UNIVERSIDAD RAFAEL URDANETA VICERECTORADO ACADEMICO FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS ADMINISTRATIVAS Y SOCIALES. ESCUELA DE PSICOLOGÍA
OS D A RV
E S E SR O H C E R DE
ESTILO DE CRIANZA Y CONDUCTA DISRUPTIVA EN NIÑOS EN EDAD ESCOLAR.
Trabajo Especial de Grado para optar al Título de Psicólogo realizado por:
Autora: María Laura Arias Sánchez Tutora Mgs. Adriana Fernández
Maracaibo, diciembre 2007
I
OS D A RV
E S E SR O H C E R DE
ESTILO DE CRIANZA Y CONDUCTA DISRUPTIVA EN NIÑOS EN EDAD ESCOLAR.
Trabajo especial de grado presentado por: _____________________________ María Laura Arias Sánchez CI: V-18. 631.982
II
DEDICATORIA
A Dios por darme fuerza en los momentos difíciles cuidarme y ayudarme
OS D A RV
cuando más lo necesito y a mi Angelito de la Guarda, por estar siempre conmigo
E S E R en mi vida y apoyarme en los Ssiempre A mi mamá, mi papá por estar O H Ctan buenos. Por ser el pilar fundamental que guía mi E R momentos buenos y no DE
camino y por enseñarme a como ser feliz. Gracias por su amor. Comprensión y hacerme sentir una persona especial. Los Amo
A mis queridas hermanas Mariel y Maria Elena, por brindarme apoyo y cariño incondicional.
A mis tías Elsa y Rita, por su inmensa paciencia y ayuda desinteresada a portada a lo largo de toda mi vida. Gracias por estar pendiente de mi y consentirme tanto.
A mis abuelitos por darme un lugar especial en su corazón y por tantas bendiciones
A mi súper amiga Rubielin, por estar conmigo durante toda la vida, por ayudarme, soportarme y aguantarme todos mis despistes y estreses. Te Quiero Mucho
A mis amigas que estuvieron presentes en los momentos más significativos de mi carrera, a Eritney, Ersy, Nathilla, Andre y Maritza.
Y a todas aquellas personas que de una u otra forma han dejado una huella en mi vida y han contribuido a lograr esta meta tan preciada. III
AGRADECIMIENTOS
A Dios por darme la mano para salir adelante en todo momento A mis profesores que siempre estuvieron ahí incondicionalmente para cumplir con esta meta tan anhelada.
OS D A Gilberto Zuleta. Por ayudarme en todas las dudas, RV por su paciencia y E S E R comprensión. S HOsu valiosa colaboración y a los niños por ser C A las Instituciones por prestar E DER A mi tutora Adriana Fernández, por ayudarme en lo que necesita. A Prof.
fuente de inspiración para esta investigación.
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ÍNDICE GENERAL TITULO DEDICATORIA ADRADECIMIENTO ÍNDICE GENERAL INDICE DE CUADROS INDICE DE TABLAS INDICE DE ANEXOS RESUMEN
OS D A RV
E S E SdelRProblema Planteamiento y Formulación O H C Objetivos de laE Investigación R Objetivo DE General
CAPITULO I: FUNDAMENTACIÓN
Objetivos Específicos Justificación de la Investigación Delimitación de la Investigación
Pág. II III IV V VII VIII IX X
1 6 6 6 7 7
CAPITULO II: MARCO TEÓRICO Antecedentes de la Investigación Bases Teóricas de la Investigación Estilos de Crianza Estilo Nutritivo Medianamente nutritivo Medianamente Restrictivo Restrictivo Crianza Ideal Conductas Disruptivas Causas de las Conductas Disruptivas Problemas de Comportamiento Mapa de Variables
9 14 14 18 21 23 26 29 32 35 47 54
CAPITULO III: MARCO METODOLÓGICO Tipo y nivel de Investigación Diseño de la Investigación Sujetos de la Investigación Población Muestra Investigadores Definición Operacional de las Variables Técnicas de Recolección de Datos Descripción del Instrumento Propiedades Psicométricas Procedimiento Consideraciones Éticas V
55 55 56 56 57 57 57 58 58 60 61 62
CAPITULO IV: RESULTADOS Y DISCUSIÓN Análisis y Discusión de los Resultados Conclusiones Limitaciones Recomendaciones REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS ANEXOS
64 70 71 72
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73 75
INDICE DE CUADROS
Pág. 54 57
Cuadro Nº 1: Mapa de Variables Cuadro Nº 2: Población
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INDICE DE TABLAS Pág. Tabla Nº 1: Estadística Descriptiva sobre las frecuencias de los Estilos de Crianza en los grupos estudiados
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Tabla Nº 2: Prueba de Chi cuadrado sobre estilos de Crianza
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Tabla Nº 3: Estadística Descriptiva sobre las conductas disruptivas de los grupos estudiados
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E S E R el coeficiente de correlación Tabla Nº 4: Estadística Descriptiva OSsobre de pearson entre lasCDimensiones de la Variable Conductas H E Disruptivas DER Tabla Nº 5: Estadística Descriptiva sobre el coeficiente de correlación de pearson entre las variables estudiadas.
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INDICE DE ANEXOS
Anexo A: Instrumento para la recolección de los datos
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IX
Pág. 98
REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS ADMINISTRATIVAS Y SOCIALES. ESCUELA DE PSICOLOGÍA
RESUMEN ESTILO DE CRIANZA Y CONDUCTA DISRUPTIVA EN NIÑOS EN EDAD ESCOLAR.
OS D A RV
E S E SR O H C E R DE
Autora: Arias María Laura Tutora: Psic. Adriana Fernández Fecha: Maracaibo, Diciembre 2007
El presente estudio tuvo como objetivo establecer la relación entre los Estilos de Crianza y Conductas Disruptivas en Niños en Edad Escolar; identificando los estilos de crianza y conductas disruptivas, posteriormente se correlacionaron ambas variables. Se realizó una investigación descriptiva, de campo, correlacional y no experimental, con una población de setenta (70) personas, ubicando la misma en dos Unidades Educativas, una pública “15 de Enero” y una privada “Nuestro Samán”; se utilizó un muestreo no probabilístico, siendo intencionada y razonada la muestra. Para la variable Estilos de Crianza se utilizó el instrumento Reporte de prácticas de Crianzas de Blok Modificado (CRPR), de Rickel & Biasatti, (1982). En la variable Conducta Disruptiva se empleó el cuestionario sobre el comportamiento de niños, en su versión para padres (CBCL) por Achenbach (1991). Los estadísticos exhibieron como resultado que los niños con conductas disruptivas, tienden a poseer padres con estilos de crianza restrictiva. Se recomendó continuar con una línea de investigación que amplié la conducta de los niños asociado a otra variable.
Descriptores: estilos de crianza, conductas disruptivas Correo electrónico:
[email protected]
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CAPITULO I
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FUNDAMENTACIÓN
E S E SR O H C el lugar por excelencia en donde los niños aprenden a E La familia R constituye DE Planteamiento y formulación del problema
comportarse consigo mismos y con los demás, es decir, es un agente de socialización infantil. Tomando en cuenta la opinión de Arés (2002), el funcionamiento psicológico supone una continua interacción entre la conducta y las variables del organismo (personales) y las ambientales (familiares, con énfasis en la conducta paterna referida a la crianza y al cuidado), de esta manera
con
el
término
interacción
se
hace
referencia
a
la
mutua
interdependencia de los elementos. Es por ello que existe un interés a nivel mundial, por investigar acerca de los patrones de crianza de los niños y cómo influyen en la formación de su conducta. La conducta del niño; formadora de su personalidad, se explica en función de sus características personales, de las variables de la situación y sobre todo de la interacción entre dichos aspectos personales y situacionales. En el transcurso del último cuarto del siglo XX, según Aguirre (2002), ha crecido el número de investigaciones encaminadas a identificar los estilos de crianza, como el conjunto de acciones, sentimientos y actitudes que los padres manifiestan hacia sus hijos en diferentes grupos culturales; se encuentran 11
estudios de carácter longitudinal, descriptivos, clínicos, transculturales, entre muchos otros. A través de la investigación de los estilos de crianza (Baldwin, 1955; Schaefer, 1959, 1988; Becker, 1964; Block, 1970; Baumrind, 1971; Maccoby & Martin, 1980; Darling & Steinberg, 1993), se han identificado dos dimensiones
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importantes, el soporte emocional y la regulación del comportamiento, sobre las
E S E SR O H Cautoritario, con autoridad, prácticas concretas: E R DE
cuales se pueden describir cuatro estilos de crianza básicos, que organizan las permisivo o indulgente y
negligente.
Ahora bien, en una familia donde escasamente se satisfacen las necesidades básicas de sus miembros, donde muchas veces el padre no asume ninguna obligación y, si lo hace, es a través de patrones de crianza rígidos, agresivos o autoritarios; donde la madre puede estar físicamente en el hogar, pero sin disfrutar de las relaciones con sus hijos, donde no existan decisiones asertivas, no se valoran las actividades intelectuales ni los logros académicos de los niños, difícilmente pueden propiciar que sus hijos se desarrollen como individuos insertos dentro de un contexto social que exige un comportamiento con normas y límites para poder avanzar hacia el éxito. En Venezuela,
Salinas (2007), publicó un
artículo de la prensa del
periódico “El Nacional” donde expone que existen muchas ideas sobre cómo criar a los niños, el autor plantea que algunos padres adoptan las ideas que sus propios padres usaron en los estilos de crianza, otros buscan consejos de sus amigos, algunos leen libros sobre cómo ser buenos padres, otros toman clases ofrecidas en la comunidad, sin embargo, los psicólogos y otros científicos
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sociales ya saben cuáles prácticas de crianza son más eficaces y tienen más probabilidad de llevar a resultados buenos para los niños. Dentro de este marco, se puede inferir que la manera particular que tienen cada familia de criar, enseñar, guiar, orientar, puede influir en los que será el niño en el futuro, la responsabilidad que tienen en sus manos como
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progenitores, dentro de una pequeña sociedad que se llama familia, la cual
E S E SR O H C alcanzando ser un sujeto productivo, dentro de ella extensa llamadaR sociedad, E DE
moldea al sujeto que dará su interacción y desenvolvimiento en otra familia más
con un desarrollo óptimo o ser un individuo que amanece dentro de su entorno etiquetado como antisocial por presentar conductas disruptivas. Así mismo, es a través de la crianza como los padres pueden comunicar a los niños las diferentes exigencias sobre las actividades cotidianas y la importancia que tiene su cumplimiento para la vida familiar, constituyéndose en un medio apropiado para influir sobre el comportamiento infantil, ya controlando algunas conductas o impulsando otras. En este sentido, la
crianza hace
evidente una atmósfera marcada por distintas actitudes, sentimientos, creencias y conductas específicas de los adultos, cuando éstos, de una u otra forma, están comprometidos con la orientación de las acciones de los niños. En consecuencia, a través de este medio se transmiten tanto los valores como las formas de pensar y de actuar que tendrán fuertes repercusiones en el futuro de los niños, facilitando u obstaculizando su incorporación en la sociedad. No resulta extraño, pues, que muchos estudios, según Bianco (1998), se han dedicado a buscar la etiología y las causas de las conductas desviadas y de la delincuencia, relacionándolas con la familia y la educación que se está dado a
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los hijos como uno de los factores explicativos de los posibles comportamientos conflictivos posteriores. Dentro de estas ideas, Papalia (2000), afirma que los niños presentan una variedad de respuestas tanto físicas como emocionales que les da un sentido de
OS D A resultan más difíciles de consolar, que cuentan RVcon patrones irregulares de E S E R S alimentación y de sueño y que reaccionan de manera inusual con ira intensa o O H C E a situaciones de frustración o de dolor, pueden llegar a R E enojos incontrolables D seguridad. Lo más probable es que aquellos bebés que desde su nacimiento
presentar un trastorno de la conducta. Los niños y los adolescentes con conductas inadecuadas parecen estar fuertemente influidos por sus experiencias familiares. Ante tal evidencia Arés (2002), asegura que son contadas las ocasiones en que se puede ver todos los elementos de estilo de crianza y conductuales interactuando entre sí; un niño inconsolable el cual no puede regular sus horas alimenticias ni su patrón de sueño o que fácilmente pierde la paciencia y es berrinchudo sin ningún motivo aparente; es un caso el cual puede convertir a una buena madre en un cúmulo de nervios que pierde fácilmente la paciencia. Por ello la incapacidad parental para brindar seguridad y confort a un niño en edad infantil, puede desencadenar o ser el gatillo de abusos por parte de los padres quienes deberían mostrar mayor control con el niño. Sin embargo es importante reafirmar que por ningún motivo significa esto que aquellos bebés que presentan dificultades en su desarrollo, terminarán con un trastorno de conducta. Además, los padres de pacientes con este tipo de trastornos han descrito a sus hijos como tranquilos y estables. Lo cierto es que la reacción y la 14
manera de conducirse por parte de los padres ante estas reacciones intensas de sus hijos también juegan un papel importante. Al respecto Bianco (1998), afirma que padre, madre o las personas que desempeñan el rol protector de un niño, como los abuelos o tutores legales,
OS D A familia, en términos de autoridad y apoyo afectivo. RVPor lo tanto, quienes ejercen E S E R S los roles parentales, deben estar de acuerdo respecto a los objetivos que O H C Ey las normas bajo las cuales éstos podrán organizar sus R E desean para su hijo D necesitan comprender que deben actuar como una unidad para dirigir una
actividades y establecer sus valores, porque de esta forma el niño va forjando su personalidad. En consecuencia, el comportamiento de los padres puede tener dos significaciones para el niño, si es violento o agresivo el niño se acostumbrara o adquirirá patrones similares; pero si es asertiva u operativa igualmente la imitará. Al respecto Vázquez (2005), en una investigación desarrollada en Maracaibo, Estado Zulia comprobó que existe una relación positivamente fuerte entre los variables estilos de crianza y conductas disruptivas, lo cual indica que la agresividad en los niños puede ser un indicio de que haya un estilo inadecuado de crianza. Esta
situación
se
agudiza
cuando
el
niño
presenta
problemas
conductuales: es muy activo, tiene bajo nivel de atención, problemas de aprendizaje, todos ellos están relacionados a la formación de su personalidad. Por lo tanto, el acuerdo entre los padres debe ser más consistente entre ellos.
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Estas situaciones anteriormente descritas son observables en Maracaibo, Estado Zulia, dentro de instituciones educativas tanto públicas como privadas, se observan niños con
conductas disruptivas e inadecuadas y los padres
parecieran carecer de normas de conductas para llevar a estos niños hacia la manejo asertivo en el estilo de crianza. En indagaciones anteriores e informales
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por la autora de esta investigación en dos escuelas primarias una pública y otra
E S E SR O H normas del salón deC clases y a la docente, poco entusiasmo por estudiar y E R E D
privada se observaron en los alumnos los siguientes síntomas: desacato a las
realizar actividades, peleas entre compañeros.
Al interrogar a los docentes de estas aulas observadas, ellas manifestaron que la mayoría de los niños que demuestran estas conductas inadecuadas, pareciera que los padres no les ofrecen la atención necesaria, generalmente no asisten a los llamados del docente y cuando asisten manifiestan no poder controlar la conducta de sus hijos. Ante la observación de tales situaciones se desarrolla la presente investigación a través de la siguiente interrogante: ¿existe relación entre los Estilos de Crianza y las Conductas Disruptivas en niños en edad escolar?
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Objetivos de la Investigación Objetivo General Establecer la relación entre los Estilos de Crianza y Conductas Disruptivas en Niños en Edad Escolar
S O D A Objetivos Específicos RV E S E R S HdeOCrianza en padres de niños en edad escolar Identificar los Estilos C E DER Identificar las Conductas Disruptivas en niños en edad escolar Determinar si existe relación entre los Estilos de Crianza y
Conducta
Disruptivas en niños en edad escolar. Justificación de la Investigación Esta investigación está encaminada a ofrecer información relevante que pueda ofrecer si existe relación entre los estilos de crianza y las conductas disruptivas presentadas por niños en edad escolar, para considerar sí estos estilos de crianza son un posible factor contribuyentes a estas conductas. El investigar esta problemática presenta relevancia científica, debido al impacto que puedan tener los resultados de esta investigación, los cuales puede servir de apoyo a nuevas investigaciones las cuales seleccionen las mismas variables y profundicen en el tema. Esta investigación se justifica socialmente por que le proporciona a los psicólogos información relevante sobre la realidad acerca de la relación entre los estilos de crianza y las conductas disruptivas, con la finalidad de crear 17
campañas de prevención, charlas sobre como evitar esas conductas dentro del hogar. En la práctica esta investigación se justifica al establecer la relación mediante procedimientos estadísticos entre los Estilos de Crianza y las Conductas Disruptivas en niños en edad escolar.
OS D A estudio justifica su relevancia contemporánea,R yaV que proporciona información E S E R S pertinente sobre la importancia en l calidad de las relaciones entre padres e O H C E R E hijos y la conducta D de éstos, las cuales establecen los futuros ajustes sociales. Con base en los resultados obtenidos en la presente investigación, el
Delimitación del Problema El ámbito de estudio de la presente investigación es el área de Psicología Clínica específicamente en el área Infantil, fue desarrollada en dos Escuelas: 15 de Enero situada en el Barrio Los Andes, y Nuestro Samán, ubicada en circunvalación 2 en Maracaibo, Estado Zulia de la República Bolivariana de Venezuela. La presente investigación fue realizada desde enero a diciembre de 2007. Para efecto de la delimitación temática se tomarán en cuenta las teorías sobre Estilo de Crianza restrictivo y nutritivo y Conductas Disruptivas.
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CAPÍTULO II MARCO TEORÍCO Este capítulo está constituido por los antecedentes de la investigación y las bases teóricas que sustentan esta investigación.
S O D A Investigaciones Antecedentes RV E S E R S HO Se encontraron C investigaciones sobre el Estilo de Crianza y Conductas E DER
Disruptivas entre ellas se encuentran: Chacón (2005), realizó una investigación denominada “El maltrato ocasionado por parte de los padres y representantes y las conductas agresivas de los niños de 6to grado”. Fue un estudio descriptivo y de campo, la información se recolectó a través de dos cuestionarios tipo encuesta aplicadas tanto a padres como a niños. La población estuvo conformada por 35 niños y 34 representantes, la muestra quedó representada por el total de la población. El cálculo de confiabilidad de los instrumentos se realizó mediante el coeficiente de Alfa Cronbach, el cual dio como resultado 0.76, confiabilidad alta. La muestra seleccionada aportó la información por medio de respuestas al cuestionario y la misma arrojó los siguientes resultados: en cuanto al maltrato a los niños presenta una incidencia moderada y con relación a las conductas agresivas que manifiestan los niños en el contexto escolar, se evidenció una frecuencia baja. Por estas razones se diseñó una serie de lineamientos para prevenir el maltrato por parte de los padres y representantes y el manejo de agresividad en los niños.
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De esta misma manera, Vásquez (2005), desarrollo un trabajo de investigación titulado “Conducta paterna y Conductas Disruptivas en los niños atendidos en la casa de los niños trabajadores del Municipio Valera”. El presente estudio consistió en una investigación descriptiva correlacional, con un diseño no experimental transeccional, cuya finalidad es terminar la relación entre la
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conducta paterna y los conductas disruptivas manifestada por los niños
E S E SR O H C en las teorías de aprendizaje social de Bandura y del Valera. El estudio se basó E R DE
trabajadores atendidos en la Casa de los Niños trabajadores de Municipio
condicionamiento operante de Skinner y en fundamentos teóricos de tipos de padres de Bianco y Moles. La muestra estuvo conformada por 15 padres y 15 niños trabajadores. Para recolectar la información se utilizó un cuestionario cerrado con cinco alternativas de respuesta, con 29 ítems, dirigido a la variable conducta paterna. La variable conductas disruptivas se exploró a través de los registros de frecuencia realizados por dos expertos. Las conclusiones de este antecedente dice que los comportamientos de los niños residentes en esa casa de cuidados es proporcionada provocada por la conducta paterna. Igualmente, Restrepo (2002), ejecutó un trabajo de carácter descriptivo, correlacional, enmarcado en un enfoque empírico analítico, a cerca de la Influencia de la Comunicación no verbal a la Conducta no Asertiva de 30 alumnos de un liceo nocturno de Medellín Colombia. El propósito fue establecer sí dichos alumnos comunicaban en general, una actitud o emoción negativa o positiva mediante la expresión del cuerpo y sí la posición asumida en el manejo
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adecuado o inadecuado de la conducta no asertiva repercutía en sus relaciones interpersonales. A este tenor, Waynez (2003) realizó en México una investigación etnometológica con el propósito de abordar el estudio de Agresividad en el niño
OS D A referentes, a la luz de un contexto general e integral. RV La población investigada E S RE S estuvo constituida por un O grupo de alumnos de quinto grado de la escuela H C E R “División del Norte”, de la Colonia Lázaro Cárdenas, Municipio Maoqui. DE y su relación con el Entorno Familiar y desde un enfoque interpretativo de estos
Entre las principales conclusiones de estudio , pueden mencionarse: (a) el niño agresivo presencia en su hogar actos de violencia ; (b) existen una marcada subordinación del rol femenino con respecto al masculino: a las niñas se les prepara para el rol de ser madre y ama de casa dando prioridad a este aspecto por encima del rol profesional; a los niños se les impulsa para que salgan, practiquen algún deporte y jueguen a las “luchas” o la “box”, porque tienen que aprender a defenderse. Esto hace que los niños presente con mayor frecuencia comportamientos de agresividad que las niñas; y (c) el aspecto económico repercute en la actitud que los padres permanentemente tienen y en el trato que brindan a sus hijos; los problemas económicos repercuten negativamente en las relaciones de los padres con los hijos. El autor recomienda ofrecer una educación a los padres que los oriente sobre como deben tratar a sus hijos; asimismo, sugiere frenar el fenómenos de la agresividad en los escolares mediante la intervención de la instancias encargadas de proteger la integridad familiar, entre ellas la escuela, donde los niños permanecen gran parte del tiempo, y quien puede contribuir a hacer los 21
padres conscientes de la influencia que tienen en los comportamientos agresivos de los hijos, pues los mismos no se dan cuenta muchas veces del trato que les brindan y de la violencia que en ocasiones ejercen frente a sus descendientes.
OS D A V los Padres de Nivel Socio Disruptivas de niños ocasionada por la Crianza Rde E S E R S Económico Bajo de Villa Salvador”, en el cual se tuvo como objetivo identificar, O H C RE descubrir D y E comparar los grados de agresividad infantil en niños de niveles En (2003), Espinosa y otros, llegaron a cabo un estudio titulado “Conductas
socioeconómicos bajos, ocasionado por la crianza. La muestra estuvo conformada por 88 niños: 44 varones y 44 mujeres, cuyas edades fluctuaban entre 6 y 8 años, de 1ª, 2ª y 3ª grado de educación primaria, en un colegio de Villa, El Salvador. El muestreo fue no probabilística de tipo intencional. A la muestra de niños o niñas se les aplico el Test de Historias Visuales para infantes elaborado por los mismos investigadores. A los resultados se les aplico el análisis de frecuencia, la media, la moda y el CHI cuadrado. Se concluyó que coexisten diferencias significativas de agresividad infantil entre varones y hembras, por cuanto los promedios de los varones (27.57%), como el de las niñas (26.57%) alcanzaban niveles de agresividad grave ocasionada por la crianza de los padres. Los resultados de este antecedente reflejan que la agresividad no es exclusiva de un determinado sexo y esta presente en niños y niñas de estratos sociales bajos. Ello representa un aporte para el presente estudio, por cuanto en el mismo se investiga la presencia de conductas agresivas en poblaciones agresivas de ambos sexos, los cuales están presentes dentro del aula. 22
En este orden de ideas, Pineda (2003), realizó una investigación en el Centro de Investigaciones Psiquiatricas y Psicológicas de Venezuela, cuyo título fue “Programa dirigido a los docente para disminuir y/o eliminar los conductas disruptivas agresiva en el niño”, el objetivo de la investigación fue identificar las conductas agresivas de los niños en el ambiente escolar y familiar y los factores
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relacionados con esas conductas, con el propósito de diseñar un programa
E S E SR O H C disminuir y/o eliminar las conductas agresivas en niños cursantes de la II etapa E R E D
dirigido al docente para capacitarlo en el manejo de estrategias dirigidas a
de educación Básica en la U.E. Dr. Antonio Fernández del estado Táchira.
El estudio se realizó en la modalidad de proyecto factible, apoyada en una investigación de campo y descriptiva, ejecutado en cuatro fases: diagnóstico, en la cual se recopiló información a través de cuestionarios válidos, con una magnitud muy alta (alumno 0.94, docentes 0.95 y padres 0.88), una muestra de 20 niños, 18 padres y 6 docentes. Los resultados evidenciaron presencia de conductas agresivas directas, indirecta y contenida en niños, tanto en el ambiente escolar como familiar, determinándose también, poco control en el manejo de emociones por parte del niño, factores desfavorables en el ambiente educativo para el manejo de conductas agresivas de los alumnos y aspectos desfavorables en el hogar que contribuyen a la aparición de estos comportamientos. Se diseñó un programa dirigido a modificar la conducta agresiva de los alumnos estructurado en dos partes: disminución y/eliminación de la conducta agresiva y prevención de la conducta agresiva. En cada una de ellas, se ofrecen contenidos generales y un manual como guía para que el docente pueda 23
intervenir en el proceso de ayuda al niño en la modificación y prevención de los comportamientos agresivos, siendo este manual un referente para la presente investigación. De igual forma, Morales (2001), investigó en el Centro de Investigaciones
OS D A V de orientación dirigido a padres e hijos, con el objetivo de diseñar un Rplan E S E R S padres, como alternativa para mejorar la comunicación asertiva. Para tal fin, O H C E descriptiva y de campo, aplicando los cuestionarios de R E ejecutó una investigación D Psiquiatricas y Psicológicas de Venezuela, los procesos comunicacionales entre
preguntas cerradas: uno a una muestra de 6 padres y otro a 12 niños. Los resultados evidenciaron en ambos grupos dificultad para ser aceptados en sociedad y para aceptar ser juzgados por sus comportamientos (temor a la crítica). Así como también dificultades para controlar las emociones ante situaciones sociales estresantes. Se ofreció un plan de acción estructurado en cuatro talleres dirigidos a mejorar los procesos comunicacionales asertivos en las relaciones docente – alumno y alumno – alumno. Estos antecedentes son significativos para la presente investigación ya que constituyeron un referente de investigaciones anteriores sobre las variables seleccionadas para ser estudiadas. Igualmente confirman la necesidad de trabajar con las variables estilos de crianza y conductas disruptivas, puesto que ambos son elementos importantes y decisivos en el desarrollo de la personalidad de los niños en edad escolar. En importante destacar que los procedimientos y resultados de dichas variables en estas investigaciones seleccionadas como antecedentes, muestran la relación existente entre ellas, verificando la necesidad de investigación de las mismas en otra población. 24
Bases Teóricas de la Investigación Estilos de Crianza Se puede definir el estilo de crianza según Arés (2002), como el conjunto de acciones, sentimientos y actitudes que los padres manifiestan hacia los niños
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y que tomadas como un todo, generan un clima emocional favorable o
E S E SR O H más completa C la complejidad de la E R DE
desfavorable en el desarrollo de los niños. Este concepto permite describir de manera
crianza,
brindando amplia
información frente a la descripción de prácticas particulares y al tiempo que facilita la predicción del tipo de influencia que ejerce la crianza sobre el futuro comportamiento de los niños. Al respecto, se puede señalar que una importante proporción de las experiencias tempranas está constituida por las que el niño recibe a partir de la relación con sus padres. Así, son relevantes tanto la interacción afectiva con ellos, como los estilos de crianza. Según Bianco (1998), el estilo de crianza es una de las frecuentes inquietudes de los padres, esta referida a qué estilo aplicar en cuanto a la crianza de sus hijos. En este ámbito, las opiniones oscilan entre los modos más permisivos y los decididamente represivos. Ambos extremos son negativos, y la mejor opción será tender a un equilibrio entre ambos estilos. Está comprobado que el exceso de permisividad puede ser tan nocivo como la represión exagerada, ya que ambos deslegitiman a los padres, fomentan las conductas de riesgo y traen dificultades del desarrollo psicológico. Es fundamental la coherencia y concordancia entre ambos padres a la hora de aplicar normas de conducta. 25
En este campo la tarea consiste en agrupar en categorías más integradoras las acciones, sentimientos y actitudes específicas, lo cual da como resultado la descripción de dimensiones sobre las cuales se representan los comportamientos de los padres. Estos agrupamientos expresan los objetivos y el tipo de influencia de las acciones relacionadas con la crianza. En cuanto a las
OS D A RV
prácticas de crianza Morris (2001), explica en éstas se expresan las prácticas
E S E SR O H el comportamiento deC sus hijos. E R E D
propiamente dichas, las pautas y las creencias, de los padres cuando orientan
La práctica es lo que efectivamente hacen los adultos encargados de
criar a los niños, y que en general, como lo afirma Aguirre (2000), son acciones encaminadas a garantizar la supervivencia del infante, favorecer su crecimiento y desarrollo psicosocial, y facilitar el
aprendizaje de conocimientos que le
permitan reconocer e interpretar el entorno que le rodea. La pauta tiene que ver con el canon que dirige las acciones de los padres, con el orden normativo que dice al adulto qué se debe hacer frente al comportamiento de los niños. Finalmente, la creencia se relaciona con las explicaciones que dan los padres sobre la forma como orientan las acciones de sus hijos. Los estilos de crianza se tratan de un conocimiento básico del modo en que se deben criar a los niños; son certezas compartidas por los miembros de un grupo, que brindan fundamento y seguridad al proceso de crianza. Como lo afirman Castro y otros (2003) se trata de explicaciones de por qué las pautas y prácticas son como son o como deberían ser. Vinculado al concepto es cierto que mamá y papá son dos personas diferentes, pero deben hacer un esfuerzo por acercar sus posiciones respecto a la crianza, ya que ellos constituyen la principal imagen de ascendiente, y la no 26
concordancia traerá consigo la confusión o la manipulación. Tan importante como lo anterior, es la consistencia en el tiempo en cuanto a las normas aplicadas: no es adecuado que un mismo hecho un día se castigue y otro se deje pasar, ya que no se estará dando una señal clara de lo que es bueno y malo. Mientras el niño no haya internalizado las normas de comportamiento y
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los principio que regirán sus actuar moral (el escoger entre una opción u otra),
E S E SR O H C E R E por lo general proceden de diferentes maneras con sus hijos. Los D padres
basará sus actos en el temor a los castigos o en el conseguir un premio.
Aunque cada autor los nombra los distintos tipos e paternidad de forma diferente, todos representan las mismas características. Para Moles, J (2000) ser padres implica una responsabilidad fundamental, un reto que no se debe evadir sino asumir con toda la responsabilidad que corresponde. Según Bianco (1998, p29): “Padre, papa y mama, papa solo, mama solas quien asume la dirigencia familiar o su autoridad y tiene como vehiculo de funcionamiento del ejercicio de la constante deque se denomina Binomio autoridad / Afecto, ser padre es aceptación de la criatura al nacer o antes, sea paternidad consanguínea o no, dicha aceptación conduce a la asistencia afectiva o estimulación del afecto (aprender a dar o recibir amor). De allí sus responsabilidades, el ejercicio de aplicación que corresponde a ambos, toma de decisiones, los padres evalúan las situaciones o asumen las responsabilidades. En relación con las implicaciones el psicólogo
Gottman (2004), ha
identificado cuatro estilos de crianza básicos en sus investigaciones sobre las familias y el clima emocional en el hogar. -Los padres que les quitan importancia a las cosas (Despreocupado) 27
-Los padres que desaprueban de todo (Desaprobador) -Los padres que lo toleran todo (Tolerante: “Laissez-faire”) -Los padres como entrenadores de las emociones (Entrenador)
S O D A definidos por los tipos de conducta paterna, según RV Bianco (1998), son los E S E R siguientes: S HO C E DER
La búsqueda de evidencias afirma que los estilos de crianza están
Estilo de Crianza Nutritivo.
En este estilo se encuentran los tipos de conducta paterna como Padres Operativos, Asertivos o Democráticos. Para Bianco (1998), la asertividad permite que padres e hijos puedan expresar adecuadamente lo que piensan o lo que sienten, sin manifestar ansiedad. Para ellos, se recomienda el entrenamiento de técnicas de asertividad, las cuales tratan de la expresión del pensamiento o de la emoción, sin que ello angustie a la persona durante la relación interpersonal. Lo operativo no es criar hijos sumisos o pasivos, sino hijos que se expresen, que conozcan sus deberes y que cumplan con la normativa de la familia, porque en el futuro tendrían que regirse por las pautas de un trabajo, de una institución o de la sociedad en general. Igualmente la asertividad implica que los padres deben cuidarse de no adoptar una conducta extrema con los hijos como conductas permisivas o autoritarias.
La aserción implica proteger los derechos personales de uno
mismo y estrenar ideas, sentimientos y opiniones de modo directo, franco y 28
apropiado, es una forma apositiva de comunicación donde se respeta a sí mismo y al niño o adolescente. Según Bianco (1998), la comunicación es el medio por excelencia que han de utilizar los diferentes integrantes de la familia para alcanzar un objetivo
OS D A existan niveles de satisfacción y felicidad para todos RVlos integrantes. E S E R S HOser verbal o no verbal y social y estará basada en La comunicación puede C E ER D el lenguaje; la no verbal se expresa a través del contacto corporal, proximidad propuesto. Poseer una familia que se exprese de manera funcional y en la que
física, gesto, expresiones faciales, movimientos de cabezas y oculares. Otro estilo de crianza es el padre democrático, él trata de dirigir las actividades de sus hijos en forma racional, presta atención a sus problemas. Es consistente, exigente, respetuoso y está dispuesto a aplicar el castigo limitado. En el mismo orden de ideas, Aguirre (2002), utiliza el término padres con autoridad, pero tienen las características de los padres democráticos. El autor señala que estos padres exhiben confianza en ellos mismos como padres y como personas, son exigentes, pero amorosos con sus hijos, los corrigen cuando es necesario, dándoles razones lógicas para su corrección y no usan el castigo físico. Para Bianco (1998), los padres operativos deben saber comunicarse efectivamente y ser un receptor operativo con los hijos y tal efecto se deben tomar en cuenta dos aspectos fundamentales: -
Saber escuchar: En este sentido para ser un receptor operativo es
necesario: 29
1) Tener la disposición de recibir el mensaje, es decir, de manifestar con la mirada y la postura del cuerpo que se desea escuchar. 2) Tratar de no criticar al emisor, ni a su mensaje y evitar las ofensas. Es preciso, del mimo modo, no sobre estimar ni halagar excesivamente al emisor a
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su mensaje.
E S E SR O H mensaje. C E R DE
3) Mantenerse en una situación de calma y no sobresaltarse al oír el
4) Clarificar las ideas que envía el emisor, es decir, repetir lo que se entendió para verificar el mensaje Saber escuchar es algo muy importante en cualquier relación, aprender a escuchar permite expresar mejor nuestros sentimientos, además factores como el tono de voz, el lugar donde se produce la conversación, el momento del día o el estado de ánimo, influyen para que sea efectiva. Ser padres no es tarea fácil, muchos no saben escuchar y menos aún no saben lo que dicen, la verdadera actitud del que escucha es lograr percibir los sentimientos y las motivaciones del otro, ya que el ser humano tienen la capacidad y la motivaciones de otro, ya que el ser humano tienen la capacidad de ponerse en el lugar del otro y así entender sus sentimientos y respetarlos, esta capacidad facilita el entendimiento y la comunicación. Según Bianco (1998), el binomio autoridad – afecto constituyen las bases del funcionamiento operativo de los padres en la familia, para ello, se considera por separado cada uno de sus componentes: El principio de autoridad es la 30
base o fundamento sobre el cual se apoya una idea aunado a la autoridad que reviste a la persona de poder. Por lo tanto los padres por derecho propio se les otorgan el ejercicio de la autoridad, esta aseveración está en cualquier doctrina de orden familiar. El principio de afecto: los afectos pueden ser agradables como por ejemplo el amor, el cariño, la ternura y la simpatía. O desagradables como el
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odio, la tristeza, la rabia, el rencor y la antipatía.
tal
E S E SR Los padres operativos O deben iniciar la situación de estimulo que provoque H C E del beso diario, las caricias, la palabra afable, el R E respuesta a través D
otorgamiento del premio, la aplicación operativa del castigo, el compartir el dolor o el sufrimiento y el pedir disculpas entre otros. Todo esto permite una respuesta de amor entre padres y los hijos, sobre todo cuando son adolescentes. El clima de cordialidad necesario para el funcionamiento de la familia se logra únicamente con el ejercicio del afecto. Según Castro y otros (2003), los niños de padres democráticos tienden a ser los niños con mejores logros escolares, porque los papás les dedican tiempo en la realización de las tareas escolares, les clarifican las dudas, recompensan las conductas apropiadas y se enfocan menos al castigo físico y solo recurren a él a el cuando consideran muy necesario, y lo acompañan con una explicación, generalmente son los niños más seguros, competentes socialmente, presentan menos agresividad y hostilidad, tienden a ser independientes con una mayor autoestima y autocontrol, son más auto dogmáticos, son más populares, se muestran más satisfechos y tienden a desarrollar satisfactoriamente dentro de la sociedad, siendo son más activos y creativos.
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Estilo de Crianza medianamente Nutritivo. Dentro de este estilo de crianza, según Papalia (2000), se encuentra las conductas de padres según las siguientes características del Padre Demócrata. Los padres demócratas ayudan a los niños a aprender a valerse por sí
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mismos y a pensar en las consecuencias de su comportamiento. Lo hacen al dar
E S E SR O H los niños se portenE deC cierta manera. Hacen seguimiento del comportamiento de R DE
a sus hijos expectativas claras y razonables y al explicarles por qué esperan que
los niños para asegurarse de que cumplan las reglas y expectativas. Lo hacen de una manera cálida y cariñosa. Muchas veces, tratan de pescar a los niños cuando se portan bien para poder reforzar el buen comportamiento, en vez de concentrarse en el malo. Por ejemplo, al niño que deja los juguetes en las escaleras le dicen que no lo debe hacer porque "alguien podría tropezar con ellos y lastimarse o dañar el juguete". Más adelante, los padres involucran a los hijos cuando fijan reglas y hacen quehaceres. "¿Quién va a trapear el piso de la cocina y quién va a sacar la basura?" Los padres que tienen un estilo democrático, según Bianco (1998), ofrecen opciones según las habilidades del niño. Para un niño pequeño, la opción puede ser entre la camisa roja o de rayas. Para un niño mayor, la opción puede ser entre una manzana, una naranja o un plátano. Los padres guían el comportamiento de los niños enseñándoles, no castigándolos. "Le pegaste a Maribel con la camioneta. Eso le dolió. Vamos a guardar la camioneta hasta que puedas jugar con ella de manera segura. 32
Los niños que tienen padres autoritarios tienden a tener logros escolares pobres ya que la presión que ejercen los padres, a través de los golpes y regaños causan en él inseguridad, temor, deprimen la iniciativa y la creatividad y no pueden desarrollarse plenamente sus capacidades, también tienden a tener problemas de hiperactividad y desobediencia. Según Aguirre (2002), los niños
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tienden a ser introvertidos, ermitaños, inseguros, tienen una baja autoestima,
E S E SR O H Ca ignorados. Los niños se vuelven agresivos, hostiles y prefieren ser golpeados E R DE son impopulares, muestran dependencia hacia el padre que los golpea,
las niñas pasivas, introvertidas, inseguras, irritables e inadaptadas sociales. Estilo de Crianza medianamente Restrictivo
Dentro de este estilo de crianza se encuentran los Padres Permisivos; éstos padres ceden la mayoría del control a los hijos. Fijan muy pocas reglas, si es que fijan algunas, y las que sí fijan generalmente no se hacen cumplir de manera uniforme. No quieren estar atados a una rutina. Quieren que sus hijos se sientan libres. No establecen límites ni tienen expectativas claras de comportamiento para sus hijos, y tienden a aceptarlos de manera cálida y cariñosa, no importa la conducta de los niños. Los padres permisivos dan a los niños tantas opciones posibles, aún cuando el niño no sea capaz de tomar una buena decisión. Tienden a aceptar el comportamiento del niño, sea bueno o malo, y no hacen ningún comentario sobre si le beneficia o no. Quizás se sienten incapaces de cambiar el mal comportamiento, u optan por no involucrarse.
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Su actitud fundamental es el desinterés por la educación de sus hijos. Son educadores que no corrigen cuando se transgrede una norma de educación y convivencia, no se inmutan cuando obran mal ni se alegran cuando se comportan bien. En resumidas cuentas, son padres que permiten hacer a sus hijos lo que les de la gana con tal de no complicarse la vida. La consecuencia de
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la educación permisiva será una falta de conciencia de lo que está bien o mal
E S E SR O H C E R Según Papalia (2000), los padres permisivos valoran la expresión de los DE
porque el niño no habrá aprendido a interiorizar ninguna norma moral.
hijos por sí mismos y la autorregulación, exigen poco y permiten que los niños controlen sus propias actividades, consideran que deben ser un apoyo para sus hijos y no un modelo o fijadores de normas, explican las razones de las pocas reglas familiares que existen, consultan las decisiones con sus hijos y casi nunca los castigan, no controlan, no exigen y son relativamente cálidos. Sus hijos tienden a ser inmaduros, sin control. En el mismo orden de ideas, Bianco (1998), refería que el padre permisivo es un padre complaciente que a todo dice que sí, se caracteriza por la poca presencia o firmeza como modelo, como sostén y como autoridad, porque se muestran como una figura débil, floja, insegura y dominable. Sus extremos son ser indiferentes o demasiado complaciente. -Impone pocas o ninguna restricción a sus hijos, por los que muestran un amor incondicional -Son poco exigentes respecto a una conducta madura, utilizan poco el castigo y permiten que el niño regule su propia conducta. 34
-Disponen de una gran libertad y poca conducción. -Los padres esperan que el niño tenga un comportamiento maduro. No establecen límites a su conducta. - En unos casos los niños tienden a ser impulsivos, agresivos, rebeldes, así
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como socialmente ineptos y sin ser capaces de asumir responsabilidades.
E S E R - En otros casos pueden ser activos, capaces de controlar S independientes, O H Calto grado de autoestima. E R la agresividad y con un DE Según los autores planteados,
el padre permisivo,
exigen menos, y
permiten a los niños regir sus propias actividades, no son exigentes, ni controladores, son relativamente cariñosos con sus hijos y casi nunca los castigan. Los padres permisivos se sienten inseguros con su rol como padres, tiene poco control sobre sus hijos y no consideran necesario castigarlos. Según Aguirre (2002), el niño es el que tiene el control y los padres se doblegan ante sus caprichos. Los niños de padres permisivos tienden a ser indulgentes, inadaptados sociales, destructivos, generalmente son los menos auto controlados, tiene logros escolares bajos, agresivos, inmaduros, mentirosos, desobedientes, inseguros, inadaptados, con baja autoestima y frustrados. En ocasiones cuando la permisividad se mezcla con hostilidad puede llevar a los niños a la delincuencia (Castro y otros. 2003). Igualmente dentro del estilo de crianza medianamente restrictivo se encuentra el padre permisivo, el cual es aquel que no impone límites y tampoco 35
proporciona afecto. Se concentra en las tensiones de su propia vida y no le queda tiempo para sus hijos. Si además los padres son hostiles entonces los niños tienden a mostrar muchos impulsos destructivos y conducta delictiva. Para los autores Bandura y Ribes (1994), un padre indiferente es un ciego
OS D A dolorosas de las que no quiere enterarse. Es padre RVque vive en otro planeta, no E S RE conoce a su hijo, no sabe loO queS le ocurre y en consecuencia no se hace cargo. H C E DER y sordo a reclamos de sus hijos sobre todos los adolescentes, a las situaciones
Para este padre, según Bianco (1998), cuando un problema se le impone
él no tiene nada que ver o no puede ser, no lo puede creer, atribuye la acusa al afuera, la culpa es de otros. Estilo de Crianza Restrictivo. Dentro de este estilo de crianza según Papalia (2000), se encuentra el Padre Autoritario, el cual significa imposición inflexible de normas de disciplina, sin tomar en cuenta la edad del niño, sus características y circunstancias. Los padres autoritarios siempre tratan de estar en control y ejercer control sobre los niños. Estos padres fijan reglas estrictas para tratar de mantener el orden, y normalmente lo hacen sin demostrar mucho afecto o cariño al niño. Tratan de establecer normas de conducta estrictas y generalmente son muy críticos de los niños por que no satisfacen los criterios. Les dicen a los niños lo que deben hacer, tratan de hacerles obedecer y normalmente no les dan opciones para escoger. Los padres autoritarios no explican por qué quieren que sus hijos hagan las cosas. Si un niño pregunta sobre alguna regla u orden, quizás el padre le 36
conteste, "Porque yo dije". Los padres tienden a concentrarse en el comportamiento negativo, en vez del positivo, y castigan o regañan a los niños, muchas veces severamente, por que éstos no siguen las reglas. Los hijos de padres autoritarios generalmente no aprenden a pensar por sí mismos ni entienden por qué sus papás exigen cierto comportamiento.
OS D A Su actitud fundamental es la imposición. R La V tendencia autoritaria, rígida e E S E R padres que juzgan continuamente a sus S Son inflexible en su forma de educar. O H C E R hijos, tratando DEde imponer sus puntos de vista con poca sensibilidad frente a los sentimientos de los hijos. Esta actitud no atiende a razones, generando el miedo y la ansiedad e inferiorizando al niño hasta grados insospechados de timidez y agresividad reprimida. Para Papalia (2000), los padres autoritarios valoran el control y la obediencia ciega trata de moldear a sus hijos según un estándar de conducta y los castigan cuando se salen de dicho patrón, se mantienen más alejados de los hijos, los cuales tienden a ser más descontentos, retraídos y desconfiados. Es decir, que estos padres distorsionan el principio de autoridad, confundiéndolo con autoritarismo. Según Bianco (1998), cuando los padres aplican exceso de autoridad o autoridad al cuadrado, atentan contra la libertad de sus hijos y contra e proceso de aprender a manejarla e imprimen una sensación de represión que puede incitar a la sumisión o a la rebeldía. Este tipo de padres, al ejercer excesos de autoridad llegan a ser violentes ya que no aceptan las opiniones, ni derechos de sus hijos.
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Tomando en cuenta la opinión de Aguirre (2002), los padres autoritarios, tratan de controlar el comportamiento y las actitudes de sus hijos y los hacen ajustarse a un estándar de conducta. Valoran la obediencia incondicional y castigan enérgicamente a sus hijos, por actuar en forma contraria a sus estándares. El padre que emplea este estilo se caracteriza por ser absorbente y
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centrar la atención del hijo en sí mismo, produciendo individuos dominados por
E S E SR O H C iniciativa y creación. E R DE
la ley, la autoridad y el orden, reprimiendo en los niños, la capacidad de
Contrastando todos los autores se puede describir a los padres autoritarios, como aquellos que tienen patrones rígidos de conducta, que no toman en cuenta las necesidades de sus hijos, los castigan físicamente sin darles una explicación de por qué los castigan. Al unir las características del padre autoritario, el padre sin amor y el padre posesivo, corresponden al padre autoritario. El padre autoritario es estricto, severo, castiga al niño repetidas veces, por lo que el niño vive en constante temor y zozobra, a menudo en la escuela son pendencieros, desobedientes, problemáticos, nerviosos y temperamentales. Los padres sin amor, castigan al niño enérgicamente, lo critican y regañan constantemente, y tienen una percepción únicamente de las imperfecciones y exigen al niño normas inadecuadas e imposibles de adquirir. Por otra parte los padres posesivos tienen buenas intenciones pero malas normas, no permiten que sus hijos corran riesgos razonables, ni que hagan cosas por ellos mismos. Igualmente dentro del estilo de crianza restrictivo se puede mencionar según Bandura y Ribes (1994), al padre de estilo violento, cuya actitud 38
fundamental es la agresividad. Normalmente ejercen este tipo de crianza aquellos educadores que vivieron su infancia bajo el signo del terror, sometidos a unos padres autoritarios. Son educadores intransigentes y duros hasta el punto del ensañamiento físico. Las consecuencias negativas son evidentes: generan en los niños muchos sentimientos contradictorios, sentimientos de
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rebeldía y hostilidad y problemas para expresar sentimientos.
E S E S Rde Bandura y Ribes (1994), lo que domina a Tomando en cuenta la O opinión H C E R este padre DEen la relación con el hijo es su comportamiento violento frecuentemente acompañado de golpes e insultos. Hasta mediados del siglo XX, la sociedad avalaba los castigos corporales como métodos educativos, actualmente los cambios, la difusión psicológica y la revisión de los modelos de enseñanza generaron una visión diferente, desde la cual la violencia familiar deje de ser considerada un método de crianza válido y pasa a ser un comportamiento desaprobado y en algún caso altamente patológico. Para Bianco (1998) la actitud del padre posesivo es también restrictiva, su condición fundamental es el exceso de protección. Tratan de evitar a toda costa que los niños pasen penas y dolores en la vida. Evitan que sus hijos se esfuercen o enfrenten a dificultades, fomentando sin pretenderlo, sentimientos de inferioridad, dependencia e incompetencia en los niños. En conclusión es difícil encontrar un estilo de crianza “puro” y que es preciso conocer a cada educador en su propia individualidad si queremos ganar la batalla de la educación.
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Estilo de Crianza Ideal
Al hablar del estilo de crianza ideal, los autores coinciden que el padre democrático es el mejor, ya que los niños saben qué se espera de ellos, aprender a juzgar sus expectativas y son capaces de decidir arriesgarse a que
OS D A RV de poder cumplir con las desagradables. Los niños experimentan la satisfacción E S E R S expectativas de sus padres, los cuales tienen una imagen realista de lo que sus HO C E DER sus padres se disgusten, o a que sus actos tengan consecuencias
hijos son capaces de dar.
A diferencia de los beneficios que trae el padre democrático, el padre permisivo no le ofrece orientación, ni disciplina al niño y éste se siente angustiado y deprimido, ya que no sabe de qué forma debe comportarse. Por otro lado los padres autoritarios controlan a los hijos de una manera muy estricta, utilizando el castigo y los golpes, los niños, se sienten inseguros y temerosos, y no saben qué comportamiento provocará una zurra o un castigo. Según Aguirre (2000), el enojo de los padres, la irritación y la impaciencia cuando aplican disciplina, refuerzan la idea de que son castigados porque no son queridos y esto trae consecuencias emocionales de dependencia e inestabilidad emocional.
El autor expone que existen relaciones entre cada
estilo de crianza y un conjunto particular de comportamientos, pero no considera la influencia ejercida por los hijos sobre los padres, por ejemplo, que un niño "fácil" puede originar un comportamiento democrático, mientras un niño "difícil" puede conducir al padre al autoritarismo. En el mismo orden de ideas, Castro y otros (2003), señalan, que ningún padre es autoritario, permisivo o democrático, ya que los padres atraviesan por 40
diferentes estados de ánimo y reaccionan de diversas maneras en situaciones diferentes, adoptando todos los tipos de paternidad. Los autores opinan que lo más importante es que el padre se dé cuenta de que los hijos son seres diferentes a él, con cierta autonomía, con ideales propios y hasta en algunos casos contrarios a lo que él piensa.
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Uno de los problemas más frecuentes que surgen para los padres es
E S E SR O H C2003). El padre puede ser severo e imperioso y la madre crianza (Castro R y otros. E DE cuándo evalúan lo que se debe hacer cuando ellos tienen diferentes estilos de
menos estricta y fácil de tratar, lo mejor en este caso es unirse y manifestarse con lo que se está en desacuerdo en privado. El niño adaptará su comportamiento y madurará en una forma normal cuando aprenda que sus padres se mantienen unidos en asuntos de gran importancia. El niño también se ve afectado cuando falta uno de los padres en el hogar, la madre soltera tiene que asumir ambos roles, y no tiene tiempo para estar con sus hijos, no lo estimula ni les dedica el tiempo suficiente para que tengan un buen desarrollo. El divorcio y el nuevo matrimonio de la mamá, trae cambios en
los niños y puede afectar su desarrollo emocional. El divorcio o separación de los padres, es un acontecimiento patogénico, no por el hecho en sí de la separación, sino por lo que puede significar para el niño, pero si la ausencia física, no va acompañada del abandono afectivo, ellos terminan por asimilar el divorcio como un problema de los padres. Cuando los padres democráticos se divorcian, los niños presentan mejores patrones de comportamiento y tienen menos problemas para relacionarse con otros niños, que los que tienen padres autoritarios o permisivos. Es por ello que
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los diferentes estilos de paternidad, traen consecuencias en la competencia, destrezas sociales y cognoscitivas de los niños. Castro y otros (2003), realizaron investigaciones para ver qué tanto realmente influían los padres en sus hijos, arribando a las siguientes conclusiones: los hijos de padres democráticos, fueron los más competentes,
OS D A RV
mostraron destrezas sociales tales como lograr retener la atención de los
E S E SR O H C afectividad como hostilidad. E R DE
adultos en forma aceptable, utilizándolos como recurso y mostrando tanto
Se llevaban bien con otros niños, estaban orgullosos de sus logros y
deseaban actuar como personas mayores. Entre las destrezas cognoscitivas utilizaban bien el lenguaje, mostrando una serie de habilidades intelectuales, planeando y llevando a cabo actividades complicadas. Los hijos de padres permisivos, eran menos eficaces en estas destrezas y los hijos de padres autoritarios, eran muy deficientes. Los estudios de seguimiento mostraron dos años después una notable estabilidad en la clasificación.
Conductas Disruptivas.
La conducta disruptiva, es una alteración del comportamiento, que a veces es diagnosticada en la infancia, caracterizada por un comportamiento antisocial que viola los derechos de otras personas, y las normas y reglas adecuadas para la edad. Entre los comportamientos disruptivos según Caballo (2000), se pueden citar el aislamiento, quejas somáticas, ansiedad y depresión, problemas sociales, de pensamiento, atención, delincuencias y conducta agresiva. Estos comportamientos a veces se presentan juntos, pero puede suceder que
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aparezca uno o varios de ellos sin estar acompañados por ninguno de los demás. En este orden de ideas Arias (2000), es una condición que se presenta en la niñez e implica problemas de comportamiento duraderos tales como conducta
OS D A Vmuy visibles y presentan un criminales. Los niños con conductas disruptivasR son E S E R S grupo complicado de problemas emocionales y de comportamiento. La O H C E es un mal comportamiento que es serio, repetitivo y R E característica esencial D antisocial, impulsiva o desafiante, consumo de alucinógenos o actividades
persistente. Existen cuatro tipos principales de estos comportamientos: comportamiento agresivo hacia gente o animales, destrucción de propiedad, actos engañosos o de robo, e infracciones serias a las reglas. Para ser diagnosticada la conducta disruptiva, según Arias (2000), un niño tiene que haber demostrado tres o más comportamientos característicos en los últimos doce (12) meses. Por lo menos uno de estos comportamientos tiene que haber sido evidente durante los últimos seis meses. Diagnosticar puede ser un dilema porque los niños cambian constantemente. Esto hace difícil distinguir si el problema es lo suficientemente persistente para que amerite un diagnóstico. En algunos casos, lo que parece ser un trastorno de conducta puede ser un problema de ajuste a una tensión aguda o crónica. Muchos niños que sufren de conductas disruptivas también sufren de trastornos de aprendizaje y casi un tercio están deprimidos. Muchos niños dejan de mostrar problemas de comportamiento cuando reciben tratamiento para la depresión. En la actualidad no existe una definición de los desórdenes de conducta que sea aceptada en términos generales. Hay varias razones que 43
justifican la falta de definición clara: Hay problemas en la medición. No hay acuerdo claro sobre lo que constituye tener una buena salud mental. Las diferentes teorías de las perturbaciones emocionales utilizan su propia terminología y definiciones.
OS D A V diferentes en los diversos las conductas adecuadas son con frecuenciaR muy E S E R S grupos culturales y étnicos. Además, la frecuencia es un aspecto muy O H C E niños que se comportan de forma inadecuada en algunos R E importante; todos los D
La influencia cultural es otro problema. Las expectativas y las normas de
momentos. Y por último, post conductas disruptivas se presentan a veces conjuntamente con otras condiciones de deficiencia y es difícil saber si una condición es causa o consecuencia de la otra. A pesar de, o tal vez a causa de estos problemas, se han realizado muchos esfuerzos para definir las perturbaciones emocionales en los niños. Según Arias (2000), una definición de las perturbaciones emocionales debería idealmente ayudar a identificar con precisión el tipo de niño para que pueda diagnosticar el problema, facilitar la comunicación con los individuos e instituciones que determinan las políticas de educación, administrativas y de fondo para los niños con conductas disruptivas, y ayudar a los investigadores, describiendo de forma precisa y detallada las características de los niños con perturbaciones, de tal manera que los estudios pueden ser replicados y los resultados generalizados. Los niños con perturbaciones emocionales graves se definen como sigue: Una incapacidad de aprendizaje que no se puede explicar por factores intelectuales, sensoriales o de salud. Una incapacidad para construir o mantener 44
relaciones interpersonales satisfactorias con compañeros o maestros. Tipos de conducta o sentimientos inadecuados bajo circunstancias normales. Un permanente estado de ánimo de infelicidad o depresión. Una tendencia a relacionar síntomas físicos o miedos con problemas de la escuela o personales (Arias. 2000).
OS D A A pesar de que la definición especifica RelVtipo de características de E S RE conducta que se encuentra O en S los niños con perturbaciones, es vaga y deja un H C E amplio espacio a la opinión subjetiva de las autoridades que rodean al niño. DER Causas de los Conductas Disruptivas. Los niños o adolescentes que provienen de hogares en desventaja, disfuncionales o desorganizados tienen mayor probabilidad de desarrollar este tipo de conductas. Se sabe que los problemas sociales y el rechazo por parte de sus compañeros contribuyen a la delincuencia. Existe también según Moles (1994), una relación entre el bajo nivel socioeconómico y las conductas disruptivas. Los niños y adolescentes que manifiestan un comportamiento delictivo y agresivo tienen un perfil cognitivo y psicológico que los caracteriza cuando se los compara con niños que tienen otros problemas mentales y con los pertenecientes a grupos de control. Todos los factores posibles influyen en la interacción de los niños y adolescentes con los demás. Las conductas disruptivas, según el autor anterior, ha sido asociadas con conflictos familiares, maltrato infantil, pobreza, defectos genéticos y adicción a drogas o alcoholismo de parte de los progenitores. El diagnóstico es más común entre muchachos y se estima que se presenta hasta en un 10% de ellos. Sin 45
embargo, es difícil saber realmente qué tan común es este trastorno, debido a que las cualidades necesarias para hacer el diagnóstico, tales como "actitud desafiante" y la "desobediencia de las reglas", pueden ser subjetivas. De hecho, para realizar un diagnóstico preciso, el comportamiento tiene que ser mucho más extremo que una simple rebeldía de adolescente o vivacidad juvenil.
OS D A RV
La conducta disruptiva, según caballo (2000), a menudo está asociada con
E S E SR O H Cdel alcohol y otras drogas. Los niños con trastorno de presente dependencia E R DE el trastorno por déficit de atención y ambos conllevan un gran riesgo de que se
conducta tienden a ser impulsivos, difíciles de controlar y despreocupados con
relación a los sentimientos de los demás. A menudo, estos niños mienten y desacatan las reglas sin razón aparente y se involucran en comportamientos antisociales como intimidación y peleas. Diversas teorías y modelos han sido propuestos para explicar la conducta anormal. Sin tomar en cuenta el modelo conceptual utilizado para considerar los desordenes de conducta, se pueden agrupar las causas sugeridas de los desordenes de conducta en dos importantes categorías: psicológica y fisiológica. Factores fisiológicos. En la gran mayoría de los niños con conductas disruptivas no hay pruebas de enfermedad o lesión orgánica, es decir, parecen estar biológicamente sanos. Algunos especialistas como Arias (2000), creen que todos los niños nacen con un temperamento determinado biológicamente, aunque el temperamento innato del niño posiblemente no cause por sí mismo el problema de conducta. Por consiguiente, algunos hechos que no producirían una conducta anormal en un 46
niño con temperamento fácil pueden provocar un trastorno de conducta en un niño con un temperamento difícil. Las posibles causas biológicas son más evidentes en niños con trastornos severos o profundos. Muchos niños autistas muestran signos de desequilibrio
OS D A V y postnatales, trastornos autismo, en donde se incluyen infeccionesR pre E S RESe ha demostrado que la genética juega S cromosómicos y deficienciasO auditivas. H C E R un papel D enE la esquizofrenia infantil. No obstante, incluso cuando existe una neuroquímico y se ha sospechado la existencia de otras causas fisiológicas de
clara deficiencia biológica, nadie ha podido afirmar con certeza si la anormalidad fisiológica es la causante del problema de conducta o si simplemente se relaciona con esta de alguna manera desconocida. (Arias. 2000). La mayor parte de los síntomas fisiológicos que se observan en niños que tienen un trastorno de conducta, según Moles (1994), algunas veces se presentan también en niños que no tienen este trastorno. Sin embargo, en los niños que tienen ADHD, estos síntomas ocurren de forma más frecuente e interfieren con el aprendizaje, el ajuste a la escuela y, algunas veces, con las relaciones del niño con los demás. A continuación se enumeran, según el autor, los síntomas más comunes de las conductas disruptivas. Sin embargo, cada niño puede experimentarlos de una forma diferente. Existen cuatro grupos principales de comportamientos que pueden incluirse en esta clasificación: La Conducta agresiva es la causa o amenaza un daño físico a otras personas y puede incluir: Conducta intimidante. Amedrentar. Peleas físicas.
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Crueldad con otras personas o animales. Uso de armas. Acciones que obligan a otra persona a tener relaciones sexuales; violación o acoso sexual. La Conducta destructora, se puede citar los siguientes tipos de conducta destructora: Vandalismo; destrucción intencional de la propiedad. Incendios intencionales. Falsedad, engaño. Existen distintos tipos de engaño: Mentira.
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Robo. Hurto en tiendas. Delincuencia.
E S E SR O H C problemas médicos o psiquiátricos. Consulte siempre al parecerse a los R de E otros DE
Los síntomas característicos de las conductas disruptivas pueden
médico del niño (del adolescente) para el diagnóstico. Factores psicológicos
Definir que es un trastorno mental, psicológico o emocional, es un problema difícil para la psiquiatría y la psicología clínica. Esa dificultad está relacionada con los distintos criterios que se han utilizado para su definición a lo largo de la historia. Básicamente se refiere a comportamientos que se han considerado "anormales" y que han sido estudiados y clasificados por los profesionales de la psicopatológica (estudio de las causas y clasificación de los trastornos mentales). Históricamente las causas de las conductas disruptivas psicológicas, según Castro y otros (2003), se han buscado fundamentalmente en tres modelos o tradiciones muy diferentes: el modelo sobrenatural, el modelo biológico y el modelo psicológico. El modelo sobrenatural, llamado también demonológico, parte de que los trastornos de la conducta están causados por posesión de espíritus o demonios. En este caso el sacerdote o brujo debía diagnosticarlo y expulsar el mal espíritu mediante un ritual exorcista. 48
La idea de la posesión persiste aún en determinadas culturas primitivas y en ciertas religiones (como la católica, aunque esta trata de distinguir entre posesión y trastorno mental). El modelo biológico se originó en la medicina griega hipocrática, y actualmente se le llama también modelo médico. Parte de la concepción de que los trastornos mentales son enfermedades que tienen una
OS D A RV
causa biológica (bioquímica, genética, física), fundamentalmente relacionada
E S E SR O H C Es el médico especialista en psiquiatría quien lo diagnostica y trata con E R E D
con el sistema nervioso central o el cerebro.
procedimientos médicos, donde destacan los psicofármacos. El modelo psicológico parte de que los trastornos mentales derivan de determinadas experiencias de la persona a lo largo de su vida que se organizan en forma de estructuras mentales, aprendizajes o significados que generan conductas anormales. Seria el psicólogo clínico el encargado de su diagnostico y tratamiento mediante la terapia psicológica (psicoterapia). En la actualidad la mayoría de los psiquiatras y psicólogos clínicos suelen considerar que en los trastornos psicológicos o mentales están implicadas causas tanto biológicas, psicológicas como sociales (son los llamados "modelos multifactoriales", "interactivos" o "psicobiosociales"). Según se hable de que determinado trastorno psíquico concreto, el peso de las causas biológicas, psicológicas o sociales será mayor o menor. También el tratamiento en determinados casos suele ser de tipo "interdisciplinario" requiriendo la intervención coordinada de varios profesionales (psiquiatra, psicólogo clínico, asistente social).
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Los dos sistemas de clasificación de los trastornos psicológicos más utilizados y difundidos a nivel mundial (CIE-10 y DSM-IV) definen a los trastornos mentales de la siguiente manera: La CIE-10 (Décima clasificación de las enfermedades mentales de la Organización Mundial de la Salud de 1993) define a los "trastornos" mentales en
OS D A RV
función de la presencia de determinadas conductas anormales, lo que la
E S E SR O H Cde malestar que presenta la persona-criterio médico. malestar, las señales E R DE
persona hace o dice -criterio psicosocial- o de determinados síntomas de
Por su parte el DSM-IV (Manual Diagnóstico y Estadístico de las Enfermedades
Mentales de la Asociación Americana de Psiquiatría de 2000) define el trastorno mental en función de sus componentes psicológicos (funciones mentales alteradas) y conductual de un cuadro clínico y de las repercusiones biológicas y de malestar que produce. Por
lo
tanto
se
sigue
observando
un
criterio
psicológico,
el
comportamiento anormal, junto con otro médico, la organización en la presentación de los síntomas, el como se relaciona entre si. Los factores psicológicos según Whittaker (1999), implican la existencia de hechos en la vida del niño que afectan su forma de actuar. Los factores psicológicos se consideran importantes en el desarrollo del trastorno de conducta en todos los modelos conceptuales (excepto en la postura estrictamente fisiológica, que tiene muy pocos defensores. Sin embargo, el tipo de hechos considerados importantes y la forma en que son analizados son considerados de forma diferente por los profesionales con diferentes enfoques (por ejemplo, un psicoanalista y un analista conductual. Los dos entornos importantes en que tienen lugar estos hechos son la casa y la escuela. 50
Opina Whittaker (1999), que la relación de los niños con sus padres ejerce una gran influencia en las diferentes formas en que el niño aprende a actuar, en particular durante los primeros años. La observación y el análisis de los modelos de interacción de padres -niño muestra que los padres que tratan a sus niños con amor, son sensibles a las necesidades del mismo, y alaban y prestan
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atención a las conductas deseadas suelen tener niños normales con
E S E SR O H C E R E ConD frecuencia, opinan Bandura y Ribes (1994), los niños agresivos y con
características de conducta positiva.
conductas disruptivas vienen de hogares cuyos padres imponen una disciplina poco consecuente, aplican castigos excesivos y violentos y demuestran poco aprecio por la buena conducta. A causa de la investigación sobre la relación entre prácticas parentales de crianza de los niños y los problemas de conducta, muchos profesionales de la salud mental se han apresurado en causar a los padres de ser los responsables de los problemas de conducta de sus hijos. Pero la relación entre padre e hijo es dinámica y recíproca. En otras palabras, la conducta del niño puede afectar la conducta del padre en la misma medida que ésta puede afectar la conducta del niño. (Bandura y Ribes. 1994). Por consiguiente, no es práctico, como mínimo y en el peor de los casos es equivocado culpar a los padres de las conductas anormales de los niños. En cambio, los profesionales deberían trabajar con los padres para ayudarlos a cambiar de forma sistemática algunos aspectos de la relación padre-hijo en un intento de prevenir y modificar estos problemas.
51
La escuela es el lugar en donde los niños pasan la mayor parte del tiempo aparte de su casa. Por consiguiente, es útil observar con cuidado qué sucede en la escuela, con la intención de identificar otros hechos que sean susceptibles de causar un problema de conducta. También, debido a que en la escuela se identifican a muchos niños con conductas disruptivas, parece razonable
OS D A RV
preguntarse si la escuela contribuye en realidad a aumentar la incidencia de los
E S E SR O H C que las escuelas son la causa más importante de las cuestionamiento: piensan E R DE desórdenes de conducta. Algunos profesionales han ido más allá del simple
conductas disruptivas.
Sin embargo, según Moles (1994), no existe ninguna prueba que apoye esta afirmación. Al igual que con las causas psicológicas o familiares, no se puede decir con seguridad si las experiencias escolares de los niños son la única causa de los conductas disruptivas, pero podemos identificar formas en que la escuela puede influir o contribuir a la perturbación emocional del niño (por ejemplo, con expectativas inadecuadas, dirección no consecuente. Existen dos signos o indicadores que pueden avisar de la presencia de un trastorno psicológico: la presencia de emociones dolorosas (sentimientos de ansiedad, depresión o irritación crónica) y la aparición de conflictos continuados en las relaciones sociales o familiares. El sufrimiento psicológico además puede adoptar múltiples formas, afirma Moles (2004), que según la persona que lo padezca le encuentre o no sentido o explicación al malestar que padece. Existe una primera forma de padecimiento a los que las personas encuentran explicación o sentido (por ejemplo sacrificio ante situaciones límites, una huelga de hambre) que no suelen ser catalogadas como trastornos psicológicos. 52
Una segunda forma de padecimiento, según el autor, consiste en que quién los sufre no termina de explicárselo o darle sentido (por lo general se trata de trastornos afectivos de tipo depresivo o ansioso).Un tercer grupo, más problemático, son los casos donde la persona que padece el malestar si le encuentra sentido a su sufrimiento, pero aquellos que le rodean no se lo
OS D A RV
encuentran (por lo general se trata de casos de trastornos mentales graves
E S E SR O H C hacer sufrir a otros, independientemente del grado de malestar subjetivo de esa E R E D como las psicosis). Y por último, el cuarto grupo, se caracteriza mas bien por
persona (se suele relacionar con trastornos graves y antisociales de la personalidad).
El grupo de personas que no encuentran sentido a su malestar suele ser quienes mas solicitan la ayuda de los servicios de psiquiatría y psicología, seguidos de aquellos que aún encontrándole un sentido, este no es validado por aquellos que le rodean. Entre las personas que no ven sentido a su malestar emocional o a sus conflictos relacionales suele ser típico la presencia de una o varias respuestas crónicas de carácter emocional: la ansiedad, la depresión y la ira. Por otro lado, la ansiedad implica la preparación de la persona ante situaciones que percibe erróneamente como amenazadoras o peligrosas haciendo que esta se prepare para defenderse o escaparse. El pensamiento y las imágenes del individuo ansioso se caracterizan por exagerar las posibilidades de peligro de un acontecimiento interno, o de un acontecimiento externo. También este pensamiento suele hacer que se minusvalore la propia capacidad de hacer frente a la situación.
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A nivel emocional la persona se siente nerviosa, con deseos de huir de la situación vivida como peligrosa. Su conducta puede incluir la inhibición del habla, la conducta de escapar o la inquietud motora. Su cuerpo puede responder, mediado por su sistema nervioso central y autonómico, con síntomas como la sudoración, taquicardia, dificultades respiratorias, tensión motora,
OS D A RV
insomnio, entre otros.
E S E supone más bien una R S HO de la persona ante los acontecimientos de su C reducción del nivel de respuesta E DER El estado depresivo, según Moles (1994),
vida. La persona esta centrada en pensamientos e imágenes en torno a sus
perdidas, incapacidad, fracasos o indefensión. Por lo general mantiene una baja autoestima y está centrada en una visión negativa de si misma, su vida y su futuro. Pueden aparecer también pensamientos o deseos suicidas A nivel emocional predomina el estado de animo depresivo, con perdida por los intereses y actividades habituales, una dificultad para disfrutar de las actividades habituales, y a veces también sentimientos de culpa, ira o ansiedad. La conducta de estas personas se caracteriza por un abandono de sus actividades habituales o por un descenso intenso de las mismas. Trastornos como la perdida del apetito, las alteraciones del sueño y la perdida del interés por el sexo, también son característicos del estado depresivo. La ira crónica consiste en un estilo de conducta centrado en la defensa y ataque directo o indirecto ("disimulado" por la ironía). Se caracteriza a nivel de pensamientos e imágenes de condena o criticas hacia el ofensor, y exigencias sobre que no debería haber actuado de una manera determinada. A nivel emocional la irritación tensa la musculatura corporal y la dispone al ataque verbal o físico, aparecen sentimientos de rencor y venganza. La conducta se dirige a atacar verbal o físicamente al supuesto ofensor.
54
El cuerpo suele responder con una elevación del ritmo cardiaco, la tensión sanguínea aumenta, la respiración se acelera, y pueden aparecer trastornos del sueño, de la alimentación y de otras necesidades corporales, la rumiación obsesiva sobre el hecho que se exige no debería haber ocurrido, las criticas al ofensor, los planes de venganza y una especial facilidad para "saltar a
OS D A RV
la más mínima". (Moles. 1994)
E S E R S Tradicionalmente, según Bandura y Ribes (1994), la evaluación de los O H C E R E disruptivas se apoyaba sobre todo en los resultados de los niños conD conductas test psicológicos y entrevistas. Sin embargo, se ha demostrado que los resultados de los test proyectivos (por ejemplo Rorschach Ink Blot, Draw A Man Test), tienen muy poco valor a la hora de prescribir una intervención adecuada. Con frecuencia, los niños no reaccionan de la misma manera en una situación de test o de entrevista que en la escuela o en casa. Además, este tipo de procedimientos de evaluación examinan sólo una muestra limitada de la conducta del niño y, lo que es más importante, no evalúan la forma de actuación habitual del niño en un período prolongado de tiempo. Como base para suministrar un tratamiento no es suficiente contar con los resultados de una sola vez. En los últimos años la medición continua se ha convertido en un método cada vez más utilizado de evaluación de los niños con conductas disruptivas. Con este método, las mismas conductas que hacen que sea considerado como un niño con conductas disruptivas, se puede observar y definir con claridad en el medio (por ejemplo, la clase) en que ocurren normalmente cada día.
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De esta forma, se pueden hacer afirmaciones exactas sobre cuáles son las conductas que deben debilitarse y qué conductas adaptativas se deberían ejecutar con más frecuencia. Además de suministrar información específica sobre la frecuencia de la presencia del problema, las mediciones directas y continuas también permiten al maestro observar de forma sistemática y tomar
OS D A RV
nota de los hechos que normalmente rodean la conducta en cuestión - tanto
E S E SR O H C E R El objetivo DE más importante de la evaluación no es determinar si un niño
antes como después de la misma.
tiene algo llamado trastorno de conducta, sino ver si la conducta de un niño es lo suficientemente diferente como para necesitar servicios especiales y, en se caso, indicar cuáles son los más adecuados. Whittaker (1999), argumenta de forma consistente la medición directa y continua de los niños con trastornos de aprendizaje. Se considera que los niños perturbados necesitan ayuda principalmente porque presentan excesos o deficiencias de conducta. Por consiguiente, no definir con exactitud ni medir estos excesos y deficiencias es un error fundamental; se parece a la práctica errónea de una enfermera que decide no medir las constantes vitales (ritmo cardiaco, ritmo respiratorio, temperatura y presión de la sangre), tal vez argumentando que ella está muy ocupada, que las mediciones subjetivas de las constantes vitales son muy adecuadas, que las constantes vitales son solo medidas superficiales de la salud del paciente o que no indican la naturaleza de la enfermedad subyacente. La tarea de la enseñanza, según Moles (1994), es cambiar la conducta y cambiarla por una conducta mejor que sea demostrable. ¿Qué se puede decir 56
entonces de la práctica educacional que, incluida por la metodología del maestro, no incluye una medición directa y fiable del cambio de conducta? .Los educadores con orientación conductista están preocupados por el significado social del cambio de conducta.
OS D A niño; los maestros deben mostrar que los cambios RV que consiguen tienen una E S E R S validez. Una forma de medir la validez social de las nuevas conductas O H C RE adquiridasD esE ver si realmente son útiles para el niño; es decir, hasta que punto Es suficiente con sólo demostrar que uno puede alterar la conducta de un
la nueva conducta será considerado como significativo por los otros, por aquellas personas que tratan con el niño. Para Moles (1994), describe un enfoque para evaluar los efectos de un tratamiento de la conducta en clase de los alumnos de una escuela, comparados con una clase experimental a causa de su conducta inadecuada. Los alumnos especiales recibieron un programa de tratamiento que consistía en un refuerzo sistemático de vales y social en clase. Las conductas producidas eran realmente mejores que la de los otros alumnos durante el mismo período de tiempo en la clase normal. La observación continuada de los alumnos durante un período de seguimiento de doce semanas después del regreso a la clase normal reveló que mantenían la conducta apropiada dentro de los límites normales definidos por la conducta de sus padres. El autor demostró no sólo que el programa de tratamiento mejoraba las conductas perjudiciales de los alumnos, sino además que estas mejoras eran socialmente válidas (por ejemplo, en la actualidad los alumnos especiales se
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comportaban también como sus pares normales) y que se conservaron durante los tres meses de seguimiento. Problemas de Comportamiento. El comportamiento normal en los niños depende de la edad, personalidad y
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desarrollo físico y emocional del niño. El comportamiento de un niño puede ser
E S E SR O H perturbación. El comportamiento normal o "bueno" usualmente está determinado C E R DE un problema si no cumple con las expectativas de la familia o si causa
por si desde el punto de vista social, cultural y del desarrollo es o no es apropiado. Saber qué debe esperar de su niño en cada edad le ayudará a decidir qué es comportamiento normal. El problema de comportamiento infantiles, según Morris (1994), son aprendidos. Al nacer, el niño desconoce las normas y las pautas de conducta que se consideran adecuadas, por lo que busca sus propios modelos y aprende de ellos. Se considera que el comportamiento es malo cuando, por defecto o exceso, no se adapta a lo que se entiende por 'normal'. Una vez que el niño realiza un acto, lo repetirá o no en función del efecto que produzca en su entorno, por lo que los padres deben encontrar el equilibrio entre permisividad y autoridad. No obstante, según afirma el autor "cada problema debe ser estudiado de manera individual para descubrir su origen, que puede ser educativo, con problemas de comportamiento, o biológico, con conductas disruptivas". En el segundo caso, relacionado con cerca del 40% de los niños hiperactivos, cabe la posibilidad de que el pequeño necesite tratamiento farmacológico, porque su mala conducta responde a "condicionantes" con los 58
que ha nacido. Se trata de niños con conductas negativistas y desafiantes hacia sus padres, que carecen de control de sus impulsos y que, cuando cometen un error, les gustaría resolverlo pero no pueden. Por otro lado, se encuentran los "falsos niños con trastornos", cuyos problemas de comportamiento tienen origen a menudo en la sobreprotección de
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los padres, "que resuelven los problemas que el niño tiene que resolver por él
E S E SR O H C permiten ir a la R cama cuando quieren y les resuelven todos los problemas, no se E E D mismo". "Si a los niños menores de tres años les dan de comer los padres, les
les educa en la capacidad de frustración y los niños no toleran un 'no'.
Éste no es el camino correcto, según el autor, no se puede ser tan autoritario que el niño sienta que sus padres no le quieren, ni tan permisivo que acabe haciendo siempre lo que quiere. Desde la Asociación Mundial de Educadores Infantiles recuerdan que la permisividad "produce falta de control interno" y reconocen que la autoridad y firmeza bien ejercida permite a los niños alcanzar una "progresiva madurez y responsabilidad. Sin ser conscientes, los padres fortalecen los comportamientos incorrectos del niño. Ningún padre pretende que su hijo haga pataletas, tenga la luz encendida mientras está durmiendo, grite en una tienda; pero el niño no ha heredado estos comportamientos, sino
que son aprendidos y su historia
particular (ambiente familiar, escolar o social en general) los ha fortalecido. Generalmente
ante
sus
pataletas
los
padres
han
reaccionado
prestándole una gran atención (han pretendido hacerle entrar en razón, le han reñido, avisado) y esta atención ha resultado un poderoso reforzador de su conducta incorrecta. Por
el contrario el niño puede haber desarrollado
conductas positivas que han pasado totalmente desapercibidas, no han sido 59
valoradas, es decir, no han sido reforzadas, de ahí que no se
hayan
consolidado, permitiendo el establecimiento de otras conductas desadaptadas. Los niños según Bandura Y Ribes. (1994), con problemas de la conducta pueden manifestar algunos de los siguientes problemas del comportamiento:
OS D A RV
Conducta agresiva hacia las personas y los animales:
E S E R demás -acosa, intimida o amenaza Sa los O H C E R DE -a menudo inicia peleas físicas
-ha usado un arma que puede causar daño físico serio a otros (por ejemplo: palos, ladrillos, botellas rotas, cuchillos o armas) -es físicamente cruel con las personas o animales -roba a sus víctimas mientras las confronta (por ejemplo: asalto) -obliga a otro a llevar a cabo una actividad sexual. Conducta delincuente: -Deliberadamente prende fuegos con la intención de causar daño -Deliberadamente destruye la propiedad de otros -Fuerza la entrada en el edificio, casa o automóvil de otros -Miente para que le den las cosas, para obtener favores o para evitar las obligaciones
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-Roba artículos sin confrontar a la víctima (por ejemplo: roba en las tiendas, pero sin forzar su entrada para robar) Problemas de pensamientos: -Se queda la noche fuera de la casa aun pese a la objeción de sus padres
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E S E R OScuando -Deja de asistir aC la H escuela le parece E DER -Se escapa de la casa
Se han propuesto otras definiciones de trastorno de conducta, y a pesar de que cada definición es algo diferente, todas tienen en común el hecho de considerar que un niño tiene conductas disruptivas cuando ésta es crónica y difiere de forma muy marcada de las normas culturales y sociales actuales. Tal vez la forma más funcional de contemplar los conductas disruptivas es describiendo cómo actúan de verdad los niños denominados perturbados emocionales. ¿Hasta qué punto su conducta es diferente de la de sus compañeros normales? La frecuencia según Morris (2001), remite al número de veces que se ejecuta una conducta. Casi todos los niños lloran, se pelean con otros niños y se enfadan de vez en cuando; por consiguiente no es acertado denominarlos perturbados emocionales. La diferencia más importante entre los niños con conductas disruptivas y los niños normales es la frecuencia con que este tipo de actividades no deseables. A pesar de que con frecuencia muchos niños con trastornos de no hacen nada que no hagan sus pares normales, lo hacen mucho más a menudo. Muy 61
estrechamente relacionada con la frecuencia está la duración. La duración es la medida de que el niño está ocupado en una actividad dada. Si bien los niños con conductas disruptivas y los niños normales suelen hacer las mismas cosas, el lapso de tiempo que el niño con trastorno de conducta dedica a ciertas actividades es, con frecuencia, notablemente diferente del utilizado por el niño
OS D A RV
normal-tanto si es mayor como si es menor. (Morris. 2001).
E S E R tienen rabietas, pero en general no Spequeños Por ejemplo, muchos niños O H C E R duran más DdeEcinco o diez minutos. Un niño con conductas disruptivas puede llegar a tener una rabieta durante una hora o más. Algunas veces el problema está relacionado con una duración muy corta, como trabajar de forma independiente o prestar atención. Algunos niños con conductas disruptivas no pueden concentrarse en una tarea durante más de varios segundos cada vez. La topografía se refiere a la forma física de una acción. Por ejemplo, tirar una pelota en la canasta o hacer rodar una pelota de bolos implica topografías diferentes. A pesar de que en ambas se utiliza el brazo, las dos actividades requieren movimientos diferentes. Estas respuestas emitidas por un niño con trastorno de aprendizaje rara vez pueden ser topografía, si alguna vez se han visto en un niño normal. Con frecuencia, estas conductas son peligrosas para el niño o para los otros. Por último, la conducta a veces se caracteriza por su magnitud o fuerza. Puede ser o muy suave o demasiado fuerte. Los niños con trastorno de conducta también tienen dificultades en
discriminar cuándo y dónde son apropiadas algunas conductas. El aprendizaje de este tipo de control de estímulos es una tarea importante del crecimiento y la mayoría de niños lo dominan de forma natural a través de la socialización. Lo 62
aprenden de sus amigos, hermano, padres u otros adultos. Sin embargo, con frecuencia, algunos niños con conductas disruptivas parecen no tener conciencia de su medio ambiente. No aprenden el lugar no el momento adecuado para realizar muchas acciones sin ser cuidadosamente instruidos. (Morris. 2001).
OS D A Hay otros dos aspectos importantes R deVlos niños con conductas E S E Rpresentan S disruptivas. Primero, estosO niños generalmente una variedad de H C E ER problemasDen varias áreas diferentes de funcionamiento. Bandura Y Ribes (1994), se refieren a esto como una “agrupación”, o sea, la presentación de dos o más tipos de problemas de conducta que aumenta la posibilidad que la conducta del niño exceda el nivel de tolerancia del maestro. Los autores ilustraron el agrupamiento con la conducta de Hobby, el niño que en una “odisea mañana” destruyó objetos de la escuela, le robó el dinero de la comida a un compañero de clase y le pegó un puñetazo, desafió al maestro y utilizó un lenguaje obsceno. Otro aspecto importante es que los problemas de conducta de un niño son de larga duración y requieren un tratamiento excesivo más que una intervención breve. La ventaja de definir los conductas disruptivas en función de estas dimensiones es que la identificación, la evaluación, las estrategias de enseñanza y la evaluación de los defectos del tratamiento pueden girar alrededor de la medición objetiva de estas dimensiones. Este enfoque según Bandura Y Ribes (1994), conduce a encarar de forma directa el problema del niño-la conducta inadecuada- y las formas de enfrentarse a la misma, en contraste a la postura de concentrarse en algunos problemas internos del niño. 63
Si el niño puede aprender formas de conducta nuevas y socialmente aceptadas, no necesitarán más ser denominado niños con trastorno de conducta.
OS D A RV
E S E SR O H C E R DE
64
Variable
Cuadro Nº 1 Mapa de la variable Dimensiones Indicadores -Inflexible en normas de disciplina. -Control excesivo. Restrictivo -Exceso de crítica al comportamiento de los niños. -Demostración de poco afecto.
Ítems
2,4,5,8,12,13,14,20, S O24,25,26,28,29,36,3 D 1,32,37,38 A V -Fijan pocas reglas. R E -Pocas S expectativas claras de E Medianamente R comportamiento. Restrictivo Estilo de OS --Desinterés por educar a los H Crianza C E hijos. R E D Medianamente Nutritivo
Nutritivo
-Aportan normas -Hacen seguimiento al comportamiento de los hijos. -Refuerzan el comportamiento positivo -Sabe escuchar -Evita ofensas -Se mantienen en calma -Demuestran afecto
1,3,7,9,10,11,15,16, 17,18
-Aislamiento
42,65,69,75,80,88,1 02,103,11
-Quejas somáticas
Conductas Disruptivas
51,54,56
-Ansiedad – Depresión
12,14,31,32,33,34,35, 45,50,52,71,89,103,11 2
-Problemas Sociales
1,11,25,38,48,55,62,6 4
-Problemas de Pensamiento
9,40,66,70,80,84,85
-Problemas de Atención
1,8,10,13,17,41,45,46, 61,62,80
-Conducta Delincuente
26,39,43,63,67,72,81, 82,90,96,101,105,106
-Conducta Agresiva.
3,7,16,19,20,21,22,23, 27,37,57,74,86,87,93, 94,95,97,104
Psicológica
65
CAPÍTULO III MARCO METODOLÓGICO
OS D A Tipo y Nivel de Investigación RV E S E R S HO
C E R DE
La Investigación fue de carácter descriptivo-correlacional, debido a que mide el grado de asociación entre dos variables, así, la investigadora por un lado identificó y correlacionó dimensiones e indicadores de los estilos de crianza con las conductas disruptivas en niños en edad escolar. Según Hernández, Fernández y Baptista
(2006. p. 105), estos estudio tienen como propósito
“conocer la relación que exista entre dos o más variable, conceptos o categorías en un contexto particular”. Es decir dentro de este estudio, se mide cada variable presuntamente relacionada y, después se analiza la correlación. En cuanto a la investigación descriptiva Chávez (2004), afirma que una investigación es descriptiva cuando permite reseñar las características o rasgos de la situación o fenómeno objeto de estudio, refiere la misma autora que la investigación de tipo correlacional es aquella que miden el nivel de relación entre dos o más variables, buscan especificar las propiedades importantes de personas, grupos, comunidades o cualesquier otros fenómenos que sean sometidos a análisis.
66
Diseño de la Investigación
La estrategia que se adaptó y dio respuesta a la interrogante de esta investigación, se encuentran bajo el enfoque del Diseño No Experimental, ya que la investigación se realizó sin manipular deliberadamente la variable en
OS D A RV consiste en observar Hernández y otros (2006), la investigaciónS no experimental E E R S Oen su contexto natural, para después analizarlos, fenómenos tal y como seH dan C E DER estudio, es decir, no se varió intencionalmente la variable independiente. Según
es decir, en un estudio no experimental no se construye ninguna situación, sino que se observan situaciones ya existentes, no provocadas intencionalmente por el investigador.
En relación las inferencias sobre las relaciones entre variables se realizan sin intervención o influencia directa y dichas relaciones se observan tal y como se han dado en su contexto natural. El diagrama de la investigación descriptivacorrelacional según Hernández y otros (2006), es el siguiente:
X1 X2 X1=X2 X1= Estilos de Crianza X2= Conductas Disruptivas Relación entre ambas variables. Sujetos de Investigación
Población.
67
El universo de esta investigación estuvo conformado por la totalidad de los padres, niños y niñas del 6to Grado de las Escuelas 15 de Enero y Nuestro Samán, que son los que se han reportado como alumnos con conductas
OS D A RV
disruptivas. Es importante acotar que la Escuela 15 de Enero es de carácter
E S E SR O H C comparación de E manera una excelente R DE
público estatal y Nuestro Samán es de carácter privado, pudiendo establecer de esta
las variables en estudio. La
población es finita, realizándose el análisis de todas las unidades de investigación que la integran, a través de un censo poblacional, se observa en el cuadro que a continuaciones expone. Cuadro No. 2 Población Escuelas
PADRES
MADRES
TOTAL
15 de Enero (Pública)
14
36
50
Nuestro Samán (Privada)
5
15
20
51
70
TOTAL 19 Fuente: Escuelas 15 de Enero y Nuestro Samán.
Investigadores, Observadores y Encuestadores
La persona que estuvo encargada de llevar a cabo esta investigación; es una joven del sexo femenino estudiante del décimo semestre de Psicología en la universidad Rafael Urdaneta de la República Bolivariana de Venezuela. De igual forma la misma autora tendrá a su cargo la aplicación de las encuestas.
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Definición Operacional de las Variables
Variable1. Estilos de Crianza. Consistirá en la sumatoria de las respuestas obtenidas en el Reporte de prácticas de Crianzas de Blok Modificado (CRPR), de Rickel & Biasatti, (1982),
OS D A RV
cuyos parámetros indican que un puntaje de 60 refiere un estilo restrictivo de
E S E SR O H Cubicado entre 121 y 180, reflejará un estilo de crianza E restrictivo, un puntaje R DE crianza, un puntaje de 61 a 120 refleja un estilo de crianza medianamente
medianamente nutritivo y por último un puntaje ubicado entre 181 y 240 reflejará un estilo nutritivo de crianza. Variable 2: Conductas Disruptivas.
Se considera conducta disruptiva, lo medido a través del cuestionario de comportamiento de niños, en su versión para padres (CBCL) por Achenbach (1991), en su traducción al español realizada por The Dellecrest Children Centrer & Earlcout Chile & Family Centre en Toronto, Canadá, la cual evalúa los indicadores aislamiento, quejas somáticas, ansiedad, depresión, problemas sociales, de pensamiento, atención, conducta delincuente y agresiva.
Técnica de Recolección de Datos
Descripción del Instrumento A continuación se describen los instrumentos utilizados en cada una de las variables:
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Para la variable Estilos de Crianza se utilizó el instrumento Reporte de prácticas de Crianzas de Blok Modificado (CRPR), de Rickel & Biasatti, (1982). Este instrumento, es una escala de 40ítems que miden dos factores relacionados con la práctica de crianza de los padres; el factor nutritivo (18 ítems) y el factor restrictivo (22 ítems). Este reporte fue utilizado para la
OS D A RV
medición del estilo de crianza de cada padre y posee afirmaciones que pueden
E S E SR O H C 2 es “describe poco de mí”, 3 es “me describe algo”, 4 describe en lo absoluto” E R DE ser clasificadas dentro de una escala Likert de 6 puntos, en donde 1 es “no me
es “me describe”, 5 es “me describe mucho” y 6 es “me describe altamente”.
Por otro lado es importante mencionar que los reactivos de la dimensión restrictivo, poseen una valencia negativa, es decir, para dichos ítems la puntuación es de 1 es igual a “me describe altamente” y la puntuación de 6 es igual a “no me describen lo absoluto” En cuanto a la variable Conducta Disruptiva se empleó el cuestionario sobre el comportamiento de niños, en su versión para padres (CBCL) por Achenbach (1991), en su traducción al español realizada por The Dellecrest Children Centrer & Earlcout Chile & Family Centre en Toronto, Canadá. La CBCL, es una escala de comportamiento que se utiliza para obtener un reporte de los padres acerca de los problemas que el niño puede estar exhibiendo, a través del uso de un formato estandarizado. Dicho formato permite identificar síntomas agrupados en síndromes clínicos asociados a diversos motivos de consulta, síndromes que a su vez están asociados a la presencia de los diferentes trastornos diagnosticados por el DSM-IV, en la población infantil según Montiel y otros (2001). 70
Este cuestionario está estructurado por una escala tipo Likert, la cual consiste en u n conjunto de ítems presentados en forma de proposiciones ante los cuales se les pide la reacción del sujeto (Hernández y otros. 2006). El cuestionario sobre el comportamiento de niños en su versión padres (CBCL), está constituido por 113 reactivos dirigidos a medir conductas infantiles a través
OS D A RV
del reporte de los padres o representantes asociados a ocho indicadores
E S E SR O H Cdepresión, problemas somáticas, ansiedad, E R DE
considerados como parte de la investigación, abarcando el aislamiento, quejas sociales, de pensamiento y
atención, conducta delincuente y agresiva (Achenbach, 1999). La conducta es evaluada a través de los indicadores aislamiento (42, 65,69, 75, 80, 88, 102, 103, 111); quejas somáticas (51, 54, 56ª, 56b, 56c, 56d, 56f, 56g) y ansiedad / depresión ( 12, 14, 31, 32, 33, 34, 35, 45, 50, 52, 71, 89, 103, 112), problemas sociales (1, 11, 25, 38, 48, 55, 62, 64), problemas de pensamiento ( 9, 40, 66, 70, 80, 84, 85),problemas de atención ( 1, 8, 10, 13, 17, 41, 45, 46, 61, 62, 80), conducta delincuente 8 26, 39, 43, 63, 67, 72, 81, 82, 90, 96, 101, 105, 106) y conducta agresiva 8 3, 7, 16, 19, 20, 21, 22, 23, 27, 37, 57, 68, 74, 86, 87, 93, 94, 95, 97, 104). (Achenbach, 1999).
Propiedades Psicométricas de los Instrumentos
En relación con la validez interna del reporte de prácticas de crianzas de los niños de Block – modificado (CPRP), los ítems que conforman los factores nutritivos y restrictivos, poseen una alta consistencia interna y validez, lo cual se sostiene a través de diferentes ejemplos, incluyendo padres de la ciudad urbana del centro, padres de una comunidad con ingresos medio alto y estudiantes 71
universitarios de una universidad grande urbana, padres de una comunidad con ingresos medio –altos y estudiantes universitarios de una universidad grande urbana.
Este instrumento presenta un coeficiente Cronbach Alpha de 0,82 para
OS D A RV Test – Retest de cada nutritivo. De igual manera por medio de S la E confiabilidad E R S O con un rango que va desde 38 a 85 (Rickel y ítem ésta se estimó de H 0,71, C E ER Biasatti). D
los ítems que conforman el factor restrictivo y 0,82 para los ítems del factor
El cuestionario sobre el comportamiento de niños en su versión para padres (CBCL), en cuanto a los coeficientes de correlación de Test – Retest, han sido reportados con un promedio de 0,87 para las ocho escalas. La confiabilidad fue más alta para las escalas conducta delincuente y agresiva que para las escalas aislamiento, quejas somáticas, ansiedad y depresión. (Achenbach, 1999).
Procedimiento de la Investigación
El procedimiento que la investigadora aplicó para la ejecución del presente estudio, es el siguiente: - Visita a las Instituciones Educativas para anunciar la necesidad de aplicación del instrumento, los objetivos de la investigación y decidir el día, hora de aplicación.
-
Segunda visita a las instituciones para la aplicación del instrumento.
Disposición de un ambiente de aplicación, manteniendo igualdad de 72
condiciones, espacio dentro de un salón de clases, tiempo suficiente según el horario matutino. La medición de la variable se realizó dentro del primer período del año escolar.
- Distribución del material, lectura de instrucciones por parte de la
OS D A RV
investigadora, manejo de dudas y preguntas solo al inicio de la distribución.
-
E S E R y control de tiempo. Aplicación de la prueba, Sregistro O H C E R DE
-La prueba fue respondida en presencia de la aplicadora.
Consideraciones Éticas
Para este estudio se tomaran en cuenta las consideraciones éticas establecidas en el Código Ético Profesional de Venezuela, (F.V.P. versión 1999), teniendo en cuenta el Artículo 57 el cual afirma que toda persona debe expresar con absoluta libertad su voluntad de aceptar o rechazar su condición de sujeto de experimentación. Debe tener la facultad de suspender la experiencia en cualquier momento y debe estar suficientemente informado acerca de la naturaleza, alcance, fines y consecuencia que pudieran esperarse de la experimentación. Igualmente se tomará en cuenta el Artículo 54, el cual está referido a que la investigación en psicología debe inspirarse en los más elevados principios éticos y científicos. La presente investigación se realizó a través de los pasos necesarios que establece la ciencia y los principios éticos que la rigen.
El
Artículo 55, se refiere a que la investigación en psicología deberá ser realizada y supervisada
por
personas
técnicamente 73
entrenadas
y
científicamente
calificadas. En este caso las personas que se eligieron para asesorar y tutorar el trabajo de investigación está relacionado con el área de psicología clínica teniendo amplia trayectoria y reconocimiento en su trabajo. El Artículo 59, promulga que toda investigación deberá ser calificada en
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función de su necesidad real, de su alcance y de los riesgos que implica. El
E S E su investigación” SR O H C E R ARTICULO DE 60. “El investigador deberá garantizar el anonimato de las
investigador deberá tener sumo cuidado de transmitir las verdaderas razones de
respuestas de los sujetos sometidos a investigaciones y evitar o aminorar la posibilidad de cualquier daño moral a aquellos” Una vez obtenidos los resultados de los instrumentos que fueron administrados a los sujetos de investigación, estos se mantendrán en confidencialidad absoluta por los investigadores. ARTICULO 63. “Como científico, el psicólogo debe, en lo posible, comunicar los resultados de su investigación a otros investigadores” Al culminar el trabajo de investigación este será entregado a la escuela de la universidad para ser utilizado por personas interesadas en investigaciones relacionadas con esta. ARTICULO 73. “Los materiales publicados por autor y utilizados por otro en una publicación ulterior, deben utilizarse solo con permiso de quien posea derechos de autor sobre el material. En caso de que no exista titulo de propiedad sobre los materiales publicados, se debe obtener permiso del autor del trabajo original y hacerse la apropiada declaración de procedencia. El
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psicólogo debe hacer reconocer, con sumo cuidado, y a través de citas específicas, el origen de sus ideas y materiales”
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E S E SR O H C E R DE
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CAPITULO IV RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Para la determinación de los resultados de la investigación se tomó en cuenta el objetivo general de la misma, la cual estuvo dirigida a establecer la
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relación entre los Estilos de Crianza y Conductas Disruptivas en Niños en Edad
E S E SR O H C E R En este DEorden de ideas, los resultados del cuadro 1 dan respuesta al
Escolar.
primer objetivo de la investigación dirigido a identificar los estilos de crianza en padres de niños en edad escolar. Es importante señalar que los resultados de estilos de crianza se analizan las encuestas de las dos instituciones objeto de estudio. Cuadro 1 Estadística descriptiva sobre las frecuencias de los Estilos de Crianza en los grupos estudiados Escuela 15 de Enero Colegio Nuestro Samán Estilo de Crianza F.A. % F.A % Restrictivo (menos de 60) 23 46.00 11 55.00 Medianamente Restrictivo (61-120) 17 34.00 4 20.00 Medianamente Nutritivo (121-180) 7 14.00 3 15.00 Nutritivo (181-240) 3 6.00 2 10.00
El cuadro 1 muestra que el mayor porcentaje de respuesta se situó en el estilo de crianza restrictivo en las dos escuelas estudiadas. En segundo lugar se sitúa en las dos instituciones el estilo de crianza medianamente restrictivo. El estilo de crianza con menor porcentaje de respuesta fue el nutritivo. Estos porcentajes de respuestas demuestran que en ambas instituciones, no importa el carácter de público o privado que poseen los padres encuestados éstos poseen un estilo de crianza restrictivo. En relación, Papalia (2000), afirma 76
que dentro de este estilo de crianza se encuentra el Padre Autoritario, el cual significa imposición inflexible de normas de disciplina, sin tomar en cuenta la edad del niño, sus características y circunstancias. Los padres autoritarios siempre tratan de estar en control y ejercer control sobre los niños.
OS D A V demostrar mucho afecto o de mantener el orden, y normalmente lo hacen Rsin E S E R S cariño al niño. Tratan de establecer normas de conducta estrictas y O H C E R E generalmente son D muy críticos de los niños por que no satisfacen los criterios. Dentro de este estilo de crianza los padres fijan reglas estrictas para tratar
Les dicen a los niños lo que deben hacer, tratan de hacerles obedecer y normalmente no les dan opciones para escoger. Las consecuencias de este estilo de crianza son evidentes: generan en los niños muchos sentimientos contradictorios, sentimientos de rebeldía y hostilidad y problemas para expresar sentimientos, evitando que sus hijos se esfuercen o enfrenten
a
dificultades,
fomentando
sin
pretenderlo,
sentimientos
de
inferioridad, dependencia e incompetencia en los niños. Cuadro 2 Prueba de Chi cuadrado sobre el Estilo de Crianza Restrictivo N observado N esperado Medianamente Restrictivo 34 17,5 Medianamente Nutritivo 21 17,5 Nutritivo 10 17,5 Restrictivo 5 17,5 28,400 Chi-cuadrado ,000 Sig. Asintót. 3 Grados de Libertad
En la tabla 2 se refleja el resultado obtenido mediante la prueba de Chi Cuadrado donde utilizando un nivel de confianza del 0.05 y un grado de libertad de 3 presentó un valor de X2 de 7.815, evidenciando un valor menor al obtenido
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en la investigación y confirmando que existen diferencias significativas entre de los estilos de crianza en la población estudiada. Haciendo énfasis en este estilo de crianza y sus consecuencias en las conductas de los niños Vásquez (2005), desarrollo un trabajo de investigación
OS D A casa de los niños trabajadores del Municipio Valera. RV Las conclusiones de este E S E R S antecedente dice que los comportamientos de los niños residentes en esa casa O H C E R E de cuidados son provocados por la conducta paterna. Es relevante hacer notar D titulado Conducta paterna y Conductas Disruptivas en los niños atendidos en la
que en ambas investigaciones se encontró que el estilo de crianza pudiera influir en las conductas de los niños. El Cuadro 3, dan respuesta al segundo objetivo de la investigación el cual se dirige a identificar las Conductas Disruptivas en niños en edad escolar Cuadro 3 Estadística Descriptiva sobre Conductas Disruptivas de los grupos estudiados. 15 de Enero Nuestro Saman Indicadores Media Desv. Típ. Media Desv. Típ. Aislamiento 12.9600 2.0199 10,5571 4,3427 Quejas somáticas 1.4600 06455 1,1571 ,7734 Ansiedad y depresión 11.3800 4.3326 9,8714 5,8258 Problemas sociales 3.4600 1.6928 5,5857 3,2325 Problemas de pensamiento 1.7200 0.8091 1,5143 ,7565 Problemas de atención 15.2800 1.6293 14,4143 2,0180 Conducta delincuente 7.7200 1.010 7,6000 ,9073 Conducta agresiva 17.2000 2.1285 17,1000 2,0155
Observando estos resultados se evidencia que la conducta agresiva es la dimensión que obtuvo un mayor promedio entre todos los tipos de conductas disruptivas en las dos instituciones, los problemas de atención sigue en segundo lugar y el aislamiento en tercer lugar. En el último lugar se encuentra el indicador
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quejas somáticas. Este predominio en este tipo de conductas al ser referido por Moles (1994), son asociadas con conflictos familiares, maltrato infantil, pobreza, defectos genéticos y adicción a drogas o alcoholismo de parte de los progenitores.
OS D A V y despreocupados con disruptivas tienden a ser impulsivos, difíciles deR controlar E S RE relación a los sentimientosO deS los demás. A menudo, estos niños mienten y H C E R sin razón aparente y se involucran en comportamientos Ereglas desacatanD las Según los resultados, los niños que presentan un tipo de conductas
antisociales como intimidación y peleas. Es importante acotar que los resultados evidenciaron que tantos los alumnos del colegio público como los del privado, que poseen un tipo de conductas disruptivas, también son agresivos, tienen problemas de atención y en poca proporción evidencian quejas somáticas. Al indagar en los antecedentes investigativos, Waynez (2003), una investigación con el propósito de abordar el estudio de Agresividad en el niño y su relación con el Entorno Familiar y desde un enfoque interpretativo de estos referentes, a la luz de un contexto general e integral de conducta; entre las principales conclusiones de este estudio, pueden mencionarse que el niño agresivo presencia en su hogar actos de violencia, existiendo similitud en los resultados de este antecedente y la presente investigación. En otro orden de ideas para la realización del cuadro 5 se efectúo primeramente un
tratamiento estadístico mediante la prueba de Kolmogrov-
Smirnov para determinar las condiciones estadísticas de las dimensiones de las conductas disruptivas, y obtener un coeficiente de correlación de acuerdo a las características de cada dimensión. Posteriormente se describe el coeficiente de 79
correlación de Pearson para cada dimensión de la variable conductas disruptivas, para saber en que dimensión tenía un alto nivel de significancia.
Cuadro 4 Estadistica descriptiva sobre el Coeficiente de Correlación de Pearson entre las dimensiones de la variable Conductas Disruptivas Conductas Coeficiente de Sig. Bilateral correlación Aislamiento 0.768 0.00 Quejas somáticas 0.840 0.00 Ansiedad y depresión 0.922 0.00 Problemas sociales 0.951 0.00 Problemas de pensamiento 0.829 0.00 Problemas de atención 0.860 0.00 Conducta delincuente 0.427 0.01 Conducta agresiva 0.15 0.00
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Estos resultados, indican que la dimensión problemas sociales, es la que posee mayor grado de significación entre todas las dimensiones de la variable conducta disruptiva, corroborándose que estos alumnos con un estilo de conducta disruptiva presentan problemas sociales, las cuales implican que el niño es el responsable de adaptarse al ambiente, evitar conflictos, construir relaciones, manejar conductas irracionales de otros, pero en este caso, en ambas escuelas se reportaron conductas contrarias a estos indicadores, describiéndose las mismas en el planteamiento del problema, trayendo como consecuencia conductas disruptivas y problemas de atención indicadores con una media más alta en ambos colegios; infiriéndose que no saben comportarse socialmente. A continuación se procedió a realizar la correlación de Pearson entre las variables estilos de crianza y conductas disruptivas con la finalidad de dar cumplimiento al último objetivo de la investigación dirigido a determinar si existe 80
relación entre las dos variables, de la misma manera con este cuadro se responde a la pregunta de investigación: Cuadro 5 Estadística Descriptiva sobre el Coeficiente de correlación de Pearson entre las Variables estudiadas Variables Estilo de Crianza Conductas Disruptivas
Correlación
0.707S O D A V R
E S E SR O H C Al realizar la E correlación entre las dos variables, el cuadro 6 exhibe los R E D
resultados, la relación entre Estilos de Crianza y
Conducta Disruptivas en
ambos colegios; los resultados determinan que los coeficientes de correlación son altamente positivos entre las variables, valor que se acerca a 1, evidenciándose que aquellos padres que posean un estilo de crianza restrictivo pudiera ocasionar en los hijos una conducta disruptiva, la cual alcanzara repercutir en problemas sociales, como se evidencia en el cuadro anterior (Nº 5).
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CONCLUSIONES Seguidamente se plasmarán las conclusiones que sintetizan los resultados de la investigación obtenidos a partir del estudio realizado, cuyo objetivo principal fue Establecer la relación entre los Estilos de Crianza y Conductas
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Disruptivas en Niños en Edad Escolar.
E S E SR O H concluyo que tantoE eC la escuela pública como en la privada el estilo de crianza R DE Al identificar los Estilos de Crianza en padres de niños en edad escolar, se
utilizado por los padres es el restrictivo.
Al identificar las Conductas Disruptivas en niños en edad escolar, se determinó que las conductas agresivas y los problemas de atención son las demostraciones más frecuentes en estos niños en ambos colegios. Al determinar si existe relación entre los Estilos de Crianza y Conducta Disruptivas en niños en edad escolar, se concluye que existe una relación positiva entre el estilo de crianza restrictivo y las conductas restrictivas.
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LIMITACIONES
Durante el desarrollo de la presente investigación se encontraron las siguientes limitaciones: - Ausencia irregular de los representantes a las reuniones pautadas para el
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llenado de los instrumentos en el colegio público, esta limitación se resolvió
E S E SR O H C y no comprometer la validez interna de la misma. posible deserción de sujetos E R DE
llamando personalmente a cada representante que inasistió, evitando una
- Los padres encuestados sobre todos los del colegio privado, demostraron
resistencia a la aplicación del instrumento, alegando que ellos no tenían ningún problema de estilo de crianza, pero que el niño era indisciplinado, ante tal situación se les explicó a los representantes el propósito de este estudio, solucionando de esta manera esta limitación. - Los padres del colegio público no entendían mucho el contenido de los ítems, solventando la situación con explicaciones cada vez que eran solicitadas procediendo a una explicación igual a toda la población para mantener las normas de la investigación.
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RECOMENDACIONES
Después de establecer las conclusiones se recomienda:
Continuar con una línea de investigación que amplíe la conducta de los
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niños asociado a otras variables.
E S E SR O H C realizar investigaciones se recomienda E R DE
Considerando que en esta población este estudio se puede considerar inicial,
que validen los hallazgos
encontrados.
Participar a las Escuelas 15 de Enero y Nuestro Samán los resultados de la investigación y estas recomendaciones con la finalidad de dar continuidad a este proceso iniciado.
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