”. Sin embargo, su crítica es impotente. Sus presupuestos teóricos eclécticos y la evidente falta de una alternativa estratégica -expresada en su apelación abstracta a no retroceder frente al “momento de terror” que implicaría toda revolución real-, hace imposible para Zizek articular una respuesta al problema central que plantea Laclau como conclusión de su debate: que la alternativa planteada es entre la democracia liberal o el totalitarismo, ya sea fascista o estalinista. El debate que se desarrolla en Contingencia... abarca un amplio espectro teórico-político que no nos es posible abordar en estas líneas. En otro artículo de esta revista, nos referimos a las posiciones de Judith Butler. Aquí, nos vamos a centrar en algunos aspectos de la elaboración de Ernesto Laclau referidas a su concepción de lo social y la “deconstrucción” del concepto marxista de “clase”. Por último nos referiremos a la discusión clave esbozada hacia el final del libro sobre estrategia política. Para la mejor comprensión del lector no familiarizado con la obra de E. Laclau, comenzaremos con una breve introducción de algunos elementos del contexto histórico en el que surge el proyecto de la “democracia radical” y las influencias intelectuales que lo nutren. La “democracia plural radical” El itinerario político-intelectual de Laclau hacia la glorificación de la “democracia” (liberal) comenzó a sistematizarse hace varios años, y dio un salto en su formulación con la edición en 1985 de Hegemonía y estrategia socialista. Hacia una política democrática radical, escrito en colaboración con Chantal Mouffe. Este libro se inscribe en el contexto del auge de la ofensiva neoliberal y su impacto ideológico expresado en el ascenso de las teorías postmodernas que se habían gestado durante la década anterior en Francia, tras el desvío del proceso revolucionario de mayo de 1968, y que en los ’80 habían invadido las academias del mundo anglosajón. (3) En Hegemonía… Laclau y Mouffe plantean que los cambios económicos, políticos y sociales sobrevenidos con el giro a la derecha reaganiano-thatcherista, notablemente la creciente fragmentación y retroceso de la clase obrera frente a la ofensiva capitalista, ponían al “pensamiento de izquierda ante una encrucijada. Las ‘verdades evidentes’ del pasado han sido seriamente cuestionadas por una avalancha de mutaciones históricas que han sacudido las bases sobre las cuales se construyeron esas verdades”. (4) Más precisamente, la teoría y la estrategia marxista, según los autores, estaba en una crisis profunda, producto de que su “esencialismo clasista” no le permitía comprender y adaptarse a la proliferación de las luchas “particulares”, asociadas con los nuevos “movimientos sociales” -feministas, ecologistas, gays, minorías étnicas- que emergían como los nuevos sujetos antagonistas. De la combinación de los postulados teóricos postmodernos con la redefinición de lo social como formación discursiva, donde a la “exorbitancia del lenguaje” le corresponde una “exorbitancia de lo político” sin ningún fundamento objetivo en las bases económicas de la organización social capitalista, surge la formulación del proyecto de la “democracia plural radical”, que basándose en la evaluación histórica de los “valores” de la teoría liberal –“igualdad” y “libertad”- termina constituyendo como único horizonte estratégico la “profundización y expansión” de la democracia. El llamado “postmarxismo” de Laclau es la forma teórica de esta resignación confesa, reafirmada con la caída de los regímenes estalinistas de Europa del este y de la Unión Soviética, con lo que se habría mostrado la “superioridad” de la “democracia liberal” por sobre el totalitarismo estalinista. En su libro Nuevas reflexiones sobre la revolución de nuestro tiempo, publicado en 1990, plantea que “El ciclo de acontecimientos que se abriera con la Revolución Rusa se ha cerrado definitivamente, tanto como fuerza de irradiación en el imaginario colectivo de la izquierda internacional, como en términos de su capacidad de hegemonizar las fuerzas sociales y políticas de aquellas sociedades en las que el leninismo, en cualquiera de sus formas, constituyera una doctrina de Estado. El cuerpo mortal del leninismo, despojado de sus oropeles del poder, nos muestra su realidad deplorable y patética”. (5) Frente al triunfalismo capitalista de la época y al fracaso del estalinismo, Laclau se propone “salvar al proyecto marxista de la obsolescencia”, al precio de negar sus fundamentos y la posibilidad de una

subversión de la sociedad de clases. Es decir, un abandono del marxismo a favor de una reelaboración de los temas del liberalismo político, pretendiendo que éste puede ser separado del liberalismo económico. (6) La “hegemonía” es redefinida en términos de “articulaciones políticas contingentes” de sujetos múltiples particulares cuya identidad es precaria y fragmentaria. La “estrategia socialista” es reemplazada por la “construcción de una democracia radicalizada y plural” en un sistema capitalista en que se combinen la “intervención estatal y los mecanismos de mercado”. Transcurridos casi veinte años de la formulación original de su estrategia, en los que la “democracia” liberal ha sido el instrumento de una ofensiva capitalista sin precedentes, e incluso el justificativo ideológico de guerras imperialistas, Laclau no ha modificado su posición. En Contingencias... donde sintetiza sus posiciones fundamentales, concluye planteando que la única alternativa frente a la “democracia liberal” es el “totalitarismo burocrático” y en esta dicotomía la opción viable para la izquierda es la “introducción de la regulación estatal y el control democrático de la economía para evitar los peores excesos de la globalización”. (7) Postestructuralismo y postmarxismo El “postmarxismo” de Laclau combina las influencias de Foucault, Derrida y en forma indirecta de Lacan, y por lo tanto se inscribe en el contexto de la formulación sistemática de las teorías postestructuralistas. El estructuralismo de las décadas de 1950 y 1960 generalizó los conceptos lingüísticos estructurales a las ciencias humanas, con lo que pretendían darle bases científicas más rigurosas. Lévi-Strauss, por ejemplo, aplicó los análisis lingüísticos a las relaciones de parentesco, Jaques Lacan hizo lo propio con la teoría psicoanalítica y Althusser emprendió la relectura estructuralista de la obra de Marx. Este estructuralismo retomó los conceptos de la teoría semiótica de Ferdinand de Saussure, centrada en el análisis del lenguaje como sistema en términos de sus leyes de operación, aunque dejando de lado la muy pertinente advertencia de Saussure sobre lo inconveniente de aplicar sus categorías lingüísticas a otros ámbitos del conocimiento. Hay dos definiciones de la teoría saussureana que fueron clave para los desarrollos posteriores: que el signo lingüístico es arbitrario, es decir que la relación entre el significante y el significado es una convención que depende de la cultura, y que su valor es diferencial, es decir que una palabra adquiere significación sólo por referencia a lo que no es. Sin embargo, la crítica postestructuralista que emergió luego del desvío del proceso revolucionario de mayo de 1968, señalaba que Saussure mantenía una relación del signo lingüístico con el referente que pretendía nombrar. La radicalización postestructuralista del modelo lingüístico saussuriano terminó por declarar la naturaleza arbitraria y convencional de todo fenómeno social: el lenguaje, la cultura, la subjetividad y lo social mismo. (8) El postestructuralismo mantuvo la concepción de la imposibilidad de un sujeto autónomo y su constitución como efecto del lenguaje, reafirmó la contingencia e historicidad, la fragmentación y la política de la vida cotidiana frente a las grandes “abstracciones” estructuralistas. El lenguaje siguió siendo el paradigma pero como un sistema fallido, donde la primacía del significante por sobre el significado hacía imposible cualquier significación, dando lugar a un proceso interminable de interjuego de significantes. Esta producción significante sin significación es lo que Derrida llamó “diseminación”, Lacan “cadena significante”, Deleuze y Guattari, “deseo” y Foucault “discurso de poder”. La operación ideológica postmoderna suponía la hostilidad a todo intento de totalización, y en ese sentido repudiaba al marxismo como un “gran relato sobre la emancipación”, uno más de los mitos modernos racionalistas con los que se pretendería ocultar la imposibilidad misma de toda totalidad. Pero esta condición es inconsistente consigo misma. El lenguaje se constituyó verdaderamente en una “gran narrativa” que supone la totalidad lingüística y discursiva, extendida al orden social de conjunto, del cual, más allá de la reafirmación de la “particularidad radical”, de la “política de la identidad” y de la “contingencia” no hay forma de salir. La deconstrucción de un “relato objetivista” sobre el marxismo La reelaboración “postmarxista” que emprende Laclau tiene como punto de partida la necesidad de superar el supuesto objetivismo de la teoría marxista que la haría uno más en la serie de relatos positivistas del horizonte iluminista, una ilusión ingenua del acceso inmediato y transparente del sujeto a una totalidad social coherente y racional. Como veremos sintéticamente, en realidad Laclau construye una “narrativa” determinista de la obra de Marx para luego proponer una tarea de “deconstrucción” (9) en el sentido derrideano o heideggeriano del término.

En Contingencia... Laclau elige dos pasajes de Marx extraídos de la Introducción a la Crítica de la Filosofía del Derecho de Hegel (10) para introducir la discusión en torno al “universal” hegeliano y al “esencialismo” de la filosofía idealista, que hace extensivo a la reelaboración materialista de la dialéctica de Karl Marx, y en general a todo intento de totalización conceptual. Este esencialismo o “metafísica de la presencia”, es decir, la ilusión de encontrar un fundamento objetivo que haga inteligible y transparente la realidad para un sujeto autónomo, es lo que la “condición postmoderna” y la proliferación de múltiples sujetos políticos habrían socavado en las últimas décadas. Aunque formulado en estos términos puede parecer muy abstracto para el lector, constituye la base de la “democracia radical” como única alternativa frente al “totalitarismo” inevitable que acarrearía todo intento de totalización. Veamos brevemente cómo funciona la “deconstrucción”. Mediante la comparación de los dos textos arriba mencionados, Laclau pretende demostrar que para Marx, la transformación de la clase obrera en “clase universal” como negación del sistema capitalista, responde a razones ontológicas, es decir que es el resultado de una operación especulativa, a la manera en que Hegel deducía las instituciones políticas, las clases y el Estado como momentos de la Idea, permitiendo la emergencia de una totalidad social sin contradicciones. Mientras que en uno de los pasajes Marx intenta explicar el rol de la clase obrera en la emancipación social, en el otro fundamenta los límites de la burguesía alemana para presentar sus intereses de clase como intereses nacionales y, a la manera de la dinámica de la Revolución Francesa, erigirse en la negación del orden existente. (11) Para Marx, estos límites no se debían a razones de lógica especulativa, sino a las determinaciones históricas materiales concretas: la burguesía alemana como clase había llegado tarde a la oleada de revoluciones burguesas -recuérdese que el prefacio a esta obra está referido al atraso de Alemania con respecto a los procesos revolucionarios de su tiempo-. Justamente en esta obra temprana, Marx critica e intenta subvertir la dialéctica idealista especulativa, que hace del sujeto un predicado de la Idea. Esta última operación tiene para Marx un resultado mistificador que transforma las determinaciones históricas concretas -por ejemplo el estado prusiano y la monarquía- en encarnaciones del “universal”, a partir de la necesidad lógica interna del movimiento de los conceptos. En uno de los comentarios a esta obra de Hegel, Marx plantea “es evidente que el verdadero método está puesto de cabeza. Lo más simple es transformado en lo más complejo y viceversa. Lo que debería ser el punto de partida se transforma en el resultado místico, y lo que debería ser el resultado racional se transforma en el punto místico de partida”. (12) ¿Cómo funciona esta inversión hegeliana cuando las deducciones de la lógica especulativa intentan explicar la realidad social y política? Continúa Marx diciendo "”o se debe reprochar a Hegel haber ilustrado la esencia del estado moderno tal cual ella es, sino intentar hacer pasar lo que es por la esencia del estado. Que lo racional sea real se muestra contradictorio con la realidad irracional que en todas partes es lo contrario de lo que expresa y expresa lo contrario de lo que es”. (13) (el subrayado es nuestro). En otro trabajo Laclau aplica esta “lectura radical” a la comparación entre el Prefacio a la Contribución a la Crítica de la Economía Política y el Manifiesto Comunista. La tensión teórica entre las determinaciones objetivas y la acción de los sujetos, que es una tensión de la propia realidad, lleva a Laclau a confundir objetividad con objetivismo: “El marxismo se constituyó como una concepción esencialmente objetivista, como afirmación de la racionalidad de lo real, en la mejor tradición hegeliana. La historia radicalmente coherente constituida por el desarrollo de las fuerzas productivas y su combinación con los varios tipos de relaciones de producción es una historia sin exterior”. (14) En este esquema automático de cambio social la lucha de clases sería un elemento perturbador que como tal, en su negatividad y antagonismo, no tiene una integración a la teoría de la emancipación social. Esta crítica bien podría ser válida por ejemplo para el mecanicismo de la Segunda Internacional, para el “Diamat” estalinista o para la lectura estructuralista althusseriana del marxismo, que pretendía una “historia sin sujeto” -tradición esta última en la cual abrevó Laclau-. Pero nada en la dialéctica materialista hace del determinismo mecánico una necesidad teórica. Entre una posibilidad abstracta y su realización como necesidad concreta media la combinación de las determinaciones de las condiciones materiales y la acción subjetiva. Analizando desde esta óptica las revoluciones burguesas, Trotsky hace la siguiente apreciación: “Desde la posibilidad de una victoria burguesa sobre la clases feudales hasta la victoria misma hubo varios lapsos de tiempo, y la victoria frecuentemente se pareció más a una semivictoria. Para que la posibilidad se transformara en necesidad tuvo que haber una fortaleza correspondiente de algunos factores y un debilitamiento de otros, una interrelación definida entre esas debilidades y fortalezas. En otras palabras:

fueron necesarios una serie de cambios cuantitativos para preparar el camino para la nueva constelación de fuerzas. La ley de la conversión de la posibilidad en necesidad lleva así -en último análisis- a la ley de la conversión de la cantidad en calidad”. (15) Como vemos, la lectura “deconstructiva” aplicada al marxismo, que como planteaba Trotsky “es sobre todo un método de análisis, no del análisis de los textos, sino de las relaciones sociales”, (16) lleva a resultados arbitrarios y formales. La dialéctica materialista como método de aprehensión de las leyes más generales del cambio, del movimiento y la transformación, está en las antípodas de la determinación teleológica. Por el contrario, aunque Laclau se propone afirmar contra toda “metafísica”, la “historicidad radical” de la construcción social, esto en realidad resulta en una trampa teórica. La “historicidad” se reduce a los infinitos juegos de lenguaje y a un supuesto metafísico de un “exterior radical” que permitiría la constitución de toda estructura caracterizada por la imposibilidad de su completud. En realidad esta “historicidad radical” termina siendo una negación de las determinaciones históricas concretas, que hacen inteligibles los procesos sociales, en su combinación de necesidad y accidente. Antagonismos sociales y “políticas de identidad” Para Laclau, la sociedad capitalista en la que vivimos ha perdido su especificidad, la de ser una sociedad organizada sobre la base de la explotación del trabajo asalariado. La definición marxiana de la sociedad burguesa como una totalidad contradictoria y desgarrada por los antagonismos de clase, que contiene en sí misma su propia negación y por lo tanto la posibilidad de su superación, es rechazada a favor de una construcción discursiva donde, como en la estructura lingüística, la objetividad es imposible. Una vez liquidado todo fundamento objetivo de la sociedad, lo que queda para Laclau es una proliferación de identidades precarias y contingentes, definidas en base a “posiciones de sujetos”, donde en la “serie enumerativa” de grupos sociales, ninguno tiene un rol articulador. Discutiendo contra el argumento de Zizek de que la llamada “política de la identidad” ha abandonado toda referencia a la lucha de clases, Laclau emprende la “deconstrucción” de la definición marxista de clase, que según su visión está impregnada de un objetivismo economicista que la hace obsoleta, ya que pretendería encerrar en una definición estrecha la multiplicidad de sujetos antagónicos. Como en su “deconstrucción” se superponen distintos planos vamos a intentar tomar uno por vez. El argumento sociológico. Basándose en la fragmentación creciente de la clase obrera -inmigrantes, desocupados entre otros-, aunque sin ofrecer ningún dato empírico, Laclau afirma que actualmente “la clase trabajadora está más reducida que en el siglo XIX”. Laclau comparte con otros intelectuales -postmodernos, postindustriales- la tesis de que la clase obrera ha sido socavada al límite de su existencia, ya sea por la expulsión masiva de fuerza de trabajo del proceso de producción, por la primacía del trabajo inmaterial, o por la reducción de la clase obrera industrial y el crecimiento del sector servicios, entre otros argumentos, con los cuales hemos polemizado en otros números de Estrategia Internacional, a los que remitimos al lector, donde demostramos que empíricamente la situación es bien distinta. Pero Laclau intenta también responder al argumento que demuestra que ha habido una ampliación de las relaciones salariales. Como consecuencia de las reconfiguraciones en el mundo del trabajo de las últimas décadas, y luego de citar una discusión con un supuesto sociólogo norteamericano que no le habría podido explicar cuál es la diferencia entre un obrero y un gerente, plantea que “el mismo hecho de que la ‘concepción ampliada de la clase obrera’ pone en discusión quiénes son los obreros significa que ya no existe correspondencia entre el nivel intuitivo y el análisis estructural. Peor aún: si la concepción de la ‘clase obrera ampliada’ fuera acertada -que no lo es-, sería imposible derivar de ella ninguna conclusión concerniente a una ‘política de clase’, porque sólo se refiere a una clase trabajadora virtual, que no corresponde a ningún grupo especificable”. (17) Indudablemente, la extensión de las relaciones salariales -la incorporación masiva de la fuerza de trabajo femenina, la reconcentración del proletariado en países periféricos, por ejemplo- fue acompañada de importantes reconfiguraciones y fragmentación de la clase obrera. Incluso la ofensiva burguesa ha tenido una política activa de segmentación de la clase obrera, por ejemplo en Estados Unidos, transformando a un sector de trabajadores en pequeños accionistas. Sin embargo, las diferencias de clase siguen siendo una definición básica, elemental y evidente. Por un lado están los capitalistas que poseen los medios de producción y las capas acomodadas que sin ser propietarios son parte del “mando del capital”, como los gerentes, y por otro los trabajadores, que más allá de sus reconfiguraciones, siguen siendo aquellos que como planteaba Marx en el Manifiesto Comunista, “no viven sino a condición de encontrar trabajo, y lo

encuentran únicamente mientras su trabajo acrecienta el capital”, es decir, la clase que se ve coaccionada a vender su fuerza de trabajo a cambio de un salario, y que no tiene ninguna posibilidad de acumulación. Esto no equivale a decir que así se agota la complejidad social, ya que no sólo dentro de las mismas clases fundamentales hay distintos sectores, sino que entre éstas, -y según el grado de complejidad y/o atraso de la sociedad en cuestión-, hay clases intermedias como el campesinado, las clases medias urbanas o capas desclasadas. Sin embargo, la tendencia a la concentración del capital “ha aumentado la polarización de la sociedad entre cada vez menos propietarios del capital y cada vez más trabajadores manuales e intelectuales obligados a vender su fuerza de trabajo a dichos propietarios”. (18) Esta tendencia no ha hecho más que profundizarse en los últimos años. Para sostener su posición Laclau debería demostrar que el privilegio de las formaciones discursivas y de las articulaciones hegemónicas contingentes ha “deconstruido” las relaciones sociales de producción, o que el neoliberalismo ha instaurado un modo de producción radicalmente distinto, para el cual la propiedad privada y la explotación del trabajo ya no tiene ninguna centralidad. Más aún, que la enorme concentración de la riqueza social en un polo cada vez más reducido de la sociedad se explicaría por algún elemento “identitario”. Los argumentos subjetivos. Para Laclau, en la teoría marxista, “capital” y “trabajo” son “categorías económicas” abstractas, (19) por lo tanto “del hecho de que se le quite plusvalor a los trabajadores no se desprende lógicamente que el trabajador resistirá necesariamente a esa extracción”, y que “la actitud del trabajador frente al capitalismo dependerá por entero de cómo esté constituida su identidad, como los socialistas lo descubrieron ya hace mucho tiempo cuando debieron enfrentarse con las tendencias reformistas dentro del movimiento sindical”, ante lo cual concluye que “no hay nada en las demandas de los trabajadores que sea intrínsecamente anticapitalista”. (20) La definición objetiva de las clases sociales es reemplazada por un criterio cultural de “identificación” que estaría libre de toda fijación “esencialista”. En ese marco, la “identidad de clase” no sólo no tendría ningún rol articulador para una estrategia emancipadora, sino que además se habría debilitado, ya que “las lógicas identitarias diferenciales cruzan las fronteras de clase y tienden a constituir identidades que no se superponen con las posiciones de clase [y por lo tanto] la ubicación en el proceso de producción deja de ser central para definir la identidad global de los agentes sociales”. (21) El trabajador, al participar en una cultura de masas más amplia constituiría distintas identidades -como “cultura de jóvenes”, “mujeres”- que al ser exteriores al proceso productivo son para Laclau verdaderamente “antagónicas”, ya que la condición de todo antagonismo, a diferencia de una contradicción, implicaría esta “exterioridad radical” que hace inconmensurables las fuerzas antagónicas. (22) Evidentemente el retroceso de la clase obrera en las últimas décadas, en sus organizaciones, en su acción independiente y en su propia percepción como sujeto social autónomo, está en la base de estas nuevas teorizaciones “identitarias”. Pero es necesario separar los aspectos objetivos y subjetivos de estas afirmaciones. La creación de la clase obrera es un producto objetivo del desarrollo capitalista, más allá de la identificación de cada trabajador. La relación antagónica que emerge de las relaciones sociales de producción capitalista tiene un carácter necesario, la burguesía sólo pudo desarrollarse como clase y extender su modo de producción desarrollando a su vez a la clase explotada como su potencial negación o “sepulturero”. Esto no equivale a afirmar que la clase obrera sea ontológicamente revolucionaria. Efectivamente no siempre el movimiento obrero fue revolucionario, y Laclau tiene razón al señalar por ejemplo la emergencia de un movimiento obrero reformista cuyas reivindicaciones en los marcos del estado burgués no son intrínsecamente anticapitalistas. Precisamente porque no hay una relación directa entre clase y revolución, la teoría marxista elaboró la necesidad de una organización política con la estrategia consciente de la revolución social. La concentración de los medios de producción y la tendencia a la socialización del trabajo crean las bases objetivas sobre las cuales plantear la construcción de una sociedad basada en la cooperación libre de productores asociados. Pero decir que crea las bases no equivale a decir que inevitablemente conducirá a ello. Para los marxistas la revolución no es un resultado inevitable del derrumbe del sistema capitalista, sino que es una probabilidad histórica. Para su realización es indispensable que la existencia objetiva del sujeto antagónico al régimen de explotación capitalista, en términos de Marx, la “clase en sí”, emerja como “clase

para sí”, es decir, que exista un movimiento obrero revolucionario que con su acción consciente destruya la propiedad privada de los medios de producción y se niegue a sí mismo como clase explotada. En esto reside el carácter básico del antagonismo de clases en la sociedad capitalista y el rol privilegiado de la clase obrera. Y es esto lo que la diferencia de los llamados “movimientos sociales”. El estado burgués -principalmente las "democracias occidentales" imperialistas- puede “reconocer” distintas identidades culturales, puede conceder ciertos derechos democráticos, generalmente como subproducto de luchas importantes -por ejemplo el derecho al aborto, el reconocimiento de las parejas gays- incluso financiar ONG que ayudan a los distintos “otros” excluidos o privados de derechos humanos, pero lo que nunca podrá hacer es democratizar el mando despótico del capital, la propiedad privada de los medios de producción. El régimen capitalista no puede prescindir de la extracción de plusvalía y de la acumulación de capital, porque esta es su esencia, mal que le pese este “esencialismo” a Laclau. Los distintos movimientos sociales que han surgido sobre todo a partir de fines de la década del ‘60 y que proliferaron en los ‘80 -ambientalistas, feministas, étnicos, pacifistas, gays-lesbianas, entre otrosindudablemente se oponen a aspectos opresivos del régimen democrático burgués capitalista. Pero esta oposición es inescencial, y sus demandas pueden ser reabsorbidas de alguna forma por el sistema, mientras no cuestionen el eje de las relaciones de explotación. (23) Esto no implica que el movimiento obrero no tenga interés en las reivindicaciones democráticas. Por el contrario, para constituirse en una clase verdaderamente revolucionaria, debe abandonar los marcos estrechos de la acción corporativa y transformarse en clase hegemónica, tomando las reivindicaciones progresivas de otros sectores sociales por ejemplo luchas de minorías raciales oprimidas, de mujeres por el derecho al aborto, de inmigrantes, y de los que resisten la opresión estatal- que son sus aliados potenciales en su lucha contra el estado burgués. El rol articulador de la clase obrera surge de que es el único sujeto social que cuando se pone en acción, cuando decide poner en cuestión las relaciones de propiedad capitalistas y su propia condición de clase explotada, es decir, cuando interviene como sujeto revolucionario, tiene la capacidad de erigirse como dirección de la emancipación social de conjunto, socializar los medios de producción y comenzar la construcción de un régimen social y político superior. Política y hegemonía A diferencia de la (a)política postmoderna, Laclau no acepta sin más la infinita fragmentación de lo social, ya que en el reino de la absoluta diferencia no hay posibilidades de articulaciones políticas. A nivel teórico, esto implica que si bien para Laclau la universalidad como tal es imposible, es un significante vacío, sólo puede tener existencia si es contaminado por algún contenido particular que tenga efectos universalizantes. Mantener la incompletud social sería el resguardo contra todo “totalitarismo”, ya que encierra la posibilidad de una dislocación de la estructura, lo que abre el juego al campo de lo político y a la “democracia radical”. (24) Pensando la política de identidad en una sociedad concreta, donde las demandas de cualquier grupo social no tienen ninguna cualidad que las haga universales, esta posibilidad depende de que el grupo en cuestión tenga aspiraciones universalizantes. Por eso postula junto con la “lógica de las diferencias” de la multiplicidad de sujetos-agente definidos por sus procesos contingentes de identificación, una “lógica de equivalencias”, que haga que otros grupos se reconozcan también en las demandas de un sujeto social específico. Y en esta articulación es central el uso que hace Laclau del concepto de hegemonía de Antonio Gramsci, al que pretende liberar también de todo “esencialismo”, es decir de toda referencia a las relaciones de clase, transformándolo en un “significante vacío”. (25) La lógica hegemónica, como modo de funcionamiento del campo de lo político, es para Laclau el corolario de la contingencia radical que permite la formación no necesaria de “bloques históricos” para la pelea por darle un contenido particular a un significante “flotante”, que por su carácter universal necesariamente es un vacío. Plantea que “Cuanto más extensa sea la cadena de equivalencias que un sector particular represente y cuanto más se transformen sus objetivos en un nombre para la emancipación global, más indefinidos serán los vínculos entre ese nombre y su significado original específico y más se aproximará al estatus de significante vacío (...) El proceso de nominación, como no está constreñido por ningún límite conceptual a priori, es el que determinará en forma retroactiva -dependiendo de las articulaciones hegemónicas contingentes- lo que precisamente se está nombrando. Esto quiere decir que la transición de la emancipación política de Marx a la emancipación total nunca puede llegar”. (26) Esta equivalencia, como se

comprende, da lugar a una ilusión “ideológica”, un efecto de “sutura” que en realidad vendría a cubrir el vacío y la imposibilidad de la totalidad social. Laclau rechaza por economicista que las clases tengan intereses materiales objetivos, por lo tanto, su teoría de la hegemonía tiene un cierto vicio autoreferencial que no permite explicar más que por motivaciones “morales” o “éticas” las elecciones políticas de los agentes sociales. T. Eagleton en su crítica a Laclau plantea esta cuestión gráficamente, dice “¿Qué lleva a un radical político a hegemonizar a un grupo social antes que otro? (...) Si el capitalista monopolista no tiene intereses al margen de la manera en que se expresan políticamente, no parecería haber razón alguna por la que la izquierda política no deba aplicar una enorme energía con objeto de ganarle para su causa. El hecho de que no lo hagamos es porque consideramos que los intereses sociales dados de los miembros de esta clase le dan muchas menos posibilidades de volverse socialistas que, por ejemplo, a los parados”. (27) Pero este no es el único inconveniente. La operación de vaciamiento del “poder”, la “democracia” o la “hegemonía” de todo contenido concreto, transforma en elemento teórico los efectos ilusorios que hacen del “estado” un terreno neutro para la lucha política. Este estado “idealizado”, que por estar vacío de contenido social, ha perdido incluso su “razón instrumental” para el dominio de clase, supone Laclau que podría ser hegemonizado en alguna contingencia histórica por algún grupo social antagónico. De ahí que la infinita metonimia que plantea la “guerra por la interpretación” sólo puede prever como desarrollo el terreno de la “guerra de posiciones”, que traducido al lenguaje de la política cotidiana, significa lisa y llanamente que la única posibilidad de lucha es en el terreno del estado burgués, su régimen democrático y sus relaciones de producción capitalista. Esta percepción encierra indudablemente una creencia en la capacidad ilimitada de “transformismo” del estado burgués a través del juego democrático. Esto tiene que ver con que para el “postmarxismo”, en su peculiar definición de la “democracia” como régimen neutro frente al dominio de clase, ya no existen “enemigos” sino sólo “adversarios”. Como plantea en un artículo Chantal Mouffe, “En el reino de la política, el ‘otro’ ya no es visto como un enemigo a ser destruido, sino como un ‘adversario’, es decir, alguien con cuyas ideas vamos a pelear pero cuyo derecho a defender esas ideas no será puesto en cuestión. Un adversario es un enemigo legítimo, un enemigo con quien tenemos en común una adhesión compartida con los principios ético-políticos de la democracia”. (28) De esta definición nos queda claro que por ejemplo Hitler o Videla no son “enemigos legítimos”. ¿Pero sí lo sería por ejemplo Tony Blair? Esto nos lleva al último aspecto que queremos discutir aquí y que tiene que ver ya con la estrategia política. La alternativa estratégica a la “democracia liberal” En su último ensayo de Contingencia..., Laclau increpa duramente a Zizek por su falta de estrategia política, o mejor dicho, por no hacer explícita su estrategia “totalitaria” frente a la democracia liberal. Dice Laclau “En su ensayo anterior, Zizek nos decía que quería derrocar al capitalismo; ahora nos comunica que también quiere deshacerse de los regímenes democrático-liberales -para reemplazarlos, es verdad por un régimen totalmente diferente del cual no tiene la cortesía de hacernos saber nada. Sólo podemos hacer conjeturas. Ahora bien, aparte de la sociedad capitalista y de los paralelogramos del señor Owen, Zizek realmente conoce un tercer tipo de organización sociopolítica: los regímenes burócratas comunistas de la Europa Oriental bajo los cuales vivió. ¿Es eso lo que tiene en mente? ¿Quiere reemplazar la democracia liberal por un sistema político unipartidario, debilitar la división de poderes, imponer la censura de prensa?” Y más adelante ironiza planteando que “Hitler y Mussolini también abolieron regímenes políticos democráticos liberales y los reemplazaron por regímenes ‘totalmente diferentes’”. (29) Respondiendo a estas críticas, Zizek reafirma sus posiciones con respecto a la lucha de clases y a la necesidad de superar las estrategias parciales que surgiría de las políticas del reconocimiento -las emancipacion(es) como diría Laclau-, planteando que “los defensores de los cambios y las resignificaciones dentro del horizonte democrático liberal son los verdaderos utópicos en su creencia de que sus esfuerzos redundarán en algo más que la cirugía estética que nos dará un capitalismo con rostro humano” (30) y apelando a su ya conocido apego al “terror revolucionario” como momento de “locura” y acercamiento a lo Real, reivindica frente a los “liberales de gran corazón” ser considerado como un “fascista de izquierda” por su opción radical. Evidentemente esto último no permite salir del falso “esencialismo” que plantea Laclau de que hay una relación necesaria entre revolución social y totalitarismo. Laclau parece hacer propio el mismo determinismo que critica y sin mediar explicación histórica alguna admite que el destino inevitable de la revolución de octubre era degenerar en una dictadura burocrática.

(31) La solución que propone Laclau es que la forma de evitar el totalitarismo burocrático es limitarse a maquillar la dictadura del capital y tratar de ampliar sus formas miserables de “democracia”, partiendo del valor que todavía retendrían los “ideales” de la Revolución Francesa. (32) Pero esto sólo puede sostenerse al precio de sustituir la historia de la lucha de clases por un formalismo de “valores abstractos” y vacíos de contenido. La Comuna de París de 1871 ya había dado la clave de que el proletariado no puede simplemente apropiarse de la maquinaria estatal burguesa y ponerla a su servicio, sino que debe destruir su ejército y su policía, y sustituirla por una democracia directa con revocabilidad, basada en el armamento de la población. Las revoluciones rusas de 1905 y 1917 vieron el surgimiento de estos órganos de poder obrero y popular, los soviets o consejos obreros, que como bien comprendió Trotsky, eran los “embriones del nuevo estado”. Más aún, “El consejo, en la historia rusa moderna, es la primera forma de poder democrático (...) Se trata de la verdadera democracia sin trapicheos, sin dos cámaras, sin burocracia profesional, con el derecho de los electores para revocar a su representante cuando lo deseen”. (33) Esta “verdadera democracia” es incompatible con la esclavización económica y sólo puede realizarse subvirtiendo el orden capitalista, incluido su estado y sus formas republicanas-democráticas por medio de las cuales la burguesía ejerce su dominación social. El desarrollo de formas de organización de democracia directa no fue un patrimonio de la revolución rusa sino que ha acompañado prácticamente toda experiencia revolucionaria del siglo XX. (34) La contrarrevolución estalinista, las derrotas de procesos revolucionarios y el retroceso subjetivo de la clase obrera en las últimas décadas frente a la ofensiva imperialista, ha transformado a algunos “intelectuales críticos” como Laclau en ideólogos de la resignación, descartando a priori la posibilidad de que la clase obrera en sus futuros combates retome esta experiencia histórica. Contingencia... fue publicado originalmente en el año 2000, cuando Clinton todavía cubría con “rostro humanitario” la política del imperialismo mundial, y el movimiento anticapitalista recién comenzaba a mostrar en las calles la explosión de “estilos de vida alternativos” y la confluencia de movimientos sociales contra los símbolos del poder económico. En los tres años transcurridos desde entonces, Bush reemplazó a Clinton y desplegó una política imperialista agresiva acompañado por la Tercera Vía de Blair que dejó sin sustento muchos de los mitos ideológicos generados en los ’90, como por ejemplo el de la “superioridad de la democracia occidental”. En esta nueva situación política, signada por la ofensiva y el guerrerismo imperialista, la estrategia de “radicalizar la democracia liberal” como único horizonte, dando por muerto todo “imaginario revolucionario”, se muestra doblemente utópica como alternativa ante la barbarie capitalista. Notas: 1 Contingencia, hegemonía y universalidad. Diálogos contemporáneos en la izquierda. FCE 2003. 2 Para una crítica más profunda a las elaboraciones de Slavoj Zizek, ver Estrategia Internacional N° 19. 3 En Nuevas reflexiones sobre la revolución de nuestro tiempo, Laclau asume claramente esta resignación, bajo la justificación ideológica de una toma de "conciencia de los límites". Plantea que "el clima intelectual de las últimas décadas, es una nueva, creciente y generalizada conciencia de los límites. Límites de la razón en primer término (...) Límites, en segundo término -o más bien lenta erosión- de los valores e ideales de transformación radical que habían dado sentido a la experiencia política de sucesivas generaciones. Es como si después de décadas -¿quizás centurias?- de anunciar el ’advenimiento de lo nuevo’, hubiéramos llegado al momento de un cierto agotamiento y desconfianza en los resultados de toda experimentación", pág. 19. 4 E. Laclau, C. Mouffe, Hegemony and Socialist Strategy. Towards a Radical Democratic Politics, Verso, Londres, 1985. 5 Nuevas Reflexiones sobre la revolución de nuestro tiempo. Ed. Nueva Visión, 2da edición, Buenos Aires, 2000, pág.11. 6 "Tenemos por un lado el liberalismo político -es decir, el campo de las libertades públicas, de la división de poderes, del sufragio universal. Desde este punto de vista los principios liberales son parte integrante y constitutiva de un socialismo democrático. Por otro lado tenemos el liberalismo económico, la creencia de que el libre juego de los mecanismos de mercado es suficiente para asegurar la reproducción social. Que este liberalismo económico no es el complemento necesario del liberalismo político lo muestra toda la experiencia contemporánea de los países del sudeste asiático, que son un paraíso del neoliberalismo y que son, sin embargo, altamente autoritarios y represivos. Es aquí que se establece la diferencia entre socialismo democrático y neoliberalismo (...) La única perspectiva realista es una mezcla pragmática de control social y

de mecanismos de mercado". E. Laclau en Octubre hoy. Conversaciones sobre la idea comunista a 150 años del Manifiesto y 80 de la Revolución Rusa, Ediciones El Cielo por Asalto, pág. 37. 7 Contingencia..., pág 208. 8 La operación lingüística en el terreno social dio lugar a dos posiciones que aunque se oponen en sus fundamentos, terminan ubicando el campo de toda acción política posible en los marcos de la democracia representativa. Por un lado, la tradición racionalista de J. Habermas incorpora la acción comunicativa como fundamento de la democracia deliberativa. El "sujeto democrático" ya está constituido por ser miembro de una comunidad lungüística, la autonomía que supone la participación democrática surgiría de las interrelaciones sociales y el reconocimiento de sí mismo y los otros. A través del diálogo racional y el proceso argumentativo se podrían resolver los problemas y los conflictos sociales. El régimen que encarna esta posibilidad es la "democracia deliberativa". Por el otro, teorías como la de Laclau que repudian el racionalismo y cognitivismo de la acción comunicativa e incorporan la imposibilidad de una totalidad lingüística transparente. En un sentido más radical, el filósofo autonomista Paolo Virno hace de la gramática uno de los conceptos clave de su teoría subjetiva. Sintéticamente lo que le da unidad inmanente a la multitud como pluralidad de singulares es su pertenencia a una comunidad lingüística que permiten la construcción de los "lugares comunes", es decir los fundamentos lógico-lingüísticos generales compartidos, esta competencia lingüística que llama "vida de la mente" es lo que constituye el "general intellect" de la multitud. Para una profundización del tema ver por ejemplo: Paolo Virno, Gramática de la multitud, Ed. Colihue. 9 La "deconstrucción" es en realidad una herramienta del análisis literario, en ocasiones usada para determinados temas filosóficos dentro de los "textos", es decir constituye una forma "radical de lectura" que no tiene un valor político o de interpretación de la realidad, salvo que ésta sea tratada como narración o construcción discursiva. 10 Contingencia..., pág 49-50. 11 "Para que una clase determinada sea la clase liberadora por excelencia, otra clase debe, por lo tanto, ser la clase evidentemente opresora. El valor general negativo de la nobleza y del clero franceses determinaba el general valor positivo de la burguesía que era una realidad y se contraponía a aquéllos. Pero, en Alemania falta a cada clase particular no sólo el espíritu de consecuencia, la severidad, el coraje, la irreflexión que podría imprimirle el carácter de representante negativo de la sociedad (...) La ocasión de una gran obra ha pasado siempre, antes de haberse presentado, y cada clase, apenas inicia la lucha contra la clase que está sobre ella, se encuentra envuelta en una lucha con el que está debajo. Por eso, el príncipe se halla en lucha con el poder real, el burócrata con la nobleza, el burgués con todos éstos, mientras el proletariado ya comienza a encontrarse en lucha con el burgués". Karl Marx, Introducción a la crítica de la "Filosofía del derecho" de Hegel, Ed. Claridad, 1987, pág. 19. 12 Comentario al parágrafo 279 de la "Filosofía del Derecho de Hegel", en Karl Marx, Critique of Hegel’s Philosophy of Right, (1843), Oxford University Press, 1970. 13 Punto 2 del comentario al parágrafo 301; Idem 13. Está fuera del alcance de estos apuntes el desarrollo profundo de la inversión del método dialéctico que hace Marx tomando la Filosofía del Derecho de Hegel, pero el elemento destacado que le permite rescatar el núcleo racional de la dialéctica del misticismo idealista es comprender que en el seno de la formación precedente se desarrolla el elemento negativo con efectos disolventes que abre el espacio para la superación en otra figura, es decir el elemento que comparte con lo superado algunos rasgos pero que agudiza a tal punto sus contradicciones que cambia su calidad. 14 Nuevas Reflexiones sobre la revolución de nuestro tiempo, pág. 190. 15 Trotsky’s Notebooks, 1933-1935. Writings on Lenin, Dialectics and Evolutionism, New York, Columbia University Press, 1986, pág. 90. 16 León Trotsky, "Resultados y perspectivas", en La teoría de la revolución permanente, Compilación, CEIP, Buenos Aires, 2000, pág. 87. 17 Contingencia..., pág. 298. 18 Ernest Mandel, Cien años de controversias en torno a la obra de Karl Marx, Siglo XXI, México 1985, pág. 9. 19 No vamos a desarrollar aquí esta discusión. Simplemente mencionaremos que para Marx las relaciones de producción son relaciones sociales, históricamente determinadas. Como explica E. Mandel "El capital es,

desde el punto de vista marxista, una relación social entre los hombres que aparece como una relación entre las cosas o entre los hombres y las cosas", Idem 19, pág. 52. 20 Contingencia..., pág 204. La relación entre relaciones de producción y antagonismo está más desarrollada por Laclau en Nuevas reflexiones... Aquí simplemente reafirma lo formulado en ese libro. 21 Contingencia..., pág. 300. 22 Por ejemplo en su libro Nuevas reflexiones..., plantea la cuestión de la siguiente manera: "En la medida en que se da un antagonismo entre el obrero y el capitalista, dicho antagonismo no es inherente a la relación de producción en cuanto tal sino que se da entre la relación de producción y algo que el agente es fuera de ella -por ejemplo una baja de salarios niega la identidad del obrero en tanto que consumidor. Hay por lo tanto una "objetividad social" -la lógica de la ganancia- que niega otra objetividad social -la identidad del consumidor. Pero si una identidad es negada, esto significa que su plena constitución como objetividad es imposible". Pág. 33. 23 Este es el punto fuerte de la crítica que viene haciendo Zizek a la "política de la identidad". Otros intelectuales no precisamente marxistas han llegado a esta conclusión después de militar en movimientos identitarios. Por ejemplo Naomi Klein plantea que "La reacción que inspiró la política de la identidad hizo un buen trabajo de enmascarar para nosotros el hecho de que rápidamente el mercado se acomodaba a nuestras demandas de una mejor representación (...) las políticas de identidad no combatían al sistema ni lo subvertían (...) La necesidad de una mayor diversidad -el grito de guerra de mis años universitarios- no sólo es ampliamente aceptada por las industrias culturales, sino que es el mantra del capital global. Y la política de identidad, como se practicó en los ’90, no era una amaneza sino una mina de oro". Naomi Klein, Patriarchy gets Funky, 2001. 24 Laclau y Mouffe se apoyan en la filosofía (post) analítica de Ludwing Wittgenstein -sobre todo enlos llamados "juegos del lenguaje"- para desarrollar su teoría política sobre la "democracia radical" y rebatir los argumentos racionalistas de Habermas y Rawls. Según Wittgenstein para tener acuerdo en las opiniones primero hay que tener acuerdo sobre el lenguaje usado, y esto según su teoría filosófica, implica tener acuerdo en formas de vida. Los procedimientos sólo existen como un ensamblaje de prácticas, que en sí mismas constituyen formas de individualidad e identidad. La gramática, entendida como la reglas para el uso de las palabra, es lo que establece los límites del sentido y los "juegos de lenguaje" permitirían el uso de las reglas gramaticales, abriendo un abanico de posibles combinaciones. 25 Antonio Gramsci fue quien más desarrolló el concepto de hegemonía, primero en el sentido que había tenido en los debates previos a la revolución rusa, es decir, de las alianzas del proletariado con las clases subalternas, y luego lo extendió para dar cuenta del dominio burgués en las sociedades occidentales democráticas avanzadas, destacando la combinación en el poder burgués de la fuerza (la violencia organizada del estado) y el consentimiento (que hacía posible la hegemonía cultural burguesa). Parafraseando a Perry Anderson, el pensamiento de Gramsci presenta antinomias -no sólo en lo que respecta a la hegemonía, sino también en cuanto a la separación de la sociedad civil y el estado, a la guerra de posición, entre otras- lo que permitió las mil y una "lecturas" de Gramsci y su incorporación al corpus teórico del reformismo. Pero en las ambigüedades del revolucionario italiano no es posible encontrar nada similar a un significante vacío como definición del poder en una sociedad en la que las clases han perdido todo fundamento objetivo. 26 Contingencia..., pág. 62. 27 T. Eagleton, Ideología. Una introducción, Paidós, Buenos Aires, 1997, pág. 271. 28 Chantal Mouffe, "Deliberative Democracy or Agonistic Pluralism?", Social Research 66 N°3, otoño 1999. 29 Contingencia..., pág. 289. 30 Contingencia..., pág. 327. 31 En la entrevista publicada en el libro Octubre hoy, Laclau evalúa del siguiente modo la revolución rusa: "Como hecho revolucionario, octubre de 1917 fue un fracaso. Fracaso desde el punto de vista del socialismo europeo, puesto que no fue el preludio de la revolución en Europa y consolidó por el contrario una nefasta división del movimiento obrero que condujo, entre otras cosas, al surgimiento del fascismo (...) Fracaso desde el punto de vista de la transformación interna de la ex URSS con la instalación de un régimen burocrático-totalitario", pág. 35. 32 La necesidad de "completar" la Revolución Francesa de 1789 ha sido teorizada desde múltiples ámbitos y se ha transformado en una suerte de programa político para muchos intelectuales, sobre todo luego de la

caída de la URSS. Este tema fue desarrollado centralmente por François Furet, uno de los principales historiadores de la Revolución Francesa, retomando la tesis ya planteada antes en la obra de H. Arendt de que el nazismo y el comunismo (stalinismo) eran las dos caras del mismo monstruo totalitario, y que la alternativa era revalorizar los ideales de libertad e igualdad de la teoría liberal. 33 León Trotsky, "Conclusiones de 1905", en La teoría de la revolución permanente, compilación, CEIP, Buenos Aires, 2000. 34 Este fenómeno atrajo la atención de teóricos liberales como H. Arendt que plantea por ejemplo que incluso historiadores que simpatizaban con la revolución "no acertaban en comprender que el sistema de consejos les ponía en contacto con una forma de gobierno enteramente nueva, con un espacio público nuevo para la libertad, constituido y organizado durante el curso de la propia revolución", Sobre la revolución, Alianza Editorial, pág. 258. * Fuente: Estrategia Internacional N° 20 http://www.ceipleontrotsky.org/La-impostura-postmarxista

“ALEX DOGBOY”: CALIDAD LITERARIA Y COMPROMISO LOS NIÑOS DE LA CALLE EN LA OBRA DE MONICA ZAK Víctor Montoya http://www.bolpress.com/art.php?Cod=2013080504 Monica Zak confesó que la idea de escribir este libro empezó a principios del 2002, en la capital de Honduras, donde conoció a un niño de la calle, cuya vida insólita, en compañía de dos perros vagabundos, la impactó tanto que, sin pensar dos veces, decidió acercarse a la realidad de los niños andariegos de la limosna; una experiencia que duró dos meses y constituyó el tema central de “Alex Dogboy”. Lo interesante es que no todo terminó en este libro, ya que su obsesión por el tema, como ya le había ocurrido en otras ocasiones, con otros libros y otros temas, la impulsó a escribir la continuación bajo el título de “Tredje kärleken” (El tercer amor), un libro aún inédito en nuestra lengua. Víctor MontoyaNació en La Paz, en 1958. Escritor, periodista cultural y pedagogo. Vivió en las poblaciones mineras de Siglo XX y Llallagua. En 1976, como consecuencia de sus actividades políticas, fue perseguido, torturado y encarcelado. Estando en el Panóptico Nacional de San Pedro y en el campo de concentración de Chonchocoro-Viacha, escribió su libro de testimonio ?Huelga y represión?, hasta que en 1977, tras ser liberado de la prisión por una campaña de Amnistía Internacional, llegó exiliado a Suecia. Cursó estudios de pedagogía en la Escuela Superior de Profesores, en Estocolmo. Dictó lecciones de quechua en institutos, coordinó proyectos culturales en una biblioteca y ejerció la docencia durante varios años. Ha publicado: ?Días y noches de angustia? (premio nacional de cuento, UTO, 1984), ?Cuentos Violentos? (1991), ?El laberinto del pecado? (1993), ?El eco de la conciencia? (1994), ?Antología del cuento latinoamericano en Suecia? (1995), ?Palabra encendida? (1996), ?El niño en el cuento boliviano? (1999), ?Cuentos de la mina? (2000), ?Entre tumbas y pesadillas? (2002) y ?Fugas y socavones? (2002). Dirigió las revistas literarias ?PuertAbierta? y ?Contraluz?. Escribe para una veintena de publicaciones en América Latina y Europa. Es miembro de la Asociación de Escritores Suecos y del PEN-Club Internacional. Participó en el Primer Encuentro Hispanoamericano de Jóvenes Creadores, Madrid, 1985, y fue uno de los principales organizadores del Primer Encuentro de Poetas y Narradores Bolivianos en Europa, Estocolmo, 1991. Su obra mereció premios y becas literarias. Tiene cuentos traducidos y publicados en antologías internacionales. Es redactor responsable de la edición digital de Narradores Latinoamericanos en Suecia: http://www.narradores.cjb.net Monica Zak, con pasión y estilo depurado, combina los métodos del periodista acucioso con el talento del narrador que sabe manejar el hilo sutil de la imaginación y la realidad a la hora de tejer el texto y el contexto de su obra, con personajes y situaciones que existen y respiran cerca de nosotros; por eso mismo, el libro “Alex Dogboy”, lejos de toda consideración tendenciosa, es una obra que pertenece al llamado realismo social, que sigue teniendo tanto cultores como lectores en este nuevo milenio.

La caracterización del personaje El protagonista principal, llamado Alex Dogboy entre amigos y conocidos, tiene un aspecto fácil de identificar; viste gorra roja de béisbol, pantalones sucios, suéter grande y zapatos de tenis. Es un niño de carácter taciturno y melancólico que, como todos los mendigos, raterillos ocasionales y buscadores de deshechos, deambula por las calles de Tegucigalpa, comiendo lo que encuentra a su paso y durmiendo a cielo abierto en las aceras de la Calle Real, como hijo de nadie, como basura de la ciudad. Monica Zak corresponde a esa categoría de escritoras europeas que no temen ingresar en los territorios invadidos por las injusticias sociales, raciales y culturales. La prueba está en que siempre avanza más allá de lo folklórico y lo pintoresco de un país, para escudriñar de cerca una realidad que resulta sugerente y explosiva, sobre todo, cuando penetra en el fuero interno de su personaje, para ver el entorno social a través de los ojos de él y para sentir las llagas de un corazón angustiado, que palpita entre el desamparo y el desprecio de una sociedad donde los sistemas de poder enseñan la ley salvaje del “sálvese quien pueda”. El abandono y la esperanza Alex Dogboy tiene cuatro años de edad cuando lo abandona su madre, quien se marcha a Estados Unidos en busca de mejores horizontes de vida. Desde entonces vive soñando con ella, abrigando la esperanza de volver a verla, de estrecharla en sus brazos y cubrirla de besos. Acude cada tarde a la parada del autobús, hasta el día en que la ve llegar hasta la puerta de la casa. Hay júbilo en la familia, pero la alegría se esfuma pronto, porque la madre, al cabo de un tiempo, retorna a Estados Unidos llevándose sólo a sus hijos mayores. Ni modo, Alex Dogboy queda primero bajo el cuido de su padre, un humilde pescador, y luego bajo la custodia de su tía, una mujer con varios hijos y una modesta casa. Así transcurren los días, los meses, los años y no vuelve a saber de su madre, quien parece haberlo puesto en el olvido, a diferencia de él que la sigue esperando con cariño, recordando vagamente la vez que lo llamó “orejas de perro”, porque nació con las orejas peludas. No pocas veces sus deseos se proyectan como películas en su mente. En sus pensamientos ve a su madre descendiendo de un taxi, con juguetes traídos desde tierras lejanas y con la promesa de recogerlo y llevárselo vivir a su lado. Monica Zak, conocedora intuitiva del espíritu humano, intenta reflejar en el libro las añoranzas y esperanzas de un niño de la calle, porque la esperanza es lo último que se pierde en la vida, luego de haber vivido a saltos de mata y entre golpe y golpe Una vida en la calle Se sabe que Alex Dogboy no se siente bien en la casa de su tía Ana Lucía, por eso desea huir de una vez y para siempre. En ese transe se cruza en su camino otro niño, el Rata, quien le comenta que la vida en la calle es lo mejor, que uno no está obligado a asistir a la escuela y que sólo hace falta pedir limosna para comer a gusto. Estas insinuaciones son suficientes para que Alex Dogboy tome la decisión de marcharse, tras quemar las fotografías de sus padres en el patio de la casa de su tía. Así cambia el curso de su vida y comienza la historia de un niño más de la calle. Pero muy pronto, mientras vaga sin más consuelo que la esperanza pero sintiendo una profunda libertad por dentro, se da cuenta de que la vida en la calle es mucho más peligrosa y complicada. Si bien es cierto que existe solidaridad entre quienes comparten el mismo destino, es cierto también que uno pierde la confianza en los demás, aunque todos comparten los mismos sueños, incluso el de enamorarse de una persona que ostenta otra condición social, como le ocurre a Alex Dogboy, quien se siente atraído por una muchacha cuyos padres tienen casa, trabajo y dinero. Los niños de la calle, desde el instante en que piden limosna en afán de llevarse un mendrugo de pan a la boca, así como aprenden a inhalar pegamento para escaparse de la realidad y refugiarse en falsas ilusiones, aprenden también que las reglas para sobrevivir son el robo y la velocidad, ya que ellos, en su condición de elementos considerados “asociales”, viven huyendo de la policía, de los autos patrulla y de los guardias armados y uniformados, por el temor a que los pillen y los encierren en la celda de una “Cuarta” (estación de policía), donde van a dar los delincuentes, las prostitutas y los miembros de las “maras” (pandillas), quienes son sometidos a un régimen de maltratos y humillaciones. Monica Zak, con su estilo particular de contar historias sostenidas sobre una base real, habla con la voz de ellos, como si formara parte de ese grupo de rapazuelos que conviven en la calle sin que nadie los acepte, ni los integre -o reintegre- a la vida social, donde el respeto a los Derechos Humanos es escamoteado por la desidia de propios y ajenos. Aquí es donde la Declaración de los Derechos de los Niños se torna en un mero

enunciado lírico, porque una cosa está escrita en los papeles y otra muy distinta es la realidad que experimentan los niños de la calle, quienes no conocen la escolaridad, la seguridad social ni la protección familiar. Ellos son hijos de nadie y, por lo tanto, no gozan de los mismos derechos ni de las mismas oportunidades que los hijos de las familias pudientes. Y, lo que es peor, las diferencias sociales y el menosprecio hacia los menos privilegiados se vislumbran en todos los niveles de la vida social. Esto constatan Alex Dogboy y sus compañeros cuando son llevados a la casa del gringo George, un ser sin escrúpulos que los invita a comer y a dormir en camas cómodas, con la intención de abusar de ellos y luego venderlos a los mercaderes que controlan la red de la prostitución y la pornografía infantil. Por suerte, Alex Dogboy y sus compañeros logran huir sanos y salvos de la casa del gringo George. Dogboy en el basural El protagonista del libro, entre idas y venidas, trabaja como pepenador en una montaña de basura, en medio de olores malolientes y aves de carroña. Vive bajo un techo de cartones y bolsas de plástico y se alimenta con los restos que echan los camiones de McDonald’s, Pizza Hut y Burger King. Trabaja de sol a sol, hasta que un día encuentra a una cachorra moribunda tirada en una caja de cartón. Él la cuida y le entrega su cariño. La llama Emmy y la convierte en su fiel compañera. Con ella, más que con sus amigos, comparte sus penas y alegrías. En el basural, a orillas del río, donde encuentra a la preciosa cachorrita, encuentra también su segundo nombre: Dogboy, el muchacho de los perros. No es para menos, pues Alex Dogboy conversa en voz alta con la perra, y ésta, con las orejas en alto, parece escucharle el relato de una vida hecha de dolores y desengaños. En el libro de Monica Zak, al mejor estilo de Jack London, los perros se convierten instintivamente en personajes dignos de ser amados y admirados, no sólo porque son los mejores amigos del hombre, sino también porque atesoran un sentimiento más noble que el de muchos humanos. A pesar de ello, los perros callejeros, en ciudades como Tegucigalpa, son animales que sufren el desprecio y el abandono. En este mismo ambiente, plagado de moscas y deshechos, Alex Dogboy conoce a una niña llamada Margarita, la misma que, ataviada siempre con un vestido rojo, camina en medio del basural rodeada por una manada de canes de todos los tamaños y colores. Se hacen amigos, juegan y conversan en sus ratos de ocio, compartiendo un interés común y el amor que sienten por los perros. Alex Dogboy, con el paso del tiempo, se adjudica un nuevo perro que, como agradecimiento al trato que recibe, pasa a ser otro de sus mejores compañeros. No en vano un día les confiesa: “Son ustedes los que son mi madre y mi padre”. De este modo, los dos perros, Emmy y Canelo, se convierten en la única familia de este niño de la calle, aparte de la mujer caritativa que, una y otra vez, deja que la ayude en los quehaceres de su restaurante popular a cambio de un plato de comida y algo de ropa. En la obra de Monica Zak se funden los perros y el niño en una simbiosis que les permite sobrevivir a las adversidades, mientras vagan por los recovecos de la cuidad y husmean en los basurales en procura de encontrar restos de comida y un rincón donde pasar la noche. Calidad literaria y compromiso No cabe duda de que la autora del libro, con la habilidad legítima de una comunicadora de fuste, deja traslucir el submundo urbano, como quien deposita su amor y su sabiduría en todo lo que escribe, aun a riesgo de conceder, de manera consciente o inconsciente, demasiada ternura maternal a sus personajes; algo que los lectores pueden constatar en algunas de las páginas cargadas de sensaciones sólo conocidas por quienes entablan un contacto estrecho con los héroes y antihéroes de una obra literaria. Se nota, asimismo, que el discurso narrativo fluye como el remanso de un río, sin ripios ni descripciones abundantes. Usa un lenguaje sencillo pero efectivo, y nos conduce de la mano por un ámbito que, aunque alejado de la Inglaterra victoriana, nos recuerda a Oliver Twist y a otros personajes de Charles Dickens; más todavía, su capacidad de percibir las palpitaciones de la naturaleza le permite describir con precisión la catástrofe provocada por el huracán Mitch, el aullido del viento, las lluvias torrenciales, la belleza salvaje del mar, la exuberancia del paisaje tropical y la forma de cómo Alex Dogboy y su perra Emmy, que se refugian del huracán entre las ramas de un árbol, son rescatados por un helicóptero de salvación. Por lo demás, el libro “Alex Dogboy” es un regio alegato a favor de los niños de la calle, un testimonio que adquiere dimensiones verdaderamente humanas en la obra de una escritora que, desde los primeros atisbos

de su vocación, ha dedicado su tiempo y su energía a forjar una literatura basada en hechos reales y documentos de primera mano. Vida y obra de Monica Zak Monica Zak es escritora, periodista y productora de documentales para televisión. Durante diez años trabajó en la revista Globen (El Globo), como corresponsal internacional, escribiendo reportajes de África, Asia y América Latina. Su preocupación principal fue siempre el derecho y la vida de los niños del mundo. En 1971 escribió sus primeros libros, y desde entonces ha publicado 47 libros, la mayoría destinados a los jóvenes y niños. Sus libros han sido traducidos a 15 idiomas. Durante 2005 terminó un guión de película basado en su novela “Pojken som levde med strutsar” (El niño que vivió con avestruces), para la compañía de cine FinalCut de Dinamarca, y publicó la novela juvenil “Tredje kärleken” (El tercer amor). La vida de Monica Zak está hecha de viajes, aventuras e investigaciones. En 1965 dejó su trabajo en el periódico Aftonbladet y compró junto con su marido un viejo barco de pesca, un barco sin motor, sólo con velas. Cruzaron el Mar del Norte y el Atlántico. En la isla Tobago, en las Antillas, tuvieron un hijo, que se llamó Christofer Tobago, y siguieron viajando. Con el viejo velero visitaron todas las islas del Mar Caribe, parte de América del Sur y Centroamérica. Durante ese viaje creció su amor e interés profundo por América Latina. El viaje duró seis años, y, durante ese tiempo, Monica Zak publicó sus primeros libros, uno para niños y otro para adultos sobre los indígenas cunas de Panamá. Desde entonces ha regresado a América Latina muchas veces y ha publicado libros con temas concernientes al Perú, Panamá, Nicaragua, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Belice, México y Honduras. Sus últimas novelas juveniles son “Alex Dogboy” (2003) y “El tercer amor” (2005), cuyos temas abordan las peripecias de un niño que vive con sus perros en las calles de Tegucigalpa, Honduras. Su primer trabajo sobre Guatemala fue la novela “La hija del puma” (1986), que se adjudicó dos premios, uno en Suecia y el otro a nivel internacional. La novela ha superado los 50.000 ejemplares vendidos en Suecia y ha sido publicada en Noruega, Dinamarca, Alemania, México y, en 2004, en Guatemala. La película “La hija del puma”, basada en la novela, ganó un “Guldbagge” (Escarabajo de Oro) en Suecia y otros premios internacionales. Otros libros que reflejan la vida de los niños y jóvenes en Guatemala son “Gatubarnsmordet” (La muerte de un niño de la calle) y “Felix gatubarn” (Félix, niño de la calle), dos libros cortos que cuentan la vida de algunos niños en la ciudad de Guatemala. En la colección de cuentos cortos “Tigermiraklet” (El milagro del tigre) hay también un cuento de dos niños indígenas de Guatemala adoptados por una sueca. Monica Zak, en los últimos años, se ha interesado mucho por la literatura de la tradición oral; ha reunido cuentos de espanto y aparecidos de varios países, y ha publicado tres libros, en cada uno de ellos hay varios cuentos de América Latina. En el primero, “Spöken från hela världen” (Fantasmas del mundo entero), figuran, por ejemplo, El Sombreron, La Llorona y otros de los nahuales. Los niños suecos, gracias a este libro, conocen los espantos famosos de Guatemala y El Salvador, y hay suecos que juran que El Sombreron se les aparece ahora en las tiendas del sur de Suecia. Este libro, el año 2004, fue publicado en sorani, el dialecto más importante de los curdos. Según comenta el traductor, ahora los niños curdos en Turquía, Irán e Irak, conocen también a El Sombreron, a La Llorona y a los nahuales de los mayas. Las últimas dos colecciones de cuentos de terror son “Vampyrens tunga” (La lengua del vampiro, 2002) y “Den sjungande dödskallen” (La calavera cantante, 2004), con cuentos orales de terror de América Latina, Suecia, Sahara, Somalia y Asia. En 2002. “Vampyrens tunga” (La lengua del vampiro), ganó el premio Bokjuryn (Jurado del libro). 16.000 lectores, entre 14 y 19 años de edad, lo nominaron como el mejor libro del año. Libros publicados en español: “Salve mi selva” (Sitesa, México, 1989), “Paloma y el secreto de las pirámides” (Sitesa, 1991), “La hija del puma” (Sitesa, 1997, y Piedra Santa, Guatemala 2004, con nueva traducción de Ana L. Valdés), “Alex Dogboy” (Coedición Nordan, Uruguay, y Piedra Santa, Guatemala, 2005, traducción de Ana L. Valdés) y “Colin y los monos” (Piedra Santa, Guatemala, 2006). Monica Zak, como productora de documentales, ha filmado en México y en Guatemala un documental sobre el niño Omar Castillo, quien trató de proteger la última selva de México, y en 1995 tres documentales sobre la selva de Ixcan de Guatemala, país al cual retornó con el camarógrafo Bo Öhlén, en 1999, para filmar el trabajo de algunas “brujas”. Este documental, “Las brujas y San Simón”, ganó el Premio de Onda de España como el mejor documental del año. Al mismo tiempo filmaron cinco documentales cortos para niños, “Lucky en la Línea”, sobre la vida de una niña de siete años que vive en La Línea. Luego regresaron para filmar tres

documentales más sobre la vida de algunos niños indígenas de Todos Santos y dos sobre niños mexicanos que ayudan a los científicos a proteger las tortugas marinas. Monica Zak nació en Dresden, Alemania, en 1939, de madre sueca y padre Checoslovaco. La pequeña familia logró salir de Alemania para evitar la Segunda Guerra Mundial. Creció en Örebro, donde culminó el bachillerato. Después se mudó a Estocolmo, donde estudió periodismo en la Universidad y empezó su vida profesional. Entre 1994 y 2003 fue miembro de Svenska Barnboksakademin (Academia Sueca de la Literatura Infantil y Juvenil). Actualmente vive en Estocolmo, está divorciada y tiene un hijo.

LOS MOMENTOS EN LOS QUE LA HUMANIDAD ESTUVO AL BORDE DE LA TERCERA GUERRA MUNDIAL http://tecnologamilitar.blogspot.mx/2013/08/los-momentos-en-los-que-la-humanidad.html El Gobierno británico desclasificó un borrador del discurso que la reina Isabel II tendría que pronunciar a la nación para llamarla a defender sus libertades en caso de estallar la Tercera Guerra Mundial. El documento ponía los primeros días de marzo de 1983 como la fecha del inicio de la guerra nuclear entre los países de Pacto de Varsovia y la OTAN . A continuación les recordamos los momentos más tensos en la historia de la humanidad que pusieron al mundo al borde de la Tercera Guerra Mundial. La crisis de Suez (1956-1957) En julio de 1956 Egipto anunció la nacionalización del canal de Suez. Francia, el Reino Unido e Israel, en respuesta, formaron una alianza militar para quedarse con el control sobre el canal. En noviembre del mismo año la Asamblea General de la ONU demandó de la alianza acabar con las acciones militares y evacuar sus tropas de las tierras egipcias. La URSS, por su parte, amenazó con usar "modernas armas de destrucción" contra Londres y París si no retrocedían. EE. UU., ante el temor de una guerra global, amenazó con sanciones económicas contra la alianza. En diciembre de 1956 Francia y el Reino Unido finalizaron la retirada de sus tropas y en marzo de 1957 Israel devolvió a Egipto las tierras que había ocupado durante la campaña. La crisis de Berlín (1961) En 1958 la URSS mediante un ultimátum exigió de los aliados desmilitarizar el Berlín occidental y retirar sus fuerzas armadas. Tras una serie de negociaciones fallidas, la URSS revocó el ultimátum, pero continuó instando a Alemania Oriental a reforzar el control sobre la frontera. La crisis culminó en agosto de 1961, con la construcción del muro que dividió la ciudad en dos, imposibilitando toda conexión entre ambos lados de la capital. Pero ninguno de los dos bloques estaba dispuesto a ceder zonas de influencia: la URSS y EE.UU. suspendieron temporalmente la desmovilización y mandaron a Berlín tropas adicionales. La confrontación continuó ' hasta 'el incidente del Checkpoint Charlie' (uno de los pasos fronterizos del Muro de Berlín), cuando tanques soviéticos y estadounidenses pasaron allí una noche enfrentados con munición pesada. El 28 de octubre por la mañana la Unión Soviética retiró sus tanques, EE. UU. hizo lo mismo.

La crisis de los misiles (1962) En 1962 a través de sus aviones Lockheed U-2 EE.UU. descubrió la instalación de bases misilísticas soviéticas en Cuba, lo que desató la llamada Crisis de los misiles cubanos. Washington demandó de la URSS impedir el ingreso de nuevas armas a la isla y desmantelar las bases existentes, para lo cual llevó a cabo el bloqueo de las costas cubanas. El momento de máxima tensión se vivió el 27 de octubre de 1962, cuando quedó derribado uno de los U-2 estadounidenses que sobrevolaba el cielo cubano, mientras que otro U-2 estuvo a punto de estar interceptado sobre el territorio ruso de Siberia. El mismo día un grupo de destructores estadounidenses rodearon un submarino soviético en las proximidades a Cuba y un avión lanzó proyectiles sobre él. Según la parte soviética, el comandante del submarino estaba a punto de dar la orden de responder con un torpedo nuclear, pero dos oficiales le convencieron que no lo hiciera. Finalmente, el submarino transmitió un mensaje donde pidió dejar de hacer provocaciones. El 28 de octubre Moscú y Washington acordaron acabar con la crisis. 'Star Wars' (el 9 de noviembre de 1979) El 9 de noviembre de 1979 los ordenadores de Norad (Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial) mostraron en sus pantallas que la URSS había empezado un ataque nuclear de plena escala. Washington no intentó comunicarse a través de la línea roja con la URSS para esclarecer la situación. Según testigos, dentro reinaba un pánico absoluto, fue emitida la alerta máxima. Sin embargo, al verificar los datos de radares, se dieron cuenta de que ningún sistema mostraba lanzamientos. Resultó que activaron por error un programa que servía para entrenar las reacciones en caso de un ataque nuclear en una computadora que estaba de guardia. El año negro (1983) Con el inicio de la campaña militar de la URSS en Afganistán en diciembre de 1979, la guerra fría tuvo un nuevo impulso. El 8 de marzo de 1983 el entonces presidente de EE. UU. Ronald Reagan tachó a la Unión Soviética de "imperio del mal" y ordenó establecer en Europa Occidental misiles de crucero, como respuesta a los misiles soviéticos con ojivas nucleares instalados en Europa Oriental. El 1 de septiembre de 1983 los cazas soviéticos derribaron un avión de pasajeros Boeing 747-200 de la aerolínea de Corea del Sur que viajaba de Nueva York a Seúl cuando sobrevoló territorio soviético restringido. El incidente tensó las relaciones entre Estados Unidos y la Unión Soviética. La Administración Reagan respondió con suspender la actividad de todas las aerolíneas soviéticas en EE. UU. y rompió varios contratos comerciales. El 26 de septiembre de 1983 un satélite soviético dio la alarma: cinco misiles balísticos intercontinentales habían sido lanzados desde la base de Malmstrom (Montana, EE. UU.) y en 20 minutos alcanzarían la URSS. A pesar de recibir la alarma, el oficial encargado, Stanislav Petrov , bajo su responsabilidad personal, no avisó a nadie ya que concluyó que una guerra nuclear no podía empezarse con solo cinco misiles. Medio año después se supo que habían sido los rayos del sol los que provocaron la alarma. En febrero del 2013 Petrov recibió el premio de Dresde de la Paz . Entre los días 2 y 11 de noviembre de 1983 la OTAN llevó a cabo ejercicios militares en Europa Occidental.

El carácter realista del ejercicio, junto al deterioro de las relaciones entre EE. UU. y la URSS y con la llegada de los misiles nucleares Pershing II a Europa, llevó a Moscú a creer que se trataba de preparaciones secretas para un genuino primer golpe nuclear. En respuesta, los soviéticos prepararon sus fuerzas nucleares y las unidades de aire situadas en la República Democrática Alemana y Polonia en estado de alerta. 'Ataque científico' (el 25 de enero de 1995) El 25 de enero de 1995 un grupo de científicos lanzaron el mayor misil meteorológico jamás existente, Black Brant XII, desde la isla noruega de Andøya, para observar las auroras boreales. Noruega había informado a la URSS sobre sus planes del lanzamiento, pero, como suele hacerse en estos casos, mencionó solo la fecha y no la hora. La trayectoria del misil y sus características físicas hicieron a Moscú creer que era un misil balístico nuclear Trident, lanzado desde un submarino estadounidense. Como resultado, Moscú puso a sus fuerzas nucleares en alerta. El entonces presidente Borís Yeltsin , según confesó luego, recurrió a 'la valija nuclear' de Rusia, dispositivo que almacena los códigos para activar el arsenal atómico. La alerta fue eliminada cuando los radares mostraron que el misil había cambiado la trayectoria. Según comentan varios historiadores, en realidad los militares rusos sabían que no se podía tratarse de un ataque nuclear, pero querían mostrar al presidente la capacidad de sus especialistas a movilizarse bien en caso de haber uno. Terrorismo Varios analistas opinan que la Tercera Guerra Mundial está en marcha desde el 11 de septiembre del 2001 y que es una guerra global contra el terrorismo . Confrontación israelí-iraní En junio del 2008 los medios israelíes, citando a varias fuentes en los servicios de inteligencia del país, filtraron que Irán está preparando un ataque contra el complejo nuclear, Dimona, con 12 misiles nucleares que tiene a su disposición. El Gobierno israelí respondió con retórica bélica, pero se abstuvo de acciones ofensivas concretas. Cabe destacar que Teherán en numerosas ocasiones insistió en que posee misiles capaces de borrar el estado hebreo de la faz de la tierra. Tel Aviv, por su parte, comunica que no permitirá que Irán obtenga armas nucleares y que está dispuesto a emprender un ataque preventivo en su contra, aunque fuese una operación independiente, sin apoyo de EE. UU. Según analistas, en caso de estallar un conflicto militar entre Israel e Irán, involucraría no solo a toda la región, sino a todo el mundo y tendría unas consecuencias catastróficas. Aires de guerra en la península coreana (2013) El 29 de marzo del 2013 Corea del Norte anunció que las relaciones en la península coreana habían entrado en estado de guerra y resolverían los asuntos con el Sur según las normas de guerra. A pesar de varios intentos de negociaciones y una reacción drástica por parte de la comunidad internacional, Pyongyang no se retracta de su retórica bélica . http://actualidad.rt.com

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MÉXICO CEDE SUS BOSQUES Y SELVAS A REDD+ 4. agosto, 2013 Elva Mendoza @elva_contra

D, P, Portada, Semana

http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2013/08/04/mexico-cede-sus-bosques-selvas-redd/ El gobierno mexicano prepara la incorporación de 138 millones de hectáreas (el 70 por ciento del territorio nacional) al mecanismo internacional Redd+. Aunque la estrategia se encuentra aún en la etapa de discusión y formalmente se someterá a consulta hasta 2014, el país ya recibió 33.8 millones de dólares de dos fondos del Banco Mundial: el Forest Carbon Partnership Facility y el Programa de Inversión Forestal. Con ello, se comprometió a concluir la estrategia y a avanzar por 5 años en las “acciones tempranas” de la Redd+. La Conafor, encargada de la ejecución del proyecto, celebra la “vocación” de todas las áreas naturales protegidas y reservas naturales mexicanas para incorporarse al mecanismo. Asegura que nada se impondrá a las comunidades, pues se realizarán consultas y los campesinos recibirán recursos económicos. Se prepara la usurpación de territorios más grande de todos los tiempos, considera Red Indígena

México cuenta con, al menos, 33.8 millones de dólares para discutir la Estrategia Nacional Redd+ y hacer funcionar pruebas piloto en cinco estados de la República. Los recursos, provenientes de dos fondos multilaterales de los que el Banco Mundial es fideicomisario, comprometen al país en la ejecución del mecanismo de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación Evitada (conocida como Redd+) sobre las áreas forestales de todo el país. Con ello, consolida el acceso al financiamiento internacional y su participación activa en el mercado de bonos de carbono. El gobierno federal –a través de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), organismo público descentralizado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales– trabaja desde 2010 en el documento rector de la Estrategia Nacional de Redd+. El último borrador que aún se discute, fechado en noviembre de 2012, pretende ser llevado a consulta pública en 2014, no obstante que se espera que Redd+ esté en operación hasta 2020 sobre la totalidad de las áreas forestales mexicanas, incluidas aquellas que se encuentran bajo alguna categoría de protección. Los recursos son utilizados para el diseño de la Estrategia y pruebas piloto o acciones tempranas Redd+ en cinco estados de la República: Jalisco, Campeche, Quintana Roo, Yucatán y Chiapas. Redd+ es un planteamiento de los países integrantes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y tiene como objetivo reducir la emisión de gases de efecto invernadero por medio de la conservación de bosques o bien la restauración de las áreas forestales que han sido degradadas. Se diseña frente a la crisis climática para otorgar compensaciones económicas, por parte de los países del Norte que tienen compromisos de reducción de emisiones en el Protocolo de Kioto, a los países del Sur para mantener en pie sus bosques. Redd+ parte de la idea de que los bosques son sumideros de carbono al capturar uno de los principales gases de efecto invernadero, el dióxido de carbono (CO2), identificado por la Convención como la principal causa del calentamiento global.

La deforestación, degradación o quema del bosque, permite que se libere el carbono como CO2 o como metano (CH4), lo que contribuye al cambio climático. Es por esto que el mecanismo financia proyectos que evitarían que eso suceda. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura calcula que los ecosistemas forestales del mundo almacenan alrededor de 289 gigatoneladas (Gt) de carbono. Si se considera el conjunto del carbono almacenado en la madera muerta, la hojarasca y el suelo, la cantidad es mayor que todo el carbono presente en la atmósfera: 652 Gt.

México con potencial en Redd+ En el documento que se prepara, la Conafor califica a México como un país con potencial dentro del programa Redd+. De la superficie total del territorio nacional (196.4 millones de hectáreas), el 70 por ciento está cubierta por ecosistemas forestales (138 millones de hectáreas) y el resto corresponde principalmente a zonas con agricultura, ganadería y áreas urbanas (29.7 por ciento). Aunque Sergio Graff, coordinador general de Producción y Productividad de la Conafor y secretario del Comité Técnico Consultivo Redd+ (CTC-Redd+), reconoce en entrevista que no existe una evaluación nacional detallada de los diversos procesos de degradación forestal del país y que las causas son múltiples, como la tala ilegal, los incendios forestales o los subsidios gubernamentales para el desarrollo de actividades pecuarias, frutícolas o agroenergéticas, afirma que “la mayor parte del problema ligado a la deforestación y a la degradación está relacionado con las actividades agropecuarias en el medio rural”. Los bosques y selvas mexicanas se encuentran entre los primeros 24 del mundo con mayor volumen de existencias de carbono en la biomasa forestal viva. “Para 2010 se calcularon en 2 mil 43 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalentes [tCO2e] con un promedio de 32 toneladas por hectárea”. Se aspira a que en 2022 México sea un sumidero neto. Además, con este mecanismo, las autoridades mexicanas ven en las 174 áreas naturales protegidas existentes nuevas oportunidades. Para Paloma Neumann, de la Campaña de Bosques y Selvas de Greenpeace México, Redd+ debiera aplicarse prioritariamente en las zonas donde se detecte que haya emisiones de gases de efecto invernadero por deforestación o degradación. “Se supone que si tienes un Área Natural Protegida ya estás conservando y se está dando financiamiento para conservar ese bosque; ¿por qué se necesita financiamiento para reducir emisiones en un área que se supone ya está conservada?”. —¿No basta con que ya estén bajo alguna categoría de protección? –se le pregunta a Sergio Graff. —Aunque tengan un decreto están sujetas a presiones de actividades porque la mayor parte de la superficie es propiedad de ejidos y comunidades y hay actividades económicas. Esta Estrategia también coadyuva a que las actividades económicas sean compatibles con la conservación. Según el Convenio de Diversidad Biológica, alrededor del 15 por ciento del carbono se encuentra almacenado en las áreas protegidas del mundo, por lo que el manejo efectivo y la expansión de estas zonas de conservación pueden contribuir a la mitigación del cambio climático, reduciendo las emisiones presentes y futuras y protegiendo los sumideros actuales. Territorios indígenas

En México, el 58 por ciento de los bosques son propiedad de los pueblos indígenas y campesinos que los habitan bajo tenencia ejidal o comunal, indican cifras del Centro de Estudios para el Cambio en el Campo de México (Ceccam). Como una conquista de la Revolución Mexicana de 1910, la mayor proporción de los bosques y selvas del país son propiedad de las comunidades forestales y de los pueblos indígenas. Dentro de la Estrategia se subraya que el 26.2 por ciento de la superficie de las áreas naturales protegidas federales y estatales del país se encuentran en territorio de pueblos indígenas: más de 2 millones de hectáreas. Sin embargo, tal como lo indica el Ceccam, los pueblos indígenas y las comunidades rurales no cuentan con títulos formales de propiedad de tenencia sobre estos territorios ni están reconocidos sus derechos sobre los bosques. La Organización de las Naciones Unidas ha expresado que para el correcto funcionamiento de Redd+ es necesario establecer una posesión clara de la tierra. Ante este hecho, según la Red Indígena Ambiental Internacional, Redd+ prepara la mayor usurpación de tierras de todos los tiempos. “El riesgo para las comunidades de los bosques es el desalojo de la tierra, su privatización a favor de las corporaciones y las restricciones de uso de su propio territorio, aunque dependen de este hábitat para garantizar su existencia como sociedades y culturas distintas”. Ejemplo de ello es el programa piloto Redd+ que el exgobernador Juan Sabines Guerrero puso en marcha en 2011 sobre 614 mil hectáreas de selva chiapaneca, y que a decir de la Conafor no forma parte de sus acciones tempranas. Tal como lo señaló públicamente Juan Sabines, desde que Redd+ llegó a la selva, 100 comunidades han sido desplazadas de su territorio. En enero de 2011, durante la entrega de recursos de Redd+, el exgobernador dijo ante los comuneros “beneficiados” que de los 170 pueblos que permanecían invadiendo alguna reserva, sólo quedaban siete. Los pueblos en resistencia están dentro de la Reserva de la Biósfera Montes Azules, área declarada en 1978, que se extiende 321 mil hectáreas sobre el territorio chiapaneco. Ahí se refugian del hostigamiento y de la represión militar y paramilitar de la que son objeto. Aunque la prueba piloto en Chiapas fue presentada como un caso de “éxito”, el 8 de julio pasado Isaí López dio cuenta en una nota de prensa en El Heraldo de Chiapas de la suspensión del proyecto del exgobernador Sabines. “Fue un fracaso. Esa estrategia ya está cancelada, no se tuvieron los resultados que se anunciaron”, dijo Carlos Morales Vázquez, secretario del Medio Ambiente e Historia Natural de la recién llegada administración.

Consulta Pública Las salvaguardas ambientales y sociales son parte de los principios adoptados por México. Provienen de los Acuerdos de Cancún de la CMNUCC. Entre otros, establecen el cumplimiento al consentimiento libre, previo e informado de las comunidades rurales e indígenas en todos aquellos aspectos de Redd+ que incidan o puedan afectar sus territorios, bienes, derechos individuales o colectivos. Aunque la Estrategia incluye esta salvaguarda, Edmundo del Pozo, investigador de Fundar, Centro de Análisis e Investigación, AC, apunta que éste es uno de los temas críticos de la Estrategia.

“Nuestro principal señalamiento es el vacío que hay con relación con el enfoque de derechos humanos y derechos de pueblos indígenas. No estamos en contra de que se recojan las salvaguardas, pero el instrumento normativo de protección a los derechos de las personas afectadas por Redd+, sobre todo a los pueblos indígenas, deben ser los derechos humanos, y las salvaguardas deben ser una normativa complementaria”. Explica el investigador que el derecho al consentimiento que recupera la Estrategia es limitado y por tanto no es verdadero, porque no reconoce el derecho al veto. “Un derecho al consentimiento que no tienen derecho al veto es un falso derecho al consentimiento”. Frente a ello, el Grupo de Trabajo del Protocolo de Consulta –conformado por Fundar, Centro de Análisis e Investigación, AC; Organización de Ejidos Productores Forestales de la Zona Maya, SC; Red Indígena de Turismo de México, AC; Red Mexicana de Organizaciones Campesinas Forestales, AC; y Sakbe, Comunicación y Defensa para el Cambio, AC– elaboró, dentro del Consejo Técnico Consultivo, un Protocolo de Consulta y Participación para la Estrategia Nacional de Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación Plus. Remarca el investigador que la necesidad de hacer el Protocolo surgió de la falta de una ley de consulta de pueblos indígenas. No obstante, el documento no tiene carácter vinculante. “Aún cuando se construyó participativamente y en el marco de la institucionalidad, no se puede decir que tenga una fuerza obligatoria para las autoridades. No es una ley de consulta ni un reglamento”. Expresa Edmundo del Pozo que una de las preocupaciones es que dentro del documento rector no se retomen los insumos que se colocaron dentro del Protocolo, “no aparece la obligación de consulta del Estado a los pueblos y comunidades indígenas”. Cuestionado al respecto, Sergio Graff asegura que no hay necesidad de incorporar el tema a la Estrategia Nacional, porque lo único que marcará ésta son los lineamientos generales. “No sé por qué tiene que ser vinculante. La consulta es una obligación”. Agrega que “las organizaciones hicieron una propuesta de protocolo que la autoridad está considerando”. —¿Ustedes tienen contemplado el derecho de los pueblos al consentimiento? —Claro. Sí. La Estrategia va a contemplar que cualquier acción ligada a un mecanismo Redd+ deberá tener consentimiento previo, libre e informado. No va a haber ninguna acción en la que no esté de acuerdo el dueño. Si en una comunidad indígena se quiere implementar [sic] una acción Redd+ tendrá que buscarse el consentimiento de la comunidad antes de hacerlo. —¿Con el derecho de veto? —En su comunidad sí, por supuesto. Lo que no pueden hacer es vetar una Estrategia Nacional, nadie. —Localmente sí… —Claro. Si la comunidad no quiere que haya un incentivo adecuado para que maneje sus bosques o no quiere un apoyo para fortalecer su organización, un apoyo para desarrollar proyectos integrales; si la comunidad no quiere, puede vetar la acción. Pero lo que busca la Estrategia es que todos los programas públicos tengan un mejor impacto a favor de la comunidad y de sus recursos. Yo no creo que nadie quiera oponerse a eso. —Pero habría que preguntarles…

—Claro. Al momento que uno quiera entrar a su comunidad se les tiene que preguntar. Por supuesto. Octavio Rosas Landa, catedrático en la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México e integrante de la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales, recalca que los bienes, propiedad de comunidades, han sido conservados y protegidos a pesar de las políticas de gobierno, pero que ahora, frente a la crisis financiera y ambiental de escala global, ésta última pretende ser paliada por medio de mecanismos de mercado que no van a solucionar el problema. “¿Por qué presionar a los campesinos y ejidatarios a que acepten este tipo de convenios si son ellos quienes más contribuyen a que el calentamiento global no se agrave? Y si no aceptan, ¿son ellos quienes no quieren detener el calentamiento global?”, pregunta.

Acciones tempranas Como parte del proceso de preparación para la próxima aplicación de la Estrategia, se han puesto a prueba acciones tempranas en el país que servirán de ejemplo para la construcción y posterior aplicación de la Estrategia Nacional. Una de ellas es en la región de las Cuencas Costeras de Jalisco, donde se contabilizan 10 áreas naturales protegidas, además de ser zona prioritaria para la conservación del jaguar y una de las de mayor importancia para la conservación de aves migratorias de América del Norte. Otra de las acciones se realiza en el Corredor Biológico Mesoamericano, que incluye a Campeche: zona de influencia de Calakmul; Yucatán: Sierrita de Ticul; y Quintana Roo: municipios de Bacalar, José María Morelos, Othón P Blanco y Felipe Carrillo Puerto.

Y por último, acciones tempranas en 5 millones de hectáreas que abarcan 57 municipios del estado de Chiapas, así como 16 Áreas Naturales Protegidas en Corredores Biológicos y la Selva Lacandona. Además, de acuerdo con Sergio Graff, se espera próximamente iniciar proyectos piloto Redd+ en el Estado de México y en Oaxaca, aunque aún no se define la zona. Sobre los resultados, Graff no tiene noción. “Es un proceso que apenas acaba de empezar, pero por ejemplo en el caso de la [Selva] Lacandona se ha tenido un impacto positivo reduciendo la deforestación. En algunos lugares se registran tasas de 7 por ciento anual y ha bajado a menos de 1 [por ciento]”. —¿Cuántas de estas acciones han implicado la venta de bonos de carbono? –se le pregunta. —No. Ninguna. Como está en un proceso de preparación, los mecanismos todavía no están definidos en los acuerdos internacionales. Nada más se trabaja a través de recursos que se asignan a estos programas. El mercado de carbono De acuerdo con el documento Redd+ y los territorios indígenas y campesinos, del Centro de Estudios para el Cambio en el Campo Mexicano (Ceccam), Redd+ es un instrumento de la economía verde y pretende financiar la captura de carbono que realizan los bosques, a partir de la emisión de certificados o bonos por captura de carbono.

A partir de que se determinó en el Protocolo de Kioto el límite sobre la cantidad de gases contaminantes que pueden ser emitidos a la atmósfera, a los países industrializados se les permite financiar proyectos de captura o reducción de estos gases en países en vías de desarrollo. De este modo, las empresas que necesiten aumentar las emisiones por encima de su límite compran bonos (certificados) que les representan el derecho a emitir una cantidad determinada de residuos. Con esto, el comprador paga por contaminar, mientras que el vendedor se ve compensado al evitar la deforestación, la degradación y la tala. Al no obligar a las empresas contaminantes a reducir sus emisiones a la atmósfera, el esquema es objeto de la oposición de organizaciones como Vía Campesina, Red Indígena Ambiental, el Ceccam y la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales. La Estrategia Nacional no impide ni acota la venta de bonos de carbono, expone abiertamente que el mercado voluntario puede representar una fuente complementaria de financiamiento. Aunque Sergio Graff aclara que en la Estrategia la venta de bonos de carbono es una posibilidad, dependerá de cómo se establezca el mecanismo a nivel internacional. “Todavía no se sabe si va a haber un mercado de carbono por reducción de emisiones, pero lo que sí es que va a haber transferencias económicas teniendo resultados de disminución de emisiones de carbono”.

Financiamiento La Estrategia Redd+ posibilita el financiamiento de fuentes públicas, privadas, nacionales e internacionales. Así como el uso de fideicomisos para hacer factible la movilización de recursos basados en resultados climáticos y la distribución de beneficios y estímulos a los dueños de terrenos forestales, comunidades indígenas y rurales.

En la Visión de México en REDD+, el documento que antecedió al borrador de la Estrategia, se lee: “Los fideicomisos nacionales, regionales o locales jugarán un papel como operadores protagónicos que tendrían la capacidad de administrar y desembolsar de manera eficiente y oportuna los fondos para promover Redd+ y dar seguimiento y evaluar el ejercicio de presupuestos con transparencia, a partir de esquemas confiables de monitoreo y verificación”. Y agrega: “los fideicomisos podrían ser públicos, privados o mixtos y mantenerse desde fondos multilaterales, mercados de carbono –en su momento– u otros recursos fiscales etiquetados que acogerían la participación de gobiernos, empresas, propietarios de tierras (ejidos, comunidades, individuos, empresas), organizaciones de la sociedad civil e intermediarios financieros, entre otros”. En los Acuerdos de Cancún los países desarrollados adoptaron formalmente el compromiso de proveer “financiamiento de inicio rápido” a los países en desarrollo durante el periodo 2010-2012 para acciones de mitigación (incluyendo Redd+), adaptación, desarrollo y transferencia de tecnología y creación de capacidades, previamente mencionado en el Acuerdo de Copenhague, donde se comprometieron a movilizar recursos para 2020 y cubrir las necesidades de los países en desarrollo en el contexto de acciones de mitigación significativas y de transparencia en su ejecución. Estos fondos pueden provenir de fuentes públicas, privadas, bilaterales, multilaterales y alternativas. En el caso de México, la Ley General de Cambio Climático instruye la creación del Fondo para el Cambio Climático con el objeto de captar y canalizar recursos financieros públicos, privados, nacionales e internacionales para apoyar acciones que enfrenten el cambio climático.

La Estrategia plantea que parte del presupuesto del fondo se habrá de constituir con los recursos derivados de su actividad en el mercado de bonos de carbono. Refiere Sergio Graff que, hasta ahora, México cuenta con 33.8 millones de dólares para las etapas preparativas de Redd+; de éstos, 3.8 millones se derivan del Forest Carbon Partnership Facility: “Apenas se va a firmar el apoyo para preparación; son 3.8 millones de dólares que se utilizan para la elaboración de la Estrategia, pero sobre todo para la consulta”; y un “donativo” de 30 millones de dólares para ejercerse en 5 años del Programa de Inversión Forestal, destinados a programas especiales en las acciones tempranas de Redd+. “No es mucho dinero pero sirve para hacer los trabajos de innovación. Ese dinero está en un fondo internacional y conforme se van aplicando los recursos, México tiene reembolsos; no se los entregan todos al país”, aclara el funcionario. Según se lee en la Estrategia, el financiamiento para las acciones tempranas en Jalisco conjuntará recursos de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), de la Unión Europea a través del proyecto de Facilidad para la Inversión en Latinoamérica (LAIF, por su sigla en inglés), del gobierno de Jalisco y de la Conafor. Además, se cuenta con tres fideicomisos donde es posible recibir recursos públicos del gobierno federal, estatal, de organismos de la sociedad civil y organismos privados. En la Península de Yucatán, señala la Estrategia Nacional Redd+, habrá financiamiento de la Unión Europea proveniente del LAIF a través de una acción conjunta con la AFD, la AECID y la Conafor, para la construcción de mecanismos de gobernanza a nivel local; financiamiento de los gobiernos de los estados de Yucatán, Campeche y Quintana Roo, así como de Conabio, The Nature Conservancy, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y la Conafor a través del ProÁrbol y los lineamientos del Programa Especial para la Conservación, Restauración y el Manejo Sustentable de los Recursos Forestales de la Península de Yucatán. En Chiapas, a partir de 2010, la Conafor promueve el Programa Especial para la Conservación, Restauración y Aprovechamiento Sustentable de la Selva Lacandona, que integra las modalidades de apoyo económico en agroecología, regeneración de selvas, restauración de riveras y arroyos, reforestación diversificada, pago por servicios ambientales, estudios forestales y silvicultura comunitaria. Mediciones y verificación Para monitorear, medir y evaluar el desempeño de Redd+, México habrá de desarrollar un sistema verificable de medición y reporte en el que deberá establecer la cantidad de emisiones y remociones de gases de efecto invernadero para una región dada y para un periodo determinado (niveles de referencia). Su definición será apoyada por el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques del Banco Mundial y por Noruega. El sistema de monitoreo mexicano deberá ser de bajo costo. “Mientras más costoso sea, más oneroso será para el país desarrollar un mecanismo de Redd+ y menores los beneficios que se obtendrán”, apuntan las autoridades en Visión de México sobre Redd+. Hacia una estrategia nacional. De acuerdo con el mismo documento, México ha participado activamente en las principales iniciativas multilaterales relacionadas con mediciones y verificación para Redd+, incluidos el Fondo Cooperativo para el Carbono de los Bosques y la iniciativa de rastreo de carbono forestal del Grupo de Observación de la Tierra. Asimismo, el país ha desarrollado trabajos bilaterales con Canadá sobre el modelo de contabilidad del carbono; con Alemania, para el uso de tecnologías de radar, y con Estados Unidos y Finlandia, para fortalecer el inventario forestal.

Fuente: www.contralinea.com.mx Periodismo de investigación http://contralinea.info/archivorevista/index.php/2013/08/04/mexico-cede-sus-bosques-selvas-redd/

FANTASÍAS. RESPUESTA AL POST DE ŽIŽEK Noam Chomsky · · · · · 28/07/13 http://www.sinpermiso.info/textos/index.php?id=6200

Hace unas semanas, preguntado de pasada, en el curso de una entrevista oral, por el famoso publicista esloveno Slavoj Žižek, Chomsky realizó una sumaria declaración –transcrita y traducida para SinPermiso por su amiga Julie Wark— en la que manifestaba su total falta de interés por el personaje, a quien, dijo, no podía tomarse en serio. La celebridad eslovena replicó con una de sus espásticas escenificaciones habituales. Esta es la sumaria respuesta de Chomsky. He recibido unas cuantas peticiones de comentario al post “Slavoj Žižek Responds to Noam Chomsky: ‘I Don’t Know a Guy Who Was So Often Empirically Wrong’” (“Slavoj Žižek replica a Noam Chomsky: ‘No conozco a ningún gachó que haya metido tanto la pata empíricamente’”: http://www.openculture.com/2013/07/slavoj-zizek-responds-to-noam-chomsky.html). Lo he leído con cierto interés, esperando aprender algo, y dado el título, descubrir algunos errores a corregir. Los hay, ni que decir tiene, en prácticamente cualquier cosa que llegue a imprenta, incluso en las monografías académicas técnicas, como puede apreciarse leyendo las reseñas que aparecen en las revistas especializadas. Y cuando los descubro o se me informa de su existencia, corrijo los errores. No en este caso, sin embargo. Žižek no encuentra nada, literalmente nada, que sea empíricamente erróneo. Lo que apenas puede sorprender. Cualquiera que se jacte de descubrir errores empíricos y sea mínimamente serio, tendrá que terminar aportando alguna que otra pieza probatoria: citas, referencias, algo. Pero nada hay de eso, lo que tampoco me sorprende. Ya me había tropezado con algunas muestras del concepto zizekiano de hecho empírico y de argumento razonado. Por ejemplo, en el número de invierno de 2008 de la revista cultural alemana Lettre International, Žižek me atribuía a mí un comentario racista que sobre Obama había hecho Silvio Berlusconi. Lo ignoré. Cualquiera que ande al estricote con la ortodoxia ideológica está hecho a ese tipo de trato. Sin embargo, un editor de la revista Harper, Sam Stark, se interesó en el asunto, y lo siguió. En el número de enero de 2009 publicó el resultado de sus pesquisas. Žižek decía que basaba la atribución a mi persona en algo que había leído en una revista eslovena. Maravillosa fuente, si es que existe. Con todo y con eso –proseguía tan terne—, atribuirme a mí un comentario racista sobre Obama no era una crítica, porque yo habría hecho esas observaciones como “una caracterización enteramente admisible en nuestra lucha política e ideológica”. Dejo a otros la decodificación de eso. Cuando el periodista/activista esloveno Igor Vidman le preguntó al respecto, Žižek le respondió que ya había discutido el asunto por teléfono conmigo y que yo estaba de acuerdo con él: http://www.vest.si/2009/01/31/zizkov-kulturni-boj/. Pura fantasía, huelga decirlo. No es el único caso. Y ahora, en efecto, sus comentarios vienen a suministrarnos un buen ejemplo de sus prácticas. De acuerdo con él, yo sostengo “que no necesitamos ninguna crítica de la ideología”, es decir, que no necesitamos aquello a lo que yo he venido dedicando enormes esfuerzos durante muchos años. ¿Sus pruebas? Se lo habría oído decir a alguien que habría hablado conmigo. Pura fantasía, de nuevo, y otro indicio de su concepto de hecho empírico y discusión racional. No podía yo, así pues, esperar gran cosa.

El único ejemplo de Žižek es este: “Me acuerdo de cuando [Chomsky] defendía esta manifestación de los Jmeres Rojos. Y escribió unos cuantos textos diciendo: ‘No, eso es propaganda occidental. Los Jmeres Rojos no son tan terribles’. Y cuando luego se ve obligado a admitir que los Jmeres Rojos no eran los tipos más amables del Universo, etc. etc., su defensa me resultó bastante chocante: ‘No, con los hechos de que disponíamos en ese momento, yo llevaba razón. Entonces no sabíamos todavía lo suficiente, bueno… ya sabe’. Pero yo rechazo totalmente esta forma de razonamiento”. Vayamos a los hechos empíricos que Žižek encuentra tan aburridos. Žižek no cita nada, pero se refiere presumiblemente a un trabajo mío de los 70, coescrito con Edward Herman (Political Economy of Human Rights [Economía política de los derechos humanos]), así como a Manufacturing Consent [La producción de consenso], en donde, una década después, repasábamos hechos y respondíamos al tipo de objeciones y críticas que aparentemente tiene en mente Žižek. En PEHR habíamos elaborado con muchas ilustraciones la distinción de Herman entre víctimas dignas e indignas. Las víctimas dignas son aquellas cuyo destino puede atribuirse a algún enemigo oficial; las indignas son las víctimas de nuestro propio estado y de los crímenes de éste. Los dos primeros ejemplos en los que nos centrábamos eran la Camboya bajo los Jmeres Rojos y la invasión indonesia del Timor oriental por la misma época. Se dedicaba un largo capítulo a cada caso. Son ejemplos muy elocuentes: atrocidades comparables, en la misma región, en el mismo momento. Las víctimas de los Jmeres Rojos son “víctimas dignas”, cuyo destino ha de atribuirse a un enemigo. Los timoreses son “víctimas indignas”, porque nosotros somos los responsables de su destino: la invasión indonesia fue aprobada por Washington y plenamente apoyada luego, hasta en sus peores atrocidades, las cuales, aunque calificadas luego por una investigación posterior de NNUU como “genocidas”, estaban ya ampliamente documentadas en ese momento. Nosotros mostrábamos que subyacía en ambos casos una mentira de tan extraordinaria escala, que habría impresionado al mismísimo Stalin. Pero de direcciones opuestas: en el caso de los JR, una enorme falsificación de supuestos crímenes, incluyendo la reconfiguración de las acusaciones tras demostrarse falsas, y la intencionada ignorancia de las pruebas más creíbles, etc. En el caso del TO, en cambio, silencio, por lo general, o negación de la evidencia. Los dos casos son distintos, huelga decirlo. El caso del TO es incomparablemente más significativo, porque podría haberse puesto fácilmente fin a las atrocidades, como se hizo finalmente en septiembre de 1999, simplemente con una indicación de Washington de que el juego había terminado. En cambio, nadie tenía una propuesta sobre lo que podía hacerse para poner fin a las atrocidades de los JR. Y cuando una invasión vietnamita terminó con ellas en 1979, los vietnamitas fueron duramente condenados por nuestro gobierno y nuestros medios de comunicación. Y castigados por ello: los EEUU empezaron de inmediato a apoyar diplomática y militarmente a los JR. Llegados a ese punto, cesaron prácticamente los comentarios: los camboyanos se habían convertido en víctimas indignas, atacadas por sus torturadores JR sostenidos por Washington. Análogamente, habían sido víctimas indignas antes de la toma del poder por los JR en 1975, porque padecieron el asalto de los EEUU en el bombardeo más intenso de la historia –equivalente a todo el bombardeo aliado en el teatro bélico del Pacífico durante la II Guerra Mundial— dirigido contra una indefensa sociedad rural siguiendo órdenes transmitidas por Henry Kissinger: “a todo lo que vuele, a todo lo que se mueva”. Consiguientemente, poco se dijo sobre su miserable destino entonces, y hasta el día de hoy. Los especialistas en Camboya sostienen que ha habido más investigación del período entre abril de 1975 y 1978 que del resto de toda su historia. Nada sorprendente, dada la utilidad ideológica del sufrimiento de las víctimas dignas, otro de los asuntos sobre los que reflexionábamos. En esos libros y en otros logramos reunir una amplia documentación que mostraba como bastante normal la pauta seguida: la Camboya bajo los JR (pero –repárese bien en ese hecho crucial— antes, no luego) y el TO resultaban casos paradigmáticos y particularmente espectaculares. Mostrábamos también que esa pauta resulta imperceptible: dábamos muchos ejemplos y ofrecíamos la obvia explicación.

Lo que escribimos sobre el caso, harto más importante, del TO, entonces y desde entonces, ha sido prácticamente ignorado. Lo mismo puede decirse de lo que nosotros y otros hemos escrito sobre Camboya en los momentos en que eran víctimas indignas, sometidas a ataque estadounidense. En cambio, se ha creado toda una industria, rebosante de histeria, empeñada en descubrir errores en nuestro repaso de los hechos desarrollados en la Camboya bajo los JR y en nuestro tratamiento de esos hechos. Hay que decir que, hasta la fecha, sin éxito. Estoy seguro de que hablo también en nombre de Ed Herman si digo que estamos orgullosos de la recientísima reedición de ese viejo texto, junto con el trabajo, mucho más importante, sobre las víctimas indignas, del mismo modo que nos sentimos felices de revisar los hechos y de responder a la tormenta de críticas una década después No es demasiado sorprendente que no se hayan descubierto errores. Porque hicimos poco más que pasar revista a lo que estaba publicado, dejando muy claro –conforme a la cita de uno de los comentaristas sobre Žižek– que “nuestro principal cometido aquí no es el de establecer los hechos en relación con la Indochina de postguerra, sino más bien el de investigar la refracción sufrida por esos hechos al pasar por el prisma de la ideología occidental, un cometido muy distinto”; y harto más sencillo, todo ha de decirse. Escribimos entonces que no podíamos saber cuáles eran los hechos reales, pero sugeríamos a los comentaristas que se atuvieran a la verdad y prestaran atención al registro documental y a los observadores más calificados, en particular a las conclusiones que citábamos procedentes de la inteligencia del Departamento de Estado, reconocida como la fuente más informativa. Además, el capítulo fue cuidadosamente leído por académicos de primer nivel especialistas en Camboya, antes de ser dado a imprenta. De modo que la falta de errores no es una gran sorpresa. Harto más interesante resulta el hecho de que quienes en nuestros días se hallan totalmente atrapados por la propaganda occidental adhieren religiosamente a la doctrina prescrita: aspavientos de gran indignación respecto a los años de los JR y a nuestro concienzudo escrutinio de la información disponible y de la torrentada falsificacatoria; y silencio sobre los casos mucho más significativos del TO y de la Camboya sometida a los ataques de los EEUU, antes y después de los años de los JR. Los comentarios de Žižek constituyen un caso paradigmático de eso. Como el lector puede fácilmente comprobar, Žižek no ofrece ni un adarme de prueba para sostener sus acusaciones; se limita simplemente a repetir lo que probablemente ha escuchado (o leído por acaso en una revista eslovena…). No menos interesante es que le resulte chocante que nos sirviéramos de los datos accesibles. Él “rechaza totalmente” ese proceder. No es necesario comentar una observación que abona la mala reputación de la irracionalidad. El resto de los comentarios de Žižek no guardan la menor relación con nada que yo haya dicho o escrito, de modo que puedo ignorarlos. Queda la cuestión de por qué este tipo de hueras escenificaciones se toman en serio. Pero la dejaré también de lado. Noam Chomsky es profesor emérito del Departamento de Lingüística y Filosofía del MIT. Universalmente reconocido como renovador de la lingüística contemporánea, es el autor vivo más citado, el intelectual público más destacado de nuestro tiempo y una figura política emblemática de la resistencia antiimperialista mundial.

RAZA, CLASE Y GÉNERO LA INTERSECCIÓN ENTRE REALIDAD SOCIAL Y LÍMITES POLÍTICOS Houria Bouteldja Parti des indigènes de la république

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=172134 Traducido para Rebelión por Rocío Anguiano

Esta intervención, en su forma íntegra, se presentó por primera vez en la universidad de Berkeley el 17 de abril de 2013, en el departamento de estudios étnicos; por segunda vez, el 18 de junio de 2013 dentro del grupo de Trabajo 24 de la Asociación Francesa de Sociología (AFS) “Género, clase, raza. Relaciones sociales y construcción de la alteridad” y, por tercera vez, en el marco de la escuela de verano de Granada consagrada al pensamiento crítico islámico y a las luchas de descolonización, el 21 de junio de 2013. Sin embargo, debemos hacer una puntualización: parte de esta comunicación fue presentada en el 6º Congreso de investigaciones feministas celebrado en Lausana en agosto de 2012. La redacción Quisiera agradecer a la universidad de Berkeley y en particular al departamento de estudios étnicos esta invitación que es para mí un honor. Antes de abordar la noción de interseccionalidad, me gustaría dejar clara una cosa. No hablo aquí desde un punto de vista culturalista, religioso o identitario. Hablo desde una perspectiva materialista y descolonial. Insisto en este hecho porque en Francia expresar un punto de vista crítico sobre el universalismo blanco enseguida se considera culturalista, particularista. Para ilustrar esta afirmación, basta un ejemplo que me han comentado recientemente: Eric Fassin, sociólogo comprometido que trabaja sobre la politización de las cuestiones sexuales y raciales (y que algunos conocen aquí en Berkeley), declaró durante la jornada de estudio “Más allá del matrimonio”, dedicada a la igualdad de derechos y a la crítica de las normas, que mi intervención en el debate [1] (centrada, entre otros temas, en la interseccionalidad) me situaba de facto en la categoría de los “culturalistas” al mismo nivel que los homonacionalistas. Esta valoración, que es al mismo tiempo una acusación y una condena, me hace sonreír por su superficialidad y su simpleza, ya que el carácter materialista de nuestras intervenciones sobre este tema está muy claro para cualquiera que haga el esfuerzo de leernos atentamente. En efecto, nuestro propósito es elaborar un proyecto político a partir de la condición concreta y material de indígenas, no a partir de una determinada ideología. Por eso, no puedo evitar pensar que las acusaciones perentorias de Fassin y de tantos otros son una expresión manifiesta de la resistencia blanca o de la incapacidad para superar el eurocéntrismo. Solo puedo aconsejarles que (re)descubran su propia literatura política y en especial a Foucault que fue el primero en diferenciar “identidad (homo)sexual” y “prácticas (homo)sexuales”. Pero por encima de Foucault están los pensadores, militantes descoloniales del sur que no solo “pueden hablar”, pensar... sino también instruir. Tras esta breve introducción, les propongo que entremos en el fondo de la cuestión. ¿Qué significa para nosotros, Indígenas de la República, la noción de interseccionalidad y, en particular, cuál es su utilidad política, por qué nos debe interesar? Para mí, existen seis razones: 1.- La primera razón es que ese concepto surge de la conciencia en lucha de las mujeres negras y que existe una comunidad de experiencia entre el conjunto de las mujeres de color de Estados Unidos y de Europa. No se puede defender o debatir esta noción sin antes rendir un homenaje a las feministas de color o al black feminism, artífices de un trabajo teórico magistral que a menudo es retomado por el entorno académico que lo despolitiza, lo neutraliza y lo reduce a un objeto de investigación. Creo que, si esa noción teórica ha nacido de las entrañas de las luchas de las mujeres negras en medios racistas, esa teoría es válida a priori y no es necesario esperar a que sea validada por el cuerpo académico blanco para corroborarla. Una vez dicho esto, he de confesar que no conozco suficientemente bien las luchas de las mujeres negras en Estados Unidos para saber cómo han orientado sus luchas políticas a partir de este concepto, es decir, cómo han articulado la opresión dentro de sus organizaciones. Por ello, solo abordaré ese tema desde el contexto francés.

2.- Porque como organización política, debemos valorar la condición de la población que constituye nuestra potencial base social: los sujetos coloniales en Francia. Entre los indígenas, la mitad son mujeres (y existe una opresión de género), la mayoría es pobre y está discriminada (y existe una opresión de clase), hay homosexuales (aunque la mayoría no lo ha reconocido públicamente). 3.- Porque las mujeres árabes, negras, musulmanas, por poner solo el ejemplo del género, sufren la opresión de dos patriarcados (el de los blancos a través de las instituciones y el poder, el de los indígenas a través de la conservación y/o recomposición de las estructuras patriarcales tradicionales). Los dos patriarcados tienen mucho en común, pero también tienen muchos intereses contradictorios. Volveré luego sobre este tema. 4.- Porque hay un feminismo blanco y movimientos LGBT eurocéntricos y hegemónicos. El feminismo blanco, los movimientos LGTB al igual que el patriarcado blanco o el movimiento obrero blanco pueden convertirse en cómplices de políticas reaccionarias y racistas para preservar sus privilegios e intereses blancos. 5.- Porque el feminismo y el movimiento LGBT pueden ser instrumentalizados por el poder independientemente de las posiciones políticas de estos movimientos que, en algunos casos, son antirracistas y anticolonialistas 6.- Por razones estratégicas: cuando se es una organización política, es preciso contemplar las posibles alianzas. Como la probabilidad de encontrar los aliados en la izquierda es evidentemente mayor que la de encontrarlos en la derecha, debemos plantearnos la cuestión de clase, género y orientación sexual y encontrar ahí respuestas o al menos pistas ya que la izquierda blanca, aunque tengo muchas dudas sobre su antisexismo real, se ha apropiado el feminismo como identidad y que esas identidades (anticapitalista, antisexista, antihomofóbica) se presentan como condición para posibles alianzas. Sin embargo, el indígena es precisamente el sujeto político más sospechoso de sexismo y de homofobia porque sus origines culturales (ya sean del África negra, del Magreb o de las Antillas) se consideran retrógrados y contrarios al progreso. Estas son las razones por las que el tema de las opresiones cruzadas —y por lo tanto de la interseccionalidad— nos concierne, en nuestra condición de Indígenas de la República. He de admitir que la conciencia de la interseccionalidad en medios blancos, especialmente entre las feministas, es sin duda un progreso. Me alegro sinceramente del avance de esa conciencia de las opresiones cruzadas y aplaudo todas las iniciativas y contribuciones procedentes del mundo blanco (académico o militante) que se enfrenta a numerosas organizaciones blancas para que se reconozcan las imbricaciones de las opresiones y la necesidad de las luchas autónomas. El verano pasado, por ejemplo, se celebró en Lausana la 6ª edición del Congreso internacional de estudios feministas cuyo tema era “Imbricación de las relaciones de poder: discriminaciones y privilegios de género, clase, raza y sexualidad” en el que participaron feministas blancas y de color como Patricia Hill Collins, Christine Delphy, Sirma Bilge, Zara Ali, que es una feminista musulmana, o incluso Paola Baccheta, aquí presente. Para mí, ese evento supuso un gran momento simbólico, aunque las organizadoras estuvieran lejos de representar al conjunto del feminismo blanco, porque mostraba el surgimiento y/o el desarrollo de una nueva conciencia en Europa donde el racismo se analiza abiertamente como un factor estructurante tanto del feminismo blanco como de la condición de las mujeres de color. Sin embargo, existe un gran PERO, ya que constatar las opresiones cruzadas, teorizarlas y formular a continuación un proyecto político que articule las tres, incluso las cuatro opresiones, son tres etapas que es preciso diferenciar y no confundir. En el contexto francés, entre la primera y la tercera hay un abismo. En cuanto esa noción de articulación penetra en los medios de extrema izquierda, nos plantean principalmente dos cosas: “ ¡Articulad raza, clase y género, incluso orientaciones sexuales!” Como si la evocación de la interseccionalidad tuviera poderes mágicos. Es como si la conciencia de las opresiones cruzadas combinada con las palabras para decirlo bastaran para definir una política y sobre todo para ponerla en práctica.

También nos dicen: “Practicad la separación como hacen las feministas blancas. Practicad la segregación por sexos, excluid a los hombres indígenas”. Frente a lo real y a las luchas concretas, esos “consejos” son de poca utilidad incluso cuando son totalmente sinceros y bienintencionados. Basta con ver el compromiso de las mujeres negras en Estados Unidos y de las mujeres magrebíes en Francia contra la violencia policial y contra la inhumanidad del sistema carcelario para darse cuenta de que ciertas prioridades se establecen de forma espontánea por las propias afectadas y que, a menudo, estas se limitan a articular la raza... con la raza. Evidentemente, este planteamiento es un poco caricaturesco ya que indirectamente las mujeres, cuando actúan por ejemplo contra los crímenes policiales, lo hacen al mismo tiempo por sus propios intereses de mujeres y de proletarias. Las mujeres indígenas en Francia no necesitan actuar como feministas declaradas o como anticapitalistas declaradas. Actúan por su interés inmediato que está siempre ligado de forma indirecta a su interés como proletarias, mujeres e indígenas. Por lo tanto, no se les puede reprochar que dejen a un lado una lucha estrictamente feminista que conllevaría luchar contra el sexismo, por la igualdad de hombres y mujeres, a favor del aborto, contra la violencia conyugal, cuando están asfixiadas por las urgencias sociales, de precariedad, paro, violencia policial, educación de sus hijos o confrontadas a las discriminaciones que sufren sus hijos de racismo cotidiano. Así, la violencia masculina, que es una realidad preocupante en los barrios populares donde vive la mayoría aplastante de la población indígena (pienso sobre todo en la violencia física, la violación, el control parental de las mujeres y de su cuerpo, en la rigidez de los roles sociales de los hombres y de las mujeres que relega a las mujeres al exclusivo papel de madre y esposa...) es solo una opresión más entre muchas otras. Yo añadiría a todo esto la gran carga negativa de la palabra “feminismo”. Se percibe ante todo como un arma del imperialismo y del racismo tanto por los hombres como por las mujeres. De ahí la dificultad para las mujeres conscientes de la necesidad de una lucha contra el patriarcado de apropiarse de ella como identidad asumida ya que corren el riesgo de provocar quizás no el oprobio general, pero sí sospechas. De ese modo, la lucha específica contra el sexismo puede tener efectos perversos. Puede contribuir a reforzar la dominación masculina de los hombres indígenas. En efecto, el patriarcado racista blanco comprendió hace tiempo que le interesaba atacar al patriarcado de los hombres negros. Durante el colonialismo, uno de los ejes estratégicos de la política colonial fue precisamente liberar a las mujeres declaradas oprimidas mientras que las mujeres en Francia no tenían derecho al voto. Fanon habló ampliamente de ello en el quinto año de la revolución argelina. La supresión del velo en el caso de las mujeres fue una de las armas esenciales para destruir el patriarcado de los indígenas. Por lo tanto, no fueron las mujeres indígenas las que debilitaron el patriarcado indígena sino los blancos y eso supone una gran diferencia. Porque en Europa fueron los movimientos feministas blancos los que atacaron a su patriarcado, no las potencias extranjeras. Es importante subrayar este hecho para entender el malestar de muchas mujeres confrontadas a la noción de feminismo. Esta política todavía está vigente. La Francia postcolonial mantiene su sueño de apropiarse el cuerpo de las mujeres indígenas y desposeer al hombre indígena, es decir, obligarle a abdicar de su único poder real. El hombre indígena no tiene ningún poder: ni político, ni económico, ni simbólico. Solo le queda el que ejerce sobre su familia (mujeres e hijos). En el marco de la lucha entre los dos patriarcados, el blanco y dominante y el indígena y debilitado, las mujeres pueden elegir entre desempeñar un papel pasivo y someterse a uno o al otro o, por el contrario, asumir un papel activo y poner en marcha estrategias para disminuir la presión sobre ellas y abrir caminos hacia la libertad. Es necesario entender que el margen de maniobra es muy pequeño. Por eso, el primer consejo, el que consiste en articular antirracismo y feminismo es inoperante, ya que más que disminuir la presión, a menuda la aumenta. Por eso, el segundo consejo, que consiste en preconizar la separación de los mujeres también es inoperante porque supone la voluntad de crear una relación de fuerza de las mujeres contra los hombres de la comunidad. La segregación por sexos política es eficaz en el entorno blanco, pero no en el entorno indígena. Es mi opinión que evidentemente es discutible. He de decir, de paso, que la segregación sexual social, es decir la separación física entre hombres y mujeres, es una práctica habitual. Me refiero a la segregación sexual política que se efectúa conscientemente y cuya finalidad es excluir a los hombres para construir un poder femenino. Personalmente, no tengo nada en absoluto contra este proceder porque estoy convencida de que es eficaz en determinados contextos pero no en el nuestro. ¿Por qué? Porque se da la circunstancia de que el colonialismo y el racismo han separado a los hombres y a las mujeres indígenas al acusar al hombre negro de ser el principal enemigo de la mujer negra. Lo que hay que entender es que ya

estamos separados, divididos, enfrentados como enemigos unos contra otros y que el colonialismo ha introducido en el corazón de las mujeres el odio hacia el hombre indígena. Yo crecí en Francia con la idea de que los hombres blancos eran superiores a los hombres de color, dignos de confianza, respetuosos con las mujeres, civilizados, etc. Pueden ver un artículo que escribí sobre este tema [2]. Puesto que ya estamos separados ¿qué puede aportar el consejo de la segregación por sexos? Respondo desde una perspectiva descolonial y centrada en las mujeres: “primero, tenemos que querernos”, debemos reencontrarnos, rehabilitarnos. En una palabra, hay que restablecer la confianza en nosotras mismas. Por eso, el primer eje de lucha de un feminismo descolonial que “articule” es plantearse la solidaridad con los hombres dominados y rechazar el principio del hombre negro como el mayor enemigo. En efecto, es esencial llevar a cabo el análisis de la opresión racial del género masculino igual que es esencial incluirla en nuestro programa político. El ejemplo del velo es muy significativo en ese sentido y me gustaría proponerles una lectura materialista: el pañuelo tiene evidentemente un significado religioso. No voy a comentar ese aspecto porque no quiero entrar en el carácter sagrado e intimo de las cosas. Es importante respetar a las mujeres que lo llevan y no convertirlo en un objeto de pura curiosidad. Sin embargo, creo que también tiene un significado social: el velo islámico surge en Francia tras la derrota del antirracismo oficial, abstracto y moral en un contexto de relegación social y racial y en un contexto en el que la ideología dominante propone a las mujeres inmigrantes que se liberen de su familia, de su padre, de su hermano, de su religión, de sus tradiciones... Creo que la aparición del velo en ese contexto es una rotunda respuesta al patriarcado blanco y racista. Creo que es una dura contraofensiva del cuerpo social indígena. Con el velo, las mujeres dicen a los hombres blancos: nuestro cuerpo no está a vuestra disposición. Para vosotros no es consumible. Rechazamos vuestra invitación a la liberación imperialista. Pero el velo representa también un compromiso entre el patriarcado de color y las mujeres de color. Las mujeres — cuyo cuerpo es un campo de batalla — saben que los ataques del patriarcado blanco refuerzan el patriarcado de color y que este reacciona de manera agresiva cuando las mujeres se someten al patriarcado blanco y racista. Por eso el velo también entraña una negociación. El velo apacigua a los hombres de color. Les dice: os respetamos, os amamos. En términos políticos, les dice: “solidaridad con los hombres dominados”. Pero también tiene un efecto feminista — y eso es lo que los blancos no entienden. Al tranquilizar a los hombres, las mujeres reducen la presión sobre ellas y conquistan espacios de libertad. A este respecto, me gustaría aclarar un punto: la solidaridad de las mujeres hacia los hombres es de dirección única. No hay reciprocidad. Los hombres esperan compromisos pero en ningún momento se solidarizan con las mujeres (excepto en lo que se refiere al apoyo económico y, diremos, que en el ámbito general de la solidaridad comunitaria). La solidaridad real y activa de los hombres hacia las mujeres que llevan el velo se explica más por la voluntad feroz de defender la comunidad y el islam — lo que no desapruebo — que por un determinado impulso en pro de las mujeres. Esto me entristece pero entiendo el mecanismo. En el punto en que nos encontramos, en la confluencia de opresiones cruzadas y de intereses contradictorios, sabemos que es mejor seguir el curso de los acontecimientos que plantear un choque frontal. De ese modo, las mujeres actúan por su propio interés al tiempo que actúan por el interés global de su comunidad. Evidentemente, este feminismo no tiene el carácter absoluto de un feminismo radical, pero ya dije antes que hablaba desde un punto de vista materialista. Las mujeres inmigrantes, mayoritariamente pobres, dependen de la solidaridad familiar y comunitaria, por eso no pueden permitirse el lujo de la ruptura. He hablado del velo, pero yo que no lo llevo, he seguido el mismo proceso. Siempre he negociado con el poder masculino negro porque no tenía otra posibilidad (en mi calidad de proletaria, indígena y mujer) y porque no hacerlo simplemente suponía la complicidad con los blancos en contra de mi comunidad, ruptura con mi familia y una mayor inseguridad social. El precio que hay que pagar es demasiado elevado. No somos heroínas. Por lo tanto, la formula política que se desprende de todo esto, no es defender la comunión de las mujeres, sino la de todos los indígenas. Para liberar a las mujeres no basta con articular mecánica y explícitamente feminismo y antirracismo. Es preciso adaptar la política a la situación de las mujeres. Por eso hay que afirmar primero el antirracismo contra el enemigo principal blanco (dado que este aspecto está consensuado y es compartido) y aplicar estrategias propias dentro de las comunidades dominadas

racialmente con el fin de salvaguardar la coexistencia comunitaria y preservar las libertades individuales, o sea, conjugando los equilibrios e integrando la jerarquía entre el enemigo principal y el enemigo secundario. Por lo tanto, no defiendo la interseccionalidad militante en el sentido de que habría que librar batalla simultáneamente contra tres o cuatro enemigos principales debido a la irreductibilidad de las diferentes opresiones y a su simultaneidad. Defiendo el derecho a definir la propia agenda, las prioridades. Quizá esas prioridades se decidirán sin los hombres, quizá con ellos, quizá en ruptura, quizá en forma de negociación. Lo que cuenta no son las palabras “feminismo”, “antisexismo”, “dominación masculina”, “patriarcado”. Lo que cuenta es el resultado. Los medios que utilizan las mujeres indígenas atrapadas entre dos patriarcados. Este proceso deberá ser respetado incluso cuando parezca contradictorio con los interés de las mujeres, porque no hay nada peor que la mirada despectiva de aquellas y aquellos que subestiman la dificultad de evolucionar en contextos donde la opresión tiene múltiples caras. Lo que acabo de decir sobre las mujeres se puede aplicar igualmente a los homosexuales musulmanes y negros que viven en los barrios populares. La mayoría de ellos optan conscientemente por la invisibilidad ya que declararse gay puede tener consecuencias dramáticas. Evidentemente esta opción se considera propia de los blancos. Al igual que en el caso de la invitación imperialista a la liberación femenina, cabría preguntarse sobre el deseo no expresado de quienes entre los blancos promueven la visibilidad de los homosexuales, ese temor equívoco de verse privado de los cuerpos indígenas... En consecuencia, hay tres estrategias posibles para un homosexual o una lesbiana de color: el alejamiento familiar si pueden permitírselo, lo que es poco habitual; la sumisión al matrimonio heterosexual; o el matrimonio con un homosexual del sexo contrario para salvar las apariencias ante su familia. Lo que las tres opciones tienen en común es la voluntad de preservar la familia y el rechazo a hacer pública su homosexualidad. Se han hecho estudios sobre las lesbianas negras en Francia y lo más chocante es que el rechazo a declarar su homosexualidad está motivado por la voluntad de las mujeres de proteger a su madre. Saben que será a ellas a quien culpen de haberlas educado mal. Y ni siquiera me estoy refiriendo a aquellas y aquellos, muy numerosos, que ni siquiera se plantean proyectarse en la vida como homosexuales y para quienes la identidad homosexual no puede ser considerada como una categoría en sí misma. Surge entonces la pregunta: ¿qué significa interseccionalidad cuando la invisibilidad es la opción mayoritaria de los principales afectados? Para acabar, les sugiero a las feministas blancas, a los LGTB y a los blancos en general que dejen de darnos consejos y de inmiscuirse en nuestras luchas y convenzan al resto de los blancos de que el feminismo, al igual que las luchas LGTB y el anticapitalismo, son eurocéntricos y deben ser descolonizados. Decía antes que no eramos heroínas. Ahora me desmiento. Creo que somos heroínas y que nuestro heroísmo, el de seres dominados dentro de un grupo racializado e infravalorado, radica precisamente en haber alcanzado nuestro objetivo de dignidad en un contexto tan hostil y conflictivo, moviéndonos entre intereses contradictorios y haciendo lo que los dominantes del grupo no hacen: pensar lo colectivo y lo individual, lo que de alguna manera constituye el origen de una tercera vía entre la sumisión al modelo de emancipación eurocéntrico y la vuelta a una autenticidad tan ilusoria como perdida. Houria Bouteldja, miembro del PIR [Parti des indigènes de la république (Partido de los indígenas de la república)] [ 1 ] Universalisme gay, homoracialisme et « mariage pour tous » http://www.indigenesrepublique.fr/article.php3 ?id_article=1794 [ 2 ] Pierre, Djémila, Dominique et Mohamed http://www.indigenes-republique.fr/article.php3 ?id_article=1612 Fuente: http://www.indigenes-republique.fr/article.php3?id_article=1850

¿ESTÁ AGOTADA LA RETÓRICA NEOLIBERAL? Paul Walder Punto Final http://www.rebelion.org/noticia.php?id=171956 En Chile no se habla de crisis en la economía. La prensa del duopolio y la especializada en finanzas insisten en acotar la economía a los negocios del sector privado, sus ventas y sus utilidades. Sólo como concesión, extienden la economía a los clientes -los consumidores- o hacia el mercado. Este espacio artificioso como si fuera un holograma, una representación fantástica de la realidad, no acepta la crisis. Los grandes negocios, como expresión única de la economía nacional y global, no han tenido obstáculos en los últimos veinte o treinta años. Hoy, tras leves tropiezos o temporales depresiones, la prensa nuevamente festeja. Lo mismo el gran empresariado, que está por encima del bien y del mal. Los cercanos eventos electorales de noviembre tampoco les quitan el sueño. Estar por encima del binominal es tener su control y la administración de los mecanismos de la institucionalidad. La economía chilena, diseñada desde hace casi cuarenta años bajo el patrón neoliberal, es una fuente de negocios que ninguna elección ni protesta se permitirá alterar. Un titular de El Mercurio de la segunda semana de julio destacaba a Chile como uno de los seis países del mundo con mayor tasa de crecimiento. Un aviso bastante claro para reforzar la idea del éxito del modelo y alertar que nada ni nadie deberá tocarlo. Chile, miembro de la OCDE, país de altos ingresos, Chile, socio comercial de las mayores economías del mundo y destino de grandes flujos de capital, es también una economía en los primeros lugares de los rankings. El aviso, que diariamente tiene otras evocaciones que van desde el aumento en el consumo, las nuevas tecnologías, las ganancias bursátiles, es una clara advertencia a cualquier lector y observador de que la gran plataforma sobre la que se ha construido la institucionalidad es la economía. Y al hablar de institucionalidad, hablamos de grandes negocios y grupos económicos. Aquí radica la estructura nacional construida hace ya cuatro décadas. Este discurso, vigente en el país ya por varias generaciones, tiene hoy más de retórica que de contenidos. Lo que hace diez o cinco años era asumido como verdad del otrora denominado “pensamiento único”, hoy está encerrado como una oración repetitiva que circula entre las distintas elites que gozan del binominal. La salida de los estudiantes a las calles, que arrastró a una buena parte de la ciudadanía más consciente, generó un quiebre, una tremenda discontinuidad en aquel pensamiento homogéneo y acomodaticio de las décadas pasadas. Elogiar el modelo de libre mercado desregulado del modo como lo hace el duopolio, parece hoy un relato vacío, ciego y sordo ante todo lo que no sean flujos de capital, ganancias y nuevos mercados. La prensa y las elites, representadas en ambos lados del binominal, continúan y continuarán con este relato basado en el crecimiento económico y, por extensión, el acceso al consumo de masas. Un relato que esconde sus irregularidades, las que han aparecido primero como realidades sociales y más tarde, como discursos antagónicos. Si recordamos los matices que ha tenido el discurso económico durante los últimos años, veremos que son giros sobre sí mismo para evitar la realidad. A veces el énfasis ha estado en el crecimiento, otras en la necesidad de una mayor igualdad. Tras la década de los noventa, con una desquiciada impronta neoliberal basada en más privatizaciones, exportaciones mineras e inversiones extranjeras, tenemos un primer matiz en la década siguiente, durante el gobierno de Ricardo Lagos, con la constatación en la opinión pública del aumento en los niveles de desigualdad. Fue pura retórica, expresada en el eslogan “crecimiento con igualdad”, que permitió más espacios para el sector privado a través de la entrega de nuevos servicios vía concesiones. El resultado: un nuevo avance en la concentración de la riqueza y nuevas marcas en la desigualdad. El gobierno de Bachelet, aun cuando puso énfasis en la protección social vía bonos y subsidios, terminó no sólo con iguales niveles de desigualdad, sino con la expresión de las primeras protestas masivas en contra del núcleo del modelo de mercado. El modelo no se movió un centímetro. El gobierno de Piñera ha sido la última vuelta de tuerca del modelo económico iniciado durante la dictadura y desarrollado hasta sus últimas consecuencias por los pasados gobiernos. Lo que no cambió la coalición

democratacristiana-socialdemócrata durante veinte años, no lo haría el regreso de sus creadores a La Moneda. El modelo, a inicios de la presente década, ya estaba certificado por ambas coaliciones. Por tanto, la derecha selló y cerró el círculo. Lo que debió ser su consolidación ha sido su cristalización, su rigidez y su fragmentación. Piñera, pese a las masivas y permanentes protestas, ha sido incapaz de alterar la economía, ya apropiada por gigantescos grupos económicos enraizados en toda la institucionalidad del Estado. Lo que nos espera en estas elecciones, y ya lo estamos viendo, será un nuevo matiz discursivo, sobreactuado y amplificado. Simples cambios menores, porque, tal como el titular de El Mercurio, para los gestores del binominal el modelo chileno no está en crisis. Publicado en “Punto Final”, edición Nº 786, 26 de julio, 2013

"HAY MÁS CONTINUIDADES QUE RUPTURAS ENTRE LOS ÚLTIMOS PAPAS" x Diego M. Vidal http://www.lahaine.org/index.php?p=70889 Entrevista con el sociólogo Fortunato Mallimaci :: "Persistencia en la manera de pensar la teología, el dogma, la Inquisición, la autoridad" 28 de julio de 2013. Este viaje estaba previsto”, se adelanta el sociólogo Fortunato Mallimaci antes de que este cronista formule completa la primera pregunta, ni bien escucha Francisco y Brasil. “Las Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ) están hechas para fortalecer la imagen del Papa”, agrega y continúa, “así que de entrada se dijo que Francisco tenía que salir a movilizar a la militancia y para eso había que hacer los viajes pero antes dedicarse a los jóvenes. Las primeras se realizaron en Roma y las segundas aquí en Argentina, que casi nadie recuerda, que fueron en 1987 y la figura central es el Sumo Pontífice. Fortalecer el papado frente a la crisis, el desprestigio, el desconocimiento que mucha gente tiene. Estas JMJ tenían que hacerse el año que viene, pero está el Mundial de Fútbol y entonces decidieron hacerlas ahora”, señala el investigador del Conicet. –En Brasil, la Iglesia Católica ha visto disminuir su grey frente a las religiones pentecostales, que además conforman un poder político también. –En América latina, desde hace unos 30 o 40 años hay una recomposición del “mercado religioso” o del “mercado de los bienes de salvación”, como más te guste, que hizo que una parte significativa de católicos no practicantes hayan decidido, en un momento de angustia, de soledad, de perder sentido a la vida, encontrar en grupos religiosos cercanos, respuestas a los problemas. Primero de todo, a la salud; segundo, de familia; tercero, el tema de la droga, es decir, hay sectores sociales empobrecidos que encontraron en estos grupos de cercanía, cristianos, respuestas que no les dio la Iglesia Católica. ¿Por qué aclaro esto? Porque no hay templos que se hayan vaciado. No, es otro conjunto de gente. Lo interesante, en este momento histórico de Latinoamérica, es que hay más personas que se dicen sin religión que las que se manifiestan evangélicos. Y si lo hacemos por franja de edad, ni te cuento. Hay muchísimos jóvenes que se asumen sin religión que todos los conjuntos religiosos no católicos juntos. El caso típico es Río de Janeiro donde los católicos son ya primera minoría con un 40% y el 60% que se dice evangélico sin religión. Creo que es un error suponer que el Papa vino recuperar eso. ¿Por qué? Porque no se lo puede recuperar. Es un problema estructural, de creencias, para el tipo de institución católica. Hoy, en Argentina se dice que hay gente que ha vuelto a los templos, que se han confesado más, incluso algunos periodistas me llamaron porque veían mucha gente en las parroquias durante las Pascuas. Cuando la única vez, o una de las pocas veces, en que los católicos van a misa es precisamente en esa festividad. Sin embargo, la efervescencia mediática tenía que decir que hay miles y miles de fieles gracias a este nuevo Santo Padre, lo que es mentira porque no hay ninguna estructura que pueda acoger más personas. Supón que en Buenos Aires se intentaran acercase unas 100 mil, no podrían. No hay curas ni espacio ni lugar.

–¿Cuál el objetivo, entonces, de la presencia del Papa en América latina? –Viene a fortalecer la militancia, los núcleos duros, a esos jóvenes que intentan tener una cierta identidad católica. Así supone el Vaticano que fortaleciendo esos núcleos duros, pasa la tormenta, que presiente pasajera, y después va a volver a tener credibilidad. Así y todo, los postulados que les bajan son los mismos que los de la ortodoxia católica: no al aborto, no a la homosexualidad. ¿Cómo pega eso en la juventud del siglo veintiuno? –Es innegable que hay muchísimas más continuidades que rupturas entre Wojtyla, Ratzinger y Bergoglio. Persistencia en la manera de pensar la teología, el dogma, la Inquisición, la autoridad. Lo que sí hay es cambio de estilos. Un obispo latinoamericano tiene un proceder distinto que uno alemán, italiano o polaco. El de América latina, sobre todo en Argentina, es un catolicismo plebeyo. Es Bergoglio, es Quarracino, es Primatesta, hijos de emigrantes no de familias patricias o grandes hacendados. A la mayoría de los prelados argentinos los podés ir a ver, hablar, andan por la calle, porque si se la creen no les van a dar atención. Es importante decirlo, porque sino pareciera que Francisco es una excepcionalidad. –Bueno, el sociólogo brasileño Emir Sader lo tilda directamente de demagogo porque cree que exagera en sus gestos. Ud mismo alguna vez dijo que no todo puede pasar por la gestualidad en un papado. –Forman parte de una manera de ser obispo, como me referí recién, pero ese simbolismo debe demostrar si sirve para cambiar las estructuras como demandan los católicos. Esto me parece no sólo que no ha comenzado, sino que hasta el día de hoy no vemos qué es lo que se va a hacer y hacia dónde se quiere ir. Un editorialista de un importante diario habla de la “iglesia popular”, concepto si lo hay transformador, no obstante aquellos que durante 3 o 4 décadas quisieron construir comunidades populares en Latinoamérica, acompañar procesos políticos y sociales de sectores pobres, fueron expulsados de la Iglesia Católica. La persecución, prohibición y control hizo que todo aquello que aparecía como crítico a lo que era la institución católica fuera dejado de lado. –El Papa llamó a que la Iglesia salga a la calle, ¿qué lectura se hace de esa convocatoria? –Se convoca a esa militancia, pero con el tiempo esa misma militancia comenzará a reclamar participación. En algún momento se les dijo que participen en los llamados movimientos como Comunión y Liberación, Opus Dei, Legionarios de Cristo o Instituto del Verbo Encarnado y de repente estos movimientos aparecían haciendo negocios económicos o religiosos o sexuales, para su propio beneficio y no para el conjunto. Es decir, se les dio dinero, un espacio fenomenal en la Iglesia Católica, resultan que hoy aparecen como los responsables de los escándalos financieros y del tipo de iglesia actual. Continuar con el Estado Vaticano, con los bancos, la presencia internacional que se tiene, ¿para qué? Para darle poder al Papa y al papado y a los amigos del Papa en sus negocios. O dejar ese banco, ese Estado, dejar esa manera de ser y dedicarse a seguir, haciendo lo que dice Francisco, una iglesia de los pobres, con los pobres, donde están los pobres, porque si no es poco creíble que les digas a los jóvenes que hay que meterse en las favelas, en las villas, en los barrios… En la Ciudad de Buenos Aires hay cerca de 800 sacerdotes activos y sólo 24 están en las villas miserias. ¿Por qué no va el resto? Ah, no, porque tienen que ocuparse de otras actividades, otros sectores sociales, estar con grandes empresarios, con los dueños de las empresas mediáticas, en las escuelas, hacer encuentros para la actividad política, etc. Todo esto me parece está en tela de juicio y ahí sí vuelvo a eso de que con los gestos no alcanzan, si no se transforman esas estructuras que han llevado a una crisis tal que el propio Ratzinger tenga que renunciar. Esto no se entiende si uno no ve la profundidad que significó en la Iglesia Católica, que su máxima autoridad, que era infalible, considerado hasta como sucesor de Jesucristo no de los apóstoles, el Rey de reyes, hasta incluso calificado como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas del mundo entero, diga renuncio, me

voy. Con lo cual mundaniza el cargo, lo desacraliza. ¿Por eso no pudieron firmar a cuatro manos la última Encíclica? Por el dogma fue… (ironiza). Todos saben que los escribió Benedicto XVI pero “el dogma dice que sólo uno puede firmar”. Esto mismo, ¿no crea cierta duda? Es decir, que mientras está sentado en el trono de San Pedro es infalible, ¿después de renunciar ya no lo es? El diario de mayor tirada de Argentina, en un artículo de un corresponsal que conoce mucho el tema, por primera vez menciona que en un tiempo no muy lejano pueda llegar la renuncia de Francisco. Se publicó en la edición del miércoles pasado. Ya está la posibilidad de que este Papa renuncie y estamos a cuatro meses nada más de que asumió. Miradas al Sur

LO QUE PONE AL DESNUDO EL CASO EDWARD SNOWDEN: THE OUTSOURCING OF INTELLIGENCE Sábado 3 de agosto de 2013. Nodo50 | Descargar artículo en PDF Fuente : Centro de Estudios Políticos para las Relaciones Internacionales y el Desarrollo (CEPRID) http://info.nodo50.org/Lo-que-pone-al-desnudo-el-caso.html Por Carlos Lanz Rodríguez En el contexto global de la crisis del régimen capitalista, el Estado imperial cada día se corporativiza más y se privatiza bajo la tutela de los monopolios financieros, los carteles mediáticos, el lobby petrolero y el complejo industrial-militar. En este último caso, la experiencia histórica enseña que una de las políticas anti – crisis empleada por el capital ( al lado del incremento de la explotación del trabajo, la conquista de nuevos mercados y el saqueo de las riquezas naturales de los países del llamado tercer mundo )tiene que ver con la promoción de los conflictos bélicos ( donde la venta de armamento y los servicios logísticos, particularmente la inteligencia humana y tecnológica, la manipulación mediática y las operaciones psicológicas ), sirven de motor para reanudar los ciclos productivos en momentos de recesión. Por ello se puede sostener que son estos monopolios de la industria militar privada quienes incentivan y se benefician de los planes guerreristas, siendo las actuales guerras de baja intensidad o guerra contra el terrorismo y el narcotráfico, formas específicas del fenómeno privatizador neo-liberal. De allí la importancia que posee su caracterización para la revolución venezolana y continental, haciendo evidente sus múltiples concreciones en las formas de intervención imperial, tomando en cuenta que sus manifestaciones no son visibles ni obvias, sino que requieren ser descubiertas y contextualizadas en sus rasgos teóricos-prácticos, que de suyo son encubiertos o clandestinos. Los anteriores planteamientos en torno al nexo de la crisis capitalista y la guerra, particularmente la tendencia privatizadora en la actual coyuntura histórica, permiten comprender como en el terreno de la seguridad y la defensa, el Pentágono norteamericano traspasa sus funciones de rutina a las compañías militares privadas. Por eso encontraremos en las descripciones que sistematizaremos más adelante, que más de la mitad de las personas que trabajan en el super secreto Centro Nacional de Contraterrorismo en Virginia son empleados de empresas privadas, tales como: Science Applications International Corporation (SAIC), BAE Systems y Lockheed Martin. La Agencia Central de Inteligencia ha gastado el 50-60 por ciento de su presupuesto (o alrededor de $ 2,5 mil millones al año) con los contratistas, tanto particulares como de empresas privadas. Autores como Tim Sorrock en su texto “Alquiler de Espía”, JB Hillhouse en el ensayo sobre “Subcontratado”, el periodista investigativo Jeremy Scahill en su libro “Blackwater: El ascenso del ejército mercenario más poderoso del mundo”, al igual que Nick Turse en su trabajo “El Complejo: Como los militares invaden nuestra vida cotidiana”, ( las carátulas de estos trabajo ilustran nuestra improvisada portada y pueden ser bajados de Internet ) vienen denunciando en sus investigaciones la externalización de los servicios en las diversas agencias de inteligencia .

Las tareas que ahora se ejecutan externamente incluyen redes de espionaje de las embajadas, análisis de inteligencia humana (HUMANIT Y OSINT), la inteligencia de señales (SIGINT), las operaciones encubiertas, y el interrogatorio de prisioneros enemigos. Este fenómeno es conocido con diversas denominaciones: “EXTERNALIZACION”, “TERCIARIZACION”,“SUBCONTRACION”U “OUTSOURCING” DE INTELIGENCIA, estando involucradas en dicho proceso el conjunto de la 12 estructuras de la Comunidad de Inteligencia (IC) de los EEUU y sus diversas funciones, entre las que están: 1.- El Centro Nacional de Contraterrorismo (NCTC) sirve como la principal organización en el Gobierno de los Estados Unidos para integrar y analizar toda la inteligencia relacionadas con el terrorismo, poseídas o adquiridas por el Estado . 2.- La Agencia Central de Inteligencia (CIA) es el productor más grande de inteligencia de seguridad nacional para los altos mandos de EE.UU. La inteligencia de la CIA analiza los acontecimientos en el extranjero, informa a las decisores y personeros políticos de alto nivel en la seguridad nacional . 3.- El Servicio Nacional Clandestino (NCS) tiene la responsabilidad de la búsqueda clandestina de inteligencia que no se pueda obtener a través de otros medios como suelen ser las fuentes abiertas. También el NCS se dedica a actividades de contrainteligencia y protección de las actividades de EE.UU. y las instituciones de la penetración por organizaciones e individuos enemigos . El NCS también lleva a cabo operaciones encubiertas de todo tipo: acciones psicológicas, sabotajes, paramilitarismo, eliminación selectivas de líderes hostiles. 4.- La Dirección de Inteligencia (DI) analiza todas las fuentes de inteligencia y produce informes, reuniones de información y documentos sobre cuestiones de inteligencia en el extranjero ,con una variedad de fuentes y métodos: los informes de la inteligencia humana, la fotografía por satélite, información de fuente abierta, y los sensores sofisticados. 5.- La Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) es un importante productor de inteligencia militar, es miembro principal de la IC de EEUU. la misión de DIA es proporcionar información oportuna a todas las fuentes de inteligencia militar a los responsables políticos, a las fuerzas armadas de los EE.UU. y los planificadores . contra una variedad de amenazas y desafíos de todo el espectro de los conflictos. 6.- La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) es la organización de seguridad nacional que protege a los Estados Unidos de las amenazas internas. Como un componente del Departamento de Justicia es un miembro de pleno derecho de la Comunidad de Inteligencia de EE.UU., el FBI sirve como un vínculo vital entre la inteligencia y fuerzas de seguridad. 7.- La National Geospatial-Intelligence Agency (NGA) es un Departamento de Defensa y organismo de apoyo de combate. Como miembro de la Comunidad Nacional de Inteligencia (IC). desarrolla las imágenes y mapas, con soluciones basadas en la inteligencia satelital. 8.- La Oficina Nacional de Reconocimiento (NRO) fue creado en septiembre de 1961 . como una agencia de clasificación del Departamento de Defensa,son los ojos de la "nación y los oídos en el espacio". Con sede en Chantilly, Virginia, la ONR es una organización conjunta dedicada a la investigación y el desarrollo, lanzamiento y operación de sistemas de reconocimiento . para satisfacer las necesidades de la IC y el Departamento de Defensa. 9.- La Agencia de Seguridad Nacional (NSA) es la organización de la criptografía de los Estados Unidos, con la responsabilidad de proteger a EE.UU. Los sistemas nacionales de información de seguridad y recopilación y difusión de las señales .Las áreas de especialización incluyen criptoanálisis, la criptografía, las matemáticas, la informática e idiomas extranjeros .

Esta es la agencia que tiene subcontratada a la transnacional Booz Allen Hamilton, donde trabaja Edward Snowden. Haciendo una descripción de esta agencia, Ignacio Ramonet (Le Monde Diplomatique) publica un artículo con el título “Todos fichados” ( Aporrea.Org Domingo, 07/07/2013 )donde señala: “La Agencia de Seguridad Nacional (NSA), cuyo cuartel general se halla en Fort Meade (Maryland), es la más importante y la más desconocida agencia de inteligencia norteamericana. Es tan secreta que la mayoría de los estadounidenses ignora su existencia. Controla la mayor parte del presupuesto destinado a los servicios de inteligencia, y produce más de cincuenta toneladas de material clasificado al día... Ella –y no la CIA– es quien posee y opera el grueso de los sistemas estadounidenses de recogida secreta de material de inteligencia: desde una red mundial de satélites hasta las decenas de puestos de escucha, miles de ordenadores y los masivos bosques de antenas situados en las colinas de Virginia Occidental. Una de sus especialidades es espiar a los espías, o sea a los servicios de inteligencia de todas las potencias, amigas o enemigas…” “Todo el sistema de interceptación de la NSA puede captar discretamente cualquier e-mail, cualquier consulta de Internet o conversación telefónica internacional. El conjunto total de comunicaciones interceptadas y descifradas por la NSA constituye la principal fuente de información clandestina del Gobierno estadounidense.” 10.- La Dirección de Inteligencia de Señales es el responsable de la comprensión de las necesidades de información de inteligencia, para la recopilación, análisis y producción, y la difusión de inteligencia de señales (SIGINT). 11.- El Servicio Central de Seguridad (CSS) se encarga de la fusión de los sistemas de criptografía, desarrolla la política y orientación sobre las contribuciones de los militares a la criptografía, a la Inteligencia / Seguridad de la Información de señales (SIGINT / INFOSEC), administra la asociación de la NSA y el Servicio de criptografía. 12.- El Centro de inteligencia abierta - Open Source Center (NSC) El Centro promueve la explotación de la inteligencia o la información que estén a disposición de la red Internet, bases de datos, prensa, radio, televisión, vídeos, datos geoespaciales, fotos e imágenes comerciales. En el ensayo publicado en el año 2008, con el título “LA ACTUAL ESTRATEGIA DE INTERVENCION IMPERIAL” planteamos una serie de líneas de trabajo, que en la actualidad cobra mayor vigencia. En tal sentido, propusimos el combate sistemático (en lo teórico y práctico) del outsourcing de inteligencia en su triple acepción e implicación: inteligencia tecnológica, operaciones psicológicas, fuerzas especiales privatizadas que realizan operaciones encubiertas: a.- En el terreno ideológico cultural impulsar una campaña comunicacional y educativa sobre las múltiples implicaciones que posee la subcontratación con los monopolios de la industria militar en los EEUU. b.-Definir líneas de investigación que reconstruyan la realidad subyacente de la injerencia del complejo militar-industrial: * Descomposición del sistema político norteamericano, conflictos interinstitucionales: guerra secreta, gobierno de sombra. * Violación de los derechos humanos * Corrupción generalizada * Impunidad de los crímenes de guerra

* Profundización de la enajenación y las conductas psicóticas del militarismo en EEUU. De esta manera, estos planteamientos previos cuentan ahora con el testimonio de Edward Snowden, contribuyendo a la profundización de la denuncia de los EEUU, como ESTADO FORAJIDO, cimentado en el culto al espionaje.

TODA LA INFORMACIÓN QUE FACEBOOK RECOPILA A TUS ESPALDAS

http://www.elciudadano.cl/2013/08/04/75731/toda-la-informacion-que-facebook-recopilaa-tus-espaldas/ Max solicitó a Facebook una copia de todos los datos que tenía almacenado sobre su perfil amparándose en la legislación europea y se sorprendió al recibir un CD con más de 1200 documentos en PDF. Max no pudo con tanta información recopilada sobre su persona y se dedico a investigar sobre posibles violaciones a sus derechos. Max ahora inició el proyectoEurope vs. Facebook. Un video difundido por el portal Aeromental cuenta el caso de Max Schrems, un austriaco estudiante de derecho de 24 años que usaba su perfil de Facebook para relacionarse con sus amistades, subir fotos, lo normal. Hace unos meses (en Julio) Max solicitó a Facebook una copia de todos los datos que tenía almacenado sobre su perfil, armado de la directiva europea 95/46/CE que garantiza el acceso de cualquier ciudadano a sus datos. Facebook, en respuesta, le entregó un CD con más de 1200 documentos en PDF (en la foto sale Mark posando con estos documentos impresos). Max se sorprendió de la cantidad de información recopilada sobre su persona y se dedico a investigar sobre posibles violaciones a sus derechos.

Descubrió , transcripciones de chats que también creía haber suprimido, peticiones de amistad denegadas, notificaciones de eventos a los que quiso asistir y otros a los que no, estatus y tags de fotos. Todo. Incluso direcciones de correo de personas que no tienen perfil activo en la red social. Se sublevó. ENTRE OTRAS COSAS, ENCONTRÓ QUE FACEBOOK LLEVA UN REGISTRO DE: Cada vez que un usuario ingresa y sale de la página. Antiguos mensajes borrados Estatus (mensajes en el muro). Transcripciones de chats que fueron eliminados. Cada uno de los mensajes privados, del muro, fotos y de chat, incluyendo los que fueron eliminados por el autor. Todos los “Me Gusta” con geolocalización, posts, pokes, incluyendo los eliminados. Peticiones de amistad denegadas. Amistades eliminadas.

Etiquetas de fotos que fueron eliminadas Fotos eliminadas. Ultima ubicación geográfica, Facebook con geolocalización recopila la ubicación geográfica (con coordenadas específicas, fecha y hora) desde donde usaste tu cuenta por última vez. No se sabe cuales son sus intenciones de hacer esto. Todos los cambios que le hiciste a tu nombre, con fecha y hora. Números telefónicos de los celulares desde donde ingresaste a tu Facebook. Todas las IPs de computadoras desde donde ingresaste a tu Facebook. Realizan también un conteo de cantidad de ingresos de varios usuarios desde una misma PC para deducir quién es el dueño o usuario principal de esa PC. Notificaciones de eventos a los que quiso asistir y otros a los que no. Direcciones de correo de personas que no tienen perfil activo en la red social. [Esta es la lista completa en inglés]

EJEMPLO Por ejemplo, tu última ubicación geográfica se guarda en Facebook de la siguiente manera:

Time 2011-04-16 18:51:27 UTC Latitude 37.34688913 Longitude 121.94080227 Altitude 0 Accuracy 675 Altitude Accuracy -1 Heading -1 Speed -1 [Ejemplos de como Facebook guarda esta información] A todo esto Max dijo: Es simplemente que Facebook está usando su red para recoger datos de los usuarios que no debería tener. Es cierto que los mismos usuarios tienen que ser responsables de lo que postean pero, ¿cómo van a serlo si no saben ni pueden decidir lo que se hace con su información, incluso cuando deciden borrarla? Max ahora inició el proyecto Europe vs. Facebook, reuniendo a muchas personas de Europa para demandar a Facebook por guardar tanta información (en especial la borrada) sin consentimiento alguno.

LA PRIVATIZACIÓN DE LA GUERRA: LA ONU CONTRATA A EMPRESAS DE SEGURIDAD PRIVADAS EN OPERACIONES HUMANITARIAS Y DE PAZ http://www.elciudadano.cl/2013/08/04/75735/la-privatizacion-de-la-guerra-la-onu-contrata-a-empresasde-seguridad-privadas-en-operaciones-humanitarias-y-de-paz/

Con el fin de discutir la utilización de empresas militares y de seguridad privadas con uso de la fuerza armada para proteger al personal de las Naciones Unidas y a los locales de la Organización en el terreno, así como la utilización de este tipo de empresas en las operaciones humanitarias y de mantenimiento de la paz, la ONU ha convocado un Panel de Expertos en su Sede en Nueva York, el 31 de Julio de 2013. El actual Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre la utilización de mercenarios organiza dicho Panel. En otras palabras, Naciones Unidas contempla la posibilidad de privatizar las operaciones humanitarias y del mantenimiento de la paz: un objetivo de varios miles de millones de dólares al año que el cartel de las empresas militares y de seguridad privada lleva codiciando desde hace muchos años.

Desde que Gregory Starr asumió el puesto en Naciones Unidas de Secretario General Adjunto para la Seguridad en 2009 y comenzó a externalizar la seguridad de la Organización al sector privado, dicho Departamento ha estado elaborando directrices y criterios para dar un aspecto de legitimación a la utilización de empresas militares y de seguridad privadas ya que la utilización de tales empresas conlleva una imagen negativa debido a las graves violaciones de derechos humanos que dichas empresas han cometido en situaciones de conflicto o de post-conflicto como Iraq. En 2012, el Departamento de Naciones Unidas encargado de la seguridad publicó un documento sobre la Política de Naciones Unidas. Asimismo dicho Departamento ha elaborado unas Directrices a seguir por la Organización sobre la utilización de empresas militares y de seguridad privadas que pueden hacer uso de la fuerza armada. Según los organizadores el objetivo del Panel de Expertos que se reunirá en julio de 2013 en Nueva York es fomentar la discusión y provocar respuestas de la sociedad civil a las Directrices emitidas por el Departamento encargado de la seguridad de Naciones Unidas. Las conclusiones del Panel de Expertos se incluirán en el próximo informe anual que el Grupo de Trabajo sobre la utilización de mercenarios someterá a la Asamblea General. Sin embargo, se puede plantear la cuestión de si uno de los principales objetivos del Grupo de Expertos de julio no es presentar y aprobar las Directrices de las Naciones Unidas con miras a lograr un paso más en la legitimación de la utilización de empresas militares y de seguridad privadas por el sistema de las Naciones Unidas. Es interesante recordar que Gregory Starr antes de entrar en Naciones Unidas fue Director del Servicio de Seguridad Diplomática (DSS) del Departamento de Estado de EE.UU. Y que fue uno de los principales promotores en externalizar la seguridad de los diplomáticos de EE.UU a empresas militares y de seguridad privadas como Blackwater. En este contexto hay que recordar que dos ex Secretarios Generales de la ONU han hecho propuestas para proveer a la Organización Mundial con un pequeño grupo de fuerzas permanentes que podrían estar a la disposición de la Organización en todo momento, de conformidad con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas. En efecto, los Estados miembros de la ONU aún no han implementado un ejército permanente de las Naciones Unidas o en su defecto una fuerza policial de la ONU según lo previsto en la Carta de la Organización. Como resultado, las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas se han basado únicamente en coaliciones ad hoc de Estados voluntarios dispuestos a proveer personal militar nacional. La consecuencia en la mayoría de los casos ha sido una serie de disfunciones de las operaciones de mantenimiento de la paz de la ONU así como de las operaciones de seguridad por falta de compromiso de los Estados Miembros de la ONU de facilitar el personal y los recursos necesarios para el adecuado funcionamiento de las operaciones de mantenimiento de la paz (1). El Departamento para la Seguridad de la ONU parece haber optado por la privatización de la seguridad de la Organización. Sin embargo, no hay que olvidar que las empresas militares y de seguridad privadas (EMSP) son la reencarnación moderna de un largo linaje de proveedores privados de la fuerza física, como corsarios, bucaneros y mercenarios (2).

En los siglos XIX y principios del XX, las naciones adoptaron instrumentos internacionales para regular las actividades de los corsarios y bucaneros (3). Los mercenarios, que habían desaparecido prácticamente durante los siglos XIX y XX, volvieron a aparecer en la década de los años 1960 durante el período de descolonización, operando principalmente en África y Asia. Bajo los auspicios de las Naciones Unidas, se aprobó una Convención que pone fuera de la ley y criminaliza las actividades de los mercenarios (4). Con el fin de evitar el estigma que produce la etiqueta “mercenarios”, estas entidades no estatales de combatientes, de free-lancers ha venido cambiado y adoptándose como los camaleones y ha pasado de llamarse “perros de la guerra” a “empresas militares privadas” en los años 90, cuando se crearon empresas como Executive Outcomes y Sandline , y más recientemente se han hecho llamar “contratistas privados” y “empresas de seguridad privada”, durante la intervención de Estados Unidos en Afganistán e Irak y el desarrollo de la industria de la seguridad en el inicio del siglo XXI; y más recientemente han cambiado nuevamente y actualmente, coincidiendo con el desarrollo del cartel de la industria de la seguridad privada, se denominan “proveedores de servicios de seguridad privada”. La externalización generalizada en los últimos años de funciones militares y de seguridad a las empresas militares y de seguridad privadas (EMSP) por los gobiernos, las organizaciones intergubernamentales y no gubernamentales, y las empresas multinacionales en situaciones de conflicto de baja intensidad, conflictos armados, post-conflictos, socorro internacional y operaciones humanitarias constituye un fenómeno de gran importancia. En muchos casos, se contrata a empresas privadas con el fin de evitar la responsabilidad directa de los gobiernos o de organizaciones. La utilización de estos contratistas privados para apoyar las operaciones en Irak y Afganistán, y las violaciones de derechos humanos en los que han participado han sido el foco de la atención internacional. Y ha generado un debate sobre las funciones de las EMSP, las normas bajo las cuales deben operar, y cómo controlar sus actividades. La Comisión de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el órgano predecesor del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, alertada por las violaciones cometidas por dichas empresas militares y de seguridad privadas, estableció en 2005 el Grupo de Trabajo sobre la utilización de mercenarios con el mandato de analizar las tendencias modernas del mercenarismo. En 2010, el primer Grupo de Trabajo sobre mercenarios de la ONU, después de haber cumplido su mandato de seis años, presentó a Naciones Unidas un proyecto de convención que había elaborado para regular y supervisar las actividades de las empresas militares y de seguridad privadas. En Afganistán no sólo ha habido violaciones de derechos humanos por dichas empresas sino también, como en otros lugares, colusión de las empresas internacionales militares y de seguridad privadas en casos de corrupción con el gobierno y negocios ilegales. Dichas actividades incluyen la creación de la inseguridad, con el objetivo de asegurar el negocio a esas empresas e incluso de ampliar los contratos mediante sobornos a grupos anti-gubernamentales para garantizar la circulación de convoyes militares y de acción humanitaria, así como dando asilo y protección a sospechosos o presuntos autores de violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad. También hay información que indica que empresas militares y de seguridad privadas, contratadas por el gobierno de EE.UU., han tenido una relación privilegiada con los Talibanes. El proyecto de convención presentado por el primer Grupo de Trabajo sobre la utilización de mercenarios de Naciones Unidas, contiene una serie de normas y procedimientos para regular a estas empresas a nivel nacional e internacional. También prevé medidas de control que las organizaciones intergubernamentales tales como las Naciones Unidas y la OTAN deberían adoptar, así como la prohibición de subcontratar al

sector privado una serie de funciones inherentemente estatales que son parte de la soberanía de los Estados. En muchos países el número de personal de seguridad privada por cada 100.000 habitantes ya es mucho mayor que el de la policía activa. Entre estos países se pueden mencionar: Angola, Argentina, Australia, Bulgaria, Chile, China, Colombia, Costa Rica, Côte d’Ivoire, República Checa, República Dominicana, El Salvador, Guatemala, Honduras, Hungría, India, Irlanda, Jamaica, Japón, Kenia, Luxemburgo, Panamá, Polonia, Rumania, Federación de Rusia, Eslovenia, Sudáfrica, Turquía y EE.UU. (5) Tras la propuesta del Grupo de Trabajo de Naciones Unidas “de un instrumento internacional para regular y controlar las actividades de las empresas militares y de seguridad privadas”, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU estableció un Grupo intergubernamental de composición abierta, encargado de debatir y negociar una posible convención. Pese a que una mayoría de Estados Miembros de la ONU está a favor de las medidas de regulación y control, la posición de los Estados occidentales es un rechazo total a la regulación y los mecanismos de supervisión internacionales. Su posición es comprensible, ya que la nueva industria de seguridad, en todo su auge y florecimiento, se encuentra en los países occidentales y en particular en el Reino Unido y los EE.UU., donde el setenta por ciento de esas empresas se encuentran. Cabe señalar que, paralelamente a la creación del Grupo de Trabajo sobre la utilización de mercenarios y con el fin de evitar cualquier regulación internacional o estatal, así como las críticas por violaciones de derechos humanos, la industria internacional de la seguridad con grupos como la Asociación Operación Estabilidad (ISOA) de Estados Unidos y la Asociación Británica de Empresas de Seguridad Privada (BAPSC) y el respaldo de los gobiernos de Reino Unido, Estados Unidos y Suiza, lanzaron en 2006 lo que se conoce como la Iniciativa Suiza. Dicha Iniciativa Suiza incluye una serie de acuerdos de autorregulación entre ellos el Documento de Montreux y el Código Internacional de Conducta, que ya han firmado cerca de 700 empresas militares y de seguridad privadas que operan en el ámbito internacional. Entre las casi 700 empresas militares y de seguridad privadas firmantes del Código se encuentran empresas como Blackwater (que ahora figura como Academi después de haber cambiado dos veces su nombre), United Resources Group, G4S y su filial Armor Group o Triple Canopy, todas ellas implicadas en graves violaciones de derechos humanos; o empresas como DynCorp, Blackwater y Aegis (otra empresa que ha cambiado de nombre y que se llamaba Sandline), todas ellas con un pasado turbulento; o empresas como la ugandesa Saracen Uganda Ltd. presuntamente implicada en capacitar a paramilitares en Puntland, Somalia y violar resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Es interesante señalar que no se ha sometido a ninguna de las empresas signatarias del Código Internacional de Conducta a cualquier tipo de control. Mecanismos de supervisión, tales como: (i) certificación, (ii) auditoría y control, y (iii) sumisión de informes sólo se aplicarán una vez que se haya establecido la Asociación del Código Internacional de Conducta. Las empresas militares y de seguridad privadas no están reguladas ni controladas por los gobiernos: se autorregulan ellas mismas. Y consecuentemente operan por lo general en un vacío jurídico sin respetar el derecho internacional humanitario y de derechos humanos. Con el fin de proporcionar una cierta legitimidad, el desarrollo más reciente de la Iniciativa Suiza va a ser el establecimiento de una asociacióncartel internacional – en Ginebra. Con esta apariencia de legitimidad se espera dar una zancadilla a cualquier proyecto de elaboración de un instrumento internacional de regulación así como seguir obteniendo contratos de las Naciones Unidas y de las organizaciones intergubernamentales del sistema de Naciones Unidas en operaciones humanitarias y por qué no en operaciones de mantenimiento de la paz.

La creación de la Asociación del Código Internacional de Conducta (ICOCA) de las EMSP va a tener lugar durante la conferencia que se va a celebrar en Ginebra los días 19 y 20 de septiembre de 2013. La Asociación va a ser oficialmente establecida bajo la ley suiza y se elegirá el primer Consejo de Administración. El Gobierno de Suiza, como estado anfitrión de la ICOCA, se ha comprometido a contribuir con 467.500 dólares anuales durante los dos primeros años, y ha indicado la posibilidad de una mayor contribución después de ese período. El Gobierno del Reino Unido se ha comprometido a participar con 300.000 euros como contribución inicial. Los Estados Unidos y Australia también han manifestado su intención de contribuir con donaciones a la Asociación. A estas contribuciones hay que añadir la financiación de la misma industria de seguridad, es decir, la cuota de suscripción individual que cada una de las empresas militares y de seguridad privadas tendrán que hacer obligatoriamente todos los años como miembros de la Asociación. Dicha cuota está en función con el nivel de ingresos de cada empresa. Se puede decir que el nuevo cartel de seguridad no nace pobre. José L. Gómez del Prado (*)

MALUCHA PINTO, ACTRIZ: “LLEGÓ EL MOMENTO DE UN CAMBIO DE VERDAD” Publicado el 04 Agosto 2013 ESCRITO POR LEOPOLDO PULGAR http://www.elclarin.cl/web/index.php?option=com_content&view=article&id=8884:malucha-pinto-actrizllego-el-momento-de-un-cambio-de-verdad&catid=7:entrevista&Itemid=8 En todos los frentes de su vida, Malucha Pinto sigue construyendo habitaciones parecidas a trincheras. Para protegerse, acoger y actuar. Pero se preocupa que sean espacios con hartas puertas y ventanas, no sólo para mirar el mundo, sino para permitirse ir y venir, cruzar y dejar pasar lo que ella y otros construyen día a día. En la política, en el teatro, en la familia, la actriz instala la pasión como protagonista, porque no entiende hacer algo sin ponerle alma, corazón y vida para que resulte. “El amor y la participación son claves para mí”, afirma, junto con apoyar la candidatura presidencial de Marcel Claude, inicia los ensayos de su próximo montaje teatral y disfruta de los colibríes, que llegaron a su casa cuando empezó a escribir la obra que llevará el nombre de este sutil pajarito. “Nuestra pasión debe convertirse en un discurso arrollador por la vida”, dice Malucha Pinto Solari. ¿Por qué apoyas a Marcel Claude? “Se define como vocero de un movimiento que hace eco de muchas demandas de la ciudadanía. He visto que sus propuestas provienen de asambleas, de mucha conversación, desde una amplitud de voces, lo que configura una mirada muy diversa sobre distintos temas y es bastante inclusiva. Una mirada que cuestiona el modelo económico, político y social actual, directa y claramente. Tiene un discurso latinoamericanista... En América Latina se están produciendo movimientos que buscan recuperar nuestro lenguaje, nuestra identidad, nuestra voz. Todo eso me interesa”. ¿Desilusionada de la Concertación? “He tenido un largo viaje… La Concertación iba a transformar el sistema que dejaron instalado Pinochet y sus boys. Pero con el tiempo eso se ha fortalecido. No pienso que la derecha y la Concertación sean lo mismo. Creo que la Concertación ha tenido aciertos… Pero ha llegado el momento de hacer un cambio de verdad, por el que luchamos en tiempos de dictadura. ¡Yo tenía ganas de ayudar a construir un país distinto!”. ¿Cuál es tu principal crítica? “Que la Concertación fue gobernando de espaldas a la gente, sin el pueblo. La gente vota por diputados y senadores en la esperanza de que hagan cambios… pero llegan al Congreso y hacen lo que quieren, a veces,

en negociaciones horrorosas. La manera como hacen política es chocante… Para mí, el tema de la participación es clave. El régimen de Pinochet terminó gracias a que había un pueblo movilizado y organizado en las calles… ¿Y qué pasó con ese pueblo organizado que tenía demandas y anhelos? Les dijeron ‘quédense tranquilos, nosotros vamos a hacer las cosas por ustedes’. Y la gente, de algún modo, hizo una entrega. Siento que, hoy, la participación es clave. ¡Yo quiero participar! Creo, además, que el sistema capitalista está terminando con lo más bello que tenemos, nuestra intuición y sensibilidad, con la capacidad de vincularnos y construir comunidad, con la capacidad de ser seres humanos. La Concertación no cuestiona el sistema capitalista ni se orienta a cambiarlo. Desde esa perspectiva, me dije: ‘Bueno, esta vez voy a hacer eco de lo que mi cuerpo, mi guata, mi corazón, todo mi yo siente’. Me ha dolido y costado, porque tengo amigos en la Concertación. Pero me voy a dar permiso para ser una disidente, una rebelde”. ¿Votarías, si hay segunda vuelta sin que Claude gane? “No lo tengo claro. Estos cuatro años con la derecha han sido súper dolorosos. A nivel de programas públicos desapareció todo lo que se fue construyendo en 17 años en los temas de mujer, educación, cultura. ¡Nunca más quiero un gobierno de derecha! Soy súper discrepante con la gente que dice que es lo mismo quien gobierne. Hay que votar. No podemos estar siempre en la vereda mirando, quejándonos y no participando de las mil maneras que uno puede hacerlo: saliendo a la calle, construyendo sindicatos, poniendo la voz donde uno vaya, conversando, criando hijos con pensamiento crítico. Tenemos que volver a ser personas comprometidas con el otro”. VALLE DE PASIONES ¿Sientes rabia, rencor? “Lucho contra la rabia. El mundo en el que aspiro a vivir se construye hoy. Aquí, entre tú y yo, cada día y en cada minuto. El mundo en el que aspiro a vivir es un mundo sin rabia, sin rencor, sin violencia... Para llegar a ese mundo necesitamos que nuestra práctica no tenga nada que ver con la rabia. Me molesta que quienes se oponen a la Concertación vivan hablando mal de la Concertación, de Michelle Bachelet. Toda la energía está puesta en criticar, en sentir rabia, en descalificar. Tenemos que poner toda nuestra energía en lo que queremos construir”. Sin pasión no se puede hacer nada… “Sí, soy súper apasionada y comprendo las explosiones de ira, porque es mucho lo que se ha postergado a la gente. La gente está olvidada, arrasada, avasallada... Pero, ¿qué logramos con quemar micros? Hay otros mucho más fuertes que te van a arrasar. Ese no es mi camino. Tenemos que hacer un esfuerzo de creatividad y vincularnos de otra manera. Porque el bicharraco con el que uno se enfrenta es inmenso y está entronizado en el mundo entero. Quizás hay que tratar de convertir la pasión en un impulso arrollador hacia la vida, a todo lo que nos acerca y vincula, a lo que nos pone contentos y entusiasma”. ¿Te dio pena la renuncia de Longueira? “Lo que pasó con Longueira es coherente con los tiempos políticos que vivimos, pero igual, nunca me había tocado algo así. Es tan raro que uno se pregunta, ¿qué habrá debajo de la alfombra? Pero puede ser. Pobre, dijeron que tiene un hijo muy enfermo lo que habría detonado la depresión. Lo encuentro terrible”. ¿Coherente con la política actual? “Sí, tiene que ver con el desmoronamiento de una manera de hacer política, de una manera de ser candidato, de una manera de vincularse. Está tan emputecida la política que la ciudadanía piensa cualquier cosa sobre el caso Longueira. Y eso es una muy mala señal para la política. La confiabilidad en este país está rota. El elástico de la ética se rompió hace rato. Pasan cosas que en otra época habrían sido motivo para desbancar a un presidente. Los casos Johnson’s, La Polar, Impuestos Internos son graves. Y no es sólo corrupción de los grandes empresarios. Esto ha ocurrido ante los ojos de la Concertación. ¿Cuántos de ellos tienen conflictos de intereses, están en las universidades privadas y otros negocios? En todo esto se ha

metido el dinero como motivación, como manera de vincularse. Nadie cree nada, nadie le cree a nadie… Y que pase eso en un país es triste y aterrador, porque puede pasar cualquier cosa”. ¿La mujer actual desarrolla lo femenino? “Esta historia tiene muchas estaciones. Hemos tenido que salir al mundo con mucha fuerza, abrirnos paso a codazo limpio, pero mi sensación es que se sigue postergando lo femenino en el mundo. El universo es masculino y femenino, se necesitan ambas fuerzas aportando lo propio y tirando juntos. Pero veo mujeres cada vez más masculinas. Veo mujeres no poniendo lo femenino en este mundo, algo que tanto se necesita. Tenemos que acercarnos, aprender a mirarnos, a respetarnos. Tenemos que hacer el amor, todos. No hay nada más bello que copular, fundirte, mezclarte, gozarte, embellecerte…”. Siguen pendientes ley de aborto y matrimonio gay... “Encuentro terrible que si estás enamorado, no puedas salir, tomarte de la mano, darte besos. Respecto del aborto, son unos frescos de raja quienes dicen estar por la vida sin considerar que es carísimo tener hijos. No hay protección para los que nacen, para que la madre pueda trabajar y desarrollarse; las mujeres tenemos los sistemas de salud más caros. Todo está en contra para que las guagüitas lleguen a término, sean ciudadanos y tengan derechos. Es una vergüenza decir ‘estoy a favor de la vida’ como si alguien estuviera a favor de la muerte. Me gustaría un país donde una tuviera ganas de tener muchos hijos”. TRAVESIA POR LA CULTURA Con su compañía Aracataca Creaciones, Malucha Pinto ha montado valiosas obras en la vertiente teatro de calle (Rosamunda, la brava, La Pasionaria, un viaje por la historia de los barrios). Hoy prepara Colibrí, con el tema de la diversidad e inclusión de las personas diferentes. Sintió ganas de reescribir Tomás, que dirigió Andrés Pérez en los 90, basada en Cartas para Tomás, que narra la experiencia de asumir que su hijo era una persona diferente, debido a severos problemas físicos. Ahora, quiere hablar desde el joven que ha hecho un camino en la Tierra y hacer un tributo a Andrés Pérez. ¿Por qué “Colibrí”? “Colibrí es un pájaro de poder entre los chamanes. Dicen que es mensajero del amor, porque extrae y traslada el polen. Hace un intercambio, permite la vida. Además, el colibrí es capaz de detenerse en el aire con el batir de sus alas, una vibración súper sanadora, dicen los chamanes. También vuelan hacia atrás, es decir, tienen un vínculo con la memoria. Mi casa está llena de colibríes. La obra se estrenará en octubre, en la explanada del Museo de la Memoria, como parte de la conmemoración de los 40 años del golpe. Para nosotros es súper importante tomar espacios públicos donde la gente se encuentra y opina. No es sólo ver una obra de teatro: también ocurre algo ciudadanamente. Hay que ir donde está la gente, compartir y producir intercambio”. ¿Qué piensas de la política cultural? “Se perdió todo el trabajo de Creando Chile en mi Barrio. No digo que haya sido una panacea, pero era una puerta que fortaleció el teatro comunitario. El arte que emerge de la gente tiene que existir, construye identidad, memoria. Allí hay una frescura que tiene un nivel estético, un alimento que revitaliza, que nutre, que abre las mentes. Se arrasó con eso. Luego se instala el tema de las industrias culturales, es decir, cómo vendemos más. El tema cultural es mucho más que eso. La única manera real de desarrollar la cultura es a través de políticas públicas, insertar la educación artística en los colegios, con buenos cursos de teatro, música, danza, donde los chicos puedan elaborar sus contenidos, convirtiéndolos en lenguaje artístico. La cultura y el arte son artículos de primera necesidad. El derecho a la cultura debe estar en la Constitución”

Genes políticos y artísticos “El ardor político viene en mis genes, por mi papá (Aníbal Pinto Santa Cruz, economista y periodista, 19191996, Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales 1995) y por mi mamá (Malucha Solari Mongrio,

bailarina, 1920-2005, Premio Nacional Artes de la Representación y Audiovisuales 2001). Tengo cartas preciosas que mi tatarabuelo escribía a su mujer, un tipo súper enamorado (Aníbal Pinto Garmendia, presidente de Chile durante la Guerra del Pacífico). Me gusta saber que se fue de La Moneda a pie, ni un peso más, ni un peso menos. Mis padres vivían la bohemia junto con la conversación apasionada y la construcción de Chile. Un mundo donde la cultura, la reflexión y el amor por el país eran protagonistas. Mi casa se llenaba de gente alucinante. Las ideas importaban mucho. Siempre digo que soy mestiza. Mi mamá, nicaragüense, era hija de un señor que huyó luego de ser derrocado el presidente Balmaceda. Se enamoró de mi abuelita, que era negra. Mis papás estaban muy enamorados, se gustaban... y siempre a punto de separarse. Quizás hubiera preferido tener papás más presentes. Pero hoy, me encantan. En esos tiempos, mientras todas las mamás tejían en sus casas, la mía andaba por el mundo bailando y durante la UP fundó la Escuela de Danza del Ministerio de Educación, donde iban niños de las poblaciones para ser bailarines. Mi papá también viajaba mucho. Me picaneaban para que me abriera al mundo y generara pensamiento. Creo que era lo que mi espíritu necesitaba”. LEOPOLDO PULGAR IBARRA

URUGUAY LIDERA UN RANKING DE LAS AMÉRICAS SOBRE INCLUSIÓN SOCIAL Uruguay lidera el ranking en inclusión social de las Américas por delante de Chile y Estados Unidos. El estudio mide 21 indicadores, de los que el país aparece en los primeros lugares en gasto social en relación al PIB y en acceso a un trabajo formal. El país destina el 12,65% de su economía a fines sociales. Foto: Francisco Flores. http://www.elpais.com.uy/economia/noticias/uruguay-lidera-ranking-americas-inclusion-social.html Es la segunda edición del Índice de Inclusión Social realizado por la publicación Americas Quarterly que tiene en su consejo editorial a expresidentes latinoamericanos como el brasileño Fernando Henrique Cardoso, el mexicano Ernesto Zedillo y el chileno Ricardo Lagos. En 2013, Uruguay subió al primer puesto del Índice de Inclusión (75,5 puntos) al desplazar a Chile (68,4 puntos), que ocupó el segundo puesto. En tercer lugar aparece Estados Unidos (64,4 puntos), cuarto Costa Rica (57,8 unidades), quinto Brasil (53,5 unidades) y luego Ecuador, Perú, Panamá, Colombia y Bolivia completan los 10 primeros. En tanto, México aparece en el puesto 11. "Uruguay lideró el ranking en el porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) destinado a programas sociales, la percepción de la capacidad de respuesta del gobierno por género y raza, y el acceso a un trabajo formal", resaltó la publicación. Los indicadores donde Uruguay no estuvo en los tres primeros lugares fueron crecimiento promedio del PIB entre 2002 y 2012, en él que figuró 9° con 4,12%, y lideró Panamá. En matrícula a nivel de Secundaría por género el país ocupó el séptimo lugar y por raza el quinto, en ambos fue primero Bolivia.

En cuánto a participación de la sociedad civil por género Uruguay se ubicó 13° y por raza 12°, allí lideraron Bolivia y Paraguay respectivamente. Respecto a inclusión financiera por género, el país se ubicó 6°, en un ítem liderado por Estados Unidos.

En empoderamiento personal Uruguay fue 5° por género y 4° por raza, con Estados Unidos como líder de ambos. Líder. En cambio, hubo varios indicadores donde el país estuvo a la cabeza o al menos en el podio. En porcentaje de población que vive con más de US$ 4 al día, Uruguay fue primero tanto por género como por raza (al ganarle a Costa Rica y Chile en el primer caso y a Chile y Brasil en el segundo). También ocupó la primera posición en acceso a un trabajo formal tanto por género como por raza por encima de Chile y Brasil en ambos casos. En la percepción de la capacidad de respuesta del gobierno, tanto por el género y raza, Uruguay fue primero ganándole a Nicaragua y Ecuador en ambos casos. Además, el país fue primero en derechos civiles (por encima de Chile y Estados Unidos), derechos políticos (igualado con Chile y por sobre Costa Rica y Estados Unidos) y en derechos de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales -GLBT- (compartido con Brasil y por encima de los Estados Unidos y México). Luego, el país fue segundo en gasto social respecto al PIB (con 21,65% del Producto destinado a ese fin) por detrás de Brasil y por delante de Costa Rica) y en derechos de la mujer (compartido con Colombia y México y por debajo de Estados Unidos y Costa Rica que fueron primeros). En acceso a una vivienda adecuada por género, Uruguay se ubicó 3° por detrás de Costa Rica y México (que igualaron en el primer puesto) y de Chile. En el mismo ítem pero por raza, el país fue segundo detrás de Brasil y por encima de Chile. De acuerdo a la publicación, Uruguay "cuenta con fuertes derechos de las mujeres, así como un alto sentido de la respuesta del gobierno a la raza y el género. Sin embargo, está por detrás de otros países en cuanto a la participación de la sociedad civil, tanto en raza como en género". Americas Quarterly señaló que lo que permitió a Uruguay desplazar a Chile fue la incorporación de dos de los tres indicadores nuevos (derechos de la mujer y de GLBT), donde el país le saca seis puestos de ventaja. Cambios para el ranking de este año El Índice de Inclusión Social de la publicación Americas Quarterly marcó que si bien no hubo "cambios dramáticos" en el ranking 2013 respecto al 2012, hubo "dos resultados" que "son notables". "El primero es el aterrizaje de Brasil en el quinto lugar este año. Si bien el resultado de la suma de dos nuevos países con puntajes por encima del país (Estados Unidos y Costa Rica), el marcador global (53,5 puntos) es notablemente inferior a la puntuación de los tres países líderes: Uruguay (75,5 unidades), Chile (68,4 puntos), y los Estados Unidos (64.6 puntos)", aseguró la publicación. "El segundo" hecho notable "es la trágicamente baja puntuación de Guatemala (14,8 unidades)", con lo que se ubicó en el último lugar (16°) del ranking. Para el listado de este año, "como lo haremos en el futuro", indicó Americas Quarterly "se incluyeron otros cuatro países en la encuesta global (Costa Rica, El Salvador, Honduras y Panamá)". Además se desglosó por género y raza la participación de la sociedad civil, la capacitación personal y el sentido de la capacidad de respuesta del gobierno.

Por último, la publicación cruzó los datos del índice con "las tasas de homicidios (cada 100.000 habitantes) en esos países, utilizando datos de 2010 de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito". La idea "no era medir la causalidad, pero sí ver la correlación", aclaró. En ese ranking, Chile es primero (3,2 homicidios cada 100.000 habitantes), Estados Unidos segundo (4,8 homicidios cada 100.000 habitantes) y Uruguay 3° (6,1). Pero Bolivia es cuarto (había sido 10° en inclusión social).ç ç

COMIENZA EN BRASIL LA ÚLTIMA ETAPA DEL IV ENCUENTRO INTERNACIONAL CONTRA EL TRABAJO INFANTIL Por Sociedad Uruguaya / julio 26, 2013 / Sin Comentarios http://www.sociedaduruguaya.org/2013/07/comienza-en-brasil-la-ultima-etapa-del-iv-encuentrointernacional-contra-el-trabajo-infantil.html 14 millones de niñas, niños y adolescentes de entre 5 y 17 años, trabajan hoy en América Latina: el 10% de los 141 millones de niños de la región, de los cuales 9,4 millones realizan trabajos peligrosos que amenazan su integridad física y psicológica. El objetivo de este espacio amplio, abierto y participativo es recoger y compartir experiencias y aprendizajes sobre prevención y erradicación del trabajo infantil provenientes de las distintas regiones de América Latina. El Encuentro se divide en cuatro etapas: la primera, que tuvo lugar en junio de 2012 en Ecuador, abordó cuestiones de la región andina; la segunda, celebrada en octubre se centró en los países de Centro América y República Dominicana; la tercera, organizada en México en marzo de 2013, debatió sobre la situación en el país azteca; y la última, el 26 de agosto de 2013, incidirá en temas relativos a los países del Cono Sur y Venezuela y tendrá lugar en São Paulo. El encuentro virtual se celebrará del 29 de julio al 23 de agosto en la Red LACTI donde se publicarán posteriormente las experiencias y aportes surgidos en la fase presencial: www.redcontraeltrabajoinfantil.com São Paulo, 24 de julio de 2013. Fundación Telefónica, con el apoyo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la UNESCO, convoca el IV Encuentro Internacional contra el Trabajo infantil como un espacio amplio, abierto y participativo, cuyo objetivo es recoger y compartir experiencias y aprendizajes latinoamericanos sobre prevención y erradicación del trabajo infantil, con vistas a la próxima Conferencia Global sobre Trabajo Infantil “Estrategias para Acelerar el Ritmo de Erradicación de las Peores Formas de Trabajo Infantil” que se celebrará en Brasil en octubre de 2013. Con este encuentro, denominado “Aportes a la eliminación del trabajo infantil en América Latina. Un camino hacia la Conferencia Mundial 2013″, Fundación Telefónica quiere identificar, analizar y compartir estudios, prácticas y experiencias exitosas en la prevención y erradicación del trabajo infantil en América Latina. El IV Encuentro Internacional contra el Trabajo Infantil se compone de cuatro etapas subregionales, teniendo cada una de ellas un encuentro presencial y una fase previa de discusión virtual. El último encuentro subregional tendrá lugar en São Paulo (Brasil) el 26 de agosto de 2013, con la participación de Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay y Venezuela. En este encuentro, que contará con una fase virtual desde el 29 de julio al 23 de agosto de 2013, se abordarán los temas relacionados con el cono sur y Venezuela. Las actividades del encuentro virtual se podrán seguir en la Red Latinoamericana contra el

Trabajo Infantil (www.redcontraeltrabajoinfantil.com) impulsada de forma conjunta por Fundación Telefónica y la OIT. Objetivo: erradicar las peores formas de trabajo infantil, de cara a la III Conferencia Global sobre Trabajo Infantil de 2013 en Brasil El IV Encuentro está abierto a la participación de diferentes actores, fundamentalmente a aquellos mencionados en la Hoja de Ruta para la Eliminación de las Peores Formas de Trabajo Infantil establecida en 2010 en la Haya: instituciones gubernamentales, interlocutores sociales, ONG y organismos internacionales y regionales. Cada uno de los debates previstos en el IV Encuentro se alimentará del trabajo virtual en la red así como de las conclusiones que se generen en los eventos presenciales. El Encuentro se divide en cuatro etapas, según las subregiones de América Latina y sus características específicas: en junio, en Ecuador, se abordó el problema del trabajo infantil en la región andina; en octubre, en Panamá, se trataron temas de América Central con la participación de Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá y República Dominicana; en marzo de 2013 se debatió sobre la situación en México con la participación de Organismos Internacionales; y esta la última, en julio y agosto de este año, incidirá en temas relativos a los países del Cono Sur y Venezuela y tendrá lugar en Brasil. Temas de la última etapa del IV Encuentro Internacional contra el Trabajo Infantil Las cuatro áreas que se abordarán en esta cuarta y última fase son: - El trabajo coordinado para combatir las peores formas de trabajo infantil. ¿Cómo se han organizado las organizaciones no gubernamentales, los organismos multilaterales, los gobiernos y la sociedad en general para combatir las Peores Formas de Trabajo Infantil? - El trabajo infantil en las cadenas de valor. ¿Cuál es la visibilidad del trabajo infantil en las cadenas de valor y qué políticas se deben implementar? - El trabajo adolescente permitido y la preparación para la vida adulta. ¿Cuáles son las potencialidades y límites del Trabajo Adolescente Permitido en el marco de las políticas de preparación para la vida adulta? - Monitoreo de las políticas de prevención y erradicación del trabajo infantil. ¿Cómo se pueden monitorear y evaluar las políticas para la prevención y erradicación del trabajo infantil y la protección del adolescente trabajador conforme marco normativo vigente? Fundación Telefónica, trabajando para la infancia a través de la educación Fundación Telefónica desde hace diez años ofrece a la infancia en situación de especial vulnerabilidad nuevas oportunidades a través de la educación. Se desarrolla en 14 países de Latinoamérica en colaboración con 120 organizaciones sociales y gobiernos locales. A través de Proniño y otros proyectos de educación dirigidos a la infancia en situación de riesgo de trabajo infantil, la Fundación ha contribuido de forma decisiva a ofrecer a estos niños y jóvenes una mejor oportunidad de vida. Fundación Telefónica entiende que los objetivos anteriores sólo se pueden alcanzar sensibilizando y movilizando a la ciudadanía y a las instituciones, contribuyendo de manera significativa a mejorar la eficacia de las políticas públicas de protección de la infancia, las familias y el empleo decente. Su acción se desarrolla en las sociedades donde Telefónica está presente: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Perú, Uruguay y Venezuela en Latinoamérica, y en Alemania, Eslovaquia, España, Irlanda, Reino Unido y República Checa en Europa.

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EL PRÍNCIPE DE ANTIOQUIA: PABLO ESCOBAR Este País | Armando Chaguaceda | 268 | 01.08.2013 | 0 Comentarios http://estepais.com/site/?p=46836 Bandido, líder social, narcotraficante, terrorista, político. A Pablo Escobar lo condenaron sus crímenes, pero sobre todo sus excesos, sus traiciones y su inseguridad. A continuación, un retrato del criminal colombiano, a la luz de la lección de Maquiavelo. Pablo Emilio, le voy a dar un consejo, el día que usted haga algo malo, hágalo bien hecho, no sea tan pendejo de dejarse pillar, […] este mundo es para los vivos, no es para los bobos, es pa’ los avispaos, y uno tiene que aprender con quién caza las peleas. Hermida, madre de Pablo Escobar, a su hijo En la introducción a El príncipe, Nicolás Maquiavelo exponía a Lorenzo de Médici las fuentes nutricias de su saber político, al decir: “[…] no he hallado, entre las cosas que me son preciadas, algo más valioso o que sea más estimable que el conocimiento de los actos de los grandes hombres, que yo he venido aprendiendo en la experiencia de las cosas modernas y la lectura de las antiguas”. Así, historia y presente se hermanan para acrisolar, desde la lectura de los clásicos, modos para el análisis, la asesoría y la acción políticos, fenómenos marcados intrínsecamente por las lógicas de la negociación y el conflicto, que persisten en la actualidad y rigen tanto procesos institucionalizados y formales como actitudes y liderazgos insertos en oscuros escenarios de la ilicitud. Estas ideas vienen a la mente cuando se analiza, desde un prisma menos “espectacular”, el fenómeno cultural (editorial y televisivo) tejido alrededor de la figura del capo colombiano Pablo Escobar Gaviria. A partir de la inusitada popularidad de libros enfocados en la vida del empresario y líder criminal (y social) antioqueño, la telenovela de Caracol Televisión lleva la historia de Escobar a las pantallas y hogares, generando una fanaticada que traspasa las fronteras nacionales, de clase y de niveles educativos, de grupos etarios y corrientes ideológicas. Es probable que ello se deba al adecuado ritmo de la trama y la cuidada producción pero, sospechamos, bien podría ser efecto del espejo que la narración ofrece de nuestra conciencia social, marcada —en los contextos latinoamericanos— por la pervivencia de altos niveles de exclusión, marginación y violencia, los cuales sirven de caldo de cultivo a lo que hemos llamado, a falta de una mejor noción, la lumpenpolítica. chaguaceda-a-268 Hablar de lumpenpolítica no significa, en forma despectiva y simplista, aludir a una actividad carente de sustrato social y motivaciones personales, susceptible de abordarse como mera desviación de las normas de una “convivencia civilizada”. La lumpenpolítica expresa la rebeldía —si se quiere bizarra— de actores y grupos marginados (no necesariamente pobres) contra el statu quo y las élites dominantes. Tampoco debe confundirse con “políticas plebeyas”, producidas por sectores populares que apelan —en espacios sociales y comunitarios— a formas de organización y participación política heterodoxas, pero construyen cierto tipo de ciudadanía y prácticas e instituciones democráticas. La lumpenpolítica relativiza al extremo los raseros éticos y la legalidad, al tiempo que refuerza códigos de honor y ciertos afectos personales, familiares y colectivos (el barrio, la banda) en su búsqueda del poder y de venganza contra sectores acomodados y, en su expresión más degradada, contra la sociedad entera. Es un fenómeno del cual valdría la pena extraer las debidas reflexiones, sobre todo por su recurrencia en nuestros contextos latinoamericanos, en cuyos niveles de desigualdad, marginación y violencia encuentra

terreno fértil para expandirse. Porque apela a un descarnado realismo (y pragmatismo) que desconoce las normas sociales dominantes, puede ser analizado desde las perspectivas sobre Gobierno —y gobernante— que propone Maquiavelo en El príncipe. En las páginas siguientes abordaremos dicho fenómeno desde las claves que ofrece el caso paradigmático del personaje colombiano, ubicándolo en el contexto sociohistórico de la nación sudamericana. Establecemos un diálogo con las ideas de Maquiavelo para discutir la correspondencia, los aciertos y los errores que relacionan la figura y la actuación de Pablo Escobar y su organización con el modelo de liderazgo político expuesto por el pensador florentino. Como puede suponerse, este no es un texto de filosofía moral, pensamiento político o historia regional; tampoco es un análisis científico de sociología o un estudio sobre la violencia. Nuestro propósito es perfilar —en un formato fluido e informal que se aleja del tradicional artículo académico y se acerca al ensayo— algunas ideas susceptibles de insertarse en el debate público sobre un tema de ineludible actualidad, aprovechando las ventajas que la coyuntura —la conmemoración de los quinientos años de El Príncipe y el éxito comercial y mediático del “fenómeno Escobar”— ofrecen.1 El contexto y sus constantes En su accidentado proceso de desarrollo como nación independiente, Colombia sufrió a lo largo del siglo XIX —como otros países hispanoamericanos— los efectos de una conflictividad permanente, la cual cobró forma siniestra en 9 guerras civiles y 20 contiendas regionales. Posteriormente, durante la primera mitad del siglo XX, la violencia se mantuvo relativamente acotada, aun cuando se formó el caldo de cultivo de agudos conflictos sociales y políticos que estallaron, de diversos modos y por distintas causas, a partir del “Bogotazo” (1948) y se mantuvieron intermitentemente a lo largo de la segunda mitad del siglo. Colombia es una nación con diversas regiones, bien definidas en términos de identidad y escasamente conectadas, con abundantes y fértiles tierras, una baja densidad poblacional —salvo en las grandes ciudades, todavía en expansión— y que vive un proceso inconcluso de colonización de sus zonas agrarias y selváticas. La población es bastante homogénea (85%, mestiza; 10%, blanca, y apenas 5% de indígenas) y está atravesada por marcadas diferencias de clase, procedencia territorial y lealtades políticas. Con un desarrollo económico tardío (fomentado a partir de los años veinte del siglo pasado, sobre la base del cultivo del café) y a falta de una economía exportadora y de grandes centros mineros volcados al mercado global, en el país sudamericano cobró pronta vida una amplia clase de pequeños propietarios rurales y urbanos, la cual se convertiría en la base social de los partidos y las élites dominantes, que se apoyaron en aquella para intervenir en la vida pública. Históricamente, la población colombiana se socializó no a través de un quehacer autónomo ciudadano o de políticas de Estado tradicionales —que resultaban material y legalmente precarias dada la debilidad del Gobierno central— sino por mecanismos y subculturas políticas específicos, forjados alrededor de dos partidos dominantes: el Liberal y Conservador. Surgidos a mediados del siglo XIX, estos partidos establecieron redes a lo largo del país, aprovechando los diversos cacicazgos locales. En sus filas coexistían terratenientes, capitalistas industriales y artesanos, además de una masa de maniobra proveniente de los sectores populares antes descritos, razón por la cual la militancia partidaria no corresponde a grupos o clases sociales bien definidos y contrapuestos. balazo-2-balerini-268 Así, en ausencia de una ciudadanía activa y de una autoridad estatal coherente, las lealtades partidarias canalizaron, durante decenios, la socialización y la participación política de la gente. La partidización cooptó y encapsuló las distintas fuerzas y conflictos sociales, acotando la emergencia de movimientos populares y/o específicamente obreros. Y las disputas interpartidistas dieron cauce a la terrible violencia sostenida a lo largo de la historia nacional, un fenómeno que ha sido descrito por diversos escritores colombianos como una suma de matanzas capaz de banalizar y hacer cotidiana la tragedia y la muerte (Ferreira, 2011), realidad

que genera la visión de una historia nacional en la que los hitos son grandes fechas caracterizadas por la catástrofe y el crimen. Paradójicamente, aunque la permanencia de esta violencia a lo largo de los dos siglos de vida política colombiana ha sido notable, también es verdad que ha coexistido con una extraña estabilidad institucional, caracterizada por la persistencia de Gobiernos civiles y de élites hegemónicas aunque territorialmente fragmentadas. Estos actores han podido prescindir, en su esquema de dominación, de recursos tales como las grandes reformas sociales o las movilizaciones nacionalistas que estremecieron a otras naciones del hemisferio. Así, cualquier explicación de los factores que han incitado la violencia en Colombia debe tomar en cuenta los elementos que simultáneamente han dado forma, en este ambiente de conflicto exacerbado, a una estabilidad institucional sui generis. En la historia nacional, el Estado colombiano no ha detentado el monopolio de la coerción, el control del territorio, la procuración de justicia y la tributación, ni ha podido convertirse en el eje de un sistema político caracterizado por la dispersión de centros de poder y por el peso de reglas informales de acceso y ejercicio del mismo (Losada, 2012). Pese a ello, en Colombia sí se ha logrado la subordinación del poder militar al civil y el respeto a los periodos institucionales de sus gobernantes. Con el trasfondo de una tradición de desconfianza frente a la autoridad, el país ha vivido en una permanente combinación de orden y violencia, de rivalidades entre los partidos dominantes y los clanes/clientelas que los conforman. Otro rasgo de esta realidad bizarra ha sido una cierta impregnación de la política —de sus modos, léxicos y procesos— por la lógica del derecho, lo que hace coexistir los límites legales de la acción estatal con violaciones autoritarias e institucionalizadas a los derechos humanos. Así, por ejemplo, los estados de excepción y los decretos presidenciales serían parte normal de la vida política colombiana durante la segunda mitad del siglo XX. En ausencia de una amplia intervención estatal y de proyectos populistas —como los desarrollados en México, Argentina o, con modificaciones, en la vecina Venezuela—, en Colombia se estableció un orden básicamente afín al liberalismo clásico decimonónico, capaz de operar sobre un pluralismo de élites políticas y económicas que se disputan (y rotan) periódicamente el poder, y que encuentra, como correlato, una cultura política nutrida por una mezcla de conservadurismo social y desconfianza respecto a la política y el Estado, y fundida con una tradición de apego al ritual electoral de la democracia representativa (Losada, 2012). Además, desde inicios del siglo pasado, la presencia de los militares —en cuanto actores protagónicos de la política nacional— se reduce de forma considerable y se establece una larga serie de Gobiernos civiles. En 1948, el asesinato del caudillo liberal disidente Jorge Eliécer Gaitán desató el llamado “Bogotazo”, episodio de lucha armada en la capital del país cuyos ecos se prolongaron, con más o menos virulencia, por casi dos décadas, dando lugar a la etapa conocida como “La Violencia”. Tal situación puede considerarse como el clímax de un conjunto de disputas sociales y políticas que, dentro y fuera del sistema estatal, arrastraron a liberales y conservadores, adquiriendo una expresión brutal y territorialmente fragmentada. Dentro de ese panorama, la emergencia de grupos guerrilleros —diversos en sus matrices ideológicas y formatos organizativos y de acción— añadió un importante factor a la explosiva situación colombiana. Con predominio de contenidos agraristas, la insurgencia aparece durante los años cincuenta (Núcleos de Autodefensa Campesina) y sesenta (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, subordinadas al Partido Comunista; Ejército de Liberación Nacional, ELN, procubano, y Ejército Popular de Liberación, EPL, maoísta), portando un discurso político de refundación social y nacional con claros contenidos marxistas. Estas guerrillas, golpeadas por las estrategias gubernamentales a mediados de los años setenta, resurgen en la década de los ochenta, a partir de una reorganización basada en el control estable de territorios, en los que usufructuaron una economía regional basada en la explotación del petróleo, los productos agrícolas (café y plátano) y, cada vez más, en la elaboración, traslado y distribución mayorista de coca. La coca, en particular, resultó decisiva para la obtención de recursos y la ampliación de la base campesina de las guerrillas, dando a organizaciones como las FARC el estatuto de Gobierno local real en las zonas ocupadas. Así, los años ochenta fueron el escenario de la diversificación y expansión de los actores armados —narcotraficantes, bandidos urbanos, paramilitares y guerrillas— cuyas alianzas y enfrentamientos

provocaron miles de civiles muertos, heridos y desaparecidos, a los que se unieron varios millones de pobladores rurales desplazados a las ciudades y a naciones vecinas (Ecuador, Venezuela). Esta persistente violencia política, considerada como la principal amenaza a la seguridad nacional —por encima de los conflictos externos— generó una vinculación más estrecha con Estados Unidos y favoreció procesos convergentes de policialización de las fuerzas armadas y militarización de la policía. ©iStockphoto.com/jameslee1 Por esos años cobraron fuerza los cárteles colombianos —en especial los de Cali y Medellín— que han sido estudiados por especialistas (como el politólogo y colombianista galo Daniel Pecaut) en cuanto organizaciones carentes de una base territorial estable, una estructura permanente y estrategias de influencia política precisas. Los cárteles se conformaron alrededor de la meta de controlar la elaboración, exportación y distribución exterior de un producto de alto valor (la cocaína), por lo cual no procuraron establecer un control sociopolítico y territorial absoluto y permanente en sus zonas de influencia, tolerando y, en algunos casos, utilizando a otras organizaciones de menor importancia. Asimismo, en sus regiones de asentamiento coexistieron con una pluralidad de actores —guerrillas, paramilitares y fuerzas policiacas— que empleaban sistemáticamente la violencia, estableciendo relaciones puntuales y cambiantes de colaboración y conflicto. Aunque los cárteles apelaron a estrategias principalmente pragmáticas centradas en la defensa de intereses económicos, su influencia política y el impacto de su actividad en las normas de comportamiento de la población han sido enormes. En una sociedad culturalmente conservadora y socialmente elitista y excluyente como la colombiana, los cárteles dieron rápidamente a sectores populares y medios — especialmente a sus jóvenes— una esperanza de movilidad social y de éxito económico rápido, lo que los legitimó ante buena parte de la ciudadanía. A ello se añadió una estrategia de fomento de la corrupción y los negocios dirigida a los actores políticos y empresariales, lo cual se tradujo en una situación de connivencia con parte de la élite nacional tradicional. En Colombia, la economía de la droga comenzó en los años sesenta en la costa atlántica, con el cultivo de la marihuana. En los años ochenta, el país se convirtió en centro mundial de producción y distribución de cocaína, suministrando más de 70% del consumo de Estados Unidos, lo que generó a los cárteles ingresos estimados (entre 1984 y 1990) en unos cuatro mil millones de dólares anuales. En este panorama, el cártel de Medellín, orientado al mercado de la costa Este de Estados Unidos, fue fortaleciendo su presencia nacional y organización interna, lo que tuvo enormes repercusiones económicas (un sistema empresarial paralelo y pujante) y políticas (intervención en campañas partidarias, empleo de la violencia, fomento de la corrupción político-administrativa) de amplio impacto en la vida nacional colombiana. Basado en vínculos familiares o de amistad, el cártel de Medellín llegó a contar con unos 200 asociados permanentes; además, tenía en su nómina a policías y funcionarios que le proporcionaban formación y apoyo, contrataba una vasta red de sicarios provenientes de las barriadas pobres y realizaba una extensa labor filantrópica en zonas populares. Los miembros de esa organización provocaron sentimientos encontrados —extrañamiento, tolerancia y aceptación— en la sociedad colombiana: para las élites tradicionales eran unos seres extraños y peligrosos carentes de prestigio; para algunos empresarios eran una fuente insustituible de inversiones y dinero; para amplios sectores populares eran personas con gran legitimidad y respeto, un ejemplo a seguir si se venía “de abajo”. A mediados de los años ochenta, como consecuencia de una política exterior ligada a Estados Unidos, Colombia internalizó la visión y la agenda de su aliado norteño. El combate a las drogas se convirtió en agenda complementaria de la lucha contra el comunismo y la insurgencia; la relación bilateral se vio crecientemente “narcotizada” —en el marco de la campaña de Ronald Reagan, que presentaba las drogas como una amenaza a la seguridad nacional estadounidense— y Colombia sufrió una elevación de los niveles de violencia criminal. Dicha violencia provocó una migración masiva que cambió la fisonomía predominantemente rural del país: en apenas dos décadas aparecieron grandes periferias pobres en las

principales ciudades colombianas. Además, se desató el enfrentamiento entre grupos de narcotraficantes, paramilitares, guerrilleros e instituciones del Estado, propiciando una mentalidad de guerra civil total cuya “filosofía” ha sido explicada por Alonso Salazar en estos términos: “La acción contra un enemigo colectivo permite, a quienes alzan su hacha primitiva, participar en el derramamiento de la sangre con una causa justa. La guerra deja de ser un hecho circunstancial para convertirse en el móvil más esencial […]”. Uno de los máximos responsables de esta escalada fue el líder del cartel de Medellín, Pablo Emilio Escobar Gaviria. El hombre y su obra La lumpenpolítica cobra vigor en los actos de Pablo Escobar, personaje cuyos itinerarios mezclan al bandido, al redentor, al empresario y al sociópata.2 En el antioqueño, el afán de liderazgo y la búsqueda del éxito personal, la comisión de delitos y la subversión del orden encuentran incentivos en los primeros años de formación, al calor materno. En una ocasión, el niño Escobar dice a su madre: “Todos los hombres de la familia son soldadores pero yo no quiero ser un soldador”. La madre le responde que su abuelo, a diferencia de los otros hombres de la familia —todos unos fracasados—, “era un duro”. El abuelo, contrabandista de whisky y corruptor de las autoridades, hombre respetado por sus vecinos, se constituyó desde entonces en ejemplo a seguir para el futuro capo. balazo-2-chaguaceda-268 En 1962, con apenas 13 años, Pablo cursa el bachillerato en un liceo donde recibe, en mezcla confusa, la influencia de corrientes radicales que abarcaban la Teología de la Revolución, la prédica del cura guerrillero Camilo Torres y el ejemplo de la Revolución Cubana. Electo presidente del Consejo de Bienestar Estudiantil, su madera de líder se fraguó en batallas a favor del transporte escolar y la alimentación de los estudiantes pobres, entre otras causas, mientras simultáneamente traficaba marihuana, cigarros y exámenes entre sus compañeros. En 1968, el joven Escobar pasó a integrar —según testimonio propio— la junta cívica de su barrio, una temprana muestra de su vocación social. Durante su formación, el capo siguió, quizá de forma inconsciente, las máximas maquiavelianas que rezan: “Para conocer la naturaleza de los pueblos hay que ser príncipe, y para entender a los príncipes hay que ser pueblo” y “El príncipe debe hacerse temer de tal manera que si no se gana el amor, por lo menos evite el odio; porque es posible ser temido y amado al mismo tiempo”. Ello es fiel reflejo de su vínculo con los sectores populares —cultivado con obra mientras vivió y prolongado en forma de culto hasta después de su muerte—, mediante el apoyo a los pobres en Medellín y ciudades vecinas. Con una política de intervención en los barrios, donde fungía lo mismo como árbitro en disputas entre los miembros de bandas o entre familias que en labores de filantropía. Sobre esto último, Maquiavelo había aconsejado, siglos atrás, que el príncipe “debe crear premios […] para quienes, de una u otra manera, quieran mejorar su ciudad o su Estado; además, debe entretener al pueblo, en las épocas propicias, con fiestas y espectáculos, puesto que en toda ciudad existen barrios, grupos y corporaciones; es conveniente reunirse con ellos de vez en cuando para dar ejemplo de magnanimidad y con ello aumentar su prestigio y mantener su dignidad […]”. ©iStockphoto.com/jameslee1 En congruencia con su origen, Pablo Escobar mantuvo ciertos gustos y apariencias personales sencillos, lo que no le impidió desatar sus demonios y derrochar plata en numerosas fiestas, orgías y proyectos personales. Como parte de su acción social, organizó campeonatos y equipos de futbol, construyó canchas deportivas y comités para proyectos comunitarios, a los que brindó recursos y asesorías, popularizando términos entonces novedosos como participación, ecología y autogestión. Por la influencia de su madre, que era maestra rural, promovió entre los jóvenes de barrios populares la educación y construyó centenares de viviendas para habitantes de comunidades marginadas como Moravia, población asentada sobre las emanaciones de un basurero totalmente reconstruido por decisión de Escobar.

No cabe duda de que la personalidad del colombiano lo llevaba, como meta, a la conquista y el disfrute del mayor poder posible, acompañándolo con cierta legitimidad no necesariamente institucional ni democrática. Así, tras ser rechazada su membresía en el Club Campestre de Medellín, financió una huelga de sus trabajadores. Tras una breve incursión en la política liberal, de la mano de un caudillo local, vio sus esperanzas frustradas por el rechazo del entonces candidato Luis Carlos Galán a vincularse con personeros del narcotráfico. Ante el fiasco, Escobar señaló, al retirarse de la contienda electoral: “Seguiré en franca lucha contra las oligarquías y las injusticias, y contra los conciliábulos partidistas, autores del drama eterno de las burlas al pueblo […], me duele el deprimente contraste de los que nada tienen frente a los que solo entienden por exclusiva divisa de sus vidas el acumular capital, oportunidades y ventajas, que lejos están de cumplir función social alguna”. ¿Sincera filiación izquierdista, retórica de legitimación ante la opinión pública, expresión de un ego desmesurado? Todo parece coincidir en el verbo y los actos de un personaje que encarnó, como pocos, las cualidades prototípicas del caudillo y el bandido latinoamericanos. ©iStockphoto.com/jameslee1 Pablo Escobar acarició, incluso, un plan para estructurar una organización armada separatista, de alcance regional, denominada Antioquia Rebelde. Concertó —entre las bandas de sicarios y las izquierdistas organizaciones de autodefensa de los barrios de Medellín llamadas milicias— una tregua, reprendiendo a algunos de sus hombres por asaltar y agredir a habitantes de zonas pobres. Escobar señaló entonces, como otras veces, que su lucha era contra el Estado y se definía como antiimperialista y antioligarca. Además, su admiración por la guerrilla del M19, responsable de acciones espectaculares y de proyectar un discurso político identificado con la idiosincrasia colombiana, fue manifiesta. En su carrera como líder de bandidos —término que se atribuía constantemente para desligarse de la “inmoralidad de los políticos”—, Escobar mantuvo intercambios más o menos estables o esporádicos pero, como regla, cordiales con diversas personalidades de la izquierda local, como fue el caso de Bernardo Jaramillo, líder de Unión Patriótica, que moriría asesinado en plena campaña presidencial a manos de la derecha colombiana.3 Un dirigente del M19 que conocía bien a Pablo Escobar lo definía como un “hombre socialmente sensible, con tendencia a la dictadura, con formación básica, rodeado de gente de diferente estrato social”. Otro miembro de la organización guerrillera lo caracterizó como un hombre cuyo liderazgo era cercano al pueblo, con una muy personal y arraigada fe cristiana. En contraste, pero sin dejar de lado la dimensión redentora del personaje, uno de los oficiales que dirigió la lucha contra Escobar lo definió del siguiente modo: “Él era un revanchista social. Y el narcotráfico fue su instrumento para cobrarle a la sociedad y al establecimiento lo que sentía como injusto. Quería reivindicar un sentido de clase […] pero eso no está expreso, no está elaborado […]”. ©iStockphoto.com/jameslee1 En sintonía con los consejos de Maquiavelo sobre la necesidad del líder de contar con un respaldo armado, Escobar dio prioridad a la formación y el empleo de una fuerza —con sicarios propios y contratados— con la cual someter a sus adversarios del narcotráfico, a grupos irregulares y al Gobierno nacional. Al respecto, el florentino había señalado en su obra que todos los profetas armados tuvieron éxito en sus empresas y los desarmados siempre fracasaron, para destacar después que “un príncipe no debe tener más ocupación, no considerar cosa alguna como su principal responsabilidad, que la guerra, su estrategia y ocupación, pues este es un arte propio de quien está señalado para mandar”. Tal es su poderío —en forma de asesinatos, atentados dinamiteros,4 secuestros de personalidades del mundo empresarial y político—, que fuerza al Estado y la opinión pública, en varias ocasiones, a rechazar la extradición de colombianos a Estados Unidos, hasta que en 1987 la Corte Suprema la declara inconstitucional y, en 1991, la Asamblea Constituyente prohíbe su inclusión en la nueva carta magna. En todo momento, Escobar quiso fomentar la más férrea lealtad de su círculo de allegados, participando personalmente en la coordinación de acciones y consciente de que, como decía Maquiavelo, “si el príncipe

fundamenta su dominio sobre armas mercenarias, jamás estará tranquilo y seguro, porque descansa sobre fuerzas desunidas, sujetas a la ambición, indisciplinadas y desleales, demasiado orgullosas entre los amigos y con los enemigos viles. […] el príncipe debe ir al frente de sus tropas, en funciones de capitán”. Sin embargo, en ocasiones recurrió al empleo de paramilitares —como instructores y escoltas personales—, los cuales a la postre virarían en su contra. Vale la pena ahondar en los que fueron dos grandes fracasos del liderazgo de Escobar: por una parte, su tendencia a asumir retos y contiendas que rebasaban el estado real de sus recursos y de la correlación de fuerzas existente y, por la otra, la ruptura con colaboradores fieles, a los que agredió y empujó a las filas de sus enemigos. Al respecto de este solipsismo y esta “conspiranoia” que frecuentemente obnubila a los conductores políticos, Maquiavelo había señalado que, frente a la adulación, “los señores se complacen tanto consigo mismos y llegan a engañarse de tal manera que difícilmente puedan defenderse de ese mal”; debido a esta soberbia, “el príncipe que se deja llevar por la fortuna cambia tan pronto como ella y fácilmente cae en la desventura”. Así, decía el pensador italiano, “cuando los hombres se empecinan en una cierta manera de actuar y cambian los tiempos de la fortuna, fracasarán inexorablemente, y cuando coincide el carácter con las circunstancias se propicia el triunfo”. En relación con ello, señala Alonso Salazar que “a Pablo lo mataron sus propios compañeros que lo orientaron mal, que lo metieron en guerras inoficiosas, los bandidos que le decían: guerra total, Patrón. Claro, porque la guerra significaba vueltas de cien o doscientos millones de pesos. Pablo era como el sacerdote de un clan guerrero y sus hombres morían por él con desprendimiento, pero a su vez ellos lo llevaron al sacrificio”. ©iStockphoto.com/jameslee1 Cuando Escobar fue encarcelado y se sintió marginado de la gestión directa del negocio y sin la libertad de movimiento y acción que antes poseía, comenzaron a aumentar su sensación de aislamiento, la necesidad y la (consiguiente) demanda de más dinero, el sometimiento y la desconfianza respecto de sus hombres en la calle. Y ello solo podía desembocar en la fórmula empleada anteriormente por el capo en busca de soluciones radicales: la violencia. Solo que esta vez, con su actuar, el antioqueño parecía desconocer la lección de Maquiavelo, cuando dijo que “la crueldad puede ser bien o mal empleada […]; correctamente, cuando se ejecuta con sorpresiva rapidez por la necesidad de afianzarse en el poder, pero después ya no se usa la crueldad, puesto que ya se tiene seguridad, y se organiza un Gobierno de beneficio para los súbditos. Mal usada es la maldad, que aun siendo poca en un principio, aumenta con el tiempo en vez de disminuir”. Y remata: “El príncipe deberá estudiar muy bien el monto de la crueldad que deberá aplicar, y ejecutar solamente aquellas medidas ineludibles, que deberán realizarse de golpe”. Así, cuando los capos que gestionaban el cártel en las calles de Medellín (“El Negro” Galeano y “Kiko” Moncada) fueron asesinados junto a sus familias por órdenes de un desconfiado y ambicioso Escobar, los supervivientes de la matanza se unieron a los archienemigos del capo antioqueño (el cártel de Cali, empresarios, los hermanos Castaño, jefes de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia), gestándose la variopinta alianza que finalmente lo derrota: los Perseguidos por Pablo Escobar, mejor conocidos por sus siglas como los Pepes. Ante tal coalición, el Gobierno, el alto mando y —según algunas fuentes— la misma embajada de Estados Unidos miraron con tolerancia y complacencia el desarrollo de una fuerza que, carente de amarres legales, podría usar contra Escobar sus propias armas. El general Maza, director de los servicios de inteligencia del Estado y enemigo personal del capo, testimonió: “A Escobar lo debilitó haber matado a sus amigos; más que las bajas que nosotros le cometimos […], haber peleado con ellos fue el peor de sus errores”. En suma, un grave error de cálculo —aderezado, seguramente, por trastornos de personalidad— de un animal político que había sido capaz de poner de rodillas a las élites colombianas y su maquinaria institucional. Respecto a la sabiduría del príncipe, Maquiavelo dijo: “Cuando se juzga la inteligencia de su soberano, generalmente nos fijamos primero en el tipo de hombres que le rodean; cuando son competentes y fieles consideramos que el señor es un sabio, porque ha tenido el talento de medir su capacidad y conservar su fidelidad”. He aquí, sin duda, una vulnerabilidad de Escobar: sin otro consejero que su conciencia, se rodeó de guerreros, gente joven, impulsiva y con poca formación que vivía de la guerra y lo adulaba para mantener la violencia que constituía un modo de vida. Su influencia —y su propia soberbia— lo llevaron a medir mal

sus fuerzas reales y a participar activamente en actos terroristas y criminales (como al atentado al avión de Avianca o el asesinato de Luis Carlos Galán) que colmaron la paciencia de la ciudadanía, le ganaron la animadversión mayoritaria de la opinión pública y le echaron encima a todas las fuerzas del Estado. ©iStockphoto.com/jameslee1 Aunque con frecuencia se recuerda que el florentino aconsejaba al príncipe que evitara “preocuparse de aquellos vicios que le son útiles para salvar el Estado” y le recomendaba adaptar su conducta a las contingencias (como “zorro” o “león”), con el fin de obtener y mantener el poder, la mirada de Maquiavelo sobre el ejercicio del liderazgo político va más allá. Sugería evitar el desborde del odio y el desprecio notorio por la persona y la propiedad de sus súbditos, aconsejando acotar solo a los posibles enemigos, de forma rápida y resolutiva, en los marcos de una gestión —que hoy calificaríamos como estratégica— de los conflictos.5 Las dinámicas de la lumpenpolítica, con su espiral de revanchismo, violencia, odio y ambición irracionales, alejaron a Escobar de las pautas expuestas por el pensador florentino. Un líder con una notable capacidad estratégica, facultado para analizar ágil y sagazmente las circunstancias y las alternativas de acción, se convirtió en un ser temerario y solitario, capaz de sembrar las semillas de su propia destrucción. EstePaís Consulte la bibliografía y las notas de este texto en la versión electrónica . ___________ ARMANDO CHAGUACEDA es politólogo e historiador por la Universidad Veracruzana. Coordinador de un grupo de trabajo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso) y miembro de su Observatorio Social, se especializa en temas de sociología, teoría política e historia contemporánea latinoamericana. - See more at: http://estepais.com/site/?p=46836#sthash.CrbsIr2B.dpuf

POLICÍAS COMUNITARIAS, AUTODEFENSAS Y PARAMILITARES Este País | José Reveles | 268 | 01.08.2013 | 0 Comentarios http://estepais.com/site/?p=46822 Ante la ausencia y la corrupción de las autoridades, cada vez son más las comunidades que se defienden solas. Se protegen, persiguen, neutralizan, castigan. Los riesgos son evidentes —abusos, infiltraciones, debilitamiento del Estado—, pero el modelo entraña lecciones importantes. La tarde del miércoles 22 de mayo de 2013, cientos de pobladores estaban con los ánimos incendiados en esa región de la Tierra Caliente michoacana. No medían las hipotéticas consecuencias de la audaz retención de más de 25 soldados al mando de un general del Ejército, a los que rodearon y encerraron en el palacio municipal de Buenavista Tomatlán durante casi siete horas, hasta que no fueran liberados cuatro miembros de las autodefensas armadas del lugar, que habían sido capturados esa mañana por la tropa y entregados al Ministerio Público en Morelia. Hubo un doble mensaje para la sociedad mexicana que atestiguaba esta escena tan poco usual en la que una multitud convocada por las campanadas de la iglesia (a la manera del pueblo de Canoa, en Puebla, en 1968, pero entonces contra la presencia de estudiantes, para ir a lincharlos) impedía salir al Ejército de la comunidad: 1. O las autoridades y, en particular, el general de brigada Sergio Arturo García Aragón dieron una demostración de insólita mesura —viniendo de un mando castrense—, pues los hombres del general no emplearon las armas para repeler al pueblo enardecido, sino que negoció para que la Procuraduría General de la República (PGR) liberara a los cuatro arrestados (asunto que se resolvió en horas, para que los guardias ciudadanos fueran llevados en helicóptero y devueltos a su comunidad). “Estoy aquí como garantía, hasta que regresen sus compañeros”, decía García Aragón, tanto a los pobladores (a quienes ofrecía comunicarlos

vía telefónica con el mismísimo secretario de la Defensa Nacional, general Salvador Cienfuegos) como a los periodistas presentes; 2. O se trató, según los críticos de la estrategia, de una muestra de debilidad frente a los civiles a quienes el Ejército tenía instrucciones de desarmar, con la consecuente percepción social de que había ingobernabilidad allí y con la confirmación de que hay grupos armados sin control en Michoacán, adonde un par de días antes habían sido enviados unos miles de soldados, marinos y policías federales, gesto del Gobierno priista de Enrique Peña Nieto que mucho se parecía al temprano envío de tropas y policías federales a esa misma entidad por el panista michoacano Felipe Calderón Hinojosa al inicio de su mandato, allá por diciembre de 2006. Retomo este episodio, con sus complejidades inherentes, para intentar analizar el fenómeno de los grupos de autodefensa, a los que muchos políticos y comentaristas confunden con las policías comunitarias. El caos en el análisis de recientes y antiguos grupos armados comienza a generarse desde la manera misma de nombrarlos: No es lo mismo decir policías comunitarias que grupos de autodefensa; Guardias civiles armados no equivale necesariamente a paramilitares; Milicias ciudadanas no es lo mismo que comandos justicieros; Si el Ejército promueve, ahora mismo, pelotones de fuerzas rurales integrados con campesinos de comunidades chiapanecas (Mapastepec es un ejemplo), los ganaderos a su vez —allí y en otras regiones del país— se organizan en grupos de autoprotección, comúnmente conocidos como guardias blancas. Continúan activos varios de los más agresivos grupos paramilitares que fueron denunciados desde el siglo pasado en Chiapas: Desarrollo, Paz y Justicia; Chinchulines; Movimiento Indígena Revolucionario Antizapatista (MIRA); Máscara Roja, y otros, señalados como instrumentos de sucesivos Gobiernos, de militares, de policías y de terratenientes para tender un cerco en torno a comunidades zapatistas y para impedir que surjan grupos opositores a la política oficial. En la contraparte estrictamente oficial, creo que no es aventurado concluir que la futura Gendarmería Nacional —integrada por militares y marinos adiestrados en cursos de seguridad pública— sí puede ser el nuevo nombre de la Policía Federal. ¿En qué se parecen o se diferencian los campesinos organizados de Cherán (capaces de enfrentar y frenar a la delincuencia organizada) que participaron en las caravanas por la Paz con Justicia y Dignidad encabezadas por el poeta Javier Sicilia, y los de la Costa Chica de Guerrero (tienen 17 años de operar en decenas de comunidades, con reglamento interno propio, bajo la protección de la ley estatal, apoyados en la Constitución y en los tratados internacionales), o los de las comunidades indígenas de Chiapas operando desde antes, durante y después del levantamiento zapatista de 1994? En torno a cada uno de estos grupos disímbolos en sus orígenes, en las causas profundas de su surgimiento, en los intereses que operan detrás de ellos, en sus metas, en su relación o confrontación con los Gobiernos, permean todo tipo de justificaciones, desde el hartazgo por la invasión de la delincuencia organizada hasta la justicia por propia mano, la venganza anónima, los linchamientos para sustituir la inacción de la autoridad, las pugnas interétnicas o religiosas, las disputas por territorios, la defensa de la autonomía indígena, la protección de cacicazgos, la conservación a cualquier precio del statu quo o, en las antípodas, los intentos de derrocar Gobiernos. Por razones de espacio, intentamos diseccionar aquí solamente los dos fenómenos que tienden a confundirse, por ignorancia o por malevolencia. Los grupos de autodefensa Impacta un video, carente de las imágenes aterradoras que suelen colocarse en las redes sociales, en el que exclusivamente habla el médico veterinario José Manuel Mireles Valverde, presidente de la sociedad de

padres de familia de la secundaria de Tepalcatepec, Michoacán, e integrante del Consejo Ciudadano de Autodefensa de ese municipio, fechado en junio de 2013. reveles-b-268 Allí describe cómo los Caballeros Templarios ya cobraban mil pesos a los ganaderos por cada vaca que vendían, 15 pesos a los carniceros por cada kilo de carne que comerciaban y 4 pesos a los tortilleros por kilogramo de ese producto básico. “Nada más por esos tres negocios se llevaban 30 millones de pesos cada mes, además del impuesto a familias que les debían entregar 10 mil o 20 mil mensuales […]. Ya nos tenían medidos los metros enfrente de nuestras casas, porque ya íbamos a pagarles por metro de vivienda; ya nos habían asignado 500 pesos por cada carro y todos los niños, desde kínder hasta preparatoria, tenían que entregar 20 pesos cada lunes. Es decir, ya teníamos que pagar para vivir”. Pero esa presión económica y las tarifas y cuotas arbitrarias impuestas por el crimen organizado no fueron el detonante de la rebelión de los habitantes: “El problema tronó cuando empezaban a llegar a tu casa y te decían: ‘me gusta mucho tu mujer […], orita te la traigo […] pero, mientras, bañas a tu niña porque esa sí se va a quedar conmigo varios días’. Y no te la regresaban hasta que estaba embarazada. Ese fue el problema. Así como le llegaban a la gente pobre de los ranchos, así comenzaron a llegar también con los ganaderos más ricos”. Los Templarios se escindieron de la Familia Michoacana, pero antes ya habían expulsado a Los Zetas de la zona y prometieron proteger al pueblo, diciendo que solamente se iban a dedicar al negocio del narcotráfico. Mintieron: además de la extorsión y el cobro de cuotas por todo, comenzaron a violar a niñas de 11 y 12 años, que también iban a escoger a los salones de clase. “Hubo 14 niñas violadas en diciembre de 2012. Nada más en el turno vespertino de mi secundaria hubo 6. Varias resultaron embarazadas”. Hartos de tan insoportable situación, los pobladores, sobre todo ganaderos, se organizaron, y se reunían durante las noches para planear la autodefensa. Tomaron ejemplo de los campesinos de Cherán y otros municipios purépechas y detonaron un movimiento “rápido y simultáneo” el 24 de febrero de 2013 para capturar a los sicarios y sus jefes del crimen organizado. Las casas de los pistoleros estaban vigiladas por la gente desde la noche anterior y al final varias decenas de gatilleros fueron entregados al Ejército que, a su vez, los remitió al Ministerio Público federal en Apatzingán. “Pero a las 12 de la noche todos habían sido liberados. Y entonces nos dimos cuenta de que teníamos en contra al mismo sistema de gobierno, a todas las policías, federales, estatales y municipales que supuestamente nos debían defender”. Buenavista, Apatzingán, Coalcomán, Tepalcatepec, La Ruana, entre más de 10 municipios de la Tierra Caliente, se alzaron en armas. No todos pudieron el mismo día porque algunos fueron descubiertos. En Coalcomán llovieron amenazas de muerte contra las autodefensas. En Apatzingán los delincuentes se disfrazaron de comunitarios. En menos de tres semanas “limpiamos el municipio y en tres meses no ocurrió ni un secuestro ni un homicidio […]”. Hasta que llegó el Ejército a intentar desarmar a los grupos de autodefensa. balazo-1-reveles-268 “Su presencia es obsoleta. Las tropas no están combatiendo o sometiendo a nadie ni a nada. No cumplen con su función de garantizar la seguridad. Si su intención era desarmarnos, están perdiendo el tiempo. Nunca nos vamos a desarmar, porque estamos decididos a que los delincuentes no vuelvan a este pueblo”, dice elevando la voz Mireles Valverde. A pesar de que los integrantes de las autodefensas les señalan dónde están los delincuentes, los soldados “no se bajan ni un metro del pavimento y dicen que siguen órdenes superiores, que ellos deben permanecer en el pueblo para mantener la paz. Pero si nosotros ya pacificamos Tepalcatepec; y no somos guerrilleros,

no pertenecemos a ningún cártel, ni tenemos tácticas militares”, dicen quienes lograron sacar a quienes mataban, secuestraban, violaban y extorsionaban. El asunto se complica cuando, para contradecir ese en apariencia convincente discurso de la autodefensa, aparecen datos de que grupos de algunos municipios, como La Ruana, tal vez fueron armados por un cártel enemigo de los Templarios, específicamente el cártel de Jalisco Nueva Generación, a cuyos integrantes la narrativa oficial identifica también como “matazetas”; o de que, en Tepalcatepec, la exsenadora del PAN, Xóchitl Díaz Méndez, habría aparecido armada. Antes del episodio de la retención de más de dos docenas de soldados en mayo, la firma de seguridad estadounidense Stratfor ya había criminalizado a las autodefensas de Buenavista Tomatlán, señalando que el cártel Jalisco Nueva Generación las organizó y armó. “El narcotráfico utiliza a los grupos de autodefensa, con civiles armados, en su lucha por conservar territorios”, afirmó. La misma empresa de análisis había alertado antes sobre una “creciente falta de control” de los máximos jefes del narcotráfico en México sobre organizaciones más pequeñas que quieren independizarse. La tendencia hacia la división o “balcanización” de los grupos delincuenciales conduce a la aparición de grupos más compactos y a que, desde sus regiones, desafíen a los cárteles mayores. Como prueba de su afirmación, Stratfor mencionó que al menos 8 de los 34 miembros armados de autodefensas capturados en Buenavista, a principios de mayo, eran del cártel jalisciense Nueva Generación. Organizaciones más poderosas, como las de Sinaloa (o Pacífico) y Los Zetas, siguen operando nacional e internacionalmente, pero encaran la disyuntiva local de luchar contra las organizaciones regionales, trabajar con ellas o cobrarles renta de territorio. Manlio Fabio Beltrones, líder de los priistas en la Cámara de Diputados, incursionó en el tema, secundado por otros voceros de la clase política del país. La existencia de guardias comunitarias es signo de ingobernabilidad y ruptura del Estado de derecho, definió. El Consejo Coordinador Empresarial planteó la urgencia de frenarlas. Beltrones mencionó cómo las autodefensas “ya han fracasado en muchos países; debemos aprender de esa experiencia”. Han devenido, inclusive, en grupos paramilitares como en Colombia (Autodefensas Unidas de Colombia, AUC) y “eso no lo podemos permitir”, porque en México no debe otorgarse autoridad a esas “guardias comunitarias”. El procurador de la República, Jesús Murillo Karam, descalificó en Guadalajara, durante la segunda reunión de seguridad regional (ante los gobernadores de Jalisco, Aguascalientes, Colima, Nayarit, Guanajuato, Querétaro y Zacatecas; los secretarios de Marina y Defensa, y el comisionado de Seguridad Nacional), a los grupos de autodefensa, porque “ponen en riesgo el Estado de derecho en el país y no pueden permitirse; de hacerlo, se llegaría a la venganza personal o pública […], se rompería el principio fundamental en todos los países del mundo, que es el monopolio del Estado sobre la fuerza pública”. Policías comunitarias Por ignorancia, por confusión o por intenciones francamente perversas se critica, sin matices, la creciente incursión de ciudadanos armados en tareas de seguridad en varias regiones del país. Y enseguida se mezcla indiscriminadamente a estos intentos de autodefensa con fenómenos de índole muy distinta, como son las exitosas y legítimas experiencias autonómicas de los pueblos indígenas. Sería muy grave que, ahora que han proliferado esos grupos de autodefensa, “en nombre de la seguridad del Estado” se dé un retroceso en la autodeterminación de los pueblos indígenas, en sus experiencias vigentes de justicia comunitaria, que por décadas han demostrado ser más efectivas en la solución de conflictos que el sistema judicial y carcelario “occidental” que rige en el resto del país.

Como escribieron las investigadoras del equipo de antropología jurídica del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) del Distrito Federal, Aída Hernández y María Teresa Sierra, el debate público tiende a relacionar experiencias autonómicas de los pueblos con autodefensas, y a estas con procesos cercanos al paramilitarismo. “Ello refuerza una tendencia antiautonomía de los pueblos y presenta al Estado como la única solución ante la falta de seguridad. Se parte de la premisa de que ‘más Estado es más seguridad’, sin reconocer que en muchas regiones los grupos de poder locales que participan en las instituciones estatales se benefician política y económicamente de la inseguridad”. El problema de fondo que se evidencia es que las instituciones oficiales “no solo no garantizan condiciones de seguridad para la población local, sino que son partícipes activas en la violencia actual”. Mucho antes de que revivieran los intentos de ciudadanos por retomar la defensa de sus pueblos ante el evidente fracaso del modelo de seguridad y justicia del Estado, la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) defendía con vehemencia su propio modelo. “Con policía comunitaria vivimos en paz: no hay asaltos ni crímenes ni violaciones a las mujeres en las comunidades indígenas”, expresaba uno de sus más antiguos comandantes en octubre de 2010, en el décimo quinto aniversario de la organización. En esa ocasión el sacerdote Mario Campos decía que “la paz no va en la lógica de que si quieres paz prepara la guerra; cada vez más presupuesto, armas cada vez más sofisticadas, cada vez más asesores para hacer la paz, lo único que producen son decenas de miles de muertos. ¿Cuánta gente ha muerto porque la crac luche por la paz? Aquí no hay esa confrontación. Aquí se demuestra que la lógica de la guerra y de las armas ya no funciona”. Los intentos de criminalización y descalificación de las policías comunitarias no cesan. A las declaraciones se suman los hechos, como ocurre en Guerrero, donde el gobernador Ángel Aguirre Rivero ha intentado modificar leyes que fueron aprobadas en el Congreso estatal, en 2011, precisamente para dar sustento jurídico a la existencia de aparatos de seguridad y justicia alternativa en municipios mayoritariamente indígenas y campesinos. El actual Gobierno pretende cortar de tajo “el derecho a prevenir, administrar justicia y reeducar a transgresores”, aduciendo que los órganos creados por la policía comunitaria “no están facultados” para esos menesteres y solamente pueden ser “auxiliares de los cuerpos de seguridad de Guerrero”, alertó el abogado Vidulfo Rosales Sierra, del Centro de Derechos Humanos de la Montaña “Tlachinollan”. Los sistemas de seguridad y justicia de los pueblos indígenas, lejos de ser ilegales, cuentan con un cuerpo normativo muy amplio: desde el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) hasta la Declaración de las Naciones Unidas sobre Pueblos Indígenas, el artículo segundo de la Constitución mexicana y, sobre todo, la Ley 701, vigente para Guerrero. En todo ese cuerpo jurídico se reconocen explícitamente los derechos de los pueblos a sus sistemas normativos, a una forma diferente, alternativa, de hacer justicia; se respeta la diversidad organizacional, cultural y jurídica en la propia cosmovisión de los pueblos, con sus propios mecanismos para resolver conflictos internos. balazo-2-reveles-268 “Es parte del derecho de la autonomía de los pueblos indígenas el tener una justicia propia, el que ellos puedan resolver sus conflictos de acuerdo a sus propios sistemas normativos, sus tribunales, sus mecanismos de reeducación de los delincuentes”, insistió Vidulfo Rosales. En esa cosmovisión no hay pugna con los derechos universalmente reconocidos, como la libertad y la integridad física, sino que se tutelan de forma inclusive más eficaz que la de la justicia tradicional. El sistema de justicia comunitario es transparente, democrático, abierto y eficaz en la selección de los policías, coordinadores y jueces. El sistema de reeducación funciona con la vigilancia del pueblo y hay pocos casos en que se condena a la privación de la libertad personal. “No se resuelve el problema de justicia

poniendo ministerios públicos o jueces indígenas, como se ha propuesto, porque equivale a enquistarlos en un sistema de justicia occidental, corrupto, ineficaz, que no ha funcionado frente al reto de la delincuencia organizada; un sistema mercantilista no para los pobres, sino para quien tenga dinero para pagar”. La policía comunitaria no ha fracasado en América Latina. Por el contrario, tiene plena vigencia en el siglo XXI. Ni en Colombia ni en México esas policías han terminado como grupos paramilitares, sostiene por su parte Marcos Matías Alonso, del CIESAS. En vez de juzgar a la ligera, se debería aprender de estas experiencias, reconocidas inclusive por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Han sido objeto de estudio y leyes lo mismo en Brasil que en Chile, Guatemala, Paraguay, Colombia o México. Como en nuestro país, en otras naciones las policías comunitarias tienen soporte legal y base social “que legitima su razón de ser”. En México, con la elevación a rango constitucional de los tratados internacionales, en junio de 2011, se fortaleció el marco jurídico para la autonomía de las formas de justicia en pueblos indígenas. Además del sustento legal que da el artículo segundo constitucional a la autodeterminación de los pueblos indígenas, el 9 de febrero de 2011 se aprobó la Ley de Reconocimiento, Derechos y Cultura de los Pueblos y Comunidades Indígenas del Estado de Guerrero” (Ley 701), cuyo articulado da base legal al funcionamiento de las policías comunitarias. Textualmente, su artículo 37 dice: “El estado de Guerrero reconoce la existencia del sistema de justicia indígena de la Costa-Montaña y al Consejo Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC). […] esta ley confirma el reconocimiento de la policía comunitaria, respetando su carácter de cuerpo de seguridad pública”. Como menciona Matías, la policía comunitaria en Guerrero ni siquiera tiene una estructura policiaca, sino que se basa en la organización comunitaria, con el respaldo de las autoridades locales y los pobladores. La confianza de la ciudadanía es clave para realizar su trabajo y es su mejor aliada contra la delincuencia. Las asambleas comunitarias resguardan su legitimidad. Los policías son elegidos por asamblea y, en situaciones de emergencia, hombres, mujeres, niños y ancianos se convierten en policía comunitaria. No reciben remuneración económica. Dan servicio gratuito a la comunidad. Por eso tienen autoridad moral. Allí la corrupción y la mordida no tienen cabida. ©iStockphoto.com/77DZIGN _____________________________________________ Por una ley de justicia comunitaria en México Excesivo e irracional son los adjetivos que sintetizan lo que ha sido el presupuesto gubernamental en seguridad. En 2010 fueron 197 mil millones de pesos (equivalente a 93% del gasto total en educación y 15% por encima de la erogación en salud y desarrollo social juntos). Pese a toda esa inversión, en el sexenio de Felipe Calderón los delitos del fuero común se incrementaron 14.6% y los federales 21.42%, para sumar en 2012 más de 1.8 millones formalmente denunciados ante el Ministerio Público. Si se considera la cifra negra de la no-denuncia, podría hablarse de más de 22 millones de delitos por año. Datos y juicios están contenidos en la iniciativa de ley para crear, dentro del Sistema Nacional de Seguridad Pública, un Subsistema de Seguridad y Justicia Comunitaria y Reeducación para los Pueblos Indígenas de México. Esta iniciativa fue presentada en la actual legislatura por el senador perredista Sofío Ramírez Hernández. Creada formalmente el 15 de octubre de 1995, la Policía Comunitaria de Guerrero es la inspiración y el referente obligado para la ley nacional que se promueve. Esa policía atiende hoy a 107 pueblos en 13 municipios de la Costa Chica y La Montaña (San Luis Acatlán, Marquelia, Metlatónoc, Cochoapa El Grande, Iliatenco, Malinaltepec, Tlapa, Atlamajalcingo del Monte, Tlacoapa, Ayutla, Acatepec, Azoyú y Tlacoachistlahuaca).

“Este esfuerzo continúa evolucionando y ahora se ha convertido en el sistema de Seguridad y Justicia Comunitaria y Reeducación, un esquema de justicia regional basado en los principios de libre determinación y de respeto a los usos y costumbres de los pueblos. No intenta competir ni suplir a las instancias formales encargadas de la seguridad, sino coadyuvar en las labores de seguridad preventiva y persecución de delitos del fuero común”, expresa la iniciativa en el Congreso de la Unión. El sistema guerrerense que se propone instaurar a nivel nacional “cuenta con órganos específicos de tipo colegiado, garantías de audiencia para los implicados, métodos para las sanciones y la verificación de su cumplimiento y, sobre todo, normas de cohesión y control social” en donde coexisten reglas locales y regionales. “La Comunitaria”, como la nombran los pueblos, comparte experiencias de justicia indígena que nacieron de relevantes procesos organizativos, como los Indígenas Nasa del cric en Colombia, las Juntas de Buen Gobierno zapatistas en Chiapas y las Rondas Campesinas en Perú. Impulsa principios éticos y políticos para priorizar la dignidad, el respeto, la defensa de lo colectivo; se privilegia la búsqueda de los acuerdos y la conciliación; se da el tiempo suficiente para dirimir conflictos. “En el momento actual de crisis de gobernabilidad, de incremento exponencial de la inseguridad y la violencia en México, instituciones como la policía comunitaria son vistas con gran reserva por los gobernantes”. Lo sabe el legislador y explica las razones que muchos aducen para negarse a aceptarlas abiertamente: esas organizaciones hacen ver la fragilidad del Estado y su legalidad misma; retan a la capacidad del poder para reconocer cabalmente sus aportes al orden social; se teme su actuar, puesto que los comunitarios destapan la impunidad del poder constituido, puesto que proponen y hacen posible otra manera de hacer justicia y de garantizar la seguridad pública. La propuesta es reformar párrafos del artículo 21 y adicionar dos fracciones al 115 de la Constitución para reconocer plenamente la capacidad de pueblos y comunidades indígenas de usar sus propios esquemas de prevención y aplicación de justicia, en coordinación con el resto de las autoridades, y para ejercer vigilancia sobre sus tierras, con presupuestos destinados específicamente para ellas. “Es momento de voltear y aprender de la sabiduría de nuestros antecesores, de reconocer dignamente nuestras raíces: de tratarlos como se merecen, porque con sus acciones y cosmovisión, paradójicamente, los pueblos indígenas ayudan a construir el Estado y ofrecen la oportunidad de generar gobernabilidad desde abajo, con mayor cohesión social, recuperando la esencia de lo común”. JR _________________________________________ JOSÉ REVELES es periodista. Como tal, ha presenciado algunos de los episodios más críticos de la historia reciente de México y Latinoamérica. Entre sus libros más recientes están Villa, Sofía Loren y los sandinistas (2009), Las historias más negras de narco, impunidad y corrupción (2009) y Narcoméxico (2011). - See more at: http://estepais.com/site/?p=46822#sthash.aUHG2AQB.dpuf

LAS 300 PERSONAS MÁS RICAS DE LA TIERRA TIENEN MÁS RIQUEZA QUE LOS 3.000 MILLONES MÁS POBRES, CASI LA MITAD DE LA POBLACIÓN DE MUNDO

Jason Hickel (AL JAZEERA) http://www.argenpress.info/2013/08/las-300-personas-mas-ricas-de-la-tierra.html La extrema desigualdad global en parte crece debido a las políticas económicas neoliberales impuestas por los países ricos a las naciones pobres.

Traducción: Ernesto Carmona (especial para ARGENPRESS.info) La crisis del capital, el crecimiento del Movimiento Occupy y el desplome del Sur de Europa han traído a la conciencia de los grandes medios occidentales el problema de la desigualdad del ingreso por primera vez en muchas décadas. Ahora todo el mundo habla de cómo el 1% más rico captura una parte tan desproporcionada de la riqueza de sus respectivos países. Este asunto volvió a estrellarse recientemente en casa cuando se conoció un video animado que ilustra las disparidades de la riqueza en Estados Unidos. Cuando las infografías capturan la atención de decenas de millares de usuarios de Internet se sabe que están golpeando un nervio.

Pero la escala global de la desigualdad en gran parte sigue estando ausente en esta historia. En The Rules (Las Reglas) decidimos reunirla en un vídeo (1) para que le prestaran cierta atención.

Aunque esta información no es nueva, todavía está asustando. En el vídeo decimos que las 300 personas más ricas en la tierra tienen más riqueza que los 3.000 millones más pobres, casi la mitad de la población de mundo. Elegimos esos números porque hacen una comparación clara y memorable, pero la verdad es que la situación es incluso peor: las 200 personas más ricas tienen cerca de 2,7 billones (españoles, millones de millones) de dólares, mucho más que los 3.500 millones de gente más pobre, que reúnen solamente 2,2 billones (españoles) combinados. Es muy difícil atrapar las mentes con tales figuras extremas. Pero quisimos hacer algo más que sólo ilustrar el grado brutal de la desigualdad: también quisimos demostrar que progresivamente está peor. Un reciente informe de Oxfam muestra que “el 1% más rico incrementó sus ingresos en 60% en los últimos 20 años, con la crisis financiera acelerando el proceso en vez de frenarlo, mientras los ingresos del 0,01% superior obtuvieron incluso mayor crecimiento. El vídeo muestra cómo opera entre los países esta creciente disparidad. Durante el período colonial, la brecha entre los países ricos y pobres aumentó de 3:1 a 35:1, en parte por tanta riqueza extraída del sur global por las potencias europeas bajo la forma de recursos naturales y mano de obra. Desde entonces, esa brecha llega a casi 80:1. ¿Cómo esto ha sido posible? Flujos de capital de pobre a los ricos La brecha está creciendo en parte debido a las políticas económicas neoliberales que las instituciones internacionales, como el Banco Mundial (BM), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización Mundial del Comercio (OMC), han impuesto en las últimas décadas a los países en vías de desarrollo. Estas políticas están diseñadas para liberalizar los mercados a la fuerza, abriéndolos a fin de dar a las multinacionales un acceso sin precedentes a tierra, recursos naturales y mano de obra baratos. Pero a un precio muy alto: que los países pobres pierdan alrededor de 500.000 millones de dólares por año de su PIB, según el economista Robert Pollin de la Universidad de Massachusetts. Como resultado vemos un claro flujo neto de riqueza desde lugares pobres a zonas donde abunda. Diseñamos el vídeo para ayudar a la gente a visualizar este flujo, y a mostrar cómo el Sur Global bombea hacia el Norte Global a un costo devastador. Pocas personas saben sobre este sifoneo constante de riqueza. Una de las razones de esto es que el discurso sobre la ayuda ocupa demasiado espacio. Considerando la enorme publicidad capturada por Jeffrey Sachs y las Metas de Desarrollo del Milenio, o Bono y Bob Geldof, o aún las grandes caridades tales como Save the Children, Christian Aid y Action Aid.

Los gobiernos de países ricos celebran constantemente cuánto pasan en ayuda a los países en vías de desarrollo, y las sociedades multinacionales salpican las credenciales de la CSR (sigla en inglés de Responsabilidad Social Corporativa) a través de informes anuales y líneas de productos sin que ningunas de ellas confiese cuánto saca fuera de los países pobres (en vías de desarrollo). El vídeo destaca el hecho que los desembolsos de esa ayuda de ricos a pobres palidecen con respecto a la cantidad de capital que fluye en la otra dirección. La evasión fiscal por sí sola representa más de 900 mil millones de dólares al año y es dinero que las corporaciones roban a los países pobres y esconden en paraísos fiscales (o más exactamente, países gobernados por ladrones), de los cuales la ciudad de Londres es el centro mundial. Los pagos de servicio de la deuda por alrededor de 600 mil millones de dólares al año, que muchos países pagaron con interés compuesto por préstamos ilegítimos acumulados por dictadores largamente ya depuestos. Ambos flujos pueden entenderse como transfusiones directas de dinero en efectivo de los pobres a los ricos. Hay mucho más que podríamos haber incluido en el video. Acaparamientos de tierra, por ejemplo: el nuevo libro de Fred Pearce, Los Acaparadores de Tierras, muestra que sólo en la última década extensiones mayores a la superficie de Europa Occidental han sido arrebatadas por las corporaciones a los países en desarrollo. Si pudiéramos cuantificar el valor de esa tierra podríamos haber añadido una cantidad enorme al montón de 2 billones de dólares en efectivo traspasado de pobres a ricos que muestra el video. O considerar el cambio climático: Un aumento de 2 grados en la temperatura global tendrá un costo de alrededor del 5 por ciento del PIB de países de regiones como África y Asia del Sur, mucho más de lo que van a sufrir los países ricos, a pesar que estos soportan la mayor parte de la responsabilidad por haber causado este desastre. Las pérdidas en este nivel hacen que la ayuda parezca insignificante. Estas son las razones fundamentales de la pobreza y la desigualdad. Estos son los problemas que tenemos que abordar. Déficit democrático Cabe señalar que la división geográfica entre el Norte y el Sur Global que representa el video no tiene tanto sentido hoy como lo tuvo alguna vez. Tratamos de mostrar cómo China y Rusia encarnan esta división dentro de sus fronteras. Pero para ser aún más precisos hubiéramos tenido que representar un pequeño grupo de ricos del corazón de las corporaciones y los individuos, una élite global frente a la mayoría de los pueblos del mundo. Ya no se trata sólo de Occidente contra el resto; la división de clases ahora está internacionalmente dispersa. Sigue siendo cierto que están monopolizadas por los países occidentales las instituciones que controlan la economía mundial (el Banco Mundial, el FMI, la OMC y varios acuerdos bilaterales de libre comercio, o TLCs). Pero eso no quiere decir que representen los intereses de los votantes de esos países. Las personas que dirigen esas instituciones -los bancos centrales, representantes sindicales y sus grupos de lobby corporativo- no son elegidos en ningún proceso democrático. El Banco Mundial y el FMI tienen el poder de imponer políticas económicas a los países en vías de desarrollo incluso cuando los votantes y los políticos elegidos en estos países los rechazan unánimemente. Encima de esto, disfrutan de la situación de “inmunidad soberana” que los protege contra pleitos cuando fallan sus préstamos fallan y sus políticas causan crisis económica y devastación humana. Es otras palabras, no sólo están estas instituciones no democráticas, también juegan sus cartas de triunfo las democracias locales y el hacer caso omiso a los votantes en naciones independientes. La gente afectada no tiene ningún recurso ante la justicia.

Vemos el mismo déficit democrático en las corporaciones. La mayoría de las entidades económicas más grandes del mundo ahora son corporaciones, no países. Son dirigidas por CEOs que son no-elegidos e inexplicables para cualquier ciudadano. Son responsables solamente ante sus accionistas, y su mandato es obtener tantos beneficios como sea posible a cualquier costo de la vida humana o del planeta. Estas corporaciones a menudo tienen más poder que los gobiernos de los países en donde operan. Una razón de esto es que la OMC y la mayoría de los TLCs hacen cumplir “los acuerdos por disputas inversorestado” que permiten a las corporaciones demandar a los gobiernos locales por legislación que compromete sus beneficios, como leyes de salario mínimo o leyes anti contaminación. Necesitamos cambiar las reglas Aquí el punto es que el poder corporativo regularmente supera la soberanía de las naciones. Tenemos que hacer frente al hecho de que las instituciones democráticas que trabajamos y sostuvimos difícilmente durante el siglo XX no sean más suficientes para protegernos en este agresivo mundo nuevo. Necesitamos cambiar las reglas, y necesitamos hacerlo rápidamente. Dado que el poder real ahora está rutinariamente manejado en el nivel supranacional, necesitamos comenzar a construir la capacidad democrática global que puede mantener control sobre la avaricia y el mercantilismo desenfrenados. Esto pudo significar un impuesto mínimo corporativo global que poner fin a los paraísos fiscales y a la manipulación de precios. Puede signifiar un salario mínimo global que ponga un piso a la explotación del trabajo. Ciertamente significaría arrebatar el control de leyes comerciales internacionales de las manos de los banqueros del FMI y de los tecnócratas de la OMC y ponerlo bajo nuevas instituciones que sean transparentes y democráticas. Si vamos a tener una economía global, necesitamos tener una supervisión democrática global. ¿Podemos lograr esto? Sí. Y de todos modos, no tenemos otra opción. De esto depende el futuro de la humanidad y del planeta. Dirán que somos soñadores por exigir estos cambios. Pero los soñadores son quienes imaginan factible que podamos continuar con el status quo. *) El Dr. Jason Hickel, PhD en antropología de la Universidad de Virginia 2011, es co-editor del libro Ekhaya: The Politics of Home in KwaZulu-Natal, South Africa, y contribuye a la crítica y al análisis políticos en publicaciones como Le Monde Diplomatique, Monthly Review y The Africa Report. En enero 2013 dictó conferencias en la London School of Economics, es consejero de la ONG The Rules (Las Reglas) y actualmente trabaja en un libro titulado The Development Delusion: Why Aid Misses the Point about Poverty (La Desilusión del Desarrollo: ¿Por qué la ayuda pierde el sentido de la pobreza). 1) Infografía: 300 más ricos versus 3.000.000.000 de personas Video: http://www.youtube.com/watch?v=uWSxzjyMNpU Fuente: Este artículo fue publicado originalmente en Al Jazeera: http://www.aljazeera.com/indepth/opinion/2013/04/201349124135226392.html

EL MENSAJE DE LA JUVENTUD BRASILEÑA Por Luiz Inácio Lula da Silva* Columna editorial publicada en New York Times 16/07/013 Fuente: http://osamigosdopresidentelula.blogspot.com http://www.laondadigital.com/LaOnda/LaOnda/636/A6.htm

Tras las primeras manifestaciones masivas en su país, el 17 de julio el expresidente Lula publicó una columna en las páginas editoriales del diario New York Times, que tuvo enorme repercusión. Al interpretar el mensaje de la juventud brasileña como altamente político -y no antipolítico-, alerta al sistema político que las instituciones y su propio Partido de los Trabajadores deben transformarse para conectar más directamente con todos los sectores. Parece más fácil explicar estas protestas cuando ocurren en países no democráticos, como Egipto y Tunes en 2011, o en países donde la crisis económica aumentó el número de jóvenes desempleados a cifras que asustan, como en España y Grecia, que cuando surgen en países con gobiernos democráticos populares, como Brasil, donde actualmente gozamos de las menores tasas de desempleo de nuestra historia y de una expansión sin precedentes de los derechos económicos y sociales. Muchos analistas atribuyen las recientes protestas a un rechazo a la política. Creo que es exactamente lo contrario: Ellas reflejan un esfuerzo por aumentar el alcance de la democracia, para incentivar a las personas a participar más plenamente. Yo sólo puedo hablar con autoridad sobre mi país, Brasil, donde creo que las manifestaqciones son en parte el resultado de los éxitos sociales, económicos y políticos. En la última década, Brasil duplicó el número de estudiantes universitarios, muchos de familias pobres. Nosotros redujimos drásticamente la pobreza y la desigualdad. Éstas son conquistas importantes, pero es completamente natural que los jóvenes, especialmente aquellos que están obteniendo cosas que sus padres nunca tuvieron, deseen más. Éstos jóvenes no vivieron la represión de la dictadura militar en las décadas del 60 y 70. No convivieron con la inflación de los años 80, cuando la primera cosa que hacíamos cuando recibíamos nuestros salarios era correr al supermercado y comprar todo lo posible antes de que los precios subieran nuevamente al día siguiente. Recuerdan muy poco de la década del 90, cuando el estancamiento y el desempleo deprimieron nuestro país. Quieren más. Es comprensible que así sea. Ellos quieren que mejore la calidad de los servicios públicos. Millones de brasileños, incluyendo los de la clase media emergente, compraron sus primeros automóviles y comienzan a viajar en avión. Ahora, el transporte público debe ser eficiente, haciendo menos difícil la vida en las grandes ciudades. Las preocupaciones de los jóvenes no son meramente materiales. Quieren mayor acceso al esparcimiento y actividades culturales. Pero por encima de todo, ellos exigen instituciones que sean más limpias y más transparentes, sin las distorsiones del sistema político y electoral anacrónico de Brasil, que recientemente se mostraron incapaces de procesar una reforma. La legitimidad de esas demandas no puede ser negada, incluso aunque sea imposible atenderlas de inmediato. Es preciso primero encontrar recursos, establecer metas y definir plazos. La democracia no es un compromiso de silencio. Una sociedad democrática está siempre en movimiento, debate y definición de sus prioridades y desafíos, en constante deseo de nuevas conquistas. Sólo en una democracia un indígena pudo ser elegido presidente de Bolivia y un afroamericano presidente de los Estados Unidos. Sólo en una democracia podría, primero un metalúrgico y después una mujer ser electos presidentes de Brasil. La historia muestra que, cuando los partidos políticos son silenciados y las soluciones se procuran a la fuerza, los resultados son desastrosos: guerras, dictaduras y persecución de minorías. Sin partidos políticos no podría haber una verdadera democracia. Pero las personas no quieres simplemente votar cada cuatro años. Quieren interaccionar diariamente con los gobiernos locales y nacionales y quieren participar en la definición de las políticas públicas, brindando opiniones sobre las decisiones que afectan al día a día.

En suma, quieren ser escuchados. Esto provoca un enorme desafío para los líderes políticos. Exige las mejores formas de relacionamiento, a través de los medios sociales, en los espacios de trabajo y las universidades, reforzando la interacción con grupos de trabajadores y líderes de la comunidad, pero también con los llamados sectores desorganizados, cuyos deseos y necesidades no deben ser menos respetados por falta de organización. Se ha dicho, y con razón, que mientras la sociedad entró en la era digital, la política permanece analógica. Si las instituciones democráticas utilizaran las nuevas tecnologías de comunicación como instrumentos de diálogo, y no meramente para propaganda, respirarían aire fresco en sus actividades. Y eso los llevaría más eficazmente a ponerlos en sintonía con todas las partes de la sociedad. Incluso el Partido de los Trabajadores, que ayudé a fundar y que ha contribuido tanto a modernizar la democracia política en Brasil, precisa una profunda renovación. Es necesario recuperar sus lazos diarios con los movimientos sociales y ofrecer nuevas soluciones para nuevos problemas, y hacer las dos cosas sin tratar a los jóvenes en forma paternalista. La buena noticia es que los jóvenes no son conformistas, apáticos ni indiferentes a la vida pública. Incluso aquellos que piensan que odian a la política están comenzando a participar. Cuando yo tenía su edad, nunca imaginé que me convertiría en un militante político. A pesar de ello, terminamos creando un partido político cuando descubrimos que el Congreso Nacional prácticamente no tenía representantes de la clase trabajadora. A través de la política conseguimos restaurar la democracia, consolidar la estabilidad económica y crear millones de empleos. Es claro que hay mucho para hacer. Es una buena noticia que nuestros jóvenes quieran luchar para garantizar que los cambios sociales continúen a un ritmo más intenso. La otra buena noticia es que la presidenta Dilma Rousseff propuso un plebiscito para realizar las reformas políticas que son tan necesarias. Ella también propuso un acuerdo nacional para la educación, la salud y el transporte público, en que el gobierno proporcionaría apoyo técnico y financiero sustancial a los estados y municipios. Al hablar con líderes jóvenes en Brasil y otros lugares, me gusta decirles lo siguiente: Incluso si estás desanimado con todo y con todos, no desistas de la política. ¡Participa! Si no encuentras en otros al político que buscas, puedes hallarlo en ti mismo

TESIS SOBRE EL SUJETO DE LA SOBERANÍA NACIONAL x Iñaki Gil de San Vicente :: Más articulos de esta autora/or: Más artículos http://www.lahaine.org/index.php?p=70909 Una de las necesidades perentorias es la de estrechar los lazos entre las naciones oprimidas, entre sus fuerzas revolucionarias Nota: Texto elaborado tras el debate realizado en Marin, Pontevedra, el pasado 23 de Julio, sobre el tema Soberanía nacional contra a opresión do capital, organizado por el PCPG y CN do Marin. 1. 2. 3. 4. 5.

EL SUJETO, LA CLASE Y EL PUEBLO LAS TRES FASES HISTÓRICAS EL OBJETIVO DE LA FASE ACTUAL LO CASI IMPOSIBLE Y LO MUY PROBABLE LAS TRES REFLEXIONES CRÍTICAS

1. EL SUJETO, LA CLASE Y EL PUEBLO 1. Hablar de la soberanía nacional de un pueblo oprimido exige definir quién es el sujeto que construye y conquista esa soberanía. A la vez, fijar conceptualmente el sujeto exige precisar qué independencia quiere y necesita ese sujeto: es el mismo debate pero con dos áreas unidas. El proyecto social y el colectivo que quiere construirlo, o viceversa, el colectivo y el proyecto que lo materializa con su lucha. La teoría del sujeto es parte de la teoría de las clases sociales, pero también la transciende para entrar en otras áreas del marxismo, como la filosófica, la ética, la política, etc., aunque en el debate sobre las clases también debemos recurrir a estas áreas y a otras, como la crítica de la economía política. Ahora, aquí, no podemos extendernos sobre el sujeto en general, sólo sobre el que practica la lucha independentista y socialista. Nos centramos, por tanto, en la clase obrera o mejor, en la nación trabajadora gallega. 2. ¿Por qué utilizamos el concepto de «nación trabajadora» en vez del de nación a secas? Porque expresa mejor el contenido teórico y político del marxismo originario, dialéctico, y porque en el capitalismo actual, es más necesario recurrir a él que a mediados del siglo XIX. En la literatura marxista abundan conceptos como «nación trabajadora», «pueblo trabajador», «pueblo obrero», e incluso «pueblo militante», «pueblo revolucionario», etc., cuando el simple análisis teórico general y abstracto debe avanzar hacia lo concreto, hacia las sociedades específicas en las que se libra la lucha de clases real, cuando la teoría general y común debe enriquecerse con lo particular de las luchas concretas en las que intervienen activa y conscientemente amplias franjas explotadas lideradas por la clase obrera, por el proletariado. 3. Cometemos un error profundo cuando hablamos de «teoría de las clases» porque para ser fieles al método marxista siempre tenemos que hablar de la «teoría de la lucha de clases» ya que en ella lo históricamente decisivo es la lucha política de clases. Pues bien, la teoría marxista de la lucha de clases relaciona cinco niveles insertos en la totalidad de la lucha: Uno, el que sostiene que nunca se puede definir a la clase obrera sin definir a la vez, en el mismo acto, a la clase burguesa, porque nunca existe explotado sin explotador; es decir, es imposible saber qué es una clase social sin saber cual es su opuesta y cómo luchan entre ellas. Sin embargo, la mayoría de debates, discusiones y «teorías» sólo tratan el problema de la existencia o no de la clase obrera, pero apenas se niega la existencia de la burguesía y de su conciencia política. 4. Dos, el que sostiene que existe una clase trabajadora objetiva aunque no tenga conciencia de ser explotada, aunque no haya desarrollado conciencia-para-sí, sino que durante períodos más o menos largos sólo tiene un sentimiento difuso y muy débil de clase-en-sí, objeto pasivo en manos de la clase capitalista, que sí tiene conciencia de clase-para-sí. La existencia objetiva de la clase obrera no significa que exista sociopolíticamente, como fuerza social consciente con objetivos políticos precisos. Sectores más o menos amplios del pueblo y de la clase trabajadora han apoyado y apoyan abierta o solapadamente a su burguesía imperialista. 5. Tres, el que explica que ambas clases fundamentales se dividen en fracciones, en franjas y en grupos, que varían y cambian al son de los cambios del sistema y de la lucha de clases en su interior; y además, que entre ambas dos clases decisivas -el Trabajo y el Capital, con mayúsculas- existen otras clases, fracciones, castas, élites, etc., intermedias en permanente cambio. La pequeña burguesa vieja y nueva, las llamadas «clases medias», «autónomos», etc., son los fundamentales colectivos intermedios entre el Trabajo y el Capital. 6. Cuatro, el que explica que la definición básica y general de las clases obrera y burguesa sólo sirve a nivel abstracto, siendo necesario a la vez concretar esas abstracciones en las formas particulares que adquieren en cada sociedad, en cada pueblo y en cada momento histórico: siempre hay que utilizar la dialéctica entre lo genético-estructural y lo histórico-genético. En unos momentos deberemos hablar sólo de dos grandes clases unidas a muerte en una lucha descarada, latente o invisible; pero otras muchas veces deberemos precisar con minuciosa sofisticación varias clases, subclases, fracciones de clase, alianzas de

clase, etc. Lo más frecuente y lo óptimo en el plano de la praxis, es que siempre desarrollemos esta dialéctica de los múltiples niveles internos de la realidad. 7. Y cinco, el que explica que la extrema y creciente complejidad de las formas de explotación directa o indirecta, de salario oficial u oculto, en la economía sumergida, del trabajo doméstico no mercantilizado pero vital para el capitalismo, de trabajo precario, a tiempo parcial o a destajo, o con el tiempo fijado por convenio, etc., esta realidad actual que nos recuerda al capitalismo manufacturero y de la primera industrialización pero con las condiciones de control, vigilancia y represión de comienzos del siglo XXI, integra obligatoriamente a las mujeres, a la juventud y cada vez más a la tercera edad, a las culturas, pueblos y naciones, a los grupos autoidentificados por su especificidad sexual, cultural y vivencial propia. Y los integra porque son parte objetiva de la fuerza social del trabajo explotada por el Capital, aunque no tenga conciencia de ello, produzcan directamente valor o no. 8. La teoría marxista de la lucha de clases es una teoría relacional, de interacción de realidades móviles, y del papel central de la conciencia política en el conocimiento de las clases en lucha. Es una teoría de relaciones múltiples entre niveles cambiantes que aparecen y desaparecen al son de la evolución general de la lucha de clases en su globalidad, lucha que nunca puede ser reducida esquemáticamente a la lucha fabril, economicista, sino que abarca a la totalidad de conflictos sociales por muy distantes que parezcan estar de esa estricta lucha fabril. La lucha de clases no se libra sólo en el área de la producción, sea en una fábrica mugrienta o en su laboratorio desinfectado, sino también en la de la circulación y realización, y en el entero proceso de la reproducción del capital, lo que quiere decir que las clases sociales también están presentes en estas áreas y en la reproducción en su conjunto. 9. Sintéticamente hablando, todos los conflictos sociales terminan remitiéndonos en último análisis a la lógica burguesa del máximo beneficio que internamente estructura todas las formas diferentes de explotación, opresión y dominación en lo cultural, étnico, nacional, etc.; en lo patriarcal, sexo-género, reproducción biológica, etc.; en la mercantilización de la naturaleza, en lo socioecológico, etc.; de la permanente aparición, cambio y desaparición de formas de explotación, opresión y dominación en la realidad extra-fabril, cotidiana, interpersonal, que generan «nuevos sujetos», «movimientos sociales», en las realidades de las esferas no sólo de la producción, sino también y sobre todo de la circulación y realización del beneficio, no sólo de la producción sino especialmente en la reproducción del capitalismo. 10. Los conceptos de «pueblo trabajador», de «nación trabajadora», etc., son especialmente válidos en estos niveles particulares porque integran en una totalidad concreta precisa y diferenciada de las circundantes, a todas las clases y franjas sociales explotadas, oprimidas y dominadas en situaciones históricas de larga duración, con estructuras políticas y sociales en las que los factores lingüístico-culturales, de memoria popular, de identidad reprimida, etc., juegan un decisivo papel aglutinador y provocador de la conciencia crítica. Estos conceptos sintetizan en un todo a la gran mayoría de la población sometida a dos explotaciones: una, la que sufre por parte de su propia burguesía, y otra la que sufre por parte del Estado ocupante. Ambas, la burguesa autóctona y la extranjera, forman una unidad económico-política pactada a lo largo de la historia. Por ejemplo, el colaboracionismo de la burguesía vasca con los Estados español y francés, o de la galega con el español, sin extendernos más ahora. 11. La evolución del capitalismo está reafirmando la valía de estos conceptos abarcadores e integradores también para los pueblos que oficialmente no sufren opresión nacional porque disponen de su propio Estado reconocido internacionalmente, pero que sí la sufren en la práctica debido a la traición de sus «burguesías nacionales» que aceptan y cumplen las feroces exigencias socioeconómicas y políticas de Estados más poderosos, y de los poderes imperialistas transnacionales. Esta «nueva» opresión nacional cada día más descarada e innegable, ya en germen durante el tránsito del siglo XIX al XX precisamente por las deudas financieras de imperios debilitados y Estados en crisis, descarga sobre los pueblos obreros, sobre las naciones trabajadoras los sacrificios impuestos por poderes extranjeros y por las «burguesías nacionales» oficialmente «independientes», pero que prefieren obedecer al exterior para mantener parte de sus beneficios, que arruinarse defendiendo a sus propios pueblos.

12. Desde luego que existe una diferencia fundamental e insalvable entre las «viejas» y «nuevas» opresiones nacionales: las primeras son cualitativamente más duras e insoportables que las segundas, que las «nuevas», porque las naciones trabajadoras que sufren las «viejas» opresiones ni siquiera tienen un Estado propio en el que reforzar su lucha de clases contra el capital «nacional» y transnacional, una lucha mixta, defensiva en unas cuestiones y ofensiva en otras, pero imprescindible. Los pueblos ocupados por Estados extranjeros están cualitativamente más indefensos que los pueblos que al menos tienen su Estado aunque vendido a poderes transnacionales. Esta diferencia es decisiva para entender la teoría marxista de la autodeterminación de los pueblos, que en el capitalismo mundializado actual, pasa por la conquista del poder independiente y la construcción de un Estado de la nación trabajadora que impulse el internacionalismo socialista contra la uniformidad imperialista. 13. Veamos algunos ejemplos recientes que muestran la idoneidad de estos conceptos: uno, la imposición de la UE contra las ayudas a la industria naval en el Estado español; otro, los aplausos de la UE a la medida del Estado español de anular la vigencia de los convenios colectivos; además, la exigencia implacable de la UE de que los pueblos del Estado español paguen la llamada «deuda»; y por no extendernos, los sistemáticos recortes de derechos y libertades especialmente necesarios para las clases trabajadoras, con la excusa de la llamada «salida de la crisis». En un primer análisis general y formal, todos los ejemplos citados afectan directamente a lo que entendemos como clase obrera en el sentido amplio, a escala del Estado; pero una vez que necesitamos profundizar en la complejidad del capitalismo estatal y de la opresión nacional inherente a él, debemos estudiar cómo se concretizan en cada nación oprimida esos y otros ejemplos, cómo toman forma específica aquí en Galiza, en los Països Catalans, en Andalucía, en Euskal Herria, en Aragón, en Castilla, etc. 2.- LAS TRES FASES HISTÓRICAS 14. Estos ejemplos son actuales, casi de ahora mismo, pero muy fácilmente podemos descubrir sus identidades sustantivas con otras medidas antiobreras y antipopulares del pasado, del mismo modo que podemos descubrir la continuidad y discontinuidad en la lucha de clases dentro de Galiza, y de sus relaciones con la larga opresión nacional que sufre desde, por poner una fecha decisiva, la tenaz resistencia del exterminado reino de Galiza a su «doma y castración» por parte del reino de Castilla. La represión de la Revuelta Irmandiña en la segunda mitad del siglo XV, inaugura una larga historia de permanencia y cambio en las relaciones de clase en su seno, y del papel de la conciencia nacional preburguesa, burguesa y/o proletaria en el seno del pueblo explotado, pueblo que, al tomar conciencia-para-sí durante el capitalismo va dando cuerpo a la nación trabajadora galega presente. 15. Hablar de «conciencia nacional preburguesa» suena a herejía, pero no podemos extendernos ahora. Lo hemos planteado para mostrar que el debate sobre las clases, pueblos y naciones, sobre el sujeto en general porque debemos introducir siempre la explotación patriarcal, sólo tiene solución dentro de una crítica de la historia oficial, la dominante, la escrita por la minoría explotadora. Desde la mayoría explotada la historia es otra cosa, y en su interior destacan los largos y lentos períodos de calma relativa, con los cortos, rápidos e intensos estallidos revolucionarios. Entre la lentitud y la rapidez destacan las reordenaciones globales. La composición de las clases y de los pueblos, de los sujetos todos, en suma, también es afectada por tales reordenaciones. 16. Dicho a grandes rasgos, las reordenaciones sancionan el cierre de una fase global de la explotación y el comienzo de otra, permitiendo al capitalismo lanzarse con todos sus bríos por nuevas sendas una vez puesto orden en su interior. ¿Qué orden? Pues el que atañe a las contradicciones fundamentales del sistema: aplastar a las clases explotadas y trabajadoras; destruir las obsoletas fuerzas productivas y facilitar la aplicación masiva de nuevas tecnologías; derrotar a las burguesías y Estados competidores obligándoles a aceptar las exigencias de las burguesías victoriosas; imponer nuevas monedas fuertes, nuevas leyes económico-financieras y de regulación del mercado internacional, y extender e intensificar la expansión mundial del capitalismo bajo una nueva hegemonía imperialista. Hasta el presente, las tres reordenaciones

europeas se han desplegado oficialmente sólo después de atroces guerras internacionales en las que ha vencido un bloque burgués sobre otras burguesías, y la burguesía en conjunto sobre las clases trabajadoras y las naciones oprimidas. 17. Según el resultado de las guerras, las reordenaciones se institucionalizan, adquieren carácter oficial e internacional, bien mediante la rendición incondicional o pactada del bloque social vencido, o mediante algunas negociaciones formales que sancionan legal e internacionalmente las exigencias del vencedor sobre el vencido. No profundizamos ahora en el papel de la guerra en el capitalismo sobre todo en sus momentos de crisis sistémica, pero sabemos que éstas comienzan por contradicciones económicas endógenas, que rápidamente adquieren contenido político acelerando las tendencias objetivas hacia la militarización y la guerra. En la historia de Europa ha habido tres grandes reordenaciones de esta índole: la que tomó cuerpo legal en el Tratado de Westfalia de 1648 tras la guerra de los Treinta Años; la que tomó cuerpo en el Congreso de Viena de 1815 tras las guerras napoleónicas; y la que tomó cuerpo en los acuerdos de Yalta y Potsdam en 1945 tras la gran crisis de 1914-1945. Estamos en la cuarta, pero sin un recurso a la guerra, por ahora. 18. Desde el siglo XVII, dos leyes tendenciales capitalistas destacan, además de otras, en el accionar las reordenaciones Una es la ley de la perecuación que explica por qué los capitales abandonan los negocios menos rentables para ir a los más rentables. Y la otra es la de la concentración y centralización, que explica que los capitales más fuertes se comen a los más débiles a la vez que se reducen los propietarios de capital. Naturalmente, estas dos leyes están a su vez sometidas a las presiones de las contradicciones internas del capitalismo, a la ley de la caída tendencial de la tasa media de ganancia, etc., pero incidiendo sobre ellas. De hecho, las reordenaciones son alternativas desesperadas del sistema para salir de sus periódicas crisis globales. 19. La historia político-económica, diplomática y militar muestra cómo las burguesías se apoyan cada vez más en sus Estados para dirigir esas leyes en su beneficio exclusivo y para debilitar a las burguesías competidoras, obligándoles a aceptar sus condiciones. El capitalismo funciona, durante los períodos de relativa «normalidad», sin mayores ingerencias estatales, pero según aumentan las dificultades de realización del beneficio, las resistencias obreras, la competencia de otras burguesías, y según avanza la crisis, las burguesías refuerzan sus Estados, sus ejércitos, etc., a la vez que exigen sumisión pasiva a las clases explotadas y claudicaciones a las burguesías competidoras. Las burocracias estatales van adaptándose con mayor o menor efectividad a las necesidades socioeconómicas de sus burguesías respectivas. 20. El «libre cambio» exterior y el proteccionismo interior no son una invención reciente del neoliberalismo sino que existían antes del capitalismo y lo encontramos muy activo ya en los siglos XIV y XV. La «libertad de mercado», la «globalización», etc., son tan antiguas y permanentes como la economía comercial y mercantil aunque sea precapitalista, pero sólo con el capitalismo han desarrollado todo su poder expansivo y exterminador. Las reordenaciones europeas han respondido a estas interacciones entre las fuerzas económicas y políticas, que han llegado a plasmarse en guerras internacionales, mundiales, para acelerar así su funcionamiento. A lo largo de estos períodos, la forma-Estado ha ido variando tanto en su interior como en su exterior, pero manteniendo una identidad básica: el monopolio de la violencia, la protección de la propiedad capitalista y la potenciación de los beneficios burgueses. Sin estos y otros cambios burocráticos los Estados más poderosos no podrían presionar con efectividad a otros más débiles, ni a sus propias clases explotadas y pueblos ocupados. 21. Los colectivos explotados, desde las clases trabajadoras hasta los pueblos y naciones oprimidas, pero también las clases propietarias, incluidos los sucesivos modos de integración del patriarcado en los modos feudales y capitalistas de producción, esta extremada complejidad ha evolucionado a su vez dentro de la totalidad arriba descrita, influyéndola. Hemos hablado de la Rebelión Irmandiña y tras este repaso podemos decir que existe una línea roja que recorre aquella lucha con otras luchas posteriores, con la mantenida no hace mucho por las masas trabajadoras de Vigo en defensa de la industria naval, o con las movilizaciones contra el Prestige, o la actual en defensa de la lengua y cultura galega, y con los valiosos

esfuerzos por ir acercando en la práctica a todas las fuerzas independentistas, empezando por la juveniles. La historia de Galiza, como la de todo pueblo, también está influenciada y hasta determinada por los vaivenes impuestos por las fuerzas imperialistas desatadas por las reordenaciones. 3.- EL OBJETIVO DE LA FASE ACTUAL 22. Sin embargo, ahora mismo la burguesía europea se encuentra inmersa en una cuarta reordenación que se diferencia de las anteriores por cuatro circunstancias específicas. Una, la definitiva mundialización del capitalismo, de la ley del valor-trabajo en concreto. Dos, la pervivencia de una crisis sistémica con características «nuevas», lo que añade factores de incertidumbre antes desconocidos. Tres, la aparición de competencias interimperialistas nunca existentes lo que dificulta en extremo las estrategias del imperialismo occidental en general y del euroimperialismo en concreto. Y cuatro, la «inconveniencia» de recurrir a una nueva Gran Guerra o guerra mundial para desatascar los obstáculos que impiden aplicar rápidamente las soluciones que se han ido planificando antes incluso de que la cuarta reordenación tomó cuerpo definitivo allá por 1992 en el Tratado de Maastricht, por citar una fecha decisiva. 23. La crisis de 2007 ha supuesto una excusa perfecta para que el bloque de clases dominante en la UE multiplique sus agresiones a los colectivos explotados. Con la excusa de la crisis, la euroburguesía endurece el ataque neoliberal ya iniciado a finales de los ’70, ampliado en los ’80 y multiplicado desde la implosión de la URSS. La experiencia de la clase obrera alemana es totalmente esclarecedora al respecto: el llamado «Estado del bienestar» (¿?) alemán ha sido desmantelado en grandísima parte, y con él ha sufrido un golpe demoledor la estructura interna del proletariado clásico alemán, multidiviéndolo, precarizándolo, debilitándolo. Otro tanto sucede en las clases trabajadoras «centrales» de la UE, como la británica, golpeada a muerte sobre todo desde 1984, por no hablar de las «periféricas». 24. Lo que está sucediendo es que la cuarta reordenación tiene como uno de sus objetivos prioritarios destruir el movimiento obrero y popular que se lanzó a la lucha prerevolucionaria y radical que sacudió a Europa –y a otras partes del mundo- entre finales de los 1960 y mediados de l980, lucha que zarandeó a muchos Estados burgueses y que, sin embargo, es prácticamente desconocida por la juventud actual. Una de las fundamentales tareas que la burguesía encarga al reformismo tras superar una oleada larga de luchas radicales y prerrevolucionarias es la de destruir la memoria combativa, impedir el aprendizaje teórico extraíble de ella, abrir un abismo entre aquellas luchas y el presente para abortar toda insurgencia futura acabando con toda posibilidad de re-radicalización, imponer la «normalidad social», encauzar el malestar popular por las trampas de la politiquería parlamentaria hasta ahogarla en el pesimismo derrotista. El eurocomunismo cumplió esa función, entre otras, como también ha cumplido la de reforzar el nacionalismo imperialista en el Estado español, y el eurocentrismo en la llamada «izquierda europea». Pero como el reformismo es necesario siempre a la burguesía, excepto cuando ésta opta por el fascismo, la industria de la alienación de masas recrea nuevas modas reformistas una vez agotadas las anteriores. 25. La amnesia impuesta desde dentro a las clases trabajadoras, al pueblo en su conjunto, ha logrado que la juventud desconozca lo esencial de la teoría de la lucha de clases, y que proliferen las modas ideológicas de usar y tirar sobre el definitivo final de esa crucial lucha, sustituida por la «movilización ciudadana». En las naciones oprimidas, la desmemoria también azota a bastantes izquierdas independentistas, incluidos sectores abertzales. Precisamente cuando el Capital ataca con una dureza brutal a la misma existencia del Trabajo como colectivo con posibilidad latente de autogenerar conciencia-para-sí, precisamente ahora empezamos a comprender la terrible devastación político-intelectual y ética causada por la lobotomía teórica sufrida desde finales de la década de 1960. 26. En los pueblos trabajadores nacionalmente oprimidos la ofensiva del Capital contra el Trabajo es también ofensiva del Estado ocupante contra la nación ocupada. La amnesia que sufren algunos independentismos socialistas es aquí más grave y peligrosa porque sectores relativamente amplios de sus naciones y hasta de ellos mismos, creen contra toda evidencia que la UE, puede ayudarles a obtener una independencia verdadera, es decir, la que les garantice el no saqueo de sus riquezas y bienes producidos en

beneficio de la euroburguesía, la que acabe con la transferencia de valor del pueblo oprimido al Estado ocupante, la que facilite un avance sustancial en las condiciones de vida y trabajo basado inevitablemente en un recorte en los beneficios de la burguesía autóctona y del Estado ocupante, además de en otras medidas que también afectan negativamente a esta burguesía. Una independencia que avance resueltamente al socialismo en la medida de sus posibilidades. 4.- LO CASI IMPOSIBLE Y LO MUY PROBABLE 27. La burguesía es oportunista por excelencia, carece de escrúpulos morales y su lema es el máximo beneficio. Por ello nunca es descartable que en determinadas condiciones la burguesía apoye movimientos nacionales burgueses, pero porque redundan en el aumento del beneficio propio y de su poder político, y porque debilita y hasta puede derrotar para siempre al independentismo popular y obrero. El imperialismo apoyó y apoya nacionalismos reaccionarios allí donde le convenga, incluso los crea artificialmente falsificando la historia popular, organizando gobiernos títeres apoyados con todos los medios, también con las armas. Las llamadas «ciencias sociales», la sociología, antropología, historia, etc., pueden justificarlo todo en beneficio de imperialismo. Por ejemplo, la burguesía europea está muy interesada en «pacificar» Euskal Herria. 28. Pero existe una frontera que la clase capitalista nunca traspasará, un poder que jamás dejará perder: la frontera es la propiedad privada de las fuerzas productivas, y el poder es el Estado. Dependiendo de las circunstancias, la clase dominante puede ceder en casi todo, puede negociarlo casi todo aferrándose a su demostrada sabiduría e instinto mercantil para intercambiar esto por aquello, cediendo en lo insustancial pera reforzar lo sustancial durante el tiempo que necesite para recomponer sus fuerzas y contraatacar para aplastar al pueblo trabajador. Además, el entramado legal, institucional y de poderes diferentes en la UE es tan enrevesado y laberíntico que permite algunas autonomías de funcionamiento que jamás contradicen lo básico del euroimperialismo. Teniendo esto en cuenta, en determinadas circunstancias pueden generarse márgenes de maniobra aprovechables por procesos de liberación, pero siempre que respeten la esencia imperialista de la UE, su contenido capitalista. 29. Tales márgenes pueden ser utilizados por una parte de la UE para reforzar sus posiciones internas contra otra parte, favoreciendo algunos movimientos regionalistas burgueses, conservadores en extremo, e incluso a nacionalismos reformistas que apoyan y aplican severas medidas antipopulares en sus países, movimientos pro-sionistas y eurocéntricos, en modo alguno antiimperialistas, que mantienen relaciones de colaboración socioeconómica práctica con la burguesía estatal ocupante, aunque discrepen en lo nacional. La imaginación es libre, y podríamos imaginar que según fueran las tensiones inter-burguesas, y según los peligros para el sistema en su conjunto por la fuerza de los independentismos revolucionarios, según estos y otros factores, la UE podría apoyar muy condicionadamente determinadas «soluciones regionales» con la condición inexcusable de la derrota de sus fuerzas revolucionarias. 30. La llamada «geometría variable» de los Estados es muy anterior al capitalismo, es tan vieja como los mismos Estados, ha funcionado en todas y cada una de las tres reordenaciones europeas anteriores y ahora mismo es masivamente aplicada en lo relacionado con la soberanía financiero-económica, política, militar, tecnocientífica y de una forma muy sibilina pero perfecta en lo policial y cultural-identitario burgués con la propaganda de la «ciudadanía europea» integradora e incluyente. «Geometría variable» impuesta por las potencias ascendentes en detrimento de las descendentes. En este nivel de elucubración necesaria, que la heurística marxista aplica como parte de su método dialéctico, es admisible la posibilidad de una ayuda de la UE a algunos procesos de «secesión» burguesa, es decir, burguesa, o sea, basada en la explotación interna y en la asunción incondicional por la burguesía autóctona de la nueva dominación exterior: se sale de una vieja cárcel para entrar en otra más moderna. 31. Puede creerse que tal posibilidad casi imposible se transformaría en probabilidad y ésta en necesidad real, realizable, si la izquierda independentista y la nación trabajadora asumieran algunos «sacrificios» reversibles y transitorios que convencieran de sus buenas intenciones a la pequeña y mediana

burguesía, incluso a sectores decisivos de la «burguesía nacional», sumando así estas su fuerza de masas a las negociaciones con el Estado opresor y con la UE para avanzar a una independencia formal basada en una «justicia social» y en una «democracia participativa» más desarrolladas. No vamos a exponer aquí la inagotable lista de desastres y derrotas populares que ha originado esta táctica, sí vamos a exponer las contradicciones estructurales que determinan su fracaso. 32. El capitalismo mundial tiene una capacidad productiva instalada que desborda con creces la capacidad de consumo de la humanidad entera. El potencial de la tecnociencia puede reducir al mínimo el tiempo de producción inundando los mercados con bienes que apenas se venderían, incluso aumentando la obsolescencia programada y volviendo a neokeynesianismos insostenibles porque la producción de valor encuentra obstáculos crecientemente insalvables debido a que se multiplica exponencialmente la esencia improductiva del sistema. Cada día masas ingentes de capital excedentario en la esfera de producción de bienes de producción y en la de bienes de consumo se vuelcan en el casino financiero, en el narcocapitalismo, sexocapitalismo y armamentismo, y en la dilapidación suntuaria más obscena y cínica. Los tímidos esfuerzos por controlar el monstruo financiero fracasan uno tras otros, mientras la crisis socioecológica y el agotamiento de recursos lastran los beneficios. 33. Nada de esto significa que el capitalismo vaya a desplomarse en una catástrofe estruendosa similar a la implosión de la URSS. No, si no se acaba con él pervivirá en una huida hacia delante. En este contexto que admite repuntes fugaces y locales de crecimiento económico, el imperialismo occidental liderado por EEUU y obedecido por la UE en lo decisivo, hará lo imposible por dominar a otros imperialismos emergentes, generalizándose una especie de reordenación permanente pero a escala mundial. La burguesía occidental se ve ya en la necesidad imperiosa, urgente, de endurecer todo lo posible en cada momento la explotación interna, el saqueo externo y la supeditación de la tecnociencia al complejo militar-industrial y al control monopólico mundial de la supremacía tecnológica incontestable. Las tendencias al autoritarismo interno, al recorte de las libertades burguesas, al Estado Europeo fuerte y al neofascismo, se refuerzan al calor de estas necesidades de clase. 34. Entre algunos independentistas, también abertzales, se ha instalado la peregrina creencia de que existen condiciones para una especie de «nacionalismo del bienestar» que logre el masivo apoyo de los sectores indecisos y dubitativos de la «ciudadanía» con poca conciencia social, gracias al desarrollo de una política con tintes utilitarios que prime la política racional sobre la emotiva. Dejando de lado la axiología que define los valores empleados en estas tesis, hay que decir que tal cosa sólo es alcanzable en una «soberanía» burguesa sujeta a las exigencias de la UE y que descargue los costos de ese «bienestar» en el propio pueblo y en otros exteriores. Los «sacrificios» que debería realizar la nación trabajadora para convencer a la nación burguesa serían cada día más duros y apenas sin contrapartida por el lado burgués, lo que llevaría, muy probablemente, a una desafección, cansancio y desunión progresiva dentro de la izquierda independentista y del pueblo trabajador, y a un paralelo pero contrario envalentonamiento de la nación burguesa. 35. Dentro del sistema capitalista no existe posibilidad alguna de una «tercera vía», de un camino intermedio que aúne lo bueno del capitalismo y del socialismo en una nación oprimida, echando lo malo al basurero. No existe esta posibilidad ni en la hipótesis de que triunfasen las presiones de la UE en el sentido de «desmembrar» una parte del Estado español porque la UE dejaría bien atada la cuestión de la propiedad privada, la de la pertenencia a la OTAN, la del dominio de la instituciones burguesas, del pago de la deuda correspondiente a ese pueblo, de la presencia en su interior de ciertos aparatos del Estado español, etc., de modo que, como hemos dicho, se saldría de una cárcel para entrar en otra. En el fondo de esta creencia y de otras fantasías, lo que existe es una ignorancia absoluta de lo que es el modo de producción capitalista, y como dijo Spinoza: la ignorancia no es argumento. 5.- LAS TRES REFLEXIONES CRÍTICAS

36. Volvamos a la realidad tras este paseo imaginario. Aplicando el principio de precaución, hemos de convenir que lo más que probable, lo casi seguro es que el Estado español no sea desmembrado por la UE sino mantenido como tal, con su unidad territorial no sólo intacta sino reforzada tras algunos retoques. La UE es la menos interesada en que se extienda el desorden político-institucional y económico que azota especialmente a su flanco sur, y por eso necesita que el Estado español se mantenga y se refuerce incluso mediante dos vías en apariencia opuestas pero con el mismo objetivo para la continuidad del capitalismo: endurecer la opresión nacional y de clase, de sexo-género, etc., a la brava, obligando a las burguesías «periféricas» a nuevas claudicaciones, o maquillar nuevas opresiones con nuevos pactos con esas burguesías, especialmente con la catalana. 37. De cualquier modo, y para ir concluyendo, nos enfrentamos a tres decisivos problemas de larga duración: el primero, una u otra vía dependerá en parte de la debilidad o fuerza del independentismo revolucionario en los pueblos oprimidos, lo que recrudece el debate sobre cómo frenar los ataques contra el sujeto colectivo, contra la nación trabajadora y sobre cómo reforzarla y extender su hegemonía política sobre la pequeña burguesía y las llamadas «clases medias» ya empobrecidas, para enfrentarse al resto de la burguesía. La hegemonía política del pueblo trabajador debe basarse en su fuerza movilizadora y de convicción teórico-política en el establecimiento de alianzas conscientes de todas las clases y sectores explotados, oprimidos y dominados, en vez de en esa ambigua palabrería sobre la «hegemonía civil y cultural de la ciudadanía» inalcanzable dentro de la dictadura de clase y opresión nacional que permanece oculta bajo la fachada democrático-burguesa. 38. Nunca debemos dejar de insistir en que la teoría de la lucha de clases demuestra que por debajo de cada medida exclusivamente económica en apariencia, siempre existe el objetivo sociopolítico de debilitar lo más posible a la clase trabajadora, alterando de alguna forma su composición de clase aunque a simple vista no se aprecie esta intención oculta. Aplicando esta lección innegable a la opresión nacional tenemos que cada medida del Estado y de la burguesía colaboracionista tiene el objetivo de debilitar lo más posible a la nación trabajadora y a la izquierda independentista. Hemos de ser conscientes de que este ataque se va a extender, profundizar y endurecer, y que de su resultado dependerá la derrota o la victoria. 39. El segundo problema es una extensión del primero, ya que trata de la responsabilidad histórica de los sectores de la izquierda independentista que reducen o relativizan la importancia de la lucha de clases dentro de su nación en estos momentos, y que al hacerlo también reducen el papel central y estratégico del pueblo trabajador en la lucha de liberación. Con diversas excusas, generalmente relacionadas con la necesidad de atraer a la «burguesía nacional», que no sólo a la pequeña burguesía -esta diferencia es clave-, y a sectores democráticos de la política estatal y europea, un sector del nacionalismo de izquierdas en el Estado español lleva tiempo supeditando de algún modo la lucha de clases interna al logro de «pactos interclasista» internos y de «pactos políticos» internos y externos. Esta política es suicida porque desanima y debilita a sectores militantes y populares, y porque desertiza teóricamente al movimiento de liberación que opta por esa vía, abriendo dudas en los demás. 40. Uno de los problemas permanentes de las izquierdas revolucionarias desde la mitad del siglo XIX es el de saber explicar pedagógicamente pero con rigor teórico no sólo por qué estallan las crisis, qué son y qué alternativas existen, sino también por qué hay que buscar acuerdos con sectores reformistas duros, con la pequeña burguesía, etc. Hay dos formas de escaparse de este problema: el ultraizquierdismo demagógico, y el paulatino abandono de la pedagogía teórico-política en la militancia, de forma que ésta termine aceptando sin crítica el giro sutil al reformismo. Ambas formas de negar la evidencia histórica son terriblemente desastrosas en los períodos de crisis, y cuanto más larga, destructora y difícil de entender sea esta, peor. Ahora malvivimos en una de esas crisis. 41. Y el tercero es también una profundización de los dos anteriores. En efecto, las crisis facilitan la toma de conciencia, pero también el desconcierto y la duda que tiende a la derecha si la izquierda no sabe explicar a tiempo qué sucede y cómo reaccionar. La opresión nacional facilita la toma de conciencia pero también facilita el que sean el nacionalismo y regionalismo burgueses los que salgan beneficiados si la

izquierda independentista no está a la altura de las necesidades. El carácter multifacético, rápido y complejo de la crisis reduce el tiempo de respuesta por parte del independentismo, cuando más necesaria es. Desgraciadamente, no se puede crear de la nada una respuesta global si durante años ha imperado la desidia teórico-intelectual, o si la represión ha dificultado sobremanera el debate enriquecedor. Es urgentemente necesario, por tanto, multiplicar la formación teórica y política. 42. Pero no podemos mantener los criterios formativos de la anterior oleada de luchas, la sostenida entre finales de 1960 y mediados de 1980, y que se ha prologando más en algunas naciones oprimidas a pesar de sus altibajos. No podemos copiar aquella formación teórica porque el capitalismo actual ha agudizado e interrelacionado más sus contradicciones, a la vez que desarrollado nuevos sistemas de contrainsurgencia. También tenemos que responder a las nuevas necesidades del internacionalismo en respuesta a la mundialización y a la existencia de la UE. Podríamos citar más razones que explican por qué debemos aumentar la formación y mejorarla, pero quiero terminar diciendo que una de las necesidades perentorias es la de estrechar los lazos entre las naciones oprimidas, entre sus fuerzas revolucionarias, y desde esta posición y a la par de estrechar los lazos con las izquierdas verdaderamente internacionalistas que con encomiable coherencia luchan en el interior del monstruo imperialista español. IÑAKI GIL DE SAN VICENTE

EEUU SE ESFUERZA POR EXPORTAR A AMÉRICA LATINA Comercio EEUU LA Por Efrén Rodrigo Herrera http://www.trincheraonline.com/2013/08/07/eeuu-se-esfuerza-por-exportar-a-america-latina/ Aunque durante los últimos meses diversos analistas han destacado la forma en que China ha venido ganando terreno en el mercado de América Latina, lo cierto es que las cifras muestran que Estados Unidos sigue presente en esa zona del hemisferio y que sus movimientos en materia comercial no descuidan los puertos de esa región.Cuando llega a la mitad el plazo que el presidente Barak Obama dio, en 2010, para que las exportaciones de la Unión Americana se dupliquen, la cifra de participación de América Latina en sus metas está ganando cada vez más fuerza. El objetivo que fijó Obama, y cuyo plazo vence al cierre de 2015, busca duplicar las ventas externas que en 2009 totalizaron 1,5 billones de dólares. Según cifras del Departamento de Comercio de Estados Unidos, las exportaciones totales cerraron 2012 en 2,2 billones de dólares, lo que hoy pondría al país a menos de un billón de dólares de la meta. Actualmente Estados Unidos tiene acuerdos de libre comercio (TLC) con 20 países. Se podría decir que más del 50% de esos tratados los tiene con América Latina y El Caribe, si se tiene en cuenta que 11 países de la región están en esa veintena. Con base en cifras de 2012, el Departamento de Comercio asegura que “las exportaciones hacia los países con los que Estados Unidos tiene acuerdos comerciales representan cerca del 50%” de sus ventas totales al mundo. En promedio, el 85% de los bienes que comercia Estados Unidos entran libres de impuestos en Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, México, Panamá y Perú. Además, los acuerdos con esos países incluyen la promesa de extender los beneficios de cero impuestos de importación para el 100% de los productos que esos mercados importen desde el país del norte, en plazos que en promedio se cumplirían en los próximos cinco años.

Entre los sectores en la lista del mayor interés de Estados Unidos por ganar terreno dentro del mercado latinoamericano, y que forman parte de los acuerdos bilaterales de libre comercio vigentes con la región, están: equipos de agricultura y construcción, fertilizantes, equipo de tecnología de la información, equipo médico y científico y madera. Los acuerdos más recientes en América Latina los firmó el año pasado con Colombia y con Panamá. Durante los primeros cinco meses de 2013, las ventas de la Unión Americana hacia Colombia se habían incrementado 18% frente al mismo período de 2012. Y con apenas un año de vigencia del acuerdo. Según la oficina de la Iniciativa Nacional de Exportaciones estadounidense (NEI, por las siglas en inglés), Estados Unidos le apuesta a conquistar una buena parte del mercado de los servicios que representan cerca de 180.000 millones de dólares, solo en Colombia y por lo menos 250.000 millones de dólares sumando los 11 países mencionados. La participación de las exportaciones hacia América Latina ha crecido sin parar, desde que Obama anunció su meta en 2010. En la actualidad, la región le compra a Estados unidos cerca del 25% del total que exporta. En 2010 las exportaciones de Estados Unidos hacia Latinoamérica representaban el 22% del total, con 285.867 millones de dólares. En 2012 la cifra subió a 382.279 millones de dólares y, hasta mayo de 2013, ya los mercados latinoamericanos han recibido bienes estadounidenses por cerca de 160.000 millones de dólares. Actualmente los países latinoamericanos que tienen TLC con Estados Unidos compran más del 80% de las exportaciones estadounidenses hacia esa zona. México, Colombia y Chile son los mayores compradores entre quienes le abren sus mercados sin restricción arancelaria. El destino de los bienes estadounidenses en Latinoamérica con más crecimiento es Chile. Entre 2003, cuando entró en vigencia el TLC bilateral, y 2010, cuando comenzó el plan quinquenal de Obama para duplicar las exportaciones, la economía chilena multiplicó por cuatro sus compras a Estados Unidos al pasar de 2.700 millones de dólares a 10.908 millones de dólares. Siguen en crecimiento entre 2010 y 2012 las exportaciones hacia Panamá (62,13%), Costa Rica (39,53%), Perú (38,45%) y Colombia (35,53%). Así las cosas, por cortesía de los planes de Obama y de los tratados sobre el libre comercio que los gobiernos firman, y seguirán firmando, los consumidores latinoamericanos tendrán para rato maíz, trigo, carnes, jugos y frutas congeladas, celulares, juguetes, cosméticos, combustibles y aeronaves civiles, entre tantos otros, con la etiqueta “made in USA” en competencia con los productos chinos y uno que otro de su propio patio. (AP).

MIENTRAS MÉXICO DABA VIDAS EN LA GUERRA AL NARCO, LA BANCA GLOBAL BEBÍA “DINERO CON SANGRE” : The Guardian Por: Redacción / Sinembargo - agosto 7 de 2013 - 21:58 Destacadas, México, TIEMPO REAL, Último minuto - 6 comentarios Las muertes y desapariciones se extendieron por todo el territorio mexicano. Foto: Cuartoscuro Ciudad de México, 7 de agosto (SinEmbargo).– El periódico The Guardian exhibe en su edición un amplio reportaje en el que documenta cómo, a medida que la violencia provocada por los cárteles de la droga se extendió en México, el sistema financiero global comenzó a lavar miles de millones de dólares en efectivo provenientes de las bandas del crimen organizado. El sistema bancario internacional, y principalmente el de Estados Unidos, ha “sacado provecho del dinero manchado con sangre” de la guerra en México, afirma el influyente diario. El reportaje, que fue realizado por el periodista Ed Vulliamy para el diario dominical The Observer, periódico hermano del vetusto The Guardian, se centra en el caso del banco Wachovia, uno de los más grandes de Estados Unidos y que forma parte del gigante Wells Fargo. La historia de Vulliamy se remonta al 10 de abril de 2006, cuando un avión DC-9 aterrizó en Ciudad del Carmen, Campeche, y soldados mexicanos estaban esperando para interceptarlo. En la aeronave no sólo encontraron 5.7 toneladas de cocaína, valoradas en 100 millones de dólares, sino el primer rastro, con papeles de por medio, de una compra realizada por el Cártel de Sinaloa, que compró ese avión con dinero lavado a través de Wachovia. De

ahí en adelante, expone el periodista de The Observer, las autoridades descubrieron miles de millones de dólares en transferencias bancarias, cheques de viajero y envíos de dinero a través de intercambios mexicanos a cuentas de Wachovia. El banco fue puesto de inmediato bajo investigación por no tener un programa efectivo contra el lavado de dinero. Fue un periodo de especial importancia, destaca, pues coincidió con la primera escalada de la violencia en la frontera México-Estados Unidos y con la que inició la guerra contra las drogas. En diciembre de 2006, el entonces Presidente Felipe Calderón Hinojosa lanzó una guerra contra las drogas que provocó la muerte de entre 60 mil y 90 mil mexicanos; la desaparición de otros cerca de 25 mil y unos 400 mil desplazados a causa de la violencia. Los procedimientos penales se hicieron directamente contra Wachovia y no contra una persona en particular, aunque el caso nunca llegó a tribunales. En marzo de 2010, el banco estableció el mayor recurso interpuesto y con arreglo relacionado con la Ley del Secreto Bancario en Estados Unidos, a través de un tribunal de distrito en Miami. De esa forma, dice el periódico dominical, pagó las autoridades federales 110 millones de dólares por las transacciones que lo ligaron con el tráfico de drogas, y cubrió una multa de 50 millones de dólares por no monitorear el efectivo utilizado para transportar, en total, 22 toneladas de cocaína. “Más sorprendente, y más importante, el banco fue sancionado por no haber aplicado las adecuadas restricciones anti-lavado para la transferencia de 378.4 billones de dólares –una suma equivalente a un tercio del Producto Interno Bruto de México– en cuentas de las llamadas Casas de Cambio (CDC) en México, con las que el banco hizo negocios”. El fiscal federal Jeffrey Sloman, citado por The Observer, dijo: “Es un despreción flagrante de Wachovia por nuestras leyes bancarias, que dio a los cárteles internacionales de la cocaína una virtual carta blanca para financiar sus operaciones”. Sin embargo, la multa total para entidad financiera fue sólo de 12.3 billones de dólares, en 2009. De acuerdo con el reportaje de Ed Vulliamy, la conclusión fue que este caso representa sólo la punta del iceberg del papel que juega el sector bancario “legal”, al beberse cientos de miles de millones de dólares –“dinero con sangre del narcotráfico criminal en México y otros lugares en el mundo”– en torno a su operaciones globales, incluso cuando han sido rescatados de su crisis con el dinero de los contribuyentes. Wachovia fue adquirido por Wells Fargo durante el crash de 2008, y al igual que Wells Fargo se convirtió en beneficiario de 25 mil millones de dólares en dinero de los contribuyentes. Durante la investigación de este caso, destacó The Observer, el diario obtuvo documentos presentados previamente a los reguladores financieros. Ahí se puso de manifiesto que la primera alarma –que fue ignorada por completo– vino, entre otros lugares, de Londres, como resultado de la diligencia de uno de los denunciantes más importantes de nuestro tiempo, Martin Woods: “Un hombre que, en una serie de entrevistas con The Observer, agregó detalles de los documentos y puso al descubierto la historia de cómo Wachovia estuvo en el centro de una de las mayores operaciones de blanqueo de capitales del mundo”. Las investigaciones que por más de cuatro años realizó Woods revelaron que durante el período del 1 de mayo 2004 al 31 de mayo de 2007, Wachovia procesó por lo menos 373 mil 600 millones de dólares en Casas de Cambio y 4 mil 700 millones en efectivo a granel, un total de más de 378 mil 300 millones, una suma que empequeñece los presupuestos debatidos por el Reino Unido y Estados Unidos para prestar servicios a los ciudadanos. Este contenido ha sido publicado originalmente por SINEMBARGO.MX en la siguiente dirección: http://www.sinembargo.mx/07-082013/713457. Si está pensando en usarlo, debe considerar que está protegido por la Ley. Si lo cita, diga la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. SINEMBARGO.MX

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EL HAMBRE COMO ESPECTÁCULO POLÍTICO Por: Sin Embargo - agosto 8 de 2013 - 0:00 Destacadas, México, TIEMPO REAL, Último minuto - 1 comentario http://www.sinembargo.mx/08-08-2013/711922 No es un programa como el de Lula en Brasil: es Solidaridad reloaded, al puro estilo de Carlos Salinas de Gortari, para adquirir legitimidad y garantizar el control corporativista de las comunidades “beneficiadas”. La Cruzada contra el Hambre, dice este especialista en Política Social, es un negocio redondo: enamora votantes, beneficia corporativos, organiza a los ciudadanos en células clientelares y apuntala a un Presidente, Enrique Peña Nieto, que llegó al poder con pocos votos. 19 de julio. Madre y su hijo, llevados a Santa Unés del Monte, Oaxaca, para un acto de la titular de la Sedesol, Rosario Robles Berlanga. Foto: Cuartoscuro Ciudad de México, 8 de agosto (SinEmbargo).– Una vez pasadas las elecciones que pusieron en riesgo la alianza del gobierno con las dirigencias de los dos mayores partidos de oposición, el Presidente Enrique Peña Nieto anunció el relanzamiento de la Cruzada Nacional contra el Hambre, principal iniciativa hasta la fecha en materia de política social del gobierno actual, inspirada en la campaña Hambre Cero implementada en Brasil durante el primer año del gobierno de Lula da Silva. De acuerdo al Decreto Presidencial que le da origen, la estrategia mexicana busca garantizar el derecho a la alimentación establecido en el Artículo 4 de la Constitución mexicana; tiene como objetivo fundamental acabar con el hambre entre la población en situación de pobreza extrema; agrupa más de 40 programas sociales y considera la participación comunitaria. No obstante, una mirada cercana a sus documentos normativos revela el limitado potencial de su diseño y un modelo de política social similar al del gobierno priista del Presidente Carlos Salinas de Gortari, con los fines genuinos de aumentar los niveles de legitimidad del gobierno y construir una estructura alterna de control corporativo y clientelar. Adicionalmente, en las acciones de la cruzada se percibe la intención de impregnar a la política social de un matiz filantrópico, que no sólo representaría la renuncia del estado al cumplimiento de los derechos sociales que manda la Constitución, sino que también serviría como un medio para limpiar la imagen de la industria alimentaria en el país. ¿INSPIRACIÓN EN EL MODELO BRASILEÑO? La imitación de la iniciativa brasileña Hambre Cero es uno de los aspectos que más se destaca de la Cruzada Nacional contra el Hambre. Se argumenta que en

México se estaría implementando una estrategia similar a la brasileña, de supuesto éxito comprobado en la reducción de la pobreza y la desigualdad. Efectivamente en 2002, durante el primer gobierno del Partido de los Trabajadores en Brasil se implementó dicha estrategia que, al igual que la mexicana, agrupaba una amplia serie de acciones para combatir la pobreza. Sin embargo, sus resultados estuvieron lejos de ser los óptimos, sobre todo por la falta de coordinación e integración entre los diversos programas que la integraban, administrados por una gran variedad de dependencias de gobierno. Tan solo un año después, el gobierno tomó la decisión de enfocarse en los programas de transferencia de ingresos, integrando cuatro diferentes bajo uno solo que fue llamado Bolsa Familia y que es prácticamente idéntico al programa Oportunidades que existe en México. El nombre de Hambre Cero se sostuvo más como una referencia al enfoque o aspiración del gobierno, pero la herramienta para combatir la pobreza fue Bolsa Familia. Ahora bien, Bolsa Familia no ha sido la única causa de la disminución de la pobreza y la desigualdad en Brasil. Otras factores, como la ampliación del seguro de desempleo –en México ni siquiera se cuenta con un programa federal de este tipo– o la alta cobertura de los sistemas de pensiones –en México menos de la tercera parte de los adultos mayores recibe una pensión del IMSS o el ISSSTE y la expansión del programa de pensiones no contributivas apenas ha iniciado– también han contribuido. Como resultado de la amplia cobertura de los programas sociales en Brasil, de acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en 2009 el gasto social representaba en ese país casi el 30 por ciento del Producto Interno Bruto, mientras que en México era apenas del 11 por ciento. Adicionalmente, con los gobiernos del PT en Brasil se aplicaron aumentos significativos al salario mínimo, como parte de negociaciones entre sindicatos, empresarios y el estado en el marco de una política de sostener e incrementar el salario mínimo real por encima de los niveles de inflación y promover así el desarrollo del mercado interno. Mientras tanto, en México se ha permitido que el valor real del salario mínimo caiga hasta representar hoy el 70 por ciento de su valor en 1994. Si el gobierno mexicano en realidad buscara adoptar un modelo de tinte social-demócrata similar al brasileño, se implementarían medidas como las mencionadas aquí. Es difícil argumentar entonces que la Cruzada Nacional contra el Hambre represente una imitación del modelo brasileño, por lo tanto su lógica debe buscarse en otro lugar, y es en las similitudes con el Programa Nacional de Solidaridad (PRONASOL) del gobierno de Carlos Salinas donde quizás se pueda encontrar. El show completo, al estilo PRI: mamás pobres, niños en harapos, trajes típicos y mordida al taco. 19 de julio, en Oaxaca. Foto: Cuartoscuro HERRAMIENTA DE LEGITIMIDAD POLÍTICA Y CONTROL CORPORATIVO Una mirada al diseño de la cruzada permite entrever la lógica de utilizar la política social como un medio para, por un lado, buscar legitimidad en la supuesta priorización del combate a la pobreza, y por otro, construir una estructura de control corporativo ante la pérdida de eficacia de la estructura tradicional basada en organizaciones obreras, campesinas y de empleados públicos afiliadas al Partido Revolucionario Institucional (PRI). Estos dos objetivos resultan muy similares a los perseguidos durante el gobierno del presidente Salinas mediante el Programa Nacional de Solidaridad. La ausencia de una segunda vuelta en las elecciones presidenciales en México provoca que el candidato ganador lo haga con porcentajes de votación muy bajos. Enrique Pena Nieto triunfó con menos del 40 por ciento del total de la votación, es decir, más del 60 por ciento del electorado no votó por él. Si a esto se añaden las acusaciones de clientelismo y compra de votos y el cuestionado papel que jugaron los medios de comunicación, la legitimidad del gobierno entrante es muy reducida. Ahora bien, nada habría de malo en que un gobierno que llega un tanto débil al poder buscara ganar apoyo entre la población con acciones que beneficien a los más pobres; el problema aquí es que básicamente la Cruzada no representa más que un reagrupamiento de los programas sociales que ya venían operando incluso algunos desde la administración del Presidente Ernesto Zedillo. Por lo tanto no se debe esperar ningún aumento significativo de los recursos públicos destinados a la reducción de la pobreza. Al no existir nuevas políticas ni recursos adicionales, la campaña publicitaria se convierte en el elemento esencial de la iniciativa. Así que lo que abunda son comerciales de televisión y radio, desplegados en periódicos y ceremonias para la firma de acuerdos y convenios protocolarios con gobernadores y empresarios, mientras que en el menú de acciones de la página de internet, se anuncian como las únicas realizadas hasta la fecha un concierto de rock, la pintura de un mural y un concurso de fotografía y otro de cortometraje, esto último además con serias consecuencias morales, como lo señala Hermann Bellinghausen en un artículo publicado recientemente en La Jornada (La Jornada 22/7/2013). La política social funciona entonces como un espectáculo, como una herramienta publicitaria para legitimar a un gobierno que llega débil al poder. Todo esto resulta muy similar al contexto y las acciones del gobierno de Salinas, cuando el PRONASOL fue ubicado al centro de la política

gubernamental y de las políticas públicas, a fin de legitimarlo después de las cuestionadas elecciones de 1988, con base en una agresiva campaña mediática no vista antes en México para promocionar un programa social. Sin embargo, los recursos destinados a su operación siempre fueron mínimos: menos del siete por ciento del total del gasto de desarrollo social según una evaluación realizada por Rolando Cordera y Leonardo Lomelí. En cuanto al segundo objetivo, más allá de la criticada selección de los municipios donde dio inicio la cruzada, que parece haber priorizado aquellos donde hubo elecciones en este 2013, el diseño de su estructura de operación posibilita la construcción de nuevas redes de control clientelar y corporativo. La estrategia considera la creación de comités comunitarios en cada colonia o localidad que funcionarían como mecanismos de participación social al coadyuvar en la definición y supervisión de las acciones. Los lineamientos de organización y funcionamiento de estos comités señalan su creación no sólo en las comunidades donde opere la cruzada, sino en todas aquellas que sean beneficiarias de los programas sociales del gobierno. Los comités estarían integrados por miembros de la comunidad elegidos “democráticamente”. El presidente de cada comité sería responsable de representar a la comunidad ante los tres niveles de gobierno y de gestionar y coordinar las acciones entre el gobierno y la comunidad. Las acciones a implementar en cada municipio serían definidas conjuntamente con los comités, a partir de la elaboración de un diagnóstico de la problemática de la localidad. Ya desde antes de que el actual gobierno entrara en funciones, la que vendría a ser nombrada secretaria de Desarrollo Social – Rosario Robles – había adelantado la intención de romper con la “lógica individualista” de la política social y “pasar a una perspectiva de participación comunitaria” (El Universal, 10/09/12). Los comités comunitarios serían la encarnación del concepto de “participación comunitaria”. El riesgo aquí es que los comités fácilmente pueden ser convertidos en instrumentos de control clientelar y corporativo. Tal como quedó claramente demostrado durante el último proceso electoral, en México los programas de combate a la pobreza continúan siendo altamente vulnerables a prácticas clientelares. A pesar de que se han registrado avances en materia de transparencia durante los últimos tres lustros, la realidad es que en cada proceso electoral surgen evidencias del uso de los programas sociales con fines clientelares. Los comités comunitarios de la cruzada contra el hambre sólo facilitarían estas prácticas clientelares. Es difícil imaginar cómo se pueda garantizar la elección “democrática” de miles de comités en todo el país; y al contario, lo más probable es que quedarían en manos de grupos políticos que entonces contarían con el instrumento ideal para repartir beneficios a cambio de apoyo político. El PRONASOL salinista también incluyó el componente de participación comunitaria y operó con comités integrados por miembros de la comunidad, llamados comités de solidaridad, que terminaron por ser en gran medida meros espacios de negociación clientelar. El programa resultó tan efectivo como herramienta de control de clientelas políticas, que hoy no queda duda que fue una de las principales causas por las que el PRI logró recuperarse tan rápidamente de las controvertidas elecciones de 1988. La construcción de esta red clientelar a través del PRONASOL resultó necesaria porque las presiones por una mayor democratización elevaron la importancia de las elecciones como la vía principal para legitimar al gobierno y restaron eficacia a las viejas centrales obreras y campesinas como medios de control corporativo. La legitimidad debía entonces ganarse en las urnas, y por ello el intercambio de beneficios sociales por votos que representó el PRONASOL fue tan efectivo. La Cruzada Nacional contra el Hambre, al igual que el PRONASOL en su momento, abre la puerta para la reconstrucción de la estructura clientelar y corporativa, en un contexto de fuerte competencia electoral que le garantice al PRI la permanencia en el poder; parece ser que se retoma el camino iniciado con el salinismo e interrumpido por las crisis económica y política de 1994-1995. El filántropo de la Cruzada contra el Hambre. Foto: Cuartoscuro COMO OBRA FILANTRÓPICA Si existe un elemento innovador en la Cruzada Nacional contra el Hambre, sería la concepción de la política social como obra filantrópica. El supuesto objetivo es conjuntar esfuerzos con los sectores social y privado para combatir el hambre. Por supuesto que la colaboración del gobierno con organizaciones de la sociedad civil, instituciones educativas o empresas privadas puede resultar positiva incrementar el capital social en el país. El problema con la cruzada es su matiz filantrópico, evidente en la campaña publicitaria y en el discurso de los funcionarios y políticos que participan en su implementación. Como se destaca de la ceremonia de suscripción del acuerdo con el Gobierno de Aguascalientes, la iniciativa busca “mover los corazones” de los mexicanos para ayudar a los más pobres. La consecuencia es que se crea la idea de que la pobreza se puede combatir con donaciones de alimentos para entrar a un concierto de rock, o peor aún, con donaciones de la industria alimentaria internacional, como las que se realizarán mediante los dos convenios firmados a la fecha con compañías transnacionales. El matiz

filantrópico de la cruzada tiene dos implicaciones mayores. Por un lado representa la renuncia del Estado a garantizar el derecho a la alimentación, porque ahora la lucha contra la pobreza dependerá de las donaciones que tengan a bien realizar grandes corporaciones transnacionales. Pero el combate a la pobreza no puede depender de la caridad, más bien debe ser una cuestión de justicia y derechos sociales, de políticas redistributivas que busquen recolectar impuestos de manera progresiva para redistribuir el ingreso equitativamente a través de las políticas sociales. El segundo efecto sería limpiar la imagen de la industria alimentaria en México, cuando son precisamente las empresas que la integran las principales culpables de los graves problemas de malnutrición, sobrepeso y obesidad que se han venido registrando en el país durante años recientes. A diferencia de otros países en donde ha sido prácticamente prohibida, en México la agresiva publicidad de alimentos chatarra es alarmante, sobre todo la que se dirige a los niños. Y en vez de intentar regular a la industria, el estado opta por otorgarles un arma para defenderse de las acusaciones, al poder argumentar que sus donaciones (deducibles de impuesto) contribuyen a la reducción de la pobreza en el país. Y la pobreza sigue en aumento. Foto: Cuartoscuro POBREZA Y DESIGUALDAD Las cifras recientemente difundidas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) reflejan el fracaso de la política social para aminorar la pobreza, redistribuir el ingreso y disminuir la desigualdad. Algunos analistas han destacado la ligera reducción en la proporción de población pobre en comparación con la última medición dos años atrás. Pero la realidad es que nos encontramos en el mismo sitio que hace treinta años, a diferencia de otros países latinoamericanos que sí han logrado avances significativos. En México más del 50 por ciento de la población es pobre y alrededor del 80 por ciento se encuentra en situación de vulnerabilidad, ¿se puede esperar que la cruzada contra el hambre pueda cambiar esta situación de manera sustancial? La respuesta es no. Quizás el ya anunciado sistema de seguridad social universal pueda resultar una iniciativa interesante, pero habrá que analizar con mucho cuidado dos aspectos de su diseño: primero, sus condiciones de elegibilidad, es decir, quienes y de qué manera tendrán acceso a sus beneficios; segundo, y más importante, su financiamiento, porque si se propone que provenga de impuestos al consumo, el impacto entre la población pobre, que representa la gran mayoría de la población del país, puede resultar negativo, con más perjuicios que beneficios. Mientras tanto lo que queda claro es que la Cruzada Nacional contra el Hambre se ubica muy lejos de garantizar el derecho a la alimentación establecido en el artículo 4 de la Constitución y por tanto de representar una herramienta útil para la reducción de la pobreza y la desigualdad. Más aun, al igual que la política social salinista, cumple fines más bien políticos: por un lado legitima al gobierno actual, por otro posibilita la construcción de estructuras clientelares para facilitar el control corporativo de los más pobres. Adicionalmente e igual de grave, el combate a la pobreza deja de ser una obligación del estado y se convierte en una obra de caridad en gran medida a cargo de las empresas privadas. Con estrategias como esta, los mexicanos tendremos que seguir observando como otros países latinoamericanos dan pasos importantes hacia la construcción de sociedades más justas y equitativas, mientras que en nuestro país los altos niveles de pobreza y desigualdad persisten. * Ricardo Velázquez Leyer estudia doctorado en Ciencias Sociales con especialidad en Política Social en la Universidad de Bath del Reino Unido Este contenido ha sido publicado originalmente por SINEMBARGO.MX en la siguiente dirección: http://www.sinembargo.mx/08-08-2013/711922. Si está pensando en usarlo, debe considerar que está protegido por la Ley. Si lo cita, diga la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. SINEMBARGO.MX

PEDRO CAYUQUEO: “ES DIFÍCIL ENCONTRAR UN MAPUCHE ANTI-CHILENO, PERO NO UN CHILENO ANTI-MAPUCHE” Por: Leonardo Garetto / Fotos: / August 6, 2013 http://www.sentidoscomunes.cl/pedro-cayuqueo-periodista-es-muy-dificil-encontrar-un-mapuche-antichileno-pero-no-tanto-un-chileno-anti-mapuche/ NO DEJES DE LEER:Mahmud Aleuy, Vicepresidente PS: “Lo obvio que hay que hacer es cambiar la Constitución”Cómo se abusa en Chile según Hernán CalderónAldo González, Economista: “Hay que

incorporar la sanción penal a la colusión”Nicolás Valenzuela, Urbanista: “Seguir invirtiendo en autopistas es insustentable”Daniel Jadue: “El transporte público debe ser estatal”TAGS:TWITTERFACEBOOK0COMENTAR Pedro Cayuqueo Millaqueo lleva algunos años siendo la voz de los mapuches en Chile y el mundo: en 1999 fue delegado mapuche ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Suiza, y acá es fuente obligada cuando se habla sobre el pueblo indígena. Es el director y fundador de dos periódicos:“Azkintuwe”y “Mapuche Times”, desde donde lucha por un Estado Pluricultural y busca combatir la ignorancia: “Muchos chilenos tienen posiciones contrarias al tema mapuche porque simplemente no conocen la historia de Chile”, dice. Acá su revisión de la historia, el conflicto y sus posibles soluciones. En un mundo ideal, ¿qué debería incorporar un programa presidencial con respecto a los pueblos indígenas? En un mundo normal, más que ideal, Chile debiera declararse un Estado Plurinacional, esto es, un Estado donde conviven diversas naciones en igualdad de derechos. Sería dar cuenta de la diversidad de su composición interna y un acto de reconciliación consigo mismo y con una historia negada. La fábula del Estado-Nación, esta imagen de un país monocultural, monolingüe, donde flamea solo una bandera, se habla un solo idioma, se reconoce una sola cultura, debe cambiar a un Estado donde su realidad plurinacional y multicultural este reconocida y garantizada. Es lo que estilan los Estados y las democracias modernas, muchas de las cuales Chile gusta mencionar como ejemplo. En un mundo normal, Chile sería un Estado del siglo XXI y no uno anclado en esta idea del siglo XIX. Es lo que debiera incorporar un programa presidencial; el compromiso de avanzar hacia un Chile Plurinacional. Ahora, si hablamos de un mundo ideal, Bruce Dickinson probablemente sería mapuche (risas). ¿Qué tan chileno se siente un mapuche hoy? Chile no hace muchos esfuerzos para que un mapuche se sienta chileno. Yo a Chile le llamo la “ruca grande”, la casa grande donde habitamos todos. Bueno, esta ruca grande es incómoda, fue diseñada entre cuatro paredes o comandancias y la repartición de los panes y los peces en su interior es del todo desigual. Lo dicen todos los informes de desarrollo humano, los informes de la OCDE, los análisis de los think tank, es decir, no es propaganda mía. ¿Quién querría vivir en una ruca como ésta, donde además te discriminan, eres tratado como habitante de segunda clase y te obligan muchas veces a comer en la cocina? Es la pregunta que nos hacemos muchos mapuche y también sospecho los rapa nui y los aymara. Y la respuesta no es favorable a Chile. Un dato interesante; es muy difícil encontrar un mapuche anti-chileno, pero no tanto un chileno antimapuche. Por lo general uno lidia con ambas identidades, ya que no es excluyente para nosotros transitar de un código cultural a otro. Yo no siento cosas contra la bandera de ustedes, al contrario. Que grato seria que también ustedes se emocionaran con la nuestra. Aun en los libros de historia se habla de “Pacificación” y no de la guerra que realmente ocurrió. Aún es posible escuchar a un profesor decir que “machi” es igual a “bruja”. O que los mapuche éramos salvajes cuya única gracia era cazar y recolectar. O beber una chicha de muy mala calidad, como enseña el profesor Sergio Villalobos, Premio Nacional de Historia. ¿Qué opinas de que Chile se convierta en un Estado Plurinacional? ¿Lo ves viable a corto plazo? Creo que es posible en la medida que Chile experimente un gran cambio cultural. No creo que las cosas avancen por decreto o mediante leyes. Ayudan, pero son un punto partida y no de llegada. Hay que combatir sobre todo la ignorancia, el no saber o el hecho real que nadie les contó. Muchos chilenos tienen posiciones contrarias al tema mapuche porque simplemente no conocen la historia de Chile. Y eso tiene que ver con un sistema educativo que niega o esconde lo que aquí sucedió. Por ello es tan importante la lucha estudiantil, por una mejor educación para todos y fantástico si además de poner el acento en la gratuidad y la calidad los chicos se fijan también en los contenidos. Aun en los libros de historia se habla de “Pacificación” y no de la guerra que realmente ocurrió. Aún es posible escuchar a un profesor decir que “machi” es igual a “bruja”. O que los mapuche éramos salvajes cuya única gracia era cazar y recolectar. O beber una chicha de muy mala calidad, como enseña el profesor Sergio Villalobos, Premio Nacional de Historia. En la medida que existan cambios en la educación yo veo posible este cambio cultural y arribar algún día al sueño de un Estado Plurinacional.

entrevista por dentro El cambio de paradigma es lo que hablábamos, este cambio cultural necesario y que daría a Chile la bienvenida al siglo XXI. Comprender, como dice nuestro gran poeta Elicura Chihuailaf, que así como es bella la rubiedad también lo es la morenidad. Ello sería un paso gigantesco para terminar con prejuicios y discriminaciones que a veces rayan en el racismo. ¿Que crees que le falta a la clase política para que el tema mapuche esté presente en la agenda publica? ¿Cual es el cambio de paradigma frente al tema indígena que tiene que tomar la clase política? El cambio de paradigma es lo que hablábamos, este cambio cultural necesario y que daría a Chile la bienvenida al siglo XXI. Comprender, como dice nuestro gran poeta Elicura Chihuailaf, que así como es bella la rubiedad también lo es la morenidad. Ello sería un paso gigantesco para terminar con prejuicios y discriminaciones que a veces rayan en el racismo. Comprender que no es una amenaza para Chile la existencia de una nación mapuche. Al contrario, es una riqueza, como lo es la existencia de los aymara, rapa nui, kaweskar, etc, le otorga “valor agregado”, por usar un término económico. Es lo que aprendieron, no sin dificultades, los neozelandeses al pasar de ser una colonia británica a una nación polinésica, oportunidad que les brindó la cultura maorí. Comprender que no puede llamarse “desarrollo” un modelo basado en la extracción de materias primas, que violenta no solo al medioambiente sino también a múltiples comunidades locales, indígenas y no indígenas. Y entender que democracia no puede ser el gobierno de unos pocos para beneficio de otros pocos. “Mandar obedeciendo”, esa debiera ser una máxima en política, algo muy propio de cómo entienden el poder y su ejercicio muchas culturas indígenas. ¿Por qué no hay candidatos mapuches en esta elección parlamentaria? Por una falla de origen de este sistema democrático tan particular que tiene Chile. Te hablo del binominal, que consagra y limita la participación política a estos dos grandes bloques donde lemas como “el que tiene mantiene” son pan de cada día. No es que no existan mapuches con ganas de participar en política. Los hay y muchísimos, pero es increíble como todos ellos, llegado el momento, en sus respectivos partidos se encontraron con un portazo en la cara o fueron sometidos a primarias imposibles. Pasó en la Alianza y la Concertación lo que es lamentable. Una de las primeras medidas que se tomó en Nueva Zelanda, para canalizar políticamente la demanda maorí, que era tan radical a ratos como pueden serlo algunos grupos mapuche, fue crear los escaños reservados en el Parlamento. Aún existen y fueron pieza fundamental para que la lucha indígena se canalizara por vías institucionales y democráticas. Chile debiera contar con cupos o escaños para pueblos indígenas en el Congreso. Es lo que hacen las democracias modernas. Según el Censo 2012 somos el 10 por ciento de la población del país. Es impresentable que ese 10% este prisionero de un sistema político excluyente y no tenga vías de participación. Es un apartheid político. ¿Qué tipos de instancias políticas de discusión sobre el conflicto indígena ha habido en el último tiempo? Desde el gobierno muy pocas. Cada administración ha creado mesas de diálogo y comisiones para tratar el tema indígena cada vez que algo se quema o alguien es quemado, como aconteció con el brutal crimen de los agricultores de Vilcún, pero se diluyen con el tiempo. Siempre las autoridades, ante este tipo de hechos, hablan de “un antes y un después” o un “cambio de paradigma”, pero no dejan de ser frases para la galería. Falta una visión de Estado. Como decía Churchill, faltan políticos que estén más preocupados de las próximas generaciones que de las próximas elecciones. Yo he perdido la cuenta de las mesas de diálogo y comisiones creadas desde el retorno de la democracia. Ahora, fuera del ámbito gubernamental, existen espacios interesantes donde el tema se ha comenzado a discutir más seriamente. En el movimiento Marca Tu Voto, que impulsa esta idea de la Asamblea Constituyente, se ha debatido el tema indígena y se ha llegado a la comprensión de lo importante que es para Chile cambiar de actitud al respecto. Lo mismo acontece en otros espacios de discusión política. Me consta que los chicos de Revolución Democrática e

Izquierda Autónoma también han gestado espacios de discusión sobre el tema, no tanto para dar sus recetas si no con esta idea de aprender, de escuchar, lo que me parece muy sabio. Y pasa lo mismo en espacios como Evopoli, lo que permite abrigar cierta esperanza de un cambio. No es menor el hecho que todos ellos serán la clase política del futuro. entrevista por dentro (2) ¿Sientes que la relevancia y discusión del conflicto mapuche en la agenda pública pasa por los problemas de violencia del sur y que cuándo éstos se terminan, y los medios dejan de cubrirlos, ya no se habla más del tema? ¿Por qué? Lo comentaba antes. La no comprensión cabal del tema, la ignorancia, sumada a su cuota de racismo, que existe, llevan a que los mapuche seamos tema solo cuando algo se quema. Eso es lamentable. Reduce un conflicto histórico, social y eminentemente político, a páginas de la crónica policial, con el agregado que al sur del Biobio protesta social es sinónimo de “terrorismo”. Aquí debo también hacer un mea culpa como periodista. Los medios, sobre todo los medios masivos que gustan caer en el sensacionalismo y lo efectista de la “violencia”, a ratos son parte del problema y no de la solución. Eso es real y quienes somos periodistas debemos tomar el guante al respecto. Un periodismo serio, responsable y ético podría hacer un gran aporte en la búsqueda de soluciones al conflicto. Eso lo hemos visto muy poco. Ha primado esta caricatura de la “guerra de Arauco” que no termina y los mapuche “terroristas”, lo que me parece de una irresponsabilidad brutal. ¿Cómo se enfrenta el pueblo mapuche ante la manipulación informativa sobre la lucha indigenista? ¿Como les afecta la imagen que aparece en los medios sobre ustedes? La imagen negativa de los mapuche en los medios afecta muchísimo. Los medios, escribió un gran teórico de la comunicación, crean realidades. Nadie queda indiferente ante titulares que dicen “Zona de Guerra” o “Araucania en Llamas”. Menos cuando lo que acompaña la nota es un incendio y a todo color. No digo que no se deba informar de los incendios o atentados, que suceden, pero centrar el foco en ello es bastante pobre como ejercicio del periodismo. Las preguntas creo son otras. ¿Qué provoca esto? ¿Cuáles son las causas? ¿Por qué no se avanza en soluciones? Es lo que uno esperaría de los medios, no este eterno periodismo via partes policiales que caracteriza a muchos. ¿Solución a esto? De parte nuestra, gestar medios propios, usar redes alternativas de difusión, es lo que muchos mapuche están haciendo. Hoy existen periódicos, sitios web, gente haciendo audiovisual, mucho trabajo en radios, es el camino, pasar del lamento a la acción. Yo vengo de ese mundo intelectual mapuche que no contento con ser escrito por otros, pasó a escribir su propia historia. Es lo que trato de hacer en el periodismo, para ello fundamos dos periódicos y batallamos por ganar espacios también en los grandes medios. Y así, muchos otros hermanos y hermanas de pueblo están en lo mismo. ¿Sientes que esta democracia no existe una integración real entre chilenos y mapuches? No existe y es algo que preocupa. Los antagonismos étnicos son peligrosos. Y se fortalecen con la agudización del conflicto. Es deber de la clase política advertir esto y actuar en consecuencia, abriendo espacios de dialogo real y participación. Lo advirtió el Relator de la ONU que visitó Chile en días recientes: Este país podría enfrentar, a mediano plazo, grados de violencia política muy superiores a los vistos hoy en día si no logra canalizar política y democráticamente las aspiraciones del pueblo mapuche. Es una advertencia muy válida. Y que nos debiera hacer reaccionar ya que hablamos de la ruca donde todos vivimos. En lo personal creo que esto pasa por una refundación de Chile. Por construir de nuevo esta ruca grande. Asamblea Constituyente, nueva Carta Magna, un cambio en el sistema político, ¿por qué tanto miedo a ello? ¿Qué experiencias concretas vividas en otros países respecto a políticas indigenistas ven viables de aplicar en Chile?

Yo soy muy cercano a las políticas de reconocimiento que han transitado muchos países anglosajones. Hablo de Nueva Zelanda, Canadá, los países nórdicos, incluso Estados Unidos. Si bien los procesos de conquista en esos casos fueron tan o más brutales que el acontecido en América Latina, hoy podemos ver en todos ellos avances notables, tales como participación política, empoderamiento económico, cultural, etc. Por mi trabajo he podido viajar muchísimo y conozco la realidad indígena en la mayoría de esos países. No es el Paraíso, pero Chile está años luz de las discusiones y los pasos que esas democracias han dado. Tiendo a ser un poco desconfiado el indigenismo latinoamericano, que es el que tenemos en Chile. Su paternalismo me incomoda. Suele usarse, muy fácilmente, como herramienta de clientelismo político. Es lo que sucede en gran parte de los países de la región y en Chile no ha sido la excepción. Políticas públicas enfocadas en la “pobreza” indígena y planes o programas que más que empoderar, buscan ser mecanismos de contención para el descontento y la protesta. El indigenismo latinoamericano te da los pescados, no te enseña a pescar. Obviamente quienes ganan allí son los pescadores, entiéndase, gobiernos de turno, partidos políticos, incluso ONGs y sectas religiosas de diverso signo.

WALL STREET PINTA A ARGENTINA COMO ALIADA DEL “DIABLO” IRANÍ – Por Charles Davis http://www.ipsnoticias.net/2013/08/fondos-buitre-pintan-a-argentina-como-aliada-del-diablo-irani-parte-ii/ © Reproducir este artículo| | Imprimir | Enviar por correo |English version En la primera parte de esta investigación, IPS revela cómo un importante donante del Partido Republicano de Estados Unidos, Paul Singer, impulsa una campaña para difamar a Argentina, presentándola como una nación antiestadounidense y aliada de Irán. En la segunda parte, se expone una red de centros de estudios, políticos y expertos, vinculados financiera y personalmente con Singer, que se encargan de amplificar la campaña, mientras el empresario litiga a Buenos Aires por una deuda de cientos de millones de dólares. Paul Singer en el Foro Económico Mundial de Davos, el 23 de enero de 2013. Crédito: WEF/cc 2.0 Paul Singer en el Foro Económico Mundial de Davos, el 23 de enero de 2013. Crédito: WEF/cc 2.0 LOS ÁNGELES, 5 ago 2013 (IPS) - Cuando Argentina entró en suspensión de pagos (default) de su deuda en 2001, varios fondos especulativos estadounidenses se abalanzaron a comprar los deprimidos bonos por unos centavos, confiados en que a la postre vencerían en los estrados de su país y obligarían a Buenos Aires a pagar hasta el último dólar del precio nominal. La batalla por esa deuda llegará a la Corte Suprema de Estados Unidos este año, pero los acreedores de Wall Street –llamados “capitalistas buitres” por sus críticos—también llevaron el caso al Congreso legislativo y a la opinión pública con una campaña mediática que presenta a Argentina como una nación cada vez más “renegada” y asociada con los enemigos de Washington. Este esfuerzo de relaciones públicas, que se centra en las relaciones crecientemente más amistosas de Buenos Aires con Teherán, se desarrolla mientras el gobierno de Barack Obama evalúa si apoyar a Argentina en la Corte Suprema en su batalla con Wall Street. Según el periódico The Washington Post, funcionarios de los departamentos (ministerios) de Justicia, del Tesoro y de Estado (cancillería) se reunieron el 12 de julio con abogados de ambas partes para discutir el caso. En presentaciones judiciales previas, la administración de Obama había argumentado que la deuda argentina no era asunto de competencia de la justicia estadounidense, reflejando así la preocupación de que una victoria de los tenedores de bonos causara otro default y complicara las posibilidades futuras de otras naciones de reestructurar sus deudas.

Un mensaje cambiante Aunque fue fundada por los capitalistas que demandan a Argentina, la ATFA aseguraba que en realidad se preocupaba por los intereses de ese país. En 2007, el copresidente Bob Shapiro, execonomista del gobierno de Clinton, dijo a Financial Times que pagar lo que demandaban los tenedores de bonos sería positivo para Buenos Aires. “Argentina no puede seguir ignorando sus obligaciones pendientes sin que su pueblo pague el precio de recibir menos inversiones extranjeras directas y seguir excluido de los mercados globales de capitales”, señaló. En 2012, las compañías extranjeras invirtieron más de 12.000 millones de dólares en Argentina, un aumento de 27 por ciento respecto del año previo y solo un poco menos que en Colombia y en México, países aliados de Estados Unidos. Pero el mensaje cambió. Para 2012, la ATFA abandonó la pretensión de ayudar a Argentina. En una columna de opinión publicada por The Telegraph, la copresidenta del grupo de presión, Nancy Soderberg, embajadora durante la administración de Clinton, instó a los legisladores de su país a “pegarle a Argentina donde le duele: la billetera”. El país sudamericano “gozó varios años de firme crecimiento económico; sus bases se comparan favorablemente con las de sus pares de la región”, escribió Soderberg. “Argentina puede pagar sus cuentas perfectamente”. Sin embargo, los tenedores de títulos argentinos, entre ellos uno de los financiadores más importantes de la derecha estadounidense, ya lograron varias victorias. En octubre de 2012, un tribunal federal de apelaciones de Estados Unidos falló que la nación sudamericana debía pagar más de 1.300 millones de dólares a sus acreedores. Y el Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció el 24 de julio que no apoyaría formalmente a Buenos Aires en la querella, argumentando que la administración de Obama se oponía a ello. El hecho de que la Casa Blanca esté dando marcha atrás en su defensa de Argentina indica que los millones de dólares invertidos por los fondos de inversión para presionar al gobierno, al Congreso y a la prensa están comenzando a cambiar el debate, en el que Irán adquiere un protagonismo similar al de Iraq en 2002. “Hacemos todo lo que podemos para que nuestro gobierno y los medios noten qué mal actor es Argentina”, dijo el director ejecutivo de la American Task Force Argentina (ATFA), Robert Raben, al sitio de noticias The Huffington Post. Este grupo de presión de Raben, quien se desempeñó como fiscal general asistente durante el gobierno de Bill Clinton (1993-2001), fue fundado por tenedores de bonos argentinos y hasta ahora destinó al menos 3,8 millones de dólares a difundir una imagen negativa de ese país sudamericano. Pero ese dinero es ínfimo en comparación con lo que los fundadores de la ATFA esperan ganar. En 2008, el fondo de inversiones NML Capital pagó 48 millones de dólares por bonos argentinos que, antes del cese de pagos, valían más de 300 millones de dólares. La compañía matriz de NML Capital es Elliott Management, firma que encabeza la batalla legal contra Buenos Aires bajo la conducción del empresario Paul Singer, principal donante de los republicanos. Luego de la cesación de pagos, más de 92 por ciento de los tenedores de bonos aceptaron un acuerdo negociado que implicó para ellos cobrar una fracción de la deuda original. Pero NML insiste en que Argentina pague los 370 millones de dólares nominales de los bonos, lo que le daría un retorno de más de 770 por ciento de la inversión inicial que hizo.

Singer ha hecho lo mismo otras veces. Compró títulos de uno de los países más pobres del mundo, la República Democrática del Congo, por unos 30 millones de dólares, y exigió un reembolso de más de 100 millones. En el caso de Argentina, los fondos detrás de la ATFA esperan obtener más de 1.300 millones de dólares. Pero si se cuentan varios litigios en otras jurisdicciones, Singer espera quedarse con más de 2.000 millones de dólares de su querella contra Argentina. El pedido de entrevista a la ATFA para este artículo no obtuvo respuesta en el plazo requerido.

Azuzando al “diablo” iraní Paul Singer es un hombre opulento, uno de los 400 más ricos del mundo. Según Forbes, este gerente de fondos de inversión y fundador de Elliott Management posee un activo neto de 1.300 millones de dólares, que le ha permitido convertirse en uno de los principales contribuyentes del opositor Partido Republicano. En 2012, aportó más de un millón de dólares a la fracasada candidatura presidencial de Mitt Romney, y millones más para otros candidatos menores. Empleados de su firma contribuyeron con más de tres millones de dólares a varios postulantes, lo que convirtió a esa empresa en una de las 100 principales financiadoras de la política estadounidense. Todos los candidatos que apoya son decididamente de derecha. En 2007, Singer se describió a sí mismo como un creyente del excepcionalismo estadounidense y reveló haber aportado “millones de dólares a organizaciones republicanas que insisten en (la necesidad de) un ejército poderoso y en el apoyo a Israel”. En entrevista con el periódico The New York Times, Singer dijo creer que Occidente “se encuentra en una etapa temprana de una prolongada lucha existencial con grupos radicales de islamistas pannacionales”. En las relaciones de Argentina con Irán, que evolucionaron para alcanzar un intercambio comercial anual de más de 1.000 millones de dólares, Singer logró alinear perfectamente sus intereses financieros y su miedo al islamismo radical: avivando el temor a Teherán, Washington se puede ver menos inclinado a apoyar a Buenos Aires. “¿Cuál es la VERDAD sobre el acuerdo de Argentina con Irán?”, pregunta un aviso a toda página publicado en junio por la ATFA en The Washington Post. El grupo se refiere al acuerdo alcanzado por los gobiernos de Argentina y de Irán para crear una Comisión de la Verdad que permita investigar el ataque con bomba contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) de Buenos Aires, que en 1994 mató a 85 personas e hirió a más de 300. Otro aviso de la ATFA incluye una fotografía de la presidenta argentina Cristina Fernández acompañada del saliente mandatario iraní, Mahmoud Ahmadineyad, y la pregunta: “¿Un pacto con el diablo?”. Un informe de 2006 del fiscal argentino Alberto Nisman señalaba al gobierno de Irán como autor intelectual del atentado, supuestamente perpetrado por miembros del grupo libanés Hezbolá (Partido de Dios), lo que condujo a que Interpol librara órdenes de captura para varios altos mandos iraníes.

En un reporte actualizado este año, muy citado por la campaña en los medios contra Argentina, el fiscal Nisman señala que el ataque no fue más que una prueba de la extensa red de inteligencia iraní en toda América del Sur, que no ha dejado de crecer desde entonces. Esa conclusión difiere de la última evaluación del Departamento de Estado, según la cual la influencia iraní en la región está “menguando”. Nadie ha sido condenado por el crimen de la AMIA, cuya investigación fue obstaculizada por un proceso plagado de errores y corrupción judicial. Pero también se puso en duda la veracidad del informe de Nisman, quien señala que el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, dio su aprobación al atentado en una reunión celebrada en Teherán pocos meses antes del ataque. Esa afirmación se basa en el testimonio de un exfuncionario de inteligencia iraní, conocido como Abolghasem Mesbahi, quien desertó de la República Islámica en 1996. Mesbahi les había dicho anteriormente a funcionarios estadounidenses que Irán había financiado y facilitado los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y Washington. Y dijo haberse enterado de la complicidad de Teherán al detectar mensajes secretos publicados en periódicos. Pero su testimonio fue rechazado por la Comisión Nacional sobre los ataques terroristas en Estados Unidos (Comisión del 11-S). En su aviso, la ATFA cita una carta de los senadores Kirsten Gillibrand, del gobernante Partido Demócrata, y Mark Kirk, republicano, a la presidenta Cristina Fernández, expresando su preocupación porque la Comisión de la Verdad “derive en una desestimación de los cargos y en un encubrimiento de este crimen abominable”. El anuncio también cita a un desafiante político iraní señalando que, “bajo ninguna circunstancia”, la República Islámica permitirá que sus funcionarios sean interrogados por ningún juez o fiscal argentino. Aunque no lo menciona la publicidad, la negativa iraní de someterse a la justicia argentina fue la principal razón para crear la Comisión de la Verdad, que formarán un panel de juristas independientes de terceros países para estudiar el caso y, junto a sus pares argentinos, interrogar a sospechosos en Irán. Los detalles de las relaciones de Argentina con Irán –que consisten mayoritariamente en exportaciones agrícolas– no le interesan mucho a la ATFA. En cambio, como lo dejó en claro su director ejecutivo, el grupo sí quiere saber: “¿Por qué Argentina está dispuesta a negociar con Irán, pero no con sus acreedores que respetan la ley?”. Argentina negoció exitosamente con nueve de cada 10 de sus acreedores. Pero estos bonistas, liderados por Singer, piensan que pueden quedarse con todo. Fondos buitre pintan a Argentina como aliada del “diablo” iraní – Parte II Por Charles Davis © Reproducir este artículo| | Imprimir | Enviar por correo |English version En la primera parte de esta investigación, IPS reveló cómo un importante donante del Partido Republicano de Estados Unidos, Paul Singer, impulsa una campaña para difamar a Argentina, presentándola como una nación antiestadounidense y aliada de Irán. En esta segunda parte, se expone una red de centros de

estudios, políticos y expertos, vinculados financiera y personalmente a Singer, que se encargan de amplificar la campaña, mientras el empresario litiga a Buenos Aires por una deuda de cientos de millones de dólares. Paul Singer en el Foro Económico Mundial de Davos, el 23 de enero de 2013. Crédito: WEF/cc 2.0 Paul Singer en el Foro Económico Mundial de Davos, el 23 de enero de 2013. Crédito: WEF/cc 2.0 LOS ÁNGELES, 7 ago 2013 (IPS) - El inversor de fondos buitre Paul Singer tiene cientos de millones de dólares en juego en su batalla legal contra Argentina sobre una porción de la deuda soberana que ese país dejó de pagar en 2001. La expectativa de un jugoso día de pago llevó a este gerente de fondos de alto riesgo a invertir una pequeña fortuna en una campaña dedicada a retratar a Argentina como estrecha aliada de la República Islámica de Irán y enemiga de Estados Unidos, tal como muestra la primera parte de este reportaje. Uno de los métodos de Singer es la publicación de comunicados a cargo de la American Task Force Argentina (ATFA), un grupo de presión que contribuyó a fundar. Otro es pagar publicidad de página entera en los principales diarios de Estados Unidos. Y el tercero es dar dinero a políticos estadounidenses para determinar la suerte del debate público e influenciar decisiones. El senador por Illinois, Mark Kirk, es un activo crítico de Buenos Aires. Este político del opositor Partido Republicano escribió una carta a la presidenta Cristina Fernández condenando el acuerdo que Buenos Aires firmó con el gobierno de Irán para investigar el ataque explosivo de 1994 a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). La misiva fue luego citada en un aviso publicitario de la ATFA. Resulta que Kirk ha recibido más de 95.000 dólares de empleados de la empresa de Singer, Elliott Management, según el Center for Responsive Politics. Irán acusado de ataque a la AMIA – 2006 De hecho, muchas cartas expresando preocupación por los lazos entre Teherán y Buenos Aires aparecen firmadas por legisladores que han recibido de Singer y su círculo dinero para sus campañas electorales. Una carta fechada el 10 de julio y dirigida al fiscal general Eric Holder reclama por ejemplo al Departamento (ministerio) de Justicia que no se ponga a favor de Argentina en el proceso judicial que le siguen un grupo de tenedores de bonos y cuya próxima etapa es la Corte Suprema de Estados Unidos. La misiva, firmada por 12 legisladores, presenta como argumentos el acuerdo por el caso AMIA y el comercio en ascenso entre Irán y Argentina, “mientras el resto del mundo (Estados Unidos incluido) intenta aislar y presionar a Irán para que abandone su programa nuclear”. “Recompensar la decisión argentina de incumplir sólidos principios internacionales para una reestructuración ordenada de su deuda soberana envalentonó obviamente a sus dirigentes como para que desafíen con impunidad otras normas internacionales”, sostiene la carta. Los firmantes recibieron en 2012 más de 200.000 dólares de empresas y comités de acción política ligados a Singer. Uno de quienes suscribieron la carta, el representante republicano por Nueva York, Michael Grimm, fue reelegido tras recibir 38.000 dólares de Elliott Management, casi el doble que su segundo mayor contribuyente. Grimm ha coauspiciado un proyecto de ley en reclamo de que Argentina cumpla en “compensar totalmente” a los tenedores de bonos. El promotor de esa iniciativa, el exlegislador Connie Mack, obtuvo 39.000 dólares de una empresa de Singer y reclamó al gobierno de Barack Obama que investigara las relaciones entre Argentina e Irán. La labro de Grimm mereció el elogio de la ATFA.

¿Conflicto de intereses? En 2008, Singer invitó al magistrado de la Suprema Corte de Justicia, Clarence Thomas, a un acto de recaudación de fondos para el Manhattan Institute, un centro de conocimiento que promueve el capitalismo ultraliberal y el intervencionismo militar y que preside el financista. En 2010, el juez supremo Samuel Alito fue el invitado de honor a un encuentro similar. Los dos magistrados están entre quienes deberán resolver si el máximo tribunal de Estados Unidos tiene competencia para dirimir el litigio entre los bonistas y Argentina. Si la Corte decide involucrarse, podría hacer más rico a un hombre ya opulento. Otro legislador que firmó la carta dirigida al fiscal general Holder es la republicana por Florida, Ileana RosLehtinen, quien preside el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes. Ella acusa a Buenos Aires de confabularse con Teherán para encubrir el presunto papel que habría jugado el régimen islámico en la explosión de la AMIA, y de socavar intereses estadounidenses al “proporcionar a Irán una gran presencia en el Hemisferio Occidental”. Pero a Ros-Lehtinen no le preocupa solamente el presunto apoyo iraní al terrorismo. En un comunicado que difundió el año pasado, la representante señalaba que “es preocupante que Argentina se niegue a honrar sus obligaciones pendientes y evada decisiones de tribunales estadounidenses”. Ros-Lehtinen recibió 108.000 dólares en 2012 del comité de acción política Unidad Estadounidense, fundado ese mismo año mediante una inversión de un millón de dólares del propio Singer, responsable de más de un tercio del presupuesto de este grupo. El legislador republicano por Nueva Jersey, Scott Garrett, que preside el Subcomité de Asuntos Financieros sobre Mercados de Capitales de la cámara baja, también estampó su firma en la carta dirigida a Holder. No importa cómo resulte el litigio contra Argentina, Paul Singer seguirá siendo un hombre muy rico y poderoso. Si gana, será más rico aún. Y el dinero en Estados Unidos entraña el poder de influir en cualquier debate, no solo sobre cuestiones financieras, sino también sobre la guerra y la paz. El 7 de junio del año pasado, Garrett celebró una audiencia para criticar el apoyo de la administración de Obama a “gobiernos aprovechados… a expensas de nuestros propios inversores”. El político deploró que “los inversores estadounidenses estén perdiendo miles de millones de dólares pese a que Argentina tiene el dinero para pagar sus deudas”. Garrett, cómo no, recibió 35.000 dólares de Elliott Management el año pasado. El 9 de julio, un subcomité de la cámara baja presidido por el republicano de Carolina del Sur, Jeff Duncan, celebró una audiencia que tituló “Amenaza a la patria: La creciente influencia de Irán en el Hemisferio Occidental“. Su propósito central era refutar un informe del Departamento de Estado (cancillería) que sostenía todo lo contrario. En 2012, Duncan había recibido 10.000 dólares del comité de acción política Cada Republicano es Crucial, financiado en gran medida por ejecutivos de fondos de riesgo de Wall Street, Singer entre ellos. En la audiencia, Douglas Farah, experiodista de The Washington Post convertido en comentarista político de derecha, presentó un testimonio según el cual Argentina “se está convirtiendo rápidamente en uno de los aliados más importantes de Irán”.

Farah acusó al gobierno de Fernández de dar pasos “destinados a absolver a altos dirigentes iraníes de su responsabilidad en un importante ataque terrorista” y de adoptar “una serie de medidas políticas y económicas en apariencia irracionales que favorecen el crimen organizado transnacional, son abiertamente hostiles a los intereses estadounidenses y podrían constituir un salvavidas para la crisis económica y nuclear de Irán”. A este testimonio le siguió otra carta, el 11 de julio, cuyo destinatario es el secretario de Estado, John Kerry, y en cuyo remitente se encuentra un grupo de políticos de los dos partidos, el Republicano y el gobernante Demócrata, entre ellos Duncan y Grimm. Esta misiva advierte que “Argentina puede estar intentando apoyar el programa ilícito de armas nucleares iraní” y reclama al canciller Kerry que sopese los vínculos del gobierno de Fernández con “el principal auspiciante mundial del terrorismo” y considere si el Departamento de Estado debe o no ponerse del lado argentino en el litigio con los fondos de alto riesgo. Farah escribió una columna el 26 de junio, publicada por el Miami Herald, en la que hablaba de la “cada vez más estrecha relación (de Argentina) con los ayatolás”, citando un informe de 2012 del fiscal argentino Alberto Nisman, en el que este afirmaba que Teherán estaba usando a su país como base para ejecutar operaciones de inteligencia y terroristas con el fin último de “exportar la revolución iraní”. La columna también aseveraba que el presidente electo de Irán, Hasán Ruhaní, “habría estado sumamente familiarizado con la planificación” del ataque a la AMIA. Semejante acusación fue repetida por otros comentaristas de derecha, si bien el propio Nisman la había desmentido un día antes de que se publicara el artículo de Farah. El otro autor de la columna es Mark Dubowitz, director ejecutivo de la Foundation for Defence of Democracies (FDD), un centro de pensamiento neoconservador que también se dedica a denostar a Argentina. Este año, sus analistas ya publicaron media docena de tales críticas. “¿Por qué Argentina permite que Irán examine el ataque a la AMIA, un crimen que seguramente cometió Hezbolá?”, la milicia libanesa apoyada por Teherán, cuestionó en una columna Lee Smith, editor de The Weekly Standard y miembro de la FDD. Y otro integrante de la FDD, Jonathan Schanzer, se dedicó a indagar en las “oscuras conexiones entre el gobierno argentino y Teherán”. Según declaraciones de impuestos a las que accedió IPS, Singer ha aportado a la FDD al menos 3,6 millones de dólares desde 2008. Amigos conservadores La FDD es una de varias organizaciones neoconservadoras vinculadas a Singer. Puesto que no son tantos los que aceptan la etiqueta de “neoconservador”, casi todos se conocen y recíprocamente integran consejos o directorios de sus grupos. Además, los lazos financieros abundan. William Kristol, director de The Weekly Standard, es parte del consejo de la FDD y del de Manhattan Institute. En marzo, el exfuncionario del gobierno de George W. Bush (2001-2009), Roger Noriega, firmó un artículo con otro exintegrante de esa administración, José Cárdenas, que ahora trabaja en la consultora de Noriega, reclamando a Washington que responsabilizara a Argentina por no cumplir “sus obligaciones con instituciones financieras internacionales” y por “sus complicadas alianzas con gobiernos renegados”. El influyente grupo neoconservador American Enterprise Institute (AEI) publicó el artículo.

Noriega recibió en 2007 al menos 60.000 dólares de Elliott Management, la empresa de Singer, para hacer lobby sobre “la deuda soberana que se debe a una compañía estadounidense”. Un documento impositivo al que tuvo acceso The Nation muestra que el AEI recibió 1,1 millones de dólares de Singer en 2009. Ante la consulta de IPS, una fuente del AEI dijo que la organización “había examinado el asunto” y concluido que Noriega “no tiene un conflicto de intereses en este caso”. Las demás personas e instituciones mencionadas en este reportaje no aceptaron la solicitud de entrevista. Dinero es poder Singer no se diferencia de otras personas acaudaladas en la forma en que usa su riqueza: para hacerse más rico, claro, pero también para promover sus convicciones y financiar a políticos y especialistas que las compartan y actúen en consecuencia. Quien que se beneficia de su generosidad pensará dos veces antes de oponerse a sus intereses, nadie muerde la mano de quien le da de comer. No importa cómo resulte el litigio contra Argentina, Paul Singer seguirá siendo un hombre muy rico y poderoso. Si gana, será más rico aún. Y el dinero en Estados Unidos entraña el poder de influir en cualquier debate, no solo sobre cuestiones financieras, sino también sobre la guerra y la paz.

TODAS LAS CLAVES DEL PROGRAMA DE VIGILANCIA DE EEUU http://www.trincheraonline.com/2013/08/09/todas-las-claves-del-programa-de-vigilancia-de-eeuu/ ¿Qué es PRISM? El problema está en aceptar los términos de uso de determinados servicios como Facebook, calificado como acto delictivo el no decir si los datos personales serán usados por alguna agencia de Estados Unidos Víctor Ayala G./HYPERLINK “mailto:[email protected][email protected] Profesionales nicaragüenses de las Tecnologías de Información y Comunicación, aglutinados en la PTIC-NIC, comentaron en las redes sociales el significado de las claves del programa de vigilancia de Estados Unidos conocido como PRISM. El sitio “Altio40.com” reveló que el espionaje que se hizo mediante el programa PRISM de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) denunciado por Edward Snowden, a grandes rasgos, “se trata de un programa que permite a esta agencia acceder a la información almacenada en los servidores de al menos 9 firmas con gran peso en Internet”. En el Power Point dadas a los periódicos The Guardian y The Washington Post, aparecen Microsoft, que fue la primera en ser espiada, Yahoo!, Google, Facebook, el proveedor PalTalk, YouTube, Skype, AOL y Apple, que entró en la lista el año pasado. Dropbox se podría sumar pronto a la lista. Con este programa se puede rastrear el “historial de búsquedas, el contenido de correos electrónicos, transferencia de archivos y chat en vivo”, según la información publicada por The Guardian. El seguimiento de esta información confidencial (almacenada o en tiempo real) se realizaría sin que fuese necesario solicitar el acceso a los proveedores de Internet o conseguir una autorización judicial. Todo ello aparece en el documento, que, al parecer, estaba destinado al entrenamiento de nuevos agentes.

Paulo Antonio McNally Zambrana, profesional de las TIC en Nicaragua, dice que “Edward Snowden se metió a problemas por revelar la existencia de este y otros software de vigilancia, (y) he ahí donde entra la polémica”. Yamil Vanegas, por su parte, califica como héroe o delincuente a Snowden, pero “eso no importa”, dice. “Lo importante es que la privacidad no existe”. Algo que justamente muchos sospechábamos desde la existencia de Internet, un programa que nació controlado por una agencia del Ejército de Estados Unidos. McNally, dice por ejemplo, que con las cuentas de Facebook mucha gente se molesta cuando acceden a sus cuentas y creen que es como abrir su diario (librito) más no saben de los términos y condiciones de los servicios. “Creo que el acto delictivo es no hacer público que no existe la privacidad ya que si un servicio me dice que mis datos serán usados por cualquier entidad de gobierno de EEUU soy yo quien decide si lo uso o no”. Cómo se aprobó el programa PRISM Durante el mandato de George W. Bush, cuando se aprobó la polémica Ley Proteger América (PAA). Esta ley tenía como objetivo, entre otras cosas, dar validez legal a la interceptación de comunicaciones extranjeras que pasaban por Estados Unidos, según apunta el Washington Post. Con la aprobación de la PAA se pasó a una situación en la que las fuerzas de seguridad tan solo necesitaban certificar que se habían tomado medidas razonables para asegurarse de que la vigilancia se realizaba sobre un extranjero y que la información que se obtendría tendría sentido dentro del programa. Todo esto se hacía sin necesidad de intervención de un juez. Lo curioso es que en muchos sectores de Estados Unidos hay más preocupación por la posibilidad de que esto supusiese que se vulnerase la privacidad de uno de sus ciudadanos que por el hecho de que se hiciese de forma sistemática con personas del resto del mundo. PC NEGOCIOS 10 consejos para promover la seguridad en Facebook Desde Facebook, proponemos 10 consejos para mejorar la seguridad cuando los usuarios son menores de edad. A su vez, Facebook permite denunciar incidentes y explicamos cómo hacerlo Safety centre | Facebook - Google Chromechrome12.07.2013 , 14:00:38Nicky Jackson Colaco*/Especial para INFORMÁTICA 1. Seguir las pautas de edad para el uso de la red. Facebook permite abrir una cuenta hasta que se cumpla los 13 años de edad, que es el requisito de edad mínima. Facebook añade capas de protección de la privacidad específica según su edad. 2. No aceptar solicitudes de amistad de desconocidos. De la misma manera que uno lo haría con los amigos fuera de Internet, los padres deben conocer quienes son amigos de sus hijos y educar sobre los riesgos de hablar con personas que no conocen. 3. Familiarizarse con Facebook y sus herramientas. Es una buena idea que los padres inviertan tiempo conociendo el mundo donde se desenvuelve su hijo. Para esto, recomendamos que los padres conozcan cómo funciona Facebook, cómo se publica y dónde están las herramientas de configuración de seguridad, privacidad y administración de perfiles.

4. Analizar juntos la configuración de seguridad. Es recomendable revisar la configuración de Facebook con los hijos y cambiar toda la privacidad a “amigos” únicamente o seleccionar individualmente cada una de las opciones (www.facebook.com/settings/?tab=privacy). 5. Utilizar la sección: “¿Quiénes pueden conectarse conmigo?” Tiene un acceso directo a la derecha del nombre y permite controlar quiénes pueden solicitar amistad y definir el tipo de filtro para los mensajes entrantes. Por ejemplo, con el “filtro estricto” el usuario sólo recibe mensajes de sus amigos de Facebook y los mensajes amigos de amigos u otros a la bandeja “Otros” sin enviar notificaciones. 6. Utilizar la sección “¿Quién puede ver mis cosas?” y la sección “Privacidad”. Desde esta sección se puede elegir qué tipo de usuarios ven tus publicaciones, administrar contenido en la que has sido etiquetado y ver como otras personas ven tu biografía. Esta sección da al usuario control sobre su información para restringirlo según sus preferencias de privacidad, entre otras opciones. 7. Utilizar la sección “Aplicaciones y sitios”. “Aplicaciones y Sitios” es una sección que controla qué información se comparte con las aplicaciones conectadas con Facebook como Farmville o Candy Crush. Controla la información acerca del perfil que otros sitios web, incluidos los motores de búsqueda, pueden obtener. Desde esta sección se pueden ver las aplicaciones permitidas, eliminar las que no desee usar o desactivar la plataforma por completo. 8. Conocer y utilizar las “Listas de bloqueados”. Se pueden bloquear a personas por nombre para que no interactúen con su perfil o vean su información en Facebook. También se puede elegir ignorar invitaciones de aplicaciones de determinados amigos. 9. Utilizar criterios similares al mundo off-line y algunos criterios más. Un consejo general para el uso de redes sociales, es partir de los mismos cuidados para las relaciones sociales que uno tiene fuera de Internet. Esto es, no hablar con desconocidos, no compartir información confidencial con gente que conocemos poco, diferenciar el tipo de contenido que se comparte según quién es la otra persona, usar conversaciones privadas para temas privados, informar a padres y autoridades si los jóvenes son molestados o agredidos, etcétera. 10. Conocer cómo informar y denunciar contenido o comportamiento abusivo. Los botones para denunciar conductas abusivas se encuentran en casi todas las secciones y páginas de Facebook. Si los usuarios informan y denuncian contenido de carácter privado, ofensivo o grosero, un miembro del equipo de seguridad de Facebook investigará y evaluará si corresponde eliminar el contenido del sitio. Para saber cómo informar acerca de abusos o infracciones, consulte la “Declaración de derechos y responsabilidades” (facebook.com/terms.php) de Facebook. * Nicky Jackson Colaco, es Safety policy manager en Facebook. FUENTE ONLINE Flickr con 1TB FOTO 03Yahoo! anunció una actualización de su sitio para compartir fotos Flickr. Se trata de una nueva política de la compañía que busca recobrar el empuje y ganar lugar en el mercado. “Flickr con un terabyte de capacidad gratis. Compartir en alta resolución. Disponible donde quiera que vayas. Eso significan 537,731 fotos de 6.5 megapíxeles para compartir y disfrutar en su calidad original y brillante”, dice el anuncio del sitio.

Esta resolución de 6.5 megapíxeles es igual a las fotos tomadas con los teléfonos inteligentes actuales de mayor uso. Se puede conseguir la aplicación de Flickr gratis en las tiendas online AppStore (iOS) y Google Play (Android). Además, Flickr ahora permite ver fotografías en forma de presentación animadas y está integrada con distintas redes sociales como Facebook, Twitter, Tumblr y Pinterest. Finalmente, el servicio ahora incluye nuevas opciones de pago. Por 50 dólares al año, el usuario podrá eliminar la publicidad. Quien desee más espacio, podrá duplicar el mismo a dos terabyte por 500 dólares anuales. WhatsApp añade los mensajes de voz “Queremos ser la comunicación del siglo XXI”, insiste un portavoz de la empresa californiana para anunciar las novedades. WhatsApp se pone al día y al igual que sus máximos competidores, WeChat y Line, permite llamadas de voz. Ahora se parece más a Viber o Skype, también a las Hangouts de Google. Las llamadas se incluyen dentro de la cuota de un dólar (alrededor de 79 céntimos de euro) al año que cobra por su uso. “Esta nueva opción permite comunicarse en tiempo real con los amigos o la familia, estén en la habitación de al lado o a miles de kilómetros de distancia”, ha señalado un mensaje de Whastapp. El servicio se irá instalando paulatinamente en las próximas horas en todas las plataformas en que funciona: iOS, Android, Windows Phone, Nokia y Blackberry. La opción de hablar se suma al anuncio de unas cifras que a buen seguro se multiplicarán tras la mejora. Cada día se envían más de 11.000 millones de mensajes y se reciben más de 20.000. Las fotos siguen reinando, son lo más enviado: 325 millones de fotos compartidas cada día.

VATTIMO: "EL ÚNICO IDEAL POSIBLE ES EL COMUNISMO" http://filosofiahoy.es/index.php/mod.pags/mem.detalle/relcategoria.4212/idpag.6100/v_mod.pags/v_mem .listado/chk.ab87b44ba910b572fc9be493a94768fd.html Es el último representante de esa gran tradición filosófica europea que parte de Nietzsche, continúa en Heidegger y desemboca en Gadamer y Derrida. Lo entrevistamos junto a Santiago Zabala, con quien firma el libro Comunismo hermenéutico (Herder).

En una entrevista recogida en el libro Ética de las verdades. Homenaje a Vattimo, el filósofo italiano afirma que, dentro de la izquierda europea, su postura filosófica y política estaría en el medio, entre el ilustrado Habermas (demasiado deudor de un enfoque kantiano) y el anárquico Derrida (al que ve como “un diablo de la secularización”). Su pensamiento está enraizado hondamente en la filosofía continental, dentro de esa corriente hermenéutica (y que se ha convertido en la koiné cultural de Occidente, según él) en la que se encuentran grosso modo la mayoría de los filósofos europeos. Usted es conocido internacionalmente por ser el introductor del “pensamiento débil”. ¿En qué consiste? Al comienzo fue un desafío, porque generalmente la palabra “débil” suscita una actitud un poco negativa, pero finalmente se reveló una palabra que, como suscitaba negatividad, se convirtió en una manera de polemizar y popularizar esta idea. ¿Por qué se le llamaba –y se le llama todavía– la teoría del pensamiento débil? Porque es una teoría filosófica que tiene en cuenta el acontecimiento de la posmodernidad, es decir, porque critica los grandes sistemas metafísicos que pretenden tener una concepción global del mundo, eso

que Lyotard llamó “metarrelatos”, solo que él no desarrolló este discurso de una manera radical. El pensamiento débil se inspira mucho más en Nietzsche y en Heidegger, como si fuesen dos aliados. Nietzsche describe la historia del pensamiento occidental como un proceso de disolución de los absolutos (lo que él llamará al final “nihilismo”) que culmina en la ciencia positivista, es decir, en una ciencia que cree conocer las cosas tal como son practicando experimentos activos. No existe una contemplación del objeto como tal, sino una interacción con el sujeto, y la ciencia se convierte siempre en más tecnología. Nietzsche no está preocupado tanto por la verdad como por la eficacia. Se producen experimentos que confirman una hipótesis científica, pero nunca sabemos exactamente cómo son las cosas en sí mismas. Es decir, el nihilismo de Nietzsche podría considerarse como un desarrollo más radical de la filosofía de Kant, pero sin su idealismo. Desde la Antigüedad hasta nuestros días, hay una línea de pensamiento que se presenta –sobre todo en los escritos de Nietzsche– como una disolución progresiva de la idea de la objetividad. ¿Por qué ya no podemos creer en la verdad? Porque ya no hay una verdad unitaria. La verdad se corresponde con unos criterios de verificación, pero estos no son siempre los mismos, sino que varían según las diferentes épocas y culturas. Las ciencias experimentales han descubierto que hay muchas premisas convencionales en su propia actividad de verificación o falsación. Por ejemplo, para comprender una proposición de física cuántica –algo de lo que yo no tengo ni idea– y verificarla o falsearla, tengo que tener una formación adecuada, y esto significa que tengo que compartir desde el comienzo una formación determinada, disponer de un conjunto de premisas, métodos, conocimientos, etc. Es decir, los a priori de Kant. La contradicción de Kant era que él pensaba que los a priori son iguales en todo el mundo, en todos los hombres. Yo digo siempre que entre Kant y la posmodernidad se encuentra la antropología cultural, cuando nos damos cuenta de que las diferencias culturales implican diferentes formas de acercarse a la realidad. Y eso no implica tener que ser idealista. Las cosas existen por sí mismas, pero las conocemos solamente desde el interior de algunos paradigmas, que son históricamente múltiples. Kant era un eurocéntrico; para él la razón occidental es la razón humana. Por ejemplo, Lévi-Strauss estudió culturas en las que el olfato era más importante que la vista. Es decir, hay maneras diferentes de entender el mundo, y el mundo se desdibuja en el interior de estas premisas diferentes. Y la posmodernidad, ¿qué pinta en todo esto? La posmodernidad es un marco epocal. Según Lyotard, como tenemos muchas culturas en competición, ya no hay un metarrelato que tenga más valor que otro. Hasta finales del siglo XIX, o principios del XX, Europa se veía a sí misma como el lugar de “la historia de la verdad”. Éramos las sociedades desarrolladas y los otros eran los pueblos subdesarrollados, que tenían que ser civilizados, ocupados, convertidos, etcétera. Hoy ya no podemos decir todo esto, y no por razones teóricas, sino por razones prácticas: esos pueblos se han rebelado y nos impiden llamarles “primitivos”. Si hoy los llamamos primitivos, probablemente nos matarían. Se acabó el eurocentrismo, y sin eurocentrismo ya no hay una unidad del pensamiento humano, sino que hay muchas humanidades, muchas épocas, muchas culturas. En resumen, el pensamiento débil se llama así porque tiene una visión de la evolución de la historia humana que tiende a la reducción de la objetividad, de la dureza de la realidad. Por ejemplo, si hoy hacemos un cálculo con un ordenador para el que necesitáramos cien matemáticos durante cien años, ¿cómo vamos a comprobar ese dato? Con otra computadora. Es decir, la realidad misma está un poco aligerada, no es tal y como nos la encontramos directamente. Toda nuestra experiencia está compuesta básicamente de ese tipo de comunicaciones que pertenecen más a nuestro lenguaje que a nuestra experiencia directa. Yo nunca he estado en Tasmania, pero sé que existe. Es decir, el pensamiento débil tiene en cuenta toda esta historia de la civilización humana que implica la disolución progresiva de los modelos absolutos. Esto es también un hecho teórico o científico (del que dan cuenta los paradigmas), un hecho político (porque las autoridades absolutas dejan el lugar a las autoridades constitucionales) y un hecho psicológico, porque Freud nos enseña que lo que nos parece absolutamente seguro quizá depende del hecho de que nuestra abuela nos descubrió robando mermelada hace años y Nietzsche nos recuerda que tenemos que sospechar sobre todo de las verdades que parecen más evidentes: las verdades de la televisión, de la publicidad, etc. Todo esto significa que progresivamente se disuelve la idea de objetividad perentoria. El pensamiento débil intenta reconstruir una racionalidad humana que no se base en unos principios absolutos que no podemos poner en duda.

¿Y cuál es la relación del pensamiento débil con la hermenéutica? Hermenéutica es una palabra aparentemente complicada --(aunque se utiliza muchísimo) que hace referencia simplemente a una teoría que pone el acento sobre la interpretación. Son precisamente Freud, Marx y Nietzsche quienes han consumado la disolución de la idea de verdad absoluta en favor de la de interpretación. Pongamos nuevamente el ejemplo de los paradigmas científicos. Tienes que tener un sistema de condiciones a priori de tipo kantiano, pero históricamente creadas por ti (por tus estudios), para poder entender lo real frente a ti en correspondencia con otros, para poder verificar ese conocimiento. Para probar una proposición de la física tienes que escribirla en lenguaje físico, que has aprendido en la escuela, al convertirte en un físico profesional. No se trata simplemente de mirar de forma pasiva lo que está ahí. Todo es interpretación. La hermenéutica es una filosofía que pone en su centro la idea de interpretación. ¿Qué tiene que ver con el pensamiento débil? Si no hay encuentro directo e inmediato con la cosa tal como es y tú no la registras pasivamente, tú eres un intérprete y, por tanto, tienes que organizar tu pensamiento alrededor de esta toma de conciencia: que todo lo que se dice es interpretación y que no hay directamente hechos. Hay una proposición de Nietzsche que naturalmente suscita mucha polémica: “No hay hechos, solo interpretaciones”. Tomar conciencia de esto significa, por ejemplo, no aceptar a los economistas que dirigen nuestra política, y esto es fundamental. ¿Qué es lo que hace el así llamado gobierno tecnócrata que gobierna en Italia y ahora casi en toda Europa? Utiliza a personas que -–probablemente de buena fe– dicen que conocen la estructura de la realidad y nos imponen medidas que dependen de esta idea. Pero se puede pensar que incluso este conocimiento supuestamente objetivo de la realidad (que obviamente se llama objetivo porque no es “objetado”, no es discutido) es un conocimiento interpretativo que lleva a cabo la comunidad de los economistas, que están de acuerdo en que tenemos que pagar la deuda y reducir el bienestar social. Pero esta es una comunidad históricamente creada que tiene sus intereses y que están condicionados por su ciencia, por su paradigma e interpretación. La idea del carácter interpretativo de la experiencia humana es un descubrimiento de libertad. Por ejemplo, la revolución francesa ha reivindicado la libertad y los derechos del hombre, pero lo ha hecho en contra de otra interpretación: la de que estos provienen de Dios. Es decir, siempre hay un problema de transformación de los criterios de verdad, que cambian históricamente, como los paradigmas científicos. Es la historia de debilitación de la objetividad: así descubrimos que la verdad no es una cuestión de encuentro con los hechos, sino de consentimiento con interpretaciones. Tomemos otro ejemplo, en este caso la idea de la verificación científica de un experimento: significa solamente que he realizado un experimento que da estos resultados, lo he escrito en lenguaje matemático (es decir, no ligado a mi situación determinada), lo he transmitido a otros que a su vez lo repiten y, si llega a tener éxito, se confirma la verdad. Pero incluso en esta situación la verdad no consiste en “encontrar el hecho”. Se llama así, hecho, cuando los experimentos tienen éxito. Esto sería una visión bastante pragmatista de la verdad. El hecho está en la verificación, no en el hecho en sí mismo: si la verificación tiene éxito, perfecto; pero si no lo tiene, se cambia. ¿Cómo puede convertirse la interpretación en una herramienta política? ¿Quién se escandaliza ante el pensamiento débil? ¿Quién tiene miedo de una interpretación que sustituya a los hechos? Las autoridades, los que tienen el poder sobre la colectividad. Si te preguntas hoy quiénes son los que no comparten el pensamiento débil, quien tiene miedo de que la gente se dé cuenta que eso que se llama “realidad” es una cuestión de consentimiento, experimentación e interpretación, obviamente son los que tienen el poder. Cuando los débiles del mundo se dan cuenta de que quienes los oprimen no esgrimen la verdad, sino la interpretación de su clase o grupo, quizás sepan que ha llegado el momento de la rebelión. ¿Por qué reivindicar hoy el comunismo, cuando parece que está ya completamente muerto? [Interviene ahora Santiago Zabala] Nuestros colegas nos decían: “¿Por qué no lo llamáis “socialismo”? Muy simple: porque los partidos socialistas (por ejemplo, el español) hoy tienen ya poco de socialismo. Utilizar la palabra ‘comunismo’ implica también un ligero shock, una provocación, no solo política, sino también ideológica. Si prescindes del determinismo histórico, la cientificidad, el recurso a la violencia, la propiedad estatal de los medios de producción, ¿qué comunismo queda?

Te queda el comunismo de Lenin: la electrificación más los sóviets. El desarrollo económico y tecnológico controlado por consejos populares, por una democracia. Pero lo que hoy tenemos en el capitalismo occidental es la electrificación sin sóviets (hoy los sóviets espantan muchísimo). ¿Qué eran los sóviets? Eran una democracia de base que habría que realizar con las instituciones apropiadas (que hoy no tenemos). Pero nuestra democracia, la democracia occidental, está controlada; es una democracia impuesta, neutralizada, y eso no es democracia. El comunismo es el ideal que tenemos que realizar a través de una construcción de formas de democracia más directas y menos condicionadas al dinero. Entonces, ¿sigue vivo el fantasma del comunismo? El problema es el siguiente: los europeos cada vez van menos a las urnas. ¿Por qué? Ya no existe un ideal de sociedad alternativa que pueda mover las masas. El último ideal que ha movido a las masas europeas después de la segunda guerra mundial ha sido el comunismo. Uno no puede sacrificar su vida por el libre mercado. Uno puede convertirse en mártir de un ideal de sociedad (es difícil llamarlo ahora “comunismo” después de Stalin y de la tradición soviética), pero el único ideal posible para reconstituir un proyecto político que nos persuada es el comunismo, como diría Lenin. Yo siempre digo: “El comunismo real ha muerto, ¡viva el comunismo ideal!”. [Zabala añade] : Volver a hablar de comunismo tiene que ver también con eso de que la objetividad no existe. Es mejor retomar algo en lo que confiamos (por ejemplo, el comunismo) de una forma diferente, en nuestro caso “debilitada”. Es el mismo problema que el de la superación de la metafísica. Algunos piensan que después de la muerte de Dios ya no hay nada más. No: hay un Dios menos malo que molesta menos. Lo mismo puede ocurrir con el “comunismo ideal”. Después del comunismo real puede haber un comunismo menos agresivo. Una de las cosas que más llaman la atención del libro es su dedicatoria. ¿Por qué habéis dedicado el libro a Castro, Chávez, Lula y Morales? [Zabala responde]: No olvidemos que economistas como Krugman o Stiglitz hablan muy bien de estos dirigentes. Los medios de comunicación nos cuentan que Chávez era un terrorista, cuando fue más pacificador que Obama. El problema de teóricos como Negri y Žižek es que ellos no dicen claramente si están a favor de Chávez o Morales. Nosotros sí lo hacemos explícitamente en este libro (lo que es una diferencia sustancial), y luego casi la mitad del libro son notas (lo que es extraño en un libro de filosofía teórica). Y no creemos que sea excesivo porque estamos hablando de que todo el mundo habla mal de Chávez o Morales cuando la realidad, en el fondo, es muy diferente. Por eso era necesario demostrar específicamente con datos nuestras afirmaciones. El libro está estructurado de tal forma que si te parece una locura, lee las notas. De ahí los siete años que hemos necesitado para terminarlo. ❖ Gabriel Arnaiz

ARAM AHARONIAN/ VENEZUELA: LA FARANDULIZACIÓN DE LA POLÍTICA ven Maggliohttp://www.surysur.net/2013/08/venezuela-la-farandulizacion-de-la-politica/ Quizá para captar votos, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) decidió convocar a personalidades atrayentes del deporte y el espectáculo, sin antecedentes políticos previos pero con popularidad en las actividades en que se desempeñaban, para convertirlos en candidatos a alcaldes, de cara a las elecciones del 8 de diciembre próximo. La idea de los estrategas pareciera ser la selección de personajes conocidos –mediáticamente al menos- por la ciudadanía, y apostar a que el resto lo ponga la “mística chavista” y el aparato electoral del partido, una vez que desapareció el portaaviones de Chávez, sobre el cual se montaron unas 15 comicios en los últimos 14 años. ¿Éste es el viraje estratégico para recuperar los votos perdidos en abril y ganar adeptos más allá de los convencidos? Es cierto que Chávez llegó a contar con la cercanía, la simpatía, el acompañamiento y el apoyo de personajes del espectáculo y el deporte, pero nunca los ubicó como centro de atención y definición de su

estrategía: la de caminar hacia el socialismo del siglo 21. Los asesores actuales del PSUV y del gobierno, quizá engolados con tantos fracasos europeos, confunden participación popular con “sábado sensacional” y tienen una visión reaccionaria sobre el pueblo venezolano, su concientización, su idiosincrasia. Es más, en esta ofensiva socialdemocratizante, que acompaña este proceso exigiendo en forma paralela medidas seriamente reaccionarias como devaluaciones y la dolarización de la economía, se trata de hacer olvidar la esencia del movimiento bolivariano, ocultar todo rasgo revolucionario (más allá de la redundante y consignera declamación), cuyas consecuencias fueron la pérdida de casi 800 mil votos en la última elección Estos “expertos” parten de la apuesta de que estos personajes sintonizan con el sentido común, con la desconfianza que muchos ciudadanos les tienen a los políticos, tanto civiles como militares. Piensan que eso hace que mucha gente se identifique y apoye rápidamente, por simple simpatía con personajes famosos, una alternativa electoral y suponen que los ayudará a ponerse un escalón arriba en las encuestas. La tentación de igualar la farándula a la política no es un fenómeno sólo venezolano. Carlos Saúl Menem lo puso de moda en los 90 en Argentina (Palito Ortega, Carlos Reutemann) y en Brasil ocurrió con Fernando Collor de Mello, que era un empresario representante de los medios (en especial de la Red O Globo)… pero hay decenas de ejemplos internacionales. Fueron estrategias para cooptar sectores de la centroderecha. Muchos de ellosven chavez con artistas llegaron a deslegitiman la política, las ideologías y hasta declarar que no querían ser políticos. Otros apreciaron que la farandulización es la degradación de la política. Hay una confusión permanente sobre lo que es la participación popular. Algunos suponen muy equivocadamente que un “buen chavista” debe reducirse a que desde la cúpula de su partido les participen por quién deben votar. No es así: Por el contrario, es urgente revertir esta tendencia a la despolitización. Recuperar la confianza del pueblo debiera ser la principal tarea de los actuales dirigentes del gobierno y del proceso. Todos los logros políticos y sociales que ha alcanzado Venezuela, tanto dentro del país como en forma de locomotora integradora reconocida y valorada en todo el continente, no pueden ponerse en discusión no pueden ser comprometidos por malas estrategias de campaña , como tampoco deben serlo por el peligro y la degradación de una mala gestión que llevara a que se tomaran medidas antipopulares para conformar a grupos e intereses que complotan contra el país y el gobierno, ante reconocibles problemas económicos que no son de tan difícil solución. No cabe duda que esta Venezuela bolivariana necesita una sensata gestión de gobierno, colectivo; un esfuerzo decidido en la formación de servidores públicos capaces, con conciencia social y revolucionaria; un gobierno cohesionado y un cuerpo de funcionarios honesto y comprometido que ejecuten ese Plan de la Patria 2013-2019 –elaborado por Hugo Chávez- aprobado en dos elecciones. El dinamismo que le había dado a la impronta chavista la hoja de ruta diseñada por Chávez en la Constitución de 1999, los Planes de Desarrollo de la Nación, las Leyes Habilitantes, han perdido su motor. Dos años atrás se cuestionaba del hiperliderazgo de Chávez, como llamado de atención sobre la ausencia de dirección colectiva. Chávez era el articulador, el que distribuía el juego entre grupos con veleidades y aspiraciones de poder, que hoy se han quedado sin el árbitro. En esta selección dedocrático-farandulera hay, intrínsecamente, un reconocimiento que a seis años de fundado, el PSUV no entusiasma, no suma militantes (quizá sí afiliados) y ni siquiera cumple su función de aparato electoral. La debilidad de los grupos, partidos, movimientos que debaten ideas en las bases, elaboran propuestas que pasan inadvertidas, es visto como un síntoma de despolitización, aunque más bien se trate de incapacidad de dirección en un PSUV rutinariamente electoralero, que obliga a cumplir órdenes en lugar de debatir ideas. Chavistas ginoHoy, el mayor logro del chavismo, que fue convertir en sujetos sociales y políticos a quienes siempre fueron objetos de política parece haber sido olvidado. Y el problema no radica solamente en si la ciudadanía los va a votar, sino si tienen idea de qué se trata la administración y gestión de un territorio, de ganar eventualmente las elecciones. El politólogo Nicmer Evans recuerda que el rechazo a las prácticas tradicionales de la política venezolana de la IV República, derivó de un proceso de despolitización denominada antipolítica –impulsada por los medios comerciales de comunicación-. Este tuvo como base la alta decepción ciudadana sobre la resolución de sus problemas por la vía político-institucional, posterior al llamado Caracazo de 1989, que produjo una serie de

hechos políticos que finalizaron en 1998 con la elección de la figura que podía generar los cambios necesarios para transformar las prácticas políticas de la época. Esto podría describir a Chávez como un candidato hijo de la antipolítica, tal como lo fue (la ex miss Universo) Irene Sáez en 1998, pero los hechos ratificaron que lo que buscaba Chávez era repolitizar a los ciudadanos: su estilo echaba mano del show pero él no era un artista, era un político, que luchaba por el empoderamiento de la ciudadanía de su soberanía, a través de la participación activa en los procesos de toma de decisión. Se está fracasando en sembrar el proyecto y, más allá de sus éxitos profesionales, de su eventual adhesión al proceso, lejos están estos candidatos dedocrático-faranduleros de ser reflejo, imagen o síntesis del proceso bolivariano, anticapitalista, antiimperialista y revolucionario. Quizá, lo próximo que propongan los asesores socialdemocratizantes, sea, precisamente, ir borrando paulatinamente esas definiciones ideológicas. Las revoluciones las hacen los revolucionarios, solía decirnos Chávez, parafraseando al Ché. No se trata sólo de un escenario para las campañas publicitarias o la firma de autógrafos. Y, quizá olvidando que Chávez, además de presidente era líder de la Revolución Bolivariana, es Nicolás Maduro, el presidente, quien anuncia las candidaturas. Más allá de todo lo dicho, lo peor es que la farandulización tampoco garantiza un éxito electoral.

¿TERRORISMO? Marcelo Colussi (especial para ARGENPRESS.info) http://www.argenpress.info/2013/08/terrorismo.html Desde hace ya unas décadas, hacia fines del siglo XX, fue estableciéndose como una táctica militar un tipo amplio y difuso de acciones al que se le ha dado el impreciso nombre de “terrorismo”. Quienes otorgan ese nombre tienen una idea determinada de lo que entienden por él; pero quienes lo reciben en realidad jamás se autodefinen como “terroristas”. De hecho, el autor de estas líneas aparece mencionado en un listado de la Fundación contra el Terrorismo en la república de Guatemala, pudiendo afirmar que yo no me considero para nada un terrorista. ¿Lo seré sin saberlo? ¿En qué consiste exactamente ser un terrorista? Si bien puede haber grandes diferencias entre los que así son designados, nadie que reciba ese mote se reconoce -mucho menos se ufana de ser- “señor del terror” sino, en todo caso, luchador social. Con lo que vemos que es muy difuso el término, equívoco, hasta incluso engañoso. En verdad ¿quién es “terrorista”? ¿Qué significa con precisión ser un “terrorista”? Siendo estrictos, no hay una definición unívoca del término. En todo caso, puede advertirse desde el inicio que su nombre mismo ya presenta una carga negativa: evoca el terror. Un acto terrorista, por tanto, más que significado político -según la lógica con que usualmente se usa en Occidente- es sinónimo de “salvajismo”, comportando un mensaje ético, emotivo, más cercano a lo visceral que a la conceptualización racional. Carga que no tiene, por ejemplo, la llamada guerra convencional. Quien mata en guerra es un héroe. Ninguna bomba inteligente de alta tecnología es asesina, es terrorista, pero sí lo son, por ejemplo, quienes resisten a la ocupación estadounidense en Irak. O, según las nuevas leyes antiterroristas que vamos viendo por diversos países latinoamericanos, quienes se oponen a las industrias extractivas de capitales globales (minería, explotación petrolera o gasífera), o quienes simplemente alzan su voz como protesta por la carestía de la vida. ¿Tiene sentido eso, o se trata sólo de un discurso de dominación, un ejercicio de poder? En el Manual de Entrenamiento Militar de la Escuela de las Américas de Estados Unidos puede leerse como una sana recomendación para sus alumnos, por ejemplo: “aplicar torturas, chantaje, extorsión y pago de recompensa por enemigos muertos”. ¿Eso es guerra limpia o terrorismo? Más aún: ¿es posible que haya guerra limpia? El terrorismo, ¿en qué categoría entra? Pero entonces, en definitiva: ¿qué es el terrorismo? ¿Hay alguna definición seria al respecto? De hecho se han aportado varias, pero los mismos ideólogos que debaten sobre sus propiedades no terminan de encontrar una versión convincente. El Departamento de Estado de los Estados Unidos de América en uno de

sus Informes anuales sobre “Tendencias del Terrorismo Mundial”, antes de definirlo siquiera comienza diciendo que “la maldad del terrorismo siguió azotando al mundo este año, desde Bali hasta Grozny y hasta Mombasa. Al mismo tiempo, se libró intensamente la guerra mundial contra la amenaza terrorista en todas las regiones, con resultados alentadores”, con lo que, ante todo, se parte de una valoración: el terrorismo es intrínsecamente “malo”. Acto seguido lo caracteriza diciendo que “se constituye, tanto en el ámbito interno como en el mundial, en una vía abierta a todo acto violento, degradante e intimidatorio, y aplicado sin reserva o preocupación moral alguna”. El ex presidente George Bush declaró durante su mandato que “no se cansará, no titubeará y no fracasará en la lucha por la seguridad del pueblo estadounidense y por un mundo libre del terrorismo. Seguiremos sometiendo a nuestros enemigos a la justicia o les llevaremos la justicia a ellos”. Claro que esa justicia puede ser la invasión militar, obviamente, pasando por sobre el derecho internacional y las resoluciones de la ONU. En nombre de la lucha contra este declarado “flagelo”, está visto que puede hacerse cualquier cosa. ¿Tan malo es el “terrorismo” que da lugar a todo tipo de intervención, incluidas guerras preventivas -hasta con armamento nuclear, como llegó a pretender en algún momento la Casa Blanca contra Irán muy recientemente- o hay ahí “gato encerrado”? Obviamente el hecho de concebir una situación tan tremendamente compleja como ésta en los maniqueos términos de “buenos” y “malos” (versión hollywoodense por cierto) nos advierte que ahí hay demasiada mentira acumulada. De acuerdo a datos suministrados por el mismo gobierno federal de Washington, el “terrorismo” mata en el mundo, en promedio, 11 personas por día, la misma cantidad que muere por hambre… ¡en menos de un minuto!, o que contrae el VIH cada cinco minutos. Pero curiosamente la Casa Blanca utiliza 100 veces menos presupuesto en su lucha contra el SIDA que lo que emplea para su guerra preventiva contra el “terrorismo”. ¿Acaso representa una mayor amenaza a la seguridad de la especie humana el siempre mal definido e impreciso “terrorismo” que la pandemia de SIDA que hoy día nos aqueja, o la hambruna crónica que sigue habiendo? El tema es complejo, y estamos dominados por un cargado discurso ideológico que la manipulación mediática de estos últimos años nos legó y sigue alimentando a diario: algunos soldados (en general blancos, rubios, amantes de la libertad y la democracia según se nos dijo -y de la Coca-Cola-) suelen ser los “buenos” en toda esta urdida historia, y los “terroristas” -que curiosamente no son blancos…ni toman Coca-Colasuelen ser los “malos”. ¿Son prácticas “terroristas” las guerras de guerrillas, las guerras de liberación nacional, las luchas anticolonialistas? ¿Cuándo empiezan a ser “terroristas” las acciones militares? Por cierto que el campo conceptual es amplio, difuso, cargado ideológicamente. Si lo que busca el “terrorismo” es crear conmoción y pavor -según una sesgada visión-, eso fue lo que logró, por ejemplo, la invasión angloestadounidense en Irak, a punto que así se designó oficialmente la operación (“Conmoción y pavor”); y no se la llamó “invasión terrorista”. ¿Quiénes son más “terroristas”: las guerrillas antiimperialistas latinoamericanas o los grupos musulmanes antisionistas?, ¿el ejército israelí o la ETA vasca?, ¿las tropas rusas en Chechenia o los comandos chechenios en Rusia?, ¿las bombas nucleares que podrían lanzar Estados Unidos o Israel sobre Irán o los zapatistas de Chiapas? Como vemos, las posibilidades que pueden caer bajo el arco de “terrorismo” son por demás de amplias: una bomba en un restaurante, una emboscada a una unidad de un ejército regular, un ataque aéreo de un país contra otro, son todas acciones igualmente violentas, con resultados similares: muerte, destrucción, terror en los sobrevivientes. ¿Cuál de ellas es más “terrorista”? Y por otro lado -quizá esto es lo esencial-: ¿quién las define como “buena” o “mala”?, si se quiere: como “terrorista” o como “no-terrorista”. Es obvio que el término no es nada inocente; su utilización arrastra una tácita condena: habría una violencia legítima -la que puede ejercer un Estado contra otro, o la que ejerce contra insurrectos que se alzan contra el orden constituido-, y una violencia no legítima a la que le cabe el mote -por cierto despectivo- de “terrorismo”. La diferencia estriba no precisamente en una consideración ética (la violencia es siempre

violencia, y ninguna es más “buena” que otra) sino en un ordenamiento jurídico que se desprende, en definitiva, de relaciones de poder. El atentado contra las torres del Centro Mundial de Comercio de New York en el 2001 es un acto terrorista, pero no lo es -al menos así lo presenta la prensa oficial que moldea la opinión pública mundial- un manual militar como el citado más arriba. ¿Cuál de las dos lógicas en juego es más “terrorista”? Y si fuera cierto que la destrucción de esos edificios fue un acto auto-provocado por el gobierno federal de Washington para justificar su proyecto de guerras preventivas, ¿eso es terrorismo o no? Es terrorismo de Estado, pero la prensa oficial no habla de eso. Pinochet, en su lucha contra los “terroristas subversivos”, ¿no era él un terrorista por los métodos empleados? ¿No fueran las peores expresiones de terrorismo de Estado las guerras sucias que ensangrentaron los países latinoamericanos las décadas pasadas? Pero oficialmente esas fueron guerras “contrainsurgentes” y no “terroristas”. ¿Quién lo decide? Si lo distintivo de un acto “terrorista” es la búsqueda de población civil no combatiente como objetivo, el 80 % de los muertos en las guerras habidas desde el final de la Segunda Guerra Mundial en 1945 a la fecha se encuadra en este concepto; actos, sin duda, por los que ningún militar ni político ha sido juzgado en calidad de “terrorista”. ¿Podría ahora abrírsele un juicio al presidente de Estados Unidos como terrorista por las dos bombas atómicas utilizadas contra población civil? ¿Por qué no? Hoy por hoy, en un mundo absolutamente dominado por los montajes mediáticos, en forma insistente se ha ido metiendo la idea del “terrorismo” como uno de los peores flagelos de la humanidad. De manera casi refleja suele asociárselo con maldad, crueldad, barbarie; y por cierto, en esa visión parcial e interesada, esas prácticas nos alejan de la civilización supuestamente democrática, presunto punto de llegada de la evolución cultural (léase: economías de mercado con parlamentos formales). Dentro de esa lógica hemos terminado por no poder distanciarnos de la falacia impulsada por los planes de dominación geoestratégicos de Washington de “terrorismo = malo, estamos contra él o somos un terrorista más”. Merced al impresionante juego manipulatorio de los medios masivos de comunicación suele ligárselo a cualquier forma de protesta, en general conectada con los países más pobres y postergados. En esa dimensión, hoy pasan a ser terroristas cualquier trabajador desocupado que protesta, o quien reclama aumento de sueldo, o un estudiante que pide más presupuesto para educación. De hecho, el autor de estas líneas podría serlo. Todo estos montajes son intrínsecamente perversos, traicioneros, sádicos, propio de fanáticos fundamentalistas. Un “terrorista” -según ese orden discursivo- es un delincuente subversivo, un apátrida; en definitiva: un monstruo inhumano. Por supuesto que los autores del manual de la Escuela de las Américas, aunque inciten a la tortura y a la corrupción, no son “malos”, porque lo hacen en nombre de la guerra contra el terrorismo, que es, a no dudarlo, una “guerra buena”. ¿Quién en su sano juicio podría alegrarse y festejar por la muerte violenta de unos niños, de una señora que estaba haciendo sus compras en el mercado, de un ocasional transeúnte alcanzado por una explosión? Pero ahí está la falacia, lo perverso del mensaje sesgado con que el poder se defiende: se presenta la parte por el todo, mostrando sólo un aspecto -con ribetes sentimentales- de un conjunto mucho más complejo. ¿Alguna vez los medios muestran las escenas dantescas que sobrevienen a los bombardeos “legales” de una potencia militar? ¿Alguna vez se habla de las monstruosidades propiciadas por la pedagogía del terror de un manual como el de la Escuela de las Américas? ¿Sufre más una víctima que la otra? ¿Es más “buena” y “respetable” una violencia que otra? Y fuera de un amarillismo oportunista bastante execrable que constituye una grosera pornografía de la pobreza, ¿cuándo el hambre del mundo es considerado un verdadero problema por los poderes tomándose acciones reales en su contra? Está claro que la dimensión del fenómeno es infinitamente más compleja que la malintencionada simplificación con que los poderes fácticos presentan el problema. El maniqueísmo n juego, en definitiva, ahoga las posibilidades de soluciones reales. Son tan víctimas los civiles que mueren en un atentado dinamitero hecho por un grupo irregular como los que caen bajo el fuego de un ejército regular. ¿Por qué los regulares serían menos asesinos que los irregulares?

El mundo sigue siendo injusto, terriblemente injusto; la distribución de la riqueza que el sistema capitalista crea es de una inequidad espantosa. El hambre sigue siendo principal causa de muerte de la población mundial, hambre evitable, hambre que debería desaparecer si se repartiera algo más equitativamente el producto social que creamos los humanos. Esa injusticia estructural en las relaciones interhumanas es el principal exterminio que enfrentamos a diario; pero eso no es la gran noticia, de eso no se habla mucho. Hoy el “terrorismo internacional” se presenta como el peor de los apocalipsis concebibles, y en la lucha contra él -así nos dicen al menos- vale todo. Es por eso que sigue teniendo vigencia lo que, en 1981, firmaban numerosos Premios Nobel como “Manifiesto contra el Hambre”, y que debemos seguir levantando como principal estandarte por un mundo mejor: “Cientos de millones de personas agonizan a causa del hambre y del subdesarrollo, víctimas del desorden político y económico internacional que reina en la actualidad. Está teniendo lugar un holocausto sin precedentes, cuyo horror abarca en un sólo año el espanto de las masacres que nuestras generaciones conocieron en la primera mitad de este siglo y que desborda por momentos el perímetro de la barbarie y de la muerte, no solamente en el mundo, sino también en nuestras conciencias. […] El motivo principal de esta tragedia es de carácter político.” Por tanto el enemigo y principal amenaza para la humanidad no es el impreciso y siempre mal definido “terrorismo”; sigue siendo la injusticia, aunque nos hayan querido hacer creer estos años que estaba un tanto pasado de moda hablar de ella.

PIZARRÓN INSUMISO REVISTA NEXOS DEL MES DE AGOSTO 2013. http://www.nexos.com.mx/?P=numanteriores&anio=2013&mes=8

ENTREVISTAS F. RETAMAR: “EL PORVENIR DE NUESTRAS LETRAS ESTÁ UNIDO AL DE NUESTRA AMÉRICA” En esta entrevista, Roberto Fenández Retamar reflexiona sobre el contexto cultural hispanoamericano del siglo XX. http://www.espaciomurena.com/?p=645 El destacado ensayista y poeta cubano está visitando nuestro país desde el 25 de abril hasta el 6 de mayo, en ocasión de una serie de actividades que organiza el Espacio Murena: entre ellas, la conferencia “José Lezama Lima y su visión calibanesca de la cultura” que brindará en el Centro Cultural Borges el día jueves 3 de mayo a las 18.30 horas y “Ser latinoamericano y caribeño”, que dictará el día sábado 5 de mayo a las 16.30 horas en la Feria del Libro (Sala Roberto Arlt). Es en este marco que le hemos acercado algunos interrogantes sobre el contexto cultural hispanoamericano del siglo XX que consideramos tienen una fundamental importancia para comprender el presente y pensar el porvenir. Espacio Murena: Estimado Roberto, de alguna manera en los años sesenta y setenta del pasado siglo se hace visible un fuerte vínculo entre literatura, política y emancipación. ¿Cuáles son, a su juicio, las condiciones que lo hacían posible? Roberto Fernández Retamar: Entiendo que la pregunta se refiere en particular a nuestra América. Y a ella llegó en esas décadas la onda anticolonialista que surgió tras el fin de la llamada Segunda Guerra Mundial y

se hizo visible en países como la India, Indonesia, Vietnam, Argelia y varios del África subsahariana. Es dentro de esa onda, de impugnación del colonialismo tradicional y del neocolonialismo, que se inscriben el triunfo en 1959 de la revolución en Cuba y los variados movimientos que ocurrieron en el continente relacionados de alguna manera con ella. El impacto de esos hechos, como no podía menos de ser, repercutió vivamente en nuestra literatura y en otras artes nuestras (el cine o la canción, por ejemplo). EM: Usted ha hecho una magnífica reinterpretación del personaje conceptual Caliban. ¿Es posible pensarlo también como figura del “intelectual comprometido” en clave hispanoamericana? ¿Qué vigencia tiene esa noción del intelectual en la actualidad? RFR: Gracias por su generosa opinión. En mi ensayo “Caliban”, que ya ha cumplido cuarenta años, recordé que ese personaje conceptual puede representar al pueblo, pero que otro personaje conceptual de la pieza de Shakespeare se corresponde con el intelectual: Ariel. Debemos al pensador argentino Aníbal Ponce un notable ensayo sobre el tema: “Ariel o la agonía de una obstinada ilusión”. Ariel aparece como un siervo de Próspero, y debe optar entre mantener esa condición o unirse al esclavo Caliban en la lucha por la liberación. Entiendo que los intelectuales de nuestros días tienen ante sí una disyuntiva similar. EM: ¿Cree usted que se ha constituido, durante el siglo XX, una tradición ensayística hispanoamericana? Si es el caso, ¿quiénes serían sus principales referentes hoy? RFR: A la primera pregunta debo responder afirmativamente. Es más: ya en el siglo XIX, sobre todo a partir del modernismo, hay en nuestra literatura muestras admirables. Ángel Rama, notable ensayista él mismo, llegó a decir que los dos géneros mayores de nuestras letras eran la poesía y el ensayo. Ambos alcanzaron metas mayores a partir del modernismo. Lo ejemplificaron Martí y Darío tanto en la poesía como en el ensayo (aunque no se lo llamara así), y algo más tarde Rodó y Sanín Cano en el ensayo. Entrado el siglo XX, practicaron magistralmente el ensayo autores como Pedro Henríquez Ureña, Alfonso Reyes, José Carlos Mariátegui, Ezequiel Martínez Estrada, Jorge Luis Borges, José Lezama Lima, Octavio Paz, Cintio Vitier y muchos más. No me es fácil responder la segunda pregunta, pues hacerlo requiere un conocimiento del que carezco. Me parecen notables ensayistas el colombiano William Ospina, los mexicanos Pablo González Casanova, José Emilio Pacheco y Víctor Barrera Enderle, el venezolano Luis Britto García, los argentinos Noé Jitrik, Ricardo Piglia, Atilio Boron y Néstor Kohan, y en mi país son ensayistas de valía Graziella Pogolotti, Leonardo Acosta, Ambrosio y Jorge Fornet. EM: Usted ha tenido una relación fluida con la cultura rioplatense, y con la Argentina en particular (a través de algunos de sus referentes como Martínez Estrada o Cortázar). ¿Cuál es su recuerdo de esos vínculos? RFR: Aunque ya tenía desde antes esa relación (de la que hablé al frente del libro de 1993 Fervor de la Argentina), ella se incrementó considerablemente por mi trabajo en la Casa de las Américas. Y antes de detenerme en los que usted menciona, quiero evocar nombres como los de Paco Urondo, Rodolfo Walsh y Haroldo Conti, hermanos que defendieron nobles causas y tuvieron un fin terrible. A Martínez Estrada lo había leído ya cuando, tras obtener un premio de la Casa de las Américas, vino a Cuba a principios de 1960. Volvió después para trabajar en la Casa, y lo leí y visité mucho. Fue para mí un verdadero maestro, y veo con tristeza (ojalá esté equivocado) que apenas se lo menciona en la Argentina de hoy. A Cortázar lo conocí en 1963, cuando integró por primera vez el jurado del Premio Casa de las Américas. Poco después leí Rayuela, quedé estremecido y le escribí una carta que inició nuestra correspondencia de veinte años, hasta su muerte. Casi la totalidad de las cartas que nos envió a la Casa de las Américas fue publicada en el número que le dedicó tras su muerte nuestra revista. Fue una criatura excepcional, y lo tenemos siempre presente. EM: ¿Cuál es su expectativa para el porvenir de la ensayística y las letras hispanoamericanas? RFR: Creo que ese porvenir está inextricablemente unido al de nuestra América, al de la humanidad en su conjunto. Más de uno ha hablado del pesimismo de la inteligencia y el optimismo de la voluntad. Los

tiempos son arremolinados, bien peligrosos. Nos esperan grandes pruebas, según nos dice la inteligencia. Pero no es dable arriar la esperanza.

LIBROS DEL MES http://www.eldiplo.org/170-poder-corrupcion-y-campana/libr/

En el país de los niños escasos China y la crisis demográfica. De los hijos únicos a los chicos de la calle Isabelle Attané Capital Intelectual; Buenos

Aires,

mayo

de

2013. 280

páginas,

99

pesos.

La investigadora y sinóloga francesa Isabelle Attané afirma en este libro que, desde los años 1980, China se ha beneficiado de una muy propicia “bonanza demográfica” que le ha permitido un extraordinario desarrollo, pero que en el futuro dicha estructura demográfica será cada vez menos favorable. En otras palabras: la abundante mano de obra barata de la que se nutre la economía china desde hace tres décadas será cada vez más escasa (si bien actualmente uno de cada cuatro chinos tiene menos de veinte años, la población en edad activa comenzará a disminuir a partir de 2020 y la población total lo hará a partir de 2035, por lo cual la sociedad sufrirá un envejecimiento acelerado más veloz que en cualquier país occidental). El espectacular crecimiento del gigante asiático ha provocado desigualdades sociales y económicas nunca vistas: por un lado jóvenes urbanos que cultivan la excelencia, por otro, hijos de campesinos migrantes que se crían solos desde muy temprana edad. Entre ambos, un abismo de segregación, falta de integración y flagrantes injusticias sociales para estos últimos, excluidos de facto de los sistemas educativos y sanitarios progresivamente desarrollados en las grandes ciudades. La autora afirma que en los últimos treinta años, las familias chinas de las clases medias y altas de las grandes urbes –tradicionalmente centradas en los ancianos– se han desviado bruscamente y hoy el niño reina sobre sus padres, incluso sobre sus abuelos; dicho fenómeno alcanza su paroxismo con el hijo único, ese “pequeño emperador”. Paralelamente, los niños de clase baja y del medio rural simbolizan la contracara del milagro económico (alrededor del 10% de los mismos se crían sin sus padres, que se ven obligados a migrar a las grandes ciudades en busca de trabajo). Pero China tiene además un problema adicional respecto a otras naciones: allí la cualidad más grande que se le desea a un hijo es que sea varón, preferencia anclada en lo más profundo de la cultura china al perpetuar el linaje paterno y afirmar el estatus social de la familia. Para lograr el anhelado varón, los chinos recurren a augurios, astrología, oraciones, dietas y cada vez más frecuentemente a ecografías, a las que muchas veces sigue un aborto si el feto es una niña. La consecuencia es el país del mundo con mayor proporción de hombres en su población, lo que trae aparejado infinidad de problemas sociales que se acentúan año tras año. Isabelle Attané concluye este ensayo advirtiendo que China se moderniza, atravesando transformaciones sin precedentes –tales como el progresivo repliegue del Estado en las últimas décadas– que han provocado que la salud y la educación dependan cada vez más de la capacidad de pago de las familias: solo los jóvenes urbanos de clase media y alta logran salir adelante, el resto vive situaciones de enorme precariedad y son víctimas de todos los tráficos: venta

masiva de niños-esclavos, mafias de la mendicidad, niños no inscriptos en el Registro Civil para evitar multas por incumplir las cuotas de nacimiento autorizadas, niños trabajadores menores de catorce años con jornadas extenuantes, prostitución infantil y traficantes que raptan, venden y revenden niños y bebés. Julián

Chappa

Las raíces del fracaso americano Morris Berman Sexto Piso; 260 páginas, 185 pesos.

México,

octubre

de

2012.

Una crisis puede ser entendida de dos maneras. La primera indica que, a partir de una serie de avatares completamente ajenos a la voluntad de los afectados, un sistema o un gobierno entran en una crisis entendida como un fenómeno temporal. La segunda es un poco más tajante: algo entra en crisis debido a que, desde su misma constitución, hay cosas que no cierran. Para el historiador cultural estadounidense Morris Berman (1944), la actual crisis que está atravesando su país natal se acomoda mucho más a esta segunda situación que a la primera. Y es que en los orígenes mismos de Estados Unidos, el “oportunismo individualista” que pone en el centro de la escena al dinero como un símbolo de éxito, de trascendencia, en alguna medida constituye una de las principales razones de su actual declive. Entonces: ¿qué condiciones del sistema capitalista están inscriptas en la médula estadounidense y cómo, a lo largo de tanto tiempo –y, principalmente, a través de los más diversos productos culturales– se “vendió” una imagen de un país que no corresponde con la realidad? En este libro, con el que cierra su “trilogía americana”, Berman lleva adelante un estudio minucioso de cuestiones ideológicas (como el fetichismo tecnológico de la sociedad estadounidense) e históricas (como las repercusiones de la actitud del Norte para con el Sur en la Guerra Civil). En definitiva, en los comienzos de una era post-estadounidense: ¿cómo será recordada la era del supuesto “imperio” norteamericano? Fernando Bogado

A la caza de Eichmann Neal Bascomb Debate; Buenos 496 páginas, 139 pesos.

Aires,

abril

de

2012.

Factores locales y externos hicieron de Argentina un destino elegido por criminales nazis y de regímenes afines. Cualquiera haya sido su número –no fueron 60.000, como con poco apego a los hechos alguna vez sostuvo uno de sus cazadores–, éstos fueron muchos. Entre ellos estuvieron los pares bielorruso, croata y eslovaco de Adolf Hitler, poco notados por su rápido ingreso a la lucha anticomunista. Cierta literatura aun incluye al ex Führer como residente aquí, si bien la mejor historiografía disponible lo da por muerto antes de la toma de su bunker. En cambio, Adolf Eichmann y Josef Mengele, jerárquicamente menos importantes, sí estuvieron en Argentina y concitaron el interés de Israel por su rol en el exterminio de judíos. Significativo aporte a la reconstrucción del secuestro de Eichmann en Argentina por parte del Mossad, esta obra sirve además como modelo para el periodismo investigativo local interesado en el tema, visto el vasto relevamiento hecho por Bascomb de fuentes documentales e historiográficas. Su honestidad y frondosa bibliografía conviven asimismo con una admitida destreza rudimentaria en alemán y un español y hebreo inexistentes, que le impidieron aprovechar a fondo ciertas fuentes. No obstante, el volumen se beneficia de las entrevistas a distintos agentes y miembros de la tripulación del avión israelí que voló con Eichmann a Tel Aviv. Su mérito principal es haber sistematizado lo conocido. Ignacio Klich

Siete debates nacionales en políticas de comunicación Guillermo Mastrini, Ornela Carboni (comps.) UNQ; Bernal, abril de 2013. 272 páginas, 100 pesos. En los últimos cuatro años, la sociedad argentina y parte de la dirigencia política se mostraron capaces de participar – cada uno con sus rasgos y particularidades– de un debate “tan necesario como ausente”: la regulación del mercado info-comunicacional. Una discusión que los grandes conglomerados mediáticos, ubicados en el ojo de la tormenta, no pudieron soslayar. La sanción de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual en 2009 es un caso emblemático sin precedentes, que se enmarca en “un saludable proceso latinoamericano […] donde la ciudadanía más activa encara procesos de debate y acción en torno a las políticas públicas de comunicación”. Reconociendo la diversidad de contextos –no sólo a nivel geográfico, sino político e ideológico– en los que tuvieron lugar los cambios en materia de políticas de comunicación, estos siete estudios abordan iniciativas de regulación en Europa, América del Norte y América Latina, que conciernen tópicos clave como la digitalización, la convergencia y la concentración, y retratan a los actores involucrados poniendo de manifiesto sus intereses. “La diversidad de agentes e intereses representa un desafío a la hora de legislar”. De allí que este trabajo se proponga analizar la correlación de fuerzas que se evidencia entre el intento de sumar a nuevos actores en el diseño de políticas de medios y las decisiones que finalmente prevalezcan. Natalia Aruguete

Marxismo y crítica literaria Terry Paidós; Buenos 164 páginas, 79 pesos.

Aires,

marzo

de

Eagleton 2013.

Marxismo y crítica literaria, una suerte de manual sobre el modo en que el marxismo puede intervenir en el campo de la literatura y el análisis de textos, es el producto de un seminario que el autor dictó en la Universidad de Oxford a principios de la década de 1970, “cuando la posibilidad de un cambio radical parecía genuina”. Acaso por eso parezca algo anacrónico, aunque, junto con el más complejo Marxismo y literatura de Raymond Williams, traza los lineamientos fundamentales de la crítica cultural marxista no dogmática. Eagleton parte de la premisa de que el legado crítico del marxismo debe ser juzgado no por el hecho de que sus ilusiones políticas no se hayan cumplido en la práctica sino por su capacidad de iluminar el estudio de las obras de arte.

El autor se ocupa, a lo largo de cuatro breves capítulos, de trazar las relaciones entre literatura e historia, entre forma y contenido, entre escritor y compromiso y entre escritor y productor. Con el objetivo de despegar el método heredado de Marx y Engels del esquematismo base/superestructura, Eagleton asegura que la literatura no es nunca un mero reflejo pasivo de la base económica y postula que, si bien el arte no puede servir por sí mismo para transformar el curso de la historia, sí puede ser un elemento activo de dicho cambio. En este sentido, la crítica marxista no es sólo una técnica de interpretación sino “parte de nuestra liberación de la opresión, y por eso vale la pena discutirla in extenso”. Nicolás

Olszevicki

Desconfiar de las imágenes Harun Farocki Caja Negra; 320 páginas, 120 pesos.

Buenos

Aires,

marzo

de

2013.

Harun Farocki ya no es un cineasta desconocido en Argentina, gracias a una revisión de su obra que realizó el Bafici hace unos años y la muestra de sus instalaciones en la Fundación Proa en el corriente año. Sin embargo, su producción conserva cierto cariz marginal, hermético, dada su cualidad indagatoria, con una aguda mirada crítica hacia la sociedad contemporánea. Él mismo realiza una historia de su trayectoria como director de documentales en esta cuidada selección de sus trabajos teóricos que editaron Inge Stache y Ezequiel Yanco, en otra exquisita publicación de la editorial Caja Negra. En sus variados textos publicados desde 1974, Farocki concibe el cine como espacio de discusión y denuncia de los usos de la imagen como herramienta de vigilancia y control ejercidos por las sociedades disciplinarias. Así, son tan relevantes sus observaciones –devenidas filmes absolutamente políticos– sobre las imágenes registradas en los campos de concentración nazis, o durante la Guerra del Golfo, o cuando la revolución en Rumania, como resultan importantes sus análisis sobre la manipulación de imágenes registradas por las cámaras de seguridad, o en las fábricas, centros comerciales y prisiones. Los trabajos de Farocki develan lo que la imagen muestra y también aquello que oculta, como en aquellas fotografías aéreas tomadas en 1944 sobre Auschwitz, en las que los Aliados nada vieron del horror que allí tenía lugar. Josefina Sartora

Bajo el poder de la caballería El ejército argentino (1962-1973) Daniel Mazzei Eudeba; Buenos 344 páginas, 127 pesos.

Aires,

noviembre

de

2012.

Hasta finales del siglo XX, el Ejército fue un actor decisivo en la política argentina. Este libro de Daniel Mazzei analiza el recorrido de esa fuerza en los poco más de diez años que van entre 1962 y 1973, coincidentes con la proscripción del peronismo tras el golpe de 1955 y su retorno al poder en las elecciones de 1973. Se trata, como señala el autor, de un período de estabilidad interna en el Ejército, a partir del predominio de un grupo de oficiales pertenecientes al arma de Caballería. Pero al mismo tiempo, de un lapso de importantes modificaciones internas, entre ellas la adopción por parte de la fuerza de la Doctrina de Seguridad Nacional, que llevaron al crecimiento de las áreas dedicadas a la Inteligencia contrarrevolucionaria y el número de oficiales entrenados en el exterior en temas afines. El resultado fue que el Ejécito argentino recibió una “doble influencia”, francesa y estadounidense, pero desarrolló “un modelo propio que se consolidó (e incluso se exportó a otros países de América Latina) durante la segunda mitad de la década de 1970. El análisis de Mazzei señala que las diferencias entre las facciones castrenses (los azules y los colorados) se debían más a cuestiones coyunturales relativas a la política que a profundas cuestiones ideológicas. Para fundamentar esta mirada presta especial atención al proceso de socialización que siguen los oficiales desde su ingreso al Colegio Militar hasta sus primeros destinos. El resultado es un análisis convincente y sólido de la historia institucional de la fuerza, de sus imbricaciones en la historia política nacional, y de los avances y retrocesos en la autonomía militar con respecto a la sociedad civil, en un proceso que alcanzó su máxima expresión a partir de la dictadura militar de 1976. Federico Lorenz

Entrevista con la historia Oriana Fallaci El Ateneo; 704 páginas, 185 pesos.

Buenos

Aires, mayo

de

2013.

Publicado originalmente en 1974, este libro de la polémica periodista italiana Oriana Fallaci, fallecida en 2006, reúne las entrevistas realizadas por la autora a veintiséis personalidades políticas centrales de la historia de la segunda mitad del siglo XX para el periódico L’Europeo. Desfilan por sus páginas, entre otros, Henry Kissinger, Golda Meir, Yasser Arafat, el rey Hussein de Jordania, George Habash, Indira Gandhi, Ali Bhutto, Giulio Andreotti, Willy Brandt, Hailé Selassié, Mohamed Reza Pahlevi, Mario Soares, Santiago Carrillo, Hélder Câmara, Nguyen Van Thieu, el general Giap. Fallaci, que considera al periodismo como un privilegio extraordinario y terrible a la vez, por la posibilidad que ofrece de contar la historia en directo, presenta estas entrevistas como simples testimonios de una época, cristalizados en un instante, que buscan descifrar por qué algunos hombres cuentan con más poder que otros y cuál es su verdadera influencia sobre el curso del mundo.

Nuevas minorías, nuevos derechos

Homi K. Bhabha Siglo XXI; febrero de 2013. 224 páginas, 110 pesos.

Buenos

Aires,

Estas “notas sobre cosmopolitismos vernáculos” reúnen ensayos y conferencias inéditas de Homi K. Bhabha, uno de los especialistas más reconocidos en teoría poscolonial. En estos textos, el intelectual indio reflexiona sobre los insterticios estéticos, éticos y políticos en los que se insertan los sujetos minoritarios y marginales desplazados por la globalización –inmigrantes, refugiados, víctimas de violencia–, carentes de derechos y ajenos a toda institucionalidad.

Historia de los partidos políticos en América Latina Torcuato S. Di Tella FCE; junio de 2013. 472 páginas, 112 pesos.

Buenos

Aires,

Edición revisada y actualizada hasta nuestros días de este libro escrito originalmente en 1992, en el que Torcuato Di Tella describe la genésis y evolución de los principales movimientos políticos de América Latina desde principios del siglo XX y su influencia en las sociedades que los engendraron. Repasa así la revolución mexicana, los movimientos de izquierda, la embestida militar, los populismos, las dictaduras, la democratización y los nuevos populismos.

Estoy verde Dólar. Una pasión argentina

Alejandro Bercovich, Alejandro Rebossio Aguilar; Bs. As., junio de 2013. 264 páginas, 120 pesos. Los autores analizan la obsesión argentina por la moneda estadounidense hurgando en sus raíces históricas. Así, investigan el submundo de las “cuevas”, los “arbolitos” y los contrabandistas, las operaciones e intereses que se esconden detrás de las presiones alcistas o devaluatorias, la fuga de divisas, las incautaciones y las pesificaciones, el doble discurso de los políticos y el uso del dólar por las mafias.

En el cielo nos vemos La historia de Jorge Julio López

Miguel Peña Lillo-Continente; 224 páginas, 98 pesos.

Buenos

Aires,

mayo

de

Graziano 2013.

Historia de un hombre que desapareció dos veces. En octubre de 1976, secuestrado por la dictadura, y en septiembre de 2006, en democracia, en circunstancias no esclarecidas, cuando debía testimoniar en el juicio contra el ex comisario Etchecolatz. Graziano repasa su vida, sus relaciones familiares, su participación como testigo, y reconstruye las búsquedas fallidas, en las que se entremezclaron inoperancia y complicidad policial.

REVISTA PRISMA SOCIAL...CONSÚLTELA http://www.isdfundacion.org/publicaciones/revista/index.html

TEXTOS ESTRATÉGICOS

[LIBRO] EL DIOS MORTAL: LUCIFER Y LA BESTIA x Franz Hinkelammert La legitimación de la Dominación en la Tradición Cristiana :: Libro que aborda una mirada distinta y opuesta a la del actual Papa Francisco I Debate abierto: ¿Un cristianismo para obedecer o para rebelarse contra el capitalismo? Libro que aborda una mirada distinta y opuesta a la del actual Papa Francisco I y las altas jerarquías de la Iglesia Católica de Roma, del teólogo de la liberación Franz Hinkelammert. El cristianismo antiutópico —un cristianismo que va contra la esperanza humana— conlleva un pensamiento de legitimación de determinados tipos de dominación. Esta es su diferencia para con el mensaje cristiano que declara vigentes todos los tipos de autoridad y dominación, porque todos son igualmente ilegítimos en la perspectiva escatoló-gica y no se percibe la posibilidad de una praxis de anticipación de la nueva tierra como un más allá de Babilonia. El cristianismo se pone en contra de la esperanza humana en el grado en el cual niega el derecho de tales anticipaciones. El resultado es la legitimación de aquellos tipos de dominación que excluyen la anticipación por la praxis de este más allá de Babilonia. Es antiutópico porque reacciona a la utopía. Sin embargo, estando la utopía en la raíz del cristianismo, tiene que transformar el propio cristianismo. La legitimación cristiana de la dominación se deriva de la negación de la esperanza humana. Leer libro completo [PDF] http://www.rosa-blindada.info/b2-img/HinkelammertDiosmortal.pdf

HISTORIA DEL EGP (EJÉRCITO GUERRILLERO DEL PUEBLO) DE ARGENTINA x Editorial Ultimo Recurso Recopilación de textos sobre la corta historia del EGP, organización de guerrilla rural impulsada por el Che Guevara y dirigida por Jorge Masetti en los años '60

En mayo de 1963, una treintena de jóvenes partió de Buenos Aires rumbo al norte argentino para lanzar allí la guerrilla rural preparando la venida del Che Guevara. Los encabezaba Jorge Massetti, el “Comandante Segundo”, fundador de la agencia cubana de noticias Prensa Latina y ex combatiente en Argelia, quien había conocido a Fidel Castro y al Che Guevara en la Sierra Maestra, cuando los entrevistó para 'Radio El Mundo', de Buenos Aires, y quedó convencido de la justicia de la causa revolucionaria del Che. CONTENIDO -El Ejército Guerrillero del Pueblo: Los primeros guevaristas -El Ejército Guerrillero del Pueblo - Salta, 1963-1964 -Guerrilla en el Norte y "Doctrina de la Seguridad Nacional" -“Hacer de la Cordillera de Los Andes la Sierra Maestra de América Latina” -Comandante “Segundo" -La guerrilla en Salta, la insurgencia en Latinoamérica -Ciro Bustos: El sueño revolucionario del Che era Argentina -Prólogo de Rodolfo Walsh al libro de Jorge Ricardo Masetti "Los que luchan y los que lloran” Leer texto completo [PDF] http://lhblog.nuevaradio.org/b2-img/historia_egp.pdf

PARA MI PARTIDO Y EL DE USTEDES HAY UNA COSA IMPRESCINDIBLE AL LLEGAR AL PODER, NO PERDER LA RELACIÓN CON EL PUEBLO DISCURSO COMPLETO DE LUIZ INACIO LULA DA SILVA EN EL XIX FORO DE SAO PAULO. http://www.laondadigital.com/LaOnda/LaOnda/636/A6b.pdf

EL 54% DE LOS INTERNAUTAS EN EU AVALA PRÁCTICAS DE ESPIONAJE COMO MEDIDAS PARA COMBATIR EL TERRORISMO, SEGÚN ESTUDIO http://www.sinembargo.mx/06-08-2013/710688

CONTRA EL IMPERIALISMO Y LA COLONIZACION: SEIS ESTRATEGIAS POR LA SOBERANIA, LA DIGNIDAD Y LA VIDA DE LOS PUEBLOS

http://www.rebelion.org/docs/172176.pdf

PARAGUAY-ESPAÑA: UNA REVISIÓN CRÍTICA A LA INVERSIÓN EXTRANJERA DIRECTA http://omal.info/IMG/pdf/informe_final_ied_espanola_paraguay.pdf

ZONAS GRISES

NUEVOS DESTINOS DE LOS INVERSORES INMOBILIARIOS...O BLANQUEO DE DINERO ILÍCITO:MIAMI Y HOLLYWOOD (EN ESTADOS UNIDOS); PIRIÁPOLIS; PUNTA DEL ESTE Y PUNTA DEL DIABLO (EN URUGUAY); PANAMÁ, ADEMÁS DE ASUNCIÓN Y VILLA ELISA (EN PARAGUAY), http://www.cronista.com/negocios/Tendencia-anti-blanqueo-desarrolladores-extranjeros-tientan-ainversores-locales-20130808-0045.html BARÓMETRO GLOBAL DE CORRUPCIÓN 2013 TRANSPARENCIA INTERNACIONAL.

http://www.miguelcarbonell.com/docencia/Bar_metro_Global_de_Corrupci_n_2013.shtml

LIBRO: AMÉRICA LATINA EN LA TURBULENCIA GLOBAL: OPORTUNIDADES, AMENAZAS Y DESAFÍOS Alexander Ugalde Zubiri (coord.) (GEALC/LAKIT y UPV/EHU, 2013) http://www.ehu.es/argitalpenak/images/stories/libros_gratuitos_en_pdf/Ciencias_Sociales/Amrica%20Latin a%20en%20la%20turbulencia%20global.pdf

REVOLUCIÓN Y CONTRARREVOLUCIÓN NOCIONES ESENCIALES EN LA OBRA Y ACCIÓN DE ÁLVARO CUNHAL x Pável Blanco Cabrera 221En el centenario del natalicio de Cunhal es incuestionable la valoración histórica del gran portugués, como un revolucionario que marcó la lucha de su pueblo en el siglo XX En estudio redactado en la prisión a principios de los años 50 están ya muy claras las concepciones marxistas-leninistas sobre el poder, sobre el declive de un modo de producción y de las incesantes contradicciones que gestan la transformación revolucionaria, tal y como lo prevé Marx en el 'Prólogo a la contribución de la crítica de la economía política'; sobre la agudización del conflicto socioclasista y la madurez de la crisis y sobre la dialéctica revolución/contrarrevolución. Tales concepciones son desarrolladas

a lo largo de la política del Partido Comunista Portugués y en varias obras firmadas por Cunhal, como 'La cuestión del Estado, cuestión central de cada Revolución'. Bajar texto completo en: http://www.lahaine.org/b2-img13/pavel_cunhal.pdf

DR. PABLO GONZALEZ CASANOVA

Oficio núm. PGC-249/2013

A los colaboradores e integrantes del Consejo Editorial del sitio “Conceptos y Fenómenos Fundamentales de Nuestro Tiempo” El próximo 9 de agosto se abrirá al público el sitio electrónico “Conceptos y Fenómenos Fundamentales de Nuestro Tiempo”. A partir de ese día se podrá consultar en la siguiente dirección: http://conceptos.sociales.unam.mx/ En espera de sus comentarios, le saludo cordialmente. PABLO GONZÁLEZ CASANOVA

MODERNIDADES ALTERNATIVAS El presente dossier explora realidades múltiples, que conllevan densidades temporales e históricas diversas, desde el mirador crítico que nos impulsa a pensar una modernidad no capitalista. La editora de este Dossier retoma la idea, sin duda provocadora, planteada por el pensador ecuatoriano Bolívar Echeverría, en el sentido de que es posible imaginar una modernidad no capitalista, y que lo que nos da derecho a ese atrevimiento es sin duda, que la modernidad no es lo monolítica que nos dicen que es, que en la historia ha habido más de un proyecto de modernidad, y que finalmente, la modernidad “realmente existente” no debe de ocultar la potencia del presente siendo un otro mundo posible . Los ensayos que presentamos exploran desde muy diversas perspectivas esto que estamos denominando modernidades alternativas, experiencias, prevalencias y emergencias, que actualizándose, contraponen un sentido común diverso al instituido por el hecho capitalista. Un sentido común no atado a la acumulación del valor valorizándose. Desde la economía, la política, la vida cotidiana, los ensayos que presentamos, así como el libro que reseñamos, exploran este horizonte abierto, el de las alternativas a la modernidad capitalista, dentro de un momento de extrema crisis civilizatoria. Este dossier es producto del Proyecto de Investigación “Modernidades alternativas y nuevo sentido común: anclajes pre- figurativos de una modernidad no capitalista”, del “Programa de Apoyo a Proyectos de Investigación e Innovación Tecnológica (PAPIIT)”, IN 306 411, adscrito al Centro de Estudios Latinoamericanos (CELA) de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Fuente: Pacarina del Sur

Baje revista completa aquí http://www.pacarinadelsur.com/editorial/781-modernidades-alternativas

PABLO GONZÁLEZ CASANOVA PRESENTÓ CONCEPTOS Y FENÓMENOS FUNDAMENTALES DE NUESTRO TIEMPO LANZA LA UNAM SITIO WEB, PRÓXIMO PARADIGMA EN EL DEBATE DE LAS IDEAS Su creación comenzó en 2007, con el fin de facilitar la selección de lecturas especializadas en ciencias sociales Será posible el diálogo y el debate con los usuarios Entre los integrantes del consejo editorial están Carlos Aguirre Rojas, Miguel Concha, Carlos Fazio y Marcos RoitmanSu creación comenzó en 2007, con el fin de facilitar la selección de lecturas especializadas en ciencias sociales Será posible el diálogo y el debate con los usuarios Entre los integrantes del consejo editorial están Carlos Aguirre Rojas, Miguel Concha, Carlos Fazio y Marcos Roitman Arturo Sánchez Jiménez Periódico La Jornada Sábado 10 de agosto de 2013, p. 2 El ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Pablo González Casanova presentó el sitio electrónico Conceptos y fenómenos fundamentales de nuestro tiempo, proyecto que se empezó en 2007, cuyo propósito es facilitar la selección de lecturas especializadas a quienes deseen profundizar sobre determinadas ideas utilizadas en las ciencias sociales, el pensamiento crítico y las nuevas ciencias. Acompañado por Rosalba Casas Guerrero, directora del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, sede de la presentación, González Casanova explicó que la página de Internet y sus alcances fueron evolucionado: Era un sitio que buscaba ese vínculo indispensable e ineludible entre las ciencias y las humanidades. Después evolucionó hacia la idea de una especie de diccionario o enciclopedia. De ahí pasamos a pensar en una guía de lecturas para investigadores, académicos y estudiantes que no saben cómo empezar a indagar con el inmenso ruido electrónico y de información que hay en este momento. González Casanova, coordinador del proyecto, detalló que éste puede ser el inicio de una tarea de varias generaciones de universitarios, pues la idea de la página es que siga acrecentando el número de artículos y definiciones con las que cuenta al momento de su inauguración, mediante la participación de especialistas, cuyos trabajos serán aprobados por un comité editorial. Rosalba Casas celebró la iniciativa de González Casanova y consideró que este proyecto colocará al instituto en el centro del debate conceptual de nuestro tiempo. El sitio web cuenta con un acervo de artículos escritos especialmente para este proyecto por investigadores nacionales e internacionales, quienes definen el significado, uso y pertinencia de diversas nociones que ayudan a explicar los problemas del mundo. Asimismo, se han recopilado algunos artículos provenientes de otras fuentes especializadas. El consejo editorial de Conceptos y fenómenos fundamentales de nuestro tiempo está integrado por Carlos Aguirre Rojas, Jorge Alonso, Atilio Borón, Dídimo Castillo, Miguel Concha, Ana Esther Ceceña, Arón Cohen,

Carlos Fazio, Enrique Leff, Isabel Rauber, Marcos Roitman, Theotonio dos Santos, John Saxe-Fernández, Rodolfo Stavenhagen y Raúl Zibechi. Foto En la presentación, el ex rector de la UNAM Pablo González Casanova hizo un breve recorrido por el desarrollo y los alcances de InternetFoto Cristina Rodríguez Algunos de los académicos que han participado con definiciones y recomendaciones bibliográficas son Lorenzo Meyer, James Petras, Marcos Roitman Rosenmann, Emir Sader, Immanuel Wallerstein, Elmar Altvater, Guy Bajoit y Graciela Bensusán Areous. Incluso se cuenta con un texto de Carlos Montemayor. Raúl Romero y Anaid Campos, quienes fueron presentados como secretarios académicos del sitio, explicaron a su vez que Conceptos y fenómenos fundamentales de nuestro tiempo cuenta al día de hoy con 200 definiciones hechas por especialistas, 2 mil 500 trabajos principales, 6 mil referencias bibliográficas actuales y generales, que han sido recomendadas por los investigadores que participan en el proyecto. Romero comentó en breve entrevista con La Jornada que se convocará a la creación de un comité editorial. Para ello se emitirá una invitación a todos los investigadores que quieran colaborar. Los académicos que consideren que falta algún concepto y lo quieran incluir, deberán enviar sus propuestas al comité editorial, encargado de la revisión y eventual aprobación de los trabajos para su inclusión en el sitio web. También comentó que cuando los usuarios de la página tengan comentarios u observaciones sobre las definiciones, trabajos o bibliografía que se encuentran compilados, podrán enviar una comunicación vía correo electrónico al autor del texto en cuestión para establecer un diálogo o debate, si es posible. El sitio concentra también, junto con cada definición, ligas a otros trabajos que pueden ampliar, complementar o añadir información a las proposiciones hechas en los textos principales. Igualmente hay enlaces a páginas de otras instituciones de investigación y a diccionarios especializados. El proyecto fue desarrollado con aportación del Programa de Apoyo a Proyectos de Investigación e Innovación Tecnológica IN301911 y del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM. La dirección electrónica del sitio es http://conceptos.sociales.unam.mx

http://conceptos.sociales.unam.mx EEUU: LA FED, ARQUITECTA DEL ESCLAVISMO MUNDIAL x Diana Duque Gómez :: El patriarcado ha desarrollado un sistema liberticida, el mercantilismo, basado en el darwinismo social y en el Estado como instrumento de expropiación El Sistema de Reserva Federal, FED, banco central de Estados Unidos, fue creado el 23 de diciembre de 1913 y cuenta con 12 bancos regionales en todo el país. Es un banco privado cuyos dueños son los Rothschild de Londres y Berlín; la familia Lazard de París; Israel Moses Seif de Italia; los Kuhn, Loeb y Warburg de Alemania y las familias Lehman, Goldman, Sachs y Rockefeller de Nueva York. Este banco no paga ningún impuesto y tiene el monopolio de la emisión de dinero y el poder de prestar dinero con interés al gobierno. Así, al imprimir billetes de banco, la FED transforma, con un mínimo de gasto, papel sin valor en dólares americanos y con ellos hace préstamos a cambio de obligaciones de pago a EE.UU., (entre tanto también a otros países) y a otros bancos. Texto completo en http://www.dianaduquegomez.blogspot.mx/2012/06/la-fed-arquitecta-del-esclavismo_8575.html

RAFAEL CORREA, PRESIDENTE DEL ECUADOR, EXPONE DENUNCIAS SOBRE LA CIA ( USA) Y LA PDI (CHILE) EN CONTRA DE SU PAÍS Y SU GOBIERNO http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=VPLgGfqjxew

LA DUEÑA DE 'YERBABUENA' ROCÍO TORRES, HEREDERA DEL IMPERIO DE LA MINERÍA ILEGAL DE PUNO, ADQUIRIÓ POR US$8 MILLONES FINCA ESPAÑOLA DE TORERO ORTEGA CAN http://agencias.lamula.pe/2013/08/11/la-duena-de-yerbabuena/agencias/ BRASIL, INERME ANTE INVASIÓN CIBERNÉTICA http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2013/08/09/brasil-inerme-ante-invasion-cibernetica/

CONTRATO COLECTIVO DE TRABAJO DE PEMEX, MÁS PRIVILEGIOS A CÚPULA SINDICAL http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2013/08/11/contrato-colectivo-de-trabajo-de-pemexmas-privilegios-cupula-sindical/

MÉXICO: REFORMA FINANCIERA: EL PREMIO A LA BANCA USURERA 7. agosto, 2013 Marcos Chávez * Los señuelos para aprobar la reforma financiera –más y mejores créditos para las familias y las empresas– nunca podrán alcanzarse, pues dos de las condiciones requeridas están canceladas con el actual modelo económico neoliberal: la intervención del Estado y la igualdad de circunstancias de los competidores en el mercado. En tanto, la propuesta sí otorgará mayores facultades para presionar y exprimir a los usuarios de una banca usurera, extranjerizada y ajena a los intereses de http://contralinea.info/archivo-revista/index.php/2013/08/07/reforma-financiera-el-premio-la-bancausurera/

URUGUAY...LA OPCIÓN DEL FRENTE ESTA ENVEJECIENDO A PASOS AGIGANTADOS http://www.elpais.com.uy/informacion/fa-militantes-base-mas-anos.html

HACIA LA METAMORFOSIS : DEL PENSAMIENTO ANTROPOLÓGICO A LA NOOSFERA

por Susana Merino http://www.elcorreo.eu.org/Hacia-la-metamorfosis-del-pensamiento-antropologico-a-la-noosfera

¿LA PODEROSA IGLESIA DEL VATICANO, ALIADA DE EEUU Y LA OTAN, NEUTRALIZÓ Y “SE TRAGÓ” A LA TEOLOGÍA DE LA LIBERACIÓN? ¿NUEVAMENTE GANÓ LA HEGEMONÍA DE LOS PODEROSOS? http://www.rosa-blindada.info/?p=2433

****** LES AGRADECEMOS LA VISITA QUE NOS HACEN, ES GRATO RECIBIRLOS CON LA INFORMACIÓN SELECCIONADA PARA QUE USTED ESTÉ BIEN INFORMADO Y PUEDA UTILIZAR LAS FUENTES QUE SISTEMATIZAMOS UN ABRAZO AFECTUOSO

COORDINADORES: ROBINSON SALAZAR Y NCHAMAH MILLER

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